Mi mañana en el bar

por
género
incesto

Eso de estar un bar y conectada a Xhamster no es bueno, estoy súper mojada. Y más mojada aun hablando con mi amo. Esta mañana tenía pocas ganes de vestirme, así que he cogido el primer conjunto de tanga y sujetador de encaje que he encontrado, las mallas negras deportivas que llevo siempre cuando voy a correr y la camisa larga blanca con botones que siempre llevo cuando quiero resaltar mi sujetador.

Se presentaba una mañana tranquila con mi coca-cola y mi ordenador con trabajos por hacer, pero al conectarme he visto que mi amo estaba conectado y que quería hablar conmigo.

- Que llevas puesto? – me pregunta. Se lo explico y me pregunta si estoy cachonda y mojada.

- Sí, mucho amo. – Es mi respuesta.

Me pide que me toque por encima de mis mallas deportivas, al poner la mano encima de mi coño ya noto todo su calor y lo mojada que estoy. Él tiene ese efecto en mí. Me gusta tener la mano ahí, me recuerda lo cachonda que me pongo cuando obedezco órdenes. Hay un chico en la barra del bar, alto, pelo rizado pelirrojo, que se ha percatado de lo que hago, le guiño un ojo y me relamo los labios, me devuelve el gesto con una sonrisa pícara.

De repente llega mi siguiente orden. Mi amo quiere que me pellizque los pezones por debajo de la camisa, me bajo el sujetador dejando a la vista de quien mire mis pechos al desnudo por debajo de la camisa y me desabrocho los tres primero botones de la prenda para poder llevar a cabo su orden. Me pellizco los pezones e intento no gemir, el chico vuelve a mirar, no se cree lo que ve, le devuelvo mi sonrisa más guarra que se hacer, le pone lo que hago y sigo. Estoy disfrutando mucho pero no puedo exhibirme por completo en público; sino estaría sin camisa ya. Estoy súper cachonda y mi amo lo sabe, por eso me ordena darme 5 palmada en mi húmedo coño por encima de las mallas.

Saco la mano de mi camisa pero no me vuelvo a poner bien el sujetador y me dejo la camisa a medio abrir, para disfrute de quien quiera mirar y me bajo la mano para cumplir con la orden. Quiero gemir de placer, joder si quiero, pero no puedo. Me doy las 5 palmadas y noto que otro chico me está mirando también. Repito el proceso, le guiño el ojo y me relamo los labios y le lanzo un beso. Me aprieto la camisa a mi cuerpo para que vea bien mis pechos desnudos. Veo que se lleva la mano a su entrepierna y me vuelvo a mi chico pelirrojo pero me lleva otra orden.

- ¿Te pone exhibirte así? – me pregunta mi amo. Sabe que me pone verraca hacer esto. – Quiero que te metas dos dedos dentro de tu coño y que los saborees. ¿Podrás hacerlo?

Claro que puedo me digo. Me retiro un poco de la mesa, ya tengo a mi chico mirándome a ver qué hago, le guiño un ojo y sin descaro me meto la mano dentro de las mallas. Al verlo se pone una mano a la cabeza en señal de asombro, no se cree lo que ve. Tiene cara de placer y asombro mezclado. Sigo con mis movimientos, tengo dos dedos dentro del coño, ojala se pudieran quedar ahí pero tengo una orden. Con cuidado de no desperdiciar nada me saco las manos, miro al pelirrojo a los ojos como desafiándolo y me meto los dos dedos en mi boca, los saboreo, los meto, los saco, pienso que es la polla de mi amo y juego con mi lengua y mis dedos. Hago cara de placer, placer que siento. Esta salado. He enseño el pote de la sal que tengo encima de la mesa al chico para darle a entender de qué sabor es mi coño. Se lleva una mano delante de su boca o la otra encima de su entrepierna, esta duro, lo veo.

Durante mi disfrute personal con la imagen que tengo delante mi ordenador me dice que tengo otra orden. Que despiste, al ir a mirar el ordenador con la mano he tirado el tenedor de mi desayuno. Lo tendré que recoger. Me levanto de la mesa y me arrodillo en medio del pasillo del bar, tengo que coger el tenedor antes que alguien lo pise. Aún voy con las tetas al aire y la camisa abierta así que al agacharme se me ve todo, no me importa, me pone aún más caliente. Apoyo mis pechos en el suelo, esta frio, se me ponen los pezones duros y con el culo en pompa y medio bar mirando mis pechos me pongo a buscar mi tenedor. No lo encuentro. Casi un minuto de rodillas buscando el cubierto. Que mojada y cachonda estoy al levantarme. Un pecho casi se sale de la camisa, y mi culo ha sido admirado por todo el bar. Al volver a sentarme veo que casi todos los chicos y alguna chica mes están mirando. Les doy una sonrisa inocente como si no supiera que pasa i porque me miran como me miran. Orden completada.

Me termino el bocadillo pensando que ya estará por hoy cuando me llega otra orden. A este paso me voy a correr en la silla del bar y sin tocarme. Mis duros pezones aprietan contra la camisa ya de por si ajustada y aún dan más fantasías a quien me mira. Con esto llega mi última orden. Jugar con hielo, con lo que me gusta!

Cojo 3 cubitos de hielo de mi vaso y me voy al baño, no sin antes mover mi culo al máximo al irme al final de bar y guiñarle un ojo a mi pelirrojo antes de entrar en el baño. Me bajo las mallas y aparto mi empapado tanga para meterme un cubito de hielo por el coño, el frio que siento me hace gemir de placer, es un alivio dentro de tanta calentura. Me lo meto al más fondo que puedo con los otros hielos me los froto ´los pezones, los dos a la vez, por un momento me olvido de la orden y solo noto el placer que recorre mi cuerpo. Están muy duros. Le doy un lametazo a cada uno para aliviar la dureza y me pongo a sitio el sujetado y los hielos dentro, uno en cada pezón. Mal día para llevar encaje. Se me transparenta todo y al rato tengo la camisa mojada y transparente. Con esta estampa salgo del baño y me vuelvo a sentar. Al poner mi culo excitado en la silla el hielo de mi coño se mueve y se me escapa un pequeño gemido. Espero que nadie lo haya oído. Los hielos de mis pezones ya casi están desechos dejando lugar a dos ronchas grandes en mi camisa que dejan mi sujetador negro al descubierto. Se me ve todo, el sujetador, la forma de mis tetas y mis pezones hinchados y duros. El hielo de mi coño también ha desaparecido, dejándome un frio charco en mis mallas.

“Quiero que en una nota pongas, - Esta puta se ha estado masturbando y necesita ser follada – y que la deje en algún lugar visible del bar. Me levante a pagar y me vaya al baño y me masturbe. Vamos a jugar me digo. Lo recojo todo, me voy a pagar bajo la atenta mirada de muchos del bar. Al irme de camino al baño dejo la nota en la barra, al lado del chico pelirrojo y me voy a baño. Como se me ha ordenado me desnudo, apoyo mis enormes y duras tetas en la puerta del baño y con las piernas bien abiertas me masturbo hasta correrme. Grito, gimo todo lo que no he podido gemir y me corro como nunca antes. Al terminar me visto, todo menos la ropa interior. Meto mi sujetador en la maleta y llevo el tanga en la mano. Al pasar por detrás del chico de la barra le meto el tanga el su bolsillo trasero.

- Te lo mereces. Te lo presto pero me lo tienes que devolver, así notas mi corrida y lo mojada que estoy con tus dedos y no a través de un tanga. – le doy un apretón a entrepierna y salgo del bar como si nada.

Al subir al coche, me doy cuenta que mi pelirrojo me espera a la salida del bar, así que le abro la puerta para que suba al coche. Quién sabe si él también tiene órdenes para mí.
escrito el
2017-01-12
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