Viejitos picarones

Hola soy Débora tengo 25 años, mido 1,67 de altura ,mis tallas son 95,63,95 piel blanca, ojos oscuros y cabello negro...
Actualmente trabajo cuidando ancianos en casas particulares... Cierta vez la familia de un anciano me pidió que cuidara del abuelo por 15 días y como me pagarían bien, acepté; la cosa es que yo ya trabajaba con ellos hace muchos años y me querían como a una hija... Llegó el momento de sus vacaciones y toda la familia se fueron de viaje, cómo a las seis de la tarde luego de su merienda le tocó su rica ducha al abuelo, entramos al baño y lo senté en la bañera, yo tenía una remera blanca y una pollerita a cuadrille muy cortita, el abuelo un calzoncillo nada más, con la bañera ya con espuma y el calor del baño cerrado comencé a sudar un poco, noté que el abuelo me miraba los pechos sin decir una palabra y me puse colorada, traté de seguir bañandolo y refregando su espalda sus brazos su pecho y sin darme cuentas ya se me avía mojado la remera, sentía sus ojos pegados a mis tetas pero no me importaba en ese momento pensaba que era un abuelo y que solo tenía curiosidad, derrepente se me cae la esponja entre sus piernas y al tratar de agarrarla me sorprendió ver qué el tímido anciano estaba al palo, le pedí disculpas por tocarlo y el simplemente sonrió, me dijo: tranquila solo es un momento agradable de su baño y yo era quien debería perdonarlo, sonreí para quebrar el hielo y continúe su baño...
Luego lo paré y entonces vi por primera vez el falo bien parado del anciano, mi primera experiencia bañando y secando a una persona que para mí era como un abuelo, lo mire a los ojos y calladita le puse la salida de baño, lo acompañé a su habitacion y lo abrigue, SERCA de las nueve de la noche cenamos y nos acostamos... Casi no pegue el ojo en toda la noche pensando en el tamaño del falo del abuelo, me causaba una sensación de calentura ver a un hombre que hace años no toca a una mujer y eso me estaba calentando... Al día siguiente pensé en dar un paso más y antes de sentarlo en la bañera lo desnudé y le dije que lo bañaría por completo como para entrar un poco más en confianza, el acepto... Y comencé a pasar la esponja por todo su cuerpo, al llegar a sus piernas rozo mi brazo por su miembro y el ya estaba otra vez con su verga bien dura, lo miro a su rostro y el solo cerro sus ojitos y yo comencé a frotarlo desde sus bolas hasta la punta de su pene, se me pasaban mil cosas por mi cabeza y al sentir que el suspiraba no aguanté las ganas y se lo agarré con mi mano en poco tiempo yo lo estaba pajeando sin darme cuenta, ese pedazo de carne estaba más caliente que el agua, dura y grande me sorprendió su tamaño, cuando lo vuelvo a mirar veo que el me está mirando y su sonrisa pícara me devuelve a la realidad, entonces tomo aire y lo levanto para secarlo y acompañarlo a su cuarto para luego llevarle su cena... A la media noche yo estaba pajeandome cuando me pongo a pensar, que estoy haciendo..? Me puse una remera larga y me dirijo a su cuarto, al entrar lo veo que estaba leyendo un libro, le pregunto si quería compañía y el solo asintió con una sonrisa, me meti a su cama y me recosté sobre su pecho,el continuaba leyendo su libro, yo estaba muy caliente y comencé a acariciar sus muslos y a tocar y jugar con sus bolas todavía con aroma a jabón, el solo se sonreía,jugando como una nena fui tocando su pedazo y note que punzaba con cada roze de mis dedos, subía y bajaba por todo su tronco y cada vez se ponía más duro, entonces lo agarro y comienzo a pajearlo, me preguntó: te gusta..? Si, mucho, le respondí... Puedo besarla...? Pregunté; Claro que sí pequeña, levanté la sábana y me sambulli por completo entre sus piernas, jamás en mi vida chupé una pija tan rica como la de este anciano y cuando menos me lo esperaba me dijo, la quieres adentro, anda as lo que quieras antes que te acabe en tu boquita rica, yo me puse a mil y me puse en cuclillas sobre ese mástil, la cabeza de su verga era tan grande que con mi conchita estando dilatada aún así costaba entrar, me llenaba por completo y comenzé a delirar con ese tremendo pedazo de carne caliente tratando de abrirme y llegar a mis entrañas, no podía creer que un anciano me tenía como loca por su pija, ya estaba metida hasta la mitad y yo la sentía en la garganta, este viejo me estaba dando el orgasmo de mi vida sin hacer ningún movimiento, era un superdotado de nacimiento mi adorable viejito, yo gritaba por dolor y por goze que hermosa pija le gritaba y el me sorprendió diciéndome, te la vas a enterrar toda...? Mira que no vas a aguantar, claro que puedo conteste, me sentí desafiada y me senté de solo un empujón, grité como una perra y con lágrimas en los ojos le digo, ahora te voy a cojer abuelo, me rompí la concha con tu verga,me volviste a desvirgar con tu pija enorme ahora vas a ver, me sentía la puta más puta que cualquier puta en el universo, gritaba gemía, lloraba de tanto placer estaba teniendo varios orgasmos seguidos y el viejo me aguantaba como un corcel era todo un caballo en pleno coito y yo su yegua cabalgando sin parar, luego de un rato comienzo a moverme más lento y noto que su pija se estaba poniendo más grande y sentía en mis entrañas como se iba inchando cada vez más y más, eso me puso tan puta que le dije, ahora soy tu puta hasta el día en que te mueras viejito de mi almaaaaa y entre gritos y suspiros veo su llegada de su leche calentita tres envestidas con fuerza y muy profundas bastaron para que me inundara de leche mi interior por completo y yo al mismo tiempo tenía un orgasmo descomunal...
Esa noche quedé dormida en su pecho eso sí, sin antes limpiarle su verga con mi boquita y tomar hasta la última gota de su semen...
Espero que les hayan gustado mi experiencia nueva...