Cielo Riveros es deseada y cogida por mayores

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Cielo Riveros es deseada y cogida por mayores
Cielo Riveros es una muchacha muy bella y bien dotada de 18 añitos. Sus formas de mujer ya de hace tiempo que llaman la atención de los hombres mayores del barrio. El dueño del apartamento, don Lucas, sueña con probar a tan deliciosa jovencita….
Esta historia se desarrolla en una colonia perdida de clase baja de una gran ciudad, es un núcleo poblacional compuesto por la mayoría de humildes obreros, pero desgraciadamente también abundan borrachos, mariguanas, bandas de asaltantes y secuestradores que ni la policía se atreve a entrar en este peligroso y barrio, era como una ciudad perdida lejos de toda civilización, las calles eran de tierra y había charcos de lodo; había perros callejeros por doquier.
En este ambiente vive nuestra protagonista de esta historia, su nombre : Cielo Riveros es una chica adolescente de 18 años que es muy popular con la comunidad masculina debido a lo buenísima que esta, mide 1.65 de 52 kilos, su cabello es de color negro lacio , unos ojos color verde preciosos con una mirada entre inocente y coqueta que hace que no deje uno de verla, unos labios gruesos , un par de pechos duros turgentes bastantes desarrollados ,cintura breve que hacía resaltar los enormes promontorios de sus nalgas, un tremendo trasero redondo parado y un par de piernas carnosas todo esto coronado con una cara preciosa de niña todavía.
La adolescente vive solo con su mama ya que su padre había fallecido ya hacía varios años en un accidente en la carretera, la chica con su mama habitaba un humilde departamentito que le rentaban a don Lucas, que era dueño del edificio donde viven y de una cantina de mala muerte que se ubicaba justo al lado del edificio de departamentos.
Su mama de la chica trabajaba de enfermera en una clínica rural así que la deja sola toda la semana y solo se veían los fines de semana, la señora le dejaba encargada su nena a don Benito un militar viudo y jubilado que vive en el departamento a lado, don Benito quería sinceramente a la chica al no tener otra familia las consideraba a Cielo Riveros y su mama como su hija y su nieta estando siempre presto por si necesitaran algo.
Como decía este bombón era muy popular con la fauna masculina de esa colonia perdida del mapa, la chica gustaba mucho de usar blusitas ombligueras ajustadas con escote que hacían resaltar mas esos tremendos senos y también minifaldas o vestidos cortos una cuarta arriba de la rodilla luciendo esa espectacular par de piernas, cuando salía a algún mandado se volvía el centro de atención de todo los hombres viejos , jóvenes, adultos ninguno se podía sustraer a la vista de la ya encamarle colegiala, a pesar del tremendo desarrollo de su cuerpo su mentalidad todavía era de una niña, para ella lucir su cuerpazo era un juego ya que le gustaba oír los piropos que le decían en la calle sin medir las consecuencias que vendrían después y por qué era verano hacía mucho calor y se sentía más cómoda con esos atuendos ligeros y cortos.
Un fin de semana que su mama se encontraba con ella la mando a comprar a la farmacia unas pastillas para el dolor de cabeza, esa tarde hacia un tremendo calor y Cielo Riveros traía puesto un vestido 10 centímetros arriba de la rodilla de esos volados y de la cintura hacia arriba era muy ceñido con un gran escote y se calzo un par de botas altas de cuero negras con tacón regalo de su mama, como no la dejaban salir sola a ningún lado ese día decidió lucirlas se veía tremendamente espectacular , cuando salió a la calle para buscar la farmacia los hombres se le quedaban viendo con cara de bobos viendo a esa espectacular hembra caminar contoneando esas nalgotas haciendo que el vestidito se meciera y se levantara levemente enseñando más de ese espectacular par de piernas y casi las nalgas, a su paso le decían de todo, hasta los carros se detenían para admirarla y la invitaban a subirse, le decían de piropos ella solo los volteaba a ver con esa hermosa cara y les dedicaba una media sonrisa a los que la chuleaban , no dándose cuenta que esto hacía que se les parara las vergas a los machos, al llegar a una esquina vio a un grupo de vagos tomando en la calle y drogándose, la chica se bajó de la acera y mejor comenzó a caminar por la calle estos al verla le dijeron.
– Estás como para metértela toda la noche, mamacita que ricas nalgas tienes, ¿cómo quisiera meterte la verga por el chiquito, hum, chiquita tienes unas tetas tan ricas!, que te las mamaría durante horas.
La chica le gustaba que la piropearan pero cuando ya eran muy subidos de tono los piropos agachaba la cabeza se ponía roja como un tomate y caminaba rápido, cuando por fin llego a la farmacia, la atendió un joven que no dejaba de verle las nalgas y el escote pidiéndole ella las pastillas para su mama, entregándole el joven una caja con las pastillas, poniéndose ella nerviosa al ver que no dejaba de verla descaradamente con ojos lujuriosos , ella le pago y cuando esperaba su cambio el muchacho que tendría unos 22 se saltó del mostrador que los separaba y se acercó bastante a ella casi se le pego le tomo la mano y así la mantuvo unos segundos sin soltársela esto hizo que la chica se pusiera más nerviosa al sentir que la mano del chico estaba muy caliente y que la miraba sin ningún disimulo de una manera que la hizo sentir muy inquieta, se notaba que la desnudaba con la vista, el chico le susurro al oído -Sabes? me pareces una chica muy sexy, estas buenísima, ella se sonrojo.
Y sin ninguna vergüenza le miraba su generoso escote la chica con dificultad deslizo su mano de las de él y se dirigió hacia la salida de la farmacia sabía que el joven no le quitaba la vista a su exuberante trasero que lo meneaba de un lado a otro, de regreso fue lo mismo le decían de todo tipo de cosas, podía sentir las miradas lascivas de los machos a sus redondas nalgas era una adolescente que exudaba sexualidad como ninguna , los hombres la miraban hipnotizados como se movían de un lado a otro esas nalgotas y como se le marcaba su pequeño bikini a través de la faldita del vestido, era todo un espectáculo para los vecinos admirar a la chamaca.
Don Lucas era un hombre moreno, viejo como de 55 años, de 1.70 greñudo una cara horrible y una tremenda barriga, comandaba una banda de asaltantes y secuestradores integrada por otros 3 viejos cincuentones sádicos y viciosos, el viejo Lucas tenía un privado que colindaba con la recamara de Cielo Riveros, ahí en la pared que separaba las dos estancias había un gran espejo de 2 por 2 metros que del lado de la adolescente se veía como un gran espejo normal, pero del lado del privado del viejo era un cristal trasparente donde se veía hasta el más mínimo detalle de lo que sucedía en la habitación.
La colegiala sin saberlo les daba unos tremendos espectáculos al viejo lujurioso de don Lucas y su banda, todas las mañanas se juntaban en el privado para verla levantarse y ver ese tremendo cuerpo virginal apenas cubierto por un diminuto short ,una blusita transparente sin brasier, la veían estirarse y levantarse de la cama se sacaba la blusa y se veía al gran espejo sin imaginar que su intimidad era tremendamente violada, aparecieron unos pechos que parecían sacados de otro cuerpo, firmes, preciosos, carnosos, grandes, la chica se ponía a posar frente al espejo apenas cubierta por el diminuto short los viejos estaban que babeaban se acariciaban las vergas mientras observaban hipnotizados como Cielo Riveros se comenzaba a despojar del short lentamente hasta que lo dejo en el piso no traía ropa interior quedando completamente desnuda se veía tremendamente sensual, un lunar se asomaba cerca de su intimidad y otro lo tenía en una de esas tremendas nalgas se veía al espejo y se daba vueltas viéndose los lunares con inocente curiosidad , después toma una toalla y se mete al baño ahí la pierden los viejos .
El viejo de don Lucas con la verga ya de fuera y dándose de jalones comento a sus no menos excitados compañeros -que buena esta la chamaca lo que más me calienta es la cara de nena inocente que tiene que no da con el cuerpo de verdadera hembra que ya está echando, Anselmo un viejo de 58 años, gordo, calvo y con una cara llena de cicatrices le contesto dándose masajes en la verga –si Lucas la chamaca esta como para meterle la verga toda la vida deberíamos hacer algo para cogérnosla ,si le dijo el viejo Lucas en eso estoy pensando ya se nos ocurrirá algo pero de que nos la cogemos todos nos la cogemos eso sí que no quepa la menor duda , riendo ruidosamente los demás viejos mientras tomaban cerveza , a los 10 minutos la chica sale del baño envuelta en la toalla, cuando se saca la toalla hace un lindo espectáculo al secarse muy lentamente empezando desde su busto lo hace con una paciencia y con unos movimientos súper delicados, luego le toca secarse sus partes íntimas, se le veía muy nítidamente tenía apenas un triangulito de bellos muy finos .
Después que termina de secarse comienza a vestirse se pone un diminuto bikini que hacía resaltar más ese tremendo trasero, enseguida se coloca su sostén sobre esos fabulosos pechos a los cuales todavía no les afectaba la gravedad a pesar de su tamaño, después se puso una minifalda una cuarta arriba de la rodilla que marcaba sus fabulosas caderas, dejando al descubierto sus fuertes y morenas piernas y ya para terminar su blusa ombliguera de esas sin mangas y pegadas al cuerpo quedando al aire su abdomen liso y sin un gramo de grasa, enseñando un generoso escote que dejaba a la vista más de la mitad de esos tremendos senos, su mama estaba orgullosa de lo bella que era su hija y la animaba a que luciera su cuerpo con ese tipo de prendas ya que ella en su juventud sus padres no le permitían usar las prendas que estaban de moda en aquellos años quedándole una frustración, la chica enseguida salió de la habitación para ir a desayunar y hacer sus deberes escolares ya que asistía a la preparatoria por las tardes dejando a los viejos lujuriosos despellejándose las vergas por el tremendo espectáculo presenciado.
Todas las tardes al dirigirse a su colegio Cielo Riveros era esperada por DON Lucas para decirle todo tipo de vulgaridades y como en esa colonia pérdida del mapa no había ley y nadie se atrevía a decirles algo, les tenían temor porque sabían lo sádico que eran.
El tipo sonrió mirando con ojos de depravado al verla.
-Te acompaño mamita para que no vayas tan sola.
La colegiala le tenía mucho miedo al ver ese viejo horrible que la veía lujuriosamente sin disimulo el escote de su blusa.
-No gracias señor tratando de caminar apresuradamente.
-Pero el viejo se le emparejaba y le decía, estas tan buena que te haría un traje de saliva.
La adolescente se ponía roja de vergüenza y trataba de caminar más rápido para llegar adonde tomaba su bus.
-Ándale mamita déjame besarte esos ricos lunares que tienes en tu nalga derecha y en tu rajita.
Cielo Riveros abría muy grande sus bellos ojos verdes desconcertada al ver que su secreto lo sabía ese viejo, lo volteaba a ver como tratando de saber cómo es que sabia eso, y apenada caminaba más rápido con ese viejo pegado a ella diciéndole vulgaridades y media.
Hasta que por fin el viejo Lucas la dejo irse viendo como hipnotizado como ese fabuloso trasero cubierto apenas por la minifalda escolar y ese par de hermosas piernas se perdían en la distancia, acercándose el viejo Anselmo que había presenciado todo y diciéndole.
-No sé cómo le vamos hacer, pero tenemos que cogernos a esta chamaca ya no aguanto Anselmo, todas las noches me imagino cogiéndola por todos lados me tiene loco.
Si lo sé todos los de la banda estamos, así como tu Lucas, pero ya tendremos una oportunidad y de verdad te digo no la desaprovecharemos, alejándose rumbo a la cantina a seguirse emborrachando y cavilando en la tremenda colegiala.
El viejo Lucas se le ocurrió la idea de conseguir una cámara de video para filmar a la colegiala en su recamara y sacar provecho luego de la película y así lo hizo instalo la cámara con triple y comenzó a filmarla constantemente.
Así transcurría esta misma rutina todos los días los viejos espiando a la chamaca y molestándola cuando se dirigía su escuela, solo descansaba de estos viejos la chica cuando su mama estaba los fines de semana con ella o cuando don Benito la acompañaba, pero esto no podía ser muy seguido debido a que el anciano jubilado trabajaba de velador en una compañía, pero algo vino a suceder un miércoles por la mañana que vino a sellar la suerte de la hermosa colegiala.
El miércoles por la mañana al despertar la chica sintió húmeda su rapadita, debido al tremendo desarrollo de su cuerpo que por naturaleza ya pedía sexo, esto porque su mama nunca la oriento sobre estos temas pensando erróneamente que se podía descarriar la chica, creciendo entonces siendo una ignorante total en cosas del sexo, noto que su rajita estaba húmeda se tocó para comprobarlo y cuando se rozó su entre pierna sintió un extraño escalofrió; fue una sensación muy agradable, así que se siguió tocando a los pocos minutos su respiración era mucho más agitada y sus dedos estaban bañados con el flujo de su entrepierna; no sabía bien que estaba pasando en su cuerpo, Con una mano exploraba su entre pierna y con la otra apretaba sus tetas, tenía los pezones erectos y sentía desesperación por abrir las piernas lo más posible. . Hubo un momento en que algo se apodero de ella, ya no podía parar; aunque le dolía no podía dejar de apretarse sus tetas con fuerza, de pronto una fuerte sensación de éxtasis invadió su cuerpo; llevo sus dos manos a su conchita; cerró bruscamente las piernas y se apretó, quedando de lado convulsionándose y aguantando las ganas de gritar; mordió la almohada y aguanto hasta que por fin paso y quedo rendida en su cama.
Los viejos estaban boquiabiertos por lo que acababan de presenciar viendo esa tremenda masturbada que se acaba de dar Cielo Riveros, reaccionando primero el viejo Lucas murmurando esperen aquí y verán lo que sucederá levantándose del asiento aun con la verga dura como un fierro y diciendo -esta zorrita ya se pasó de la raya nada más nos calienta y nos deja así, si quiere verga tendrá.
Dándose la vuelta y llegando al departamento de la chica, siendo un mal viviente toda su vida no le costó trabajo forzar la cerradura del departamento de Cielo Riveros penetrando a la estancia y dirigiéndose a la habitación de la chica.
Entro sigilosamente al cuarto y le puso seguro a la puerta de la habitación viendo primero en la cama la ropa limpia de la colegiala, dándose cuenta que se estaba bañando, se parapeto detrás de la puerta del baño para que la chica al salir no notara de momento su presencia.
Poco después la chica salía del baño envuelta en una toalla y sin nada abajo secándose el cabello con la mirada hacia el piso sin imaginarse lo que está por suceder, volteo a verse en el gran espejo al mismo tiempo que la toalla caía al piso dejando su tremendo y virginal cuerpo completamente desnudo dando un grito ahogado de horror y abriendo completamente sus bellos ojos verdes al notar en el reflejo del espejo la presencia del viejo Lucas a sus espaldas a escasos 2 metros mirándola con una sonrisa dejando ver una hilera de dientes podridos y acariciándose la verga que tenía una tremenda erección.
-hola mamita que sabrosa te ves así desnuda, la chica con sus manos trataba de taparse sus senos y su intimidad ante la risa del viejo.
La chica sin voltearse viendo al viejo a través del espejo con voz asustada y roja de vergüenza porque nadie la había visto sin ropa pregunto al viejo, viéndolo a través del gran espejo.
-qu..e qu..e , desea señor que quiere.
El viejo acercándose a la asustada chica acariciándose la verga se podía ver la tremenda empalmada por la delgada tela de la bermuda, sin quitar la vista de ese fabuloso trasero ya que la chica seguía de espaldas a él, observaba sus grandes y bien proporcionadas nalgas, carnosas y sin rastros de estrías ni celulitis, completamente limpias y deseables con gotitas de agua que resbalaban lentamente haciendo que la vista fuese tremendamente sensual.
-Que culo soberbio es un culazo descomunal decía el viejo viéndole las nalgotas y acercándose más lentamente a la asustada chica, extasiado por sus tremendas redondeces, no titubeó al estar junto a ella, tomándola decididamente por detrás, – que lindo cuerpo tienes , susurró desde atrás al oído y al instante la adolescente sintió los velludos brazos del viejo que pasaban entre medio de los de ella y su cuerpo pasando por debajo de las axilas el viejo olía a demonio, algo asqueroso mezcla de licor y sudor a continuación bajo sus manos por su breve cintura sintiendo la suavidad desquiciante de esa juvenil piel y comenzó a subirlas lentamente esas manos sucias llenas de callos por el abdomen de la colegiala hasta llegar al gran premio sus formidables y nunca manoseadas tetas las empezó acariciar desde su base recorriendo todo su contorno sintiendo su dureza y suavidad para después estrujar las dos al mismo tiempo el viejo apoyaba su verga durísima sobre las nalgotas de la nena y comenzó a puntearla sentía un cosquilleo desquiciante en la verga al sentir su curvatura y dureza, experimentaba una placida sensación de esas ricas y duras nalgas tallaba y tallaba su vergota moviendo su cadera con enérgico ímpetu, levantando por momentos levemente ese tremendo trasero de ese bombón de chamaca por momentos las nalgotas de la chica atrapaban la palpitante y excitada verga del viejo la sentía claramente por que el viejo llevaba una bermuda de pans don Lucas sentía como ese apetitoso trasero lo trasportaba al cielo, la adolescente no decía nada solo cerraba los ojos y sus tetas subían y bajaban al ritmo de su respiración que comenzaba hacer mas rápida.
-Que buenas tetas tienes, comenzó a apretar los pechos con pasión, los amasaba fuertemente murmurándole al oído que estaban grandes y firmes, al mismo tiempo que empezó a puntear con más fuerza, sus manos le apretaban los pechos y su cuerpo le apretaba la cintura, para conservar su bulto a la altura de las nalgotas, la chica comenzaba a sentirse inquieta por la morbosa situación ya que nunca había tenido novio y menos ser manoseada como lo estaba haciendo ese viejo.
—Noo…noo…suélteme por favor musitó la adolescente tratando de apartarse, con sus finas y delicadas manos las manos del viejo que le masajeaba las tetas, pero el viejo le mordió una oreja diciéndole.
-Quieta mamacita si no cooperas te mato sacando una navaja del bolsillo de su bermuda y poniéndosela al cuello a la colegiala que sin más dejo de ofrecer resistencia por el miedo y dejo al viejo libre a sus anchas para que hiciera con ella lo que quisiera solo resistiéndose con su voz, este al darse cuenta de la sumisión de la chica arrecio en las caricias, Cielo Riveros temblaba ,el viejo le lengüeteada la oreja con esa asquerosa boca llena de barbas con varias semanas sin rasurar, la chica sentía escalofríos al mismo tiempo que no dejaba de estrujar esos pechos con ambas manos palmo las enormes tetas de Cielo Riveros eran demasiado aun para sus manos, con una mano el viejo la agarraba cada una de sus tetasas mientras con la otra exploraba todo el cuerpo de la adolescente, presionando su excitada y palpitante verga contra las nalgotas juveniles.
El viejo acariciaba su abdomen de la nena sus callosas manos sentían la piel erizada mientras su experimentada lengua se introducía en su oreja haciendo círculos que la llenaban de escalofríos, para después subir sus manos y atrapar el hinchadísimo pezón y darle suaves masajes con los dedos, la chica solo cerraba sus ojos e inclinaba su cabeza hacia atrás, el viejo tomo una de sus manos de la nena y la dirigió a su palpitante verga se lo tocaba y se lo apretaba suavemente sobre el pans sintiendo su dureza.
—Por favor. no… no….no por favor…déjeme..déjeme…decía la chica incapaz de oponerse al viejo por el terror que le provocaba, su respiración se comenzó agitar, el viejo sentía como su piel se estremecía y se erizaba con el roce de sus dedos.
Entonces el viejo se dio la vuelta quedando de frente a ella quedaban casi a la misma altura por ser Cielo Riveros algo alta siendo una ventaja más al no tener que agacharse mucho para disfrutase ese cuerpo.
La colegiala paralizada por el miedo no reaccionaba porque estaba aterrada deja que el viejo hiciera todo lo quisiera con ella , la lengua del viejo, ávida de placer, recorrió el interior de la virgen boca mientras hacia el reconocimiento bucal el viejo comenzó a sobarle la espalda y la fue bajando hasta que la agarro por la nalgas y la atrajo hacia el para que sintiera su bultote apretaba esos preciosos cachetes con las dos manos sintiendo su dureza y suavidad ,su lengua experta recorrió el cuello bajando a sus hinchados pezones que se erizaron cuando aquel hombre los comenzó a mamar golosamente, consiguiendo que tuviera unos escalofríos de placer que hicieron que la entrepierna de la colegiala se humedeciera.
– AAAhhhhhh, déjeme don Lucas…uuuuyyyy….por favor gemía ella sólo cerró sus ojos y su respiración se agitaba, oleadas de placer se sucedían en su cuerpo, don Lucas viejo zorro en estas cuestiones sabía que la chica no aguantaría con tantas sensaciones placenteras y que solo era cuestión de tiempo para que se entregara toda -no, no me haga esto gemía la colegiala su voz era un susurro apenas oíble.
-El viejo estaba en la gloria ni en sus años de juventud tuvo un cuerpo como de esta chica, que emanaba un aroma limpio a joven virginal, estrujaba y mamaba como un poseído esas tremendas tetas que tantas veces las había soñado y que por fin las tenía en sus manos y boca, la chica se retorcía al sentir sensaciones que nunca había sentido.
-Por favor. no… no….no por favor…déjeme. Déjeme. dijo con voz temblorosa Cielo Riveros cada vez mas débil.
– haa que rica sabes hueles bien rico mamita estas mucho mejor de lo que me imagine le decía el viejo para después besarla asquerosamente en la boca y apretarle el culote.
Cielo Riveros miró hacia arriba con las lágrimas rodando por su mejillas, suplicando! -por favor déjeme ya deténgase don Lucas , en su ignorancia sabia que lo que hacían era algo prohibido pero no podía detenerse primero por que el viejo la tenia amenazada y segundo por que su cuerpo se entregaba cada ves mas a esas placenteras sensaciones nunca antes sentidas.
– le decía cosas al oído como oohh mamazota estas bien buena, que duras las tienes, la colegiala temblaba como un pollo mojado.
No dejaba de mamarle esos tremendos pechos golosamente los pezones eran de un rico color oscuro hinchados por la excitación lo que le provocaba unos escalofríos tremendos por todo el cuerpo de la chica, mientras sus manos acariciaban y estrujaban ese trasero firme, redondo, carnoso,- que divina que estás tiernita y durita decía el viejo ni en el mejor congal de la ciudad encontraría una puta tan sabrosa como tu.
Basss…taaa. Porrr faaa…vooor suplicaba la chica entre jadeos, muy a su pesar el aliento del macho le enervaba los sentidos un rico cosquilleo desquiciante empezó a recorrer una y otra vez su rajita, sentía como una corriente eléctrica por todo su cuerpo, el viejo suspiraba de gusto estaba dándose el agasajo de su vida, hilos de saliva bajaban por la erizada piel de la nena desde los pechos hasta su abdomen, el placer que la colegiala sentía en ese momento hizo que su mente se le nublara estaba perdiendo la batalla contra su mismo cuerpo el placer superaba la razón; se mordía los labios para no gritar de placer.
Entre tanto el viejo sobaba ese tremendo trasero, mientras mamaba los pechazos de la nena con esa boca llena de dientes podridos, manos y bocas le hacían falta al viejo al no darse abasto con tanta carne fresca, el viejo sabía que no tardaría la chica en perder la razón y así fue, de pronto la nena dio un gemido.
– aaaaaaaaaahh aaaaaaaaaaahhh y arqueo la cintura meneándose por instinto e inclinando la cabeza hacia atrás introduciendo sus manos en la sucia melena del viejo atrayéndolo más a sus fabulosos pechos fue en ese momento que toda su resistencia, si tenía alguna, se desmoronó por completo, el viejo al darse cuenta hundió más su horrible rostro entre los tremendos globos de carne dispuesto a seguir gozando a la chamaca, ella cerro sus ojos y mordió su labio inferior.
Lamía apretaba mamaba mientras ella se retorcía de placer completamente entregada ya, acariciaba con sus finos dedos suavemente la parte posterior de la cabeza del viejo mientras este le comía las tetas, la chica susurro -don Lucas mee da pena con usted.
El viejo solo le dijo-te gusta mamita, mientras pasaba su lengua asquerosa por una de las tetas para enseguida volver a mamarsela.
-aaahhhh…aaahhhh…aaaaahhhhh siiiii contesto la chamaca entre jadeos y suspiros, la chica sentía intensos escalofríos que le recorrían la suave piel por que el viejo le lengüeteaba y mordía los pezones con esa boca barbuda que hacían que se retorciera de placer arqueando la cintura al máximo se aferraba a la cabeza del viejo contra sus turgentes y duras tetasas, estaba sumergida en un mar de caricias, lamidas, opresiones y mordidas cerraba sus ojos dejándose llevar, la golosa y barbuda boca del viejo que mamaba sin descanso y la colegiala sentía morir de placer por esa lengua rasposa que hacia las delicias de sus pezones, ella estaba haciendo toda clase de gemidos, -ahhhhhhhffff ahhhh ahhhh ahhgggggggg.
El viejo entonces la tomo entre sus brazos cargándola como si fueran recién casados sin dejar de besar esa rica boquita que con esos gruesos labios lo hacían perder la razón metía su asquerosa lengua que olía a licor y a tabaco llenando de babas la boca de la chica, ella paso sus brazos por la nuca del viejo y se dejó llevar por el rumbo a la cama, el viejo ya estaba dispuesto a desvirgar a esa fabulosa colegiala, parecía que todo estaba perdido para Cielo Riveros
totalmente entregada a ese horroroso viejo para que la desvirgara debido a su inexperiencia en cuestiones sexuales.
La tendió cuan larga es en la cama, la chamaca tenía los ojos semicerrados por la tremenda excitación que tenía, el viejo volteo al espejo e hizo una seña con su dedo pulgar a su banda que seguramente filmaban y se masturbaban con el espectáculo, frotándose las manos se dispuso continuar con el fabuloso agasajo que se estaba dando.
Don Lucas entonces se despojó de la camisa lentamente sabiendo que tenia todo el tiempo del mundo al no regresar la mama de la chica hasta el sábado, dejando ver esa tremenda barriga asquerosa y llena de vellos canosos, tenía los ojos rojos por la tremenda excitación.
El viejo comenzó a besarle los pies a la adolescente y lentamente ir subiendo por esas tremendas piernas sin despegar esa boca barbuda lentamente fue subiendo, la chica suspiraba hasta llegar a su preciosa intimidad coronada apenas con un caminito de bellos muy finos coloco una de las piernas de la chica sobre su espalda para poder dedearle el ano también y clavo la cabeza dándole de lengüetazos a la virginal panochita.
– Aahhh…dios… aahhhmmm…Jadeaba Cielo Riveros arqueando la cintura, el viejo le agarraba las nalgas y trataba de meter sus dedos en el ano de la chica al mismo tiempo que le seguía mamando su panocha Cielo Riveros
tenía la respiración agitadísima se le podía oír.
-Aahhh..ahhhh….aahhggg Gritaba Cielo Riveros mordiéndose la mano. Pero el viejo no paraba de chuparle la vagina, cada vez más rápido. Cielo Riveros
se retorcía en la cama, tratando de no gritar. Le rodeaba la cabeza al viejo con su pierna que tenia en la espalda del viejo y le apretaba la cabeza contra su rajita, queriéndose meter la lengua de el mas y mas adentro -Mmmm…aaaaaaahhh…aahhh los jadeos de Cielo Riveros
eran enloquecedores.
La cola de la chica estaba muy cerradita no podía el viejo meterle el dedo en el ano para dedearla así que le saco los dedos los metió en su panochita de la nena que estaba muy húmeda y volvió a la carga en su cerradito ano , presionaba con sus sucios y callosos dedos el virginal anillo hasta que cedió y la penetro con su dedo de en medio de la mano y después con dos dedos comenzó un mete saca sin parar , su larga y experimentada lengua la metía hasta encontrar sitios placenteros de la colegiala quien no dejaba de retorcerse y de gemir.
-Aahh… huufff… aahhhh.. Su respiración se aceleraba, sentía olas de calor y placer que se expandían desde su zona pélvica hacia todo el resto de su cuerpo.
Ella gozaba doblemente, al sentir la penetración en su ano, y el cosquilleo placentero que le provocaban esa larga lengua en su rajita, la colegiala no dejaba de arquear la espalda y de cerrar sus manos sobre la sabana presa de un placer que nunca había sentido, el viejo no paraba de mamar con avidez el clítoris estremeciendo a la colegiala -ahhhh papi que riiiiiico ahhhhhh papi, la situación había hecho perder la cabeza al viejo toda su lujuria estaba completamente fuera de control , no era para menos la experiencia era totalmente enajenante.
La colegiala gritaba y se contorsionaba ya que el viejo internaba tan profundamente como podía su experimentada lengua y la agitaba en ese hirviente interior –ahhhhhhhffff ahhhh!! ahhhh ahhgggggggg gemia la chamaca su cuerpo estaba completamente poseído por el placer.
El cuerpo de Cielo Riveros
respondía a estos estímulos se movía hacia adelante y hacia atras, inconcientemente, tratando de hundir su vagina ardiente en lo mas profundo de la boca del viejo la cual emitía unos excitantes ruidos de succión con la boca, señal de que estaba tragandose todos sus flujos, aaaaahhhhhhh luuuuccaassss papi uyyyyyyyyyyyyyyyyyy.
Afuera del departamento de Cielo Riveros sucedía que llegaba don Benito y una vecina con cara de preocupación le decía que había visto al viejo Lucas introducirse al departamento de la colegiala, dejando las bolsas inmediatamente el jubilado y subió corriendo por las escaleras, como tenia llaves del departamento de la chica se introdujo y fue directo a la habitación de la chica tratando de abrirla y al ver que tenia segura hablando fuertemente y golpeando la puerta dijo.
Cielo Riveros (así le decía de cariño) estas bien hija ábreme la puerta.
Fue como un balde de agua fría para la pareja la, chica reaccionando como impulsada por un resorte se safo de los brazos del viejo y comenzó a vestirse apresuradamente, volviéndole la cordura de inmediato.
El viejo golpeo con sus puños la cama por la frustración de no seguir agasajándose a ese tremendo y virginal cuerpo.
-Me lleva la chin…decía por que tenía que venir ese pin…. viejo ahorita, incorporándose de la cama se comenzó a poner su apestosa playera dándose cuenta que la fiesta se había terminado quedándose aun con la verga una tremenda erección se le veía claramente en su bermuda completamente empalmada, tomo entonces a la colegiala por el cuello y amenazándola le dijo.
-Cuidadito y dices una palabra de esto pendeja por que vengo y te mato tu me conoces y sabes de lo que soy capaz de hacer, asintiendo con la cabeza la chica
-Le dirás a este viejo metiche que se te descompuso el baño y vine a ver que le sucedia entendido
-siiiii contestaba Cielo Riveros con ojos de miedo
Continua la historia de Cielo Riveros
la escultural colegiala quien tendrá que someterse ahora a la voluntad de un lujurioso profesor para conseguir su sueño
Cielo Riveros
La adolescente aun agitada se vestía apresurada con una blusita y un short, enseguida le quito el seguro a la puerta de su habitación y la abrió, entrando don Benito poniendo una cara de furia al ver al viejo Lucas que lo observaba con una sonrisa descarada, Cielo Riveros se veía con el pelo totalmente revuelto nerviosas, asustada con la respiración agitada y la cara muy roja.
-Pero que demonios hace aquí usted pregunto el jubilado a don Lucas.
-No se sulfure abuelo vine arreglar una fuga de agua que tenía el baño de esta preciosura y ya quedo solucionado y como no tengo más que hacer aquí me retiro volteando a ver a la chica y diciéndole –hasta luego mi reina ya sabes cuando tengas otra fuga me llamas y yo te la arreglo, saliendo enseguida el viejo lujurioso de la habitación con una sonora carcajada.
Don Benito se dirigió a la chica –que paso Cielo Riveros
que te hizo ese desgraciado dime y en este momento le arreglo las cuentas, pero la adolescente le tenía un enorme miedo al viejo Lucas y solo balbuceo –no abuelito no paso nada así sucedieron las cosas como él dijo tenía una inundación en el baño por una fuga de agua y don Lucas amablemente vino y la arreglo.
Don Benito la miro cariñosamente sabiendo que la chica le mentía y le dijo.
-Hija si más adelante me quieres decir realmente que paso te escuchare siempre tendrás mi apoyo y mi cariño abrasándola tiernamente saliendo enseguida de la habitación y se fue a su departamento.
Cielo Riveros cerró la puerta de su habitación y se tiro a su cama con las palmas de las manos en su cara y comenzó a llorar sacando toda la tensión acumulada por la situación que había vivido con el viejo lujurioso y por qué casi los descubría Don Benito en una situación comprometedora sentía vergüenza y asco al recordar como el viejo la acaricio, la beso y mamo su escultural cuerpo desnudo, no dándose cuenta se quedó dormida completamente agotada.
Al rato la despertaron unos golpes de alguien que clavaba algo con un martillo volteo a ver el reloj vio que se había quedado dormida poco más de una hora, se asomó afuera a ver que sucedía y vio a don Benito clavando algo en la puerta del departamento y acercándose le pregunto qué sucedía, el jubilado le explico que estaba colocando una base de metal para un grueso madero que atravesara toda la puerta y así estaría más segura, por si alguien trataba de forzar la puerta.
Ya más tranquila la chica se dirigió a su habitación para darse un baño e irse a la escuela cuando se quito su ropa y se vio en el espejo del baño se dio cuenta asustada que tenia los pezones totalmente amoratados, sus pechos llenos de marcas y mordidas sentía un desagradable olor a sudor y a sexo del viejo Lucas y comenzó a sollozar de nuevo un rato para después bañarse y se vistió con una blusa amplia de su mama ocultando y disimulando los moretones de sus senos.
El viejo Lucas quien ya se encontraba en su privado con el resto de la banda bebiendo una cerveza comentaba – como fue a llegar ese pinché viejo cuando ya estaba por cogerme esa apetitosa palomita me dejo más caliente que el infierno tengo una erección en la verga como nunca, el viejo Anselmo dijo- si compadre tuviste en tus manos la mejor vieja que existe en esta colonia por poco te la coges nosotros aquí nos despellejábamos las vergas viéndote en acción pero tuvo que llegar ese viejo metiche.
-Si compadre ahora tengo un dolor en los huevos que no se me quita y la verga dura como un fierro , dirigiéndose a Castulo un viejo de 58 años de raza negra le dijo –ve a la cantina y tráeme a la Micaela, el viejo Lucas debajo de su privado tenía una cantina de mala muerte donde trabajaban unas prostitutas vendiéndose al mejor postor una de estas era la Micaela al rato llego la Micaela era una mujer ya de 43 años algo pasada de peso morena con piernas llenas de celulitis una cara que ya se le veían los estragos de toda una vida de desvelos unos senos completamente caídos oliendo a licor y mascando un chicle.
-Hola mi rey para que soy buena dijo la Micaela al viejo Lucas.
-Para que más para sacarme la leche de la verga jajajjj dijo Lucas.
-Si mi rey ya sabes que esa es mi especialidad a ver ustedes bola de estorbos váyanse a ver si ya puso la cochina jajajaj dijo la mujer , saliendo los demás dejando solos a la pareja , la mujer deslizo su vestido quedando desnuda no traía ropa interior tenia un vientre abultado los senos completamente flácidos las piernas flacas nada que ver con la despampanante Cielo Riveros la mujer se acostó en un colchón viejo y abrió las piernas esperando al viejo , este se quitó su bermuda y con la verga totalmente dura la penetro la mujer ni se inmuto seguía mascando su chicle acostumbrada a esas situaciones, el viejo Lucas la cogía con rapidez imaginando en su mente que era Cielo Riveros no tardando ni 5 minutos cuando se vino a borbotones dejando a la Micaela completamente batida de ese espeso semen.
-Lárgate a seguir trabajando, le dijo el viejo la Micaela se incorporó, se vistió de nuevo y salió del privado el viejo se quedó ahí solo tomando cerveza y pensando en la adolescente no había experimentado nunca una atracción física tan irresistible como la que sentía por Cielo Riveros acostumbrado a tomar todo lo que deseaba sentía rabia al pensar en la apetecible palomita que tuvo en sus brazos y que se le escapo, cavilaba en ella cuando sonó su teléfono y se le dibujo una sonrisa al oír lo que le decían del otro lado del auricular, llamo al resto de la banda y les dijo.
Muchachos prepárense tenemos trabajo me llamo nuestro contacto el objetivo ya esta listo salimos esta misma noche para allá, revisen el carro ya que es un viaje largo de 10 horas, Anselmo le dijo- y que pasara con la palomita del cuarto 12(refiriéndose a Cielo Riveros ), ese asunto tendrá que esperar hasta que regresemos nuestros negocios no pueden esperar así que preparen todo partimos hoy en la noche, don Lucas y su banda secuestraban personas adineradas de distintos puntos del país tenían un socio que se encargaba de estudiar a las víctimas y cuando la situación era propicia entraban en acción esa misma noche partieron para efectuar su trabajo.
Al otro día la adolescente salió con temor a la calle por miedo de encontrase al viejo Lucas pero respiro aliviada cuando una vecina le comento que los había visto partir con muchas maletas una noche antes respirando aliviada la jovencita y tratando de llevar su vida como antes de que sucediera lo que paso cuando casi la violan pero estaba muy equivocada de ahí en adelante ya nada sería igual.
Una noche que ya estaba acostada en la oscuridad de su recamara vestida solamente con un diminuto bikini, ya profundamente dormida comenzó a tener un sueño húmedo se acariciaba su escultural cuerpo entre sueños sus manos recorrían sus turgentes senos apretando los duros pezones comenzó a soñar en la morbosa situación que había sucedido en esa recamara,como flashasos venían a su mente los momentos vividos con el viejo Lucas sentía esas manos ansiosas que acariciaban y estrujaban su fabuloso trasero y esa boca que mamaba golosa sus turgentes pechos haciéndola estremecer y humedecerse en su rajita su mano estrujaba sus duros pechos y con la otra mano hacia círculos en su ombligo todo esto con el viejo Lucas en su mente en acción bajo más una de sus manos y la metió por dentro del bikini hasta que encontró su virginal rajita ya húmeda con sus dedos estimulaba su clítoris ya hinchado de deseo arqueando su cuerpo sus hábiles e inquietas manos, no dejaron ni un rincón del excitado cuerpo sin recorrer, despertando en cada rincón de la suave piel el deseo y la pasión que escondía su joven y apasionado cuerpo, teniendo varios orgasmos despertó sobresaltada y excitada todavía jadeando empezó a respirar profundamente tratando de controlarse y quedo profundamente dormida de nuevo.
Al otro día se mostraba sorprendida al recordar la masturbación y se desconcertaba al recordar que el viejo dominaba su sueño húmedo se hizo a la idea que era una locura y que no volvería a suceder, en eso se equivocaba cada noche el viejo regresaría en deliciosos sueños húmedos no pudiendo evitarlo gozando de deliciosos orgasmos cada noche.
Cielo Riveros regreso a la normalidad de su vida al no encontrarse Lucas y la demás banda que siempre la molestaban, un día como siempre se dirigía tomar su bus para ir a su escuela caminaba contoneando las caderas deliciosamente, traía puesto su precioso y muy sexy uniforme escolar, una blusa blanca de esas sin mangas y pegada al cuerpo que revelaban un abdomen liso y sin un gramo de grasa, enseñando un generoso escote mas de la mitad de ese par de mamarles melones y para completar el cuadro una cortisima minifalda enseñando sus turgentes y potentes piernas y su trasero redondo, carnoso y respingón ,se veía tremendamente sensual con ese andar tan cadencioso era una adolescente que exudaba sexualidad por todo los poros no había hombre que pasara por su lado sin voltear a ver ese carnoso trasero, Cielo Riveros aun estudiaba el bachillerato, pero parecía ya toda una universitaria, levantaba piropos de admiración y vulgares también no tomándolos en cuenta la chica siguiendo su cadencioso andar.
Cielo Riveros era un verdadero bocado, tan linda, tan joven, tan ingenua y los machos trataban de imaginársela desnuda se excitaban viéndola andar, la chica venia cavilando en sus pensamientos las cosas que tenía que hacer en la escuela ese día no viendo al chico de la farmacia que barría la banqueta quien no podía dejar de apreciar el delicioso volumen de sus pechos , se la imaginaba desnuda en la cama , la imagen era insoportable tenía que tocar y acariciar esa piel o se volvería loco, al ver que se dirigía hacia el la abordo.
-Hola como estas preciosa la chica lo volteo a ver y con coquetería femenina le brinda una sonrisa agradable y le contesto –bien gracias, ella veía que los ardientes ojos oscuros del chico tenían una forma muy especial de mirarla y eso le agrado , entonces ella bajo la mirada se sentía cohibida ante la mirada del chico -por qué no me miras me tienes miedo?- es que no te conozco le contesto sonrojada de la cara ,- si tienes razón discúlpame me llamo Rodrigo para servirte preciosa y le extendió la mano ella se la tomo y sintió su varonil mano que le apretaba suave y delicada al mismo tiempo su fina mano, el chico hubiera querido eternizar el momento con tal de prolongar la cercanía de la joven , la chica estaba recién bañada su lacio cabello caía sobre sus hombros , toda ella despedía un delicioso olor a jabón.
-Ya que no somos unos desconocidos espero que algún día me aceptes una invitación a salir le dijo el chico contestándole ella -no creo que se pueda no me dejan salir sola sin permiso pero a lo mejor un día si le dijo ella a el no dejando que el chico fuera a perder las esperanzas totalmente despidiéndose de ella con un beso en la mejilla dirigiéndose a su escuela.
A partir de ese día Cielo Riveros se detenía unos momentos a platicar con el chico cuando se dirigía a su escuela le agradaba su amena platica la hacía reír mucho y se dio cuenta que le gustaba mucho, comparaba a Rodrigo con el viejo Lucas y se daba cuenta que eran diametralmente opuestos él era un caballero la trataba con delicadeza y le daba finas atenciones y no como el viejo desagradable y vulgar , en las noches cuando estaba en sus sueños húmedos poco a poco fue desapareciendo la figura del viejo y fue tomándola Rodrigo pasando agradables momentos en sus sueños con el.
Cielo Riveros vivía en un mundo color de rosa debido a que su madre no le permitía salir a ningún lado cuando no tenía que hacer en su casa se dedicaba a ver telenovelas toda la mañana imaginando que ella era la protagonista y que su príncipe azul velaba por ella y la amaba ,admiraba a las actrices de las novelas y ansiaba ser como ellas era su sueño ser actriz, por eso un día que vio en la escuela una convocatoria para un grupo de teatro experimental que se formaría se emocionó mucho y fue por un formulario y lo lleno con sus datos , imaginándose que ese era el principio de una exitosa carrera .
El maestro que dirigía ese programa teatral era un enfermo sexual que cuanta alumna caía en sus garras se aprovechaba de ella siendo todo eso del teatro solo pretextos para mantenerse cerca de las colegialas que lo volvían loco, había sido corrido ya de varias escuelas en otro estado por las quejas de las alumnas de las que se había querido aprovechar pero como tenía mucha labia llego a esa escuela donde nadie la conocía convenciendo al director de poner en marcha ese programa, era un tipo muy desagradable físicamente se llamaba profesor Tulio era como de 56 años barrigón, calvo, y con unos ojos saltones que le hacían desagradable para cualquier mujer, lo que no tenía físicamente agradable lo tenía en labia, tenía una tremenda labia para envolver a sus víctimas.
Cielo Riveros era de las más bonita y de las más desarrollada físicamente de todo el plantel maestros y alumnos la veían con deseo y admiración , a los dos días la chica vio que salió una lista para los castings dándose cuenta que le tocaría un viernes después de la clase de educación física que era la última ya para salir de la escuela, ese día los de su clase podrían usar la alberca después de la clase de física llevando bajo sus ropas su traje de baño , cuando llego ese día la chica se sentía muy acalorada por lo que al terminar la clase de educación física al igual que sus compañeros de despojo de sus ropas quedando ella en un diminuto bikini, uno de esos que consiste en un tanga en la parte inferior y la parte de arriba consistía en dos pequeñísimos triangulitos que casi no lograban taparla y unidos por unas finísimas tiras de tela, los chiflidos y los piropos no dejaron de escucharse a continuación se veía soberbia todos los hombres parecían perros, aullaban, silbaban y gritaban como enajenados; hasta le dio un poco de miedo se metió al agua colorada de la cara por la vergüenza que luego se le paso al jugar con sus compañeras con un balón , al rato se dio cuenta que se acercaba la hora de su casting y se salió del agua, su cuerpo perfecto emergió del agua, mojado, húmedo, como si fuera una sirena, su figura semidesnuda se dibujaba perfecta se fue envuelta en la toalla al vestidor, y ya no se puso nada en la parte de arriba solo se fue con el sujetador del traje de baño donde se marcaban sus duros pezones, y una minifalda cortísima y abierta saliendo apresurada al famoso casting al llegar se dio cuenta por la ventana que estaba otra chica en la oficina del profesor Tulio , después de un momento salió la chica que estaba antes de ella con una cara enojadísima y azoto la puerta diciendo –viejo estúpido, Cielo Riveros se quedó ahí hasta que oyó la vos aguardientosa del profesor diciendo que pase la siguiente.
Cielo Riveros al traspasar la puerta se quedó extasiada viendo a la pared al profesor Tulio retratado con famosos actores y actrices que veía en sus telenovelas, no sabiendo la chica que todo era un truco de fotomontaje para deslumbrar a jóvenes inocentes e ingenuas como ella y conseguir sus sucios propósitos.
-Pásale preciosa le dijo el viejo sentado detrás de su escritorio comiéndosela con los ojos , se levantó y dirigiéndose a Cielo Riveros le dijo –mucho gusto en conocerte linda, ella le devolvió el saludo no dejando de ver las fotos en la pared de la oficina el viejo a continuación le dijo yo descubrí a todas esas estrellas de hoy de la televisión soy un descubridor nato de talentos ellas fueron como tu cuando comenzaron solo unas colegialas pero yo las forme y ahora me agradecen mucho el hecho de que por mi están en el estrellato, la chica estaba extasiada pensaba que por fin su sueño se haría realidad, -mira nena un par de piernas y un rostro agradable es suficiente para empezar ….anda cuéntame cuáles son tus aspiraciones le decía el profesor quien la oía sin oírla más atento a las formidables redondeces de la escultural colegiala.
El viejo le dijo ven vamos a ver qué tan buena eres si tienes madera lo vio dirigirse a las cortinas y cerrarlas quedando semi oscura la oficina veía que la mirada del viejo traspasaban su poca ropa que llevaba se sentía desnuda delante de el en ese momento se arrepintió no haberse vestido un poco más debido a las prisas de que se le hacía tarde para el casting –vamos hacer una prueba de dos amantes quiero ver si tienes pasión y aptitud para el papel de chica que estoy buscando tienes que actuar como una amante que espera ansiosamente a su hombre y al verlo da rienda suelta a su pasión guardada se natural solo déjate llevar, el viejo se acercó a la nerviosa chica veía en esa mirada del profesor Tulio la misma ansiedad y lujuria del ya casi olvidado viejo Lucas acercándose a la colegiala , Cielo Riveros sentía miedo y repugnancia por ese hombre obeso ,calvo y con esos ojos saltones como de sapo que le miraba el busto y las piernas descaradamente.
Ella bajo sus parpados para evitar esa quemante mirada tomando a Cielo Riveros por su breve cintura la beso en los labios al contacto de esa ardiente boca ella lo rechazo empujándolo-pero que demonios te pasa quieres o no quieres ser una estrella de televisión si no quieres puedes retirarte y no me hagas más perder mi tiempo dijo el profesor presionándola psicológicamente , en Cielo Riveros su ingenuidad pensaba que esa era una oportunidad única para cumplir sus sueño y dócil y mansa se dirigió al viejo disculpándose -lo siento profesor no volverá a suceder continuemos de nuevo.
Esa actitud envalentono más al viejo al mirarla el lujurioso profesor sonríe con su boca llena de babas por el bocado que estaba ahí a su disposición y le dice con aquella cara de sádico –eres una jovencita muy linda ella tenía la mirada en el piso, el viejo la tomo por el mentón y alzo su hermosa cara acercando su babeante boca a la de ella y besándole los hermosos labios asquerosamente tomo los brazos de ella y los paso alrededor de su cuello mientras el la estrechaba por la breve cintura.
Los dos se fundieron en un largo y prolongado beso de lengua como si fueran novios, el viejo al tenerla tomada por su breve cintura la pegaba a él sintiendo la deliciosa suavidad y dureza de la escultural adolescente, estrechaba más ese turgente cuerpo , el viejo tenía mal aliento y sus bigotes le picaban los labios a la chica mientras la lengua de Cielo Riveros tenía una lucha intensa con la lengua pegajosa y húmeda del fogoso profesor , su aliento era a alcohol , tabaco, ajo y aliento de viejo.
Ella callada, dócil y sumisa, se dejaba hacer todo lo que quisiera el lujurioso profesor no quería volver a contradecirlo y perder su oportunidad de llegar hacer actriz, estaba temblando, notaba como su cuerpo era un manojo de nervios sus mejillas encendidas delataban su turbación el viejo con sus manos recorría la suave y desnuda espalda de la nena (recuerden que ella solo estaba vestida con el pequeño sujetador de su traje de baño y una cortísima minifalda) - mmmm….tienes una piel suave como de bebe le decía al oído el lujurioso maestro, como ventosas las manos del viejo se incrustaban en el apetecible cuerpo de la jovencita.
Cada caricia del sudoroso viejo empezaba en la espalda y la terminaba en el fabuloso trasero de la hermosa y juvenil adolescente, no dudaba el fogoso viejo en apretar ese par de nalgas duras y llenas de carne, sus manos ansiosas y sudorosas recorrían el escultural cuerpo como si quisiera remodelarlo, -que ricos cachetes tienes preciosa, dijo el viejo al tiempo que sobaba obscenamente las juveniles nalgotas, en una de esas que estrujaba el carnoso trasero el viejo introdujo sus manos bajo la minifalda de la chica y le tocaba las piernas desnudas, eran muy suavecitas, sus manos ásperas sudorosas subieron hacia el fabuloso trasero se lo manoseaba estrujando esas nalgotas sólo cubiertas por su diminuto bikini, se sentía el calorcito y como temblaba el fabuloso cuerpo de la chica.
El viejo no dejaba de besar esos carnosos, apetecibles, maravillosos labios de la espectacular adolescente , de la boca de la sensual colegiala solo se oían apagados quejidos al sentir que las caricias del profesor eran cada vez mas atrevidas -mmmmmmmggg mmmmmmmggg y se retorcía en un inútil intento de evitar que las ansiosas manos del viejo se introdujeran bajo su minifalda los dedos del viejo se deslizaron bajo el bikini disfrutando la turgencia de esas nalgotas , el viejo a continuación trataba de introducir los dedos en el cerrado agujerito posterior de la chica presionaba y presionaba haciendo círculos tratando de vencer la resistencia de su cerrado culito- mmmmmmmggg mmmmmmmggg se oían los ahogados quejidos de la boca de Cielo Riveros ante el asfixiante y asqueroso beso del viejo.
Cuando por fin los ansiosos dedos vencieron la resistencia del agujerito posterior de la chica, el fogoso viejo sentía en sus dedos que emanaba un rico calorcito la chica por un momento se safo del asfixiante beso y balbuceo --Por favor déjeme ya ...por favor, el lujurioso viejo se recreó mirando aquellos ojazos verdes espantados sin dejar de hacer lentos círculos suaves en el culo de Cielo Riveros alternándolos con metidas y sacadas el viejo estaba hechizado por ese cuerpo que invita al desenfreno y a la lujuria, acerco su cara al mi oído de la adolescente y dijo -qué buena estás, mamacita.
Para enseguida volver a besarla asquerosamente en los labios y apretarle el desquiciante trasero, a continuación sus sudadas manos subieron por la juvenil espalda mientras la ansiosa boca besaba el desprotegido cuello esto la estremeció ya que la chica seguía con sus brazos alrededor de la nuca del viejo por temor a que se volviera a enojar lengueteba la oreja y el cuello de la colegiala haciendo que se contoneara por los escalofríos de sus sensibles partes, la chica nada más abría y cerraba los ojos sintiendo como su cuerpo empezaba a reaccionar a tales caricias y lengüeteadas, por momentos le volvía a sobar las sabrosas nalgotas mientras la besaba en los carnosos labios , hasta que cargó nuevamente hacia su sensible cuello y otra vez le inundó un temblor en el cuerpo –no,no me haga esto inquirió la colegiala su voz era apenas un susurro.
Ella seguía dejándose hacer por el viejo y comenzó su boca hacer leves gemidos estaba empezando a sudar, su aroma era delicioso, el calor que brotaba de la boca del macho sobre su piel la hacía estremecer aahhhh las manos incansables le estrujaban con ansia las sabrosas nalgotas , sentía el ardiente aliento del viejo en su cuello y sus hombros-noo ohhhh, nooo ohhhhh, me da pena balbuceaba la chica, al besar el cuello una y otra vez empezó a recorrerle un escalofrío por el escultural cuerpo de Cielo Riveros instintivamente cerro los ojos y levanto la cabeza dejando que la lengua salivosa del viejo le recorriera todo el cuello ella vibraba y respiraba profundamente.
Teniéndola abrasada contra busco en la espalda el broche del sostén la chica al darse cuenta de sus intenciones en un débil momento de lucidez dijo –noooooo,pero fue demasiado tarde los enormes y duros pechos de la chica saltaron libres de sus ataduras, eran unos pechos soberbios, redondos, macizos y rotundos en los que destacaban poderosamente los pezones erectos, -mierda que tetas..son enormes decía el viejo babeándose y sin más preámbulos tomo cada uno de los turgentes pechos con una mano y sin esperar más el caliente profesor se abalanzo sobre los melones de la colegiala mamándolos con desesperación cuando sintió la lengua del viejo succionándole los pezones casi se desmaya de placer un intenso escalofrió le recorrió todo el cuerpo -que buenas tetas decía el fogoso viejo , las primeras sensaciones de excitación llegaron a ella ahhhhhhhhhhh, ohhhhhhhhhhhh ante la golosa mamada del viejo ,sentía en su rajita ese conocido cosquilleo que le enervaba los sentidos .
Los besaba y los chupaba como el mas rico manjar que jamás había probado los senos reaccionaron ante tales estimulaciones aumentando de volumen y de dureza al contacto de la boca golosa mientras las manos estrujaban los senos y apretaban los pezones circularmente, el viejo sentía como ella empezaba a gemir con mas intensidad Ahhhhhhhhhhh, ohhhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhh, mmmmmmmmm, ahhhhhhhhhhh, mmmm.
La joven por momentos parecía perder el conocimiento en medio de una sensación poderosa que le sacudía todo el cuerpo que la llevaba a aferrarse a la calva y asquerosa cabeza del viejo, como se aferraba a las sábanas cuando se masturbaba en su cuarto, ella se estremecía y respiraba agitadamente- -ahhhh papi que riiiiiico ahhhhhh papi gemia presa del deseo ya su virginal rajita se humedecía constantemente ante tanta estimulación ,el viejo sentía que esas redondas formas de la adolescentes lo enervaban tanto que lo llevaban al desquicio, las mamadas y caricias del fogoso viejo arrancaban de los juveniles labios gemidos y jadeos, el viejo con su golosa boca le mamaba sin pausas alternadamente los senos y con la otra mano estrujaba el otro seno, mordía mamaba con su larga lengua, lo hizo con tal maestría, que la adolescente sentía sucesivas andanadas eléctricas que surcaron fulminantes todo su escultural cuerpo, produciéndome trastornadoras sensaciones placenteras y agradables, los durísimos senos llenaban alternadamente su boca glotona del viejo, mientras Cielo Riveros gozaba de las excitantes caricias que las ansiosas manos repartían generosamente en el resto del cuerpo -ahhhhhhhffff ahhhh ahhhh ahhgggggggg gemía descontroladamente Cielo Riveros era todo un espectáculo como la disfrutaba ese asqueroso viejo.
El calor sexual empezaba a consumir a la chica, cerraba sus hermosos ojos verdes y se dedicaba a gozar de las caricias del viejo lujurioso quien loco de pasión y hambriento de deseos, recorría cada centímetro del despampanante cuerpo de la colegiala despertando intensos fluidos que preparaba su epidermis haciendo que la chica desfalleciera de placer,- qué cuerpo eres una diosa nena le decía al oído el profesor -eres una delicia tus pechos firmes carnosos que no los puedo abarcar con mis manos y boca, enseguida el viejo con la rasposa lengua hacia círculos en todo la aureola hasta finalizar en el pezón, que lamía y chupaba con glotonería, sentía en ese momento cómo la chica vibraba de placer.
En eso estaban cuando el viejo la soltó y se encamino con ella docil de la mano a un sofá que había en su oficina a continuación se comenzó a bajar los pantalones junto con los calzoncillos dejado salir libre una tremenda verga erecta venosa palpitando sobresalía de entre una abundante mata de pelos negros y se sentó con las asquerosas piernas abiertas, la chica nunca había visto un pene y menos de ese tamaño - quieres verga?, quieres comerte una buena verga? le decía el viejo, la joven temblaba y eso le daba seguridad al caliente maestro quien, aprovechando la sumisión de su víctima la obligo arrodillarse y tomándola de la cabellos le decía -mámamela la chica se sentía desconcertada no sabía que hacer, así que la tocó con la punta de la lengua, y sintió un gusto salado, enseguida comenzó a lamer alrededor de la roja cabeza - chupa fuerte que no te ciento inquiría el viejo e instintivamente la excitada chica comenzó a mamársela se lo metía en la boca, y empecé a chupar con avidez, -nena, nenita, así... si.. ahhh, sigue ahhhh
eso, ahora recorre la cabeza con tu lengua decía el viejo ante las sensaciones que le hacia sentir la sabrosa boca de Cielo Riveros - Señorita... que boca, que sabroso mamas.
Cielo Riveros seguía con su labor se la chupaba ardientemente saboreando esa magnifica verga casi hasta atragantarse, su boca sentía en su interior esa tremenda dilatación del rígido miembro, el viejo hacia esfuerzos para contenerse y empleaba en ello todo su autodominio para prolongar el placer que esa deliciosa boca y labios le proporcionaban de pronto Cielo Riveros comenzó a sentir que aquel tremendo miembro tenía algunos espasmos en su boca y el viejo dijo - ah me corro, te la voy a dar, tomo firmemente a Cielo Riveros de la cabeza y disparo la primera de varias cargas de semen llenándole la boca a la chica con el lechoso liquido la chica seguía con su labor mamándole y ordeñándole la verga y sin dudar siguió tragando, el profesor largaba unos sonidos de placer entre dientes -haa... haa.. haa... siii así cachorrita, toma toda la lechita de tu macho.
A continuación el viejo con el miembro flácido se incorporó subiéndose los pantalones y dejando a la pobre Cielo Riveros arrodillada y jadeando el profesor le dijo –te puedes retirar el lunes daré los resultados del casting nena ahí sabrás si quedaste en el elenco le dijo el viejo para a continuación reírse con una sonora carcajada Cielo Riveros se incorporó poniéndose el sujetador de su bañador para enseguida salir de la oficina del profesor y dirigirse a los vestidores para cambiarse e irse a su casa.
Cielo Riveros se quedo ahí de rodillas totalmente desconcertada por lo que había sucedido, el viejo profesor salio de la oficina dando un portazo y subiéndose la cremallera del pantalón con una gran sonrisa de oreja a oreja, Cielo Riveros quedo arrodillada en el suelo tratando de tranquilizarse, por la comisura de los labios resbalaban hilillos de asqueroso semen del lujurioso profesor, ella tosía para expulsar de su garganta los restos de semen tratando de sacarse el gusto de ese sabor que le quedo en la boca.
Ya más tranquila se levanto la nena busco su sujetador colocándoselo sobre sus formidables tetas, y a continuación salió de la oficina para dirigirse a su casa, al llegar como autómata se dirigió a la ducha se encontraba en unas condiciones físicas y mentales deplorables pero mediante una larga ducha y el ingresar toda su ropa a la lavadora se dispuso a dormir hasta bien entrado el día siguiente que era fin de semana.
Al otro día no salió para nada todo el día se la paso haciendo el quehacer de la casa, su mama había salido de paseo y no regresaría hasta muy tarde, ya en la noche en la intimidad de su recamara acostada boca abajo en su cama ,tomo su diario el cual era su fiel confidente, y empezó a detallar sus experiencias vividas el día anterior hasta que llego a lo del casting y no pudo evitar recrearlas en su mente y sentir un estremecimiento al recordar como el viejo Tulio la hizo sentir un tremendo placer en su cuerpo al llegar a la parte de cuando le mamo la verga sintió una mezcla de vergüenza y satisfacción, confundida al sentir satisfacción por ese viejo asqueroso apago la luz y se dispuso a dormir.
Llego el lunes aún tenía una gran confusión respecto a lo que había sucedido, no podría decirse que estaba traumada pero la verdad es que no terminaba de creer lo que había hecho en el casting. poco a poco empezó a bloquearlo en su subconsciente dando por terminado todo eso de querer ser actriz máxime que al platicar con otras compañeras de su colegio supo que el viejo Tulio era un depravado sexual al quererse aprovechar de una alumna como lo hizo con Cielo Riveros pero esta lo denuncio con el director quedando todo en que le llamarían la atención ya que el viejo Tulio se defendió diciendo que la chica estaba confundida que él era un gran profesional del teatro y bla bla bla ya saben que tenía una gran labia este depravado viejo.
La colegiala siguió en su vida normal de su casa a la escuela y de la escuela a su casa, lo que la hacía salir de la rutina diaria era sus amenas pláticas con Rodrigo el chico de la farmacia quien insistía a la hermosa colegiala en salir a dar la vuelta en verdad el chico estaba loco por la formidable colegiala, pero quien no, si traía loco a todos los machos de la colonia en verdad que era una diosa hecha mujer.
Un día estaba el chico en la farmacia y vio en su reloj que eran la una y media de la tarde se apresuró a salir a sabiendas que era la hora que pasaba Cielo Riveros ya que ella estudiaba en las tardes, y no se equivocó la vio con su cadencioso andar dirigirse a donde estaba el cómo todo los días venia vestida con el uniforme escolar, su curvilínea figura se adivinaba bajo las ropas de colegiala se notaban sus portentosos senos solo cubiertos por su blusita con un escote que dejaba muy poco a la imaginación y un chaleco que por el tamaño de los senos casi no le cubrían nada, su minifalda tableada que tapaba su carnoso trasero y dejaba a la vista sus potentes y torneadas piernas era una chica llena de curvas de miedo, todo esto coronado por un bellísimo rostro de niña todavía sin ninguna imperfección con unos grandes ojos verdes pero evidentemente lo que más llamaba la atención era su cuerpo, que a pesar de sus 18 años, era ya el de toda una mujer, y todos los machos al verla se le ponía muy dura la verga con solo mirarla.
El chico al verla se le ilumino el rostro era como ver un ángel en la tierra.
-"Hola Rodrigo" le dijo la chica con una voz melodiosa.
-"Hola Cielo Riveros " le dijo el chico tomándole de la mano y acercándose a la colegiala para darle un rico beso en la mejilla que para el era sentirse en la gloria.
-"Como estas, sabes te quería invitar a una noche disco que habrá en el parque de la colonia el sábado pero ya sé que tu mama no te dará permiso" poniendo el chico una cara de triste resignación que conmovió profundamente a Cielo Riveros quien dándole una esperanza le dijo.
"-Me da pena Rodrigo has de pensar que no quiero salir contigo, pero no es así, si por mi fuera saldría todos los días contigo porque me caes muy bien, pero mi mama es muy estricta conmigo no me permite salir a pasear a menos que no sea con ella o con mi abuelito, pero voy hablar con ella voy hacer todo lo posible para ir a esa noche disco ya que es cerca de mi casa en el parque.
El chico le sonrió al ver que por lo menos tenía una leve esperanza.
La chica a continuación le dijo "mañana voy ir al centro me manda mi mama al correo a dejar unas cartas y a pagar unos abonos a la mueblería no se si puedas acompañarme y de ahí me invitas un café le dijo.
"- claro que si "dijo el chico "mañana le digo al dueño que me de permiso y te acompaño al centro."
"-Ok entonces mañana te espero a las 9 de la mañana en el parador de los buses que van al centro" le dijo la chica para a continuación despedirse para irse a su escuela.
Al otro día Rodrigo se paseaba nervioso en la parada había llegado desde media hora antes ansioso y emocionado al saber que saldría con una beldad de mujer, cuando al voltear a su derecha la observo como a 30 metros que venía Cielo Riveros preciosamente arreglada esa mañana hacia calor, y la chica llevaba puesto un vestido de una sola pieza con tirantes a los hombros con un escote que era imposible no ver esos melones que tenía por senos a partir de la cintura estaba pegado al cuerpo, y llegaba hasta unos 10 centímetros por arriba de las rodillas dejando descubiertas esas portentosas piernas y su carnoso trasero, para rematar sus botas negras a la rodilla que en conjunto con el vestido la hacían ver bastante sexy.
Rodrigo observo que los hombres la miraban lujuriosamente algunos incluso le decían piropos muy atrevidos eso provoca que Cielo Riveros moviera más instintivamente ese par de nalgotas al caminar.
"-Hola eres puntual "le dijo Cielo Riveros al chico quien estaba anonadado no podía creer que sería acompañante de tremendo forrazo de chamaca.
"-eeeee esste si" contesto nerviosamente dándole un beso en la mejilla.
Llego el bus y se fueron platicando de cosas triviales hasta llegar al centro y dirigirse primero al correo y luego a pagar los abonos de la mama de la chica.
Al ir caminando luego de cumplir con los mandados por el centro la chica se maravillaba con las tiendas y se adelantaba como una niña emocionada a ver los aparadores de las tiendas de ropa esto lo aprovechaba el chico quien con la mirada la recorría desde los pechos hasta las redondas nalgas o al agacharse para ver más detalladamente los aparadores el chico se recreaba mirándole las piernotas y casi las nalgas, luego cuando la nene se volteaba para señalarle algo , el chico tenía que hacer un gran esfuerzo mental para evitar que su tranca se pusiera tiesa y que ella lo notara.
Pero Cielo Riveros estaba más emocionada por el paseo que para ella era algo extraordinario salir de la pesada rutina se divertía como una niña de 10 años emocionada al ver las grandes tiendas de ese centro comercial y es que ella su mentalidad era todavía inocente de una chica sin malicia lo que no le ayudaba para nada es que ese cuerpazo que tenía ya muy desarrollado que tenía necesidades pedía sexo aunque ella mentalmente no lo deseara, pero los machos si lo notaban por eso la acosaban principalmente los viejos.
Poco después se encaminaron a un café que había en la parte alta del centro comercial al llegar a las escaleras eléctricas ella se adelantó a Rodrigo, mientras subían para el chico era inevitable que observara aquellas formas redondas de su cuerpo, sus nalgas, sus piernotas torneadas, su mirada se posaba en sus caderas y en su fabuloso culo ufff, le podía ver un mini bikini que destacaba sus formas bien redondeadas, estaba en la gloria nada más de verla.
Llegaron al café y se sentaron en una meza, ahí el chico disimuladamente cuando Cielo Riveros volteaba la cabeza para observar algo, aprovechaba para ver su maravilloso par de tetas, grandes, redondas apetecibles su canalito debía llevar a la perdición no podía dejar de apreciar el volumen de sus pechos y cuando cruzó las piernas, le pudo ver sus magníficos muslos mostrándoselos inocentemente la chica descuidadamente por completo casi hasta el bikini.
Tomaron café, platicaron rieron en verdad la estaban pasando bien, al salir del café pasaron por unos cinemas del centro comercial el chico le dijo a Cielo Riveros que si quería podían entrar a ver una película la chica se quedo pensando observo su reloj eran las 11 de la mañana era temprano todavía y dijo que si que estaba bien que el escogiera la película , mientras Cielo Riveros observaba los cartelones el compro dos boletos para ver la película de Exorcista 2 entraron en la sala que estaba casi vacía por la hora de la mañana había solo un par de chicas con uniforme de secundaria que se ve andaban de pinta y un señor como de 50 años que estaba durmiendo en el sala , la chica al entrar a la penumbra de la sala por que ya había comenzado la película se tomo de la mano de Rodrigo quien estaba sumamente nervioso al sentir la suave mano de su diosa.
El chico le dijo vamonos hasta atrás de ahí se ve mejor la película se encaminaron hasta la ultima fila y se sentaron ella no le soltó la mano al chico al sentarse, y eso le agrado a el pensando que no le era indiferente, comenzó la película, y el aire acondicionado de la sala al estar casi vacía comenzó a hacer que se empezara a bajar la temperatura haciendo que Cielo Riveros por lo ligera de sus ropas le comenzaran a castañear los dientes.
"-tengo frrrio Rodrigo."
"-si estos del cine yo no se por que ponen el clima tan fuerte."
Pasando su brazo izquierdo el muchacho por los hombros de la chica la abrazo ella al sentir el calido abraso se pego mas a el recargando su cabeza en el hombro del chico, este ya no prestaba atención a la película estaba en la gloria sentir esa suavidad de la piel del brazo de la chica y su perfume embriagador, su mano acariciaba lentamente la suave piel del antebrazo de Cielo Riveros, teniendo una vista esplendorosa de los senos de la nena al tener ella recargado su cabeza del hombro del chico.
Y empezó a tener una deliciosa erección disfrutando el momento, en eso hay un grito en la película que la chica hasta brinco del susto y más se pego al chico ella tomándole con sus manos la mano derecha del chico lo puso muy cerca de los senos de ella y le dijo.
- "no me sueltes que tengo miedo."
Rodrigo se estaba calentando por la situación sentía el delicioso aroma de sus cabellos de la nena y como las finas manos de Cielo Riveros le apretaban suavemente sus dedos uno por uno por el miedo de la película de terror le causaba a la colegiala, la chica mantenía la mano de Rodrigo muy cerca de sus senos, en un momento que se movió ella para acomodarse inconscientemente pego la mano del chico en sus globos de carne, Rodrigo estaba que tenia una erección tremenda ya ni veía la película solo cerraba los ojos y se dejaba llevar por lo delicioso del momento .
En eso en una escena de la película donde se ve la chica exorcizada gritando y sacando espuma de la boca Cielo Riveros volteo la cara espantada quedando muy cerca del rostro de Rodrigo a escasos 2 centímetros y se dieron un beso espontáneo y se quedaron viendo para enseguida volverse a dar otro beso pero ya mas largo fue un largo y profundo Rodrigo cada ves estaba mas caliente y comenzó a besar y a chuparle su oreja, ella se inmovilizó, le sorprendió muchísimo y se puso muy nerviosa y con tono sorpresivo sintió que la piel se le ponía chinita, comenzaba a tener escalofríos y la voz cortante.
"-Rodrigo me haces cosquilla" el chico no dijo nada siguió lengüeteándole la oreja a la adolescente a sabiendas que es una parte muy sensible de las mujeres.
Ella sólo cerró sus ojos y se dejaba hacer sintiendo ese delicioso escalofrió por toda su piel su respiración se comenzó agitar el chico no dejaba de morderle suavemente el lóbulo de la oreja para que a continuación introducir la lengua en la oreja de la nena lo que le producía cosquillitas agradables a Cielo Riveros, Rodrigo con su mano izquierda se iba directo a su nuca dándole masaje despacito y acariciándoselo muy suavemente la niña cerraba sus ojos y se retorcía despacio gozando de todo aquello, con la otra mano lenta y suavemente primero acariciaba los senos de la nena para a continuación introducir la mano por el escote y sentir el pezón que estaba hinchado ya Cielo Riveros arqueaba la espalda por tanta estimulación el chico ya con mas confianza amasaba fuertemente los deliciosos melones de Cielo Riveros ella solo cerraba sus ojos y se mordía los labios y el le decía al oído –"que grandes tetas y que duras están ."
La volvió a besar en los gruesos y deliciosos labios luchando su lengua con la lengua de ella para después bajar al sensible cuello de la chica haciendo que la chica suspirara y echara la cabeza hacia atrás esto lo aprovecho Rodrigo para comenzar a deslizar los tirantes del vestido de la chica hacia abajo sacándole por completo los pechotes a la nena para a continuación llevarse una de esas formidables tetas a la boca y comenzar a mamarlo los lamía y los mordisqueaba alternadamente Cielo Riveros lo abrasaba por el cuello y pasaba sus dedos por la nuca del chico acariciándole suavemente el pelo arqueando la espalda y gimiendo
"-Ahhhhhh, ahhhhh ahhhhhhhhhhhhhhhh que riiiiiico ahhhhhh.
El chico mamaba con avidez esas duras y deliciosas tetas del bombón que tenía a su lado disfrutaba lamer con la lengua el durísimo pezón mientras con la otra mano estrujaba el otro seno, ella seguía dejándose llevar y cada vez gemía más, estaba empezando a sudar a pesar de que el aire acondicionado del cine estaba a todo su nivel, su aroma era delicioso, el chico entonces bajo una de sus manos a la rodilla de Cielo Riveros para a continuación empezar a acariciarle suavemente la rodilla , poco a poco empezó a subir la mano por las deliciosas piernotas de la chica se las acariciaba por la cara interna eran muy lisitas , muy suaves y muy carnosas.
Cielo Riveros por un momento al sentir que esas manos sudorosas y ansiosas estaban subiendo mucho por sus piernas le dijo con voz entrecortada.
"Pooor favorrrr noooo siiiigas" y cerrando sus piernas atrapando la mano de Rodrigo entre en medio de las piernotas , el chico no dijo nada solo que comenzó a comerle golosamente los sensibles melones de la ya excitada colegiala haciendo que la chica arqueara la espalda aflojando la presión de sus muslos sobre la mano de Rodrigo dejándole el camino libre para seguir ascendiendo , el chico sentía en su mano el calor que despedían las piernas de la adolescente, tenía una erección como nunca en su vida y como no si tenía a una preciosa chamaca con un cuerpo escultural que le quitaba el sueño y que lo enloquecía por ella todas las noches se masturbaba en su cama soñando que la besaba que la acariciaba que tocaba todo sus deliciosos rincones y ese sueño era realidad a esa hora, Rodrigo en esos deliciosos momentos no se cambiaba ni por el hombre más rico del mundo.
La respiración de Cielo Riveros se había ido convirtiendo en un jadeo que era delicioso a los oídos de Rodrigo.
"-Ohhhhhhhhhhhh ahhhhhhhhhhh miii amooor jadeaba Cielo Riveros
Poco después la colegiala abrió de forma instintiva sus muslos y empezó a gemir de manera más clara presa ya esas sensaciones que la enloquecían, la mano de Rodrigo que hurgaba las piernas de Cielo Riveros por fin llego a tierra prometida sintió la humedad y el calor que emanaba de la virginal rajadita de la nena introdujo un dedo haciendo a un lado la tanga y comenzó a acariciarle el sexo desprotegido y con sus dedos abrió los labios vaginales delicadamente que para esos instantes ya estaban húmedos para enseguida comenzar a acariciarle la deliciosa rajadita con los dedos cuidadosamente sabiendo que la nena era virgen y para no lastimarla.
"-Ahhhhhhhhhhhh ohhhhhhhhhhhhh diiiiooos miiiooooo" gritaba y jadeaba mientras que se retorcía como una serpiente la nena, de la película ya ni se acordaban los dos ambos jadeaban sin control, ...sus carnes lujuriosas de Cielo Riveros saciaban los deseos de Rodrigo, sus piernotas su rajadita, su espalda, sus tetas... toda ella, estaba al alcance del chico , palpaba a placer sus senos, lamía y succionaba sus apetecibles pezones la dedeaba suavemente en la rajadita estremeciendo a la escultural colegiala , ella...gemía trastornada-"síii... así.... papito".
En esas estaban cuando de pronto se encendieron las luces del cine la función ya había terminado Cielo Riveros al darse cuenta de esto se aparto del chico rápidamente y se subió los tirantes de su vestido y su sostén sus bellos ojos verdes se posaron en Rodrigo mientras se acomodaba la ropa tenia la mirada ida y su frente perlaba de sudor en eso bajo la mirada a su pantalón y vio que tenía una tremenda erección parecía una carpa de circo lo único que hizo la niña fue agachar la cabeza roja como un tomate para enseguida levantarse y salir de la sala sin esperar al chico llena de remordimientos y de vergüenza por haberse dejado llevar por sus instintos.
Y a afuera del cinema el la alcanzo lleno de angustia pensando que ella se había enojado por lo que hicieron en el cine y le dijo.
" Cielo Riveros discúlpame por favor me deje llevar no supe controlarme por favor discúlpame"
Ella lo volteo a ver con los ojos llenos de lágrimas y le dijo
"No tengo nada que disculparte si no estoy molesta contigo lo que pasa es que siento una gran vergüenza por lo que paso que vas a pensar de mi"
El le dijo" no tienes por que avergonzarte lo que paso fue algo maravilloso yo te amo y si tu sientes aun que sea un poquito de cariño por mi te pediré si quieres ser mi novia" le decía al mismo tiempo que la tomaba de las manos aceptando ella y ya mas tranquila se fueron abrasados a su casa de ella despidiéndose cuando llegaron a su colonia , tenían que ser cautos por que por el momento nadie debía saber que eran novios por que le podían ir con el chisme a su mama de la chica.
En la escuela preparatoria donde estudiaba Cielo Riveros trabajaba de conserje un hombre viejo de unos 58 años barrigón y con cara de degenerado, que siempre andaba traspirado y sucio debido a que hacia el aseo en todos los salones ,era un hombre moreno como de de 1.70 de estatura conocido en la escuela como el cojo Juan ya que tenia una pierna más corta que la otra, lo que le provocaba una leve cojera al caminar que lo hacia ver mas horrible , era viudo desde hace varios años por lo que veía a las deliciosas colegialas como un manjar lejos y prohibido, era un depravado que gustaba de espiarlas cuando se metían a bañar en las regaderas después de las clases de educación física ya que junto a las regaderas de las chicas existía un cuartito donde se guardaba todos los utensilios para asear los salones y el viejo se las había arreglado para hacer un hueco disimulado para espiar a las colegialas y masturbarse viéndolas completamente desnudas.
Al otro dia después de salir Cielo Riveros con Rodrigo estaba en su clase de educación física en la escuela al terminar la clase las chicas se fueron a jugar voleibol y los varones fútbol pero ella se fue derecho a ducharse porque quería apartarse un poco para escribir en su querido diario todo lo acontecido con Rodrigo el día anterior, llego a las duchas se quitó lenta y sensualmente su ropa para enseguida quedarse bajo el chorro de la regadera que recorría su escultural cuerpo parecía una diosa convertida en mujer , la adolescente muestra en todo su esplendor su juvenil y escultural cuerpo era un bocado , un manjar de reyes no dándose cuenta la chica que el cojo la espiaba deleitándose con el espectáculo era delicioso ver como se enjabonaba su par de inmensas tetas, que tetas tenía la niña esa, las tenía adornados con un par de pezones grandes y oscuros rodeados de unas aureolas igualmente grande e impresionantes, unos buenos pechos para una nena de tan solo 18 años el cojo tenía la vista en ese par de melones que tenía por senos la nena ni parpadeaba el viejo, los senos se elevan majestuosos retando a la fuerza de gravedad que no les afectaban todavía a pesar de su tamaño .
La chica pasaba el jabón por sus pechos , por su abdomen liso era un espectáculo por el que algunos hubieran pagado gustosos para verlo, solo el cojo era testigo dándose unos jalones en la verga sin dejar de ver a la chamaca en eso la chica al llegar con su mano a su bajo vientre sintió una sensación muy placentera y comenzó a acariciarse su caliente conejito cerrando los ojos y disfrutando de las electrizantes sensaciones el viejo conserje sintió que se venía dejando salir un potente chorro de semen y cayendo sentado en el suelo exhausto por el espectáculo presenciado.
La chica se vistió después de la ducha y salió a sentarse en una banca bajo unos frondosos y frescos arboles algo retirados, sabía que tenía todavía 40 minutos antes de que entraran a la siguiente clase y se puso a escribir en su querido diario todo lo que había sucedido el día anterior con Rodrigo por momentos al escribir suspiraba la chica al recordar los deliciosos momentos pasados.
Así estaba descuidada escribiendo en su diario no dándose cuenta que el cojo se acercaba a ella por la espalda al llegar junto a ella desde atrás el viejo se quedó quieto contemplando el escote de la chica su mirada estaba clavada en los botones desabrochados de la blusa , el viejo se estaba calentando de nuevo, observaba también ese precioso par de piernotas torneadas que las tenía cruzadas la nena la visión era excitante en eso se le ocurrió algo y volteo para los lados vio a lo lejos que estaban los salones como a unos 80 metros y que los compañeros de Cielo Riveros retozaban jugando pelota acomodándose la tiesa verga con la mano saludo a la chica.
"hola preciosa" le dijo la chica recién se había dado cuenta de que tenía alguien al lado, sobresaltándose por no esperar que estuviera alguien tan cerca.
"hola don Juan"(a si se llamaba el viejo conserje)"que susto me acaba de dar" le dijo la chica.
"j aja ja" se rió el cojo Juan sentándose a lado de la hermosa colegiala, a ella la ponía incomoda al ver como ese viejo la miraba sin disimulo las piernas y el escote de la blusa, en eso la chica descuidadamente levanta sus manos para acomodarse el cabello haciendo resaltar bajo sus ropas esos tremendos melones, el macho estaba tenso la sangre se le agolpa en el cerebro y no era para menos, la silueta de la colegiala era perfecta, la carne provocativa de sus pechos resaltaban por una notable firmeza y unos pezones rígidos enmarcados sobre la delgada blusa hacían que la mirada del viejo se extasiara, sus sinuosas caderas, las piernas bien delineadas, su abdomen plano sin un gramo de grasa y el par de torneadas piernas cruzadas eran suficientes argumentos para enloquecer a cualquiera, Cielo Riveros sin duda alguna despedía sensualidad por cada centímetro de su piel.
"-Que haces aquí tan solita" le dijo el cojo Juan al mismo tiempo que colocaba su brazo en el respaldo de la banca llegando a tocar la espalda de Cielo Riveros esta al sentir la mano del viejo se hizo para adelante.
Eres muy guapa ¿lo sabes? Le dijo el viejo sin dejar de mirarle el delicioso escote.
-"Gracias señor" ella se sentía incomoda porque quería seguir escribiendo su diario, pero con el cojo Juan no podía hacerlo, el viejo sonreía y la miraba ella conocía esa mirada sabía que el viejo estaba excitado y eso la ponía nerviosa por experiencia propia sabia de lo que eran capaces los viejos con tal de disfrutarla y más nerviosa se puso al percatarse que estaban muy alejados de los demás completamente sola con un viejo horrible y cojo que no dejaba de verla con lujuria.
"Este señor Juan creo que ya me voy por que va comenzar mi clase ya." dijo la nerviosa nena .
·"No preciosa no te vayas para tu clase todavía falta más de media hora quédate a platicar conmigo "le dijo el viejo acercándose más a la paralizada colegiala colocándose a lado de ella quien no se atrevía a voltearlo a ver seguía con las piernotas cruzadas y con la vista al frente, el viejo puso una mano en la nuca de la nena y comenzó acariciarle esa parte sensible de la colegiala y le dice-"Oye, que piel tan suave tienes" el lujurioso viejo sólo sonreía mientras le acariciaba suavemente la nuca a la nena quien solo movía la cabeza tratando de que la mano del viejo le dejara de acariciar la nuca que hacía que le dieran escalofríos en la piel.
Ella lo volteo a ver y le dijo "por favor don Juan no haga eso ...por favor" el viejo veía esa hermosa cara y esos ojazos verdes que con el continuo pestañear denotaban nerviosismo, ella horrorizada vio que el rostro del viejo transformado su mirada asustaba a la colegiala por que conocía esa mirada y sabía que no le presagiaba nada bueno él la desnudaba con la mirada fijaba su mirada en los melones y en las piernotas de la nena ya que al usar la falda del uniforme escolar tan corta al sentarse se le subía más dejando al descubierto ese par de torneadas y gruesas piernas para deleite del viejo, el viejo al ver la pasividad de la nena siguió adelante poso una mano sobre la piernota de la colegiala sintiendo su suavidad haciendo que se le pusiera tiesa la verga la chica cada vez más nerviosa solo decía "déjeme ya ...por favor" el macho esta tenso sentía que la sangre se le agolpa en el cerebro no era para menos tenía una beldad a su lado a la que estaba manoseando, acariciaba lentamente las formidables piernas de la nena disfrutando su suavidad enloquecedora , la chica tenía la cara roja , estaba comenzando a sudar y estaba temblando, su cuerpo era un manojo de nervios el viejo se acercó al oído de la nena y con la voz entrecortada por la calentura le dijo que tenía unos pechos increíbles y que si se los dejaba agarrarlos le daría dinero , la chica no podía creer lo que estaba oyendo, no supo que decirle al viejo lujurioso sentía el latir de su corazón en la cabeza, y nuevamente experimento un escalofrío por todo el cuerpo cuando la mano del viejo avanzo más arriba en su pierna.
Entonces el viejo no aguantando más se fue sobre la boca de la chica con su asquerosa lengua "noooooo, déjeme..nooooo",decía la chica,"estas muy buena mamita , muy rica, y yo estoy muy caliente".."nooooooo suélteme viejo" "jajajja el reia, sentía una impotencia tan grande, el viejo era demasiado fuerte para sus esfuerzos, el hedor a cerveza que provenía de su aliento, no lo soportaba, su lengua asquerosa lamía con ansiedad sus labios, los cuales mantenía muy apretados," Noo...noo...musitó la chica , tratando de apartarse No, no, no, por favor, no siga."
En un descuido del viejo consiguió safarse de los brazos del cojo y salió corriendo tomando su mochila , corrió y corrió despavorida hasta llegar exhausta a los salones volteo hacia atrás y vio a lo lejos que el viejo Juan seguía sentado en la banca respirando aliviada , el viejo por su cojera no pudo seguirla y cuando se disponía a irse vio el diario de la chica y lo tomo y al darle una leída rápida se sonrió y dijo "j a ja ja esta palomita va tener que regresar a mis brazos y se alejó cojeando.
Y así pasaron dos días y llego el sábado el día de la noche disco en la colonia de Cielo Riveros ese dia en la mañana la chica le insistía a su mama que por favor la dejara ir.
"Mama por favor déjame ir solo estaré un rato por favor ya sabes que yo no te doy problemas y siempre te obedezco en todo, mis calificaciones son buenas".
"Si hija, pero es que me da temor que te falten al respeto algún borracho o mariguano."
"Mama tu conoces a Rodrigo el que trabaja en la farmacia el es mi amigo y estará conmigo", la señora conocía al muchacho y tenía buena impresión de el por ser un chico trabajador y le dijo "está bien pero yo voy contigo "le dijo su mama, sabiendo las inquietudes que tenía su hermosa hija ya que ella también paso por esa etapa.
"Gracias mama le dijo Cielo Riveros voy ir a la farmacia a avisarle a Rodrigo se puso un short de mezclilla muy corto que le embonaba a la perfección su trasero dejando al descubierto sus piernotas y una blusita ombliguera se puso sus sandalias y salio rumbo a la farmacia , al llegar no estaba Rodrigo sol estaba el dueño un señor como de 38 años llamado Carlos , y le dijo que si quería esperarlo que no tardaba que había ido a dejar unas medicinas la chica le dijo que si y se quedó parada a la entrada de la farmacia dándole la espalda al dueño de la farmacia que se deleitaba viendo ese espectacular trasero menudas nalgotas pensaba don Carlos para sus adentros , la mirada de don Carlos la recorría dándose un taco de ojo ella no quería voltear a ver a don Carlos porque casi podía sentir sobre sus redondas nalgas la miraba lasciva de don Carlos, empero muy a su pesar aquello le gustaba sentirse deseada por ese hombre.
Cuando llego Rodrigo le dio la noticia y se pusieron de acuerdo despidiéndose la nena de don Carlos y se fue a su casa.
Ya cuando se acercaba la hora de su cita la nena se bañó muy bien se unto crema y se comenzó a vestir emocionada de que era la primera vez que saldría a una cita se puso un muy pequeño bikini de encajes color negro, una cortísima minifalda blanca de esas voladas que apenas y le tapaba las nalgotas quedándole a la perfección acentuándole su breve cintura y dejándole descubiertas esas piernotas torneadas y potentes, sus brillosos botas negras de tacón a la rodilla haciendo que resaltaran más sus nalgotas y para rematar su atuendo un top azul sin ponerse sostén donde se traslucían sus ricos pezones y sobre este un chalequito que no le tapaba nada, su breve maquillaje la transforma en un viejarrón despidiéndose de su mama se fue recomendándole a su hija que se portara bien.
Nada más de salir a la calle los machos al ver semejante mujerona se les abrían los ojos viendo el delicioso y cadencioso andar de la nena que se le marcaba el negro bikini en esa minifalda blanca la miran con lujuria , con deseo ella tímida no les sostiene la mirada, mientras los machos miran como la breve y volada minifalda se mecía de un lado a otro por el movimiento de ese culazo,enseñando esas piernotas y casi se le veía el bikini y con las tetotas apuntando al cielo , su presencia brilla y su cadencioso andar resuena en el pavimento al contacto de sus botas de tacón dando un toque de magia al momento que les permite vivir a los calientes machos que la miran pasar , durante el corto trayecto al parque de la colonia varios coches se parqueaban invitándola a subir obviamente la nena no aceptaba.
Cuando dieron las 8 de la noche Rodrigo ya se encontraba en el parque esperando que llegara su diosa, en el centro del parque ya algunas parejitas bailaban al ritmo de música regueton el chico tenía apartada una meza esperando a Cielo Riveros y a su mama en una de esas, la vio que venía sola se veía espectacular, vestida de una minifalda blanca en donde la redondez de sus nalgas era sobresaliente y marcada, un top azul que marcaba sus muy desarrollados senos la chica ya se había quitado el chalequito por el calor que hacía , su estrecha cintura completamente al aire, sus gruesas y torneadas piernas lucían esplendorosas, eran irresistibles a la vista, sus pasos resonaban en el pavimento tock tock por el tacón de sus botas al pasar por donde había un grupo de muchachos ya mayores oyó que le decían decía "cuanta carne y yo chimuelo", en alusión a su gran trasero, el cual era morbosamente notorio la nena no les hacía caso y se contoneaba más tremendamente sexy.
Por fin llego hasta donde estaba Rodrigo saludándolo con un beso en la mejilla se sentó a su lado diciéndole que su mama ya no pudo ir debido a que estaba muy cansada del ajetreo de toda la semana ya que trabajaba de enfermera en las madrugas y solo descansaba los fines de semana y que solo le recomendó que se cuidara y que se portara bien , los chicos se pasaron platicando un rato viendo a las parejas que bailaban , las sillas eran de esas muy pequeñas como de los antros por lo que Cielo Riveros hacia grandes esfuerzos para acomodarse se tenía que sentar con las piernas encogidas y enseñando piernas a lo bestia los muchachos pasaban y la veían sin disimulo las piernotas a si como del generoso escote del top.
En esas estaba cuando comenzó a sonar por el sonido la canción reguetonera de dady yanqui "lo que paso paso" haciendo que Cielo Riveros se parara a bailar con Rodrigo tomados de la mano.
El ambiente se electrizo impregnándose de sensualidad cuando comenzó a bailar, sus piernas sus pechos y el sensual movimiento de sus caderas eran como para calentar al más frió de los témpanos de hielo.
A sus 18 años poseía todo para volver loco a cualquier hombre.
Se oían comentarios diciendo "que chamaca esta buenísima" y se la quedaban viendo embobados.
Toda ella era una tentación los machos no podían sustraer la mirada de ese delicioso movimiento que hacían las caderas de Cielo Riveros era un cuerpo que invitaba al desenfreno y a la lujuria.
Así estuvieron bailando hasta que ya cansados se fueron a sentar de nuevo la chica sentía calor, a pesar de la minifalda minúscula y del top de algodón que dejaban al aire su ombligo y le dijo a Rodrigo que le trajera algo de tomar, el chico fue por dos refrescos , así estuvieron hasta que se dieron las 12 de la noche y la chica le dijo que por favor la acompañara a su casa se levantaron y se fueron caminando lentamente hacia la casa de la chica ella recargada en su hombro y el abrasándola a si llegaron hasta el departamento de la chica ,Rodrigo no quería que se fuera y le rogaba que por favor se quedara un momento mas con ella la chica no quería por que nunca había desobedecido a su mama, pero también quería seguir con el así que le dijo al chico que la esperara en la azotea que a esa hora esta solitaria y mas oscura que una boca de lobo,y así lo hizo el chico se subió a esperarla en la azotea , Cielo Riveros se asomo a la recamara de su mama y como lo suponía dormía profundamente y volvió a salir para dirigirse a la azotea cuando subió no veía mas allá de sus narices, entonces Rodrigo la llamo y camino siguiendo la voz de el, cuando llego de donde venia la voz no lo vio y se desconcertó .
En esas estaba cuando el chico le llego por la espalda abrasándola por la cintura y besándola en la mejilla, la chica le acariciaba la nuca, mientras el pegaba su verga a las nalgotas de la colegiala la chica sentía entre las nalgas las palpitaciones de su excitado miembro de Rodrigo, en eso el la volteo para quedar frente a ella y la empezó a besar primero muy suave en los labios ella se dejaba llevar contestando el beso, mientras se besaban el la abrasaba por la espalda y la acariciaba para enseguida bajar las manos hasta el fabuloso trasero de la nena y no dudo en apretar ese par de nalgotas llenas de carne el chico sentía delicioso estrujar las duras y redondas nalgotas de Cielo Riveros sentía el bikini por que la tela de la minifalda era muy delgada , la chica se dejaba hacer y solo se mordía los labios dejándose acariciar.
El chico ya más excitado comenzó a besarla en el sensible cuello de Cielo Riveros haciendo que la chica se estremeciera y levantase la cabeza hacia atrás instintivamente después de estarle estrujando las nalgotas subió las manos hasta la espalda de la nena introduciendo las manos por debajo del top y le desabrocho el sostén para continuación sacárselo y quitarle el top por arriba, las tetas de la chica estaban completamente duras y los pezones enormes por la excitación.
El chico a continuación se agacho tomando las dos grandes tetas cada una con una mano para enseguida llevarse a la boca mamándola y estrujando la otra los gemidos de la colegiala eran enloquecedores "aaaaahhhhh...aaaaaahhhhh", el chico no dejaba de recorrer con su ávida lengua la aureola haciendo círculos para finalmente lengüetearle el pezón mientras su mano se encargaba del otro pezón se comía los pechos enteros estaban durísimos, tersos riquísimos "ahhhhhhh ,ahhhhhhhhh" gemía la colegiala.
Ella solamente cerraba los ojos se estremecía, respiraba profundamente la chica nada mas abría y cerraba los ojos sintiendo como su cuerpo reaccionaba a tanto estimulo, gemía cada ves mas rápido preámbulo de que estaba apunto de tener un orgasmo gimiendo cada ves con mas intensidad "ohhhhhhhhh" "ahhhhhhhh" su entre pierna estaba que ardía y comenzaba a humedecerse llegando a un delicioso orgasmo dejando a Cielo Riveros exhausta,quien le dijo luego ya mas tranquila a Rodrigo que ya era tarde que se fuera si no su mama podría despertarse y darse cuenta de su ausencia se despidieron con un beso y la chica se metió a su recamara dispuesta a descansar después del ajetreado dia .
Al otro dia la chica se levanto haciendo sus deberes mientras su mama salía con unas amigas, ella comenzó a buscar su preciado diario para plasmar todo lo vivido en la noche disco y lo que sucedió después en la azotea con Rodrigo, abrió su bolso de la escuela y se sorprendió al no encontrarlo angustiada comenzó a revolotear toda su habitación buscando al dueño de todo sus secretos ,su desesperación aumentaba a cada minuto, sabia que se engañaba pensando que estaba en otro lugar que no fuese su bolso por fin se dio por vencida y pensaba como es que no se había dado cuenta de su ausencia, ese libro era su tesoro mas preciado contenía sus secretos mas íntimos en sus paginas, incluso sus experiencias con los degenerados viejos de don Lucas y el viejo profesor Tulio y lo que había sentido no pudo conciliar el sueño si no hasta muy altas horas de la noche pensando donde y en que manos estaba su adorado diario.
Al siguiente dia ya en la escuela la chica no ponía atención a la clase, seguía tratando de recordar donde había dejado su diario, cuando salio de la clase fue a la tienda a comprase un refresco y se sentó en una banca pensando en su diario, cuando se acerco un niño como de 10 años y le entrego un sobre y se fue corriendo , intrigada lo abrió para saber que era esa misiva y puso una cara de sorpresa al leerlo , la carta decía con una letra espantosa que su diario era muy interesante y que si quería recuperarlo debía ir donde vivía el cojo Juan que si no lo hacia toda la escuela se enteraría lo putita que era , el viejo vivía al fondo de la escuela en un sótano , la chica confundida por el contenido de la carta se lamentaba por el tremendo descuido recordando el episodio vivido con el conserje cuando tuvo que salir corriendo ya que el viejo degenerado se quiso aprovechar de ella, sabia la hermosa chica que debía ir por el por que si su contenido era divulgado su vida se convertiría en una pesadilla.
Entro a su siguiente clase pero estaba sumamente nerviosa sabia que el degenerado del viejo conserje tenia su diario y no sabia que esperar del lujurioso viejo al terminar esa clase todavía le faltaban dos clases mas pero ya no pudo aguantar la angustia y tomando sus cosas se dirigió al sótano donde seguramente la esperaba el cojo, el sótano donde vivía el viejo conserje estaba un poco alejado de las instalaciones de la escuela la entrada era una vieja puerta de lamina que al abrirla daba directamente a unas escaleras la chica entro y comenzó a bajar las escaleras al bajar todas las escaleras estaba un largo pasillo y al final vio una puerta imaginando que ahí estaba el cojo se dirigió hacia allá ,estaba tensa y muy nerviosa le daban ganas de darse la vuelta e irse de ese horrible lugar semioscuro con telarañas en las paredes donde se oía un goteo de agua intermitente que chocaba con una lamina,la chica muy asustada por lo tétrico de lugar estaba casi a punto de darse la vuelta y regresar, pero se detuvo al recordar su preciado diario , no definitivamente no podía darse ese lujo.
Máxime que el viejo ya la había amenazado con revelarlo a toda la escuela, nadamas de pensarlo que el viejo cumpliera su amenaza la llenaba de terror, no no podía pasar por esa vergüenza, que todos se enteraran de sus intimidades de sus secretos guardados que solo su diario conocía y con lujo de detalles así que respirando profundamente se encamino al fondo del pasillo y al llegar toco la vieja puerta de madera.
"Quien es "se oyó la voz aguardentosa del conserje.
"Soy yo" le contesto la colegiala."
"Pásale mi reina esta abierto" le dijo el viejo, la chica tímidamente empujo la puerta de madera, su vista tardo unos segundos para que se acostumbrara a la penumbra del cuarto del viejo apenas alumbrado por una débil lámpara de meza,llegándole a su fino olfato un desagradable olor de cigarro, cerveza, pies sudorosos y humedad, la colegiala hizo una mueca de asco, llevándose una mano a su nariz, sentía asco y no atinaba a decir nada, solo unas ganas enormes de vomitar y huir de allí, miraba a su alrededor, era un cuartucho horrible todo sucio sin ventanas por eso los olores al no existir ventilación se quedaban encerrados , había un plato con comida rancia en un silla ropa, sucia amontonada en el piso , las paredes llenas de postres de mujeres en ropa interior, era un sitio asqueroso igual que la apariencia del viejo quien estaba acostado en la cama en short sin camisa leyendo el diario de Cielo Riveros con una mano metida dentro del short masajeándose la verga, la colegiala lo veía con asco con esa panzota asquerosa al aire con la cara llena de verrugas, su piel morena, reseca y arrugada, en la que luce multitud de burdos tatuajes sudoroso por el calor como si no se bañara nunca todo este cuadro le daba nauseas a la colegiala , a ella que le gustaba el orden y la limpieza estar metida en un cuarto tan repugnante y con tan desagradable compañía.
"Me has echado de menos, guapa" le dijo el viejo Con una sonrisa de triunfo "que es lo que quiere" Le dijo la sensual colegiala, con voz temblorosa.- "Así me gusta directa al grano" le dijo el viejo levantándose de cama, la chica al ver que se dirigía a ella asustada se hizo a un lado introduciéndose mas a ese apestoso cuarto el conserje tomo un candado y horrorizada ella vio que tranco la puerta y volteándola a ver sonríe con su dientes llenos de caries y le dice con aquella cara de sádico "ahora si mamita platicaremos tranquilamente sin que me vuelvas a dejar para salir corriendo" la chica veía la mirada llena de lujuria del viejo y sintió una mezcla de miedo y excitación.
Tratando de aparentar una calma que no sentía Cielo Riveros le dijo al viejo "por favor don Juan solo devuélvame mi diario y me retiro" el viejo pensaba para sus adentros de ninguna forma voy a dejar pasar a una hembra como esta, de esas se conocen una vez en la vida y hay que aprovecharlas como sea, qué cuerpazo es una diosa y con esa hermosa cara de cría me vuelve loco, ella llevaba una ajustadísima blusa de tirantes ombliguera con un escotazo que casi nadamas le cubrían los pezones de esos dos globos de carne esto por que se había quitado por el calor el saco del uniforme y su minifalda escolar donde se apreciaba esas gruesas y apetecibles piernotas y su redondo y carnoso trasero el viejo se la comía con los ojos, a continuación el cojo dirigiéndose a la adolescente le dijo "si y me pareció muy interesante lo que se cuenta en el sobre todo en la parte cuando estabas con Lucas y con el maestro Tulio", la hermosa colegiala miro al viejo preocupada con esos bellos ojazos verdes diciéndole "por favor don Juan le daré mis ahorros que tengo para que por favor me devuelva mi diario y que no divulgue lo que leyó" le dijo la nena ingenuamente pensando que con eso el lujurioso viejo se lo devolvería.
"No mi reina le dijo el viejo si quieres que te devuelva tu diario vas a pagar otro precio, quiero disfrutarte como te disfrutaron esos vejetes pero no quiero a la fuerza quiero que sea por tu propia voluntad sin oponer resistencia, no te preocupes que no te penetrare se que eres virgen y no quiero tener problemas con la ley solo será besos caricias y mamadas" le dijo el lujurioso viejo(siendo esto una vil mentira ya que sus planes eran de penetrarla por culo para que no hubiese problemas de embarazo ) la nena sintió al oír estas palabras que el corazón le daba un vuelco y volvió a sentir esa mezcla de miedo con excitación se quedo sin habla un momento pensando en su situación se sentía turbada por tener que dejarse hacer con su escultural cuerpo por ese viejo asqueroso que además olía mal y que fuera todo por voluntad propia definitivamente era un precio muy alto, pero no le quedaba otra salida si no se divulgaría todas sus intimidades y entonces la cosa seria peor, resignada miraba al viejo con asco.
Con una voz baja le dijo al viejo que estaba bien que seria como el quería iba ha hacer todo lo que le dijera, las cartas estaban tiradas no podía hacerse atrás.


La escultural y deseada colegiala sera violada y sodomisada por el conserje todo por recuperar su presiado diario.
El asqueroso viejo se le abrieron los ojos al oír estas palabras de la nena su cara tenia una morbosa mueca de triunfo, y dándole un sorbo a la cerveza que bebía quedándole la mata de bigotes chorreando del espumoso liquido, sentía que la verga se le ponía dura por que no era una putita barata de calle la que tenia, si no una escultural nena de 18 años dueña de un cuerpazo como pocos , sentado en la cama con los pies en el piso se comenzó a quitar el short quedando asquerosamente desnudo ese arrugado y seboso cuerpo, se agarro a continuación la media erecta verga que emergía de una sucia mata de pelos y se lo meneaba con la mano la nena abrió mas sus hermosos ojos verdes y los clavo en el aparato del viejo, este mientras mas la miraba, mas se excitaba y llegaban a su cabeza infinidad de calientes pensamientos para con ella, se relamía los labios pensando en lo que iba a hacer con la colegiala a continuación cojeando lentamente se acerco a la nena quien por instinto camino hacia atrás hasta topar con la pared no tenia escapatoria era un manojo de nervios veía con horror como se acercaba a ella ese ser horrible con una mirada llena de deseo se veía espantoso al caminar como cojeaba y como esa barrigota sebosa se movía como gelatina, el viejo tomaba las cosas con mucha calma sabiéndose dueño de la situación al llegar frente a la nena le dijo "bueno mamacita entonces vamos a darle a lo sabroso", la miraba fijamente a la cara, con sus ojos totalmente fuera de sus órbitas y con una cara de depravación total.

El viejo se comenzó a pegar al escultural cuerpo de la chica y esta apoyaba las manos sobre los vellos del pecho del viejo haciendo fuerza para tratar de separarse, en tanto él hacía fuerza para atraerla hacia el, el viejo tenía más fuerza que ella y ganó sus sucias y roñosas manos la tomaron de la breve cintura acariciando la suave piel lentamente mientras su horrible y arrugado rostro se acercaba a la boca de la chica tratando de saborear esos gruesos y perfectos labios de la nena y diciéndole "dame un besito guapa", mientras la rodeaba con sus brazos y ponía su cara cerca de la espantada chica, ella volteo el rostro de lado pegando su mejilla a la pared tratando de evitar que el viejo le mancillara los labios, le repugnaba su olor a sudor y a cerveza el viejo se sonrió sabiendo del asco que le producía a la colegiala.
Para a continuación apoderarse de su oreja y el cuello, le encantaba sentir ese aroma atractivo de juventud de feminidad de pulcra higiene de la nena, esto hacía calentar mas al degenerado , estaba subyugado por ese monumento de chamaca ,mientras las manos comenzaron a bajar para recorrer ese redondo y carnoso par de nalgas de la nena, el viejo sentía riquísimo palpar la dureza de esas nalgotas y sentir el bikini sobre la minifalda de la chica "eres una puta exquisita me encantas que rico bikini traes cabrona" le decía el viejo quien no dejaba de morderle la orejita y recorrer con su asquerosa lengua el juvenil cuello de la nena , una gran turbación se había despertado en el interior de la joven sentía que ese caliente aliento que le recorría su sensible cuello le producían escalofríos y solamente musito tratando inútilmente que el cojo parara "por favorooor, deténganse..por favooor….nooooo"pero esto calentaba mas al viejo que cada segundo que pasaba se iba excitando y calentando aún mas, el verla ahí delante y saber que estaba sometida totalmente.
Las arrugadas y toscas manos del caliente conserje le acariciaban la tersa y suave piel de la espalda de la nena produciéndole cosquillitas, para a continuación irlas deslizando lentamente hacia abajo rumbo a ese par de carnosas y redondas par de nalgotas , el caliente cojo sentía en sus manos al irlas bajando lentamente desde la espalda de la chica como iban surgiendo deliciosamente al tacto esos tremendos promontorios de carne , que eran el sueño de muchos machos , el horroroso viejo al ser viudo y tener muchos años sin una mujer en sus brazos sentía una calentura como hace años que no tenia , se deleitaba estrujando esas perfectas y enloquecedoras nalgotas sobre la delgada tela de la minifalda de la nena , los acariciaba ,los apretaba , sintiendo deliciosamente en sus callosas manos como temblaba la nena ante el magreo, sentía su dureza y su sabrosa redondez de ese par de soberbias nalgotas , la nena solo se retorcía como culebra antes los toqueteos del viejo, en eso de las dos manos se introdujeron bajo la minifalda de la nena sintiendo y tocando la suavidad de la piel desnuda , tocaba y acariciaba esas piernotas suaves y tersas para enseguida manosearle las nalgotas solo cubierto por su pequeño bikini le acariciaba, le apretaba sus nalgotas abundantes y duras.

La nena comenzó a mover la cabeza de un lado a otro por los lengüetazas del viejo en su cuello, el caliente viejo destrabo el botón de la falda de la chica y le bajo lentamente la cremallera para a continuación deslizar la minifalda del uniforme escolar hacia abajo , Cielo Riveros estaba tan enajenada por los lengüetazas del lujurioso viejo en su cuello y en su oreja que ni sintió cuando la minifalda escolar cayo al piso quedándose solo con su bikini el viejo se acerco al oído y le dijo" que buena estas mamasota" para continuación levantar la blusa deslizándola por la cabeza quedando la tremenda colegiala solo en ropa interior la vista era espectacular, con su lencería sexy diminuta y muy provocativa haciendo que resaltaran mas esas fabulosas carnes su pequeño sostén deteniendo esas montañas de carne y su bikini que en la parte de atrás se perdía en ese par de nalgotas parecía una diosa convertida en mujer, el viejo se hizo para atrás para admirarla mejor saboreándose por ese bombón que tenia a su disposición "por favorooor, deténganse..por favor" es lo único que atinaba a decir la escultural colegiala.
El viejo no dejaba de observar extasiado su delicioso culo con esa tanguita puesta, era precioso, circular, paradito, riquísimo, los dos seguían frente a frente muy cerca uno del otro la chica recargada en la pared con la cabeza de lado y el viejo casi sobre la nena , ella olía el tufo de la boca del viejo apestaba a tabaco y a cerveza y veía ese horrible rostro lleno de lujuria, lleno de deseo con los ojos desorbitados por tener semejante bombón, el viejo disfrutaba viendo el espanto en su carita angelical, la chica estaba paralizada sentía que sus brazos y sus piernas le pesaban una tonelada por la tensión del momento su mente se negaba a aceptar la realidad del momento y se engañaba a ella misma pensando que era una pesadilla y que en cualquier momento despertaría en su cama , en esas estaba cuándo el viejo volvió a la carga tomándola de su breve talle acerco su boca y diciéndole "que rica estas mamacita, dame un beso y aprovechando su momentánea pasividad de la chica se apodero de esos deliciosos labios, carnosos, frescos y sabrosos ,su asquerosa y maloliente lengua se metió por completo en la boca de la colegiala la cual solo se oían quejidos ahogados "uuuhhhhmmm""uuuhhhhmmm"ante el violento beso que casi la dejaba sin aliento, el viejo chupaba y saboreaba esa deliciosa boca con esos gruesos labios de la nena que sentirlos era algo excitante .

En cambio para la chica era una tortura sentir en su fina boca ese pestilente olor a tabaco y a cerveza pero aguantaba a pie firme todo ese magreo todo por recuperar su preciado diario, estuvieron largos segundos besándose hasta que se separaron un momento y la chica le volvió a suplicar que la dejase "por favor don Juan me ahoga por favor déjeme", pero el viejo ya mas caliente lejos de hacerle caso volvió a la carga "que linda estas mamita, que buena estas , cuantas veces soñé con esto siempre te me antojaste estas buenísima"y volvió a apoderarse de esa rica boquita, la chica contra su voluntad se dejaba resignada todo lo que ese viejo le quisiera hacer la nena pensaba en la morbosa situación ,ese viejo gordo cojo y sucio tenia una nena de 18 años en su sucia habitación a su disposición se sentía media excitada ante tal acoso y comenzó a responder a sus asquerosos besos las dos lenguas se entrelazaban intercambiando saliva, era un beso largísimo la lengua del viejo exploraba todo el interior de la boca de la nena y lamiéndole los dientes y los sensuales labios de la chica , al mismo tiempo las sudorosas y toscas manos se deslizaban por la sensible y suave piel de la chica quien al estar semidesnuda sentía la piel arrugada y fofa del viejo abrasar su juvenil y escultural cuerpo, las sudorosas manos del viejo recorrían sus formas perfectas de la nena estrujaba y apretaba esas nalgotas con las dos manos haciendo que la nena sintiera su tiesa vergota en su bajo vientre, el caliente conserje sentía en ese momento cómo temblaba la nena.
La colegiala se sentía llena de angustia y de miedo ella abría y cerraba sus ojos viendo y sintiendo como el asqueroso conserje la besaba y la manoseaba como un poseso, Cielo Riveros era una chiquilla deliciosa, su piel suave, cálida, huele a flores, a ternura, a hogar dulce, y el viejo le babeaba su boca y sus nalgotas se las magreaba con avaricia y desesperación, el lujurioso conserje la besaba con voraz ansiedad, a continuación el viejo bajo al cuello de la colegiala y se lo comenzó a chupar, haciendo que a la nena le dieran escalofríos por todo su l escultural cuerpo , la respiración de la nena se agitaba por que el viejo no dejaba de chuparle con esa boca caliente su cuello sentía que la barba y los bigotes del viejo al deslizarse por su sensible cuello aumentaban las sensaciones de escalofríos, al mismo tiempo las manos del viejo no dejaban de apretarle contra el las nalgotas a la chica , las cuales ya estaban metidas dentro de su bikini sintiendo la suavidad ,redondez y dureza de ese par de nalgotas ,la colegiala estaba turbada su par de melones que tenia por pechos subían y bajaban debido a lo agitada de su respiración "mmmmmmmm, rica mmmmmm" decía el caliente conserje ,"noooooo por favor nooooo" decía la colegiala entre sollozos con las ultimas fuerza de voluntad que le quedaban, trataba por todos los medios de no entregarse, de no disfrutarlo.

El viejo sin dejar de chuparle el cuello busco el broche del sostén de la nena, que era de esos que se abrochan por el frente destrabándolos y liberando ese par de melones, los maravillosos pechos de Cielo Riveros , redondos, erguidos, firmes con unos pezones oscuros hinchados por la excitación que destacaban en las aureolas, era maravillosa la visión de ese esplendido cuerpo.
-"Por favor déjeme ya por favor" decía la nena
"Por favor no no no por favor déjeme déjeme" dijo con voz temblorosa.
El viejo tomo un seno con cada mano y los comenzó a estrujar juntándolos y separándolos y diciéndole "pero que par de melones tienes. "
La chica tenia los ojos cerrados y la cara de lado con la mejilla pegada a la pared y sus brazos pegados a su cuerpo sintiendo como esas rudas manos estrujaban con ansia sus duros melones el viejo dijo a continuación ""ah que buenas tetas moría por apretarlas y chuparlas" tomo los brazos de la nena y se los paso por su nuca para enseguida abalanzarse sobre los desprotegidos melones de la nena y comenzar a mamarlos tremendamente con fuerza causando que Cielo Riveros sintiera una descarga eléctrica que le recorría todo su cuerpo provocándole un placer indescriptible, la nena tenía sentimientos contradictorios, luchaba con todas sus fuerzas para que ese hombre repugnante no le hiciera sentir placer, pero tras medio minuto de mamarle con su boca los pechos, cerrando los ojos sucumbió, sentía morir de placer la lengua rasposa hacia las delicias de sus durísimos pezones.
Su cuerpo se combó y su cintura quedo totalmente arqueada sus dedos instintivamente se introdujeron entre los canosos cabellos del viejo y le comenzaron acariciar la cabeza al viejo mientras este estrujaba un pecho con una mano y el otro pecho se lo devoraba con la boca violentamente, el viejo hacia círculos con la lengua por toda la aureola para a continuación estrujarle con sus labios y su lengua el hipersensible pezón de la nena.
"aahhhhhh deejeeme deejeeme don Juan uyyyyyyyyy poor faavorr sueltem...nhg" decía la nena a sabiendas que el viejo no la soltaría, pero sentía mucho placer decirlo y que el viejo no parara.
La colegiala con cada uno de los lengüetazos y chupadas del goloso viejo a sus pechos reaccionaba con su cuerpo arqueándolo sentía su lengua como mamaba y engullía sus pechos y pezones y oleadas de escalofríos se esparcieron por todo su cuerpo, ella cerraba sus ojos y se mordió los labios, no podía parar de jadear presa de una excitación incontrolable se retorcía, gritaba y jadeaba, su espalda se arqueaba a mas no poder, la chica comenzó a gemir como una puta cualquiera y a entregarse a las sucias caricias y mamadas del viejo.
"Aaahhhhhh, don Juan...uuuuyyyy....por favor aaahhhh" gemía la nena.
La escena era morbosamente caliente verla desde la espalda del viejo donde se apreciaba como el cuerpo gordo, flácido y sudoroso del viejo materialmente aplastaba contra la pared a la exuberante colegiala y como se movía la asquerosa cabeza llena de canas por la violenta ansiedad, con que mamaba y estrujaba esos dos grandes y duros senos, la cara de la colegiala tenia un rictus de sufrimiento y de placer al mismo tiempo, sus hermosos ojos verdes los tenia cerrados y su boca entreabierta soportando el ataque lujurioso y ansioso del viejo a su escultural y deseado cuerpo , el viejo sabia bien por haber leído y releído el diario de la nena que esta al ser tan sensible en todo su escultural cuerpo no aguantaría tanto magreo.
Ella se estremecía y suspiraba dejándose hacer por el lujurioso conserje respirando agitadamente, sentía escalofríos por todo su cuerpo y un cosquilleo enloquecedor en su rajita el viejo continuaba con su deliciosa labor mamando y succionándole los pezones a la nena y estrujándole esos dos increíbles globos de carne Cielo Riveros sentía la caliente respiración del caliente viejo en su pecho "oohhhhhhh oohhhhhhh gemía la nena desfalleciendo casi por el placer con los ojos cerrados, el calor que brotaba de la boca del macho la hacia estremecerse ,la chica abría y cerraba sus hermosos ojos verdes sintiendo como su cuerpo empezaba a entregarse a todo ese estimulo perdiendo todo control sobre el, a continuación el lujurioso y caliente conserje comenzó a bajar sobre el escultural anatomía de la colegiala sin despegar su boca de ese delicioso cuerpo arrastrando sus ansiosas manos por la espalda de la nena llegando al ombligo dándole suaves mordiscos haciendo que la excitada nena cerrara sus ojos y echara su cabeza hacia atrás pegando con la pared a continuación empezó a bajar mas hincándose en el piso atrapando con sus manos en el trasero de la nena el bikini y comenzar a deslizarlo hacia abajo lentamente disfrutando el espectáculo frente a sus ojos hasta sacárselos dejando a la luz esa preciosa y virginal rajadita que apenas se le asomaban un caminito de finos bellos para enseguida hundir su cara y comenzar a mamarle la rajadita mientras sus manos le sobaban las nalgotas, la cara del viejo se metía literalmente entre las dos piernas de la nena lengüeteándole su virginal rajadita la chica lo disfrutaba se contorsionaba y gemía de placer.

"Aahhhh ahhhhhhh uyyyyyyyyy gemía deliciosamente la colegiala , el viejo lamía sus labios vaginales y le lenguetaba el sensible clítoris a la nena haciendo que se estremeciera con esa rasposa y larga lengua ,sus dedos de la nena le tomaban la cabeza al viejo y le jalaba los canosos cabellos presa de las sensaciones placenteras que le daba, el viejo a continuación se puso de pie y se quedo unos segundos observando con los ojos desorbitados el escultural cuerpo de la colegiala desnudo su cintura esbelta, que se ensanchaba para dar lugar a sus grandes y bien proporcionadas nalgas, blancas y sin rastros de estrías ni celulitis, completamente limpias y deseables, el conserje pensaba en sus adentros no podía creer que tenia ese manjar a su disposición estaba extasiado, se sentía como en un increíble y apasionante sueño del cual no creía que fuera realidad, allí la tenía, a una preciosa colegiala entregada y estaba siendo sodomizada por primera vez por el ,y le dijo a la chica que seguía con la cabeza echada hacia atrás recargada en la pared "que cuerpazo tienes mamita eres una diosa "en cambio ver al viejo era todo lo contrario, con su cuerpo muy moreno lleno de tatuajes seboso y arrugado con una barrigota consecuencia al exceso consumo de cerveza una cara arrugada con unas grandes y desagradables verrugas en la nariz y en la mejilla a todo esto había que agregarle la poca atención que le daba a su higiene personal, el viejo ahí estaba parado completamente desnudo con una tremenda erección en la verga que emergía de una abundante y sucia mata de pelos.
Cielo Riveros lo observaba con los ojos semicerrados seña inequívoca de lo excitada que se encontraba, en otras circunstancias nada mas de ver al viejo como se encontraba desnudo hubiese vomitado ante la asquerosa visión, el viejo cojeando se acerco a la nena y extendiéndole su mano la llamo a que se acercara, la chica desnuda como se encontraba se acerco al viejo, este tomándola de los hombros se puso de tras de ella apoyándole su apestosa vergota completamente tiesa y palpitante sobre las nalgotas desnudas de la nena, la vista de las nalgotas redondas era espectacular el viejo le acariciaba las nalgotas con su verga, Cielo Riveros comenzaba a respirara fuerte y a jadear, la chica sentía también la asquerosa y sudada barriga del viejo en su espalda, las manos del viejo atraparon los melonzotes de la nena y los dedos agarraron los hinchados pezones de la colegiala para darle un lento y suave masaje haciendo que la chica echara la cabeza hacia atrás al mismo tiempo que la punteaba las nalgotas con la verga y diciéndole al oído, "te gusta verdad mamacita ,como me calientas putita" , estas tetasas me vuelven loco" la nena tenia la su cabeza echada hacia atrás recargada en el hombro del viejo y este la punteaba cada ves las fuerte con la vergota, ella echo sus brazos hacia atrás agarrándose de el cuello del viejo para no caerse.

El caliente viejo sin dejar de puntearle las nalgotas, ni de sobarle con los dedos los pezones que estában durísimos y muy parados lentamente la fue llevando acercándose a la cama, y le decía quedito en el oído lo que le iba a hacer en la cama, la voluntad de la colegiala estaba completamente enajenada tenia los ojos cerrados y se dejaba manosear, el caliente conserje no dejaba de puntearle las deliciosas nalgotas y aspiraba al mismo tiempo el delicado perfume que salía de su cuello, cuando estuvieron a lado de la cama el viejo se separo de ella y la guió para que se acostara la nena en esa vieja cama de madera la nena se acostó boca arriba con una pierna flexionada y sus brazos agarrando la almohada en su cabeza dejando todo su escultural cuerpo desprotegido se veía soberbia, el caliente viejo se dirigió a un cajón y saco una cuerda tomo las dos manos de la chica y se los amarro a la cabecera de la cama dejándola indefensa, ,para a continuación decirle a Cielo Riveros "te voy a enseñar a lo que sabe un macho", y se subio a la cama e la observo unos segundos y vio que su cara y ojos expresaban resignación, miedo por la situación, a continuación le dijo "vas a saber lo que puedes sentir mamacita" y sin más preámbulos el viejo desnudo se hecho sobre la chica violentamente dejándole caer todo su seboso y sudado cuerpo, sobre la colegiala metiéndose entre sus piernas.
La nena sintió sobre su esbelto abdomen como esa piel arrugada y sudada, la aplastaba y comenzó a besarla violentamente en los labios se los mordía y se los jalaba con fuerza haciendo que la indefensa nena abriera sus ojazos por la sorpresa de tan violento ataque a su boca, le estrujaba los senos con fuerza y los pezones se los apretaba con salvajemente haciendo que la chica sintiera mucho dolor ,ella comenzó a gritar y a patalear ,pero estaba indefensa con las manos bien amarradas a la cabecera de la cama ante ese maniático sexual.
El caliente viejo era como un animal salvaje le apretaba las tetotas fuertemente haciéndole daño, se las mordía, le pellizcaba salvajemente los pezones para luego estirarlos con la boca y morderlos sin compasión ella gritaba mas de dolor que de placer, arqueaba su cuerpo desesperada tratando de que el caliente viejo parara y no dejaba de llorar y gritar rogándole al viejo que parara ,pero eso calentaba mas al ya fuera de si conserje y mas duro apretaba y mordía "por favorooor, deténganse..por favooor….nooooo," es lo único que atinaba a decir mientras se retorcía tratando de zafarse gritaba, se contorsionaba la indefensa nena, el viejo le decía "este es solo el principio perra sucia, ahora te voy a demostrar lo que es un macho caliente" diciéndole esto regreso a sus pechos y los comenzó a morder con furia los pezones y sus alrededores, ella gritaba y el conserje le volvió a meter una cachetada, y continuo con su castigo mordiéndole los pechos a su antojo y ella solo sentía dolor y mas dolor, la nena gritaba con lagrimas en sus bellos ojos verdes no podía hacer nada el viejo estaba echado encime de ella aplastándola y magreándola como un salvaje, y la nena indefensa incapaz de defenderse el viejo la había amarrado bien.
Al viejo en ese momento se le revelaban todas las mujeres que lo despreciaban y se burlaban de el por su cojera, estaba como un verdadero loco lastimando a la chica descargando todo su rencor y excitación sobre la nena quien desesperada se contorsionaba por el ataque sentía que el peso del viejo la ahogaba quien desnudo, echado encima de la chica, la babeaba y la magreaba con avaricia y desesperación," Ahhh... ahhhh... .no... por favor... no.... ahhh auxiliooooo gritaba la nena, el viejo le dio dos cachetadas fuertes haciendo que a Cielo Riveros le quedara ardiendo la cara "cállate puta que esto apenas comienza" la nena tenia una cara de espanto total "sniff sniff... por favor don Juan déjeme ir ya" decía la chiquilla lloriqueado con sus manos atadas fuertemente a la cabecera de la cama el viejo tenia los ojos desorbitados parecía un loco esto espantaba mas a la nena tomándola de los cabellos se los jalo violentamente y le dijo al oído "cállate puta aquí se hace lo que yo diga y yo sabré cuando te dejare ir lo entiendes le dijo" dandole una fuerte cachetada la nena ya mas asustada le contesto "siiiiiiii don Juan siiiii.

A continuación el viejo se sentó sobre el pecho de la chica sin hacer demasiada presión, para no asfixiarle , colocando una pierna a cada lado de su cuerpo y su sucio trasero sobre los senos de la chica pasó una de sus manos hacia la parte posterior de su cabeza he hizo que echara su cabeza la colegiala hacia delante, hacia su miembro, el cual sostenía con su otra mano y busco la boca de la nena que al ver lo que pretendía el viejo mantenía los labios cerrados, el viejo lleno de mañas soltó su verga y con esa mano tomo la nariz de la chica y se los apretó impidiendo que respirara ante la desesperación de la colegiala que cuando abrió la boca desesperada para jalar una bocanada de aire el viejo presto le metió toda la verga a la boca sentía esos labios pulposos y mojados en la verga. el viejo estaba que no cabía del gozo que estaba sintiendo en ese momento por la boquita de esa preciosa niñita que mamaba y mamaba su gorda verga a la fuerza.
Sintiendo como la lengua de la nena trataba inútilmente de sacar a ese intruso de la boca haciendo que el viejo en su verga sintiera un delicioso cosquilleo,"aahhhhhhh ahhhhhh así zorrita mamale la verga a tu macho" ella ya resignada entre sollozos se la mamaba al viejo era una verga gorda y sucia , el vejete profirió toda clase de gemidos y sonidos de satisfacción, insultando de paso a la adolescente que le estaba practicando una felación por demás prodigiosa, el viejo con las dos manos la tomo de los cabellos llevando el el ritmo de la mamada la cogia literalmente por la boca, introduciendo una y otra ves esa sucia y apestosa vergota que olía a orín y a sudor la chica sentía mucho asco le tomaba la cabeza y la movía a su antojo, hacia adelante, hacia atrás, a los lados, en círculos, gozaba esa boca como nunca había gozado boca alguna, su verga era tan grande y gruesa, que se le dificultaba mucho tragarla, sin embargo tenia que lamer, chupar y mamar a la fuerza. la nena nunca había tenido algo tan grande en su boca.
Cada segundo que pasaba el caliente conserje se iba excitando cada vez más, la lujuria se apoderaba de su mente y cuerpo , se sentía increíblemente bien observando como esa linda zorrita se la chupaba, pero sobre todo, se excitaba aún mas el saber que la estaba sometiendo y que ella no tenía mas remedio que obedecerle sin rechistar.
La chica sentía que el asco era insoportable, pero no podía hacer nada estaba a merced de ese depravado sexual, el viejo casi la estaba asfixiando con la vergota en la boca y con su seboso cuerpo sentado sobre su pecho le taladraba la boca sin cesar y ella sin poderse defender, la cara del hombre era digna de ser enmarcada pues al contrario de Cielo Riveros que parecía a punto de desfallecer el se sentía en el séptimo cielo, a juzgar por sus gestos y gemidos "aaaah puta, que sabrosa estás, hasta que se me hizo gozarte cabrona; ah, ah, ah aaaaahhhhhh" el le agarraba la cabeza y el la hacia tragar bien aquella verga maloliente cuando la nena sintió que el asco ya era insoportable aun vino mas, la tomó firmemente de la cabeza y aceleró el ritmo de las arremetidas, cuando de repente se detuvo, sostuvo la cabeza de la joven firmemente, con la punta de su falo es su boca y disparó la primer descarga, de semen, el caliente viejo descargo la leche sobre aquella boquita de princesa de tal manera que a ella casi le sobreviene un atragantamiento ,la boca de Cielo Riveros se llenó de leche por completo, tanto que por la comisura de sus labios asomó un poco de aquel líquido, sintió toda su boca caliente por aquel líquido viril al mismo tiempo ese sabor agridulce "aaahhhh así ,así mamita trágate toda la leche de tu macho decía el viejo" al mismo tiempo que le tapaba la nariz ,obligando a la nena a tragarse todo.
La colegiala tragaba el semen del viejo desesperada por que casi no podía respirar debido a que el viejo le tapo la nariz con su mano para obligarla a tragar todo el liquido seminal, el viejo eyaculaba en la boca de la nena tanta leche que se atragantaba y se le escapaban por la comisura de los labios hilillos de ese viril liquido el caliente viejo seguía sentado sobre el pecho de la nena y con su verga tiesa dentro de la boca de la escultural jovencita disfrutando de los desesperados quejidos de la chica por que el viejo no le soltaba la nariz evitando que respirara y con la vergota en su boca, además del peso del conserje en su pecho, era poco el aire que podía jalar a sus pulmones, sus hermosos ojos verdes miraban al viejo suplicando piedad, pataleaba con sus piernas el colchón desesperada ante la falta de aire el cojo Juan sádico como era disfrutaba toda la desesperación de la nena y le decía.
"aahhhh que sabrosa boquita tienes zorrita me sacaste bastante leche pero todavía tengo mas para ti mamita todavía falta lo bueno".
A continuación se bajo el viejo de la chica y le saco la vergota de la boca, respirando la nena desesperada jalando aire a sus castigados pulmones, el cojo Juan se sentó al borde de la cama tomo su cerveza y le dio un sorbo eructando, a continuación le acaricia las piernas a la nena mientras le daba mas sorbos a su cerveza la nena que seguía bien amarrada ala cabecera de la cama completamente desnuda , ella esta tosiendo por que en su garganta tenia varios pelos púdicos atorados en su garganta y no había forma de sacarlos de ahí.
Su vocecita ronca esta al borde del sollozo, con la cara desencajada y con restos de semen que le resbalaban por la comisura de los labios, la boca abierta y las pupilas enormemente dilatadas mirando al viejo con una desesperada expresión de terror, de saberse que estaba ahí desnuda encerrada en ese cuarto, con ese viejo maniático sexual y bien amarrada le dice.
"cof cof por favor don Juan suélteme, ya déjeme ir mire todo lo que me a hecho cof cof se lo suplico."
"Je je je" se reía el viejo sin dejar de pasar sus manos por las piernotas de la nena lentamente sintiendo la suave tersura de su piel y diciéndole "por que te quieres ir mamita si todavía falta lo mejor vas a ver que al rato vas a gritar de lo rico que lo estaremos pasándolo" sonriéndole con esa cara de sádico y enseñándole toda esa dentadura llena de caries, levantándose el viejo dando un ultimo eructo le dijo "sigamos con nuestro asunto mamita que esto todavía tiene para mucho rato jajajajajaja" ante los ojos aterrados de la escultural colegiala , viendo indefensa como el viejo desnudo separaba sus piernas "no,no..qué me va a hacer qué me va a hacer"decía la nena al mismo tiempo que intentó cerrar sus muslos pero el viejo ya se había metido entre ellos en medio de sus dos piernas y dejando caer todo su peso encima de ella la comenzó a babear en la boca y le estrujaba y le magreaba sus pechos con avaricia y desesperación se los mordía sin piedad haciendo que la nena sintiera todo el sadismo de ese caliente viejo.
Bastaaaa.... ahhhhh... ahhhhh... por favoooooorrr.... aaahhhhhh... detengaseeeee... bastaaaaaaaa .
"Putita como me calientas estas tetotas me vuelven loco "decía el viejo comiéndole los senos con desesperación se los mordía fuertemente dejándolos todos marcados, ella solo lloraba y se quejaba indefensa como estaba amarrada, para el viejo era muy sabroso sentir la suavidad la tersura de la piel de la chiquilla su aroma que despedía a juventud esa juventud que al viejo se le había ido hace muchos años.
La nena sentía como ese cuerpo gordo la aplastaba inundándola con su sudor y como la verga del viejo se frotaba sobre su bajo vientre presionándose contra ella, tenia una cara de miedo y entre sollozos le decía al viejo que parara que le dolía con lagrimas en su carita pero esto calentaba mas al viejo quien con salvajismo le mordía los senos y le jalaba el pezón con los dientes sin piedad.
"Aaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhh..... nooooooooooooooo.... por favooooooooorrrr..... bastaaaaaaa."
"Desde hace tiempo quería tenerte así putita, perra maldita no sabes cuantas veces soñé este momento" estaba como un verdadero loco, haciéndola sufrir, mordiedola y estrujando con salvajismo sintiendo descargar todo su rencor y su excitación sobre esa nena, "por favorooor, deténganse...por favooor….nooooo, es lo único que atinaba a decir la chiquilla mientras se retorcía inútilmente tratando de sacarse al viejo de encima de ella, "Siiiii eres la putita mas sabrosa que he visto" "noooooooo nooooooooo" gemía la nena "Como que no, te voy a coger te voy a meter la verga "" le decía el desquiciado viejo quien recorría el transpirado cuerpo de la chiquilla le masajeaba los brillantes pechos por el sudor la magreaba como un loco así estuvieron un buen rato hasta que el viejo se detuvo y bajándose de la exhausta nena le dijo "bueno mamita ahora vamos hacer un rico 69 para que yo me coma tu panochita" dándole unos sorbos a la cerveza la nena.
La nena sin dejar de ver el cuerpo del viejo que por la barriga le resbalaban abundantes gotas de sudor y viendo esa vergota larga, gorda y llena de venas palpitantes que emergía de una abundante y antihigiénica mata de pelos le decia toda asustada.
"Por favor... no me viole... no.... no...por favor....por favor
La suplicas de la nena solo hacían calentar mas al viejo quien levantándose se subió a la cama y coloco sus piernas a los lados de los estirados brazos de la chica que seguía amarrada a la cabecera de la cama solo que ahora al revés de cómo la tuvo hace unos momentos con la intención de hacer un 69 dirigió su palpitante verga a la boca de la nena quien trato de resistirse apretando los labios esto hizo que el viejo le diera un par de cachetadas que le quedaron ardiendo las mejillas, el cojo estaba colérico y le estampó otra cachetada en la mejilla izquierda dejándole los pómulos de un rojo encendido y no conforme con eso le lanzó un escupitajo en el rostro que la adolescente recibió dejando que se resbalara por sus labios "abre la boca pendeja si no te va peor "no quedándole mas remedio que abrir sus labios a la chica y volver a engullir esa apestosa vergota .
El viejo a continuación dejo caer todo su peso metiendo su cabeza entre las piernas de la colegiala haciendo un perfecto 69 a pareciendo ante sus ojos esa vagina con unos finos vellos dorados, los labios carnosos y rosados y le empieza a lamer el interior de los muslos para a continuación sepárale los labios vaginales con los dedos para poder meterle la lengua hasta lo mas profundo de la concha de Cielo Riveros quien nada podía hacer, el viejo le comenzó a mamar con avidez el clítoris estremeciendo a la colegiala, mientras su verga le daba unos frenéticos bombeos a su boca haciendo que la cabeza de la nena rebotara una y otra ves sobre el colchón, entraba y salía de su boca la vergota soportando las envestidas del erecto miembro.
La lengua del hombre siguió dándole feroz batalla al clítoris de la nena mientras ella experimentaba muy a su pesar un gran placer cerraba los ojos fuertemente para aguantar esas sensaciones la cosa ya le estaba gustando, la húmedos labios de la chica se entrecerraban con fuerza alrededor de esa vergota, jadiando ante el ataque sin misericordia de la lengua y los dedos del viejo a su vagina, la nena sentía que el viejo le dejaba ir todo su peso sin contemplaciones su esbelto vientre sentía como ese cuerpo flácido y sudado la aplastaba.
Los gordos y peludos huevos del conserje por las arremetidas le rozaban su fina carita la cara, le envestía la boca, con rítmicos movimientos de cadera haciendo que la nena le mamara fuerte y metiéndosela bien profunda, hasta casi tocarle los huevos con los labios,Cielo Riveros sentía como aquella barra penetraba hasta su garganta, sentía la pegajosa humedad que manaba de la punta.
El viejo alternaba largos lengüetazas por toda la rajadita hasta el culo para enseguida regresar al clítoris y hundir en el la lengua y agitarla en su hirviente interior, la nena tenia las piernas completamente abiertas la lengua del viejo continua con su labor explorando la conchita empapada de Cielo Riveros , lamiéndola de punta a punta, lamiendo la miel que mana de su sexo, , lamiendo golosamente por dentro el clítoris ya hinchado de la nena , el cuerpo de la nena se estremece de pies a cabeza, y sus ahogados gemidos se hacen más intensos.
"Mppphhh.... Mpphmm mmmmm... mmmm...mmppmh" gemía la nena ante las intensas mamadas que le daba el viejo , por la vergota que tenia en su boca y que la taladraba sin piedad el cuerpo de la nena se sacude con violencia de mujer,Cielo Riveros mama con avidez la verga del viejo con su boquita caliente y húmeda, succionando desesperada ante el intenso cosquilleo que le producía la ansiosa lengua del viejo en su clítoris , le apretaba la cabeza con sus muslos al viejo , sentía su cuerpo convulsionarse, la sangre le fluía de pies a cabeza con velocidades y temperatura indescriptibles, las piernas le temblaban su panochita se encontraba toda humedecida y latiendo como si el corazón se le hubiera ido allí abajo comenzó a excitarse cada ves mas y mas, su boca engullía y mamaba esa verga ansiosa del viejo se excitaba con el fuerte sabor a macho que se desprendía la vergota del viejo sintiendo como se hinchaba dentro de su boca sus mejillas rojas de excitación involuntaria, sencillamente no podía evitar que su cuerpo respondiera a los embates y escarceos de un macho en celo, desesperada arqueaba la cintura completamente excitada.
La lengua, y la boca del conserje van insaciables de su clítoris a su culito, una y otra vez, sintiendo los ahogados gemidos y quejidos de la colegiala sofocados por los embates de la verga en su boca, el hombre hacia lo que quería no solo con la concha de Cielo Riveros sino también con el agujero del culo y ambas partes estaban rojas y lubricadas por las fuertes mordidas y succionadas del macho, la nena se retorcía y jadeaba ahogadamente , su espalda se arqueaba a mas no poder, los ahogados gemidos de la nena inundaban el cuarto mientras que el cuerpo de la nena seguía sintiendo ese calor descontrolado su cuerpo se estremecía cada vez que la golosa lengua rozaba su clítoris su lengua del viejo era larga y a menudo la metía profundamente hasta encontrar sitios placenteros la nena no dejaba de retorcerse, gemía como una loca ya no podía mas, la excitación la descontrolaba, prueba de ello, es que de repente y sin voluntad, comenzó a mover sus caderas contra esa sucia y caliente boca provocándole miles de sensaciones al viejo este tenia la cara de gozo absoluto.
Cielo Riveros se siente sofocada debido a su agitadísima respiración ,mama con fuerza y lascivia la durísima vergota del viejo sus gruesos labios hacen presión alrededor de la roja cabeza haciendo que el viejo sienta que esta por venirse, esa lengüita de la nena hace que el viejo casi saque la leche hirviente hacia afuera , el viejo siente que ya no aguanta mas y se le escapan las primeras gotas de liquido seminal ,y mama con mayor voracidad la virginal panochita de la nena haciendo que el cuerpo de la nena se estremezca recorrido por ondas violentas de placer, de repente la nena sintió que su cuerpo ya no le respondió mas a su mente y comenzó a contorsionarse y gemir sin poder evitarlo, estaba al borde de un orgasmo, en ese momento recordó cuando jugueteaba con su clítoris de noche cuando su madre no estaba y sintió que esto era mas aun que esas noches de placer, su vagina comenzó a contraerse rítmicamente y sus ojos se desorbitaban, la chica parecía sufrir, pero su cuerpo estaba completamente poseído por el placer que le daba ese viejo ," mppphhh.... mpphmm mmmmm... mmmm...mmppmh" gemía la nena ahogadamente , sus piernas se enredaron alrededor de la cabeza del viejo apretándosela contra su panochita el viejo le metía los dedos en el culo al mismo tiempo que le mamaba , era un espectáculo muy morboso como la disfrutaba ese gordo inmundo, mientras que su cuerpo seguía sintiendo ese calor descontrolado.
Finalmente los dos llegaron al inevitable orgasmo casi al mismo tiempo el viejo acabo en su boquita de la nena, largos chorros de leche caliente que ella va tragando sin dejar de chupar y lamer, su boca sensual sigue apretadita envolviendo la vergota, sus labios dulcemente carnosos siguen succionándole, su lengüita infantil sigue con su caricia de mujer sobre la piel de la verga del viejo y este sigue eyaculando en su boca sin parar.
Cielo Riveros también está llegando al orgasmo su cuerpo es presa de temblores y su cuerpo se sacude violentamente que parece que quiere escapar de los brazos del viejo ,y estalla en un enorme y prolongado orgasmo, el viejo le succiona todo sus jugos tragándoselos.
Entonces, gradualmente, el ritmo de las acometidas del viejo a la boca de la nena se hizo más lento hasta que, exhausto cayó sobre ella.
Después el viejo se queda un rato sobre la nena muy cansado, aquella chiquilla estaba haciendo que florecieran sus más bajos instintos, disfrutando como un loco, haciendo lo que se le antojara con su cuerpo y su mente, era una sensación de poder increíblemente maravillosa, la chica a continuación sintió como la verga del viejo se ponía flácida en su boca perdiendo su dureza, la nena también estaba completamente agotada, el lujurioso conserje estaba sudando como un cerdo por el calor que hacia y por el esfuerzo físico que había hecho , se mezclaban los olores de su sudor, los de su semen, y los que ya había dentro de la casa ,el viejo a continuación se rodó bajándose de sobre la nena acostándose a su lado y diciéndole "que buena mamada me distes mi reina" y acariciadote los pechos continuo diciéndole "estas bien rica mami y todavía falta lo mejor" ella le miraba de reojo con sus ojos tristes, pero a la vez sumisos, sabía que debía obedecer, estaba sometida por el miedo y amenazas del vejete de no devolverle su diario el viejo la observaba su cara y su boca de la nena apestaban a semen, sus ojos estaban tristes pero sumisos, estaba completamente dominada era un espectáculo fascinante, el vejete se levanto de la cama y se dirigió a tomar su cerveza y viendo a la nena amarrada en la cama se le volvió a poner tiesa la verga.
La nena esta quieta junto en la cama como un pajarito herido, poco a poco se le va normalizando su respiración la chica tenia la mirada como ida se veía preciosa amarrada y tendida en la cama la cara la tenia con restos de semen que le resbalaban por la comisura de sus labios sus pechos los tenia llenos de moretones y marcas de mordidas.
"Ohh mamita que buena acabadas me has hecho tener hace mucho que no tenia una tan buena por eso vas a probar una verga de macho caliente en tu culo" le decía el conserje, la chica ya mas tranquila y dándose cuanta de su situación le dijo "por favor se lo suplico no me hagas nada, yo se la chupare de nuevo pero por favor no me hagas nada mas no me violes" decía la chiquilla.
"Ja jaja ja eso suplica palomita que eso me calienta mas de todos modos ese culito va ser mió jajajajajaja" le decía el viejo quien a continuación le desato las manos a la chica de la cabecera de la cama y empujándola le dio vuelta quedando la nena boca abajo, "no dejamm balbuceo la joven, apenas estaba tan cansada estaba en tal estado de cansancio que era como una muñeca a la que se podía manejar al antojo de uno por eso el viejo ya no la amarro el viejo le puso una almohada bajo su vientre que hizo levantar aun mas las nalgotas de Cielo Riveros el viejo se deleitaba con la vista era un par de nalgotas juveniles impresionantes grandes, redondas, suaves y duras y no resistiendo mas se subió a la cama de nuevo y le comenzó a besar la espalda a la nena sus labios recorrían la espalda de la chica llegando a sus nalgas, para a continuación separar sus piernas y pasar su lengua por las nalgotas para luego separarle las nalgas y meter la lengua hasta llegar al ano le mamaba con la lengua desde el ano hasta su panochita haciendo que la chica se estremeciera y comenzara a jadear, la nena aun entre su calentura le decía al viejo "no por favor pare no lo haga no me hagas nada ahí por favor."
Esto calentaba mas al viejo que seguía en su labor mamadora y estrujándole con sus ansiosas las manos el enorme par de nalgas pasaba su larga y rasposa lengua por su rajita de arriba hacia abajo llegando hasta el ano y de regreso otra ves rápidamente le daba de lengüetazos, pasaba y repasaba por el cerrado culito lentamente, le acariciaba con su lengua haciendo pequeños círculos alrededor luego introducía su lengua áspera dentro de su culito, a la nena nunca le habían hecho eso, y sentía que era una sensación tan rica, lo morboso de aquello lo hacia mas placentero aun, no podía resistirse a tanto placer, Cielo Riveros se sentía como nunca siendo penetrada por aquella lengua, sentía su lengua sobre su clítoris, como se lo chupaba y mordisqueaba, y solo podía jadear y gemir de placer .
Cielo Riveros gemía, mordía sus labios y entrecerraba sus ojos "ahhh ahhh ahhh asi ahhhhhh ooohhh asii asiii oohh, la jovencita gemía y su cuerpo ardía mientras temblaba presa de sensaciones y de un cosquilleo por todo su cuerpo.
El viejo a continuación se levanto apoyándose en las duras nalgotas de la nena y le dijo "prepárate pendeja por que te voy a meter la verga vas a saber lo que es un macho "abriéndole las nalgotas a la nena con las manos coloco su verga palpitante embocándola a la entrada de ese cerrado culito ella respiraba hondo y rápido, como tratando de prepararse para un dolor inevitable, sintió el calor del cuerpo del caliente macho, el viejo comenzó a meterle la verga lentamente y Cielo Riveros supo que estaba perdida, un empujón y el pene se introdujo unos milímetros mas dentro de ella, el segundo empujón mas fuerte ya ganó un par de centímetros mas, ella respiraba hondo.
Sentía como el virginal ano de la nena ejercía una resistencia y como este ayudado por lo lubricado que se encontraba el ano va venciendo esa resistencia hasta meterle la mitad de esa grande y gruesa vergota y ahí se quedo quieto un rato disfrutando de las ricas contracciones que hacia el castigado ano de la nena ante la arremetida de ese intruso.
"Bastaaa ahhhhh ahhhhh por favooor aaahhhhhh detengaseeeee bastaaaa "decía la ensartada nena sentía que su culo se habría y como le entraba centímetro a centímetro esa potente verga sus lágrimas eran mas abundante "que colita apretada tienes pendeja le dijo el viejo haciendo fuerzas para penetrarla totalmente venciendo la resistencia del cerrado ano de la nena hasta ensartarla completamente la pobre Cielo Riveros sentía que la estaba partiendo, pues era demasiado gruesa, sus enormes testículos peludos golpearon sus nalgotas y solo grito de dolor sus ojos se dilataron como sorprendidos la nena sentía como esa verga la llenaba totalmente, sus ojos se abrieron de par en par, sus manos se crisparon "No, por favor sáquela, me duele mucho , no sigaaa ayyyyy, me lastimaaaa ,ayyy, me duelee, ayyy" se oían los gritos de la nena.
El viejo sin hacerle caso se acostó sobre ella y empezó a culear como loco, , sus envestidas eran rápidas y potentes haciendo vibrar el cuerpo de la colegiala con cada estocada la nena casi no tenía ya fuerzas para oponerse"no por favor no por favor no puedo más "susurro.
"Qué culito más estrecho tienes putitaa" decía el viejo, el cerrado culito de la nena poco a poco se fue adaptando a la enorme verga que la violaba y el dolor poco a poco fue cediendo al placer, la colegiala sentía como la verga del viejo se deslizaba perfectamente en su ano provocándole un placer indescriptible nunca antes sentido, le estaban dando duro, sentía como entraba y salían los huevo del viejo se y el ruido de su culo por las cada embestidas ploc ploc ploc, sentia que la volvían loca, ya no podía mas, "ahhh ahhhh ahhhhhh, ahhhhh ahhhhhhhhhhhhhhhh oooohhh ooohhhhh ella gemia con cada ensartada del viejo al sentir las paredes de su ano rozadas por ese pedazo de carne,su respiración era rápida, y tenia un temblor de su cuerpo juvenil mientras la culeaba el viejo como loco.
Ella ya no chillaba, solo jadeaba de placer, gemía mas y mas cada vez el viejo la ensartaba sin piedad , cada mas profundo la culeaba con fuerza, con rudeza, loco por la sensación del momento , las ensartadas hacían vibrar las nalgotas de la jovencita ella estaba completamemnte entregada al viejo sin voluntad de resistirse la vergota entraba y salía perforándola sin contemplaciones los huevos del viejo hacían ruido contra su culo en cada embestida , le metía y le sacaba la verga arrancándole gritos de placer a la colegiala al sentir las paredes de su culo como la rozaba esa vergota,ella temblaba su cuerpo estaba rebosante de placer.
El viejo la insultaba, le decía "puta, perra, zorra", eso lo excitaba aun mas, estaba disfrutando como un loco, verla sometida y follada era algo increíble la miraba con una cara totalmente desencajada, la cara de un depravado sexual, y cada vez, sus embestidas eran mas salvajes, mas fuertes, mientras le gritaba que era una puta, oír eso excitaba a la nena una manera increíble nadie la había tratado así y comenzó a suspirar, gozando de la enculada salvaje a la que estaba siendo sometida, cerraba los ojos, apretando sus dientes y mordiendo sus labios, ella gozaba con la situación el viejo no dejaba de decirle "puta grita mas fuerte como me calientas putita como se come tu culo mi vergaaaaa" totalmente fuera de si.
"Aaaaaaahhhhhhhhhh aaahhhhhhhhhhhhhh uyyyyyyyyyyyyy" gemía la chica desfalleciendo de placer el conserje la seguía embistiendo fuertemente le daba tan fuete que al chocar con sus nalgotas de la nena s hacia mucho ruido, ella estaba que chorreaba, la penetraba tan fuerte que le vino un orgasmo intenso la nena arqueaba la espalda y paraba las nalgotas queriendo que la verga del viejo la penetrara mas profundamente la expresión de su cara es de de dolor y de placer a la vez , un placer inmenso que no conocía , la verga le estaba produciendo unos orgasmos incontrolables yo no paraba de gemir y retorcerse, , los orgasmos se sucedían en su cuerpo uno tras otro de repente un orgasmo arrollador, el más grande de su vida, le sobrevino en aquel momento y grito como poseída por el demonio,"aaaaahhhhh ahhhhhhhhh asiiii Ahhhh papiiiii que riiiiiico ahhhhhh papiiiiiiii uyyyyyyyy.
Los orgasmos le asaltaban uno tras otro en forma despiadada, eran tan intensos y continuos, que la volvían loca, el viejo le metía y sacaba la tranca con tanto vigor que cada uno de sus embates hacía pujar a la adolescente, el cuerpo se contorsionaba como una especie de espasmos tanto era el placer de ella, el viejo se acostó en su espalda y le mordía la nuca mientras la culeaba , metió sus manos por debajo del cuerpo de ella agarrándole las tremendas tetas y se los comenzó apretar y a estrujar sin dejar de culearla, le mordía la nuca y el cuello sin piedad, la nena estaba tan caliente que no decía nada solo se dejaba hacer solo gritaba y se contorsionaba-"aahhh, ahhh, asiiiiiiii y paraba mas las nalgotas queriendo que la verga del viejo la clavara mas profundamente, que culeada le daba el viejo a Cielo Riveros la embestía brutal y salvajemente le estrujaba los pechos y los pezones y la mordía sin piedad en la nuca y en el cuello la nena sentía como esa vergota la llenaba totalmente.
El viejo estuvo cerca de media hora rompiéndole el culo hasta que sintió que se venia, apretó sus tetas fuertemente y le mordió con fuerza el cuello, la cara de la nena estaba totalmente desencajada, con los ojos el viejo bufando se vino en torrentes que inundaron todo su trasero, mojando sus nalgas y piernas de la nena "aaarrrggggghhhhhh gemia el viejo al venirse , la nena también tuvo un inmenso orgasmo al mismo tiempo que manifesto por medio de gritos y gemidos roncos mientras su cuerpo era presa de espasmos de placer y lujuria"aaahhhhh papiiiiiii uyyyyyyyyyyyyyyy aaahhhhhhhh el orgasmo de la nena era interminable , el viejo llenaba su tierno culito de abundante leche caliente , la nena sentia en su culo por primera ves el caliente y pegajoso semen golpeando e impregnándose en las paredes de su culo y poco a poco llenándola de su caliente fluir.
El viejo se quedo arriba de la nena completamente agotado por la tremenda culeada a continuación el viejo Juan le saca su todavía duro miembro de la cola de la nena y se levanto, la nena aun con la respiración agitada lo ve sin entender a donde va, el viejo se dirige a la lamparita para a continuación apagar la débil lámpara de meza dejando el cuarto totalmente a oscuras no se veía nada era una oscuridad total y se subió de nuevo a la cama para seguir culeando a la escultural colegiala en esa reinante oscuridad donde solo se oían los insultos del viejo y los gemidos de placer de la nena.
CIELO RIVEROS PARTE 5
La colegiala perdió la noción del tiempo, el momento era solo recibir las embestidas del viejo a su ya no virginal ano y sentir esa vergota del caliente conserje que la hacia sentirse mujer por primera ves, el viejo parecía que se iba a infartar por lo agitado que estaba y por el sobre esfuerzo que hacia para darle duro a ese par de nalgotas y al tesoro que escondían, la estuvo cogiendo hasta quedar exhausto por el placer.
La nena estaba totalmente cansada, como todo el cuartucho estaba oscuro no supo cuanto tiempo había pasado desde que llego, ahí estaba totalmente sin energías con el viejo arriba de ella sintiendo su respiración en su mejilla totalmente satisfecho y ella vejada y humillada.
Ella en su debilidad cavilaba mientras se le iba pasando el efecto del placer en lo que había pasado, en que hacia ahí, en ese cuarto horrible, al lado de un hombre viejo y asqueroso, el viejo ese que la había gozado a su antojo, que la había humillado, al nivel de una puta sucia y lloro en silencio por lo que había sucedido.
De pronto sintió que la lamparita se volvía a encender haciendo que sus pupilas se cerraran ante la luz sorpresiva, el viejo estaba muy sudado por el esfuerzo realizado y vio con satisfacción como su verga tenia rastros de sangre así como también el colchón demostración inequívoca de que Cielo Riveros era virgen.

Luego el viejo se bajo de sobre la nena haciendo que ella sintiera un frió en su agujerito, sin lugar a dudas lo había abierto en dos, ella entonces llevo una mano hacia su ya no tan virginal ano y lo sintió todo lleno de los fluidos de semen del cojo y volteándolo a ver con esos grandes y bellos ojos verdes y le dijo "es usted un desgraciado mentiroso me dijo que no me penetraría y mire como me a dejado" y a continuación se levanto y se puso su bikini y se comenzó a vestir dándose cuenta con asco que estaba toda pegajosa por los restos de semen seco en la cara en la espalda en las piernas y que olía a el sudor de el y como no si la había cogido y ella lo había disfrutado también, eso la hacia sentir vergüenza y asco de ella misma y mientras se ponía su brasier pensaba en como pudo perder su virginidad anal con un gordo de 60 años que no se lavaba ¿Se había vuelto loca o que?.
Mientras se ponía su falda escolar veía al viejo quien la observaba acostado como se vestía con una sonrisa burlona de satisfacción y le dijo.
"Parece mentira que te acabo de culiar me dejaste seco jajaja"
Ella seria lo miro mientras se acaba de vestir y ver esa sonrisa burlona en la cara del viejo le daba rabia e impotencia, sentía que la blusa escolar se le pegaba en la espalda y las piernas también las sentía empegostadas por tanto semen.
Al acabar de vestirse la colegiala le dijo al viejo "donde esta mi diario" el agotado conserje le señalo un ropero y le dijo que en el segundo cajón encontraría su preciado diario y la llave del candado para que pudiera irse en medio de una gran carcajada diciéndole que se lo había ganado a pulso, ella se sintió indignada por las burlas del viejo y con los ojos llenos de lagrimas le daban ganas de matarlo por hacerla sentirse peor que basura.
Abriendo la puerta del cuartucho la nena salio al exterior viendo que ya había caído la noche y que ya la escuela permanecía desierta se dirigió a la salida y tomo el bus a su casa cuando llego se metió directo a la ducha, estando en un estado físico y mental deplorable , mientras se bañaba no paraba de pensar en lo que había sucedido y aun que era contra su voluntad en su interior sabia que había sentido un placer indescriptible, cuando termino el baño se hecho en su cama sentía que todo el cuerpo le dolía y presa de un cansancio abrumador se quedo completamente dormida.
Al otro día aun tenia una gran confusión por lo que había sucedido, no podría decir que estaba traumada pero la verdad es que no terminaba de creer lo que había hecho, sabiendo que había terminado ese capitulo de su vida poco a poco lo fue enterrando en su mente y trato de llevar su vida normal ,pero solo quedaría en eso, en deseos ya que mas adelante seria victima de mas acosos por parte de hombres deseosos de disfrutar de sus encantos.
El lunes siguiente, al volver al colegio, procuro seguir con su ritmo normal de vida, con sus amigas, comportándose de igual forma que antes, nada había cambiado solo que sentía algo de vergüenza, así que evitaba encontrarse con el conserje que la había violado, un día al estar en el receso platicando con sus amigas lo vio como a unos 10 metros sin camisa todo sudoroso paleando tierra bajo el sol sin camisa con toda esa barriga bofa y bañado en su sudor , volvieron a su mente de la nena esas imágenes cuando empapado también en sudor le destrozaba su culito, y se le contrajo el esfínter, la piel se erizo, sus senos se endurecieron repentinamente y su conchita comenzó a humedecerse , espantada por la reacción de su cuerpo se despidió de sus amigas y se fue a su salón.

La vida de Cielo Riveros giraba alrededor del deseo, la lujuria y la lascivia que sin proponérselo provocaba en hombres de todas las edades quienes valiéndose del engaño, el acoso, el chantaje y otras sucias artimañas, no cesaban en su intento de querer llevársela a la cama para saciar en su voluptuoso cuerpo las mas bajas, sucias, puercas y aberrantes perversiones sexuales.
Así pasaron los días la nena fue olvidando ese capitulo que paso con el cojo Juan y salía a pasear los sábados con el permiso de su mama con su novio Rodrigo iban a cines, museos, centros comerciales, ferias etc. la nena era muy feliz con su novio y estando juntos para ella era lo máximo.
Un sábado estando con su mama en casa, ya que como recordaran su mama trabajaba de enfermera en una clínica rural y por su horario nada más se veían los fines de semana, le llamo su mama.
"Cielo Riveros mi niña ven te tengo una sorpresa" la nena contestándole desde su recamara le dijo "voy mama. "
Llegando la nena a la sala de su casa, vio que su mama tenía una pequeña caja envuelta en regalo y dándole un beso en la mejilla a su mama le dijo.
"Y eso mama que es"poniéndoselo en sus manos su mama le dijo.
"Es para ti mi niña lo compre por que se que lo necesitas y por que llevas muy buenas calificaciones en la escuela pero ábrelo ándale."
La nena sin esperar más lo abrió y vio que era un muy moderno teléfono celular con cámara integrada para tomar fotos y video, la nena emocionada abrazo a su mama diciéndole "gracias mama no sabes cuanto deseaba tener uno, ya todos en la escuela tenían menos yo eso me hacia sentir mal gracias mama."
"Si hija te lo mereces por ser tan buena hija, solo te pido que lo cuides por que lo estoy pagando con mucho sacrificio ya ves que lo que gano apenas nos alcanza para lo mas elemental. "
La nena muy feliz corriendo a su recamara se tiro a su cama y lo primero que hizo fue llamar a su novio poniéndolo al tanto de que ya tenia celular y poniendo se de acuerdo para verse en la tarde para salir a dar la vuelta.
En la tarde la colegiala se dirigía al parque para verse con su novio Rodrigo, la chica llevaba un vestido veraniego bordado con florecitas con un escotazo que dejaba ver mas de la mitad de ese par de mamables pechos , de abajo le quedaba a medio muslo y esto aunado a las nalgotas de la nena hacia que el vestido se le subiera de una forma provocativa, con ese sinuoso caminar la falda se balanceaba de lado a lado al compás de sus caderas,cuando andaba era seguida por todo el vecindario masculino ,ella iba pensando en ver a su novio y no se daba cuenta del efecto que entre los hombres despertaba no pocos suspiros a su paso, cualquier hombre joven o mayor, soñaba con satisfacer sus fantasías en los brazos de aquella mezcla de niña-mujer, ese día había mucho viento cuando de pronto una ráfaga de aire levanto el vestido de la nena tomándola desprevenida alegrándoles la vista a los afortunados que pudieron ver su bikini rosado lleno de encajes haciendo que la nena se pusiera colorada por la pena.
Uno de los que veían ese delicioso vaivén de las ese par de nalgotas con deseo era "el gorila" un cholo líder de una banda que se dedicaban a asaltar gente para comprarse droga y cervezas típico de estas colonias perdidas, tendría como unos 32 años, lleno de tatuajes, cabeza rapada, una barba de varias semanas sin afeitar, vestía siempre con bermudas grandes y tenis era muy corpulento y muy velludo de ahí que le decían el gori de carácter dominante.
Ese día para variar se estaban drogando con marihuana en un callejón a lado de un billar donde era su centro de operaciones, era un callejón abandonado muy estrecho apenas como metro y medio de ancho por unos 8 metros de largo generalmente se iban hasta el fondo a estarse drogando y mantenían a uno afuera para que les echara aguas por si pasaba algo.
Este fue el que les aviso con un chiflido al distinguirá a Cielo Riveros con su andar cadencioso y moviendo sinuosamente su escultural anatomía, el gori y los demás salieron del fondo del callejón par disfrutar el espectáculo de Cielo Riveros .
Ella los vio parados al gori y su banda recargados en la pared, pero ella no les presto atención por que estaba abstraída en sus pensamientos de que vería a su novio, al pasar junto a ellos sintió las miradas las cargadas de lujuria que sin recato alguno se dirigían a sus prominentes pechos, estos veían hipnotizados como sus firmes pechos tensaban la tela de su vestido, y como los pezones que se marcaban perfectamente en la tela a pesar de la protección del sujetador, y las miradas cargadas de lujuria eran dirigidas también a sus apetecibles nalgas , esto la asusto mucho a ella al ver las miradas de esos hombres y trato de apurar el paso para pasar lo mas rápido posible agachando la cabeza.
"Adonde vas tan sola mi reina " oyó la nena la voz ronca del gori, al levantar la vista la chica lo vio que sin quitarle la vista a sus tremendos pechos se relamía los labios con lascivia a la ves que los demás murmuraban un "mamacita" o alguna otra palabra libidinosa.
La nena sin contestarles apresuro el paso toda asustada ala ves que el viento seguía aumentando y hacía esfuerzos sobrehumanos para que no se le levantara el mini vestido.
"Oye hermano pero que culo de vieja" dijo uno de los cholos.
"Que espectáculo, que tremendo culo tiene esta hija de puta que nalgotas...grandes y redondas"dijo el gori.
"Esta buenísima….que melones los que se carga" volvió a decir en tono lujurioso uno de los cholos.
"No cabron….si esa pinché vieja le para la verga a cualquiera….es para estarle bombeando las nalgas todo el día en la cama" dijo el gori.


La nena siguió su camino olvidándose de los cholos y no prestando atención a los piropos que le decían a su paso ella estaba en verdad enamorada de su novio y solo pensaba en su encuentro con el, al divisarlo se le dibujo una sonrisa en su hermoso rostro se abrasaron y besaron para a continuación sentarse en una banca y platicar de trivialidades ahí se les fue pasando la tarde tomados de la mano sentados y dándose besitos de piquito , los machos que pasaban se deleitaban viendo las bien torneadas piernotas cruzadas dejando ver su suave piel de terciopelo que al estar sentada en la banca hacia que el vestido se le subiera dando un grandioso espectáculo a todo aquel que pasaba por ahí.
Sobra decir que el muchacho se sentía en las nubes al tener con el a una mujer que provocaba los pensamientos mas libidinosos de los hombres, lo sabia muy bien por que el también había estado así cuando conocía de vista a Cielo Riveros y la veía pasar caminando contoneándose haciendo que la sangre le hirviera de deseo pero ahora este escultural chiquilla era suya y nada mas que de el (déjenme reírme ja ja ja eso pensaba el, no sabiendo a cuantos ya había Cielo Riveros dado su cuerpo para que la disfrutaran y los que faltaban).
El chico sintió que se calentaba con tanto besos que le daba esa beldad que tenia por novia sentados como estaba besándose pasaba su mano por la espalda de la nena y la apretaba contra el para después bajar por su costado y posarse en esas deliciosas y suaves piernas acariciándolas y comenzando a subir lentamente, cada ves mas, excitado el chico comenzó a besarle el cuello, hurgaba su deliciosa piel fresca , la nena tenia una mirada que denotaba temor ,excitación ante esos besos y caricias cada ves mas atrevidos y al que dirá la gente que pasaba y los veía.
La chica reaccionando por que estaban en un lugar público le dijo.
"No… no debemos" sintiendo el lo agitada que estaba poniéndose.
Ya la tarde caía era casi de noche y tomándola el de la mano le dijo "ven vamos a caminar."
Caminaron el silencio abrasados la feliz pareja deteniéndose por momentos para darse de besos ante la mirada de envidia de cuantos machos los veían hubieran deseado estar en su lugar para disfrutar de los sensuales labios de ella, que de solo verlos era imposible evitar pensamientos morbosos sobre las maravillas que haría su dueña con ellos, así como de tocar sus exquisitas redondeces las cuales se delineaban perfectamente bajo el mini vestido de ligero vuelo que apenas cubría sus bien torneadas piernas, motivo también de pensamientos libidinosos, así siguió la feliz pareja caminando hasta que llegaron a un terreno baldío que estaba más oscuro que la boca de un lobo, el chico la llevo hacia adentro tratando de continuar lo que hicieron en el parque pero lejos de las miradas indiscretas la recargo en un árbol.

Y comenzó a besarla en la boca con una presión avasallante, le metía la lengua revolviéndola adentro, le agarraba los pechos por arriba del vestido y se los masajeaba, ella hizo un débil gesto como para impedirlo, pero sin convicción alguna.
Le saco las tetas fuera y comenzó a mamárselas, que tetas duras y grandes, con unos pezones completamente hinchados, sus jadeos aumentaron. , el pezón lo tenía grueso carnoso y durísimo, le mamaba un pezón y con la mano le masajeaba el otro pecho haciendo que la nena se humedeciera de su conchita.
"ahhhhh ahhhhhhhh mi amor" gemía la nena presa de sensaciones placenteras.
Cielo Riveros lo tenía tomado con sus brazos agarrándolo de la nuca y apretándolo contra sus formidables pechos suspirando con las lengüeteadas del chico que la hacían sentir un cosquilleo desquiciante que le recorría todo su cuerpo, sentía su coñito que estaba humedecido ante la situación tan placentera que le daba su novio y a juzgar por la presión que sentía contra su estómago, parecía que su polla también estaba dura.

A continuación el chico bajo una de sus manos por debajo del vestido hasta la parte superior de su muslo de la nena sintiendo un gran placer esa piel desnuda tan suave recorría con su mano ese par de nalgotas ricas estrujándolas y acariciándolas por largo rato disfrutando cada segundo del placer que le daba ese cuerpo de ensueño, bajaba las manos recorriendo el suave muslo de la pierna para a continuación de nuevo subía la mano para estrujar de nuevo esas nalgotas.
"ohhhhhh ohhhhhhhh mi amor me haces tan feliz" gemía la nena, le tocaba su caliente panochita estaba que casi hervía, por tanto manoseo del excitado chico, Cielo Riveros hacia muecas de placer en su angelical carita torcía la boca, se mordía los labios y movía su cabeza de un lado a otro.
Las lujuriosas manos del chico recorrían ese par de piernotas suaves acariciándolas ávidamente mientras no dejaba de mamarle los pechos impetuosamente.
Ahhh cosita rica decía el chico tenia la verga completamente dura y ella lo sentía en su bajo vientre excitándola mas y aferrándose mas a la cabeza de el pegándolo mas a sus formidables tetas.
"Aahhh mamacita cosita rica" le decía el caliente muchacho para a continuación apoderarse del hinchado pezón con la boca y succionárselo haciendo que Cielo Riveros arqueara la cintura y gimiendo " Ahhhhhhhhhh, qué rico, amor.


La colegiala estaba súper acelerada y jadeaba a cada instante, era un autentico volcán sexual.
.
En esas estaban cuando oyeron que venían unas señoras platicando por el lote baldío separándose inmediatamente Cielo Riveros se compuso su ropa y su cabello y ella le dijo que ya era tarde que por favor la fuera a dejar a su casa ante el desencanto del chico que quería seguir la fiesta .

Caminaron hasta la puerta de la casa de la chica y dándose un beso se despidieron entrando la chica a su casa.
Esa noche en la soledad de su recamara ya de madrugada la nena comenzó a tener un sueño húmedo durmiendo solamente con un diminuto bikini con su mano comenzó a acariciar su clítoris, al tiempo que con otra mano se acariciaba sus apetecibles pechos, haciendo un alto en sus delicados pezones para pellizcarlos, jugar con ellos, bordear su contorno, retorcérselos suavemente mientras flexionaba sus torneadas piernas y arqueaba la espalda hundiendo la cabeza en la almohada presa de la excitación a su mente venia el faje que se había dado con su novio en el lote baldío.
Oohhh mi amor así dame mas decía la nena de pronto oyó una voz aguardientosa que le decía "si zorrita te voy a dar mas "ella al verlo ya no era Rodrigo, era el cojo Juan y ya no estaba en el lote baldío estaba en el cuartucho del lujurioso viejo completamente desnuda, "puta te voy a mamar la panocha y te voy a meter la verga hasta que me harte de ti.
Esas palabras vulgares en el tono como se las decía producían un calor dentro de la colegiala que la hacían perder la razón y en el sueño el viejo le mamaba los pezones como un desesperado, haciendo que su panocha se humedeciera en medio de un delicioso cosquilleo…."aahhhh….oh di-dios"….susurro con los ojos entrecerrados, los labios húmedos semi abiertos mientras que a su mente en medio del sueño llegaba la voz del cojo Juan.

"Ahhh que rico mami eres toda una perrita te encanta la verga se nota mucho que andas urgida , pero yo te voy a dar una culiada que nunca olvidaras" todo eso venia a su mente como un torbellino haciendo de ese momento algo excitante para ella gemía sin dejar de frotarse vigorosamente la entrepierna que para estos momentos prácticamente la tenia empapada , ladeando la cara con el cabello como cascada sobre el mismo dándole un toque mas erótico y con sus dedos entrando y saliendo de su intimidad, mojándolos con sus jugos que cada vez emanaban en mayor cantidad.
Despues de unos minutos mas de esta faena…."ahhhhmmmmjjjj ….oohhhhh ….di-dios mió ….ahhhhggggmmmmjjjj!" ….gimió largamente mordiendose el labio inferior de un solo lado, agitando, estrujando las sabanas, convulsionando su escultural anatomía ante la llegada de un caudaloso orgasmo que en forma estrepitosa le hizo lanzar alaridos de placer que seguramente llegaron a todos los rincones de la casa, pero sintiéndose segura de no ser oída por nadie, descargo toda la energía acumulada.
No pudo evitar sentir un estremecimiento que le recorrió todo el cuerpo, desde la punta de los cabellos hasta los dedos de los pies exhausta se volvió a quedar dormida.
Al otro día en la mañana al despertar se sintió muy húmeda de su panochita al principio no recordaba nada, pero poco a poco comenzó a recordar en la noche con su sueño húmedo y las imágenes venían a su mente donde era tomada por el viejo Juan entonces sus pómulos se enrojecieron su cuerpo comenzó a prenderse y su panocha le volvía a palpitar.
Sorprendida por la reacción de su cuerpo corriendo se levanto y se metió en la regadera tratando de apagar el fuego que comenzaba arder en su cuerpo y que amenazaba con consumirla.
Ya más tranquila después de la ducha se dedico a hacer sus quehaceres y a preparar sus cosas para el otro día que era lunes ir a la escuela.

El lunes la nena llego a su escuela preparatoria bajándose del bus que la dejaba frente al plantel escolar ,la nena veía todo el barullo que había formado por todos los escolares que llegaban a la escuela bachiller y los que salían de tomar sus clases del turno de la mañana , y volteo hacia todos lados esperando ver a alguien conocido, cuando se topo con la mirada de claudia quien era su mejor amiga quien como decimos aquí en México no cantaba mal las rancheras también, esto quiere decir que al igual que Cielo Riveros claudia también tenia lo suyo pero a diferencia de Cielo Riveros esta chica era totalmente desinhibida.
Esta nena era dueña de un redondo trasero que parecía haber sido moldeado por un escultor una cintura delineada de avispa un par de pechos no tan grandes ni tan exuberantes como los de Cielo Riveros pero agradables a la vista masculina, de la cara no era tan hermosa como Cielo Riveros pero tampoco se podía decir que fuera fea, su carita era picarona de mirada sensual y cabellos ondulados rubios, derretían a los que la conocían.
Saludándose el par de encamables colegialas de un beso en la mejilla y platicando alegremente se quedaron unos minutos a las puertas del colegio aprovechando que todavía faltaban unos minutos para empezar las clases, el par de nenas platicaban distraídamente sin prestar atención a las miradas tanto de maestros, intendentes y alumnos que se deleitaban viendo el delicioso espectáculo visual que ofrecían las dos chicas con sus mini faldas escolares que apenas les llegaban a medio muslo exhibiendo piernas muy bien torneadas y la curva de sus traseros que se podían apreciar como sobresalían de sus faldas.
Había compañeros de ellas que trataban de aprovechar la oportunidad de propiciar encuentros casuales e intentar ver un poco más allá el panorama que ofrecían el abultado pecho de Cielo Riveros debido al generoso escote de su blusa ajustada, o cuando con su amiga claudia se encontraban sentadas en el césped y ofrecían a la vista sus par de bellas y torneadas piernas provocando que más de uno tuvieran que hacerse "justicia por mano propia" en los baños del colegio al no aguantar ver semejante espectáculo visual.
Como decíamos claudia era una chica totalmente desinhibida, le gustaba darse sus buenas agasajadas con algún chico que le gustara se dejaba besar y manosear por él, sus besos y su cuerpo ya era del dominio de compañeros de la escuela, amigos de sus hermanos, vecinos etc. desde hacía un año le había agarrado un gustillo por todo eso que tuviera que ver con muchachos y cuestiones sexuales.
Su uniforme elevo más de una queja de las maestras con el director, su faldita tableada era cortísima, y le gustaba llevar la camisa apretada, resaltando más su figura.
Ella sabía aprovechar el cuerpecito que dios le dio hacía que los más chicos de 1° año, le compraran cosas con solo sonreírles un poco, inclusive había logrado que un profesor, que se babeaba con ella le subiera las notas bajas que tenía en matemática.
"Porfa profe" solo había tenido que decir, comiendo una paleta insinuantemente y jugando con sus cabellos, lanzándole una miradita de cachorra triste de las que ella bien sabía hacer.
Salía todos los fines de semana a discotecas, fumaba sin que sus padres lo supieran, y trataba de que no la vieran llegar borracha, cosa que, hacia bastante seguido, se juntaba con los amigos de su novio todos estaba muertos por ella y algunos afortunados ya habían disfrutado de sus encantos, el novio era un tipo pandillero un vago que no hacia nada de provecho solo vagar y estarse drogando.
Claudia salía todos los fines de semana, bailaba desaforada con algún chico si no estaba su novio lo besaba si le gustaba, y si valía la pena, se dejaba manosear en los reservados y si se daba la situación, ella le mamaba la verga (siempre y cuando el joven agraciado valiera la pena)se había convertido en una experta mamadora ya había mamado 6 vergas distintas, la de su novio , la de su primo, y la de algunos chicos de la discoteca, y a ella no le disgustaba, le gustaba saber que volvía loco a los hombres que se las mamara... le gustaba el calor, sentir como palpitaba al acabar y tragarse todo el semen, le hervía la sangre cuando recordaba tener sexo, esa cosa que había descubierto hace unos meses y se había vuelto adicta a estas cuestiones.


Sonando el timbre para que los muchachos pasaran a tomar las clases las dos beldades se fueron a su salón para tomar sus respectivas clases meneando deliciosamente el trasero ante la mirada de admiración y de deseo de todos los varones y de envidia de las chicas menos agraciadas.
Al terminar una clase Cielo Riveros se quedo un rato en el aula con otra compañera que le explicaba unos problemas de matemáticas que no había logrado entender bien , cuando termino la explicación busco a su amiga claudia con la mirada dándose cuenta que no se hallaba en el aula, como tenia todavía 20 minutos de receso y salio a buscarla.
Cielo Riveros se paseaba por la escuela buscando a su amiga, en verdad que era una criatura digna de ser plasmada en un cuadro de un gran pintor para dejarla de legado para la posteridad, unos rasgos angelicales de su rostro que era imposible no voltearla a ver , su cuerpo casi perfecto lleno de curvas por todas partes sus grandes y hermosos senos que se erguían desafiantes en donde se marcaba el delicioso pezón sobre la tela de su blusa ya que traía el chalequito oficial del uniforme sin abotonar , su estrecha cintura y su vientre completamente plano , un par de nalgotas redondas y paradas que se balanceaban en su cadencioso andar y un par de piernotas bellamente moldeadas y firmes que se apreciaban debajo de esa minifalda.


En verdad que era un monumento de chamaca casi todos en la escuela soñaban con conquistarla y cogersela, sobre todo un chico llamado víctor un mozalbete de 20 años de esos típicos que nada mas van a la escuela por diversión ya había repetido varios semestres por que no estudiaba solo le encantaba irse de pinta, fumar en la escuela o estar viendo revistas pornográficas que siempre llevaba en su mochila, y pues ya andaba ya con las hormonas alborotadas y absorto veía a Cielo Riveros , no le quitaba la vista a sus formidables muslos ni a sus redondas nalgas que se delineaban bajo el ligero vuelo de la minifalda escolar y que se cimbraban con su cadencioso andar.
Ella al verlo que la miraba lujuriosamente se sonrojo y cambio la mirada hacia otro lado tratando de evitarlo sabiendo que era un bueno para nada y que nada mas estaba en la escuela por hechar relajo.
Víctor no aguantando mas al verla se acerco a la nena diciéndole.
"Adonde vas mamacita no quieres que te acompañe."
"No gracias" le dijo la nena secamente sin siquiera voltearlo a ver.
Este se había colocado a su lado caminando al parejo de ella y al estar tan cerca de ella era inevitable no clavar la mirada en aquel par de maravillosos par de melones que se dejaban ver por el escote de la blusa , eran demasiados imponentes demasiados soberbios para no babearse por ellos.
"Por que no vamos al cine mamita no seas aburrida vamos yo te invito" le decía el caliente chico a la escultural colegiala, "mira que la pasaremos muy bien allá, estas tetotas ya piden que las mamen y las soben"

Cielo Riveros sintió que le ardía la cara al oír las vulgaridades que le decía el mozalbete.
"Pero que te has creído imbecil déjame de estar molestando."
"¿Que te pasa zorrita? Si esas tetotas son para disfrutarlas ni modos que vayas para monja eso si seria un desperdicio" le decía el caliente víctor que a fuerzas se la quería tirar.
La nena se sentía incomoda por que el chico aparte de decirle leperadas no la dejaba, seguía caminando a su lado y viéndola descaradamente.
"Que dices entonces nos vamos al cine y me das una mamada de verga mira que mis bolas están llenas de leche para que no se me vayan a reventar."
La chica ya no le contestaba creía que ignorándolo se aburriría y se iría, pero esta actitud animaba mas al caliente joven quien seguía bombardeándola de peladeses.
La nena estaba tan absorta en deshacerse de víctor que no se fijo ya por donde iba y fueron a dar a una parte que estaba desierta de la escuela hasta el fondo, en el segundo piso donde había unos salones que servían de laboratorios, pero que en esos momentos no había nadie ya que al ser el receso todos estaban abajo en los comedores o en las canchas jugando pelota.
Distraída como iba al doblar una esquina había un pasillo como de 3 metros de fondo y mas allá solo una pared, la chica quiso dar media vuelta y regresar por donde había venido pero víctor se interpuso, ella se hizo de lado para librarlo pero el se volvía a interponer y no paraba de decirle.
"Ándale putita no seas apretada podemos pasar un rato agradable tu y yo mira que ahorita no hay nadie estamos solos aquí."
"Solo dame un besito mamita rica" le dijo víctor al mismo tiempo que estirando una mano le agarro una nalga a la nena quien reaccionando sorprendida por la atrevida caricia le empujo la mano y le dijo.
"No me toques entupido eres un cerdo lárgate y déjame salir si no gritare y te acusare para que te expulsen".
El la veía divertido era un chaval que ya estaba muy corrido y viendo los hermosos ojos verdes de la nena sabia que estaba asustada y quería aparentar que estaba enojada y que cumpliría su amenaza.
La nena se estaba poniendo nerviosa por la situación de estar ella y ese depravado solos en ese lugar alejados de los demás, ella insistía tratando de esquivarlo para poder pasar y el seguía interponiéndose haciendo inútiles sus esfuerzos de la chica de pasar.
Esto hizo desesperarse a la chica y ya bajándole el tono a su voz casi suplicándole le dijo
"Por favor déjame pasar víctor yo no te e dado motivos para que me hables así."
Tremendo error de Cielo Riveros con esto el confirmo que estaba asustada y ya más envalentonado al ver la timidez de ella la tomo de las muñecas diciéndole.
"Claro putita que me has dado motivos andas por toda la escuela levantando los pitos con tu forma de menearte y de vestirte enseñando todo y diciéndonos con esa actitud que estas que te mueres por una buena verga", le decía el chico al mismo tiempo que la iba forzando a caminar hacia atrás hasta que su espalda de ella se pego a la pared del pequeño corredor.
El mozalbete ya mas seguro y sintiéndose dueño de la situación la recorría con miradas lascivas sus portentosos pechos, miradas que no pasaron desapercibidas para ella y que le hicieron sentir un ligero estremecimiento mezcla de temor y excitación.
Por la posición en que estaban se veía la parte de adentro de un salón por los cristales pero los de adentro no los veían por que los tapaba un viejo pizarrón recargado en la ventana que ya estaba carcomido y tenía unos pequeños huecos, en eso oyeron unas voces que se adentraban al salón eran un par de profesores que habían olvidado unos documentos que tenia que llevar a la dirección.
Los dos voltearon a ver a través de los huecos del pizarrón el chico sin soltarla de las muñecas, Cielo Riveros reconoció a uno de los maestros era un maestro que siempre le había tenido cariño y que siempre la ayudaba cuando necesitaba alguna explicación de algo que no entendía, pensado que era su tabla de salvación se
preparo para gritar auxilio, pero víctor adivinando sus intenciones le dio una cachetada diciéndole.
"Si gritas zorra todos se vana enterar de que te estoy culeando ¿quieres que todos sepan que te culeo y que a ti te gusta? Quieres eso puta."
Cielo Riveros sorprendida y asustada por la cachetada movió su cabeza negativamente lo que menos quería era que su prestigio anduviera por los suelos la horrorizaba pensar que todos la tacharan de una puta.
"Entonces putita flojita y cooperando si no ahorita todos se enteraran de que eres una puta barata".
La asustada nena con lagrimas en los ojos solo atinaba a decir "Porque me hace esto, por favor déjame ir."

El sujeto sólo sonreía y sin ningún reparo se agarraba la erecta verga por sobre el pantalón que como carpa de circo estiraba la tela del pantalón.

Tomándola de la cintura la estrecho fuertemente a el, la nena horrorizada puso sus manos en el pecho de el forcejeando tratando de separarse de el, pero el chico la jalo de los cabellos fuertemente de la parte de atrás jalándolos hacia abajo lastimándola y diciéndole "en que quedamos zorra vas a cooperar o ahorita todos se enteran lo puta que eres ".
La nena muy asustada le dijo que si pero que ya no la lastimara.
El caliente chico volvió a estrecharla por la breve cintura disfrutando de la cara de horror de la nena y la repegaba fuertemente a el para que ella sintiera la verga que estaba dura y crecía a causa suya desde hacia un buen rato y acerco su boca tratando de besarla en esos gruesos y frescos labios pero la nena volteo la cara de lado diciendo, "noo déjame que me haces suéltame déjame ir víctor".
Volviéndola agarrar de los cabellos por la parte de atrás jalándola salvajemente se apodero de esos jugosos gruesos y deliciosos labios dándole un beso asfixiante para ella,sintiendo ese delicioso aliento que emanaba de esa jugosos labios.
Ella tenía los ojos abiertos al máximo con una expresión de espanto en su cara, sentía horrorizada ese caliente aliento que emanaba de su boca de el, esa lengua que se introducía en su delicada y fina boca a la fuerza y que se movía buscando la lengua de ella para enredarse y esa barba tupida de candado de el que como lija le raspaba su boca.
"Mmmmmmmmmgggggggg" "Mmmmmmgggggggg"
Gemía y se contoneaba la nena ante el salvaje beso, después de un rato el se separo de ella haciendo que la chica desesperada volviera a suplicar con lagrimas en los ojos.

"Déjame ya déjame víctor no me hagas esto por favor"
Pero víctor ya mas caliente la veía lujuriosamente y sintiéndose dueño de la situación comenzó a meter la lengua en la oreja lo que hacia que le dieran cosquillas agradables a la nena que se contoneaba ante estas sensaciones para después dedicarse a besarle el cuello con esa tupida barba de candado que tenia y que hacia que a Cielo Riveros le hiciera muchas cosquillas en su sensible cuello, mientras que con una mano la subía y se prendía de una de las formidables tetas de la nena manoseándola quien al sentir la atrevida caricia a su pecho pego un respingo diciendo "noooooooo noooo lo hagas déjame "pero el no la escuchaba estaba abstraído por ese cuerpo de Diosa y le estrujaba las nalgas con la otra mano sintiendo ese delicioso y curvilíneo trasero.
La nena estaba horrorizada le daban ganas de gritar y salir corriendo de ahí pero las amenazas de víctor la hacían pensarlo dos veces rogando que esto acabara pronto.
Bajando ambas manos víctor se deleitaba estrujando apretando y masajeando ese par de nalgas maravillosas sus manos recorrían ansiosas esas tremendas redondeces para después agarrarla de a cartoncito como decimos en México (con ambas manos apoyadas en las nalgas la levantaba hacia arriba).
"Madre mía, qué culo te cargas mamacita estas mas rica de lo que pensé", y era algo muy cierto ese culo era duro, redondo era perfecto, la verga de víctor estaba tan dura que Cielo Riveros sentía como se le repegaba en su bajo vientre asustándola.

"No se como te aprietas tanto mamazota si estas nalgas ya piden verga a gritos y esta panocha cerradita ya es hora de que conozca lo que es culear, ohhh putita que duras y ricas tienes las nalgas".
La nena estaba temblando, notaba como su cuerpo era un manojo de nervios, "No no me hagas esto" su voz era un susurro ella tenia sus brazos colgados a los costados de su cuerpo dejándose hacer ya sin oponer resistencia y víctor tenia metidas ambas manos por en medio de sus brazos y de su cuerpo de la nena masajeándole el trasero.
La tenia recargada a la pared y con su cuerpo la empujaba punteándola con su cintura como si la estuviera culeando haciendo que ella sintiera esa tremenda erección en su bajo vientre al mismo tiempo que con sus manos en las nalgotas de ella la estrujaba hacia el.
Víctor ya muy caliente le decía "te gusta zorra yo se que te gusta" ella ya tenia echada la cabeza hacia atrás dejando su cuello totalmente desprotegido a merced de el por los lengüetazos a su sensible cuello, esto por que al recorrerla el con su boca una y otra vez le producía deliciosos escalofríos por todo su cuerpo haciendo que instintivamente echara su cabeza ella hacia atrás dejándole todo el camino libre ,víctor había dado con uno de los muchos puntos débiles de la escultural colegiala.
La lengua y la barba de candado del chico la hacían sentir un ricos escalofríos y que le enervaba los sentidos pero aun así le decía "Por favor déjame, por favor, víctor", la chica ni cuenta se dio que los maestros que habían llegado hacia un rato ya se habían retirado pudiendo salir de esa situación si lo hubiera notado.
Él le sobába las nalgas sin parar sentía algo indescriptible rico en sus manos como se estremecía y temblaba ese formidable culaso por la caliente situación y también sus deliciosos contoneos que no paraban calentaban mas al ya de por si caliente víctor era maravilloso sentir y estrujar esas nalgotas y sentir su bikini por la delgada tela de la falda al mismo tiempo que se contoneaba deliciosamente.
La nena temblaba en todo su cuerpo presa de sensaciones muy placenteras que se iban apoderando poco a poco de ella contra su voluntad ese masaje que le daba la lengua de el en su sensible cuello le enervaban los sentidos.

Cielo Riveros con los ojos entrecerrados sentía la quemante boca de víctor como recorría una y otra ves su sensible cuello, mientras que las dos temblorosas manos por la excitación de víctor,le sobaban sin parar sus carnosas y apetitosas nalgotas bajo la cortisima minifalda escolar y se las estrujaba y las separaba sintiendo como la nena se contoneaba ante el manoseo y el sintiendo que esas nalgotas lo llevaban al cielo.
Que culo el de Cielo Riveros era firme, duro y suave la nena sentía como las manos de víctor las estrujaba, esas nalgas que tenían loco a mas de 10, con ambas manos se las abría y se las volvía a cerrar una y otra ves todo esto sin dejar de lengüetearle con la boca el sensible cuello haciendo que la resistencia de la chica fuera cada ves menos.
Acercándose a su oído le dijo el chico "tu cuerpo está hecho para gozarlo, eres como un manjar de dioses."

El excitado muchacho le quita el chaleco por la espalda a Cielo Riveros y la blusa a continuación quedándose solamente con su sexy brasier sin que se opusiera la nena exasperada por las lamidas a su cuello, la monumental colegiala continuaba con los ojos cerrados con la cabeza echada para atrás recargada en la pared, los pechazos subían y bajaban al ritmo de su agitada respiración era una visión muy enervante.
Para a continuación meter las manos en la espalda de Cielo Riveros buscando el broche del sostén, la nena con sus manos en los hombros de el trataba de apartarlo suavemente y contoneándose en un inútil esfuerzo para evitar que le quitara el brasier diciéndole.
"Noooooo noooo lo hagas detente "pero el no se detenía, sus manos temblorosas luchaban por zafar el broche que aprisionaba ese par de exuberantes senos.
Que delicioso era para el sentir esa sensación de dominio sobre la colegiala que la estaba obligando contra su voluntad y que no se podía oponer a sus sucios deseos.
La nena exasperada por las lamidas a su sensible cuello por esa lengua rasposa y esa barba que la hacia sentir un delicioso cosquilleo en su cuello trataba inútilmente de detener débilmente al caliente víctor contoneándose y con sus dos manos en los hombros de el empujándolo muy suavemente y con la cabeza echada hacia atrás le decía
"Viiiict tooorr paaa paaa paara "a sabiendas conociéndose como se conocía que si esa lengua y esa boca con esa barba tupida llegaban a sus senos y a sus hipersensibles pezones sus pocas fuerzas para oponerse y su poca lucidez quedarían derrotadas y entonces si se entregaría a esas placenteras sensaciones y víctor haría con ella lo que le placiera.
La colegiala sentía los vellos de su cuello de su pecho, de sus brazos erizándose por los escalofríos que la recorrían una y otra vez, mientras las sudorosas y temblorosas manos de víctor luchaban por destrabar el broche del sostén de la nena cosa que no era fácil debido a su ansiedad, a sus manos temblorosas y sudadas y a los movimientos de Cielo Riveros que no paraba de contonearse en un vano intento de evitar lo inevitable.
Cielo Riveros permanecía con la cabeza echada hacia atrás aguantando la desquiciante boca a su sensible cuello que no le daba tregua haciendo que minara su voluntad, cuando de pronto oyó un sonido de "clic" los soberbios melones de la nena acababan de ser liberados de su prisión saltando libres y deslizando el brasier por sus brazos cayó al piso.
Víctor se separo de la chica momentáneamente para poder admirar ese formidable espectáculo que eran los senos de Cielo Riveros al desnudo eran un par de pechos de película, redondos, erguidos no hacia falta que usara sujetador ese maravilloso par de melones se mantenían firmes desafiando la fuerza de gravedad a pesar de su tamaño y con unos pezones hinchados por la excitación que destacaban en las aureolas era una visión maravillosa.
La nena al verse desnuda totalmente de su cintura para arriba se puso roja como un tomate, pero no se movía ahí se quedo estática aguardando lo que viniera lo cual acabo de calentar al chico.


La mirada del lujurioso víctor irradiaba una morbosidad alucinante al ver ese monumento de chamaca ahí semi desnuda se recreaba con la increíble visión de ese espectacular cuerpo.
Cielo Riveros estaba muy nerviosa a sabiendas de lo que venia con una rara mezcla de miedo deseo y excitación estando consiente de que si las lamidas y lengüetazos a su cuello las deliciosas sensaciones casi acaban con su voluntad, ahora todo eso trasladado a sus pechos y a sus sensibles pezones serian sensaciones multiplicada por diez y que entonces si su voluntad seria totalmente avasallada por el deseo, la lujuria y el placer de su cuerpo.
Ella respiraba agitada los espectaculares senos subían y bajaban deliciosamente al compás de su respiración sentía que el corazón se le salía del pecho a sabiendas de que ese perro caliente no tendría compasión de ella.
El observando la casi total entrega de la nena se le dibujo una mueca de una diabólica sonrisa de satisfacción y
Tenia los ojos llenos de lagrimas que caían por sus ojos al verse obligada a estar en esta situación, las mamadas eran tan golosas y sin dar tregua a sus pechos que su cuerpo se calentó mas de lo esperado y muy a su pesar su mente la traiciono entregándose por completo y se dejo llevar por su cuerpo y emitiendo gemidos de placer ante las avasallantes sensaciones.
Antes de continuar con el relato de Cielo Riveros vamos a ver quien era Víctor , el era un muchacho de una familia adinerada venida a menos y como hijo único fue criado a que se le cumplieran todos sus caprichos consintiéndolo en todo sus padres, por eso cuando vinieron a menos y perdieron toda su fortuna, su padre se suicido tuvieron que pedir refugio con un primo de su mama quien les dio alojamiento y a Víctor lo inscribieron en esta escuela publica donde su tío era el director , el doble golpe que tuvo su familia perder su fortuna y a su padre fue algo duro para el acostumbrado a vivir en abundancia y de momento tener que vivir con limitaciones, haciendo que se volviera una persona sin escrúpulos perversa y cruel.
A la escuela solo iba a perder el tiempo los maestros se quejaban con su tío el director por que era muy indisciplinado en las clases y siempre estaba poniendo el desorden pero el tío en lugar de corregirlo con disciplina se hacia de la vista gorda por que pensaba que el chico reaccionaba así por la doble desgracia que le paso pensando que con el tiempo se corregiría cosa muy equivocada, el chico se fue haciendo peor cada ves mas.
Víctor era un chico delgado alto media alrededor de 1.80 tenia los ojos negros con una mirada que destellaba maldad, cabello lacio corto la cara la tenia llena de barros y espinillas producto de la actividad hormonal al máximo que tenia su cuerpo, que lo hacían que siempre anduviera pensando en sexo viendo a las chicas de escuela con deseo y lujuria y masturbándose continuamente imaginándose en la cama con cualquiera de sus compañeras.
Ninguna chica le hacia caso cuando pretendía acercarse a alguna tratando de conquistarla, por que era una persona que no sabia tratar a las chicas era muy pedante que no aceptaba un no como respuesta y reaccionaba agresivamente y con amenazas además de que era muy impaciente así que todas las chicas lo rechazaban haciendo que tuviese un sentimiento de frustración y se refugiaba en sus películas y revistas pornográficas en las que descargaba toda su lujuria y deseos acumulados.
Imagina amigo lector con todos estos antecedentes como se sentía Víctor cuando acorralo a la esculturalCielo Riveros en ese solitario lugar y la manoseaba a placer y como se le embotaron los sentidos al tener a su disposición ese esplendido manjar de pronto para el, después de tantas carencias y limitaciones en lo que respecta a chicas, continuemos con el relato.
Víctor observaba esos hermosos senos con los ojos vidriosos y llenos de lujuria y le dijo
"Pero qué tetas te cargas puta, qué melones tienes las mejores tetas que he visto en mi vida... no he visto nunca unas tetas tan increíbles" decía Víctor extasiado con esa maravillosa visión, Cielo Riveros continuaba con la cabeza echada hacia atrás con los ojos cerrados y con la respiración muy agitada a sabiendas de lo que venia.
Víctor se pego de nuevo al curvilíneo cuerpo de la nena y tomando las dos manos de ella se las puso en su hombro mientras el deslizaba las suyas sobre ese redondo y carnoso trasero y le acariciaba las deliciosas nalgonas por debajo de la reducida minifalda que por lo corto que era se le subía casi a la cintura y dejaba ver sus nalgonas al natural que devoraban el diminuto bikini blanco que portaba, ella con las manos en el hombro de el trataba de apartarlo muy suavemente en una reacción automática de defensa pero ante las fuertes acometidas de el caliente Víctor no servía de nada.
Víctor continuo con su caliente labor de masajear ese redondo trasero , para después acercando su boca le decía al oído "¿sabes? estoy excitadísimo zorra, me dan ganas de meterte la verga en esta rajada que llora por una buena culeada", y era verdad lo dedos de Víctor le habían hecho a un lado el bikini e introduciéndose en su virginal vagina de la nena le daba una dedeada hasta donde podía meter sus dedos, alternando la dedeada con masajes al ya duro clítoris de la chica que respondía a los estímulos aun contra su voluntad empapándole los dedos al chico.
Ella sentía como esa dedeada le mermaba su voluntad y con la respiración entre cortada le suplicaba "aaaaahhhh viiiiiiicccttooorrr nooooooooo suuuueeellttaaammeee "ya casi sin convicción de la nena.
Pero el depravado la dedeada aun con mas ímpetu y le decía al oído "yo se que lo estas disfrutando putita así que no jodas"para a continuación introducir su húmeda lengua en la sensible oreja de ella llenándola de saliva y de escalofríos al mismo tiempo que le apretaba con fuerza las nalgonas.
"Sabes estoy excitadísimo, y creo que tu también, verdad piruja" le dijo Víctor sin dejar de amasar ese trasero que era el mas deseado de la escuela y que en esos momentos era solo suyo.
Ella a pesar de la excitación de su cuerpo en su mente se sentía impotente indefensa ultrajada sin poder evitar que ese desgraciado se aprovechara de ella y que su cuerpo poco a poco respondiera a todo ese manoseo.
Sin mas preámbulos Víctor tomo cada teta con una mano y comenzó a masajear disfrutando y sintiendo su dureza y suavidad le recorría todo su contorno desde la base hasta los pezones "que buena estas mamasota"masajeaba cada vez mas fuerte los deliciosos pechos de Cielo Riveros los apretaba, los movía en círculos, los juntaba para después volverlos a separar, ella comenzaba a reaccionar aunque ella no quería su cuerpo contestaba a las caricias de su manoseador meneando hacia adelante y hacia atrás su cintura instintivamente.
Sentía la nena un delicioso escalofrió que le recorría toda la espina dorsal una y otra ves.

"Aahhhhh noooooooo Viiiict tooorr déjame aaaahhhhh" todavía con sus ultimas fuerzas la nena trataba de no entregarse, pero con su cabeza echada para atrás eras mas que evidente que estaba disfrutando el momento, Víctor volvió a la carga al cuello al mismo tiempo que estrujaba los senos de Cielo Riveros ,haciendo que se multiplicaran las placenteras sensaciones en la chica al sentir en su indefenso cuello como volvía a la carga esa boca , esa lengua y esa barba que la hacían sentir ricos escalofríos ,aunado a la masajeadas que le estaban dando en los pechos alternadas con apretones de dedos en los duros pezones.
Al mismo tiempo Víctor con fuerte movimientos de cintura hacia adelante y hacia atrás la hacia como si la estuviera culeando punteándola con la verga que tenia una tremenda erección haciendo que la nena la sintiera en su bajo vientre.
La nena tenia sus dos manos en el hombro de el pero ya no trataba de apartarlo solo los mantenía ahí, a continuación Víctor empezó a bajar su boca por el cuello de la nena dirigiéndose a sus desprotegidos pechos, la nena sentía esa aliento candente como bajaba lentamente dirigiéndose a sus pechos y su cara tenia una expresión de éxtasis y de sufrimiento al mismo tiempo por que sabia que al llegar a sus pechos la boca de Víctor, no podría por mucho tiempo abstraerme a sus deseos y se entregaría a el completamente en cuerpo y mente, aun que ella no quería aceptarlo pero ya casi estaba totalmente entregada.
Víctor gozaba haciendo sufrir a la nena por que cuando estaba a punto de llegar a sus pechos con su boca volvía a subirla otra ves lentamente haciendo que la nena se exasperara, lo sentía claramente por que ella crispaba sus manos jalando su playera por los hombros, disfrutaba el con su sufrimiento ya que ella deseaba que de una ves su boca le mamara las tetas para quitarse ese remordimiento de conciencia y entregarse completamente.
Pero Víctor jugaba con ella a sabiendas de la lucha interior que tenía Cielo Riveros todo esto sin dejar de masajearle los pechos y sin dejar de lamerle el cuello exasperándola más y acrecentando aun más su excitación de la nena ,todo esto era demasiado para ella y no tenia como resistirlo.
"Vaya tetas que tienes mamacita casi no me caben en la mano, duras, redondas, como a mí me gustan...mmmmmm,
"Viiiict tooorr deeeee jaaaa meeee nooo siiiigas aaaahhhhhhhh" balbuceaba la nena con voz temblorosa, su respiración era cada ves mas agitada y sus mejillas estaban sonrojadas.
"Estas buenísima puta vas a disfrutar esto de verdad ya lo veras zorra "le decía el suertudo de Víctor.
"Poooofaaaavoooorrr noooo meeeee, haaaagaaas naaaadaaa" inquiría la casi ya entregada colegiala.
"Ah puta, que sabrosa estás, hasta que se me hizo gozarte cabrona" decía Víctor quien ya sin mas contratiempo dirigió su ansiosa boca directo al pezón derecho de Cielo Riveros y comenzó a chuparle y a succionarle el grueso, carnoso y durísimo pezón de la colegiala.
La nena sintió un tremendo y electrizante cosquilleo en su vagina al sentir esa lengua golosa y esa barba en su sensible pezón estremeciéndola toda arqueando instintivamente la cintura al máximo, y sus manos se apoderaron de la nuca del chico atrayéndolo hacia sus pechos, quien con la boca le mamaba alternadamente los pechos , lamiéndoselos y succionándole los pezones de esos dos increíbles globos de carne, y con una mano estrujaba el otro pecho y la otra mano libre la seguía dedeando la húmeda vagina haciendo que la nena se le fueran los ojos en blanco por tanto placer que recibía.
La colegiala al sentir las maravillosas cosquillas que recorrían su cuerpo de arriba a abajo cada vez que su lengua hacía contacto con sus senos y sus hinchados pezones, su rajita despertaba involuntariamente ante la situación a la que estaba siendo sometida humedeciendo una y otra ves su bikini haciéndola suspirar.
Tenia los ojos llenos de lagrimas que caían por sus ojos al verse obligada a estar en esta situación, las mamadas eran tan golosas y sin dar tregua a sus pechos que su cuerpo se calentó mas de lo esperado y muy a su pesar su mente la traiciono entregándose por completo y se dejo llevar por su cuerpo y emitiendo gemidos de placer ante las avasallantes sensaciones.
"Aahhhhhhhhh ahhhhhhhhhhhh viiiict tooorr oooohhhhhh gemía la nena desfalleciendo, Víctor ya totalmente desatado le mamaba golosamente las tetas , ella se retorcía como culebra y gemía y sus dedos se introducían en los cabellos de el atrayéndolo a sus globos de carne, instintivamente arqueaba la espalda y meneaba sus caderas totalmente fuera de control.
"Aahhhhh que rica estas puta "le decía el ya desatado Víctor quien parecía pulpo agarrando tanta carne que tenia a su disposición, desfogaba todo ese deseo guardado ,toda esa calentura que hasta ahora podía ser saciada y con la mas buenota y deseada de la escuela.
Le devoraba los pechos con ansia y desesperación "sluuurrp, sluuurrp, sluuurrp"se oía la boca de Víctor al mamar las tetas de Cielo Riveros , ella introducía sus finos dedos en los cabellos de el y le acariciaba la cabeza al mismo tiempo que lo atraía mas a sus pechos, esa boca y esa lengua la hacían sentir que moría de placer.
La lengua de Víctor parecía una maquinita le rodeaba toda la aureola humedeciéndola para enseguida atacar sin pausa el hipersensible pezón de la ya entregada nena, y lo que más le calentaba era oírla gemir obscenamente sin voluntad propia ya y sin recato alguno.
Ahhhhhhhh aaaahhhhhhhhhhh víiiictoooorrr paapiiiiiiiii huyyyyyyyyyyyy.
La voluntad de Cielo Riveros había sido completamente arrasada por la gran excitación de su escultural cuerpo, su mente se negó a seguir resistiendo a todas esas sensaciones que la hacían estremecer, era como estar en un caudaloso rió y tratar de nadar contra la corriente tarde o temprano la fuerza del rió ganaría y te arrastraría .
Cielo Riveros se contorsionaba por tanto placer que recibía sin que el caliente de Víctor le diera un segundo de respiro, tenía la respiración agitadísima, y ya no podía controlar su enardecido cuerpo, Víctor en medio de su excitación sentía un gran placer por haberlas doblegado a sus calientes deseos, a ella que siempre lo había rechazado ,que nunca le dio oportunidad ni de tener amistad por obvias razones ya que mientras ella era una buena estudiante y en la escuela nunca había dado oportunidad de que alguien la pretendiera para un noviazgo rechazando a sus múltiples pretendientes que se acercaban a ella para que los aceptara ,el como ya hemos hablado por ser totalmente contrario a ella en cuestiones de escolares y de comportamiento , pues menos tenia oportunidad ya que ella detestaba a ese tipo de gentes que solo iban a la escuela a perder el tiempo.
Cielo Riveros hacia ostensibles muecas de placer, torciendo la boca, frunciendo los labios, moviendo la cabeza de un lado a otro ante las deliciosas oleadas de placer que la hacían estremecerse.
"Anda puta no que no querías, yo aquí te veo bien ganosa, sabia que ibas a aflojar" le decía el chico a ella que ya no oía ni le importaba las vulgaridades que el le decía todo era solo recibir placer.

Excitada y temblorosa con el rostro enrojecido producto de los orgasmos que la avasallaban sus ojos entre abiertos y su hermosa cabellera negra cayéndole en los hombros desordenada, su recoge cabellos quien sabe adonde había ido a dar.
"Ouuuuh aaaaahhhh ahhhhhhhhhh viiiict tooorr oooohhhhhh miii amooor
Gemía la nena quien sentía una y otra vez un desquiciante cosquilleo en su rajita que la enervaban aun más.
Víctor con los sentidos completamente embotonados por la lujuria también estaba fuera de si mamaba, besaba, mordía, estrujaba como desaforado esos senos que siempre tuvo pero en sus sueños cuando se masturbaba y ahora eran toda una realidad se relamía los labios de ese cuerpazo que estaba disfrutando.
La nena con la cabeza totalmente echada hacia atrás y la cintura totalmente arqueada al máximo le entregaba todo a ese lujurioso que no paraba de darse este magnifico festín, tenia los pezones completamente babeados y los senos llenos de las marcas de los dientes de el pero ella solo sentía placer que la enloquecían.
"aaaahhhh viiiicttooorr paaaaaapiiiiiiiiii ohhh, ohhh, ohhhh que riiiiicccccooooooo"
Cerraba los ojos y se retorcía gozando todo aquello, la nena sentía el placer correr vertiginoso en su sangre y llegar a su cerebro golpeándolo con tantas sensaciones que temía volverse loca.
Era una situación tremendamente caliente Víctor era muy afortunado de disfrutar los encantos de esa beldad que era deseada por muchos machos, y el lo sabia sentía que su erecta verga ya había eyaculado quien sabe cuantas veces y eso que no la había penetrado esto es por que Cielo Riveros era un manjar digno del paladar mas exigente, era una diosa por la que cualquier macho hubiese dado un brazo con tal de pasar una noche con ella.
"Ahhh aaahhhhh mamaaaasootaa que riiiiiico le decía el mientras mamaba como perro hambriento y le apretaba el culote.
Habían pasado como 25 minutos desde que habían llegado ahí donde estaban cuando de pronto se oyó un timbre ensordecedor , ya que por la calentura no habían reparado que justo arriba de ellos estaba uno de los 3 timbres que estaban distribuidos por todo el plantel escolar para llamar a clases o para llamar al receso.
"Riiiiiiinnggggg riiiiiinnggggg sonaba el timbre escolar como loco sin parar, la nena ya media vuelta en si por que todavía estaba medio atontada empujaba a Víctor que en su tremenda calentura ni oía al ensordecedor timbre.
Ella lo empujaba diciéndole "yaaa yaaaa paara que no oyes el timbre" y lo empujaba tratando de salir de ese caliente abraso en que la tenia.
El todavía no sabía ni que onda estaba extasiado todavía por el momento que había pasado con Cielo Riveros y decía "hee heee queee queee pasa."
"El timbre no oyes dentro de poco aquí estará lleno de gente" poco a poco Cielo Riveros recuperaba su cordura y su autocontrol tenia la cara muy roja, el cabello alborotado, se comenzó a vestir apresuradamente sin atreverse a ver a Víctor por la vergüenza que la empezaba a invadir, recogió su sosten del piso y se lo puso, los pezones aun tremendamente hinchados se marcaban perfectamente en la prenda intima.
Su blusa se la comenzó a poner apresurada al mismo tiempo que decía "oh dios mío pero que he hecho", mientras que al fondo del pasillo se oían como venían hablando ya sus condiscípulos que regresaban del receso, se arreglaba el cabello apresuradamente y se componía su minifalda escolar.

Víctor estaba como ido la veía como se vestía pero tenia como la mirada perdida, ella lo miraba de reojo y al terminar de vestirse salió apresurada de ese lugar sin decirle nada mas a el, quien seguía ahí parada como autómata tratando de ordenar sus ideas de lo que había sucedido ,sentía como que había sido un sueño , pero no podía serlo se decía a el mismo por que aun podía sentir la suavidad de esa tersa piel , la dureza de esas nalgas , la turgencia de esos senos, y en sus oídos retumbaba como un eco los gemidos de ella .
En esas estaba cuando llego un compañero de el diciéndole "heyy brother que te pasa" al mismo tiempo que le daba un espaldarazo te estuvimos esperando para el partido de fut contra el otro grupo y pues perdimos no nos completamos.
"¿Que estas enfermo? Estas muy sudado de la espalda y tienes colorada la cara.
El ya reaccionando le dice "no, no nada de eso ven e voy a platicar algo que no vas a creerme" le dijo y se fueron caminando.
Cielo Riveros por su parte iba apresurada rumbo a su salón se sentía terriblemente mal por lo que había hecho se preguntaba "que va pensar de mi Víctor, va decir que soy una puta barata que se deja manosear por cualquiera y si se lo cuenta a alguien y al rato toda la escuela lo sabe que horror, que va ser de mi."
Inmiscuida en estos pensamientos llego a su aula sus compañeros de grupo se encontraban en sus sillas muy callados trabajando y se dirigió a su pupitre tomo sus cosas y salió del aula, en la puerta del salón se topo con Claudia que venia platicando muy cariñosa con un chico, esta al ver la cara de Cielo Riveros le dijo al chico que al rato lo alcanzaba.
"Pero que te pasa mujer tienes una cara como si alguien se hubiera muerto" le dijo Claudia "ella con la cara desencajada le dijo" mira mañana te cuento me siento mal me voy a mi casa le dices al profesor que estoy enferma que por eso me fui por favor".
"Si esta bien pero me tienes asustada mujer ¿no quieres que vaya contigo?"
"No, estoy bien solo quiero estar sola por favor ya mañana te platico".
Esta bien vete tranquila que yo arreglo todo aquí y dándole un beso en la mejilla se despidieron y Cielo Riveros enfilo rumbo a su casa.
Cielo Riveros al llegar a su casa se fue a su recamara boto los libros y se puso a llorar acostada boca abajo en su cama, los sollozos la hacían estremecer toda, estaba enojada con ella misma por no impedir que las cosas llegaran hasta donde llegaron con Víctor.
Se decía a ella misma "por que, por que lo permití y no lo detuve por que" y golpeaba con sus puños el colchón de la cama "ahora va andar contando a toda la escuela que soy una facilona una puta" se decía a ella misma y es que en verdad estaba muy avergonzada, mientras gruesas lagrimas le salían de sus bellos ojos verdes y caían por su hermoso y angelical rostro y así se quedo completamente dormida sin darse cuenta.
Estuvo dormida como tres horas cuando despertó ya eran las nueve de la noche, estirándose y bostezando se levanto dispuesta a cenar algo ya que su estomago chillaba de hambre.
Se preparo un cereal con leche y frutas ya que le gustaba cuidar su hermosa figura y se sentó a cenar en el comedor y prendió la tele, viendo que pasaban una novela comía su cereal y veía la tele pero sin verla a su mente llegaban las imágenes de Víctor diciéndole "eres una puta barata, eres una ramera, pero que sabrosa estas mamacita "y se hundía en sus pechos mamándoselos ansiosamente mientras que sus manazas le estrujaban su hermoso trasero.
Tomándose de la cabeza decía en voz baja "dios mío pero que hice" , todo esto ya mas tranquila que cuando llego de la escuela se decía a ella misma "por que me pasan estas cosas a mi si soy una buena muchacha, buena hija , buena estudiante , me gusta ayudar a los necesitados tengo un buen corazón , pero por que a mi me tienen que pasar estas horribles cosas"(ya refiriéndose en su lamento no solo a Víctor , si no también a el viejo Lucas , al profesor tulio , al cojo Juan y los que faltaban nada mas que la preciosa criatura no lo sabia ja ja ja ja ).

"Y tengo que vivir desdichada mientras que otras gentes viven felices la vida, siendo que son gentes malvadas, viciosas y yo que soy buena tengo que sufrir tanto por que" se preguntaba la colegiala y así termino de cenar y se fue a su recamara para disponerse a dormir.
Ya en la intimidad se su recamara se preparo para dormir, se quito su uniforme quedándose solo en su bikini así le gustaba dormir por ser unos meses muy calurosos, acercándose al gran espejo de la pared y contemplo el reflejo de su bello rostro que lucia en esos momentos enojado, angustiado y triste al mismo tiempo por todo lo sucedido.
Y bajando la vista viendo su escultural cuerpo se dijo a si misma cómo la había disfrutado Víctor a placer y que ella se había entregado sin oponer resistencia eso ya no le causaba tristeza , si no que le daba rabia contra ella misma y contra Víctor, escudriñaba sus hermosos duros y grandes senos viendo que tenia marcas moradas de los chupetones y de los dientes de el y cuando se toco los pezones sintió un dolor que la hizo recordar que Víctor en su avasallante calentura se los había mordido y jalado pero en esos momentos ella no sintió nada por la adrenalina pero ahorita ya todo mas tranquilo si sentía el dolor.
Así se acostó y se quedo dormida, ya en la madrugada sentía en su rajada un rico cosquilleo y introduciendo sus dedos se masturbaba y a su mente venían de nuevo esos calientes momentos vividos con Víctor, y tenia sentimientos contradictorios por que ella quería ser una chica limpia y decente pero por otro lado sentía que dentro de ella había una puta dispuesta a todo con tal de satisfacer su necesidad de placer, cuando tuvo su orgasmo se volvió a quedar dormida.

Al otro día la nena ya mas tranquila la crisis de la noche anterior ya se había ido y pensando las cosas fríamente analizaba que Víctor podría hablar lo que quisiera pero que ella siempre lo negaría y que no le convenía andar diciendo eso por que lo podían expulsar de la escuela además de que era su palabra de ella que era una chica con una reputación y un prestigio contra la de el que era un vago, un patán y un bueno para nada además de que no tenia ni una prueba y así con estos pensamientos positivos haciendo sus deberes se le fue la mañana hasta que llego la hora de irse a la escuela.
Como a la una de la tarde se puso su uniforme y bajo a la calle para dirigirse a tomar su bus que la llevaría a la escuela, a ella le bastaba salir a la calle para alborotar a todos los penes que se cruzaran en su camino.
Era una colegiala de la que emanaba sexualidad y sensualidad en forma natural, el desarrollo de su cuerpo no estaba a la par de la mentalidad que tenia, era todavía en cierta forma muy ingenua e inocente cualquier macho que la presionara o chantajeara un poco la nena accedería a sus pretensiones, con tal de salir del problema, si su mama le hubiera dado una buena educación ella sabría defenderse al estar en estas situaciones y si todavía ella le platicara cuando estaba metida en algún problema de que la estaban chantajeando por lo menos su mama los hubiera denunciado y no se aprovecharían de Cielo Riveros pero desafortunadamente para ella y afortunadamente para nosotros los lectores eso no sucedió para seguir deleitándonos de cómo abusaban y se aprovechaban de esta beldad.
Su mentalidad ingenua aunado a el tremendo desarrollo de su cuerpo que ya pedía macho a gritos, cuando accedía a los deseos de alguien que la chantajeara aun que al principio su mente se horrorizara de que la estaban manoseando y abusando terminaba por ceder a los deseos de su cuerpo explotando como un volcán en erupción y que no se puede contener.
Ese día se dirigía a tomar su bus que la llevaría a la escuela, con su precioso uniforme compuesto por una minifalda a cuadros donde se apreciaban unas piernonas potentes y bellamente torneadas que servían de soporte a un magnifico par de nalgonas, se podían apreciar su contorno bajo esa corta minifalda escolar que no ocultaba para nada su tremenda cola, esas majestuosas nalgonas, redondas, alzadas y bien duras pecaminosamente desafiantes, que hace inmediatamente exclamar a todos los hombres que la miran pasar "que buen culo mamacita".
Ese día los rayos del sol caían a plomo hacia un calor bastante fuerte por eso la nena no se había puesto su chaleco complemento del uniforme escolar si no que lo llevaba guardado dentro de su mochila para no acalorarse en el trayecto a su escuela y lo llevaba guardado dentro de su mochila que llevaba al hombro para ponérselo ya que estuviera a las puertas del colegio.
Así que solo llevaba una blusa blanca sin mangas ombliguera de esas que son elásticas y que se pegan al contorno del cuerpo, que dejaba ver esa preciosa piel suave de sus hombros, su breve cintura al aire que revelaba un abdomen liso y sin un gramo de grasa y un generoso escote donde dejaba ver ese par de grandes y duros par de senos que al estar en fundados en esa blusa tan estrecha hacia que se marcaran los pezones por sobre la tela haciendo que a mas de un macho se le pusiera tiesa la verga.
Era una visión preciosa todo esto coronado con esa preciosa cara de niña todavía y esos hermosos ojos verdes toda ella era un sueño de cualquier macho, la nena caminaba dirigiéndose a donde tomaba su bus no haciendo caso a todo el alboroto que provocaba estaba acostumbrada ya a ello y en su ignorancia pensaba que así eran los machos con todas las mujeres y con eso se justificaba, además que ella no era engreída, ni presumida su simpatía y sencillez eran en ella un valor añadido, a un que eso si muy tímida con quien no conocía , pero si algún macho se le acercaba y le hablaba sin groserías y sin ser demasiado obvio en sus intenciones ella aun que en su timidez era educada y platicaba con el .
Así siguió su camino la nena toda ella era un digno espectáculo no había macho que no volteara a ver sus hermosas curvas y su cadencioso andar, había algunos que si le decían de groserías y vulgaridades pero ella ni se inmutaba y seguía su camino.

La nena tenia que pasar por un populoso billar que había por su camino diario y contoneando deliciosamente las nalgas paso junto al billar caminando lentamente dejando que todos se deleitaran con su escultural figura, a esa hora estaba atestado de vagos y gente sin oficio ni beneficio que se la pasaban todo el día ahí metidos perdiendo el tiempo quienes al verla pasar le llovieron piropos algunos graciosos "mami que buena estas" por ti soy capas de salir de aquí e ir a buscar trabajo""mamita tu si eres una mujer no como la que tengo en mi casa".
Esto causo mucha gracia en Cielo Riveros quien esbozo una sonrisa y por un momento se olvido del trago amargo que había pasado con Víctor el día anterior y volteando su rostro con coquetería en forma muy sensual hacia los adentros de ese local que servía de billar y que estaba atestado de hombres y dándoles una hermosa sonrisa en su angelical rostro les dijo adiós con una mano haciendo que todos los machos comenzaran a aullar como lobos "auuuuuuuuuu" "auuuuuuuuuuuuu" al ver a esa preciosa colegiala como les sonreía y les decía adiós ,la colegiala en su ingenuidad no sabia que por estas demostraciones hacia que luego los machos pensaran que estaba dándoles entrada a cualquiera de ellos por eso luego se metía en problemas, ella pensaba que solo era amable con ellos.
Los machos en el billar se le quedaron viendo hasta que la perdieron de vista, cualquiera de ellos hubiera querido darle una fajada o darse un acoston con ese bombón de chamaca lleno de curvas por todos lados.
Así la nena siguió su camino ante las miradas de admiración y deseo de los machos, le miraban ese formidable trasero cubierto por la corta minifalda escolar y sus dos globos de carne que eran ese par de tetas ricas.
Ella no lo vio pero dentro del local estaba el gori con uno de sus compinches quienes comentaban "ese culo pide a gritos una verga" "cada día esta mas rica esa mamacita, y pensar que solo tiene 18 años pero ya tiene cuerpo de mujer de 30" "simón carnal esa putita a pesar de su edad puede coger días enteros la muy puta."
"Yo la vi el sábado que andaba abrazada y se daba de besos con el buey que trabaja en la farmacia."
"A poco ese buey es su novio pero si es un perfecto pendejo de seguro teniendo tanto culo a su disposición no sabrá que hacer, es un puto que si de seguro ve un arma se mea en los pantalones."
"Esta zorra esta para meterle la verga y con esa boca de mamadora que tiene esta para que nos de una buena mamada de verga, hoy la vamos a esperar cuando regrese de la escuela tiene que pasar por aquí la zorrita y le daremos lo que anda buscando por que se ve que el pendejo de su novio no a de saber que hacer con tanta carne jajajajajajajaja"y así riéndose se metieron de nuevo al billar a esperar que la nena regresara de su colegio.
Ese día en el colegio la chica en un receso hablo con Claudia y le explico entre sollozos lo que había sucedido con Víctor el día anterior, Claudia abrasándola amorosamente la consolaba diciéndole que se las pagaría Víctor que si ella lo aprobaba ella le podría decir algunos amigos que tenia para que le dieran una golpiza, pero Cielo Riveros se negó rotundamente tan buena era que no quería que golpearan a Víctor diciéndole a Claudia que ya se le olvidaría ese mal momento.
En un momento que fue a comprar un refresco en la tienda que estaba al interior del colegio contoneándose deliciosamente al caminar, haciendo que alumnos y maestros la voltearan a ver con admiración y deseo.
Sin embargo ella parecía no darse cuenta del revuelo hormonal que causaba a su alrededor, ella vivía en una feliz ignorancia del tremendo deseo que despertaba en los hombres esta característica de ella la hacía todavía más excitante verla pasearse con ese tremendo culazo, sus tetas, sus muslos de aquí para allá y con esa hermosa cara de niña todavía era algo tremendo sin darse cuenta de las innumerables erecciones que provocaba.
Casi al llegar a la tienda vio a Víctor que estaba con un chaval mas riéndose a carcajadas muy sonoramente, y todo su valor se fue como humo sintió que le temblaban las piernas y que un nerviosismo se apoderaba de ella se detuvo un momento le dieron ganas de regresar por donde había venido, pero en eso noto que Víctor ya había notado su presencia y que le decía algo a su amigo por que voltearon a verla al mismo tiempo.
Vio como Víctor esbozaba una sonrisa como de triunfo, a ella le molestaba verle esa sonrisa con aire de arrogancia de machismo y de seguridad y volteando su rostro hacia el otro lado se dirigió a la tienda.
Y armándose de un valor que estaba lejos de sentir entro a la tienda y pidió una coca light y se quedo esperando su cambio, al recibirlo contoneándose deliciosamente se encamino a su salón de nuevo, no había avanzado mucho cuando sintió que una mano la tomaba del hombro y le decía "hola preciosa. "
Ella sabia que era el y sin voltearlo a ver le dijo "que quieres no tengo tiempo de platicar" tratando de ser seca y cortante.
El riéndose se puso frente a ella esbozando una sonrisa burlona que a ella la hacia molestarse y le dijo "y como ayer puta si tuviste tiempo para mi y hasta gemías como una vil ramera. "
Y ahí se fue todo su valor de la nena quien visiblemente nerviosa le decía a el que bajara la voz casi suplicándole "por favor Víctor no hables tan fuerte te pueden oír" decía la angustiada colegiala.
Y peor aun que los chicos y chicas que pasaban los veían extrañados de que Cielo Riveros estuviera platicando con el vago de Víctor por que eran en la escuela dos seres diametralmente opuestos ella seria, estudiosa, recatada y buena alumna y el un vago, burro y una fichita, por eso Cielo Riveros se angustiaba que todos se enteraran lo que había sucedido con Víctor el día anterior y todo su estatus se fuera por los suelos.
Este sonrió malévolamente y le dijo "entonces puta te espero en 20 minutos allá atrás de la escuela donde esta el árbol de mango si no vociferare a todos lo zorra y lo puta que eres. "
Puta esa palabra sentía que le taladraba sus oídos, por que para ella era un gran insulto ser llamada así, podía soportar que la llamaran pendeja, mocosa tonta pero esa palabra puta le sonaba en su cerebro como un eco (puta, puta, puta) toda su seguridad estaba por los suelos en esos momentos, se sentía llena de angustia y nerviosismo.
"Ya lo sabes en 20 minutos la presiono aun mas Víctor y se alejo riéndose ruidosamente.
Se sintió perdida tenia una sensación de vació en el estomago, las piernas le temblaban y un nerviosismo se apodero de ella a sabiendas de que quería Víctor que fuera a ese lugar apartado y solitario no sabia que hacer le daban ganas de salir huyendo no quería ir allá pero si no iba su status seria echado a la basura y seria conocida como una vil puta.
Cuando volteo a la tienda ya no estaba Víctor y aun contra su voluntad lentamente se dirigió al lugar acordado por el cuando llego lo vio recargado del árbol de mango fumándose un cigarro este se sonrió al verla con esa sonrisa burlona que tanto le chocaba a Cielo Riveros .
"Bien zorrita bien que viniste "le dijo el burlonamente.
"Víctor que quieres de mi, ya déjame en paz" le dijo la angustiada muchacha.
"Te dejare cuando me plazca y me harte de ti cosa para la cual todavía falta mucho preciosa" acercándose a ella y tomándola de su quijada.
"Y sabes ahorita quiero repetir lo que hicimos ayer pero ya sin que nos interrumpa ese maldito timbre, me dejaste bien caliente zorrita y quiero mas de ti."
Le dijo agarrándola de ambas manos, a la horrorizada colegiala.
"No Víctor eso no por favor fue un error, fue una equivocación "le decía la asustada colegiala con su hermosa carita reflejando un miedo atroz.
"Ja ja ja "se reía el caliente Víctor sin soltarle las manos" ¿error? ¿Equivocación?
"Si eso nunca debió haber sucedido"
"No lo creo preciosa mira a pancho el no lo cree así" le dijo a la nena señalando a su erecto pene con la cabeza para que mirara, ella dio un grito ahogado al ver la tremenda erección que no presagiaba nada bueno para ella.
El aprovechando ese momento de espanto para ella la agarro de la cintura fuertemente y la pego a el estrechándola deliciosamente para que sintiera la erección que tenia.
Y trato de besarla pero ella hacia su cabeza de un lado para otro.
"Noooooooo deejaaameee nooo quiero" al tiempo que al apretarse más contra ella la hacía sentir su bulto enorme, cada vez más gordo, en su entrepierna.
"Noo nnooo otra ves "decía la angustiada colegiala, el caliente chico la tenia agarrada con sus dos manos de su precioso trasero haciendo que la minifalda se le levantara hasta arriba enseñando su bikini blanco y sus tremendas nalgas.
"Ándale mamacita por que te haces la difícil si bien que lo disfrutamos ayer, bueno si quieres a la manera difícil así será entonces" y dando un chiflido salió otro chico detrás de unos arbustos el mismo con el que había estado en la tienda.
La nena se angustio más al verlo salir y ver que la veía con ojos llenos de lujuria y con una tremenda erección en su pantalón.
Y tratando de escapar luchaba con Víctor diciéndole "suéltame, déjame desgraciado "pero no pudo zafarse el tenia mas fuerzas que ella y dirigiéndose a su compañero le dijo "agárrala de los brazos a esta zorra ahorita va a ver lo que es bueno.
El recién llegado la tomo de los brazos jalándoselos hacia atrás dejándola completamente inmóvil y a merced de Víctor, quien ya con las manos libres la tomo de ambos lados de la cabeza y le dio un tremendo beso que casi le succiona la boca a ella, en eso Víctor se separa y da un alarido de dolor.
"Aaaayyyyyyyyy ella lo había mordido en la boca sacándole sangre, este enfurecido estaba a punto de darle un golpe cuando oyeron una voz autoritaria que decía "retiren sus manos de ella".
Los dos chicos tomados por sorpresa la soltaron, viendo que era Claudia y dos fornidos muchachos compañeros de ella.
"Aléjense de ella o podrá pasarles algo desagradable "amenazo Claudia a Víctor y al otro quienes cobardes como eran se alejaron de Cielo Riveros que solo sollozaba en cuclillas en el suelo y diciendo "ya si solo queríamos divertirnos un rato."
"¿Y que se creen muy hombres abusando de ella incapaz de defenderse de sus acosos?
Ya no le contestaron se retiraron de ahí murmurando su derrota.
Claudia acercándose a su amiga le dijo "ya paso todo, estas a salvo amiga "
pero ella no le contestaba estaba todavía muy agitada y temblando de nerviosismo, cuando por fin levanto la cara y vio a lo lejos que sus acosadores ya se retiraban, no pudo contenerse y rompió en llanto, Claudia abrasándola amorosamente se conmovió al contemplar el alma desnuda de su camarada; se sentó junto a ella, la cobijó entre sus brazos y permaneció haciéndole compañía, hasta haberse desahogado.
Y les hizo una seña a los dos chicos dándoles las gracias en voz baja y estos se retiraron, una hora después ya en su salón de clases las dos chicas platicaban , Claudia le explicaba que ella la vio platicando con Víctor cerca de la tienda y que se le hizo raro por lo que le había dicho ella e intuyo que algo andaba mal al ver los ademanes que el hacia, y a ella verla con la cara agachada y sumisa a lo que el decía y confirmo sus sospechas al ver que ella dirigía sus pasos hacia atrás de la escuela tomando el camino que lleva hasta ese lugar donde la encontró, y no se dirigía adonde estaba ella esperándola.
E intuyendo que algo estaba mal fue por dos compañeros muy amigos de ella del equipo de fut bol americano de la escuela y les pidió que por favor la acompañaran que los necesitaba para algo urgente solo que se retraso por que tuvo que ir hasta el campo a buscarlos que esta hasta el otro extremo de la escuela y que lo demás pues ya lo sabia.
Cielo Riveros abrasándola le dijo "gracias amiga no tengo con que pagarte esto que has hecho por mi".
"No es nada ya sabes para eso somos intimas ja ja ja se rió Claudia "contagiando a Cielo Riveros y así se dispusieron a olvidar ese amargo momento.
Ya la noche había caído cuando Cielo Riveros regresaba de la escuela ella salía a las 8 de la noche pero como se quedaba platicando con alguna amiga y el trayecto de regreso a su casa era de media hora ya eran cerca de las nueve de la noche cuando venia caminando por las sucias y enlodadas calles de esa colonia donde vivía las calles lucían solitarias debido a que la gente se encerraba en sus casas temprano debido a la violencia que imperaba en esa colonia perdida (asaltos, secuestros, violaciones, peleas entre bandas rivales, gente drogándose y tomando en las calles etc.) todo esto afloraba mas al caer la noche donde la policía ni se conocía en estos lares era como una tierra sin ley.
Los vecinos se encerraban en sus casa y te podían estar asaltando o asesinando y aun que pidieras auxilio nadie saldría a ayudarte por eso cuando caían las sombras de la noche las calles lucían solitarias y oscuras los pocos faroles de los postes que funcionaban resultaban insuficientes su luz solo iluminaban unos pocos metros dejando ver mas allá como una boca de lobo.
La nena de donde se bajaba del bus tenia que caminar todavía 3 cuadras para llegar a su casa por calles solitarias y oscuras, ella en su mente ingenua no le daba mucho temor debido a que siempre hacia el mismo trayecto y nunca le pasaba nada por eso caminaba confiada a pesar de lo tenebroso que se veía el panorama.
Al doblar una esquina choco de frente con dos borrachos dándole un tremendo susto a la nena, estos al ver el angelical rostro de la deliciosa chiquilla y su delicioso cuerpo la miraron con una cara de lujuria y le empezaron a decir vulgaridades " mamacita te cogería toda la vida"; "que tetas déjame mamártelas "; "tienes cara de mamadora" "te gusta parar vergasCielo Riveros se ponía roja de la vergüenza y de la turbación aceleraba su paso para dejar de oír semejantes palabrotas.
Ya mas adelante se paro y trato de calmarse respirando profundamente, cuando noto que alguien se metía en un requiso de una puerta dándose cuenta de que la seguían, sintió que un escalofrió le recorría la espina dorsal dándose cuenta que todavía le faltaban dos largas cuadras para llegar a su casa.
Comenzó a caminar de nuevo apresuradamente asustada por la persona que la venia siguiendo quien sabe con que intenciones, de ves en cuando volteaba y veía en la oscuridad la silueta de una persona quien ya no se escondía si no que seguía caminando sin preocuparse ya que la chica lo viera, la chica al percatarse de esto apuro el paso ,cada paso que daba la minifalda escolar se le subía mas y mas hasta mostrar casi las nalgas por la prisa de su paso ante el deleite de su perseguidor ella solo se preocupaba de apresurar el paso y que no la alcanzara su perseguidor ante el inútil esfuerzo de la nena cada ves le recortaba mas distancia quien alentado por el espectáculo de la minifalda de la nena que se subía deliciosamente.
Que espectáculo era ver el vaivén de ese par de nalgonas que subían y bajaban deliciosamente por el presuroso caminar de la colegiala, la nena estaba que desfallecía al ver el inútil de sus esfuerzos por dejar atrás a su perseguidor, si no que al contrario cada ves estaba mas cerca de ella oyendo con horror el "tock tock" de sus pasos cada ves mas cerca de ella.
Al doblar una esquina vio como un sediento ve un oasis en el desierto las luces del billar que eran como un barco en medio de una tormenta ve las luz salvadora del faro, así Cielo Riveros apresuro el paso casi desfalleciendo hacia el billar que funcionaba hasta muy tarde alcanzo a oír el murmullo de la gente que jugaba y la música de una rocola pero cuando estaba a unos 5 metros de llegar y pedir auxilio en el billar sintió una mano que la tomaba del hombro dando ella un grito de miedo.
le dijo.
Al doblar una esquina vio como un sediento ve un oasis en el desierto las luces del billar que eran como un barco en medio de una tormenta ve las luz salvadora del faro, así Cielo Riveros apresuro el paso casi desfalleciendo hacia el billar que funcionaba hasta muy tarde alcanzo a oír el murmullo de la gente que jugaba y la música de una rocola pero cuando estaba a unos 5 metros de llegar y pedir auxilio en el billar sintió una mano que la tomaba del hombro dando ella un grito de miedo .....
Al doblar una esquina vio como un sediento ve un oasis en el desierto las luces del billar que eran como un barco en medio de una tormenta ve las luz salvadora del faro, así Cielo Riveros apresuro el paso casi desfalleciendo hacia el billar que funcionaba hasta muy tarde alcanzo a oír el murmullo de la gente que jugaba y la música de una rocola pero cuando estaba a unos 5 metros de llegar y pedir auxilio en el billar sintió una mano que la tomaba del hombro dando ella un grito de miedo
CIELO RIVEROS PARTE 7
–-Tranquila… tranquila… no grites soy yo hija, cálmate…cálmate - le decía a la nena don Benito tratando de calmar a la espantada colegiala quien visiblemente asustada abrasaba y lloraba en el hombro de su abuelo al reconocerlo.
Don Benito le acariciaba los cabellos diciéndole palabras tranquilizadoras a la escultural colegiala.
–-Ya mi niña ya, no llores todo esta bien, estas… conmigo.
Y así abrazados y acariciándole la cabeza para tranquilizarla don Benito la fue encaminando para su casa diciéndole.
–-Ya mija mira te compre una pizza para que cenemos mi niña bonita.
Sacando el sexagenario de una bolsa de plástico una clásica caja donde venia una deliciosa pizza hawaiana tamaño familiar, haciendo que la nena dejara de momento de gimotear y brillándole los ojos al ver la redonda pizza se le formo una media sonrisa en su angelical rostro.
Esto reacción de la chica era por que las pizzas eran algo que a la chica le agradaba mucho, pero por la difícil situación económica que viva era un lujo que muy pocas veces se podía dar, por eso la cara de felicidad al saber lo que cenarían.
Don Benito se había dado cuenta de la situación tan peligrosa a la que estuvo expuesta su adorada nieta, solo que no quiso decirle nada para no asustarla mas, el vio cuando venían dos cholos siguiendo a la nena ya muy cerca de ella quien sabe con que negras intenciones, pero al verlo a el llegar y abrazar a la chica se habían detenido poniendo cara de frustración al ver como sus planes no se llevaban a cabo.
Al ir don Benito y la adolescente caminando lentamente dirigiéndose a la casa de la chica pudieron percatarse un poco mas adelante del billar en una parte muy oscura la silueta de varias cholos por donde pasaría Cielo Riveros , estaban recargados a la pared unos y otros a un viejo y destartalado carro tomando licor y drogándose, la colegiala al verlos se abrazo mas fuerte de su abuelito.
Estos veían a la escultural jovencita con ojos de lujuria pero al mismo tiempo de impotencia al ver a la nena abrazada por el anciano de don Benito, esto los detenía en sus malvados planes debido a que a pesar de ser ellos una escoria de lo peor en
la sociedad, respetaban al sexagenario, debido a que el anciano los había visto nacer y crecer a todos ellos y a pesar de su maldad en el presente, en aquellos años cuando la mayoría de ellos eran unos niños de 5,6 y 7 años.

Siempre encontraron en don Benito una sonrisa amable, un dulce, una paleta una caricia en su cabeza, o el anciano se los llevaba en bola a un parque donde había juegos infantiles donde pasaban muchos momentos felices en esos entonces inocentes niños que venían de hogares desintegrados donde los irresponsables padres los mandaban a andar pidiendo dinero a la calle o a estar en las esquinas donde había semáforos a estar de payasos o peor aun a estar de tragafuegos para quitarles lo poco que ganaban para irse a comprar droga o alcohol.
Teniendo estos chicos que estar mal comiendo y soportando las palizas de esos padres viciosos cuando se les embotaban los sentidos de alcohol y drogas, para ellos don Benito fue la única persona que les tendió la mano , que les había dado cariño de padre.
Y esos hasta la fecha eran los únicos recuerdos felices de esos ahora ya muchachos de 20, 22 y 24 años quienes estaban perdidos en las drogas, el alcohol y asaltando a cualquiera que se les atravesara en su camino cuando andaban necesitados, don Benito era la única persona en el mundo a quien respetaban y eran incapaces de hacerle daño, por eso su actitud al ver a don Benito abrasado de su escultural nieta solo fue de saludarlo.
–-Buenas noches don Benito.
–-Buenas noches muchachos…seriamente les contesto el sexagenario y siguió su camino abrazado de su tremenda nieta, la nena al ver ahí a los cholos con caras de pervertidos se abrazaba mas fuerte de su abuelo sintiendo mucho temor por la descarada forma de eso tipos de verla, la desnudaban con la mirada sin disimular nada era una mirada cargada de lujuria a su tan deseado cuerpo.
Al pasar el anciano y su nieta se quedaban como hipnotizados viendo el cadencioso andar de ese par de las apetitosas nalgas apenas cubiertas por esa muy corta falda escolar que apenas y le tapaba lo mínimo, dejando muy poco a la imaginación.
Parecían como perros hambrientos que parados frente a una carnicería se quedaban viendo los deliciosos filetes colgados en los ganchos y sin poder tomar aun que fuese solo uno para saciar su hambre atroz.
Así se sentían estos cholos como los perros de la carnicería impotentes de poder hacer algo , al ver como se alejaba lentamente aquel suculento manjar y ellos que tanto habían esperado con ansia que llegara ese momento para poder desahogar sus ansias en la colegiala, pero ahora solo veían como se esfumaban sus calientes planes.
La nena podía sentir sobre sus redondas nalgas la mirada lasciva de los cholos, lo que le provoco una sensación de escalofrió en su espalda, erizándole los finos bellos de su nuca el nerviosismo por la sensación tan intensa, hizo que acelerara el paso para llegar a su casa.
–-Qué buena que esta la puta esa me dejo tiesa la verga nada mas de verla tan cerca- dijo el gori sobandose por sobre el pantalón la empalmada erección que tenia.
–-Me lleva la fregada hoy que ya le íbamos a dar a esa putita lo que anda buscando cuando se pasetea por la calle meneándose como una puta.
–-Si tenia que aparecer el viejo si no fuera por que se porto reata con nosotros cuando éramos unos chavales, tomábamos a la putita esa aun que viniera con el.
–-Y ahora como me bajo la pinché calentura, me dejo esa zorra la verga bien tiesa" al mismo tiempo que se sobaba por sobre el pantalón el erecto miembro.
–-Toma carnal llégale a la mari pa que te alivianes- dijo otro de los cholos al tiempo que le pasaba un cigarro de marihuana.
Y así se fueron de nuevo al billar a olvidar su fracasado plan.
La suerte había estado de lado de la nena, don Benito había aparecido en el momento justo y en el lugar exacto para salvarla de las garras de esos viciosos, para fortuna de la nena ese día era viernes y por lo menos estaría a salvo el fin de semana de los cholos, pero su buena estrella no duraría siempre negros nubarrones se veían en su futuro.
Al llegar el anciano y la jovencita a su casa se dispusieron a degustar la pizza ella le dijo al abuelo que pusiera la meza mientras ella se cambiaba y se ponía algo mas cómodo.
El anciano sirvió dos rebanadas en dos platos y sirvió la coca en dos vasos y se sentó a esperar a la nena, ella volvió un momento después enfundada solamente en un top y un muy breve short enseñando a la vista sus deliciosos encantos.
Y se dispusieron a cenar el anciano veía con ternura como la bella adolescente devoraba una porción de pizza mientras el le daba un sorbo al refresco de cola al mismo tiempo que le decía.
–-Mija tu sabes que no me gusta meterme en tus cosas personales, a mi lo único que me importa es verte que estas bien y que seas feliz tu y tu mama, ya que son las dos únicas personas en el mundo que me importan.
Ella mira a don Benito con amor, a su querido abuelo y le dijo.
–-Si abue lo se y te doy las gracias por ser tan bueno conmigo y mi mama eres el mejor abue del mundo.

–-Si mija por que te quiero te voy a decir esto, e notado que ya eres toda una mujercita tu cuerpo ya se desarrollo como el de toda una señorita y estoy orgulloso de ti, para mi siempre serás mi niña consentida aquella con la que jugaba y le contaba cuentos cuando eras una pequeña de 5 años , yo siempre te veré como mi pequeña , pero la gente de la calle no, hay mucha gente mala y perversa que
solo ven en ti a una mujer para satisfacer sus deseos mas bajos y perversos y de esa gente esta lleno este barrio.
–-Ya vez lo que paso hoy con la banda del gori algo tramaban contra ti, pero gracias a que venia llegando yo también me di cuenta y afortunadamente no paso nada y se pudo evitar lo que pretendían esos vagos.
–-Yo te aconsejaría que no les dieras motivos a la gente de la calle para que te faltaran al respeto, esto lo digo por que hija tu forma de vestir no es muy adecuada provocas a los hombres como te dije hace un momento para siempre serás mi niña pero ya no eres una niña.
--Hay abue pero por que me dices eso si yo solo me visto como se visten las demás muchachas en la escuela.
–-Si niña pero es que esas faldas tan cortitas que casi no te tapan nada es cuestión nada mas de que soplara una racha de aire fuerte para que te vieran el trasero o que te agacharas un poco para que te vieran el color de tu ropa interior.
Y era muy cierto eso que comentaba el sexagenario la adolescente no dejaba casi nada a la imaginación con ese tipo de vestimenta, casi toda su ropa eran mini faldas un cuarto de la mano arriba de la rodilla, blusas muy chiquitas que se le pegan a la piel con grandes escotes y muy entalladas y aunado a esto el tremendo y escultural cuerpo de la nena era imposible que no fuera el foco de atención cuando salía a la calle provocando a los machos a los pensamientos mas lujuriosos y perversos para con ella.
–-Si niña pero entiende no digo que no te vistas a la moda de ustedes los jóvenes, pero solo que no seas tan provocativa trata de que tus faldas no sean tan cortas bájales un poco mas y tus blusas súbeles el escote, mira lo que paso hoy en la noche con esos vagos quien sabe que malvados planes tenían contigo yo no les vi muy buenas intenciones , de ahora en adelante te esperare en la parada para acompañarte cuando regreses de la escuela, mientras no este trabajando no quiero verte caminar sola de regreso a tu casa por todas esas calles solitarias, oscuras y llenas de esos vagos buenos para nada.
La nena dándole un sorbo a la coca le contesto al preocupado sexagenario.
–-Hay abue tu haces una tormenta en un vaso de agua, yo no voy a cambiar mi forma de vestir por que mi mama me apoya ya que como tu sabes cuando ella tenia mi edad mi abuela no la dejaba vestirse a la moda y era muy estricta con ella y me dice que no quiere que yo pase por lo que paso ella, ella me alienta a vestirme como se visten las muchachas de mi edad.
–-Y además es la moda todas las muchachas de la escuela y las que veo en la calle se visten igual que yo y yo no quiero que me vean como un bicho raro si de repente cambio mi forma de vestirme abue , y con lo que respecta a esa bola de vagos que están siempre en el billar no te preocupes por ellos no se atreverían hacerme algo , solo me dicen de piropos cuando paso donde están ellos y ya estoy acostumbrada no me molesta y además no les tengo miedo, (siendo esto una mentira ya que la nena si le entraba mucho temor cuando se los topaba sobre todo al ver la perversas miradas llenas de lujuria con que la veían solo que no estaba dispuesta a cambiar su forma de vestir por ellos y para no alarmar mas al abuelo).

–-Hija mía tu eres muy hermosa y lo sabes nadie puede negar eso, estas convertida en toda una mujer bellísima sobre todo por tu hermoso rostro que todavía es el de una niña, tu no necesitas vestirte así con esos retazos de ropa para llamar la atención eso déjaselo a esas muchachas que no tuvieron la fortuna de heredar un rostro y un cuerpo tan bonito como tu, y tienen que recurrir a vestirse con poca ropa y ajustada para llamar la atención pero tu no lo necesitas tu ya de por si llamas la atención por tu natural belleza, trata de vestirte en forma mas recatada con ropa mas holgada y veras que de todos modos tu belleza no se opacara hija hazlo por mi por tu querido abuelo.
La nena viendo a su abuelo con esos hermosos ojos verdes cariñosamente le dijo.
–-Ok abue te prometo que lo pensare y lo tomare en cuenta gracias por preocuparte por mi te quiero mucho abue, al mismo tiempo que le apretaba la mano cariñosamente.
--Bueno abue me voy a duchar y a dormir que vengo muy cansada mientras si quieres ve la tele o ya te vas para tu dep.
–-Si hija no te preocupes ya me voy salúdame a tu mama mañana vengo de nuevo acuéstate y descansa.
–-Si abuelito gracias por la pizza cuídate te quiero mucho.
La adolescente se levanto de la meza para irse a descansar pero antes coloco el grueso madero en la entrada de la puerta de su departamento (aquel que había colocado don Benito desde el día en que se metió el viejo Lucas).
Después la nena se dirigió a su alcoba y se preparo para dormir se quito el top y el minúsculo mini short quedándose solo con su bikini (pues así dormía más cómoda) y abrazando la almohada se dispuso a caer en brazos de Morfeo.
Aquella noche Cielo Riveros sufrió para conciliar el sueño, las escenas del acoso de víctor y la manoseada que le dio volvían una y otra vez a su mente casi lo podía oír diciéndole.
–-Estas buenísima puta vas a disfrutar esto de verdad ya lo veras zorra, mientras la dedeaba y le mamaba las tetas como loco.
La respiración de la nena se comenzó agitar ante las calientes imágenes en su mente, su ardiente cuerpo pedía a gritos un alivio, un fuego espantoso quemaba las entrañas de la joven, y ella sabía que necesitaba sacarlo, sabía cómo sacarlo... pero también sabía que el modo de sacarlo, no era correcto, en su mente de nuevo luchaban su yo puritana y mojigata contra sus deseos y calenturas de su escultural cuerpo que por naturaleza y por el tremendo desarrollo que había adquirido pedía sexo.
Cielo Riveros se mordió los labios y apretó los puños. "No debo... no debo hacerlo..." pensó, pero era muy difícil pensar con claridad, parecía que en su mente se había incrustado la imagen de víctor y era imposible sacarlo de allí diciéndole.
–-Ah puta, que sabrosa estás, hasta que se me hizo gozarte cabrona, al mismo tiempo que le succionaba las tetas.
La nena sentía un calor abrasador dentro de su bikini y decidió quitárselo, acostada como estaba boca arriba bajo ambas manos y tiro hacia abajo despojándose de la prenda intima quedando totalmente desnuda, , su sexo le picaba y cosquilleaba, suplicaba por sentir unos dedos en su caliente interior.
Ella se encontraba en ese momento en un estado de semiinconsciencia es decir no estaba ni completamente dormida pero tampoco despierta en la oscuridad de su recamara, su conciente luchaba contra esas placenteras sensaciones que se apoderaban de su cuerpo que se extendían por todo su escultural cuerpo como una deliciosa droga de placer.
Pero las placenteras sensaciones de su ardiente cuevita le estaban ganando la batalla a su mente.
–-Quizá si me rascase, sólo un poco, y sólo por arriba quizá se calmase."- pensó en sus adentros como tratando de justificarse por lo que estaba apunto de hacer.
Cuando sus finos dedos apenas rozaron su cuevita una tremenda sensación de placer ataco todo su cuerpo, la joven supo que estaba perdida, supo en ése momento, que acababa de perder la partida, que ya no podía parar y sus dedos comenzaron a acariciar suavemente los finos bellos de su sexo.
Quiso gritar cuando las placenteras sensaciones la atacaron despiadadamente pero en lugar de eso, se mordió los labios y su mano comenzó a acariciar arriba y abajo su caliente sexo.
–-Mmmmmmmhh.... no deberíaaaa.... haahhh.... mmmmhh... no debo... mmmmh - gemía la colegiala con la almohada en su boca.
La chica acostada boca arriba con las piernas completamente abiertas se entregaba ya totalmente al placer la joven apretaba y masajeaba los labios mayores de su sexo húmedo, uno de sus dedos se deslizó por entre sus labios, acarició el interior, y rozó suavemente su clítoris.
–-Ah aaahhh... mmmmmmhhh… mmmmmmmmmmmmhhhh–-la joven exploraba su intimidad, acariciando la entrada de su sexo, saboreando cada cosquilla, cada placentero escalofrío, dándole goces indescriptibles.
Y en su mente la imagen del depravado del víctor que le decía.
–-Ahhh aaahhhhh mamaaaasootaa que rico–- mientras mamaba como perro hambriento los pechos de la colegiala y le apretaba el culote en el solitario pasillo de la escuela.
El placer aumentaba en su cuerpo mientras se comportaba en la cama como una puta zorra y sucia, las piernas estaban totalmente abiertas para facilitar la masturbación de sus dedos a su cuevita, su otra mano empezó a tocar sus pechos, que reaccionaron enérgicamente, sus pezones erectos estaban tan sensibles las caricias en ellos parecían hacer efecto también en su sexo.
Cielo Riveros se retorcía de gusto, no podía parar, mientras sus suspiros se le agolpaban en el pecho, su mano acariciaba más velozmente su interior, sus dedos frotaban incansables su clítoris, completamente hinchado rojo y enormemente sensible, que le obsequiaba deliciosos calambrazos de placer cada vez más intensos a cada roce.
–-ahhhhhhhhh aaahhhhhhhhh ohhhhhhhh–- gemía quedadamente la adolescente embriagada por las placenteras sensaciones que le daba su caliente cuerpo.
Arqueaba al máximo la espalda presa del placer prohibido de la masturbación a su virginal cuevita, Cielo Riveros tenía que morder la almohada para reprimir el feroz impulso de gritar con todas sus fuerzas de placer, ya que éste crecía sin parar, y cada vez con mayor rapidez, atacándola sin piedad, su sexo hervía de gozo cuando sus dedos acariciaban, en círculos y de arriba abajo, su clítoris, rojo e hinchado, a punto de explotar de gusto, los pezones completamente hinchados , su pecho subía y bajaba con rapidez, el sudor le corría por entre los pechos, duros, redondos y que exhalaban tanto calor y placer como el resto de su cuerpo.

Mientras tanto, Cielo Riveros no podía notarlo, pero todo su cuarto despedía un intenso y agradable olor a placer, a sexo olor que se escapaba por la ventana abierta, se acarició la entrada de la vagina con la punta de los dedos, frotándose el clítoris con la palma de la mano, y un pequeño grito se escapó por la comisura de sus labios, al tiempo que su frágil cuerpo se estremeció de placer, sus caderas se elevaron solas, y todo su ser pareció estallar en un sinnúmero de sensaciones cálidas, placenteras, gozosas.
Acababa de tener un orgasmo apenas podía abrir los ojos, jadeaba quedadamente, notando cómo su mano acariciaba aún su sexo chorreante estaba tan sensible, que aquellas caricias eran indefiniblemente agradables, se sentía tan bien, tan calmada, tan a gusto, tan relajada.
Cielo Riveros recuperaba lentamente el aliento, mientras un hilillo de sudor recorría su frente y bajaba por su cuello, y unas deliciosas cosquillas recorrían su cuerpo, en una especie de reconfortante caricia y así en ese estado de completa paz se quedo completamente dormida.
Al otro día por ser sábado la nena se levanto tarde, desayuno y se puso hacer los quehaceres de su casa , después se dio un duchazo y se puso a ver la televisión , al mismo tiempo que se arreglaba las uñas de los pies , esperando que llegara su mama cuando sonó su celular era su amiga Claudia.
–-Hola floja que haces.
–-Nada aquí cortándome las uñas y tu.
–-Mmmm pues levantándome tu crees anoche fui con mi chavo a un concierto de rock y pues regresamos ya como a las 3 de la madrugada.
–-Dichosa tu que puedes salir a muchos lugares y que tus padres te dan permiso, en cambio yo, las únicas salidas que me deja ir mi mama es al centro a pagar o a comprar a la tienda.
–-Mmmm malo , malo, malo una esta joven y solo se vive una vez y tenemos derecho de salir a divertirnos a desfogar nuestros ansias y pasiones juveniles, como yo ayer que me fui con mi chavo después del concierto a un solitario parque y nos dimos un agarron tremendo que hasta estrellas me dejo viendo.
–-Hay amiga tu y tus locuras, deberías de ser mas recatada, mira que en la escuela con cuantos te has besado y manoseado, una debe de darse su lugar no que te vayan a considerar una facilota.
–-Si intima pero que le puedo hacer si cuando veo un chavo buenote me dan ganas de echármelo y no paro hasta que me lo coma a besos y si vale la pena darnos un buen agarron en un motel.
–-Bueno allá tu clau pero yo no estoy de acuerdo con esa forma de ser tu ya me conoces , si no es por que somos amigas desde que iniciamos la prepa y por que eres una amiga sincera y leal yo no me juntaría contigo solo te pido que te cuides y seas mas sensata.
–-Ok lo tomare en cuenta, oye cambiando de platica el motivo de mi llamada es para invitarte a la feria que acaba de llegar a la ciudad.
–-Apoco no estaba enterada que acababa de llegar la feria amiga.
–-Si llego ayer y hoy ya acabaron de instalarse hoy es el primer día, esta a 2 cuadras de mi casa.
Se hizo un momento de silencio Cielo Riveros analizaba la situación de ir a la feria y después de unos segundos le dijo a Claudia.
–-No creo amiga… eso es muy lejos de mi casa es hasta el centro mi mama nunca me dejara.
–-Mira por eso no te preocupes déjalo de mi cuenta yo me encargo mis papas hablaran con tu mama y por la distancia no te preocupes te quedas a dormir en mi casa y listo.
–-Suena bonito clau tu y yo en la feria divirtiéndonos y paseando por mi no hay obstáculo yo si tengo ganas de salir de esta monotonía y salir a distraerme pero no se que dirá mi mama me cuida mucho por que ya sabes soy su única hija y no quiere que por salir a divertirme me vaya a pasar algo malo se moriría sin mi.
–-Pues no lo sé, ella se quedaría muy angustiada al saberme lejos y yo no quiero darle preocupaciones ya bastante tiene con dejarme sola toda la semana por irse a trabajar para que en su descanso también le de mas preocupaciones no se claudia.

–-Ve amiga te divertirás necesitas un poco de ocio para contrarrestar la monotonía de vida que llevas de la casa a la escuela y de la escuela a la casa, además irás conmigo… ¿qué te puede pasar?... confía en mí, te divertirás.
Cielo Riveros se quedó callada por un instante no estaba segura si era buena idea Clau al ver su silencio capto su indecisión y para presionarla le dijo como no queriendo la cosa medio en broma y medio en serio.
–-Acuérdate inchima que cuando te rescate del maldito de víctor me dijiste que no tenias con que pagarme lo que había hecho por ti, si me acompañas esa deuda queda saldada si no te cobro con intereses heee"- entonces... ¿me acompañarás?
–-Está bien iré contigo –exclamó con risueña y amistosa voz, –-si tú me aseguras que la pasaré bien, entonces la pasaré bien, tú eres mi mejor amiga, y ya es hora de que salga de esta monotonía solo una condición clau si no convencen a mi mama tus papas de ir pues entonces ya no quedo de mi ¿estamos?
–-Ja, ja de eso no tengas duda amiga mis papas van a convencer a tu mama y vas a ver como nos vamos a divertir chao nos vemos en la tarde le avisas a tu mama que iré con mis padres para llevarte a la feria chao bambina.
La nena se quedo pensativa cuando colgó el teléfono una parte de ella le decía que si, que saliera a divertirse a pasear a olvidarse de los sin sabores de la vida pero por otra parte ella conocía a Claudia muy bien de toda la vida y sabia que su debilidad por los hombres la hacia cometer locuras sin fijarse en las consecuencias y presentía que si salían la metería en problemas por ser tan ligera en cuestiones de sexo.
Eso la tenia preocupada e indecisa pero pensó, conociendo a mi mama como es, no creo que me deje pasar la noche fuera de la casa y con eso se quedo tranquila y segura de que no saldría a ninguna feria.
–-¿Le pongo mayonesa? –le preguntó a Cielo Riveros su madre, era medio día y su madre le había preparado unos sándwiches.
–Sí–- contestó la nena, –-pero sin papas ni chile ni cebolla y tampoco le vayas a poner aguacate –haciendo un gesto de asco.
–Pues has de querer el puro pan –exclamó sarcásticamente su madre y cuéntame, hija, ¿cómo estuvo tu día?
–Bien –respondió masticando su sándwich, sabes mama recuerdas a mi amiga Claudia escalante mass la que su papa nos ayudo cuando mi abuelita Eugenia (mama de su mama de Cielo Riveros ) nos vino a visitar y cuando salimos un día la atropello aquel taxi que no quería pagar los gastos de hospitalización.
–-Si hija lo recuerdo perfectamente todo un caballero el señor papa de tu amiga es una persona decente como ya casi no las hay en esta ciudad llena de gente mala.
La nena se llevaba un vaso de coca a la boca cuando su mama dijo
–-Esa tu amiga Claudia su hija se ve que es una buena muchacha decente y recatada.
–-Puuuuaaaaffffffff salio disparado de la boca de Cielo Riveros todo el refresco que estaba ingiriendo al oír estas palabras de su mama.
–-Cof cof cof tosía agarrándose el pecho con las manos.
–-Hija que te paso mira que desastre hiciste en la meza.
–-Si mami cof cof discúlpame se me subió la coca y tuve que toser.
-Si hija esta bien no te preocupes, le dijo la señora limpiando la meza con un trapo.
–-Esa muchacha Claudia te decía me parece muy buena influencia para ti ya ves que cuando viene hasta me ayuda a lavar los trastes aun que yo le diga que los deje es muy atenta educada y tan simpática toda una señorita decente.
Cielo Riveros pensaba para sus adentros…si tan decente que ya no es virgen y dos abortos que lleva la muy canija.
–-Continua hija que me ibas a decir de esta señorita tu amiga.
–-Pues que quiere que vaya a una feria que llego allá por su casa pero como esta lejos de aquí me quedaría en su casa a dormir y ya vendría hasta mañana domingo en la tarde para acá.

Su mama se quedo por un momento callada meditando la situación, la chica estaba segura que no la dejarían ir y eso en su yo recatada y mojigata se alegraba.
–-Pues ya veremos hija ya sabes que me angustiaría mucho saber que estas lejos y me dolería que te pasara algo.
La nena abrazo a su madre diciéndole.
–-Si mamita no te preocupes yo no quiero dejarte angustiada, y yo divirtiéndome y dándole un beso le dijo –-ya esta decidido mama… no voy.
Dirigiéndose a su madre le dijo la nena, me voy e tomar una siesta madre deja la trastamenta yo la lavo al rato tu descansa que ya trabajaste mucho en la cocina.
–-Si hija voy a ver la tele un rato, la señora observaba a su hermosa hija y pensaba que era afortunada por tenerla de hija era una chica que nunca le había dado dolores de cabeza, que sacaba buenas calificaciones en la escuela, que era atenta obediente y muy cariñosa y al mismo tiempo analizaba que no era justo tenerla encerrada en esas paredes cuando estaba en la flor de su juventud, que ella mas que nadie merecía salir a divertirse a distraerse un rato y así se quedo pensando en esa situación.
Mucho rato después Cielo Riveros estaba dormitada boca abajo en su recamara cuando entre sueños sintió que la jalaban del brazo y le decían.
–-Ya despiértate floja alístate que ya nos vamos a ir.
–-Hee heee queee coomoo decía la nena sobandose los ojos somnolienta
–-Que te alistes que no ves que ya nos vamos ahí esta mis papas en la sala de tu casa con tu mama.
–-Queeeee como a poco si me dio permiso mi mama- dijo toda incrédula de que su mama hubiere dado el permiso de ir a la feria.
–-Si alístate yo te espero afuera ponte guapa y sexy que hoy nosotras seremos el atractivo visual de la feria ja ja ja y a ver cuantos chavos nos ligamos, de aquí nos dejan mis padres en la feria ya que ellos tienen un compromiso de un matrimonio que los invito a un rancho y regresarán hasta mañana.
Cielo Riveros observo a Claudia que estaba vestida con un vestido oscuro de tirantes ceñido a su cuerpo a medio muslo con falda de vuelo cortita, con un generoso escote donde se apreciaban sus pechos redondos, unas zapatillas de tacón alto haciendo que el redondo trasero resaltara más.
–-Ponte guapa te espero afuera- dijo clau quien al salir choco con la mama de la nena, –-disculpe señora le dijo, no te preocupes hija le contesto la señora.
–-Hija alístate que vas a salir con tu amiga a la feria sus papas vinieron a pedir permiso y me convencieron diciéndome que ellos se harán responsables aparte de que eres joven y cumples con tus deberes y tienes derecho de divertirte también sanamente.
La colegiala abrazo amorosamente a su madre diciéndole –-gracias mamita por ser tan buena conmigo… te quiero mucho.
–-Ya… ya… ándale alístate que los señores ya están esperando para llevarlas a la feria-
–-Si mamita- y como un torbellino se paro la nena agarro su toalla y se metió a la ducha al rato salio del baño y se empezó a secar lentamente su escultural cuerpo con la toalla que pasaba entre sus dos nalgas; recorría sus senos, sus piernas, su espalda, y libraba a su cutis de las gotas de agua.
Enseguida saco un frasco de crema y untándose en las manos comenzó a recorrer lenta y delicadamente toda su suave y fina piel, las manos recorrían toda su anatomía dejando esa juvenil y fresca piel suave y tersa como la piel de un bebe.
Después se agacho en la cómoda cajonera dónde guardaba sus prendas íntimas, y exclamó en su interior.
–-¿Qué bikini me pondré? y con su mano tomo un bikini negro muy chiquito de encajes y cubrió con ellos su hermoso culo y su virgen coño, a continuación llevo ambas manos a sus dos nalgas y les dijo dulcemente.
–-Espero y no anden de coquetas hoy muchachas, pues ya me han ocasionado varios problemillas.
A continuación escogió una blusa azul cielo de esas elásticas que se le amoldaba como una segunda piel al cuerpo, era de ese tipo de blusas que se que usaban sin sostén, y que donde iban los pezones por dentro de la blusa solo tenían de
protección como una especie de algodón para que no se transparentara tanto los pezones.
Era también ombliguera dejando su esbelto abdomen al aire sus hombros cruzados por dos delgados tirantes y un escotazo que dejaba al aire dos terceras partes de esos hermosos y mamables senos, eso más que blusita era casi un top.
Sonrió para sí misa viendo por el reflejo del espejo como se acomodaban sus hermosos y duros senos con la blusa-top, la nena tenía esos hermosos senos con lo que tranquilamente podía andar sin sostén ya que estos se mantenían erguidos sin que la gravedad les afectara a pesar de su volumen.
Continuando con su vestimenta tomo una minifalda blanca de esas amplia de vuelo, a la cadera un cuarto de mano arriba de la rodilla donde se amoldaba exquisitamente a su redondo trasero y tapando solo lo mínimo y para rematar toda esta caliente vestimenta se coloco sus brillosas botas negras de tacón alto a la rodilla, haciendo ver su figura tremendamente sexy.
Se veía espectacular la nena esas piernotas bellamente torneadas libres de celulitis y mostrándose en todo su esplendor, que en conjunto con la corta mini falda y las botas de tacón alto a la rodilla hacia resaltar mas esas hermosas piernas.
Ese redondo y respingado trasero cubierto por esa breve minifalda que por lo corto, sus redondas nalgas sobresalían alzando aun mas la de por si corta mini falda haciendo que ese monumental trasero fuese algo irresistible a la vista.
Su abdomen liso sin ningún gramo de grasa dejando al aire su breve cintura y su sexy ombligo, su escotazo en esa reducida y apretada blusa de licra elástica blanca haciendo que los grandes y duros senos parecieran que se fueran a salir de su encierro marcándose ricamente el pezón por lo ajustado de la blusa, su hermoso y angelical rostro de niña con esos grandes y hermosos ojos verdes y su cabello lacio suelto a los hombros.
En verdad amigo lector que era un monumento de chamaca si vestida con su uniforme de colegiala se veía espectacular imagínensela así con ropa nueva y sexy para salir a pasear, se veía muy encamable apetitosa suculenta etc.
La nena se puso de pie y viéndose al espejo se sonrió a ella misma aprobando el reflejo de ella que le daba el espejo, esa minifalda blanca era tan corta y de tela tan delgada que más bien parecía un pareo de esos que usan las chicas en las playas sobre el traje de baño, se marcaba perfectamente su pequeño bikini negro que contrastaba con la minifalda blanca.
Tomando un frasco de fino perfume original tomo con su dedo índice distribuyéndolo en su cuello detrás de sus orejas y en el escote de su blusa.
Ya para terminar tomo su cepillo y se peino su lacio cabello al hombro se puso gel para que su cabello conservara esa ilusión de humedad y se pinto de rojo intenso sus labios y se delineo los ojos, que hermoso era el rostro de Cielo Riveros con esos grandes ojos verdes y esas facciones tan finas y delicadas que contrastaban enormemente con el entorno sucio y vulgar del barrio donde vivía.
Saliendo de su recamara la colegiala se dirigió a la sala de su casa donde estaban todos esperándola.
–-Lista ya nos podemos ir, buenas tardes doña esperanza y don Emilio- les dijo Cielo Riveros a los padres de claudia saludándolos de mano.
–-Pero que guapa vas mi hija dijo la mama de Cielo Riveros mira que yo creo que hoy van a romper muchos corazones tu y Claudia ya que las dos van espectaculares.
–-Hay mama que cosas dices mira que me apenas aquí delante de los papas de Clau.
–-Tu mama tiene razón hoy vamos hacer las reinas de la feria tu y yo amiga así que prepárate a romper muchos corazones ja ja ja ja- dijo la siempre alegre Claudia.
–-Sacando su bolsa la madre de Cielo Riveros le dijo ten mija este dinero para que te compres lo que quieras y te diviertas y cuídate, cualquier cosa llevas tu cel me llamas.

–-No se preocupe señora que yo la cuidare como a mi misma ella esta en buenas manos y además mi casa esta cerca de solo 2 cuadras de la feria no se preocupe que solo nos divertiremos sanamente- (je je je si como no).
–-Bueno mami nos vemos mañana te duermes temprano y ya mañana te llamo de la casa de Clau- dándole un beso a su mama despidiéndose de su progenitora.
–-Hasta luego señora mañana le traemos a su hija- se despidieron todos y se enfilaron al auto del papa de Claudia se subieron y se fueron a la feria.
Al mismo tiempo ya en la feria en un stand de venta de bebidas alcohólicas departían alegremente 4 viejos quienes no dejaban de ver a las hermosas edecanes de una cervecera que bailaban música de regueton con sensuales movimientos.
Estos viejos eran nuestro ya conocido cojo Juan conserje de la escuela bachiller donde estudia Cielo Riveros , tenia un defecto ya que tenia una pierna más corta que la otra, lo que le provocaba una leve cojera al caminar que lo hacia ver mas horrible es un hombre de 58 años barrigón y con cara de degenerado, que siempre andaba traspirado y sucio.
El profesor Tulio quien es como de 56 años de estatura media barrigón y calvo con unos ojos saltones que le hacían desagradable para cualquier mujer, lo que no tenía físicamente agradable lo tenía en labia, tenia una tremenda labia para envolver a sus victimas.
El inspector escolar profesor Vicente era un hombre feo, que no tenía menos de 60 años de pelo y un gran bigote, canosos, los ojos hundidos provistos de grandes arrugas en su rostro, sus manos, grotescas, uñas amarillentas seguramente a causa de la nicotina ya que fumaba mucho este viejo , medio gordo y con cara de sádico, con un gusto especial por las jovencitas de los institutos donde llegaba su jurisdicción así era este viejo pervertido.
Y por ultimo don Tereso compadre del profesor Vicente que no tenia nada que ver con el magisterio pero como estaba de visita el profesor Vicente en aquella región andaba con el, por que el profesor Vicente era su compadre y había llegado con su esposa y estaba hospedado con el en su casa.
Don Tereso era un viejo que se dedicaba a la mecánica automotriz por ende casi nunca andaba limpio era muy desaliñado con una barriga bastante prominente a causa del exceso de cerveza que ingería constantemente ese día andaba con una camisa a cuadros arrugada y con los botones primeros desabrochados de donde emanaba una mata de pelos sucios y canosos , lucia un prominente bigote, espeso, moreno, y una barba como de varios meses sin afeitarse ,haciendo que la cerveza que tomaban se le desparramara asquerosamente por barba y bigote.
Estos cuatro horribles viejos tenían algo en común, su gusto y afición por la carne joven eran unos depravados que si tenían la menor oportunidad, no dudaban en aprovecharse de alguna jovencita que cayera en sus garras.
–-Así mamacita que rico mueves el culo ea...ea... ea... ea... -decía el viejo Tereso a las bellas edecanes que bailaban a un lado de ellos sobre una tarima.
–-Que buenas nalgas tienen esas pendejas yo si les metía la verga y las ponía a que me la mamaran- decía el viejo degenerado del inspector Vicente agarrándose sin disimular por sobre el pantalón la empalmada verga y con los ojos danzándole siguiendo el ondular movimiento de las caderas de las chicas que bailaban animadamente.
El cojo Juan le dijo al profesor Tulio –-se ve que el inspector se la esta pasando muy bien esta muy ambientado con todo este relajo.
–-Si fue buena la idea que tuviste pinché Juan de venir a la feria y traer a mi jefe yo creo que con esto me gano un ascenso… salud … Juan.
–-Oiga don Tulio desde hace días e querido hablar con usted sobre una cuestión en la escuela.
–-Si Juan a ver dime de que se trata.
–-¿Se acuerda de aquella jovencita de ultimo año llamada Cielo Riveros del carmen Jiménez Gomes?
El viejo tulio se le vino un brillo siniestro en los ojos dijo.
–-Cual Juan… la amiga de claudia… ¿la pendeja esa que es un bombón dueña de un culaso y unas tetotas como melones?
–-Claro que me acuerdo Juan ahorita que me la recordaste hace como dos semanas fue a mi oficina y le di una manoseada y unas mamadas a esas tetas que ahí me acabe de criar ja ja ja.
–-Vieras que me dejo con unas ganas de clavarla Juan nada mas la hice que me diera una mamada de verga que vieras que ricote la succiona esa pendeja, me saco toda la leche.
Dándole un sorbo a su tarro de cerveza el cojo continúo.
–-Si maestro esa mera resulta que la otra vez bla bla bla le empezó a contar todo lo que había sucedido con Cielo Riveros cuando perdió su diario.
–-Bueno niñas hasta aquí podemos llegar no podemos avanzar mas es mucha la aglomeración de gentes y de carros si nos metemos mas con el auto nos quedamos varados, de aquí hasta el recinto ferial se pueden ir caminando.
Dijo el padre de Claudia a las chicas quienes tuvieron que descender del carro y se irían caminando hasta la feria seria algo así como unos 200 metros debido a tanta gente que llevaba el mismo rumbo y los que venían en sentido contrario.
-Ok papi un beso adiós mami nos vemos mañana un beso.
–-Si hija te cuidas y cuida a esta niña que mira como nos la encargo su mama.
–-Si chao, adiós don Emilio hasta mañana doña esperanza se despidieron las nenas dispuestas a pasarla de lujo.
Las dos encamables colegialas empezaron a caminar a paso lento rumbo a la feria, toda la jauría de machos se alborotaron a ver a este par de curvilíneas nenas, se perdían viendo el sexy y cadencioso andar de esas dos espectaculares hembras, en ese momento corría una racha fuerte de aire haciendo que la pobre Cielo Riveros constantemente sostuviera su minifalda con ambas manos para que no se le levantara.
Cielo Riveros al ser una chica que le fascinaba usar mini faldas, pero al mismo tiempo era pudorosa ,esto es que no por el hecho de enseñar sus preciosas piernas desnudas ya se diera por hecho que no le avergonzara enseñar su ropa interior , ella tenia una extraña forma de ver las cosas ya que en su ignorancia enseñaba piernas casi hasta las nalgas con las minis que usaba y casi en la totalidad los pechos con los escotazos que gustaba usar , era incongruente que le diera pena enseñar la ropa interior si no dejaba casi nada a la imaginación pero pues bueno así era la nena.
Así que la nena era muy cuidadosa en sus movimientos, con esas mini faldas la colegiala exhibía sus hermosas piernas pero también daba a notar su sometimiento al no tener libertad de movimiento al no poder sentarse de cualquier forma, al caminar teniendo mucho cuidado, ella cuidaba mucho su forma de sentarse y de levantarse, para agacharse en ocasiones le resultaba imposible debido a lo corta de la prenda que le gustaba usar, tenia mucho cuidado en la flexión de las piernas lo hacia con calma y cuidando no enseñar de mas.
La minifalda la condenaba a ser privilegiada o acosada por los machos y una que otra lesbiana, recibir una atención especial en donde estuviera, Cielo Riveros era una de esas nenas que transforma perturba y tensa el espacio donde se encuentra sobre todo con los hombres.
Cielo Riveros tenia que soportar todo los días las miradas libidinosas y de deseo que despertaba en todos los lujuriosos que se cruzaban con ella y además todas las linduras y aberraciones que le decían los machos al verla pasar, todo esto no le importaba a la nena por estar a la moda al igual que las demás nenas de su edad y que bueno que fuese así hubiera sido un desperdicio que teniendo un cuerpo tan suculento, no se vistiera de esa manera.
Continuando con el relato las dos nenas caminaban lentamente dirigiéndose a la feria, la calle por donde iban estaba atestada de vendedores ambulantes a ambos lados de la calle que a gritos ofrecían sus mercancías, y de gente que iban y venían por ella, los machos al reparar en estas dos formidables nenas enfundadas en falditas tan cortas enseñando esos carnosos muslos a lo bárbaro no parpadeaban ni quitaban la vista al hipnotizante vaivén de sus caderas al caminar.
Los varones que venían en sentido contrario se codeaban al ver al par de hermosas nenas y no les quitaban el ojo de sus curvilíneos cuerpos que las recorrían con el mayor de los descaros, y haciendo comentarios entre si
Cielo Riveros continuaba luchando con su minifalda debido a las ráfagas de viento que venían por momentos y que hacían que la mini se quisiera subir dejando sus bellos encantos al descubierto, ante la morbosa mirada de admiración y deseo de cuanto macho se les cruzaba.
En contraste de Cielo Riveros la escultural Claudia iba mandando mensajes con su celular muy despreocupada más atenta a la pantalla que a cubrirse de que la faldita del vestido se le subiera, dejando por momentos al descubierto según venían las ráfagas de aire sus hermosos encantos, dejando ver por pequeños lapsos sus redondas nalga, la tanga de color blanco se perdía en ese formidable trasero devorándolo y los que venían de frente podían apreciar el sexy triangulo de su tanga haciendo imposible no posar los ojos en ese espectáculo de la totalmente desinhibida y exhibicionista Claudia .

Este par de nenas eran la fantasía de los hombres y era la envidia de cualquier mujer, no faltaba entre tanta gente que el hombre que iba con su mujer se quedara viendo embobado a este par de nenas y sin decir aguas le dieran una sonada cachetada por su pareja.
O que alguna que otra santurrona que venia de frente al verlas se persignara varias veces al mismo tiempo que ponía cara de espanto, y le tapara los ojos a su hijo para que no viera esas cosas pecaminosas.
–-Fiuuuuuuuuu ….fiuuuuuuuuu! ….mamacitas….gritaban unos hombres ya embriagados con cerveza y por el espectacular show que Claudia les estaba dando.
Las dos nenas causaron un impacto sobre todo en la fauna de machos, algunos por celular comentaban con otros del par de esculturales nenas que habían llegado a la feria, viéndolas algunos disimuladamente y otros mas atrevidos con total descaro las ricas anatomías.
Este era el panorama que tenían las nenas de ahí en adelante llenas de machos que no les quitaban el ojo de encima y recibiendo infinidad de piropos.
–-Oye…ya viste el revuelo que ocasionas….exclamo Claudia a Cielo Riveros , y esta le dijo.
–-Hay clau… mejor vamonos para tu casa mira como nos miran los hombres ya me arrepentí haber venido a vestida así.
–-No señor nos quedamos, mira que arreglarnos tanto para irnos a encerrar no eso no, tú ponte seria y si hay un chico buen mozo solo le sonríes.
En esas estaban cuando sin decir agua va Cielo Riveros sintió desde atrás como una mano atrevida se colaba por debajo de la mini agarrándole una de las nalgas apretándosela lascivamente al mismo tiempo una boca le decía pegada al oído.
–-Mamacita que buena estas para culearte- todo esto paso rápido en 3 segundos no dándole tiempo de poder reaccionar y darle una cachetada al mano larga, por salir este corriendo.
Se quedo fría y muda ante tal atrevimiento alcanzando a ver a un muchacho como de 20 años tipo cholo que a unos 15 metros llegaba adonde había otros como el y estos lo felicitaban y reían como si hubiera hecho una hazaña.
–-Malditos, aprovechados los odio- decía la nena con un mohín en el rostro de niña de 5 años al que otro niño le robo una paleta.
Claudia no se había dado cuenta por ir con el celular mandando mensajes pero cuando la volteo a ver noto que algo pasaba y le pregunto.
–-Pero que te pasa mujer por que estas así-, guardando su teléfono en su bolsa.
–-Esos desgraciados abusivos me manosearon por debajo de la falda y me dijo una majadería-, señalando la nena al susodicho quien seguía con su banda riéndose y celebrando su hazaña.
–-Y eso que amiga que te toco… y… que, si te dijo alguna leparada… y… que, no ves que eso es lo que quieren esos pendejos.
–-No Clau vamonos de aquí ya no quiero ir a la feria ya no amiga por favor.
–-Mira bebe tu y yo tenemos que platicar muy seriamente ven vamos entremos aquí.
Las dos nenas se fueron a un local que funcionaba como cafetería pero que a esa hora estaba casi vació por que toda la gente se dirigía al relajo de la feria.
Las dos nenas se sentaron en una meza y pidieron Claudia un jugo de naranja y Cielo Riveros una coca ligh.
–-Mira amiga ¿cuantos años tenemos de conocernos?
–-Pues desde que entramos a la prepa.
–-Ok y cuando te e fallado, o te e engañado.
–-No pues nunca amiga tú eres mi mejor amiga en la que confió a ciegas.
–-Ok nena mira ya es hora de que despiertes, ya tienes 18 años ya no eres una niña mírate esos pechos, esas nalgas, esas piernas y esa cara tan bella, eres toda una mujer que despierta pasiones y deseos eso que te paso con víctor en la escuela y lo que te hicieron hace un rato son evidencia de lo hermosa que eres a los ojos de los hombres.
–-Cielo Riveros bajando la vista apenada ante las palabras de su camarada dijo.
–-¡Ay! No sigas amiga haces que me sonroje.
Pero Claudia no estaba dispuesta a darle tregua continuo.
–-No nena tu tienes que madurar ya de aquí, al mismo tiempo que con la palma de la mano le daba un suave golpecito en la cabeza de Cielo Riveros , para que este a la par de este cuerpo de mujer.
–-Eso que hiciste hace un momento frente a esos vagos, (refiriéndose Claudia a la reacción que tuvo Cielo Riveros al ser manoseada) eso déjaselo a una niña de 10 años que no te das cuenta que lo único que haces es verte ridícula y tonta.
–-Con tu actitud de niña buena y de mujercita bien portada ridícula no te lleva a nada. ¿Por qué no dejas salir la voluptuosidad que escondes?
–-Por eso tienes que cambiar, por tu bien, porque el sexo te perseguirá toda la vida, no tienes opción y no puedes verlo de esa forma de niña tonta y espantada; tienes que acogerlo con júbilo y avidez siendo algo de nuestra naturaleza femenina, no puedes rechazarlo (mmmm tienes mucha razón Claudia).
Claudia la amiga íntima de Cielo Riveros como ya habíamos dicho era una de esas chicas que al tener un cuerpo escultural, atraía a los machos esto por que era una chica ligera o de esas chicas fáciles, tenía una fama de irse a la primera oportunidad que tuviese a cualquier lugar solitario y oscuro con cualquier chico o mayor que se lo pedía a disfrutar del manoseo y con algunos a algún motel.
Cielo Riveros seguía callada anonadada por que Claudia nunca le había hablado así tan directo y como decimos aquí en México sin pelos en la lengua.
–-Hay algo que debes saber, y es que el sexo es algo hermoso, sublime, encantador nos da mucho, pero mucho placer, tú fuiste dotada con ese bellísimo cuerpo eres hermosa mil y un hombres te desean; anhelan cogerte no tienes elección debes rendirte a sus deseos y hacerlos felices porque es precisamente, ser feliz y hacer felices a los demás la única ley que debes obedecer.
–-Cielo Riveros en esos momentos paso por su mente todos esos momentos vividos con todos sus acosadores e incluso con Rodrigo su novio y recordaba que por momentos sintió un tremendo placer muy a su pesar.
–-Tú tienes el trasero que toda mujer envidia y desea tener, unas tetas redondas y turgentes, unos labios carnosos que todo hombre apetece besar , buenas piernas y bonita cara, ojos grandes y cristalinos, hermosas mejillas, un coño virgen, apretado, rosado y una piel de lo más sensual, es un crimen no usar ese cuerpo como tal un completo crimen no tienes opción, la naturaleza te lo obsequió, de otras mujeres te escogió a ti; fuiste su predilecta; no la decepciones, muéstrale que eres su digna hija.
Cielo Riveros veía a su amiga estupefacta y muda muy en su interior sabia que ella tenia razón , pero el solo pensar de que algún hombre fuera de su novio la manoseara , la besara y le mamara su escultural cuerpo le producía un gran rechazo.
Claudia tomándola de la mano le dijo mirándola directo a los ojos.
–-Mira nena yo no quiero perjudicar nuestra amistad con todo esto que te estoy diciendo es por eso que te doy esta pequeña plática, porque eres mi amiga y no deseo otra cosa más que el goce de tu vida y orientarte hacia en camino correcto-.
–-Tu madre sin duda te conocen bien, pero te conocen mejor tus amigos; y tú misma te conoces mejor que nadie, por lo tanto, obedécete a ti misma, sigue tus instintos, tu mama se que hace mucho por ti por que tu me lo has contado se que mientras estés con ella le debes respeto.
–-Pero mi madre siempre me dice que mi prioridad es estudiar y salir adelante que no quiere que yo sea una simple empleada y vivir con limitaciones y yo se que ella lo hace por mi bien dijo Cielo Riveros .
Claudia dándole un sorbo a su jugo y mirándola seriamente le dijo.
–-Ella quiere que tú te comportes como ella se comporto pero tú no eres ella, tú eres diferente nena, tú haz las cosas a tu modo; recuerda eso, sé autónoma si tú no tomas tus propias decisiones que crees que va a ser de ti. ¿Y si te equivocas? no importa tienes derecho a equivocarte, y hasta de hacer estupideces.
–-Tú ya no tienes ocho años, tu mama no te puede leer la mente, no a estado contigo pegada a ti todo el tiempo hay muchas cosas que les ocultas por obvias razones (al oír esto la nena sintió una punzada en el corazón vaya que tenia cosas que le ocultaba a su mama) ¿Cómo diablos va a ser ella más apta que tú para tomar las decisiones que te atañen y afectan o benefician a ti y sólo a ti?
Cielo Riveros cavilaba ella quería a su mama pero claudia tenia razón si le hubiese contado todo lo que le había pasado con todos esos viejos lujuriosos tal ves ya la hubiese sacado de la escuela y la hubiese mandado a un internado de monjas, llevándose las dos manos al rostro y exclamando que horror al imaginarse por toda su vida encerrada en un convento y todo sus sueños y aspiraciones tirados por la borda.
–-Tratando de defender un poco su postura ante tanta frase contundente de su amiga le dijo.
–-Pero mi madre dice que sus intenciones son buenas; ella me da muchos buenos consejos... yo... yo... yo tengo que obedecerla.
–-Y que sabe tu mama ella no siempre tiene la razón, también se equivoca, mira Cielo Riveros tu mama no es perfecta, ella también se equivoca no lo puede saber todo, tu vive tu vida sin que tu mama te limite, se libre no obedezcas nada mas por obedecer, analiza siempre lo que te dice, ¿a poco cuando ella te prohibió tener novio la obedeciste?
La nena negó con la cabeza.
Claro que no mija tu le desobedeciste por que tu sentías que lo correcto era que tu anduvieras con ese chico de la farmacia, por que tu cuerpo y tu mente sentían atracción por ese muchacho y anduviste a escondidas con el tengo o no tengo razón.
-Si amiga claro que si-
–-Mira se que esto te esta cayendo como un balde de agua fría por que se como es tu forma de pensar, te conozco como la palma de mi mano, por eso ahorita no creas que te digo que te vayas a la cama con todos los hombres que te lo pidan pero por lo menos trata de actuar ya como una mujer madura que no te espanten cosas como las de hace rato y reacciones como una niña.
–-Te lo digo por tu bien amiga por que te quiero mucho eres mi mejor amiga y quiero que madures ya que seas una mujer completa hecha y derecha.
–-Gracias Clau se que tienes razón pero por favor dame tiempo déjame asimilar todo esto y tratar de cambiar poco a poco dejar de ser una niña y ser una mujer por lo menos ahorita te prometo que ya no tendré esos arranques y me comportare como toda una mujer.
–-Así se habla amiga bueno vamonos que nos espera una feria donde tú y yo seremos las reinas- y levantándose las dos nenas pagaron y moviendo exquisitamente el trasero se encaminaron al recinto ferial.
Mientras tanto en la feria los 4 viejos seguían departiendo alegremente tomando bebidas embriagantes y viendo a las hermosas nenas que pasaban por decenas en donde ellos estaban sentados, sobre todo el viejo Tereso y el inspector escolar Vicente, por que el maestro Tulio y el cojo Juan seguían platicando de Cielo Riveros .
-No chinguees Juan te cojiste a la pendeja de Cielo Riveros no mames y yo que e querido tener otra sesión con ese bombón pero ya no se para por mi oficina desde ese día y cuando me ve en la escuela me evita, vieras que tengo unas ganas de meterle la verga, de clavarla a esas nalgotas soberbias y mira tu sin hacer tanto ruido ya te la cojiste.
–-Si maestro viera que es una perra en la cama primero no quería y después gemía como una zorra al sentir la verga en el culo ese día me dejo todo seco , me dio una deslechada como nunca en la vida ja ja ja ja ja.

–-Pinché Juan salud por que ya te comiste esa palomita tan exquisita y a la que todos le queremos meter la verga.
Sonando los tarros los dos viejos brindaron y siguieron con la plática.
El viejo tulio le dio con la palma abierta en la espalda al cojo Juan diciéndole.
–-Que pendejo fuiste Juan para que le regresaste el pinché diario, que no ves que ahí la pudiste tener de esclava a esa pendeja el tiempo que quisieras.
–-Si maestro fui un pendejo después me lamente pero es que en esos momentos no podía pensar bien por la tremenda cogida estaba todo pendejo y sin pensar en lo que pasaría mas adelante y le di el pinché diario.
–-Si Juan que pendejo mira que ahorita tuviéramos nuestra puta de lujo a nuestra disposición- dándole un sorbo a la refrescante cerveza el viejo Tulio continuo.
-Oye wuey y ¿no has buscado la forma de apoderarte del pinché diario de nuevo? tu puedes entrar a los salones cuando están de receso o en educación física.
-Claro que si maestro eso hice enseguida que me di cuenta que la había pendejeado, pero esta zorrita salio mas lista e revisado como 5 veces sus cosas cuando no están en clase y ya no lleva el diario.
-Si salio lista la zorra pero bueno ya pensaremos en la forma de poderla tener sometida a nuestros caprichos jaja ja salud pinché Juan.
–-Salud maestro, yo a la que le traigo ganas es a su amiga claudia esa zorra me trae pendejo la e visto cuando se da sus buenos atracones con el maestro de educación física en el laboratorio de química es casi una puta profesional mira que da unas mamadas de verga que me daban ganas de entrar y ponerle mi pija también en esos momentos a esa zorrita.
–-Es una puta en potencia yo me la anduve cogiendo el año pasado cuando tenia problemas con 3 materias y la iban a expulsar de la escuela pero yo no fui tan pendejo como tu pinché Juan por cada materia que yo manipularía para que apareciera aprobada le dije que me tenia que dar las nalgas dos veces.
–-Ah pinché Juan como disfrute a esa zorra 6 veces me la lleve al motel y le di unas cogidas que para que te cuento con decirte que hasta ya papacito ya déjame me matas me decía la muy zorra.
-Ja ja ja salud maestro por esa putita que le anduvo dando las nalgas.
–-Puta madre Juan ya me aburrí de estar aquí sentado vamos a dar una vuelta a ver que pollita con esta aglomeración de gente les damos una arrimada de verga.
–-Que buena idea maestro ja ja ja vamos a sobar un poco de culos tanto hablar de putas ya se me paro ja ja ja.
Y así los dos viejos pervertidos se levantaron diciéndoles a los otros dos que regresarían dentro de un rato.
Las dos nenas por fin llegaron a la taquillas viendo que había una enorme fila como de 40 metros de gente para entrar al recinto ferial no quedándoles mas remedio que ponerse hacer cola, pero era tanta la aglomeración de gente que se hacia difícil caminar hacia la taquilla, la cola avanzaba muy lentamente entre empujones y apretujones.
Claudia avanzaba adelante, con Cielo Riveros pegada detrás de ella agarrada a su cintura para no separarse y perderse, muy pronto los machos repararon en el culazo suculento de la colegiala totalmente desprotegido y a merced de cualquiera que se pusiera listo con el pretexto de la aglomeración humana y darse el agasajo de su vida y peor aun como ya estaba oscureciendo, había un gran tramo en la fila en la que pasaba por una zona totalmente oscura, como una boca de lobo y solo al llegar a la taquilla se iluminaba el panorama.
Los machos mas aventados no perdieron el tiempo y se repegaban su bulto empalmado contra las desprotegidas nalgotas de Cielo Riveros esto por que claudia caminaba delante de Cielo Riveros en fila dejando a la angustiada colegiala detrás de ella a merced de los degenerados que se daban el agasajo de su vida con esas duras y suculentas nalgas.
Cielo Riveros repegaba su pecho a la espalda de claudia y la abrazaba por la cintura al mismo tiempo que sudaba frió al sentir las empalmadas vergas que sin ningún disimulo le daban por las nalgotas, quienes no eran otros si no el mismo cholo que le había metido mano unos minutos antes y un amigo de este quienes se habían puesto listos y se adelantaron a los que pensaban hacer lo mismo
Claudia seguía mandando mensajes con el celular a su novio ajena a lo que sucedía detrás de ella con su escultural amiga.
La nena con un hilo apenas de voz le dijo a su compañera a la que ya no veía por la densa oscuridad de esa zona a la que ya habían entrado.
–-Hayy…Clau se están aprovechando detrás de mí unos chavos, se me están repegando mucho y siento como me pegan su cosa en mis pompas.
Claudia sin despegar la mirada del cel le dijo a la angustiada nena.
–-En que quedamos amiga acuérdate lo que hablamos hace rato, compórtate como una chica madura no vayas empezar con tus niñerías, te están manoseando y repegando...y que... no te vas a morir por eso tu demuéstrales que eres una mujer hecha y derecha y que eres indiferente a sus atrevimientos.
–-Si Clau me comportaré como una mujer madura- y tragando saliva se dispuso a soportar los ataques a sus redondas nalgas, abrasando mas a claudia por la cintura, recargando su mentón en el hombro derecho de su amiga a la que solo veía un poco por la luz del celular y cerrando los ojos, dejo a los cholos todo el camino libre.
Estos al ver la pasividad de la colegiala a sus punteadas que le daban con sus empalmados miembros a esas deliciosas nalgotas y amparados por la oscuridad, se envalentonaron más y mientras uno de ellos la tomaba por la cintura dejando el erecto miembro en medio del delicioso nalgón, la empezaba a puntear con mas fuerza, pegado a ese culazo de ensueño, la bombeaba una y otra vez, levantando levemente por momentos ese tremendo culo y ella solo se dejaba hacer.
El otro aprovechado estaba de lado derecho de ella y repegaba su erecto miembro en la pierna de la pasiva nena, mientras una de sus manos se introducía por debajo de la minifalda y comenzó acariciar la suave y tersa piel desnuda recorriéndola una y otras ves metiendo la mano hasta los deliciosos muslos de esa deliciosa piernota.

Cielo Riveros volvió a tragar saliva... gulp...y se abrasaba mas a claudia como si eso pudiera detener a los manos largas que tenia pegados como moscas a la miel detrás de ella y pensaba.
–-"¡Oh Dios mío! ... me están tocando, me están metiendo mano... le daban ganas de gritar con todas sus fuerzas y salir corriendo y huyendo de ese lugar, pero le venían las palabras de Claudia cuando le dijo –-trata de actuar ya como una mujer madura que no te espanten cosas como las de hace rato y reacciones como una niña.
Y tratando de pensar en otra cosa se decía a ella misma –-debo de aguantar, no pasa nada, no pasa nada- se repetía una y otra vez en su mente.
Mientras tanto los cholos seguían con su caliente labor, el que la punteaba arreciaba con sus furiosos embates a las duras nalgotas sintiendo en la punta de la verga un delicioso y agradable cosquilleo como si tuviera un rico orgasmo atorado que no se terminaba y no era para menos ese culazo era un verdadero manjar de reyes y no solo el nalgón toda la nena podía perder y enloquecer hasta a la persona mas ecuánime.
Y el que le recargaba su miembro a la pierna seguía cada ves metiendo la mano mas profundamente de esas deliciosas y suaves piernas, la atrevida mano exploraba cada ves mas por los rincones profundos de esos tersos muslos de la angustiada colegiala, quien solo soportaba todo ese manoseo por la terapia que le había dado Claudia si no desde hacia rato hubiese salido huyendo.
Los cholos no eran de palo y se estaban dando una tremenda calentada con la escultural nena ella podía escuchar sus agitadas respiraciones y sus aberrantes comentarios.
El cholo que la punteaba cada vez estaba mas excitado, todo esa caliente situación lo tenia maravillado que ya no pensaba en los que estaban a su alrededor y empujaba hacia delante para sentir cada vez mas esas formidables nalgas en su erecta verga que estaba mas duro que un fierro y exclamaba con voz aguardentosa.
–-Oh que linda perrita de mierda… mamasota que ricas nalgas, te metería la verga en este culo apretadito que esta pidiendo ya por una buena culeada.
Mientras el otro gandaya ya le manoseaba una de sus redondas nalgas por debajo de la mini introduciendo la atrevida mano en la raya que separa las dos nalgas sintiendo como la nena se sobresalto y dio un respingo, pero a pesar de que cada ves eran mas atrevidas toda esas caricias y magreo, no dijo nada y deja que le sigan haciendo eso y mucho mas.
Los calientes dedos del segundo cholo se introdujeron dentro de su bikini haciéndolo a un lado y buscando su hoyito posterior con dificultad por los bombeos que el primer cholo le daba a la nena y cuando lo localizo sin miramientos le metió todo el dedo empezando un mete saca lento por la incomoda posición.
Cielo Riveros estaba totalmente indefensa y a merced de ese par de manos largas, tanto magreo y manoseo a su deseado cuerpo en esa oscuridad empezó a reaccionar y a sentir un rico cosquilleo en su vagina y un calorcito que empezó a recorrerla lentamente.
Mientras tanto el segundo cholo le restregaba la verga que ya se había sacado del pantalón en la desnuda pierna, la nena cerraba los ojos y apretaba fuertemente los dientes, para no gritar, para su mala suerte comenzó a tocar un grupo de música tropical haciendo peor la situación de la colegiala ya que la música a todo volumen y estridente llenaba todo el ambiente.
Imaginen su situación la oscuridad total, la música a muy alto volumen y los cholos abusando de su escultural cuerpo.
La colegiala en su mente y con los ojos cerrados trataba de reprimir las deliciosas sensaciones que se iban apoderando lentamente de su juvenil cuerpo al mismo tiempo que seguía repitiendo una y otra vez –-debo de aguantar, no pasa nada, no pasa nada debo aguantar soy mujer madura no una niña.
En eso sus brazos instintivamente se soltaron del abrazo que le daba a Claudia por la cintura y puso sus manos sobre los hombros de su amiga extendiendo ambos brazos a todo lo que le daban separándose de ella unos 40 centímetros dejándole a sus manoseadores todo el camino libre de su cuerpo, ya que hasta ese momento los abusadores no habían podido meterle mano a la chica en la parte delantera de su cuerpo por estar ella pegada a Claudia.
El segundo cholo al darse cuenta que tenia el camino abierto en el resto del cuerpo de la nena con la mano que tenia libre y sin dejar de dedearle el culo, le empezó a acariciar los deliciosos tersos y suaves muslos de la nena por adelante y comenzó a meterse dentro de su bikini busco su rajita que para esa hora ya tenia los primeros signos de que se estaba humedeciendo por la caliente situación y eso le dio todavía mas ánimos para ser mas atrevido.
Sintió su rajita apretadita y cada vez más húmeda, dándose cuenta al topar con un obstáculo que la sabrosa colegiala era virgen.
Y acercando su boca al oído de ella le dijo... –-mierda... eres virgen mamazota, si quieres nosotros te podemos hacer el favor vamos a un motel a ponerle jorge al niño.
Al hablarle tan cerca de su cara a la chica le llegaba el tufo a cigarro y alcohol que emanaba de esa boca sucia.
De la boca de Cielo Riveros solo se oía que hacia –-uffff... uuffff ... y con la respiración que empezaba agitársele por tanto metida de mano.
El que la punteaba con su erecto miembro desde atrás al percatarse que la nena ya no estaba pegada abrasada a su compañera dejando totalmente libre el camino al resto de su voluptuoso cuerpo, fue subiendo las dos manos recorriendo ese abdomen plano y suave hasta introducirse por debajo de la blusa con la intención de manosearle las tetas.
Ella al darse cuenta de sus intenciones se contorsionaba con lentos movimientos sensuales, pero era inevitable que esas ansiosas manos se apoderaran de sus suculentos senos.
Mientras tanto Claudia discutía por el celular con su novio por que habían quedado de verse en la feria y este se había ido a otra ciudad a un concierto de rock dejándola plantada.
–-Que poca madre paco y yo de pendeja aquí en la feria pensando que nos veríamos.
–-No estas pendejo que mi amor ni que la chingada y bla bla bla bla.

El primer cholo sin dejar de envestirla con su erecto miembro el tremendo y delicioso nalgón metió ambas manos por debajo de la blusa y al palpar esos turgentes y suaves senos sintió que tenían una mayor carga eléctrica que un transformador de alta tensión, pues el simple contacto sus manos con la delicada piel de esas prominencias lo calentaron aun mas.
Los recorría por todo su redondo contorno lentamente disfrutando su suavidad y turgencia, hasta llegar a los erectos pezones por la excitación que se erizaron cuando el caliente cholo los comenzó a masajear con las yemas de los dedos consiguió que la colegiala tuviera unos escalofríos de placer que hicieron que su entrepierna se humedeciera todavía mas.
La nena sin soltar ambas manos de los hombros de claudia que seguía discutiendo con su chavo, totalmente separada de su amiga con los brazos extendidos al máximo, instintivamente con un movimiento tremendamente sensual contorsiono el cuerpo y arqueo la espalda al máximo levantando las redondas nalgotas entregándose con toda majestad echando su cabeza hacia atrás dejando totalmente a merced de esos lujuriosos su curvilíneo cuerpo a esos mal nacidos.
El que le masajeaba las tetas se acerco a su oído derecho sintiendo el delicioso olor a jabón limpio de su sedoso cabello y aspirando el agradable olor del fino perfume y le dijo
–- ¿Te gusta lo que te hacemos, zorra? que culo y que tetas mamita estrujándole los duros senos y punteando las nalgotas que por el arqueo de la espalda de la nena se sentían majestuosamente placenteras en su erecto miembro,
Cielo Riveros gozaba, cerrando los ojos, concentrándose en la sensación de ser manoseada y amasada soltaba gemidos y suspiros muy suaves era obvio que le estaba agradando, que le metieran mano la enardecía.
A pesar de todo lo que le estaban haciendo ella seguía callada no les contestaba nada a sus manoseadores solo se dejaba toquetear, esto calentaba mas a los cholos por que sabían que tenían el camino libre de hacer lo que quieran con la escultural nena.
Para los dos cholos y la nena en esos momentos tan placenteros todo desapareció la gente a su alrededor, la música estridente del grupo musical, el murmullo de las personas, los gritos de los niños etc. ellos estaban en otra dimensión, en otro lugar en la que solo existía el gozo, el deleite y el placer.
Ella tenia fuertemente cerrados los ojos, notaba cómo el sudor bajaba por su frente, el placer recorría una y otra ves todo su cuerpo enloqueciéndola, la nena mantenía erguida sus nalgotas alzándolas al máximo como desafiando a sus manoseadores a pesar de las puntadas y dedeadas que le daban, su cabeza echada hacia atrás ya descansaba en el hombro del primer cholo que se deleitaba llenándola de saliva el cuello, la oreja y también de electrizantes y deliciosas cosquillas.
El primer cholo quien seguía pegado a su oído le dijo…. –-te quiero coger zorra, y le lengüeteaba la oreja y el cuello llenándola de escalofríos a la nena que sentía la quemante boca del cholo como la ensalivaba.
El miedo desapareció casi por completo oyendo la sarta de leperadas que le decían los excitados machos, y de su boca salieron un par de jadeos, –-ahhhhhhhh ahhhhhh los cuales motivaron mas a sus agresores.
–-Ahhh que bonita te vez asiiiii… disfrutándolo… como una putita, zorra calienta vergas te está gustando verdad puta verás cuando pruebes mi verga...te vas a retorcer de placer."-
Claudia quien en un arranque de enojo con su novio le había colgado la llamada, por un momento volteo su cabeza al sentir que Cielo Riveros ya no estaba pegada a su cintura con sus manos, si no que las tenia ahora sobre sus hombros, pero no alcanzo a ver nada en esa tremenda oscuridad, solo sentía como los dedos de su amiga se crispaban apretando por momentos sus hombros y pensó al deducir lo que pasaba detrás de ella, –-bienvenida al mundo real querida amiga disfrútalo mientras dure y se feliz - al momento volvió a timbrar su celular , era el novio y volvió a la discutidera con el olvidándose de su manoseada amiga.
Cielo Riveros seguía aguantando todo el magreo de los calientes cholos que le decían al oído.
–-Te gusta cabrona ya afloja para que te haces, si esto te encanta golfa vamonos para un hotel y vas a ver puta que vas a gritar con la culeada que te daremos.
Ella solo gemía quedadamente ya excitada y estoicamente seguía ofreciéndoles ese culazo levantándolo al máximo a pesar de las potentes envestidas que le daba el primer cholo y aceptando los apasionados apretones de sus dos manotas sobre sus duros senos.
–-Ahhhhhhhh…ahhhhhhhhh- se oía que salían los gemidos de la boca de la colegiala quien no dejaba de retorcerse sumergida en un mar de sensaciones que la desquiciaban totalmente proporcionándole un gran placer que la hacia perder toda ecuanimidad.
Solo la delgada tela de su mini falda y los gruesos pantalones de mezclilla impedían que la penetrara el primer cholo, la adolescente alzaba sus majestuosas nalgotas y se las restregaba contra las fuertes embestidas del primer cholo, la excitación que le provocaba dejarse magrear y puntear por esos mal nacidos era increíble.
Los cholos seguían manoseándola a placer, estrujándole las tetas, punteándola, masturbándola, ella totalmente perdida y seguía descansando su cabeza en el hombro del primer cholo que le lengueteaba la oreja, la mejilla, el cuello y diciéndole peladeces y majaderías llenándola aun mas de deliciosos escalofríos.
–-Mierda que gran culo tienes perra, para culearte todo el día... tu lo que quieres es que te den buena verga por ese culo mamasota rica.
–-Ohhhhhhhhhh ohhhhhhhhhh- gemía Cielo Riveros abandonando su cuerpo al placer que le prodigaban esos cholos, quienes estaban completamente poseídos por el deseo y la lujuria que les prodigaba la entregada colegiala.
Cielo Riveros arqueaba la espalda, ante la inminente llegada de un delicioso orgasmo, se aferraba a Claudia para no perder el equilibrio y caer, su clítoris estaba erizado por el largo y delicioso orgasmo que la hacia perder la noción del tiempo y del espacio
Con los ojos cerrados y mordiéndose el labio inferior de un solo lado la nena disfrutaba del electrizante orgasmo que la llenaba de sensaciones placenteras , como si nada ni nadie existiera mas que ese momento el cual hubiera deseado que nunca terminara.

Los cholos continuaban deleitándose y abusando de la escultural jovencita parecía que no tenía llenura su ardiente calentura y gozo infinito que les daba las pecaminosas carnes de Cielo Riveros , tenían completamente embutido los sentidos ante esas voluptuosas carnes.
La nena sentía la agitada respiración del primer cholo, su aliento caliente que exhalaba le inundaba la cara y el cuello, el olor que despedía a cigarro y cerveza ya no le molestaba, ahora le embriagaba los sentidos y como si tratara de cloroformo la adormecía.
El segundo cholo le manoseaba la sonrojada e hinchada vulva, volviéndola a dirigir a esas sensaciones tan morbosas que la aniquilaban, le metían mano los lujuriosos cholos a placer, la jovencita solo disfrutaba la humillación a la que era sometida dejándose hacer, el segundo cholo la dedeaba sin pausas haciendo que Cielo Riveros se estremeciera ante la dedeada a sus partes intimas y sensibles.
El primer cholo continuaba estrujando y amasando los duros pechos y punteando las redondas nalgotas, al mismo tiempo que al tener a la nena descansando su cabeza en su hombro derecho, atacaba el cuello desde el lado izquierdo de Cielo Riveros , chupándole el lóbulo de la oreja, lengüeteándole el cuello haciendo estremecer a la jovencita quien se dejaba llevar por las embriagadores sensaciones, se sentía como anestesiada sin voluntad propia, las obscenas palabras la enardecían aun mas dejándola sin poder de reacción.

El trío al ir avanzando la fila muy lentamente no se percataron que estaban a unos cuantos metros de salir de la parte oscura, por tener los sentidos embriagados de placer casi llegaban a una parte donde había dos varandales de fierro a cada lado de aproximadamente un metro de ancho por unos 10 metros de largo que llegaba al final a la taquilla, este servia para que la gente hiciera una fila y evitar que algún listo no quisiera hacer fila y se quisiera colar.
Claudia llego a la zona del varandal y al percatarse puso una mano sobre la estructura y continuo hablando por el cel, y entonces sucedió lo impensado, por la calle llego una ruidosa batucada con unas exuberantes cubanas atraviadas con una espectacular y breve vestimenta danzando ágilmente al ritmo de samba y detrás de ellas un par de carros alegóricos con unas hermosas edecanes que iban regalando a la gente cervezas de lata, playeras de populares equipos de fútbol , gorras ,refrescos de cola etc.
Y entonces se desato una tremenda estampida que por poco y arrastra a Cielo Riveros si no es por que se agarro fuertemente de los hombros de claudia y esta se agarro con ambas manos del barandal dejando por un momento su plática con su novio por el cel.
La gente corría como loca hacia los recién llegados queriéndose llevar alguno de los regalos que repartían las edecanes, debido a que era una multitud muy grande fue como una estampida de búfalos, no respetaron nada, los cholos que manoseaban a Cielo Riveros fueron arrastrados por esta multitud perdiéndose entre la ola humana que los arrastro muy lejos teniendo un brusco y amargo despertar.
–-Pero que bestias son, parece que por una pinché cerveza o una mugrienta playera les vale madre empujarse, y tu como estas que tal la agasajada que te dieron allá en lo oscurito.
–-Hee…ahhh"-…decía Cielo Riveros acomodándose la minifalda y la blusa despertando apenas del letargo que le dio la manoseada de los cholos-esteeee siiii pues me estuvieron punteando por atrás ya sabes como son los hombres de lujuriosos amiga"- (no le quiso platicar que la manosearon a placer por todos lados por pena y vergüenza).
–-Ya vez amiga no es tan terrible como tú pensabas -, y no le pregunto mas detalles volviendo su atención de nuevo al cel, –-este baboso me dejo plantada tu crees prefirió irse con sus amigos que a estar aquí conmigo a ver si sus amigos le dan lo que yo le doy que se joda el pendejo.
Por fin llegaron a la taquilla las dos nenas pagando su entrada y se introdujeron al recinto ferial dispuestas a disfrutar del evento sin saber Cielo Riveros que las sorpresas esa noche apenas empezaban.
Las dos chicas se dirigieron a la entrada de la feria llegando hasta donde estaba un viejo sesentón que recogía las entradas y las rompía poniéndolas en una ánfora, este al percatarse de la presencia de las dos encamables colegialas no paraba de observarlas detenidamente con lasciva, y a propósito con mucha calma iba rompiendo los boletos de las chicas para tardar mas la maravillosa visión de las dos nenas.
El tipo en tanto no paraba de mirarles los pechos y los desnudos muslos, era notorio como su vista recorría lascivamente, la simétrica voluptuosidad de los dos pares de turgentes senos.
Cielo Riveros se empezó a desesperar al ver que el viejo boletero tardaba exageradamente en romper a la mitad los boletos para darles sus comprobantes , volteaba para todos lados no quería verle la cara al sexagenario por que sentía su lujuriosa mirada a su generoso escote.

Claudia seguía entretenida con el cel mandando mensajes y ella desesperada al ver que pasaban los segundos y el viejo boletero no les daba sus comprobantes, en eso volteo su hermoso rostro para ver que pasaba, por que tanta tardanza para romper dos boletos.
Al voltearlo a ver se percato de que el viejo tenia la mirada clavada a su escote sin ninguna vergüenza ni disimulo, se deleitaba viéndole como casi se le salían por el escote esas dos deliciosas tetotas, se notaba a leguas que la desnudaba con la mirada.
El viejo rabo verde al ver que ella lo volteaba a ver, le sonrió y le dijo sin pronunciar ningún sonido solo con el movimiento de los labios –- mamacita que buenas tetas tienes-, para a continuación con la boca le lanzo un asqueroso y vulgar beso.
Ella volteo hacia el otro lado ofendida y sorprendida por el atrevimiento del sexagenario pensando en sus adentros –-pero que se a creído este viejo, si podría yo ser su nieta, ¿y que pensara tenernos aquí esperando toda la noche?"-
El viejo boletero se seguía deleitando la vista con Cielo Riveros que es a la que tenía mas cerca ya que Claudia se había retirado un poco por estar mandando mensajes por el móvil, el sexagenario la observaba detenidamente a la nerviosa nena escrutando cada una de sus curvas deteniéndose en las tetas remarcadas por la ceñida blusa y también en sus muslos que se enaltecían con aquellas botas.
El viejo por fin termino de romper los boletos y acercándose a Cielo Riveros se los dio en la mano atrapando con sus dos sudorosas y arrugadas manos la fina y delicada mano derecha de la chica y diciéndole.

–-Toma diosa si necesitas algo puedes venirme a ver aquí, estoy hasta las 3 de la mañana mamacita-
Ella como era una señorita muy educada le contesto seria –-si señor gracias-
Y jalando a Claudia se dirigieron ambas por fin a la famosa feria.
Atravesaron una breve explanada para a continuación llegaron a unos escalones que daban a un puente improvisado de rejillas metálicas soldado, esto por que para llegar a la zona de la feria había que pasar un pequeño barranco de unos 4 metros de profundidad por 15 de largo
Esto no hubiese sido problema si no que había un detalle en la parte de abajo del puente había una multitud de hombres trabajando cargando y descargando una gran cantidad de cajas de cervezas y rejas de refrescos de unos camiones que entraban por un camino que daba a la carretera y se almacenaban toda esas cajas de bebidas y de ahí se distribuían a todo el recinto ferial.
Cielo Riveros y Claudia iban muy despreocupadas riendo y platicando de x cosa y empezaron a subir los escalones sin dejar de platicar, en eso cuando llegaron a la parte de arriba donde empezaba el puente Cielo Riveros se detuvo en seco y se quedo muy seria viendo hacia abajo donde los cargadores estaban afanados en su tarea descargando un nuevo camión repleto de cerveza.
Claudia se extraño de la repentina reacción de su amiga y le pregunto
–- Que te pasa, por que tienes esa cara tan seria dime.
–-Clau, que no te das cuenta mira ese puente es de rejillas cuando lo pasemos esos hombres de allá abajo nos van a ver todo.
Era muy cierto el puente al estar compuesto por rejillas metálicas daban al observador desde abajo todo un sin igual panorama para deleitarse la pupila sobre todo si alguna chica llevaba minifalda se veía todo dejando literalmente nada a la imaginación.
Cielo Riveros se sentía paralizada como ya hemos dicho antes, su yo santurrona y mojigata se negaba rotundamente a pasar por ahí dejando expuestas a las miradas lujuriosas todos sus bellos encantos a los que estaban abajo.
–-No seas tonta que no ves que ellos están afanados trabajando y ni en cuenta con la gente que pasa por aquí , además aquí casi no llega la luz , en un dado caso que voltearan arriba no verían casi nada ( lo cual no era cierto ya que al estar el puente a solo 4 metros de altura los postes y las luces en el campamento donde se guardaba las bebidas se veía absolutamente todo lo que pasaba en el puente con toda claridad , solo que los cargadores estaban mas afanados en terminar su trabajo para de ahí descansar.
La nena no muy convencida por Claudia seguía dudando si pasar o no y le decía.
–-Que no habrá otro camino por donde podamos llegar sin tener que pasar por este puente.
Ya un poco desesperada claudia le contesto.
–-Nooooo…no hay otro camino coño este es el único que no ves que toda la gente entra por aquí a la feria, mira esas muchachas van cruzando el puente y ni están ahí haciendo un teatro por cruzarlo.
-"Ya… por favor déjate de niñerías y vamos, ándale no quiero estar aquí toda la noche sin ir al reventón que hay allá en la feria.
–-Esta bien ok vamos pues, dijo Cielo Riveros y viendo hacia el piso de la estructura metálica, podía ver a los cargadores que platicaban ya animadamente en circulo contentos por haber terminado ya su pesada jornada laboral.
Dio un suspiro con todas sus fuerzas como para agarrar valor y tomada de la mano de claudia se dispuso a cruzar los 15 metros que la separaban de llegar al otro lado.
Apenas llevaban las dos esculturales nenas caminado unos 5 metros sobre la estructura metálica cuando de pronto el cielo nocturno se ilumino con unos destellantes cohetes luminosos en forma de abanico, haciendo que los cargadores automáticamente voltearan todos hacia arriba , percatándose entonces del formidable espectáculo que estaba pasando por arriba de sus cabezas.
Como si se hubieran puesto de acuerdo Cielo Riveros voltio al mismo tiempo hacia abajo cuando los machos dirigieron sus miradas hacia arriba, viendo estos a las dos exquisitas nenas enfundadas en esas cortisimas minifaldas que mostraban sin ningún obstáculo sus escondidos encantos.
Cielo Riveros se quedo paralizada sin poderse mover por el impacto que le dio ver que su pesadilla se estaba volviendo realidad, dejaba ver a la jauría de machos de abajo sus desnudas y bellamente torneadas par de piernotas y siguiendo la vista todavía mas arriba mostraba en toda su plenitud el apetecible par de nalgotas separadas solo por el pequeñísimo bikini de encaje que se enterraba delicadamente entre ellas.
Todo se veía claramente en toda su plenitud, las poderosas y redondas nalgas y como se perdía el bikini negro en ellas a los machos se les hizo agua la boca ante semejante espectáculo y comenzaron primero a cuchichear, luego unos silbidos, algunos palabra que la elogiaban pero subidas de tonos, y después vio a los obreros que la miraban como si nunca hubieran vista una mujer en su vida.
Varios de los cargadores ya se sobaban el miembro empalmado sobre el pantalón sin dejar de ver para arriba y diciendo entre ellos mismos…-–-no mames wuey….que nalgotas ricas.
Se veía claramente la vulva de Cielo Riveros todavía un poco hinchada por el manoseo de hacia unos momentos de los cholos envuelta en aquel bikini negro –-mira su panocha cabron no chingues yo si se la mamo….pa su madre…están buenísimas las dos zorras esas, y ya mas descontrolada la situación los machos silbaban y gritaban como enajenados
Cielo Riveros estaba roja como un tomate por la vergüenza paralizada y sin poder reaccionar en cambio la desinhibida claudia les sonreía coquetamente y se daba vueltas lentamente sacando mas las nalgotas y abriendo las piernas dándoles a los machos de abajo un tremendo espectáculo, les sonreía con coquetería y les cerraba un ojo al mismo tiempo que les aventaba besos al aire haciendo que los machos silbaran mas fuerte.

Tomando a Cielo Riveros por el brazo la jalo diciéndole –-vamonos o te piensas quedar todo el día ahí enseñando el bikini, y las dos nenas atravesaron el resto del puente y por fin se adentraron a la feria.
Todo era un ambiente muy alegre en la feria al fondo se veían los juegos mecánicos que hacían las delicias de grandes y chicos a pesar de estar las chicas a una distancia como de 200 metros de las atracciones mecánicas se podían oír los gritos de las muchachas por la emoción de estar dando vueltas en la montaña rusa o en el martillo.
A la derecha de las colegialas estaban instalados los puestos de comida y fritangas con los clásicos y molestos meseros insistentes que quieren a fuerza llevarte a cenar a sus puestos de comida a pesar de que uno les diga que no tener hambre.
A la izquierda de las chicas estaban los clásicos stands de cervezas y licores con la infaltable música estridente que a veces llegaba hacer molesto para los oídos por que casi todos los stands ponían la música a muy alto volumen como si fuera una guerra de a ver quien ponía la música mas fuerte.
Más allá de los stands de licores estaba el teatro del pueblo donde llegaban los artistas de renombre a hacer sus presentaciones para deleite de la gente.
Y por ultimo detrás del teatro del pueblo estaba un gran parque natural con un lago en medio, tenía varios caminos donde uno se podía perder fácilmente, bancas de cemento en partes estratégicas para sentarse a platicar, grandes áreas verdes donde el bien cuidado pasto permitía a la gente sentarse para tener un día de campo y casi hasta el final un infaltable kiosco.
Este era el panorama que tenían las colegialas para divertirse hasta que el cuerpo aguantara, las dos estaban viendo hacia todos lados como indecisas de saber para donde ir primero, Cielo Riveros observo un reloj digital como de 2 metros de largo por 1 de ancho con la publicidad de la coca cola y vio que marcaba las 8 de la noche con 10 minutos y verificando su reloj de pulsera tuviera la misma hora que el digital , viendo que estaba atrasado el suyo por 5 minutos pero no dándole importancia voltio a ver a Claudia y le dijo.
–-Bueno guapa y ¿ahora para donde vamos primero?
–-Pues yo tengo sed que te parece si compramos nos refrescos y de ahí vemos para donde vamos.
–-Me parece bien amiga yo también tengo mucha sed vamos-
Las dos nenas se encaminaron por uno de los pasillos que estaban atestados de gente apenas y se podía caminar Claudia iba adelante abriendo camino diciéndole a la gente que se quedaba platicando a medio camino.
–-Peeermiso por favor si no avanza no estorbe, la gente solo se movía un poco y seguían en lo suyo, Cielo Riveros la seguía de muy cerca caminando detrás de ella con una mano agarrada del hombro de claudia para no separarse y con la otra agarrando su bolsa que traía colgada en su hombro donde traía su dinero, su identificación y su celular.
Cuando de pronto la vio y los ojos se le abrieron como dos platos al degenerado por la sorpresa, se quedó como absorto viéndola como a unos 15 metros de él, la nena caminaba con la cabeza agachada como viendo hacia el suelo, esto por que los machos con los que se cruzaba le decían majadería y media y ella trataba de poner oídos sordos a toda las peladeces que le decían, algunos se acercaban a su cara tanto que parecía que le iban a dar un beso, pero no, sólo era para decirle piropos pegados a su oreja subidos de tono.
Por fin, después de muchos empujones, llegaron las nenas a un puesto donde vendían bebidas preparadas y cerveza en vasos desechables de unicel, éste era atendido por 3 chicos de unos 26 años que estaban haciendo preparados algo atareados y por momentos se daban un descanso, ya que por lapsos de unos 5 minutos se quedaban sin clientes, estaban en uno de esos momentos de breve descanso cuando uno de ellos notó a las dos beldades que se acercaban a su puesto, poniendo cara de asombro al notar a las dos hermosas adolescentes.
Uno de ellos no estaba en ese momento, había ido al baño, y el tercero estaba apurado con un pica-hielo haciendo trozos más pequeños.
–-Buenas noches, dijo Claudia al llegar a la barra dándole una media sonrisa coqueta al primero de los cantineros, haciendo que este se pusiera nervioso al tener ante él a dos esculturales nenas, que al estar de frente a él podía apreciar los grandes escotazos de sus vestimentas, dejando los dos pares de redondos senos a tan solo un metro de donde él estaba al otro lado de la barra.
Los ojos le bailaron de un lado a otro, por una parte no quería ser muy obvio en su mirada de recreársela en esos dos pares de redondos senos, pero era imposible no perderse en esos escotazos, que parecía que luchaban por no permitir que escaparan de sus dominios los dos pares de mamables pechos de las chicas.
–-Buu buu eenaass noo noo chee cheess see see ñoo ri ri taass, tartamudeó el cantinero, quien era un chico con unos kilos de más, de lentes de aumento y no muy experto en cuestiones de chicas hermosas.
Tratando de disimular su nerviosismo y su mirada a los escotes de las nenas les dijo:
–-Quéé quéé vaaa vaaaan a too too maar see see ño ño riítas.
Viéndolas a los ojos, pero no pudo sostenerle la mirada a la traviesa Claudia que lo miraba fijamente poniéndolo mas nervioso, al mismo tiempo que él con un trapo hacía como que limpiaba la barra no percatándose de que había un vaso desechable que alguien había dejado ahí con la mitad de cerveza y por la rapidez con que se apuraba a limpiar botó el contenido de ésta, yendo a parar el líquido a un señor que estaba con su esposa sentados en unos bancos frente a la barra platicando.
El chico, al notar lo que había hecho, se llenaba en disculpas tartamudeando aún más con el señor y diciéndole que no pagara nada que la cuenta corría por el, y todo rojo de la cara por su torpeza.
Claudia no pudo reprimir una risita divertida volteando a ver a Cielo Riveros y llevándose la mano a la boca para sofocar la risa al ver al cantinero tan nervioso y rojo de la cara.
–-Ya Clau no te rías, no ves que ya se dio cuenta el muchacho y lo pones más nervioso, él está trabajando ya no te rías.

Pero a la Clau le había dado un ataque de risa que no podía parar y Cielo Riveros al verla que no salía de ese estado le dijo –-ahorita vengo voy a pedir dos refrescos a ver si cuando venga ya te calmaste.
Cielo Riveros al ser una chica que no era burlona ni mala onda le dijo al muchacho, el cual tenia una cara como diciendo trágame tierra, –-por favor nos das dos refrescos de cola
–-Si ,si se se ñoño rita pe permíítatamee.
Y dirigiéndose el torpe cantinero a su compañero que seguía picando hielo en cuclillas le dijo: –-oyee daa dame hieeelo en en estoos vasos.
–-Puta madre gordo ¿qué no te puedes esperar a que lo ponga ya todo picado en la hielera?, le contesto todo mal humorado por el pesado trabajo que estaba haciendo.
El gordo no le contesto nada sólo le hizo señas con la cara, señalándole con movimientos de cejas hacia las chicas.
Éste se levantó de estar encuclillado picando el hielo y lo primero que vio fue el angelical y bellísimo rostro de niña de Cielo Riveros , con esos grandes ojos verdes, para enseguida notar los poderosos y redondos senos de la nena, posando su mirada por unos 5 o 6 segundos en esos dos maravillosos melones duros de la chica.
Ella tenía la vista de lado y hacia arriba, tamborileando con los dedos de su mano sobre la barra esperando las bebidas, el segundo cantinero se acercó secándose las manos con una franela y al ver que la nena tenía la vista hacia arriba y de lado volvió a bajar la mirada de nuevo a sus exuberantes melones, deleitándose mientras se terminaba de secar las manos.
Ella en un rápido movimiento volteó y lo agarró viéndole su escote con la mirada perdida en sus senos, para enseguida volver la vista arriba de nuevo y pensó en sus adentros el por qué siempre atraía a estas clases de gente, acosadores, manoseadores y todo tipo de degenerados (obvio mamacita si te vistes como te vistes y estas tan buena y rica es normal que los machos andarán detrás de ti como moscas a la miel).
En eso sintió que Claudia se ponía a su lado y le preguntaba por las bebidas, diciéndole ella que ya estaban pedidas que ahorita se las servían.
–-Qué andan haciendo tan lindas chicas y tan solas por esta feria, les dijo el segundo cantinero a las dos nenas.
–-Paseando, le dijo Claudia o qué ¿no podemos?
–-Claro preciosas yo solo preguntaba porque es muy raro ver a dos hermosas señoritas solas en este paraje lleno de lobos (machos).
–-No estamos solas mi hermano y mi primo están allá esperándonos, dijo claudia mintiéndole al chico.
Y a continuación le preguntó, sonriéndole sensualmente –- ¿ya están nuestras bebidas?
–- ¿Las bebidas? dijo el chico –-ah si las sodas… apúrate pinché gordo con las bebidas de las señoritas.
–-Aquí tienen hermosas damas sus refrescos, no se preocupen no es nada la casa paga, para nosotros es un honor que nos vengan a consumir a nuestro negocio.
–-Gracias, gracias dijeron las dos chicas y con su cadencioso andar se fueron adentrando de nuevo en el barullo de la feria bebiendo sus refrescos.
El cantinero le dijo a su amigo el gordo, viendo a las dos nenas y el delicioso meneo de sus cortas faldas: –-Gordo no cabe duda, quien inventó la minifalda merece que le demos una medalla universal al mérito!.
Mientras tanto en otro lugar de la feria, no muy lejos de donde andaban las ricas nenas, se oía la voz aguardentosa del cojo Juan.
–-Pero qué culoooooo…qué buen culo mamita!!, le decía a unas adolescentes que tuvieron la mala suerte de pasar cerca de donde estaba el degenerado, que andaba dando vueltas junto con el maestro Tulio viendo la multitud de muchachas que había en la feria.
Las nenas, en respuesta al vulgar y sucio piropo, le dirigieron una mirada mezcla de temor, asco y desprecio, acelerando el paso para alejarse del par de viejos pervertidos, alcanzando éstos a oír que una le gritaba al cojo Juan –-viejo cerdo, seboso, repugnante!!, causando la risa de los dos viejos pervertidos.
–- Desgraciado Juan, qué putañero eres con las chamacas, yo nada más me conformo con verlas y recrearme la vista, estas lindas chamacas están muy lejos de nuestro alcance.
–-Si maestro lo se, pero qué más da decirles lo ricas que están si ya se también que estas pulgas no brincan en nuestro petate, somos demasiados viejos para estas linduras.
–-Así es pinché Juan, ven vamos a mear que ya tanta cerveza me lleno la vejiga, ya siento que me van a reventar los huevos jajajajaja.
………………….
–-Qué padre esta todo el ambiente! ¿ya ves tonta? y tú que no querías venir, poniendo a tu mama de pretexto, de lo que te ibas a perder.
Cielo Riveros pensaba en sus adentros "si de lo que me iba a perder, primero la manoseada que me dieron en la fila, luego el viejo de los boletos casi haciéndome una proposición indecorosa y para rematar el espectáculo que les dimos a los cargadores en el puente, si de haber sabido que pasaría todo esto mejor me quedo en mi casa"(y lo que falta todavía preciosa que eso no es todo).
-"Pero bueno ya estoy aquí y ahora al mal tiempo buena cara, ¡arriba ese ánimo Cielo Riveros y diviértete que estás en una feria, no en un velorio!"… se dijo a ella misma, tratando de olvidar los malos ratos y tratando de divertirse de ahí en adelante.
–-Heyy qué te pasa? ¿Por qué te quedas callada?
–-No, por nada, es que pensaba que tienes razón amiga, ya estamos aquí hay que divertirnos qué caray sólo se es joven una vez.
–-Así se habla nena! ya era hora de que despertaras de ese letargo de monja que era un obstáculo en tu vida, mira déjame ir al wc que ya me anda, espérame allá en donde están montando el toro mecánico y regreso en unos 10 minutos.
–-Ok Clau allá te espero, no te tardes.
……………….
–-Ufff que alivio!, dijo el profesor Tulio saliendo del baño de varones, qué descanso!, pinché Juan ¿tú no vas a mear?
---No maestro, yo todavía no tengo ganas.
–-‘Ta bueno Juan, mira vamos por otras chelas que la noche apenas empieza.
–-Oiga maestro y el inspector Vicente ¿no nos estará buscando?
–-No lo creo Juan ese pinché viejo depravado está más entretenido con las chamacas que están baile y baile arriba de la tarima , ni se acuerda de nosotros, además cualquier cosa que me llame al celular y listo tú no te preocupes Juan, vamos por las chelas.
Así llegaron a uno de los varios puestos donde vendían cerveza y licor preparado, mientras el profesor Tulio hacía fila para pagar en la caja, el cojo Juan le daba un sorbo a la cerveza y veía todo el barullo de la multitud de gente de todas las edades que iban y venían.
Cuando de pronto la vio y los ojos se le abrieron como dos platos al degenerado por la sorpresa, se quedó como absorto viéndola como a unos 15 metros de él, la nena caminaba con la cabeza agachada como viendo hacia el suelo, esto por que los machos con los que se cruzaba le decían majadería y media y ella trataba de poner oídos sordos a toda las peladeces que le decían, algunos se acercaban a su cara tanto que parecía que le iban a dar un beso, pero no, sólo era para decirle piropos pegados a su oreja subidos de tono.
El cojo Juan alcanzó a verla por un breve lapso de unos 4 segundos por que de nuevo la nena se volvió a perder en la multitud, lento como era para reaccionar se quedo unos 10 segundos pensando si sería ella o era una visión, no estaba muy seguro por que sólo la había visto de perfil por unos breves segundos y porque la nena llevaba la cara agachada, haciendo más difícil identificarla.
Volvió la mirada hacia donde pensó que iría, calculando por el paso que llevaba, dejó el vaso de cerveza en el piso, agarró una silla y la jaló junto a unas cajas de madera que contenían partes de los juegos mecánicos y que no las habían retirado de ahí, con dificultad se subió primero a la silla y después a gatas se subió a las cajas de madera, cuando se incorporó tenía una vista mas panorámica a unos 2 metros del nivel del suelo más lo que él tenía de estatura al pararse sobre sus pies, enseguida la alcanzó a ver ya unos 6 metros más adelante de donde la había visto primero, porque a la chica se le dificultaba también avanzar por tanta gente, sólo que ahora la vio de espaldas.

El cojo se llevó ambas manos a los ojos y como no creyendo lo que sus ojos veían se los tallaba con las manos, para enseguida dirigir la mirada a donde caminaba Cielo Riveros quien, con un cadencioso andar de caderas, movía las soberbias nalgotas y pensaba el viejo ya emocionado:
–- Tiene que ser ella, esas nalgotas yo las conozco, tiene que ser ella, se volvía a repetir; nunca ni en sus mas remotos sueños hubiese imaginado que la vería ahí en la feria y al parecer, para su buena suerte, creía que andaba sola, el viejo sentía que ese día la suerte estaba de su lado.
El viejo reaccionó cuando el profesor Tulio lo saco de sus pensamientos diciéndole:
–-Y ahora… ¿qué quieres trabajar de chango en un circo pinché Juan? ¿qué madres haces allá arriba? te vas a caer, más con la pata chueca que tienes.
El cojo, reaccionando, se bajó todo apresurado bufando por el esfuerzo que tenía que hacer por su obesidad y por la cojera, se acabó de bajar y le dijo al profesor Tulio todo emocionado:
–-Ufffff… ufffffffff .. ma… ma… maestro, no me va a creer a quien acabo de ver que pasó y solita.
–-A quien pinché Juan ya suéltala no la hagas cardiaca.
–-A la… Cielo Riveros … maestro, la vi que pasó sola caminando dirigiéndose hacia allá, señalándole con la mano la dirección,
–-¿Quéééé? ¿estás seguro pinché Juan? no chingues!! ¿y cómo anda vestida?
–-Pues trae una blusa azul celeste, una mini-falda blanca muy cortita y anda con unas botas hasta la rodilla, fue lo que le alcance a ver maestro.
–-Espérame aquí, y el viejo Tulio salió corriendo apresurado hacia donde le había dicho Juan, estaba tan ansioso por volver a ver a la nena que por el solo hecho de saber que ella estaba ahí y solita sentía una emoción como hacia tiempo no había sentido este degenerado, a sabiendas que si era cierto y se encontraba con ella, como estaban fuera de la escuela y con su tremenda labia ya se la imaginaba convenciéndola para llevarla a un motel y cogérsela.
El viejo se pasaba entre la gente sin pedir permiso, casi empujando a las personas, los que lo veían pensaban que a lo mejor le habían llamado por el celular para decirle de una emergencia en su casa.
El viejo por más que apresuraba el paso y veía con ansiedad hacia delante de él, no veía a nadie con las ropas que le había dicho el cojo Juan y ya dudando un poco pensaba…"¿no será que este hijo de la chingada me agarró de pendejo?, si es así lo voy a mandar a la chingada y no le vuelvo a invitar otra pinché cerveza más".
Ya un poco cansado se recargo en un poste para agarrar aire, en eso vio una escalera de unos 3 metros que estaba recargada hacia arriba en la pared de un local encadenada e iluminándosele una idea se subió para tener un mejor panorama y pensaba… "si ya no la veo me regreso y mando a la chingada al pinché cojo por agarrarme de pendejo".
Se subió y sí tenia un gran panorama de la feria desde esa altura, se agarraba con una mano de la escalera y la otra mano se la llevaba a la frente tapándose los ojos para evitar el reflejo de la luz del poste que tenia cerca.
Pero por más que buscaba con la mirada, con la esperanza de verla, no la veía y sentía por dentro un sentimiento de frustración al sentir que la palomita se le iba de sus garras como el agua se escapa de las manos.
Y peor aún, había un gran carro alegórico al que varios hombres iban empujando, pero se había atorado en un desnivel que había en el suelo y los trabajadores hacían grandes esfuerzos para sacarlo y moverlo de ahí a su lugar donde quedaría guardado, su molestia era que le robaba gran parte de la visión de la feria y no sabia si la nena estaba del otro lado.
Cuando ya estaba apunto de bajarse y mandar a la chingada todo, vio que los trabajadores por fin movían el armatoste y se dijo –-"si no esta del otro lado me regreso y de puro coraje me pongo hasta la madre con cerveza".
Lentamente el carro alegórico se fue moviendo y como si viera el viejo una visión celestial por fin la localizo, la jovencita estaba pagando a un vendedor de fresas con crema, sus bellos ojos veían con alegría el rico postre que había comprado, el viejo le leyó los labios cuando dio las gracias al vendedor y le regalo una sonrisa con esos carnosos labios y lentamente se dirigió con su rico movimiento cadencioso de nalgas hacia donde estaba el toro mecánico, lugar donde había quedado de verse con Claudia que había ido al baño.
El viejo Tulio estaba cautivado viendo ese culazo que, al retirarse su dueña, lo movía en forma bastante provocativa, como incitando a que los machos se lo tocaran, con esa redondez perfecta de su cola, haciendo la jovencita, perder la cabeza a más de uno en la feria, incluyendo al viejo Tulio.
Éste, como si fuera a cobrar una herencia, se bajó rapidísimo para dirigirse hacia donde iba la jovencita e interceptarla, llegando al suelo el viejo iba emocionado, en su lujuriosa mente ya se veía en el motel con la deliciosa jovencita metiéndole la verga por todos lados.
Sintió que como en dos pasos llegó a donde estaba el vendedor de las fresas con crema y, con el corazón casi saliéndose del pecho, el caliente viejo se dirigió hacia donde ella se había encaminado, la vio delante de él a unos 10 metros y apresuró más el paso al alcanzar a divisar cada ves más cerca el vaivén de sus caderas y el sube-baja de los cachetes del culo al andar, era sencillamente de infarto.
En eso se le acerca al viejo un vendedor de billetes de lotería que se le planto de frente diciéndole –-ándele patrón llévese un cachito, juega para hoy en la noche y bla bla bla… ya saben cómo son de insistentes estos pinches vendedores de lotería….Deteniendo al caliente viejo un momento en la persecución de su presa
–-No joven, ahorita no por favor, déjeme pasar que llevo prisa.
Pero el molestoso vendedor insistía en sus argumentos de que le comprara un cachito, de que ese era su día de suerte, que no le diera la espalda a la fortuna, etc.. etc.
El viejo caliente, al no poderse deshacer del molestoso vendedor, se canteaba de lado no queriendo perder de vista a la nena, veía con angustia creciente cómo poco a poco se alejaban más esas apetitosas nalgas que prometían, a quien las tuviera, un mundo infinito de placer y lujuria.
Si no hubiese aparecido ese vendedor ya casi la hubiese alcanzado, pero no, ahí estaba sin poderse deshacer del billetero y la distancia que ya le había recortado lentamente se volvía a separar cada segundo más de él.
Su angustia creció cuando vio que la nena daba vuelta a una esquina y desaparecía de su campo visual, eso lo desquicio y dándole un empujón al billetero le dijo:
–-¡Te dije que no cabrón, déjame de estar chingando pendejo!.
Y acelerando el paso de nuevo trató de darle alcance, pero su buena suerte hasta ahí había llegado; poco antes de llegar a la esquina donde dio vuelta la nena se topó con una gran multitud de gente que venían en sentido contrario, no dándole ningún resquicio por donde pudiera pasar para seguir su persecución.
Era la gente que salía del palenque musical el cual, por haberse presentado un famoso cantante, se había abarrotado, engrosando toda esa multitud el, ya de por sí hasta el tope de gente, recinto ferial.
Por más que pedía permiso el lujurioso viejo, era más que imposible seguir por ese camino, fue demasiado para él y pateando el suelo se fue rumiando su derrota, regresando a donde había empezado su loca persecución, viendo al cojo Juan sentado en una ingiriendo cerveza esperándolo.
–-¿Qué pasó mi maestro? ¿por qué esa cara que tiene, que se lo lleva el demonio?.
El viejo Tulio dirigiéndose al mesero le dijo:
–-Hey tú, tráeme una corona bien fría.
–-Tenías razón… vi a la hembrita pinché Juan, no era una visión la que viste, y no mames está más buenota la condenada… estoy con lo que me platicaste que te la cojiste, y al verla hoy vestida con esa poca ropa enseñando casi las nalgas y las tetas, me entraron unas ganas de meterle la verga hasta por las orejas, pero cuando casi la alcanzaba se me perdió y estoy que me lleva la chingada Juan.
–-Calma… calma profesor, a esa pollita la vamos a rastrear en toda la pinché feria y la vamos a encontrar, así sea lo último que hagamos.
–-Salud Juan, ahorita nos tomamos esta cerveza y nos vamos a buscarla hasta por debajo de las piedras.
Mientras tanto nuestra hermosa protagonista estaba parada en donde el toro mecánico, que hacia las delicias de chicos y grandes, esperando a su amiga; el toro mecánico tenia alrededor un colchón para amortiguar el golpe de los que caían y tenia un barandal que rodeaba para que nadie se quisiera subir sin pagar.
La nena se puso a esperar a Claudia sintiendo que ya había tardado más de los 10 minutos que le había dicho, veía su reloj y le inquietaba el ver que de su amiga ni sus luces, volteaba a ver a otro fulano que tiraba el toro mecánico divertida cuando en eso sonó su móvil, sacándolo apresurada de su bolsa de mano viendo que era Claudia, quien le dijo que iba tardar un poco por que el baño eran nada mas tres retretes y había una larga fila para poder pasar a usarlos, que no se desesperara.
Acabó de comerse sus fresas con crema y volteando hacia todos lados buscó un bote de basura para depositar la caja y unas servilletas que usó, no divisó ningún bote, en eso vio frente a ella un letrero que decía "deposite su basura aquí" y se dirigió allá, pero para su desconcierto no había nada, sólo el letrero.
Con una mano en su mentón la nena pensaba "bueno y en dónde están los botes de basura", ella por su pulcra limpieza y educación era incapaz de dejar la basura al piso y acercándose a una señora que tenia un carrito de venta de dulces le preguntó por los depósitos de basura.
–-Pues…en la tarde vinieron los de la limpieza niña y se los llevaron para vaciarlos porque ya estaban llenos y desde esa hora no los han traído.
–-¿Y en dónde habrá uno para echar esta basura señora?.
–-Allá muchacha en donde están esos andamios desarmados, señalándole la señora, hay una vereda y como a unos 30 metros está un depósito general.
–-Gracias señora, muy amable; y hacia allá se dirigió la confiada chica, notando según se adentraba a esa zona que le dijo la señora, que el lugar estaba casi en penumbras y que casi no pasaba nadie por ahí, por el camino notó que estaban estacionados varios campers, o como les dicen aquí en México casa rodante, de los empleados de la feria distribuidos por todo el terreno.
Sólo pasaban por ahí, muy de vez en cuando, trabajadores de la feria y uno que otro que, al notar que en esa zona casi no había gente y estaba un poco en penumbras, aprovechaba para orinar y no ir a hacer fila a los atestados baños.
La preciosa jovencita, al notar que ese lugar estaba un poco solitario y tranquilo, se quedó ahí, quería por un momento tener un poco de tranquilidad y olvidarse de todo el barullo de la feria mientras regresaba Claudia, además de que tenia una buena vista desde esa zona del toro mecánico y podría ver a Claudia cuando llegara e ir a su encuentro, esto porque donde se puso estaba unos 30 metros atrás del toro mecánico.
El sonido de los grillos y las ranas la relajaban, reconfortándola envuelta en esa paz de la naturaleza.
Al estar casi en penumbras esa zona donde se había quedado la jovencita, no podía ser distinguida por alguien que estuviera en la zona del toro mecánico, si volteaban a ver esa parte sólo verían oscuridad y penumbras, ya que la poca iluminación que había donde estaba Cielo Riveros llegaba del reflejo de las luces de la feria, lo que no pensó la chica fue en lo peligroso de ese lugar para una nena tan buenota como ella, porque no sólo no la podrían ver si le pasara algo, sino que tampoco oírla si gritaba, por el estridente música de donde estaba el toro mecánico, que amenizaba el ambiente.
Sus hermosos ojos verdes poco a poco se habituaron a la oscuridad y unos dos minutos después ya distinguía más, apareciendo poco a poco ante sus ojos cosas que cuando llegó no las veía, el sonido de los grillos la llenaba de paz y tranquilidad.
Ya mas relajada la sensual jovencita, descansando sus oídos del escándalo de la feria y del barullo de la gente, viendo que no le quedaba otra cosa que hacer más que esperar, se recargó en una rústica y pesada de madera que al parecer era de los mecánicos de la feria y servia para darle mantenimiento a las máquinas; la nena, poniendo sus brazos sobre la estructura, inclinó su cuerpo en escuadra y su cabeza sobre sus manos subiendo una de sus piernas sobre una piedra que estaba en el piso, haciendo que la mini se le subiera un poco dejando ver esa torneada piernota un poco mas arriba, a continuación al descansar su cabeza y sus hombros sobre la parte superior de la , arqueó la espalda sobresaliendo aún más ese gran trasero, marcando aún más la curvatura de sus firmes y redondos glúteos lo que la hacía ver muy deseable.
Todo esto confiada porque pensó que nadie la veía en ese solitario lugar, sólo que estaba equivocada, 4 pares de ojos que estaban ya habituados a la oscuridad detrás de ella a unos 8 metros, en la parte todavía más oscura, ocultos, la miraban atentamente, casi sin parpadear, con lujuria y deseo.

La confiada nena bostezó y cerró sus ojos queriendo darse un pequeño descanso a tanto ajetreo, no percatándose de que estaban esos 4 pares de ojos que la veían atentamente en la oscuridad, libidinosamente viendo a esa hermosa criatura que tenía ese delicioso culo respingado y al tener su cuerpo en escuadra y sus piernas sin flexionar, la de por si muy corta mini se alzó un poco más, dejando a la vista de esos ojos que la escudriñaban en la oscuridad la descubierta parte baja de sus redondas nalgas, y los dueños de esos ojos se recreaban la vista con el delicioso espectáculo de la curvilínea chavita.
La nena de repente se levanto de su posición estirando los brazos hacia arriba y bostezando, volteando a ver a sus espaldas, dando un grito de espanto al ver a 4 asquerosos y desarrapados viejos muy cerca de ella a tan solo un metro, todos ellos con una edad promedio no menos de 58 años, barrigones, arrugados y todos andrajosos y sucios por común denominador, la chica retrocedió unos pasos alertada por la presencia de los cuatro viejos.
–-Hay Dios mió pero que susto me acaban de dar, no los oí acercarse- dijo la jovencita a los viejos que estaban fascinados con ese par de nalgas de concurso y veían con lujuria como se traslucía el sexy bikini de la nena.
Estos viejos estaban vestidos con ese tipo de overoles de mezclilla que son pantalón abajo y arriba sólo unos tirantes al hombro con el logotipo de la feria "atracciones Pegaso" llenos de grasa y playera también embarrada y oliendo muy fuerte a sudor, estos señores eran mecánicos que se encargaban de armar los juegos de la feria y al estar todo funcionando bien se dedicaban a dar vueltas en la feria y a beber cerveza en cantidades industriales.
Había uno que al parecer era el jefe de todos ellos porque cargaba un radio de comunicación walki talkie enganchado a su sebosa cintura, desde donde se oían las transmisiones de la gente de la feria.
–-Ramírez…. Ramírez….Repórtate a base central cambio…. biiiiii
–-Aquí…. Ramírez…… enterado ahorita voy para allá cambio"-….biiiii
El viejo le bajo el volumen al radio mientras la curvilínea chiquilla notó que era un viejo muy horrible, traía los tirantes del overol amarrados a su sebosa cintura, llevaba una playera sin mangas que dejaba apreciar unos grandes tatuajes de dragones a lo largo de los peludos y sudados brazos, el cuello se veía claramente cómo estaba perlado de unas asquerosas verrugas y sobresalía del pecho una mata de canosos pelos.
Llevaba la camisa toda traspirada de sudor, su cara toda llena de arrugas, unas horribles y gruesas patillas canosas que se juntaban con la abundante barba y los bigotes, haciéndolo ver mas siniestro, la boca le sonrió a la curvilínea chiquilla notando ella la inexistencia de dientes y con partes de la encía de un repulsivo color negro como si tuviera podrida esas zonas de la boca.
Y para terminar la descripción de este lujurioso viejo, una alborotada mata de pelos sucios y canosos en su cabeza, el viejo se acariciaba asquerosamente la peluda barriga pues tenia la playera a media barriga levantada, haciendo que Cielo Riveros le diera le diera un poco de asco al verlo tan cerca de ella y llegándole el tufo a sudor, ella sentía que ese sucio hombre le provocara rechazo y deducía que lo mas seguro es que llevaba sin ducharse al menos cuatro días
Todo lo opuesto de Cielo Riveros que era una chavita con una imagen limpia, fina, delicada, joven y muy hermosa, sin el más mínimo asomo de vulgaridad, además de noble y de buenos sentimientos de ella emanaba siempre un agradable olor a pulcra limpieza.
Contrastaban enormemente era como querer comparar un cristalino rió de aguas limpias y puras, con un caudal de aguas negras de un drenaje definitivamente nada que ver.
A Cielo Riveros le resultaba un hombre repugnante de aspecto pero no dejo ver su rechazo hacia los viejos, disimuló el asco que le daban, el viejo no le contesto a la jovencita, estaba extasiado viendo el despampanante y juvenil cuerpo de la colegiala, la recorría de arriba abajo con la mirada y no disimulaba su morbo, deteniendo su vista en el escote del pecho donde se mostraban obscenamente sus manoseables pechos que parecían desbordarse por el generoso escote, firmes, redondos como unos melones y con unos delicados pezones que se marcaban claramente sobre la delgada tela de la blusa, y las piernotas de la chica que sobre salían por debajo de la corta minifalda, Cielo Riveros se había dado vuelta y estaba de frente a ellos.
Y después de un silencio que a la colegiala se le hizo eterno por fin hablo el viejo con una voz aguardentosa le dijo.
–-¿qué anda haciendo una nena tan rica por aquí solita?
Ella tratando de dominar su incomodidad por las descaradas miradas dijo:
–-Discúlpeme señor estoy esperando a mi compañera que fue al baño.
La nena tratando de no dejar ver su creciente nerviosismo se agarraba su lacio y sedoso cabello que le caía de lado tapándole permanentemente muy sensualmente uno de sus bellos ojos verdes y se lo hacia para arriba solo para que en un momento volviera a caer de nuevo en su ojo izquierdo.
Su voz sonó para los viejos dulce e inocente y lo que le gusto al viejo es ese trato de "usted" signo inequívoco de temor y respeto sin duda la cosa iba por buen camino.
Don Pedro notaba que la colegiala tenia ese angelical y hermoso rostro de niña inocente ya que no le embarnecia su faz todavía, pero su cuerpo mostraba los atributos y las redondeces de una exuberante mujer y pensaba -mira nada mas qué chamaquita tan sabrosa me vino a caer.
El viejo tomando las cosas con calma tomo su lata de cerveza que llevaba en la mano le dio un trago y tiro la lata vacía al piso dando al mismo tiempo un asqueroso eructo y llevándose la percudida camisa a la boca para limpiársela.
Cielo Riveros hizo un gran esfuerzo para reprimir las arcadas de asco que le venían, todo era demasiado asqueroso para su pulcra educación y limpieza.
A continuación el viejo destapando otra lata le pregunto.
–-Cómo te llamas ricura.
–-Cof...cof…Cielo Riveros señor… Cielo Riveros , tosía la nena tratando de reprimir las arcadas de asco que le venían.
–-Uumm, bonito nombre para una nena tan rica, yo soy Pedro Ventura mamita.
Extendiéndole el sucio viejo su sudada mano, dudando un par de segundos la jovencita en darle la suya o no y al final cedió porque ante todo ella era una chica educada.
Casi se desmaya del asco al sentir sobre su fina y bien cuidada mano con un delicado manicure la piel de las palma de las mano del viejo toda pelada como si tuviese hongos pero enseguida la retiro.
Los otros viejos estaban a unos 3 o 4 metros dejando que su jefe hiciera su lucha con la escultural jovencita y esperando que también les tocara algo.
–-¿Quiénes son ustedes?..Preguntó un tanto temerosa la nena al viejo, tratando de visualizar bien de quiénes se trataba.
El viejo queriéndose lucir con la chamaca le dijo alardeando.
–-Somos los técnicos encargados de los aparatos de la feria mi reina, si no es por nosotros nada funcionaría y no habría feria mamacita ¿cómo ves?.
La nena aparte del asco que le daba ese asqueroso viejo, sentía una gran antipatía al ver su tosquedad, su prepotencia y su machismo que mostraba ese decrepito viejo.
Ella sentía que el ambiente se volvía cada ves mas pesado y queriéndose despedir y salir de ahí le dijo al viejo.
–-Buuuenoo don Pedro fue un placer conocerle, me tengo que ir a buscar a mi amiga.
Pero el viejo no estaba dispuesto a dejarla ir así de fácil nada más, con su enorme experiencia en mujeres ya había detectado en Cielo Riveros a una nenita ingenua, inocente una presa que no iba a dejar escapar así de fácil nada más y máxime que llevaba meses sin tocar a una mujer, esto por que era un viejo feo, asqueroso y muy prepotente y todas las muchachas lo rechazaban.

-De estas mamazotas no me caen todo los días tengo que llevármela allá atrás y meterle la verga, a esta chamaca que esta que se cae de buenota, pensaba el viejo .
Y mientras la chica se volteo para tomar su bolso y retirarse, el viejo movió su seboso cuerpo cerrándole el paso a la chica y diciéndole.
–-Por que te vas ricura si la noche es joven y podemos pasarla bien divirtiéndonos, conozco un lugar donde se ve una vista espectacular de la ciudad halla detrás de los campers si quieres vamos y lo compruebas por ti misma mi reina.
Ante las mirada morbosa de don Pedro que no apartaba la vista de las redondeces de ese manoseable cuerpo que a estas alturas sentía como lo enardecía de deseo solo que se contenía por que quería ir a la segura , llevar a la chamaca a un paraje mas alejado y solitario y hacer de las suyas.
La veía esperando ansioso su respuesta y como también la brisa nocturna le revolvía el cabello haciéndola ver más sensual.
La nena se quedo unos segundos callada con la vista hacia el suelo meditando su situación, ahí estaban esos viejos con no sabia que negras intenciones con ella, queriéndola llevar hasta atrás de los campers un lugar muy alejado y apartado, pero también se dio cuenta que su situación no era muy segura que digamos.
Estaba en un lugar que aun que tenia a la vista la zona del toro mecánico que era lo ultimo de la feria, esos viejos si querían se la podrían llevar arrastras hacia lo profundo del terreno a una zona mas oscura y sin nadie que pudiera ayudarla.
Aquí por lo menos puedo salir corriendo hacia el toro mecánico y pedir ayuda si intentan hacerme algo pensaba , y es que también se sentía intimidada por ese viejo y tenia mucho miedo contrariarlo y a saber como reaccionaria .
En eso se oyó por la radio del viejo.
–- …… … reportarse cambio.
–-Aquí base cambio.
–-Necesitamos uno de tus muchachos que vaya a reportarse con el contador Eduardo Medina en la gerencia.
–-Ok ahorita lo mando cambio y fuera.
El viejo dirigiéndose a sus subalternos dijo con voz autoritaria que intimido todavía más a la nena.
–-A ver tú, pinché concho.
–-Si señor dígame.
–-Vete para la gerencia, ya oíste y cuidadito con hacer una pendejada por que ya sabes cómo me las gasto.
Ella veía toda la escena y pensaba.
–-Este viejo se ve que es de los que no les puede uno decir que no, están acostumbrados a mandar y ser obedecidos-- y le entró mucho temor y más cuando el viejo se volvió hacia ella esperando su respuesta.
–-¿Entonces qué mi reina? ¿vamos allá donde te dije? vas a ver que bonita se ve la ciudad.
Ella notaba claramente cómo el viejo hacía esfuerzos para mantener la compostura, la desnudaba con la mirada y sentía como si la toqueteara con los ojos el degenerado.
–-Eeesteeee no lo creo seeññorr, mi amiiigaa vendráá pronto poor mi y sii no me encuentra me buscaráá con la policía.
Toda nerviosa le dijo y esperando una reacción violenta del viejo, pero no, para su buena suerte no pasó nada, el viejo le dijo.
–-Ok reina si no quieres no, pero por lo menos brinda con nosotros y te vas, ¡no nos vas a despreciar!-- extendiéndole el viejo una lata de cerveza.
Ella se sentía angustiada por que ella no tomaba bebidas embriagantes y era la segunda vez que iba a dar la contra al intimidante viejo.
–-Hay don Pedro, qué pena con usted… pero… yo no bebo.
Y por segunda vez rogó al cielo que ese viejo no reaccionara violentamente, estaba muy tensa esperando la respuesta del horrible viejo.
–-Sólo una y te puedes ir- insistió el viejo volviéndole a extender la lata de cerveza ya destapada que echaba espuma por la boquilla.
Ella se sentía muy intimidada y de haber estado en sus manos hubiera accedido a lo que le pedían, pero el tomar licor o cerveza era algo mas allá de sus fuerzas, definitivamente era algo que no aceptaría nunca por voluntad propia.
Y toda nerviosa le contestó al viejo.
–-Si yo tomara esas bebidas don Pedro no me negaría a la que me ofrece usted, pero no puedo, de verdad gracias.
–-Ok dijo el viejo no hay problema, ya vi que no quieres, no insistiré mas mi reina.
Y agarrando la cerveza se la empino dándole un gran sorbo quedándole la barba y el bigote puercamente chorreándole del espumoso liquido.
La ingenua nena, creyendo que ya había pasado el peligro, pensaba retirarse de ahí, sentía la abrumadora necesidad de irse, diciéndole al viejo con muy evidente temor.

–-Bueno don Pedro ahora si me retiro, muchas gracias por todo.
–-Pero por que insistes en irte mamacita no puedes ser tan descortés, nos hemos portado bien contigo, le decía el viejo con la cara muy seria y en un tono intimidatorio como regañando a la escultural jovencita.
–-No de verdad, ya son las 9:10 y me tengo que ir, suplicaba la rica chamaca.
El degenerado viejo le clavaba la mirada morbosamente al generoso escote que dejaba a la vista más de dos terceras partes de esos redondos senos y cómo se marcaban perfectamente en la delgada tela sus dos pezones erizados, por los nervios de la situación en la que estaba y también por que había empezado a descender la temperatura ambiental abruptamente, afectando a la nena por ir muy destapada.
El degenerado sentía un enorme deseo que apenas y podía contener, de saborear esas exuberantes carnes de la adolescente, de mamarle esos turgentes senos sin años encima, de besar esos gruesos y deliciosos labios, de acariciar esos muslos y el perfecto y redondo trasero de la jovencita.
Ella sintió como si el viejo le estuviera haciendo una radiografía, como si ese cerdo se la estuviera imaginando ya desnuda, eso hizo que sintiera en la cara un calorcillo de vergüenza y tuvo que bajar la mirada avergonzada.
La chica no se equivocaba en su percepción pues eso era precisamente lo que pasaba por la mente de don Pedro, eso y otros pensamientos de índole más sádica.
El viejo, viéndole descaradamente y morbosamente los redondos senos, le dijo autoritariamente
–-De ninguna manera mamacita, nos tienes que acompañar hasta que se acabe la cerveza.
Ella, resignada, aceptó y pensaba nada mas que acaben estos viejos la cerveza me voy de este solitario y horrible lugar, la culpa la tengo yo, quién me manda a meterme aquí, si Claudia me dijo que la esperara allá en el toro.
Muy inquieta jugaba con su celular mientras los vejetes tomaban como sedientos, en eso le llego un mensaje de Clau que le decía que todavía la esperara otros 15 minutos por que se habían quedado sin agua los baños y estaba por llegar una pipa, según les habían dicho, para echarle a los baños.
Guardando su móvil en su bolsa contaba desesperada cuántas latas faltaban para que se acabaran e irse de ahí donde la retenían.
Al fondo oía como el animador del toro mecánico invitaba a las parejas a pasar al centro a bailar mientras le daban mantenimiento a la bestia mecánica.
Y volviendo la vista a la pista veía con alegría como las parejas bailaban animadamente, olvidándose por un momento de su precaria situación, volteándose y dándoles la espalda a los viejos, quienes se regodeaban con las redondas y duras nalgotas y cómo se marcaba por sobre la delgada tela de la mini blanca el sensual y muy femenino bikini negro de encajes entallado que se amoldaba perfectamente en esas protuberantes y portentosas nalgas, con extraordinaria claridad se le traslucía todo, su bien formado trasero era una verdadera invitación al pecado, los viejos miraban con insistente procacidad sus enormes y deliciosas nalgas.
La gente, al fondo, bailaba alegremente a ritmo de música duranguense, muy animadamente y que contagiaba, a la nena le dieron muchas ganas de estar allá, más cerca de donde se sentía el ambiente muy padre.
Pero sólo fueron 2 ó 3 canciones que se oyeron porque en eso el animador interrumpió la bailadera diciendo.
–-Bueno amigos pues en este momento mientras arreglan el toro, unas chicas me han reclamado que no hemos puesto, desde que abrimos, música romántica ya que ellas quieren bailar con sus novios y como el cliente manda, ¡a bailar se ha dicho! ¡échale mi dj!.
Y al ritmo del tema de titanic la pista las parejas de enamorados abrazados románticamente bailaban.
La chiquilla dio un gran suspiro y se acordó de su novio, anhelando en ese momento su presencia, cerrando sus ojos se imaginaba con él bailando románticamente esas baladas.
En eso oyó la aguardentosa voz del viejo diciéndole.
–-Mamita ven para acá, ¿por qué no bailamos?- le propuso tendenciosamente don Pedro con cara de emoción.
La nena sintió que el estomago le daba un vuelco del asco, de que ese viejo arrugado, feo, lleno de carnes flácidas y mal oliente quisiera bailar con ella y precisamente cuando las melodías eran baladas y tener que soportar su asquerosa cercanía, su mente y su cuerpo se negaban rotundamente acercarse a ese hombre en esas condiciones.
–-Yooo yooo don Pedro no noo puueedoo –toda nerviosa le contestó Cielo Riveros .
El viejo dándole una bocanada al cigarro que fumaba insistió.
–-¿Que pasó mi reina? si es sólo un baile, nada más- y presionándola le dijo tajantemente – mira muñequita he sido tolerante contigo pero mi paciencia tiene límites y no querrás conocerme encabronado.
Ella se acordó de que era la tercera vez que lo contradecía y al ver esa horrible cara con ese gesto duro y osco le infundió temor, no queriendo saber como reaccionaria si lo contradecía por tercera vez.
Y terminó aceptando la invitación, rogándole al cielo que pasara rápido el tiempo, pues ya quería salir de ahí.
–-Estaa biiieeen don Pedro bailaré con uusteed - dijo la nena toda tensa con la cara agachada y quedándose ahí parada esperando que el viejo tomara la iniciativa.
El rostro del horrible viejo no disimulaba el torbellino de pecaminosos deseos que le bullían en la mente –-je je je je vas a ver palomita qué rico lo pasaremos.
El viejo era de estatura media y Cielo Riveros al ser una chavita de una buena estatura, con 1.60 más el tacón de sus botas, rebasaba los 1.65, para el viejo era excelente porque él andaba por los 1.70, casi a su altura le quedaba la jovencita.
El viejo, no pudiendo esperar más para sentir ese cuerpo de infarto, tomó las manos de la nena y las pasó sobre sus hombros mientras que él dirigió sus manos a la desnuda, al aire y sexy cintura de la colegiala; al poner las sucias y rasposas palmas de las manos sobre la suave piel de la chica sintió lo pequeña y perfecta que tenia esa parte de su anatomía, el tacto de sus manos directamente con su tersa y desnuda piel de la jovencita hizo estragos en el degenerado, calentándolo aún más, pudo comprobar la suavidad y tersidad de su juvenil piel propia sólo de una jovencita.
La atrajo contra su cuerpo toscamente, pegándola a él, la nena era un manojo de nervios, la deliciosa proximidad de la niña produjo en él un efecto inmediato y su verga empezó a levantarse.
Ella, con asco, comenzó a sentir en su entrepierna ese miembro duro y caliente y así pegados como si fueran dos enamorados comenzaron a danzar suavemente al ritmo de las lentas baladas que se tocaban desde la zona del toro mecánico.
El viejo, sin dejar de verle descaradamente los redondos senos por tenerlos tan cerca, le pregunto.
–-¿y cuántos años tienes? mamacita.
–-18 señor, le respondió con una voz temblorosa, ésto por que el viejo sin ningún disimulo le repellaba en su entrepierna su empalmada verga.
La bella adolescente se sentía muy incomoda por las descaradas repelladas del vejete a su entrepierna con esa empalmada verga, no sabía que hacer ni cómo actuar ante semejante situación bochornosa, con una creciente timidez intentaba fingir que no se daba cuenta de la acción abusiva del vejete.
–-Pues si eres una jovencita muy hermosa y con un cuerpo muy sexy mamacita.
–-Graaaciiaass seeñoor—contestó Cielo Riveros toda nerviosa por el vulgar piropo, y sin poderle sostener la lujuriosa mirada bajaba sus ojos toda intimidada.
El viejo la observaba con lujuria contenida por las agradables sensaciones que sentía al tener ese juvenil y voluptuoso cuerpo de la curvilínea jovencita; estaba extasiado y no era para menos, ella veía con asco como le sonreía el asqueroso con satisfacción de tenerla en sus brazos.
–-¿Sabes? me pareces una chica muy atractiva, estás buenísima, le dijo el viejo lujurioso.

–-Gra….gracias don Pedro, agradeciéndole al vejete el vulgar cumplido, sin atreverse a alzar la vista para verle a los ojos al viejo.
Por momentos el viejo la apretujaba más contra él queriendo que esas embriagadores sensaciones que lo desquiciaban no terminaran, su voz se hizo temblorosa y ronca, era evidente que apenas podía contener su emoción.
–-Qué rica estás mamacita, eres un forrazo como esas que salen en la tele- le decía, a la par que le daba una asquerosa lamida a la mejilla de la chiquilla.
La chica respondió a esto con una mueca de repugnancia a la ves que suplicaba.
–-Por favor… Don Pedro, me ahoga, por favor… no me apriete tanto- pero el viejo lejos de hacer caso, la apretaba mas contra él mientras le acariciaba con esas manos peladas el breve talle de la nena, el viejo a pesar de la abrumadora calentura que sentía, tomaba las cosas con calma, disfrutando cada segundo de ese delicioso momento y siguió con sus caricias en la cintura y la espalda desnuda, haciendo que a la chica le dieran cosquillitas en su sensible piel.
continuara …..
Suplicaba la mamasota, sabiendo que esas sensaciones que la empezaban a abrumar no llevaban a nada bueno; ahorita que todavía no estaba entregada a esos placeres, se conocía muy bien y sabia adonde la llevaría todo eso si despertaba su ardiente temperamento, le horrorizaba visualizarse en una cama cogiendo con ese asqueroso viejo y sus compinches.
Cielo Riveros 9
Mientras tanto la claudia ya aburrida de estar haciendo fila en los atestados baños veía por fin que ya estaba próxima a entrar a estos para calmar su atestada vejiga que le protestaba con dolores el por que no vaciaba su contenido.
–- Uffffff por fin ya no aguanto las ganas de orinar, pensaba en sus adentros sin imaginarse por la situación que pasaba en esos momentos su amiga Cielo Riveros .
Mientras tanto allá en un lugar alejado y casi en penumbras de la feria solo alumbrado por la luna llena que majestuosa se asomaba esa estrellada noche, nuestra hermosa protagonista vivía una situación angustiante al tener que estar soportando al degenerado viejo de don pedro quien estaba fascinado y casi babeaba por las tremendas redondeces de la escultural jovencita y por ese aire de ingenuidad e inocencia que se desprendía de ella.
La tenia bien agarrada por ese fino y firme talle que estaba al aire, donde se apreciaba su vientre plano sin un gramo de grasa y coronado por su sexy ombligo que atrapaba hipnóticamente la atención.
El sátiro se la comía con los ojos mientras su mente maquinaba ideas perversas para con la hermosa nena
–-Yo…yo…. ten... tengo que irme, por favor, suélteme-- suplicaba la mamasota con esa deliciosa voz melosa e inocente
–-No…cosita rica, hasta que acabe la tanda mi reina.
El degenerado viejo aprovechando la pasividad de la encamable jovencita la apretaba contra el haciéndola sentir su dura erección en su entre pierna de la mamasota.
Para acabarla de fastidiar, la tanda una tras otra de las románticas baladas parecía no tener fin, ante la desesperación de Cielo Riveros y deleite del viejo y de sus compinches que se agarraban la verga, sobándosela sobre su overol, al ver como su jefe se volvía cada ves más atrevido con la deliciosa chamaca con la que bailaba.
Luego le dijo el viejo sin despegar la mirada de los mamables senos de la jovencita con total morbosidad
–-¡Qué hembra tan infernal eres mamacita! desde que llegaste te hemos estado siguiendo, no pienso en otra cosa que en meter mi verga en ese divino culo- todo esto sin dejar de apretarla contra él, sintiendo ella la empalmada verga.
El viejo estaba embelesado ante las dos tremendas tetas de la jovencita que, al tenerlas tan cerca, se quedaba endiosado con esos erguidos y rotundos senos que prometían un sin fin de placer y gozo para quien los tuviera.
Sólo escuchar las palabras del viejo descarándose ya en sus sucias intenciones con ese vulgar lenguaje, el cuerpo de la chica se tensó y notaba cómo una sensación de miedo, casi de terror, crecía dentro de ella incontroladamente.
–-Por favor… don Pedro, no me falte al respeto, yo no le he dado motivos para que me diga esas vulgaridades-- dijo la curvilínea jovencita con voz tenue y tensa a la vez.
El viejo se aventó una terrorífica carcajada al escucharla, el escalofrío fue total, el miedo era insoportable, sus comentarios morbosos le asustaban más a cada segundo que pasaba, no sabia que hacer, ese viejo la tenía bien agarrada sin soltarla ni un segundo, no tenia muchas opciones.

Dueño de la situación el asqueroso viejo le dijo.
–- ¡Pero si tú mamasota nos diste entrada para que te faltemos al respeto, zorra caliente vergas!
Ella desconcertada por la aseveración del viejo y cada vez más asustada por la caliente situación le contestó
–-No… no… sé a qué se refiere señor-, dijo con voz muy quedita.
–-¿Ah no?... putita rica ¿no lo sabes? y cuando tu y la zorra de tu amiga se pararon a medio puente enseñándonos todo, sin dejar nada a la imaginación no es eso provocarnos y decirnos que quieren una buena verga de macho, me dejaste caliente desde que te vimos arriba del puente enseñándonos todo mi reina, dime no es eso provocar mamasota.
Cielo Riveros sintió que la cara le ardió al oír estas palabras del viejo, al mismo tiempo que el corazón le daba un vuelco, las impactantes palabras del asqueroso viejo fueron como un cubetazo de agua fría, ¿que podría argumentar en su favor? dijera lo que dijera esos horribles viejos no le creerían, el viejo tenia razón su acción en el puente la condenaba.
Y no soportando ver la cara lujuriosa de triunfo del viejo al notar que no tenía argumentos de defensa, la escultural jovencita bajo la mirada agachando la cabeza, sus hermosas mejillas adquirieron un color rojo.
Y sintiéndose cada vez más caliente y dueño de la situación al ver su pasividad sus roñosas manos que le acariciaban la suave y tersa piel del talle hacían cada vez círculos más grandes abarcando mas de esa deliciosa y suave piel al tiempo que le preguntaba.
–-Que pasa zorrita ¿no me vas a contestar?
Ella solo con su voz muy quedita apenas y visiblemente nerviosa murmuro –-heee eesteee yooo yooo, sus hermosos y grandes ojos verdes parpadeaban muy rápido evidenciando su tremendo miedo que sentía la nena.
El lujurioso viejo le levanto la voz fuertemente asustando aun mas a la jovencita
–-¡Queeeeee no te oigo zorra dime tengo razón o no puta calienta vergas!
Solo el silencio de la voluptuosa jovencita fue más que obvio que no sabía, que no tenia que contestar toda las evidencias contundentes la condenaban.
El horrible viejo de don Pedro más que satisfecho con su reacción le dijo
–-El que calla otorga mi reina y tomándola del mentón la obligo a levantar la mirada diciéndole –“entonces vamos a disfrutar estas nalgotas y estas chichotas que ya me anda por mamarlas mamasota.
Al levantarle el viejo el mentón a la escultural jovencita noto en sus ojos un par de lágrimas y su carita una expresión de mucho miedo que solo excitaba más al degenerado de don Pedro.
La nena veía con horror que todo se le empezaba a ir de las manos, no veía como saldría de esa caliente situación, sabía por experiencia propia de otras situaciones similares por las que había pasado, que a esos degenerados ya nada los detendría hasta obtener lo que querían.
Estaba muy tensa y nerviosa, sentía que cada vez se hundía en un profundo agujero y nada ni nadie la podrían salvar.
La deliciosa jovencita, en un último intento de recomponer todo ese mal entendido, suplicó al sátiro viejo muy angustiada.
–-Nooo don Pedro, lo del puente fue una equivocación, déjeme explicarle.
Pero el viejo al saber que tenía a su alcance ese exuberante, fresco y juvenil cuerpo de la adolescente, ya no la oía y sucumbió a su deseo irrefrenable de poseerla, sin importar si para ello debía forzarla.

La chiquilla al mismo tiempo trataba de separarse de él, mas de pronto una terrible sensación de pánico se apodero de la jovencita, cuando sintió que las manos que le estrechaban su cintura, bajaron hacia su redondo y respingado trasero y lo agarraron fuertemente; como la tela de la mini era muy delgada, sentía claramente como hundía sus dedos en sus duras nalgas y hacía tanta presión que la vergota del viejo la sentía mas grande en su pelvis.
Paralizada de miedo sólo pensaba en sus adentros.
–Oh dios mío… me… está… tocando. ¿Qué hago?
El viejo acariciaba las majestuosas curvas de las nalgas con las dos manos, introdujo sus arrugada manos bajo la mini, la piel rugosa y áspera de sus viejos dedos no recordaban haber tocado algo tan suave, tan delicado como la piel de esa criatura.
–-Jooooodeeeeerr pero qué clase de culo tienes mamasota, eres una diosa-- las manos del viejo no paraban de estrujarle las nalgotas a la chica, se las masajeaba con las descascaradas palmas de la manos bajo la minifalda sintiendo la deliciosa piel desnuda y suave de la nena.
Ella, reaccionando, le daba de golpes en el pecho al viejo tratando de que la soltara, pero para el caliente y rudo sexagenario esos golpes eran caricias y seguía con su manoseo al formidable trasero de la colegiala, la muy corta minifalda y por ser de esas de vuelo facilita en mucho el manoseo del viejo.
Aprovechaba para poner su mano en las tersas piernotas, acariciaba la suave y tibia piel de esos muslos hasta llegar a la redondez de sus nalgas y, sintiendo la turgencia de esas tiernas carnes tan hermosas, embriagado por el perfume que emanaba de esa criatura, se tenía que contener para evitar una corrida.
–-Noooooo suuuéeelteeemeeee pooor faaaavor, no haaaaga esooo.
Pero el viejo estaba embrujado por ese trasero formidable, suave, duro, redondo.
–-Qué culote tan rico tienes mamasota, para meterte la verga una y otra vez.
Ella se sentía impotente e indefensa, estaba en las garras de ese viejo caliente, no podía hacer nada, él tenia mucha más fuerza que ella.
Ella lo miraba a los ojos suplicándole con la mirada que parara pero el viejo se seguía deleitando con esas espectaculares nalgotas; estaba fascinado con la redondez y textura de ese par de juveniles y soberbias nalgotas.
Entonces las arrugadas y peladas manos se comenzaron a deslizar lentamente hacia arriba llegando pronto a la desnuda y breve cintura de la nena, pero no se detuvieron ahí y siguieron su delicioso viaje por la suave piel de la chica, con las claras intenciones de llegar a las redondas tetas de la jovencita; el rostro del viejo mostraba una mueca enfermiza, sus ojos se estaban poniendo vidriosos y hasta se le caía la baba y no era para menos imagínense tener varios meses en ayuno sexual y de pronto tener en sus manos un forrazo de jovencita.
..."n-no... n-no… e-espere...n-no...no
La aterrada colegiala entonces tomó las manos del viejo por las muñecas deteniendo por un momento su caliente avance a la altura de las costillas, en una reacción natural de defensa, pero para el rudo viejo esto no era nada, considerando que tenía mucha más fuerza que ella, para él eso no era obstáculo sino todo lo contrario, eran caricias el sentir las suaves manos de la chica en sus muñecas.
A continuación el viejo inclinó su arrugado y barbudo rostro hacia el cuello de la joven pegando su asquerosa boca mal oliente a cerveza y cigarro en el muy sensible y esbelto cuello de la nena; dándole una succión con los labios, sacó su asquerosa lengua y la pasaba por el muy sensible cuello de la voluptuosa jovencita, quien cerro los ojos ante las deliciosas sensaciones que la invadieron notando cómo se le erizaron todo los vellos de su cuerpo.
El viejo sintió claramente esta reacción en la piel de la chica porque sus manos continuaban sobre los costados de la nena y esbozó una media sonrisa siniestra, sabía que iba por buen camino con ese bombón de chamaca y continúo con más énfasis chupeteando el sensible cuello de Cielo Riveros , llenándola de múltiples escalofríos.
–-Ooooh…Nooo…ooooohhhh… don Pedro, por favor deténgase.
Suplicaba la mamasota, sabiendo que esas sensaciones que la empezaban a abrumar no llevaban a nada bueno; ahorita que todavía no estaba entregada a esos placeres, se conocía muy bien y sabia adonde la llevaría todo eso si despertaba su ardiente temperamento, le horrorizaba visualizarse en una cama cogiendo con ese asqueroso viejo y sus compinches.
–-Estás muy buena mamasota y se ve que te encanta la verga, ahorita te resistes pero al rato vas a estar gritando de placer como una zorra.
Y a continuación arremetió de nuevo al sensible cuello de la nena, haciéndola sentir escalofríos y sensaciones agradables, esa lengua y esa barba que le atacaban el cuello sin pausas.
La chica sentía cada ves más que ese viejo conseguiría sus propósitos al estar ella en desventaja, luchaba contra ese viejo que la forzaba y contra su propio cuerpo que poco a poco aceptaba las arremetidas de ese asqueroso viejo, notando que el asco y el rechazo a ese degenerado viejo disminuían y en su lugar se apoderaba de su cuerpo una agradable sensación de placer que, como una droga, luchaba por adueñarse de su voluntad.
Pero ella continuaba luchando a pesar de estar en desventaja, alzó sus manos y las puso en el pecho del viejo y trataba de hacer fuerzas para separarse de él, éste disfrutaba la lucha que le quería dar la nena, esto le dejó las manos libres al viejo que, sin pérdida de tiempo, la agarró del breve talle sin ninguna delicadeza y se re pegó de nuevo al voluptuoso cuerpo de la nena sintiendo ella la dura tranca del viejo en su entrepierna.
El viejo, sonriendo, le miraba su carita espantada y viéndole esos gruesos y carnosos labios se le despertó un gran deseo de besarlos, entonces aferrado a la cintura de la colegiala trató de alcanzar esa deliciosa boquita con su asquerosa lengua.
–-Nooo, déjeme...nooo-..viejo…degenerado…-- luchaba ella forcejeando y
moviendo su cabeza para ambos lados, tratando de evitar que el asqueroso viejo le robara un beso de sus frescos labios.
Ella, así dominada como estaba, sólo podía mover su rostro de un lado a otro tratando de evitar tan repugnante beso.
–-Mamacita estás muy buena y yo muy caliente, déjame darte un beso.
–-Nooo…. suélteme….don Pedro….suélteme-- pero el viejo más la apretaba del talle y buscaba afanosamente robarle un beso a la sabrosa adolescente.
Mientras tanto el maestro Tulio y el cojo Juan se paseataban por los stands donde se reunían los jóvenes y se metían a ellos buscando entre la turba de jóvenes que bailaban y se embriagaban, a la escultural Cielo Riveros , saliendo este par de degenerados de uno de los últimos stands de jóvenes con cero resultado de la mamasota.
–- Parece que se la trago la tierra a la zorra, decía el maestro tulio
–-Así es maestro ni sus luces de la chamaca y mire que la hemos rastreado como perros y nada, decía el cojo Juan.
–- Ya vimos todo estos puteros donde llegan chamacos y no esta, vamos ahora por rumbo a los juegos damos una vuelta y de ahí nos vamos por donde esta el toro mecánico, de que tenemos que hallarla la tenemos que hallar dijo el maestro tulio y hacia allá se dirigieron.
Cielo Riveros sentía una impotencia tan grande; el viejo era demasiado fuerte para ella y el hedor a cerveza que provenía de su aliento era insoportable, su lengua asquerosa, en un momento en el forcejeo, lamieron los labios de la chica, los cuales ella mantenía muy apretados para evitar que el viejo metiera su asquerosa lengua entre ellos.
–-Deejeemee pooor faavooor don Pedro- y entonces sucedió lo impensable, el borracho viejo se cansó del forcejeo y la soltó un momento, tratando de agarrar aire; esto porque habían tenido mucho trabajo armando los juegos y casi no habían descansado, aparte de que habían estado tomando cerveza desde temprano sin parar ni un momento, y todo eso vino a repercutir en ese momento del forcejeo con la encamable colegiala.
La nena se desconcertó al sentir que de repente el viejo la soltaba y tratando de alejarse de él fue dando pasitos hacia atrás al mismo tiempo que se bajaba y se acomodaba la mini, ya que por el manoseo del viejo se le había subido hasta la cintura, hasta que se topó con la mesa de madera donde había estado recargada cuando llegó.
El viejo al notar esto se acercó de nuevo a ella no queriendo que la sabrosa presa se le fuera a huir, y puso sus dos sucias y peludas manos sobre la mesa a ambos lados de la nena, dejándola encerrada en medio de sus brazos y sin nada de espacio para maniobrar; él jadeaba tratando de agarrar aire.

–- uffff uffff-- respiraba todo agitado, estaba muy lejos de terminar la caliente situación, sólo era una breve pausa.
Los otros viejos, divertidos por todo lo que estaba pasando, decían burlonamente.
–-Ja ja ja compadre, te salió respondona la palomita, jajajaja ya te cansó, si quieres te ayudamos ya estás viejo para estos trotes.
Herido en su orgullo les contesto el degenerado don Pedro.
–-Están pendejos… ahorita van a ver que puedo con esta chamaca y otras que me pongan enfrente.
La nena mientras tanto al ver que el viejo la tenía aprisionada con sus dos peludos y sudados brazos a cada lado de la mesa se dio vuelta dándole la espalda para que no viera que se sentía atrapada, craso error, y se quedó quieta, petrificada, apenas y respiraba, el miedo la tenía paralizada.
El degenerado viejo sintió que la sangre le hervía de deseo y que nuevas fuerzas se reinyectaban en su seboso cuerpo al sentir lo cerca que estaba de la colegiala y ver las desprotegidas y tremendas nalgotas indefensas a sólo unos centímetros de él, sólo era cuestión de dar un muy cortito paso para sentir esas soberbias nalgotas en su tieso miembro, esa espectacular visión le dio renovadas fuerzas para continuar su ataque a la indefensa jovencita.
Podía ver el viejo cómo esas voluptuosas nalgotas temblaban por el gran miedo que la nena sentía, ella tenia ambas manos en su cara y sollozaba quedadamente, estremeciéndose toda.
El degenerado viejo veía con lujuria cómo la corta mini falda se levantaba por efecto del tremendo y respingado trasero de la adolescente, que muy apenas lograba cubrir, la verga la tenia como fierro por efecto de contemplar las suculentas curvas de la jovencita.

Y pensaba el degenerado --¿cuándo yo tendría a una mujer así de buenota?, al menos por las buenas nunca.
El viejo poco a poco recuperaba las fuerzas y al estar encorvado agarrado de la mesa con ambas manos, no le quitaba la vista al apetecible culazo de la nena.
Eso lo hizo ponerse muy enardecido al tener la visión de esas pecaminosas carnes, donde se apreciaba claramente el pequeñito y sexy bikini que luchaba estirándose al máximo y que hacia resaltar aún más las duras y redondas nalgas.
Don Pedro tenía la verga al rojo vivo y sentía que le latían los testículos por la excitación de tener esa maravillosa visión.
-¡Qué culazo puta!, ahorita vas a sentir la verga de un macho caliente- dijo el abusivo viejo con voz carrasposa.
La nena seguía de espaldas, arrinconada, sollozando, entonces el viejo se comenzó a incorporar y sin despegar la vista del tremendo culazo que tenía al frente, se comenzó a despojar del overol cayendo al piso, dejando al descubierto un repugnante calzoncillo que alguna vez fue blanco y que cubría las partes asquerosas de ese desagradable hombre.
Se podía ver como el calzoncillo en la parte de enfrente la gran erección que tenía el degenerado viejo, parecía una carpa de circo, la tela del calzoncillo se podía apreciar claramente manchas de humedad, seguramente líquido preseminal que el muy degenerado había secretado al estar manoseando a la sabrosa colegiala y sentir sus deliciosas curvas y firmes carnes.
Sniff…..sniff….snifff…sollozaba la colegiala, con espasmos alternados, al imaginarse lo que vendría a continuación, sus intenciones de esos viejos eran claramente obvias, al haber recibido el primer ataque del viejo Pedro, al estar conciente de su situación sus finas manos que estaban en su hermoso rostro le comenzaron a temblar de miedo, los latidos de su corazón se aceleraron y su mente la ubicaba en una terrible realidad, no había salida , alejada totalmente de la gente en ese paraje solitario casi oscuro y perdido no había nadie que pudiera rescatarla de esos degenerados.
Salvando la breve distancia que lo separaba de la jovencita y, sin poder esperar más el viejo, se abalanzó sobre ella apoyando su tremendamente erecto miembro en las redondas y duras nalgas de la jovencita.
Al haberse despojado del grueso overol de mezclilla y quedarse en calzoncillo solamente, la percepción de las agradables sensaciones al pegarse al curvilíneo cuerpo de la deliciosa chica se multiplicaron al 300 por ciento para beneplácito del degenerado
Sintiendo en su verga, al contacto con las nalgotas, una placentera sensación que lo invadió como nunca antes había sentido, de unas ricas y duras nalgas que de tan combadas las sentía como algo tremendamente desquiciante.
Sus peladas y sucias manos le rodearon por el fino y breve talle que conformaban ese vientre plano casi perfecto, estrechándola hacia él y acariciando su suave abdomen, recorriéndolo, mientras el tieso miembro se hundía en el culazo de Cielo Riveros .
Ella, al sentir que el viejo se le arrimó y le apoyo su palpitante verga, abrió los ojos como platos y dio un respingo por la sorpresa de la acción del abusivo viejo.
–-Aaaaahhh , ahhhhhhh deeeteengaaasee doon dooon Pee Peedroo, nooo ¿quéé haacee? suélteme.
–-Ya no aguanto mamasota, me tienes calientísimo, ya no te resistas y disfrútalo.
Ella bajó sus manos y las puso encima de las manos del viejo que, aparte de deleitarse con las redondas nalgas punteándolas y repellandole su erecto miembro, disfrutaba de la tersa y suave piel del sexy abdomen de la nena; la chica puso sus manos encima de las manos del viejo tratando de parar esas mórbidas caricias a su juvenil cuerpo, pero sus finas manos eran arrastradas por las calientes y rasposas manos del viejo que no dejaban de recorrer la fina y tersa piel de la chica, al mismo tiempo que su trasero recibía una y otra ves las estocadas del viejo.
Decir que era una exquisitez, sería poco decir, era una cosa maravillosa, sentir ese fabuloso cuerpo ahí forzándolo contra su voluntad y abusando de ella.

La claudia salía del baño público por fin y se dirigió adonde había quedado de verse con su amiga, al mismo tiempo que le llamaba desde su móvil para avisarle que ya iba hacia allá.
–- Que raro, no me contesta, pensaba la escultural Claudia al mismo tiempo que deducía que por la música ella no oía su móvil y sin mas preocupaciones se dirigió hacia el toro mecánico.
El viejo tenía tan gran erección que sentía que iba a romper el calzoncillo, su verga que estaba totalmente agitada, bramaba por entrar en esas exuberantes carnes.
–-Nooooo noooo- musitaba Cielo Riveros con esa voz aniñada y tratando de apartarse contorsionando su culazo, en un desesperado intento de parar los embates del viejo, logrando sólo que al viejo lo calentara más todavía ese movimiento.
Y poniendo su boca muy cerca de su oreja derecha de la chica le dijo.
–-Aaahh mamasota, te voy a culear, te voy a violar, te voy a llevar conmigo y nadie te encontrará, vas a ser mi mujer, perra calienta vergas, hasta que me harte de ti.
La chica totalmente espantada por las palabras del viejo musitaba.
–-sniff sniff... por favor no ...no por favor… p..oo..r.......fa......v...oo..rrr....nooooo, suplicaba angustiada.
En medio de toda esta vorágine, la chica oía que su móvil sonaba una y otra vez y pensaba.
–-Hay dios, seguramente es Clau, ha de estar preocupada por mi y yo sin poder escapar de estos viejos-- eso le daba mucha tristeza porque ya se imaginaba siendo secuestrada por esos asquerosos viejos y siendo violada hasta que se hartaran y más tristeza le daba por su mamá que seguramente se moriría al no volver a saber de ella y se preguntaba por qué tenía que sufrir eso, por qué sufrir siempre de los abusos de los hombres.
Don Pedro continuaba embistiendo implacablemente con su verga endurecida las firmes nalgotas de la chica, a la vez que le atacaba con su barbona boca el hombro casi desnudo de la nena, lamiéndoselo y recorriéndolo con su rasposa lengua hasta su cuello y su oído para enseguida regresar de nuevo a su desnudo hombro, en un ir y venir que llenaban de escalofríos y que exasperaban a la nena.
–-Noooooooooooo……paaaareeee……dooon ….Peeeedrooo.
El viejo seguía deleitándose con la chamaca, sintiendo en su erecto miembro la desquiciante dureza y curvatura de ese juvenil culazo, al mismo tiempo que su apestosa boca no paraba de lamerle los casi desnudos hombros ya que la blusa que llevaba Cielo Riveros al ser casi un top y en los hombros sólo dos delgados tirantes, la dejaba toda desprotegida.
Con una habilidad que sólo se da cuando la adrenalina de la calentura se inyecta en el cuerpo, usando su apestosa boca y la rasposa lengua, el viejo luchaba contra el elástico del delgado tirante de la blusita de la chica, buscando un resquicio por donde meter la lengua y así poder jalar el tirante por los hombros y deslizarlo por su brazo, con la intención de dejar desnudos los senos de la jovencita, cosa nada fácil ya que la blusa al ser elástica y muy pequeña se estiraba al máximo por las protuberancias de la niña y ambos tirantes estaban muy tensados.
Esta labor hubiese sido no tan difícil si el viejo hubiese tenido su dentadura completa, ya que con los dientes hubiese tomado el elástico y con un movimiento de cabeza lo hubiese arrastrado al hombro para deslizarlo hacia abajo, pero así con la lengua era una labor complicada, pero eso al viejo no le importaba, él tenia paciencia, además de que sus fosas nasales eran inundadas continuamente con el exquisito aroma del perfume que emanaba del cuello de la nena.
Mientras tanto las sucias manos, con la piel de las palmas horrorosamente descascaradas, continuaban su labor de acariciar ese abdomen plano con las manos de la chica encima arrastrándolas sin poderlas ella detener y por momentos la apretaba hacia él para sentir todavía más fuerte, en su tieso miembro, la punteada que le daba al sabroso culote de la chica.
–-Dééjeemee… dééjeemee don Peedroo pareee aaaahhhhh…deténgase…aaaaahhhh-
–-Aaaaaaahhhhh…. Aaaaaaahhhh-- gemía la colegiala en cada nuevo repellón que le daba la vergota del viejo, ya que sin ninguna consideración hacia movimientos salvajes con su cadera de atrás para adelante y la punteaba fuertemente, sintiendo y absorbiendo el impacto las redondas nalgas de Cielo Riveros .
El viejo cada ves mas desquiciado dirigió una de sus manos hacia arriba tratando de alcanzar los turgentes senos de la chica, ella muy angustiada al darse cuenta de sus intenciones, con sus dos manos las puso sobre la del viejo que subía haciendo fuerzas para detener la invasora, a sabiendas de que si esas manos llegaban a sus redondos senos y, peor aún, a sus hipersensibles pezones, todo acabaría para ella.
La reacción de ella es lo que quería el lleno de mañas y degenerado viejo, quien con un movimiento rápido atrapó ambas manos de la nena por las muñecas reteniéndolas férreamente, con una mano el viejo tenía más fuerza que la fina y delicada Cielo Riveros , neutralizándole ambas manos, ante la impotencia de ella; todo esto lo calentaba más, y dirigió hacia abajo la mano que le quedó libre, el elástico de la mini de la chica no fue obstáculo, fácilmente se introdujo y, deslizándose, bajó un poco más ante el horror e impotencia de la chica.
Muy pronto alcanzó el borde superior del pequeñísimo y sexy bikini de la encamable jovencita y lentamente metió la escamosa mano allanándolo ante la enorme desesperación de la nena.
-Nooooooooo… deetééngaasee… paaareee…nooo…loo..haaagaa.
Mientras tanto la boca del asqueroso viejo seguía luchando con el tirante que no cedía ni un ápice, haciendo muy complicado su intento de despojarla de su blusa a la nena.
En eso el viejo sintió debajo de su boca algo de lo que no se había percatado, esto porque el sedoso y hermoso cabello de la nena lo tapaba, un botón de esos que se traban a presión en la parte de atrás de la blusa de la nena, unos 5 centímetros abajo del hombro en su espalda, dándose cuenta de que de ahí se trababa el tirante de la blusita de la chiquilla.
Se dio entonces a la tarea de jalar con las encías afanosamente el botón que no resistió mucho los violentos jaloneos del desquiciado y caliente viejo.
“Clik” se oyó y el tensado tirante izquierdo de la blusa, como si fuera una liga a la que se tensa y se suelta de golpe, salió disparado yendo a acabar sobre el seno semi descubierto de la jovencita.
El viejo entonces se fue sobre el otro tirante y con la boca lo forzaba vigorosamente para destrabarlo, pero no cedía a pesar de que lo jalaba afanosamente, parecía que el botón se resistía a dejar a su dueña desnuda de la cintura para arriba.
Mientras tanto allá abajo del ombligo de la nena se desarrollaba otro drama, los sudados y temblorosos dedos por la emoción del viejo, ya estaban adentro del bikini de la nena y moviéndose como si fuera una araña buscaban la entrada de su rajadita ante la enorme desesperación de la curvilínea jovencita, quien se meneaba angustiosamente tratando de evitar esa profanación, el viejo le seguía agarrando sus manos por las finas muñecas dejándola indefensa y la otra mano con todo el camino libre y con paciencia buscaba su clítoris.
Ella sabia que si el viejo se apoderaba de su sensible y muy perceptivo clítoris entonces si, adiós voluntad propia y bienvenido gozo, placer y disfrute a manos llenas.
"P-por favor... deténgase... se lo suplico..." imploraba desesperada la mamasota, pero el caliente viejo la ignoro, como si no escuchara sus ruegos.
Mmmmmh... Por favor... no me toque... ahí... aaaah..."
Contoneaba y culebreaba todo el cuerpo y hacia las nalgotas para atrás en un vano intento de evitar que esa arrugada mano cumpliera su caliente misión.
Todo ese contoneo de la voluptuosa anatomía de la colegiala enardecía aún más al viejo depravado, sintiendo cómo ese redondo culazo se le repellaba una y otra vez a su erecto miembro llenándolo de deleites y placenteras sensaciones.
- Nooooo……nnooo..por…favor…nooo…Don…Peeedrooo…aaaaahhhhh.
- Ssshhhh..entrégate chiquita….se que lo deseas…entrégate…disfruta el placer que te daré, mamasota- le dijo y se fue de nuevo a seguir su labor de destrabar el botón de la blusa con la boca.
Su mano notaba con mucho agrado cómo la zona de la entrepierna de la chiquilla estaba casi totalmente libre de pelos, apenas unos finos vellos percibía, sus dedos pronto encontraron la entrada de la intimidad de la chica y los más largos se metieron entre sus labios vaginales, la nena al sentirlos, junto sus piernas y atrapó a la invasora mano, en un último y desesperado acto de defensa, a la ves que suplicaba.
Noooo…porr …faaavoorr ….aahh…paaareee….ahhhhh….alli..nooo
Estaba realmente desesperada la encamable colegiala al ver lo inútil de sus esfuerzos, sabía que solo era cuestión de tiempo para que esa mano se apoderara de su intimidad.
El viejo gozaba con toda esa resistencia de la nena, eso lo calentaba más al degenerado.
El mañoso viejo le dio un mordisco en el cuello haciendo que la nena aflojara la presión que sus hermosas piernas le hacían a la mano.
-Tu panochita esta húmeda y caliente zorrita, lo estás disfrutando puta-- le decía al oído el viejo, a la par que sus dedos se apoderaban del muy sensible clítoris de la colegiala.
Ella cerraba sus hermosos ojos verdes y se mordía los labios de lado, al sentir como ese magreo la comenzaba a enardecer incontrolablemente haciéndole perder la razón enloqueciéndola, el viejo alternaba los masajes al cada ves más hinchado clítoris con dedeadas a la conchita virgen, le metía los dedos hasta tocar la delicada membrana del himen de la chica, con cuidado para no romperlo, ese privilegio quería que fuera para su verga.
La nena trataba de reprimir las cada ves más fuertes y agradables sensaciones que se apoderaban de ella cada segundo que pasaba, tratando de pensar en su mamá, en su casa, en su novio, etc., pero el viejo continuaba moviendo hábilmente sus dedos en su vagina, que estaba que ardía.
Ella se sentía sola, abandonada y cada vez más exhausta por tanta lucha, su voluntad muy debilitada también y con pocas fuerzas para seguir resistiendo.
“Clik” sonó el segundo botón del tirante de la blusa de la nena al destrabarse saliendo volando hasta el pecho de la colegiala, dejándole sus hermosos y redondos hombros desnudos.
Ella ya casi sin fuerzas para luchar cada ves más débil por las dedeadas que le daban, sólo protestó muy quedadamente.
-"Nooooo….déééjeeemee….suuuéélteemee…..- se oían los quejidos de la nena, ya que a pesar de estar en una situación nada agradable su curvilíneo cuerpo empezaba a reaccionar a las dedeadas del tipo en su vagina.

--"Aaaaahhh!...aahhh!...aahhh!...noooooood...aahhh....gemía suplicante la mamazota .
De-detengase...p-por ffavor...aahhhhggggg!...mmmmgghhhh!...aahhh!...d-diosss..exclamaba entre gemidos
Las redondas tetas de la chiquilla luchaban por no quedar desnudas, estoicamente detenían la blusita que las cubrían casi casi, con los pezones resistiéndose a mostrarse a esos degenerados.
El viejo acerco su horrible, arrugado y barbón rostro al cuello de la jovencita posándose en su desnudo hombro, sintiendo ella su aliento que exhalaba fuego, llenándola de escalofríos que le transmitía el transpirado viejo.
Ella al percibir la cara del viejo en su redondo hombro y sentir como le chupeteaba su sensible cuello y el lóbulo de oreja, instintivamente inclinó su cabeza de lado al mismo tiempo que cerraba sus ojos, dejándole al viejo a su disposición toda esa zona de su cuerpo; la boca y la tupida barba de éste recorrían todo esa exquisita piel que subyugaba al viejo, erizándole a la nena todo los vellos de su cuerpo, estremeciéndola; la jovencita le estaba cumpliendo al sexagenario sus fantasías mas morbosas.
La inquieta boca que le lamía los hombros y la oreja, dejaba en su recorrido un camino de asquerosa saliva que resbalaba, por efecto de la gravedad, hacia los pechos y abdomen de la nena.
El viejo se deleitaba con el dulce y agradable perfume que emanaba de la nena, inundándole las fosas nasales, disfrutando de ese rico aroma que lo sumergía en todo ese gozoso frenesí descontrolado, cuya fuente era la sabrosa chamaca y en lo único que pensaba era en que todo aquello durase eternamente.
El viejo entonces pudo sentir cómo aflojaba la chica sus manos que tenía retenidas, soltándolas, cayendo ambos brazos pesadamente a cada lado de la nena, sin ningún signo de querer seguir oponiéndose a sus deseos.
Tomando la blusa con la mano libre sin ninguna dificultad se la quitó, despojándola y dejándole las formidables tetas completamente desnudas, desde el hombro que chupeteaba tenia el viejo una vista espectacular de esos dos redondos melones al descubierto, sin nada que los ocultara.
Completamente embelesado contemplaba esos espectaculares senos en toda su maravillosa desnudez, se erguían turgentes, redondos, macizos y provocadores; a pesar de su tamaño la gravedad no les afectaba, se manifestaban totalmente levantados, los pezones de un color oscuro, hinchados por toda la turbación y el magreo.
Subían y bajaban las redondas tetas al compás de la agitada respiración de la chiquilla, parecían estar para ser mamados y estrujados por primera vez, era imposible no clavar inevitablemente la mirada en aquellos maravillosos melones., eran demasiado imponentes, demasiado soberbios para no babear por ellos.
-Mamita rica….susurró, en el momento que su mano libre se apodero del turgente seno palpándolo primero como no creyendo lo que sus ojos veían para a continuación estrujarlo y recorrerlo por todo su contorno.
Después con sus dedos coge el pezón hinchado y le comienza a dar un suave masaje a la delicada e hipersensible extremidad de la chica a la par que le decía al oído.
-Qué buenas tetas tienes chamaca, vas a ver como me las voy a comer- y gruñendo como un animal salvaje, mete luego su lengua caliente y húmeda en la oreja de la colegiala, lamiéndosela como un poseído, llenándola de múltiples escalofríos que la turbaban enormemente, al mismo tiempo que le estrujaba una de las tremendas tetas y con la otra mano la seguía dedeando allá abajo sin tregua llenándola a la casi sin voluntad colegiala de múltiples estremecimientos e instintivamente arqueaba la espalda al sentir un placer infinito que salía de su interior.
Ella siente que su corazón late a mil por hora, mientras entre sus piernas siente también el palpitar húmedo de su cosita, caliente como un volcán listo para explotar.
-Oohhhhhhhhhhhh oohhhhhhhhhhhhhhh aahhhhhhhhhhhhhhh -- se oían los gemidos de la boca de la chica que trataba de reprimir, pero era imposible parar de gemir, era algo en lo que poco a poco ella perdía el control.
El depravado le decía al oído.
–Mamazota, vas a ver qué culeadas te voy a dar, te voy a volver una puta en la cama y me voy a llenar las bolsas de billetes contigo, diosa.
Aquel lenguaje soez y vulgar la ponía más cachonda aún y subía el culote instintivamente para sentir aún más fuerte la vergota que la punteaba y empezó a contonear las caderas ya muy excitada, sentía que la sangre hirviendo le fluía como una corriente de aguas impetuosas.
Cerraba sus hermosos ojos verdes pues el gusto por todo eso iba en aumento cada segundo que pasaba, los latidos de su corazón se aceleraban por momentos y su estrecha y virginal rajada se humedecía por ráfagas , ella tenia sentimientos encontrados por que quería que todo aquello acabase pero por otro lado deseaba que no tuviera fin.
Literalmente el viejo tenía sus 5 sentidos totalmente enajenados y enardecidos por el placentero momento.
La vista: sus ojos no paraban de deleitarse con los fabulosos senos de concurso y ver ese hermoso rostro de la chiquilla, excitándolo al saber que tenía esa preciosa jovencita en sus garras.
Olfato: desde que comenzó todo el magreo su nariz no ha dejado de deleitarse con ese delicioso aroma que emana de ese cuerpo de infarto, un aroma a pulcra higiene, un aroma de un cuerpo joven fresco y en plenitud de desarrollo, un aroma a miedo y temor y un aroma de su delicado perfume original que sólo usaba en ocasiones especiales la nena.
Tacto: este, ni se diga, es el que más se ha estado deleitando, sintiendo esa lozana y tersa piel joven, sintiendo el par de nalgotas de concurso de la chiquilla, sintiendo como se estremece su cuerpo en cada escalofrío que él hace que le de, sintiendo la humedad de su vagina, etc.
Oído: su aparato auditivo se ha deleitado desde que la oyó hablar por primera vez con esa dulce y melodiosa voz de una niña ingenua e inocente, se ha deleitado cuando suplicaba que no le hiciera nada o que parara de los manoseos y también cuando de repente se le escapaba un gemido de placer.
Gusto: este sentido ha sido el que menos ha entrado en acción, pero también tendrá buena participación para deleite del viejo, este sentido se ha deleitado al saborear la piel fresca y joven de la chiquilla al lengüetearle los hombros, el cuello y las orejas, gustando el delicioso sabor que irradia esa cuerpo joven y exuberante, ahí les cuento cuando pruebe los carnosos labios de la deliciosa boca de la nena o cuando mame y pruebe el sabor de los dos senos de la chica.
–- Qué tetas mamasota son enormes y qué duras están…. decía el viejo babeándose al estrujarlas y masajearlas alternadamente.
El abusivo y pervertido de don pedro sentía como la deliciosa colegiala vibraba y se estremecía por todo lo que le hacia, percibiendo como a cada segundo que pasaba la jovencita oponía menos resistencia a sus abusivas acometidas.
P-por favor…. de-déjeme...por favor Don pedro….aaaaaaaahhhhhhh.
Mamasota… eres la perra… mas rica de este mundo, te voy a meter la verga zorra calienta machos.
Enseguida los intrusos y experimentados dedos en estas lides del degenerado entreabrían los labios vaginales de la adolescente buscando afanosamente el delicado botón de su sensible clítoris y al encontrarlo recomenzar a frotarlo, ocasionando que la encamable jovencita se contorsionara y en su cara se dibujara un rictus de placer.
Aaaaaaahhhhh…p-pooorr…ffaaaaaaaaa….vvoooorrr…paaarreee..aaaahhh
El viejo sentía claramente como arqueaba su cuerpo por instinto la escultural jovencita y como esas carnosas y deliciosas nalgas se le re pegaba aun mas para enorme gozo de su endurecido miembro que yacía visible bajo el elástico del calzoncillo, el vejete se había sacado la erecta verga por sobre el elástico del asqueroso calzoncillo y se internaba bajo la mini de la chica para su morboso placer.
Basss…taaa, porrr faaa...vooor…suplicaba la mamasota entre jadeos
Las muy experimentadas manos y boca del viejo estaban terminando con los últimos reductos de resistencia de la colegiala, toda esa estimulación al mismo tiempo la estaban acabando.
La mano derecha del vejete totalmente apoderada de su clítoris dándole un masaje que estimulaba muy placenteramente al ya duro cartílago, la mano izquierda estrujaba ambos senos alternadamente y por momentos con las yemas de los dedos le daba un suave masaje a los durísimos pezones y la barbuda y sin dientes boca y lengua recorrían afanosamente todo el cuello y los desnudos hombros de la rica jovencita y por momentos se apoderaba del lóbulo de la oreja de la chica dándole suaves mordiscos , ella ladeaba su cabeza para permitirle al viejo mas facilidad en su labor.
Todo eso la estaba matando de placer a la escultural jovencita, ella apoyaba sus suaves y delicadas manos sobre los peludos y sudados brazos del vejete a la altura de su muñeca de el, pero no para detener las acometidas del lujurioso viejo, si no que cerraba sus finas manos y le daba suaves apretones a esas sucias manos que le daban degeneradas caricias.
Su resistencia física estaba totalmente vencida, solo por momentos entre gemidos pronunciaba algunas palabras de que el vejete parara todo ese abuso a su escultural cuerpo.
De-dejeemee….aaahhhhhhh….poooor…favor…..don….peeedrrooo…se oía de su boca muy débil solo como un susurro.
-Que tiernecita estas putita, te voy a meter la verga por todos tus huecos puta, vas a gritar de placer mamasota te voy hacer mujer.
Esa golosa boca en su cuello, la mano en su vagina y la otra apretando su seno estaban desquiciando de placer a la nena que, involuntariamente, empezaba a gozar de aquello, su mente sabía que debía resistir pero su cuerpo decía lo contrario.
La respiración de la chica era cada vez mas profunda, presa de todo ese magreo que la llenaba de oleadas placenteras cada ves más fuertes; los escalofríos que recorrían todo su cuerpo hacían que los finos vellos de su piel estuvieran permanentemente erizados.
La colegiala sentía que su cuerpo empezaba a encenderse incontrolablemente, el fogoso temperamento de su cuerpo le ganaba la batalla a su mente que trataba de reprimir esas sensaciones, no tenia como resistir todos esos estímulos, era demasiado.
El viejo la sentía vibrar, estremecerse por todo el magreo del que era objeto por el desgraciado y aprovechado vejete, ella con los ojos entre cerrados sentía que ya no podía luchar mas, su cuerpo la había vencido.
La jovencita no cesaba de retorcerse pero ya no tanto por oponerse al abuso del viejo, sino porque sentía en su cuerpo un delicioso hormigueo desde su panochita, que se extendía por toda su curvilínea anatomía, haciéndola estremecerse, llenándola de un tremendo placer y gozo; dejando de luchar, se abandonó totalmente a los lujuriosos deseos del viejo.
Cielo Riveros comenzó a gemir de placer, ya entregada al viejo para su asquerosa satisfacción.
–-Ahhh ahhh ahhh ahhhhhh asii asiii oohh oohhhhhhhhhhhhhh.
Al viejo, al darse cuenta su reacción, se le dibujó una siniestra sonrisa en los labios imaginándose ya saciando sus mas bajos instintos en su jugoso y suculento cuerpo que para esos momentos ya estaba a punto...listo para ser poseído a la par que pensaba.
–- Je je je…este arroz ya se coció, le voy a dar una culeada a esta chamaca que no lo olvidará nunca… je je je je.
La chiquilla no cesaba de jadear, ya sin ningún recato, dejando escapar todo ese fuego que trataba de contener y que le quemaba por dentro de su cuerpo, ella sentía cómo todo eso era mucho más que cuando se masturbaba en la soledad de su recámara; sentir las manos que la acariciaban, la estrujaban, la dedeaban; sentir esa apestosa boca cómo le chupeteaba el cuello y las orejas, llenándola de sensaciones agradables; sentir el erecto miembro del viejo cómo le punteaba sus nalgotas, excitándola; sentir ese miembro que estaba como fierro y saber que era por ella y sobre todo oler el sudor del viejo, oler ese aroma a hombre, a macho caliente…. todo eso la enardecía, no tenia comparación; de cuando se masturbaba sola, esto era definitivamente mucho más.
–-Oohhhhhhhhhhhh……aahhhhhhhhhhhh…….diiioooos….. mmm,uhmm.
El viejo sentía la mano con que la dedeaba, totalmente empapada de los flujos de la chiquilla y le decía al oído:
–-Esta panochita tiene dueño de ahora en adelante zorra.
–- Oooohhhhhhh…si, siiiiii……don …….Pe..Pee…Peeedroo,… Uussteeed …es …su…su duuuueeeñoo…., al mismo tiempo que hacía para atrás sus nalgotas para sentir mas fuerte las punteadas que le daba el viejo.
El hermoso rostro de la jovencita tenía esos bellos ojos verdes entre cerrados por las oleadas de placer que le llegaban en forma constante una detrás de otra y que le nublaban la razón, los húmedos labios abiertos gimiendo y jadeando, presa ya su voluntad del deseo y las placenteras sensaciones que le daba el sátiro viejo, ya no le importaba nada, tan solo saciar esa incontrolable calentura casi anormal que la invadía en toda su escultural anatomía y que la llevaban a actuar como la mas puta de las putas.
Ver esa escultural y hermosa adolescente, ingenua y casi inocente gimiendo sonoramente de placer, le inspiraba un morbo de estratosfera al viejo de don pedro, los minutos siguieron en intensos chupeteos,caricias, manoseadas y dedeadas aquel exquisito y delicioso cuerpo de la colegiala.
–-Qué culo más rico tienes mamasota!! y estas chichotas están hechas para darme placer, puta barata, zorra!!.
–-Esos insultos prendían más a la deliciosa adolescente , llenándola de sensaciones indescriptibles, le excitaba sentirse humillada y en manos de ese sátiro, sentía cómo la erecta verga del viejo palpitaba en sus nalgotas como si tuviera vida propia, ella se sentía esclava, emputecida y ese sentimiento la hacía vibrar.
El depravado le susurraba roncamente al oído al percibir en sus 5 sentidos cómo se estremecía la escultural jovencita.
–-¿Ya ves cómo te gusta nena?...todas son unas putas baratas, primero no quieren y después aflojan solitas… te voy a culear mamasota ¿quieres que te meta la verga?
Cómo la prendía oír al vejete con ese lenguaje soez y vulgar cerca de su oído; cómo la calentaba esa sensación de estar indefensa, sin salida en manos de ese caliente vejete.
–-Ahhhhhhhhhhhh……siiii…..don..Peedroo…..métamela…..hágame su mujer.
Estaba irreconocible Cielo Riveros , ¿dónde había quedado aquella jovencita bien portada, limpia, de buenos sentimientos, nada vulgar y que detestaba todo lo pornográfico?, en otras circunstancias jamás hubiese dicho eso Cielo Riveros , pero en esos momentos el deseo, la calentura, la lujuria la tenían completamente dominada.
El viejo entonces le dio vuelta quedando de frente a ella y veía embelesado a la hermosa jovencita ya totalmente entregada a sus mas depravados y sádicos deseos, los ojos del degenerado viejo le brillaban con siniestra maldad al imaginarse ya culeándose a ese tremendo bombón de jovencita.
Ella entre su tremenda excitación veía el rostro de don Pedro transformado a como lo había visto la primera vez esa misma noche, tenia cambiado el rostro en una siniestra mueca de lujuria, los ojos rojos por el deseo, las venas de sus sienes se habían hecho visibles por la excitación, de la boca caía un hilo de asquerosa baba que se perdía entre la maraña de esa tupida barba , todo esto sumado a lo arrugado de su piel, a lo antihigiénico , sucio y sudado de su aspecto , si la nena no hubiese estado tan excitada por el viejo seguramente se hubiese desmayado de ver este adefesio de la naturaleza
Ella tenia los parpados de sus ojos semi cerrados por la excitación, el horrible viejo bajo la vista, y se recreaba mirando los redondos senos desnudos de la nena, perfectamente formados, turgentes, que se alzaban majestuosos moviéndose agitadamente con el ritmo de su respiración; sus hinchados pezones estaban rodeados por una rica aureola de carne; la vista de esos tremendos melones era soberbia.
El viejo no pudo evitar tomarse unos instantes contemplando la visión de esta diosa, con esos tersos melones de carne que se erguían majestuosos y que subían y bajaban al ritmo de la agitada respiración y cubiertos de un ligero sudor que los hace brillar, los ojos del degenerado se le salían contemplando esos tremendos melones.
Ella tenía su hermoso rostro expectante por el siguiente paso que daría el viejo degenerado, a la vez que se ruborizó al ser conciente de que estaba totalmente desnudada de la cintura para arriba y ante la libidinosa mirada de un caliente vejete.
Entonces el vejete dijo.
–-Mamasota estás muy buena de verdad, qué par de tetas grandes y divinas, verás que culeada te voy a echar, vas a ver las estrellas, bomboncito
Entonces el vejete volvió su atención a los carnosos y húmedos labios de la chiquilla, quedando cautivado y recordando que no los había probado aún, es más, nunca había probado los labios de una jovencita tan hermosa y se lleno de ansias de poseer esos tentadores labios.
Ella estaba expectante sentía una rara mezcla de miedo, ansiedad y real excitación
Ella se dio cuenta de sus intenciones al verlo venir sobre su carnosa boca, el horrible rostro arrugado y barbón del vejete y totalmente dócil y entregada se dispuso a recibir esa apestosa boca sin dientes en sus finos y delicados labios.
Ella abrió su boca dispuesta a que el viejo gozara sus labios.
Al mismo tiempo el viejo la estrechaba por la cintura atrayéndola hacia sí, haciéndole sentir sin miramientos el duro bulto que tenía formado en la entrepierna.
–-Aaaahhhhhhh mamazota…., y le dio un beso espantosamente asqueroso; fundiéndose los dos en un fogoso beso, el viejo mancillando esos jugosos y frescos labios de la jovencita, introducía su lengua infestada de alcohol, en esa boca tan fina y delicada, avasallándola ella podía sentir en sus papilas gustativas los repugnantes ácidos y gases de la cerveza y el tabaco que el viejo le pasaba en ese asqueroso aliento putrefacto, ella ya no oponía resistencia alguna y toda mansa se dejaba hacer.
La invasora y larga lengua del vejete le exploraba hasta la garganta y ella respondía a ese asqueroso beso con verdadera pasión, sentía como esa lengua apestosa se movía con agilidad y destreza en su boca y ella quería sentirla recorriendo todo su escultural cuerpo; ese viejo fácilmente podría ser su abuelo, pero que en esos momentos sólo deseaba que fuera su macho, ella suspiraba disfrutando como la abusaba el viejo y lo abrazaba por los hombros derritiéndose como mantequilla por el caliente beso.
El vejete disfrutaba esa deliciosa boca de donde emanaba un aliento calido, limpio y muy rico, su lengua le recorría todos sus perfectos dientes explorándoselos, ella sentía que esa tupida barba le puyaba los labios, pero eso no le importaba, lo que quería era saciar ese fuego que la estaba consumiendo en su cuerpo y no le importaba que fuera con ese repugnante viejo.
Ella en lugar de rechazar al asqueroso vejete alzo sus manos desde los hombros del viejo e instintivamente las dirigió a la parte posterior de la cabeza del viejo, introduciendo sus dedos en la maraña de canosos cabellos empezándole a dar un suave y delicioso masaje con las yemas de los dedos para deleite del viejo, lo que confirmaba que ella sí estaba disfrutando el momento sexual.
Sus bocas parecían una sola las lenguas se fundieron en una sola, sus flujos salivales se mezclaban...segregando aún más y era tal la cantidad que esta escurría como hilillos por entre las comisuras de las dos cavidades bucales
El viejo la besaba apasionadamente con su lengua enredada en la de ella intercambiando sus flujos salivales... y ella gimiendo...exhalando suspiros cargados de erotismo...de deseo carnal! , y el enardecido por el placer que le daba esa deliciosa chiquilla, a la par que sus manos bajaron a las juveniles nalgotas de la nena e, introduciéndose bajo la mini, las acariciaba y las estrujaba; podía sentir claramente como esas nalgotas se contraían rítmicamente por el movimiento de pelvis de la chica hacia delante y hacia atrás como si estuviera cogiendo.
Gozaba el escultural trasero de la colegiala que estaba totalmente entregada, las arrugadas manos recorrían las tersas y muy suaves piernotas y el culo de la excitada chiquilla, quien mansamente se dejaba manosear; la verga del viejo estaba apunto de estallar y palpitaba deseando penetrar ese culazo de infarto.
El viejo le jaló la minifalda hacia abajo con la colaboración de ella que alzaba las piernas para que la mini saliera sin dificultad, despojándola y quedando la nena solamente en su sexy bikini y sus botas a la rodilla; dejando a la vista de cualquiera que pasara sus bragas negras cubríendo la redondez de sus nalgas, mismas que mordían parte de la tela, y la hermosura de sus bien torneadas piernas.
El viejo continúo acariciando y estrujando aquellas redondas y hermosas nalgas carnudas de piel suave.
–- Vaya culo que tienes puta, te voy a meter la verga zorra, le decía a la par que la dedeaba en su agujero posterior metiéndole el dedo pulgar una y otra vez y luego dos dedos los introducía y los movía en círculos tratando de dilatar su cerrado ano.
Ella cerraba los ojos, abandonándose a todo lo que el degenerado viejo le quisiera hacer, era presa de sus deseos y de su fogoso cuerpo estaba tan sensible a todo ese magreo que una sola mano en cualquier parte de su cuerpo del vejete, le bastaba para hacerla temblar de deseo.
De pronto el viejo dejando de besarla dirigió su ansiosa boca al desprotegido cuello de ella que seguía aferrada a la cabeza del vejete dándole un dulce y suave masaje a la parte posterior de su cabeza.
Ella al sentir hacia donde se dirigía sintió que casi se desmayaba imaginándose ya el placer que le daría esa barbona boca cuando le mamara sus desnudos senos, sentía que su corazón iba a doscientos por hora.
El viejo subiendo las manos las dirigió a los redondos senos de la nena a la par que le besaba y le succionaba el cuello, le comenzó a masajear las tetas estrujándolas, sintiendo el viejo el pezón durísimo al tacto con sus dedos, ella sé estremeció al sentir la atrevida caricia y suspiraba muy agitada.
Por momentos el caliente vejete muerde suavemente el cuello de la chica haciéndola sobresaltarse y ella hundía mas sus dedos en los canosos cabellos del vejete, atrayéndolo hacia su corazón que el viejo noto que le latía fuertemente.
Don Pedro se regodeaba con los pechos de la chica los apretaba, masajeaba, estrujaba a su gusto y como el quería los duros senos de la colegiala alternando los estrujamientos con masajes a los dos hinchadísimos pezones de la chiquilla a sabiendas el lleno de mañas viejo lo sensible que son las mujeres en esa parte de su cuerpo los frotaba tan hábilmente que ella se arqueo un poco, producto del placer que le daba ese viejo.
Las succiones a su fino cuello y los masajes a sus sensibles pezones la estaban matando de placer, el asqueroso viejo había logrado despertar su fogoso temperamento.
–-aahhhhhhhhhhhhhh… ahiiiiii…siiiiii…uffff……. uffff …aahhhhhhh.
La boca del viejo dejaba escapar su ardiente aliento sobre su cuello, su boca que le chupeteaba el cuello era como brazas de fuego.
Entonces el viejo bajó más su arrugada cara dirigiéndola a los desprotegidos pechos de la chiquilla y, sin dejar de estrujarlos, abrió ampliamente su barbuda boca y atrapó el pezón en conjunto con la aureola, empezándole a dar una gran succión con esa boca sin dientes; ella sentía el calor atroz que emanaba de esa boca y cómo la lengua se deslizaba hábilmente sobre la inmensa sensibilidad de su pezón.
La deliciosa jovencita sintió claramente como un intenso y tremendo cosquilleo nacía en su panochita y empezó a subir por todo su cuerpo, expandiéndose rápidamente; sentía que la sangre le recomenzaba a hervir y arqueando la espalda al máximo, gemía llena de estremecedoras sensaciones que le daba la mamadota del viejo en sus senos.
–- Mmmmm,,aaahhhhh, aaahhh... diosss, diossss, dioosssss, qué ricoooo se sienteeeeee!!.
El viejo se daba el banquete de su vida con los juveniles senos de la chiquilla, mamaba muy hambriento los muy sensibles pechos de la jovencita y repegaba su empalmado miembro en la entrepierna de la nena.
–- Hmmmmm qué delicia de chichotas tienes condenada escuincla.
Cielo Riveros estaba en éxtasis, casi sin poder emitir palabras coherentes, por la excitación, todo lo que salía de su boca eran deliciosos gemidos que eran agradables al oido del abusador vejete.
–- Oohhhhhhhhhhhhhh…oohhhhhhhhhhhhhhhh….qué riiiiiccooooooo!!!; intensos escalofríos recorrían la suave piel de la nena, una y otra vez el vejete mamaba desesperadamente los pezones mientras ella se retorcía de placer y se aferraba a la cabeza del viejo, apretándola contra su pechos
La nena casi desfallecía por las sensaciones tan intensas que la empezaban a enloquecer, esa boca sin dientes en sus pezones la mataba de placer, el sentir como le atrapaba esa chimuela boca con sólo sus encías su pezón y junto con la rasposa lengua, le daba un placer nuca antes experimentado.
Ella explotaba en fuertes gemidos de placer, no podía controlarse, todo era demasiado para la chica; intensos escalofríos recorrían la suave piel, el viejo, fuera de sí, también le mamaba golosamente los senos, los mordía, los estrujaba, ante la complacencia de ella que tenia su cabeza echada hacia atrás y la espalda arqueada al máximo, totalmente entregada.
–- Aahhh…ahhh…dooon…Peeeedrooo… asíii…asíiiiiii…uyyyyyyy, con el semblante totalmente descompuesto por la excitación.
El viejo sumergía su asquerosa cara entre los mamables pechos de la jovencita embarrándosela con su propia saliva y el sudor de ella que yacía en toda la superficie de esos dos incomparables globos de carne.
El viejo ya muy caliente con los gemidos de la jovencita mamaba con mucho sadismo los senos de la nena, haciéndola gemir cada vez más fuerte y estremeciéndola toda.
Ohhhhhhhh…diossssssss…..paaapiiii…..El desquiciante cosquilleo que le recorría la panocha la enloquecía haciéndola perder toda ecuanimidad; a estas alturas su virginal panochita palpitaba fuertemente como si el corazón se le hubiera estacionado allá abajo.
El viejo no dejaba de chuparle y llenarle de saliva los pechos y le decía.
–-¿te gusta puta?..Ahora vas a sentir lo que es culear, te voy a meter la verga.
–- Sssiii.sssii...ssiii....-gemía, indefensa, la chiquilla.
Mamaba sin tregua esas increíbles tetas como un niño hambriento, matándola de placer a la colegiala haciendo que le brotaran lágrimas abundantemente de sus bellos ojos verdes por tanto placer que le daba ese horrible viejo, ella sentía que por momentos le flaqueaban sus potentes piernas por el implacable ataque del viejo a su tan deseado cuerpo
A continuación el vejete la recargó en la pesada meza de madera y dándole la vuelta la dejo a espaldas de el y tomó el bikini de la chiquilla y, agarrando el elástico, lentamente comenzó a bajarlo sin recibir ningún tipo de resistencia, dejándola completamente desnuda, sólo conservaba la chiquilla sus botas como única vestimenta.
Ella era como un títere en manos del lujurioso viejo quien podía hacer con ella lo que le diera su regalada gana; el viejo veía las redondas nalgotas de la jovencita que estaba a punto de culear y se relamía los labios al saber que le esperaba un inmenso placer.
Así detrás de ella el viejo la empujo suavemente sobre la meza, dejando a la jovencita de la cintura para arriba sobre la superficie de la misma con sus redondas tetas aplastadas por su mismo peso de ella, quedando la muchacha en forma de una L.
La vista era impresionante de esas rotundas y majestuosas nalgas redondas alzadas, pecaminosamente desafiantes y en la plenitud de sus 18 años, el viejo no podía abstraerse de mirar ese carnoso y erguido par de nalgotas que, con las piernas completamente derechas sin flexionar, engrandecían más ese gran culo.
El viejo con cara de sádico agarro su tieso miembro de respetables dimensiones, como de unos 20 centímetros de larga, gruesa en su circunferencia, llena de venas palpitantes y la empeso a tallar contra esas nalgas de concurso.
Continuara
10 (versión RD)
en No Consentido
La vista era impresionante, ver esas rotundas y majestuosas nalgas redondas alzadas pecaminosamente desafiantes, y en la plenitud de sus 18 años. El viejo caliente de don Pedro no podía abstraerse de mirar ese carnoso y erguido par de nalgotas que con las piernas completamente derechas sin flexionar, engrandecían más ese gran culo.
El viejo con cara de sádico agarro su tieso miembro de respetables dimensiones, como de unos 20 centímetros de larga, gruesa en su circunferencia, llena de venas palpitantes y la empezó a tallar contra esas nalgas de concurso.
CIELO RIVEROS 10 (VERSIÓN RE-RE ALTERNA)
La nena sintió la cabeza de la tranca del vejete como era acomodada en la entrada de su orificio posterior, y a pesar de la inmensa calentura en que la había transportado este desalmado y horrendo hombre, quiso poner un poco más de resistencia, el saberse observada por los amigos de don Pedro la hicieron bajar las revoluciones,
--Ahhhh don Pedrooo, por favor no me lo hagaaa, están sus amigos mirando…!!, se atrevió a decir Cielo Riveros , quien aún se mantenía apoyada desnuda en la mesa y mirando con su carita suplicante al que iba a ser su violador.
--Callate pendejaaa calienta vergasss!!, ya te dije que nos has estado calentando por casi toda noche y ahora te convertiré en mi mujer, jajaja, diciendo esto último don Pedro empujo su apéndice vergal con decisión hacia el interior de la hermosa colegiala, quien al sentir el vigoroso apuntalamiento hacia su culo, no le quedó más remedio que cerrar sus ojos y contraer sus facciones al sentir el inmenso dolor anal que le produjo la salvaje embestida.
Don Pedro se dio cuenta que a pesar de su concentración y del empeño que le ponía para colarse en el poderoso cuerpo de Cielo Riveros , su verga era rechazada por aquel soberbio pedazo de culo que tenía a su entera disposición, sus amigos mientras observaban lo que estaba ocurriendo solo a metros de ellos, no dejaban de sobarse sus vergas y animaban al que era su jefe a romperle el trasero a aquella hermosa adolescente que se les había aparecido en sus miserables destinos,
--Vamos jefecito, rómpale el culazo a esa puta hasta que le sangre el hoyo, jejejeje…
--Si Pedro!, vamos apurale! que yo ya quiero probar su zorra!!, esta tan rebuenota que hasta le chuparía los dedos a su ginecólogo, jajajajaj!!!, reían los rufianes…
Cielo Riveros al escuchar las insolencias y vulgaridades que decían los hombres ahí reunidos, y al percatarse de que ellos también ya exigían su parte para beneficiarse con las bondades de su cuerpo, y que uno de ellos pretendía penetrarla por su vagina, cayó en un estado total de pánico absoluto…
--Por favor don Pedro, no deje que ellos me lo hagan, snifff!!
--Callate perraaa!! Ya te dije lo puta y zorra que eras así que tendrás que prestar tu panocha a todos nosotros, jajajajaja!! Te la vamos a romper cosita ricaaa, te vamos a culiarrr!! Así que llora todo lo que quieras, total nadie te va a escuchar, y lo más seguro es que después te va a gustar tanto que mañana vendrás por mas vergaaa, jajajajaja!! Ahora quedate quieta que no puedo meterte mi verga en el culo!!.
El viejo continuaba en su afán penetrador que cada vez era más infructuoso, mientras tanto toda la calentura experimentada por la sensual jovencita se fueron disipando, ahora lo que sentía era terror, la fuerte música seguía alegrando el ambiente, pero a Cielo Riveros se la iban a violar en una feria, en donde solo a unos cuantos metros bailaban parejas de enamorados, como así mismo padres disfrutaban con sus esposas y pequeños hijos, y ella ahí en una zona oscura, toda desnuda y con tres viejos calientes y pervertidos.
Don Pedro ya estaba cayendo en la desesperación, pero que apretado tenía el ojete del culo esa pendeja endemoniada!, Cielo Riveros sollozaba y contraía todos sus músculos de las nalgas, por lo que el viejo optó a aplicarle una sonora tanda de fuertes nalgadas en el culo para que la hembra se distendiera.
--Plafff…Plafff…plafff…plafff…retumbaron los manasos del fiero mecánico a las duras y tiernas carnes de Cielo Riveros , el viejo noto que con esta salvaje medida la joven pareció tranquilizarse un poco, por lo que volvió a apuntar su herramienta de carne en el diminuto ano de la colegiala, cerrando sus ojos en señal de concentración empujo firme y decididamente, introduciendo así la vibrante cabeza de su taladro vergal, lo había conseguido, estaba atravesando a la tierna chamaca,
--Ahhhh, noooo!! Don Pedro saquelooo!!. Cielo Riveros sentía un tremendo dolor jamás experimentado, ni siquiera con el cojo Juan le había dolido tanto la vez que le atravesó el culo en el sótano de la escuela, y claro, si bien el cojo se gastaba medidas aceptables en su verga, don Pedro lo superaba con creces en medida y grosor…
--Aceptalo pendejaaaa!! Hace un rato me dijiste que querías culiar y ahora te haces la santita!! Jajajaa…Ya te metí parte de mi vergaaa y ahora lo tendrás todooo!! Te voy a encular como Dios mandaaa jajajaja!! Diciendo esto último el horrendo hombre se afianzo con sus gruesas manos de las suaves caderas de Cielo Riveros y empujo más violentamente, atravesándola con salvaje brutalidad, hasta que sintió que sus testículos chocaban con la suave vagina de la niña.
Cielo Riveros lo sintió entrarle hasta el alma, quiso gritar y escapar, pero sabía que sus intenciones serian en vano, por lo que aceptando su lamentable realidad, solo atino a cerrar fuertemente sus ojos, con su boca abierta en señal de silencioso dolor aguantaba la presión que hacía la verga de aquel viejo desconocido al interior de su cuerpo y que se la había metido por el culo, pensaba que lo que tenía introducido en su trasero no era una verga, lo sentía como si le hubieran metido un fierro incandescente y al rojo vivo.
Por su parte don Pedro se mantenía enterrado en el curvilíneo y potente cuerpo de la linda muchachita de 18 años, la veía sumisa y sometida, por lo que se dio a pegarle una buena sobada en su suave anatomía y en especial en su femenino y bien formado culo que él se había encargado de ensartar, había sido tan infructuosa la labor que pensaba que era el primero en debutar el trasero de la tierna chiquilla.
El feroz mecánico una vez ya más calmado comenzó a meter y sacar su verga de aquél glorioso culazo, sentía y experimentaba como el esfínter de la chamaca le apretaba la verga de vez en vez, como si ella no quisiera que su verga abandonara aquella sublime parte de su cuerpo, por cada envestida que le asestaba le arrancaba un fuerte gemido de auténtico dolor, Cielo Riveros sentía que aquel despiadado hombre la estaba descuartizando por el culo.
Los otros borrachos espectadores se quedaron sin habla y con la boca abierta, babeaban al ver la épica batalla sexual que estaba librando su jefe con una hermosa adolescente colegiala, de esas que se visten y arreglan rico, con falditas cortas y coquetas, pero que ahora se encontraba desnuda y sometida, ellos ya querían probarla también, por lo que uno de ellos se atrevió a solicitar a su jefe que se apurara,
--Vamos Pedrito apurate que nosotros también queremos probar a la putita, le solicito el que parecía más caliente del resto…
Don Pedro que sudaba como caballo de hipódromo después de haber corrido una carrera, casi bufaba por el intenso placer que estaba sintiendo…
--Mala suerteee!!, van a tener que esperar su turno, par de inútilesss!! Jajajja, a esta potranca primero tengo que domarla, les decía sin dejar de empujar, mientras copiosas cantidades de babas caían desde su boca desprovista de dientes…
El mecánico quien no cesaba sus firmes movimientos de apuntalamiento que accionaban al interior del ano de Cielo Riveros , paso sus gruesas y peladas manos, producto de su rudo trabajo, por debajo del suave estomago de la joven haciendo que ella se enderezara y para así poder sobarle sus duras y sedosas tetas, el vejete se daba cuenta que con sus manos a pesar de tenerlas grandes y peludas, estas no abarcaban a palparlas en forma completa, el saber y darse cuenta de tener ensartada por el culo a esa chiquilla can carita de niña pero con un cuerpazo endiabladamente infartante, casi lo enloquecieron de calentura, por lo que comenzó un corto trayecto hacia una parte del terreno que tenía pasto, haciendo que Cielo Riveros se agachara para quedar puesta en cuatro patas, todo esto sin sacar ni siquiera un milímetro del adolorido esfínter de la jovencita.
Cielo Riveros ya puesta en cuatro, sentía como don Pedro se ensañaba enterrándole su verga por el culo. Dentro de su lamentable condición psicológica, se preguntaba cómo había llegado a esto, si solo hace algunos minutos estaba con Claudia y ella se había estado comiendo unas fresas con crema, pero ahora la estaban enculando en un espacio público, siendo observada por otros dos mal vivientes.
Don Pedro empujaba contra el cuerpo indefenso de Cielo Riveros como un verdadero poseído, de pronto se fijó que la joven aún mantenía sus botas puestas y esta situación lo desconcentraban, a él le gustaban desnudas y encueraditas, tal como diosito las había enviado a este mundo, por lo que sin pensarlo comenzó a bajar el cierre de estas, primero de una y luego la otra y sin mucha dificultad la despojo de sus botas, su última parte de vestimenta que le quedaban de protección a la bella colegiala, ahora si ya se sentía satisfecho, la tenía enculada y totalmente desnuda solo para él.
La culeada iba para larga, el mecánico no quería acabar, pero sabía que sus compinches esperaban turno, como unos verdaderos perros calientes se paseaban alrededor de la pareja de contendores sexuales, y la realidad no era muy diferente ya que la escena era muy similar a lo anterior, en donde el líder de la jauría estaba acoplado y pegado a la perra que se encontraba en estado de leva, en donde los machos restantes ya podían oler el atrayente e instintivo aroma de apareamiento animal.
Cielo Riveros sentía las peludas manos de don Pedro que la recorrían por todas partes de su cuerpo y como de vez en cuando este se inclinaba sobre su espalda para besarle con su boca desdentada y con su tupida barba sin rasurar de tres a cuatro días por lo menos, la nuca y parte de su cuello, haciendo que toda su esbelta anatomía se enervara y se le erizaran todos los pelitos de su suave piel, su culo ya se había adaptado a la enorme tranca que le metían sin compasión, con sus hermosos ojos verdes semi cerrados y su enarbolado cabello que caía en forma desordenada sobre su cara ante los feroces movimientos de empuje, mordiéndose levemente su labio inferior y por medio de suaves gemidos que ya no eran de dolor sino de natural y legitimo placer, le hacía saber a su macho que ella ya le pertenecía.
Las suplicantes solicitudes de los futuros posesores del cuerpo de la chamaca sacaron a la pareja de aquel erótico y morboso estado de placer en que se encontraban…
--Vamosle…wey, apurale y acaba luego con la pendeja que a mí ya se me revienta la verga por metérsela…
--Si pendejo te estas tardando demasiado con la putaaa, opinaba el otro…
--Tran…qui…losss ya… la… ten…drannn!!, les contestaba el mecánico entrecortadamente, sin dejar de moverse, con sus ojos inyectados en sangre y con las venas de sus sienes palpitando producto de la excitación…
--Eso nos dijiste hace un buen rato y todavía te las estas cogiendo…
--Es que ustedes calientes de mierda son muy apurones y me desconcentran!!, mejor vayan a vigilar en donde está el toro mecánico y vean que nadie se acerque, yo les avisare cuando les toque…
Los viejos aceptaron a regañadientes lo que les decía su jefe, pero era verdad, ellos también solicitarían privacidad al momento en que les tocara turno con tan suculenta hembra, por lo que dejaron a la pareja a solas y se alejaron unos cuantos metros.
Cielo Riveros quien a pesar de la tremenda calentura que estaba sintiendo su cuerpo, como pudo volteo a mirar a don Pedro para pedirle piedad, ella no quería ser violada por los demás,
--Por fa…vorrrr don Pedroooo…no deje que me lo me…tannnn sus amigosss…
El obeso y fornido mecánico se sintió como un Dios al ver a la tierna chiquilla suplicándole su intervención para no ser tomada por el resto del grupo, pero aun así no estaba dispuesto a no cumplir con su palabra, ya que ellos siempre que lograban engatusar a alguna despistada hembra la compartían, ese era el acuerdo del grupo,
--Lo siento pendejaaa!! Estas riquísima, pero mis amigos también te van a violar jajajja!!, Te van a rajar la zorra a vergazosss!! Nosotros compartimos a todas las putas que nos encontramos por el camino, jajaja, y tú no serás la excepción, así que disfruta y aprontate!!, con esto último el vejete inicio una serie de firmes y rápidas metidas de verga…
--Don…Pe..drooo…es…que… yo… soy… vir..gennnn!! Ohhhhh!! Diossssss!!, gemía la jovencita ante las bestiales arremetidas que le daban a su cuerpo y culo.
El mecánico creyó no escuchar lo que le decía la tierna chiquilla que estaba enculando, por lo general, todas las hembritas de la edad de Cielo Riveros ya se acostaban con sus estúpidos noviecitos, es por lo mismo que cuando se encontraban con tan suculentos bocados, preferían metérsela directamente por el culo y no por la panocha,
--No mames pendejaaa!!...Vuelve a repetir lo que me dijiste, solicito don Pedro ahora moviéndose suavemente…
--Es verdad don Pedrooo, soy vir…gennnn…, le confirmaba Cielo Riveros con su carita llena de vergüenza mezclada con calentura al mismo tiempo, con lágrimas en su rostro, pensaba que este viejo la podía salvar de su casi segura violación y desvirgamiento vaginal, además el haber estado copulando y gozando analmente con él, la hacían sentirse un poco más familiarizada con este horrendo mecánico que solo conocía desde hace una hora aprox.
El viejo al volver a escuchar esto último tuvo que sacar todas sus fuerzas de auto control para no eyacular, ya que el solo imaginarse a el mismo metiendo su verga en una vagina cerradita y virginal casi se corrió en el culo de la colegiala, y más encima era la de esta misma pendeja con cuerpo de Diosa que gloriosamente había logrado encular…
--Y dime pedazo de puta, si yo no dejo que esos pendejos te la metan.. te portaras bien conmigo?
--Siii, don Pedro me portare bien, pero no deje que me violennn…
--Tratoo? Le consulto el vejete estirándole la mano para sellar el compromiso…
--Trato, respondió Cielo Riveros en forma quedita, quien al todavía estar enculada y puesta en cuatro patas, como pudo estiro hacia atrás su blanca y delicada manita, para adquirir el compromiso con don Pedro…
--Escuchame pendeja, le dijo el vejete sacando su verga del orificio de Cielo Riveros , el cual al quedar vacío se cerró en forma casi automática, --Recoge tus ropas que nos largamos ahorita mismo,
--Pero para donde me llevara?, se atrevió a preguntar Cielo Riveros a quien la cordura le llego de un sopetón,
--Tu no me preguntes nada!!, quieres que evite que esos pendejos te la metan?...
--Si, si, don Pedro pero no me hará nada?
--jajajaja!! Nada de lo que ya no hayamos hecho ricura, pero ahora solo los dos, o quieres que les avise a los otros que les llego su turno?, vamos decide!!…
--Está bien!, decidió Cielo Riveros no muy convencida, pero prefería seguir dejándose encular por don Pedro, a que esos canallas la violaran, esto sumado a algo de calentura que aun predominaba en la mente de la chamaca…
El mecánico como un rayo se puso su overol de trabajo, mientras Cielo Riveros aun desnuda recogía sus ropas, en esto sintió que era tomada con fuerzas por el brazo, el mecánico la llevo en andas adonde se encontraba estacionado un viejo auto, con mucho cuidado abrió la puerta del copiloto y metió a la joven para el sentarse al volante, el vejete tomo las ropas de Cielo Riveros y las arrojo a los asientos traseros, para luego tomar una vieja frazada y pasársela a la encuerada colegiala diciéndole,
--Cúbrete! con esto será suficiente, no iremos muy lejos, Cielo Riveros ya roja por la vergüenza de encontrarse desnuda con un viejo asquerosamente feo y desmadejado, solo atino a cubrir su cuerpo con aquella cobija sucia e inmunda que llegaba a estar tiesa quizás por qué tipos de secreciones que se habían llegado hasta a secar en ella, pero que ahora protegían sus desnudeces, fue cuando escucho hablar por radio al mecánico…
--Gerencia!!, aquí Pedro Ventura…
--Diga Ventura…cambio…
--Me retiro por hoy, me acabo de enfermar…jejeje…
--Lo siento Ventura…tendrá que esperar a mañana…la feria está en su momento pick y no podemos arriesgarnos…
--Parece que no me escuchaste pendejooo!, interrumpió don Pedro a su inter locutor, --Yo no te estoy pidiendo permiso!!….te aviso que me retiro y ya para mañana en la noche estaré disponible para dirigir el desarme de la feria…te queda clarooo idiotaaa!!, ahora anotalo para que le avisen al dueño, después yo hablo con el!!…
Luego de algunos segundos de silencio, Cielo Riveros no supo porque le había gustado tanto que don Pedro pusiera en su lugar a ese pesado tipo que estaba al otro lado de las comunicaciones radiales, reacción que hiso que instintivamente ella cerrara sus piernas para contraer algo que ya le estaba haciendo falta en aquella zona prohibida que poseía al medio de la parte superior de sus muslos, al mismo tiempo que mientras observaba como don Pedro se desenvolvía en sus asuntos volvió a inconscientemente morderse su labio inferior.
--Está bien Ventura, permiso autorizado, se escuchó de pronto por la radio, el mecánico puso el motor en marcha y aseguro ambas puertas del viejo vehículo.
Los despistados compinches de don Pedro solo se dieron cuenta de la fuga cuando sintieron la puesta en marcha del motor, y solo atinaron acercarse al vehículo cuando este ya se ponía en marcha lentamente…
--Y que pasa wey!! Adonde te marchas con la putita…y nuestro turno a qué horas…?
--Pues ya no hay turno pendejo, me voy con mi mujer!! Jajajaja!!….toma la radio, quedas a cargo hasta mañana!!, y cuidadito con andar soltando la lengua porque los despido a los dos!, escucharon dúo de idiotas, y si quieren remojar la verga vayan buscándose otra puta, porque esta perra es mía , les quedo claro zopencos! hijos de la grandísima puta!!
Los incrédulos hombres miraron a Cielo Riveros quien lentamente fue cubriendo su rostro con la manta dejando a la vista solamente sus hermosos ojos verdes, estaba muerta por la vergüenza.
Con esto último don Pedro fue tomando velocidad circundando la feria hasta llegar al camino pavimentado, Cielo Riveros escondida con la frazada vio como sus botas quedaron tiradas y olvidadas en el suelo al lado de la mesa en donde había estado apoyada y ofrecida a este viejo que ahora la había declarado como de su propiedad, veía a toda la gente de la feria como disfrutaban con las entretenciones y ella iba desnuda en un auto, con un viejo que se la llevaba en dirección desconocida.

La escultural Claudia esperaba aburrida junto al toro mecánico ya iban a ser casi 40 minutos que llevaba esperando a Cielo Riveros , pensaba que de seguro su amiga se había encontrado con algún chavo del colegio y este le había invitado algo por allí, estaba en estas cavilaciones cuando un cacharriento automóvil pasaba a solo 10 metros de donde ella estaba, pero su vista se encontraba hacia donde estaba la gente, por lo que ni siquiera se dio cuenta de esta situación.
El cojo Juan con el maestro Tulio, luego de beber sus coronas bien heladitas y transpiradas se dieron nuevamente a la tarea de intentar encontrar a la encamable colegiala, como unos verdaderos estrategas militares se propusieron hacer una exhaustiva operación rastrillo, desde donde estaba el toro mecánico hasta el otro extremo de la feria, estaban haciendo los últimos detalles cuando fueron observados por Claudia quien al verlos no dudo para ir a consultarles por su amiga…
--Hola Profe!, saludo coquetamente la Claudia a su profesor con quien ella ya había tenido algo a cambio de unas cuantas notas para salvar el año escolar…
Al cojo Juan casi se le cayeron los pantalones al ver el también endemoniado cuerpazo que se gastaba la zorrita de Claudia…
--Pero si no es mi alumna favorita! Exclamaba el maestro Tulio con sus ojos de sapo aún más hinchados que antes, producto de la casi automática aceleración sanguínea al recordar la exquisita forma en que Claudia lo había masturbado y mamado la verga en su oficina. Aquella ves el trato había sido una buena follada, pero Claudia toda una experta en calentar vergas había hecho que el viejo se viniera antes, para así evitar tener que dejarse follar por él. El viejo la miraba de pies a cabeza empelotándola con su caliente mirada.
--Yaaa no me venga con esas que después vamos a arreglar cuantas, le dijo la rubia, con una mirada de coqueta complicidad, --Yo venía por otro asunto…
--No faltaba más, pues díganos mi reina en que podemos servirle, le decía el cojo quien también tenía puesta su mirada en el par de tetas de la rubia que se notaban hinchaditas y paraditas…
--Les quería preguntar si Uds. no han visto por aquí a mi amiga Cielo Riveros , vinimos juntas a la feria y de pronto se me perdió….
--¿Pero cuál es tu amiga?, pregunto don Tulio haciéndose el desentendido, --A si, si, ya la recuerdo es la chamaquita de ojos verdes, pues no la hemos visto…
--Ahhh, solo preguntaba por si acaso…si la ven por ahí le pueden decir que me llame al celu… o que la estaré esperando junto al toro mecánico…
--Pues no faltaba más mi reina si quieres yo te puedo acompañar hasta que ella llegue, no vaya a ser que algún baboso de estos te falte el respeto, proponía el cojo Juan, preso por la calentura, al ver a la amiga de Cielo Riveros quien estaba tan rebuenota como ella misma.
--Juan acuérdate de nuestro asunto, le recordó el maestro Tulio, quien por ahora estaba más interesado en Cielo Riveros que en la rubia, en eso los interrumpió Claudia para decir,
--No, pero gracias don Juan! yo se cuidarme solita, jijiji, le dijo mirándolo mientras jugaba coquetamente con un mechón de su rubio cabello y lo mordisqueaba felinamente con su blanca dentadura, diciendo esto último dio media vuelta y se dirigió al toro mecánico…
La caliente pareja de degenerados quedaron embobados mirando como Claudia se retiraba moviendo todas las curvas de su cuerpo para beneplácito de sus perversas miradas.
--Pero que zorra es para sus cosas esa putita de Claudia maestro, que tal si nos vamos donde ella y nos ofrecimos para buscar a la Cielo Riveros , así luego les damos una cervezas y nos las llevamos a algún hotelucho, le dejo a la Cielo Riveros a Usted, y yo me encargo de la Claudia que le perece maestrito, jejeje…
--No es mala idea pinche cojo!, pero quién te dijo que la Claudia iba a querer acostarse contigo?, esa zorra no hace nada sin algo a cambio, te lo digo por experiencia propia, le decía el maestro con aires de filósofo.
--Pues yo ya tengo la fórmula infalible, para que ese par de putas se acuesten con nosotros y por las buenas maestrito, jejeje…
--Así?, y dime como la haríamos, preguntaba con cara suplicante el maestro Tulio que sus bolas ya estaban que se le reventaban por todo el semen que se le acumulaba con el solo imaginarse acostado con Cielo Riveros , y quizás por qué no, después hacer una cambiadita con el cojo, así se las culiarian a las dos juntas, era lo que pensaba su degenerada mente…
--Pues lo primero es encontrar a esa yegüita de la Cielo Riveros , luego por la labor realizada les invitamos unas tandas de Tequila del más barato, es solo que ellas acepten y le juro maestro que a la tercera tanda de Tequilas ese par de putas no sabrán ni de la zorra, jajajaja!!, es una receta que me dio un amigo, y ya la he probado profesorcito y resulta!!
--Eres un cabron!! pinche cojo de la grandísima puta!!, vamos entonces a enganchar a la Claudia y luego nos dedicamos a buscar a la otra hembrita, jejejeje!!
Claudia al llegar nuevamente al punto de encuentro seguía mirando en todas las direcciones posibles, intentando buscar a su amiga, la realidad era que ya se estaba preocupando de verdad por Cielo Riveros , sabía que su amiga no era como ella, --Ay Eve!! ojala no te hayas metido en problemas, pensaba para sus adentros.
Cuando la singular pareja de aprovechadores llego hasta donde estaba la rubia colegiala, fue el cojo Juan el que hablo primero,
--Escuchanos mi reina, aquí con el profesorcito nos entramos a preocupar por tu amiga, que tal te parece si te ayudamos a encontrarla,
--Pus, no sé, yo creo que mi amiga debe andar por ahí, en cualquier momento aparecerá…
--Entonces dejanos acompañarte ricura, solicito el maestro Tulio, que ya al estar tan cerca de la rubia se le estaba empezando a asomar el colmillo de la lujuria, --Así cuando llegue tu amiga, nos podemos ir a servir alguna cosilla en cualquiera de los puestos, jejeje.
--Está bien, dijo Claudia, (par de viejos calientes, pensaba para sus adentros) --Pero no les aseguro de ir a servirnos algo, ya que estamos esperando a mi novio que viene con unos amigos, les mentía la rubia para no comprometerse con el par de vejestorios.
--Pierde cuidado rubita, apenas llegue la Cielo Riveros , las acompañamos hasta que llegue tu novio, y luego nosotros nos retiramos, jejeje que te parece?, consultaba el cojo Juan, quien también contribuía para hacerse del par de hembras. Claudia solo asintió con un ligero movimiento de hombros.
--Toma pinche cojo, ve y comprate unas chelitas, jejeje, para que nos sirvamos alguna cosita mientras esperamos, jejeje, propuso el profesor Tulio dándole unos billetes al cojo.
Una vez que el cojo Juan se fue a comprar las cervezas el maestro Tulio no perdió tiempo para comenzar una lasciva conversación con la estudiante,
--Pero mira que andas linda mi preciosura y cuando iras a mi oficina, para ver algún asuntito con respecto a tus notas,
--Ay nooo!... Como cree, le contesto la Claudia, con un rictus de enojo en su semblante, --Usted es un mentiroso, después de lo que me hiso hacerle me arreglo solo un par de notas y el acuerdo era el promedio…
--Pues tú tampoco cumpliste con tu palabra lindura, el trato era una follada y apenas me la mamaste y me pajeaste.
--Además que es Usted un hablador, por ahí me contaron que se anda vanagloriando que nos acostamos y eso no fue así…
--Jajaja, seguro que deben ser de esas putitas que me tienen ojeriza, mentía el maestro Tulio, --Pero la verdad chamaca, es que si no te aplicas vas a perder el semestre y aun te queda el próximo, recuerda que yo siempre estaré presto a ayudarte, claro que eso tiene un costo mayor a una simple mamada…
--Calleseeee!!, le interrumpió Claudia moviendo su cabeza para que el profesor se diera cuenta que el cojo ya venía de vuelta con las cervezas, haciéndose espacio entre medio de la gran cantidad de gentes que circundaba por el sector.
Pasaron unos 20 minutos en que el trio estuvo esperando que Cielo Riveros apareciera, Claudia ya estaba realmente preocupada por su amiga, los tres miraban en todas direcciones por si la veían, a la vez que se empinaban sus cervezas…
--Bien yo creo que tu amiga no aparecerá rubita, de seguro que se fue con algún compañerito a hacer quizás qué tipo de cochinadas, jejeje, le decía el maestro a Claudia…
--Pues si quieren se pueden ir yo iré a buscarla, dijo Claudia quien no presto atención a la vulgaridad emitida por el maestro, la rubia ya se estaba asustando de verdad, por la prolongada desaparición de Cielo Riveros ,
--De eso ni decir, le contesto el viejo Tulio, --Cojo ve por la parte de al frente y revisa todos los tugurios, esa chamaca tiene que estar adentro de uno de ellos, yo con la Claudia buscaremos en este otro lado y nos juntamos al otro extremo de la feria para ver cómo nos fue…
Una vez de acuerdo el trio se puso manos a la obra y comenzaron la búsqueda.

Don Pedro manejaba por unas oscuras calles solitarias, Cielo Riveros iba hecha todo un atado de nervios de no saber para donde la llevaban, fue cuando se fijó que el horrendo hombre tomaba su celular y marcaba un número telefónico, iniciando una conversación de mucha familiaridad con la persona a la cual le hablaba…
--Hola wey!!…sí, sí, todo bien….si si…escuchame… es solo que te quería avisar que esta noche ocupare tu taller, si, si, aún mantengo las copias de llaves que me diste…mi casa queda al otro lado de la ciudad, y la cabaña esta aún más lejos, lo más cercano es el Pie Grande, jejeje…sí..si…es una pendeja que esta para partirla…jajajja…cómo? A ver espera!. Don Pedro se volvió para donde estaba la colegiala, --Como me dijiste que te llamabas pendeja?, le pregunto a la asustada chiquilla.
--Cielo Riveros !, le contesto la colegiala en forma triste y tímida.
--Se llama Cielo Riveros !!, jajajaja si, si, algún día te la presentare, comooo?...no mamesss!!!, don Pedro escuchaba con atención lo que le decía el otro hombre que estaba al otro lado de la conversación, --No mamessss pendejoooo!! Y es casadaaa!!,… jjajajajaja, es lógico que se te haga la difícil, siempre son así al principio, pero ya verás que después que te la culiees va a andar colgada de tu vergaaa!!, si claro la cabaña esta toda destartalada pero ocupala cuando quieras…hablamos, dijo el mecánico a modo de despedida.
Al viejo mecánico de don Pedro la ansiedad por cogerse a Cielo Riveros por la forma normal, ya lo consumían, la joven le había confidenciado que era virgen, extraño caso para los tiempos en que se vivía, ya que por lo general era casi imposible encontrarse un magnifico ejemplar femenino en estas condiciones y menos con las infartantes medidas que se gastaba la pendeja que llevaba en estos momentos sentada a su lado y desnuda, solo cubriendo su cuerpo con un viejo cobertor que el mantenía en su auto para casos de emergencia como este.
Pero no todo le iba a salir tan fácil al perverso mecánico, en el momento que ya faltaban un par de cuadras para doblar y llegar al taller de su hermano, se encontró con un llamativo control policial, al ver al policía haciéndole señales para que aparcara a un costado de la calle se percató y alarmo, de cómo explicaría el llevar a una joven adolescente de 18 años desnuda sentada en su auto…
--Solo esto me faltaba!!, bufo el viejo Pedro dándole manotazos al volante, --Escuchame bien pendejaaa!!, si la poli se llega a dar cuenta que estas encuerada, le diremos que eres puta y que te recogí en el centro, escuchasteee!! Luego yo veré la forma de ir a sacarte de la comisaria, entendiste?
--Pero don Pedrooo!, yo no soy prostituta…
--Les dirás que eres puta y se acaboooo!! Y mucho cuidadito con dártelas de viva, porque una vez saliendo de la cana, te busco donde sea y aparte de pelarte el culo a palos, te vuelvo a encular, pero ahora delante de todos los mecánicos de la feria que son como 20 y luego te dejo con ellos, escuchaste maldita zorraaaa!!
--Si… si… don Pedro, les diré que soy pu..taaa…
Un joven policía ya se acercaba al vehículo con una linterna, Cielo Riveros y don Pedro esperaban expectantes a como se darían las cosas, unos metros más adelante otro grupo de uniformados mantenían contra el muro a tres delincuentes que habían hecho bajar de un automóvil, y todo esto sumado a la fuerte luminosidad que provenía de las luces que proyectaba el carro policial estacionado al otro lado de la calle.
--Sus documentos y licencia por favor, solicito el policía, don Pedro rápidamente saco lo solicitado desde la guantera, el fiscalizador una vez que hubo comprobado que al parecer todo estaba en orden solicito nuevamente, --Ábrame el maletero, revisión de rutina.
Cuando don Pedro bajo del vehículo el joven uniformado se percató que la compañera de aquel ordinario viejo que estaba controlando era solo una jovencita, esto lo puso en alerta, y olvidándose del maletero rodeo el vehículo hasta llegar a la ventanilla de Cielo Riveros , y no conforme con ello y para asegurarse abrió la puerta.
Lo primero que pudo deducir fue que la bella joven era solo una chiquilla de no más de 18 años quizás, luego se percató que ella iba descalza y que al parecer solo estaba cubierta con un viejo cobertor, alumbro un poco más hacia el interior del auto y comprobó que la ropa de la joven estaba en los asientos traseros, volvió a mirar a la asustada Cielo Riveros y consulto,
--Que significa todo esto señor…
--No sé a qué se refiere, le dijo don Pedro con cara de enojado…
--Pues le explico, al parecer esta joven va sin ropa, es familiar suya, amiga, no se dígame algo, usted es el que sabe…
--Acaso nunca habías controlado un auto con una puta en su interior…
--Es eso verdad?, pregunto el uniformado dirigiéndose a Cielo Riveros , --Permítame sus documentos señorita. Cielo Riveros como pudo tomo su blusa desde el asiento trasero y saco el pequeño porta documentos en donde siempre andaba trayendo solo su identificación y la credencial escolar, para luego pasárselo al joven policía que ella calculaba que tendría solo un par de años más que ella.
La encamable colegiala quiso decirle la verdad, el joven justiciero tenia cara de buena persona, además que todo el lugar estaba lleno de policías, sería fácil librarse del viejo que la había violado y raptado en la feria, pensaba la atribulada Cielo Riveros , y cuando estuvo a punto de decir la verdad sus ojos se toparon con la dura y fría mirada de don Pedro, que en esos momentos le prometía las penas del infierno si se le ocurría hacer una pendejada.
--Es verdad, soy pu…taaaa, dijo finalmente…
--Pues bien señor aquí están sus documentos, Usted puede retirarse, pero la señorita quedara en calidad de detenida por ejercer la prostitución en la vía publica, y dirigiéndose a Cielo Riveros le indico, --Tome sus cosas y baje del vehículo, haremos el control de identidad y luego se sube a la patrulla le decía a una espantada Cielo Riveros , ya que se encontraba así al estar escuchando que se la llevaban presa por puta.
--Pero que pendejooo!! Y para que te la llevas presa si no estábamos haciendo nada!!, le gruñía don Pedro, intentando evitar la detención de la hembra que él quería que fuera su compañera sexual por el transcurso de la noche.
Mientras todo esto ocurría a un lado de la calle, al otro extremo de esta, sentado en la patrulla policial, el sargento Eustaquio Sinforoso, no perdía detalle de lo que estaba ocurriendo solo a tres metros de donde él se estaba zampando la mitad de un pollo asado con patatas fritas, veía como sus jóvenes colegas de menor jerarquía y que estaban bajo sus órdenes hacían todo el trabajo, esto era lo que más le gustaba de su labor, que él no hacía nada y solo mandaba, pero cuando vio que uno de ellos se transaba en una fuerte discusión con un civil, se dijo que ya era la hora de trabajar.
El sargento Sinforoso bajo de malas ganas del carro policial, dedujo que lo que pasaba no era de mayor gravedad por lo que sin pensarlo mucho se dirigió al vehículo que estaba siendo controlado, con una presa de pollo en la mano, para poner orden y a enseñarles a esos novatos como se hacía el trabajo.
--Silencio, silencioooo!! Llego diciendo el sargento, para tomar conocimiento de cuál era la situación. Don Eustaquio Sinforoso llevaba 27 años en la policía, moreno, y de típicos bigotes mexicanos, de nariz ancha y alargada, de mediana estatura, con una ponchera de 30 litros por lo menos de abdomen, ninguna chaqueta de su uniforme le cerraba, por lo tanto tenía que usarlas abiertas, de pecho ancho que denotaban que en su juventud debió haber tenido excelente condición física, muy distinta a la que tenía actualmente, ya estaba fogueado con todo tipo de procedimientos, sabía muy bien cuando era la mejor opción de sacar provecho personal de la situación o simplemente pegarse a reglamento.
--Mi sargento se trata de un 256, ejercicio de la prostitución en la vía publica, informo el joven cabo a su superior, el sargento los miro de uno a uno inspeccionándolos incluyendo también a su joven colega, a la misma ves que terminaba de darle el ultimo mordisco a su pollo asado, tirar el hueso para atrás y terminar chupándose los dedos.
--A ver anciano, dijo el sargento Sinforoso, dirigiéndose hacia don Pedro sacando su bastón de mando y pegándose con él en las manos, --Adonde recogió a la putita?.
A don Pedro le dieron ganas de agarrarlo de los bigotes mexicanos y despachárselo con el mismo palo que este se pegaba en las manos.
--La recogí en el centro!!, no se para que tanta alharaca si a solo cuadras de aquí está lleno de putas , pueden ir allá y llenar su cacharro con ellas…
--Mmm…lo se… lo se…, admitía el sargento, --Veo que usted es mecánico, le dijo apuntando con su bastón al overol lleno de grasa de don Pedro…
--Pus si, y que hay con eso…
--En la comisaria tenemos un carro que es de mi capitán y hace semanas no podemos echarlo a andar, Ud., cree que si por uno de estos días se pudiera dar una vueltita y darle una miradita, solo tendría que repararlo y decir que fue el sargento Sinforoso quien lo mando…
Don Pedro que ya se había dado cuenta para donde iba la situación, solo atino a reírse…
--Jajajaja!!, claro que puedo ir mi general!!, le dijo el viejo mecánico en tono sarcástico y dándole a entender que él ya estaba claro con el acuerdo que indirectamente le estaban proponiendo.
--Bien, aquí no hemos vista nada, termino diciendo el sargento a cargo del procedimiento, --Pero me gustaría darle una mirada a la puta, me gusta saber cuáles son las que andan puteando por mis calles…
--Pero mi sargento, el reglamento dice, intento rebatir el joven policía,
--Que reglamento ni que nada pendejo!!, le grito muy enojado el sargento a su subalterno, haciendo gala de su apellido, --Las calles están llenas de delincuentes y de droga y tu andas preocupado de putas novato de mierda!!, diciendo esto último se dirigió hacia donde estaba Cielo Riveros quien se encontraba con sus ojos llorosos al ver como un trio de desconocidos decidían por su futuro y que se referían hacia ella como una puta.
El sargento Sinforoso se agacho lentamente para estudiar a la ramera que el bajo su autoridad le estaba permitiendo su libertad, estos tipos de procedimientos le encantaban, pero cuando vio la clase de puta que andaba trayendo el mecánico en su auto casi se puso a vomitar, instintivamente dirigió su bastón hacia el cuerpo de Cielo Riveros , levantando con este el sucio cobertor que cubrían sus desnudeces, solo basto mirar un poco y fue suficiente, su mente trabajo a mil por hora, para luego decir a su subalterno, cursale una infracción empadronada con todos sus datos personales por andar putiando en la calle sin carnet de sanidad y una vez llenado me lo llevas a la patrulla y Uds. tortolitos se pueden retirar.
Pero que pedazo de mujeron se iba a culiar aquel detestable mecánico, pensaba el viejo y caliente policía, por unos momentos sintió las tremendas ganas de desistir del trato que había hecho y mandar el auto de su capitán a la verga, para llevarse a esa Diosa a la delegación y ver cuál sería la mejor forma de beneficiársela, pero aún le quedaba toda la noche por patrullar, el secreto estaba en la infracción, ya vería como la haría.
Una vez puesto en marcha el vehículo, no pasaron ni 5 minutos cuando llegaron al taller de don Cipriano, hermano de don Pedro. Una vez que bajaron del vehículo y pudieron entrar por la puerta chica, el viejo encendió las luces del taller, Cielo Riveros quien con una mano sostenía su ropa y el documento que le había pasado el joven policía y que le recalco que tenía que cancelarlo en un plazo de 30 días, con la otra mantenía agarrado el cobertor y sus ropas, pudo ver que en el interior de este había una gran cantidad de vehículos en reparación, pero al medio de estos resaltaba una lujosa camioneta que debido al color y ciertos toques interiores, la colegiala intuyo que la dueña debía ser una mujer, --¿de quién será? pensó por unos segundos, fue en esto que don Pedro le arrebato de las manos la infracción que le habían pasado a Cielo Riveros por ejercer la prostitución en la vía publica…
--Jajajajaja, ya ves pendeja sin querer ya podríamos decir que eres legalmente toda una puta profesional, jajajaja este documento lo certificaaa!! es como tu diploma de honor en lo que es el puterio!! Jajajaja!! se burlaba de la pobre Cielo Riveros , a la vez que la agarro de un brazo y se guardaba el documento en uno de sus bolsillos, para luego casi arrastrarla a una oficina interior en la cual la asustada jovencita pudo ver que en esta solo había una cama. --Pero no te preocupes esta noche debutaras como tal, le decía don Pedro mientras frente a los asustados ojos de Cielo Riveros procedía a desnudarse por completo, -- Te convertiré en toda una hembra, te voy a culiar hasta que no te queden ganas ni siquiera de mear, jajajaja!! Te convertiré en mi perraaa!! Serás mi putaaa!!, le gritaba el vejete con desesperación.
A Cielo Riveros desde hace rato que se la había esfumado ese agradable cosquilleo que de vez en cuando tan gratamente asaltaban su cuerpo, habían sido muchas situaciones de tensión las que había vivido en el transcurso de esta infernal noche, como para encontrarse excitada con tan horrendo hombre, que casi la había exhibido en público y en su total desnudes, y que para colmo le había hecho decir a unos policías y de sus propios labios que ella era una vulgar puta callejera, pero nuevamente la aguardentosa voz de don Pedro la sacaban de sus tristes cavilaciones…
--Y que estas esperando putona, ahí está la cama, esta será nuestro centro de operaciones, jejeje o más bien dicho nuestro nidito de amor, jejeje, vamos quitate ese cobertor y acuéstate, que ahora si probaras lo que es culiar con un verdadero macho taurino, jajajaja!!
--Don Pedro, por favor ya fue suficienteee, se atrevió a solicitar erróneamente Cielo Riveros , pensando que tal vez este viejo caliente se podría compadecer de ella, --Yo me quiero ir a mi casa…
--Claro que te iras para tu casa reinita, pero eso será mañana y ya convertida en toda una puta, jajajaja!! En mi putaaaa!! Te lo voy a meter hasta por las fosas nasales, jajaja!! Escuchaste pinche zorraaaa!!, diciéndole esto último de un solo zarpazo le arrebato el cobertor, dejándola totalmente desnuda frente a su caliente mirada, vamos súbete a la cama y ponte en posición de culeo, jajajaja!!
Cielo Riveros ya casi entregada a su triste e injusto destino se subió lentamente en la cama, mientras el ordinario sujeto de don Pedro se pelaba la verga soslayándose con el erótico espectáculo que le brindaba la hermosa y desnuda chiquilla, quien en estos momentos solita se había puesto en 4 patas para que la encularan…
--Jejeje!! Es muy apetitoso lo que me ofreces pendejita rica, pero ahora lo vamos a hacer de la otra forma, ya te lo dije, te convertiré en mi mujer con todas sus letras, lo haremos de la forma normal y natural, como verdaderamente lo hace un hombre y una mujer, así que por favor …solo lo diré una vez, date vuelta y ábrete de piernas porque te lo voy a meter por la zorraaaa!!
Cielo Riveros lo quedo mirando directamente a sus aborrecibles ojos, estaba aterrada por lo que se proponía este vil y casi anciano hombre, lo veía asquerosamente peludo y fofo, los pelos de su pecho y hombros más parecían grasienta suciedad que pelos masculinos, se preguntaba cómo había sido capaz de haber estado culeando con él, solo hace un par de horas o tal vez menos, y haberse dado el lujo de sentir placer, se avergonzaba de ella misma haberse declarado de su propiedad, y todo producto de su cuerpo que cuando le hacía sentir rico la impulsaba a hacer y decir todo tipo de peladeces, ella no era así, porque… porque!!, se preguntaba en forma apesumbrada, ese hombre era verdaderamente detestable, y lo que le pretendía hacer ahora era desquiciante, siempre había imaginado que su primera vez iba a ser por amor, o sea ni siquiera con Rodrigo su novio había querido llegar a concretar algo, con la finalidad de salvaguardar su más íntimo reducto de amor para reservarlo para cuando ella estuviera enamoradamente casada.
Cielo Riveros se paró como resorte de la cama retrocediendo unos cuantos pasos, y muy envalentonada y desafiante por la segura intención de no dejarse violar por aquel asqueroso viejo, le dijo,
--No don Pedro yo no lo hare con Ud.!, le dijo con su carita llena de ira, y pensando en su Rodrigo…--Usted no tiene derecho…
--Jajaja!! Así que no quieres hacerlo?, le interrumpió el fiero mecánico, --Pus eso lo veremos ahorita mismo!!, ya vas a ver si no tengo derechos!!, Cielo Riveros lo vio tomar una escoba que había apoyada en una pared, para luego tomarla con sus dos manos y quebrarla por la mitad, lo vio venir con el grueso palo bien asido, y con solo verle el siniestro rictus que se apodero del feo rostro de don Pedro se arrepintió de lo que había dicho, la iban a apalear, sintió que le temblaban sus poderosas piernas y mientras más se acercaba el vejete más ganas le daban de mearse ahí mismo.

En la feria, Claudia el cojo Juan y el maestro Tulio ya se habían aburrido de buscarla, después de haber dado tres vueltas completas intentando dar con el paradero de Cielo Riveros , se encontraban ya sentados esperando la primera ronda de tequilas que habían solicitado, para apagar la sed, Claudia se había auto convencido que lo más seguro era que su amiga se había encontrado con algún chavo y había decidido largarse con él, en cualquier momento le llamaría se consolaba y conformaba. Con los tequilas ya en la mesa, el trio se propuso a brindar por la velada.
--Bueno rubita brindemos por la salud de Cielo Riveros que tiene que andar por allí pasándola bien y tu aquí preocupada por ella, jejeje, decía el maestro Tulio.
--Sí, es verdad ella es muy responsable con sus cosas lo más seguro es que en cualquier momento aparecerá, o me llamara, si no me ha llamado es porque está bien, termino por convencerse la Claudia.
--Así se habla reinita, salud, dijo el cojo Juan.
A los hombres le llamo la atención como Claudia se bebía de solo dos sorbos el contenido del vaso sin ni siquiera arrugarse, por lo que prontamente solicitaron otras dos rondas, ya que se percataron que la rubia bebía mas que ellos mismos.
Y en efecto la juventud de la hembra sumado a su excelente estado físico le permitían beber alcohol sin ningún tipo de problemas, el trio conversaba y se reían de las estupideces que el alcohol les hacía decir, el maestro Tulio dedujo que la cosa iba para bien por ahora dejaría de lado las tremendas ganas que le tenía a Cielo Riveros , con este otro portento de chamaca que tenía a su disposición se conformaría, por lo que se empezó a medir en su ingesta de alcohol, no así el cojo que estaba tomando como desaforado y haciéndose el lindo con la rubia colegiala, al paso que iba no aguantaría mucho dilucidaba el profesor.
Claudia por su parte y al son de la fuerte y movida música reggaetón, y ya con bastante alcohol en su mente, pero no como para perder los estribos, se sentía entretenida con ese par de viejos calientes que se estaban gastando el sueldo del mes en todas las porquerías que le estaban comprando, entre globos con forma de corazón, peluches, y distintos tipos de artilugios artesanales, cadenas, anillos, tobilleras, etc. Solo era cuestión que un vendedor se acercara a la mesa de ellos ofreciendo sus productos y el par de degenerados se peleaban para decidir quién era el que se lo compraba.
Ya desde hace un buen rato que la rubia sentía como por debajo de la mesa grasientas manos le recorrían sus muslos, no supo en que momento ya se encontraba sentada al medio de este par de patanes, y cada vez se apretaban más a sus curvas. En un momento dado se acercó un joven muchacho a sacarla a bailar,
--Señorita, gustaría bailar un rato , le pregunto el jovencito que era casi de la misma edad de Claudia. La rubia entretenida al ver la cara de espanto que pusieron sus compañeros de juerga al darse cuenta que quizás la palomita se les podía echar a a volar, solo dijo…
--Ay qué pena, me encantaría bailar con Ud. joven pero no sé si mis tíos aquí presentes me darán permiso, contesto metiéndose coquetamente el dedo índice entre sus dientes y mirando a sus supuestos tíos. (Realmente esta Claudia sí que era una zorra con letras mayúsculas.)
El maestro Tulio que en esos momentos era el más sobrio de los tres, salto al instante,
--Pero por supuesto sobrinita vaya a bailar no más pues, no faltaba más, solo que no se nos vaya muy lejos, mire que después a lo mejor nos iremos a bailar para otro lado…
--Ay gracias tiito, Usted sí que es bueno conmigo, le dijo la rubia, dándole un beso en el cachete al caliente profesor, mientras el cojo Juan ya bebía directamente de la botella que habían pedido que les trajeran a la mesa.
El baile comenzó y Claudia comenzó a mover su figura al son de la música, el joven por más empeño que le ponía para apegarse al cuerpo de aquella hermosa joven rubia y con cuerpo de Diosa, esta se le separaba, cuando el muchacho posaba sus manos en su cintura o caderas, ella iba y muy sutilmente se las sacaba.
Claudia bailaba el reggaetón en forma espectacular, pero a pesar de que estaba bailando con un imberbe muchacho casi de su edad , su baile estaba dirigido al par de vejetes que la habían estado acompañando por el transcurso de esa noche, se movía en forma sensual y provocativa, para que ellos vieran bien lo que quizás podrían tener al alcance de sus manos, ella sabía que los tenia calientes y eso le gustaba, por lo que ahora con su baile pretendía calentarlos aún más, el muchacho solo estaba siendo utilizado por ella en su afán de mantener al borde de la lujuria a su maestro y al cojo Juan, que este último ya estaba a punto de pararse e ir a golpear al inocente muchacho producto de los celos que intempestivamente estaba sintiendo, lo que no sabía la rubia, producto del alcohol en su mente y cuerpo, era que ella ya estaba aún más caliente que sus dos compañeros de mesa.
Cuando la tanda de bailes termino para que las parejas descansaran la rubia volvió a la mesa para sentarse a un lado del maestro Tulio, el cojo Juan ya casi estaba noqueado por las inmensas cantidades de tequila que se había zampado, situación que aprovecho el maestro, era ahora el momento propicio,
--Ya rubita, no te hagas , me tienes más que caliente, porque no nos vamos a acostar y terminamos lo que dejamos pendiente en mi oficina , le decía a la vez que posaba su grasienta mano en uno de los poderosos muslos de la rubia…
--Ay no! como cree!!, yo no soy una chica tan fácil, además que yo tengo novio, le decía la rubia a la vez que revisaba su celular para ver si tenía algún mensaje de Cielo Riveros .
--Veras que seré bueno contigo, pídeme lo que quieras, pero por favor vamos a acostarnos, yo sé que tú puedes hacerlo y tu novio no tiene que por que enterarse,
--Lo que yo quiera?, consultaba la rubia con una interesada coquetería y sin dejar de revisar su teléfono…
--Si mamita lo que tú quieras le proponía el vejete al borde del llanto…
--Pues yo quiero las notas de los dos semestres, y de todos los ramos, jijiji…
El maestro Tulio quedo impactado con lo que podía Claudia, eso era mucho, él no podía intervenir en las notas de los demás profesores,
--No seas zorra para tus cosas!, tu sabes muy bien que yo no registro las notas de todos los profesores,
--Pero a fin de cada semestre puede hacerme los certificados, Ud. tiene los timbres del colegio, ya los he visto en su oficina, jijiji…
El maestro Tulio, se preguntó como no lo había pensados antes? La Claudia tenía razón, bastaría con solo sacar dos certificados en blanco y luego el los llenaría con notas falsas, además que podría hacerlo con otras alumnas que estuvieran en las mismas condiciones que la Claudia, esta muchacha sí que era un genio, determinaba.
--Tú deberías dedicarte a estudiar Ingeniería Comercial!!, rubia calienta vergas, mira que si tienes madera para negociar y estrategia para convencer, pero aun así tu precio es muy alto para solo una noche de amor…
--Eso tiene solución maestrito, lo podríamos discutir en la cama, jijiji…
--Hecho pendeja, vámonos ahorita mismo!!, bufaba el vejete con sus marcados e inflamados ojos de batracio reptilesco.
--Bueno vámonos ahorita mismo profe!, ay qué pena… y que pasara con don Juan, pobrecito, lo dejaremos aquí durmiendo?.
--Este cojo de mierda, casi nunca se mide con el alcohol, dejémoslo aquí , él se sabe cuidar solo mi reina, jejeje…
--Ok maestro, dejémosle aquí, total no creo que le pase nada…por favor lléveme mis cosas, estoy muy cansada, termino diciendo la rubia.
Así ya una vez de acuerdo la pareja conformada por el profesor y la alumna hicieron abandono de la feria para ir a tomar un taxi, Claudia caminaba tres pasos más adelante, siempre revisando sus mensajes en el celular, mientras el maestro Tulio, luchaba por no quedarse atrás, haciéndose espacio entre las personas, los 5 globos rojos con forma de corazón que entre él y el cojo le habían obsequiado a la chiquilla le dificultaban la visión, más la bolsa llena de peluches y de las demás chucherías que le habían comprado, pero la Claudia muy responsable con el acuerdo contraído con su profesor de vez en cuando se detenía para esperarlo, el pobrecito que venía todo cargado, pero ella se mantenía siempre atenta a su celular.
En el trayecto hasta la casa de la rubia colegiala, al viejo Tulio le faltaban manos para saciar sus ganas de sentir las curvas de la espectacular chamaca que se iba a ir a servir, el taxista ni el mismo se creía lo que había escuchado, cuando la pareja de pasajeros lo habían abordado, el hombre mucho más viejo que la mujer, asquerosamente feo y gordo, había solicitado ir a un motel, pero lo que más lo confundió fue escuchar a la misma hembra que era casi una adolescente, si no fuera por las marcadas curvas de su figura, solicitar que mejor se fueran para su casa ya que estaba solita, además que así podrían esperar a otra chiquilla que el parecer tenían que esperar. Ese viejo sí que era bravo para sus cosas pensaba el pobre taxista.

Mientras esto sucedía en la feria, en el taller de don Cipriano, la escena era muy distinta, Cielo Riveros solo atino a taparse desesperadamente su carita, sintió que era tomada brutalmente desde sus cabellos, escucho cuando don Pedro tiro al suelo el palo que traía en sus manos, para luego ser arrastrada por toda aquella inmunda habitación de taller en donde todo apestaba a grasas aceitosas mezclado con basura, movía sus manitas hacia todos lados en su inútil afán de encontrar algún apoyo para no caerse, hasta que sintió que era arrinconada contra una pared, en donde vio que su violador, un asqueroso viejo de quizás hasta 60 años y que aun la tenía bien asida de sus cabellos, tomaba impulso con su otra mano para asestarle una fuerte cachetada en el rostro que por poco casi la deja aturdida, cuando aún no reaccionaba del feroz golpe recibido en la cara vio que la manaza del vejete ya venía nuevamente de vuelta, para recibir otro aún más brutal en su otra mejilla.
Don Pedro, quien se encontraba totalmente salido de sus cavales, nuevamente arrastro el desnudo y portentoso cuerpo de la encamable colegiala, para ubicarla frente a frente de cara a él, y para que no se le olvidara quien era el que mandaba, le asesto otra aún más fuerte cachetada en el rostro arrojándola de bruces en el suelo.
Cielo Riveros aun no era consciente de lo que le estaba sucediendo, en su vida jamás había sido golpeada, y ahora extrañamente la estaba golpeando brutalmente un asqueroso mecánico que pretendía convertirla en su mujer a como dé lugar.
--Ves lo que consigues con tus estupideces maldita zorra estupidaaaa!!, le gritaba el desnudo vejete, con su verga aún más parada que antes, por el exquisito placer que sentía al estar golpeando a tan suculenta y virgen hembra. Cielo Riveros estaba en estado de Shock, aunque quería pedirle a aquel energúmeno que ya no la golpeara, de su garganta no salían las palabras, el viejo continuaba vociferando, --Acaso no te acuerdas que ya en la feria estuvimos culeando y te comportabas como una verdadera putaaa, jajaja!! Y ahora me sales con las mamadas que yo no tengo derechos!!, pues ahorita mismo te hare conocer los derechos que yo tengo sobre ti, y tomando nuevamente el palo que había tirado en el suelo, a la vez que el mismo tomaba el cuerpo lleno de curvas infernales de la tierna estudiante, la acomodo dejándola en 4 patas, para luego con palo en mano, tomando impulso y con todas sus fuerzas: Plaffff!!, retumbo ahogadamente el palo que recibió en sus carnes del culo, la sumisa colegiala,
--Ahora te portaras biennn!! Perraaa inmundaaaa!!
--Ahhhhhyyyyyyyy!! Pudo por fin emitir el grito de dolor, la garganta de la adolorida joven una vez que recibió el castigo ejemplarizador que recibió de su verdugo, --Noooo, don Pe…drooo…por fa…vorrrrr…ya… no me pe…gue…..Snifff, snifff…
--Esta noche te voy a enseñar a que te comportes como mi mujer trola de mierda!!, quieres recibir otro palo en el culo, perra asquerosaaaaa!!
--Noooo don Pedroooo!! Por favor ya noooo!! me portare biennnn!! Sniff…snifff!!
--Y para que vayas sabiendo muy bien cuáles son mis derecho sobre ti, ahorita mismo lo sabrás, decía don Pedro a la vez que se ponía de rodillas atrás del cuerpo de Cielo Riveros que aún se mantenía en 4 patas, y sin previo aviso y tomando a la colegiala por sorpresa le abrió el par de portentosas nalgas, acomodo su verga que ya estaba que se reventaba de tanto semen acumulado, y se lo mando a guardar de un puro envión hasta lo más recóndito de su glorioso y excelso pedazo de trasero, para comenzar a culearla en forma salvaje y rabiosa, como para enseñarle quien era el que mandaba, --Jjajajajaj pero que rico y apretado tienes el culo pendeja endemoniada, tomaaaa!!, tomaaaaa!! Este es mi derecho sobre tiiiii puta pendejaaaaa!! le gritaba por cada feroz clavada que le daba por el culo.
Cielo Riveros ya no decía nada, solo se dejaba culiar para que aquel exaltado mecánico no la fuera a matar a palos, solo se dio a aguantar las feroces arremetidas y apuntalamientos a los cuales estaba siendo sometida en contra de su voluntad, --Plafff, plafff, plafff, plafff, retumbaban las sonoras series de feroces nalgadas que recibía la jovencita en las carnes de su glorioso y bien formado culote, sentía como don Pedro sacaba y metía su verga con desesperado aceleramiento, enculandola hasta la saciedad.
Pero el vejete no era tonto, a pesar que se lo estaba pasando muy bien gozando a plenitud de un joven y hermoso culazo de 18 años, sabía que la chamaca tenía otra parte de su cuerpo que le prometía placeres aún mayores, por lo que fue gradualmente aminorando sus arremetidas hasta que con mucho cuidado retiro su poderoso artefacto carnal del precioso reducto que por segunda vez en la noche había disfrutado, para luego ponerse de pie y nuevamente tomo violentamente los cabellos de Cielo Riveros y la hiso que se enderezara, la joven quedo de rodillas, con la gruesa verga de don Pedro solo a centímetros de sus hermosos ojos verdes,
--Ahora quiero que me la chupes, putona y ponle empeño, porque o si no tú ya sabes lo que te pasara, Cielo Riveros recién se fijó que el vejete aún mantenía el palo en sus manos, por lo que aun con sus ojitos llenos de lágrimas, procedió a con una mano despejarse el rostro de cabellos enarbolados y con la otra se asió a la verga que ahora le estaban pidiendo que chupara, a pesar del profundo asco que esta asquerosa herramienta de carne le provocaba, al verla toda aceitosa con restos de jugos de sus propios interiores, que extrañamente pulsaba de arriba hacia abajo, de inflamadas venas azules y verdosas hinchadas, y que en su base estaba frondosamente cubierta por una gran cantidad de antihigiénicos pelos gruesos y negros, fue abriendo su angelical boquita, tal como en una ocasión ya lo había hecho con la verga del maestro Tulio y se la zampo de un puro bocado casi hasta la mitad, con el único afán de dejar contento al viejo que por ahora era su dueño según el mismo le había dicho y para que este no siguiera pegándole.
Cuando don Pedro sintió como su verga era apresada por la dulce y fresca boca de Cielo Riveros , si sintió en el mismísimo cielo, pero que rica tenía la boca esa chamaca endemoniada, la colegiala envolvía con su lengua parte del tronco y del glande, haciendo que su dueño casi perdiera los sentidos de la razón, sin pensarlo dos veces don Pedro se agarró firmemente de los cabellos de Cielo Riveros y comenzó el mismo a dirigir la mamada de verga, moviendo aceleradamente la cabeza de la joven tal cual como si se la estuviera follando por la boca.
Cielo Riveros ahogada al máximo por tanta intromisión de verga en su boca y garganta, ya estaba babeando grandes cantidades de saliva que escurrían por las comisuras de sus labios, de vez en cuando se atragantaba, era mucha la cantidad de saliva que caían también desde sus mismas fosas nasales, que por la presión ejercida por aquella satánica verga, la gran cantidad de flujos salivales mezclados con líquidos pre seminales buscaron el camino de las narices de la jovencita para salir expulsados con violencia desde esta por cada atragantamiento que sufría la pobre chiquilla. El vejete ajeno a todo esto solo gozaba follandose la boca de Cielo Riveros , con sus ojos entrecerrados y con su asquerosa boca abierta y desprovista de dientes daba a demostrar el inmenso placer que estaba experimentando.
--Que bien lo mamas perraaaa!!, exclamaba el horrendo mecánico, inconsciente de que al él no se lo estaban mamando, simplemente era el quien se estaba follando la cabeza de Cielo Riveros .
Por su parte la hembra resistía con mansa y dócil entereza a lo que le estaban haciendo, ya estaba clara de lo que le sucedería si se ponía a reclamar o a hacer problemas, ahí era don Pedro el que mandaba asumía ya la pobre y entregada Cielo Riveros .
El viejo de una se la saco de la boca para no eyacular dentro de ella, y producto del acelerado impulso en que la habían estado utilizando oralmente, la joven cayó de espaldas, su hermosa carita estaba embalsamada con líquidos extraños y saliva mesclada con semen, don Pedro en el acto se encargó de desparramárselas aún más por toda su cara, hasta que sus poros absorbieran esta exquisita y a la vez asquerosa esencia masculina, siguió con sus fenomenales tetazas, que también estaban bañadas con estos líquidos, don Pedro se encargó de desparramarlos por todo el cuerpo de Cielo Riveros , quien daba la impresión de estar totalmente aceitada.
La colegiala una vez ya recuperada de tan salvaje tratamiento, se dio cuenta que el vejete, a pesar de su apariencia decrepita, la tomo en brazos sin ningún tipo de complicación, para de una forma no tan violenta como la había tratado anteriormente, arrojarla sobre la cama que desde hace rato la tenía nerviosa, ya que prácticamente sabía lo que iba a pasar en ella.
Cielo Riveros muy enervada y asustada por los acontecimientos que se veían venir, vio al viejo que con su inmensa tranca desafiando a los cielos, ir a hurgar entre sus ropas para luego decirle y darle conocimiento…
--Escuchame pendejaaa!!, le decía mientras en sus manos mantenía la infracción por prostitución, y la identificación escolar de Cielo Riveros , --La verdad es que no quiero volver a pegarte, pero si me obligas a ello no dudes que lo hare, si miras bien te darás cuenta que aquí en mis manos tengo estos dos documentitos tuyos, que tienen todos tus datos personales, los cuales me los dejare de recuerdo, me vas entiendo?, le preguntaba don Pedro mirando con cara de demonio a la asustada Cielo Riveros , quien le asintió con un ligero movimiento de cabeza,--Quiero escucharte estúpida? Di que entiendes!!, le volvió a decir mirando el palo que estaba a un costado de la cama, cosa que Cielo Riveros capto al instante de lo que pasaría si no le contestaba…
--Si don Pedrooo…le entiendo!, contestaba la tierna y desnuda joven que con una mano intentaba tapar sus tetas y con la otra su tierno y tímido tajito.
--Bien, te aclaro que ahora vamos a dedicarnos a follar como animales calientes, y quiero que pongas de tu parte para hacerme sentir bien y satisfecho, porque o si no, aparte de volver a darte la pateadura de tu vida, el lunes a primera hora voy para tu colegio y les cuento a todos tus profesores que su alumna sale a putiar por las noches te queda claro putita, jejeje, sin mencionar que ahora puedo ir hasta tu casa, no me interesa saber con quién vives, pero de seguro que se mostraran muy interesados en saber lo que hace la zorra de su hija, cuando le dan permiso para salir a divertirse, y yo creo y estoy seguro que tu no quieres eso, para ti ricura, verdad!
Cielo Riveros quien ya iba entiendo de que se trataba tanta explicación e imaginando la cara de decepción que pondrían su madre con su abuelito, el saber que a su hija le habían cursado una infracción por ejercer la prostitución en la vía publica, sin mencionar de lo que opinarían sus profesores y compañeros, a ella que siempre fue tan buena hija, responsable en sus deberes escolares, siempre interesada en participar en ayudantías y cosas por el estilo, con todo esto su vida se vería acabada, todos estos pensamientos casi la hacían enloquecer, por lo que solo se dio a contestar,
--Si don Pedro, yo no quiero eso para mí, snifff!!, por favor hare todo lo Ud. quiera!! pero no vaya para mi casa a acusarme, snifff…snifff, ni tampoco a mi colegiooo!!...buaaaaa!! buaaaaaa!! Sniffff!! Snifffff!! lloraba desconsoladamente.
--jajajajajaja!! Eso si esta mejor mi amorrr, desde hoy día pasas a ser mi mujerrrr!!, mi hembraaaa!!, mi putaaaaaa y en todas sus letrasss!!!, te voy a emputecerrrr!!, te voy a violarrr todas las veces que yo quiera, jajajajaja!!
El viejo ni el mismo se la creía de haber tenido tanta buena suerte de haberse encontrado una tierna jovencita, virgen y casadera, de esas que se arreglan rico con ropas que hacen resaltar las formas de sus cuerpazos recién desarrollados, se notaba que la colegiala era limpiecita y pulcra con su presentación personal y ahora la tenía solo para él, sin mencionar las suculentas medidas que se gastaba, esas endemoniadas y diabólicas curvas que casi lo hicieron enloquecer cuando recién la vio en el puente de la feria junto a su encamable amiga que también estaba tan rebuenota como ella, pero esta zorrita estaba mejor pensaba el detestable vejete para sus adentros y ya aprontándose a tomar lo que la joven poseía al medio de sus piernas y que por esas cosas del destino estaba destinada para uso exclusivo solo para él.
Cielo Riveros lo vio venir a acostarse en esa inmunda cama en donde la convertirían en mujer, por cada movimiento que el viejo hacía para acomodarse junto a su cuerpo, la cama rechinaba obscenamente, cosa que la ponían aún más nerviosa…
--Ya putita entregate dame unos besitos jejejeje, le decía el vejete a la vez que la abrazaba y buscaba su fresca boca, Cielo Riveros no sabía que hacer estaba muy lejos de querer entregarse por las buenas a ese desalmado y caliente vejestorio, pero sabía que su destino dependía de ello.
Don Pedro, dejando la sesión de besos para más tarde, tomo la mano en que la joven cubría sus senos y la dejó a un lado, también retiro la otra con la cual Cielo Riveros protegía su vagina, una vez que logro que la asustada colegiala dejara a la vista sus más preciados tesoros, se sintió conforme, el viejo por muy caliente y macho que fuera para sus cosas, temblaba por la emoción de estar acostado con una hembra de tales características, asquerosamente comenzó a lamerle la suave cara, como a su vez a hablarle en sus perfumados oídos,
--Desde hoy pasas a ser mi juguete personal, mi potranquita rica, serás mi hermoso y personal objeto sexual, y voy a jugar contigo hasta que me harte, hasta que te revientes de tanta verga que te voy a meter, a la vez que con sus asquerosas manos comenzaba a sobarle las tetas y recorrerla por todo el resto de su cuerpo, --Mmmmmm... que bien hueles ricura, mmmmm… siii...cosita ricaaaa te voy a enyeguecer!!... y esmerate en satisfacerme, porque si me llego a aburrir de ti, te ofreceré a todos mis amigos para que jueguen contigo cuando les den ganas, y te hare putiar en las calles para ganarme un buen dinerito a costas tuyas, así que por favor no me jodas con tus mamadas de que eres virgen y pura, pórtate bien y anda abriéndote de patas, vamos ricura hazlo, ábreselas a tu macho pedazo de zorraaaa!!...

Cielo Riveros escuchaba asqueada los repulsivos planes que tenía don Pedro para ella, ese aliento bucal a podrido, aliento a viejo, ya casi la hacían no soportar tanto manoseo a sus respetables formas, de pronto escucho la primera solicitud de don Pedro, ahora que era prácticamente su dueño,
--Ponte de rodillas al final de la cama y chúpamela de nuevo pendejaaa!!, quiero ver ese culo bien levantado, hazme una buena mamada!!, solicito don Pedro mientras él se acomodaba de espaldas para disfrutar la nueva felación que estaba inquiriendo, Cielo Riveros como pudo fue tomando ubicación de cómo le habían ordenado, y una vez con sus dos temblorosas manitas bien sujeta a la peluda base de su erguida y portentosa verga, y pensando en que ella no quería que este horrendo hombre se acercara ni en la más mínimo a su casa o al colegio, se lo metió en la boca para comenzar a chuparlo y a lamerlo con sus ojos cerrados, procurando no pensar en otra cosa que no fuese en hacerlo sentir bien, y además para que don Pedro no se enojara con ella.
Con deleitosa concentración se la mamaba, con su boquita bien apretada, su cabeza subiendo y bajando, y haciendo círculos de vez en cuando, chupando sin parar un solo momento, como una verdadera poseída por el demonio, lamiendo, moviendo la lengua circularmente por el venoso tronco y el glande, concentrada también en soportar el repulsivo asco, y esperando cual sería la próxima orden de su macho.
--Ohhhhh!! Pero que zorra eres para chupar la verga mamitaaa!!--Eso es así…así…Mmmmm…Arghhhhh!!, gruñía el vejete, ante la sabrosa mamada que le estaba prodigando Cielo Riveros , --Cometelo todooo todoooo!! Tragátelo todoooo putaaaaa!!...
Luego de unos 10 minutos de una morbosa y rica felación, Don Pedro se lo saco de una, le parecía que la chamaca había aprendido muy bien cuáles eran sus nuevas obligaciones, el vejete la quedo mirando ensimismado, que rica se veía la pendeja arrodillada en la cama y con las comisuras de sus labios chorreándole restos de líquidos pre seminales, con sus tetas brillosas por la sudoración obtenida por la morbosa tarea en que había estado ocupada.
El viejo determino que ya era hora de poseerla, de hacerla suya, verdaderamente se la quería meter hasta el corazón, hace mucho tiempo que no se sentía tan atraído de esta forma por alguna hembra, y claro Cielo Riveros era una chiquilla hermosa, que jamás este viejo horrendo y degenerado hubiese tenido la oportunidad de poseer, si no fuera por el extraño curso de los acontecimientos.
El caso es que una inmensa e instintiva necesidad animal por destrozarla a vergazos se apodero de su desequilibrada mente, tal vez fuese por su olor, por su aroma a pulcra inocencia, o por su belleza.
Don Pedro perdido en un mar de degenerados deseos la tomo con fuerzas para dejarla recostada de espaldas en aquel sucio colchón, Cielo Riveros anticipándose a lo que se venía cruzo instintivamente sus piernas en señal de protección de su casi natural y depilada vagina de escasos y finos bellitos negros y sedosos, el vejete al notar la reacción de la asustada colegiala, le dijo,
--Ahora te la voy a meter pendeja así que no me salgas con tus mamadas, te la voy a meter de una, para que así todo sea más rápido para ti y no sufras tanto, jejejeje, aunque yo sé que igual te va a doler, pero si te portas bien veras que te va a gustar tanto que después me andarás buscando para que te de verga, jajajaja!!, serás mi mujer pendeja, te voy a culiar como jamás nadie te lo volverá a hacer y en el momento en que te lo meta no lo olvidaras nunca, jajajaja, decía el detestable hombre a la vez que iba tomando ubicación entre los hermosos muslos abiertos de Cielo Riveros , que el mismo se había en cargado de ir abriendo.
Cielo Riveros comenzó a llorar de miedo, era injusto lo que le estaba sucediendo, se la iban a culiar adentro de un sucio taller mecánico, que ni siquiera sabía adonde estaba ubicado, atrás quedaban sus sueños de casarse virgen y enamorada, que pasaría ahora con Rodrigo, con qué cara le miraría a sus ojos, el que era tan bueno, tan noble, y ella dejándose culiar por un horrible mecánico que hasta podría ser fácilmente su abuelo.
Sintió su cuerpo aplastarse por el de don Pedro, el vejete ya se había montado sobre el potable cuerpo de la colegiala, que estaba casi ahogada debajo de él y con sus bellas piernas abiertas, esperando lo desconocido, el vejete acomodo su armamento en la entrada de la pequeña rajadura intima de Cielo Riveros , paso sus brazos por debajo de la espalda de la joven para afianzársela desde sus suaves hombros, la apretó contra el en señal de poderío de macho, y ya sin esperar nada más empujo con todas sus fuerzas hacia el interior de la vagina de la tierna colegiala, Cielo Riveros experimento ahora si un inmenso dolor casi animal jamás sentido en su vida, ni siquiera el palo en el culo que le habían dado hace poco le había dolido tanto, al sentir la gruesa cabeza de la verga de don Pedro intentar calar su vagina.
--Ahhhhhhh, nooooo, por…fa…vorrrrrr!!, grito Cielo Riveros ,
--Arggghhh, que apretada la tienes chiquilla del demonio, le decía don Pedro justo al lado de su oído, a la vez que le propinaba otro feroz apuntalamiento vergal-vaginal que tampoco tuvo éxito, Cielo Riveros solo lloraba silenciosamente por el dolor en su vagina, y por todo lo que estaba viviendo, las lágrimas brotaban copiosamente desde sus hermosos ojos verdes y rodaban lentamente por su carita, su visión solamente era el techo de esa mugrosa habitación y los canosos pelos de don pedro que casi le tapaban la mirada, --Preparate pendeja porque ahora sí que te la meto, el mecánico con mucha concentración y morboso ímpetu volvió a empujar con fuerzas desmedidas sobre los apretados pliegues vaginales de la joven, y para buena suerte de él y mala suerte para ella, estos cedieron ante la impecable estocada vergal que les habían asestado, permitiéndole el ingreso hasta la mitad de su gruesa verga, a ese endemoniado cuerpo de Diosa, que él había estado deseando ya desde hace unas tres horas por lo menos,
--Aaaaaayyyyyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyyyyy!! Buaaaaaaa!! Buaaaaaaa!! Don Pedroooo!!, por favorrrrrrr!! Ya..no…me… la… me….taaaaaa!! Sniffffffffff! Snifffff!! Sniffffff!!, Cielo Riveros sentía que la rompían por dentro, sus carnes se rasgaban ante la brutal intromisión a su deleitoso cuerpo,
--Callateeee zorraaaa mal paridaaaa! y acepta mi vergaaaaa! Tomaaaaaa!!, bramo don Pedro dándole un tercer y aún más brutal empuje en donde Cielo Riveros termino por comerse vaginalmente toda la verga de don Pedro, había entrado totalmente, solo los pesados testículos llenos de semen caliente y espeso habían quedado fuera del cuerpo de la hermosa joven recién estrenada sexualmente.
Estaba hecho, Cielo Riveros ya no era más virgen, Don Pedro Ventura, un asqueroso y viejo mecánico se había encargado de tomar y usurpar la virginidad de la tierna colegiala, recién convertida en mujer, dejándosela para el por el resto de su miserable existencia.
El vejete permaneció ensartado dentro del cuerpo de Cielo Riveros y en toda su longitud vergal, por espacio de unos dos minutos aproximadamente, el calor interior del cuerpo de aquella joven Diosa y que envolvían a su verga era el mayor placer que jamás en su vida había experimentado, no quería salirse jamás de aquella apretada vagina que en estos momentos en forma forzosa le albergaba a su gruesa tranca, en la habitación solo se escuchaba los sonoros sollozos de la hembra recién desvirgada.
Una vez que el viejo caliente y degenerado de don Pedro determino que ya era tiempo suficiente para que aquel apretado reducto amatorio se acostumbre a sus dimensiones vergales, concluyo que ya había llegado el momento de empezar a moverse, para que esa joven y tremenda colegiala viera y supiera lo que era culear con un verdadero macho caliente,
--Que rica tienes la panocha pendeja, le decía el vejete babeando y con sus ojos cerrados, --No me saldría de tu cuerpo jamás, eres una verdadera potranca hecha para ser follada por un verdadero potro salvaje, pero ahora sabrás lo que es culiar de verdad ricura, jajajaja!!, Te hace sentir lo que jamás nadie te lograra provocar y te juro pendeja que te va a quedar gustando tanto que querrás repetir la operación cuanto antes, Jajajajaja!!, Te voy a culiar y te voy a preñar!! Serás la madre de mis 4 hijos que te voy darrrr!!, le decía riéndose y burlándose a una ensartada y adolorida Cielo Riveros , que aún mantenía su boca abierta en un ahogado grito de dolor, con sus ojos bien abiertos y vidriosos producto del enajenante impacto emocional y de calvario carnal.
Don Pedro comenzó a moverse lentamente en forma culiatoria, metía y sacaba su tranca solamente hasta la mitad, el calorcito y las placenteras sensaciones que le prodigaban la vagina de aquella núbil Diosa a su verga eran indescriptibles, Cielo Riveros por su parte aplastada y dejándose ensartar, ni siquiera podía moverse por intenso dolor que sentía por cada apuntalamiento que le daban con animal ensañamiento, sentía que prácticamente la estaban empalando por la zorra, el vejete cada vez se movía mas fuerte intentando adentrarse el máximo posible hacia el interior de aquel curvilíneo y juvenil cuerpo, la cama rechinaba rítmicamente antes los fieros bombeos que hacia el mecánico.
Fueron pasando los minutos y don Pedro cada vez se movía más fuerte y rápido, aserruchaba, metía, taladraba profundamente en los interiores de Cielo Riveros , haciendo círculos con la intención de agrandarle la panocha a la entregada jovencita, el hombre sudaba como animal, las lágrimas en los ojos de Cielo Riveros ya se habían secado, por ahora soportaba estoicamente las bárbaras y crueles arremetidas de verga que le metían a su cuerpo, ella también sudaba, lo comprobaban algunos cabellos pegados en su cara y ciertas gotitas de transpiración que se le acumulaban entre su cara y narices, no se dio cuanta cual fue el momento en que cerro sus ojos para dejar al viejo que tenía montado sobre su curvilíneo cuerpo hiciera con ella lo que quisiera, el dolor fue pasando en forma paulatina, la cosa era que por ahora la culiada que le estaban pegando era de campeonato y ella sintiéndola con sus piernas bien abiertas y con sus ojos cerrados.
Don Pedro sabía que tenía que aprovechar esta instancia, no estaba muy seguro que si después de la primera acabada se le fuera a parar de nuevo, por lo tanto determinaba que tenía que prolongar lo más posible aquella culiada de antología que se estaba pegando con una bella estudiante de 18 años, los gritos de dolor con los bramidos que había pegado Cielo Riveros gradualmente habían ido aminorando, ahora en aquella habitación lo único que se escuchaba era el prolongado rechinar de la cama ante los bruscos movimientos que hacían sobre ella y los suspiros de dolor y placer de ambos amantes ante la desnaturalizada follada que se estaban pegando.
Cielo Riveros totalmente confundida no sabía qué hacer, el dolor en su vagina había ido aminorando, aun sentía dolor, pero era una extraño dolor que la hacía sentir rico, noto que mientras más profunda era la clavada, el dolor parecía que más iba a desaparecer y como es lógico que ella quería que desapareciera, lentamente comenzó a empujar hacia adelante, a los pocos minutos de estas extrañas sensaciones en el cuerpo de la colegiala, Cielo Riveros ya no se movía para que desapareciera el dolor ni nada parecido, ahora ella ya estaba culiando por autentica y genuina calentura, en un momento don Pedro pensó que la chamaca lo había abrazado para sujetarse, pero cuando en un lapso que él se detuvo para estudiar lo que allí abajo estaba ocurriendo, con placentera emoción comprobó que la joven seguía moviendo sus caderas de atrás y hacia adelante, por lo que a modo de agradecimiento comenzó a moverse y a meter verga en una forma casi demencial, ahora sí que se venía lo bueno pensaba el feliz y amachado vejete,
--Ahhhh que rico te meneas putitaaaa!!, Te lo dije!! yo sabía que iba terminar gustándote, jajajajaja!!, le decía preso por la excitación…
Aun así Cielo Riveros se sentía avergonzada, se preguntaba cómo podía estar sintiendo tan rico mientras este asqueroso hombre mancillaba su cuerpo de esa manera, mas no podía dejar de mover su cintura y caderas, su mente le ordenaba que se aferrara más firmemente al viejo cuerpo del que ahora ya se había convertido en su hombre, ella no lo quería admitir pero a estas alturas ya se la estaba pasando muy bien acostada con don Pedro, lentamente de su mente fueron desapareciendo aquellas terribles imágenes de cuando el detestable hombre le había pegado, pero su conciencia aun le recordaban que a pesar de todo lo antes descrito, a ella se la estaban violando, sin contar de las continuas imágenes de ver a su trabajadora madre esperándola con el desayuno servido, o de su abuelito que tanto la aconsejaba y la cuidaba protegiéndola de los mal vividores, o de Rodrigo su trabajador y fiel novio…
Pero su cuerpo le invitaba a olvidarse de todos ellos, las gratificantes clavadas que le daban a su perfecta anatomía iban a terminar por enloquecerla de placer, don Pedro estaba siendo muy bueno con ella, pensaba en las nebulosas de sus subconsciente, hasta que ya queriendo terminar con todos esos sentimientos encontrados su mente decidió claudicar a todos sus pesares, y se entregó en cuerpo y alma a todo lo que aquel libidinoso viejo verde quisiera hacer con ella.
Sus delicadas manitas con uñas muy bien cuidadas, lentamente comenzaron a deslizarse por las anchas espaldas de don Pedro, Cielo Riveros en un momento se sintió emocionada, de estar en tales circunstancias con un hombre mucho más viejo que ella, y que este le estuviera haciendo sentir a vergazo limpio, esos gratificantes y arrebatadores escalofríos de placer a su cuerpo.
Don Pedro quien ya se sabía ganador de aquella caliente contienda de sexo, separo su cuerpo levemente para admirar a la diosa que poseía ensartada con su armatoste, la vio con sus idílicos y perdidos ojos verdes semi cerrados, como también pudo ver que de sus rojos labios caían una pequeña cantidad de saliva, señal de demostración inequívoca que aquella hermosa hembra ya había sucumbido a los deliciosos placeres de la carne, noto que por cada profunda clavada que le enterraba por la panocha, la hembra emitía un audible: --Shhhhhhhh!!... Aaahhh!!
El vejete sin perder el tiempo y aprovechando la ocasión, busco con febril desesperación aquellos preciados labios rojos semi abiertos que le prometían el paraíso, Cielo Riveros lo recibió casi con agrado para luego fundirse ambos en el más apasionado beso con lengua que ambos jamás en sus vidas se habían dado en ocasión alguna.
La pareja se besaba cada vez más lascivamente, la potente colegiala guiada por un nuevo afecto recién nacido y aflorado desde sus revolucionadas progesteronas, fue subiendo sus manitas hasta la nuca de don Pedro, y por segunda vez en la noche se daba a aplicarle nuevamente un delicado masaje con la yema de sus dedos al áspero pellejo reinado con gruesos y desmadejados pelos canosos, en la cabeza del hombre que se la estaba culiando a la fuerza.
Cielo Riveros ahora se comía y devoraba como una posesa las rosadas encías desprovistas de dientes de don Pedro, sus delicados dedos se perdían entre los hirsutos pelos canosos del mecánico, jugaba asquerosamente con su lengua y la de él, revolviendo la gran cantidad de babas de ambos que se acumulaban dentro de su fresca boquita y que ella se encargaba de ir tragándoselas todas, era una autentica deidad de placer en lo que se había convertida la tierna chiquilla, el viejo aún no se la quería creer, por lo que le devolvía a modo de agradecimiento unas sólidas y profundas arremetidas vergales, para hacerle ver que desde ese día él era su único macho.
Don Pedro apenas se pudo separar de los desesperados labios de Cielo Riveros , y sabiéndose y el haber comprobado que él era ya el ganador le dijo,
--Te dije que te iba a encantar mi verga pendejaaa!! Vamos dime que te encanta mi vergaaaa!!, exclamaba don Pedro sin dejar de arremeter con violencia…
Cielo Riveros no le contestaba nada, la inmensa y desquiciante calentura que se había apoderado de su persona, no se lo permitían. Sus quejidos y suspiros de placer, comenzaron a subir de volumen e intensidad, convirtiéndose en gritos y en alaridos de auténtico placer carnal y sexual, don Pedro mantenía su frenético ritmo de mete y saca, y conforme aumentaban los gritos de la colegiala, mas aceleraba y ganaba fuerzas en sus movimientos, hasta que sus oídos escucharon lo que el ya anhelaba oír, los gritos y palabras que exclamo Cielo Riveros fueron claros y concisos,
--Ahhhh…siiiiii…ricoooooo…papiiiiii!!…
--Te gusta cómo te la meto pendejaaaaa!!, le consultaba el caliente vejete,
--Siiiii, don Pedroooo, métamela todo lo que quieraaaa, mas adentroooo, mas adentroooo!!, exigía la chamaca a la vez que meneaba con fuerzas sus caderas para hacer más profunda la clavada,
--Eres la mejor zorra que me he culiado pedazo de puta! Vamos dilo! Di que eres mi putaaa!!, exigía el viejo quien seguía serruchando y bañado por el sudor y la calentura del momento,
--Siiii papiiii!! Yo soy su putaaa!! Soy su putitaaaaa!! soy su mujerrrrrr!!, Cielo Riveros no era consciente de todas las peladeces, que le estaba diciendo al viejo que había sabido llevarla a tal estado de calentura.
Don Pedro veía claramente la descompostura que estaba sufriendo la hermosa jovencita, que en estos momentos movía sus caderas rítmicamente a las clavadas que el calientemente le concedía, gratamente comprobaba, que el cuerpo de Cielo Riveros estaba siendo preso de unos fuertes y brutales espasmos de placer, veía como la nena se retorcía e intentaba acoplarse aún más férreamente a su propio cuerpo, además que creía sentir como los músculos vaginales de la tierna chamaca se contraían abrazándole y comprimiéndole la verga, y como totalmente salida de sus cavales le pedía,
--Sigaaaa!!, sigaaaaaa!! métamela enteraaaaa!!... estoy a punto de ... métamela más fuerteee!! Todaaa…Todaaaa!!
El feliz y fiero mecánico comenzó a empujar hacia el interior de la joven sin cejar en su empeño, hasta que ambos pubis, uno suave y casi depilado, en contrate de otro que era bien peludo, se quedaron pegados haciendo desquiciantes círculos copulatorios, sin despegarse ni siquiera un milímetro, por lo que ambos cuerpos ya estaban casi al borde de un fenomenal orgasmo, hasta que para el gozo de don Pedro, pudo notar que en la inminente explosión que se venía en el cuerpo de su compañera de coito, su vagina derramaba unos abundantes y calientes chorros de líquidos vaginales, no sabía si estos bien eran de orina o de otro tipos de líquidos, pero de lo que si estaba seguro era que estos le estaban bañando en forma exquisita a su ya casi adolorida vergota.
-- Asii!!, así!!... don Pedroooo!! Deme más fuerteee... deme más fuerteeee!!... continuaba vociferando Cielo Riveros con su espalda totalmente enarcada y con su vagina totalmente levantada, en el afán de que don Pedro no le sacara su verga de su cosita.
El viejo sentía que su verga estaba enterrada hasta lo más profundo de las tiernas entrañas de aquella dulce y caliente potranca que se encontraba perdida en la total calentura. Hasta que el cuerpo de Cielo Riveros no fue capaz de resistir tanto gozo, una formidable y placentera corriente eléctrica que le nacía desde lo más profundo de su zorrita, se expandía a raudales hacia todas las extremidades de su cuerpo y que le hicieron explotar en el más formidable y grandioso orgasmo sentido en su vida, que ni siquiera el cojo Juan le había hecho experimentar, cuando la hiso debutar por el culo.
--Siiiiiiiiiiiiiii!!!, grito Cielo Riveros como una verdadera posesa, su grito placentero fue emitido desde lo más profundo de su ser y de su alma, el cual recorrió y retumbo por todos los rincones del vacío taller de don Cipriano, y que pudo haberse escuchado fácilmente en toda la cuadra de donde se encontraba el Pie Grande, debido al silencio de aquellas altas horas de la noche.
De la misma forma don Pedro determino que este era el momento exacto para verter su apremiante y urgido simiente al interior del cuerpo de tan estupenda y curvilínea estudiante. En el momento en que Cielo Riveros emitía su placentero grito de éxtasis el viejo la callo con un asqueroso beso en la boca el cual daba la impresión que se la estaba comiendo, para luego separase y notificarle,
--Eres una Diosa pedazo de zorraaaaa! Ya no aguan…tooo…masssss!, me voy…a…co…rrerrr… adentro de…tu…cuer…pooooo!! Ohhhhh que…ri…cooooo, la…vas….a …re…ci..birrrrr, pu…taaaaa!! to…maaaaaaa!!, gruño con desesperación, y fijando su mirada, en el hermoso rostro descongestionado de Cielo Riveros , derramo en el interior de su estómago 6 a 8 potentes chorros de hirviente y reproductivo semen, el cual salía escupido en abundancia y con fuerzas desde su verga, quemando las entrañas de la excitada Cielo Riveros quien sentía la potencia y virilidad de su macho, pensaba que aquello era lo más hermosa y gratificante experiencia jamás vivida en su existencia.
Estuvieron pegados en esa posición un espacio de tiempo indeterminado, Cielo Riveros con sus bellos muslos bien abiertos y con don Pedro aun incrustado con su verga al interior de su cuerpo, había sido la follada de sus vidas para ambos, y que el viejo estaba totalmente dispuesto a repetir en cuanto sus fuerzas se lo permitieran. Lentamente el mecánico se fue saliendo y desclavando del portentoso cuerpo de Cielo Riveros , ambos quedaron tendidos en la cama exhaustos, para que sus transpirados cuerpos pudiesen asimilar el placer recibido, y para a su vez se regulasen sus ritmos cardíacos y sus agitadas respiraciones se normalizaran.
--Eres una verdadera puta en la cama a la hora de culiar ricura, el sueño de cualquier macho caliente como yo, jajajaja!!, le decía el vejete a la misma vez que la abrazaba y la hacía apegarse a su obesidad. --Ha sido una de las mejores folladas que me he pegado en mi vida, por hoy creo que será suficiente pendeja, descansemos un ratito y luego te iré a dejar a tu casa, mira que quiero saber dónde vive mi mujer, jajajaja!!
--A Cielo Riveros , a quien ya se le había pasado a medias la calentura, y exigiéndose a ella misma entrar en razón, le contesto,
--Don Pedro, no es necesario que me vaya a dejar creo que me puedo ir sola, tomare un taxi, la jovencita no quería que aquel viejo con el cual se había estado revolcando supiera donde ella vivía.
--Nooo!!, le contesto el vejete, --Desde hoy día eres mi mujer, y yo soy tu marido, y no permitiré que mi hembra ande por las calles sola en la noche, o quieres que aparezca por ahí algún viejo degenerado y te culie, jajajaja!!, se reía ya que él estaba claro que era exactamente lo que le había ocurrido a la encamable chamaca que el ya veía como de su propiedad.
Una vez que descansaron desnudos y abrazados por un tiempo indeterminado, en el cual Cielo Riveros fue retornando a su triste realidad y en donde asimilaba que había sido violada, el viejo determino que ya habían descansado lo suficiente, le ordeno a Cielo Riveros que se vistiera mientras él se ponía su overol de trabajo, había pensado en llevarse a su casa a la colegiala para poder seguir follándosela al día siguiente, pero sabía que eso le podía traer problemas, ya que la familia de la joven se podía preocupar y comenzarían a buscarla, se conformaba que al tener en su poder la falsa prueba que certificaban de que Cielo Riveros era una vulgar puta, ya que esto le garantizaban unos futuros y placenteros encuentros con la colegiala todas las veces que él quisiera, además que idearía la forma para poder dejársela y llevársela a vivir con él, hasta que se hartara.
--Don Pedro…no tengo mis botas, le dijo la chamaca al recordar que sus botas habían quedado tiradas en la feria,
--No importa mira ponte estas, le dijo el vejete a la vez que de a un lado de la cama sacaba unas rosadas chalas de mujer,
--Pero y de quién son?, preguntaba Cielo Riveros , un poco preocupada por tener que calzarse algo que era de otra persona,
--No te preocupes, son de la María, es una sobrina que de vez en cuando se encierra con mi hermano para hacer sus cochinadas, pero es tan limpiecita como tú, e igual de zorra y puta para sus cosas, jajajajaja!!
Y así una vez vestidos hacían abandono del taller, Cielo Riveros a quien la ferviente calentura que horas antes le habían envuelto y cautivado ya la habían abandonado por completo, ahora los sentimientos de culpa le atacaban sin misericordia, se preguntaba cómo pudo haberse entregado en la forma en que lo había hecho a ese odioso y detestable hombre que la había forzado sexualmente y que daba el aspecto de que llevaba unos buenos días sin bañarse, y ella haberlo disfrutado.
Nuevamente sus lágrimas volvían a brotar angustiantemente desde sus ojos, sentía ganas de matarlo, pero con el solo recordar lo bruto que él había sido con ella al momento de metérsela, instintivamente le nacían unas tremendas ganas de volver a quitarse la ropa, tirarse de espaldas en la cama y abrirle las piernas, para que el tomara lo que ella ya pensaba que solo le correspondía a él, para luego volver a recriminarse y preguntarse que por que ahora sentía eso tan raro hacia don Pedro, un asqueroso viejo que solo hace algunas horas le había pegado y violado al mismo tiempo, le había robado lo más preciado que ella poseía y que había sido su virginidad, nuevamente pensaba en su familia, en su vida escolar, en Rodrigo, y lo que más le dolía y se reprochaba era saber que don Pedro la había hecho gozar una verdadera perra.
Los sentimientos que asaltaban a la muchachita eran totalmente contradictorios.
Antes de salir de aquella nauseabunda y sucia habitación, pudo ver la gran mancha de sangre que había quedado en el inmundo colchón, señal irrefutable de su desvirgamiento a manos de don Pedro, el vejete al ver como la joven miraba la escena con sus ojos bañados en lágrimas por lo allí ocurrido, le dijo proféticamente,
--No te preocupes putita, dejémoslo así no más, total, quizás a que pedazo de yegua mal parida se irán a culiar nuevamente en esa cama y encima de nuestros jugos cuando ya estén secos, jajajaja, reía a la vez que la sacaba a empujones de aquel caliente taller mecánico, en donde se quedaba para siempre su virginidad mancillada. (Faltaba poco para que amaneciera)



(4 horas antes aproximadamente en la casa de Claudia)
Una vez que ya estaban en la sala de estar de la casa de la rubia estudiante, el maestro Tulio, no se creía que estaba a punto de acostarse con Claudia, sabía que los padres de ella no llegarían hasta el mediodía del domingo, por lo tanto tenía todo el tiempo del mundo para follársela como el quería ya desde hace mucho tiempo.
Mientras él suertudo y feliz profesor se encontraba perdido en un mar de perversos y lascivos deseos, la rubia servía otras dos copas de tequila para hacer la previa de lo que sería el encuentro sexual con su profesor, a cambio de los certificados de notas semestrales de su último año de colegio.
Claudia quien en este momento ya ni se acordaba de la suerte de su amiga, producto del alcohol en su mente, se mantenía nerviosa, mitad por la fealdad del viejo con el cual estaba a punto de acostarse, y mitad por saberse también muy caliente de estar a punto de cometer tal abominación.
Los vasos servidos quedaron en la mesita que se encontraba justo al lado del sofá en donde estaba sentado el caliente maestro, este no despegaba sus ojos de sapo de las pronunciadas curvas que ya estaba a punto de poseer, hasta que ya no aguantando más y queriendo un poco más de acción, se atrevió a solicitar…
--Caliéntame rubita, hacete alguna cosita rica para que mi verga este como fierro al momento que te la meta…
Claudia quien también ya estaba deseando que de una buena vez por todas, que aquel anti estético y repugnante viejo verde se la metiera, poso sus infernales curvas enfundadas en el ajustado vestido negro tipo mini falda que llevaba puesto, para inclinarse y posar sus apetitosos labios muy cerca del rostro del vejete para preguntarle,
--Quiere que lo caliente?,
--Siiii mamasota caliéntame todo lo que quieras, le pedía ya casi rogándole…
--Y mis certificados?
El viejo Tulio, ya todo traspirado y tiritando por la emoción le dijo,
--El primero estará listo para esta misma semana, y el otro…, el vejete lo pensó por un momento, --Tu misma me dijiste que eso lo conversaríamos en la cama, le contestaba como buen estratega a pesar de lo caliente que lo tenía la putita de Claudia.
La rubia le regalo una de sus más calentonas sonrisas, para luego depositarle un leve beso en los gruesos y asqueroso labios de aquel lujurioso hombre obeso y sexagenario,
--Espéreme aquí, me iré a poner más cómoda, le dijo la potente Claudia a su maestro.
No fueron más de tres minutos en que la bella estudiante se demoró en ir a su cuarto y volver, pero el viejo casi se volvió loco cuando la vio aparecer desde su cuarto totalmente desnuda, sus ojos de réptil perecieron crecer tres veces más de cómo eran en su tamaño normal, Claudia camino lentamente hacia donde estaba el suertudo profesor que ni se daba cuenta como se le caían las babas ante el morbos espectáculo que le estaba brindando una de sus más bellas alumnas.
Cuando la rubia colegiala ya se encontraba solo a metros del hombre que sería su primer macho como corresponde. Se dice esto ya que todos sabemos lo muy puta que era Claudia para sus cosas, pero debido a su ambiente escolar y a sus jóvenes y ocasionales amantes inexpertos y primerizos en cuestiones sexuales, sus folladas anteriores siempre habían sido con ropa, o a medio vestir, folladas a la rápida, mamadas en alguna plaza o en algún auto, pero ahora era distinto, se iba a acostar totalmente desnuda con un hombre por primera vez en cumplimiento del acuerdo adquirido y también por venganza del estúpido de su novio que había preferido largarse con sus amigos a haberse quedado con ella que tanto había esperado esta oportunidad en que iba a estar sola en su casa. El muy come mierda solo tenía que haber traído un amigo para que su amiga del alma también lo hubiese pasado bien, pero sus planes no habían dado fruto, y el que se iba a regodear con su cuerpo a su total antojo era su detestable profesor, que desde hacía ya dos años que vivía acosándola, y a ella le había encantado haberlo calentado en todo este tiempo.
El degenerado viejo quien miraba el escultural cuerpo desnudo de Claudia que se encontraba solo a un metro de él, se permitió a estudiarla, parte por parte, curva por curva, de una forma descarada y quizá un tanto arrogante por su parte, ya que a estas alturas sabía muy bien que faltaba muy poco para cumplir con uno de sus mejores sueños.
Recorría e inspeccionaba con calentona observancia la hermosa anatomía de la rubia: Uno setenta de altura quizás, unas tetas perfectas y totalmente proporcionadas a su físico, la tersa y suave piel de su vientre totalmente al desnudo, con un pequeño y coqueto piercing de cadenita en su femenino ombliguito, unos muslos y piernas maravillosas y finalmente con su alisado cabello rubio peinado hacia un lado su viciosa cara de putita, que más parecía la de una joven actriz pornográfica, que la de una real estudiante de secundaria como lo era ella, aun así la chamaca se veía hermosa.
Claudia grácilmente poso su dorado cuerpazo en un sillon que estaba a solo un metro del maestro Tulio, que no perdía ni un detalle de las desquiciantes curvas que la rubia le estaba ofreciendo,
--Y así profe?, …le caliento un poquito más?, le preguntaba con una voz de putita profesional…
--Siii mamitaaaaa!! Estoy que largo mis lecherazos en los mismos pantalanes…
--Ay que sed maestro, me podría acercar mi tequila porfi!…
--No faltaba más mi reina, le contestaba el viejo caliente, sumido por una calentura que aceleradamente iba en aumento, a la vez que se paró como espiral tensado, y con su grasienta y temblorosa mano le acercaba la copa a la empelotada Claudia, quien se sentía como una diosa, que podía hacer lo que ella quisiera con aquel caliente profesor.
Claudia a sabiendas que ya no había nada más que esperar, se compadeció del pobre hombre, y dejando de lado cualquier tipo de pudor o sentimiento de rechazo corporal debido a su fealdad, se paró del sillón para quedar de pie junto a él, paso sus desnudos brazos por ambos hombros de su maestro, sintió que la prominente panza del hombre no le permitía adosarse como ella hubiese querido, pero el vejete al ver el pedazo de mujeron desnudo que tenía ya en sus manos la tomo y se la afianzo con brutal y ansiosa desesperación,
--Ay profe no sea tan apurón!, jijiji, le decía y reía la rubia chiquilla quien aún mantenía su trago en una de sus manitas, al notar el ímpetu en que el vejete le manoseaba casi por completo su desnudo cuerpo, evidenciando asi las tremendas ganas que tenía el maestro Tulio por metérsela…
El vejete buscaba con ahínco los sabrosos labios de la desnuda Claudia, quien no lo dudo mucho para dejar besarse por el aun vestido hombre, lentamente y a medida que el asqueroso beso continuaba el viejo se fue tranquilizando, la rubia por momentos sentía asco, pero al ir sintiendo la dureza que se le clavaba en su desnudo y perfecto vientre que no tenía ni siquiera un milímetro de grasa , poco a poco lo fue soportando, al minuto la encamable colegiala ya estaba entregada y caliente, ella conocía muy bien los placeres del acto de apareamiento, por lo que muy sutilmente se fue separando del que iba a ser su amante por aquella noche, para pasarle la otra copa aun servida y tomarlo de su gorda y aceitosa mano e invitarlo a que fuera a su habitación, en donde se libraría la lujuriosa contienda sexual.
La rubia lo guiaba, ambos próximos amantes cruzaron de la mano la sala de estar para llegar al dormitorio de la joven, cada uno llevaba su trago, y una vez que ya estuvieron al lado de la cama, y mirándose penetrantemente a los ojos se mandaron de una el contenido de los vasos, dejándolos en el velador a un costado de la cama, cuando la rubia quiso apagar la luz de la lámpara, el vejete se interpuso,
--No lo pienses putita, aun pienso que tu precio es un poco alto, así que lo vamos a hacer con la luz encendida, no quiero perderme ni un detalle de tu cuerpo al momento de metértelo y cuando ya estemos culiando, además que no sería justo, me has estado calentando toda lo noche, y este momento no lo voy a desperdiciar, jejejeje…
La Claudia no dándole importancia a la solicitud de su profesor solo le dijo,
--Ay profe usted que es, jijiji…
La estudiante se subió gateando a la cama, el caliente profesor se empezó a desnudar casi con desesperación, al minuto ya se encontraba en las mismas condiciones que Claudia, quien al verlo en su total y asquerosa desnudes, casi estuvo a punto de arrepentirse, pero se dijo para sí misma, “todo por mis certificados, jijiji”.
El viejo no lo dudo para el también subirse a la cama, esperaba expectante a que fuese la rubia quien tomara la iniciativa, ella por su parte se hinco sobre el lecho, para ver cuál sería su primera misión para ganarse los tan preciados certificados de notas, fue en eso que se fijó en la parada tranca que se gastaba el maestro Tulio, la vez en que se la había chupado en su oficina había sido casi en las penumbras y rápido, ya que cualquier persona podía entrar y sorprenderlos, pero ahora la veía en toda su magnificencia, esta era de medidas que se podrían decir normales, pero para Claudia siempre acostumbrada a mamar y servirse simples verguitas de sus novios, la vio como si fuese la verga de un animal, totalmente poblada por gruesos pendejos negros, terriblemente gorda y pulsando excitadamente rápido, todo esto fue mucho para la caliente estudiante quien instintivamente se lanzó con una lujuriosa expresión en su bello rostro, para comenzar a lamer verga en forma reiteradamente desesperada, hasta que de un solo golpe se lo engulló hasta lo más profundo de sus garganta, manteniéndose en esa posición durante unos deliciosos segundos, en los que el feliz del maestro Tulio aprovecho para empujar y adentrarse aún más en aquella gloriosa garganta que lo estaban llevando al verdadero paraíso.
La veía puesta en 4 patas, moviendo aceleradamente su rubia cabellera de atrás hacia adelante, como una real enajenada mental, mamándole la verga, ordeñándolo con sus labios, como una verdadera corderita recién nacida, notaba en la punta de su tranca que ya casi faltaba muy poco para adentrarse en la faringe de la caliente chamaca, pero la sabrosa y profunda mamada que le estaban dando a su verga continuaba, con movimiento de lengua a veces suaves y en otras ocasiones violentos e intensos, el vejete pensaba que se le iba la vida en aquella magistral chupada de verga que le estaba dando su alumna.
--Ohhhhhh rubita como me comes la vergaaaa!! Exclamaba el vejete, a la vez que dejaba que fuese Claudia quien hiciera el trabajo mamador como ella lo estimara conveniente,
--Mmmm…srrrppppphhh…srpssssss, era lo único que podía emitir la estudiante quien solo se aplicaba a chuparle el pico a su profesor,
Claudia había perdido los sentidos con esa gorda verga que mantenía alojada en su boca y que no podía dejar de succionarla aunque ella quisiese, pero también sentía la imperiosa necesidad, a que su degenerado profesor se la metiera. El grosor de aquella gloriosa tranca de carne la tenían en tal estado de calentura que ahora sí que no estaba dispuesta a dejar pasar la oportunidad a que se la metieran, decidió que su profesor se la tenía que culiar sí o sí.
Lentamente se la fue sacando de la boca, a la vez que sorbía todos los restos de líquidos pre seminales que bañaban el tronco del ahora alargado miembro viril, dejándolo totalmente limpio, pero bien reluciente debido a la humedad de sus labios, ella misma hiso que el hombre se tendiera de espaldas en su camita, para luego en forma inmediata se levantó y fue pasando una pierna por sobre la panza del maestro Tulio para quedar a horcajadas sobre el pero sin metérsela todavía, lanzándose a devorar su repulsiva boca como una verdadera posesa, mordiéndole suavemente los gruesos labios, jugando con su lengua y con la de el. Era una auténtica diosa y un prodigio erótico por la lascivia, lujuria y morbosidad en que ella se encargaba de llevar la situación.
El maestro Tulio aprovechaba su posición para acariciarle las tetas, para lamérselas con desesperación, para chuparlas y mamarlas como si él fuera un bebito sediento de leche, la chamaca estaba divina pensaba, en sus grasientas manos sentía las suavidades de su piel con olor a crema corporal, olía a sexo, olía a hembra, su verga ya latía desesperadamente por adentrarse al interior de aquel cuerpazo. A cada latido de su verga, se producía un leve contacto con su panochita, produciéndole una placentera y arrebatadora sensación, ahora sí que le tenía ganas a la endiablada chamaca.
Claudia le tomo por las muñecas, mirándolo con una cara de puta pervertida y aun encaramada sobre su panza peluda, el vejete que sus ojeras ya estaban que se reventaban por lo hinchadas que las tenía producto de la inmensa calentura que ya casi lo consumían, solo se dejaba hacer por aquella erótica vampiresa.
--Vamos putita…ya dejate de mamadas y dejame meter….
--Shhhhh!!, lo hiso callar la estudiante, dándole a entender que ella sabía lo que hacía, al tiempo que tomaba su trofeo de carne y se lo ubicaba posándoselo en la entrada de su rubia vagina, a la vez que cerraba sus ojos en señal de concentración para dejarse caer casi con brutalidad, penetrándose ella misma y dando un sonoro gemido de placer.
Claudia se la había embocado y metido todo sin la ayuda de nadie, para luego comenzar con unos suaves movimientos de sube y baja, sintiendo y deleitándose con las increíbles y ricas sensaciones que le provocaban el estar ensartándose en la tranca del maestro Tulio, quien yacía recostado y casi incrédulo de la increíble follada que le estaba empezando a dar Claudia, la hembra por su parte y por por la expresión de su cara se notaba que también se lo estaba disfrutando de lo lindo.
La rubia continuaba con los mismos suaves y cadenciosos movimientos de cintura y caderas, exprimiéndosela hasta mas no poder, al tiempo que notaba como una verdadera puta profesional, que al vejete cada vez se le ponía más dura la verga, por la que gradualmente fue acelerando sus movimientos, por cada segundo que pasaba ambos amantes sentían que más placentera y gratificante era la culiada de concurso que se estaban pegando, el viejo también empujaba su apéndice hacia arriba para empalar aún más ala caliente mujer que se lo estaba follando, a la vez que se decía para el mismo, que esta Claudia sí que sabía darle placer a un macho.
--Le gusta lo que le hago maestrito? Le preguntaba la joven hembra a su profesor, con sus hermosos ojos semi cerrados , producto dela acalorado excitación en que se encontraba,
--Siiiii zorrita realmente te mueves ri….coooooo! por Dios ni…ñaaaa!!… como me sorbes la ver…gaaaa!!
--Me he ganadooo mis cer…ti…fi…ca…dossss?...
--Claro que si linduraaaaa…, pero el otro lo conversaremos después, por ahora sigue cabalgandomeeee….. pu…taaaaaa!!
La rubia estudiante, ya más preocupada de su propio placer que de los certificados escolares inicio una acelerada cabalgada, con la única intención de dejar secas las bolas de profesor Tulio, se meneaba con auténtica calentura, en ciertos momentos ondulaba su cintura, arremetía y exprimía la verga que tan deliciosamente ella sola se estaba culiando para luego volver a una rítmica cabalgada que ya la estaban llevando hasta el mismísimo cielo.
El degenerado profesor determino que ya había dejado mucho tiempo que la acalorada puta que sabrosamente lo estaba cabalgando, se sintiera dueña de la situación, ahora le enseñaría lo que era culiar de verdad con un verdadero macho caliente, se enderezo como pudo y trabajosamente, ya que la Claudia quien se encontraba perdida en el mar de la lujuria no podía dejar de menearse violentamente, esto al profesor le encantaba, una vez enderezado y cuando la rubia quiso lanzarse a besarlo el profesor la tomo de sus suaves y pronunciadas nalgas y se la desclavo de una, arrojándola de espaldas a la cama, Claudia no sabía muy bien lo que estaba pasando, cuando lo vio venir asquerosamente a montarse sobre su curvilíneo cuerpo, se lo imagino como uno de aquellos asquerosos monstruos que aparecen en las películas de hentai, pensaba que solo le faltaban los tentáculos, pero esto la calentaban aún más.
El vejete se hecho con su aplastante y pesada humanidad sobre las curvas de la joven estudiante para comenzar a besarla en sonoros movimientos de lenguas y saliva, poco a poco comenzó a bajar por su anatomía, pasando por sus tetas que aprovecho de lamérselas por unos segundos, para luego pasar por su suave estomago con piercing incluido hasta llegar a su suave triangulito de dorados y suaves bellitos crespos y brillosos, abriendo asquerosamente su bocota de Tiranosaurio Rex, se zampo de un solo mordisco la pequeña ranurita que tenía Claudia al medio de sus piernas, movía su lengua como enajenado intentando penetrarla con ella lo máximo posible, se la sentía apretada y chiquitita, no se explicaba como solo hace unos cuantos minutos, aquella reducida grieta de amor se había comido en toda su extensión su gruesa tranca carnal, esto lo hacían calentar aún más.
El asqueroso hombre que ya se sentía dueño de aquel dorado cuerpo de la colegiala, ya se sentía enamorado de aquella rica panocha que se estaba comiendo, hacía mucho tiempo que no disfrutaba de los sabores de una zorra de 18 años, determinaba que era un excelente trato el que había hecho con Claudia, aun así pensaba que la rubia se había excedido un poco en el precio, por lo tanto era ahora cuando tenía que aprovechar que esto haya valido la pena.
La chupada de zorra continuaba, el vejete la veía ondular su pelvis al mismo compas en que él se la estaba comiendo , con sus bellas piernas bien abiertas y de par en par, con sus ojos cerrados, señal clara que la rubia lo estaba disfrutando, el con sus gruesos labios que no se separaban ni un centímetro de la panocha de Claudia, aspirando y comiéndose todas las aromáticas esencias que fluían desde el interior de su zorra sin desperdiciar nada, y con los desquiciantes gemidos y exclamaciones de placer que emitía la tierna chamaca, eran como la música de fondo, de aquella morbosa escena.
--Te gusta que te coma tu panochita putita calienta vergass, se atrevió a preguntar el viejo con cara de reptil, una vez que se separó de la sabrosa grieta para tomar un poco de aire…
--Siiiii ma…estro… siga…chu…pan…do…me…laaaaa!!, pedía Claudia sin dejar de menear su pelvis de arriba hacia abajo buscando los gruesos labios que tan gratificantemente le estaban haciendo sentir…
--Ya vas a ver trola de mierdaaa!! En un rato te voy a meter la verga hasta sacártela por la boca, para que no te queden ganas de andar haciendo tratos conmigo, le decía el maestro a la vez que se volvía a zampar la panocha, Claudia con sus cejas fruncidas por la calentura, solo pudo emitir un calenturiento…
--Ohhhhhh, al volver a sentir la pestilente boca de su profesor y el imaginarse la tremenda follada que le prometían.
Las lamidas en el tajo de Claudia de por si cada vez se volvían mas asquerosas, pero la rubia quería que el hombre no parara jamás de hacer lo que le estaba practicando, era la primera vez que se la chupaban, fue un momento imprevisto que ya no aguantando mas tanto chapoteo de lengua en su íntimo reducto amatorio, que comenzó mover sus caderas y cintura como una culebra, además de bufar como una total poseída…
--Ahhhh ricoooooo…..profe….profeee…no pare... no pare…sigaaa comiéndomela todaaaa!!!, ohhhhh Diossssss!! diossssss!!, cosa que el profesor no se hiso de rogar y fue cuando se dio cuenta que la rubia había alcanzado un gran orgasmo, ya que sus poderosas piernas y muslos le atenazaron por la cabeza, oprimiéndolo con fuerzas hacia su jugosa panocha que no paraba de soltar líquidos que iban a dar en mayor parte a su boca y cara, quedando al final con todo su rostro de sapo mojado por las femeninas eyecciones.
Claudia quedo a patas abiertas, con su respiración totalmente acelerada y con su mirada vidriosa puesta hacia el techo, jamás había tenido un orgasmo de esas características, el vejete que recién se acordó de su tranca ya adolorida de tanto semen acumulado se montó nuevamente en las suavidades del cuerpo de aquella niña Diosa, y sin preguntar nada simplemente se lo metió hasta el fondo.
La rubia solamente se dejó que se lo metieran y al recordar lo prometido por su maestro, eso de metérselo tan adentro hasta sacárselo por la boca no dudo en secundarlo con el empeño, por lo que ya a los pocos minutos nuevamente estaban culiando como verdaderamente lo hacen un macho y una hembra.
El maestro Tulio se movía como desesperado sobre aquel femenino cuerpo de 18 años, a la vez que lengüeteaba asquerosamente el hermoso rostro de Claudia, la rubia quien se meneaba al mismo ritmo de su profesor y gozando con las lamidas en su cara, sentía que después de esta follada no podría volver hacerlo durante un mes, ninguno de sus novios había sido capaz de arrancarle un orgasmo real y verdadero, solamente no eran más que unos tímidos escalofríos los que había llegado a sentir con alguno de ellos , este viejo sí que era caliente pensaba, y sentía como su verga se adentraba en su cuerpo como si esta estuviera envuelta en llamas.
La culiada feroz continuaba, y así lo demostraban los sonoros crujidos de la rosadita cama de Claudia, que parecía que en cualquier momento se iba a quebrar, estos sonidos nunca antes ella los había escuchado, ya que se dijo que sus anteriores folladas había sido solamente por ahí y a la rapidita, pero ahora que los escuchaba en su propia habitación y en su cama misma determino que le encantaban estos sonidos, y hasta le parecía sentir que todos los muebles de su habitación vibraban y rechinaban al ritmo de la follada que le estaba pegando su profesor.
Estaba en estos pensamientos cuando sintió que el viejo se separaba de su cuerpo,
--Ahora te quiero en 4 patas pendejaaaaa!!, Claudia que se lo estaba pasando muy bien, no lo dudo mucho y rápidamente adopto la posición que ya había escuchado, y que ella nunca había practicado, pero que bien se sintió cuando ya estaba puesta, se sentía como una perra, le encanto sentirse meramente un animal, esos babosos que había tenido por novios no le llegaban ni a los talones a su maestrito que si sabía cómo follar a una mujer como ella.
El profesor Tulio ya desde hace rato dueño de la situación, se apegó al cuerpo de Claudia para apuntar y acomodar su verga a la entrada de la zorra, empujo con fuerzas hacia su interior metiéndosela hasta la misma raíz, la rubia lo recibió casi llorando por la emoción, bajo su cara para posarla en las rosadas sabanas de su camita, que ya estaban mojadas por tantas exudaciones corporales de ambos cuerpos, sentía en sus espaldas la blanda panza del macho que la estaba montando por detrás y que cada vez iba acelerando más los movimientos de meter y sacar.
El viejo la culiaba lentamente y en forma acompasada, la sensación de tener su verga metida en tan esplendoroso cuerpo lo tenían al borde de la eyaculación, pero el ver como se agitaban las carnes de la rubia por cada movimiento que el hacia lo aleonaban a querer seguir aguantando su explosión de semen, además que le daba miedo acabar dentro de la rubia, ya que la podía dejar embarazada y ahí sí que tendría problemas, hasta que de tanto mirarle el culo a aquella pendeja que tan rico le movía las nalgas dejándose follar, nuevamente el colmillo de la lujuria volvía a asomar en su caliente temperamento, mientras tanto la estudiante no paraba de gemir y moverse de lo tan rico que lo estaba pasando, sintió cuando el profe se la saco dejándola vaciá, a la vez que noto como este caliente viejo verde comenzaba a lamerle el culo, situación que le hicieron ver las estrellas, sentía como la lengua del hombre le lamia aquella parte prohibida, pero era tan rico que ella no podía negarse.
Cuando el vejete noto que el culo de la hembra ya estaba bien mojado con sus salivas puso en práctica la sodomítica idea que había cruzado por su mente, tomo firmemente a la chamaca por una de sus caderas para que no se le fuera a arrancar al momento de la irrupción, acomodo su vergota en el rosado anillito de Claudia y se propuso a empujar. La iba a encular.
Claudia quien se mantenía entretenida sintiendo como le lengüeteaban el culo, no pensó nunca lo que su profe se proponía a hacerle, y cuando se sintió bien sujeta de sus caderas y al sentir como la tranca de aquel asqueroso viejo se posaba tímidamente a la entrada del diminuto y virgen puntito que tenía por culo, por primera vez en la noche se sintió aterrada, por ahí nunca se la habían hecho, algo había escuchado, pero ella estaba lejos de querer experimentarlo en ninguna ocasión , ni siquiera con el más bello de los príncipes azules y menos con este auténtico viejo degenerado que ya se estaba preparando para penetrarla analmente…
--Nooooo!!, fue su primer grito desesperado al notar de lo que pretendían hacerle…
--Callate putaaaa!! Acuérdate que tenemos un trato…jajjaja!! Le decía el amorfo profesor….
--Maestro esto no entraba en el tratoooo!!...Ohhhhh! Uffffffffffffff!!, no em…pu…jeeee!!, le grito al sentir el primer apuntalamiento….
--Grita todo lo que quieres pendeja, porque ahora te voy a encularrrrr, jajajajaja!!... y trata de disfrutarlo, porque te doleraaa!! Te viso que no podrás cagar como en una semana, jjajajajaj, le decía y a la vez burlándose de aquella rubia estudiante que siempre se creyó superior a todos los demás…
--Maestro Tulioooo…por fi…no me la haga por ahiiiii….que me va a doler…., le pedía la Claudia, intentando mirar hacia atrás…
--Lo siento putaaaa, me has tenido más que caliente en todo este tiempo, y si quieres tu certificado del primer semestre , este es el precio…, diciendo esto último y tomando impulso con máxima concentración, el profesor empujo con fuerzas demenciales hacia el indefenso cuerpo de la rubia, logrando ensartarla por el culo de una y limpiamente.
--Buaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhh!!, Saquelooooooo!! Viejo degeneradoooo!! Por ahí no se haceeeeeee!! Fueron los fuertes y lamentosos alaridos que dio la hembra ensartada, una vez que se sintió enculada, sus ojos se abrieron como platos y sin ni siquiera pestañear, todo su curvilíneo cuerpo temblaba y no de placer, era solo un espantoso y animal dolor el que sentía la bella chamca.
Pero Claudia era una hembra brava, ella no lloraba, pero si opuso una encarnizada resistencia a no dejarse follar por el culo. El viejo solo reía y babeaba de tener ensartada por el culo a tan estupenda y buenota estudiante, la mantenía bien agarrada de sus caderas para que no se le fuera escapar, Claudia movía su culo en todas las direcciones posibles en su afán de que se la desclavaran, pero su enculador captor era más fuerte que ella, aun así la hembra lograba avanzar pequeños tramos en su huida, está más decir que todos estos movimientos y apretamientos de culo que hacia la rubia, lo único que lograban era que al vejete se le parara aún más la tranca, haciendo más difícil el desclavamiento…
--Saquelooo…saquelooooo…que me dueleeeee!! Viejo cochinoooo!!, vociferaba la adolorida joven,
--Jajajajaja!! Estas loca si crees que te la voy a sacar, aceptalo pendeja te acabo de encularrrr!!! Ahora sí que te tengo como yo queriaaa, como a una verdadera perraaa, has visto como culean los perrrosss?’, pues es así mismito como nos vamos a poner a culiar ahoraaaa, jajajajaja!!, a la vez que le decía esto último el profesor volvía apuntalarla para alojárselo lo más adentro posible…
--Ufffffffff, gemía Claudia sintiendo e imaginando lo profundo que se lo habían metido, hasta que ya viéndose perdida, y como ella era toda una zorra, se atrevió a decirle a su profe… --No se mueva que me dueleee!!, pero oiga profe, si yo me dejo encular como Ud. quiere, me haría los dos certificados este mismo semestre?, Ohhhh diosssss!!, gemía de dolor ante el mas mínimo movimiento que hacia su verdugo….
--Eso lo veremos después maldita perra interesada, todo dependerá a cómo te portes! aún queda mucha noche por delante!!, jajajajaja!!
Sabiendose bien enculada y teniendo claro que ya no tenía nada más que perder la rubia intento calmarse y dejar que su profe la enculara de la forma que él quisiera.
Don Tulio, sí que se la estaba pasando bien con aquella rubita, y todo por la codicia de la pendeja, pensaba y reía para sus adentros, sintiéndose ya con más confianza y notando que la pendeja se estaba ofreciendo a cooperar, se afianzo aún más firmemente a esas suaves caderas, para comenzar a culearla y hacerle ver cómo era follar con un verdadero potro en estado de celo, metiendo y sacando su verga del ensangrentado culo de Claudia.
El viejo se propuso a darse el máximo de placer posible no importándole el inmenso dolor que le estaba provocando a la adolorida colegiala, durante unas deliciosos clavadas anales, en donde la rubia gemía, gritaba y aguantaba estoicamente su suplicio, don Tulio pudo disfrutar de tan excelso disfrute, consiguiendo que su erección y placer se tornasen mucho más consistentes e intensos, de lo que era hasta ese momento.
--Toma perraaaa!! Esto eras lo que andabas buscando desde hace ratoooo!!
--Ahhhhh don Tuliooooo, más despacio que me va a descularrrrrrr!! le pedía con su rostro lleno de dolor. Ohhhhh!! Dueleee!! Dueleeeeeee!!
Durante unos buenos minutos en que el vejete no paraba de meter y sacar su verga del apretado esfínter de la rubia, y notando que la yegua a la cual estaba domando ya se mostraba más amansada, se propuso a parar un poco la faena , estaba bañado en sudor, al igual que Claudia que daba el aspecto de como si recién hubiese salido de darse una ducha , por todo lo majada en transpiración debido a los firmes y violentaos movimientos de verdadera apareamiento animal que le estaban pegando.
Cuando la estudiante noto que su maestro aminoraba el ritmo de la culiada, no supo el por qué a ella le dieron tantas ganas de seguir moviéndose, las clavadas eran netamente dolorosas, pero lo que la confundía era la sensación de sentir se una perra, de que la tuvieran puesta en 4 patas y que un horrendo vejestorio se la estuviera metiendo por el culo, hasta que ya no aguanto más y prácticamente le ordeno,
--Métamela entera viejo cabronnnn!!, hágame cagar el culo a vergazos pero siga metiendomelaaaaa!! Muevaseeeee enculemeeeeee!! Acaso eso no era lo queriaaa!!, Claudia al soltarle todo este tipo de peladeces a su profe, más se encabritaba y calentaba al mismo tiempo, al maestro Tulio casi le da in infarto cardiaco al notar el nivel de calentura de la hermosa joven que cada vez lo sorprendía mas por lo excelente que era para la cama, por lo que comenzó un frenético mete y saca que llegaba hasta lo más profundo de las entrañas de la rubia y caliente chamaca, --Ayyy profe me esta matandoooo , me va a mataarrrrrrrrrr!!! Ahhhhhh ricoooooooo probarlo por el culooooo profersorcitooooo!!
--Tomaaaaa!! Pinche trolaaaaa de mierdaaaaa!! Eres todaaa una putaaaaa!! Y eso que no querías perraaaa mal paridaaaaa!! Jajajaja!!
--Lo quieroooo!! Lo quierooooo… todoooooooo… adentro… del culoooooo!!, Claudia ya babeaba presa de la excitación y de todas sus desinhibiciones que había logrado sacar al dejar se encular por un asqueroso viejo con cara y ojos de sapo.
El vejete quien se mantenía bien ensartado al medio de las bien formadas nalgas de la estudiante, se inclinó por sobre sus espaldas buscándole la boca para besarla, la hembra lo recibió con desesperación, ambos se devoraban las bocas, quedando clogando gruesos hilos de babas cada vez que se separaban producto de los férreos movimientos que se daban, uno enterrando hacia adelante y la otra levantando aún más el culo para que aquella gruesa verga no fuese a salirse de sus interiores anales.
De pronto la Clau se quedó quieta y con sus ojos bien abiertos, el viejo Tulio noto esta extraña reacción de la caliente y rubia jovencita, vio que desde su cintura hacia abajo la pendeja temblaba, el temblor de nalgas cada vez se hacía más encabritado, por lo que dedujo que la chamaca estaba al borde de su primer orgasmo por el culo, hasta que la escucho bramar,
--Ohhh Diosssss!! …Ohhhhh Diosssss!!... Que es esto Dios mioooooo!!...profe….me estoy corrien…dooooo..por…el cu…looooooo!!
El viejo maestro de escuela, al notar en el estado que tenía a una de sus más bellas estudiantes, clavo su virilidad hasta lo más profundo se sus viseras, arrancándole un sonoro y prolongado grito de placer, a la vez que notaba los fuertes espasmos y contracciones anales en que la joven inconscientemente le apretaba la verga, mientras mas fuerte gritaba la chamaca , más profundo se lo metía…
--Te gusta yegua de mierdaaaa!! Te gusta que te metan vergaaaa por el culoooo!!
--Siiiiiiiiiiiii…profe ahhhhhhh, ohhhh, mmmmmm, ayyyyyy!! me sigo corriendoooooo, ohhhhh Diosssssss, siento que meoooooo! Siento que me meooooooo!! Ricoooooooooooo!!
El vejete se la saco de una, Claudia se desplomó en su cama presa de inevitables contracciones y espasmos de placer, don Tulio la miraba masajeándose la verga con una cara de auténtico degenerado, la veía con sus ojos blancos como una posesa, su enervante calentura se plasmaba, en las abundantes cascadas de flujos y líquidos femeninos que emanaban desde sus entrañas y que salían desde su zorrita y por el culo al mismo tiempo, entre gritos y gemidos de auténtico placer, las contracciones fueron pasando quedando casi aturdida con pequeños tiritones en su escultural cuerpazo, cuando ya todo había pasado para Claudia y mientras aun no volvía a su estado normal levanto su carita que más parecía la de un femenino demonio recién sacado del infierno, por el rictus de puta recién saciada en que la había dejado el maestro Tulio, este ya no aguantado mas tanta lujuria, y dándole rienda suelta a uno de sus más desequilibrados deseos para esa noche de impúdica obscenidad, tomo delante de los ojos de Claudia uno de los vasos en que anteriormente habían tomado Tequila y pasándole este a la aún caliente muchacha, esta lo puso en la punta de su verga, hasta que por fin para el vejete llegaba su momento del orgasmo,
--Arrrrrrrggggghhhhhhh!! Gruño mientras copiosas descargas de abundante semen blanco lechoso y caliente se iban depositando en el vaso sostenido por Claudia, quien no perdía detalles, los vio salir expulsados con fuerzas, el primero casi llego a un cuarto de vaso, seguido por tres de la misma potencia e intensidad y seguido por otros cuatro que a medida que salían eyectados iban disminuyendo en poderío.
Claudia quedo fascinada por la gran cantidad de semen que había juntado en el vaso y que ya sabía que era solo para ella, su espesura, su blanquecino y a veces semi transparente color que tenía aquel liquido potente y varonil, se apoderaron de sus más insanos deseos de hembra, y ella el saberse la causante de toda esa expulsión de verdadera leche de macho, se bajó de la cama en forma casi desesperada quedando de rodillas ante el maestro Tulio, y teniendo aun el vaso lleno de semen en sus manos, en forma instintiva procedió a bebérselo y siempre mirando con sus ojos de viciosa a la degenerada cara de su profesor.
El maestro Tulio miraba la función que le estaba dando esa putilla, con cara de ser un feliz y autentico degenerado, se fijaba en como el botoncito de la garganta de Claudia subía y bajaba al estar bebiendo y tragando todo su semen, hasta que la rubia colegiala lo vació todo, se había bebido hasta la última gota, para luego tirar el vaso hacia cualquier parte y quedar mirando al que había sido su macho con una sonriente cara de puta recién estrenada, ala ves que se sobaba su vientre a la altura de su pierceng,
--Y ahora profe… me gane mis dos certificados, le consultaba haciendo ademanes de niña mimada…
--Si pendejaaaa, el primero ya te lo ganaste! y con creces!!, jejejeje, le iba diciendo a la vez que la tomaba de sus poderosas formas para volver a dejarla acostada en la cama, el vejete se acostó con ella y tapo a ambos con los gruesos cobertores, para luego apagar la luz de la lámpara y abrazarse a su curvilíneo cuerpo desnudo de la Claudia, y una vez ya estando en total oscuridad dentro de la habitación, le dijo--Ahora que ya estamos acostados en la cama como marido y mujer vamos a discutir lo de tu segundo certificado putita, jejeje…tal como tú lo Cielo Riveros
11 (Versión RD)
en No Consentido
Cielo Riveros
11 (Otra Versión)
--Si pendejaaaa, el primero ya te lo ganaste! y con creces!!, jejejeje, le iba diciendo el maestro Tulio a Claudia a la vez que la tomaba de sus poderosas formas para volver a dejarla acostada en la cama, el vejete profesor se acostó con ella y tapo a ambos con los gruesos cobertores, para luego apagar la luz de la lámpara y abrazarse al curvilíneo cuerpo desnudo de la Claudia, y una vez ya estando en total oscuridad dentro de la habitación, le dijo --Ahora que ya estamos acostados en la cama como marido y mujer vamos a discutir lo de tu segundo certificado putita, jejeje…tal como tú lo dijiste!!.
Cielo Riveros
Sentada a la derecha en el destartalado coche del siniestro don Pedro, Cielo Riveros
iba contrariada y aun espantada por lo sucedido recientemente, no podía creer en la terrible situación que había vivido, había sido violada, pensaba en como su virginidad había sido arrebatada por un desalmado, asqueroso y vil vejete. Recordaba que varias horas antes se encontraba dormida en la seguridad y calidez de su habitación cuando fue interrumpida por su mejor amiga invitándola a la Feria, fue en esto que al acordarse de Claudia pensó en avisarle que ya iba de regreso y que tal vez en 30 minutos estaría llegando a su casa, decidió enviarle un mensaje,
--Y a quien le enviás mensajes a esta hora pendeja!?, le vocifero don Pedro mientras manejaba y cuando se percató que Cielo Riveros
estaba enviando un mensaje desde su teléfono, la pobre que aún estaba muy apenada por la traumática experiencia sufrida en manos de aquel iracundo vejestorio, le contesto con la verdad para que él no se volviera a enojar y le pegara nuevamente,
--A una amiga… se suponía que andábamos juntas en la feria…, yo la estaba esperando a ella… cuando lo conocí a Ud…. y sus amigos, le respondió con voz temblorosa.
--Ahhh sí!, jajajaja!! te refieres a la otra putilla que andaba contigo en busca de verga, la rubia jajajaja!!, si!... la recuerdo bien!, no estaría mal que me la presentaras…que tal si un día de estos nos pegamos una fiestecita entre los tres… que me dices lindura, acaso no te parece una buena idea?,
--No lo creo don Pedro, no sé si ella quisiera ir a una fiesta conmigo y con Ud., además que ella tiene novio y… El mecánico la interrumpió y no la dejo terminar lo que le estaba diciendo, y al estar en un semáforo en rojo aprovecho esta situación para intimidar a la pobre y asustada jovencita, quería que una vez que él ya se retirara dejándola en su casa, no se le olvidara quien era desde este día su único y verdadero dueño,
--Me importa una verga si ella tiene novio, o está casada o soltera…!!!, le gritó el vejete, --El caso es que cuando yo te lo diga tú vas y me la traes!!! Acabo de decidir que me la quiero coger!!! Y tú me ayudaras!!! Entendiste escuincla de mierda!!! Diciéndole esto último la tomo bruscamente de sus cabellos y la jaloneo hacia su cuerpo para que ella lo mirara directamente a su cara, para luego continuar…--Te recuerdo que desde hoy pasaste a ser mi mujer! Mi puta personal!! Serás mi zorraaa!!! Así que andate preparando pendeja, en un tiempo más te iras a vivir conmigo y nos casaremos!!! Jajajaja!!! Te llenare de chamacos!!! Jajajaja!!! Pero antes te hare putiar por las calles… quiero que por las noches andes culiando y ganando dinero para mi…jajajaja!!! Además te deberás abrir de patas y culiar con todos mis amigos y todas las veces que yo te lo ordene, así que dejate de contestarme estupideces, te queda claro grandísima putaaaa!!!
Cielo Riveros con todo su pelo alborotado y respirando agitadamente solo lo quedo mirando con su carita de asustada, no entendía ni comprendía por que este viejo se creía su dueño, aunque sabía que si no le obedecía en lo que él le solicitara su vida estaría perdida, como le podría explicar a su madre y a su abuelito del porque le habían cursado una infracción por ejercer la prostitución en la vía publica, o que dirían sus maestros y compañeros del colegio al enterarse que ella… la que siempre destacaba con excelentes calificaciones salía por las noches a prostituirse, esto era mentira!!, pero como podría explicárselo a todos …no le creerían, y por Dios!!!, pensó de pronto, con qué cara podría ver a Rodrigo su novio si este llegaba a enterarse de lo que supuestamente ella hacía por las noches y a espaldas de todos sus seres queridos, miro casi con rabia al hombre culpable de toda su desdicha, y que más encima solo hace un par de horas le había robado su virginidad violándola adentro de una oficina con cama que había al interior de un taller mecánico, no le quedaba más opción… tenía que obedecer y hacer caso en todo de lo que le ordenara don Pedro, se consolaba a medias pensando que tal vez así podría seguir llevando una vida normal.
Una hora antes en la casa de Claudia, paradójicamente y por esos misterios de la vida acontecía una situación no igual pero si muy similar a lo que anteriormente le habían solicitado a Cielo Riveros , pero ahora era a la hermosa Claudia a quien le solicitaban colaboración para que otro viejo degenerado y sinvergüenza se beneficiara con el despampanante cuerpo de nuestra candorosa e inigualable Cielo Riveros
Estando aun acostados, Claudia y su horrendo profesor con cara de sapo, ambos desnudos y abrazados después de haber descansado unos buenos minutos tras la bestial follada que el obeso maestro y la escultural estudiante se habían pegado, fue la rubia y alocada colegiala quien toco primero el tema de cuál sería el precio que tendría que pagar por su segundo certificado de notas.
--Y profesorcito? Me va a decir que es lo que tendré que hacer ahora para ganarme mi segundo certificado?, le consultaba intentando ser lo más candorosa y sexi que pudiera, y esto no le costaba mucho, pues la jovencita era muy atractiva para los ojos de cualquier macho en estado de calentura.
--Claro que te lo diré ricura, jejeje, veras rubita…, al viejo cuando hablaba le caían vistosas gotas de babas por ambos lados de sus gruesos labios de batracio, --Fue verdaderamente un placer haberte reventado el culenque, jejeje! así que tu primer certificado ya te lo ganaste, jejeje, pero siendo realista y viendo las serias complicaciones que esta situación me podrían traer en el colegio si es que alguien me descubriera, esto hace que el precio por tu segundo certificado sea algo un poco más elevado, no sé si me entiendes lindura, jejeje…
--Pues diga no más don Tulito… para que soy buenita…todo por mi segundo certificado de notas, jijiji…le dijo coquetamente a la vez que le prodigaba una serie de eróticos besos en las peludas y canosas tetillas fofas del vejete con cara de sapo.
Al sexagenario maestro el solo hecho de estar acostado desnudo con una de sus más potentes y hermosas alumnas y por la emoción y excitación que le causaba la desvergonzada solicitud que estaba a punto de soltarle a la curvilínea Claudia ya se le estaba volviendo a parar la verga, por lo que sin pensarlo dos veces se dio a poner en conocimiento cual sería el precio por el segundo documento en cuestión.
--Escuchame bien chamaca, ahora te voy a decir cuál es el precio por lo que me pides, este tiene varias condiciones…deberás pensarla bien porque o si no hasta aquí no más lo dejamos, claro que antes de irme sea cual sea tu respuesta igual te pegare una última follada, jejeje. Claudia escuchaba atentamente. --En vista de lo rica y buenota que eres para culiar… quiero que estos 5 meses que restan para que termine el año escolar nos sigamos acostando por lo menos dos días a la semana.
Claudia al escuchar la infamia que pretendía su profesor en forma casi automática se separó del grasoso cuerpo de don Tulio, este viejo de mierda se estaba excediendo en el precio pensaba la ahora atribulada chiquilla, una cosa era que ella se haya calentado por culpa de los tragos y por el interés de sacarle a como dé lugar los certificados de notas acostándose con él, pero otra muy diferente era que ella siguiera dejándose follar si como fuesen novios, aparte de que era inmensamente asqueroso y feo.
--Noooo!!…yo no me seguiré acostando con Usted!! O sea… el trato era solo por hoy!!! Exclamo Claudia quien ante tal desvergonzada solicitud volvió de una a la cordura.
El degenerado profesor al notar que su alumna daba muestras de no querer acceder a lo que él estaba solicitando se adelantó y la atrajo nuevamente hacia su cuerpo oprimiendo las suaves tetas de Claudia contra su suelto y peludo pecho canoso…
--Está bien, le contesto el vejete, --Si no quieres no hay problema… pero eso no impedirá a que te culie nuevamente antes de irme, jejeje…el lunes puedes pasar a buscar tu certificado, pero el otro lamentablemente no te lo puedo dar, esto se lo decía con la única razón de intentar tocar la parte interesada de la mente de la muchacha, luego comenzó a darle una serie de asquerosas lamidas en el lozano rostro de Claudia, la colegiala ahora sentía asco al estar en tales condiciones con un viejo con cara de reptil y de casi sesenta años de edad, y para rematarla tenerlo acostado desnudo en su propia cama y con ella en iguales condiciones.
La Claudia pensaba muy aconjodamente que la anterior follada con su maestro no había servido de mucho, si bien ya tenía el certificado del primer semestre, este no servía de mucho si no obtenía el segundo, pero el precio que estaba poniendo aquel asqueroso hombre con ojos hinchados era demasiado alto, ella no se veía acostándose dos veces a la semana con aquel perverso y degenerado vejete, sabía que el hombre ya se estaba preparando para volver a metérselo, por lo que la estudiante de 18 años ya se acondicionaba psicológicamente para un nuevo coito, había asumido que tendría que volver a culiar con su maestro.
Llevaban varios minutos en en que el viejo la punteaba haciendo movimientos de como si ya la estuviera culiando, la cama ya crujía exquisitamente también preparándose para lo que se venía.
El viejo con una de sus manos le apretaba sus mandíbulas haciendo que ella abriera su boca para el introducir su mórbida y pegajosa lengua para luego soltarla, y por debajo de las cobijas pasear a su regalado antojo sus sebosas manos y recorrer las suavidades del femenino y joven cuerpo que tenía a su alcance, la rubia colegiala experimentaba en su plano vientre como la sudada y blanda panza del vejete se movía hacia todos lados en el afán de su dueño por mantenerse pegado lo más posible a ella, y en el momento que sintió la dura y caliente punta de la vergota de su amante ocasional entrar a medias en su núbil vagina y el estar siendo nuevamente acomodada de espaldas para dar paso al apareamiento sexual, se dijo para sí misma que tal sacrificio debía valer la pena, ya no había nada que perder y si un certificado por ganar…
--Acepto!! Le soltó de una y claramente.
El viejo quedo paralizado por unos momentos ante la mágica palabra de la descocada e interesada jovenzuela…
--Jejeje…pero mira que interesada me saliste putita mal criada…el viejo se mantenía enterrado con solo un cuarto de verga en la dorada y apretada panocha de la Clau, --Pero veras cuando me interrumpiste hace un rato yo aún no terminaba de decirte cual es el precio… aún faltaba la otra mitad y la más importante lindura…estas segura que podrás cumplir con lo que te pida?…
--Le cumpliré profe…pero es que me da miedo… quedar embarazada, le dijo con sinceridad y entre cortadamente, a la vez que le iba abriendo sus piernas para que el viejo quedara montado más cómodamente, la rubia continuo…--La verdad… es que necesito el segundo certificado…, pero dígame… cual es la segunda parte del trato?, consultaba con sus ojos cerrados y con sus bellas pernas abiertas experimentando el delicioso cosquilleo que le causaba el tener metida a medias aquella gorda tranca de macho,
--Pus…si te da miedo que te pueda preñar… todas las semanas te daré un dinerito para que te compres pastillas, jejeje ves?, todo tiene solución en esta vida… ahora te diré la segunda parte de mis condiciones putita…, el vejete metió sus manos por debajo de los hombros de Claudia para afianzársela mejor, y midió bien sus palabras para que la estudiante lo apañara en su nueva solicitud… --Tengo entendido que tú eres muy amiga de la Cielo Riveros …
--Así es… pero… que tiene que ver mi amiga Cielo Riveros con todo esto? Claudia sentía como la gruesa verga del profe le habría la vagina, ya que esta estaba adquiriendo una dureza y rigidez aún más mayor que en la follada anterior, no quería desconcentrarse de aquel rico estado, y era lógico si el viejo se calentaba hasta más no poder con solo pronunciar el nombre Cielo Riveros .
--Aunque no me lo creas tu amiga tiene que ver en todo esto, el viejo se lo metió otro poco, --Ohhhh pero que calentita es tu panocha por dentro cosita ricaaaaa!!!
Claudia sintió el leve adentramiento de verga, pero aún no estaba del todo caliente, eso sí que igual estaba sintiendo muy rico. Su profesor la tenía intrigada todavía se preguntaba que tenía que ver Cielo Riveros con todo esto.
--Pero vamos… dígame!... que es lo que quiere saber de ella?, le volvía a decir una a medias ensartada Claudia…
--Quiero… que me ayudes a… culiarmelaaaaaa!!, diciendo esto último el vejete empujo con fuerzas al ya entregado cuerpo de la joven estudiante quien recibió y albergo en su vagina la verga del maestro Tulio en todo su grosor y longitud.
Claudia quedo impactada con semejante solicitud, mil ideas pasaban por su mente, a la vez que sentía como el viejo profesor se echaba sobre su cuerpo y comenzaba lentamente a moverse metiéndoselo y sacándoselo en forma aceitosamente acompasada intentando de aprovechar y de sentir al máximo las gratificantes sensaciones que le provocaban en la verga al estar al interior de la panocha de la rubia colegiala.
La ensartada estudiante intentaba por todos los medios posibles ordenar las ideas, se preguntaba porque este viejo caliente le hacía tal solicitud, Cielo Riveros era su mejor amiga y por nada del mundo haría una barbaridad del calibre que le estaba solicitando el mismo vejete que en esos momentos le tenía metida la verga hasta lo más recóndito de su ser.
Las ideas revoloteaban como alocadas mariposas en su mente, meditaba en la vileza de tal solicitud, como así mismo veía difusas imágenes de su amiga del alma desnuda y ensartada en la verga de aquel hombre tan feo y degenerado, no supo por qué motivo el solo imaginársela en tales condiciones le bajaron unas desesperadas ganas de abrirse aún más de piernas, para que su profe se la metiera más profundo de lo que ya se la tenía metida y para poder así sentir más rico aun de lo que ya estaba sintiendo.
Por su parte el profesor Tulio estando montando y aserruchando el febril y curvilíneo cuerpazo de la Clau, se daba cuenta que la joven poco a poco se iba perdiendo en las constelaciones de la calentura, sabía que el silencio de la rubia era por algo, si se hubiese negado a su segunda tanda de solicitudes lo habría hecho al instante meditaba sin dejar de empujar su verga para adentro, la vio con sus ojos cerrados y sus labios semi abiertos, acerco lentamente sus asquerosa boca de reptil a los de la hermosa y semi caliente joven, ella no se movió solo abrió sus labios y ambas bocas se unieron, sus lenguas se buscaron hasta enredarse una con la otra, así fueron exquisitos los minutos que estuvieron atracándose y culiando apasionadamente, como si la última cláusula del contrato entre ambos ya estuviera firmada.
En el mismo momento en que el vejete se aprontaba a separarse del asqueroso beso con lengua con la clara intención de continuar presionando a Claudia para que ella le ayudara a concretar una violación con la dulce Cielo Riveros, y que la respuesta más segura en aquel morboso y erótico momento sería un categórico si, el fuerte zumbido de vibración del teléfono de la rubia chamaca saco a la pareja de aquel placentero estado de mal sana excitación.
Claudia a pesar de lo muy rico que se la estaban culiando como pudo estiro su mano hasta el velador, tenía que revisar el mensaje que se anunciaba como entrante ya que podrían ser sus padres, por nada del mundo quería que la sorprendieran acostada con el profesor más feo que existía en el colegio, de muy malas ganas tomo su teléfono y reviso, mientras el viejo no paraba de empujar firme hacia el interior de su vagina, su sorpresa fue grande una vez leído el mensaje, era de Cielo Riveros y le decía que llegaba en 30 minutos a su casa, esta situación hizo que la calentura y lo rico que había sentido se esfumaran en el acto,
--Profe!… salgase!! El mensaje es de Cielo Riveros …y dice que llegara en cualquier momento!!!…
El profesor Tulio hubiera dado su vida por no salirse del potable cuerpo de Claudia, pero con solo escuchar el nombre Cielo Riveros reacciono con la verga puesta en su mente y supuso que este sería el mejor momento para convencer a la interesada colegiala que le ayudara en sus viles propósitos.
Mientras la extraña pareja de amantes se vestía rápidamente en la oscuridad de la habitación de Claudia fue el hombre quien comenzó la conversación…
--Y qué me dices rubita?… ahora que ya está por llegar la otra chamaca…me ayudaras a convencerla u obligarla para que se acueste conmigo?, jejeje…
--No sea tan cara dura viejo cochino!… yo no forzare a mi amiga a hacer algo que ella no quiera… si no fuera porque necesito esos certificados yo nunca lo hubiera hecho con Usted, le dijo en el momento en que ya terminaba de darle los últimos toques a su corto vestido negro,
--Jejejeje…pero a pesar de tus palabras lo disfrutaste como una cerda si hasta te bebiste todos mis mocos…jajajaja!!!
--Estaba ebria…solo lo hice por eso…ahora acompáñeme al ante jardín a esperarla…
Una vez apostados y ambos fumando en el antejardín de la casa, el caliente vejete de don Tulio continuaba en su afán de querer convencer a la estudiante en su desalmada solicitud…
--Mira…hagamos un trato pendeja…, le decía mientras le mandaba una senda chupada a su cigarrillo, --Si me ayudas a convencerla y lo logramos…te prometo que para esta misma semana te doy los dos certificados, y te libras de tener que acostarte conmigo lo que queda del año… y si no nos resulta, lo dejamos tal como estamos, o sea ya no te pediré más tu ayuda con la Cielo Riveros , pero eso sí que nos juntamos para follar dos veces a la semana tal como te dije hace un rato…que te parece?, es un trato justo…
--Mmmm…no lo sé…no creo que Cielo Riveros quiera hacerlo con Ud. Además que ella tiene muy poca experiencia en estas cosas, le decía Claudia a la vez que levantaba su mirada en todas direcciones para ver si su amiga aparecía por algún lado…
--Pues intentémoslo ricura… piénsalo!! son tus certificados de notas, así tendrías que esperar solo que pase el año sin tener la necesidad de estar preocupada de exámenes y de todo ese tipo de mamadas que a ti tanto te aburren…jejeje. El viejo profesor era un auténtico degenerado, por algo era tan amigo del cojo Juan, si él quisiera se las podría violar a ambas juntas, pero estas chamacas eran muy conocidas en el colegio, y no estaban en situación de vulnerabilidad, como si estaban otras que el simplemente las violaba y las golpeaba a su regalado antojo, además que el cojo había tenido suerte haciéndose con el diario de Cielo Riveros, pero él no tenía nada como para presionarla, o como otras alumnas que por un poco de droga o algo de dinero se dejaban hacer de todo.
Claudia no podía dejar de pensar en el excelente trato que le proponía el profesor Tulio, pero se trataba de su amiga del alma, ella no podría hacerle ese tipo de canallada, sabía que Cielo Riveros no era como ella, o como sus otras amigas, mientras continuaba mirando hacia la esquina de fondo escuchaba las continuas suplicas del degenerado profesor para que ella intercediera en sus calientes pretensiones de hacerse con el cuerpo de su amiga de infancia, pensó que si Cielo Riveros por lo menos hubiera sido de otra forma tal vez habría aceptado, pero ella la conocía bien, sabía que no aceptaría bajo ningún precio andar acostándose con cualquiera y menos con tan espantoso vejete, pero a lo mejor era algo de eso lo que le faltaba a su amiga, despertar un poco de su ingenua personalidad, si hasta capaz que sacara algo beneficioso para ella en todo esto, y lograr que viera que la vida está llena de oportunidades y situaciones para sacarle provecho.
Estos erróneos pensamientos sumado a la codicia de la joven hicieron que en algo flaquera en la lealtad con su amiga,
--Lo intentare…pero no le prometo nada, le dijo finalmente a su profesor.
--Jejejeje…sabía que aceptarías ya que es un excelente trato, le contesto el degenerado en forma emocionada. Al vejete con solo pensar que tal vez estaba solo a minutos de acostarse con Cielo Riveros ya tenía la verga como fierro, solo faltaba que la endemoniada chiquilla llegara de una buena vez, ahora sí que no se le iba escapar se prometía, como así mismo ya se imaginaba que si la situación se le presentaba algo favorable fácilmente podría acostarse con las dos juntas, si hasta ya se sobaba las manos por tener tanta buena suerte.
--Le dije que solo lo intentare…sigo pensando en que la Cielo Riveros na va a querer hacerlo…
--Tu solo háblale bien de mí, yo me encargo de lo demás…le haremos una pequeña fiesta de bienvenida, te queda algo de licor?,
--En el estante hay otra botella de tequila que está cerrada…
Don Tulio recordó claramente como la rubia se había calentado rápidamente con los tequilas que le invitaron en la feria el con el cojo, como así mismo a su mente llegaron nítidas las proféticas palabras del cojo Juan: “si le damos de beber del tequila más barato, ese par de putas no sabrán ni de la zorra!!”…
--Óyeme rubita…te quiero hacer una consulta, jejeje…a tu amiga le gustan los golpeaditos de Tequila…
--Ufffff…le encantan…y a mí también!! No me va a decir que va a preparar unos golpeaditos con sal? jijiji...
--Pues eso mismo es lo que estoy pensando lindura, y no te esfuerces mucho con tu amiga, total si no quiere que la vamos a hacer, le dijo el suertudo profesor para confundir a su bella estudiante…
Ya eran las tres de la madrugada cuando Claudia vio que un destartalado automóvil se estacionaba en la esquina de su casa, don Tulio solo hacían algunos minutos que se había ido a la cocina a partir limones y preparar los vasos, luego de un buen rato vio que en el interior del cacharro había una pareja de enamorados besándose en forma apasionada, pero no podía verle las caras, a lo lejos veía que la pareja se notaba bastante entretenida haciendo quizás que tipos de cosas, vio por fin que la mujer que había estado acompañada de un hombre al cual no pudo verle la cara, bajaba del vehículo, y que por la misma ventana del copiloto se despedían con otro romántico beso de enamorados, luego vio que el destartalado automóvil dio la vuelta en la misma esquina en donde había estado estacionado, hasta que desapareció algunas cuadras más abajo, ahí recién se pudo dar cuenta que era la misma Cielo Riveros en cuerpo y alma a quien habían venido a dejar en aquel cacharriento vehículo.
(Minutos antes en el cacharro de don Pedro)
--Llegamos putita, jajajaja!!! No puedes negar que allá en el taller lo pasamos de maravilla pendeja…
Cielo Riveros por su parte solo tomo sus cosas y ya se aprontaba para bajarse del auto, cuando fue tomada por el viejo fuertemente del brazo,
--Y que modales son esos perra de mierda!, crees que te vas así no más y sin despedirte de tu macho!?,
--Don Pedro… por favor…allá afuera esta mi amiga y no quiero que me vea con Usted, podría sospechar algo…
--Acaso te doy vergüenza escuincla calienta vergas!!!, acuérdate que desde hoy soy tu marido… soy el que te culeaaaa!!! Y aunque no te guste tu eres mi mujer!!!, así que despídete como corresponde… dame un beso con harta lengua o si no soy capaz de bajarte de mi coche y culiarte delante de tu amiga y de todos los vecinos que quieran ver el espectáculo, así que convénceme que soy tu marido!!!
La colegiala a sabiendas que don Pedro era capaz de hacer todas aquellas atrocidades que le estaba diciendo, acerco su fresca boca a la del vejete, este al recibirla se la comenzó literalmente a comer, prácticamente se la estaba succionando e intentaba absorber todo lo que ella tuviera dentro de su cuerpo, por su parte la joven solo se dejaba hacer, después de este asqueroso beso por fin se podría ir a la casa de Claudia y olvidar las traumáticas experiencias vividas en aquella horrorosa noche de feria.
El salivoso besuqueo continuaba, el vejete no quería separarse de su joven Diosa que el mismo se había encargado de estrenar sexualmente por su vagina, deseaba ver que es lo que pasaba ahora que tenía prácticamente intimidada a la encamable colegiala, pero en la mente de la mocosa de 18 años ya estaba pasando de todo, Cielo Riveros se preguntaba como ella era capaz de estar besándose con aquel ordinario tipejo, recordó como su cuerpo le había hecho sentir tan rico después que el vejete le había enterrado el pico en su virgen zorrita, y de hecho en estos mismos momentos ya sentía al medio de sus piernas ese agradable cosquilleo que le prometían placeres aún mayores.
El asqueroso beso fue aumentando en intensidad y ansiedad, las manos del mecánico fueron tomando una descarada confianza en el curvilíneo cuerpazo de la tierna colegiala, a la vez que sus lenguas ya se enredaban una contra la otra, concretamente el vejete ya la había pasado a su asiento y la tenía montada en su regazo, hasta ya le había subido el vestido a la altura de su cintura, la chamaca estaba muy nerviosa ya que iba desprovista de ropa interior, esta había quedado destrozada en el basurero del taller mecánico, sentía como el vejete ahora después de haberle soltado la boca le besaba el cuello combinándolo con salivosos chupeteos en la oreja.
Cielo Riveros estaba paralizada ya que se daba cuenta que el ordinario viejo no tenía ninguna intención de soltarla, y le preocupa que Claudia estuviera viéndolo todo.
Por su parte el desalmado don Pedro se daba cuenta como su técnica poco a poco iban haciendo claudicar a la tierna colegiala que el mismito había convertido en mujer solo hace un rato, sentía como la suave piel de Cielo Riveros se erizaba, su tacto y suavidad eran incomparables todo en ella era perfecto, su tersa y fina piel eran un verdadero banquete para los Dioses, banquete que el mismo ya se había servido sin convidarle a nadie, su verga nuevamente ya estaba lista para la batalla.
Cielo Riveros estaba muy nerviosa y agitada, sentía el armamento del mecánico duro y parado, pensaba que el viejo en cualquier momento se lo metía, ya que desde hacía algunos minutos no paraba de refregárselo en la panocha, muy a su pesar sentía exquisita aquella verga que le había estrenado la vagina por primera vez, pero aun así no iba a permitir que aquel miserable hombre mancillara nuevamente su cuerpo y menos al interior de un viejo y chancharriento automóvil.
Don Pedro seguía besando su cuello y raspándola con su barba sin afeitar quizás de cuantos días, Cielo Riveros sentía en sus mismas fosas nasales su hediondez a cuerpo sin asear mezclado con olores a grasas y aceites de mecánico, y esto sumado con la serie de escalofríos que el vejete le provocaba con sus lamidas eran una verdadera bomba de tiempo, su piel no dejaba de estar erizada, el mecánico lentamente fue bajando sus encías desdentadas hasta llegar a la altura de sus tetazas, que comenzó a besar como mal nacido por sobre su vestido, la calentura del hombre iba en franco aumento.
Cielo Riveros apenas participaba de lo que le estaban haciendo solo se mantenía con sus ojos cerrados intentando de ordenarle a su mente que se dejara de hacerla sentir tan rico, ya estaba claro de lo que le pasaría si no controlaba la situación, pero se dejaba hacer, sentía como el viejo mecánico le besaba en la boca y en el cuello, donde encontraba una especial receptividad ya que aquella erógena parte su cuerpo era el que más rico le hacía sentir en un principio.
Mientras las peladas manos del tosco mecánico subían por sus muslos lentamente, sintiendo y acariciando a plenitud su maravillosa y sedosa piel hasta llegar a ese majestuoso y rotundo pedazo de culo, no se aguantó las ganas de asestarle una firme y fiera nalgada, levanto su mano para agarrar fuerzas y de pronto se lo asesto de una –Plaaaffffff!!!!! Retumbo ahogadamente la fuerte palmada al interior del vehículo, Cielo Riveros solo se echó sobre su hombro aguantando el dolor de la laceración a sus carnes, su sedoso cabello negro se enredaba con los canosos y encrespados pelos que tenía el vejete por detrás de sus orejas, esto último lejos de espantarla la estaban haciendo encender aún más.
El viejo se dio nuevamente a besarla en la boca y alternando chupeteos en las tetas, a medida que aumentaba la intensidad de los impúdicos besos, estos hacían que aumentara la participación de Cielo Riveros, sobre todo en las caricias, apretaba la cabeza de don Pedro contra sus chichotas, todo el auto ya olía a cacha y sexo del bueno, el olor a coño adolescente y verga de viejo lo impregnaban todo.
Lo mejor Cielo Riveros para don Pedro en estos momentos era su mirada, sus ojos verdes brillaban en la semi oscuridad del viejo automóvil, entrecerrados parecían suplicarle al vejete que continuara con todo lo que le estaba haciendo, pero el mecánico ahora solo la miraba con su burlona sonrisa, (muy parecida a la de su hermano Cipriano por cierto), Cielo Riveros pensó que el hombre esperaba a que fuese ella quien debía tomar la iniciativa, muy humillada y queriendo que lo que deseaba el asqueroso vejete pasara lo más pronto posible, le fue bajando el cierre del overol hasta la altura de la verga, mirando hacia el techo del automóvil en señal de auténtico suplicio se dio a agarrarle la tranca para ella misma tallársela antes de la irrupción , pero en el mismo momento en que se la palpo para sacarla de su escondite, el viejo le asesto una fuerte cachetada en el rostro arrojándola hacia el asiento contiguo,
--Jajajaja, y quien te dio permiso para agarrarme la verga pendeja caliente!… jajajaja!!, se reía el miserable de puro gusto al estar vejándola de esa forma, --Te das cuenta de lo muy putona que eres para tus cosas?!, jajajaja!!! Me hubiera encantado volver a meterte la verga, pero debo regresar al trabajo, así que como ya está la otra puta esperándote te me largas de aquí al instante… vamos fuera de mi vehículo pedazo de zorraaa!!!!
Cielo Riveros no sabía que pensar, creía que lo que realmente quería el mecánico era volver a hacérselo, e incluso reconocía que hasta se había excitado con el viejo y en un momento hasta había pensado en querer volver a sentir su vergota al interior de su cuerpo, pero al parecer este también gozaba humillándola de esa forma, sus ojitos verdes se llenaron de lágrimas, ahora lo odiaba con toda su alma.
--Y que me miras con esa cara de puta arrepentida!, te dije que te bajes de mi vehículo ahora mismo!!, Fueraaaa te digoooo!! Lárgate de aquí o acaso quieres que te pegue para que entiendas!!!
Cielo Riveros vio la cara de don Pedro contraída por la ira, ese viejo era el mismo demonio en persona se dijo para sí misma, temblando por el miedo que le causaba, bajo con movimientos desincronizados, una vez que estuvo fuera fue el mismo mecánico quien bajo el vidrio del copiloto para luego sacar su mano y tomarla agresivamente de sus cabellos para atraerla hacia él,
--Escúchame puta!!!, deberás estar atenta a tu teléfono porque uno de estos días te llamare para violarte, y si no me contestas deberás atenerte a las consecuencias…, a la puta de tu amiga la ocuparemos más adelante, te lo digo para que te vayas preparando, y recuerda que tengo todos tus datos personales, así que si no vas donde yo te diga, yo mismito iré a buscarte a tu casa o a tu colegio, estas clara reinita?, Cielo Riveros con autentico espanto le asintió, el viejo a modo de despedida le dio tres asquerosas lamidas en la cara y luego la escupió en el rostro, para terminar diciéndole, --Ahora lárgate de mí vista perraaaa!!!
Cielo Riveros solo alcanzo a dar unos cuantos pasos cuando sintió que el viejo automóvil se ponía en marcha, lo vio avanzar solo unos metros y este dio la media vuelta haciendo chirriar los neumáticos hasta que por fin desapareció de su vista, se sintió algo aliviada por fin ese monstruo desaparecía de su vida, pensó que ahora al fin podría descansar, con sus dos manitas se limpió el gargajo que le escupió el vejete en el rostro a modo de despedida, y aun semi temblorosa inicio el camino a casa de Claudia que estaba a una cuadra de donde la habían ido a dejar.
Mientras avanzaba intentaba serenarse no quería por nada del mundo que su amiga se diera cuenta de lo que le había sucedido, le inventaría cualquier situación, ya que sus cosas y problemas personales ella no los compartía con nadie y menos si era de esa índole.
Claudia la esperaba sonriente, nunca se imaginó que su ingenua amiga Cielo Riveros se había largado con un chico en la feria, pero no la condenaba, ella hubiera hecho lo mismo, además que conocía muy bien los gustos de su amiga, de seguro que el chico debió de ser muy apuesto era lo que pensaba la perdida rubia compañera de colegio de Cielo Riveros
Cuando la encamable colegiala ya estaba a unos metros de la Clau, intento sonreírle para hacerle pensar que todo estaba bien, pero al momento de estar ambas frente a frente, el quebrantado temperamento de Cielo Riveros ya no pudo aguantar más solo se echó a llorar en los brazos de su amiga…
--Pero Cielo Riveros …que te pasa…y porque lloras…cuéntame te paso algo?, deberías haberme avisado si pensabas largarte con algún chico…te buscamos por toda la feria. Mientras Claudia intentaba consolarla por todos los medios posibles se dio cuento que su amiga venia sin sus botas, pero traía puestas unas bonitas sandalias por lo que no le dio mucha importancia a esta situación, Cielo Riveros sollozaba más ahogadamente, --Dímelo… ese chico te hizo daño…vamos dímelo, e iremos a buscarlo…yo tengo unos amigos…
Cielo Riveros se abrazaba al cuerpo de su amiga, quería contarle sus desdichas, de cómo la habían violado analmente en la parte oscura de la feria, y como luego la raptaron en un automóvil, para ser llevada a un viejo y sucio taller mecánico en donde la habían convertido en mujer producto de otra violación, lo que la detenía en la confesión era solo una cosa, y esta era que a pesar de haber sido escupida, humillada, golpeada y maltratada psicológicamente, ella veía que a lo mejor don Pedro no era un hombre tan malo, quizás debió haber tenido problemas desde niño y por eso ahora su personalidad se veía alterada, además que luego de haberla penetrado salvajemente ella había sentido tan rico, que había algo que no se explicaba por qué le hacían sentirse algo atraída por aquel ordinario y vulgar vejete, pensaba que tal vez este no era malo del todo.
Claudia como pudo la hizo entrar a su casa, el maestro Tulio que ya estaba listo y dispuesto con una bandeja llena de vasitos y limones para beber tequila golpeado, no entendía por qué la chamaca venia llorando, le hizo unos gestos a Claudia para que le explicara qué es lo que estaba pasando pero la rubia solo le hizo señas que se esperara, luego las vio a ambas encerrarse en el baño, típico delas mujeres cuando tienen dramas pasionales se dijo para el mismo.
Cielo Riveros …cuéntamelo todo, le decía Claudia a su amiga mientras esta se lavaba la carita.
--Ehhh nada…no pasa nada…
Cielo Riveros recordaba que don Pedro había anunciado su visita en cualquier día de la semana por lo tanto, ya no quería darle más vueltas al asunto además que sabía que ya habría tiempo para hablarle de don Pedro a su amiga ya que este había sido enfático en que ella de alguna forma tendría que llevarle a Claudia, aunque igual pensaba que esto lo decía solo para asustarla, por ahora lo mejor era dejar las cosas tal como estaban,
--Pero como que nada!?...si venias llorando como una Magdalena!! Quiero que me lo digas ahora…que te hizo ese chico…el del auto?
--Lo que pasa es que ese tipo era muy pesado… y me dijo cosas feas…snifff, le decía una ya más recuperada Cielo Riveros …
--Segura que no te hizo daño?
--De verdad Clau…no me hizo nada…deja darme una ducha y porfi…préstame un vestido limpio…
--Está bien…le respondió Claudia no muy convencida del todo, mientras se daba a prepararle la bañera su amiga para que esta se duchara, --Bueno como te decía antes, con el profesor Tulio y don Juan el auxiliar te buscamos por toda la feria, pero nunca te encontramos…
--Y el profesor Tulio con don Juan están aquí?, Le consulto una nuevamente espantada Cielo Riveros al recordar la vez en que tuvo que chuparle la verga al profesor dentro de su oficina, por su infantil afán de querer llegar a ser actriz, y lo más traumático de como el cojo Juan se la había violado en reiteradas ocasiones en el cuarto que se encontraba en el subterráneo del colegio.
--Don Juan luego de haberte buscado por todas partes prefirió irse para su casa, y yo con el profe nos vinimos a esperarte…y ves? la hicimos bien… ahora nos tomaremos unos tequilitas con el profe… que te parece la idea?
Cuando Claudia se dio cuenta que a Cielo Riveros se le llenaban nuevamente sus ojos de lágrimas y le decía…
--Ay Clau, no creo que sea una buena idea ese profesor es algo raro, yo no quie…
--No seas mal agradecida Cielo Riveros … con el profe anduvimos desesperados buscándote por toda la feria… y ahora que ya sabemos que estas bien, te bañaras, te pondrás ropa y nos tomaremos unos traguitos con él, es lo mínimo que puedes hacer para agradecerle no crees…
Cielo Riveros le vio el rostro de preocupación y enojo a su amiga, tal vez tenía algo de razón, por su culpa Claudia no lo había pasado bien en la feria, además que serían solo un par de tragos,
--Está bien…pero tú sabes que yo no soy buena bebiendo, así que solo me tomare un poco…
--Así está mejor amiga… y acuérdate de lo que hablamos antes de entrar en la feria, debes liberarte un poco más y dejar de andar reprimiéndote… ya verás que lo pasaremos bien…
En la sala el vejete ya estaba impaciente por estar a solas con ese par de putas, ni el mismo se la creía, iba a estar a sus anchas con las dos alumnas más potables del establecimiento escolar, a una ya la había probado, a la otra en una ocasión la había engatusado para que le mamara la verga, estaba impaciente por ver como se le darían las cosas desde ahora, pensaba esto mientras rápidamente sacaba de uno de sus bolsillos un frasco con un extraño polvillo blanco que rápidamente después de hacer en la mesa algo parecido a una línea, se la mando rápidamente por las narices, antes de que fuese ser sorprendido por sus portentosas y ricas estudiantes.
Claudia dejo a su amiga en la ducha para que se sintiera más relajada y fue para la sala donde las esperaba un impaciente Tulio que ya estaba que largaba sus lecherazos producto de la malograda follada que le había estado pegando a la rubia antes de que Cielo Riveros anunciara su llegada, tenía sus testículos rebosantes de semen espeso y caliente, listo para ser depositado en el útero de cualquier fémina y que en este caso él quería que fuese el de la escultural Cielo Riveros, la alumna con mejor futuro según las estadísticas académicas.
--Se dará una ducha y vendrá a tomarse unos tragos, yo la convencí de eso…pero no me pida na más, ahora lo demás dependerá solo de Ud., pero ni se le ocurra forzarla a algo que ella no quiera hacer, y menos de faltarle el respeto, porque soy capaz de sacarlo a patadas de mi casa…me escucho?
--Como tú quieras lindura, le decía el vejete a la vez que se acercaba al voluminoso cuerpo de la potable y rubia colegiala, para tomarla desde su cintura y atraerla contra su pecho, --Ya te dije que yo no voy a forzar a nadie, total si ella no quiere, nosotros tenemos un trato y acuérdate que solo hace un ratito dejamos un tema pendiente, así que si la cosa no resulta la dejaremos durmiendo en tu habitación y nosotros nos iremos a la recamara de tus papis, que te parece princesa, tenemos un trato?,
--Ahí veremos qué pasa, jijiji, y ahora suélteme que puede venir en cualquier momento, jijiji, la decía una prendida Claudia que con solo recordar la potente culiada que se había estado pegando con don Tulio, antes que llegara Cielo Riveros, le hacían temblar sus muslos…
Cielo Riveros ya estaba casi en condiciones, lo único que le incomodaba era que el vestido que le presto su amiga era algo más corto que el que había llevado puesto, pero este estaba limpio, por nada del mundo se volvería a poner la vestimenta que uso cuando la habían violado, pero lo más terrible era el sentirse desprotegida al andar sin ropa interior, le daba mucha vergüenza pedirle algo prestado a Claudia, que explicación le daría?, así que conformándose tal como estaba salió a la sala en donde la estaban esperando con una bandeja llena de limones, tequilas y con música para alegrar el ambiente.
Vio que el maestro Tulio se mantenía sentado muy apegado al cuerpo de su amiga, esta conversaba con el sonriéndole coquetamente ya se habían vaciado un par de vasos de licor, el vejete al ver salir a Cielo Riveros con un cortísimo vestido de mezclilla tipo jardinera, de esos con bolsillitos a los lados, casi se le salen los ojos de las hinchadas bolsas que este tenía por parpados, se paró apresuradamente para ir a saludar a la joven que ya estaba casi a punto de pasar a ser su mujer, según sus sucios propósitos.
--Hola Cielo Riveros, jejeje, nos tuviste muy preocupados, en donde anduviste metida que no nos dabas señales…
--La verdad profe que no quiero hablar de eso, le decía la dulce Cielo Riveros intentando no mostrar el inmenso odio que le sentía por haber jugado con sus sueños y el haber tomado provecho personal a costa de ello, el vejete le estampo un salivoso beso en la mejilla incluso se atrevió a sacar una pequeña porción de su lengua para sentir la lozanía de su cara, Cielo Riveros al notarlo muy disimuladamente se limpió su mejilla…
--Un golpeadito?, le ofreció indicándole la bandeja llena de vasos servidos con Tequila…
La fiesta comenzó, esta se centraba en una movida música reguetón y una serie de servidas de Tequilas que el mismo profe se encargaba de ir golpeando en la mesa y ofreciéndoles al par de chamacas que ninguna se dio cuenta que el mismo prácticamente no estaba bebiendo nada, conversaban de divertidas anécdotas escolares, Claudia hablaba a la misma vez que bailaba con su amigo imaginario, a los pocos minutos Cielo Riveros ya estaba algo más relajada incluso ahora que estaban cantando karaoke, ya ni se acordaba de don Pedro y de la siniestra oficina con cama en la cual había sido violada, también se había dado cuenta que el maestro Tulio no era tan aprovechador como ella creía, ya que llevaban bastante rato bebiendo y pasándolo bien y no se había comportado en forma incorrecta con ninguna de las dos, hasta incluso ahora lo en contraba mas simpático, ya que les narraba diversas historias de sus vivencias personales, y claro si el vejete como bien ya se ha dicho anteriormente, se gastaba una labia de los Dioses.
Ahora era Claudia quien serbia los vasos con el místico brebaje, que don Tulio quería que hiciera efecto lo más pronto posible, y así fue. La primera en caer noqueada fue la Claudia, que en el concurso de Karaoke se le olvidaban todas las canciones por lo tanto debía zamparse al seco un vaso lleno de Tequila.
Estaban los tres muertos de la risa cuando de pronto Claudia simplemente se desplomo,
--jejejeje y que mierda le pasa a esta pendeja, el vejete se hacia el desentendido ya que era justo esto lo que estaba esperando, deshacerse de la Claudia para el poder hacer lo que ya desde hacía rato había planeado.
--Creo que se le pasaron las copas, le contestaba una sonriente Cielo Riveros, --Creo que debemos llevarla a su habitación, me ayuda?...
--Hazte a un lado mi amor…yo la llevare…
Cielo Riveros no tomo en cuenta el amoroso apelativo con que el maestro Tulio por primera vez en la noche se refería a ella, tal vez el alcohol en su mente hicieron que bajara la guardia.
Una vez que el maestro dejo a Claudia en su habitación regreso a la sala, e invito una última copa a Cielo Riveros, ella totalmente confiada acepto tomarse otro trago con el profe,
--Está bien maestro Tulio, me serviré el ultimo golpeadito y me iré a la recamara de los padres de la Clau… ya son casi las 05.00 de la madrugada…Ud. que hará?
El vejete se dijo que ya era hora de actuar, no había ningún impedimento para tomar el cuerpo que desde hace tanto tiempo deseaba, así que se sacó la máscara de mojigato y se puso manos a la obra,
--Pus yo me quedare aquí contigo mi amorcito, o acaso te creías que ya me había olvidado de ti… acuérdate que ya me la chupaste una vez y esta no será una excepción, jejeje, además que quiero probar los otros encantadores orificios que posee tu cuerpo, jejejeje…
--Como!!?…que cosa me está diciendo!!!?, Cielo Riveros se dio cuenta en el acto que el caliente y degenerado profesor lo había planeado todo para quedarse a solas con ella…
El vejete fue rápido y no le dio tiempo de reacción a la jovencita, como oso acechando a su presa se abalanzo sobre su cuerpo lanzándola al sofá y montarse sobre su cuerpo. A la pobre Cielo Riveros la faltaba la respiración, el viejo era muy pesado para ella, le vio de muy cerca sus parpados hinchados y como la comenzaba a lengüetear en la cara con desesperada dedicación.
Cielo Riveros pataleaba en todas direcciones, a su mente llegaron de golpe las imágenes de lo sucedido solo hacían unas cuantas horas, la habían violado anal y vaginalmente y ahora era su mismo profesor quien pretendía hacer lo mismo con ella.
Debido a los bruscos movimientos que hacia la joven y espantada hembra al profesor Tulio le costaba trabajo manosearla a sus anchas, el vestido de Cielo Riveros ya se le había subido hasta la altura de su cintura debido a los bruscos movimientos que hacía en señal de protección, hasta que el profe perdiendo los estribos la sujeto con una de sus manos y le mando un certero tortazo en pleno rostro casi aturdiéndola emocionalmente, esta era la segunda vez en la noche que un hombre se atrevía a golpearla,
--Tomaaa!!, le dijo el viejo Tulio, y –Splashhhh!!! Retumbo la cachetada en el rostro, --Ahora te me quedas quieta maldita zorraaa, o acaso crees que no sé qué ya te has revolcado con el pinche cojo del colegio, puta de mierdaaa!!!
--Por favor don Tulio no me lo haga?… suéltemeee!!… le pedía mientras que con sus manitas intentaba inútilmente sacárselo de encima…
--Quédate quietecita putita!!, le decía con la mano empuñada y en alto, para luego abrazarla más firme contra él, --Hoy vas a ser mía pedazo de zorra, y será mejor que no hagas ninguna estupidez.
El profe acercó su asquerosa boca a los dulces labios rojos de la colegiala, ella intentaba esquivarlo, pero el vejete al igual como lo había hacho con la Claudia, le apretó sus cara con una de sus manazas y comenzó a comérsela por la boca, para luego de unos salivosos segundos de besuqueo no consentido decirle,
--Por qué no empezamos a sacarnos la ropa mi vida? Acaso no quieres hacerlo conmigo también?, la agarró entonces por el cuello y tomo su vestido con su otra mano para comenzar a bajárselo, lo primero que hiso fue bajarle ambos tirantes de los hombros, liberando aquellas preciadas montañas de carne que tanta admiración causaban a la vista de los hombres, lo que veía el viejo Tulio era espectacular, como pudo se lo fue bajando, veía su apetitosa piel al desnudo y pensaba que estaba en un sueño, siguió bajando el vestido ya iba llegando a la altura de sus caderas, y en un último esfuerzo termino de sacárselo de un puro tirón, y lo que vio casi lo hacen perder la razón, Cielo Riveros andaba sin ropa interior, el vejete aún no se la creía,
--Eres peor que una vulgar puta callejera mamitaaaa!! Quien lo iba a pensar que te gustaba andar a zorra pelada, jejeje!!!, el obeso maestro de secundaria no se cansaba de mirarla lujuriosamente, aquel curvilíneo cuerpo femenino estaba hecha a manos del mejor escultor dela época del Renacimiento, las formas y curvas que se pronunciaban en su cintura y caderas eran hipnotizantes, el viejo tragaba sendas cantidades de saliva, estaba realmente impactado --Estas realmente rebuenota mi amorrrr, le decía recorriendo con sus ojos de sapo todas las infernales curvas de carne joven que solo estaban a centímetros de su reptilesca mirada…
Cielo Riveros sabía lo que se proponía el vejete, con sus ojitos llenos de lágrimas le rogo,
--Profesor… le pido por favor que no me vaya a violar, snifff si quiere se la chupo hasta que se aburra, pero no me lo haga, snifff…
--Claro que me la vas a chupar cosita ricaaa…pero también vamos a follar, jejeje, hoy ha sido mi día de suerte, le acabo de reventar el culo a la puta que está durmiendo borracha, y ahora te toca a ti…que te parece lindura…
La pobre Cielo Riveros estaba tan asustada y tan cansada que ya ni siquiera podía podía moverse, su respiración era agitada, el vejete aprovecho para manosearla a su antojo, le encantaba masajearle las tetas, la colegiala intento nuevamente zafarse, pero don Tulio la tenía casi inmovilizada, pero no le pareció que la joven continuara resistiéndose, y para calmarla y hacerla entender de que no tenía escapatoria le asesto otra dos fieras cachetada en el rostro, --Plafff --plafff!!!, retumbaron las cachetadas en la sala, para luego casi gritarle en el mismo rostro enrojecido,
--Parece que no entendiste puta… no intentes hacer ninguna de tus zorrerías porque soy capaz de desfigurarte la cara a golpes… entiendes yegua caliente?
Cielo Riveros con su rostro al rojo vivo por los continuos tortazos que le habían asestado, solo asintió con su carita ya enrojecida por los golpes, miro como pudo hacia la habitación de Claudia por si venía a socorrerla, hasta pensó en que tal vez el mecánico de la feria se podía devolver y salvarla de las garras de aquel enloquecido maestro que ya estaba dispuesto a violarla, hasta pensó en irse a vivir por las buenas con don Pedro y hacer todo lo que él le había propuesto con tal de que la salvara de su ya casi segura tortura sexual.
--El maestro Tulio convencido de que ya había domado a esa potranca, la dejo tirada en el sillón, Cielo Riveros ya no tenía ninguna intención de hacerle problemas, lo miro con profundo asco como este se desnudaba ante su verdosa mirada, el viejo era muy gordo y feo, para luego observar y quedar el triple más espantada de como este viejo sacaba de sus ropas un pequeño frasco en el cual desparramaba en la mesa de centro una pequeña cantidad de polvo blanco, ahí lo comprendió, el muy miserable se estaba drogando, y lo vio cómo se mandaba otra porción de droga sin importarle que ella lo estuviese viendo todo.
El viejo Tulio se seguía drogando para según el sentirse aún más estimulado en el momento en que se la metiera.
Cielo Riveros lloraba acostada sobre el sofá, sollozaba muy bajito, hasta que el profesor una vez arrodillado a un lado de su cuerpo desnudo, acercó su cara de sapo a la de ella, la colegiala lo sintió respirar pesadamente casi en su mismo rostro, le daba un profundo asco, luego sintió cuando este le metió la mano entre sus muslos apoderándose de su casi lampiño tajito, para decirle al oído,
--Pero que tajito más rico es el que tenemos aquí abajo…y que apretadito lo tienes!! Me lo voy a comer enteroooo! Me lo voy a zamparrrrrrrr!! Te la voy a chupar hasta que me aburraaaaaaa!!!
--Don Tulio…Snifff…no me haga daño por favor…snifff….sniffff!!
Cielo Riveros estaba aterrada, nunca se imaginó que el maestro aparte de ser caliente y aprovechador también era drogadicto, se quedó quieta y paralizada de terror.
El vejete la tomo del brazo e hiso que se pusiera de pie,
--Ya está putita ahora nos vamos de luna de miel a la habitación matrimonial, jejejeje…
Cielo Riveros nuevamente comenzó a llorar y suplicar mientras prácticamente la iban arrastrando desnuda a la habitación de los padres de Claudia,
--Profesor por favor… no quieroooo sniffff… quiero irme a mi casa… dejemeee!
--Déjate de estupideces zorra asquerosa!, mira que vamos a pasarla muy bien y muy rico… ya verás!!
Una vez que ingresaron a la habitación Cielo Riveros se quedó mirando aterrada la cama, seria ahí en donde la volverían a violar, el vejete la tomo por detrás agarrándola por sus tetas y alojo su semi tiesa verga en las duras y frescas nalgotas de la asustada jovencita, el vejete se apegó a su espalda pasándole la lengua por detrás de la oreja, a la vez que la manoseaba como desesperado, le encantaba pasear y sentir sus manos en las marcadas curvas que se pronunciaban en sus caderas, para luego volver a subirlas y bajar desde las tetas, pasar por su cintura y hasta llegar a su panochita adornada escasamente por sus crespos pelitos negros y brillosos, la tanteaba y la recorría, pasaba nuevamente por sus amplias y bien formadas caderas, su bien marcada y formada figura lo tenían casi enloquecido de calentura.
--Por favor…profesor Tulio ya noooo!!, le solicitaba casi a punto de desmayarse de puro miedo.
El viejo queriendo darse el mejor espectáculo vivido en su existencia, encendió la luz de la habitación, después la tomo nuevamente de sus cabellos obligándola a ponerse en 4 patas, Cielo Riveros obedeció algo adolorida,
--Mueve tu trasero para mi mamasotaaaa!!
--Quee?
--Que muevas el culo perraaaa!!!… quiero verlo como se mueve cuando gateas en cuatro por toda la habitación, deseo sobártelo cuando vayas gateando.
Cielo Riveros totalmente asustada y nerviosa comenzó a mover su cuerpo. A medida que avanzaba en su gateo daban ganas de agarrala y metérselo así mismo como estaba, la imagen de la tierna chamaca en 4 patas y gateando desnuda era enloquecedora, y lo hacía en forma exquisita, cada movimiento de avance, y cada contoneo que hacía con cualquiera de sus muslos eran un prodigio solo para reyes, daba la impresión que era una verdadera hembra amazónica en busca de su presa,
--Válgame Diossss!! Pero qué clase de cuerpo es el que te gastas pendejaaaa!!!, le decía el profesor Tulio, mientras encendía un cigarrillo para disfrutar del erótico espectáculo que le estaba brindando Cielo Riveros .
El viejo la seguía fumando su cigarrillo observándolo todo y manoseándola mientras la joven amazona avanzaba en su recorrido, tras algunos minutos de paseo en 4 patas el impúdico y asqueroso sobajeo de carnes continuaba,
--Sigue gateando perrita, no sabes lo rica que te ves en pelotas y puesta en 4 patas, llevo como tres años pajeandome la verga en tu honor mamacita y esta noche por fin te voy a probar. La humillada colegiala solo cerraba sus ojos no quería verle la cara drogada y degenerada que tenía aquel horrendo profesor.
Una vez que el maestro Tulio se fumó todo su cigarrillo y se cansó de sobajearla se arrodillo al lado de aquel portentoso y femenino cuerpo desnudo, para comenzar a lamerla como si este fuera un perro, no hubo ninguna parte del cuerpo de Cielo Riveros que se salvarla de las lamidas, así estuvo unos buenos minutos, habían momentos en que el viejo parecía notar que a la chamaca se le ponía la carne de gallina además que cuando sucedía esto la joven hacia unos raros movimientos musculares, pero el continuaba con la faena lamedora.
La tierna colegiala solo se mantenía quieta y tragaba saliva como podía, sabía que un hombre bajo el efecto de las drogas era capaz de hacerle cualquier cosa, solo temblaba dejándose que la lengüetearan por donde el viejo lo quisiera.
A estas alturas y aunque ella no lo deseaba su cuerpo ya estaba siendo atacado por gratificantes escalofríos, sobre todo cuando el vejete pasaba la lengua por sus nalgotas, mientras más cercana se la pasaran de donde estaba su orificio posterior los escalofríos eran más intensos y ricos, pero ella no quería sentir eso, aquel miserable viejo había emborrachado a su amiga para poder beneficiársela a su antojo, y más encima estaba drogado, pero su potable y poderoso cuerpazo no le daba tregua a la atribulada chiquilla, los escalofríos poco a poco se iban transformando en sendos corrientazos que la recorrían por completo.
Cuando el degenerado profesor dejo de lamerla, Cielo Riveros supo que ya estaba casi perdida el vejete se la iba a meter, y más le quedo claro cuando este por fin le hablo,
--Ahora vas a ser muy obediente zorrita rica, y haz todo lo que te pida para no tener que golpearte! Cielo Riveros seguía temblando de miedo, trago saliva mientras le asentía en forma afirmativa con su cabeza, se sentía totalmente desamparada en aquella casa, seguía pensando que si por lo menos hubiera estado don Pedro para defenderla, de pronto cayo en cuenta que porque pensaba tanto en don Pedro si ese viejo caliente también la había violado y golpeado, ella debería pensar en Rodrigo era a el a quien amaba, estando en estas cavilaciones, la grave voz de su maestro la volvieron a su triste realidad --Putita ahora te subirás a la cama y te abrirás completamente de piernas, quiero ver tu cuerpo desnudo y abierto solo para mí, vas a hacerlo no es cierto cosita rica?
Cielo Riveros lentamente se fue subiendo a la cama para ponerse de espaldas, cerro sus hermosos ojos verdes y se fue abriendo de piernas tal como le había pedido el vejete, este por su parte se tendió posando su cabeza al medio de sus muslos con la única intención de mirarle su vagina hasta hartarse, encendió otro cigarrillo para disfrutar de la vista. Se la tocaba con delicadeza, sus gruesos dedos jugaban con los escasos pendejitos de la joven estudiante, le sobaba el vientre, su pelvis, sus muslos abiertos, hasta que decidió de ponerle un poco más de acción a la cosa, fue a ubicar su verga justo en la cara de la nerviosa adolescente, le ponía su tranca delante de sus ojos para que ella mirara las rápidas pulsaciones que esta hacía.
La colegiala recorría la peluda panza de su maestro, fue bajando su vista hasta la verga de don Tulio, ahora la observo con detenimiento, si bien ya se la había chupado en una ocasión, esa vez no había puesto atención en ciertos detalles que ahora si podía ver nítidamente, se la veía extremadamente gorda, daba la impresión de ser esponjosa se decía para ella misma, el glande era azulado y no sabía por qué miraba con tanto detenimiento la forma de este, y las continuas salidas de un fino hilillo de líquido que manaba desde la punta y que caía sobre sus tetas, instintivamente saco su lengüita pasándosela por su labio superior, para luego morderse el labio inferior, su respiración y presión sanguínea iban en acelerado aumento, el vejete totalmente lejano a lo que le estaba ocurriendo a Cielo Riveros veía embobado desde su posición las bellas piernas abiertas de la chamaca en donde también podía observar la exquisita grieta de carne que se le formaba al medio de ellas, grandes cantidades de babas caían sobre la negra cabellera de la muchacha pero ninguno de ellos se percataba de esto ya que ambos estaban concentrados en lo suyo.
El vejete muy excitado salió de aquella paradisiaca abstracción en la que se encontraba y bruscamente la tomo de sus cabellos y la obligó a ponerse de rodillas… el verla desnuda y sumisamente arrodillada ante él lo calentaron hasta la locura,
--Chúpame las bolas, le ordeno…
--Qué…?
--Que me chupes los testículos zorraaaa!!… acaso no entiendes?, junto con decirle esto último levanto su puño como si le fuera a volver a pegar…
Cielo Riveros muy asustada empezó a lamer los testículos con desesperación, no porque deseara hacerlo pero no quería que el vejete le fuera a dejar marcas en su cara, las lamidas sonaban acuosas, la colegiala paseaba sus lengua alternando entre uno y otro testículo, inconscientemente le tomo la verga y se la levanto para poder pasear su lengua por debajo de las peludas bolas del vejete, este estaba en el séptimo cielo.
Pasados algunos minutos el profe sin dar ningún tipo de aviso agarró su verga y se lo metió de una en la boca, empujo con fuerzas hacia la faringe de la muchachita que por poco casi la hacen vomitar, su miembro olía asqueroso, la pobre ni se acordaba que el mismo le había dicho que se la había metido por el culo a la Clau, demás está decir que el vejete ni siquiera se había aseado después del sexo anal y vaginal que había practicado con la rubia, y no era que Claudia no pusiera cuidado en su higiene ni mucho menos, la cosa era que el viejo con cara de sapo era desaseado, hediondo y cochino por naturaleza, la pobre Cielo Riveros no tuvo más opción que seguir chupando verga por varios minutos, en los cuales el vejete le sostenía la cabeza empujándola para adelante y atrás obligándola a seguir el ritmo que el determinara necesario para darse placer.
Una vez que el vejete se sacio de lo rico que le hacía sentir la boca de Cielo Riveros la obligó a colocarse nuevamente en cuatro patas con su trasero apuntando hacia él.
La joven cerró sus ojos como suplicando, lo sintió como intentaba separar sus duras y firmes nalgotas, a la vez que acomodaba su verga en la entrada anal de la asustada chiquilla, hasta que lo sintió como empezaba a empujar hacia adentro, la estaban enculando.
Cielo Riveros sentía en sus propias carnes como el profesor Tulio se la entallaba de arriba y hacia abajo, como si estuviera tratando de buscar por dónde meterla, el vejete se estaba desesperando, se suponía que la chamaca ya estaba abierta por el culo según lo dicho por el propio cojo Juan, pero la verga no entraba, enceguecido por la calentura y ansiedad de estar lo más pronto posible al interior de su cuerpo le dio una tremenda nalgada,
--Plaffffff!!!, --Vas a tener que ayudarme perra calienta vergas, si el pinche cojo ya te lo metió por el orto, deberías tenerlo un poco más dilatado, ábrete tú misma el culo para yo poder encularte!!! –Plafffffff, retumbo otra fiera nalgada en las duras carnes de Cielo Riveros …
--Don Tulio! Por favor no me pegue!! Me está lastimando…dejemeee!!!
--Que te abras el orto te dije perra de mierdaaaa!!! Vamos di que me ayudaras a encularte, diciendo esto ultimo levanto sus dos manazas y con fuerzas le aplico una doble nalgada, --Plafffffffff!!!
--Siiiiii!!!!!!!!!!!!!, profe yo le ayudare a que me enculeeee!!! Pero por favor ya no me pegueeeee!!!! Snifffffsssss!!
Aunque Cielo Riveros no lo quería llevo ambas manos a sus nalgas, para que el casi enloquecido profesor no la siguiera lastimando, tomándolas de par en par y abriéndoselas para que al viejo no le costara tanto trabajo poder metérsela por el culo, se lo dejo expuesto para que el hiciera lo que quisiera, ya no tenía sentido alguna seguir luchando, en su mente solo quería que todo acabara pronto.
El profesor Tulio quedo boquiabierto, desde su posición veía el apretado y rosadito puntito anal en toda majestuosidad, casi con cariño apunto la punta de su gordinflona verga a la entrada de este, se afianzo con ambas manos de las firmes caderas de Cielo Riveros, y concentrándose en la breve cintura de la muchacha, empujo su verga con decisión, perforando todo lo que se interpusiera por su camino…
Cielo Riveros apretó fuertemente sus mandíbulas y dientes cuando sintió de cómo le enterraban por tercera vez en la noche una verga por el culo…
--Ohhhh…Ayyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyyyy!! Diossss! Diosssss!! Sáquela que me dueleeee!! Es muy gorda su cosaaaa!!!, exclamaba la chamaca con sus ojos abiertos como platos, aun así no dejaba de abrirse con fuerzas las nalgas…
--Ahhhhh!!! Eres una muy rica putita sabes!… Tu culo es calientito y exquisito mi amorrrrrr!!!, le decía el vejete con sus ojos cerrados, a la misma vez que se lo dejaba enterrado por completo y le mandaba tres solidas apuntaladas para que ella sintiera a cabalidad que se lo tenía enterrado por completo.
--Suéltemeee!…No se muevaaa!!… sáquelo viejo asqueroso!!!… basta que me duele muchoooo!!!, me dueleeeee!!!!, ayyyyyyy!!!!!
El vejete haciendo caso omiso a lo que demandaba la adolorida Cielo Riveros, no se aguantó las tremendas ganas de nalguearla, el orto de la colegiala se contraía y le apretaba exquisitamente la verga como si esta realmente quisiera succionársela por el culo…
--Plafff! Plaffff!! Plafffff!!! Plaffffff!!!!, retumbaban en la habitación las fieras nalgadas y palmetazos que el vejete le asestaba en sus carnes, a la vez que comenzaba a meter y sacar con fuerzas, las chichotas duras y firmes se mecían rápida y circularmente al mismo ritmo en que ensartaban a su dueña, los movimientos culiatorios eran cada vez más acelerados, Cielo Riveros luchaba mentalmente con su cuerpo, no quería gemir, pero los escalofríos se venían uno tras otro desde que sintió la vergota posarse en la entrada de su ano, ahora ya casi sin fuerzas le rogaba que por favor la soltara,
--Por fa…vorrr…donnn…Tu…liooooo…ya…no…me…lo…hagaaaaa…
--Jajajaja!! Claro que te lo voy a seguir haciendo pendejaaaa…estoy casi seguro que ya te estas calentandooo…tomaaaaaa!!!, le decía a la vez que se dejaba caer hacia adelante y se lo comenzaba a meter y sacar en forma más rápida, Cielo Riveros solo murmuraba que ya no más, a pesar de tener la sensación de que le estaban despedazando brutalmente el trasero, no podía dejar de sentir muy rico,
--Nooooo…ya no masssss por fa…vorrrr!, gemía empujando inconscientemente el culo hacia atrás para que la perforación fuese aún más profunda de lo que ya era.
Pero el vejete no bajaba las revoluciones, apretaba su miembro contra aquel glorioso y apretadísimo esfínter, hasta que por fin la hizo pegar un grito terrible de placer y dolor al mismo tiempo, al viejo ni le importaba que la Claudia se fuese a despertar con el escándalo que él y Cielo Riveros tenían en la habitación de sus padres,
--Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!, Ufffffffff!!! Ohhhhhh!!! Ohhhhh!!, los gritos poco a poco se fueron transformando en exquisitos gemidos de placer, --Mmmmmmm! Mmmmmmmm!! Mmmmmmmmmmm!!, ya suspiraba casi desesperada de placer la tierna chamaca,
Ambos respiraban agitadamente, el ano y coño de Cielo Riveros estaban humedecidos, su cuerpo se encabritaba y estimulaba al máximo, escuchaba gruñir al viejo con cara de sapo como si este fuese un toro embravecido, sintió como ahora la tironeaba desde su cabello y le jaloneaba la cabeza hacía atrás, para decirle cosas vulgares producto de su sádica calentura,
--Culeas muy rico cerda de mierdaaa!, eres una autentica putaaaa!! --Dime quien te rompe el culo mas rico, yo o el pinche cojo de la gran puta!!?...
Cielo Riveros a quien ya casi no le quedaban fuerzas para resistirse a nada de lo que le pidiera el vejete, se olvidó de todo, ya ni siquiera le importaba que se la estaban violando, solo quería gozar y que su profe la gozara todo lo que él quisiera…
--Responde perra inmunda quien te parte el orto más rico yo o el cojo Juannn!!, Plaffffff, retumbo la fiera nalgada que le asesto en el culo para que reaccionara…
--Us…teddddd!!
--Yo que pendejaaaa, quiero escuchar la frase completaaa, el viejo profesor con extrañas fuerzas para un hombre de su edad, no paraba de meter y sacar verga,
--Usteddd …me parte el culo…. más rico que don Juannnnn!!!, le soltó la estudiante en forma clara y categórica,
--Jajajaja!…así me gusta putitaaaa!!…ya estas caliente verdad zorritaaaa?, el viejo al ver que la hermosa colegiala no le contestaba, siguió presionándola, --Contesta mierdaaaa o quieres que te mate a golpes por desobedienteee!!!
Cielo Riveros estaba muy caliente, como pudo le contesto al macho que en estos momentos la perforaba tan exquisitamente…
--Siiii papi! Estoy…. Muy…. calienteeeee!! Ohhhhhh ri… cooooooo!!
--Jajajaja te voy a seguir partiendo el culo hasta que te desmayes de placer putita, jajajaja!!!
--Siiiiiiii Tu…lio!! mi amorrrr!!! sígueme culiando ri…coooooooo!!!!!
La tierna Cielo Riveros ya estaba perdida, en estos momentos su calentura sobrepasaba todos los límites permitidos, en aquel estado estaba dispuesta a hacer cualquier cosa que el vejete le pidiera.
--Ahora quiero hacértelo por la zorra pendejaaa, lo quieres?
Cielo Riveros con una autentica sonrisa de viciosa volteo a mirar al viejo que le estaba pidiendo la parte por su vagina, ella con sus ojos verdes semi cerrados producto de la calentura le asintió, el profesor Tulio muy emocionado por lo que ahora se le venía lentamente se la fue sacando, Cielo Riveros se puso de espaldas y abrió sus muslos ofreciéndole sin ningún tipo de impedimento lo que él le estaba solicitando, el vejete se echó sobre su cuerpo para luego juntar su cara con la de ella para comenzar a besarla apasionadamente, metió su lengua en la boca de la entregada colegiala, ella por su parte como guiada por instinto también abrió su boca lo que más pudo, hasta que ambas lenguas se rosaron y se enredaron en un intercambio de saliva constante.
La cama ya estaba hedionda a sudor, el vejete comenzó a bajar su cara de sapo por todo el despampanante cuerpazo de una de sus más brillantes y bellas alumnas, lamio y chupo toda la carne que encontró a su paso hasta que llego a la región de su pelvis coronada con pequeñas cantidades de suaves pelitos encrespados, acarició su vagina y ella con sus ojitos puestos en la fea cara de su profesor y en señal de verdadero agradecimiento le abrió las piernas lo que más pudo, lo vio meter su cara y legua justo en su preciosa entrada de amor.
Cielo Riveros estaba muy excitada por todo lo que le estaban haciendo, la lengua del vejete bailaba resbalosamente al interior de su ranura intima, veía como el degenerado profesor Tulio le sorbía todos sus jugos vaginales, se la chupaba y se la succionaba, literalmente le estaba comiendo la zorra, vio cuando este con dos de sus gordos dedos le abrió su panochita para luego volver a meter su lengua lo más profundo que pudo, chupando y comiéndose todo lo que manaba desde su interior, para Cielo Riveros aquello era el mismísimo cielo, era tan rico lo que estaba sintiendo que cerro sus ojos y se relajó abriéndose aún más de piernas, nunca en su vida había sentido tan exquisito.
No supo en qué momento se vinieron los corrientazos de placer en donde la joven perdió total compostura, como pudo se inclinó hacia adelante y lo agarro por los cabellos y comenzó a mover su vagina como si ella misma se estuviera culiando la boca del vejete, le punteaba ondulatoriamente, en eso comenzó a gritar,
--Ahora profeeee!!…si, si…asiiii!! Asiiiii!!! Continúe por favorrr!! …siga comiéndomela que me voy a venirrrrr por la zorraaa!!!… Mmmmmmm….que ricooooo!!!… ayyyyyy!!… que ricooooo profersorcitooooo!!!.
Cielo Riveros se retorcía de calentura, sintiendo y gozando todo el placer que le regalaba su vagina al estar prácticamente pegada a la boca de su profesor, hacia movimientos pélvicos de atrás y hacia adelante, combinándolos con exquisitos meneos ondulatorios, hasta que lanzando un terrorífico grito de placer y excitación le ponía en conocimiento a su macho que ella estaba en la cúspide de un glorioso orgasmo,
--Siiiiiiiiiiiiiiii!!!!! Me vengoooo don Tuliooooooo!!!!! Ricoooooooo mi vidaaaa!!!!! Me estoy corriendooooo en tu bocaaaa!!!! Comemelaaaa!!!!… comemelaaaaa!!!! Le gritaba y pedía sin dejar de apuntalarle su panocha en plena boca abierta del feliz vejete, a la vez que con sus bellas piernas le atenazaba la cabeza empujándosela más firmemente hacia su jugosa y febril vagina.
--Ves cómo te gustó… escuincla de Mierda!!!, le dijo el viejo con cara de sapo una vez que se pudo separar de aquella exquisita hendidura, --Ahora te voy a culiar por la zorra ya verás…
La colegiala que aún estaba en estado de extrema calentura le dio su autorización,
--Si… la… quiero… toda…. adentro, le dijo sin saber lo que estaba diciendo, con sus ojos lánguidos y mirando hacia un lado de la habitación.
Cielo Riveros se abrió de piernas nuevamente para que su profesor de una buena vez se la metiera y la hiciera su mujer, fue ella misma quien ahora se abría su apretada vagina con dos de sus dedos para que su macho llegara y simplemente se la encajara hacia su interior, esto fue mucho para el degenerado y aprovechador profesor, con solo tener la visión de la dulce Cielo Riveros abriéndose y dándole luz verde a su verga para que se paseara por donde él lo quisiera lo llevaron al placer anticipado,
--Ohhhhh putitaaaaa me corroooooo!! no voy alcanzar a meterteloooo!!!, el viejo como pudo se abalanzo hacia la cara de la expectante jovencita, ella viendo que en cualquier momento este dispararía sus lecherazos, lo espero sin saber qué hacer, el viejo como pudo se instaló a horcajadas sobre sus tetas tomando y apretando su hermosa cara la obligo a que abriera su boca, Cielo Riveros no podía respirar sintió entrar en su boca la gorda verga de don Tulio que una vez bien alojada en su cavidad oral este disparo tres sendos y gruesos borbotones de semen caliente y espeso, seguidos por otros cuatro de igual intensidad y potencia, la corrida en su boca fue abundante, la colegiala aguanto la respiración lo mejor que podía, sentía como la verga de su maestro escupía semen al interior de su garganta y paladar cuantiosas cantidades de aquel exquisito liquido espeso y caliente que una vez ya había bebido en el interior de la oficina de su profe, pero ahora sentía unas tremendas ganas de bebérselo todo, por lo que sin pensarlo dos veces a medida que esta prolífica esencia masculina salía a raudales de la verga ella lo iba tragando, y aprovechaba de chupársela intentando succionarle hasta la última gota de semen que el vejete poseyera al interior de sus peludas bolas.
Cielo Riveros se había tragado una gran cantidad de espermios que le había regalado el maestro Tulio.
El viejo cayó desplomado al lado del curvilíneo y sudado cuerpo desnudo de la tierna colegiala, ella se mantenía con sus ojos vidriosos, sus curvas aún estaban temblorosas por la tremenda excitación a las que habían estado expuestas, poco a poco se fue serenando, hasta que los fuertes ronquidos del hombre al cual le había bebido una gran cantidad de semen, la sacaron de su estado de calentura, se volvió a mirarlo, ahí estaba el miserable y aprovechador vejete que por segunda vez se había beneficiado con su cuerpo, los remordimientos y el sentimiento de culpa se apoderaron de su mente, --Pero que barbaridad era la que acababa de hacer?, se preguntó de pronto, lentamente se levantó de la cama y salió de aquella habitación, con sus hermoso ojitos verdes llenos de lágrimas fue por el vestido que le había prestado su amiga y se lo puso, consulto la hora ya eran las 09.00 de la mañana.
Una vez que se hubo arreglado un poco en el baño se dispuso a irse para su casa, desde la sala escuchaba los fuertes ronquidos del profesor, quiso ir a despedirse de su amiga, intentaba no hacer ruidos, y cuando abrió la puerta de la habitación la pobre chamaca casi se desmaya de la impresión, vio a Claudia tirada en su cama desnuda con su dorado cabello rubio totalmente alborotado, mantenía sus bellas piernas bien abiertas, una de sus manos la movía aceleradamente en su vagina haciendo frenéticos círculos, y con la otra mano se apretaba alternadamente las tetas, escucho claramente como su rubia amiga murmuraba con su cejas fruncidas en señal de concentración en lo que estaba haciendo:
--Asiii…asiiii…profesor Tuliooo!!… metamelaa!! Métamelaaaa!!! más adentrooo!!!… más adentroooo!!!
Cielo Riveros se quedó mirando como embobada el desnudo cuerpo excitado de su amiga, sus bellos ojos verdes la recorrieron curva por curva, inconscientemente junto sus piernas lo que más pudo, sintió que su cosita sin darle previo aviso le soltaba una extraña cantidad de agüita calientita que corrió por sus muslos y que la hicieron sentir muy rico, le estaban dando ganas de….
Cielo Riveros salió casi corriendo espantada de la casa de Claudia y muy asustada por lo que su cuerpo le había hecho sentir en el momento que vio a su amiga masturbándose, se preguntaba que como era posible que su cuerpo le hiciera sentir eso después de todas las atrocidades que le habían ocurrido, y más encima a costillas de Claudia que era su gran y mejor amiga, esto está mal… muy mal, se iba diciendo.
Ya en el bus y en camino a la seguridad de su casa no podía dejar de pensar en todo lo sucedido en la noche anterior, se maldecía a ella misma por haberse entregado al más feo y degenerado de sus profesores, ahora con qué cara podría llegar el día lunes al colegio?, y con qué cara podría ver a su madre que seguramente a estas horas ya debía estarla esperando, sentía asco por lo que había hecho, en que había estado pensando cuando le dio por beberse el semen de tan asqueroso sujeto, y Claudia desnuda y masturbándose, que hermosa la había visto…no! en eso no iba pensar!!, se dijo terminantemente.
Recordó también su anterior violación, por nada del mundo don Pedro se tenía que enterar de lo acontecido en la casa de su amiga, ya que este se podía enojar con ella, pensó que tal vez ni la llamaría como le había prometido, y si la llamaba bastaría con no contarle nada de lo sucedido, con esto último la pobre se tranquilizó un poco más, de pronto cayo en cuenta que porque estaba más preocupada de lo que podría pensar don Pedro, si ese viejo caliente también se había aprovechado de ella, su preocupación debía de centrarse en Rodrigo, era a el a quien ella amaba con todas las fuerzas de su corazón, por lo tanto se sacó la imagen de don Pedro y prefirió pensar en Rodrigo, el si era bueno y comprensivo con ella.
Al ingresar a su casa intento hacer el menor ruido posible, pero para su tranquilidad encontró una nota de su amada madre en la que le decía que tuvo que irse a atender una urgencia en el hospital, por fin pudo descansar, de seguro que su madre ya no llegaría hasta el próximo fin de semana, a duras penas aseguro la puerta con el pasador de madera que había instalado don Benito.
Se dio una relajante ducha, a medida que las refrescantes cantidades de agua recorrían y lavaban su mancillado cuerpo, Cielo Riveros recordó las escenas más escabrosas de la noche anterior, de cuando don Pedro con sus amigos la vieron desnuda en la feria, de cómo el viejo mecánico la enculo delante de los otros viejos, su desvirgamiento adentro de un sucio taller mecánico, y para rematarla la cogidota que le había pegado su profe por el culo estando él bajo el efecto de las drogas, ni que decir de la abundante cantidad des espermios que se había comido solo hace un par de horas, la joven colegiala lentamente se fue agachando en la ducha para ponerse a llorar desconsoladamente acurrucada en una esquina de la bañera, mientras el agua de la ducha le limpiaba su curvilíneo cuerpo de todo lo malo que le había ocurrido en esas últimas 12 horas de su vida.
Ya eran casi las 6 de la tarde, Cielo Riveros se despertó un poco confundida, había dormido casi todo el día, aun no recordaba que día era hoy, de pronto vio que en la silla a los pies de su cama estaba el vestido que le había prestado Claudia, la angustia se apodero nuevamente de su conciencia al recordar todo lo sucedido, reviso su teléfono celular tenía 5 llamadas perdidas de Rodrigo, eso la saco un poco de su lamentable estado emocional, le llamo y estuvieron conversando unos buenos minutos en donde quedaron de acuerdo para juntarse al siguiente día después de terminado el colegio.
El resto de la tarde Cielo Riveros se lo paso ordenando sus cuadernos, y preparando su uniforme escolar, las sucias imágenes que la atormentaban poco a poco se iban disipando, pero el solo pensar que ya no tan solo tendría que soportar las lascivas miradas del cojo Juan sino que también ahora se sumarian las del maestro Tulio, la hacían poner de mal humor, se puso como regla no tener que ir por nada del mundo a la oficina de aquel asqueroso hombre, como se había atrevido a tirársela en la casa de su amiga, pensaba que si don Pedro tomara cartas en el asunto lo más seguro era que se lo despacharía, increíblemente estos pensamientos hacia la burlona persona del vil mecánico la hacían poner de buen humor, pero luego recordaba que ese mismo sujeto también se la había violado y que más encima también le había dicho que se quería coger a Claudia.
Cielo Riveros dormía apaciblemente en la oscuridad de su habitación, en sus sueños veía a Rodrigo que la esperaba sentado en los bancos de una hermosa plaza, ella se había arreglado para él, en sus sueños era el día en que juntos iban a concretar el acto de amor, ella llegaba con un poco de retraso, y Rodrigo al verla se ponía de pie y extendía sus brazos para que ella corriera hacia él, una vez que ya estuvieron abrazados, Cielo Riveros sentía el cuerpo de su amado distinto, a la vez que una hediondez extraña emanaba de sus ropas, con espanto se percataba que Rodrigo ya no estaba en sus sueños y el que la mantenía abrazada era don Pedro quien la miraba con su burlona sonrisa, ella quería escapar e ir en busca de su amado, pero el vejete casi sin ningún esfuerzo la iba arrastrando hacia la misma oficina con cama en donde la había convertido en su mujer.
La jovencita se estremecía en la cama de un lado a otro, las tapas se habían caído y solo estaba con su camisa de dormir, lentamente sus muslos se comenzaron a frotar uno contra el otro, la pesadilla continuaba.
Don Pedro la metió a la fuerza en la oscura habitación, ella ya estaba casi entregada sabía que el vejete se la iba a follar, una ardiente comezón en su zorrita le invitaban a buscar la cama tenderse en ella y abrirse de piernas, para que el mecánico le hiciera eso que ella ya sabía que disfrutaría mucho.
En la oscuridad ella buscaba la cama mientras se iba sacando sus ropas, quería que don Pedro se lo hiciera de la misma forma abrutada que ella bien conocía, una vez que ya pudo estar acostada y tendida de espaldas abrió sus muslos en espera de su macho, lo veía en las penumbras como este se quitaba su overol de trabajo, y cuando lo vio acercarse para venir a montársela y ella se abría aún mas de piernas, con espanto vio que el que venía desnudo y con la tranca bien parada no era don Pedro, sino que el mismísimo maestro Tulio y que le decía…
--Me echabas de menos mi amorcito?, ahora sí que no te salvaras lindura, le decía agitándose la verga a la vez que se acercaba a su cuerpo desnudo, ella quería cerrar sus piernas pero no lo podía lograr, ahogadamente llamaba a don Pedro pero este había desaparecido, cuando sintió el seboso cuerpo del maestro Tulio subirse sobre el suyo llevo su mirada hacia un lado de la cama en donde vio otra cama igual a la en que ella estaba acostada, de pronto vio que era la misma Claudia la que estaba desnuda y masturbándose tal como la había visto el día domingo en la mañana, ella intentaba llamarla para que la salvara, pero Claudia no cesaba de masturbarse y la miraba sonriente, hasta que vio que otro sujeto se estaba acomodando en los tibios muslos de su amiga, de pronto lo reconoció, era don Pedro que aprovechando los muslos abiertos de la Clau, se lo mando a guardar de una, Cielo Riveros pataleaba en todas direcciones, don Pedro y Claudia follaban rítmicamente solo a un metro de donde estaba ella, ambos la miraban sonriendo mientras jugaban con sus puntiagudas lenguas y sin dejar de mirarla.
En su sueño ella estaba enojada pero no podía dejar de mirar de lo que ellos hacían, su amiga se veía más hermosa que nunca, y le asentía muy bien estar follando con semejante semental que ella también ya había probado, en eso sintió la verga de don Tulio que ya se aprontaba a entrar en su vagina, y justo en el momento en que el vejete tomaba fuerzas para empujar este misteriosamente desapareció, Cielo Riveros no sabía que era lo que pasaba, miro a la cama contigua y también había desaparecido don Pedro, Claudia la miraba sonriente aún se mantenía con sus bellos muslos abiertos, como si la estuviera esperando, Cielo Riveros no quería acercarse pero su cuerpo reaccionaba solo, ya se había levantado y se acercaba al portentoso cuerpo de su amiga, nooo! se iba diciendo, pero Claudia la esperaba a ella ofreciéndole su hermosa zorrita jaspeada con dorados pelitos, Cielo Riveros se la encontraba atrayentemente hermosa, se arrodillo al medio de los perfectos muslos abiertos de Claudia y con decisión fue agachando su cabeza en dirección a la jugosa vagina que le estaban ofreciendo, saco su lengua para hacer el primer contacto con la piel de su amiga y…
--Nooooooooo!!!, fue el espantoso grito que vocifero Cielo Riveros cuando se despertó.
Cielo Riveros estaba toda sudada, había sido una pesadilla, sentada en su cama y con su respiración agitada intento tranquilizarse, como pudo volvió a recostarse para descansar, ya que se había despertado muy alterada, fue en eso que se percató de la seguidilla de pulsaciones que tenía en su panocha, llevo su mano a aquella parte de su cuerpo y se percató que estaba completamente mojada, su corazón se aceleró con solo un leve contacto de su manita con su cosita, tenía mucha calor por lo que se sacó el camisón para quedarse solo con sus rosaditas pantaletas con encajes, ella seguiría durmiendo se decía, pero la vivas imágenes de don Pedro follandose a Claudia no le daban tregua, por otro lado estaba don Tulio que también andaba desesperado por metérsela, y por ultimo… eso último!, eso último en lo que ella no quería imaginárselo, pero lamentablemente la imagen del cuerpo desnudo de su amiga la tenía viva en su mente.
Con los ojos cerrados comenzó a sobarse su estómago, lentamente fue bajando sus manitas hacia esa parte que ella sabía que si se la tocaba le iban a hacer sentir muy rico, pero no se quería permitir darse placer con la imagen de su amiga siendo violada por el burlón de don Pedro, tras unas acaloradas contradicciones sobre lo que estaba bien y lo que estaba mal decidió que se tocaría solo un ratito pero con sus calzoncitos puestos, de seguro que después de un rato su cuerpo y su mente la dejarían en paz.
Cielo Riveros se masturbaba en la oscuridad de su alcoba, sus pensamientos estaban puestos en el voluminoso cuerpo dorado de Claudia, imaginaba a don Pedro aserruchándola con brutalidad, luego cambiaba la imagen por la de don Tulio abofeteándola y enculandola, luego de eso se venía la imagen de Claudia con sus bellas piernas abiertas y masturbándose, así iba alternando sus morbosos pensamientos para darse placer, ya que así su cuerpo se lo exigía en esa acalorada noche.
Lentamente fue metiendo su manita por debajo de sus pantaletas, y al tocar con sus dedos su pequeño botoncito la sensación que sintió en todo su cuerpo fue indescriptible, sin pensarlo dos veces levanto sus caderas y llevo sus manos a sus pantaletas para deslizarlas hacia abajo y sacárselas, Cielo Riveros quedo completamente desnuda, la maratónica noche de sexo que se había pegado solo hace menos de un día no eran suficiente para su desarrollado cuerpazo, sentía unas tremendas ganas de masturbarse de la misma forma en que había visto a su amiga haciéndolo, y lo iba a hacer.
Nuevamente bajo una sus delicadas manitas hacia su casi lampiño pubis, casi se lo acariciaba, mientras que con su otra mano rozaba las suavidades de sus muslos, esta exquisita combinación le proporcionaban un deleitoso cosquilleo en todo su venerable cuerpo.
Todas sus curvas disfrutaban de las caricias que se estaba auto proporcionando la tierna colegiala, con suavidad y ligereza comenzó a rozar su clítoris desprovisto de pelitos, sus dedos hacían más y más círculos.
Cielo Riveros con sus bellas piernas abiertas de par en par presionaba su manita con más fuerza a la vez que su excitación iba siendo cada vez mayor, luego con su dedo medio se abrió paso entre sus carnes íntimas y lo introdujo en su vagina la cual sintió húmeda y caliente, estaba sintiendo muy rico.
Pensaba en don Pedro, poco a poco su cuerpo ya comenzaba a sudar, y su excitación era mayor.
Deseaba que alguien se la metiera, su cuerpo tenía hambre y sed de verga, se imaginaba la del mecánico, la de don Tulio, la del cojo Juan, en esos momentos hubiese hasta pagado por haber tenido cualquiera de las tres vergas a su alcance, luego se imaginaba a ella misma desnuda y arrodillada rodeada de las tres vergas, las cuales ella chupaba alternándolas y con desesperación, sus dedos ya hacia desquiciantes círculos en su jugosa vagina.
Cielo Riveros sentía que ya se avecinaba un orgasmo, por lo tanto tenía que elegir luego a uno de los dueños de las tres vergas que tanto la enloquecían en estos momentos, para pegarse una paja en su honor, por lo amachado y bruto que era para sus cosas eligió a don Pedro, aunque los otros dos tampoco se quedaban atrás, pensaba mientras seguía masturbándose.
Se imaginó a don Pedro montándola con las mismas fuerzas en que lo había hecho en aquel taller mecánico, sentía tan rico en su zorrita que no quería parar nunca de sobajearse la panocha, era una sensación insoportable, a la vez maravillosa, enloquecedoramente caliente y nueva para ella.
Sus dedos se resbalan de arriba abajo por las carnes de su jugosa y encharcada zorrita, la sentía mojada y algo pegajosa, se volvió a introducir un dedo muy suavemente y bien profundo dentro de su vagina, lo saco chorreante de sus propios jugos íntimos, y temblorosamente se lo llevó a la boca, quería probar, una vez que se lo chupo, declaro que sabía muy rico, ahora entendía porque se la lamian antes de metérsela, y la de Clau? ... la de ella tendría el mismo sabor? Se preguntaba mientras sus dedos aceleraban la exquisita labor masturbadora.
Ahora con un gran charco de jugos vaginales en su cama, y ya teniendo una leve idea del verdadero sabor de una vagina, Cielo Riveros fuera de sí cambio la imagen de don Pedro por la de Claudia, tal y como lo había soñado… se la imaginaba tirada desnuda y en una cama con sus piernas abiertas esperando que alguien se la chupara y ese alguien iba a ser precisamente ella misma, Cielo Riveros se la iba a chupar, en su mente grafico la vagina de Claudia tal como la había visto aquella mañana y poco a poco fue sacando su fresca lengua imaginándose que la ponía en la rubia vagina de su amiga, su calentura era cada vez más y más fuerte,
Ahora en su mente tenía la viva imagen de Claudia montada en forma inversa encima de ella haciendo ambas un glorioso 69, imaginaba delante de sus ojos la rubia vagina que en estos momentos tanto deseaba lamer, imaginaba sus manos paseándose por las curvas de su amiga…
Esto fue mucho para la alterada e intespestuosa mente de la curvilínea colegiala que aún se masturbaba como energúmena, en consecuencia fue el cuerpo de Claudia el que se adjudicó la erótica y exquisita paja que se mandó Cielo Riveros en su honor, las imágenes del rico 69 entre ambas, la calentaron de sobre manera hasta que su zorrita exploto en una verdadera cascada de jugos que evidenciaban el sabroso orgasmo de la tierna chamaca,
--Ohhhhhh! Dios míooooo!!, Clauuuuu!!… Clauuuuuuuu!!! como me gustaría chupártelaaaa!!!, exclamaba la nena dedicándole su paja a su amiga, mientras su manita subía y bajaba rápidamente por su zorrita totalmente encharcada de jugos vaginales, sus caderas ondulaban frenéticamente imaginando que también Claudia se la estaba chupando a ella, --Ohhhhhh ayyyy! Ayyyyyyy que me corroooo!… me corrooooooo Claudiaaaaa rica! ricaa!! ricaaa!!! ricaaaa!!!! Ricaaaaaaaa!!!!!, Cielo Riveros casi se meo de placer, subía y bajaba sus caderas en todas direcciones sin despegar su manita de su mojada panocha, una oleada de eléctrico placer la invadían y le hacían abrir y cerrar sus piernas con desesperación, terminando con extraños movimientos de como si verdaderamente se estuviera acalambrando, lentamente su cuerpo desnudo dejo de moverse, solo su agitada respiración daban claras muestras del inmenso placer que había experimentado, estaba cansada, tal como quedo toda despaturrada en su camita se quedó dormida.
Aquel día lunes la colegiala salió a tomar el bus para su colegio, iba tan ensimismada en sus pensamientos que no ponía atención en las calientes miradas que le daban los malvivientes del sector, y menos de todas las vulgaridades que le gritaban desde cualquier esquina, pero ella pensaba en lo extraño que había sido su sueño de la noche anterior, se sentía muy apenada por lo que había hecho, sabía que estaba mal haberse tocado su casita pensando en eso con Claudia, pero había sentido tan rico, no sabía por qué su cuerpo le hacia ese tipo trampas, prefirió no pensar más en el asunto… total, eso no pasaría nunca más.
Una vez que llego a su colegio se fue rápidamente para su salón, en el trayecto se encontró con Claudia, la pobre Cielo Riveros solo al mirarla se sonrojo de vergüenza por la estupidez que había hecho en la noche,
--Hola amiga…como no me llamaste ayer?, estaba muy preocupada a qué hora te fuiste para tu casa?
--Ay Claudia, sé que me fui temprano pero no sé a qué hora, pero ya era de mañana…
--Y donde dormiste?...la habitación de mis padres estaba hecha un desastre… por suerte alcance a asearla…
--Claudia yo dormí en el sofá, creo que fue el profesor el que se fue a dormir en la habitación de tus papas…
--Mmmm…tiene que haber dormido como rey el viejo ese… cuando me levante ya se había marchado… oye Cielo Riveros te quiero hacer una pregunta, el viejo ese… intento algo contigo esa noche?
Cielo Riveros pensó que se moría, --Porque Claudia le preguntaba semejante cosa?, habría escuchado algo cuando el profesor Tulio se la había estado follando en la habitación de sus padres?
--Claro que no Claudia, porque me preguntas esas cosas?
La chamaca no servía para mentir, pero aun así su amiga le creyó,
--Jajaja…si te creo tonta, solo preguntaba, acuérdate que a mí se me pasaron las copas y ni supe cómo me quede dormida, jijiji, justo en el momento en que Cielo Riveros le iba a contestar algo vio que solo a un par de metros de ellas estaba el profesor Tulio con el cojo Juan, ambos conversaban y cuchicheaban mirándolas y riéndose burlonamente de ellas, o por lo menos Cielo Riveros n lo captaba así, --Mira ahí está el profe, acompañame y mientras yo hablo con el de una cosita sobre mis notas tú le hablas a don Juan, acuérdate que él también te anduvo buscando.
--Clau…de verdad que me hubiera gustado hablar con don Juan pero debo ir a dejar un libro a la biblioteca, así que nos vemos en clases…
--Está bien amiga…nos vemos en un rato, en esto Cielo Riveros se fue rápidamente para el salón y Claudia se fue a hablar con don Tulio.
Obviamente el degenerado docente le dijo a Claudia que no había pasado nada con Cielo Riveros ya que si le decía la verdad, hasta ahí no más le llegaba el trato con la hermosa y rubia estudiante.
Mientras las bellas colegialas estaban en eso, el Profesor Tulio con el cojo Juan estaban enfrascados en una interesante conversación,
--Tenías razón cojo de mierda, la Cielo Riveros se gasta un culo para los Dioses, es una pendeja exquisita, lamentablemente no alcance a reventarle la zorra, le decía don Tulio al cojo…
--Tranquilo profe ya vera que llegara su oportunidad, yo pienso seguir tirándomela, solo debo planear algo para arrastrarla a mi cuartucho y culiarla todas las veces que yo quiera, jajaja!! Mire ahí llegaron ese par de putitas, Ufffff que buenota está la Claudia profe, pero a esa no es como llegar, Cielo Riveros es más confiada, pero la rubia se nota que está más vivita, jejeje, le decía mientras las miraba y las desnudaba con la mirada…
--Hagamos un trato cojo de la grandísima puta…
--Pus dígame no más profesor…
--Escuchame… planea algo bueno para poder encerrame en tu cuartucho con la Cielo Riveros, ojala sea por un día entero, si la logras llevar me dejas la otra parte a mí, solo deberás vigilar que nadie se acerque a interrumpirnos, y te juro pendejo que te pongo a la Claudia en bandeja y por un fin de semana entero…que te parece?
--Sale profesor! Pero eso va a costar un poco, la pendeja anda a la defensiva, yo solo planeaba violármela en cualquier parte del colegio, pero Ud. quiere por todo el día…
--De eso se trata tarado de la gran puta, disfrutar a concho de la carne joven que nos provee el colegio, además que no tienes para que apurarte, tenemos tiempo de sobra, ahora largate mira que ahí viene la rubia y yo tengo que hablar con ella…
A media mañana Cielo Riveros no se podía concentrar en las clases de matemáticas, Claudia se sentaba tres asientos más adelante que ella, la rubia solo se dedicaba a enviarle mensajes a su novio y no hacía nada de los trabajos en clases, pero esto no era lo que le preocupaba a la femenina mocosita de ojos verdes, sino que no podía dejar de estudiar las marcadas curvas de su amiga, le miraba sus hermosos muslos, recordaba cuando la había visto tirada en la cama con ellos totalmente abiertos, luego se la imaginaba así mismo como estaba sentada jugando con su celu pero sin nada de ropa. Sus piernas nuevamente le temblaban, como podía estar sucediéndole eso? Finalmente se concentró en los ejercicios matemáticos y por fin se pudo calmar.
En la tarde llego apresuradamente a su casa, en una hora más se iba a juntar con Rodrigo su novio, tenía tantas ganas de estar en sus brazos, de hablar con él y así tantas cosas más. Se ducho rápidamente y se cambió la ropa escolar. Cuando ya estuvo lista salió de su casa en dirección al parque en donde quedaron de encontrarse, a lo lejos lo vio que él ya había llegado, la esperaba sentado en una de los típicos asientos que abundan en los parques.
Cielo Riveros iba vestida con una ajustada blusa color celeste y con mini falda blanca, las sandalias con tacón la hacían ver aún más alta de lo que era, se veía una mujer imponente, solo su carita angelical e inocente desentonaba con el pedazo de hembra que era para los ojos de cualquiera.
--Como estas princesa!, le saludo Rodrigo con un romántico piquito en los labios…
--Bien! y como estas tu…
Los jóvenes conversaron por largos minutos sentados en el parque, Cielo Riveros mantenía su cabeza apoyada en el hombro de su novio, se sentía feliz de estar con Rodrigo, el joven la desconectaba de todo lo malo que le estaba ocurriendo con esa tropa de viejos cochinos y calientes que la vivían molestando, en su lista estaban: don Lucas, el gordo Anselmo, el cojo Juan, don Tulio, don Pedro, el Gori, y así tantos otros. Hasta que Rodrigo la saco de sus pensamientos.
--Amor mi madre me pidió que te llevara a la casa esta tarde, le he hablado mucho de ti y te quiere conocer…
--Pero Rodrigo, y que pasara si no soy de su gusto, seguro que ella quiere otro tipo de chica para ti…me da vergüenza ir a tu casa…
--Tu eres perfecta Cielo Riveros, yo sé que le caerás muy bien…
Luego de unos minutos en que tardo Rodrigo en convencer a Cielo Riveros de que fueran a su casa, la nena por fin se decidió,
--Bueno pero si vamos a ir que sea luego, tú sabes que a mí no me gusta andar tarde en la calle. Una vez de acuerdo la feliz pareja de novios se puso en camino hacia la casa del muchacho.
La señora María madre de Rodrigo estaba encantada con la novia de su hijo, era una nena de muy buenos modales, y muy bonita por cierto, todo en ella reflejaba transparencia, no era como esas jóvenes actuales que andan perdiéndose en la calle, o acostándose con mal vividores por algo de dinero, Cielo Riveros era distinta por lo tanto los novios contaban con su aprobación.
--Ves? Te dije que le ibas a caer bien, le decía Rodrigo a Cielo Riveros, mientras su madre les preparaba algo de comer antes de que su hijo la fuera dejara su casa…
En eso estaban cuando se abrió la puerta de la calle, venia llegando el padrastro de Rodrigo, se trataba de Don Severiano un hombre de unos 57 años robusto, de mediana estatura, con una prominente panza cervecera, unos tupidos bigotes, y un cabello entrecano que solo le cubría los laterales de su cráneo siempre presumiendo de sus raíces italianas, era un viejo pocas pulgas tirando para ogro, casi parecía un toro.
Rodrigo se levantó rápidamente y fue a hablar con su madre,
--Mamá—Usted me dijo que hoy llegaría tarde…
--Así se suponía hijo, no sé por qué llego tan temprano, madre e hijo hablaban casi en susurros, para que el viejo no los fuera a escuchar, en eso Rodrigo ya estaba de regreso con Cielo Riveros.
--Pero que tenemos aquí?, dijo don Severiano cuando vio que su hijastro se disponía a marcharse con su novia…
--Permiso señor, contesto Rodrigo intentando dirigirse a la puerta con Cielo Riveros tomada de la mano, el viejo se interpuso…
--Y quien es esta encantadora chamaquita que llevas tomada de la mano…no me vas a decir que anda perdida y tú te la encontrate?, jajaja!!
--Es mi novia…
--Jajaja…escuchaste María?, le grito a su mujer que en esos momentos ponía los cubiertos en la mesa silenciosamente, --El niño de la casa ya creció… ahora tiene novia!! Jajajaja!!!
--Ya nos retiramos, por favor déjeme pasar le decía el joven, este le tenía odio y miedo al hombre que lo había criado, el muchacho lo aguantaba desde los 7 años ya que era con mucho dolor testigo de los maltratos que ese viejo le daba a su cándida madre y hasta a el mismo muchas veces lo había golpeado por cualquier motivo, el maltrato hacia él siempre fue físico como sicológico, diciéndole toda la vida que era un inútil, desquitándose con ellos el mal día que muchas veces tenia.
El viejo se quedó boquiabierto y cuando por fin pudo ver ala tremenda hembra que su hijastro había llevado a la casa, aquella de las que muchas veces el muchacho había comentado pero que él no le creía, (pero que pedazo de hembra, este mocoso inútil no se merece este manjar tan sabroso), se decía el viejo zorro contemplando de pies a cabeza y comiéndosela con su odiosa mirada a la hermosa colegiala a la vez que sentía como se le paraba la verga.
Cielo Riveros quien notaba algo raro en la situación, quiso ser cortes con el hombre, ya que se daba cuenta que al parecer debía haber algún tipo de problemas entre padre e hijo,
--Buenas tardes señor…mi nombre es Cielo Riveros, le dijo la chamaca estirándole su blanca manita,
--Aprende pedazo de idiota… esos sí que son buenos modales, le dijo don Severiano a su hijastro a la vez que tomaba la suave mano de Cielo Riveros y disimuladamente se la llevo para rosarla contra su paquete en el mismo momento en que le estampaba un beso en la cara, y casi muy cerca de sus labios, la colegiala debido a la tensión del momento no se percató de nada, solo sintió los puntiagudos bigotes que le pincharon la cara.
El viejo Severiano mientras seguía obstaculizando la puerta de salida se dio a estudiar a la suculenta hembra que su hijastro tenía por novia, le calculaba por lo menos 1.70 mts de altura, ojos verdes, de tetas grandes y paraditas, unas torneadas piernotas y muslos de ensueño, y para colmo un antojable culazo bien parado y redondito, esa mocosa era un verdadero monumento de mujer se decía para sus adentros.
Estaría demás describir como este viejo caliente y sin vergüenza obligo a Rodrigo y a Cielo Riveros a quedarse a cenar, situación que el vejete aprovecho para estudiarla a su regalado antojo, al igual que su mujer la veía de buenos modales y bien educada, pensaba que era mucha carne y mucha mujer para el maricon que tenía por hijastro, aquella hembra se merecía follar con un verdadero macho caliente, y el sentenciaba que el mejor candidato para ello era el mismo, pero tendría que ser cuidadoso para lograr su objetivo, pero que se la culiaba si o si, pensaba mientras no dejaba de comérsela con la mirada.
Una vez que terminaron la cena y mientras la pareja se despedía, el semental italiano (según él) se prometió que de alguna forma se las arreglaría para poder cogerse a la bella chamaca.
Los días pasaron y la normalidad llegaba a la vida de nuestra dulce colegiala, lo único extraño que había notado era que desde que conoció al padrastro de Rodrigo se lo había encontrado en la calle por lo menos unas cuatro veces, ya sea en las cercanías de su colegio, o en el trayecto a su casa, ocasiones en que el viejo se hacia el que no la veía.
Estaba claro, don Severiano se había obsesionado con la hermosa y potable figura de Cielo Riveros, se las había ingeniado para hacerse de la dirección de la nena siguiendo a Rodrigo los días en que quedaban de salir a dar una vuelta, había sido su mismo hijastro quien inconscientemente la había llevado hasta la casa de su novia, luego de eso ya no necesito más seguirlo, cuando su caliente temperamento sentía la imperiosa necesidad de volver a mirarla se pasaba hasta horas esperando que la chamaca saliera de su casa para el seguirla, hasta se había comprado una pequeña cámara digital para tomarle fotos desde lejos y pajearse mirándolas de todos los ángulos posibles.
La semana había pasado sin novedad, y Cielo Riveros ya casi ni se acordaba de don Pedro y de los otros rufianes, aquel día viernes la chamaca iba de vuelta para su casa, había salido del colegio un poco más tarde de lo normal por haberse quedado terminando un trabajo, ya casi todo el alumnado se había retirado, era una tarde de mucho calor, pero ella estaba muy contenta ya que les habían entregado los certificados de notas del primer semestre y nuevamente ella había destacado entre los primeros lugares, su madre iba a estar muy feliz por sus logros escolares.
Sentada en la parada de autobuses y ensimismada admirando una y otra vez su certificado de notas, no puso atención en la gruesa figura que tomaba ubicación justo al lodo suyo, hasta que una familiar y aguardentosa voz la devolvía a la peor de sus pesadillas,
--Hola mamasotaaa!!… pero mira qué bonita te vez vestida de colegiala, jejeje… Cielo Riveros lo miro con espanto, todo su curvilíneo cuerpo comenzó a temblar cuando comprobó que justo sentado al lado de ella estaba el mismo don Pedro en persona sonriéndole con su burlona mirada, la chamaca rápidamente se puso de pie para alejarse hacia cualquier parte pero el vejete fue mucho más rápido que ella y la tomo fuertemente de un brazo,
--Nooo! Suélteme… exclamaba la asustada jovencita al sentirse fuertemente inmovilizada por don Pedro…
--Jajaja… no te pienso soltar ricura, es más te vine a buscar para que nos vayamos a follar a tu casita, ya me he enterado de algunas cositas tuyas y sé que tu mami no llega hasta mañana, jejeje, así que no hagas ninguna mamada de la que te vayas a arrepentir…
Don Pedro estaba muy divertido con la débil resistencia que estaba oponiendo la rica de Cielo Riveros. Ella por su parte estaba aún más espantada, no podía llevar a don Pedro hasta su casa, para hoy había quedado con Rodrigo de ver una película, el joven ya debía estar esperándola a la entrada de su vivienda, que explicación le daría cuando la viera llegar con un viejo ordinario y que para rematarla le tendría que pedir que se fuera para ella encerrase en su propia casa con el horripilante mecánico, en definitiva esto no lo podía permitir…
--Suélteme… déjeme ir… la joven seguía con sus forcejeos a la vez que miraba en todas las direcciones posibles para ver si alguien la podía ayudar, extrañamente a esa hora de la calurosa tarde la calles estaban vacías…
--Te he dicho que no pendeja!!! Hoy es mi día libre y he esperado toda la semana por este momento así que vamos caminando para tu casa, que hoy sí que vamos a follar como marido y mujer, jajajaja!!!.
--Don Pedro me hace daño!, se quejaba la asustada colegiala, pero el hombre seguía igual de decidido en sus calientes propósitos.
Cielo Riveros a pesar de estar cansada y asustada de la situación, golpeó con su mochila la cabeza del vejete intentado hacer que la soltara, el mecánico ahora ya más enojado ante la situación que se le estaba presentando, golpeó con todas sus fuerzas a la nena.
El brutal bofetón que recibió Cielo Riveros hicieron que dejara de forcejear al instante, la colegiala no se lo esperaba, el tortazo había sido bestial. Le zumbaba el oído y ahora sí que estaba más asustada que nunca, con las piernas temblando, se sentó nuevamente en los asientos de la parada.
--Está bien, le dijo con voz quedita y temblorosa, --Pero deje recuperarme, la chamaca había quedado mareada con semejante cachuchazo.
La calentura bullía en el interior del perverso hombre, la adrenalina le salía hasta por los poros al ver y sentirse superior ente aquella indefensa jovencita de 18 años, y el tenerla ahí sumisa y casi entregada, se sintió poderoso.
--Te dije que no me hicieras alguna mamada pendeja, esto no tendría por qué haber pasado, así que recuperate luego porque quiero verte sin ropa lo más pronto posible, acuérdate que tú eres mi mujer, le dijo a la vez que le volvía a mostrar el parte policial por prostitución.
--Por favor don Pedro, déjeme ir, si quiere hagámoslo otro día pero hoy de verdad que no puedo, sniffff, déjame marchar, le suplicaba temiendo ser descubierta por su novio, quien la vería llegar acompañada de un hombre mucho más viejo que ella, esto no se lo podía permitir, era lo que pensaba.
Cielo Riveros sabía que don Pedro era un viejo abusador y pervertido, se asustó aún más pensando en lo que le podría hacer un hombre depravado que era capaz hasta de golpearla en la misma calle, y mientras más pensaba en esto, más asustada se sentía, tenía que haber una forma de poder librase de aquella más que comprometedora situación, pero no se le ocurría nada.
Don Pedro ya confiado en que había dominado la situación, bajo la guardia y la soltó del brazo, situación que Cielo Riveros aprovecho para salir corriendo en forma desesperada, su corazón le latía a mil por hora, pero los inmensos nervios que sentía en esos momentos le jugaron una mala pasada y tropezó se fue de bruces contra el suelo, la chamaca no se hizo daño pero el solo pensar en lo que le iba a ocurrir por haber hecho semejante tontería la hicieron quedar aterrada, los segundos se le hicieron eternos hasta que sintió que nuevamente era tomada del mismo brazo, su existencia nuevamente se le venía cuesta abajo.
--Hija de la grandísima putaaaa!!, ya vas a ver de lo que soy capaz perra de mierdaaaa!!!, bufaba el vejete mientras la arrastraba, hacia un callejón marginal que estaba a mitad de la cuadra en donde ellos estaban.
--Noooo…don Pedroooo… por favor no me lleveeeee…sollozaba Cielo Riveros mientras era llevada a tirones.
El ordinario mecánico la llevó hasta el sucio callejón, el lugar era conocido por ser lugar habitual de drogadictos, y de una gran cantidad de vagabundos que merodeaban por el sector, cuando llegaron al lugar Cielo Riveros vio una pila de mugrientos colchones arrumbados en un rincón, sintió un olor raro, un olor que se sentía en el aire, era como mezcla de meados, basura y sudor, esto le causo mucho asco, parecía un refugio de delincuentes.
El viejo agresor de don Pedro ya tenía claro de lo que le iba a hacer a la encamable y estúpida colegiala, para que en una próxima oportunidad en que él la fuera a buscar a donde sea, nunca más le quedaran ganas de hacer ese tipo de pendejadas, una vez que se aseguró que el callejón estaba vacío, la tiro de espaldas en uno de los sebientos colchones en los que con seguridad eran ocupados por las noches para culiar a las prostitutas de la calle, pero ahora se la iban a culiar a ella dilucidaba la asustada chamaca.
Don Pedro al verla allí tirada, temblorosa y asustada se fijó en lo buenota que estaba la pendeja, la verga se le puso dura como fierro, era increíble la forma en que se calentaba con solo mirarla la carita a esa chamaca endemoniada, por lo que se se agachó y le agarro el rostro para girarle la cara y verla frente a frente, Cielo Riveros intentó apartarse, pero el vejete la retenía con fuerza, y cuando estuvo a escasos milímetros de su carita angelical, el burlón mecánico sacó su lengua con la cual se dio a lamerla por todos los centímetros de su rostro, la nena se moría de asco, la repulsión que sentía en esos momentos por el asqueroso vejete la hacían estar al borde de ponerse a vomitar.
El odioso mecánico sin pensarla dos veces se dispuso a magrearle las tetas mientras intentaba por todos los medios posibles hacer que la hembrita abriera la boca para el poder introducir su asquerosa lengua.
Cielo Riveros se resistía e intentaba esquivar los repulsivos lengüetazos en su boca, pero era casi imposible. El feroz mecánico ya estaba babeando de calentura. Mientras seguía intentando introducir su lengua en la boca de la tierna adolecente, se las arregló para desabotonar la blanca blusa escolar, hasta que con mucho esfuerzo logro retirarla del desesperado cuerpo de la joven, su brasier corrió la misma suerte, los minutos corrían rápidamente, Cielo Riveros no supo en que momento ya la tenía con las tetas al aire.
El viejo seguía con la idea de que ella le abriera su fresca boca, pero no lo conseguía, pero se conformaba ya que con sus descascaradas manos podía recorrer la suave y delicada piel de su estómago, en seguida se las subió hasta sus chichotas, que estaban igual de firmes y grandes de cuando se las probo en el taller y en la feria, se las manoseaba como desesperado, las sobaba y las sobajeaba, fueron largos minutos en los cuales la dulce chiquilla, ya un poco cansada de tanto magreo en sus tetas, por fin le abrió su boquita de ensueño, el hombre aprovechó para introducir su lengua y lamer cada uno de los rincones de aquel mágico paladar, hasta lograr juntarla y enredarla con la de la ya casi entregada colegiala.
Cielo Riveros ya casi se estaba ahogando, el vejete le había metido la lengua hasta la misma campanilla de la garganta y se había encargado de llenarle la boca de babas, pero ella necesitaba respirar por lo que no le quedaba más opción que tragarse toda la cantidad de asquerosa saliva que don Pedro le había depositado en su boca. El vejete se separó del ardiente beso,
--Te llego la hora pendeja, ahora sabrás lo que es ser una puta callejera, yo quería que la cosa resultara por las buenas, pero tú te empeñas en hacer estupideces, le decía con su sonrisa burlona y malévola, a la misma ves que se iba bajando los pantalones, Cielo Riveros comenzó a temblar de miedo, --Ahora sacate la falda y los calzones, y ábrete de patas, te voy a culiar encuerada y a plena luz del día, jajajaja!! Y en plena calle para que nunca más se te ocurra hacerme una pendejada como la de hace un rato, te voy a emputecer pendejaaa!!!, te la voy a meter en la calle y tirada en el suelo!!!… tal como se culian a las putas!!!, jajaja!!!, así que desde hoy pasaras a ser una más de ellas, jajajaja!!! Así que vamos sacándonos la ropa putaaaaaa!!!!
Cielo Riveros temblado de miedo por el siniestro rictus que adquirió la cara de don Pedro no le quedo más opción que obedecerle, nerviosamente se sacó la falda escolar y luego sus pequeñísimos calzoncitos hasta quedarse tal como Dios la había enviado a este mundo.
El viejo se quedó con la ropa puesta solo se bajó hasta los tobillos sus viejos y desteñidos pantalones de mezclilla, junto con sus amarillentos y tiesos calzoncillos, para luego dejar delante de los asustados ojos de Cielo Riveros su descomunal y erecta verga, la tenía completamente tiesa y pulsante, como a su vez comenzaba a masturbarse, para que la nena supiera de una lo que iba a tener que comerse por la ranurita que ella tenía entre medio de sus muslos.
Una vez que poso su cuerpo al lado del de la chamaca, comenzó nuevamente a besarla, la desnuda joven lo tenían enloquecido, Cielo Riveros solo se dejaba, el estar en aquellas condiciones en un espacio publica la tenían choqueada emocionalmente, el vejete le soltó la boca para bajar a chuparle las tetas, la hermosa colegiala sentía el pestilente aire que corría por todo su cuerpo,
--Don Pedro por favor… no me lo haga aquí en la calle…snifsss!!
--Callateeee!!!!, le gruño como león en sus mismas fosas nasales, haciendo que a la chamaca se le erizaran todos los pelitos de su cuerpo debido al estupor, luego continuo vociferando, --Tú te lo buscaste putaaaa!!!, además que a estas alturas ya no puedo, si supieras lo buenota que estas quizás me entenderías, jajaja!!!. Te he deseado tanto en estos días que ni te imaginas, ya perdí la cuenta de todas las pajas que me hice en tu honor pendeja culona, y por fin llego el día, así que intenta que lo pasemos rico, porque si no me convences te iré a dejar a tu casa así encuerada tal como estas, entiendes pinche putaaaa!!!!.
El viejo indeseable de don Pedro como un verdadero energúmeno se puso a horcajadas sobre su cuerpo, a la misma vez que ubico su gruesa y larga vergota entre sus tremendas chichotas, mientras que sus dos manazas junto y apretó aquellas preciosas y duras montañas de carne, para comenzar el mismo a darse un exquisito vaivén de tetas practicándose la mejor paja rusa que jamás en su vida había experimentado.
Cielo Riveros veía en primera fila las dimensiones de la tranca de don Pedro, no entendía como aquella tremenda barra de carne caliente, que estaba llena de venas multicolores se la habían metido hasta el fondo y en su totalidad en su pequeño tajito de carne, no supo cuál fue el momento en que su cuerpo ya había comenzado a pedirle guerra, como a su vez sus hermosos ojos verdes no dejaban de humedecerse ante la impotencia de estar siendo violada desnuda y tirada en el suelo en una cochina y vulgar calle, las lágrimas ya caían por su rostro.
A medida que su joven vagina le iba exquisitamente pulsando cada vez más rico, ella más se fijaba en la punta de la verga que se asomaba y desaparecía entre sus grandiosas y turgentes tetas al mismo ritmo de las sacudidas que le pegaba el mecánico.
Lentamente comenzaba a desear aquel azulado glande como si este fuera un un objeto de preciado valor, más que como un vil instrumento con el que le mancillaban y violaban aquella femenina parte de su cuerpo.
Don Pedro viéndose satisfecho por el momento se apartó de ella y se puso de pie, la agarro violentamente del pelo alzándola y haciendo que se pusiera de rodillas, comenzando restregarle su verga por los carnosos labios cerrados de Cielo Riveros .
La chamaca aún se resistía, pero ese fuerte y atrayente olor a verga de macho que ella ya bien conocía se le introducía por sus fosas nasales, era todo tan anti higiénico, tan vulgar, y esto sumado a que la tenían tirada en un mugriento colchón, el estar totalmente desnuda en un callejón que más parecía un basural, con el viejo odioso y ordinario de don Pedro intentando hacer que ella le mamara la verga, mas su segura y espeluznante violación terminaron por calar hondo en el acalorado temperamento de la tremenda y potable colegiala, Cielo Riveros ya estaba caliente.
El fuerte olor a verga mezclada con semen, le ganaron a la fortaleza de la encamable jovencita, después de haber luchado y el haberse negado, simplemente abrió sus labios, dejando entrar en su boca la mal oliente y salada verga de don Pedro, este comenzó a sencillamente follarse la boca de la desnuda y arrodillada Cielo Riveros, intentando meterle la tranca hasta la faringe mientras le agarraba firmemente de sus cabellos para que no se le arrancara.
La chamaca se atragantaba y se atoraba, tenía la boca rebosante de verga y líquidos pre seminales mezclados con semen, por cada vez que la tranca se le salía de la boca, esta salía bañada de babas que caían circundando la verga de don Pedro, y que hacían un blanquecino puente entre la boca de Cielo Riveros y la verga del mecánico, esto alternado con seguidas atragantamientos en que la chamaca vomitaba por las narices gruesos cordones blancos de semen, que daban la impresión que ella fuese un dragón botando fuego por las narices.
El viejo ya desesperado por metérsela de una buena vez, la empujo nuevamente de espaldas en aquel sucio colchón que más que seguro en la noche era ocupado para dormir por vagos e indigentes,
--Ahora si la vas a sentir nuevamente putilla, le decía don Pedro a la vez que ya se acomodaba entre medio de los acalorados muslos de Cielo Riveros , a la vez que miraba en todas direcciones por si alguien osaba a cercarse mientras que él ya estaba por terminar la faena sexual a la que estaba sometiendo a la entregada adolescente de 18 años, ninguno de los amantes se percató que una gruesa figura desde hacía rato los miraba desde las escaleras del edificio contiguo de donde ellos ya se disponían a culiar.
Cielo Riveros casi por compromiso le pedía,
--Dejeme, dejemeee… ya no me lo hagaaaa!!!, que para el viejo fue más que una súplica, que como intentaba hacerlo ver la caliente colegiala.
El mecánico una vez que ubico la punta de su gruesa y palpitante verga y estando ya montado sobre el escultural cuerpazo de la curvilínea chamaca, simplemente empujo hacia adentro.
Por su parte Cielo Riveros lo sintió entrar de una y limpiamente, el vejete otra vez comenzaba a bombear con fuerzas sobre su cuerpo. Don Pedro sumamente caliente seguía metiendo y sacando, entrando y saliendo mientras le repetía por cada feroz apuntalada y sumamente excitado:
--Tomaaaa!…tomaaaaaaa!! Siéntela todaaaaa puta pervertidaaaa!!!! Te gusta verdad… te gusta que te culien en la calle y en el suelooooo?
Cielo Riveros solo se dedicaba asentir las gratificantes culiadas que le ponía don Pedro, miraba el cielo azul que se asomaba por entre medio de los edificios de donde a ella se la estaban follando, pero don Pedro quería verla y sentirla caliente…
--Contestame putaaaa!!…yo sé que te gusta que te culiennnn en espacios públicos!!!…recuerdas ese día en la feriaaa, andabas sedienta de vergaaa, así que ahora quiero que me lo digas tu solitaaaa!!!
Esto ya fue mucho para Cielo Riveros, como una verdadera enajenada comenzó a mover sus caderas al mismo ritmo en que don Pedro le metía la verga,
--Siiiiii don Pedroooooo!! Me encanta andar culiandoooo en la calleeeeeee!!! Mmmmm…ri…cooooo pa…pi !!!!
--Di que eres mi putaaaa calienteeeee!!!, don Pedro cada vez empujaba más fuerte, para mantenerla en aquel estado de apremiante calentura,
--Yo soy su putaaaa calienteeee!!! Don Pedrooooo!!!!… soy su putitaaaaa….ahhhh…ohhhh…ri cooooo!!!
--Me harás ganar dinero con tu zorraaaa!!…vamos dime que siiiiiii!!!
--Ohhhhhh…siiiiiiii don Pedrooooo…yo prestare la zorraaaa…para que Ud. gane dinerooooo!!! Papi…papiiiiii…me corrooooo en la calleeeee don Pedrooooo!!! Diosssss!!! Diosssssssss!!!!!
Cielo Riveros no aguanto más, su cuerpo se reventó en oleadas orgásmicas que bañaban la verga que le tenían metida hasta lo más profundo de su coño, nunca pensó que iba a sentir tan rico al ser culiada en plena vía publica, como a su vez sintió cuando don Pedro también le descargaba una abundante cantidad de semen caliente, lo sentía a chorros como se los tiraban adentro de su vagina, y ella los recibía con las mismas ganas y empeño de cómo se los estaban dando.
--Ohhhhhhhh! Como me corrooooooo dentro tuyoooo!!! pendejaaaaaaa!!!!
Don Pedro se salió como pudo y se limpió la verga con la misma blusa escolar de Cielo Riveros, para luego tirársela en la cara diciéndole,
--Jajajaja!!…estuviste muy bien perrita, ahora vístete pendeja caliente antes que lleguen los dueños de este lugar y te vean en esas condiciones, lo más seguro es que te van a querer follar, jejeje…sabes? Con semejante culiada que nos pegamos creo que ya estás en condiciones para salir a putiar por las calles, así que andate preparando, jajaja, acuérdate que en cualquier momento me aparezco por tu casa, jajajaja!!, el vejete diciendo esto último y terminando de arreglarse sus ropas simplemente se fue, dejando a la potente colegiala desnuda y tirada en el colchón, en aquel miserable callejón.
Cielo Riveros se dio a vestirse antes de que llegase alguien y la viera en esas condiciones.
En ese mismo momento en el edificio contiguo don Severiano abandonaba las escaleras desde donde lo había visto todo, semi traumado, y totalmente caliente se guardó su cámara digital, como si esta tuviera la información más secreta e importante de la Cia o el Mossad Israelita, una siniestra y degenerada sonrisa se le iba dibujando en el rostro mientras se alejaba de ese lugar.
dijiste!!
Cielo Riveros 12 (version RD)
en No Consentido
Cielo Riveros 12 (Versión RD)
En Homenaje a Sergio.
Después de la colosal follada que le habían puesto a su cuerpo en un sucio y vulgar espacio público, Cielo Riveros caminaba en dirección a tomar el bus que la dejaría en su casa. Con sus lindos ojos verdes entristecidos y bañados en lágrimas iba totalmente destruida emocionalmente, se preguntaba por qué a ella le pasaban este tipo de cosas tan malas y sucias si ella no era así, su mente no cesaba en repetirle que se la acababan de culear en un mugriento callejón público que servía de guarida para prostitutas y delincuentes.
Mientras pensaba en esto sentía como desde su vagina escurrían densa y acompasadamente gruesos goterones del semen que le había depositado don Pedro al interior de su cuerpo solo hace algunos minutos, inevitablemente para ella estos bajaban en pequeñas cantidades por sus muslos, los sentía helados con el contacto del aire que se filtraba por debajo de su falda escolar, en esos momentos lo único que deseaba era llegar a su hogar para bañarse y retirar de su cuerpo hasta la última gota de la inmundicia viril que en estos momentos ya se le secaban y sentía como tomaban forma de costras resquebrajadas en la suave piel de sus muslos.
Una vez que bajo del auto bus lo primero que vieron sus ojos fue que en la puerta de su casa estaba esperándola Rodrigo, tal como habían quedado para esa tarde, pensó que tendría que armarse de valor para que su novio no notara algo raro y llegase a sospechar de las andanzas en las que ella en contra de su voluntad andaba metida.
El joven se veía un poco molesto ya que llevaba casi 2 horas aguardando la llegada de su enamorada, hasta que por fin la vio bajar del auto bus,
--Porque vienes llegando a esta hora?… fue lo primero que le pregunto el joven sin siquiera saludarla y con el semblante serio y de enojo,
--Ho…laaa Rodrigo… hoy no tuve un muy buen día en el cole…, le mentía la chica para ver si así podía salir del problema,
--Que te ocurre?, por que traes esa cara?, el muchacho se daba cuenta que algo malo le había pasado a su novia, se le notaba en el rostro que había estado llorando, aparte de notarla un poco desordenada en sus vestimentas y algo demacrada en su rostro,
--Ya te lo dije… hoy no he tenido un buen día… y me siento algo enferma,
--Pero habíamos quedado en ver películas…
--Lo se Rodrigo, y de eso mismo te quería hablar… porque no lo dejamos para otro día?, de verdad que me siento enferma..., te prometo que para la próxima vez si estaré con mas ánimos, le decía la destrozada y recién violada colegiala mientras buscaba la llave de su casa en su mochila,
A Rodrigo no le gustaba para nada esta idea, él había esperado mucho por un día como este para estar a solas con su novia y poder tal vez concretar eso que tanto él deseaba y que era hacer el amor con ella, pero la noto tan decaída que supo al instante que su chica no le mentía,
--Esta bien mi Eve… pero prométeme que te mejoraras pronto para que así podamos estar más tiempo juntos, le dijo el chamaco a la vez que la abrazaba tiernamente tomándola desprevenida, lo cual hiso que en la mente de la nena solo imperaran pensamientos que le decían lo sucio que era todo eso, su Rodrigo el más noble de todos los chavos que ella conocía la abrazaba amorosamente mientras ella estaba con su vagina rebosante del semen que le habían echado mientras se la follaban en un callejón, y que el hombre el cual había eventualmente fertilizado y mancillado su cuerpo era un detestable y odioso viejo que trabajaba de mecánico en una feria y que oportunidad que este tenía desde que la conoció le notificaba a grito limpio que muy pronto la convertiría en puta.
Estando en estos razonamientos sintió que su amado le tomaba su cara para luego depositarle un romántico beso en los labios, Cielo Riveros cuando sintió la lengua del joven que ya se enredaba con la suya recordó los largos minutos en que ella le había estado chupando la verga a don Pedro solo hace un rato, por lo que en forma brusca se separó de la boca de su prometido,
--Que paso Cielo Riveros !?, porque te separaste tan rápido, le consultaba el extrañado chamaco a su prometida,
--Rodrigo… por favor no me mal entiendas… yo lo deseo tanto como tu… pero como te dije antes, hoy no me siento muy bien… solo compréndeme, le dijo la colegiala en forma angustiada, ella no quería mancillar la boca de su amado con los hediondos sabores a verga salada que le dejo don Pedro en su boca, claro está que esto no se lo podía decir a su novio, la tierna chiquilla continuaba hablándole, --Mira… mañana ya es sábado y seguro que mi mamá me dará dinero para ir al centro a pagar unas cuentas, me podrías acompañar y podemos pasar a la plaza un rato, ahí podremos estar más tranquilos y yo ya estaré más recuperada.
El joven le veía su carita de hermosa inocencia, de cómo le daba ideas para que ellos pudieran estar juntos, situación que termino por convencerlo, él no podía estar enojado con ella, tal vez esa no era la misma forma en que él quería estar junto a ella, ya que en la plaza no podría hacer mucho, pero el solo hecho de tener la posibilidad de poder estar nuevamente junto a ese cuerpo lleno de diabólicas curvas que lo tenían embobado, solo con eso para él era suficiente.
--Esta bien preciosa mañana nos juntamos en la parada de buses… y descansa de verdad que te notas muy agotada y enferma.
Y así la pareja se despidió con un leve beso en los labios, con una muy avergonzada Cielo Riveros por las razones que aún predominaban en su mente.
Al siguiente día la pareja felizmente fue a realizar los trámites que la madre le había encargado a su hermosa chamaca, Cielo Riveros ya más repuesta de su traumática experiencia vivida en las garras y en la verga de don Pedro se mostró esta vez más distendida en los brazos de su Rodrigo, estando con él se sentía más segura, el joven la hacía olvidar las humillaciones que tuvo que soportar en las oportunidades en que había sido abordada por don Lucas en su propia casa, o el cojo cuando se la enculo por toda una tarde en el inmundo cuartucho que había en el sótano del colegio, o el maestro Tulio…, y para qué decir del siniestro de don Pedro, que este último en las dos oportunidades en que se la había violado le había juramentado que aparte de llevársela a vivir con el cómo su propia y única mujer, más encima la prostituiría en la calle y la obligaría a culear con sus amigos.
Sentados y abrazados bajo la sombra de un gran árbol los jóvenes se besaban con verdadera pasión, a Rodrigo le faltaban manos para recorrer el voluptuoso cuerpo de aquella preciosidad que tenía por novia, como así mismo el impetuoso temperamento de la tierna chamaca tampoco se quedaba atrás, debido a sus ya no menores incursiones en el ámbito sexual, la excitación poco a poco se iba instalando en la mente y en el cuerpo de Cielo Riveros quien al saberse en compañía de Rodrigo su único amor, y no en las garras de viejos abusadores como los que ya ella bien conocía, se aventuró a darle un pequeño adelantito a su novio aprovechando que a esas horas la plaza en que estaban sentados se encontraba poco concurrida.
Tímidamente la blanca manita de la encamable jovencita fue bajando por el pecho del muchacho para luego en forma disimulada intentar rosarle el paquete, al hacerlo obviamente sintió la verga de su novio totalmente parada, pero al ir ya entrando en un poco de confianza noto la gran diferencia que existía entre esta nueva verga y las otras que ya ella muy bien conocía, no pudo dilucidar si el joven la tenía chica o mediana, pero la diferencia con la de don Pedro, o con la misma del maestro Tulio era más que notable, estando en estas cavilaciones sintieron el silbido de un carrito manicero que se acercaba, por lo que tuvieron que recomponerse casi al instante, el joven quien al tener su virilidad a tope por la furtiva incursión de su novia sobre su verga aprovecho la situación y le volvía a pedir a su amada lo que él desde hace rato ya quería hacer con ella,
--Cielo Riveros … yo te amo… tienes que creerme… cuando me dejaras hacértelo?…, las palabras le salían casi ahogadas por el nerviosismo.
La joven solamente lo miraba con una sonrisa tierna, ella sabía muy bien a que se refería el chamaco,
--Ay mi Rodri… me haces sentir penita por lo que me dices…, a pesar que la nena se sentía muy bien en su compañía en alguna parte de su mente no dejaba de comparar lo que acababa de medir con su manita con las otras vergotas que ella también ya había probado pero no precisamente con su manita, así que le dijo casi en forma nostálgica, --Por ahora no te prometo nada… pero de verdad que muy luego lo haremos, ya sea en tu casa o en la mía, pero yo quiero que sea algo especial, que nazca de los dos, decirte lo haremos tal día, suena algo frio… yo quiero que sea natural y romántico. La enamorada adolescente de 18 añitos estaba dispuesta a entregarse a Rodrigo, con él lo haría por amor, encontraba injusto que una horda de vejetes asquerosos y mal vividores se tomaran derechos con ella y con su cuerpo, siendo que su Rodrigo era el único a quien pensaba ella de que legítimamente le correspondían esos derechos.
--Pero mi amor… no importa de la forma en que lo preparemos… si lo que realmente vale es que ambos nos queremos, y nada ni nadie podrá jamás separarnos… vamos dime que me dejaras hacértelo esta misma semana en tu casa.
El pobre y caliente jovenzuelo estaba desesperado por cogerse a tan tremenda chamaca que tenía por novia, y estaba agotando todos sus cartuchos en intentar de convencerla, ni se imaginaba de la turba de viejos mal vividores que sin ni siquiera preguntárselo a ella solo la garraban y se la culiaban de todas las formas que ellos querían.
--Rodrigo me haces sonrojarme con tus insistencias, pero te tengo una buena noticia, le dijo Cielo Riveros finalmente a su amado,
--Dime… dime cual es esa buena noticia…! el joven entre excitado y enamorado esperaba a ver cuál era la noticia, se imaginaba que la escultural y hermosa jovencita le iba a notificar el día en que el por fin la haría suya…
--Yo también quiero que me lo hagas, pero por favor no me pidas que te dé una fecha… te prometo que será muy pronto, le dijo finalmente y roja como un tomate debido a las palabras que estaban saliendo por su boquita.
--De verdad!?... Ohhhh mi vida no sabes lo feliz que me haces!.
Se estuvieron haciendo arrumacos y besándose en forma enamorada por otro rato, Rodrigo ya estaba que sufría un orgasmo ahí mismo sentado en la plaza con solo recordar las palabras de su novia en donde le decía que en poco tiempo estaba dispuesta a dejarse que él se lo hiciera.
En el momento en que la joven pareja de enamorados nuevamente se estaban besando en forma más que apasionada, el vibrador del teléfono de Cielo Riveros los obligo a separarse, la nena toda risueña abrió su bolso para contestar, pulso el botón de contestar y dijo,
--Hola?,
--Buenas tardes! Con la señorita Cielo Riveros del Carmen…, la voz de la mujer que hablaba al otro lado de la línea sonaba austera y extremadamente formal según al parecer de la extrañada nena,
--Si con ella…,
--Le llamamos del juzgado local… Necesitamos saber cuándo se presentara a cancelar la multa por ejercer la prostitución en la vía pública?
Cielo Riveros sintió que el corazón se le salía por la boca, a la misma vez que ya sentía como si en cualquier momento se meaba ahí mismo al lado de su novio,
--Ehhh… como di… ceee!?, le pregunto intentando darse tiempo y calmarse para que Rodrigo no se diera cuenta de la naturaleza de aquella fatídica llamada…
--Señorita no se haga la mensa… Usted sabe muy bien que hace unas semanas fue sorprendida por la autoridad prostituyéndose en plena vía publica, solo díganos cuando va a pagar la multa para evitar emitir una orden de arresto…
En esos momentos Rodrigo le hacía señas para que le dijera de quien se trataba la llamada telefónica, la asustada chica intentando serenarse lo más posible, tapo con su manita el teléfono y le dijo a su novio,
--Es del colegio… me están cobrando las cuotas para el paseo de fin de año, le dijo a la misma vez que se ponía de pie y se alejaba un par de metros para que su novio no escuchara a esa endemoniada mujer del tribunal que le estaba cobrando la multa que le cursaron en la oportunidad en que don Pedro le había obligado a decirle a la policía que ella era una puta, --Iré a pagar lo antes posible señora… pierda cuidado…
--Ok muchacha… pero te advierto que si esta no está cancelada dentro de un mes se emitirá una orden de arresto a tu nombre, y ahí sí que la cosa se te pondrá difícil, disculpa que te lo diga, pero intenta pagar la multa en plazo que te dije… total con una noche de trabajo haces demás la cantidad, yo llevo años en esto y a veces ustedes las putas de pura flojas no vienen a cancelar y terminan pagando el triple, a parte de las atenciones gratuitas que deben hacerles a los funcionarios, así que no seas tonta…
--No se preocupe señora…, le interrumpió la escandalizada chamaca para no seguir escuchando a su interlocutora que también juraba de guata que ella era una puta cualquiera, para luego continuar, --Iré a pagar lo más pronto posible…y gracias por sus consejos. Diciendo esto último la nena sencillamente corto la llamada.
Después de la famosa llamada telefónica nuestra encamable colegiala le pidió a Rodrigo que por favor la fuera a dejar a su casa. El viaje de regreso lo hicieron con un dicharachero Rodrigo que estaba totalmente ajeno a los problemas en que andaba metida su novia, y con una pensativa y conmocionada Cielo Riveros que solo pensaba de qué forma lograría reunir el dinero para cancelar una multa de algo que ella ni siquiera había hecho.
Fue esa misma noche en que la nena sin ni siquiera tener apetito se encerró en su habitación, para ver si tenía los ahorros suficientes para cancelar la multa, y cuando ya se aprontaba a esto, nuevamente el zumbido de su celular llamaba su atención a estas alturas ya hasta le daba miedo contestar, pero sabiendo que por la hora era casi imposible que la llamaran de algún tribunal o similar, contesto ya algo más tranquila,
--Hola, contesto un poco más serena, serenidad que no la duraría mucho…
--Como estas zorra…!?, jajajaja aun te duele la concha después de la chingada que te puse en el callejón!?..., don Pedro se notaba algo alegre según lo notaba la jovencita…
--Ehhhh quien habla!?, Cielo Riveros intentaba hacerse la desentendida, pero con solo haber escuchado esa conocida y aguardentosa vos supo en el acto de quien se trataba…
--No te hagas la burra pendeja… jajajaja, si sabes muy bien con quien hablas…
--Ehhh la verdad que no sé señor, que deseaaa?, le dijo mientras caminaba a la puerta de su habitación y tras abrirla y ver que en el comedor de su casa todo estuviera en orden para que su mamá no la escuchara volvió a cerrarla y le puso seguro,
--Pus hablas con tu marido estúpida!!!, o ya se te olvido quien es el que te culeaaa!!???, jajajaja!!!!
--Ahhhh don Pedrooo… es que no le conocí la voz…
El vejete notando que con solo recordarle quien era su marido o prácticamente su dueño ella lo reconocía como tal, le ordinario vejete no dio más de gozo, pero aun así lo vulgar, pelado y sin vergüenza no se le quitaba,
--Así es pendeja… has extrañado mi verga!?
--Don Pedro… y como es que tiene mi numero!?, le consulto Cielo Riveros haciéndose la que no había escuchado lo último, a la vez que su corazón le latía a mil por hora pensando en que los más seguro era que ese manipulador viejo la haría salir de su casa a esas horas de la noche con tal de volvérsela a violar.
--Que como lo tengo?, pus en tu infracción por puta salen todos tus antecedentes personales pendeja, o ya olvidaste que ya aun la mantengo en mi poder…?
--Dígame que es lo que desea… en estos momentos estoy algo ocupada y…
--Pues deseo meterte la verga putita, no sabes las ganas que te estoy juntando para cuando volvamos a follar, tengo litros de mocos espesos y calientes para que te los comas por todos tus orificios, y de la forma en que tú lo quieras, jejejeje que me dices reina?..., quieres probarlos ahorita mismo?, jejejeje…
La nena con solo ir escuchando las peladeces de grueso calibre que le soltaba su violador, sentía como toda su piel se le erizaba, y como un rico escalofrió se le asentaba en la parte media de la espalda, de la misma forma que sentía cuando por algún motivo le daba miedo algo.
--Don Pedro de verdad que por ahora no puedo salir de mi casa, pero si quiere el lunes usted me dice adonde yo vaya, y le prometo que ahí estaré, la nena recordaba claramente como el viejo se había atrevido a ir a buscarla a su colegio y que se la había violado en las cercanías de este, no quería que por nada del mundo al viejo se le ocurriera llegar hasta su casa.
--Jajajaja!... nada de eso pendeja, jajaja!! o al menos no por ahora, se nota lo sedienta de verga que andas por estos días, pero no te preocupes ya llegara tu momento… Te llamaba para avisarte que ando de gira con la feria… llegare como en dos semanas y quiero que me vayas preparando a la rubia de tu amiga ya que les voy a encomendar una misión, no sin antes pegarnos una pequeña fiesta en donde les voy a presentar a mi hermano, jajajaja…
--Don Pedro… por favor no involucre a Claudia en esto, ella es mi amiga y no creo que quiera participar…
--Yo no la voy a involucrar en nada estúpida… serás tu quien la involucrara, jajajja!!!, así que desde hoy día es tu problema inventarle cualquier tipo de zorrería para que te acompañe el día en que te llame, jajajaja… nos las vamos a culear a las dos juntas cosita rica… para que así después hagan un trabajito que le vamos a encomendar, jajajaja…
--Don Pedro… de verdad que no creo que ella quiera…
--Es tu problema zorraaa!!!, así que ya sabes, yo llego en dos semanas… y quiero que me la lleves al lugar que yo te indicare en su momento, y anda preparando el culo y la zorra, porque lo más seguro es que salgas preñada de tanto que te vamos a coger al igual que a la puta esa de tu amiga, jajajaja, te mando un besito en la zorra… chaoooo!!!!
Cielo Riveros quedo casi al borde del llanto tras escuchar las atrocidades que don Pedro estaba urdiendo para cogérsela a ella y a la misma Claudia, pero se tranquilizó un poco al pensar que el viejo se ausentaría por dos semanas por lo menos según le había dicho el mismo, pensando en esto se fue a dormir, por lo menos no la molestaría por un buen tiempo se decía para ella misma en el momento en que se entregaba a un tranquilizador sueño.
Y así pasaban los días, en donde los acosadores de la tierna chamaca parecían que se habían puesto de acuerdo entre todos para no molestarla, lo que si la mantenía incomoda de a momentos era la inminente llegada de don Pedro con seguros afanes de cogérsela a ella y a Claudia, y para rematarla este desalmado vejete pretendía compartirlas, según le había entendido, todo esto la mantenían en un inconsciente y alterado estado de calentona curiosidad, los que se sumaban a los continuos acosos de don Severiano el padrastro de su novio que oportunidad que tenía la aprovechaba para entablar conversación con ella los días en que Rodrigo la invitaba para su casa.
Lo del dinero de la infracción ya casi lo había solucionado echándole mano a su alcancía personal en donde guardaba dineritos que le daba su madre y que también le daba don Benito por mandados que a veces él le hacía, solo faltaba hacerse un tiempo para ir a pagar la multa situación que le daba mucha vergüenza.
Volviendo a las incomodas situaciones que debía presenciar la chamaca en las oportunidades que iba a la casa de su novio, lo más penoso para ella era presenciar el trato déspota y autoritario con que el odioso hombre trataba a la madre de Rodrigo cuando se dirigía a ella, Cielo Riveros la veía tan frágil y menudita al lado de aquel bestial viejo con pinta de ogro como lo era don Severiano, y en efecto la señora María era baja de estatura y delgada, en contraste a don Severiano que era mucho más alto que ella, y de complexión tosca, sin mencionar la anchura de su pecho y espaldas, coronándolo con una tremenda panza que más parecía un barril de cerveza que el estómago de un hombre.
Demás también esta mencionar los continuos menoscabos que este odioso gigante italiano hacía con su novio en la misma presencia de Cielo Riveros en donde el vejete abiertamente lo ridiculizaba con tal de hacerlo ver como un idiota delante de la encomiable colegiala, ese hombre era de lo más odioso y detestable se decía la nena para sus adentros.
Ni que decir de cuando don Severiano a vista y paciencia de la señora María y de Rodrigo se daba a alabarla de lo tan linda y señorita que él la encontraba, o que si él hubiese estado más joven seria el chamaco más feliz de la tierra si se hubiese encontrado una chavita tan tierna y candorosa como lo era ella, cosas que le decía con su mirada enrojecida por la calentura y puesta fijamente en su vagina o en sus senos, situación que hacían que el pobre Rodrigo casi enloqueciera de los celos con la impotencia de no poder decirle nada ya que él y su madre dependían económicamente de don Severiano.
Cielo Riveros se daba cuenta de todo esto, pero tampoco se atrevía a armarle un escándalo o ponerlo en su lugar ya que sabía que luego los platos rotos los terminarían pagando la pobre señora y también su novio, la cosa fue que a medida que pasaba el tiempo la tierna chiquilla ya se estaba comenzando a acostumbrar a las salidas palabras halagadoras que le hacía don Severiano lo que se combinaba con la sequía de verga en que la había dejado don Pedro a tal punto que ya no podía negarse para ella misma que hasta a veces le gustaba que un viejo tan odioso y machista como el primero se las dijera, pero este otro sin la necesidad de tratarla de puta como lo hacía don Pedro.
Don Severiano por su parte medía muy bien el terreno el cual estaba pisando, si bien tenía pruebas contundentes para poder chantajear a la novia de su hijastro, este quería que el día en que se la cogiera fuera por las buenas y con pleno consentimiento de ella, en otras palabras lo que deseaba el libidinoso vejestorio era quitarle limpiamente la novia a su hijastro, y si realmente lo lograba estaba dispuesto hasta en despacharlos de su casa, a Rodrigo y a la señora María con tal de el quedarse viviendo como marido y mujer con tan tremendo y jovial pedazo de hembra, pero la situación que lo perturbaba un poco era que no estaba seguro si en la oportunidad en que el mismo fue testigo cuando la vio cogiendo encuerada en un desolado callejón público, aun no sabía si se la habían violado, o ella se había dejado follar con su propio consentimiento, por más que veía y estudiaba la grabación que le había tomado mientras un viejo se la culeaba y le pegaba, no lograba tomar una determinación, ya eran innumerables las pajas que se había hecho mirando aquellas enloquecedoras imágenes en donde se la follaban tirada en un mugriento y miserable rotoso colchón.
Cielo Riveros y como ya se dijo anteriormente sin darse cuenta en este corto tiempo se había ido acostumbrando a ver a don Severiano, ya que eran seguidas las oportunidades en que su novio la invitaba a compartir a su casa, y claro desde que el caliente padrastro había conocido a la atractiva novia de su hijo se las arreglaba para estar todo el tiempo posible en casa, además que con lo que el sabia de Cielo Riveros presentía que tal vez no le sería tan difícil acostarse con ella, pero opto por el camino más difícil, intentaría seducirla bajo cualquier costo, esto lo calentaban y enardecían hasta la insania.
La incauta chamaca no se daba cuenta o más bien dicho ya se había acostumbrado que su futuro suegro cada vez que ella iba para su casa este se encargaba de atenderla como una verdadera reina, de cómo cada vez que se sentaban a la mesa era el quien se instalaba al lado de ella y Rodrigo con su madre tenían que ocupar el otro extremo de la mesa, la situación ya se había formado costumbre, sumado a que fueron incontables las oportunidades en que cuando ella con Rodrigo pretendían sentarse a charlar en el living de su casa el viejo se las arreglaba para mandar al chamaco a comprar cervezas o cualquier otra cosa para ser el quien ocupara el puesto al lado de la agraciada jovencita, situaciones que malhumoraban a Rodrigo ya que cuando se desocupaba del encargo encontraba a su padrastro enfrascado en cualquier tipo de conversación con su novia, y Cielo Riveros quien ya lo veía con más confianza, solo reía de las salidas con que el vejete intentaba congraciarse con ella sin notar ni lo más mínimo de los oscuros deseos carnales que imperaban en la lasciva mente del padrastro de su novio.
Fue un día sábado de ese mismo mes en que don Severiano celebraba su cumpleaños número 58, este se paseaba como bestia enjaulada a pesar de estar en un ambiente muy festivo entre medio de casi toda su parentela con amigos incluidos, el interior de la casa y el jardín trasero en donde estaba la pista de baile que había preparado el mismo anfitrión estaban adornados con numerosas y chillonas guirnaldas multicolores, las mesas engalanadas con vistosos manteles estaban repletas de bocadillos y jarras con pulque y aguas frescas, otras con vino blanco y fruta picada, sin dejar de lado las numerosas botellas de Tequila y Mezcal, y para coronar diversas botellas de Jim Beam, para los de gargantas más refinadas.
Desde hace rato que ya habían comenzado a llegar los invitados, casi la gran mayoría eran toscos viejos cincuentones vestidos por apolillados trajes de chaqueta y corbata quienes asistían acompañados de sus mujeres todas viejas gordas y feas que vestían sus mejores trapos para no desentonar en la festividad reinante, las rancheras y cumbias ya desde hace rato que alegraban el ambiente, pero el vejete solo pensaba en que el muy imbécil de su hijastro hacían más de dos horas que se había ido en busca de Cielo Riveros y aun no se la traía, en esas condiciones el caliente viejo no se podía relajar ni disfrutar de su día.
Cada vez que se abría la puerta de la casa el iracundo de don Severiano con un vaso de pulque en su mano llevaba su mirada hacia la entrada para ver si el estúpido de Rodrigo hacia su aparición con la mujer que él ya prácticamente consideraba de su propiedad, su esposa en esos momentos ajena a los perversos sentimientos de su marido solo se esmeraba en atender a las visitas y que a nadie le faltara nada, ya que si algo no salía bien sabía que su esposo era capaz de zurrarla delante de todos los presentes, tal como ya la había hecho en otras reuniones familiares.
Hasta que por fin los antipáticos ojos de don Severiano pudieron ver lo que con tantas ansias estaba esperando, la puerta se abrió y como obra de magia hacia ingreso a sus aposentos la joven hembra que lo tenía enloquecido de una insana y animalesca calentura, la vio que venía entre avergonzada y risueña tomada de la mano de su hijastro.
Lo que don Severiano, familiares varones y amigos de este vieron en el momento de la irrupción de la chica casi cayeron en un aletargado estado de calentona admiración por lo que en esos momentos veían, la tremenda hembra que acababa de entrar por el umbral de la puerta era un verdadero monumento esculpido en honor a la femineidad, esa joven y hermosa deidad hecha mujer se presentaba ante ellos con un vestido negro de una sola pieza algo ajustado en la parte de su cintura lo que remarcaba en forma deleitosa las líneas de sus caderas, la parte de debajo de la soberbia vestimenta que traía puesta atrayente chamaca era más holgado, el vestido que lucía le llegaba hasta un poco más arriba de sus exquisitos y apetitosos muslos, los viejos estaban que se morían pues vieron que aquella curvilínea jovencita poseía una cara bellísima: mitad hembra y mitad pendeja, con unos ojos verdes intensos y preciosos, de piel trigueña, su alisado cabello largo y oscuro lo traía peinado hacia un lado de su carita, 1.70 de estatura por lo menos se decían para ellos mismos, con unas nalgotas prominentes y bien paradas que estaban para excitar a una ciudad entera estimaban con ojos lujuriosos, con unas chichotas de muy buen tamaño que se notaban sedosas y duras, todo está conjunción de exquisitos atributos físicos y femeninos declaraban que aquella mujercita se gastaba un cuerpazo mejor dotado que cualquier modelo de esas que aparecen en la TV, se le notaba un cutis suave como el de una verdadera bebita, sus tersas piernas y relucientes muslos parecían estar dibujados a mano alzada por lo muy bien formados que se le notaban, en fin la chamaca estaba de por si más que buenísima era lo que al unísono pensaban la jauría de machos que embobados la recorrían y se la comían con la mirada.
Don Severiano que el alma y el corazón ya se le salían por la boca de lo caliente que se puso con semejante visión rápidamente tomo una bandeja con vasos servidos y se dirigió hacia donde los recién llegados, estratégicamente le paso la fuente con vasos a su hijastro para notificarle,
--Hazte cargo de esto pendejo… le sirves a mis invitados todo lo que les haga falta y luego le ayudas a tu madre en todo lo que necesite, yo me encargare de presentarles tu novia a la familia, jajaja… Y sin esperar respuesta por parte del joven simplemente puso una de sus peludas manos en la cintura de Cielo Riveros para llevársela y hacer las presentaciones, sobre todo con sus amigos.
Un rato antes y en el momento en que el viejo la saludo le dio un beso en la cara el cual fue muy cerca de sus labios, Rodrigo no se percató de esto y Cielo Riveros quien si lo hiso pensó que fue por pura casualidad.
Rodrigo en forma encolerizada por la egoísta forma en que fue recibido por su padrastro, se dio a ayudarle a su madre en todas las tareas que se necesitaban para llevar a cabo el buen desarrollo del cumpleaños de don Severiano, mientras veía que este último no se le despegaba a su novia por ningún motivo, Cielo Riveros por su parte también se sentía incomoda con la situación, en dos oportunidades se separó del viejo para ir donde Rodrigo para ayudarle a él y a su madre, pero el astuto vejete luego de darle unos 15 minutos para que la cosa no fuese tan notoria iba hasta donde estaba Cielo Riveros con Rodrigo y nuevamente bajo cualquier patraña se la llevaba para lucirla ante sus amistades como si la joven tuviera algo que ver con él y no con su hijastro.
Al rato Rodrigo lavaba unos vasos enojado y enrabiado, si bien estaba seguro de los sentimientos de Cielo Riveros , veía preso por los celos como la joven conversaba animadamente con su padrastro y con unos amigotes de este, situación que era advertida por don Severiano que cuando su mirada se cruzaba con la del muchacho aprovechaba para poner su mano en la estrecha cintura de la joven y decirle cualquier estupidez, lo hacía siempre mirando al muchacho para que ella se riera y así poner mal al celoso novio, esto lo entretenía como a su vez también lo calentaban, mientras Rodrigo lo presenciaba todo con un doloroso nudo en el estómago y con impotencia.
Así se iban desarrollando los acontecimientos y la fuerte música invitaba a todos los comensales a pegarse una bailadita, la festiva actitud de don Severiano estaba dando sus frutos ya que con esto la inocente jovencita ya no lo veía tan antipático, su futuro suegro estaba siendo muy atento con ella y por cada vaso con trago que se bebía el astuto vejete no perdía el tiempo en reponérselo, situación que a la mareada muchachita le hacían sentir bien, lo que si le incomodaba en esos momentos era estar ella pasándolo tan bien y su pobre novio casi no tenía tiempo para disfrutar de la fiesta, en eso su suegro aprovecho para continuar acortando trechos entre él y ella,
--Señorita Cielo Riveros … sería tan amable de bailar conmigo?, le consultaba el aprovechador vejete a la vez que sin disimulo alguno la recorría de pies a cabeza…
--Ay don Severiano… de verdad que me gustaría, pero encuentro que no sería correcto de yo ponerme a bailar mientras Rodrigo esta tan ocupadito, le respondía la dulce chiquilla, que por nada del mundo pretendía ponerse a bailar con el viejo, que si bien ahora lo veía con más confianza, ella sabía que no era lo correcto además que no quería indisponer a Rodrigo con algo semejante,
--Pus él está ocupado ayudando a su mami, además que solo bailaremos… anda será solo un bailecito, insistía el viejo en forma eufórica. En ese momento tocaban rancheras mexicanas de esas que se deben bailar muy pegaditos…
--Es que no sé si sea correcto don Seve…, además que aparte de Rodrigo por ahí está su esposa, qué pensaría ella de mí?… se podría enojar si nos viera bailando…
--Ella no dirá nada… en esta casa mando yo!, decía el vejete que la calentura ya se le salía por los ojos al notar que la colegiala en cualquier momento le concedería un baile delante de todos sus familiares y amigos, que desde hace rato habían notado que el viejo no se separaba por nada del mundo ni un centímetro de la novia de su hijastro, --Te lo repito dulzura en esta casa se hace todo lo que yo digo, además que ya somos casi familia, jajajaja, le volvía a repetir el exaltado vejestorio intentando mantener la calma para no asustar a la joven.
Cielo Riveros observaba como el padrastro de Rodrigo le hablaba, el alcohol en su mente la hacían sentirse estimulada, sentía como bajo esas circunstancias tal vez le encantaría ser manoseada por cualquiera de los viejos ahí presentes, pero sin que Rodrigo se diera cuenta de ello, inconscientemente la nena estaba deseando verga a gritos, y la culpa de sentirse en ese estado la tenía el mecánico se decía la jovencita al recordar la hedionda vergota que este le metía sin ni siquiera pedirle su permiso, se preguntaba porque don Pedro aun no la llamaba si ya estaban casi en la fecha en que él dijo que se aparecería, de a ratos casi deseaba que el viejo la llamara por teléfono en esos mismos momentos confirmándole su advenimiento y ella junto con pasar a buscar a Claudia mandarse a cambiar con ella al lugar que él les dijera y hacer todas esas cosas cochinas que el viejo le había juramentado.
Con estos pensamientos Cielo Riveros volvía a la realidad observando los mostachos de don Severiano que pretendían ser italianos, estos se movían al ritmo en que el vejete insistía que ellos se pusieran a bailar, don Severiano era levemente más bajo que ella y estaba vestido con pantalones negros y camisa del mismo color esta la tenía abrochada solo hasta el botón que le daba inicio a su tremenda panza cervecera, los ojos verdes de Cielo Riveros veían de muy cerca un tupido enjambre de pelos entre canosos que el viejo tenía en el pecho, por algunos segundos sintió unas tremendas ganas de meter sus pequeñas manitas blancas por entre medio de esos gruesos pelos canosos y sentirlos entre sus deditos, miro hacia la sala y vio que Rodrigo con una bandeja vacía conversaba animadamente con unos viejitos que al parecer eran sus abuelos, luego miro al viejo y le dijo,
--Está bien… bailemos pero solo un ratito…
Don Severiano quien no daba más de gozo se zampo de un solo trago su vaso, y agarro a la joven por la cintura para sacarla a la terraza en donde estaba la improvisada pista de baile en la cual ya había varias parejas bailando animadamente.
En el trayecto en que se desplazaban a bailar el vejete le hizo señas al hombre que estaba a cargo de la música que era otro pelafustán que trabajaba en esto mismo en el ordinario restorán del que era dueño don Severiano, y abruptamente la seguidilla de rancheras cambio a una tanda de baladas mexicanas para comenzar con la canción “Si nos dejan” de Alejandro Fernández, y luego por otras del mismo estilo pero ahora de Marco Antonio Solís.
Ya en la pista de baile el viejo la tomo firmemente por su esbelta cintura para atracarla hacia su cuerpo, la nerviosa chamaca mientras sentía por primera vez el cuerpo de don Severiano tan cerca de ella miraba en todas direcciones intentando ver donde estaba Rodrigo y si este ya se había percatado de que ella estaba bailando con su padrastro, pero el joven ajeno a esto ya estaba en la cocina ayudando a su madre y a otras viejas que se aprontaban a poner los platos en la mesa ya que se acercaba la hora de la cena.
Mientras eso ocurría en la cocina, Cielo Riveros con don Severiano bailaban muy pegados uno al otro y no precisamente porque la chamaca lo quisiera, sino que el caliente viejo la tenía agarrada con fuerzas, sus sudorosas manazas se las tenía puesta justo en el límite de sus caderas y donde comienzan las nalgas, el viejo ya estaba verde por bajarlas y tantear el mismo esas grandiosas nalgotas que por vez primera estaban casi a su entera disposición.
La nena en la semi oscuridad de la terraza y amparados por las otras parejas que bailaban y que talvez los protegían de las miradas de Rodrigo y la señora María, sentía la tupida barba sin afeitar de don Severiano como le pinchaban las suavidades de sus mejillas, sus temblorosas manitas las tenía puestas en los hombros de su peculiar compañero de baile, mientras este mismo ya comenzaba disimulada y despaciosamente a sentir y sobar esas duras carnes que sus manos estaban palpando, las subía y bajaba sintiendo centímetro a centímetro desde sus caderas hasta su cintura y viceversa, y lo que más lo ponía caliente era saber que a quien tocaba era la misma novia de su hijo, esa hembra dulce y jovial que lo había cautivado desde el primer día que la vio en su casa, aun no se convencía que era la misma que el tenia grabada culiando con otro viejo aún más asqueroso que el mismo. Don Severiano quiso medir sus avances,
--Que bien bailas chamaca… seguro que ya te lo han dicho antes, el viejo sintiendo que su herramienta ya estaba dura como un fierro incandescente le hablaba casi comiéndose uno de sus perfumados oídos, lo que hiso que Cielo Riveros sintiera muy a su pesar un exquisito escalofrío que nacía desde su misma oreja y este se expandiera por todas las curvas de su cuerpo.
La colegiala quien se encontraba en forma apenada y casi disfrutando de las delicias de aquel rico escalofrió no le contesto nada, el viejo por su lado creyendo haber escuchado un leve suspiro desde los labios de su encantadora compañera de baile la atrajo más hacia su cuerpo tubo el cuidado de poner la altura de su verga justo en la parte media de la chamaca, quería que ella se la sintiera como la tenia de dura y parada para ver cuál era su reacción.
La joven sintió la dura punta de la herramienta de su suegro puesta en forma impecable justo en la curvatura de su pelvis, imagino que si no tuviera su vestido y ropa interior puesta como el viejo sus pantalones, la tendrían nuevamente lista para penetrarla, asustada miro a su alrededor pero vio que las demás parejas bailaban despreocupados de la forma en que ella estaba atracada corporalmente con el cumpleañero de la fiesta, y pensando en Rodrigo quiso poner término a ese atrevido bailoteo en el que la tenía don Severiano,
--Ay don Seve… creo que ya deberíamos parar de bailar en cualquier momento servirán la cena…
--No chamaca, bailas muy rico y no dejaremos de hacerlo hasta que no se termine la tanda, y no te preocupes por el mocoso de mi hijastro… él está muy ocupado atendiendo a mis visitas, jajajaja, y si se atreve a darte problemas porque bailaste conmigo, me dices y yo me lo arreglo, jajajajja!!!, sientes como te bailo?, le dijo el vejete a la misma vez que le pegaba una fuerte y bien disimulada punteada hacia adelante para que la nena le sintiera lo tan dura que tenía su tranca.
Cielo Riveros quien entendió muy bien que el vejete quería que ella le sintiera la verga, en forma muy avergonzada y temerosa prefirió hacerse la desentendida, recordó la vez en que el salvaje de don Pedro la tubo en las mismas condiciones dando como resultado una feroz enculada en aquella feria, con estos recuerdos sintió que su corazón se aceleraba, y no sabiendo que contestar solo le dijo lo primero que se le vino a la mente,
--Don Severiano… quería darle las gracias por haberme invitado a su fiesta de cumpleaños…
--No tienes nada que agradecerme princesa, tu eres la novia del chamaco que yo mismito he criado, esta es tu casa, y puedes venir y hacer todo lo que quieras cuando te venga en gana, jejejeje…
La nena a pesar de sentirse apenada de que su odioso suegro la estuviera punteando en plena fiesta y cerca de Rodrigo mientras bailaban no pudo evitar sentirse halagada por las palabras de su suegro, en su mente ya predominaba la imagen de don Pedro mostrándole su verga bien parada y brillosa, aun nerviosa y sin saber muy bien que decir siguió con la conversación…
--Don Seve… le quedare debiendo su regalo de cumple… Rodrigo me aviso tarde y no tuve tiempo de traerle un presente… más adelante le traeré algo, le decía la nena al oído del viejo, la fuerte música hacia que la pareja buscaran los oídos del otro para poder hablar.
El viejo quien notaba que la chica no hacia problemas como para retirarse quiso seguir avanzando para intentar conseguir algo de ella esa misma noche, pero por más que pensaba no se le ocurría nada, si se la llevaba a su habitación seria observado por todos los presentes, además que no estaba muy seguro si la nena iba a querer acompañarlo a un lugar donde hubiera una cama, y el saber que se la estaba punteando a sus anchas quiso seguir calentándola para ver qué pasaba,
“--Que tal si me regalas tu zorra chamaca endemoniada… ese es el mejor regalo que me podrías hacer puta calienta vergas…”, pensaba el vejete para sus adentros después de haber escuchado las dulce palabras de la novia de su hijastro, situación que lo alentó a seguir con su treta,
--Sabes Cielo Riveros cita?... eres una chavita muy linda, tú me gustas mucho… jejeje… así que no te preocupes por no haberme traído un presente, ya habrá tiempo para que me des un regalito, jejejeje,
Cielo Riveros a quien le tomaron por sorpresa las primeras palabras de su suegro, solo se dio a decirle,
--Ay don Seve… que cosas me dice… me toma por sorpresa no sé qué decirle…
--No me digas nada cosita rica… solo sigue bailando con este pobre viejo que en la verdad de las cosas nunca tendrá una posibilidad de estar con una chamaquita tan linda y delicada como lo eres tu dulzura… jejeje…
La colegiala cada vez se enervaba más por las cosas que le estaba diciendo su casi suegrastro, no encontraba las palabras para responderle, se sentía extraña por lo que se dio a contestarle al vejete,
--Ohhh don Severiano no me diga esas cosas… Usted me da penita, le decía Cielo Riveros quien ya todo su cuerpo temblaba por saber que prácticamente el vejete se le estaba declarando, su respiración poco a poco se iba haciendo entre cortada, y no porque el viejo le gustara ni mucho menos, si no que la misma situación la azoraba, el estar en su misma casa, en donde su novio y la propia mujer de este estaban solo a metros de ellos preparando la cena que ya se venía, y ella bailando muy apegada al viejo sintiéndole la verga casi incrustada en su vagina, ya que las vestimentas de ambos eran lo único que en esos momentos los separaban, y para rematarla el muy caliente vejestorio regalándole palabras halagadoras y declarándosele…
--Que no te de pena mamacita… pero es la purita verdad… desde que te vi por primera vez que me sentí enamorado de ti, me gustaría decirte tantas cositas que ni te imaginas…
--Don Seve por favor no le siga que me pongo muy nerviosa…, la nena esperaba que el viejo siguiera con sus palabras y al notar que este ahora solo respiraba pesadamente en uno de sus oídos se atrevió a preguntarle, --Y qué otras cosas tendría para decirme?. La chamaca solo se sonreía estúpidamente de puro nerviosismo, intentaba que el viejo no se diera cuenta de su estado. Don Severiano a su vez se daba cuenta que ya iba muy bien encaminado.
--Mira qué tal si nos vamos un ratito al fondo del patio… ahí hay una parte oscurita…? solo para que conversemos antes de la cena, no es justo que yo te esté diciendo estas cosas y tu novio y mi mujer nos vean…
Cielo Riveros ahora sí que estaba más nerviosa que antes, el viejo quería que fueran al fondo del patio, estaba clara en esos momentos que por nada del mundo accedería, pero también reconocía que las tiernas palabras del vejete le habían gustado, eso no significaba que ella tuviera alguna intención de querer tener algo con él, pero de verdad que sentía unas ganas tremendas de saber qué otra cosa más tenía el viejo que decirle, aun así la cordura predominaba en su temperamento…
--Ay no lo creo don Seve… eso no estaría bien… pero si tiene algo más que decirme me lo puede decir aquí mismo…
Don Severiano ya estaba más que recaliente y se daba cuenta que la chamaca no debía andar muy lejos de esa condición, ya que si fuese otra la situación simplemente lo podría dejar plantado en la misma pista de baile, pero ahí estaba ella muy abrazada “bailando” con él, y pidiendo que le siguiera diciendo guarradas halagadoras,
--Vamos hacia el fondo preciosa… ahí en esa parte que se ve oscurita… solo será un ratito… te diré unas cositas que quiero que sepas y nos venimos a cenar, jejejeje…
La chamaca quien ya se lo estaba pensando de verdad en arrancarse con el viejo por algunos minutos hacia esa parte oscura que había al fondo de la casa del vejete ya le estaba comenzando a gustar la idea, pero aun ponía resistencia,
--Pero qué pensaría mi novio y su esposa si nos vieran que nos alejamos a un lugar oscuro? Eso no se vería bien, la chica decía todo esto con su cuerpo temblando por una extraña adrenalina, ella estaba segura que si iba con el vejete a la parte oscura del patio no pasaría nada entre ellos pero lo prohibido de la situación increíblemente ya la tenían entre curiosa y enervada,
--Ellos no tienen que porque darse cuenta, además que no haremos nada malo… escúchame cosita rica, ahora nos separaremos… tu disimuladamente te alejaras a ese sector y me esperaras ahí mientras yo voy a buscar unos tragos y mis cigarrillos para que hablamos un rato, te aseguro que nadie lo notara…
--Está bien… iremos a hablar un ratito, pero si se demora mucho me veré en la necesidad de devolverme, no quiero que Rodrigo vaya a pensar mal de mí…
--No te preocupes mamita… yo voy y vuelvo tu solo me esperas, jejejeje…
La pareja se separó en el medio de la pista de baile, Cielo Riveros vio como don Severiano salía disparado hacia el sector en donde se encontraba la mayoría de los invitados y lo vio desparecer entre ellos, si bien ella sabía que no estaba bien lo que había acordado con el vejete, algo en su interior la empujaba que fuera al fondo del patio en la parte que se veía oscura. Sin ni siquiera pensar en Rodrigo y viendo que cada cual en aquella fiesta estaba en lo suyo simplemente y mordiéndose inconscientemente su sensual labio inferior camino hacia el fondo de la estancia sin ser vista por nadie hasta que su silueta se perdió en la oscuridad.
Don Severiano preparo dos vasos con trago nerviosamente, el de Cielo Riveros lo hiso con granadina y licor de cherry, una mal sana idea se le paso por la mente ya que pensaba que por el momento tenía nulas posibilidades de tener algo mas allá con la agraciada chamacota, pero él deseaba que la nena se quedara con algo suyo en su grácil anatomía, temblando de emoción por lo que se le había ocurrido y luego de otear en todas direcciones con cara de malo para confirmar que nadie de los presentes lo estuviera observando se dirigió al baño con el mismo vaso que le había preparado el trago a la joven, una vez encerrado se apresuró en sacar su semi erecta vergota y sumirla en el vaso para que el licor se impregnara con sus sabores vergales, sintió las insanas ganas de masturbarse y agregar una buena ración de semen para que la pendeja se los bebiera brindando con el pero no había tiempo para aquello, por lo que algo tan asqueroso como lo primero se le instalo en su desequilibrada mente y la puso en práctica, posando el vaso en la redonda punta de su verga hiso fuerzas hasta que logro soltar una buena cantidad de amarillenta orina dejando el vaso hasta la mitad, luego de limpiarse y guardarse su pulsante tranca salió nuevamente y muy emocionado lleno el resto del vaso con jugo de fruta heladito con la intención de que la nena no notara nada raro en el momento en que se lo bebiera. Para el solo se llevó una cerveza.
Cuando don Severiano ya se aprestaba para ir a juntarse con tan atractiva chamaca, fue interceptado por su hijastro,
--Oiga… ha visto a Usted a Cielo Riveros , le he buscado y no la encuentro?...
--Y que me preguntas a mi estúpido… de seguro que debe haberse ido por ahí con alguno de tus primos a hacerle alguna zorrería, ya que se ve que tú no te la puedes con una hembra como esa, jajajaja…
--Ya no le empiece señor… yo solo le estoy preguntando si es que la ha visto… fue Usted quien se la llevo para presentarle a sus familiares…
--Pus ya te dije que no la he visto idiota…!, luego de que la deje ya no la vi más…
Rodrigo en esos momentos se empinaba y miraba en todas direcciones, a lo mejor si hubiera puesto atención en las manos de su padrastro se hubiera dado cuenta que tal vez el viejo algo le ocultaba ya que llevaba claramente un trago de mujer y una cerveza en estas, y además que precisamente don Severiano no era de los que atendía a su propia esposa, pero el incauto muchacho se sintió más tranquilo al saber que su novia por lo menos no estaba al lado del odioso de su padrastro…
--Gracias… luego la buscare… iré por más trago para poner en las mesas…
--Oye pendejo… en cuanto rato más servirán la cena?
--Yo creo que en 30 minutos…
--Ya veo… quiero que ubiques a tu novia a mi lado cuando cenemos, es la primera vez que cenara con la familia así que debemos ser atentos con ella…
--No lo creo señor… yo pensaba en cenar junto a Cielo Riveros luego de que…
--Ya te lo dije estúpido…!! Ella cenara a mi lado porque yo soy el festejado… y tú aquí estas solo para servir junto a tu madre, o quieres que se los explique a los dos juntos y de otra forma!!??
Rodrigo quien entendió en el acto que si no accedía a lo que su detestable padrastro estaba ordenando entre rugidos nuevamente las consecuencias las pagaría su progenitora, por lo que solo se dio a responder,
--Si señor… se hará como usted diga…
--Está bien ahora ve a ayudar a tu madre… si veo a la yegua de tu novia le diré que la andas buscando…, jajajaja!!!
--Gracias… y con permiso, dijo el atribulado joven que erróneamente había pensado en un principio que su padrastro no lo molestaría por esta noche, y que podría disfrutar de la velada junto a su Cielo Riveros , que equivocado había estado.
Don Severiano luego de cruzar la pista de baile y poniendo especial cuidado en que nadie pusiera atención hacia donde el iba, disimuladamente y en forma facinerosa se escabullo hacia las sombras traseras de su patio en donde lo esperaba la inocente novia de su hijastro, una vez que ya estuvo casi llegando al lugar oscuro miro con risa de maleante para corroborar de que no era observado por nadie hasta que también su gruesa y tosca figura se desvaneció en la penumbra.
Minutos antes Cielo Riveros esperaba nerviosa a que llegara el padrastro de su novio, incluso hasta había recapacitado y ya pensaba en devolverse, sabía que don Pedro no la perdonaría si se llegaba a enterar del tipo de cosas que andaba haciendo ella en su ausencia, pero ahora el temor de ser vista por alguien salir de una parte oscura la hacían dudar de sus intenciones. Mientras la atribulada nena se debatía en cuál sería el mejor momento para salir de aquella parte sin ser vista por nadie se pudo dar cuenta que el vejete ya venía con dos vasos en sus manos, una vez que este llego a su lado vio que le extendía un copón grande de esos en los que se toma cerveza con la diferencia que este venía con un trago de color rojo que se notaba exquisito.
--Ay don Severiano… creo que yo no debería estar aquí con Usted, le dijo la jovencita en el momento en que le recibía el vaso al viejo con su blanca manita,
El viejo la miraba de pies a cabeza, en la oscuridad veía claramente sus relucientes muslos que resaltaban en el crepúsculo de la noche, y aun no se la creía que la tuviera en el fondo de su patio en donde solo estaban él y ella, mientras toda su familia y amigos se encontraban disfrutando de la fiesta, la música seguía sonando alegremente. Hasta que a sabiendas que tenía por lo menos media hora para intentar algo con ella antes de que sirvieran la mesa y los echaran de menos se puso manos a la obra,
--No tienes de que preocuparte mi reina… luego servirán la cena y ahí nos iremos de inmediato adonde están los demás jejejeje…
--Y que es eso de lo que me quería hablar?…, le pregunto Cielo Riveros a la misma vez que ponía en sus labios el singular brebaje que le había preparado su suegro en el mismo baño de su casa, don Severiano miraba con su corazón latiéndole a cien por hora notando como la chamaca se bebía inconscientemente una no menor cantidad de sus propios meados, hasta que intentando calmarse un poco le contesto,
--Pus de eso mismo que te dije mientras bailábamos…
--De qué cosa?, le consultaba la jovencita poniéndole una cara picara mientras seguía bebiendo de su exquisito trago, quería escuchar nuevamente la declaración del vejete, aunque sabía que por lo menos de su parte el viejo tenia cero posibilidad de llegar a tener algo con ella, pero la situación la tenía entretenida, sumado a que don Pedro estaba fuera de la ciudad y además que Rodrigo estaba tan ocupado que si no fuera por don Seve ella estaría muy aburrida…
--Pues tomate tu traguito primero y te cuento preciosura, jejejeje… te gusta el sabor de tu trago…
--Mmmm, si… esta riquísimo, pero lo siento algo amargo… que es?, le consulto a la vez que se relamía sus labios con su exquisita lengüita mirando el vaso e intentando adivinar el contenido de este…
--Es licor de cerezas, te lo hice algo cargado al cherry por eso lo sientes amargo dulzura, vamos bébetelo todito y si quieres en un ratito más te preparo otro igual…
--Me encantaría… pero dígame… eso que me iba a decir, mire que ya creo que tenemos que irnos, no vaya a ser que alguien nos vea aquí y vayan a pensar mal.
El viejo notando que Cielo Riveros ya se había vaciado el vaso con licor y orina, simplemente se abalanzo sobre ella y la tomo desprevenidamente desde su cintura arrimándola con fuerzas hacia su grotesca contextura, haciendo que la chica dejara caer el vaso ya vacío,
--Como ya te lo dije antes chamaca… la purita verdad es que desde que te vi por primera vez que te he deseado, le decía el vejete con cara de pervertido y mirándola a sus labios mientras le hablaba.
Cielo Riveros quien fue tomada por sorpresa no tuvo tiempo de ponerse a salvo solo en segundos se vio tomada por don Severiano quien ya le apretujaba contra su ancho pecho y su panza con sus manos puestas en sus ancas y muy cerca de las carnes que daban el nacimiento a su loable trasero, el viejo ya creía sentir los elásticos de su fina ropa interior por debajo de la tela del vestido,
--Nooo don Severiano… que hace!? Nos pueden ver…!!
El viejo en el acto se dio cuenta que a la chica le preocupaba más que no los vieran a que el la estuviera manoseando a su antojo al fondo de su patio,
--No te preocupes pendeja… aquí nadie nos vera, jejejeje además que si viene alguien solo le decimos que te sentías malita y que vinimos por un poco de aire, jejejeje…
La nena al escuchar que el padrastro de su novio ya se dirigía a ella mas vulgarmente, recordó la vez en que otro viejo tan caliente como este mismo la tubo en una situación más o menos parecida, aquella vez había sido en una feria de entretenciones alejados de todo el mundo, y ahora su mismo casi suegro la tenía en su propia casa al medio de una fiesta de cumpleaños y en el apartado oscuro de su jardín, parecía como si su vida fuese un círculo vicioso entre fiestas, viejos aprovechadores y vergas hediondas, la única diferencia que ahora notaba era que extrañamente a este vejete no le tenía tanto miedo, pero si mucho respeto además que le causaba cierto temor ser sorprendida por su novio o por la esposa del viejo,
--Don Severiano por favor suélteme yo no quiero tener problemas con Rodrigo… recuerde que él es su hijo…!
--Ese imbécil no es nada mío…!!, le corto el viejo en el acto para luego continuar con sus leperadas,--Y tú eres mucha mujer para él, jejejeje, así que no pienso soltarte… imagina que estamos bailando como estábamos hace un rato… si es casi lo mismo, jejejeje. El viejo nuevamente se esforzaba por hacerle sentir su verga mientras le decía, --Estuve pensando ricura… en eso del regalo que me decías, jejejeje…
--Ay don Seve… mejor suélteme… ya le dije que otro día le comprare y le traeré su regalo, la chamaca ya se estaba comenzando a preocupar, lo que al principio vio como una inocente jugarreta con el viejo ya se estaba comenzando a transformar en otra cosa, llevaban unos buenos minutos abrazados forzosamente al menos por parte de ella, y el viejo no la soltaba.
--Y qué tal si me regalas un besito en la boca… así quedamos saldados y no me debes nada, el viejo le decía todo aquello buscando sus rosados y brillosos labios, la ahora si asustada chamaca lo esquivaba como podía, sus bigotes italianos ya le raspaban la cara, y ya sentía la verga del viejo ahora más dura de como se la había sentido mientras bailaban,
--No don Seve… que hace? Déjeme… Cielo Riveros nuevamente iba cayendo en cuenta que en ninguna parte podía estar a salvo de las garras de viejos calientes y degenerados, se suponía que don Severiano era el hombre que había criado a su novio como si este fuese su propio hijo, y no era justo que ella estuviera allí en esas condiciones, a la vez que en otra parte de su mente no dejaba de pensar como la historia se repetía cuando ella ya estaba dando por superado sus anteriores violaciones.
El viejo por su parte se sentía en la gloria al sentir ese majestuoso cuerpo comprimirse contra el de él, muy a su pesar notaba que la jovencita se le estaba resistiendo y si se ponía a gritar llamaría la atención de sus invitados por lo que intento calmarla de alguna forma,
--No te preocupes princesa si no quieres darme un beso no importa, pero solo déjame tenerte abrazada un ratito… es mi única oportunidad de estar así con una chamaquita tan bonita como tú, el viejo lo decía con voz de si como realmente estuviera sufriendo,
--Ay don Seve creo que lo mejor es que me deje… quiero volver con Rodrigo, me debe estar buscando…
--Solo un ratito más mi bebita… tu cuerpo es muy rico, anda dale en el gusto a este pobre viejo aunque solo sea en el día de su cumpleaños… no seas malita…
Cielo Riveros se extrañaba de ver como ese viejo que en otras ocasiones lo había visto ser tan salvaje y odioso ahora se comportaba como un verdadero chamaco de esos que habían en su colegio, esto la hiso bajar la guardia…
--Don Severiano es que de verdad que me da pena estar así con Usted… y que diría Rodrigo si se llegase a enterar que Usted me tiene abrazada en su patio!?
--Él no se enterara de nadita… solo déjame sentirte un rato y luego nos vamos donde están todos los demás… quieres?
Cielo Riveros tras pensárselo por un momento y viendo que el viejo ya no le insistía con sus intentos de besarla le soltó…
--Bueno… pero que sea solo un rato y solo porque esta de cum… ple… años… lue… go nos va… mos a donde están sus in… vi…tados…, le decía la nenita en forma entrecortada y con sus manitas apoyadas entre el duro pecho y los hombros de su acosador,
--Gracias cosita ricaaaa… no sabes lo feliz que me haces…
Ahora la colegiala al ya estar más calmada puso atención en la dureza que el viejo le tenía puesta en su vientre, y como este de vez en cuando se movía para ir acomodándola en la parte más sensible de su cuerpo, la nena se la sentía a plenitud y le daba vergüenza pedirle al vejete que ya no se moviera, solo se dio a imaginarse lo que el viejo le clavaba a la vez que intentando que este no la viera se mordía los labios intentando no disfrutar lo muy rico que ya estaba comenzando a sentir.
La chamaca con sus ojos entre cerrados intentaba mirar hacia de dónde venían los sones de: “pero recuerda nadie es perfecto… y tú lo veras… más de mil cosas mejores tendrás… pero un cariño sincero jamaaaas...”, en eso fue que sintió que una mano del vejete iba bajando disimuladamente casi rosándole una nalga, ella a pesar de sentirlo y ya saber que era lo que el vejete quería tocar no le dijo nada, pensaba que ya casi daba lo mismo, ese hecho no iba a mejorar o empeorar su situación, luego de unos minutos de aquella extraña circunstancia que estaba viviendo ya sentía otros disimulados roces de tanteo en sus promontorios de carne trasera, para luego determinar que estos roces ya no eran de tanteo, sencillamente don Severiano la tenía bien agarrada del culo y sobándoselo con ella escuchando la romántica canción de M. A. Solís.
Cielo Riveros solo se mantenía abrazada al vejete y dejándose que el tocara todo lo que quisiera, el alcohol en su mente le decía que tal vez este era el regalo de cumpleaños que ella le daba al viejo, y sumado a que por cada apretón que le pegaba el vejete con su verga iba sintiendo que paulatinamente su vagina se comenzaba a derretir en un mar de líquidos calientitos, en esos momentos don Severiano ya le apretaba las nalgas a manos llenas saciando y llenando su tacto con las carnes de la colegiala quien ya sentía como un dedo del viejo buscaba su orificio posterior para dedearlo.
Aquello a la nena ya le estaba gustando mucho, su panocha ya estaba muy mojada, a la vez que sentía que el viejo ya empezaba a respirar pesadamente, y en el momento en que don Severiano tímidamente ponía su dedo medio a la entrada de su ojete, ella sin saber los motivos e intentando que el viejo no lo notara le paro más el culo buscando el contacto de ese dedo con la entrada de su ano por sobre el vestido por supuesto.
La mano del vejete lentamente rodeó su cadera y pasó hacia delante de su cintura girándola y apegándose a ella. Cielo Riveros ahora sentía su dura verga apretársele con bravura contra la parte media de sus nalgas, su corazón le empezó a latir con fuerza, sus pequeñitos pezones se le endurecieron como piedras.
Al minuto don Severiano ya restregaba su verga como si verdaderamente se la estuviera culiando al mismo tiempo que con su mano acariciaba su vagina por sobre el vestido, Cielo Riveros sentía el exquisito sabor de lo prohibido con sus ojos cerrados, este le llamaba cada vez más y estaba sintiendo muy rico, notaba como su casi suegro movía su manaza en su tajito como si la estuviera masturbando, y era eso lo que precisamente estaba haciendo el detestable vejestorio, para la caliente chamaca ya todo lo que le estaban haciendo le sabia a delicioso, cuando las manos de don Severiano comenzaron a bajar hasta sus muslos para luego ir subiéndole el vestido la nena no entendía por qué pero por ahora lo dejaba que el viejo se saliera con la suya, hasta ella misma se preguntaba cómo era eso que no oponía resistencia?, el viejo ya tanteaba y recorría la piel de su vientre al desnudo.
Ella solo se estremecía sin saber qué hacer ni que decir, el pesado olor a tabaco y alcohol que don Severiano expelía le llenaban sus pulmones y a ella le encantaba, sabía que en aquel rincón de la casa nadie los veía, ahora sintió como una mano del viejo se metía por entre su negra ropa interior de encaje para comenzar a acariciarle sus escasos y suaves pendejitos negros y brillosos para enseguida seguir bajando uno de sus dedos y dibujarle con uno de estos su tajito de carne que ya estaba totalmente encharcado, la nena ya sin casi medir las consecuencias comenzó a menearle el culo contra la dura verga que el viejo escondía en sus pantalones.
--Noooo don Seveee…rianoooo… no me to…queeeee…, le pedía Cielo Riveros al vejete en forma entre cortada y con sus ojitos cerrados con una de sus manitas puestas por sobre la peluda mano del viejo que le sobaba su vagina, sin embargo ella también meneaba sus caderas hacia atrás buscando que aquella dureza hiciera contacto con las partes más sensibles de su trasero…
--Estas bien buenota pendeja… no sabes las ganas que tenia de sentir tu cuerpo como ahora lo estoy haciendo… que tal si luego que despache a toda la gente me esperas en la esquina y nos vamos a acostar a algún hotel… ese sería mi mejor regalo de cumpleaños que me podrías ofrecer… que dices putita… te animas? Tras estas últimas palabrotas el viejo se dio a comenzar a chupar una de sus perfumadas orejas, la jovencita sintiendo como toda su piel se erizaba solo movía su cabeza circularmente, con su oído buscaba la puntiaguda y salivosa lengua del confianzudo vejete, a pesar de estar sintiendo la llamada al desenfreno no le quiso contestar a lo que su suegro le había solicitado como regalo de cumpleaños.
El viejo por su parte ya estaba que sufría un enloquecedor orgasmo, en su pantalón ya se dibujaba una tremenda aureola de humedad producto de los viscosos líquidos pre seminales que su verga desde hace rato estaba expulsando, aun así no le daba descanso a la atractiva Cielo Riveros , le seguía comiendo su oreja como desesperado ya que creía darse cuenta que a la nena esto le encantaba, además que en el momento en que le había subido el vestido hasta la cintura pensó que la portentosa chamaca lo frenaría pero solo la vio con sus ojos verdes semi cerrados y mordiéndose el labio inferior, el viejo simplemente comenzó con pequeños besos en su cuello y en la parte baja de sus oídos, a lo que al poco rato ya los combinaba con los sendos chupeteos que en estos momentos le estaba dando, Cielo Riveros solamente movía su cabeza al mismo compas de los chupeteos de oreja, se imaginaba a ella esperando al vejete en alguna esquina para luego ir a acostarse con él en algún hotelucho, esto hacia que todo su cuerpo se enervara por la seguidilla de escalofríos que don Severiano le estaba haciendo sentir con su propuesta, la respiración de la chamaca ya era fuerte y acelerada, sus mejillas las tenía rosaditas de lo tan caliente que la estaban poniendo en ese sitio oscuro, sentía como el dedo del viejo le recorría su vagina rosando el inicio de sus carnes interiores pero sin metérselo del todo, su coñito estaba empapado y destilando líquidos como si este fuese un manantial, y en el mismo momento en que ella se estaba dejando llevar por la calentura del momento y le iba a preguntar que como lo harían con Rodrigo si ella accedía a ir a acostarse con él, a sus oídos le llegaba la ronca voz del viejo quien le hacia una inusual solicitud,
--Quítate los calzones chamaca… ya que veo que no te atreves a ir a revolcarte conmigo… quiero que me los des como regalo de cumpleaños, jejejeje…
Esta vez la nena sí noto su voz grave y autoritaria como a ella le gustaba que la trataran, la colegiala solo obedeció, como pudo llevo sus manitas hasta los elásticos de su diminuta lencería negra que se perfilaban bien estirados y tirantes a la altura de sus caderas, para ir lentamente bajándoselos tal como le había pedido su casi suegro, con mucho trabajo logro hacerlos deslizar hacia abajo mientras estos se enrollaban en sus muslos, pasando por sus apetitosas rodillas y hasta que por fin los hiso llegar a sus tobillos para luego de levantar una pierna, con la otra subirla y retirarlos con su manita, en la penumbra del patio se los ofreció a don Severiano, el viejo antes de recibírselos le dijo,
--Di que me los regalas por mi cumpleaños número 58, jejejeje…
La chamaca quien ya estaba fuera de sí, y presa de una extraña calentura que se combinaba con lo prohibido de la situación le dijo con su temblorosa vocecita,
--Don Severiano… tome… se los regalo por su cumpleaños número 58…, le respondió la tierna chamaca ofreciéndoselos, el vejete encantado se los recibió y una vez de aspirarlos casi hasta la asfixia a un lado de los ojitos verdes de Cielo Riveros se los guardo en el bolsillo interior de su chaqueta como si estos fuesen un verdadero trofeo, para luego comenzar nuevamente a besarla en el cuello, el viejo al notar como la chamaca casi se retorcía de quien sabe que cosa lentamente la fue girando hasta quedar de frente a ella, ya sin nada más que esperar simplemente junto su hedionda boca con la fresca boquita de ella, Cielo Riveros lo recibió dándole muestras que desde hace rato ella también lo deseaba, y se lo demostró subiendo uno de sus muslos hasta la cadera del viejo y con su pierna alzada empujarlo por detrás haciendo que la compresión de cuerpos fuese más completa, don Severiano aprovecho para sobar a sus anchas esa curva del muslo levantado que daba paso a toda la curva de la suave nalga de la joven, una vez que se sacio de manosear aquella singular parte de su cuerpo en la forma más natural del mundo le tomo su manita y se la llevó al paquete, en donde la chamaca por fin pudo tantear ella misma esa caliente vergota que desde hace rato le espoloneaba el culo intentando traspasarla con ropa y todo.
La colegiala mientras aún estaba siendo besada por cada segundo que pasaba más se entregaba a esa enloquecedora relación con su suegro, con su manita y por sobre la ropa recorría y palpaba esa nueva vergota que don Severiano le estaba enseñando que no tenia nada que ver con el convencional pene que a Rodrigo le había sentido solo hace algunos días, se notaba que el viejo no era su padre biológico dilucidaba la colegiala al notar que ni siquiera a mano llena alcanzaba a circundarla, y cuando la recorría con la palma de su mano esta era interminable, don Seve notando lo entusiasmada que estaba la pendeja simplemente le ordeno,
--Sácamela putaaa… quiero que te arrodilles como la zorra que eres y me mames la verga, jejejeje… recuerda que hoy es mi cumpleaños, y tú eres el regalo que me trajo mi hijastro, jajaja… el vejete nuevamente le tenía su manaza perdida en la zorra masturbándola y calentándola para no dejar que la chamaca pensara en forma sensata.
Por primera vez en todo este rato Cielo Riveros sitio un dejo de enojo con el viejo, el no tenia que porque burlarse de Rodrigo por lo que ellos estaban haciendo, aun así ella ya sentía unas ganas tremendas de mirar con sus propios ojos lo que don Severiano tenia escondido en sus pantalones, a la vez que el viejo seguía diciéndole guarradas al mismo tiempo que le saco sus empapados dedos desde su vagina para luego ver ella misma como este se los llevaba a la boca para lamerlos y chuparlos,
--Mmmmsssrrrpsss!!!, sonó la bocota del vejete cuando termino de chupase los dedos a la misma vez que le notificaba, --Que rico sabor tienes pendeja, este es un verdadero manjar solo para Dioses, te apuesto que el imbécil de mi hijastro aun no te los ha probado, jajajaja!!! Sabes riquísimo cabrona…
Cielo Riveros de pie junto al vejete y tan caliente como este mismo como pudo le comenzó a desabrochar el pantalón, le encantaba la forma prepotente en que este la estaba comenzando a tratar, y más la enardecía que el viejo le recordara a cada momento que ella era la novia de su hijastro, el solo hecho de sentirse ella misma como el regalo de cumpleaños que el viejo tanto había estado esperando hicieron que en su cuerpo se formara una verdadera bomba de tiempo que en cualquier momento estallaría, ya casi sin pensar en nada con sus temblorosos dedos bajó el cierre de este abriéndolo de par en par, para después meter su mano con dedición y agarrar la gruesa culebra que don Severiano tenia por verga para luego sacarla ante su vista.
La chica quedo como hipnotizada y aterrada ante la demencial imagen vergal que tenía ante sus ojos, o sea esto que estaba mirando y que su blanca manita no alcanzaba a circundar no tenía nombre, sintió la imperiosa necesidad de soltársela por el miedo que le ocasionaba, pero algo en su mente se oponía a ello obligándola a mantenerse asida a ese venerable instrumento viril, claramente su conciencia le indicaba que si de las vergas que ya había probado con antelación la de don Pedro era la más grandota, esta al parecer hasta le ganaba, y no era que el viejo mecánico la tuviera chica ni mucho menos, era que sencillamente don Severiano se gastaba una monstruosidad, a pesar de la oscuridad imperante en el lugar en donde se encontraban se la podía ver casi en todo su esplendor, una gran cantidad de hiel y saliva se le formo debajo de la lengua, ya que ella sintió instintivamente unas tremendas ganas de llevársela a la boca si es que le cabía, como una posesa se fue arrodillando sin quitar su vista ni por un segundo de aquella grotesca masa de carne que palpitaba delante de ella y cuando ya se disponía a tomarla también con su otra manita para poder tantearla a sus anchas, noto que la música dejaba de sonar y que varias mujeres invitaban a los contertulios a pasar a la mesa ya que la cena estaba servida,
--Me lleve la verga pendejaaaa… jajajaja! esto queda pendiente mamasotaaa…!!, le decía don Seve al mismo tiempo en que le quitaba su verga de las manos y procedía a guardársela nuevamente, y luego continuar, --Yo saldré por una puerta trasera y me daré la vuelta hasta llegar a la parte de adelante de la casa… diré que andaba comprando cigarrillos… y tu levántate… espera un rato y sales haciéndote la mensa por el mismo lugar en que vinimos, jajajaja…
Cielo Riveros quien aún no reaccionaba vio como el viejo Severiano desaparecía por una tosca puerta de latón que había por detrás del patio y que daba a la calle, rápidamente se puso de pie y recompuso su vestido, a la vez que limpiaba sus rodillas de la tierra en que estuvo hincada, recién caía en cuenta que le acababa de regalar sus calzones al padrastro de su novio, y que estuvo solo a segundos de chuparle la verga.
La colegiala aprovechando que la mayoría de los invitados estaban preocupados de tomar ubicación en la mesa que estaba al interior de la vivienda pudo salir sin llamar la atención, efectivamente nadie había visto nada, totalmente apenada y arrepentida por lo que ella misma estuvo a punto de hacer se preguntaba que como se le había ocurrido haberse dejado llevar y seducir por aquel odioso viejo que desde que la conoció lo único que hacía era acosarla y burlarse de su novio en cada ocasión que podía, y justo en el momento en que ya llegaba al sector del comedor fue abordada por Rodrigo,
--Eve… donde diablos estabas?, desde hace un rato que te estaba buscando…
--Rodrigo… solo estaba tomando un poco de aire… de pronto me sentí un poco sofocada, y tú estabas tan ocupado…
--Sí, es verdad amor… le corto el chamaco, --Intentare desocuparme luego para que podamos estar un rato juntos…
A la chamaca quien al estar ya con la mente más despejada sabía que corría un peligro inminente si se le ocurría quedarse en la fiesta de don Severiano, por lo que le pidió a su novio,
--Rodrigo de verdad que te estoy muy agradecida por haberme invitado, pero creo que ya me iré para mi casa… me siento muy cansada…
--Pero amor después de la cena ya estaré desocupado… por favor quédate y te prometo que lo pasaremos muy bien… además que tu puesto ya está servido… anda ve a cenar…
--Y adonde cenaremos?...
--Yo lo hare en la cocina con mi madre… tú vas en aquel puesto, le dijo el muchacho apuntando hacia la silla que estaba ubicada justo a un lado del puesto de don Severiano…
La nena en forma automática y ya no queriendo darle más chance al viejo para que este pensara que ella quería tener algo con él, solo se dio a responderle a su novio,
--Ay no Rodrigo… de verdad que no tengo hambre… mejor te acompaño en la cocina…
--De verdad que me gustaría mi Eve… pero tu puesto ya está considerado… le dijo su novio a la vez que casi la llevo a la fuerza a que la nena tomara ubicación al lado de su padrastro, ya que él sabía que si no le obedecía a lo que había dicho el vejete, lo más seguro es que este se desquitara con su madre.
Al joven aunque no le gustaba la idea de que su novia cenara al lado del odioso hombre con el cual su madre tenía una relación desde la muerte de su difunto marido, solo quería minimizar problemas en su hogar además que no creía capaz que el viejo intentara propasarse con su novia delante de su esposa y de toda la familia.
La cena se llevaba a cabo casi con normalidad, don Severiano se las estaba pasando de lujo en el día de su cumpleaños, la reciente incursión en el patio trasero de su casa con la novia de su hijastro lo habían dejado en un delirante estado de calentura, de reojo miraba a la tremenda hembra que tenia sentada a su lado, como también en forma continua y creyéndose ya con ciertos derechos posaba una de sus manazas en las suaves piernas de la joven por debajo de la mesa, ella disimuladamente y para no armar una incómoda situación se las retiraba intentando que nadie notara de lo que estaba ocurriendo bajo el mantel.
Así continuo la cena en donde Cielo Riveros casi no toco su plato, estaba más preocupada de retirarle las manos a su suegro desde sus muslos que de otra cosa, sumado a que la gran mayoría de los viejos que compartían la mesa más se la comían a ella que lo que tenían puesto en sus platos, mientras don Severiano alternaba sus manoseos con verdaderos deseos de meterse debajo de la mesa abrirla de piernas y pegarle una buena chupada de zorra ahí mismo delante de todos los presentes, pensaba en esto devorándole el nacimiento de sus tetas que estaban solo a centímetros de donde él estaba sentado, se preguntaba de cómo había sido tan pendejo en no habérselas manoseado o chupado, y el saber que la chica estaba sin sus calzones y que estos estaban en el bolsillo de su chaqueta, prácticamente la caliente situación lo tenían erotizado.
Hasta que mientras se desarrollaban estos libidinosos acontecimientos llegó el momento de la torta, la señora María con otra vieja que la acompañaba en todas las tareas ubicaron el pastel al frente de don Severiano con la colorida velita con el número 58 que ya estaba encendida para que el viejo la apagara luego de que entre todos le cantaron el cumpleaños feliz,
--El deseoo…! el deseoooo!!, gritaban los compadres del vejete con vaso en mano, antes de que este soplara la velita. El viejo con su mejor cara de pervertido miro a Cielo Riveros penetrantemente a sus ojos verdes en un momento en que la chica lo miro, este le dijo telepáticamente que su deseo ella lo tenía entre medio de sus piernas, lo que la nena creyó captar casi al instante ruborizándose y llevando su mirada hacia cualquier parte de la mesa con una de sus manitas en los labios.
Cuando la azorada y manoseada chamaca por fin se pudo levantar de la mesa se fue rápidamente a buscar a su novio, le pediría que la fuera a dejar a su casa ya que las recientes experiencias vividas sumados a la calentura con la que andaba don Severiano en la fiesta, y que ella bien sabia, la podían hacer cometer una barbaridad, todo este tiempo sin probar una buena verga después de las tremendas folladas que le había puesto el viejo Pedro por la zorra, y los bestiales enculamientos por parte del maestro Tulio y el cojo Juan, ya le estaban por pasar la cuenta, ya casi deseaba que don Pedro la interceptara en cualquier parte y se la violara en la misma calle o en cualquier callejón oscuro de la forma en que únicamente él sabía hacerlo.
Una vez que Cielo Riveros pudo encontrar a su Rodrigo se tranquilizó un poco ya que el joven le dijo que por fin ya no tenía que realizar más trabajos, mientras el viejo Severiano por más que pensaba no encontraba la formula necesaria de poder arrebatarle a su hijastro a la tierna pendejita que tenía por novia y que solo hace unas horas había estado solo a segundos de que le chupara su verga.
--Pero porque no quieres entrar a la fiesta?, le consultaba el chamaco a su novia ya que ella le había solicitado que se quedaran sentados en el ante jardín de la casa,
--Es solo que al estar entre medio de tanta gente me siento ahogada, además que aquí solitos podemos platicar más a gusto, le mentía Cielo Riveros a su novio.
Pero la verdad era una sola, si bien ya se le había pasado reconocía que solo hace un rato don Severiano el odioso padrastro de su novio la había tenido más que caliente, y ahora ya más enfriada y pensando en forma prudente le rogaba a Dios que al viejo no se le fuera a ocurrir contarle mentiras a su novio, vería la forma de hacer que Rodrigo ya no la invitara más a su casa, y antes de que su cuerpo le hiciera cometer cualquier tontería, pensó en que tendría que concederle a su Rodrigo lo que el tanto deseaba a penas se lo pidiera nuevamente, no fuese a ser cosa que don Severiano se le adelantara pensaba la confundida chamaca.
Solo fueron suficiente unos cuantos atracones y fogosos besos para que el enamorado muchacho comenzara con sus febriles insistencias,
--Amor… has pensado en eso que yo quiero que hagamos?, le dijo el chamaco en uno de sus perfumados oídos,
--Si lo he pensado mi Rodri… pero aun no estoy muy segura… además que adonde lo haríamos?, Ay no lo sé… me cuesta tomar una determinación como esa…, le mentía la chamaca para no darle una imagen tan facilona a su novio, ya que este podría pensar mal de ella.
--Vamos amor dime que si… mira este Lunes es mi día libre en la farmacia, y tu estarás sola en tu casa… ahí podríamos hacerlo, rogaba Rodrigo en forma desesperada a su amada…
--Rodrigo, de verdad que me da penita contigo, pero si yo te dijera que si… quizás que cosas tu pensarías de mí?, le respondía una sonrojada Cielo Riveros a Rodrigo quien le pedía que se acostara con el ya casi al borde del llanto,
--Pensare que me amas!, y que nos podremos casar en cuando tú me lo pidas, de verdad amor… te deseo con todas las fuerzas de mi alma…
--Ay no se Rodrigo además que el lunes tengo colegio, a mí no me gusta faltar así como así…
--Pero será por nuestro amor mi vida, de verdad que valdrá la pena… anda dime que me harás ese favor, el muchacho ya no encontraba palabras con tal de convencerla, hasta que sus oídos por fin escucharon lo que tanto deseaba,
--Está bien mi cielo, si tanto lo quieres… me dejare que me lo hagas en mi casa…
--De verdad!?, es verdad lo que me estás diciendo!!??. El joven aun no daba crédito a lo que su hermosa novia le estaba confirmando…
--Te lo digo de verdad Rodrigo el lunes no iré al colegio y te esperare… no es eso lo que querías?, Cielo Riveros miraba con una seductora sonrisa a su amado quien aún no se la podía creer que estaba solo a casi de 24 horas de por fin cogerse el portentoso cuerpo de su novia, estas serían las dos noches más largas de su vida.
Luego de esta particular conversación entre la pareja de novios, una gruesa sombra que había estado escuchando lo que ambos jóvenes planeaban se escabullo para volver a entrar sigilosamente hacia el interior de la casa en donde aún continuaba la fiesta, don Severiano lo había escuchado todo.
Al rato después de que ambos jóvenes quedaron de acuerdo para acostarse el día lunes en la casa de la joven, Rodrigo fue a dejar a Cielo Riveros a su casa, y casi cantando se devolvió para la suya por las solitarias calles vacías pensando en todas las cosas románticas que le diría en el momento en que estuvieran haciendo el amor.
El día Domingo posteriormente de que la casa de don Severiano ya había vuelto a la normalidad tras el jolgorio de la noche anterior, el viejo veía la televisión mal humorado, con resaca y tocándose los bigotes, no había querido almorzar solo se daba beber cerveza y a pensar en lo que había escuchado, el baboso del hijo de su mujer solo estaba a horas de cogerse a la portentosa chamaca que la noche anterior le había dado claras muestras que con solo sobajearla un poco ella se empezaba a comportar como la mejor de las putas, y tan señorita que se ve a simple vista se sonreía para sus adentros.
Lentamente empezó a armar la idea que tenía en su mente.
Esa misma noche el semental italiano les daba órdenes a su mujer y a su hijastro,
--Así es como me escuchas mujer… si no te había autorizado antes para que viajaras a ver a tu hermana enferma fue porque no tenía el dinero suficiente para que le compres todo lo que le pueda hacer falta, te puedes quedar tres días con ella y te vienes…, termino de decir don Seve casi ordenándole a su mujer, para luego continuar con el joven, --Y tu bueno para nada!!, dijo ahora refiriéndose a Rodrigo, --Mañana iras a dejar a tu madre a la terminal ya que va a ir cargada con bolsos, aprovechando que no trabajas los días lunes, jajajaja!!!
El joven quien reacciono casi al instante al recordar de la tan esperada cita que tenia para con su novia quiso poner objeción,
--Señor… yo tengo compromisos para mañana temprano… tal vez podría ir a Usted a dejar a mi madre al bus y luego re…
--Te digo que serás tu quien la ira a dejar pendejo estupidoooo!!!!, le berreo prepotentemente don Severiano a su hijastro, para luego continuar intimidándolo, --No eres más que un mal agradecido, siempre haciendo problemas cuando uno te pide algo, así que mañana te me levantas tempranito y te vas a dejar a tu madre a la estación de buses, tu tía la necesita!!, yo no puedo porque tengo que ver unos asuntos… si quieres de allá te puedes devolver, pero me la vas a dejar al bus si o si… escuchaste idiotaaaa!, además que no sé de qué realmente alegas tanto si solo te demoraras un par de horas a lo más, luego te puedes dedicar a tus estupideces jajajaja!!!
Después de haber dado sus órdenes el vejete ya estaba impaciente de que la noche pasara lo antes posible, ya se imaginaba lo gratificante que sería para su verga lo que sucedería aquel día lunes.
Rodrigo por su parte se cansó de buscar su celular, no recordaba donde lo había dejado, y no era tanto que el fuera dependiente de su teléfono, sino que tenía que avisarle a Cielo Riveros que ya no podría llegar en la mañana tan temprano como lo habían acordado, y que se tardaría un par de horas. Don Severiano que lo miraba atento a todos los movimientos del ya casi desesperado muchacho se atrevió a consultarle,
--Que buscas con tanta desesperación chamaco!!??
--No recuerdo donde deje mi teléfono… Usted lo ha visto…?
--Pus no…!, le contesto el vejete, --Y por qué tan desesperado por un teléfono?,
--Es que he quedado con mi novia para mañana temprano, íbamos a salir… y le quería avisar que llegare un poco más tarde de lo que acordamos…
--Jajajaja!!! Y por eso tanta alharaca…? que te espere pendejo!, debes aprender que uno no le debe dar tantas explicaciones a las mujeres…, le enseñaba el padrastro a su hijastro, --Te pueden ver como un idiota… cuando uno les da muchas explicaciones a las zorras, estas se le comienzan a meter ideas absurdas en la mente y luego te querrán dar órdenes e intentaran controlar lo que haces, que se espere y se acabó, jajajaja!!!
Rodrigo pensaba para sus adentros que él no sería como don Severiano que trataba a su madre como si ella fuese su empleada personal, el sería distinto, sobre todo si se trataba de su Cielo Riveros , pero por ahora iba a tener que esperarlo ya que se convenció de que quizás en que parte había perdido su teléfono, por más que lo busco no lo pudo encontrar.
Al siguiente día siendo las 9.30 am., el viejo Severiano emocionadísimo volvía a su casa después de haber ido el mismo a dejar a su mujer y a su hijastro a un taxi, del bolsillo de su chaqueta saco los calzones de Cielo Riveros y se dio a olerlos profundamente de como si con esto se estuviese dando fuerzas para lo que haría a continuación, una vez que ya se sintió más seguro, de su otro bolsillo saco el celular de Rodrigo que él había escondido el día anterior en un descuido del muchacho y simplemente tecleo el número de Cielo Riveros que estaba remarcado como favorito.
(45 minutos antes en la casa de Cielo Riveros )
Cielo Riveros ese día se había levantado feliz por lo que haría en pocas horas con su amado Rodrigo. Se dio una ducha espumosa, aplicando sales, esencias y todo lo que usan las mujeres cuando se preparan para un encuentro de aquellas características, sabía que Rodrigo tal vez ya debería venir en camino, se reconocía para ella misma que todas las ganas que había estado acumulando en ausencia de don Pedro, y de los otros vejetes que no habían osado en molestarla desde hace semanas las desfogaría en el momento en que estuviera acostada con su novio, si hasta don Lucas andaba desaparecido, además que don Severiano había estado casi a punto de hacerla caer en la tentación y por Dios que le habría gustado se decía muy… pero muy al interior de su mente.
Luego de maquillar su cutis solo lo necesario y de aplicarse cremas por todos los centímetros de su cuerpo, escogió el calzoncito más diminuto de los que ella poseía, este era de color blanco al igual que el sujetador, pensó que con esto volvería loco a su novio y se la cogería con más ganas de las que ya le tenía pues su baja prenda íntima le tapaba apenas el nacimiento de su tajito e incluso dejaban ver algunos de sus escasos pelitos íntimos que se vislumbraban brillosos y sedosos, luego opto por un ajustado vestido color azul alucinante que le llegaba a medio muslo, este era de esos con tirantes en los hombros y morbosamente dibujaba en forma diabólica cada centímetro de su tremenda y curvilínea figura, y para terminar con su enloquecedor atuendo se calzo unas preciosas sandalias de medio taco que aparte de hacerla ver aún más soberbia estas le enaltecían su trasero haciéndolo ver aún más parado de lo que ella lo tenía.
Una vez que la encomiable jovencita determino que así estaba perfecta para los momentos previos a ser poseída por su amado se perfumo solo lo suficiente y se sentó en una de las sillas del comedor a esperarlo.
Mientras la engalanada y nerviosa nena esperaba a su novio en la salita de su casa, escucho el timbre de su teléfono, una vez que lo reviso y se dio cuenta que era Rodrigo quien la llamaba se dio a contestar en la forma más femenina y coqueta que le fue posible,
--Hola!?, la voz de Cielo Riveros sonó como el más bello de los villancicos, para los peludos oídos de don Severiano,
--Alooooo!!! Rugió la voz del vejete por el teléfono, la chamaca se percató al instante que esa no era la voz de su Rodrigo,
--Quien habla!?, pregunto la nena un poco preocupada…
--Soy yo Severiano… como estas nena…
Cielo Riveros quedo como petrificada, nunca se había imaginado que sería don Severiano su casi suegro quien la llamaría, aun no entendía muy bien por qué él estaba hablando del teléfono de su enamorado.
--Ehhh Buenos días don Severianooo… como está Usted?
--Yo bien Cielo Riveros … Jejeje, el que está un poco complicado es tu novio… el me pidió que te llamara…
--Que le paso!?, que es lo que tiene!?, dígame!... la nena se preocupó casi al instante,
--Amaneció enfermo, se siente tan mal que me pidió que te dijera que no iba a poder ir a tu casa como habían quedado… Cielo Riveros se estaba empezando a preocupar de verdad, la voz de don Severiano sonaba tan convincente que no dudo en la veracidad de lo que este le estaba diciendo, hasta casi se olvidó en ese momento de lo que había sucedido entre ellos solo hace dos días atrás en el cumpleaños del viejo, don Seve notando que la chamaca se la estaba creyendo siguió con lo planeado por él, --Jovencita de verdad que yo veo mal al chamaco, mi mujer tuvo que salir y me cuesta irme al trabajo y dejarlo así como esta, que tal si te vienes para que lo cuides, yo te espero para no dejarlo solo, y luego una vez que llegues me podre ir más tranquilo… que me dices!?
--Claro que si don…! espéreme que yo salgo en este mismo momento para su casa… Cielo Riveros nunca imagino las mentiras que habían detrás de aquella llamada telefónica, el hecho de que el vejete supiera que ella con Rodrigo habían quedado de verse ese día significaba únicamente de que su mismo novio se lo había dicho, si bien encontró extraño que fuera el mismo viejo quien la llamara desde el teléfono de Rodrigo ahora creía en todo lo que este desvergonzado hombre le estaba diciendo…
--Bien… pero apúrate… él te necesita… así que mientras más rápido te vengas mejor…
--Ni que se diga más don Seve, dígale que me espere… ya voy en camino…
El vejete una vez que corto la llamada, fue a su dormitorio para chequear que todo estuviera en condiciones para cuando llegara su mujer, pensaba estar cogiéndosela por dos días enteros, tenía cigarrillos y cervezas en una mesita a un lado de la cama, así que ya no faltando nada más se mandó un Sidelnafil de 100 mg, y se dio a esperar a ese ansiado cuerpo lleno de curvas que lo haría llegar al paraíso.
Cielo Riveros sin darse tiempo a nada casi corriendo salió de su casa, solo eran unas cuantas cuadras las que debería caminar, pensaba que debía llegar lo antes posible a cuidar a su Rodrigo que tanto la necesitaba en estos momentos.
El viejo estando a la espera de la joven hembra que había embaucado para cogérsela todas las veces que él quisiera hasta ya resoplaba de una ansiada calentura, a los pocos minutos y en el momento en que se asomó por la ventana vio venir a lo lejos a una imponente mujer con vestido azul, a los segundos de aquella fantástica visión el pobre hombre casi se infarto cuando noto que esta era la mismita chamaca que él estaba esperando, la vio acercarse a su puerta apurada lo que hacía que sus caderas se movieran ampulosamente exquisitas, su verga ya estaba que explotaba.
La despampanante colegiala esperaba ansiosa e impaciente a que le abrieran la puerta en la casa de Rodrigo, hasta que por fin vio aparecer a don Severiano quien la hiso pasar al instante,
--Pásale… pásale chamaca…, el vejete se tuvo que aguantar las ganas de abalanzársele y violarla de cualquier forma posible,
--Donde está el?, pregunto Cielo Riveros con su carita de preocupación,
--Está en mi recamara, lo puse ahí ya que estará más cómodo… vamos ándale yo te llevo…
--Ay gracias por avisarme don Severiano… y que es lo que tiene?, fue lo último que pregunto la desprevenida jovencita cuando al llegar e ingresar al dormitorio matrimonial del vejete percatarse que este estaba vacío y que su Rodrigo no estaba en la cama como ya ella se lo había imaginado…
--Qué opinas preciosura… no es una maravilla que al fin podamos estar solitos y con una cama disponible para nosotros solos!?
La nena quien su verdosa mirada estaba puesta fijamente en la cama vacía cayó casi al instante en cuenta que Rodrigo no estaba en la habitación y que tampoco lo iba a estar en la casa, las palabras de don Severiano habían sido claras: “la cama estaba dispuesta para ellos solos”, sin ánimos de voltearse y solo escuchando la pesada respiración del viejo a sus espaldas con voz asustada y roja por una extraña vergüenza que la invadía quiso preguntar aquello que ella ya sabía,
--Don… de… esta Ro… dri… gooo…?
--Tuvo que salir, lo vino a buscar otra chava que él tiene a tus espaldas… jajaja… así que tenemos casi todo el día solo para nosotros…
Cielo Riveros quien ya se había dado cuenta que nuevamente la habían hecho caer en una trampa y que todo eso que le decía el viejo de Rodrigo con otra joven eran puras mentiras pensó que si no hacía algo luego lo más seguro era que otra vez se la violarían, quiso poner atajo a lo que probablemente le iba a suceder, ella no lo permitiría.
Se volteo rápidamente hacia donde don Severiano, le diría unas cuantas verdades y luego se iría para su casa,
--Es Usted un embustero… como se le ocurre mentirme de esa forma…
--Cállate encuinclaaaa!!!, bramo el vejete como un verdadero cavernícola, --Esta es mi casa…y aquí el único que levanta la voz soy yo!!, te queda claro zorraaaa!!!!
Cielo Riveros quien había tenido un mínimo de valentía para encarar al desalmado de don Severiano, cambio de opinión en el acto, recién se percató que el viejo tenía un brillo extraño en sus ojos los cuales se le notaban enrojecidos, sin ni siquiera proponérselo bajo su vista hasta su verga en donde claramente y por sobre el pantalón de tela se le veía que este la tenía tremendamente parada, automáticamente sus hermosas piernas comenzaron a temblar, como así mismo en sus propios oídos creía sentir los latidos de su corazón, el viejo ya se le venía acercando,
--Nooo don Severianooo… por favor nooooo… fue lo único que salió de los labios de la chamaca cuando en su mismo cuerpo sintió que era tomada brutamente desde su cintura por el padrastro de su novio, el viejo la giro y la arrimo contra un viejo mueble de madera que era usado por su mujer para mantener sus utensilios personales.
El vejete al tenerla de espaldas a él no podía quitar la vista de ese tremendo culazo que la nena se gastaba y escondía bajo aquel soberbio vestido azul, le miraba y dimensionaba sus grandes y bien proporcionadas nalgas, como pudo le ubico su endurecida herramienta justo al medio de estas, estaba decidido a cogérsela lo antes posible…
--Que trasero tan sublime es el que te gastas mocosa, tienes un culazo descomunal le decía don Severiano mirándole las nalgotas y moviendo su cara a los lados como no creyéndosela de lo que tenía antes sus ojos, no dudo en comenzar a sobárselas pausadamente a la muy asustada Cielo Riveros .
El vejete quien estaba como poseído por la atracción que sentía por esas delineadas formas que tenía en estos momentos para el solo no dudo en comenzar a sobajearla por todo su cuerpo y por sobre el vestido, sobre todo tanteándole las tetas, pensó en que la quería tener encuerada lo más rápido posible, a la vez que le decía en uno de sus oídos, --Como te dije el otro día chamaca… eres una chavita muy linda, que tremendo cuerpo es el que tienes cosita rica, lo que te dije recién es la purita verdad… pero es cosa tuya si me quieres creer o no, pero ese maricon que tienes por novio no te merece lindura, jejejeje, le susurraba desde atrás en su oído, en ese momento Cielo Riveros sintió los peludos brazos del viejo que pasaban entre medio de los de ella para comenzar a puntearla contra el antiguo mueble de madera.
La colegiala sin saber qué hacer ni que decir solamente se dio a escucharlo, sentía la voz del viejo justo atrás de sus oídos, como también sentía un asqueroso olor a boca sin asear mezclada con licor y cigarro, se preguntaba cómo fue q no se la había sentido el sábado en la noche si hasta se habían besado, pero ella lo había hecho solo porque se había tomado unas copitas demás y porque el viejo había estado de cumpleaños, solo por eso se volvía a repetir.
Don Severiano aprovechando la pasividad de la colegiala, subió sus manazas hasta los suaves hombros de Cielo Riveros y se propuso a correr los tirantes del vestido con claras intenciones de comenzar a desnudarla, lo que hiso que la chica reaccionara casi al instante,
--Don Severianooo… no! que hace!?... que es lo que quiereeee!!? El viejo percatándose de que la colegiala estaba resistiéndose fue directo al grano,
--Jajajaja!!, me gusta que quieras ir directo al punto chamaca, la verdad es que el otro día me dejaste más que caliente, y si quieres saber qué es lo que quiero ahora, pues bien te lo diré: Quiero culearte!!!, el otro día note como estabas de caliente y si no hubiese sido porque las otras viejas llamaron a cenar lo más probable es que te hubiera culeado en la parte trasera de mi jardín, jajajaja lo hubieras pasado riquísimo, si hasta ya te habías puesto en posición de chuparme el cochayuyo, jajajaja…
--No… eso no es verdad… la jovencita quien rápidamente volteo para quedar de frente con el viejo solo intentaba con sus dos manitas impedir que el vejete le bajara el vestido, sintió como este un minuto antes le había bajado el cierre que su prenda tenía en la parte trasera, recordó que solo hace menos de una hora ella estaba convencida que sería Rodrigo quien iba tener el honor de hacer esa tarea, pero al contrario de eso, ahora era el padrastro de el quien lo había hecho, la osca voz del vejete la hicieron ver cuál era su realidad para estos momentos,
--Si, si es verdad cosita ricaaaa, he estado esperando por casi dos días para que nosotros dos termináramos lo que dejamos pendiente en mi patio, y como ya te lo he dicho… desde que te vi por primera vez he deseado acostarme contigo como si fuéramos marido y mujer… y ya que el estúpido del Rodrigo no está a la altura de cogerse una verdadera hembra como lo eres tu… lo hare yo, jejejeje… hoy descubrirás lo que es echar cacha con un hombre de verdad dulzura… jajajaja, nunca en mi vida imagine que me acostaría con semejante potranca como lo eres tú zorra!, te hare gritar como la puta que eres, jajaja!!! Lo vamos a pasar muy rico cuando lo estemos haciendo… ya verás…
Cielo Riveros solo miraba a aquel hombre muy asustada, no entendía bien lo que realmente pretendía ya que se este se esmeraba en recordarle lo mucho que ella lo atraía y las ganas que le tenía, sino que también tenía que humillarla de esa forma, diciéndole todo tipo de peladeces, en eso sintió que el viejo nuevamente la tomaba y la contraía ahora contra su pecho, tal como lo había hecho en su patio, pero ahora lo hacía con más propiedad, el vejete sin ni siquiera disimularlo ni nada parecido metió sus manos por debajo del vestido de la colegiala para comenzar a magrearle el culo a sus anchas, para luego continuar con sus peladeces,
--Pues mira nada más el par de nalgotas que te gastas chiquilla endemoniada, a ver si están tan duras como me las imaginaba… Plaaaafffffff!!!!!!, fue tan fuerte la nalgada en el culo que le asesto don Severiano que hizo que de la chica se escuchara un fuerte grito de dolor, el viejo solo empezó a reír carcajadas mientras le decía,--No me has decepcionado pendeja, te gastas un culo duro y bien parado, justo como a mí me gustan, no hay duda que disfrutare meterte mi verga por el orto, jajajajaja!!!, espero que este tan apretado como me lo he imaginado en las numerosas pajas que me he hecho en tu honor putaaa!!!
Ahora la joven solo miraba a don Severiano con impotencia. Mientras el viejo mantenía sus peludas manos encima de las nalgas de Cielo Riveros quien no sabía qué hacer para poder desembarazarse de aquella incómoda posición, a la vez que sentía como este se las acariciaba y por momentos también se las apretaba, ella solo intentaba de alguna forma separarse y alejarse de él tímidamente pues sabía que no debía hacerlo enojar, ya que Rodrigo le había narrado de las brutales palizas que este odioso hombre le daba a su madre cuando ella no hacia las cosas tal cual como él las ordenaba, fue hasta ese momento que hábilmente don Severiano corrió a un lado aquel diminuto calzoncito e intento introducir uno de sus dedos en el apretado ano de la tierna adolescente.
Cielo Riveros en forma despavorida al sentir aquel dedo intruso hurgar en su orificio posterior como pudo se deshizo de los brazos del vejete, pero sin opción de escapar, la puerta de la habitación estaba a las espaldas del viejo, este se interponía entre ella y su única vía de escape, levanto su carita para quedar mirando con esos hermosos ojos verdes directamente a la tosca cara con bigotes de aquel aprovechador y caliente hombre, estaba horrorizada, no sabía cómo escapar de aquel viejo asqueroso, pero más grande fue su desesperación al ver que don Severiano estaba sobándose la verga con una con una malsana sonrisa en su cara, durante un instante hubo silencio absoluto en la habitación hasta que fue interrumpido bruscamente por las palabras del padrastro de su novio,
--Bien putita ya no hay más tiempo que perder, don Severiano le hablaba con cara de pervertido mientras la recorría de pies a cabeza como si se la estuviera comiendo con su caliente mirada de violador recién salido de una cárcel, su respiración ya era acelerada, y sus ojos se le había resquebrajado y enrojecido, --Aprovechemos que ahora no está mi mujer en la casa y que tampoco está el imbécil de su hijo, jajajaja, nos vamos a dedicar a culear como dos perros calientes, jajajaja.
En ese mismo momento la petrificada Cielo Riveros presenciaba como el caliente de su casi suegro se bajaba el cierre de su pantalón y sacaba su miembro erecto para que ella pudiera vérselo nuevamente, la colegiala que estaba absorta en una esquina de la recamara quedó impresionada pero al mismo tiempo intimidada, pues la verga de aquel viejo otra vez se veía enorme, la joven miraba como aquella descomunal tranca no solo era gruesa y venosa, sino que también era bastante larga y encorvada hacia arriba, la veía pulsar agitadamente dando la impresión que aquella tremenda cosa tenia pulmones propios y respiraba agitadamente, sus ojitos se trasladaron a una frondosa maraña de pelos negros en la base de esta, ahora sí que la veía con total nitidez y no en la oscuridad como había sido la vez anterior, la nena se percataba también que esa aterradora verga además de tener una tremenda cabeza gorda también la tenía muy morada, todo eso que estaba presenciando eran una conjunción que sencillamente la horrorizaban, pues sabía que las intenciones de don Severiano eran culearsela lo más que pudiera hasta descargar todo su hirviente semen completamente adentro de ella.
Estando Cielo Riveros en total estado de conmoción por lo que le iba a pasar y extrañamente estando también casi hipnotizada por las demenciales medidas de aquella aparatosa verga que más se parecía a la de un animal que a la de un hombre normal, sintió que fue tomada por un brazo y que su próximo violador ya la arrastraba hacia el lecho matrimonial,
--No don Severianooo… por favor… no me lleve a la camaaaa!!!, exclamaba penosamente la chamaca y forcejeando para que don Seve no lograra su caliente cometido, la chica en su desesperación admitía que si bien la vergota del viejo era alucinante para ella, estaba casi segura que esta no le cabria ni por la boca, menos por sus otros dos orificios se decía para sus adentros en forma agobiada, lo que la llevo a oponer una férrea resistencia con tal de impedir que el aprovechador padrastro de su novio se la cogiera, sin embargo entre medio de jadeos, pataleos y empellones no fueron suficientes para que el infeliz viejo cesara en sus lujuriosas intenciones.
Una vez que don Severiano logro arrastrarla hasta el borde de la cama, y viendo lo chillona y problemática que se estaba poniendo la pendeja la tomo violentamente de sus cabellos y con fuerzas le soltó una fuerte cachetada en el rostro, haciendo que la ahora si despavorida hembra cayera encima del lecho amatorio producto del bestial manotazo, ocasionando que la desdichada Cielo Riveros derramara sus primeras lágrimas de esa ardiente sesión de sexo que ya se aproximaba, en donde ella y su cuerpo nuevamente se adjudicarían el protagonismo principal.
El viejo a sabiendas que con su brutal tratamiento había acallado e intimidado a la chica, aprovecho para terminar de sacarse la ropa dejando al descubierto un cuerpo ancho y obeso cubierto completamente por un enjambre de pelos negros, gruesos y crespos, que estos se iban pronunciando y espesando a medida que se acercaban a la verga totalmente parada y ya casi rugiendo por meterse en las jóvenes carnes vaginales que al parecer esta ya había olido, para luego su bestial dueño simplemente echarse sobre la cama a tomar lo que prácticamente ya era de él.
Bruscamente tomo a la chica que estaba estirada en la cama sollozando con una de sus manitas en la parte de la cara en donde había recibido el tortazo y simplemente la atrajo contra su cuerpo, para nuevamente comenzar a manosearla, Cielo Riveros entre sollozos intento una vez más hacer que don Severiano no se la violara,
--Don Severiano… snifff… por favor no me lo vaya a hacer… sniffssss… yo soy la novia de su hijastro, snifffssss, con esto la nena pensó erróneamente que quizás el viejo se la pensaría, pero lo único que logro fue complicar aún más su situación, ya que a don Seve era eso lo que precisamente más lo calentaban, cogerse a la novia de su hijastro era como ganarse el mayor de los trofeos, con esto pensaba que si el chamaco lograba casarse algún día con la joven, seria gratificante para su ego y virilidad saber que él también se había cogido a la misma hembra incluso primero que él, así que la tomo nuevamente pero ahora por las piernas, le subió el vestido hasta la cintura como si la chica fuera de su total propiedad y le sencillamente separo sus muslos con poderío, logrando con esto que a su ardiente mirada quedara en los diminutos calzoncitos blancos que la joven llevaba puestos, mientras ella seguía llorando y suplicando que por favor no se lo hicieran, don Severiano ya claramente enfurecido y caliente hasta la locura le dijo,
--Silencio putaaaaa!!!, yo no te hice venir hasta mi casa para esto!!!, zorra calienteeee!!!!, te callas ahorita mismo o te muelo a bofetadas y a patadas, así que mejor disfrútaloooo!!!, jajajaja!!!! Te aseguro que Rodriguito es un maldito maricon que jamás te culeara como yo lo voy a hacer hoy día, jajajaja!!!!!
Una vez dicho esto último el semental italiano soltó las relucientes piernotas descalzas de Cielo Riveros , la nena ya no hizo nada por volver a juntarlas ya que si lo hacía sabía que el vejete no dudaría en pegarle nuevamente, don Severiano que no dejaba de escuchar como la chica se deshacía en sollozos, hizo caso nulo a lo que claramente eran suplicas por parte de ella para que el desistiera de sus insanas pretensiones, y tomando la diminuta tanga de la chica con sus dos manos la rompió hasta deshacerse de esta dejando al descubierto la ahora desnuda vagina de la colegiala, sin ningún tipo de pudor el viejo poso su desequilibrada mirada en la tierna panocha casi despoblada de pelos, y estando claramente caliente, no dudo en terminar de desnudarla bajándole el vestido por completo y luego hacer lo mismo con su brassier, hasta que por fin la tuvo como él quería… totalmente desnuda.
Don Severiano como pudo se la acomodó poniéndola en la cama de costado para el ubicarse por detrás de ella, la jovencita totalmente temerosa solo se estaba dejando hacer para que no la fueran a zurrar como le habían amenazado.
El caliente vejete a continuación paseo sus manos por su estrecha cintura sintiendo la suavidad enloquecedora de esa juvenil y tersa piel, para luego con sus temblorosas manazas comenzar a recorrerla lentamente por su estómago, para luego ir subiéndolas poco a poco hasta llegar a sus femeninas y colosales tetasas recién terminadas en desarrollo, las comenzó a manosear desde su nacimiento recorriéndolas en su totalidad, experimentando y corroborando la dureza de estas tal como él se las había imaginado.
Mientras se las apretaba pero sin llegar a hacerle daño sus lujuriosos ojos no cesaban en ir recorriendo su cuerpo y devorándosela en forma anticipada, las sedosidades que sus toscas manos estaban experimentando en los juveniles senos de la chamaca amenazaban con hacerlo perder la razón, sus manos, sus ojos y su mente se estaban llenando y saciando de hembra, el viejo ya apoyaba su envarada verga sobre las nalgotas de la nena para comenzar a puntearla poniendo sumo cuidado en no metérsela, quería estar jugando y manoseándola hasta sentirse pleno y satisfecho de tanta carne joven, pero si se empeñaba en que la bella chamaca sintiera y se diera cuenta de la tan dura que la tenía gracias a ella, los movimientos que hacia el viejo eran tan enérgicos que ya daba la impresión de como si verdaderamente ya se la estuviese culeando, las suavidades de aquella monumental jovencita lo hacían sentirse en el paraíso.
Cielo Riveros por su parte aguantaba el magreo lo que mejor podía, pero el solo sentir esa infernal barra caliente que le estaban frotando al medio de sus nalgas hicieron que su presión sanguínea se acelerara y comenzara a respirar en forma pesada, solo se mantenía con sus ojitos cerrados, e inconscientemente ya se mordía su labio inferior como si de verdad ya le estuviera gustando todo lo que le estaba haciendo el padrastro de su novio.
--Te gastas las medias tetas pendeja!, te las voy a chupar hasta dejártelas desinfladas cabrona!! , ya verás lo rico que lo vamos a pasar, jejejeje, le decía y reía el vejete quien ya había comenzado a comerle la oreja que tenía a su disposición, produciéndole a la nena una gratificante oleada de ricos escalofríos que le estaban enervando los sentidos, don Severiano a estas alturas ya le amasaba las tetas casi con devoción, esa atractiva chamaca era toda una Diosa se decía para sus adentros, por lo que comenzó a puntearla con más ímpetu y vigor, quería calentarla a como dé lugar, Cielo Riveros ya presentía lo que ocurriría si al vejete se le ocurría darla vuelta y que le diera por chuparle las tetas, por lo que quiso ponerle atajo a lo que su cuerpo ya estaba comenzando a reclamar, si es que podía a estas alturas,
--Noo... Noo... don Seve… ria… nooo! Ya de… je… meee!! por fa… vor!!! Le decía casi en balbuceos,
--Como que no mamacitaaa… si el otro día bien que no me hiciste problemas y se notaba que te la estabas pasando tan bien como yo… así que por que no te dejas de tus webadas y empiezas con las puterias que a ti tanto te gustan, jejeje, le dijo el viejo quien a la misma vez ahora arreciaba más firmemente con sus punteos de verga, como así mismo aspiraba y llenaba sus pulmones con el fresco aroma a cabello recién lavado que la joven le otorgaba a sus fauces de lobo feroz.
Don Severiano estaba en el séptimo cielo, acariciaba a la nena a manos llenas y en forma lujuriosamente desesperada, no había parte del cuerpo de su joven compañera de cama que el ya no haya explorado, aunque a su vagina la estaba dejando para uso exclusivo de su verga, mientras le chupaba y lamia su oreja este se extrañaba que de a ratos sus manos experimentaban la piel erizada de la chamaca quien se encontraba disfrutando de unos desquiciantes escalofríos a la misma vez que ella ya movía su cabeza en forma circular y buscando con su oído ensalivado la experta lengua que por segunda vez la estaban haciendo perder la razón, el vejete al caer en cuenta de esto supo al instante que desde aquí en adelante quizás la cosa se pondría mas sabrosona, rápidamente tomo una de las blancas manitas de la jovencita y la llevo para que le agarrara su pulsante barra de carne caliente, la colegiala solo cerro sus ojos e inclino su cabeza hacia atrás, para comenzar a tantear casi con delicadeza esa gruesa y caliente estaca de carne llena de nervios que por más que intento en recorrerla o circundarla no lo pudo lograr.
--Ay don Seve… por favor… no... no... no por favor... no me haga esto… déjeme… déjemeeee... decía la caliente pendeja sin ser capaz de soltarle la verga al viejo y ya siendo ella misma quien empujaba su trasero hacia atrás, su respiración ya acusaba el lamentable estado de semi-excitacion en cual se encontraba, el astuto viejo atento a la jugada como pudo la dio vuelta quedando de frente a ella.
La aterrorizada colegiala el verse y sentirse ya en las manos de aquel sátiro y bestial hombre rogaba a Dios para que a este no se le fuera a ocurrir chuparle las tetas ya que el resultado por parte de ella seria excitantemente catastrófico para ella.
La lengua y los labios del viejo que en esos momentos lamian las perfumadas carnes del cuello y hombro de la chica se fueron desplazando hasta llegar y colarse al interior de la deliciosa y fresca boca de Cielo Riveros , prácticamente se la estaba devorando bucalmente, mientras de la misma forma el viejo continuaba con sus morbosos manoseos, fue bajando con estas hasta que la agarro nuevamente por la nalgas y la atrajo hacia el para qué sintiera como su virilidad se comprimía con las suavidades de su vientre, mientras su experimentada lengua tras saciarse de las salivas de la nena ahora otra vez recorrían el femenino cuello de la chamaca otorgándole mares de escalofríos que se acentuaban por los exquisitos cosquilleos que también aportaba el espeso bigote, para luego ir bajando a sus inflamadas tetas que al parecer ya también reclamaban ser succionadas, el vejete sin pensársela dos veces comenzó a chupárselas con ahínco, logrando con esto que la joven tuviera unos excitantes estremecimientos que ya la tenían al borde de la rendición total, su panocha ya era un manantial de líquidos vaginales, así también lo demostraba ella con su respiración acelerada,
--Ahhhhhh, ya… dé… je… me don… Se… ve… ria… nooo... por fa… vor!! Gemía la nena con sus ojos cerrados y respirando aceleradamente, una invasivo estado de excitación se había apoderado de todo su cuerpo.
Don Severiano no hacía caso a las solicitudes de la tierna hembra solo se daba a seguir comiéndole las tetas, estaba seguro que si la chica ya una vez hasta se había arrodillado ante el por sentirse caliente, en esta nueva ocasión no tenía por qué ser diferente, así que sencillamente solo se daba a seguir succionándole los melones, como si de verdad fuera a conseguir sacarle leche de las tetas, a la vez que se sentía en la gloria al estar en tales condiciones con tan estupenda chamaca, sabía que a esas horas su hijastro aun debía estar en la terminal lo que le daba el tiempo suficiente que para cuando este llegara de regreso el mismo ya estaría disfrutando de su novia.
Mientras el vejete estaba en estas malvadas cavilaciones, la nena ya casi se retorcía al sentir esas ricas sensaciones que su cuerpo ya le reclamaba en apaciguar.
--Por favor don Seve... ya no... no... no por favor... ya déjeme… déjeme… le pedía la nenota que en su mente ya casi no existían Rodrigo ni don Pedro, ni nadie, solo era ella y esa tremenda verga resbalosa que tenía adosada en su estómago el cual estaba totalmente bañado en las lubricas exudaciones que salían desde la punta de esta.
--Ahhhh que sabrosa eres chamacaaa, aun no entiendo porque al estúpido de tu novio se le ocurrió salir con otra pendeja y no contigo como habían quedado, le decía el viejo en sus mismas narices, la chica al escuchar lo que le estaba diciendo don Severiano, casi la hacen volver a la realidad pero justo en el momento en que le iba a decir que ella no le creía nada este aprovecho para nuevamente comenzar a besarla asquerosamente en la boca.
El viejo una vez que se separó del asqueroso e intenso beso con lengua, la vio quedarse con sus ojos cerrados y con su carita de lado, como si de verdad ella estuviera esperando a que le hicieran cualquier cosa, pero la verdad era que en la mente de la nena estaban las palabras de su casi suegro, seria verdad eso que le estaba diciendo el viejo sobre Rodrigo?, estimo que solo eran falacias de este para que ella se le entregara, pero estaba sintiendo tan rico que en la otra parte de su mente en donde había una Cielo Riveros en miniatura vestida de diablita esta le ordenaba que se agarrara de aquella mentira para ella justificar sus ímpetus y ponerse a culiar con el padrastro de este, el afortunado viejo por su parte no dejaba de chupetearle esas tremendas montañas de carne, una vez que se dio por satisfecho al menos por ahora, se separó de ellas para volver con sus salidas palabrotas,
--Vamos putitaaa… de verdad que no quiero violarte… porque no me das mi regalo de cumpleaños que prometiste que me traerías!?, jejejeje…, le decía mientras movía circularmente el tronco de su verga por sobre la casi lampiña pelvis de la chamaca con la intención de que ella entendiera en el acto cual era el tipo de regalo que él estaba reclamando,
--Noooo… no… le… daré… ese… re…ga… looooo!, le respondía la chica entre jadeos, claramente le confirmaba al viejo que ella había entendido muy bien cuál era el obsequio que él tanto quería por parte de parte de ella, pero muy a su pesar el solo pensar en la naturaleza del regalo que le reclamaban le enervaban los sentidos, unas ricas y desquiciantes punzadas se le instalaran en su vagina, sentía una deleitosa corriente eléctrica recorriéndola por todo su cuerpo, don Severiano ya resoplaba como un verdadero cerdo antes de ser degollado, estaba dándose él mismo el mejor regalo de cumpleaños de su vida, mientras no se cansaba de mirarla, ni se imaginaba la inmensa calentura que estaba sintiendo la nena con aquella sórdida solicitud que él le hacía, así que sin esperar más se dio a darle placer al sentido del gusto, acomodo a la complaciente nena de espaldas en la cama y simplemente se dio a separar las piernas de la chica para luego sin darle tiempo a nada enterrar su rostro en la vagina y empezar a chupársela como si de un nutritivo alimento se tratara, Cielo Riveros quien aún algo de cordura le quedaba solo trataba de separarlo empujando tímidamente la cabeza del viejo con sus manos que se enredaban en tieso pelo encrespado que tenía el vejete por cabello, pero aquel hombre estaba como poseído comiéndose y lamiéndole la zorra de la chica.
La nena sentía como don Severiano intentaba introducir la lengua adentro de su vagina, su cuerpo o más bien dicho su coñito desde hace rato que había comenzado a lubricarse y dejaba salir jugos íntimos de este, mientras ella sentía como aquel lascivo sátiro le mordisqueaba la vagina haciéndola experimentar un desquiciante y gran placer, no le cabía duda alguna que aquel hombre sabía mue bien lo que hacía se decía para sus adentros, pero ella no podía permitir que el viejo se diera cuenta de ello, por tal motivo apretaba con todas sus fuerzas sus mandíbulas y dientes intentando por todos los medio posibles no dejar salir ningún tipo de gemido desde sus labios y boquita.
Tras unos intensos minutos de chupeteos vaginales en donde ya Cielo Riveros según ella había comenzado disimuladamente a menear sus caderas para que su casi suegro no se diera cuenta de lo muy caliente que la tenía, sintió cuando el vejete se separaba de ella, la nena quien hasta ese momento había tenido sus ojos cerrados, los abrió solo para quedarse mirando lo que para ella sería una espeluznante experiencia, el viejo había dejado de chuparle la zorra y ahora estaba hincado en la cama sujetando con una mano su gorda y descomunal verga apuntando directo a la entrada de su panochita, Cielo Riveros quien miraba totalmente escandalizada apoyándose con sus codos en la cama, vio como don Severiano junto con apuntar su animalesca cosota a sus cerrados labios vaginales, este también se acomodaba sobre su cuerpo haciéndola que nuevamente ella quedara tendida, y justo en el momento en que ella le pediría que por favor no se lo hiciera el aprovechador viejo con sus enmarañados pelos de la cabeza enterrados en las fragancias de su cuello de una sola embestida le enterró hasta la mitad de su verga caballuna en su aun apretada vagina, la nena grito despavorida,
--Nooooooo!!, Agggggggyyyyyyyy!!!
El vejete con su bocota abierta y con su cara desfigurada por el infinito placer que sintió al verse clavado en las cálidas carnes de la joven solo se quedó estático y enterrado a medias sobre el adolorido y flagelado cuerpo de la chamaca, luego de varios segundos y después de meter sus manazas por debajo de los suaves hombros de la nena para afianzársela mejor empezó con un lento mete y saca, la chica quien se retorcía de un lacerante dolor en su vagina solo se aferraba a las anchas y peludos espaldas de su casi suegro, no porque lo estuviera disfrutando como lo pensaría cualquiera quien los mirara, pero era una forma de quizás hacer más llevadera su traumática experiencia, el viejo por cada embestida trataba de hacer llegar más al fondo su gruesa y envarada verga, aquella tranca era muy gruesa y larga para la chica que a pesar de estar completamente mojada sentía como esa verga casi satánica le entraba y salía una y otra vez, cada vez más profundo causándole puro sufrimiento, ella solo decía,
--Deténgase, sniffssss espereeee, Auchhhh!!!! No tan adentro por favor, me dueleeee, deténgaseeee… su cosa es muy grandeee… nunca me cabra enteraaaa!!, snifssss… auhchsssss!!!, le decía entre exclamaciones y lloriqueos.
Pero el vejete estaba perdido en los mares de la lujuria, por fin se la estaba culeando como en tantas ocasiones la había imaginado y hasta soñado, aquella zorrita que aún mantenía ensartada casi a medias y con sus relucientes muslos bien abiertos era la más ajustada que había probado en toda su vida, el placer que estaba experimentando era incomparable, mientras seguía con su intenso mete y saca sus ojos ya estaban casi en blanco, pero lo que le molestaba era que a pesar de las fuerzas con las que la estaba espoloneando, una buena parte de su verga y que era la más gruesa de esta por ser la de la base aún no se la lograba deslizar hacia el interior de la vagina de la monumental chamaca que se estaba violando, y al escuchar los quejumbrosos reclamos que le hacia su compañera de coito solo se dio a decirle justo al frente de su cara,
--Uffffff!, que bien me la aprietas chamaca, tu solo aguanta ya verás que saldrás comiéndotela toda, jajajajaja!!, que rica la tienes putaaaa!!!!, Ese pendejo del Rodrigo ni se imagina lo que es estar aquí dentro tuyo, jajajaja!!!!!
--Nooooo don Seveeee, saquelaaaa…!! no seré capaz de comermelaaaa!!! Ayyyyyyy dueleeeee!!!!, Cielo Riveros sin ni siquiera poner atención en lo que el viejo le decía sobre su novio, solo respondía en el mismo dialecto del vejete, con el solo afán de que este entendiera de una lo que ella le pedía,
--Jajajajaja… estás loca si piensas que te la voy a sacar zorra asquerosaaa!!… mi esposa es mucho más menudita que tú y me la aguanta todita, jajajaja!!!, porque crees que le pego todo lo que quiero y no reclama nada…!? Es porque le encanta comerse mi verga pendeja, jajajaja!!!! Y a estas alturas no podría vivir sin ella, lo mismo que te pasara a ti cuando termines de probármela completa, jajajajaja!!!!!
Al terminar de decirle esto último el abusador vejete tomo con sus dos manos una de las tetas de la joven y bajo su greñuda cabezota para poder chupárselas en forma alternada.
Así estuvieron un buen rato lo cual fue una tortuosa eternidad para la pobre Cielo Riveros , quien sentía como el viejo por cada minuto que pasaba la bombeaba con más frenesí junto con aguantarle sus asquerosos besuqueos con lengua, pero don Severiano a pesar del intenso placer que estaba sintiendo se exasperaba al darse cuenta que la nena aun no podía comerle la verga en su totalidad, por lo que muy enojado se levantó y retiro su miembro brilloso y goteante de los líquidos de ambos, y tomando aire con solo una de sus fosas nasales le mando un asqueroso escupo con flemas incluidas el cual impacto impecablemente justo al medio de la vagina que se negaba a albergarlo en forma completa, para luego de eso volver a posar su armatoste en la lubricada entrada intima de la chica, tomo fuerzas y con su cara en señal de concentración de una sola y bestial arremetida el toro italiano se dejó caer sobre ella y le metió toda su verga en forma perfecta a la ya atravesada hembra, que empezó a bufar como si la estuviesen matando en el momento que sintió el feroz empalamiento.
--Ayyyyyyyy!!!!!, no don Seveeeeeeee!!!!! Me va a matarrrrrr!!!!! Me mueroooo!!!!, me mueroooooo!!!!!, gritaba la nena con su carita desfigurada por el lacerante dolor que estaba sintiendo en su vagina, se imaginaba que estaba siendo brutalmente empalada por su verdugo en el sótano de algún castillo del medievo en plena Edad Media.
En resumidas cuentas Cielo Riveros se acababa de comer los casi 23 centímetros de carne que le habían logrado meter, entre gritos y alaridos de dolor pensaba que no saldría con vida, su mente estaba en el limbo ya que a pesar de las inmensas ganas que sentía de patalear con sus piernas para aplacar la dolorosa estocada que le habían puesto apenas las podía mover, en su mente se imaginaba que la tenían ensartada tal cual como se ensarta a una mariposa en un muestrario, y que sus doloridos muslos doblados y abiertos eran las alas del insecto pinchado con la aguja intentando escapar de su calvario, y ella misma era el bichito que don Severiano acababa de ensartar con su terrible y ardiente aguijón de carne.
Pero como ya era costumbre en cada ocasión en que se la violaban ninguno de los viejos le hacía caso en sus angustiantes suplicas, y en este tampoco habría excepción, don Severiano casi enloquecido por el logro cometido comenzó con un rítmico mete y saca, mientras ella se aferraba casi con desesperación a su pecho, el viejo la tenía bien ensartada y ya no había vuelta atrás, gradualmente comenzó a acelerar la velocidad de las clavadas, para el vejete ahora todo era gozar, gozar y gozar, para luego de eso volver a gozar.
--Pare don Seveeee!... snifffsss… me dueleee!!, me duele… sniffssss muchooooo!!! No le siga por favorrrr!!!, Snifssss!!!, vistosos ríos de lágrimas corrían por la carita de la tierna colegiala de 18 añitos, quien no paraba de preguntarse porque a ella le ocurrían este tipo de cosas siendo que ella siempre intentaba de ser una niña muy bien portada y atenta con las personas que necesitaran de ella, en su mente tenia las imágenes de su buena madre, de don Benito y la de su amado Rodrigo, entre sollozos y en su interior les pedía perdón a todos ellos por haber permitido que la arrastraran a la horrorosa situación en que nuevamente otro abusador y vil viejo mancillaba su cuerpo a su total antojo .
Mientras todo lo anterior atacaban al conmocionado temperamento de la escultural y violada jovencita el viejo Severiano solo se dejaba caer sobre ella notando como cedían sus carnes vaginales permitiéndole su ingreso en forma triunfante y victoriosa ante su tan terrible invasión vergal.
Cielo Riveros seguía lanzando gritos aterradores, a la vez que lloraba tratando de soportar aquel agudo dolor que le subía por las piernas.
Don Severiano ahora penetraba por completo dentro de ella hasta notar como sus testículos golpeaban contra las nalgas de la nena, disfrutaba sintiendo como aquel estrecho y tibio conducto femenino le acogía en su recóndito interior, así mismo también veía como la desesperada chica arañaba con fuerzas las sábanas moviendo su cabeza de un lado a otro por cada estocada que él le mandaba, extrañamente también notaba como ella se acomodaba ante las fuertes embestidas que cada vez le propinaban con más fuerzas.
El viejo había tomado una velocidad de locomotora en el interior de la deliciosa cavidad entrando y saliendo una y otra vez, la jovencita seguía llorando mientras lo miraba con semblante atemorizado, hasta que con tanto magreo y ya después de unos 20 minutos de la colosal follada que le estaban plantando el intenso dolor de carnes nuevamente desgarradas poco apoco estaban dando paso a las primeras sensaciones de éxtasis de la despampanante colegiala.
El vivo recuerdo de su violación al interior de una oficina con cama de aquel horrendo taller mecánico en el cual otro salvaje y temible hombre como lo era el mismito don Pedro y que en donde la habían convertido en mujer hicieron que ella rememorara que una vez aguantado esos intensos dolores, estos habían dado paso a un placer infinito, a su mente llegaban también sus otros dos enculamientos, a manos del amorfo auxiliar de su colegio y del maestro Tulio, la jovencita no se dio cuenta que entre estocada, arremetidas y agasajamientos que ahora le mandaba el padrastro de su novio, de sus labios ya comenzaban tímidamente a salir los primeros gemidos de un puro y genuino placer que ya se comenzaba a empoderar de su acalorado sistema neurológico.
El vejete percatándose en el acto de esta situación comenzó a moverse más rápidamente, a la vez que le preguntaba,
--Jajajajaja, ya vez puta, yo sabía que al final te iba salir gustando, la adolorida chica solo lo miraba con sus hermosos ojos verdes semi cerrados, los ríos de lágrimas ya estaban casi secos, su carita estaba coloradita, y en su frente y por los lados de su perfecta nariz ya se veían enloquecedoras gotitas de sudor que se le iban acumulando por efecto de la tremenda culeada que le estaban poniendo, sin mencionar que desde ese mismo momento la atractiva nena ya había comenzado a menearle sus caderas, al mismo compas en que le metían la verga, con el solo objetivo de hacerle más fácil el trabajo al macho que tan bien la estaba poseyendo.
El viejo no se cansaba de observar a la cautivadora hembra que se estaba follando, esos ojos verdes le fascinaban, su esbelta figura lo tenían culiandola como un verdadero poseído, sentía como sus duras tetas se comprimían contra su pecho, el solo sentirlas como si estas fueran a reventar en cualquier momento lo calentaban hasta la locura, todo en ella era una viciosa invitación al sexo desenfrenado y sin límites. Pero él quería corroborar que la chica ya estaba entregada, así que continuó con sus salidas palabrotas,
--Te estas moviendo riquísimo pendejaaaa… y ahora que me dices, tú zorrita es el regalo de cumpleaños que tanto había esperado?, jejejeje…
La chica que no sabe que contestar solo cerro sus ojos y ya no teniendo nada más que aparentar se abrazó apasionadamente el cuello de su casi suegro, enarco su espalda y comenzó a mover su cintura de atrás para adelante como si su vida dependiera de aquella fantástica follada, sin nombrar los aportes y a alientos que le empezó a dar al viejo para que se la culiara de la forma que él lo estimara conveniente,
--Ahhhhh… Papiiiii… qué ricoooo!!! Le dijo a la misma vez que sentía como sus pezones se endurecían al contacto y roce con los gruesos pelos negros del pecho de su amante. --Ahhh!!! … asiiii… don Seveeee… me entro todaaaa… culiemeee… culiemeee todo lo que usted quieraaaaa!!!, le decía a la misma vez que encogía mas sus muslos para que la penetración fuera más profunda.
--Entonces putaaaa… me la regalassss!!??, me regalas tu zorraaaaa!!!???, don Severiano quería sacarle de sus labios el lujurioso obsequio del cual él quería ser dueño absoluto...
--Si papi… es tuya… se la regalo solo para Usteddddd…!!! Yo también me la puedo con su vergaaaa!!!! Ahhhh que ricoooo…!! Que rico me culiasss!!!... es solo tuya mi rey!!!! Ahhhhhyyyy!!!!
Con solo ella misma pronunciar aquellas sórdidas palabrotas en donde le estaba regalando su femenina intimidad a don Severiano, la caliente chamaca ya no aguanto más y desde sus intimas entrañas fluyeron una buena cantidad de jugos vaginales que bañaron la gruesa verga de don Severiano que seguía trepanando su vagina en forma infernalmente desquiciante.
--jajajaja gracias putaaaa!!, pues tu zorraaaa también esta ricaaaa… esta tan buena que merece ser siempre bien cogida por una vergota insaciable como la mía, jajajaja!!!, le dijo este último poniéndole una impecable y profunda estocada que hicieron que la carita de Cielo Riveros se descompusiera entre dolor y éxtasis, acompañado por un deleitoso quejido de aguante por parte de ella,

--Arrrrrrrggggggggg!!!! Broto el erótico gemido desde sus labios a la misma vez que le decía al vejete, --Don Seveeee… me encanta como me cogeee!!! Quiero que me coja por toda la mañanaaaaa!! Ohhhhh uffffff que bien me la clava por Diosssss!!! Ahhhhhyyyyyyyy!!!!!
El viejo sentía que estaba en el paraíso, a su edad y con una hembra mucho más joven que él, bella, caliente y lujuriosa, gimiendo y hasta suplicando que no deje de penetrarla y culearla, y que para rematarla era la novia de su hijastro, por ahora ni recordaba lo del asunto del video en que la tenía follando con otro viejo que la triplicaba en edad, todos estos ardientes pensamientos lo llevaron a redoblar las fuerzas de sus embates, estaba dispuesto a dar su vida en aquella épica y legendaria culeada que le estaba asestando a tan suculenta chamaca.
Cielo Riveros tan caliente como el mismo vejete notaba el heroico empeño que le estaba poniendo este en la follada, lo vio jadeando sobre sus cuerpo mientras le metía la verga, por lo que se dio a estudiarlo, le analizaba casi con deseo sus enmarañados pelos ondulados y canosos, su mofletuda cara que por lo general era de enojo ahora la tenía bañada en sudor y con sus ojos cerrados en una extraña expresión de concentración mientras se meneaba sobre su cuerpo, y su tupido bigote que pretendía ser italiano este ahora se movía al mismo ritmo de sus bufidos de placer por cada apuntalamiento que le mandaba con la verga, con toda esto la nena no supo por qué pero extrañamente sentía como si don Severiano fuese su real y único dueño, y que ella había nacido solo para él y para su verga, con sus dos blancas manitas lo tomo desde sus cachetes y lo conmino a que la besara, lo que el viejo lo tomo con un morboso entusiasmo comenzando así un asqueroso besuqueo de bocas y lenguas que se buscaban con salvajismo.
Al borde del orgasmo mutuo y bañados en sudor, fue la joven hembra quien se incorporó y como pudo se montó sobre la gran panza peluda de su casi suegro, la vergota que intentaba meterse estaba tan grandota que ella se tuvo que poner de pie sobre la cama, para luego semi inclinarse y ser ella misma quien en forma emocionada tomaba la gruesa estaca para ir bajando sus caderas e ir clavándosela a medida que su vagina se la iba volviendo a tragar centímetro a centímetro, don Severiano lo veía todo desde su posición casi babeando por lo lujuriosa que se había puesto la chamaca, y ya se aprontaba a disfrutar la caliente galopada que la pendeja prometía que le iba a mandar, y en efecto Cielo Riveros una vez acomodada a horcajadas sobre su panza y totalmente empalada sobre la verga que ya estaba a punto de estallar adentro de ella empezó a mover sus caderas en un frenético movimiento circular que hacían estremecer de placer al viejo Severiano, su esbelto cuerpo se veía radiante, su trigueña piel brillaba por el sudor, y sus chichotas se mecían al ritmo de sus lujuriosos movimientos.
(15 minutos antes en la casa de Cielo Riveros )
Rodrigo llevaba casi 10 minutos esperando que alguien le abriera la puerta en la casa de Cielo Riveros , en sus manos llevaba una caja con bombones de chocolate que le había pasado a comprar una vez que dejo a su madre en el bus, en eso sintió que un viejito le hablaba,
--Buenos días joven… le puedo ayudar en algo,
Rodrigo en el acto reconoció la voz de don Benito, no dudo en preguntarle en forma disimulada por la joven…
--Buenas Don… la verdad es que venía a buscar a Cielo Riveros para salir a dar una vuelta…
El jubilado quien no era tonto solo le siguió la corriente al chamaco, ya que él desde hace rato se había dado cuenta que su nieta en reiteradas ocasiones había salido con él, así que le respondió,
--Me pareció haberla visto salir en la mañana temprano… pensé que iba a juntarse contigo… iba muy arreglada…
--Pus yo creo que Usted vio mal jefe… ella me iba a esperar aquí en su casa, pero al parecer se quedó dormida, llegue hace un buen rato y aun no me abre la puerta, justamente ayer perdí mi teléfono y no la puedo llamar… Usted me podría ayudar?
Don Benito quien bien conocía al chamaco y sabía que este no era uno de esos vagos que se la pasaban parados en la esquinas drogándose quiso ser amable y le demostraría que efectivamente la chamaca había salido temprano,
--Esto lo hare solo porque me caes bien y sé que eres un muchacho serio, pero mira, yo tengo llaves en la casa y te puedo apostar que la vi salir temprano, puede que haya ido al colegio a alguna actividad de termino de semestre ya que iba con ropa de calle, además que la vi salir muy apurada.
Cuando don Benito le mostro a Rodrigo que Cielo Riveros realmente no estaba en su casa, el chamaco quedo en un angustiante estado de preocupación, pensaba que para donde habría ido ella si habían quedado de verse en su casa.
Una vez que don Benito cerró la puerta de Cielo Riveros al joven no le quedo más que emprender la retirada, cabizbajo y con la caja de bombones en sus manos se puso en dirección a su hogar pensando en las variantes de donde habría podido ir su novia, determino que se iría a tomar un buen desayuno y luego volvería a ver si es que ella ya estaba de vuelta, pensó que lo más seguro era que Cielo Riveros al ver que él no había llegado a la hora convenida había decidido irse al colegio.
Al cerrar la puerta de entrada de su casa el acongojado muchacho sintió claramente como su padrastro aprovechando que su madre no estaba en el hogar este había traído a otra de sus putas para cogérsela, esto era común en él y no era la primera vez que lo hacía, los bufidos y los sonoros rechinidos que hacían los resortes de la cama hacia ver que la situación era evidente.
El joven muy malhumorado por la desvergonzada acción de su padrastro encendió la televisión a volumen alto estaba decidido a que el viejo se diera cuenta que él había llegado a la casa y así le aguaría la fiesta.
Mientras en la habitación matrimonial Cielo Riveros totalmente bañada en sudor cabalgaba como desesperada a don Severiano, estaba al borde de su mejor orgasmo de la mañana, pero el fuerte zumbido del televisor que venía desde el comedor la desconcentraron y cayó en cuenta que alguien mas estaba en la casa, como pudo fue menguando en sus movimientos para quedar mirando en forma aterrada al viejo que ella misma se había estado follando los últimos 15 minutos,
--Don Seve alguien llego a la casa…, le dijo aun ensartada al máximo y con su carita que nuevamente había adoptado las finas facciones que eran común el ella…
--Si, debe ser tu novio, jejejeje… pero tú no te preocupes él no es capaz de venir hasta aquí… solo sigamos culiando tal como lo estábamos haciendo, le decía el vejete con sus manazas puestas entre sus suaves nalgas y sus caderas,
--Es que me da pena estar haciéndolo con Usted y que el este ahí afuera… le dijo la nena entre susurros que con solo imaginar que su Rodrigo estaba solo a metros de donde ella estaba follando con su padrastro, una inmensas ganas de mover su cintura y revolver la verga del viejo al interior de su estómago se apoderaron de la parte viciosa de su mente…
--Así cosita… sigue moviéndote así mismito, el vejete al notar como la nena a pesar de que su amado estaba al otro lado del muro de donde estaban ellos, ella no podía dejar de menearse, este comenzó a animarla a que siguiera culiando en forma desvergonzada y tal cual como lo estaban haciendo antes que llegara el infortunado chamaco.
Un rato antes de esto último Rodrigo quien con una maliciosa sonrisa noto como su padrastro junto con la puta que estaba aminoraban la follada que se estaban pegando, erróneamente pensó que el viejo se iba a levantar y la iba a botar a la calle tal cual como lo había hecho en otras ocasiones, pero desafortunadamente luego de sentirlos que cuchicheaban entre ellos, los muy desvergonzados comenzaban nuevamente a moverse de la misma forma en que los había escuchado en el momento en que llego a la casa, y viendo que el viejo no iba a parar de follarse a la mujer con la cual estaba acostado simplemente apago la televisión y prefirió irse a su habitación.
--Ves cómo es de maricon!?, ni siquiera se atreve de venir y defender el honor de su propia madre, jajajaja…
Cielo Riveros solamente lo miraba con sus ojos entrecerrados sin dejar de mover sus caderas de atrás para adelante, en donde también hacia exquisitos movimientos circulares cuando ambas pelvis se juntaban, exprimiéndosela y succionándosela con la zorra, sus manitas las tenía apoyada en la blanda panza del vejete, la situación la tenían presa de una insana calentura, el hecho de que su Rodrigo estuviera escuchando como a ella se la culiaba don Severiano la enardecían, y aunque ella lo quisiera no podía dejar de clavarse la gruesa verga que le tenían metida hasta la misma altura de su cintura.
Hasta que su acalorado temperamento exploto y ya sin medir ningún tipo de consecuencia se abandonó a la caliente y morbosa situación, sencillamente se puso a follar como una enajenada.
--Ahhhh… ricooo… papiii!!! Cogemeeee… culiame siempre asiii!!!! El ambiente en la habitación olía intensamente a sexo, el erótico olor a coito, coño mojado y a verga eran envolventes, --Aaaahhh ahhhh… ricooooo! Ricooooooo!!!, la nena clavaba sus uñas en el peludo pecho de su macho, un estremecedor orgasmo se le venía a pasos agigantados, --Me vengooo… me vengooooo paapiii!! Mmmmmggg! Ahhhgg!!!
--Yo también!!! Chiquitaa… te amoooo!!!, le decía don Severiano por decirle cualquier cosa, --Eres divinaaa para follarrrr… putaaaaa!!!, verga y vagina se movían y se raspaban al unísono una contra la otra, hasta que en un momento dado ambas se quedaron pegadas y solo frotándose con desesperación, la verga de don Severiano se vaciaba con 5 eyecciones de espeso semen al interior de la vagina de Cielo Riveros , a la misma vez que la chamaca contraía sus músculos vaginales con la única intención de extraerle hasta la última gota de semen a esa gruesa verga que la tenían hechizada, una vez que todo termino la chamaca simplemente se dejó caer en forma desfalleciente y exhausta sobre el peludo pecho del padrastro de su novio, increíblemente se sintió bien atendida y satisfecha sexualmente tras la bestial cacha que le habían pegado, instintivamente comenzó a llenarle la cara con húmedos y frescos besos que ni ella misma sabia porque se los estaba dando.
Don Severiano sintiéndose tan dichoso como un rey, solamente la abrazo y la acomodo contra su pecho para luego ponerle en conocimiento,
--Culias exquisito pendeja, tienes un hermoso cuerpo… eres una delicia de chamaca… desde hoy eres mía… solo mía…, le decía el vejete quien por cada palabrota la apretujaba más contra su pecho, la nena simplemente le asintió con su cabeza preguntándose: y que iba a hacer ahora con Rodrigo?.
Minutos antes del orgasmo de Cielo Riveros y don Severiano, Rodrigo al interior de su habitación se tapaba la cabeza con la almohada con tal de no escuchar las leperadas que gritaba la vulgar prostituta que su padrastro se estaba cogiendo en la misma cama en que también dormía su madre, la ronca voz con la que gritaba la caliente mujer lo exasperaban a tal punto que no se dio cuenta cual fue el momento en que se le había parado la verga, hasta que por fin los escucho que a grito limpio ambos se daban a desfogarse en un orgasmo.
Rápidamente se levantó y fue a instalarse al living a ver televisión, lo único que deseaba en esos momentos era que su padre postizo botara de la casa de una vez por todas a la puta que se había atrevido a traer hasta el hogar en ausencia de su santa madre.
--Como estas pendejo… yo te hacía en la casa de tu noviecita, jajajaja…
Rodrigo vio que su padrastro había salido envuelto en una bata y fumando,
--No le da vergüenza… como se le ocurre meter prostitutas a la casa!?, el chamaco se veía bastante enojado,
--Cállate imbécil!, yo traigo a quien quiero a mi casa, jajajaja, además que la yegua que me acabo de coger está más que rebuenota, jajajaja… deberías hacerte hombre de una vez por todas… por que no entras a la habitación y te la culias?, jajajaja…
--No gracias… yo tengo novia y la respeto… nunca seré como Usted…!!, Rodrigo miraba con ojos de odio a don Severiano,
El viejo italiano solo lo miro de pies a cabeza, con una irónica sonrisa en sus bigotes, hasta que le soltó,
--Jajajajaja…! cada día me convenzo más de lo estúpido e idiota que eres, jajajaja!!!, bien si no quieres culearla es asunto tuyo, pero te aviso que si no aprovechas ahora jamás tendrás la opción de cogerte a una hembra como la que esta acostada desnuda en mi habitación y esperando a que le den verga, jajajaja!!!!
--Usted y esa mujer solo me dan asco… seguro que le cobro bien barato esa ramera…
--Jejejeje… como te empeñas en hacerme reír pendejo, para que sepas que esa putita no cobra nada… solo lo hace gratis, jajajaja!!!! Y esta tan rica para culearla que si me convence los más seguro es que los botare a ustedes dos y me la traeré a vivir conmigo, jajajajaja!!!!
--Pues hágalo si quiere, yo ya me la puedo para trabajar y mantener a mi madre, sepa bien que nosotros no lo necesitamos…
--Pues díselo tú mismo a tu mami, jajajaja… es ella la que nunca ha querido dejarme, jajajaja… Bueno, la cosa es que ahora yo me iré a acostar con mi mujer, dormiremos un rato y luego seguiremos follando así que no te molestes en hacer ruidos, porque ella no se ira de aquí hasta que yo me sienta saciado y satisfecho…
Rodrigo lo vio desaparecer tras la puerta de la habitación matrimonial, sentía unas tremendas ganas de ponerse a llorar, como era posible que su madre por tantos años llevara aguantando a ese sujeto, por lo que apago la televisión y se fue a su habitación, ahora en la casa reinaba el silencio, al parecer su padrastro y su puta estaban descansando.
--Te lo dije como era de maricon… pero tú no me creías… jejejeje,
--Pero no tenía que haberle ofrecido que el viniera y me lo hiciera, le decía una avergonzada Cielo Riveros que estaba tapada con una sábana hasta sus ojos, mientras veía como el vejete se desprendía de la bata y se acostaba desnudo aun lado de ella,
--Yo sabía que no vendría, jejejeje y si lo hubiera hecho solamente le hubieras abierto tus muslos y te aseguro que saldría arrancando y llorando como lo hacen los maricones, jajajaja!!!
Luego de esa conversación y ya estando destapados, abrazados y desnudos, se dieron descansar un rato, es importante señalar que la nena por ahora no tenía la más mínima intención de salirse de la cama de don Severiano.
Rodrigo en el silencio de su habitación y ya estando más tranquilo pensaba que apenas diera la hora en que su novia saliera del colegio, la iría a visitar y le pediría las disculpas por no haberse presentado a la hora que habían convenido, estando en eso, nuevamente a sus oídos llegaban los sonidos que hacia la cama de su padrastro ante los fuertes movimientos que estaban haciendo sobre ella, por lo que al instante dio por hecho que ellos nuevamente lo estaban haciendo, recordó los bramidos que había dado la mujer hace una hora atrás, estaría tan buena como le había dicho el viejo?, increíblemente sintió como nuevamente su verga comenzaba a parársele debido a que los movimientos de los resortes de la cama cada vez eran más escandalosos, sin pensársela más se puso de pie y como un verdadero boina negra se dio a la tarea de ir a espiarlos por el rabillo de la puerta que daba a la habitación matrimonial.
Por cada paso que daba acercándose a la puerta de la alcoba sentía su corazón latiéndole a mil por hora debido al morbo de ver el mismo que tal estaba la puta que su padrastro se estaba cogiendo, ya escuchaba claramente los gemidos y jodeos de cuerpos que provenían desde el interior de la habitación, con mucho cuidado se agacho a un lado de la puerta y puso su ojo por el hoyito que había en la chapa hasta que los vio: estaban ambos desnudos en la cama matrimonial, veía que el viejo estaba encima de ella quien lo recibía con las piernas bien abiertas, por más que buscaba el ángulo no podía verle la cara, admitía que la mujer debía tener muy buen físico ya que los muslos que él veía abiertos de par en par eran espectaculares y muy bien formados, la puta en esos momentos estaba recibiendo unas tremendas embestidas que le propinaba la vergota de su padrastro, ensartándola con poderío, vio que ella lo mantenía abrazado y que tiernamente le acariciaba las espaldas con unas muy delicadas uñas, a la vez que escuchaba claramente como ella se quejaba de dolor y placer al mismo tiempo, ya que sus gemidos eran algo roncos de como si verdaderamente le doliera lo que le estaban haciendo.
--Ooooohhhhhh… papiiiiiii mas… despacio!!!, que la tiene muy grandota y me dueleee…!!! Aaaahhhhhhhh…!!!!
--Jajajaja, si mi reinaaaaa, pero sé que también te encantaaaa, te gustaaaa… dime te gustaaaaaa?!!!, le decía el viejo por cada empellón que le mandaba,
--Si don Severianoooo… Oooohhh, siii me encantaaaaaa… métamela más para adentrooooo… Ayyyyyy! Ayyyyyyyy!! Ayyyyyyyyy!!!! Ayyyyyyyyyy!!!!, gritaba la chamaca ante cada una de las fieras embestidas que le ponía el vejete.
Rodrigo quien ya se estaba calentando hasta mas no poder al ser único testigo de la bestial follada que se estaban dando al interior de la habitación, no se aguantó más y lentamente bajo el cierre de su pantalón y saco su verga para comenzar a jalársela puesto de rodillas y sin quitar su ojo desde la fisura de la puerta.
--Arrrrrrrrgggggghhhhh, tomaaaa zorraaaaaa!!, Tomaaaaaa!!!, le gritaba el viejo en las mismas narices de Cielo Riveros , para luego seguir bramándole, --Que bien culias putaaaaaa!!, siento lo exquisito de cómo me aprietas la verga con tu zorraaaa, Aaarrrgggghhhhhh!!!!.
--Usted también lo hace muy ricooooooo… don Seveeeee… deme mas no pareeee!!!, Ayyyyyyy!... Ayyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyy!!! Ohhhhhhh!!!! que grandeeee… y que largaaaaaaa se la siento Donnnnnnnn!!!!!
--Eres todo un monumento de mujer ricuraaaa…! no sabes las ganas que te tenía desde la primera vez que te vi…!!!, y justo en el momento en que Cielo Riveros le iba a contestar una guarrada, el vejete la acallo con un asqueroso beso lingüístico, el cual fue recibido por la deseosa boca de la chamaca quien lo acogió abriendo su boquita lo más que pudo para comenzar a besarlo profunda y apasionadamente, sin dejar de recibir los bestiales agasajamientos vergales en su curvilínea anatomía, en donde las feroces estocadas le llegaban hasta el fondo y los más recóndito de sus viseras con ese grueso y largo pedazo de verga que le metían y le metían, sin descanso y sin cesar.
El chamaco se masturbaba como condenado mirando inconscientemente como le culeaban a su novia, veía y escuchaba como su padrastro bufaba y gruñía como un toro ante tal deleite de mujer que se estaba cogiendo, dándole ahora bestiales empujones en donde el choque de cuerpos sudorosos retumbaban por toda la habitación, a Rodrigo lo excitaba ver como esa pobre chava soportaba el tener que recibir en su zorrita semejante pedazo de verga, la cual no paraba de intentar metérsele lo más adentro posible.
El viejo quien no estaba ajeno al caliente estado en que tenía a la pendeja, la veía recibir su verga con sus hermosos ojos verdes entrecerrados y con su lengüita puesta en una de las comisuras de su boquita entreabierta.
Los despiadados apuntalamientos de verga dura y caliente que le asestaban adentro de ella la tenían casi al borde de un inminente orgasmo, por lo que la chamaca ahora gemía y exigía que se la cogieran más fuerte de como ya se lo estaban haciendo,
--Aaaaaahhhhhhhhh!… así papi…!! así mi vidaaaa…!! asi mi amorrrrr…!!! si… siiiii…!!!, por favor dame más duroooo…!!!! Más fuerteeeeee…!!!! Ayyyyyyy…!!!!
Cielo Riveros nuevamente estaba solo a pocos minutos de irse cortada, y Rodrigo miraba toda aquella morbosa situación masturbándose desde atrás de puerta, veía excitado hasta la insania esas furiosas penetraciones que la propinaban a esa caliente y hermosa mujer que se estaban culeando, los veía hacer movimientos rápidos de apareamiento como los de un perro cuando se culea a su perra, y cuando pensó que ya todo acababa vio como la pareja de animales, porque no los podía calificar de otra forma, estos cambiaban de posición quedando la exótica hembra clavada y sentada encima del obeso cuerpo de su padrastro con la tremenda y parada verga incrustada hasta la altura de su mismo ombligo, veía que ella estaba lista y dispuesta para comenzar a galoparlo, lo cual lo hiso casi al instante comenzando a menear sus caderas adelante y atrás, ondulando con su cintura y exprimiendo con su vagina, culeandose ella sola con ese grueso pedazo de verga que le tenían metida.
Rodrigo quien ahora la miraba de espaldas contra él, la veía follar en toda majestuosidad y aun no se la creía, ya que veía que su padrastro se estaba follando a un verdadero bombón de mujer, bastante joven por cierto y que se gastaba un físico espectacular, ese precioso culo con un coqueto lunar en su nalga derecha lo tenían hechizado, que manera de moverse la puta por Dios se decía para sus adentros, determinando que aquella joven prostituta era una verdadera experta en ejercer su trabajo, sus preciosas nalgas comprimían la verga que le ensartaban, desde su posición notaba claramente cómo se bamboleaban esas grandes tetas que se gastaba la muy zorra, las cuales eran chupeteadas por don Severiano en cada oportunidad que podía y que eran muy seguidas.
--Te gusta cómo te culio muñecaaaaa!!!, te vez toda una puta culiandote tu sola, jajajaja!!!
-Siiii… Uyyyyyyyy don Seveeeee...! si me gustaaaaa…!! siiiii… aahhhhhhhhyyyy!!! Resollaba la hembrita clavándose, meneándose y moviendo sus caderas y cintura en forma alucinante, el feliz vejete sentía tan rico que hasta se imaginaba que al interior del vientre de Cielo Riveros había una blanca manita que lo masturbaba rápidamente para que el sintiera más rico con su verga metida adentro…
--Oooohhhh…! que bien te mueves pendejaaaaaa!!, el viejo Severiano como un verdadero poseído se enderezo y se abalanzo sobre el portentoso cuerpo de la chamaca quedando ahora en forma inversa, Rodrigo ahora la veía acostada de espaldas y con su cabeza a los pies de la cama, si no hubiese sido porque el cabello de Cielo Riveros le tapo su rostro el perfectamente la hubiera podido reconocer, pero el chamaco no estaba en andar reconociendo a nadie, él estaba muy caliente viendo la follada que se esteban pegando adentro de la habitación, ahora veía como aquella hermosa mujer nuevamente se abría de muslos a modo de invitación para que su macho le volviera a meter la verga, también a él le llamo la atención esos escasos pelitos negros que aquella nena tenía en su vagina.
Vio como ahora de espaldas nuevamente se la metieron casi al instante una vez que estuvo abierta de muslos, otra colosal cacha se aproximaba, el joven ya no aguantando más mando tres sendos lecherazos los cuales impactaron en la puerta de sus padres, en esos momentos deseaba ser el quien se estaba cogiendo a la puta esa, reconocía que se arrepentía de no haber aceptado en culearla cuando su padrastro se lo propuso, esa mujer estaba para comérsela se decía al tiempo que continuaban sus descargas de prolífica esencia, hasta que por fin todo paso.
Sentado en el suelo, traspirado y con su verga ya fláccida se sintió un idiota por lo que había hecho, adentro de la habitación continuaban los gemidos y las aserruchadas, como pudo se puso de pie y se fue al baño a darse una ducha, se sintió sucio, como pudo haberse excitado con el cuerpo de una puta?, se decía, siendo que él contaba con una novia que era todo lo contrario a esa sucia mujer que la acababa de ver desfogándose con la verga de su padrastro.
En la habitación matrimonial aún continuaba la ardiente follada, el viejo Severiano sudaba como caballo metiéndole verga a la chamaca en la misma posición del misionero que es tan rica, la nena quien solo lo recibía con sus piernas bien abiertas y con cara de enojada estaba sintiendo muy rico, los dedos de sus pies los separaba y los juntaba, los entrecruzaba y los volvía a separar producto de sus ansias en contraer los músculos de su vagina en su único afán de exprimirle la verga a don Severiano, quien este último creía sentir como la jovencita se esmeraba en sorberle la verga con su coño.
Don Severiano no queriendo darle termino a aquella acalorada sesión de sexo desmesurado enderezo su cuerpo para ir retirando su verga desde aquel glorioso cuerpo que el extrañamente acababa de envilecer, la nena preocupada y pensando en que tal vez el viejo ya se había aburrido de estarla culeando, solo lo quedo mirando desde su posición, pero vio que el vejete se ponía de pie a un lado de la cama para luego decirle en 4 patas puta…!!! Ahora te voy a culear como a las perras, jajajajaja!!!!
Cielo Riveros con todo su sedoso cabello negro alborotado y humedecido por la traspiración felinamente movió sus curvas para ir acercándosele a gatas por sobre la cama, cada movimiento que hacia la nena era enloquecedor, el viejo sentía que cualquier momento era el último para su verga, hasta que por fin la vio ponerse tal como él le había dicho a un borde de la cama a la altura perfecta para el culearla a lo perrito, la chica le ubico el culo justo a un lado de donde estaba él para luego inclinar su tronco adosándolo en la cama hasta quedar con sus tetas aplastadas.
La espectacular panorámica que tenía el vejete era de concurso, y sin ya querer esperar más apunto con su verga a la acalorada panocha, con mucho cuidado poso el morado glande en su agujero vaginal, Cielo Riveros quien sintió la punta de carne tomar posesión levanto sus caderas para poder abrir y separar aún más sus piernas, al mismo tiempo que el viejo la tomo de su esbelta y pronunciada cintura para ir presionando lentamente, al mismo tiempo que el vejete la jalaba hacia su apéndice su agradecida vergota comenzó a entrar como si aquella deliciosa y jugosa vagina fuese su propia casa, lo que a su dueño lo hacían gozar placeres nunca antes sentidos.
Don Severiano disfrutaba cada centímetro que con su verga rosaba y abría las paredes interiores de la nena, era delicioso sentir como su tranca nuevamente forzaba aquella núbil vagina a abrirse, se notaba que tenía muy poco uso, pues a pesar de todo lo que el sabia se la sentía muy apretada, en eso a sus oídos nuevamente llegaban los gemidos y las ardientes suplicas de la nuevamente ensartada jovencita,
--Siiiiii…! asiiiiiii…! asiiiiiii…!! Métala mássss…!! mássss…!! másssss…!!! méeetalaaa todaaaaa!!!!!!, en tanto el viejo empujaba, empellía y apuntalaba su apéndice en busca de mayor satisfacción sexual.
Plaffff…!, Plaffff…!! Plaffff…!! Plaffff…!! Plaffff…!!! Plaffff…!!! Retumbaban los feroces choques de nalgas y apéndice, el viejo la apuntalaba con bestialidad, como también a veces aminoraba los embates para ir recorriéndole su subterránea e íntima caverna vaginal como si su verga fuese el mismo Nautilus en plena faena de reconocimiento en aquellos exquisitos y tibios mares de placer que poseía la chamaca en los más profundo de su caliente coño, llegando cada vez más adentro por cada apuntalamiento que le mandaba, la mente del vejete estaba a mil por hora, podía sentir en forma placentera como cada vez profundizaba aún más en el cuerpo de la nena, era una follada enloquecedora como también la mejor cacha que se había pegado en toda su vida.
Cielo Riveros seguía animándolo,
--Uyyyyyyy don Seveeeee que ricooooo!!, que grande se la sientooooo!!!, nunca me lo habían hecho tan ricoooooooo…!!! méeeetalaaaaa…!!! métela mássssss…!!! la quiero todaaaaaaa!!!! Mmmmmmmmmm que ricoooooo papiiiiii!!!... se la siento bien dura y paradaaaaaa!!!!... Muévaseeeee… muévaseee mas fuerteeeee…!!!!! mas firmeeeeee…!!!!! Ohhhhhh… creo me voy cortadaaaaaaa!!!! creo que me estoy viniendoooooooooo!!!!!!
Apenas el vejete noto el lamentable estado erótico de Cielo Riveros , le mando una estocada en la cual intento sacársela por la boca si es que se podía, basto tan solo eso para que la caliente nenota explotara en un tremendo y fantástico orgasmo, sus líquidos vaginales salían a raudales como si la jovencita verdaderamente se estuviera meando, estos salían y escurrían mojándolo todo, su casi suegro ya no se podía aguantar por la calentura con que lo había puesto la chica, así que empezó un estruendoso mete y saca los más rápido y acelerado que le permitían sus fuerzas, se la metía y se la sacaba dejándosela ir hasta el fondo de sus entrañas, Cielo Riveros gritaba y exigía que le dieran más fuerte,
--Asiiii don Severianitooooo!!... métamelaaaaa… metamelaaaaaa toooodaaaa…!!!!! Masssss firmeeeeeee… cojameeeeee máaaaaaas fuerteeee!!!!!
El viejo ya no se pudo aguantar más y enérgicamente se la metió hasta el fondo de su matriz, corriéndose con su verga lo más profundo que pudo en el cuerpo de Cielo Riveros , tres, cinco, y hasta seis vigorosos chorros de caliente y espeso semen explotaron en el caliente e íntimo reducto femenino, el semen lo inundaba todo, como a su vez también se desbordaba desde el interior de su vagina, el viejo experimentaba las contracciones que hacia la nena con su zorrita besándole y succionándole la verga, exprimiéndosela hacia adentro, intentando con esto y si es que era posible, hacer aún más profunda la penetración.
Una vez terminado todo el vejete solo se dejó caer a un lado de ella desmadejado y todo sudado, lentamente fue sacando de su vagina su humeante y espumosa verga aun en estado de erección producto del viagra, como pudo se echó a un lado de ella quien también poco a poco iba recuperando el aliento, vio que la nena se puso de espaldas y abrió sus piernas sin ningún mínimo de pudor, en donde pudo observarla con los muslos completamente separados, de su agrietada vagina aún abierta escurrían una gran cantidad de los líquidos de ambos los cuales formaban un espeso charco blanco y semi trasparente que poco a poco iba siendo absorbido por la sabana.
Ambos amantes sintieron claramente cuando la puerta de la casa se abría y se cerraba, dándose cuenta en el acto que Rodrigo nuevamente había salido, seguramente iba a la casa de su novia para ver si ella ya estaba de regreso, Cielo Riveros y el viejo lo notaron así, hasta que fue don Severiano el primero en hablar,
--Te gusto lo que acabamos de hacer chamaca!?, le dijo por fin una vez que ya notaba que todo volvía a la normalidad,
La desnuda colegiala junto con volver a unir sus piernotas, giro su cuerpo adonde estaba el vejete, y con su carita llena de vergüenza, le dijo,
--Don Severiano… no sé qué es lo que me paso… por favor no se lo vaya a decir a Rodrigo…
--Y que hay con ese pendejo?!!, acaso no te diste cuenta lo muy maricon que es?, jajajaja!!!
--Él no es así como Usted dice… él es un joven muy bueno…
--Yaaaaa… no me interesa estar hablando de ese bueno para nada, jajajaja…, así que descansa un rato que volveremos a coger apenas me recupere, jejejejje
--Don Seve… creo que ya debo irme para mi casa… Rodrigo me debe haber andado buscando por toda la mañana… y ya son casi las tres de la tarde…
--Nooooo!!, no te iras…!!!, tu serás mi mujer hasta mañana, después de eso si quieres te largas, jajajaja, le dijo el vejete en forma terminante,
--La verdad que no puedo quedarme hasta mañana, por favor don Seve solo deje irme,
--Haremos un trato pendeja… para que vayas sabiendo desde hoy día mismo tu pasas a ser algo así como mi novia, jajajaja… la neta que como te lo dije antes… estas muy rica y de verdad que me gustaría que te vinieras a vivir conmigo, así que anda pensando que le inventaras a tu novio para despacharlo, porque yo apenas pueda correrlos de mi casa tú te vienes a vivir conmigo y tendremos muchos hijos, jajajaja!!!!
Cielo Riveros intentando en no pensar en las salidas palabrotas de don Severiano solo respondió,
--Entonces me puedo ir?,
--Por ahora te iras, pero mañana estaré todo el día solo, así que quiero que te vengas tempranito y estaremos todo el día acostados, jajajaja!!!
--Don Seve… es que mañana tengo colegio… hoy ya falte y no podría…
--Me interesa una vergaaaa tu colegio y las putiadas que andabas haciendo para acostarte con ese imbécil!!, así que elige… te vas y vuelves mañana, o te quedas y no te vas hasta mañana en la noche, jajajaja!!!
--Está bien… volveré mañana…
--Jajajaja así me gusta ricura, que sepas quien es tu macho desde hoy, si quieres puedes darte una ducha en ese mueble hay toallas…
Cielo Riveros ya recompuesta, duchada y vestida nuevamente se aprontaba para retirarse de la casa de don Severiano, el viejo la miraba desnudo y sentado mientras se bebía una cerveza y fumaba, aun no se la creía que se había acostado con tan tremenda mujer, y cuando la nena ya se disponía a abandonar su casa, este la atajo,
--No sabes lo que me cuesta dejarte ir lindura, es increíble lo buena que estas y lo muy rica que eres para coger…
La confundida nena quien ya había vuelto a ser ella, solo se ruborizo y no encontraba las palabras adecuadas para responder a tan singulares halagos por parte del padrastro de su novio que lo tenía en frente de ella, desnudo y con su verga tomando fuerzas, el viejo noto el nerviosismo de la chamaca,
--No te preocupas cosita rica, te iras… pero antes quiero que me des una buena mamada a modo de despedida, jejejeje,
--Pero don Seve… yo ya estoy lista para irme… además que Rodrigo debe estar esperándome en mi casa…
--Ya te dije que ese pendejo a mí no me interesa!!, jajaja…!!! así que ahora me chupas la verga antes de irte, el viejo la miraba jalándose la bien parada tranca, a la vez que la veía con su vestido azul bien compuestito, y por Dios que le daban ganas de arrancárselo y volvérsela a coger ahí mismo tirada en el piso del living de su casa…
Cielo Riveros notaba que esa extraña expresión en los ojos del vejete le habían vuelto, y viendo que este en cualquier momento podía cambiar de opinión y se la podría volver a coger quizás hasta que horas solo le respondió,
--Está bien… se la chupare… pero luego me deja ir…
--Jajjajaja…! hecho pendejita rica…!! ven siéntate en este sillón así estarás mas cómoda, jejejeje
La jovencita quien nuevamente estaba invadida por los nervios, tomo femeninamente asiento en uno de los sillones, desde ahí vio como don Severiano quien no se había tomado la molestia de ni siquiera vestirse, le acercaba su verga a la boca, para luego decirle,
--Ya esta dulzura mámame la verga, y no quiero que pares de chupármela hasta que te llene de mocos esa linda boquita de zorra que te gasta, jajaja!!!, vamos apúrate quiero que te la comas toda putaaa!!!, chúpatela hasta mis bolas, y mucho cuidadito con mordérmela, o si no tú ya sabes, jajajaja!!!!
La nena ya no teniendo opción alguna acerco sus labios hasta al aceitoso glande de don Severiano, y muy delicadamente como era ella empezó a tener contacto con sus labios y con la verga, muy lentamente fue abriendo la boca y poco a poco empezó a introducirse el caliente y duro cipote de carne hasta donde pudo, para luego comenzar a rodearlo con su fresca y dulce lengua, pero eso no era suficiente para el abusivo viejo quien como pudo la tomo bruscamente del cabello y empezó a empujarla contra su verga haciendo que esta última le llegara hasta el fondo de su garganta.
Cielo Riveros como pudo se sujetó a las piernas de don Severiano, y sacando fuerzas de coraje aguanto que aquel hombre comenzara a embestirla una y otra vez hasta que él se sintiera satisfecho, la nena sentía como por momentos se asfixiaba por los líquidos que derramaba don Seve adentro de su boca y también por las grandes cantidades de saliva que a ella misma se le formaban, sentía muchas arcadas y unas tremendas ganas de vomitar, de sus mejillas ya caían lagrimas debido a la falta de aire en sus pulmones, hasta que en un momento dado la nena fue tomando ritmo y simplemente ya se la estaba chupando casi con entusiasmo, el viejo no quitaba sus manazas de su cabeza como si fuese el quien maniobraba el ritmo de la mamada.
La nena luego de unos buenos minutos de chupadas y acaloradas succiones se sacó la verga de la boca, el vejete no le dijo nada ya que su nueva mujercita lo tenía en el paraíso del placer, para luego ella solita proceder a pasarse la dura y goteante tranca por toda su linda carita, besando y lamiendo desde el pulsante e hinchado glande, pasando por el tronco venoso y llegar hasta sus testículos los cuales fueron lamidos y lengüeteados por todas partes y por unos buenos minutos, Cielo Riveros notaba como la verga del viejo se envaraba aún más en los momentos en que ella paseaba su lengua por debajo de las bolas, el viejo había subido una de sus piernas al sillón por la tanto la nena podía ver claramente aquellas partes más que intimas que poseía el viejo detrás de sus testículos, y por mas asco que ella sentía al estar pasando su lengua en aquel sector inmundo no podía separarse de ahí, con su corazón latiendo a mil y en forma delicada pero muy envalentonada fue acercando su lengua a aquella parte prohibida para cualquier chica del calibre de ella.
Don Severiano estaba con sus ojos en blanco sintiendo como la chamaca le lamia y le chupaba una y otra vez la parte baja de sus testículos, por su parte Cielo Riveros ya no aguantando mas tanto vicio en los labios simplemente corrió su dulce boquita y sin ni siquiera en que nadie se lo solicitara comenzó a lamerle el culo a don Severiano, que ya estaba que se desmallaba de calentura por lo que le estaba haciendo la novia de su hijastro, la chamaca poseída casi por el demonio no cesaba en las lamidas anales que le estaba dando al viejo, este se había puesto casi en 4 patas en el sillón mientras la chica ahora puesta de rodillas le pajeaba la verga colgante, a la misma vez que lo premiaba con la mejor lamida anal que jamás en su vida le había dado a nadie.
La nena pasaba una y otra vez su lengüita haciendo círculos con la punta de esta, para de a ratos separarse y volver a abrir su labios y llevarlos hacia el peludo ojete que se estaba comiendo, hasta daba la impresión de que ella lo hacía hasta casi con agrado, ya que en veces mantenía sus labios abiertos y bien pegados en toda aquella zona en donde lo único que se movía era su lengua y sus mejillas que hacían movimientos de succión, en fin Cielo Riveros estuvo varios minutos pasando su lengua y sus labios por todo el orto del viejo quien se estremecía por cada contacto bucal que hacía la chica con su circunferencia posterior.
Hasta que nuevamente la depravada mente de Cielo Riveros la hacían volver a ocuparse de los testículos y de la verga del viejo, comenzando a mamársela como una endemoniada, casi se la trago de un solo bocado, succionándola con dedicación, para luego avanzar un poco más y de otro tarascón termino por tragársela entera, su naricita rozaba con los gruesos pelos crespos de la pelvis del viejo, prácticamente la tenía totalmente embutida en su boca hasta la misma raíz de esta, quedándose así por unos buenos segundos, siendo su único contacto con el vejete la gruesa verga de este dentro del fondo de su cavidad oral, para luego y así mismo sacar como pudo su lengua e intentar lamerle las bolas sin retirar un centímetro de su boca la grotesca verga que se estaba tragando.
El viejo quien ya había vuelto a su posición la miraba a sus hermosos ojos verdes que también lo miraban a él desde abajo, y en deleitosa conmemoración a la reciente lengüeteada anal que le había obsequiado aquella hermosa ninfa de vestido azul, la tomo de su oscura cabellera y se la empezó a follar por su boquita con movimientos firmes y desquiciados, su verga se deslizaba fácil en su cavidad oral, se la ensartaba en lo mas profundo de la faringe, la detenía ahí un momento para luego sacársela a la altura del glande y de nuevo incrustársela hasta el final de su garganta, el feliz vejete casi se infarto ahí mismo cuando vio que la nena había subido su vestido y abierto sus muslos, sencillamente la chamaca se estaba masturbando arrodillada mientras le mamaba la verga, por lo que iracundo de don Severiano comenzó a culearle la boca con más rapidez aun.
Fue en ese momento que al tener su enrojecida y viciosa mirada puesta en la ventana se pudo dar cuanta que a lo lejos venia nuevamente de vuelta su cabizbajo hijastro, situación que lo llevo al desenfreno absoluto,
--Ahora zorraaaaa!!! Estoy a punto de correrme… Oooohhh!!!, ya me vienen los mocos putaaaaa aaaahhhhhhh!!!, aquí te vannnnn!!!!, toma mi semen puta aaaahhhhhhhhh…!!!!!
El primer chorro salió expulsado con fuerza, este fue directo a su garganta en donde Cielo Riveros lo trago sin ningún tipo de asco o inconveniente, otros tres dieron en su paladar, y los siguientes disparos iban llenando la cavidad bucal de la perversa jovencita, y por cada disparo de hirviente y nutritivo semen este iba acompañado de un lujurioso estremecimiento de placer por parte del viejo.
Cielo Riveros con su sensual boquita abierta recibió una sustanciosa y no menor cantidad de los espermios de don Severiano los cuales no dudo en tragárselos en forma golosa y hambrienta, en su vestido azul habían numerosas muestras del líquido blanco y brillante que cayeron desparramados en el instante último de la eyaculación,
--Jajajajaja… te los comiste todos putaaaaa!!!, ya te premiare en otro momento por eso que me hiciste atrás hace un rato, jajaja!!!... ahora levántate y sale por la puerta de atrás, ahí viene tu novio…
La cara de viciosa que tenía la atractiva muchachita en esos momentos desapareció en el acto cuando sus oídos escucharon que Rodrigo venia aproximándose,
--Que es lo que dice!?, le consultaba mientras que con una de sus manitas intentaba quitarse restos de semen que había quedado desperdigados por su barbilla y por su cara,
--Jajajaja… ahí en la esquina viene el maricon de tu novio… así que arranca por la puerta de atrás del patio…, mientras se ´ponía un pantalón deportivo que había traído desde la habitación cuando la nena se había estado bañando, la desequilibrada mente del viejo ya había maquinado una humillación aun mayor para el inocente muchacho --Pero quiero que cuando te des la vuelta hagas como que vienes a visitarlo y lo saludes con un prolongado beso con lengua, jajaja…
--Noooo don Seve…! Usted está loco… yo no hare eso…!!
--Lo harassss!!!, o quieres que te mantenga aquí y le diga que tú eras la puta que estuvo cogiendo conmigo durante toda la mañana, jajajajaja…
Cielo Riveros ya puesta de pie vio que Rodrigo ya estaba muy cerca de la casa, el viejo la tenía sujeta por unos de sus brazos,
--Está bien… lo hare pero déjeme arrancar…
--Jjajajjaja vete… y recuerda… quiero que le metas la lengua bien adentro, jajaja… y mañana te quiero tempranito y bien bañadita, jajajaja ahora largoooo!!, que el chamaco ya está que llega, jajajjaa!!!!
Cielo Riveros salió como pudo de la casa de don Severiano por la puerta trasera, mientras caminaba mirando en todas las direcciones como comprobando que no hubiera ningún conocido que la viera salir de la casa de su novio cuando este no estaba y que solo había estado ella con su padrastro, pero se calmó al darse cuenta que no había sido vista por nadie, pero ahora venía lo más espeluznante de toda la situación, ella tendría que besar a su novio después de haberle mamado y haberle hecho esa otra cosa al viejo ese que solo disfrutaba haciéndolos padecer a él y a su madre.
Viéndose ya al frente de la puerta intento calmarse y trato de adoptar la forma más natural posible, hasta que haciéndose la que ahí no pasaba nada, toco la puerta de Rodrigo,
--Híjole… pero mira quien te ha venido a visitar chamaco, le dijo el viejo a su hijastro en el momento que el mismo le abrió la puerta a Cielo Riveros ,
Rodrigo quien salió desde el interior de su habitación no pudo dejar de expresar en su rostro la inmensa alegría de que su Cielo Riveros por fin hubiera aparecido, como si nada la tomo y la llevo para el lado de afuera de la puerta de su casa, ya que no le gustaba que su novia estuviera tan cerca de su padrastro, y menos que ahora no estaba su madre en el hogar, ya que sabía lo muy confianzudo que era este con cualquier mujer que tuviera cerca.
Ya afuera de la casa el joven por fin le pudo hablar más tranquilo,
--Donde estabas Eve?… he ido dos veces a tu casa y no había nadie,
-Es que como tu dijiste que llegarías temprano… yo solo…
--Si, le corto el chamaco, --Ya me lo dijo tu abuelito… te fuiste al colegio pensando que yo no iba a llegar…
Cuando Cielo Riveros estaba lista para decirle algo a su novio, vio que desde la ventana le hacía señas don Severiano, la chica solamente llevo sus manos a los hombros de su “amado”, y comenzó a besarlo en forma efusiva, batía su lengua con la de él casi con dulzura, como a su vez miraba con sus ojos verdes hacia donde estaba el vejete quien miraba con cara de satisfacción y que este le hacía señas con su mano y el pulgar levantado, notificándole que por ahora todo estaba bien.
Luego de ir a dar una vuelta a la plaza, en donde el chamaco encontraba algo extraña su novia, se sentaron en un banco para platicar,
--Entonces ya que hoy no logramos hacerlo, cuándo será?, le preguntaba el enamorado muchacho a su novia,
--Hay no lo sé Rodrigo… hoy era el día, ahora ya no estoy segura de nada…
Cielo Riveros se sentía extraña al estar abrazada a Rodrigo siendo que solo hace algunas horas hasta había estado bufando de una infinita calentura en los brazos de su padrastro, y eso que ella le había hecho en su trasero ahora hasta le daban ganas de ponerse a vomitar,
--En qué piensas mi vida, le pregunto el chamaco al verla tan pensativa,
--En nada… solo son cosas que a veces hace una…, le dijo con su mirada puesta hacia el suelo,
--Jejejeje…y que cosas se supone que hacen a veces ustedes las chavas…
--Nada Rodrigo no me hagas caso…
--Amor… que comiste antes de venirte del colegio?, cuando te beso siento un gusto raro en tu boca…
La chamaca quedo escandalizada por la pregunta de su novio, y que le diría ahora?, que lo que el sentía era el sabor a verga, culo y semen de su propio padrastro?,
--Ehhh… discúlpame mi Rodri… es que un rato antes de llegar a tu casa estuve comiendo maní salado…
--Mmmm… si ese es el sabor que te sentí… era a maní salado… --Sabes Eve?, suerte que llegaste esta tarde a mi casa, porque o si no lo más seguro seria que a estas horas estaría riñéndome con mi padrastro,
--Y porque se iban a poner a reñir ahora?, le consulto la chamaca,
--Es que el muy desgraciado se atrevió a meter a la casa a una, pus tú ya sabes…
--No, no te entiendo, a quien se atrevió a meter a la casa?, Cielo Riveros extrañamente estaba interesada en saber que era lo que pensaba su novio de aquel espinudo asunto en donde ella era cabal protagonista…
--Pus… metió a una puta…
Cielo Riveros se sintió dolida ella misma por oír como su Rodrigo se refería a ella aunque fuese en forma inconsciente,
--Pero y porque estas tan seguro que era una… una de esas mujeres que tú dices…
--Como te digo mi Eve… esa mujer era una autentica puta, parecía insaciable de la manera en que lo hacía, y gritaba guarradas con voz de desesperada…
--Y tú la escuchaste…?
--Si y estuvieron horas dándose sin parar…
--Pero eso no significa que sea una prostituta… a lo mejor era una amiga de él…
--Como dices eso Eve… esa mujer era una zorra sin escrúpulos, te aseguro que si la vuelvo a ver en mi casa y encerrada haciendo sus cochinadas con mi padrastro, yo mismo la echare a patadas…
--Pero que cosas dices Rodrigo… tu no deberías meterte en los asuntos de don Seve…, la chica estaba muy mal humorada por las palabras de su novio, el muy malvado prácticamente estaba amenazándola con echarla a patadas, a ver si a don Seve le iba a gustar cuando ella le contara, de pronto cayo en cuenta que ella no debería porque estar pensando de aquella forma, así que mejor le pediría que fueran a caminar un rato, para poder calmarse un poco, pero justo en ese momento sintió su celular que sonaba al interior de su bolso, al verificar la llamada se pudo dar cuenta que era de su mamá, la jovencita muy contenta se dio a contestarle, el amor de su madre siempre la sacaban de todas sus desdichas,
--Hola… le contesto la chamaca…
--Hija… dónde estás?
--Estoy en el parque… vine con Rodrigo…
--Cielo Riveros … necesito que te vengas para la casa lo antes posible… aquí está la policía, el sargento Eustaquio Sinforoso dice que necesita hacerte unas preguntas…
La chamaca quedo como petrificada, no sabía que contestarle, y que quería la policía que la necesitaban!?, Eustaquio Sinforoso!!!! Lo recordó casi al instante, como también recordó la llamada de la mujer hace un par de semanas, “la infracción por puta!!”, se dijo de pronto para sus adentros, como había sido tan irresponsable y no la había ido a cancelar se maldecía, y que explicación le daría ahora a su madre?
--Ehhhh… pero que quieren?, consulto de pronto la asustada chamaca,
--Solo vente hija… aquí lo hablaremos…
--Pero mamá… se suponía que tú estabas en el trabajo?,
--Se me olvido dejarte el dinero de la renta a don Lucas, y por eso me vine… y cuando llegue a casa ellos estaban esperando… hija por favor vente… dicen que es muy delicado lo que tienen que hablar contigo,
--Si ya me voy, contesto la espantada nena por todo lo que se le venía encima.
Una vez que corto la llamada se levantó como una energúmena para luego decirle a su novio,
--Rodrigo… me debo ir… algo ocurrió en mi casa… por favor no vayas hasta que yo te avise…
--Pero que ocurrió…? Déjame acompañarte, el chamaco se daba cuenta del alterado estado emocional en que había quedado su novia después de la llamada,
--No… no me acompañaras…!!!
--Yo te avisare… y si vas antes de eso me enojare contigo… es una amenaza!!, le dijo antes de sin ni siquiera despedirse desaparecer lo más rápido que pudo.
El extrañado muchacho no se explicaba aquel brusco cambio de ánimo que había sufrido su novia, solamente la vio desaparecer caminando mu Cielo Riveros 13 (version apocrifa)
Don Lucas trancaba la puerta siendo observada por la desesperada Janitzi quien era arrastrada por el viejo Anselmo hacia la habitación de la nena, la rubia chiquilla aun luchaba con todas sus fuerzas por liberarse de las garras de los viejos pero para Anselmo Janitzi era como una débil muñequita y sin mucho esfuerzo la metió al dormitorio arrojándola sobre la cama.
Cielo Riveros quien se encontraba en la cama boca abajo con las manos atadas en su espalda y aun jadeando pudo ver a Janitzi caer a su lado, sintió vergüenza al ver a su fina amiga a su lado y peor que la viera en tan humillante situación; la nena estaba tan confundida que no se daba cuenta que Janitzi también seria victima de las perversiones de los dos viejos.
Don Lucas entraba en la habitación viendo a las dos inocentes chamacas y a su vez burlándose de ellas acompañado de su gordo socio. –Ja ja ja, mira pues Anselmo, hoy día nos daremos un banquete de lujo… -- Je je si Lucas hoy día comeremos carne de primera je je je…
Cielo Riveros quien apenas podía alzar su cabezita empezó a llorar pidiendo que no les hicieran nada tan solo recibiendo las risas humillantes de los viejos, quienes por nada del mundo dejarían pasar esa oportunidad; y Janitzi quien hasta ese momento no había dicho nada se puso de pie y exploto de cólera.
-- YA BASTA VIEJOS ASQUEROSOS, SABEN CON QUIEN SE ESTAN METIENDO, USTEDES NO SABEN QUIEN ES MI PADRE… Los dos viejos miraron a Janitzi y ambos se miraron a la vez para luego explotar en una sonora y burlona carcajada que hacia enfurecer mas a la rubia.
-- Dejen de reírse nacos, ustedes no saben lo que les pasara si me ponen un dedo encima… El viejo Lucas arremetió contra Janitzi tomando ambos lados del vestido y arrancándolo para dejar al aire los apetecibles senos de la chiquilla que ante la sorpresa del ataque se tapo los senos con un brazo para con el otro abofetear a don Lucas sin éxito.
Don Lucas sujeto salvajemente a Janitzi arrimándola contra la pared ante los desesperados intentos por zafarse de la chiquilla, Don Lucas pasaba su lengua desde el cuello hasta las mejillas de la rubia quien ponía un rostro de asco al sentirlo.
-- Claro que sabemos quién es tu padre mocosa, es un pobre idiota que se encuentra preso por no saber llevar su negocio de la droga… Los azules ojos de Janitzi se abrieron por la sorpresiva respuesta del viejo. – Dime escuincla como diablos te va a ayudar tu padre desde la prisión donde seguro ahora lo culean ja ja ja…
Janitzi se indignaba cada vez más al oír la seguridad con la que se manejaba don Lucas, ella quien había estado acostumbrada a que todos hagan lo que diga, le dolía en el alma el estar siendo sometida por ese repulsivo viejo al que tantas veces lo había despreciado hasta incluso había escupido al suelo al verlo, las palabras de don Lucas le habían quitado su actitud altanera y la valentía con que aun se manejaba pues para ella el viejo tenía razón ahora nadie podría ayudarla, ya no contaba con la protección que antes le proporcionaba su padre.
-- Estas calladita, vez que tengo razón, ahora solo disfruta como la Cielo Riveros … Janitzi aun con el desprecio y repulsión que le tenía no aceptaba su destino y con el asco que le producía le escupió en la cara a Don Lucas quien solo sonreía ante tal atrevimiento y con mucho descaro comenzó a lamer los restos de saliva que tenía en su cara.
-- Humm sabes deliciosa muñeca, como sabrá tu panocha ahora que la pruebe… -- No, no no déjeme maldito asqueroso, auxilioooo noooo… La chiquilla trataba de liberarse de don Lucas quien la tenia arrinconada contra la pared y a todo esto Cielo Riveros quien hasta ese momento solo observaba rogaba a don Lucas que soltaran a su pobre amiga.
-- Déjela por favor don Lucas no le haga daño… -- Shhh tu cállate tetona, oye Anselmo ocúpate de mi otra zorrita mientras me encargo de domar a esta yegua rebelde… ---- Como no Lucas, si hace tiempo que soñaba con este momento… Don Lucas mirando con ojos de sádico a Janitzi le dijo: -- ya verás rubia te voy a volver una dócil putita y después hasta me buscaras para que te folle je je …
Mientras tanto Cielo Riveros veía al gordo Anselmo que se desabotonaba la camisa dejando ver una sebosa panza con algunas cicatrices que mostraban toda una vida de delincuencia, no podía creer que ese calvo viejo inmundo también iba a mancillar su cuerpo, que esas manos asesinas estrujarían sus encantos. Se sentía impotente con las manos atadas a su espalda y oyendo como el ancho pantalón del gordo caía al piso con una pesada correa.
Veía a ese inmundo viejo tan solo con un holgado bóxer donde se notaba un considerable bulto con muestras de humedad en dirección a ella, Anselmo no podía creer que tenía a su disposición a esa escultural chamaca que tantas pajas le había dedicado e incluso unos minutos antes había desparramado de semen el espejo al ver ese portentoso trasero que tanto le volvía loco.
-- Hummm hasta que se me hizo probar de tus carnes chamaca… -- No, no me toque, aléjese, no me toque… -- Humm sigue quejándote zorrita, me encanta oír tu dulce voz quejándose je je je… -- Por favor no me toque, se lo suplico no me toque…
El asqueroso gordo se encontraba detrás de la nena viendo esas infartantes nalgas que ya quería estrujar y a su vez como ese par de melones que tenia por senos se veían aplastados por el tórax de la nena, la arrastro poniéndola de rodillas al filo de la cama quedando ante su vista el delicioso trasero de la colegiala, Cielo Riveros se movía dificultando la labor del obeso viejo quien le propino una fuertísima nalgada que hizo tambalear su cuerpo.
-- Ya maldita escuincla te quedas quieta o cojo mi correa y te azoto hasta que sangres, tú decides… -- No, no por favor no me pegue, no me pegue… -- Oye gordo de mierda no me maltrates a la nena… -- Descuida Lucas solo quiero que entienda razones… -- ten cuidado, no vaya ser que la mates como a esa puta que trabajaba para nosotros… -- je je descuida Lucas tendré mucho cuidado…
La colegiala se aterrorizo al igual que Janitzi al oír los fríos comentarios de ambos viejos, Cielo Riveros entendió que sería muy peligroso para su vida resistirse ante ellos, pensaba a su vez que con don Pedro, el cojo Juan o el maestro Tulio tal vez se resistió porque solo eran unos aprovechados pero estos dos eran unos peligrosos criminales.
-- Oye gordo me voy a la sala con esta putita, te dejo con mi otra putita pero no la vayas a matar…
Cielo Riveros Vio como Don Lucas se llevaba a la fuerza a Janitzi hacia la sala, dejándola sola con ese agresivo viejo y entro en desesperación.
-- por fa-favor… no me haga daño, no me ma-mate, por favo-vor… rogaba la nena llorando sin ni siquiera conmover al gordo Anselmo. – Pues pórtate bien culona y nada te pasara…
Cielo Riveros asintió con la cabeza con los ojos llorosos, caso contrario el gordo Anselmo a quien le llenaba de morbo ver ese rostro hermoso con una expresión de miedo. Tenía a su disposición a esa chamaca que tanto deseaba, de esas que nunca ni en su juventud pudo tocar, acostumbrado solo a las prostitutas de cuarta categoría todas gordas y sin atractivo pero esta vez a la que tenía era a una joven de 18 años con un cuerpo de Diosa.
-- Muy bien escuincla dobla las rodillas que quiero ver ese hermoso culo bien paradito… La condicionada nena flexiono sus piernas quedando de rodillas con el rostro de lado sobre la cama dejando a la vista y expuestas sus tan preciadas zonas íntimas.
Anselmo se arrodillo en el suelo para poder apreciar esa jugosa panocha que ya quería degustar, podía ver también el dilatado ano de la nena quien ya había recibido verga minutos antes por don Lucas y como un desesperado empezó a lamer los labios vaginales sintiendo la suave textura y la embriagante fragancia de mujer que tiene Cielo Riveros.
-- Humm que delicia eres preciosa, que rica panocha slurpp slurpp… Eran los sonidos que la lengua de Anselmo provocaba al lamerle, Cielo Riveros sentía como su vagina comenzaba a humedecerse muy a parte de los sentimientos de rechazo, asco y odio que sentía por ellos, no había duda de que su cuerpo tenía vida propia y se encendía sobretodo al contacto con los depravados y abusadores.
Se mordía los labios tratando de aguantar lo que su cuerpo ya le pedía pero aun se sentía en control de poder luchar contra los manoseos del viejo quien sujetándose de las carnosas nalgas seguía prodigándose con su lengua, el viejo prácticamente besaba la exquisita panocha de la chamaca sintiendo en su paladar los primeros fluidos que la vagina destilaba.
-- Ayyy de-deténgase señor, no-no siga ahhh… -- slurpp slurpp que rico néctar el que tienes zorrita humm no me canso de saborearlo… -- nooo no siga, us-usted me da asco-co uuhhh…
La nena lo rechazaba con las palabras pero sus caderas se movían al ritmo de la comida de vagina que le daba el gordo, ese viejo calvo con cicatrices en la cara y una barriga cervecera sin duda seria una horrorosa imagen para cualquier chica pero la nena sentía que ya su cuerpo y mente se acostumbraban a sucumbir y aceptar este tipo de hombres, atrás quedaron sus sueños de entregarse por amor, de que su primera vez seria inolvidable y romántico pues sentía que esta vez la suerte ya no la ayudaría y que hoy le diría adiós a su tan preciada virginidad.
En cambio era envidiable para cualquier mortal lo que vivía Anselmo, tener a su disposición a la mejor hembra de la colonia, la de las falditas cortas, la de las sensuales botas, la de las blusitas escotadas la de los pequeños tops, pero sin duda lo que más calentaba a los machos del vecindario era verla en su uniforme escolar, la cortísima falda que se bamboleaba al ritmo de su nalgas y como esa blusa escolar se tensaba por los enormes melones que la nena tenia.
-- Ayy se-señor pare por fa-favor ahhh ahhh… La lengua del asqueroso Anselmo seguía con su viboreante caricia produciéndole una excitante sensación, esa que siempre la obliga a entregarse sin tapujos; pero esta vez quería luchar, no podía ceder ante la lujuria y mucho menos delante de Janitzi; a quien podía oír que aun luchaba al otro lado de la habitación.
-- Que buena estas maldita puta… -- de-detengase ya no si-siga ahh ahh… A la nena le costaba aguantar los gemidos que cada vez se oían más fuertes en la habitación, la gruesa lengua se introducía dentro de la vagina acalorando cada vez más su exuberante cuerpo.
-- humm que ricos tus jugos, tu panocha ya está que pide mi verga… -- Ayyy Nooo No déjeme, no quiero no nooo… -- je je escúchate como gimes perra, ya verás que cuando te la clave vas a aullar como una loba… -- No por favor ahhh de-dejeme ayy nooo…-- De ninguna manera, ya hace tiempo que te tengo ganas…
Y así era, Anselmo al igual que Lucas desde mucho tiempo atrás que deseaban a la nena, la habían visto desarrollarse desde los 14 años cuando su cuerpo de niña ya echaba forma para convertirse en el cuerpo de una mujer, la veían todos los días al levantarse con sus diminutas prendas contemplando su belleza.
Las veces que la veían salir envuelta en una toalla con su cabello húmedo dándole un aspecto sensual, las gotas que se deslizaban por la suavidad de su piel, de esa piel suave y tersa y cuando se despojaba de la toalla dejando ver esas hermosa y turgentes tetas era la perdición para ellos, todo eso gracias al espejo que tenían; esas visiones diarias eran dignas de montones de masturbaciones que se daban dejando empañadas de semen el espejo.
Todos esos recuerdos se juntaban en la mente del viejo obeso quien aun no podía creer la suerte que tenia al cumplirse su más anhelada fantasía.
La lengua de Anselmo seguía en su desquiciante exploración mientras sus manos se deslizaban hacia las aplastadas tetas de la nena que aun así se asomaban por los lados, el espejo reflejaba una morbosa imagen, un viejo gordo y calvo con una jovencita de 18 años dueña de un cuerpo perfecto, esculpido por la madre naturaleza como su más digna representante.
El gordo Anselmo ya no podía aguantar más habían sido más de diez minutos en los que había degustado de la panocha de la nena y se despojo del bóxer dejando ver una verga aunque no tan grande como la de Don Lucas si era más rechoncha o gruesa cubierta de unos antihigiénicos bellos; la nena empezó a temblar al darse cuenta de las intenciones del viejo quien tomándola de las caderas palpaba con la punta de su verga la entrada de su virginal y húmeda panocha.
-- Prepárate zorrita, porque ahora vas a gritar de placer, te voy a culear hasta llenarte de semen el útero je je vas a ver que te gustara…
Cielo Riveros sentía como la gruesa punta de esa verga subía y bajaba acariciando la aterciopelada textura de su húmeda vulva que no hacía nada más que lubricar la punta de esta; ella lloraba rogando que algo o alguien lo detenga, recién recordaba la amenaza de Don Pedro de cuidar su virginidad y se atormentaba mas en cuál sería su reacción cuando se entere que ya no es más virgen.
-- No por favor, no me pe-penetre, déjeme se-señor de-déjeme…
MINUTOS ANTES
Pero mientras esto sucedía un rato antes en la sala Janitzi era víctima de Don Lucas quien a toda costa tenía pensado doblegar a esa rebelde y orgullosa muchacha.
Don Lucas se acerco a Janitzi totalmente desnudo, ella no pudo evitar mirar su miembro que estaba con una semi erección. Ella lo intento enfrentar, pero Don Lucas con su fuerza la agarro de ambos brazos y la llevo a un sillón que había en la pieza.
-Déjame en paz viejo inmundo!!! Gritaba Janitzi e intentaba patearlo sin fortuna.
Don Lucas la sentó en el sillón con fuerza y le grito
-- Cállate putita, ahora la inmunda serás tú!! Jajaja…
Ese comentario hizo erizarle la piel a Janitzi, que miraba con desesperación intentando ver como zafar de esa situación.
Don Lucas agarro su carita con una mano y empezó a acariciarla toscamente, para luego agarrar ambos lados de su mandíbula y apretarla.
-- Ahora vamos a ver como escupes, solo que ahora va a ser diferente puta…
Y luego acerco su miembro a los labios de la rubia, ella pudo sentir el olor fuerte que despedía esa verga. Las lágrimas corrían por sus mejillas sin parar.
Los labios de Janitzi se resistían a albergar esa asquerosa verga pero Don Lucas siendo un viejo zorro en estos menesteres le pellizco hasta el dolor uno de sus pezones logrando que Janitzi abriera los labios por el dolor.
Los labios fueron forzados por la cabeza de ese enorme miembro, dándole unas arcadas por el olor que tenia.
-- Vamos putita chúpala entera ja ja ja!!! Gritaba Lucas.
Agarro la cabeza de ella y empezó a intentar meter su miembro lo más profundo posible, haciéndole dar más arcadas a la pobre rubia que lloraba desconsoladamente.
-- Ahora quien es el gordo inmundo rubia chupa vergas ja ja ja… Se reía Lucas y disfrutaba de los labios carnosos de Janitzi.
Su miembro salía cada vez con más saliva que se deslizaba por la barbilla de Janitzi y caía sobre sus pechos y el vestido desgarrado.
Lucas cerraba los ojos y se movía con violencia como cogiéndole la boca a la rubia que tanto lo había despreciado, hasta que de pronto paró en seco dejándole todo su miembro dentro de la boca.
Janitzi recién pudo respirar con mayor facilidad y solo podía ver esa panza inmunda delante de ella y la cara de depravado de ese viejo asqueroso disfrutándola.
-- Ahora prepárate putita que viene lo mejor… Dijo Lucas a carcajadas.
Luego saco su verga ensalivada de la hermosa boca de Janitzi y agarrándola de los pelos la puso de pie frente a él, ella tosiendo aun seguía tan prepotente y le dijo
-- Déjame en paz viejo de mierda, resentido, esta la es la única manera de tener a una mujer como yo, enfermo impotente…
La cara de Don Lucas empezó a tomar un color rojizo, y luego empujo con mucha fuerza a la hermosa rubia contra el sillón, ella se asusto mucho, pero Lucas estaba sacado y no la dejo reaccionar, rápidamente la levanto de los pelos y la giro contra el respaldo del sillón, rompió su vestido y empezó a arrancar la pequeña tanga que llevaba Janitzi en ese momento.
Ella gritaba desesperadamente que la dejara en paz pero Lucas estaba sacado y violento, la visión de ese blanco trasero lo desquiciaba y termino de arrancar la sexy y pequeñísima tanga y se puso sobre Janitzi diciéndole:
-- Ahora vas a aprender a respetar niña fresa!!! Tomo su miembro y con fuerza la metió lo más adentro que pudo. -- AAAAAYYYYYYYYYYYYY duuuueeleee déjame infeliz!!! Gritaba Janitzi mientras intentaba tirar manotazos para sacárselo de encima.
Lucas totalmente poseído por la ofensa, agarro a la rubia de sus nalgas y las apretaba con fuerza, las estrujaba, y se movía a un compas salvaje, como queriendo romper a la chamaca.
Janitzi con su torso sobre el sillón, lloraba y gritaba pidiendo piedad, pero Lucas estaba furioso y seguía con su vaivén violento como queriéndole dar una lección a la rubia engreída.
Pero para el viejo seguía siendo una tarea difícil dominar a la rubia quien se movía constantemente y por momentos su miembro se salía del cuerpo de la chica; el viejo se ponía violento pero era inteligente, sabía que no la podía lastimar ya que eso llamaría mucho la atención y las habladurías de todos en el edificio.
-- Bien bien, veo que te gusta luchar mocosa, está bien, te voy a dejar ir… A Janitzi eso la desconcertó mucho, en realidad no podía creer que se libraba así de fácil, -- De verdad me dejara….y Cielo Riveros a ella tamb…. --- Mira zorrita Cielo Riveros es mía, y como tú te resistes, te irás… pero te iras de aquí junto con tu madre…
La rubia de pronto se puso a pensar y ahora que don Lucas las botaba, a donde irían, no tenían dinero para alquilar en otro lugar y eso que aquí era barato, prácticamente se quedarían en la calle. Don Lucas la miraba con burla comprendiendo su situación.
-- Así es gatita, se van y a ver si se acomodan en algún parque o debajo de los puentes, je je, Allí conocerás a muchos que te respetaran je je je… -- No por favor, le juro que le pagare… -- CON QUE, si no tienen ni un peso, es mas tu mama me rogo que te de trabajo en mi cantina, lo cual accedí, pero por tu comportamiento no hay trato y se van…
Janitzi se encontraba sin salida, pero no veía que aquel trato le convenciera de entregarse al viejo, y peor trabajar en esa vulgar cantina ganando un sencillo, no era lo que esperaba para ella; Don Lucas vio un arma poderosa en eso y le dijo:
-- Mira gata, tú me gustas, y te diré que en la cantina solo servirás tragos pero si te pagare muy bien, tendrás mucha lana para que te des tus refinados gustos y vivirás gratis con tu madre, que mas puedes pedir, nadie más te podría ofrecer lo que yo te doy…
Janitzi de pronto fue invadida por la codicia pero no le respondía, veía con asco que el viejo le podría dar lo que ya no tenía; Don Lucas se arrodillo ante ella que se encontraba sentada en el sofá. – Y dime gatita, estamos de acuerdo… Janitzi lo miro a los ojos, abría la boca para responder pero no se atrevía, su orgullo la detenía pero no por eso oponía resistencia.
Don Lucas con tranquilidad la tomo de la cintura acercando sus pechos hacia sus oscuros labios engulléndose unos de los rosados pezones, la rubia chiquilla no pudo más que suspirar ante el atrevido contacto – ahhh es-espere, no yo no ahh…
Le daba vergüenza admitirlo pero la oferta la había seducido, pero su orgullo no la dejaba aceptarlo ante el viejo, en tanto Don Lucas acariciaba su cintura bajando por sus contorneadas piernas para empezar a abrirlas, Jani quien aun mostraba un fingido rechazo lo tomo por la cabeza, -- Tranquila gatita, no necesitas hablar…
El viejo se deslizo hacia la panocha de la rubia quien al sentir el primer contacto de la lengua se recostó en el sofá para dejarse hacer lo que el viejo quería, Don Lucas reía pensando ( jeje tan fácil la domine gracias a don dinero), y no dejaba de tener razón ya que la chica estaba acostumbrada a la buena vida y que todo le caiga sin esfuerzo y la opción que le ofrecían no era nada despreciable para tener cierta comodidad, pero le daba pena y cierto desprecio don Lucas, atrás quedaron los chicos lindos que la tocaban y ahora un viejo naco es quien la tocaba.
-- Hummm gatita que rico hueles, igual que Cielo Riveros … -- Ayy nooo, yo no pu-puedo ahh ahh… -- Tranquila gatita no hables y solo disfruta… Don Lucas lengüeteo con lascivia la mojada panocha logrando que la rubia explotara de placer, -- Ayy Dios ahhh noo ahhh ahh…
La hábil lengua de Don Lucas enloquecía a Janitzi de los pies a la cabeza, nunca le habían comido de esa forma salvaje la panocha, era una experiencia nueva para ella, el viejo a su vez le amasaba los erectos pezones, enloqueciéndola mucho mas; la chiquilla se sujetaba de los cabellos mordiéndose los labios ya a punto de explotar.
-- Ayyy siii ohhh di-diooss ayy ahhhh… -- Así mi gatita, goza que te hare enloquecer…
Janitzi se retorcía sobre el sofá, ya no daba más de placer muy dentro de si pensaba como es que podía estar gozando con este viejo al que tantas veces despreciaba y mucho menos entendía en que momento flaqueo; le daba vergüenza gemir como lo hacía pero la excitación la dominaba y se entregaba sin reclamo.
Don Lucas que ya no aguantaba más le ensarto nuevamente su tieso miembro pero sin oposición alguna, el viejo sentía como su verga se calentaba dentro de la panocha de la rubia chiquilla, empezó un suave vaivén que la hacía delirar, Janitzi recibía con deleite la hombría de don Lucas quien ya la tenía con las piernas sobre sus hombros en furibundos embistes.
-- Ayyy siii diioos ahhh hummmm de-despacioo ahhh… Janitzi a pesar de no ser virgen la sentía muy gruesa para ella y no dejaba de tener razón, ya que su experiencia se remontaba a chiquillos sin experiencia y no como ahora con un viejo experimentado y dominador – Ayy por fa-favor despa-pacio ahh ahh… -- je je tranquila gatita, estas con un macho de verdad, no con esos muchachitos maricas que conocías… -- Ayyy ahh ahh di-dioss ahh ahh… -- Acaso quieres que pare… -- no, no sigaaa ayy no pa-pare ahh ahh…
Janitzi muy avergonzada pedía que no parara, ya le había empezado a gustar ese trato que le daba el viejo, nunca la habían tratado así de brusco y eso era algo nuevo para ella, pero a su vez pensaba; que pena por unos billetes me ofrecí, le salían algunas lagrimas de vergüenza pero el placer acompasaba su conciencia.
-- Ayy mi gatita que rico se siente, voltéate que quiero verte ese culo mientras te culeo… Janitzi a pesar de que disfrutaba no le gustaba que le hablara tan vulgarmente pero si le gustaba que le dijeran gatita, obediente se puso como le pido don Lucas para recibir de nuevo esa verga que ya tanto deseaba.
-- Ayyy no tan fuerte ahh ahhh… -- ya te acostumbraras, óyete como gimes, eres una gata en celo je je… La rubia volteaba a verlo con cólera por lo que le decía pero su rostro no podía ocultar los gestos de placer que tenían y solo pudo ver como el viejo le mandaba un beso sujetándola de sus caderas, ella se sonrojo de cólera de indignación y porque no aceptarlo también de placer.
Las Embestidas seguían incesantes y fuertes, pero fueron interrumpidos por las quejas de Cielo Riveros en la otra habitación, -- Carajo, mejor vamos adentro no vaya ser que este gordo le haga algo a tu amiga… Don Lucas tomo a Janitzi entre sus brazos llevándola hacia la recamara de la nena arrojándola sobre la cama y ponerse entre sus piernas a succionar la húmeda vulva…
Al mismo tiempo Anselmo ya con la cabeza de su verga presionando la entrada de la panocha de Cielo Riveros veía como Janitzi caía en la cama ya rendida ante los tocamientos y amenazas de Lucas, pudo ver como esa rubia orgullosa y soberbia estaba derrotada con los ojos entrecerrados y llorosos pero con una mueca de insoportable placer, no le cabía dudas de que los dos tenían carne de primera en su fogoso banquete.
Cielo Riveros pudo ver también como Janitzi completamente desnuda ya no luchaba y más bien jadeaba acalorada ante la invasora lengua que la penetraba, sus bien formadas y blancas piernas abrazaban la cabeza de Don Lucas como pidiendo que se adentre más en su vagina, sin duda estaba experimentando un gran placer, aquel que nunca había recibido al haber estado solo con muchachos consentidos de sociedad inexpertos en temas de sexo salvaje, de ese sexo vulgar que estaba recibiendo.
-- ayyy uhhh ahhh ahhh… gemía Janitzi siendo observada por Cielo Riveros quien no entendía como la rubia ya no luchaba y más bien gozaba como una loca, Don Lucas pudo ver el rostro de sorpresa de Cielo Riveros al ver la reacción de la ya entregada Janitzi y sonriendo empezó a subir por el plano vientre de la chiquilla recorriéndola con su lengua y a su vez la rubia sentía como la mal cortada barba del viejo raspaba la suave superficie de su piel produciéndole una sensación de escalofriante placer.
Don Lucas comenzó a devorar los tentadores pechos de Janitzi que no eran tan grandes como los de Cielo Riveros pero si entraban en el estándar de lo apropiado con unos puntiagudos y rozados pezones; Janitzi se mordía los labios al sentir la caliente boca de Lucas sobre sus tetas y masticando suavemente sus pezones, se retorcía sobre la cama sintiendo en su vagina nuevamente la verga del viejo pidiendo permiso para entrar.
Llegado un momento Janitzi y Cielo Riveros cruzaron sus miradas, la de la nena era de desesperación al sentir como el gordo Anselmo la quería penetrar por su último reducto de virginidad pero la de Janitzi era de placer, con sus ojos entrecerrados y mordiéndose los labios, ya perdida por la excitación.
-- Ves a tu rebelde y altanera amiga, como goza y tu haciendo problemas… Le dijo Anselmo a la nena quien movía su cabeza no aceptando la aclaración y también al sentir los ligeros empujones que el gordo le daba en la entrada de su panocha, abriendo los labios unos milímetros como tomando vuelo para penetrarla de golpe.
-- Ayy Ayyy ahhh ahhh ahhh… fueron los gemidos de placer que se escuchaban cuando la verga penetro en la vagina de golpe, pudo Cielo Riveros ver como Don Lucas nuevamente arremetió sobre Janitzi quien lo apretaba con sus piernas al sentir el salvaje bombeo que este le daba.
-- AHH toma putita toma, ya ves eras una chica fresa cuando llegaste y ahora ya sabes lo que es un macho de verdad… -- ahhh ahhh ve-vete a la mi-mier.. ahh ahh… Gemia de placer Janitzi pero a su vez se sentía herida por las palabras que su verdugo decía delante de Cielo Riveros .
-- Desde ahora eres mi mujer rubia, hoy día sales de aquí toda una hembra je je… -- ayyy ahhh no, nu-nun ca ahh ahh… Don Lucas arremetió contra sus labios siendo recibidos por ella a pesar de sus rechazos, Cielo Riveros veía como ambas lenguas se fusionaban devorándose los labios con pasión, sintió asco de lo que veía, como su tan fina amiga se entregaba a ese viejo desagradable y criminal, pero le llego a la mente esa frase que dice: el burro habla de orejas y recordó como ella también había tenido que besar a sujetos desagradables como el maestro Tulio, el cojo Juan o Don Pedro, todos viejos y feos.
Se le puso roja la cara y comprendió que le pasaba a Janitzi, le ocurría lo mismo que a ella, que su cuerpo la había dominado y se entregaba a la lujuria.
-- Ayy uhh siii siii ahhh ahhh… -- quieres mas fuerte gatita…. – ayyy siii ma-mas fuerte ahh ahh… Anselmo quien aun palpaba con su verga la vagina de Cielo Riveros también veía extasiado la escena de su camarada y comento. -- Je Je y donde está la orgullosa ahora je je…
-- Oye gordo ya deja de mirar y dale a la nena que esta que pide hace rato… -- je je Ahorita mismo la reviento a esta chiquilla…
Cielo Riveros salió de su trance al escuchar a los viejos y nuevamente se quejo pidiendo que no la penetre, ella quería cuidar a toda costa su virginidad.
-- Por favor no, no quiero, déjeme… -- Oye gordo, verdad; dale por el culo, a la nena le encanta… -- Pero Lucas yo quiero darle por esta panocha que ya esta jugosa… -- no gordo conociéndote, te puedes correr dentro de ella y la preñas… -- Pero Lucas después le damos la pastilla… -- He dicho que no carajo, además esas pastillas malogran el cuerpo y no queremos que se nos deforme la nena…
Cielo Riveros respiro aliviada aunque sentía repulsión por lo que le hacían no pudo negar sentir alivio porque su vagina se salvaba por el momento, ella se sentía en obligación de proteger su virginidad, pero mucho más que la amenaza de don Pedro ella sentía un sentimiento de infidelidad hacia él, como una mujer que engaña a su marido; no comprendía eso que sentía y pensaba que debería sentirse culpable por Rodrigo y no por don Pedro, pero no era así.
-- Muy bien zorra, vamos a probar este culito que tantas veces he deseado… Anselmo se agacho y escupió la entrada anal de la nena para lubricarla; para Cielo Riveros eso fue como una descarga eléctrica, como si presionaran un botón en su cuerpo que accionara la excitación y más cuando sintió la lengua del viejo hacer círculos en su recto.
La nena cada vez se calentaba más y ya la culpa o su conciencia la abandonaba al ver que Janitzi gozaba y gritaba de placer al recibir los embistes de don Lucas, la vergüenza se alejaba de su mente y sus carnosos labios ya no aguantaban las delicadas mordidas que se daba tratando de evitar los gemidos.
-- ahhh se-señor uhhh pa-pare por favor ahh ahh… -- Anselmo, llámame Anselmo o mejor dime Papucho je je… Anselmo reía acompañado de don Lucas al oírle, Cielo Riveros se azoraba cada vez más, sentía su cuerpo hirviendo, la lengua de Anselmo se hundía cada vez más en el ano de la nena haciendo círculos; sin duda la estaba dejando bien lubricada. Anselmo se puso de pie jalando al filo de la cama a la nena para penetrarla de una vez ante la desesperación de Cielo Riveros que aun no asimilaba el ser penetrada por ese viejo.
-- no, no lo haga cerdo asqueroso no… -- QUE COSA, que me has dicho…Cielo Riveros pudo ver como Anselmo muy molesto se dirigió hacia donde se encontraba su pantalón sacando de su bolsillo un afilado cuchillo, casi se le salen los ojos del miedo al ver que se dirigía hacia ella con cara de molesto.
-- A ver puta, repite lo que me dijiste… -- no, no por favor, discúlpeme, no me haga daño… -- me dijiste cerdo no, habla maldita zorra… --pe-perdóneme, no quise ofenderlo, por favor no me haga daño…
La nena le rogaba con lagrimas y asustada que no le hiciera daño, mientras que Anselmo le ponía el filo del cuchillo por su mejilla, sintiéndose poderoso ante la inocente chiquilla. A todo esto Don Lucas ni siquiera prestaba atención seguía con el incesante bombeo de su verga dentro de la encharcada vagina de Janitzi quien para ese momento seguía apretando con sus piernas al viejo y a su vez le sujetaba de las caderas pidiendo que le de más profundo, Don Lucas aceleraba mas las embestidas al sentir también como la rubia chiquilla le mordía y besaba el cuello ya completamente sacada de placer.
-- Ahora mocosa te dejaras de niñerías y portaras bien entendido… El gordo Anselmo le dijo eso a Cielo Riveros propinándole una fuerte nalgada y viendo que la nena asentía, el viejo tomo el cuchillo y corto los amarres dejándole los brazos libres. – Muy bien escuincla ponte de pie frente a mí…
Cielo Riveros con el mayor temor se puso de pie frente a Anselmo quien observaba embelesado el perfecto cuerpo de la nena, aquel que toda la vida vio a través del espejo ahora la tenía en carne propia y a su disposición; la nena era casi del mismo tamaño que Anselmo lo cual era perfecto para él, quien con locura atrajo hacia él a la nena para devorarle la boca en un asqueroso y repulsivo beso.
Cielo Riveros sentí asco y solo mantenía abierta la boca sintiendo como la lengua del viejo exploraba todo su interior, pero no solo era eso ya que las dos manos sujetaban con fuerza las duras y carnosas nalgas casi levantándola del suelo, el viejo no se daba abasto con el cuerpo de la nena, hubiese deseado tener cuatro brazos para seguir manoseando los encantos de la adolescente.
-- Humm que tal cuerpazo que tienes zorra, estoy en el cielo… La nena solo oía tratando de aguantar los manoseo del gordo y no fue hasta que encontró su punto débil, inesperadamente Anselmo le lamio el cuello oyendo como la nena suspiro dejando escapar un leve gemido, el viejo aprovecho eso y comenzó un incesante asedio sobre el delicado cuello de la nena quien sentía como la excitación comenzaba a ganar terreno a su autocontrol.
-- Ayy no, pare, pa-pare ayy noo ahh… Los gemidos comenzaron a surgir de los labios de la nena ya se sentía perdida y nuevamente a punto de sucumbir ante el magreo y chupetones que le daba el viejo; sentía escalofríos por todo su cuerpo, ese viejo horrible la iba a follar por el ano, aunque eso la mantenía tranquila no aceptaba al sujeto.
-- Uhh se-señor, no ahh ahhh… -- que sabrosa estas zorrita, te voy a follar como nadie lo ha hecho…
En la habitación se escuchaba ya claramente los gemidos de la nena que se mesclaban con los de Janitzi y con los de Don Lucas que al oírla le increpo al gordo:
-- Ya pues gordo déjate de jugar y culeala o quieres que yo también lo haga… -- Nada de eso, vas a oír ahora como esta nena aúlla de placer, vamos zorra ponte en cuatro al filo de la cama…
Cielo Riveros sabiendo que era peligroso no hacerle caso al viejo Anselmo se puso en dicha posición con los pies colgando de la cama dejando a la vista su tremendo y espectacular trasero, Anselmo veía como ese ano ya rosado latía esperando ser empalado, Cielo Riveros nuevamente cruzo miradas con Janitzi quien se sujetaba de las sabanas presa del placer, ella no entendía como podía estar gozando tan deshinibidamente, ella que era tan orgullosa y de estilo refinado revolcándose con Don Lucas.
-- Muy bien putita afloja ese culo que allí te va… Anselmo puso la cabeza de la verga en la entrada del recto empezando a presionar, la nena sentía como se le abría el ano recibiendo esa cabeza gruesa y sintiendo un ligero dolor; la verga de Anselmo no era tan larga como la de don Lucas pero si tenía una gruesa cabeza que le recordaba a la de don Pedro, y ese recuerdo la excito.
-- Ahuu de-despacio por favor ahh ahuu… -- Tranquila que ya te entra toda… -- Ayyy me du-duele ahh ahhh…
La verga se abría paso sin piedad, la nena apretaba sus blancos dientes aguantando el dolor que le producía la gruesa cabeza del miembro, el ano de la nena a pesar que ya había recibido bastantes invasores siempre se cerraba lo que le producía placer a los abusadores al sentir como las paredes rectales les apretaba las vergas. Anselmo dio un último empujón y la penetro completamente chocando sus asquerosos testículos con la vulva de la nena.
Cielo Riveros ya la sentía toda adentro sintiendo el cosquilleo de los antihigiénicos bellos púbicos sobre sus nalgas, -- Ya ves zorrita ya la tienes adentro, te la comiste todita… -- Ayy por favor señor, des despacio que me duele… Anselmo comenzó a retirar su verga lentamente, no podía creer que su asqueroso miembro por fin estaba dentro de ese divino trasero que tanto había deseado. De pronto puso una expresión malévola y la embistió con fuerza.
-- Ahuuu noo, ahuuu me du-duele ahh auhh… -- Tranquila zorrita, así me recordaras siempre je je… -- nooo por fa-favor despa pacio auhh ahhuu… El viejo obeso la embestía con fuerza el conocido ploc ploc de sus pieles se oían en la habitación, los que fueron oídos por don Lucas quien no quiso quedarse atrás y le dijo a Janitzi.
-- Mira gatita, como a tu amiga le dan por el culo, como goza… Janitzi quien respiraba agitadamente volteo a ver a Cielo Riveros quien se mordía los labios aguantando estoicamente los embates de Anselmo, a su vez ella pensaba como la tan inocente y tímida chiquilla ya había recibido por el ano, eso era algo que ella nunca pensaría ni siquiera experimentar.
-- Muy bien gatita ponte en cuatro frente a tu amiga… La rubia toda complaciente se puso frente a Cielo Riveros separándola unos 10 centímetros de su rostro, la nena solo agacho la mirada muy apenada mientras que don Lucas se acomodaba detrás de Janitzi sujetándola de las estrechas caderas para luego con toda su fuerza penetrarla por la encharcada panocha.
-- Ahhh ahhh ssiiii ahhh ahhh… Cielo Riveros sentí muy de cerca los gemidos de Janitzi a quien no se atrevía verla al rostro, el ploc ploc de ambos sonidos se fusionaron estruendosamente, el gordo Anselmo deslizo sus manos hacia las enormes tetas de la nena que colgaban como campanas, la colegiala al sentir las toscas manos amasar sus pechos fue el acabose para ella y nuevamente le llego esa corriente de excitación.
Sus labios ya estaban rojos de tanto mordérselos y dulcemente se abrieron para dejar escapar los gemidos que aguantaba. – Ayyy ahhh hummmm ahhh ahh… -- Ya ves zorrita, te dije que te gustaría, óyete como gozas… -- Ca-callese ahhh no no ahhh di-diga eso ayy ayyy…
Cielo Riveros y Janitzi nuevamente cruzaron sus miradas y esta vez la de las dos eran ya de placer, la rubia solo cerró los ojos con una leve sonrisa que la nena no pudo entender, acaso le gustaba lo que le hacia se preguntaba, claro que ella también sentía placer ante las embestidas que le daban pero aun tenia presente quienes eran estos dos viejos desalmados.
-- Ayyy si-sigue por fa-favor no pares ayy ahhh…. – Aguanta gatita, déjame agarrar fuerza… Janitzi reclamaba que le siguiera dando sin parar; Don Lucas se sentía bien al ya tener dominada a la altanera rubia, claro que tal proposición sedujo mucho a Janitzi, pero por dentro pensaba que lo que le daba no pagaba lo que el ofrecía y ya le tenía preparado algo que quizás no le gustaría.
En cambio Janitzi no le daba tregua a don Lucas y seguía moviendo su trasero culeandose ella misma, mientras don Lucas resoplaba y sonreía al tener ya dominada a la rubia quien hacia círculos sobre la verga del viejo, en cambio Anselmo seguía con sus duros embistes sintiendo un infinito placer al sentir como el ano de la nena le apretaba su rechoncha virilidad.
-- Ay Lucas que rico culo tiene la chiquilla, AHH… -- je je si me consta es un manjar je je… -- Y cómo será el de la rubia, tienes que probarla… Janitzi dejo de moverse alertada ante el comentario y levantando la mirada exclamo: -- A mí nadie me hará eso, entendieron… -- Oye gordo a mí gatita no le gusta así que olvídalo… Don Lucas dijo eso acariciando la delicada y suave espalda de la rubia y dándole unos suaves embistes que tranquilizaron a la rubia, pero a su vez le sonrió al gordo Anselmo guiñándole un ojo.
Mientras que las dos chamacas eran gozadas insaciablemente por los dos viejos, en la distancia Don Ernesto seguía pensando en Cielo Riveros , no se le borraba de la mente aquella imagen de la colegiala en su auto, la sonrisa inocente acompañada de ese cuerpo espectacular; nunca antes había tenido esos pensamientos para con ella.
A su vez pensaba como una chiquilla tan educada y de su casa fue amiga durante todo este tiempo de su hija Claudia; Ernesto había descubierto que su hija no era la blanca paloma que siempre creyó, se sentía decepcionado de ella, y tal vez pensó que si su hija era así de guarra, entonces capaz también Cielo Riveros era como ella.
Pero no se la quería jugar, tenía que ir pasó por paso, primero una invitación para tomar un café, después le regalaría cosas, todo con el fin de encamarse a la nena; al tipo se le armaba una carpa tan solo pensar en Cielo Riveros , ya se sentía un hombre muy maduro y quería rejuvenecer con esa carne fresca que era la nena para él.
Regresando a la habitación de Cielo Riveros los dos viejos seguían con sus embistes a las chiquillas, pero el que estaba más a punto de correrse primero era el gordo Anselmo quien ya transpiraba agitado tras cada estoque que le daba al ano de la nena.. –Ufff que rico Ahh toma zorrita ahh ahh…Cielo Riveros a pesar del asco que le tenía también gemía porque no podía luchar contra su cuerpo,.. – Ayyy ayyy diooss ahh ahh… -- Vez zorrita, te gusta la verga, Ahh ahh…
Don Lucas quien había bajado los embistes sobre Janitzi se puso delante de ella colocando sobre sus labios su pegajoso miembro y tomándola del cabello la obligo a mamársela, la rubia engullo hasta donde podía de esa verga que tanto placer le daba, la verga entraba y salía de su boca, le daba lametazos y hasta succionaba la cabeza de esta para beneplácito de Don Lucas que veía sonriente la escena.
-- Oye Lucas, pero mira que bien la mama la niña, y tan fina que se creía je je… -- Así es Anselmo, pero ya le enseñe como son las cosas aquí, ahora es una dócil yegua je je… Janitzi dejo de mamar la verga de don Lucas pero no se la saco de la boca, solo la llenaba de ira al escuchar a los dos viejos burlarse de ella. – Oye zorrita no quieres mamar la verga de Lucas… La nena ni siquiera oía lo que le decían se encontraba con el rostro enterrado en las sabanas mordiéndose los labios por la culeada que le daba el gordo.
Don Lucas la tomo del cabello alzándola a la altura de su verga -- Oye Cielo Riveros, aquí tu amiguita quiere compartir un dulce contigo je je… La nena volteo a ver a Janitzi que con los ojos entrecerrados metía y sacaba de su boca la verga del viejo, no podía creer la forma tan fácil que había caído su amiga; y en sus pensamientos recibió dos fuertísimas nalgadas que la hicieron abrir grande sus verdes ojos… -- Oye zorrita, mama la verga con tu amiga o ahorita mismo te rajo las nalgas…
La nena solo volteo y con su rostro asustado le asintió al gordo a quien si le tenía miedo incluso más que a don Lucas quien hasta ese momento era el que mejor se comportaba por así decirlo; Don Lucas quien aun la tenía tomada del cabello la acerco hacia su verga para que empezara a mamarla… -- Oye gatita deja que tu amiga también pruebe de tu dulce je je…
Janitzi retiro de sus labios la empalmada verga de don Lucas para dejar que Cielo Riveros hiciera lo suyo, la nena muy tímidamente iba acercando sus labios sobre la húmeda cabeza y empezó con tímidas lamidas, el viejo Lucas hervía de emoción al ver como la nena le mamaba la verga con su carita inocente… Oye gatita tu también mámamela… Janitzi empezó a lamer por los costados de la verga, Don Lucas ahora si casi se corría al ver esos hermosos rostros comiéndose su verga.
Las delicadas y rosadas lenguas recorrían todo el contorno del duro miembro y a veces se encontraban en la punta de esta, pero ambas no se miraban; Don Lucas pedía que lo mirasen a los ojos mientras mamaban y esa imagen lo hacía sentirse poderoso, veía la cara de Janitzi ansiosa por recibir esa verga de nuevo en su panocha y la de Cielo Riveros era un rostro de temor, de placer y dolor por los fuertes embistes de Anselmo.
-- Oye Lucas Ahh Ahh has que se besen Humm que se besen las putas… El gordo Anselmo que ya estaba en las últimas de excitación le sugirió algo que a Don Lucas también le agrado, --Muy bien niñas quiero que se besen… rápido… Don Lucas lo pidió con autoridad dándole una fuerte nalgada a Janitzi quien volteo para mirar a la nena quien se quedo con la boca abierta por lo que le pedían.
La nena hasta ahora nunca en su vida había experimentado el ser besada por otra mujer, le parecía asqueroso e impropio de la naturaleza; en cambio Janitzi quien venía de otra idiosincrasia lo había experimentado, era común que las chicas de su sociedad practicaran entre ellas los besos en su primera vez.
-- Vamos putas bésense mierda… El gordo Anselmo embestía furioso el culo de la nena quien aun expectante gemía tras cada estocada, y fue Janitzi quien se acerco a la nena y se apodero de sus labios, Cielo Riveros abrió sus ojos sorprendida por el repentino beso, sentía el cálido aliento de la rubia, sus suaves labios acariciar los suyos, ya no sentía los malos alientos de alcohol o cigarro, esta vez era agradable, y casi sin remediarlo también sus labios besaban los de ella en unas delicadas caricias.
Don Lucas sonreía ante tan morboso beso, ver a esas dos bellas criaturas besarse como un par de lesbianas le hicieron hervir la sangre; Don Anselmo también veía con dificultad el beso pero no era lo que quería. – oigan putas ese no es un beso, con lengua con... Las dos chicas al instante entrelazaron sus lenguas en un apasionado beso que enardecieron al gordo.. – Sii assi aHH Ahh tomaaaa malditaa putaa ahhh… El gordo al ver esa imagen empezó un más salvaje embiste que hizo gritar mas a la nena.
-- Ayy ahuu noo ahh ahuu… -- YAAA zorra me voy a correeeer AHHHH… El gordo Anselmo retiro su verga y empezó a eyacular una gran cantidad de semen sobre la espalda de la nena dejándola completamente mojada. Cielo Riveros sentía con asco que su espalda le quemaba por el contacto del viscoso liquido – Ahhh que bueno estuvo AHH AHHH… -- Gordo de mierda, tan rápido te corriste, eres un inútil je je…
Anselmo tomo una parte de las desgarradas prendas de Cielo Riveros y le limpio la espalda para luego caer de costado sobre la cama, la nena seguía en cuatro sobre la cama jadeando por las últimas embestidas del viejo. Anselmo la atrajo de espaldas a él y abrazándola para acariciarle los redondos melones, Cielo Riveros ni se quejaba pues le tenía mucho miedo por lo violento que se ponía.
-- Muy bien gatita ahora te toca a ti recibir verga…. Don Lucas se acostó en la cama, con la verga apuntando al techo, ordenando a la rubia a sentarse sobre él y cabalgarlo, Janitzi se sentó sobre el pero dándole la espalda, muy dentro de ella no quería que el viejo le vea el rostro de placer que ponía; don Lucas tomándola de la cintura le hundió todo su miembro dentro de su panocha.
-- Ahhh ayyy siii ahh ahh… Janitzi suavemente comenzó a cabalgar al viejo quien le acariciaba las nalgas y a su vez pasaba un brazo por delante de ella para amasar y pellizcar de sus pechos, la rubia sentía que chorreaba de placer, sentir esas manos ásperas y toscas sobre su cuerpo era algo nuevo para ella, pensaba también lo que hacía y lo que le hacían y la excitaba a sobremanera.
Anselmo veía a la orgullosa rubia como gozaba, y la vez que manoseaba a la jadeante Cielo Riveros a quien la excitación no la abandonaba, sentir esas gruesas manos de dedos gordos sobre sus sensibles pechos la calentaban demasiado y a la vez que el gordo le susurraba al oído -- Mira zorrita, como goza tu amiguita, tu también quieres gozar así… la nena jadeaba al sentir que a su vez el asqueroso gordo le pasaba la lengua por su oreja, una mano de Anselmo se deslizaba hacia la vulva de la nena acariciándola.
-- Por fa-favor se-señor no me to-toque ahhh…allí no me to-toquee ahhh… El gordo seguía hurgando delicadamente sobre la superficie de la panocha sin dejar de lamer el cuello de la nena, la verga del gordo lentamente comenzaba a recobrar su dureza, Cielo Riveros sentía sobre sus nalgas como iba tomando vida.
-- Ayyy Lu-lucas ayyy ahh ahh… -- muévete gatita, sigue moviéndote para llenarte de leche… -- Ayyy siii ahhh ahhh… Janitzi seguía saltando sobre la verga de Lucas como poseída, el viejo le sujetaba los brazos por la espalda y le daba de nalgadas para que acelere la culeada. –Vamos mi gatita, muévete mas, mas, mas fuerte… --Ayyy ayyy ahhh me mueroo ahhh… Janitzi llegaba al orgasmo mojando de sus fluidos toda la ingle de don Lucas que al sentirla fue el que acelero los embistes próximo a correrse también.
-- AHH te lleno Gata, AHHH… -- Siii sii lle-llename ahh… Don Lucas con un salvaje rugido comenzó a eyacular dentro de la rubia quien cayó jadeante sobre la espalda de este sintiendo como ese liquido caliente se vertía dentro de ella, Don Lucas agarrando las dos tetas de Janitzi también jadeaba expulsando hasta la última gota de leche dentro de ella. Sin duda alguna Lucas había conseguido domar a la rubia con sus promesas, no le cabía duda de que sería una muy dócil yegua desde ese momento.
En cambio Cielo Riveros no sentía lo mismo, al contrario de Janitzi ella asentía a todo por temor, le tenía miedo a don Lucas pero ahora mas temía al viejo Anselmo; lloraba por dentro al saberse usada por estos dos criminales; la llenaba de angustia al pensar que pasaría después, hasta donde llegarían con ella los dos viejos.
Anselmo sentía como la sangre le irrigaba todo el cuerpo esperando con ansias lleguen hasta su miembro y le brinden otra erección, tarea no tan difícil para su cuerpo al tener entre sus brazos a tan despampanante adolescente; el viejo seguía con las caricias sobre su panocha mientras le magreaba una de sus tetas, la fragancia que despedía la piel de la nena lo embriagaba, era como un perro que sentía los olores de una perra en celo, ver también a un lado a Janitzi de espaldas sobre su compañero quien le acariciaba las tetas mientras le mordía el cuello lo tenían cada vez más caliente.
-- Huy zorrita, espera a que me recupere y te hare gritar de nuevo… -- No ya no, por favor señor ya déjeme… Cielo Riveros sentía que no iba por buen camino, el gordo seguía con sus manoseos aumentando la temperatura de su cuerpo, entendía que de seguro ya no querría darle por atrás e intentaría darle por su virgen panocha la cual sentía ya caliente por los roces que el viejo le daba.
Serian ya como cinco minutos de toqueteos de ambos viejos con las chicas, Janitzi gemía ante las caricias que Don Lucas le daba, al viejo se le empalmaba la verga cada vez más, ya quería llevar a cabo su segunda parte del plan, pudo divisar entre las cosas de la nena una de esas sogas de nylon que se usan para ejercicio y dejando sobre la cama a la jadeante Janitzi procedió a tomar la cuerda.
Empezó a atar las manos de Janitzi las cuales las tenía estiradas para arriba para luego anudarla en la cabecera de la cama, la rubia quien aun jadeaba se dio cuenta pero ya era muy tarde para ella. – Que hace, para que me ata… -- Tranquila mi gatita, es solo un jueguito je je… A Janitzi no le gustaba la manera en que se lo dijo, sabía que nada bueno le esperaba. – no, no quiero jugar, desáteme… Don Lucas solo sonreía sin hacerle caso lo que la asustaba y enfurecía a la vez – Le digo que me desate, maldito viejo, quíteme esto…
Janitzi jaloneaba la cuerda pero era en vano estaba bien sujeta y los jalones no hacían más que lastimar sus muñecas; Anselmo seguía con sus infames caricias sobre la nena quien observaba con pena las quejas de su amiga y sintiendo miedo pues presentía que se les venía lo peor.
-- Bueno Anselmo, creo que llego la hora de cambiar de huecos je je… -- Huy si compadre… reviéntale el culo a esa chiquilla, dale su merecido por todas las veces que nos desprecio je je… Janitzi entro en pánico al oír lo que tramaban los viejos, el sexo anal era algo que nunca tuvo planeado en su vida, había oído que era la experiencia más dolorosa que cualquier chica podría experimentar y ella no quería comprobarlo.
-- No, no te atrevas, no quiero, suéltame por favor… -- je je te gustara gatita, igual que a Cielo Riveros , no la oíste como gozaba… -- No yo no, déjame maldito… -- Aquí harás lo que yo te diga, si quieres comodidades, tienes que pagar el precio je je… -- pe-pero yo no quiero eso, por favor déjeme ir… Janitzi rogaba por que la suelten pero era en vano, Don Lucas quería dejar huella en ella y que mas que estrenarle su virgen ano.
-- Muy bien gordo, yo le abriré el culo a mi gata y tú te encargas de la nena… -- No por favor, por allí no, déjenme por lo que más quieran… La nena rogaba en lágrimas por piedad, no quería albergar dentro su vagina a ninguno de los viejos los cuales estaban muy lejos de sentir compasión por ellas.
-- tu tranquila zorrita, veras que te gustara… -- No por favor por allí no, por allí no… -- Carajo porque no quieres, acaso solo te gusta por el culo…Cielo Riveros con lagrimas revelo su más preciado secreto, inocentemente se le escapo lo que tanto cuidaba para sorpresa de los viejos, -- So-soy virgen, soy vi-virgen, déjenme…
Anselmo quedo mudo al oír la confesión, solo don Lucas atino a responder con una gratísima sorpresa -- No mames chamaca, el pendejo de tu novio te ha dado por el culo y no por tu panocha je je…Cielo Riveros se quedo callada solo lloraba pensando que quizás conmovería a los viejos y se libraría de esa pesadilla. – Oye Anselmo, me temo que tendrás que esperar… -- Por-porque Lucas… -- je je porque después de darle por el culo a mi gatita, estrenare a la Cielo Riveros también…
La nena abrió sus ojos bien grandes al oírle, sintió que su alma se retiraba de su cuerpo, en cambio Anselmo fue el que reclamaba por ser el mismo el encargado de esa noble labor. – no mames Lucas y yo que… -- Carajo gordo, hoy es mi cumpleaños y estos son mis regalos, además tú te colaste, tú ya sabes donde deberías de estar… El viejo Lucas le dio a entender quien es el que mandaba, el gordo no tuvo más que aceptar la orden.
-- Bueno Anselmo tu mantenme caliente a la nena mientras empiezo por aquí… Al viejo gordo no le quedo más que seguir disfrutando del cuerpo de Cielo Riveros mientras observaría la labor de don Lucas el cual giraba a Janitzi boca abajo forzándola a doblar sus rodillas para dejar sus blancas nalgas levantadas, -- Escúchame bien rubia y también va para ti Cielo Riveros, aquí harán lo que les diga, a las buenas o las malas ustedes eligen, porque de todas maneras lo harán, ENTENDIDO… PLAFF PLAFF, fueron las cachetadas que recibió Janitzi sobre su trasero a su vez que la nena también oía la aclaración de Lucas.
Janitzi doblo sus rodillas dejando en alto su trasero, por primera vez sintió miedo al oír a Don Lucas, mientras que este tomo una de las cremas que usaba Cielo Riveros para su piel y comenzó a untarlo sobre el inexplorado ano de la rubia, Janitzi sentía una sensación escalofriante mitad miedo y tal vez curiosidad al sentir ese dedo hurgar su hasta ese momento virgen ano.
Don Lucas suavemente introducía su dedo milímetro a milímetro en el recto dilatándolo cada vez mas, Cielo Riveros oía los quejidos de su amiga y recordó como aquella vez que el cojo Juan le desvirgo el ano, sin querer y gracias también a los manoseos de Anselmo se comenzó a calentar, la nena pensaba dentro de sí (aguanta Jani, aguanta y veras que bien se siente); le daba vergüenza lo que ella misma se decía pero la escena le enardecía los sentidos.
-- AYY des-despacio Ayy me du-duele Ahuu… -- je je ya verás gatita que me pedirás que te de con fuerza… -- Ahuu no, no por favor me va a do-doler ahuuu noo… -- eso dicen todas, pero después gimen como perras, si o no Cielo Riveros …
La nena quien se encontraba apresada y siendo manoseada por Anselmo se puso roja por el comentario del viejo, cruzo miradas con Janitzi quien hacia muecas de dolor al sentir ya dos dedos dentro de su recto, -- Cielo Riveros, du-duele mucho ahuuu noo ya noo Lucas, ahuuu… Cielo Riveros no pudo contestarle, ya que el viejo le mordía el cuello quitándole la respiración por la ardiente sensación que le producía. Don Lucas se unto de crema toda la punta de su verga, listo para profanar la tan delicada intimidad de la rubia.
-- AYYY noooo, mal-dito ahuu du-duele noooo… El viejo le había introducido de golpe casi la mitad de su verga produciéndole gritos de dolor a Janitzi, jamás en su vida había sentido tanto dolor como hasta ese momento. – AYY noo, me, me duele, sa-sacalo por favor ayyyy nooo… -- Tranquila Gatita, así es mejor, para que siempre recuerdes que el gran Lucas fue el que te rompió el culo je je…
Janitzi claro que nunca olvidaría lo que le pasaba, jamás en su vida había sido tan maltratada o humillada como hasta ese momento, pensaba para sí misma el haber cedido ante la propuesta del viejo, su maldita codicia era la culpable, tuvo la oportunidad de haberse ido de aquel lugar y ahora recién se arrepentía. – Ahuu sa-saquelo por fa-favor ayyy dios nooo... el dolor era demasiado para ella y sus quejidos le dolían en el alma a la nena quien veía impotente como sufría su amiga.
A su vez pensaba que por culpa de ella, Janitzi sufría y todo por ser su amiga, por querer defenderla, se sentía demasiado culpable… -- Déjela, Don Lucas déjela, no la lastime… Don Lucas solo sonreía al escuchar que la nena pedía compasión por su amiga; -- je je ya la dejare, pero será para romperte tu virgen panocha, je je…
Cielo Riveros se arrepintió de haber hablado, se quedo muda y asustada por lo que después le esperaba; Janitzi seguía sintiendo como el miembro de su verdugo seguía abriéndose paso dentro de ella y empezó a morder fuertemente la almohada tratando de menguar en algo su suplicio. – Ya gatita ya, la tienes toda adentro, je je ahora si ya eres toda una hembra je je, la hembra de Lucas je je… -- Ahhuu mal-dito, viejo marica, solo así puedes tener a una mujer ahhuuu noo ahhuu nooo… Janitzi empezó a gritar al sentir como el viejo le empezó a bombear fuerte el culo en castigo por tal insolencia.
-- Así que marica no, toma por malagradecida UFF UFF… -- Ayyy por fa-favor nooo, ayyy des-pacio ahuuu noo… Janitzi sufría aunque poco a poco las paredes de su recto comenzaban a ceder ante el miembro que albergaba, pero no por eso el dolor cedía, más bien era insoportable para ella el ardor que le producia -- Ayyy per-perdóname Lucas ayyy me du-ele… -- Vas a portarte bien… -- ahhuu si, me por-tare bien, despacio que me duele ayyy ayyy… -- je je ya sabes que eres desde ahora para mi…
Janitzi soltó unas lagrimas de vergüenza al ceder ante ese viejo que muy dentro de ella comenzó a odiar, su orgullo estaba por los suelos y no le quedaba más que someterse en ese momento y con el mayor dolor de su alma salieron de sus labios las respuestas más humillantes para ella -- ayyy Lucas soy tu hem-hembra, ayyy des-pacio por favor ayyy dioss des-despacio ayyy…
Don Lucas sintiéndose un Dios sonrió y bajo la fuerza de sus embistes hasta dejar de moverse pero sin sacarle la verga, nuevamente terminaba domando a esa fiera que tenía en Janitzi, la rubia sintió alivio al sentir que ya no la penetraban, el viejo Lucas comenzó con caricias en su clítoris tratando de calentarla, y a su vez le acariciaba los pechos.
En pocos segundos empezó a oír como Janitzi empezaba a jadear suavemente, los tocamientos para ella surgían efecto, pero también poco a poco comenzaba a sentir una deliciosa sensación al sentir su ano invadido por ese miembro, su panocha comenzaba a expulsar esos líquidos que eran señal de inequívoco placer, sin lugar a dudas Don Lucas sabía lo que hacía.
A un lado de la cama el viejo Anselmo de costado apretaba contra si el exuberante cuerpo de Cielo Riveros quien sentía las rudas manos aplastar sus tetas y como la ya erecta verga le acariciaba por debajo sus intimidades, la cabeza de la verga se deslizaba desde el ano hasta la chorreante vulva, todo eso sumado a los asquerosos labios del gordo que le babeaban su sensible cuello la tenían en un estado caliente y expectante a lo que le sucedía a su amiga.
-- Ayyy señor ya-ya no me toque ahhh ya noo ahhh… -- je je, pero si a ti te gusta zorra, te gusta que te toquen, que te vean, por eso siempre te vistes con esas falditas y esos pequeños tops, te gusta calentar las vergas de todos los machos de la colonia, sales a pedir verga siempre, y ahora se cumplió tu deseo je je… tal aclaración del viejo no le gusto a Cielo Riveros , que culpa tenia ella de gustarle vestir así, esa no era razón para que la forzaran, recién venían a su mente las palabras de Don Benito cuando le recomendaba cambiar su manera de vestir.
-- Ya vez zorrita te quedaste muda, ves que tengo razón, tranquila que ahora te daremos toda la verga que pides je je… la nena seguía negándolo entre leves gemidos, ya no podía aguantar tanto tocamiento, muy a parte que no daba razón a lo que el gordo le decía, su cuerpo ardía en placer, no pudiendo creer como se entregaba a la lujuria nuevamente.
En el otro lado de la cama Janitzi ya gemía más fuerte, sus instintos de hembra en celo nuevamente habían renacido y ya no sentía el dolor de la penetración anal que había sufrido, fue ella misma quien comenzó a moverse para sentir como la verga de Don Lucas rozaban las paredes rectales produciéndole un pequeño ardor pero también una placentera sensación.
-- Huy como te mueves gata, ya te gusto que te rompan ese culito tan lindo que tienes je je… -- Huyy Don Lu-Lucas ahhh ca-callese ahh ahhh… -- je je te duele aceptarlo je je ahora te hare gozar como nunca… -- ayy des-pacio ahh ahh uhhh siii… Don Lucas sonreía al ver como dominaba a Janitzi, a su vez sentía como su verga era apretada por el ano de la rubia, a pesar de que toda su vida había tenido a la mujer que quería, nunca había desvirgado un culo y esta era una sensación que sin lugar a dudas lo sentía en la gloria.
-- je je oye Lucas después me dejas probarle el culo a la rubia, quiero compararlo con la de la Cielo Riveros je je… A pesar del placer que sentía con la culeada que le daban Janitzi pudo oír lo que el gordo pedía, no estaba dispuesta a permitir que Anselmo la violara, el gordo le daba asco y por sobre todo miedo al ver lo violento que se porto con Cielo Riveros .
-- Ahhh no, don Lu-Lucas no quiero que ese vi-viejo me toque ahh ahh… -- je je ¿Por qué gatita?... – Ayyy so-solo lo quiero a usted…con el no ayyy ayyy… -- je je ni modo Gordo, no la vamos a obligar je je… -- Maldita rubia presumida… le increpo Anselmo ante el rechazo de Janitzi y toda su furia lo desquito con la pobre Cielo Riveros quien sentía como le apretaba con fuerza los pechos hasta pellizcar los pezones haciéndola retorcer de dolor .
-- Ahuuu se-señor, me duele, no ha-haga eso ahuu… -- Cállate maldita zorra, yo te hago lo que me da la gana… Don Lucas que seguía penetrando con más fuerza a Janitzi escuchaba el mal trato que le daba el gordo, aunque no le importaba cavilo que eso podría jugar a su favor y le recrimino al gordo por su manera de actuar. – Oye gordo de mierda, ya no la maltrates, trátala bien carajo…
Anselmo lo miro confundido, pensaran que Don Lucas tenía un momento de piedad para con ella, pero la verdad era que quería ganarse su confianza, que se sintieran bien mas con el que con Anselmo, su idea de desvirgarla aun estaba en luz verde y nada ni nadie lo impediría.
Janitzi seguía con sus gemidos de placer, nunca antes había sentido tanta excitación al tener sexo, pensaba a su vez que a pesar del dolor que sintió cuando la penetraron por el ano no se imaginaba lo bien que se sentía, con razón Cielo Riveros gritaba de placer se decía.
-- Ayyy Lucas ahh asiii ahh siii da-dame mass ayyy… -- Claro mi gatita, te voy a dar la culeada de tu vida… Dicho esto don Lucas acelero sus embistes tomando a Janitzi por los pechos, la rubia sintió como la verga del viejo llego lo más profundo que pudo. – Ayyy por dioss ayyy uhhh lu-lucass ahhh… -- Que te dije, pórtate bien y la pasaras bien, ves que no te menti… -- Ayyy siii, me po-portare bien ahh ahh…
Cielo Riveros oía la entrega de su amiga y no lo podía creer, sentía algo de asco pero a su vez su conciencia le recordaba como ella sucumbió ante el cojo Juan en esa tarde donde la cogió el cojo hasta el anochecer, como gozo con esa culeada que le dio, y más reciente la manera en que se entrego en la Feria con Don Pedro, como ese viejo que se había apoderado de su vida a tal punto que hasta le tenía un sentimiento de culpa al estar con estos viejos en su ausencia.
-- Ayyy siii siii ahhh que ri-ricoo ahh ahh… Don Lucas notaba que en cualquier momento se veía venir el orgasmo de Janitzi pero el aun se controlaba pues no quería correrse y esperar a que se le pare de nuevo, ya que quería desvirgar a la nena también, el viejo tomo las caderas de la rubia y acelero con fuerza sus embistes – Ayyy ahhh ahhh ayyy dioss ahhh… -- MMM ya te vas a correr gata, ahhh… -- AYy siii, siii ahhh ahhh… Después de unos incesantes minutos el viejo sintió como Janitzi explotaba en un orgasmo y de su panocha le salpicaban una gran cantidad de fluidos los cuales se llevo a la boca.
-- Je je que rico sabes, este es jugo de la alta sociedad je je… se burlaba Don Lucas quien dejando tirada y algo mareada en la cama a Janitzi puso su vista en su nueva víctima. – Ahora si mi reina, le toca a tu dulce panochita jeje… Los ojos de Cielo Riveros empezaron a llenarse de lágrimas pues aun guardaba esperanzas de salvar su virginidad -- no por favor, no me haga eso, yo hare lo que me pida, por favor… -- Nada de ruegos y ven aquí…
Don Lucas tomo del brazo a la nena poniéndola de pie frente a él, sus inquisitivos y horribles ojos la desarmaban sintiéndose una débil presa ante él, ella a toda costa quería proteger su virgo, rogaría y se humillaría todo por cuidar su virginidad. – Por fa-favor don Lucas, hare lo que me pi-pida pero no me lo haga, se lo suplico… El viejo solo la miraba sintiéndose poderoso.. – Harás lo que te pida… -- La nena tragando saliva le asintió ante lo que pedía.
-- Muy bien muñeca, vamos al baño… El viejo la llevo al pequeño cuarto de baño que tenia la nena donde la obligo a ponerse de rodillas mientras él se aseaba la pegajosa verga, acto seguido se puso frente a ella y de forma dominante le dijo. – Muy bien, comienza a mamar… La nena con sus ojos brillosos de tristeza acerco sus labios hacia la punta de la verga, sentía asco pero veía esperanza de que si lo hacía bien ya no la desvirgarían.
Suavemente sus labios ya acogían la cabeza de la verga sintiendo el viejo la cálida boca de la nena – Mas cariño, mas cométela más… La colegiala se introducía todo lo que podía de la verga hasta el punto se sentir arcadas, en cambio el viejo gozaba al ver desde arriba a la bella chamaca mamarle su asquerosa verga y a su vez ver las enormes tetas.
-- Huy que rico la mamas, se ve que eres una chupa vergas de primera… La nena cerraba los ojos de cólera y humillación sentía ganas de matar a ese viejo canalla pero lo que más le dolía era tener entre sus labios la verga de este viejo quien estiraba sus manos amasándole sus pechos, la nena dio un ligero suspiro al sentir que el viejo le pellizcaba delicadamente los pezones.
El viejo veía embelesado como esa hermosa nena arrodillada le mamaba la verga – Ay chamaca, que rico la chupas, huy recuerdo cuanto tu mama me la chupaba, eres igual de buena que ella Huy que rica tu boca… Cielo Riveros dejo de mamar al oír lo que el viejo le decía, no podía ser, ella no podía creer lo que el viejo le comentaba, su madre le había mamado la verga alguna vez, era algo que le costaba creerlo.
El viejo noto la sorpresa en la nena y la obligo a seguir mamando – Sigue mamando y te contare… La nena con la confusión en su mente y casi como una zombie continuo con la felación expectante de que el viejo le contara -- Veras nena, tu mama fue mi amante cuando tú eras una pequeña niñita je je… Cielo Riveros lo miraba a los ojos muy confusa y sin poder creerlo y eso para el viejo era fascinante al ver su bello rostro viéndolo a los ojos con su verga deslizándose en sus carnosos labios.
-- Ay pequeña, las veces que con tu mama culeabamos mientras tú estabas en tu escuelita y tu cornudo padre trabajando, je je… a la nena le salían las lagrimas al recordar a su padre y como este viejo se burlaba de su memoria… – Usted mi-miente… reclamo la nena quien veía con cólera al viejo mientras volvía a engullirse la verga de este – Bueno nena, pregúntale a tu madre y veras que es cierto je je je…
La nena seguía con la mamada mientras el viejo le seguía apretando los pechos; mientras que en el otro cuarto Janitzi seguía de costado siendo acosada por Anselmo quien se acercaba por detrás y comenzaba a acariciarle las blancas nalgas; la rubia no decía nada pues en su aun delirio pensaba que se trataba de don Lucas a quien ya asentía con complacencia.
En el baño don Lucas levanto a la nena dejándola frente a él para comenzar a besarla como un salvaje, sus manos se apoderaron de sus duras nalgas sintiendo sobre su bajo vientre la durísima verga del viejo, la nena aguantaba todo lo que podía por no excitarse pero le era imposible ante el insaciable hambre de sexo que tenía su cuerpo. Sus pechos acariciaban el velludo pecho de don Lucas lo cual le erizaba toda la piel de su cuerpo.
A su vez la nena se imaginaba en su mente a su linda madre años antes cogiendo con Don Lucas, tenía un sentimiento de rechazo y asco pero a su vez el morbo del momento la excitaban, -- Ay mamacita que rica estas, me cogí a la madre y ahora a la hija je je… -- Eso es men-tira, no le cre-creo… -- El viejo le tomo el rostro a la nena y con una sonrisa burlona le dijo – Ahora que la veas, pregúntale y veras que cara pondrá je je…
El viejo Lucas ya tenía la verga parada y lista para penetrarla, ya no aguantaba más, los recuerdos de la madre de Cielo Riveros lo pusieron a mil y hasta se imaginaba cogerse a madre e hija a la vez; estar tirado en una cama y a su lado a las dos, su mente era un mar de perversiones animales.
Estaba listo para llevar a la nena a la cama y desvirgarla cuando suena el radio de Anselmo con una no grata noticia. – Atención Jefe, me oye… Don Lucas tomo el radio y contesto al instante -- Si que pasa, estoy ocupado.. – Jefe aquí le informo que Don Benito se acerca al edificio, cambio…
Don Lucas puco su mejor cara de furia pensaba que nuevamente llegaba ese viejo a malograrle la fiesta; la nena al escuchar no ocultaba su emoción, su ángel de la guarda nuevamente llegaba, pero para ella esa noche la suerte no la acompañaría, Don Lucas contesto. – Mira muchacho, dile a la Micaela que salga y entretenga al viejo, que le diga que arregle los grifos del baño… Cambio… -- En el acto Jefe…
Don Lucas sonriente soltó el radio y nuevamente enfilo contra la nena quien sollozaba porque sus esperanzas se desvanecieron, Don Lucas estaba seguro que don Benito no rehusaría en ayudar a Micaela, era un viejo muy atento y servicial en la colonia, siempre al servicio de la comunidad.
-- Muy bien muñeca, sigamos con lo nuestro… Cielo Riveros trago saliva al ver que el viejo se le acercaba amenazante, en su retroceso cayo de espalda sobre la cama en donde el gordo Anselmo de costado penetraba por la panocha a la aun inconsciente Janitzi, la nena veía que ya no tenía escapatoria y la resignación cada vez se apoderaba de su mente.
El viejo la tomo de las piernas dejándola al filo de la cama, su enfilada verga estaba a escasos centímetros de la panocha de la nena quien en un último intento de salvación comenzó a sollozar y a rogarle al viejo, -- Por favor Don Lucas no me penetre, no lo haga, se lo ruego… -- No mamazota, ahora tendrás el honor que YO te quite la virginidad je je…… -- No por favor, me va a embarazar, déjeme se lo imploro…
A los oídos del gordo Anselmo llegaron las suplicas de la nena y se acordó de la razón fundamental del porque se encontraba en ese cuarto, -- Oye Lucas, usa uno de los preservativos que traje… -- mmm no gordo, mejor así, para que sienta la carne de un macho… -- pero Lucas los condones me los vendió su noviecito je je es justo que los uses…
A Don Lucas se le dibujo una sonrisa cruel en la cara, que mas humillación para Cielo Riveros al saber que los preservativos con los que la iban a penetrar los vendió su querido Rodrigo, Don Lucas tomo uno de los profilácticos y procedió a colocárselos, --Bueno ricura, se ve que tu novio te quiere, me mando estos condones para usarlos contigo je je, cuando lo veas me le agradeces je je…
Cielo Riveros era un mar de lagrimas, su novio no era ni un mínimo recuerdo hasta ese momento y vaya manera como se lo recordaban, la nena veía la verga de don Lucas erecta y cubierta por un preservativo amarillo listo para profanar su último reducto de virginidad.
-- Ahora si Cielo Riveros, prepárate para el placer je je… -- Por favor no me lo haga, se lo ru-ruego ayyy nooo nooo… La nena sintió de pronto como la punta de la verga se abría paso dentro de su panocha, la verga ya empujaba la delicada membrana que comprobaba la castidad de Cielo Riveros. – nooo, no por favooor, no sigaa nooo… pedía la nena llorando sin ser escuchada puesto que Lucas miraba al techo con rostro de enfermo sintiendo como esa núbil vagina se iba acoplando a su invasora verga paso a paso.
-- AHHHHH nooooo noooooo de-detengaseeeee ahhhh nooooo… La verga del viejo se introdujo de una forma bestial, la nena sintió casi el mismo dolor que sintió la primera vez que le desfloraron el ano, el ardor era insoportable para ella pero más lo era el dolor mental que sufrió, el sentir como esa ruin verga se alojaba cada vez más dentro de su intimidad la mataba, nunca pensó que de esa manera dejaría de ser virgen.
-- Ayyyy nnooo, dios mio porqueee ayyy nooo nooo… -- No te quejes tetona, soy yo el que te coge je je, el gran Lucas je je je… -- ayyy noo lo odiooo...lo odiooo ayyy nooo ayyyy…
El viejo lleno por completo la panocha de la nena, su ingle ya chocaba con la de la colegiala quien lloraba sin consuelo al sentirse penetrada por ese vil viejo, la nena se encontraba con las piernas abiertas por los brazos del viejo quien se apoyaba sobre la cama penetrándola sin parar, le daba asco verlo como gozaba y como las gotas de sudor de la frente del viejo le caían sobre sus pechos y rostro.
-- AHh que rico te siento nena, AY mamita, fui el que le rompió el culo a tu madre y ahora le rompo la panocha a la hija je je je… Aquellas humillantes palabras destrozaban sicológicamente a la nena, se le rompía el corazón pensar que su mama engaño a su padre con el viejo aunque ella pensaba que todo era mentiras de don Lucas, solo para humillarla.
-- Ayy noo es me-mentira, ayyy nooo bassstaaa ahhhh… -- Es verdad niña culona, tu mama engañaba a tu padre porque él la tenia pequeña je je je no sentía nada y quería una buena verga como la mía je je… Cielo Riveros se quedo callada, se le vino a la mente lo que sintió cuando le vio el miembro a su novio, recordó esa cierta desilusión al verla pero no por eso entendía lo que hizo su madre.
Don Lucas para dolor de la nena puso sus piernas sobre sus hombros sintiendo ella que la verga la penetraba más profundamente, los dedos de sus pies apuntaban al techo tras cada fuerte estocada que el viejo le daba, la nena sentía como si la apuñalaban por la panocha, la verga del viejo era como un fierro caliente que le producía el mas desgarrador dolor.
-- Ayyy me me du-duele, ya pa-pare ahuuu nooo… -- AY mamacita, que rico me lo aprieta tu panocha AY nena, recuerda quien te hizo mujer AHHH… El viejo seguía con sus fuertes embistes y sus humillantes palabras, la nena lloraba apretando con su mano izquierda la sabana y con la derecha trataba de detener los embistes del viejo sin éxito alguno.
-- ayyy ya por favor, de-despacio ayyy di-diooss ayyy… la nena seguía implorándole piedad a Don Lucas quien seguía en su vaivén animal, a un lado Janitzi gemía de placer tras cada embiste de Anselmo quien a su vez le amasaba los pechos pudo oír los lamentos de la nena, como se encontraba espaldas a ellos ni se dio cuenta de que no era don Lucas quien la penetraba, si no el gordo obeso a quien detestaba.
-- pe-pero que haces, de-déjeme asqueroso… -- Cállate y sigue gozando como lo hacías je je… Janitzi no podía forcejear el viejo la sujetaba de los pechos con mucha fuerza mientras seguía con sus fuertes embistes, sentía que la de Anselmo era más gruesa pero no más larga que la del Lucas, y esa sensación era nuevamente única para ella aunque a su vez le preocupaba que con ese gruesa verga le quiera penetrar su recién estrenada colita.
El gordo la empezó a embestir con más fuerza -- su-suélteme viejo asqueroso, ahhh me las-tima ayyy… Anselmo seguía apretándole los pechos hasta el dolor y lamiéndole la cara – maldita chamaca orgullosa, siente mi verga, siéntela como te abre je je… -- Ayy nooo, vi-viejo asque-roso ahh no, no siga… Janitzi no podía reprimir lo que sentía y mucho menos defenderse por sus amarres, le dolía que este viejo ordinario le hiciera sentir placer.
Anselmo se estiro sobre la cama y sin esfuerzo alguno puso a Janitzi sobre él, los pechos de la rubia quedaron frente a su boca que sin perder ni un minuto empezó a devorar insaciablemente, a la chiquilla se le iba el aire y abría grande la boca al sentir los lametones, succiones y mordidas que el viejo le hacía a sus apetecibles pechos, sus atados brazos colgaban rendidos mientras que el gordo verga en mano ubicaba la entrada de la intimidad de la rubia penetrándola de golpe.
-- Ayyyy nooo, sáquela, ayyy ahhh… -- je je óyete como te gusta, chamaca altanera je je… Anselmo la tomo de las caderas y la empezó a subir y bajar en fuertes sentadas que producían el fuerte sonido de sus pieles – Ahhh ahhh des-despacio, mal-maldito viejo ahh ahh…
Mientras que Anselmo se daba un banquete con Janitzi, Don Lucas seguía follandose a la nena quien tenía la voz ronca de tanto llorar, sentía que el ardor poco a poco desaparecía y como las paredes de su vagina apretaban el miembro del viejo, Cielo Riveros sentía que aquella fricción de la penetración comenzaba a gustarle a su fogoso cuerpo, pero su conciencia aun le permitía saber que no gozara, que no disfrutara de la violación que ese vil viejo le había hecho.
-- AHHH te gusta chamaca, te gusta cómo te cojo, jejeje… -- nooo, no me gus-ta noooo ya ba-basta por favor ayyy… Don Lucas quien sonreía al oír sus suplicas la dejo de penetrar para sentarse sobre la cama invitando a la nena a sentarse sobre él, la chamaca le negaba con la cabeza tal pedido, era morboso para Lucas ver el miedo con la que se negaba; el viejo estiro una mano y la jalo atrayéndola hacia él.
-- Ven acá chamaca, tú haces lo que te diga carajo… Cielo Riveros con mucho miedo quedo frente a don Lucas quien le acomodo las dos piernas alrededor de si mismo entrelazándose con ella y tomándola de la cintura, la nena cerraba los ojos con tristeza al sentirse como una muñeca con la cual se le podía hacer lo que quiera.
-- Huy mi amor que rico se siente tu cuerpo caliente, bésame… Lucas le levanto la quijada y se apodero de sus carnosos labios, la nena se desesperaba con esa voraz lengua que acariciaba la suya, el viejo le mordía suavemente los labios y a su vez le acariciaba la espalda y las nalgas atrayéndola más hacia el.
El viejo tenía la verga como un fierro o como un animal salvaje reclamando su nueva cueva, la cual Don Lucas ya acomodaba para penetrar de nuevo, sin ningún esfuerzo levanto a la nena y la sentó de golpe – Aaauuu nooo por fa-favooor, ya no don Lucaaas yaaa nooo… El viejo para no oír sus quejas nuevamente la beso sintiendo dentro de su boca los quejidos de dolor de la nena.
La nena nuevamente sentía que a su cuerpo le comenzaba a gustar lo que le hacían, la fricción de la verga del viejo, las ásperas manos acariciando sus nalgas y espalda y ahora sumado a que el viejo le comenzaba a besar, lamer y mordisquear su fino cuello la llevaba por el recurrente camino del placer.
-- Ayyy por favor don Lucas, de-detengase ayyy ahhh… -- je je, tranquila nena, ya te empezó a gustar je je… -- no, no, ahhh ahh de-de-jeme ahhhh… La nena ya tenía el rostro mirando al techo con sus manos hacia atrás ya entregándose y sin ganas de luchar. La fogosidad de su cuerpo nuevamente le ganaba a su conciencia y su culpa, aunque no gozaba como veces anteriores donde sumisa respondía a los caprichos de sus acosadores pero en cierta medida si sentía placer en su recién estrenada panocha.
-- Ayyy ya pa-pare don Lu-Lucas ahh yaa noo si-sigaa ahh ahh… -- je je mentirosilla, mira como gimes putita, eres igual de puta que tu madre je je… -- nooo nooo ahhh oohhh diooss ah… Don Lucas se aferraba mas al cuerpo de la nena mezclándose los sudores de ambos, los duros melones de Cielo Riveros se aplastaban sobre el velludo pecho del viejo mientras Lucas le introducía un dedo en el ano, sintiendo como la nena daba un respingo al sentirla.
-- Ay nooo, sa-sauqelo ahhh de-dejeme don Lucas aaahh aaahh… -- SHHH silencio muñeca, solo goza je je je… -- ahhh yaaa nooo, se lo ru-ruego ahh pa-pare aaahh aaahh… La nena trataba de ser fuerte y resistirse a la lujuria pero poco a poco sentía que perdía el control de su voluntad, el viejo Lucas se dio cuenta que cada vez la nena se calentaba mas y nuevamente se zambullo sobre las tetas de la nena con un voraz apetito.
-- Ayyy uuhhh yaaa yaaa paaareee ahhh ahhh… la cada vez mas entregada colegiala casi se caía de espalda si no fuera por el viejo quien la sujetaba de la cintura; Don Lucas pudo ver también como Janitzi se movía al compas de las manos de Anselmo en una rítmica cabalgada y a su vez que el viejo le comía las tetas, aquella imagen le enervo los sentidos y se dejo caer sobre la cama sujetando las caderas de la nena.
-- Vamos chamaca, ahora tu sola te moverás o te parto la cara… La nena en su delirio sintió temor ante la amenaza del viejo y comenzó con un suave sube y baja mordiéndose los labios tratando de menguar los gemidos que ya quería desfogar, pero para don Lucas eso no era suficiente y tomándola de las caderas la comenzó a follar mas fuerte en duros sentones que hicieron gritar a la nena.
-- Ayyy ahhh des-despacio ahh ahh… --Ahh nena, a mi me gusta fuerte, para que aprendas que follas con un macho de verdad y no con el marica de tu novio je je je… -- Ayyy don Lu-lucas ahh ahh mass su suave ahh ahh… El viejo la seguía subiendo y bajando con fuerza mientras la nena liberaba los más sexis gemidos, su cuerpo ya le empezaba a pedir más, Don Lucas le comenzó a soltar y ya la nena era quien cabalgaba al ritmo que el viejo deseaba.
Don Lucas podía ver a la nena como lo cabalgaba y como esos melones se balanceaban de arriba abajo, ya no podría aguantar mas a ese ritmo, era morboso ver a ese viejo de mas de 50 años con la bella chamaca de 18 años, el viejo estiro sus manos para coger cada teta y apretarla según las embestidas que le daba.
-- Ayyy ayyy siii ahh ahh queee ric ahh ahh… -- Si mamazota que rico culeas ahhh ahh eres mejor que tu madre ahh ahh… -- ayyy ahhh siii ahhh to-toqueme maass ahh ahh… A don Lucas le sorprendió que la nena le pidiera que la tocara, sonreía al ver que la nena ya pedía y no se negaba, el viejo se acerco y le comenzó a succionar las tetas como u animal haciéndole sentir una escalofriante electricidad por todo su cuerpo.
La nena lo tomo de la cabeza acariciando los canos cabellos incitándole a que le coma con mas fuerza las tetas, el viejo sentía que se asfixiaba entre esas dos montañas de carne. Sin lugar a dudas había enloquecido a la nena.
-- AHH aHH nenita, si que eres buena follando ahhh no crees gordo… -- AHH si Lucas, esta rubia también es buena cogiendo, ya estoy a punto de llenarla de leche UFF UFF… Don Lucas quien también estaba por explotar agarro a la nena y la tiro de espaldas sobre la cama para al unisonó penetrarla cayendo encima de ella en una común pose del misionero, la nena lo recibía con los ojos entrecerrados y entrelazando sus piernas en las caderas del viejo.
Anselmo tuvo la misma idea e hizo lo mismo con la desquiciada Janitzi quien se sentía perdida con la gruesa verga del viejo obeso, Anselmo le puso las piernas sobre sus hombros la penetro de golpe acomodando su horrible panza para tal fin; en el cuarto solo se oían los gemidos de las dos abusadas y dominadas chamacas, se hubiesen oído en todo el edifico si no fuera por la bulla que el equipo de sonido hacia.
-- Ayyy ahhh uhhh maass masss ahh ahh goordoo as-asqueroso ahh ahh… gemía Janitzi ante los embistes de Anselmo mientras que a un lado la nena también gozaba por la culeada que le daba Don Lucas, -- ayyy ahhh uhh no pa pare ahh siii ahhh…
Ambos viejos ya estaba a punto de correrse, sus vergas ya no aguantaban las ganas de escupir toda la leche que se había juntado. – Oye gordo AHH cu-cuando te diga las mojamos de lecha a estas dos AHH chiquilllas… -- UFF AHH lo que digas UFF UFFf…
Tras unos minutos mas de embistes los viejos ya no aguantaron y a la orden de Lucas los dos dejaron de penetrarlas. El viejo Anselmo apunto su gorda verga hacia la rubia y comenzó a descargar una gran cantidad de semen sobre el vientre pechos e incluso una buena cantidad le llego a los labios a Janitzi quien no podía limpiarse por tener sus brazos atados.
Al mismo tiempo don Lucas se saco el condón y descargo su leche sobre las tetas de la nena y jalándola del cabello le embadurno todo su lindo rostro de semen, los viejo aun jadeantes se pararon y veían a las dos chamcas respirando agitadas y todas llena de semen.
La vista era espectacular y morbosa para ellos, pero sentían que ya no daban y además estaba que en cualquier momento Don Benito se desocuparía y vendría a ver a la nena; así que se dispusieron a vestirse rápidamente, la nena quien recién se recuperaba se acurruco en su cama y comenzó a llorar por anta humillación, Janitzi quien también se recuperaba del orgasmo sufrido le pidió a don Lucas que la soltara.
-- Señor Lucas desáteme por favor… -- je je como tu digas mi reina je je… -- Oye Lucas la rubia si que es una puta en la cama je je y tan creída que era je je… el viejo corto los amarres liberando a la rubia quien indignada por lo que dijo el viejo obeso tomo la misma escoba con la que quiso golpear a Lucas y le propino un fuerte golpe en la espalda al gordo quien aun se vestía dando un fuerte grito de dolor…
-- AUUU Carajo, perra maldita… -- Viejo asqueroso quien te dijo que me tocaras, maldito cerdo cochino…
Anselmo enfureció como nunca ya que no le gustaba que le dijeran cerdo y se fue en dirección de Janitzi para golpearla pero fue detenido en su camino por Lucas quien sonriente le increpo –Déjala gordo de mierda, ella tiene razón, quien te dijo que la follaras… -- Pero Lucas no pue… -- Ya carajo, la rubia es mía y si algo le pasa te las veras conmigo, ENTENDISTES…
El viejo Anselmo solo agacho la cabeza viendo como Janitzi al sentirse proteida sonreía ante su sometimiento, Una vez vestidos los viejos se dispusieron a retirarse a seguir festejando y bebiendo no sin antes despedirse de las nenas. – Buena mi Jani, ya sabes como quedamos tomate unos días y empiezas abajo jeje,… Janitzi solo asintió con la cabeza sin responderle. – Chau mi amor… El viejo Lucas se dispuso a darle un beso siendo rechazada por ella y solo se fue riendo junto al gordo.
En ese instante Janitzi volteo y vio que la nena seguía en posición fetal llorando como una niña por todo lo sucedido, sin lugar a dudas había sido la peor experiencia vivida hasta ese momento en su vida, los sollozos de Cielo Riveros conmovieron a la rubia quien gateando se subió a la cama para abrazar a la nena quien se abrazo a ella para seguir llorando…………
y apurada en dirección a su hogar, algo muy malo debió haber ocurrido en su casa se quedó pensando en la solitaria plaza.
Cielo Riveros 14
Los vejetes como si todo eso fuese de lo más normal del mundo luego de dejarlas en tan lamentables condiciones y tras fumarse un cigarro comentando de lo muy bien que se las habían pasado con esas dos hembritas de 18 años, se limpiaron sus vergas con las ropas de las jóvenes y simplemente se fueron en la camioneta de don Cipriano, dejándolas desnudas y todas culeadas al interior de la casucha.
--Ehhh... parece que ya se fueron, dijo Cielo Riveros aun tirada en el suelo y con sus deditos doblados en su boquita cuando sintió que el motor de la camioneta se iba alejando. La nena ya había recuperado su tímida personalidad de siempre.
La rubia tras mirar el inmundo lugar en donde se las habían cogido se puso de pie y le contesto a su amiga,
--Al menos nos dejaron la ropa y nuestras cosas... ponte de pie tu también y vístete que nos vamos... mira ya esta aclarando...
Cielo Riveros 14
Las dos exuberantes colegialas caminaban en silencio por aquel solitario y polvoriento camino rural en donde habían sido abandonadas, sus figuras eran imponentes y contrastaban con el paisaje de aquellos lugares. Ambas avanzaban moviendo deliciosamente sus cuerpos, quien las viera nunca creería que aquellas exquisitas beldades venían recién saliendo de una salvaje sesión de sexo duro y bestial con dos viejos mecánicos de muy baja calaña, sesión que había durado casi una noche completa, pero ahora solo la oscura sombra de los árboles y el frescor de la mañana las acompañaban.
Claudia a pesar de estar consciente de lo que les había ocurrido y de lo hecho por ellas con los dos detestables amigos de Cielo Riveros era de una conducta de lo mas reprobable, de cualquier modo no dejaba de mirar a su amiga en forma sonriente, deseaba hacerle miles de preguntas, pero el semblante serio y de preocupación que veía en la cara de nuestra deseada colegiala mientras esta caminaba cadenciosamente, la detenían a que se las hiciera.
Iban con su rostro demacrado y con su cuerpo adolorido, en el pelo de ambas, a pesar que se lo habían limpiado, aun se secaban algunas muestras de las exudaciones venéreas que los mecánicos habían vomitado desde sus vergas solo momentos antes, ya que todos sabemos y tal como se dijo, aquellos dos ordinarios vejetes se las habían estado cogiendo por toda una noche, en distintas posiciones y prácticamente tiradas en el suelo hasta que ambos se quedaron con los testículos secos al haberles soltado una gran cantidad de semen caliente y viscoso en sus caritas en el momento que dieron por terminada la celestial orgía que se habían pegado con ellas.
Con todo lo anterior, en aquellas tan deplorables condiciones físicas y con sus vestimentas sucias con tierra y espermios secos como las dejaron abandonadas, las nenotas a ojos de cualquiera no dejaban de verse netamente apetecibles como lo eran ellas.
Tras caminar 20 minutos por lo menos por fin pudieron llegar a un camino con pavimento, por lo que rápidamente se fueron a sentar en una solitaria y deteriorada parada de autobuses la cual se encontraba llena de basura. En distintos puntos de aquella inmunda garita de pasajeros habían notorias manchas de orina que aun humeaban sus hedores, ya que mas que paradero esta era usada por los pasantes para echar unas buenas meadas.
Aun era temprano y por el sector en donde se encontraba aquel rustico y miserable paradero de autobuses no se veía ningún alma, todo era follaje, terrenos con siembra y solo el camino con pavimento les enseñaba al par de chamacas que por fin estaban en dirección a la civilización, fue Cielo Riveros la primera en mostrar preocupación al no saber ni siquiera donde estaban.
--Ay Clau…!!, y que hacemos ahora!?, ya es tarde y por aquí no pasa nadie…
--No te preocupes Eve, ya pasará un autobús y regresaremos a nuestras casas, no sabes las ganas que tengo de entrar a una ducha para enjabonarme y sacar de mi cuerpo toda esa porquería que tus amigos me desparramaron por todos lados…, -de alguna forma ahí era la Claudia la que conservaba la calma, la rubita ya se había visto en situaciones más o menos parecidas anteriormente, claro que no tan brutales y crudas como la de la noche anterior, en donde los machitos aquellos de esas otras incursiones tampoco habían logrado obtener mucho en la parte sexual y obviamente que estos fueron casi el triple más jóvenes en comparación de estos últimos dos con los que ellas si habían estado cogiendo como Dios manda.
--Pero es que por aquí no se ve a nadie, ni siquiera pasan autos…! Me da miedo que nos ocurra algo malo…!!, -la chamaquita decía lo anterior mirando en todas direcciones, mientras Claudia no pudo dejar de reírse con las palabras de su amiga.
--Jijiji… Ay Eve… no me hagas reír… con lo que nos pasó anoche con tus amigos que más nos podría ocurrir…!?, jijiji. -La rubia estudiante se encontraba sentada a solo un metro de donde estaba la mamasota y no dejaba de mirarla con picardía mientras le hablaba, ya que con el solo hecho de recordar como la había visto cogiendo con los dos viejos al mismo tiempo y con su carita desfigurada por el placer que debió haber sentido en aquellos momentos en que dos vergas distintas se deslizaban y entraban alternadamente por sus dos orificios principales. El solo pensar e imaginar esto último a la rubia aun le hacían sentir unas raras sensaciones tanto mental como físicamente, preguntándose que quien lo iba a creer?.
Nuestra agraciada y curvilínea chamaca que se encontraba sentadita con sus dos poderosos muslos bien juntos en aquel solitario paradero notaba la singular forma en que su amiga de la niñez le hablaba y la miraba al mismo tiempo, y tras escuchar lo último que esta le decía se dio a responderle.
--Ellos… ellos no son mis amigos…, -le contestó mirando hacia el horizonte del pavimento por donde debería llegar el transporte de regreso a sus hogares.
--Como que no lo son…!?, -le contestó seguidamente Claudia, --si tu mismita me los presentaste anoche, o acaso ya no lo recuerdas…!?, además que casi me rogaste para que saliéramos a juntarnos con ellos, -le respondió la rubia estudiante que ya estaba comenzando a pensar que su amiga del alma de ingenua no tenía nada.
--O sea si…!, -Cielo Riveros le habló con un dejo de preocupación en su voz al notar que Claudia daba muestras de no creer en lo que decía, así que continuó explicándole, --Yo al que conozco un poco mas es a don Pedro, pero a su hermano era la primera vez que lo veía…!!
--Mmmmm…!, como que no te creo mucho amiga, Jijiji. Me dices esas cosas y a pesar de eso igual te encontré acostada con ese tal don Cipriano cuando llegué con su hermano luego de ir a dar una vuelta en camioneta, jijiji…, -la rubia le hablaba buscando su mirada con la suya por lo que continuó, --Yo me pregunto ahora… cómo habría sido la situación si ya lo hubieses conocido!?, jijiji… -Ahora Claudia miraba a Cielo Riveros de una forma tan acusadora como también de complicidad por lo que habían hecho juntas, su entre maliciosa y picara sonrisa así lo hacían notar.
--Ay Clau…!, de verdad que yo no te estoy mintiendo, lo que pasó… lo… lo que pasó… -La tentadora adolescente de cabellos azuladamente negros no encontraba las palabras necesarias para explicarle a su amiga como se habían sucedido las cosas con don Cipriano en el momento en que se quedaron a solas en aquella viciosa casucha de campo, o al menos como lo fue al principio de aquella incursión sexual en que la encontró Claudia una vez que llegó de vuelta con don Pedro, hasta que al fin le dijo no muy convencida de ello, --En ese momento en que tu llegaste me… me… e… es… es… taban v… vio… violandooo…!, -dijo la mamasota entre cortadamente, casi muerta por la vergüenza y mirando hacia el suelo, lo único que deseaba en esos momentos era que su amiga creyera en sus palabras, pero muy en su interior ni ella misma se la creía, deseaba que la tierra se abriera y se la tragara para no asumir la realidad.
--Jajajaja… Eve…!, no me mires por mensa, si cuando yo entré en esa casucha tu rostro era el de una verdadera put…, ay perdón…!!!, -Claudia rápidamente se tapó la boca con sus delicadas manitas de niña fresa, para luego y en el acto continuar con sus acaloradas apreciaciones, --Discúlpame Eve es que casi se me salió, o sea lo que quiero decir es que se notaba que te la estabas pasando muy bien con lo que te hacía ese señor Cipriano, jijiji…!
La resuelta Claudia miraba detenidamente a su amiga para notar cuales eran las reacciones de ella ante su tanda de verdades, y notó que con sus últimas aclaraciones a la nena se le llenaron sus ojitos verdes de lágrimas, ya que prácticamente la había tratado en forma involuntaria de puta, por lo que rápidamente se arrepintió de estar siendo tan dura con ella y quiso hacerla sentir no tan culpable.
--Ya Eve…, no pongas esa cara… si no es tan grave eso que estabas haciendo, además que yo se que tú no eres así, recuerda que yo también tuve que hacerlo, mira te voy a confidenciar algo muy personal, para que veas que tú no eres la única que se acuesta con viejos, jijiji…
La colegiala rápidamente se quedó mirando a su amiga con sus labios balbuceando, ella quería decir cualquier cosa para defender su reputación, pensaba que si bien ella hasta este momento se había acostado con distintos vejetes, estos sucesos eran netamente involuntarios por parte de ella, aunque sabía que a estas alturas difícilmente podría dar a demostrar lo contrario, o al menos con su amiga.
Claudia quien advirtió el estado emocional en que se encontraba Cielo Riveros rápidamente le soltó lo que quería decir.
--Escúchame Eve… mira esto es un secreto Ehhh, ps…, ps…, la otra vez en mi casa yo también lo hice con un viejo, -la rubia veía que su amiga poco a poco le iba prestando atención a sus palabras, así que continuó, --Mas precisamente y para que sepas fue con el profesor Tulio, jijiji, vez…?, tú no eres la única que se ha acostado con hombres mayores…
Cielo Riveros cambio rápidamente de expresión ante tan intima confesión de Claudia, claro que la rubia se lo estaba confidenciando únicamente para que la nena no se sintiera tan mal ya que ella al conocerla de tanto tiempo conocía el carácter reservado y retraído de su amiga.
--Lo… lo… has hecho con el profesor Tulio…?, -Cielo Riveros por un momento olvidó su estado emocional, la confesión de Claudia era muy comprometedora…
--Pus si… y que tiene?, además que me prometió hacerme un favor a cambio de dejar que me lo hiciera…
--Y que favor te hará a cambio por haberte acostado con él?, -Ahora Cielo Riveros se mostraba más confiada y abierta de mente con semejante declaración por parte de Claudia.
--Mmmm… jiji, por ahora no te lo puedo decir, pero quería que lo supieras para que no te sintieras tan culpable, y también para que sepas que no estás sola en esto, -le respondió solidariamente a Cielo Riveros la salida jovencita fresa.
--Claudia…! Tuuu… tu… me estas vacilando…! Yo… yo… no te creo que lo hayas hecho con el maestro Tulio…!, solo lo dices para que yo no me sienta tan mal. –Cielo Riveros miraba con cara de sorprendida a la rubia mientras le decía esto último.
Claudia por su parte se miraba el cuidado de sus uñas con cara de aniñada, pero la verdad era que nuestra infartante colegiala si le creía, ya que conociendo a su amiga sabía que esta era capaz de hacer cualquier cosa a cambio de algo que quisiera obtener, y en el colegio ya eran muchos los comentarios que enlodaban su reputación, sumándole que a su mente rápidamente le vinieron las imágenes de ver a Claudia totalmente desnuda masturbándose y mencionando al profesor Tulio aquella vez que tuvo que salir huyendo de su casa antes de que ella hiciera una barbaridad al ver a su amiga desnuda o antes de que el buen profesor se despertara y se la culeara nuevamente, fue la rubia quien la sacó de su ensimismamiento.
--Jajajaja…!!, te digo que si tonta, me acosté con él ese día que fuimos a la feria cuando tú te perdiste en el sector del toro mecánico, sucedió un rato antes de que llegaras a mi casa. Te das cuenta…?, ahora sabes que tu buena Claudia se lo ha hecho con el profe más feo del colegio, jijiji, y para que sepas el profesor Tulio también fue un poco bruto cuando me lo hiso…
La contrariada mamasota quien escuchaba las íntimas confidencias de su amiga fue traicionada por su acalorado temperamento a la hora de entrar en detalles lujuriosos ante tan ardiente conversación y a su acalorados recuerdos, añadiéndole a que con su misma amiga acababan de estar revolcándose en un cuarteto de antología con dos vejetes de vergas descomunales así que fue y le soltó sin darse cuenta otra más alteradora intimidad de ella a la rubia. Claudia la captó al instante y lo que escuchó la dejaron boquiabierta.
--Ay si…!, el maestro Tulio puede ser un poco bruto y tosco al momento en que se lo hace a una, pero no la tiene tan grande como la de don Pedro o don Cipriano… o al menos así se la sentí yo cuando me la metió en tu casa... –La chamaca en sus últimas palabras fue consciente de la indiscreta revelación que le estaba haciendo a su rubia amiga, y tras quedarse callada marcadamente al caer en cuenta del error cometido lentamente fue girando su carita hacia donde estaba Claudia para quedarse mirándola con sus preciosos ojos verdes bien abiertos, saltones y mas vidriosos que nunca.
La bella Claudia se quedó pasmada, no se la podía creer, su amiga del alma y de la niñez, la más calladita del colegio y alumna ejemplar ante todo el profesorado, la misma que se sacaba las máximas calificaciones en todos los ramos, y que era pretendida por los chamacos más bien parecidos del establecimiento escolar también se acostaba con el aberrante maestro Tulio!?, ya que claramente era la misma Cielo Riveros quien le estaba confirmando que ella conocía las dimensiones vergales del asqueroso maestro y que para rematarla no se la sintió tan grande cuando el profesor con cara de mórbido renacuajo se la había metido en su propia casa, según le acababa de confidenciar al compararlas con las de don Pedro y don Cipriano.
--Noooooo…!!! Eve…!!!! me estás diciendo que el maestro Tulio también te la metió…!!??, -el curvilíneo cuerpo de la rubia embutido en el exquisito vestido negro que tenia misteriosas manchas secas de un líquido medio blancuzco y viscoso temblaba de emoción ante este nuevo soplo lujurioso que le acababa de soltar Cielo Riveros , y al ver que la chamaca se había quedado petrificada ante su imprudente confesión se dio a animarla a que fuera ella misma quien se lo confirmara nuevamente y que ella no había escuchado mal, --No te quedes callada amiga…!!, dime también te has acostado con el profesor Tuliooo!?
Cielo Riveros quien en esos momentos se sentía morir de vergüenza por la imprudencia de su confesión supo que no le quedaba más alternativa que reconocer lo dicho por sus propios labios.
--Ehhh… es que yoooo… no queríaaaa… peroooo siiiiiii… también me lo hisoooo… y fue en tu casaaaa…!, -le dijo ahora mordiéndose el labio inferior y mirando hacia cualquier parte.
--No lo puedo creer…!!! Esto… esto… es increíble…!!!, dímelo otra vez y pellízcame para no creer que lo estoy soñando… dime, el profesor Tulio te estuvo culeando en mi propia casa…!!??, -la rubia ahora ya estaba de pie y caminaba nerviosamente de un lado a otro al frente de su amiga, ella de un minuto a otro ya estaba como loca y totalmente salida por el curso de la conversación.
--Ay Clau…!, no lo digas así, esa vez no sé que me ocurrió, pero así fue, como tú lo dices…!, -le respondió Cielo Riveros desde los viejos y resecos tablones en donde estaba sentada.
--Pues dilo tu también para creerte…!!!, -un extraño brillo en los ojos de la rubia chamaca denotaban el alterado estado de morbosidad en que la tenía su amiga del alma, y más se encabritaba en los momentos en que su dulce amiga era la que se ponía a largar guarradas, algo muy parecido a la conversación que habían tenido antes de salir de su casa.
--Ya… párale Claudia que me da vergüenza hablar de esas cosas…, -la nena no hallaba donde meterse, en tanto la rubia sabía que la Cielo Riveros estaba bajando la guardia y que solo bastaba presionarla un poco para que siguiera soltándole las lujuriosas zorrerías que andaba metida.
--Dilo tu misma…!!!, y te juro que no te molesto mas…!!!, -le demandaba en forma alterada y ya media caliente con solo imaginarse a su amiga del alma clavándose al asqueroso maestro, la lujuriosa Claudia se lo decía ahora parada imponentemente frente a ella y con sus manos puestas en sus caderas, sus bien formadas y doradas piernas le temblaban.
--Pero que quieres que diga yo misma?, -la nena otra vez llevó sus deditos doblados a su exquisita boquita de labios tan rojos como las frambuesas en sazón, mientras miraba para cualquier parte menos a su amiga.
--Pues que te culearon en mi casa pues mujer…!, si de eso estamos hablandooo…!!!, -la rubia increíblemente estaba que sufría un orgasmo ahí mismo parada como estaba.
--Bueno, te lo direee…!, pero por favor ya le paras con tus salidas…: mira… el profesor Tulio me estuvo cu… cu… cu… leando en tu propia c… ca… casa…!, estas conforme ahora!?, -le consultó finalmente la chamaca a su amiga haciéndose inconscientemente como si planchara sus ropas con sus manitas, la nena estaba muy nerviosa.
A estas alturas Claudia estaba destilando desde su jugosa vagina intensos chorros de fluidos íntimos mezclados con el semen de los dos viejos que también habían descargado adentro de ella, la rubia sentía como 1 o 2 de estas imprudentes gotas de fluidos escapaban de entre medio de su calzón ya empapados espesamente para ir escurriendo y bajando lentamente por sus muslos, aun así lo que más le importaba en esos momentos era lo que su amiga le estaba revelando, pensaba también en que se había comprometido con ella en no seguir con sus preguntas, pero ella (Claudia) quería saber más…
--Y lo hicieron… sin nada de ropa…?, o sea, completamente d… des… desnudos…!?, -la caliente Claudia ya estaba que se sacaba su vestido y se masturbaba ahí mismo tirada en el suelo de tierra imaginando a su amiga teniendo sexo encuerada con el profesor con cara de sapo.
La colegiala quien también se encontraba muy en su contra con su entre pierna casi en las mismas condiciones que la de la rubia ante tan ardiente conversación, inexplicablemente para ella se lo confirmó moviendo afirmativamente su cabecita.
--Ay Eve…! Ay Eveee…!!, -exclamó Claudia poniéndose a caminar otra vez de un lado a otro y rápidamente con sus ojos cerrados e intentando aguantar y no dejar salir de su intima hendidura un chorro de agüita caliente que imprudentemente igual escurrió desde su vagina hacia sus dorados muslos avasallando y mezclándose con las gotas anteriores.
Una vez recuperada a medias volteó hacia donde estaba sentada su amiga para continuar con su salido interrogatorio.
--Oye…!, y no me vas a decir que a parte de los dos viejos de anoche y del maestro Tulio…, también te has acostado con otros viejos…?
Cielo Riveros volvió de sopetón a la realidad, sus piernas y todo su antojadizo cuerpazo comenzó a temblar de estupor ante la imprudente pregunta de su amiga, solo se la quedó mirando impactada y con sus labios gesticulando cualquier cosa con tal de evitar la respuesta que debía darle a Claudia, la atractiva y joven rubia tenía la cara de ser una autentica degenerada según la veía en esos momentos.
--Clauuu…!, ahí viene un autobús… hazle señas…!!!, -la alterada Cielo Riveros vio venir al autobús como si este viniera a salvarla de su propia ejecución sumaria ante la verduguienta pregunta de su amiga.
Claudia rápidamente giró su mirada y vio que se venía acercando el transporte, así que ya no quedándole más remedio comenzó a hacerle señas para que este se detuviera.
--No sé porque amiga, pero ya creo saber cuál iba a ser tu respuesta, Ahhh…!, y no te creas que esto quedara aquí Ehhh… nosotras dos tenemos una buena conversación pendiente, -le dijo Claudia terminantemente a Cielo Riveros antes de poner su dorado muslo en la pisadera el transporte.
--Ehhh si claro…!, -fue la respuesta de la avergonzada colegiala quien se subió detrás de Claudia.
Las dos atrayentes mamasotas hicieron en silencio el recorrido hasta el centro de la ciudad, con una ensimismada Cielo Riveros que solo se daba a mirar por la ventana ante la inquisidora y picarona sonrisa de Claudia que no dejaba de estudiar las reacciones de su amiga mientras ahora la observaba y la imaginaba acostada con el maestro Tulio.
Una vez que se bajaron del autobús, una extrañada Cielo Riveros le preguntaba a su amiga que para adónde iban ahora, si la dirección de la casa Claudia quedaba en sentido contrario de la calle en la cual ellas iban caminando.
--Que para donde vamos ahora!?, ps… vamos a ir a un centro asistencial a pedir la píldora, o acaso quieres quedar embarazada de cualquiera de tus dos amigos?, -la rubia estudiante le contestaba con su semblante serio debido a la importancia que tenía para ella aquel trámite.
Cielo Riveros se sintió extraña al andar en aquellas andanzas con su amiga, ya que según ella y por lo que le había enseñado su mamá eso que iban a hacer ahora era para jóvenes libertinas, y no para niñas bien y de estudios como lo era ella, pero sabía que su amiga tenía razón, lamentablemente era consciente de que se la habían estado cogiendo hasta la amanecida y no le quedaba más opción que dejarse llevar por Claudia.
Cuando ya estuvieron a la entrada del centro asistencial público el cual a esas horas estaba atiborrado de personas, Cielo Riveros dio muestras de vergüenza y no quería entrar, la rubia tuvo que convencerla de que lo hiciera ya que con todo lo que habían depositado dentro de su cuerpo las posibilidades de un embarazo no deseado eran muy altas.
--Ay Clau, es que yo no estoy acostumbrada esto… me da penita entrar ahí…, -la chamaca junto con decir lo ultimo miraba en todas direcciones pensando que la podría ver alguna persona conocida de su madre quien también trabajaba en un centro hospitalario, claro que en otro sector de la ciudad.
--No seas tonta Eve, si aquí nadie nos conoce, solo nos pedirán nuestras identificaciones y nos darán la píldora, además que estos asuntos son de carácter reservado, ya te dije, nadie lo sabrá, solo nosotras dos, y si nos preguntan les decimos que unos chicos nos emborracharon y nos lo hicieron, y asunto terminado, ya no seas infantil y hagámoslo.
Ya con lo último la nena no le quedó más remedio que entrar junto a su amiga a pedir la famosa pastilla.
Fue una chica vestida de auxiliar de enfermería quien las atendió esta era solo un par de años mayor que las chamacas. Cielo Riveros y Claudia luego de ambas pasar sus identificaciones en el mesón se dieron a esperar a que les dieran el medicamento.
En eso las colegialas vieron que la chica luego de confirmar ambas identificaciones sacó de un mueble algo parecido a una ficha clínica y que también hablaba en voz baja con una vieja gorda y con pinta de chaperona que también vestía un delantal blanco, ambas funcionarias miraban las identificaciones de las chamacas y los documentos extraídos por la más joven, como si estuvieran confirmando algo, en eso fue la gorda quien se hiso cargo de la situación, así que con las dos identificaciones en mano mas los documentos entregados por la joven auxiliar se fue acercando adonde esperaban las estudiantes.
--Cual de las dos es Cielo Riveros del Carmen Jiménez Gómez…?, -la vieja les consultaba autoritariamente y con cara de enojada, aparte de gorda era muy fea.
--Ehhhh… soy yooooo…!, -le contestó la chamaca con temor y en forma extrañada, Claudia también estaba algo curiosa.
--Usted señorita, -le vieja le hablaba ahora a Claudia, --Espere a que le traigan la píldora aquí en el mesón, y Usted, -dijo ahora refiriéndose a Cielo Riveros , --Usted debería ser más responsable con su situación, si se va a dedicar a la prostitución desde hace mas de dos semanas que debería haber venido a este centro asistencial o a cualquier otro a hacerse el control médico que les hacemos a las putas…, o acaso no le tiene miedo al Sida…!?, o a pegarse cualquier infección con todos los hombres que se debe acostar por las noches?.
La incrédula Claudia escuchaba sin poder creer todo lo que le decía esa vieja gorda a su tímida amiga, mientras esta ultima solo se daba a escucharla con cara de espanto y sin poder gesticular palabra alguna, en eso Claudia sintió que nuevamente debía sacar la cara por su amiga del alma.
--Ehhh…!, perdón que me entrometa señora, pero creo que acá hay una equivocación mi amiga y yo somos estudiantes, ella no es ninguna prostituta como Usted dice…
--Que equivocación ni que ocho cuartos…!, esta pajarraca es una putilla de esas que se paran en los callejones por si no lo sabías…, -En su profesión la vieja odiaba a las prostitutas, más que nada por prejuicios sociales que por lo que esas pobres hembras le hicieran un mal a alguien, y las odiaba más todavía si estas eran de buen ver, así que imagínense como su puso al ver a la deslumbrante colegiala, el asunto era que la vieja le hablaba con un odio parido a nuestra asustada adolescente de 18 añitos recién cumplidos.
La rubia no pudo evitar reírse un poco por la tremenda equivocación que estaba cometiendo aquella señora, por lo que se dio a ponerse un poco más seria e intentar volver a explicarle.
--No…!, Usted está equivocada…
--Pues confírmelo Usted misma señorita, -le cortó la viaja, --Aquí está la ficha que les hacemos a todas las putas con los documentos que llegan del tribunal, abajito esta adjunta la copia del parte que le cursaron hace un poco más de un mes, aquí dice clarito, Cielo Riveros del Carmen Jiménez Gómez, 18 años, domiciliada en…(en el documento oficial salía clarita la dirección de Cielo Riveros y Claudia la conocía muy bien), Causal: prostitución en la vía pública, -continuaba ladrando la vieja a oídos de todas las personas que a esas horas se encontraban en el centro asistencial, --Además que a la muy sinvergüenza la pillaron haciéndolo encuerada arriba de un carro según se detalla mas abajito, vamos lea y revíselo Usted misma y dígame si estoy equivocada.
La rubia Claudia tenía sus ojos abiertos como platos mientras leía lo que decía el documento emitido por un tribunal oficial, ahí estaban claritos los datos personales de su amiga de la infancia, y al termino de la copia de la infracción estaba la misma firma de su amiga que ella ponía en sus cuadernos, o sea, -pensaba la rubia, quien había firmado aquella infracción por prostitución irrefutablemente era su misma amiga de la niñez con su puño y letra, mientras Cielo Riveros roja como un tomate, y al borde del llanto no sabía cómo reaccionar a tan comprometedora situación.
--Y que me dice ahora señorita, cree Usted que pueda existir algún tipo de equivocación…
--Ehhh… no sé qué decir…, -le dijo la joven rubia a la vieja enfermera, para después dirigirse hacia su amiga con cara de estupefacción, --Eve… tu dime algooo…!, -la chamaca solo miraba hacia abajo y mordiéndose los labios, ella por ahora no tenía nada que decir al respecto.
--Bueno, después puede hablar con su amiga, pero a ella no le corresponde este sector, a las putas las atendemos por una ventanilla que da a la calle de atrás, pero antes le sacaremos una muestra de sangre para ver si está infectada con algo. –Junto con decir lo ultimo la vieja energúmena tomó a la chamaca de un brazo y se la llevó casi a rastras hacia el fondo de un pasillo hasta meterla al interior de una de las salas, todo esto ante las acusadoras miradas de todo el público presente y a las muchas murmuraciones por parte de estos de cómo se llevaban a la puta para desinfectarla.
--Nooo…! no me lleveee…!!, -exclamaba la mamasota al estar siendo tratada públicamente como una vulgar puta callejera mientras era arrastrada por la viejota y al medio de la batahola que se formó en el sector donde estaban, --Clauuu…no dejes que me llevennnn…!!!
--Cállate pendeja que toda la gente se está enterando de lo que te dedicas a hacer por las noches…!, -ladraba la madura jefa de enfermeras quien estaba acostumbrada a atender a las muchas prostitutas que llegaban a tratarse y a recibir la píldora, --Las zorras como tú siempre alaraquean para hacerse los exámenes y una lo único que quiere es ayudarlas…
--Te espero afuera…!!, alcanzó a gritarle la rubia a Cielo Riveros antes de que se cerrara la puerta de la sala en que la vieja metió a la asustada chamaca.
Claudia estuvo esperando a Cielo Riveros afuera del centro asistencial público por casi dos horas, hasta que por fin la vio salir, rápidamente la joven salió al encuentro de su amiga.
--Ohhhh… Eve…!! Al fin sales, ya estaba preocupándome, dime que te hicieron…!?
--Solo me sacaron una pequeña muestra de sangre de un brazo, y luego me hicieron esperar a que llegaran los resultados, y como todos salieron buenos me dijeron que me fuera y que volviera a tratarme dentro de una semana…
--Están locos…!!, tu no volverás a aquí…!! que se han imaginado!?, -bufaba la bella Claudia al haber sido testigo de cómo a su amiga la habían tratado de la misma forma en que se tratan a las callejeras, la rubia había sido testigo de toda la situación que incriminaba a su amiga, y a pesar de todo aquello ella aun dudaba de que su tímida amiga realmente se dedicara a prostituirse por las noches, la situación sencillamente no le cuadraba, hasta que poniendo atención en Cielo Riveros le consultó: --Y que es esa caja que traes en tus manos…!?, -dijo de pronto. La rubia estudiante entre aireada y curiosa vio que su amiga traía bajo el brazo una extraña caja rectangular.
--Ehhh… son p… pre… pre… preservativos…! me los regalaron…!
La rubia se quedó mirando asombrada la caja de 200 unidades de profilácticos de goma que su amiga mantenía en sus manitas, hasta que su linda cara de asombro y enojo lentamente fue transformándose hasta terminar riéndose a carcajadas.
--Jijijiji… ya entiendo esos condones te los regalaron para que los uses con tus clientes, jijiji..
--Clauuuu…!! No te rías… yo no soy prostituta…!!, te lo puedo explica todo, esto fue una confusión…!!
--Si claroooo…!! jijiji…!!!
--De verdad…!!!
--Lo sé, lo sé Eve…!, no te enojes conmigo, yo te conozco y sé que no eres una prosti… es que me da risa todo esto…, primero tus amigos y su fiesta, y ahora resulta que te confunden con una puta, todo esto merece una buena explicación de tu parte Ehhh…,
--Si… si yo te lo explicaré…!!!, -la angustiada chamaca daba gracias a Dios que su amiga creía en sus palabras.
--Bien ya es bastante tarde y debemos llegar a nuestras casas, así que en la semana me lo deberás explicar todo… vámonos de una buena vez…!!!
--Y que hago con los preservativos…?
--Pues bótalos tonta…!!!, tu no los necesitas… si no eres ninguna puta como dijo esa vieja, que se cree…!?
La rubia tras decir lo último fue y le arrebató ella misma la caja de condones de las manitas de Cielo Riveros para luego tirarla adentro de un basurero, después de eso hiso parar un taxi el cual ambas abordaron rápidamente, y tras pasar a dejar a nuestra colegiala a su casa la rubia se retiró a la de ella.
(Día lunes en el establecimiento escolar)
Cielo Riveros tras haber llegado temprano a su colegio se quedó extrañada de la normal forma en que la saludo Claudia después de los acontecimientos sucedidos solo hace un par de días. Su rubia y fresa amiga la había saludado de lo más normal del mundo con un notorio beso en cada mejilla de la nena para que todo el alumnado que estuviera cerca de ellas notara su presencia, este tipo de actitud era normal en su personalidad y por eso la mamasota estaba intrigada.
--Como estas mi Eve…, estudiaste para el examen de hoy?, -le consultó con naturalidad.
--Si, si estudie y tú?, pudiste estudiar algo…?, -Cielo Riveros también le contestó en forma normal, aunque por dentro le costaba mirar a su amiga a sus ojos, ya que desde que los vejetes las habían abandonado en la casucha habían hablado de todo, menos de lo que ocurrió entre ellas a solicitud de los dos viejos depravados, en tanto la rubia ya le contestaba.
--Ay no…!, ayer salí por todo el día con mi novio, así que no tuve tiempo, pero no importa ya me las arreglaré con la nota después que salgan los resultados. –Cielo Riveros rápidamente recordó la incursión sexual de Claudia con el maestro Tulio y de ese extraño acuerdo que había dicho la rubia que tenía con el asqueroso maestro. --Y tu pudiste arreglar tu situación con Rodrigo?, debe estar muy enojado porque lo dejaste plantado el otro día…
--Si, ayer hablé con él por el celu, le dije que tuve un problema personal en mi casa, estaba muy enojado y como que no me creía, pero finalmente se quedó tranquilo, y quedamos para salir este fin de semana.
--Bueno, eso está muy bien, espero que esta vez no tengas algo que urgente que hacer como el otro día, jijiji…
--Claudia…!, por favor ya no le empieces que me da pena…!, además que alguien te puede escuchar…, -le decía la nena mirando en todas direcciones.
--Ok… ok… no me hagas caso… Mmmm… ahora recuerdo que nosotras dos tenemos una conversación pendiente, lo recuerdas no?
--Si… lo recuerdo, pero por favor ahorita no… aquí en el colegio no, que nos podría escuchar alguien…
--Tranquila amiga no te presionaré, pero de que tenemos esa conversación la tenemos…!, Ahhh…! mira te dejo mi Eve… que ahí vienen mis amigas y a ti te caen mal, así que nos vemos en el salón…
--Si ándale…, oye Clau, si quieres repasar la materia antes del ex…, -Cielo Riveros se preocupaba de la situación académica de su mejor amiga, pero a esta poco le interesaba, rápidamente le cortó lo que la nena le quería decir.
--No te preocupes Eve, yo me las arreglo…, -le dijo muerta de la risa antes de marcharse.
Cielo Riveros vio alejarse a Claudia con una jauría de chamacas fresas, todas materialistas empedernidas y muy producidas artificialmente quienes lucían vistosos teléfonos inteligentes y de última tecnología.
Una vez en el salón y tras haber terminado en menos de 20 minutos el examen la nena se dio a contemplar a su rubia amiga que estaba con sus rubios cabellos tomados con una traba pequeña con lo cual le quedaba su linda cara totalmente despejada y con su naricita bien perfilada y algo respingada, la veía totalmente despreocupada echándose brillo en las uñas, su hoja de examen estaba en blanco.
Fugazmente se le vinieron a su mente los recuerdos de aquella espeluznante noche de sexo desenfrenado en que ella y su amiga se vieron envueltas y en las garras de dos viejos degenerados.
Mientras continuaba observándola sentada en su pupitre Cielo Riveros inconscientemente puso sus ojos verdes en los dorados muslos de Claudia e inevitablemente se le vinieron las imágenes de lo que los viejos las habían obligado a hacer, su corazón rápidamente comenzó a latir debido que las imágenes eran tan nítidas que hasta podía desnudar a su atractiva amiga desde su lugar y verla completamente encuerada y en todo detalle, por lo que prefirió pedir permiso para salir del salón y así poder tomar un poco de aire e intentar ponerse a pensar en otra cosa que no la alteraran, pero al ir saliendo no pudo evitar mirar a Claudia que justo en ese momento levantó su cabeza y le devolvía la mirada con una bella sonrisa en su rostro que extrañamente hicieron que la pobre chamaca dijera por lo bajo.
--Ay Clauuu…!, -a la misma vez que ya saliendo del salón inconscientemente la colegiala se iba mordiendo su labio inferior al ya tener en su mente el recuerdo de cuando ella estuvo desnuda y sentada sobre la boca de su amiga y como esta le lamía su ranura de carne íntima obligada por aquellos dos siniestros vejestorios.
Eso fue lo más novedoso en cuanto al primer día de la semana después de lo ocurrido, los siguientes días se dieron normales para la suculenta adolescente de cabellos negros y de ojos verdes. Sus lujuriosos recuerdos de la experiencia vivida poco a poco comenzaban a desaparecer.
Solo eran algunos mensajes de grueso calibre por parte de don Pedro que habían llegado a su celular, en donde le decía de los litros de mocos calientes que le tenía reservado solo para ella, de los 4 preñazos que ansiaba que ella tuviera si es que se casaban algún día, y que también y si es que se portaba mal en su ausencia la haría culear gratis con todo el sindicato de trabajadores de su feria y mil cosas más, la nena tras leerlos los iba borrando pero no podía evitar reírse con algunos de ellos, el viejo era un pelado y sin vergüenza de nacimiento y muy mal hablado meditaba cuando estos le llegaban.
Por otro lado el viejo Anselmo se había tomado la molestia de un día esperarla en la misma parada de autobuses para que don Lucas no lo viera, solo para decirle que el material que se estaba consiguiendo ya estaba por obtenerlo, en este supuestamente aparecía su madre manteniendo relaciones sexuales con don Lucas en la misma cama matrimonial que por aquellos tiempos ella compartía con su marido (el padre de Cielo Riveros ), pero la chamaca daba por hecho que eso solo eran falacias de aquel obeso delincuente solo para ver si lograba encamársela, mas ella ni loca se iba a acostar con ese gordo asqueroso se prometía una y otra vez, ya que los supuestos videos ni siquiera debían existir.
Por otro lado ella misma se propuso no ir a la casa de Rodrigo estando su suegro presente después de que este se la había violado (según ella). Solo se había atrevido a ir en un par de ocasiones siempre y cuando estuviera su suegra presente.
Del sinvergüenza sargento Sinforoso otra vez no sabía nada, este misteriosamente no había vuelto a molestarla. Mientras que el cojo Juan con el maestro Tulio aun no agotaban sus esfuerzos en intentar lograr encerrase en el subterráneo del colegio con Claudia y Cielo Riveros , sus ideas eran estarlas culeando por un día entero alternándoselas y dándoles entre los dos a cada una de ellas por sus distintos orificios, algo muy parecido a lo que habían hecho la dupla de mecánicos, pero lamentablemente para ellos y en forma fastidiosa aun no lograban dar con la fórmula exacta para llegar a concretarlo.
El resto de la semana continuó sin novedad, en el colegio la nena intentaba evitar encontrarse con su rubia amiga ya que esta oportunidad en que se la encontraba le recordaba de la conversación que ambas tenían pendiente para luego irse a coquetear con los chamacos para que estos le compraran refrescos y golosinas.
Y así estando ya en un estado sicológico casi normal la colegiala a sabiendas que en cualquier momento sus viejos acosadores iban a reclamar lo que ella tenía para ofrecerles decidió que de una buena vez por todas debía entregarse a Rodrigo antes de que uno de estos facinerosos vejestorios la dejara embarazada.
Cielo Riveros sabía que con Rodrigo ya habían sido muchas las veces fallidas en que no lograron concretarlo y en las que ella terminó cogiendo con algún viejo mal vividor, pero esta vez eso no sucedería, ella iba a darlo todo por su amado Rodrigo que tanta paciencia le tenía en los momentos que ella le fallaba, además que si bien Cielo Riveros ya había obligadamente probado vergas de diversos tamaños y de distintos hombres, con su Rodrigo esto sería totalmente distinto, esta vez no iba a ser violada, esta vez sería ella quien se entregaría a él, y lo haría por amor.
Ya teniendo todo esto en mente la nena se dio a preparar como sería su pequeña luna de miel anticipada con su Rodrigo, y lo primero que hiso fue notificarle a la parte interesada, así que estando recostada en su camita y vestida con su uniforme escolar se dio a llamarlo por teléfono.
--De verdad Cielo Riveros …? Estas segura de lo que me dices…?
--Si mi Rodri… lo he pensado una y otra vez y creo que en nuestra relación ya estamos en la instancia para dar ese importante paso, además que la otra vez en tu casa ya te la había dicho, -la chamaca se sentía en las nubes por tan romántica conversación con su novio.
--Pero es que ya nos habíamos puesto de acuerdo antes, y no resultó, que pasaría si otra vez en tu casa surgieran problemas… No lo resistiría, deseo tanto que ocurra eso que tú dices que ni te imaginas.
--Si resultará Rodrigo, así que no te preocupes, esta vez sí lo haremos…, -le aseguraba la nena mirando una pequeña foto de su novio que este le había regalado en una ocasión.
El chamaco, aunque entre contento y nervioso, se mostraba incrédulo, ya que su novia últimamente andaba un poco extraña, ni mencionar de lo dolido que había quedado después de otra vez haberse quedado plantado esperándola tal como sucedió la última vez en que quedaron de acuerdo para verse. Aun así la idea lo entusiasmaba, y mucho.
--Pero y que le dirás a tu mamá, ella sospechará algo si no llegas a tu casa la noche del sábado.
--No te preocupes… me dijo que iba a salir a cenar con sus compañeras de trabajo y luego se iría a quedar a la casa de una de ellas, así que le pedí permiso para ir a quedarme a la casa de Claudia, ya verás que no habrán problemas, así que después de ir a ver al cine esa película de amor que tanto dices podremos estar toda una noche juntos, -Cielo Riveros estaba muy nerviosa diciéndole todo eso a su amado novio, pero en el fondo de su ser sabía que esto debía ser así, incluso estaba dispuesta hasta dejarse embarazar por Rodrigo para poder ver si con esto la horda de viejos lujuriosos que se la cogían dejaban de molestarla.
El joven Rodrigo ahora sí que no daba más de felicidad, por fin compartiría cama con la chamaca más bonita y buenota que había conocido en toda su vida, imaginaba la cara que pondría su padrastro cuando este se enterara que su chica por fin le había dado la prueba de amor siendo él el único poseedor de su belleza y todo lo que encierra ello, ya que don Severiano su odioso padrastro seguidamente y en las oportunidades en que estaban solos le preguntaba si por fin había logrado encamársela, burlándose de él y diciéndole que esa potranca era mucha hembra para un pobre maricon como él, según sus propias palabras.
Así la pareja de tortolitos quedó de acuerdo para por fin concretar la famosa prueba de amor que existe entre dos enamorados, ritual milenario en el cual la hembra accede a darle de probar de sus esencias y encantos femeninos al macho escogido. Esta vez sería Cielo Riveros quien se entregaría a su Rodrigo para demostrarle todo el amor que ella le profesaba.
(Día viernes en la casa de Rodrigo)
--Y tu pendejo… porque andas tan de buen humor…?, -le consultó don Seve a su hijastro mientras se estiraba sus mostachos italianos en el momento en que descansaba en uno de los sillones de la sala, en su pecho canoso se veía una gruesa cadena de oro, el viejo se encontraba con la camisa desbrochada y con su gran panza peluda al aire.
El viejo Severiano después de la incursión sexual que había mantenido en su propia casa solo hace algún tiempo con la exquisita novia de su hijastro se mostraba muy interesado en el noviazgo de ellos, siempre quería saber en que estaban.
--Eso a Usted no le interesa, solo ando de buen humor y punto, -le contestó el chico en forma seca, mientras el mismo planchaba la camisa escogida para usar ante su amada al día siguiente.
--Jajajaja…!!!! no me vas a decir que ya te la encamaste, porque no te la creo…, -el vejete estaba atento a lo que contestara su hijastro, de alguna forma quería sacarle información, el solo enterarse de los avances a retrocesos que tuviera Rodrigo en su noviazgo lo ofuscaban o lo calentaban hasta la locura, según fuera el caso, ya que aun no perdía la fe de volver a acostarse con la dulce jovencita, ella hasta le había lamido el culo sin ser él quien se lo pidiera en aquella ocasión en que el jugándosela de cuerpo entero se lo había hecho a la fuerza en un principio hasta lograr hacerla gozar.
--No, no me la he encamado, porque ella no es para eso…, mañana iremos al cine, se lo digo ya que lo veo tan interesado en lo que hacemos o no hacemos…!, -al chico no le gustaba hablarle de su novia al viejo de su padrastro, ya que notaba con la cara de caliente que este la miraba en las oportunidades en que él la había invitado para su casa, pero el viejo era fastidioso con el tema.
--Si serás estúpido pendejo, las zorras son para meterles la verga y punto, no para llevarlas al cine y gastar dinero en ellas, por ejemplo cuando conocí a tu madre y me enteré que estaba viuda, solo la traje a mi casa para que me cocinara, luego de eso simplemente me la culie, y vaya que le gustó porque a los días ya estaba instalada contigo incluido bajo este mismo techo…, pero ese no es tu caso pendejo, esa hembra que tienes por novia nunca te pasará la zorra, es mas ni siquiera sé que hace contigo, como ya te lo he dicho, esa mujer está hecha para abrírsele de patas a machos de verdad y no a maricones como tú… soquete…!!, jajajaja…!!!!
El chico no daba más de ira, sabía que la conversación estaba llegando demasiado lejos con su odioso padrastro, y si este se llegaba a enojar iba a terminar golpeándolo tal como lo hacía siempre, aun así le contestó en forma desafiante.
--No se ría…!, para que sepa que Cielo Riveros después de ir al cine me dará la prueba de amor, así que mañana no llegaré a dormir a la casa.
Con las últimas palabras de Rodrigo en donde le notificaba abiertamente a su dicharachero padrastro que al día siguiente él iba mantener relaciones sexuales con la tremenda chamaca que el viejo deseaba con todo su ser, en el ambiente quedó un extraño silencio, hasta que el viejo después de digerir las palabras de su imberbe hijo postizo, fue poco a poco empuñando sus manos, a la vez que su peludo pecho canoso se fue hinchando hasta que libero toda su energía con un tremendo bufido de bestia mal herida.
--No mames desgraciadooo…!!!!, -gruñó el viejo Severiano quien había estado echado en su sillón favorito, ahora hasta le costaba enderezarse debido a su prominente panza más que cervecera, ahora solo se movían sus empuñados brazos como haciendo círculos al estar dándose impulsos para ponerse de pie. Eso que le acababa de decir su hijastro no le había gustado para nada, ya que él por más que intentó en el último tiempo volver a hacerse con el cuerpo de la colegiala no lo había podido lograr, y esa aberrante mariconada de la famosa prueba de amor que decía Rodrigo entre este y la pendeja que lo tenía caliente hasta la locura, casi lo enceguecieron de los celos.
--Pues si mamo y que…!!!!, -le contestó sobre la misma el chamaco quien se sentía triunfal por la osada respuesta que le había dado a su padre postizo.
Una vez que el iracundo vejete logró ponerse de pie tomó por sorpresa a su hijastro, y se lo llevó agarrado del cuello hasta atracarlo contra una de las paredes, para simplemente notificarle.
--Escúchame bien pedazo de idiota… Tu mañana no tocarás a esa potranca, ni mañana… ni nunca, y sabes por qué?, porque ella no irá a juntarse contigo, otra vez te dejará plantado como ya lo ha hecho en otras ocasiones, o crees que no lo he escuchado cuando se lo cuentas a tu madre llorando como un verdadero maricon…!!!, y que te quede claro pendejo reculiao’… esa mujer es mucha hembra para un pobre pedazo de idiota como tú, esa principiante de yegua está hecha para acostarse y ser gozada por machos de verdad, o sea, por machos como yooo…!!. Te queda claro estúpido…!!??
--Suéltalo Severiano…!, le estás haciendo daño…!!! La señora María, quien momentos antes había salido a realizar unas compras llegó de estas silenciosamente, por lo que escuchó todo el último repertorio que su esposo le decía a su hijo mientras lo mantenía semi ahogado contra uno de los muros de la casa.
--Tú te me callas desgraciadaaaa…!!!!, o acaso quieres que vaya para allá y te apaleeee…!!!!! –Don Severiano estaba como loco y le gritaba a su mujer mirándola con sus ojos enrojecidos por la ira y sin soltar a su hijastro de sus garras, los celos lo tenían enceguecido, por lo que continuaba vociferándole, --Esta conversación es entre hombres…!!!!, o más bien dicho entre un hombre y un maricon, jajajajaja…!!!!, -Ahora el viejo volteó su mofletuda cara con bigotes para hablar lo más cerca que pudo a los oídos del chamaco, su idea era humillarlo y menoscabarlo, tal como lo hacía siempre. --Así que ya sabes cabrón, y no te me las des de gallito, mañana te veré regresar derrotado y entrarás por esa puerta llorando como lo haces siempre, así que te quede claro… Tú no eres hombre para ese tipo de hembras… jajajajaja…!!!!!, le dijo finalmente hasta liberarlo de su opresivo apretón de mano en el cuello del joven.
Ya eran las 4 de la tarde del día sábado y la mamasota quien recién venía saliendo de darse una refrescante ducha se encontraba solo envuelta en una pequeña toalla ajustada a su cuerpo, toda su piel y su pelo expelía frescos aromas a jabón, lavanda y a flores primaverales, en la blanca piel de sus hombros aun se veía algunas gotitas de agua que daban cuenta de lo muy limpiecita que era ella.
Luego de secar sus cabellos y de peinarlos hacia un lado de su carita se dio a escoger el tipo de ropa interior que ahora si podría ver Rodrigo con lujo de detalles, según pensaba, por lo que escogió un diminuto conjunto de sostén y tanguita de color rojo oscuro y medio purpuraceo, el primero para que le sujetara sus chichotas y se le vieran apetitosamente paraditas y el segundo para que le tapara solamente lo necesario con la idea de que el joven casi enloqueciera al momento en que ella se quitara el vestido que iba a llevar puesto, este ultimo sería uno de sus favoritos, con tirantes a los hombros dejando ver solo el nacimiento de sus dos globos de tersa y brillante carne que la nena se gastaba por tetas, el vestido que era blanco con pequeñas figuras floreadas se le ajustaba perfectamente a su cintura dibujándosela estiradamente y llegándole justo a la altura de la mitad de sus dos bien ponderados muslos, para finalmente calzarse unas pequeñas zapatillas de mediano taco que hacían elevar aun mas su porte y figura.
Y así, una vez ya vestida, nuestra mamasota otra vez quedaba con la imagen de ser una hembra soberbia e imponente, solo su carita de tierna adolescente quinceañera contrastaba con aquellas lujuriosas y diabólicas curvas que ya se adivinaban por debajo de la tela del vestido escogido.
Fue en el momento en que se estaba perfumando suavemente detrás de su orejitas que casi se meó de horror al escuchar el insistente sonido de su teléfono, sabía que si don Pedro nuevamente la estaba llamando para sus salidos requerimientos otra vez sus planes con Rodrigo se irían al tarro de la basura. La asustada nena descartó inmediatamente que la llamada fuese de su amado ya que al saber que a esa hora el estaba en su trabajo le era muy difícil que su jefe lo dejara llamar por teléfono.
Con mucho temor se fue acercando a la mesa en donde sonaba su celu, y al tomarlo para comprobar quien era la persona que la llamaba tan insistentemente con alivio comprobó que la llamada correspondía a su mamá:
--Alo… mami…?, -le contestó dando gracias a Dios que no era don Pedro quien llamaba.
--Hola mija… porque siempre te demoras tanto en contestar tu teléfono?
--Ahhhh es que me estaba duchando, recuerdas que me diste permiso para ir a quedarme en la casa de Claudia… verdad?
--Si, lo recuero hija, solo quería saber a qué hora llegaras mañana?
--Mmmm… es que con Claudia aun no tenemos planes…
--Bueno si es así… si quieres vente para la casa en la tardecita, recuerda que yo no voy a estar, -la buena señora Isabel sabía que a su nena no le gustaba estar sola en la casa por eso le estaba dando aviso que ella llegaría en la tarde del día domingo.
--Ahhh… que bueno que me avisas así aprovecharé de ver unas materias con Claudia, tú ya sabes que a ella no le va muy bien en el colegio.
--De acuerdo, entonces nos vemos como a las 7 de la tarde?, a esa hora yo ya estaré de regreso.
--Si mamá… como a las 7 está bien…
--Bueno hija te dejo que debo terminar el turno…, -se despedía de su hija la abnegada progenitora.
--Chao mami…!, y que lo pases bien con tus compañeras…
--Gracias hija, pásalo bien tu también.
Una vez terminada la conversación y ya estando Cielo Riveros en condiciones, y a sabiendas que no tenía en su celular ninguna llamada de don Pedro haciéndole demandas de su presencia para él hacerle todo tipo de cochinadas, la nena se puso en camino a la casa de Claudia, tal como habían quedado, ya que nuestra precavida mamasota le había dicho a su madre que se quedaría a dormir en la casa de la rubia aprovechando que ella también saldría con sus amigas.
La colegiala pensaba estar con Claudia un par de horas ya que Rodrigo terminaba su turno en la farmacia a las 8:00 de la noche y quedaron de juntarse a las 9 justo a la entrada del cine. Su rubia amiga sabía todo lo que tenía que hacer si a la madre de Cielo Riveros se le ocurría llamar para su casa preguntando por su hija, además que ahora tenía también permiso por todo el día domingo, ya vería si esas horas las ocuparía con Rodrigo o bien se iría a la casa de Claudia a hacer la hora, ya que veía improbable que la rubia quisiera estudiar tal como le había dicho a su mamá, la cosa era que a estas alturas la impresionante adolescente de 18 añitos ya estaba en la puerta de la casa de Claudia y con esta ultima recibiéndola en el portal.
--Hola amiga…!, -le saludó la rubia fresa a la misma vez que en forma de sana envidia la inspeccionaba, --Pero que buena te vez con ese vestido Eveee…!, ese Rodrigo sí que se la va a pasar bien contigo en la noche ehhh…! -Claudia miraba de pies a cabeza a su amiga del alma, ella esta vez era cómplice en la fogosa noche de amor que Cielo Riveros iba a mandarse junto a su amado.
La colegiala ante las halagadoras palabras de su amiga se sonrojó inmediatamente, ya que ella si se había arreglado de tal forma era para que su Rodrigo la encontrara bonita, y no para que él se la pasara bien con ella porque estaba buena tal como lo decía Claudia, o sea… si, pero esas palabras eran muy frías, ella pensaba en entregarse a Rodrigo porque él la amaba y no porque en esta ocasión él la encontrara buena, valga la redundancia.
Fue la voz de su amiga quien la sacó de esas extrañas cavilaciones.
--Y? a qué horas es la cita?, -le consultó la bella Claudia junto con cerrar la puerta de la casa.
--A las 9:00, nos juntaremos en el cine que está a un lado del centro comercial…
--Ahhh mira, que bien, o sea tendremos tiempo para platicar un ratito, vamos a mi habitación que ahí estaremos más cómodas, quieres un refresco?.
--Si, un refresco estaría bien, donde están tus padres…?, -quiso saber la nena, quien miraba con timidez por si los progenitores de su amiga estuvieran en algún lugar de la sala.
--No te preocupes por ellos Eve…!!, salieron y no llegaran hasta mañana…!!!, -la rubia le gritaba de la cocina mientras servía los refrescos.
--Y tu no saldrás con tu novio…?, -Cielo Riveros le hacía estas consultas a su amiga ya que la había visto vestida solo con unos jeans ajustadísimos, con una blusa blanca que se le ceñía a la cintura y con unas sandalias también de medio taco, su amiga era muy atractiva, y aunque entre nosotros en ese atuendo la rubiecita esa estaba para empelotarla y culearsela de cualquier forma, Cielo Riveros sabía que cuando Claudia salía a sus panoramas con su novio sus favoritas eran las minifaldas o los vestidos ajustados y cortísimos.
--No, el muy pesado se fue a un concierto con sus amigos, me invitó, pero a mí no me gusta salir con él si es que no gasta dinero así que preferí quedarme aburriendo en casa, -le dijo con algo de fastidio en su voz.
--Ahhh claro, ya veo…!, -le contestó la colegiala junto con recibirle el vaso con refresco a su interesada amiga quien ya estaba de vuelta, ambas ya ingresaban a la recamara de la joven y rubia anfitriona.
--Aja…!, ya que tenemos un par de horas para platicar que tal si me vas explicando eso que sucedió la semana pasada. –Claudia junto con decir lo último se fue recostando en la parte superior de su cama, acomodándose contra las almohadas, era como si hubiese estado esperando este momento.
--Ehhhh… que cosa?, no sé de qué me hablas…, -Cielo Riveros estaba sentada en la parte media del rosadito lecho de Claudia, había captado al instante de lo que deseaba saber, pero ella intentaría esquivar esa conversación.
--No te hagas la mensa Eve, tú sabes muy bien a que me refiero… En el centro asistencial tenían una ficha con las que controlan a las prostitutas, y para rematarla en ella estaba archivada una infracción de esas que le pasan a las mujeres por mantener sexo en la calle, estaban todos tus datos y hasta la dirección de tu casa, y como guinda de la torta mas encima estaba firmada por ti amiga, yo conozco tu letra, así que dime… en que andas metida?, -la expresión de la chamaca rubia ahora era de seriedad realmente estaba preocupada por la situación de su amiga de la infancia.
Cielo Riveros había imaginado que este momento tendría que llegar algún día, ya que lo sucedido en aquel maldito centro asistencial publico había sido más que comprometedor, pero también pensaba y reconocía que ese día su amiga en ningún momento la dejó sola, la había estado esperando por más de dos horas en la salida del consultorio público, y esas sí que son las amistades que valen meditaba la mamasota antes de dar su respuesta, así que ya no quedándole más remedio tuvo que admitir ante su mejor amiga que efectivamente esa infracción por prostitución se la habían cursado a ella.
--Ay Clauuu…!!!, si, esa era mi letra y mi firma, pero es que tu no lo entenderías nunca…, -le dijo finalmente mirándola a la cara con sus hermosos ojos verdes denotando preocupación, y con su azulado pelo negro peinado hacia un lado de su tierna carita.
La Claudia que ya se había preparado mentalmente para una respuesta como esa, trató de pensar sensatamente y brindarle a su amiga todo el apoyo del mundo, aunque igual semejante respuesta le alteraban un poco los sentidos, no sabía que pensar al respecto, hasta que al final le habló.
--Eve… voy a ser bien honesta contigo solo porque eres mi mejor amiga, escúchame bien, si necesitas dinero para algo yo puedo hablar con mis padres, o no sé, buscar una solución, pero tú no puedes andar por ahí acostándote por dinero, no está en tu esencia… -Cielo Riveros al escuchar semejantes palabras reaccionó en el acto, y no pudo evitar que otra vez sus hermosos ojitos verdes se le llenaran de lagrimas mas todavía al notar que su amiga si creía que ella era una vulgar puta callejera.
--C… Cla… Claudia… yo no soy una p… pros… prostituta…!, ya te lo he dicho, y no me acuesto por dinero con nadie, como no lo entiendes?.
La rubia y coqueta estudiante creía en las palabras de Cielo Riveros , pero de cualquier modo pensaba que la situación era más que comprometedora para su introvertida amiga, mas que no creerle, la Claudia estaba totalmente intrigada por la situación de ella.
--Entonces dame una explicación razonable pues amiga, si me acabas de reconocer que esa era tu letra y tu firma…!, -le contestó finalmente con sus doradas cejas inclinadas hacia arriba, la situación de su compañera de colegio era más que comprometedora y ella quería llegar al meollo del asunto.
La colegiala olvidando por un rato que el motivo por el cual se encontraba en la casa de la Claudia era solo para hacer la hora antes de ir a juntarse con su novio, y a sabiendas que aun faltaban un par de horas para que este saliera de la farmacia se dio a intentar de explicarle a su amiga el porqué de la existencia de aquel sórdido parte policial en el cual se apuntaba que ella ejercía la prostitución.
--Clauuu…!, te lo explicaré desde el principio…!, -en la habitación de la rubia todo quedó en silencio tras las últimas palabras de la colegiala, hecho que ambas jóvenes entendían que Cielo Riveros tenía carta abierta para presentar sus descargas ante su escrutadora amiga. --Recuerdas el día en que me perdí en el sector del toro mecánico?, -la chamaquita se lo preguntó con sus ojos cerrados como dándose fuerzas para iniciar a narrarle de cómo había caído en las garras del abominable mecánico don Pedro Ventura, quien poco a poco se había ido adueñando de su vida y de su cuerpo.
--Claro que lo recuerdo, si con el maestro Tulio y con el cojo ese que es auxiliar del colegio dimos vuelta toda la feria buscándote por todos lados, y tú parecías haberte esfumado, -Claudia mantenía un semblante serio en su nórdico rostro de Diosa del Este europeo…
--Pues ese día fue cuando conocí a don Pedro…!, -le reveló Cielo Riveros ahora con sus ojitos abiertos y mordiéndose el labio inferior, como si aquella confidencia fuera una falta cometida por su parte.
--No me digas…!, y que tiene eso que ver con la infracción por prostitución?, -quiso saber su atractiva amiga.
--Si te digo…!, pero déjame seguir explicándote, es que resulta que cuando tú te fuiste para los baños yo necesitaba un poco de aire fresco, así que después de probar una fresas con crema decidí esperarte justo detrás del toro mecánico porque ahí no había tanta gente y corría una brisa refrescante, entonces luego de un rato sentí que alguien me hablaba…
La rubia escuchó impactada aquella fantástica historia que le estaba dando a conocer su amiga, de cómo don Pedro la había enculado delante de sus amigos justo detrás del toro mecánico, (claro que no con palabras salidas y no con guarrerías, o al menos por ahora, más la rubia entendía todo tal cual como acá se está explicando) y como luego se la llevó desnuda en su cacharriento automóvil y que habían sido controlados por un operativo policial, en donde ella obligada por el salido mecánico se dio a decirle a la poli en forma ineludible que ella era puta y que por eso se encontraba encuerada al interior del vehículo del vejete, para después ambos haberse dirigido hasta un sector de lo mas ordinario en donde existía un taller mecánico en el cual el pervertido viejo aparte de haberle pegado la había convertido en mujer, en su mujer, y al interior de una lúgubre oficina en donde existía un catre en el cual se lo hicieron.
El temperamento de Claudia poco a poco fue cambiando a medida que escuchaba los pormenores de las desdichas de su amiga, y a pesar de todo ello ahora la rubia estaba eufórica y le preguntaba a Cielo Riveros hasta los más mínimos detalles de todo lo sucedido en aquella ocasión, y Cielo Riveros muerta de vergüenza se daba a detallar de cómo había sido toda esa espeluznante experiencia, tal como quería saber su compañera de clases.
--Lo entiendes ahora?, es por eso que existe esa infracción por prostitución, y don Pedro también tiene una copia en su poder.
--Mmmmm…, ya veo…!, es por eso que tú te sigues acostando con ese viejo verdad?, -la rubia estaba muy interesada en la extraña historia de Cielo Riveros , de cierta forma la compadecía, pero había algo en todo ello que también le fascinaba y le hacían sentir cosas raras a su cuerpo, su corazón ahora le latía a mil, y no pensaba en dejar hasta ahí la conversación estaba dispuesta a sonsacarle a su amiga hasta su ultima intimidad cometida ya que recordaba muy bien que a ella se le había salido que también lo hacía con el maestro Tulio, pero todo a su tiempo pensaba la lujuriosa joven de cabellos dorados.
Cielo Riveros quien seguía sentada solo a medio metro de donde estaba su amiga no le quedó más remedio que admitir la última consulta que le había hecho ella moviendo su cabeza afirmativamente.
--Y cómo es eso que él me conocía de antes que nos juntáramos con ellos en la feria?, si yo no lo había visto nunca en mi vida, -Claudia sin darse cuenta y mientras interrogaba a su amiga con sus dos manitas jugaba nerviosamente a estirarse ciertos mechones rubios de sus cabellos, la conversación cada vez se ponía más fascinante para ella.
--El nos vio en el momento que ingresamos a la feria, creo que de ahí nos andaba siguiendo, o algo parecido.
--El te pidió que me invitaras para que fuéramos a acostarnos con su hermano también?
--Ay si Clauuu…!!, pero yo no quería, por favor no te enojes conmigo… el me obligó…!!, y si yo no le hacía caso iba a ir al colegio a mostrar la infracción a los profesores…
Y que iba a estar enojada la rubia con Cielo Riveros , al contrario, estaba sorprendida con la lujuriosa experiencia que le acababa de narrar su amiga del alma, además de todos sus detalles, por lo que quiso ahondar más en aquella sorprendente conversación.
--Si, si entiendo y no te preocupes, no estoy enojada contigo… además que después de todo igual lo pase bien ese día.
Cielo Riveros quien en ese momento estaba dándole un trago al vaso de refresco que le había servido Claudia al tener ya su boca y garganta seca de tanto hablar, pero el líquido casi se le sale por las narices al escuchar que después de todo su amiga se la había pasado bien con los dos ordinarios vejetes según decía.
--Lo pasaste bien!?, como me dices eso?, si nos v… vio… violaron…!!!, -le exclamó Cielo Riveros a la rubia una vez recuperada del atragantamiento.
--Ps…!, lo pase bien y punto!, además que yo no sentí que me violaran, y tu no me vas a venir a decir que te lo pasaste mal porque no te creo, jijiji, sobre todo cuando lo hiciste con los dos al mismo tiempo, lo recuerdas?
--Claudia…!!! Yo… yo…, no puedo decirte esas cosas…, son privadas…!.
La rubia que no era tonta se daba cuenta que su tímida amiga no le estaba negando su pregunta, sino que le decía que lo que pudo haber sentido ella en el momento en que se la trabaron dos viejos al mismo tiempo era algo privado, por lo que quiso seguir insistiendo para sacarle a la nena como lo había sentido.
--Ya Eve… no seas tan mojigata, después de lo que hemos pasado juntas no es necesario que te hagas la santita conmigo, vamos dime… dime que se siente?, -ahora la libertina Claudia estaba apoyada con su espalda en el respaldo de su cama, extrañamente estiró sus dos estilizadas piernotas embutidas en jeans, y se ubicó una almohada justo en la parte de su cintura para abajo si como estuviese ejerciendo presión con esta por algún motivo.
--Ehhhh… Que se siente de que…!?, -le consultó una avergonzada Cielo Riveros quien al mismo tiempo se llevó su dedo índice a su boca, esto lo nena lo hacía cada vez que intentaba eludir una pregunta, y la despierta Claudia ya se había dado cuenta de ello también.
--Que te lo hagan dos hombres al mismo tiempo pues Eve…!, si de eso estamos hablando, -ya a estas alturas las palabras de la rubia sonaban mas como exigencias que como una inocente conversación entre dos chicas.
--Ya para Claudia…! creo que ya hemos conversado lo suficiente…!!, si ya te dije lo que querías saber…!
La rubia quien captó que su amiga daba muestras de dar por terminada aquella candente plática quiso mostrarse más comprensiva con ella con la finalidad de que se sintiera más en confianza.
--Mira, recién estamos empezando Eve…, y no sabes lo orgullosa que me siento de ti ahora que sé que te comportas como una mujer adulta, además que aún es temprano así que vamosle, sigamos conversando. –Claudia junto con decirle esto último se hiso aun lado de la cama dejándole espacio a Cielo Riveros para que también se recostara en el sector de las almohadas para que así estuviera más cómoda, tal como lo hacían desde que eran nenitas y se juntaban para contarse secretos.
--Y que mas quieres saber?, -le preguntó la chamaca una vez que estuvo sentada contra el respaldo y con sus dos poderosas piernas estiradas, tal como estaba también la rubia, en cierto sentido el que su amiga se enorgulleciera de ella por sus ardientes vivencias y que no la condenara como ella lo había pensado le dieron un poco mas de tranquilidad, tranquilidad que lamentablemente hizo que empezara a bajar la guardia.
--Pero Eve… contéstame con la verdad, recuerda que yo soy tu mejor amiga, además que lo que te haya pasado tampoco es del otro mundo y yo no se lo contaré a nadie, sale?
Cielo Riveros ya se preparaba sicológicamente para el vendaval de imprudencias que con toda seguridad le iba a preguntar Claudia, pero sabía que ellas eran verdaderas amigas, así que le dijo,
--De verdad que no se lo contarás a nadie?, ni… ni a tus otras amigas del cole?, -todo el cuerpo de la colegiala temblaba, ya que creía saber para donde iban a ir las preguntas de la rubia.
--Palabra de exploradora mi Eve…!, lo recuerdas…!? además que esas estiradas zopilotas no son mis amigas, ps… solo las utilizo para levantarles a sus novios, jiji… tu ya me conoces amiga, así que no temas…
--Si es así entonces sale y vale, que quieres saber Claudia?, -Cielo Riveros junto con preguntarle a Claudia y para no ensuciar la cama con la punta de sus pies se sacó las zapatillas luego subió sus blancas rodillas para rodear con sus brazos parte de sus piernas, el vestido se le subió un poco mostrando parte de sus muslos, pero en aquella situación eso no le importaba, sabía que no habiendo presente ningún viejo caliente y sin vergüenza ella no corría peligro, además que estaba con su amiga, la misma que desde la niñez siempre había sacado la cara por ella en los momentos en que estuvo metida en algún problema en el colegio, además que a medida que fueron creciendo era la rubia quien se encargaba de presentarle a distintos chicos para que ella se hiciera de algún novio, mas la nena siempre los había rechazado a todos, claro que bien diplomáticamente y como corresponde para no quedar como una estirada.
La suspicaz e intrigada Claudia ya empezaba con su interrogatorio:
--Primero dime… que se siente tener dos vergas adentro tuyo…!?, -la rubia adolescente se puso de costado en la cama con un codo apoyado en esta y con su mano apoyando su cara, todo su curvilíneo cuerpo estaba estirado a un lado de donde estaba la nerviosa chamaca, que casi se desmayó con semejante pregunta.
--Ay no Claudia…! no me preguntes esas cosas…! me da verguenzaaa…!!
--No seas mensa Evi, y como que te da vergüenza conmigo?, si yo estuve ahí mismito cuando te lo hacían, solo dime si te gustó… vamos dime… es rico…!?
Tras pensarla por algunos segundos, la temblorosa mamasota pensó que Claudia estaba en lo correcto, que mas daba si ella había presenciado cuando los dos viejos se la estuvieron cogiendo al mismo tiempo, sumándole que a ella (a Claudia) también le hicieron cochinadas de todo tipo, así que se propuso a decirle la verdad, aunque le costaba.
--Ehhh… s… si, es b… bue… buenoooo…!!, -la chamaca no hallaba donde meterse, nunca en su vida le había comentado sus intimidades a nadie, y por su parte la rubia estaba más que maravillada con la respuesta de Cielo Riveros .
--Buenooo…!?, o sea que te gustoooo…!!??
Cielo Riveros poco a poco iba cayendo en ese morboso y rico juego de palabras con el que su rubia amiga la estaba interrogando, así que en una forma extrañamente nerviosa le contestó justamente como la Claudia deseaba escuchar:
--Creo que si..., e… ess… es ricoooo que a una se lo hagan e… en… entre dosss…!!, -la nena a pesar de sus sentimientos encontrados no se daba cuenta que aquella conversación a ella también ya le estaba comenzando a gustar.
--Ay mi Eve…!, nunca pensé que tú te la pudieras con dos hombres al mismo tiempo, quién lo iba a creer…!?, -opinaba Claudia que aunque entusiasmada y todo intentaba ponerle paños fríos a la situación, obviamente para que su amiga entrara aun mas en confianza, ella quería saberlo todo, por lo que continuó, --Oye Eve, el otro día te confesé que yo en una oportunidad lo hice con el maestro Tulio, y a ti se te salió que también lo habías hecho con él, vamos cuéntame cómo fue eso.
--Ay Clau, ya te dije que sucedió en tu casa, con eso es suficiente… para que quieres saber más?, además que fue el mismo día en que me violó don Pedro…!!!
--Y esa fue la única vez que te lo hizo el maestrito…?, -la rubia no le hacía caso a su amiga, y no le daba tregua, ya sabía que Cielo Riveros le iba a soltar todo lo que ella quisiera saber.
Luego de un silencio casi sepulcral que hubo en la habitación la rubia estudiante supo que hubo más de alguna vez por lo que siguió presionando a la nerviosa mamasota que en esos momentos ya estaba casi en la hora de retirarse para ir a juntarse con Rodrigo, aunque la nena ni siquiera lo recordaba.
--Vamos contéstame Eve…!, hubo alguna otra ocasión con el profesor Tulio?,
--Ehhh… o sea, s… si, h… hubo u… una vez en el colegio dentro de su oficina, pero esa vez solo me hiso chupársela…!, -le soltó como si eso le restara importancia a tan reprobable acción de su parte, solo se la había chupado y nada más, según ella. La nena cada vez se soltaba mas y le confiaba sin censura y en toda crudeza sus incursiones sexuales de las cuales la rubia le iba preguntando,
--Se la chupasteeee!!?? S… Se… Se la chupaste en el mismo colegioooo…!!??, -Claudia sentía que su corazón en cualquier momento explotaría, su cuerpo poco a poco comenzaba a reaccionar, y a estas alturas sus mejillas ya estaban notoriamente sonrosadas, al mismo tiempo ella continuaba, no fuera a ser que Cielo Riveros volviera su típico estado de santurrona. --Y anterior a eso que…?
--Ay Clauuu…!, no quiero que pienses de mi que soy una cualquiera pero si, un par de veces me tuvieron en el sótano del colegio él… el… y d… don J… Ju… Juan, -la mamasota se quedó mirando a su amiga para inconscientemente esperar cual iba a ser la siguiente pregunta, Claudia ya estaba como una verdadera loca de remate.
--Con ese cojo asqueroso Eve!!!???, pero si en el sótano el tiene su habitación… Eve… cuéntame que te hicieron ahí…!?,
--Me tuvieron desnuda… y solo me manosearon, al menos el profesor Tulio solo me manoseó, pero el cojooo…, -ahora era la misma Cielo Riveros quien casi con emoción en sus palabras le soltaba todo con lujo de detalles a la rubia.
--Pero el cojo queeee…!!!???, Ahhh entiendoooo… al menos el profe te manoseó, o sea, o… sea… que con el cojo también lo hicisteee…!?, -la eufórica rubia lo iba entendiendo todo, y era ella misma quien se daba las acertadas respuestas en donde Cielo Riveros se encargaba de confirmarlas.
--Ay Clau, esto es horrible pero si, el cojo auxiliar del colegio también me lo hizo… fueron un par de veces… es mas… el cojo fue el primero que me lo hiso por d… de… detrás…!!, y don Pedro fue el primero por delante…
--Uffff…!!!, el cojo Juan fue el primero que te lo hiso por detrás, es decir… es decir, te has puesto a culear con el auxiliar del colegio y para rematarla le pasaste el culo!!!???, Ay Eve…!!! Ay Eve…!!!, y como fuiste a caer en esa situación, acaso te gustaba…?, porque ese hombre sí que es asqueroso…!
--Noooo…!!, no me gusta…!!!! Y como tú lo dices… ese cojo es asqueroso…!!!!, pero resulta que un día se me perdió mi diario, y entonces…
La chamaca se explayó en los detalles de cómo el cojo Juan se hiso con su diario y como este la chantajeó con divulgar su contenido, ante una ensimismada Claudia que por cada palabra obscena dicha por su tímida amiga sentía como le comenzaba a punzar su rubia hendidura a raíz de lo lujurioso que era todo aquello.
--Increíble…!!, te lo estuvo haciendo toda una tarde y encerrados en su habitación…!?, amiga no sé qué decirte, me has dejado pasmada, nunca me imaginé que eras tan caliente…!!!
--Claudia… no me digas esas cosas, ya te dije que yo no soy así, además que don Juan solo me lo hizo por detrás…-a la nena ya no se le ponían sus ojitos llorosos, pero si se notaba que no quería que Claudia su mejor amiga se quedara con una mala imagen de ella.
--Pero y que quieres que piense si de la forma en que me lo cuentas se nota que te la pasaste bien, o me lo vas a negar?, -La Claudia ya estaba muy excitada, pero aun así le costaba trabajo asimilar las historias de Cielo Riveros .
La colegiala por su parte también pensaba en lo raro que era eso de mantener con Claudia semejante conversación, no sabía el porqué, pero había algo que la empujaba a seguir sincerándose con su amiga.
--Ay Clau… no sé como explicártelo, no es que a mí me guste que me lo hagan, pero tienes algo de razón, a pesar que en un principio me lo hacen a la fuerza, siempre acabo haciéndolo con ganas con ellos, porfi amiga… no se lo cuentes a nadie, a mi no me gustan esos viejos, es solo que no sé como explicártelo… de verdad que no lo seee…!!!
--No te preocupes Eve, por algo somos carnales…, pero te tengo otra pregunta…, -a la rubia hasta le costaba tragar saliva para poder hablar, y ahora lo hacía con sus ojos cerrados, la conversación con Cielo Riveros la tenían extremadamente caliente, pero sabía que su amiga ya estaba en el horario de marcharse así que si quería saber más para luego masturbarse a solas en su habitación imaginando las enajenantes hazañas de su atractiva e inocente amiga tenía que hacerlo rápido.
--Dime Claudia… pero por favor que ya sean tus últimas preguntas, tengo mucha pena, por estar confiándote todo esto,
--Si, si tranquila, ahí te va mi pregunta…, aparte de don Pedro, don Cipriano, el maestro Tulio y el cojo Juan, lo has hecho con algún otro viejo?
--Claudia…!, pero por qué quieres saber eso? No te entiendo…?
--Solo dímelo tonta, si no le contaré a nadie, solo quiero saberlo…, -el tajito de la rubia ya estaba que se derretía ante la segura respuesta que ya se veía venir, por ello la rubia ansiaba la respuesta de la nena.
--Me juras que no se lo dirás a nadie?,
A la rubia se le salieron los ojos de sus orbitas ya que si su amiga le estaba pidiendo su silencio bajo juramento era porque aun había más, así que aguantándose las ganas de mearse en la misma cama por todas aquellas sensaciones de nerviosismo prohibido, le juró su discreción.
--Por la virgencita de la Guadalupe mi cuate…!, vamos cuéntamelo todo…!!!
--Ay… bueno, es que un día fue para mi casa don Lucas, nuestro arrendatario, pero el solo me la chupó...
--Te la chupo él a ti?
Las preguntas de la rubia se venían una detrás de la otra, lo mismo pasaba con las repuestas de la mamasota, quien también estaba sintiendo algo rico en su panochita con solo pronunciarlas.
--Sip, y el que si me lo hiso en mi casa fue el policía, ese mismo que me paso el parte por prostitución según él, ese día nos quedamos solos un rato ya que mi mamá se fue al mercado con mi abuelito, entonces el sargento Sinforoso…
--Válgame Dios Eve…!!!, lo hiciste con un sargento de la policía?, sigue con quien más te has acostado…?
Luego de una infartante declaración de cómo se la había cogido el buen sargento la ruborizada colegiala le soltó a su amiga su más íntimo y demencial secreto.
--Ps… ps… yo también me acosté con don Severiano…!!!
--Don Severiano…!?, y ese quien es…!!??, -a pesar de su juventud la Claudia estaba al borde de ataque cardiovascular, y aparte de eso sus neuronas estaban totalmente convulsionadas ante el abanico de vejestorios con los que su amiga del alma se revolcaba.
--Esto sí que es un secreto Clau, nadie se debe enterar… ya que don Severiano es… es… el p… pa… pa… drastro de Rodrigo…
--El padrastro de tu novio…!!!???, y te acostaste con él…!!!???
--El me obligó… pero después… después paso lo mismo de siempre…
--O sea te calentaste?, te calentaste con el padrastro de tu novio!?
--Si… creo que me calenté… me calenté con el padrastro de mi novio… Ay Clau… yo no debería estar diciéndote todas estas cosas…!!!
Ambas nenotas ahora se miraban a los ojos con sus respiraciones levemente agitadas. Claudia sabía que su amiga de un momento a otro se marcharía pero como todos imaginamos ella por nada del mundo pretendía dar por terminada la conversación.
--A ver amiga déjame hacer un recuento, vamos por orden: Don Lucas tu arrendatario, con el cojo Juan, el maestro Tulio, don Pedro, don Cipriano, ese Sargento que tú me dices, y con don Severiano tu suegro, o sea te has acostado con 7 hombres distintos y todos estos son viejos calientes…!!!
--Si, pero don Lucas no me la alcanzó a meter ehhh…!, -se defendía la nena en pos de su reputación.
--Pero igual estuviste acostada desnuda con él, verdad…?, -le consultó Claudia inquisitivamente.
--Ehhhh… siiiii…!
--Entonces también vale… te has acostado con 7 viejos distintos Eve, jijiji aun no lo puedo creer…!!!
--Por favor Clau, no se lo cuentes a nadie por favorcitooo…!!!, -le pedía la colegiala con su carita suplicante.
--Descuida que seré una tumba, pero sabes que mi Eve?
--Que cosa…!?, -Cielo Riveros ya imaginaba que quizás con que otra cosa le saldría su amiga, pero nunca imaginó lo que sus oídos escucharon y que muy a su pesar venía siendo la purita verdad.
--O sea, yo me consideraba la puta más grande del colegio amiga, pero ahora en comparación contigo y con todo lo que más has contado tú te llevas el estandarte… o sea eres la puta más grande y no tan solo del colegio sino de varias cuadras a la redonda, jijiji, si al lado tuyo vengo siendo solo una monja, no crees?
--Claudia como me dices eso…!?, si ya te dije que casi todos me violaron…!!!, -le contestó finalmente nuestra pobrecita y alterada Cielo Riveros que a pesar de las frías y humillantes palabrotas de Claudia creía entender que algo de verdad había en ellas.
--Si, pero al parecer a ti te gusta que te violen, jijiji…
--Ya Clau… párale si…?
--Si, si, tonta sin son bromas, no me hagas caso… peroooo… -Claudia quien a pesar de sus risueñas palabras se sentía extrañamente excitada, y no estaba dispuesta a dejar ir a su amiga si no le revelaba esa preguntita que desde hace rato revoloteaba morbosamente en su rubia cabecita.
--Pero que mas quieres saber?, si ya te lo he dicho todo…!
--Es que ahorita sí que quiero hacerte una preguntita personal mi Eve, pero quiero que igualmente me digas toditita la verdad…
--Ay Nooo…!!!, ya me tengo que ir, si ya estoy algo retrasada, mi Rodri ya debe ir en camino…!, -diciendo esto último la chamaca estiró sus piernas en la cama con claras intenciones de levantarse para luego irse a juntar con Rodrigo.
--Solo la última pregunta y te vas…, -la interceptó Claudia posando una de sus delicadas manitas sobre una de las piernas de la nerviosa mamasota, justo un poquito más arriba de sus bien hechitas rodillas.
--Ehhhh… y que quieres saber ahora?, -la mirada de la chamaca se posó fijamente en la mano de Claudia sobre una de sus piernas.
--E… Esooo… eso que hicimos las dos juntas el otro día que estuvimos con los viejos… t… te… g… gus… gustó?
La pregunta fue un verdadero mazazo en la cabeza de nuestra chamaca, ya que si bien tras la candente conversación que estaba sosteniendo con su amiga de la infancia hasta había sentido unas extrañas sensaciones en su intima hendidura, pero la actual pregunta de verdad que no se la esperaba. Eso que le estaba preguntando Claudia era antinatural, si ella lo había hecho con Claudia fue porque los viejos la habían obligado y no porque a ella le gustaran las mujeres, o sea, el acto sexual para la colegiala comprendía en la unión de un macho y una hembra, y no dos mujeres refregándose sus cositas, pero a pesar de todos estos sólidos principios la nena no se podía negar a ella misma que Si, si le había gustado, intimidad que ahora sí que no estaba dispuesta a confiárselo a Claudia, porque ahí sí que nunca más podría mirarla a la cara si es que se lo reconocía.
--Noooo…!, Claudia, como me preguntas eso?. Si yo te lo hice y deje que tú también me lo hicieras fue porque nos obligaron…!!!, -ahora ambas verdosas miradas estaban frente a frente, una denotando timidez y la otra una nerviosa excitación.
--Nos obligaron?, Tú crees Eve…? Nos obligaron?, -La Claudia ni ella misma sabía porque no podía quitar su mano de la suave pierna de su amiga.
--Si, nos obligaron…!, -la nena llevó otra vez su manita a los labios, y Claudia ya creía saber el significado de la señal que inconscientemente le enviaba su amiga a su mente.
--Pues yo no lo hice obligada, además que si tenía ganas de hacértelo…, -la rubia junto con decirle estas acaloradas confesiones sin habérselo propuesto ya estaba acariciando suavemente la temblorosa pierna de Cielo Riveros que ante la situación se sentía sin aire en sus pulmones.
--Pero Claudia…!, -pudo por fin decir, --Que cosas me estás diciendo…!?, si eso solo se hace entre un hombre y una mujer, nosotras somos amigas… solo eso… a mi no me gustan las mujeres, y a ti tampocoooo…!!!
--Ps…! si tonta, si somos amigas, y yo tengo novio y tu también…, te juro que a mí no me gustan las mujeres, y sé que a ti tampoco… perooo…
--Pero queeee…!!!, -ahora nuestra Cielo Riveros también reaccionaba como una verdadera desequilibrada mental.
La rubia estudiante sin haberlo planeado ni imaginado se vio en tan candente e intima conversación con su amiga, esta ya no era de viejos lujuriosos ni violaciones, sino solo de ellas. Y claro, como ya lo hemos dicho en ocasiones anteriores Claudia al ser una chica fresa y de mejor condición económica y social que Cielo Riveros , ya en algunas oportunidades se había visto envuelta en pequeños juegos sexuales con sus otras amigas, y desde esos tiempos por alguna extraña razón en mas de alguna ocasión había sentido unas tremendas ganas de hacerlo con Cielo Riveros , pero ella al conocer su tímido temperamento pensó que nunca llegaría a darse una ocasión, bien sabía ahora que con todo lo sucedido el escenario cambiaba completamente, y si bien ya lo habían hecho obligadas por los dos vejetes, ella ahora sentía unas poderosas ganas a que lo volvieran a hacer, pero ahora ellas dos solas. Así que sin pensársela mas dejó de lado la amistad de la infancia y se dio a confesarle a su amiga lo que ella pensaba de todo aquel asunto entre ellas.
--Jijiji, pero contigo es distinto sabes?, mira, de vez en cuando las amigas entre si hacen cositas ricas, cosas de chicas, que nadie más puede saber ni enterarse… me entiendes?
--No, no te entiendo Claudia…!, y ya para que me estas asustando…!, -la nena veía como su amiga no paraba de sobarle delicadamente su pierna, al son de su enajenante conversación.
--O sea, cositas ricas, entre nosotras, así mismito como las que hicimos… lo recuerdas?, -ahora la rubia se recostó apegando todo su cuerpo junto a las temblorosas curvas de la mamasota que de verdad ya estaba nerviosamente asustada con las locuras de Claudia que ahora estando en mejor posición había ido subiendo su manita y ya le estaba acariciando desde su rodilla hasta mas arribita de la mitad de su suave y brillante muslo.
--Ay Claudia… tú estás loca de remateeee…!!!, -la casi histérica chamaca le decía todo eso a su amiga mirando hacia cualquier parte de la habitación, insólitamente sin moverse de la cama, en cualquier otra ocasión hubiese salido corriendo para su casa, pero ahora por alguna razón sencillamente no lo hacía, aun así la nena estaba muy nerviosa.
--Ps…!, tú tienes la culpa Eve…, con todas esas historias de los viejos con los que te acuestas me hicieron sentir sensaciones…, -la rubia le hablaba despacito y con sus ojos cerrados concentrándose en esas suavidad nunca antes sentida en sus manitas que era la piel de su amiga de la infancia.
--S… sen… sentiste s… sen… sensaciones…!?, -le consultó ahora Cielo Riveros también con sus ojos semi cerrados, su respiración poco a poco se iba entre cortando, ya que ella también estaba comenzando a sentir sensaciones, la chamaquita ni recordaba que a esa hora ella debería estar juntándose con su Rodrigo a la entrada del cine.
--Si, y me están dando ganas de que lo hagamos ahora que estamos solitas…, -le soltó la rubia la enajenante propuesta a su compañera de colegio.
Cielo Riveros ante la sórdida proposición que le hacía su rubia amiga volvió a medias a la realidad, a pesar de eso ella aun no se movía de la cama, en su mente solo daba vueltas eso que le había dicho su amiga, o sea, Claudia abiertamente le estaba proponiendo que se acostaran?. Hasta que cuando lo pudo entender, con algo de cordura le dio su respuesta a su amiga.
--Ay no Claudia…! creo que no…!!, además que debo ir a juntarme con Rodrigo…!!!
La fresa estudiante estando ya engolosinada con las suaves piernas de su introvertida amiga le contestó solo para hacerla entrar en confianza y alargar un poco mas ese tan rico momento, ya que ella sabía que Cielo Riveros debía ir a juntarse con su novio y ella no quería entrometerse en los asuntos de ambos.
--Pues iras igual Eve, yo no pretendo privarte de ir a salir con tu novio, además que tienen toda la noche para estar juntos, es solo que ya me dieron ganas de tocarte un poquito… me dejas?,
--S… Solo tocarmeee?, -las palabras de Claudia con eso de que ella no pensaba privarla de ir a juntarse con su Rodrigo la tranquilizaron un poco.
--Si, solo tocaré un poquito… y tal vez… un beso…? Luego te puedes ir a juntar con tu enamorado, que me dices?
La chamaca rápidamente posó una de sus piernas sobre la otra entre cerrándolas ya que la delicada manita de Claudia cada vez subía peligrosos centímetros aproximándose a su zona prohibida, y ella no entendía por qué motivos no podía detenerla, solo se vio contestándole:
--Solo un beso…!?
--Si solo un beso…!!, -la rubia ya no aguantándose más posó sus rosados labios en el brillante y suave hombro de su amiga notándolo suavecito, fresco y bien perfumado.
--Ay Clau, nosotras dos somos chicas esto está mal…!!!, -Cielo Riveros le decía lo anterior a su amiga mirando en sentido contrario de donde estaba la salida Claudia quien ya iba subiendo con sus labios en el inicio del despejado cuello de la colegiala que no sabía a cómo reaccionar ante tan delirante situación.
--Ya te explique que a veces las nenas como nosotras hacen cosas de chicas, y eso no está mal, a mi no me gustan las mujeres ahombradas, tu no lo eres y yo tampoco lo soy, ambas somos dos hembras muy femeninas que estamos rebuenas según los comentarios en el cole y en todos lados, además que tu cumples con todos mis requisitos para hacerlo contigo un ratito, jijiji, vamos dame un beso igual que el otro día, pero ahora solo nosotras dos.
--Ay Claudia, haces que me ruborice con todas esas cosas que me dices…!, le decía la asustada e incrédula Cielo Riveros con sus ojitos cerrados y mordiéndose el labio inferior, y claro su carita estaba muy ruborizada.
--Si te ruborizas es porque a lo mejor tú también lo quieres…, -le decía la caliente rubia a su amiga muy cerca de sus perfumaditos oídos, que increíblemente al habérselo dicho muy cerca de ellos hizo que toda la piel de la nena se erizara, tal cual como le ocurría en las oportunidades en que sus viejos violadores le decían todo tipo de peladeces y guarrerías antes de cogérsela, la rubia le había ido subiendo su vestido dejándolo un poco corrido y en donde se podía apreciar el nacimiento de aquel precioso triangulo que la nena tenia por vagina, la rubia mas se calentó con solo ver un poquito de ese triangulito que estaba enfundado en tela roja bien oscura como la sangre.
Ante semejante erizada de bellitos y cabellos a la nena no le quedó más remedio que reconocer que tal vez un besito entre dos chicas no le haría mal a nadie, ella sabía que su vestido estaba subido y que mostraba una pequeña parte de su ropa interior, de cualquier modo ella no hacía nada por taparse.
--Ay no lo sé…!, Ehhhh…!, está bien pero que sea solo un beso…!, -le dijo finalmente mirando hacia otro lado y haciéndose la mensa.
--Será solo un beso amiga… así que no te preocupes…- Claudia junto con hablarle lo anterior ya iba subiendo con sus labios por la mejilla de la nena que solo se mantenía con sus ojos cerrados esperando lo que tenía que pasar entre ellas, sintiendo como la manita de Claudia se había posado en su cadera por debajo de su ropa acariciándola suavemente.
--Pero como amigas…?, -le consultó Cielo Riveros solo para hacer menos comprometedor la tremenda zorrería que estaba a punto de cometer dejándose llevar por la degenerada de su amiga.
--Como amigas Eve… siempre como amigas, jijiji… -reía la rubia revoloteando con sus labios y la punta de su lengüita por distintos sectores de la suave cara de Cielo Riveros .
--Y luego me voy a juntar con Rodrigo…?, -la nena sentía como los labios de Claudia ya venía acercándose a los de ella, el fresco aliento de la rubia ya llegaba a las fosas nasales de la pobre chamaca.
--Sip, te irás a juntar con tu Rodrigo, yo no te voy a retener…, -le dijo Claudia ahora con su naricita respingona pegada a la perfilada y perfecta nariz de nuestra temblorosa mamasota ambas mirándose a los ojos y luego mirándose los labios hasta que Claudia fue cerrando sus ojos a la misma vez que iba posando sus rosados labios en los rojos de Cielo Riveros hasta que simplemente ambas semi abrieron sus boquitas y se besaron. En el living de la casa de Claudia y al interior del bolso el celular de la colegiala vibraba con más de 10 llamadas perdidas de Rodrigo.
(En ese mismo momento a la entrada del cine en que debían juntarse Cielo Riveros y Rodrigo)
El chamaco caminaba nerviosamente de un lado para otro, ese día se había ido a comprar pantalones y zapatos nuevos ya que la ocasión lo ameritaba, sumado a las largas horas que lo habían separado de tan memorable momento, pero su novia hacía más de 30 minutos que debería haber llegado, en su mente retumbaban las palabrotas dichas por su padrastro solo el día anterior:
“Tu mañana no tocarás a esa potranca, ni mañana… ni nunca, y sabes por qué?, porque ella no irá a juntarse contigo, otra vez te dejará plantado como ya lo ha hecho en otras ocasiones…”; “que te quede claro pendejo reculiao’… esa mujer es mucha hembra para un pobre pedazo de idiota como tú, esa principiante de yegua está hecha para acostarse y ser gozada por machos de verdad, o sea, por machos como yooo…!!. Te queda claro estúpido…!!??...”
Lo anterior era demencial para el pobre muchacho, mientras su mente le machacaba lo dicho por su padrastro sus casi llorosos ojos veían la larga fila que hacían las numerosas parejas de felices enamorados quienes esperaban el acceso a la sala cinematográfica conversando abrazados y haciéndose arrumacos. Acaso el no tenía también que haber estado de la misma forma a esas horas con su novia?, se preguntaba a la misma vez que volvía al asiento en donde tenía las dos cajas con palomitas de maíz que había comprado para él y Cielo Riveros , para luego de volver a mirar las dos entradas que había adquirido guardárselas en el bolsillo de su camisa y volver a marcar el numero de Cielo Riveros el cual sonaba y sonaba no habiendo quien le contestara.
El tiempo pasó sin misericordia para el pobre Rodrigo quien vio dos largas filas de personas entrar y salir del cine por cada espectáculo.
Ya era pasada la media noche y Cielo Riveros definitivamente no había llegado, incluso en el intertanto de cada función había tomado un taxi en dirección a la casa de su novia en donde la encontró (la casa) con todas las luces apagadas y con nadie que atendiera la puerta.
Luego supuso que con toda seguridad Cielo Riveros se había retrasado por algo y que llegaría a la segunda función, total tenían toda la noche para ellos, pero al estar de vuelta en el cine nunca se encontró a su novia esperándolo tal como lo había imaginado.
Siendo ya cerca de las 1 de la mañana fue cuando le dieron aviso que ya bajaban las cortinas del local para cerrarlo, fue ahí cuando se convenció de su triste realidad, nuevamente la habían dejado plantado, tal cual como lo había presagiado su padrastro.
El herido y casi destrozado joven estando casi al borde del llanto se puso en camino hacia su casa, no sin antes arrojar las dos cajas de palomitas de maíz en un basurero y de romper las dos entradas al cine que con tanta ilusión había comprado para él y para su novia.
(4 horas antes en la casa de Claudia)
... Claudia fue cerrando sus ojos a la misma vez que iba posando sus rosados labios en los rojos de Cielo Riveros hasta que simplemente ambas atractivas colegialas semi abrieron sus boquitas y se besaron, mientras en el living de la casa de Claudia y al interior de un bolso de salir el celular de la colegiala vibraba con más de 10 llamadas perdidas de Rodrigo.
Ambas frescas y femeninas lengüitas se juntaron y se revolvieron suavemente, y ahí estaban ellas besándose abrazadas y comenzándose a tocar.
La rubia Claudia se mantenía semi inclinada sobre el portentoso cuerpazo de su amiga a la misma vez que temblorosamente se había ido encargando de subirle el vestido hasta dejárselo a la altura de su cintura, en donde ahora si se podía ver aquel diminuto calzoncito rojo que daba forma a un desquiciante triangulito color sangre adornando las poderosas caderas de la chamaca creando la ilusión óptica de que en cualquier momento ella los haría reventar de la parte elasticada por lo tirante y estirada que se notaba aquella fina prenda de encaje, y por su parte Cielo Riveros poco a poco comenzaba a olvidarse de su compromiso con Rodrigo
Los besos en los labios y con lengua por parte de ambas mamasotas eran suaves y húmedos. Ambas boquitas se encontraban, se comían y se envolvían entre ellas con todo.
Las dos hembritas atracaban sus bocas al parecer con deseo y con una sensualidad increíble. En eso Claudia sin dejar de besar a su amiga empezó a apartarle el pelo de la cara e increíblemente terminó con una de sus delicadas manitas encima de una de sus chichotas, mientras que con la otra le acariciaba peligrosamente un poco más debajo de su cadera y por debajo del vestido.
Nuestra deseada y sensual colegiala que en un momento se sintió relajadísima con esa suave y delicada incursión entre chicas que estaba manteniendo con Claudia de pronto se vio paralizada, ya que en tanto su rubia amiga la seguía besando en la boca Cielo Riveros abrió sus ojos como platos, y como no lo iba a hacer si su fresa amiga comenzó a sobarle las tetas con las misma ansias en que se las masajeaba don Pedro o cualquiera de los otros viejos cuando andaban calientes y desesperados por culearsela, al menos eso pensaba la nena en aquellos momentos, ni que decir que la otra manita de la rubia había ido subiendo por su cintura y ahora ya estaba un poco mas debajo de su ombligo, prácticamente en la antesala de posarse sobre la triangular tela roja que protegía la vagina de la tierna colegiala, hasta que Claudia simplemente tomo manual posesión sobre el sexo de su amiga.
Cielo Riveros se encontraba paralizada y no podía reaccionar ya que la delicada manita de Claudia ya se encontraba jugueteando por sobre la diminuta tela que la preservaban de cualquier situación indebida. La salida Claudia que se encontraba totalmente revolucionada sexualmente al estar sobándole la vagina a su amiga ni se la pensó para comenzar a dibujar con su dedo medio la intima rayita de carne que Cielo Riveros poseía justo al medio de sus muslos, este lo hundía y lo metía para adentro con tela y todo.
Ante la pasividad de su compañera de cole la rubia se separó de sus labios y llevó su vista hacia abajo viendo en primera fila ese estilizado cuerpo casi al desnudo desde la estrecha cintura para abajo, sus marcadas caderas, sus bien formados muslos, y sus bien desarrolladas piernas las mantenía muy juntitas entre cruzando sus pantorrillas si como con esto fuera lo necesario para proteger su hendidura de sus febriles y excitantes toqueteos.
La Clau notaba como su tímida amiga se mantenía quietecita mientras ella no paraba de masturbarla, su dedo ya daba muestra de estar húmedo por lo que intentaba hundirlo aun mas en ese caliente y medio acuoso tajo que se había formado en la tela de la diminuta prenda, esta misma ya mostraba una oscura humedad justo en el sector del tajito.
Cielo Riveros continuaba inmóvil ahora se mantenía con sus ojos cerrados y respirando solamente por su boca, sus músculos lentamente comenzaron a relajarse y su mente comenzaba a perderse en las delicias de ese femenino dedo que tan bien le estaba trabajando allá abajo, y su caliente amiga se daba cuenta de esto por lo que no dándole tiempo de reacción y sin dejar de masturbarla se acomodó aun mas al lado de su cuerpo para nuevamente comenzar a besarla más efusivamente a la misma vez que se dio a seguir diciéndole cosas a su oído para ver si su tímida amiga terminaba por calentarse de una buena vez por todas y para que se pusiera a realizar todo tipo de guarrerías tal como la había visto ella que las hacía cuando estuvieron con los dos vejetes.
--Sabes Eve…?, después de que estuvimos con esos viejos me masturbe toda la semana imaginando este momento…, -le decía la rubia bien bajito y entre exquisitos besitos por la parte de la oreja de la nena y sus alrededores.
--Ayyy…! C… Claudiaaa…! Nooo…! E… esooo es m… men… mentiraaaa…!, -le decía entre susurros y moviendo circularmente su cabeza antes las deliciosas y delicadas lamidas que la rubia le daba a su orejita.
--No tonta… es la purita verdad…!, estas muy rica amiga, es imposible no imaginarte desnuda y no calentarse…
--Yo… yo… s… soy tu amigaaa…!, no puedes imaginarme desnuda y hacer esooo…!!
--Si, somos amigas…!, y siempre lo seremos, pero la verdad Eve es que desde hace mucho tiempo deseaba estar así contigo, solo para divertirnos, jijiji… no creas que me voy a enamorar de ti ni nada de esas cochinadas, solo quiero que hagamos cositas ricas de vez en cuando a espaldas de nuestros novios… y si quieres podemos seguir acostándonos con los viejos esos de tus amigos, dime que no te gustaría…
--Que cosas dices Clau… Ohhhh…!!, -Cielo Riveros con solo imaginarse a ella con Claudia otra vez revolcándose con don Pedro o con el viejo que fuera no pudo evitar dejar de salir de su intima hendidura un caliente chorro de líquidos vaginales, su amiga la estaba poniendo a mil con sus lujuriosas salidas.
--Reconócelo Eve…! dime que te gusta acostarte o que nos acostemos con viejos asquerosos… -La rubia estudiante no cejaba en su imprudente interrogatorio.
--Mmmmmmm…! Ahhhhh…! Mmmmm…!, -era lo único que obtenía por respuesta la perversilla de Claudia.
--Dilo amigui…! yo no le contaré a nadie… dime que disfrutas cuando esos viejos te la meten…!, -la respiración de la rubia se dificultaba al estar diciéndole semejantes barbaridades a Cielo Riveros , quien era la alumna más tranquila y más bien portada de todo el establecimiento escolar.
Claudia se sorprendió aun mas cuando ante su salida pregunta por única respuesta obtuvo de Cielo Riveros que ella poco a poco fue subiendo sus piernotas para luego simplemente abrírselas de par en par, dejándole su vagina totalmente disponible para que ella la masturbara todo lo que quisiera al compás de sus guarras preguntas. La joven burguesa entendió el mensaje, su amiga de la infancia también ya estaba con ganas de jugar y se lo estaba transmitiendo a su forma, fue por eso que profundizó aun más en el fuego cruzado del cargamento de leperadas con las que la estaba bombardeando.
--Vamos Evi…!, recuerda que tu eres más puta que yo misma…!, así me lo dijo don Pedro, y así me lo has demostrado con lo que me acabas de confiar, reconoce que te gusta que cualquier viejo asqueroso venga y te meta la verga…!!, -le decía la envalentonada Claudia al borde del ataque cardiaco ya que nunca imagino que algún día le estaría diciendo semejantes guarradas a su mejor amiga con el solo fin de calentarse entre ambas.
En la mente de la ya muy caliente colegiala revoloteaban las palabras de su amiga a la misma vez que las analizaba dentro de su enardecimiento sexual, preguntándose así misma si sería ella en realidad más puta que su libertina amiga?, y mientras que para Claudia todo no pasaba mas de ser un simple juego de palabras entre chicas para excitarse y ver hasta donde llegaba la cosa para Cielo Riveros era algo verdadero, ella no se había abierto de patas para enviarle señales a Claudia ni nada parecido sino porque ella ya estaba hirviendo de calentura y necesitaba que le metieran algo, o frotarse con cualquier cosa, o lo que fuese porque a ella le gustaba simplemente sentir rico de cualquier forma posible, y si…!!, se reconocía a ella misma, que ella: Cielo Riveros del Carmen Jiménez Gómez era la puta más grande que había en el colegio incluso hasta de su barrio, más que la Claudia y su jauría de amigas, gracias a Dios que la fresa esa que la masturbaba en esos momentos y que era su mejor amiga no se lo contaría a nadie, se decía mordiéndose exquisitamente su labio inferior y disfrutando de cómo le corrían una buena paja, por lo que finalmente y llevada por su propia calentura le soltó a su amiga lo que ella quería escuchar.
--Ohhhhh…! S… siiiiiii…! C… Clauuu…!! Me gusta que c… cualquier v… viejo que le den ganas v… venga y me lo h… ha… hagaaa…!!!
La rubia estaba empeñada en que Cielo Riveros su pusiera a decir groserías y guarradas del más grueso calibre, y al paso en que iban, según lo ultimo dicho por la nena, eso debería suceder en cualquier momento calculaba, por lo que siguió atacando a la colegiala.
--Aja…!, que biennnn…!! Pero dime, que es lo que te gusta que te hagan…?!!!, -el cuerpo de Claudia temblaba de emoción calenturienta, su pregunta había sido muy directa, por lo tanto espera una respuesta similar.
--Mmmmfff… que cualquier viejo me haga e… e… esoooo…!!!, -Cielo Riveros le contestaba a medias lo que su amiga le consultaba, pero es que Claudia junto con hablarle la estaba masturbando muy rico según sentía, si hasta le costaba hablar.
--Pero, que es “eso” amiga…!, -la Claudia se lo pregunto ahora recargando su voz en “eso”, lógicamente ella quería saberlo literalmente, --Dímelo mas al detalle…! no te entiendo…!!
Con lo ultimo y al vaivén del la delicada manita de Claudia que se movía circularmente en su vagina solo protegida por la roja tela de su pequeña tanguita a la nena ya no le queda más remedio que claudicar, así que le soltó desde sus propios labios que era “eso” que a ella le gustaba que le hicieran, y se lo dijo ahora tal cual como la rubia Claudia lo quería, o sea, de la forma más ordinaria y vulgar que pudo.
--Q… Que… Que me c… cu… culéen…! eso Clau…!! Que me cu… culéen bien ri… ricoooo… y bien fuerteeee!!, -a la misma medida que la le nena iba soltando semejantes peladeces también se iba soltando y entrando mas en confianza, --Me encanta que cualquier viejo asqueroso se me monte y me deje bien culiadaaa…!!! y llena de semennnn…!!! Solo porque a ellos les dieron ganas…!!! Mmmmm…!!!
A la rubia con solo escuchar la tremenda peladez pronunciada por su amiga se le abrieron los ojos como platos y creía sentir en sus mismas sienes los latidos de su corazón, sumándose a estos todas las pulsaciones sanguíneas en diferentes partes de su dorado y curvilíneo cuerpecito, Cielo Riveros era un desalmado monstruo del erotismo y la lujuria se decía, así que tragando saliva siguió con su delirante interrogatorio.
--Querrás decir… que te llenen de mocos?, -la Claudia estaba totalmente desinhibida con tan peculiar conversación que había logrado establecer con Cielo Riveros .
--Si… que me den sus mocos por donde ellos quieran…!!!, -hay Clauuuu… me tocas tan ricoooo…!!!!
No haciéndole caso y tragando saliva la salida y joven burguesa seguía con el hilo de la conversación:
--Amiga… por donde te gusta más que te los den…??, -obviamente la salida estudiante se refería al semen, ella quería saber por dónde prefería su amiga que se lo depositaran en los momentos en que se la cogían, y la escalofriante respuesta no tardó en llegar.
--Me g… gusta que me los e… echen en la z… zo… zorraaaa…!!!
--Wuaaaa…! Eveeee…!! Me tienes como locaaaaa…!!! Oye… y acaso no te gusta bebértelos…!!??
--Ooooohhhh…!!!! Siiiiiiiiii…!!!!, me encanta sentir en mis labios como les pulsa la verga antes de dármelos… yo me los como…!!!! Me los comooooo…!!!!, -a la nena también se le habían soltado los tornillos…!, estaba enloquecida diciendo todo tipo de guarradas, y ahora hasta sin que Claudia se lo preguntara!. --Me fascina sentir como bajan y se deslizan lentamente por mi garganta esas cantidades de mocos que me dan a probar… ese rico liquido medio salada y calienteee…!!!, lo imagino tan blancoooo…!!!!, tan espesooooo…!!!! Ohhhhh…!!!! Ufffffff…!!!!
--Pero que es lo que te gusta más…!!?? Que te los echen adentro de tu coñito…!? O… comértelos y tragártelos…!!??, -ahora la putinga y aprovechadora de Claudia le hablaba con un brazo pasado por debajo de su cabeza, con lo que podía despejar la cara de Cielo Riveros de sus cabellos, y con su otra mano le acariciaba una teta bien suavecito, la colegiala se mantenía con sus bellas piernotas bien abiertas y moviendo su pelvis circularmente y hacia arriba como si realmente estuviera punteando con alguien.
Y como ya dije antes, la nena a estas alturas no estaba para guardarse nada:
--Las dos formas me gustan…!!!
Claudia nunca supo cual fue el momento en que la situación se puso tan caliente, y tampoco estaba para detener su vendaval de preguntas guarras, la situación para ella era muy rica, por lo que continuaba ahondando aun más.
--Pero amiga… elige la que más te gusteee…!!!
--Ohhhh…!! Mmmmm…!!! Me gusta que me los echen en la z… zo…zorra y bien adentroooo…!!!!. –le confesaba de lo forma más calientemente sincera.
--Guauuuuuu…!!! Que ricoooo y porque amiga…!!!!, porque te gusta que te eyaculen adentro de tu zorraaaa…!?, -el rubio coñito de Claudia estaba que colapsaba, lo tenía tan mojado debido a las continuas expulsiones de líquidos que soltaba desde su intima rendija que la sensación para la rubia era tal cual como si estuviese sufriendo un largo y continuo orgasmo, y miren como debe haber quedado con semejante respuesta de nuestra deseada y caliente mamasota:
--P… Porque así me p… po… podrían dejar p…pre… preñadaaaaa…!!!!
--No mames mi Eve…!!! Guaaaaaaa…!!! Estoy que me meo por tu culpa amigaaa…!!!!, y de cuál de todos los viejos con los que te has acostado te gustaría quedar embarazadaaa…!!!!
--De cualquieraaaa…!!! Ohhhhh…!!! No me interesa Clauuuu…!!! De verdad que no me interesaaaa…!!! Me gustaría quedar preñada de cualquiera…!!!! Me da lo mismoooo…!!!, sería rico que me dejaran bien embarazada y no saber cuál de todos esos viejos fue el que me preñóóóóó…!!!! Ohhhhh…!!!! Clauuuu…!!!! Me corrooooo…!!!! Me corrooooooooo…!!!!
La caliente situación en que estaba con su mejor amiga, y sumándose a ello todas esas cosas que tenía en la mente nuestra impresionante colegiala fue mucho para ella, esa nueva y prohibida perversidad recién nacida en su sensualidad y que le había mostrado Claudia también le atraían y fue esta misma nueva sensación de perversa lascivia la que la hicieron capitular ante su amiga de la infancia yéndose cortada en el aire y sin que ni siquiera hubiese nadie masturbándola mientras meneaba sus ancas.
La chamaca ya estaba caliente, muy caliente y una vez recuperada de los ricos escalofríos de ese primer orgasmo se lo demostró a la rubia deslizando sus manitas por entre medio de los rubios cabellos de ella para abrazarla y atraerla a sus rojos labios, para luego de estar ahora casi comiéndosela a besos con lengua hacerla rodar por la cama y quedar esta vez ella montada sobre el cuerpo de Claudia, la misma posición en la cual parecía que estuviese dispuesta a cabalgarla.
La joven de cabellos dorados por un momento no entendió lo que estaba ocurriendo incluso creyó que su tímida amiga por fin se retiraría para ir a juntarse con su amado a pesar de estar ya bastante atrasada, pero al verse de espaldas en la cama con su Cielo Riveros montada sobre ella a la altura de su cintura la vio enderezar su cuerpo, y más escandalizada quedó cuando la vio que la dulce y tímida chamaca la miraba con su respiración terriblemente agitada para luego entrecruzar sus manitas para abajo y tomar los bordes de su vestido para sencillamente ir subiéndolo por su cintura, despejar su ombliguito y seguir retirándoselo hasta despejar sus redondas chichotas para por fin pasarlo por sobre su cabeza moviendo sensualmente sus azulados cabellos negros y hasta que finalmente se lo sacó por completo.
La fascinada Claudia instintivamente posó sus manitas en las desnudas y marcadas caderas de su integra amiga, estas brillaban ante la luz de la lámpara, la suavidad de su piel era enloquecedora, era mucho más suave que la de ella misma que se aplicaba todas las cremas y lociones habidas y por haber, meditaba la facinerosa rubia, hasta que por fin en forma media incrédula le consultó al tiempo que subía sus manitas a esa estrecha cintura para luego devolverlas a las caderas sintiendo ella misma el poderío y perfección corporal que era poseedora su amiga de toda la vida.
--Pero Eve…!, que haces…?!!, jijiji… recuerda que Rodrigo tu novio te está esperando…, -le dijo la Clau desde abajo y hacia las alturas.
La nena lentamente y siempre mirándola con parte de sus sedosos cabellos tapándole a medias su carita de adolescente quinceañera llevó sus manitas a su espalda para destrabarse su sujetador liberando así sus dos colosales globos de carne que perfectamente se acondicionaban a su anatomía hasta retirárselo, y luego de ya estar con las tetas al aire y ante los incrédulos ojos verdes de la rubia, simplemente le dijo,
--A la mierda con Rodrigo, e… es… esta noche… e… es… es noche de chicas…!, -junto con ello fue bajando su cuerpo para volver a comerse la sensual boquita de la feliz y eufórica Claudia quien no perdió tiempo y comenzó a mover su lengua con la de Cielo Riveros a la misma vez de darse a manosearla casi con desesperación, la rubia encontraba más que acertada la determinación de Eve.
La excitada colegiala ya no pensaba en nada, se encontraba en un delirante y nuevo estado de lujuria compulsiva, o en otras palabras estaba tremendamente caliente por tanta guarrería hablada, y estaba dispuesta a servirse a Claudia a como dé lugar, el olor a coño lubricado y a erotismo puro poco a poco se iba a instalando en la femenina habitación juvenil de la rubia, para la nena todo esto era casi irreal, se sentía estar en el mejor de los sueños lésbicos que ya en más de una ocasión había tenido y justamente con su salida amiga como protagonista.
Por su parte Claudia estaba extasiada y a la vez seducida por ese tremendo cuerpazo de hembra hecha y derecha que estaba sobajeando y que nada tenía que ver con los flacuchos y sueltos cuerpos de las pendejas esas con las que había incursionado en “juegos de chicas”, nunca se imaginó que su amiga del alma, la mas bien portada de todo el colegio, fuera tan morbosa y lujuriosa a la hora de calentarse, ahora entendía porque ese ejercito de viejos ordinarios se la culeaban todas las veces que ellos querían. Pensando en lo anterior sus manitas recorrían esos dos pedazos de tremendos muslos tan suaves como la misma piel de un bebé, para luego pasear sus palmas por esas dos redondas nalgotas que se ampliaban en sus redondeces y se estrechaban al ir llegando a sus caderas y finalizar con el paso a su cintura, para después volver a hacer una y otra vez ese tan exquisito y carnal recorrido, y apenas vio que su amiga levantó un poco su tronco separándose de sus labios ni se la pensó para apoderarse de esas dos grandes tetas que colgaban solo a centímetros de sus ojos verdes para casi en el acto llevarse una de ellas a su dulce boquita de princesa mal criada y comenzar a chupársela de la misma forma como si de verdad fuera a beberse toda la lechita que pudiera tener su amiga al interior de ellas.
Cielo Riveros sentía como su amiga le succionaba exquisitamente sus tetasas tal cual como si ella fuese su bebita necesitada de alimento maternal cambiándose alternativamente de chichota y hacer la misma operación con la otra, como también se estremecía de placer al sentir como su incondicional compañera de colegio le lamía circularmente sus pezoncitos con su fresca y puntiaguda lengua tal cual como si estos fueran caramelos de azúcar, y esto a nuestra chamaca poco a poco le iban haciéndole perder los sentidos sin dejar de vibrar con todo su cuerpazo y suspirar deleitosamente antes los ricos escalofríos que sentía con tal tratamiento succionador en sus tetas, ya casi no lograba pensar en nada, su mente gradualmente iba quedando en blanco solo dándole paso al placer y al delicioso vicio de la carne, situación que hicieron que la colegiala en forma instintiva comenzara a refregar notoriamente su panocha en el áspero jeans de su amiga, justo en la altura pélvica de la sabrosa rubia, era obvio que otro orgasmo ya se le avecinaba a pasos agigantados.
Los suaves movimientos que hacía la chamaca sobre el curvilíneo cuerpo de la pendeja rubia eran genuinamente de coito, con esto amigos míos Cielo Riveros literalmente estaba cruzando una remota frontera que prácticamente la llevarían a confines placenteramente prohibidos y lamentablemente ya casi sin retorno (aunque no estoy muy seguro si tan lamentables, pero igual).
A Claudia no le costó mucho trabajo reaccionar ante los eróticos movimientos que hacía su amiga, además que era exactamente lo que ella había estado esperando, así que aprovechándose de la situación y en rememoración de las fantasías de sus masturbaciones en las noches anteriores como pudo estiró su manita hacia el velador que estaba junto a la cama para tomar unas pequeñas tijeras con punta redonda, de esas que se usan para trabajos escolares para luego y con mucho cuidado llevarla a la altura de las caderotas de la nena procediendo primero a cortar un elástico lateral del pequeño calzoncito rojo de su amiga en el sector de sus caderas, y para después hacer lo mismo en el otro extremo, una vez logrado su cometido sencillamente los tomó empuñadamente por delante de su vagina y se los fue retirando y estirando lentamente mientras estos se iban deslizando por esa casi depilada vagina que se gasta nuestra increíble colegiala, hasta dejarla completamente desnuda, Cielo Riveros en todo este atrejeo nunca dejo de moverse.
Y otra vez se repetía la historia, a nuestra incomparable mamasota que se gastaba un tremendo cuerpazo con lujuriosas y diabólicas curvas que caían casi en lo criminal nuevamente la tenían completamente encuerada y la Claudia que estaba con toda su ropa puesta aun no se sacaba ni los zapatos de mediano taco.
A esas alturas ambas chamacas de 18 años estaban realmente desatadas, Cielo Riveros no dejaba de moverse sobre el cuerpo de Claudia preocupada únicamente de su propio disfrute, o sea, como toda una zorra, mientras la rubia que no le importaban las condiciones sicológicas de su amiga, con lo que se convertía en otra zorra más grande todavía, solo se preocupaba de sentir y manosear toda la carne al desnudo que pudiera, solo se daba a sentir esas duras y suaves nalgotas que se gastaban su bien ponderada compañera de colegio, hasta que cuando la rubia ya no se aguantó más las ganas de realmente empezar el verdadero show de cositas ricas que se hacen entre dos chicas que están buenas como pudo se fue enderezando en la cama quedando abrazada al desnudo cuerpo de Cielo Riveros que se movía como una verdadera endemoniada, como si realmente se la estuvieran culeando.
La rubia no perdió tiempo en abrazarla por la cintura y atraerla aun más hacia su femenino cuerpo con la finalidad de que a su amiga no le costara tanto trabajo realizar sus deliciosos meneos, para así, ambas dos, comenzar otra vez a besarse en la boca con deseo mutuo y sin descanso, luego se lamían el cuello, mientras la desnuda Cielo Riveros como podía iba desabotonando la blusa de su amiga, ella también ya deseaba chuparle las tetas a la afortunada Claudia.
Pero por ahora los deseos de la rubia eran otros, ya habría tiempo para ella empelotarse y darle a probar de sus encantos a su amiga, por lo tanto no dudo en ir delicadamente tomando las manitas de Cielo Riveros y comenzar a ser ella quien ahora se montaba sobre aquel tremendo y estilizado cuerpo de hembra con curvas aterradoramente exquisitas.
Cielo Riveros lentamente se fue reclinando hacia atrás de la cama hasta quedar de espaldas sobre ella en forma inversa, su cabeza quedó alojada justo en el canto donde se terminaba el lecho, o para que me entiendan mejor la nuca de su cabecita quedó colgando hacia abajo y sus negros cabellos caían en cascada hasta desparramarse en el suelo, la pequeña y femenina manzanita de su garganta al estar doblada y estirada hacia atrás subía y bajaba debido al intenso estado de excitación en que se encontraba la nena, a la vez que sentía como los labios de su amiga luego de mandarle unas exquisitas succiones en las tetas ya iban bajando hacia la parte que Claudia desde hace ya un rato deseaba embelesarse, y nuestra encuerada colegiala quien ya no estaba para negarle nada a nadie fue y se abrió de patas completamente y lo que más pudo, dejando su intima veta de carne abierta y en bandeja para que la explotara sexualmente quien lo quisiera, y era obvio, ella también deseaba que su rubia amiga se la chupara y extrajera desde su interior los acuosos e íntimos tesoros que ella naturalmente proveía a quien se le antojara probárselos y sumirse en ellos.
La caliente Claudia descendió con su lengua por el potente cuerpo de Cielo Riveros y lo hacía con lujuriosa emoción hasta que llegó justo al medio de donde estaba el nacimiento de esas dos potentes piernotas que estaban más abiertas de como los están las puertas de una Iglesia el día domingo, en eso por fin se encontró con lo que ella ya estaba deseando embriagarse hasta el empalagamiento.
Los ojos verdes de la rubia casi no pestañeaban mirando aquel precioso monte de Venus apenas sombreado por una pequeña población de pelos bien negritos, brillosos y encrespaditos, y un poco mas debajo de aquel primoroso monte, tan erótico como femenino, estaba esa atrayente y tierna rajadura de carne que estaba como esperando ser lamida o abierta por algo, el asunto para la rubia es que estos exquisitos tesoros femeninos estaban a su total disposición, a la vez que se preguntaba que como fue posible que aquella pequeña y apretada grieta de carne, según la veía a centímetros de sus ojos fuera capaz de comerse cuanta verga se le pusiera por delante, no importando sus grotescas dimensiones o cuan largas fueran estas, sencillamente se las tragaba igual, se decía para sí misma y mientras se le hacía agua la boca por probarla.
Así que Claudia a sabiendas que ya no había nada más que esperar como pudo rodeó con sus brazos los dos firmes muslos abiertos de su entregada amiga y con ambas manitas se dio a separar levemente esos exquisitos y rosados labios vaginales que le daban forma al tajito que le estaban obsequiando y justo cuando su mirada vio que entremedio de aquellas rosáceas carnes intimas semi abiertas por sus dedos se vislumbraba un pequeño agujero negro en forma de tajo la abundante hiel termino por inundarle su fresca boquita, por lo que ya sin esperar nada abrió sus rosados labios para posar el superior en el nacimiento de la pelvis de Cielo Riveros y el inferior justo donde terminaba aquella preciosa rajadura que ahora abiertamente se estaba comiendo.
La rubia en el momento en que recién estaba comenzando a chuparle la zorra a su amiga y luego de haber probado ese acido y salado sabor vaginal en donde se tragó todo lo que pudo de los líquidos que anteriormente lubricaban la panocha se dio a comenzar lamérsela, ella reconocía que la concha de Cielo Riveros sabía bastante bien, a la misma vez que intentaba adentrar su lengüita lo más posible al interior de aquella mística vagina, como de a momentos también subía un poco y se daba a chupetear todos los pelitos crespos que ahí habían, se los peinaba de un lado a otro con su lengua y se los comía con sus dos labios entrecerrándolos y estirándoselos hacia arriba, para luego repetir la bucal operación una y otra vez para terminar lamiéndosela con total glotonería.
Y así iban pasando los minutos, y al estar Claudia chupando y lamiendo como desaforada aquel fresco coño que le estaban prestando su naricita estaba enterrada en la suaves carnes de la pelvis rozándose suavemente con los ya mojados pelos que ahí existían, estos a pesar de ser suaves eran algo gruesos según la rubia que los tenía solo a centímetros de sus ojos, aparte de habérselos sentido con sus labios y su lengua varios de ellos se desprendieron de la suave carne de ese místico monte y ahora estaban pegados a su paladar, y ella mientras seguía succionando juntaba saliva en su boquita para con esto lograr despegarlos y así ir tragándoselos todos, sumándose a esto que obligadamente también la olía entera y también le gustaba ese intenso aroma a hembra en estado de celo que expelía esa enigmática zona.
Por su parte Cielo Riveros estaba en el séptimo cielo, desde que había sentido la fresca boca de Claudia posarse en la parte más intima de su persona obligadamente se tuvo que agarrar con sus dos manitas a los bordes de la cama empuñándolos y casi quebrándose las uñas debido a las fuerzas con que apretaba sus manos, por cada lamida o succión que le aplicaba en la concha su bisexual amiga una serie de ricos y electrizantes corrientasos de placer que nacían desde el interior de su vagina la recorrían entera, y ella intentaba levantar su cabecita para mirar lo que hacía Claudia allá al otro lado de su cuerpo pero la fuerza de gravedad se lo impedía ya que solo eran un par de segundos lo que la podía mantener levantada en donde solo lograba ver que por entre medio de sus dos chichotas los rubios cabellos de su amiga se movían circularmente al medio de sus muslos abiertos, luego de eso simplemente se dejaba caer con sus ojos cerrados y girando su rostro para ambos lados, esto lo hacía según como fuese la lamida que le dieran, a la misma vez que sacaba su lengüita y la paseaba deliciosamente por todo el contorno de sus labios al mismo compas en que sentía que se paseaba la lengua de la rubia por su sagrada intimidad vaginal.
La Claudia ni tonta ni perezosa sin dejar de chuparle la zorra a su amiga como pudo se fue desnudando, primero fueron sus zapatos los cuales se los retiró cada uno con la punta de sus pies, luego fueron sus jeans que ayudada por sus manos se los fue bajando de a poco para que seguidamente con la complicidad de sus bellas piernas terminara por retirárselos por completo, sus blancos calzoncitos salieron enrollados en ellos, y finalmente su blusa y su sujetador.
Así fue como ambas atractivas colegialas ya se encontraban totalmente encueradas y listas física y mentalmente para comenzar a darse, Cielo Riveros meneaba su cintura al mismo ritmo en que la rubia se la comía, y a Claudia le encantaba mantener su manita en la pelvis de su amiga sintiendo a ciencia cierta aquellos exquisitos meneos ondulatorios en que Eve le refregaba la zorra en su propia boca.
En la mente de la joven libertina estaba la grandiosa idea de hacer acabar a su tímida amiga con su propia lengua ya que por cada succión o lamida que ella le practicaba sentía como la nena se estremecía, ya eran numerosas las descargas de jugos vaginales que su compañera de colegio le había soltado desde su panocha y la muy guarrilla se los fue bebiendo todos, así que otra vez estando bien agarrada con sus brazos (los de Claudia) rodeando sus muslos (los de Cielo Riveros ) decidió acelerar sus movimientos lingüísticos ya que la quería ver retorcerse de calentura cuando llegara el momento de la explosión hormonal que se avecinaba en el cuerpo de su amiga que cada vez jadeaba más fuerte y sus gemidos eran más que escandalosos aun, hasta que estando en tan ardiente tarea sintió como a Cielo Riveros se le comenzaban a tensar los músculos de las piernas, estos se estiraron a tal grado que los deditos de sus pies se doblaban y se abrían una y otra vez como si la chica se estuviera acalambrando, y la rubia era testigo de todo aquello hasta que cuando la nena comenzó a arquear su espalda a la misma vez que fue levantando su pelvis con la boca de Claudia chupando y lamiendo sin separarse ni siquiera un centímetro, fue el fuerte grito de placer quien confirmaba que Cielo Riveros otra vez se estaba viniendo como una endemoniada.
Momentos antes y por su parte la nena sentía toda la concentración de energías que se le estaban acumulando en la parte más sensible de su cuerpo, sentía como su amiga estando bien ubicada justo entre medio de sus piernas se daba a comerle la panocha como si tuviera hambre, a la misma vez que se daba a abrirle los labios vaginales en cada ocasión que se separaba para tomar aire, cada lengüetazo que le aplicaba Claudia le hacían estremecer de placer, le sentía su lengua tibia y súper excitante, su amiga la movía de un lado a otro mientras le chupaba y chupaba su bien mojada almeja. Después sintió que Claudia con sus labios sujetó suavemente su pequeño botoncito mientras pasaba la punta de su lengua sobre él, y la nena cada vez se calentaba más y más, y no paraba de gemir como si la estuviesen torturando, no quería que Claudia parará de lamer, y así era, la rubia estudiante lamía y lamía la vagina de Cielo Riveros cada vez con más frenesí moviendo su lengua más rápido, sintiendo lo húmedo y cálido que era el interior de aquella apetecible hendidura que se estaba comiendo.
La candente situación que se vivía en la juvenil y rosada habitación de Claudia que era muy parecida a las casitas de Barby, estaba llegando a niveles de calentura casi abominables y que llevaron a nuestra nena a que irremediablemente sintiera ese exquisito y animal llamado de la naturaleza, por lo que comenzó a arquearse con espalda y todo ya dispuesta a liberar esa energía concentrada en lo más recóndito de su panocha y que urgía por expandirse, hasta que cuando ya no dio más de calentura y estando arqueada al máximo con sus piernotas bien abiertas y apoyadas en la cama; con su panocha bien levantada y meneándola sobre la boca de la rubia aceleradamente sencillamente explotó y comenzó a correrse y a mearse en otro intenso y brutal orgasmo, a la misma vez que soltando los bordes de la cama ni se la pensó para sujetar con fuerzas la cabeza de Claudia empujándola firmemente hacia su vagina mientras se corría una y otra vez sintiendo como la rubia le chupaba y succionaba los líquidos que ella soltaba en fuertes chorros y que se venían una y otra vez por cada tensión de muscular en la que se estaba viendo deleitosamente asaltada.
--Ohhhhhhhhhh…!!!!!!!! Ahhhhhhhhhhhhh…!!!!!!! Clauuuuuuuu…!!!!!!!! Me corrooooooooooo…!!!!!!! –Entre sus gritos y toda tensionada Cielo Riveros no dejaba de mirar a la rubia con sus cejitas para arriba, y con una expresión de placer que ni se las cuento, solo se daba a comprobar de cómo su amiga le bebía todos los líquidos vaginales que ella destilaba en calientes y fuertes chorros, mientras seguía bufando: --Ayyyyyyyy….!!!!! Ricooooooooooo…!!!! Mffffffffsssssssss…!!!! Clauuuuuuu…!!!! Me la chupas tan biennnn…!!!!! Ricoooooo…!!! Ricoooo…!! Ricoo…! Ric ri…, -a la misma medida que los electrizantes escalofríos iban menguando el cálido aliento de placer de nuestra nena también iba disminuyendo hasta que una vez que hubo aflojado todos los músculos y tensores de su cuerpo, sobre todo los de su cuello que los tubo tensionados todo el momento del lujurioso clímax en donde miraba a la rubia, simplemente quedó tirada a patas abiertas mientras la desnuda Claudia le limpiaba con mucha meticulosidad hasta las últimas gotas de flujos vaginales que le habían salido a veces blanquecinos como también amarillentos según hubo observado la misma Claudia en el momento del orgasmo, la rubia estaba con toda su cara mojada y por su barbilla aun caían gotas del intimo almíbar femenino que le habían dado a probar.
Cielo Riveros se había quedado exhausta después de la exquisita corrida que se había mandado gracias a su amiga, pero esta ultima y después de haber ingerido todo lo que su compañera le soltó, aun tenía muchas ganas de continuar, la rubia sabía sin duda alguna que tenían toda la noche para seguir disfrutando, así que dándole algo de tiempo para que la nena se pudiera recuperar se tomó sus rubios cabellos con una traba pequeñita quedando con toda su cara despejada y a posterior se entretuvo mirándole la vagina bien de cerca, lo hizo por un espacio de tres minutos por lo menos hasta que determinando que no podía permitirse que a Cielo Riveros se le pasara la calentura así como así lentamente comenzó a trepar por la cama para posarse ahora totalmente desnuda muy apegada al cuerpo de la colegiala aplastando sus doradas y cónicas tetas con las de su ardiente amiga que eran mucho más grandes y redondas que las de ella, comenzando Claudia otra vez a lamerle el cuello y sobarle con brusquedad su par de chichotas.
La fresa estudiante le lamía el cuello, la cara, su nariz, la oreja, para nuevamente comenzar ambas a besarse en los labios con apasionante intensidad, la rubia se daba cuenta que su amiga también estaba dispuesta a nuevamente ir a la guerra, ya que su lengüita sincronizaba a la perfección con la de ella.
Estando el par de chamacas, siempre besándose en los labios, puestas de costado en la cama y frente a frente ambas dos sintieron que sus vaginas ya se rozaban por lo que en forma instintiva fueron empujando sus caderas para hacer que sus femeninas hendiduras comenzaran abiertamente a rasparse, a los pocos minutos de esto y en la misma posición antes mencionada el par de hembritas se meneaban arremetiendo una contra la otra, todo esto entre húmedos besuqueos y expresiones de calentura en sus rostros que eran para el recuerdo, pero esta vez fue Cielo Riveros quien queriendo ser ella también quien gozara del áureo cuerpo de Claudia con movimientos muy femeninos y delicados siempre meneándose con sus caderas hizo que se dieran vuelta en la cama para ahora ser ella quien montaba el cuerpo de la rubia.
Claudia por su parte y por arte reflejo abrió sus bellos muslos tal cual como si fuese a ser penetrada por una verga con la diferencia que ahora era la panocha de su amiga la que se acomodaba sobre la suya, y en el momento en que los negros pendejitos de Cielo Riveros se juntaron y enredaron con los dorados pelitos de Claudia, la salida y anteriormente tímida nena comenzó a moverse tal cual como si ella le estuviera metiendo algo a su amiga, esta ultima solo se dio a cerrar sus ojos y a empezar a mover sus caderas buscando la perfecta sincronización con los movimientos que hacía su compañerita de colegio, a la misma vez que se daba a agarrarle y apretarle sus chichotas lamiéndoselas y chupándoselas.
O sea, y aunque cueste creer ahora era nuestra dulce Cielo Riveros quien abiertamente se estaba culeando a Claudia, los golpeteos que hacía el respaldo de la cama de la rubia contra el muro así lo demostraban, eran acelerados y fuertes Toc…!!! Toc…!!! Toc!!! Toc!!!, que se oían producto de los firmes empujones que le mandaba la chamaca a su amiga y que se mezclaban con ardientes gemidos de hembras en celo.
Ambos cuerpos brillaban por la sudoración corporal, de a momentos era la rubia quien se montaba sobre el cuerpo de Cielo Riveros para ella estar dándole con el mismo tratamiento antes descrito. Hicieron también un exquisito 69 en donde se estuvieron chupando la concha por espacio de unos 40 minutos por lo menos y cuando después de eso estaban ambas cruzadas de piernas y con sus panochas bien pegadas una a la otra moviéndolas y refregándoselas ondulatoriamente tal cual como lo habían hecho en la noche en que fueron obligadas por los vejetes fue Claudia la que se puso a condimentar aun mas aquella hermosa tijera femenina que se estaban mandando:
--E… Esto… esto es g… ge… genial E… Ev… Eveee…!!, nunca pensé que lo volveríamos a hacer tan r… ri… ricoooo… te g… gus… gustaaaa…!!!???, -le consultaba la rubia guarrilla a su amiga mientras le movía su conchita estando con una de sus piernas cruzadas por debajo de un muslo de Cielo Riveros , que lo tenía completamente abierto y doblado sobre la cama, y aferrándose con sus dos brazos al otro muslo de la nena, este otro Cielo Riveros lo tenía levantado verticalmente y con sus pantorrilla descansando el suave hombro de Claudia.
La nena escuchaba la consulta de la rubia estando de espaldas en la cama con sus dos brazos extendidos hacia los lados como si estuviese crucificada a esta, sus chichotas de movían circularmente y en forma deleitosa productos de los movimientos de ambos cuerpos, ya que ella también estaba dada a menear y refregar su panocha contra la de Claudia, a la misma vez que sentía en su pelvis las fuerzas en que su amiga también la friccionaba contra la de ella, en su muslo levantado sentía como su joven amiga se aferraba con mas energías en el momento que arremetía con su vagina hacia la de ella, admitiéndose para su interior que hacer cosas de chicas con la rubia ahora también le encantaba. Así que ya sin duda alguna le dio su respuesta:
--Siiiiiii…! Ahhhhh…!! Me encanta Clauuuuu…!!! Me encanta hacer cosas de chicas contigo…!!! Ohhh…!!! Que r… ricoooo…!!! Que ricoooo… que se siente estooooo…!!!, -le admitió meneándole su zorrita y con sus ojitos semi cerrados, siempre mirándola desde su posición con su blanca carita adornada con tonalidades rosadas, era lógico comprender que en aquellos momentos la calentura le brotaba hasta por los poros a nuestra tremenda chamaca de ojos verdes.
Pero no era solo eso lo que deseaba saber la rubia, aparte de querer hacer más rico aun el refriegue que se estaba mandando con su mejor amiga:
--Ahhhh Eveeee…!! Quisiera saber…!!! Mmmmm…!!! Quisiera saber… cual de todas las vergas que ya te has comido fue la que te gusto mas…!!??, -le consultó la Clau a Cielo Riveros , como si entre ellas ya no existiera ningún tema tabú. Y así era según la respuesta de la lujuriosa chamaca.
--De todas las que me he comidoooo…!?, -le preguntaba ahora Cielo Riveros con la misma expresión en su rostro antes descrito.
--Si amiga…!!! De todas las que te has comidoooo…!!!!, -el estomago de la rubia se revolvía nerviosa y exquisitamente al notar ella que su amiga estaba dispuesta a iniciar otra conversación llena de guarrerías al mismo tiempo en que se frotaban sus tajitos, por lo que se dio a refregar el suyo con mas frenesí todavía, ya que así lograría mejores respuestas se decía la muy aprovechadora. En tanto Cielo Riveros ya comenzaba a sacarla de su morbosa incertidumbre:
--Me han gustado t… to… tod… todassssss…!!!
Semejante respuesta descolocó a la rubia a tal grado que ya estaba que se ponía a vomitar de calentura, como era eso que a la muy putinga de su santurrona amiga le gustaban todas las vergas que le habían metido?, pensaba en que fue la misma Cielo Riveros quien momentos antes le había asegurado que todas las culeadas que le pegaron los 7 de la fama, estas se sucedieron forzadamente y ahora ella muy suelta de cuerpo le contestaba que le gustaban todas aquellas vergas.
--Todassss…!!!??? Me dices que todassss…!!!???, -la rubia ahora se meneaba mas frenéticamente haciendo con esto que acuosos sonidos que provenían de sus afiebradas panochas se escucharan escandalosamente en toda la habitación.
--Siiii Clauuuu…!!! t… to… todasssss…!!!! Me han gustado todassssss…!!! Ohhhhh…!!! Ohhhhh…!!! -Ahora era la nena quien también le colaboraba a la rubia meneando su vagina a la misma velocidad en que se la movía la rubia, sus ojos estaban fuertemente cerrados en clara señal del empeño que le ponía la colegiala a la causa. Ambas panochas ya casi ni se separaban, solo se comprimían circularmente, y al momento en que lo hacían era una gran cantidad de jugos que manaban y escurrían por las dos entrepiernas, haciendo escandalosos y acuosos sonidos.
--Oh de verdad que te creo amiga…!!! Pero a estas alturas ya debes tener tus favoritas… vamos cuales son las vergas que más te han gustado, quiero saber el nombre de sus dueños???, -Claudia se movía y se acomodaba en aquella impresionante posición tijeresca sin dejar de preguntarle guarrerías a su amiga del alma, la excitación ya casi la superaba.
--Mmmmm…!!! Han sido todas muy ricassss…!!! P… pe… peroooo…,
--Pero queeee!!!??, -la rubia sentía que un avasallador orgasmo ya se le venía a raudales, le calentaba hasta la locura estar haciendo cosas de chicas con Cielo Riveros , pero esa calentura se multiplicaba por cien con el solo hecho de nuevamente estar sonsacándole intimas zorrerías a la mas calladita de sus amigas.
--Pero c… creo… creo…, creo que son dosssss…!!!, -la colegiala dio se respuesta con sus ojitos cerrados y refrescándose sus labios con su lengüita, para luego seguir confirmando: --Si, son dos las que más me gustannnn…!!!!
--Dos…!!??? Y cuáles son esas dossss!!!???, -Claudia también cerraba sus ojos fuertemente intentando aguantar no correrse ya que la conversación otra vez ya estaba más que salida.
Cielo Riveros tras concentrarse y volver a pasar su lengüita por todo el contorno de sus labios le dio su veredicto a la enloquecida rubia, siempre meneándole rápidamente su pelvis, sobre todo cuando sentía que la rubia le recargaba la de ella sobre esta misma:
--La de don P… Pe… Pedro…!!!, y la de don S…Se… verianooooo…!!!!, -le confirmó finalmente…
Claudia no se la quería creer, pensaba que ella no había estado muy lejos de pensar que su amiga mantenía algún tipo de relación con el repulsivo mecánico que trabajaba en la feria, pero eso de que ella también se acostaba con su casi suegro y que mas encima este era poseedor de una de sus vergas favoritas la tenia al borde del desmayo, aparte de estar respirando por la boca al tener sus fosas nasales tapadas debido a que su acelerada respiración estaba muy por encima de sus necesidades corporales, no obstante a esto la hiperventilada y a la vez ardiente rubia continuaba con sus guarrerías:
--Ahhhh… que ricoooooo amigaaa…!! Pero escoge solo unaaa…!!! la más rica que tu encuentresss…!!!!
Cielo Riveros intentaba escoger una, pero no podía, a ella verdaderamente le gustaban las dos vergas antes señaladas por lo que se dio a aseverar lo que estaba diciendo:
--Me gustan las dos Clauuuuu…!!! Como no lo entiendes…!!!!???? Mejor sigue moviendoteeee…!!!!, --Tu siempre quieres saberlo todoooo!!!!-, le contesto en una forma fastidiosamente caliente, ahora la nena zarandeaba sus curvas más desquiciantemente, su cuerpo estaba bañado en sudor, ella también sentía que las convulsiones de placer ya amenazaban por posesionarse de su sistema tanto neuronal como hormonal.
--Ok… Ok… mi Eveeee…!!!!, -la rubia conformándose a medias ya casi estaba entregada al eminente orgasmo que ya casi la hacían explotar, aun así escuchó que su amiga de la infancia no estaba dando por terminada la conversación, su amiga la quería matar de calentura pensaba la rubia.
--Ademasss…!!!
--Ademassss queeee…!!!!!?????, -bufó la rubia antes de sucumbir a la lujuria…
--El cojo Juannnnn…!!!!, -le musitó su tímida amiga ahora con sus dos manitas empuñadas en sus labios debido a lo que estaba a punto de confidenciarle a Claudia,
--Que pasa con ese cojo asquerosoooo…!?
--Él… es el que mejor me lo ha hecho por detrasssss…!!!! Ahhhhhh…!!!! ya no doy más Clauuuuuu…! Creo que me iré cortadaaaaa…!!!!!, -la nena ya comenzaba a levantar su cintura de la cama unos buenos centímetros siempre refregándosela contra la rubia concha de Claudia.
--Noooooooo…!!! No, te vayas aun… Dimeee…!!! te ha gustado que el cojo de mierda ese te diera por el culooooo…!!!!!, -la caliente fresa se aferraba con energías al muslo de Cielo Riveros , encargándose de que ambas vaginas se mantuvieran comprimidas al máximo, las dos chicas sentías el huesito de la pelvis de la otra ante tan delirante refriegue, aun así se seguían meneando firme no temiendo a pelárselas. En tanto Cielo Riveros le reafirmaba a Claudia con crudas palabras y de la forma más explícitamente posible otra de sus más secretas intimidades:
--Siiiiiiiiiiiiiiii…!!! de verdad…!!! Es el mejor que me lo ha hecho por el c…cu…looooo…!!!!, fue tan brutoooo…!!! Tan animalllll…!!!! Y es tan feoooooo y asquerosoooo…!!!!, me encanta que haya sido el primero en pegarme al mismo tiempo que me lo rompioooooo…!!!!, -nuestra nena ahora sí que estaba desatada, y era cierto, aunque casi todos esos viejos asquerosos con los que ella había cogido se la habían enculado y le habían pegado, ella no podía dejar de sentir cierta sensación corporal por la verga del cojo, y por esa bestialidad con la que se la había embutido por el culo por una tarde entera mientras estaban encerrados en su cuartucho ubicado en el sótano del colegio, aquello había estado en lo más secreto de su mente, y ahora también se lo confidenciaba a su amiga con la que se estaba revolcando desnuda y en una cama tal cual como se revolcaba con los demás vejetes.
Esto último ya fue mucho para la caliente Claudia que ya estaba en un excitante estado de delirio sexual, sus rosados labios vaginales se separaron solo milímetros de los de Cielo Riveros y en forma misteriosa empezaron tiritar y a cerrase y abrirse levemente hasta que cuando la rubia ya no dio más y soltó de estos un fuerte lluvia jugos vaginales con los que bañó la vagina de su amiga, en su imaginación estaban las nítidas imágenes de ver al cojo Juan pegándole a su amiga para después verlo enculandola brutalmente:
--Ay… Eveeee…!!!! Ay mi Eveeee…!!!! me corrrooooooo…!!!! Creo que me corrrooooooo…!!!!! Ahhhhhhyyyyyyyy…!!!!! –fue el grito que mandó en el momento que soltó el primer chorro, --Me mandaste cortada con tus puterías amigaaaaaa…!!!! Ahhhhh…!!!! Ufffffff…!!!! Mmmmmm…!!!!!, -gemía la rubia a la misma vez que habría sus compuertas de líquidos femeninos con los que bañaba la panocha de su amiga y parte de su vientre, esos exquisitos chorros de líquidos salían expulsados en forma de abanico, tal cual como si estuviera apagando el fuego que existiera en la concha de Cielo Riveros .
En tanto la mente de nuestra retraída colegiala también sucumbió ante tanta guarrería desatada:
--Ay si…!! Siiiiiiiiiiiii…!!! Siiiiiiiiiiii…!!! Yo también Clauuuuu…!!!! Yo también me voy cortada junta contigooooo…!!!!!
En el momento de la explosión orgásmica y de jugos de todo tipo ambas chamacas enderezaron sus cuerpos para quedar sentadas en la cama pero siempre son sus piernotas cruzadas y moviéndose como endemoniadas, las dos se abrazaban fuertemente desde las suavidades de sus nalgas atrayéndose una contra la otra, mientras eran asaltadas por placenteros calambres que las hacían retorcerse enteras los cuales nacían de los dos bañados coños que se negaban a separar y dejar de chuparse entre sí, y todo esto ante la banda sonora del popurrí de guarrerías que se gritaban una a la otra.
--Corrámonos juntas entonces amigaaa…!!!!! Guaaaaa…!!!!! me viene otro Eveeeee…!!!! me viene otrooooooo…!!!!! Siento que se me deshace la zorraaaaa…!!!!! –aullaba la rubia estudiante mientras continuaba yéndose cortada, --Ahí le voyyyyy… Ahhhhhhh…!!!!! Ohhhhh…!!!!! Ricaaaaa mi Eveeeeee……!!!!! me fuiiiiiii…!!!!! me fuiiiiiiiiiiiiii otra vez…!!!!! Ahhhhhh…!!!! Diossss…!!!! Diosssssss…!!!
En tanto la calladita Cielo Riveros tampoco se quedaba atrás con su propio arsenal de lujuriosidades:
--Ahhhhhh…!!!!Ohhhhh…!!!! Mfffssssssssss…!!!! Eso Clauuuu…!!!! Dame tus caldosss…!!!! Meáme enteraaaaa si así lo quieressss…!!!! Báñame con tus meados calientessssss…!!!!! Ohhhhhh… Clauuuuuu…!!!! Ahí te van los míos Clauuuuuu… Tomaaaaa…!!!!! Tomaaaaaaaaaaaa!!!!!, -le gritaba empujando bruscamente su vagina haciéndola impactar con la de Claudia, mientras sentía que esta se derretía y se aleaba con las tibias carnes de su amiga y ante los fluidos calientes que ella también iba soltando mientras ambas se corrían.
Con sus resbalosos torsos bien pegados uno al otro y con las cuatros chichotas resbalándose entre ellas buscando acomodamiento las sabrosas y lujuriosas nenas no dejaron de moverse, besarse y correrse solo dadas a sentir las oleadas de escalofríos en que se vieron asaltadas.
Fueron muchas y largas horas en que en el solitario living de la casa de Claudia se escucharon notoriamente desde la habitación de la hija del matrimonio de aquel hogar sonidos de jadeos de cuerpos que se rozaban, gemidos y susurros femeninos de aliento, gritos de jóvenes hembras que se corrían una y otra vez, mas los acuosos y escandalosos choques de ciertas partes corporales que estaban empapadas según se oía ya que daba la impresión que por cada vez que impactaban debía saltar agua de aquellas singulares partes, sin mencionar los largos minutos de acelerado golpeteo del respaldo de la cama de la chamaca rubia contra la pared en el transcurso de la noche y en cortos intervalos de tiempo, así lo hubiese oído cualquiera que hubiese estado sentado en uno de los sillones de la sala. Aun cuando ya estaba aclarando con los primeros resplandores de la mañana según se veía en los ventanales de la casa, desde la habitación de Claudia otra vez venía el morboso crujir de la cama, y aquel escandaloso golpeteo de esta contra el muro, obviamente se habían puesto a culear de nuevo y todo lo anterior al son de los gemidos de las dos nenas mejor cotizadas corporalmente tanto en el colegio al cual asistían y en el barrio en el cual cada una de ellas vivía.
(Al siguiente día)
Nuestra agraciada colegiala se despertó toda desnuda y adolorida en la cama de su amiga, al abrir sus ojos verdes lo primero que pudo ver fue a Claudia ya vestida, la rubia estaba de minifalda y con una blanca blusa primaveral mientras alisaba sus rubios cabellos, fue en eso que la fresa estudiante al girar su cara se percató que su tímida amiga también ya se había despertado.
--Hola Eve… que tal dormiste…!?, -le consultó dándole los últimos retoques a su cabello y mirándose de distintas posiciones al espejo.
A la chamaca con solo sentir su desnudo cuerpo pegajoso sumándole la humedad que existía en la cama rápidamente se le aclaró la mente y se le vinieron las imágenes de las largas e intensas horas de sexo lésbico que había mantenido con su amiga de la infancia durante toda la noche, por ende como un rayo tomó una de las sabanas que estaban caídas a un lado de la cama y se tapó hasta el cuello, el pudor y la vergüenza nuevamente imperaban en su tímida personalidad.
--Claudiaaaa…! Ehhhh… qué hora es?, -fue lo único que atinó a preguntar sin siquiera poder mirar a su amiga a la cara.
--Son las 12 del día…!, -le contestó la rubia de lo más relajada.
--Queeee…!? pero como es tan tarde…!?, -automáticamente la preocupada chamaca se dio a mirar el lugar en donde había quedado su ropa, sus calzoncitos rojos los vio que estaban destrozados y tirados en el suelo.
--Y que mas quieres?, -la voz de su amiga del alma nuevamente atraían su atención, --ps… yo encuentro temprano para lo hora en que nos dormimos, si no te acuerdas ya estaba claro cuando lo hicimos por última vez…, -le dijo Claudia mirándola en forma maliciosamente traviesa a la misma vez que giraba su cuerpo para quedar de frente a la cama para que a Cielo Riveros no le quedaran dudas a lo que se refería, para luego decirle… --Porque… recuerdas lo que hicimos anoche verdad?.
Cielo Riveros imperiosamente necesitaba que llegaran los ovnis y se la llevaran a la galaxia más lejana posible al estar su amiga recordándole en sus mismas narices que se habían “acostado”. Hasta que a sabiendas de no poder negar lo innegable le contestó:
--Ay Clauuu…! Si…, lo recuerdo…! Pe… pero por favor ya no le empieces si…!? Que me da pena…!!, además que eso no volverá a ocurrir entre nosotras…, -le dijo la muy avergonzada nena mirando hacia cualquier parte de la habitación.
--Jijiji… si claro…!!!, -Claudia mientras le contestaba guardaba las llaves de la casa y su celular adentro de su bolso.
--De verdad…!! Yo no quería hacerloooo…!!!! Por favor créeme… lo jurooooo!!!!, -continuaba chillando la mamasota quien ahora estaba acostada de lado en la cama tapándose férreamente hasta la altura de las tetas.
La rubia que más o menos calculaba que Cielo Riveros empezaría con sus cosas también le hizo saber sus impresiones, (claro que en forma amigable):
--Como tampoco querías hacerlo con tu ramillete de enamorados, verdad Eve?, -ahora la atractiva y toda producida Claudia cerraba su bolso y miraba a Cielo Riveros un poco más seriamente.
Nuestra nena no hallaba donde meterse, recordaba muy bien las intimas revelaciones que le había hecho solo hace horas.
--Yo no te he mentido Claudia…!, -exclamó de pronto Cielo Riveros , --Ya te expliqué que en ciertas ocasiones no se qué es lo que me pasa… De verdad…!!! --Y lo de anoche… lo de anoche… eso no debió haber ocurridoooo…!!!
--Bueno… si tu lo dices… que así sea, jijiji… como Usted mande mi capitana!!, Jijijiji…!!!, -Claudia quien ya estaba en estado normal no dejaba de sorprenderse entre la gran diferencia que existía entre esa chamaquita de su misma edad que estaba ahora en la cama tapando su cuerpo en forma pudorosa, ella no tenía nada que ver con la otra poderosa y lujuriosa amazona que no se cansaba de tener orgasmos y hablar guarrerías de grueso calibre a la hora de mantener sexo con la que se había estado revolcando la noche entera, las dos eran la misma, se decía la joven rubia, pero al estar tan apurada para ir a encontrarse con su novio dejó esas cavilaciones para otro momento.
--Clauuuu… ya párale!!! y no me molestes…!!! Clau… para dónde vas tan apurada…?!, -Cielo Riveros en el intertanto de la conversación se había dado cuenta que su amiga iba saliendo.
--Ok… no me hagas caso Eve… jiji, Ahhhhh…!, claro… yo voy saliendo ahorita así que si quieres…
--Vas saliendo…? y para donde…?, -le cortó la nena en forma extrañada ya que ella aun estaba desnuda y en la cama de su amiga.
--Voy a juntarme con mi novio, me llamó casi desesperado para invitarme a la casa de sus padres, no se… un tío esta de cumpleaños y esas cosas aburridas a las cuales me invita…
--Entiendo, espérame… y nos vamos juntas…, –la chamaca en el acto se sentó en la cama siempre tapando sus encantos con la sabana de Claudia.
--No amiga, ya estoy bastante retrasada, mis padres no llegan hasta la tarde así que dúchate tranquila… Ahhhh…!, se me olvidaba… en el refri hay leche y bocadillos, chao mi Eve y dale mis saludos a tu Rodrigo, jijiji…
Sin más la rubia desapareció ante la otra vez exaltada mirada de la chamaquita al recordar de sopetón que nuevamente le había fallado a su amado Rodrigo.
Nuestra nena una vez que se quedó sola se dio una larga ducha en el baño de su amiga, no entendía el porqué, pero extrañamente mientras enjabonaba su cuerpo no sentía culpa por lo recientemente ocurrido con Claudia, así que mejor se dio a pensar en que cosa le diría a su amado Rodrigo ya que nuevamente este estaría decepcionado de ella.
Pensando en mil soluciones para salir del problema con su novio la nena de pronto se vio vestida y recién bañadita bebiendo un vaso de leche en la cocina de la casa de los padres de Claudia y lista para irse para su casa, claro que por razones de fuerza mayor nuestra colegiala iba sin sus calzones, recordemos que la rubia se los destrozó en el momento que la estaba encuerando.
Al rato la nena ya iba llegando a su casa, y notaba que a pesar de ser las 1 de la tarde en aquel día domingo no hacía calor, ya que al ir caminando por la vereda experimentaba como un fresco aire se colaba por debajo de su vestido blanco con florecitas oreándole exquisitamente su panochita desnuda y los negros pelitos de esta. Misteriosamente, tal como se dijo anteriormente, y a pesar de haberse mandado una lujuriosa noche de sexo lésbico con su mejor amiga, la chica no sentía muchos remordimientos, además que muy para sus adentros reconocía que lo hecho con Claudia había estado muy pero muy rico, sin embargo y aunque su sensualidad le aclaraba de lo gratificante que era el haberse revolcado con Claudia aun así faltaba algo, y ese algo era sencillamente que no se la habían metido, con estos pensamientos en su cabecita la nena sin ser ella misma consiente ya se sentía falta de verga, claro que su cuerpo aun no se lo demandaba, pero era una verdadera bomba de tiempo.
Con estas intimas impresiones, algunas de ellas aun escondidas en su mente y mientras caminaba despreocupadamente desde la vereda observó que el tugurio de don Lucas estaba cerrado, por lo mismo ni señas de este y de ninguno de sus secuaces, lo mismo con la horda de marihuanos que por lo general siempre estaban parados y adornando la esquina de la calle donde vivía.
Todo esto era muy tranquilizador para la nena, y recordando que su madre le había dicho que ella no regresaría hasta las 7 de la tarde pensaba en llegar a su casa y relajarse para ponerse a pensar tranquilamente en como lo haría con Rodrigo.
Una vez que giró la llave de la puerta de su casa y hubo entrado a esta, con algo de desconcierto pudo comprobar que tal vez su mamá no había ido a la cena con sus amigas, porque estaban todas sus cosas en uno de los sillones, seguramente había preferido descansar pensó alegremente ya que así podrían compartir juntas la tarde del día domingo.
Pero fue en el momento que observó que la puerta de la habitación de su progenitora estaba abierta y que en su interior estaba toda la cama desordenada supo que algo no andaba bien ya que desde que ella tuvo uso de razón siempre la vio ordenada, su madre tenía por costumbre que siempre al levantarse no hacía nada sin antes orear la habitación y rehacer las ropas de cama en esta.
Todo fue muy rápido, pues el desconcierto, la mentira, la nerviosidad y lo prohibido invadieron la mente y el cuerpo de nuestra nuevamente afligida chamaquita debido a que en el momento en que vio el lecho de su madre y que este estaba todo desarbolado escuchó risas y una conversación que venía de adentro del baño, situación que hizo que en forma automática inspeccionara más detenidamente la alcoba en cuestión y fue cuando vio que en la silla que estaba a los pies de la cama colgaba de esta un grueso cinturón negro con cartuchera del mismo color.
El anticuado revólver oxidado y el grueso bastón de mando que estaban ahí colgados le indicaron a medias lo que estaba pasando al interior de su casa, sus ojos ya habían dado con el resto del uniforme del asqueroso y corrupto policía que estaba desperdigado en distintos puntos de la alcoba, cayendo en cuenta también que al estar las ventanas cerradas el fuerte olor a sexo lo invadía todo, y ya sin tener tiempo de reacción fue cuando se abrió la puerta de baño en donde crudamente a la nena se le borraron todas sus dudas.
Con sus bellos ojos verdes vio a su madre descalza y envuelta solo en una toalla de baño de las normales, ni siquiera era de las grandes que la taparan un poco mas pensó Cielo Riveros para sus adentros, además que era obvio que debajo de la toalla no traía nada puesto, pero lo más perturbador para nuestra alterada colegiala es que venía saliendo con su pelo mojado, sonriente y tomada de la mano del grotesco cuerpo moreno del inigualable sargento Eustaquio Sinforoso quien se encontraba todo sonriente y a torso desnudo, este estaba solo tapado desde cintura para abajo también con una mísera toalla, su pachacho cuerpo oscuro, aunque muy ancho de pecho, y con su tremenda panza peluda oscura contrastaban con el blanco y aun bien formado cuerpo de su madre.
La pobre señora Isabel casi se murió de un infarto cuando vio a su hija de 18 añitos parada en la puerta de su habitación y viéndola salir del baño casi desnuda y tomada de la mano de un hombre que no era su padre, su bella sonrisa de milf (Milf que aun está muy buena para darle) automáticamente se borró de su cara dándole paso a una marcada expresión de horror, lógicamente y en forma acertada pensó que su hija ya tenía claro que ella (la señora Isabel) y el sargento se habían acostado aprovechando que ella (Cielo Riveros ), se había ido a pasar la noche en la casa de una amiga.
--Eve…!!!! M…Mi…Mija pero que haces aquí a esta hora…!?, si se suponía que no llegarías hasta las 7 de la tardeeee…!!!!, -le consultó entrecortadamente a la misma vez que rápidamente le soltaba la mano al policía de negros y largos bigotes mexicanos.
--Llegué antes…, -fue todo lo pudo balbucear la decepcionada nena en el momento que iba bajando su vista al suelo, de reojo vio como su madre le hacía señas al sargento para que este se metiera adentro de su alcoba.
La nena no supo en qué momento su estómago se llenó de nudos de pesar, ni que mencionar los ríos de lagrimas que corrían por su carita, eran lagrimas de desilusión, ya que su madre, su propia madre era quien se bajaba por si sola del alto pilar en que ella la tenia puesta solemnemente en virtud de la rectitud y como también de la abnegación, desde este día para Cielo Riveros su madre pasaba a ser solo una mortal mas, común y corriente.
Una vez que se cerró la puerta de la habitación que había sido de sus padres en el momento en que el casi desnudo sargento de la policía se metió en su interior, la señora Isabel rápidamente le habló a su hija:
--Eve… mi Cielo Riveros … nosotras dos debemos tener una conversación, deja vestirme y te lo explicaré todo…!, -le decía la contrariada señora Isabel quien ahora se sujetaba la toalla con una mano empuñada a la altura de sus tetas para que esta no se le cayera.
--No te preocupes… lo entiendo todo…!, -la nenita junto con decirle eso se limpiaba sus lagrimas de la cara con una de sus manitas.
--No hija… debemos hablar las dos…!, -insistía la bella progenitora sin saber que mierda hacer ante tan comprometedora situación en que la había sorprendido su hija.
--No mamá… yo ya no quiero hablar contigo… Sniffsss…!! Me… me… mentisteeee!!!, -le dijo la bien portada hija quien dio media vuelta para dirigirse a su habitación.
--Hijaaaa…!, por favor hablemos…!!! Perdóname… debí habértelo dicho… y lo iba a hacerrrrr…!!!, -intentaba explicarle Isabel a su atractiva hija.
--Noooo…! No quiero escucharloooo…!! Snifsssss…!! por ahora lo único que quiero es estar sola… Sniffsss…!!!!, -la angustiada y muy sentida nena ya se dirigía para su habitación.
--Eve… para donde vasss…?, por favor perdonameee…!!!!
Naturalmente la colegiala se iba retirando a su habitación tal como lo dije antes, pero en estas situaciones aunque la parte que cometió la falta, en este caso la madre de Cielo Riveros , vea lo lógico de lo que sucede igual se dedican solo a preguntar puras webadas sin sentido.
--Dime… para dónde vas mijaaa…???!!!, -seguía bufando la buenota de la madre de Cielo Riveros hasta que fue testigo del sonoro Plaffffff…!!!!!, que retumbó en toda la casa cuando la dolida chamaca cerró su habitación con un más que sonoro portazo.
En el intertanto de lo anterior don Eustaquio Sinforoso se vestía rápidamente y muerto de la risa en la antigua habitación marital de aquella casa.
El sinvergüenza policía se había trabajado casi un mes entero a aquella buena mujer hasta que logró acostarse con ella a base de mentiras y regalos baratos, diciéndole que él estaba pasando por un muy mal momento en su matrimonio y que su separación ya casi era un hecho inminente y mil cosas más, siendo que la verdad era muy distinta, ya que él era casado con una tremenda mujer gorda y muy mal humorada que era capaz apalearlo y de hasta cortarle la verga si se atrevía a dejarla a ella y a sus 7 hijos, pero el aprovechador viejo aprovechaba los horarios y los turnos de su trabajo que por lo general eran de noche para hacer de las suyas con cuanta musa a la cual él pudiera sacarle provecho, y ahora estaba plenamente dedicado a enviciar y envilecer el hogar de la chamaca que el mismito había sorprendido en andanzas raras con un mecánico, además que sabía que teniendo carta abierta para llegar esa casa a la hora que él lo quisiera se estaría agasajando con esas dos vulnerables y buenotas mujeres todas las veces que pudiera.
En el momento en que el gordo y moreno policía con mucho trabajo y echando la guata para adentro se estaba terminando de abrochar su grueso cinturón negro de reglamento entró a la habitación una desesperada hembra de 39 años que lo único que atinó fue a sentarse en la cama intentando tapar su cuerpo con la mísera toalla que llevaba puesta, ella sin darse cuenta puso uno de sus bien ponderados muslos blancos por encima del otro. Lo que la cubría la pequeña toalla era lo mínimo, el caliente sargento miraba fijamente a esa atractiva cara de hembra madura adornada por unas tímidas arrugas que se vislumbraban a la altura de sus ojos, y con una que otra cana en sus cabellos, el vejete estaba que se abalanzaba sobre ella para ponerle otra ferviente cacha, es que lo que más le calentaba al corrupto policía era el ser consciente de que ya a estas alturas se las había culeado a las dos, y estaba lejos de querer dejar de hacérselo a ambas, pero sabía que debía ser prudente para sacar el máximo de provecho posible a tan exquisita situación.
--Que pasó allá afuera, la chamaca se dio cuenta de algo?, -le consultó en forma aborrecida y como solapando su burlona consulta.
Pero la señora Isabel no estaba para darse cuenta de estos detalles si bien hace un rato ella estaba presta para prepararle un rico y abundante almuerzo para luego pasar la tarde juntos ahora la situación cambiaba abruptamente:
--Don Eustaquio por favor discúlpeme por lo desconsiderada que voy a ser con Usted, pero creo que lo mejor por ahora es que se vaya…
--No te preocupes mi amor, tu sabes que yo lo único que quiero es lo mejor para ti y tu hija, Jejeje…
--Lo sé… le sé don Eustaquio… y perdóneme por estar pidiéndole que se vaya…
--Tranquila mijita, ahorita mismo me estoy yendo para que me arregles esta situación… recuerda lo que hablamos anoche, en poco tiempo quiero tener llaves de la casa para venirme a quedar contigo todas las veces que yo quiera y para venir además a darme unas vueltitas cuando tu estés en el trabajo, así cuidaré a tu chamaca para que no le pase nada malo, jejejeje…
--No se preocupe don Eustaquio… yo sé de sus buenas intenciones, y sé también que una vez que se lo explique todo a mi Eve, ella también lo entenderá… --U… Us… Usted… es la perfecta imagen paternal que ella necesita.
(--Claro que lo soy, como me las voy a culear a las dos juntas Dios mío… A esa Cielo Riveros le haré un hermanito con este tremendo pedazo de yegua que tiene por madre, y a esta misma le haré unos cuantos nietecitos con la descocada potranca de su hija, que bonita familia les dejaré antes de que me jubile, jejejejje…)
Con semejantes planes para ellas el viejo uniformado inicio sus palabras de despedida:
--Bien, si es así entonces yo ya me voy, nos vemos pronto primor…, -en eso el ancho y vicioso policía por fin se retiró dando por terminada su visita a aquel hogar con un sonoro y potente portazo.
Y así fue la tarde de aquel día domingo en la casa de nuestra colegiala, con ella encerrada llorando en su habitación, y con su madre cada 10 minutos golpeando su puerta para intentar explicarle que ella con el buen sargento Sinforoso tenían una relación.
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Aquella semana comenzó muy mal para Cielo Riveros , en su soledad y tristeza no había una sola hora en que no recordara lo demencial y prohibido que sintió al momento en que vio a su madre casi desnuda y de la mano de un viejo que también se encontraba en las mismas condiciones que ella, pero lo más terrorífico para la angustiada mamasota era que el viejo con el cual su madre ahora se revolcaba también se lo había hecho a ella, situación que la hacían odiarlo más terriblemente todavía, el muy miserable no se había conformado con habérselo hecho a ella casi a la fuerza, sino que también osó a engatusar a su progenitora la cual había caído redondita, ya que recordaba clarito como la señora Isabel aquel día domingo le decía desde afuera de su habitación que la perdonara, que debían hablar de la situación, que el señor Eustaquio era un hombre muy bueno, que le había prometido que él se ocuparía de las dos juntas (… y claro que el viejo sin vergüenza deseaba ocuparse de las dos juntas), y así muchas cosas más, pero ella siempre preocupada de su orgullo y el que dirán de sus vecinos cuando estos se enteraran que su madre había metido un hombre extraño al hogar no quiso hablar con ella, hasta que la dolida señora Isabel entre sollozos se retiró a su habitación.
Y como dije antes a la colegiala le llovía sobre mojado, aparte de lo anterior Rodrigo se había negado rotundamente a hablar con ella, incluso Cielo Riveros una tarde de la semana fue a verlo a la farmacia en donde el chamaco de la forma más fría de lo que podamos imaginar simplemente le dijo que ahorita estaba ocupado, que él la llamaría cuando tuviese tiempo.
Aunque la verdad era una sola, Rodrigo después de haber aguantado una torrencial lluvia de burlas y humillaciones en el momento en que su padrastro lo vio llegar a la casa derrotado y con los ojos llorosos la noche en que su novia no se había aparecido, y en donde también le sacaba en cara la muy zorra y descarada que era la potranca que tenia por novia (esto el viejo Severiano lo hacía con una malsana y rabiosa alegría). Y después de haber superado lo doloroso que fue haberse quedado plantado en el cine, no dio más de dicha cuando al encender su teléfono luego de haberlo tenido apagado por tres días seguidos ver más de 30 llamadas perdidas de su amada Cielo Riveros .
Y para que les cuento lo que sintió cuando él al continuar con su cruzada de no contestarle el teléfono verla llegar a la farmacia vestida de colegiala y con su mochila al hombro, lógicamente la nena quería darle una explicación y hacer las paces se decía en el momento en que se encontraba ubicando unos remedios en un estante.
Ese día el chamaco sintió la sed de la venganza correr por sus venas, por un momento quiso decirle unas cuantas verdades, cosas horribles que le nacían desde lo más profundo de su alma debido a su mal herido ego de macho por culpa de una mala mujer.
Pero al verla ahí paradita y modosita al interior de la farmacia se le fue a la mismísima verga su despecho masculino, sin embargo no le haría ver que ella podía llegar y venir a arreglar las cosas así como así y nada más, su novia le debía una muy buena explicación.
Fue ahí que el sin siquiera darse la vuelta por el mesón interior de la farmacia de aquel día jueves le dijo que sería él quien le avisaría el día y la hora en que se juntaran para hablar.
El joven había decidido castigarla por lo menos otra semana entera, además ahora ya más tranquilo pensaba que si Cielo Riveros le tenía el celular lleno de llamadas y que mas encima llegaba a la necesidad de ir a buscarlo ella misma a su trabajo era porque realmente algo le había sucedido y que por eso no se presentó en el lugar y a la hora que habían acordado, sí, eso era lo más seguro de lo que le había podido ocurrir a su novia se aseguraba para el mismo el pobre chamaco.
Así pues amigos míos, así de traicionero y confuso es el amor verdadero, pero sigamos.
Y así iban pasando los días para nuestra inigualable mamasota, con todo lo sucedido anteriormente su alterado estado sicológico se negaba a serenarse, y hubo otro hecho que terminó por ya descolocarla, ya que a mediados de esa misma semana y estando en el colegio la nena intentó en varias oportunidades hablar con Claudia, sabía que podía contar en ella para confiarle sus últimas aflicciones, pero la rubia cada vez que tenían un momento para ellas se ponía a wazzapear con sus amistades y muerta de la risa.
--Claudia por favor ponme atención necesito que hablemos…, -ambas chamacas estaban en hora libre y en un solitario banco que estaba ubicado en un rincón del patio del colegio.
--Jijiji… Ahhh…!, si espera… déjame mandarle un último mensaje…, -la rubia movía rápidamente sus dedos en el teclado del celular, siempre sonriente y también mordiéndose el labio inferior mientras escribía.
--Y con quien te envías tantos mensajes?, -quiso saber la chamaca .
--Ahhh… es con un chico nuevo que conocí…
--Y de donde es?
--Tu no lo conoces, así que ya no preguntes mas… y mejor dime eso que quieres hablar conmigo…
--Resulta que la semana pasada cuando iba llegando a mi casa…
--Ahí está de nuevo…jiji discúlpame Eve es que es muy insistente…, -le interrumpió otra vez Claudia sin dejar que la nena se explayara en sus pesares.
--Clau…!, así no podremos hablar… que tal si a la salida del colegio vamos al centro comercial para que hablemos tranquilas mientras nos servimos helados…, -le propuso Cielo Riveros , ya que sabía que Claudia dependía impulsivamente de su teléfono.
--Ay no Eve, hoy no puedo…!, resulta que me vienen a buscar porque me invitaron a una parte…
--Pero adonde te invitaron…?
--Hay no amiga, es secreto, además que tu nunca te has interesado para donde yo voy cuando me invitan…
--Bueno tienes razón, entonces cuando podremos hablar?
--A lo mejor el finde… este chico quiere salir conmigo también el viernes, y el sábado lo tengo reservado con mi novio, jijiji…
--Pero Clau recuerda que el próximo lunes empiezan los exámenes finales… debes estudiar…
--Ay no amiga eso no es para mí, ya te dije que yo me las arreglo con los resultados…
--Entonces hablamos la próxima semana?
--Claro que si amiga…! Ehhhh… Eve cúbreme en la ultima hora de clases… ya que me arrancaré del colegio, este chico está desesperado por salir conmigo, jijiji…
--Descuida Claudia tu sabes que siempre lo he hecho…, -le respondió la nena algo decepcionada al darse cuenta que a su rubia amiga por ahora le interesaba más hacer de las suyas con este nuevo chavo que hablar con ella.
--Ay… esa es mi Eve…!, -la rubia junto con exclamarle lo anterior le estampó un efusivo beso en la frente, para luego decirle, --Ahhhh… y no olvides que tenemos pendiente el viaje a la playa, lo pasaremos del uno amiga, nos comeremos a todos los chicos que queramos, jijiji…
--Clauuuu…! No hables así…!
--Ahhh… si, si descuida… les haremos el amor entonces…jijiji…
Cielo Riveros no pudo evitar reírse con las ocurrencias de su salida amiga, desde el banco del patio la vio alejarse siempre sonriente y wazapeando con el famoso chico que había conocido ahora, seguramente se estaban poniendo de acuerdo para algo.
Un no sé qué hiso quedar curiosa a la portentosa chamaca, ella conocía a su amiga y Claudia por muy mala fama que tuviera en el colegio no era de escaparse con chicos antes de la hora reglamentaria, si lo hacía para irse al Mall con sus amigas para ver ropa y esas cosas, pero estaba segura que esta era la primera vez que lo haría para escaparse con un chavo.
Así que apenas se percató que la rubia no llegó a su última clase pidió permiso para ir al baño. Cielo Riveros corrió rápidamente por el pasillo del segundo piso del pabellón escolar, sabía que desde uno de sus extremos se podía ver la puerta chica que era por donde se daban las deserciones, y justo cuando llegó a ese extremo la vio parada con su mochila, la rubia no se percataba que Cielo Riveros la estaba espiando desde el segundo piso, solo estaba preocupada de mirar en toda direcciones, seguramente oteaba el vehículo en el cual la pasarían a buscar.
La colegiala por su parte desde su puesto de observación en las alturas también esperaba con mas curiosidad que antes la inminente llegada del nuevo chico de Claudia, hasta que con expectación vio que desde la esquina más arriba de donde estaba la rubia estudiante se venía acercando lentamente el cacharriento automóvil nada más ni nada menos que de don Pedro.
Un extraño nerviosismo invadió el escultural cuerpo de nuestra Evelyncita que por más que abría sus hermosos ojos verdes mas no lo creía, hasta que cuando ella misma fue testigo de cómo don Pedro se bajaba del vehículo para saludar a la rubia con un efusivo beso en la boca, y para luego de ver hacerla subir a su carro simplemente se la llevó en dirección desconocida y quizás para donde.
Cielo Riveros mientras veía el carro de don Pedro desaparecer se sentía en un extraño estado tanto síquico como físico y muy difícil de definir, su carita mientras había ido mirando la escena estaba inexpresiva y con sus mandíbulas muy tensas y apretadas, ni ella misma se daba cuenta como sus puños se iban cerrando fuertemente a ambos lados de su cuerpo.
Su mente no acostumbrada a pensar mal de las personas ahora si le decía lo contrario, ya que se preguntaba el porqué Claudia no quiso decirle con quien se iba a juntar para salir, ahora ya no le extrañaba tanto que don Pedro en los últimos días a parte de ciertos mensajes no la había llamado para citarla ni para molestarla, estaba claro se dijo de pronto para ella misma, esos dos se acababan de juntar para irse a culear pensó guarramente y con la ira de los celos en cada uno de sus poros.
Nuestra nena ni ella misma sabía que estaba celosa de su mejor amiga, por lo que caminando como un verdadero zombi por los pasillos del plantel escolar fue a retirar su mochila del salón y pidió permiso para retirarse a su domicilio aduciendo sentirse indispuesta.
Ya era la tarde del día viernes y había sido una semana para los mil demonios para la mamasota. Aun estaba dolida con Claudia ya que la muy putilla al siguiente día de lo sucedido anteriormente le había dicho que no se pudo juntar con el chico ese del cual le había hablado porque este no se apareció y que finalmente se tuvo que ir muy aburrida para su casa.
Con su mente totalmente atormentada por todos estos pensamientos impuros la nena con miles de mariposas revoloteando furiosamente en su estomago, y que no eran precisamente de amor al prójimo, se decía que esos dos aun se debían estar juntando para ir a revolcarse ya que en los dos días posteriores por cada vez que llamaba al celu de su rubia amiga este estaba apagado y cuando la llamaba a la casa le decían que había salido con sus amigas, y con don Pedro brillando por su ausencia, hasta que finalmente y ya queriendo pensar en otra cosa se decía en forma enrabiada:
--Bueno si ellos querían seguir acostándose… allá ellos…
Por otro lado, y que era más importante que lo otro (según ella) se consolaba que si Rodrigo le dijo que él sería quien le avisaría el día en que hablarían de su situación eso así sería, solo esperaba que ahora sí que nadie ni nada se interpusiera entre ellos.
Y fue como si los designios del destino estuviesen a su favor ya que en esos mismos momentos en que ella estando ya un poco mas recuperada de sus pesares, y al estar casi terminando de hacer sus deberes escolares para luego ponerse a estudiar unas materias sintió que alguien tocaba insistentemente la puerta de su casa.
No eran golpes fuertes ni brutos, pero si eran constantes y se notaba que la persona quien tocaba debía estar apurada, para su sorpresa y en el momento en que se levantó de su escritorio para ir a ver quien llamaba tan insistentemente vio que al otro lado del umbral de la puerta era la mismita señora María (la madre de Rodrigo) en persona quien había estado tocando tan apremiantemente.
--Señora María…! que gusto…! Pase…! pase…! le sirvo un refresco?, -la nena se puso muy nerviosa, esta era la primera vez que su suegra iba para su casa y quería que ella se llevara una muy buena impresión.
--No mija… no te preocupes… estas solita?, -la señora ya estaba al interior de la sala en la casa de Cielo Riveros .
--Si, mi mamá no llega hasta mañana, Usted sabe que ella trabaja en el hospital público verdad?
--Si, si lo sé…, -le contestaba nerviosamente la vieja mirando en todas direcciones de la casa.
--Y a que se debe su visita?, -quería saber la chamaca, --No me va a decir que a Rodrigo le ocurrió algo malo… Ohhh Dios que horror…!
--No mija…! Rodrigo está bien… es solo que te venía a buscar para que fueras a la casa…, -le dijo finalmente y mirándola a la cara.
--A su casa?, -ahora sí que la nena no entendía nada, si Rodrigo quería verla bastaba con que él fuera para su casa, o llamarla sencillamente.
--Si mija, a mi casa…?, -volvió a afirmar la buena señora.
--Es que no entiendo… si con Rodrigo quedamos en que el me ub…
--El quiere cenar contigo… y me envió a buscarte…!, -le interrumpió su casi suegra.
--Ahhh ya veo, pero es que me tomó por sorpresa, ahorita mismo tenía pensado ponerme a estudiar…
--Por favor Cielo Riveros …!, -seguía insistiendo la doña, --Ven a cenar con nosotros mija…, si de verdad quieres a Rodrigo por favor vámonos lo más pronto posible, como te digo él quiere cenar contigo esta noche…
--Bien… si es así creo que me podré hacer un tiempo…, -la nena pensó que por haber dejado tantas veces plantado a su novio este estaba tomando medidas precautorias para no quedar traumado nuevamente, así que le contestó finalmente: --Pero me tendrá que esperar un ratito.
--Gracias… confío en ti mija…
--No se preocupe, ahorita me doy una ducha, me cambio y nos vamos para su casa…
La nena no daba más de gozo, su Rodrigo extrañamente había enviado a su madre a buscarla para cenar, la más seguro que esa era la forma en que ambos retomarían su noviazgo.
La colegiala tras bañarse rápidamente se vistió con una exquisita falda blanca, sus pantaletas y sujetador también eran albos como la nieve.
El ocaso de la tarde se mostraba algo caluroso por lo que se decidió solo por una ajustada polera blanca con tirantes en sus hombros, para finalmente calzarse unos pequeñitos zapatitos del mismo color y con el taco un poco altos, estos le calzaban perfectamente.
Una vez listas, suegra y nuera se pusieron en camino a la casa de la primera en donde Cielo Riveros se mostró muy conversadora, y en donde la vieja solo le contestaba casi con monosílabos:
--Y Rodrigo nos está esperando…?, -la chamaca iba tan emocionada que casi ni se acordaba de las traiciones de su madre, de Claudia y de don Pedro.
--Claro…!
--Uy que emocionante… Usted sabía que tuvimos un pequeño problema el fin de semana pasado verdad?
--Algo me dijo mija…
--Pero no le dijo los detalles…?
--No… no me los dijo…
--Oiga y su esposo va a estar en la casa…?
--No lo sé…
En eso ya iban llegando a la casa de Rodrigo, y fue en esa instancia en que la nena recién se dio cuenta que la señora María aparte de contestarle en forma muy fría tenía también los ojos muy hinchados si como hubiese estado llorando por algo, además de verle que un lado de su cara estaba algo enrojecido e inflamado, en su momento quiso preguntarle si le había pasado algo malo, pero prefirió optar por la discreción, en este momento la señora María ya cerraba la puerta de la casa tras ellas, mientras Cielo Riveros cadenciosamente y algo preocupada por quien sabe qué cosa se dirigía a tomar asiento en uno de los sillones de la sala.
(2 horas antes en la casa de Rodrigo)
--Tu hijo es un bueno para nada… como no es capaz de dominar a esa potranca que tiene por novia?, Cualquier macho hecho y derecho es capaz de domarla, menos él, jajajaja…!!!!, -el odioso viejo otra vez se estaba burlando del pobre chamaco, lo bueno era que este aun no llegaba del trabajo.
--Severianooo…!, eso a ti no debe porque importarte… solo te digo que ya no lo molestes mas, no hay un solo día en que no le digas cosas, -le señora María defendía a su hijo mientras guardaba en el closet una ropa recién planchada.
--Pues se lo merece por estúpido…!, -el viejo le contestaba con un vaso de cerveza en la mano y con la otra rascándose la guata.
--El año pasado también tuvo una novia y nada que le decías cosas desagradables… no entiendo el porqué te entrometes tanto en la relación de Rodrigo y esta otra niña…
El viejo que andaba caliente por Cielo Riveros desde hace semanas sentía imperiosamente las ganas de decirle miles de cosas a su esposa con respecto a esa niña, aun así se midió por el momento en sus dichos.
--Porque esa niña como tú le dices, es mucha hembra para un imbécil como el…, satisfecha ahora!?, -le dijo para luego beber de su cerveza siempre mirando a su mujer.
--Ahhh… claro si lo recuerdo… el otro día le decías que una joven como ella está hecha para hombres como tu verdad?, -ya había fastidio en las palabras de la señora, y no era por la joven sino por lo fresco y sin vergüenza que era su marido.
--Pus… si y qué?, -fue la desafiante respuesta del hombrón italiano.
--Severiano…! Cielo Riveros es una buena niña… por favor ya no te metas más en los asuntos de ellos y déjalos tranquilos…
--Los dejaré tranquilos cuando a mí se me ocurra… y por ahora no se me ocurre, jajajja…!!!, a propósito a qué horas se supone que debería llegar este tarado, necesito que se suba al techo y que me repare la antena de la tele, hoy es el capítulo final de la novela nocturna y no quiero perdérmela.
--Hoy la farmacia esta de turno, por lo tanto Rodrigo no llega hasta mañana.
--Queeeee…!? Y ahora como le haré para ver el final de mi teleserie…!!!. –le consultaba en forma aireada don Severiano a su esposa.
--Pues hazlo tu mismo… así haces un poco de ejercicio, si quieres que una chica joven y buena moza no baje su mirada a la hora que vas pasando por lo menos intenta bajar esa tremenda panza que tienes…
Don Seve se sintió humillado a medias, ya que si bien su propia mujer lo estaba encarando y prácticamente diciéndole que no había jovencita alguna capaz de mirarlo producto de su tremenda guata solo se dio a contestarle ahora con algo más de mal humor:
--Si que me miran para que sepas…!!!!
--Severiano…!, yo no sé de adonde sacaste que tu eres joven… mírate al espejo, si ya estas viejo y canoso, además que no me cae en gracia la forma en que miras a esa niña cuando viene a la casa…
--Cual niña?, -el viejo por cada segundo que pasaba se iba aireando mas con la conversación.
--Cielo Riveros … la novia de Rodrigo quien más…!
--Ahhh la puta esa…! jajajaja…!, -(si supieras que ya hasta me la he cogido, pensaba el vejete)
--No le digas así…! esa joven no es como las de por aquí… ni siquiera se compara con tus sobrinas que la mayoría han quedado embarazadas de puros vagos…
--Así ah…?, -el viejo quien no le aguantaba a nadie que ofendieran a su familia se levantó rápidamente de su sillón y se fue acercando a su esposa para luego en forma desafiante decirle: --Y quien te asegura a ti que esa modosita pendeja de tetas grandes no es buena para la verga…
--Porque no lo es y punto…!, -la señora María ya se estaba comenzando a asustar por lo alterado que estaba su marido.
--Si que lo es vieja estúpida…!, me vas a seguir contradiciendo!?, -un extraño brillo predominaba en los ojos del furioso viejo.
--Por Dios Severiano… es la novia de Rodrigo…!, -la asustada mujer decía lo anterior solo por contestar algo, en el estado en que estaba su marido muy pronto iba a querer golpear a alguien, y ella bien que lo sabía.
--Jajajajajaja…!!!, claro…!!! y eso es justamente lo que más me da risa… jajajaja…!!! Que siendo la novia del estúpido de tu hijo, sea este el único que aun no se la puede encamar mientras otros ya si lo han hecho…, jajajaja…!!!
--Eres muy mal hablado…! acaso no piensas que hasta podría ser tu hija…?, -la señora estaba desesperada por ponerle paños fríos a la conversación.
--Pues no lo es…!, además que solo te digo la purita verdad…!!!, -el viejo casi tenía arrinconada a la pobre mujer contra un rincón en los muros de la casa.
--Bueno tal vez así sea en otros casos, pero no con Cielo Riveros y menos contigo…, -por favor déjame pasar que debo preparar la cena.
--Y que te hace pensar que yo no me puedo coger a una hembra joven como esa… como la tal Cielo Riveros mas precisamente?, -el viejo se había interpuesto en su camino no dejándola avanzar cuando la mujer quiso dirigirse hacia la cocina.
--Ya Severiano…!, yo no quiero seguir con esta conversación… por favor déjame pasar…
--Pues yo si quiero seguir con la conversación…! , -la señora María creía ver como a su marido poco a poco se le iban inyectando los ojos en sangre, mientras este mismo ya estaba como un verdadero demente, --Tú la iniciaste, así que ahorita mismo la terminamos…, dime desgraciadaaaa…!!! Quien te crees tú para venir a decirme que yo no puedo culear a una pendeja como esa… Dimeee…!!!!
--Severiano… yo no he dicho esoooo…!!
--Si lo dijiste vaca de mierda…!!! ahora contéstame lo que te estoy preguntandooooo…!!!!, -el viejo ahora se mantenía en una posición desafiante y con sus puños cerrados, su esposa estaba aterrada.
--Severiano por favor no te pongas así… le hace mal a tu ulcera…!, -le decía la vieja intentando calmar a su marido.
--A la verga mi Ulcera vieja desgraciada…!!!! y vamos respondiendo… que te hace pensar que la pendeja esa no sería capaz de acostarse conmigo?
--Severiano se sensato y mira la edad que tienes…!!!
El viejo sintiéndose otra vez insultado por su mujer y no midiendo consecuencias ni situaciones fue y le soltó la verdad:
--Pues te digo que ya me la culie desgraciada…!!!!, que me dices ahorita de la linda noviecita de tu hijo…!!??
--No, eso no es verdad solo lo dices porque estas enojado…
--Si que lo es… y para que sepas que me la estuve culiando una mañana entera en nuestra propia habitación… tal como me culeo a todas las putas que quiero cuando tú no estás en la casa…!!!!, como te queda el ojo viejita?
--Mentira…!!! eso es mentira…!!! tú le darías asco a una joven como ella…!!!
En eso la vieja sintió como su marido la tomaba furiosamente del pelo para jalarla contra su cuerpo.
--Asco??? Pus te voy a demostrar la clase de noviecita que tiene tu hijo…
--Que vas a hacer Severiano!!??, -decía la pobre mujer mientras el viejo la zarandeaba tomada de las mechas.
--Yo no voy a hacer nada… serás tú quien lo hará, así que ahorita mismo te me arreglas y me la vas a buscar, aprovecharé que ese imbécil no llegará esta noche y me la cogeré en tus propias narices…, -le dijo finalmente y por fin soltándola de sus canoso cabellos.
--Que cosas dices Severiano? Snifssss… yo no le haré eso a esa pobre niña…
--Te me vas a buscarla mierdaaaa…!!!, -el viejo junto con gritarle apuntaba hacia la puerta de la calle.
--Noooo…!, yo no iré a buscar a nadie…!!, -ahora la señora María hablaba haciendo ademanes de taparse la cara ya que veía que en cualquier momento su marido se la zurraría.
--Si irás…!, -el viejo fue y la tomó fuertemente de un brazo para el mismo comenzar a arrastrarla hacia la puerta mientras le iba dando conocimiento de sus requerimientos, --E irás porque yo soy el que te mantengo a ti y al estúpido de tu hijo…
--Él… él trabajaaaa…!!!, -claramente la señora defendía a su hijo mientras la arrastraban.
--Si, trabaja solo para comprarse teléfonos, ropa y cuanto mamada que no sirven para nada en este hogar, ni siquiera compra una coca cola para la hora de almuerzo, y si la compro yo es él quien se la bebe toda viendo televisión o lloriqueando como los maricones, así que como yo los mantengo a los dos ahorita me obedecen…!!!, -el eufórico y salido viejo ya estaba abriendo la puerta de la calle, --Así que si no quieres que te pegue vamos moviendo ese culo y me vas a buscar a la pendeja esa para otra vez hacerla mi mujer, cosa que tu hijo no está capacitado para hacerlo, jajajaja…
--No…!!! Severiano tú estás loco…!!!, -chillaba la vieja cuando notó que su marido la estaba empujando para afuera de la casa, ella rápidamente cargó su cuerpo en la puerta volviéndola a cerrar, acto que ahora si sacó de las casillas al excitado y enloquecido vejete.
--Si, estoy loco…!!!, pero loco de calentura por volvérmela a coger…!!! así que tomaaaa…!!! --Plafffff…!!!, --Toma desgraciada…!!! Plaffffff…!!!! --Vas a ir ahora…!!!???, -fueron dos fuertes cachamales que el viejo le puso a su esposa para hacerla entender.
--No…! no ireee…!!,
--Plafffffff…!!!!, -retumbo otra bofetada aun más fuerte que las anteriores… --Iras ahora…!!??
--Sniffsss…!!!! Pero si tantas ganas tienes de hacérselo a esa muchacha… ve a buscarla tu mismo, no dices que ya lo hicieron? Sniffsss…!!!, -ahora ya la señora María lloraba desconsoladamente.
--Si…!, si lo hicimos… pero si yo la voy a buscar se negará a salir de su casa, la muy zorra ahora se niega a aceptar que le gusto mi verga, o porque razón crees que ahora no viene tan seguido… te lo has preguntadooo!?
--Severiano por favor…!!!
--Te digo por última vez… ve a buscarme a esa chamaca porque ya no me aguanto las ganas de volvérmela a culear, o ahorita mismo te llevo para el patio y te ahorco… vas a ir…!?
--Si… si… si ireeee…!!!, pero ya no me pegues…!!!!, -aceptó la pobre mujer cuando vio que su marido nuevamente estaba levantando su mano para con toda seguridad dejársela caer por donde fuera.
--Mira vieja… si no estás aquí con ella dentro de una hora te juro que te salgo a buscar para matarte a patadas y después las pagara el baboso de tu hijo… estas clara?
--Si… iré a buscarla Severiano…! pero por favor no le hagas daño a Rodrigo… es mi hijo como no lo entiendes…!, -le suplicaba con las manos la sufrida señora María ahora arrodillada a los pies de su marido.
--Si… si lo sé…! –el viejo junto con ir hablándole nuevamente la tomó de sus cabellos jalándola para que se pusiera de pie, --Pero cuando yo te pedí tener hijos me saliste con la mamada que estabas operada… así que ahorita y si Diosito quiere yo mismito me encargaré de hacerme uno para mí solo y será la yegua esa que me irás a buscar quien me lo dará, jajajajaja…!!!! ya verás como chilla de calentura cuando tiene una buena verga adentro de la concha.
--Está bien…!, está bien…! ya voy pero ya no me jales del pelo…!
--Entonces apúrate estúpida, y a penas llegues con ella prepara la cena y nos sirves, hoy quiero cenar con mi nuera postiza, Jejeje… por lo menos que me sirvas para algo, jajajaja…!!!, -le dijo finalmente y soltándola.
La pobre señora María tras haber caminado un par de cuadras muerta de miedo no pudo evitar sentarse en el banco de una plaza para calmarse un poco y limpiarse las lágrimas maldiciendo el día en que pensando ilusamente decidió casarse con ese demonio que tenía por esposo después de haber enviudado en su corto y primer matrimonio.
Eran ya más de 15 años en que llevaba mortificándolos a ella y a Rodrigo. Pero esto ya era el colmo, de donde había sacado Severiano que la dulce novia de su hijo iba a querer acostarse con él, a pesar de ello sabía que debía ir a buscarla, o sino las consecuencias serían peores.
La iría a buscar pero solo lo haría para que nada malo les pasara a ella y a Rodrigo, además que estaba segura que eso de que Cielo Riveros y su esposo se habían acostado según este ultimo aseguraba eran solo patrañas, aparte de que ella confiaba mucho en la integridad de la bella chamaca.
(Hora actual en la casa de don Severiano)
Cielo Riveros aun estando un poco nerviosa al haberse percatado del estado de su suegra se mantenía sentadita en el sofá esperando que en cualquier momento se apareciera su amado Rodrigo tal como le había entendido a la señora María.
Desde su ubicación en el living de la casa veía como la callada señora solo se mantenía en silencio haciendo los quehaceres de la cocina y ubicando los cubiertos en la mesa, la nena notaba que la doña de la casa estaba alterada por algo.
Fue en eso que desde la habitación matrimonial con profundo estupor vio aparecer a ese tremendo viejo panzón, de pelos canosamente encrespados y de bigotes espesos que ya en una ocasión se la había violado.
El vejete mientras había estado esperando que su esposa le trajera a la chica que pensaba violar nuevamente se había estado engalanando para ella, vistiéndose con pantalones y camisa de color negro, y ataviado en su regordete cuello su gruesa cadena de oro, dándole un aspecto más de maligno narcotraficante que de un típico amante latino como él deseaba figurar ante nuestra mamasota.
--Jejejeje… pero si no es mi nuera postiza la que esta sentadita esperándome?, -fue lo primero que dijo el indeseable hombre al ir acercándose lentamente al sofá en donde esperaba la colegiala.
Una ahora si muy asustada Cielo Riveros puso atención a las palabras del viejo Severiano, ella no estaba esperándolo a él sino que a Rodrigo, así que rápidamente se quedó mirando a su suegra quien en esos momentos estaba poniendo fuentes con ensaladas en la mesa, notando que la señora María por alguna extraña razón rehuía su mirada.
--Señora María…!, -le habló de pronto, --y donde esta Rodrigo?, Usted me dijo que él estaría esperándome…!!, –pero fue su casi suegro quien le contestó antes de que la vieja le dijera algún tipo de mamada a esa exquisita potranca que otra vez el tenía a su disposición.
--Tu novio llegará en un rato mas chamaca, así que mientras llega seré yo quien te atienda en esta casa, jejejeje…, -Severiano se mostraba muy dicharachero y sonriente, pero por dentro y mirando el albo atuendo en que se presentaba el femenino objeto de su obsesión sentía que su calentura iba aumentando peligrosamente, debido a que desde el día en que la había probado sexualmente decidió no aparearse con su mujer ni con las putas que comúnmente introducía a su casa o al restorán del que era propietario, en esa oportunidad el vejete había pensado equivocadamente que se le daría más fácil volver a acostarse con ella.
El asunto era que el viejo estaba desesperado por cogérsela, si hasta se imaginaba que toda la leche que se le había ido acumulando en las pelotas en todo este último tiempo esta ya debiese estar añejada al no tener a la hembra indicada para que se la ordeñase, como también temía que si se prolongaba esta situación todo aquel espeso semen descompuesto se le podría ir al cerebro y adquirir una enfermedad siquiátrica.
En tanto Cielo Riveros al ver que se le venía aproximando aquel grotesco vejete que desde ya casi un mes atrás se lo había hecho a la fuerza rápidamente intentó ponerse de pie para en último caso ir a ayudarle a su suegra mientras su novio llegaba, pero fue detenida rápidamente por don Severiano quien tomándola de un brazo la obligó a volver a tomar asiento.
--Tranquila mi Reina… si aquí sentadita no te va a ocurrir nada malo… deseas algo para beber…?, -le dijo entre cordial y amenazante a la misma vez que tomaba ubicación al lado de ella.
--No, gracias…! No tengo sed…!. –la asustada colegiala veía muy de cerca como le colgaban los cachetes de su cara adornados por ese espeso bigote plomizo que los cruzaba por debajo de su ancha nariz. Rápidamente y en forma inevitable a su mente vinieron esas asquerosas imágenes de cuando ese repulsivo hombre obeso había estado encima de ella y moviéndose sobre su cuerpo con su cara desfigurada por un inmundo placer, a la nena le dieron ganas de ponerse a vomitar.
--Creo que insistiré…, -volvió a decir el viejo quien estaba ajeno a los pensamientos de la bella colegiala, --Quieres beber algo conmigo mientras esperamos la llegada de tu novio?
--Le dije que no…!, -le volvió a repetir Cielo Riveros cruzándose de brazos a la altura de sus tetas y mirando en sentido contrario y con cara de fastidio.
--Pues entonces beberás al gusto mío…! Viejaaaaa…!, -gritó desde el sillón claramente dirigiéndose a su esposa. --Trae una botella de vino tinto y dos copas…! y apúrate…!!
La señora María al minuto llego con la botella de vino y las dos copas que le había pedido su esposo.
--Señora María quiere que le ayude en algo…?, -aprovechó la chamaca de decirle a su suegra, para ver si se podía sacar de encima al viejo Severiano.
--No mija no te preocupes…!, -la señora le contestaba lo anterior mirando de reojo al hombre de la casa, claramente la doña se daba cuenta del rechazo que sentía aquella jovencita por su esposo.
--A qué hora llegará Rodrigo?, -le volvió a preguntar Cielo Riveros .
--Él… él… llegara pronto… no te preocupes. –La pobre mujer se sentía podrida al estar mintiéndole a la novia de su hijo, se daba cuenta a lo lejos de los embustes de Severiano, pero confiaba en que este luego se aburriría de sus odiosidades y que diciéndole otra de sus mentiras la despacharía.
--Bien…!, -acotó el vejete, --ahora que ya sabes que Rodriguito luego llegará ahora te beberás una copa con tu suegro postizo, jejejeje…!!!, -el viejo insistía por hacerse el simpático con la chamaca.
Mientras la señora se retiraba a la cocina, don Severiano en forma de lo más ceremoniosa se dio a descorchar la botella para que luego de servir las dos copas y pasarle una a Cielo Riveros extender la suya en señal de estar brindando con la contrariada joven.
--A tu salud chamaca…!!!, -le dijo el vejete mirándole las piernas, luego las tetas, y por ultimo mirándola a la cara.
La mamasota que se daba cuenta de cómo el viejo la miraba con cara de caliente, se propuso a no dar pie para que don Seve creyera cosas que no iban a pasar:
--Yo… yo… no beberé nada…!, yo vine a estar con Rodrigo, y no a beber vino con Usted…!, -Cielo Riveros le hablaba con convicción, y el viejo lo notaba, por lo mismo ya le empezaban a pulsar las venas de las sienes producto de la ira que le causaba al notar como la pendeja se rehusaba a hablar y tomar vino con él, y tras mirar que su mujer estaba al interior de la cocina desde donde no los podía ver decidió cambiar un poco de técnica ya que eso de querer haber sido cortes con aquella endiablada chamaca no estaba resultando como él quería.
--Si…! si lo harás…!, recuerda que nosotros dos ya nos hemos acostado… eso me da ciertos derechos para hacer muchas cosas contigo, como esto por ejemplo, –el vejete junto con decirle lo último en voz baja, y con toda la propiedad del mundo posó una de sus manazas peludas el pleno muslo de la nena y por debajo de su mini falda
--Nooo…!, don Seve… Usted está loco…! no me toque…!!, -le reclamó Cielo Riveros en el acto y mirando hacia la cocina temiendo que la señora María saliera y sorprendiera a su marido manoseándola en el mismo living de su casa.
En tanto el viejo continuaba hablándole muy cerca a sus oídos aprovechando de mirar en primera fila ese precioso nacimiento de chichotas que estaba dispuesto a chupar a penas se le diera la oportunidad:
--Entonces bebe conmigo pendeja… aunque sea solo un trago… si no quieres que te empelote aquí mismo y aparte de comerte las tetas te culie tirada en la alfombra delante de mi esposa…
--E… Esta… bien…, pero solo será un trago y nada mas…!, -junto con decirle lo ultimo la chamaca como pudo le retiró la mano de su pierna con la suya.
--Así… esta mejor pendeja…, a propósito te ves muy linda con esa blanca ropita que te pusiste!, si pareces un verdadero vasito de leche ricura…!! Jejejeje…!!
Cielo Riveros , que no le causaban ninguna gracia las palabras de halago que le profería el vejete, y con tal de que este la dejara tranquila tomó la copa que le habían servido y bebió tres sorbos del vino, en tanto el viejo para no seguir asustándola se paró del sofá en que compartían y se ubicó sentado en otro sillón que estaba justo al frente de ella, desde donde se dedicó a mirarla en forma penetrante mientras la morboseaba pensando en que solo en un rato mas se la iba a estar culeando. (Delante de su esposa para él, y delante de la madre de su novio para ella (ß)).
Don Seve estaba recaliente mientras se bajaba el solo la botella de vino, únicamente se daba a comérsela con sus ya enrojecidos ojos, imaginándola desnuda y apareándose con él.
Fue en eso que la buena señora María les daba aviso que la cena ya estaba servida, la nena de muy malas ganas se puso de pie creyendo que iban a cenar sin esperar a su amado ya que vio solo tres cubiertos puestos en la mesa, por lo que rápidamente le dijo al vejete lo que ella pensaba.
--Don Severiano, yo creo que lo mejor es que Usted se sirva su cena junto a su esposa mientras yo espero a Rodrigo viendo televisión, el está por llegar no?
El viejo, que según él era de origines italianos ya se estaba cansando de la actitud de Cielo Riveros , claramente se daba cuenta que la chamaca desde que había llegado a su casa lo estaba rechazando haciéndole ver abiertamente que ella no quería nada con él. Es que nuestra nena estando en su sano juicio era una chica muy bien portada, en su correcta personalidad no estaba eso de andar coqueteándole a viejos calientes, si bien en su fuero interno ella sabía que ambos se habían acostado esto se sucedió en forma forzada y bajo engaños, además que se había jurado que ella por nada del mundo iba a volver a dar pie para que el odioso vejete confundiera las cosas.
Pero por su parte don Severiano que estaba muy aireado por la forma en que le hablaba la colegiala ya estaba casi a punto de correr la cortina y decirle abiertamente a la chamaca que Rodrigo no iba a llegar y que ella después de cenar se iba a tener que ir a acostar con él en la misma habitación matrimonial de la casa, había esperado tanto por esta oportunidad que no estaba dispuesto a desperdiciarla, total ya había acondicionado a su mujer que era la parte más difícil de lo que espontáneamente se le ocurrió de un momento a otro, y si esta se ponía a armarle escándalos le volvía a pegar y punto.
--Escúchame chamaca…!, -le dijo finalmente don Seve y en forma amenazante, --Lo mejor que puedes hacer y que es en beneficio para todos los que viven en esta casa es sentarte en la mesa y cenar conmigo… mira que ya estoy perdiendo la paciencia.
La nena desde su posición y al estar parada casi al frente del vejete siendo ambos casi de la misma estatura le vio que tenía las pupilas de sus ojos llenas de venitas rojas, como si estos estuviesen trisados y a punto de quebrarse, situación que le empezó a causar más temor todavía.
--Pe… pe… pero y R… Ro… Rodrigo… el va a llegar?, -la nena hacía la consulta mirando a su suegra que con los ojos llorosos era testigo de todo lo que estaba ocurriendo, además que Cielo Riveros ya vislumbraba que en esa casa algo extraño estaba ocurriendo.
--Por favor mija…, -dijo de pronto la suegra de Cielo Riveros , --solo siéntate y cena con nosotros…
--Pero contésteme señora María… Rodrigo va a llegar?, -la contrariada chamaca miraba alternadamente a su suegra y al vejete, como si de verdad estuviese exigiendo que alguien le dé una buena explicación de lo que ahí sucedía, pero lo único que obtuvo por respuesta fue un extraño silencio.
La buena mujer que en un momento estuvo a punto de decirle a Cielo Riveros la verdad y que lo mejor que podía hacer era retirarse lo antes posible, fue fulminada por una bestial mirada de su marido, y recordando además que si en esa casa no se hacia lo que Severiano deseaba lo más seguro era que las iba a pagar su hijo, solo se dio a contestar:
--Si mija… el llegará en cualquier momento… solo siéntate a la mesa y cena con nosotros.
Cielo Riveros que no estaba para nada convencida con la respuesta de su suegra lentamente fue tomando asiento en la mesa, viendo que el facineroso vejete hacía lo propio con su silla muy apegada a la de ella, y cuando la señora María hubo servido los tres platos, el viejo con toda la autoridad que a él le correspondía en ese hogar le dio sus instrucciones a su mujer:
--Tú no vieja…!, retira tus cubiertos y tu plato y vete a cenar a la cocina, o simplemente desaparécete no muy lejos de aquí, si necesitamos algo te avisaremos y tu vienes y nos atiendes, jejejeje…, -le demandaba abusivamente don Seve a su esposa.
La pobre viejita quien aun se decía que toda esa mal cuerna inventada por su odioso marido era solo para seguir humillándola a ella y a su hijo, pensaba que a Severiano ya se le estaba pasando la mano, mientras caminaba a la cocina con su plato y sus cubiertos preguntándose de que cosa podría hacer ella?, ya que si intentaba poner las cosas en su lugar el muy bestia de su esposo era capaz de pegarles a las dos juntas, y al siguiente día también las pagaría su hijo, así que decidió que las cosas siguieran fluyendo, en algún momento el hombre tendría que aburrirse de tanto teatro.
Por su parte la colegiala mientras sentía en su naricita todo el aliento a vino mezclado con gases estomacales que manaban de la bocota del viejo italiano mientras este vociferaba escuchaba incrédula las despóticas instrucciones que le daba este a su mujer despachándola cual sirvienta a comer en la cocina, a la vez que se preguntaba a qué horas iba a llegar finalmente Rodrigo?, pero su mente y debido a las anteriores circunstancias poco a poco le estaba avisando de cuál era la verdad: los ojos llorosos de la señora María cuando la fue a buscar a su casa; una parte de su cara visiblemente inflamada producto de un golpe que debió haber recibido; la botella de vino para dos, la cena para dos, la forma prepotente en que el odioso viejo se estaba dirigiendo a las dos, todo eso tenía un solo significado para la contrariada chamaca y este era que sencillamente Rodrigo no iba a llegar.
El viejo ya casi se había devorado todo lo puesto en la mesa, y Cielo Riveros lo miraba de soslayo sintiendo los continuos eructos que este dejaba salir sonoramente en cada intertanto mientras engullía, presintiendo además que por cada minuto que pasaba su situación en aquella casa se ponía más peligrosa, así que en pos de su integridad y para que ahí no fuese a ocurrir una desgracia lentamente fue corriendo su vacío plato hacia atrás para posteriormente ponerse de pie y darle aviso al vejete que ella se retiraba (error).
--Don Severiano… en vista que Rodrigo no ha llegado y que Usted ya se ha servido casi toda su cena, yo ahorita me estoy yendo, tengo que hacer muchas tareas sabe…?, y además…
--Siéntate pendejaaa…!, -bramó don Seve sin dejar de mirar su plato y masticando un trozo de pollo asado, el viejo continuaba: --y no hables mamadas…!!, tú de aquí no te vas hasta que yo te lo diga…!!!
--Pero don Seve… si Rodrigo no está en la casa para que quiere q…
--Sientateeee he dichoooooooooo…!!!!, -le gritó ahora el viejo poniéndose rápidamente de pie e interceptando a la decidida mamasota, su ulcera ya le estaba zapateando.
--Severiano…!, deja que la niña se vaya para su casa… ya es tardeeee…!!
La buena señora María que había estado viendo y escuchando la situación desde la cocina salió rápidamente a cooperarle a Cielo Riveros , pensando equivocadamente que su marido iba a recular en sus malsanas intenciones, según le había dicho horas antes. Pero el vejete al ir tomando aire e inflando su panza lo que más pudo le mandó un bestial grito que tanto Cielo Riveros como la vieja se paralizaron de pavor.
--Tu te me callas vieja desgraciada y entrometidaaaa…!!!! Y te me vas al tiro para la cocina que es el único lugar que te corresponde en esta casaaaaaa…!!!!! Fuera de aquiiiiiiiiiiii…!!!!!!!!!, -aparte de estar extremadamente alterado el viejo era muy machista.
La señora María muerta de miedo se fue a recoger los platos y se puso a lavarlos en forma neurótica, recordando que la iban a moler a palos si no hacía lo que le decían. --Y tu pendejaaaa…!!!, -le dijo ahora a Cielo Riveros con la voz un poco más baja pero tan alterado como anteriormente. --Para que le vayas sabiendo… el maricon ese que tienes por novio no va a llegar hasta mañana, así que he decidido que esta noche nos acostaremos los dos juntos…!!!!, -le iba diciendo ahora acercándose peligrosamente mientras la desesperada nena iba retrocediendo.
La ahora muy escandalizada colegiala no daba crédito a lo que sus oídos acababan de escuchar, o sea, ese viejo sí que estaba loco, como podía pretender acostarse con ella estando su propia esposa presente en la casa, y que más encima se lo decía a viva voz y con la señora María escuchándolo todo.
Ahora sí que todos los sucesos ocurridos le iban calzando, pensando acertadamente que algo había sucedido en esa casa antes que su suegra la fuera a buscar, a eso se debía el alterado estado de la viejita y las notorias magulladuras en su cara, además que por algo ahora también había intentado defenderla. Cuando su mente le aclaró más o menos lo que ahí estaba pasando, un real estado de ira y de odio hacia ese abusador vejete alteró sus sentidos, por lo que se propuso férreamente a no darle en el gusto de lo que pretendía:
--Nooo…!! No don Severianoooo…!! Yo… yo… no me acostaré con Usteddd…!!!, -le dijo en el momento que dejo de retroceder, y levantando su manita hacia el vejete en clara señalización de PARE.
--Si lo harás zorraaaaaaaa…!!!, -gruñó el viejo no haciéndole caso a lo que decía, --O acaso creías que por haberte desaparecido de esta casa no lo volveríamos a hacer…!?, -terminó diciéndole a viva voz.
La chamaca al notar como el viejo pregonaba en voz alta que ellos ya se habían acostado no importándole la presencia de la señora María en la cocina rápidamente bajó la guardia cayendo casi en la desesperación con solo imaginar lo que podría pensar su suegra si es que se quedaba con la idea de lo que ella había hecho con su marido.
--Don Seveee… calleseee…!, su esposa esta la cocinaaaaa…!, -la chica ahora se lo decía en forma casi inaudible…, y moviendo sus manitas en forma desesperada.
--Si lo haremos pendeja…!!!, -el vejete seguía hablando en voz alta con la única idea de que su esposa los escuchara desde la cocina, --Y será mejor que pongas de tu parte, así se te hará más fácil aceptarlo…, -junto con decirle lo ultimo don Seve agarró a la chamaca y se la empezó a llevar al dormitorio matrimonial entre forcejeos y manoteos por parte de la espantada nena que aun no creía lo que estaba sucediendo en la misma casa de su amado Rodrigo.
--Y que es lo que tengo aceptarrr…!!??, --Suélteme don Seveee…!!! que haceeee…!!!???, Para donde me llevaaaa…!!??, -chillaba la nena con total desespero en el momento que se la llevaban a la recamara matrimonial de aquella casa.
--Aceptarás que el único macho que tienes bajo este techo soy yooo…!!!. Que te quede claro encuinclaaaa, además que he decidido que desde hoy día mismito tu pasas a ser mi mujer oficial… jajaja…!!! Por lo tanto ahora te llevo para la camaaaa…!!!!
Cuando Cielo Riveros se vio de un momento a otro metida en la misma habitación en que ese miserable hombre ya se la había violado una vez, en forma atacada se daba a mirarlo con sus bellos ojos verdes bien abiertos analizando las salidas pretensiones de su casi suegro, el viejo literalmente le estaba diciendo que se lo iba a volver a hacer no importándole la presencia de su pobre esposa, que la trataba peor que a una sirvienta, pero ella se había prometido nunca más acostarse con él, ni por muy rico que haya sentido al final de la otra incursión, y ahora menos viendo lo muy miserable y aprovechador que era.
--Y que me miras con cara de mensa pendeja, ahí está nuestra cama, esta desde hoy será nuestro nidito de amor, jejeje, vamos quítate esa ropita y acuéstate, llevo más de un mes esperando este momento, jajajaja!!
La chica armándose de valor e intentando no hacer escándalo por respeto a esa pobre mujer tomó aire y se dio a intentar hacer entrar en razón a ese viejo demente que osaba a tomar decisiones por ella.
--Don Seve…, por favor… ya es suficienteee…, -se atrevió a decir erróneamente Cielo Riveros , pensando que tal vez el caliente de su suegro podría pensar con algo de cordura, --Yo no me voy a acostar con Usted… Rodrigo es mi novio, y Us…
El vejete le cortó al instante, ahora sí que ya estaba aburrido con la actitud poco cooperadora de la tremenda chamaca, así que sin importarle que la puerta de la habitación estuviese abierta hasta atrás y con la presencia de su esposa muy cerca de ella, el se iba a encargar de dejarle bien claro a la pendeja esa el lugar que le correspondía a ella en esa casa, pero primero iba a comenzar como él ya lo deseaba así que no midiendo consecuencias decidió que simplemente se la iba a violar, junto con esto último empezó a vociferarle sus impúdicos propósitos a la misma vez que él se comenzaba a sacar la ropa, Cielo Riveros quedó aterrada:
--Claro que lo harás zorraaaaaa, y lo harás porque desde hoy día yo soy tu único macho… jajajaja!! Serás mi mujerrrr…!! mi hembraaaa…!!! mi putaaaa…!!!!, -con esta última frase el vejete abrió su propia camisa con fuerzas y de par en par sin siquiera desabrochar los botones los cuales saltaron lejos y en distintas direcciones, --Mañana mismo quiero que mandes a la verga a tu noviecito y le dirás que tu eres mucha hembra para un pobre maricon como el… jajajaja…!!!! --Te voy violar zorritaaaa…!!! --Te voy a meter la verga por todos tus orificiossss… ya verassssssss…!!!!, -el semental italiano ya estando con su tremenda panza peluda al aire y después de desabrocharse el cinturón ya se comenzaba a bajar el cierre del pantalón para quitárselo, mientras seguía vociferándole, --Te voy a estar dando verga hasta que te desmayes para después embutirte todos mis mocos bien adentro de la zorra preñándote una y otra vez…, -Cielo Riveros con horror y asqueada al máximo veía ahora como el obeso mastodonte se comenzaba a sacar los calzoncillos delante de ella y no dándole tregua en su bombardeo de leperadas, --Me darás por lo menos unos 5 chamacos… Te meteré esto hasta por las orejas, jajaja!!!!! –le decía ahora bamboleándose su erecta herramienta ante una atribulada jovencita que se encontraba paralizada y sin saber qué hacer ante la demencial situación que estaba viviendo, Cielo Riveros aun veía como el viejo se la agitaba de la forma más desvergonzada imaginable, y fue el enloquecido viejo quien la hacía volver a la realidad de la forma más espantosa en que lo puede hacer una mujer en aquellas circunstancias:
--Escuchaste pinche zorraaaa…???!!!!, -diciéndole esto último se abalanzó rápidamente sobre ella y de un puro movimiento la inmovilizó por detrás pasándole su brazo por el cuello y para ser el mismo quien comenzara a sacarle la ropa.
--No don Seveee…!!! que haceeee…!!!, -era lo que lograba decir la nena con sus dos manitas puestas en el brazo que la inmovilizaba, sus ojitos estaban fuertemente cerrados y notaba como el aire empezaba a escasear en sus pulmones.
--Pues que hago…!?, estoy encuerándote para luego violarte, a ver si te quedaran ganas de volver a ponerte quisquillosa, jajajaja…!!!!
--No don Seveeee…!! no me violeeee…!! está su esposaaaaa…!!!!, -era lo que apenas podía gesticular.
La nena no era consciente de lo que decía, o sea cualquiera de nosotros podría entender perfectamente que según ella don Seve si se la podría violar estando ellos solos, pero entendamos la difícil situación por la que estaba pasando la colegiala, obviamente sus neuronas estaban más que alborotadas.
--Si te violaré pendejaaa…!!!, pero eso solo será al principio…!!! luego de que te entierre mi verga adentro de tu panocha por razones obvias serás tu solita quien empezaras a bailar con tu concha clavada en ella… ya verás, jajajaja… o acaso ya se te olvidó lo rico que la pasamos la otra vez…?, jajajaja…!!!!
--Noooo…!!! Usted me violoooo…!!! Usted me violooooooo…!!!!,-dentro de su desesperación la aterrada mamasota se daba cuenta que el viejo ya casi vociferaba a los 4 vientos que ellos ya se habían acostado, por lo que se encargaba de que la señora María se enterara de que lo sucedido entre ellos había sido producto de una violación, no fuese hacer que su suegra vaya a pensar mal de ella, recordemos que a la nena le importa mucho salvaguardar su reputación.
La señora María por su parte quien inevitablemente había estado escuchando desde la cocina todo lo que ocurría en su propia habitación matrimonial de pronto cayó en cuenta que entre ellos si había pasado algo, según ella misma escuchaba, pero nunca imaginó que el animal de su marido haya sido capaz de haberse atrevido a violar a la joven novia de su hijo, así que armándose de valor se propuso a nuevamente ir a socorrer a la pobre chamaca antes de que se la volvieran a violar.
--Severianoooo…!!! ya déjala…!!!, -la doña con las manos llenas de espuma del detergente y con un plato a medio lavar desde el umbral de la puerta de la habitación veía la cruda escena de observar a su marido completamente desnudo mientras mantenía inmovilizada a la chica por detrás de su cuello, la imagen era demencial.
Don Severiano quien estaba bajo los efectos del alcohol por haberse bebido la botella de vino el solo, con cara de neurótico y de maldad giró su cara hacia donde estaba su esposa para volver a amenazarle en forma bestial:
--Cállate desgraciadaaaaaa!!!! Y vete a otra parte donde no molestes…!!!!, y ni se te ocurra llamar a la poli o avisar a los vecinos porque ya sabes lo que ocurrirá a parte de molerte a palos… jajajaja…!!!!
La pobre vieja con solo verle la cara de desquiciado de su marido supo que este no iba a soltar a la joven, así que otra vez se tuvo que retirar intimidada ahora al sofá en donde sin saber que hacer simplemente se puso a llorar por lo que estaba ocurriendo en el que se suponía que era su hogar, ella sabía lo que ocurriría si es que ella intercedía por la nena, las consecuencias las pagaría su hijo, pensaba entre sollozos y con sus dos manos llenas de espuma en la cara, el plato estaba en el suelo.
Mientras tanto en la habitación que continuaba con la puerta completamente abierta, el viejo de solo tres zarpazos le arrancó la falda a la angustiada chamaca para en forma automática arrojarla a la cama. Cielo Riveros rápidamente se deslizó hacia el respaldo de esta quedando semi acostada y con sus dos muslos bien juntos y doblados como si estuviese protegiendo aquella parte de su cuerpo que nuevamente estaban prestos a usurpar.
El viejo la miraba con su ardiente y deseosa mirada sin creérsela ni el mismo que ya casi la tenia lista, sus enrojecidos ojos prácticamente ya se la comían llamándole mucho la atención lo buena que se veía la mamasota solo en pantaletas blancas, con su ajustada polera alba la cual le hacían resaltar esas tremendas chichotas que se gastaba, y aun calzando sus pequeñas zapatillas con taco, estas la nena las había elegido a sabiendas que con ellas puestas su figura se veía aun más imponente de lo que ya era según lo enseñado por Claudia hace un par de años.
En la posición antes descrita Cielo Riveros solo se daba a protegerse sus tetas con un brazo y su panochita con su otra manita, ya casi estaba entregada a su triste e injusto destino preguntándose otra vez porque a ella le pasaban estas cosas si ella hacía todas sus tareas y estudiaba mucho, además que de chamaquita siempre intentaba portarse bien con todo el mundo, mientras el exaltado y caliente de don Severiano encuerado como estaba y que le importaba una mierda el bien comportamiento de aquella pendeja no dejaba de chaquetearse impulsivamente la verga mirándola y recorriéndola centímetro a centímetro una y otra vez.
--Jejeje!! Te ves muy apetitosa así como estas pendejita rica, pero ya es hora de que realmente empecemos a pasarla bien, no crees?
Cielo Riveros quien no podía pensar claramente al saber que la puerta de la habitación en la cual se la iban a violar estaba abierta y con su suegra tal vez escuchándolo todo, solo se dio a negarle desde la cama con su cabecita, mirándolo de reojo y con la expresión de su cara como si en cualquier momento se fuese a largar a llorar. El viejo continuaba con sus aberrantes intenciones:
--Ya te lo dije zorrita, esta noche serás mi hembra con todas sus letras, lo haremos como verdaderamente lo hace un marido y su mujer, así que por favor… solo lo diré una vez, sácate los calzones y libérame tus tetotas… ahoraaaaaaaa…!!!
La colegiala lo quedó mirando directamente a su aborrecible cara, estaba aterrada por lo que se proponía este vil y depravado hombre que no sentía respeto por su hogar ni por su familia, lo veía tremendamente obeso y peludo, los plomizos y enmarañados pelos de su pecho y de sus hombros se notaban grasientos, por lo que se preguntaba de cómo había sido capaz ella de haberle confesado a Claudia que ese amorfo esperpento estaba entre los favoritos a la hora de ponerse a coger con alguien, y para rematarla decirle que su verga era una de las mejores que ella había probado, y todo por culpa de su cuerpo que cuando le hacía sentir rico la impulsaba a hacer y decir todo tipo de peladeces.
El asunto era que en ese momento viéndolo de otra perspectiva para la ahora sensata chamaca ese vejete era de lo más asqueroso y detestable, y lo que le pretendía hacer ahora en la misma casa en donde vivía su amado y en las mismas narices de su suegra era tan abominable como desquiciante lo que la llevaron a que rápidamente se levantara de la cama e intentara nuevamente en forma altanera a no dejar que otra vez se lo hicieran:
--Don Severiano…! Ahora sí que yo no lo haré con Ud.!, -le dijo muy envalentonada y con altanería.
El viejo se la quedó mirando fascinado, ni siquiera había prestado atención a lo que la jovencita le decía con aireada arrogancia, solo se daba a deleitarse con esa celestial imagen que tenía ante su detestable mirada, esas piernotas formidables y bien ponderadas con respecto al resto de su cuerpo lo volvían loco, la polerita blanca un poco subida mostrando su ombliguito y un poco más, con esas chichotas que subían y bajaban producto de la agitada respiración de la chamaca, ni que decir que al estar aun con sus zapatillas con taco puestas le hacían ver aquel cuerpo aun mas estilizado de lo que naturalmente ya era.
Estando en eso poco a poco cayó en cuenta de las últimas palabras dichas por la nena.
--Jajaja!! Así que no quieres hacerlo?, -le dijo de pronto riéndose el desnudo mamut italiano, --Pus…! eso lo veremos ahorita mismo!!, ya vas a ver si lo haremos o no…!!.
Cielo Riveros lo vio abrir un antiguo ropero con diseños anticuados, de donde sacó desde su interior un grueso cinturón de cuero para luego verlo venir a ella con su verga mas parada que antes, cayendo en cuenta que por mensa ahora mismito se la iban a zurrar, además que con solo verle su siniestro rostro mofletudo con las cejas hacia abajo como si estuviese muy enojado se arrepintió de lo que había dicho, otra vez las ganas de mearse atacaron su estomago debido a lo que con toda seguridad le iba a ocurrir.
La colegiala apenas vio que el cinturón venía hacia ella por los aires solo atinó a taparse desesperadamente su cara sintiendo el primer guascazo por sus hombros y su espalda, no supo en qué momento se vio arrinconada y agachada contra el muro para recibir el mismo tratamiento dos veces más, hasta que de pronto se sintió firmemente jalada de los cabellos obligada a levantarse, la nena estaba siendo vapuleada tal cual como si ella fuese una muñeca de trapo en donde el aprovechador Severiano no perdió tiempo en encuerarla el mismo.
Lo más simple fueron sus blancas pantaletas que el vejete tomándolas primero de una parte de su caderas se la bajó hasta la mitad de uno de sus muslos, luego la otra parte la misma operación, hasta que en tres zigzag por cada lado del curvilíneo cuerpo fue la misma chamaca que por acto reflejo terminó por retirárselas con sus pies aun calzados, prefería quedar desnuda a que le siguieran pegando.
Luego fue el turno de su blanca polera, en donde ahora la nena muy cooperadora levantó sus brazos para que a don Seve no le costara tanto trabajo retirárselas, para finalizar siendo ella misma quien con sus dos temblorosas manos llevarlas hacia atrás de su espalda y terminar sacándose el sostén dejándolo caer ahí mismo donde estaba parada, como demostrándole a don Sevito que ahora sí que ella se portaría bien.
Por su parte el viejo Severiano que se había calentado aun mas por el solo hecho de haberle pegado también se encontraba totalmente salido de sus cabales, nuevamente la tomó en forma violenta de sus cabellos ubicándola frente a frente de cara a él y desnuda como estaba para luego notificarle:
--Y esto es para que nunca más se te olvide quien es el que manda en esta casaaa…!!!, -en eso el sulfurado viejo tomó impulso y…
--Plaffffffff…!!!!!, -retumbó la más fuerte cachetada sentida por la nena desde que los viejos se la cogían, que la hicieron caer al gastado piso de madera de la habitación que aun olía a cera. (Ya que la señora María enceraba a diario.)
Cielo Riveros desnuda y tirada en el suelo no daba crédito que el padrastro de Rodrigo le estuviera pegando, la nena se encontraba con su torso semi flectado y con sus dos antebrazos apoyados en las tablas de madera, su sedoso cabello negro le tapaba toda su carita, y aunque la nena estaba espantada con tal tratamiento aun no lloraba.
El despiadado Severiano quien no estaba seguro si deseaba seguir pegándole o a cogérsela de una buena vez por todas, con solo observar aquel esbelto y joven cuerpo de Diosa al desnudo optó por la segunda opción, claro que si ella se ponía escandalosa nuevamente ya no le quedaría más que seguir con la primera (se entiende verdad?).
--Ahorita te voy a enseñar a que te comportes como mi mujer pendeja de mierda…!!, o acaso quieres que te siga pegando perra asquerosaaaaa…??!!, -le dijo finalmente el enfurecido viejo quien nuevamente comenzaba a masajearse la verga como dándose fuerzas con esto para la inminente penetración que ya se veía venir.
--Noooo don Severianooooo…!! Por favor no me pegueeee…!!, -su vocecita era quejumbrosa.
La nena con solo imaginar ese grueso cinturón de cuero desgarrándole las carnes de su trasero estaba a punto de largarse a llorar de miedo ahí mismo tirada en el suelo y aun con sus diminutos zapatitos de taco alto.
--Ok, si es así demuéstramelo con una buena mamada, y ponle hartas ganas porque o si no tú ya sabes lo que te pasará, -el vejete le dijo esto último ubicándose justo en donde la chamaca estaba tirada, aparte de volverla a tomar bruscamente de sus cabellos para dejarla hincada ante él.
Cielo Riveros no quería por nada del mundo chuparle la verga a don Severiano, pero extrañamente tampoco deseaba que le volvieran a pegar delante de su suegra, tenía que tomar una decisión rápido. Su situación era tan confusa que ni ella misma supo cual fue el momento en que con sus ojitos llenos de lágrimas procedió a con una mano despejar su rostro de los cabellos que lo cubrían, y con mucho pesar con la otra tomó la verga que ahora le estaban ordenando que chupara.
Y ahí estaba nuevamente nuestra bella mamasota hincada y desnuda ante la grotesca imagen del viejo Severiano quien la miraba hacia abajo esperando a que ella iniciara la acción succionadora.
Por su parte la chamaca a pesar del profundo asco que le provocaba ahora esta asquerosa herramienta de carne, al verla toda aceitosa y con inflamadas venas multicolores que pulsaba de arriba hacia abajo producto de la excitación de su dueño, y que en la base de esta estaba poblada espesa y selváticamente de pelos gruesos y negros, en contra de su voluntad fue abriendo su cándida y fresca boquita.
Cielo Riveros se la fue zampando lentamente casi hasta la mitad de su extensión, y así con su atractivo rostro desfigurándose lentamente por el llanto se dio a echársela a la boca, tal como se dijo anteriormente, mientras copiosas lágrimas de dolor y pesar del alma rodaban por sus mejillas, su único afán llorando y todo era dejar contento a su suegro.
Don Severiano al sentir como su verga era deliciosamente comprimida por la dulce y fresca boca de Cielo Riveros , se sintió estar más allá del séptimo cielo, era la primera vez de su vida en que una nena tan buenota como lo era Cielo Riveros se la mamaba llorando, esto lo calentaron hasta la locura, pero que deliciosa tenía la boca y su lengua la pendeja, se decía mientras miraba como la llorona Cielo Riveros se la seguía chupando.
Y claro la nena al estar llorando sin querer queriendo envolvía con su lengua una gran parte del tronco y todo su glande, haciendo que don Seve casi enloqueciera de calentura, ya que el viejo había esperado tanto por volver a sentir las delicias que provocaba cualquier parte del cuerpo de tan singular chamaca, en consecuencia ya sin esperar más y no importándole los ahogados gemidos de la nena ante su lloriqueo con verga en la boca, la agarró firmemente de los cabellos y comenzó el mismo a dirigir la labor chupadora, moviendo aceleradamente con sus dos manazas peludas la cabeza de Cielo Riveros tal cual como si se la estuviera culeando por la boca.
Cielo Riveros resistía la culeada bucal con entereza, era mucha la carne vergal que le metían y le sacaban al interior de su boca, por lo que ya la tenían babeando una gran cantidad de saliva, esta escurría por las comisuras de sus labios y caían en gruesos goterones por su barbilla hasta llegarle a las tetas, sus ojos estaban nublados de lagrimas que no eran solo de su lloriqueo sino que la mayor cantidad de estas eran por la falta de aire y por la gran presión de la verga que comprimía con aire sus órganos oculares, lo ojitos de la chamaca se agrandaban y se achicaban por cada irrupción de carne vergal que le introducían violentamente por la boca.
Afuera de la habitación y aun estando sentada en el living de la casa la señora María al borde de la locura estuvo escuchando la degenerada solicitud que le hacía su esposo a la niña que había logrado meter a su habitación, y ahora era testigo audible de los inmundos quejidos de placer que profería este y de los escandalosos sonidos bucales que hacía Cielo Riveros al estar con toda seguridad y forzadamente mamándole la verga a su marido mientras lloraba ahogadamente.
En tanto al interior de la habitación Cielo Riveros ya estaba toda atragantada, el viejo le perforaba la boca hasta más allá de la garganta. De sus fosas nasales salían expulsados los trasparentes líquidos pre seminales que expulsaba don Severiano por la verga y que provenían de sus dos grandes testículos.
El odioso y caliente suegro de Cielo Riveros ajeno a todo esto solo gozaba culeándole la boca con sus ojos cerrados y con su asquerosa bocota abierta, el espeso bigote le temblequeaba producto de las gesticulaciones placenteras que este inconscientemente hacía.
--Que rico es culearte por la boca putaaaaa…!!, -le decía el excitado viejo ahora mirándola hacia abajo y sin dejar de mover la cabeza de su víctima en forma violenta y acelerada, ni siquiera le importaba que su esposa lo estaba escuchando todo al otro lado de la pared.
La nena por su parte aguantaba la bestial cacha oral que le estaban poniendo de la mejor forma que podía sin siquiera atreverse a pensar de lo que podría estar pensando su suegra por lo que ella estaba haciendo con su marido.
Estando cada uno en sus propias ideas, de pronto don Seve de una se la sacó de la boca, quedando Cielo Riveros arrodillada y con dos escandalosos gruesos goterones de babas mezclada con semen colgándoles desde los hoyitos de su naricita, y otros más abundantes todavía escurrían despaciosamente hacia abajo por su barbilla, por parte de sus tetas y por el estomago.
Estando en tan indecente estado la nena nuevamente y en forma sorpresiva sintió que su casi suegro la agarraba violentamente ahora de un brazo haciéndola poner de pie para otra vez el ubicarse detrás de ella alojando su erecta verga justo al medio de aquellas tersas y paradas nalgotas de las que ella era dueña, sintiendo al lado de su oído el desesperado y caliente vozarrón de este y que le decía:
--Bien pendeja culona, ahora nos echaremos a coger en mi cama matrimonial, y no quiero alharaqueros de tu parte ni nada parecido, solo te tenderás de espaldas y te abrirás de patas… yo me encargo del resto… esperaremos a tu novio culeando por toda la noche, jejejej, no es una maravilla lo que se me ocurrió para esperar a ese zorrito?, -Don Seve mientras le decía semejantes barbaridades a su joven victima la manoseaba entera, rápidamente se encargó de desparramar por todo su cuerpo los líquidos que embalsamaban a Cielo Riveros . Lo hizo con los de su carita, siguió con los que bañaban sus brillosas y turgentes chichotas, moviéndoselas circularmente y para todos lados, estas estaban muy resbalosas.
La colegiala quien recién se recuperaba del anterior y salvaje tratamiento, escuchaba las atrocidades que le iba diciendo su suegro mientras la manoseaba, hasta que otra vez sintió que la empujaban violentamente cayendo de espaldas en la cama quedando puesta tal como don Severiano lo deseaba. Fue ahí cuando Cielo Riveros supo que ya no tendría escapatoria, su casi suegro se la iba a culear, y así este insano mental se estaba encargando de hacérselo saber.
--Bien chamaca, -le decía el vejete mientras se ponía de rodillas sobre la cama tomando ubicación a los pies de la nena, --ahora quiero que apenas te meta la verga te pongas a coger como una perra en estado de leva, y también quiero que le pongas harto empeño y que me hagas sentir rico, porque si veo que no lo haces, te juro que te llevo toda encuerada a la misma farmacia donde está trabajando el maricon ese que tienes por novio y te culeo en sus mismas narices tirada en la vereda, jajajaja, te queda claro putillaaa…!!!???
Cielo Riveros quien quedó casi en estado de shock al imaginarse a ella siendo violada por su casi suegro tirada en la misma vereda donde estaba la farmacia en donde trabajaba su novio, no le quedo más opción que mover su carita afirmativamente, claramente le estaba admitiendo al vejete que ella lo iba a hacer sentir rico como él le demandaba.
--Dímelo en voz alta zorraaa…!!!, Quiero escucharlo de tu propia voz…!!!, para que no queden dudas de lo que haremos aquí en la cama, mira que se podría prestar para malos entendidos, jajajaja…!!!!, -se burlaba el siniestro casi suegro mirando hacia la puerta completamente abierta de su habitación matrimonial.
--Si don Severianoooo…!, yo no quiero que Usted me viole en la calle y delante de Rodrigooo, snifff!!, por favor haré todo lo Ud. quiera!! Pero no me lo haga delante de Rodrigoooo…!!! snifff…!!! Snifff…!!! Buaaaaa!!! Buaaaaaa…!!! Sniffff…!!! Snifffff…!!!, -lloraba desconsoladamente la nena a sabiendas que la pobrecita de su suegra estaba escuchando todo lo que ella decía.
--Jajajajajaja!! Así está mejor lindura, recuerda lo que te dije antes, desde hoy día pasas a ser la mujer de esta casa, o sea MI MUJERRRR!!, mi hembraaaa!!, te voy preñar zorritaaaaa!!, serás solo miaaaa…!!!, ya vas a ver…!!!, te voy a violarrr todas las veces que yo quiera, jajajajaja!!!
Don Severiano aun no se la podía creer, aquella misma mañana ni se había imaginado como terminaría ese día, por fin se iba a volver a coger a esa linda criatura de suculentas medidas anatómicas que su hijastro le había llevado estúpidamente para la casa.
Mientras el excitado viejo que con sus peludas manos se encargaba de abrirle de par en par esas dos piernotas de tersa y brillante piel se daba a admirar y a embriagarse en esas endemoniadas y diabólicas curvas de hembra que casi lo hicieron enloquecer el día en que la vio entrar por primera vez a su casa de la mano del estúpido de Rodrigo.
Ahora su ardiente mirada estaba puesta fijamente en esa preciosa y tierna fisura de carne apenas sombreada por los escasos bellitos negros que la nena poseía en esa parte de su cuerpo, el vejete ya estaba aprontándose a tomar lo que la joven poseía al medio de sus piernas y que obligadamente le estaba mostrando crudamente en aquellos delirantes momentos.
La casi enloquecida chamaca vio y sintió como el viejo Severiano se echaba sobre su cuerpo para nuevamente hacerla su mujer como tanto le había repetido en el transcurso de aquella tarde y principios de la noche, por cada movimiento que don Seve hacía para acomodarse encima de su cuerpo, la cama crujía escandalosamente, la nena otra vez con su carita bañada en lagrimas solo aguantaba el peso de ese obeso cuerpo mirando hacia la puerta abierta.
--Ya pendeja estamos solo a minutos de que te me entregues, empecemos con unos besitos ricos de esos que tu sabes dar, -le decía el muy Satanás a la vez que le comprimía sus suaves tetas contra su peludo pecho al tenerla abrazada por debajo de sus hombros y buscando con su hocico hediondo a vino barato sus rojos labios cerrados.
La señora María lo había escuchado todo, desde la forzada mamada de verga hasta la indecente propuesta que le había hecho su marido a esa pobre chamaca que se estaba inmolando sexualmente para que el bestia de su marido no humillara a su hijo tal como había amenazado, la buena señora pensaba y estaba segura que la atractiva novia de su hijo era tan victima de Severiano como lo eran ella y su hijo.
Volviendo a la habitación matrimonial Cielo Riveros no sabía qué hacer, don Severiano solo se daba a comprimir su verga sobre su casi depilada pelvis mientras intentaba meter su lengua por entre medio de sus apretados labios rojos que ella se negaba a abrir, la nena estaba muy lejos de querer ponerse a coger por las buenas con su casi suegro.
Don Severiano viendo que la chamaca estaba presta a dejarse a que se lo hicieran a pesar que se negaba a besarlo determinó que ya era hora de poseerla, y por su lado él verdaderamente ya se la quería meter todo lo que pudiera, la hembrita novia de su hijastro lo traía loco desde que la había conocido.
De un momento a otro el viejo se vio en una instintiva necesidad animal por culearla a como diera lugar, estaba engolosinado en un universo de deseos lujuriosos, así que ya no esperando nada mas metió su mano por entre medio de los dos cuerpos tomando su verga y ubicando el descubierto glande justo a la entrada de tan esplendorosa vagina, pero la asustada chamaca anticipándose a que la penetraran instintivamente intento cruzar sus piernotas, pero el viejo no dejándole opciones rápidamente se las volvió a abrir empujando su apéndice y adentrando la punta de su verga en el inicio de tan deseado reducto amatorio, para luego notificarle con su cara casi encima de la de ella:
--Ahora te voy pendejaaaa…!, así que cuando la recibas aguántala lo mejor que puedasss…!!!, -le dijo el odioso hombre a la vez que volvía a acomodarse sobre sus muslos abiertos.
La escandalizada colegiala lo escuchaba casi no pudiendo respirar por el peso del tremendo viejo, sus manitas nerviosamente se agarraban de las ropas de cama y a veces se posaban en las laterales de la tremenda y blanda panza que la comprimían contra el colchón, con repulsión le veía los cachetes de su cara solo a centímetros de sus ojos, también veía la gran cantidad de traspiración que corría por el cuello de aquel cerdo que ya estaba solo a segundos de violársela.
Cielo Riveros sintiendo que don Seve ya empezaba a presionar su verga para metérsela comenzó a llorar de miedo, de rabia, y de impotencia por todo lo que le estaba sucediendo, su casi suegro nuevamente se la iba a culear simplemente porque él lo había decidido.
Y así estando ella con sus bellas piernas bien abiertas y con semejante animal sobre ella, este último ya no esperando nada mas empujó con fuerzas descomunales hacia el interior de la vagina de la decepcionada colegiala quien se daba cuenta que otra vez selo estaban metiendo a la fuerza sin ella haber sido capaz de evitarlo.
--Ahhhhhhh…!!!!, Nooooo…!!!, por…fa…vorrrrrr!!!!, Don Seveeee…!!!! no me lo hagaaaa…!!!!, -fue lo único que alcanzó a gritar la colegiala pero ya era tarde, su casi suegro estaba totalmente ensartado en ella y mirándola con cara de enojado placer…
--Arggghhh…!!!, no recordaba lo ajustada que tienes tu rendija zorra asquerosaaaaaa…!!!!, -fue lo primero que le dijo don Seve justo encima de su carita por la cual ahora caían lagrimas en forma más abundante que antes, a la vez que le mandaba otra bestial estocada vergal para que no se le olvidara que era él quien nuevamente se la estaba cogiendo.
Cielo Riveros también lloraba por el intenso dolor en su vagina, el viejo era un bestia, se la acababa de meter sin siquiera haberla lubricado antes, ni siquiera un escupito le había mandado en la panocha antes de metérsela, los ríos de lágrimas brotaban copiosamente desde sus hermosos ojos verdes bañándole toda su carita.
Don Seve ya se había empezado a mover sobre el esbelto cuerpo de la desdichada mamasota quien estoicamente aguantaba las feroces arremetidas de coito que le estaban pegando a su fértil y saludable anatomía en tanto ella solo se daba sollozar por su desgracia.
Mientras se la culeaban firmemente sus bellos ojos verdes nublados en lágrimas cruelmente dieron con un vistoso retrato antiguo enmarcado en madera que colgaba en el muro de la habitación, en este estaban retratados don Severiano, y la señora María mucho más jóvenes de cómo eran ahora, pero lo más fulminante y terrible de aquello para nuestra pobrecita colegiala fue ver que al medio de ellos estaba parado un niño de edad indeterminada, obviamente era Rodrigo cuando era más chamaquito, la nena como pudo volteo su mirada para no ver mas y ahora sencillamente se puso a llorar mas amargamente que antes por todas las emociones causadas en su mente con aquella inocente y antigua fotografía.
Su casi suegro ajeno a todo esto solo se daba a moverse y a sentir las placenteras sensaciones que le otorgaba el interior del coño de Cielo Riveros a su verga que se incrustaba una y otra vez, así que fue y le dijo:
--Prepárate pendejaaaa…!!! Porque ahora sí que me voy a empezar a mover fuerteeee…!!!!, -el indeseable hombre con mucha concentración y entusiasmado hasta más no poder aceleró las fuerzas de sus empujes, su gruesa verga increíblemente ya se deslizaba como si nada por el interior de la vagina de la quebrantada chamaca que aun no paraba de llorar.
--Buaaaaaaa…!! Buaaaaaaa…!! Don Seveeeeee!!, por favorrrrrrr!! Ya… no… me… la… me….taaaaaa…!! Me dueleeeeeee…!! Sniffffffffff…!!! Snifffff…!!! Sniffffff…!!!, -Cielo Riveros se sentía mancillada, aun se sentía seca, por lo que los dolores vaginales eran terribles, pero lo que más le dolía en aquellos infortunados momentos era que por primera vez ella si sentía que mancillaba el amor que le había entregado Rodrigo.
--Callateeee perraaaa mal paridaaaa…!!, y goza de la vergaaaa..!!!, Tomaaaaaa…!!!, -bramó el casi suegro mandándole un brutal estocada que a la nena casi se le salen los ojos para afuera, para luego seguir metiéndosela y sacándosela todo lo que él quería.
Cielo Riveros quien lloraba audiblemente ya se estaba comiendo vaginalmente toda la gruesa extensión de la verga de don Severiano quien se la estaba culeando como todo un campeón, sintiendo aquel delicioso y acuoso calorcillo interior que le brindaba el cuerpo de aquella joven y atractiva Diosa que lloraba como una verdadera Magdalena. El viejo aprovechándose de su estado comenzó a decirle:
--Que te quede claro zorritaaaa…!, desde hoy pasas a ser mi mujer oficial…!!, así que te voy a estar cogiendo hasta que me harteeee…!!!, hasta que te deje bien preñada de tanta verga que te voy a meter, -por cada frase con las que le notificaba sus salidas intenciones le mandaba sólidos empujones como si con estos firmara las promesas que le estaba haciendo,
La ultrajada chamaca solo se daba recibir la verga y con ello los fuertes empujones con los que la estremecían, escuchando además todas aquellas locuras que le decía su suegro con su carita volteada en sentido contrario de donde estaba el famoso retrato.
Ya con los ríos de lágrimas secos en sus mejillas solo se daba a aguantar de como el vejete junto como olerle sus cabellos por detrás de sus perfumados oídos y que también se los lengüeteaba este seguía con sus palabrotas:
--Mmmmm…!! que rica tienes la concha pendejaaa…!!!, -le decía casi babeando y arremetiendo circularmente con su verga hacia delante, esto lo hacía con sus ojos cerrados, --No me saldré de tu cuerpo en toda la noche, para que cuando llegue el tarado de Rodrigo nos encuentre cogiendo…, jejejeje, entiende que eres una hembra soberbia… hecha solo para ser cogida por un macho como yo y nadie masssss…!!!, -con sus palabras el casi suegro nuevamente comenzaba a acelerar sus embates, --Pero como a ti aun te gustan los maricones ahora te enseñaré lo que es culiar con un macho de verdad ricura, jajajaja!! La otra vez parece que te faltó que te metiera mas verga…!! pero ahora te dejaré al día…!!!, -en tanto la colegiala aún se mantenía con sus ojos fuertemente cerrados producto del enajenante impacto emocional que le causaba estar siendo cogida prácticamente delante de la dueña de casa y que para rematarla era su suegra, sin mencionar que su conchita aun estaba seca.
Pero a don Severiano no le entraban balas, el estaba decidido a sacarle el máximo provecho placentero a esa colosal cacha que le estaba pegando a la novia de su hijastro, aunque la nena aun no sentía ni el más mínimo cosquilleo en su panocha igual se dejaba ensartar con su cuerpo totalmente brillante y mojado debido a la sudoración corporal.
El viejo que la violaba se la metía una y otra vez en forma completa y despiadada, el gusto y las placenteras sensaciones que le otorgaba la vagina de aquella exquisita y joven hembra a su verga eran indescriptibles, en cambio Cielo Riveros solo sentía que prácticamente la estaban enterrando un grueso y largo palo por la zorra, experimentando además que su casi suegro cada vez se movía más fuerte y que intentaba adentrarse el máximo posible al interior de ella, escuchando como la cama crujía y rechinaba rítmica y escandalosamente ante los fieros bombeos que hacían sobre su cuerpo.
La asustada señora María desde afuera de la habitación no recordaba que su marido fuera tan fogoso a la hora de tener sexo, temía que la pobre chiquilla cayera al hospital después de tan brutal violación de la cual estaba siendo víctima, por cada quejido de dolor que escuchaba por parte de la nena la pobre mujer se persignaba deseándole la buena nueva para cuando por fin la liberaran.
Pero al otro lado del muro don Severiano bombeaba cada vez con mas desenfreno, metía, aserruchaba y taladraba profundamente en la adolorida panocha de la colegiala, haciendo círculos en ella como si de verdad intentara agrandársela mientras resoplaba de placer.
El casi suegro estaba sudando cual animal de carga transportando piedras para construir una pirámide en el desierto, y ahora sí que las lágrimas en los ojos de Cielo Riveros ya se habían secado por completo, la nena en estas acaloradas instancias soportaba resignadamente las bestiales arremetidas de verga que le ponían a su cuerpo, ella también estaba toda mojada de sudor, así se notaba al estar ella con muchos de sus pelitos pegados en su frente, y ya inconscientemente con los ojos cerrados y levemente respirando por sus boquita semi abierta.
La pobre chamaca no supo cual fue el momento en que subió sus manitas al pecho del vejete claramente para que este no se dejara caer tan pesadamente sobre ella, pero ahora las había ido corriendo hacia las gruesas espaldas del viejo dando la impresión como si ella ya estuviese culeando de buena ley abrazada con el afortunado de don Severiano, ya que la imagen de la tremenda cacha que se estaban pegando sobre la cama era de campeonato y con ella sintiéndola con sus piernas bien abiertas, respirando por la boca, y con sus ojos fuertemente cerrados.
Don Severiano a sabiendas del portento de hembra que se estaba cogiendo había decidido prolongar lo más posible aquella terrible y antológica cogidota que le estaba pegando a la bella colegiala, los gritos y los lloriqueos por parte de la chamaca ya se habían extinguido, ahora lo único que se escuchaba en la habitación era el constante rechinar de la cama ante los violentos movimientos que se ejercían sobre ella.
Naturalmente y para no seguir solapando a nadie les diré que la perdida nena al estar siendo víctima del taladreo constante de una herramienta de dimensiones considerables inevitablemente su panocha ya estaba dando su opinión por sí sola.
Fue un no menor chorro de agüita caliente que la atractiva colegiala expulsó desde la concha con el cual le baño toda la verga a su casi suegro dejándosela aceitada y lubricándola de paso a ella también, o sea nuestra mamasota ya había empezado a sentir rico, pero ella aun se negaba a admitirlo, la cosa era que cuando el vejete mas profundizaba en las clavadas ella por puro instinto sentía imperiosamente la necesidad de devolverle el movimiento hacia arriba, así que en un momento dado amigos míos, la madre naturaleza ya había hablado, la casi perdida chamaca se vio a ella misma empujando sus caderas hacia arriba cuando la verga venía bajando, y a los pocos minutos de estos leves movimientos ya no lo eran tanto sino que ahora ella ya estaba culeando con don Seve por autentica y genuina calentura.
Cuando el vejete se percató de ello de verdad que le dieron ganas de salir a tirar cohetes como para celebrar el año nuevo, pero en vez de hacer eso en forma automática se dio a animar a la chamaca para que se siguiera meneando más rico todavía:
--Ahhhh…!! que exquisito te mueves pendejaaaa!!, --Yo sabía que tarde o temprano ibas a aceptar la vergaaa…!!!! Jajajaja!!!! Esooooo…!!!! asiiiii…!!!! Mueveteeee…!!!! Así…!!! Como solo tú sabes hacerlooooooooo…!!!! Ohhhhhhh…!!!! que gustooooo que me das putaaaaaaaa…!!!!
La nena ya estaba desatada, en una recóndita parte de su mente Cielo Riveros recordaba que su suegra debía estar escuchándolo todo, pero hacía tanto rato que no la veía que guarrillamente se dijo para sí misma que tal vez la señora María se había ido para otra parte, así que no la escucharía como tampoco la vería, además que estaba sintiendo tan rico, pensaba sin poder dejar de menear sus caderas y cintura.
Gradualmente su impetuosa sensualidad había ido tomando posesión de su mente y de su cuerpo ordenándole que se aferrara con mas energías a la obesa complexión de su casi suegro quien ahora y otra vez lo veía como su verdadero macho caliente, hasta que ya queriendo gozar y ser gozada su mente decidió capitular, y se entregó en forma embelesada y lujuriosa a todo lo que el viejo caliente de don Severiano quisiera hacer con ella.
Ahora sus delicados y desnudos brazos se aferraban con pasión a esa tremenda guata que la aplastaba no alcanzando a rodearlo completamente, pero ella lo recorría lo que más podía si como realmente quisiera fundir su esbelto cuerpo con toda esa masa grasienta que se movía gelatinosamente sobre ella mientras le metían carne de verga por su intima hendidura.
La soberana cacha que don Severiano le estaba pegando a Cielo Riveros era de escándalo, recordemos que la nena está completamente desnuda, con sus dos bellos muslos bien abiertos y recogidos, y aun con sus pequeños zapatitos con taco calzados en sus piececitos, los cuales se agitaban al mismo ritmo de la bestial cogida de la cual era víctima, mientras que don Seve sin dejar de zarandearla a vergazo limpio ahora la veía mirándolo con sus bellos ojos verdes semi cerrados, como también comprobó que de sus rojos labios caían una pequeña cantidad de saliva, señal inequívoca que aquella joven hembra ya se había rendido a los deliciosos placeres de la carne, notando también que por cada profunda estocada de verga que le ponía, la chica le regalaba una lujuriosa pero leve sonrisa en la cual solo imperaba el vicio, así que imagínensela.
Don Severiano y Cielo Riveros ahora se besaban con apasionante lascivia. La entregada hembrita mientras se besuqueaba con su suegro, y guiada por su calentura lentamente fue subiendo sus manitas hasta la nuca de este para proceder a aplicarle un delicado masaje con la yema de sus dedos en tanto la seguían culeando casi sin misericordia.
Una inmensa y desquiciante calentura se había apoderado de la tímida Cielo Riveros , el viejo Severiano quien había dejado de besarla para poder tomar un poco de aire con agrado ahora escuchaba los quejidos y suspiros de placer que emitía la caliente nena, estos poco a poco comenzaron a subir de volumen e intensidad, convirtiéndose a los pocos minutos en fuertes gritos y en alaridos de auténtico placer carnal y sexual, por lo que el casi suegro persistía en su frenético ritmo de mete y saca, y a medida que aumentaban los gritos de la colegiala, mas aceleraba y tomaba fuerzas en sus penetradores movimientos, hasta que sus oídos escucharon lo que él ya tanto había estado esperando escuchar. Las exclamaciones de Cielo Riveros fueron claras y con autentica convicción:
--Ahhhh…!!! siiiiii…!!! Así papiiiiiii…!!! Ohhhhh…!!! Ricoooooo…!!! Mmmmm…!!!!
--Te gusta cómo te la meto putaaaaaa…!!??, -le consultaba el caliente casi suegro de la chamaca quien miraba para la puerta de su habitación, claramente él deseaba que la vieja de su esposa escuchara las ardientes poterías que decía la novia de su hijo,
--Siiiii, don Seveeeeeeeeee…!!!, -le contestó la nena con autentica desesperación, y para luego seguir emitiendo guarradas y zorrerías de grueso calibre, --Métamela todo lo que quieraaaa…!!!!, mas adentroooo…!!!, bien para adentroooo…!!!!, --Métamela mas firme por favorrrrr…!!!!, -le demandaba a grito limpio la colegiala a la misma vez que intentaba menearse con sus caderas con las mismas fuerzas en que el viejo le ponía sus feroces clavadas.
(Minutos antes en el living de la casa en donde se llevaba a cabo semejante culeada)
La señora María se mantenía en forma angustiada esperando a que su marido terminara de violarse a Cielo Riveros , pero los enajenantes minutos pasaban y lo que estaba ocurriendo en su propia habitación matrimonial se prolongaba más de lo que ella pensó en algún momento. En forma nerviosa se había tenido que ir a preparar un té para los nervios, ni siquiera deseaba ni imaginarse que es lo que ocurriría con la relación de su hijo con su novia después de ella haber sido testigo de la brutal violación por parte de su esposo hacia la atractiva jovencita.
En eso estaba la buena señora cuando con alivio puso atención que la pobrecita de Cielo Riveros ya no gritaba ni lloraba, ahora era solo el prolongado crujir de la cama y los resortes del colchón que subían y bajaban lo que se escuchaba en el silencioso ambiente de la casa, sumándole a lo anterior los sonoros resoplidos que emitía su esposo cuando este al parecer se dejaba caer sobre el cuerpo de la callada chamaca.
Pero a la pobre vieja casi se le cae la taza de té de sus manos cuando escuchó que su marido elogiaba a la jovencita diciéndole lo bien que se movía ella, así que agudizando su oído creyó sentir que ahora la cama tenía un crujido distinto al interior, este era más rítmico y mejor sincronizado que el anterior pensaba en alguna parte de su mente la vieja, para luego decirse y convencerse de que eso solamente lo decía Severiano para seguir humillando a ella y a la joven.
Y justo en el momento en que se iba a pegar otro sorbo de té la tasa ahora sí que se le cayó de las manos al escuchar que era la misma nena quien exclamaba en voz alta y sin que nadie se lo ordenara lo siguiente:
“--Ahhhh…!!! siiiiii…!!! Así papiiiiiii…!!! Ohhhhh…!!! Ricoooooo…!!! Mmmmm…!!!!”
Esos gritos y palabrotas no eran de una mujer a la cual se la estaban violando se dijo de pronto la señora, pero lo que la dejo boquiabierta fue la segunda tanda de leperadas que berreaba la caliente chiquilla:
“--Siiiii, don Seveeeeeeeeee…!!!, --Métamela todo lo que quieraaaa…!!!!, mas adentroooo…!!!, bien para adentroooo…!!!!, --Métamela mas firme por favorrrrr…!!!!”
En tanto adentro de la habitación el vendaval de guarrerías continuaba por parte de ambos:
--Eres la zorra mas suculenta y caliente que me he culeado en mi vida pendeja…!!!, -le notificaba ahora con cara de apasionado don Seve a la colegiala, y haciéndole ver sus nuevos requerimientos. --Quiero que desde hoy solo seas para mí y de nadie más…!!!!, -le exigía el viejo quien seguía aserruchando con toda la calentura del momento.
--Siiii papiiii…!! Yo solo seré suyaaaaaaaa!! Soy su… suyaaaaaaa…!! Soy su mujerrrrrrr…!!, -Cielo Riveros no era consciente de todas las peladeces que le estaba diciendo a su suegro, y menos era consciente que la señora María estaba parada en el umbral de la puerta viéndola y escuchando las estupideces que le decía a su marido.
La pobre vieja desde la puerta de su propia habitación y con sus ojos con lágrimas veía claramente la descompostura que estaba sufriendo la descarada novia de su hijo, que en esos momentos movía sus caderas rítmicamente a las clavadas que el caliente de su marido le pegaba. La veía debajo del cuerpo de su esposo con su barbilla alojada en el peludo hombro de este, estaba con sus ojos fuertemente cerrados y con sus cejas inclinadas hacia arriba, determinando que verdaderamente esa puta desvergonzada estaba cogiendo con cara de caliente.
En un extraño estado de nerviosismo mezclado con rabia la señora María veía como el cuerpo de Cielo Riveros estaba siendo preso de unos fuertes y brutales espasmos de placer, la buena señora aun algo incrédula notaba como esa joven puta se retorcía e intentaba acoplarse aún más férreamente al grotesco cuerpo obeso de su esposo, y como ella totalmente salida de sus cabales le pedía,
--Sigaaaa don Seveeeee…!!, Sigaaaaaa…!! Métamela enteraaaaa…!!! estoy a punto de irme cortadaaaaaaa...!!!! Métamela más fuerteee…!!!! Mas fuerteeeee…!!!!, Todaaa…!!!!, Todaaaa…!!!!
La infeliz madre de Rodrigo ya no quiso ver más, ahora estando nuevamente sentada en el sofá deseaba con todo su ser que esos dos sin vergüenzas terminaran de hacer lo que estaban haciendo, para que después esa joven y sucia ramera se fuera lo antes posible de su casa para nunca más volver a mirarle esa cara de puta que ella le había visto solo hacían muy pocos minutos.
Pero en la habitación matrimonial los contendientes sexuales estaban muy lejos de querer parar la faena de apareamiento, el caliente Severiano empujaba hacia el interior de la joven sin cejar en su empeño, hasta que ambas matas de pelos, una suavemente sedosa y casi depilada, a diferencia de la otra que era motudamente peluda y espesa se quedaron pegadas y haciendo desquiciantes círculos de refriegue coital, sin despegarse ni siquiera un milímetro, lógicamente tanto el macho como la hembra ya estaban casi al borde de un fenomenal orgasmo.
Severiano ya creía ver la inminente explosión orgásmica que se venía en el cuerpo de su joven compañera de apareamiento, ya que su ardiente concha derramaba abundantes y calientes chorros de caldos vaginales, no estaba seguro si la nena realmente se estaba corriendo o se estaba meando, pero de lo que si estaba seguro era que le estaban bañando la verga en forma deliciosamente exquisita.
--Asii…!!, así…!!! don Severianoooo!! Deme más fuerteee...!! deme más fuerteeee…!!!, -continuaba gritándole Cielo Riveros ahora con su espalda totalmente enarcada y con su vagina bien levantada, deseando para sus adentros y con todo su ser que su casi suegro descargara todo ese semen añejado que le había dicho poseer bien adentro de su cuerpo con la única finalidad que este la preñara tal como le había dicho.
--Te gusta mi verga pendejaaaaaaaaa…!!!, -le consultó don Seve sacándola a medias de su delirante estado de placer.
--Me encantaaaaaaaa…!!!, -la respuesta de la chamaca fue instantánea, pero el viejo quería entretenerse y calentarse aun mas antes de acabar dentro de ella.
--Dime zorraaaaa…!!!, te has acostado alguna vez con el maricon de Rodrigo…!!??, -el viejo le preguntaba siempre meneándose arremetedoramente.
La caliente mamasota por un momento le extrañó la pregunta del viejo que la estaba culeando, pero su verga la sentía tan rica mientras la perforaba tiesamente, que su mente no le dio para pensar que Rodrigo era su actual novio y que su casi suegro lo único que deseaba era envilecer y vejar la relación que ellos tenían.
--Noooooo… no le hemos h… he.. choooooo…!, -le dijo a la misma vez que se mordía fuertemente su labio inferior sin dejar de enarcarse para así sentir más profunda la verga que le estaban metiendo.
--Jajajajaja…!!! ya lo sabía yo pendejaaa…!!! Tú eres mucha hembra para un pobre maricon como ese, jajajajaja…!!!!
Increíblemente para todos nosotros el grado de calentura de Cielo Riveros era tal que ella en esos momentos y al estar siendo cogida brutalmente por un verdadero macho caliente, le encontró toda la razón del mundo a su suegro, por lo que bien convencida de que estaba en lo correcto fue y se lo confirmó:
--Siiiiiiiiiiiiiii…!!!!, -le dijo al mismo tiempo que relajando todos los músculos de su cuerpo los volvió a recoger atenazándose enérgicamente con sus piernotas y brazos a ese obeso y gelatinoso cuerpo de macho maduro que la estaba haciendo ver las estrellas.
Atenazada y todo la nena seguía meneando sus caderas para que el viejo sintiera más rico aun de lo que debía estar sintiendo.
--Dime porque no te has acostado con el…!!??, -el viejo sabía que de un momento a otro le soltaría los lecherasos.
Y nuestra nena, tristemente para Rodrigo y su madre que lo estaba escuchando todo desde afuera, le contestaba con la verdad a su suegro:
--Porque Rodrigo no me c… ca… calientaaaaaaaaa…!!!! Ohhhh… ricooooo!!!! exclamo al mismo tiempo que le soltaba otro chorro de caldos vaginales, lo que acababa de decir ella misma la estaban calentando en demasía.
--Jajajajaja…!!! dilo en vos mas fuerte pendejaaaa… di que un pobre maricon como ese no te calientaaaaa…!!!!, -el vejete a toda costa deseaba que su esposa tomara conocimiento de todas las guarrerías que estaba soltando de sus propios labios la dulce novia de su hijo.
--Si don Seveee…!!!!, --Mmmmmm…!!!! Ohhhhhh… Ricooooo…!!!!, -algo en su mente la detenía a que dijera semejante barbaridad.
--Dilo Zorraaaaaaaaa…!!!!, -junto con presionarla el viejo se dejaba caer con mas fuerzas sobre ella, si hasta los testículos del vejete ya parecía que en cualquier momento se introducirían por el lubricado coño de Cielo Riveros .
Ambos amantes ya estaban que se corrían debido a la ardiente y enloquecedora conversación que se le había ocurrido a don Severiano, los dos se encontraban en la estratosfera de la calentura. Hasta que la nena pensando con la zorra y no con su mente fue y le dio en el gusto al vejete:
--Ay don Seveeee…!!! si es verdad…!!! Ese pobre maricon de Ro… Rodrigo no me calientaaaaa…!!! –Uffffffffsss…!!!, --Yo… yo… yo soy mucha hembra para el…!!!! Ohhhhhh Diosssssss…!!!!
--Jajajaja…!!! Que bien…!!!!, y dime como para que tipo de machos eres hembra Tú, pedazo de zorraaaaaaaaa…!!!!!, -el viejo comenzó a perforarla con rabia y aceleradamente, para que la chiquilla le diera la respuesta que él quería y no le fuese a salir con una mamada.
--Yo… yo… soy una hembra hecha para un macho como Ustedddd…!!! Ohhhhh don Seveeeeee…!!!! me corroooo…!!!! me corrooooooooooooo…!!!!!
El viejo automáticamente se enterró hasta lo más profundo de las tiernas entrañas de aquella dulce y caliente chiquilla que se encontraba perdida en la total calentura.
En el momento de que Cielo Riveros le dio su ultima respuesta ya no fue capaz de resistir tanto gozo, y tal como le dijo al vejete que se corría una formidable y placentera corriente eléctrica que le nacía desde lo más profundo de su coño se desparramaba a raudales hacia todas las extremidades de su cuerpo y que le hicieron explotar en uno de los más formidables y grandiosos orgasmo sentidos en su vida.
--Siiiiiiiiiiiiiii…!!!, Ricoooooooooo…!!!!!, -gritaba Cielo Riveros como una verdadera fulana, sus placenteros alaridos fueron emitidos desde lo más profundo de su ser y de su alma, estos recorrieron y retumbaron por todos los rincones de la casa de Rodrigo. De la misma forma don Severiano estimulado hasta la insania por la calentura de la chamaca ya estaba por verter su apremiante y acumulado semen al interior del cuerpo de tan estupenda y curvilínea jovencita.
Luego de que Cielo Riveros emitiera su placentero grito de éxtasis con el cual le dejaba las cosas claras a su suegra que la escuchaba desde el living de la casa, el viejo la premió con un asqueroso beso en la boca el cual daba la impresión que se la estaba comiendo.
--Eres mi mujer pedazo de zorraaaaa!, -le dijo una vez que se separó de sus labios, --Ya no aguanto masssss!!!, me voy… a… co… rrerrr… adentro tuyoooooo!! --Ohhhhh que… ri…cooooo se siente estooooo…!!!!!, --Lo… vas… a … re… ci… birrrrr…!!! pu… taaaaa…!!!! to… maaaaaaa…!!!!!, -gruñó con desesperación clavando su mirada en el hermoso rostro descongestionado por el placer de Cielo Riveros , chorreando y expulsando con fuerzas en el interior de su matriz de 6 a 8 potentes chorros de hirviente y reproductivo semen, el cual salía escupido copiosamente y con energías desde su verga, invadiendo y avasallando las intimas entrañas de la excitada Cielo Riveros quien sentía la potencia y virilidad de su macho.
Se quedaron unidos en esa posición por un buen rato, la toda mojada colegiala se mantenía con sus bellos muslos bien abiertos y con don Severiano aun clavado con su verga al interior de su cuerpo. Hasta que una vez que el casi suegro estuvo seguro que en sus testículos no quedaba ni una gota de semen lentamente se fue saliendo y desclavando su verga del portentoso cuerpo de Cielo Riveros .
La pareja se quedó tendida en la cama exhausta por espacio de unos buenos minutos, para que sus transpirados cuerpos desnudos pudiesen recuperarse ya que con toda seguridad pensaban volver a hacerlo.
--Eres una verdadera puta en la cama a la hora de coger pendeja, -el viejo Severiano mantenía a su joven hembra abrazada su obeso cuerpo, --Así descansemos un ratito y luego repetiremos, --Viejaaaaaaa…!!!, ven que te necesitamossssss…!!!!.
Cielo Riveros con solo escuchar que el viejo que se la acababa de coger estaba llamando a su esposa como que se le anduvo pasando a medias la calentura, por lo que le dijo:
--Don Seveeeee…! que haceeee…!? no llame a su esposa que me va a ver acostada con Ustedddd…!
--Y que tiene…?, si ya lo escuchó todo, además que ahora si deberás mandar a la verga a tu noviecito, jejejeje…!, si acabas de bufar a los 4 vientos que él es un pobre maricon y que no te merece…, jajajaja…
Cuando la avergonzada chica iba a decir que ella de alguna forma no había querido decir eso la señora María ya hacía su aparición por la puerta de la habitación:
--Porque siempre te demoras tanto cuando yo te llamo…? –Le dijo el vejete en forma mal humorada a su esposa,--Tráeme una corona bien heladita y un refresco para mi mujer…!
La doña observaba incrédula a aquella pareja de desvergonzados que estaban acostados en su propia habitación completamente desnudos y sin cubrirse. La dolida señora no podía quitar la vista de la curvilínea figura de Cielo Riveros al desnudo.
La nena por su parte quien estaba roja como un tomate y abrazada de costado al cuerpo del hombre que había sido su macho, se daba cuenta de ello y de reojo la miraba avergonzada, la pobrecita quería morirse, aun así mantenía una de sus delicadas manitas posada y descansando en el peludo pecho canoso de don Severiano. Y que mas podría haber hecho?.
--Y que nos miras con cara de mensa…!!! Ve a buscar una chela y el refresco, que mi mujer debe tener sedddd…!!!, -le volvía a repetir el viejo ahora con su cara de mas enojado que antes.
La doña quien sentía unas tremendas ganas de tomar de las mechas a la descarada chiquilla, abofetearla y despacharla de su hogar, otra vez se sintió intimidada por su esposo y simplemente bajó su vista para responderle a su marido.
--Severiano… no quedan cervezas, si ya te las has bebido todas…
--Pues te me vas a comprarlas…!!!, -le ordenó el vejete.
--Pero Seveee… ya es tardeee y…
--Que te vas comprarlas he dicho…!!!, el negocio del pelado Chula cierra re tarde así que ahí encontrarás, saca dinero de mi pantalón y te me vas por esas cervezas…
La amedrentada mujer silenciosamente ingreso a esa habitación que estaba impregnada a olor a coño y a verga, para luego tomar desde el suelo los pantalones de su esposo para sacar dinero, no pudo evitar poner atención en los albos calzoncitos de Cielo Riveros que estaban todos enrollados al lado de estos. Ya sin pensar en nada más la dolida mujer tomó el dinero y salió lo más rápido que pudo de esa indecente habitación.
Una vez que don Seve y Cielo Riveros nuevamente estuvieron a solas fue la atribulada chamaca quien rompió el silencio:
--Don seve…!, porque me está haciendo todo esto…? ahora nunca más podre ver a la señora María y tampoco a Rodrigo… Sniffsss…!!!
--Como que Nooo…!!, -le contestó su casi suegro en el acto quien con su mano y dedo pulgar limpió de su carita unas tímidas lagrimas que le corrían, --Entiende pendeja que desde hoy día tu eres la hembra titular de esta casa… --TU eres mi mujerrrr…!!!, -le seguía repitiendo don Seve, --Y yo soy tu maridoooo…!!!, no permitiré que nadie te diga nada por lo que hagas o dejes de hacer, lo único que deberás arreglarme lo antes posible es mandar a la verga al Rodriguito ese, y cuanto antes quiero que te largues de tu casa con todos tus trapos y te vengas a vivir a esta casa.
--Pero pe… pe…roooo… y Rodrigo y su esposa… que será de ellos…!? Usted esta locooo…!!!
--Ellos perfectamente se pueden quedar a vivir aquí… o si quieren largarse que se vayan… me da lo mismo…!!! Además que necesito a la María en la casa para que nos atienda…!!!
Los sentimientos que asaltaban a la muchachita eran totalmente contradictorios, ella acababa de mantener relaciones sexuales con su suegro, y si bien otra vez lo había sentido muy rico igual pensaba que todos esos planes que tenía el viejo en su mente eran demenciales.
Estando en estas reflexiones los hermosos ojos verdes de la chamaca volvieron a dar con el antiguo retrato del matrimonio con Rodrigo, esta vez el impacto emocional no fue tan violento como lo había sido momentos antes, mirándolo en forma pensativa a su mente le vinieron los recuerdos de haber visto a su madre casi encuerada de la mano de aprovechador sargento que se la había violado, se sumaron a estos la traición de Claudia con don Pedro que quizás a estas horas también deberían estar cogiendo, pensaba la nena, pensamientos que extrañamente la hicieron arrimarse con mimosa seriedad al peludo pecho de don Seve, su carita estaba posada justo al lado de una tetilla del obeso vejete.
Una vez que descansaron desnudos y abrazados por un tiempo indeterminado y viendo que las cervezas aun no llegaban, el viejo determinó que ya habían descansado lo suficiente, el había sentido a la nena adosándose bien apegada a su panza así que mirando su cuerpo desnudo aun brillando quiso otra vez que se pusieran a pasarlo bien:
--Ponte en 4 patas al final de la cama y chúpamela de nuevo pendejaaa…!!, quiero ver tu cuerpo levantado ese culo, mira que en un ratito mas te lo voy a reventar, jejeje, ya apúrate y hazme una buena mamada!!, -le solicitó mientras él se acomodaba de espaldas para disfrutar la nueva felación que le estaba solicitando.
Cielo Riveros quien aun tenía en su mente los recuerdos de las traiciones de las personas que ella mas quería como pudo fue tomando la ubicación que le habían solicitado, y una vez que ya estuvo en la indecente posición a 4 patas puesta en diagonal sobre la cama para que el viejo viera y tocara todo lo que él quisiera se agarró con sus dos temblorosas manitas bien sujeta a la peluda base de la ya bien erguida verga y se la metió en la boca para comenzar a chuparla y a lamerla con sus ojos cerrados, procurando no pensar en otra cosa que no fuese en hacerlo sentir bien, y todo en venganza de quienes la habían traicionado.
La colegiala ya se la mamaba bien concentrada y con sus rojos labios bien apretados, su cabeza que subía y bajaba rápidamente también hacía círculos de vez en cuando, chupando sin parar ni por un solo momento, se la mamaba como una verdadera desesperada, lamiendo todo lo que pudiera, moviéndole su lengua circularmente por el venoso tronco y el glande…
--Arrrrghhhss…!! Pero que zorra más exquisita eres para chupar la verga mamitaaa!! --Eso es…!! así…!!! así…!!! Mmmmm…!!!! Arghhhhh!!!!, -gruñía y bufaba el vejete ante la sabrosa mamada de verga que le estaba mandando Cielo Riveros , --Esooooo…!!! Mama la vergaaaa…!!! Cométela todaaaaa…!!!! Todaaaaa…!!!! Trágatela entera putaaaaa…!!!!
Después de unos 15 minutos por lo menos de una morbosa y rica mamada, Don Severiano se la sacó de una, Cielo Riveros extrañada se puso de rodillas y se dio vuelta para quedar mirando al vejete por si este le hacía otra proposición, pero el casi suegro solo se la quedó mirando absorto, que soberbia e imponente se veía la pendeja arrodillada en la cama y con las comisuras de sus labios chorreándole restos de líquidos pre seminales, sus colosales tetas y todo su cuerpo brillaban hipnóticos y sugestivamente.
El viejo Severiano una vez de haberse recuperado de tal estado rápidamente se recostó en el cama con la verga apuntando hacia el techo, para luego decirle…
--Ven…!! Ahora tengo ganas de que te montes sobre mi verga tu solita y quiero que me la cabalgues…,
La nena que otra vez se sentía un mero objeto sexual y eso le gustaba, así que con los más delicados y femeninos movimientos que ella hacía en forma natural, gateo la poca distancia que la separaba de su suegro para después levantar una de sus poderosas piernotas pasándola por sobre la panza del vejete hasta quedar montada sobre él y quedar con su verga justo a la entrada de su ya destilante panocha.
--Métetela tu solita Cielo Riveros cita…!, quiero verte hacerlo…!, -le ordenó el viejo…
Cielo Riveros quien puso atención que esta era la primera vez que desde que conocía al vejete este la llamaba por el diminutivo de su nombre sintió una comezón sin precedentes en la más recóndito de su zorra, los deseos recién nacidos por clavarse la verga de su casi suegro ya casi la consumían, así que tomó ese bien parado y tieso mástil de carne y muy decidida lo ubicó en la entrada de su intima hendidura, para luego y casi en el acto cerrar sus ojos y dejarse caer de un solo envión.
La nena otra vez estaba desatada y convertida en toda una hembra brava ya que ella misma y sin esperar ordenes de nadie comenzó a mover sus caderas en forma acompasada para que la verga le entrara en su totalidad, y mientras esta mas se enterraba en su cuerpo ella mas iba tomando velocidad, todo esto ante un muy sorprendido Severiano, que de pronto la vio quedarse paralizada con la verga totalmente enterrada en sus entrañas.
La colegiala creía sentir esa vergota perforándola hasta casi más arriba de su cintura, por lo que inclinó su cuerpo hacia adelante para sujetarse con el respaldo de la cama, quedando con todas sus tetas colgándoles y meciéndose exquisitamente y expuestas para que don Severiano las chupara todo lo que el quisiera.
Don Seve no se la quería creer, veía y sentía a esa hermosa hembra de 18 años clavada a su verga en su totalidad, desde su posición la miraba por ambos costados de su brillante cuerpo, en donde veía como la línea de su cintura se transformaba en la línea de una amplia cadera para luego curvarse y convertirse en el opulento radio de su trasero bajando precitadamente y dibujar la recta que le daba forma a sus muslos abiertos, entre el lado de su bajo estomago por el lado opuesto a sus caderas se veía esa línea de carne doblada que se formaba al estar ella puesta casi en 4 patas y a horcajadas sobre su verga, y todo esto sumándole a que además creía sentir como los sedosos y suaves pelitos de su zorra, se enredaban con los gruesos pendejos de él, ya que en ese mismo momento la caliente mamasota muy suavemente había empezado a mover sus caderas y cintura en forma circular y haciendo presión hacia abajo sobre su verga como si realmente se la estuviera exprimiendo para volver deslecharlo.
Mientras esto se sucedía en la casa de don Severiano la señora María ya venía de vuelta con el pedido de cervezas, y en el momento que estando ya casi a tres cuadras de llegar a la casa sintió que alguien la llamaba.
Con mucho pesar se dio cuenta de que su hijo igual la había visto desde la farmacia, ya que para hacer el trayecto para llegar al negocio del pelado Chula ella obligadamente debía pasar por el trabajo de Rodrigo.
El chamaco la alcanzó corriendo:
--Mamá que haces a estas horas en la calle…?, ya es muy tarde…!, -le dijo apenas estuvo a un lado de ella.
--Ehhhh…!, andaba comprándole cervezas a Severiano…!!! Justo se le acabaron hoy día…, -la señora María intentaba hablar lo más normal posible, pero su hijo que no era tonto sabía que ella lo estaba solapando en algo.
--Y porque no salió a comprarlas el…?, -le dijo de pronto el chamaco.
--Mijo… tu sabes que él trabaja todo el día y llega cansado a la casa… entonces me pid…
El joven Rodrigo no la dejo terminar:
--Es un aprovechador…!, -el muchacho en ese preciso momento vio las marcas en su cara, --Porque… porque tienes esas marcas en tu cara…!?
--No es nada… y no te preocupes, es solo que sin querer me golpee en una ventana…!, -la señora María sabía que su hijo iba a querer ir a arreglar cuentas con su esposo no importándole que siempre era él quien terminaba perdiendo y sacando la peor parte.
--Te volvió a pegar verdad…!?, -el chico estaba realmente furioso.
--No te preocupes Rodrigo y vuelve a tu trabajo…!!! Yo ya estoy acostumbrada… además que yo tuve la culpa mijo…
--Porque siempre lo defiendes…!!?? no te entiendo…!!
La señora intentando calmar al tensionado chamaco otra vez le hablaba un tema que ya en muchas otras ocasiones lo habían visto:
--Rodrigo… hijo, fue él quien te crio cuando tu padre murió… recuerda que al principio él no era así, o acaso ya olvidaste cuando nos llevaba a pasear a la playa o al campo?, o cuando estuviste en la clínica por tres meses cuando te operaron… fue él quien cubrió todos los gastos… si yo hubiese estado sola nunca hubiera logrado tener todo ese dinero como no lo entiendes…? Él… él es raro para sus cosas, pero en el fondo no es un hombre malo…!
El chico quien algo de razón le encontraba su madre, igual le dijo lo que él pensaba:
--Pero eso no le da el derecho a pegarte ni a tratarte como a una sirvienta…!, además que no me gusta que salgas a estas horas a comprarle cervezas o lo que sea…
--No es nada hijo…!!, como ya te dije antes… tu sabes que es el que nos mantiene…
Pero el chamaco estaba absorto sacando conclusiones:
--Mamá…!, -le dijo de pronto, --Hoy es viernes y por lo general el después de su trabajo se llega solo a bañar para irse a jugar dominó con sus amigos y siempre llega tarde, y si no, es él quien sale a comprar si es que necesita algo porque así aprovecha de hablar con sus amigotes esos que se juntan en el negocio del pelado Chula… porque te envió a ti?
--El está… está algo ocupado mijo…, por eso no pudo ir él…, -le contestó la señora María volviendo a tomar la bolsa con las cervezas para que su hijo se fuera al trabajo.
--Ahhh… claro ya me lo temía… volvió a meter a otra puta a la casa verdad?. –el chamaco sintió ganas de ir y matarlo, y viendo que su madre se quedó callada sin saber que contestarle la siguió presionando, --Vamos mamá ya no le tapes los abusos a ese desgraciado… esta con una puta en la casa verdad…!?
La señora María que no sabía qué cosa contestarle a su hijo al estar ella clara que el chico tenía toda la razón, pero lo que no sabía su chamaco que con la puta que se estaba revolcando su padrastro era su propia novia. Y recordando la cara de ramera que tenía esa guarrilla cuando ella estuvo parada en la puerta no le quedó más que contestar:
--Si mijo… Severiano está… estaá… con una mujer sucia metido en la cama… pero no te preocupes… yo ya estoy acostumbrada…
--Es un miserable…!!!, vamos yo te iré a dejar a la casa…!!!
--Nooooo…!!! Rodrigo… por favor vuelve a tu trabajo…!!!, -le rogó la señora María a su hijo para evitarle el dolor de que se encontrara a su novia teniendo relaciones sexuales con su padrastro.
--Ni que lo digas… yo te iré a dejar…!, además mi jefe fue el que me avisó que te vio pasar y me dio permiso para venir a ayudarte… así que dame la bolsa…!
--Está bien mijo…! pero… pero solo me dejarás en la puerta y te vienes… no quiero que tengas problemas en tu trabajo por mi culpa.
Una vez que madre e hijo hicieron el corto recorrido hasta la casa, don Seve con Cielo Riveros estaban arremetiéndole firme a la fulminante cacha que se estaban pegando.
El chico rápidamente sacó de su bolsillo sus llaves de la puerta y fue él quien abrió y entró de los primeros. La señora rápidamente se interpuso en su camino ya que no quería verlo sufrir. Los femeninos gritos y quejidos que provenían de la habitación eran guturales.
--No mijo…! por favor no vayas ni le digas nada… que o si no te va a pegar…!
--Es que el no puede ofenderte de esta forma…! Déjame ir y decirles unas cuantas verdades, sobre todo a esa inmunda puta…
--Hijo me prometiste que te irías al trabajo y que solo me ayudarías… por favor no entres a esa habitación… si de verdad me quieres por favor no les digas nada.
Mientras tanto los gritos que provenían de la habitación matrimonial eran legendarios.
--Ese miserable… si esta con la misma puta de la otra vez…!, -le dijo el chamaco a su preocupada progenitora.
--Tu ya los habías escuchado…!?, -el semblante de la señora era de sorpresa, ya que ahora entendía que su hijo ya los había escuchado por la forma en que dijo lo último.
--Si, por la forma en que chilla esa ramera… es la misma que una vez ya trajo a la casa…!!!
--Mijo por favor vete…!!!, -le dijo finalmente la señora María, --Yo me las puedo arreglar sola… ya para mañana se habrá ido…
--Está bien… me iré…!, pero solo porque tú me lo estas pidiendo, y enciérrate en mi habitación y no los escuches…
--Así lo haré mijo… no te preocupes… y ve con cuidado.
Una vez que por fin ya se quedó sola en el living de la casa la doña rápidamente sacó las cervezas y las puso en el refrigerador, luego de eso sacó una pequeña bandejita en donde ubicó una de las botellas y un vaso, estuvo a punto de poner otro vaso con refresco, tal como le había dicho su esposo, pero finalmente no lo hizo, ella no iba a atender a esa descarada y sinvergüenza pendeja que quizás desde hacía cuanto tiempo que se estaba acostando con su esposo a espaldas de ella y de su hijo.
En tanto, adentro de la habitación matrimonial la cogidota que se estaban pegando los amantes ya era de escándalo, Cielo Riveros siempre montada sobre la panza del vejete seguía haciendo una serie de ondulaciones casi diabólicas, sus movimientos pélvicos con los que se comía la verga de don Seve eran alucinantes, los hacía con vehemencia de atrás y hacia adelante y bien rapidito, la chamaca ahora se movía solo por instinto animal.
Fue en el momento en que Cielo Riveros se movía fuerte sobre la verga de don Severiano meneando sus caderas en forma ondulatoriamente exquisita en que la señora María entró a la habitación:
--Se… Severianoooo… aquí traigo tu cervezaaa…!, -la señora aunque no quería mirar esa escandalosa imagen igual no podía quitar su vista del cuerpo de la chica que si bien se seguía moviendo sobre la verga ya no lo hacía en la forma tan desenfrenada como lo había estado haciendo, no la miraba porque se estuviera calentando ni nada parecido, era simplemente que aun no se la creía que una joven tan atractiva como lo era Cielo Riveros se acostara con su marido. La situación sencillamente no le cuadraba para nada, y tan señorita que se veía, se decía. Fue el viejo quien la sacaba de estas extrañas meditaciones.
--Trae esa bandeja y déjamela en el velador…, -la doña veía como su esposo le daba instrucciones con sus manazas puestas en las resplandecientes caderas de su joven amante.
Cuando la colegiala escuchó la voz de su suegra en forma automática fue frenando sus movimientos, pero no entendía porque no podía dejar de moverse en forma completa siendo que lo normal era que ella se desclavara de la verga y se tapara.
Cielo Riveros se daba cuenta que la señora María estaba mirando como ella se estaba culeando a su esposo, y como ya lo dije antes ella no podía parar de moverse, lo único que pudo hacer fue despegar sus manitas del respaldo de la cama y enderezar su cuerpo quedándose meneando suavemente sobre la verga que tenia bien clavada a la concha, era como cuando uno detiene el auto y lo deja con el motor encendido, para que se entienda.
La señora María con sus piernas temblorosas ingresó hasta donde estaba el velador, solo miraba de reojo el desnudo cuerpo de la bella chamaca, apenas saliera de esa inmunda habitación se encerraría en la alcoba de su hijo tal como este le había dicho, pensaba la viejita.
--Y donde está el refresco de mi mujer…!!??, -le consultó con enfado el viejo Severiano a su esposa.
La dolida doña tras pensársela por unos segundos le dijo lo que ella pensaba del asunto:
--Yo… yo no atenderé a esta p…pu…putaaa…!, -dijo finalmente mirando por primera vez con odio a la desnuda chamaca que la expresión de su carita era como que si no le importara lo que ahí estaba sucediendo, Cielo Riveros también se quedó mirando a la vieja, pero solamente pestañeando sensualmente debido a lo muy rico que sentía la verga que tenía clavada.
El indignado vejete que por nada del mundo retiraba sus manos de las suaves caderotas que se movían acompasadamente sobre su apéndice casi fulminó a su esposa con su respuesta:
--Si la atenderassssss…!!!, así que vamos trayendo ese vaso con refresco que te pedí…!!!!! Y no quiero que nunca más te refieras así a ella, porque o si no te juro que te pateo hasta dejarte inconsciente…!!!!
--Severiano ya basta…!!! He hecho todo lo que me has pedido… pero no voy a tolerar…
--Cállate desgraciadaaaa…!!!, mira si no vas a la cocina ahorita mismo y me traes ese vaso date por despachada de esta casa, --Ahhhh pero recuerda que tu chamaco entra a la Uni este otro año… quien le va a pagar esas mamada si se van de aquí… se las pagarás TU?, porque con lo que gana ese pendejo en la botica no le alcanza ni para comprar la sal de todo lo que se come en el mes… Así que decide…!
--Esta bien Severianooo…!, lo traeré… pero solo porque…
--No…!!!, he cambiado de opinión…!, -le interrumpió el viejo, --Chamaca dile que te traiga algo para beber…!!
--Es que don Severiano… parece que la señora María está algo enojada conmigo…, -le dijo la caliente nena que no paraba de moverse no importándole su desnudez y que su ex casi suegra estuviera a menos de un metro de ella.
--Pídeselo pendejaaaa…!, o si no me levantaré de la cama y la voy a moler a palos delante tuyooooo…!!!
Como la nena deseaba que esa señora se fuera lo más pronto posible de aquella habitación para ella seguir en lo que había estado haciendo antes de que la interrumpieran fue que le dijo:
--Ehhh… señora María traigameeee… un refrescooooo…!
--Y dile que se apure porque estas cansada con lo que estás haciendo…!!!, -el viejo ahora también le hablaba con prepotencia a la colegiala.
--Y por favor ap…
--Nooo…!!!, pídeselo sin el por favor…!!! Mándala con más autoridad…!!! Recuerda que desde hoy tu eres la mujer de esta casaaaaa…!!!!
--Ehhh…!! y apureseeeee…!!, porque ya estoy cansada con lo que estoy haciendoooo…!!!!, -le dijo finalmente la nena moviéndose exquisitamente despacito y mirando a la pobre señora María pestañeando sensualmente con sus bellos ojos verdes, de verdad que con solo hablarle de esa forma le estaban haciendo sentir más rico todavía.
--Ya escuchaste a mi mujer estúpida…!!! ahora tráele lo que te está pidiendo…!!!
A la humillada señora María no le quedó más remedio que ir a buscarle el refresco y dejárselo en la misma bandeja de la corona. Los amantes en todo momento siguieron culeando como si ella no existiera por lo que la pobre mujer una vez que le trajo el refresco que le pidió Cielo Riveros no le quedó más alternativa que irse a descansar a la habitación de su hijo, ya que estaba claro que la joven putita de Severiano no se iba a ir hasta el siguiente día.
Mientras que en la habitación principal a don Severiano hasta se le caían las babas por tan exquisitos movimientos de caderas y pélvicos que le asestaba la hermosa colegiala a su verga, sentía que esta se la apretaba con su panocha, como si esa zorra estuviera succionándole la verga para volver a extraerle otra vez hasta la última gota de semen, que rico culeaba la pendeja se decía el vejete para el mismo.
Una muy lujuriosa Cielo Riveros que en aquellos delirantes momentos otra vez estaba siendo presa de las mas placenteras sensaciones fue aumentando el ritmo de sus meneos, ahora se sacaba la verga de don Severiano casi hasta un poco más de la mitad, para luego dejarse caer con brutalidad, su cintura se movía en forma frenética.
--Arggggssss…!!! que rico que culeas putitaaaaa…!!!, -le dijo don Seve a su hembra.
--Le gustaaa…!?, Le gusta como se lo hagoooo…!?, -le consultaba la nena siempre jadeando exquisitamente mientras sus chichotas se movían ondularmente frente a la cara del excitado vejete.
--Si putillaaaaa…!!! Así…!!! Menéate mas fuerteee…!!! –Ohhh me encantasssss…!!! Slurrpssss…!!!! Mas fuerteee…!!! Slurpssss…!!!, -era el sonido de su lengua al momento en que le chupaba y le apretaba las tetas con fuerzas, --Eres toda una perra calienteeee…!!!, -le gritaba y se quejaba su casi suegro.
--Ahhhh…! Mmmmm…!! don Seveeeee…!!! se la siento a la altura de mi ombligoooo…!!!, -le dijo la nena en el mismo momento en que se dejo caer completamente, comiéndose toda la extensión de esa gruesa verga caliente para comenzar otra vez con un frenético movimiento pélvico de atrás hacia adelante, moviendo todo su cuerpo endemoniadamente rápido, la cama matrimonial de don Severiano crujía como nunca lo había hecho antes y todo producto de los feroces movimientos que hacia nuestra inigualable colegiala.
Hasta que el esplendoroso y estilizado cuerpo de Cielo Riveros ya no dio más, toda la calentura y excitación acumulada por las morbosas situaciones vividas aquella noche estaban a punto de expandirse por todo su curvilíneo cuerpo, y el viejo Severiano quien era consciente de lo que estaba por suceder nuevamente se daba a alentar a su hembra para que se corriera todo lo que ella quisiera:
--Esoooo…! Culeaaa…!! Culea mas fuerte zorraaaa…!!!, --Córrete sobre mi vergaaaa…!!!, -le animaba don Severiano con cara de degenerado.
--Siiii…!!! Ahhh…!!! que ricooo…!!! ricooo…!!!! Se… se… verianoooo…!!! Mi amorrrrrr…!!!! Ahhh…!!!! Mmmmm…!!!! –Gemía escandalosamente la nena.
--Ohhh…!!! Putaaaaaa…!!!, Que grandioso es sentir como me sorbes la verga con tu zorraaaaaaa…!!!!!, -el viejo le gritaba con una chichota agarrada en cada mano para después seguir succionándoselas.
--Siii…!!!! Don Seveeeeeeee…!!! Me lo como todaaaa…!!!! Todaaaaa…!!!! Esoooo…!!! Esoooooo…!!!! Chúpeme las t… te… tetasssss…!!!!
Don Severiano quien no se cansaba de admirar el rostro descongestionado de placer de la bella chamaca mientras ella le comía la verga con la panocha una y otra vez, en un arrebato de pasión calenturienta se separó de sus chichotas que estaban llenas de marcas enrojecidas productos de los muchos chupones que este le había hecho y la bajó violentamente de las mechas obligándola a quedarse bien clavada a su verga para decirle:
--Escúchame zorraaaaa…!! Tú desde hoy eres mía…!! te queda claroooo!!??
--Seeeee…!!!, -le contestó la bella chamaca moviendo su carita apasionadamente hacia los lados, no importándole que la tuvieran jalada de los cabellos.
Movimientos que casi enloquecieron de calentura a don Severiano que lo llevaron a empujar y desclavar con fuerzas a la colegiala dejándola tirada a los pies de la cama, para el rápidamente ponerse arrodillado agarrarla y ponerla el mismo en 4 patas en la cama con su brillante trasero apuntando hacia su verga, y sin ya esperar nada mas le dio conocimiento de lo que se venía ahora:
--Ahora si pendeja, ahora te la voy a meter por el culo…!!!, -le dijo al mismo momento en que con sus dos manos procedía a tomar de par en par aquel suculento par de nalgotas y descubrir su orificio posterior para en el acto mandarle un certero escupo en este y apuntar su gruesa verga con la sola intención de incrustársela.
Quien hubiese visto las grandes diferencias que existían en el diminuto orificio de Cielo Riveros con la gruesa tranca que el viejo pensaba enterrarle hubiera dicho que aquella faena jamás se concretaría.
Pero don Severiano tomó su verga con determinación, esta ya estaba que reventaba por todo el semen acumulado, y Cielo Riveros quien se mantenía atenta a esta situación mirando desde su posición y hacia atrás ya se preparaba mentalmente para aguantar el inminente empalamiento anal que el viejo ya se preparaba para plantarle, el cabezón y aceitoso glande ya estaba ubicado a la entrada del esfínter.
--La quieres por el culo putaaaa…!?, -le consultó el viejo al percatarse que la nena lo miraba con cara de viciosilla y respirando agitadamente por su boca.
--Si don Seveeee…!!! Métamela por el culooooo…!!!!, -le respondió la colegiala con su respiración totalmente agitada.
Don Severiano acomodó la verga bien afianzada a las carnes de las nalgas para que esta no se resbalara en el momento en que el ejerciera presión, luego se agarró con sus dos manazas en el espacio que existía entre las caderas y la cintura de la chamaca, una mano por cada lado, y ahora sin ningún tipo de miramiento de una sola y certera estocada se la clavó en toda su extensión llegándole hasta las mismas vísceras al interior del cuerpo de la hermosa joven, quedando ambos cuerpos ensamblados en la típica posición en que los perros se culean a las perras.
Y así empezó un furioso mete y saca anal, con Cielo Riveros puesta en 4 patas y con sus ojos fuertemente cerrados desfigurando su cara por cada feroz apuntalamiento de verga que le mandaban por el culo.
La verga de don Severiano entraba apretadamente por aquel ajustado conducto anal, mientras que la nena solo se daba a aguantar aquel delicioso pero fuerte dolor que sentía al interior de su trasero al estar sintiendo como la verga de su casi suegro invadía todo el espacio de sus entrañas, la sensación era como si su culo en cualquier momento fuese a estallar debido a la compresión y a la falta de espacio al interior de este.
Pero Cielo Riveros sabía muy bien cual y como era su papel de hembra en el acto copulatorio por cualquiera de sus tres orificios (oral, anal o vaginal), el asunto era que ella ahora secundaba al viejo con sus desmesurados movimientos apuntaladores echando con fuerzas su cuerpo hacia atrás cuando el vejete empujaba la verga hacia adelante, sincronizándose a la perfección en el caliente acto de sexo anal que ambos se daban.
Don Seve empezó a acelerar sus embestidas, le clavaba con furia su descomunal pedazo de verga bien adentro de su ano, y ella ya no daba más de calentura, se concentraba solamente en apretar su esfínter cuando la verga que la perforaba estaba totalmente enterrada, eso le hacía sentir muy rico, el placentero gustillo poco a poco se iba centrando en lo más profundo de su ano, y una vez que ya estuvo instalado allí la nena comenzó a mover su cuerpo hacia atrás con unas energías nunca antes sentida, el placer anal estaba haciendo estragos en su núbil anatomía y don Seve se daba cuenta de ellos, por lo que se daba a encularla de la forma más brutal que podía.
Hasta que la colegiala ya no fue capaz de tolerar en su cuerpo tanta satisfacción placentera, una indeterminada serie de escalofriantes corrientasos de placer anal explotaron en forma aparatosa dentro de su cuerpo recorriendo y desparramándose por todos los rincones de su esbelta anatomía, la mamasota sentía que se desintegraba, a la misma vez que sus hermosos ojos verdes iban quedando en blanco al estar estos dándoseles vuelta debido a la tremenda calentura que estaba experimentando, su lengüita también estaba afuera sin ella darse cuenta, hasta que cuando ya en su rostro se marcaba un rictus del placer mas mundano y vicioso que uno pueda imaginar dejó salir de sus labios y de su estomago un gutural grito de dicha carnal.
--Aaaahhhhhhhhhhhhhhh…!!!!!!!!!!!! Don Seveeeeeeeeeeee!!!!! que ricooooooohhh…!!!!! que ricoooooo…!!!!! ohhhh…!!!! Don seveeeeeeee…!!!!!! Don seveeeeeeeeee…!!!!!!!, -la nena no podía dejar de llamar al vejete mientras se estaba yendo cortada por el culo, mientras que su cuerpo era víctima de unos ricos y avasalladores espasmos de placer.
Para don Severiano esto fue el colmo de la calentura, por lo que se dio a premiarla con las más salvajes y brutales de sus estocadas intentando partirle el culo en dos pedazos en los momentos que la nena seguía corriéndose una y otra vez hasta que el mismo se vio acabando junto con ella en el más intenso y caliente orgasmo que había tenido en toda su vida:
--Ahora zorraaaaaaaaa…!!!!!!, -le gritaba el casi suegro con todas sus fuerzas y todo traspirado, --Tomaaaaaaa…!!!!! Tomaaaaaaaa…!!!!! –Ahí tienes más semennnnnn…!!!!! Argggggggghhhhh…!!!!!!!
El viejo se corría como un enajenado en las mismas entrañas de la chamaca, fueron otras 6 abundantes descargas las que la nena se tuvo que comer ahora por el culo, hasta que cuando don Severiano ya estuvo totalmente detenido y sin nada más que expulsarle fue cuando quedó echado sobre el todo mojado cuerpo de la colegiala que respiraba agitadamente y con una extraña sonrisilla en su cara, no le importaba tener que soportar el pesado cuerpo que tenia sobre su espalda.
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La señora María no pudo dormir tranquila esa noche ya que la pareja de escandalosos se había casi amanecido cogiendo, el constante crujir de la cama hasta a altas horas de la madrugada así se lo había hecho saber.
Ya eran las 8:00 de la mañana y Cielo Riveros después de haberse despertado abrazada al obeso cuerpo de su suegro cayó recién en cuenta de las atrocidades que había cometido en aquella cama, el viejo también se había despertado y la miraba orgulloso por tan encantadora noche que ella le había brindado a su verga.
--Don seveee… me tengo que ir… Rodrigo ya debe estar por llegar…
--Te irás después del desayuno pendeja… ya le solicité a la María que lo preparara…
--Ay no…!, su esposa me va a matar apenas yo salga de esta habitación…!
--Tranquila pendeja yo ya arreglé esa situación, mientras tu dormías le explique cómo era la cosa desde ahora y ella no abrirá el pico, jejejeje…
--De verdad?
--Si… he pensado en lo nuestro y para que veas que yo soy buenito te doy un plazo de dos semanas para que me arregles la situación con el maricon de Rodrigo…
La nena estaba toda confundida, ella no quería terminar la relación con su amado, pero don Seve se la había vuelto hacer tan rico, que no sabía que determinación tomar.
--Ehhh…!! Me puedo ir a dar una ducha?, -le consultó de pronto a su macho dejando su problema para pensarlo más tarde.
--Claro que si mi reina… si ya te dije que tu eres la mujer de esta casa… que no se te olvide. --Mariaaaaaaaa…!!!!, -volvió a bufar llamando a su esposa… --Tráele tollas limpias a mi mujer y prepárale el baño que va a tomarse una ducha antes de recibir a su novio, jajajajaja…!!!!, -le dijo burlonamente una vez que la señora hubo llegado a la habitación.
Cielo Riveros se las recibió muerta de vergüenza, eso sí que ahora la nena aunque aun estaba desnuda y abrazada al cuerpo de don Severiano, por lo menos habían cubierto sus cuerpos con las cobijas de cama.
40 minutos después de lo anterior estando Cielo Riveros y don Severiano sentados a la mesa listos para desayunar, con la colegiala recién bañadita, pero si muy ojerosa y demacrada, y con don Severiano todo chascón y con su barba sin afeitar solo envuelto en una bata de levantarse, la puerta principal de la casa se abrió y hacía su ingreso Rodrigo.
El chamaco se quedó sin habla al ver a su amada Cielo Riveros sentada a la mesa, ni siquiera le preocupó la presencia de su padrastro que leía en forma absorta el diario matutino, fue la señora María que tras un breve silencio le ponía en antecedentes a su hijo.
--Mira quién te ha venido a ver mijo…!, justo te estábamos esperando para que desayunemos en familia…
Rodrigo se sintió el hombre más afortunado de la tierra, si justo este día iba a llamar a su novia para que hicieran las paces, y ella anteponiéndose a sus intenciones había adivinado y lo fue a ver antes de que el la llamara, entre ellos sí que existía una verdadera conexión se decía el chamaco, quien en el acto saludo a su madre y a su novia para luego sentarse a la mesa feliz de la vida y disfrutar de la mañana sabatina.
La viejita tras decir lo último le mandó una fulminante mirada a Cielo Riveros con la cual la nena se vio obligada a morderse su labio inferior y bajar su vista en forma avergonzada, la chamaca estaba podrida por dentro.
Una semana antes de estos lamentables sucesos que se sucedieron en la vida de nuestra tremenda colegiala, el sargento Eustaquio Sinforoso se bajaba del furgón policial que lo había pasado a dejar a la salida del hospital público, el horrendo y corrupto policía llevaba bajo el brazo un pequeño ramo de flores de las más baratas, faltaban solo 10 minutos para que la hembra victima de sus mas infames intenciones terminara suCielo Riveros 15 (version apocrifa)
en No Consentido
El maestro Tulio pensaba desesperadamente como librarse de su esposa e ir a disfrutar del suculento postre que el cojo Juan le tenía preparado en aquel precario cuartucho, la nena era sin duda alguna su más obsesivo deseo, aquella hermosa adolescente que cuando la veía pasar por los pasillos de la escuela le hacía olvidarse de todo y fantasear con agasajarse de ese maravilloso cuerpo.
No había momento del día en el que no pensara en las deliciosas curvas que dibujaban el perfecto cuerpo de Cielo Riveros , ya alguna vez había tocado su cuerpo y probado del fresco aroma de esos carnosos labios y como esa rosada lengua se entrelazaba con la suya, claro que con las artimañas y la maravillosa labia que este tenía para engatusar a chicas inocentes valiéndose de su cargo.
Pero ahora el cuerpo de la nena estaba a su merced para hacerle lo que le diese en gana, no podría desaprovechar tamaña oportunidad, no podía disimular su nerviosismo y sus ansias; tendría que buscar la manera de escabullirse de su mujer a toda costa.
En cambio a una cierta distancia el cojo Juan seguía sentado a un lado de Cielo Riveros acariciándole las piernas y sintiendo esa escalofriante suavidad que tiene la piel de la nena, veía como la chamaca suspiraba por cada tocamiento que este le hacía, el viejo Juan sentía como se le endurecía cada vez más el miembro, diciéndose que si el Tulio demoraba mas, el mismo seria quien disfrutara de aquella divina diosa.
En cambio la nena seguía abstraída en aquel erótico mundo al cual había sido transportada mediante el engaño, todo debido a su ya tonta inocencia y su exceso de confianza; podía ver al cojo Juan como la tocaba, pero no lo rechazaba, su mente le traía los placenteros recuerdos que paso con este viejo, aquel que la desvirgo analmente, todos aquellos calientes recuerdos elevaban su temperatura al máximo, y solo disfrutaba del momento, no existía nada más para ella.
El cojo Juan comenzó a subir sus manos hasta acercarlas a la núbil vagina, sus dedos ya acariciaban los delicados labios vaginales haciendo que la nena echara la cabeza para atrás y arqueara su espalda tan solo decía algunas quejas que mas parecían gemidos. – ayyy no por favor… no me toque allí ahhhh… el cojo sonreía al notar que los quejidos de la nena eran más de placer que de reclamos.
El cojo ya no podía aguantar más, ya no quería esperar al maestro Tulio, tenía ante él un exquisito manjar y no quería que se le enfriara, así que con toda la morbosidad que llevaba por dentro acerco su repulsivo rostro hacia la deliciosa entrepierna de la nena sintiendo el aroma que su húmeda vagina destilaba, la estimulada colegiala al sentir que el viejo acercaba su rostro a su sensible parte intima estiro sus manos impidiendo que el cojo realizara su cometido.
-- no, no por favor, de-dejeme, no haga eso… exclamo Cielo Riveros con una voz tan inocente pero sensual a la vez lo cual volvía loco al cojo pues le hacía recordar aquella vez que en ese mismo cuartucho la obligo a rendirse a sus asquerosas perversiones y casi al mismo tiempo se le prendió el foco al cojo – que pasa chamaca, quieres que le enseñe a toda la escuela tu diario je je… que se enteren como te gusta que los viejos te cojan je je…
La pobre Cielo Riveros no entendía nada, en su cabeza solo veía lo terrible que sería su vida si se enteraran sus compañeros, ella que tenía el mejor de los conceptos y la mas pulcra reputación, no se daba cuenta que nada de eso pasaría y que por causas del fármaco nuevamente caía en las redes del asqueroso viejo pero a pesar de su miedo su cuerpo se calentaba al venirle los esporádicos recuerdos de aquella vez que el cojo se aprovecho de ella, podía ver el mismo cuarto y oler el mismo repulsivo hedor.
-- no por favor, no lo haga señor, hare lo que me pida pero no les enseñe mi diario… El cojo Juan sonreía vil y asquerosamente al ver que su morbosa intención iba por buen camino, nuevamente puso en camino su repulsivo rostro hacia la deliciosa panocha de la nena, a pocos milímetros ya podía percibir aquel aroma de mujer de Cielo Riveros , estirando su lengua dio la primera lamida a esa aterciopelada piel haciendo que Cielo Riveros lo tomara con cierta fuerza de sus sucios y grasosos cabellos, dos lametazos mas y ya la nena con la espalda arqueada y la cabeza de costado, se mordía los labios con los ojos entrecerrados.
-- ayyy nooo pa-pareee ahhh… la nena no podía aguantar más aquella rasposa lengua que atacaba con desquiciante fiereza sus labios vaginales, sus manos apretaban las sucias y amarillentas sabanas que olían a sudor pero extrañamente para ella eso no le importaba y muy a su pesar lo que quería era seguir sintiendo esa lengua que la hacían retorcerse de placer.
El cojo Juan deslizo sus manos hacia los grandes y redondos senos masajeándolos toscamente ante lo cual la nena en una rápida reacción le tomo de las manos tratando de quitárselas inútilmente puesto que el cojo tenía más fuerza, la pobre Cielo Riveros no tardo en ceder a los fuertes magreos y pellizcos que le daba a sus tetas el abusador conserje y nuevamente apretando las sucias sabanas se dedico a soportar el placer que este le daba.
-- ayyy ayyy noooo pa-pare señor ya nooo ahhh… El cojo quien en su lengua saboreaba los primeros fluidos que la nena soltaba sonreía al oír su inocente voz quejándose pero a su vez disfrutando de la comida de panocha que le daba, la nena ya prácticamente con sus torneadas piernas le atenazaba la cabeza al cojo queriendo que esa viboreante lengua entrara mas profundo en su intimidad.
-- Tranquila belleza… Pronto llegara un amigo y te haremos disfrutar como te gusta ja ja ja… -- Ay no, de-déjeme por favor… no qui-quiero ahhh ahhh… -- Acá harás lo que te diga; o quieres que toda la escuela lea tu diario y se entere lo puta que eres… ¡¡¡QUIERES ESO!!!
Le dijo el malvado cojo en tono enérgico y dominante a la excitada nena quien en su desorbitada mente deslumbraba la vergüenza que pasaría si se enteraran sus compañeros, su preciada reputación se iría por los suelos y todos la llamarían con ese apelativo vulgar que se le dice a las mujeres libertinas y fáciles PUTA. – noo no por favor, hare lo que me pida ahhh pero por favor no les cu-cuente… -- ja ja… entonces putita a cooperar, ya veras que no te arrepentirás je je…
El ruin cojo veía que todo le salía bien, en cuanto llegara el maestro Tulio encendería la cámara que grabaría la escena y desde ese momento tendrían a la inocente colegiala como esclava sexual, para disfrutarla cuando se les diera la gana; ya se imaginaba los sinfines de orgias que le harían, incluso ofrecérsela al director de la escuela, con aquella sabrosa adolescente buscaría una mejor remuneración por su paupérrimo trabajo.
-- muy bien muñeca, ahora solo disfruta de la noche que te espera ja ja vas a querer quedarte a vivir aquí ja ja… Acto seguido el cojo nuevamente zambullo su asquerosa lengua sobre los ya distendidos labios vaginales en una incesante lamida, seguía bebiendo los cada vez más abundantes líquidos corporales que la nena producía, no tenían comparación ni con la de las pocas putas que había probado en su vida, la nena era una mujer incomparable y en ese momento la tenía a su disposición.
Mientras que eso sucedía a una distancia no muy lejana Verónica seguía indignada y furiosa, no podía creer como a pesar de su intimidante amenaza Cielo Riveros había osado a verse con Victor, la sangre le hervía de cólera al ver que ya llevaban mucho tiempo allí metidos sin salir, en su mente los imaginaba follando como animales enervándole más su ira, pero contrariamente no sabía si sentía celos por Victor o porque este se estaba cogiendo a Cielo Riveros , lo cual hizo que sigilosamente se dirigiera hacia el cuartucho del cojo.
Mientras tanto el cojo seguía saboreando del exquisito elixir que le chorreaba a la nena a quien tenía con las piernas flexionadas hacia arriba dejándole una vista maravillosa de sus intimidades, su áspera lengua recorrían desde el clítoris hasta su pequeña cavidad anal en donde el cojo hundía su puntiaguda lengua en delicadas penetraciones haciendo que Cielo Riveros se mordiera los labios en una natural reacción de placer.
-- Ayyyy siiiiii ahhhh ahhhh se-señoooor pa-pareee…… el cojo con toda su fuerza volteo a la nena boca abajo dejándola con las piernas flexionadas dejando expuestas sus tentadoras partes intimas, nuevamente su asquerosa lengua empezó a deslizarse de arriba abajo, todo el canalete de la nena se encontraba humedecida por la pegajosa saliva del cojo, ella solo con sus pechos aplastadas sobre la asquerosa cama y sus manos apretando la sucia almohada se encontraba jadeante sintiendo como las sucias manos del cojo le acariciaban sus suaves nalgas y a su vez las apretaba con fuerza, como un caníbal queriendo arrancar un pedazo de carne.
Cielo Riveros seguía apretando con fuerza la sucia y maloliente almohada con la respiración ahogada sintiendo ahora como el cojo le metía un ensalivado dedo por el ano, el placer que sentía hasta ese momento aumento un grado mas con aquella incursión que le hacia el cojo; este a su vez le acariciaba desde el cuello continuando por toda su espalda, el contacto de esas desgastadas y rugosas manos no hacían mas que sienta como una corriente eléctrica que le recorría toda la columna vertebral.
-- Ayyy no siga ahh ahh pareeee ahhh… -- je je tu tranquila perrita, solo estoy preparando tu culito para que reciba nuevamente a esta verga que la rompió, je je veras que cuando la sienta la recordara y le gustara je je…
Escuchar aquella aclaración hizo que la nena se mojara más, los recuerdos de aquella cogida que le dio el cojo le venían como flashazos que bombardeaban su mente en un constante delirar, el cojo viendo que iba por buen camino de enloquecer de lujuria a su presa como ya alguna vez lo había comprobado metió su bífida lengua dentro de la panocha de la colegiala haciendo que esta temblara de placer y empujara su intimidad sobre el rostro del vejete tratando de que esa lengua llegara más profundo.
En otra circunstancia la nena hubiese luchado con más ímpetu por no caer tan fácil a la seducción pero aquel fármaco la tenia confundida, inmersa en un mundo donde no existía el pudor ni las buenas costumbres, en ese momento la que mandaba sobre ella era su cuerpo que como siempre traicionaba su sentido común y se ofrecía a la lujuria sin importarle quien podría ser la que la satisficiera.
El cojo se quito la sucia playera que llevaba, el olor de su transpiración era inaguantable y se propago por toda la habitación, aquel vejete poco le importaba su higiene y en esos momentos estaba que sudaba a raudales mas por la emoción de tener a la monumental colegiala y también por lo cerrado del cuartucho, arrodillándose sobre la cama el apetitoso trasero de la nena quedo justo a la altura de su verga que se encontraba aun oculta por el sucio pantalón deportivo que usaba.
La nena pudo sentir claramente como el cojo la punteaba con aquel miembro, quería gritar, huir pero no podía, extrañamente para ella su pechos se endurecieron y su respiración se volvió más jadeante, la sensación que sentía en su trasero era electrizante para ella, su cuerpo quería acción y como si le leyeran la mente el cojo la tomo de la cintura atrayéndola hacia él, la espalda de la nena se encontraba arqueada pues la hinchada panza del cojo la obligaba a estar así.
Su espalda comenzó a mojarse con el sudor que el cojo tenía en el pecho, pero a pesar de lo asqueroso que era eso no le afectaba en nada y mucho mas al sentir como el cojo se apoderaba de sus pechos con ambas manos, los magreos sobre sus redondas carnes eran salvajes, los pellizcos que le daba el cojo a los pezones eran fuertes y mas las estocadas que le daba a sus duras nalgas ya la tenían prácticamente descontrolada, rebosante de placer.
-- aaahhh ahhhh se-señooor ahhh… -- tranquila preciosa, ves que te gusta je je, ahora que venga mi amigo vas a morir de placer… el cojo le hablaba quedito en su oreja derecha a una excitada colegiala, sentir en su oreja el caliente aliento que salía de aquella pestilente boca le erizaba la piel y cuando la viscosa lengua comenzó a recorrer su fino cuello casi se desmaya, ahora aquella sensible y erógena parte de su cuerpo era atacada sin piedad.
El cojo le pasaba la lengua y su vez le daba pequeñas mordidas sin dejarle marcas, una de sus manos comenzó a deslizarse desde la base del pecho derecho bajando por el suave vientre que no tenía ni un minúsculo gramo de grasa, sus dedos ya pasaban por aquellos poquísimos vellos llegando a la ya encharcada vulva para empezar a sobarla con ahincó.
La nena recostó su cabeza hacia atrás encima del hombro izquierdo del cojo dejándose hacer por este, ya no existía ni el menor indicio de querer luchar o por negarse a ese placer no consentido del que era víctima, el cojo sonreía ruinmente al ver que aquel fármaco era infalible para estos casos, ya se imaginaba haciendo caer en sus redes a cuanta colegiala le gustara, las grabaría y tendría su propio harem, sonreía vilmente al pensar que sería el inicio de un muy lucrativo negocio, pero en ese momento solo existía Cielo Riveros .
Para esos momentos Verónica ya se encontraba bajando muy sigilosamente la escalera que daba paso al estrecho pasillo que daba a la puerta del cuchitril del cojo, aun era de día y en aquel pasillo se veían cosas abandonadas, llenas de telarañas, sillas rotas y muy cerca del cuarto del cojo unas viejas puertas amontonadas; Verónica no era una chica temerosa, pero aquel lugar si le parecía tenebroso, pero no importándole eso, sentía la curiosidad de saber qué es lo que hacían Victor y Cielo Riveros en aquel lugar.
Tras cada paso que daba podía oír leves sonidos, un paso más y ya oía los tenues jadeos, la frente se le arrugo y sus acaramelados ojos se cerraban presas del enfado… esta maldita está cogiendo, se decía muy malhumorada cada vez más cerca al cuartucho, tuvo suerte de que la puerta del cuarto al ser tan descuidada tenia pequeñas grietas que dejaban ver su interior, verónica acerco sus ojos y al ver lo que ocurría casi se le salen de sus orbitas.
Con la boca abierta no podía creer que la tan fina, educada y pulcra Cielo Riveros se encontrara en tan denigrante situación y con un viejo asqueroso como el conserje, pero que clase de enferma libidinosa y calentona podía ser, se decía Verónica, para ella era repulsivo ver como el cojo estaba manoseando las maravillosas tetas de Cielo Riveros y esta jadeaba con la cabeza recostada sobre el cuello del cojo; y Víctor donde esta!!! Se decía tratando de averiguar dónde estaba el incauto muchacho.
El cojo seguía con las duras punteadas sobre las nalgas de la nena que al sentirlas ella misma trataba de pegarse más a él, algo que le resultaba un poco difícil por la prominente panza cervecera, el cojo le estrujaba los pechos con una mano mientras que con la otra le giro el rostro a Cielo Riveros y con lascivia se apodero de sus carnosos labios, la nena sentía esa apestosa lengua hurgarle dentro de su boca, entrelazándose con la suya, en otra ocasión hubiese rechazado que aquel vejete la besara con tanta facilidad, pero esta vez la situación era diferente.
Ahora ella no podía oponer resistencia, no podía luchar contra los deseos de su insaciable cuerpo, la Cielo Riveros lujuriosa había ganado la batalla a la Cielo Riveros pudorosa y se manejaba a su libre albedrio con ganas de satisfacer todo su insaciable apetito sexual. El cojo Juan nuevamente bajo uno de sus dedos y comenzó a hurgar la panocha de Cielo Riveros que para ese momento estaba que ardía, muy delicadamente comenzó a penetrar aquella ardiente cavidad.
El cojo no encontraba ya ningún indicio de la castidad de Cielo Riveros , aquella membrana que certificaba su pureza ya no se encontraba más en su lugar, aquel dedo que hacía de inspector comenzó a dar vueltas dentro de ella produciéndole una caliente sensación jadeando tras el intenso y asqueroso beso que le daba el cojo. – Así que ya no eres virgen, je je, y yo que pensaba rompértela je je…… Cielo Riveros solo escuchaba al cojo, no podía responderle por la intensa excitación que sufría, aquel despiadado dedo le rozaba las paredes de su conducto vaginal volviéndola loca de placer.
-- ahhh ahhh siiii ahhhh siiiii ahhh… -- ja ja, claro que si putita, ahora que venga mi amigo te vamos a reventar de a dos ja ja ja, vas a saber lo que es tener dos vergas de machos dentro tuyo ja ja…
Cielo Riveros solo seguía con sus gemidos en otra circunstancia aquello la hubiese horrorizado pero en ese momento le parecía excitante, se imaginaba siendo penetrada por sus dos intimidades y se chorreaba del gusto, sentía curiosidad por saber quien seria aquel con el que el cojo la compartiría pero del otro lado de la puerta Verónica no podía creer lo que escuchaba, jamás en la vida pudo pensar que Cielo Riveros sería así de putita y de revolcarse con un viejo horrible que ni las más baratas meretrices se follarian por dinero.
Lo que no sabía era que la pobre Cielo Riveros había sido inducida a entregarse de esa manera, no era consciente de lo que hacía, subyugada a obedecer mediante el chantaje, Verónica vio como el cojo soltó a la nena dejándola en cuatro y tomándola de las caderas la comenzó a puntear nuevamente con fiereza, como si la estuviese cogiendo de verdad, pero aun así Cielo Riveros podía sentir el apretado bulto que chocaba contra sus nalgas.
Aquella sensación le parecía maravillosa, inconscientemente deseaba que el cojo se bajara de una vez aquel sucio pantalón y le incrustara de nuevo aquel miembro que la hizo sentirse mujer por primera vez… -- HUMM te gusta culona, te gusta que te culeen… -- ahhh ahhh siiiii ahhh ahhh…
Verónica con la boca abierta seguía sin creer de lo que sus ojos y oídos eran testigos, “perra asquerosa”; se decía así misma al ver el comportamiento de Cielo Riveros , pero extrañamente para ella la situación comenzó a cambiar, lo que hasta hace un instante le pareció repugnante le comenzó a parecer morboso, poder ver a la hermosa Cielo Riveros con ese sensual y espectacular cuerpo en posición de perrita con un viejo asqueroso que sujetándola de las caderas le daba tremendas estocadas a ese deseado trasero comenzó sin entender porque a calentarla.
Aquella visión llenaría de morbo a cualquiera, una hermosa chiquilla de 18 años con un cuerpo que toda adolescente quisiera tener desnuda y en tan deliciosa posición con un viejo horrible, descuidado de su aseo y con un físico deplorable punteándole con fuerza esas espectaculares nalgas, sin duda había activado el lado morboso en Verónica quien mordiéndose los labios seguía con la privilegiada vista de la escena.
Ya para ese instante Cielo Riveros meneaba su trasero contra el bulto del cojo, se encontraba transpirada lo cual hacia que su cuerpo se viera más espectacular, su sudor se mesclaban con los del cojo dándole un erótico brillo parecido al aceite, -- ja ja te gusta putita, siempre supe que eras una calienta vergas, haciéndote la monjita pero bien que te gusta que te cojan…
Cielo Riveros ni siquiera escuchaba lo que le decía el despiadado cojo, ella solo estaba inmersa en esas sensaciones que desquiciaban el apetito carnal de su cuerpo, poco a poco sentía como sus nalgas se abrían sintiendo el bulto del cojo adentrándose un poco, deseaba que de una vez la clavaran no le importaba si aun fuese ese asqueroso y repulsivo viejo, lo único que quería era desfogar toda esa energía acumulada que tenia.
-- Eres una yegua chamaca, ya verás cómo te vamos a domar, te volverás nuestra putita… el cojo seguía con los punteos teniendo la sensación de que en cualquier momento explotaría y se correría, la visión que tenia de la nena era maravillosa, desde arriba podía ver como esas nalgas que rebotaban sobre su ingle daban paso a una delgada cinturita, todo esto acompañado de aquellos melones que tras cada estocada se balanceaban por los costados, con aquella maravillosa visión cualquier mortal se correría al instante.
Al otro lado de la puerta Verónica pensaba quien seria esa otra persona a la que se refería el cojo, pensó rápidamente en que sería Victor, no creyendo como pudo ser capaz de compartirla con ese viejo, pero olvidándose de aquello se llevo sus manos dentro de su blusa comenzando a frotar muy delicadamente sus senos; cuando a la distancia sus oídos logran percibir que alguien se acercaba.
Rápidamente se acerco hacia las escaleras y pudo distinguir al maestro Tulio quien mirando hacia atrás venia en dirección al cuartucho; mirando para todos lados no sabía por dónde huir, regreso de nuevo y tras las viejas puertas de madera se introdujo rogando porque no la descubrieran, cuando al fin pudo ver al maestro Tulio quien llegaba frotándose las manos sin percatarse de la presencia de alguien más, de haber sido así, hubiese podido ver a Verónica.
Al abrirse la puerta la chica pudo ver a Victor tirado en el piso sin moverse, que es lo que pasa aquí se decía, toda esta situación le parecía muy extraña, sobre todo por Cielo Riveros quien no entendía como podía estar tan entregada a aquellos dos horribles sujetos; una vez que la puerta se cerró espero unos pequeños segundos y nuevamente poso sus ojos por las pequeñas aberturas de la puerta para ver lo que pasaba.
En el cuarto la situación ya era otra el maestro Tulio encontró al cojo agasajándose con Cielo Riveros a la que el solo quería para él, el olor del cuarto le pareció tan desagradable, se le ocurrió la idea de llevarse a la nena a algún motel, allí si podría darse un banquete con la chamaca sin nadie que le estorbe, el tan solo pensarlo hizo que se le empalmara la verga, pero al recordar la situación en la que se encontraba no tuvo más que conformarse a follarla en ese asqueroso cuartucho, total a partir de ese día la convertirían en su esclava.
-- ya déjala y prende la cámara pinche gordo que no tengo mucho tiempo je je… el cojo sonriente y muy excitado se levanto para prender la cámara y grabar un mejor ángulo de la escena; el maestro Tulio se acerco hacia la nena quien aun jadeosa seguía en cuatro patas con la cabecita agachada sin saber lo que pasaba.
Tulio acerco su nariz para oler las intimidades de la chamaca pero también pudo percibir el hedor que le había dejado el cojo, aun así el delicioso aroma de Cielo Riveros era perceptible pero la del cojo también… -- Pinche gordo asqueroso, la próxima vez siquiera báñate… -- je je, para que maestro, si esta es una cerda, le gusta los viejos asquerosos je je…
Cielo Riveros quien aun drogada pero recuperándose de la excitación, volteo su rostro viendo que el cojo se encontraba en la mesa sentado, se giro mas y cuando vio al maestro Tulio quien se desbotonaba la camisa entro en pánico; aquel cerdo era alguien a la que ella no soportaba, un aprovechador y vil canalla que se valía de su cargo para abusar de la necesidad de las colegialas.
-- us-usted nooo, que hace acá… -- que crees mamacita, he venido a gozar de tu cuerpito, hoy no te me escapas chamaca je je… -- No, váyase, déjeme, te odiooo maldito, no no no…
El maestro Tulio no pudo evitar sentirse mal, como es que tan hermosa chamaca lo despreciaba así, no entendía como ella gozaba con el cojo, el cual era un tipo lisiado, sucio y repulsivo pero con él era diferente, lo detestaba… -- je je, que pinche chamaca, ni aun con la droga que le dio el Victor quiere algo con usted maestrito je je…
El maestro Tulio se sentía herido y mas por lo que dijo el cojo burlonamente, pero eso no lo desanimaba y es mas todo esa vergüenza lo animo a violarla sin compasión se desquitaría de su desprecio dándole una buena culeada…
Todo esto fue oído por Verónica quien ahora entendía que era lo que pasaba, por más que le tenía cólera a Cielo Riveros , sabía muy bien que ella no actuaria así, solo por estar drogada es que tenía ese comportamiento y a su vez pensaba lo idiota que fue Víctor al caer en su propia trampa; pero ahora se encontraba confusa, que hago se decía, si iba por ayuda o ella misma entraba en acción para ayudarla, no sabía que hacer, así que decidió a ver que es lo que pasaría.
El maestro Tulio que aun tenia los pantalones puestos pero con el torso desnudo se veía desagradable, con una pequeña barriga abultada y su rostro enfermizo, propios de un viejo pervertido se acercaba a la asustada nena quien se tapaba con sus brazos sus deliciosos pechos con las piernas juntas como tratando de ocultarse de la mirada del malvado profesor, el maestro Tulio se veía aterrador con una mirada llena de morbo y malicia, herido por ser despreciado por la bella chiquilla.
-- no se me acerque, de-déjeme déjeme…… Tulio con una destreza inusual la tomo de los pies jalándola hasta el filo de la cama, dejándola con la entrepierna expuesta, lista para ser saciada por su asquerosa boca, la nena pataleaba dificultándole aquella labor empujándole la cabeza con sus manos, Tulio desesperado le pidió al cojo que dejara la cámara y le ayudara un poco con la rebelde yegua.
El cojo dejo la cámara apuntando la escena y se acerco hacia la nena tomándola de los brazos – tranquila muñeca, veras que la pasaras bien je je, vas a aullar como una loba…
La nena se sentía impotente al verse maniatada por estos dos abusadores, el cojo la tenia inmovilizada dejándole el camino libre a Tulio quien sujetándola de las piernas ya tenía la punta de su lengua sobre la vulva de Cielo Riveros , nada mas notarla comenzó a quejarse, por nada del mundo aceptaba que aquel cerdo la tocara y que gozara de su cuerpo pero lamentablemente no tenía fuerzas para contrarrestar a aquellos dos ruines sinvergüenzas.
-- no por favor, déjenme, no me toque nooo por favoooor… el cojo solo sonreía al oír las suplicas mientras que Tulio ya empezaba con las lamidas, su lengua parecía una brocha que subía y bajaba desde los labios vaginales hasta el enrojecido ano, aquellos estímulos muy pronto harían sucumbir a la nena en ese mundo de lujuria a la que ya estaba acostumbrada.
Los lamentos de la pobre nena eran cada vez más fuertes, rogando porque la dejen, todos estos oídos por Verónica quien algo apenada apretaba los puños detrás de la puerta, no sabía que hacer, le causaba indignación el que abusaran así de la pobre Cielo Riveros de esa manera, a quien pediría ayuda, le daba cierto temor que aquellos tomen represalia después con ella pero aun así ya estaba dispuesta a ir y avisarle al director… cuando derrepente vuelve a escuchar como Cielo Riveros gemía despacio.
-- ahhh noooo ahhh no ha-haga esoooo ahh ahhh… Aquellas palabras de la nena la dejaron estática, como es que algo por lo que se quejaba comenzaba a gustarle, es decir con esos viejos horribles, discernió en irse y se quedo nuevamente a ver lo que pasaría.
Tulio seguía deleitándose de los sabores vaginales de la nena con despiadadas lamidas, subiendo una mano hacia esos portentosos pechos, la sensación en sus manos al sentir aquel redondo melón de carne era maravillosa, no se comparaban a ninguna de las colegialas a las cuales había metido mano, el pecho de piel suave y firmeza juvenil lo desquiciaba a raudales hundiéndole tan profundamente la lengua dentro de la panocha.
Cielo Riveros cada vez más se rendía ante los tocamientos que recibía, Tulio chupándole la panocha a su vez que le apretaba un pecho, el cojo quien la sujetaba y a su vez con la manos mas carrasposas le magreaba el pecho restante, eran sensaciones que hasta ahora no había sentido, ser abusada por dos personas a la vez, un par de viejos horribles, uno asqueroso con el cual había probado por primera vez lo que era el sexo y el otro un ser despreciable y calculador al cual odiaba.
Su cuerpo empezaba a sentirle gusto de lo que le hacían, cada vez dejaba de luchar , el cojo sentía como ya no ejercía resistencia y sus brazos se quedaban quietos, la nena ya estaba rendida el cojo haciéndole muecas a Tulio se lo dio a entender y este comenzó a follarle el ano a punta de dedo -- ayyy ahhh pa pareee ahh ahh… Tulio le masticaba suavemente los labios vaginales y chupaba su clítoris y sin parar con la vehemencia de su dedo, el cojo soltó a la nena quien tan solo se sujeto de las amarillentas sabanas aguantando el ataque de su odioso maestro.
-- ya ya por favor… de-detengase ahh ahhh… pero el maestro seguía sin parar, desquitándose de esa manera el desprecio que le tenía – calla y disfruta zorra, ahora quien más odias te dará la culeada de tu vida, te voy a llenar de leche todo el útero je je…
Cielo Riveros nuevamente arqueaba la espalda, los estímulos del maestro le estaban haciendo perder el control, ya no podía ni reprocharle nada, aun en su turbamiento le daba asco que el maestro la follara y encima le descargara dentro de ella su repugnante semen, aquel que un día mediante el cuento de la actuación el maestro le hizo tragar.
El cojo para esto ya se había bajado el buzo y se masturbaba ante la escena con intenciones de acercársela a los labios de la nena, siendo detenido por el maestro – ni lo pienses Juancito, por ahora solo es mía je je… el cojo ni se inmuto, más bien sonriente seguía con las jaladas a su verga, sabía muy bien que desde ese momento la chamaca seria suya o compartida con el maestro cuando quisiera.
En cambio al otro lado de la puerta Verónica mira estupefacta el tamaño de la verga del cojo, a pesar de ser un tipo repugnante y asqueroso, le llamo la atención el tamaño de esa verga, ni siquiera comparable con las de los muchachitos con los que había estado, nuevamente y extrañamente para ella todo le volvía a causar esa morbosidad del voyeur, se había olvidado de que Cielo Riveros estaba siendo abusada, ahora lo único que quería era ver como la follaban, sentía como su entre pierna le comenzaba a picar y sus pechos se erizaban, sentía envidia por lo que pasaba Cielo Riveros pero a su vez le llamaba la atención ver como ellos disfrutaban del cuerpo de la nena, su lado bisexual afloraba también pidiendo ser considerada.
-- ahhh ahhh por favoorr déjeme detengaseee ahh ahh… pedía la pobre chamaca ya presa del placer, sus labios ya estaban rojos de las mordidas que se daba por aguantar tanto tocamiento, el maestro Tulio sentándose en la cama la jalo hacia el sentándola en su regazo de frente a él, los pechos de la nena chocaban con los suyos sintiendo como le quemaban, todo el cuerpo de la nena estaba que ardía, ella con los ojos entrecerrados pudo ver el rostro de su odioso maestro muriéndose de pena.
Hasta hace un momento le había dicho cuanto lo despreciaba pero ahora estaba sucumbiendo a sus deseos, sin fuerzas para oponerse, el maestro veía embelesado a esa diosa entre sus piernas toda entregada y con la mirada más enferma se apodero del cuello de esta con insaciables mordidas, la nena echaba su cuerpo para atrás al sentir el cálido aliento y las toscas mordidas de Tulio, este la tenia sujeta de la cintura y en esa posición se abalanzo sobre los duros pechos.
Ante ello la nena ya presa del placer le sujeto de la cabeza, sin duda ya la situación le estaba gustando, Tulio al darse cuenta dirigió sus dos manos hacia las dos portentosas nalgas sujetándolas con ahincó como si sus dos manos fuesen unas garras, la nena al sentirlas se apretó mas contra el sintiendo la dureza de ese bulto aun escondido en el pantalón, aquella dulce chamaca que en otras ocasiones había tenido la fuerza para luchar ahora se encontraba vencida, su cordura y buenas costumbres no eran rivales para su lujuria y la droga.
Al maestro le dieron ganas de probar aquellos carnosos labios que harían una delicia de su paladar, con una mano la tomo del rostro mirándola a los ojos, le nena se encontraba con una cara de placer, los labios enrojecidos, jadeantes y sus hermosos ojos verdes entrecerrados la hacían ver sensual y con toda la lascivia que podía tener se apodero de ellos metiendo su lengua dentro de la cavidad bucal de Cielo Riveros serpenteando por dentro y entrelazándose con la de ella, Cielo Riveros no podía rechazarlo, inconscientemente ya se había entregado y solo se dejaba hacer.
La nena ya complaciente a la succionadora boca de Tulio sobre la suya sentía como este la tomaba de las nalgas haciéndole sentir la dureza de su verga aun atrapada en el pantalón, la piel se le erizo al sentir como por ella esa verga pedía que la liberen para profanar su preciado templo vaginal, ella misma ya hacia círculos sobre este pidiendo ya ser empalada como lo merecía… -- Oiga maestrito, ya de una vez cójasela, no ve como está loca porque la claven je je…
El maestro Tulio se separo de Cielo Riveros viéndola nuevamente al rostro, ella se encontraba encandilada, muerta de placer, con una mueca de querer batalla pero ya, -- me lleva la chingada, ahorita mismo la reviento a esta mocosa… Tulio con una desesperación inusual arrojo a la nena sobre la cama y comenzó a desabrocharse la correa para quitarse el pantalón todo esto sin dejar de mirar a aquella hermosa colegiala que echada en la cama esperaba ansiosa por ser penetrada.
El maestro Tulio ya con el pantalón por los pies se acerco hacia la cama y jalando a Cielo Riveros al filo de este guiaba su verga hacia la entrada de la núbil vagina, todo esto ante la mirada de Verónica quien también se impresiono por el tamaño considerable del miembro del profesor, sus manos ya se encontraban en dirección a sus partes intimas, ansiosa por ver como se follaria a Cielo Riveros , nuevamente deseaba ser ella y pasar por tan excitante momento de placer.
En ese mismo instante en un lugar mucho más alejado de la escuela se encontraba Rodrigo junto a su madre y su malvado padrastro almorzando tranquilamente salvo don Severiano quien en su mente solo existía la novia de su hijastro, desde el día que la trajo no podía sacarla de su mente, todas las noches se follaba a doña María pensando en la dulce Cielo Riveros , ansiaba poderse coger a aquella muchachita a como de lugar.
-- oye Rodriguito y cuando vuelves a traer a tu amiguita a la casa… el muchacho a quien le hervía la sangre al oírle hablar de su novia le contesto increpante… -- es mi novia, no mi amiga, y no sé, le preguntare cuando pueda……
Rodrigo se lo dijo de mala manera como para cortarle el tema, pero don Severiano era insistente, a toda costa quería volver a tener en su casa a la hermosa colegiala, y si así fuera haría hacer valer su salvaje autoridad.. – Bueno pues, mañana que es sábado invítala a almorzar, o dame su teléfono para yo mismo invitarla…
Rodrigo se quedo mudo, hasta la madre del chico se quedo perpleja ante tanto interés por la chiquilla, a don Severiano poco le importaba lo que pensaran puesto que el prácticamente mantenía la casa, una palabra en contra de sus decisiones y les iría muy mal. Rodrigo seguía mudo ante tal pedido de su malvado padrastro. – Rápido muchacho que esperas…
La madre de Rodrigo quien hasta ahora se mantenía callada solo atino a decir… -- ya déjalo Seve… si no quiere no le insistas… -- Tu no te metas carajo, acá este muchachito tiene que aprender a ser mas sociable, que esperas dame su número……
Automáticamente la madre se quedo callada solo agachando la cara para seguir comiendo mientras que Rodrigo aun con toda la furia contenida sacaba su celular para darle el numero a su Padrastro, una vez que se lo dio don Severiano marco el numero para ofrecerle la invitación, pero estaba apagado ya que Cielo Riveros no llevaba el celular a la escuela.
La impotencia se remarco en la cara del viejo quien aunque sea quería escuchar su dulce voz, -- ya no insista en llamar, ella está en su escuela a estas horas… el viejo un poco más calmado y pensándolo bien dejo de insistir con la llamada, -- bueno ojala que se encuentre en su escuela, porque una chica tan bonita puede tener otros pretendientes más interesantes… -- NO!!! Ella me quiere y nos queremos….
El viejo soltó una carcajada, -- por eso mismo te digo que la traigas, para que se acostumbre a ti, en cualquier momento puede conocer a otro chico más interesante que tu… un simple ayudante de farmacia sin futuro…
Rodrigo agacho la cabeza muy ofendido y a la vez humillado, el trato de su padrastro siempre había sido así con él, menospreciándolo y humillándolo cruelmente. Lo odiaba tanto pero el muchacho le tenía miedo para reprocharle o contestarle de mala manera.
A una distancia más lejana de ellos se encontraba don Emilio, ansioso por el día de mañana en donde por fin se encontraría con la tan hermosa chiquilla, aquella amiga de su hija que hasta hace poco tiempo ni le llamaba la atención pero ahora era su más grande obsesión, ya se imaginaba con ver su hermoso e inocente rostro con esa sonrisa encantadora que encandila a cualquiera, se la imaginaba en estos momentos en su escuela con su ceñido uniforme y con esa imagen se quedo tranquilo a la espera del día siguiente.
Regresando a la escuela en donde nuestra protagonista era víctima de los dos sujetos mas despreciables de la escuela, el maestro Tulio ensalivándose la punta de su miembro la ponía en dirección de aquella entrada que le sabría a gloria, por la que tanto había esperado y justo en el momento en que le iba a dar un empujón fue detenido imprevistamente por el cojo. – Espere maestro así nomas no se la coja… -- Carajo cojo, y como quieres que lo haga…
El maestro algo contrariado le pedía al cojo que le explique el porqué de su interrupción, el cojo le aclaro que de esa forma la podría embarazar y allí si se meterían en problemas, Tulio lo pensó bien y le dio la razón… -- tienes un preservativo Juan, yo no traje ni uno… -- el muchacho estúpido tenia uno, debe de estar por allí…
El maestro Tulio se puso a buscar el condón preguntándole al cojo la razón de su preocupación sobre el embarazo, cuando escucho decirle que este había embarazado a Claudia se mando una burlona carcajada.. – ja ja ja… que vas a embarazar tu a mi Claudia, quien te ha dicho eso ja ja… -- me lo dijo la chamaca esta, por eso es que Claudia se retiro de la escuela…
Al maestro Tulio le cambio el ceño, si era cierto eso, el no quería que a Cielo Riveros le pasara lo mismo y una vez que encontró el condón se lo puso aunque algo ajustado – Carajo este chiquillo sí que la tenia flácida, mocoso estúpido… dijo el maestro dándole una patada al inconsciente Víctor, una vez ya listo se fue al encuentro de la nena quien hasta ese momento había estado en espera de lo que le vendría, pudo ver como su odioso maestro se acercaba hacia ella, con la verga endurecida y cubierta por aquella capa de látex.
Se le veía horrible, pero su cuerpo le pedía acción – Vamos zorrita ábrete las piernas, que ahorita serás mi mujer…. Cielo Riveros subyugada a la lujuria abrió sus piernas para dar paso a ese despreciable profesor no tenía conciencia para darse cuenta de lo que estaba haciendo. Pero en ese momento apareció su ángel de la guarda que por el momento la salvaba del profesor Tulio.
El celular de Tulio empezó a sonar, con toda prisa cogió su móvil y vio que era su mujer la que lo llamaba, no podía creer su suerte justo en el momento que más había esperado le interrumpe su mujer, y con el temor que tenia le contesto, de mas esta decir que su mujer estaba enfadada, el maestro con el cuento de ir al baño ya se había tomado mucho tiempo y su mujer con lo insegura que era tras la fama de mujeriego de su marido, le pedía que regresara rápido o ella misma iría al baño a buscarlo, el maestro al instante le dijo que iría con ella y colgó.
-- Que pasa maestro, le dio miedo je je… -- Carajo, mi pinche mujer que molesta, te la dejo Juan, total después de hoy la tendré cuando quiera, toma el condón… el maestro le arrojo el condón en son de burla, mientras se subía los pantalones y colocaba la camisa con intenciones de irse, rápidamente Verónica se volvió a meter detrás de las amontonadas puertas, una vez que el maestro se fue despavorido al encuentro de su mujer, Verónica salió de su escondite para seguir husmeando lo que ahora pasaría.
Dentro del cuarto el cojo se acerco a la chamaca ya con la libertad de creerse el dueño de la situación, llevaba en su mano una lata de cerveza – Muy bien yegüita, ahora estamos como al principio, ahora si vas a gozar de verdad je je…
El cojo le hizo beber un poco de cerveza para después despojarse del sucio pantalón que llevaba dejando ver una ya plomiza trusa que en algún momento fue de color negro, la imagen del viejo era horripilante para Verónica, con una pierna más larga que la otra, con el cuerpo con varias cicatrices y manchas de suciedad pero eso si con una considerable herramienta que ni siquiera la mata de antihigiénicos vellos ocultaba.
A Cielo Riveros no le causaba asco, en su sano juicio tal vez hasta hubiese querido vomitar, pero esta vez la que mandaba era su lado lujurioso y esta no discriminaba a nadie, el cojo ya despojado de la sucia trusa se abalanzo sobre el cuerpo de la nena abriéndole las piernas dominantemente para acomodarse mejor, la cabeza de su ansiosa verga se encontraba a escasos milímetros de la panocha, pero el cojo en estos momentos se encontraba devorando de los redondos melones de Cielo Riveros .
Sus lenguas hacían círculos por los erectos pezones pasando de uno a otro sin dejar de pellizcar al que quedaba libre, los jadeos de la nena se hicieron más fuertes, resonaban por todo el cuartucho, tener a ese monstruo asqueroso encima le gustaba a su cuerpo, quería sentir más y con sus piernas comenzó a sujetarlo por la cintura, atenazándolo más a ella.
El cojo sentía como esas torneadas piernas lo apretaban desesperadamente, el mismo hacia un esfuerzo por no penetrarla por la vagina, el temor de preñarla lo tenía asustado, pero de todas maneras tenía pensado reclamar aquel conducto que el mismo estreno.
Verónica seguía viendo como ese viejo asqueroso se deleitaba con los pechos de la nena y como esta lo recibía con pasión, esperaba ansiosa porque de una vez se la folle, quería ver como esa asquerosa pero atrayente verga entrara y saliera de la intimidad de Cielo Riveros , su prenda intima ya la tenía mojada, con tan solo ver lo que sucedía ya su cuerpo se había excitado.
El cojo Juan ya mas excitado volteo boca abajo a la chamaca quedándose a la altura de las nalgotas de Cielo Riveros , tan solo con acariciarlas ya se sentía en la gloria, la textura de aquella piel era electrizante, la firmeza que tenían era alucinante, este le abrió aquellos dos duros cachetes y con su puntiaguda lengua comenzó a dilatarle aquel conducto que pronto recorrería su apestosa verga… -- ayyy ahhh siiiii ayyyy siiii que biiiiennn ahhh…
El cojo oía como la más melodiosa de las canciones aquellos gemidos de placer que salían de aquellos hermosos labios y con fuertes empujones de lengua seguía desquiciando de placer a la ya enloquecida chamaca, aquellos gemidos también excitaban a la ya emocionada Verónica quien escuchaba los morbosos intercambios de palabras. – Quieres verga zorrita, quieres que te clave por el culo… --- siiii, ayyy siiii ahhhh… -- Pídemelo!!! Pídelo como la calienta verga que eres je je… -- ahhh por favor, cla-claveme yaaa ahh ahh…
El viejo sonrió ante las palabras suplicantes de la nena y dejando de estimularle el ano se paro con dificultad en la cama con la verga completamente tiesa – Muy bien putita, quieres verga por el culo, pues primero a mamarla RAPIDO!!!...
Cielo Riveros absorta de la realidad y llena de excitación se arrodillo en la cama quedándole aquella apestosa pero gruesa verga frente a sus labios, su cuerpo quería acción, quería ser penetrada de una vez y si para eso tenía que probar aquel maloliente mástil de carne y venas lo haría, todo sea por saciar el insaciable apetito sexual de su cuerpo…
Sus labios comenzaron a acercarse lentamente hacia la rojiza cabeza, el cojo veía emocionado como esos labios carnosos ya estaban cerca de envolver su miembro, por la ranura de la puerta Verónica con la boca abierta no podía creer lo que pasaba – ah dios mío, no lo creo, no lo creo… se decía al ver como parte de aquel miembro desaparecía dentro de la boca de la nena.
Los rosados labios recorrían lo que podían de aquella palpitante verga mientras que por dentro su lengua acariciaba aquel venoso contorno, las sensaciones que sentía el cojo eran maravillosas, no recordaba a nadie quien le hubiera mamado el miembro de esa manera tan dulce y sensual… -- Si, Así putita lo haces bien, sigue así que después seguirá ese rico trasero que tienes ahhhh…
Tan solo oír lo que seguiría Cielo Riveros apresuraba la mamada haciendo gozar al cojo quien agarrándola del cabello se sujeto la verga obligándole a mamarle aquellas dos sucias bolas, la nena con toda complacencia se pasaba de una a otra, el olor nauseabundo de aquellas desaseadas partes no le importaban, estaba como adormecida, lo único que olía ella era a sexo, a ese placer que tanto le gustaba.
Fueron como 20 minutos en los que los carnosos labios recorrieron todo lo que podían de la verga del cojo, su rosadita lengua lamio desde los testículos hasta la roja cabeza, el sucio conserje veía maravillado como aquel hermoso rostro disfrutaba de la mamada, aquella imagen ya era una tortura para el morboso y pervertido vejete.
-- Ya basta putita, ya no aguanto, ahora si te reviento el orto, ponte en cuatro rápido!!!… el cojo arrojo sobre el sucio camastro a Cielo Riveros quien con una desesperación se colocaba en posición de perrito ansiosa por recibir dentro de ella la virilidad de aquel horrible viejo. Este colocándose cómodamente iba guiando aquella verga hasta la entrada del palpitante ano.
Verónica aun atónita veía como la cabeza de aquel grueso mástil se colocaba en la entrada posterior de la nena… -- NO!! Eso le dolerá, no creo que lo haga… pensaba Verónica no sabiendo de las muchas experiencias que ya había tenido aquella estrecha cavidad.
-- Toma puta calienta vergas ahhhh… el cojo le incrusto sin miramientos todo su miembro hasta la base misma, Cielo Riveros abrió la boca y sus ojos verdes al sentir como el viejo la había empalado tan crudamente, pero a pesar de eso, no había sentido tanto dolor, lo que más sentía en ese momento era placer, aquella sensación de tener dentro de su ano aquel viejo pedazo de carne endurecido. – ayyy siiii uuuhhhhh ahhhhh… eran los gemidos que salían de la boca de la nena.
El cojo empezó con suaves estocadas como para tomar vuelo sintiendo que las paredes rectales apretaban su verga como reconociéndolo, aquella sensación lo ponía como toro bravío, listo para empezar con las salvajes embestidas que muy pronto resonarían por el cuarto al contacto de las pieles.
-- AY putita, me había olvidado lo apretadita que eras, Uhh que rico me la aprietas ahhh… La nena oía jadeosa las sucias palabras del cojo que segundo a segundo aumentaba el ritmo de la culeada… -- huyyy siiii ahhhh ayyy paaapiiii ahhh… el vejete aumentaba las estocadas al ritmo de los gemidos de Cielo Riveros , ella comenzó a levantar sus portentosas nalgas para poder sentir más de aquella dura penetración, el cojo casi se va para adelante ante ese movimiento y para equilibrarse estiro sus manos sujetando los dos riquísimos pechos que colgaban majestuosamente.
-- Eres una puta, gozas como una condenada, desde ahora te volverás nuestra puta… le decía el malvado conserje apretándole los pezones y sujetándole los pechos como un águila que atrapa a su presa, al placer de la penetración que sentía Cielo Riveros se le sumo al de las arrugadas manos apretándole salvajemente sus turgentes pechos haciendo que perdiera mucho mas el control.
Verónica se encontraba excitada viendo aquella libidinosa escena de cómo el cojo le daba fuertes embistes a la nena, su respiración se volvió agitada, sintiendo como su vientre se endurecía hasta sentir cosquilleos sobre sus pechos, estaba claro que jamás en la vida se imagino a la inocente Cielo Riveros en aquella situación y tampoco espero que le gustara tanto.
El cojo continuaba con el incesante mete y saca de su miembro, pero ya quería otra posición, aquella por su cojera le resultaba incomoda y muy agitante, así que sacándosela de golpe se hecho de costado sobre el camastro jalándola hacia él, alzándole una pierna volvió a colocársela dentro en fuertes estocadas.
El miembro nuevamente era recibido sin problemas por el dilatado ano de la nena, aquel conducto ya había probado uno de mayor tamaño y grosor que la del cojo, pero aun así siempre recibía gustosa a cualquier invasor que quería visitarla – Ahhh que rico putita eres toda una perrita te encanta la verga se nota mucho y tu haciéndote la santita, tremenda puta…
El cojo se lo decía cruelmente con leves mordiscos sobre su oreja enervándola más de la calentura, se sentía a merced de aquel inquisidor vejete que aparte de follarla duro la humillaba con crueles palabras salidas de su apestosa boca, el viejo nuevamente se apodero de las chichotas de la nena apretándolas con fuerza haciéndole entender que en ese momento el era su macho, el único dueño de su cuerpo.
-- te gusta putita, quieres mas, anda puta contesta… Los hasta ahora gemidos que vociferaba la nena se convertían en calientes palabras que llegaban a los oídos del sucio conserje – ayyy des-despaciooo ahh ahh… -- NADA DE ESO, A TI TE GUSTA FUERTE, COMO A TODAS LAS PUTAS…
El viejo aumento la fuerza de sus embistes, lo hacía tan salvajemente, ni como la primera vez que la clavo, al parecer se desquitaba del maltrato y rechazos que siempre había recibido por parte de las mujeres, -- bas-basta por favor hhh ahhh… -- No putita!!, tu solo sigue recibiendo verga, que para eso solo sirves…
-- ayyy ahhh ahhh yaaaa noooo… La nena lo decía de la boca para afuera porque en realidad estaba gozando con lo que le hacían, en ese momento estaba inmersa al deliro del sexo, entregada como nunca y sin nadie que la salvara del cruel destino que siempre le querían deparar……
turno…
Cielo Riveros 16 (version apocrifa)
en No Consentido
Las horas ya habían transcurrido y en el cuartucho el cojo Juan se encontraba resoplando satisfecho por la follada que le había dado a una ya inconsciente Cielo Riveros , ya había pasado mucho rato que había perdido el conocimiento presa del placer forzado al cual había sido sometida.
Verónica la única testigo de lo acontecido ya se había retirado a una distancia prudencial, esperando atenta que es lo que pasaría, se encontraba muy nerviosa pero no de los comunes nervios si no de esos que son por las ansias de querer experimentar lo mismo, estaba curiosa y excitada por todo lo visto, jamás pensó que el sexo con viejos horribles y asquerosos le fuese a gustar tanto.
En su cabeza rondaba la envidia por todo lo que le hicieron a la nena, todavía podía oír en su mente los maravillosos y melodiosos gemidos que resonaron de la deliciosa boca de Cielo Riveros , sin lugar a dudas fue lo más erótico, excitante y morboso que había visto en toda su corta vida.
El cojo ya se encontraba parado encendiéndose un cigarro, podía contemplar el maravilloso cuerpo de la nena sobre su sucia y maloliente cama, restos de su asqueroso semen se secaban sobre los majestuosos pechos de Cielo Riveros que a su vez le daban un brillo espectacular, su vientre plano también habían sido mancillados por las sucias secreciones del cojo sin dejar de mencionar las portentosas nalgas que fue donde el cojo derramo su última corrida.
En total fueron tres veces que se corrió sobre el cuerpo de la nena y todas sus embestidas fueron por el apretado ano de la colegiala, el cojo no se atrevió a penetrarla por la panocha, sentía temor de preñarla también a ella pero al verla en la cama le venían a la mente todo lo que había gozado y su asquerosa verga comenzó a levantarse de su descanso, se puso a pensar con lujuriosa demencia si se decidía en que su verga prueben de las apretadas paredes vaginales de la nena.
-- mmm que mierda, si la preño todos sabrán que fui yo je je… se dijo así mismo el despreciable y deforme viejo pensando que sería considerado un Dios cuando se enteren que preño a Claudia y Cielo Riveros dos de las mas deseadas colegialas del plantel.
En ese mismo instante el maestro Tulio estaba reunido con algunos profesores todos acompañados de sus esposas se encontraban brindando con el Director, cuando le llega una queja por parte de una de las acompañantes de que los baños eran un asco, el Director se molesto mucho y pidiendo disculpas pregunto por el cojo, no lo había visto en todo el día y su labor o deber era mantener la escuela en perfecto estado de limpieza y mucho mas ese día que era de celebración general.
Su molestia aumento al escuchar que no lo encontraban por ningún lado y muy enfurecido se dispuso en ir a su precario habitáculo donde seguro estaría durmiendo descaradamente dejando de lado sus obligaciones, fue en ese momento que Tulio le interrumpió diciéndole que el mismo le llamaría, que no se molestara en abandonar la reunión a lo que algo muy molesto el Director acepto.
Tulio fue muy hábil al hacer eso, pues si el director lo encontraba al cojo en plena faena si que tendrían problemas y no es que el Director sea un ejemplo de autoridad y buenas costumbres pues al igual que ellos también era un viejo verde, lujurioso por las jovencitas pero hasta ahora nunca había chocado con las colegialas de su plantel, lo que en realidad le preocupaba a Tulio es que encontrara a su sobrino tirado en el piso, aquel muchacho problemático era su protegido y no perdonaría lo que le habían hecho.
El cojo quien ya se disponía a darle rienda suelta a sus deseos y lujuria contesto algo molesto el teléfono oyendo la voz de su cómplice... – Oye cerdo asqueroso, ven para aquí inmediatamente que el director te necesita… -- no manches Tulio, estoy que la paso bien aquí… -- oye idiota quieres que el viejo vaya a buscarte… el cojo lo pensó bien dejando de lado sus intenciones de cogerse nuevamente a la nena -- mmm ya voy wey, déjame arreglar aquí…
El cojo no tuvo más que dejar aquel delicioso banquete e ir de inmediato a cumplir con los requerimientos del viejo Director, para eso cerro su puerta con un viejo candado, dejando encerrada a la nena junto al mozalbete de Víctor. Con toda la incomodidad que su físico le daba iba a toda prisa trastrabillando por el precario camino siendo visto por una ya cansada y aburrida Verónica quien ya veía de lejos al viejo en dirección a las aulas.
En ese momento no sabía que hacer, tenia cierto temor de que el viejo regresara rápido, con mucha precaución fue tras el cojo y al comprobar que tendría para rato en sus labores con toda prisa fue en dirección al cuartucho, en aquel lugar Cielo Riveros y Victor no daban muestras de querer levantarse inconscientes y victimas de dos viejos zorros, para ese momento solo se oían los jalones que le daba Verónica a la puerta tratando de abrirla, pero el candado era muy seguro.
Fueron como diez minutos en los que lucho para abrirla y con lo vieja que era la madera de la puerta fue que cedió permitiéndole el paso a la chiquilla, Verónica se llevo una mano a la boca al sentir el desagradable hedor a transpiración que se sentía en el cuartucho, encendió la tenue luz del cuarto y pudo ver a la sensual Cielo Riveros tirada en la cama completamente desnuda.
Veía estupefacta y con algo de asco los restos de semen secándose sobre su cuerpo, pero muy a pesar de eso le parecía maravilloso y excitante, no podía creer como una bella jovencita, la más deseada por toda la escuela había sido gozada por el más repugnante y desagradable sujeto que podría existir, arrodillándose en el piso se acerco hacia el rostro de Cielo Riveros viendo de cerca esos carnosos y rosados labios, a la mente se le venía el momento como estos se apoderaban del miembro del cojo, como habían recorrido toda la superficie venosa de esa apestosa pero considerable verga, en ese momento se le hacía agua la boca en una hambrienta sensación de envidia.
Su vista siguió con el recorrido del mancillado cuerpo de la nena para quedarse viendo las redondas chichotas, estaban enrojecidas, con leves marcas de mordidas y las manchas de las sucias manos sudorosas del cojo y con restos húmedos del semen de este, instintivamente se acerco hacia ellos para percibir el olor que tenían, no entendía que le pasaba, se estaba sintiendo atraída nuevamente por el hermoso cuerpo de Cielo Riveros , dio media vuelta algo contrariada y pudo divisar frente a ella la cámara del maestro Tulio.
Con toda la curiosidad que tenia se acerco hacia ella encendiéndola para revisar su contenido, los ojos casi se le salen al ver que toda la escena que había visto estaba grabada, con eso ya no tendría que recordar las excitantes escenas de la cual fue testigo, si no podría verlas cuando le diese la gana. Estaba a punto de irse cuando volteo a ver a la nena, sintió compasión por ella, después de todo era una mujer como ella y además la habían sometido cobardemente con drogas, se acerco rápidamente para tratar de despertarla.
-- Cielo Riveros … Cielo Riveros despierta… despierta Cielo Riveros !!!!... pero era inútil, solo recibía cortos gemidos de sueño por parte de ella, que hago!! Se decía, de verdad quería ayudarla pero se encontraba nerviosa de que regresaran los dos viejos y la encuentren, pero los extraños sentimientos que le tenía a la nena le dieron valor para ayudarla y tomando una de las botellas de agua se la empezó a rociar en el rostro.
Aquello logro despertar en algo a Cielo Riveros quien abriendo los ojos no entendía lo que pasaba, solo pudo reconocer el rostro de Verónica. –Verito… que pasa…donde es-estoy… -- cállate estúpida y vámonos de aquí… Vero ya un poco más tranquila solo encontró las sandalias y el corto vestido de la nena pero nada más y ayudándole a ponérsela a toda prisa la ayudo a salir de aquel lugar dejando abandonado a Victor.
Cielo Riveros iba apoyada sobre Verónica quien con mucho esfuerzo la llevaba, tendría que buscar la manera de sacarla de la escuela sin que se diesen cuenta los maestros y el único camino era entre la multitud de escolares que bailaban al unisonó por la estruendosa música de las bandas que tocaban, muchos de ellos miraban extrañados el estado en la que se encontraba la nena y no entendían la razón de estar acompañada por una de las alumnas mas rebeldes y de peor reputación de la escuela.
-- Hey Vero… que le pasa a Cielo Riveros … le decían algunos compañeros algo preocupados y otros excitados por el sexy vestido que le marcaban todo su deseado cuerpo… -- Eh no nada.. solo se le paso las copas un poco ja ja… contestaba algo apurada y esquiva, la intención de Verónica era llevársela a su casa hasta que se recupere, por una extraña razón sentía lastima por ella y quería ayudarla, muy aparte de que olía muy mal por el contacto del asqueroso sudor del cojo y era verdad, el cuerpo de Cielo Riveros se encontraba con los olores del semen del cojo, el asqueroso sudor que se mezclo con la suya y los restos de apestosa saliva por las tantas lamidas y mordidas que le habían dado.
Por suerte la casa de Verónica quedaba a una calle de la escuela a la cual llegaron rápidamente, no había nadie en casa de ella puesto que su alcohólico Padre siempre paraba en el bar y su madre ejerciendo el oficio más antiguo del mundo, ni bien entraron la llevo a su habitación, Cielo Riveros aun se sentía algo mareada no entendiendo lo que pasaba… -- que hacemos aquí vero… -- Cállate y ven aquí,… casi a los jalones la llevo hacia la ducha quitándole fácilmente el vestido y empujándola hacia la regadera, cuando los fríos chorros de agua comenzaron a caer sobre su cuerpo Cielo Riveros abrió la boca algo desesperada pero sin reaccionar a quitarse las sucias manchas que difícilmente el agua sola no podrían quitar.
Verónica miraba excitada como Cielo Riveros lucia sensual con el cuerpo mojado aumentando su excitación y envidia al ver ese perfecto cuerpo, sin darse cuenta comenzó a despojarse de sus ropas quedándose solo con su pequeña tanga, se metió junto con Cielo Riveros a la ducha y tomando una esponja enjabonada comenzó a pasarle por todas las áreas mancilladas por el cojo, podía sentir claramente la suavidad de la piel de la nena, era para envidiarla, sin darse cuenta su otra mano se apodero de uno de los pechos notando su suavidad y dureza, la volteo contra la pared y la enjabono las duras y redondas nalgas notando las huellas de las furibundas nalgadas y mordidas que el cojo le dio.
Miraba con ojos de envidia y de enamorada aquel perfecto y castigado trasero, ya no podía mas con lo que veía, sentía que la panocha le hervía con tan solo observar y tocar de aquellos tentadores encantos, ahora entendía porque la desesperación de la mayoría de chicos por ella, si ella misma se calentaba con mayor razón los demás, aquella adolescente había sido enviada a este mundo para satisfacer tanto a hombres como a mujeres, nuevamente la puso de frente viendo como ella seguía algo dócil y aturdida con los ojos entrecerrados tratando de reaccionar, no pudiendo mas acerco sus labios hacia los duros pezones y les dio una ligera succión provocando la reacción de Cielo Riveros .
-- ehh que pa-pasa… -- nada!!! ya casi acabamos… contesto algo nerviosa Verónica quien no podía creer haberse atrevido a probar de aquel apetitoso pezón, su lado bisexual afloraba cada vez mas pero solo con ella, por alguna razón el corazón se le aceleraba al verla y mucho mas ahora al sentirla, tenia al frente esos carnosos labios por los cuales muchos soñaban con besar, ella ya no podía mas, se sentía demasiado tentada con frotar sus labios con las de ella, de sentir por primera vez la delicada sensación de besar a una mujer.
Cada vez acercaba sus labios junto con los de ella pero en ese instante y gracias al agua fría Cielo Riveros ya se encontraba más consciente de lo que pasaba y la detuvo empujándola hacia atrás – pe-pero que pasa, que ha-hago aquí… reacciono la nena tapándose sus turgentes chichotas sorprendida al ver a Verónica también desnuda y duchándose con ella.
Verónica algo contrariada pero recobrando su carácter hostil y dominante le tomo de los cabellos con fiereza – que te dije estúpida, te dije que te alejaras de Victor oh no…Cielo Riveros no recordaba nada, estaba perdida tratando de entender a que se refería la rebelde chiquilla, sentía miedo al tener a la iracunda y peligrosa chiquilla frente a ella… -- no, no se a que te re-refieres, no re-recuerdo nada… Verónica reía por dentro pero a su vez sus pequeños pero apetecibles pechos se erectaban recordando la tremenda culeada que le dieron.
-- ah no recuerdas, te hare recordar estúpida, has estado cogiendo con Victor toda la tarde y en la casucha del asqueroso conserje… Cielo Riveros abrió grandes sus lindos ojos verdes, las lagrimas le comenzaron a salir de inmediato, no podía creer lo que Verónica le decía y con el alma destrozada cayó de rodillas llorando por lo que le decía -- --NO!!! No puede ser nooooo, dime que no es ci-cierto nooo…
A pesar de que Verónica era malvada se le partía el corazón al verla, tenía ganas de abrazarla, de besarla y consolarla, no entendía lo que sentía, hasta hace poco la odiaba y le caía mal por ser una chica fresa y consentida por los maestros pero ahora no, verla arrodillada llorando desconsolada hizo que naciera en ella un extraño sentimiento por Cielo Riveros o quizás era amor pensaba.
-- Ey tranquila Cielo Riveros , la verdad no estoy segura solo te vi desnuda en la cama, pero el idiota de Victor también estaba desmayado, tal vez tomo lo mismo que tu y no te hizo nada…Cielo Riveros levanto su triste y llorosa mirada esperanzada en que eso fuese cierto… – estas se-segura… -- Creo que si, por eso te saque de allí, otros podrían haberse aprovechado si te encontraban así… decía algo cínica recordando con profunda excitación todo lo que le hicieron, en cambio la nena se levanto y con mucho alivio abrazo a Verónica en una muestra de total agradecimiento.
Aquel abrazo la tomo por sorpresa, sintiendo los turgentes pechos de la nena aplastar a los suyos respirando de esa suave y húmeda piel, rápidamente llevo sus manos hacia su espalda acariciándola en una clara muestra de consolarla, pero en realidad estaba excitada al contacto corporal con ella, -- gracias Vero, no sabré como pagártelo nunca… -- Bueno, tu solo aléjate de Victor y me harás mis tareas ok, ahora vístete y vete a tu casa…
Hasta ese momento fue que Cielo Riveros se dio nuevamente cuenta de que estaba desnuda junto a ella y muy sonrojada tomo una toalla cubriendo su cuerpo, minutos después Cielo Riveros se ponía su vestido extrañada mirando para todos lados en busca de su pequeña prenda intima, Verónica al darse cuenta con burla le dijo que no lo encontró y que si quería le podía prestar uno de ella, la nena quien era amante de la limpieza y el aseo personal entendía muy bien que aquellas prendas no se deben compartir para evitar cualquier contagio y decidió irse así nomas.
Nuevamente Cielo Riveros se veía espectacular con tan sexy y escotado vestido, la noche ya había llegado y hacia un poco de viento, a lo que Verónica le prestó una chamarra de cuero negro que se le ajusto a su cuerpo quedando el vestido como una pequeña minifalda roja que la hacían ver mucho más sensual, ambas chicas se disponían a salir a la calle cuando se encuentran con el papa de Verónica, un viejo de unos 57 años, de pelo corto entrecano alto de 1.82 cm, panzón y con un rostro de sádico y haragán con una corta barba sin afeitar, demás está decir la cara que puso al ver a la deliciosa Cielo Riveros , ni la borrachera que tenia le impedía notar
a la despampanante chiquilla que se encontraba en su precaria casa.
-- Buenas noches señor… saludo la nena demostrando la atenta educación con la que había sido instruida, en cambio al viejo se le hacía agua la boca al escuchar tan dulce voz… hasta que trajiste una amiga a la casa, zorrita… Cielo Riveros se sorprendió por la manera tan vulgar y soez en que aquel señor se dirigió a su propia hija… -- y como te llamas muchachita preciosa… le pregunto con ojos desorbitados a una nerviosa nena… -- E-Cielo Riveros señor, mucho gusto… el papa de verónica le daba un sorbo largo a su botella de cerveza Corona sin dejar de ver de pies a cabeza a la tímida colegiala… -- pero que bonito nombre… yo soy Manolo a tus ordenes para todo lo que desees preciosa… le dijo extendiéndole la mano a lo cual algo contrariada pero sonriente Cielo Riveros también le ofreció.
Verónica pudo ver como su padre le besaba la mano con un ruidoso y exagerado beso, Cielo Riveros abrió la boca algo sorprendida pero con agrado ante tal atento y cordial saludo siendo esto tomado con celos por Verónica a lo cual decidió interrumpir… -- bueno ya nos vamos, apúrate Cielo Riveros … lo cual molesto a Manolo quien arrugando la frente increpo soezmente a su hija… -- que te pasa zorra… no ves que estamos conociéndonos… la nena se puso más nerviosa al escuchar el maltrato con la que se dirigía a su propia hija.
Don Manolo era un tipo de lo peor, el cual siempre había sido un machista y vividor obligando a su mujer a prostituirse ante sus negativas de ser el mismo quien suministrara de los recursos necesarios para su familia, era tanta su inmoralidad que hasta a su propia hija la presionaba también para que trabajara con su mama, era por eso la conducta rebelde, defensiva y agresiva de Verónica.
Verónica apuro el paso a Cielo Riveros dirigiéndose hacia la salida de la casa sintiendo la nena como el viejo borracho le agarro ligeramente una de sus nalgas sobresaltándola... – No la molestes maldito!!! Le dijo una muy mortificada Verónica cerrando la puerta con fuerza escuchando desde adentro como el viejo la insultaba llamándola putita, perrita y zorra.
Cielo Riveros no dijo nada sintiendo lastima por lo que padecía Verónica quien la acompañaría hasta el paradero de autobuses, en el trayecto algunos chicos vagos y callejeros piropeaban a Cielo Riveros al verla con su caminar cadencioso y su sensual movimiento de trasero… – puedes dejar de mover el culo, mira lo que provocas… la nena algo ruborizada agacho la cabeza inocente de lo que le reclamaba pues ese sensual andar era natural en ella.
Una vez que llego el autobús se despidió de una fría y molesta Verónica subiéndose en el acto, la nena avanzo hasta atrás buscando un asiento solitario pero todos estaban ocupados solo quedaban libres los de dos asientos y como en el medio estaba un grupo de chicos y unas cuantas señoras se fue hasta el asiento de atrás para tratar de cavilar todo lo que aun no recordaba, por mas esfuerzo que hacía no lograba dilucidar lo que le paso, su última imagen era la de Victor evitando que el maestro Tulio la acosara.
Pero muy en el fondo sabia que algo le había ocurrido, su exuberante cuerpo como burlándose de ella le comunicaba a su cerebro de que había sido usado y saciado, ella misma se daba cuenta porque sentía sus pezones irritados al contacto con la tela del vestido y sumado al escozor que sentía en su ano le daba a entender de que en ese momento que no recordaba alguien se había aprovechado de ella, con total tristeza y profunda angustia se lamentaba que le hayan hecho eso, que estúpida era al haber confiado en ese vago maldito del Victor.
La nena recostaba su cabeza en la fría ventana observando las calles con esos preocupantes pensamientos cuando siente que alguien se sienta a su lado, pudo sentir un olor a transpiración, alcohol y a cigarro barato terrible y girándose para ver a su inoportuno acompañante de viaje se encontró con un tipo desagradable, un borracho de unos 40 años, delgado casi como enfermizo, muy ojeroso con un bigote corto pero tupido, llevaba una sudorosa camiseta negra despintada y unos pantalones vaqueros también rasgados por lo viejo, al ver que este la observo con una descarada y escalofriante sonrisa la nena se atemorizo.
-- ho-hola muñeca, un gusto compartir asiento contigo… le dijo el asqueroso tipo acercando su cara sintiendo ella el tufo a alcohol y su desagradable transpiración, Cielo Riveros estaba asustada observo hacia adelante y ya algunos se habían bajado, pudo ver un asiento adelante y pidiendo permiso se dispuso a retirarse pero este no se lo permitió… -- ósea, te saludo con respeto y tú me haces el desplante… -- no… no señor disculpe… solo qui-quiero sentarme adelante…
El asqueroso tipo pudo notar el temor que le infundía a la muy nerviosa chamaca y quiso aprovecharlo y con la más completa majadería tomándola fuertemente del brazo le hablo con tono autoritario… -- siéntate carajo… vamos a conocernos tu y yo… de un jalón la hizo sentarse cayendo sobre el asiento sus par de nalgas asustándola más, la nena no sabía que hacer, si pedir ayuda o gritar, aquellas dudas eran aprovechadas por el borracho quien tomándola de la mano se la beso presentándose… -- me llamo Ramón… a tus or-ordenes preciosa… le dijo con la típica y acostumbrada voz del que esta ebrio.
-- mu-mucho gusto señor… ahora discúlpeme, me tengo que bajar… él para nada tonto de Ramón notaba que le mentía y enfureciéndose más la amenazo con una navaja que llevaba en el bolsillo – oye chamaca mentirosa, tú te quedas aquí conmigo… vamos a conocernos y veras que la pasaremos muy bien… aquella aclaración fue acompañada por una mano acariciando su pierna por debajo del corto vestido, el individuo pudo sentir la deliciosa suavidad de la piel de aquella diosa enervándole los sentidos al máximo… -- hummm pero que lindas y suaves piernas tienes muñeca, qui-quieres ser mi novia…
Estaba de mas decir la completa desesperación que tenia Cielo Riveros sentía un miedo terrible tratando de sacar esa asquerosa y rugosa mano de su pierna pero este le puso el frio metal cerca de su rostro – tranquila amorcito, no me gustaría arruinar esa hermosa carita de ángel que tienes… le dijo el despiadado sujeto tratando de darle un beso que fue rechazado por la nena al sentir el asqueroso aliento que emanaba de su boca.
-- por favor señor… déjeme ir, se lo ruego… le pedía la inocente Cielo Riveros a aquel sujeto que cada vez subía mas sus manos por debajo del vestido, la nena apretaba sus piernas impidiéndole el paso de esa sucia mano pero eso no era la única calamidad que pasaba pues el sujeto le abrió el cierre de la chamarra dejándole ver el escote en donde se encontraban ocultas aquel par de hermosas chichotas… -- huy pero que tenemos aquí, mira estas dos reinas escondidas hummm… el sujeto puso una cara de absoluta impresión al ver el tamaño de esas apetecibles montañas de carne.
Cielo Riveros tragaba saliva presa de la desesperación se sentía a merced de aquel tipejo y sin la esperanza de que alguien la salvara y para su mala suerte el bus iba lento debido al tráfico de la zona ¡¡¡no puede ser, no me puede pasa esto a mi… se decía la pobre nena pensando que en ningún lugar y en ningún momento podría estar a salvo de los sádicos y depravados, su cuerpo parecía un imán que atraía esa clase de tipos.
El borracho hundió su rostro encima de las chichotas de la nena aspirando la fresca fragancia que despedían, acto que hizo que Cielo Riveros aumentara en desesperación – por favor señor, déjeme, no me toque… aquel tipejo estaba muy lejos de hacerle caso enajenado con las deliciosas partes de su joven victima… -- pero que delicia eres chamaca, te voy a llevar a mi casa y te hare el amor como nadie te lo ha hecho, vas a ser mi mujer… escuchar las sucias intenciones del tipejo fue de terror para ella su respiración se volvió más agitada llena de nervios y desesperación.
-- no por favor, se lo ruego déjeme ir por favor, por lo que más quiera… ver esa temerosa pero linda carita era excitante para Ramón, no aguantando las ganas la tomo por el rostro y le robo un ruidoso beso en aquellos carnosos labios, Cielo Riveros reacciono con fuerza echando la cabeza para atrás golpeándose un poco con la ventana, en cambio el borracho aun sentía en sus resecos labios la deliciosa frescura de los labios de la nena – pero que rica eres mamacita… dame otro beso mi amor… le dijo el sujeto acercándose nuevamente a Cielo Riveros quien al tratar de evitarlo aflojo las piernas sintiendo como aquella mano que seguía allí avanzo hasta toparse con su intima parte vaginal.
-- AHH pero mira que putita eres, andando con la panocha al aire… fue hasta allí que se arrepintió de no haber aceptado que Verónica le prestara una prenda, claro que tampoco eso hubiese evitado de las sucias intenciones del sádico sujeto quien con la mayor lascivia sus sucios dedos comenzaron a escarbar en la deliciosa intimidad de la nena… -- NO!!! No por favor, qui-quite sus manos de allí noooo… decía la desesperada chamaca sin siquiera aminorar las sucias intenciones del ebrio Ramón quien ante el fallido intento de besarla le pasaba sus labios por su oreja derecha a punto de activar el lado ansioso de placer que siempre afloraban en ella.
El despiadado ebrio quito sus manos de la panocha de la nena notándolo húmedos por las deliciosas secreciones que chorreaban en ella, con suma morbosidad se las llevo a la nariz oliendo con desquiciante agrado el exquisito aroma que tenían… -- hummm pero que deliciosa eres chamaca, ya verás como en mi casita me tragare todos tus jugos je je, te voy a dejar seca mi amor, hummm huele de tus jugos… Ramón tomándola del rostro le acerco sus húmedos dedos para que la nena oliera de su sabor, Cielo Riveros no podía creer lo bien que olía, era la primera vez que sentía de sus sabores.
Con su bello rostro aun en sus manos Ramón se acerco a ella estampándole nuevamente un aterrorizante beso a la distraída Cielo Riveros quien cerraba sus labios para detener a esa invasora lengua que olía mal y que luchaba por entrar y enredarse con la suya… -- con que te haces la difícil no pendeja, ahora sabrás quien soy yo… la asustada chamaca entro en pánico al notarlo molesto y amenazante, Ramón con la navaja en sus manos la acerco a ella quien se tomo el rostro muerta de miedo momento en el cual este tomo el vestido rasgando el escote que ocultaban sus chichotas.
Pudo ver como aquellos dos majestuosos melones quedaron a la vista hundiendo su calaverico rostro en ellos, uno a uno pasaba de pezón en pezón con hambrientas succiones y lamidas que hacían desesperarse más a la nena quien respiraba agitadamente sintiendo como su cuerpo comenzaba a reaccionar con aquellas salvajes acometidas tratando inútilmente con sus delicadas manos alejarlo de sus chichotas – por… por favor de-dejeme, no si-sigaaa nooo… suplicaba la colegiala con voz baja tratando de no llamar la atención pues se moriría de pena de que los demás pasajeros se diesen cuenta.
-- hummm preciosa que ricas chichotas hummm… una mano se fue deslizando por debajo del vestido para nuevamente comenzar a acariciar aquella poco a poco húmeda intimidad, Cielo Riveros poco a poco comenzaba a perder el control de su cuerpo aquella pestilente lengua subía de sus pechos hasta su cuello para nuevamente bajar y mordisquear suavemente de aquellos erectos pezones, era un intenso ataque que ya no pudo soportar y recostando su cabeza sobre la ventana comenzó a jadear suavemente pero aun tratando de controlarse… -- pa-pare, no si-siga por favooor… de-detengaseee aaahhh…
Aquel sonido fue excitante para Ramón quien levantando su rostro y sin dejar de frotarle la panocha la vio con sus ojos entrecerrados media jadeante, aquello era una imagen única, una hermosa jovencita con los pechos al aire y haciendo gestos de placer gracias a sus sucias manos, pudo sentir como de su verga comenzaban a gotear las primeras gotas del liquido pre seminal… -- Ayy muñequita rica, me tienes a punto de reventar… la nena no le contestaba, solo se encontraba mordiéndose los labios tratando de evitar gemir fuerte por aquella asquerosa mano que en su panocha la hacían sentir deliciosas sensaciones a su traicionero cuerpo.
Aquello ya era desquiciante para Ramón y con la mano que le quedaba libre se abrió el cierre del pantalón sacándose el miembro que se encontraba incomodo en aquel apretado lugar, y tomando a Cielo Riveros de la cabeza la hizo agacharse en dirección a su verga, en ese momento Cielo Riveros recobro un poco de cordura pudiendo sentir el desagradable olor que emanaba del miembro de Ramón, el olor era para vomitar y para su tortura estaba a unos centímetros de su bello rostro.
-- Vamos preciosa… chúpamela, cometela toda… es para ti… la nena no estaba dispuesto a cumplir con tal pedido, sentía ganas de vomitar de tan solo imaginarse dentro de su boca aquella apestosa verga… -- nooo!!! de-dejeme por favor… de-detengaseee… el ebrio y ruin sujeto no estaba dispuesto a quedarse sin las ganas de que la adolescente probara de su verga y con toda su fuerza la inclino mas sintiendo como la punta de su miembro buscaba ingreso por entre los cerrados y carnosos labios.
Tanto era su deseo que apretándole una buena porción de su sedoso cabello le hizo abrir la boca presa del dolor, fue allí que la nena sintió como la asquerosa y maloliente verga ingreso dentro de su fresca boca, el sabor que esta tenia era repugnante, ella trataba de sacarse o expulsar de su boca aquella intrusa verga haciendo delirar mas a Ramón al sentir como esta se frotaba dentro de la cavidad bucal y como la lengua le hacía placenteros masajes en su vano intento por expulsarla… -- AYYY mamazota siiii... sigue así que lo haces bien ahhhh…
Cielo Riveros ya no podía mas, el sabor era asqueroso y con mucho esfuerzo logro sacársela de la boca escupiendo al suelo completamente asqueada, Ramón la seguía teniendo del cabello dominantemente con un rostro de satisfacción… -- que rico la chupas… hazlo de nuevo… la nena lo miro al rostro con signos de asco pero con un rostro de desesperación al sentir que la gente que iba en el bus se paraban algunos para bajarse y otros subían para realizar su viaje… -- Por fa-favor señor ya noooo, aquí noooo por favor… aquella aclaración fue excitante para el borracho quien entendía que aquella hermosa mujer estaría dispuesta a cumplirle sus deseos pero en un lugar más privado y con una cara de satisfacción la soltó del cabello…
Tomándola de la cintura la sentó sobre sus piernas espaldas a él poniéndole la navaja en el cuello y con la otra mano arremetiendo con suaves caricias sobre su deliciosa panocha… -- muy bien chamaca… te vas a portar bien conmigo o te arrepentirás… niégate ahora mismo y te rebano el cuello en este instante entendiste… la nena llena de terror asentía con la cabeza ya sin esperanzas de salvarse de este ruin sujeto quien guardando la navaja se dedico a magrearle las tetas desesperadamente mientras que le decía en la oreja que esta noche la haría suya que la iba a llenar de leche y que pasaría la noche más sabrosa de toda su vida.
Ramón ya no aguantaba, tener entre sus manos a esa maravillosa y deliciosa colegiala dueña de un cuerpo de diosa era para morirse, sus manos nunca habían tocado una piel tan suave y mucho menos unos pechos juveniles que a pesar de su edad serian la envidia de cualquier mujer adulta y Cielo Riveros podía sentir como le llenaba de jugos los dedos del borracho ante tanta caricia, sus pezones estaban parados al máximo sintiendo sobre su cuello y oreja las sucias palabras o intenciones que Ramón le decía que haría.
-- Esta bien… ya no aguanto zorrita, aquí mismo nos bajamos y nos vamos a un motel, te voy a culear hasta que amanezca mi amor… le dijo el asqueroso borracho acercando su repulsivo rostro y dándole un beso en los labios, dirigió su mano acariciándole la vagina y subiéndole el cierre de la chamarra le oculto los expuestos melones… -- ahora si muñeca, tranquilita nos bajaremos y cuidado con hacer algo estúpido porque te rebano el cuello… le dijo con un tono malévolo y despiadado.
Cielo Riveros quien aun respiraba agitada presa del miedo se paro junto a él y caminando hacia adelante se disponían a bajar del autobús, tenía sus lindas mejillas sonrojadas por los forzados estímulos recibidos, recién se daba cuenta lo que le pasaría, nuevamente a merced de un sucio abusivo y sin nadie que la ayudara, ya se imaginaba con terror en algún hotel barato solo de cuatro paredes y un techo con una sucia cama siendo culeada por aquel horrible hombre que si con ropa se le veía delgadamente enfermizo desnudo debería ser más horrible aun.
Sentía la punta de la navaja en su cintura cosa que no le daba valor para pedir ayuda, cuando el bus paro se dio cuenta que estaba a un paradero de su vecindario, Ramón de un ligero empujón la obligo a bajar y cuando eso ocurría un montón de laberintosos chiquillos arremetió en el bus desesperados por subir.
Cielo Riveros ya fuera del bus pudo ver como aquella manada de chavos se llevaron para adentro a su desesperado acosador, rápidamente pensó que al fin la suerte que ya hace mucho la había abandonado se acordó de ella y comenzó a apurar el paso para escapar de su captor chocando con un robusto sujeto, al levantar su rostro pudo ver que se trataba de uno de los pocos policías que custodiaban aquellas calles – hey que te pasa chiquilla, ten cuidado por donde vas… la dulce Cielo Riveros preocupada por el borracho volteo hacia atrás para ver si aun la seguía, viendo como este se volvió a subir al bus atemorizado al verla con un policía.
Ramón no podía creer como se le escapo de sus garras aquel monumento de chiquilla, aun en su borrachera con suma impotencia se lamentaba que aquella horda de escuincles le malograran la mejor noche de sexo que pudo haber tenido en toda su miserable vida… -- pinches chamacos de mierda, pero algún día me la volveré a encontrar en este bus… pensaba muy mortificado volviendo a sentarse en los últimos asientos donde descaradamente se masturbo desparramando de su blanco y amarillento semen sobre los asientos.
Después de que con sumo alivio vio el bus alejarse de ella sintiéndose librada de aquel asqueroso sujeto y disculpándose con el policía Cielo Riveros procedió a caminar con destino a su vecindario, en aquella peligrosas calles la fauna masculina reconocían el sensual caminar del objeto más deseado del barrio, el sueño dorado de muchos, el amor platónico de algunos y la fantasía depravada de todos, cabizbaja iba meditando el suceso pasado en el bus, no entendía como a pesar de que era víctima de un depravado su cuerpo reaccionaba a los estímulos que le daban, ni siquiera prestaba atención a los silbidos y piropos de toda clase que le decían en su sensual trayecto.
Tan distraída en sus confusos pensamientos no se dio cuenta que un grupo de muchachos drogados y callejeros se pusieron en su camino – a dónde vas reina tan solita… no quieres acompañarnos al parque a brindar con nosotros… Cielo Riveros reaccionando se encontró rodeada por aquellos vagos que con total descaro la miraban de pies a cabeza asintiendo en lo buenota que estaba – por favor, permítanme el paso… pedía algo nerviosa y asustada la nena viendo cómo ni se movían un metro.
Tan solo oía las risas y los planes descarados que tenían para ella, eso para la nena ya era demasiado al salir de un problema y entrar en otro y con total indignación grito como nunca lo había hecho… -- ¡¡¡ DEJENME EN PAZ!!!! Aquel grito fue tomado con sorna por aquellos vagos que con risas burlonas le empujaban para todos lados aprovechado algunos en tocarle el trasero…-- tu vendrás con nosotros preciosa, ya verás cómo te divertirás… Cielo Riveros nuevamente sentía que se metía en un problema en el que difícilmente saldría librada cuando en ese momento todos oyeron el estruendoso ruido de un balazo.
Era uno de los matones de Don Lucas quien merodeando por aquellas calles se había percatado de lo que sucedía – Haber pendejos dejen pasar a la señorita y pídanle disculpas… al oírle y reconocerle aquellos cholos vagos agacharon la cabeza permitiéndole el paso a una asustada Cielo Riveros quien con lentos pasos se alejaba oyendo las disculpas de aquellos fumones pero lo que más le dolió fue escuchar lo último que dijo el matón de don Lucas… -- Y recuerden bien pendejos, ella es propiedad de Lucas Guzmán Loera, que no se vuelva a repetir…
Aquella aclaración le dolió en el alma, nuevamente era salvada por quien la violo sin compasión, de aquel sujeto que supuestamente con su madre le pusieron los cuernos a su querido padre, realmente odiaba a Lucas, pues le había robado el último reducto de pureza que tenia, aquel que con amor le quiso entregar a su querido Rodrigo pero más importante para ella había sido mantenérselo intacto para Don Pedro, le asustaba cuando sepa que la perdió. Aquel viejo la tenía en sus manos, tenía pruebas que le arruinarían la vida y su inmaculada reputación y así acongojada se fue en dirección a su casa.
Para esos momentos está claro recordar el enojo, impotencia y reproches que le daba el maestro Tulio a un muy desencajado cojo Juan que se preguntaba cómo es que la colegiala había podido salir del cuartucho y lo peor de todo que hasta la cámara se había llevado, habían perdido su oportunidad de tenerla para siempre de esclava sexual… -- eres un idiota pinche cojo… le decía muy molesto el profesor Tulio quien era el que más lamentaba lo ocurrido… -- pero ya verá esa chiquilla cuando la vea… eran las palabras del impotente y frustrado maestro jurándosela a la pobre e inocente colegiala.
Pero para esos momentos muy alejada de aquellos dos viejos Cielo Riveros llegaba a su casa pero no por eso sus calamidades acabarían pues en su triste andar llegaba al edificio donde vivía pudiendo escuchar el jolgorio y groserías que venían de la cantina de don Lucas, muy preocupada porque uno de estos viejos saliera rápidamente se adentro subiendo la larga escalera cuando a mitad de esta se encuentra con la obesa figura de Anselmo, la nena se quedo paralizada llena de miedo al ver como este gordo viejo se acercaba hacia ella bajando peldaño a peldaño de la solitaria escalera.
La luz que alumbraba aquella desolada zona era lúgubre con olores de humedad y paredes pintadas con grafitis, ella quería retroceder y huir pero el temor era demasiado cuando en eso oye la horrible voz del viejo… -- Hola niña preciosa… de dónde vienes tan linda je je… la nena no le respondió, pero con total indignación y molestia quiso proseguir con su camino… -- per-permiso por favor… la muy inocente Cielo Riveros justo al pasar por su lado le da la espalda sintiendo al instante como este arremetió contra ella aplastándola contra la pared.
Cabe resaltar que la nena se sentía aplastada por el enorme peso del obeso sujeto sintiendo sobre sus duras y portentosas nalgas la dura erección de aquel grueso miembro que ya una vez había entrado dentro de ella y sobre su nuca sentía el fuerte aliento a alcohol que despedía el viejo. No tenía fuerzas para librarse, aquel gordo sujeto era demasiado fuerte y pesado tan solo apoyaba sus manos sobre la pared tratando de empujar hacia atrás al viejo logrando solo excitarlo más al extasiado Anselmo.
-- déjeme, déjeme ir… sueltemeeeee… pedía la desesperada nena sintiendo como Anselmo con una mano le acariciaba las piernas subiéndole el vestido tratando de llegar hacia su deliciosa panocha… -- NO!!! No por favor, quíteme las manos nooooo!!!! El gordo viejo solo sonreía emocionado y ansioso de disfrutar de aquella deliciosa y hermosa adolescente… -- je je silencio mamazota… o nos escucharan tus vecinos, tu solo déjate disfrutar jejeje…
La angustiada colegiala abrió grande sus ojos verdes al darse cuenta donde estaba, en cualquier momento algún vecino o amigo de ella podría encontrarla en aquella situación comprometedora, que vergüenza seria para ella si la vieran con aquel viejo horrible y tontamente dejo de hacer bulla dejando caer sus manos como entregándose a los deseos de aquel viejo obeso… -- -humm ya ves ricura… ahora si vas a disfrutar de una verga como tanto te gusta…
Ella aun no claudicaba en su lucha por liberarse de las sucias garras del vejete y respondiéndole en voz baja le pedía que la dejara ir… -- de-dejeme por favor señor, no me haga nada… pero Anselmo estaba lejos de hacerle caso, no perdería la oportunidad de comerse a la chiquilla por nada del mundo, había ansiado volverla a tocar desde aquella noche que junto a Lucas abusaron de ella y este era su momento.
Nuevamente comenzó a refregarle la verga en las nalgotas de Cielo Riveros aplastándola contra la pared en donde sus redondas chichotas también se aplastaban como gelatina soportando la presión de aquel obeso, era un ir y venir de fuertes estocadas sobre sus nalgas solo cubiertas por la delgada y suave tela del pequeño vestido, pensaba con miedo que cuando el viejo se de cuenta de que no llevaba ropa interior seria el comienzo de una nueva pesadilla de sexo no consentido para ella.
-- Ay mamazota, que rico culo te manejas, siempre supe que eras una putita y que te gusta la verga… decía un excitado Anselmo frotándole la verga, aquel rechoncho miembro que ya soltaba sus primeras gotas de lubricación, en cambio la nena se desesperaba al oírle como este aseguraba que ella era una cualquiera, una putita de callejón hambrienta de sexo, se sentía mal y a su vez lo detestaba por tal aseveración… -- NOOO!!! No es cierto… usted es un desgraciado, déjeme ir… el vil y sonriente viejo era indiferente a los reclamos de la colegiala solo disfrutaba de su cuerpo y de la deliciosa fragancia que despedía ella.
Con mucha lascivia sus manos comenzaron a acariciarle ambas piernas corriendo el vestido hacia arriba, ella en un acto de defensa le tomo ambas manos en un inútil intento por detenerlo, a lo cual Anselmo dirigió su apestosa boca en el desprotegido cuello comenzando a darle ligeros mordiscos, en ese momento Cielo Riveros se estremeció, aquella zona de su cuerpo ya era conocida como el punto de inicio de la entrega de su cuerpo… -- nooo por favor!!! Suélteme, déjeme ir… gimoteaba la colegiala sintiendo ligeros escalofríos al sentir esa asquerosa lengua deslizarse desde su cuello hasta el lóbulo de su oreja izquierda.
Con mucha angustia tragaba saliva sintiendo como nuevamente la vida la ponía en una situación caliente y con este horrible ser, sus intentos de lucha y por zafarse de las garra de Anselmo eran inútiles claramente sentía como el duro miembro de aquel gordo se metía entre sus nalgas por encima de la delgada tela del vestido y ante la ausencia de su prenda intima era mucho más notoria el sentir de la dura y empalmada verga… -- siente mi verga ricura… está loco por meterse dentro de ti, te ha extrañado muchísimo…
Anselmo seguía fuera de control con sus incansables embistes, tenía la verga por reventar y sin siquiera haberla penetrado y su lengua aun seguía con el incesante ataque al sensible cuello, a la fuerza quería voltearle el rostro y probar de aquellos carnosos labios pero Cielo Riveros aun se resistía, se encontraba algo agitada puesto que aquel viejo le estaba atacando en aquella zona tan sensible para ella, quería luchar contra sus instintos de mujer lujuriosa pero siempre perdía esa batalla, las punteadas que la deba en sus duras nalgas y aquel ataque que sufría en su cuello y oreja eran demasiadas.
Cielo Riveros no podía resistir mas aquellas sensaciones, ya habían pasado minutos tratando de concentrarse y de tratar de no sentir como aquella rasposa lengua le hacían erizar su tersa piel, sentía que cada vez perdía la lucha contra el placer y la excitación.
En ese momento todo se le junto y aunque no recordaba que le paso en la escuela sabia que por lo irritado de sus pezones y el delicioso escozor que sentía en el ano se habían aprovechado de ella y el tratar de imaginarse quien fue la puso excitada y sumado a la corta experiencia que le hizo pasar aquel borracho en el bus donde también cayo rendida y entregada ante sus lascivos ataques la excitaron, se imaginaba que de no ser por aquellos revoltosos chavos o por el inoportuno policía en estos momentos estaría revolcándose con aquel desgarbado y desagradable sujeto en algún motel de mala muerte o en todo caso estaría en algún solitario parque con aquella horda de drogadictos muchachos que la rodearon en aquella calle, imaginarse siendo tocada por todos ellos y rodeada de tantas vergas la puso aun más caliente.
Pero muy en el fondo se preguntaba que le pasaba, porque tenía esos pensamientos tan denigrantes y pecaminosos, solo podía escuchar como de su boca salían unos leves gemidos de placer, muy enajenada en sus pensamientos no se había dado cuenta que Anselmo ya le estaba metiendo unos dedos en su encharcada vagina… -- huy putita… andando sin nada dentro je je se ve que vienes de coger con el estúpido de Rodriguito jeje…
-- por…por favor… no…no sigaaa ahhhh… Anselmo no podía creer como tan rápido ya había calentado a la nena, podía sentir como ya no daba muestras de lucha ante sus acometidas y dándose un respiro la sujeto por la cintura y sin sacarle la otra mano de la panocha retrocedió apoyando su ancha espalda contra la pared, sus dedos seguían introduciéndose dentro de ella sintiendo como ardían al contacto de lo calientes fluidos que ella soltaba, la nena dejo caer su cabecita hacia un lado dándose el gusto de sentir aquella rasposa lengua lamerle el cuello.
Al ya notarla rendida Anselmo deslizo el cierre de la chamarra abriéndola por completo y su asombro fue mayor al poderle ver por encima de su hombro como aquellas dos majestuosas chichotas estaban al aire y con el vestido rasgado… -- je je me sorprendes zorra… te haces la monjita pero eres tremenda puta, saliendo a la calle de esta manera jejeje… Cielo Riveros ya no sentía ofensa al oírle decir aquellas sucias palabras, estaba más concentrada en sentir placer, en desquitarse ese fuego inmenso que tenia por dentro aun si aborrecía al gordo y viejo sujeto.
-- Ay zorrita eres igual de puta que tu madre jejeje… nuevamente le llegaba a sus odios ofensivas aseveraciones sobre su querida madre, aun en su estado de excitación le molestaba que se refieran así de su progenitora… -- nooo!!!! Mi ma-madreee no es una pu-puutaa… reclamaba la colegiala defendiendo el honor de su madre, en cambio Anselmo solo reía siguiendo con sus besos y succiones en el cuello para evitar que se enfrié – jeje ay mamazota si tú supieras las tremendas pajas que me hacia viéndolos fornicar… Cielo Riveros sintió un estremecimiento en su vientre al darse cuenta de que este viejo había sido testigo de la traición que su madre le había hecho a su padre.
-- me-mentira… us-usteedd mienteee… Anselmo con ambas manos comenzó a amasar aquellas dos montañas de carne que tenia por senos pellizcando con cierta sutileza los endurecidos pezones… pero en ese momento comenzó a sonar su celular, sabía muy bien que era Lucas el que llamaba con insistencia… -- Ay putita es verdad lo que te digo, tu madre y el Lucas le ponía los cuernos al buena gente de tu padre jejeje… hasta un video tengo de una de esas cogidas que se metían…
Nuevamente Anselmo la apretó contra la pared en donde sus redondas chichotas se aplastaron contra la fría y sucia pared sin dejar de presionar con su empalmado miembro sobre sus nalgas como recordándole el tamaño y grosor que este tenía… -- jeje muy bien zorrita, me tengo que ir, pero si quieres ver como tu mama y el Lucas cogían como animales tu avísame jeje… claro que antes tendrás que portarte muy bien conmigo y entregarte como la putita que eres, jejeje espero pronto que te decidas… y diciendo esto último el obeso sujeto se dirigió con prisa ante el llamado de Lucas dándole una fuerte palmada en las nalgas que se pudo haber oído en todo el edificio dejando a una extasiada y confundida Cielo Riveros apoyada contra la pared.
Veía con la respiración agitada como aquel repugnante y adiposo viejo se iba riéndose con la seguridad de que ella accedería a sus asquerosas intenciones y cerrándose la chamarra se dirigió a su hogar rápidamente temerosa de que en tan sola corta distancia pueda ser víctima nuevamente de algún aprovechador.
Ya una vez en la seguridad de su habitación se miraba en el espejo, por suerte no había nadie al otro lado viéndola, quitándose la ajena chamarra pudo ver como sus pechos quedaron al aire por el rasgado que le dio aquel asqueroso borracho, pudo notar algunas marcas de mordidas y la ligera humedad que le dieron, se quito el vestido arrojándolo al piso observando las perfectas y esculturales curvas de su cuerpo, pensaba con cólera como había reaccionado ante los toqueteos, primero con aquel asqueroso borracho en el bus, luego estaban aquellos vagos que la tocaron a empujones y por ultimo don Anselmo.
Eso es lo que más le molestaba y mas al saber que este tenía pruebas comprometedoras de su madre, pero no se creía capaz de acceder al chantaje de este, por nada del mundo se entregaría a ese viejo que tanto odiaba, apretaba los puños muy molesta solo de pensar como la toco, todo esto sin dejar de mirarse al espejo impotente de poder detener las sucias intenciones que siempre tienen con ella, las marcas en su cuerpo eran una tortura para ella lo que la animo a darse nuevamente una ducha bien fría.
Rato después ya se encontraba sentada en su cama tan solo con una pequeña pantaloneta que se le ajustaba perfectamente y una pequeña playera que usaba para dormir, asimilando todo lo vivido en el día, como unos flashazos se le venía a la mente los últimos momentos antes de perder la razón, recordaba como tontamente se confió de Victor y bebió de cierta bebida que le ofreció y también como luego se encontraba desnuda en la ducha con Verónica, pensaba en lo buena que fue al ayudarla.
Sus labios esbozaron una pequeña sonrisa al recordar como el padre de Verónica le beso la mano con tal cordial saludo a pesar que era un tipo vulgar y alcohólico le pareció agradable aun si este tipo le toco sus nalgas pero a su vez sentía lastima por como trataba a su propia hija, pensaba que ella no era la única que sufría en la vida pero soñando con que alguna vez sería una profesional y se llevaría de aquel peligroso y pobre vecindario a su madre y porque no ayudar también a la pobre Verónica de quien pensaba en estos momentos estaría sufriendo de los insultos y acosos de su padre no sabiendo que para esos momentos Verónica se encontraba encerrada en su habitación con las piernas abiertas acariciándose la vagina muy agitada viendo una y otra vez el video en donde el cojo se la había follado toda la tarde.
Cielo Riveros estaba a punto de dormirse cuando suena su celular… -- -si… diga… -- Hola Evi… soy Emilio, te llamaba para recordarte que mañana almorzamos juntos… la nena no pudo evitar un suspiro a su vez sorprendida por aquella llamada, con todo el ajetreo del día se había olvidado que tenía que salir con Don Emilio, el padre de su mejor amiga… -- EH!! Si Don Emilio, mañana estaré con usted… Emilio no pudo evitar sobarse el miembro al escuchar esa dulce voz asegurarle que mañana estaría con el… -- Muy bien Evi… yo te llamo mañana para recogerte, que duermas bien… -- igualmente Don Emilio… buenas noches…
Cielo Riveros estaba emocionada aquella llamada le había alegrado el día, se recostó en su cama pensando en su salida con aquel hombre maduro, pero también pensaba si estaba bien lo que hacía, aquel señor era el padre de Claudia, su mejor amiga, no podía hacerle eso; aunque también se decía que no tenía nada de malo, don Emilio solo quería conversar acerca de su hija, sería solo una salida tranquila, sus ojitos ya se les cerraban cuando oye de nuevo el timbre de su celular. Emocionada pensando que sería nuevamente Don Emilio cogió su celular viendo que se trataba de Rodrigo.
-- Alo… mi amor como estas… la nena se sintió mal, su querido novio la llamaba con tanto amor y ella pensando en otro, no podía ser tan mala pensaba… -- EH si Rodri… ya estaba por dormirme… -- mi amor… te invito a almorzar mañana en mi casa…aquella invitación no le cayó bien a Cielo Riveros porque a esas horas tendría que salir con Don Emilio, tendría que buscar la manera de no aceptar la invitación… -- Ay Rodrigo… no creo que pueda, tal vez el domingo si… del otro lado del teléfono Rodrigo le comunicaba a su malvado padrastro que su bella novia no podría a lo cual este le quito el teléfono siendo el mismo quien ofrecería la invitación.
-- Hola Cielo Riveros , te esperamos mañana en nuestro humilde hogar… la nena se sorprendió al oír la ronca voz del padrastro… -- Como esta Don Severiano… pero la verdad ya le dije a Rodrigo que no se si mi madre me dará permiso… -- Bueno en ese caso yo mismo iré para hablar con tu mama y asunto arreglado… Cielo Riveros se puso nerviosa, de ninguna manera podía permitir que aquel viejo viniese a su casa porque supuestamente su madre no sabía de su relación amorosa con el chico de la farmacia como conocían al buen Rodrigo… -- MMMM no don Severiano no se moleste, de todas maneras estaré presente en su casa mañana… -- muy bien preciosa, te esperamos…
Cielo Riveros arrojo el celular muy incómoda pensando que haría ahora para poder verse con don Emilio, estaba muy molesta con Rodrigo por haberle pasado el móvil a su padrastro, ella quería salir y distraerse con alguien que le de seguridad y esa persona era Don Emilio se puso a pensar que excusa podría inventar para irse temprano de la casa de Rodrigo cuando nuevamente suena el celular, muy molesta lo coge pensando que si es Rodrigo le increparía por haberle hecho eso pero al contestar oyó la aguardentosa voz de don Pedro… -- Como está la putita más sabrosa que me he comido… extrañando a su macho jejeje… la nena se puso nerviosa al oírle, sentía miedo pero a su vez comenzó a nacer desde sus entrañas una sensación de emocional excitación.
-- Don Pedro… co-como esta… -- aquí pues trabajando, buscando algún momento para darme una escapada y culearte como te mereces jejeje… la nena no entendía lo que le sucedía, sentía un sentimiento de odio hacia aquel sujeto mezclado con temor pero a su vez su cuerpo reaccionaba excitada reconociendo la voz de aquel vejete que bajo el chantaje la había dominado, los pezones se habían endurecido y sentía un estremecimiento en su esfínter, Don Emilio, Rodrigo y todo lo sucedido en el día habían desaparecido… -- No sabes las ganas que tengo de tenerte en mis manos, aquí todas las putas no se igualan a ti, todos los días me pajeo pensando en cómo te cogí en la feria…
Cielo Riveros se puso a recordar como aquel día en la feria termino subyugada bajo el poder de ese viejo dominante entregándose y gozando como nunca lo había hecho con nadie, aun se preguntaba si es que no hubiese aparecido Claudia y el maestro Tulio que hubiese pasado, tal vez su virginidad hubiese sido para la verga de don Pedro aquel miembro sin duda había sido la mejor que hasta ahora había visto y probado en todas sus dimensiones pero sin la satisfacción de haberla visto eyacular ninguna vez o de haber probado de de ese elixir… -- que pasa putita… te comieron la lengua los ratones jejeje… -- NO!! Don Pedro, dígame para que me llama…
-- PARA QUE!!! Para hablar con mi mujer… con mi putita jejeje… la nena solo pudo gesticular un sonido de queja ante lo que le decía… -- ACASO ME EQUIVOCO!!!… le recrimino el vejete de manera airada asustando a Cielo Riveros … -- eh!!! Nooo don Pedro, no se equivoca… -- jeje entonces dime que eres… la nena apretando un puño llena de pena, impotencia y excitación cayó en el juego del vejete… -- so-soy su mu-mujer don Pedro… -- jeje asi me gusta putita, que obedezcas a tu marido jejeje…
Cielo Riveros seguía tan solo oyendo lo que el vejete le decía…-- muy bien putita quiero que te desnudes ahora… -- Que!!!... – lo que oíste, desnúdate rápido!!!!Cielo Riveros como una autómata se quito la playera y deslizo la pequeña pantaloneta quedando completamente desnuda sobre su lecho… -- ya don Pedro… -- jeje no te creo así que tomate una foto y envíamela a mi número y rápido… la nena quiso reclamar -- pe-pero no le miento… -- mándamela rápido!!!! Cuando Cielo Riveros escuchaba la airada voz del vejete terminaba por aceptar lo que le pedía y tomándose la foto se la envió a su verdugo llena de vergüenza.
Don Pedro de tan solo verla casi eyacula… -- muy bien putita, así me gusta, veo que sigues tan hermosa como siempre, la nena más bella de todo el DF… a pesar de lo bochornoso y humillante del momento de su rostro nació una leve sonrisa ante el halago del vejete… -- me lleva la chingada chamaca, mejor no me hubieses mandado la foto, ahora te deseo mas, quiero morderte esas chichotas y esas nalgotas que tienes… la nena seguía contrariada escuchándolo viniéndole como flashazos los recuerdos vividos en la Feria y la última vez que estuvo con él en aquella confortable cama en donde se encontraba.
Se le calentaba la panocha recordando como el vejete la sodomizo en su propia cama y ella solo gozaba de la fricción de aquel grueso miembro dentro de su ano, esa misma noche Don Pedro la hubiese desvirgado de no ser por la abrupta interrupción de Don Lucas… en ese instante se lleno de un angustiante miedo al recordar que por culpa de ese viejo ya no conservo su virginidad para don Pedro, no quería ni imaginarse la reacción que este tendría cuando se enterara.
-- Muy bien putita me despido y sigue manteniéndote tan buena como siempre… fue lo último que dijo don Pedro antes de colgar el teléfono dejando algo inquieta a nuestra querida Cielo Riveros , en ese momento sentía que algo le faltaba, una sensación de angustia por el placer carnal que no había tenido jamás nuevamente se recostó en su cama recordando como aquel día en la Feria conoció o mejor dicho cayó en las garras de don Pedro, tenia juntas sus torneadas piernas tratando de apretarse su deliciosa intimidad a la vez que sus pies acariciaban en un suave y delicado camino las blancas sabanas de su cama.
Se mordía los labios y la almohada presa del deseo y las ansias de sexo que su cuerpo le pedía pensando como desfogar o satisfacerse, entendía muy bien que tan solo tocándose no sería suficiente pero quien!!! pensaba la nena, quien seria aquella persona con la cual podría saciar aquel improviso apetito sexual que arraigaba su cuerpo, todo era culpa de don Pedro por calentarla y ni siquiera se encontraba cerca para coger con el… rápidamente con vergüenza pensaba como era posible que tuviera esos pensamientos pero el calor de su cuerpo era incontrolable.
A su mente la única persona a la cual le daría su consentimiento era Rodrigo pero estaba molesta con él a su vez que no sentía mucho deseo carnal por su novio, la otra persona que con horror era el más cercano en saciar sus deseos era Anselmo, pero ella lo odiaba al igual que a don Lucas y por mas que le haya ofrecido pruebas de la infidelidad de su madre preferiría mil veces salir y buscar a aquel borracho que quiso abusar de ella en el bus.
Su excitación era tal que comenzó a frotarse su caliente panochita cogió su cámara y comenzó a tomarse fotos así desnuda como se encontraba y en su delirio pensaba que estoy haciendo, porque me comporto de esta manera… sin dejar de sentirse caliente continuo con su improvisada sesión de fotografía, la nena no se reconocía y mordiéndose los labios cambio la cámara a modo de grabación de video dispuesta a grabarse desnuda, la morbosidad que tenia era incontenible pero no había grabado ni 20 segundos cuando la cámara se apaga.
Al revisarla pudo ver que el celular decía, memoria llena… la nena algo confusa no se explicaba porque estaba llena, no recordaba haberla usado así que se dispuso a verificar que había, cuando encontró el archivo que ocupaba tanto espacio la encendió de inmediato… al reproducirse el video Cielo Riveros casi se desmaya, no podía creer lo que veía… era ella en la feria gimiendo con locura podía ver en su rostro un rictus de placer que ella misma no se la creía, con la mano en la boca veía estupefacta y avergonzada como disfrutaba de aquella supuesta violación de la que fue víctima.
Estuvo a punto de borrarla cuando el video hace un movimiento enfocando el horrible y sádico rostro de Don Pedro, el video hizo un plano más extenso de la situación y se pudo ver como tan solo con sus botas negras se encontraba postrada sobre aquella improvisada mesa de madera siendo follada con violencia por aquel sucio vejete, muy alejado de ellos distinguía dos personas observando la escena, muy a su pesar comenzó a excitarse dirigiendo su mano que instantes atrás tapaba su boca hacia su húmeda vagina oyendo el celular…
–- Vamos putita dime quien es tu macho, quien es dueño de tu cuerpo……
–-Uuusteed uussteed es miii maaachooo, ahhh ahhh……
–-Ussteed ess mii duueeñooo ahhh ayyy ………
–-Humm mi putita así me gusta…… dime que eres ahora de mi………
–-Ahhh ahhh suuu mujer, soy suu muujerr ahhh ahhh ……
–-Ahora me perteneces muñeca y no te dejare nunca………
–-Serás mi puta para siempre……
Fue lo último que oyó la nena antes de explotar en un intenso orgasmo cayendo rendida sobre la cama muy agitada y casi de golpe se quedo dormida… pero ni en lo más profundos de su sueños su cuerpo la dejaba tranquila, se encontraba sobre su cama ante las miradas de don Lucas y Anselmo quienes desnudos y con los miembros al aire la miraban sonrientes – hola preciosa… aquí estamos para tranquilizar tus ganas de verga jejeje… muy a pesar de que era un sueño ella se negaba pero sin controlar los deseos que tenia de sexo, soportaba estoicamente las ansias de meterse en sus labios aquellas dos barras de carne que coquetas se balanceaban invitándola a probarlas.
-- no quieres verga… o acaso prefieres la de ese asqueroso… le dijo don Lucas apareciendo a los pies de su cama la enfermiza figura de Ramón, el borracho del bus con una considerable verga semitieza apuntando hacia ella… -- prefieres la de el!!! Le decía burlonamente y sonriente enseñándole la suya el ruin don Lucas… la nena lo odiaba y con toda esa furia contenida y ansiosa de sexo gateo hasta donde se encontraba Ramón tomándole la verga desde la base y dándole ligeros lametones para terminar de engullirse una parte de aquella ya erecta verga sin dejar de mirar a retadoramente a los ojos a don Lucas en una actitud de sensual burla.
Sentía como Ramón le acariciaba su espalda con esa sucia y callosa mano sintiendo deliciosos escalofríos de placer… -- te gusta verdad puta… prefieres a ese vago asqueroso que a mi… le decía molesto aquel viejo que ella tanto odiaba sin dejar de mamar aquella larguirucha verga que satisfacían en algo la enorme ansia de placer que quería… -- vas a dejar que ese inmundo te coja en vez de a mi quien te desvirgo la panocha… le seguía diciendo burlonamente hiriéndola profundamente.
La nena dejo de chupar aquella verga echándose en su cama abriendo sus piernas para recibir al instante a aquel sujeto que con lascivia y amenazas la había tocado en el bus… pero mil veces prefería a aquel sujeto a que Lucas y Anselmo la vuelvan a tocar… -- ahh ayyy siiii siii ahhh… fueron los gemidos de la nena al sentir como aquella verga entraba hasta donde podía de su caliente panocha lo abrazo por la nuca apretándose con el y abrazándolo con sus torneadas piernas tratando de sentir más profundo las embestidas que le daba, sin dejar de mirar con ojos excitados a aquello dos maleantes que aun sonrientes la miraban masturbándose…
Sentía su cuerpo húmedo de sudor de ella y de su amante que caían sobre ella, Ramón ya no podía mas poniéndose de rodillas comenzó a masturbarse y desparramando una increíble descarga de semen sobre su vientre y tetas bañándolas por completo, la nena solo se mordía los labios presa del orgasmo que había tenido viendo como de las vergas de don Lucas y Anselmo también la manchaban de intensas descargas de semen sobre su cara y cabellos burlándose de ella.
Pasaron las horas y ya era de día la nena aun en su tibio despertar oía que tocaban su puerta despertándose asustada y completamente sudada, se dio cuenta que estaba desnuda y rápidamente se puso la pantaloneta y la playera acercándose para ver quien tocaba, afortunadamente para ella la que tocaba era su madre quien llegaba como siempre los fines de semana.
Recibiéndola con un fuerte abrazo se dispusieron a desayunar conversando entre ellas todo lo que habían hecho entre semana, claro está que la nena no contaba de lo que era víctima y en esa habitual convivencia entre madre e hija la mañana comenzó a pasar rápidamente estando un poco nerviosa por la cita que tendría con el padre de Claudia, así que se lo conto a su madre quien algo preocupada se sorprendió de que su hija saliera con el padre de su mejor amiga… -- Ay mami no es lo que te imaginas Don Emilio solo quiere hablar de Claudia y quien más que yo que la conozco tan bien… le decía inocente la nena quien no sabía de las verdaderas intenciones de don Emilio a lo que su madre entendió ya que su hija no le daba motivos para hacerla pensar mal.
Rápidamente la nena se dio un baño y maquillándose tenuemente se puso un ajustado top escotado color melón y un ajustado pantalón blanco con sus botas negras, se veía espectacular, como una hermosa modelo y despidiéndose de su mama salía de su casa en dirección al centro comercial en donde se encontraría con don Emilio, no había caminado mucho cuando se encuentra con Rodrigo quien la abraza efusivamente… -- Hola preciosa… lista para irnos… Cielo Riveros no supo qué hacer, se había olvidado que tenía que ir a almorzar con la familia de Rodrigo… --Ay hola Rodri… le dijo dándole un tierno beso en los labios… -- mi amor no podre ir… tengo un asunto urgente que atender… le dijo mintiéndole con dolor al buen muchacho.
Rodrigo muy comprensivo entendía las razones de su hermosa novia pero poniendo una cara de completa tristeza y decepción lo que hiso sentir mal a la nena quien tomándolo del rostro le dio otro tierno beso… -- mi amor en la noche vienes y conversamos en la azotea… Rodrigo puso una cara de alegría y devolviéndole el beso la dejo ir contento pues solo esperaría hasta la noche para pasarla románticamente con ella, pero a una cierta distancia su malvado padrastro observaba como la hermosa palomita se iba en otra dirección que no era su casa… -- pinche muchacho estúpido, nada puede hacer bien… se decía muy malhumorado decidido a seguir a la colegiala hacia su destino.
Ni bien subió al bus Don Severiano paro un taxi ordenando seguir al bus ante un curioso taxista que dudaba en hacerlo… -- Estoy siguiendo a mi hija… usted solo haga su trabajo… le dijo enojado al taxista quien muy lentamente siguió al bus, Cielo Riveros bajo justo en la estación que daba hacia el muy concurrido centro comercial, el viejo también a una distancia prudencial bajo del taxi siguiendo a la nena quien inocente no imaginaba que era espiada, para ese momento Don Emilio ya podía distinguir la hermosa figura de la colegiala vestida muy sexy haciendo que las miradas de los hombres que transitaban por el lugar voltearan a verla excitados, enamorados y embobados ante tremendo monumento de mujer.
Los dos se saludaron cordialmente dirigiéndose hacia uno de los restaurantes, para esto don Severiano miraba muy molesto y curioso que la hembra que tanto deseaba se encontraba con un tipo maduro y apuesto en vez de asistir al almuerzo que con mucho trabajo había preparado, en cambio Cielo Riveros conversaba muy amenamente con don Emilio contándole cosas de Claudia que de por si la mayoría eran mentiras ya que no sería capaz de decirle que su querida hija era una tremenda putita que se acostaba con quien se le diese la gana.
La conversación termino entorno a Claudia y Don Emilio comenzó a preguntarle a la nena cosas de su vida, sus intereses, sus metas, sus gustos, contestándole ella muy alegremente, siempre riéndose de las cosas graciosas que el maduro hombre le preguntaba o respondía, era la primera vez que se sentía segura con alguien, pero se sonrojaba cuando Don Emilio le decía uno que otro halago poniendo esa carita de niña mimada que a muchos enternecía pero a los que querían cogérsela los excitaba y Don Emilio no era la excepción, pues bajo su piel de oveja pensaba en esos sonrientes y carnosos labios envolviendo su miembro en un delicioso sube y baja.
La veía tan tierna e inocente pensando que con ella haría lo que le diese la gana y pagando la cuenta la invito a caminar por el centro viendo las tantas galerías de ropa que habían, su idea era impresionarla o darle regalos, sabiendo de su condición humilde pensaba que con eso podría conquistarla o que se muestre interesada mas en el, pero la nena muy cortésmente rechazaba tales ofrecimientos, pero no por eso dejaba de estar atraída por Emilio que en ningún momento dejaba de halagar su tierna belleza diciendo que cuanto le gustaría ser un chiquillo de nuevo y conocer a alguien tan hermosa como ella haciendo que Cielo Riveros sonría tímidamente muy apenada pero a su vez emocionada, todo esto siendo visto por don Severiano que con ojos envidiosos y furiosos tomaba fotos sin que ellos de diesen cuenta.
Así paso la tarde y Don Emilio dejaba en su casa a la nena… -- Hasta luego don Emilio… le decía al empalmado maduro – mmm te puedo recoger a la salida de tu escuela… para conversar de nuevo… la nena no pudo evitar por dentro la emoción de que aquel apuesto señor quería volverla a ver… -- ehhh siii… claro… -- bueno hasta mañana… le dijo Emilio hiéndose en el acto, dejando a una emocionada y suspirante Cielo Riveros quien rápidamente pensó en que es lo que le pasaba, Don Emilio era un hombre casado, padre de su mejor amiga, y no podía seguir pensando en una relación con el, ella tenía novio al cual quería mucho y en ese preciso instante se apareció Rodrigo.
La nena al verlo rápidamente lo abrazo fuerte dándole un tierno beso apoyando su rostro en uno de los hombros del chico tratando de olvidar sus ideas para con Don Emilio, el chico la abrazo de la cintura muy emocionado por el efusivo saludo de su hermosa diosa, Cielo Riveros lo tomo de la mano y lo llevo dentro del edificio diciéndole que lo espere en la azotea donde minutos después paso momentos de tranquilidad abrazado de Rodrigo conversando amenamente entre besos y besos tiernos siendo abruptamente interrumpidos…
-- Como está la parejita jejeje… la nena se asusto al oír la voz de don Lucas quien en compañía de Anselmo llegaron con una botella de tequila con sus sonrisas burlonas… -- como esta Don Lucas… don Anselmo como esta… fue el saludo de Rodrigo quien parándose con todo respeto les extendió la mano saludándolos cortésmente… -- Aquí pues muchacho, festejando la vida jejeje no deseas una copita… le ofreció don Lucas a Rodrigo con la intención de emborracharlo y aprovecharse de Cielo Riveros , la nena muy nerviosa y llena de miedo tomo del brazo a Rodrigo jalándolo junto a ella… -- Ehh la verdad no don Lucas, será en otra oportunidad… dijo el muchacho muy nervioso mirando una y otra vez a una seria Cielo Riveros .
-- je je je ah ya veo, nuestra nena te tiene dominado jejeje… Rodrigo asintió un poco apenado ante la burla de don Lucas… -- eh pues un poco, además no quiero enfadar a mi novia… los dos viejos miraban sonrientes a la pareja y sobre todo a Cielo Riveros quien con miedo y odio a su vez miraba a ambos viejos, podía notar la burla y soberbia con que don Lucas la miraba como sabiéndose dueño de ella, armándose de valor tomo del rostro a Rodrigo propinándole un apasionado beso que hizo sentir celos y envidia a los vejetes… -- Así es, mi novio me hace caso porque lo amo… y diciendo esto último tomo de la mano a Rodrigo abriéndose paso entre ellos pero aun temblando de miedo por si aquellos viejos se atrevían a hacerle daño.
Afortunadamente nada paso y Cielo Riveros se fue a su cuarto despidiéndose de Rodrigo, pero en la azotea Anselmo reclamaba a don Lucas porque permitió que la nena se fuera… -- déjala gordo, que se crea segura den si misma, así me gustara mas cuando me la vuelva a coger jejeje… prosiguiendo con su borrachera comenzaron a planear como abordar nuevamente a la nena… -- oye Lucas… ya que no me dejas cogerme a Cielo Riveros ni a la rubia Janitzi… porque no me dejas cogerme a Pilarcita… una sonrisa maquiavélica nació del rostro de don Lucas, a su mente regresaban los recuerdos de aquellas cogidas que se metían… -- no sería mala idea… me cojo a la madre y a la hija jejeje… -- que chingon eres Lucas, el pobre Julian se revolcara en su tumba con eso jejeje… -- así es Anselmo… cornudo hasta desde la tumba jajajaja… reían burlándose de la memoria del padre de Cielo Riveros .
Con esos aconteceres de la vida Cielo Riveros paso el fin de semana tranquila, el día domingo salió con Rodrigo al centro comercial en donde su querido novio no pudo ofrecerle todo lo que Don Emilio si pudo, recordaba como el día anterior aquel apuesto maduro la invito a almorzar después hasta le ofreció comprarle cosas aunque no acepto pero si unos helados, pero comparado con Rodrigo quien por sus gastos hogareños no le alcanzaba más que para los boletos del cine… -- discúlpame Cielo Riveros , aun no me han pagado… decía muy apenado Rodrigo al no poder satisfacer los gustos de su novia… -- descuida bebe, yo invito esta vez… le dijo la nena muy comprensiva y cariñosa sacando dinero de su bolso haciendo sentir más apenado a su novio.
Cielo Riveros paso la siguiente semana más tranquila de su vida no evitaba que la piropearan de todas las maneras posibles pero al menos nadie se había atrevido a forzarla, el profesor Tulio y el cojo Juan no la acosaban porque pensaban que tenía aquel video en donde se comprobaba que la habían drogado y violado y temiendo que los denunciara solo la veían muy contrariados como ella seguía actuando con su habitual manera natural de comportamiento escolar, el que si se fue en balde fue Victor quien buscaba de todas formas conversar con ella siendo enviado al diablo por ella amenazándolo con contarle al director.
La nena se sentía libre de acosos, muy segura y mucho más cuando en toda esa semana Don Emilio la recogía a la salida de la escuela, el comportamiento de aquel hombre maduro la tenía encandilada, sin querer se estaba enamorando del padre de su mejor amiga, ya era común que sus miradas se cruzaran quedándose congelados como esperando que alguien de el primer paso, pero siempre acababan sonriendo mirando hacia otro lado, don Emilio sonreía por dentro pues ya se sabía ganador de ese monumento de hembra.
Fue un día en la mañana en que Cielo Riveros se sentía intranquila, pensando en lo que le pasaba, su corazón latía a mil por don Emilio, no tenía ni el más remoto pensamiento de Rodrigo, en ese momento recibió un mensaje de texto en su celular, era de don Emilio diciéndole que se encontraba solo y triste… la nena no dejaba de sentirse emocionada, se encontraba sentada en su cama… que hago, que hago se decía y con la emocional respiración que tenia se paro abriendo su ropero buscando la ropa más sexy que tenia, pensando a su vez que hacía, no podía creer que se animaba a ir a casa de don Emilio.
Minutos después ya se encontraba camino a su destino vestida con unos apretados jeans y un escotado top blanco, el ruido que producían sus pequeñas botas de taco eran escuchados por la fauna masculina del vecindario… estoy loca… estoy loca se decía la inquieta nena sin ánimos de dar un paso atrás, pensaba en Claudia su querida amiga, como le iba hacer eso, pero a su vez recordaba sus palabras, que aprovechara su juventud y belleza y que se entregara a los deseos de quienes la desean y en este caso era su padre la que la deseaba en un sentimiento reciproco.
Don Emilio abría la puerta estupefacto y sorprendido al ver a tan dulce belleza adolescente que había venido a verlo, rápidamente la invito a pasar llevándola a la cocina con la mirada puesta en el sensual andar de sus caderas y duras nalgas, fueron unos cortos momentos de platica en donde la nena no sabía cómo explicar el porqué de su visita y sin miramientos y con la experiencia del galán maduro se acerco a ella quien lo miraba impávida y nerviosa, la tomo de la cintura acercando su rostro a la de ella, la nena solo cerro sus ojos esperando valga la redundancia muy nerviosa el contacto de sus labios.
Aquel fue el beso más limpio que pudo tener, atrás quedaron los apasionados besos que se tuvo que dar con los horribles viejos de los cuales fue víctima, esta vez eran consentidos con un hombre limpio y el cual le gustaba mucho no tenían aliento desagradable como sus abusadores, las manos de don Emilio muy sutilmente bajaban de la cintura muy cerca de las portentosas nalgas que se ajustaban al jean, Cielo Riveros no dio muestras de rechazo sentía que aquel hombre podía hacer con ella lo que quisiese, no le negaría nada.
El beso ya se había vuelto muy apasionado sintiendo como esas esponjosas y juveniles tetas se aplastaban contra su fornido pecho… -- ay chiquita linda te amo… le dijo a la nena volviéndola a besar, la nena suspiraba mas ante esas palabras, ya no escuchaba los insultos despectivos o los calificativos de perra, puta o zorra que tantas veces le habían dicho y tomándolo de la nuca lo abrazo disfrutando gustosa de aquel romántico ósculo, la pareja seguía en su apasionada entrega no dándose cuenta que la puerta principal se abría muy sutilmente.
Aquella persona que entraba se extrañaba que no se encontrara nadie, muy lentamente comenzó a dirigirse hacia la cocina donde creía oír un ápice de ruido, cada vez se le hacían más claros los sonidos guturales de quienes se están enfrascando en un tremendo intercambio de salivas, ligeramente y sin hacer ruido observo por un lado de la puerta quienes eran…
Claudia abrió muy grande sus ojos al ver que su respetable padre quien siempre se habría creído un dechado de las buenas costumbres y la responsabilidad se encontraba engañando a su madre con una chiquilla y no cualquiera, estaba con su mejor amiga, la inocente, mojigata y educada Cielo Riveros … -- maldita perra, se ve que se tomo en serio mis consejos… se decía Claudia aguantándose la risa por ver a su mejor amiga con su padre…
-- Ay chiquita linda, que bueno que me atreví a buscarte, soy el hombre más feliz del mundo… le decía a una muy sonrojada Cielo Riveros , quien cavilaba en lo que sucedía… -- noo… esto está mal, no puedo hacerle esto a Claudia y a su esposa, no podemos… le decía muy avergonzada siendo esto escuchado por Claudia quien por lo menos no sentía rencor por la nena… -- al diablo con ellas preciosa, solo estamos tu y yo… quiero vivir contigo, irme lejos contigo, me harías el hombre más feliz del mundo… le decía mintiéndole y tratando de ilusionarla tan solo con el afán de encamársela en ese momento.
Aquello no le gusto a Claudia, entendía muy bien que la estaba engañando, ella era muy experta en estos menesteres y sabía muy bien las únicas intenciones de su padre, don Emilio nuevamente arremetió contra la nena besándola compasiblemente sin ser rechazado, al parecer sus palabras habían funcionado con ella quien pensaba que con él, estaría a salvo de don Lucas, Anselmo y de tantos depravados que la acosaban nuevamente se entrego a ese cálido beso el cual sentía estaba llena de amor a pesar que ahora sentía como se apoderaba de sus duras nalgas…
Claudia quien recordaba que su madre estaba estacionando el auto y conversando con una vecina se dispuso a interrumpir aquel íntimo romántico momento… -- que está pasando aquí!!!! Dijo arremetiendo con bravura ante la sorprendida pareja… -- Cla-claudia!!!... fue la reacción de la nena al ver que su mejor amiga la encontraba en indecorosa situación y con su padre, don Emilio no sabía que hacer, no tenia manera de explicarle a su hija lo sucedido solo le quedo lavarse las manos presa de la desesperación… -- Hija!!! No es lo que crees… fue ella quien me busco, yo sería incapaz de engañar a tu madre… dijo como un cobarde sorprendiendo a la nena quien abría la boca muy indignada con los ojos llorosos… -- e-eso no es cierto…
Cielo Riveros se quería morir aquella imagen del hombre perfecto y caballero que tenia de don Emilio se destruyo instantáneamente, era un cobarde y mentiroso era peor que aquellos viejos que se habían aprovechado de ella, don Emilio no la miraba a la cara tan solo esperaba cual sería la reacción de su Claudia, fue Cielo Riveros quien con lagrimas se dispuso huir de aquel lugar siendo detenida por Claudia…-- Cielo Riveros … espérame en mi recamara… -- no!!!, quiero irme de aquí… dijo llorosa la nena… -- te digo que me esperes en mi cuarto… le contesto alzándole la voz a lo cual le nena se dirigió en el acto.
-- Hija tienes que creerme, yo no quise que esto pasara, fue ella quien se me insinuó… dijo desesperado y preocupado don Emilio tratando de convencer a su hija de que él era inocente o una víctima… -- eres un cobarde papa… como puedes hacerle esto a mi amiga, a mi no me engañas, ella no pudo estar aquí si no fuese porque tú la buscaste… don Emilio no sabía que contestarle, lo único que quería es que su esposa no se entere de aquel desliz, -- hija… no se que decir… le contesto apenado y sumiso a la inquisitoria mirada de Claudia… -- vete Papa, mi madre… tu es-po-sa, está afuera… llévatela a pasear…
Don Emilio rápidamente salió en busca de su esposa dejando a una sonriente pero a su vez molesta hija, Claudia pensaba por dentro que gracias a esta situación había ganado poder en su familia, antes de aquello su padre estaba decepcionada de ella y sus privilegios se habían terminado pero ahora las cosas cambiaban a su favor… en su recamara Cielo Riveros se encontraba llorando, decepcionada y sintiéndose la más tonta del mundo al pensar que Emilio la estaba tomando en serio y se sentía peor al haber sido sorprendida por su mejor amiga, aquella que tantas veces la había ayudado y defendido.
Claudia entro a su recamara encontrando a una llorosa nena quien le rogaba perdón y que no sabía que le paso, diciéndole también que jamás sabría de ella, que sentía asco y vergüenza de sí misma, Claudia miraba seriamente a la nena viendo como le rogaba perdón y estirando su mano la llamo con una linda sonrisa, la nena se fue contra ella abrazándose las dos en un efusivo abrazo… -- tranquila Evi… claro que te perdono pinche loca… le decía alegremente Claudia quien no guardaba ningún rencor a su amiga… -- ya no llores amiga, no tienes la culpa, caíste en las mentiras del pendejo de mi padre… las dos nenas caminaron abrazadas cayendo ambas sobre la cama sin dejar de abrazarse, Claudia le daba besos en la cabeza tratando de calmar a una avergonzada Cielo Riveros …
Así como estaban se quedaron varios minutos conversando cara a cara sintiendo sus propios deliciosos alientos, la nena ya más calmada bajo su mirada hacia el vientre de su amiga acariciándola… -- y dime será hombrecito… Claudia sonrió mirando como la nena le frotaba su vientre... – no será nada amiga… tuve un problema y lo perdí prematuramente… Claudia le explico como por problemas de su inmaduro útero había perdido aquel ser que se formaba en ella… -- Ay amiga que pena… yo solo esperaba que no se pareciera al señor Juan… Claudia arrugo la frente con una sonrisa chistosa… -- te refieres al cojo… jajaja no!!!, como crees amiga, yo preñada por ese viejo… Claudia le explico que el hijo que esperaba era de su ex novio quien al enterarse no quiso saber de ella.
-- Ay Evi… soy loca pero no para tanto jajaja, pero debo reconocer que ese cojo sabe follar… deberías probarlo jajaja… Cielo Riveros se sonrojo apenada, si supiese su amiga que aquel viejo ya la había culeado a su antojo y así abrazadas se quedaron conversando un buen rato… -- bueno Clau… tengo que irme, hoy hay escuela…. -- ah si amiga, ya estaré pronto por allí y que se preparen los chicos que vengo más caliente que nunca…… Cielo Riveros le sonrió muy coquetamente… -- Ay Clau… no cambias, te extrañe mucho… -- jaja si se nota… siempre tengo que cuidarte… eres como una hija para mi…
Así fue que la nena se retiro a su casa y a pesar que se encontraba tranquila se sentía la mujer más estúpida del mundo… se sentía decepcionada por aquel hombre, dándose cuenta que de ella solo buscaba su cuerpo, solo tenía ganas de encamarse con ella, era peor que todos los viejos que abusaron de ella pues al menos aquellos desgraciados eran sinceros en sus intenciones pero don Emilio fue un vil mentiroso, es que no habrá ningún hombre que sea bueno, que se merezca su amor incondicional, se decía cuando a una distancia de su casa pudo divisar al buen Rodrigo que la esperaba…
Verlo esperándolo con esa sonrisa de asombro que ponía cuando la veía la hizo sentir mal, ella no se merecía su amor… había traicionado su fidelidad hiendo a buscar a un hombre casado, no era como las otras veces donde la obligaron, esta vez fue ella misma quien lo busco… tenía ganas de llorar y confesarle la verdad, Rodrigo se acerco a ella y abrazándola por la cintura la cargo dándole vueltas alegremente… -- Ay Rodrigo… cuidado… decía divertida y apenada la nena por las muestras de alegría y amor de su novio.
Rodrigo estaba contento, su padrastro y su madre habían salido a un corto viaje por tres días, eran de los pocos momentos en los que se sentía bien en casa, sin la presencia de su iracundo padrastro quien se la pasaba gritando y alzándole la mano a su madre ante su impotente presencia, Rodrigo y la nena seguían abrazados el la tomaba de la cintura y ella de la nuca, la nena le pedía disculpas por haber estado distante con él y que ahora todo su tiempo seria para él y no habría excusas para no estar con él… Rodrigo esbozo una sonrisa picara al oír eso y sin vacilar le confesó sus intenciones.
-- lo único que deseo en este mundo eres tu mi amor… sa-sabes aun tengo la espina de aquella tarde que haríamos el amor y te tuviste que ir… dijo algo nervioso esperando que su diosa no se incomodara, la nena recordaba que por culpa de don Pedro se tuvo que ir aquel día que se entregaría a su novio… -- Ay Rodri… discúlpame por esa vez… dijo algo sonrojada no tratando de dar explicación de lo sucedido… -- No importa amor… pero en mi casa no habrá nadie y nada me gustaría más que reiniciemos aquello que quedo pendiente… seria el hombre más feliz de la tierra… confeso Rodrigo tragando saliva siendo notado por la nena quien veía que el estaba tan nervioso como lo estaba ella.
Cielo Riveros pensaba porque no, el era su novio, otros se habían saciado de su cuerpo sin merecerlo, ella se sentía en deuda con el y le enternecía su mirada noble y sincera, el no la engañaba, el no la forzaba, el le confesaba sus verdaderos sentimientos y deseos… -- en-entonces mañana en la tarde nos vemos en tu casa… Rodrigo casi desmaya de alegría… -- en serio… no iras a la escuela por mi… -- No mi amor, mañana quiero estar contigo… la felicidad y excitación que sentía Rodrigo era incomparable, en ese momento imaginaba a su hermosa novia completamente desnuda sobre su cama, sentía con impotencia que aquel día no pasaba rápido ansioso de que llegue el siguiente… -- Mi amor me haces muy feliz… y no te preocupes hoy en la farmacia tomare unos preservativos…
La nena le interrumpió rápidamente… -- no mi amor… no es necesario… -- pe-pero Cielo Riveros respondió sorprendido el muchacho… -- y si quedas embarazada… -- No me importa… será nuestro bebe tuyo y mío el cual nos unirá para siempre… dijo amorosa y tierna lo cual ilusiono a Rodrigo… -- Esta bien amor… mañana nos vemos en mi casa… y con un amoroso beso se despidieron pactando la consumación de su romance para el día siguiente… Cielo Riveros veía alejarse a Rodrigo lleno de felicidad, lleno de ilusión, la idea del embarazo le vino de improviso.
Pensaba que una vez embarazada se libraría de todos sus acosadores, se iría a vivir lejos con un buen chico como Rodrigo aun con el dolor de dejar a su madre y abuelo, pero es que no veía salida a los acosos de don Lucas y Anselmo era tanta su desesperación y odio ante ellos que era la única salida que veía… Para esto pudo ver como de la cantina salían aquellos dos que martirizaban su mente acercándose hacia ella… -- Hola muñequita me dijeron que uno de mis muchachos te salvo hace unos días jejeje… ya ves conmigo estarás a salvo siempre… la nena estaba entre el miedo y el odio al notar cómo se burlaba de ella… -- no necesito nada de usted… con permiso… retirándose molesta siendo tomada por el brazo por Anselmo quien en el oído y bajito le murmuro… -- recuerda mi oferta… piénsalo bien… la nena jaloneaba asustada para que la soltara – déjala Anselmo!!! No toques a mi princesita jejeje… Cielo Riveros se retiro a toda prisa subiendo hacia su hogar trancando la puerta pensando que estos días de terror pronto se acabarían.
Aquel día en la escuela Cielo Riveros la paso intranquila, por suerte nadie la molesto ese día, Víctor ya ni se le acercaba y el maestro Tulio la evitaba siempre, cosa que la hacía sentir extraña, se olía el cabello pensando que olía mal o se estaba volviendo fea para que aquellos dos no estuvieran detrás de ella como siempre pero a su vez la hacía sentirse más tranquila, su único deseo era estar con su amado Rodrigo sellando su amor para siempre.
Así llego el día siguiente… para eso la nena estaba con su apretado uniforme escolar pues su abuelito se encontraba de descanso ese día y no quería que sospechara de ella, despidiéndose de don Benito salía de su casa avisando a Rodrigo que iba para su casa, ella iba radiante, hermosa, feliz y muy ilusionada cuando nuevamente suena su celular… -- Ya Rodrigo… tranquilo voy para allá… dijo muy alegre la nena… -- Cual Rodrigo putita… soy yo… tu verdadero macho jejeje… la nena se asusto al oír la aguardentosa voz de don Pedro… -- Don Pedro!!!, di-dígame que desea… -- jeje que deseo… pues a ti… ven rápido a mi casa que quiero descargar las bolas que están llenas de leche jejeje…
La nena se quedo inmóvil, don Pedro había venido al D.F. y nuevamente se interponía entre su amado Rodrigo y ella… -- don Pe-Pedro, no puedo… tengo escuela… dijo pensando rápido tratando de librarse del vejete… -- ah tienes escuela… bien iré para allá para enseñarles a todos lo puta que eres… -- no!!! no por favor no me haga eso… -- entonces ya sabes que hacer… ven a mi casa y rápido… la nena nuevamente caía bajo el chantaje y el dominio de aquel viejo… -- usted vive muy lejos y no tengo dinero… -- mira putita tu toma un taxi y ven para acá que yo pago cuando llegues, pero que sea rápido que ya quiero verte… dijo colgando el teléfono.
Cielo Riveros se sentía destrozada nuevamente tendría que abandonar los deseos de su novio y mirando hacia el cielo se decía… -- lo siento Rodrigo… y se fue en busca de un taxi al encuentro de don Pedro, en el camino iba triste y meditabunda sin darse cuenta como el taxista miraba por el retrovisor sus torneadas pierna cruzadas al ser tan corta la falda escolar… y sin más llego hacia su destino en donde el vejete la esperaba, nada más verlo sintió odio hacia él, no creía como este vil vejete en la intimidad de su cuarto podía excitarla tanto pero en ese momento no sentía nada por el, solo indignación por ser un miserable chantajista.
El vejete la tomo por la cintura haciéndola entrar en aquel amplio pasadizo en donde las otras casas se encontraban sin sus habitantes debido a que tenían a esa hora que trabajar, la casa de don Pedro quedaba al fondo y era la más grande del lugar, una vez dentro el vejete la miro de pies a cabeza… -- ay putita hasta de colegiala te ves hermosa… la tomo de las nalgas apretándola contra el, la nena trataba de zafarse de sus garras pero el siempre era más fuerte…
El viejo la soltó y sentándose en una silla sobándose el enorme bulto que ya tenía le dijo… bueno putita a lo que vine… hay un amigo que me pagara 1000 pesos por tu virgen panocha así que manos a la obra jejeje… la nena entro en pánico, hasta ese momento no recordaba lo de su virginidad y temía por la reacción del vejete… -- que te pasa putita, algún problema… dijo algo molesto el vejete… la nena muy asustada y con lagrimas en sus ojos se acerco a el arrodillándose desconsolada… -- por favor don Pedro… pe-perdoneme… ya no so-soy virgen… perdóneme por fa-favor… Don Pedro puso una cara iracunda asustando mas a la nena quien lo veía arrodillada con sus hermosos ojos verdes llorosos.
-- que te dije pinche chamaca… me has hecho perder mil pesotes pero ahora tu me los pagaras… decía muy enfurecido a una intimidada colegiala… -- le pro-prometo que le pagare don Pedro… el vejete la tomo de la mano poniéndola de pie con fuerza… -- no entiendes putita… me los pagaras hoy mismo… te gusta le verga no, por eso dejaste que tu noviecito te desvirgara, adoras las vergas, pues ahora te llevare a que pruebes muchas y con lo que ganes me pagaras mi dinero…
La nena abrió la boca sorprendida y asustada, aquel vejete la iba a prostituir ese sería su castigo por haberle fallado… -- no!!! por favor don Pedro… por lo que más quiera no me haga esto… decía desesperada tratando de convencerlo que desista de sus intenciones, el vejete fue hacia la puerta abriéndola por completo… -- Tu decides o cumples con lo que te digo o te puedes ir en este momento… claro que todos sabrán lo puta que eres, en tu escuela, en tu vecindario, todos sabrán lo que Cielo Riveros verdaderamente es… una puta…
Cielo Riveros seguía impotente al ver que Don Pedro no le daba ninguna salida y más bien la chantajeaba adueñándose más de ella… -- rápido putita… decide que no tengo todo el día… Cielo Riveros lo miraba con sus ojos tristes sintiéndose derrotada como siempre ante el y agachando la cabeza accedió llena de vergüenza ante el… -- co-como usted diga don Pedro… -- jejeje muy bien putita… manos a la obra jejeje… El vejete la tomo de la mano sacándola de la casa con suma prisa, la nena muy asustada y apenada le seguía el paso sintiendo miedo por las cosas que el vejete la iba a obligar a hacer.
Rato después y con mucha discreción por parte de don Pedro entraban a un mediocre Night Club que en ese momento se encontraba cerrado… la nena veía las sillas sobre las mesas y un enorme sujeto de raza negra obeso y calvo que fungía de seguridad del local y que en aquel lúgubre lugar le resaltaban los dientes y los ojos al verla… el vejete la seguía jalando de la mano llevándola hacia el fondo del local en donde se encontraban los camerinos… -- muy bien putita… pórtate bien y cuidadito con llorar o negarte ante mis pedidos… le dijo amenazante el vejete a una nena que asintió con impotencia.
Dentro del camerino se encontraba una señora de un poco más de cuarenta años de nombre Cecilia quien al ver a don Pedro lo saludo como si lo conociera de toda la vida… -- hola Pedrito… tanto tiempo sin visitarnos… dijo la vieja mirando a su vez sorprendida a la hermosa colegiala quien seguía de la mano del vejete… -- Aquí pues Cecilia… vengo a pedirte un favor… la vieja sonrió con malicia viendo de pies a cabeza a la nena… -- mmm quieres que le de trabajo a esta chica, viéndola bien de seguro nos llenara los bolsillos de bastante lana… Cielo Riveros trago saliva asustada aguantándose las ganas de reclamar o llorar ante lo que escuchaba… -- jajaja nada de eso Ceci… quiero que me prestes unas prenditas para que mi nena las use… hoy será su primer día como putita… además ella es mucha carne para tu local jejeje sin ofender…
Cecilia también reía impresionada por la natural y juvenil belleza de la nena quien bajaba la mirada apenada ante su inquietante mirada… -- bueno Pedrito estás en tu casa, escoge lo que quieras pero cuando quieras te compro a la nena… le veo mucho futuro aquí… el vejete solo sonreía viendo la cara atemorizada de la nena… -- jeje lo tendré en cuenta Cecilia… rápidamente el vejete comenzó a hurgar en los armarios buscando las prendas adecuadas para lo que quería de Cielo Riveros … -- que esperas escuincla… quítate la ropa rápido… -- por favor don Pedro… no me haga esto… le juro que le pagare…
El vejete la miro con cara de enfado dando por terminado sus suplicas… -- apúrate Cielo Riveros quítate el uniforme, zapatos, medias y brasier… menos tu tanguita… no lo volveré a repetir… la nena resignada a los requerimientos de don Pedro procedió a desnudarse mientras el vejete seguía en busca del atuendo indicado para Cielo Riveros … la nena se quito los zapatos seguido de las medias desabotonándose la blusa que escondían aquellos enormes par de senos, minutos después ya se encontraba solo con su sexy tanguita cruzada de brazos ocultando sus turgentes pechos, don Pedro al verla se quedo estupefacto ante su imponente belleza viéndola de pies a cabeza con devoción… -- Ay mi dios pero que buena estas chamaca… toma ponte esto…
La nena recibió un cortísimo short de tela jean que se ajustaban a sus caderas dejando a la vista los cachetes de su hermoso trasero… -- pe-pero don Pedro… no puedo usar esto… no puedo salir así a la calle… -- jejeje no te preocupes cariño…… iremos muy lejos donde nadie te conoce jejeje… Cielo Riveros se miraba en el espejo avergonzada por cómo se veía demasiado expuesto tu hermoso trasero, que diría su madre si la vieran así o su abuelito querido; el vejete le dio un cortísimo top de color blanco que dejaban al descubierto su hermosa y liso vientre con esa curvada cintura que volvería loco hasta a un cura, la parte superior de sus pechos sobresalían por el top dejando un excitante espacio como para guardar un celular en el.
El vejete veía con satisfacción que la nena lucia despampanantemente preciosa y cogiendo unos zapatos de tacón no tan altos pudo ver como el trasero se erguía majestuosamente… don Pedro llamo de nuevo a Cecilia quien en el acto apareció pidiéndole unos esmaltes para uñas negros, quería que tantos las manos como pies de la nena brillaran de ese color haciéndola ver más puta. Fue la misma Cecilia quien se las pinto sin dejar de ver el sorprendente cuerpo de la nena y notando el nerviosismo que ella padecía.
-- muy bien putita ya estas lista… vas a ser la sensación de las calles jejeje… del rostro de la nena caía una lagrima de impotencia y tristeza al ver como el vejete la iba a humillar de la manera más baja, nunca en su vida pensó que estaría en una situación así… lo único que recordaba con cólera era porque no se negó a ir a la Feria… -- Te he dicho que no llores… y tomando su ropa escolar poniéndola en una mochila se dispusieron a salir con destino desconocido para la nena.
-- Don Pedro a donde vamos… decía la nena apenada por las miradas lascivas de los hombres que pasaban y las de asco y rechazo de mujeres y viejas señoras, roja como un tomate y con ganas de que la tierra se la tragara en ese momento iba al lado del vejete quien sonreía orgulloso al tener a su lado a esa deidad de mujer… unos chavos que pasaban frente a ellos la miraban sin discreción, diciéndole que buenas tetas, que buen culo, estas buena putita, la nena quería morirse hay mismo cuando en eso don Pedro la toma de la cintura atrayéndola hacia el, los muchachos no podían creer como ese horrible viejo sea dueño de tan hermosa nena cuando en eso y con su áspera mano le sobo todo el trasero propinándole una sonora nalgada que fue escuchado por los chiquillos que con ojos envidiosos y con la boca abierta miraban como se alejaban de ellos.
-- por fa-favor don Pedro no haga eso… nos están viendo… decía la nena impotente y avergonzada ante tal atrevimiento del vejete… -- PORQUE!!! Que sepan que eres mía… no ves como dejaron de decirte majaderías… le dijo tomándola nuevamente de las nalgas frente a el y propinándole un asfixiante beso ante las miradas de los caminantes de aquella lejana calle, la nena trataba de apartarse del vejete pero le era casi imposible lograrlo escuchando como una vieja mojigata que pasaba por el lugar les incriminaba por tal exposición… -- Ay dios mío… que barbaridad, que barbaridad… decía la vieja alejándose… -- largo de aquí abuela… estoy con mi mujer jejeje… decía el viejo apurando el paso a la nena llevándola de la cintura y a veces sobándole aquel par de tentadoras nalgas… -- por favor don Pedro… no haga eso aquí… la gente me está mirando…
-- Eso debiste de pensarlo antes de coger con tu noviecito… estas en deuda conmigo así que no quiero oír más quejas… la nena recordó a su pobre Rodrigo quien en ese momento se preguntaría preocupado que paso con su novia que nuevamente le fallaba, con mucha tristeza pensaba que no era culpa de Rodrigo el haber perdido su virginidad si no de aquellos dos viejos malditos, si se encontraba en esta situación era por culpa de Don Lucas y no del inocente y fiel Rodrigo… -- Muy bien putita ya llegamos… aquí trabajaras hoy… le decía al vejete a una distraída nena quien al ver aquella avenida donde habían llegado pudo divisar esquinas con cantidad de mujeres, todas vestidas vulgarmente levantando las manos a los autos que circulaban por allí, con terror y vergüenza pensaba hasta aquí llegue, ahora si sería muy a su pesar una verdadera puta… -- Muy bien te pararas en esa esquina, yo te estaré cuidando de cerca… busca un cliente que te quiera pagar por encima de los 500 pesos, no me importa si te toma todo el día… no aceptes a los que llegan en auto, depende de ti que saldes tu deuda putita jejeje… la nena estaba asustada y nerviosa, las piernas le temblaban mirando como una cachorra triste al vejete… -- por favor… por lo que más quiera, no me haga esto… -- cállate y ponte en camino… le dijo el vejete propinándole una fuerte nalgada que hizo que avanzara más rápido en aquella esquina donde su vida se denigraría por cCielo Riveros 17 (version apocrifa)
en No Consentido
Cielo Riveros caminaba triste, resignada, nerviosa y muy avergonzada hacia aquella esquina en donde unos metros atrás don Pedro la vigilaba… -- ya sabes… cobra 500 pesos… fueron las ultimas palabras de don Pedro que resonaban en su mente, paso a paso veía como los concurrentes la miraban babeando al contemplar su sensual andar y maravillosa anatomía mirando hacia el sucio suelo no pudiendo aguantar las fuertes miradas lascivas que le daban.
Una vez en aquella esquina volteo la mirada en donde se encontraba el vejete viéndola este de brazos cruzados cargando la mochila escolar de la nena y moviendo la cabeza en señal de aceptación, tan solo bastaron unos minutos para convertirse en centro de atención, de deseo y admiración de los clientes y también de la envidia y cólera de todas las meretrices que en su mayoría pasaban los 25 años, muchas descuidadas de su físico y sin la belleza y natural juventud que si ofrecía la nena.
Cielo Riveros mirando hacia el vejete no pudo aguantar el odio y rencor que le tenía al exponerla u obligarla a denigrarse de esa manera, todo por culpa del maldito Lucas se decía, apretando sus blancos dientes y sus puños con ganas de llorar veía impotente al vejete deseando que un rayo lo quemara o la tierra se lo tragara aunque a su vez pensaba que era ella la que quería eso.
-- Hola ricura… primera vez que te veo por aquí, nos tomamos unas copitas… fue el primer cliente que se acerco a la nena, un hombre de lentes y delgado cerca de los cincuenta años para nada atractivo quien babeaba saboreando el delicioso cuerpo que la colegiala ofrecía… -- cuanto cobras chamaca, estas bien buena para reventarte ese culito jejeje… le dijo otro hombre alto y calvo a quien Cielo Riveros le pareció idéntico al maestro Tulio en una versión muy pobre… -- pero que buena putita jeje… esta me la llevo… dijo un obeso y horrible tipo quien rodeaba a la nena observando cada detalle de su expuesta anatomía… -- pero que buen culo tienes zorrita… buen culo… dijo el mismo sujeto quien se había atrevido a sobarle las nalgas y propinarle una sonora nalgada sobresaltando a Cielo Riveros .
Otro de los sujetos se atrevió a apretarle uno de sus pechos comprobando lo turgente que eran quien seguido de otro también alargo su mano dándose el gusto de sentirlas, Cielo Riveros estaba desesperada alejando esas manos y pidiendo que no la toquen esperando que don Pedro venga y la proteja como él le había dicho… pero al alzar su mirada vio que don Pedro no hacia ningún amague por defenderla y seguía mirándola de brazos cruzados con un gesto de cabeza en señal de aprobación.
Cielo Riveros no podía con los mano largas hasta que uno de los sujetos increpo con voz fuerte… -- ya basta estúpidos… esta zorrita se va conmigo… aquello asusto a la nena pues noto cierta brusquedad y seguridad en aquel tipo… -- Muy bien chiquilla… cuanto es lo que cobras por tu cuerpo… aquello le dolió en el alma a Cielo Riveros pues entendió que en ese momento la estaban tratando como a una meretriz y no veía salida a tan humillante situación y llena de vergüenza de sus labios salieron aquella respuesta indicada por el vejete… -- son qui-quinientos pesos… fueron las dulces y humillantes palabras que salieron de los carnosos labios de la nena sintiéndose morir en aquel momento.
El tipo quien ya la había agarrado de la cintura la soltó con una impresión de total desconcierto en su mirada… -- QUE!!! No mames pinche zorra, como vas a cobrar eso… te doy si quieres 50 pesos… la nena pudo ver entre los desconcertados hombres que la rodeaban a un sonriente Pedro quien con la cabeza le decía que no aceptara… -- ehh no…. son quinientos pe-pesos señor… respondió nuevamente muy apenada, los demás tipos se rascaban la cabeza impotentes ya que aquella suma era casi imposible de pagar y es que en verdad eran conscientes de que por aquel espectacular y juvenil cuerpo 500 pesos era una suma muy miserable de pagar.
-- Estas loca pinche puta… nadie te pagara eso aquí… vete al carajo… se fue dándole un empujón aquel tipo en busca de otra de las prostitutas del lugar, la nena se sintió tranquila al ver como se iba aquel tipo aunque pensativa pues se dio cuenta de que ninguno de aquellos asiduos concurrentes habían pagado alguna vez aquella fuerte suma… no entendía porque don Pedro le había obligado a cobrar aquella suma difícil de pagar pero se sentía tranquila pensando que tal vez todo aquello era un castigo tan solo para humillarla por haber perdido su virginidad.
Los reclamos y propuestas de dinero seguían contra Cielo Riveros viendo casi tranquila la posibilidad de que nadie pagaría aquella cuantiosa suma para los miserables concurrentes de aquel lugar y que su dignidad seguiría intacta; una de las prostitutas quien se había acercado hacia la nena se retiro incrédula y con burla al oír lo que cobraba aquella chiquilla que les había quitado clientela a contárselo a sus otras colegas quienes ya se encontraban furiosas y con ganas de atacarla….
-- Como!!! Que se cree esa perra para cobrar tamaña cantidad… decía una de las prostitutas más maduras de la calle… -- pinche mocosa… y encima nos quita la clientela aun no he ganado nada… decía quejándose otra… -- Vamos a desfigurar a esa zorra… decía una de las más violentas meretrices del lugar…. – tranquilas chicas!!! Esto lo resolverá Edu y Tomas, avísenles…. fue lo que dijo la más vieja quien mandaba allí tratando de calmar a las demás enfurecidas prostitutas del lugar.
Cielo Riveros seguía escuchando todo tipo de ofrecimientos por su cuerpo ya un poco temerosa porque un tipo llego a ofrecerle cerca de 200 pesos, sin duda alguna para la nena veía que nadie podría alcanzar aquella suma que el vejete le había pedido cobrar entendiendo que solo esto era un castigo por no haber conservado su virginidad… en ese momento vio que don Pedro se alejo del lugar desapareciendo de su vista…. – Así que tu eres la que cobra 500 pesos… la nena volteo al oír aquella sonora voz… pudo distinguir a dos fornidos sujetos uno vestido de terno y el otro con ropa deportiva.
Se trataban de dos sujetos que controlaban el tráfico de mujeres en aquella calle Edu quien era la voz mandante vestía de terno color blanco y camisa negra con unos brillosos zapatos blancos y Tomas un tipo de raza negra alto y musculoso con una mirada penetrante y amenazadora que asustaría hasta al mismo Satanás y la nena no era la excepción… -- -Responde putita!!! Tu eres la que quiere 500 pesos…. Cielo Riveros estaba ahora si asustada pues aquellos dos sujetos no disimulaban en nada su molestia pues ninguna chica trabajaba allí sin su protección y su permiso… -- dis-disculpe señor… ya me retiro… dijo nerviosa la nena alejándose de la montonera de tipos.
La nena se sentía aliviada al dejar atrás ese mal momento de denigración y humillación que Don Pedro le había hecho pasar, paso tras paso se sentía bien al alejarse de aquellos asquerosos sujetos buscando con la mirada a donde se había ido el vejete pues el tenia su ropa escolar y con la que tenia puesta de ninguna manera pondría un pie por su vecindario cuando como una rápida sombra vio que Tomas se puso al frente de ella deteniéndola con uno de sus fuertes brazos sobre su hombro… -- A donde crees que vas ricura… tenemos asuntos que arreglar…
Cielo Riveros se asusto al ver la atemorizante cara de Tomas quien la giro y tomándola del hombro la obligo a caminar en dirección a Edu quien esperaba parado tocándose la barba con un gesto de admiración al ver el impresionante cuerpo de la nena acercarse, los demás tipos quienes rodeaban a la nena ya se habían alejado pues como habituales concurrentes ya conocían a Edu y Tomas y lo violentos que eran, en cambio Cielo Riveros muy angustiada miraba para todos lados esperando que don Pedro apareciera y la rescatara pero en ese momento ni su sombra se avistaba.
-- Muy bien zorrita… vienes aquí a trabajar y a quitar clientela a mis chicas y te vas como si nada… le increpo Edu tomándola del mentón amenazantemente mientras Tomas la sujetaba del brazo muy fuerte haciéndola sentir más miedo de la que ya tenía… -- por favor… dis-culpeme señor… déjenme ir…. Edu y Tomas se miraban a los ojos admirados por el espectacular cuerpo de la colegiala y el delicioso aroma que desprendía, sin lugar a dudas veían en la nena una excelente inversión para su vil negocio pues conseguir mujeres de la magnitud y juvenil belleza de Cielo Riveros era muy difícil… -- Escúchame bien chiquilla, has hecho perder mucho dinero a mis chicas son como 20 chicas y cada una cobra 50 pesos… así que me debes 1000 pesos….
Cielo Riveros con los ojos a punto de llorar no podía creer lo que le decían, nuevamente le acarreaban una deuda de la cual ella no tenia culpa alguna y al oír mil pesos le vino a la memoria que era la misma cantidad por la cual don Pedro la había llevado a aquel lugar, pero a pesar de eso ahora sentía mucho más miedo con estos sujetos… -- Tendrás que pagarnos muñeca… y si hoy no juntas los mil pesos trabajaras para nosotros para siempre jejeje… -- ¡¡¡no por favor!!! Déjenme ir… se los ruego por favor…. Pedía con ojos llorosos la nena sin siquiera conmover en nada a los viles sujetos.
Tomas con una de sus grandes manos acaricio las redondas nalgas de la nena sintiendo la escalofriante sensación que producían al palparlas, eran carnes suaves, duras bien formadas y de glúteos levantados, en ese momento Cielo Riveros sufría por dentro llena de angustia y terror al sentir aquella tremenda mano apretar sus redondas carnes… -- ay no dios mío… que no me toque… que me dejen ir por favor… se decía por dentro la nena sintiendo como ahora Edu le apretaba uno de sus apetitosos pechos… -- oye Edu esta chiquilla esta apetitosa… no piensas que primero deberíamos probar de su talento…. Dijo Tomas quien ya tenía una erección con tan solo magrear aquel delicioso trasero.
-- Tienes razón negro…. Le daremos una audición a esta nena pero ahora mismo….. Cielo Riveros se quería morir, aquellos dos explotadores y desalmados tipejos tenían siniestras intenciones para ella y encima querían llevársela y probar de su cuerpo, tragaba saliva mientras Edu y Tomas conversaban sobre sus planes y en aquel momento comenzó a correr despavorida, mientras lo hacía con la dificultad que le daban aquellos zapatos de tacón que le había obligado a poner don Pedro miraba para atrás viendo como los dos sujetos iban tras ella pero sin la intención de correr.
Muy extrañada seguía en su huida cuando es detenida por una de las prostitutas del lugar, una mujer algo gorda y robusta quien la tomo del brazo amenazándola con una afilada navaja… -- no te muevas estúpida!!! que te marco la cara en este instante… le dijo con voz vulgar y amenazante mientras que veía que Edu y Tomas venían con cara de enfado… -- Muy bien Rosa déjanos con ella y vete a trabajar que hoy tienes que pagar 300 pesos… -- pe-pero Edu no creo que… -- silencio y vete a trabajar puta de mierda y me juntas ese dinero…
La nena se asusto por el carácter iracundo con el que trataba Edu a las mujeres, en ese momento pensó en que fue un error el haber tratado de escapar de ellos y con mucho miedo comenzó a disculparse tratando de que no la lastimaran… -- por favor se-señor perdóneme… no me haga daño por favor… pedía la nena con ojos asustados tratando de conmover a los dos sujetos quienes con sonrisas de superioridad se miraban a su vez que miraban a la nena.
-- Tranquila chiquilla, porque vemos un gran negocio en ti… no te haremos nada pero eso si… con tu huida solo lograste llegar hacia donde te íbamos a llevar jejeje… le dijo Edu quien moviendo la cabeza le dio a entender a Tomas que tomara a Cielo Riveros de los brazos… -- muy bien!!! Ahora probaremos que tan puta puedes ser… Tomas comenzó a llevar del brazo a la nena en dirección a los moteles de paso que mas servían como habitáculos de sexo para las meretrices del lugar, la llevaba tan fuerte del brazo haciéndola sentir dolor
Presa de la desesperación iba tratando inútilmente de detener su avance pues al ver a donde la llevaban se horrorizo al imaginarse las sucias intenciones de aquellos desgraciados… -- no!!! por favor… yo les pagare, pero déjenme ir… déjenme por favor…. – jaja vienes a jugar a la puta y crees que te dejaremos ir…. Le dijo con una malévola voz el negro Tomas pasando una de su manos hacia adelante apretándole un pecho… -- jeje desde ahora nos perteneces nena… pero no te preocupes, ganaras mucho dinero y a su vez te terminara por gustar…. La nena comenzó a lagrimear con el alma que se le salía del cuerpo, diciéndose que hasta aquí llego la inocente vida que había tenido.
La llevaron a uno de los cuartos más alejados en donde al abrir la puerta pudo ver unas paredes con la pintura rasgada y ya despintada una cama y una mesita en donde habían una toalla, jabón y un rollo de papel y de un fuerte empujón la tiraron sobre la cama viendo ella como cerraban la puerta, Cielo Riveros sentada y llorando veía como aquellos dos conversaban de otros asuntos sin prestarle atención, fueron como diez minutos hasta que ambos voltearon con una mirada burlona y atemorizante.
-- Muy bien chiquilla… ahora probaremos que tan buena puta puedes ser… le dijo el negro quien se quitaba la camiseta deportiva que llevaba dejando ver unos pectorales muy trabajados y un vientre digno de cualquier fisicoculturista… -- no te preocupes preciosa si lo haces bien hasta te pagaremos jejeje… le dijo el otro quien se sacaba el saco, corbata y camisa quedándose solo con el pantalón puesto… -- por favor no!!! no quiero esto, déjenme ir… los dos echaban a reír burlándose de ella mientras que el negro se bajaba el pantalón deportivo quedándose en bóxer con un tremendo bulto dentro de el.
-- -no quieres esto putita, entonces que hacías allí parada vestida como puta eh… la nena no sabía que contestar, como podría decirles que la obligaban a hacerlo y todo por un chantaje, en ese momento recordaba a don Pedro y su odio crecía más hacia él, la había abandonado en aquel lugar y a merced de estos dos malditos sujetos…. – ya ves mujer… tu silencio lo dice todo, pero no te preocupes que nosotros te graduaremos de puta jejeje… le comento Edu quien sacaba una pistola de su pantalón colocándolo a un lado de la pequeña mesa.
La nena se asusto mas y abrió muy grandes sus hermosos y llorosos ojos verdes al ver como Tomas se bajaba el bóxer dejando ver una tremenda verga llena de venas y con la cabeza ya húmeda por la excitación, Tomas le sonrió al ver su rostro de impresión pensando que la nena estaba maravillada con su herramienta, no sabiendo que lo que más le causaba era terror y cierto rechazo pues era la primera vez que veía el miembro de un hombre africano y a pesar que no era prejuiciosa o racista aquello le causaba repulsión y mucho mas sabiendo que eran unos degenerados explotadores.
-- jaja veo que te impresiona la verga de Tomas… no desesperes que ahorita la probaras… le dijo Edu quien también ya tenía la verga al aire de un considerable tamaño y tomándola de los cabellos la hizo arrodillar en el piso dejándola a poca distancia de la bamboleante verga de Tomas quien con ligeros movimientos golpeaba la hermosa cara de la nena quien cerraba los ojos y su boca evitando sentir el olor y el contacto de aquel miembro que se le hacía repulsiva…. – Abre la boca pinche puta o te rajo la cara…. Le decía muy enfurecido Edu quien apretaba más los cabellos de la nena.
-- Espera un rato Edu… primero quiero ver el cuerpo de esta chiquilla… quiero ver esas chichotas que se me hacen apetecibles… Edu sonrió morbosamente con la idea y en verdad verla con esas pequeñas prendas dejaban entender que la nena tenía un cuerpo espectacular, digno de una diosa griega, la nena seguía con sus lamentos y llorosa preguntándose cómo es que pudo acabar allí y todo por salvaguardar su estúpida reputación con los demás… -- muy bien chiquilla enséñanos las tetas y rápido… no lo volveré a repetir…
Cielo Riveros con el dolor de su corazón y con el alma ya perdida como aceptando su destino comenzó a despojarse del pequeño top dejando ver sus hermosas y majestuosas chichotas, aquella imagen fue demencial para ellos. No habían visto unos pechos tan perfectos, duros y erguidos sin muestras de imperfecciones y con los pezones rosados… -- me lleva el diablo Edu… pero mira que tetas… dijo muy excitado el negro sintiendo como la verga se le endurecía hasta el límite, la nena lo noto también dándole asco y muy angustiada de que aquella negra barra de carne ingresara en ella.
-- Estas buena chamaca… esta nos servirá para ofrecerla a nuestro cartel de empresarios jejeje será un buen negocio…Cielo Riveros se tapo el rostro con sus manos llorando al ver que su vida o su futuro prometedor como profesional se había acabado y había caído en manos de aquellos malditos, en ese momento Edu tomo la palabra…
-- Muy bien puta… primero le darás una mamada a Tomas… hace rato veo que le miras la verga y después… te vamos a dar de a dos y para que veas que somos gentiles tu podrás elegir quien entrara por tus huecos jejeje… esa será tu audición…Cielo Riveros movía su cabeza negativamente sollozando mientras veía que ambos se quitaban lo que les quedaba de ropa listos para abusar de ella, la sola imagen de verse empalada por aquellos dos le parecía terrorífica cuando en eso tocan la puerta y una gruesa voz que dice… Servicio al cuarto!!!.
Tomas algo confundido quiso tomar su arma siendo detenido por Edu… -- tranquilo wey… debe ser Julio de recepción, le pedí que traiga unos tequilas… cuando Tomas abrió la puerta recibió un golpe seco en la cabeza cayendo al suelo como un costal de papas, cuando Edu quiso reaccionar ya el tipo que había ingresado le apuntaba con un arma… -- Quieto pendejo o te vuelo la cabeza… la nena quien a todo esto y por miedo se había subido a la cama acurrucándose vio a un tipo gordo y encapuchado quien por el momento la había salvado pero sin saber de sus intenciones.
-- Muy bien tu el esquelético arrodíllate… le dijo al agresor a Edu quien obedecía pero sin dejar de mirarlo con su mirada retadora… -- no sabes con quien te estás metiendo cabron, esto te va a costar… el sujeto quien lo apuntaba vio que Tomas volvía en sí y ordeno que se parara a un lado de su arrodillado compañero… -- muy bien pendejo… ahora probaras de esa verga que tanto ofreces… Edu miro a Tomas algo contrariado y Tomas no era esquivo a lo que ordenaban… pero al ver como el encapuchado les apuntaba procedieron a cumplir con la orden… -- esto te costara muy caro imbécil… fue lo último que dijo antes de meterse a la boca la negra verga sin antes ser fotografiado por el agresor y siendo visto por Cielo Riveros sintiendo asco por lo que hacían…. – muy bien ya basta par de maricas, ahora los dos arrodillados contra la pared…
Una vez en aquella posición recibieron un fuerte golpe en la cabeza cayendo desmayados en el piso, la nena pudo ver como el sujeto giro en dirección a ella muriéndose de miedo pues no sabía de sus intenciones… -- por fa-favor no me ha-haga daño… pidió llorando Cielo Riveros tapándose los pechos viendo como este guardaba su arma… -- para que te escondes esas chichotas, si ya las he visto y probado jajaja… le dijo dejándose ver el rostro, Cielo Riveros pudo ver que se trataba de don Pedro, no sabía si alegrarse o matarlo, le había hecho pasar por una experiencia terrible.
-- es usted un maldito, te odio!!! Le dijo la nena poniéndose el top ante la mirada burlona del vejete… -- ósea que te salvo y así me tratas ricura… la nena pudo ver como don Pedro se apresuro en buscar entre la ropa de Edu el botín por el cual había usado a la nena, don Pedro encontró como cuatro mil pesos que no eran más que lo que recaudadaban del esforzante día de trabajo de las chicas, una vez cumplido su cometido guardo el dinero dentro de la mochila dejando una nota a los dos desmayados. – Muy bien Cielo Riveros saldremos tranquilos por detrás del motel, no te pongas nerviosa… le dijo don Pedro tomándola de la cintura y estampándole un inesperado beso…. – déjeme maldito!!! Dijo la nena empujándolo viendo como este solo sonreía…
Para esos momentos Rodrigo se sentía nuevamente defraudado, todas las ansias de querer poseer el hermoso cuerpo de su novia se habían desvanecido, marcaba y marcaba el numero de la nena pero este se encontraba apagado… se preguntaba porque nuevamente le hacía eso, si el día anterior había sonado tan ilusionada y ansiosa de hacer el amor con él hasta el extremo de querer quedar embarazada por él, no se explicaba el porqué de su conducta así que vistiéndose salió en su búsqueda, pensando en que lugares la podría encontrar pues primero empezaría por su casa.
Por otro lado Cielo Riveros y el vejete ya muy alejados de la zona rosa en donde paso penurias humillantes seguían su camino algo turbada pues seguían en esas calles corrientes y suburbanas en las que montón de vagos gritaban improperiosos piropos al ser testigos del espectacular cuerpo de la nena tan solo cubierto por un pequeño short que no disimulaba la redondez de esas turgentes nalgas y un pequeño top que tensaban sus tremendos melones.
Algunos vagos que caminaban cerca a ellos se le acercaban murmurándole gruesos piropos, la nena asustada tomándose del brazo del vejete le pedía que la deje ir a su casa -- por favor don Pedro… no me gusta este lugar… déjeme ir… Don Pedro aprovechando su temor la abrazo por la cintura pegándola más a él queriendo demostrar que aquella diosa era suya… -- Deja que griten… que sepan que estoy con mi mujer jejeje… Cielo Riveros se sonrojo mas presa de la indignación pero en ese momento no tenía valor de alejarse del vejete por temor a los tantos vagos que paraban por allí.
¡¡¡ SUUEGROOO!!!... Fue el grito de uno de los vagos que incomodo a don Pedro pues él quería que todos sepan que aquella hermosa jovencita era suya… -- Muy bien chamaca, en este momento demostrare a estos estúpidos que tu eres mi mujer y cuidado con negarte porque te quito la ropa y te dejo con ellos… ENTENDISTE!!!... la nena tenia temor cuando el vejete se exasperaba y si había sido capaz de llevarla a ese centro de prostitución si le creía capaz de cumplir su amenaza así que asintió llena de rabia y miedo ante su pedido, el vejete la tomo por su estrecha cintura sintiendo la suavidad de su piel atrayéndola hacia él y estampándole un asqueroso beso.
La nena al principio quiso negarse en abrir sus labios pero al sentir como este le apretaba con fuerza la cintura accedió dando paso a esa bífida lengua enrollarse con su delicada y rosada lengua, las ásperas manos del vejete no quisieron estar tranquilas y se posaron en las tremendas nalgas de infarto apretándolas con fuerza elevando a la nena en el aire, Cielo Riveros se sentía apenada pues sabía que mucha gente los miraba, que vergüenza para ella que la vean con un viejo tan horrible y en tan candente escena.
La nena seguía soportando esa viboreante y viscosa lengua cuando en la vereda del frente fue avistada por uno de sus nuevos victimarios, la vida siempre le abría caminos nada buenos para ella, era como un imán para los malos hombres, Ramón no creía la suerte que tenia, pensaba que nunca más en la vida tendría la oportunidad de encontrarse a la tan bella jovencita que se le escapo aquella noche… cruzo la acera y con un periódico viejo tratando de ocultarse se acerco en dirección a ellos.
Tras dejar de besarse el vejete observo en dirección de los vagos haciendo un gesto con la mano, tomando nuevamente de la cintura a la nena la encamino a su nuevo destino pero sin dejar de sobarle las nalgas ante la vista de los transeúntes… -- por favor don Pedro, no haga eso… la gente nos está viendo… el vejete la rodeo por el cuello enseñándole un motel de paso… -- jeje quieres que entremos… jeje allí ya nadie nos vera… la nena movió la cabeza negativamente, lo que menos quería en ese momento era que aquel viejo malvado la follara, miraba para todos lados esperando que alguien la salvara, en esos momentos pensaba en don Lucas y su protección pero a la vez sentía que por culpa de él se encontraba en aquella situación.
El vejete la tomo de la mano haciendo que le siguiera el paso… la nena apenada evitaba las miradas de los señores y señoras que miraban extrañados que fuera al lado de aquel feo viejo y peor aun vestida tan escandalosamente… -- a do-donde vamos… pregunto nerviosa y apenada la nena a un sonriente vejete que caminaba orgulloso de la mano de tan tremendo bombon… -- al Night club, quiero tomarme unas copas y que mis amigos conozcan a mi mujer jejeje… Cielo Riveros se indignaba cuando le escuchaba decirle que ella era su mujer, quería matar a ese viejo y no entendía cómo es que en algún momento este vil vejete la había excitado tanto porque en estos momentos solo sentía odio y repulsión.
Ramón les seguía el paso sigilosamente con los ojos desorbitados al ver esas tremendas nalgotas poco cubiertas por el pequeño short, se le juntaba la baba al pensar que de no haber sido por esos mocosos esas nalgas hubiesen sido suyas, maldecía ese momento pero le animaba saber que si aquella hermosa jovencita estaba al lado de tan horrible viejo el podría tener esperanzas de conquistarla sin tener que obligarla.
Tras llegar nuevamente al club ya había algunos concurrentes viendo bailar a las diferentes chicas pero al ver a Cielo Riveros todos se quedaron embobados con tan tremendo cuerpo, el vejete la dejo sentada en una de las sillas del bar ante el desconcierto de ella... -- por favor don Pedro, ya me quiero ir… -- Nada de eso!!! Espérame aquí y si alguien se te acerca tu solo di que tu marido está aquí… Entendiste!!!... Cielo Riveros asintió indignada pero muy temerosa de quedarse sola allí ante tantas miradas libidinosas que le daban.
No pasaron ni dos minutos cuando uno de los sujetos se le acerco a la nena sentándose a su costado…. – hola muñeca, te invito un trago… la nena se puso algo nerviosa -- No gracias… contesto educadamente… -- trabajas aquí preciosa… puedo pagarte lo que quieras…Cielo Riveros se apeno mas pues por su ropa cualquiera pensaría que es una más de las putitas trabajadoras del club… -- eh no… yo no trabajo aquí… le dijo demostrando su incomodidad… -- -entonces que haces aquí… has venido sola… la nena ya no sabía que decir para deshacerse de aquel insistente sujeto y recordando lo que le dijo el vejete y llena de vergüenza le respondió… -- espero a mi… marido… dijo sonrojándose de vergüenza.
-- tan joven y con marido… no te creo… le decía el tipo sin rendirse en su intento de querer ligarse a la nena y acercándose un poco más a ella colocando su mano en una de sus rodillas, ella se la quito desesperada mirando para todos lados en busca de don Pedro y cuando lo vio le levanto la mano llamándolo… aquel tipo volteo a ver viendo como don Pedro hacia una señal de que se aleje de ella… -- Ese viejo es tu marido… dijo desconcertado el tipo viendo como la nena asentía un poco sonrojada.
Nuevamente la nena se quedo sola muy incómoda y nerviosa, el cantinero le ofreció un vaso de agua la cual algo nerviosa acepto, en ese momento a una cierta distancia se encontraba Ramón viendo estupefacto a la nena sentada con las piernas cruzadas, esas tremendas y suaves piernas que ya había tocado en el bus y también los deliciosos pezones que se le marcaban por el ajustado top, aun tenía en sus resecos labios el sabor de los labios de la nena, de esa deliciosa boquita que a la fuerza cubrieron su apestosa verga… no podía mas, esa nena debería ser suya y metiendo una mano en su bolsillo en busca de su navaja fue en dirección de la nena con la intención de llevársela.
La nena no se daba cuenta de quien venía en su búsqueda estaba distraída bebiendo del vaso de agua observando a las bailarinas no comprendiendo como se podían dedicar a tan denigrante trabajo cuando la jalan abruptamente del brazo… -- Ven putita… ahora iremos a un privado… quiero que bailes para mi jejeje… le dijo don Pedro a la nena quien lo miraba avergonzada por lo que le pedía, detrás de ellos Ramón se freno en sus intenciones, viendo como aquel viejo se llevaba a la fuerza a su objetivo más preciado.
El vejete llevaba a la nena de la cintura como empujándola hacia los privados del clandestino recinto en donde quería deleitarse con el exuberante cuerpo de la nena sin que esta se sienta cohibida por las demás personas… -- por favor don Pedro… ya fue suficiente, déjeme ir… suplicaba la colegiala siendo empujada dentro de la cabina en donde estaba el privado, tan solo había un sofá reclinable unos parlantes de donde sonaba la música especial para estos bailes y una pequeña tarima en donde las chicas realizan sus sensuales bailes.
Don Pedro se sentó cómodamente en el sofá indicando a la nena pararse en la tarima… -- muy bien!!! Ahora quiero que bailes para mi jejeje hasta que quedes encuerada jejeje… a la nena se le vino a la mente la manera denigrante como las chicas se ganaban la vida y ahora ella era obligada a realizarlo también… -- que esperas… empieza ya… Cielo Riveros lo miraba con sus ojos llenos de tristeza e impotencia y a su vez de odio y rencor sin saber que hacer pues la situación le era demasiado incomoda y humillante, don Pedro le tomo del broche del pequeño short jalándolo hasta sus pies sorprendiendo a la nena quien llevo sus manos hacia su intimidad tan solo cubierta por su diminuta tanguita.
-- Ya vez!!! Es así de fácil, baila y quítate la ropita jejeje… el vejete volteo a sentarse sobándose la verga por encima del pantalón viendo como aquellas hermosas y torneadas piernas dibujaban una perfecta y hermosa curva hacia su estrecha cintura, era excitante ver a la hermosa jovencita solo en tanguita y con un pequeño top ocultando casi nada de esas chichotas, en cambio Cielo Riveros estaba cohibida por la inocencia y sana costumbre que siempre había precedido en ella y cayendo de rodillas en la alfombrada tarima movió negativamente su cabeza… -- no… no puedo… no puedo hacerlo….
El vejete lejos de enfadarse solo la miro con poca compasión parándose y saliendo del privado, no paso ni un minuto y regreso deteniendo a la nena en su intento de ponerse el short… -- muy bien Cielo Riveros … la nena se sorprendió que no la llamara putita como siempre lo hacía… -- vendrá una de las chicas a bailar aquí y aprenderás como se hace… don Pedro tomo asiento en el mismo instante que la bailarina entro al privado, la nena se apeno un poco llevando sus manos hacia su intimidad ante la sonrisa sarcástica de la danzante, don Pedro tomo de la mano a Cielo Riveros sentándola de espaldas a el sobre sus piernas, Cielo Riveros pudo sentir claramente el bulto que ya se formaba en los pantalones del vejete, quiso ponerse de pie pero don Pedro la tomo de la cintura dominantemente claudicando en su intento de separarse de el.
La bailarina comenzó a bailar con sus sensuales movimientos ante la mirada morbosa del vejete y la mirada apenada de la nena quien a veces miraba al suelo pues la bailarina la miraba a los ojos sonriente lo que la hacía cohibirse más… don Pedro acerco sus labios sobre el cuello de la nena dándole suaves y pegajosos besos que hicieron temblar entera a la nena sonrojándose más al ver como la bailarina seguía sonriendo ante lo que veía, el vejete tomo de las caderas a la nena haciendo círculos sobre su empalmada verga.
Cielo Riveros ya sentía como la verga de don Pedro estaba completamente dura reclamando salir pues había reconocido ese culo que ya una vez había probado, quería salir huyendo de allí pero tenía miedo a la reacción del vejete quien subió sus labios hacia su oreja izquierda mordiéndole suavemente el lóbulo y susurrándole palabras calientes… -- que buena estas putita… te voy a comer enterita, mi verga quiere explotar dentro de ti… para nuevamente bajar sobre su cuello con más feroces lamidas y mordidas, Cielo Riveros comenzaba a perder el control y se azoraba al ver como la bailarina sonreía y le guiñaba el ojo.
Una de las manos del vejete subió desde su liso vientre hasta meterse debajo del top atrapando uno de los majestuosos pechos dejando a la vista el otro, la nena se puso roja pues la presencia de la bailarina le daba vergüenza, que pensaría de ella en un lugar como ese y con un viejo desagradable, la mano de don Pedro seguía amasando las chichotas pasándose de la una a la otra mientras su otra mano fue en dirección hacia la panocha.
La mano cual araña se fue metiendo por debajo de la delgada tela de la tanga sintiendo los pequeños vellos que tenían hasta llegar a la caliente vulva, la nena tomo la mano de don Pedro tratando de quitársela inútilmente ya que los mordiscos que le daba en el cuello la hacían claudicar en su lucha, con sus ojos entrecerrados podía ver como la bailarina se pellizcaba los pechos pues aquella visión de una jovencita tan hermosa siendo manoseada por un viejo era lo más morboso que uno podía ver.
Suavemente don Pedro comienza a sentir los leves gemidos que daba la nena, a su mente le llegaban los recuerdos de cómo logro seducirla en la feria así que su lengua comenzó a recorrer con ahincó aquella parte tan sensible de la nena con la sola intención de excitarla y despertar a la mujer hambrienta de sexo que yace en ella, con los dedos comienza a acariciarle los labios vaginales junto a su sensible clítoris ante la impotente fuerza de la nena quien trataba de quitar esa mano de su intimidad… -- por fa-favor don Pedro, de-déjeme… no me toque ahhh…
Cada vez Cielo Riveros comenzaba a ceder en su intento de librarse de esa situación, sus ojos se entrecerraban presas de las caricias que la habilidosa mano le hacía en su panocha, dócilmente dejo caer su cabeza en uno de los hombros de don Pedro ante la mirada morbosa de la bailarina quien se encontraba excitada con la situación, el vejete reclino el sofá hacia atrás quedando casi como una cama… -- que rico hueles putita, la vamos a pasar bien y tu panocha sabrá lo que es tener una verdadera verga adentro jejeje…
Reía el vejete pensando en que había sido su novio el que la había desvirgado, el sabia por el diario de la nena que aquel muchachito era un tanto desproporcionado virilmente y se burlaba de aquello mientras que Cielo Riveros se mordía los labios pues no aguantaba tantas caricias en su panocha como en el resto de su cuerpo, el vejete tomo ambos lados de la tanguita y de un fuerte jalón lo rompió dejando a la vista las juveniles intimidades de la nena quien junto las piernas apretando la mano del vejete…. – Don Pedro NO!!! la chi-chica me está vi-viendo ahhh ahhh…
Exclamo la nena reclamando que se sentía apenada que la bailarina la viera lo cual fue tomado con morbo por el vejete quien con un movimiento de cabeza le indico que se fuera lo cual sonriente lo hizo dejándolos solos y con la puerta entreabierta, para esos momentos Ramón quien se encontraba en aquel pasillo muerto de curiosa morbosidad, envidia y celos buscaba en cuál de los privados se encontraba aquella deliciosa jovencita que se había convertido en la causa de todas sus masturbaciones y sucias eyaculaciones fue en ese momento que vio salir a la bailarina del privado y disimulando su presencia espero a que se fuera para acercarse y fisgonear.
En el privado la nena ya no podía aguantar más tanto toqueteo y de su boca los gemidos se hacían cada vez más excitantes, un dedo del vejete ya se encontraba dentro de ella provocándole sensaciones delirantes, sus delicadas manos que hasta un momento antes trataban de detener los magreos de sus senos y panocha ahora solo las acariciaban suavemente y los zapatos de tacón cayeron al suelo, don Pedro sentía claramente como la piel de Cielo Riveros ardía de la excitación aunque muy a su pesar la nena no soportaba la idea que su cuerpo comenzara a responder a los estímulos de aquel viejo que la había estado humillando durante todo el día.
-- te gusta putita… gimes como una gatita, ya verás como gozaras conmigo… la nena se mordía los labios pero su cuerpo se tensaba en impotencia al oírle ganador al vejete estaba reuniendo fuerzas para deshacerse de las manos de ese viejo, desde su interior sentía que le nacían fuerzas para detener lo que le estaba haciendo pero como si se hubiera dado cuenta don Pedro comenzó a besarle y mordisquearle el cuello acelerando el movimiento de sus dedos dentro de ella, aquello fue fatal para Cielo Riveros quien sujetándose por ambos lados del sofá comenzó a gemir mas fuerte sintiendo como desde debajo de ella el vejete la punteaba con fuerza con ese duro bulto que ya asomaba.
En ese momento Ramón se asomaba por la puerta que se encontraba entrejunta pudiendo ver el espectáculo más morboso que jamás había visto, sus ojos no podían dar razón a lo que veían, como era posible que un viejo como ese pudiese estar gozando de aquella hermosa jovencita, el gandaya apretaba los puños de impotencia y envidia al ver como la nena gemía con la mano del vejete dentro de su panocha y la otra amasando aquellos melones que el también en el bus había disfrutado, sin darse cuenta dentro de sus sucios pantalones la verga se le comenzó a parar presa de la emoción, celos y el morbo de aquella escena.
El vejete seguía con la incursión dentro de la panocha de la nena y estirando un dedo hábilmente comenzó también a penetrar aquel ano que ya le habían hecho sentir maravillas al penetrarla haciendo curvar el cuerpo de la colegiala disfrutando de esa sucia mano que ya la había calentado con tan solo tocarla, muy dentro de ella se sentía mal por estar disfrutando de lo que le hacia aquel viejo que en todo el día no había más que aborrecido y odiado, se preguntaba porque era así, porque siempre cedía ante los acosos y tocamientos de los tipos repugnantes, porque su cuerpo terminaba muy placenteramente por entregarse a los sucios deseos de aquellos sucios y degenerados malvivientes.
-- ahhh ahhh ya nooo… de-dejeme por fa-favor ahhh…. Pedía rogando con una voz tan sensual la nena retorciéndose sobre el fofo cuerpo del vejete quien tan solo aceleraba sus lamidas y manoseos con la sola idea de desquiciarla de placer y despertar a aquella lujuriosa hembra que conoció en la Feria… -- tranquila mi putita… relájate y veras que la pasaremos delicioso jejeje… le dijo con su cálido y maloliente voz sobre la oreja de la nena para seguir chupándosela como un sádico sabiendo ya que ese era uno de los puntos débiles y erógenos de la encamable chamaca, el vejete seguía paso a paso todo lo que le hizo en la Feria.
La pobre nena ya no podía resistir mas, su cuerpo ya estaba hambriento de sexo de aquel sexo que en esa tarde hubiese estado teniéndolo con su adorable novio, tan solo acordarse de Rodrigo hicieron que una lagrima saliera de sus bellos ojos, pensaba que esto no podía seguir así, Rodrigo no podía seguir sufriendo sin saberlo por sus tantas infidelidades no consentidas y que los cándidos e inocentes labios de Rodrigo probaran los suyos después de haber besado asquerosas bocas o de haber mamado de repugnantes miembros, su conciencia le decía que debía de terminar con Rodrigo porque el no se merecía una chica como ella.
Sus delicadas manos arañaban el sofá ya no aguantando tanto placer que sentía, su redondo trasero sentía el duro bulto del vejete que se le metía entre sus nalgas aun dentro del pantalón, don Pedro sujeto con ambas manos aquellos dos melones amasándolos como un sádico sin dejar de lamerle el cuello y la oreja, la nena ya demasiado excitada llevo sus dos manos hacia las del vejete acariciándolas y pidiendo que se las agarre más fuerte, don Pedro esbozo una sonrisa de satisfacción al ver que ya ese arroz se había cocinado al punto que a el le gustaba, nuevamente bajo una mano hacia la panocha hurgando con ligeros movimientos mientras seguía pasando de pecho en pecho con la otra mano.
Los gemidos de la nena ya iban a la par con la música del privado, aquel embriagante gemido que llegaban a los oídos de Ramón quien presa de la excitación se metió una mano dentro del pantalón comenzando a sobarse su ya erecta verga; mientras que don Pedro sin dejar de masturbar a la nena llevo uno de sus dedos a la boca de la colegiala quien ya muy caliente comenzó a chupar entre gemidos… -- huy que rico lo chupas mi putita jejeje así también me chuparas esta verga que tanto te gusta…. Le dijo el vejete a una excitada Cielo Riveros quien por dentro sentía vergüenza pero se había ya dejado vencer por los deseos y ansias de sexo de su exuberante cuerpo.
El sonido de esa deliciosa boquita chupando el regordete dedo del vejete era escuchado por Ramón quien ya comenzaba a sentir envidia y celos de la suerte que tenía ese despreciable viejo, don Pedro muy hábilmente volteo a la nena frente a el apoderándose de aquellos labios que en todo el día se habían resistido a besarlo o lo habían hecho a regañadientes pero esta vez ya estaban dóciles y sumisos a recibirlo, su viscosa lengua se metió dentro de la fresca boca de Cielo Riveros buscando su rosada lengua, la nena pudo sentir el olor a alcohol y descuido bucal que el viejo tenia pero muy a su pesar no oponía resistencia y más bien correspondía a tan asqueroso beso.
Ramón veía la escena ya muy furioso al ver como esa chiquilla que tanto deseaba correspondía a tan horrible viejo, el recordaba que tuvo que forzarla y amenazarla para que le correspondiera pero en ningún momento sintió tanta docilidad como en la que ahora era testigo, el vejete estiro sus manos hacia las portentosas nalgas de la nena agarrándoselas con fuerza dejándole las marcas de sus sucias manos y meterle uno de sus dedos en el ano para comenzar con una suave penetración… -- huy que rico culo tienes chiquita… te lo voy a romper de nuevo y a tu panocha también, hoy sabrás lo que es tener allí una verdadera verga de macho y no la cosita esa que te metió tu noviecito jejeje…
Le decía el vejete chupeteándole el cuello a una nena quien miraba con los ojos entrecerrados y excitados hacia el techo, instintivamente se acomodo sobre el vejete sintiendo la dureza de su oculto miembro sobre su vulva y sintiendo el dedo del vejete estimularle el ano, el placer era tanto y ansiaba mas y muy lentamente comenzó a frotar su panocha contra el miembro del vejete comenzando a gemir cada vez mas… -- ahhh ahhh ayyy siiii… el vejete sonreía ante los gemidos de excitación de la nena quien seguía con la cabeza levantada gimiendo excitada dejando sus redondas chichotas al alcance del vejete quien sin pensarlo mucho comenzó a morderlos, chuparlos y lamerlos como un loco hiendo de uno en uno provocando mas sensaciones de placer a la ya entregada colegiala.
Ramón veía babeando de hambrienta envidia como aquel viejo iba de seno en seno chupándolos como un bebe, deseaba tanto ser el mismo quien los probara, ya no aguantaba ser solo testigo de tan caliente escena, el la quería solo para el…. Mientras que el vejete ya no podía mas, las caricias que la vulva de la nena le daba al frotarse ya lo tenían por reventar, no quería que fuese en ese lugar pero ya la excitación era demasiada y estirando una mano comenzó a desabrochar su pantalón siendo notado por la nena quien sabiendo de sus intenciones se levanto un poco para dejar que el vejete sacara aquella barra de carne que ya una vez en la feria la habían embriagado de placer.
Sus miradas se encontraron la de el era horrible, la de un sádico quien sonreía triunfante, la de la nena era de excitante confusión pues a pesar de la excitación se daba cuenta quien era aquel viejo que por chantajes se había apoderado de ella pero por culpa de su cuerpo excitado y traicionero no podía negarse a sus caprichos de lujuria, el vejete ya tenía la verga fuera, estaba rígida, dura con múltiples venas llenas de sangre que la mantenían vigorosa, la nena se dejo caer sintiendo en su vulva el calor de aquella verga que aun no entraba en ella.
-- Ahora si cachorrita, ahora si sabrás lo que es que te desfloren jejeje… el vejete tomo su mástil colocando la roja y lubricada cabeza en la entrada de la aun núbil vagina de la nena quien al sentirla comenzó a temblar de excitación al sentir como sus labios se abrían tratando de dar paso a tan grueso visitante, sintió un dolor agudo cuando la cabeza del miembro se abría paso gimiendo con dolor al ver que no sería fácil aquella incursión, pero ya una vez acomodada el vejete pensó en clavársela con todo, con fuerza como para que nunca se olvide de el y lo recuerde siempre, la tomo de la cintura tomando fuerzas para enterrársela hasta el fondo.
Pero en ese mismo instante irrumpió con suma vehemencia Ramón navaja en mano sorprendiendo a los calientes amantes, la nena se levanto de encima del vejete ocultando su panocha pues el top que aun tenia puesto ya ocultaban sus melones, el vejete ajustándose el pantalón se levanto increpando al que había interrumpido su caliente sesión… -- quien mierda eres pendejo… largo de aquí….
La situación era tensa en aquel privado, Ramón estaba en posición de ataque con su afilada y oxidada navaja, mientras que don Pedro se puso frente a el arreglándose la ropa muy furioso porque este desgarbado o esquelético sujeto le haya malogrado tamaña situación… -- A un lado viejo inútil…. Esa chiquilla se viene conmigo… le respondió amenazante y sin dejar de mirar a una aun contrariada Cielo Riveros … -- TU!!! CHIQUILLA… VEN PARA ACA… CREISTE QUE NUNCA TE IBA ENCONTRAR… le dijo Ramón a la nena quien recuperaba el aliento y dándose cuenta para su terrorífico asombro de quien se trataba.
Cielo Riveros presa del miedo al ver a ese repugnante sujeto quien bajo amenazas se la iba a llevar aquel día en el bus se acerco a espaldas del vejete como buscando protección, Ramón se enfurecía mas al ver como aquella nena prefería al viejo en vez de a el… -- Puta maldita… te digo que vengas conmigo…. Le grito asustándola más ante la negativa de ella quien movía la cabeza sin poder articular palabra alguna por el miedo a todo esto, don Pedro viejo zorro en toda su vida analizaba la situación y en el momento que Ramón estiro su mano para jalar a la nena el vejete tomo la mochila de Cielo Riveros dándole un fuerte golpe en la cara que lo tiro al piso.
Las cosas de la mochila cayeron al suelo, el dinero entre algunos cuadernos y lapiceros, Ramón algo aturdido se levanto de nuevo navaja en mano pero ya para esto don Pedro estaba revolver en mano apuntándole… -- Ahora pues pendejo, te atreviste a interrumpir mi velada con mi nena… momento en el cual el vejete le estampo tremendo golpe que lo tiro al suelo, Ramón cayo aturdido en el piso desde donde veía a su tan anhelada diosa… -- Vístete Cielo Riveros … nos vamos de aquí… le dijo don Pedro llamando a seguridad del local y comenzó a darle de patadas sin piedad a Ramón.
El pobre tipo antes de perder el conocimiento ante tanto golpe pudo divisar en el piso el carnet escolar de la nena y la tanguita rota tomándolas rápidamente se los metió dentro del pantalón cayendo desmayado, Cielo Riveros ya se había puesto más que el pequeño short porque su tanguita estaba rota veía como don Pedro recogía las cosas del suelo metiéndolas a la mochila, momento en el cual el negro de seguridad y Cecilia la dueña del local preguntaban que pasaba… -- No pienso pagar nada, este tipo se metió y me quiso robar, no hay seguridad en este lugar… dijo quejándose el vejete ante una contrariada Cecilia quien asintió ordenando sacar al desmayado Ramón del local.
A esas horas en la escuela de Cielo Riveros Rodrigo esperaba la salida de su novia, había estado en casa de ella tocando desesperadamente, fue don Benito quien al verlo le dijo que se había ido a la escuela, el inocente Rodrigo pensó pues que por lo responsable que era ella prefirió estudiar y muy tranquilo esperaba su salida para llenarla de besos y perdonarle que le haya fallado, pero ya era mucho el alumnado que salía y no podía ver a la nena, se metía entre la montonera de chicas y no la encontraba hasta que de improviso alguien la saludo… -- Hola Rodrigo… le dijo una sensual voz que lo hizo despabilarse un poco… -- eh Hola Claudia, como estas… de casualidad no has visto a Evi…
A Claudia se le frunció el seño, ella había estado en la escuela arreglando su regreso a la prepa y sabía que Cielo Riveros había faltado, en donde estaría se preguntaba ella, si no estaba con su novio “el buenito”, con quien estaría, pero su espíritu de amiga razono de inmediato para ayudar a su amiga… -- Ah si Eve… pues veras, nos han dejado un trabajo muy complicado, si no lo presentamos reprobamos, así que ella se fue al centro a comprar unos materiales que necesitamos y después irá a mi casa, así que no la esperes jijiji…
Rodrigo se quedo pensando, pues a pesar que Claudia había sido muy convincente aun quería ver a su novia y que ella mismo se lo diga, pero Claudia una maestra en la mentira y la disuasión notaba algo confuso y desconfiado al chico y mordiéndose el labio muy sensualmente le tomo el mentón pellizcándoselo suavemente… -- tranquilo Rodri… crees que Eve engañaría a un bombón como tu… Rodrigo se sonrojo sonriendo tímidamente pues desde siempre Claudia lo intimidaba pues era todo lo contrario a su cándida novia… -- tu tranquilito muñeco, que yo le digo que te llame, bye…
Rodrigo se sintió un poco más tranquilo listo para retirarse viendo como Claudia se iba meneando su trasero ante los silbidos de los demás chicos quienes le piropeaban el culo, Claudia llevo su mano hacia su derrier dándose unas palmaditas ante las risas de los demás y sacándole una sonrisa a Rodrigo quien por dentro pensaba (loca de m…). Unos metros más allá Claudia marcaba el número de Cielo Riveros tratando de comunicarse con ella pero aun estaba apagado… -- Pinche Cielo Riveros , con mi papa no creo que estés, pero ya me dirás que estás haciendo pinche perra… pensó riéndose al imaginarse que su recatada amiga se encontraba revolcándose con algún tipo.
Regresando a la incómoda situación que vivía la nena ambos ya se encontraban muy alejados del Night club, el vejete le había preguntado de donde la conocía aquel sujeto que irrumpió en el local, la nena solo mantenía la cabeza abajo sin contestarle ante lo cual el vejete la tomo por los brazos samaqueandola en pos de encontrar una respuesta, la nena con los ojos vidriosos le conto muy apenada como fue la situación en el bus y como aquel sujeto se la quiso llevar a la fuerza, el vejete se molesto mas, pues en ese caso hasta le hubiese dado más fuerte a Ramón, tan solo imaginarse a Cielo Riveros en manos de aquel sujeto le provoco unos celos enfermizos.
-- Bueno ya paso!!! Ahora vamos a mi casa a continuar lo que nos interrumpieron…. La nena protesto pues ya no quería estar un instante mas con él, quería irse a su casa ya no soportaba mas toda esa situación – no don Pedro, ya fue suficiente, déjeme ir por favor, yo no quiero estar con usted… el vejete lejos de molestarse sonrió pues a el le gustaba así, que se niegue para después lograr excitarla… -- pero chiquita, en el local la estabas pasando bien, hasta tu misma buscabas que mi verga te penetrara jejeje… la nena movía la cabeza negativamente tratando de negar aquella aclaración.. – no... no es ci-cierto… -- claro que es cierto, eres como una lámpara mágica, solo basta que te sobe y cumples todos mis deseos jejeje… le dijo el vejete agarrándola de la cintura y sobándole las nalgas ante la vista de las personas.
Cielo Riveros miraba para todos lados llena de vergüenza tratando de zafarse del vejete ante las miradas morbosas y escandalosas de las personas que los observaban al pasar… -- no… Usted solo me chantajea, me obliga, usted es un miserable… el vejete solo sonreía ante los reclamos de la nena y soltándola la tomo del hombro mirándola a los ojos… -- muy bien Cielo Riveros te propongo algo… te daré las fotos que tengo de ti, el video y todo lo que te comprometa conmigo, así quedaras libre de mis chantajes… Cielo Riveros abrió bien grande sus ojos verdes, el vejete le proponía devolverle todas las pruebas que denigraban su reputación… -- en se-serio, no me miente… -- no te miento amorcito pero todo eso con una sola condición… Cielo Riveros cambio su expresión de sorpresa pues aquello no le auguraba nada bueno por parte del vejete… -- y cual es la condición… pregunto ante un don Pedro que caminaba en círculos delante de ella.
El vejete paró en seco frente a ella mirándola de pies a cabeza… -- MMM pues veras, quiero que esta noche te me entregues, que follemos hasta que no nos quede una gota de sudor, que hagas todo lo que te pida sin miramientos u objeciones, todo eso y eres libre te lo prometo… amanece conmigo como marido y mujer y tu vida volverá a ser la de antes, palabra de hombre…. Le dijo el vejete estirándole una mano a la nena en pos de firmar el trato.
Cielo Riveros abrió la boca ante la indecente propuesta… --Co-como!!!... marido y mujer, usted está loco… dijo la nena negativamente muy ofuscada por tal condición… -- tu eliges mi reina, hacemos el amor toda la noche y quedas libre para siempre o no aceptas y seguirás pasando días como los de hoy je je y es más, hasta te recogeré en tu vecindario para que te vean así… la nena movía su cabeza negativamente, el vejete la presionaba muy bien para que aceptara su propuesta… -- Que decides muñeca… no tengo todo el día… solo una noche de sexo y te olvidas de mi….
Cielo Riveros estaba estática, en ese momento el vejete solo le causaba asco y repulsión, pues a pesar que el trato le parecía asqueroso sería el fin de su pesadilla y el comienzo de su tranquilidad pero sabía que aun era un chantaje, le miraba con ojos de furia e impotencia con la respiración agitada hasta que dócilmente le respondió… -- pero no puedo… mi abuelito se molestara si no llego a casa… el vejete sonrió morbosamente, aquella aseveración le indicaba que la nena aceptaba su propuesta y ahora solo tendría que ingeniárselas para solucionar esos pequeños detalles…
-- Toma tu celular y avísale a tu abuelo que te quedaras en casa de una amiga… la nena estaba nerviosa o más bien triste por tener que llamar y mentirle a ese viejito tan cariñoso que tanto las quiere, al mirar el celular vio bastantes llamadas perdidas de su querido Rodrigo, su conciencia la avasallaba con múltiples misiles de dolor, pero a su vez pensaba, es por ti Rodrigo, a partir de mañana ya nadie se interpondrá entre nosotros….revisando vio las llamadas de Claudia y un mensaje de texto que decía: Que estás haciendo amiga: mámasela bien hasta la última gota jajaja .
Su rostro se sonrojo pero ya estaba acostumbrada a esos mensajes de su loca amiga a la cual llamo… --Hola Claudia… quiero que me hagas un favor amiga… al escuchar la nerviosa voz de Cielo Riveros , Claudia sonrió pues para ella solo existía el sexo como excusa… -- wau amiga jajaja, cuantos orgasmos ya has tenido jajaja… Aquella conversación fue escuchada por don Emilio quien justo pasaba cerca de la habitación de su hija… Cielo Riveros muy incómoda no sabía que responderle a su ladina amiga puesto que el vejete se acerco a ella abrazándola por atrás y dándole sonoros besos que era escuchados al otro lado del celular por Claudia… -- Ah ya veo… estas en tremenda faena aun… así me gusta amiga que disfrutes y disfruten de tu cuerpo jajaja…
Don Emilio no podía ocultar su frustración al oír eso, la chiquilla que tanto deseaba se encontraba con otro, comiéndose ese delicioso cuerpo que el tanto deseaba pero que como un cobarde negó… -- Claudia ya basta… hazme un favor, quiero que llames a mi casa y le digas a mi abuelo que me quede en tu casa, por favor amiga… Claudia solo sonreía muy encantada de apoyar a su amiga… -- Claro que si amiga, no te preocupes por eso… tu solo disfruta del sexo, me alegro por ti… Cielo Riveros solo la escuchaba algo molesta pues el vejete podía oír todo sin dejar de toquetearla ante la vista de la gente… -- y dime… con quien estas amiga… no será ese tal Pedro del que me hablaste una vez…
Don Pedro pudo escuchar lo que dijo Claudia enorgulleciéndose mas, Cielo Riveros muy apenada y queriéndose morir se despidió de Claudia molesta por tal infidencia… -- Chau Claudia y gracias… el vejete no le dijo nada solo le sonreía morbosamente y casi con burla ante las miradas esquivas de la nena quien se sentía avergonzada… -- jaja tranquila mi reina, ya en tu diario había leído que te gustaba mi verga jajaja… en ese instante Claudia marcaba el numero de la casa de Cielo Riveros metiéndole un cuento a Don Benito convenciéndolo de que pasaría la noche con ella, Claudia se sentía excitada al pensar en su amiga follando como loca dándose cuenta que su papa estaba a un lado de la puerta… -- ni modo Papa… por cobarde te la ganaron… viendo sonriente como este se retiro de su puerta.
En ese instante el vejete paro un taxi subiendo ambos en dirección a su casa, durante el trayecto el taxista no podía evitar ver por el retrovisor como el viejo la tenia abrazada y con la otra mano le acariciaba las torneadas piernas dándole besos en las mejillas y cuello ante una tímida y apenada nena, no se explicaba cómo es que una hermosa chiquilla se deje tocar por tan despreciable sujeto.
La oscuridad de la noche era muy penumbrosa en el vecindario del vejete; don Pedro y la nena iban por el pequeño y oscuro callejón en donde vivía el viejo, cabe recordar que la morada del vejete era una de las más grandes y alejada de las demás, la nena caminaba muy incómoda al imaginarse que toda la noche tendría que soportar encima suyo a ese horrible viejo, estaba hasta pensando en dar marcha atrás y no aceptar el trato pero en ese momento recibió la llamada de Rodrigo en su cel… -- Hola amor… como estas… le dijo su inocente novio muy alegre de que le respondió la llamada… -- Rodrigo!!! Eh dis-disculpa por lo de hoy…
El vejete se acerco a la nena arrimándola contra la pared para empezar a tocarla morbosamente, Cielo Riveros se puso nerviosa pues temía que su novio sospechara algo… -- tranquila putita o te quito el celular… en ese momento el vejete le estampo un beso de lengua que la nena no pudo evitar tan solo con el celular en su oreja oyendo a su novio… -- no te preocupes amor… Claudia ya me explico todo, dale bien fuerte a ese trabajo, mañana te llevo a la escuela, te amo!!! Le dijo esperando su pronta respuesta, la nena quería zafarse de ese beso pero le resultaba difícil hasta que el vejete la soltó… -- ok Rodrigo, bye… la nena colgó mirando enfadada al vejete que tan solo sonreía.
El vejete la tomo de la mano entrando ambos a su casa, dándose con la no grata sorpresa de que Raymundo su bobalicón hijo se encontraba con tres amigos jugando videojuegos y tomándose unas cervezas, los chicos se quedaron con la boca abierta y babeando al ver el tremendo mujeron que venía con don Pedro… -- A ver tira de idiotas, se me van que quiero intimidad con mi mujer… decía el vejete llevando de la mano a su habitación a una completamente sonrojada Cielo Riveros quien notaba las miradas lascivas que le daban a su expuesto cuerpo… el vejete antes de cerrar la puerta les dio un guiño a los muchachos, quienes no podrían creer que aquel sucio viejo se iba a comer semejante hembra.
Raymundo un muchacho de 23 años que siempre llevaba la cabeza rapada, con marcas de acné y siempre vestido con ropa vieja ya que con las justas vivía de la venta de unos diarios y que la mayor parte del tiempo se la pasaba viviendo del hurto, sentía envidia por aquella chamaca que ya una vez había visto pero que no podía creer que su viejo y horrible padre pudiese poseer, rápidamente con sus amigos se dirigieron hacia la puerta para tratar de ver o escuchar lo que allí iba a acontecer.
Una vez adentro el vejete abrió su ropero sacando su cámara y toda prueba que tenia de la chiquilla… -- Muy bien mi reina aquí están las pruebas, todo lo que te vincula a mí, solo ahora me harás disfrutar de una noche de sexo y fin a nuestra historia jejeje… Cielo Riveros tragaba saliva pues a pesar del trato le parecía repugnante el tener que pensar en satisfacer a tan horrible viejo… -- que esperas, ven a mí, si ya sabes que te gusta cuando te toco, hasta a tu amiga le cuentas de mi… el vejete se acerco hacia ella quien negaba tales aseveraciones… -- eso no es cierto… usted no me gusta, adema apesta… le contesto la nena mostrando muecas de disgusto.
-- Apesto!!! Jajaja bueno eso se puede arreglar… el vejete comenzó a desbotonar su arrugada camisa a cuadros dejando ver su fofa panza y su pecho cubiertos de una densa capa de entrecanos vellos, al mismo tiempo se aflojaba el cinturón y pantalón cayendo estos al piso, la imagen era brutal para la nena pues el viejo lucia horrible en ese estado, como era posible que por voluntad propia pudiese satisfacer a ese viejo, no encontraba la manera de hacerlo, el vejete termino por sacarse los zapatos y medias y bajándose la trusa dejo ver un tremendo miembro que aun muerta colgaba majestuosa… -- muy bien putita, si apesto ahora tu me bañaras, desnúdate y vamos a la ducha…
La nena seguía sin moverse algo asqueada por ver al viejo desnudo, quien en su camino la tomo de la mano jalándola con violencia en dirección al baño, los muchachos que se encontraban al otro lado podían distinguir a través de las grietas de la precaria puerta lo que pasaba… -- se la va a coger en la ducha…no manches tu jefe si que es bravo… se decían entre ellos con las vergas ya paradas, en el cuarto de baño don Pedro ya se encontraba en la ducha ante una pasiva nena quien no se atrevía a moverse… -- que esperas puta, entra rápido… ella no hacía nada tan solo movía la cabeza negativamente hasta que don Pedro estirando las manos le rompió a jalones el pequeño top que cubrían sus chichotas.
Ella se las cubrió tímidamente ante la sonrisa del vejete quien le apuraba en que se quite el pequeño short ante la tímida negativa de ella… -- Escucha mocosa, si no te apuras te saco afuera y dejo que mi hijo y su pandilla te vean desnuda… APURATE!!!... La nena algo horrorizada y sabiendo que debía de cumplir con parte del acuerdo comenzó a bajarse el short dejándola caer al piso quedándose ahora si completamente desnuda, el vejete de un jalón la metió con él en la ducha abriendo el grifo y recibiendo los fríos chorros de agua… -- Muy bien putita, decías que apesto, ahora báñame jejeje…
La nena no sabía qué hacer, ver al viejo desnudo y mojado le parecía repugnante, como de su sucio cabello y tupida barba caían sucias gotas de agua y para colmo en aquel lugar no había ni un pedazo de jabón, el vejete estiro sus manos agarrándola de la cintura y apretándose con ella, la nena pudo sentir en su bajo vientre como la verga comenzaba a cobrar vida y se ponía dura buscando su cuevita, hacia esfuerzos para separarse de el empujándolo con sus manos en el peludo y mojado pecho… -- huy así me gustas putita,, hazte la difícil, ya verás cómo te voy a calentar y tú misma me vas a rogar que te coja jejeje…
La nena respiraba agitada con los ojos tristes y llorosos, pues a pesar de todo sabia que el viejo tenía razón, en el momento que su cuerpo se rindiera tendría que someterse y entregarse a la lujuria sin contemplaciones, ahora recién entendía lo que el vejete le había dicho de manera sarcástica, que ella era como una lámpara de Aladino… el vejete en ese instante se volteo dándole la espalda ordenándole que le lavara la espalda, la nena comenzó a sobársela junto al agua sintiendo como don Pedro estiro una mano hacia atrás tocándole y acariciándole su panocha… -- NOOO!!! No me toque, quite sus mano de allí… le decía retrocediendo y evitando aquel tocamiento.
El vejete retrocedió también aplastándola contra la pared y hurgándole con mas ahincó la vagina, la nena no podía como salir de aquella posición pues el viejo era muy pesado… -- por favor no!!!... déjeme, me está lastimando… el vejete no le hacía caso y movía su espalda sintiendo como las húmedas chichotas le hacían deliciosos masajes en su ancha y peluda espalda… -- Ay putita, que rico se sienten tus tetas mojadas en mi espalda huy… sus dedos comenzaron a penetrarla suavemente, la nena sentía como entraban dentro de ella acariciando sus paredes vaginales, cerraba los ojos y apretaba los dientes tratando de resistir las deliciosas sensaciones que terminan por enloquecer a su cuerpo.
El vejete dio media vuelta sin quitar sus dedos de la panocha apretándose contra ella, la nena al ser de una altura considerable no le hacía difícil la tarea a Don Pedro de deleitarse con su cuerpo y como un hambriento comenzó a engullirse uno a uno los pezones de las húmedas chichotas… -- HUMM que ricas chichotas… vas a ver como hoy hare que produzcan leche dentro de poco jejeje… la nena seguía luchando para poder contenerse y no claudicar ante el placer, sus delicadas manos trataban inútilmente de empujar al vejete haciendo que solo este las sintiera como suaves y húmedas caricias… -- por favor… ya basta… pedía le nena inútilmente puesto que sentía angustia de volver a entregarse al vejete.
-- tranquila zorra… ya entrégate, sabes que te gusta coger, no lo rechaces y te juro que te hare pasar una noche que jamás olvidaras jejeje… el orgullo de Cielo Riveros no quería aceptarlo, quería demostrar que su espíritu era fuerte… -- -recuerdas mi putita, como gozaste en la Feria, como gritabas de placer… y en tu casa como fuiste una gatita sumisa… jejeje… A la nena aquellos recuerdos se les venían a la mente como flashazos que hicieron que sus pezones se pararan y sintió un ardiente calor en su vagina, aquellas sensaciones la inquietaron pues sabía que no la llevarían a nada bueno y más cuando el viejo comenzó a besarle con ligeras succiones en su delicado cuello, aquella boca con escasos dientes provocaban sensaciones escalofriantes en su cuerpo pues aparte la viscosa lengua subía y bajaba por su cuello como un perro lamiendo a su ama.
Su respiración se comenzó a agitar pero aun tratando de contenerse y no demostrar que estaba perdiendo… -- por fa-favor don Pedro, ya no siga… de-dejeme ir por favor… rogaba con una voz que demostraba excitación y sensualidad, las manos de la nena dejaron su intento de separarse del vejete y cayeron a un lado, don Pedro trato de besar esos carnosos labios que se veían apetitosos pero la nena movía la cabeza de un lado a otro evitándolo en un último resquicio de orgullo y de su lucha por no ceder ante la excitación, el vejete cada vez más se metía entre sus piernas haciendo que ella las abriera mas, sus manos subían y bajaban acariciando los lados de su estrecha y curvada cintura.
La sensación era maravillosa tocar esa piel suave y húmeda por aquellos curvados lados le provocaban electrizantes sensaciones a la nena, su plano y perfecto vientre podían sentir como era acariciada por la empalmada y gruesa verga de don Pedro, agacho la mirada y pudo ver con un poco de dificultad por la fofa panza del viejo como se asomaba la cabeza completamente roja y con brillosas secreciones que daban a entender de que ya querían probar de las delicias que su cuerpo ofrecía. Don Pedro tomo de la cintura a la nena poniéndola contra la pared como un policía interviniendo a un sospechoso, la nena no hizo nada y seguía exhalando gemidos apoyando sus manos contra la sucia mayólica de la pared.
El vejete se arrodillo en el piso abriéndole las nalgas y con su lengua comenzó a recorrer desde el ano hasta la panocha dando principal atención a la zona del perineo tratando de enloquecer completamente a la ya casi rendida chamaca… -- pero que rico sabes preciosa, no hay duda que eres única y solo para mi jejeje… la nena recostó su rostro sobre la sucia mayólica de la ducha con los ojos cerrados pues esa lengua la estaba volviendo loca de placer, aun en su poca claridad pensaba con molestia que como es posible que pueda ceder tan rápido y con ese viejo el cual era malo con ella, pero otra parte de su cuerpo le decía que dejara de luchar y que se entregara al placer que aquel monstruo le daba.
El vejete se puso en pie y con su verga sobaba el canal que separaba las dos tremendas nalgas mientras acercaba su rostro a la oreja izquierda de la nena quien solo se mordía los labios tratando de contenerse… -- Quieres que te penetre putita, quieres que te perfore y que te llene de leche jejeje… la nena aun dolida por aquellas palabras se negaba a voz baja pero sintiendo excitación por esa verga que era atrapada por sus nalgas… -- noooo… noo qui-quierooo noooo…. Decía jadeante la nena pues el vejete tenía entre sus manos ambas tetas masajeándolas y pellizcándole hábilmente los duros pezones, el vejete sonreía pues a pesar de su negativa la nena se movía al compas de su verga… -- jejeje asi que no quieres no… entonces porque mueves el culo zorra…. Plaffff fue el sonido de una fuerte nalgada que hicieron sentir dolor pero a su vez la excitaron más pues los recuerdos de las nalgadas que le dio en la feria la calentaban en demasía, el vejete al notarlo le dio una seguidilla de nalgadas oyendo los gemidos de dolor y placer de la nena.
Don Pedro apunto su verga por el caliente ano de la nena empezando a meter la punta de esta, la nena comenzó a sentir un ligero dolor pues a pesar de que no era la primera vez que le daban por allí, la magnitud de esta verga era muy considerable a diferencia de las otras… -- aaauuu nooo… sa-saquelo por fa-favorrr, dejemeee… pedía la nena arañando la sucia mayólica y cerrando los ojos aguantando el ligero desgarro que la verga le producía, en cambio el vejete quien seguía amasándoles los pechos comenzaba a meter centímetro a centímetro toda la longitud de su miembro… -- aahhhhh noooo, de..detengaseeee ayyyy noooooo…
Don Pedro de un fuerte embiste se la clavo casi completa haciendo gritar a la nena siendo escuchado por los expectantes chamacos que se morían de ganas de poder ver lo que pasaba, la nena recibía los embistes del vejete haciéndola pararse en puntas de pies, sus tetas seguían siendo amasadas y pellizcadas por las arrugadas y habilidosas manos de don Pedro quien a su vez le mordía la nuca y el cuello tratando de calentar mas a una disforzada y reclamante nena… -- te gusta putita, otra vez tus nalgas son mías y mi verga es toda tuya jejeje… las sucias palabras del vejete no hacían más que indignar la mente de la nena pero su cuerpo era dominado y se calentaba cada vez mas.
Sentir aquella barra de carne dentro de ella estaba volviendo loca a su cuerpo y mente, esas arrugadas manos que con lascivia se apoderaban de sus chichotas la calentaban enormemente, ni comparadas a las suaves manos de su pobre Rodrigo quien ya hace mucho no le hacía sentir lo que sentía cuando la forzaban y dominaban. Se preguntaba con impotencia porque era así, porque solo su cuerpo era excitado por rufianes asquerosos y aprovechados, es que nunca podrá vivir plenamente feliz con un chico apuesto y noble como Rodrigo.
Los minutos pasaban y no solo su cuerpo gozaba del placer que le daban si no también su mente comenzaba a entregarse a los sucios deseos de su caliente y exuberante cuerpo, el vejete ya no la tenía aplastada contra la pared pero seguía con sus suaves embistes sintiendo como su verga era apretada por las paredes rectales de Cielo Riveros quien ya se rendía ante los deseos del vejete apoyando su cabeza en uno de los hombros de su verdugo, por dentro aun pensaba que no tenía sentido seguir luchando ante aquella situación, esta sería la última noche que vería al viejo, por fin su vida no tendría las angustias del chantaje que el vejete le imponía, tan solo ahora lucharía por no caer en manos del maldito de Don Lucas y tratar de ser feliz con su querido Rodrigo.
Sus manos instintivamente se dirigieron hacia atrás tomando de los grasosos cabellos al vejete en suaves y sensuales caricias, Don Pedro sonreía pues se sentía triunfante por volver a enloquecer de placer a la tierna colegiala, y sus manos dejaron de tocarle ambas chichotas siendo la nena quien en un movimiento rápido le tomo las manos volviendo a ponerlas allí con fuerza… -- jejeje ya ves muñeca, eres una putita calentona, te dije que al final terminarías entregándote como la putita deseosa de verga que eres… pues ahora esta vergota será toda tuya durante toda la noche, vas a amanecer llena de leche jejeje te iras de aquí preñada jejeje… la nena apoyo nuevamente sus manos contra la pared ya un poco alejada quedando en forma de L, el vejete se maravillaba por la vista de esas nalgotas con marcas de sus palmas chocando contra su pelvis, como esa gruesa herramienta que tanto le enorgullecía entraba y salía por aquel conducto que muchos deseaban pero pocos y osados podían tener.
Los gemidos de la nena eran cada vez más fuertes y llenos de excitación y resonaban por toda la casa… -- ves como te gusta mi verga, ya verás que de todas maneras seguirás deseando que siempre te coja jejeje…Cielo Riveros seguía recibiendo gustosa pero a su vez contrariada por las palabras burlonas del vejete quien en ese momento se la saco poniendo a la nena frente a el contra la pared, la nena sentía esa dura verga contra su vientre, tenía ganas de tocarla, de sentirla pero le daba vergüenza dar ese paso y demostrar al vejete que ya estaba entregada a la lujuria.
Don Pedro se apodero de sus carnosos labios en un desesperado beso sintiendo la nena como esa viscosa lengua buscaba enredarse con la suya que aun se encontraba tímida y no fue hasta que sintió como las rugosas manos la comenzaban a acariciar por los lados de sus sensibles costillas haciéndole sentir deliciosos escalofríos, el vejete sentía como esas redondas chichotas se aplastaban como gelatinas en su peludo pecho y como la respiración se le comenzaba a acelerar a la nena… -- Quieres que te la meta por la panocha, quieres de verdad sentir una verga en la panocha y no esa cosita que te metió tu noviecito jejeje…..
Cielo Riveros estaba demasiado caliente pero sin el valor de responderle al viejo quien seguía con sus caricias y lamidas de cuello frotándole su grueso mástil en el bajo vientre de la nena, eran segundos de confusión para Cielo Riveros pues a pesar de sentirse excitada aun le daba cierta pena y molestia de entregarse por completo al vejete y fue en ese momento de recibir tantas lascivas caricias, besos, lamidas y mordiscos que como una autómata su delicada mano bajo y se apodero de la ansiosa verga de don Pedro… -- AYYY así mi putita, tómala, es todita tuya…. Le dijo el vejete feliz de que la nena diera ese paso que le dio a entender que ya estaba dócil y entregada, que ya la había domado.
Sentir esa caliente, delicada y suave mano le endureció la verga en toda su magnitud, el corazón se le aceleraba al viejo ansioso porque esos carnosos labios probaran de su miembro de una vez, sin dejar de besar los alrededores de su cuello y orejas le comenzó a hablar con su cálido y desagradable aliento… -- vamos mi reina, mi putita, mi mujer, chúpame la verga que está ansiosa por sentir tus labios…. La nena estaba con los ojos cerrados y la respiración agitada oyendo como muy lejana lo que le pedía el viejo.
Don Pedro la tomo de los hombros bajándola lentamente a la altura de su inhiesta y dura virilidad que aun era sostenida por la delicada mano, cuando ella abrió sus ojos se encontró con la dura cabeza de ese tremendo miembro a la cual sin darse cuenta sostenía… -- vamos chiquita, está esperando ansiosa que la pruebes jejeje… Cielo Riveros lo miro de frente a los ojos, la de ella era una mirada hermosa, sus ojos verdes brillaban como estrellas pero demostrando sentirse humillada ante el y tragando saliva pues a pesar que la excitación la dominaba sentía vergüenza de chupar de aquella verga que se le hacía apetitosa.
-- Vamos mi reina, será la última vez que la tengas ante ti… no la desaproveches jejeje… le decía burlón pero a su vez con ansias de que aquella hermosa jovencita de carnosos y rosados labios mamara de una vez de su gruesa virilidad.... en ese momento a mucha distancia el maestro Tulio y el cojo Juan tomaban cerveza en un bar aun lamentándose de que la sensual y encamable colegiala se les había escapado de las manos, ya había pasado mucho tiempo y pensando ellos que la nena tenía como prueba el video se extrañaban que no haya reaccionado o incluso los hubiese denunciado.
-- Oiga maestro no cree usted de que alguien la haya ayudado a escapar… decía el cojo Juan limpiándose la cerveza de los labios… -- Pero quien pinche cojo!!! Quien puede haber sido…. Le reclamaba Tulio molesto, algo mareado y jalándole de la sucia camisa al cojo, hasta ese día no se habían puesto a pensar en todas las posibilidades salvo el cojo quien ya tenía una suposición dado a su trabajo de limpieza siempre seguía cauteloso los pasos de la nena… -- Sabe maestro, últimamente he visto a Cielo Riveros andar con la chamaca problemática esa mmmm Verónica Linares…
El maestro Tulio se sorprendió puesto que esa chiquilla por su comportamiento no era de la clase de amigas con que Cielo Riveros hacia amistad, siendo ambas de polos totalmente opuestos,… -- Tú crees Juan que ella tenga algo que ver…. Decía algo esperanzado el maestro Tulio viendo que una nueva puerta se le abría en su posibilidad de encamarse con la colegiala de sus sueños… -- pues no se maestro, pero voy a averiguar, buscare en su casillero y en su mochila, pero eso si maestro, con una condición…
El maestro Tulio levanto las cejas algo contrariado preguntando cual es la condición… -- Bueno maestro, si la palomita vuelve a caer yo también quiero follarmela…. El maestro Tulio lo tomo de la mano y le dijo con una cara de tremenda perversión… -- Pinche Cojo, si esa chamaca cae de nuevo… tu y yo la reventamos juntos jejeje… los dos sujetos comenzaron a pedir más cerveza festejando por su nuevo plan, todo sea por tener entre sus sucias manos a la hermosa colegiala.
Maldita sea!!! Decía un impotente don Emilio en su pequeña biblioteca fumándose un cigarro y golpeando el escritorio, la sola idea de imaginarse a Cielo Riveros revolcándose con algún muchacho lo llenaba de celos, envidia y de cólera, pues a su vez lo peor de todo para el es que su hija no tuvo la intención de acusarle con su esposa, de seguro le hubiese chantajeado para obtener todos sus caprichos como exactamente lo hacía, pero no hubiese perdido el amor o la ilusión que ya se había ganado de la nena; sirviéndose un tequila se puso a pensar que hacer para poder volver a engatusar a la nena, estaba muy decidido en hacerlo cueste lo que le cueste.
Habían pasado más de 10 minutos y el hijo de don Pedro y sus amigos no podían creer lo que sus ojos veían por las grietas de la vieja puerta, en aquella cama el vejete se encontraba tendido con la cabeza apoyada sobre el descanso del camastro y en aquella cama la nena estaba de costado en cuatro patas con su cabeza subiendo y bajando de aquel mástil de carne y venas que se le hacía tan maravillosa y deseable. La imagen era brutal para aquellos chicos, no podían creer como una belleza de chamaca como Cielo Riveros se encontrara brindando placer a un viejo horroroso como don Pedro, sus miembros naturalmente comenzaron a erectarse por la situación morbosa del cual eran ocultos testigos.
La nena sentía como el vejete estiraba una de sus manos hacia sus nalgas comenzando a acariciarlas y a tomarlas con fiereza, como demostrándole que aquellas dos hermosas y redondas posaderas le pertenecían, sin dejar de mamar aquella dura verga le miro a los ojos al desagradable vejete propinándole unas sonoras nalgadas que no hicieron más que excitar mucho más a la nena, por su confundida mente ella se preguntaba porque le gustaba esas sensaciones, aquel trato que la hacía sentirse tan dominada, tan puta, tan sumisa a los deseos de un macho, el corazón le latía a mil por hora al sentirse así de dominada y entregada deseando desde el fondo de sus entrañas que esta noche la follen como nunca nadie lo había hecho.
Los viejos dedos comenzaron a meterse en sus intimas cavidades, ella sentía como un dedo entraba en su húmedo ano y los otros abrían los labios de su caliente vagina mordiendo con cierta delicadeza presa de la excitación el miembro del vejete quien sentía con doloroso placer el descontrol de la nena… -- Calma putita jeje cométela suavemente jeje… don Pedro comenzó a mover sus dedos aumentando el calor y los temblores en el cuerpo de Cielo Riveros , la tomo de los cabellos para que los chicos pudieran ver con claridad como aquella hermosa adolescente le hacia una deliciosa mamada.
Nuevamente para ellos la imagen era impactante, la nena se veía hermosa, la silueta de la chamaca en cuatro patas era espectacular, el redondo trasero levantado y meneándolo al compas de los dedeos del vejete y como le colgaban como campanas aquellas dos formidables e imponentes chichotas, a pesar de la dificultad de su visión podían ver claramente como esos sensuales y carnosos labios subían y bajaban al compas de los movimientos del vejete, la envidia y desesperación de querer estar en lugar del viejo les correia por dentro.
Mientras que Cielo Riveros seguía con su incesante mamada viendo a los ojos a veces con extrañeza y excitación como es que no podía hacer nada para detenerse en su afán de satisfacer a su verdugo, se daba cuenta que sin querer se había vuelto casi una experta mamadora, a su mente llegaba el recuerdo de aquella vez que con el maestro Tulio realizo su primera felación y sin alejarse de ese recuerdo estaba la presencia del cojo Juan la segunda verga que probo y la cual le robo la virginidad de su ano, a pesar que ese recuerdo le traía placer, sentía un rencor profundo contra ellos y a pesar que don Pedro era de la misma calaña no entendía como todo su odio y rencor por lo que le había hecho pasar todo ese día casi había desaparecido.
En ese momento lo único que deseaba era disfrutar del sexo pero no se atrevía poner de su parte, lo que quería era que el vejete la tomara, que hiciera con ella lo que le diese la gana, estar a la morbosa voluntad y caprichos de ese horrible vejete, al cual bajo una condición había aceptado esa noche como su marido y como su macho, aun si fuese por un chantaje ya casi no le importaba, la pena se le iría acabado el trato puesto que ya nunca mas vería a don Pedro y aquel recuerdo lo borraría paulatinamente de su mente, puesto que no era la primera vez que algo así le pasaba.
El morboso vejete sentía sensaciones nunca antes vividas, nunca una mujer le había hecho sentir tanto placer como el que le hacía sentir la hermosa adolescente, todos sus sentidos disfrutaban al máximo de la nena, su vista disfrutaba de la despampanante visión de aquel cuerpo perfecto, sus odios podían oír los excitantes gemidos que hacia la nena al chupar y sentir como aquellos rudos dedos la penetraban, su olfato sentía la deliciosa fragancia que la panocha de la nena destilaba, sin lugar a dudas se sentía el hombre más afortunado del planeta y en parte lo era.
Don Pedro acelero el movimiento de sus dedos llegando a meterlos casi por completos en sus húmedas intimidades, los gemidos de la nena era excitantes melodías para el vejete y los empalmados muchachos… -- ahhh ahhh humm humm… eran los sonidos guturales que hacia la nena con la verga en la boca cerrando los ojos con una desbordante excitación, su cuerpo ya no aguantaba más y le pedía acción luchando con su mente para que ella misma lo pidiera, tan solo dejo de mamar abriendo sus ojos en dirección del pervertido rostro del vejete.
El vejete al ver esa hermosa mirada pudo leer lo que su cuerpo le transmitía… -- Muy bien mi putita… es hora de empezar con lo bueno jeje… ahora gozaras mucho más que en la Feria… el vejete se arrodillo en la cama estirando a la nena boca abajo sobre la cama, Cielo Riveros estaba que ardía de excitación y a pesar que aun era consciente de lo que pasaba, trataba de borrar la poca muestra de dignidad y pudor que le quedaba, por primera vez tenia esos deseos de entregarse sin tapujos, sentir los movimientos que hacia el viejo tras de ella junto al rechinar de las tuercas de aquella vieja cama de madera la llenaban de excitante ansia y emoción.
La nena adopto la posición de perrito esperando con deseo que el vejete nuevamente le introdujera en su estrecho ano aquella gruesa barra de carne que tanto placer le hizo sentir en la Feria, sentía escalofríos de placer con tan solo recordar aquellos momentos vividos cuando derrepente escucho la aguardentosa voz del vejete… --Así no putita…. Ponte así… el vejete tomándola de la cintura la volteo boca arriba sin problema alguno, tomándola de los pies le abrió las piernas agachándose para mamar una a una y vorazmente las chichotas de Cielo Riveros que no hacía más que gemir y retorcerse de placer… -- NO!! Putita, tu culo es delicioso pero ya lo he probado jejeje… esta vez le toca a tu linda y jugosa panocha jeje… ahora si sabrás lo que es tener una verdadera verga de macho…
Cielo Riveros antes de que se le aclarara la mente pudo sentir como la dura cabeza de ese miembro era atrapada por sus labios vaginales tratando de adaptarse a esa dimensión que aun no había entrado por allí… -- -nooo!!! no por favor… no me lo haga por ahí… decía con voz jadeante pero a la vez asustada que no hacía más que excitar al vejete sonriéndole morbosamente… -- por favor por ahí no, se lo ruego… seguían las sensuales suplicas de la nena, el vejete pensaba por dentro lo inocente que era esta chamaca en lo que al sexo se refería, sin lugar a dudas era un diamante en bruto a la cual había que pulir.
-- jeje ósea que ofreces el culo en vez de tu panocha jejeje, pues te diré una cosa, recuerdas a las putas esas de la avenida, pues ellas por el culo cobran casi el doble de lo normal y tu lo ofreces como si nada jejeje, ahora te lo voy a meter por esta panocha que ya muchas veces se me ha escapado jejeje… A la nena le sorprendió lo dicho por el vejete, todo este tiempo le habían dado por el culo como si nada y hasta esas vulgares prostitutas cobraban el doble, se sintió sucia, como una cualquiera, tenía la cabeza de lado pensando en lo ignorante que había sido, por haber guardado silencio sin contarle a nadie lo que le hacían, si al menos le hubiese contado a Claudia, ella con su experiencia le hubiese aconsejado algo.
-- AAAYYy aahahh noooo…. Fue un grito de dolor cuando sintió como el vejete le comenzó a introducir poco a poco su duro miembro dentro de su intimidad, apenas habían entrado unos 8 centímetros y la nena sentía que se le ensanchaba todo por dentro, como su más preciado ser era nuevamente invadido sin su consentimiento, poco podía hacer para detener el avance del vejete puesto que la tenia bien tomada de los pies introduciendo con ligera velocidad y fuerza todo el resto de su miembro… -- ayyyy noooo, me dueleeee, sa-saquela por fa-favooorr pareee yaaaa… don Pedro gozaba con el rostro de dolor que ponía la nena pero sintiendo compasión comenzó a metérselo más lentamente hasta que las paredes internas de la intimidad de la chamaca se adecuaran a su tamaño.
-- tranquila mi reina, aun vamos por la mitad… hoy día es nuestra última noche putita y de mi nunca te olvidaras jejeje… -- ahhhh noooo ayyyyy de-despacio aaaahhh… fueron los quejidos de dolor que dio la chamaca al sentir como el vejete le introdujo un poco más de lo que faltaba, de sus bellos ojos comenzaron a brotar lagrimas de dolor tanto físico como mental, sus manos se dirigieron hacia la fofa cintura del vejete tratando de detener en vano el avance de ese miembro que la invadía y mancillaba con dolor, de sus lindos ojos brotaban algunas lagrimas no solo de dolor sino también de tristeza por su novio quien hasta ahora era el único quien no se había beneficiado con su cuerpo aun con la autoridad que le daban el ser su pareja.
Don Pedro veía con orgulloso placer como le faltaba unos 4 centímetros de los 20 que media su miembro, sentía con placer como era apretada por aquellas paredes vaginales como tratando de fusionarse entre sí, la nena no pudiendo evitar más la entrada de aquella bestia de carne y venas poso sus manos en los fofos pechos del vejete sujetándose de los abundantes bellos, a pesar que eso le significaba cierto dolor, a Don Pedro poco le importaba, cualquier dolor era poco comparado con el placer que era estarse cogiendo a tan hermosa colegiala… -- YAAA!!! Ya putita, ya la tienes toda adentro…. Que rico me la aprietas ahhhh…
Para Cielo Riveros era cierto eso, sentía claramente como su vagina presionaba la verga del vejete tratando de amoldarse a su tamaño pero sin dejar de sentir dolor, un profundo dolor que se mezclaba con la imagen aterradora que era ver a aquel vejete encima suyo, sentía ganas de gritar, de arañarlo y golpearlo pero por su mente solo pasaba tratar de asimilar el ardor que sentía en su panocha… -- ayyy me la-lastimaaa… de..dejeme por favorrrr… suplico la nena al sentir como el vejete se movía lentamente… don Pedro estaba prácticamente encima de ella, los redondos y hermosos pechos de la nena eran aplastados por el velludo pecho del vejete quien se acomodaba mas entre sus piernas haciendo que la nena abriera mas sus piernas alrededor de la fofa cintura.
Al vejete le encantaba escuchar cada gemido de dolor que hacia la colegiala, eran muestra de que su tan deseada chiquilla le había guardado parte de su virginidad y acercándose a uno de sus oídos comenzó a susurrarle con su caliente aliento… -- tranquila mi putita, ya pasara el dolor y veras como vas a gozar conmigo jejeje no estás con tu tonto noviecito, estas con un verdadero hombre, tu hombre, tu macho y hoy sabrás lo que es ser una verdadera hembra jejeje… te vas a enamorar de mi y no vas a querer irte jejeje te lo aseguro… la nena no quería creer lo que le decía, ella jamás sentiría nada por un desalmado como el, nunca pasaría eso pues era consciente de que el se aprovechaba de ella.
Pero nuevamente el vejete regreso al ataque y comenzó a besarle la oreja con lamidas y delicadas succiones bajando hasta su cuello para nuevamente subir al ataque de su sensible oreja, la nena comenzó a sentir que la piel se le erizaba y en su vientre la sensación de nerviosismo que da paso a la excitación, todo eso le daba vergüenza, como era posible que se excitara tan rápido, el vejete nuevamente se puso de rodillas sin sacarle el miembro y sujetándola de los pies le abrió las piernas, la imagen de tener toda la longitud de su miembro dentro de la intimidad de la nena lo excitaba, al fin sentía que aquella jovencita era suya completamente, lentamente comenzó a retirarle la verga hasta dejarle un poco más que la punta de esta dentro de ella, una parte de los labios vaginales era arrastrada para afuera.
-- Ahora si mi putita linda… llego la hora de lo bueno… don Pedro nuevamente comenzó a introducirle el miembro en un suave vaivén la nena se sujeto de las sucias sabanas aguantando el dolor y ardor que sentía con la fricción de aquel intruso que la llenaba por dentro… -- ahhh nooo me lastima… de-detengase… me ardee noooo… al vejete poco le importaba lo que la nena le pedía, era consciente que mientras pasaría el tiempo su panocha se acostumbraría y nuevamente despertaría a la nena lujuriosa y hambrienta de sexo que Cielo Riveros escondía dentro de ella.
Los embistes cada vez aumentaban en velocidad y fuerza y a la nena la sensación de ardiente incomodidad iba desapareciendo de a poco, podía sentir claramente como su intimidad comenzaba a emanar de sus húmedos fluidos, como su delicioso elixir comenzaba a empapar aquel mástil de carne que se movía dentro de ella facilitando mucho mas su ingreso y salida y haciéndolo más placentero, Don Pedro pudo notar como el rostro de la colegiala comenzaba a cambiar, el semblante de malestar y sufrimiento comenzaba a cambiar por un rostro hermoso de inocente placer… — AHHH!!! Putita, ya te está gustando jejeje… te dije que ibas a gozar como nunca… le dijo el vejete viendo como la nena se mordía los carnosos labios comenzando a respirar agitadamente.
Pero a Cielo Riveros le dolía aun reconocer que en verdad lo que le había dicho el vejete estaba siendo cierto, el dolor y ardor ya habían desaparecido y su cuerpo comenzaba a disfrutar de los vaivenes que le daban, quería quejarse y negar lo que el vejete le decía, pero el renaciente placer la dejaba casi sin voz, el vejete le soltó las piernas quedando estas alrededor de su cintura y aumento la fuerza de sus embistes, en el cuarto se oía el chapoteo que hacia la fricción de ambos sexos… -- ahhhh pa-pareee… no.si-sigaaa ahhhh ahhh… pedía la nena demostrando con sus gemidos que aquello ya le estaba dando placer y que por vergüenza pedía que la dejara… -- Nada de eso mi putita, ahora si sabes lo que es un macho y te está gustando jejeje… o dime… Así te hizo sentir tu noviecito cuanto te desvirgo jejeje no lo creo jejeje…
La nena pensaba en su novio con tristeza, pagando una culpa del cual no era responsable, se sentía mal por eso, en su mente solo se llenaba de rencor contra el único culpable, aquel viejo maldito y detestable que fue quien la desvirgo, sus hermosos ojos llenos de placer miraban hacia el techo maldiciendo a don Lucas pero a su vez disfrutando de lo que le hacia el vejete… -- en que piensas putita, acaso en tu novio, te arrepientes de haberlo hecho primero con el jejeje ahora que ya descubriste lo que es un verdadero hombre en la cama… le dijo don Pedro deteniendo sus embistes, para luego comenzar con el mismo ritmo con el que le estaba dando.
-- Ayyy ahhhh ahhh hummmm ahhhh…… fueron los repentinos gemidos que sintió la nena al nuevo comienzo de los embistes, sus piernas rodearon la gorda cintura del vejete como tratando de aferrarse más a el, ya no podía aguantar más, su cuerpo quería explotar y gozar sin contemplaciones, sin cargos de conciencia o culpa… las manos del vejete fueron a tomar cada una de sus redondas chichotas que se balanceaban de lado a lado tras los fuertes embistes, sus miradas se encontraron, las de el eran de asqueroso y pervertido morbo, las de ella eran de confusión, pero de una placentera confusión, se ponía a pensar en cómo este viejo que abusaba de ella le podía causar tanto placer, que cosa había hecho en la Feria para ponerla tan caliente o de esa manera.
Lo comparaba con el malvado Lucas, y hubiese preferido que esta sea su primera vez y no con don Lucas, se preguntaran porque, y es que en su mente ella pensaba que don Lucas no le dio a escoger, solo entro con un arma y a la fuerza tomo lo que quiso, en cambio don Pedro siempre le dio una opción, el cumplir con lo que le pedía o vivir humillada pero al menos intacta, tal vez le parecía estúpido o sufría eso que había escuchado del síndrome de Estocolmo… pero en ese momento ya todo se le borro de la mente.
Los embates del vejete ya la habían dominado y mordiéndose los labios llevo sus manos hacia las rudas manos que apretaban sus pechos, el vejete esbozo una sonrisa de triunfo al ver que la nena ya se estaba entregando y ahora si disfrutaría a placer de la colegiala sin tener que forzarla, sería una noche muy larga de sexo desmesurado pues el sabia de su aguante… -- AHH mi putita que rico me aprietas la verga AHHH… ya quiero llenarte de leche, hoy día te irás llena de leche AHHH… decía el vejete a una excitada nena que sentía próximo un delicioso y devastador orgasmo… -- ahhhh siiiii… siiiii ahhhhh ahhh papiiiiii ahhhh…
El vejete sin dejar de embestirla sentía como la nena temblaba presa de un inmenso orgasmo salpicando fluidos en la mata de pelos que tenía en la verga, pero el no estaba ni siquiera cerca de una próxima eyaculación, a pesar de sus años tenía un aguante envidiable y seguía con sus recios embistes, haciendo que la nena no dejara de sentir placer a pesar del reciente orgasmo, el vejete ya cansado de aquella posición le retiro la verga jalándola de los brazos dejándola arrodillada frente a el, nuevamente sus miradas se encontraron y las dos eran de irremediable excitación.
En la puerta los muchachos veían estupefactos y excitados la suerte de aquel viejo al poder poseer a tan deliciosa y hermosa jovencita… Raymundo veía con ojos envidiosos la suerte de su padre, pero impotencia a su vez de siquiera algún día poder conocer o mejor dicho que una jovencita como Cielo Riveros le hiciera caso, tenía ganas de sacarse la verga y masturbarse pero le daba vergüenza hacerlo en frente de sus amigotes, por dentro pensó que ya era hora de botarlos, muy lejanamente pensaba que tal vez estando solo su padre compartiría con el a la sabrosa colegiala aunque solo lo veía como algo utópico pero al menos quería masturbarse sin aquellos mirones, así que procedió a regañadientes de sus amigos a botarlos de su casa.
En la cama unos minutos antes el vejete y la nena estaban arrodillados frente a frente, el la tomaba con una mano de esas carnosas y duras nalgas dejando marcas de sus dedos y con la otra la tomaba del cabello dominantemente… -- ya vez como te dije que ibas a gozar… ya has tenido un orgasmo y ni siquiera hemos empezado del todo… te dije que hoy serias mi mujer y yo tu marido jejeje tu macho… así que me tienes que cumplir como mi hembra que eres… el vejete se apodero de sus labios en un morboso beso metiéndole su viscosa lengua tan dentro de ella quien completamente excitada al oírle llamarla su mujer y su hembra correspondía entrelazando su lengua con la de el, sintiendo la tupida barba del vegete raspar placenteramente su delicado y hermoso rostro.
Para el vejete era delicioso saborear de la frescura de esos labios y del cálido y agradable aliento de la nena quien a su vez le repugnaba pero no sabía porque excitaba aquel aliento de alcohol y cigarro que este emanaba, el vejete le comenzó a dar de nalgadas sin dejar de besarla lo que hacía que la nena se sintiera mas dominada y sumisa ante el, le encantaba sentirse así, le hacía sentir placer y morbo sentirse propiedad de aquel repugnante y desalmado vejete, sus delicadas manos que hasta ese momento estaban inmóviles sujetando la cintura del vejete fueron a tomar aquel miembro que en su vientre se deslizaba manchándola con su propios fluidos, con aquella herramienta entre sus manos y sin dejar de besar al vejete tenía muchas ganas de sentirla dentro de ella y también de saborearla de nuevo, hasta ese momento recordó que nunca en las veces que estuvo con el vejete pudo ver eyacular aquella verga que en ese momento tanto deseaba.
El vejete sentía orgullo de que la nena nuevamente por instinto le tomara la verga con incontrolable excitación y dejándola de besar nuevamente tomándola del cabello le dijo en un susurro… -- Quieres verga zorrita… quieres que te coja…. Anda pídemelo y te hare gozar como tanto deseas… la nena miraba excitada al vejete y con un afirmativo movimiento de cabeza acepto lo que el vejete le decía… -- Quiero escucharte… dímelo perrita, quieres que te coja… ANDA DILO!!!... la nena ya no podía aguantar más, se sentía vacía sin esa verga dentro de ella y su cuerpo le pedía más placer… -- ahhh siii, don Pedro, co-cojame por favor ahhh… el vejete le dio un ruidoso beso en los labios lleno de orgulloso morbo… -- muy bien perrita, en cuatro patas como la perrita que eres… RAPIDO!!!!, le ordeno dándole una sonora nalgada que hizo que la nena se prendiera mucho mas.
El vejete pudo ver como la nena se ponía en cuatro patas en dirección a la puerta de la habitación, aquella imagen era hermosa y del enorme y vertiginoso placer el vejete hasta casi vomita, la vista de aquellas redondas nalgas era maravillosa, adornada por ese peculiar lunar; podía ver como ambas intimidades tenían un brilloso rastro de fluidos… -- Que delicia eres chamaca…ahora vamos de nuevo con lo bueno… la nena cerro sus ojos al sentir nuevamente como el vejete colocaba la punta de su miembro en la entrada de su jugosa panocha jugando con ella, tratando de que ella misma lo pida, tan solo le dejaba la punta dentro de ella esperando que la nena le sorprenda con alguna reacción, los segundos pasaban y Cielo Riveros ya ansiaba ser penetrada.
Giro su cabeza hacia atrás topándose con la mirada burlona del vejete, quien con una sugestiva mueca le dio a entender que le dejaba todo el trabajo a ella, la nena estaba caliente pero aun apenada por la situación sentía la cabeza de ese miembro dentro de ella pero quería sentirla por completo y en un ligero movimiento se le salió de la panocha… -- Anda putita… búscala tu misma y rápido que ya me urge estar allí adentro… la nena seguía en posición de perrita sin saber que hacer…. PLAFFFFFF… fue el sonido de una fuerte nalgada que hizo temblar por completo su cuerpo.
-- Que esperas… apúrate que ya quiero follarte… Cielo Riveros estiro una mano por debajo de ella tomando el mástil de carne y venas que ya le urgía sentir dentro de ella, nuevamente ya tenía la punta de esta dentro de su panocha, pero esta vez no quería esperar, esta vez fue ella misma quien en un suave retroceso comenzó a introducirse toda la verga… -- ahhhh ahhhh siiiiii uuuuhhh hummm… el vejete sintió como sus bolas chocaban con las nalgas de la nena pero no se movía, más bien fue la nena que comenzó con el ir y venir de la penetración, jamás pensó que podría sentir tanto placer en la vida y mucho menos en manos de este horrible viejo.
Seguía y seguía ella misma buscando su propio placer con delicados vaivenes y gimiendo como una tierna gatita, don Pedro seguía sin moverse disfrutando de los movimientos y sumisión de su nena, en ese momento Raymundo nuevamente estaba en la puerta, esta vez estaba solo y con el pantalón abajo masturbándose suavemente viendo como su padre se cogía a la tan hermosa chiquilla, en ese momento el vejete pudo notar que detrás de la puerta alguien los espiaba, para eso tomo de las caderas a la nena y comenzó el mismo con unos fuertes y rápidos embistes.
-- ahhhhh ayyyy ahhhhh des-despacio ahhh… el vejete le seguía dando fuerte quería que su hijo escuchara como hacia gozar a una jovencita, demostrar que aunque la vejez le haya llegado aún estaba en condiciones de satisfacer a un monumento de mujer como la nena… -- Querías vergaa AHHH ahora disfruta putita… te gusta ehhh… Cielo Riveros gemía cada vez más fuerte y llena de placer, sus chichotas que colgaban majestuosas se balanceaban para todos lados y el maravilloso sonido de sus nalgas chocando contra la piel del vejete la estaba volviendo loca, sus manos se sujetaron de las sabanas hasta rasgarlas… -- ayyy siiii siiii ahhh diooosss ayyy siiiii hummm…
En el cuarto se oía estruendosamente el sonido de los gemidos de ambos amantes sumado al rechinar de las tuercas de la vieja cama, en las casas continuas también pueden oírlas escandalizándose pero sin poder hacer nada… -- Sigue gritando muñeca… te dije que esta noche gozarías como una condenada y lo que yo prometo lo cumplo jejeje… decía el vejete cogiéndola y acariciando ese par de nalgas con rosadas marcas de sus palmadas... – ahhh ahhhh donn pe..pedrooo ahhhh sii..siigaaa ahhh no pareeee ahhhh…
Las embestidas seguían muy fuertes y la nena estaba desquiciada y descontrolada, ningún recuerdo existía para ella, lo único que quería era disfrutar y que la follen sin piedad, al vejete le gustaba la visión del cuerpo de la nena, como sus nalgas daban paso a una estrecha cintura y como su fina espalda hacia juego con esta, en realidad Cielo Riveros era una Diosa y esa Diosa en ese momento era suya, todos esos pensamientos lo excitaban a muerte, estirando su mano tomo de los sedosos cabellos a la colegiala jalando su cabeza hacia atrás como si fuese una yegua… -- Te gusta putita… te gusta que te coja… -- siiii ahhh siiii… me gustaaa ahhh… -- quien es tu macho… ehhh dime quien te está cogiendo…
A pesar de lo humillante del momento a la nena le excitaba aquel juego de morbosas palabras que el vejete le decía… -- ahhh us...usted… usted es mi ma-machoo ahh ahhh…al vejete le encantaba oír esa dulce voz llena de excitación aceptar que ella era su hembra y prosiguió con sus preguntas… -- Así me gusta cachorrita… dime esas chichotas, estas nalgotas y esta jugosa panocha de quien es… la nena se mordía los labios a punto de tener otro orgasmo… -- ahhh son su-suyas ahhh ahhh… PLAFFF recibió otra nalgada… – DE QUIEN!!!... – ahhh de mi macho ahhh son suyas don Pedro ahhhh ahhh…
El vejete decidió cambiar de postura y se acostó boca arriba con su grueso miembro apuntando al techo… -- Quieres mas verga… le decía burlonamente sacudiéndose el miembro, la nena gateando se acerco hasta el vejete y como una hambrienta comenzó a lamer ese miembro que tanto deseaba, el vejete gozaba con los lametones que la colegiala le daba y cuando vio como se tragaba gran parte de esta casi se corre al instante… -- Espera zorra mamona… no quiero correrme aun… se ve que te gusta chupar verga jejeje tu noviecito debe de gozar con tus mamadas…
En ese instante la nena no sabía ni a quien se referían, lo único que quería era seguir gozando y que ese viejo la follara como solo él lo hacía… el vejete la atrajo más hacia el sentándola sobre su miembro, la nena se mordía los labios al sentir como nuevamente ese monstruo de carne y nervios entraba en ella… -- ahora si putita… me vas a cabalgar hasta que me saques toda la leche… RAPIDO!!! La nena comenzó a subir y bajar lentamente pues en esta posición sentía un ligero ardor e incomodidad, el vejete estiro sus manos y comenzó a masajearle las excitadas chichotas mientras ella miraba el techo con los ojos entrecerrados disfrutando de los tocamientos y de la penetración.
Bastaron unos 5 minutos y la nena ya aceleraba cada vez más sus movimientos, el sonido de sus nalgas chocando con el vejete se hicieron cada vez más fuertes, sentir esas manos asperas apretando lo que podían de sus senos la enloquecían; don Pedro comenzó a sentir que a ese ritmo no tardaría mucho para correrse, pensaba que esta nena a pesar de su inocencia cuando despertaba su lado lujurioso era una come hombres… -- AHHH SIIII RICURA… AHHH SIGUEEE AHHHH AHHH… la nena tampoco era ajena a los gemidos y ya estaba a punto de tener un nuevo orgasmo y desde su posición su panocha vertía sobre la base de la verga cantidades de sus fluidos… -- ahhh ahhh diooss ahh siiii siiii, ahhh don pe-pedro meee gustaaa ahhh ahhh… nuevamente sus miradas se encontraron y acercándose se comenzaron a besar apasionadamente llegando la nena a un devastador orgasmo con sus tetas sobre el sudoroso y peludo pecho del vejete.
-- AHHHh AHHH ME CORROOOO AHHH AHHHH… fueron los gritos de placer del vejete quien eyaculaba enormes cantidades de semen dentro de la nena llenándola hasta el útero, los dos se quedaron en esa posición respirando muy agitados, la nena podía sentir dentro suyo el semen caliente del vejete pero poco le importaba las consecuencias que eso le pudiera causar, en ese momento solo existía el placer y su cuerpo aun no se sentía satisfecha del todo, quería mas y para suerte de ella la verga del vejete seguía tan dura como desde el principio… -- AHH mi putita… que rico fue llenarte de leche jejeje pero no te preocupes aun tengo más para darte…
El vejete la tomo de las nalgas y con movimientos de sube y baja comenzó nuevamente a follarse a una excitada colegiala quien empezó con sus leves gemidos mordiéndole los hombros llena de excitación, no quería que esa palomita se enfriara y no basto con unos minutos y fue sola la nena quien hacia los movimientos disfrutando del miembro del vejete, sus manos se agarraban bien fuerte de la hedionda almohada mientras sentía esa rasposa lengua recorrer desde su cuello hasta las redondeces de sus dos enormes chichotas; se mordía los labios completamente encantada por lo que don Pedro le estaba haciendo sentir… -- Ves que te dije muñeca… ibas a gozar jeje como gozas ahora jejeje…
La nena oía entre sus sensaciones de placer las inquisidoras palabras del vejete aceptando con cierta culpa que todo lo que le había dicho era verdad… -- Dime ricura… te arrepientes de que tus amigos te salvaran en la Feria… mira lo que te has perdido jejeje… la nena recordaba sintiendo como el miembro del vejete seguía entrando y saliendo de su panocha aquella noche en la Feria, si no se hubiesen aparecido Tulio y el cojo tal vez esa noche su primera vez hubiese sido con don Pedro y no de la manera violenta en que don Lucas se lo arrebato… -- Vamos putita… contesta: te arrepientes!!!
-- ahhh siiii.. siii….De sus dulces labios se oyó como un susurro la aceptación de la nena, al vejete aquella aceptación de arrepentimiento lo excitaba mas, le hacía sentir se mas dueño de la chamaca pero a su vez maldecía con sed de venganza a aquellos tipos que aquella noche le arrebataron a la colegiala… -- dime muñequita… quienes eran esos pendejos que te rescataron… dime sus nombres y te daré una cogida que no la olvidaras nunca… dímelo… La nena con la excitación al tope y con las ansias de querer seguir disfrutando y embriagándose de ese placer que hasta ahora con creces el vejete le había hecho sentir le respondió con la sensualidad que solo en ese momento de su boca salía.
-- el ma-maestro Tulio… co..conserje Juann ahh ahhh… a don Pedro se le quedo esos nombres en la mente y serian difíciles de borrar, dándose cuenta como la nena a cada instante aceleraba el ir y venir de la penetración; estaba a punto de acelerar el mismo la penetración cuando la puerta se abre de improviso cayendo Raymundo con el miembro en la mano y los pantalones abajo, a don Pedro la sola imagen de su hijo le parecía patética pero en ese momento su lastima hacia él le encendió un sentimiento de compasión y de morbo y con un movimiento de cabeza le animo a acercarse…
Raymundo no podía creer lo que acontecía, su padre le llamaba como invitándolo a compartir de esa deliciosa jovencita, su corazón latía a mil por horas de emoción y excitación de poder siquiera tocar aquella piel tan suave y brillosa que por el sudor la hacía ver más sensual, quitándose los pantalones para poder caminar sin dificultad se acerco a los pies de la cama viendo como el miembro de su padre entraba y salía de la húmeda panocha de Cielo Riveros .
La nena presa del placer que la tenía como hipnotizada en ese momento no se daba cuenta de la situación, estaba a merced de un nuevo capricho que tenía en mente el vejete, solo fue cuando sintió como la mano de Raymundo comenzó a acariciar sus portentosas nalgas, ella pudo notar que una mano del vejete le acariciaba el cabello y la otra la tenia sujetándola de la cadera, de quien es esa otra mano se preguntaba, girando su cabeza pudo ver como aquel feo muchacho acariciaba sus nalgas con una cara de estúpida y enfermiza excitación.
-- Ehh no!! no me toques… don Pedro dígale que no m… la nena fue interrumpida por una mano del vejete que le cerro los labios… -- tranquila muñeca… ya verás que te va a gustar cuando sientas dos vergas dentro de ti jejeje… a la nena aquella idea no le gusto para nada, la sola idea de que Raymundo la tocara le daba asco y cuando sintió como este subía detrás de ella trato de levantarse siendo sujetada por el vejete haciendo inútil cualquier intento de escaparse…
-- noooo déjeme… no quierooo… por favorrrr no lo hagannnn… se quejaba la nena mirando con ojos suplicantes al vejete quien solo sonreía descaradamente… Raymundo ya estaba colocado detrás de ella abriendo con sus manos las nalgas contemplando aquel agujero que ya con ansias quería penetrar… -- Vamos inútil… que esperas, o quieres que te enseñe como se hace… le increpo el vejete a su hijo quien con torpeza colocaba la punta de su miembro en la entrada del ano.
La nena lloriqueaba ante lo que le iban a hacer………………
ompleto.
Raymundo con la pija como el acero empezó a puntear la entrada de la nena
Aquí la posible continuación de esta historia que tiene atrapado a mas de uno me incluyo, de las aventuras de esta apetecible colegiala. Tomándome el atrevimiento de personificar a Cielo Riveros en la piel de la mismísima Lupe Fuentes la dulce actriz Colombiana, que con su belleza y simpatía refleja lo que podría ser la hermosa Cielo Riveros .
Recordamos los últimos momentos de Cielo Riveros en el relato anterior para refrescar la memoria de todos los lectores…
El vejete la tomo de la mano entrando ambos a su casa, dándose con la no grata sorpresa de que Raymundo su bobalicón hijo se encontraba con tres amigos jugando videojuegos y tomándose unas cervezas, los chicos se quedaron con la boca abierta y babeando al ver el tremendo mujeron que venía con don Pedro… -- A ver tira de idiotas, se me van que quiero intimidad con mi mujer… decía el vejete llevando de la mano a su habitación a una completamente sonrojada Cielo Riveros quien notaba las miradas lascivas que le daban a su expuesto cuerpo… el vejete antes de cerrar la puerta les dio un guiño a los muchachos, quienes no podrían creer que aquel sucio viejo se iba a comer semejante hembra.
La tomo de la mano jalándola con violencia en dirección del cuarto, los muchachos que se encontraban al otro lado podían distinguir a través de las grietas de la precaria puerta lo que pasaba… -- se la va a coger …no manches tu jefe si que es bravo… se decían entre ellos con las vergas ya paradas, el vejete se quito los pantalones y toda la ropa quedando completamente desnudo, estiro sus manos agarrándola de la cintura y apretándose con ella, la nena pudo sentir en su bajo vientre como la verga comenzaba a cobrar vida y se ponía dura buscando su cuevita, hacia esfuerzos para separarse de el empujándolo con sus manos en el peludo y mojado pecho… -- huy así me gustas putita,, hazte la difícil, ya verás cómo te voy a calentar y tú misma me vas a rogar que te coja jejeje…
El vejete dio media vuelta sin quitar sus dedos de la panocha apretándose contra ella, la nena al ser de una altura considerable no le hacía difícil la tarea a Don Pedro de deleitarse con su cuerpo y como un hambriento comenzó a engullirse uno a uno los pezones de las húmedas chichotas… -- HUMM que ricas chichotas… vas a ver como hoy hare que produzcan leche dentro de poco jejeje… la nena seguía luchando para poder contenerse y no claudicar ante el placer, sus delicadas manos trataban inútilmente de empujar al vejete haciendo que solo este las sintiera como suaves y húmedas caricias… -- por favor… ya basta… pedía le nena inútilmente puesto que sentía angustia de volver a entregarse al vejete. Y fue en ese momento de recibir tantas lascivas caricias, besos, lamidas y mordiscos que como una autómata su delicada mano bajo y se apodero de la ansiosa verga de don Pedro… -- AYYY así mi putita, tómala, es todita tuya…. Le dijo el vejete feliz de que la nena diera ese paso que le dio a entender que ya estaba dócil y entregada, que ya la había domado.
Sentir esa caliente, delicada y suave mano le endureció la verga en toda su magnitud, el corazón se le aceleraba al viejo ansioso porque esos carnosos labios probaran de su miembro de una vez, sin dejar de besar los alrededores de su cuello y orejas le comenzó a hablar con su cálido y desagradable aliento… -- vamos mi reina, mi putita, mi mujer, chúpame la verga que está ansiosa por sentir tus labios….
Don Pedro la tomo de los hombros bajándola lentamente a la altura de su inhiesta y dura virilidad que aun era sostenida por la delicada mano, cuando ella abrió sus ojos se encontró con la dura cabeza de ese tremendo miembro a la cual sin darse cuenta sostenía… -- vamos chiquita, está esperando ansiosa que la pruebes jejeje… Cielo Riveros lo miro de frente a los ojos, la de ella era una mirada hermosa, sus ojos verdes brillaban como estrellas pero demostrando sentirse humillada ante el y tragando saliva pues a pesar que la excitación la dominaba sentía vergüenza de chupar de aquella verga que se le hacía apetitosa.
Habían pasado más de 10 minutos y el hijo de don Pedro y sus amigos no podían creer lo que sus ojos veían por las grietas de la vieja puerta, en aquella cama el vejete se encontraba tendido con la cabeza apoyada sobre el descanso del camastro y en aquella cama la nena estaba de costado en cuatro patas con su cabeza subiendo y bajando de aquel mástil de carne y venas que se le hacía tan maravillosa y deseable. La imagen era brutal para aquellos chicos, no podían creer como una belleza de chamaca como Cielo Riveros se encontrara brindando placer a un viejo horroroso como don Pedro.
para ellos la imagen era impactante, la nena se veía hermosa, la silueta de la chamaca en cuatro patas era espectacular, el redondo trasero levantado y meneándolo al compas de los dedeos del vejete y como le colgaban como campanas aquellas dos formidables e imponentes chichotas, a pesar de la dificultad de su visión podían ver claramente como esos sensuales y carnosos labios subían y bajaban al compas de los movimientos del vejete, la envidia y desesperación de querer estar en lugar del viejo les correia por dentro.
Don Pedro acelero el movimiento de sus dedos llegando a meterlos casi por completos en sus húmedas intimidades, los gemidos de la nena era excitantes melodías para el vejete y los empalmados muchachos… -- ahhh ahhh humm humm… eran los sonidos guturales que hacia la nena con la verga en la boca cerrando los ojos con una desbordante excitación, su cuerpo ya no aguantaba más y le pedía acción luchando con su mente para que ella misma lo pidiera, tan solo dejo de mamar abriendo sus ojos en dirección del pervertido rostro del vejete.
El vejete al ver esa hermosa mirada pudo leer lo que su cuerpo le transmitía… -- Muy bien mi putita… es hora de empezar con lo bueno jeje…Te gusta putita… te gusta que te coja con mis dedos… -- siiii ahhh siiii… me gustaaa ahhh… -- quien es tu macho… ehhh dime quien te está cogiendo… pesar de lo humillante del momento a la nena le excitaba aquel juego de morbosas palabras que el vejete le decía… -- ahhh us...usted… usted es mi ma-machoo ahh ahhh…al vejete le encantaba oír esa dulce voz llena de excitación aceptar que ella era su hembra y prosiguió con sus preguntas… -- Así me gusta cachorrita… dime esas chichotas, estas nalgotas y esta jugosa panocha de quien es… la nena se mordía los labios a punto de tener un orgasmo… -- ahhh son su-suyas ahhh ahhh… PLAFFF recibió otra nalgada… – DE QUIEN!!!... – ahhh de mi macho ahhh son suyas don Pedro ahhhh ahhh…
El vejete decidió cambiar de postura y se acostó boca arriba con su grueso miembro apuntando al techo… -- Quieres mas verga… le decía burlonamente sacudiéndose el miembro, la nena gateando se acerco hasta el vejete y como una hambrienta deslizo su lengua por sus carnosos y hermosos labios demostrando su putez al máximo extremo, el vejete la atrajo más hacia el sentándola sobre su miembro, la nena se mordía los labios al sentir como ese monstruo de carne y nervios entraba en ella… -- ahora si putita… me vas a cabalgar hasta que me saques toda la leche… RAPIDO!!! La nena comenzó a subir y bajar lentamente pues en esta posición sentía un ligero ardor e incomodidad, el vejete estiro sus manos y comenzó a masajearle las excitadas chichotas mientras ella miraba el techo con los ojos entrecerrados disfrutando de los tocamientos y de la penetración.
Bastaron unos 5 minutos y la nena ya aceleraba cada vez más sus movimientos, el sonido de sus nalgas chocando con el vejete se hicieron cada vez más fuertes, sentir esas manos asperas apretando lo que podían de sus senos la enloquecían; don Pedro comenzó a sentir que a ese ritmo no tardaría mucho para correrse, pensaba que esta nena a pesar de su inocencia cuando despertaba su lado lujurioso era una come hombres… -- AHHH SIIII RICURA… AHHH SIGUEEE AHHHH AHHH… la nena tampoco era ajena a los gemidos y ya estaba a punto de tener un nuevo orgasmo y desde su posición su panocha vertía sobre la base de la verga cantidades de sus fluidos… -- ahhh ahhh diooss ahh siiii siiii, ahhh don pe-pedro meee gustaaa ahhh ahhh… nuevamente sus miradas se encontraron y acercándose se comenzaron a besar apasionadamente llegando la nena a un devastador orgasmo con sus tetas sobre el sudoroso y peludo pecho del vejete.
-- Dime ricura… te arrepientes de que tus amigos te salvaran en la Feria… mira lo que te has perdido jejeje… la nena recordaba sintiendo como el miembro del vejete seguía entrando y saliendo de su panocha aquella noche en la Feria, si no se hubiesen aparecido Tulio y el cojo tal vez esa noche su primera vez hubiese sido con don Pedro y no de la manera violenta en que don Lucas se lo arrebato… -- Vamos putita… contesta: te arrepientes!!! -- ahhh siiii.. siii….De sus dulces labios se oyó como un susurro la aceptación de la nena, al vejete aquella aceptación de arrepentimiento lo excitaba mas, le hacía sentir se mas dueño de la chamaca.
Dándose cuenta como la nena a cada instante aceleraba el ir y venir de la penetración; estaba a punto de acelerar el mismo la penetración cuando la puerta se abre de improviso cayendo Raymundo con el miembro en la mano y los pantalones abajo, a don Pedro la sola imagen de su hijo le parecía patética pero en ese momento su lastima hacia él le encendió un sentimiento de compasión y de morbo y con un movimiento de cabeza le animo a acercarse…
Raymundo no podía creer lo que acontecía, su padre le llamaba como invitándolo a compartir de esa deliciosa jovencita, su corazón latía a mil por horas de emoción y excitación de poder siquiera tocar aquella piel tan suave y brillosa que por el sudor la hacía ver más sensual, quitándose los pantalones para poder caminar sin dificultad se acerco a los pies de la cama viendo como el miembro de su padre entraba y salía de la húmeda panocha de Cielo Riveros .
La nena presa del placer que la tenía como hipnotizada en ese momento no se daba cuenta de la situación, estaba a merced de un nuevo capricho que tenía en mente el vejete, solo fue cuando sintió como la mano de Raymundo comenzó a acariciar sus portentosas nalgas, ella pudo notar que una mano del vejete le acariciaba el cabello y la otra la tenia sujetándola de la cadera, de quien es esa otra mano se preguntaba, girando su cabeza pudo ver como aquel feo muchacho acariciaba sus nalgas con una cara de estúpida y enfermiza excitación.
-- Ehh no!! no me toques… don Pedro dígale que no m… la nena fue interrumpida por una mano del vejete que le cerro los labios… -- tranquila muñeca… ya verás que te va a gustar cuando sientas dos vergas dentro de ti jejeje… a la nena aquella idea no le gusto para nada, la sola idea de que Raymundo la tocara le daba asco y cuando sintió como este subía detrás de ella trato de levantarse siendo sujetada por el vejete haciendo inútil cualquier intento de escaparse…
-- noooo déjeme… no quierooo… por favorrrr no lo hagannnn… se quejaba la nena mirando con ojos suplicantes al vejete quien solo sonreía descaradamente… Raymundo ya estaba colocado detrás de ella abriendo con sus manos las nalgas contemplando aquel agujero que ya con ansias quería penetrar… -- Vamos inútil… que esperas, o quieres que te enseñe como se hace… le increpo el vejete a su hijo quien con torpeza colocaba la punta de su miembro en la entrada del ano.
CONTINUACION…..
Raymundo con la pija como el acero empezó a puntear la entrada de la nena que con movimientos esquivos evitaba a toda costa la penetración, no estaba preparada para recibir una doble penetración, al advertir don Pedro de que la situación incomodaba a Cielo Riveros increpo a su hijo para que el climax por el creado no sea apagado por el inexperto de Raymundo… Vamos inútil que primero te chupe la verga vas a ver lo bien que lo hace y como le gusta a la puta meterse pingos gigantes y le caben entero en la boca jajaja vamos acércate para que sus hermosos labios aprueben lo que se va a comer…jajajaa vas a ver como vas a disfrutar nena de tenerla nuevamente entera en tu culo pendeja, vas a gozar como una Puta. Entonces con movimientos torpes el chamaco se ubico sobre la cabecera de la cama y apuntando su aparato sobre la hermosa cara de la nena tímidamente le pidió… podrias chuparla? Please.
El vejete la tomo de las nalgas y con movimientos de sube y baja comenzó nuevamente a follarse a una excitada colegiala quien empezó con sus leves gemidos mordiéndole los hombros llena de excitación, no quería que esa palomita se enfriara y no basto con unos minutos y fue sola la nena quien hacia los movimientos disfrutando del miembro del vejete, sus manos se agarraban bien fuerte de la hedionda almohada mientras sentía esa rasposa lengua recorrer desde su cuello hasta las redondeces de sus dos enormes chichotas; se mordía los labios completamente encantada por lo que don Pedro le estaba haciendo sentir… -- Ves que te dije muñeca… ibas a gozar jeje como gozas ahora jejeje…Y por si fuera poco doble racion jejeje vamos muñeca ocúpate de la otra verga que viene de regalo.
Cielo Riveros al abrir los ojos se encontró con una tranca tan grande y gruesa como la de su ahora amante el viejo Pedro, sin dudas alguna su hijo heredo las bondades del viejo y sintió la necesidad de probar tan hermoso ejemplar, con una de sus manos sujeto el poderoso miembro tan duro y tieso con venas que se parecían a las de Pedro, mientras tanto Raymundo con sus manos recorría la suave y desnuda espalda de la nena. Cada caricia del joven empezaba en la espalda y la terminaba en el fabuloso trasero de la hermosa y juvenil adolescente, no dudaba el caliente pendejo en apretar ese par de nalgas duras y llenas de carne, sus manos ansiosas y sudorosas recorrían el escultural cuerpo que no paraba de tragar a través de su concha la poderosa verga de su Padre.
El hijo del vejete comenzó a besar esos carnosos, apetecibles, maravillosos labios de la espectacular adolescente , de la boca de la sensual colegiala solo se oían apagados quejidos al sentir que la pija del viejo entraban en lo mas profundo de su ser - y sin mediar palabras abrió sus labios a su máximo esplendor para poder engullir nuevamente el poderoso mástil que el chico le ofrecia. , así que la tocó con la punta de la lengua, y sintió un gusto salado, enseguida comenzó a lamer alrededor de la roja cabeza - chupa fuerte que no te ciento inquiría el chico e instintivamente la excitada Cielo Riveros comenzó a mamársela se lo metía en la boca, y empezó a chupar con avidez, -nena, nenita, así... si.. ahhh, sigue ahhhh
eso, ahora recorre la cabeza con tu lengua decía el Raymundo ante las sensaciones que le hacia sentir la sabrosa boca de la nena- pendeja... que boca, que sabroso mamas.
Cielo Riveros seguía con su labor se la chupaba ardientemente saboreando esa magnifica verga casi hasta atragantarse, su boca sentía en su interior esa tremenda dilatación del rígido miembro, mientras el hacia esfuerzos para contenerse y empleaba en ello todo su autodominio para prolongar el placer que esa deliciosa boca y labios le proporcionaban de pronto Cielo Riveros comenzó a sentir que aquel tremendo miembro tenía algunos espasmos en su boca y el joven dijo - ah me corro, te la voy a dar, tomo firmemente a Cielo Riveros de la cabeza y disparo la primera de varias cargas de semen llenándole la boca a la chica con el lechoso liquido la chica seguía con su labor mamándole y ordeñándole la verga y sin dudar siguió tragando, el pendejo largaba unos sonidos de placer entre dientes -haa... haa.. haa... siii así cachorrita, toma toda la lechita de tu nuevo macho. Siiiiii me encanta la hembra que me trajo mi Padre siiiiii.
-Mmm… Delicioso… -murmura la nena sacándose el tremendo vergón de la boca y masturbándolo con su manita mientras un chorro le llego al cuello y otro directamente en sus mejillas embadurnandole toda la cara con el viscoso liquido, restregándosela la pija por todo el hermoso rostro mientras no paraban de salir gotitas de semen, luego vuelve a mostrar su perfil en inocente sonrisa, para volver a metérsela en la boca tras darle un lametón desde los gordos cojones hasta la punta del glande, que hace que el chamaco se estremezca de pies a cabeza.
Vamos no te sientas campeón vociferaba Pedro, eres un estúpido acabaste tan rápido me haces quedar mal maldito imbécil. No pareces mi hijo dejaste con ganas a la chamaca no ves que desea con todas sus ganas que le den pija por el culo?.Verdad pendeja querias una pija en tu culo?
Siiii don Pedro usted me prometio me la iban a dar en mi culito, esto último lo dijo metiendo uno de sus finos dedos por su tan perfecto trasero.
Ya escuchaste a la putita quiere acción por detrás asi que no estorbes y reúnete con los pajeros de tus amigos para que aprendan como se hace gozar realmente a una hembra. Los amigos de Raymundo veian desde la puerta sin poder dar crédito a sus ojos tanta lujuria incluso dos de ellos desparramaron por el piso todo el esperma mientras se masturbaban y miraban embelesados como su sádico viejo disfrutaba sin necesidad de forzarla a tan escultural adolescente.
La nena aun montada sobre el vejete con un agil movimiento de cadera dejo libre y bamboleante la verga que tanto placer le provocaba, miro con ojos agradecidos a don Pedro y anunciaba que la noche de sexo todavía no había acabado. El veterano la tomo por la cintura y con su verga sobaba el canal que separaba las dos tremendas nalgas, -- Quieres que te penetre putita, quieres que te perfore y que te llene de leche jejeje… la nena caliente por esas palabras se aprobaba con la cabeza pero sintiendo excitación por esa verga que era atrapada por sus gluteos… El vejete miraba de manera soberbia a los afortunados expectadores que tenia en la puerta de su habitación.
Vamos perra que mi garcha quiere entrar y vos elegís donde queres tenerla, eres mi mujer y voy a darte el derecho de elegir donde queres que te la entierre, la nena tomo con una de sus manitas el gigante aparato totalmente duro y lubricado por los fluidos naturales que ella misma descargo durante sus orgasmos, y alzando su cadera ubico la cabeza del mástil justo en la entrada de su complaciente ano.
El viejo sentía que se venia ahí mismo y trato de moverse lo menos posible para no descargarse… Vamos pequeña siéntate que mi pija esta ansiosa de entrar en tu culo. La nena empezo con ligeros movimientos de cadera a tratar de meter la punta del monstruoso miembro del viejo que al estar tan lubricada no tubo dificultad de que la cabezota ingresara y abriéndose paso comenzaba a meter centímetro a centímetro toda la longitud del gigantesco miembro…apenas habían entrado unos 8 centímetros y la nena sentía que se le ensanchaba todo por dentro, como su más preciado ser era nuevamente invadido y le encantaba, le faltaba unos 4 centímetros de los 24 que media su miembro, sentía con placer como era apretada por aquellas paredes rectales como tratando de fusionarse entre sí, la nena no pudiendo evitar más la entrada de aquella bestia de carne y venas poso sus manos en los fofos pechos del vejete sujetándose de los abundantes bellos, a Don Pedro poco le importaba, cualquier dolor era poco comparado con el placer que era estarse cogiendo a tan hermosa colegiala… -
…Asiiiii mamita asiiiii métetela toda asiiii la pija de tu macho toda dentro. Como me gusta culiarte con el uniforme puesto y con la cara de puta que pones, si que te gustan las vergas verdad? Las vergas grandes gruesas y viejas con experiencia como la mia he mmmm.-
YAAA!!! Ya putita, ya la tienes toda adentro…. Que rico me la aprietas ahhhh… el vejete la tenia bien tomada de los pies introduciendo con ligera velocidad y fuerza todo el resto de su miembro… -- ayyyy Don Pedro entro completa siiii la siento toda dentro … don Pedro gozaba con el rostro de placer que ponía la nena pero seguía inmóvil para no llegar tan pronto al extasis y lograr que las paredes internas de la intimidad de la chamaca se adecuaran a su tamaño.
Raymundo y sus amigos no podían creer como tan terrible verga entraba por completa en tan hermoso culo, solamente los huevos del vejete quedaron fuera, no perdían detalle de la situación y no se animaban a intentar participar porque conocían lo bravo que era el viejo Pedro, a pesar que sentían envidia del tipo se sentían afortunados de ser los privilegiados espectadores del salvaje espectáculo.
-- AY putita, a pesar de habértela dado muchas veces por el culo sigues siendo muy apretadita, Uhh que rico me la aprietas ahhh… La nena oía jadeosa las sucias palabras del viejo y con suaves movimientos la nena llevaba el ritmo de la culeada… -- huyyy siiii ahhhh ayyy paaapiiii ahhh… el vejete inmóvil de espalda dejaba hacer el trabajo todo a Cielo Riveros , ella comenzó a levantar sus portentosas nalgas para poder sentir más de aquella dura penetración, don Pedro pudo sentir que su miembro casi se sale por completo pero la nena como una experta cogedora volvia a sentarse y la barra de carne desaparecia nuevamente centímetro a centímetro en la hermosa cueva, el viejo estiro sus manos sujetando los dos riquísimos pechos que colgaban majestuosamente.
-- Eres una puta, gozas como una condenada, desde ahora te volverás nuestra puta de mi y de mi hijo… le decía el malvado viejo apretándole los pezones y sujetándole los pechos apretándolos y exprimiendolos, al placer de la penetración que sentía Cielo Riveros se le sumo al de las arrugadas manos apretándole salvajemente sus turgentes pechos haciendo que perdiera mucho mas el control.
Cuando Cielo Riveros levantaba sus caderas se le salía casi por completa pero el miembro nuevamente era recibido sin problemas por su dilatado ano, aquel conducto ya había probado varios de todo tamaño y grosor , pero aun así siempre recibía gustosa a cualquier invasor que quería visitarla – Ahhh que rico putita eres toda una perrita te encanta la verga se nota mucho y tu haciéndote la santita, tremenda puta…
--Ahhi ahiii siii siii ahhiii ahhh…… --TE GUSTA PUTA, TE GUSTA SENTIR MI VERGA……entonces la nena sin darse cuenta empezó a aumentar el ritmo de sus caderas, subia y bajaba cada vez mas rápido y prácticamente era ella la quien culiaba al asqueroso vejete.
--Ahii siii, mee gustaa doon Pedroo, mee guustaa ahhh …… --QUIERES QUE TE LA SAQUE……
--¡¡¡NO!!! ¡¡¡ NO!!! sigaaa maas maass ahhh ahhh…… --DIME PUTITA, DIME QUIEN TE FOLLA, QUIEN TE CULEA…… -- hummm ahhii ussteedd ahh ahh
--plass plasss ¡¡¡ QUIEN!!! DILO PUTITA DIME QUIEN SOY…… el vejete le grito dándole fuertes palmadas pidiéndole ser mas especifica.
--ahhh ussteed, mii maachooo, ahíii ahiii…… --DIME QUE MAS SOY PUTITA, DILOOO……
--Ahhiii mii machoo, mi mariidoo ahhh, mii duuueeñooo ahiii ahhii……
--ASI ME GUSTA PUTITA, AHORA TE MERECES UNA BUENA CULEADA
Don Pedro comenzó un vaivén salvaje produciendo un escandaloso ruido de sus pieles al tocarse, las nalgas de la nena vibraban tras cada contacto de las furiosas estocadas del vejete, la nena no paraba de gritar presa de un endemoniado placer. La pija entraba y salía a gran velocidad por el hermoso culo de la joven.
--Te gusta lo que te hago putita, te gusta lo que tu marido te hace……
La nena muerta de placer ya aceptaba su condición de hembra en celo, de hembra necesitada de macho y ya no pudiendo resistirse mas acerco sus carnosos labios a la boca del vejete que se encontraba de espaldas y sudando como un caballo.
--Ahí don Pedro, me gustaaa; todo lo que me hace me encanta……
El viejo y Cielo Riveros se fusionaron en un apasionado beso, entrelazando sus lenguas con un instinto casi animal. La nena sentía esa verga dura hurgando en lo mas profundo de su culo y a su vez las manos del viejo abrían y separaban esas durísimas nalgas que se encontraban marcadas con las manos de su ahora marido.
TE GUSTA COMO TE ROMPO BIEN EL OJETE Al tiempo que decía esto las estocadas eran profundas y salvajes….
--si mi amor, me encanta como me rompes el culito … Cielo Riveros arqueo su cuerpo hacia atrás quedándose con el tremendo vergon dentro de su recto entregando su último resquicio de castidad que le quedaba.
--Claro que te gusta y te voy a llenar de leche dentro de tu culo……
--ahii paapiii siii, hazlo, haz lo que tú quieras ………
Mientras tanto Cielo Riveros no le daba tregua a don Pedro y seguía moviendo su trasero culeandose ella misma, mientras el viejo resoplaba y sonreía al tener ya la eyaculación en la punta de su cipote, ya no aguantaba mas estaba a punto de descargarse y la nena hacia círculos sobre la verga del viejo,
Don Pedro transpiraba agitado tras cada estoque que le daba al ano de la nena.. –Ufff que rico Ahh toma zorrita ahh ahh… Cielo Riveros a pesar del asco que le tenía también gemía porque no podía luchar contra su cuerpo,.. – Ayyy ayyy diooss ahh ahh… -- Vez zorrita, te gusta la verga, Ahh ahh…
-- Ayy ahuu noo ahh ahuu… -- YAAA zorra me voy a correeeer AHHHH… El viejo Pedro empujo su verga bien profundo y empezó a eyacular una gran cantidad de semen dentro del culo de la nena sintiendo como ese liquido caliente se vertía dejándola completamente mojada por dentro.
Cielo Riveros sentía impotencia porque no pudo evitar ser sodomizada por tan despreciable animal y como fue tan tonta por aceptar entrar en su casa, se sentía agotada pero satisfecha a la vez de saber que puede dar mucho placer a un macho como don Pedro, su leche tibia llenaba sus entrañas y le encantaba sentirla dentro, estuvieron asi un rato largo el viejo con una sonrisa de estar completamente satisfecho y ella recostada sobre sus hombros y sus tetas sudorosas aplastadas sobre el peludo pecho del vejete, aun la mitad del tremendo miembro estaba en su culo mientras embarraba sus bolas completamente entre los jugos y su semen, estuvieron así un rato, moviéndonos suavemente.
--Quieres convivir conmigo putita…… Le pregunto el vejete a la nena quien estaba tremendamente poseída por la lujuria y la excitación sin dejar de acariciarle los pezones y lamerle el cuello no dejando que pensara libremente y manteniéndola caliente siempre.
--Siii sii don peedrooo…… --ja ja pero después de eso, serás mi mujer y de mi hijo también te compartiremos un dia cada uno o bien los dos juntos je....... –No me importa don Pedro, ahh ahh…… --ja ja así me gusta mi putita pero ahora quiero que me la chupes y me limpies bien la verga entendido……
El vejete que se sentía un Dios al poseer a tan hermosa chamaca retiro su miembro de la cavidad y veía como la nena se agachaba y tomaba con sus delicadas manos su gruesa verga que se encontraba toda embarrada de liquidos y semen y como lentamente sus labios se acercaban hacia la enorme cabeza de su miembro para empezar a engullirla.
Veía como esos hermosos labios subían y bajaban por su venoso miembro que todavía increíblemente se encontraba tieso y como la nena con sus bellos ojos verdes lo miraba a los ojos con rostro sumiso; la nena quien aun excitada cumplía con esa labor oral veía el desagradable rostro del vejete disfrutando de la mamada, sentía asco y odio por lo que la obligaba hacer, pero a su vez la situación calentaba su cuerpo excitándola enormemente limpiaba con su lengua desde el glande recorriendo todo el mástil hasta llegar a sus huevos metiendolos en la boca y chuparlos con suavidad, con un entusiasmo desmedido como agradeciendo tanto placer a la monstruosa pija.
Cielo Riveros sentía en sus labios una variedad de sabores mezclados que por el grado de excitación no le producían asco. LISTO PENDEJA QUE ME LO ESTAS GASTANDO YA QUEDO LIMPIA Y LUSTROSA SE NOTA QUE TE ENCANTA LA PIJA PERO VAS A TENER QUE ESPERAR PARA TENERLA DE NUEVO…
Con un manotazo el viejo aparto a la bella chamaca de su lado y se bajo de el mugroso camastro, los chamacos que estaban en la puerta salieron a los empujones para dirigirse al living, la nena con su tierna y hermosa mirada contemplaba como don Pedro se calzaba el sucio overol lo que hacia suponer que su hermoso cuerpo podría ya descansar de la terrible culiada que le fue propinada esa noche.
Vamos putita vístete que por hoy ya tuviste suficiente, quiero que te vallas a tu casa no quiero que se preocupen y te busquen ya no quiero problemas con la justicia, pero mañana quiero que me busques a la salida del trabajo o prefieres que tu macho te espere a la salida de tu colegio… Noo don Pedro a mi colegio no yo ire a buscarlo. BUENO VISTETE Y VETE PARA TU CASA Y SI TE PREGUNTAN DONDE ESTUVISTE DILE QUE CON TU AMIGA.
Cielo Riveros buscaba por el suelo sus prendas y al mirarse al espejo que pendia de un ropero descubrió que su mirada era diferente, no sentía remordimientos ni culpas por haberse entregado a los deseos del pervertido vejete, después de todo no la paso tan mal entrego todos sus orificios y por todos lados sintió placer que mas podía pedir.
La nena se vistió lo mas rápido posible, se dirigió a la puerta de salida, en el living los muchachotes la miraban asombrados y fascinados de que tan hermosa chiquilla fuera tan hembra en la cama, Cielo Riveros moviendo sus curvas sutilmente los miro a los cuatro y les regalo una sonrisa, el vejete al advertir eso apoyo sus manos en el trasero de la colegiala indicando que el era el dueño y para afianzar mas su postura de macho dominante la tomo por la barbilla y le estampo un beso de lengua bien profundo demostrando asi que los chamacos no se hagan ilusiones con la bebota que ahora es de su propiedad.
Vas a venir mañana quiero que limpies un poco y cocines para mi y para mi hijo después te vamos a coger como a vos te gusta pendeja que dices….Si don Pedro como usted diga. Y pórtate bien no quiero enterarme que te andas entregando como una puta cualquiera con cualquier macho entiendes. Abrio la puerta y se marcho moviendo el culo como solo las hembras satisfechas pueden hacerlo.
Cielo Riveros mientras caminaba presurosa para su casa recordaba los momentos de lujuria que había pasado en la casa de Pedro, al atravesar la plaza un par de ancianos que se encontraban sentados en un banco se quedaron como hipnotizados viendo el cadencioso andar de ese par de las apetitosas nalgas apenas cubiertas por esa muy corta falda escolar que apenas y le tapaba lo mínimo, dejando muy poco a la imaginación. La nena podía sentir sobre sus redondas nalgas la mirada lasciva de los viejos, lo que le hizo sentir una diva una mujer deseada.
–-Qué buena que esta la puta esa me dejo tiesa la verga nada mas de verla tan cerca- dijo el anciano sobandose por sobre el pantalón la empalmada erección que tenia.
La nena seguía provocando con su andar la mirada de todos los hombres que desde sus vehículos tocaban bocina y no era para menos sus redondas nalgas sobresalían alzando aun mas la de por si corta mini falda haciendo que ese monumental trasero fuese algo irresistible a la vista. Cielo Riveros sabia lo que su figura provocaba y le gustaba calentar a los hombres, ya no sentía vergüenza de asumirlo, le encantaba sentirse deseada, y se sentía adicta a la pija de los viejos ahora nada podría detenerla su cuerpo despedia sexo y lujuria por los poros y estaba dispuesta a darse todos los gustos, se había convertido en una ninfómana.
Mañana voy a lo de don Pedro a recibir lo que merezco…
La hermosa colegiala sufria su primer desencanto amoroso.
Mientras Cielo Riveros se dirigía presurosa a su casa pudo sentir que su pequeño bikini estaba toda pegajosa por los restos de semen seco también en la cara en la espalda en las piernas y que olía a el sudor de don Pedro y su hijo y como no si el viejo la había cogido y ella lo había disfrutado también, eso la hacia sentir algo de vergüenza, pero ya no tanto asco de ella misma como las primeras veces que era violada y sometida por la fuerza, ahora ya sentía placer al ser humillada poseída por los machos deseosos de disfrutar de sus encantos.
Sentía que la blusa escolar se le pegaba en la espalda y las piernas también las sentía empegostadas y una gota de semen deslizaba por sus piernas, sin duda alguna el viejo la había llenado de leche su hermoso culo.
Cuando llego se metió directo a la ducha, estando en un estado físico deplorable , mientras se bañaba no paraba de pensar en lo que había sucedido y aun que era contra su voluntad en su interior sabia que había sentido un placer indescriptible, cuando termino el baño se hecho en su cama sentía que todo el cuerpo le dolía y presa de un cansancio abrumador se quedo completamente dormida teniendo como ultimo pensamiento la monstruosa pija de don Pedro y de su hijo.
Al volver al colegio, procuro seguir con su ritmo normal de vida, con sus amigas, comportándose de igual forma que antes, nada había cambiado solo que sentía que su cuerpo sentía distinto, ahora a sus hermosos ojos verdes le llamaba la atención las colas y los bultos que llevaban los hombres entre sus piernas, se sonrojo al advertir que alguien pudiera darse cuenta, pero no podía evitarlo, en sus pensamientos se cruzaban imágenes de sexo y lujuria, cuando cruzaba en la calle algún hombre se imaginaba que el tipo la manoseaba y la poseía por la fuerza, esos pensamientos la hacían exitarse y no podía apartarlo de su imaginación.
Sonando el timbre la regreso de sus pensamientos la chamaca se fue a su salón para tomar sus respectivas clases meneando deliciosamente el trasero ante la mirada de admiración y de deseo de todos los varones y de envidia de las chicas menos agraciadas. Dos horas mas y terminaría la jornada de colegio, y tendría que visitar a don Pedro ante la amenaza de no hacerlo el viejo la iria a recoger directamente en la puerta del colegio, vergüenza que Cielo Riveros no quería pasar, que todos se enterasen de que tenia una relación con tal despreciable ser.
Llego la hora y salio presurosa a cumplir con su promesa, sentía nervios y miedo de lo que pudiera hacerle hoy el viejo en su casa, también se sentía exitada y ansiosa, había pensado toda la noche que seria nuevamente un juguete para que el viejo sádico se entretenga a su antojo.
Pasaron unas tres cuadras cuando pudo divisar el auto de don Pedro, un modelo viejo, pasado totalmente de moda, y apoyada en la ventanilla una chica que conocía, se acerco un poco mas en forma mas disimulada para que no puedan verla, y ahora si no había dudas la que charlaba y sonreía a don Pedro era su mejor amiga Claudia recordamos que era una chica totalmente desinhibida, le gustaba darse sus buenas agasajadas con algún chico que le gustara se dejaba besar y manosear pero con un viejo nunca siempre decía que le daba asco los viejos verdes, sin embargo sus besos y su cuerpo ya era del dominio de compañeros de la escuela, amigos de sus hermanos, vecinos etc. desde hacia un año le había agarrado un gustillo por todo eso que tuviera que ver con muchachos y cuestiones sexuales.
Su faldita tableada era cortísima y al apoyarse en la ventanilla se le subia a tal punto que sus hermosas nalgas quedaban al descubierto, los autos que pasaban en el lugar tocaban bocina, algunos desde sus autos gritaban frases de alto contenido sexual hacia ella, entonces lo impensado, abrió la puerta del auto y Claudia subio en el asiento del acompañante sin que nadie la obligara a hacerlo, el viejo puso en marcha el destartalado carro y salio a gran velocidad en dirección a su casa.
15 cuadras separaban el colegio de la casa de don Pedro, apuraba sus pasos para llegar a la casa del viejo, la curiosidad y el enorme interrogante que retumbaba en su cabeza como un martilleo, que hacia Claudia tan animada y coqueta con el hombre que hasta entonces había logrado los momentos mas lujuriosos e intensos orgasmos jamas alcanzados, cuando por fin llego a destino el auto estaba estacionado en la vereda, entonces Cielo Riveros opto por colarse por un pasillo lateral al garaje donde por una ventana podía ver el interior de la vivienda, su corazón latia aceleradamente, se asomo a la ventana y sus hermosos ojos vieron algo que era difícil de creer.
Sobre un rincón y contra la pared estaba Claudia, don Pedro sosteniendoles las muñecas, besaba en forma casi desesperada el cuello de la niña, con esa tupida barba de candado que tenia y que hacia que a Claudia le hiciera muchas cosquillas en su sensible cuello, mientras que con una mano la subía y se prendía de una de las formidables tetas de la nena manoseándola quien al sentir la atrevida caricia a su pecho pego un respingo diciendo "despaciooooooooo "pero el no la escuchaba estaba abstraído por ese cuerpo de Diosa y le estrujaba las nalgas con la otra mano sintiendo ese delicioso y curvilíneo trasero.
"Solo dame un besito mamita rica" le dijo Pedro al mismo tiempo que estirando una mano le agarro una nalga a la nena quien reaccionando sorprendida por la atrevida caricia le empujo la mano y le dijo.
"No me beses entupido eres un cerdo los besos no están incluidos y déjame salir si no gritare y lo acusare que me estas violando"
Vamos nena acaso no quieres ganarte unos miles de pesos, se que te hacen falta vamos no seas mala solo un beso quiero a las buenas o a la fuerza quiero comerte la boca.
Agrarrandola de los cabellos por la parte de atrás jalándola salvajemente se apodero de esos jugosos gruesos y deliciosos labios dándole un beso asfixiante para ella,sintiendo ese delicioso aliento que emanaba de esa jugosos labios.
Ella tenía los ojos abiertos al máximo con una expresión de espanto en su cara, sentía horrorizada ese caliente aliento que emanaba de su boca de el, esa lengua que se introducía en su delicada y fina boca a la fuerza y que se movía buscando la lengua de ella para enredarse y esa barba tupida de candado de el que como lija le raspaba su boca.
"Mmmmmmmmmgggggggg" "Mmmmmmgggggggg"
Gemía y se contoneaba la nena ante el salvaje beso, la lengua y saliva del viejo invadían la boca de Claudia, ella dejo de protestar sabiendo que nada podía hacer al respecto se dejaba hacer por el viejo que cerrando los ojos disfrutaba de tan hermoso momento.
Bajando ambas manos Pedro se deleitaba estrujando apretando y masajeando las partes intimas de la nena, sus manos recorrían ansiosas esas tremendas redondeces para después agarrarla con ambas manos apoyadas en las nalgas la levantaba hacia arriba.
"Madre mía, qué concha te cargas mamacita estas mas rica de lo que pensé", y era algo muy cierto esa concha de adolescente era perfecta, la verga de don Pedro estaba tan dura que Claudia sentía como se le repegaba en su bajo vientre asustándola.
Mientras tanto Cielo Riveros veía y escuchaba todo lo que acontecía allí dentro y pensaba que su amiga sabia aprovechar el cuerpecito que dios le dio en el colegio hacia que los más chicos de 1° año, le compraran cosas con solo sonreírles un poco, inclusive había logrado que un profesor, que se babeaba por ella le subiera las notas bajas que tenia en matemática.
"Porfa profe" solo había tenido que decir, comiendo una paleta insinuantemente y jugando con sus cabellos, lanzándole una miradita de cachorra triste de las que ella bien sabia hacer para que el profe le pusiera buenas notas. Pero esto superaba ya los limites, estaba vendiendo su cuerpo al viejo Pedro, en pocas palabras se estaba prostituyendo.
Claudia rodeo con sus brazos la cabeza del viejo, Y el la besaba en la boca con una presión avasallante, le metía la lengua revolviéndola adentro, le agarraba los pechos por arriba del vestido y se los masajeaba, ella hizo un débil gesto como para impedirlo, pero sin convicción alguna.
Le saco las tetas fuera y comenzó a mamárselas, que tetas duras y grandes, con unos pezones completamente hinchados, sus jadeos aumentaron. , el pezón lo tenía grueso carnoso y durísimo, le mamaba un pezón y con la mano le masajeaba el otro pecho haciendo que la nena se humedeciera de su conchita.
"ahhhhh ahhhhhhhh señor mmmmm" gemía la nena presa de sensaciones placenteras.
Claudia lo tenía tomado con sus brazos agarrándolo de la nuca y apretándolo contra sus formidables pechos suspirando con las lengüeteadas del viejo, A continuación don Pedro sin perder el tiempo bajo una de sus manos por debajo del vestido hasta la parte superior de su muslo de la nena sintiendo un gran placer esa piel desnuda tan suave recorría con su mano ese par de nalgotas ricas estrujándolas y acariciándolas por largo rato disfrutando cada segundo del placer que le daba ese cuerpo de ensueño, bajaba las manos recorriendo el suave muslo de la pierna para a continuación de nuevo subía la mano para estrujar de nuevo esas nalgotas.
Con uno de sus dedos aparto la pequeña tanga hacia un costado y comenzó con movimientos circulares acariciar la juvenil concha de Claudia.
"ohhhhhh ohhhhhhhh señor que me hace" gemía la nena, le tocaba su caliente panochita estaba que casi hervía, por tanto manoseo del excitado viejo, Claudia hacia muecas de placer en su angelical carita torcía la boca, se mordía los labios y movía su cabeza de un lado a otro.
Las lujuriosas manos del viejo recorrían ese par de piernotas suaves acariciándolas ávidamente mientras no dejaba de mamarle los pechos impetuosamente, uno de los dedos de don Pedro se colaron dentro de la ya lubricada conchita de la nena, entraba y salía para darle paso a un segundo dedo, tenia manos gruesas asi que dos dedos que entraban y salían dilataban la conchita preparándola para lo que se venia.
"Aahhh mamacita cosita rica" le decía el caliente viejo para a continuación apoderarse del hinchado pezón con la boca y succionárselo haciendo que Claudia arqueara la cintura y gimiendo " Ahhhhhhhhhh, qué rico, mete sus dedos señor.
"Ahhh que rico mami eres toda una perrita te encanta la verga se nota mucho que andas urgida , pero yo te voy a dar una culiada que nunca olvidaras" queres que te meta mi verga? Queres sentir mi verga en tu concha eh? Contesta quieres?
Si la quiero ya démela ya mismo por favor balbuceaba la nena presa de la terrible exitacion que llevaba, con una de sus delicadas manos bajo el cierre del pantalón del vejete, pero entonces don Pedro la aparto de forma abrupta.
Tranquila putita que mi verga va a ser toda tuya pero primero me la vas a tener que chupar si, vamos. Con una de sus manos la hizo poner de rodillas y la cara de la nena quedo a la altura de su bragueta.
Ahora si sacala putita as de cuenta que es una paleta vamos que no tengo toda la tarde, Claudia introdujo su mano dentro del pantalón apartando el slip y salto hacia afuera como un cipote prisionero ansioso de libertad, la nena abrió sus ojos grandísimos, jamas había visto algo asi, las pijas que había probado eran de compañeros de escuela o amigos de su hermano pero ninguna tan descomunalmente grande como la de don Pedro…
Con los dedos índice y pulgar acaricio el pene del viejo en evidente erección, luego lo rodeo con sus dedos para llevárselo a los labios y relamérselo como si fuera una paleta, una paleta gigante, su lengua recorria la enorme cabezota que se encontraba roja y dura como una piedra. Sus manos se fueron hacia los testículos acariciándolos mientras sus labios recorrían el contorno del miembro con maestría.
Ahhhhh pendeja me habían contado historias de vos, mmmmmm ahhhh veo que tenían razón sos muy buena chupando ahhhhh sigue, sigue no te distraigas que lo estas haciendo de maravillas mmmmm.
Cuando noto que el miembro estaba por explotar de la exitacion, abrió los labios y trago con lujuria medio miembro, recorriéndolo incesantemente con su lengua hasta dejarlo brillante. Mirándolo fijamente mordisqueo el glande haciendo que se le endureciera aun mas la pija al viejo. Entonces, de un movimiento se trago completamente el miembro, que sentía palpitar en su ardiente garganta. Era una locura, allí estaba Claudia tan hermosa y juvenil de rodillas devorado el vergon de don Pedro mientras desde la ventana Cielo Riveros habia comenzado a acariciase bajo las ropas.
El ritmo de la joven aumento, su lengua envolvía el pene y como parecía masturbarlo con su garganta. La colegiala lo llevo al borde del orgasmo, en ese momento aparto la boca y comenzó a masturbarlo frenéticamente mientras lamía el glande y su lengua exploraba los pliegues del miembro.
Don Pedro con la eyaculación en la punta de su rabo levanto a la colegiala en sus brazos y la apoyo de espaldas en la mesa del comedor, tomo en sus manos el miembro que lo tenia tan duro como un mástil y se lo metio de un solo empujon en la lubricada concha de la nena.
Claudia por primera vez tenia alojado dentro suyo una pija tan descomunal como la de don Pedro, las paredes vaginales de la nena recibieron al visitante sin ningún problema, el viejo metia la verga hasta el tope para luego sacarla casi por completa, el placer que sentía se le notaba en la mueca de su arrugado rostro.
El pene entraba y salía por su concha una y otra vez, el mete y saca era rapido, sentía como sus cuerpos chocaban, plaf, plaf, plaf, estaba muy humeda la concha de Claudia, las manos del viejo la tomaba de la cadera con fuerza.
- Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, me vengo nenaaaaaaaa, siiiiiiiiiiiiii.
Aaaaaaahhhhh…. Aaaaaaahhhh-- gemía la colegiala en cada nuevo repellón que le daba la vergota del viejo, ya que sin ninguna consideración hacia movimientos salvajes con su cadera de atrás para adelante y la penetraba fuertemente, sintiendo y absorbiendo el impacto la juvenil concha de la nena.
Entonces el viejo se queda quieto metiendo su grueso miembro hasta lo mas profundo para descargar toda su leche, Claudia al sentir el espeso y tibio liquido dentro suyo sonrio en forma triunfante al lograr hacer acabar tan rápido a don Pedro.
Aaaaagggg putita no puedo con tu ritmo, estas demasiado buena, me calientas demasiado mi verga esta muy agradecida sos la mejor prostituta que cogi en mi vida, ahora vístete y vete que ya te llamare cuando quiera tus servicios nuevamente.
Sobre la comoda están los cinco mil pesos que acordamos, te los ganaste en buena ley, sos hermosa y coges de maravillas, incluso mejor que la putita de tu amiga la Cielo Riveros , si vos estas mucho mejor.
Al escuchar eso Cielo Riveros sintió que el corazón se le partia en mil pedazos, ella creía que para Pedro era alguien especial, de inmediato salio corriendo a toda prisa para su casa, las lagrimas cubrían su bello rostro, al llegar cerro la puerta con furia y se fue para su cuarto, se tiro sobre la cama boca abajo y comenzó a llorar, era este su primer desengaño amoroso, no se daba cuenta pero estaba enamorada del viejo, maldecia a don Pedro y a la que creía su mejor amiga, su llanto era producto de un engaño y no estaba dispuesta a dejarla pasar, por la mente de Cielo Riveros cruzo la idea de la venganza.
Voy a pegarle donde mas le duele al viejo, maldito voy a vengarme donde mas te duela viejo malnacido.
El excitado hombre veía como la nena se giraba en dirección a la puerta de la casa viendo la redondez de su trasero menearse dentro de la corta falda escolar y tomando valor se la jugó con la chamaca.
Cielo Riveros lloraba desconsoladamente en su cama, mojando las sabanas con sus lagrimas, mientras un sentimiento traicionaba su persona, esa tarde tenia que encontrarse con don Pedro para luego revolcarse como solo el viejo la hacía sentir, lujuria, sexo y perversión esa mezcla que la hacía sentirse una mujer completa y deseada, pero nada de eso ocurrió, con su delicada mano acaricio su humeda panocha que estaba preparada para recibir la pija del viejo.
–-ahhh ahhh doon peedroo por que me hizo eso ahh ahhh…… La nena no podía sacárselo de la cabeza, recordaba que don Pedro le dijo que nunca lo olvidaría y tenía razón y ahora deseaba volverlo a ver, que me pasa dios mío se decía ella, como puedo estar deseando a ese viejo, luego el recuerdo del engaño la zorra de la que se hacia llamar su mejor amiga Claudia tomando el lugar que a ella le pertenecía, recibiendo por la concha las embestidas desesperadas de don Pedro, la humillación pudo mas y entre sueños planeaba su venganza.
Mañana vere a Claudia en el colegio y encontrare la forma de encontrarme con su papa, ella siempre presumió de sus padres la pareja perfecta, se que el tipo me desea, lo noto cada vez que el viene a buscar a Claudia y me come con la mirada, inventare cualquier excusa para que mi amiga me lleve con el.
Una vez en el colegio Claudia se extraño del repentino cambio de su amiga y le pregunto
–- Que te pasa, porque tienes esa cara tan seria dime.
_Nada no te preocupes es solo que necesito que me prestes el libro de algebra esta tarde tengo que sacar unos apuntes.
Claro que si pero si acaso no somos amigas? Cielo Riveros la miro con desprecio, Claudia no se percato de eso e insistió, mira vamos para la oficina de mi padre el tiene que llevarme a las clases de danzas no podre acompañarte pero le pediré que te lleve y en mi cuarto en los estantes de los libros lo sacas y lo llevas es todo tuyo y disfruta estudiando nena jijijii vamos.
Si va a ser todo mio, y disfrutar seguro pensaba Cielo Riveros para sus adentros, sentía furia por su amiga si bien la conocía y sabia que le encantaba el sexo pero lo que no entendía es por que les cobraba dinero a los hombres con los que se relacionaba, si la situación económica de ella era buena, a lo mejor para aumentar su ego necesitaba que los tipos paguen por su cuerpo, o a lo mejor el dinero era solo una cortina para que los hombres no se dieran cuenta de el alto grado de putez de la colegiala que necesitaba del sexo como el aire. Eso eran interrogantes que solo Claudia sabia. Luego salieron del colegio en dirección al trabajo del papa de Claudia que quedaba a tres cuadras.
Las dos encamables colegialas empezaron a caminar a paso lento rumbo a la oficina, toda la jauría de machos se alborotaron a ver a este par de curvilíneas nenas, se perdían viendo el sexy y cadencioso andar de esas dos espectaculares hembras, en ese momento corría una racha fuerte de aire haciendo que la pobre Cielo Riveros constantemente sostuviera su minifalda con ambas manos para que no se le levantara.
Cielo Riveros al ser una chica que le fascinaba usar mini faldas, pero al mismo tiempo era pudorosa ,esto es que no por el hecho de enseñar sus preciosas piernas desnudas ya se diera por hecho que no le avergonzara enseñar su ropa interior , ella tenia una extraña forma de ver las cosas ya que en su ignorancia enseñaba piernas casi hasta las nalgas con las minis que usaba y casi en la totalidad los pechos con los escotazos que gustaba usar , era incongruente que le diera pena enseñar la ropa interior si no dejaba casi nada a la imaginación pero pues bueno así era la nena.
Cielo Riveros tenia que soportar todo los días las miradas libidinosas y de deseo que despertaba en todos los lujuriosos que se cruzaban con ella y además todas las linduras y aberraciones que le decían los machos al verla pasar, todo esto no le importaba a la nena por estar a la moda al igual que las demás nenas de su edad y que bueno que fuese así hubiera sido un desperdicio que teniendo un cuerpo tan suculento, no se vistiera de esa manera.
Pero en la mente de la nena estaba la idea de encontrarse con el papa de Claudia esa tarde, Ernesto era su nombre, de 45 años atractivo y de buen físico se cuidaba y jugaba mucho al tenis, podría decirse que era irresistible para las mujeres, de todas las edades hasta las colegialas como Cielo Riveros inclusive, cuando pasaba por el colegio a buscar a Claudia las demás chicas quedaban embobadas mirándolo, pero el siempre se mostro muy amable con nosotras y muy respetuoso y con muy buenos modales.
Mientras tanto la minifalda de Cielo Riveros la condenaba a ser privilegiada o acosada por los machos y una que otra lesbiana, recibir una atención especial en donde estuviera, especialmente hoy quería llamar la atención del papa de Claudia. Pero como hacerlo teniendo en cuenta que la mama de Claudia era una hermosa mujer tenia 35 años una altura y un cuerpo privilegiado, en sus comienzos fue modelo, ahora era dueña de una agencia de publicidad, lo que hacia que Claudia pasara un buen pasar económico y heredara la belleza de ambos, la mama de Claudia era tan linda que ningún hombre teniéndola tendría la necesidad de mirar otra mujer. Pero Cielo Riveros era diferente era una de esas nenas que transforma perturba y tensa el espacio donde se encuentra sobre todo con los hombres.
El papa de Claudia no iba a ser la excepción de tentarse con los encantos de la adolescente, se encontraba ya en la vereda de la oficina donde trabaja cuando las vio llegar, centro su mirada en Cielo Riveros no parpadeaba ni le quitaba la vista al hipnotizante vaivén de sus caderas al caminar, Los varones que venían en sentido contrario se codeaban al ver al par de hermosas nenas y no les quitaban el ojo de sus curvilíneos cuerpos que las recorrían con el mayor de los descaros, y haciendo comentarios entre si.
Cielo Riveros continuaba luchando con su minifalda debido a las ráfagas de viento que venían por momentos y que hacían que la mini se quisiera subir dejando sus bellos encantos al descubierto, allí estaba el papa de Claudia y no quería dejar una mala impresión. Mientras tanto la cara del padre reflejaba una morbosa mirada de admiración y deseo que cualquier macho pudiera sentir.
Era una colegiala de la que emanaba sexualidad y sensualidad en forma natural, el desarrollo de su cuerpo no estaba a la par de la mentalidad que tenia, a pesar de los encuentros que tuvo con los viejos como don Pedro, ….el cojo Juan, etc.etc. era todavía en cierta forma muy ingenua e inocente cualquier macho que la presionara o chantajeara un poco la nena accedería a sus pretensiones, con tal de salir del problema, si tuviera las agallas que tenia su amiga Claudia sabría defenderse al estar en estas situaciones pero desafortunadamente para ella y afortunadamente para don Ernesto eso no sucedió para seguir deleitándonos de cómo abusaban y se aprovechaban de esta beldad, aunque en esta oportunidad Cielo Riveros busca la atención del papa de Claudia para que si esta vez se aprovechen de ella, siendo esto parte de su plan de venganza hacia su mejor amiga.
Subieron al coche de alta gama que reflejaban la buena posición económica de don Ernesto cuando finalmente llegaron al instituto de danzas y Claudia se despidió de su papa con un beso, recordándole a Cielo Riveros el lugar donde estaba el libro que necesitaba, el papa de Claudia ahora si conducía en dirección a su casa, en el camino la nena iba nerviosa pensando en el plan que había ideado su cabecita, sabia que don Ernesto la miraba con ganas, y que no necesitaría mucho esfuerzo para que el se fijara en ella don Ernesto manejaba y le contaba que se encontraba solo en casa y que su esposa no tenia horarios, que el trabajo que tenia ella le consumía casi todo el tiempo y que la extrañaba mucho.
La nena podía notar la decepción y tristeza en su rostro cuando le contaba que su matrimonio había caído en un pozo, y que la rutina lo había alejado de su esposa. A Cielo Riveros le daba ganas de abrazarlo y consolarlo pero en que estoy pensando, él es papa de mi amiga y podría ser mi padre y no quería que Ernesto se diera cuenta de los impuros pensamientos que tenia la nena para con el papa de su amiga.
-- Sabes Cielo Riveros , me hubiese gustado que Claudia sea como tú… la nena le miro con una encantadora sonrisa y con sus profundos ojos verdes y su bello rostro que derretiría a cualquier hombre y a su vez cruzo inocentemente una de sus piernas dejando ver su contorneada pierna al levantarse la corta falda escolar. Fue en ese instante de maravillosa y celestial visión que don Ernesto dejo de ver a Cielo Riveros como la amiga de su hija y más bien como una sensual mujer.
-- Gracias don Ernesto por tal consideración…… el padre de Claudia volvió en sí y siguió manejando pero ya en su cabeza estaba la maravillosa imagen de la nena, no se la podía sacar de la mente incluso giraba el retrovisor para poder verla sin que se de cuenta, automáticamente se le había parado el miembro imaginándose a la chamaca desnuda, y el gozando de ese juvenil cuerpo, de esa nena que podría ser su hija y hasta hace minutos antes la consideraba como tal.
Al llegar hasta la casa don Ernesto se la jugó pues su mente ya se había corrompido con la visión que tuvo de la chamaca y sin ningún escrúpulo se había decidido a intentar seducirla pero sabía que tendría que ir paso a paso y con cautela.
-- Bueno chiquita ya estamos en casa… -- muchas gracias don Ernesto por tomarse la molestia. El papa de Claudia como todo un caballero abrió la puerta trasera del coche para que saliera Cielo Riveros , que con una sonrisa respondió ese amable gesto.
El excitado hombre veía como la nena se giraba en dirección a la puerta de la casa viendo la redondez de su trasero menearse dentro de la corta falda escolar y tomando valor se la jugó con la chamaca.
- Hey Cielo Riveros … -- eh si dígame don Ernesto… -- mm me gusto platicar contigo y de veras me siento solo en mi casa, no se tal vez podrías quedarte un poco y platicar conmigo, no lo tomes a mal pero eso hacía con Claudia y ya casi ni para en casa o si te parece acepta tomar un poco de jugo fresco que hay en la cocina … Siendo eso una mentira ya que las intenciones del tipo eran oscuras y solamente ver tremendo cuerpo le salía la lujuria por los poros, la nena algo apenada pero sonriente pensaba (mi plan esta saliendo como esperaba, un momento a solas con el papa de Claudia) y le respondió tímidamente. – ehhh si claro don Ernesto me gustaría si no es mucho pedir un jugo de naranjas
… -- Muy bien Cielo Riveros ven para la cocina allí serviré tu jugo. La nena apoyada sobre la mesada observaba como don Ernesto le temblaban las manos al llenar el vaso, aquí tienes espero te guste. Gracias señor por ser siempre tan amable para conmigo.
Al recibir el vaso Cielo Riveros sintió como las manos del tipo rozaba las de ella mas de lo debido, cerro los ojos y bebió del vaso casi hasta la mitad, gracias señor como podre pagarle tantas atenciones, el papa de Claudia ni lerdo ni perezoso tomo ambas manos de la niña y las beso cálidamente.
_Pero como no servir a una muchacha tan bella y linda como vos, para mi seria un gran honor poder complacerte en todo lo que me pidas, solo dime y yo lo hare no tengas miedo.
A pesar de la inocencia Cielo Riveros sabia que tenia a don Ernesto a su merced aposto a mas y con mirada triste y palabras tímidas sugirió… quisiera que me abrase casi nadie lo hace, abrázame como si fuera su hija necesito sentir el calor y el afecto de alguien, que no quiera hacerme daño.
Por supuesto que no mi niña nadie va a hacerte daño, ven yo voy a protegerte para que nada ni nadie te lastime… a continuación el papa de Claudia la rodeo con sus fornidos brazos sintiendo el cuerpo de la nena pegada a su cuerpo, sintiendo un calor y un deseo irrefrenable y casi sin pensarlo con una mano tomo la mejilla de Cielo Riveros y por primera vez beso los carnosos y hermosos labios de la muchacha, al principio fueron tiernos y prolongados, después su lengua invadía la boca de la colegiala que se dejaba hacer, ella respondía también con su lengua entrelazándola a las de el.
Cielo Riveros estaba a punto de desmayarse, estaba besando al hombre del cual sus compañeras de colegio siempre suspiraban cada vez que lo veían, pero era una privilegiada o una víctima? El papa de Claudia no era un santo, bajo ese manto de un hombre gentil, y educado escondía un perfil bastante morboso y lascivo, sus pensamientos rozaban a las de un depravado y tenía a una nena en sus manos para saciar sus mas bajos instintos.
La nena rodeo el cuello de Ernesto, y el aprovecho sus manos libres para posarlas sobre los hermosos glúteos de la colegiala, Cielo Riveros sin dejar de besar y en un acto de reflejo saco las manos que en forma atrevida acariciaban su perfecto trasero, pero el tipo insistía con el manoseo apretando las nalgas y haciendo que el cuerpo de la chamaca se apretara al de el, pudiendo ella sentir en su bajo vientre la ya muy dura verga del exitado hombre.
Una vez mas Cielo Riveros repelía las manos del papa de Claudia que obsecionadamente masajeaban los hermosos y duros muslos de la nena, nooo señor que me hace… entonces don Ernesto reacciono tomándole fuertemente de los brazos y en su mirada pudo Cielo Riveros descubrir que el hombre gentil y amable estaba sacado, en sus ojos solo pudo ver a un ser pervertido, como todos los hombres que le había tocado, sintió miedo no sabia como podría reaccionar el tipo, no era el que conocía se había convertido en un depravado casi violento por momentos.
-- Mira chamaca te diré como es la cosa, tu creías que yo no se lo que realmente eres, Claudia ya me conto tus aventuritas que tuviste con tipos cual de todos mas horribles y pelagatos, conmigo tendrías todos los gustos que se te venga en mente, no soy como esos vejetes miserables sin dinero, todo este tiempo espere por este momento, y no voy a desaprovechar esta oportunidad, hoy no habrá nadie que te salve…
_Por favor señor pero no me haga daño… entonces Ernesto poso su mano en los muslos de la joven y a travez de la pequeña tanga sus dedos recorrían en círculos su hermosa y deseada panocha…
_Vamos putita acaso crees que no se que eres una zorrita una bella y complaciente zorrita, en los bares pude escuchar tus andanzas, los hombres no paran de hablar de la forma casi celestial de chupar pijas, y de como te gusta que te den duro por el culo.
Acto seguido coloco a la nena de espaldas a él, y mientras admiraba el hermoso y perfecto trasero abrió la bragueta para dejar escapar un gigante y viril miembro, como de 22 centimetros tan duro como una piedra y arrimándole su gruesa verga en las duras nalgas pasándole un brazo por su delgada cintura y acariciar su delicada vulva a través de su tanguita y con la otra le sobaba sus deliciosos senos.
_Ya lo vez pendeja mira siente como me tienes exitado, por tu culpa mi pija brinca con vida propia que no da mas, esta ansiosa de penetrar tu cuerpo, te va a gustar sentirla dentro, Don Ernesto le dijo eso ultimo propinándole un asqueroso beso el cual la nena no pudo rechazar por el miedo y también porque se sentía dominada por él, sintiendo el regreso de ese calor excitante que solo le producía el manoseo del tipo sobre sus redondos senos y por sobre todo al sentir como el el papa de Claudia le acariciaba con sus astutos dedos sus aterciopelados labios vaginales sumado a la gruesa verga que sentía sobre sus duras nalgas llegando incluso hasta casi pedirle que la culeara allí mismo.
La nena claramente sentía el miembro duro de don Ernesto golpear sus nalgas mientras que las manos del tipo tomaron el top de la nena y los quito con una agilidad memorable dejando a la vista sus dos espectaculares tetas que se apoyaban sobre la fría superficie del cerámico de la cocina.
-- Don Ernesto déjeme por favor no me haga nada… -- silencio mi niña vas a ver que después te va a gustar como, se que te gusta sentir las vergas entrar en tu cola… -- no, no por favor usted no… El tipo sonreía al oír el rechazo de la nena porque eso lo motivaba más, la nena se desespero mas porque ante las arremetidas del papa de Claudia sentía como esa verga dura se metía por debajo de la falda y como la punta de esta punteaba su vulva por encima de su pequeña tanga.
Y como casi siempre le sucedia la nena sintió el primer beso que fue casi como una succión sobre su cuello erizándole la piel y escapándosele un suave gemido.
-- ahhh noo ya déjeme por favor… Don Ernesto pudo sentir claramente que esa zona era el punto débil de la nena y arremetió con mas frenesí el sensible cuello de Cielo Riveros quien a toda costa aun luchaba por evitar que el papa de Claudia la violara, en cambio para el tipo era maravillosamente delicioso poder sentir el agradable aroma de la nena quien destilaba una embriagante frescura.
Mientras que su voraz boca se saciaba con el erógeno cuello de la nena el tipo tomaba la falda enrollándola hasta la cintura quedando ante su vista las maravillosas nalgas que se comían la delgada tela de la pequeña braguita que tenia la chamaca, don Ernesto frotaba su verga entre esas nalgas apetitosas sintiendo un excitante escalofrió al palpar la suave textura de estas.
Pero para la nena era una experiencia nueva lo que estaba viviendo, muy a pesar de lo que su cuerpo sentía, su mente aceptaba caer en manos de este despreciable sujeto, entendía muy bien que los otros que abusaron de ella serian pervertidos, aprovechados o que estuvieron borrachos cuando lo hicieron, pero don Ernesto era parte de un plan que ella misma había ideado, esa tarde iban a aprovecharse de ella, pero esta vez fue Cielo Riveros quien había buscado astutamente que el tipo se aprovechara de ella.
--que buenota estas chamaca, sin duda eres una diosa, tienes un cuerpo de infarto, con tan solo verte provocas que te violen, que te cojan, seguro muchos en este barrio ya probaron tu cuerpo pero hoy solo yo tengo el privilegio je je je…
La nena quien sentía las manos de don Ernesto recorrer toda su hermosa humanidad pensaba a la vez en todos sus acosadores desde el maestro Tulio, el cojo Juan el viejo ratero llamado don Lucas, y por ultimo recordó a su principal acosador, aquel que era prácticamente dueño de su vida don Pedro.
-- Don Ernesto por lo que maass qui-quiera, déjeme por fa-favor… El tipo seguía arremetiendo contra la suavidad del cuello de Cielo Riveros viendo la nena que si seguía por ese camino su cuerpo terminaría por entregarse a esas temblorosas sensaciones; el papa de Claudia miraba excitado la sexy tanguita de la nena la cual era unida por dos aros de plástico por los lados tomando ambos aros y jugueteando con ellos.
-- Pero que linda braguita que tienes, sin duda querías que te la vieran, seguro que a todos los viejos asquerosos que se revolcaron contigo les mostraste una distinta, ya ves que eres una perrita en celo, pides verga a gritos ja ja ja… -- No, no soy eso, suélteme don Er… nestooooo…
Fue el grito desesperado de la nena al sentir como el pervertido hombre punteaba sus nalgas, de como la tremenda cabeza del pene buscaba la entrada de su ano atravez de la tanguita que apenas cubria su precioso culo, la nena podía ver como la verga de don Ernesto se asomaba entre sus piernas acariciándole la vulva, las manos del tipo sujetaban ambos melones con lascivia y su lengua recorrían su cuello y mordían suavemente su oreja.
El papa de Claudia ya fuera de sí volteo a la nena quedando ante su vista los delicioso melones que como un hambriento empezó a succionar – Hummm que ricas chichotas, déjame chuparlas hummm… Cielo Riveros ya no decía nada solo se encontraba aplastada contra los azulejos de la cocina tratando d aguantar las sensaciones que su cuerpo ya empezaban a sentir.
-- P-por favor…. de-déjeme...por favor Don Ernesto….aaaaaahhhh… la pobre Cielo Riveros tomaba de los hombros al tipo tratando de apartarlo sin éxito siendo para el papa de Claudia caricias sobre sus hombros, seguía arremetiendo con mordiscos sobre los ya erectos pezones y alternaba con lametazos que subían desde los pechos hasta el cuello y oreja.
El tipo quien no tomaba descanso para nada se deleitaba con cada parte del cuerpo de la colegiala, bajando una de sus habiles manos hacia la vagina de la nena que poco a poco comenzaba a humedecerse. – Noooo porr faaavoorr aahh paaareee ahhhhh allí nooo… -- descuida mi niña ya verás que pronto hasta gritaras porque te la meta… -- aahhh!aahhh! nooooooo aahhh...
La nena cerró los ojos mordiéndose los labios tratando de que don Ernesto no escuchara los gemidos que ya quería liberar, el tipo iba por buen camino y en sus manos sentía los incomparables fluidos de la colegiala, que ya no se resistia, solo se dejaba hacer y disfrutaba ya de la situación.
-- Ooooh ooo ooohhhh don Ernesto, -- hummm pero que rico sabes pendeja, se ve que te encanta lo que te hago, se nota que estas ansiosa de verga hummm…
La nena quien prácticamente apretaba la cabeza de don Ernesto sobre sus tetas la pobre nena su cuerpo ya se rendía ante lo que le hacía el papa de Claudia quien con uno de sus dedos penetro el ya desvirgado ano de Cielo Riveros hasta que toparon con sus nudillos.
-- Huy putita se ve que ya te han dado por el culo, me habían dicho que fueron varios los viejos que ya habían probado tu culo … La pobre nena pensaba con humillación que su secreto estaba en boca de todos, ya su historia se contaba en los bares de como unos viejos aprovechados y abusadores capaces de todo la poseyeron y para su vergüenza también pensaba en lo rico y placentero que la hacían sentir, pensaba sobretodo en ese viejo que era dueño de su vida, aquel con el que había gozado infernalmente, le regresaban los recuerdos de la Feria y de hace unos días en su habitación revolcándose con Don Pedro y su excitación crecía.
-- Ya no aguanto mamasota, me tienes re calientísimo, ya no resistas y disfruta de la culeada que te voy a dar… vamos para arriba a mi habitación, allí estaremos comodos, vamos ahora mismo antes que llegue mi mujer y arruine todo.La nena quien solo tenía los ojos entrecerrados y gimiendo de excitación solo veía mareada como era llevada de la mano hacia las escaleras que el tipo con un sonoro chirlo sobre las nalgas de la nena, la invito a subir.
--Muy bien mi putita sube que yo te sigo ……
La nena subía por las escaleras sintiendo la mirada del papa de Claudia quien se relamía al ver ese hermoso y redondo trasero contoneándose en cada peldaño de la escalera y ceñirse al delgado vestidito a medio muslo viendo también esas torneadas piernas, tenía la verga parada al ver tan maravillosa mujer que iba ser solo suya.
El tipo estiro sus manos para levantar el vestido quedando ante su vista ese par de deliciosas nalgas de concurso y la tanguita que se perdia en ese redondo trasero y le propino un ruidoso beso en la nalga a la nena.
—Así me gusta muñeca que seas obediente…… La pobre Cielo Riveros por momentos se arrepentia por lo que estaba haciendo, el papa de Claudia no se estaba comportando tan amablemente como solia hacerlo, la exitacion del hombre lo hacia que sus actitudes y palabras fueran casi violentas y eso le causaba temor no quería contradecirlo, pero no tenía el valor de dar marcha atrás, ya lo había provocado y podría enojarse mucho incluso lastimarla. Todo el trayecto hasta llegar a la habitación Cielo Riveros fue manoseada por todas partes escuchando en voz baja las vulgaridades que el papa de Claudia tenía en mente.
Una vez dentro la nena cerró la puerta y vio la amplia recamara y la cama matrimonial de los padres de Claudia. Mientras tanto el tipo veía extasiado a la nena como ese bello cuerpo de la colegiala transparentaba sobre la delgada tela del vestido, ese cuerpo que tantas fantasias había causado en el, incluso varias veces se masturbo pensando en la muchacha y ahora al fin iba a saciar sus más bajos instintos con la chica mas linda del pueblo.
El papa de Claudia se dirigió al cama quitándose la ropa quedándose solo en bóxer para luego sentarse y llamar a la chamaca pero le ordeno que lo hiciera gateando; al tipo se le armo una carpa debajo del bóxer al ver a esa hermosa adolescente venir como una gatita con ese hermoso cuerpo de diosa que tenia.
Cielo Riveros ya no sabia que pensar, seguir el juego del tipo para que su plan llegara a buen termino, o disculparse y marcharse ya que no se imaginaba al papa de Claudia fuera tan perverso como todos los hombres a los que había conocido.
El tipo observaba la mirada sumisa y de resignación de la nena ya cerca de él y no aguantando mas tomo a la nena y la sentó en sus piernas de espaldas a el, la nena sentía notablemente en sus nalgas la verga dura como un fierro mientras que las manos de este sujetaban con fuerza sus duras tetas que al sentirlas se le pusieron duros los pezones.
_Ven pequeña ven con tu papi y cuéntame como te portaste en la escuela eh?
Imagino que no estaras coqueteando y provocando a todos los machos que van a tu colegio, pues mira como te vistes, pareces una cualquiera y como te mueves cuando caminas, te encanta calentar las vergas de los que te desean, te gusta provocar a los hombres he? Plaffff una palmada en la cola recibe Cielo Riveros sorprendida.
_Ahora yo soy tu papi y vos mi nena, y me vas a obedecer siempre si no voy a castigarte y ponerte en penitencia si mi nena? Y le paso la lengua por la oreja izquierda. Cielo Riveros estaba confundida, el la trataba como si fuera su hija, con dulzura pero el tipo continuaba sobándole las tetas y besando su cuello desde atrás.
Ella trataba de que su cuerpo no gozara del manoseo pero su cuerpo no le hacía caso, la colegiala sentía como el la punteaba con fuerza y para su horror el tipo seguía besando el lóbulo de su oreja izquierda, la nena sabía que si el tipo seguía por ese camino su cuerpo vencería a su razón y se entregaría nuevamente como a todos los hombres que habían encontrado la manera de excitarla y no poner resistencia.
--Ahii mi niña hermosa que ricas tetas, que ricas nalgas, hoy vas a ser mia voy a destrozarte te deseo tanto no sabes cuanto, cuando visitabas a mi hija yo las espiaba deseaba tanto acariciar tu cuerpo, y ahora por fin lo tengo hoy si voy a cogerte como tantas veces imagine mientras me masturbaba pensando en tu cuerpo.
El tipo le decía todo esto magreando esas esponjosas tetas mientras que con la otra mano ya empezaba a acariciar ese clítoris que ya habían humedecido la pequeña tanguita; la nena tenía entrecerrados los ojos luchando por no sucumbir a las caricias y manoseos del papa de Claudia pero sabía que tarde o temprano su cuerpo terminaría por entregarse, su mente no podía luchar contra el hambre de su suculento y escultural cuerpo y sumado a que no tenía esperanzas de que alguien llegara para salvarla solo trataba de demorar su entrega.
Eran ya como 10 minutos de incesante manoseo sobre el cuerpo de la nena quien ya se mordía los labios del gusto por lo que le hacían, su respiración ya era agitada y el papa de Claudia ya tenía los dedos húmedos de los jugos que la nena había soltado de su caliente panocha.
El papa de Claudia llevo esas manos húmedas a la boca de Cielo Riveros para que pruebe el exquisito sabor de su propia vagina que ya pensaba perforar, _VAMOS PRUEBA ES TU JUGO NENA, ES LO QUE LARGAN LAS PUTITAS COMO VOS, CUANDO LE GUSTAN LO QUE LE HACEN, VES TE ENCANTA LO QUE TE HACE TU PAPI.
Pero primero quería ver acción de parte de la nena quien seguía con sus escondidos gemidos sintiendo las ásperas manos por todo su cuerpo. El tipo soltó a la nena dejándola a un lado de la cama quien resoplaba agitada por tanto tocamiento y abrió bien grande sus ojos cuando vio al papa de Caludia sacarse el bóxer y dejar a la vista un miembro de 22cm y grueso ante sus ojos.
Es tan grande….casi igual a la de don Pedro, acaso todos los hombres tienen sus cosotas tan gigantes y moustrosas… pensaba a sus adentros la muchacha.
--Muy bien mi niña, complace a tu papi y chúpame la verga que está ansiosa por tu boquita ja ja ja……
La nena se quedo impávida ante lo que el tipo le pedía sin tomar iniciativa de aquella asquerosa orden y este al ver su pasividad la tomo de los cabellos acercándola con fuerza; la nena podía sentir el ya conocido olor a pija de las tantas que había probado y nuevamente tenia un grueso mástil de venas palpitantes a escasos centímetros de sus bellos ojos.
--Vamos abre esa boquita y mama la verga de tu Papi……
La nena sintiéndose derrotada y sin escape cerró los ojos y abrió lentamente sus labios para alojar el miembro del papa de Claudia pero esta vez sin oposición alguna.
El tipo la obligo a mirarla a los ojos y ella entendió que no podría negarle ninguna petición, estaba a merced de ese pervertido hombre, nunca se imagino que fuera asi, siempre se comporto como un autentico caballero con ella.
--ASI PUTITA, MIRA A TU PAPI MIENTRAS LE MAMAS SU VERGA………
La nena desesperada y asustada pidió disculpas y tímidamente acerco sus labios a la gruesa cabeza del miembro, tímidamente empezó a meter a su dulce boquita todo lo que podía de ese largo falo, sentía que eso era parte del plan de venganza cumplir tan asquerosa labor a la que era sometida, el Papa de Claudia rápidamente estiro un brazo hacia esas nalgas que tan loco lo volvían y empezó a penetrar con un dedo por todo el ojete de la colegiala.
Cielo Riveros casi se atraganta con la verga al sentir ese dedo entrar y salir en su ano, el dolor y placer nuevamente empezaba a consumirla y el tipo lo sabía muy bien al oír los sonidos guturales de placer que hacia la nena con la verga en su boca y sin perder el tiempo con esa misma mano acariciaba la vulva de la nena llenándola de gusto, la nena ya se daba por vencida y dejaba de luchar contra lo que su cuerpo le pedía y fue más cuando escucho lo que el tipo le dijo.
--Te gusta putita, tienes un cuerpo que se hizo para follar, no lo desperdicies y gózalo……desde ahora sos la nena de Papa.
La nena al oírle recordó lo que siempre le dijo Claudia, que ya sea una mujer madura y que siempre habrían muchos hombres que ansiaban o querían cogerla y ella debería rendirse a sus deseos y hacerlos felices y sentirse feliz porque el sexo da mucho pero mucho placer, esas palabras de su lejana amiga Claudia resonaban en su mente, pero sabría Claudia que el hombre al que tenia que hacer feliz era su propio padre? mientras que el tipo ya sentía como la nena meneaba su trasero tras la cogida de dedo que le daba a la muchacha por el ano.
La nena lo miraba a los ojos ya sumisa, no entendiendo como es que ya no tenía fuerza para negarse a los deseos del tipo, se sentía relajada recibiendo el suave vaivén de la verga del papa de Claudia en su boca, sintiendo con su lengua la textura venosa del miembro casi tan inmenso como el de don Pedro.
Tenía toda su espalda arqueada sintiendo su cuerpo gozar pero aun su mente no claudicaba a someterse voluntariamente, tenia que lograr que el papa de Claudia quede rendido a sus pies, la nena sintió el aumento de calor en su cuerpo al sentir esas manos manosear sus chichotas, subía y bajaba más rápido por esa pija gruesa que le llegaba hasta la garganta, imaginaba la nena tener toda la verga dentro suyo y se humedecia mas aun.
Los manoseos eran cada vez mas rápidos y fuertes haciendo que poco a poco la nena empezara a perder el control y oír los gemidos ahogados de la nena lo calentaba mas y acto seguido y como un salvaje la puso boca abajo para empezar a lamer la panochita de la colegiala quien mansamente se estiro en el sofá sintiendo la lengua del tipo hurgar dentro de su rosada vulva.
La colegiala arañaba las sabanas de la cama aguantando las ganas de gritar de placer para que el papa de Claudia no se de cuenta lo mucho que le gustaba lo que le hacía; pero con la espalda arqueada ya no pudo más y unos leves gemidos se escaparon de sus labios para beneplácito de don Ernesto quien sonreía porque su labor iba por buen camino.
--mmmm ahhha ahhh ahhh…… --,mi dulce niña tienes la conchita tan hermosa como la imagine mmmmm, que rica y rosada panocha tiene mi nena mmmmm
Cielo Riveros estaba casi derrotada y que solo era cuestión de minutos para que sucumbiera como siempre cada vez que era abusada por los hombres, el tipo lleno de mañas estiro sus manos para amasar y pellizcar las redondas y duras tetas de la nena y acelero también la comida de vagina que le daba.
--ahiii ahiii nooo nooo ahhh ahhh……
El papa de Claudia seguía chupando y dando lametazos desde la vulva hasta el ano de la colegiala oyendo como esta ya deliraba de placer y le metió todo su dedo nuevamente por el recto de la nena.
--ahiii ahii señor yaa noo ahhh…… el papa de Claudia ya tenía la verga como un garrote oyendo los gemidos de la nena y no aguantando mas se arrodillo en la cama y atrajo hacia él a la colegiala para empezar a besarla como un salvaje, ella no pudo hacer nada ante el sorpresivo beso y solo trataba de alejarse de este quien la tenia sujeta de la espalda y las nalgas.
--Señor…… folleme por favor…… El tipo quien ya estaba encima se le dibujo una diabólica sonrisa al oír esa dulce y tierna voz pidiéndole que se la folle.
_Ya te dije soy tu papi, dime quien soy y te voy a culiar como nunca mi nena bella, pideme bien y te doy con el gusto.
--folleme papi soy su nena métame su cosota la deseo ahora …… --mmm eso está mejor Cielo Riveros , pero dime quien soy…… --Usted es mi…… Papi…… --Muy bien putita, asi quería tenerte…… --si Papi, le hare caso en todo lo que me diga……
El Papa de Claudia ya muy salido de excitación se sentó en la cama y tomo a la nena sentándola en sus piernas, quedando frente a él esas formidables tetas que como un animal empezó a succionar, la colegiala en un acto de auto reflejo poso sus manos en los hombros del tipo con la intención de alejarse pero rápidamente pudo discernir al recordar que todo era parte del plan y que todo estaba saliendo como ella queria.
El tipo sentía las suaves y delicadas manos de la nena acariciar sus hombros; y no perdiendo el tiempo llevo sus manos hacia las nalgas de Cielo Riveros acariciándolas con fuerza y metiéndole un dedo por el ano, la colegiala largo un pequeño gemido al sentir ese grueso dedo hurgar en su cavidad rectal y mas las succiones y lametazos que le daba el tipo en sus senos y a su vez en el cuello empezó a perder el control.
--ahhh ahhh noo ahhh ahhh…… -- Que ricas chichotas tienes mocosa, no me canso de mamarlas…… --ahhh nooo aahhh por faavoorr ahhh…… --deja de luchar putita y entrégate, vas a ver que hasta vas a pedir que te coja siempre vas a disfrutar como nadie vas a adorar mi pija, vas a ser la nena de Papa……
La nena ya no podía luchar más contra lo que su cuerpo le pedía y mucho menos con los hábiles manoseos del papa de Claudia, sentía la verga dura del tipo chocar en su bajo vientre y sus delicadas manos apretaban con fuerza los recios hombros quien al sentirlas tomo una de sus manos llevándola hasta su portentosa verga haciendo que se la sujete, la nena no oponía resistencia y dócilmente rodeo con su mano ese grueso mástil de carne.
El papa de Claudia guiaba su mano en un lento sube y baja mientras seguía hurgándole el ano y succionando los deliciosos pezones de la colegiala quien ya soltaba gemidos de placer mas fuertes; el tipo estaba a mil escuchando a la nena gemir y voluntariamente le pajeaba la verga ya sin su ayuda, Cielo Riveros se mordía los labios con sus ojos entrecerrados mirando al techo sintiendo como el le mordía delicadamente los senos subiendo hasta su delicado cuello como un vampiro.
El cuerpo de le nena temblaba ya de placer, su mente ya no podía resistirse mas, a pesar que todo era parte del plan de venganza no la pasaba tan mal no negaba que la situación era excitante al someterse a este depravado que alucinaba que Cielo Riveros era su hija, con la fantasia de que estaba practicando un incesto, su cuerpo había ganado la batalla y como una poseída bajo su otra mano aferrándose con ambas al tieso miembro del papa de Claudia quien sonreía triunfante al ver que la nena seguía su juego.
Ya tenía a la chamaca como muchas veces había imaginado, y ahora si nadie interrumpiría sus lujuriosas intenciones, el tipo palpaba esa jugosa vagina con escasos pelos y con un dedo empezó a penetrar delicadamente a la nena sintiendo lo estrecha que era esa vagina que aseguraba que sentiría un placer inmenso penetrar ese codiciado orificio, ese privilegio tendría que ser sin duda para su verga.
--ahhi ahí doon Ernesto…… no ahh ahhh…… --Ya ves mi niña, te dije que te gustaría, y ya verás cuando pruebes mi verga, vas a llorar de gusto ja ja ja……… --ahhh ahhh uhhh ahhhh……
La nena solo gemía escuchando a ese ser pervertido que jugaba que convertiría en mujer a su propia hija, la mente de Cielo Riveros no aprobaba el incesto pero su cuerpo lo deseaba y no comprendía como sus manos subían y bajaban por esa enorme verga una y otra vez, el tipo quien solo miraba a la nena vio como esta bajaba la mirada hacia la verga que tenía entre sus manos dándole una deliciosa sensación al sentir esas suaves y delicadas manos frotando su grueso miembro.
--Sigue putita sigue, esta verga es sola para ti…… Cielo Riveros solo miraba al papa de Claudia con los ojos entre cerrados y mordiéndose los labios presa del placer que le daba quien con sus habilidosos dedos le penetraba sus intimidades.
-- Muy bien mi niña ya es hora de que pruebes la verga de tu papi ja ja ja; el papa de Claudia ya se encontraba encima de ella succionando los sensibles pezones de la colegiala quien se sentía aplastada por el cuerpo de su abusador; pero ya era presa de las oleadas de placer que su cuerpo sentía con las descaradas caricias y lametones que le daban.
--Que delicia eres chamaca, no sabes cuantas veces soñé tenerte en mi cama, cuando cogia a mi mujer imaginaba que estaba contigo…… La nena escuchaba las perversidades que decía el tipo y escalofríos de prestarse a ese juego tan obseno que le proponía el papa de Claudia, pero no por eso su cuerpo dejaba de estar excitada retorciéndose en su cama de placer.
--ahiii ahhh ahhh ahhh…… -- Dime mi niña, quieres que tu papi te la meta ya……
La nena aun tenia control de su mente mas no de su cuerpo y con la poca dignidad que le quedaba se negaba a los caprichos del papa de Claudia.
--noooo nooo deejemme Señor ahhh ahhh…… --No me llames Señor dije que me digas Papa y no mientas muñeca, se bien que quieres verga……
El tipo arremetió con bravura sobre la juvenil panocha hundiendo su lengua lo más profundo que podía haciendo gemir a los gritos a la nena quien sujetaba de los barrotes de la cama matrimonial y lo apretaba con sus piernas casi hasta la asfixia, pero a pesar de eso el papa de Claudia seguía fuerte en su labor de enloquecerla de placer.
-- Ahiii ahhhii siii Papi ahhh hummmm…… --Ya vez como te hace gozar tu Papi y mas lo harás cuando sientas mi verga……
La nena ya no podía articular palabras, de sus labios solo salían deliciosos gemidos que eran música para los oídos del tipo quien sentía como se llenaba la boca con los abundantes fluidos que expulsaba la nena; el degenerado subió hasta llegar a los labios de la nena besándola como un salvaje pero sin sentir rechazo de parte de ella.
Cielo Riveros quien ya se encontraba perdida en un universo de placer entrelazaba su lengua junto con la del papa de Claudia sintiendo el sabor de sus fluidos, también podía sentir la verga del tipo que como una víbora buscaba la entrada de su caliente panocha y en un arrebato de placer bajo su mano hacia la punta de ese mástil ayudándole a encontrar la entrada que daba paso a su último reducto de castidad.
El papa de Claudia pudo sentir como la cabeza de su verga se abría paso por la panocha de la nena pero aun no quería penetrarla, quería hacerla sufrir hasta que ella misma le ruegue que se la meta.
--Quiere verga mi putita…… -- siiii Papiiiii ahhh siii ahhh…… -- Pues verga vas a tener mi niña puta……
El tipo se quito de encima de la chamaca sentándose sobre la cama viendo a la nena aun acostada mirándola con ojos de placer y completamente agitada, a pesar de que ya sabía que la tenía dominada el papa de Claudia aun no podía creer que tan espectacular adolescente era suya en ese momento.
-- Te gusta la verga no; bueno ponete en cuatro patas hazle caso a tu papi hazme caso putita del papi……
La excitada nena sin titubear acato la orden del tipo sin importarle que la tratara de puta y se puso en cuatro patas dejándole una vista espectacular al papa de Claudia quien miraba ese par de nalgas de infarto temblando de placer, el tipo se acerco hacia ellas y tomándola con una mano de la cadera con la otra le dio unas fuertes nalgadas que enardecían mas a Cielo Riveros quien ya ansiaba sentir dentro suyo a ese animal pervertido que la tenía en su poder.
--asi putita asi soñé tenerte algún dia y ese dia a llegado, primero le daré a tu culo lo que tanto me pide, si vieras como esta latiendo por recibir mi verga ja ja, tu culo es el deseo de todos los hombres del pueblo y sus alrededores y ahora es todo mio ja ja ja……
La nena sintió como el don Ernesto escupía en la entrada de su palpitante ano y a su vez de saliva la punta de su verga para colocarla en la entrada de su rosado recto.
Cielo Riveros sentía la adrenalina del momento al estar en cuatro patas deseando a que depravado la penetrara, le venían los recuerdos de placer que sintió cuando otros hombres como don Pedro, Anselmo, Tulio, hasta el mismísimo cojo Juan le dieron por el culo y se resigno mentalmente a no sufrir mas y tratar de disfrutar en algo lo que el tipo le hacía.
El papa de Claudia le incrusto sin compasión la mitad de su verga escuchando el doloroso quejido de la nena quien se aferraba de las sabanas presa del dolor, el tipo quien se desquicio mas al sentir como le apretaba la verga llego a metérsela por completo viendo como la nena agachaba la cabeza sobre la cama quejándose aunque débilmente de dolor.
-- Ya mi niña aguanta que después vas a aullar como una loba de tanto placer…… --Ahhuuu nooo ahhh ahiiii…… -- Que rico lo aprietas muñeca, tienes el mejor culo del mundo……
-- Ahiii Papi despacio que entro toda y la tiene muy grande Papiiiiiiii ahh ahhiii……
El tipo empezó un lento mete y saca que hacía temblar a la nena, ella aunque ya había recibido antes intrusos por su ano esta vez no la habían lubricado como debía ser y lentamente se acostumbraba a los embistes del depravado.
--Ahhi uuhhh ahhh deespaaciioo ahhh ahhh…… -- ya vez hija, te dije que te gustaría ja ja………
El sentir como la llamaba hija le resultaba extraño y el dolor fue desapareciendo dando paso a ese placer que tanto la enloquecía, en la habitación solo se oían los gemidos de la nena y el ploc ploc que producían las nalgas de Cielo Riveros con la pelvis del tipo quien gruñía como un oso tras cada salvaje embestida que le daba.
El papa de Claudia pudo ver a través del espejo del ropero el rostro de placer de la nena quien se mordía los labios con los ojos entrecerrados sintiendo como esa gruesa verga se acoplaba perfectamente con las paredes de su ano. -- Mira el espejo mi niña, ves como goza la nena de Papa, la nena de papa es una puta ja ja ja……
La nena abrió sus ojitos viéndose reflejada en cuatro patas con el pervertido atrás suyo embestía con fuerza, el tipo quien se dio cuenta de la mirada de la chamaca se inclino hacia adelante para pasar sus manos hacia las enormes tetas que le colgaban como campanas y amasarlas con bravura acelerando mas sus embistes sintiendo la nena que esa gruesa verga le llegaba hasta el fondo.
--Ahhii ahiii siii ahii uhhh siii…… -- Mira al espejo mi niña, observa como goza la nena de Papa, eres toda una puta ja ja ja…… -- ahhhh nooo ahhh ahh ahhh…… --Te gusta mi verga, quieres que pare…… --nooo nooo sigue ahhh ahhh……
Te gusta la culiada que tu Papa te da eh? Quien soy dime quieres toda mi pija en tu culo? Dime….siiiiii Papi dámela toda la quiero toda dentro siiii Papa dámela que rico mmmmm ahhh asiii Papa no pare siga ahhh ahhh.
Cielo Riveros le seguía el juego al depravado, porque dentro suyo sentía un placer inmenso, llamarlo Papa llenaba un espacio en su vida en la que su Padre siempre estuvo ausente, será por eso que le gustaban tanto los hombres mayores, en todos ellos veía al Padre que nunca tuvo.
El Papa de Claudia sonreía al tenerla tan excitada y que le seguía el juego acelerando mas sus embistes sobre el castigado ano de la colegiala quien seguía gimiendo como gata en celo, pero el tipo quería más participación de la nena y rápidamente se retiro de la nena echándose en la cama matrimonial.
La nena quien volteaba aun agitada vio que el tipo le indicaba que se montara encima de él, la chamaca ya resignada y sobretodo excitada se acerco hacia el depravado sentándose sobre su verga. El tipo la atrajo hacia el propinándole un asqueroso beso sintiendo las redondas tetas de la nena sobre su adiposo y peludo pecho.
A su vez el tomaba su verga poniéndola en dirección al ano de la nena pero a su vez palpaba con la punta de esta la entrada de la húmeda panocha de Cielo Riveros quien seguía entrelazando su lengua con el papa de Claudia en un apasionado beso.
--Quieres que te la meta en la panocha putita…… Le pregunto el tipo a la nena quien estaba tremendamente poseída por la lujuria y la excitación sin dejar de chuparle los pezones y lamerle el cuello no dejando que pensara libremente y manteniéndola caliente siempre.
--Siii sii Papiiii la quiero adentro siiii…… --ja ja pero después de eso, serás la nena consentida de Papa....... –siiii usted va a ser mi Papi, ahh ahh…… --ja ja así me gusta mi niña pero ahora quiero que me la chupes……
El tipo que se había tomado en serio el papel del Padre dominante se sentía un Dios al poseer a tan hermosa chamaca veía como la nena se agachaba y tomaba con sus delicadas manos su gruesa verga y como lentamente sus labios se acercaban hacia la enorme cabeza de su miembro para empezar a engullirla.
Veía como la lengua de Cielo Riveros recorría toda la cabeza como si fuera un chupetín gigante, para luego esos hermosos labios subían y bajaban por su venoso miembro y como la nena con sus bellos ojos verdes lo miraba a los ojos con rostro sumiso; la nena quien aun excitada cumplía con esa labor oral veía el rostro del depravado disfrutando de la mamada, había aprendido bastante bien el arte de mamar vergas, había tenido excelentes profesores como don Pedro, Tulio etc. Cumplia su labor como la mas experta de las prostitutas no sentía asco ni odio por lo que la obligaba hacer, pero a su vez la situación calentaba su cuerpo excitándola enormemente.
--Ya no aguanto más mi hermosa y puta niña, tu concha la voy a probar otro dia, … el Papa de Claudia ya no pudo aguantar más las sensaciones que le producían la mamada de la nena, quería descargar su leche de una vez y que mejor que dentro de su hermosa boca, Cielo Riveros se aferraba al tremendo vergon del tipo con las dos manos, masturbándolo esperando que el imponente miembro que tanto placer había causado escupiera de una vez toda la leche.
Se agachó y esta vez le pasó la lengua por los huevos, chupaba uno, y luego otro. Lengüeteaba en el canalito que se forma en la base de los huevos haciéndolo suspirar en cada lenguetazo. Regresó a hacer su labor con la cabeza del pene, pero el papa de Claudia ya no podía soportar más esa tortura, ahora si estaba por explotar.
Aahhhh seeeee aaaghhh abri esa boquita mi niña recibe la lechita de Papa toma toda mi leche mi niña ahhhh mmmm
Cielo Riveros aceleró el movimiento de sus manos como quien ordeña para sacar la leche. Subía sus manos despacio y la bajaba con más ganas hasta que el papa de Claudia la tomo de la cabeza con firmeza y vio Cielo Riveros frente a sus ojos como saltó con fuerza la primera expulsión de semen que fue a dar directo dentro de su boca, un segundo chorro en sus mejillas y quijada y lo demás saltó de tal forma que le quedo en sus manitas.
Le gusto la lechita que Papi le dio eh? La tenia guardada para ti mi niña. Cielo Riveros sonriente con la cara toda salpicada por el tibio y espeso liquido acerco sus manos a la boca y chupaba sus dedos que habían quedado salpicado de sus mecos.
_Vamos traga pequeña, no dejes una gota fuera traga toda la leche de Papa. La niña muy obediente relamia los restos de semen que embadurnaban su hermoso rostro.
Entonces estando en esa situación es cuando se abre la puerta de la habitación, la mama de Claudia al ver a Cielo Riveros de rodillas con la cara todavía sonriente llena de semen, y a escasos centímetros la verga todavía tiesa de su marido quedo paralizada, dejo caer el pequeño portafolios que cargaba al piso. Cielo Riveros no se movia y seguía lamiéndose los dedos llenos de semen, el papa de Claudia dio un salto al costado para ponerse los pantalones.
_No es lo que tu piensas amor… su suerte ya estaba echada, pescado infraganti con la mejor amiga de su hija, y en la misma cama matrimonial que compartían, lo que sucedió después fueron gritos y acusaciones de parte de ella, Cielo Riveros se vistió rápidamente y salio presurosa de esa casa que se había convertido en un hervidero de odio y traiciones y reproches, su plan había funcionado, si con esto el matrimonio perfecto de los papas de Claudia no llegaba a su fin estaría muy cerca de serlo.
Mientras Cielo Riveros se dirigía a su casa pensaba como la primera parte de su plan de venganza había funcionado. Por lo que había hecho había perdido una amiga, a lo mejor la había perdido mucho antes cuando Claudia se había metido con el hombre equivocado, con el hombre de su vida.
Continuara…….
Los toscos carniceros ya estaban como desesperados, soñaban con violársela, con cogérsela entre los dos, o de que les mamaba la verga en forma alternada al interior del local en los momentos en que mantuvieran las cortinas abajo, hasta imaginaban tenerla encerrada en la bodega para poder violarla.
Cielo Riveros regresaba a su casa, por un paro de profesores los alumnos fueron despachados hasta nuevo aviso, por su cabeza pasaban las escenas que había vivido en manos de los tipos que siempre abusaron de ella, fueron muchos los viejos que pudieron apoderarse del ya no inocente cuerpo de la bella adolescente,
” y tengo que vivir desdichada a otras chicas no les pasa como a mi, los hombres malvados siempre buscan mi cuerpo y siempre lo consiguen.” En esos oscuros pensamientos estaba cuando abrió la puerta de casa imaginando lo sorprendida que estaría su madre de verla tan temprano, al no verla en la cocina la nena fue a buscarla en su habitación, al acercarse pudo sentir que algo raro allí dentro sucedía, unos ruidos y suspiros que a ella le eran conocidos, entonces muy sigilosamente la colegiala abrió la puerta de la habitación.
Fue allí donde casi se detiene su corazón, en la cama su madre en cuatro con las piernas bien abiertas y tras de ella alguien muy conocido por ella, podría reconocer a leguas su espalda morena y regordeta, su prominente panza sobresalían por sus costados, y cuando lo escucho hablar no le cabían dudas era el, el dueño del conventillo el hombre que ella odiaba, que también había abusado de ella, que la acosaba dia y noche, don Lucas estaba poseyendo a la mujer que le había dado la vida.
Cielo Riveros llevo sus manitas a su boca para evitar gritar de espanto, no podían sus ojos creer tremendo espectáculo, su madre dejándose poseer por el culo por Lucas, se preguntaba por qué, que vio en ese horrible hombre.
“Pero que culito mas estrecho tienes putita!!” se nota que no lo usas hace cuanto, me encanta asi parece el culito de una adolescente see Putaa me apretas rico la verga tomaa!! Que las putas como tu merecen ser culiadas asi tomaa!!
El cerrado culo de la mama de Cielo Riveros sentía como la verga del viejo se deslizaba perfectamente en su ano causándole un placer que hace muchísimo tiempo en el que guardo el luto en memoria de su difunto esposo, ahora solo disfrutaba del brutal empalamiento, sentía como las bolas de Lucas rebotaban en sus nalgas ya no podía mas un brutal orgasmo la invadía. Ahhh ahhh mmm oohhhh ooohhhh la señora gemia con cada ensartada del viejo que se abria paso sin problemas por su dilatado recto.
Eso fue mucho para Cielo Riveros salio casi corriendo a su habitación y entre lagrimas trataba de asimilar lo que había presenciado, recostada en su cama deseaba que todo fuera una horrible pesadilla, que no fuera cierto que su madre se enredara con tan despreciable sujeto, y encima parecía disfrutar mucho de lo que le hacían.
Espero la hora de la cena para salir del cuarto, ya en la cocina su madre con un ánimo muy alegre sirvió los platos y con tono firme y seguro le confeso a Cielo Riveros que había decidido rehacer su vida, que el hombre que la acompañaría de hoy en adelante era el dueño del conventillo, o sea Lucas, de seguro el viejo la había convencido con su hábil labia para embaucar personas, además su madre veía la posibilidad de ya no pasar necesidades económicas al lado de ese hombre.
Eso fue la gota que rebalso el vaso, la adolescente le contesto a su madre que ya no quería vivir en esa casa, que viera la posibilidad de instalarse en la casa de Don Benito que era como un abuelo para ella. En principio la pobre mujer no entendía la decisión que había tomado su hija, pero pensó que solo se trataba de la inseguridad de adolescentes y que le costaba asimilar que su padre ya no estaba entre los vivos.
En definitiva don Benito no tuvo inconvenientes en aceptar a Cielo Riveros si a fin y al cabo el siempre trato de protegerla de los peligros que siempre asechaban a la chica, y tomando en cuenta que la conocía desde pequeña y el cariño que sentía por ella era como la de una nieta. Paso el mes de Noviembre y Cielo Riveros terminaba su paso por la secundaria, y sentía la necesidad de ayudar económicamente a su abuelo postizo, por lo que le pidió si conocía alguien que pudiera darle empleo.
Don Benito tenía dos viejos amigos que manejaban una carnicería y le pareció una buena idea que Cielo Riveros fuera en nombre de el para que la tomaran en lo que sea. Cuando don Angel y don Carlos vieron que la nieta de su amigo Benito era una deseable y cándida jovencita, de solo 19 añitos . A todo esto la esforzada y preocupada adolecente estaba bastante bonita, era de pelo negro y lacio , este le llegaba hasta la altura en su espalda donde su cintura da inicio a las caderas, en su carita se veían unos preciosos ojos verdes cristalinos que le irradiaban una transparencia casi absoluta a su carismática personalidad, y su juvenil contextura llamaba a gritos a la lujuria sobre todo con aquellos del sexo opuesto, además que sus pechos sin ser grandes eran del tamaño apropiado como para llamarle la atención a cualquiera, pero lo que si era llamativo en su cuerpo ya casi terminado en desarrollo era el delineado y perfecto trasero que se gastaba, redondito y bien parado sobre todo cuando se ponía jeans de mezclilla o cualquier tipo de pantalón, con sus caderas bien pronunciadas, con unos fuertes muslos que estaban dibujados a mano, y al medio de estos ya se podía adivinar la diabólica curvatura en la cual existía una deliciosa panochita lista y apta para ya comenzar a acoger miembros masculinos, al menos así lo dictaminaría cualquiera que la tasara corporalmente.
Cielo Riveros estaba muy contenta con su empleo de cajera, y así lo notaba también don Benito su abuelo postizo, ya que con los aportes económicos por parte de ella desde que había comenzado a trabajar en una carnicería de barrio la calidad de vida de ambos fue mejorando notablemente,
Sus jefes y dueños de la carnicería eran don Ángel y don Carlos, un par de viejos usureros y sexagenarios, ambos hermanos, Don Ángel y don Carlos (ambos casados, con hijos(as) mayores y nietos por doquier),
Estos viejos le recordaban siempre que ella era empleada sin contrato de trabajo no estaban obligados a pagarle un sueldo alto, añadiéndole también que desde que la joven comenzó a trabajar con ellos siempre le recordaban que solamente la tenían trabajando en su carnicería a modo de favor personal hacia su abuelo porque este era amigo de ellos desde ya hacían años.
Pero en el fondo el par de viejos tan calientes como aprovechados estaban encantados con los servicios de la dulce chiquilla, ya que ella al ser una alegre joven virginal y vestirse como lo hacen todas las nenas de su edad con jeans apretaditos con los cuales enseñaba las curvilíneas formas que ella poseía desde sus caderas para abajo combinándolos con ceñidos top escotados, o con falditas de mezclillas y de esas cortitas con las cuales les enseñaba sus buenas porciones de piernas cuando estaba sentada en el alto asiento detrás de la caja, o cuando también se embutía en esos semi ajustados vestiditos primaverales a medio muslo, y con sus lacios cabellos tomados y despejándoles su carita de tierna adolescente, con todo esto el par de miserables por nada del mundo deseaban que aquella dulce nena dejara de trabajar para ellos.
Los muy sinvergüenzas apenas contrataron a la joven habían mandado a sacar la puerta del mostrador de la caja con la sola intención de poder mirarle a plenitud las líneas que dibujarían su cuerpo en los momentos en que ella estuviera sentada pagándose de los pedidos; y premiándolos también con la directa visibilidad de donde ellos estaban ubicados tras el mostrador de carnes hacia las suavidades de sus piernas. O como en los ratos en que bajaba la clientela no se cansaban de morbosearla y casi comérsela entre ambos con sus lujuriosas miradas, comentando entre ellos con palabrotas de grueso calibre todas las cosas que le harían si tuvieran la oportunidad de tenerla desnuda.
Pasaron las primeras semanas en que la nena comenzó a trabajar con ellos, luego los meses, y así un año entero, y los toscos carniceros ya estaban como desesperados, soñaban con violársela, con cogérsela entre los dos, o de que les mamaba la verga en forma alternada al interior del local en los momentos en que mantuvieran las cortinas abajo, hasta imaginaban comprar una pequeña cama para ubicarla en la bodega del negocio para culearla por turnos en el día a día, y así muchas cosas más. Pero por ahora todo eso solo eran sueños, sueños de viejos calientes que comentaban y graficaban las muchas maldades que le harían, esto lo hacían en los momentos en que salían a beber cervezas antes de retirarse a sus hogares y vivir sus avinagradas realidades junto a las verdaderas morsas que tenían por esposas.
En la carnicería Los dos viejos estaban vestidos con trajes supuestamente blancos, pero que debido a su negocio estos estaban todos ensangrentados y algo mugrientos, al igual que las peludas manos de ambos.
–Otro pedido…!!, anótese con 2 kilos de asado, 2 de pollo… y… y… tres de…
–¡Yaaa…! ¡¡Ya… más lento…!! Que aun me tengo que pagar de los dos pedidos anteriores!!, -le exclamaba Cielo Riveros a sus jefes quien ese día vestía un floreado vestido blanco con pequeñas figuras primaverales. La nena intentaba marcar sin equivocarse en la máquina registradora, junto con recibir el dinero y dar los cambios de vuelto, sentada como estaba en la caja sus piernas se veían tan bellas como relucientes y exquisitas.
Las ventas diarias eran realmente buenas, pero ellos siempre se encargaban de llorar a viva voz de lo mal que les iba, diciéndole a Cielo Riveros que ella era muy lenta en la caja, y que por su culpa los clientes se aburrían y se iban.
La chica por su parte le ponía todo el empeño del mundo, ella era muy hábil con sus manos para ingresar todos los pedidos sin equivocarse, y esto quedaba claro en la cuadratura que hacía al final de la jornada, aun así el par de usureros inventaban errores en los talonarios para hacerle creer que existían dineros faltantes, las cuales se las descontaban de su sueldo en forma sagrada.
–Por lo mismo te digo que deberás ponerle más empeño mira que si no…, mi hermano ya ha pensado en buscarte una reemplazante, -le mentía el maquiavélico viejo intentando preocupar a la joven, cosa que logró al instante.
–Queeee…!? No…!, don Carlos, por favor dígale a don Ángel que ya no me equivocare mas… yo… yo necesito este trabajo, mi abuelo está enfermo y con lo que gana no nos alcanza para…
–Ese no es nuestro problema, -le cortó don Carlos mientras se limpiaba sus ensangrentadas manos con un mugriento y ensangrentado estropajo, para luego continuar, –Por muy amigo que seamos nosotros con Benito… este es un negocio, y aquí todos debemos esforzarnos para que la cosa funcione, y el que no lo hace lamentablemente se tiene que ir, así que ya lo sabes.
Fue el jueves de esa misma semana en que la jovencita una vez que llegó a su trabajo, en forma preocupada se encontró que en la puerta chica que estaba ubicada al medio de las cortinas de latas del negocio había un grupo de 5 mujeres hablando con don Ángel –Pásale… pásale… señorita ve a tomar tu puesto…, -le dijo don Ángel una vez que Cielo Riveros estuvo junto a la puerta de servicio, la nena notaba que su otro jefe no quería que ella escuchara lo que él hablaba con las mujeres.
–Que… que… está pasando aquí…?, -le preguntó la nena a don Carlos una vez que ya estuvo al interior del negocio.
–Te lo dije mija, aquí el que no funciona se va… esas mujeres son las postulantes para tu puesto, lo lamento pero solo trabajas hasta mañana… tu sueldo quedará en forma de pago por todos los errores que has cometido y por los adelantos extras que nos has solicitado.
A Cielo Riveros en forma automática se le llenaron sus verdosos ojitos con lágrimas al recibir aquella nefasta noticia y por el impacto causado con solo pensar que al siguiente día debería decirle a su abuelo que la habían despedido,
Don Carlos se lo había dicho tan fríamente que ella no tenía las palabras necesarias para rebatir la decisión que el con su hermano ya habían tomado, por lo que en forma desganada caminó hasta la esquina en que estaba la caja Don Carlos con su corazón latiéndole a mil veía como la mocosa le regalaba un sensual meneo de caderas y trasero al andar embutida en unos ajustados jeans que daban la impresión de estar a punto de reventarse por cada movimiento que hacía al ir avanzando hacia su lugar de trabajo, junto con tener las insanas intenciones de ir a tomarla por detrás de su cuerpo y desde las tetas para agasajársela para él solo, en esos precisos momentos le rogaba a Dios que el siniestro plan puesto en marcha con su hermano surtiera los efectos esperados, ambos vejetes sabían por los labios de Benito en su última reunión de dominó que la chica estaría sola por todo el fin de semana en su casa.
A mitad de aquella misma mañana Cielo Riveros ya más calmada vio como don Ángel entrevistó en la bodega a las 5 mujeres y como las fue despachando una por una.
Luego a las horas más tarde, con don Ángel ya vestido otra vez de carnicero, escuchaba también como en voz alta este último le hablaba a su hermano diciéndole lo muy hábiles que eran las postulantes que se habían presentado ese día, y de la gran experiencia que tenían sobre todo en supermercados, seguro que con la nueva cajera seleccionada por fin les podría empezar a ir mejor en el negocio, se decían entre palmadas en la espalda y miradas de reojo hacia donde estaba la cabizbaja jovencita, obviamente los viejos a propósito se encargaban de que ella escuchara todo lo que ellos decían.
Aquel día Cielo Riveros decidió no ir a almorzar a su casa, estuvo toda la mañana pensando en el asunto, ella si o si debía hablar con sus dos jefes para que no la echaran de la chamba, se comprometería a ponerle más empeño y ganas en sus labores con tal de que no la cambiaran y de poder recibir su sueldo como todo los fines de mes.
–Lo siento jovencita, pero ya lo hemos decidido… -Le hablaba don Ángel –Tu reemplazo empieza a trabajar este mismo lunes con nosotros, así que mañana una vez que cerremos, tú agarras todas tus cosas y te nos vas…
–Pero yo he intentado hacerlo bien…, no sé porque me equivoco si saco las cuentas dos veces y hasta tres en algunas ocasiones antes de dar el cambio…, -ahora la joven miraba a don Carlos, como si tal vez él pudiera de alguna forma hacer cambiar de opinión a su hermano.
–Como te dijimos antes… ya está decidido, mañana te vas…, -fueron las frías palabras de don Carlos quien confirmaba lo dicho por su familiar.
–Señores si quieren me arrodillo ante ustedes… pero por favor no me echen…, -la chica junto con decirles lo último desesperadamente se puso de rodillas y los miraba a ambos con cara suplicante, sus dos manitas las tenía puestas igual de cómo si estuviese rezando.
Don Carlos rápidamente quedó mirando a su hermano, como diciéndole que ese era el momento justo como para dar el segundo paso de su plan, por lo que al instante lo puso en acción.
–Oye Ángel… y si quizás le dijéramos eso que te dije la otra vez… si ellaaa… mmm… no se… si accediera tal vez podríamos…, -el viejo se daba vueltas en sus dichos solo para captar la atención de la chica. Por otro lado su hermano también estaba presto para colaborar y ver si la nena se confundía.
–Que… que… es eso que ustedes quieren que yo h… ha… haga…!, -les consultó la jovencita aun puesta de rodillas ante ellos.
–Nada… no le hagas caso a mi hermano y olvídalo, solo son cosas de viejos…, -el viejo Ángel le contestaba con cara de mal humorado, pero al estar sentado ya se masajeaba la verga por debajo de la mesa, creía notar cierto interés por parte de Cielo Riveros en dejarse embaucar.
–Va… vamos… díganme… tal vez yo pueda hacerlo… existe alguna solución?
–De verdad estarías dispuesta a hacer lo que te pidamos con tal de conservar tu trabajo…?, -Ahora era el mismo viejo Ángel quien estaba por correrse de lo tan caliente que se sentía, nunca imaginó que llegarían tan lejos con la salida ocurrencia de su hermano.
–Tal vez… si…, es que aún no me lo dicen…, -Cielo Riveros ya estaba puesta de pie nuevamente, algo en su mente le indicaba que debía tener cuidado con las solicitudes que sus aun jefes llegaran a proponerle, ya que por muy candorosa que fuera la chica no era ninguna tonta y algo sabía de los intereses masculinos que pueden existir en un hombre hacia una mujer, además que en muchas ocasiones les veía la cara de degenerados que ambos hermanos ponían cuando atendían a alguna damita de buen ver en la carnicería.
–Fantasías de hombres casados? A… a que se refiere…!?, -la chica ya estaba con los pelos de punta, aquella frase le sonaba realmente perversa, lo que en un principio solamente fue un fugaz y lejano pensamiento ya con esto se le acercaba mas, y ya más o menos entendía a lo que querían llegar los dos viejos.
–No te asustes Cielo Riveros cita…, ven siéntate en esta silla, -don Carlos notando que la nena se comenzaba a poner a la defensiva, intentó hacerla sentir más en confianza, ofreciéndole el asiento, para luego continuar con la acalorada propuesta, –Si no es nada malo lo que queremos pedirte, mira si tu aceptaras a hacerlo, tu sueldo estaría intacto mañana mismo y en tus bolsillos, ni siquiera te descontaríamos las diferencias de dinero… te parece justo nuestro acuerdo?
–No me descontarían…?, o sea, me pagarían el sueldo completo…!?, -le consultaba la jovencita ahora sentada y poniéndole más atención a lo que le ofrecían que a lo que ella debería hacer.
–Claro que si… si tu nos haces ese favor que te pedimos, hasta de pronto podríamos subirte un poquito la puntería en tus honorarios… que te parece?, -don Carlos se la estaba jugando, cada vez creía notar ver a Cielo Riveros más interesada en el trato que estaban a punto de proponerle.
–Ya no le sigas, es inútil, ella no aceptará a hacerlo…, -don Ángel se imaginaba que él hacía el papel del policía malo, y don Carlos era el bueno.
–Y de que juego se trata…?, -pero las vagas esperanzas de la chica cada vez se derrumbaban mas y mas.
–De que por lo menos una vez a la semana simules ser nuestra mujer…!!!, -termino diciéndole desfachatadamente don Ángel a su joven trabajadora.
–Q… que… que… c… co… saaaaa…?, -la cara de la adolescente en el acto fue de escándalo total.
–Ps… ya lo escuchaste pendeja, simplemente es eso… queremos que por lo menos una vez a la semana nos prestes la concha… vamos que dices? Nos dejaras aceitarte la pepa?, seguro que a ti también te encantará…, -ahora era don Ángel quien en forma desfachatada y ordinaria le decía sin tapujos lo que realmente deseaban ellos de ella.
Por unos momentos un extraño silencio reino en la carnicería que a esas horas se encontraba con las cortinas abajo. Los dos viejos sudaban de calentura al tener a la jovencita en tan lujuriosa conversación, ella por su parte solo se los quedó mirando en forma alternada a cada uno de ellos, don Ángel le acababa de decir literalmente lo que ellos deseaban de hacerle.
–N… no… no creo p… po poder h… ha… hacerlo… yo… yo no p… pue… dooo… no p…pue… doooo…, -les dijo Cielo Riveros una y otra vez ahora mirando hacia el suelo y completamente sonrojada al verse a ella misma manteniendo semejante conversación con dos hombres mayores y que para rematarla eran amigos de su abuelo, si ella los conoció desde que era solo una niña.
Tras otro breve silencio, era el vozarrón de don Ángel quien nuevamente lo rompía:
–Te lo dije estúpido… esta zorrilla quiere que le den todo gratis, que sacas con intentar perdonarle todas sus equivocaciones si ella no quiere darnos nada a cambio…!?
–Si que lo sabes hacer estúpida, – atacó al instante el perverso viejo tras su breve análisis, –si mírate nada mas, con esos pantaloncitos tan apretaditos que te embutes para que el culo se te vea más grande de lo que ya lo tienes, porque crees que haces eso?, vamos… dime?, -ante el silencio de la joven era el mismo viejo quien se daba a contestar sus preguntas, –Lo haces solo para que uno te lo mire, o sea, porque andas sedienta de vergaaa… si hasta en la cara se ve lo puta que debes ser a la hora de sacarte la ropa y meterte en una cama.
Acaso piensas que no nos enteramos que ya anduviste revolcándote con cuanto viejo se te cruzo en el camino, ya todo el pueblo sabe que te encanta la verga de viejos, sabemos del mecanico ese Pedro que te coge cuando se le canta la gana, tus profesores gozaron de tu cuerpo para que te den buenas notas no entiendo por qué no nos entregas a nosotros para que tengas un buen sueldo. o acaso crees que no nos hemos dado cuenta de cómo también te franeleas con el pendejo ese Rodrigo que a veces te viene a dejar…!?
–El… el… es mi novio…, y apenas nos damos un beso de despedida…!, -intentaba defenderse la ofendida criatura ante tan viles acusaciones.
–Pues harto maricón que te salió ese tal Rodrigo ya que tú misma estás diciéndonos que ese pendejo aun no ha sido capaz de rellenarte la almeja tanto como tú quieres que alguien lo haga…, -la jovencita en el acto abrió y tapó su boquita en forma escandalizada, nadie nunca en la vida se había dirigido a ella con tanta ordinariez, por su parte el salido viejo continuaba con su atrevido bombardeo de insultos y vulgaridades, –Viendo que por lo general te gusta andar parando vergas por la calle con esas faldas cortitas que comúnmente también te pones con la sola intención de mostrarle el culo a todo el mundo, y toda pintarrajeada como una verdadera puta en busca de que alguien se la culie en cualquier callejón de mala muerte…
Ahora la chica estaba con su carita desfigurada de angustia ante semejante vendaval de mentiras e insultos hacia su persona y actuar, por lo que don Carlos vio oportuno intentar serenarla, antes de que la chiquilla saliera corriendo de su carnicería y todo se les fuera a la verga.
–Tranquila… tranquilita, y no te nos asustes, solo escúchame… hagamos una cosa, mejor vete para tu casa y piénsalo, si decides no querer seguir trabajando para nosotros estás en tu derecho de hacerlo, pero si realmente necesitas este trabajo y el dinero que te ofrecemos solo debes presentarte a trabajar mañana, claro que con ello es de que aceptas nuestras pequeñas condiciones, jijiji, -le decía y reía nerviosamente don Carlos, el seguía apelando a la diplomacia, ya que su hermano con su actitud lo único que estaba logrando era espantar cada vez más a la joven.
–De… De verdad don Carlos que no puedo hacer eso… yo… yo… nunca lo haría… además que…, -la jovencita se quedó mirando al suelo mordiéndose el labio inferior, le daba mucha vergüenza estar en aquella situación con sus dos jefes.
–Además QUE…?! pendeja…!!!, –Vamos… termina la frase que ibas a decir…!, -bufó el mastodonte peludo de don Ángel quien se calentaba hasta la locura con solo estar asustando y hablándole guarramente a la curvilínea colegiala.
–Yooo… yo no puedoooo… como no lo entienden… no puedo… no puedooo…, -les volvía decir ahora con sus dos manitas puesta en la cara, Cielo Riveros aun creía que los viejos se iban a compadecer de ella dejándola trabajar sin tener que darles algo a cambio.
–Mira… aun existe la posibilidad que mantengamos nuestros ofrecimientos si accedieras a solamente vestirte bien buenota como comúnmente lo haces, ponerte unos trapitos que te compraremos, servirnos trago, unos cuantos besuqueos y corridas de mano, no sé… cosas así… todo esto una vez por semana y ya… así todo continuaría de la misma forma que hasta hoy, claro que con las nuevas mejoras que te ofrecemos, y nosotros estaríamos bien atendidos…, jijiji, que dices…?
Cielo Riveros tras pensársela por unos breves segundos inocentemente entendió que esta otra nueva oferta no era tan comprometedora como la anterior.
–P… Pero… pero no me harían lo o… otrooo…?, -obviamente la joven les preguntaba a su forma de que acaso ellos con esta otra nueva propuesta se comprometían a no meterle sus vergas.
–A muy pesar nuestro, Nooo…!, no te lo haríamos… que dices?, -claro que el viejo Carlos solo lo decía de la boca para afuera, ya que con su hermano ya habían presupuestado esta reacción por parte de la chica, ellos solo esperaban un mínimo de aceptación por parte de ella para que cuando ya estén de una forma más intima simplemente violársela.
La jovencita de verdad que ya se la estaba pensando, esta nueva propuesta por parte de sus jefes ya no era tan aberrante como lo anterior, solo serían unos besos y unos cuantos toqueteos una vez por semana y ella podría seguir trabajando, y recibiendo su sueldo, sumándole que hasta le estaban ofreciendo un aumento si es que aceptaba, aun así su conciencia le gritaba a los 4 vientos que eso no lo hacía una chica de principios y bien educada como lo era ella, que si aceptaba esto algo en su persona la marcaría negativamente para siempre, sin embargo ante aquellos sensatos pensamientos desde sus exquisitos labios carmesí salió una frase que quizás decía todo lo contrario:
–M… me… me lo jurannn…?, -les consultó mientras los miraba, su carita tenía la expresión de un profundo pesar, ya que mas que estar preguntando ella estaba aceptando la enajenante propuesta, y así también lo entendió el par de vejetes.
–Claro que lo juramos princesita…, solo un par de besuqueos, manoseos varios y estaremos conformes, Jejeje… -aportó ahora don Ángel quien estaba al borde de un derrame neuro-cerebral, para luego continuar, –pero con una condición eso si…, -la cara del vejete estaba desfigurada por una severa ansiedad de calentura desenfrenada…
–C… Cual…!?, -preguntó la nena desde donde estaba ubicada al frente de ambos,
–El lugar para jugar por primera vez será en tu propia casa, y esto será mañana mismo en la tarde…, luego veremos cómo le haremos para nuestros futuros jueguitos…
–Mañana…!? P… pe… pero porque en mi casa?, -la chica otra vez dudaba ante esta nueva condición.
–Porque nosotros somos casados, y no podemos andar por ahí mostrándonos acaramelados con una jovencita tan buena como lo estás tú mi reina, te imaginas las mentiras que podría decirle la gente que nos viera a nuestras esposas!?, y aquí en la carnicería no tenemos las comodidades necesarias para pasarlo bien, además que sabemos que Benito mañana no estará en tu casa, y que ya no llegará hasta el domingo,
–No… no lo sé… debo pensarloooo… mi abuelo no me deja llevar a nadie a la casa, ni siquiera mi novio me puede ir a dejar hasta la puerta cuando salimos.
–Pues tienes de aquí a mañana para pensarla…, -don Ángel otra vez se mostraba cabreado, la pendeja esa ya le estaba dando muchas vueltas al asunto, por lo que prosiguió: –Escucha niña, si tu palabra final es no, simplemente mañana no vengas… pero si decides mantener tu puesto de trabajo con las nuevas regalías que te ofrecemos, mañana sin falta te deberás presentar a trabajar en forma normal y bien arregladita como tú ya sabes hacerlo… así abriríamos solamente por la mañana y luego nos iríamos a tu casa a pasarlo bien… ya lo sabes, ahora es tu decisión… por hoy solo lárgate, te damos la tarde libre.
La chica limpiándose las lágrimas de sus ojitos dio media vuelta y pasó a buscar sus efectos personales a la “Caja”, su mente era un caos total al no estar segura de que determinación tomar finalmente, fue en el momento en que ya se retiraba que don Carlos le habló nuevamente:
–Espera…
La jovencita al girar su cuerpo vio el corpulento hombre estirar hacia ella el blanco sobre que contenía su sueldo del mes.
–Toma chiquilla… esto es en señal de que nosotros en parte si nos interesa tu situación… recuerda que si aceptas venir mañana trabajaremos solamente en la mañana, al medio día cerramos y nos vamos para tu casa, y tranquila solo serán besos y cosas superficiales, además que nadie lo sabrá, a nosotros también nos interesa mantenerlo en secreto, así que guárdalo es tuyo…, -le dijo a la misma vez que le tomaba la blanca manita a la nena casi obligándola a recibir el sobre con dinero. –Ahora solo vete bebe… y te esperamos mañana, yo se que vendrás.
Finalmente la chica a sabiendas que ese dinero realmente lo necesitaba caminó en dirección a su casa, esa sería la noche más larga de su vida, debía tomar una decisión.
Al fin y al cabo había huido de la casa de su Madre para que don Lucas no pudiera tocarla, pensó tal vez que sus padecimientos en manos de viejos aprovechadores como el jorobado conserje o don Pedro que hacia un año que había perdido contacto con el, todo eso había quedado atrás en un pasado que no quería recordar ahora todo comenzaba de nuevo. Otra vez en manos de viejos Depravados.
EN EL PROXIMO CAPITULO LA ENCAMABLE COLEGIALA RECIBIRA EN SU PROPIO HOGAR A LOS PERVERTIDOS HERMANOS CON LA UNICA RAZON DE PRESERVAR SU TRABAJO.
Los hermanos carniceros la veían tal cual como era ella, un verdadero prodigio de hembra joven, la ajustada y minúscula tanga le tapaban solamente lo mínimo al grado de que con solo verle esa erótica parte de su cuerpo tenía a los dos viejos balbuceando lujuriosidades incoherentes.
Fue un extraño día viernes en la mañana en que la jovencita mientras se preparaba para irse a trabajar a la carnicería –Abuelito… aquí tienes el dinero para tus remedios, no olvides pasar a comprarlos al centro antes de que vayas a abordar el bus, también alcanza para que le lleves algo de mercadería a mi Madre, -le dijo la jovencita a don Benito dejándole los billetes en la mesa.
–Pierde cuidado Cielo Riveros , que así lo haré como siempre, -le dijo finalmente a la vez que junto con tomar el dinero inocentemente también agradecía a su par de buenos amigos que le habían dado trabajo de cajera.
–Como a qué horas te irás?, -le consultó la nena quien estaba apuradísima arreglando sus cosas antes de salir para su trabajo. Don Benito mirándola se daba cuenta que la nena se había esmerado mucho en arreglarse,

–No olvides de dejar todo apagado y bien cerrado, hoy atenderemos todo el día en la carnicería así que saldré algo tarde del trabajo, -le dijo Cielo Riveros a su abuelo postizo en los momentos que ya terminaba de arreglarse antes de salir de su casa.
Finalmente Cielo Riveros salió de su casa vestida terriblemente antojadiza y juvenil como ella estaba acostumbrada a hacerlo. Llevaba puesta una minifalda blanca no tan corta, pero sus piernas eran tan potentes y llamativas que era imposible no echar andar la imaginación con solo mirárselas, vestía también un ajustado top de color fucsia con tirantes en los hombros que hacían resaltar sus pechos bien paraditos y notoriamente duros. Su cutis lo llevaba maquillado como todas las nenas de su edad lo hacen, solamente lo suficiente como resaltar las partes más encantadoras de su fisonomía.
Unas horas mas tarde Don Benito estaba sentado en el paradero que se encontraba en la esquina de la calle en que él vivía. Llevaba unos 20 minutos por lo menos esperando el taxi colectivo que lo llevaría al centro cuando de pronto vio que por la vereda de al frente y por la esquina contraria de donde estaba sentado venía de vuelta a casa su nieta, estuvo a punto de hacerle señas, pero en el momento en que se percató de que ella venía acompañada de sus dos amigos, don Ángel y don Carlos, y que ambos traían en sus manos dos bolsas que según el observaba debían venir botellas en su interior, algo le indicó que lo mejor que podía hacer era observarlos, eso era bastante extraño, –¿Que andaba haciendo Cielo Riveros con sus dos amigos (de él) a esas horas del día?, si ellos deberían estar atendiendo la carnicería.
Y más extrañado aun quedó cuando vio que los tres se detenían al frente de su propia casa y que su curvilínea nieta tan bonita y arregladita como la había visto salir esa misma mañana con su minifalda blanca ahora en forma visiblemente apurada sacaba las llaves de su bolso para luego de abrir la reja del ante jardín y lo mismo con la puerta principal seguidamente hacer pasar hacia al interior de la casa a sus dos amigos (de don Benito) que a la misma vez eran los jefes de ella, la chica rápidamente había cerrado la puerta cuando ya estuvo adentro.
–Don Benito…! porque su nieta vino a la casa a estas horas…!?, -el jubilado recién se percataba que a su espaldas y a la salida de un negocio de verduras estaban paradas dos viejas conocidas que en forma atenta también habían observado a Cielo Riveros entrar a su vivienda con don Ángel y don Carlos, la que le consultaba era doña Beba, la vieja más habladora y hocicona de toda la cuadra, esta usaba tubos en su cabeza igual que doña Florinda, pero era algo más gorda y más vieja.
–Ehhh… ni idea… a almorzar supongo… esta es hora de almuerzo no?, -don Benito notaba las malas intenciones en las palabras de su vecina.

–Ahhh claro, ahora entendemos, -continuo diciendo la señora Beba, –O sea que la nena ahora que trabaja y que no está su madre para corregirla trae a sus dos jefes para la casa cuando tú no estás en casa, no es así…!?
Eeeee si sabia ya de antemano que ella llevaría a sus jefes para casa, mentía don Benito intentando hacer parecer la situación no tan comprometedora como se veía, o como la querían hacer ver el par de viejas feas, además que por muy extraño que pareciera todo, el confiaba plenamente en la conducta de su nieta.
–Pues no se nota Benito, tú te vez tan sorprendido como nosotras, ¡por Dios…!, deberías estar más pendiente de lo que anda haciendo tu nieta por ahí, si su Padre que en paz descanse estuviese vivo no perm…

El jubilado caminó nerviosamente desde el paradero hasta su humilde pero bien conservada y limpia vivienda, en el momento en que abrió la reja que antecedía al jardín de reojo miró hacia la esquina en donde estuvo esperando el colectivo, desde su nueva ubicación en la entrada de su casa pudo ver que las dos viejas habladoras aún se mantenían observándolo desde la esquina mientras cuchicheaban entre ellas.
Con mucho cuidado se acercó al muro de su modesta morada, y sin saber por qué en forma silenciosa se arrimó de espaldas a los ásperos ladrillos que lo separaban de lo que estaba ocurriendo al interior de su domicilio, las viejas extrañamente le habían sembrado una duda en su mente.
Don Benito se había acercado a la vivienda arrimándose contra uno de sus muros. Intentando no hacer ruidos rodeó su humilde casa hasta llegar a una de sus ventanas, sabía que por ahí existían fisuras que le permitirían comprobar en que andaba Cielo Riveros con sus amigos (de él).
Una extraña nerviosidad lo invadía al querer saber que era lo que en realidad estaba sucediendo en su mismo hogar, aunque a veces en su mente se decía que él no tenía que porque estar haciendo eso, con toda seguridad Cielo Riveros y los dos carniceros habían venido a buscar algo, quizás efectivamente su nieta los había invitado a almorzar sanamente tal como él les dijo al par de viejas habladoras que lo increparon en el paradero de colectivos, pero a su vez también temía que la cosa no fuera tan así y que algo aún más macabro de lo que su mente ya le dictaba podría estar sucediendo.

Desde su estratégica ubicación contra el muro y a un lado de la ventana estuvo por un par de minutos agachado y esperando que su nieta saliera de la casa acompañada de los dos hombres, sin embargo eso no sucedió, por ahora no se atrevió a mirar por las grietas que existían en el carcomido concreto y el marco de la ventana, solo se mantuvo esperando, hasta que a sus oídos llegaban las primeras palabras de los que estaban al otro lado del muro, incluyendo a su nieta.
Sin embargo al interior de la casa que estaba al medio de la calle en cuestión una extraña situación se sucedía, la joven Cielo Riveros acababa de cerrar la puerta por dentro y se encontraba extremadamente nerviosa acompañada de dos viejos calientes sin saber que estos no tendrían miramientos con ella al momento en que se les subiera la temperatura.
Los dos vejetes habían tomado ubicación en el sofá, mientras ella tímidamente se ubicó en una de las sillas, tenía ambas manitas cruzadas y apoyadas sobre las piernas, no dejaba de frotárselas levemente en forma temblorosa para secarse el sudor, la chica estaba muy alterada al estar en tal situación al interior de su casa.
–Bueno, ¿nos sirves algo para beber nenota?. –Era don Ángel quien se encargaba de romper el hielo. Su hermano, en igual estado, era quien ahora le daba más instrucciones:
–En las bolsas que trajimos hay cigarros y cervezas, por ahora qué tal si nos pasas unas chelitas primor, antes de que comencemos a jugar contigo, jijiji
-Sí, claro que si… –respondió Cielo Riveros con voz temblorosa. La chica tiritaba de un extraño miedo que poco a poco la había ido envolviendo, ahora pensaba que tal vez no había sido muy buena idea meter en su casa a sus dos jefes, por muy amigos que fueran ellos de su abuelo pensaba. Hasta que como pudo se puso de pie y se acercó a la mesa en donde habían quedado las bolsas que traían los viejos, de una de ellas sacó dos botellas de cerveza para pasárselas una a cada uno. Los viejos se la recibieron con agrado y desde el sillón la miraban de pies a cabeza mientras ya comenzaban a beber, obviamente ya se la estaban devorando.
Desde su ubicación desde afuera de la casa don Benito después de esperar unos instantes cambió de posición y estando en un alterado estado psíquico emocional puso uno de sus ojos en una de las grietas de la ventana, fijándose que efectivamente ahí estaba su nieta acompañada por dos hombres que el muy bien conocía. El atribulado abuelo aun no entendía muy bien lo que pasaba, pero prefirió seguir escondido para ver cómo seguía la cosa. Fue ahí cuando escuchó la extraña conversación:
–Mira chicuela…, -escuchó que decía don Ángel, –Espero que ahora que estamos en tu casa y solitos no te nos vayas echar para atrás, has sido tú quien ha cometido bastantes errores en dar los cambios en la carnicería, errores que nosotros estamos dispuestos a pasar por alto, incluso ya habíamos tomado una determinación, la que tu muy bien ya sabes…, aun así hemos preferido darte otra oportunidad, claro que con ciertas condiciones, jejejeje…, condiciones que tu solita aceptaste…
–Tampoco es nada tan grave, -le cooperó ahora Don Carlos a su hermano, –Solo te queremos ver algo ligera de ropas y que hagas todo lo que te pidamos…
–Yo… Yo no me echaré para atrás…, -dijo Cielo Riveros con un hilillo de voz, la chica estaba de pie ante ellos. Don Benito desde el hoyo de la pared veía a su nena cabizbaja, y como él la conocía notaba la inseguridad en lo que estaba diciendo, el hombre se daba cuenta que lo que estaba haciendo su nieta no era algo de su agrado, pero los viejos seguían presionándola.
–Pues entonces ya sabes lo que tienes que hacer pendeja, esta mañana ya te lo explicamos y tú te mostraste de acuerdo… -le vociferó don Ángel, que por lo general era el más prepotente de los dos. –Ve a tu habitación píntate de nuevo y ponte las cositas que te compramos.
Don Benito desde el otro lado del muro en forma escandalizada vio que Cielo Riveros una vez que tomó otra de las bolsas que estaban sobre la mesa se fue de la salita hacia su habitación cerrando la puerta tras ella, y dejando a la espera a los dos carniceros.
El desesperado jubilado no se la podía creer, ya había caído en cuenta que sus dos amigos estaban chantajeando a su nieta con no despedirla a cambio de algo por supuestos errores cometidos por ella, a eso se debía su alterado estado anímico en aquellos últimos días.
Ya que escuchó claramente que ellos querían verla ligera de ropas y que hiciera unas cuantas cosas, -pero que cosas serían esas?, meditaba.
Don Benito lentamente se dio vuelta hasta quedar sentado en el húmedo suelo de su patio, y ahora sí que su estado mental era un desastre, se sentía enfadado, tan defraudado y humillado por su insensata nieta como por sus dos amigos, pero aun así no era capaz de levantase y entrar a su propia casa a poner las cosas en orden, y esto era por un solo motivo, y este era que desde que había entrado al ante jardín de su casa tras haber hablado con sus vecinas se vio asaltado por un extraño e inconsciente morbo que le impedía dejarse ver y poner fin a lo que se venía inminentemente, claro que ese morbo no era por desear a su nieta postiza ni mucho menos, inexplicablemente para él deseaba saber a ciencia cierta si las viejas habían tenido razón en sus salidas indirectas, ahora escudándose en que él esperaba ver a Cielo Riveros echando dignamente a esos dos aprovechadores del interior de su hogar, decidió esperar a ver qué era lo que pasaba a continuación, su corazón latía aceleradamente.
Cielo Riveros tardó varios minutos en salir de su habitación, mientras los dos carniceros hablaban de sus cosas bebiendo y fumando, como si de verdad ellos estuvieran sentados en el mejor de los cabarets esperando ver un buen baile erótico. Fue por el sonido de la puerta que se abría en que los dos hombrones se quedaron boquiabiertos, al igual que don Benito que al escuchar el ruido de la puerta otra vez ya estaba en su puesto de observación.
Cuando la adolescente volvió a paso lento a la salita los dos carniceros en forma inconsciente estiraron sus manos hacia ella moviendo sus dedos que las hacían de garras y muy parecido a como si ambos tuvieran tics nerviosos en ellos, como si de verdad ya quisieran abalanzarse sobre ella para hacerle entre ambos miles de cosas.
Los hermanos vieron el momento justo en que se abrió la puerta de la habitación de la chica, y la femenina imagen que observaron los dejó casi fulminados, ante ellos estaba la dulce jovencita descalza y haciendo gala del poderoso cuerpo que se gastaba. El negro portaligas con medias también negras y que a la chica le llegaban un poco más arriba de la mitad de sus muslos le hacían ver su figura más curvilínea y tremenda de lo que ya era, la veían tal cual como era ella, un verdadero prodigio de hembra joven, la ajustada y minúscula tanga le tapaban solamente lo mínimo al grado de que con solo verle esa erótica parte de su cuerpo tenía a los dos viejos balbuceando lujuriosidades incoherentes.
En el momento en que la candorosa nena que los embrujó ya estuvo a medio metro de donde estaban ellos sentados con su ligero atuendo de prostituta de las altas esferas, fue don Ángel a quien primero le salió el habla,
–Vaya…! vaya…!! vayaaa…!!!, -el vejete le hablaba como no creyendo lo que veía, –Si que te ves bien putita con esos trapitos que te compramos pendejaaa…!!!, te ves aun mas buena de cómo te vemos todos los días en la carnicería mamiiiii…!!!!, -le dijo con sus ojos bien abiertos y sin dejar de recorrerla.
Por su parte don Carlos solo gesticulaba con su bocota abriéndola y cerrándola, sus dos dientes principales superiores se mostraban amarillentos y bien separados uno del otro, al pobre no le salía ni el habla ya que hasta le faltaba el aire ante tan impactante y deleitosa visión que estaba plantada a solo medio metro de donde ellos estaban comiéndosela, sumándole que aquel pequeño triangulo de tela negra que se ubicaba a una cuarta y media más abajo de su ombliguito, esta apenas cubría lo justo para que a la nena imaginativamente no se le asomara el nacimiento de los primeros pelitos que ella debía poseer en la parte más intima de su persona, y esto era lo que tenía a los dos viejos casi babeando de calentura.
–Es… tas… estas… riquisimaaaa…!!!, -fue lo primero que le dijo a la nena el hermano de don Ángel una vez recuperado del primer impacto, sin dejar de devorársela una y otra vez, –T… ta… tal como lo dijo Ángel… pa… parecees una p… pu… puta de verdad…!!!
Los dos vejetes habían planeado toda la noche anterior lo que pretendían que ella les hiciera aquella tarde antes de violársela, le pedirían que les bailara con aquel enloquecedor atuendo, pensaban tomarle fotografías desnuda con ella acostada y puesta de costado sobre la mesa del comedor, después de cogérsela habían ideado darle de comer un tazón de cereal pero reemplazando la leche con sendas cantidades de su propio semen caliente y espeso para que ella con cuchara en mano lo revolviera con el cereal para luego servírselo, y así muchas aberraciones mas, pero el viejo Ángel quien ya no se aguantó más después de un año de calentura acumulada simplemente se levantó del sillón para sin darle aviso a nadie abalanzarse sobre su cuerpo y con sus dos manazas deshacerse del sujetador de la nena en un tiempo record de un segundo y medio exacto, a continuación de eso y en el acto la tomó desde su estrecha cintura con sus dos grandes manazas de carnicero para comenzar a comerle las tetas en forma desesperadamente hambrienta.
Para Cielo Riveros todo eso que estaba viviendo era demencial, un rato antes y estando aun en la habitación solo se daba a pensar en su Abuelo, su madre, y en la memoria de su padre, no era justo para todos ellos lo que ella estaba haciendo, esto lo pensaba mientras miraba las negras medias que debía ponerse junto con los ligueros, esa ropa era de bailarinas eróticas meditaba tragando saliva, hasta que lentamente se dio a maquillarse suavemente tal cual como se lo habían pedido, y tras pensársela por varios minutos llena de dudas finalmente asumió que no le quedaba de otra, sino adiós trabajo, total serían solo un par de manoseos tal como ellos le habían dicho, por lo que procedió a quitarse su ropa para después ponerse lo que los dos viejos le compraron.
Luego de eso y ya estando en la salita fue que de un momento a otro se vio a ella misma atracada contra uno de los muros, sus sostenes ya no estaban y era don Ángel quien la sujetaba e inmovilizaba, este se daba a chuparle sus senos con una cara que llegaba a dar miedo, según ella veía en forma espantada.
–Slurppppssssss…! Slurpssss…! Slurpsss…!, -y otra vez Slurppppssssss…!, -se escuchaban los acuosos chupeteos en las tetas y en el silencio de aquella humilde casa, sumándose también los resoplidos animalescos por parte del caliente vejete en el momento justo en que tomaba aire para volver succionarle cualquiera de sus dos protuberancias de suave carne, incluyendo sus pezoncitos nunca antes lamidos por su rasposa lengua.

Noooo… d… don… An…Angel… dejemeeee… e… estooo no e…raaa p… par… teeee del t… tra… tratoooo…!!!, -le reclamaba la alterada adolescente una vez que pudo reaccionar al ardiente asalto por parte de uno de sus jefes, temiendo además que al viejo se le ocurriera no cumplir con su palabra.
Simultáneamente al otro lado del muro de la sala y estando agachado don Benito se preguntaba: -Pero qué tipo de trato es eseee…!!!???, -pensaba sin poder dejar de mirar la escena con su temblorosa mano puesta en la boca. Mientras tanto adentro de la casa la perversión recién comenzaba.
–No me interesaaaa…!!!!, -le gritó don Ángel a la chica en una oportunidad en que separó su babeante hocico de una de sus jóvenes chiches, –Te haremos esto y todo lo que se nos pueda ocurrir, jajajajaaa…!!!! Slurppppssssss…! Slurpssss…! Slurpsss…!, -volvía a la faena el vejete, seguidamente en leves intertantos continuaba corriendo la cortina de lo que realmente le harían, –De verdad eres tan pendeja que te creíste que solo te miraríamos…!? –Srpsssss…!!!

–Nooooo que diceeee…!? Ustedes lo juraronnnn…!!!, -les gritó Cielo Riveros mirándolo con espanto al entender al instante que su jefe le estaba diciendo abiertamente que no solamente serían simples toqueteos, en tanto el viejo seguía confirmándoselo.
–Jajajajaaa…!!!, ni yo ni mi hermano vamos a la iglesia putillaaa, así que anda preparándonos la papaya, porque hoy te convertiremos en una verdadera mujer, jajajajaja…!!!!
–Noooo… don Ángel… ya pareee…!!!, don Carlos… p… por favor… dígale algooooo…!!!!, -la pobre nena estaba desesperada, ahora en forma infructuosa intentaba separar a ese tremendo viejo de su lozano y níveo cuerpo, sumado a que inútilmente buscaba protección en el hermano del animal que en esos momentos le lamía y succionaba sus pechos casi con devoción.

–Jejejeje… no te asustes princesita, pero es que lamentablemente mi hermano te dice toditita la verdad, simplemente te vamos a culear dulzura,
Cielo Riveros veía como su otro jefe, don Carlos, mientras le contestaba semejante barbaridad se masajeaba la verga por sobre el pantalón no perdiéndose ningún detalle de cómo su propio hermano le magreaba y chupeteaba las tetas como un poseído.
–Noooo por favorrr…!!, se los pidoooo, no me lo hagannnn…!!! mi abuelo nunca me lo perdonaría…!!! Snifsssss…!!!, -comenzaba a llorar la aterrada adolescente al no tener dudas de lo que le harían sus dos jefes. Don Ángel quien la mantenía sujeta con sus dos brazos extendidos contra el muro solo se daba a succionar y lamer con sus dos ojos cerrados, ante las quejas de la chica.

–Tranquilita mija… únicamente será sexo, y Benito tu Abu no tiene por qué enterarse… Ayer nos dijiste que necesitabas tu sueldo, y que mejor forma de ganártelo con el sudor de tu frente…, -seguía confirmándole el menor de los hermanos.
–Yo diría que se lo va a ganar con el sudor y los jugos de su conchaaaa…!!!, jajaja…!!!, -Slurpssss…!!!, -el hermano mayor se había separado de una tetita solamente para opinar lo anterior, y luego volvió a la labor.
–Siiii…!!!, con el sudor de tu concha pendejaaa…!!!, jajajajaaaa…!!!! Y todo a espaldas de mi buen Benito nuestro amigo, jajajajajaaa…!!!!

Don Benito quien su estado en aquellos momentos era tan extraño como enloquecedor solo se daba a mantenerse agachado con la única finalidad de no ser visto por ninguno de sus dos amigos, su mirada a través de la grieta ya le daba cuenta que la hermosa hembra de cuerpo escultural que él había visto salir de una de las habitaciones de su casa vestida solamente en portaligas a la cual le estaban mamando las tetas era nada más y nada menos que su inocente y adolescente nieta.

A don Benito en su interior algo le incitaba a ponerse de pie e ingresar a la vivienda para poner fin a todo aquello que estaba a minutos de ocurrir, pero otra razón aun más poderosa le indicaba que se aguantara y que mirara lo que acaeciera, y esta misma razón estaba posesionada al interior del bulto de su entrepierna, como en años que no lo sentía su verga estaba bien parada y pulsante, el Abuelo postizo de Cielo Riveros tenia la verga bien parada, sintiendo como esta derramaba líquidos desde su punta humedeciéndole el pantalón, la sensación que le producía lo anterior sumándose con el perverso morbo que lo envolvía era tan rico, que el contrito progenitor prefirió quedarse agazapado tras el muro como si nada. Él quien estaba tan lleno de sentimientos filiales y contradictorios que se mezclaban con las vilezas que se habían ido apoderando de su mente ya quería ver como sus dos amigos carniceros se lo hacían a su nieta, por lo que intentando no hacer ruido continuó con su mirada puesta en la grieta del muro, mientras que con una de sus manos comenzaba a apretarse su endurecido pene, primero suavemente, pero esto iría en aumento a medida que se desarrollaban los acontecimientos dentro de su vivienda.

En tanto al interior de la casa una heroica lucha de cuerpos se libraba entre una inocente adolescente contra un asqueroso tiranosaurio rex, -era este quien otra vez le refregaba en su cara lo que le iban a hacer mientras la seguía manteniendo inmovilizada contra el muro luego de haberle soltado las tetas:
–Te vamos a coger toda pendeja…!!! Jajajajaaaa…!!! Te vamos a culear hasta hartarnosss…!!!!, por fin mi hermano y yo nos vamos a tirar a nuestra suculenta cajera, jajajaaa…!!!!, -el vejete mientras le decía todo esto ahora se daba a olerle su cuello y sus aromáticos cabellos.

–Te lo dije Ángel… te dije que esta hermosa putilla algún día nos iba a abrir esas tremendas piernotas que mirábamos desde detrás del mostrador de la carnicería, así que viólala rápido que a mí también me urge meterle la verga en la concha, jajajajaaaa…!!!
Con estas fatídicas palabras la jovencita lloraba con más amargura y miedo que antes, cosa que a los dos carniceros parecía no importarles, sus vergas ya a medio parar estaban enormes, y lo estarían aún más en los deliciosos momentos en que ya estuvieran adentro de aquel suculento y juvenil cuerpo de aquella linda chica.

Don Ángel al verla casi desnuda y llorando en la antesala de su eventual apareamiento ya no se aguanto más y simplemente la tomó de un brazo para comenzar a llevársela casi arrastrando a una de las habitaciones, necesitaba urgentemente una cama.
–Nooooo…!!! don Angel…!!!, sniffssss…!!! que haceee…!!!??? sniffssss…!!! usted me lo prometió…!!!, lo prometioooo…!!!!
–Cállate zorraaaa…!!!! ya es hora que me des de probar de tu panocha, ha sido un año en que te has encargado de calentarnos sin convidarnos nada así que ahora tomaremos lo que nos pertenece, además que somos tus jefes por lo tanto debes obedecer, jajajajaaaaa…!!!

–Noooo…! No…!, yo no lo haré…!! Snifsss…!!, despídanme si así lo quieren pero no me lo hagannn…!!!, Sniffssss…!!! despidanmeee…!!! Despidanmeee…!!! Snifsssss…!!!!, -imploraba la adolescente mientras era arrastrada en dirección a la cama.
–Jajajajaaaa…!!!, muy tarde lindura, nos diste tu palabra y solo hace un rato nos dijiste que no te echarías para atrás así que camina perraaaa…!!!!, -el viejo Ángel de fuertes jaloneos la hacía avanzar.

–Para donde te la llevas hermano…?, -consultaba don Carlos desde el sillón mitad entretenido y mitad curioso a la misma vez que bebía cerveza.
–Ps…! me la pienso coger en la misma cama de su Abuelo, jajajajaaaa…!!!
don Benito con solo escuchar eso último rápidamente salió de su posición. Ante la enajenante situación que se estaba viviendo al interior de su vivienda cualquiera de nosotros creería que el viejo se dirigiría a la puerta de la casa para ingresar a ella y salvar a su Nieta, pero el lujurioso y nervioso progenitor hizo todo lo contrario, a gatas bordeó la casa hasta llegar por fuera de la ventana de su habitación, sabía que ahí también existían grietas que le permitirían ver lo que sucedería.

Ya estando en la misma entrada de la habitación del Abuelo de Cielo Riveros , don Ángel le devoraba a la jovencita sus sollozos con ardientes y desesperados besos en la boca con los cuales le robaba el aliento, mientras sus peludas manazas la recorrían entera, para luego de eso con fuerzas arrojarla sobre la cama a la misma vez que le iba notificando:
–Ahora si pendejaaaa…!! ahorita grita y llora todo lo que quieras…!!!
–Noooo don Ángel que haceeeee…!? Dejemeeee…!!!!, -le gritaba la jovencita desde la cama, aunque cada vez estaba más espantada la nena se veía muy rica tendida en el lecho donde dormía su padre, con su albo cuerpo perfecto y con las porta ligas parecía una joven debutante de película porno a lo que en definitiva en el futuro se convertiría en la actriz porno Cielo Riveros Stone.

El viejo junto con lo ultimo simplemente se había dado a rodear la cama mirándola en forma sexualmente hambrienta, y don Carlos quien ya estaba al interior de la habitación hacía lo mismo.
–Te ves realmente exquisita con esos portaligas que yo mismito escogí y te compré, Jejeje, pareces una verdadera puta barata.
La jovencita solo se daba a llorar y a gemir en forma desconsolada por todos los insultos que le proferían, con sus ojitos verde-claritos rebosantes de lágrimas ahora veía a sus dos jefes de la carnicería sobarse sus bultos a un lado de la cama en donde ella estaba esperando a ser violada, mientras que las palabrotas por parte de don Ángel continuaban, este a medida que le hablaba se iba echando sobre la cama para al mismo tiempo comenzar a manosearla:
–Jajajaja… ese lloriqueo de putinga arrepentida no te va a servir de nada cosita rica, desde que llegaste a trabajar a nuestra carnicería con tus modositos vestidos algo cortos, o con esos pantaloncitos apretadísimos que te embutes para enseñarnos el culo, solamente para provocarnos, te pasaste de la raya por eso le dije a mi hermano que la nietita de nuestro queridísimo amigo Benito iba a tener que ser nuestra algún día, ya que la cara de putilla que escondes detrás de esa de niña buena no te la quitan ni a palos, y mira tú que hemos tenido buena suerte, esperamos tanto tiempo por una oportunidad como esta y aquí te tenemos a un paso de cogerte con tal de mantenerte en tu puesto, jajajjaaaa…!!!

Cielo Riveros lloraba aun mas con lo que le decían, aun tenía unas vagas ilusiones de que algo o alguien llegara a salvarla, al mismo tiempo que con sus débiles manitas luchaba intentando hacer que el vejete no la tocara, cosa que no surtió efecto ya que el carnicero una vez que estuvo recostado en el lecho a un lado de ella rápidamente la sometió y ya la estaba besando asquerosamente en la boca, o literalmente se la estaba comiendo, mientras que su hermano sentado en una silla que el mismo había traído desde el comedor se daba a disfrutar de la desquiciante función.
CONTINUARA… EN EL PROXIMO CAPITULO CIELO RIVEROS POCO A POCO COMENZARA A DISFRUTAR DEL ABUSO POR PARTE DE SUS JEFES MIENTRAS SU PERVERTIDO ABUELO POSTIZO TAMBIEN DISFRUTARA DEL ESPECTACULO QUE LE REGALABAN EN SU PROPIA HABITACION.
El viejo le decía.Te la voy a meter putita, te la voy a embutir entera, te voy a taladrar toditita hasta que empieces a gozar y a pedir tu sola a que te den más verga, jajajaaa…!!!!, y luego de eso le daré el pase a mi hermano para que también te pruebe, jejejeeee…!!!
Mientras el vil carnicero se daba a devorársela oralmente besándola en la boca con verdadera desesperación este también le chupeteaba y le lamía el cuello y su cara, estrujándole sus tetas con rudeza, en tanto la chica de solo 19 añitos, ingenuamente y en forma desesperada les continuaba rogando que no le hicieran nada, ella ni se imaginaba que con las palabras usadas en sus ruegos lo único que hacía era calentarlos aun mas:
–P… Por f… fa… favor no me lo h… ha… hagannn… pro favor patroon!!!
Con solo escuchar aquellos ruegos los ojos de los viejos ya brillaban de lujuriosa excitación, ambos suponían que la chica estaba en serio rogándole que no se lo hicieran, pero al viejo Ángel al estar escuchando semejante poesía a un lado de sus peludas orejas fue y le dijo:

–Como me calientas con lo que nos cuentas mami, y si, te ves bastante apretadita, si hasta en tus pasos se nota lo cerrada que estas cuando caminas… a todas luces uno se da cuenta que te debe costar trabajo abrirte de patas…, jejejeeee…
Cielo Riveros otra vez lloraba desconsoladamente ya que su jefe tras terminar su tanda de vulgaridades otra vez se lanzó a chuparle las tetas con desesperación y violencia, sus rosados pezoncitos sin ella quererlo ni notarlo aun en forma gradual comenzaban a endurecerse.
–Nooooo ya bastaaaa don Angellll…!!! ya no chupeeee…!!! yo no quiero estoooo…!!! dejemeeeee…!!!!
Pero los gritos de la bella adolescente mas prendían al par de degenerados, sobre todo a don Ángel que se estaba dando el festín de su vida…

Solo aguanta y acéptalo pendeja… desde hoy día en adelante te haremos de todo, y tú te dejaras porque esto te encantará una vez que pruebes nuestras viejas vergas casadas… si ya hasta mandamos a comprar un catre que instalaremos en la bodega de la carnicería, así te culearemos todos los días o cuando sencillamente nos venga en ganaaaa…!! jajajajaaaa…!!!!
Cielo Riveros con terror desde su posición en la cama vio como don Carlos ya tenía su verga al aire y se masturbaba mirándola a ella, esta era la primera vez que la chica veía el pene su jefe, y más espantada aun quedó cuando el mismo viejo Ángel ya hincado a un lado de ella procedía a sacar una enorme masa de carne peneana de entre medio de su pantalón, la jovencita en estado casi de shock caía en cuenta que ambos viejos la tenían bien parada, y ahora al estar tan llenos de lujuria y perversión era don Ángel el primero en enseñársela abiertamente:

–Así que nunca has visto la mia…!? –Pues mírala bien pendejita rica… es toda tuya, desde orita pasa a ser tu nueva mamila de lechita caliente, beberás de su contenido a diario, jajajjaaaa…!!!
Cielo Riveros ya estaba agotada, desde su ubicación solo se dedicó a mirarle la verga a don Ángel en forma atónita y con su cuerpo temblando de miedo, aquel instrumento que le enseñaban era enorme, nunca imaginó que un el pene de su jefe fuera tan feo y grande, era muy grueso y largo, de un color café oscuro y lleno de pelos negros desde la mitad del tronco de este hasta su base en donde colgaban dos grandes testículos que parecían nueces gigantes.
Una vez que don Ángel con orgullo le enseñó su verga a su joven víctima, con total propiedad se la restregó por todo su rostro, la chica solo gemía en forma desfalleciente a la vez que movía su carita intentando esquivarlo, esto duró por lo menos dos largos minutos, luego de eso con una de sus manazas le agarró una teta para también frotarla contra esta, la suavidad que sintió en el despejado glande cuando lo hizo fue tan intensa que por poco casi se corre, la chica nuevamente estaba llorando al sentirse tan sucia y violada al estar ahora el vejete abiertamente masturbándose con sus dos duros senos.

Don Ángel después que se dio por satisfecho inmediatamente se dispuso a terminar de desnudarla, la jovencita solo lloraba y a veces suplicaba, pero estas de nada le sirvieron, el carnicero incluso después de desproveerla de sus pequeños calzoncitos ya le estaba quitando también las medias del porta ligas, fue ahí cuando ella supo que estaba solo a minutos de que le ocurriera de todo, el viejo le estaba mirando su vagina con cara de desquiciado a la misma vez que se iba ubicando al medio de sus piernas:
–Que rica panocha es la que tienes putitaaaa…!!! tus pelitos castaños y casi claritos te forman un pequeño triangulito muy ricoooo… tal cual como a mí me gustannnnn…!!!, -junto con esto el viejo le asestó una serie de fuertes vergazos en la joven vagina de la nena para luego de eso simplemente alargar su mano hasta sus claros cabellos, empuñarlos, y con violencia atraerla y ponerla forzosamente en 4 patas con su asustada carita a escasos centímetros de su grotesco aparato carnal, la chica en forma asustada veía como unos delgados hilillos de liquido trasparente muy parecido a la clara del huevo caían de la punta de esa cosa, fue ahí cuando supo que era lo que le tocaba hacer en aquella extraña posición en que la tenían:
–Bien pendeja… lo primero que harás para comenzar este juego será comerte mi herramienta, o sea, me vas a chupar la verga hasta que te tragues todo el liquido que salga de su interior cuando me este corriendo, está claro putita…!?

El viejo sin esperar respuesta por parte de la chica se afianzó su cabeza pasando una mano por la barbilla y con la otra puesta por detrás de su cabeza y simplemente de un solo empujón se la atravesó por sus labios hasta un poco más de la mitad de su gruesa longitud.
En el momento en que Cielo Riveros la sintió entrar hasta su misma garganta fue víctima de unas fuertes arcadas, sus mejillas se hincharon, al igual que sus ojos que se abrieron como platos, y ríos de saliva y bilis se filtraron por entre sus labios y las rugosidades de la verga incrustada en ellos, en eso don Ángel comenzó a culearle la cabeza sin importarle el padecimiento de la chica,
–Eso… eso… eso… putita… así es… chupalaaa…!!!
El viejo carnicero le hablaba a la chica como si de verdad ella se la estuviese chupando por propia voluntad, esto no era así, él la estaba violando, pero seguía con sus ardorosas arengas:
–Vamos putingaaaa…!!! Ahora saca tu lengüita lo que más puedas, -le decía sin dejar de masturbarse el mismo con la cabeza de la jovencita.
En eso estaban cundo el otro hermano que era un simple espectador se puso al lado de Cielo Riveros y con su mástil parado como nunca esperaba su turno para la chupada, la nena al darse cuenta que el otro instrumento también requería atención dejo de chupar la verga a don Angel e imploro.
¡!por favor don Carlos ud noo no los dos ala vez!!!
¡!!callate puta que mi hermano también merece que se la chupes!!!
¡!!demuestrale lo bien que lo haces vamos pruébala te va a gustar!!
Cielo Riveros agarro con sus delicadas manos la verga de don Carlos y tímidamente empezó a besar el glande del viejo que era grande como una ciruela gigante, después simplemente abrió sus frescos labios y engullo mas de la mitad de verga caballuna que tenia su otro jefe.
¡!! Eso putilla chupala como me la chupaste a mi demuestra lo guarra que sos demuestra que lo haces como la mejor de las prostitutas jajajaaajaa!!
La colegiala alternaba los chupeteos, tenia al lado las dos vergas que punzaban sus mejillas las dos quería las caricias de su lenguita ya experta en cuestiones de fellatio no era la primera vez que Cielo Riveros tenia en su boca miembros de los tipos que siempre abusaban de ella.

Por otro lado, o más bien dicho desde el patio y por el hoyito de la pared el abuelo de la chica estaba al borde del ataque cardiaco, con su mano puesta en la verga y masajeándosela apretadamente veía como una hembra hecha y derecha se mantenía desnuda y puesta en la cama en 4 patas con sus muslos separados uno del otro, apoyándose con sus dos palmas en la cama aguantando una bestial cogida por la boca, pero su excitación se volvía cada vez mas deliciosa al tener en cuenta que a la mujer que con toda seguridad se la iban a salir violando era su nieta postiza.
En tanto adentro de la habitación uno de los ardientes carniceros ya se la metía toda, la chica literalmente se estaba atorando con casi 25 centímetros de verga salada.
Cielo Riveros casi no respiraba, solo se deba a retorcer su cuerpo en desesperados y arrítmicos movimientos en busca de un poco de aire, pero los dos hermanos no le daban tregua, al contrario de ayudarla don Carlos estiró su manaza y le mandó tres fuertes palmadas en las nalgas para ver si con eso dejaba de moverse y morderle la verga.
–Plaffffffffff…!!! Plaffffffffff…!!!! Plaffffffffff…!!!!!, -retumbaron y sonaron las carnes de la chica una tras otra tras el abusivo tratamiento del carnicero, este mismo continuo metiéndole y sacándole su verga de la boca por un buen rato.

–Eso putaaa…! eso essss…!! así… así…!! Así es como se mama la vergaaa…!! Ahhhhh…!!! Ohhhhhh…!!!! Mmmmm…Podes muy bien con las dos jejjee!!!!, -le bufaba el despreciable hombre a la jovencita mirándola con cara de degenerado a la misma vez que le seguía moviendo la cabeza de atrás y para adelante en forma acelerada.
El bello rostro de Cielo Riveros en esos momentos era un desastre, de sus ojos caían copiosos ríos de lagrimas a raíz de la asfixia a la cual la sometían, sumándole que por su naricita le salían continuamente gruesos cordones de saliva mezclada con líquidos pre eyaculatorios, estos escurrían por las laterales de su carita y luego colgaban por su barbilla moviéndose al mismo ritmo en que los viejos la sometian.
Fueron varios minutos en que a la ultrajada adolescente en forma forzada la tuvieron chupando verga, uno de los vejetes en un principio había pensado en eyacular al interior de su boca para que se lo tragara, pero con solo ver lo buena que estaba al tenerla completamente encuerada y puesta en 4 decidió finalmente que ahora deseaba correrse dentro de ella:

–Muy bien zorra… ya demostraste que sos experta en mamar verga, ahora voy a comprobar yo mismo si es cierto que tu concha está para recibir verga, ya tu fama traspasa fronteras, jejejeje…en todo el pueblo se habla de que te revolcaste en cuanto viejo se te cruzo en el camino, nunca tu novio siempre tipos grandes, se nota que los prefieres maduros, entonces Si eso es así este mismo lunes te daré un bono en efectivo para que te lo gastes en lo que tú quieras, jejejeeee…!
Cielo Riveros en forma automática cayó en pánico, el viejo ese le estaba diciendo abiertamente que le iba a introducir su tremendo aparato al interior de su cuerpo a cambio de unos cuantos pesos, a la jovencita aun le colgaban vistosas cantidades de líquidos pre seminales desde sus labios y narices y en esas condiciones rápidamente gateo por la cama para ubicarse acurrucada en el respaldo de esta en señal de auto protección, mientras miraba aterrada como aquellos mastodontes se comenzaba a sacar la ropa, para luego también observar como Don Carlos que había decidido participar activamente de la violación y mirándola con una extraña sonrisa en su rostro, la chica sabia que los viejos no tendrían contemplación hacia ella solamente tendrían decidír cual de los dos iba a ser el primero en ensartale la verga, y fue don Ángel el mismo que ahorita se estaba empelotando para con su verga probar al interior de su estrecha e intima hendidura.
Los dos viejos estaban mirándola con la calentura saliéndole hasta por los poros, sus ojos ya estaban inyectados en sangre, sabían que la chica estaba aterrada por lo que ahora iba a suceder y si como ambos estuviesen programados, comenzaron a decirle ellos mismos lo que le iba a pasar, claro que con groserías de grueso calibre:
–Tranquila dulzura… ya verás lo mucho que te va a gustar nuestras vergas después de que la pruebes… jejejeje…, -don Ángel tras decirle esto ya terminaba por sacarse los calzoncillos para quedarse completamente desnudo, una vez que lo estuvo tomó a Cielo Riveros de las dos piernas y la arrastró hacia el centro de la cama para el acomodarse al medio de sus muslos.
La jovencita en el acto comenzó a lanzar patadas y a hacer movimientos de huida, sin embargo en el acto se sintió inmovilizada, era don Carlos quien también desnudo rápidamente se había lanzado por el lado de la cama en donde estaban las almohadas, claramente era para prestarle cooperación a su hermano.
–Noooo…! que hace don Carlos…!! Suélteme…!! sueltemeeee…!!!!, -la jovencita ahora intentaba mover sus brazos, pero ya casi no tenía fuerzas, solo veía el enfermo rostro sonriente de don Carlos quien estaba detrás de su cuerpo inmovilizándola para que don Ángel pudiera hacer lo suyo, ahora era este mismo (don Carlos) quien le hablaba:
–Quédate quieta pendeja que ahora te vamos a convertir en una verdadera puta y aparte de quitarte lo mojigata… también serás nuestro receptáculo de semen, jajajjaaaa…!!!
La desnuda chica solo hacía fuerzas con todas sus extremidades con tal de liberarse pero era imposible, en tanto los viejos seguían diciéndole en forma ordinaria lo que le iba a ocurrir.
–Así es pendeja… Te acostumbrarás tanto a nuestras vergas que después que las pruebes nos andarás suplicando para que te culiemos a cualquier hora del día…, -el viejo Ángel mientras le hablaba le abría una y otra vez sus muslos ya que la chica en cuanto podía intentaba cerrarlos. –Vas a prestarnos todos tus agujeros, sobre todo el del culo que es lo que mas deseamos…
Ahora era el hermano menor quien le hablaba:
–Ya te lo dijimos… solo serás nuestra cosa para culear, jajajajaaaa…!!!!, -don Carlos había pasado los brazos de la chica por detrás de su cabeza para luego aprisionarlos con sus dos rodillas, Cielo Riveros sentía el duro miembro de su jefe punteándole la espalda y tras decirle lo ultimo con sus dos manazas la tomo de la cara obligándola a que abrirá su dulce boquita y una vez que lo logró inclinó su cuerpo para seguidamente escupir tres veces dentro de su boca. La nena desde su posición estando tendida de espaldas con repulsión recibió los tres escupitajos del vejete para en el acto y en forma más espantada aun ver que ahora era don Ángel quien estando casi encima de ella le mandaba otros tres sendos escupos tan copiosos y asquerosos como los tres primeros.
La fuerzas de Cielo Riveros ya eran nulas, sus muslos estaban sin energías, abiertos y temblorosos, por lo que simplemente se dejó hacer por los dos carniceros, ya que después de haber sido obligada por don Carlos a tragarse los escupos cerrando y tapándole la boca con sus dos manos, este mismo se lanzo a ensalivarle y succionarle las tetas aprovechando la posición en que estaba, mientras que don Ángel se ocupaba desde su ombligo para abajo.
Fueron varios minutos que la jovencita estuvo aguantado el doble magreo a su cuerpo, mientras uno le besaba y mamaba sus pechos aplastándole sus brazos el otro con su gran manaza le masajeaba su vagina, claro que solo superficialmente y sin llegar a abrírsela con sus dedos, el viejo Ángel estaba guardando esa tarea para realizarla con su gruesa herramienta que ya en esos mismos momentos la tenía temiblemente bien parada.
Por primera vez en el transcurso de aquella tarde algo extraño sucedía en la joven sensualidad de la chica, tal vez se debió al intenso masajeo en su intima hendidura, o a las dolorosas succiones en sus tetas, la cosa fue que de un momento a otro Cielo Riveros comenzó a mojarse, su vagina y su cuerpo en parte ya respondían al acalorado tratamiento por parte de los carniceros, junto con ello su verdosa mirada estaba puesta fijamente en la tremenda y descomunal erección del viejo que la masturbaba, la jovencita se la miraba sin parpadear ni quitar la mirada de ella, con esto su inocencia poco a poco se iba diluyendo, fue como si con la sola visión de esa terrible masculinidad que se envaraba cerca de su vagina hubiese hecho un click en alguna parte de su sistema nervioso haciendo que su cuerpo comenzara gradualmente a acalorarse.
Apenas don Ángel cayó en cuenta de lo que estaba sucediendo en el cuerpo de la chica rápidamente se dio a celebrarlo con su hermano:
–Jajajajaaaa…!!! Mira nada más…!!! Parece que nuestra perra ya está caliente, jajajajaaaa…!!!
Don Carlos separándose de las tetas de Cielo Riveros miraba como su hermano le enseñaba sus dedos mojados con los caldos de la chica, para él eso tenía un solo significado y este era que la jovencita ya debía tener deseos de verga, para luego mirarla a ella y decirle:
–Ves putita ricaaaa…!? nosotros sabíamos que igual terminarías por calentarte… si ya estas toda mojada, jejejeje…
Cielo Riveros tras escuchar lo que le decían aquellos dos enfermos mentales rápidamente volvió a la realidad y retiró su mirada de la parada verga de don Ángel diciéndose para sí misma que ella no estaba excitada, y que al contrario de ello únicamente se sentía asqueada, y tan dolida como asustada, no queriendo reconocer que su cuerpo estaba comenzando a sentir lo contrario y que este al parecer había respondido a la masturbación del carnicero en jefe.
–Bien… bien zorrita… se ve que te gusta lo que te hacemos, Jejeje, así que no te preocupes porque te haremos esto y mucho más, si hasta nos rogaras por mas verga, por mas carne salada, te meteremos el chorizo hasta que te desmayes, jajajjaaaa…!!!!, -junto con decirle lo ultimo el ardiente carnicero empezó a comerle toda la vagina, saboreando y sorbiendo con sus gruesos labios los jugos vaginales que aun chorreaban de aquella joven abertura de carne femenina.
–Nooo… no por favor ya no lo hagaaaa…!!!, -le rogaba Cielo Riveros a su jefe, pero el viejo ya se la estaba devorando como desesperado, mientras el hermano de este se jalaba la verga en forma compulsiva sobre el rostro de la chica aun manteniéndola inmovilizada con sus piernas sobre su brazos y mirando cómo le comían la vagina.
Don Ángel lengüeteaba toda la intima entrada de la chica, luego se la probaba con los dos labios bien abiertos comiéndosela como solo un verdadero depredador lo podría hacer, extrayendo con estos todos los jugos que ella sin saber el porqué otra vez estaba dejando salir, este se los bebía tal cual como lo haría con los jugos de un durazno maduro.
Esto ya había sido mucho para la jovencita, aunque ella no lo deseaba su cuerpo ya respondía deleitosamente a tanta masturbación, o en otras palabras Cielo Riveros verdaderamente ya estaba conociendo lo que realmente era el sentirse caliente, los abusos hacia su anatomía ya eran demasiados, el mayor de los hermanos a sabiendas del estado de la dulce chiquilla rápidamente subió su obesa humanidad por sobre el curvilíneo cuerpo de su joven víctima, la iba a poseer ya.
Cielo Riveros de un momento a otro se vio a ella desnuda y de espaldas en la cama en donde dormía su abuelo Benito, con don Ángel montado sobre su cuerpo y con don Carlos ahora echado hacia un lado pero manteniéndole sujetos sus bracitos para que ella no se defendiera,
–Ya está mi hermosa puta adolescente… por fin ha llegado la hora de que te tragues mi verga por ese lindo coño apretado que me acabo de comer, jejejeje…, -Cielo Riveros sabiéndose perdida y aun intentando contener los cálidos caldos que fluían de su vagina lloraba por todo lo que le estaba ocurriendo pensó equívocamente que los abusos que desde hace casi un año ya no ocurrían podría ella estar ya fuera del alcance de viejos abusadores , don Ángel continuaba con sus palabrotas, –Ahora sí que si mi zorritaaa… mi cajera de tiempo completo, ha llegado el día y la hora en que te vas a convertir en mi hembra, Jejeje no es una maravilla?
Ante estas palabrotas la chica solo lloraba con su carita puesta hacia uno de sus desnudos y relucientes hombros sintiendo como la inmovilizaban de los brazos para que no se moviera y ya sintiendo también la cabeza del pene de don Ángel juntarse con la intima entrada hacia su persona, el vejete había puesto sus fornidos brazos justo al medio de sus muslos doblados obligándola a abrírselos por completo.
–Mmmmm… esto se va sentir como a Dioses mijita ricaaaa…, estas piernotas tan cerraditas como siempre las veía cuando estabas sentada en la caja ahora te las tengo totalmente abiertotas, y ellas me darán esa ofrenda que me tienes guardada al medio de ellas, será un regalo que me darás y que no olvidare jamás…, -le decía el muy miserable a la misma vez que con su mano agarraba su verga y se la paseaba por toda su apretada rayita , junto que con hablarle besarle sus relucientes rodillas las cuales las tenía una a cada lado de su grotesca humanidad. –Te la voy a meter putita, te la voy a embutir entera, te voy a taladrar toditita hasta que empieces a gozar y a pedir tu sola a que te den más verga, jajajaaa…!!!!, y luego de eso le daré el pase a mi hermano para que también te pruebe, jejejeeee…!!!
El viejo Ángel ya no aguantándose más cerró sus ojos y con fuerzas descomunales fue metiéndole su enorme verga sin contemplaciones.
CONTINUARA…EN EL PROXIMO CAPITULO LA DOBLE FOLLADA QUE EXPERIMENTAR CIELO RIVEROS EN MANOS DE SUS DOS APROVECHADORES PATRONES.
Don Benito desde su posición a través de la destartalada puerta no daba mas de tanta exitacion su casi nieta era sometida por sus dos mejores amigos, y el en vez de estar evitando tremenda aberración solo se daba a estar observando y excitándose por lo guarro de la situación, ahora la tenia dura.
El viejo Angel con toda la concentración del mundo fue hundiendo su grueso mástil en la intimidad de la hermosa adolescente, a pesar de que Cielo Riveros tenia una panocha muy estrecha la lubricación que había adquirido después de tanto magreo la poronga del abusador patrón se deslizaba sin contemplaciones al interior de la nena.
¡!! Por favor don Angel saqueloo yo no puedo acostarme con usted, yo ya tengo novio se llama Rodrigo, el no merece que yo haga esto, por favor doncito y no me la meta!!!
--Me importa una verga si tenes novio, o estás casada o soltera…!!!, le gritó Angel, --El caso es que cuando yo te lo diga tú lo haces!!! Acabo de decidir que te quiero coger!!! Y vos te dejaras coger!!! Entendiste escuincla de mierda!!! Diciéndole esto último la tomo bruscamente de sus cabellos y la jaloneo hacia su cuerpo para que ella lo mirara directamente a su cara, para luego continuar…--Te recuerdo que desde que el estúpido de mi amigo Benito no esta en casa vos pasaste a ser mi mujer! Mi puta personal!! Serás mi zorraaa las veces que el no este!!! Y si tu novio al que tanto defiendes fuera un hombre de verdad estaría aquí defendiendo la reputación de su novia, asi que dime miento o no miento en lo que digo contestaaa putaa…Así que andate preparando pendeja, en un tiempo más te iras a vivir conmigo y mi hermano Carlos lo abandonaras a el y nos juntaremos!!! Jajajaja!!! Te llenaremos de hijos!!! Jajajaja!!! Pero antes te hare putiar con todos …jajajaja!!! Además te deberás abrir de patas y culiar con todos los proveedores a los cuales debemos plata, todas las veces que yo te lo ordene, así que dejate de contestarme estupideces, te queda claro grandísima putaaaa!!!
En la mente de Cielo Riveros lentamente se iban formando las ideas: una vez mas engañando a Rodrigo, una vez mas dejándose abusar por viejos que por la edad podrían ser su padre, una vez mas víctima de el deseo que despertaba su hermoso y curvilíneo cuerpo que no hacia mas que meterla en mas y mas problemas, las atrocidades que alguna vez escucho hablar a sus violadores de turno como el jorobado conserje, su maestro de secundaria que abuso también de ella, don Pedro, el comisario Sinforoso, incluso su casi Suegro el padrastro de su novio Rodrigo habían logrado aparearse con Cielo Riveros , y eso la atormentaba, como era posible que pasaran tantos hombres por su vida sin siquiera ella buscar ese destino, pero aun no tenía la idea formada, su mente trabajaba mil, hasta que vio como ese amorfa herramienta de carne que se le levantaba por su tremenda panza, se hundia centímetro a centímetro por su pequeña panocha, fue como un ejercicio matemático o una ecuación de función algebraica, en donde todos los productos calzaban y daban el resultado exacto… por fin lo entendió… mirándole la tremenda verga del vejete su mente se lo dijo: se lo iban a meteeer todaa!!!???
Miro al viejo con cara de espanto y automáticamente como una defensa natural la vagina de la joven empezó a expulsar fluidos para que el aparato que se le estaban metiendo se deslizara sin tener dificultades, apenas pudo balbucear, muy bajito, casi inaudible, con sus ojitos llenos de lágrimas le dijo, --Nooo…! don Pricilooo!!, por favor eso…noooo…!!!, y el viejo con la más aborrecible de sus sonrisas, y con cara de ser un auténtico degenerado, le dijo…--Siiiii pendeja calienteeee!! Eso siiiiiiiiiii!!!!
El viejo seguía enterrándole la verga en su suave rendija, la jalo de los pelos y aprovechando que Cielo Riveros abrió levemente sus hermosos labios fresa le planto un brutal y profundo beso , con sus lenguas entrelazadas e intercambiando salivas, aun así el viejo pudo notar que de la boca de la nena empezaban a salir con mas vehemencia auténticos y genuinos gemidos de placer.
Suavemente el cuerpo de Cielo Riveros empezó a menearse con movimientos pélvicos, movía solamente su estrecha cintura, por cada sobajeo de verga que le daba el viejo en su cosita, ella la meneaba hacia adelante, como saliendo a darle la bienvenida a esa tranca que la tenia casi embutida por completa, ambos se movían con calientes y eróticos movimientos, hasta que alcanzaron una perfecta sincronización que daba la impresión de como si ya se conociesen por años , en ese estado estuvieron un buen rato gozándose uno al otro.
. Nunca en su vida el viejo pensó que se iba a encamar con una pendeja tan preciosa como lo era Cielo Riveros . La gorda rinoceronte que tenia como mujer no fue tan agraciada, solo se caso con ella por en interés de su negocio, y con la putas que él se metía ninguna le llegaba ni a los talones a nuestra dulce Cielo Riveros . Es mas, algunas meretrices hasta se arrepentían del trato comercial que habían adquirido con él, al notar su hediondez y fealdad, y este muchas veces tenia que hasta golpearlas para que se dejaran follar por él, e incluso a mas de alguna puta barata le pago para él darse el solo gusto y placer de pegarles.
Pero ahora era todo muy distinto la bella adolescente se dejaba culiar sin casi ningún problema incluso notaba que con pequeños movimientos pélvicos que la nena si le estaba gustando que le metan la verga en su estrecha panocha…
Por su parte el Carnicero estaba eufórico, se quedo quieto con las tres cuartas partes de su verga ensartada en ese exquisito cuerpo que el destino le había ofrecido, el cuerpo de Cielo Riveros , el cuerpo de una hermosa adolescente, era la nieta de su amigo Benito, y aprovechando que el anciano no estaba se la estaba culiando en la mismísima cama del septuagenario…
Don Angel con su verga totalmente parada se esforzaba por tenérsela metida lo mas adentro posible de aquel cuerpo lleno de curvas lujuriosas y provocatibas, solo se dedicaba a sentir la tibieza de las carnes de la rica jovencita, ni siquiera le preocupaban los sollozos de ella, solo le importaba su propio placer, el rostro de Cielo Riveros era un mar de gesticulaciones de placer y remordimentos, todas esas sensaciones sentía la jovencita mientras el viejo le había ensartado 15 centimetros de verga pero aun faltaba que entrara un poco mas, para que el acto sexual fuese completo, el vejete no quiso esperar mas y con un certero y recio empujón, se la clavo en su totalidad a la mancillada joven.
El viejo no se movía, se la tenia bien clavada hasta el fondo de sus entrañas, en su mente (la del Carnicero) solo pensaba: estoy adentro…! adentro…!! adentro…!!! Es mi empleada y se esta dejando culiar. Se repetia una y otra vez, sentía como esas tibias carnes interiores le apretaban deliciosamente su verga, retiro sus brazos de los hombros de la nena, sabia que Cielo Riveros ya estaba ensartada y perdida, ella ya había empezado a disfrutar del coito, ya no se resistia la nena solo cerraba sus ojitos en señal de autentico disfrute.…
¡!!Vamos Angel apurate que yo también quiero darle masa a la Evelencita ¡!!
Era tanta la excitación de ambos amantes que se habían casi olvidado del hermano menor del Carnicero, Don Carlos ya exigía desde su privilegiada ubicación, y jalándose la verga con desmedido entusiasmo reclamaba la parte de su botin que también le pertenecía.
Cielo Riveros se concentraba en la fricción que hacia la verga de don Angel al deslizarse por su estrecha ranura, se preguntaba como era posible que ese largo y grueso instrumento estuviera moviéndose en su totalidad al interior de su cuerpo, pensaba en lo cabezón que era este y no daba crédito a que este estuviera metiéndosele por su estrecho tajito. Ahora recordó que momentos antes lo había sentido en sus manos y hasta había chupado y lamido esa verga, y ahora don Carlos que también quería metérsela realmente aguantaría en un solo dia que dos tipos se la metieran… (Pensaba la mente de la desquiciada y caliente criatura…)
Una vez que Cielo Riveros vio como el otro hermano se pajeaba sentado en una silla esperando su momento, sintió ganas de ser observada entonces volvió a abrir en su totalidad sus potentes y bellas piernas, espero y estudio los movimientos de don Angel y cuando este venia en una impecable arremetida hacia su interior, ella con su panocha salió al encuentro de ese exquisito y calvo palo que la estaba taladreando…
--AHHHHHH…!!!! fue el exquisito gemido de placer de la niña al saberse protagonista de la caliente situación, --Ahhhhhhhh!!….Ohhhh…!!! ahhh…!!!, continuaba gimiendo por cada una de las clavadas que le asestaba su Patron…
Con estos eróticos movimientos copulatorios, Cielo Riveros se entrego por completo a los nuevos y exquisitos placeres que su cuerpo lleno de curvas estaba sintiendo, los sentimientos de odio y rechazo hacia su aprovechador Jefe fugazmente desaparecieron, ahora no quería que ese viejo se saliera de ella, y aumento mas su placer cuando recordó que el hermano menor le había aclarado que el también le enterraría la verga, sabia que don Carlos no se iría de la humilde habitación hasta que se la cogiera y mas encima convertidaaa… en PUUUTA!!??...
Los pensamientos de Cielo Riveros antes descritos fueron su perdición, la niña se abrazó al fofo cuerpo del carnicero y ahora se dedico a disfrutar de la caliente culiada que le estaban propinando, con sus piernas flexionadas abrazo y rodeo el culo del viejo, haciendo fuerza ella misma para que su Patron se adentrara mas en ella, ahora si quería que la partiera en dos, y ella haría todo lo posible porque eso sucediera, ella misma también arremetía contra esa verga dura y caliente que la perforaba, y no aguantando mas empezó a alentar al viejo para que se la culiara sin contemplaciones…:
--Ahhhh…!!! ahhh…!!! PATROOOOOON…!!! PATROOOOOON!!!!, gritaba la caliente Colegiala a la cual estaban follando, --METEMELAAA…!! METEMEEEELA…!!!, LA PUEDOOO AGUANTARRRR TODAAAAA, PERO METEMEEELA…, MAS… FUERTEEE…!!!! AHHHH…!!! LA QUIERO MAS FUERTEEEEEE!!!!!, --DESTROZAME LA ZORRAAA SI QUIERES PERO METEMEEELA MAS PARA DENTROOOOO…!!!! POOORRR FAVOOORRRR…!!! LA QUIERO MAAAAS PARA ADENTROOO...!!!!!!!, eran los desaforados gritos de Cielo Riveros …ahora entregada por completo al salvaje apareamiento…
Mientras tanto fuera de la casa Don Benito, el abuelo postizo de Cielo Riveros desde el otro lado del muro y por una pequeña grieta lo había visto todo, vio como a su Nieta la habían extorsionado, de cómo la obligaron a vestirse tal como lo hacen las putas, luego fue testigo también de cómo la habían forzado a que le mamara la verga al más prepotente de los carniceros, este se había dado el lujo hasta de nalguearla, y ahora veía además que luego de haber entre ambos hombres mancillar las partes más intimas de su cuerpo junto con escupirla, ahora simplemente veía como se la estaban violando en su propia habitación.
El vacilante abuelo postizo de Cielo Riveros quien se encontraba perversamente excitado recién asimilaba el espantoso infierno que debía estar viviendo su nieta debido a sus gritos y como gemia de placer cada vez que el viejo se dejaba caer sobre su cuerpo, pero a pesar de los muchos sentimientos que lo invadían y que otra vez le indicaban poner fin a todo aquello que estaba ocurriendo, hubo otra razón aun más poderosa que se lo impedían, el ya había visto como la violaban, pero al saber que había sido Cielo Riveros quien voluntariamente los metió adentro de la casa, solo con esto ya quería saber si su nieta en algún momento sería capaz de ponerse a culear por si sola con los dos hombres con los cuales estaba encerrada, don Benito estaba perdido en una insana morbosidad, sencillamente otra vez no hizo nada a favor de su nena y prefirió seguir mirando y masturbándose a costillas del sufrimiento de su casi nieta.
Por cada minuto que pasaba en la habitación se escuchaba claramente como la respiración del viejo se ponía cada vez más pesada, pero los jadeos y arremetidas continuaban, en eso don Carlos quien se la chaqueteaba impulsivamente parado a un lado de la cama comenzó a reclamar su parte de la torta:

–Ya Ángel dispárale luego tus mocos que yo también quiero rajarle el sapo…
La chica aunque escuchaba al hermano de quien la violaba no reparaba en ello, solo se daba a aguantar la cogida, su deplorable estado sicológico ya no daba para reclamos, y sabía que después de don Ángel le tocaría el turno a don Carlos.
–Vete a la mierda Carlos…!!!, -don Ángel le contestaba a su hermano con todo su obeso rostro traspirado y sin dejar de aserruchar a la chica, –Esta perra es exquisita para culearlaaaa…!!! Si que es un verdadero manjarrrrrr…!!!!, ni te imaginas como me aprieta la verga con su ajustada panochaaaa…!!!!
–jejejeeee…!!! te creo, pero ya córrete de una vez por todas para que me la prestes…
–Naaaaaaaaaaa…!!!!, Benito no llega hasta el domingo en la tarde… será mía hasta mañana sábado… luego la tendrás tu hasta el domingo…, le proponía el violador a su hermano.
Una inmensa y desquiciante calentura se había apoderado de la tímida Cielo Riveros al verse observada por su otro Patron hacia que su calentura fuera en aumento casi descontrolado, el viejo quien había dejado de besarla para poder tomar un poco de aire con agrado ahora escuchaba los quejidos y suspiros de placer que emitía la caliente nena, estos poco a poco comenzaron a subir de volumen e intensidad, convirtiéndose a los pocos minutos en fuertes gritos y en alaridos de auténtico placer carnal y sexual, por lo que el mayor de los hermanos y jefe de la joven empleada persistía en su frenético ritmo de mete y saca, y a medida que aumentaban los gritos de la colegiala, mas aceleraba y tomaba fuerzas en sus penetradores movimientos, hasta que sus oídos escucharon lo que él ya tanto había estado esperando escuchar. Las exclamaciones de su hermosa cajera fueron claras y con autentica convicción:
--Ahhhh…!!! siiiiii…!!! Así papiiiiiii…!!! Ohhhhh…!!! Ricoooooo…!!! Mmmmm…!!!!
--Te gusta cómo te la meto putaaaaaa…!!??,Todo a cambio de tu puesto de trabajo -le consultaba el caliente Carnicero de la nena quien miraba para la puerta ventana de la habitación, claramente él había escuchado ruidos extraños del exterior,
“--Siiiii, don Angeeeel…!!!, --Métamela todo lo que quieraaaa…!!!!, mas adentroooo…!!!, bien para adentroooo…MALDITO VIEJO INUTIL!!!!, --Métamela mas firme por favorrrrr…!!!!”
En tanto adentro de la habitación el vendaval de guarrerías continuaba por parte de ambos:
--Eres la zorra mas suculenta y caliente que me he culeado en mi vida pendeja…!!!, -le notificaba ahora con cara de apasionado el Carnicero a su empleada, y haciéndole ver sus nuevos requerimientos. --Quiero que desde hoy solo seas para mí y mi hermano y de nadie más…!!!!, -le exigía el viejo quien seguía aserruchando con toda la calentura del momento.
--Siiii papiiii…!! Yo solo seré suyaaaaaaaa!! Soy su… suyaaaaaaa…!! Soy su mujerrrrrrr…y de Carloooos!!, -gritaba la ya descontrolada adolescente.
Atenazada y todo la nena seguía meneando sus caderas para que el viejo sintiera más rico aun de lo que debía estar sintiendo.
--Dime porque te gusta coger tanto conmigo…!!??, -acaso el maricon de Rodrigo tu novio no te hace gozar como te mereces pendeja de mierda…el viejo sabía que de un momento a otro le soltaría los lecherasos.
Y nuestra nena, tristemente para su conciencia que la traicionaba no le quedo otra que contestarle con la verdad a su Jefe su patrón.
--Porque Rodrigo no me c… ca… calientaaaaaaaaa…!!!! Ohhhh… ricooooo!!!!
exclamo al mismo tiempo que le soltaba otro chorro de caldos vaginales, lo que acababa de decir ella misma la estaban calentando en demasía.
--Jajajajaja…!!! dilo en vos mas fuerte pendejaaaa… di que un pobre maricon como ese no te calientaaaaa…!!!!, -el Carnicero a toda costa deseaba que su hermano que se masturbaba a escasos centímetros de ellos tomara conocimiento de todas las guarrerías que estaba soltando de sus propios labios la dulce nena.
--Si don Angeeeel…!!!!, --Mmmmmm…!!!! Ohhhhhh… Ricooooo…!!!!, -algo en su mente la detenía a que dijera semejante barbaridad.
--Dilo Zorraaaaaaaaa…!!!!, -junto con presionarla su Patron se dejaba caer con mas fuerzas sobre ella, si hasta los testículos del vejete ya parecía que en cualquier momento se introducirían por el lubricado coño de Cielo Riveros .
Ambos amantes ya estaban que se corrían debido a la ardiente y enloquecedora conversación que se le había ocurrido a don Angel, los dos se encontraban en la estratosfera de la calentura. Hasta que la nena pensando con la zorra y no con su mente fue y le dio en el gusto al vejete:
--Ay don Angeeel…!!! si es verdad…!!! Ese pobre maricon de Rodriii… Rodrigoo no me calientaaaaa…!!! –Uffffffffsss…!!!, --Yo… yo… yo soy mucha hembra para el…!!!! Ohhhhhh Diosssssss…!!!!
--Jajajaja…!!! Que bien…!!!!, y dime como para que tipo de machos eres hembra Tú, pedazo de zorraaaaaaaaa…!!!!!, -el viejo comenzó a perforarla con rabia y aceleradamente, para que la chiquilla le diera la respuesta que él quería y no le fuese a salir con una tonteria.
--Yo… yo… soy una hembra hecha para un macho como Ustedddd…y su hermano Carlooos!!! Ohhhhh don Angeeeel…!!!! me corroooo…!!!! me corrooooooooooooo…!!!!!
El viejo automáticamente se enterró hasta lo más profundo de las tiernas entrañas de aquella dulce y caliente chiquilla que se encontraba perdida en la total calentura.
En un momento dado el sexagenario se desclavo de la curvilínea colegiala, y acostándose a la par de la bella joven y con la verga totalmente parada como un mástil esperando el mejor de los homenajes le grito a la joven hembra.
--Ven…!! Ahora tengo ganas de que te montes sobre mi verga tu solita y quiero que me la cabalgues…,
La nena que otra vez se sentía un mero objeto sexual y eso le gustaba, así que con los más delicados y femeninos movimientos que ella hacía en forma natural, gateo la poca distancia que la separaba de su Patron para después levantar una de sus poderosas piernotas pasándola por sobre la panza del vejete hasta quedar montada sobre él y quedar con su verga justo a la entrada de su ya destilante panocha.
--Métetela tu solita Evelencita…!, quiero verte hacerlo…!, -le ordenó el viejo…
La joven empleada quien puso atención que esta era la primera vez que desde que conocía a su Jefe este la llamaba por el diminutivo de su nombre sintió una comezón sin precedentes en la más recóndito de su zorra, los deseos recién nacidos por clavarse la verga de su Patron ya casi la consumían, así que tomó ese bien parado y tieso mástil de carne y muy decidida lo ubicó en la entrada de su íntima hendidura, para luego y casi en el acto cerrar sus ojos y dejarse caer de un solo envión.
La nena otra vez estaba Ensartada y convertida en toda una hembra brava ya que ella misma y sin esperar ordenes de nadie comenzó a mover sus caderas en forma acompasada para que la verga le entrara en su totalidad, y mientras esta mas se enterraba en su cuerpo ella mas iba tomando velocidad, todo esto ante un muy sorprendido don Carlos que desde el costado miraba como su hermano gozaba de tan espectacular hembra, que de pronto la vio quedarse paralizada con la verga totalmente enterrada en sus entrañas.
La colegiala creía sentir esa vergota perforándola hasta casi más arriba de su cintura, por lo que inclinó su cuerpo hacia adelante para sujetarse con el respaldo de la cama, quedando con todas sus tetas colgándoles y meciéndose exquisitamente y expuestas para que su Jefecito las chupara todo lo que el quisiera.
Don Benito por el pequeño agujero de la ventana miraba estupefacto como sus viejos amigos se aprovechaban de la joven e inocente nieta, sin embargo sus manos jalaban de arriba abajo su verga literalmente se estaba haciendo una paja mirando como a su casi nieta la violaban. En tanto, adentro de la habitación de don Benito la cogidota que se estaban pegando los amantes ya era de escándalo, Cielo Riveros siempre montada sobre la panza del vejete seguía haciendo una serie de ondulaciones casi diabólicas, sus movimientos pélvicos con los que se comía la verga de don Angel eran alucinantes, los hacía con vehemencia de atrás y hacia adelante y bien rapidito, la colegiala ahora se movía solo por instinto animal.
Fue en el momento en que la Nena se movía fuerte sobre la verga de Don Angel meneando sus caderas en forma ondulatoriamente exquisita en que el hermano Menor excamo:
A la mierda no aguanto mas esta puta esta gozando como una autentica zorra, y vos Angel estas enterrado hasta los huevos, y veo un agujero libre y disponible, y por la fama que tiene esta hembra adolescente fueron varios los tipos que metieron sus vergas por ese precioso ojete, no creo que tenga problemas con aguantar el mio.
Pero primero quiero sentir tus labios en mi tranca ves que la tengo tan grande como la de mi hermano? Lo ves putita por tu culpa la tengo mas dura que un garrote.
Cielo Riveros al abrir los ojos se encontró con una tranca tan grande y gruesa como la de su ahora amante el viejo Angel, sin dudas alguna su hermano heredo las bondades que tenia el mayor y sin recibir ordenes de nadie, con una de sus manos sujeto el poderoso miembro tan duro y tieso con venas que se parecían querer reventar, mientras tanto Don Carlos con sus manos recorría la suave y desnuda espalda de la nena. Cada caricia del Carnicero empezaba en la espalda y la terminaba en el fabuloso trasero de la hermosa y juvenil adolescente, no dudaba el caliente Don Carlos en apretar ese par de nalgas duras y llenas de carne, sus manos ansiosas y sudorosas recorrían el escultural cuerpo que no paraba de tragar a través de su concha la poderosa verga de su hermano mayor.
El caliente carnicero comenzó a besar esos carnosos, apetecibles, maravillosos labios de la espectacular adolescente, de la boca de la sensual colegiala solo se oían apagados quejidos al sentir que la pija del mayor de los viejos entraban en lo mas profundo de su ser - y sin mediar palabras abrió sus labios a su máximo esplendor para poder engullir el poderoso mástil que don Carlos le ofrecía. , así que la tocó con la punta de la lengua, y sintió un gusto salado, enseguida comenzó a lamer alrededor de la roja cabeza - chupa fuerte que no te ciento inquiría el Pervertido carnicero e instintivamente la excitada Cielo Riveros .
comenzó a mamársela se lo metía en la boca, y empezó a chupar con avidez, -nena, nenita, así... si.. ahhh, sigue ahhhh …eso, ahora recorre la cabeza con tu lengua decía el pervertido carnicero ante las sensaciones que le hacia sentir la sabrosa boca de la nena- pendeja... que boca, que sabroso mamas.
Les gustan como soy capaz de hacer gozar a ambos a la vez? los dos Hermanos me desean sus Vergas ahora me pertenecen, y son mias y de nadie mas, están tan grandes y duras para mi sola verdad? La pendeja estaba fuera de si a falta de una dos Vergas la llevaban al Extasis mientras tanto…
Cielo Riveros seguía con su labor se la chupaba ardientemente saboreando esa magnifica verga casi hasta atragantarse, su boca sentía en su interior esa tremenda dilatación del rígido miembro, mientras el hacia esfuerzos para contenerse y empleaba en ello todo su autodominio para prolongar el placer que esa deliciosa boca y labios le proporcionaban de pronto Lupita comenzó a sentir que aquel tremendo miembro tenía algunos espasmos en su boca y el viejo Carlos casi a los gritos exclamo me corroo noo todavía nooo , de una se desclavo de la boca de la joven hembra, y alejándose y procurando pensar en algo desagradable que no le permitan acabar tan pronto se alejo de la pareja que seguían en un mete y saca furioso, su hermano de espaldas y la joven doncella cabalgando encima, una vez recuperado y con el esperma otra vez en sus pelotas don Carlos se acerco a la apasionada pareja de amantes y se ubico con la pija como el acero apunto al orificio rectal de la nena y empezó a puntear la entrada del ojete que con movimientos esquivos evitaba a toda costa la penetración, pero el destino ya estaba echado las vergas de los dos aprovechadores viejos estaban listos y dispuestos a la doble penetracion …
Mientras tanto fuera don Benito no tenia Angulo para observar la aberración que pasaba en su propia habitación y con mucho cuidado y sin hacer el mas mínimo ruido se introdujo en la casa se desplazó hasta la puerta de su habitación y por la rendija de la llave observo la terrible escena donde su amigo don Angel tenia bien clavado su mástil en la concha de Cielo Riveros mientras tanto su otro amigo el hermano menor Don Carlos se ubicaba en la entrada posterior de su hermosa y deseable nieta.
Don Carlos no queriendo darle termino a aquella acalorada sesión de sexo desmesurado enderezo su cuerpo para ir arrimando su verga hacia el redondo duro y deseable trasero como tallado a mano era un glorioso cuerpo que el extrañamente estaba dispuesto a ceder a sus mas bajos instintos, Cielo Riveros preocupada y pensando en que el otro viejo carnicero tramaba oscuras obsenidades, solo lo quedo mirando desde su posición, pero vio que el vejete se ponía de pie a un lado de la cama para luego decirle bien abierta de culoo puta…!!! Ahora te voy a culear como a las perras, jajajajaja!!!!
Cielo Riveros con todo su sedoso cabello negro alborotado y humedecido por la traspiración felinamente movió sus curvas para ir acomodándose sobre el cuerpo del obeso cuerpo de su Jefe don Angel, cada movimiento que hacia la nena era enloquecedor, el viejo sentía que cualquier momento era el último para su verga, hasta que por fin la vio ponerse tal como él le había dicho con el mástil de su hermano totalmente ensartado en la concha y el agujero del culo a la altura perfecta para el culearla a lo perrito, la chica le ubico el culo justo a un lado de donde estaba él para luego inclinar su tronco adosándolo en la cama hasta quedar con sus tetas aplastadas sobre el pecho de Don Angel que gozaba como enajenado al saber que su hermano se apoderaría del tan desado y perfecto culo que se gastaba la adolescente que tenían como empleada..
La espectacular panorámica que tenía el vejete era de concurso, y sin ya querer esperar más apunto con su verga a lo que siempre miro, admiro y deseo, el culito de Cielo Riveros era el sueño de todos los machos de ese perdido pueblo, con mucho cuidado poso el morado glande en su agujero anal, Cielo Riveros quien sintió la punta de carne tomar posesión levanto sus caderas para poder abrir y separar aún más sus piernas, al mismo tiempo que el viejo la tomo de su esbelta y pronunciada cintura para ir presionando lentamente, al mismo tiempo que el vejete la jalaba hacia su apéndice su agradecida vergota comenzó a entrar como si aquella deliciosa y apretado esfinger fuese su propia casa, lo que a su dueño lo hacían gozar placeres nunca antes sentidos.
Don Angel sintia desde abajo como su hermano disfrutaba cada centímetro que con su verga rosaba y abría las paredes interiores de la nena, era delicioso sentir como su tranca rozaba a través de lo fino que separaba su tranca en el utero de la adolescente con la verga de la de su hermano en el ano sentía como la verga de Carlos forzaba ahora el orificio tan soñado Don Carlos vio abrirse ese soñado culo, se notaba que tenía muy poco uso, pues a pesar de todo lo que el sabia se la sentía muy apretada, en eso a sus oídos nuevamente llegaban los gemidos y las ardientes suplicas de la nuevamente ensartada jovencita,
--Siiiiii…! asiiiiiii…! asiiiiiii…!! Métala mássss…!! mássss…!! másssss…!!! Méeetalaaa los doooos asii un poco maaaas metaaan sus cosoootaaas quieroooooo!!!!
todaaaaa!!!!Mendigooooooo!!, en tanto el viejo empujaba, empellía y apuntalaba su apéndice en busca de mayor satisfacción sexual.
Plaffff…!, Plaffff…!! Plaffff…!! Plaffff…!! Plaffff…!!! Plaffff…!!! Retumbaban los feroces choques de nalgas y apéndice, el carnicero la apuntalaba con bestialidad, como también a veces aminoraba los embates para ir recorriéndole su subterránea e íntima caverna anal como si su verga fuese un submarino en plena faena de adentrarse en lo mas profundo de aquellos exquisitos y tibios mares de placer que poseía la joven hembra en los más profundo de su caliente culo, llegando cada vez más adentro por cada apuntalamiento que le mandaba, la mente de Don Carlos estaba a mil por hora, podía sentir en forma placentera como cada vez profundizaba aún más en el cuerpo de la nena, sentía a travez de la fina tela que separa ura de orto como su hermano entraba y salía de ella, era una follada enloquecedora como también la mejor cacha que se había pegado en toda su vida.
Cielo Riveros seguía animándolo, por su culo habían pasado varios, el que la hizo debutar analmente el Jorobado conserje de su colegio Juan, el viejo mecanico del Parque de diversiones don Pedro, hasta un Taxista que ya no recuerda el nombre habían enterrado sus vergas en ese culo.
Pero nunca en su vida había sentido dos pijas a la vez, era la experiencia que le estaba faltando a su extenso expediente de puta ninfómana amante de grandes vergas.
--Uyyyyyyy don Carlooooos Don Angeeeel que ricooooo!!, que grande se la sientooooo!!!, nunca me lo habían hecho tan ricoooooooo…!!! méeeetenlaaaaa…!!! métenla mássssss…Perrooooos!!! la quiero todaaaaaaa!!!! Mmmmmmmmmm que ricoooooo papiiiiiitoooos!!!... se la siento bien dura y paradaaaaaas!!!... Muévaseeeee… muévaseee mas fuerteeeee…!!!Putooooos!! mas firmeeeeee…!!!!! Ohhhhhh… creo me voy cortadaaaaaaa!!!! creo que me estoy viniendoooooooooo!!!!!!
Apenas Don Carlos que la tenia ensartada por el orto noto el lamentable estado erótico de Cielo Riveros , le mando una estocada en la cual intento sacársela por la boca si es que se podía, basto tan solo eso para que la caliente nenota explotara en un tremendo y fantástico orgasmo, sus líquidos vaginales salían a raudales como si la jovencita verdaderamente se estuviera meando, estos salían y escurrían mojándolo todo, los huevos de don Carlos y don Angel se empañaron con los fluidos de la adolescente ellos ya no se podía aguantar por la calentura con que lo habían puesto la chica, así que empezó un estruendoso mete y saca los más rápido y acelerado que le permitían sus fuerzas, se la metían y se la sacaban dejándosela ir hasta el fondo de sus entrañas, Cielo Riveros gritaba y exigía que le dieran más fuerte,
Don Benito desde su posición a través de la destartalada puerta no daba mas de tanta exitacion su casi nieta era sometida por sus dos mejores amigos, y el en vez de estar evitando tremenda aberración solo se daba a estar observando y excitándose por lo guarro de la situación, su pija que durante años no se paraba ahora la tenia dura como el acero, se apoyo sobre el agujero de la cerradura cuando la puerta cedió, y el jubilado cayo desparramado en el piso al lado de la cama donde sometían a su joven y hermosa casi nieta.
Los tres amantes en lo mejor del acto sexual, miraron con susto y sorpresa como don Benito con la verga fuera de los pantalones y totalmente dura y parada se bamboleaba de un lado para otro era claro que el abuelo estaba excitado por lo que ocurria allí dentro.
Los dos hermanos estallaron en risas… JJJAAAJAJAAJAAAAA Pero mira JAJAJJA EL ABUELITO ENCANTADO QUE NOS CULIEMOS A SU NIETAAAA JAJAJAJAAA.
Don Benito observaba incrédulo al trio de desvergonzados que estaban acostados en su propia habitación completamente desnudos y ensartados. El dolido abuelo no podía quitar la vista de la curvilínea figura de su casi nieta al desnudo.
La nena por su parte quien estaba roja como un tomate y abrazada al cuerpo del hombre que era de su amigo y el otro enchufado por su culo, se daba cuenta de ello y de reojo miraba avergonzada, la pobrecita quería morirse, aun así mantenía una de sus delicadas manitas posada y descansando en el peludo pecho canoso de su Jefe. Y que mas podría haber hecho?.
--Y que nos miras con cara de carnero degollado…!!! Ven y prueba su dulce boquita no te vas a arrepentir que nuestra putita debe estar sedienta de leche !!!, -se burlaba Don Angel.
Cuando la colegiala vio a su abuelo con la pija totalmente parada en forma automática fue frenando sus movimientos, pero no entendía porque no podía dejar de moverse en forma completa siendo que lo normal era que ella se desclavara de las dos vergas y se tapara.
Ven Benito y no te quedes con las ganas ya sabemos que te calienta tu nieta viejo pervertido, ven y acerca tu verga para que tu nena te la chupe lo hace como las mejores prostitutas del pueblo vamo pruébalo tu mismo.
-vamos Cielo Riveros chupale la verga a tu abuelo no te hagas la inocente que ya nos demostraste que de santa no tienes nada vamos chúpale el pingo a tu abu pendejaaa…!!, quiero ver tu boca tragando esa verga ahora pendejaaa!!!, mientras tanto mi hermano y yo te vamos a seguir reventando por los dos agujeros, jejeje, ya apúrate y hazle una buena mamada!!, -le solicitó mientras él abuelo se acomodaba de espaldas para disfrutar la felación que le estaba solicitando.
Cielo Riveros quien aun tenía en su mente los recuerdos de como su abuelo protector como pudo fue tomando la ubicación que le habían solicitado, y una vez que ya estuvo en la indecente posición ensartado en ambas partes, puesta en diagonal sobre la cama para que el viejo viera y tocara todo lo que él quisiera se agarró con sus dos temblorosas manitas bien sujeta a la peluda base de la ya bien erguida verga de su abu y se la metió en la boca para comenzar a chuparla y a lamerla con sus ojos cerrados, procurando no pensar en otra cosa que no fuese en hacerlo sentir bien, sentía la necesidad de hacerlo gozar en compensación de todos los favores que recibió de el cuando estaba totalmente desamparada y sola.
La colegiala ya se la mamaba bien concentrada y con sus rojos labios bien apretados, su cabeza que subía y bajaba rápidamente también hacía círculos de vez en cuando, chupando sin parar ni por un solo momento, se la mamaba como una verdadera desesperada, lamiendo todo lo que pudiera, moviéndole su lengua circularmente por el venoso tronco y el glande…
--Arrrrghhhss…!! Pero que zorra más exquisita eres para chupar la verga estoy orgulloso de vos !! --Eso es…!! así…!!! así…!!! Mmmmm…!!!! Arghhhhh!!!!, -gruñía y bufaba el abuelo ante la sabrosa mamada de verga que le estaba mandando su Nieta, --Esooooo…!!! Mama la vergaaaa…Pendeja de mierdaaaa!!! Cométela todaaaaa…!!!! Todaaaaa…!!!! Trágatela entera putaaaaa…!!!!
–Jajajaja!!! Se reía don Carlos Que cerda me saliste para tus cosas Mamasota, jamas ni en lo mas lejanos de los rincones de mi pervertida mente me pasaría que se la chupara a tu abuelo jajjajaa ahora por cochinona te voy a seguir rompiendo el orto para que no puedas cagar en dos meses, jajajaja!!!!,
El viejo Carnicero la seguía enculando sin piedad, la colegiala una vez que pudo engullir por completo la verga de su abu y temiendo que sus machos se aburrieran le comenzó a solicitar al vejete,

–Ayyyyyyy!!! Ohhhhhhh!!!! Don Carñps….no tan fuerte por favor!!…. que me va a matarrrrrrrrr por el culoooooooooo!!!!! Gritaba la nuevamente afortunada señorita Cielo Riveros una vez recuperada de sus regurgitaciones…
Pero el viejo Carnicero que estaba bañado en sudor solo seguía enculandola como un poseído,
–Plafff!… plafff!!… plaffff!!!… retumbaban las redondas y antojables nalgotas da la hermosa colegiala ante el enardecido ataque del caliente y eufórico Don Carlos, la señorita Cielo Riveros ahora aguantaba el brutal ataque mordiéndose el labio inferior con una verdadera expresión de placentero pánico, sus ojos se mantenían abiertos como si estuviesen presenciando un milagro, pero ante cada brutal enterrada de verga en su ya lubricada panocha y en su apretado culito, de sus labios fresas ya brotaban gemidos que más parecían de desaforado placer , así lo confirmaba también su respiración agitada y excitada, el intenso placer anal y el saberse ensartada por su concha su culo y su boquita le hacían sentirse más mujer, más hembra y más perra, pensaba en lo extraño que era todo esto ya que ella nunca en su vida se había sentido así.
El viejo carnicero estaba culeandosela como enloquecido, miraba ese portentoso y tremendo cuerpazo que la hembra comúnmente escondía debajo de sus ropas de colegiala, le miraba ese glorioso par de nalgotas que le sorbían sus 23 centímetros de verga casi en su totalidad,
–Ayyyyyy don Carlooos más despacio por favor…que me va a rajar por el culo y la cochaa, el cuerpo y las tetas de la adolescente se movían en forma escandalosa, al mismo ritmo en que le perforaban el culazo y la vagina.
–Ya te dije que tenías que aceptar las vergas de mi y de mi hermano tu empleo depende de ello!!, jajajaja!!, aguanta mi Amorcito que después de unas cuantas folladas por el ano y por la concha te harás una adicta a que te den de a dos!!, jajajaja!!! Tomaaaa!!!, el viejo seguía arremetiendo y la joven colegiala continuaba recibiendo verga, –Muéveme el culo pendeja recuerda que desde hoy eres mi mujerrrr!!!, el dueño de la carniceria se estaba pegando la follada de su vida, y la colegiala lo secundaba en sus viles abominaciones.
La hermosa joven que era el deseo de todo el pueblol ya gozaba desde hace rato con lo que ahora le hacía los hermanos don Carlos y Don Angel además su abuelo le perforaba la boca con su dura verga, estaba casi enloquecida de calentura al estar en una situación que era una aberración de la naturaleza dos viejos aprovechadores y su casi abuelo con la verga en su boquita,las estocadas que le daban por el culo cada vez eran más recias y profundas, haciendo que su delineado cuerpo le regalaran oleadas de placer anal, sensaciones que la obligaban a retorcerse de gusto intentando de atornillar por el culo a aquella gruesa verga que tan deliciosamente la perforaba, la nena gozaba tanto de atrás como por adelante ya no podía más de tanto placer que le estaban otorgando, por su parte don Carlos al notar de lo bien que se lo estaba pasando la chiquilla, la tomo violentamente de su lacio cabello intentando tratarla como a una yegua, para luego comenzar a darle más duro por el culo, esto fue demasiado para la pobre y caliente señorita Cielo Riveros , simplemente la nena se llegó a mear de tanto placer…
–Ayyy don Carlooos… siento algo raroooo!! Don Angeeel mi conchaaa ma a explotaar Ayyyyyy que ric….Ohhhh que esto Diosssss!!! Ohhhhh que ricoooooo!!! Ufffffff!!, hasta que la nena exploto en un muy extraño pero enloquecedor orgasmo, –Ayyyyyy que meooooo!!! Ayyyy que me meooooooo!!!! Asiiiiiiii!! Denme más durooooo viejos de MIERDAAAA dénmelo todaaaaa!!! Patroneeees no aguanto masssss, me voy a me…… Ayyyyyy me mieeeeeeeeeee!!!!! Ohhhhhhhh que ricooooooooo!!!
Cielo Riveros corcoveaba de auténtico placer, sus muslos y piernas chorreaban de su propia orina, los vejetes estaban encantados no sabían de ninguna puta que se hubiera llegado a mear de tanta calentura, y ellos lo había logrado con una linda chiquilla , si hasta ya le estaba empezando a tomar cariño a la pendejilla caliente esa, que seguía retorciéndose de placer con su vergota metida en lo más profundo de sus intestinos.

El viejo carnicero que aun aguantaba sus fuerzas la desclavo de una, la colegiala sintió su orificio posterior vacío en el mismo momento en que se le lleno de aire, su cuerpo estaba electrizado, aun se sentía la verga del otro hermano en lo mas profundo de su panocha .
¡!Ya no aguanto maaas perra quiero tirar mis mocoos quiero acabar en tu boquitaaa!!!
De una Don Angel se desclabo de la pendeja y se ubico al lado de su hermano quien con la verga totalmente dura y a punto de ayacular apuntaron junto al abuelo Benito a la dulce y fresa boquita de Cielo Riveros ,
Vamos pendeja ayudanos a descargar ordéñanos la verga a los tres que vas a recibir tu premio pendeja putaaa.
Cielo Riveros obedecía gustosa su labor chupaba ardientemente en forma alternada saboreando las magnificas vergas casi hasta atragantarse, su boca sentía en su interior esa tremenda dilatación de los rígidos miembros, los viejos hacían esfuerzos para contenerse y empleaban en ello todo su autodominio para prolongar el placer y no eyacular ya que esa deliciosa boca y labios le proporcionaban de pronto Cielo Riveros comenzó a sentir que los tremendos miembros tenían algunos espasmos en su boca y el primero de los viejos dijo - ah me corro, te la voy a dar, tomo firmemente a Cielo Riveros de la cabeza y disparo la primera de varias cargas de semen llenándole la boca a la chica con el lechoso liquido la chica seguía con su labor mamándole y ordeñándole la verga y sin dudar siguió tragando, llego el turno de Don Angel que largaba unos sonidos de placer entre dientes -haa... haa..es tuya Eve haa... siii así cachorrita, toma toda la lechita de tu macho.
Finalmente don Benito que por primera vez en muchos años salía de sus testículos abundantes cantidades de tibio y espeso semen embadurnando por completo la carita de Cielo Riveros , quien miraba como el hombre que durante años había cuidado de ella hora disparaba en su carita sus mocos, eso no era natural pero también pensaba que podía con tres machos a la vez sintiéndose triunfadora de tan Epica guerra entre machos y hembra a lo mejor ese era su ventaja en esta vida. Ese era su triste destino satisfacer a hombres viejos terminar siempre follada por todos sus orificios, o llevar una vida normal de cualquier adolescente.
Cuando todo acabo y los tres hombres terminaron dormitando en la humilde habitación nuestra adolescente se vistió rápido teniendo cuidado de no despertar a nadie y salió de la casa totalmente decepcionada de lo que le propuso la vida y en especial del que consideraba su abuelo de cariño que a la larga había sucumbido a los encantos que la naturaleza había otorgado como una maldición a su preciosa anatomía.
Ahora solo le quedaba volver con su Madre que había metido en su vida al aprovechador don Lucas, o bien probar suerte con su novio Rodrigo pero tenia en contra a su Padrastro que ya la había violado ahun delante de sus narices.
CONTINUARA…A LOS SEGUIDORES DE LA SAGA Y DE ROGER DAVID, PERDON POR CORRUMPIR A DON BENITO SIEMPRE PROTECTOR DE CIELO RIVEROS , SIEMPRE DEFENDIO EN FORMA INOCENTE LOS DESTINOS DE NUESTRA BELLA ADOLESCENTE, PERO LOS DESEOS DE LA CARNE QUE ES DEBIL NO PODRIA ESTAR EXENTO DEL POBRE HOMBRE QUE NI SIQUIERA ERA SU ABUELO BIOLOGICO, LAS CURVAS DIAVOLICAS DE NUESTRA BELLA ADOLESCENTE LE JUGARON UNA MALA PASADA. AHORA CIELO RIVEROS QUEDARA A MERCED DE LOS CUIDADOS DE SU FIEL NOVIO RODRIGO.
Que espectáculo, que tremendo culo tiene esta hija de puta que nalgotas...grandes y redondas" pensar que te fuiste a la ciudad para entregarte a tus jefes de la carnicería, ya nos enteramos pendeja puta dijo el gori. Esta buenisima y pensar que esos melones lo disfrutaron los carniceros.
La vida de Cielo Riveros giraba alrededor del deseo, la lujuria y la lascivia que sin proponérselo provocaba en hombres de todas las edades quienes valiéndose del engaño, el acoso, el chantaje y otras sucias artimañas, no cesaban en su intento de querer llevársela a la cama para saciar en su voluptuoso cuerpo las mas bajas, sucias, puercas y aberrantes perversiones sexuales.
Así fue víctima de sus últimos abusadores los hermanos dueños de una carnicería donde la explotaron laboralmente, y por si eso fuera poco, la sometieron sexualmente, experimentando por primera vez una doble penetración, su conciencia estaba más que confundida, a pesar de lo inmoral de que una mujer se acueste con dos tipos a la vez, ella sabía muy dentro suyo que había disfrutado como la mejor de las putas de la doble follada.
También estaba consiente que su abuelito postizo don Benito, ya no era digno de su confianza, porque no solamente esta vez no salió en defensa de su dignidad, muy por el contrario, al abrirse sin querer la puerta de la habitación donde los viejos la violaban, don Benito cayó sobre el piso con su miembro totalmente tieso, el pervertido se estaba masturbando mientras abusaban de ella, y para agravar las cosas cuando en el estado de calentura que tenía Cielo Riveros al estar empalmada por sus dos orificios, su casi abuelo se acercó y permitió que su casi nieta, le mamara la verga hasta vaciar hasta la última gota de espeso semen que durante años guardaban sus pelotas.
Así pasaron los días la nena fue olvidando ese capítulo que paso con sus antiguos patrones de la carnicería don Angel y don Carlos, los que esos dos viejos le hicieron no tiene nombre, también recordaba con nostalgia como don Benito la protegía de los malvados y pervertidos hombres, ahora lo único que tenía para sentirse segura era su novio Rodrigo recordaba los días en que iban a cines, museos, centros comerciales, ferias etc. la nena era muy feliz con su novio y estando juntos para ella era lo máximo, hasta que apareció el padrastro de Rodrigo que mediante engaños termino por abusar también de ella.
La nena no dudo en llamar a su novio poniéndolo al tanto de que ya tenía la intención de hablar algo muy importante para ambos, Cielo Riveros quería contarle a su amado que fueron muchos los hombres que se aprovecharon de su cuerpo, y que ya no era la inocente joven que conoció el alguna vez, y pactaron para verse en la tarde para salir a dar la vuelta.
En la tarde la colegiala se dirigía al parque para verse con su novio Rodrigo, la chica llevaba un vestido más que corto que ahora con el desarrollo de su cuerpo parecía como pegado, con un escotazo que dejaba ver mas de la mitad de ese par de mamables pechos , de abajo le quedaba a medio muslo y esto aunado a las nalgotas de la nena hacia que el vestido se le subiera de una forma provocativa, con ese sinuoso caminar la falda se balanceaba de lado a lado al compás de sus caderas, cuando andaba era seguida por todo el vecindario masculino ,ella iba pensando en ver a su novio y tratando de olvidar que siempre fuera presa de los pervertidos tipos que terminaban siempre culiandola y no se daba cuenta del efecto que entre los hombres despertaba no pocos suspiros a su paso, cualquier hombre joven o mayor, soñaba con satisfacer sus fantasías en los brazos de aquella mezcla de niña-mujer, ese día había mucho viento cuando de pronto una ráfaga de aire levanto el vestido de la nena tomándola desprevenida alegrándoles la vista a los afortunados que pudieron ver su bikini rosado lleno de encajes haciendo que la nena se pusiera colorada por la pena.
Uno de los que veían ese delicioso vaivén de las ese par de nalgotas con deseo era "el gorila" el cholo líder de una banda que se dedicaban a asaltar gente para comprarse droga y cervezas el fue unos de los que nunca pudo poner sus manos en tan apetecible cuerpo, y fue una sorpresa tan grande como agradable volver a ver a la escultural colegiala por estos lares ya que Cielo Riveros hacia casi un año que se fue del pueblo para trabajar en la ciudad. Este fue el que les aviso con un chiflido al reconocer a Cielo Riveros con su andar cadencioso y moviendo sinuosamente su escultural anatomía, el gori y los demás salieron del fondo del callejón para disfrutar el espectáculo que hacía tiempo no disfrutaban del admirar y desear el andar de Cielo Riveros .
Ella los vio parados al gori y su banda recargados en la pared, pero ella no les presto atención porque estaba abstraída en sus pensamientos de que vería a su novio, al pasar junto a ellos sintió las miradas las cargadas de lujuria que sin recato alguno se dirigían a sus prominentes pechos, estos veían hipnotizados como sus firmes pechos tensaban la tela de su vestido, y como los pezones que se marcaban perfectamente en la tela a pesar de la protección del sujetador, y las miradas cargadas de lujuria eran dirigidas también a sus apetecibles nalgas , esto la asusto mucho a ella al ver las miradas de esos hombres y trato de apurar el paso para pasar lo mas rápido posible agachando la cabeza.
"Adonde vas tan sola mi reina " oyó la nena la voz ronca del gori, al levantar la vista la chica lo vio que sin quitarle la vista a sus tremendos pechos se relamía los labios con lascivia a la ves que los demás murmuraban un "mamacita hace mucho que no te veia" o alguna otra palabra libidinosa.
La nena sin contestarles apresuro el paso toda asustada ala ves que el viento seguía aumentando y hacía esfuerzos sobrehumanos para que no se le levantara el mini vestido.
"Oye hermano pero sigue estando buenota la pendeja, y su culo sigue tan hermoso como siempre" dijo uno de los cholos.
"Que espectáculo, que tremendo culo tiene esta hija de puta que nalgotas...grandes y redondas" pensar que te fuiste a la ciudad para entregarte a tus jefes de la carnicería, ya nos enteramos pendeja puta dijo el gori.
"Esta buenísima….y pensar que esos melones los que se carga lo disfrutaron los viejos carniceros impotentes, que envidia siento de ellos" volvió a decir en tono lujurioso uno de los vagos.
"No boludo….si esta le para la verga a cualquiera`sin importar que sean viejos ….de seguro la estuvieron bombeando las nalgas todo los días en la cama" dijo el gori.
La nena siguió su camino los chismes en el pueblo llegan como reguero de pólvora, y se sorprendió que todos supieran que ella trabajaba en una carnicería, lo que no lograba entender como sabían estos delincuentes que sus jefes habían literalmente tenido relaciones coitales con ella, y no prestando mas atención a los comentarios fuera de lugar que le decían a su paso ella estaba en verdad enamorada de su novio y solo pensaba en su encuentro con el, al divisarlo se le dibujo una sonrisa en su hermoso rostro se abrasaron y besaron para a continuación sentarse en una banca y platicar de trivialidades ahí se les fue pasando la tarde tomados de la mano sentados y dándose besitos de piquito , los machos que pasaban se deleitaban viendo las bien torneadas piernotas cruzadas dejando ver su suave piel de terciopelo que al estar sentada en la banca hacia que el vestido se le subiera dando un grandioso espectáculo a todo aquel que pasaba por ahí.
Sobra decir que el muchacho se sentía en las nubes al tener con el a una mujer que provocaba los pensamientos mas libidinosos de los hombres había escuchado rumores de que su prometida había estado acostándose con sus jefes a cambio de conservar el trabajo, pero el confiaba ciegamente en ella y descartaba de plano que asi fuera, además cuando la vio venir caminando contoneándose haciendo que la sangre le hirviera de deseo pero ahora esta escultural chiquilla era suya y nadie mas que de el (pero por la mente de Cielo Riveros pensaba que hoy le confesaría a su novio las veces que ya había entregado su cuerpo a viejos pervertidos para que la disfrutaran incluso su propio padrastro, pero no tenia el valor de decírselo esa noche).
El chico sintió que se calentaba con tanto besos que le daba esa beldad que tenia por novia sentados como estaba besándose pasaba su mano por la espalda de la nena y la apretaba contra el para después bajar por su costado y posarse en esas deliciosas y suaves piernas acariciándolas y comenzando a subir lentamente, cada ves mas, excitado el chico comenzó a besarle el cuello, hurgaba su deliciosa piel fresca , la nena tenía una mirada perdida en la distancia a lo mejor Rodrigo seria el indicado que con sus besos borrar de sus labios las asquerosidades que hizo con los depravados viejos que le toco como amantes de turno, ahora denotaba temor de que el se diera cuenta que ella ya tuviera mucha experiencia en el arte de amar , pero ahora sentía excitación ante esos besos y caricias cada ves mas atrevidos y al que dirá la gente que pasaba y los veía.
La chica reaccionando porque estaban en un lugar público le dijo.
"No… no debemos aquí no" sintiendo el lo agitada que estaba poniéndose.
Ya la tarde caía era casi de noche y tomándola el de la mano le dijo "ven vamos a caminar." Rodrigo sabia perfectamente que no podía llevar a su novia a su casa porque su Padrastro haría imposible que ellos pudieran tener intimidad.
Mejor nos vamos a la Farmacia, tengo las llaves del depósito allí podremos estar mas tranquilos. Entonces la mamasota se levantó del banco y con la mas dulces de las sonrisas le daba a entender que si aceptaba ir con el a un lugar mas privado.
Caminaron el silencio abrasados la feliz pareja deteniéndose por momentos para darse de besos ante la mirada de envidia de cuantos machos los veían hubieran deseado estar en su lugar para disfrutar de los sensuales labios de ella, que de solo verlos era imposible evitar pensamientos morbosos sobre las maravillas que haría su dueña con ellos, así como de tocar sus exquisitas redondeces las cuales se delineaban perfectamente bajo el mini vestido de ligero vuelo que apenas cubría sus bien torneadas piernas, motivo también de pensamientos libidinosos, así siguió la feliz pareja caminando hasta que llegaron a la parte trasera de la farmacia, entraron y Rodrigo no quiso prender la luz para no levantar sospechas, solamente la luz de la luna que entraba por los ventanales los alumbraban, el chico la llevo hacia adentro tratando de continuar lo que hicieron en el parque pero lejos de las miradas indiscretas la recargo contra el armario donde guardaban los remedios.
Y comenzó a besarla en la boca con una presión avasallante, le metía la lengua revolviéndola adentro, le agarraba los pechos por arriba del vestido y se los masajeaba, ella hizo un débil gesto como para impedirlo, pero sin convicción alguna.
Le saco las tetas fuera y comenzó a mamárselas, que tetas duras y grandes, con unos pezones completamente hinchados, sus jadeos aumentaron. , el pezón lo tenía grueso carnoso y durísimo, le mamaba un pezón y con la mano le masajeaba el otro pecho haciendo que la nena se humedeciera de su conchita.
"ahhhhh ahhhhhhhh mi amor" gemía la nena presa de sensaciones placenteras.
Cielo Riveros lo tenía tomado con sus brazos agarrándolo de la nuca y apretándolo contra sus formidables pechos suspirando con las lengüeteadas del chico que la hacían sentir un cosquilleo desquiciante que le recorría todo su cuerpo, esta vez era distinto, no la estaban forzando, además el hecho de quien besaba ahora era joven y no un viejo asqueroso y sentía su coñito que estaba humedecido ante la situación tan placentera que le daba su novio y a juzgar por la presión que sentía contra su estómago, parecía que su polla también estaba dura.
A continuación el chico bajo una de sus manos por debajo del vestido hasta la parte superior de su muslo de la nena sintiendo un gran placer esa piel desnuda tan suave recorría con su mano ese par de nalgotas ricas estrujándolas y acariciándolas por largo rato disfrutando cada segundo del placer que le daba ese cuerpo de ensueño, bajaba las manos recorriendo el suave muslo de la pierna para a continuación de nuevo subía la mano para estrujar de nuevo esas nalgotas.
"ohhhhhh ohhhhhhhh mi amor me haces tan feliz" gemía la nena, le tocaba su caliente panochita estaba que casi hervía, por tanto manoseo del excitado chico, Cielo Riveros hacia muecas de placer en su angelical carita torcía la boca, se mordía los labios y movía su cabeza de un lado a otro.
Las lujuriosas manos del chico recorrían ese par de piernotas suaves acariciándolas ávidamente mientras no dejaba de mamarle los pechos impetuosamente.
Ahhh cosita rica decía el chico tenia la verga completamente dura y ella lo sentía en su bajo vientre excitándola mas y aferrándose mas a la cabeza de el pegándolo mas a sus formidables tetas.
"Aahhh mamacita cosita rica" le decía el caliente muchacho para a continuación apoderarse del hinchado pezón con la boca y succionárselo haciendo que Cielo Riveros arqueara la cintura y gimiendo " Ahhhhhhhhhh, qué rico, amor.
La mano derecha del caliente chico ahora corriendo para un costado su pequeñas bragas se apodero de su clítoris dándole un masaje que estimulaba muy placenteramente al ya duro cartílago, la mano izquierda estrujaba ambos senos alternadamente y por momentos con las yemas de los dedos le daba un suave masaje a los durísimos pezones y la ansiosa boca y lengua recorrían afanosamente todo el cuello y los desnudos hombros de la rica Cielo Riveros y por momentos se apoderaba del lóbulo de la oreja de la chica dándole suaves mordiscos , ella ladeaba su cabeza para permitirle su novio mas facilidad en su labor.
Todo eso la estaba matando de placer a la escultural jovencita, ella apoyaba sus suaves y delicadas manos sobre los jovenes y sudados brazos de su Novio a la altura de su muñeca de el, pero no para detener las acometidas del lujurioso joven, si no que cerraba sus finas manos y le daba suaves apretones a esas inexpertas manos que le daban degeneradas caricias.
Su resistencia física estaba totalmente vencida, solo por momentos entre gemidos pronunciaba algunas palabras de que Rodrigo parara todo ese mangreo a su escultural cuerpo.
….aaahhhhhhh….poooor…favor…..Rodrigoooo…se oía de su boca muy débil solo como un susurro. Estas seguro que nadie va a venir podrían descubrirnos.
-No tenes de que preocuparte mi amor, los dueños de la farmacia no vienen por las noches ven pero que tiernecita estas mi amor, me vas a dejar que te la meta hoy por primera vez te hare mi mujer mi amor, te voy hacer mujer.
Dicho esto desde algunos rincones de la calle se escucharon risas, y también algún silbido…Dale apurémonos Rodrigo que escucho voces allí afuera.
Cielo Riveros tenia miedo que fueran los dueños y los pillara dando tremendo espectáculo.
Ella estaba expectante sentía una rara mezcla de miedo, ansiedad y real excitación.
Ella se dio cuenta que su novio no estaba dispuesto a desistir de sus intenciones de penetrarla esa noche el quería demostrar que la amaba y la deseaba como mujer y también demostrar que se comporta como un hombre y totalmente dócil y entregada se dispuso a continuar lo que estaban haciendo abrio su boca dispuesta a que su Rodrigo gozara sus labios.Al mismo tiempo el joven la estrechaba por la cintura atrayéndola hacia sí, haciéndole sentir sin miramientos el duro bulto que tenía formado en la entrepierna.
Rodrigo no dejaba de estrujarle y mamarle los apetecibles pechos que se gastaba la pendeja –- Oohhhhhhhhhhhhhh…oohhhhhhhhhhhhhhhh….qué riiiiiccooooooo!!!; intensos escalofríos recorrían la suave piel de la nena, una y otra vez el joven mamaba desesperadamente los pezones mientras ella se retorcía de placer contra el armario del deposito y se aferraba a la cabeza de su novio, apretándola contra su pechos
Rodrigo ya muy caliente con los gemidos de la jovencita mamaba con mucho sadismo los senos de la nena, haciéndola gemir cada vez más fuerte y estremeciéndola toda.
Ohhhhhhhh…diossssssss…..Rodrigooooooii…..El desquiciante cosquilleo que le recorría la panocha la enloquecía haciéndola perder toda ecuanimidad; a estas alturas su ya no virginal panochita palpitaba fuertemente como si el corazón se le hubiera estacionado allá abajo.
Rodrigo no dejaba de chuparle y llenarle de saliva los pechos y le decía.
Te amo con todo mi corazón eres la única mujer en mi vida.
Y en un reflejo de total instinto de hembra Cielo Riveros puso sus manitas sobre el cierre del pantalón donde su novio ya no podía ocultar la terrible erección que se notaba un duro bulto oculto y deseoso de salir, y era la colegiala que quería liberar al monstruo que de seguro le otorgaría placeres que ya antes había disfrutado con diferentes machos.
Cielo Riveros absorta de la realidad y llena de excitación sin importar que pensara su novio de ella se arrodillo en el suelo quedándole la cremallera a la altura de sus labios, su cuerpo quería acción, quería ser penetrada de una vez pero sentía una fuerte necesidad de probar lo que su novio tenia como verga, y haría, todo sea por saciar el insaciable apetito sexual de su cuerpo.. con sus manitos temblorosas por los nervios y la exitacion extrajo el miembro de Rodrigo que ya estaba tieso, y al tenerlo entre sus manos vio que no era lo que imaginaba, sus dimensiones eran normales mas bien tirando a chico, por su mente no quiso compararla a la de los viejos que abusaron de ella, pero no podía evitarlo, asi parada como la tenia Rodrigo, apenas alcanzaba las dimensiones de la de don Pedro cuando la tenia dormida por ejemplo, su mano cubria toda la extensión del miembro que parecía una varita de las que usan los magos, el grosor de las vergas del padrastro de su novio por ejemplo era hasta el triple de gruesa. Pero eso no tendría que desalentarla, trato de borrar de su mente los miembros masculinos que ya había probado y concentrarse en la de Rodrigo, es mas ella amaba a su novio no por el largo ni el grosor de su miembro. Entonces sus labios comenzaron a acercarse lentamente hacia la rojiza cabeza, Rodrigo veía emocionado como esos labios carnosos ya estaban cerca de envolver su miembro,– ah dios mío, no lo creo, no lo creo… se decía el chico al ver como parte de su miembro desaparecía dentro de la boca de la nena.
Los rosados labios engulleron sin dificultad toda la extensión de aquella palpitante verga mientras que por dentro su lengua acariciaba aquel venoso contorno, las sensaciones que sentía el afortunado Rodrigo eran maravillosas, nunca nadie le hubiera mamado el miembro de esa manera tan dulce y sensual… -- Si, Así mi amor lo haces bien, sigue así donde aprendiste a hacerlo tan ricooo ahhhh…
Tan solo oír lo que su novio sugería acerca de donde aprendió el arte de mamar vergas trato de disminuir el ritmo de la mamada su novio podría darse cuenta que ella era una golfa que le fascinan las vergas, mientras el chico quien agarrándola del cabello se sujeto la verga obligándole a metérsela entera quedando solamente las bolas fuera, la nena con toda complacencia jugaba con su lengua en toda la extensión del miembro que tenia atrapado entre sus labios, estaba como adormecida, lo único que olía ella era a sexo, a ese placer que tanto le gustaba y que esa noche lo haría con su único amor Rodrigo.
Fueron como 5 minutos en los que los carnosos labios recorrieron todo lo que podían de la verga del muchacho, su rosadita lengua lamio desde los testículos hasta la roja cabeza, el exitado chico veía maravillado como aquel hermoso rostro disfrutaba de la mamada, aquella imagen de tenerla a Cielo Riveros de rodillas engullendo su verga fue una tortura para el ya no podria aguantar demasiado. Basta mi amor, ya no aguanto, ahora si quiero metertela ya mi amor!!!… Cielo Riveros quien en su desesperación se colocaba en posición de perrito ansiosa por recibir dentro de ella la virilidad de su amado Rodrigo. Este colocándose cómodamente iba guiando aquella verga hasta la entrada de la palpitante concha.
El muchacho miraba atónito veía como la cabeza de su miembro se colocaba en la entrada de la hermosa nena… -- ! Esto le dolerá, cuando empuje le dolerá ¡… pensaba el ingenuo muchacho no sabiendo que por su dulce Cielo Riveros habían pasado muchos pedazos de verga muchos mas grandes mas largos y mas gruesos que su modesto miembro que se gastaba el muchacho sin embargo la tierna adolescente deseaba mucho ser penetrada por su amado Rodrigo.
La nena sintió la cabeza de la tranca de su amado como era acomodada en la entrada de su ya lubricada concha, era la primera vez que hacia el amor en forma real, las otras veces fueron forzadas, aunque disfrutaba mucho de revolcarse con los desalmados hombres que la violaban esto era distinto era su amado lo que siempre había soñado entregarse por amor--Ahhhh Rodrigooo, por favor hazlo …!!, se atrevió a decir Cielo Riveros , quien aún se mantenía en cuatro en el oscuro deposito y mirando con su carita suplicante invitaba a su novio a que le enterrara la verga de una la quería sentir adentro lo mas profundo que pueda.
prepárate amor que allí voy diciendo esto último Rodrigo empujo su cabeza vergal con decisión hacia el interior de su hermosa amada, quien al sentir el vigoroso apuntalamiento, no le quedó más remedio que cerrar sus ojos y contraer sus facciones al sentir como el modesto aparato vergal de su novio entraba sin mayores dificultades a su estrecha concha.
Ya te metí toda mi vergaaa asi la querias todooo!! se afianzo con sus manos de las suaves caderas de Cielo Riveros y empujo más violentamente, atravesándola con salvaje brutalidad, hasta que sintió que sus testículos chocaban la entrada suave vagina de la nena.
Cielo Riveros lo sintió entrarle hasta el alma, ponía lo mejor de ella para que su amado disfrutara y que se la había metido por primera vez en su concha, pensaba que lo que tenía introducido en su vagina no era una verga tan grande pero le reconfortaba que era de su novio.
Rodrigo quien no cesaba sus firmes movimientos de apuntalamiento que accionaban al interior de la concha de su novia, paso sus manos, por debajo del suave estomago de la joven haciendo que ella se enderezara y para así poder sobarle sus duras y sedosas tetas, el joven se daba cuenta que con sus manos a pesar de tenerlas grandes, estas no abarcaban a palparlas en forma completa, el saber y darse cuenta de tener ensartada a su novia can carita de niña pero con un cuerpazo endiabladamente infartante, casi lo enloquecieron de calentura, por lo que comenzó un mete y saca infernal lo que provoco los primeros gemidos de la jovencita.
La culeada iba para larga, pero Rodrigo no quería acabar, apenas llevaban 3 o 5 minutos culiando, pero el destino le jugaría una mala pasada, su joven novia empezó a mover sus caderas de atrás y hacia adelante, por lo que a modo de agradecimiento comenzó a moverse y a meter verga en una forma casi demencial, ahora sí que se venía lo bueno pensaba el feliz y amachado jovenzuelo,
--Ahhhh que rico te meneas Eveliin!!, erees la mejooor!!, le decía preso por la excitación…
--Eres una Diosa deseada por todos y hoy sos miaaa! Soy tu novio y me siento orgulloso de serlooo. Ya no aguan…tooo…masssss!, me voy…a…co…rrerrr… adentro de…tu…cuer…pooooo!! Ohhhhh que…ri…cooooo, la…vas….a …re…ci..birrrrr, amoo…rrr!! to…maaaaaaa!!, gruño con desesperación, y fijando su mirada, en el hermoso rostro descongestionado de Cielo Riveros , derramo en el interior de su estómago 6 a 8 potentes chorros de hirviente y reproductivo semen, el cual salía escupido en abundancia y con fuerzas desde su verga, quemando las entrañas de la excitada Cielo Riveros quien sentía como su novio se venia tan pronto, y no era la experiencia que podría colmar su expectativa.
Estuvieron pegados en esa posición un espacio de tiempo indeterminado, Cielo Riveros en cuatro con sus bellos muslos bien abiertos esperaba ya sin respuesta que su novio la siguiera taladrando y con Rodrigo aun incrustado con su verga ya flácida al interior de su cuerpo, había sido la follada mas rápida de la historia donde solo pero solo Rodrigo había disfrutado la bella Cielo Riveros recién empezaba a disfrutar y sintió un vacío tremendo cuando lentamente Rodrigo se fue saliendo y desclavando del portentoso cuerpo.
El muchacho se sintió apenado al darse cuenta que su novia todavía no había quedado satisfecha, pero era un problema que afecta a muchos hombres, porque Rodrigo sufría de eyaculación precoz, Cielo Riveros para que no se sintiera mal abrazo a su amado y le dio un tierno beso en los labios. Se vistieron y salieron en forma apresurada, tratando de no ser vistos, Rodrigo acompaño a su amada hasta la casa de la madre de Cielo Riveros , angustiado por su desempeño en el acto de apareamiento donde no logro satisfacer a su amante, mientras la bella adolescente se despidió del chico y se fue a duchar con agua fría para tratar de apagar la calentura en su cuerpo, producto de no haber sido follada como las hembras merecen.
Bajo el agua de la ducha estaba cuando sintió la voz del marido de su Madre el malparido y pervertido, Don Lucas el tipo que ella odiaba con toda su alma.
CONTINUARA…
Unos ojos lujuriosos vieron de costados a una imponente mujer con un short ajustadisimo, parecía que las nalgas de la bella colegiala tragarían en cualquier momento ese diminuto pantalón corto, con el barbijo puesto don Severiano casi no la reconoció.
Bajo la fría ducha nuestra Cielo Riveros trataba de apagar la calentura que había quedado en su apetecible cuerpo, tras el fallido acto de apareamiento que había tenido con su novio Rodrigo, el muchacho sufría de eyaculación precoz, un problema que afecta a gran parte de la población Masculina, esto hizo que el joven eyaculara apenas dos o tres minutos de haber penetrado la panocha de su novia, dejándonos a mi como a ustedes estimados lectores con las ganas de que nuestra bella adolescente gozara de una noche mas de lujurioso apareamiento, con esas mismas ganas quedo nuestra Cielo Riveros , cuando sintió el tibio néctar derramarse en su interior, y sentir el pene de su Rodrigo perder erección en escasos segundos, tampoco culpemos mucho al muchacho, nosotros también al tener a tan apetecible colegiala en cuatro dispuesta a entregar su escultural cuerpo por entera y que encima te mire con esos ojos hermosos y tiernos quien no se descargaría en su interior después de bombearla en solo segundos.
Mientras tanto Cielo Riveros trataba de alargar el tiempo bajo la regadera, no quería encontrarse en el pasillo que lleva el baño a la cocina con su madre Doña Isabel y el desalmado Don Lucas que tenía como pareja, desde donde estaba escuchaba la vos de su Madre cuando el dueño del inquilinato la invitaba a pro crearse, además que Cielo Riveros pensaba que a la pobre de su Madre en vez de hacerle el amor entregaba su cuerpo a cambio de que no las echaran de la pensión, ya que la situación económica de ambas eran desesperantes, por las noches desde su habitación escuchaba como en el cuarto de su progenitora salían gritos de parte de ella como si la estarían descuartizando, por los bramidos y alaridos de placer que a ella le parecían escuchar.
Habían ocasiones en que Cielo Riveros podría jurar que a su madre la estaban golpeando, pero luego la veía muy risueña salir a prepararle algo para comer a su hombre, o como se besaban como enajenados no respetando que ella estuviera presente. Le costaba entender como aquel odioso y pervertido tipo, que en una ocasión la violo, eso Cielo Riveros no lo podía superar, esa vez no fue chantajeada como con el cojo Juan y ni siquiera sintió la excitación que le dio Don Pedro la primera vez en la Feria, aquella excitación que la hizo entregarse con pasión y deseo. Esa vez no fue asi don Lucas solo vino y la tomo sin ningún derecho, reclamando algo que no era suyo, encima permitió que su compinche el Gordo Anselmo, también la violara, Don Lucas le había robado todo su orgullo, por eso odiaba tanto al sujeto que por ahora parecía que su objetivo pasaba en convertirse en su Padrastro.
Don Lucas por su parte estaba encantado de haber formado una relación formal con su inquilina la señora Isabel, una mujer madura con un cuerpo mas que conservado, por efecto de su propia naturaleza, la mama de Cielo Riveros tenia curvas mas que apetecibles, cualquier hombre estaría que dispuesto a agasajarse de ella y el viejo daba riendas sueltas a su lujuria y disfrutaba al máximo de tan suculenta y hermosa hembra en la misma casa de ella, luego su plan sería poder disfrutar también del cuerpo de su hija la infartante adolescente llamada Cielo Riveros , pero bueno!, él estaba viviendo el día a día y tenía que aprovechar.
Cuando nuestra Cielo Riveros termino de ducharse se envolvió con su toalla y sigilosamente se dirigió a su habitación, era inevitable pasar por la pieza de su madre que por el destino o por costumbre esta vez nuevamente estaba entreabierta, la adolescente sabía muy dentro suyo que no debía espiarlos, que la intimidad de su madre y su pareja era incluso rechazado por todo lo que pasaba por su conciencia, pero la calentura que llevaba puesta en su interior producto de que su Rodrigo no la culiara como Dios manda, hizo que se detuviera al lado mismo de la entreabierta puerta, al asomarse para ver lo que pasaba dentro quedo casi paralizada ante las obscenas y depravadas visiones que se plasmaron en el verde de sus ojos.
Vio a su Madre totalmente desnuda, de rodillas en el suelo con una tremenda cosa de carne embutida en su boca …Luego de mirar por un buen rato sus ojos y mente le explicaron que aquella repugnante masa pulposa y carnal en forma alargada que Doña Isabel mantenía ensartada en sus labios, era el mismo pene de don Lucas el que una vez obligo a ella chupar contra su voluntad, el tipo que también se encontraba desnudo al igual que ella, la tenía firmemente agarrada de sus cabellos dirigiendo la maniobra de succión con bruscos movimientos de caderas.
Para Cielo Riveros practicar el sexo oral era como muy común casi normal, lo había hecho ella con los machos de turno que le toco follar, sus amigas también lo hacían como algo natural que tenia el sexo, pero verlo hacer a su Madre en vivo y en directo para ella era algo que no se hacía, era algo sucio y prohibidoooo!! Se decía para ella misma, además ver sus cuerpos desnudos, jamas imagino ver a su Madre encuerada y menos con un hombre que no fuera su difunto Padre.
Cielo Riveros no supo qué hacer ni cómo reaccionar, muy lentamente se fue retirando hacia atrás para no interrumpir a la pareja, a la vez que pensaba que como su Madre era capaz de hacer algo tan repulsivo, pero en un rincón de su mente también quedo graficada nítidamente la hermosa forma de esa tremenda y bestial verga nervuda que alguna vez obligaron a tragársela entera y que su Progenitora mamaba golosamente.
Cuando ya estaba a salvo de no ser vista por el caliente matrimonio, y estaba a punto de retirarse muy asqueada por la espeluznante imagen recién vista, tubo la pequeña debilidad de querer mirar un poco más, para ver si realmente estaban presa de un gozo verdadero, y era ella la mal pensada, se mentía para sí misma.
Se acercó un poco más a la puerta y muy sigilosamente se puso a espiar como su Madre mantenía relaciones sexuales con el tipo que alguna vez la había violado…
La sorprendida Cielo Riveros vio como aquel hombre eyaculaba por su gigantesco miembro muy parecido al de los potros, abundantes emisiones de un extraño liquido blanco en la boca de su Madre, y como esta golosamente se lo tragaba, (su mente ya le había indicado que lo que se había bebido su Progenitora era semen de macho).
Vio también que cuando ya creía que había finalizado aquella extraña sesión amatoria, que fue su Madre quien se tendió en el mismo suelo de la habitación y abierta de patas pedía que le metieran verga; y más grande fue su sorpresa cuando comprobó que don Lucas aun con su armamento firme y parado se lo mando a guardar de una y en toda su longitud, y que más encima se puso de pie con Doña Isabel totalmente ensartada a su apéndice, vio los jadeos que hacían ambos cuerpos desnudos y sudados.
Luego vio cómo su propia Madre se ponía en cuatro patas tal como lo hacían las perras dándose ella misma fuertes nalgadas en el culo, como animando a su amante para que este le hiciera quizás que cosa…
--Estas lista putaaaa!!, escucho claramente desde su ubicación Cielo Riveros …--Si Lucas!!, deleee!!...deleeee!!, vio cómo su progenitora pedía que le dieran, pero que cosa será?... Se preguntaba la dudosa adolescente…
Y vio cuando el horroroso Don Lucas tomaba fuerzas y dándose impulso le asesto un lacerante y sonoro cachetazo que casi se llegó a encarnar en las suavidades de su gran pedazo de hermoso culo…
--Auuuuuhhahhh!!...ayyy!!…ayyyy!!…fue el fuerte alarido de auténtico dolor que sintió Doña Isabel cuando las manos del sujeto quedaron marcadas en sus suaves carnes, a la vez que su respiración era totalmente agitada por las fuertes convulsiones de suplicio que tenía que aguantar y por las casi inevitables ganas de arrancar que sentía su lacerado cuerpo, pero ella se sometía a su macho por lo que se volvía a acomodar para seguir recibiendo de lo que tanto le gustaba a ella que le dieran…
El vejete ahora con todas la seguridad del mundo le siguió castigando el culo con unos encarnizadas palmadas que retumbaban en toda la habitación,
--Quieres más zorraaaa!!
--Siiiiii!!
Vio la sádica expresión en la de aquel miserable hombre que tomando más fuerzas que antes dejaba caer implacables e inmisericordiosas palmadas en el curvilíneo cuerpo de la mujer.
Plafff! Plafff!! Plafff!!!....Plafff!!, … La adolescente espectadora, de solo ver la manera tan violenta que le daban al desnudo cuerpo de su Madre, ver la crueldad a la que ella era sometida, los lamentoso gemidos de dolor que dejaba salir de sus labios la hacían creer que su Madre estaba en el mismísimo infierno, soportaba todo eso para no quedar en la calle y que don Lucas no le cobrara el alquiler, pero al comprobar que era la misma Doña Isabel quien animaba al vejete a que siguiera pelándole el culo a guascazo limpio y verle la cara de degenerada y de puta gozadora de hombres, que gozaba con las aberraciones que le hacían, para luego volver a ser testigo de cómo Don Lucas metía esa monstruosa verga de caballo en el acalorado cuerpo de su complaciente Madre, …
Tomaaa putaa te encanta todaaaa pendeja asi pendejaa…la palabra pendeja no coincidía con la situación de ambos, lo que no sabia Cielo Riveros es que Don Lucas cogia con Doña Isabel imaginando que a la que atravesaba con su sable de carne era nada mas que ella la hermosa adolescente, que daba vueltas en la mente del vejete, que arremetía con fuerzas pensando que lo hacia con Cielo Riveros quien no aguanto más y huyo hacia la seguridad de su habitación para ir a encerrarse con llave y tratar de no pensar que hacían su Madre y su Macho.
Las aberrantes imágenes de haber visto a su propia Madre ensartada por una verga casi de animal, la tenían confundida y horrorizada, su estado mental había quedado en condiciones deplorables, pero lo que no entendía y lo que más la entristecía era ver que Doña Isabel parecía disfrutar de todas aquellas humillaciones a la cual era sometida, también recordó que Don Lucas también cuando la violo la había tratado de aquella manera, pero la Colegiala más se escandalizó cuando se sorprendió a ella misma con sus pezones totalmente erectos que casi le llegaban a doler, prefirió pensar en otra cosa, ya que casi en el mismo instante comenzó a sentir en su sexo el mismo cosquilleo que había sentido cuando estuvo con su novio y este al ser mas rápido que Speedy Gonzales, no le permitió a la nena llegar éxtasis, ni la ducha fría logro calmarla, esto era extraño, muy extraño, pensaba la la bella Cielo Riveros .
Encendió la tele a un volumen alto para evitar escuchar los gritos de la otra habitación, en las noticias hablaban del brote de un virus desconocido, que se desparramaba por el mundo, y los presidentes de los distintos Países mandaban en cuarentena a sus habitantes, pero esas noticias tan graves a ella no parecían afectarla, por su cabeza solamente `pasaba la confusión que tanto la atormentaba de estar aguantando en su casa a un abusador, y que su cuerpo se excitara de ver a su propio violador coger con su madre eso parecía hacerla enloquecer, con esos atormentadores pensamientos la nena finalmente se durmió en la seguridad de su habitación.
El otro dia ya un poco más tranquila por la distracción de estar preparándose el desayuno en la cocina, por unos momentos casi se había olvidado de los vejámenes de los cuales disfrutaba su Madre, pero la calentura que cargaba su cuerpo eso hacía que a cada rato les llegaran esas imágenes como si fueran sacadas de una escena de cine porno, la gruesa verga que perforaba a su amada Madre, mezclaba concentrada el vaso de leche y con sus otra mano se tocaba la caliente panocha, cuando vio a su Padrastro Don Lucas entrar a la cocina…
--Buenos días Señorita, jejeje, le saludo burlonamente…
Cielo Riveros no pudo evitar fijarse en la pervertida mirada del asqueroso hombre y no supo el por qué, pero también le dedico una leve mirada al paquete de aquel asqueroso sujeto.
--Buenos días Niña que no te enseñaron educación acaso, le reclamaba don Lucas a la joven Cielo Riveros …
Bue—Buenos días…susurro en voz baja la chica mirando para otro lado, no soportaba dirigirle la palabra al sujeto que tanto odiaba.
--quería disculparme por el alboroto que armamos anoche tu Madre y yo, jejeje, es que no podemos contenernos las ganas y como tu mama es muy fogosa y yo muy ardiente hacemos mucho ruido sabes jejeje… Don Lucas le decía eso sabiendo que eso incomodaba muchísimo a Cielo Riveros , pero disfrutaba que asi sea poner incomoda a la nena, lo que pasa es que mi esposa no me deja salir si no la atiendo como a ella le corresponde jejeje, le contesto sin siquiera que la adolescente le haya preguntado algo, simplemente para molestarla le comentaba esas cosas y fijando su perversa mirada en las tetas de Cielo Riveros que no podía evitar que a través de su pijama se notara claramente sus pezones endurecidos , y no pudiendo con el genio el pervertido viejo le mando sus guarradas a la joven que se negaba a responder las peladeces que soltaba.
Ayyy mamita que rica que estas, como me gustaría partirte la zorra nuevamente a vergazo limpio y como lo hice esa tarde te acordas pendeja como gozaste mi verga, yo si te movías como una víbora cuando la tenías adentro eh…le decía el degenerado…--Que pasa te comieron la lengua los ratones jejeje…
--hable mas bajo Don mi Madre podría escuchar…
Cielo Riveros nunca le conto a su madre que el ahora amante de ella la había literalmente violado, para la adolescente le daba mucha vergüenza que su madre supiera sobre ese incidente.

--Cuenta con ello ricura, jejeje, ese es nuestro secretillo, pero no creas que ahora estas salvada, cuando te fuiste a la ciudad para trabajar tu Madre quedo muy sola y triste, eso lo aproveche para acercarme a ella y enamorarla jejeeje, fue el primer paso, después mudarme para la casa de ustedes, y el tercer paso es poder culiarte nuevamente, pero no voy a apurar las cosas todo se dará a su debido tiempo, no tienes que desesperar primor, tarde o tempranos terminaremos enredados en la cama eso dalo por seguro jejeje, en un futuro cercano pasare a convertirme en el macho de ambas, ya verás dormiremos los tres juntos en la cama jejeje, me las cogeré a las dos al mismo tiempo, ese sería un sueño cumplido, un manjar que cualquier hombre daría su vida por ello …
El viejo hablaba hasta por los codos, le contaba a Cielo Riveros sus diabólicos y pervertidos planes que tenía para con ella y su madre Doña Isabel, después de prepararse un emparedado de fiambre se despidió de la colegiala tocándole su sedoso cabello, y advirtiéndole, prepárate pendeja que aprenderás a vivir conmigo, ahora tengo unos negocios que atender que con esto de la pandemia no podremos movernos tan libremente como antes adiós, dijo dando un portazo, para luego desaparecer…
Cielo Riveros sintió ganas de gritarle todo el desprecio que sentía por el, pero no quería que su Madre supiera lo que paso entre ellos, prefería el silencio, y no la vergüenza.
La adolescente quedo sola en la cocina se sintió agitada por el tenso momento que paso con Lucas, y también porque llevaba una calentura que no podía controlar en su cuerpo, pensó en su novio Rodrigo, el es el único que podría consolarla, iría a su casa para saber como se encuentra en la televisión hablaban del virus y el como es empleado de en una farmacia de seguro tendría mucho trabajo, entonces se vestía apresurada con una blusita y un short, tenía una cara de furia al al pensar en el viejo Lucas y sus locuras que tenía planeado para ellas. Cielo Riveros se veía con el pelo totalmente revuelto nerviosa, asustada con la respiración agitada y la cara muy roja. Su novio salía a las 7 pm. Tenia tiempo para estar con el un rato, el toque de queda por la cuarentena llegaba como máximo circular hasta las 9 de la noche, compro un barbijo en el negocio de la esquina ya que en las noticas indicaban que nadie podría circular por las calles sin él, la nena que de adolescente ya su cuerpo bien desarrollado, era ya toda una hembra que por estar a la moda al igual que las demás nenas de su edad y que bueno que fuese así hubiera sido un desperdicio que teniendo un cuerpo tan suculento, no se vistiera de esa manera.
La encamable colegiala empezó a caminar a paso firme rumbo a la casa de su amado, toda la jauría de machos se alborotaron a ver a este caminar a la despampanante colegiala de curvilíneas curvas, se perdían viendo el sexy y cadencioso andar casi natural de la espectacular hembra, en ese momento el diminuto short se perdía en las preciosas nalgas de la chica, que con barbijo puesto era muy sensual con ese atuendo, la nena era un exquisito platillo de excelentes curvas, y muy caliente su novio la dejo como una pava hirviendo, donde nadie puso a hervir un huevo, una pava hirviendo que la pusieron al máximo y no la usaron, asi quedo ese cuerpo de hembra en celo .
En el camino un patrullero se puso a la par, y al bajar los vidrios polarizados el que conducía era el comisario Sinforoso, se acuerdan de el verdad? Fue uno de los tantos viejos que aprovechando que sorprendió a Cielo Riveros encuerada en el asiento trasero de don Pedro, mediante chantajes pudo aprovecharse de la adolescente.
--Ey belleza pero donde desapareciste todo este tiempo… mira que me debes favores y no estoy dispuesto a renunciar a ellos, te confieso que culiarte fue una de las cosas mas maravillosas que me paso en la vida, y voy a esperar el momento de volver a hacerlo, sabes chiquilla, ahora tu Madre esta en pareja y a tu casa no voy a ir, pero si te voy a raptar en cualquier momento y te llevo a un telo, que dices Primor lo hacemos eh?
Cielo Riveros lo miro con cara de enojo y movió su cabeza en señal de rechazo, a pesar de la calentura que llevaba encima cualquier tipo solamente tendría que tomarla de la mano y llevarla a un telo para cogérsela, pero ella estaba decidida, quería intentarlo nuevamente con su amado Rodrigo, asi fue que a los pocos minutos nuestra Cielo Riveros llego a la casa de Rodrigo, el patrullero freno en la esquina para ver que pasaba, la nena al tocar el timbre no salió nadie, por un instante alguien se asomó por la ventana fueron unos ojos lujuriosos vieron de costados a una imponente mujer con un short ajustadisimo, parecía que las nalgas de la bella colegiala tragarían en cualquier momento ese diminuto pantalón corto, a los segundos de aquella fantástica visión el pobre hombre que casi se infarta era el mismísimo don Severiano, cuando noto que esta era Cielo Riveros , con el barbijo puesto no la había reconocido, hace tiempo que no sabía de ella, era la nena que él estaba esperando en sus sueños más remotos, la vio acercarse a su puerta apurada lo que hacía que sus caderas se movieran ampulosamente exquisitas, una vez mas Cielo Riveros todo el timbre y el viejo su verga ya estaba que explotaba.
La despampanante colegiala esperaba ansiosa e impaciente a que le abrieran la puerta en la casa de Rodrigo, hasta que por fin vio aparecer a don Severiano quien la hiso pasar al instante,
--Pásale… pásale Cielo Riveros …, el vejete no pudo ocultar la terrible excitación se encontraba totalmente alborotado de volver a tener a su alcance a tan hermosa adolescente que una vez supo cogérsela en su propia cama.
--Donde está el?, pregunto Cielo Riveros con su carita de niña inocente,
--Está en su trabajo, lo hicieron quedar después de hora por la gran demanda de insumos por la pandemia esta que llego al país jejje. …
Su madre al enterarse que su consentido hijo trabajaría hasta tarde fue a llevarle una bandeja de comida, pero no te preocupes ya deben de estar por venir ven siéntate en el sillón allí estaremos cómodos hasta que lleguen.
--Qué quieres tomar preciosura… que tal si hasta que ellos lleguen tomamos un vermusito, no es una maravilla que otra vez podamos estar solitos mira que mi pinga extraño mucho tu panochita.
Para la nena las palabras de don Severiano habían sido claras: “la inminente violación estaba en camino, y ella estaba por demás caliente para evitarla”, sin ánimos de salir corriendo porque afuera estaba el comisario Sinforoso esperándola para raptarla seguro con la excusa de llevarla detenida por alguna contravención a la pandemia y seria víctima de la violación de este, no tenía escapatoria, ahora sentada en el sofá de la casa de su novio y solo escuchando la pesada respiración del viejo al lado suyo con voz asustada y roja por una extraña vergüenza que la invadía quiso preguntar aquello que ella ya sabía,
-Es Usted un abusador sinvergüenza, ya una vez me violo sin importarle que yo fuera novia de su hijastro… como se le ocurre ahora repetir eso es muy malo yo amo a Rodrigo…
--Cállate encuinclaaaa!!!, bramo el vejete como un verdadero Machirulo, --Esta es mi casa…y aquí el único que toma las decisiones soy yo!!, te queda claro zorraaaa!!!!
Cielo Riveros quien había tenido un mínimo de sentido común cambio de opinión en el acto, recién se percató que el viejo tenía un brillo extraño en sus ojos los cuales se le notaban enrojecidos, sin ni siquiera proponérselo bajo su vista hasta su verga en donde claramente y por sobre el pantalón de tela se le veía que este la tenía tremendamente parada, automáticamente sus hermosas piernas comenzaron a temblar, como así mismo en sus propios oídos creía sentir los latidos de su corazón, el viejo ya se le venía acercando,
--Nooo don Severianooo… por favor nooooo…otra vez nooo…
Fue lo único que salió de los labios de la dulce Cielo Riveros cuando en su mismo cuerpo sintió que era tomada brutamente desde su cintura por el padrastro de su novio, el viejo la giro y la arrimo contra el camastro donde seguro cogia con la madre de Rodrigo.
El vejete al tenerla de espaldas a él no podía quitar la vista de ese tremendo culazo que la nena se gastaba y escondía bajo aquel soberbio short que se perdia en sus gluteos, le miraba y dimensionaba sus grandes y bien proporcionadas nalgas, como pudo le ubico su endurecida herramienta justo al medio de estas, estaba decidido a cogérsela lo antes posible…
--Que trasero tan sublime es el que te gastas mocosa, tienes un culazo descomunal le decía don Severiano mirándole las nalgotas y moviendo su cara a los lados como no creyéndosela de lo que tenía antes sus ojos, no dudo en comenzar a sobárselas pausadamente a la muy asustada Cielo Riveros .
--Me entere que entregas este trasero a quien se cruza en tu camino, pendeja hdp ahora ese ojete tiene que ser mio es lo que me falto hacer contigo!!!.
El vejete quien estaba como poseído por la atracción que sentía por esas delineadas formas que tenía en estos momentos para el solo no dudo en comenzar a sobajearla por todo su cuerpo y por sobre el pequeño pantaloncillo, sobre todo tanteándole las tetas, pensó en que la quería tener encuerada lo más rápido posible, a la vez que le decía en uno de sus oídos, --Como te dije el otro día nena… eres una pendejita muy linda, que tremendo cuerpo es el que tienes cosita rica, lo que te dije recién es la purita verdad… pero es cosa tuya si me quieres creer o no, pero ese maricon que tienes por novio no te merece lindura, jejejeje, le susurraba desde atrás en su oído, en ese momento Cielo Riveros sintió los peludos brazos del viejo que pasaban entre medio de los de ella para comenzar a puntearla contra el antiguo camastro de madera.
Don Severiano aprovechando la pasividad de la colegiala, subió sus manazas hasta los suaves hombros de la colegiala y se propuso a correr los tirantes de la blusita con claras intenciones de comenzar a desnudarla, Cielo Riveros tenia tanta calentura en su cuerpo que se dejaba hacer, estaba regalada pero para disimular estar en desacuerdo con las intenciones de su casi suegro susurro muy débilmente.
--Don Severianooo… no! que hace!?... que es lo que quiereeee!!? El viejo percatándose de que la colegiala no estaba resistiéndose fue directo al grano,
--Jajajaja!!, me gusta que quieras ir directo al punto pendeja, la verdad es que el otro día me dejaste más que satisfecho con entregarme tu cosita, y si quieres saber qué es lo que quiero ahora, pues bien te lo diré: Quiero culearte por el culo, es el lugar que me falta penetrar en tu cuerpo putaaa!!!
--Pues mira nada más el par de nalgotas que te gastas chiquilla endemoniada, a ver si están tan duras como me las imaginaba… Plaaaafffffff!!!!!!, fue tan fuerte la nalgada en el culo que le asesto don Severiano que hizo que de la chica se escuchara un fuerte grito de dolor, el viejo solo empezó a reír carcajadas mientras le decía,--No me has decepcionado pendeja, te gastas un culo duro y bien parado, justo como a mí me gustan, no hay duda que disfrutare meterte mi verga por el orto, jajajajaja!!!, espero que este tan apretado como me hablan todos en el Pueblo en las numerosas pajas que me he hecho en tu honor putaaa!!!
--Bien putita ya no hay más tiempo que perder, don Severiano le hablaba con cara de pervertido mientras la recorría de pies a cabeza como si se la estuviera comiendo con su caliente mirada de violador recién salido de una cárcel, su respiración ya era acelerada, --Aprovechemos que ahora no está mi mujer en la casa y que tampoco está el imbécil de su hijo, jajajaja, nos vamos a dedicar a culear nuevamente pero esta vez por tu culooo, jajajaja.
En ese mismo momento la muy caliente Cielo Riveros presenciaba como el caliente de su casi suegro se bajaba el cierre de su pantalón y sacaba su miembro erecto para que ella pudiera vérselo nuevamente, la colegiala que estaba absorta contra la cama matrimonial quedó impresionada pero al mismo tiempo intimidada de volver a ver las dimensiones que se gastaba el viejo, pues la verga de su suegro otra vez se veía enorme, la joven miraba como aquella descomunal tranca no solo era gruesa y venosa, sino que también era bastante larga y encorvada hacia arriba, la veía pulsar agitadamente dando la impresión que aquella tremenda cosa tenia pulmones propios y respiraba agitadamente, sus ojitos se trasladaron a una frondosa maraña de pelos negros en la base de esta, ahora sí que la veía con total nitidez y no en la oscuridad como había sido la vez anterior, la nena se percataba también que esa aterradora verga además de tener una tremenda cabeza gorda también la tenía muy morada, todo eso que estaba presenciando eran una conjunción que sencillamente la horrorizaban, pues sabía que las intenciones de don Severiano eran metérsela por el culo lo más que pudiera hasta descargar todo su hirviente semen completamente adentro de ella.
--Don Severiano… snifff… por favor no me lo vaya a hacer… sniffssss… yo soy la novia de su hijastro, snifffssss, la nena fingía no estar de acuerdo en que se la metieran por el culo pensó erróneamente que quizás el viejo se la pensaría, pero lo único que logro fue complicar aún más su situación, ya que a don Seve era eso lo que precisamente más lo calentaban, metérsela por el traste a la novia de su hijastro era como ganarse el mayor de los trofeos, con esto pensaba que si el chamaco lograba casarse algún día con la joven, seria gratificante para su ego y virilidad saber que él también se había cogido a la misma hembra incluso primero que él, así que, le bajo el shorsito hasta sus tobillos como si la chica fuera de su total propiedad y sencillamente separo sus muslos con poderío, logrando con esto que a su ardiente mirada quedara en los diminutos calzoncitos blancos que la joven llevaba puestos, mientras ella seguía llorando y suplicando que por favor no se lo hicieran, don Severiano ya claramente enfurecido y caliente hasta la locura le dijo,
--Silencio putaaaaa!!!, yo no te mande venir hasta mi casa lo hiciste solitaa!!!, zorra calienteeee!!!!, te callas ahorita mismo o te la meto en el orto de una y sin saliva, así que mejor disfrútaloooo!!!, jajajaja!!!! Te aseguro que Rodriguito es un maldito maricon que jamás te la meterá por el culo como yo lo voy a hacer hoy día, jajajaja!!!!!
Don Severiano no queriendo darle termino a aquella acalorada conversación de sexo desmesurado enderezo su cuerpo para ir mostrando su verga desde aquel glorioso cuerpo que tenia a escasos centímetros de el, el Cielo Riveros expectante de que le propondría el vejete, solo lo quedo mirando desde su posición, pero vio que Don Lucas se ponía de pie a un lado de la cama para luego decirle en 4 patas puta…!!! Ahora te voy a culear como a las perras, jajajajaja!!!!
Cielo Riveros con todo su sedoso cabello negro alborotado y humedecido por la traspiración felinamente movió sus curvas para ir acercándosele a gatas por sobre la cama, cada movimiento que hacia la nena era enloquecedor, el viejo sentía que cualquier momento era el último para su verga, hasta que por fin la vio ponerse tal como él le había dicho a un borde de la cama a la altura perfecta para el culearla a lo perrito, la chica le ubico el culo justo a un lado de donde estaba él para luego inclinar su tronco adosándolo en la cama hasta quedar con sus tetas aplastadas.
La espectacular panorámica que tenía el vejete era de concurso, y sin ya querer esperar más apunto con su verga a lo que siempre miro, admiro y deseo, el culito de Cielo Riveros era el sueño de todos los machos de ese perdido pueblo, con mucho cuidado poso el morado glande en su agujero anal, la nenota quien sintió la punta de carne tomar posesión levanto sus caderas para poder abrir y separar aún más sus piernas, al mismo tiempo que el viejo la tomo de su esbelta y pronunciada cintura para ir presionando lentamente, al mismo tiempo que el vejete la jalaba hacia su apéndice su agradecida vergota comenzó a entrar como si aquella deliciosa y apretado esfinger fuese su propia casa, lo que a su dueño lo hacían gozar placeres nunca antes sentidos.
Don Severiano disfrutaba cada centímetro que con la cabeza de la verga como una ciruela gigantesca entrara rosaba y abría las paredes interiores de la nena, era delicioso sentir como su tranca nuevamente forzaba ahora el orificio tan soñado y lo vio abrirse, se notaba que fueron muchos los que habían transitados por el , pues a pesar de todo lo que el sabia se la sentía muy apretada, en eso a sus oídos nuevamente llegaban los gemidos y las ardientes suplicas de la nuevamente ensartada jovencita,
--Siiiiii…! asiiiiiii…! asiiiiiii…!! Métala mássss…!! mássss…!! másssss…!!! méeetalaaa todaaaaa!!!!Mendigooooooo!!, en tanto el viejo no empujaba en su totalidad, se dio cuenta que la pendeja estaba mas que caliente asi que solamente la cabeza de su cipote entraba en el ajustado orificio, solamente un poco mas de la puntita entraba en el culo de nuestra Cielo Riveros , el viejo sabia que la nena la quería entera, pero el solamente la cabeza entraba casi por completo para luego sacársela. empellía y apuntalaba su apéndice en busca de mayor satisfacción sexual.
¡!Metemela entera viejo inútil!! Bramaba la pendeja estaba tan caliente que quería que su padrastro se la metiera entera.
Mientras el viejo zorro dueño de una experiencia en materia de mujeres que al estar tan calientes y alborotadas, con ganas de vergas, meterles solamente la punta de la cabezota las enloquecía, asi que por espacio de 10 minutos solamente introducia la cabeza y la sacaba dejando a la nena enloquecida de que la metieran entera, pero eso no podría resistirlo, ni la colegiala ni el, ese trasero que tanto deseaba tenia que metérsela entera, entonces tomando con mucho cuidado poso el morado glande en su agujero anal, Cielo Riveros quien sintió otra vez la punta de carne tomar la entrada del estrecho ano de la nena, lentamente Don Severiano fue introduciendo su verga se la sentía muy apretada, en eso a sus oídos nuevamente llegaban los gemidos y las ardientes suplicas de la nuevamente ensartada jovencita,
--Siiiiii…! asiiiiiii…! asiiiiiii…!! Métala mássss…!! mássss…!! másssss…!!! méeetalaaa todaaaaa no solamente tu puntaa!!!!Mendigooooooo!!, en tanto el viejo empujaba, centímetro a centímetro empellía y apuntalaba su apéndice en busca de mayor satisfacción sexual. Fue asi que el gigantesco falo entro por completo en el recto de la hermosa Cielo Riveros , quien ya ensartada en su totalidad sentía que su calentura acumulada podría asi calmarse y se sentía feliz de que asi sea.
El ritmo de las ensartadas fueron subieron de tono, el viejo arremetía como si fuera lo ultimo que fuera en su vida.
Plaffff…!, Plaffff…!! Plaffff…!! Plaffff…!! Plaffff…!!! Plaffff…!!! Retumbaban los feroces choques de nalgas y apéndice, el viejo la apuntalaba con bestialidad, como también a veces aminoraba los embates para ir recorriéndole su subterránea e íntima caverna anal como si su verga fuese el mismo Nautilus en plena faena de reconocimiento en aquellos exquisitos y tibios mares de placer que poseía la chiquilla en los más profundo de su caliente culo, llegando cada vez más adentro por cada apuntalamiento que le mandaba, la mente del vejete estaba a mil por hora, podía sentir en forma placentera como cada vez profundizaba aún más en el cuerpo de la nena, era una follada enloquecedora como también la mejor cacha que se había pegado en toda su vida.
Cielo Riveros seguía animándolo, por su culo habían pasado varios, el que la hizo debutar analmente el Jorobado conserje de su colegio Juan, el viejo mecanico del Parque de diversiones don Pedro, hasta un Taxista que ya no recuerda el nombre habían enterrado sus vergas en ese culo.
--Uyyyyyyy don Seveeeee que ricooooo!!, que grande se la sientooooo!!!, nunca me lo habían hecho tan ricoooooooo…!!! méeeetalaaaaa…!!! métela mássssss…Perrooooo!!! la quiero todaaaaaaa!!!! Mmmmmmmmmm que ricoooooo papiiiiii!!!... se la siento bien dura y paradaaaaaa!!!!... Muévaseeeee… muévaseee mas fuerteeeee…!!!Putooooo!! mas firmeeeeee…!!!!! Ohhhhhh… creo me voy cortadaaaaaaa!!!! creo que me estoy viniendoooooooooo!!!!!!
Apenas el vejete noto el lamentable estado erótico de Cielo Riveros , le mando una estocada en la cual intento sacársela por la boca si es que se podía, basto tan solo eso para que la caliente nenota explotara en un tremendo y fantástico orgasmo, sus líquidos vaginales salían a raudales como si la jovencita verdaderamente se estuviera meando, estos salían y escurrían mojándolo todo, su casi suegro ya no se podía aguantar por la calentura con que lo había puesto la chica, así que empezó un estruendoso mete y saca los más rápido y acelerado que le permitían sus fuerzas, se la metía y se la sacaba dejándosela ir hasta el fondo de sus entrañas, Cielo Riveros gritaba y exigía que le dieran más fuerte.
El viejo ya no se pudo aguantar más y enérgicamente se la metió hasta el fondo de sus entrañas , corriéndose con su verga lo más profundo que pudo en el culito de Cielo Riveros , tres, cinco, y hasta seis vigorosos chorros de caliente y espeso semen explotaron en el caliente e íntimo reducto femenino, el semen lo inundaba todo, como a su vez también se desbordaba desde el interior de su cola, el viejo experimentaba las contracciones que hacia la nena con su culito, exprimiéndosela hacia adentro, intentando con esto y si es que era posible, hacer aún más profunda la penetración.
Una vez terminado todo el vejete solo se dejó caer a un lado de ella desmadejado y todo sudado, lentamente fue sacando de su cola su humeante y espumosa verga aun en estado de erección producto del viagra, como pudo se echó a un lado de ella quien también poco a poco iba recuperando el aliento, vio que la nena se puso de espaldas y abrió sus piernas sin ningún mínimo de pudor, en donde pudo observarla con los muslos completamente separados, de su agrietada vagina y culo aún abierto escurrían una gran cantidad de los líquidos de ambos los cuales formaban un espeso charco blanco y semi trasparente que poco a poco iba siendo absorbido por la sabana.
Ambos amantes sintieron claramente cuando fuera en la calle daban la señal de el toque de queda, donde nadie podría salir a la calla hasta el día siguiente, seguramente su novio como la madre de el tendrían que pasar la noche en la farmacia, por el toque de queda, don Severiano fue el primero en hablar,
--Te gusto lo que acabamos de hacer chamaca!?, le dijo por fin una vez que ya notaba que todo volvía a la normalidad, mira que tu Rodri y su mama no vendrán esta noche, y vos tampoco podrás regresar a la tuya, por el toque de queda
--Don Seve… no creo que yo deba dormir esta noche aquí, mi novio no esta ni su mujer, ya son casi las 11 de la noche…
--Haremos un trato pendeja… por esta pandemia para que vayas sabiendo desde hoy día mismo tu pasas a ser algo así como mi enfermera, tendras permiso de circulación y vendrás todos los dias, te convertirás en mi terapeuta personal, jajajaja… la neta que como te lo dije antes… estas muy rica y de verdad que me gustaría que te vinieras a vivir conmigo, así que anda pensando que le inventaras a tu novio para engañarlo y puedas verte todas las veces que se me cante jajajaja!!!! Otra opción te doy, te casas con el inservible y se quedan a vivir aquí, por supuesto que te cogeré cuantas veces pueda.
Cielo Riveros ya recompuesta, se daba cuenta que otra vez este viejo miserable tenia la propuesta de que ella se casara con su Rodri para asi poder tenerla cerca y aprovechase cuantas veces quiera. el viejo la miraba desnudo y sentado mientras se bebía una cerveza y fumaba, aun no se la creía que había penetrado un culo con tan tremenda mujer, y cuando la nena ya se disponía a dormir al lado de el porque sus probabilidades de regresar a su casa eran imposibles, este la atrajo,
--No sabes lo que me cuesta dejarte ir lindura, es increíble lo buena que estas y lo muy rica que eres para coger…
Cielo Riveros intentando en no pensar en las salidas palabrotas de su suegro don Severiano solo respondió,--Entonces me puedo dormiir?,
--Ya te dije acaso estas sorda vas a venir a culiar conmigo las veces que yo quiera con la excusa de venir a cuidarme!!, jajaja…!!! así que ahora me das un beso antes de dormiirte, el viejo la miraba jalándose la bien parada tranca, a la vez que la veía totalmente desnuda por Dios que le daban ganas de volvérsela a coger ahí mismo tirada en el piso del living de su casa…
Cielo Riveros notaba que esa extraña expresión en los ojos del vejete le habían vuelto, y viendo que este en cualquier momento podía cambiar de opinión y se la podría volver a coger quizás hasta que horas solo le respondió,
Hasta mañana Don Lucas…
–Y que te pasa ahora zorraaaaaa!?, acaso no me la quieres chuparrrrrr!!? Acaso ese tal Lucas la tiene mas grande que yo, acaso la deseas mas a la de el que a la mia! –Es que me da asco… su cosa esta muy hedionda, por favor ya déjeme ir perooo…
Aquí los últimos párrafos del anterior relato, donde Don Severiano sometió analmente a la dulce colegiala novia de su hijastro Rodrigo.
--Ya te dije acaso estas sorda vas a venir a culiar conmigo las veces que yo quiera con la excusa de venir a cuidarme!!, jajaja…!!! así que ahora me das un beso antes de dormirte, el viejo la miraba jalándose la semi parada tranca, a la vez que la veía totalmente desnuda por Dios que le daban ganas de volvérsela a coger ahí mismo tirada en la cama matrimonial…
Cielo Riveros notaba que esa extraña expresión en los ojos del vejete le habían vuelto, y viendo que este en cualquier momento podía cambiar de opinión y se la podría volver a coger quizás hasta que horas solo le respondió,
Hasta mañana Don Lucas…
A lo mejor algún desprevenido lector no se percató del error de Cielo Riveros , cuando la nena lo único que quería es que el viejo la dejara en paz, y la dejara dormir pero Don Severiano no paso por alto ese tremendo exabrupto de parte de la colegiala y salto de su sillón donde se encontraba, y pego un grito que hizo retumbar el techo, lleno de cólera…
Pero como me llamaste pendeja malagradecida!!! Y de una certera cachetada que retumbo en la habitación, le recrimino nuevamente, ¡!! Como me llamaste eh, acaso no podes sacarte de tu mente al nuevo macho que trajo tu madre a tu casa… acaso lo viste desnudo en la ducha, lo viste meando, por eso estas caliente con el, respondemee!!!
Perdone don Severiano no va a volver a ocurrir, yo yo… la pobre Cielo Riveros no encontraba una excusa coherente para reparar su error y temía que el viejo le propinara nuevamente una bofetada,
¡!!Acaso no te alcanzo lo que acabamos de hacer eh, mi poronga no fue suficiente para que andes pensando en la poronga de tu Padrastro!!! Le reprochaba el viejo totalmente sacado y celoso a la vez.
Ven acércate, te voy a enseñar a respetar a este viejo, acércate que todavía hay mas para vos…
Cielo Riveros tenia clara de lo que realmente quería el vejete de ella, o sea sabía que el sexagenario se la volvería a violar pero extrañamente al recordar la verga que se gastaba le hacían sentirse confundida, eran del mismo tamaño y grosor que del Don Lucas, entonces por qué pensaba en Lucas y no en la verga de don Severiano, pero en el momento en que el vejete fue acercando su mano por sus bien torneados muslos y en dirección a la manita que protegía su vagina, le vio sus ojos que parecían los de un lobo hambriento de carne fresca, mientras también lo veía que se lamia asquerosamente sus gruesos labios.
Automáticamente la adolescente llevo su mirada a la verga del vejete y vio como esta lentamente se empezaba a parar por debajo del canzoncillo, don Severiano se percató de lo que miraba Cielo Riveros y supo que a pesar de como el la maltrataba la nena todavía estaba interesada en mirar su poderoso instrumento…
–Tócala!!, le ordeno con su gruesa y grave voz,
La nena lo quedo mirando con ojos expectantes, moviendo su cabeza en forma negativa, las palabras no le salían y la boca se le había secado, si acariciaba los genitales del tipo este se la volveria a violar
–Que la toques mierdaaaa!!!, le volvió a gritar tomando el mismo la mano de la chica y haciendo que se la agarrara de lleno, la colegiala ahí supo que lo que don Severiano ordenaba esto se tenía que cumplir…–Siéntela pendeja ves que el viagra si da resultado, mi pedazo esta así por tu culpa y prepárate que ahora si te la voy a dar con todo, para que no andes pensando en otros tipos cuando te estoy culeando, porque ahora sí que vas a saber lo que es recibir verga de verdad, jajajaja!!!
Cielo Riveros temblaba tenia miedo de que la volvieran a cachetear, el viejo prácticamente le estaba confirmando sus temores, se la iba a seguir violando en la cama matrimonial que Don Severiano compartía con su mujer, sus ojos se llenaron de lágrimas de resignación, ya no era la nena valiente que defendería a muerte la dignidad de su Rodrigo, ahora estaba entregada en manos del Padrastro del muchacho nunca imagino estar en tales condiciones con su casi suegro, que su ansiosa mirada de lujurioso deseo de cogerse a la novia de su hijastro era lo que más la aterraban ahora lo tenía abalanzándose sobre ella para hacerle cientos de cosas aberrantes que de seguro saciarían sus mas bajos instintos.
El viejo una vez subiéndose al camastro, se tumbaba de espaldas en el lecho matrimonial, tomo a la asustada chica de los brazos y la atrajo hacia su ancho pecho poblado de gruesos pelos canosos, clavándole su herramienta en el vientre de ella, mientras le acariciaba los duros pezoncitos le consulto mirándola a sus asustados ojos,
–realmente piensas en la verga de Lucas cuando te la meto pendeja?
–Noooo!!!, le pudo contestar al fin…
–No me mientas zorrita…te vi la cara de puta con la que me mirabas cuando te la estaba metiendo, y de seguro imaginabas al macho de tu madre arriba tuyoo, jejejeje… eso me dice que eres muy pero muy puta, y que una sola verga no es suficiente para vos…así que dime la verdad!!!!, a don Severiano mas se le paro cuando sintió las desnudas y juveniles tetas de Cielo Riveros comprimirse contra su pecho.
–De verdad don Seve…sniffs…no pensé en el cuando usted me la metía por el culo por favor no me viole nuevamente, solo dormiremos y mañana me marchare temprano…
–Jajajaja, claro que no te voy a violar pendeja buscona, vamos a culiar que es distinto, le decía mientras que con una mano la sujetaba de su cintura con la otra se sacaba el viejo calzoncillo, para seguir diciéndole muy cerca de su cara,
–No te darás ni cuenta cuando tu solita te estarás clavando en mi verga, jajaja!!, arrojándola hacia un lado de su obeso cuerpo le dijo, –Miraaaa!!!, lo que vieron los asustados ojos de la antojable nena fue un miembro enorme y muy gordo lleno de venas multicolores que pulsaban rápidamente producto del aceleramiento de la presión sanguínea. No podía creer que terrible instrumento hubiera entrado por completo en su cola, su tamaño y grosor, noto que esa verga gruesa y nervuda mas se parecía a la de un caballo que a la de su Rodrigo, que era normal tirando a pequeña, y encima eyaculaba apenas la penetraba, y ella quedaba con todas las ganas de seguir haciéndolo, todo lo contrario, Don Severiano por lo menos esta debía medir unos 23 centímetros le calculaba la sorprendida pendejita, nunca en su vida había imaginado una herramienta de carne tan descomunal, fuera tan eficiente a la hora de aparearse, tomando en cuenta que para ello el viejo había tomado viagra.
La nena al estar tan cerca de aquel monstruoso falo, cayó en un verdadero estado de culpa, pensó en Rodrigo…no don Severiano no lo haga…sniffsss no podemos engañar a su hijo, y a su señora que es muy buena, paremos con esto!!!! Sniffsss sniffsss….
–No me lo haga…por favor…sniffssss, seré buenita y me vestiré linda para usted, lo vendré a visitar para cuidarlo cuando se enferme…pero no me la vaya a meter !! Snifffsss…sniffssss…
–Déjate de estupideces y tócamela estúpida!!! ya verás que esta durísima todavia!!!, le ordenaba el vejete con su voz ronca, mientras el mismo le limpiaba la cara con sus toscas manos, esto hizo que la desafortunada joven se sintiera un poco más segura, volvió a poner su mirada en la cosota que le estaban solicitando que ella atendiera, el vejete ya le estaba sobando una teta.
Tímidamente acerco sus manos temblorosas, ahora que la tenía cerca le daba miedo tocarla de nuevo, cerro sus ojos y se dio fuerzas hasta que al fin se
la agarro, la sintió caliente, húmeda y durísima como si estuviera agarrando el palo de un hacha, miro al vejete y lo vio con sus ojos enrojecidos, este la miraba como si verdaderamente se la quisiera comer, la pobrecita y solo se quedó agarrada a la estaca de carne sin saber qué hacer.
–Y qué esperas pendeja!?,si quieres venir a diario a ver al inútil de tu novio tienes que pagar por ello, empieza a pajearme!, con semejante tranca que me gasto te tienes que acostumbrar a ella!!, jajaja, vamos… hazlo!! yo sé que tú puedes!!, jajaja… diciéndole esto último a la avergonzada chiquilla puso sus manazas sobre las de ella y le obligo a que comenzara a subirlas y bajarlas, la pequeña Cielo Riveros quien se encontraba de rodillas masturbando la estaca del pedófilo sexagenario , y ya pasado unos buenos minutos, no supo en que momento el vejete había retirado sus manos, y ahí se encontraba practicándole ella solita una desvergonzada masturbación a un viejo que podía ser su abuelo y que para rematarla era el padrastro de su novio, la paja continuaba frenéticamente.
A la curvilínea y portentosa joven al parecer ya se le había pasado la culpa por, la masturbación que le estaba propinando a su casi Suegro era de campeonato, pero aun así le daba algo de asco cuando le veía a la punta bajarle el pellejo, dando paso a que sus ojos miraran el glande azulado, ya notaba que sus manos y la cosa del vejete olían fuertemente a meados y otro tipo de sustancia que se parecían mucho a los que sus anteriores machos que habían abusado de ella también arrojaban desde la punta del falo, y que sin que ella se diera cuenta esos prolíficos olores le atraían, ahora gracias a sus fuertes y rítmicos movimientos manuales se la sentía más dura y más recia que antes, cada vez que miraba al Viejo como queriendo preguntarle con su mirada si es que lo estaba haciendo bien ,veía a este sonreírle en forma desvergonzada como sin decirlo que lo que ella estaba agarrando era mucho mas larga y gruesa que la de su Rodrigo, hasta que escucho nuevamente lo que le tocaba hacer,
–Ahora… chúpamela jovencita!!, límpiame la verga con tu lengüita!!!,
–Me llamo Cielo Riveros … escucho!!?, la joven que ya estaba entrando en confianza con el vejete, además que no le gustaba que le tratara de una nena inexperta.
Cielo Riveros acerco su cara a la verga, en esos momentos tenía toda la intención de chupársela, pero al ver la verga con algunos gruesos y encrespados pelos pegados en el glande, y ese desagradable y fuerte olor a orina, le dieron una profundas arcadas, el vejete al percatarse de esto se semi inclino para decirle en forma aireada,

–Y que te pasa ahora zorraaaaaa!?, acaso no me la quieres chuparrrrrr!!? Acaso ese tal Lucas la tiene mas grande que yo, acaso la deseas mas a la de el que a la mia!
–Es que me da asco… su cosa esta muy hedionda, por favor ya déjeme ir…
El viejo automáticamente se puso de pie con cara de estar muy enojado, la arrojo sobre el camastro, la colegiala se contorsionaba y retorcía pataleando en todas direcciones en señal de proteger su cosita de la ansiosa mirada de degenerado de Severiano, prácticamente a puros menoneos la arrojo sobre el colchon, quiso volver a pegarle para que aprendiera a obedecer, pero cuando su tosca mirada tropezó con aquel sedoso triangulo de tiernos pelitos negros y brillosos quedo íntegramente hechizado, como pudo le tomo las piernas abriéndoselas de par en par, sin importarle el dolor que le causaba, para luego ir acercándose a la apretada y ya no virgen zorrita y proceder a olerla, el aroma que desprendía la tierna panocha de la joven era para enloquecer a cualquier hombre, la oloroso hasta el cansancio, una vez que sus narices estuvieron impregnadas de aroma a hembra solo dijo,
–Ahhhh… que rico hueles aquí abajo lindura, de verdad que huele a hembra caliente y sedienta de verga, jejeje, con razón todos los machos enloquecen contigo, diciendo esto último abrió su bocota babeante y lentamente se fue acercando a esa apetitosa y frágil panochita para comenzar a devorársela a su total antojo, se dio a lamerle el tajo hasta el cansancio, el viejo estaba fascinado.
A pesar que esa zorra ya la había probado, esta era como su primera vez, se la chupaba, se la lamia y se la escupía, para luego explorársela con sus gruesos dedos de campesino, todo era mágico para don Severiano, otra vez iba disfrutar de una mujer que no fuese su esposa y lo más importante: estaba solo a minutos de ser él… quien iba a empernar a una joven hembra que tuvo la mala suerte de cruzarse por su camino, estaba en un sueño del cual no quería despertar nunca jamás.
Cielo Riveros con su conciencia que le recriminaba todo lo que estaba pasando entre el viejo y ella, sentía repulsión por todo lo que le hacían ahí abajo, solo a unas cuartas de donde estaba su ombligo, hiso un esfuerzo por controlar sus nauseas,
pero lo que no sabía la pobre jovencita era que lo peor estaba por llegar.
Cuando don Severiano por fin se cansó de sorber jugos, chupar, lamer y
jugar con su ya chorreante zorrita le alzó las piernas doblándoselas y haciendo que se quedara con ellas abiertas, para empezar a montarse sobre su curvilínea anatomía con claras intenciones de meterle aquella monstruosidad de verga que ahora la tenía más tiesa y parada que nunca.
La colegiala al notar que el viejo se le estaba montando para convertirla nuevamene en su mujer instintivamente comenzó una frenética lucha para defender su fidelidad para con su amado Rodrigo, pero más que eso era el tremendo pánico que sentía al solo imaginarse estar siendo penetrada por semejante animal, don Severiano que ya estaba caliente al máximo no iba a dejar pasar esa oportunidad y ya estando montado cómodamente sobre su blanco y curvilíneo cuerpo, le aplico dos severas cachetadas en el rostro, estas fueron tan bestiales y dolorosas como cuando ella confundió su nombre con el de don Lucas que la nena automáticamente se quedó paralizada y shokeada esperando sin saber lo que iba a suceder…
–Ahora vas a saber lo que es culear con un verdadero macho caliente pendeja con cara de muerta!!!, jejejeje, así que déjate de pendejadas, ya estás en edad de ser gozada por un hombre de verdad putaaaa estar pensando en otros machos cuando te clavan, y peor aún pensas en vergas que no es de tu novio el inútil de Rodrigo!!!,
–No… por favor don Severiano no me violeeeee… snifssss…
–Yo no te estoy violando pendejaaaa!…fuiste tú solita la que se vino a meter a mi propiedad con la excusa de buscar a tu novio , nadie te forzooo!… y vi como tú putaaa me mirabas la verga cuando esta se paraba a través de mi calzoncillo, así que no seas zorra para tus cosas, jajaja!!…viniste por verga…y verga tendrasss!!, jajajajaja!!!!!
Cielo Riveros noto como el viejo una vez que dijo esto último ubico la cabeza amoratada de su herramienta justo en la entrada de su panochita, este sin esperar nada más solo comenzó a empujar con fuerzas y sin consideraciones.
A cada a empujón su enorme tranca le hacían recordar como el la había violado por primera vez, sin su consentimiento, pero de pronto sintió que el dolor se hacía cada vez menos intenso e insoportable, la sensación en su vagina era que la estaban simplemente explorando por dentro, el viejo Severiano hacia fuerzas desmesuradas por meter su herramienta lo que más pudiera adentro de esa apretada panocha que se negaba a recibirlo por completo, ambos cuerpos sudaban, el suplicio para la pequeña colegiala ni siquiera comenzaba aun, don Severiano volvió a acomodarse en los abiertos y blancos muslo de la joven, le miro sus ojos de inocente colegiala y su cabellera azulada, el rímel ya se le había corrido y se desparramaba por la asustada lozanía de su cara, hasta que ella lo vio cerrar sus ojos como si este viejo asqueroso se concentrara en algo, y fue cuando lo sintió entrar,
–Nooooooooooooooooooooooo mi vagina pertenece a Rodrigo su hijooo!!!!!, fue el primer desgarrador grito que se sintió en la oscura habitacion, el viejo empujo firme y en forma salvaje alojándole su verga al interior de su cuerpo en toda su extensión, su vagina ya no lo era, si bien su novio ya la había penetrado esta era muy pero muy distinta tan grande y gruesa y se lo había comido todo, –Ahhhhhhhhhhhhyyyyyyyyyyyy…que me doliooooooo!!!! Saqueloooooo!!! Su verga es muy grandeeeeehhh!!!! Ayyyyyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyy!! No por favorrrrrrr!!!! Sniffsssssssssss! Snifsssssssssssssss!!!.
Cielo Riveros con su carita desencajada por sentir su coñito abierto y ensartado por una verga que le llegaba hasta la misma altura de su cintura.
–Cállate zorraaaaa!! Y acepta que mi vergaaaaa es el triple de la que tiene el inútil de tu novio!!! Jajajaja!!! Eres mía pendeja, te acabo de convertir en mi mujer, jejejeje… Te juro que desde ahora te encantara que te meta mi tranca…, el viejo le decía esto con todo su cuerpo echado hacia adelante, sintiendo en su verga la exquisita sensación en que el joven coño de la joven le abrazaba su herramienta, –Ohhhhhh… era verdad lo que me decían de vos pendejaaa todo el pueblo habla que tu panocha es tan estrecha que parece virgen… tu coño me aprieta la verga en forma exquisita Mmmmmm… , el viejo lentamente empezaba a hacer unas especies de círculos con su cintura pero siempre empujando hacia adentro, para luego seguir envileciendo a la hermosa colegiala, –Ahora acostúmbrate cosita que siempre te la voy a meter por la zorra prepárate que luego nos comenzaremos a mover fuerte, Ohhhh! Ahhhhhh!! Que delicia es estar adentro de tu cuerpo mi reinaaaa, le decía el salvaje de don Severiano, quien ya se había comenzado a mover lentamente, para ir agarrando ritmo y fuerzas a medida que metía y sacaba.
El vejete seguía penetrándola con todas sus fuerzas, y la culpa de estar engañando a Rodrigo no desaparecía del cuerpo de la colegiala, a estas alturas su vagina se le había dormido de tantos feroces espolonazos, la nena solo se dejaba hacer, llorando en silencio y con su manita y deditos semi doblados en su boca no daba crédito a lo que le estaba sucediendo, sentía sobre su figura el pesado cuerpo de don Severiano que no cesaba en sus furiosas arremetidas, se quedó quieta intentando controlar su respiración, deseaba que aquel doloroso martirio terminara cuanto antes, aunque a estas alturas el vejete estaba tan metido dentro de su cuerpo que sentía los latidos de la verga al interior de su estómago, como también sentía sus testículos como le rozaban su apretado esfínter, la nena estaba clara que la habían abierto por completo.
El casi suegro aserruchaba firme, sentía el aroma de su pelo y de su piel, por ningún motivo pensaba en parar la faena copuladora, la pendeja estaba realmente exquisita, y él se había prometido que nunca más tendría consideraciones antes de poseer a alguna mujer, ya que si se les trataba bien estas se comportaban como una verdaderas zorras, y les daba por hacerles pendejadas a los hombres, así que determinaba que estaba muy bien lo que le estaba haciendo a la novia de su hijo, con esto último redoblo las fuerzas y los empujes hacia el afiebrado cuerpo de la nena.
De pronto el viejo se tomó un descanso pero se la dejo totalmente envainada, la colegiala al saberse ensartada a cabalidad se sintió extraña, sentía la verga del viejo como si fuese un animal con vida propia que se movía dentro de su cuerpo, al estar totalmente ensartada por su vagina, de pronto imagino que la verga se hinchaba cada vez más y más, el vejete nuevamente había vuelto a sus enloquecedores movimientos de mete y saca, haciéndolo una y otra vez, así estuvieron por largos minutos, lo que sentía Cielo Riveros en esos momentos era algo totalmente nuevo para ella, ya no sentía dolor, sentía que mientras más fuertes fuesen los vergazos que le daban, más gustillo sentía al interior de su zorrita, la nena no quería reconocerlo pero era su propio cuerpo quien en esos momentos le decía lo muy rico que se la estaba culiando un viejo que era nada mas y nada menos que el padre de su novio.
Don Severiano se la estuvo culiando por un buen rato, la follada ya iba como para los 45 minutos por lo menos, y la colegiala ya se movía al mismo ritmo con que le empujaban la verga para adentro, mientras más firme ella empujara contra la verga más rico y delicioso era el placer que le otorgaba su sistema nervioso, de pronto sintió una sensación de como si se le fuera a parar el corazón, era algo desconocido, como una poseída empezó a menear su cuerpo en forma acelerada jadeando y gimiendo como una vulgar puta, el vejete babeaba de gusto y calentura, la pendeja ya culeaba como una verdadera mujer y él era el causante de ello y quien le había enseñado, junto su bocota de depredador junto a los carnosos labios de la colegiala, quien lo recibió con un exquisito beso con lengua, el viejo Severiano no era un besador innato, pero viendo la desesperada forma en que la señorita metía su lengua dentro de la boca de él solo comenzó a hacer lo mismo, aquella juvenil boquita de 20 años sabia a menta, y era verdad.
Ambos amantes no se daban cuenta de la forma salvaje en que se estaban dando, don Severiano , como pudo fue dando vuelta el cuerpo de la muchacha, hasta que quedo ella montada sobre la redonda y prominente panza peluda del vejete,
–Lo ves putaaaaa! Yo sabía que mi verga te iba a encantar mas que la de Lucaas!!!, la joven casi no lo escuchaba solo estaba concentrada en moverse y refregarse bien refregada la verga del viejo en su ensanchada conchita, sus tetas saltaban exquisitamente al mismo ritmo en que la nena hacia sus movimientos de placer haciendo enloquecedores círculos, su cintura se movía desquiciantemente como una acordeón, combinando con firmes subidas y bajadas de caderas para luego hacer unas diabólicas ondulaciones como queriendo que aquella deliciosa estaca de carne le llegue hasta el estómago.
El viejo comenzó a darle unas fuertes estocadas hacia arriba, ensartándola con ferocidad…
–Mmmmfssss, gesticulaba a duras penas la diabólica muchacha…
–Te gusta zorraaaaaa!!! Te gusta que te lo hagannnnn ahora no piensas en Lucaas eh no piensas en otras vergas mientras te la meto pendeja putaaa!!!
–Siiiiiii… es muy…ri cooooooo…que a una se la cu…liennnn y solamente pienso en su verga don Severianooo!!!…, le confirmaba la transpirada colegiala sin dejar de menearse.
–Jejejeje…yo sabía que te iba a gustar mi vida…desde hoy eres mi hembra…quiero que vengas día por medio a cuidarme y acostarte conmigo…lo harás ricura?
–Siiii don Severianooo… Usted me culia muy ricoooooo… yo vendré todos los días a acostarme con Ustedddd…Ohhhhhh auchhhhh..que ricoooo mi amorrrrrr…le decía la caliente colegiala sin ni siquiera saber que estaba aceptando venir a cuidarlo en cuarentena con la excusa que el estaba enfermo.
–Jajajaja con eso ultimo te sacaste el premiado lindura, jejeje…desde hoy serás mi putita… y no pienso compartirte con nadie, jejejeje solo serás miaaaaa!!!, le dijo a la vez que le mandaba una salvaje estocada, que Cielo Riveros recibió con cara de degenerada, desde hace rato que era inconsciente que se la caían las babas de su dulce boquita ya no tenia remordimientos en su conciencia hacia su amado Rodrigo solamente quería gozar del momento quería sentir esa enorme tranca dentro de su estómago, su novio no la tenia tan grande y dura pensaba en esos momentos…
Don Severiano la atrajo hacia el abrazándola con sus peludas manazas, a la vez que le daba sendas chupadas a las duras tetas que se gastaba la joven, ella ya lo disfrutaba todo, su mente estaba en blanco, solo sentía oleadas de placer por todo lo que le hacía su Suegro, y se lo demostraba con exquisitos movimientos de su cuerpo para el beneplácito de aquella grandiosa verga que se la tenían ensartada en lo más recóndito de su espléndida anatomía.
El vejete solo dejaba que la colegiala se moviera como quisiera, hasta que al verla en el total estado de calentura en que se encontraba se la desclavo como si ella fuese una muñeca y la puso en 4 patas como a las perras, los flujos seminales corrían por los potentes muslos de la hembra, pero a ella ya no le importaba nada, el viejo comenzó a chuparle el culo como si este fuese un helado, la nena sentía muy rico, la sensación de la lengua del viejo en su esfínter casi la enloquecieron, le encantaba sentir las babas de su Suegro chorrear por sus muslos, pero cuando noto la verga acomodarse en la misma entrada de su culo, nuevamente cayo en pánico Nooooo!!!, noooo!!, noooo!, por favor don Severiano otra vez nooooo!!! Otra vez nooooo!, decía con su vocecita entre caliente y asustada.
El viejo no tubo compasión por la tierna colegiala, una vez que acomodo la tranca en el cerrado orificio posterior de la joven no se lo metió, sencillamente fue el quien agarrando a la joven de sus muy marcadas caderas, con fuerzas la atrajo hacia el y la empujo contra su apéndice vergal enterrándose por completo el culo de la nena contra su verga.
La colegiala recibió el salvaje empalamiento con un ahogado grito de tortuoso horror, sus dedos se crisparon y se enterraban en el viejo colchon, con su cara congestionada y su boca totalmente abierta, recibía por el orto los tormentosos apuntalamientos de verga, su vista se le nublo cuando su cuerpo no fue capaz ya de resistir el desgarrador sufrimiento al cual estaba siendo sometido y la pobre sencillamente una vez mas a pesar de que por su lulo pasaron muchas vergas de distinto tamaño y grosor no aguantaba que se la metieran por alli.
Don Severiano quien no estaba al tanto de lo que le ocurría a su joven víctima y a posterior de aquel bestial enculamiento le empezó a dar con rabia, como si ella hubiese sido la culpable de todas sus desgracias, pasaban los minutos y ante las salvajes arremetidas y producto del incesante y doloroso suplicio la nena poco a poco volvió en sí, sentía que en cualquier momento la iban a matar a vergazos por el culo, acompañado de que mientras más profundo le daban, más se le revolvía el estómago, y sabiéndose imposibilitada de cualquier tipo de escape simplemente comenzó a vomitar de placer mientras implacablemente le seguían rompiendo el culo bestialmente,
–Jajajaja!!! Que cerda me saliste para tus cosas Mamasota, por cochinona te voy a seguir rompiendo el orto para que no puedas cagar en dos meses, jajajaja!!!!,
don Severiano la seguía enculando sin piedad, la colegiala una vez que se pudo limpiar la amarga bilis de la boca, y temiendo por su vida saco un poco de fuerzas y le comenzó a solicitar al vejete sabiendo que este ya estaba al tanto que ella ya había experimentado el sexo anal por cuanto macho se la había cruzado por el camino,

–Ayyyyyyy!!! Ohhhhhhh!!!! Don Severiano….no tan fuerte por favor!!…. que me va a matarrrrrrrrr por el culoooooooooo!!!!! Gritaba la nenota una vez recuperada de sus regurgitaciones…
Pero su Suegro que estaba bañado en sudor solo seguía enculandola como un poseído,
–Plafff!… plafff!!… plaffff!!!… retumbaban las redondas y antojables nalgotas da la nenita ante el enardecido ataque del caliente y eufórico vejete, Cielo Riveros ahora aguantaba el brutal ataque mordiéndose el labio inferior con una verdadera expresión de doloroso pánico, sus ojos se mantenían abiertos como si estuviesen presenciando un milagro, pero ante cada brutal enterrada de verga del lujurioso vejete, de sus labios fresa ya brotaban gemidos que más parecían de placer que de dolor, así lo confirmaba también su respiración agitada y excitada, el intenso dolor anal y el saberse puesta en cuatro patas le hacían sentirse más mujer, más hembra y más perra, pensaba en lo extraño que era todo esto ya que ella nunca en su vida se había sentido así, al menos su novio Rodrigo jamás la había puesto en semejante situación de calentura.
Don Severiano estaba culeandosela como enloquecido, miraba ese portentoso y tremendo cuerpazo que la nenita comúnmente escondía debajo de sus ropas de colegiala, le miraba ese glorioso par de nalgotas que le sorbían sus 23 centímetros de verga casi en su totalidad ese mounstruo entraba y salía entraba y salia,
–Ayyyyyy don Severiano… más despacio por favor…que me va a rajar por el culo, el cuerpo y las tetas de la colegiala se movían en forma escandalosa, al mismo ritmo en que le perforaban el culazo.
–Ya te dije que tenías que aceptar el dolor de la vergaaa!!, jajajaja!!, aguanta mi Amorcito es la segunda vez que te la doy por el culo, que después de unas cuantas folladas por el ano te harás una adicta a que te den por el culo!!, jajajaja!!! Tomaaaa!!!, el viejo seguía arremetiendo y la joven nenita continuaba recibiendo verga, –Muéveme el culo pendeja recuerda que desde hoy eres mi mujerrrr y no del inútil de Rodrigoo!!!, el vejete se estaba pegando la follada de su vida, y la colegiala lo secundaba en sus viles abominaciones.
La hermosa joven de ojos claros e inocentes ya gozaba desde hace rato con lo que ahora le hacía su Suegro, estaba casi enloquecida de calentura al escuchar ese lenguaje soez y vulgar con que la trataba el miserable padrasto de Rodrigo, las estocadas que le daban por el culo cada vez eran más recias y profundas, haciendo que su delineado cuerpo le regalaran oleadas de placer anal, sensaciones que la obligaban a retorcerse de gusto intentando de atornillar por el culo a aquella gruesa verga que tan deliciosamente la perforaba, la nena ya no podía más de tanto placer que le estaban otorgando, por su parte don Severiano al notar de lo bien que se lo estaba pasando la chiquilla, la tomo violentamente de su azulado cabello intentando tratarla como a una yegua, para luego comenzar a darle más duro por el culo, esto fue demasiado para la pobre y caliente Cielo Riveros , simplemente la nena se llegó a mear de tanto placer…
–Ayyy don Seveee… siento algo raroooo!!
Ayyyyyy que ric….Ohhhh que esto Diosssss!!! Ohhhhh que ricoooooo!!! Ufffffff otra vez usted esta perforando mi culitooo que ricooo!!, hasta que la nena exploto en un muy extraño pero enloquecedor orgasmo, –Ayyyyyy que meooooo!!! Ayyyy que me meooooooo!!!! Asiiiiiiii!! Deme más durooooo viejo de MIERDAAAA démelo todaaaaa!!! Don Severiano no aguanto masssss, me voy a me…… Ayyyyyy me mieeeeeeeeeee!!!!! Ohhhhhhhh que ricooooooooo!!!
Cielo Riveros corcoveaba de auténtico placer, sus muslos y piernas chorreaban de su propia orina, el vejete estaba encantado no sabía de ninguna puta que se hubiera llegado a mear de tanta calentura, y él lo había logrado con una linda chiquilla que decía ser novia de su hijastro, sabía que la pendejilla le traería buena suerte, si hasta ya le estaba empezando a tomar cariño a su futura yerna caliente, que seguía retorciéndose de placer con su vergota metida en lo más profundo de sus intestinos.
El viejo que aun aguantaba sus fuerzas la desclavo de una, la colegiala sintió su orificio posterior vacío en el mismo momento en que se le lleno de aire, su cuerpo estaba electrizado, aun se sentía dependiente de aquella monstruosa verga que la había convertido en mujer en la cama matrimonial donde el que la estaba haciendo gozar compartia lecho con su esposa y, con cara de viciosa se puso de espaldas y abrió sus muslos todo lo que pudo, para demandar lo que a ella le correspondía,
–Don Seve…ri…ano… síga…me cu…liando no piense en Rodrigo ni en su esposa, sígame rompiéndome el culo que me encanta como lo hace métame su cosota que mi culo lo acepta por completo metamelo todaaaa la quiero todaaa dentro!!…
–Jejejeje, mira que eres puta y viciosa pendeja endemoniada… te he estado follando por más de una hora y todavía quieres más!!?, jajajaja!!! ni las putas profesionales piden verga con tanta ansiedad como lo estás haciendo zorraaaa asi quiere ser esposa de mi hijastro!!, jajajajaja!!!!…
–Por favor don Severiano solo otro ratito, le pedía en forma suplicante y con sus ojos llorosos de calentura moviendo sus caderas ondulatoriamente, la nena ya no aguantaba más de tanta excitación al estar mirando la verga del vejete como amenazaba de lo tiesa y parada que aun la tenía, la jovencita estaba totalmente fuera de sí, mientras le abría las piernas ofreciéndose y acomodándose esperando a recibir nuevamente la tranca al interior de su cuerpo…–Por favor Suegro miooo!… violemeeee!!…. culiemeee!!… culiemeeee una última vez y acabemos con esto!!!, empezaba a sollozar extasiada y desesperada `para que el viejo le metiera la verga,
–Jajajajaja!!! Jamás me imagine lo buena que me saldrías para la verga, jajaja!!!, a ver? grita más fuerte pendeja porque no te creo mucho lo que me estas pidiendo, jejeje…
–Follemeeeeeeee!!! Culiemeeee de una buena vezzzzzzzzzz!!!!, gritaba la colegiala con sus piernas totalmente abiertas…–Soy su putaaaa hágame lo que Rodrigo no pudoooo!!! Soy una putaaaaa y puede culiarme todo lo que quieraaaaaaaaaaaaaa!!, gritaba histérica y con voz ronca, la nena lloraba de calentura aun no saciada.
Don Severiano ya no aguantando más se abalanzo sobre su cuerpo y comenzó a besarla frenética y asquerosamente, le metía su inmunda lengua en la inmaculada boca con sabor a menta, Cielo Riveros recibía sus salivas y recorría con su lengüita sus rosadas encías como así mismo los dos únicos dientes que el viejo poseía, prácticamente se los estaba chupando, la joven le lamia la cara, su sabor salado y su olor a macho la tenían cautivada, quería todo lo de él, su tranca ya estaba nuevamente en su máxima erección, don Severiano nunca en su vida imagino que aquella niña novia de su hijastro, se iba a calentar tanto después de haber probado su verga, si eran 33 años de diferencia entre ellos.
El viejo totalmente enardecido recorría con sus peludas y grotescas manos el suave y curvilíneo cuerpazo de la nena, que a puros gemidos seguía rogando por que la ensartaran nuevamente, el viejo se subió a su desesperado cuerpo sediento de verga, y ubico su gruesa tranca en el recién estrenado reducto de amor de la colegiala, poco a poco se la fue metiendo mientras le decía a sus perfumados oídos,
–Que rica tienes la zorra pendeja caliente…esto es lo que querías? …tu novio no te la supo dar eh pues ahí la tienes, el viejo se la fue metiendo de a poco, sintiendo la estreches de la muchacha, –Aun la tienes apretadita mi vida, le decía el viejo verde con sus ojos cerrados, y con cara de gozador, la nena sentía que el vejete nuevamente la estaba llenando de verga, sus gemidos comenzaban a aumentar,
–Mmmmmm…, la nena se imaginaba su suegro jamás acabaría de meterle verga, y le encantaba sentirlo así, sus jadeos no demoraron en hacerse notar…
–Jejeje…que zorrita más rica es a la que me estoy culeando, le decía mientras empujaba profundo sobre el acalorado cuerpo de la joven el cual también jadeaba en forma exquisita, –Lo ves pendeja como te encanta la verga? Te mueves rico para culear… eres una verdadera putita, jejeje ahora no piensas en Lucas ni en don Pedro ni en los jefes que tuviste en la capital que me entere que te culearon para conservar tu empleo eh puta culiaste con tus jefes para conseguir trabajo jajjaa conmigo no tendrás que trabajar te mantendré pendeja seras mi mujer putita linda…
Don Severiano empezó con los rudos movimientos de mete y saca, ya estaba casi por llegar al tan ansiado orgasmo…
–Ahhhhh don Señoooooorr rmasssss!….masssss!!…..masssssssss!!!!, le imploraba la colegiala quien se movía totalmente aferrada de las anchas y peludas espaldas de su amante que sabia todas las aventuras que ella había tenido en manos de tan aberrantes y abusivos viejos que la habían violado…
–Tomaaaa!! Tomaaaaa!! Le decía el vejete apuntalándola con bestialidad, –Eres ahora mi perraaa calienteeeee!!
–Siiiiiii yo soy su perraaaaaaaaaa!!!!, le confirmaba la nena con sus ojitos cerrados y presa por la calentura que le causaba al sentirse penetrada por aquel ordinario vejestorio…
La panochita de la nenota nuevamente chorreaba cuantiosas cantidades de líquidos vaginales, la verga del viejo degenerado entraba y salía sin ningún impedimento de la resbalosa entrada intima de la nena, ella también empujaba sus caderas hacia adelante en busca de verga, el viejo prácticamente la estaba matando de placer, hasta que las tibiezas de sus carnes le ganaron a la estaca penetradora,
–Ohhhh que rico estoy sintiendo pendeja te lo voy a dar VAMOS A PASAR LA CUARENTENA JUNTOOOS…

–Demelooooooo lo quieroooooooo…echemeloooo todoooooooo viejo inútil muévase lárgueme la lechee!!!
Ambos se pusieron a culiar rápidamente, con sus respiraciones totalmente agitadas y entre mezcladas, –Ah ha! Ah ha!! Ah ha!! Ah ha!!! Ah ha!!!! Se escuchaba alrededor de ellos como si estuviesen dándose desesperados, hasta que el vejete sintió como si lo estuviesen noqueando Severiano no entendia como la colegiala no quedaba embarazada después de todas las culiadas que le propinaron los que la violaron anteriormente…
–Arrrrrggggggggggggg!!! Tomaaaaaa pendejaaaaaaaa… ojala te quedes bien preñadaaaaaa….ahhhhhhh…que rico me comes la vergaaaaaa!….mamitaaaaaaa!! mmmmmfsssss…
Cielo Riveros sentía otra vez como en su vida como una inmensa verga escupía cuantiosas cantidades de un líquido espeso y caliente al interior de su cuerpo, nuevamente no se aguantó y volvió a mearse de una verdadera y genuina calentura, a la vez que solo meneaba muy despacito su cintura para que aquel falo al cual ella estaba bañando con sus calientes líquidos, y que tan exquisitamente la estaba fertilizando no se le saliera ningún centímetro de su interior, solo sintió que su cuerpo se desintegraba, mordiéndose su labio inferior gozo atenazada al cuerpo de su macho, hasta que sintió que este dejo de hacer fuerzas con su verga, ambos quedaron pegados por unos buenos minutos.
El viejo degenerado la desclavo y se quedó tirado un rato junto al inmóvil cuerpo de la joven colegiala que quedo sintiendo como en su interio cantidades abundantes de leche tibia se desparramaban por su vajina,
–Eres toda una hembra Cielo Riveros , y me gustaría que te quedaras conmigo, pero ya está amaneciendo, toma tus ropas y lárgateee, el toque de queda termina a las 8 hs. Tendras que marcharte tus papis se podrían preocupar, jejejeje, le dijo medio en serio y medio burlándose…

Mientras la avergonzada y agotada hembrita se vestía con sus pequeños pantolencillos cortos que se le metían en el culo, el desnudo vejete la contemplaba, y una vez que ya estuvo completamente vestida, le dijo…
–Cuando volverás para que repitamos ya sabes le dices a los polis que vienes a cuidar a un anciano enfermo, y te dejaran pasar, jejeje…
–No lo sé… le respondió la nena con un hilillo de voz…
–Pues yo quiero que vengas el próximo viernes, te daré una semana para que descanses… invéntate algo en tu casa dile que estoy enfermo y que me vienes a cuidar y vienes para que nos acostemos en mi vivienda… quiero que pasemos un fin de semana entero encerrados y culiando, jejejeje…
–No sé si mis padres me dejaran salir…
–No me importaaaa lo que digan tus padres!!…, le vocifero en sus mismas narices, y tomándola violentamente de sus cabellos le puso en conocimiento, –Desde hoy eres mi mujerrr!!!..o acaso no recuerdas lo rico que te meneabas solo hace unos minutos… y quiero que te sigas vistiendo de la misma forma en que lo has hecho hasta hoy como una colegiala calienta vergas…te queda claro putillaaaaa!!!!
–Siiii,
–Si queeee y ni que me entere que tu padrastro te toque un pelo eh!!
–Si don Severiano me queda claroooo…
–Así está mejor pendeja!…y no quiero enterarme que andas enredada con algún pendejo del pueblo, porque soy capaz de matarte a patadas, y de paso me despacho al pendejo que desde hoy se atreva a tocarte o molestarte…necesitas dinero!?, la nena totalmente sorprendida por la insólitas aclaraciones que le hacia el vejete, solo negó con su cabeza…–Bien! si necesitas algo solo vienes y me dices, ahora lárgate que ya es tarde en cualquier momento regresan mi mujer y el inútil de tu novio asi que lárgate ahora… y te estaré esperando el próximo viernes en la tardecita, jejejeje…
De esa manera Severiano encuentra la forma de encontrarse a escondidas con la novia de su hijastro según su plan era el mas perfecro…
Entonces la tierna adolescente ya vestida con su provocativo atuendo agarro su bandolera y se dirigio hacia la puerta para marcharse entonces don Severiano le hablo en forma provocadora.
Espera primor te olvidas de algo…no te vallas sin lo principal…
Entonces la colegiala llena de disgusto se acerco al viejo y le dijo en la cara…
Si ya se quieres un beso de despedida… siempre lo pides pero te digo te lo doy no por mi cuenta sino por tus chantajes…
Entonces la nena acerco sus labios fresas a los de su violador y con un apasionado beso de lengua mutua se despidieron…
Entonces fue que don Severiano con una gran carcajada respondió,
Jajjajajaaa pendeja calentona, yo me refería que no te marches sin tu barbijo!! Ni mencione tus besos jajjja pero se nota que te encanta que te meta mi lengua pendeja puta. Jajjajjaa
Cielo Riveros con toda la vergüenza manifestada en su rojo rostro, enfurecida consigo misma, al estar expuesta en evidencia que el viejo la tenía caliente, agarro el barbijo que tenía en la mesita de luz y se lo puso sin decir una palabra,. Y de un portazo se marcho de esa casa…
En sus pensamientos estaban lo bien que lo había pasado en manos de su suegro ya que su novio había eyaculado en forma precoz y ella no había logrado llegar al orgasmo, cosa que el viejo depravado si había logrado, también sabía que eso no estaba bien, también retumbaba en su consiente, el estar pensando en la verga de su ´padrastro a pesar de estar cogiendo con otro tipo, sumergida en esos pensamientos estaba cuando a la mitad del camino una voz conocida le increpaba.
Pero quien es esa nena que después de tanto tiempo aparece por estos lares.
Era nada mas y nada menos que el mecanico don Pedro…
CONTINUARA….
-Que culo soberbio es un culazo descomunal decía el viejo viéndole como las nalgotas se balanceaban de un lado a otro producto del potente chorro de agua que parecían acariciar tremendo cuerpo de perfectas y bien delineadas curvas y acercándose mas lentamente a la asustada chica.
Eran las 8 de la mañana y el sol asomaba con todo su esplendor, Nuestra Cielo Riveros salía presurosa de la casa de su novio, no fuera la desgracia que la viera salir justo cuando el llegaba junto a su Progenitora después de las horas extras que tuvo que hacer, por la cantidad de demanda que había de remedios debido a la pandemia donde muchos sufrían el contagio.
Mientras caminaba para su casa se veía espectacular con tan sexy y ajustado pantaloncito de jean bien metido en los cachetes que se meneaban por naturaleza propia, la calle estaba desierta y nadie podía admirar tanta belleza, hasta el barbijo color rosa con pequeñas florcitas le quedaba a medida, el día ya había llegado y ya a esa hora el sol del verano empezaba a calentar el ambiente, la humedad que había en el aire izo que lo que llevaba puesto se le ajustara a su cuerpo quedando en evidencia las endemoniadas curvas que se gastaba la jovencita, ese caminar sensual y de nena coqueta la hacían ver mucho más atractiva, ahora era solo una nena que caminaba solitariamente por las estrechas callejuelas de su pueblo, Cielo Riveros se preguntaba así misma como poder ser tan estúpida, de darle el beso de despedida al viejo asqueroso de don Severiano, el se refería al barbijo y como una incrédula pensó que quería un beso, lo peor que lo acepto con agrado, ahora va a creer que muero por sus apestosos chupones, ¡!! Con razón todos los viejos logran culiarme, soy muy pero muy ingenua y estúpida!!! Pensaba para sus adentros nuestra colegiala.
¡Oye tu niña a donde crees que vas tan apurada! Ey que eres sorda ahora acaso?
Cielo Riveros al escuchar esa conocida vos voltio para mirar y ahí lo vio, al principio no lo reconoció con un enorme barbijo que cubría casi todo su cara, un barbijo tan sucio y transpirado como su ropa, si no fuera por el mameluco que parecía la única prenda que tenía el mecánico no lo hubiera reconocido era Don Pedro recogiendo trastos, chapones viejos de la vereda y cargándolo en su vieja camioneta.
Acuérdense que Pedro se ganaba la vida a diario como mecánico de juegos de feria, y hace como mas de dos meses que están todos en fase uno de cuarentena, o sea casi todo cerrado solo negocios esenciales están abiertos, o sea que el viejo estaba pasándola mal económicamente.
Don don Pedro tanto tiempo, espero que este bien con esto de la pandemia… yo eh ya me voy para mi casa, mi madre debe estar preocupada.
¡Pero a estas horas y recién a tu casa! Mira solo las nenas malas regresan de día a su casa, que pasa estabas encamada con tu noviecito eh, ese tal Rodrigo mira que tienes mucho que responder chiquilla, desde que te fuiste a la Capital que no contestas el teléfono, se corre un rumor por aquí que fuiste la mujer de un carnicero, dueño del negocio donde eras empleada, pero mira que zorra resultaste, te aseguraste trabajo, comida y una verga para que no te falte nada eh jajajaa.
No hable asi don Pedro, yo no soy una cualquiera para que sepa trabaje duro para ganarme la vida, pero por un problema que tuve con los dueños de la carnicería y con mi abuelo Benito es que me volví para el pueblo.
A otra parte con esas historias y ven para aca lindura, que hace como un año que mis dedos no tocan tu suve pielsita, vamos sabes que no hago daño.
_Por favor don Pedro déjeme pasar quiero llegar a mi casa.
El veterano avanzaba y la nena retrocedia, en un momento dado don Pedro logro tomarla del brazo con rapidez y con fuerza y la introduzco en una especie de zaguán, un pasillo que usaban las casas antiguas esas que dan a los patios internos donde se forman los conventillos.
--Jajajajaja, ya ves pendeja sin querer ya podríamos decir que eres legalmente toda una puta profesional, si anduviste entregando la zorra en la Capital por trabajo y comida eres una ramera vip jajajaja conociéndote los rumores deben ser cierto!! Está en tus genes y vos no queres reconocerlo y para mi va a ser un honor demostrarte que tu vocación es el puterio!! Jajajaja!! se burlaba de la pobre Cielo Riveros , a la vez que con una de sus gastadas manos rodeaba la pequeña cintura de la colegiala, para luego casi arrastrarla mas al interior del zaguán en la cual la asustada jovencita pudo ver que Don Pedro solo la miraba con nostalgia, podía adivinar Cielo Riveros que por la mente del viejo Pedro desfilaban los momentos donde por primera vez la violo en la Feria delante de sus empleados, o cuando la llevo a su sucio camastro donde durante toda una noche le partió la panochita, es seguro que su mirada navegan por esos lujuriosos momentos.
--Pero no te preocupes hoy solamente quiero besarte como lo hacíamos en los viejos tiempos te acuerdas amor, cuando te entregabas por completo y me besabas con pasión, le decía don Pedro mientras frente a los asustados ojos de Cielo Riveros que no podía creer que después de librarse de su casi suegro caía en manos de Pedro, era como saltar del sartén y caer en las brasas, el mecánico ahora recorría la espalda de la jovencita hasta que sus gordos dedos se apoderaron de los glúteos que parecían explotar en esos pequeños pantaloncitos, -- Te convertiré otra vez en mi hembra, te voy a volver a culiar como a vos tanto te gusta te voy a acerté mear de tantos orgasmos, jajajaja!! Volveras a ser mi perraaa!! Serás mi putaaa!!, y nunca mas voy a dejar que huyas del pueblo yo voy a protegerte y mantenerte!!! le gritaba el vejete con desesperación.
--Don Pedro, por favor ya fue suficiente, se atrevió a solicitar erróneamente Cielo Riveros , pensando que tal vez este viejo caliente se podría compadecer de ella, --Yo me quiero ir a mi casa…
--Claro que te iras para tu casa reinita, pero primero me darás una chupadita en compensación por todo este año que te me escapaste y me engañaste con los de la capital, jajajaja!! Ni te imaginas cuantas noches soñé con tus chupadas mi Reyna !! ahora te lo voy a meter en tu boquita hasta que largue todos mis mocos y te salgan hasta por las fosas nasales, jajaja!! Escuchaste pedazo de zorraaaa!!, diciéndole esto último de un solo zarpazo la puso de rodillas quedando la nena a la altura de su cremallera, dejándola totalmente sorprendida y aterrada de que saliera alguien del conventillo y los pillara en tan comprometedora situación,
Vamos bájame el cierre y sácala tu misma, se como amas mi sable y vos también lo sabes, gozaste como loca cuando te la metía entera, te acordas pendeja cuando me suplicabas que te la metiera mas fuerte!! Ahora ponte en posición de petardo, jajajaja!!
Cielo Riveros ya casi entregada a su triste e injusto destino le bajo lentamente en la cremallera, mientras el ordinario sujeto de don Pedro se jactaba de tenerla ya bien parada la verga soslayándose con el erótico espectáculo que le brindaba la hermosa y entregada chiquilla, quien en estos momentos solita metía su manito encontrándose con el ya duro bastón dentro del sucio overol…
--Jejeje!! Es muy rico lo que me estas haciendo pendejita rica, ahora si sácalo y míralo lo ansioso que esta por entrar en tu dulce boquita de niña puta jajajaa!!!!
_Por favor don Pedro hoy no, déjeme ir se lo ruego, le prometo que otro día si podríamos volver a hacerlo, pero estoy muy cansada y solo quiero ir para mi casa, sea buenito al menos por los momentos que pasamos juntos el año pasado donde me decía que me amaba, ahora solo déjeme que me valla.
¡!!PLAF sonó la cachetada que recibió Cielo Riveros , quien sorprendida y desde el piso vio los ojos furiosos de don Pedro.
¡!! Parece que en la Ciudad te hicieron olvidar los modales, te olvidaste rápido quien soy marranita, sabes que no puedes hacerme enojar, asi que mas vale que te pongas a trabajar tanto con tus manitas como con tu lenguita, y me saques con tus ordeñadas toda la leche que llevo acumulada este año entendiste pendeja putaaaa!!!!
UUUUOOOEEEAAAAUUUU Fue el fuerte sonido que vino desde la calle. Los dos tanto viejo como colegiala quedaron paralizados al ver las luces del patrullero policial entraban por el zaguán, y otra vez la sirena UUUOOEEEAAUUU, Fue allí donde bajo desde el asiento del acompañante el comisario don Sinforoso, solamente su silueta gruesa, y esos bigotes tipos mostachos inconfundibles arruinaban los planes del viejo mecánico, y con pasos sin prisa que hacían retumbar las botas texanas en el antiguo pasillo de conventillo-

--Ves lo que consigues con tus estupideces maldita zorra estupidaaaa!!, le gritaba el enojado vejete, tienes ya mas de 20 años compórtate!!!!con su verga aún parada trataba de volverla a su lugar dentro del overol, mientras la tan suculenta y hermosa hembra estaba en estado de Shock, no sabía si esto la salvaba o empeoraba las cosas, sabía que el comisario Sinforoso era un pervertido, violador ya una vez la había violado en su propia casa en las propias narices de su amada Madre, pero también era un alivio que impidiera que aquel energúmeno que ya no la maltratara, de su garganta no salían las palabras, el viejo continuaba vociferando, --Acaso no te acuerdas que te comportabas como mi si yo fuera tu marido y tan fácil olvidaste todo y ahora te comportabas como una verdadera chiquilla malcriada!!
¡!! TODOS A CALLAR LA BOCA!! Llego la autoridad, pero que veo aquí, con que me encuentro.
¡!!OTRA VEZ USTEDES!!! Si la última vez que los vi juntos usted señor llevaba encuerada a la prostituta en el asiento trasero de su camioneta, se acuerdan que les di una infracción por ejercicio de la prostitución, tanto para la putita como para el cliente yo si me acuerdo.
_ Yo no trabajo de prostituta señor esta usted confundiendo.
¡!!SILENCIO yo no estoy preguntando, ahora están violando la cuarentena, saben que para estar en la vía publica hay que tener un permiso de circulación a ver empecemos por el señor…
Escuche comisario usted sabe junto chatarra, cobre, baterías viejas, trato de subsistir para no morir de hambre… usted me entiende, para eso no hay permiso de circulación.
¡!!SI NO TIENES PARA COMER como es que tienes para estar con la prostituta.
Perdone comisario, es verdad lo que dice la niña ella no es prostituta.
¡!!ENTONCES SON NOVIECITOS!!! Haciendo chanchadas en la via publica???
El viejo pedro al mirar a Cielo Riveros se le dibujo una leve sonrisa, esta vez la jovencita al sentirse acorralada no tendrá opción que aceptar que el y ella son como tortolitos enamorados.
¡!!QUE ME DICE JOVENCITA SON NOVIOS O EL ES SOLAMENTE UN CLIENTE!!
Un largo silencio invadió el pasillo y la respuesta fue lo que Pedro quería escuchar salir de los propios labios de Cielo Riveros .
_Si Señor comisario, somos novios, por favor no nos arreste no estábamos haciendo nada malo
El comisario Sinforoso haciendo una innecesaria como falsa ceremonia, como si fuera un fiscal o juez analizando si hay contravención o no, si hay culpable o inocente en la causa, tomo la determinación.
_Viendo que lo que ustedes estaban haciendo es un delito leve, y viendo la situación de vulnerabilidad en el señor Pedro, por su edad que debe estar por los sesenta y pico, y porque se gana la vida en la calle es que puede marcharse pero a su domicilio, si lo encuentro hoy violando la cuarentena no va a haber contemplaciones.
¡!!GRACIAS Comisario, vamos pequeña te acompaño a tu casa.!!!
¡!!YO NO HABLE NADA DE LA `PUTITA USTED VAYASE FUERA DE MI VISTA ANTES QUE ME ARREPIENTA!!!
El viejo Pedro que pensó que la suerte hoy le sonreía, se fue tan presuroso como frustrado, sin siquiera pedir por la liberación de su amada Cielo Riveros .
_Señor solo déjeme ir para mi casa mi madre usted la conoce debe ya estar preocupada.
_ ESCUCHAME CIELO RIVEROS ya nos conocemos bien, sabes que conmigo no se juega, ayer tarde te hable y no me hiciste caso y te metiste en la casa de tu novio ese tal Rodrigo. Ahora vas a tener que compensarme y no te va a salir barato sabes, no es personal pero tendré que llevarte demorada por unas horas a la comisaria.
¡!!NO DON SINFOROSO POR FAVOR TENGA PIEDAD, YO NUNCA FUI A LA CARCEL, DEJEME IR SE LO SUPLICO.!!!
¡!!VAMOS NENA ES SOLO UN TRAMITE!!! UNAS HORAS EN EL CALABOZO NO ES CARCEL, NO ME HAGAS ESCENA AQUÍ NIÑA.
La situación para la nena era tan trágica como también extrañamente morbosa, ya que el solo imaginarse que en cualquier momento saldría gente del conventillo y podrían reconocerla e irle con el cuento a su mamá de que la estaban arrestando en la via publica y tendría que tener una explicación lógica del delito que estaba cometiendo. todo esto era una verdadera bomba de tiempo ya que sin ser consiente ella misma gradualmente fue tomando coraje y la bronca por tanta mala suerte le vino encima.
¡!!BASTA DON SINFOROSO, YA ME HARTE QUE TODOS ME TRATEN COMO SI YO FUERA UN OBJETO DE SU PROPIEDAD, YO TENGO PODER DE DECISIÓN ASI QUE RESPETEME DE UNA BUENA VEZ!!!
El comisario la miro por espacio de unos segundos sin decir una sola palabra con sus ojos saltones que no expresaban nada entonces el viejo lanzo una carcajada que pudo sentirse en todo el conventillo..
JAJAAAJAJAA HABLAS EN SERIO PENDEJA?? Eres muy graciosa sabes???
Entonces el comisario la puso contra un costado, la cara de Cielo Riveros quedo pegada a la húmeda pared, y con la superioridad de fuerza no tuvo problemas en ponerle las esposas.
¡!!VAMOS PENDEJA, QUE NO ESTOY PARA PERDER EL TIEMPO, VAMOS AL PATRULLERO QUE MIENTRAS MAS RESISTAS PEOR PARA TI!!!
Subieron a Cielo Riveros en la parte trasera del patrullero, y salieron rumbo a la comisaria, por el retrovisor Sinforoso miraba la cara de angustia de la colegiala, que ya adivinaba para sus adentros las intenciones del pervertido comisario. Tras recorres unos minutos Sinforoso ordeno al oficial que manejaba que parara un momento.
Entro presuroso a una casa que parecía ser la de el, y no tardo nada en salir con un pequeño bolso de mano y volvieron a seguir camino a la comisaria.
No tardaron mucho, el comisario la bajo del patrullero y la introdujo en forma presurosa al destacamento, en la mesa de entrada una mujer policía le tomo los datos, y con mirada cómplice le pregunto al comisario Sinforoso.
Cual es la contravención que realizo la señorita—
_Violación de la cuarentena, eso ponga en el expediente.
Dicho eso la llevo por un pequeño pasillo que daba a galerías abarrotadas, mientras caminaba en forma sensual y cadenciosa por el húmedo suelo de cemento, ya a esa hora el calor era casi insoportable, y allí dentro no había aire acondicionado por supuesto, el transpirado comisario la llevaba del brazo y abrió una celda donde había una especie de ducha y le ordeno a la muchacha.
¡!!AHORA SACATE LA ROPA PUTA QUE PARA ESO SI ERES EXPERTA!!!
_Por favor voltee y que me va a dar para ponerme.
_Espera sácate la ropa no quiero repetirlo enseguida vuelvo
Poco después la chica se quitó de encima las pocas prendas que llevaba puesta, el calor que hacía allí dentro fue como un alivio sin embargo estar totalmente desnuda la tenía muy incómoda con la mirada hacia el piso sin imaginarse lo que esta por suceder, volteo a ver si aparecía el comisario dejo caer la prenda con que se tapaba su intimidad dejando su tremendo y escultural cuerpo completamente desnudo dando un grito ahogado de horror y abriendo completamente sus bellos ojos verdes al notar que Sinforoso se aparecía con una manguera de agua como de 2 pulgadas de espesor, de esas que usan en los calabozos para calmar una pelea de presos, o para calmar algún reo alterado, allí quedo el comisario como a 2 metros mirándola con una sonrisa dejando ver una hilera de dientes podridos y acariciando la válvula de la manguera como si fuera una verga .
-HOLA MAMITA QUE SABROSA TE VES ASI DESNUDA, la chica con sus manos trataba de taparse sus senos y su intimidad ante la risa del viejo.
AHORA RELAJATE QUE VAS A RECIBIR UN RICO BAÑO GENTILEZA DE LA CASA.
Dicho eso abrió el paso de agua que en forma potente fue a parar de lleno en los pechos de la adolescente que solo atino a taparse la carita, ante tan abundante y refrescante chorro, el agua golpeaba todas sus partes, liberándola de toda suciedad y transpiración, en un momento dado Cielo Riveros le dio la espalda Sinforoso y este apunto el chorro en plenas nalgas el viejo acercándose un poco mas a la chica y acariciándose la verga se podía ver la tremenda empalmada por la delgada tela del pantalón policial sin quitar la vista de ese fabuloso trasero ya que la chica seguía de espaldas a el, observaba sus grandes y bien proporcionadas nalgas, carnosas y sin rastros de estrías ni celulitis, completamente limpias y deseables con gotitas de agua que resbalaban lentamente haciendo que la vista fuese tremendamente sensual.
-Que culo soberbio es un culazo descomunal decía el viejo viéndole como las nalgotas se balanceaban de un lado a otro producto del potente chorro de agua que parecían acariciar tremendo cuerpo de perfectas y bien delineadas curvas y acercándose mas lentamente a la asustada chica, extasiado por sus tremendas redondeces, procedió a apagar la llave de paso, ya era suficiente.
_SUFICIENTE NIÑA AHORA QUEDASTE LIMPITA, QUEDATE ALLI QUIETECITA QUE ENSEGUIDA VUELVO. Dicho eso Sinforoso salió en busca de toallas seguramente y quedarse allí quietecita, como si podría ir a otro lado pensaba Cielo Riveros .
Enseguida apareció con una toalla y le arrojo el pequeño bolso que había sacado de su casa en el trayecto a la comisaria.
_ALLI TIENES ROPA NIÑA `PONTELO, DE SEGURO TE VA, ES ROPA ESCOLAR DE MI HIJA QUE VA A TERCER AÑO DE SECUNDARIA, LO SAQUE DE LA SOGA DEL PATIO DE CASA VAMOS PRUEBATELO, TAMBIEN HAY ROPA INTERIOR DE ELLA.
Cielo Riveros con mucha vergüenza seco sus partes, y con rapidez logro ponerse la pequeña braga que pertenecía a la hija del comisario Sinforoso, le quedaba algo chico como así también el sostén , teniendo en cuenta que nuestra adolescente tenía un cuerpo por demás desarrollado, con sus 20 años a cuestas la ropa de una colegiala de tercer año por supuesto le resultaría chica.
La bombachita le quedo como una tanga ultra pequeña, el corpiño parecía querer explotar por el volumen de las tetas que se gastaba Cielo Riveros , que tuvo el mismo problema con la faldita que le quedo minifalda escolar, y la camisa que los dos últimos botones de arriba no le prendían.
_Estoy lista ya hice todo lo que me pidió ahora si me va a dejar libre?
_JAJAJAA Tranquila chiquillla que esto recién comienza ahora acompañame.
La hermosa colegiala con el comisario guiándola por delante, debieron cruzar dos rejas hacia mas al interior de la cárcel, Los hermosos ojos aterrados de la nena que era la primera vez que pisaba un pabellón carcelario, no se cansaban de recorrer en forma asombrada lo que estaba viendo, llegaron a una celda individual donde al frente se encontraban un recluso y una travesti que fue demorada en la noche por ejercer la prostitución, el reo que vio acercarse a Sinforoso con tan suculenta hembra, no daba crédito a lo que sus ojos y su sentido común le dictaban.
--Ohhhhhh…Comisario que hermosa hembra que se consiguió este dia… Pero si es una preciosura de muchacha, cuantos años tiene, pero ese uniforme de colegiala es lo mas sensual que vi en mi vida ademas tiene cara de perra calienteeee…!!!, -bufó el preso cuando su ratonil mirada dio con el cuerpazo de Cielo Riveros --Es piernuda y se ve bien yegua para sus cosas… debe culear como solo lo hacen las putas profesionales,
--Si solo mira nada más… que caderotas…!!!, -continuaba diciendo el delincuente que al parecer llevaba alli guardado varios meses), --Que piernas…!!!, se nota que debe estar apretadita porque casi no las separa una de otra para caminar…, y que bien menea ese culo la muy zorraaa…!!!. –El recluso con cara y mirada taurina la miraba y bufaba sus groserías con sus oscuros ojos de pupilas ya enrojecidas a causa de ese fantástico descubrimiento, y con sus dos peludas manazas traspiradas aferradas a los barrotes que lo separaban de la celda de enfrente.
El comisario Sinforoso sin prestarle la mas mínima atención a las palabrotas del recluso abrió la celda y de un tiron de brazos introdujo a Cielo Riveros en su interior.
--Vaya meneo de culo que nos está regalando esta niña, lo felicito comisario esta vez si que supo elegir a su presa…!!! Me gusta como le vibran sus nalgotas y las tetas al caminar, -opinaba sin que nadie le pregunte sin quitar se su aborrecida mirada del cuerpo de la adolescente, -se me hace que esa pendeja está apretada entera, y que no se la culean como verdaderamente se lo mereceeee… si mira nada mas…!!!, -repetía una y otra vez el bestial delincuente cada vez mas excitado en la celda de enfrente.
Mientras tanto Cielo Riveros aturdida y abstraída por lo que vociferaba el preso de enfrente y analizando su situación veía que la celda en la cual estaba metida no era más que un reducido espacio pero cuando puso atención que en un rincón de la celda y en el suelo estaban puestos unos mugrientos y delgados colchones recontra usados y miro en forma suplicante a Sinforoso.
_Ahora que es lo que me hará comisario, usted no puede tocarme aquí dentro, seria un delito sexual de abuso contra una detenida.
--JAJAJAAA Es simple… si aceptas nos ponemos a culear como desesperados, solo un par de horas, no te costara ya que ya lo hicimos una vez en tu casa lo recuerdas jejejeeee…!!!, me sigues…!?, -ante el silencio de la hermosa hembra y por la expresión de su cara al estar esperando en que iban a terminar sus palabras el viejo entendió que ella si lo seguía, --Entonces y como aún es temprano te quedarás en forma voluntaria hasta que me hagas el hombre mas feliz del pueblo, así podremos estar culeando por toda la mañana, y una vez que los guardias den el aviso que se acabo el turno del mediodia te podrás largar para siempre, solo será unas horas de culeo desenfrenado y regresaras a tu casa salva, no sana pero si salva, entiendes la paradoja no sana JAJJAAAA.Sy de aquí en adelante yo mismo me encargaré de su seguridad… ahora si no aceptas, tendras que pasar todo el dia y noche durmiendo en ese colchoncito, de todos modos mañana insistiré en mi idea de culiar contigo preciosa y tu de igual forma saldrás violada, así que dame tu respuesta ahora mismo pendeja, quieres por las buenas o quieres por las malas?
¡NO ES JUSTO, ME ARRESTA SOLAMENTE POR NO TENER PERMISO DE CIRCULACION, YO ESTABA CUIDANDO AL PADRE DE MI NOVIO ENFERMO!!
_QUE DICES MALDITA PUTA MENTIROSA…El comisario la tomo de atrás por los sedosos cabellos lacios, ¡!!ACASO ME TOMAS POR ESTUPIDO!!! ESTUBE TODA LA NOCHE ALLI FUERA DEL DOMICILIO DONDE SUPUESTAMENTE CUIDABAS AL ABUELITO ENFERMO…
_DURANTE TODA LA NOCHE BUFABAS COMO UNA ZORRA CUANDO ALLI DENTRO TE CULIABAN, TE CULIABA TU SUEGRO PUTA BARATA…
Cielo Riveros lo miraba sin poder decir una palabra esta vez el comisario si la tenia entre las cuerdas no podía negar que lo que el estaba diciendo era mentira.
_TUBE QUE AGUANTAR TODOS TUS GEMIDOS ALLI AFUERA, Y DIME CUANDO SUPLICABAS QUE TE DIERAN MAS DURO, ERA POR LA CONCHA O POR EL CULO DONDE TE LA ESTABA CLAVANDO EL VIEJO FEO ESE.
Cielo Riveros no respondía sabía que estaba perdida, que esta vez no podría declararse inocente, el comisario podría ir con el chisme a su Madre, o peor aún contárselo a su amado Rodrigo.
--Me… me dijo que solo sería una sola vez…pregunto con cara angelical!?
JAJAJA me alegra que entendieras, vas a ver que lo vas a disfrutar.
_Por favor no le cuente lo de mi suegro a mi madre y menos a mi Rodrigo.

--Jejejejeeee… trato hecho putita… no habérmelo dicho desde un principio…?, no sabes cuánto me calienta estar cogiéndome a una zorra a espaldas de su novio, jejejeee, así que dalo por hecho, él no se enterara de nadita…, -y diciéndole esto último el vejete finalmente se dispuso a abalanzarse sobre la colegiala, que con su atuendo ultra apretado era una tentación de Dioses.
Fue el caliente recluso de la celda de enfrente quien la devolvió a su realidad, ESO COMISARIO ENSEÑALE A LA PUTA QUIEN MANDA EN ESTA COMISARIA JAJAJA
El comisario tomándola desde la cintura y atrayéndola con fuerzas contra su pecho, este aparte de ser muy gordo, ancho y corpulento pero su estatura no era lo que se dice alto, mas bien tirando a petiso por lo tanto su carota quedo justo frente al hermoso rostro de Cielo Riveros , y la calentura ya casi lo desbordaban en aquella ardiente mañana de visita carcelaria,
--Óye pendeja...! Empecemos..., al fin estamos solo tú y yo...!, --Ahora dame unos besitos mamacita ricaaa…!, -le iba diciendo el comisario a la medida que la iba atracando al muro donde quedó apoyada de espaldas la asustada nenota.
_PERO COMO SOLOS, A SOLO METROS ESTAN ESOS DOS MIRANDO, NO ESTAMOS SOLOS.
JAJAJAJAJA NO TE PREOCUPES PEQUEÑA ESE ESTA ACOSTUMBRADO, NO ES LA PRIMERA VEZ QUE TRAIGO A ESTA CELDA A UNA PUTA PARA CULIAR, NO TE PREOCUPES POR EL ES SOLO UN DECORADO, ANDA VEN NO TE DISTRAIGAS.
_ESO NO SE DISTRAIGAN SIGAN CON LO SUYO, VAMOS COMISARIO USTED PUEDE CULIESE A LA HEMBRA QUE ESTA PARA CHUPARSE LOS DEDOS.

El viejo comisario al tenerla así de agarrada y en aquel estado, con su cara chorreando de transpiracion y sus gruesos labios buscaron la altura de su desprotegido cuello, el aroma floreal que emanaba de aquella parte y de sus fragantes cabellos y al estar también solo centímetros del nacimiento de aquellas formidables protuberancias de carne dura que la colegiala se gastaba por tetas, y llevado por un acto de auténtico reflejo se dio a sumir su gran bocaza abierta en las fragancias del cuello de la contrariada Cielo Riveros el viejo sabía que su punto débil era esa erógena zona de su cuello, situación que aprovechaba para lamerla y besuquearla en aquella suave y erógena zona que él estaba usurpando.
Cielo Riveros con su carita apoyada al borde del muro solo lo miraba hacia un lado de su cara, sus aterrados ojos veían como el salido comisario Sinforoso movía su cabeza en su cuello, sentía como esa tibia y pestilente boca con lengua incluida iban humedeciendo toda su sensible y suave piel. También sentía como la panza de aquel detestable hombre que gustaba abusar de las mujeres en prision se comprimía contra su plano estómago, ahora la escandalizada nena se estaba poniendo más que nerviosa por la situación de estar ella y ese aprovechador comisario y al frente la mirada atenta del interno que no perdía detalle de lo que sucedía en el interior de una celda carcelaria en desuso.
--P… por favor don Sin… fo… rosooo… déjeme... yo no estoy acostumbrada a estoooo… Dejemeeee!!, -le dijo en forma suplicante con sus bellos ojos bien abiertos y mirando como el comisario no menguaba en sus besuqueos en el cuello, claro que ella sabía que no la iban a dejar, ya que para algo aún mas peor era para lo que ella había ingresado a esa celda con semejante hombre, hasta que este último una vez que paró de chupetear y lamer, la tomó otra vez y mas rudamente de sus caderas atracándola con más firmeza contra el muro para luego decirle:
--Te tendrás que ir acostumbrando perraaa…!! Nosotros dos tenemos un acuerdo y de aquí no saldrás sino es bien cogida, este tremendo culazo de universitaria que te gastas y estas chichotas que te cargas por ahora son solo mías, así que por favor ya déjate de estupideces y comienza a pagarme lo convenido…!!!
--Ya… ya putaaa... ya no te hagas la importante conmigo y regálame unos ricos besitos con esa boquita de zorra relamida que te gastas..., -junto con decirle esto último el asqueroso y viejo comisario estiró sus gruesos labios intentando buscar los de Cielo Riveros , la joven intentaba por todos los medios posibles evitar que eso ocurriera por lo que movía su bello rostro a ambos lados del muro esquivándolo y diciéndole:
--Don Sinforoso... n... no q… quieroooo... n... no lo ha... gaaaa... usted tiene… una … Hijaaaa…!!!

El salido vejete le contesto en forma más eufórica aun,
--Eso me calienta mas washita ricaaaaa…el vestidito que te di le queda igual de bonito que a mi hija, que por cierto es muy putita, acaso piensas que yo y ella no nos besamos, mi hija es una ninfómana igual que vos, y no sabes lo lindo que es el incesto!!!, Asi que no me vengas con huevadas que la historia con mi hija es asunto mio!!!
Ahora dime Papi no me beses, como si fueras mi hija vamos dímelo, QUE ESPERAS DIMELOOOOOO
_ No no me be be ses papi que soy tu tu hija.
Vamos dímelo otra vez para que mi verga se siga endureciendooooo…!!!!, -el viejo Sinforoso al ir diciéndole eso último le faltaban manos para seguir manoseándola, estas la recorrían entera, el vestidito se le subia por tanto mangreo y dejaban sus redondas nalgas al aire libre, al comisario le encantaba estar comprobando el mismo las formas corporales que poseía la preciosa hembra, sus ganas de besarla en los labios se acrecentaban aún mas.
--Jajajajaaaa…!!! Tú sí que eres estupidaaaa…!!!!, o sea estas dispuesta a pasarme la concha pero no a darme besossss…!?, jajajajaaaa…!!! Pues haz cuenta que eso estaba anotado en la letra chica del contrato, así que ahora regálame tu boquita de zorraaaa…ella intentaba frenarlo poniendo en el tapete su situación de nena ella había aceptado hacerlo con el a cambio de su libertad pero darle besos eso no lo habían hablado cuando se habían puesto de acuerdo para culear se dio a vociferarle cual era su punto de vista al respecto:
--Me importa una verga que no lo hayamos tratado antes el tema de los besos…!!! –y en un rápido movimiento de manos le subió el vestido a la altura de su cintura y metió sus dos manazas entre la tela de las pantys y la piel femenina apoderándose en el acto y a dos manos de ese poderoso y redondo par de suaves nalgotas que tanto había estado deseando comenzando a sobarlas casi con desesperación a la misma vez que su tanda de verdades continuaba, --Además y para que lo sepas lo que más me calentó de ti la primera vez que te vi pasar rumbo a la casa de tu suegro es que en tu carita se notaba que ibas por demás caliente, como si tu novio no te hubiera culeado como mereces. Y te vi meneando este culo que te cargas, era ver la cara de perra fiel y altanera que ponías al ir pasando frente a nosotros,dentro del patrullero jajajajaaaa…!!!, así que déjate de puteadas de poca monta y entrégate zorraaaa… que en pocos minutos ya esteremos culeando como verdaderos perros calientes mientras tu noviecito espera el día de tu visita, jajajajaaaa…!!!!

Estos pensamientos se unieron a las grasientas sobadas en su trasero, sumándole también los continuos lengüeteos que le estaban dando en el cuello lo que le ocasionaron unas sensaciones que ya antes había sentido y la llevaron a la perdicion, estas eran una seguidilla de tímidos escalofríos que le recorrieron levemente su espina dorsal, aun así Cielo Riveros no le prestó mucha atención a aquello, ya que en esos momentos ella solo se sentía humillada por aquel viejo comisario que a viva voz le ponía en antecedentes que ella ni su situación le importaban y que solo deseaba cogérsela, como si ella fuese una cosa que sirve solo para tal efecto, o tal vez como un juguete sexual, ella no era ninguna muñeca inflable se decía en alguna parte de su mente, pero los viejos que la habían violado si la consideraban una manejable muñeca sexual.
Cielo Riveros temió lo peor cuando al estar ella con su vestido subido hasta la altura de su cintura sintió como su violador posaba algo notoriamente duro sobre las delgadas telas de sus pantys y del pequeño triangulo formado por su fina y pequeña ropa interior, totalmente horrorizada caía en cuenta que aquella dureza que sentía restregarse contra su vagina era el pene erecto de don Sinforoso.
La hermosa adolescente rápidamente puso sus manos en el pecho de su caliente adversario intentando con esto sacárselo de encima, pero don Sinforoso ya casi perdiendo los estribos con tal actitud por parte de la soberbia y joven hembra, la tomó con ambas manazas fuertemente de sus cabellos obligándola a que lo mirara, su verga quedó casi incrustada en la pequeña bombachita de la nena, justo al medio de aquel místico triangulo que protegían lo mas intimo que era poseedora la atractiva colegiala.
--Escúchame bien puta de mierda, ya me estas cansando con tu actitud de perra relamida, acaso no quieres volver a ver rápido a tu casita eh, o acaso prefieres quedarte aquí por unos dias?, -el viejo por cada palabrota que le decía en su mismo rostro empujaba su cintura contra ella haciéndole sentir el poderío de su verga, como a su misma vez más fuerte la jalaba del cabello, --Así que dímelo tu misma zorraaaa... me vas a secundar SI o NO en todo lo que yo te haga…!?
--Yo lo voy a secundar en todo lo que Usted me hagaaaa…!!!, pe… pero ya pare, no me jale del pelo que me dueleee…!!!
--De verdad zorraaaaa…? o esta es otra de tus puteadas???!!!!
--Ya le dije que voy le voy a secundar en todo... pero don Sinforoso... ya no me jale del cabelloooo...!! Por favorrrrr…!!!

El comisario Sinforoso si hubiese estado con otra de las tantas putas de las cual estaba acostumbrado a tratar hasta la hubiese abofeteado ahí mismo, aparte de patearla todo lo que él quisiera antes de violarla, pero con solo verle el inocente mirar en sus ojos, su preciosa cara de rasgos casi angelicales que ahora solo denotaban temor, por alguna extraña razón se contuvo y poco a poco fue aflojando, hasta liberarla, pero siempre manteniendo su verga firmemente adosada a la vagina de Cielo Riveros .
--Bien putaaa...! espero que desde ahorita nos entendamos mejor, ahora nos besaremos.
El viejo Sinforoso muy caliente como ya estaba y sintiéndose satisfecho con sus logros la había soltado del cabello y nuevamente volvió a estrecharla hacia él tomándola por la amplitud de sus caderas disfrutando a concho y con sus propias manos el voluminoso cuerpazo que se gastaba la joven hembra, del otro lado el convicto feliz testigo de lo que allí sucedía sonreía de morbo, el comisario sentia la suavidad de su piel en la parte de sus caderas y de sus redondas nalgas eran desquiciantes sumándole a esto que esa sensación de carnes apretadas por el efecto de las medias de colegiala se le hacían más exquisitas aun, ahora y a la misma vez que la comprimía fuertemente hacia él para que Cielo Riveros sintiera en su panochita lo muy parada que tenía su verga gracias a ella se daría a literalmente comérsela, y a sabiendas que la putona ya no pondría obstáculos de por medio sin más se apoderó de aquella fresca y sensual boca mandándole un beso asfixiante y represivo, sintiendo en su bocota un delicioso aliento tan dulce como la miel.
el viejo comisario movía su cara sin despegar un solo centímetro su boca con la de ella, pero lo que más le preocupaba a la formidable hembra era que el bulto que sentía comprimirse en su vagina este era tremendo y estaba espantosamente duro, lo sentía como si el viejo no tuviera un pene normal puesto en esa parte, lo que ella estaba sintiendo que le comprimían en su delicada hendidura era tan duro como una piedra…, que piedra…!? Eso era una rocaaa…!!!, -se gritaba angustiantemente en su mente en tanto el asqueroso besuqueo continuaba.
--Sssptsss...! Ssssptsssssss...!!!, -era el sonido de bocas devorándose entre ellas al interior de la ordinaria celda, mientras que Cielo Riveros era salvajemente punteada, ella en forma desesperada se movía agitadamente contra la pared ante aquel brutal sesión de asquerosos besos que le estaba robando el desvergonzado comisario.
Por su parte el viejo Sinforoso ya sintiéndose dueño de la situación y más caliente que el pitón de una locomotora a carbón ya se la quería coger con desesperada lujuria. Tras pasar tres largos minutos en que la estuvo besando a la fuerza y moviendo sus caderas si como ya estuviese cogiéndosela despegó su bocota de los rojos y azucarados labios fresa de tan tierna adolescente, entre ambas bocas quedaron llamativos puentes salivales que los unían.
--Ufffff…!!! Pero que buen culazo es el que te gastas putaaaaaaa...!!! -El viejo Sinforoso ya traspirando notoriamente aun no se la creía que semejante ejemplar de mujer estuviera encerrada en una de las celdas de la cárcel junto a él, la asustada Cielo Riveros lo escuchaba viendo al frente de sus ojos como ríos de sudor le bajaban por su cara, como si este se estuviese derritiendo, --Creo que voy a culearte ahorita mismo...!!!!

--Ya mamacitaaa...! ya no te hagas la difícil... y déjame ver de que están hechas estas chiches…!, -junto con decirle esto último el degenerado comisario de un jalon desprendio todos los botones de la camisa de la nena, la misma suerte corrió el sujetador que fue arrastrado junto con el manotazo, quedando la hembra con sus redondas chichotas al aire y expuestas para que él hiciera lo que quisiera con ellas, y sin mas fue y se las agarró comenzando así una serie de palpadas y apretadas sintiéndolas a cabalidad:
--Ohhh putaaaa!!! Pero que suavidad que te gastas en estas tetotas mamiiiii...extrañe tanto acariciarlas hace tanto fue vos te acuerdas en tu casa siiii!!!, -le decía mirándoselas con los ojos abiertos como platos al mismo tiempo que ya se las apretaba para posterior a eso pasar su cara por ellas manteniendo sus ojos cerrados y en forma apasionada.
Don Sinforoso estaba en el séptimo cielo, ya que mientras le hacía la operación antes señalada la tenía atracada a la pared y con su cuerpo la empujaba punteándola con su verga como si de verdad ya se la estuviera cogiendo.
--Siente mi verga en tu almeja pendeja...! yo se que te gustaría sentirla bien adentro tuyo... jajajaja…!!!, -le decía por cada movimiento pélvico que le mandaba, para luego continuar, --Te gusta putaaa!?... Te gustaaaa…!!?? Te gustaría sentir mi gruesa verga carcelaria abriéndote el delicado tajo que tienes ahí abajo perraaa...!?
Cielo Riveros se mantenía con su cabeza apoyada contra el muro, con sus ojos cerrados y extrañamente respirando por la boca producto de la fatiga y el agotamiento, nunca en su vida la habían estrujado tanto, pero Sinforoso creyendo que la hembra ya estaba caliente por la expresión de su cara se lanzó otra vez a darle una serie de asquerosos besos en esos exquisitos labios rojos y azucarados probando nuevamente esa suave lengüita con sabor a fresas.
Cielo Riveros en aquellos momentos era una verdadera muñeca de goma que se dejaba hacer lo que quisieran, solo que ella no participaba, situación que el aprovechador victimario luego de habérsela devorado ocularmente aprovechó para bajarle las medias de colegiala de una, quedando maravillado con esas brillosas y suaves caderas, y con solo ver ante su ansiosa mirada aquella alba y diminuta ropa interior casi lo hacen perder la razón a causa de la tremenda calentura a la cual ya estaba entregado, aquella provocativa tanguita blanca no tenía nada de remilgada él la había descolgado de la soga de su casa y no había imaginado, ahora que estaba al descubierto de las medias la notaba muy tirante en aquellas relucientes y suaves carnes de sus caderas.
De un momento a otro la casi inconsciente hembra otra vez se vio con sus ojos cerrados sintiendo aquel duro instrumento incrustársele en la tela de su ropa interior, pero ahora existía algo que marcaba la diferencia entre ellos, la dureza que había estado sintiendo ahí abajo ahora la sentía más cercana y mas resbalosa, y como era que no si el ansioso comisario ya hasta se había bajado los calzoncillos y se la estaba pasando a pelo en su panochita casi desprotegida, la tanguita de Cielo Riveros estaba toda mojada con los líquidos pre seminales que el viejo iba expulsando de su verga a medida que la punteaba, sus blancas tetas parecían inflarse aun mas debido a lo agitado de su respiración al estar sintiendo por vez primera un idílico gustillo que en forma gradual ya la comenzaba a llamar al apareamiento, por supuesto que ella aun no tenía puta idea de esto último.
Don Sinforoso aprovechando el estado de la ninfa no perdió tiempo en meter las manos por ambos lados de sus caderas con la única intención de comenzar a bajarle la tanguita, y la hembra que en algún momento había llevado sus delicadas manitas al peludo pecho del hombre solo se daba a emitir unos desganados reclamos como si ella misma no estuviese convencida de lo que estaba diciendo:
--Noooooo...! e... eso… noooo!! Noooo lo ha... ha... gaaa...!! d... de... ten... gaseee...!!!, -ahora fue ella misma quien bajó sus manitas tomándole las manos al hombre para que este se detuviera, y el viejo estaba tan entusiasmado al estar en tan erótico ritual pre coital con semejante pedazo de hembra no se hizo problemas para detener momentáneamente el inminente encueramiento de su bella compañera sexual, por lo que con el mismo entusiasmo que antes fue subiendo las palmas de sus manos sin despegarlas de aquella enloquecedora tersura en la piel de la bella nena, pasándolas por sus nalgotas, sus caderas y su cintura dándose por unos buenos segundos a palpar y sobajear a su antojo todo aquel festín de carnes femeninas que la hembra tenía para ofrecer con la suavidad de su cuerpo.
El aborrecible comisario no hallaba por donde comenzar, instintivamente la apoyó otra vez contra el muro pintarrajeado, tomó con sus manos cada una de sus tetas y comenzó a chupárselas con depravación, disfrutando y sintiendo a tope su extrema dureza y magnifica suavidad, su fragancia y su sabor, de a ratos se las recorría con las palmas de sus manos en todo su contorno jugando con sus dedos pulgares en sus pequeños pezones rosados, luego friccionándoselas y amasándolas en forma circular cada vez con más ganas, para luego volver a bajar sus manos a las nalgas de ella contrayéndola hacia él y seguir punteándosela si como de verdad la estuviera poseyendo, la veía con sus deliciosos y jugosos labios semi abiertos como si ella estuviese sintiendo todo lo que le hacían así que sin pensársela mas aprovechó la ocasión para estamparle otro asqueroso beso con lengua que ahora si la hembra luego de unos nerviosos segundos por parte de ella lo aceptó y lo recibió enredando tímidamente su fresca lengua con la de él.
Aquella extraña pareja por cada segundo que pasaba parecían besarse más apasionadamente, la pestilente saliva pasada a cigarro y a fritanga de cebolla rancia se entre mezclaba con la fresca saliva floreal de la exquisita colegiala que en esos momentos parecía ya estar disfrutando de todo lo que le hacían, por su parte aquel aprovechador hombre estaba apostando todo por calentar a tan tremenda hembra para cogérsela con ella excitada, y ya casi la tenía lista.
Asi abrazados como estaban el comisario recostó sobre los dos colchones que había en el piso de la celda, quedando la pereja una al lado del otro.
–Esto… e… esto no está bien… d… de… déjeme señor…, – decía esto para no sentirse tan culpable por las caricias, pero en su voz no había indicio de que quisiera que el viejo parase.
–Me encantan las viejas que usan estas tanguitas así de chiquitas, siendo que fue el mismo comisario quien le trajo tan diminuta ropa interior, es tan pequeña tu tanguita – decía el viejo separando un poco el hilo dental de hermosa adolescente.
–Mjmjmj…, – fue lo único que pudo pronunciar la chica, quien se había recostado completamente sobre Don Sinforoso con su cabeza posada a un lado de la de él en el sucio colchón.
Los hábiles dedos del viejo buscaron la intimidad de la nena, la encontraron y de manera muy lenta comenzaron a abrirse paso por sus pliegues, ante la cooperación de Cielo Riveros quien no hacía nada por oponerse.
El viejo comisario entonces pudo sentir la poca cantidad de vello púbico que tenía la colegiala en esa parte, se preguntó si así era cuando se la culeo por primera vez o se depilaba, aunque lo que más le importaba es que la estaba tocando, y la notaba húmeda.
“O dios que rico” pensaba la chica sintiendo los gruesos y tiesos dedos del comisario restregándole la entrada de su vagina, aunque sabía que estaba haciendo mal.
No fue una tarea tan difícil, la íntima fisura de Cielo Riveros estaba lubricada por sus líquidos, su novio Rodrigo jamás se atrevía a masturbarla con sus dedos, le parecía algo inmoral, por lo que la chica al ser una situación diferente a lo que estaba acostumbrada lo dejo hacer.
Estas bien apretadita pendeja…, – decía el viejo, para luego llevarse sus dedos a su boca y lamerlos, de esta forma lubricarlos y volver a su labor.
La joven hembra lanzaba eróticos gemidos inentendibles, estaba disfrutando mucho, cada vez que los dedos del viejo tocaban su vagina una descarga eléctrica la recorría de la cabeza a los pies.
Ella estaba sorprendida de la poca o nula resistencia que estaba poniendo, quería hacerlo pero sentía delicioso, su vagina comenzó a desprender fluidos a la vez que el viejo aceleraba su mete y saca.
–Dioooooss… mío…, – murmuraba Cielo Riveros al separar la cabeza del colchón, los dedos entraban y salían rápidamente haciendo que la colegiala vibrara, jamás en la vida había sentido tan rico.
–Ya… pa… paree… p… porrr favorrr…, – ahora gritaba como una loca, esta vez en verdad quería que parara, por fin había juntado fuerzas para oponerse, pero tal vez era demasiado tarde.
El viejo sentía en su piel como los fluidos de la chica escurrían en abundancia, esto confirmaba que lo estaba haciendo bien.
–Noooo… poorr… favor…, – los gritos de la nena cada vez se hacía más fuerte, sus tímidas manos fueron al encuentro de las de él en un afán de impedir que siguieran avanzando. Nos están mirando no lo haga Sinforoso nooo.

No lo consiguió, el hombre era muy fuerte.
–Meee… me vooooy.. aaa … co… corrreer…!!!, – incluso ella estaba preocupada de lo fuerte que estaba gritando y lo peor es que cada vez sentía más rico y las ganas de correrse ya casi la superaban,
–Puta Cielo Riveros … estas re buena… vente todo lo que quieras…, – las palabras del viejo fueron interrumpidas por la boca de Cielo Riveros , quien lo beso en un afán de acallar sus propios gritos ante el mayor orgasmo que hasta el momento había tenido en su vida y del cual estaba siendo víctima.
Mientras en la celda de enfrente el recluso ya se jalaba la verga a diestra y siniestra sus pupilas no podían creer que el viejo Sinforoso solamente con sus dedos haya hecho gozar a tan preciosa adolescente y eso lo calentaba en demasia.
La nena vio como el tipo de enfrente se masturbaba e intento separarse del viejo, pero esta vez no lo logra.
El remordimiento va inundando su ser, ¿Cómo era posible que se haya dejado llevar tan fácilmente por sus deseos, siempre terminaba cediendo a los abusos de tipos tan viejos que podrían ser su abuelo.
–De… De… jeme…, – decía Cielo Riveros , ya fue suficiente.
Pero el viejo no le hacía caso, en vez de eso intentaba besarla nuevamente, a lo cual ella se negaba, pero siendo el viejo más fuerte terminó por conseguirlo.
El beso es largo, su saliva se mezcla, sus lenguas se buscan, ambos están excitados… el tipo de enfrente se masturba desenfrenadamente, pero a ella ya no le importa, simplemente se deja hacer solamente quería disfrutar del momento.
Tras unos buenos minutos de intensos besos que les quitan el aliento don Sinforoso no quiere separarse de Cielo Riveros , ella hace un esfuerzo para alejarse de ese infiel beso, finalmente lo logra, ambos deben respirar.
La nena esta mucho más exaltada que el viejo, sus pechos suben y bajan de manera hipnotizante, fue un orgasmo maravilloso, pero ella sabe que se dejó llevar, que nunca debió pasar eso y menos con tan despreciable hombre.
Sin embargo se pregunta: Cómo era posible que en esos pocos momentos con el viejo hubiera disfrutado más que toda su relación con su amado Rodrigo?.
Don Sinforoso se da cuenta que su princesita quiere irse, no se lo permite la aprisiona sosteniéndola de esas amplias y suaves caderas que tanto le gustan.
–Me tengo que ir señor…, – dice Cielo Riveros aun con la respiración agitada, por primera vez en la mañana era consciente que estaba semidesnuda frente a un hombre que podría ser su abuelo, sus mejillas enrojecieron de vergüenza.
–A donde nalgona…!?, esto apenas empieza, – el comisario se levantó de su posición y se sentó en el colchón, levantando como si se tratara de una pluma a la buenísima de Cielo Riveros sentándola frente a él, de esta forma la nenota quedó a unos pocos centímetros de la erecta virilidad del hombre.
El corazón de Cielo Riveros latía a mil por hora, había sido muy estúpida al pensar que el viejo la dejaría ir así como así, sus bellos ojos verdes se clavaron en el pene del viejo, no entendía cómo es que momentos antes había querido sentir el pene de ese hombre entre sus manos, ahora que lo veía más de cerca se dio cuenta que era un monstro, si el viejo intentaba meterla estaba segura que la partiría en dos.
–No… déjeme…. Aléjese de mí…, – la nuevamente preocupada hembra trataba de empujar el seboso cuerpo de Don Sinforoso sin resultados.
El viejo comisario no entendía porque la nena se comportaba así, momentos antes estaba bastante cooperadora, aunque si debía ser sincero no le importaba, a fin de cuentas tenía allí a la pendeja más sensual que había conocido en su vida, semidesnuda a unos escasos centímetros de su verga, por nada del mundo la dejaría ir.
–La cara del viejo era de un completo degenerado, y era entendible, tener a semejante mujer así como la tenía volvía pecador al más santo.

Cogió la diminuta tanga de la chica y de un jalón la rompió y se la quitó a su dueña, ella soltó un ligero alarido por lo brusco de la acción.
Fue entonces cuando el momento más esperado por el viejo llegó, era hora de penetrarla, tomándola de su formidable trasero la levantó y la dirigió a hacia su enhiesto miembro, la nena al darse cuenta comenzó a gritar:
–Nooooo…!! Me va a destrozar…!!! Por favor Noooo!!!, – sin embargo sus suplicas fueron en vano, muy lentamente el viejo la fue penetrando, mientras ella no paraba de quejarse. –Dueleee…!!! Noooo…!!! Nooooo!!!!, – Cielo Riveros después de haber entregado la zorra a su suegro durante toda la noche, tenia la panocha por demás delicada, mientras tanto tratando de tener algún lugar del cual apoyarse abrazo al viejo, su cabeza la puso junto a la de él.
Con un gran dolor la colegiala ya había logrado tragarse más de la mitad de esa verga.
–Estas bien apretadita pendeja… esto que se siente es increibleeee…!!!, -le vociferaba el viejo sinforoso con sus ojos bien abiertos mirándola a su cara asustada.
La colegiala ya no decía nada, su cuerpo se arqueo por la fuerza del viejo, guardaba sus fuerzas para tratar de resistir el dolor, el cual llego muy pronto, el viejo la dejo caer ensartándose la porción mas gruesa de su verga que le faltaba de un tirón.
El grito de la chica no se hizo esperar.
–Ahhhhhhhh… me dueleeeeeeeeeee…!!!!!!!!
–Tranquilízate nena… verás que en unos momentos te acostumbraras a la verga y pedirás mas de ella…te acuerdas como la última vez?, – el viejo acariciaba el sedoso cabello de la nena de forma muy paternal, cosa que agrado a Cielo Riveros , la hizo sentir un poco más segura. TE DIJE QUE TE IVA A TRATAR BIEN PRIMOR.
Ya totalmente ensartada el viejo la liberó de sus manos, sabía que lo que menos quería la nena era moverse por lo tanto no se separaría, aprovechó este momento para terminar de retirar el minivestido, con una mano estiró hacia arriba los brazos de la chica y con la otra se lo quitó.
Se veía tremendamente sensual, solamente con su camisa blanca toda desbotonada sentada en la verga de un hombre mayor, era simplemente espectacular.
Cielo Riveros no podía creerlo, el viejo había ganado, estaba dentro de ella, se sentía como una estúpida, como la peor de las mujeres, cómo había permitido que todo eso pasara?
El viejo sintiendo que ya había esperado lo suficiente para que la estirada vagina de Cielo Riveros se adaptara empezó a mover su pelvis, sintiendo un placer inmenso, cuantos días y cuantas noches había soñado con esto y al fin se le había cumplido.
–Nooo… no se muevaaaa…!, – la cara de la adolescente era mezcla de dolor y de placer, la verga del comisario era tan larga y gruesa como la de su suegro, pero en ella ya no había dolor se había adaptado muy rápido a ese falo, lo que no quería era excitarse más, estaba sintiendo muy rico.
Lo ves nena… tu panochita ya se adaptó a mí… puedo sentir como me succiona la vergaaaa…, – decía el viejo muy agitado y ya con su cara mojada de traspiración..
–Nooo… eso no es… ciertooo…, – Cielo Riveros lo negaba ahogadamente tratando de así sentirse menos culpable.
El viejo mordió la oreja de la colegiala, la lamía, la saboreaba, mientras el placer de ella va en aumento.

Encaja sus cuidadas uñas en la gran espalda del viejo haciéndolo sentir un dulce dolor.
Don Sinforoso cada vez se mueve más rápido, esta enloquecido por Cielo Riveros , al igual que ella que hace esfuerzos sobre humanos para no demostrarlo, en su mente y en su corazón estaba Rodrigo, pero a pesar de que ella ya se movía levemente aceptando esa relación no le daría la satisfacción al viejo.
–AAHHHHHHHHHHH…!!!!, – Cielo Riveros no pudo dejar escapar un sonoro gemido.
–Me encantas como culeas estúpida…!!!. Qué rica panochita es la que te cargas zorraaa… y por fin estoy probando su sabor…, – la calentura del momento hacía que el viejo insultara a la nena y sorprendentemente a ella le gustaba, le gustaba sentirse utilizada por ese hombre, ser su zorra, tal como él se lo decía, y estar indefensa ante él.
La manos del viejo cogieron a la excitada y joven hembra de su espectacular trasero, la subía y la bajaba sobre su larga y gruesa verga venuda, sus fluidos se unían, sus cuerpos se frotaban, el viejo sentía en su fofo pecho como los melones de la colegiala se apretaban.
Don Sinforoso hace por besarla nuevamente, ella lo rechaza.
Su resistencia ya casi es nula, la verga del comisario está por romperla, esta la lleva a lugares que no creía que pudiera alcanzar, está experimentando el mayor placer vivido.
Ya no le importa nada, olvida completamente a su novio Rodrigo, su vida y se entrega completamente al sexo desenfrenado con ese hombre que apenas conocía y que era la segunda vez que se apareaba con el.
–AAAAAAAAAAHHH…!!!!- Grita como una loca Cielo Riveros y es ella, quien ahora busca la boca de Don Sinforoso, él la acepta y se funden en un apasionado beso, sus lenguas juegan, se buscan, se sienten mientras se ponen a culear en forma apasionadamente desquiciante.
el comisario nota como ya no tiene que cargar a la nena para seguir penetrándola, ella se está ensartando por sí sola, el sonido del plock…! Plock…! que hace el trasero de Cielo Riveros al golpear al viejo es maravilloso, excitante.
Las manos del viejo abandonan el trasero de la preciosa colegiala y cogen los melones de la nena que los tenia expuestos.
–ASI CULIAME EL PINGO, VOS CULIAME EL PINGO…, – ordena el viejo separándose de aquel beso.
Cielo Riveros desvía la mirada, se siente apenada, pero no deja de mover sus caderas, el placer es inmenso, ella quiere seguir sintiendo rico.

Ante Don Sinforoso se muestran majestuosamente las tetas más hermosas que había visto nunca, grandes, voluminosas, con dos pequeños pezones rosados bastante duros muestra de la excitación de su dueña, se mueven de arriba hacia abajo, nota como de ellos escurren gotas de sudor haciéndolos ver más apetecibles.
El viejo las estruja bruscamente, las amolda a sus callosas manos…
–Que hermosas chichotas te gastas putona…, – Don Sinforoso abre lo más grande que puede su boca y se los come.
–Ahhhhhhahhhhhhhh…!!!!, – Cielo Riveros no paraba de gritar, de gemir, de mostrar su excitación, en aquellos delirantes momentos le encantaba que esa hedionda boca le succionara sus tetas.
El viejo no se la cree, que rica está la colegiala, es una diosa… es su diosa…!
Pasan bastantes minutos con ellos culeando. Cielo Riveros se meneaba vigorosamente sobre la obesa cintura del viejo que la empalaba, con todas las fuerzas que ejercía en su cuerpo concentradas desde su cintura para abajo, apretando, frotando, comprimiendo y succionando con su vagina esa temible vergota que estaba probando, ambos están en su límite, exhaustos, sudorosos, pero aun excitados.
Mientras tanto en la celda de enfrente el reo recostado sin perder detalle del apareamiento entre la colegiala y el comisario, la travesti que tenia de acompañante le practicaba sexo oral, ellos tampoco fueros exentos de tan exitante y memorable momento.
–PORRR FAVORRR… YA ACABE CON ESTO…!!!- Cielo Riveros no se daba cuenta lo fuerte que gritaba a la misma vez que ella sola se movía violentamente sobre el cuerpo de don Sinforoso, la gente que pasaba por fuera de la comisaria podían escucharla gritar, o como así mismo oír el acelerado jadeo de ambos cuerpos excitados.
–Voy pendejaaa…!!!, -el viejo ya queriendo acabar se salió de ella, la levantó la puso baca arriba en el conchon y subió en ella.
Estos pequeños instantes de calma sirvieron para que Cielo Riveros se calmara un poco.
–Ahí te voy nalgonaaaa…!, – le dijo Don Sinforoso colocando su aun erecto miembro en la lubrica entrada de la vagina de Cielo Riveros .
–Esppeereee…!, – lo detuvo la hermosa colegiala desde su posición poniendo sus manitas en la peluda panza del viejo comisario…
El viejo puso una cara de curiosidad.
–Noo… no se venga cortado dentro… Cuando vaya a eyacular salgase por favor…!, -Cielo Riveros sabía que resistirse era inútil, es mas ni siquiera estaba segura de querer detenerlo, pero pensaba en su vida pues no quería que la dejaran embarazada, como hace unas horas le reprochaba su casi suegro cuando eyaculaba abundante cantidades de esperma.
Don Sinforoso no respondió, de un solo golpe introdujo toda la extensión, de su descomunal falo.
–Mmmmmffffffss… r… ri… cooooo…!, – gimió excitantemente Cielo Riveros con sus ojos fuertemente cerrados ante tan brutal pero deleitosa acción para su venerable cuerpazo que ya a estas alturas lo resistía todo.
El viejo dejo caer todo su peso en la nena, ella tiene dificultades para respirar, el hombre es muy pesado, pero aun así se mantiene con sus mulos totalmente abiertos y recogidos en señal de aceptación de coito.
Es por eso que el rápido mete y saca del pene del hombre la vuelve loca, lo abrazó, sus suaves manos daban tiernas caricias a su espalda, y nuevamente mientras cogían se besaron pero ahora con verdadera pasión.
La celda parece venirse abajo, la cogida que el hombre le estaba poniendo al voluptuoso cuerpo de la colegiala era de antología.
El placer y los deleitosos escalofríos enloquecen a la nena y aprisiona al viejo con sus

piernas, queriendo y permitiéndole que entrara más en ella.
Su vagina y su pene parecen ser uno solo, parecen haber nacido el uno para el otro, ambos sexos se derretían y se fusionaban.
El tiempo pasa, 30 minutos en aquella posición, pasan los 45 y ninguno de los dos tiene idea de cuánto tiempo ha pasado, como tampoco quieren terminar de hacerlo, solo se concentraban en seguir sintiendo el placer.
En la celda de enfrente ya el delincuente bombea su erecto falo en el interior del ano de la travesti que empuja hacia atrás queriendo recibir todo el miembro de su compañero de celda en toda su extensión.
El voluptuoso cuerpo de hermosa colegiala no puede más a llegado a su límite, se tensan todos sus músculos, los contrae e intenta abrazarle en forma completa la verga con su vagina, y cuando cree lograrlo explota en grandes espasmos de placer, literalmente está sufriendo un espectacular orgasmo.
–Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii…!!!!!!, – Grita en forma desesperada con su cara irreconocible debido a su ahora rictus orgásmico por todo lo que estaba sintiendo._Asiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii metemla enteraaa viejo inutillll Siiiiiiiiiiiiiiiii muévase mas la quiero todaaaaa asiiii putooooooooooo-
Al sentir que su hembra tuvo el orgasmo tan deseado por ella Don Sinforoso no pudo más y al igual que la chica llega a su límite.
La vagina de Cielo Riveros que no dejaba de escurrir líquidos, sintió como la verga que aun la penetraba hacia movimientos extraños.
–Salgase Donnnn, – dijo la nena en un momento de sensatez notando que el viejo iba a eyacular.
Don Sinforoso haciendo caso omiso, no se salió y deposito toda su semilla en la dulce colegiala.
–Noooooooo…!!!!- el grito de la chica era de temor, aun así su vagina no dejaba de chupar ese falo que vomitaba semen a raudales casi en su misma matriz.
–Acepta mi corrida pendejaaaa…!, – la voz del viejo resuena en todo el cuarto mientras esta eyaculando dentro de ella.
El espeso líquido era abundante, viscoso caliente para Cielo Riveros era como si la estuvieran embarazando, y tenia terror a ello.
Totalmente exhausto el viejo se separó de la chica y sin proponérselo cae dormido, ha sido la mejor cogida de su vida.
Ella yace en el colchón boca arriba, completamente desnuda con sus bellas piernas bien abiertas, su cabello lacio alborotado y el rímel corrido, de su vagina escurre el liquido seminal del viejo, esta exhausta, a la vez que cae en cuenta que se la acaban de culear.
A medida que su excitación bajaba, la culpa ocupo su lugar, era una estúpida, había
terrminado cayendo en las redes del viejo, había sido infiel, a su Rodrigo por segunda vez en 24 horas y lo peor le había gustado.
Mientras en la celda de enfrente el reo también eyaculaba cantidades de semen en el ano del travesti que tenia de acompañante, seguramente con la mente puesta en la colegiala, cogia con el travesti pensando en que se lo hacía a Cielo Riveros .
La nena zamarroneo al comisario Sinforoso, para que despertara, el viejo estuvo de patrulla toda la noche y por todo el esfuerzo del apareamiento lo habían dejado exhausto.
_Señor ya, devuélvame mi ropa, no pienso regresar a casa con el uniforme de colegiala de su hija. Por favor ya déjeme ir.
El comisario miro su reloj y sin contestar se vistió en su uniforme policial, y ajustándose en enorme cinturón, y con la cara de satisfacción en su rostro abrió el calabozo y le dijo.
_TE GANASTE LA LIBERTAD CHIQUILLA, ALLI VA TUS PANTALONCITOS, Y TUS OTRAS PRENDAS, PERO NO TE ACOSTUMBRES A ESTAR SIN MI. TE ESTARE VIGILANDO MIRA QUE TE VAS A DEJAR COGER LAS VECES QUE SE ME ANTOJEN LAS GANAS ENTENDISTE PUTITA, POR HOY ERES LIBRE.
El reo que se encontraba al frente y fue testigo de todo le sugirió a Sinforoso.
OIGA COMISARIO, POR QUE NO ME LA PRESTA UN RATITO Y LA SUELTA ESTA TARDE RECIEN, MIRE QUE UNA NENA TAN BUENOTA COMO LA QUE SE ACABA DE COMER USTED, NO SE ENCUENTRA TODOS LOS DIAS.
_!!!CALLATE INSERVIBLE, ACASO NO TE ALCANZO LA PROSTITUTA QUE TE CONSEGUI, DISFRUTALA QUE EL TRAVESTI SI SE VA ESTA TARDE.
Dicho eso el comisario Sinforoso salió por los pasillos y se escuchaba los gritos.
¡!!GUARDIAAA A SOLTAR A LA PROSTITUTA, QUE YA CUMPLIO SUS HORAS DE DEMORADA, YA SON LAS 12 DEL MEDIODIA Y CUMPLI MI TURNO, ME RETIRO DEJO TODO EN SUS MANOS.!!!
Cielo Riveros fue escoltada hasta la mesa de entrada, donde la mujer que atendió su ingreso le hizo firmar la salida y con ironía le pregunto.
_Y COMO PASO LA MAÑANA SEÑORITA, NO SE ABURRIO ALLI DENTRO EN SU CELDA.
No hubo respuesta, Cielo Riveros salio de la comisaria con el sol ya muy alto, y el calor era insoportable, ahora solo quedaba inventar una excusa para que su Madre le creyera por que tantas horas de ausencia, desde que salio de su casa.
CONTINUARA…
Cielo Riveros 29 en Navidad conoce al negro Uganda
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Cielo Riveros no pudo evitar mirar el momento en donde el hombre de raza negra saco su instrumento para mear, la nena miro perpleja y con mucho asombro vio como el Senegalés saco de su bragueta una larga y desproporcionada manguera de carne negra, que a pesar que estaba dormida era tan larga y gruesa.
Era Navidad y Cielo Riveros se encontraba sola en su cuarto, el encuentro don su novio Rodrigo se habría frustrado, ella estaba furiosa sin siquiera saber que todo había sido saboteado por su suegro don Siveriano que no quería que la nena se encontrara con Rodrigo, ahora un 25 de Diciembre la muchacha estaba sola y sin planes para disfrutar de tan importante dia.
Suena el celular de Cielo Riveros , muy molesta lo coge pensando que si es Rodrigo le increparía por haberle hecho eso pero al contestar oyó la aguardentosa voz de don Pedro… -- Como está la putita más sabrosa que me he comido… extrañando a su macho jejeje… la nena con sus 20 añitos a cuestas se puso nerviosa al oírle, sentía miedo pero a su vez comenzó a nacer desde sus entrañas una sensación de emocional excitación.
-- Don Pedro… co-como esta… -- aquí pues trabajando, buscando algún momento para darme una escapada y culearte como te mereces jejeje… la nena no entendía lo que le sucedía, sentía un sentimiento de odio hacia aquel sujeto mezclado con temor pero a su vez su cuerpo reaccionaba excitada reconociendo la voz de aquel vejete que bajo el chantaje la había dominado, los pezones se habían endurecido y sentía un estremecimiento en su esfínter … -- No sabes las ganas que tengo de tenerte en mis manos, el HDP. Del comisario Sinforoso te saco de mis manos, yo ya te tenia dominada pero bue…aquí todas las putas no se igualan a ti, todos los días me pajeo pensando en cómo te cogí en la feria…
Cielo Riveros se puso a recordar como aquel día en la feria termino subyugada bajo el poder de ese viejo dominante entregándose y gozando como nunca lo había hecho con nadie, don Pedro aquel miembro sin duda había sido la mejor que hasta ahora había visto y probado en todas sus dimensiones pero sin la satisfacción de haberla visto eyacular ninguna vez o de haber probado de de ese elixir… -- que pasa putita… te comieron la lengua los ratones jejeje… -- NO!! Don Pedro, dígame para que me llama…
-- PARA QUE!!! Para hablar con mi mujer… con mi putita jejeje… la nena solo pudo gesticular un sonido de queja ante lo que le decía… -- ACASO ME EQUIVOCO!!!… le recrimino el vejete de manera airada asustando a Cielo Riveros … -- eh!!! Nooo don Pedro, no se equivoca… -- jeje entonces dime que eres… la nena apretando un puño llena de pena, impotencia y excitación cayó en el juego del vejete… -- so-soy su mu-mujer don Pedro… -- jeje asi me gusta putita, que obedezcas a tu marido jejeje…
Quiero que vengas ya mismo al taller…estoy con amigos y quiero que conozcan la belleza de mujer que tengo, quiero que vengas con tu lindo uniforme escolar que es lo que mas me encanta.
Cielo Riveros seguía tan solo oyendo lo que el vejete le decía…-- muy bien putita quiero que te desnudes ahora… -- Que!!!... – lo que oíste, desnúdate rápido!!!! Cielo Riveros como una autómata se quito la playera y deslizo la pequeña pantaloneta quedando completamente desnuda sobre su lecho… -- ya don Pedro… -- jeje no te creo así que tomate una foto y envíamela a mi número y rápido… la nena quiso reclamar -- pe-pero no le miento… -- mándamela rápido!!!! Cuando Cielo Riveros escuchaba la airada voz del vejete terminaba por aceptar lo que le pedía y tomándose la foto se la envió a su verdugo llena de vergüenza.
Don Pedro de tan solo verla casi eyacula… -- muy bien putita, así me gusta, veo que sigues tan hermosa como siempre, te perdono que te fueras a la Capital a acostarte con los viejos esos que eran tus Patrones, olvide que eres la nena más bella de todo el pueblo… a pesar de lo bochornoso y humillante del momento de su rostro nació una leve sonrisa ante el halago del vejete… -- UF..POR DIOS NENA , mejor no me hubieses mandado la foto, los amigos que tengo alrededor no pueden creer lo buena que estas, me pone celoso eso y ahora te deseo mas, quiero morderte esas chichotas y esas nalgotas que tienes… la nena seguía contrariada escuchándolo viniéndole como flashazos los recuerdos vividos en la Feria y la última vez que estuvo con él en aquella confortable cama en donde se encontraba, No asi en el saguan donde la quería forzar a que le practicara sexo oral, ahora sus amigos la conocían por fotos pero completamente desnuda eso la apenaba.
Tomate un taxi ya pendeja que yo aquí pago el viaje, mas vale que lo hagas porque sabes que será peor para ti.
Si don Pedro en media hora estoy allí, resignada Cielo Riveros hacia caso al pedido del pervertido viejo y después de ponerse su uniforme escolar y con la mentira a su madre que se dirigía a visitar a su novio Rodrigo partió rumbo al taller mecánico donde esperaban su viejo amante don Pedro y los borrachos amigotes .
Salio presurosa a la calle en busca del primer taxi que la llevara a encontrarse con su ya muy maduro amante.
Cuando Cielo Riveros llego a destino bajo del taxi muy presurosa y abrió el porton de chapa introduciéndose al taller para que nadie pueda reconocerla entrando a ese antro de viejos borrachos, en un barrio donde abundan las viejas chusmas y criticonas, el ruido del porton fue estremecedor, y los concurrentes en su interior al ver sorprendidos a la hermosa hembra que se allí se presentaba quedaron en completo silencio, no podían creer lo hermosa que lucia esa jovencita casi niña, que llegaba de visita, nada menos hace un rato la vieron desnuda en una selfie.
Don Pedro casi corriendo salio a recibirla, pago al taxi que esperaba fuera y al regresar vio como todos sus amigos desnudaban con la mirada a su amada y joven Amante, que muy timida se quedo allí inerte, el viejo la tomo de la cintura y tomándola de forma repentina la sorprendio con un beso de lengua, para que los allí reunidos supieran a quien pertenecía esa hembra.
Señores quiero presentarles a mi novia, su nombre es Cielo Riveros , y para que nadie se haga ilusiones estamos muy enamorados jeje.
Vamos nena saluda a mis amigos. No te hagas la timida, que ya me demostraste que de timida no tienes nada jejeje.
Entonces la colegiala saludo con un beso a todos y cada uno de los allí presentes, allí estaban, el hermano de Pedro, los dos viejos empleados que la noche donde don Pedro la hizo suya por primera vez ellos también querían su parte y quedaron con las ganas, y por ultimo un hombre de raza negra a los que todos llamaban Uganda, asi todos recibieron el frágil beso de mejilla de Cielo Riveros , a lo que algunos de los viejos aprovecharon en correr la boca y darle un beso de medio labio a la ruborizada adolescente.
Vamos entonces continuemos con las cartas, que ahora mi mujer se encargara de traernos las bebidas, vamos mujer ve al freezer y reparte, vamos dicho eso una sonora cachetada en los glúteos de Cielo Riveros , señalaban que la noche era manejada en la forma que decía don Pedro.
Esa noche fueron muchas las cervezas que la joven muchacha tubo que servir, el que mas tomaba y mas se desubicaba era don Pedro, sin dudas la cerveza le llego de pleno y en su afán de fanfarron, humillaba a nuestra Cielo Riveros .
Que pasa que hoy estas floja!! Mocosa maniera, vamos que mis amigos tienen las botellas vacias!! Trae rápido mas bebidas que para eso parece lo único que sirves, vas a ver cuando mas tarde te coja vas a suplicar por mi verga pendeja enclinca!!
Esa situación no solo incomodaba a Cielo Riveros , sino también a los invitados, que no paraban de mirar lo hermosa que se veía la joven hembra, que al servir tenia que soportar los rozes de manos que los viejos ya en forma nada disimulada al recibir la botella le agarraban la frágil mano agradeciendo la bebida y también el espectáculo de que la hermosa jovenzuela se luciera con su traje de colegiala.
Pero lo que a Cielo Riveros le llamaba la atención era ese hombre de raza negra al que llamaban Uganda, que en realidad se llamaba Loan, y en realidad era de Senegal que fue a parar a ese remoto pueblo huyendo de la guerra civil de su país.
Las cervezas corrian como roció de pólvora, y como todos saben tanto tomar te lleva a orinar seguido, asi que en un momento dado Uganda se fue al baño y al estar este ocupado recurrió a un rincón del taller para vaciar su vejiga llena, lo que el no percato es que al costado la ventana estaba la precaria cocina, y Cielo Riveros no pudo evitar mirar el momento en donde el hombre de raza negra saco su instrumento para mear, la nena miro perpleja y con mucho asombro vio como el Senegales saco de su bragueta una larga y desprorcionada manguera de carne negra, que a pesar que estaba dormida era tan larga, como nunca nunca había visto, descomunalmente venoso, y una cabeza que parecia una ciruela morada oscura.
El Negro se pùso a mear como si nada, dejando a nuestra Eve totalmente confundida, le hacia recordar cuando de niña veia mear a los caballos, con interminables chorros de orine-
Después de una hora el viejo Pedro hecho a todos porque ya no podía mas de la borrachera.
Fuera todoooos que quiero intimidad con mi prometida!!! Fueraaa
Y asi termino esa noche de mucho alcohol con don Pedro durmiéndose a los 5 minutos de acostarse con Cielo Riveros , y la nena no pudiéndose sacarse de la cabeza, la enorme pollota del negro Uganda.
Ya eran casi las 6 de la tarde, la colegiala se despertó un poco confundida, había dormido casi todo el día, aun no recordaba que día era hoy, El resto de la tarde se lo paso ordenando sus cuadernos, y preparando su uniforme escolar, las sucias imágenes que la atormentaban poco a poco se iban disipando, pero el solo pensar que un hombre tuviera un instrumento tan grande tan grueso tan largo tan monstruoso como el del negro Uganda, no podía sacárselo de la mente.
Solo hacia que su panochita se humedeciera, Don Pedro ya le había enviado varios mensajes, anunciando que tendría un corto viaje y se ausentaría por unos días, eso le daba libertad para relajarse y hacer lo que se le cantara la gana.
Decidida fue esa tardenoche al taller donde sabia que estaría el empleado de raza negra, que tanto la había impactado, solo rogaba que no estuvieran los otros dos empleados de Don Pedro que tanto le desagradaba, y que una vez casi la toman por la fuerza.
Una vez que llego a destino, y mirando para todas direcciones sin que nadie pudiera advertirlo, uso la llave que le dejo don Pedro para abrir el candado e ingreso al taller,
Pero que tenemos aquí?, dijo el Moreno cuando vio a la adolescente en una visita tan sorpresiva como inesperada.
Permiso señor, contesto Cielo Riveros intentando ser lo mas casual posible…
--Y que trae por aquí a esta encantadora muchachita …no me vas a decir que anda perdida?, jajaja!!
Ya me retiro, solo vine a ver si estaba don Pedro, por favor déjeme pasar le decía la joven, El negro se quedó boquiabierto y cuando por fin pudo ver ala tremenda hembra que su jefe había llevado al taller la noche anterior, aquella de las que muchas veces el viejo había comentado pero que él no le creía, (pero que pedazo de hembra, este viejo roñoso inútil no se merece este manjar tan sabroso), se decía el Africano contemplando de pies a cabeza y comiéndosela con su amarillenta mirada a la hermosa colegiala a la vez que sentía como se le paraba la temible verga.
Cielo Riveros quien notaba algo raro en la situación, quiso ser cortes con el negro, ya que se daba cuenta que su sola presencia podría ocasionar algún tipo de problemas entre empleador y empleado,
--Buenas tardes señor…mi nombre es Cielo Riveros , le dijo la nena estirándole su blanca manita.
Pero que niña tan educada le dijo el africano en su pobre castellano a la vez que tomaba la suave mano de Cielo Riveros y disimuladamente se la llevo para rosarla contra su paquete en el mismo momento en que le estampaba un beso en la cara, y casi muy cerca de sus labios, la colegiala debido a la tensión del momento no se percató de nada, solo sintió los puntiagudos bigotes que le pincharon la cara.
El negro Uganda mientras seguía obstaculizando la puerta de salida se dio a estudiar a la suculenta hembra que su Patron tenía por novia, le calculaba por lo menos 1.70 mts de altura, ojos verdes, de tetas pequeñas y paraditas, unas torneadas piernotas y muslos de ensueño, y para colmo un antojable culazo bien parado y redondito, esa mocosa era un verdadero monumento de mujer se decía para sus adentros.
Estaría demás describir como este negro caliente y sin vergüenza, ya que en su país de seguro no tenia una buena reputación, por algo tuvo que huir y refugiarse en este remoto pueblo de mala muerte.
Sin perder tiempo el Negrete tomo de la mano a la joven y la llevo al cuartucho que le había confiado don Pedro, ante la pasividad de la nena, la llevo directamente a la pieza. Vente conmigo putita y veras que rico la pasaremos, a espalda de mi jefe todos los días disfrutaras de mi tranca.
No era lo que quería para su vida pero era algo que la excitaba, amanecer cada día en brazos de ese semental un animal de raza negra quien se la cogería ni bien se despierta y encima cogiendo con otros mientras Don Pedro la cuida como su chulo.
-- Piénsalo bien mi putita, veras que nada te faltara je je en mi país era muy buscados pòr las chicas que querían vergas grandes jejjeese o dime no te gustaría que te metiera mi verga ahora mismo… -- ¡¡SIII!! ehh digo no don Uganda yo solo que-quería dec… la excitación le había ganado a la razón de la nena, su cuerpo contesto por ella ante la atrevida pregunta poniéndola muy nerviosa y ruborizada por lo que dijo y tratando de cambiar el tema siendo interrumpida por un excitado y morboso negro africano.
je je ves mi putita, te mueres por estar con el negro je je… Cielo Riveros no podía responder, se había quedado apenada por lo sucedido y sin ideas de cómo explicar su respuesta y tras unos cuantos segundos de silencio el negrete continuo con los ataques sicológicos.
-- No respondes porque es cierto, te gusta ser mi perrita y te mueres porque un negro te de una culeada ahora mismo je je, como solo las zorras disfrutan de carne negra je je, dime te arrepientes de venir hoy, te calienta tanto estar con el negro y te cogiera toda la noche je je no lo niegues putita…
La nena se mordía los labios entre el miedo y la excitación de lo que el negro le proponía; las manos le temblaban, Uganda la había calentado con tan solo hablarle guarradas, el negro podía oír la respiración entrecortada y jadeante de la pobre nena que ya no podía más por la calentura, su cuerpo pedía sexo y hasta se le había olvidado el porqué fue hasta alli.
El negro Uganda seguía sentado a un lado de Cielo Riveros acariciándole las piernas y sintiendo esa escalofriante suavidad que tiene la piel de la nena, veía como la chamaca suspiraba por cada tocamiento que este le hacía, el negro sentía como se le endurecía cada vez más el tremendomiembro, diciéndose que si no esta su jefe Pedro, el mismo seria quien disfrutara de aquella divina diosa.
En cambio la nena seguía abstraída en aquel erótico mundo al cual había sido transportada por el hombre de raza negra, todo debido a su ya tonta inocencia y su exceso de confianza; podía ver al africano como la tocaba, pero no lo rechazaba, su mente le traía el momento en que por primera vez vio con sus propios ojos la descomunal verga negra azabache que solo en sueños podría imaginar, todos aquellos calientes recuerdos elevaban su temperatura al máximo, y solo disfrutaba del momento, no existía nada más para ella.
El moreno comenzó a subir sus manos hasta acercarlas a la núbil vagina, sus dedos ya acariciaban los delicados labios vaginales haciendo que la nena echara la cabeza para atrás y arqueara su espalda tan solo decía algunas quejas que mas parecían gemidos. – ayyy no por favor… no me toque allí ahhhh… el negro de amarillenta mirada sonreía al notar que los quejidos de la nena eran más de placer que de reclamos.
Uganda ya no podía aguantar más, ya no quería esperar, tenía ante él un exquisito manjar y no quería que se le enfriara, así que con toda la morbosidad que llevaba por dentro acerco su repulsivo rostro hacia la deliciosa entrepierna de la nena sintiendo el aroma que su húmeda vagina destilaba, la estimulada colegiala al sentir que el negro acercaba sus gruesos labios a su sensible parte intima estiro sus manos impidiendo que el Negrete realizara su cometido.
no, no por favor, de-dejeme, no haga eso… exclamo Cielo Riveros con una voz tan inocente pero sensual a la vez lo cual volvía loco al negro pues le hacía recordar aquella vez que lo vio mear con su manguera gigante y casi al mismo tiempo se le prendió el foco al negro – que pasa pendeja, quieres que tu macho Pedro sepa que te encanta la verga negra.. je je… que se entere como te gusta que los negros te cojan je je…
no por favor, no lo haga señor, hare lo que me pida pero no le diga a don Pedro… El africano sonreía vil y asquerosamente al ver que su morbosa intención iba por buen camino, nuevamente puso en camino su carnoso labio hacia la deliciosa panocha de la nena, a pocos milímetros ya podía percibir aquel aroma de mujer de colegiala, estirando su lengua dio la primera lamida a esa aterciopelada piel haciendo que Cielo Riveros lo tomara con cierta fuerza de sus cabellos como virulana, dos lametazos mas y ya la nena con la espalda arqueada y la cabeza de costado, se mordía los labios con los ojos entrecerrados.
ayyy nooo pa-pareee ahhh… la nena no podía aguantar más aquella rasposa lengua que atacaba con desquiciante fiereza sus labios vaginales, sus manos apretaban las sucias y amarillentas sabanas que olían a sudor pero extrañamente para ella eso no le importaba y muy a su pesar lo que quería era seguir sintiendo esa lengua que la hacían retorcerse de placer.
El hombre del africa deslizo sus manos hacia los pequeños y redondos senos masajeándolos toscamente ante lo cual la nena en una rápida reacción le tomo de las manos tratando de quitárselas inútilmente puesto que el negro tenía más fuerza, la pobre Cielo Riveros no tardo en ceder a los fuertes magreos y pellizcos que le daba a sus tetas el abusador negrete y nuevamente apretando las sucias sabanas se dedico a soportar el placer que este le daba.
ayyy ayyy noooo pa-pare señor ya nooo ahhh… El negro quien en su lengua saboreaba los primeros fluidos que la nena soltaba sonreía al oír su inocente voz quejándose pero a su vez disfrutando de la comida de panocha que le daba, la nena ya prácticamente con sus torneadas piernas le atenazaba la cabeza al negro queriendo que esa viboreante lengua entrara mas profundo en su intimidad.
-- Tranquila belleza… Pronto llegara el momento en que mi amigo la vergota gigante te hara disfrutar como te gusta ja ja ja… -- Ay no, de-déjeme por favor… no qui-quiero ahhh ahhh… -- Acá harás lo que te diga; o quieres que don Pedro se entere lo puta que eres… ¡¡¡QUIERES ESO!!!
muy bien muñeca, ahora solo disfruta de la noche que te espera ja ja vas a querer quedarte a vivir aquí ja ja… Acto seguido el negrete nuevamente zambullo su asquerosa lengua sobre los ya distendidos labios vaginales en una incesante lamida, seguía bebiendo los cada vez más abundantes líquidos corporales que la nena producía, no tenían comparación ni con la de las pocas putas que había probado en su vida, Cielo Riveros era una mujer incomparable y en ese momento la tenía a su disposición.
La colegiala veía su propia imagen desnuda en el espejo del viejo ropero, que el negro Uganda tenia en la humilde pieza con sus 21 añitos chocaba con un espejo que la daba a entender y que le decían burlonamente que a ella un negro le estaba chupando la zorra de esta forma, el negrete ya llevaba unos buenos minutos comiéndosela por su pequeña rendija, cuando de pronto empezó a sentir que este venia subiendo por las carnes de su vientre, lamiendo y avasallando todo a su paso con aquella inquieta lengua que había sentido al interior de su intimidad.
Pensaba que fue ella misma que busco encontrarse con el Africano, que fue ella misma que con la excusa de buscar a don Pedro podría allí verlo, pensó en como podría haberse convertido en una niña tan puta, de provocar siempre que los hombres terminaran violándola.
La nena esperaba expectante y ya sentía lo que se veía venir, Uganda ya venía a la altura de sus duras tetas, paso y se entretuvo por un rato lamiendo entre su cuello y oreja dejando esta última toda ensalivada, situación que le causaron los ya conocidos escalofríos al cuerpo desnudo de aquella joven que se encontraba nuevamente en contra de su voluntad dejándose hacer por el negrete aprovechador, que lo único que quería en este momento era mandárselo a guardar.
Y los presagios de Cielo Riveros se cumplieron ahora Uganda buscaba con su boca los labios de ella, hasta que se encontraron, la nena intentaba por todos los medios posibles correr su cara, mantenía fuertemente sus mandíbulas bien cerradas, pero a el negro eso no le importaba se conformaba con lamérselos, ensalivárselos, y hasta le gargajeo en su rostro para después el mismo desparramar toda su propia saliva a los distintos rincones de la cara de la joven.
Eve tenía su carita brillosa de tan ensalivada que se la tenían, pero lo más curioso para ella era el olor tan particular que tenia el hombre de raza negra, ese olor dulzon que desprendía el cuerpo del negro como si este fuese su olor personal y característico, y así seria, la pobre y desventurada colegiala se tendría que empezar a acostumbrar a esos fuertes olores a negro que por ahora la atrapaban hasta mas no poder.
De un brusco empujón fue arrojada a la cama que chillo como lo vieja que era, la blancura del cuerpo de Cielo Riveros contrastaba con lo negro de la piel del Africano, sus gráciles extremidades temblaban por lo que se veía venir, su respiración se agitaba a medida que pasaban los segundos, ya no habría vuelta, el negro Uganda en estos momentos se comenzaba a desvestir, para luego dar paso a la segura copulación entre ambos.
Por la indeterminada edad de aquel hombre, Cielo Riveros se percató de lo mucho que le costaba al negro sacarse su pantalón bermuda , y más grande fue su espanto cuando vio que lo que le dificultaba al hombre deshacerse de la prenda era el terrible Falo que atascado se resistía a salir libre.
-Que te parece mi aspecto zorra de mierdaaaa!!??, no es una maravilla, el único problema es que de niño padecí de una extraña enfermedad que dejo que mi verga creciera mas de lo normal, para algunos mas de 25 cm.es considerado fenómeno, pero para algunas mujeres es un sueño hecho realidad jajajaja, pero espera a ver mi verga completamente tiesa y de seguro que nunca veras algo igual, te voy a hacer ver las estrellas putita, porque la tranca que me gasto esa si es de lo más anormal del mundo, después ansiaras que llegue el día de nuestros encuentros para venir a acostarte con el buen negro Uganda jajaja!!, y en una de esas, lo más seguro es que hasta dejes a don Pedro y a tu futuro esposo, solo te tienes que acostumbrar a vencer ese profundo miedo que de seguro ya estas sintiendo y ver mi gigantesca verga…pero veras que ya no a ser tan malo contigo, jajaja!!.
Terminando de decir esto último el negro Uganda ya lo tenía decidido, se la iba a violar.
Cielo Riveros quedo horrorizada, el desgraciado cuerpo desnudo de Uganda que en este minuto ya se había quitado los pantalones y calzoncillos, parecían ser el de algún algún documental de National Geografic que ella había visto, pensó que si este tipo fuera un animal, lo mas parecido era la de un caballo salvaje y exitado, solamente en ellos había observado tremenda herramienta reproductiva, su mirada tropezó con la hiniesta verga palpitante que este tenía, y no pudo evitar hacer una rápida comparación con la de todos los machos que habían ensartado su ya no virginal cuerpo.
Pensó que esta nueva verga que se dejaba ver ante su inocente mirada, era monstruosa, su longitud era muy difícil de calcular como asi también su ancho y esta era mucho más nerviada y con los mismos ríos desquiciantes de hinchadas venas de múltiples colores e igual de palpitante, los pelos de la base eran como virulana negra.
Cuando lo vio venir a subirse a la cama con la insana seguridad e intención de tomar lo que prácticamente ya era de él, Cielo Riveros comenzó una franca huida, pero el agil negro cazador de las praderas Africanas la alcanzo a agarrar por unas de sus piernas y la jalo con fuerzas hacia el centro del colchon que la hacía de cama amatoria, con claras intenciones de que se lo iba a meter.
la colegiala había sido sorprendida e inmovilizada por un abrazo rudo y poderoso, a la vez que se preguntaba que como esa calamidad humana podría tener tanta fuerza, la negra humanidad de Uganda aplastaba fuertemente su delicado cuerpo, a la vez que al notar sus prominentes muslos clavárseles en diferentes partes de su cuerpo le producían dolor.
Un fuerte grito de pavor salió de los atemorizados labios de ella, y en medio de sus vanos e inútiles esfuerzos por escapar, y de sus débiles intentos para impedir la consumación de los propósitos de su nuevo y negro violador, reconoció que era casi inútil la desfallecida resistencia que ella podía ofrecer.
El negro Uganda, no ajeno a esto y con una caliente rapidez sumado a la terrible excitación provocada por el contacto con las suavidades de aquella juvenil y asustada hembra, tomó a la fuerza la posesión de sus más secretos e íntimos encantos y preso de su Africana y contenida lujuria metió toda su parada gigantesca y tiesa verga en el cuerpo de su nueva joven manceba, ensartándosela en su totalidad, Cielo Riveros lo recibió en toda su longitud y grosor con auténticas demostraciones de rechazo, aversión y autentico dolor al recibir algo inhumano algo que ninguna mujer podría recibir sin sentir que se encontraría partida al medio en dos. En la humilde cama se libraba una feroz lucha entre dos contendientes, en la que cada uno desempeñaba un papel muy diferente uno del otro.
El negro violador, igualmente enardecido y aireado por las dificultades que le presentaba su víctima a la realización satisfactoria de su invasión y esto sumado a las exquisitas sensaciones que estaba experimentando en el salvaje enfrentamiento cuerpo a cuerpo con una de las más bellas jovencitas que le toco culear, le enterraba su tiesa y gigantesca herramienta de carne en la lasciva y jugosa ranura que tenía la nena entre medio de sus bellas piernas, intentaba por medio de ansiosas y brutales aserruchadas de retrasar la inminente pero copiosa y abundante descarga de semen que se aproximaba, el cual lo desparramaría al interior del cuerpo de la jovencita.
La vejada Cielo Riveros lloraba copiosamente al sentirse violada por ese animal venido del Africa, que la mantenía con sus muslos abiertos mientras él se dedicaba a meter y sacar el negro mástil, adentro de su cuerpo en forma desesperada, le veía brillar su cara, y de como este se mantenía con sus ojos cerrados en autentica señal de estar sintiendo al máximo los placeres que le otorgaban a su verga las carnes intimas de la curvilínea y hermosa jovencita a la cual él estaba mancillando.
--Nooooo… don Uganda por favor ya noooo… sniffssss!!, le rogaba Cielo Riveros sintiendo como le metían la negra verga dura como el acero y llena de venas que palpitaban como con vida propia, e intentando de alguna forma que el caliente Negrete la dejara de una buena vez,
--Cállate zorraaaa… y siente mi vergaaa…
El negro Uganda se la dejaba ir de una y lo más profundo que podía, no podía creer como una nena tan menudita como Cielo Riveros podía recibir por completo toda su herramienta, como también de vez en cuando se la metía y sacaba lentamente intentando de experimentar al máximo ese gratificante gozo que le proporcionaba su verga al rosarse con las cálidas carnes de la vagina de la jovencita. Ya llevaban unos buenos minutos en esta tarea.
Mientras tanto el cuerpo de la nena quien a duras penas había vencido las sensaciones de miedo al ver y sentir la verga de caballo en su cuerpo metiéndole su cipote como palo de amasar que tenia como verga, y debido a su nuevo temperamento adquirido después de los tantos encamamientos que ya había tenido con muchos hombres del pueblo, antes de esta nueva lucha sexual, estaba comenzando a sentir esos gratificantes escalofríos que se apoderaban poco a poco de su ardiente estado emocional, mientras la ensartaban, la pobre se daba el tiempo de pensar en la persona la cual la estaba apuntalando, era el Negrete!! Qué pasaría si ahora este negro Africano la llegase a dejar embarazada?, se preguntaba para sí misma, un niño/a negro que pensaría la sociedad, ella no podía de darse el lujo de dejarse preñar por él ni menos entregarse a disfrutar como ya lo había hecho con don Pedro o su suegro don Severiano o sus patrones de la capital que terminaron dentro de su vagina grandes cantidades de semen, pero aun así las potentes clavadas de verga que le asestaban en estos momentos ya estaban comenzando a provocar estragos en su delineado cuerpo, ya que en estos mismos momentos sentía la imperiosa necesidad de comenzar a contonearse.
Cielo Riveros ya se daba cuenta de lo que le estaba haciendo Uganda se sentía muy rico y gratificante para su mente y cuerpo, pensó en menearse solo un poquito, para comprobar ella misma si esto era igual de placentero como lo había sido con don Pedro, y adivinen, Error!!
No tuvo la fuerza de voluntad necesaria como para aguantar las ganas de ella también comenzar a moverse y menearse de la misma forma en que la estaban poseyendo, primero la nena lo hacía muy despacito, pero por cada movimiento que ella hacía con sus caderas, las sensaciones se iban notando aún más placenteras, gradualmente la hembra se fue entregando a los placeres de la carne Negra, y luego de varios minutos en que la pareja daba la impresión de estar apareándose como los animales ahora la pareja ya estaban sencillamente culiando con todas las de la ley, o como Dios manda!!
Ante los violentos y lascivos ataques, que ambos amantes se propinaban, la mente de Cielo Riveros seguía luchando por no ser la mujer de un negro, recordaba muy bien de que lo que ella hacía en estos momentos era estarse pro creando, era el acto de apareamiento sexual, de las consecuencias que esto podría generar en su vida, si en la consumación del acto la sabia naturaleza pusiera la semilla negra en su vientre y ella quedaría esperando un hijo, pero también existiría la posibilidad de que el padre fuera don Pedro.
Mientras más pensaba en las nefastas consecuencias de lo que podría pasar con lo que ella estaba haciendo, más se perdía en las confusas nebulosas de la pro creación, y estas aberraciones en vez de espantarla , más la prendían y calentaban, el solo hecho de pensar en aventurase en correr esos riesgos, más fuerte se movía y meneaba, por lo que decidió en esmerarse y gozar a plenitud de todas las insanas oleadas de calentura que su propia naturaleza lujuriosa iban despertando en ella, y esto acrecentado a las ansiosas clavadas a las cuales estaba siendo sometida.
Cielo Riveros ahora también correspondía en un acto de natural y autentico instinto animal por parte de ella y que a pesar de la inusual imagen del hombre negro que en estos momentos la estaba sometiendo sexualmente y por la ardiente fricción que le causaban las palpitaciones de semejante tranca al interior de su vientre, estas igual le amenazaban con traicionarla, su inocente mirada estaba perdida y vidriosa hacia cualquier punto de esa horrenda y sucia habitación, hasta que a continuación y con desmesuradas convulsiones en sus órganos y con su respiración más que acelerada, se rindió y se sometió a tan vil violación a su exquisito cuerpo, ahora ya dejaba de ser Cielo Riveros ahora era la hembra la que comenzaba a actuar y decidir por ella, ya no le preocuparon las probables consecuencias del coito y descargo desde su misma intimidad, un derrame de su propia esencia natural sobre el hinchado palo de carne negra que tan deliciosamente le estaban metiendo al interior de su cuerpo y en contra de su voluntad.
El negro Uganda por su parte nadaba en un mar de placeres jamás ni en su africa natal podía haber imaginado, tenía plena conciencia de a quien se estaba culiando, era la novia de su jefe, esto era un sueño del cual no quería despertar jamás, por lo que decidió aminorar la velocidad de sus acometidas, ya se había percatado del orgasmo contenido que había sufrido su bella adversaria.
El lento y cadencioso mete y saca de su verga en el cuerpo de aquella juvenil diosa fue provocando el aumento gradual de la calentura y lascivia de nuestra dulce jovencita, quien ya estaba casi gozando de aquella nueva violación sufrida y provocada a causa de su ingenuidad. La necesidad por mover y menear sus caderas ya la tenían casi superada, su cuerpo se lo exigía y demandaba, ya no disimulaba nada, ahora sencillamente estaba dedicada a culiar y a que se la culiara ese negro dueño de tan enorme falo azabache.
Cielo Riveros ya hacia desquiciantes movimientos ondulatorios con sus ancas y caderas, los cuales hicieron que Uganda cayera en un estado similar al ataque cardiaco, el corazón le latía a cien por hora, a la vez que comenzó a darle la cacha más caliente y brutal que jamás en su vida le haya dado a mujer alguna, le daba estocadas, empujaba, embestía, y la apuntalaba para luego retirarse hasta dejar ver la ancha cabeza como una ciruela gigante enrojecida y morada de su erecta y parada verga junto a los rosados y delicados labios vaginales de Cielo Riveros , para luego volver a metérselo hasta las más íntimas profundidades de sus entrañas, los negros pendejos que le nacían en el vientre ya se enredaban con la suave y escasa población de tímidos y sedosos pelitos íntimos que cubrían el nacimiento de la vagina de la fémina, hasta que muy en contra de su voluntad por parte de ella todavía, unos leves gemidos entrecortados acusaron el auténtico placer que ella y su cuerpo ya estaban sintiendo desde hace un buen rato.
Ahora lo contemplaba con una perdida mirada de calentura, le miraba sus amarillentos ojos, fue en esto que Uganda al estar consciente del real goce de su compañera sexual acerco sus carnosos labios a los de la joven quien ahora lo recibió sumisa y complaciente, para dejarse besar por su nuevo y negro amante.
Juntaron sus lenguas las cuales luchaban entre si al interior de ambas bocas, intercambiaban salivas en donde era Cielo Riveros quien se encargaba de que nada de estas se perdieran y tragaba todas las conjunciones salivales que ellos iban juntando. La nena pensaba que por lo menos este hombre no era tan gordo como don Pedro y que además tenía toda su dentadura en buen estado y no esa masa ennegrecida que tenía en la boca su otro primer amante.
Ambos se estaban follando uno al otro, se restregaban en forma desesperada, cuando de pronto un placentero y sonoro gemido por parte de la joven hembra demostró nuevamente de su real estado de calentura ya que una vez más, las seguidas convulsiones de placer recorrieron todo su sistema nervioso, para luego aferrarse con todas sus fuerzas a la escalofriante contextura de su nuevo macho semental con el cual se estaba apareando, movía su cintura, ancas y caderas con total desesperación, sus ojos cerrados que daban la impresión de estar enojada, demostraban la gran concentración con la que ella se lo estaba follando, le encantaba que la ensartaran con tan inmenso instrumento, que se la metieran y de que se la culiaran sin pudores ni miramientos, hasta que su cuerpo ya no resistió más, para culminar y explotar en un tercero intenso y sensacional orgasmo, el cual demostró con los más fuertes bramidos de placer emitidos por mujer alguna, a la vez que pretendió abrir sus piernas separándolas lo más que le permitió su cuerpo, entregándose al negro Uganda en plenitud.
El negro Uganda, ya se había dado cuenta de su triunfo y conquista, nunca se había imaginado el estar yaciendo con la niña Cielo Riveros y menos pensó que esta se entregaría de una mejor forma en que lo haría una verdadera ramera, a la vez que sentía que en cualquier momento descargaba su simientosa masculinidad en el interior del joven cuerpo de su nueva putita, quien se mantenía debajo de su cuerpo en forma mansa y sumisa, por lo que se sintió poseído por unos desenfrenados deseos recientemente renacidos y todavía no deleitados con la integra posesión de tan hermosa y joven mujer, por lo que la más perversa enajenación se fue apoderando de sus oscuros instintos.
El negro saco su verga del tierno cuerpo avasallado de Cielo Riveros y el mismo, con bestiales movimientos dio vuelta la agotada figura de su compañera sexual ya casi semi desmayada a raíz de los desquiciantes placeres sufridos y congraciados con ella en aquella humilde cama.
la colegiala nuevamente posaba en cuatro patas para que un degenerado hombre hiciera con ella y con su culo lo que quisieran, esta situación hicieron que la pobre niña volviera un poco a la realidad, y su realidad era solo una, el haber adoptado la degenerada posición antes señalada la llevaron a que sus ardientes emociones ya desearan un sufrido pero exquisito enculamiento.
El objetivo del negro Uganda era claro y evidente, y lo fue aún más cuando la misma Cielo Riveros hiso la invitación y usando sus dos manos abrió ella misma sus dos poderosas nalgas de ensueño dejando ver al negro Ugandes su apretado conducto posterior el cual ella ya deseaba que se lo perforaran, invitación que Uganda capto en el acto y dejándose llevar por el lujurioso entusiasmo que la situación provocaba, metió su grueso y negro dedo índice lo más adentro que pudo de aquel místico culo que jamás había imaginado con poseer, Cielo Riveros bufaba y babeaba por las sensaciones causadas con ese dedo metido en el culo, el negro Africano por su parte sentía como el esfínter apretaba el dedo invasor, como no queriendo dejarlo salir de su interior.
Las gruesas y negras manos del caliente africano le acariciaban la tersa y suave piel de la espalda de Cielo Riveros produciéndole cosquillitas, para a continuación irlas deslizando lentamente hacia abajo rumbo a ese par de carnosas y redondas par de nalgotas , el caliente negro sentía en sus manos al irlas bajando lentamente desde la espalda de la chica como iban surgiendo deliciosamente al tacto esos tremendos promontorios de carne , que eran el sueño de muchos machos , el oscuro hombre al ser refugiado y estar en tierras extrañas sin una mujer en sus brazos sentía una calentura como hace años que no tenia , se deleitaba estrujando esas perfectas y enloquecedoras nalgotas sobre la delgada tela de la minifalda de la nena , los acariciaba ,los apretaba , sintiendo deliciosamente en sus manos como temblaba la nena ante el magreo, sentía su dureza y su sabrosa redondez de ese par de soberbias nalgotas , la nena solo se retorcía como culebra antes los toqueteos del negrete, en eso de las dos manos se introdujeron bajo la minifalda de la nena sintiendo y tocando la suavidad de la piel desnuda , tocaba y acariciaba esas piernotas suaves y tersas para enseguida manosearle las nalgotas le acariciaba, le apretaba sus nalgotas abundantes y duras tan blancas que contrastaba con sus dedos de carbón.
Cielo Riveros lo observaba con los ojos semicerrados seña inequívoca de lo excitada que se encontraba, en otras circunstancias nada mas de ver al negro como se encontraba desnudo hubiese salido corriendo del susto ante la impresionante visión, de tan tremendo instrumento que se cargaba el negrete, se acerco a la nena y extendiéndole su mano la llamo a que se acercara, la chica desnuda como se encontraba se acerco Uganda, este tomándola de los hombros se puso de tras de ella apoyándole su gigantesca vergota azabache completamente tiesa y palpitante sobre las nalgotas desnudas de la nena, la vista de las nalgotas redondas era espectacular el negro le acariciaba las nalgotas con su verga, Cielo Riveros comenzaba a respirar fuerte y a jadear, las manos del negro atraparon los duros senos de la nena y los dedos agarraron los hinchados pezones de la colegiala para darle un lento y suave masaje haciendo que la chica echara la cabeza hacia atrás al mismo tiempo que la punteaba las nalgotas con la verga y diciéndole al oído, "te gusta verdad mamacita ,como me calientas putita" , estas pequeñas tetas me vuelven loco" la nena tenia la su cabeza echada hacia atrás recargada en el hombro del Africano y este la punteaba cada ves las fuerte con la vergota, ella echo sus brazos hacia atrás agarrándose de el cuello de Uganda para no caerse.
Al negro de africa en ese momento se le revelaban todas las mujeres que lo despreciaban y despreciaban por su color de piel, estaba como un verdadero loco lastimando a la chica descargando todo su rencor y excitación sobre la nena quien desesperada se contorsionaba por el ataque sentía que el peso del negrete la ahogaba quien desnudo, echado encima de la chica, la babeaba y la magreaba con avaricia y desesperación," Ahhh... ahhhh... .no... por favor... no.... ahhh auxiliooooo gritaba la nena, el negro le dio dos cachetadas fuertes haciendo que a Cielo Riveros le quedara ardiendo la cara "cállate puta que esto apenas comienza ver si mi jefe logra superar la cogida que te dare esta noche" la nena tenia una cara de espanto total "sniff sniff... por favor don Uganda déjeme ir ya" decía la chiquilla lloriqueado con sus manos agarradas fuertemente por el negro que tenia los ojos desorbitados parecía un loco esto espantaba mas a la nena tomándola de los cabellos se los jalo violentamente y le dijo al oído "cállate puta aquí se hace lo que yo diga y yo sabré cuando te dejare ir lo entiendes le dijo" dandole una fuerte cachetada la nena ya mas asustada le contesto "siiiiiiii don Uganda siiiii.
A continuación el negro se sentó sobre el pecho de la chica sin hacer demasiada presión, para no asfixiarle , colocando una pierna a cada lado de su cuerpo y su negro trasero sobre los senos de la chica pasó una de sus manos hacia la parte posterior de su cabeza he hizo que echara su cabeza la colegiala hacia delante, hacia su gigantesco miembro, el cual sostenía con su otra mano y busco la boca de la nena que al ver lo que pretendía el negrete mantenía los labios cerrados, el africano lleno de mañas soltó su verga y con esa mano tomo la nariz de la chica y se los apretó impidiendo que respirara ante la desesperación de la colegiala que cuando abrió la boca desesperada para jalar una bocanada de aire Uganda presto le metió parte de la verga a la boca pues era demasiada inmensa para que entre toda, sentía esos labios pulposos y mojados en la verga. el negro estaba que no cabía del gozo que estaba sintiendo en ese momento por la boquita de esa preciosa niñita que mamaba y mamaba su gorda y gigantesca verga negra a la fuerza.
Sintiendo como la lengua de la nena trataba inútilmente de sacar a ese intruso de la boca haciendo que el africano en su verga sintiera un delicioso cosquilleo,"aahhhhhhh ahhhhhh así zorrita mamale la verga a tu negro ustedes las niñas blancas chupan mejor que las golfas negras" ella ya resignada entre sollozos se la mamaba a Uganda era una verga larga y gruesa como una manguera , el negrete profirió toda clase de gemidos y sonidos de satisfacción, insultando de paso a la adolescente que le estaba practicando una felación por demás prodigiosa, el africano con las dos manos la tomo de los cabellos llevando el el ritmo de la mamada la cogia literalmente por la boca, introduciendo una y otra vez esa larga y mounstrosa vergota que olía a negro con su particular olor, la chica sentía como le tomaba la cabeza y la movía a su antojo, hacia adelante, hacia atrás, a los lados, en círculos, gozaba esa boca como nunca había gozado boca alguna, su verga era tan grande y gruesa, que se le dificultaba mucho tragarla, sin embargo tenia que lamer, chupar y mamar a la fuerza. la nena nunca había tenido algo tan grande en su boca.
La chica sentía que el tamaño de lo que tenia en la boca no entraría todo, pero no podía hacer nada estaba a merced de ese depravado sexual, el negro casi la estaba asfixiando con la vergota en la boca y con su brillante y negro cuerpo sentado sobre su pecho le taladraba la boca sin cesar y ella sin poderse defender, la cara del hombre era digna de ser enmarcada pues al contrario de Cielo Riveros que parecía a punto de desfallecer el se sentía en el séptimo cielo, a juzgar por sus gestos y gemidos "aaaah puta, que sabrosa estás, hasta que se me hizo gozarte pequeña niña blanca; ah, ah, ah aaaaahhhhhh" el le agarraba la cabeza y el la hacia tragar bien aquella verga gigante cuando la nena sintió que el tamaño ya era insoportable aun vino mas, la tomó firmemente de la cabeza y aceleró el ritmo de las arremetidas, cuando de repente se detuvo, sostuvo la cabeza de la joven firmemente, con la punta de su falo en su boca y disparó la primer descarga, de semen, el caliente negrete descargo la leche sobre aquella boquita de princesa de tal manera que a ella casi le sobreviene un atragantamiento ,la boca de Cielo Riveros se llenó de leche blanca y tibia por completo, tanto que por la comisura de sus labios asomó un poco de aquel líquido, sintió toda su boca caliente por aquel líquido viril al mismo tiempo ese sabor agridulce "aaahhhh así ,así mamita trágate toda la leche de tu Negro decía Uganda" al mismo tiempo que le tapaba la nariz ,obligando a la nena a tragarse todo.
La colegiala tragaba semen africano desesperada por que casi no podía respirar debido a que el negro le tapo la nariz con su mano para obligarla a tragar todo el liquido seminal, Uganda eyaculaba en la boca de la nena tanta leche que se atragantaba y se le escapaban por la comisura de los labios hilillos de ese viril liquido de semen africano, Uganda seguía sentado sobre el pecho de la nena y con su verga tiesa dentro de la boca de la escultural jovencita disfrutando de los desesperados quejidos de la chica , pataleaba con sus piernas el colchón desesperada ante la falta de aire el negro sádico como era disfrutaba toda la desesperación de la nena y le decía.
"aahhhh que sabrosa boquita tienes zorrita me sacaste bastante leche pero todavía tengo mas para ti mamita todavía falta lo bueno".
A continuación se bajo el negro de la chica y le saco la negra vergota de la boca, respirando la nena desesperada jalando aire a sus castigados pulmones, el refugiado africano se sentó al borde de la cama y seco su transpiración, a continuación le acaricia las piernas a la nena mientras le daba mas sorbos a su cerveza la nena que seguía a la cabecera de la cama completamente desnuda
Su vocecita ronca esta al borde del sollozo, con la cara desencajada y con restos de semen que le resbalaban por la comisura de los labios, la boca abierta y las pupilas enormemente dilatadas mirando al negro con una desesperada expresión de terror, de saberse que estaba ahí desnuda encerrada en ese cuarto, con ese negrete maniático sexual le dice.
"cof cof por favor don Uganda suélteme, ya déjeme ir mire todo lo que me a hecho cof cof se lo suplico."
"Je je je" se reía el negro sin dejar de pasar sus manos por las piernotas de la nena lentamente sintiendo la suave tersura de su piel y diciéndole "por que te quieres ir mamita si todavía falta lo mejor vas a ver que al rato vas a gritar de lo rico que lo estaremos pasándolo" sonriéndole con esa cara de sádico, levantándose el negro dando un ultimo eructo le dijo "sigamos con nuestro asunto mamita que esto todavía tiene para mucho rato jajajajajaja"
El negro Uganda a continuación se levanto apoyándose en las duras nalgotas de la nena y le dijo "prepárate pendeja porque te voy a meter la verga vas a saber lo que es un macho "abriéndole las nalgotas a la nena con las manos coloco la cabeza de su verga palpitante embocándola a la entrada de ese cerrado culito ella respiraba hondo y rápido, como tratando de prepararse para un dolor inevitable, sintió el calor del cuerpo del caliente macho negro, Uganda comenzó a puntearle el cipóte que parecía un picaporte esférico gigante y morado como una gran ciruela, que se apoyaba en la arandela del culo de la escultural colegiala y Cielo Riveros supo que estaba perdida,
El negro Uganda nunca imagino tener en cuatro a tan hermosa hembra, ver esas firmes y majestuosas nalgas redondas como dos montañas de carne alzadas pecaminosamente desafiantes, y en la plenitud de la chiquilla. El africano caliente como el alquitrán fundido, su amarillenta mirada parecía salirse de la orbita de sus ojos, abstraerse de mirar ese carnoso y erguido par de nalgotas que al estar en tan complicada posición, parecían abrirse al máximo para el futuro intruso de turno, en cuatro patas engrandecían más ese gran culo.
El negrete con cara de sádico agarro su tieso miembro de descomunales dimensiones, como de unos 30 centímetros de larga, gruesa en su circunferencia, llena de venas moradas palpitantes y la empezó a tallar el oscuro instrumento sobre las blancas nalgas de la colegiala.
La nena sintió la cabeza de la tranca del negrete como era acomodada en la entrada de su orificio posterior, y a pesar de la inmensa calentura en que la había transportado este desalmado hombre de color, quiso poner un poco más de resistencia, --Ahhhh don Ugandaaa, por favor no me lo hagaaa, soy la novia de su jefe…!!, se atrevió a decir Cielo Riveros , quien aún se mantenía en cuatro desnuda en la cama y mirando con su carita suplicante al que iba a ser su violador.
--Callate pendejaaa calienta vergasss!!, ya te dije como has estado calentando por casi toda noche cuando te mostrabas con el viejo Pedro, lo hacias a propósito, me provocabas sabiendo que no podía hacer nada pero ahora te convertiré en mi mujer, jajaja, diciendo esto último Uganda empujo su apéndice vergal con decisión hacia el interior de la hermosa colegiala, quien al sentir el vigoroso apuntalamiento hacia su culo, no le quedó más remedio que cerrar sus ojos y contraer sus facciones al sentir el inmenso dolor anal que le produjo la salvaje embestida.
El negro africano se dio cuenta que a pesar de su concentración y del empeño que le ponía para colarse en el poderoso cuerpo de Cielo Riveros , la colosal cabeza como un gigantesco ciruelo morado, era rechazada por aquel soberbio pedazo de culo que tenía a su entera disposición, y comenzaba como a desesperarse a pesar de varios intentos no poder introducir ni siquiera la cabeza en tan apretado culo.
Cielo Riveros al percatarse que el negro tenia dificultades para meter su aparato, cayó en un estado total de pánico absoluto…si ni siquiera entra la punta del monstruoso instrumento menos podría recibir todo el aparato reproductor del negro Uganda.
--Por favor don Uganda su cosa no entra, no insista snifff!!
--Callate perraaa!! Ya te dije lo puta y zorra que eras así que tendrás que prestar tu culito al tu macho negro, jajajajaja!! Te lo voy a romper cosita ricaaa, te voy a culiarrr!!mira que una vez que la cabeza entra el cuerpo es una visita..jajjaja.. Así que llora todo lo que quieras, total nadie te va a escuchar, y lo más seguro es que después te va a gustar tanto que mañana vendrás por mas vergaaa negraaaa, jajajajaja!! Ahora quedate quieta que no puedo meterte mi verga en el culo!!.
El negro continuaba en su afán penetrador que cada vez era más infructuoso, mientras tanto toda la calentura experimentada por la sensual jovencita se fueron disipando, ahora lo que sentía era terror, a Cielo Riveros se la iban a violar en un inmundo cuarto a manos de un africano que en vez de un pene normal tenia un cipote del tamaño de un caballo.
El negro Uganda ya estaba cayendo en la desesperación, pero que apretado tenía el ojete del culo esa pendeja endemoniada!, la chiquilla sollozaba y contraía todos sus músculos de las nalgas, por lo que el negrete optó a aplicarle una sonora tanda de fuertes nalgadas en el culo para que la hembra se distendiera.
--Plafff…Plafff…plafff…plafff…retumbaron los manasos del fiero negro a las duras y tiernas carnes de Cielo Riveros , el negrete noto que con esta salvaje medida la joven pareció tranquilizarse un poco, por lo que volvió a apuntar su gigantesca herramienta de carne negra en el diminuto ano de la colegiala, cerrando sus ojos en señal de concentración empujo firme y decididamente, introduciendo así la vibrante cabeza de su taladro vergal, lo había conseguido, estaba atravesando a la tierna chamaca,
--Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, noooo!! Don Uganda saquelooo saquelooo!!. Cielo Riveros sentía un tremendo dolor jamás experimentado, ni siquiera con el cojo Juan le había dolido tanto la vez que le atravesó el culo en el sótano de la escuela, y claro, si bien el cojo se gastaba medidas aceptables en su verga, ni siquiera don Pedro superaba el terrible tamaño de la herramienta del negro áfrica…
--Aceptalo pendejaaaa!! Anoche con tu mirada me dijiste que querías culiar y ahora te haces la santita!! Jajajaa…Ya te metí parte de mi vergaaa y ahora lo tendrás todooo!! Te voy a encular como solo en africa culean jajajaja!! Diciendo esto último el hombre de color se afianzo con sus gruesas manos de las suaves caderas de Cielo Riveros y empujo más violentamente, atravesándola con salvaje brutalidad, hasta que sintió que sus negros testículos chocaban con la suave vagina de la niña.
la colegiala lo sintió entrarle hasta el alma, quiso gritar y escapar, pero sabía que sus intenciones serian en vano, por lo que aceptando su lamentable realidad, solo atino a cerrar fuertemente sus ojos, con su boca abierta en señal de silencioso dolor aguantaba la presión que hacía la gigantesca verga de aquel negro desconocido al interior de su cuerpo y que se la había metido por el culo, pensaba que lo que tenía introducido en su trasero no era una verga, lo sentía como si le hubieran metido una serpiente gigante, que en su interior se retorcia como con vida propia, la boa mamba negra estaba ya instalada en su culo.
Por su parte Uganda se mantenía enterrado en el curvilíneo y potente cuerpo de la linda muchachita , la veía sumisa y sometida, por lo que se dio a pegarle una buena sobada en su suave anatomía y en especial en su femenino y bien formado culo que él se había encargado de ensartar, había sido tan infructuosa la labor que pensaba que era el primero en debutar el trasero de la tierna chiquilla.
El feroz africano una vez ya más calmado comenzó a meter y sacar sus casi 30 centímetros de verga de aquél glorioso culazo, sentía y experimentaba como el esfínter de la nena le apretaba la verga de vez en vez, como si ella no quisiera que su verga abandonara aquella sublime parte de su cuerpo, por cada envestida que le asestaba le arrancaba un fuerte gemido de auténtico dolor, Cielo Riveros sentía que aquel despiadado hombre de raza negra la estaba descuartizando por el culo.
Lo que acontecia en esa habitación, no era de este mundo, una hermosa y ya no tan inocente colegiala apareándose con un autentico Mandingo, la épica batalla sexual que estaba librando el negrete con una hermosa adolescente colegiala, de esas que se visten y arreglan rico, con falditas cortas y coquetas, pero que ahora se encontraba desnuda y sometida, yo como escritor y ustedes como lectores ya querían probarla Cielo Riveros es el sueño de todo hombre que se respete y sabiendo que ella recibe muy gustosa las tremendas vergas que la taladran por todos lados.
Negro Uganda que sudaba como caballo le brillaba el cuerpo, el sudor resaltaba aun mas su negrura, casi bufaba por el intenso placer que estaba sintiendo…
--pero mira como entro doda!! Jajajja, y vos putita decias que no te cabia mi verga jajajaaaa, le decía sin dejar de empujar, mientras copiosas cantidades de babas caían desde su boca en la espalda de la nena…
El negro quien no cesaba sus firmes movimientos de apuntalamiento que accionaban al interior del ano de Cielo Riveros , paso sus gruesas y peladas manos, producto de su rudo trabajo, por debajo del suave estomago de la joven haciendo que ella se enderezara y para así poder sobarle sus duras y sedosas tetas, el negrete se daba cuenta que con sus manos a pesar de tenerlas grandes, estas no abarcaban a palparlas en forma completa, el saber y darse cuenta de tener ensartada por el culo a esa chiquilla can carita de niña pero con un cuerpazo endiabladamente infartante, casi lo enloquecieron de calentura, por lo que comenzó un corto trayecto hacia una parte del terreno que tenía pasto, haciendo que Cielo Riveros se agachara para quedar puesta nuevamente en cuatro patas, todo esto sin sacar ni siquiera un milímetro del adolorido esfínter de la jovencita.
Cielo Riveros ya puesta en cuatro, sentía como Uganda se ensañaba enterrándole su verga por el culo. Dentro de su lamentable condición psicológica, se preguntaba cómo había llegado a esto, luego recordaba que fue ella misma quien busco encontrarse con el negro por que deseaba su verga y ahora la estaban enculando en el mismo taller donde el viejo Pedro también la sometia,
El negro africano empujaba contra el cuerpo indefenso de Cielo Riveros como un verdadero poseído, de pronto se fijó que la joven aún mantenía sus coletas hechas y esta situación lo calentaban aun mas, nada mas lindo que colegialas en coletas, por lo que tomando suavemente por el extremo el largo cabello de Cielo Riveros tomo con ambas manos las coletas de la joven , ahora si ya se sentía satisfecho, la tenía enculada , totalmente desnuda y tomada por sus coletas solo para él.
La hermosa niña sentía las negras manos de Uganda que la recorrían por todas partes de su cuerpo y como de vez en cuando este se inclinaba sobre su espalda para besarle con sus gruesos labios, la nuca y parte de su cuello, haciendo que toda su esbelta anatomía se enervara y se le erizaran todos los pelitos de su suave piel, su culo ya se había adaptado a la enorme tranca negra que le metían sin compasión, con sus hermosos ojos verdes semi cerrados y su enarbolado cabello que en forma de coleta era sostenida como lazo, del que monta una yegua ante los feroces movimientos de empuje, mordiéndose levemente su labio inferior y por medio de suaves gemidos que ya no eran de dolor sino de natural y legitimo placer, le hacía saber a su Negro que ella ya le pertenecía.
Cielo Riveros quien a pesar de la tremenda calentura que estaba sintiendo su cuerpo, como pudo volteo a mirar a Uganda para con su mirada de niña provocarle al macho que la poseía, una calentura jamas descripta.
--Por fa…vorrrr don Ugandaaaa…no me…la saque tan rapidooo…
-Don…Ugandaaaa …acábeme dentrooooo! Ohhhhh!! Diossssss!!acabeme dentro de mi panochita…, gemía la jovencita ante las bestiales arremetidas que le daban a su cuerpo y culo.
El negrete creyó no escuchar lo que le decía la tierna chiquilla que estaba enculando, por lo general, todas las hembritas de la edad de Cielo Riveros ya se acostaban con sus estúpidos noviecitos, es por lo mismo que cuando se encontraban con tan suculentos bocados, preferían metérsela directamente por el culo y no por la panocha,
--No mames pendejaaa!!...Vuelve a repetir lo que me dijiste, solicito Uganda ahora moviéndose suavemente…
Quiero que termine dentro mio señor….
El hombre del africa entonces saco de golpe su inmenso y duro instrumento y para que la adolescente sepa quien mandaba allí le dijo.
--Y para que vayas sabiendo muy bien cuáles son mis derecho sobre ti, ahorita mismo lo sabrás, decía Uganda a la vez que se ponía de rodillas atrás del cuerpo de Cielo Riveros que aún se mantenía en 4 patas, y sin previo aviso y tomando a la colegiala por sorpresa le abrió el par de portentosas nalgas, acomodo su verga que ya estaba que se reventaba de tanto semen acumulado, y se lo mando a guardar de un puro envión hasta lo más recóndito de su glorioso y excelso pedazo de trasero, para comenzar a culearla en forma salvaje y rabiosa, como para enseñarle quien era el que mandaba, --Jjajajajaj pero que rico y apretado tienes el culo pendeja endemoniada, tomaaaa!!, tomaaaaa!! Este es mi derecho sobre tiiiii puta pendejaaaaa!! le gritaba por cada feroz clavada que le daba por el culo.
Cielo Riveros ya no decía nada, solo se dejaba culiar para que aquel exaltado africano no la fuera a matar a pijasos, solo se dio a aguantar las feroces arremetidas y apuntalamientos a los cuales estaba siendo sometida, --Plafff, plafff, plafff, plafff, retumbaban las sonoras series de feroces nalgadas que recibía la jovencita en las carnes de su glorioso y bien formado culote, sentía como Uganda sacaba y metía sus casi 30 cmt.de verga con desesperado aceleramiento, enculandola hasta la saciedad.
Pero el negrete no era tonto, a pesar que se lo estaba pasando muy bien gozando a plenitud de un joven y hermoso culazo de colegiala, sabía que la niña la haría pronto llegar al orgasmo , por lo que fue gradualmente aminorando sus arremetidas hasta que con mucho cuidado retiro su poderoso artefacto carnal del precioso reducto que por fin había disfrutado, para luego ponerse de pie y nuevamente tomo violentamente las coletas de Cielo Riveros y la hiso que se enderezara, la joven quedo de rodillas, con la gruesa verga del negrete solo a centímetros de sus hermosos ojos verdes,
--Ahora quiero que me la chupes, putona y ponle empeño, porque o si no tú ya sabes lo que te pasara, Cielo Riveros recién se fijó que el negrete tenia el pingo negro como un hierro, tan duro que apuntaba hacia el techo, por lo que, procedió a con una mano despejarse el rostro de cabellos enarbolados y con la otra se asió a la verga que ahora le estaban pidiendo que chupara, a pesar del profundo miedo que esta gigantesca herramienta de carne negra y venosa le provocaba, al verla toda aceitosa, bamboleante y lustrosa con restos de jugos de sus propios interiores, que extrañamente pulsaba de arriba hacia abajo, de inflamadas venas azules y verdosas hinchadas, y que en su base estaba frondosamente cubierta por una gran cantidad de pelos gruesos y negros, fue abriendo su angelical boquita, tal como en una ocasión ya lo había hecho con la verga del maestro Tulio y se la zampo de un puro bocado casi hasta la mitad, con el único afán de dejar contento al negro que por ahora era su dueño según el mismo le había dicho y para que este pudiera volver a penetrarla como en ese mismo instante estaba deseando.
Con deleitosa concentración se la mamaba, con su boquita bien apretada, su cabeza subiendo y bajando, y haciendo círculos de vez en cuando, chupando sin parar un solo momento, como una verdadera poseída por el demonio, lamiendo, moviendo la lengua circularmente por el venoso tronco negro y el glande, concentrada también en soportar el gigante invasor que ni siquiera cabia en su boquita, y esperando cual sería la próxima orden de su macho.
--Ohhhhh!! Pero que zorra eres para chupar la verga mamitaaa!!--Eso es así…así…Mmmmm…Arghhhhh!!, gruñía el negrete, ante la sabrosa mamada que le estaba prodigando Cielo Riveros , --Cometelo todooo todoooo!! Tragátelo todoooo putaaaaa!!...
Luego de unos 10 minutos de una morbosa y rica felación, el negro Uganda se lo saco de una, le parecía que la nena había aprendido muy bien cuáles eran sus nuevas obligaciones, el Grone la quedo mirando ensimismado, que rica se veía la pendeja arrodillada en la cama y con las comisuras de sus labios chorreándole restos de líquidos pre seminales, con sus tetas brillosas por la sudoración obtenida por la morbosa tarea en que había estado ocupada.
El negro determino que ya era hora de poseerla nuevamente, de hacerla suya, verdaderamente se la quería meter hasta el corazón, hace mucho tiempo que no se sentía tan atraído de esta forma por alguna hembra, y claro Cielo Riveros era una chiquilla hermosa, que jamás en su África natal hubiese tenido la oportunidad de poseer, si no fuera por el extraño curso de los acontecimientos.
El caso es que una inmensa e instintiva necesidad animal por destrozarla a vergazos se apodero de su desequilibrada mente, tal vez fuese por su olor, por su aroma a pulcra inocencia, o por su belleza.
El negro perdido en un mar de degenerados deseos la tomo con fuerzas para dejarla recostada de espaldas en aquel sucio colchón, Cielo Riveros anticipándose a lo que se venía abrió instintivamentes sus piernas en señal de aceptacion de su casi natural tarea de coito el negro al notar la reacción de la asustada colegiala, le dijo,
Ahora te la voy a volver a meter pendeja así que no me salgas con tus mamadas, te la voy a meter de una, para que así todo sea más rápido para ti y no sufras tanto, jejejeje, aunque yo sé que ya no te duele, te cabe perfecto mi pinga en tu cola, pero si te portas bien veras que podras tener mi pija para cuando gustes jajjajaaaaa después me andarás buscando para que te de verga, jajajaja!!, serás mi mujer pendeja, te voy a culiar como jamás nadie te lo volverá a hacer ni siquiera tu macho el viejo Pedro jijiii y en el momento en que te lo meta no lo olvidaras nunca al negro Uganda, jajajaja, decía el detestable hombre a la vez que iba tomando ubicación entre los hermosos muslos abiertos de Cielo Riveros que el mismo se había en cargado de ir abriendo.
Sintió su cuerpo aplastarse por el de Uganda, el negrete ya se había montado sobre el potable cuerpo de la colegiala, que estaba casi ahogada debajo de él y con sus bellas piernas abiertas, esperando ser perforada, el negrete acomodo su armamento en la entrada de la pequeña entrada anal e intima , paso sus brazos por debajo de la espalda de la joven para afianzársela desde sus suaves hombros, la apretó contra el en señal de poderío de macho, y ya sin esperar nada más empujo con todas sus fuerzas hacia el interior de la apretada cola de la tierna colegiala, Cielo Riveros experimento ahora si un inmenso placer casi animal jamás sentido en su vida, ni siquiera el palo en el culo que le habían dado hace poco le había dado tanto placer, al sentir la gruesa cabeza de la verga del negro intentar calar muy dentro de su culo.
--Ahhhhhhh, mmmmmm, por…fa…vorrrrrr!!, dameloooooo,seeeemmmmm.
--Aaaaaayyyyyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyyyyy!!!! Don Ugandaaaa!!, por favorrrrrrr!! me….taaaaaamelaaaaaa!! asiiiiiii asiiiiii!! Sniffffff!!, Cielo Riveros sentía que se la metían hasta el estomago mismo, sus carnes se rasgaban ante la brutal intromisión a su deleitoso cuerpo,
--Callateeee zorraaaa mal paridaaaa! y acepta mi vergaaaaa! Tomaaaaaa!!, bramo Uganda dándole un tercer y aún más brutal empuje en donde Cielo Riveros termino por comerse analmente los casi 30 cmts. De verga africana, había entrado totalmente, solo los pesados testículos negros llenos de semen caliente y espeso habían quedado fuera del cuerpo de la hermosa joven .
Que rica tienes la cola pendeja, le decía el negrete babeando y con sus ojos cerrados, --No me saldría de tu cuerpo jamás, eres una verdadera potranca hecha para ser follada por un verdadero potro salvaje, pero ahora sabrás lo que es culiar de verdad ricura, jajajaja!!, Te hace sentir lo que jamás nadie te lograra provocar y te juro pendeja que te va a quedar gustando tanto que querrás repetir la operación cuanto antes, Jajajajaja!!, Te voy a culiar y te voy a preñar!! Serás la madre de varios mulatos que te voy darrrr!!, le decía riéndose y burlándose a una ensartada y complaciente Cielo Riveros , que aún mantenía su boca abierta en un ahogado grito de dolor mezclado con placer, con sus ojos bien abiertos y vidriosos producto del enajenante impacto emocional y de calvario carnal.
Uganda comenzó a moverse lentamente en forma culiatoria, metía y sacaba su tranca solamente hasta la mitad, el calorcito y las placenteras sensaciones que le prodigaban el culo de aquella núbil Diosa a su verga eran indescriptibles, Cielo Riveros por su parte aplastada y dejándose ensartar, ni siquiera podía moverse por tan profundo que sentía por cada apuntalamiento que le daban con animal ensañamiento, sentía que prácticamente la estaban empalando por el culo, el negrete cada vez se movía mas fuerte intentando adentrarse el máximo posible hacia el interior de aquel curvilíneo y juvenil cuerpo, la cama rechinaba rítmicamente antes los fieros bombeos que hacia el africano.
Fueron pasando los minutos y Uganda cada vez se movía más fuerte y rápido, aserruchaba, metía, taladraba profundamente en los interiores de Cielo Riveros , haciendo círculos con la intención de agrandarle el agujero del culo a la entregada jovencita, el hombre sudaba como animal, las lágrimas en los ojos de la colegiala ya se habían secado, por ahora soportaba estoicamente las bárbaras y crueles arremetidas de verga que le metían a su cuerpo, ella también sudaba, lo comprobaban algunos cabellos pegados en su cara y ciertas gotitas de transpiración que se le acumulaban entre su cara y narices, no se dio cuanta cual fue el momento en que cerro sus ojos para dejar al negro que tenía montado sobre su curvilíneo cuerpo hiciera con ella lo que quisiera, el dolor fue pasando en forma paulatina, la cosa era que por ahora la culiada que le estaban pegando era de campeonato y ella sintiéndola con sus piernas bien abiertas y con sus ojos cerrados.
En un momento el negro pensó que la nena lo había abrazado para sujetarse, pero cuando en un lapso que él se detuvo para estudiar lo que allí abajo estaba ocurriendo, con placentera emoción comprobó que la joven seguía moviendo sus caderas de atrás y hacia adelante, por lo que a modo de agradecimiento comenzó a moverse y a meter verga en una forma casi demencial, ahora sí que se venía lo bueno pensaba el feliz y amachado negrete,
--Ahhhh que rico te meneas putitaaaa!!, Te lo dije!! yo sabía que iba terminar gustándote que te hiciera la colita, jajajajaja!!, le decía preso por la excitación…
-Te dije que te iba a encantar la verga negra pendejaaa!! Vamos dime que te encanta mi vergaaaa negraaaa!!, exclamaba Uganda sin dejar de arremeter con violencia…
Cielo Riveros no le contestaba nada, la inmensa y desquiciante calentura que se había apoderado de su persona, no se lo permitían. Sus quejidos y suspiros de placer, comenzaron a subir de volumen e intensidad, convirtiéndose en gritos y en alaridos de auténtico placer carnal y sexual, el negro mantenía su frenético ritmo de mete y saca, y conforme aumentaban los gritos de la colegiala, mas aceleraba y ganaba fuerzas en sus movimientos, hasta que sus oídos escucharon lo que el ya anhelaba oír, los gritos y palabras que exclamo la chiquilla fueron claros y concisos,
--Ahhhh…siiiiii…ricoooooo…papiiiiii!!…
--Te gusta cómo te la meto pendejaaaaa!!, le consultaba el caliente negro,
--Siiiii, don Ugandaaaaa, métamela todo lo que quieraaaa, mas adentroooo, mas adentroooo!!, exigía la chiquilla a la vez que meneaba con fuerzas sus caderas para hacer más profunda la clavada,
--Eres la mejor zorra que me he culiado en el mundoi pedazo de puta! Vamos dilo! Di que eres mi putaaa!!, exigía el negro quien seguía serruchando y bañado por el sudor y la calentura del momento,
--Siiii papiiii!! Yo soy su putaaa!! Soy su putitaaaaa!! soy su mujerrrrrr!!, Cielo Riveros no era consciente de todas las peladeces, que le estaba diciendo al negro que había sabido llevarla a tal estado de calentura.
El negro veía claramente la descompostura que estaba sufriendo la hermosa jovencita, que en estos momentos movía sus caderas rítmicamente a las clavadas que el calientemente le concedía, gratamente comprobaba, que el cuerpo de la colegiala estaba siendo preso de unos fuertes y brutales espasmos de placer, veía como la nena se retorcía e intentaba acoplarse aún más férreamente a su propio cuerpo, además que creía sentir como los músculos de sus nalgas de la tierna chamaca se contraían abrazándole y comprimiéndole la verga, y como totalmente salida de sus cavales le pedía,
--Sigaaaa!!, sigaaaaaa!! métamela enteraaaaa!!... estoy a punto de ... métamela más fuerteee!! Todaaa…Todaaaa!!siiiiiii negroo de mierdaaaa metemelooooo todoooo en el culooooo negrooooo de mierdaaaaaaa!!!!
El feliz y fiero hombre de color comenzó a empujar hacia el interior de la joven sin cejar en su empeño, hasta que los glúteos de la nena uno suave y casi depilado, en contrate de otro que era bien peludo, se quedaron pegados haciendo desquiciantes círculos copulatorios, sin despegarse ni siquiera un milímetro, por lo que ambos cuerpos ya estaban casi al borde de un fenomenal orgasmo, hasta que para el gozo de Uganda, pudo notar que en la inminente explosión que se venía en el cuerpo de su compañera de coito, su culo derramaba unos abundantes y calientes chorros de líquidos orgasmicos, nunca había sentido liquidos anales, pero de lo que si estaba seguro era que estos le estaban bañando en forma exquisita a su ya casi adolorida vergota.
-- Asii!!, así!!... don Ugandaaaa!! Deme más fuerteee... deme más fuerteeee!!... continuaba vociferando Cielo Riveros con su espalda totalmente enarcada y con su cola totalmente levantada, en el afán de que el negro no le sacara su verga de su culo.
-Eres una Diosa pedazo de zorraaaaa! Ya no aguan…tooo…masssss!, me voy…a…co…rrerrr… adentro de…tu…cul…ooooo!! Ohhhhh que…ri…cooooo, la…vas….a …re…ci..birrrrr, pu…taaaaa!! to…maaaaaaa!!, gruño con desesperación, y fijando su mirada, en el hermoso rostro descongestionado de Cielo Riveros , derramo en el interior de su recto 6 a 8 potentes chorros de hirviente y reproductivo semen africano, el cual salía escupido en abundancia y con fuerzas desde su verga, quemando las entrañas de la excitada Cielo Riveros quien sentía la potencia y virilidad del Mandingo Africa, pensaba que aquello era lo más hermosa y gratificante experiencia jamás vivida en su existencia.
Estuvieron pegados en esa posición un espacio de tiempo indeterminado, Cielo Riveros con sus bellos muslos bien abiertos y con el negro aun incrustado con su verga al interior de su hermoso culo, había sido la follada de sus vidas para ambos, y que el negro estaba totalmente dispuesto a repetir en cuanto sus fuerzas se lo permitieran. Lentamente el negro se fue saliendo y desclavando del portentoso cuerpo de la colegiala, ambos quedaron tendidos en la cama exhaustos, para que sus transpirados cuerpos pudiesen asimilar el placer recibido, y para a su vez se regulasen sus ritmos cardíacos y sus agitadas respiraciones se normalizaran.
FIN.
Cielo Riveros 30 Cae en manos del Gori y sus rufianes
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Intento defenderse, ahora tenía las manos libres, pero el Gori la tenia sujeta demasiado fuerte y solo conseguía resbalarse por el sudor. Evidentemente la iban a violar, pensó Cielo Riveros al sentir el mástil de carne entre sus piernas. El tipo con una sola mano sostenía los dos brazos y su carita de nena
Esto sucedió cuando Cielo Riveros cumplio 19 años y tenia que dirigirse a la capital para conseguir empleo y empezar sus estudios terciarios. Era un domingo por la tarde, y ella llegaba por primera vez a la capital. Había vivido toda su vida en un pueblo de mala muerte donde solo encontró ser abusada por viejos pervertidos, que pareciera ser que se encontraba a la vuelta de la esquina esperando la oportunidad de poder abusar de ella. Preguntando inocentemente a medio mundo, llego a la estación de trenes. Pero ella no se daba cuenta de cómo la miraban cuanto hombre la veía. Tenía cara de nena simpática, y cada vez que sonreía para preguntar una calle, se la quedaban viendo embobados. Su largo cabello castaño, lacio, parecía bailar con la suave brisa de verano. Esa tarde especialmente hacia calor, y Cielo Riveros llevaba puesto un vestido enterizo con dibujos de flores, de colores claros. Este a partir de la cintura estaba pegado al cuerpo, y llegaba hasta unos centímetros por arriba de las rodillas.
También tenía puestos unas botitas de cuero marrón claro, que en conjunto con el vestido, la hacían ver bastante sexy. Pero evidentemente lo que mas llamaba la atención era su cuerpo, que a pesar de sus veinte años, era ya el de toda una mujer, y eso a todo el que se haga llamar hombre, se le ponía muy tiesa con solo mirarla fugazmente. Pasa que su cuerpo, a pesar de su pequeña altura (debía medir un metro cincuenta y cinco), era bastante exuberante: sus pechos generosos, una cintura estrecha, una cola firme y redondita, todo bajo el manto de su piel morena, de un tostado claro, eran irresistibles a la vista.
-que gambas (piernas) temes mamita...saca boleto todo el tiempo que quieras, que con esta vista no me enojo decía el maleducado boletero...Mientras Cielo Riveros sacaba el boleto, la muchachada miraba su cola, que encima de ser muy deseable, se transparentaba un poco en el vestido, y se le notaba su bombachita blanca. Lo único que hizo la niña fue agachar la cabeza roja como un tomate y caminar rápidamente hacia el andén.
-pero que delantera (pechos) nena!!!..Le grito uno al pasar. Ella se moría de vergüenza, y caminado más rápido, llego al andén y se recostó contra una columna abrazando su abultada mochila, sin mirar a nadie por la creciente timidez que tenía.

Si hubiera mirado a su alrededor, se habría dado cuenta de que el andén estaba lleno de policías uniformados, y que la mayoría, por no decir casi todas las personas que había en el andén, eran de un hinchada de fútbol, y no estaban muy contentos, venían de una derrota de su equipo y tenían ganas de romper todo.
Escucho el silbato del tren, y cuando este freno, subió rápidamente sin hacer caso a las groserías que le gritaban. El vagón estaba lleno, y la gente que había en el no se parecían en nada a los de la estación. Con su mochila abrasada en su pecho, fue abriéndose paso, hasta llegar a un vagón casi vació, Se sentó sola en un asiento de dos y se dispuso a leer un libro que había traído. Pero lo que Cielo Riveros no sabía es que los vagones que le seguían al suyo, estaban reservados para la hinchada de fútbol, y había por lo menos cincuenta fanáticos enardecidos buscando la manera de sacarse la calentura de su derrota.
-eh!solo miro oficial, solo estoy mirando...Un pibe de la hinchada estaba mirando por la ventanilla de la puerta, pero los oficiales lo obligaban a retirarse apuntándolo con sus bastones. Cuando el pibe vio algo que lo dejo hipnotizado: La nena de la estación prácticamente sola.
Salio casi catapultado en busca de el jefe barrabrava, que ahogaba sus penas por la derrota en litros y litros de cerveza, Jefe Jefe, pero no sabe lo que acabo de descubrir en el vagón del medio, esta la hermosa pendeja esa la que se pasea por el pueblo exhibiendo su exuberante cuerpazo, la que calienta vergas y nunca nos presta atención, esa colegiala llamada Cielo Riveros esta justo en este tren, se encuentra solita cargando una mochila gigante, parece que se largo a la capital, y nadie la acompaña.
El que manda en la barra es un tal Gori, por Gorilon por supuesto, comanda un puñado de mariguaneros, de mala muerte que de vez en cuando van para la capital cuando su equipo de futbol a lo que son fanáticos de verdad, juegan fuera del pueblo, son intocables por sus antecedentes de causar destrozos y pleitos cuando las cosas no se dan como ellos quieren.
El pibe que le fue con el cuento estaba que echaba fuego por sus fosas nasales, siempre habían visto a Cielo Riveros paseando por el pueblo en forma mas que provocadora meneando su estrecha cintura, y esas curvas perfectas.
–-no vas a creerme Gori… vi a la hembrita la Cielo Riveros , no era una visión la que viste, y no jodas está más buenota la condenada… estoy con lo que me platicaste que te la quieres coger, y al verla ahora vestida con esa poca ropa enseñando casi las nalgas y las tetas, me entraron unas ganas de meterle la verga hasta por las orejas, pero cuando quise ir por ella el guardia me detuvo no dejo que me acerca a ella.
–-Calma… calma pendejo, a esa pollita la vamos a rastrear en todo los vagones y la vamos a encontrar, así sea lo último que hagamos.
Vas y le dices al guardia que ella es tu amiga y la convences como sea que se venga hacia los vagones de atrás me entiendes pendejo… Vamos ve rápido antes que arranque el tren y la nenota se asuste y se baje.
El joven barrabrava haciendo caso a lo que el Gori acababa de ordenarle se dirigió nuevamente a la puerta del vagon donde se encontraba todavía sentada nuestra hermosa adolescente llamada Evein.
-espere!!..espere oficial!!!..Ahi esta mi amiga!!!..La estaba buscando por todos lados!!..Puedo ir a saludarla...déle...Otros se habían asomado y también vieron a Cielo Riveros , y los oficiales ante la insistencia y la mirada de la hinchada, le dijeron al pibe:

-solo vos pibe...tienes menos de un minuto...Cielo Riveros no se había percatado de nada, ni siquiera cuando el pibe se sentó a su lado, ella creyó que era un pasajero normal más. El pibe espero a que los oficiales dejaran de mirar por la ventanilla, miro a su alrededor y nadie se fijaba en el. Miraba de reojo a la nenota, especialmente al escote de su vestido, que dejaba ver parte de sus generosos senos ajustados en la tela. Ella de ingenua que era no notaba como la miraba baboseándose y con cara de degenerado.
- quédate quietecita y no grites bombón...-El pibe le había puesto una navaja en el cuello, y por la posición en que estaban, los demás pasajeros no podían ver.- Hace lo que te digo y no te va a pasar nada malo.- Cielo Riveros lo miro asustada, recién se había dado cuenta de que tenía alguien al lado, y encima la está a punto de degollar. El pibe apretó la navaja contra su cuello y le dijo si entendía, Cielo Riveros asintió con la cabeza, temblando de miedo.

-por favor, no me haga nada...si quiere dinero...-Dijo la adolescente muy asustada, pero el pibe solo se acercó a su oído y le susurro.

-no digas nada si yo no te lo ordeno..-la nena ante la amenaza, asintió nuevamente con la cabeza. Nunca le había pasado nada asi, tan violento.
-ahora me vas a acompañar, y si los canas (policías) te preguntan algo, vos decís que sos mi amiga y que está todo bien. ¿Está claro?- Cielo Riveros asintió una vez mas, prefería hacerle caso antes de que le hiciera daño. Cuidadosamente se levantaron y se dirigieron a la puerta. El pibe pasó su brazo por el cuello de la nena, dejando la navaja en su cuello, pero oculta en el pelo de la joven. Mientras caminaban, el pibe puso su otra mano en un pecho de la nena, y lo masajeo unos instantes.

-¡pero que melones tenes nena!- la adolescente solo cerro los ojos y no dijo nada, estaba petrificada del miedo con la navaja apretando en su cuello.

-es mi amiga oficial, viene con nosotros..-Le dijo el pibe a los policías al cruzar la puerta. Los canas miraron a Cielo Riveros de arriba a abajo, desnudándola con la mirada.
-¿todo bien piba?- Le preguntaron. Ella respondió que si, aunque sabía que esa era su única oportunidad de pedir ayuda. Pero muerta de miedo como estaba, solo siguió caminando con el pibe a su lado. La llevo hasta el último vagón, Cielo Riveros sintió las miradas perversas sobre su inocente cuerpo, escucho groserías a su paso, y algunas manos que tocaron su trasero al pasar.
-Al fin llegaste nena...pero mira que putita habías sido, llegaste hasta acá sin decir nada- Cielo Riveros alzo la cabeza y reconoció al Gori, el jefe de la barra que en pueblo molestaba a cuanta mujer se atrevía pasar por delante de ellos el Gori era Tipo barrigón, traspirado y sucio, sentado en un asiento de cuatro. También vio que en ese vagón había al menos quince personas, todos hombres, todos grandotes. Había unos negros de como dos metros, también unos tipos que parecían fisiculturistas, y varios viejos como el que le hablaba.
-ni se te ocurra gritar, aunque parece que te comieron la lengua, ¿como es que andas por estos lares acaso te escapaste lindura?..-Cielo Riveros no respondio, en realidad escapo de su casa porque su madre estaba conviviendo con el tipo que casi logra violarla, don Lucas dueño de el conventillo, por eso la nena escapo hacia la capital a refugiarse en lo de don Benito su abuelo postizo, el podría conseguirle un puesto de trabajo hasta que pueda establecerse y conseguir donde alquilar y donde hospedarse `pero ahora no sabia que hacer, no tenia escapatoria, la mayoría de esos hombres la doblaba en estatura, y no se quería imaginar lo que le harían si los hacia enojar.

-¡el jefe te pregunto que haces aqui!- Le dijo el pibe bruscamente, todavía con la navaja en su cuello. Cielo Riveros no sabia bien porque no quería responderle porque estaba en la capital en busca de una nueva vida, les dijo su nombre a lo mejor si supieran quien era ella la dejarían ir, aunque no sabía de que le serviría en esa situación.
-Cielo Riveros ...-Susurro asustada y temblando.- por favor, déjenme ir, si quieren dinero les puedo dar algo...pero por favor, no me hagan nada...por favor...-

-pero Cielo Riveros que lindo atuendo te cargas hoy...-Le dijo el gordo Gori, en tono de burla. -no quiero tu plata... lo que quiero son esas dos sandias que tanto muestras en el pueblo y que haces desear a todos que hermosas tetas que tenes pendeja.- Cielo Riveros se quedo confundida, ¿a que se refería con esas dos sandias? Pero no tardo mucho en descubrirlo, dos negros la agarraron de los brazos, imposibilitándole todo movimiento.
-¡que buena que estas pendeja!, ¡que sandias por dios!- El gordo había ordenado que la acercaran, y sin pararse de donde estaba sentado, comenzó a estrujarle los pechos por encima del vestido. La adolescente se resistía como podía, pero los negros la tenían sujeta firmemente.

-¡déjame!..¡auxilio!..¡por favor, que alguien me ayude...!..-Un negro tapo su boca con su gran mano, Cielo Riveros solo podía retorcerse antes los toqueteos del gordo barrabrava.
-¡mierda, que tetas!..¡son enormes!- Decía el gordo babeándose. Masajeaba salvajemente los pechos de la nena, los apretaba, los movía en círculos, los juntaba y los separaba. Los demás se reían al ver esto, y lo que Cielo Riveros no pudo notar, es que a todos los presente, se les había formado un gran bulto entre las piernas.
-¡pero que puta que sos!... ¡ni siquiera tenes un corpiño puesto!- El jefe barra había sacado los pechos de Cielo Riveros al aire, y mientras se los estrujaba, los demás miraban como hipnotizados los grandes pechos de la nena. Cielo Riveros trataba de gritar, pataleaba y trataba de zafarse, pero no podía hacer nada.

Con un rápido movimiento, el gordo la agarro por la cintura y la atrajo hacia el. La nena se tambaleo y a pesar de estar agarrada por los dos negros, no pudo evitar recostar sus pechos contra la cara del gordo. Sintió su lengua recorrerlos, succionarlos, mamarlos salvajemente. Chupaba las tetas de la joven asquerosamente, Cielo Riveros sentía la respiración del tipo en su pecho, la saliva que la embardunaba, y por más que ella no quisiera, sentía a sus pezones reaccionar.
Los demás le tenían al Gori un respeto sublime, porque no tocaban para nada a la joven, solamente los dos negros la sostenían de los brazos y le tapaban la boca. Cielo Riveros estaba bañada en transpiración de tanto forcejear, y sus pechos brillaban por la saliva que el barra iba dejando en cada chupada. Sus ojos recorrieron desesperadamente el vagón en busca de alguna ayuda, pero solo pudo ver a una multitud de hombres sucios que se la comían con los ojos y se frotaban el bulto que tenían entre sus piernas
-¿vez como te gusta nena?...tenes los pezones duritos, duritos...- Le dijo el tipo mientras pasaba su lengua por uno de ellos, para después mamarle el pecho violentamente. Cielo Riveros estaba agitada, sabía que no podía hacer nada, la tenían bien agarrada y esperaba que el gordo solo le chupara las tetas y la dejara ir.

-amordázala y prepárala, que con estas tetasas tengo para rato...- Ordeno el jefe barra a uno de los negros.
-¡aux....!..- Cielo Riveros quiso gritar cuando la gran mano salio de su boca, pero le habían colocado rápidamente una media sucia y con otra se la amordazaron fuertemente en la nuca. El gordo la atrajo mas hacia el, y la colegiala se vio obligada a arquear mas la espalda. Su cola quedaba en pompa por más que ella se retorciera. El barra no dejaba de chuparle y llenarle de saliva los pechos. La pobre Cielo Riveros comenzó a llorar, ya no sabía qué hacer, se sentía totalmente impotente frente a esos hombres de mala vida.
El negro se puso detrás suyo, la nena se estremeció al sentir una mano recorriendo sus piernas. Intento incorporarse con todas sus fuerzas, pero el gordo la tenia firmemente sujeta de la cintura. La joven podía sentir al negro frotando sus nalgas, sentía su mano subir hasta llegar a su cola, y podía sentir como masajeaba sus cachetes firmes y duros.

-¡que piernas nena!.. ¡sos infernal!..-Le decía el negro a la vez que le bajaba la bombacha de la niña rápidamente hasta las rodillas.
-¡mmmmmmmmm!!!!- Exclamo Cielo Riveros al sentir algo que antes no había sentido. El negro había colocado su cabeza entre sus piernas y pasaba su lengua por su conchita . La colegiala no podía evitar excitarse, la lengua del negro se movía rápidamente y la penetraba sin pudor. Ella tuvo que cerrar fuertemente los ojos para aguantar esas extrañas sensaciones.

-¡mmmmmmm!..- El negro había metido un dedo en su concha, metiéndolo y sacándolo a la vez que también la chupaba. Ella no podía hacer nada ante los sobos que le estaban propinando.
Cielo Riveros no se había dado cuenta de que el jefe barrabrava tenía su pene fuera del pantalón, y cuando lo vio, quedo sorprendida: era enorme, largo y grueso, con las venas palpitando. Mientras el jefe le chupaba las tetas, no podía dejar de mirar como el barra se masturbaba, ella nunca había visto muchos penes juntos pero este le resultaba inmenso. Pero la lengua y los dedos del negro no la dejaban tranquila, Cielo Riveros sudaba y ya tenía el cuerpo brillante y el vestido pegado al cuerpo.
-¿te gusta pendeja?..ahora la vas a sentir...- Cielo Riveros no tuvo tiempo de reaccionar a estas palabras, porque el gordo barra la sentó encima suyo rápidamente, dejándolos cara a cara. Intento defenderse, ahora tenía las manos libres, pero el Gori la tenia sujeta demasiado fuerte y solo conseguía resbalarse por el sudor. Evidentemente la iban a violar, pensó la joven al sentir el mástil de carne entre sus piernas. El tipo con una sola mano sostenía los dos brazos de Cielo Riveros , con la otra acomodo su pene en la entrada de la vagina.
-¡mmmmm!¡mmmmmm!!!!!...-Cielo Riveros quiso gritar con todas sus fuerzas, pero el Gori la agarro de la cintura y la penetro violentamente, metiendo casi la mitad de su enorme pene dentro de ella. La nenota cerró los ojos fuertemente por el dolor, esa cosa era demasiado grande para ella. Lagrimas incontrolables caían de sus ojos, y ya casi no podía resistirse.

-hoooo....que estrecha sos nena...prepárate...-Cielo Riveros miro los ojos del gordo pidiéndole por favor que no lo haga, pero la mordaza en su boca solo dejaba escapar gemidos.
El jefe barra la tomo firmemente de la cola y la empujo salvajemente contra su cuerpo.

-¡mmmmmmmmmmmmmmmm!!!!...- Le había enterrado todo su pene de una, Cielo Riveros sintió un dolor que casi se desmaya, y no pudo evitar recostarse contra el pecho del barrra. Pero este no tenia misericordia, agarrándola de las nalgas, la hizo subir y bajar por su verga lentamente. Los demás podían ver como la gran verga del Gori penetraba a la dulce joven sin piedad.
-¡mmm!...¡mmm!...¡mmm!..- El tipo prácticamente la hacia saltar encima suyo, había comenzado a chuparle los pechos otra vez, Cielo Riveros ya no sentía dolor y tuvo que abrazar al gordo por el cuello para aguantar semejante pedazo de carne entre sus piernas.

-...asi pendeja...hooo...sos infernal...que conchita apretada tenes....-Le decia el gordo cuando no le estaba chupando las tetas. Cielo Riveros solo subía y bajaba por la verga del Gori, sentía que el dolor iba disminuyendo poco a poco, como su vagina se adaptaba al enorme pene, y como poco a poco el placer la invadía.

-mmmm...mmmm...mmmm...- No podía evitar gemir, nunca había sentido nada igual. Tras varios minutos de penetración salvaje, el dolor que sentía había desaparecido del todo. Su exuberante cuerpo brillaba de tanto sudor que corría por su cuerpo, sus cabellos parecian recién salidos de la ducha. El jefe barra también estaba todo transpirado, hacia mucho calor y el vagón tenia todas las ventanas cerradas.
Después de un rato, el gordo la dio vuelta como a una muñeca, Cielo Riveros se recostó cansada contra el asiento de enfrente cuando sintió salir la verga del gordo de su cuerpo. Solo quería descansar del enorme esfuerzo que había hecho, pero el barra todavía no había acabado.
-mmmmMMMMMM!!!..- Sintió nuevamente ese gran pene dentro suyo, pero esta ves más rápido que antes. El gordo la culeaba rápidamente, Cielo Riveros solo cerro los ojos y se dejo hacer, la cosa ya le estaba gustando.

-..mmmm...ahhhhh siiiii papiiiiiiiimmmm...mmmmm...- Sus gemidos inundaban el vagón, su cola hacia ¡plop!, ¡plop!, ¡plop! al chocar contra el vientre del gordo. Mientras la cuelaba, el gordo se recostó en su espalda y la agarro de los pechos, masajeándolos y estrujándolos. Comenzó a chuparle la nuca para luego lamer sus orejas.

-vez como te gusta pendeja... cuando estabas en el barrio me rechazabas, y me mirabas con asco, nunca escupas para arriba pendeja puta porque ahora ves como te gusta la verga dura...- Le susurró al oído. Luego se incorporó nuevamente y la siguió culeando con fuerza. La embestía con tal fuerza que Cielo Riveros temblaba con cada estocada.
-mmm...mmm..NO SEÑOR POR ALLI NOOO.¡MMMMMMMMM!!!!...-El Gori había metido su pulgar sin piedad en su estrecho ano. La joven abrió los ojos por el nuevo dolor. Después se lo saco, pero solo para ensalivarlo y volverlo a meter. Ahora para Cielo Riveros todo era un mezcla de dolor y placer. Algo que ya conocía en manos de los viejos pervertidos de su pueblo.
Un segundo dedo entro en su ano, el gordo los metía y los sacaba, hasta que metió un tercero. Cielo Riveros se retorcía de placer, el gordo barra la seguía culeando a la vez que movía en círculo sus tres dedos en el ano de la adolescente. Estuvieron asi un buen rato, hasta que el ano de la colegiala se dilato un poco.

-prepárate pendeja...que me falta este agujerito que tenes las veces que te paseabas por el pueblo moviendo tu cintura y tus nalgas como una autentica putita... despreciabas a los tipos como yo, pero bien que te gustaba que te digan piropos- Y dicho esto, saco su verga de la concha de Cielo Riveros y la coloco en la entrada de su ano. A pesar de que ella ya sabía lo que le venía, se agarró fuertemente del asiento presintiendo lo que estaba por pasar.
NO SE PIERDAN EL PROXIMO CAPITULO EN DONDE NUESTRA PROTAGONISTA CAE EN MANOS DE EL GORI Y SU RUBLA DE DELINCUENTES BARRABRAVAS QUE LE DARAN DURO Y LA HARAN SENTIR COMO NUNCA ANTES HABIA DISFRUTADO POR SUS DOS ORIFICIOS MUY PRONTO LA CULMINACION DE ESTA CALIENTE HISTORIA.
Cielo Riveros 31 VIOLADA EN EL TREN
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El Gori se colocó detrás de Cielo Riveros y colocó su pija en la entrada del su ano. A pesar de que ella ya sabía lo que era el sexo anal, se agarró fuertemente del asiento presintiendo lo que estaba por pasar.
Remakes del relato Pampita y los barras, esta obra lo busque en todorelatos pero no lo pude encontrar, Remakes existió siempre en la historia por ejemplo en la Opera donde distintas Soprano interpretan obras que ya fueron estrenadas por otras artistas, Remakes existió también en películas famosas como Spider Man con distintos actores para interpretar al chico trepa paredes, quien no recordar al Guason que se puso en sus zapatos a nada mas y nada menos que Jack Nicholson, el recordado y que Dios lo tenga en la gloria Heath Ledger , que la valió el Oscar al mejor actor secundario en Batman, y por supuesto Joaquin Phoenix también ganador del Oscar al mejor actor en Joker, en una conmovedora actuación, todos con la misma historia con desarrollos casi similares adaptados a los personajes, como sucedió en mis publicaciones de JLo y el mendigo donde Jennifer Lopez interpreta a Gabriela, en una adaptación que llevo a los capítulos JLo y el mendigo del 1 al 5. En esta ocasión la excelente historia de Pampita y los barras, es interpretada por nuestra hermosa Cielo Riveros , donde al ponerse en el papel de la nena abusada en los vagones de un sucio tren, se pone a la altura de las circunstancias, llevando al personaje a un nivel de excitación nunca antes vista. La actuación de Cielo Riveros es digna de un Oscar a la mejor actriz porno del momento. Espero puedan disfrutar del final de esta historia que continua de la siguiente manera.

-prepárate pendeja...que me falta este agujerito que tenes...- Y dicho esto, saco su verga de la concha de Cielo Riveros que con sus 19 años ya había probado en su pueblo natal varias vergas y de distinto tamaño en su apretada cola, el Gori se colocó en la entrada de su ano. A pesar de que ella ya sabía lo que era el sexo anal, se agarró fuertemente del asiento presintiendo lo que estaba por pasar.
Te acordas en el pueblo cuando te paseabas del brazo de Rodrigo el alfeñique que decía ser tu novio, movias el culo provocándonos, ingorandonos, despreciándonos, pero yo sabia que algún dia tendría esta oportunidad, ahora prepara esa colita que tanto soñé, las innumerables pajas que me hice pensando en tu culo y ahora a un centímetro de mi verga para enterrarla en ese agujero soñado.

-¡MMMMMMMMMMMM!!!!...- salio de su boca amordazada cuando el Gori le enterró la mitad de su gran verga en su cola. Cielo Riveros sentía como si un hierro caliente le quemara las entrañas, no se explicaba como antes si había aguantado vergas enormes como la del jorobado conserje, y la del mismísimo viejo Pedro en su cola, ahora esta le resultaba distinta, enorme.

-¡que colita apretada tenes pendeja!...-Le dijo el tipo haciendo fuerza para penetrarla totalmente, pero su verga era demasiado grande para el apretado anito de la joven.
La nena sintió un alivio cuando el gordo saco su verga y la penetro por la vagina, pero estaba muy equivocada, solo era pera lubricarla, porque la saco de nuevo y la puso en su ano otra vez.
-¡mmmmmmmm!!!!!...- El gordo barra esta vez embistió con fuerza y la penetro totalmente, y dejo su verga allí, quieta, esperando que el ano de Cielo Riveros se dilate un poco. El tipo comenzó a masturbarla, lo que alivio un poco el dolor que sentía en su cola. Metía sus dedos en la vagina de la colegiala a la vez que lentamente comenzaba a mover su cintura, penetrándole la cola lentamente con su imponente verga.

-¡mmmm!..¡mmm!...¡mmm!!!..- A pesar de que su ano se dilataba a la fuerza, el dolor era mucho. La masturbación que le hacia el Gori con tres dedos la ayudaba un poco, pero no lo suficiente, y Cielo Riveros no podía ocultar su cara de dolor, llena de lagrimas.
-¡MMMM!..¡MMM!...¡MMMM!..- El tipo comenzó a culearla mas fuerte, dejando de masturbarla y agarrándola de la cintura. La nena gemía a más no poder y se aferraba como podía al asiento para aguantar las potentes embestidas del Gori. La verga entraba y salía completamente de la cola de nuestra Cielo Riveros cada vez más rápido.

-¡pendeja!..¡que culo infernal tenes, por dios!!!...- Le gritaba el tipo aferrándose a su tetas. Se escuchaba un ¡plop! ¡plop! ¡plop! por las estocadas salvajes que recibía la joven, los cachetes de la cola vibraban con cada penetración.
-¡mmm!..¡mmmm!..¡MMMMMMMMMMM!!!!!!...- A pesar del dolor, Cielo Riveros no pudo evitar volver a sentir lo que sintió cuando los viejos pervertidos de su pueblo le hicieron, por su mente pasaban breves imágenes de las vergas que habían penetrado su cuerpo, ya sea por su carnosa y sensual boca, o por su ya no virginal concha, y muchas veces por su apretado culito, el barra que la estaba violando la tenía al borde del orgasmo.
Las embestidas se hicieron todavía más rápidas y violentas, el tipo le estrujaba las tetas, preludio de su orgasmo.

-¡toma pendeja, toma toda la leche!!!..¡haaaaaa!!!...- El gordo barra comenzó a descargar sendos lechazos de su gran verga en la cola de Cielo Riveros , llenándola por completo. La joven sintió un gran alivio al sentir el líquido en sus entrañas. Eso la relajo un poco y tuvo otro orgasmo más intenso que el anterior.

El barra, sin sacar su verga de la cola de la joven, la abrazo apoyando la espalda de la nena contra su pecho. Comenzó a masajearle los pechos enormes y transpirados, chupo el cuello y las orejas de la adolescente. y puso su mano entre las piernas de ella para comenzar a acariciarle el clítoris. Cielo Riveros sin saber porque se relajó y se dejó manosear por ese gordo asqueroso, el tipo que la había violado, delante de todos esos hombres que esperaban su turno. Su respiración estaba todavía agitada, y la verga en su ano no le molestaba, es más, le gustaba sentirla dentro suyo.
Al rato el Gori le quito la mordaza, y Cielo Riveros sentía como la verga del gordo se achicaba hasta perder todo su imponente tamaño.

--mmmhaaa...haaaaa...- Emitió la colegiala cuando el Gori saco su verga y ya no tenia nada en la boca, no pudo resistirse a nada, solo quería descansar, se sentía totalmente fatigada. El barra la dejo recostada en el asiento, y se dirigió a los que estaba en el vagón con sus vergas durísimas en los pantalones.

-la pendeja esta es terrible, tiene un culo, una conchita y unas tetasas para culearla toda la vida. y con esa carita de putita ni les cuento...- Los demás lo miraban impacientes, estaba más que excitados al ver como se había culeado a una adolescente hermosa muy deseada por los hombres del pueblo y que ahora en el sucio tren estaría a su disposición.
- es toda suya... a vos Chiquito te deje la boquita de la pendeja para estrenar..- Chiquito era su mano derecha, un tipo de dos metros extremadamente musculoso.- aprovechen que falta rato para que bajemos, vallan al furgón así la poli no de da cuenta...- Y dicho esto chiquito agarro a Cielo Riveros y la cargo en su hombro como su fuera una bolsa de papas. La nena estaba tan cansada que no podía ni moverse.
-dejenme...déjenme...- Balbuceo, pero nadie le hizo caso. Chiquito llamo a nueve para que lo acompañaran. Todos hombres grandotes y formados, algunos eran negros, otros eran gordos, pero todos eran gigantes. Cuando llegaron al furgón del tren, cerraron la puerta, Cielo Riveros no tenia ni idea de lo que le esperaba.
Chiquito la dejo en medio del furgón que estaba totalmente cerrado y solo con una débil luz de una lámpara que colgaba del techo. Chiquito la mantenía parada agarrándola de los hombros, y ella solo podía ver como todos esos hombres sucios y transpirados la miraban con cara de degenerados. Cielo Riveros estaba como dormida, solo escuchaba las risas de mucha gente alrededor de ella.
En menos de un segundo todos se tiraron encima de ella como perros en celo, manoseándola por todos lados. Le arrancaron el vestido a tirones, dejándola completamente desnuda, solo tenía puesto sus botitas de piel. Sus pechos duros bamboleaban con el manoseo. Uno le metía su lengua hasta la garganta, besándola salvajemente, Otros dos se dedicaba a chuparle los pechos, lamiéndolos y succionándoles los pezones, masajeando esos dos increíbles globos de carne. Otros Metían sus manos entre las piernas de la adolescente y la masturbaban, tan desesperados que la tenían levantada y sus pies apenas tocaban el suelo. Metían dedos en su vagina que ya empezaba a largar sus jugos. Otros masajeaban su cola perfecta, redonda y parada, metían sus dedos y los sacaban, se turnaban para hacerlo, llegándole a meter cuatro dedos en cada uno de sus orificios. Los demás chupaban su cuerpo por donde podían, agarraban las manos de la joven y la hacían tocar sus bultos. No había parte del cuerpo de Cielo Riveros que no fuera manoseada, chupada o penetrada por esos hombres de mala vida.
-mmmm...hhaaammmm...- Gemía suavemente, la hermosa colegiala que a pesar que estuvo con muchos hombres casi todos viejos de su pueblo ahora estaba sin control, solo se dejaba hacer, no sabía porque, pero esos sobos que estaba recibiendo le gustaban. El calor del furgón era sofocante, todos están traspirados, Cielo Riveros brillaba de sudor, parecía aceitada. Su cuerpo resbalaba con los sobos, pero nunca caía, la tenían en el aire, sus pies no tocaban el suelo en medio de esos animales hambrientos.
Después de un rato, Chiquito la arrodillo en el suelo, abrió su pantalón y Cielo Riveros vio la verga mas grande de su vida, mas grande que la del Gori, era gruesa y larga, venosa con la cabeza roja. Palpitando de la excitación y calentura. Chiquito Agarro la cabeza de Cielo Riveros y la acerco a la verga, dejándola en la punta de sus labios.

-no...déjame...- Balbuceo la joven, apenas resistiéndose. Pero con un movimiento Chiquito empujo la cabeza de Cielo Riveros y metió su enorme y larga verga por la boca de la joven, la pobre adolescente no pudo resistirse, se sentía como una muñeca, podía hacer lo que quieran con ella. Cielo Riveros no daba abasto con tanta carne en su boca, le costaba respirar, Pero Chiquito la tenía agarrada de los pelos y la obligaba a chupársela.
-Chupa putita, chúpamela, con esa carita de chupa vergas me volves loco...- Le decía. Cielo Riveros sentía como la verga le llegaba hasta la garganta, le dolían las mandíbulas porque las tenía que abrir al máximo, y la verga era tan grande que solo se podía tragar la mitad. Mientras otro de los secuaces se había puesto a su lado y no hacía más que magrearle los pechos, otro hacia lo mismo del otro lado, masajeaban sus enormes pechos transpirados, a todos volvían locos ese par de tetasas. Otro estaba entre sus piernas y le chupaba su sexo mientras que empezaba a meterle varios dedos. Uno detrás de ella le chupaba el ano y también le metía varios dedos, su ano ya estaba completamente dilatado y estirado, ya no sentía ningún dolor. Otros había colocado sus vergas en las manos de la joven para que los masturbaran, y Cielo Riveros sentía que eran enormes, su pequeña mano no se cerraba en torno a ellas.
-mmmm...mmmm...mmmm....- No podía evitar gemir, la hacían sentirse como una perra en celo, sus experiencias sexuales en su pueblo ni se comparaba a lo que estaba viviendo en la capital en un vagón mugriento rodeada de hombres horribles y malos. Chiquito seguía moviendo su cabeza de atrás hacia adelante agarrándola de los pelos. Cielo Riveros tragaba su enorme verga como podía e instintivamente comenzaba a chuparla con lujuria, a pesar de que minutos antes se negara a hacerlo.
-así putita... que fuerte que estas... que bien chupas la verga perra...- la nena mientras mamaba la verga, subía y bajaba sus manos por las vergas de los demás, soltando una y agarrando otra, tenía vergas enormes por todos lados. Su respiración estaba agitada, se la podía escuchar claramente. Los que estaban entre sus piernas, tenían metidos tres dedos en su ano y su concha, y ella instintivamente comenzó a mover sus caderas. Arrodillada en el suelo, se acomodó y abrió más sus piernas para facilitarles la masturbación, aunque no sabía porque. La estaban violando, pero le empezaba a gustar lo que le estaban haciendo los barrabravas.
Así la tuvieron un rato, sobándola y metiéndole mano por todos lados. Chiquito comenzó a gemir y a penetrarle la boca salvajemente. Cielo Riveros comenzó a marearse con el ir y venir de su cabeza, hasta que de pronto Chiquito se la enterró hasta la garganta y la dejo hay, quieta.
-¡aaaahhhh...trágate todo pendeja...aahhhhh!!!...- comenzó a eyacularle dentro de la boca dos tres hasta cuatro descargas de leche en cantidades enormes, Cielo Riveros con tanta leche se atragantaba, pero chiquito no le soltaba la cabeza y ella se veía obligada a tragar como podía semejante cantidad de leche. El semen se le escapaba por la comisura de los labios, hasta que Chiquito saco su verga de la boca de la joven y termino con dos potentes chorros que fueron directo a su cara. La nena quedo arrodillada en el suelo, una cantidad de semen salió de su boca cuando la abrió para respirar.

-¿queres mas nenita?...acá tenes mas lechita!!!...- Los dos a los que ella había estado masturbando se acercaron a agarrándola del pelo, hicieron que mirara sus vergas. Se masturbaron y comenzaron a acabarle en la cara con potentes chorros. Su cara y su pelo comenzaron a chorrear semen que iba a caer sobre sus hombros o sus pechos. La obligaron a abrir la boca y unos chorros fueron a parar a su garganta, ella tragaba como podía, la cantidad de semen era impresionante. Su cara quedo bañada en semen, casi no podía ver, y su pelo mojado por la transpiración ahora estaba enbardunado con semen.
Chiquito la miraba masturbándose, tenía la verga todavía dura e imponente, al igual que los demás, todos tenían sus vergas fuera de los pantalones y todas eran enormes.

-prepárate pendeja...ahora viene lo mejor...- Le dijeron, pero Cielo Riveros estaba tan cansada que ni escucho, solo sintió que la empujaba y ella caía de espaldas al suelo. Ella seguía tragando el semen que le quedaba en la boca, trataba de sacarse el gusto a aquello. Había olvidado que estaba haciendo, se sentía perdida. Chiquito se había puesto entre sus piernas y se disponía a perforarla. Otros dos mientras la magreaban los pechos y no paraban de insultarla "Putita, en el pueblo te sentías omnipotente, intocable ahora te vamos a reventar pendeja divina". Cielo Riveros en un instante recordó lo que le estaban haciendo y intento moverse, pero se sentia tan cansada que no se noto su resistencia.

-noo...nooo...- Llego a balbucear, pero nadie le hizo caso. Chiquito la había agarrado de la cintura y levantándosela un poco, acomodo la punta de su enorme verga en la entrada de la vagina de la adolescente. La nena seguía intentando moverse sin ningún resultado, cuando de repente se paralizó, su cuerpo se combó y su cintura quedo totalmente arqueada, dio un gran grito, Chiquito se la acababa de enchufar entera sin piedad.
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHH!!!...- La verga de chiquito era mucho mas grande que la del gordo, y ella sentía ya mucho placer al tener semejante pedazo de carne atravesándola sin piedad. Chiquito la tenía agarrada de las nalgas y la Cogia rápidamente, los pechos de Cielo Riveros se bamboleaban para todos lados con las embestidas. Sentía su espalda ir y venir contra el suelo y sentía como esa verga la llenaba totalmente.

-¡hhaaaa!...¡haaaa!..¡hhaaa!!!..-comenzó a gemir Cielo Riveros . Mientras la Cogian sin piedad, Chiquito recorría su cuerpo transpirado, tocaba y masajeaba sus pechos brillantes de sudor y semen, los recorría en todo su contorno. Los demás miraban el espectáculo y meneaban sus vergas, esperando su turno.
Chiquito se sentó al un lado de Cielo Riveros y agarrándola la sentó sobre él, clavándole toda su verga en la conchita dilatadísima de la hermosa joven.
-mmmmhaaaaaaa TODAAAAA....-Jadeo Cielo Riveros al sentirse nuevamente penetrada. Chiquito al ver que la nena no reaccionaba, la agarro de las nalgas y la obligo a cabalgar sobre él, haciendo que sus tetazas se balancearan sobre su cara. Chiquito comenzó a chuparlos mientras la hacia bajar y subir por su verga.
Cielo Riveros estaba como hipnotizada de placer. Un negro se puso delante de ella y la colegiala sin dudarlo agarro su verga y se la metió en la boca. Comenzó a mamarla con desenfreno, se la sacaba de la boca y lo pajeaba con sus dos manos mientras recorría con su lengua todo el contorno de la verga. Luego se la volvía a meter en la boca y seguía mamando como una experta. El negro jadeaba de placer, aquello era la gloria, una nena con un cuerpazo infernal se la estaba chupando como una puta de lujo.

Entonces el rostro de Cielo Riveros se torció, sacó la verga de su boca y la apretó con sus manos fuertemente, y dio un gemido terrible, como nunca hasta ahora lo había hecho.
-¡AAAAAAUUUUUUUGGGGGGGGGHHHH!!!!!...- Chiquito estaba bajo de ella, y por cómo le temblaba el cuerpo a ella, y los esfuerzos que hacía él por meterle su verga entera por completo como se dice una verdadera culeada.
-¡aahhh!...¡aahh!..¡aahhh!!!...-Cielo Riveros seguía aferrada al pene del negro con todas sus fuerzas, Chiquito empezaba a taladrarla, adentro y afuera si piedad. La tenia agarrada de la cintura y las estocadas hacían vibrar los cachetes de la cola de la joven.

-aahhh...aaahhh...aaahhh...-Después de un rato, Cielo Riveros había cambiado la cara, ahora su cara era de increíble placer, jadeaba como una perra en celo, estaba sudando y movía sus caderas acompañando las estocadas de Chiquito. Comenzó a masturbar la verga del negro con sus dos manitas instintivamente, para luego comenzar a succionarla como si le fuese la vida en ello.
-mira cómo goza la putita..- Dijo el grandote mientras la culeaba a la vez que estiraba sus manos y masajeaba los pechos de Cielo Riveros . El negro no pudo aguantar más y de su rabo negro salieron varios chorros de blanco néctar acabo en su boca, pero la colegiala en vez de rechazarlo, se lo tragó todo, succionando el pene del negro hasta sacarle la última gota, y al final terminó relamiéndose.
-aaahhhh...aaahhhh...aaaahhhh...- Ahora Cielo Riveros se movía al compás según Chiquito se la daba por la concha. Otro se puso delante de ella y la nena ya fuera de si, agarro la verga y comenzó a chupársela, se la sacaba de la boca y se la pajeaba de tal manera que al rato la hacía estallar. Acabándole en su cara, que chorreaba semen por todos lados. Otro ocupaba su lugar y Cielo Riveros hacia el mismo trabajo, la chupaba desaforadamente. Los que ya habían acabado, la tenía otra vez completamente duras y empalmadas al ver como la nena inocente estaba totalmente en celo.
-mmm...mmm..¡MMMMMMMM leche quiero mas leche!!!!...- Cielo Riveros tenía orgasmos a cada rato, mientras ella seguía aceptando la verga de Chiquito, que taladraba desde abajo sin piedad. En un momento dado la nena quedo arrodillada sobre el cuerpo de Chiquito chupando la verga de un negro, que se la saco de la boca y lo comenzó a pajear para hacerlo acabar en sus tetas.

-mmm..mmmm...mmmm..-Cielo Riveros meneando sus caderas como una loca sobre la verga de Chiquito, se dedicado a mamar vergas como si fueran un manjar. Se la chupaba a uno y masturbaba a otros dos con sus manos, chupaba tres vergas alternativamente como desaforada. Los hizo acabar a todos en su boca, en su cara o en su cuerpo.
Luego quedo ella ensartada jadeando, relamiéndose el semen que chorreaba de su boca y todo su cuerpo. Los demás la miraban asombrados, no podían creer que esa nena que tan recatada y decente parecía en el pueblo ahora se aguantara tanta verga por todos sus agujeros. Chiquito la tenía dura, al igual que todos los demás, faltaba poco para que termine el viaje y tenían que aprovechar el tiempo que quedaba.
-aaahh...aahh..Aahh. ASIII PUTOOOO DAMELA DAMELA MENDIGOOOOO DAME ESA VERGA PENDEJOOOO..- Cielo Riveros comenzó a maldecir y decir palabras que solamente las decía cuando estaba en autentico goze sexual, comenzó a gemir dulcemente, estaba tan perforada que la enorme verga de Chiquito se deslizaba perfectamente en su concha mojada de jugos y semen. Al momento otro de los de la banda se puso detrás, la abrió los cachetes de la cola y se la metió de un empujón.
-mmmmmaaaaaahhhhhhh....-Cielo Riveros gemía largamente al sentirlo, la verga se había deslizado perfectamente por su ano sin causarle ningún dolor. Los dos tipos comenzaron a moverse acompasadamente, penetrando a la nena pueblerina con sus imponentes vergas. Cielo Riveros primero se retorció, pero en un rato siguió balanceándose ahora con las dos vergas en sus agujeros, gozando y jadeando apretada contra esos dos cuerpos mucho más grandes que ella.
Sus movimientos eran rítmicos como si toda sus vidas lo hubieran hecho, eran perfecto las estocadas en el culo y concha, Cielo Riveros con sus movimientos manejaba perfecto el ritmo de la cogida.
-aaahhhh!...aaahhhh!!...aaaaahhhhh!!!...- Aquello era una locura, la nena jadeaba como pidiendo más, ella resbalaba por la transpiración apretada contra los dos cuerpos, pero las vergas la seguían perforando como pistones que entraban y salían sin piedad, y eso a ella ya no le molestaba.

-aaahhh!!..aaahhhmmm!!!...mmmm!!..-el pibe que fue el responsable de arrastrarla hasta ese lugar se acercó con la verga parada y se la clavó en la boca, y ella agarro la verga con las dos manos para chupársela mejor. El pibe le acariciaba la cabeza mientras Cielo Riveros se la mamaba, como si fuera una perrita a la que estaba recompensando.
Otros agarraron sus manos y colocaron sus vergas en ellas, Cielo Riveros los masturbó rápidamente, haciendo bajar y subir sus manitas por ellas. la escena era impresionante, la dulce nena de Pueblo, hasta hace unos momentos inocente, era protagonista de una doble penetración, tenía dos vergas inmensas en su cola y en su concha, chupaba otra con sus labios carnosos y pajeaba a otros dos con sus manos, ya no tenía agujero libre que no estuviera ocupado por alguna verga, ni siquiera en su pueblo los viejos pervertidos pudieron llegar tan lejos.
-mmmmm...ASIII DAMEEE PAPIIIIII SIIII PENDEJOOOOOO ASIII ME GUSTA METELOOOO METELLOOO LLENENMEEEEE PENDEJOOOOOOOOOOS...- Los jadeos de Cielo Riveros inundaban el vagón. Así estuvieron culendosela hasta que primero uno reventó en su boca, para después salpicarle la cara de semen. Cielo Riveros sintió como su cola y su vagina se llenaban, estaban acabando dentro suyo, y cuando su culo se desocupaba otro ocupaba su lugar y enterraba la pija en su dilatado ano, se turnaban un rato cada uno, fueron muchas las pijas que probaron su espectacular y redondo culo. Cielo Riveros se recostó contra Chiquito que pudo sentir sus tetazas húmedos y duros en su cara. Los otros dos acabaron en sus manos, salpicando de semen todo su cuerpo.
Cuando todos salieron de ella, Cielo Riveros cayó a un lado como desmayada, de placer y de cansancio por el enorme esfuerzo que había hecho. Quedo boca arriba en el piso del furgón jadeando suavemente, con la respiración agitada y tratando de tragar el semen que le quedaba en la boca.
-¡mierda pendeja, como quedaste!..- El gordo barra había entrado al furgón y la miraba sonriente. Cielo Riveros estaba en un estado deplorable, estaba totalmente transpirada y bañada en semen, tirada en el suelo como una muñeca.

-antes de bajarnos un último polvo, eh piba? Mira que fue mucho el tiempo que espere para tenerte, ahora voy a aprovecharte, y cuando regreses al pueblo vas a decirle al inútil de tu novio que lo dejas porque ahora estas saliendo conmigo, desde ahora somos novios escuchaste pendeja..- Cielo Riveros se quiso negar pero no pudo ni reaccionar. El Gori la agarro y la levanto, la coloco contra la pared y la nena se recostó contra esta cansada, sus piernas flaqueaban, no podía mantenerse parada.

-Putita!.. Como me calentas...- Le dijo el Gori recostándose contra su espalda y refregándole su bulto contra la cola de la colegiala.
-¡estas tetasas me vuelven loco!...-Le decía mientras le masajeaba las perfectas tetas, al gordo barra no le alcanzaban las manos. Se abrió el pantalón y se lo bajo hasta los tobillos junto con su ropa interior. El mástil que tenía como pene apuntaba directamente al culo de la adolescente. La inclino un poco haciendo que Cielo Riveros sacase la cola y la dejara paradita, la vista de la cola era infernal. El gordo le acariciaba la cola con su verga, la joven comenzaba a respirar fuerte y a jadear, el sucio la estaba excitando nuevamente.
no.. por favor...no...- Balbuceo Cielo Riveros , pero el Gori le abrió las piernas y se la metió en el culo como un desesperado. La hermosa colegiala arqueo la espalda, no de dolor, sino de placer.

-aaaaaahhhhhhhhh....-Jadeo cuando la tuvo totalmente adentro. En un instante el gordo la agarro bien fuerte de las caderas y empezó el mete saca. La perforaba como si fuera lo último que haría en la vida, Cielo Riveros sentía la barriga del Gori golpeándole la espalda, y como la verga se deslizaba perfectamente en su ano provocándole un placer indescriptible.

-haaaa...haaaa..Haaa..HaaaaASIII PUTOOO ASIIII GORDO DAMELAAAA POR EL OJETEEEE DAMELLLA GORDO PUTOOOO...-Los jadeos de Cielo Riveros calentaban a cualquiera, por lo que todos los presentes comenzaron a masturbarse mirando como el jefe se la culeaba.
-¡como tenes la cola pendeja!..¡estas reabierta!..-Le decía el gordo barra a la vez que la embestía mas fuerte. ¡plop! ¡plop! ¡plop! se escuchaba al chocar el vientre del Gori contra la cola de Cielo Riveros . El gordo la agarro de las tetas y empujo más y más hasta llegar a metérsela entera hasta el fondo. La nena no podía parar de jadear.

El Jefe barrra bombeaba esa tremendo cola con todas sus fuerzas mientras disfrutaba de dos impresionantes globos de carne. Cielo Riveros , que tenia la cara recostada contra la pared, se incorporó paso sus manos hacia atrás, agarrándose el cuello del Gori para no caerse. Con una mano el tipo la agarraba de una de sus tetasas mientras con la otra exploraba todo el cuerpo de la adolescente a la vez le daba por el culo.

-aaahhh....aaahhh!!...aaahhhhh!!!!....-La cola bien firme de Cielo Riveros vibraba a cada estocada. El gordo barra con una mano exploraba su vagina y le metía dos dedos, la sentía mojada y a punto de acabar.
-haaa!!!...¡aaaahhhh!!!!....¡aaaaaaahhhhhhENTIERRAMEEEE LA PIJAAA EN EL CULOOOOO!!!!!...-Cielo Riveros estaba por acabar al igual que el Gori. Los gemidos de placer hacían que los demás se despellejaran las vergas con sus manos.
-¡aaahhh, toma pendeja!!!...- El gordo barra le llenaba la cola de leche, casi le arranca las tetas mientras acababa. Cielo Riveros no paraba de jadear, su orgasmo era increíble. Su cuerpo convulsionaba mientras sentía como el torrente de leche la estaba llenando. Ella seguía agarrando al gordo hasta que terminaron de acabar. Cuando se la saco, Cielo Riveros se recostó contra la pared, noto como le quedaban las piernas temblando de la tremenda acabada.
Luego cayo rendida al suelo boca arriba, y los que se había estado masturbando, se colocaron en círculo alrededor de ella y comenzaron a bañarla en leche, Cielo Riveros sentía los chorros y abría la boca tratando de tragar lo que podía. Si antes estaba bañada en semen, ahora su cuerpo estaba completamente blanco de esperma. Cielo Riveros no supo nada mas, cayo dormida de cansancio y no supo que paso después, solo escucho "te mereces un premio pendeja", antes de dormirse en el suelo.
Se despertó completamente vestida en un asiento de la estación de trenes. Eran alrededor de las diez de la noche en el reloj de la estación. Había gente en el andén, pensó que todo había sido un sueño, un sueño muy real, porque se sentía totalmente dolorida. Se dio cuenta de que nada había sido un sueño cuando noto que tenía puesta una camiseta de fútbol, la misma camiseta que tenían la mayoría de los hombres que la habían violado, abrió su mochila para ver si no le faltaba algo, estaba todo y encontró envuelto en papel de diario 15.000 pesos, que los barras habían juntado entre todos, y recordó esas últimas palabras antes de desmayarse en el vagón…TE MERECES UN PREMIO.
Llego sin problemas a la casa de don Benito donde ella se refugiaría hasta encontrar un trabajo, algo que lograria más adelante en la carnicería de los pervertidos y abusadores hermanos dueños del local, como escusa por la hora Cielo Riveros le dijo a su abuelo postizo que había una demora en el tren y que por eso había llegado tarde, y que estaba muy cansada y que por la mañana hablarían. Cuando se acostó cansadísima, no pudo evitar que se le dibuje una sonrisa en la cara, a pesar que le dolía todo el cuerpo y que la habían violado, no la había pasado tan mal, además tenía dinero suficiente para todo un mes obsequio de los muchachos barrabravas.
Cielo Riveros 32
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-- Buenas noches señor… saludo la nena demostrando la atenta educación con la que había sido instruida, en cambio al viejo se le hacía agua la boca al escuchar tan dulce voz… hasta que trajiste una amiga a la casa, zorrita… Cielo Riveros se sorprendió por la manera tan vulgar y soez en que aquel señor se dirigió a su propia hija
Buen dias para todos los lectores de TODORELATOS. Para los nostalgicos de Cielo Riveros aqui un breve recuerdo de sus aventuras, si quieren mas solo comenten. Gracias
Las horas ya habían transcurrido y en el cuartucho el cojo Juan se encontraba resoplando satisfecho por la follada que le había dado a una ya inconsciente Cielo Riveros , ya había pasado mucho rato que había perdido el conocimiento presa del placer forzado al cual había sido sometida.
Verónica la única testigo de lo acontecido ya se había retirado a una distancia prudencial, esperando atenta que es lo que pasaría, se encontraba muy nerviosa pero no de los comunes nervios si no de esos que son por las ansias de querer experimentar lo mismo, estaba curiosa y excitada por todo lo visto, jamás pensó que el sexo con viejos horribles y asquerosos le fuese a gustar tanto.
En su cabeza rondaba la envidia por todo lo que le hicieron a la nena, todavía podía oír en su mente los maravillosos y melodiosos gemidos que resonaron de la deliciosa boca de Cielo Riveros, sin lugar a dudas fue lo más erótico, excitante y morboso que había visto en toda su corta vida.
El cojo ya se encontraba parado encendiéndose un cigarro, podía contemplar el maravilloso cuerpo de la nena sobre su sucia y maloliente cama, restos de su asqueroso semen se secaban sobre los majestuosos pechos de Cielo Riveros que a su vez le daban un brillo espectacular, su vientre plano también habían sido mancillados por las sucias secreciones del cojo sin dejar de mencionar las portentosas nalgas que fue donde el cojo derramo su última corrida.
En total fueron tres veces que se corrió sobre el cuerpo de la nena y todas sus embestidas fueron por el apretado ano de la colegiala, el cojo no se atrevió a penetrarla por la panocha, sentía temor de preñarla también a ella pero al verla en la cama le venían a la mente todo lo que había gozado y su asquerosa verga comenzó a levantarse de su descanso, se puso a pensar con lujuriosa demencia si se decidía en que su verga prueben de las apretadas paredes vaginales de la nena.
-- mmm que mierda, si la preño todos sabrán que fui yo je je… se dijo así mismo el despreciable y deforme viejo pensando que sería considerado un Dios cuando se enteren que preño a Claudia y Cielo Riveros dos de las mas deseadas colegialas del plantel.
En ese mismo instante el maestro Tulio estaba reunido con algunos profesores todos acompañados de sus esposas se encontraban brindando con el Director, cuando le llega una queja por parte de una de las acompañantes de que los baños eran un asco, el Director se molesto mucho y pidiendo disculpas pregunto por el cojo, no lo había visto en todo el día y su labor o deber era mantener la escuela en perfecto estado de limpieza y mucho mas ese día que era de celebración general.
Su molestia aumento al escuchar que no lo encontraban por ningún lado y muy enfurecido se dispuso en ir a su precario habitáculo donde seguro estaría durmiendo descaradamente dejando de lado sus obligaciones, fue en ese momento que Tulio le interrumpió diciéndole que el mismo le llamaría, que no se molestara en abandonar la reunión a lo que algo muy molesto el Director acepto.
Tulio fue muy hábil al hacer eso, pues si el director lo encontraba al cojo en plena faena si que tendrían problemas y no es que el Director sea un ejemplo de autoridad y buenas costumbres pues al igual que ellos también era un viejo verde, lujurioso por las jovencitas pero hasta ahora nunca había chocado con las colegialas de su plantel, lo que en realidad le preocupaba a Tulio es que encontrara a su sobrino tirado en el piso, aquel muchacho problemático era su protegido y no perdonaría lo que le habían hecho.
El cojo quien ya se disponía a darle rienda suelta a sus deseos y lujuria contesto algo molesto el teléfono oyendo la voz de su cómplice... – Oye cerdo asqueroso, ven para aquí inmediatamente que el director te necesita… -- no manches Tulio, estoy que la paso bien aquí… -- oye idiota quieres que el viejo vaya a buscarte… el cojo lo pensó bien dejando de lado sus intenciones de cogerse nuevamente a la nena -- mmm ya voy wey, déjame arreglar aquí…
El cojo no tuvo más que dejar aquel delicioso banquete e ir de inmediato a cumplir con los requerimientos del viejo Director, para eso cerro su puerta con un viejo candado, dejando encerrada a la nena junto al mozalbete de Víctor. Con toda la incomodidad que su físico le daba iba a toda prisa trastrabillando por el precario camino siendo visto por una ya cansada y aburrida Verónica quien ya veía de lejos al viejo en dirección a las aulas.
En ese momento no sabía que hacer, tenia cierto temor de que el viejo regresara rápido, con mucha precaución fue tras el cojo y al comprobar que tendría para rato en sus labores con toda prisa fue en dirección al cuartucho, en aquel lugar Cielo Riveros y Victor no daban muestras de querer levantarse inconscientes y victimas de dos viejos zorros, para ese momento solo se oían los jalones que le daba Verónica a la puerta tratando de abrirla, pero el candado era muy seguro.
Fueron como diez minutos en los que lucho para abrirla y con lo vieja que era la madera de la puerta fue que cedió permitiéndole el paso a la chiquilla, Verónica se llevo una mano a la boca al sentir el desagradable hedor a transpiración que se sentía en el cuartucho, encendió la tenue luz del cuarto y pudo ver a la sensual Cielo Riveros tirada en la cama completamente desnuda.
Veía estupefacta y con algo de asco los restos de semen secándose sobre su cuerpo, pero muy a pesar de eso le parecía maravilloso y excitante, no podía creer como una bella jovencita, la más deseada por toda la escuela había sido gozada por el más repugnante y desagradable sujeto que podría existir, arrodillándose en el piso se acerco hacia el rostro de Cielo Riveros viendo de cerca esos carnosos y rosados labios, a la mente se le venía el momento como estos se apoderaban del miembro del cojo, como habían recorrido toda la superficie venosa de esa apestosa pero considerable verga, en ese momento se le hacía agua la boca en una hambrienta sensación de envidia.
Su vista siguió con el recorrido del mancillado cuerpo de la nena para quedarse viendo las redondas chichotas, estaban enrojecidas, con leves marcas de mordidas y las manchas de las sucias manos sudorosas del cojo y con restos húmedos del semen de este, instintivamente se acerco hacia ellos para percibir el olor que tenían, no entendía que le pasaba, se estaba sintiendo atraída nuevamente por el hermoso cuerpo de Cielo Riveros , dio media vuelta algo contrariada y pudo divisar frente a ella la cámara del maestro Tulio.
Con toda la curiosidad que tenia se acerco hacia ella encendiéndola para revisar su contenido, los ojos casi se le salen al ver que toda la escena que había visto estaba grabada, con eso ya no tendría que recordar las excitantes escenas de la cual fue testigo, si no podría verlas cuando le diese la gana. Estaba a punto de irse cuando volteo a ver a la nena, sintió compasión por ella, después de todo era una mujer como ella y además la habían sometido cobardemente con drogas, se acerco rápidamente para tratar de despertarla.
-- Cielo Riveros … Cielo Riveros despierta… despierta Cielo Riveros!!!!... pero era inútil, solo recibía cortos gemidos de sueño por parte de ella, que hago!! Se decía, de verdad quería ayudarla pero se encontraba nerviosa de que regresaran los dos viejos y la encuentren, pero los extraños sentimientos que le tenía a la nena le dieron valor para ayudarla y tomando una de las botellas de agua se la empezó a rociar en el rostro.
Aquello logro despertar en algo a Cielo Riveros quien abriendo los ojos no entendía lo que pasaba, solo pudo reconocer el rostro de Verónica. –Verito… que pasa…donde es-estoy… -- cállate estúpida y vámonos de aquí… Vero ya un poco más tranquila solo encontró las sandalias y el corto vestido de la nena pero nada más y ayudándole a ponérsela a toda prisa la ayudo a salir de aquel lugar dejando abandonado a Victor.
Cielo Riveros iba apoyada sobre Verónica quien con mucho esfuerzo la llevaba, tendría que buscar la manera de sacarla de la escuela sin que se diesen cuenta los maestros y el único camino era entre la multitud de escolares que bailaban al unisonó por la estruendosa música de las bandas que tocaban, muchos de ellos miraban extrañados el estado en la que se encontraba la nena y no entendían la razón de estar acompañada por una de las alumnas mas rebeldes y de peor reputación de la escuela.
-- Hey Vero… que le pasa a Cielo Riveros … le decían algunos compañeros algo preocupados y otros excitados por el sexy vestido que le marcaban todo su deseado cuerpo… -- Eh no nada.. solo se le paso las copas un poco ja ja… contestaba algo apurada y esquiva, la intención de Verónica era llevársela a su casa hasta que se recupere, por una extraña razón sentía lastima por ella y quería ayudarla, muy aparte de que olía muy mal por el contacto del asqueroso sudor del cojo y era verdad, el cuerpo de Cielo Riveros se encontraba con los olores del semen del cojo, el asqueroso sudor que se mezclo con la suya y los restos de apestosa saliva por las tantas lamidas y mordidas que le habían dado.
Por suerte la casa de Verónica quedaba a una calle de la escuela a la cual llegaron rápidamente, no había nadie en casa de ella puesto que su alcohólico Padre siempre paraba en el bar y su madre ejerciendo el oficio más antiguo del mundo, ni bien entraron la llevo a su habitación, Cielo Riveros aun se sentía algo mareada no entendiendo lo que pasaba… -- que hacemos aquí vero… -- Cállate y ven aquí,… casi a los jalones la llevo hacia la ducha quitándole fácilmente el vestido y empujándola hacia la regadera, cuando los fríos chorros de agua comenzaron a caer sobre su cuerpo Cielo Riveros abrió la boca algo desesperada pero sin reaccionar a quitarse las sucias manchas que difícilmente el agua sola no podrían quitar.
Verónica miraba excitada como Cielo Riveros lucia sensual con el cuerpo mojado aumentando su excitación y envidia al ver ese perfecto cuerpo, sin darse cuenta comenzó a despojarse de sus ropas quedándose solo con su pequeña tanga, se metió junto con Cielo Riveros a la ducha y tomando una esponja enjabonada comenzó a pasarle por todas las áreas mancilladas por el cojo, podía sentir claramente la suavidad de la piel de la nena, era para envidiarla, sin darse cuenta su otra mano se apodero de uno de los pechos notando su suavidad y dureza, la volteo contra la pared y la enjabono las duras y redondas nalgas notando las huellas de las furibundas nalgadas y mordidas que el cojo le dio.
Miraba con ojos de envidia y de enamorada aquel perfecto y castigado trasero, ya no podía mas con lo que veía, sentía que la panocha le hervía con tan solo observar y tocar de aquellos tentadores encantos, ahora entendía porque la desesperación de la mayoría de chicos por ella, si ella misma se calentaba con mayor razón los demás, aquella adolescente había sido enviada a este mundo para satisfacer tanto a hombres como a mujeres, nuevamente la puso de frente viendo como ella seguía algo dócil y aturdida con los ojos entrecerrados tratando de reaccionar, no pudiendo mas acerco sus labios hacia los duros pezones y les dio una ligera succión provocando la reacción de Cielo Riveros .
-- ehh que pa-pasa… -- nada!!! ya casi acabamos… contesto algo nerviosa Verónica quien no podía creer haberse atrevido a probar de aquel apetitoso pezón, su lado bisexual afloraba cada vez mas pero solo con ella, por alguna razón el corazón se le aceleraba al verla y mucho mas ahora al sentirla, tenia al frente esos carnosos labios por los cuales muchos soñaban con besar, ella ya no podía mas, se sentía demasiado tentada con frotar sus labios con las de ella, de sentir por primera vez la delicada sensación de besar a una mujer.
Cada vez acercaba sus labios junto con los de ella pero en ese instante y gracias al agua fría Cielo Riveros ya se encontraba más consciente de lo que pasaba y la detuvo empujándola hacia atrás – pe-pero que pasa, que ha-hago aquí… reacciono la nena tapándose sus turgentes chichotas sorprendida al ver a Verónica también desnuda y duchándose con ella.
Verónica algo contrariada pero recobrando su carácter hostil y dominante le tomo de los cabellos con fiereza – que te dije estúpida, te dije que te alejaras de Victor oh no… Cielo Riveros no recordaba nada, estaba perdida tratando de entender a que se refería la rebelde chiquilla, sentía miedo al tener a la iracunda y peligrosa chiquilla frente a ella… -- no, no se a que te re-refieres, no re-recuerdo nada… Verónica reía por dentro pero a su vez sus pequeños pero apetecibles pechos se erectaban recordando la tremenda culeada que le dieron.
-- ah no recuerdas, te hare recordar estúpida, has estado cogiendo con Victor toda la tarde y en la casucha del asqueroso conserje… Cielo Riveros abrió grandes sus lindos ojos verdes, las lagrimas le comenzaron a salir de inmediato, no podía creer lo que Verónica le decía y con el alma destrozada cayó de rodillas llorando por lo que le decía -- --NO!!! No puede ser nooooo, dime que no es ci-cierto nooo…
A pesar de que Verónica era malvada se le partía el corazón al verla, tenía ganas de abrazarla, de besarla y consolarla, no entendía lo que sentía, hasta hace poco la odiaba y le caía mal por ser una chica fresa y consentida por los maestros pero ahora no, verla arrodillada llorando desconsolada hizo que naciera en ella un extraño sentimiento por Cielo Riveros o quizás era amor pensaba.
-- Ey tranquila Cielo Riveros , la verdad no estoy segura solo te vi desnuda en la cama, pero el idiota de Victor también estaba desmayado, tal vez tomo lo mismo que tu y no te hizo nada… Cielo Riveros levanto su triste y llorosa mirada esperanzada en que eso fuese cierto… – estas se-segura… -- Creo que si, por eso te saque de allí, otros podrían haberse aprovechado si te encontraban así… decía algo cínica recordando con profunda excitación todo lo que le hicieron, en cambio la nena se levanto y con mucho alivio abrazo a Verónica en una muestra de total agradecimiento.
Aquel abrazo la tomo por sorpresa, sintiendo los turgentes pechos de la nena aplastar a los suyos respirando de esa suave y húmeda piel, rápidamente llevo sus manos hacia su espalda acariciándola en una clara muestra de consolarla, pero en realidad estaba excitada al contacto corporal con ella, -- gracias Vero, no sabré como pagártelo nunca… -- Bueno, tu solo aléjate de Victor y me harás mis tareas ok, ahora vístete y vete a tu casa…
Hasta ese momento fue que Cielo Riveros se dio nuevamente cuenta de que estaba desnuda junto a ella y muy sonrojada tomo una toalla cubriendo su cuerpo, minutos después Cielo Riveros se ponía su vestido extrañada mirando para todos lados en busca de su pequeña prenda intima, Verónica al darse cuenta con burla le dijo que no lo encontró y que si quería le podía prestar uno de ella, la nena quien era amante de la limpieza y el aseo personal entendía muy bien que aquellas prendas no se deben compartir para evitar cualquier contagio y decidió irse así nomas.
Nuevamente Cielo Riveros se veía espectacular con tan sexy y escotado vestido, la noche ya había llegado y hacia un poco de viento, a lo que Verónica le prestó una chamarra de cuero negro que se le ajusto a su cuerpo quedando el vestido como una pequeña minifalda roja que la hacían ver mucho más sensual, ambas chicas se disponían a salir a la calle cuando se encuentran con el papa de Verónica, un viejo de unos 57 años, de pelo corto entrecano alto de 1.82 cm, panzón y con un rostro de sádico y haragán con una corta barba sin afeitar, demás está decir la cara que puso al ver a la deliciosa Cielo Riveros , ni la borrachera que tenia le impedía notar
a la despampanante chiquilla que se encontraba en su precaria casa.
-- Buenas noches señor… saludo la nena demostrando la atenta educación con la que había sido instruida, en cambio al viejo se le hacía agua la boca al escuchar tan dulce voz… hasta que trajiste una amiga a la casa, zorrita… Cielo Riveros se sorprendió por la manera tan vulgar y soez en que aquel señor se dirigió a su propia hija… -- y como te llamas muchachita preciosa… le pregunto con ojos desorbitados a una nerviosa nena… -- E-Cielo Riveros señor, mucho gusto… el papa de verónica le daba un sorbo largo a su botella de cerveza Corona sin dejar de ver de pies a cabeza a la tímida colegiala… -- pero que bonito nombre… yo soy Manolo a tus ordenes para todo lo que desees preciosa… le dijo extendiéndole la mano a lo cual algo contrariada pero sonriente Cielo Riveros también le ofreció.
Verónica pudo ver como su padre le besaba la mano con un ruidoso y exagerado beso, Cielo Riveros abrió la boca algo sorprendida pero con agrado ante tal atento y cordial saludo siendo esto tomado con celos por Verónica a lo cual decidió interrumpir… -- bueno ya nos vamos, apúrate Cielo Riveros … lo cual molesto a Manolo quien arrugando la frente increpo soezmente a su hija… -- que te pasa zorra… no ves que estamos conociéndonos… la nena se puso más nerviosa al escuchar el maltrato con la que se dirigía a su propia hija.
Don Manolo era un tipo de lo peor, el cual siempre había sido un machista y vividor obligando a su mujer a prostituirse ante sus negativas de ser el mismo quien suministrara de los recursos necesarios para su familia, era tanta su inmoralidad que hasta a su propia hija la presionaba también para que trabajara con su mama, era por eso la conducta rebelde, defensiva y agresiva de Verónica.
Verónica apuro el paso a Cielo Riveros dirigiéndose hacia la salida de la casa sintiendo la nena como el viejo borracho le agarro ligeramente una de sus nalgas sobresaltándola... – No la molestes maldito!!! Le dijo una muy mortificada Verónica cerrando la puerta con fuerza escuchando desde adentro como el viejo la insultaba llamándola putita, perrita y zorra.
Cielo Riveros no dijo nada sintiendo lastima por lo que padecía Verónica quien la acompañaría hasta el paradero de autobuses, en el trayecto algunos chicos vagos y callejeros piropeaban a Cielo Riveros al verla con su caminar cadencioso y su sensual movimiento de trasero… – puedes dejar de mover el culo, mira lo que provocas… la nena algo ruborizada agacho la cabeza inocente de lo que le reclamaba pues ese sensual andar era natural en ella.
Una vez que llego el autobús se despidió de una fría y molesta Verónica subiéndose en el acto, la nena avanzo hasta atrás buscando un asiento solitario pero todos estaban ocupados solo quedaban libres los de dos asientos y como en el medio estaba un grupo de chicos y unas cuantas señoras se fue hasta el asiento de atrás para tratar de cavilar todo lo que aun no recordaba, por mas esfuerzo que hacía no lograba dilucidar lo que le paso, su última imagen era la de Victor evitando que el maestro Tulio la acosara.
Pero muy en el fondo sabia que algo le había ocurrido, su exuberante cuerpo como burlándose de ella le comunicaba a su cerebro de que había sido usado y saciado, ella misma se daba cuenta porque sentía sus pezones irritados al contacto con la tela del vestido y sumado al escozor que sentía en su ano le daba a entender de que en ese momento que no recordaba alguien se había aprovechado de ella, con total tristeza y profunda angustia se lamentaba que le hayan hecho eso, que estúpida era al haber confiado en ese vago maldito del Victor.
La nena recostaba su cabeza en la fría ventana observando las calles con esos preocupantes pensamientos cuando siente que alguien se sienta a su lado, pudo sentir un olor a transpiración, alcohol y a cigarro barato terrible y girándose para ver a su inoportuno acompañante de viaje se encontró con un tipo desagradable, un borracho de unos 40 años, delgado casi como enfermizo, muy ojeroso con un bigote corto pero tupido, llevaba una sudorosa camiseta negra despintada y unos pantalones vaqueros también rasgados por lo viejo, al ver que este la observo con una descarada y escalofriante sonrisa la nena se atemorizo.
-- ho-hola muñeca, un gusto compartir asiento contigo… le dijo el asqueroso tipo acercando su cara sintiendo ella el tufo a alcohol y su desagradable transpiración, Cielo Riveros estaba asustada observo hacia adelante y ya algunos se habían bajado, pudo ver un asiento adelante y pidiendo permiso se dispuso a retirarse pero este no se lo permitió… -- ósea, te saludo con respeto y tú me haces el desplante… -- no… no señor disculpe… solo qui-quiero sentarme adelante…
El asqueroso tipo pudo notar el temor que le infundía a la muy nerviosa chamaca y quiso aprovecharlo y con la más completa majadería tomándola fuertemente del brazo le hablo con tono autoritario… -- siéntate carajo… vamos a conocernos tu y yo… de un jalón la hizo sentarse cayendo sobre el asiento sus par de nalgas asustándola más, la nena no sabía que hacer, si pedir ayuda o gritar, aquellas dudas eran aprovechadas por el borracho quien tomándola de la mano se la beso presentándose… -- me llamo Ramón… a tus or-ordenes preciosa… le dijo con la típica y acostumbrada voz del que esta ebrio.
-- mu-mucho gusto señor… ahora discúlpeme, me tengo que bajar… él para nada tonto de Ramón notaba que le mentía y enfureciéndose más la amenazo con una navaja que llevaba en el bolsillo – oye chamaca mentirosa, tú te quedas aquí conmigo… vamos a conocernos y veras que la pasaremos muy bien… aquella aclaración fue acompañada por una mano acariciando su pierna por debajo del corto vestido, el individuo pudo sentir la deliciosa suavidad de la piel de aquella diosa enervándole los sentidos al máximo… -- hummm pero que lindas y suaves piernas tienes muñeca, qui-quieres ser mi novia…
Estaba de mas decir la completa desesperación que tenia Cielo Riveros sentía un miedo terrible tratando de sacar esa asquerosa y rugosa mano de su pierna pero este le puso el frio metal cerca de su rostro – tranquila amorcito, no me gustaría arruinar esa hermosa carita de ángel que tienes… le dijo el despiadado sujeto tratando de darle un beso que fue rechazado por la nena al sentir el asqueroso aliento que emanaba de su boca.
-- por favor señor… déjeme ir, se lo ruego… le pedía la inocente Cielo Riveros a aquel sujeto que cada vez subía mas sus manos por debajo del vestido, la nena apretaba sus piernas impidiéndole el paso de esa sucia mano pero eso no era la única calamidad que pasaba pues el sujeto le abrió el cierre de la chamarra dejándole ver el escote en donde se encontraban ocultas aquel par de hermosas chichotas… -- huy pero que tenemos aquí, mira estas dos reinas escondidas hummm… el sujeto puso una cara de absoluta impresión al ver el tamaño de esas apetecibles montañas de carne.
Cielo Riveros tragaba saliva presa de la desesperación se sentía a merced de aquel tipejo y sin la esperanza de que alguien la salvara y para su mala suerte el bus iba lento debido al tráfico de la zona ¡¡¡no puede ser, no me puede pasa esto a mi… se decía la pobre nena pensando que en ningún lugar y en ningún momento podría estar a salvo de los sádicos y depravados, su cuerpo parecía un imán que atraía esa clase de tipos.
El borracho hundió su rostro encima de las chichotas de la nena aspirando la fresca fragancia que despedían, acto que hizo que Cielo Riveros aumentara en desesperación – por favor señor, déjeme, no me toque… aquel tipejo estaba muy lejos de hacerle caso enajenado con las deliciosas partes de su joven victima… -- pero que delicia eres chamaca, te voy a llevar a mi casa y te hare el amor como nadie te lo ha hecho, vas a ser mi mujer… escuchar las sucias intenciones del tipejo fue de terror para ella su respiración se volvió más agitada llena de nervios y desesperación.
-- no por favor, se lo ruego déjeme ir por favor, por lo que más quiera… ver esa temerosa pero linda carita era excitante para Ramón, no aguantando las ganas la tomo por el rostro y le robo un ruidoso beso en aquellos carnosos labios, Cielo Riveros reacciono con fuerza echando la cabeza para atrás golpeándose un poco con la ventana, en cambio el borracho aun sentía en sus resecos labios la deliciosa frescura de los labios de la nena – pero que rica eres mamacita… dame otro beso mi amor… le dijo el sujeto acercándose nuevamente a Cielo Riveros quien al tratar de evitarlo aflojo las piernas sintiendo como aquella mano que seguía allí avanzo hasta toparse con su intima parte vaginal.
-- AHH pero mira que putita eres, andando con la panocha al aire… fue hasta allí que se arrepintió de no haber aceptado que Verónica le prestara una prenda, claro que tampoco eso hubiese evitado de las sucias intenciones del sádico sujeto quien con la mayor lascivia sus sucios dedos comenzaron a escarbar en la deliciosa intimidad de la nena… -- NO!!! No por favor, qui-quite sus manos de allí noooo… decía la desesperada chamaca sin siquiera aminorar las sucias intenciones del ebrio Ramón quien ante el fallido intento de besarla le pasaba sus labios por su oreja derecha a punto de activar el lado ansioso de placer que siempre afloraban en ella.
El despiadado ebrio quito sus manos de la panocha de la nena notándolo húmedos por las deliciosas secreciones que chorreaban en ella, con suma morbosidad se las llevo a la nariz oliendo con desquiciante agrado el exquisito aroma que tenían… -- hummm pero que deliciosa eres chamaca, ya verás como en mi casita me tragare todos tus jugos je je, te voy a dejar seca mi amor, hummm huele de tus jugos… Ramón tomándola del rostro le acerco sus húmedos dedos para que la nena oliera de su sabor, Cielo Riveros no podía creer lo bien que olía, era la primera vez que sentía de sus sabores.
Con su bello rostro aun en sus manos Ramón se acerco a ella estampándole nuevamente un aterrorizante beso a la distraída Cielo Riveros quien cerraba sus labios para detener a esa invasora lengua que olía mal y que luchaba por entrar y enredarse con la suya… -- con que te haces la difícil no pendeja, ahora sabrás quien soy yo… la asustada chamaca entro en pánico al notarlo molesto y amenazante, Ramón con la navaja en sus manos la acerco a ella quien se tomo el rostro muerta de miedo momento en el cual este tomo el vestido rasgando el escote que ocultaban sus chichotas.
Pudo ver como aquellos dos majestuosos melones quedaron a la vista hundiendo su calaverico rostro en ellos, uno a uno pasaba de pezón en pezón con hambrientas succiones y lamidas que hacían desesperarse más a la nena quien respiraba agitadamente sintiendo como su cuerpo comenzaba a reaccionar con aquellas salvajes acometidas tratando inútilmente con sus delicadas manos alejarlo de sus chichotas – por… por favor de-dejeme, no si-sigaaa nooo… suplicaba la colegiala con voz baja tratando de no llamar la atención pues se moriría de pena de que los demás pasajeros se diesen cuenta.
-- hummm preciosa que ricas chichotas hummm… una mano se fue deslizando por debajo del vestido para nuevamente comenzar a acariciar aquella poco a poco húmeda intimidad, Cielo Riveros poco a poco comenzaba a perder el control de su cuerpo aquella pestilente lengua subía de sus pechos hasta su cuello para nuevamente bajar y mordisquear suavemente de aquellos erectos pezones, era un intenso ataque que ya no pudo soportar y recostando su cabeza sobre la ventana comenzó a jadear suavemente pero aun tratando de controlarse… -- pa-pare, no si-siga por favooor… de-detengaseee aaahhh…
Aquel sonido fue excitante para Ramón quien levantando su rostro y sin dejar de frotarle la panocha la vio con sus ojos entrecerrados media jadeante, aquello era una imagen única, una hermosa jovencita con los pechos al aire y haciendo gestos de placer gracias a sus sucias manos, pudo sentir como de su verga comenzaban a gotear las primeras gotas del liquido pre seminal… -- Ayy muñequita rica, me tienes a punto de reventar… la nena no le contestaba, solo se encontraba mordiéndose los labios tratando de evitar gemir fuerte por aquella asquerosa mano que en su panocha la hacían sentir deliciosas sensaciones a su traicionero cuerpo.
Aquello ya era desquiciante para Ramón y con la mano que le quedaba libre se abrió el cierre del pantalón sacándose el miembro que se encontraba incomodo en aquel apretado lugar, y tomando a Cielo Riveros de la cabeza la hizo agacharse en dirección a su verga, en ese momento Cielo Riveros recobro un poco de cordura pudiendo sentir el desagradable olor que emanaba del miembro de Ramón, el olor era para vomitar y para su tortura estaba a unos centímetros de su bello rostro.
-- Vamos preciosa… chúpamela, cometela toda… es para ti… la nena no estaba dispuesto a cumplir con tal pedido, sentía ganas de vomitar de tan solo imaginarse dentro de su boca aquella apestosa verga… -- nooo!!! de-dejeme por favor… de-detengaseee… el ebrio y ruin sujeto no estaba dispuesto a quedarse sin las ganas de que la adolescente probara de su verga y con toda su fuerza la inclino mas sintiendo como la punta de su miembro buscaba ingreso por entre los cerrados y carnosos labios.
Tanto era su deseo que apretándole una buena porción de su sedoso cabello le hizo abrir la boca presa del dolor, fue allí que la nena sintió como la asquerosa y maloliente verga ingreso dentro de su fresca boca, el sabor que esta tenia era repugnante, ella trataba de sacarse o expulsar de su boca aquella intrusa verga haciendo delirar mas a Ramón al sentir como esta se frotaba dentro de la cavidad bucal y como la lengua le hacía placenteros masajes en su vano intento por expulsarla… -- AYYY mamazota siiii... sigue así que lo haces bien ahhhh…
Cielo Riveros ya no podía mas, el sabor era asqueroso y con mucho esfuerzo logro sacársela de la boca escupiendo al suelo completamente asqueada, Ramón la seguía teniendo del cabello dominantemente con un rostro de satisfacción… -- que rico la chupas… hazlo de nuevo… la nena lo miro al rostro con signos de asco pero con un rostro de desesperación al sentir que la gente que iba en el bus se paraban algunos para bajarse y otros subían para realizar su viaje… -- Por fa-favor señor ya noooo, aquí noooo por favor… aquella aclaración fue excitante para el borracho quien entendía que aquella hermosa mujer estaría dispuesta a cumplirle sus deseos pero en un lugar más privado y con una cara de satisfacción la soltó del cabello…
Tomándola de la cintura la sentó sobre sus piernas espaldas a él poniéndole la navaja en el cuello y con la otra mano arremetiendo con suaves caricias sobre su deliciosa panocha… -- muy bien chamaca… te vas a portar bien conmigo o te arrepentirás… niégate ahora mismo y te rebano el cuello en este instante entendiste… la nena llena de terror asentía con la cabeza ya sin esperanzas de salvarse de este ruin sujeto quien guardando la navaja se dedico a magrearle las tetas desesperadamente mientras que le decía en la oreja que esta noche la haría suya que la iba a llenar de leche y que pasaría la noche más sabrosa de toda su vida.
Ramón ya no aguantaba, tener entre sus manos a esa maravillosa y deliciosa colegiala dueña de un cuerpo de diosa era para morirse, sus manos nunca habían tocado una piel tan suave y mucho menos unos pechos juveniles que a pesar de su edad serian la envidia de cualquier mujer adulta y Cielo Riveros podía sentir como le llenaba de jugos los dedos del borracho ante tanta caricia, sus pezones estaban parados al máximo sintiendo sobre su cuello y oreja las sucias palabras o intenciones que Ramón le decía que haría.
-- Esta bien… ya no aguanto zorrita, aquí mismo nos bajamos y nos vamos a un motel, te voy a culear hasta que amanezca mi amor… le dijo el asqueroso borracho acercando su repulsivo rostro y dándole un beso en los labios, dirigió su mano acariciándole la vagina y subiéndole el cierre de la chamarra le oculto los expuestos melones… -- ahora si muñeca, tranquilita nos bajaremos y cuidado con hacer algo estúpido porque te rebano el cuello… le dijo con un tono malévolo y despiadado.
Cielo Riveros quien aun respiraba agitada presa del miedo se paro junto a él y caminando hacia adelante se disponían a bajar del autobús, tenía sus lindas mejillas sonrojadas por los forzados estímulos recibidos, recién se daba cuenta lo que le pasaría, nuevamente a merced de un sucio abusivo y sin nadie que la ayudara, ya se imaginaba con terror en algún hotel barato solo de cuatro paredes y un techo con una sucia cama siendo culeada por aquel horrible hombre que si con ropa se le veía delgadamente enfermizo desnudo debería ser más horrible aun.
Sentía la punta de la navaja en su cintura cosa que no le daba valor para pedir ayuda, cuando el bus paro se dio cuenta que estaba a un paradero de su vecindario, Ramón de un ligero empujón la obligo a bajar y cuando eso ocurría un montón de laberintosos chiquillos arremetió en el bus desesperados por subir.
Cielo Riveros ya fuera del bus pudo ver como aquella manada de chavos se llevaron para adentro a su desesperado acosador, rápidamente pensó que al fin la suerte que ya hace mucho la había abandonado se acordó de ella y comenzó a apurar el paso para escapar de su captor chocando con un robusto sujeto, al levantar su rostro pudo ver que se trataba de uno de los pocos policías que custodiaban aquellas calles – hey que te pasa chiquilla, ten cuidado por donde vas… la dulce Cielo Riveros preocupada por el borracho volteo hacia atrás para ver si aun la seguía, viendo como este se volvió a subir al bus atemorizado al verla con un policía.
Ramón no podía creer como se le escapo de sus garras aquel monumento de chiquilla, aun en su borrachera con suma impotencia se lamentaba que aquella horda de escuincles le malograran la mejor noche de sexo que pudo haber tenido en toda su miserable vida… -- pinches chamacos de mierda, pero algún día me la volveré a encontrar en este bus… pensaba muy mortificado volviendo a sentarse en los últimos asientos donde descaradamente se masturbo desparramando de su blanco y amarillento semen sobre los asientos.
Después de que con sumo alivio vio el bus alejarse de ella sintiéndose librada de aquel asqueroso sujeto y disculpándose con el policía Cielo Riveros procedió a caminar con destino a su vecindario, en aquella peligrosas calles la fauna masculina reconocían el sensual caminar del objeto más deseado del barrio, el sueño dorado de muchos, el amor platónico de algunos y la fantasía depravada de todos, cabizbaja iba meditando el suceso pasado en el bus, no entendía como a pesar de que era víctima de un depravado su cuerpo reaccionaba a los estímulos que le daban, ni siquiera prestaba atención a los silbidos y piropos de toda clase que le decían en su sensual trayecto.
Tan distraída en sus confusos pensamientos no se dio cuenta que un grupo de muchachos drogados y callejeros se pusieron en su camino – a dónde vas reina tan solita… no quieres acompañarnos al parque a brindar con nosotros… Cielo Riveros reaccionando se encontró rodeada por aquellos vagos que con total descaro la miraban de pies a cabeza asintiendo en lo buenota que estaba – por favor, permítanme el paso… pedía algo nerviosa y asustada la nena viendo cómo ni se movían un metro.
Tan solo oía las risas y los planes descarados que tenían para ella, eso para la nena ya era demasiado al salir de un problema y entrar en otro y con total indignación grito como nunca lo había hecho… -- ¡¡¡ DEJENME EN PAZ!!!! Aquel grito fue tomado con sorna por aquellos vagos que con risas burlonas le empujaban para todos lados aprovechado algunos en tocarle el trasero…-- tu vendrás con nosotros preciosa, ya verás cómo te divertirás… Cielo Riveros nuevamente sentía que se metía en un problema en el que difícilmente saldría librada cuando en ese momento todos oyeron el estruendoso ruido de un balazo.
Era uno de los matones de Don Lucas quien merodeando por aquellas calles se había percatado de lo que sucedía – Haber pendejos dejen pasar a la señorita y pídanle disculpas… al oírle y reconocerle aquellos cholos vagos agacharon la cabeza permitiéndole el paso a una asustada Cielo Riveros quien con lentos pasos se alejaba oyendo las disculpas de aquellos fumones pero lo que más le dolió fue escuchar lo último que dijo el matón de don Lucas… -- Y recuerden bien pendejos, ella es propiedad de Lucas Guzmán Loera, que no se vuelva a repetir…
Aquella aclaración le dolió en el alma, nuevamente era salvada por quien la violo sin compasión, de aquel sujeto que supuestamente con su madre le pusieron los cuernos a su querido padre, realmente odiaba a Lucas, pues le había robado el último reducto de pureza que tenia, aquel que con amor le quiso entregar a su querido Rodrigo pero más importante para ella había sido mantenérselo intacto para Don Pedro, le asustaba cuando sepa que la perdió. Aquel viejo la tenía en sus manos, tenía pruebas que le arruinarían la vida y su inmaculada reputación y así acongojada se fue en dirección a su casa. CONTINUARA...
Cielo Riveros 33
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Nuevamente el gordo Anselmo comenzó a refregarle la verga en las nalgotas de Cielo Riveros aplastándola contra la pared en donde sus redondas chichotas también se aplastaban como gelatina soportando la presión del Obeso.
Nuevamente Cielo Riveros se veía espectacular con tan sexy y escotado vestido, la noche ya había llegado y hacia un poco de viento, a lo que Verónica le prestó una chamarra de cuero negro que se le ajusto a su cuerpo quedando el vestido como una pequeña minifalda roja que la hacían ver mucho más sensual, ambas chicas se disponían a salir a la calle cuando se encuentran con el papa de Verónica, un viejo de unos 57 años, de pelo corto entrecano alto de 1.82 cm, panzón y con un rostro de sádico y haragán con una corta barba sin afeitar, demás está decir la cara que puso al ver a la deliciosa Cielo Riveros , ni la borrachera que tenia le impedía notar a la despampanante chiquilla que se encontraba en su precaria casa.
-- Buenas noches señor… saludo la nena demostrando la atenta educación con la que había sido instruida, en cambio al viejo se le hacía agua la boca al escuchar tan dulce voz… hasta que trajiste una amiga a la casa, zorrita… Cielo Riveros se sorprendió por la manera tan vulgar y soez en que aquel señor se dirigió a su propia hija… -- y como te llamas muchachita preciosa… le pregunto con ojos desorbitados a una nerviosa nena… -- E-Cielo Riveros señor, mucho gusto… el papa de verónica le daba un sorbo largo a su botella de cerveza Corona sin dejar de ver de pies a cabeza a la tímida colegiala… -- pero que bonito nombre… yo soy Manolo a tus ordenes para todo lo que desees preciosa… le dijo extendiéndole la mano a lo cual algo contrariada pero sonriente Cielo Riveros también le ofreció.
Verónica pudo ver como su padre le besaba la mano con un ruidoso y exagerado beso, Cielo Riveros abrió la boca algo sorprendida pero con agrado ante tal atento y cordial saludo siendo esto tomado con celos por Verónica a lo cual decidió interrumpir… -- bueno ya nos vamos, apúrate Cielo Riveros … lo cual molesto a Manolo quien arrugando la frente increpo soezmente a su hija… -- que te pasa zorra… no ves que estamos conociéndonos… la nena se puso más nerviosa al escuchar el maltrato con la que se dirigía a su propia hija.
Don Manolo era un tipo de lo peor, el cual siempre había sido un machista y vividor obligando a su mujer a prostituirse ante sus negativas de ser el mismo quien suministrara de los recursos necesarios para su familia, era tanta su inmoralidad que hasta a su propia hija la presionaba también para que trabajara con su mama, era por eso la conducta rebelde, defensiva y agresiva de Verónica.
Verónica apuro el paso a Cielo Riveros dirigiéndose hacia la salida de la casa sintiendo la nena como el viejo borracho le agarro ligeramente una de sus nalgas sobresaltándola... – No la molestes maldito!!! Le dijo una muy mortificada Verónica cerrando la puerta con fuerza escuchando desde adentro como el viejo la insultaba llamándola putita, perrita y zorra.
Cielo Riveros no dijo nada sintiendo lastima por lo que padecía Verónica quien la acompañaría hasta el paradero de autobuses, en el trayecto algunos chicos vagos y callejeros piropeaban a Cielo Riveros al verla con su caminar cadencioso y su sensual movimiento de trasero… – puedes dejar de mover el culo, mira lo que provocas… la nena algo ruborizada agacho la cabeza inocente de lo que le reclamaba pues ese sensual andar era natural en ella.
Una vez que llego el autobús se despidió de una fría y molesta Verónica subiéndose en el acto, la nena avanzo hasta atrás buscando un asiento solitario pero todos estaban ocupados solo quedaban libres los de dos asientos y como en el medio estaba un grupo de chicos y unas cuantas señoras se fue hasta el asiento de atrás para tratar de cavilar todo lo que aun no recordaba, por mas esfuerzo que hacía no lograba dilucidar lo que le paso, su última imagen era la de Victor evitando que el maestro Tulio la acosara.
Pero muy en el fondo sabia que algo le había ocurrido, su exuberante cuerpo como burlándose de ella le comunicaba a su cerebro de que había sido usado y saciado, ella misma se daba cuenta porque sentía sus pezones irritados al contacto con la tela del vestido y sumado al escozor que sentía en su ano le daba a entender de que en ese momento que no recordaba alguien se había aprovechado de ella, con total tristeza y profunda angustia se lamentaba que le hayan hecho eso, que estúpida era al haber confiado en ese vago maldito del Victor.
La nena recostaba su cabeza en la fría ventana observando las calles con esos preocupantes pensamientos cuando siente que alguien se sienta a su lado, pudo sentir un olor a transpiración, alcohol y a cigarro barato terrible y girándose para ver a su inoportuno acompañante de viaje se encontró con un tipo desagradable, un borracho de unos 40 años, delgado casi como enfermizo, muy ojeroso con un bigote corto pero tupido, llevaba una sudorosa camiseta negra despintada y unos pantalones vaqueros también rasgados por lo viejo, al ver que este la observo con una descarada y escalofriante sonrisa la nena se atemorizo.
-- ho-hola muñeca, un gusto compartir asiento contigo… le dijo el asqueroso tipo acercando su cara sintiendo ella el tufo a alcohol y su desagradable transpiración, Cielo Riveros estaba asustada observo hacia adelante y ya algunos se habían bajado, pudo ver un asiento adelante y pidiendo permiso se dispuso a retirarse pero este no se lo permitió… -- ósea, te saludo con respeto y tú me haces el desplante… -- no… no señor disculpe… solo qui-quiero sentarme adelante…
El asqueroso tipo pudo notar el temor que le infundía a la muy nerviosa chamaca y quiso aprovecharlo y con la más completa majadería tomándola fuertemente del brazo le hablo con tono autoritario… -- siéntate carajo… vamos a conocernos tu y yo… de un jalón la hizo sentarse cayendo sobre el asiento sus par de nalgas asustándola más, la nena no sabía que hacer, si pedir ayuda o gritar, aquellas dudas eran aprovechadas por el borracho quien tomándola de la mano se la beso presentándose… -- me llamo Ramón… a tus or-ordenes preciosa… le dijo con la típica y acostumbrada voz del que esta ebrio.
-- mu-mucho gusto señor… ahora discúlpeme, me tengo que bajar… él para nada tonto de Ramón notaba que le mentía y enfureciéndose más la amenazo con una navaja que llevaba en el bolsillo – oye chamaca mentirosa, tú te quedas aquí conmigo… vamos a conocernos y veras que la pasaremos muy bien… aquella aclaración fue acompañada por una mano acariciando su pierna por debajo del corto vestido, el individuo pudo sentir la deliciosa suavidad de la piel de aquella diosa enervándole los sentidos al máximo… -- hummm pero que lindas y suaves piernas tienes muñeca, qui-quieres ser mi novia…
Estaba de mas decir la completa desesperación que tenia Cielo Riveros sentía un miedo terrible tratando de sacar esa asquerosa y rugosa mano de su pierna pero este le puso el frio metal cerca de su rostro – tranquila amorcito, no me gustaría arruinar esa hermosa carita de ángel que tienes… le dijo el despiadado sujeto tratando de darle un beso que fue rechazado por la nena al sentir el asqueroso aliento que emanaba de su boca.
-- por favor señor… déjeme ir, se lo ruego… le pedía la inocente Cielo Riveros a aquel sujeto que cada vez subía mas sus manos por debajo del vestido, la nena apretaba sus piernas impidiéndole el paso de esa sucia mano pero eso no era la única calamidad que pasaba pues el sujeto le abrió el cierre de la chamarra dejándole ver el escote en donde se encontraban ocultas aquel par de hermosas chichotas… -- huy pero que tenemos aquí, mira estas dos reinas escondidas hummm… el sujeto puso una cara de absoluta impresión al ver el tamaño de esas apetecibles montañas de carne.
Cielo Riveros tragaba saliva presa de la desesperación se sentía a merced de aquel tipejo y sin la esperanza de que alguien la salvara y para su mala suerte el bus iba lento debido al tráfico de la zona ¡¡¡no puede ser, no me puede pasa esto a mi… se decía la pobre nena pensando que en ningún lugar y en ningún momento podría estar a salvo de los sádicos y depravados, su cuerpo parecía un imán que atraía esa clase de tipos.
El borracho hundió su rostro encima de las chichotas de la nena aspirando la fresca fragancia que despedían, acto que hizo que Cielo Riveros aumentara en desesperación – por favor señor, déjeme, no me toque… aquel tipejo estaba muy lejos de hacerle caso enajenado con las deliciosas partes de su joven victima… -- pero que delicia eres chamaca, te voy a llevar a mi casa y te hare el amor como nadie te lo ha hecho, vas a ser mi mujer… escuchar las sucias intenciones del tipejo fue de terror para ella su respiración se volvió más agitada llena de nervios y desesperación.
-- no por favor, se lo ruego déjeme ir por favor, por lo que más quiera… ver esa temerosa pero linda carita era excitante para Ramón, no aguantando las ganas la tomo por el rostro y le robo un ruidoso beso en aquellos carnosos labios, Cielo Riveros reacciono con fuerza echando la cabeza para atrás golpeándose un poco con la ventana, en cambio el borracho aun sentía en sus resecos labios la deliciosa frescura de los labios de la nena – pero que rica eres mamacita… dame otro beso mi amor… le dijo el sujeto acercándose nuevamente a Cielo Riveros quien al tratar de evitarlo aflojo las piernas sintiendo como aquella mano que seguía allí avanzo hasta toparse con su intima parte vaginal.
-- AHH pero mira que putita eres, andando con la panocha al aire… fue hasta allí que se arrepintió de no haber aceptado que Verónica le prestara una prenda, claro que tampoco eso hubiese evitado de las sucias intenciones del sádico sujeto quien con la mayor lascivia sus sucios dedos comenzaron a escarbar en la deliciosa intimidad de la nena… -- NO!!! No por favor, qui-quite sus manos de allí noooo… decía la desesperada chamaca sin siquiera aminorar las sucias intenciones del ebrio Ramón quien ante el fallido intento de besarla le pasaba sus labios por su oreja derecha a punto de activar el lado ansioso de placer que siempre afloraban en ella.
El despiadado ebrio quito sus manos de la panocha de la nena notándolo húmedos por las deliciosas secreciones que chorreaban en ella, con suma morbosidad se las llevo a la nariz oliendo con desquiciante agrado el exquisito aroma que tenían… -- hummm pero que deliciosa eres chamaca, ya verás como en mi casita me tragare todos tus jugos je je, te voy a dejar seca mi amor, hummm huele de tus jugos… Ramón tomándola del rostro le acerco sus húmedos dedos para que la nena oliera de su sabor, Cielo Riveros no podía creer lo bien que olía, era la primera vez que sentía de sus sabores.
Con su bello rostro aun en sus manos Ramón se acerco a ella estampándole nuevamente un aterrorizante beso a la distraída Cielo Riveros quien cerraba sus labios para detener a esa invasora lengua que olía mal y que luchaba por entrar y enredarse con la suya… -- con que te haces la difícil no pendeja, ahora sabrás quien soy yo… la asustada chamaca entro en pánico al notarlo molesto y amenazante, Ramón con la navaja en sus manos la acerco a ella quien se tomo el rostro muerta de miedo momento en el cual este tomo el vestido rasgando el escote que ocultaban sus chichotas.
Pudo ver como aquellos dos majestuosos melones quedaron a la vista hundiendo su calaverico rostro en ellos, uno a uno pasaba de pezón en pezón con hambrientas succiones y lamidas que hacían desesperarse más a la nena quien respiraba agitadamente sintiendo como su cuerpo comenzaba a reaccionar con aquellas salvajes acometidas tratando inútilmente con sus delicadas manos alejarlo de sus chichotas – por… por favor de-dejeme, no si-sigaaa nooo… suplicaba la colegiala con voz baja tratando de no llamar la atención pues se moriría de pena de que los demás pasajeros se diesen cuenta.
-- hummm preciosa que ricas chichotas hummm… una mano se fue deslizando por debajo del vestido para nuevamente comenzar a acariciar aquella poco a poco húmeda intimidad, Cielo Riveros poco a poco comenzaba a perder el control de su cuerpo aquella pestilente lengua subía de sus pechos hasta su cuello para nuevamente bajar y mordisquear suavemente de aquellos erectos pezones, era un intenso ataque que ya no pudo soportar y recostando su cabeza sobre la ventana comenzó a jadear suavemente pero aun tratando de controlarse… -- pa-pare, no si-siga por favooor… de-detengaseee aaahhh…
Aquel sonido fue excitante para Ramón quien levantando su rostro y sin dejar de frotarle la panocha la vio con sus ojos entrecerrados media jadeante, aquello era una imagen única, una hermosa jovencita con los pechos al aire y haciendo gestos de placer gracias a sus sucias manos, pudo sentir como de su verga comenzaban a gotear las primeras gotas del liquido pre seminal… -- Ayy muñequita rica, me tienes a punto de reventar… la nena no le contestaba, solo se encontraba mordiéndose los labios tratando de evitar gemir fuerte por aquella asquerosa mano que en su panocha la hacían sentir deliciosas sensaciones a su traicionero cuerpo.
Aquello ya era desquiciante para Ramón y con la mano que le quedaba libre se abrió el cierre del pantalón sacándose el miembro que se encontraba incomodo en aquel apretado lugar, y tomando a Cielo Riveros de la cabeza la hizo agacharse en dirección a su verga, en ese momento Cielo Riveros recobro un poco de cordura pudiendo sentir el desagradable olor que emanaba del miembro de Ramón, el olor era para vomitar y para su tortura estaba a unos centímetros de su bello rostro.
-- Vamos preciosa… chúpamela, cometela toda… es para ti… la nena no estaba dispuesto a cumplir con tal pedido, sentía ganas de vomitar de tan solo imaginarse dentro de su boca aquella apestosa verga… -- nooo!!! de-dejeme por favor… de-detengaseee… el ebrio y ruin sujeto no estaba dispuesto a quedarse sin las ganas de que la adolescente probara de su verga y con toda su fuerza la inclino mas sintiendo como la punta de su miembro buscaba ingreso por entre los cerrados y carnosos labios.
Tanto era su deseo que apretándole una buena porción de su sedoso cabello le hizo abrir la boca presa del dolor, fue allí que la nena sintió como la asquerosa y maloliente verga ingreso dentro de su fresca boca, el sabor que esta tenia era repugnante, ella trataba de sacarse o expulsar de su boca aquella intrusa verga haciendo delirar mas a Ramón al sentir como esta se frotaba dentro de la cavidad bucal y como la lengua le hacía placenteros masajes en su vano intento por expulsarla… -- AYYY mamazota siiii... sigue así que lo haces bien ahhhh…
Cielo Riveros ya no podía mas, el sabor era asqueroso y con mucho esfuerzo logro sacársela de la boca escupiendo al suelo completamente asqueada, Ramón la seguía teniendo del cabello dominantemente con un rostro de satisfacción… -- que rico la chupas… hazlo de nuevo… la nena lo miro al rostro con signos de asco pero con un rostro de desesperación al sentir que la gente que iba en el bus se paraban algunos para bajarse y otros subían para realizar su viaje… -- Por fa-favor señor ya noooo, aquí noooo por favor… aquella aclaración fue excitante para el borracho quien entendía que aquella hermosa mujer estaría dispuesta a cumplirle sus deseos pero en un lugar más privado y con una cara de satisfacción la soltó del cabello…
Tomándola de la cintura la sentó sobre sus piernas espaldas a él poniéndole la navaja en el cuello y con la otra mano arremetiendo con suaves caricias sobre su deliciosa panocha… -- muy bien chamaca… te vas a portar bien conmigo o te arrepentirás… niégate ahora mismo y te rebano el cuello en este instante entendiste… la nena llena de terror asentía con la cabeza ya sin esperanzas de salvarse de este ruin sujeto quien guardando la navaja se dedico a magrearle las tetas desesperadamente mientras que le decía en la oreja que esta noche la haría suya que la iba a llenar de leche y que pasaría la noche más sabrosa de toda su vida.
Ramón ya no aguantaba, tener entre sus manos a esa maravillosa y deliciosa colegiala dueña de un cuerpo de diosa era para morirse, sus manos nunca habían tocado una piel tan suave y mucho menos unos pechos juveniles que a pesar de su edad serian la envidia de cualquier mujer adulta y Cielo Riveros podía sentir como le llenaba de jugos los dedos del borracho ante tanta caricia, sus pezones estaban parados al máximo sintiendo sobre su cuello y oreja las sucias palabras o intenciones que Ramón le decía que haría.
-- Esta bien… ya no aguanto zorrita, aquí mismo nos bajamos y nos vamos a un motel, te voy a culear hasta que amanezca mi amor… le dijo el asqueroso borracho acercando su repulsivo rostro y dándole un beso en los labios, dirigió su mano acariciándole la vagina y subiéndole el cierre de la chamarra le oculto los expuestos melones… -- ahora si muñeca, tranquilita nos bajaremos y cuidado con hacer algo estúpido porque te rebano el cuello… le dijo con un tono malévolo y despiadado.
Cielo Riveros quien aun respiraba agitada presa del miedo se paro junto a él y caminando hacia adelante se disponían a bajar del autobús, tenía sus lindas mejillas sonrojadas por los forzados estímulos recibidos, recién se daba cuenta lo que le pasaría, nuevamente a merced de un sucio abusivo y sin nadie que la ayudara, ya se imaginaba con terror en algún hotel barato solo de cuatro paredes y un techo con una sucia cama siendo culeada por aquel horrible hombre que si con ropa se le veía delgadamente enfermizo desnudo debería ser más horrible aun.
Sentía la punta de la navaja en su cintura cosa que no le daba valor para pedir ayuda, cuando el bus paro se dio cuenta que estaba a un paradero de su vecindario, Ramón de un ligero empujón la obligo a bajar y cuando eso ocurría un montón de laberintosos chiquillos arremetió en el bus desesperados por subir.
Cielo Riveros ya fuera del bus pudo ver como aquella manada de chavos se llevaron para adentro a su desesperado acosador, rápidamente pensó que al fin la suerte que ya hace mucho la había abandonado se acordó de ella y comenzó a apurar el paso para escapar de su captor chocando con un robusto sujeto, al levantar su rostro pudo ver que se trataba de uno de los pocos policías que custodiaban aquellas calles – hey que te pasa chiquilla, ten cuidado por donde vas… la dulce Cielo Riveros preocupada por el borracho volteo hacia atrás para ver si aun la seguía, viendo como este se volvió a subir al bus atemorizado al verla con un policía.
Ramón no podía creer como se le escapo de sus garras aquel monumento de chiquilla, aun en su borrachera con suma impotencia se lamentaba que aquella horda de escuincles le malograran la mejor noche de sexo que pudo haber tenido en toda su miserable vida… -- pinches chamacos de mierda, pero algún día me la volveré a encontrar en este bus… pensaba muy mortificado volviendo a sentarse en los últimos asientos donde descaradamente se masturbo desparramando de su blanco y amarillento semen sobre los asientos.
Después de que con sumo alivio vio el bus alejarse de ella sintiéndose librada de aquel asqueroso sujeto y disculpándose con el policía Cielo Riveros procedió a caminar con destino a su vecindario, en aquella peligrosas calles la fauna masculina reconocían el sensual caminar del objeto más deseado del barrio, el sueño dorado de muchos, el amor platónico de algunos y la fantasía depravada de todos, cabizbaja iba meditando el suceso pasado en el bus, no entendía como a pesar de que era víctima de un depravado su cuerpo reaccionaba a los estímulos que le daban, ni siquiera prestaba atención a los silbidos y piropos de toda clase que le decían en su sensual trayecto.
Tan distraída en sus confusos pensamientos no se dio cuenta que un grupo de muchachos drogados y callejeros se pusieron en su camino – a dónde vas reina tan solita… no quieres acompañarnos al parque a brindar con nosotros… Cielo Riveros reaccionando se encontró rodeada por aquellos vagos que con total descaro la miraban de pies a cabeza asintiendo en lo buenota que estaba – por favor, permítanme el paso… pedía algo nerviosa y asustada la nena viendo cómo ni se movían un metro.
Tan solo oía las risas y los planes descarados que tenían para ella, eso para la nena ya era demasiado al salir de un problema y entrar en otro y con total indignación grito como nunca lo había hecho… -- ¡¡¡ DEJENME EN PAZ!!!! Aquel grito fue tomado con sorna por aquellos vagos que con risas burlonas le empujaban para todos lados aprovechado algunos en tocarle el trasero…-- tu vendrás con nosotros preciosa, ya verás cómo te divertirás… Cielo Riveros nuevamente sentía que se metía en un problema en el que difícilmente saldría librada cuando en ese momento todos oyeron el estruendoso ruido de un balazo.
Era uno de los matones de Don Lucas quien merodeando por aquellas calles se había percatado de lo que sucedía – Haber pendejos dejen pasar a la señorita y pídanle disculpas… al oírle y reconocerle aquellos cholos vagos agacharon la cabeza permitiéndole el paso a una asustada Cielo Riveros quien con lentos pasos se alejaba oyendo las disculpas de aquellos fumones pero lo que más le dolió fue escuchar lo último que dijo el matón de don Lucas… -- Y recuerden bien pendejos, ella es propiedad de Lucas Guzmán Loera, que no se vuelva a repetir…
Aquella aclaración le dolió en el alma, nuevamente era salvada por quien la violo sin compasión, de aquel sujeto que supuestamente con su madre le pusieron los cuernos a su querido padre, realmente odiaba a Lucas, pues le había robado el último reducto de pureza que tenia, aquel que con amor le quiso entregar a su querido Rodrigo pero más importante para ella había sido mantenérselo intacto para Don Pedro, le asustaba cuando sepa que la perdió. Aquel viejo la tenía en sus manos, tenía pruebas que le arruinarían la vida y su inmaculada reputación y así acongojada se fue en dirección a su casa.
CONTINUACION DE LAS AVENTURAS DE CIELO RIVEROS PARA LOS QUE NESECITEN REFRESCAR LA MEMORIA…
Para esos momentos está claro recordar el enojo, impotencia y reproches que le daba el maestro Tulio a un muy desencajado cojo Juan que se preguntaba cómo es que la colegiala había podido salir del cuartucho y lo peor de todo que hasta la cámara se había llevado, habían perdido su oportunidad de tenerla para siempre de esclava sexual… -- eres un idiota pinche cojo… le decía muy molesto el profesor Tulio quien era el que más lamentaba lo ocurrido… -- pero ya verá esa chiquilla cuando la vea… eran las palabras del impotente y frustrado maestro jurándosela a la pobre e inocente colegiala.
Pero para esos momentos muy alejada de aquellos dos viejos Cielo Riveros llegaba a su casa pero no por eso sus calamidades acabarían pues en su triste andar llegaba al edificio donde vivía pudiendo escuchar el jolgorio y groserías que venían de la cantina de don Lucas, muy preocupada porque uno de estos viejos saliera rápidamente se adentro subiendo la larga escalera cuando a mitad de esta se encuentra con la obesa figura de Anselmo, la nena se quedo paralizada llena de miedo al ver como este gordo viejo se acercaba hacia ella bajando peldaño a peldaño de la solitaria escalera.
La luz que alumbraba aquella desolada zona era lúgubre con olores de humedad y paredes pintadas con grafitis, ella quería retroceder y huir pero el temor era demasiado cuando en eso oye la horrible voz del viejo… -- Hola niña preciosa… de dónde vienes tan linda je je… la nena no le respondió, pero con total indignación y molestia quiso proseguir con su camino… -- per-permiso por favor… la muy inocente Cielo Riveros justo al pasar por su lado le da la espalda sintiendo al instante como este arremetió contra ella aplastándola contra la pared.
Cabe resaltar que la nena se sentía aplastada por el enorme peso del obeso sujeto sintiendo sobre sus duras y portentosas nalgas la dura erección de aquel grueso miembro que ya una vez había entrado dentro de ella y sobre su nuca sentía el fuerte aliento a alcohol que despedía el viejo. No tenía fuerzas para librarse, aquel gordo sujeto era demasiado fuerte y pesado tan solo apoyaba sus manos sobre la pared tratando de empujar hacia atrás al viejo logrando solo excitarlo más al extasiado Anselmo.
-- déjeme, déjeme ir… sueltemeeeee… pedía la desesperada nena sintiendo como Anselmo con una mano le acariciaba las piernas subiéndole el vestido tratando de llegar hacia su deliciosa panocha… -- NO!!! No por favor, quíteme las manos nooooo!!!! El gordo viejo solo sonreía emocionado y ansioso de disfrutar de aquella deliciosa y hermosa adolescente… -- je je silencio mamazota… o nos escucharan tus vecinos, tu solo déjate disfrutar jejeje…
La angustiada colegiala abrió grande sus ojos verdes al darse cuenta donde estaba, en cualquier momento algún vecino o amigo de ella podría encontrarla en aquella situación comprometedora, que vergüenza seria para ella si la vieran con aquel viejo horrible y tontamente dejo de hacer bulla dejando caer sus manos como entregándose a los deseos de aquel viejo obeso… -- -humm ya ves ricura… ahora si vas a disfrutar de una verga como tanto te gusta…
Ella aun no claudicaba en su lucha por liberarse de las sucias garras del vejete y respondiéndole en voz baja le pedía que la dejara ir… -- de-dejeme por favor señor, no me haga nada… pero Anselmo estaba lejos de hacerle caso, no perdería la oportunidad de comerse a la chiquilla por nada del mundo, había ansiado volverla a tocar desde aquella noche que junto a Lucas abusaron de ella y este era su momento.
Nuevamente comenzó a refregarle la verga en las nalgotas de Cielo Riveros aplastándola contra la pared en donde sus redondas chichotas también se aplastaban como gelatina soportando la presión de aquel obeso, era un ir y venir de fuertes estocadas sobre sus nalgas solo cubiertas por la delgada y suave tela del pequeño vestido, pensaba con miedo que cuando el viejo se de cuenta de que no llevaba ropa interior seria el comienzo de una nueva pesadilla de sexo no consentido para ella.
-- Ay mamazota, que rico culo te manejas, siempre supe que eras una putita y que te gusta la verga… decía un excitado Anselmo frotándole la verga, aquel rechoncho miembro que ya soltaba sus primeras gotas de lubricación, en cambio la nena se desesperaba al oírle como este aseguraba que ella era una cualquiera, una putita de callejón hambrienta de sexo, se sentía mal y a su vez lo detestaba por tal aseveración… -- NOOO!!! No es cierto… usted es un desgraciado, déjeme ir… el vil y sonriente viejo era indiferente a los reclamos de la colegiala solo disfrutaba de su cuerpo y de la deliciosa fragancia que despedía ella.
Con mucha lascivia sus manos comenzaron a acariciarle ambas piernas corriendo el vestido hacia arriba, ella en un acto de defensa le tomo ambas manos en un inútil intento por detenerlo, a lo cual Anselmo dirigió su apestosa boca en el desprotegido cuello comenzando a darle ligeros mordiscos, en ese momento Cielo Riveros se estremeció, aquella zona de su cuerpo ya era conocida como el punto de inicio de la entrega de su cuerpo… -- nooo por favor!!! Suélteme, déjeme ir… gimoteaba la colegiala sintiendo ligeros escalofríos al sentir esa asquerosa lengua deslizarse desde su cuello hasta el lóbulo de su oreja izquierda.
Con mucha angustia tragaba saliva sintiendo como nuevamente la vida la ponía en una situación caliente y con este horrible ser, sus intentos de lucha y por zafarse de las garra de Anselmo eran inútiles claramente sentía como el duro miembro de aquel gordo se metía entre sus nalgas por encima de la delgada tela del vestido y ante la ausencia de su prenda intima era mucho más notoria el sentir de la dura y empalmada verga… -- siente mi verga ricura… está loco por meterse dentro de ti, te ha extrañado muchísimo…
Anselmo seguía fuera de control con sus incansables embistes, tenía la verga por reventar y sin siquiera haberla penetrado y su lengua aun seguía con el incesante ataque al sensible cuello, a la fuerza quería voltearle el rostro y probar de aquellos carnosos labios pero Cielo Riveros aun se resistía, se encontraba algo agitada puesto que aquel viejo le estaba atacando en aquella zona tan sensible para ella, quería luchar contra sus instintos de mujer lujuriosa pero siempre perdía esa batalla, las punteadas que la deba en sus duras nalgas y aquel ataque que sufría en su cuello y oreja eran demasiadas.
Cielo Riveros no podía resistir mas aquellas sensaciones, ya habían pasado minutos tratando de concentrarse y de tratar de no sentir como aquella rasposa lengua le hacían erizar su tersa piel, sentía que cada vez perdía la lucha contra el placer y la excitación.
En ese momento todo se le junto y aunque no recordaba que le paso en la escuela sabia que por lo irritado de sus pezones y el delicioso escozor que sentía en el ano se habían aprovechado de ella y el tratar de imaginarse quien fue la puso excitada y sumado a la corta experiencia que le hizo pasar aquel borracho en el bus donde también cayo rendida y entregada ante sus lascivos ataques la excitaron, se imaginaba que de no ser por aquellos revoltosos chavos o por el inoportuno policía en estos momentos estaría revolcándose con aquel desgarbado y desagradable sujeto en algún motel de mala muerte o en todo caso estaría en algún solitario parque con aquella horda de drogadictos muchachos que la rodearon en aquella calle, imaginarse siendo tocada por todos ellos y rodeada de tantas vergas la puso aun más caliente.
Pero muy en el fondo se preguntaba que le pasaba, porque tenía esos pensamientos tan denigrantes y pecaminosos, solo podía escuchar como de su boca salían unos leves gemidos de placer, muy enajenada en sus pensamientos no se había dado cuenta que Anselmo ya le estaba metiendo unos dedos en su encharcada vagina… -- huy putita… andando sin nada dentro je je se ve que vienes de coger con el estúpido de Rodriguito jeje…
-- por…por favor… no…no sigaaa ahhhh… Anselmo no podía creer como tan rápido ya había calentado a la nena, podía sentir como ya no daba muestras de lucha ante sus acometidas y dándose un respiro la sujeto por la cintura y sin sacarle la otra mano de la panocha retrocedió apoyando su ancha espalda contra la pared, sus dedos seguían introduciéndose dentro de ella sintiendo como ardían al contacto de lo calientes fluidos que ella soltaba, la nena dejo caer su cabecita hacia un lado dándose el gusto de sentir aquella rasposa lengua lamerle el cuello.
Al ya notarla rendida Anselmo deslizo el cierre de la chamarra abriéndola por completo y su asombro fue mayor al poderle ver por encima de su hombro como aquellas dos majestuosas chichotas estaban al aire y con el vestido rasgado… -- je je me sorprendes zorra… te haces la monjita pero eres tremenda puta, saliendo a la calle de esta manera jejeje… Cielo Riveros ya no sentía ofensa al oírle decir aquellas sucias palabras, estaba más concentrada en sentir placer, en desquitarse ese fuego inmenso que tenia por dentro aun si aborrecía al gordo y viejo sujeto.
-- Ay zorrita eres igual de puta que tu madre jejeje… nuevamente le llegaba a sus odios ofensivas aseveraciones sobre su querida madre, aun en su estado de excitación le molestaba que se refieran así de su progenitora… -- nooo!!!! Mi ma-madreee no es una pu-puutaa… reclamaba la colegiala defendiendo el honor de su madre, en cambio Anselmo solo reía siguiendo con sus besos y succiones en el cuello para evitar que se enfrié – jeje ay mamazota si tú supieras las tremendas pajas que me hacia viéndolos fornicar… Cielo Riveros sintió un estremecimiento en su vientre al darse cuenta de que este viejo había sido testigo de la traición que su madre le había hecho a su padre.
-- me-mentira… us-usteedd mienteee… Anselmo con ambas manos comenzó a amasar aquellas dos montañas de carne que tenia por senos pellizcando con cierta sutileza los endurecidos pezones… pero en ese momento comenzó a sonar su celular, sabía muy bien que era Lucas el que llamaba con insistencia… -- Ay putita es verdad lo que te digo, tu madre y el Lucas le ponía los cuernos al buena gente de tu padre jejeje… hasta un video tengo de una de esas cogidas que se metían…
Nuevamente Anselmo la apretó contra la pared en donde sus redondas chichotas se aplastaron contra la fría y sucia pared sin dejar de presionar con su empalmado miembro sobre sus nalgas como recordándole el tamaño y grosor que este tenía… -- jeje muy bien zorrita, me tengo que ir, pero si quieres ver como tu mama y el Lucas cogían como animales tu avísame jeje… claro que antes tendrás que portarte muy bien conmigo y entregarte como la putita que eres, jejeje espero pronto que te decidas… y diciendo esto último el obeso sujeto se dirigió con prisa ante el llamado de Lucas dándole una fuerte palmada en las nalgas que se pudo haber oído en todo el edificio dejando a una extasiada y confundida Cielo Riveros apoyada contra la pared.
Veía con la respiración agitada como aquel repugnante y adiposo viejo se iba riéndose con la seguridad de que ella accedería a sus asquerosas intenciones y cerrándose la chamarra se dirigió a su hogar rápidamente temerosa de que en tan sola corta distancia pueda ser víctima nuevamente de algún aprovechador.
Ya una vez en la seguridad de su habitación se miraba en el espejo, por suerte no había nadie al otro lado viéndola, quitándose la ajena chamarra pudo ver como sus pechos quedaron al aire por el rasgado que le dio aquel asqueroso borracho, pudo notar algunas marcas de mordidas y la ligera humedad que le dieron, se quito el vestido arrojándolo al piso observando las perfectas y esculturales curvas de su cuerpo, pensaba con cólera como había reaccionado ante los toqueteos, primero con aquel asqueroso borracho en el bus, luego estaban aquellos vagos que la tocaron a empujones y por ultimo don Anselmo.
Eso es lo que más le molestaba y mas al saber que este tenía pruebas comprometedoras de su madre, pero no se creía capaz de acceder al chantaje de este, por nada del mundo se entregaría a ese viejo que tanto odiaba, apretaba los puños muy molesta solo de pensar como la toco, todo esto sin dejar de mirarse al espejo impotente de poder detener las sucias intenciones que siempre tienen con ella, las marcas en su cuerpo eran una tortura para ella lo que la animo a darse nuevamente una ducha bien fría.
Rato después ya se encontraba sentada en su cama tan solo con una pequeña pantaloneta que se le ajustaba perfectamente y una pequeña playera que usaba para dormir, asimilando todo lo vivido en el día, como unos flashazos se le venía a la mente los últimos momentos antes de perder la razón, recordaba como tontamente se confió de Victor y bebió de cierta bebida que le ofreció y también como luego se encontraba desnuda en la ducha con Verónica, pensaba en lo buena que fue al ayudarla.
Sus labios esbozaron una pequeña sonrisa al recordar como el padre de Verónica le beso la mano con tal cordial saludo a pesar que era un tipo vulgar y alcohólico le pareció agradable aun si este tipo le toco sus nalgas pero a su vez sentía lastima por como trataba a su propia hija, pensaba que ella no era la única que sufría en la vida pero soñando con que alguna vez sería una profesional y se llevaría de aquel peligroso y pobre vecindario a su madre y porque no ayudar también a la pobre Verónica de quien pensaba en estos momentos estaría sufriendo de los insultos y acosos de su padre no sabiendo que para esos momentos Verónica se encontraba encerrada en su habitación con las piernas abiertas acariciándose la vagina muy agitada viendo una y otra vez el video en donde el cojo se la había follado toda la tarde.
Cielo Riveros estaba a punto de dormirse cuando suena su celular… -- -si… diga… -- Hola Evi… soy Emilio, te llamaba para recordarte que mañana almorzamos juntos… la nena no pudo evitar un suspiro a su vez sorprendida por aquella llamada, con todo el ajetreo del día se había olvidado que tenía que salir con Don Emilio, el padre de su mejor amiga… -- EH!! Si Don Emilio, mañana estaré con usted… Emilio no pudo evitar sobarse el miembro al escuchar esa dulce voz asegurarle que mañana estaría con el… -- Muy bien Evi… yo te llamo mañana para recogerte, que duermas bien… -- igualmente Don Emilio… buenas noches…
Cielo Riveros estaba emocionada aquella llamada le había alegrado el día, se recostó en su cama pensando en su salida con aquel hombre maduro, pero también pensaba si estaba bien lo que hacía, aquel señor era el padre de Claudia, su mejor amiga, no podía hacerle eso; aunque también se decía que no tenía nada de malo, don Emilio solo quería conversar acerca de su hija, sería solo una salida tranquila, sus ojitos ya se les cerraban cuando oye de nuevo el timbre de su celular. Emocionada pensando que sería nuevamente Don Emilio cogió su celular viendo que se trataba de Rodrigo.
-- Alo… mi amor como estas… la nena se sintió mal, su querido novio la llamaba con tanto amor y ella pensando en otro, no podía ser tan mala pensaba… -- EH si Rodri… ya estaba por dormirme… -- mi amor… te invito a almorzar mañana en mi casa…aquella invitación no le cayó bien a Cielo Riveros porque a esas horas tendría que salir con Don Emilio, tendría que buscar la manera de no aceptar la invitación… -- Ay Rodrigo… no creo que pueda, tal vez el domingo si… del otro lado del teléfono Rodrigo le comunicaba a su malvado padrastro que su bella novia no podría a lo cual este le quito el teléfono siendo el mismo quien ofrecería la invitación.
-- Hola Cielo Riveros , te esperamos mañana en nuestro humilde hogar… la nena se sorprendió al oír la ronca voz del padrastro… -- Como esta Don Severiano… pero la verdad ya le dije a Rodrigo que no se si mi madre me dará permiso… -- Bueno en ese caso yo mismo iré para hablar con tu mama y asunto arreglado… Cielo Riveros se puso nerviosa, de ninguna manera podía permitir que aquel viejo viniese a su casa porque supuestamente su madre no sabía de su relación amorosa con el chico de la farmacia como conocían al buen Rodrigo… -- MMMM no don Severiano no se moleste, de todas maneras estaré presente en su casa mañana… -- muy bien preciosa, te esperamos…
Cielo Riveros arrojo el celular muy incómoda pensando que haría ahora para poder verse con don Emilio, estaba muy molesta con Rodrigo por haberle pasado el móvil a su padrastro, ella quería salir y distraerse con alguien que le de seguridad y esa persona era Don Emilio se puso a pensar que excusa podría inventar para irse temprano de la casa de Rodrigo cuando nuevamente suena el celular, muy molesta lo coge pensando que si es Rodrigo le increparía por haberle hecho eso pero al contestar oyó la aguardentosa voz de don Pedro… -- Como está la putita más sabrosa que me he comido… extrañando a su macho jejeje… la nena se puso nerviosa al oírle, sentía miedo pero a su vez comenzó a nacer desde sus entrañas una sensación de emocional excitación.
-- Don Pedro… co-como esta… -- aquí pues trabajando, buscando algún momento para darme una escapada y culearte como te mereces jejeje… la nena no entendía lo que le sucedía, sentía un sentimiento de odio hacia aquel sujeto mezclado con temor pero a su vez su cuerpo reaccionaba excitada reconociendo la voz de aquel vejete que bajo el chantaje la había dominado, los pezones se habían endurecido y sentía un estremecimiento en su esfínter, Don Emilio, Rodrigo y todo lo sucedido en el día habían desaparecido… -- No sabes las ganas que tengo de tenerte en mis manos, aquí todas las putas no se igualan a ti, todos los días me pajeo pensando en cómo te cogí en la feria…
Cielo Riveros se puso a recordar como aquel día en la feria termino subyugada bajo el poder de ese viejo dominante entregándose y gozando como nunca lo había hecho con nadie, aun se preguntaba si es que no hubiese aparecido Claudia y el maestro Tulio que hubiese pasado, tal vez su virginidad hubiese sido para la verga de don Pedro aquel miembro sin duda había sido la mejor que hasta ahora había visto y probado en todas sus dimensiones pero sin la satisfacción de haberla visto eyacular ninguna vez o de haber probado de de ese elixir… -- que pasa putita… te comieron la lengua los ratones jejeje… -- NO!! Don Pedro, dígame para que me llama…
-- PARA QUE!!! Para hablar con mi mujer… con mi putita jejeje… la nena solo pudo gesticular un sonido de queja ante lo que le decía… -- ACASO ME EQUIVOCO!!!… le recrimino el vejete de manera airada asustando a Cielo Riveros … -- eh!!! Nooo don Pedro, no se equivoca… -- jeje entonces dime que eres… la nena apretando un puño llena de pena, impotencia y excitación cayó en el juego del vejete… -- so-soy su mu-mujer don Pedro… -- jeje asi me gusta putita, que obedezcas a tu marido jejeje…
Cielo Riveros seguía tan solo oyendo lo que el vejete le decía…-- muy bien putita quiero que te desnudes ahora… -- Que!!!... – lo que oíste, desnúdate rápido!!!! Cielo Riveros como una autómata se quito la playera y deslizo la pequeña pantaloneta quedando completamente desnuda sobre su lecho… -- ya don Pedro… -- jeje no te creo así que tomate una foto y envíamela a mi número y rápido… la nena quiso reclamar -- pe-pero no le miento… -- mándamela rápido!!!! Cuando Cielo Riveros escuchaba la airada voz del vejete terminaba por aceptar lo que le pedía y tomándose la foto se la envió a su verdugo llena de vergüenza.
Don Pedro de tan solo verla casi eyacula… -- muy bien putita, así me gusta, veo que sigues tan hermosa como siempre, la nena más bella de todo el DF… a pesar de lo bochornoso y humillante del momento de su rostro nació una leve sonrisa ante el halago del vejete… -- me lleva la chingada chamaca, mejor no me hubieses mandado la foto, ahora te deseo mas, quiero morderte esas chichotas y esas nalgotas que tienes… la nena seguía contrariada escuchándolo viniéndole como flashazos los recuerdos vividos en la Feria y la última vez que estuvo con él en aquella confortable cama en donde se encontraba.
Se le calentaba la panocha recordando como el vejete la sodomizo en su propia cama y ella solo gozaba de la fricción de aquel grueso miembro dentro de su ano, esa misma noche Don Pedro la hubiese desvirgado de no ser por la abrupta interrupción de Don Lucas… en ese instante se lleno de un angustiante miedo al recordar que por culpa de ese viejo ya no conservo su virginidad para don Pedro, no quería ni imaginarse la reacción que este tendría cuando se enterara.
-- Muy bien putita me despido y sigue manteniéndote tan buena como siempre… fue lo último que dijo don Pedro antes de colgar el teléfono dejando algo inquieta a nuestra querida Cielo Riveros , en ese momento sentía que algo le faltaba, una sensación de angustia por el placer carnal que no había tenido jamás nuevamente se recostó en su cama recordando como aquel día en la Feria conoció o mejor dicho cayó en las garras de don Pedro, tenia juntas sus torneadas piernas tratando de apretarse su deliciosa intimidad a la vez que sus pies acariciaban en un suave y delicado camino las blancas sabanas de su cama.
Se mordía los labios y la almohada presa del deseo y las ansias de sexo que su cuerpo le pedía pensando como desfogar o satisfacerse, entendía muy bien que tan solo tocándose no sería suficiente pero quien!!! pensaba la nena, quien seria aquella persona con la cual podría saciar aquel improviso apetito sexual que arraigaba su cuerpo, todo era culpa de don Pedro por calentarla y ni siquiera se encontraba cerca para coger con el… rápidamente con vergüenza pensaba como era posible que tuviera esos pensamientos pero el calor de su cuerpo era incontrolable.
A su mente la única persona a la cual le daría su consentimiento era Rodrigo pero estaba molesta con él a su vez que no sentía mucho deseo carnal por su novio, la otra persona que con horror era el más cercano en saciar sus deseos era Anselmo, pero ella lo odiaba al igual que a don Lucas y por mas que le haya ofrecido pruebas de la infidelidad de su madre preferiría mil veces salir y buscar a aquel borracho que quiso abusar de ella en el bus.
Su excitación era tal que comenzó a frotarse su caliente panochita cogió su cámara y comenzó a tomarse fotos así desnuda como se encontraba y en su delirio pensaba que estoy haciendo, porque me comporto de esta manera… sin dejar de sentirse caliente continuo con su improvisada sesión de fotografía, la nena no se reconocía y mordiéndose los labios cambio la cámara a modo de grabación de video dispuesta a grabarse desnuda, la morbosidad que tenia era incontenible pero no había grabado ni 20 segundos cuando la cámara se apaga.
Al revisarla pudo ver que el celular decía, memoria llena… la nena algo confusa no se explicaba porque estaba llena, no recordaba haberla usado así que se dispuso a verificar que había, cuando encontró el archivo que ocupaba tanto espacio la encendió de inmediato… al reproducirse el video Cielo Riveros casi se desmaya, no podía creer lo que veía… era ella en la feria gimiendo con locura podía ver en su rostro un rictus de placer que ella misma no se la creía, con la mano en la boca veía estupefacta y avergonzada como disfrutaba de aquella supuesta violación de la que fue víctima.
Estuvo a punto de borrarla cuando el video hace un movimiento enfocando el horrible y sádico rostro de Don Pedro, el video hizo un plano más extenso de la situación y se pudo ver como tan solo con sus botas negras se encontraba postrada sobre aquella improvisada mesa de madera siendo follada con violencia por aquel sucio vejete, muy alejado de ellos distinguía dos personas observando la escena, muy a su pesar comenzó a excitarse dirigiendo su mano que instantes atrás tapaba su boca hacia su húmeda vagina oyendo el celular…
–- Vamos putita dime quien es tu macho, quien es dueño de tu cuerpo……
–-Uuusteed uussteed es miii maaachooo, ahhh ahhh……
–-Ussteed ess mii duueeñooo ahhh ayyy ………
–-Humm mi putita así me gusta…… dime que eres ahora de mi………
–-Ahhh ahhh suuu mujer, soy suu muujerr ahhh ahhh ……
–-Ahora me perteneces muñeca y no te dejare nunca………
–-Serás mi puta para siempre……
Fue lo último que oyó la nena antes de explotar en un intenso orgasmo cayendo rendida sobre la cama muy agitada y casi de golpe se quedo dormida… pero ni en lo más profundos de su sueños su cuerpo la dejaba tranquila, se encontraba sobre su cama ante las miradas de don Lucas y Anselmo quienes desnudos y con los miembros al aire la miraban sonrientes – hola preciosa… aquí estamos para tranquilizar tus ganas de verga jejeje… muy a pesar de que era un sueño ella se negaba pero sin controlar los deseos que tenia de sexo, soportaba estoicamente las ansias de meterse en sus labios aquellas dos barras de carne que coquetas se balanceaban invitándola a probarlas.
-- no quieres verga… o acaso prefieres la de ese asqueroso… le dijo don Lucas apareciendo a los pies de su cama la enfermiza figura de Ramón, el borracho del bus con una considerable verga semitieza apuntando hacia ella… -- prefieres la de el!!! Le decía burlonamente y sonriente enseñándole la suya el ruin don Lucas… la nena lo odiaba y con toda esa furia contenida y ansiosa de sexo gateo hasta donde se encontraba Ramón tomándole la verga desde la base y dándole ligeros lametones para terminar de engullirse una parte de aquella ya erecta verga sin dejar de mirar a retadoramente a los ojos a don Lucas en una actitud de sensual burla.
Sentía como Ramón le acariciaba su espalda con esa sucia y callosa mano sintiendo deliciosos escalofríos de placer… -- te gusta verdad puta… prefieres a ese vago asqueroso que a mi… le decía molesto aquel viejo que ella tanto odiaba sin dejar de mamar aquella larguirucha verga que satisfacían en algo la enorme ansia de placer que quería… -- vas a dejar que ese inmundo te coja en vez de a mi quien te desvirgo la panocha… le seguía diciendo burlonamente hiriéndola profundamente.
La nena dejo de chupar aquella verga echándose en su cama abriendo sus piernas para recibir al instante a aquel sujeto que con lascivia y amenazas la había tocado en el bus… pero mil veces prefería a aquel sujeto a que Lucas y Anselmo la vuelvan a tocar… -- ahh ayyy siiii siii ahhh… fueron los gemidos de la nena al sentir como aquella verga entraba hasta donde podía de su caliente panocha lo abrazo por la nuca apretándose con el y abrazándolo con sus torneadas piernas tratando de sentir más profundo las embestidas que le daba, sin dejar de mirar con ojos excitados a aquello dos maleantes que aun sonrientes la miraban masturbándose…
Sentía su cuerpo húmedo de sudor de ella y de su amante que caían sobre ella, Ramón ya no podía mas poniéndose de rodillas comenzó a masturbarse y desparramando una increíble descarga de semen sobre su vientre y tetas bañándolas por completo, la nena solo se mordía los labios presa del orgasmo que había tenido viendo como de las vergas de don Lucas y Anselmo también la manchaban de intensas descargas de semen sobre su cara y cabellos burlándose de ella.
Pasaron las horas y ya era de día la nena aun en su tibio despertar oía que tocaban su puerta despertándose asustada y completamente sudada, se dio cuenta que estaba desnuda y rápidamente se puso la pantaloneta y la playera acercándose para ver quien tocaba, afortunadamente para ella la que tocaba era su madre quien llegaba como siempre los fines de semana.
Recibiéndola con un fuerte abrazo se dispusieron a desayunar conversando entre ellas todo lo que habían hecho entre semana, claro está que la nena no contaba de lo que era víctima y en esa habitual convivencia entre madre e hija la mañana comenzó a pasar rápidamente estando un poco nerviosa por la cita que tendría con el padre de Claudia, así que se lo conto a su madre quien algo preocupada se sorprendió de que su hija saliera con el padre de su mejor amiga… -- Ay mami no es lo que te imaginas Don Emilio solo quiere hablar de Claudia y quien más que yo que la conozco tan bien… le decía inocente la nena quien no sabía de las verdaderas intenciones de don Emilio a lo que su madre entendió ya que su hija no le daba motivos para hacerla pensar mal.
Rápidamente la nena se dio un baño y maquillándose tenuemente se puso un ajustado top escotado color melón y un ajustado pantalón blanco con sus botas negras, se veía espectacular, como una hermosa modelo y despidiéndose de su mama salía de su casa en dirección al centro comercial en donde se encontraría con don Emilio, no había caminado mucho cuando se encuentra con Rodrigo quien la abraza efusivamente… -- Hola preciosa… lista para irnos… Cielo Riveros no supo qué hacer, se había olvidado que tenía que ir a almorzar con la familia de Rodrigo… --Ay hola Rodri… le dijo dándole un tierno beso en los labios… -- mi amor no podre ir… tengo un asunto urgente que atender… le dijo mintiéndole con dolor al buen muchacho.
Rodrigo muy comprensivo entendía las razones de su hermosa novia pero poniendo una cara de completa tristeza y decepción lo que hiso sentir mal a la nena quien tomándolo del rostro le dio otro tierno beso… -- mi amor en la noche vienes y conversamos en la azotea… Rodrigo puso una cara de alegría y devolviéndole el beso la dejo ir contento pues solo esperaría hasta la noche para pasarla románticamente con ella, pero a una cierta distancia su malvado padrastro observaba como la hermosa palomita se iba en otra dirección que no era su casa… -- pinche muchacho estúpido, nada puede hacer bien… se decía muy malhumorado decidido a seguir a la colegiala hacia su destino.
Ni bien subió al bus Don Severiano paro un taxi ordenando seguir al bus ante un curioso taxista que dudaba en hacerlo… -- Estoy siguiendo a mi hija… usted solo haga su trabajo… le dijo enojado al taxista quien muy lentamente siguió al bus, Cielo Riveros bajo justo en la estación que daba hacia el muy concurrido centro comercial, el viejo también a una distancia prudencial bajo del taxi siguiendo a la nena quien inocente no imaginaba que era espiada, para ese momento Don Emilio ya podía distinguir la hermosa figura de la colegiala vestida muy sexy haciendo que las miradas de los hombres que transitaban por el lugar voltearan a verla excitados, enamorados y embobados ante tremendo monumento de mujer.
Los dos se saludaron cordialmente dirigiéndose hacia uno de los restaurantes, para esto don Severiano miraba muy molesto y curioso que la hembra que tanto deseaba se encontraba con un tipo maduro y apuesto en vez de asistir al almuerzo que con mucho trabajo había preparado, en cambio Cielo Riveros conversaba muy amenamente con don Emilio contándole cosas de Claudia que de por si la mayoría eran mentiras ya que no sería capaz de decirle que su querida hija era una tremenda putita que se acostaba con quien se le diese la gana.
La conversación termino entorno a Claudia y Don Emilio comenzó a preguntarle a la nena cosas de su vida, sus intereses, sus metas, sus gustos, contestándole ella muy alegremente, siempre riéndose de las cosas graciosas que el maduro hombre le preguntaba o respondía, era la primera vez que se sentía segura con alguien, pero se sonrojaba cuando Don Emilio le decía uno que otro halago poniendo esa carita de niña mimada que a muchos enternecía pero a los que querían cogérsela los excitaba y Don Emilio no era la excepción, pues bajo su piel de oveja pensaba en esos sonrientes y carnosos labios envolviendo su miembro en un delicioso sube y baja.
La veía tan tierna e inocente pensando que con ella haría lo que le diese la gana y pagando la cuenta la invito a caminar por el centro viendo las tantas galerías de ropa que habían, su idea era impresionarla o darle regalos, sabiendo de su condición humilde pensaba que con eso podría conquistarla o que se muestre interesada mas en el, pero la nena muy cortésmente rechazaba tales ofrecimientos, pero no por eso dejaba de estar atraída por Emilio que en ningún momento dejaba de halagar su tierna belleza diciendo que cuanto le gustaría ser un chiquillo de nuevo y conocer a alguien tan hermosa como ella haciendo que Cielo Riveros sonría tímidamente muy apenada pero a su vez emocionada, todo esto siendo visto por don Severiano que con ojos envidiosos y furiosos tomaba fotos sin que ellos de diesen cuenta.
Así paso la tarde y Don Emilio dejaba en su casa a la nena… -- Hasta luego don Emilio… le decía al empalmado maduro – mmm te puedo recoger a la salida de tu escuela… para conversar de nuevo… la nena no pudo evitar por dentro la emoción de que aquel apuesto señor quería volverla a ver… -- ehhh siii… claro… -- bueno hasta mañana… le dijo Emilio hiéndose en el acto, dejando a una emocionada y suspirante Cielo Riveros quien rápidamente pensó en que es lo que le pasaba, Don Emilio era un hombre casado, padre de su mejor amiga, y no podía seguir pensando en una relación con el, ella tenía novio al cual quería mucho y en ese preciso instante se apareció Rodrigo.
La nena al verlo rápidamente lo abrazo fuerte dándole un tierno beso apoyando su rostro en uno de los hombros del chico tratando de olvidar sus ideas para con Don Emilio, el chico la abrazo de la cintura muy emocionado por el efusivo saludo de su hermosa diosa, Cielo Riveros lo tomo de la mano y lo llevo dentro del edificio diciéndole que lo espere en la azotea donde minutos después paso momentos de tranquilidad abrazado de Rodrigo conversando amenamente entre besos y besos tiernos siendo abruptamente interrumpidos…
-- Como está la parejita jejeje… la nena se asusto al oír la voz de don Lucas quien en compañía de Anselmo llegaron con una botella de tequila con sus sonrisas burlonas… -- como esta Don Lucas… don Anselmo como esta… fue el saludo de Rodrigo quien parándose con todo respeto les extendió la mano saludándolos cortésmente… -- Aquí pues muchacho, festejando la vida jejeje no deseas una copita… le ofreció don Lucas a Rodrigo con la intención de emborracharlo y aprovecharse de Cielo Riveros , la nena muy nerviosa y llena de miedo tomo del brazo a Rodrigo jalándolo junto a ella… -- Ehh la verdad no don Lucas, será en otra oportunidad… dijo el muchacho muy nervioso mirando una y otra vez a una seria Cielo Riveros .
-- je je je ah ya veo, nuestra nena te tiene dominado jejeje… Rodrigo asintió un poco apenado ante la burla de don Lucas… -- eh pues un poco, además no quiero enfadar a mi novia… los dos viejos miraban sonrientes a la pareja y sobre todo a Cielo Riveros quien con miedo y odio a su vez miraba a ambos viejos, podía notar la burla y soberbia con que don Lucas la miraba como sabiéndose dueño de ella, armándose de valor tomo del rostro a Rodrigo propinándole un apasionado beso que hizo sentir celos y envidia a los vejetes… -- Así es, mi novio me hace caso porque lo amo… y diciendo esto último tomo de la mano a Rodrigo abriéndose paso entre ellos pero aun temblando de miedo por si aquellos viejos se atrevían a hacerle daño.
Afortunadamente nada paso y Cielo Riveros se fue a su cuarto despidiéndose de Rodrigo, pero en la azotea Anselmo reclamaba a don Lucas porque permitió que la nena se fuera… -- déjala gordo, que se crea segura den si misma, así me gustara mas cuando me la vuelva a coger jejeje… prosiguiendo con su borrachera comenzaron a planear como abordar nuevamente a la nena… -- oye Lucas… ya que no me dejas cogerme a Cielo Riveros ni a la rubia Janitzi… porque no me dejas cogerme a Pilarcita… una sonrisa maquiavélica nació del rostro de don Lucas, a su mente regresaban los recuerdos de aquellas cogidas que se metían… -- no sería mala idea… me cojo a la madre y a la hija jejeje… -- que chingon eres Lucas, el pobre Julian se revolcara en su tumba con eso jejeje… -- así es Anselmo… cornudo hasta desde la tumba jajajaja… reían burlándose de la memoria del padre de Cielo Riveros .
Con esos aconteceres de la vida Cielo Riveros paso el fin de semana tranquila, el día domingo salió con Rodrigo al centro comercial en donde su querido novio no pudo ofrecerle todo lo que Don Emilio si pudo, recordaba como el día anterior aquel apuesto maduro la invito a almorzar después hasta le ofreció comprarle cosas aunque no acepto pero si unos helados, pero comparado con Rodrigo quien por sus gastos hogareños no le alcanzaba más que para los boletos del cine… -- discúlpame Cielo Riveros , aun no me han pagado… decía muy apenado Rodrigo al no poder satisfacer los gustos de su novia… -- descuida bebe, yo invito esta vez… le dijo la nena muy comprensiva y cariñosa sacando dinero de su bolso haciendo sentir más apenado a su novio.
Cielo Riveros paso la siguiente semana más tranquila de su vida no evitaba que la piropearan de todas las maneras posibles pero al menos nadie se había atrevido a forzarla, el profesor Tulio y el cojo Juan no la acosaban porque pensaban que tenía aquel video en donde se comprobaba que la habían drogado y violado y temiendo que los denunciara solo la veían muy contrariados como ella seguía actuando con su habitual manera natural de comportamiento escolar, el que si se fue en balde fue Victor quien buscaba de todas formas conversar con ella siendo enviado al diablo por ella amenazándolo con contarle al director.
La nena se sentía libre de acosos, muy segura y mucho más cuando en toda esa semana Don Emilio la recogía a la salida de la escuela, el comportamiento de aquel hombre maduro la tenía encandilada, sin querer se estaba enamorando del padre de su mejor amiga, ya era común que sus miradas se cruzaran quedándose congelados como esperando que alguien de el primer paso, pero siempre acababan sonriendo mirando hacia otro lado, don Emilio sonreía por dentro pues ya se sabía ganador de ese monumento de hembra.
Fue un día en la mañana en que Cielo Riveros se sentía intranquila, pensando en lo que le pasaba, su corazón latía a mil por don Emilio, no tenía ni el más remoto pensamiento de Rodrigo, en ese momento recibió un mensaje de texto en su celular, era de don Emilio diciéndole que se encontraba solo y triste… la nena no dejaba de sentirse emocionada, se encontraba sentada en su cama… que hago, que hago se decía y con la emocional respiración que tenia se paro abriendo su ropero buscando la ropa más sexy que tenia, pensando a su vez que hacía, no podía creer que se animaba a ir a casa de don Emilio.
Minutos después ya se encontraba camino a su destino vestida con unos apretados jeans y un escotado top blanco, el ruido que producían sus pequeñas botas de taco eran escuchados por la fauna masculina del vecindario… estoy loca… estoy loca se decía la inquieta nena sin ánimos de dar un paso atrás, pensaba en Claudia su querida amiga, como le iba hacer eso, pero a su vez recordaba sus palabras, que aprovechara su juventud y belleza y que se entregara a los deseos de quienes la desean y en este caso era su padre la que la deseaba en un sentimiento reciproco.
Don Emilio abría la puerta estupefacto y sorprendido al ver a tan dulce belleza adolescente que había venido a verlo, rápidamente la invito a pasar llevándola a la cocina con la mirada puesta en el sensual andar de sus caderas y duras nalgas, fueron unos cortos momentos de platica en donde la nena no sabía cómo explicar el porqué de su visita y sin miramientos y con la experiencia del galán maduro se acerco a ella quien lo miraba impávida y nerviosa, la tomo de la cintura acercando su rostro a la de ella, la nena solo cerro sus ojos esperando valga la redundancia muy nerviosa el contacto de sus labios.
Aquel fue el beso más limpio que pudo tener, atrás quedaron los apasionados besos que se tuvo que dar con los horribles viejos de los cuales fue víctima, esta vez eran consentidos con un hombre limpio y el cual le gustaba mucho no tenían aliento desagradable como sus abusadores, las manos de don Emilio muy sutilmente bajaban de la cintura muy cerca de las portentosas nalgas que se ajustaban al jean, Cielo Riveros no dio muestras de rechazo sentía que aquel hombre podía hacer con ella lo que quisiese, no le negaría nada.
El beso ya se había vuelto muy apasionado sintiendo como esas esponjosas y juveniles tetas se aplastaban contra su fornido pecho… -- ay chiquita linda te amo… le dijo a la nena volviéndola a besar, la nena suspiraba mas ante esas palabras, ya no escuchaba los insultos despectivos o los calificativos de perra, puta o zorra que tantas veces le habían dicho y tomándolo de la nuca lo abrazo disfrutando gustosa de aquel romántico ósculo, la pareja seguía en su apasionada entrega no dándose cuenta que la puerta principal se abría muy sutilmente.
Aquella persona que entraba se extrañaba que no se encontrara nadie, muy lentamente comenzó a dirigirse hacia la cocina donde creía oír un ápice de ruido, cada vez se le hacían más claros los sonidos guturales de quienes se están enfrascando en un tremendo intercambio de salivas, ligeramente y sin hacer ruido observo por un lado de la puerta quienes eran…
Claudia abrió muy grande sus ojos al ver que su respetable padre quien siempre se habría creído un dechado de las buenas costumbres y la responsabilidad se encontraba engañando a su madre con una chiquilla y no cualquiera, estaba con su mejor amiga, la inocente, mojigata y educada Cielo Riveros … -- maldita perra, se ve que se tomo en serio mis consejos… se decía Claudia aguantándose la risa por ver a su mejor amiga con su padre…
-- Ay chiquita linda, que bueno que me atreví a buscarte, soy el hombre más feliz del mundo… le decía a una muy sonrojada Cielo Riveros , quien cavilaba en lo que sucedía… -- noo… esto está mal, no puedo hacerle esto a Claudia y a su esposa, no podemos… le decía muy avergonzada siendo esto escuchado por Claudia quien por lo menos no sentía rencor por la nena… -- al diablo con ellas preciosa, solo estamos tu y yo… quiero vivir contigo, irme lejos contigo, me harías el hombre más feliz del mundo… le decía mintiéndole y tratando de ilusionarla tan solo con el afán de encamársela en ese momento.
Aquello no le gusto a Claudia, entendía muy bien que la estaba engañando, ella era muy experta en estos menesteres y sabía muy bien las únicas intenciones de su padre, don Emilio nuevamente arremetió contra la nena besándola compasiblemente sin ser rechazado, al parecer sus palabras habían funcionado con ella quien pensaba que con él, estaría a salvo de don Lucas, Anselmo y de tantos depravados que la acosaban nuevamente se entrego a ese cálido beso el cual sentía estaba llena de amor a pesar que ahora sentía como se apoderaba de sus duras nalgas…
Claudia quien recordaba que su madre estaba estacionando el auto y conversando con una vecina se dispuso a interrumpir aquel íntimo romántico momento… -- que está pasando aquí!!!! Dijo arremetiendo con bravura ante la sorprendida pareja… -- Cla-claudia!!!... fue la reacción de la nena al ver que su mejor amiga la encontraba en indecorosa situación y con su padre, don Emilio no sabía que hacer, no tenia manera de explicarle a su hija lo sucedido solo le quedo lavarse las manos presa de la desesperación… -- Hija!!! No es lo que crees… fue ella quien me busco, yo sería incapaz de engañar a tu madre… dijo como un cobarde sorprendiendo a la nena quien abría la boca muy indignada con los ojos llorosos… -- e-eso no es cierto…
Cielo Riveros se quería morir aquella imagen del hombre perfecto y caballero que tenia de don Emilio se destruyo instantáneamente, era un cobarde y mentiroso era peor que aquellos viejos que se habían aprovechado de ella, don Emilio no la miraba a la cara tan solo esperaba cual sería la reacción de su Claudia, fue Cielo Riveros quien con lagrimas se dispuso huir de aquel lugar siendo detenida por Claudia…-- Cielo Riveros … espérame en mi recamara… -- no!!!, quiero irme de aquí… dijo llorosa la nena… -- te digo que me esperes en mi cuarto… le contesto alzándole la voz a lo cual le nena se dirigió en el acto.
-- Hija tienes que creerme, yo no quise que esto pasara, fue ella quien se me insinuó… dijo desesperado y preocupado don Emilio tratando de convencer a su hija de que él era inocente o una víctima… -- eres un cobarde papa… como puedes hacerle esto a mi amiga, a mi no me engañas, ella no pudo estar aquí si no fuese porque tú la buscaste… don Emilio no sabía que contestarle, lo único que quería es que su esposa no se entere de aquel desliz, -- hija… no se que decir… le contesto apenado y sumiso a la inquisitoria mirada de Claudia… -- vete Papa, mi madre… tu es-po-sa, está afuera… llévatela a pasear…
Don Emilio rápidamente salió en busca de su esposa dejando a una sonriente pero a su vez molesta hija, Claudia pensaba por dentro que gracias a esta situación había ganado poder en su familia, antes de aquello su padre estaba decepcionada de ella y sus privilegios se habían terminado pero ahora las cosas cambiaban a su favor… en su recamara Cielo Riveros se encontraba llorando, decepcionada y sintiéndose la más tonta del mundo al pensar que Emilio la estaba tomando en serio y se sentía peor al haber sido sorprendida por su mejor amiga, aquella que tantas veces la había ayudado y defendido.
Claudia entro a su recamara encontrando a una llorosa nena quien le rogaba perdón y que no sabía que le paso, diciéndole también que jamás sabría de ella, que sentía asco y vergüenza de sí misma, Claudia miraba seriamente a la nena viendo como le rogaba perdón y estirando su mano la llamo con una linda sonrisa, la nena se fue contra ella abrazándose las dos en un efusivo abrazo… -- tranquila Evi… claro que te perdono pinche loca… le decía alegremente Claudia quien no guardaba ningún rencor a su amiga… -- ya no llores amiga, no tienes la culpa, caíste en las mentiras del pendejo de mi padre… las dos nenas caminaron abrazadas cayendo ambas sobre la cama sin dejar de abrazarse, Claudia le daba besos en la cabeza tratando de calmar a una avergonzada Cielo Riveros …
Así como estaban se quedaron varios minutos conversando cara a cara sintiendo sus propios deliciosos alientos, la nena ya más calmada bajo su mirada hacia el vientre de su amiga acariciándola… -- y dime será hombrecito… Claudia sonrió mirando como la nena le frotaba su vientre... – no será nada amiga… tuve un problema y lo perdí prematuramente… Claudia le explico como por problemas de su inmaduro útero había perdido aquel ser que se formaba en ella… -- Ay amiga que pena… yo solo esperaba que no se pareciera al señor Juan… Claudia arrugo la frente con una sonrisa chistosa… -- te refieres al cojo… jajaja no!!!, como crees amiga, yo preñada por ese viejo… Claudia le explico que el hijo que esperaba era de su ex novio quien al enterarse no quiso saber de ella.
-- Ay Evi… soy loca pero no para tanto jajaja, pero debo reconocer que ese cojo sabe follar… deberías probarlo jajaja… Cielo Riveros se sonrojo apenada, si supiese su amiga que aquel viejo ya la había culeado a su antojo y así abrazadas se quedaron conversando un buen rato… -- bueno Clau… tengo que irme, hoy hay escuela…. -- ah si amiga, ya estaré pronto por allí y que se preparen los chicos que vengo más caliente que nunca…… Cielo Riveros le sonrió muy coquetamente… -- Ay Clau… no cambias, te extrañe mucho… -- jaja si se nota… siempre tengo que cuidarte… eres como una hija para mi…
Así fue que la nena se retiro a su casa y a pesar que se encontraba tranquila se sentía la mujer más estúpida del mundo… se sentía decepcionada por aquel hombre, dándose cuenta que de ella solo buscaba su cuerpo, solo tenía ganas de encamarse con ella, era peor que todos los viejos que abusaron de ella pues al menos aquellos desgraciados eran sinceros en sus intenciones pero don Emilio fue un vil mentiroso, es que no habrá ningún hombre que sea bueno, que se merezca su amor incondicional, se decía cuando a una distancia de su casa pudo divisar al buen Rodrigo que la esperaba…
Verlo esperándolo con esa sonrisa de asombro que ponía cuando la veía la hizo sentir mal, ella no se merecía su amor… había traicionado su fidelidad hiendo a buscar a un hombre casado, no era como las otras veces donde la obligaron, esta vez fue ella misma quien lo busco… tenía ganas de llorar y confesarle la verdad, Rodrigo se acerco a ella y abrazándola por la cintura la cargo dándole vueltas alegremente… -- Ay Rodrigo… cuidado… decía divertida y apenada la nena por las muestras de alegría y amor de su novio.
Rodrigo estaba contento, su padrastro y su madre habían salido a un corto viaje por tres días, eran de los pocos momentos en los que se sentía bien en casa, sin la presencia de su iracundo padrastro quien se la pasaba gritando y alzándole la mano a su madre ante su impotente presencia, Rodrigo y la nena seguían abrazados el la tomaba de la cintura y ella de la nuca, la nena le pedía disculpas por haber estado distante con él y que ahora todo su tiempo seria para él y no habría excusas para no estar con él… Rodrigo esbozo una sonrisa picara al oír eso y sin vacilar le confesó sus intenciones.
-- lo único que deseo en este mundo eres tu mi amor… sa-sabes aun tengo la espina de aquella tarde que haríamos el amor y te tuviste que ir… dijo algo nervioso esperando que su diosa no se incomodara, la nena recordaba que por culpa de don Pedro se tuvo que ir aquel día que se entregaría a su novio… -- Ay Rodri… discúlpame por esa vez… dijo algo sonrojada no tratando de dar explicación de lo sucedido… -- No importa amor… pero en mi casa no habrá nadie y nada me gustaría más que reiniciemos aquello que quedo pendiente… seria el hombre más feliz de la tierra… confeso Rodrigo tragando saliva siendo notado por la nena quien veía que el estaba tan nervioso como lo estaba ella.
Cielo Riveros pensaba porque no, el era su novio, otros se habían saciado de su cuerpo sin merecerlo, ella se sentía en deuda con el y le enternecía su mirada noble y sincera, el no la engañaba, el no la forzaba, el le confesaba sus verdaderos sentimientos y deseos… -- en-entonces mañana en la tarde nos vemos en tu casa… Rodrigo casi desmaya de alegría… -- en serio… no iras a la escuela por mi… -- No mi amor, mañana quiero estar contigo… la felicidad y excitación que sentía Rodrigo era incomparable, en ese momento imaginaba a su hermosa novia completamente desnuda sobre su cama, sentía con impotencia que aquel día no pasaba rápido ansioso de que llegue el siguiente… -- Mi amor me haces muy feliz… y no te preocupes hoy en la farmacia tomare unos preservativos…
La nena le interrumpió rápidamente… -- no mi amor… no es necesario… -- pe-pero Cielo Riveros respondió sorprendido el muchacho… -- y si quedas embarazada… -- No me importa… será nuestro bebe tuyo y mío el cual nos unirá para siempre… dijo amorosa y tierna lo cual ilusiono a Rodrigo… -- Esta bien amor… mañana nos vemos en mi casa… y con un amoroso beso se despidieron pactando la consumación de su romance para el día siguiente… Cielo Riveros veía alejarse a Rodrigo lleno de felicidad, lleno de ilusión, la idea del embarazo le vino de improviso.
Pensaba que una vez embarazada se libraría de todos sus acosadores, se iría a vivir lejos con un buen chico como Rodrigo aun con el dolor de dejar a su madre y abuelo, pero es que no veía salida a los acosos de don Lucas y Anselmo era tanta su desesperación y odio ante ellos que era la única salida que veía… Para esto pudo ver como de la cantina salían aquellos dos que martirizaban su mente acercándose hacia ella… -- Hola muñequita me dijeron que uno de mis muchachos te salvo hace unos días jejeje… ya ves conmigo estarás a salvo siempre… la nena estaba entre el miedo y el odio al notar cómo se burlaba de ella… -- no necesito nada de usted… con permiso… retirándose molesta siendo tomada por el brazo por Anselmo quien en el oído y bajito le murmuro… -- recuerda mi oferta… piénsalo bien… la nena jaloneaba asustada para que la soltara – déjala Anselmo!!! No toques a mi princesita jejeje… Cielo Riveros se retiro a toda prisa subiendo hacia su hogar trancando la puerta pensando que estos días de terror pronto se acabarían.
Aquel día en la escuela Cielo Riveros la paso intranquila, por suerte nadie la molesto ese día, Víctor ya ni se le acercaba y el maestro Tulio la evitaba siempre, cosa que la hacía sentir extraña, se olía el cabello pensando que olía mal o se estaba volviendo fea para que aquellos dos no estuvieran detrás de ella como siempre pero a su vez la hacía sentirse más tranquila, su único deseo era estar con su amado Rodrigo sellando su amor para siempre.
Así llego el día siguiente… para eso la nena estaba con su apretado uniforme escolar pues su abuelito se encontraba de descanso ese día y no quería que sospechara de ella, despidiéndose de don Benito salía de su casa avisando a Rodrigo que iba para su casa, ella iba radiante, hermosa, feliz y muy ilusionada cuando nuevamente suena su celular… -- Ya Rodrigo… tranquilo voy para allá… dijo muy alegre la nena… -- Cual Rodrigo putita… soy yo… tu verdadero macho jejeje… la nena se asusto al oír la aguardentosa voz de don Pedro… -- Don Pedro!!!, di-dígame que desea… -- jeje que deseo… pues a ti… ven rápido a mi casa que quiero descargar las bolas que están llenas de leche jejeje…
La nena se quedo inmóvil, don Pedro había venido al D.F. y nuevamente se interponía entre su amado Rodrigo y ella… -- don Pe-Pedro, no puedo… tengo escuela… dijo pensando rápido tratando de librarse del vejete… -- ah tienes escuela… bien iré para allá para enseñarles a todos lo puta que eres… -- no!!! no por favor no me haga eso… -- entonces ya sabes que hacer… ven a mi casa y rápido… la nena nuevamente caía bajo el chantaje y el dominio de aquel viejo… -- usted vive muy lejos y no tengo dinero… -- mira putita tu toma un taxi y ven para acá que yo pago cuando llegues, pero que sea rápido que ya quiero verte… dijo colgando el teléfono.
Cielo Riveros se sentía destrozada nuevamente tendría que abandonar los deseos de su novio y mirando hacia el cielo se decía… -- lo siento Rodrigo… y se fue en busca de un taxi al encuentro de don Pedro, en el camino iba triste y meditabunda sin darse cuenta como el taxista miraba por el retrovisor sus torneadas pierna cruzadas al ser tan corta la falda escolar… y sin más llego hacia su destino en donde el vejete la esperaba, nada más verlo sintió odio hacia él, no creía como este vil vejete en la intimidad de su cuarto podía excitarla tanto pero en ese momento no sentía nada por el, solo indignación por ser un miserable chantajista.
El vejete la tomo por la cintura haciéndola entrar en aquel amplio pasadizo en donde las otras casas se encontraban sin sus habitantes debido a que tenían a esa hora que trabajar, la casa de don Pedro quedaba al fondo y era la más grande del lugar, una vez dentro el vejete la miro de pies a cabeza… -- ay putita hasta de colegiala te ves hermosa… la tomo de las nalgas apretándola contra el, la nena trataba de zafarse de sus garras pero el siempre era más fuerte…
El viejo la soltó y sentándose en una silla sobándose el enorme bulto que ya tenía le dijo… bueno putita a lo que vine… hay un amigo que me pagara 1000 pesos por tu virgen panocha así que manos a la obra jejeje… la nena entro en pánico, hasta ese momento no recordaba lo de su virginidad y temía por la reacción del vejete… -- que te pasa putita, algún problema… dijo algo molesto el vejete… la nena muy asustada y con lagrimas en sus ojos se acerco a el arrodillándose desconsolada… -- por favor don Pedro… pe-perdoneme… ya no so-soy virgen… perdóneme por fa-favor… Don Pedro puso una cara iracunda asustando mas a la nena quien lo veía arrodillada con sus hermosos ojos verdes llorosos.
-- que te dije pinche chamaca… me has hecho perder mil pesotes pero ahora tu me los pagaras… decía muy enfurecido a una intimidada colegiala… -- le pro-prometo que le pagare don Pedro… el vejete la tomo de la mano poniéndola de pie con fuerza… -- no entiendes putita… me los pagaras hoy mismo… te gusta le verga no, por eso dejaste que tu noviecito te desvirgara, adoras las vergas, pues ahora te llevare a que pruebes muchas y con lo que ganes me pagaras mi dinero…
La nena abrió la boca sorprendida y asustada, aquel vejete la iba a prostituir ese sería su castigo por haberle fallado… -- no!!! por favor don Pedro… por lo que más quiera no me haga esto… decía desesperada tratando de convencerlo que desista de sus intenciones, el vejete fue hacia la puerta abriéndola por completo… -- Tu decides o cumples con lo que te digo o te puedes ir en este momento… claro que todos sabrán lo puta que eres, en tu escuela, en tu vecindario, todos sabrán lo que Cielo Riveros verdaderamente es… una puta…
Cielo Riveros seguía impotente al ver que Don Pedro no le daba ninguna salida y más bien la chantajeaba adueñándose más de ella… -- rápido putita… decide que no tengo todo el día… Cielo Riveros lo miraba con sus ojos tristes sintiéndose derrotada como siempre ante el y agachando la cabeza accedió llena de vergüenza ante el… -- co-como usted diga don Pedro… -- jejeje muy bien putita… manos a la obra jejeje… El vejete la tomo de la mano sacándola de la casa con suma prisa, la nena muy asustada y apenada le seguía el paso sintiendo miedo por las cosas que el vejete la iba a obligar a hacer.
Rato después y con mucha discreción por parte de don Pedro entraban a un mediocre Night Club que en ese momento se encontraba cerrado… la nena veía las sillas sobre las mesas y un enorme sujeto de raza negra obeso y calvo que fungía de seguridad del local y que en aquel lúgubre lugar le resaltaban los dientes y los ojos al verla… el vejete la seguía jalando de la mano llevándola hacia el fondo del local en donde se encontraban los camerinos… -- muy bien putita… pórtate bien y cuidadito con llorar o negarte ante mis pedidos… le dijo amenazante el vejete a una nena que asintió con impotencia.
Dentro del camerino se encontraba una señora de un poco más de cuarenta años de nombre Cecilia quien al ver a don Pedro lo saludo como si lo conociera de toda la vida… -- hola Pedrito… tanto tiempo sin visitarnos… dijo la vieja mirando a su vez sorprendida a la hermosa colegiala quien seguía de la mano del vejete… -- Aquí pues Cecilia… vengo a pedirte un favor… la vieja sonrió con malicia viendo de pies a cabeza a la nena… -- mmm quieres que le de trabajo a esta chica, viéndola bien de seguro nos llenara los bolsillos de bastante lana… Cielo Riveros trago saliva asustada aguantándose las ganas de reclamar o llorar ante lo que escuchaba… -- jajaja nada de eso Ceci… quiero que me prestes unas prenditas para que mi nena las use… hoy será su primer día como putita… además ella es mucha carne para tu local jejeje sin ofender…
Cecilia también reía impresionada por la natural y juvenil belleza de la nena quien bajaba la mirada apenada ante su inquietante mirada… -- bueno Pedrito estás en tu casa, escoge lo que quieras pero cuando quieras te compro a la nena… le veo mucho futuro aquí… el vejete solo sonreía viendo la cara atemorizada de la nena… -- jeje lo tendré en cuenta Cecilia… rápidamente el vejete comenzó a hurgar en los armarios buscando las prendas adecuadas para lo que quería de Cielo Riveros … -- que esperas escuincla… quítate la ropa rápido… -- por favor don Pedro… no me haga esto… le juro que le pagare…
El vejete la miro con cara de enfado dando por terminado sus suplicas… -- apúrate Cielo Riveros quítate el uniforme, zapatos, medias y brasier… menos tu tanguita… no lo volveré a repetir… la nena resignada a los requerimientos de don Pedro procedió a desnudarse mientras el vejete seguía en busca del atuendo indicado para Cielo Riveros … la nena se quito los zapatos seguido de las medias desabotonándose la blusa que escondían aquellos enormes par de senos, minutos después ya se encontraba solo con su sexy tanguita cruzada de brazos ocultando sus turgentes pechos, don Pedro al verla se quedo estupefacto ante su imponente belleza viéndola de pies a cabeza con devoción… -- Ay mi dios pero que buena estas chamaca… toma ponte esto…
La nena recibió un cortísimo short de tela jean que se ajustaban a sus caderas dejando a la vista los cachetes de su hermoso trasero… -- pe-pero don Pedro… no puedo usar esto… no puedo salir así a la calle… -- jejeje no te preocupes cariño…… iremos muy lejos donde nadie te conoce jejeje… Cielo Riveros se miraba en el espejo avergonzada por cómo se veía demasiado expuesto tu hermoso trasero, que diría su madre si la vieran así o su abuelito querido; el vejete le dio un cortísimo top de color blanco que dejaban al descubierto su hermosa y liso vientre con esa curvada cintura que volvería loco hasta a un cura, la parte superior de sus pechos sobresalían por el top dejando un excitante espacio como para guardar un celular en el.
El vejete veía con satisfacción que la nena lucia despampanantemente preciosa y cogiendo unos zapatos de tacón no tan altos pudo ver como el trasero se erguía majestuosamente… don Pedro llamo de nuevo a Cecilia quien en el acto apareció pidiéndole unos esmaltes para uñas negros, quería que tantos las manos como pies de la nena brillaran de ese color haciéndola ver más puta. Fue la misma Cecilia quien se las pinto sin dejar de ver el sorprendente cuerpo de la nena y notando el nerviosismo que ella padecía.
-- muy bien putita ya estas lista… vas a ser la sensación de las calles jejeje… del rostro de la nena caía una lagrima de impotencia y tristeza al ver como el vejete la iba a humillar de la manera más baja, nunca en su vida pensó que estaría en una situación así… lo único que recordaba con cólera era porque no se negó a ir a la Feria… -- Te he dicho que no llores… y tomando su ropa escolar poniéndola en una mochila se dispusieron a salir con destino desconocido para la nena.
-- Don Pedro a donde vamos… decía la nena apenada por las miradas lascivas de los hombres que pasaban y las de asco y rechazo de mujeres y viejas señoras, roja como un tomate y con ganas de que la tierra se la tragara en ese momento iba al lado del vejete quien sonreía orgulloso al tener a su lado a esa deidad de mujer… unos chavos que pasaban frente a ellos la miraban sin discreción, diciéndole que buenas tetas, que buen culo, estas buena putita, la nena quería morirse hay mismo cuando en eso don Pedro la toma de la cintura atrayéndola hacia el, los muchachos no podían creer como ese horrible viejo sea dueño de tan hermosa nena cuando en eso y con su áspera mano le sobo todo el trasero propinándole una sonora nalgada que fue escuchado por los chiquillos que con ojos envidiosos y con la boca abierta miraban como se alejaban de ellos.
-- por fa-favor don Pedro no haga eso… nos están viendo… decía la nena impotente y avergonzada ante tal atrevimiento del vejete… -- PORQUE!!! Que sepan que eres mía… no ves como dejaron de decirte majaderías… le dijo tomándola nuevamente de las nalgas frente a el y propinándole un asfixiante beso ante las miradas de los caminantes de aquella lejana calle, la nena trataba de apartarse del vejete pero le era casi imposible lograrlo escuchando como una vieja mojigata que pasaba por el lugar les incriminaba por tal exposición… -- Ay dios mío… que barbaridad, que barbaridad… decía la vieja alejándose… -- largo de aquí abuela… estoy con mi mujer jejeje… decía el viejo apurando el paso a la nena llevándola de la cintura y a veces sobándole aquel par de tentadoras nalgas… -- por favor don Pedro… no haga eso aquí… la gente me está mirando…
-- Eso debiste de pensarlo antes de coger con tu noviecito… estas en deuda conmigo así que no quiero oír más quejas… la nena recordó a su pobre Rodrigo quien en ese momento se preguntaría preocupado que paso con su novia que nuevamente le fallaba, con mucha tristeza pensaba que no era culpa de Rodrigo el haber perdido su virginidad si no de aquellos dos viejos malditos, si se encontraba en esta situación era por culpa de Don Lucas y no del inocente y fiel Rodrigo… -- Muy bien putita ya llegamos… aquí trabajaras hoy… le decía al vejete a una distraída nena quien al ver aquella avenida donde habían llegado pudo divisar esquinas con cantidad de mujeres, todas vestidas vulgarmente levantando las manos a los autos que circulaban por allí, con terror y vergüenza pensaba hasta aquí llegue, ahora si sería muy a su pesar una verdadera puta… -- Muy bien te pararas en esa esquina, yo te estaré cuidando de cerca… busca un cliente que te quiera pagar por encima de los 500 pesos, no me importa si te toma todo el día… no aceptes a los que llegan en auto, depende de ti que saldes tu deuda putita jejeje… la nena estaba asustada y nerviosa, las piernas le temblaban mirando como una cachorra triste al vejete… -- por favor… por lo que más quiera, no me haga esto… -- cállate y ponte en camino… le dijo el vejete propinándole una fuerte nalgada que hizo que avanzara más rápido en aquella esquina donde su vida se denigraría por completo.
SE VIENEN CALIENTES MOMENTOS DONDE NUESTRA CIELO RIVEROS SERA SOMETIDA POR DEPRAVADOS SUJETOS COMENTARIOS PARA LOS QUE QUIEREN RECORDAR ESOS MOMENTOS.
Cielo Riveros 34 Prostituida
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Hola ricura… primera vez que te veo por aquí, nos tomamos unas copitas… fue el primer cliente que se acerco un obeso y horrible tipo rodeaba a la nena observando cada detalle de su expuesta anatomía… -- pero que buen culo tienes zorrita… buen culo… dijo el mismo sujeto quien se había atrevido.
PARA LOS QUE YA OLVIDARON PARTES DE LAS AVENTURAS DE NUESTRA CIELO RIVEROS AQUI UN ADELANTO
Cielo Riveros caminaba triste, resignada, nerviosa y muy avergonzada hacia aquella esquina en donde unos metros atrás don Pedro la vigilaba… -- ya sabes… cobra 500 pesos… fueron las ultimas palabras de don Pedro que resonaban en su mente, paso a paso veía como los concurrentes la miraban babeando al contemplar su sensual andar y maravillosa anatomía mirando hacia el sucio suelo no pudiendo aguantar las fuertes miradas lascivas que le daban.
Una vez en aquella esquina volteo la mirada en donde se encontraba el vejete viéndola este de brazos cruzados cargando la mochila escolar de la nena y moviendo la cabeza en señal de aceptación, tan solo bastaron unos minutos para convertirse en centro de atención, de deseo y admiración de los clientes y también de la envidia y cólera de todas las meretrices que en su mayoría pasaban los 25 años, muchas descuidadas de su físico y sin la belleza y natural juventud que si ofrecía la nena.
Cielo Riveros mirando hacia el vejete no pudo aguantar el odio y rencor que le tenía al exponerla u obligarla a denigrarse de esa manera, todo por culpa del maldito Lucas se decía, apretando sus blancos dientes y sus puños con ganas de llorar veía impotente al vejete deseando que un rayo lo quemara o la tierra se lo tragara aunque a su vez pensaba que era ella la que quería eso.
-- Hola ricura… primera vez que te veo por aquí, nos tomamos unas copitas… fue el primer cliente que se acerco a la nena, un hombre de lentes y delgado cerca de los cincuenta años para nada atractivo quien babeaba saboreando el delicioso cuerpo que la colegiala ofrecía… -- cuanto cobras chamaca, estas bien buena para reventarte ese culito jejeje… le dijo otro hombre alto y calvo a quien Cielo Riveros le pareció idéntico al maestro Tulio en una versión muy pobre… -- pero que buena putita jeje… esta me la llevo… dijo un obeso y horrible tipo quien rodeaba a la nena observando cada detalle de su expuesta anatomía… -- pero que buen culo tienes zorrita… buen culo… dijo el mismo sujeto quien se había atrevido a sobarle las nalgas y propinarle una sonora nalgada sobresaltando a Cielo Riveros .
Otro de los sujetos se atrevió a apretarle uno de sus pechos comprobando lo turgente que eran quien seguido de otro también alargo su mano dándose el gusto de sentirlas, Cielo Riveros estaba desesperada alejando esas manos y pidiendo que no la toquen esperando que don Pedro venga y la proteja como él le había dicho… pero al alzar su mirada vio que don Pedro no hacia ningún amague por defenderla y seguía mirándola de brazos cruzados con un gesto de cabeza en señal de aprobación.
Cielo Riveros no podía con los mano largas hasta que uno de los sujetos increpo con voz fuerte… -- ya basta estúpidos… esta zorrita se va conmigo… aquello asusto a la nena pues noto cierta brusquedad y seguridad en aquel tipo… -- Muy bien chiquilla… cuanto es lo que cobras por tu cuerpo… aquello le dolió en el alma a Cielo Riveros pues entendió que en ese momento la estaban tratando como a una meretriz y no veía salida a tan humillante situación y llena de vergüenza de sus labios salieron aquella respuesta indicada por el vejete… -- son qui-quinientos pesos… fueron las dulces y humillantes palabras que salieron de los carnosos labios de la nena sintiéndose morir en aquel momento.
El tipo quien ya la había agarrado de la cintura la soltó con una impresión de total desconcierto en su mirada… -- QUE!!! No mames pinche zorra, como vas a cobrar eso… te doy si quieres 50 pesos… la nena pudo ver entre los desconcertados hombres que la rodeaban a un sonriente Pedro quien con la cabeza le decía que no aceptara… -- ehh no…. son quinientos pe-pesos señor… respondió nuevamente muy apenada, los demás tipos se rascaban la cabeza impotentes ya que aquella suma era casi imposible de pagar y es que en verdad eran conscientes de que por aquel espectacular y juvenil cuerpo 500 pesos era una suma muy miserable de pagar.
-- Estas loca pinche puta… nadie te pagara eso aquí… vete al carajo… se fue dándole un empujón aquel tipo en busca de otra de las prostitutas del lugar, la nena se sintió tranquila al ver como se iba aquel tipo aunque pensativa pues se dio cuenta de que ninguno de aquellos asiduos concurrentes habían pagado alguna vez aquella fuerte suma… no entendía porque don Pedro le había obligado a cobrar aquella suma difícil de pagar pero se sentía tranquila pensando que tal vez todo aquello era un castigo tan solo para humillarla por haber perdido su virginidad.
Los reclamos y propuestas de dinero seguían contra Cielo Riveros viendo casi tranquila la posibilidad de que nadie pagaría aquella cuantiosa suma para los miserables concurrentes de aquel lugar y que su dignidad seguiría intacta; una de las prostitutas quien se había acercado hacia la nena se retiro incrédula y con burla al oír lo que cobraba aquella chiquilla que les había quitado clientela a contárselo a sus otras colegas quienes ya se encontraban furiosas y con ganas de atacarla….
-- Como!!! Que se cree esa perra para cobrar tamaña cantidad… decía una de las prostitutas más maduras de la calle… -- pinche mocosa… y encima nos quita la clientela aun no he ganado nada… decía quejándose otra… -- Vamos a desfigurar a esa zorra… decía una de las más violentas meretrices del lugar…. – tranquilas chicas!!! Esto lo resolverá Edu y Tomas, avísenles…. fue lo que dijo la más vieja quien mandaba allí tratando de calmar a las demás enfurecidas prostitutas del lugar.
Cielo Riveros seguía escuchando todo tipo de ofrecimientos por su cuerpo ya un poco temerosa porque un tipo llego a ofrecerle cerca de 200 pesos, sin duda alguna para la nena veía que nadie podría alcanzar aquella suma que el vejete le había pedido cobrar entendiendo que solo esto era un castigo por no haber conservado su virginidad… en ese momento vio que don Pedro se alejo del lugar desapareciendo de su vista…. – Así que tu eres la que cobra 500 pesos… la nena volteo al oír aquella sonora voz… pudo distinguir a dos fornidos sujetos uno vestido de terno y el otro con ropa deportiva.
Se trataban de dos sujetos que controlaban el tráfico de mujeres en aquella calle Edu quien era la voz mandante vestía de terno color blanco y camisa negra con unos brillosos zapatos blancos y Tomas un tipo de raza negra alto y musculoso con una mirada penetrante y amenazadora que asustaría hasta al mismo Satanás y la nena no era la excepción… -- -Responde putita!!! Tu eres la que quiere 500 pesos…. Cielo Riveros estaba ahora si asustada pues aquellos dos sujetos no disimulaban en nada su molestia pues ninguna chica trabajaba allí sin su protección y su permiso… -- dis-disculpe señor… ya me retiro… dijo nerviosa la nena alejándose de la montonera de tipos.
La nena se sentía aliviada al dejar atrás ese mal momento de denigración y humillación que Don Pedro le había hecho pasar, paso tras paso se sentía bien al alejarse de aquellos asquerosos sujetos buscando con la mirada a donde se había ido el vejete pues el tenia su ropa escolar y con la que tenia puesta de ninguna manera pondría un pie por su vecindario cuando como una rápida sombra vio que Tomas se puso al frente de ella deteniéndola con uno de sus fuertes brazos sobre su hombro… -- A donde crees que vas ricura… tenemos asuntos que arreglar…
Cielo Riveros se asusto al ver la atemorizante cara de Tomas quien la giro y tomándola del hombro la obligo a caminar en dirección a Edu quien esperaba parado tocándose la barba con un gesto de admiración al ver el impresionante cuerpo de la nena acercarse, los demás tipos quienes rodeaban a la nena ya se habían alejado pues como habituales concurrentes ya conocían a Edu y Tomas y lo violentos que eran, en cambio Cielo Riveros muy angustiada miraba para todos lados esperando que don Pedro apareciera y la rescatara pero en ese momento ni su sombra se avistaba.
-- Muy bien zorrita… vienes aquí a trabajar y a quitar clientela a mis chicas y te vas como si nada… le increpo Edu tomándola del mentón amenazantemente mientras Tomas la sujetaba del brazo muy fuerte haciéndola sentir más miedo de la que ya tenía… -- por favor… dis-culpeme señor… déjenme ir…. Edu y Tomas se miraban a los ojos admirados por el espectacular cuerpo de la colegiala y el delicioso aroma que desprendía, sin lugar a dudas veían en la nena una excelente inversión para su vil negocio pues conseguir mujeres de la magnitud y juvenil belleza de Cielo Riveros era muy difícil… -- Escúchame bien chiquilla, has hecho perder mucho dinero a mis chicas son como 20 chicas y cada una cobra 50 pesos… así que me debes 1000 pesos….
Cielo Riveros con los ojos a punto de llorar no podía creer lo que le decían, nuevamente le acarreaban una deuda de la cual ella no tenia culpa alguna y al oír mil pesos le vino a la memoria que era la misma cantidad por la cual don Pedro la había llevado a aquel lugar, pero a pesar de eso ahora sentía mucho más miedo con estos sujetos… -- Tendrás que pagarnos muñeca… y si hoy no juntas los mil pesos trabajaras para nosotros para siempre jejeje… -- ¡¡¡no por favor!!! Déjenme ir… se los ruego por favor…. Pedía con ojos llorosos la nena sin siquiera conmover en nada a los viles sujetos.
Tomas con una de sus grandes manos acaricio las redondas nalgas de la nena sintiendo la escalofriante sensación que producían al palparlas, eran carnes suaves, duras bien formadas y de glúteos levantados, en ese momento Cielo Riveros sufría por dentro llena de angustia y terror al sentir aquella tremenda mano apretar sus redondas carnes… -- ay no dios mío… que no me toque… que me dejen ir por favor… se decía por dentro la nena sintiendo como ahora Edu le apretaba uno de sus apetitosos pechos… -- oye Edu esta chiquilla esta apetitosa… no piensas que primero deberíamos probar de su talento…. Dijo Tomas quien ya tenía una erección con tan solo magrear aquel delicioso trasero.
-- Tienes razón negro…. Le daremos una audición a esta nena pero ahora mismo….. Cielo Riveros se quería morir, aquellos dos explotadores y desalmados tipejos tenían siniestras intenciones para ella y encima querían llevársela y probar de su cuerpo, tragaba saliva mientras Edu y Tomas conversaban sobre sus planes y en aquel momento comenzó a correr despavorida, mientras lo hacía con la dificultad que le daban aquellos zapatos de tacón que le había obligado a poner don Pedro miraba para atrás viendo como los dos sujetos iban tras ella pero sin la intención de correr.
Muy extrañada seguía en su huida cuando es detenida por una de las prostitutas del lugar, una mujer algo gorda y robusta quien la tomo del brazo amenazándola con una afilada navaja… -- no te muevas estúpida!!! que te marco la cara en este instante… le dijo con voz vulgar y amenazante mientras que veía que Edu y Tomas venían con cara de enfado… -- Muy bien Rosa déjanos con ella y vete a trabajar que hoy tienes que pagar 300 pesos… -- pe-pero Edu no creo que… -- silencio y vete a trabajar puta de mierda y me juntas ese dinero…
La nena se asusto por el carácter iracundo con el que trataba Edu a las mujeres, en ese momento pensó en que fue un error el haber tratado de escapar de ellos y con mucho miedo comenzó a disculparse tratando de que no la lastimaran… -- por favor se-señor perdóneme… no me haga daño por favor… pedía la nena con ojos asustados tratando de conmover a los dos sujetos quienes con sonrisas de superioridad se miraban a su vez que miraban a la nena.
-- Tranquila chiquilla, porque vemos un gran negocio en ti… no te haremos nada pero eso si… con tu huida solo lograste llegar hacia donde te íbamos a llevar jejeje… le dijo Edu quien moviendo la cabeza le dio a entender a Tomas que tomara a Cielo Riveros de los brazos… -- muy bien!!! Ahora probaremos que tan puta puedes ser… Tomas comenzó a llevar del brazo a la nena en dirección a los moteles de paso que mas servían como habitáculos de sexo para las meretrices del lugar, la llevaba tan fuerte del brazo haciéndola sentir dolor
Presa de la desesperación iba tratando inútilmente de detener su avance pues al ver a donde la llevaban se horrorizo al imaginarse las sucias intenciones de aquellos desgraciados… -- no!!! por favor… yo les pagare, pero déjenme ir… déjenme por favor…. – jaja vienes a jugar a la puta y crees que te dejaremos ir…. Le dijo con una malévola voz el negro Tomas pasando una de su manos hacia adelante apretándole un pecho… -- jeje desde ahora nos perteneces nena… pero no te preocupes, ganaras mucho dinero y a su vez te terminara por gustar…. La nena comenzó a lagrimear con el alma que se le salía del cuerpo, diciéndose que hasta aquí llego la inocente vida que había tenido.
La llevaron a uno de los cuartos más alejados en donde al abrir la puerta pudo ver unas paredes con la pintura rasgada y ya despintada una cama y una mesita en donde habían una toalla, jabón y un rollo de papel y de un fuerte empujón la tiraron sobre la cama viendo ella como cerraban la puerta, Cielo Riveros sentada y llorando veía como aquellos dos conversaban de otros asuntos sin prestarle atención, fueron como diez minutos hasta que ambos voltearon con una mirada burlona y atemorizante.
-- Muy bien chiquilla… ahora probaremos que tan buena puta puedes ser… le dijo el negro quien se quitaba la camiseta deportiva que llevaba dejando ver unos pectorales muy trabajados y un vientre digno de cualquier fisicoculturista… -- no te preocupes preciosa si lo haces bien hasta te pagaremos jejeje… le dijo el otro quien se sacaba el saco, corbata y camisa quedándose solo con el pantalón puesto… -- por favor no!!! no quiero esto, déjenme ir… los dos echaban a reír burlándose de ella mientras que el negro se bajaba el pantalón deportivo quedándose en bóxer con un tremendo bulto dentro de el.
-- -no quieres esto putita, entonces que hacías allí parada vestida como puta eh… la nena no sabía que contestar, como podría decirles que la obligaban a hacerlo y todo por un chantaje, en ese momento recordaba a don Pedro y su odio crecía más hacia él, la había abandonado en aquel lugar y a merced de estos dos malditos sujetos…. – ya ves mujer… tu silencio lo dice todo, pero no te preocupes que nosotros te graduaremos de puta jejeje… le comento Edu quien sacaba una pistola de su pantalón colocándolo a un lado de la pequeña mesa.
La nena se asusto mas y abrió muy grandes sus hermosos y llorosos ojos verdes al ver como Tomas se bajaba el bóxer dejando ver una tremenda verga llena de venas y con la cabeza ya húmeda por la excitación, Tomas le sonrió al ver su rostro de impresión pensando que la nena estaba maravillada con su herramienta, no sabiendo que lo que más le causaba era terror y cierto rechazo pues era la primera vez que veía el miembro de un hombre africano y a pesar que no era prejuiciosa o racista aquello le causaba repulsión y mucho mas sabiendo que eran unos degenerados explotadores.
-- jaja veo que te impresiona la verga de Tomas… no desesperes que ahorita la probaras… le dijo Edu quien también ya tenía la verga al aire de un considerable tamaño y tomándola de los cabellos la hizo arrodillar en el piso dejándola a poca distancia de la bamboleante verga de Tomas quien con ligeros movimientos golpeaba la hermosa cara de la nena quien cerraba los ojos y su boca evitando sentir el olor y el contacto de aquel miembro que se le hacía repulsiva…. – Abre la boca pinche puta o te rajo la cara…. Le decía muy enfurecido Edu quien apretaba más los cabellos de la nena.
-- Espera un rato Edu… primero quiero ver el cuerpo de esta chiquilla… quiero ver esas chichotas que se me hacen apetecibles… Edu sonrió morbosamente con la idea y en verdad verla con esas pequeñas prendas dejaban entender que la nena tenía un cuerpo espectacular, digno de una diosa griega, la nena seguía con sus lamentos y llorosa preguntándose cómo es que pudo acabar allí y todo por salvaguardar su estúpida reputación con los demás… -- muy bien chiquilla enséñanos las tetas y rápido… no lo volveré a repetir…
Cielo Riveros con el dolor de su corazón y con el alma ya perdida como aceptando su destino comenzó a despojarse del pequeño top dejando ver sus hermosas y majestuosas chichotas, aquella imagen fue demencial para ellos. No habían visto unos pechos tan perfectos, duros y erguidos sin muestras de imperfecciones y con los pezones rosados… -- me lleva el diablo Edu… pero mira que tetas… dijo muy excitado el negro sintiendo como la verga se le endurecía hasta el límite, la nena lo noto también dándole asco y muy angustiada de que aquella negra barra de carne ingresara en ella.
-- Estas buena chamaca… esta nos servirá para ofrecerla a nuestro cartel de empresarios jejeje será un buen negocio… Cielo Riveros se tapo el rostro con sus manos llorando al ver que su vida o su futuro prometedor como profesional se había acabado y había caído en manos de aquellos malditos, en ese momento Edu tomo la palabra…
-- Muy bien puta… primero le darás una mamada a Tomas… hace rato veo que le miras la verga y después… te vamos a dar de a dos y para que veas que somos gentiles tu podrás elegir quien entrara por tus huecos jejeje… esa será tu audición…
Vamos que esperas mira a Tomas ya tiene la verga semiparada de solo verte, tenes un lomo, un cuerpo excepcional muy desarrollado para una nena con carita de colegiala.
Ven pequeña no tengas miedo le dijo el hombre de color, y tomándole de la manito obligo a la temblorosa Cielo Riveros a sostener el terrible falo que se gastaba el negro, a pesar que todavía no había alcanzado su mayor esplendor, el solo grosor de aquella verga era igual a la muñeca de la mano de la hermosa adolescente.
A pesar que Cielo Riveros sabia ya de penes grandes este era mas de lo que jamas había visto en su vida, y comenzó a mover su manito recorriendo la herramienta negra desde la base hasta la cabezota que parecía una ciruela negra gigante, ahora ya con las dos manos la nena pajeaba el miembro que ahora si se puso durísimo como el acero, desde su posición la nena veía la imponente verga y a Tomas que con una sonrisa de dientes amarillos la miraba fascinado por tanta belleza expresada en tan joven hembra.
Ves como se puso mi garrote por tu culpa y esta que revienta de ganas de probarte vamos mueve mas rápido tus manos no seas holgazana, rápido con ganas, demuéstranos que eres buena para putear.
Cielo Riveros pajeaba al negro frenética y rápidamente, y sin que siquiera se lo pidieran engullo de un solo bocado el enorme grande que apenas entraba en su boquita, la ciruela negra entraba por completo en la tierna boca de la colegiala y fue recibido con tibios lengüetazos, la tarea oral Cielo Riveros ya la había aprendido muy bien por los encuentros anteriores con otros tipos.
Asi se hace putilla, chupatelo como lo hacen las prostitutas!!! Alentaba Edu que ya con su miembro también de tamaño considerable, pero no como el de su amigo se masturbaba desde un costado.
Por supuesto que el miembro no entraría entera en la boquita de la chiquilla, pero Cielo Riveros se las arreglaba para que no faltara un lugar del viril pene sea chupado, lamido o escupido, la faena llevaba ya como 5 minutos, y el negro estaba en el Cielo, sin lugar a dudas Cielo Riveros se había convertido en una experta en mamar vergas, y ahora desplegaba toda su experiencia en satisfacer a su aprovechador violador.
Tomas no podía resistir mucho de sus pelotas el semen que tenía quería ya salir y salpicar toda la hermosa carita de niña que se gastaba Cielo Riveros , por eso no espero más y tomándola en sus fuertes brazos, alzo a la colegiala y la coloco justo de frente donde estaba su socio con la verga dura y parada.
Vamos Edu clávatela de una a la chamaca, que parece que ya quiere probar verga y se nota que esta caliente por poco casi me saca los mocos con sus mamadas y lengüetazos la muy putita!!
Cielo Riveros que se encontraba de rodillas en el sillón encima del explotador sexual que prácticamente la había raptado y llevado a ese cuartucho de cuarta, tomo con sus delicada manita el mástil del tipo y de a poco se la fue clavando en su ya lubricada panocha, el miembro de grandes proporciones se deslizaba sin ninguna dificultad en el útero de la joven, hasta que solo los testículos quedaron fuera.
Era sorprendente como la nena se había comido 20 cm. De verga gruesa y dura, estuvieron asi unos cuantos segundos y fue Cielo Riveros quien empezó a subir y bajar lentamente, el miembro casi salía por completo de la caliente panocha, para desaparecer por completo cuando la colegiala se sentaba, una vez mas nuestra protagonista estaba entregada a los placeres de la carne.
Aghh Pendeja!!!si que te moves rico asiii, movete putita vamos demuéstranos lo buena que sos…
Entonces Cielo Riveros comenzó a moverse mas rápido, empezó a moverse en círculos mas rápido, una mezcla de calentura inundaban los sentimientos de la bella adolescente, una vez mas había caído en la trampa del placer y el sexo, estaba siendo violada pero disfrutaba de eso.
El negro Tomas se acerco de espalda a la pareja que se apareaban como si nadie los molestara, y jalándose la verga para asegurarse que todavía la tenía bien parada dijo…
Llego tu hora Cielo Riveros , vas a saber lo que es disfrutar de lo bueno, doble verga, doble empalamiento doble placer…
Cielo Riveros movía su cabeza negativamente sollozando a pesar que disfrutaba de la pija metida en su panocha, no estaba lista para una doble follada, pero los tipos estaban listos para abusar de ella, la sola imagen de verse empalada por aquellos dos le parecía terrorífica cuando en eso tocan la puerta y una gruesa voz que dice… Servicio al cuarto!!!.
Tomas algo confundido quiso tomar su arma siendo detenido por Edu… -- tranquilo wey… debe ser Julio de recepción, le pedí que traiga unos tequilas… cuando Tomas abrió la puerta recibió un golpe seco en la cabeza cayendo al suelo como un costal de papas, cuando Edu quiso reaccionar ya el tipo que había ingresado le apuntaba con un arma… -- Quieto pendejo o te vuelo la cabeza… la nena quien a todo esto y por miedo se había subido a la cama acurrucándose vio a un tipo gordo y encapuchado quien por el momento la había salvado pero sin saber de sus intenciones.
-- Muy bien tu el esquelético arrodíllate… le dijo al agresor a Edu quien obedecía pero sin dejar de mirarlo con su mirada retadora… -- no sabes con quien te estás metiendo cabron, esto te va a costar… el sujeto quien lo apuntaba vio que Tomas volvía en sí y ordeno que se parara a un lado de su arrodillado compañero… -- muy bien pendejo… ahora probaras de esa verga que tanto ofreces… Edu miro a Tomas algo contrariado y Tomas no era esquivo a lo que ordenaban… pero al ver como el encapuchado les apuntaba procedieron a cumplir con la orden… -- esto te costara muy caro imbécil… fue lo último que dijo antes de meterse a la boca la negra verga sin antes ser fotografiado por el agresor y siendo visto por Cielo Riveros sintiendo asco por lo que hacían…. – muy bien ya basta par de maricas, ahora los dos arrodillados contra la pared…
Una vez en aquella posición recibieron un fuerte golpe en la cabeza cayendo desmayados en el piso, la nena pudo ver como el sujeto giro en dirección a ella muriéndose de miedo pues no sabía de sus intenciones… -- por fa-favor no me ha-haga daño… pidió llorando Cielo Riveros tapándose los pechos viendo como este guardaba su arma… -- para que te escondes esas chichotas, si ya las he visto y probado jajaja… le dijo dejándose ver el rostro, Cielo Riveros pudo ver que se trataba de don Pedro, no sabía si alegrarse o matarlo, le había hecho pasar por una experiencia terrible.
-- es usted un maldito, te odio!!! Le dijo la nena poniéndose el top ante la mirada burlona del vejete… -- ósea que te salvo y así me tratas ricura… la nena pudo ver como don Pedro se apresuro en buscar entre la ropa de Edu el botín por el cual había usado a la nena, don Pedro encontró como cuatro mil pesos que no eran más que lo que recaudadaban del esforzante día de trabajo de las chicas, este dinero es lo que te ganaste pendeja… se lo chupaste al negro y el blanquito te la metio por la panocha, suficiente para cobrárselos, una vez cumplido su cometido guardo el dinero dentro de la mochila dejando una nota a los dos desmayados. – Muy bien Cielo Riveros saldremos tranquilos por detrás del motel, no te pongas nerviosa… le dijo don Pedro tomándola de la cintura y estampándole un inesperado beso…. – déjeme maldito!!! Dijo la nena empujándolo viendo como este solo sonreía…
Para esos momentos Rodrigo se sentía nuevamente defraudado, todas las ansias de querer poseer el hermoso cuerpo de su novia se habían desvanecido, marcaba y marcaba el numero de la nena pero este se encontraba apagado… se preguntaba porque nuevamente le hacía eso, si el día anterior había sonado tan ilusionada y ansiosa de hacer el amor con él hasta el extremo de querer quedar embarazada por él, no se explicaba el porqué de su conducta así que vistiéndose salió en su búsqueda, pensando en que lugares la podría encontrar pues primero empezaría por su casa.
Por otro lado Cielo Riveros y el vejete ya muy alejados de la zona rosa en donde paso penurias humillantes seguían su camino algo turbada pues seguían en esas calles corrientes y suburbanas en las que montón de vagos gritaban improperiosos piropos al ser testigos del espectacular cuerpo de la nena tan solo cubierto por un pequeño short que no disimulaba la redondez de esas turgentes nalgas y un pequeño top que tensaban sus tremendos melones.
Algunos vagos que caminaban cerca a ellos se le acercaban murmurándole gruesos piropos, la nena asustada tomándose del brazo del vejete le pedía que la deje ir a su casa -- por favor don Pedro… no me gusta este lugar… déjeme ir… Don Pedro aprovechando su temor la abrazo por la cintura pegándola más a él queriendo demostrar que aquella diosa era suya… -- Deja que griten… que sepan que estoy con mi mujer jejeje… Cielo Riveros se sonrojo mas presa de la indignación pero en ese momento no tenía valor de alejarse del vejete por temor a los tantos vagos que paraban por allí.
¡¡¡ SUUEGROOO!!!... Fue el grito de uno de los vagos que incomodo a don Pedro pues él quería que todos sepan que aquella hermosa jovencita era suya… -- Muy bien chamaca, en este momento demostrare a estos estúpidos que tu eres mi mujer y cuidado con negarte porque te quito la ropa y te dejo con ellos… ENTENDISTE!!!... la nena tenia temor cuando el vejete se exasperaba y si había sido capaz de llevarla a ese centro de prostitución si le creía capaz de cumplir su amenaza así que asintió llena de rabia y miedo ante su pedido, el vejete la tomo por su estrecha cintura sintiendo la suavidad de su piel atrayéndola hacia él y estampándole un asqueroso beso.
La nena al principio quiso negarse en abrir sus labios pero al sentir como este le apretaba con fuerza la cintura accedió dando paso a esa bífida lengua enrollarse con su delicada y rosada lengua, las ásperas manos del vejete no quisieron estar tranquilas y se posaron en las tremendas nalgas de infarto apretándolas con fuerza elevando a la nena en el aire, Cielo Riveros se sentía apenada pues sabía que mucha gente los miraba, que vergüenza para ella que la vean con un viejo tan horrible y en tan candente escena.
La nena seguía soportando esa viboreante y viscosa lengua cuando en la vereda del frente fue avistada por uno de sus nuevos victimarios, la vida siempre le abría caminos nada buenos para ella, era como un imán para los malos hombres, Ramón no creía la suerte que tenia, pensaba que nunca más en la vida tendría la oportunidad de encontrarse a la tan bella jovencita que se le escapo aquella noche… cruzo la acera y con un periódico viejo tratando de ocultarse se acerco en dirección a ellos.
Tras dejar de besarse el vejete observo en dirección de los vagos haciendo un gesto con la mano, tomando nuevamente de la cintura a la nena la encamino a su nuevo destino pero sin dejar de sobarle las nalgas ante la vista de los transeúntes… -- por favor don Pedro, no haga eso… la gente nos está viendo… el vejete la rodeo por el cuello enseñándole un motel de paso… -- jeje quieres que entremos… jeje allí ya nadie nos vera… la nena movió la cabeza negativamente, lo que menos quería en ese momento era que aquel viejo malvado la follara, miraba para todos lados esperando que alguien la salvara, en esos momentos pensaba en don Lucas y su protección pero a la vez sentía que por culpa de él se encontraba en aquella situación.
El vejete la tomo de la mano haciendo que le siguiera el paso… la nena apenada evitaba las miradas de los señores y señoras que miraban extrañados que fuera al lado de aquel feo viejo y peor aun vestida tan escandalosamente… -- a do-donde vamos… pregunto nerviosa y apenada la nena a un sonriente vejete que caminaba orgulloso de la mano de tan tremendo bombon… -- al Night club, quiero tomarme unas copas y que mis amigos conozcan a mi mujer jejeje… Cielo Riveros se indignaba cuando le escuchaba decirle que ella era su mujer, quería matar a ese viejo y no entendía cómo es que en algún momento este vil vejete la había excitado tanto porque en estos momentos solo sentía odio y repulsión.
Ramón les seguía el paso sigilosamente con los ojos desorbitados al ver esas tremendas nalgotas poco cubiertas por el pequeño short, se le juntaba la baba al pensar que de no haber sido por esos mocosos esas nalgas hubiesen sido suyas, maldecía ese momento pero le animaba saber que si aquella hermosa jovencita estaba al lado de tan horrible viejo el podría tener esperanzas de conquistarla sin tener que obligarla.
Tras llegar nuevamente al club ya había algunos concurrentes viendo bailar a las diferentes chicas pero al ver a Cielo Riveros todos se quedaron embobados con tan tremendo cuerpo, el vejete la dejo sentada en una de las sillas del bar ante el desconcierto de ella... -- por favor don Pedro, ya me quiero ir… -- Nada de eso!!! Espérame aquí y si alguien se te acerca tu solo di que tu marido está aquí… Entendiste!!!... Cielo Riveros asintió indignada pero muy temerosa de quedarse sola allí ante tantas miradas libidinosas que le daban.
No pasaron ni dos minutos cuando uno de los sujetos se le acerco a la nena sentándose a su costado…. – hola muñeca, te invito un trago… la nena se puso algo nerviosa -- No gracias… contesto educadamente… -- trabajas aquí preciosa… puedo pagarte lo que quieras… Cielo Riveros se apeno mas pues por su ropa cualquiera pensaría que es una más de las putitas trabajadoras del club… -- eh no… yo no trabajo aquí… le dijo demostrando su incomodidad… -- -entonces que haces aquí… has venido sola… la nena ya no sabía que decir para deshacerse de aquel insistente sujeto y recordando lo que le dijo el vejete y llena de vergüenza le respondió… -- espero a mi… marido… dijo sonrojándose de vergüenza.
-- tan joven y con marido… no te creo… le decía el tipo sin rendirse en su intento de querer ligarse a la nena y acercándose un poco más a ella colocando su mano en una de sus rodillas, ella se la quito desesperada mirando para todos lados en busca de don Pedro y cuando lo vio le levanto la mano llamándolo… aquel tipo volteo a ver viendo como don Pedro hacia una señal de que se aleje de ella… -- Ese viejo es tu marido… dijo desconcertado el tipo viendo como la nena asentía un poco sonrojada.
Nuevamente la nena se quedo sola muy incómoda y nerviosa, el cantinero le ofreció un vaso de agua la cual algo nerviosa acepto, en ese momento a una cierta distancia se encontraba Ramón viendo estupefacto a la nena sentada con las piernas cruzadas, esas tremendas y suaves piernas que ya había tocado en el bus y también los deliciosos pezones que se le marcaban por el ajustado top, aun tenía en sus resecos labios el sabor de los labios de la nena, de esa deliciosa boquita que a la fuerza cubrieron su apestosa verga… no podía mas, esa nena debería ser suya y metiendo una mano en su bolsillo en busca de su navaja fue en dirección de la nena con la intención de llevársela.
La nena no se daba cuenta de quien venía en su búsqueda estaba distraída bebiendo del vaso de agua observando a las bailarinas no comprendiendo como se podían dedicar a tan denigrante trabajo cuando la jalan abruptamente del brazo… -- Ven putita… ahora iremos a un privado… quiero que bailes para mi jejeje… le dijo don Pedro a la nena quien lo miraba avergonzada por lo que le pedía, detrás de ellos Ramón se freno en sus intenciones, viendo como aquel viejo se llevaba a la fuerza a su objetivo más preciado.
El vejete llevaba a la nena de la cintura como empujándola hacia los privados del clandestino recinto en donde quería deleitarse con el exuberante cuerpo de la nena sin que esta se sienta cohibida por las demás personas… -- por favor don Pedro… ya fue suficiente, déjeme ir… suplicaba la colegiala siendo empujada dentro de la cabina en donde estaba el privado, tan solo había un sofá reclinable unos parlantes de donde sonaba la música especial para estos bailes y una pequeña tarima en donde las chicas realizan sus sensuales bailes.
Don Pedro se sentó cómodamente en el sofá indicando a la nena pararse en la tarima… -- muy bien!!! Ahora quiero que bailes para mi jejeje hasta que quedes encuerada jejeje… a la nena se le vino a la mente la manera denigrante como las chicas se ganaban la vida y ahora ella era obligada a realizarlo también… -- que esperas… empieza ya… Cielo Riveros lo miraba con sus ojos llenos de tristeza e impotencia y a su vez de odio y rencor sin saber que hacer pues la situación le era demasiado incomoda y humillante, don Pedro le tomo del broche del pequeño short jalándolo hasta sus pies sorprendiendo a la nena quien llevo sus manos hacia su intimidad tan solo cubierta por su diminuta tanguita.
-- Ya vez!!! Es así de fácil, baila y quítate la ropita jejeje… el vejete volteo a sentarse sobándose la verga por encima del pantalón viendo como aquellas hermosas y torneadas piernas dibujaban una perfecta y hermosa curva hacia su estrecha cintura, era excitante ver a la hermosa jovencita solo en tanguita y con un pequeño top ocultando casi nada de esas chichotas, en cambio Cielo Riveros estaba cohibida por la inocencia y sana costumbre que siempre había precedido en ella y cayendo de rodillas en la alfombrada tarima movió negativamente su cabeza… -- no… no puedo… no puedo hacerlo….
El vejete lejos de enfadarse solo la miro con poca compasión parándose y saliendo del privado, no paso ni un minuto y regreso deteniendo a la nena en su intento de ponerse el short… -- muy bien Cielo Riveros … la nena se sorprendió que no la llamara putita como siempre lo hacía… -- vendrá una de las chicas a bailar aquí y aprenderás como se hace… don Pedro tomo asiento en el mismo instante que la bailarina entro al privado, la nena se apeno un poco llevando sus manos hacia su intimidad ante la sonrisa sarcástica de la danzante, don Pedro tomo de la mano a Cielo Riveros sentándola de espaldas a el sobre sus piernas, Cielo Riveros pudo sentir claramente el bulto que ya se formaba en los pantalones del vejete, quiso ponerse de pie pero don Pedro la tomo de la cintura dominantemente claudicando en su intento de separarse de el.
La bailarina comenzó a bailar con sus sensuales movimientos ante la mirada morbosa del vejete y la mirada apenada de la nena quien a veces miraba al suelo pues la bailarina la miraba a los ojos sonriente lo que la hacía cohibirse más… don Pedro acerco sus labios sobre el cuello de la nena dándole suaves y pegajosos besos que hicieron temblar entera a la nena sonrojándose más al ver como la bailarina seguía sonriendo ante lo que veía, el vejete tomo de las caderas a la nena haciendo círculos sobre su empalmada verga.
Cielo Riveros ya sentía como la verga de don Pedro estaba completamente dura reclamando salir pues había reconocido ese culo que ya una vez había probado, quería salir huyendo de allí pero tenía miedo a la reacción del vejete quien subió sus labios hacia su oreja izquierda mordiéndole suavemente el lóbulo y susurrándole palabras calientes… -- que buena estas putita… te voy a comer enterita, mi verga quiere explotar dentro de ti… para nuevamente bajar sobre su cuello con más feroces lamidas y mordidas, Cielo Riveros comenzaba a perder el control y se azoraba al ver como la bailarina sonreía y le guiñaba el ojo.
Una de las manos del vejete subió desde su liso vientre hasta meterse debajo del top atrapando uno de los majestuosos pechos dejando a la vista el otro, la nena se puso roja pues la presencia de la bailarina le daba vergüenza, que pensaría de ella en un lugar como ese y con un viejo desagradable, la mano de don Pedro seguía amasando las chichotas pasándose de la una a la otra mientras su otra mano fue en dirección hacia la panocha.
La mano cual araña se fue metiendo por debajo de la delgada tela de la tanga sintiendo los pequeños vellos que tenían hasta llegar a la caliente vulva, la nena tomo la mano de don Pedro tratando de quitársela inútilmente ya que los mordiscos que le daba en el cuello la hacían claudicar en su lucha, con sus ojos entrecerrados podía ver como la bailarina se pellizcaba los pechos pues aquella visión de una jovencita tan hermosa siendo manoseada por un viejo era lo más morboso que uno podía ver.
Suavemente don Pedro comienza a sentir los leves gemidos que daba la nena, a su mente le llegaban los recuerdos de cómo logro seducirla en la feria así que su lengua comenzó a recorrer con ahincó aquella parte tan sensible de la nena con la sola intención de excitarla y despertar a la mujer hambrienta de sexo que yace en ella, con los dedos comienza a acariciarle los labios vaginales junto a su sensible clítoris ante la impotente fuerza de la nena quien trataba de quitar esa mano de su intimidad… -- por fa-favor don Pedro, de-déjeme… no me toque ahhh…
Cada vez Cielo Riveros comenzaba a ceder en su intento de librarse de esa situación, sus ojos se entrecerraban presas de las caricias que la habilidosa mano le hacía en su panocha, dócilmente dejo caer su cabeza en uno de los hombros de don Pedro ante la mirada morbosa de la bailarina quien se encontraba excitada con la situación, el vejete reclino el sofá hacia atrás quedando casi como una cama… -- que rico hueles putita, la vamos a pasar bien y tu panocha sabrá lo que es tener una verdadera verga adentro jejeje…
Reía el vejete pensando en que había sido su novio el que la había desvirgado, el sabia por el diario de la nena que aquel muchachito era un tanto desproporcionado virilmente y se burlaba de aquello mientras que Cielo Riveros se mordía los labios pues no aguantaba tantas caricias en su panocha como en el resto de su cuerpo, el vejete tomo ambos lados de la tanguita y de un fuerte jalón lo rompió dejando a la vista las juveniles intimidades de la nena quien junto las piernas apretando la mano del vejete…. – Don Pedro NO!!! la chi-chica me está vi-viendo ahhh ahhh…
Exclamo la nena reclamando que se sentía apenada que la bailarina la viera lo cual fue tomado con morbo por el vejete quien con un movimiento de cabeza le indico que se fuera lo cual sonriente lo hizo dejándolos solos y con la puerta entreabierta, para esos momentos Ramón quien se encontraba en aquel pasillo muerto de curiosa morbosidad, envidia y celos buscaba en cuál de los privados se encontraba aquella deliciosa jovencita que se había convertido en la causa de todas sus masturbaciones y sucias eyaculaciones fue en ese momento que vio salir a la bailarina del privado y disimulando su presencia espero a que se fuera para acercarse y fisgonear.
En el privado la nena ya no podía aguantar más tanto toqueteo y de su boca los gemidos se hacían cada vez más excitantes, un dedo del vejete ya se encontraba dentro de ella provocándole sensaciones delirantes, sus delicadas manos que hasta un momento antes trataban de detener los magreos de sus senos y panocha ahora solo las acariciaban suavemente y los zapatos de tacón cayeron al suelo, don Pedro sentía claramente como la piel de Cielo Riveros ardía de la excitación aunque muy a su pesar la nena no soportaba la idea que su cuerpo comenzara a responder a los estímulos de aquel viejo que la había estado humillando durante todo el día.
-- te gusta putita… gimes como una gatita, ya verás como gozaras conmigo… la nena se mordía los labios pero su cuerpo se tensaba en impotencia al oírle ganador al vejete estaba reuniendo fuerzas para deshacerse de las manos de ese viejo, desde su interior sentía que le nacían fuerzas para detener lo que le estaba haciendo pero como si se hubiera dado cuenta don Pedro comenzó a besarle y mordisquearle el cuello acelerando el movimiento de sus dedos dentro de ella, aquello fue fatal para Cielo Riveros quien sujetándose por ambos lados del sofá comenzó a gemir mas fuerte sintiendo como desde debajo de ella el vejete la punteaba con fuerza con ese duro bulto que ya asomaba.
En ese momento Ramón se asomaba por la puerta que se encontraba entrejunta pudiendo ver el espectáculo más morboso que jamás había visto, sus ojos no podían dar razón a lo que veían, como era posible que un viejo como ese pudiese estar gozando de aquella hermosa jovencita, el gandaya apretaba los puños de impotencia y envidia al ver como la nena gemía con la mano del vejete dentro de su panocha y la otra amasando aquellos melones que el también en el bus había disfrutado, sin darse cuenta dentro de sus sucios pantalones la verga se le comenzó a parar presa de la emoción, celos y el morbo de aquella escena.
El vejete seguía con la incursión dentro de la panocha de la nena y estirando un dedo hábilmente comenzó también a penetrar aquel ano que ya le habían hecho sentir maravillas al penetrarla haciendo curvar el cuerpo de la colegiala disfrutando de esa sucia mano que ya la había calentado con tan solo tocarla, muy dentro de ella se sentía mal por estar disfrutando de lo que le hacia aquel viejo que en todo el día no había más que aborrecido y odiado, se preguntaba porque era así, porque siempre cedía ante los acosos y tocamientos de los tipos repugnantes, porque su cuerpo terminaba muy placenteramente por entregarse a los sucios deseos de aquellos sucios y degenerados malvivientes.
-- ahhh ahhh ya nooo… de-dejeme por fa-favor ahhh…. Pedía rogando con una voz tan sensual la nena retorciéndose sobre el fofo cuerpo del vejete quien tan solo aceleraba sus lamidas y manoseos con la sola idea de desquiciarla de placer y despertar a aquella lujuriosa hembra que conoció en la Feria… -- tranquila mi putita… relájate y veras que la pasaremos delicioso jejeje… le dijo con su cálido y maloliente voz sobre la oreja de la nena para seguir chupándosela como un sádico sabiendo ya que ese era uno de los puntos débiles y erógenos de la encamable chamaca, el vejete seguía paso a paso todo lo que le hizo en la Feria.
La pobre nena ya no podía resistir mas, su cuerpo ya estaba hambriento de sexo de aquel sexo que en esa tarde hubiese estado teniéndolo con su adorable novio, tan solo acordarse de Rodrigo hicieron que una lagrima saliera de sus bellos ojos, pensaba que esto no podía seguir así, Rodrigo no podía seguir sufriendo sin saberlo por sus tantas infidelidades no consentidas y que los cándidos e inocentes labios de Rodrigo probaran los suyos después de haber besado asquerosas bocas o de haber mamado de repugnantes miembros, su conciencia le decía que debía de terminar con Rodrigo porque el no se merecía una chica como ella.
Sus delicadas manos arañaban el sofá ya no aguantando tanto placer que sentía, su redondo trasero sentía el duro bulto del vejete que se le metía entre sus nalgas aun dentro del pantalón, don Pedro sujeto con ambas manos aquellos dos melones amasándolos como un sádico sin dejar de lamerle el cuello y la oreja, la nena ya demasiado excitada llevo sus dos manos hacia las del vejete acariciándolas y pidiendo que se las agarre más fuerte, don Pedro esbozo una sonrisa de satisfacción al ver que ya ese arroz se había cocinado al punto que a el le gustaba, nuevamente bajo una mano hacia la panocha hurgando con ligeros movimientos mientras seguía pasando de pecho en pecho con la otra mano.
Los gemidos de la nena ya iban a la par con la música del privado, aquel embriagante gemido que llegaban a los oídos de Ramón quien presa de la excitación se metió una mano dentro del pantalón comenzando a sobarse su ya erecta verga; mientras que don Pedro sin dejar de masturbar a la nena llevo uno de sus dedos a la boca de la colegiala quien ya muy caliente comenzó a chupar entre gemidos… -- huy que rico lo chupas mi putita jejeje así también me chuparas esta verga que tanto te gusta…. Le dijo el vejete a una excitada Cielo Riveros quien por dentro sentía vergüenza pero se había ya dejado vencer por los deseos y ansias de sexo de su exuberante cuerpo.
El sonido de esa deliciosa boquita chupando el regordete dedo del vejete era escuchado por Ramón quien ya comenzaba a sentir envidia y celos de la suerte que tenía ese despreciable viejo, don Pedro muy hábilmente volteo a la nena frente a el apoderándose de aquellos labios que en todo el día se habían resistido a besarlo o lo habían hecho a regañadientes pero esta vez ya estaban dóciles y sumisos a recibirlo, su viscosa lengua se metió dentro de la fresca boca de Cielo Riveros buscando su rosada lengua, la nena pudo sentir el olor a alcohol y descuido bucal que el viejo tenia pero muy a su pesar no oponía resistencia y más bien correspondía a tan asqueroso beso.
Ramón veía la escena ya muy furioso al ver como esa chiquilla que tanto deseaba correspondía a tan horrible viejo, el recordaba que tuvo que forzarla y amenazarla para que le correspondiera pero en ningún momento sintió tanta docilidad como en la que ahora era testigo, el vejete estiro sus manos hacia las portentosas nalgas de la nena agarrándoselas con fuerza dejándole las marcas de sus sucias manos y meterle uno de sus dedos en el ano para comenzar con una suave penetración… -- huy que rico culo tienes chiquita… te lo voy a romper de nuevo y a tu panocha también, hoy sabrás lo que es tener allí una verdadera verga de macho y no la cosita esa que te metió tu noviecito jejeje…
Le decía el vejete chupeteándole el cuello a una nena quien miraba con los ojos entrecerrados y excitados hacia el techo, instintivamente se acomodo sobre el vejete sintiendo la dureza de su oculto miembro sobre su vulva y sintiendo el dedo del vejete estimularle el ano, el placer era tanto y ansiaba mas y muy lentamente comenzó a frotar su panocha contra el miembro del vejete comenzando a gemir cada vez mas… -- ahhh ahhh ayyy siiii… el vejete sonreía ante los gemidos de excitación de la nena quien seguía con la cabeza levantada gimiendo excitada dejando sus redondas chichotas al alcance del vejete quien sin pensarlo mucho comenzó a morderlos, chuparlos y lamerlos como un loco hiendo de uno en uno provocando mas sensaciones de placer a la ya entregada colegiala.
Ramón veía babeando de hambrienta envidia como aquel viejo iba de seno en seno chupándolos como un bebe, deseaba tanto ser el mismo quien los probara, ya no aguantaba ser solo testigo de tan caliente escena, el la quería solo para el…. Mientras que el vejete ya no podía mas, las caricias que la vulva de la nena le daba al frotarse ya lo tenían por reventar, no quería que fuese en ese lugar pero ya la excitación era demasiada y estirando una mano comenzó a desabrochar su pantalón siendo notado por la nena quien sabiendo de sus intenciones se levanto un poco para dejar que el vejete sacara aquella barra de carne que ya una vez en la feria la habían embriagado de placer.
Sus miradas se encontraron la de el era horrible, la de un sádico quien sonreía triunfante, la de la nena era de excitante confusión pues a pesar de la excitación se daba cuenta quien era aquel viejo que por chantajes se había apoderado de ella pero por culpa de su cuerpo excitado y traicionero no podía negarse a sus caprichos de lujuria, el vejete ya tenía la verga fuera, estaba rígida, dura con múltiples venas llenas de sangre que la mantenían vigorosa, la nena se dejo caer sintiendo en su vulva el calor de aquella verga que aun no entraba en ella.
-- Ahora si cachorrita, ahora si sabrás lo que es que te desfloren jejeje… el vejete tomo su mástil colocando la roja y lubricada cabeza en la entrada de la aun núbil vagina de la nena quien al sentirla comenzó a temblar de excitación al sentir como sus labios se abrían tratando de dar paso a tan grueso visitante, sintió un dolor agudo cuando la cabeza del miembro se abría paso gimiendo con dolor al ver que no sería fácil aquella incursión, pero ya una vez acomodada el vejete pensó en clavársela con todo, con fuerza como para que nunca se olvide de el y lo recuerde siempre, la tomo de la cintura tomando fuerzas para enterrársela hasta el fondo.
Pero en ese mismo instante irrumpió con suma vehemencia Ramón navaja en mano sorprendiendo a los calientes amantes, la nena se levanto de encima del vejete ocultando su panocha pues el top que aun tenia puesto ya ocultaban sus melones, el vejete ajustándose el pantalón se levanto increpando al que había interrumpido su caliente sesión… -- quien mierda eres pendejo… largo de aquí….
La situación era tensa en aquel privado, Ramón estaba en posición de ataque con su afilada y oxidada navaja, mientras que don Pedro se puso frente a el arreglándose la ropa muy furioso porque este desgarbado o esquelético sujeto le haya malogrado tamaña situación… -- A un lado viejo inútil…. Esa chiquilla se viene conmigo… le respondió amenazante y sin dejar de mirar a una aun contrariada Cielo Riveros … -- TU!!! CHIQUILLA… VEN PARA ACA… CREISTE QUE NUNCA TE IBA ENCONTRAR… le dijo Ramón a la nena quien recuperaba el aliento y dándose cuenta para su terrorífico asombro de quien se trataba.
Cielo Riveros presa del miedo al ver a ese repugnante sujeto quien bajo amenazas se la iba a llevar aquel día en el bus se acerco a espaldas del vejete como buscando protección, Ramón se enfurecía mas al ver como aquella nena prefería al viejo en vez de a el… -- Puta maldita… te digo que vengas conmigo…. Le grito asustándola más ante la negativa de ella quien movía la cabeza sin poder articular palabra alguna por el miedo a todo esto, don Pedro viejo zorro en toda su vida analizaba la situación y en el momento que Ramón estiro su mano para jalar a la nena el vejete tomo la mochila de Cielo Riveros dándole un fuerte golpe en la cara que lo tiro al piso.
Las cosas de la mochila cayeron al suelo, el dinero entre algunos cuadernos y lapiceros, Ramón algo aturdido se levanto de nuevo navaja en mano pero ya para esto don Pedro estaba revolver en mano apuntándole… -- Ahora pues pendejo, te atreviste a interrumpir mi velada con mi nena… momento en el cual el vejete le estampo tremendo golpe que lo tiro al suelo, Ramón cayo aturdido en el piso desde donde veía a su tan anhelada diosa… -- Vístete Cielo Riveros … nos vamos de aquí… le dijo don Pedro llamando a seguridad del local y comenzó a darle de patadas sin piedad a Ramón.
El pobre tipo antes de perder el conocimiento ante tanto golpe pudo divisar en el piso el carnet escolar de la nena y la tanguita rota tomándolas rápidamente se los metió dentro del pantalón cayendo desmayado, Cielo Riveros ya se había puesto más que el pequeño short porque su tanguita estaba rota veía como don Pedro recogía las cosas del suelo metiéndolas a la mochila, momento en el cual el negro de seguridad y Cecilia la dueña del local preguntaban que pasaba… -- No pienso pagar nada, este tipo se metió y me quiso robar, no hay seguridad en este lugar… dijo quejándose el vejete ante una contrariada Cecilia quien asintió ordenando sacar al desmayado Ramón del Local.
CONTINUARA... PARA LOS QUE QUIEREAN REMEMORAR LOS HERMOSOS Y CALIENTES MOMENTOS DE NUESTRA HERMOSA COLEGIALA LLAMADA CIELO RIVEROS .
Cielo Riveros 35 don Pedro su marido
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El vejete dio media vuelta sin quitar sus dedos de la panocha apretándose contra ella, don Pedro como un hambriento comenzó a engullirse uno a uno los pezones de las húmedas chichotas…veras pronto tus tetas darán leche jajaja
PARA LOS AMANTES DE LA HERMOSA COLEGIALA LLAMADA CIELO RIVEROS AQUI UN CAPITULO DE CUANDO LA NENA ERA UNA ADOLESCENTE.
A esas horas en la escuela de Cielo Riveros Rodrigo esperaba la salida de su novia, había estado en casa de ella tocando desesperadamente, fue don Benito quien al verlo le dijo que se había ido a la escuela, el inocente Rodrigo pensó pues que por lo responsable que era ella prefirió estudiar y muy tranquilo esperaba su salida para llenarla de besos y perdonarle que le haya fallado, pero ya era mucho el alumnado que salía y no podía ver a la nena, se metía entre la montonera de chicas y no la encontraba hasta que de improviso alguien la saludo… -- Hola Rodrigo… le dijo una sensual voz que lo hizo despabilarse un poco… -- eh Hola Claudia, como estas… de casualidad no has visto a Evi…
A Claudia se le frunció el seño, ella había estado en la escuela arreglando su regreso a la prepa y sabía que Cielo Riveros había faltado, en donde estaría se preguntaba ella, si no estaba con su novio “el buenito”, con quien estaría, pero su espíritu de amiga razono de inmediato para ayudar a su amiga… -- Ah si Eve… pues veras, nos han dejado un trabajo muy complicado, si no lo presentamos reprobamos, así que ella se fue al centro a comprar unos materiales que necesitamos y después irá a mi casa, así que no la esperes jijiji…
Rodrigo se quedo pensando, pues a pesar que Claudia había sido muy convincente aun quería ver a su novia y que ella mismo se lo diga, pero Claudia una maestra en la mentira y la disuasión notaba algo confuso y desconfiado al chico y mordiéndose el labio muy sensualmente le tomo el mentón pellizcándoselo suavemente… -- tranquilo Rodri… crees que Eve engañaría a un bombón como tu… Rodrigo se sonrojo sonriendo tímidamente pues desde siempre Claudia lo intimidaba pues era todo lo contrario a su cándida novia… -- tu tranquilito muñeco, que yo le digo que te llame, bye…
Rodrigo se sintió un poco más tranquilo listo para retirarse viendo como Claudia se iba meneando su trasero ante los silbidos de los demás chicos quienes le piropeaban el culo, Claudia llevo su mano hacia su derrier dándose unas palmaditas ante las risas de los demás y sacándole una sonrisa a Rodrigo quien por dentro pensaba (loca de m…). Unos metros más allá Claudia marcaba el número de Cielo Riveros tratando de comunicarse con ella pero aun estaba apagado… -- Pinche Cielo Riveros , con mi papa no creo que estés, pero ya me dirás que estás haciendo pinche perra… pensó riéndose al imaginarse que su recatada amiga se encontraba revolcándose con algún tipo.
Regresando a la incómoda situación que vivía la nena ambos ya se encontraban muy alejados del Night club, el vejete le había preguntado de donde la conocía aquel sujeto que irrumpió en el local, la nena solo mantenía la cabeza abajo sin contestarle ante lo cual el vejete la tomo por los brazos samaqueandola en pos de encontrar una respuesta, la nena con los ojos vidriosos le conto muy apenada como fue la situación en el bus y como aquel sujeto se la quiso llevar a la fuerza, el vejete se molesto mas, pues en ese caso hasta le hubiese dado más fuerte a Ramón, tan solo imaginarse a Cielo Riveros en manos de aquel sujeto le provoco unos celos enfermizos.
-- Bueno ya paso!!! Ahora vamos a mi casa a continuar lo que nos interrumpieron…. La nena protesto pues ya no quería estar un instante mas con él, quería irse a su casa ya no soportaba mas toda esa situación – no don Pedro, ya fue suficiente, déjeme ir por favor, yo no quiero estar con usted… el vejete lejos de molestarse sonrió pues a el le gustaba así, que se niegue para después lograr excitarla… -- pero chiquita, en el local la estabas pasando bien, hasta tu misma buscabas que mi verga te penetrara jejeje… la nena movía la cabeza negativamente tratando de negar aquella aclaración.. – no... no es ci-cierto… -- claro que es cierto, eres como una lámpara mágica, solo basta que te sobe y cumples todos mis deseos jejeje… le dijo el vejete agarrándola de la cintura y sobándole las nalgas ante la vista de las personas.
Cielo Riveros miraba para todos lados llena de vergüenza tratando de zafarse del vejete ante las miradas morbosas y escandalosas de las personas que los observaban al pasar… -- no… Usted solo me chantajea, me obliga, usted es un miserable… el vejete solo sonreía ante los reclamos de la nena y soltándola la tomo del hombro mirándola a los ojos… -- muy bien Cielo Riveros te propongo algo… te daré las fotos que tengo de ti, el video y todo lo que te comprometa conmigo, así quedaras libre de mis chantajes… Cielo Riveros abrió bien grande sus ojos verdes, el vejete le proponía devolverle todas las pruebas que denigraban su reputación… -- en se-serio, no me miente… -- no te miento amorcito pero todo eso con una sola condición… Cielo Riveros cambio su expresión de sorpresa pues aquello no le auguraba nada bueno por parte del vejete… -- y cual es la condición… pregunto ante un don Pedro que caminaba en círculos delante de ella.
El vejete paró en seco frente a ella mirándola de pies a cabeza… -- MMM pues veras, quiero que esta noche te me entregues, que follemos hasta que no nos quede una gota de sudor, que hagas todo lo que te pida sin miramientos u objeciones, todo eso y eres libre te lo prometo… amanece conmigo como marido y mujer y tu vida volverá a ser la de antes, palabra de hombre…. Le dijo el vejete estirándole una mano a la nena en pos de firmar el trato.
Cielo Riveros abrió la boca ante la indecente propuesta… --Co-como!!!... marido y mujer, usted está loco… dijo la nena negativamente muy ofuscada por tal condición… -- tu eliges mi reina, hacemos el amor toda la noche y quedas libre para siempre o no aceptas y seguirás pasando días como los de hoy je je y es más, hasta te recogeré en tu vecindario para que te vean así… la nena movía su cabeza negativamente, el vejete la presionaba muy bien para que aceptara su propuesta… -- Que decides muñeca… no tengo todo el día… solo una noche de sexo y te olvidas de mi….
Cielo Riveros estaba estática, en ese momento el vejete solo le causaba asco y repulsión, pues a pesar que el trato le parecía asqueroso sería el fin de su pesadilla y el comienzo de su tranquilidad pero sabía que aun era un chantaje, le miraba con ojos de furia e impotencia con la respiración agitada hasta que dócilmente le respondió… -- pero no puedo… mi abuelito se molestara si no llego a casa… el vejete sonrió morbosamente, aquella aseveración le indicaba que la nena aceptaba su propuesta y ahora solo tendría que ingeniárselas para solucionar esos pequeños detalles…
-- Toma tu celular y avísale a tu abuelo que te quedaras en casa de una amiga… la nena estaba nerviosa o más bien triste por tener que llamar y mentirle a ese viejito tan cariñoso que tanto las quiere, al mirar el celular vio bastantes llamadas perdidas de su querido Rodrigo, su conciencia la avasallaba con múltiples misiles de dolor, pero a su vez pensaba, es por ti Rodrigo, a partir de mañana ya nadie se interpondrá entre nosotros….revisando vio las llamadas de Claudia y un mensaje de texto que decía: Que estás haciendo amiga: mámasela bien hasta la última gota jajaja .
Su rostro se sonrojo pero ya estaba acostumbrada a esos mensajes de su loca amiga a la cual llamo… --Hola Claudia… quiero que me hagas un favor amiga… al escuchar la nerviosa voz de Cielo Riveros , Claudia sonrió pues para ella solo existía el sexo como excusa… -- wau amiga jajaja, cuantos orgasmos ya has tenido jajaja… Aquella conversación fue escuchada por don Emilio quien justo pasaba cerca de la habitación de su hija… Cielo Riveros muy incómoda no sabía que responderle a su ladina amiga puesto que el vejete se acerco a ella abrazándola por atrás y dándole sonoros besos que era escuchados al otro lado del celular por Claudia… -- Ah ya veo… estas en tremenda faena aun… así me gusta amiga que disfrutes y disfruten de tu cuerpo jajaja…
Don Emilio no podía ocultar su frustración al oír eso, la chiquilla que tanto deseaba se encontraba con otro, comiéndose ese delicioso cuerpo que el tanto deseaba pero que como un cobarde negó… -- Claudia ya basta… hazme un favor, quiero que llames a mi casa y le digas a mi abuelo que me quede en tu casa, por favor amiga… Claudia solo sonreía muy encantada de apoyar a su amiga… -- Claro que si amiga, no te preocupes por eso… tu solo disfruta del sexo, me alegro por ti… Cielo Riveros solo la escuchaba algo molesta pues el vejete podía oír todo sin dejar de toquetearla ante la vista de la gente… -- y dime… con quien estas amiga… no será ese tal Pedro del que me hablaste una vez…
Don Pedro pudo escuchar lo que dijo Claudia enorgulleciéndose mas, Cielo Riveros muy apenada y queriéndose morir se despidió de Claudia molesta por tal infidencia… -- Chau Claudia y gracias… el vejete no le dijo nada solo le sonreía morbosamente y casi con burla ante las miradas esquivas de la nena quien se sentía avergonzada… -- jaja tranquila mi reina, ya en tu diario había leído que te gustaba mi verga jajaja… en ese instante Claudia marcaba el numero de la casa de Cielo Riveros metiéndole un cuento a Don Benito convenciéndolo de que pasaría la noche con ella, Claudia se sentía excitada al pensar en su amiga follando como loca dándose cuenta que su papa estaba a un lado de la puerta… -- ni modo Papa… por cobarde te la ganaron… viendo sonriente como este se retiro de su puerta.
En ese instante el vejete paro un taxi subiendo ambos en dirección a su casa, durante el trayecto el taxista no podía evitar ver por el retrovisor como el viejo la tenia abrazada y con la otra mano le acariciaba las torneadas piernas dándole besos en las mejillas y cuello ante una tímida y apenada nena, no se explicaba cómo es que una hermosa chiquilla se deje tocar por tan despreciable sujeto.
La oscuridad de la noche era muy penumbrosa en el vecindario del vejete; don Pedro y la nena iban por el pequeño y oscuro callejón en donde vivía el viejo, cabe recordar que la morada del vejete era una de las más grandes y alejada de las demás, la nena caminaba muy incómoda al imaginarse que toda la noche tendría que soportar encima suyo a ese horrible viejo, estaba hasta pensando en dar marcha atrás y no aceptar el trato pero en ese momento recibió la llamada de Rodrigo en su cel… -- Hola amor… como estas… le dijo su inocente novio muy alegre de que le respondió la llamada… -- Rodrigo!!! Eh dis-disculpa por lo de hoy…
El vejete se acerco a la nena arrimándola contra la pared para empezar a tocarla morbosamente, Cielo Riveros se puso nerviosa pues temía que su novio sospechara algo… -- tranquila putita o te quito el celular… en ese momento el vejete le estampo un beso de lengua que la nena no pudo evitar tan solo con el celular en su oreja oyendo a su novio… -- no te preocupes amor… Claudia ya me explico todo, dale bien fuerte a ese trabajo, mañana te llevo a la escuela, te amo!!! Le dijo esperando su pronta respuesta, la nena quería zafarse de ese beso pero le resultaba difícil hasta que el vejete la soltó… -- ok Rodrigo, bye… la nena colgó mirando enfadada al vejete que tan solo sonreía.
El vejete la tomo de la mano entrando ambos a su casa, dándose con la no grata sorpresa de que Raymundo su bobalicón hijo se encontraba con tres amigos jugando videojuegos y tomándose unas cervezas, los chicos se quedaron con la boca abierta y babeando al ver el tremendo mujeron que venía con don Pedro… -- A ver tira de idiotas, se me van que quiero intimidad con mi mujer… decía el vejete llevando de la mano a su habitación a una completamente sonrojada Cielo Riveros quien notaba las miradas lascivas que le daban a su expuesto cuerpo… el vejete antes de cerrar la puerta les dio un guiño a los muchachos, quienes no podrían creer que aquel sucio viejo se iba a comer semejante hembra.
Raymundo un muchacho de 23 años que siempre llevaba la cabeza rapada, con marcas de acné y siempre vestido con ropa vieja ya que con las justas vivía de la venta de unos diarios y que la mayor parte del tiempo se la pasaba viviendo del hurto, sentía envidia por aquella chamaca que ya una vez había visto pero que no podía creer que su viejo y horrible padre pudiese poseer, rápidamente con sus amigos se dirigieron hacia la puerta para tratar de ver o escuchar lo que allí iba a acontecer.
Una vez adentro el vejete abrió su ropero sacando su cámara y toda prueba que tenia de la chiquilla… -- Muy bien mi reina aquí están las pruebas, todo lo que te vincula a mí, solo ahora me harás disfrutar de una noche de sexo y fin a nuestra historia jejeje… Cielo Riveros tragaba saliva pues a pesar del trato le parecía repugnante el tener que pensar en satisfacer a tan horrible viejo… -- que esperas, ven a mí, si ya sabes que te gusta cuando te toco, hasta a tu amiga le cuentas de mi… el vejete se acerco hacia ella quien negaba tales aseveraciones… -- eso no es cierto… usted no me gusta, adema apesta… le contesto la nena mostrando muecas de disgusto.
-- Apesto!!! Jajaja bueno eso se puede arreglar… el vejete comenzó a desbotonar su arrugada camisa a cuadros dejando ver su fofa panza y su pecho cubiertos de una densa capa de entrecanos vellos, al mismo tiempo se aflojaba el cinturón y pantalón cayendo estos al piso, la imagen era brutal para la nena pues el viejo lucia horrible en ese estado, como
era posible que por voluntad propia pudiese satisfacer a ese viejo, no encontraba la manera de hacerlo, el vejete termino por sacarse los zapatos y medias y bajándose la trusa dejo ver un tremendo miembro que aun muerta colgaba majestuosa… -- muy bien putita, si apesto ahora tu me bañaras, desnúdate y vamos a la ducha…
La nena seguía sin moverse algo asqueada por ver al viejo desnudo, quien en su camino la tomo de la mano jalándola con violencia en dirección al baño, los muchachos que se encontraban al otro lado podían distinguir a través de las grietas de la precaria puerta lo que pasaba… -- se la va a coger en la ducha…no manches tu jefe si que es bravo… se decían entre ellos con las vergas ya paradas, en el cuarto de baño don Pedro ya se encontraba en la ducha ante una pasiva nena quien no se atrevía a moverse… -- que esperas puta, entra rápido… ella no hacía nada tan solo movía la cabeza negativamente hasta que don Pedro estirando las manos le rompió a jalones el pequeño top que cubrían sus chichotas.
Ella se las cubrió tímidamente ante la sonrisa del vejete quien le apuraba en que se quite el pequeño short ante la tímida negativa de ella… -- Escucha mocosa, si no te apuras te saco afuera y dejo que mi hijo y su pandilla te vean desnuda… APURATE!!!... La nena algo horrorizada y sabiendo que debía de cumplir con parte del acuerdo comenzó a bajarse el short dejándola caer al piso quedándose ahora si completamente desnuda, el vejete de un jalón la metió con él en la ducha abriendo el grifo y recibiendo los fríos chorros de agua… -- Muy bien putita, decías que apesto, ahora báñame jejeje…
La nena no sabía qué hacer, ver al viejo desnudo y mojado le parecía repugnante, como de su sucio cabello y tupida barba caían sucias gotas de agua y para colmo en aquel lugar no había ni un pedazo de jabón, el vejete estiro sus manos agarrándola de la cintura y apretándose con ella, la nena pudo sentir en su bajo vientre como la verga comenzaba a cobrar vida y se ponía dura buscando su cuevita, hacia esfuerzos para separarse de el empujándolo con sus manos en el peludo y mojado pecho… -- huy así me gustas putita,, hazte la difícil, ya verás cómo te voy a calentar y tú misma me vas a rogar que te coja jejeje…
La nena respiraba agitada con los ojos tristes y llorosos, pues a pesar de todo sabia que el viejo tenía razón, en el momento que su cuerpo se rindiera tendría que someterse y entregarse a la lujuria sin contemplaciones, ahora recién entendía lo que el vejete le había dicho de manera sarcástica, que ella era como una lámpara de Aladino… el vejete en ese instante se volteo dándole la espalda ordenándole que le lavara la espalda, la nena comenzó a sobársela junto al agua sintiendo como don Pedro estiro una mano hacia atrás tocándole y acariciándole su panocha… -- NOOO!!! No me toque, quite sus mano de allí… le decía retrocediendo y evitando aquel tocamiento.
El vejete retrocedió también aplastándola contra la pared y hurgándole con mas ahincó la vagina, la nena no podía como salir de aquella posición pues el viejo era muy pesado… -- por favor no!!!... déjeme, me está lastimando… el vejete no le hacía caso y movía su espalda sintiendo como las húmedas chichotas le hacían deliciosos masajes en su ancha y peluda espalda… -- Ay putita, que rico se sienten tus tetas mojadas en mi espalda huy… sus dedos comenzaron a penetrarla suavemente, la nena sentía como entraban dentro de ella acariciando sus paredes vaginales, cerraba los ojos y apretaba los dientes tratando de resistir las deliciosas sensaciones que terminan por enloquecer a su cuerpo.
El vejete dio media vuelta sin quitar sus dedos de la panocha apretándose contra ella, la nena al ser de una altura considerable no le hacía difícil la tarea a Don Pedro de deleitarse con su cuerpo y como un hambriento comenzó a engullirse uno a uno los pezones de las húmedas chichotas… -- HUMM que ricas chichotas… vas a ver como hoy hare que produzcan leche dentro de poco jejeje… la nena seguía luchando para poder contenerse y no claudicar ante el placer, sus delicadas manos trataban inútilmente de empujar al vejete haciendo que solo este las sintiera como suaves y húmedas caricias… -- por favor… ya basta… pedía le nena inútilmente puesto que sentía angustia de volver a entregarse al vejete.
-- tranquila zorra… ya entrégate, sabes que te gusta coger, no lo rechaces y te juro que te hare pasar una noche que jamás olvidaras jejeje… el orgullo de Cielo Riveros no quería aceptarlo, quería demostrar que su espíritu era fuerte… -- -recuerdas mi putita, como gozaste en la Feria, como gritabas de placer… y en tu casa como fuiste una gatita sumisa… jejeje… A la nena aquellos recuerdos se les venían a la mente como flashazos que hicieron que sus pezones se pararan y sintió un ardiente calor en su vagina, aquellas sensaciones la inquietaron pues sabía que no la llevarían a nada bueno y más cuando el viejo comenzó a besarle con ligeras succiones en su delicado cuello, aquella boca con escasos dientes provocaban sensaciones escalofriantes en su cuerpo pues aparte la viscosa lengua subía y bajaba por su cuello como un perro lamiendo a su ama.
Su respiración se comenzó a agitar pero aun tratando de contenerse y no demostrar que estaba perdiendo… -- por fa-favor don Pedro, ya no siga… de-dejeme ir por favor… rogaba con una voz que demostraba excitación y sensualidad, las manos de la nena dejaron su intento de separarse del vejete y cayeron a un lado, don Pedro trato de besar esos carnosos labios que se veían apetitosos pero la nena movía la cabeza de un lado a otro evitándolo en un último resquicio de orgullo y de su lucha por no ceder ante la excitación, el vejete cada vez más se metía entre sus piernas haciendo que ella las abriera mas, sus manos subían y bajaban acariciando los lados de su estrecha y curvada cintura.
La sensación era maravillosa tocar esa piel suave y húmeda por aquellos curvados lados le provocaban electrizantes sensaciones a la nena, su plano y perfecto vientre podían sentir como era acariciada por la empalmada y gruesa verga de don Pedro, agacho la mirada y pudo ver con un poco de dificultad por la fofa panza del viejo como se asomaba la cabeza completamente roja y con brillosas secreciones que daban a entender de que ya querían probar de las delicias que su cuerpo ofrecía. Don Pedro tomo de la cintura a la nena poniéndola contra la pared como un policía interviniendo a un sospechoso, la nena no hizo nada y seguía exhalando gemidos apoyando sus manos contra la sucia mayólica de la pared.
El vejete se arrodillo en el piso abriéndole las nalgas y con su lengua comenzó a recorrer desde el ano hasta la panocha dando principal atención a la zona del perineo tratando de enloquecer completamente a la ya casi rendida chamaca… -- pero que rico sabes preciosa, no hay duda que eres única y solo para mi jejeje… la nena recostó su rostro sobre la sucia mayólica de la ducha con los ojos cerrados pues esa lengua la estaba volviendo loca de placer, aun en su poca claridad pensaba con molestia que como es posible que pueda ceder tan rápido y con ese viejo el cual era malo con ella, pero otra parte de su cuerpo le decía que dejara de luchar y que se entregara al placer que aquel monstruo le daba.
El vejete se puso en pie y con su verga sobaba el canal que separaba las dos tremendas nalgas mientras acercaba su rostro a la oreja izquierda de la nena quien solo se mordía los labios tratando de contenerse… -- Quieres que te penetre putita, quieres que te perfore y que te llene de leche jejeje… la nena aun dolida por aquellas palabras se negaba a voz baja pero sintiendo excitación por esa verga que era atrapada por sus nalgas… -- noooo… noo qui-quierooo noooo…. Decía jadeante la nena pues el vejete tenía entre sus manos ambas tetas masajeándolas y pellizcándole hábilmente los duros pezones, el vejete sonreía pues a pesar de su negativa la nena se movía al compas de su verga… -- jejeje asi que no quieres no… entonces porque mueves el culo zorra…. Plaffff fue el sonido de una fuerte nalgada que hicieron sentir dolor pero a su vez la excitaron más pues los recuerdos de las nalgadas que le dio en la feria la calentaban en demasía, el vejete al notarlo le dio una seguidilla de nalgadas oyendo los gemidos de dolor y placer de la nena.
Don Pedro apunto su verga por el caliente ano de la nena empezando a meter la punta de esta, la nena comenzó a sentir un ligero dolor pues a pesar de que no era la primera vez que le daban por allí, la magnitud de esta verga era muy considerable a diferencia de las otras… -- aaauuu nooo… sa-saquelo por fa-favorrr, dejemeee… pedía la nena arañando la sucia mayólica y cerrando los ojos aguantando el ligero desgarro que la verga le producía, en cambio el vejete quien seguía amasándoles los pechos comenzaba a meter centímetro a centímetro toda la longitud de su miembro… -- aahhhhh noooo, de..detengaseeee ayyyy noooooo…
Don Pedro de un fuerte embiste se la clavo casi completa haciendo gritar a la nena siendo escuchado por los expectantes chamacos que se morían de ganas de poder ver lo que pasaba, la nena recibía los embistes del vejete haciéndola pararse en puntas de pies, sus tetas seguían siendo amasadas y pellizcadas por las arrugadas y habilidosas manos de don Pedro quien a su vez le mordía la nuca y el cuello tratando de calentar mas a una disforzada y reclamante nena… -- te gusta putita, otra vez tus nalgas son mías y mi verga es toda tuya jejeje… las sucias palabras del vejete no hacían más que indignar la mente de la nena pero su cuerpo era dominado y se calentaba cada vez mas.
Sentir aquella barra de carne dentro de ella estaba volviendo loca a su cuerpo y mente, esas arrugadas manos que con lascivia se apoderaban de sus chichotas la calentaban enormemente, ni comparadas a las suaves manos de su pobre Rodrigo quien ya hace mucho no le hacía sentir lo que sentía cuando la forzaban y dominaban. Se preguntaba con impotencia porque era así, porque solo su cuerpo era excitado por rufianes asquerosos y aprovechados, es que nunca podrá vivir plenamente feliz con un chico apuesto y noble como Rodrigo.
Los minutos pasaban y no solo su cuerpo gozaba del placer que le daban si no también su mente comenzaba a entregarse a los sucios deseos de su caliente y exuberante cuerpo, el vejete ya no la tenía aplastada contra la pared pero seguía con sus suaves embistes sintiendo como su verga era apretada por las paredes rectales de Cielo Riveros quien ya se rendía ante los deseos del vejete apoyando su cabeza en uno de los hombros de su verdugo, por dentro aun pensaba que no tenía sentido seguir luchando ante aquella situación, esta sería la última noche que vería al viejo, por fin su vida no tendría las angustias del chantaje que el vejete le imponía, tan solo ahora lucharía por no caer en manos del maldito de Don Lucas y tratar de ser feliz con su querido Rodrigo.
Sus manos instintivamente se dirigieron hacia atrás tomando de los grasosos cabellos al vejete en suaves y sensuales caricias, Don Pedro sonreía pues se sentía triunfante por volver a enloquecer de placer a la tierna colegiala, y sus manos dejaron de tocarle ambas chichotas siendo la nena quien en un movimiento rápido le tomo las manos volviendo a ponerlas allí con fuerza… -- jejeje ya ves muñeca, eres una putita calentona, te dije que al final terminarías entregándote como la putita deseosa de verga que eres… pues ahora esta vergota será toda tuya durante toda la noche, vas a amanecer llena de leche jejeje te iras de aquí preñada jejeje… la nena apoyo nuevamente sus manos contra la pared ya un poco alejada quedando en forma de L, el vejete se maravillaba por la vista de esas nalgotas con marcas de sus palmas chocando contra su pelvis, como esa gruesa herramienta que tanto le enorgullecía entraba y salía por aquel conducto que muchos deseaban pero pocos y osados podían tener.
Los gemidos de la nena eran cada vez más fuertes y llenos de excitación y resonaban por toda la casa… -- ves como te gusta mi verga, ya verás que de todas maneras seguirás deseando que siempre te coja jejeje… Cielo Riveros seguía recibiendo gustosa pero a su vez contrariada por las palabras burlonas del vejete quien en ese momento se la saco poniendo a la nena frente a el contra la pared, la nena sentía esa dura verga contra su vientre, tenía ganas de tocarla, de sentirla pero le daba vergüenza dar ese paso y demostrar al vejete que ya estaba entregada a la lujuria.
Don Pedro se apodero de sus carnosos labios en un desesperado beso sintiendo la nena como esa viscosa lengua buscaba enredarse con la suya que aun se encontraba tímida y no fue hasta que sintió como las rugosas manos la comenzaban a acariciar por los lados de sus sensibles costillas haciéndole sentir deliciosos escalofríos, el vejete sentía como esas redondas chichotas se aplastaban como gelatinas en su peludo pecho y como la respiración se le comenzaba a acelerar a la nena… -- Quieres que te la meta por la panocha, quieres de verdad sentir una verga en la panocha y no esa cosita que te metió tu noviecito jejeje…..
Cielo Riveros estaba demasiado caliente pero sin el valor de responderle al viejo quien seguía con sus caricias y lamidas de cuello frotándole su grueso mástil en el bajo vientre de la nena, eran segundos de confusión para Cielo Riveros pues a pesar de sentirse excitada aun le daba cierta pena y molestia de entregarse por completo al vejete y fue en ese momento de recibir tantas lascivas caricias, besos, lamidas y mordiscos que como una autómata su delicada mano bajo y se apodero de la ansiosa verga de don Pedro… -- AYYY así mi putita, tómala, es todita tuya…. Le dijo el vejete feliz de que la nena diera ese paso que le dio a entender que ya estaba dócil y entregada, que ya la había domado.
Sentir esa caliente, delicada y suave mano le endureció la verga en toda su magnitud, el corazón se le aceleraba al viejo ansioso porque esos carnosos labios probaran de su miembro de una vez, sin dejar de besar los alrededores de su cuello y orejas le comenzó a hablar con su cálido y desagradable aliento… -- vamos mi reina, mi putita, mi mujer, chúpame la verga que está ansiosa por sentir tus labios…. La nena estaba con los ojos cerrados y la respiración agitada oyendo como muy lejana lo que le pedía el viejo.
Don Pedro la tomo de los hombros bajándola lentamente a la altura de su inhiesta y dura virilidad que aun era sostenida por la delicada mano, cuando ella abrió sus ojos se encontró con la dura cabeza de ese tremendo miembro a la cual sin darse cuenta sostenía… -- vamos chiquita, está esperando ansiosa que la pruebes jejeje… Cielo Riveros lo miro de frente a los ojos, la de ella era una mirada hermosa, sus ojos verdes brillaban como estrellas pero demostrando sentirse humillada ante el y tragando saliva pues a pesar que la excitación la dominaba sentía vergüenza de chupar de aquella verga que se le hacía apetitosa.
-- Vamos mi reina, será la última vez que la tengas ante ti… no la desaproveches jejeje… le decía burlón pero a su vez con ansias de que aquella hermosa jovencita de carnosos y rosados labios mamara de una vez de su gruesa virilidad.... en ese momento a mucha distancia el maestro Tulio y el cojo Juan tomaban cerveza en un bar aun lamentándose de que la sensual y encamable colegiala se les había escapado de las manos, ya había pasado mucho tiempo y pensando ellos que la nena tenía como prueba el video se extrañaban que no haya reaccionado o incluso los hubiese denunciado.
-- Oiga maestro no cree usted de que alguien la haya ayudado a escapar… decía el cojo Juan limpiándose la cerveza de los labios… -- Pero quien pinche cojo!!! Quien puede haber sido…. Le reclamaba Tulio molesto, algo mareado y jalándole de la sucia camisa al cojo, hasta ese día no se habían puesto a pensar en todas las posibilidades salvo el cojo quien ya tenía una suposición dado a su trabajo de limpieza siempre seguía cauteloso los pasos de la nena… -- Sabe maestro, últimamente he visto a Cielo Riveros andar con la chamaca problemática esa mmmm Verónica Linares…
El maestro Tulio se sorprendió puesto que esa chiquilla por su comportamiento no era de la clase de amigas con que Cielo Riveros hacia amistad, siendo ambas de polos totalmente opuestos,… -- Tú crees Juan que ella tenga algo que ver…. Decía algo esperanzado el maestro Tulio viendo que una nueva puerta se le abría en su posibilidad de encamarse con la colegiala de sus sueños… -- pues no se maestro, pero voy a averiguar, buscare en su casillero y en su mochila, pero eso si maestro, con una condición…
El maestro Tulio levanto las cejas algo contrariado preguntando cual es la condición… -- Bueno maestro, si la palomita vuelve a caer yo también quiero follarmela…. El maestro Tulio lo tomo de la mano y le dijo con una cara de tremenda perversión… -- Pinche Cojo, si esa chamaca cae de nuevo… tu y yo la reventamos juntos jejeje… los dos sujetos comenzaron a pedir más cerveza festejando por su nuevo plan, todo sea por tener entre sus sucias manos a la hermosa colegiala.
Maldita sea!!! Decía un impotente don Emilio en su pequeña biblioteca fumándose un cigarro y golpeando el escritorio, la sola idea de imaginarse a Cielo Riveros revolcándose con algún muchacho lo llenaba de celos, envidia y de cólera, pues a su vez lo peor de todo para el es que su hija no tuvo la intención de acusarle con su esposa, de seguro le hubiese chantajeado para obtener todos sus caprichos como exactamente lo hacía, pero no hubiese perdido el amor o la ilusión que ya se había ganado de la nena; sirviéndose un tequila se puso a pensar que hacer para poder volver a engatusar a la nena, estaba muy decidido en hacerlo cueste lo que le cueste.
Habían pasado más de 10 minutos y el hijo de don Pedro y sus amigos no podían creer lo que sus ojos veían por las grietas de la vieja puerta, en aquella cama el vejete se encontraba tendido con la cabeza apoyada sobre el descanso del camastro y en aquella cama la nena estaba de costado en cuatro patas con su cabeza subiendo y bajando de aquel mástil de carne y venas que se le hacía tan maravillosa y deseable. La imagen era brutal para aquellos chicos, no podían creer como una belleza de chamaca como Cielo Riveros se encontrara brindando placer a un viejo horroroso como don Pedro, sus miembros naturalmente comenzaron a erectarse por la situación morbosa del cual eran ocultos testigos.
La nena sentía como el vejete estiraba una de sus manos hacia sus nalgas comenzando a acariciarlas y a tomarlas con fiereza, como demostrándole que aquellas dos hermosas y redondas posaderas le pertenecían, sin dejar de mamar aquella dura verga le miro a los ojos al desagradable vejete propinándole unas sonoras nalgadas que no hicieron más que excitar mucho más a la nena, por su confundida mente ella se preguntaba porque le gustaba esas sensaciones, aquel trato que la hacía sentirse tan dominada, tan puta, tan sumisa a los deseos de un macho, el corazón le latía a mil por hora al sentirse así de dominada y entregada deseando desde el fondo de sus entrañas que esta noche la follen como nunca nadie lo había hecho.
Los viejos dedos comenzaron a meterse en sus intimas cavidades, ella sentía como un dedo entraba en su húmedo ano y los otros abrían los labios de su caliente vagina mordiendo con cierta delicadeza presa de la excitación el miembro del vejete quien sentía con doloroso placer el descontrol de la nena… -- Calma putita jeje cométela suavemente jeje… don Pedro comenzó a mover sus dedos aumentando el calor y los temblores en el cuerpo de Cielo Riveros , la tomo de los cabellos para que los chicos pudieran ver con claridad como aquella hermosa adolescente le hacia una deliciosa mamada.
Nuevamente para ellos la imagen era impactante, la nena se veía hermosa, la silueta de la chamaca en cuatro patas era espectacular, el redondo trasero levantado y meneándolo al compas de los dedeos del vejete y como le colgaban como campanas aquellas dos formidables e imponentes chichotas, a pesar de la dificultad de su visión podían ver claramente como esos sensuales y carnosos labios subían y bajaban al compas de los movimientos del vejete, la envidia y desesperación de querer estar en lugar del viejo les correia por dentro.
Mientras que Cielo Riveros seguía con su incesante mamada viendo a los ojos a veces con extrañeza y excitación como es que no podía hacer nada para detenerse en su afán de satisfacer a su verdugo, se daba cuenta que sin querer se había vuelto casi una experta mamadora, a su mente llegaba el recuerdo de aquella vez que con el maestro Tulio realizo su primera felación y sin alejarse de ese recuerdo estaba la presencia del cojo Juan la segunda verga que probo y la cual le robo la virginidad de su ano, a pesar que ese recuerdo le traía placer, sentía un rencor profundo contra ellos y a pesar que don Pedro era de la misma calaña no entendía como todo su odio y rencor por lo que le había hecho pasar todo ese día casi había desaparecido.
En ese momento lo único que deseaba era disfrutar del sexo pero no se atrevía poner de su parte, lo que quería era que el vejete la tomara, que hiciera con ella lo que le diese la gana, estar a la morbosa voluntad y caprichos de ese horrible vejete, al cual bajo una condición había aceptado esa noche como su marido y como su macho, aun si fuese por un chantaje ya casi no le importaba, la pena se le iría acabado el trato puesto que ya nunca mas vería a don Pedro y aquel recuerdo lo borraría paulatinamente de su mente, puesto que no era la primera vez que algo así le pasaba.
El morboso vejete sentía sensaciones nunca antes vividas, nunca una mujer le había hecho sentir tanto placer como el que le hacía sentir la hermosa adolescente, todos sus sentidos disfrutaban al máximo de la nena, su vista disfrutaba de la despampanante visión de aquel cuerpo perfecto, sus odios podían oír los excitantes gemidos que hacia la nena al chupar y sentir como aquellos rudos dedos la penetraban, su olfato sentía la deliciosa fragancia que la panocha de la nena destilaba, sin lugar a dudas se sentía el hombre más afortunado del planeta y en parte lo era.
Don Pedro acelero el movimiento de sus dedos llegando a meterlos casi por completos en sus húmedas intimidades, los gemidos de la nena era excitantes melodías para el vejete y los empalmados muchachos… -- ahhh ahhh humm humm… eran los sonidos guturales que hacia la nena con la verga en la boca cerrando los ojos con una desbordante excitación, su cuerpo ya no aguantaba más y le pedía acción luchando con su mente para que ella misma lo pidiera, tan solo dejo de mamar abriendo sus ojos en dirección del pervertido rostro del vejete.
El vejete al ver esa hermosa mirada pudo leer lo que su cuerpo le transmitía… -- Muy bien mi putita… es hora de empezar con lo bueno jeje… ahora gozaras mucho más que en la Feria… el vejete se arrodillo en la cama estirando a la nena boca abajo sobre la cama, Cielo Riveros estaba que ardía de excitación y a pesar que aun era consciente de lo que pasaba, trataba de borrar la poca muestra de dignidad y pudor que le quedaba, por primera vez tenia esos deseos de entregarse sin tapujos, sentir los movimientos que hacia el viejo tras de ella junto al rechinar de las tuercas de aquella vieja cama de madera la llenaban de excitante ansia y emoción.
La nena adopto la posición de perrito esperando con deseo que el vejete nuevamente le introdujera en su estrecho ano aquella gruesa barra de carne que tanto placer le hizo sentir en la Feria, sentía escalofríos de placer con tan solo recordar aquellos momentos vividos cuando derrepente escucho la aguardentosa voz del vejete… --Así no putita…. Ponte así… el vejete tomándola de la cintura la volteo boca arriba sin problema alguno, tomándola de los pies le abrió las piernas agachándose para mamar una a una y vorazmente las chichotas de Cielo Riveros que no hacía más que gemir y retorcerse de placer… -- NO!! Putita, tu culo es delicioso pero ya lo he probado jejeje… esta vez le toca a tu linda y jugosa panocha jeje… ahora si sabrás lo que es tener una verdadera verga de macho…
Cielo Riveros antes de que se le aclarara la mente pudo sentir como la dura cabeza de ese miembro era atrapada por sus labios vaginales tratando de adaptarse a esa dimensión que aun no había entrado por allí… -- -nooo!!! no por favor… no me lo haga por ahí… decía con voz jadeante pero a la vez asustada que no hacía más que excitar al vejete sonriéndole morbosamente… -- por favor por ahí no, se lo ruego… seguían las sensuales suplicas de la nena, el vejete pensaba por dentro lo inocente que era esta chamaca en lo que al sexo se refería, sin lugar a dudas era un diamante en bruto a la cual había que pulir.
-- jeje ósea que ofreces el culo en vez de tu panocha jejeje, pues te diré una cosa, recuerdas a las putas esas de la avenida, pues ellas por el culo cobran casi el doble de lo normal y tu lo ofreces como si nada jejeje, ahora te lo voy a meter por esta panocha que ya muchas veces se me ha escapado jejeje… A la nena le sorprendió lo dicho por el vejete, todo este tiempo le habían dado por el culo como si nada y hasta esas vulgares prostitutas cobraban el doble, se sintió sucia, como una cualquiera, tenía la cabeza de lado pensando en lo ignorante que había sido, por haber guardado silencio sin contarle a nadie lo que le hacían, si al menos le hubiese contado a Claudia, ella con su experiencia le hubiese aconsejado algo.
-- AAAYYy aahahh noooo…. Fue un grito de dolor cuando sintió como el vejete le comenzó a introducir poco a poco su duro miembro dentro de su intimidad, apenas habían entrado unos 8 centímetros y la nena sentía que se le ensanchaba todo por dentro, como su más preciado ser era nuevamente invadido sin su consentimiento, poco podía hacer para detener el avance del vejete puesto que la tenia bien tomada de los pies introduciendo con ligera velocidad y fuerza todo el resto de su miembro… -- ayyyy noooo, me dueleeee, sa-saquela por fa-favooorr pareee yaaaa… don Pedro gozaba con el rostro de dolor que ponía la nena pero sintiendo compasión comenzó a metérselo más lentamente hasta que las paredes internas de la intimidad de la chamaca se adecuaran a su tamaño.
-- tranquila mi reina, aun vamos por la mitad… hoy día es nuestra última noche putita y de mi nunca te olvidaras jejeje… -- ahhhh noooo ayyyyy de-despacio aaaahhh… fueron los quejidos de dolor que dio la chamaca al sentir como el vejete le introdujo un poco más de lo que faltaba, de sus bellos ojos comenzaron a brotar lagrimas de dolor tanto físico como mental, sus manos se dirigieron hacia la fofa cintura del vejete tratando de detener en vano el avance de ese miembro que la invadía y mancillaba con dolor, de sus lindos ojos brotaban algunas lagrimas no solo de dolor sino también de tristeza por su novio quien hasta ahora era el único quien no se había beneficiado con su cuerpo aun con la autoridad que le daban el ser su pareja.
Don Pedro veía con orgulloso placer como le faltaba unos 4 centímetros de los 20 que media su miembro, sentía con placer como era apretada por aquellas paredes vaginales como tratando de fusionarse entre sí, la nena no pudiendo evitar más la entrada de aquella bestia de carne y venas poso sus manos en los fofos pechos del vejete sujetándose de los abundantes bellos, a pesar que eso le significaba cierto dolor, a Don Pedro poco le importaba, cualquier dolor era poco comparado con el placer que era estarse cogiendo a tan hermosa colegiala… -- YAAA!!! Ya putita, ya la tienes toda adentro…. Que rico me la aprietas ahhhh…
Para Cielo Riveros era cierto eso, sentía claramente como su vagina presionaba la verga del vejete tratando de amoldarse a su tamaño pero sin dejar de sentir dolor, un profundo dolor que se mezclaba con la imagen aterradora que era ver a aquel vejete encima suyo, sentía ganas de gritar, de arañarlo y golpearlo pero por su mente solo pasaba tratar de asimilar el ardor que sentía en su panocha… -- ayyy me la-lastimaaa… de..dejeme por favorrrr… suplico la nena al sentir como el vejete se movía lentamente… don Pedro estaba prácticamente encima de ella, los redondos y hermosos pechos de la nena eran aplastados por el velludo pecho del vejete quien se acomodaba mas entre sus piernas haciendo que la nena abriera mas sus piernas alrededor de la fofa cintura.
Al vejete le encantaba escuchar cada gemido de dolor que hacia la colegiala, eran muestra de que su tan deseada chiquilla le había guardado parte de su virginidad y acercándose a uno de sus oídos comenzó a susurrarle con su caliente aliento… -- tranquila mi putita, ya pasara el dolor y veras como vas a gozar conmigo jejeje no estás con tu tonto noviecito, estas con un verdadero hombre, tu hombre, tu macho y hoy sabrás lo que es ser una verdadera hembra jejeje… te vas a enamorar de mi y no vas a querer irte jejeje te lo aseguro… la nena no quería creer lo que le decía, ella jamás sentiría nada por un desalmado como el, nunca pasaría eso pues era consciente de que el se aprovechaba de ella.
Pero nuevamente el vejete regreso al ataque y comenzó a besarle la oreja con lamidas y delicadas succiones bajando hasta su cuello para nuevamente subir al ataque de su sensible oreja, la nena comenzó a sentir que la piel se le erizaba y en su vientre la sensación de nerviosismo que da paso a la excitación, todo eso le daba vergüenza, como era posible que se excitara tan rápido, el vejete nuevamente se puso de rodillas sin sacarle el miembro y sujetándola de los pies le abrió las piernas, la imagen de tener toda la longitud de su miembro dentro de la intimidad de la nena lo excitaba, al fin sentía que aquella jovencita era suya completamente, lentamente comenzó a retirarle la verga hasta dejarle un poco más que la punta de esta dentro de ella, una parte de los labios vaginales era arrastrada para afuera.
-- Ahora si mi putita linda… llego la hora de lo bueno… don Pedro nuevamente comenzó a introducirle el miembro en un suave vaivén la nena se sujeto de las sucias sabanas aguantando el dolor y ardor que sentía con la fricción de aquel intruso que la llenaba por dentro… -- ahhh nooo me lastima… de-detengase… me ardee noooo… al vejete poco le importaba lo que la nena le pedía, era consciente que mientras pasaría el tiempo su panocha se acostumbraría y nuevamente despertaría a la nena lujuriosa y hambrienta de sexo que Cielo Riveros escondía dentro de ella.
Los embistes cada vez aumentaban en velocidad y fuerza y a la nena la sensación de ardiente incomodidad iba desapareciendo de a poco, podía sentir claramente como su intimidad comenzaba a emanar de sus húmedos fluidos, como su delicioso elixir comenzaba a empapar aquel mástil de carne que se movía dentro de ella facilitando mucho mas su ingreso y salida y haciéndolo más placentero, Don Pedro pudo notar como el rostro de la colegiala comenzaba a cambiar, el semblante de malestar y sufrimiento comenzaba a cambiar por un rostro hermoso de inocente placer… — AHHH!!! Putita, ya te está gustando jejeje… te dije que ibas a gozar como nunca… le dijo el vejete viendo como la nena se mordía los carnosos labios comenzando a respirar agitadamente.
Pero a Cielo Riveros le dolía aun reconocer que en verdad lo que le había dicho el vejete estaba siendo cierto, el dolor y ardor ya habían desaparecido y su cuerpo comenzaba a disfrutar de los vaivenes que le daban, quería quejarse y negar lo que el vejete le decía, pero el renaciente placer la dejaba casi sin voz, el vejete le soltó las piernas quedando estas alrededor de su cintura y aumento la fuerza de sus embistes, en el cuarto se oía el chapoteo que hacia la fricción de ambos sexos… -- ahhhh pa-pareee… no.si-sigaaa ahhhh ahhh… pedía la nena demostrando con sus gemidos que aquello ya le estaba dando placer y que por vergüenza pedía que la dejara… -- Nada de eso mi putita, ahora si sabes lo que es un macho y te está gustando jejeje… o dime… Así te hizo sentir tu noviecito cuanto te desvirgo jejeje no lo creo jejeje…
La nena pensaba en su novio con tristeza, pagando una culpa del cual no era responsable, se sentía mal por eso, en su mente solo se llenaba de rencor contra el único culpable, aquel viejo maldito y detestable que fue quien la desvirgo, sus hermosos ojos llenos de placer miraban hacia el techo maldiciendo a don Lucas pero a su vez disfrutando de lo que le hacia el vejete… -- en que piensas putita, acaso en tu novio, te arrepientes de haberlo hecho primero con el jejeje ahora que ya descubriste lo que es un verdadero hombre en la cama… le dijo don Pedro deteniendo sus embistes, para luego comenzar con el mismo ritmo con el que le estaba dando.
-- Ayyy ahhhh ahhh hummmm ahhhh…… fueron los repentinos gemidos que sintió la nena al nuevo comienzo de los embistes, sus piernas rodearon la gorda cintura del vejete como tratando de aferrarse más a el, ya no podía aguantar más, su cuerpo quería explotar y gozar sin contemplaciones, sin cargos de conciencia o culpa… las manos del vejete fueron a tomar cada una de sus redondas chichotas que se balanceaban de lado a lado tras los fuertes embistes, sus miradas se encontraron, las de el eran de asqueroso y pervertido morbo, las de ella eran de confusión, pero de una placentera confusión, se ponía a pensar en cómo este viejo que abusaba de ella le podía causar tanto placer, que cosa había hecho en la Feria para ponerla tan caliente o de esa manera.
Lo comparaba con el malvado Lucas, y hubiese preferido que esta sea su primera vez y no con don Lucas, se preguntaran porque, y es que en su mente ella pensaba que don Lucas no le dio a escoger, solo entro con un arma y a la fuerza tomo lo que quiso, en cambio don Pedro siempre le dio una opción, el cumplir con lo que le pedía o vivir humillada pero al menos intacta, tal vez le parecía estúpido o sufría eso que había escuchado del síndrome de Estocolmo… pero en ese momento ya todo se le borro de la mente.
Los embates del vejete ya la habían dominado y mordiéndose los labios llevo sus manos hacia las rudas manos que apretaban sus pechos, el vejete esbozo una sonrisa de triunfo al ver que la nena ya se estaba entregando y ahora si disfrutaría a placer de la colegiala sin tener que forzarla, sería una noche muy larga de sexo desmesurado pues el sabia de su aguante… -- AHH mi putita que rico me aprietas la verga AHHH… ya quiero llenarte de leche, hoy día te irás llena de leche AHHH… decía el vejete a una excitada nena que sentía próximo un delicioso y devastador orgasmo… -- ahhhh siiiii… siiiii ahhhhh ahhh papiiiiii ahhhh…
El vejete sin dejar de embestirla sentía como la nena temblaba presa de un inmenso orgasmo salpicando fluidos en la mata de pelos que tenía en la verga, pero el no estaba ni siquiera cerca de una próxima eyaculación, a pesar de sus años tenía un aguante envidiable y seguía con sus recios embistes, haciendo que la nena no dejara de sentir placer a pesar del reciente orgasmo, el vejete ya cansado de aquella posición le retiro la verga jalándola de los brazos dejándola arrodillada frente a el, nuevamente sus miradas se encontraron y las dos eran de irremediable excitación.
En la puerta los muchachos veían estupefactos y excitados la suerte de aquel viejo al poder poseer a tan deliciosa y hermosa jovencita… Raymundo veía con ojos envidiosos la suerte de su padre, pero impotencia a su vez de siquiera algún día poder conocer o mejor dicho que una jovencita como Cielo Riveros le hiciera caso, tenía ganas de sacarse la verga y masturbarse pero le daba vergüenza hacerlo en frente de sus amigotes, por dentro pensó que ya era hora de botarlos, muy lejanamente pensaba que tal vez estando solo su padre compartiría con el a la sabrosa colegiala aunque solo lo veía como algo utópico pero al menos quería masturbarse sin aquellos mirones, así que procedió a regañadientes de sus amigos a botarlos de su casa.
En la cama unos minutos antes el vejete y la nena estaban arrodillados frente a frente, el la tomaba con una mano de esas carnosas y duras nalgas dejando marcas de sus dedos y con la otra la tomaba del cabello dominantemente… -- ya vez como te dije que ibas a gozar… ya has tenido un orgasmo y ni siquiera hemos empezado del todo… te dije que hoy serias mi mujer y yo tu marido jejeje tu macho… así que me tienes que cumplir como mi hembra que eres… el vejete se apodero de sus labios en un morboso beso metiéndole su viscosa lengua tan dentro de ella quien completamente excitada al oírle llamarla su mujer y su hembra correspondía entrelazando su lengua con la de el, sintiendo la tupida barba del vegete raspar placenteramente su delicado y hermoso rostro.
Para el vejete era delicioso saborear de la frescura de esos labios y del cálido y agradable aliento de la nena quien a su vez le repugnaba pero no sabía porque excitaba aquel aliento de alcohol y cigarro que este emanaba, el vejete le comenzó a dar de nalgadas sin dejar de besarla lo que hacía que la nena se sintiera mas dominada y sumisa ante el, le encantaba sentirse así, le hacía sentir placer y morbo sentirse propiedad de aquel repugnante y desalmado vejete, sus delicadas manos que hasta ese momento estaban inmóviles sujetando la cintura del vejete fueron a tomar aquel miembro que en su vientre se deslizaba manchándola con su propios fluidos, con aquella herramienta entre sus manos y sin dejar de besar al vejete tenía muchas ganas de sentirla dentro de ella y también de saborearla de nuevo, hasta ese momento recordó que nunca en las veces que estuvo con el vejete pudo ver eyacular aquella verga que en ese momento tanto deseaba.
El vejete sentía orgullo de que la nena nuevamente por instinto le tomara la verga con incontrolable excitación y dejándola de besar nuevamente tomándola del cabello le dijo en un susurro… -- Quieres verga zorrita… quieres que te coja…. Anda pídemelo y te hare gozar como tanto deseas… la nena miraba excitada al vejete y con un afirmativo movimiento de cabeza acepto lo que el vejete le decía… -- Quiero escucharte… dímelo perrita, quieres que te coja… ANDA DILO!!!... la nena ya no podía aguantar más, se sentía vacía sin esa verga dentro de ella y su cuerpo le pedía más placer… -- ahhh siii, don Pedro, co-cojame por favor ahhh… el vejete le dio un ruidoso beso en los labios lleno de orgulloso morbo… -- muy bien perrita, en cuatro patas como la perrita que eres… RAPIDO!!!!, le ordeno dándole una sonora nalgada que hizo que la nena se prendiera mucho mas.
El vejete pudo ver como la nena se ponía en cuatro patas en dirección a la puerta de la habitación, aquella imagen era hermosa y del enorme y vertiginoso placer el vejete hasta casi vomita, la vista de aquellas redondas nalgas era maravillosa, adornada por ese peculiar lunar; podía ver como ambas intimidades tenían un brilloso rastro de fluidos… -- Que delicia eres chamaca…ahora vamos de nuevo con lo bueno… la nena cerro sus ojos al sentir nuevamente como el vejete colocaba la punta de su miembro en la entrada de su jugosa panocha jugando con ella, tratando de que ella misma lo pida, tan solo le dejaba la punta dentro de ella esperando que la nena le sorprenda con alguna reacción, los segundos pasaban y Cielo Riveros ya ansiaba ser penetrada.
Giro su cabeza hacia atrás topándose con la mirada burlona del vejete, quien con una sugestiva mueca le dio a entender que le dejaba todo el trabajo a ella, la nena estaba caliente pero aun apenada por la situación sentía la cabeza de ese miembro dentro de ella pero quería sentirla por completo y en un ligero movimiento se le salió de la panocha… -- Anda putita… búscala tu misma y rápido que ya me urge estar allí adentro… la nena seguía en posición de perrita sin saber que hacer…. PLAFFFFFF… fue el sonido de una fuerte nalgada que hizo temblar por completo su cuerpo.
-- Que esperas… apúrate que ya quiero follarte… Cielo Riveros estiro una mano por debajo de ella tomando el mástil de carne y venas que ya le urgía sentir dentro de ella, nuevamente ya tenía la punta de esta dentro de su panocha, pero esta vez no quería esperar, esta vez fue ella misma quien en un suave retroceso comenzó a introducirse toda la verga… -- ahhhh ahhhh siiiiii uuuuhhh hummm… el vejete sintió como sus bolas chocaban con las nalgas de la nena pero no se movía, más bien fue la nena que comenzó con el ir y venir de la penetración, jamás pensó que podría sentir tanto placer en la vida y mucho menos en manos de este horrible viejo.
Seguía y seguía ella misma buscando su propio placer con delicados vaivenes y gimiendo como una tierna gatita, don Pedro seguía sin moverse disfrutando de los movimientos y sumisión de su nena, en ese momento Raymundo nuevamente estaba en la puerta, esta vez estaba solo y con el pantalón abajo masturbándose suavemente viendo como su padre se cogía a la tan hermosa chiquilla, en ese momento el vejete pudo notar que detrás de la puerta alguien los espiaba, para eso tomo de las caderas a la nena y comenzó el mismo con unos fuertes y rápidos embistes.
-- ahhhhh ayyyy ahhhhh des-despacio ahhh… el vejete le seguía dando fuerte quería que su hijo escuchara como hacia gozar a una jovencita, demostrar que aunque la vejez le haya llegado aún estaba en condiciones de satisfacer a un monumento de mujer como la nena… -- Querías vergaa AHHH ahora disfruta putita… te gusta ehhh… Cielo Riveros gemía cada vez más fuerte y llena de placer, sus chichotas que colgaban majestuosas se balanceaban para todos lados y el maravilloso sonido de sus nalgas chocando contra la piel del vejete la estaba volviendo loca, sus manos se sujetaron de las sabanas hasta rasgarlas… -- ayyy siiii siiii ahhh diooosss ayyy siiiii hummm…
En el cuarto se oía estruendosamente el sonido de los gemidos de ambos amantes sumado al rechinar de las tuercas de la vieja cama, en las casas continuas también pueden oírlas escandalizándose pero sin poder hacer nada… -- Sigue gritando muñeca… te dije que esta noche gozarías como una condenada y lo que yo prometo lo cumplo jejeje… decía el vejete cogiéndola y acariciando ese par de nalgas con rosadas marcas de sus palmadas... – ahhh ahhhh donn pe..pedrooo ahhhh sii..siigaaa ahhh no pareeee ahhhh…
Las embestidas seguían muy fuertes y la nena estaba desquiciada y descontrolada, ningún recuerdo existía para ella, lo único que quería era disfrutar y que la follen sin piedad, al vejete le gustaba la visión del cuerpo de la nena, como sus nalgas daban paso a una estrecha cintura y como su fina espalda hacia juego con esta, en realidad Cielo Riveros era una Diosa y esa Diosa en ese momento era suya, todos esos pensamientos lo excitaban a muerte, estirando su mano tomo de los sedosos cabellos a la colegiala jalando su cabeza hacia atrás como si fuese una yegua… -- Te gusta putita… te gusta que te coja… -- siiii ahhh siiii… me gustaaa ahhh… -- quien es tu macho… ehhh dime quien te está cogiendo…
A pesar de lo humillante del momento a la nena le excitaba aquel juego de morbosas palabras que el vejete le decía… -- ahhh us...usted… usted es mi ma-machoo ahh ahhh…al vejete le encantaba oír esa dulce voz llena de excitación aceptar que ella era su hembra y prosiguió con sus preguntas… -- Así me gusta cachorrita… dime esas chichotas, estas nalgotas y esta jugosa panocha de quien es… la nena se mordía los labios a punto de tener otro orgasmo… -- ahhh son su-suyas ahhh ahhh… PLAFFF recibió otra nalgada… – DE QUIEN!!!... – ahhh de mi macho ahhh son suyas don Pedro ahhhh ahhh…
El vejete decidió cambiar de postura y se acostó boca arriba con su grueso miembro apuntando al techo… -- Quieres mas verga… le decía burlonamente sacudiéndose el miembro, la nena gateando se acerco hasta el vejete y como una hambrienta comenzó a lamer ese miembro que tanto deseaba, el vejete gozaba con los lametones que la colegiala le daba y cuando vio como se tragaba gran parte de esta casi se corre al instante… -- Espera zorra mamona… no quiero correrme aun… se ve que te gusta chupar verga jejeje tu noviecito debe de gozar con tus mamadas…
En ese instante la nena no sabía ni a quien se referían, lo único que quería era seguir gozando y que ese viejo la follara como solo él lo hacía… el vejete la atrajo más hacia el sentándola sobre su miembro, la nena se mordía los labios al sentir como nuevamente ese monstruo de carne y nervios entraba en ella… -- ahora si putita… me vas a cabalgar hasta que me saques toda la leche… RAPIDO!!! La nena comenzó a subir y bajar lentamente pues en esta posición sentía un ligero ardor e incomodidad, el vejete estiro sus manos y comenzó a masajearle las excitadas chichotas mientras ella miraba el techo con los ojos entrecerrados disfrutando de los tocamientos y de la penetración.
Bastaron unos 5 minutos y la nena ya aceleraba cada vez más sus movimientos, el sonido de sus nalgas chocando con el vejete se hicieron cada vez más fuertes, sentir esas manos asperas apretando lo que podían de sus senos la enloquecían; don Pedro comenzó a sentir que a ese ritmo no tardaría mucho para correrse, pensaba que esta nena a pesar de su inocencia cuando despertaba su lado lujurioso era una come hombres… -- AHHH SIIII RICURA… AHHH SIGUEEE AHHHH AHHH… la nena tampoco era ajena a los gemidos y ya estaba a punto de tener un nuevo orgasmo y desde su posición su panocha vertía sobre la base de la verga cantidades de sus fluidos… -- ahhh ahhh diooss ahh siiii siiii, ahhh don pe-pedro meee gustaaa ahhh ahhh… nuevamente sus miradas se encontraron y acercándose se comenzaron a besar apasionadamente llegando la nena a un devastador orgasmo con sus tetas sobre el sudoroso y peludo pecho del vejete.
-- AHHHh AHHH ME CORROOOO AHHH AHHHH… fueron los gritos de placer del vejete quien eyaculaba enormes cantidades de semen dentro de la nena llenándola hasta el útero, los dos se quedaron en esa posición respirando muy agitados, la nena podía sentir dentro suyo el semen caliente del vejete pero poco le importaba las consecuencias que eso le pudiera causar, en ese momento solo existía el placer y su cuerpo aun no se sentía satisfecha del todo, quería mas y para suerte de ella la verga del vejete seguía tan dura como desde el principio… -- AHH mi putita… que rico fue llenarte de leche jejeje pero no te preocupes aun tengo más para darte…
El vejete la tomo de las nalgas y con movimientos de sube y baja comenzó nuevamente a follarse a una excitada colegiala quien empezó con sus leves gemidos mordiéndole los hombros llena de excitación, no quería que esa palomita se enfriara y no basto con unos minutos y fue sola la nena quien hacia los movimientos disfrutando del miembro del vejete, sus manos se agarraban bien fuerte de la hedionda almohada mientras sentía esa rasposa lengua recorrer desde su cuello hasta las redondeces de sus dos enormes chichotas; se mordía los labios completamente encantada por lo que don Pedro le estaba haciendo sentir… -- Ves que te dije muñeca… ibas a gozar jeje como gozas ahora jejeje…
La nena oía entre sus sensaciones de placer las inquisidoras palabras del vejete aceptando con cierta culpa que todo lo que le había dicho era verdad… -- Dime ricura… te arrepientes de que tus amigos te salvaran en la Feria… mira lo que te has perdido jejeje… la nena recordaba sintiendo como el miembro del vejete seguía entrando y saliendo de su panocha aquella noche en la Feria, si no se hubiesen aparecido Tulio y el cojo tal vez esa noche su primera vez hubiese sido con don Pedro y no de la manera violenta en que don Lucas se lo arrebato… -- Vamos putita… contesta: te arrepientes!!!
-- ahhh siiii.. siii….De sus dulces labios se oyó como un susurro la aceptación de la nena, al vejete aquella aceptación de arrepentimiento lo excitaba mas, le hacía sentir se mas dueño de la chamaca pero a su vez maldecía con sed de venganza a aquellos tipos que aquella noche le arrebataron a la colegiala… -- dime muñequita… quienes eran esos pendejos que te rescataron… dime sus nombres y te daré una cogida que no la olvidaras nunca… dímelo… La nena con la excitación al tope y con las ansias de querer seguir disfrutando y embriagándose de ese placer que hasta ahora con creces el vejete le había hecho sentir le respondió con la sensualidad que solo en ese momento de su boca salía.
-- el ma-maestro Tulio… co..conserje Juann ahh ahhh… a don Pedro se le quedo esos nombres en la mente y serian difíciles de borrar, dándose cuenta como la nena a cada instante aceleraba el ir y venir de la penetración; estaba a punto de acelerar el mismo la penetración cuando la puerta se abre de improviso cayendo Raymundo con el miembro en la mano y los pantalones abajo, a don Pedro la sola imagen de su hijo le parecía patética pero en ese momento su lastima hacia él le encendió un sentimiento de compasión y de morbo y con un movimiento de cabeza le animo a acercarse…
Raymundo no podía creer lo que acontecía, su padre le llamaba como invitándolo a compartir de esa deliciosa jovencita, su corazón latía a mil por horas de emoción y excitación de poder siquiera tocar aquella piel tan suave y brillosa que por el sudor la hacía ver más sensual, quitándose los pantalones para poder caminar sin dificultad se acerco a los pies de la cama viendo como el miembro de su padre entraba y salía de la húmeda panocha de Cielo Riveros .
La nena presa del placer que la tenía como hipnotizada en ese momento no se daba cuenta de la situación, estaba a merced de un nuevo capricho que tenía en mente el vejete, solo fue cuando sintió como la mano de Raymundo comenzó a acariciar sus portentosas nalgas, ella pudo notar que una mano del vejete le acariciaba el cabello y la otra la tenia sujetándola de la cadera, de quien es esa otra mano se preguntaba, girando su cabeza pudo ver como aquel feo muchacho acariciaba sus nalgas con una cara de estúpida y enfermiza excitación.
-- Ehh no!! no me toques… don Pedro dígale que no m… la nena fue interrumpida por una mano del vejete que le cerro los labios… -- tranquila muñeca… ya verás que te va a gustar cuando sientas dos vergas dentro de ti jejeje… a la nena aquella idea no le gusto para nada, la sola idea de que Raymundo la tocara le daba asco y cuando sintió como este subía detrás de ella trato de levantarse siendo sujetada por el vejete haciendo inútil cualquier intento de escaparse…
-- noooo déjeme… no quierooo… por favorrrr no lo hagannnn… se quejaba la nena mirando con ojos suplicantes al vejete quien solo sonreía descaradamente… Raymundo ya estaba colocado detrás de ella abriendo con sus manos las nalgas contemplando aquel agujero que ya con ansias quería penetrar… -- Vamos inútil… que esperas, o quieres que te enseñe como se hace… le increpo el vejete a su hijo quien con torpeza colocaba la punta de su miembro en la entrada del ano.
La nena lloriqueaba ante lo que le iban a hacer……………
SI QUIEREN SABER COMO TERMINO ESTO SOLAMENTE VEAN EL CAPITULO DE CIELO RIVEROS 18 LA CONTINUACION, ALLI DON PEDRO DEMOSTRARA A SU HIJO Y LOS MUCHACHOTES AMIGOS QUIEN MANDA Y QUIEN POSEE EL CUERPO DE LA BELLA ADOLESCENTE.

Cielo Riveros 36 violada por su maestro Tulio
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--Pero que tajito más rico es el que tenemos aquí abajo…y que apretadito lo tienes!! Me lo voy a comer enteroooo! Me lo voy a zamparrrrrrrr!! Te la voy a chupar hasta que me aburraaaaaaa!!! --Don Tulio…Snifff…no me haga daño por favor…snifff….sniffff!
Ya eran las tres de la madrugada cuando Claudia vio que un destartalado automóvil se estacionaba en la esquina de su casa, don Tulio solo hacían algunos minutos que se había ido a la cocina a partir limones y preparar los vasos, luego de un buen rato vio que en el interior del cacharro había una pareja de enamorados besándose en forma apasionada, pero no podía verle las caras, a lo lejos veía que la pareja se notaba bastante entretenida haciendo quizás que tipos de cosas, vio por fin que la mujer que había estado acompañada de un hombre al cual no pudo verle la cara, bajaba del vehículo, y que por la misma ventana del copiloto se despedían con otro romántico beso de enamorados, luego vio que el destartalado automóvil dio la vuelta en la misma esquina en donde había estado estacionado, hasta que desapareció algunas cuadras más abajo, ahí recién se pudo dar cuenta que era la misma Cielo Riveros en cuerpo y alma a quien habían venido a dejar en aquel cacharriento vehículo.
(Minutos antes en el cacharro de don Pedro)
--Llegamos putita, jajajaja!!! No puedes negar que allá en el taller lo pasamos de maravilla pendeja…
Cielo Riveros por su parte solo tomo sus cosas y ya se aprontaba para bajarse del auto, cuando fue tomada por el viejo fuertemente del brazo,
--Y que modales son esos perra de mierda!, crees que te vas así no más y sin despedirte de tu macho!?,
--Don Pedro… por favor…allá afuera esta mi amiga y no quiero que me vea con Usted, podría sospechar algo…
--Acaso te doy vergüenza escuincla calienta vergas!!!, acuérdate que desde hoy soy tu marido… soy el que te culeaaaa!!! Y aunque no te guste tu eres mi mujer!!!, así que despídete como corresponde… dame un beso con harta lengua o si no soy capaz de bajarte de mi coche y culiarte delante de tu amiga y de todos los vecinos que quieran ver el espectáculo, así que convénceme que soy tu marido!!!
La colegiala a sabiendas que don Pedro era capaz de hacer todas aquellas atrocidades que le estaba diciendo, acerco su fresca boca a la del vejete, este al recibirla se la comenzó literalmente a comer, prácticamente se la estaba succionando e intentaba absorber todo lo que ella tuviera dentro de su cuerpo, por su parte la joven solo se dejaba hacer, después de este asqueroso beso por fin se podría ir a la casa de Claudia y olvidar las traumáticas experiencias vividas en aquella horrorosa noche de feria.
El salivoso besuqueo continuaba, el vejete no quería separarse de su joven Diosa que el mismo se había encargado de estrenar sexualmente por su vagina, deseaba ver que es lo que pasaba ahora que tenía prácticamente intimidada a la encamable colegiala, pero en la mente de la mocosa de 18 años ya estaba pasando de todo, Cielo Riveros se preguntaba como ella era capaz de estar besándose con aquel ordinario tipejo, recordó como su cuerpo le había hecho sentir tan rico después que el vejete le había enterrado el pico en su virgen zorrita, y de hecho en estos mismos momentos ya sentía al medio de sus piernas ese agradable cosquilleo que le prometían placeres aún mayores.
El asqueroso beso fue aumentando en intensidad y ansiedad, las manos del mecánico fueron tomando una descarada confianza en el curvilíneo cuerpazo de la tierna colegiala, a la vez que sus lenguas ya se enredaban una contra la otra, concretamente el vejete ya la había pasado a su asiento y la tenía montada en su regazo, hasta ya le había subido el vestido a la altura de su cintura, la chamaca estaba muy nerviosa ya que iba desprovista de ropa interior, esta había quedado destrozada en el basurero del taller mecánico, sentía como el vejete ahora después de haberle soltado la boca le besaba el cuello combinándolo con salivosos chupeteos en la oreja.
Cielo Riveros estaba paralizada ya que se daba cuenta que el ordinario viejo no tenía ninguna intención de soltarla, y le preocupa que Claudia estuviera viéndolo todo.
Por su parte el desalmado don Pedro se daba cuenta como su técnica poco a poco iban haciendo claudicar a la tierna colegiala que el mismito había convertido en mujer solo hace un rato, sentía como la suave piel de Cielo Riveros se erizaba, su tacto y suavidad eran incomparables todo en ella era perfecto, su tersa y fina piel eran un verdadero banquete para los Dioses, banquete que el mismo ya se había servido sin convidarle a nadie, su verga nuevamente ya estaba lista para la batalla.
Cielo Riveros estaba muy nerviosa y agitada, sentía el armamento del mecánico duro y parado, pensaba que el viejo en cualquier momento se lo metía, ya que desde hacía algunos minutos no paraba de refregárselo en la panocha, muy a su pesar sentía exquisita aquella verga que le había estrenado la vagina por primera vez, pero aun así no iba a permitir que aquel miserable hombre mancillara nuevamente su cuerpo y menos al interior de un viejo y chancharriento automóvil.
Don Pedro seguía besando su cuello y raspándola con su barba sin afeitar quizás de cuantos días, Cielo Riveros sentía en sus mismas fosas nasales su hediondez a cuerpo sin asear mezclado con olores a grasas y aceites de mecánico, y esto sumado con la serie de escalofríos que el vejete le provocaba con sus lamidas eran una verdadera bomba de tiempo, su piel no dejaba de estar erizada, el mecánico lentamente fue bajando sus encías desdentadas hasta llegar a la altura de sus tetazas, que comenzó a besar como mal nacido por sobre su vestido, la calentura del hombre iba en franco aumento.
Cielo Riveros apenas participaba de lo que le estaban haciendo solo se mantenía con sus ojos cerrados intentando de ordenarle a su mente que se dejara de hacerla sentir tan rico, ya estaba claro de lo que le pasaría si no controlaba la situación, pero se dejaba hacer, sentía como el viejo mecánico le besaba en la boca y en el cuello, donde encontraba una especial receptividad ya que aquella erógena parte su cuerpo era el que más rico le hacía sentir en un principio.
Mientras las peladas manos del tosco mecánico subían por sus muslos lentamente, sintiendo y acariciando a plenitud su maravillosa y sedosa piel hasta llegar a ese majestuoso y rotundo pedazo de culo, no se aguantó las ganas de asestarle una firme y fiera nalgada, levanto su mano para agarrar fuerzas y de pronto se lo asesto de una –Plaaaffffff!!!!! Retumbo ahogadamente la fuerte palmada al interior del vehículo, Cielo Riveros solo se echó sobre su hombro aguantando el dolor de la laceración a sus carnes, su sedoso cabello negro se enredaba con los canosos y encrespados pelos que tenía el vejete por detrás de sus orejas, esto último lejos de espantarla la estaban haciendo encender aún más.
El viejo se dio nuevamente a besarla en la boca y alternando chupeteos en las tetas, a medida que aumentaba la intensidad de los impúdicos besos, estos hacían que aumentara la participación de Cielo Riveros , sobre todo en las caricias, apretaba la cabeza de don Pedro contra sus chichotas, todo el auto ya olía a cacha y sexo del bueno, el olor a coño adolescente y verga de viejo lo impregnaban todo.
Lo mejor de Cielo Riveros para don Pedro en estos momentos era su mirada, sus ojos verdes brillaban en la semi oscuridad del viejo automóvil, entrecerrados parecían suplicarle al vejete que continuara con todo lo que le estaba haciendo, pero el mecánico ahora solo la miraba con su burlona sonrisa, (muy parecida a la de su hermano Cipriano por cierto), Cielo Riveros pensó que el hombre esperaba a que fuese ella quien debía tomar la iniciativa, muy humillada y queriendo que lo que deseaba el asqueroso vejete pasara lo más pronto posible, le fue bajando el cierre del overol hasta la altura de la verga, mirando hacia el techo del automóvil en señal de auténtico suplicio se dio a agarrarle la tranca para ella misma tallársela antes de la irrupción , pero en el mismo momento en que se la palpo para sacarla de su escondite, el viejo le asesto una fuerte cachetada en el rostro arrojándola hacia el asiento contiguo,
--Jajajaja, y quien te dio permiso para agarrarme la verga pendeja caliente!… jajajaja!!, se reía el miserable de puro gusto al estar vejándola de esa forma, --Te das cuenta de lo muy putona que eres para tus cosas?!, jajajaja!!! Me hubiera encantado volver a meterte la verga, pero debo regresar al trabajo, así que como ya está la otra puta esperándote te me largas de aquí al instante… vamos fuera de mi vehículo pedazo de zorraaa!!!!
Cielo Riveros no sabía que pensar, creía que lo que realmente quería el mecánico era volver a hacérselo, e incluso reconocía que hasta se había excitado con el viejo y en un momento hasta había pensado en querer volver a sentir su vergota al interior de su cuerpo, pero al parecer este también gozaba humillándola de esa forma, sus ojitos verdes se llenaron de lágrimas, ahora lo odiaba con toda su alma.
--Y que me miras con esa cara de puta arrepentida!, te dije que te bajes de mi vehículo ahora mismo!!, Fueraaaa te digoooo!! Lárgate de aquí o acaso quieres que te pegue para que entiendas!!!
Cielo Riveros vio la cara de don Pedro contraída por la ira, ese viejo era el mismo demonio en persona se dijo para sí misma, temblando por el miedo que le causaba, bajo con movimientos desincronizados, una vez que estuvo fuera fue el mismo mecánico quien bajo el vidrio del copiloto para luego sacar su mano y tomarla agresivamente de sus cabellos para atraerla hacia él,
--Escúchame puta!!!, deberás estar atenta a tu teléfono porque uno de estos días te llamare para violarte, y si no me contestas deberás atenerte a las consecuencias…, a la puta de tu amiga la ocuparemos más adelante, te lo digo para que te vayas preparando, y recuerda que tengo todos tus datos personales, así que si no vas donde yo te diga, yo mismito iré a buscarte a tu casa o a tu colegio, estas clara reinita?, Cielo Riveros con autentico espanto le asintió, el viejo a modo de despedida le dio tres asquerosas lamidas en la cara y luego la escupió en el rostro, para terminar diciéndole, --Ahora lárgate de mí vista perraaaa!!!
Cielo Riveros solo alcanzo a dar unos cuantos pasos cuando sintió que el viejo automóvil se ponía en marcha, lo vio avanzar solo unos metros y este dio la media vuelta haciendo chirriar los neumáticos hasta que por fin desapareció de su vista, se sintió algo aliviada por fin ese monstruo desaparecía de su vida, pensó que ahora al fin podría descansar, con sus dos manitas se limpió el gargajo que le escupió el vejete en el rostro a modo de despedida, y aun semi temblorosa inicio el camino a casa de Claudia que estaba a una cuadra de donde la habían ido a dejar.
Mientras avanzaba intentaba serenarse no quería por nada del mundo que su amiga se diera cuenta de lo que le había sucedido, le inventaría cualquier situación, ya que sus cosas y problemas personales ella no los compartía con nadie y menos si era de esa índole.
Claudia la esperaba sonriente, nunca se imaginó que su ingenua amiga Cielo Riveros se había largado con un chico en la feria, pero no la condenaba, ella hubiera hecho lo mismo, además que conocía muy bien los gustos de su amiga, de seguro que el chico debió de ser muy apuesto era lo que pensaba la perdida rubia compañera de colegio de Cielo Riveros .
Cuando la encamable colegiala ya estaba a unos metros de la Clau, intento sonreírle para hacerle pensar que todo estaba bien, pero al momento de estar ambas frente a frente, el quebrantado temperamento de Cielo Riveros ya no pudo aguantar más solo se echó a llorar en los brazos de su amiga…
--Pero Eve…que te pasa…y porque lloras…cuéntame te paso algo?, deberías haberme avisado si pensabas largarte con algún chico…te buscamos por toda la feria. Mientras Claudia intentaba consolarla por todos los medios posibles se dio cuento que su amiga venia sin sus botas, pero traía puestas unas bonitas sandalias por lo que no le dio mucha importancia a esta situación, Cielo Riveros sollozaba más ahogadamente, --Dímelo… ese chico te hizo daño…vamos dímelo, e iremos a buscarlo…yo tengo unos amigos…
Cielo Riveros se abrazaba al cuerpo de su amiga, quería contarle sus desdichas, de cómo la habían violado analmente en la parte oscura de la feria, y como luego la raptaron en un automóvil, para ser llevada a un viejo y sucio taller mecánico en donde la habían convertido en mujer producto de otra violación, lo que la detenía en la confesión era solo una cosa, y esta era que a pesar de haber sido escupida, humillada, golpeada y maltratada psicológicamente, ella veía que a lo mejor don Pedro no era un hombre tan malo, quizás debió haber tenido problemas desde niño y por eso ahora su personalidad se veía alterada, además que luego de haberla penetrado salvajemente ella había sentido tan rico, que había algo que no se explicaba por qué le hacían sentirse algo atraída por aquel ordinario y vulgar vejete, pensaba que tal vez este no era malo del todo.
Claudia como pudo la hizo entrar a su casa, el maestro Tulio que ya estaba listo y dispuesto con una bandeja llena de vasitos y limones para beber tequila golpeado, no entendía por qué la chamaca venia llorando, le hizo unos gestos a Claudia para que le explicara qué es lo que estaba pasando pero la rubia solo le hizo señas que se esperara, luego las vio a ambas encerrarse en el baño, típico delas mujeres cuando tienen dramas pasionales se dijo para el mismo.
--Eve…cuéntamelo todo, le decía Claudia a su amiga mientras esta se lavaba la carita.
--Ehhh nada…no pasa nada…
Cielo Riveros recordaba que don Pedro había anunciado su visita en cualquier día de la semana por lo tanto, ya no quería darle más vueltas al asunto además que sabía que ya habría tiempo para hablarle de don Pedro a su amiga ya que este había sido enfático en que ella de alguna forma tendría que llevarle a Claudia, aunque igual pensaba que esto lo decía solo para asustarla, por ahora lo mejor era dejar las cosas tal como estaban,
--Pero como que nada!?...si venias llorando como una Magdalena!! Quiero que me lo digas ahora…que te hizo ese chico…el del auto?
--Lo que pasa es que ese tipo era muy pesado… y me dijo cosas feas…snifff, le decía una ya más recuperada Cielo Riveros …
--Segura que no te hizo daño?
--De verdad Clau…no me hizo nada…deja darme una ducha y porfi…préstame un vestido limpio…
--Está bien…le respondió Claudia no muy convencida del todo, mientras se daba a prepararle la bañera su amiga para que esta se duchara, --Bueno como te decía antes, con el profesor Tulio y don Juan el auxiliar te buscamos por toda la feria, pero nunca te encontramos…
--Y el profesor Tulio con don Juan están aquí?, Le consulto una nuevamente espantada Cielo Riveros al recordar la vez en que tuvo que chuparle la verga al profesor dentro de su oficina, por su infantil afán de querer llegar a ser actriz, y lo más traumático de como el cojo Juan se la había violado en reiteradas ocasiones en el cuarto que se encontraba en el subterráneo del colegio.
--Don Juan luego de haberte buscado por todas partes prefirió irse para su casa, y yo con el profe nos vinimos a esperarte…y ves? la hicimos bien… ahora nos tomaremos unos tequilitas con el profe… que te parece la idea?
Cuando Claudia se dio cuenta que a Cielo Riveros se le llenaban nuevamente sus ojos de lágrimas y le decía…
--Ay Clau, no creo que sea una buena idea ese profesor es algo raro, yo no quie…
--No seas mal agradecida Eve… con el profe anduvimos desesperados buscándote por toda la feria… y ahora que ya sabemos que estas bien, te bañaras, te pondrás ropa y nos tomaremos unos traguitos con él, es lo mínimo que puedes hacer para agradecerle no crees…
Cielo Riveros le vio el rostro de preocupación y enojo a su amiga, tal vez tenía algo de razón, por su culpa Claudia no lo había pasado bien en la feria, además que serían solo un par de tragos,
--Está bien…pero tú sabes que yo no soy buena bebiendo, así que solo me tomare un poco…
--Así está mejor amiga… y acuérdate de lo que hablamos antes de entrar en la feria, debes liberarte un poco más y dejar de andar reprimiéndote… ya verás que lo pasaremos bien…
En la sala el vejete ya estaba impaciente por estar a solas con ese par de putas, ni el mismo se la creía, iba a estar a sus anchas con las dos alumnas más potables del establecimiento escolar, a una ya la había probado, a la otra en una ocasión la había engatusado para que le mamara la verga, estaba impaciente por ver como se le darían las cosas desde ahora, pensaba esto mientras rápidamente sacaba de uno de sus bolsillos un frasco con un extraño polvillo blanco que rápidamente después de hacer en la mesa algo parecido a una línea, se la mando rápidamente por las narices, antes de que fuese ser sorprendido por sus portentosas y ricas estudiantes.
Claudia dejo a su amiga en la ducha para que se sintiera más relajada y fue para la sala donde las esperaba un impaciente Tulio que ya estaba que largaba sus lecherazos producto de la malograda follada que le había estado pegando a la rubia antes de que Cielo Riveros anunciara su llegada, tenía sus testículos rebosantes de semen espeso y caliente, listo para ser depositado en el útero de cualquier fémina y que en este caso él quería que fuese el de la escultural Cielo Riveros , la alumna con mejor futuro según las estadísticas académicas.
--Se dará una ducha y vendrá a tomarse unos tragos, yo la convencí de eso…pero no me pida na más, ahora lo demás dependerá solo de Ud., pero ni se le ocurra forzarla a algo que ella no quiera hacer, y menos de faltarle el respeto, porque soy capaz de sacarlo a patadas de mi casa…me escucho?
--Como tú quieras lindura, le decía el vejete a la vez que se acercaba al voluminoso cuerpo de la potable y rubia colegiala, para tomarla desde su cintura y atraerla contra su pecho, --Ya te dije que yo no voy a forzar a nadie, total si ella no quiere, nosotros tenemos un trato y acuérdate que solo hace un ratito dejamos un tema pendiente, así que si la cosa no resulta la dejaremos durmiendo en tu habitación y nosotros nos iremos a la recamara de tus papis, que te parece princesa, tenemos un trato?,
--Ahí veremos qué pasa, jijiji, y ahora suélteme que puede venir en cualquier momento, jijiji, la decía una prendida Claudia que con solo recordar la potente culiada que se había estado pegando con don Tulio, antes que llegara Cielo Riveros , le hacían temblar sus muslos…
Cielo Riveros ya estaba casi en condiciones, lo único que le incomodaba era que el vestido que le presto su amiga era algo más corto que el que había llevado puesto, pero este estaba limpio, por nada del mundo se volvería a poner la vestimenta que uso cuando la habían violado, pero lo más terrible era el sentirse desprotegida al andar sin ropa interior, le daba mucha vergüenza pedirle algo prestado a Claudia, que explicación le daría?, así que conformándose tal como estaba salió a la sala en donde la estaban esperando con una bandeja llena de limones, tequilas y con música para alegrar el ambiente.
Vio que el maestro Tulio se mantenía sentado muy apegado al cuerpo de su amiga, esta conversaba con el sonriéndole coquetamente ya se habían vaciado un par de vasos de licor, el vejete al ver salir a Cielo Riveros con un cortísimo vestido de mezclilla tipo jardinera, de esos con bolsillitos a los lados, casi se le salen los ojos de las hinchadas bolsas que este tenía por parpados, se paró apresuradamente para ir a saludar a la joven que ya estaba casi a punto de pasar a ser su mujer, según sus sucios propósitos.
--Hola Cielo Riveros , jejeje, nos tuviste muy preocupados, en donde anduviste metida que no nos dabas señales…
--La verdad profe que no quiero hablar de eso, le decía la dulce Cielo Riveros intentando no mostrar el inmenso odio que le sentía por haber jugado con sus sueños y el haber tomado provecho personal a costa de ello, el vejete le estampo un salivoso beso en la mejilla incluso se atrevió a sacar una pequeña porción de su lengua para sentir la lozanía de su cara, Cielo Riveros al notarlo muy disimuladamente se limpió su mejilla…
--Un golpeadito?, le ofreció indicándole la bandeja llena de vasos servidos con Tequila…
La fiesta comenzó, esta se centraba en una movida música reguetón y una serie de servidas de Tequilas que el mismo profe se encargaba de ir golpeando en la mesa y ofreciéndoles al par de chamacas que ninguna se dio cuenta que el mismo prácticamente no estaba bebiendo nada, conversaban de divertidas anécdotas escolares, Claudia hablaba a la misma vez que bailaba con su amigo imaginario, a los pocos minutos Cielo Riveros ya estaba algo más relajada incluso ahora que estaban cantando karaoke, ya ni se acordaba de don Pedro y de la siniestra oficina con cama en la cual había sido violada, también se había dado cuenta que el maestro Tulio no era tan aprovechador como ella creía, ya que llevaban bastante rato bebiendo y pasándolo bien y no se había comportado en forma incorrecta con ninguna de las dos, hasta incluso ahora lo en contraba mas simpático, ya que les narraba diversas historias de sus vivencias personales, y claro si el vejete como bien ya se ha dicho anteriormente, se gastaba una labia de los Dioses.
Ahora era Claudia quien serbia los vasos con el místico brebaje, que don Tulio quería que hiciera efecto lo más pronto posible, y así fue. La primera en caer noqueada fue la Claudia, que en el concurso de Karaoke se le olvidaban todas las canciones por lo tanto debía zamparse al seco un vaso lleno de Tequila.
Estaban los tres muertos de la risa cuando de pronto Claudia simplemente se desplomo,
--jejejeje y que mierda le pasa a esta pendeja, el vejete se hacia el desentendido ya que era justo esto lo que estaba esperando, deshacerse de la Claudia para el poder hacer lo que ya desde hacía rato había planeado.
--Creo que se le pasaron las copas, le contestaba una sonriente Cielo Riveros , --Creo que debemos llevarla a su habitación, me ayuda?...
--Hazte a un lado mi amor…yo la llevare…
Cielo Riveros no tomo en cuenta el amoroso apelativo con que el maestro Tulio por primera vez en la noche se refería a ella, tal vez el alcohol en su mente hicieron que bajara la guardia.
Una vez que el maestro dejo a Claudia en su habitación regreso a la sala, e invito una última copa a Cielo Riveros , ella totalmente confiada acepto tomarse otro trago con el profe,
--Está bien maestro Tulio, me serviré el ultimo golpeadito y me iré a la recamara de los padres de la Clau… ya son casi las 05.00 de la madrugada…Ud. que hará?
El vejete se dijo que ya era hora de actuar, no había ningún impedimento para tomar el cuerpo que desde hace tanto tiempo deseaba, así que se sacó la máscara de mojigato y se puso manos a la obra,
--Pus yo me quedare aquí contigo mi amorcito, o acaso te creías que ya me había olvidado de ti… acuérdate que ya me la chupaste una vez y esta no será una excepción, jejeje, además que quiero probar los otros encantadores orificios que posee tu cuerpo, jejejeje…
--Como!!?…que cosa me está diciendo!!!?, Cielo Riveros se dio cuenta en el acto que el caliente y degenerado profesor lo había planeado todo para quedarse a solas con ella…
El vejete fue rápido y no le dio tiempo de reacción a la jovencita, como oso acechando a su presa se abalanzo sobre su cuerpo lanzándola al sofá y montarse sobre su cuerpo. A la pobre Cielo Riveros la faltaba la respiración, el viejo era muy pesado para ella, le vio de muy cerca sus parpados hinchados y como la comenzaba a lengüetear en la cara con desesperada dedicación.
Cielo Riveros pataleaba en todas direcciones, a su mente llegaron de golpe las imágenes de lo sucedido solo hacían unas cuantas horas, la habían violado anal y vaginalmente y ahora era su mismo profesor quien pretendía hacer lo mismo con ella.
Debido a los bruscos movimientos que hacia la joven y espantada hembra al profesor Tulio le costaba trabajo manosearla a sus anchas, el vestido de Cielo Riveros ya se le había subido hasta la altura de su cintura debido a los bruscos movimientos que hacía en señal de protección, hasta que el profe perdiendo los estribos la sujeto con una de sus manos y le mando un certero tortazo en pleno rostro casi aturdiéndola emocionalmente, esta era la segunda vez en la noche que un hombre se atrevía a golpearla,
--Tomaaa!!, le dijo el viejo Tulio, y –Splashhhh!!! Retumbo la cachetada en el rostro, --Ahora te me quedas quieta maldita zorraaa, o acaso crees que no sé qué ya te has revolcado con el pinche cojo del colegio, puta de mierdaaa!!!
--Por favor don Tulio no me lo haga?… suéltemeee!!… le pedía mientras que con sus manitas intentaba inútilmente sacárselo de encima…
--Quédate quietecita putita!!, le decía con la mano empuñada y en alto, para luego abrazarla más firme contra él, --Hoy vas a ser mía pedazo de zorra, y será mejor que no hagas ninguna estupidez.
El profe acercó su asquerosa boca a los dulces labios rojos de la colegiala, ella intentaba esquivarlo, pero el vejete al igual como lo había hacho con la Claudia, le apretó sus cara con una de sus manazas y comenzó a comérsela por la boca, para luego de unos salivosos segundos de besuqueo no consentido decirle,
--Por qué no empezamos a sacarnos la ropa mi vida? Acaso no quieres hacerlo conmigo también?, la agarró entonces por el cuello y tomo su vestido con su otra mano para comenzar a bajárselo, lo primero que hiso fue bajarle ambos tirantes de los hombros, liberando aquellas preciadas montañas de carne que tanta admiración causaban a la vista de los hombres, lo que veía el viejo Tulio era espectacular, como pudo se lo fue bajando, veía su apetitosa piel al desnudo y pensaba que estaba en un sueño, siguió bajando el vestido ya iba llegando a la altura de sus caderas, y en un último esfuerzo termino de sacárselo de un puro tirón, y lo que vio casi lo hacen perder la razón, Cielo Riveros andaba sin ropa interior, el vejete aún no se la creía,
--Eres peor que una vulgar puta callejera mamitaaaa!! Quien lo iba a pensar que te gustaba andar a zorra pelada, jejeje!!!, el obeso maestro de secundaria no se cansaba de mirarla lujuriosamente, aquel curvilíneo cuerpo femenino estaba hecha a manos del mejor escultor dela época del Renacimiento, las formas y curvas que se pronunciaban en su cintura y caderas eran hipnotizantes, el viejo tragaba sendas cantidades de saliva, estaba realmente impactado --Estas realmente rebuenota mi amorrrr, le decía recorriendo con sus ojos de sapo todas las infernales curvas de carne joven que solo estaban a centímetros de su reptilesca mirada…
Cielo Riveros sabía lo que se proponía el vejete, con sus ojitos llenos de lágrimas le rogo,
--Profesor… le pido por favor que no me vaya a violar, snifff si quiere se la chupo hasta que se aburra, pero no me lo haga, snifff…
--Claro que me la vas a chupar cosita ricaaa…pero también vamos a follar, jejeje, hoy ha sido mi día de suerte, le acabo de reventar el culo a la puta que está durmiendo borracha, y ahora te toca a ti…que te parece lindura…
La pobre Cielo Riveros estaba tan asustada y tan cansada que ya ni siquiera podía podía moverse, su respiración era agitada, el vejete aprovecho para manosearla a su antojo, le encantaba masajearle las tetas, la colegiala intento nuevamente zafarse, pero don Tulio la tenía casi inmovilizada, pero no le pareció que la joven continuara resistiéndose, y para calmarla y hacerla entender de que no tenía escapatoria le asesto otra dos fieras cachetada en el rostro, --Plafff --plafff!!!, retumbaron las cachetadas en la sala, para luego casi gritarle en el mismo rostro enrojecido,

--Parece que no entendiste puta… no intentes hacer ninguna de tus zorrerías porque soy capaz de desfigurarte la cara a golpes… entiendes yegua caliente?
Cielo Riveros con su rostro al rojo vivo por los continuos tortazos que le habían asestado, solo asintió con su carita ya enrojecida por los golpes, miro como pudo hacia la habitación de Claudia por si venía a socorrerla, hasta pensó en que tal vez el mecánico de la feria se podía devolver y salvarla de las garras de aquel enloquecido maestro que ya estaba dispuesto a violarla, hasta pensó en irse a vivir por las buenas con don Pedro y hacer todo lo que él le había propuesto con tal de que la salvara de su ya casi segura tortura sexual.
--El maestro Tulio convencido de que ya había domado a esa potranca, la dejo tirada en el sillón, Cielo Riveros ya no tenía ninguna intención de hacerle problemas, lo miro con profundo asco como este se desnudaba ante su verdosa mirada, el viejo era muy gordo y feo, para luego observar y quedar el triple más espantada de como este viejo sacaba de sus ropas un pequeño frasco en el cual desparramaba en la mesa de centro una pequeña cantidad de polvo blanco, ahí lo comprendió, el muy miserable se estaba drogando, y lo vio cómo se mandaba otra porción de droga sin importarle que ella lo estuviese viendo todo.
El viejo Tulio se seguía drogando para según el sentirse aún más estimulado en el momento en que se la metiera.
Cielo Riveros lloraba acostada sobre el sofá, sollozaba muy bajito, hasta que el profesor una vez arrodillado a un lado de su cuerpo desnudo, acercó su cara de sapo a la de ella, la colegiala lo sintió respirar pesadamente casi en su mismo rostro, le daba un profundo asco, luego sintió cuando este le metió la mano entre sus muslos apoderándose de su casi lampiño tajito, para decirle al oído,
--Pero que tajito más rico es el que tenemos aquí abajo…y que apretadito lo tienes!! Me lo voy a comer enteroooo! Me lo voy a zamparrrrrrrr!! Te la voy a chupar hasta que me aburraaaaaaa!!!
--Don Tulio…Snifff…no me haga daño por favor…snifff….sniffff!!
Cielo Riveros estaba aterrada, nunca se imaginó que el maestro aparte de ser caliente y aprovechador también era drogadicto, se quedó quieta y paralizada de terror.
El vejete la tomo del brazo e hiso que se pusiera de pie,
--Ya está putita ahora nos vamos de luna de miel a la habitación matrimonial, jejejeje…
Cielo Riveros nuevamente comenzó a llorar y suplicar mientras prácticamente la iban arrastrando desnuda a la habitación de los padres de Claudia,
--Profesor por favor… no quieroooo sniffff… quiero irme a mi casa… dejemeee!
--Déjate de estupideces zorra asquerosa!, mira que vamos a pasarla muy bien y muy rico… ya verás!!
Una vez que ingresaron a la habitación Cielo Riveros se quedó mirando aterrada la cama, seria ahí en donde la volverían a violar, el vejete la tomo por detrás agarrándola por sus tetas y alojo su semi tiesa verga en las duras y frescas nalgotas de la asustada jovencita, el vejete se apegó a su espalda pasándole la lengua por detrás de la oreja, a la vez que la manoseaba como desesperado, le encantaba pasear y sentir sus manos en las marcadas curvas que se pronunciaban en sus caderas, para luego volver a subirlas y bajar desde las tetas, pasar por su cintura y hasta llegar a su panochita adornada escasamente por sus crespos pelitos negros y brillosos, la tanteaba y la recorría, pasaba nuevamente por sus amplias y bien formadas caderas, su bien marcada y formada figura lo tenían casi enloquecido de calentura.
--Por favor…profesor Tulio ya noooo!!, le solicitaba casi a punto de desmayarse de puro miedo.
El viejo queriendo darse el mejor espectáculo vivido en su existencia, encendió la luz de la habitación, después la tomo nuevamente de sus cabellos obligándola a ponerse en 4 patas, Cielo Riveros obedeció algo adolorida,
--Mueve tu trasero para mi mamasotaaaa!!
--Quee?
--Que muevas el culo perraaaa!!!… quiero verlo como se mueve cuando gateas en cuatro por toda la habitación, deseo sobártelo cuando vayas gateando.
Cielo Riveros totalmente asustada y nerviosa comenzó a mover su cuerpo. A medida que avanzaba en su gateo daban ganas de agarrala y metérselo así mismo como estaba, la imagen de la tierna chamaca en 4 patas y gateando desnuda era enloquecedora, y lo hacía en forma exquisita, cada movimiento de avance, y cada contoneo que hacía con cualquiera de sus muslos eran un prodigio solo para reyes, daba la impresión que era una verdadera hembra amazónica en busca de su presa,
--Válgame Diossss!! Pero qué clase de cuerpo es el que te gastas pendejaaaa!!!, le decía el profesor Tulio, mientras encendía un cigarrillo para disfrutar del erótico espectáculo que le estaba brindando Cielo Riveros .
El viejo la seguía fumando su cigarrillo observándolo todo y manoseándola mientras la joven amazona avanzaba en su recorrido, tras algunos minutos de paseo en 4 patas el impúdico y asqueroso sobajeo de carnes continuaba,
--Sigue gateando perrita, no sabes lo rica que te ves en pelotas y puesta en 4 patas, llevo como tres años pajeandome la verga en tu honor mamacita y esta noche por fin te voy a probar. La humillada colegiala solo cerraba sus ojos no quería verle la cara drogada y degenerada que tenía aquel horrendo profesor.
Una vez que el maestro Tulio se fumó todo su cigarrillo y se cansó de sobajearla se arrodillo al lado de aquel portentoso y femenino cuerpo desnudo, para comenzar a lamerla como si este fuera un perro, no hubo ninguna parte del cuerpo de Cielo Riveros que se salvarla de las lamidas, así estuvo unos buenos minutos, habían momentos en que el viejo parecía notar que a la chamaca se le ponía la carne de gallina además que cuando sucedía esto la joven hacia unos raros movimientos musculares, pero el continuaba con la faena lamedora.
La tierna colegiala solo se mantenía quieta y tragaba saliva como podía, sabía que un hombre bajo el efecto de las drogas era capaz de hacerle cualquier cosa, solo temblaba dejándose que la lengüetearan por donde el viejo lo quisiera.
A estas alturas y aunque ella no lo deseaba su cuerpo ya estaba siendo atacado por gratificantes escalofríos, sobre todo cuando el vejete pasaba la lengua por sus nalgotas, mientras más cercana se la pasaran de donde estaba su orificio posterior los escalofríos eran más intensos y ricos, pero ella no quería sentir eso, aquel miserable viejo había emborrachado a su amiga para poder beneficiársela a su antojo, y más encima estaba drogado, pero su potable y poderoso cuerpazo no le daba tregua a la atribulada chiquilla, los escalofríos poco a poco se iban transformando en sendos corrientazos que la recorrían por completo.
Cuando el degenerado profesor dejo de lamerla, Cielo Riveros supo que ya estaba casi perdida el vejete se la iba a meter, y más le quedo claro cuando este por fin le hablo,
-Ahora vas a ser muy obediente zorrita rica, y haz todo lo que te pida para no tener que golpearte! Cielo Riveros seguía temblando de miedo, trago saliva mientras le asentía en forma afirmativa con su cabeza, se sentía totalmente desamparada en aquella casa, seguía pensando que si por lo menos hubiera estado don Pedro para defenderla, de pronto cayo en cuenta que porque pensaba tanto en don Pedro si ese viejo caliente también la había violado y golpeado, ella debería pensar en Rodrigo era a el a quien amaba, estando en estas cavilaciones, la grave voz de su maestro la volvieron a su triste realidad --Putita ahora te subirás a la cama y te abrirás completamente de piernas, quiero ver tu cuerpo desnudo y abierto solo para mí, vas a hacerlo no es cierto cosita rica?
Cielo Riveros lentamente se fue subiendo a la cama para ponerse de espaldas, cerro sus hermosos ojos verdes y se fue abriendo de piernas tal como le había pedido el vejete, este por su parte se tendió posando su cabeza al medio de sus muslos con la única intención de mirarle su vagina hasta hartarse, encendió otro cigarrillo para disfrutar de la vista. Se la tocaba con delicadeza, sus gruesos dedos jugaban con los escasos pendejitos de la joven estudiante, le sobaba el vientre, su pelvis, sus muslos abiertos, hasta que decidió de ponerle un poco más de acción a la cosa, fue a ubicar su verga justo en la cara de la nerviosa adolescente, le ponía su tranca delante de sus ojos para que ella mirara las rápidas pulsaciones que esta hacía.
CONTINUARA… EN EL PROXIMO CAPITULO EL MAESTRO TULIO PODRA AL FIN APAREARSE CON LA TAN ENCAMABLE COLEGIALA, AGASAJANDOSE POR TODOS SUS ORIFICIOS.

Cielo Riveros 37 Aplicada la alumna del maestro Tulio
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Siiiiii!!!!!!!!!!!!!, profe yo le ayudare a que me enculeeee!!! Pero por favor ya no me pegueeeee!!!! Snifffffsssss!! casi con cariño apunto la punta de su gordinflona verga a la entrada del ano de la nena.
FIN DEL EPISODIO DONDE POR FIN EL MAESTRO TULIO PODRA POSEER A LA BELLA ADOLESCENTE QUE LE QUITABA EL SUEÑO.
La colegiala recorría la peluda panza de su maestro, fue bajando su vista hasta la verga de don Tulio, ahora la observo con detenimiento, si bien ya se la había chupado en una ocasión, esa vez no había puesto atención en ciertos detalles que ahora si podía ver nítidamente, se la veía extremadamente gorda, daba la impresión de ser esponjosa se decía para ella misma, el glande era azulado y no sabía por qué miraba con tanto detenimiento la forma de este, y las continuas salidas de un fino hilillo de líquido que manaba desde la punta y que caía sobre sus tetas, instintivamente saco su lengüita pasándosela por su labio superior, para luego morderse el labio inferior, su respiración y presión sanguínea iban en acelerado aumento, el vejete totalmente lejano a lo que le estaba ocurriendo a Cielo Riveros veía embobado desde su posición las bellas piernas abiertas de la chamaca en donde también podía observar la exquisita grieta de carne que se le formaba al medio de ellas, grandes cantidades de babas caían sobre la negra cabellera de la muchacha pero ninguno de ellos se percataba de esto ya que ambos estaban concentrados en lo suyo.
El vejete muy excitado salió de aquella paradisiaca abstracción en la que se encontraba y bruscamente la tomo de sus cabellos y la obligó a ponerse de rodillas… el verla desnuda y sumisamente arrodillada ante él lo calentaron hasta la locura,
--Chúpame las bolas, le ordeno…
--Qué…?
--Que me chupes los testículos zorraaaa!!… acaso no entiendes?, junto con decirle esto último levanto su puño como si le fuera a volver a pegar…
Cielo Riveros muy asustada empezó a lamer los testículos con desesperación, no porque deseara hacerlo pero no quería que el vejete le fuera a dejar marcas en su cara, las lamidas sonaban acuosas, la colegiala paseaba sus lengua alternando entre uno y otro testículo, inconscientemente le tomo la verga y se la levanto para poder pasear su lengua por debajo de las peludas bolas del vejete, este estaba en el séptimo cielo.
Pasados algunos minutos el profe sin dar ningún tipo de aviso agarró su verga y se lo metió de una en la boca, empujo con fuerzas hacia la faringe de la muchachita que por poco casi la hacen vomitar, su miembro olía asqueroso, la pobre ni se acordaba que el mismo le había dicho que se la había metido por el culo a la Clau, demás está decir que el vejete ni siquiera se había aseado después del sexo anal y vaginal que había practicado con la rubia, y no era que Claudia no pusiera cuidado en su higiene ni mucho menos, la cosa era que el viejo con cara de sapo era desaseado, hediondo y cochino por naturaleza, la pobre Cielo Riveros no tuvo más opción que seguir chupando verga por varios minutos, en los cuales el vejete le sostenía la cabeza empujándola para adelante y atrás obligándola a seguir el ritmo que el determinara necesario para darse placer.
Una vez que el vejete se sacio de lo rico que le hacía sentir la boca de Cielo Riveros la obligó a colocarse nuevamente en cuatro patas con su trasero apuntando hacia él.
La joven cerró sus ojos como suplicando, lo sintió como intentaba separar sus duras y firmes nalgotas, a la vez que acomodaba su verga en la entrada anal de la asustada chiquilla, hasta que lo sintió como empezaba a empujar hacia adentro, la estaban enculando.
Cielo Riveros sentía en sus propias carnes como el profesor Tulio se la entallaba de arriba y hacia abajo, como si estuviera tratando de buscar por dónde meterla, el vejete se estaba desesperando, se suponía que la chamaca ya estaba abierta por el culo según lo dicho por el propio cojo Juan, pero la verga no entraba, enceguecido por la calentura y ansiedad de estar lo más pronto posible al interior de su cuerpo le dio una tremenda nalgada,
--Plaffffff!!!, --Vas a tener que ayudarme perra calienta vergas, si el pinche cojo ya te lo metió por el orto, deberías tenerlo un poco más dilatado, ábrete tú misma el culo para yo poder encularte!!! –Plafffffff, retumbo otra fiera nalgada en las duras carnes de Cielo Riveros …
--Don Tulio! Por favor no me pegue!! Me está lastimando…dejemeee!!!
--Que te abras el orto te dije perra de mierdaaaa!!! Vamos di que me ayudaras a encularte, diciendo esto ultimo levanto sus dos manazas y con fuerzas le aplico una doble nalgada, --Plafffffffff!!!
--Siiiiii!!!!!!!!!!!!!, profe yo le ayudare a que me enculeeee!!! Pero por favor ya no me pegueeeee!!!! Snifffffsssss!!
Aunque Cielo Riveros no lo quería llevo ambas manos a sus nalgas, para que el casi enloquecido profesor no la siguiera lastimando, tomándolas de par en par y abriéndoselas para que al viejo no le costara tanto trabajo poder metérsela por el culo, se lo dejo expuesto para que el hiciera lo que quisiera, ya no tenía sentido alguna seguir luchando, en su mente solo quería que todo acabara pronto.
El profesor Tulio quedo boquiabierto, desde su posición veía el apretado y rosadito puntito anal en toda majestuosidad, casi con cariño apunto la punta de su gordinflona verga a la entrada de este, se afianzo con ambas manos de las firmes caderas de Cielo Riveros , y concentrándose en la breve cintura de la muchacha, empujo su verga con decisión, perforando todo lo que se interpusiera por su camino…
Cielo Riveros apretó fuertemente sus mandíbulas y dientes cuando sintió de cómo le enterraban por tercera vez en la noche una verga por el culo…
--Ohhhh…Ayyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyyyy!! Diossss! Diosssss!! Sáquela que me dueleeee!! Es muy gorda su cosaaaa!!!, exclamaba la chamaca con sus ojos abiertos como platos, aun así no dejaba de abrirse con fuerzas las nalgas…
--Ahhhhh!!! Eres una muy rica putita sabes!… Tu culo es calientito y exquisito mi amorrrrrr!!!, le decía el vejete con sus ojos cerrados, a la misma vez que se lo dejaba enterrado por completo y le mandaba tres solidas apuntaladas para que ella sintiera a cabalidad que se lo tenía enterrado por completo.
--Suéltemeee!…No se muevaaa!!… sáquelo viejo asqueroso!!!… basta que me duele muchoooo!!!, me dueleeeee!!!!, ayyyyyyy!!!!!
El vejete haciendo caso omiso a lo que demandaba la adolorida Cielo Riveros , no se aguantó las tremendas ganas de nalguearla, el orto de la colegiala se contraía y le apretaba exquisitamente la verga como si esta realmente quisiera succionársela por el culo…
--Plafff! Plaffff!! Plafffff!!! Plaffffff!!!!, retumbaban en la habitación las fieras nalgadas y palmetazos que el vejete le asestaba en sus carnes, a la vez que comenzaba a meter y sacar con fuerzas, las chichotas duras y firmes se mecían rápida y circularmente al mismo ritmo en que ensartaban a su dueña, los movimientos culiatorios eran cada vez más acelerados, Cielo Riveros luchaba mentalmente con su cuerpo, no quería gemir, pero los escalofríos se venían uno tras otro desde que sintió la vergota posarse en la entrada de su ano, ahora ya casi sin fuerzas le rogaba que por favor la soltara,
--Por fa…vorrr…donnn…Tu…liooooo…ya…no…me…lo…hagaaaaa…
--Jajajaja!! Claro que te lo voy a seguir haciendo pendejaaaa…estoy casi seguro que ya te estas calentandooo…tomaaaaaa!!!, le decía a la vez que se dejaba caer hacia adelante y se lo comenzaba a meter y sacar en forma más rápida, Cielo Riveros solo murmuraba que ya no más, a pesar de tener la sensación de que le estaban despedazando brutalmente el trasero, no podía dejar de sentir muy rico,
--Nooooo…ya no masssss por fa…vorrrr!, gemía empujando inconscientemente el culo hacia atrás para que la perforación fuese aún más profunda de lo que ya era.
Pero el vejete no bajaba las revoluciones, apretaba su miembro contra aquel glorioso y apretadísimo esfínter, hasta que por fin la hizo pegar un grito terrible de placer y dolor al mismo tiempo, al viejo ni le importaba que la Claudia se fuese a despertar con el escándalo que él y Cielo Riveros tenían en la habitación de sus padres,
--Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!, Ufffffffff!!! Ohhhhhh!!! Ohhhhh!!, los gritos poco a poco se fueron transformando en exquisitos gemidos de placer, --Mmmmmmm! Mmmmmmmm!! Mmmmmmmmmmm!!, ya suspiraba casi desesperada de placer la tierna chamaca,
Ambos respiraban agitadamente, el ano y coño de Cielo Riveros estaban humedecidos, su cuerpo se encabritaba y estimulaba al máximo, escuchaba gruñir al viejo con cara de sapo como si este fuese un toro embravecido, sintió como ahora la tironeaba desde su cabello y le jaloneaba la cabeza hacía atrás, para decirle cosas vulgares producto de su sádica calentura,
--Culeas muy rico cerda de mierdaaa!, eres una autentica putaaaa!! --Dime quien te rompe el culo mas rico, yo o el pinche cojo de la gran puta!!?...
Cielo Riveros a quien ya casi no le quedaban fuerzas para resistirse a nada de lo que le pidiera el vejete, se olvidó de todo, ya ni siquiera le importaba que se la estaban violando, solo quería gozar y que su profe la gozara todo lo que él quisiera…
--Responde perra inmunda quien te parte el orto más rico yo o el cojo Juannn!!, Plaffffff, retumbo la fiera nalgada que le asesto en el culo para que reaccionara…
--Us…teddddd!!
--Yo que pendejaaaa, quiero escuchar la frase completaaa, el viejo profesor con extrañas fuerzas para un hombre de su edad, no paraba de meter y sacar verga,
--Usteddd …me parte el culo…. más rico que don Juannnnn!!!, le soltó la estudiante en forma clara y categórica,
--Jajajaja!…así me gusta putitaaaa!!…ya estas caliente verdad zorritaaaa?, el viejo al ver que la hermosa colegiala no le contestaba, siguió presionándola, --Contesta mierdaaaa o quieres que te mate a golpes por desobedienteee!!!
Cielo Riveros estaba muy caliente, como pudo le contesto al macho que en estos momentos la perforaba tan exquisitamente…
--Siiii papi! Estoy…. Muy…. calienteeeee!! Ohhhhhh ri… cooooooo!!
--Jajajaja te voy a seguir partiendo el culo hasta que te desmayes de placer putita, jajajaja!!!
--Siiiiiiii Tu…lio!! mi amorrrr!!! sígueme culiando ri…coooooooo!!!!!
La tierna Cielo Riveros ya estaba perdida, en estos momentos su calentura sobrepasaba todos los límites permitidos, en aquel estado estaba dispuesta a hacer cualquier cosa que el vejete le pidiera.
--Ahora quiero hacértelo por la zorra pendejaaa, lo quieres?
Cielo Riveros con una autentica sonrisa de viciosa volteo a mirar al viejo que le estaba pidiendo la parte por su vagina, ella con sus ojos verdes semi cerrados producto de la calentura le asintió, el profesor Tulio muy emocionado por lo que ahora se le venía lentamente se la fue sacando, Cielo Riveros se puso de espaldas y abrió sus muslos ofreciéndole sin ningún tipo de impedimento lo que él le estaba solicitando, el vejete se echó sobre su cuerpo para luego juntar su cara con la de ella para comenzar a besarla apasionadamente, metió su lengua en la boca de la entregada colegiala, ella por su parte como guiada por instinto también abrió su boca lo que más pudo, hasta que ambas lenguas se rosaron y se enredaron en un intercambio de saliva constante.
La cama ya estaba hedionda a sudor, el vejete comenzó a bajar su cara de sapo por todo el despampanante cuerpazo de una de sus más brillantes y bellas alumnas, lamio y chupo toda la carne que encontró a su paso hasta que llego a la región de su pelvis coronada con pequeñas cantidades de suaves pelitos encrespados, acarició su vagina y ella con sus ojitos puestos en la fea cara de su profesor y en señal de verdadero agradecimiento le abrió las piernas lo que más pudo, lo vio meter su cara y legua justo en su preciosa entrada de amor.
Cielo Riveros estaba muy excitada por todo lo que le estaban haciendo, la lengua del vejete bailaba resbalosamente al interior de su ranura intima, veía como el degenerado profesor Tulio le sorbía todos sus jugos vaginales, se la chupaba y se la succionaba, literalmente le estaba comiendo la zorra, vio cuando este con dos de sus gordos dedos le abrió su panochita para luego volver a meter su lengua lo más profundo que pudo, chupando y comiéndose todo lo que manaba desde su interior, para Cielo Riveros aquello era el mismísimo cielo, era tan rico lo que estaba sintiendo que cerro sus ojos y se relajó abriéndose aún más de piernas, nunca en su vida había sentido tan exquisito.
No supo en qué momento se vinieron los corrientazos de placer en donde la joven perdió total compostura, como pudo se inclinó hacia adelante y lo agarro por los cabellos y comenzó a mover su vagina como si ella misma se estuviera culiando la boca del vejete, le punteaba ondulatoriamente, en eso comenzó a gritar,
--Ahora profeeee!!…si, si…asiiii!! Asiiiii!!! Continúe por favorrr!! …siga comiéndomela que me voy a venirrrrr por la zorraaa!!!… Mmmmmmm….que ricooooo!!!… ayyyyyy!!… que ricooooo profersorcitooooo!!!.
Cielo Riveros se retorcía de calentura, sintiendo y gozando todo el placer que le regalaba su vagina al estar prácticamente pegada a la boca de su profesor, hacia movimientos pélvicos de atrás y hacia adelante, combinándolos con exquisitos meneos ondulatorios, hasta que lanzando un terrorífico grito de placer y excitación le ponía en conocimiento a su macho que ella estaba en la cúspide de un glorioso orgasmo,
--Siiiiiiiiiiiiiiii!!!!! Me vengoooo don Tuliooooooo!!!!! Ricoooooooo mi vidaaaa!!!!! Me estoy corriendooooo en tu bocaaaa!!!! Comemelaaaa!!!!… comemelaaaaa!!!! Le gritaba y pedía sin dejar de apuntalarle su panocha en plena boca abierta del feliz vejete, a la vez que con sus bellas piernas le atenazaba la cabeza empujándosela más firmemente hacia su jugosa y febril vagina.
--Ves cómo te gustó… escuincla de Mierda!!!, le dijo el viejo con cara de sapo una vez que se pudo separar de aquella exquisita hendidura, --Ahora te voy a culiar por la zorra ya verás…
La colegiala que aún estaba en estado de extrema calentura le dio su autorización,
--Si… la… quiero… toda…. adentro, le dijo sin saber lo que estaba diciendo, con sus ojos lánguidos y mirando hacia un lado de la habitación.
Cielo Riveros se abrió de piernas nuevamente para que su profesor de una buena vez se la metiera y la hiciera su mujer, fue ella misma quien ahora se abría su apretada vagina con dos de sus dedos para que su macho llegara y simplemente se la encajara hacia su interior, esto fue mucho para el degenerado y aprovechador profesor, con solo tener la visión de la dulce Cielo Riveros abriéndose y dándole luz verde a su verga para que se paseara por donde él lo quisiera lo llevaron al placer anticipado,
--Ohhhhh putitaaaaa me corroooooo!! no voy alcanzar a meterteloooo!!!, el viejo como pudo se abalanzo hacia la cara de la expectante jovencita, ella viendo que en cualquier momento este dispararía sus lecherazos, lo espero sin saber qué hacer, el viejo como pudo se instaló a horcajadas sobre sus tetas tomando y apretando su hermosa cara la obligo a que abriera su boca, Cielo Riveros no podía respirar sintió entrar en su boca la gorda verga de don Tulio que una vez bien alojada en su cavidad oral este disparo tres sendos y gruesos borbotones de semen caliente y espeso, seguidos por otros cuatro de igual intensidad y potencia, la corrida en su boca fue abundante, la colegiala aguanto la respiración lo mejor que podía, sentía como la verga de su maestro escupía semen al interior de su garganta y paladar cuantiosas cantidades de aquel exquisito liquido espeso y caliente que una vez ya había bebido en el interior de la oficina de su profe, pero ahora sentía unas tremendas ganas de bebérselo todo, por lo que sin pensarlo dos veces a medida que esta prolífica esencia masculina salía a raudales de la verga ella lo iba tragando, y aprovechaba de chupársela intentando succionarle hasta la última gota de semen que el vejete poseyera al interior de sus peludas bolas.
Cielo Riveros se había tragado una gran cantidad de espermios que le había regalado el maestro Tulio.
El viejo cayó desplomado al lado del curvilíneo y sudado cuerpo desnudo de la tierna colegiala, ella se mantenía con sus ojos vidriosos, sus curvas aún estaban temblorosas por la tremenda excitación a las que habían estado expuestas, poco a poco se fue serenando, hasta que los fuertes ronquidos del hombre al cual le había bebido una gran cantidad de semen, la sacaron de su estado de calentura, se volvió a mirarlo, ahí estaba el miserable y aprovechador vejete que por segunda vez se había beneficiado con su cuerpo, los remordimientos y el sentimiento de culpa se apoderaron de su mente, --Pero que barbaridad era la que acababa de hacer?, se preguntó de pronto, lentamente se levantó de la cama y salió de aquella habitación, con sus hermoso ojitos verdes llenos de lágrimas fue por el vestido que le había prestado su amiga y se lo puso, consulto la hora ya eran las 09.00 de la mañana.
Una vez que se hubo arreglado un poco en el baño se dispuso a irse para su casa, desde la sala escuchaba los fuertes ronquidos del profesor, quiso ir a despedirse de su amiga, intentaba no hacer ruidos, y cuando abrió la puerta de la habitación la pobre chamaca casi se desmaya de la impresión, vio a Claudia tirada en su cama desnuda con su dorado cabello rubio totalmente alborotado, mantenía sus bellas piernas bien abiertas, una de sus manos la movía aceleradamente en su vagina haciendo frenéticos círculos, y con la otra mano se apretaba alternadamente las tetas, escucho claramente como su rubia amiga murmuraba con su cejas fruncidas en señal de concentración en lo que estaba haciendo:
--Asiii…asiiii…profesor Tuliooo!!… metamelaa!! Métamelaaaa!!! más adentrooo!!!… más adentroooo!!!
Cielo Riveros se quedó mirando como embobada el desnudo cuerpo excitado de su amiga, sus bellos ojos verdes la recorrieron curva por curva, inconscientemente junto sus piernas lo que más pudo, sintió que su cosita sin darle previo aviso le soltaba una extraña cantidad de agüita calientita que corrió por sus muslos y que la hicieron sentir muy rico, le estaban dando ganas de….
Cielo Riveros salió casi corriendo espantada de la casa de Claudia y muy asustada por lo que su cuerpo le había hecho sentir en el momento que vio a su amiga masturbándose, se preguntaba que como era posible que su cuerpo le hiciera sentir eso después de todas las atrocidades que le habían ocurrido, y más encima a costillas de Claudia que era su gran y mejor amiga, esto está mal… muy mal, se iba diciendo.
Ya en el bus y en camino a la seguridad de su casa no podía dejar de pensar en todo lo sucedido en la noche anterior, se maldecía a ella misma por haberse entregado al más feo y degenerado de sus profesores, ahora con qué cara podría llegar el día lunes al colegio?, y con qué cara podría ver a su madre que seguramente a estas horas ya debía estarla esperando, sentía asco por lo que había hecho, en que había estado pensando cuando le dio por beberse el semen de tan asqueroso sujeto, y Claudia desnuda y masturbándose, que hermosa la había visto…no! en eso no iba pensar!!, se dijo terminantemente.
Recordó también su anterior violación, por nada del mundo don Pedro se tenía que enterar de lo acontecido en la casa de su amiga, ya que este se podía enojar con ella, pensó que tal vez ni la llamaría como le había prometido, y si la llamaba bastaría con no contarle nada de lo sucedido, con esto último la pobre se tranquilizó un poco más, de pronto cayo en cuenta que porque estaba más preocupada de lo que podría pensar don Pedro, si ese viejo caliente también se había aprovechado de ella, su preocupación debía de centrarse en Rodrigo, era a el a quien ella amaba con todas las fuerzas de su corazón, por lo tanto se sacó la imagen de don Pedro y prefirió pensar en Rodrigo, el si era bueno y comprensivo con ella.
Al ingresar a su casa intento hacer el menor ruido posible, pero para su tranquilidad encontró una nota de su amada madre en la que le decía que tuvo que irse a atender una urgencia en el hospital, por fin pudo descansar, de seguro que su madre ya no llegaría hasta el próximo fin de semana, a duras penas aseguro la puerta con el pasador de madera que había instalado don Benito.
Se dio una relajante ducha, a medida que las refrescantes cantidades de agua recorrían y lavaban su mancillado cuerpo, Cielo Riveros recordó las escenas más escabrosas de la noche anterior, de cuando don Pedro con sus amigos la vieron desnuda en la feria, de cómo el viejo mecánico la enculo delante de los otros viejos, su desvirgamiento adentro de un sucio taller mecánico, y para rematarla la cogidota que le había pegado su profe por el culo estando él bajo el efecto de las drogas, ni que decir de la abundante cantidad des espermios que se había comido solo hace un par de horas, la joven colegiala lentamente se fue agachando en la ducha para ponerse a llorar desconsoladamente acurrucada en una esquina de la bañera, mientras el agua de la ducha le limpiaba su curvilíneo cuerpo de todo lo malo que le había ocurrido en esas últimas 12 horas de su vida.
FIN DEL EPISODIO.
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Cielo Riveros 37 Aplicada la alumna del maestro Tulio
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Siiiiii!!!!!!!!!!!!!, profe yo le ayudare a que me enculeeee!!! Pero por favor ya no me pegueeeee!!!! Snifffffsssss!! casi con cariño apunto la punta de su gordinflona verga a la entrada del ano de la nena.
FIN DEL EPISODIO DONDE POR FIN EL MAESTRO TULIO PODRA POSEER A LA BELLA ADOLESCENTE QUE LE QUITABA EL SUEÑO.
La colegiala recorría la peluda panza de su maestro, fue bajando su vista hasta la verga de don Tulio, ahora la observo con detenimiento, si bien ya se la había chupado en una ocasión, esa vez no había puesto atención en ciertos detalles que ahora si podía ver nítidamente, se la veía extremadamente gorda, daba la impresión de ser esponjosa se decía para ella misma, el glande era azulado y no sabía por qué miraba con tanto detenimiento la forma de este, y las continuas salidas de un fino hilillo de líquido que manaba desde la punta y que caía sobre sus tetas, instintivamente saco su lengüita pasándosela por su labio superior, para luego morderse el labio inferior, su respiración y presión sanguínea iban en acelerado aumento, el vejete totalmente lejano a lo que le estaba ocurriendo a Cielo Riveros veía embobado desde su posición las bellas piernas abiertas de la chamaca en donde también podía observar la exquisita grieta de carne que se le formaba al medio de ellas, grandes cantidades de babas caían sobre la negra cabellera de la muchacha pero ninguno de ellos se percataba de esto ya que ambos estaban concentrados en lo suyo.
El vejete muy excitado salió de aquella paradisiaca abstracción en la que se encontraba y bruscamente la tomo de sus cabellos y la obligó a ponerse de rodillas… el verla desnuda y sumisamente arrodillada ante él lo calentaron hasta la locura,
--Chúpame las bolas, le ordeno…
--Qué…?
--Que me chupes los testículos zorraaaa!!… acaso no entiendes?, junto con decirle esto último levanto su puño como si le fuera a volver a pegar…
Cielo Riveros muy asustada empezó a lamer los testículos con desesperación, no porque deseara hacerlo pero no quería que el vejete le fuera a dejar marcas en su cara, las lamidas sonaban acuosas, la colegiala paseaba sus lengua alternando entre uno y otro testículo, inconscientemente le tomo la verga y se la levanto para poder pasear su lengua por debajo de las peludas bolas del vejete, este estaba en el séptimo cielo.
Pasados algunos minutos el profe sin dar ningún tipo de aviso agarró su verga y se lo metió de una en la boca, empujo con fuerzas hacia la faringe de la muchachita que por poco casi la hacen vomitar, su miembro olía asqueroso, la pobre ni se acordaba que el mismo le había dicho que se la había metido por el culo a la Clau, demás está decir que el vejete ni siquiera se había aseado después del sexo anal y vaginal que había practicado con la rubia, y no era que Claudia no pusiera cuidado en su higiene ni mucho menos, la cosa era que el viejo con cara de sapo era desaseado, hediondo y cochino por naturaleza, la pobre Cielo Riveros no tuvo más opción que seguir chupando verga por varios minutos, en los cuales el vejete le sostenía la cabeza empujándola para adelante y atrás obligándola a seguir el ritmo que el determinara necesario para darse placer.
Una vez que el vejete se sacio de lo rico que le hacía sentir la boca de Cielo Riveros la obligó a colocarse nuevamente en cuatro patas con su trasero apuntando hacia él.
La joven cerró sus ojos como suplicando, lo sintió como intentaba separar sus duras y firmes nalgotas, a la vez que acomodaba su verga en la entrada anal de la asustada chiquilla, hasta que lo sintió como empezaba a empujar hacia adentro, la estaban enculando.
Cielo Riveros sentía en sus propias carnes como el profesor Tulio se la entallaba de arriba y hacia abajo, como si estuviera tratando de buscar por dónde meterla, el vejete se estaba desesperando, se suponía que la chamaca ya estaba abierta por el culo según lo dicho por el propio cojo Juan, pero la verga no entraba, enceguecido por la calentura y ansiedad de estar lo más pronto posible al interior de su cuerpo le dio una tremenda nalgada,
--Plaffffff!!!, --Vas a tener que ayudarme perra calienta vergas, si el pinche cojo ya te lo metió por el orto, deberías tenerlo un poco más dilatado, ábrete tú misma el culo para yo poder encularte!!! –Plafffffff, retumbo otra fiera nalgada en las duras carnes de Cielo Riveros …
--Don Tulio! Por favor no me pegue!! Me está lastimando…dejemeee!!!
--Que te abras el orto te dije perra de mierdaaaa!!! Vamos di que me ayudaras a encularte, diciendo esto ultimo levanto sus dos manazas y con fuerzas le aplico una doble nalgada, --Plafffffffff!!!
--Siiiiii!!!!!!!!!!!!!, profe yo le ayudare a que me enculeeee!!! Pero por favor ya no me pegueeeee!!!! Snifffffsssss!!
Aunque Cielo Riveros no lo quería llevo ambas manos a sus nalgas, para que el casi enloquecido profesor no la siguiera lastimando, tomándolas de par en par y abriéndoselas para que al viejo no le costara tanto trabajo poder metérsela por el culo, se lo dejo expuesto para que el hiciera lo que quisiera, ya no tenía sentido alguna seguir luchando, en su mente solo quería que todo acabara pronto.
El profesor Tulio quedo boquiabierto, desde su posición veía el apretado y rosadito puntito anal en toda majestuosidad, casi con cariño apunto la punta de su gordinflona verga a la entrada de este, se afianzo con ambas manos de las firmes caderas de Cielo Riveros , y concentrándose en la breve cintura de la muchacha, empujo su verga con decisión, perforando todo lo que se interpusiera por su camino…
Cielo Riveros apretó fuertemente sus mandíbulas y dientes cuando sintió de cómo le enterraban por tercera vez en la noche una verga por el culo…
--Ohhhh…Ayyyyyyyy!! Ayyyyyyyyyyyyy!! Diossss! Diosssss!! Sáquela que me dueleeee!! Es muy gorda su cosaaaa!!!, exclamaba la chamaca con sus ojos abiertos como platos, aun así no dejaba de abrirse con fuerzas las nalgas…
--Ahhhhh!!! Eres una muy rica putita sabes!… Tu culo es calientito y exquisito mi amorrrrrr!!!, le decía el vejete con sus ojos cerrados, a la misma vez que se lo dejaba enterrado por completo y le mandaba tres solidas apuntaladas para que ella sintiera a cabalidad que se lo tenía enterrado por completo.
--Suéltemeee!…No se muevaaa!!… sáquelo viejo asqueroso!!!… basta que me duele muchoooo!!!, me dueleeeee!!!!, ayyyyyyy!!!!!
El vejete haciendo caso omiso a lo que demandaba la adolorida Cielo Riveros , no se aguantó las tremendas ganas de nalguearla, el orto de la colegiala se contraía y le apretaba exquisitamente la verga como si esta realmente quisiera succionársela por el culo…
--Plafff! Plaffff!! Plafffff!!! Plaffffff!!!!, retumbaban en la habitación las fieras nalgadas y palmetazos que el vejete le asestaba en sus carnes, a la vez que comenzaba a meter y sacar con fuerzas, las chichotas duras y firmes se mecían rápida y circularmente al mismo ritmo en que ensartaban a su dueña, los movimientos culiatorios eran cada vez más acelerados, Cielo Riveros luchaba mentalmente con su cuerpo, no quería gemir, pero los escalofríos se venían uno tras otro desde que sintió la vergota posarse en la entrada de su ano, ahora ya casi sin fuerzas le rogaba que por favor la soltara,
--Por fa…vorrr…donnn…Tu…liooooo…ya…no…me…lo…hagaaaaa…
--Jajajaja!! Claro que te lo voy a seguir haciendo pendejaaaa…estoy casi seguro que ya te estas calentandooo…tomaaaaaa!!!, le decía a la vez que se dejaba caer hacia adelante y se lo comenzaba a meter y sacar en forma más rápida, Cielo Riveros solo murmuraba que ya no más, a pesar de tener la sensación de que le estaban despedazando brutalmente el trasero, no podía dejar de sentir muy rico,
--Nooooo…ya no masssss por fa…vorrrr!, gemía empujando inconscientemente el culo hacia atrás para que la perforación fuese aún más profunda de lo que ya era.
Pero el vejete no bajaba las revoluciones, apretaba su miembro contra aquel glorioso y apretadísimo esfínter, hasta que por fin la hizo pegar un grito terrible de placer y dolor al mismo tiempo, al viejo ni le importaba que la Claudia se fuese a despertar con el escándalo que él y Cielo Riveros tenían en la habitación de sus padres,
--Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!, Ufffffffff!!! Ohhhhhh!!! Ohhhhh!!, los gritos poco a poco se fueron transformando en exquisitos gemidos de placer, --Mmmmmmm! Mmmmmmmm!! Mmmmmmmmmmm!!, ya suspiraba casi desesperada de placer la tierna chamaca,
Ambos respiraban agitadamente, el ano y coño de Cielo Riveros estaban humedecidos, su cuerpo se encabritaba y estimulaba al máximo, escuchaba gruñir al viejo con cara de sapo como si este fuese un toro embravecido, sintió como ahora la tironeaba desde su cabello y le jaloneaba la cabeza hacía atrás, para decirle cosas vulgares producto de su sádica calentura,
--Culeas muy rico cerda de mierdaaa!, eres una autentica putaaaa!! --Dime quien te rompe el culo mas rico, yo o el pinche cojo de la gran puta!!?...
Cielo Riveros a quien ya casi no le quedaban fuerzas para resistirse a nada de lo que le pidiera el vejete, se olvidó de todo, ya ni siquiera le importaba que se la estaban violando, solo quería gozar y que su profe la gozara todo lo que él quisiera…
--Responde perra inmunda quien te parte el orto más rico yo o el cojo Juannn!!, Plaffffff, retumbo la fiera nalgada que le asesto en el culo para que reaccionara…
--Us…teddddd!!
--Yo que pendejaaaa, quiero escuchar la frase completaaa, el viejo profesor con extrañas fuerzas para un hombre de su edad, no paraba de meter y sacar verga,
--Usteddd …me parte el culo…. más rico que don Juannnnn!!!, le soltó la estudiante en forma clara y categórica,
--Jajajaja!…así me gusta putitaaaa!!…ya estas caliente verdad zorritaaaa?, el viejo al ver que la hermosa colegiala no le contestaba, siguió presionándola, --Contesta mierdaaaa o quieres que te mate a golpes por desobedienteee!!!
Cielo Riveros estaba muy caliente, como pudo le contesto al macho que en estos momentos la perforaba tan exquisitamente…
--Siiii papi! Estoy…. Muy…. calienteeeee!! Ohhhhhh ri… cooooooo!!
--Jajajaja te voy a seguir partiendo el culo hasta que te desmayes de placer putita, jajajaja!!!
--Siiiiiiii Tu…lio!! mi amorrrr!!! sígueme culiando ri…coooooooo!!!!!
La tierna Cielo Riveros ya estaba perdida, en estos momentos su calentura sobrepasaba todos los límites permitidos, en aquel estado estaba dispuesta a hacer cualquier cosa que el vejete le pidiera.
--Ahora quiero hacértelo por la zorra pendejaaa, lo quieres?
Cielo Riveros con una autentica sonrisa de viciosa volteo a mirar al viejo que le estaba pidiendo la parte por su vagina, ella con sus ojos verdes semi cerrados producto de la calentura le asintió, el profesor Tulio muy emocionado por lo que ahora se le venía lentamente se la fue sacando, Cielo Riveros se puso de espaldas y abrió sus muslos ofreciéndole sin ningún tipo de impedimento lo que él le estaba solicitando, el vejete se echó sobre su cuerpo para luego juntar su cara con la de ella para comenzar a besarla apasionadamente, metió su lengua en la boca de la entregada colegiala, ella por su parte como guiada por instinto también abrió su boca lo que más pudo, hasta que ambas lenguas se rosaron y se enredaron en un intercambio de saliva constante.
La cama ya estaba hedionda a sudor, el vejete comenzó a bajar su cara de sapo por todo el despampanante cuerpazo de una de sus más brillantes y bellas alumnas, lamio y chupo toda la carne que encontró a su paso hasta que llego a la región de su pelvis coronada con pequeñas cantidades de suaves pelitos encrespados, acarició su vagina y ella con sus ojitos puestos en la fea cara de su profesor y en señal de verdadero agradecimiento le abrió las piernas lo que más pudo, lo vio meter su cara y legua justo en su preciosa entrada de amor.
Cielo Riveros estaba muy excitada por todo lo que le estaban haciendo, la lengua del vejete bailaba resbalosamente al interior de su ranura intima, veía como el degenerado profesor Tulio le sorbía todos sus jugos vaginales, se la chupaba y se la succionaba, literalmente le estaba comiendo la zorra, vio cuando este con dos de sus gordos dedos le abrió su panochita para luego volver a meter su lengua lo más profundo que pudo, chupando y comiéndose todo lo que manaba desde su interior, para Cielo Riveros aquello era el mismísimo cielo, era tan rico lo que estaba sintiendo que cerro sus ojos y se relajó abriéndose aún más de piernas, nunca en su vida había sentido tan exquisito.
No supo en qué momento se vinieron los corrientazos de placer en donde la joven perdió total compostura, como pudo se inclinó hacia adelante y lo agarro por los cabellos y comenzó a mover su vagina como si ella misma se estuviera culiando la boca del vejete, le punteaba ondulatoriamente, en eso comenzó a gritar,
--Ahora profeeee!!…si, si…asiiii!! Asiiiii!!! Continúe por favorrr!! …siga comiéndomela que me voy a venirrrrr por la zorraaa!!!… Mmmmmmm….que ricooooo!!!… ayyyyyy!!… que ricooooo profersorcitooooo!!!.
Cielo Riveros se retorcía de calentura, sintiendo y gozando todo el placer que le regalaba su vagina al estar prácticamente pegada a la boca de su profesor, hacia movimientos pélvicos de atrás y hacia adelante, combinándolos con exquisitos meneos ondulatorios, hasta que lanzando un terrorífico grito de placer y excitación le ponía en conocimiento a su macho que ella estaba en la cúspide de un glorioso orgasmo,
--Siiiiiiiiiiiiiiii!!!!! Me vengoooo don Tuliooooooo!!!!! Ricoooooooo mi vidaaaa!!!!! Me estoy corriendooooo en tu bocaaaa!!!! Comemelaaaa!!!!… comemelaaaaa!!!! Le gritaba y pedía sin dejar de apuntalarle su panocha en plena boca abierta del feliz vejete, a la vez que con sus bellas piernas le atenazaba la cabeza empujándosela más firmemente hacia su jugosa y febril vagina.
--Ves cómo te gustó… escuincla de Mierda!!!, le dijo el viejo con cara de sapo una vez que se pudo separar de aquella exquisita hendidura, --Ahora te voy a culiar por la zorra ya verás…
La colegiala que aún estaba en estado de extrema calentura le dio su autorización,
--Si… la… quiero… toda…. adentro, le dijo sin saber lo que estaba diciendo, con sus ojos lánguidos y mirando hacia un lado de la habitación.
Cielo Riveros se abrió de piernas nuevamente para que su profesor de una buena vez se la metiera y la hiciera su mujer, fue ella misma quien ahora se abría su apretada vagina con dos de sus dedos para que su macho llegara y simplemente se la encajara hacia su interior, esto fue mucho para el degenerado y aprovechador profesor, con solo tener la visión de la dulce Cielo Riveros abriéndose y dándole luz verde a su verga para que se paseara por donde él lo quisiera lo llevaron al placer anticipado,
--Ohhhhh putitaaaaa me corroooooo!! no voy alcanzar a meterteloooo!!!, el viejo como pudo se abalanzo hacia la cara de la expectante jovencita, ella viendo que en cualquier momento este dispararía sus lecherazos, lo espero sin saber qué hacer, el viejo como pudo se instaló a horcajadas sobre sus tetas tomando y apretando su hermosa cara la obligo a que abriera su boca, Cielo Riveros no podía respirar sintió entrar en su boca la gorda verga de don Tulio que una vez bien alojada en su cavidad oral este disparo tres sendos y gruesos borbotones de semen caliente y espeso, seguidos por otros cuatro de igual intensidad y potencia, la corrida en su boca fue abundante, la colegiala aguanto la respiración lo mejor que podía, sentía como la verga de su maestro escupía semen al interior de su garganta y paladar cuantiosas cantidades de aquel exquisito liquido espeso y caliente que una vez ya había bebido en el interior de la oficina de su profe, pero ahora sentía unas tremendas ganas de bebérselo todo, por lo que sin pensarlo dos veces a medida que esta prolífica esencia masculina salía a raudales de la verga ella lo iba tragando, y aprovechaba de chupársela intentando succionarle hasta la última gota de semen que el vejete poseyera al interior de sus peludas bolas.
Cielo Riveros se había tragado una gran cantidad de espermios que le había regalado el maestro Tulio.
El viejo cayó desplomado al lado del curvilíneo y sudado cuerpo desnudo de la tierna colegiala, ella se mantenía con sus ojos vidriosos, sus curvas aún estaban temblorosas por la tremenda excitación a las que habían estado expuestas, poco a poco se fue serenando, hasta que los fuertes ronquidos del hombre al cual le había bebido una gran cantidad de semen, la sacaron de su estado de calentura, se volvió a mirarlo, ahí estaba el miserable y aprovechador vejete que por segunda vez se había beneficiado con su cuerpo, los remordimientos y el sentimiento de culpa se apoderaron de su mente, --Pero que barbaridad era la que acababa de hacer?, se preguntó de pronto, lentamente se levantó de la cama y salió de aquella habitación, con sus hermoso ojitos verdes llenos de lágrimas fue por el vestido que le había prestado su amiga y se lo puso, consulto la hora ya eran las 09.00 de la mañana.
Una vez que se hubo arreglado un poco en el baño se dispuso a irse para su casa, desde la sala escuchaba los fuertes ronquidos del profesor, quiso ir a despedirse de su amiga, intentaba no hacer ruidos, y cuando abrió la puerta de la habitación la pobre chamaca casi se desmaya de la impresión, vio a Claudia tirada en su cama desnuda con su dorado cabello rubio totalmente alborotado, mantenía sus bellas piernas bien abiertas, una de sus manos la movía aceleradamente en su vagina haciendo frenéticos círculos, y con la otra mano se apretaba alternadamente las tetas, escucho claramente como su rubia amiga murmuraba con su cejas fruncidas en señal de concentración en lo que estaba haciendo:
--Asiii…asiiii…profesor Tuliooo!!… metamelaa!! Métamelaaaa!!! más adentrooo!!!… más adentroooo!!!
Cielo Riveros se quedó mirando como embobada el desnudo cuerpo excitado de su amiga, sus bellos ojos verdes la recorrieron curva por curva, inconscientemente junto sus piernas lo que más pudo, sintió que su cosita sin darle previo aviso le soltaba una extraña cantidad de agüita calientita que corrió por sus muslos y que la hicieron sentir muy rico, le estaban dando ganas de….
Cielo Riveros salió casi corriendo espantada de la casa de Claudia y muy asustada por lo que su cuerpo le había hecho sentir en el momento que vio a su amiga masturbándose, se preguntaba que como era posible que su cuerpo le hiciera sentir eso después de todas las atrocidades que le habían ocurrido, y más encima a costillas de Claudia que era su gran y mejor amiga, esto está mal… muy mal, se iba diciendo.
Ya en el bus y en camino a la seguridad de su casa no podía dejar de pensar en todo lo sucedido en la noche anterior, se maldecía a ella misma por haberse entregado al más feo y degenerado de sus profesores, ahora con qué cara podría llegar el día lunes al colegio?, y con qué cara podría ver a su madre que seguramente a estas horas ya debía estarla esperando, sentía asco por lo que había hecho, en que había estado pensando cuando le dio por beberse el semen de tan asqueroso sujeto, y Claudia desnuda y masturbándose, que hermosa la había visto…no! en eso no iba pensar!!, se dijo terminantemente.
Recordó también su anterior violación, por nada del mundo don Pedro se tenía que enterar de lo acontecido en la casa de su amiga, ya que este se podía enojar con ella, pensó que tal vez ni la llamaría como le había prometido, y si la llamaba bastaría con no contarle nada de lo sucedido, con esto último la pobre se tranquilizó un poco más, de pronto cayo en cuenta que porque estaba más preocupada de lo que podría pensar don Pedro, si ese viejo caliente también se había aprovechado de ella, su preocupación debía de centrarse en Rodrigo, era a el a quien ella amaba con todas las fuerzas de su corazón, por lo tanto se sacó la imagen de don Pedro y prefirió pensar en Rodrigo, el si era bueno y comprensivo con ella.
Al ingresar a su casa intento hacer el menor ruido posible, pero para su tranquilidad encontró una nota de su amada madre en la que le decía que tuvo que irse a atender una urgencia en el hospital, por fin pudo descansar, de seguro que su madre ya no llegaría hasta el próximo fin de semana, a duras penas aseguro la puerta con el pasador de madera que había instalado don Benito.
Se dio una relajante ducha, a medida que las refrescantes cantidades de agua recorrían y lavaban su mancillado cuerpo, Cielo Riveros recordó las escenas más escabrosas de la noche anterior, de cuando don Pedro con sus amigos la vieron desnuda en la feria, de cómo el viejo mecánico la enculo delante de los otros viejos, su desvirgamiento adentro de un sucio taller mecánico, y para rematarla la cogidota que le había pegado su profe por el culo estando él bajo el efecto de las drogas, ni que decir de la abundante cantidad des espermios que se había comido solo hace un par de horas, la joven colegiala lentamente se fue agachando en la ducha para ponerse a llorar desconsoladamente acurrucada en una esquina de la bañera, mientras el agua de la ducha le limpiaba su curvilíneo cuerpo de todo lo malo que le había ocurrido en esas últimas 12 horas de su vida.
FIN.

escrito el
2024-07-08
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