Comida por dos Hombres del doble de mi edad

Me llamo Andrea, tengo 20 años, soy de estatura media, ojos claros, cabello castaño y piel blanca. Mis piernas son atléticas, tengo un trasero redondo y voluminoso, mis caderas son anchas y mis senos redondos y pequeños.

No he tenido muchas relaciones antes, siempre me he interesado más por el estudio que por cuestiones sexuales o amorosas. El año pasado rompí con mi novio, me sentía abrumada de su presencia y quería vivir etapas de mi juventud, yo sentía que junto a él no disfrutaba nada.
Ese mismo año realizamos un viaje con amigos y primos, fuimos a la playa. Era la primera vez que iba a un viaje así, sabía que podía embriagarme sin que nadie dijera nada.

El día que llegamos, nos intalamos en un apartamento cerca al mar, era un conjunto residencial agradable donde la mayoría de apartamentos eran alquilados a turistas que querían pasar tiempo en la ciudad.
Esa noche estabamos preparados para salir a tomar, ya habíamos bebido cervezas antes por lo que estábamos todos ya ebrios. Esperando el taxi en la entrada que nos iba a llevar al bar, conocimos a un grupo de hombres ya mayores, por ahí entre los 35 y los 45 años de edad, todos lucían bien, y dos de ellos se nos acercaron para hacer conversa. Soy tímida por ende no hablé mucho y pensé que tal vez estaban más interesados en dos amigas que estaban allí. Tomaron el teléfonos de una de ellas, se despidieron y nos montamos al taxi.

Nos dirigimos al bar, y al llegar pedimos más alcohol, bailamos y la pasamos genial. De un momento a otro este grupo de amigos que habíamos conocido en la entrada de los apartamentos, llegaron al bar y se hicieron junto a nosotros. Uno de ellos empezó a acercarse a mi y a bailar conmigo, se llamaba Daniel. Pasadas las horas decidimos ir al apartamento para seguir tomando allí, entonces llamamos el taxi y nos subimos. Como eramos tantos yo me senté en las piernas de Daniel. En el recorrido Daniel acariciaba mis piernas y me tocaba por encima del pantalón, yo intentaba que los demás no se dieran cuenta, pero él seguía tocándome y yo me empezaba a excitar.

Llegamos a los apartamentos, yo ya estaba muy ebria como todos los demás. Mis amigos decidieron irse al apartamento y de un momento a otro yo quedé en el apartamento de estos señores al lado de Daniel. Él me tomó y me llevó a la hamaca donde yo me recosté encima de él. Dos de sus amigos se nos acercaron como si fueran perros velando por comida, yo en ese momento me asusté, no quería ser compartida a gente que no conocía, así que disimuladamente empecé a pegarme más a Daniel. David que era uno de ellos dijo
- Deberías compartirnos un poquito de ella, Mira que yo la tenía primero en la mira y me la quitaste.
A lo que Daniel no respondía nada.

Después de un rato, Daniel me dirigió a su cama, me empezó a desnudar y a besarme. Sin embargo de un momento a otro se quedó dormido, estaba muy ebrio.

Yo bajé del loft dispuesta a irme a mi apartamento, sin embargo David y su otro amigo, Alex, me retuvieron un rato para tomar un poco de ron y oir música, yo no ví problema. Luego comenzaron a empezar a tocarme, David de unos 40 años, con su mano empezó a tocarme el cuello mientras se acercaba y lo besaba, a la misma vez Alex de 45, me tocaba la pierna de manera sútil. Yo tenía miedo, estaba un poco asustada porque era una situación muy extraña para mi, pero intenté relajarme. Los dos me condujeron a su habitación, en la cual ya había uno de sus amigos durmiendo. David comenzó a quitarme la camisa, yo estaba pasmada dejando que ellos hicieran conmigo lo que fuera de su antojo.

Alex empezó a desabrocharme el pantalón mientras David me quitaba el brassier y a la vez se quitaba su ropa. Me seguían besando y yo me empezaba a mojar. David me sentó en la cama y tomó mi mano para que se la pusiera en su pene, me dijo:
-Dale unos besitos

Tomé su pené y empecé a besarlo suavemente, a la vez que sacaba un poco mi lengua para lamerlo. Al mismo tiempo, Alex se quitaba su ropa y empezaba a masturbarse con la escena que veía, y le dijo a David:
-Déjame disfrutar también.

David me indicó que me hiciera en cuatro pero con mi culo apuntando hacia él. Él quería tener el premio mayor. Entonces Alex me acercó su verga en señal de que le hiciera lo mismo que a su amigo, así que la empecé a chupar. Mientras tanto, sentía que el pene de David tocaba mis labios vaginales que estaban muy mojados, y la iba hundiendo dentro de mi, en ese instante solté un gemido, que Alex silenció poniendo de nuevo su verga en mi boca.

Los dos sedientos de lujuria con un joven de la mitad de su edad, me penetraban y a la vez me hacían chupar.

David seguía cogiéndome mientras Alex comenzaba a besarme, primero mis labios, luego mis senos, para terminar mordiéndome mis piernas a la vez que me masturbaba. Sin embargo David estaba un poco celoso de la atención más sentimental que nos estabamos dando con Alex, así que me puso boca arriba y se acostó encima mío para seguir follándome y poder besarme a la vez. Viendo Alex que David no quería seguir compartiendo, solo se hizo a un lado mientras se masturbaba con la escena.

David me cambió de pose, y me puso encima suyo. Yo sentía su pene palpitante dentro de mi y empecé a cabalgarlo con muchas ganas. A la vez movía mi culo para sentirlo más adentro mientras él gemía de placer y me tomaba de mis pechos. Volvió a ponerme boca arriba y me abrazaba fuerte mientras me besaba y empujaba su miembro en mi con mucha pasión, luego de tanto placer eyaculó y sentí como me llenó toda, y se quitó de encima para que yo apoyara mi cabeza en su pecho. Caímos del sueño. Para ese momento ya Alex agotado y ebrio se había dormido también.

Al otro día, desnuda me levanté, tomé rápidamente mi ropa y me cambié, ya que mis amigos habían venido a buscarme. Cuando salí del baño David me volvió a meter en él y comenzó a besarme, quería que siguiéramos pero debía irme, así que pudé safarme de él y salir de allí.

Recuerdo que bajé y Daniel me vió con cara de confusión, el no sabía que me había quedado con sus amigos y de paso me habían comido.

Nunca pensé que tendría un trío, pero es una de las mejoras experiencias que he tenido hasta ahora. Con respecto a este grupo de amigos maduros, salimos en otra ocasión y tuve un nuevo encuentro sexual con David, sin embargo ya después al volver a nuestras ciudades nos distanciamos pero me dejaron que en este delicioso recuerdo.