Rompiéndole el culo a Cielo Riveros

por
género
hetero

Rompiéndole el culo a cielo riveros
cielo riveros era una chica simpática, de 1.65m, cabellos lacios y negro, ojos del mismo color, piel bronceada. De su cuerpo puedo decirles que era una versión a escala de jennifer lópez, su trasero no era tan exageradamente voluptuoso como el de j-lo, pero si muy apetecible. Encontré esta foto en internet, puede darles una idea de la apariencia y formas de cielo riveros y, a decir verdad esta niña tiene las nalgas un poco mas abultadas que las de cielo riveros.

Volviendo al relato, nosotros estudiábamos en la misma facultad, ella siempre estaba rodeada por chicos. A mi no me llamaba la atención unirme a su club de fans, me contentaba viéndola pasearse por la facultad con sus jeans apretados y mas de un pensamiento morboso cruzo por mi mente… y la de muchos.

Un amigo, javier, llego a ser su enamorado. Era un tipo divertido pero también mujeriego. Cielo riveros conocía su fama y aun así lo acepto, quizás pensaba que su curvilíneo cuerpo cambiarían su promiscuidad. Poco me importo, yo tenia enamorada, así que pensé: bien por javier, y que disfrute de ese jugoso trasero... Por cosas del destino, seria yo el primero en disfrutarlo...

Poco después coincidí con ella en un curso. Debíamos presentar informes casi todas las semanas. Yo no conocía a nadie en ese salón, creí que a cielo riveros le iría mejor, pero al final de la clase ella se me acerco y me pregunto si tenía compañero. No me hice ilusiones, pensé que me quería agrupar con algún amigo o amiga suya que estuviera solo.

- no, todavía no tengo compañero... Respondí sin mayor interés.

- bueno, yo tampoco... Te parece si lo hacemos juntos...

Tome sus palabras en doble sentido, me hubiera abalanzado para hacerlo ahí mismo, pero no se refería a eso. Cielo riveros se dio cuenta de cómo sonó su propuesta y antes de que yo dijera algo, repuso:

- me refiero al trabajo... No seas mal pensado... Dijo sonriendo, un poco sonrojada.

- si, me parece bien... Respondí devolviéndole la sonrisa.

Así nos fuimos haciendo amigos. íbamos a su casa o a la mía a hacer los informes y presentarlos casi a la hora de entrega.

Casi al final del ciclo, cielo riveros fue a mi casa a terminar un informe, creímos que nos tomaría tiempo, así que decidió quedarse. El trabajo no fue difícil, terminamos a las 2 de la madrugada. Pensé que se iría, hasta ofrecí llamarle un taxi, pero cielo riveros prefirió quedarse. Se habían escuchado casos de taxistas violadores últimamente, usaban un polvillo para adormecer a sus pasajeras y luego se deleitaban con ellas. Hoy agradezco que se quedara y maldigo mi torpeza por casi dejarla ir.

Nos quedamos conversando en mi cuarto, le ofrecí un refresco, pero...

- ¿no tendrás un vino?... Me pregunto con sonrisa coqueta.

Baje al primer piso, saque un par de botellas del mini-bar, cogí unas copas de la cocina, sin hacer ruido, porque mis padres dormían y no quería aguarme la fiesta.

Con el vino, la conversación fue más amena. Nunca hablamos de cosas personales pero esa noche hablamos hasta de sexo. Me hizo prometer que nunca le contaría a nadie lo que esa noche hablamos (después me haría prometer que no le contara a nadie lo que hicimos). Aunque un poco cohibida al principio, luego fue hablando sin complejos. Con el vino en la sangre y la conversación sexual, mi pene iba endureciendo, mas aun con cielo riveros y su redondo trasero hundiéndose en mi cama. Temí que fuera evidente lo tieso que tenia mi entrepierna.

Llego el momento de hablar de javier y como les iba en la cama. Con una copa más de vino y bajo otra promesa solemne de silencio de mi parte, me hablo de sus intimidades con él:

- bueno, si, es evidente que ya lo hemos hecho, varias veces... Me dijo sin tapujos.

! Maldito suertudo! , ¡llevan poco tiempo juntos y ya lo hacen como conejos!... Ella noto mi expresión:

- ¿por qué esa cara? ¿acaso no lo has hecho aun con tu enamorada?... Pregunto curiosa.

- si lo he hecho, solo que pasaron 5 meses antes de que fuéramos a la cama...

- ¿y por qué tanto?... Me dijo sonriendo.

- quería estar segura que yo estaba realmente interesado y que no buscaba solo placer.

- vaya, ¡se te habrán hinchado las pelotas en esos 5 meses!... Me dijo sonriendo

- jajaja, si, pero bueno, valió la pena, a pesar de que ella no tenia experiencia...

- ¿qué?, ¿no me digas que tu la desfloraste?...

- si, su cielo riveros siempre fue sobre protectora con ella...

- así que tu echaste a perder a esa pobre niña... Me dijo bromeando.

- jaja, puede decirse, prefiero decir que sus padres me la cuidaron bien...

- jajaja, pero, vamos, cuéntame mas de eso... Insistió curiosa.

- como dije, ella no tenia experiencia, pero la forma como se entrego, esa ternura, esa pasión... Pero bueno, hay cosas que aun no hacemos porque le da vergüenza...

- ¡sátiro! ¡mañoso!... Que cosas le querrás hacer a la pobre chica... Me dijo riendo.

- jajaja, nada malo, tu sabes, hay mas de un par de posiciones para hacerlo... Respondí.

Por primera vez hablaba tan abiertamente de sexo con una chica, a la que quería practicarle más de una posición. No me importaba que fuera enamorada de un amigo, ni tan amigo, compañero de joda puede decirse. Llegue al punto en que me olvide que yo tenia enamorada.

- tienes razón. Creo que javier no puede quejarse... Respondió, guiñándome el ojo.

- lo tienes satisfecho... Dije con cierta envidia.

- si, pero hay algo que todavía no... Cielo riveros titubeo, se arrepintió de lo que iba a decir.

- ¿qué es lo que todavía no?... Pregunte curioso.

- no, no es nada... Dijo sonrojándose por primera vez en la noche.

- vamos, mira que yo te he contado todo... Insistí.

- tienes razón, esta bien... Pero...

- si, por tercera vez te prometo que lo que digas no sale de aquí... Dije con tedio.

- por tu bien espero que sea así... Respondió, mostrándome un puño juguetonamente.

- pero vamos, cuéntame... ¿qué es lo que aun no hacen?...

- javier tiene cierto gusto por el sexo... Nuevamente cielo riveros titubeo.

- continua... Insistí.

- bueno... El quiere hacérmelo por atrás... Dijo con vergüenza, luego tomo mas vino.

- ¿sexo anal?... Pregunte incrédulo, porque creí que ya lo habrían hecho, viendo el inmenso trasero que ella tenía, cualquiera pensaría en metérselo por allí.

- si, sexo anal... Dijo cielo riveros mas suelta y agrego: nunca lo he hecho... ¿pensaste que si?...

- como estuviste de acuerdo en que hay más de una forma de hacerlo, creí que tú habías hecho eso... Respondí, imaginándome detrás de ella, perforándole su aun estrecho ano. Mi verga estaba mas dura que nunca, acomode mis piernas para disimular mi erección.

- pues no, aun no me he atrevido. Mis otras parejas también me lo pidieron, pero... Como que me dio miedo... No se que fijación tienen esos mañosos con mi pobre culito...

¿culito?, pero si tienes un ¡culaso!... Quise gritarle. Todos en la facultad fantaseaban con romperle el culo en una buena cogida, y ella no se daba cuenta que hasta los mas recatados profesores, al menos de reojo, la veían meneando su cola con su coqueto andar...

- ¿y por qué el miedo?... Pregunte volviendo a mis cabales.

- porque puede ser doloroso... Me gustaría complacerlo, el ha insistido mucho... Pero...

- ¿pero que?

- no se, javier es un poco tosco... Con decirte que la primera vez que lo hicimos me la metió toda de frente, ni siquiera espero que me mojara... Es un desesperado...

Quise reírme pero debía comprender a javier, tanto tiempo estuvo detrás de ella, que al tenerla no se aguanto y se la clavo lo más rápido que pudo, como para que no se le escape... No dije nada y cielo riveros continúo quejándose:

- me dolió, pero me hice la tonta... Imagínate si acepto que me la meta por ahí, me va a desagarrar mi pobre anito...

Oyendo lo que decía, mi verga estaba por explotar, la leche casi manchaba mi ropa interior.

- ni que javier la tuviera tan grande... Dije con sorna.

- bueno, no es tan grande, pero si la tiene gordita... Me dijo haciendo gestos con la mano para darme a entender de que tamaño era y que tan gorda la tenia.

- ah... Me limite a decir, quizás con una sonrisa burlona, porque me pareció que mi amigo no era tan aventajado como presumía. Ella noto mi expresión.

- ¿qué? ¿por qué ese gesto? ¿cómo es la tuya?... Me preguntó entre enfadada y curiosa.

Quise sacarla y mostrársela, total, estaba recontra dura... Pero me contuve y me limite a decir:

- quizás no sea tan gorda… pero si es mas larga...

- vaya, bien por tu enamorada, estará feliz... Me dijo sonriendo.

- no puede quejarse... Respondí con cierto orgullo.

- y dime... ¿tu ya le has practicado sexo anal?...

- no, todavía no. Como te digo aun se avergüenza de algunas cosas, pero poco a poco, es una tarea que aun tenemos pendiente...

- pero tú ya se lo has hecho a tus otras enamoradas...

- si, a un par. Tampoco querían al principio, por vergüenza, temor al dolor... Pero al final lo hicimos y una de ellas se volvió adicta y solo quería que lo hagamos por ahí.

- ¿tanto así?... Pregunto sorprendida y acalorada, al parecer el vino y la conversación no solo me afectaba a mi, podía decir que le comenzaba a picar su arrugado anillo.

- si, y la otra no se hizo mayores problemas después, aceptaba gustosa tener sexo anal...

- ¿en serio?... Y digamos ¿cómo harías para introducírsela a tu enamorada?... En una no se la vas a meter toda, como hace el salvaje de javier...

La veía preguntar con una curiosidad que iba mas allá del querer conocer, con una mano sobre el pecho, parecía que se estaba excitando. Sus ojos me miraban atenta.

- no pues, tiene que ser de a pocos... Hay que prepararla bien, sino le va a doler... Dije y bebí mas vino, ella se termino su copa y se sirvió mas.

- y ¿cómo iniciarías a una chica miedosa?... Como yo, por ejemplo... Dijo con interés.

A esas alturas creo que yo tampoco me diferenciaría mucho de javier, con el tremendo trasero de cielo riveros, quizás yo la perforaría en una y la cabalgaría salvajemente para exorcizar el recuerdo de todas las veces que mis ojos siguieron el vaivén de sus caderas.

- bueno... Dije conteniendo la saliva, ya que el solo pensar que yo podría inaugurar su culito se me hacia agua la boca, así que hable sin mayores preocupaciones: primero yo usaría algún gel que te ayudara a lubricar y dilatar tu anito... Te untaría el gel y pondría un poco en mis dedos... Después, mis dedos masajearía tu anito hasta que te relajes y poco a poco iría introduciéndote mi dedo meñique...

Ahora era evidente que yo no era el único excitado, la vi morderse los labios, su mano sobre su pecho se movía sigilosa pero con cierto nerviosismo.

- ¿si? ¿y que mas?... Pregunto con cierta ansiedad.

- dejaría mi dedo meñique adentro... Como para que te acostumbres a tenerlo dentro de ti... Luego lo sacaría y lo metería lentamente... Simulando el acto sexual...

Al mencionar esto me pareció ver como contraía sus muslos, como imaginándose que en realidad yo lo hacia y al parecer no le fue desagradable. Creo que hasta lo disfruto.

- ¿y para que harías eso?... Dijo conteniendo su nerviosismo y bebiendo mas vino.

- para ayudar a dilatar tu anito... Después cuando el meñique entre y salga sin mayor resistencia, lo sacaría e introduciría un dedo mas grande... Así uno por uno hasta que tu esfínter se acostumbre y no sufra cuando... Cuando finalmente le introduzca mi pene... Dije con voz suave, quería darle mayor efecto a mis palabras

y surtieron efecto, la vi retorcerse un poco, podría jurar que su conchita se había mojado.

- no te creo... Dijo ella intentando calmarse.

- ¿por qué?... Repuse saliendo un poco de mi excitación.

- aun así dolería...

- tal vez un poco, pero no demasiado...

- no... No te creo... Repitió con cierto nerviosismo, propio de su excitación.

- si no lo has intentado, ¿cómo sabes si te dolería o no?... Replique.

- bueno... No se... ¿acaso tienes una de esas cremas aquí?...

No lo podía creer, prácticamente me estaba pidiendo que le hiciera una demostración. Mi fantasía podría realizarse: ¡ser el primero en romper el, por muchos codiciado, culito de cielo riveros!

- si, tengo una en mi cajón... Repuse intentando serenarme.

- ¿qué estoy diciendo?... Dijo como arrepintiéndose, luego repuso... Y como, ¿cómo seria?, ya, bueno, digamos que a manera de prueba, dejo que hagas todo lo que has dicho, porque alguna vez tengo que hacerlo... Mira que si dices algo te mato... En fin, ¿cómo seria?... Mejor termina de explicarme... Dijo nerviosa.

Era obvio que cielo riveros estaba súper-excitada por lo que le describí. En este momento no podía dejarme ganar por mi ansiedad y abalanzarme sobre ella o espantarla de otra forma. Si quería disfrutar de su estrecho ano y tener su enorme culo entre mis manos, tenia que calmarme... Tenia que darle el puntillazo final para que ella cayera y no dudara en dejarme proceder...

- como tu anito estaría completamente lubricado y flexible, mi pene también untado con gel, se deslizaría sin mayor oposición, claro que lo metería de a pocos... Considerando que mi pene no es tan grueso, tu anito sufriría menos... A decir verdad, seria mejor que un pene delgado ayude a dilatar tu esfínter...

- si, si tienes razón... Javier la tiene gorda y si, si lo dejo a él... Me va romper toda, ese loco desesperado... Pero, ¿puedo?...

- dime...

- ¿puedo verla?... Muéstramela... No vaya a ser que yo acepte y resulte que tienes un pene mas grueso... Dijo con cierta excitación, era obvio que había descubierto mi erección y eso la había calentado mas aun.

Con nerviosismo me desabotone el pantalón, casi disparada salió la cabeza de mi pene, ella se encargo de sacar el resto.

- vaya, ¡si es más larga!, un poco más delgada, ¡pero no tanto!... Exclamo sorprendida.

Creí que se arrepentiría, maldije mi infortunio: será otra paja mas... Pensé... Pero no fue así, cielo riveros llego al punto en que no hay marcha atrás, su conchita debía estar empapada. Disimuladamente sobaba su entrepierna intentando acallar esa picazón que incrementaba en sus intimidades...

- no importa, tengo que saber como es, si no es ahora, nunca... Dijo como justificándose.

No creo que sienta gran remordimiento por serle infiel al aventurero de javier, que conociéndolo, le habría puesto los cuernos a cielo riveros más de una vez, buscando refugio en sus amigas cariñosas cada vez que cielo riveros le negaba su culito. Yo no me sentía tan culpable, después de que adiestrara el ano de cielo riveros, seria javier quien disfrutaría de todo el sexo anal que quisiera con ese enorme trasero. Al fin y al cabo el saldría ganador, así que digamos que le estaba haciendo un favor...

- ¿dónde esta la crema?... Pregunto con ansiedad

- ¿ah?, ¡oh!, si, si... Por acá la tengo…

con el pantalón que se me caía busque en mi mesa de noche. Tenia una provisión de crema para cuando desvirgara el culito de mi enamorada... Fugazmente pensé en ella, pero hombre y débil al fin, ante la posibilidad que se presenta una vez en la vida... No me iba hacer para atrás... Imagínense a j-lo en su dormitorio, desnuda, en la pose del perrito, pidiéndoles, casi rogándoles que se le metan por el culo... ¿uds. Se negarían?... Si dicen que si y no están mintiendo, los felicito... Por que yo no podría negarme...

Ella se paseaba nerviosa, mientras yo más nervioso aun buscaba el gel... Hasta que al fin lo encontré... Cielo riveros se dio cuenta, y sin tener que decirle nada se fue acomodando en mi cama:

- ay no se... ¿cómo me coloco?... Pregunto nerviosa.

- es mejor que te pongas en cuatro... Le dije tragando saliva.

Obedientemente se ubico como una perrita ansiosa, arrodillándose en la cama primero y luego inclinándose hacia delante hasta que su cabeza toco el colchón, sus codos apoyados en la cama cubrían su rostro. Sentiría un poco de vergüenza o tal vez no quería que su cara delatara su ansiedad... La observe por unos segundos, aunque su posición no era como la había imaginado porque su espalda formaba una joroba, aun así era una imagen digna de recordar.

Cielo riveros un poco impaciente no sabia si bajarse el pantalón deportivo o dejar que yo lo hiciera, su mano nerviosa hizo más de una vez el ademán de querer hacerlo, pero no se atrevía. Así que yo, lentamente fui descubriendo el objeto del deseo de muchos. Ante mi fue apareciendo un bronceado y carnoso trasero, de solo verlo casi se me sale toda la leche, mas aun observando la diminuta tanga negra que desaparecía entre sus abultadas nalgas... Me quede sin aliento.

Sin dar mayor pie a que cielo riveros dudara, decidí continuar, tome su tanguita y la fui bajando suavemente. Su piel se erizo, quizás por el frío o porque era la primera vez que alguien que no fuera su enamorado la veía así... Lo cierto es que, al bajar completamente su tanga note que estaba mojada. Al escudriñar un poco en sus intimidades, su lampiña conchita lucia empapada, sus labios vaginales parecían aguardar ansiosos que los penetraran... Algún día, pensé.

No quise distraerme, mis manos recorrieron sus redondas formas, ella se retraía un poco, así que continué haciéndolo hasta que la sentí menos tensa... Luego separe cuidadosamente sus abultadas nalgas para ver mejor su arrugado anillo, objeto del deseo de muchos universitarios y de cuanto macho la haya conocido u observado. Nuevamente ella endureció sus nalgas, quise darle un palmazo para que las relajara pero opte por acariciarlas y nuevamente surtió efecto...

- vamos chris... Apúrate... La escuche susurrar, quizás hablando para sus adentros, pero en el silencio de la noche pude escuchar su ruego.

Esparcí sobre su esfínter el frío gel, que hizo que su piel se pusiera como de gallina. Aun así no se hizo para atrás, se mantuvo firme, ansiosa esperando que mis dedos hicieran todo lo que dije...

- chris... Me llamo con voz apagada..

- ¿si?... Respondí temiendo su arrepentimiento.

- por favor... Que solo... Que solo sean los dedos... Ya sabes no quiero...

- entiendo...Dije con cierta resignación.

Cielo riveros estaba excitada pero consciente, no quería finiquitar su infidelidad. No me desanime, tenia esperanza de que mis caricias la hicieran cambiar de opinión. Al saber que aceptaba sus términos, cielo riveros se relajo mas, su espalda que antes formaba una joroba rígida, ahora se iba distendiendo... Y ya no ocultaba tanto la cabeza...

Mis dedos masajearon su arrugado esfínter y las zonas adyacentes, con movimientos circulares, luego a manera de espiral, de afuera hacia adentro, presionando suavemente al final, de tal forma que su ano se fuera haciendo a la idea de que mi dedo iba a penetrarla...

Cuando sentí que su estrecho anillo no oponía mayor resistencia, le unte más gel y embadurne mi dedo meñique. Luego mi dedo hizo el mismo recorrido en espiral un par de veces, solo que esta vez presionaba con más fuerza al final y note que su ano cedía fácilmente. Fue entonces que decidí profanar su pequeña cueva... Lentamente fue ingresando mi dedo hasta la uña...

- ahhhhh... La escuche exclamar, algo sorprendida pero a la vez excitada.

Cielo riveros se contrajo, apretando las nalgas y a su vez su esfínter presiono mi dedo... Fue un acto reflejo que poco a poco fue calmando, dejándome proseguir... Mi dedo hacia un corto trayecto de ida y vuelta, sin sacarlo, desde el comienzo hasta el final de la uña, un temblorcillo recorrió su cuerpo. Cuando su cuerpo cedió, mi dedo fue ingresando de a pocos, repitiendo la misma operación... Hasta que su ano se comió gustoso todo mi dedo meñique...

Se movía algo nerviosa, separo un poco las piernas, como para que sus carnosas nalgas se abrieran y dejaran que mi dedo ingresara sin dificultad. Su espalda por momentos se arqueaba dejándome observar su esplendoroso trasero en toda su dimensión... Cielo riveros aun no se atrevía a voltear para ver como desfloraba su hasta hace poco virginal ano.

Mi dedo meñique hacia un recorrido más largo, desde la mitad del dedo hasta el final, hasta donde su arrugado anillo me lo permitía. Al principio las incursiones eran lentas luego, a medida que su ano se hacía mas flexible, lo fui haciendo con mayor rapidez, simulando la penetración real del acto sexual... Y sentí que cielo riveros comenzaba a disfrutarlo...

Era momento de que otro dedo hiciera su incursión. Saque el meñique, observe el descontento que causo en su cuerpo que se había acostumbrado a aquel intruso. Unte el índice con gel y esparcí mas en su pequeño agujero. Mi dedo repitió las mismas maniobras... Y todas fueron bien aceptadas por el cada vez más dilatado y flexible ano de cielo riveros.

Cuando saque el índice, fue ella quien siguió su recorrido hacia atrás, para no dejarlo ir. Contuve su trasero con mi mano, así cielo riveros entendió que era el turno de un dedo más grande: el dedo medio. Aguardo ansiosa su ingreso. Lo fui introduciendo lentamente y ella misma hizo el recorrido hacia atrás... Insertándoselo mas...

- uhmmm.... Gimió nerviosa notando que el nuevo inquilino en su ano era más grande.

Podía decir que disfruto cuando mi dedo medio estuvo todo adentro, más aun cuando su recorrido simulando el acto sexual era más rápido. La veía mover su cabeza nerviosa... Tal vez mordiéndose los labios, evitando que algún gemido suyo la delatara por completo.

Cuando mi dedo medio fue pan comido para su goloso ano, decidí introducir dos dedos a la vez. La vi impaciente aguardando lo que seguía. No escuche ninguna queja por mi labor (sus ahogados gemidos y su profunda respiración me lo confirmaban) pero tampoco había ninguna palabra que dejara de lado aquel acuerdo de solo usar mis dedos en su adiestramiento anal...

Fui introduciendo el índice y el anular a la vez, su voluminoso trasero fue escapando, temeroso de esta nueva incursión... Sin embargo cuando los dos estuvieron dentro suyo, su huida acabo. Su cabeza se enterró nuevamente entre las sabanas, al fin pude ver su rostro, apoyado de lado sobre la cama, cubierto por sus negros cabellos, sus mejillas encendidas, acaloradas, en sus carnosos labios una mueca de dolor y placer, sus ojos entrecerrados lagrimeaban...

- ayyy... Uhmmm.... Ahhhh... La escuchaba quejarse, gemir, suspirar.

No solo yo hacia los movimientos de ingreso y salida, ella también se unía a mí accionar, moviendo su trasero, dejando que mis dedos le entraran hasta la raíz... Se levantaba, con sus manos apoyadas sobre la cama, sus dedos estrujaban las sabanas transmitiendo su dulce dolor y todo su placer, arqueaba la espalda, abría mas sus muslos... Me mostraba todos sus atributos.

Uhhh.... Ohhhh.... Gemía cielo riveros ahora, sin reprimirse.

Estaba enloqueciendo, veía su tremendo trasero ir y venir, su voz disfrutando de mis caricias, su cuerpo estremeciéndose... Pero no escuchaba nada que me permitiera clavármela de verdad, dejarme de esos inocentes juegos. Quise apurar la situación; saque mis dos dedos... Pasaron unos segundos, ella aguardaba en silencio....

- eso es todo por hoy... Le dije.

- ¿cómo?... Exclamo sorprendida.

Por primera vez volteo completamente y me vio. La observe desde atrás: cielo riveros en cuatro patas, su imponente trasero al aire, sus bien formados muslos, su pantalón remangado hasta la rodilla, igual que su tanga, su polito a la altura de sus senos... Su rostro excitado, sus cabellos mojados, sus coloradas mejillas y en sus ojos una expresión de ruego...

- que es suficiente por hoy... Replique.

- no... Vamos un poquito mas... Mira que falta un poco...

Llego a tomar una de mis manos, jalándola hacia su trasero, como para que reiniciara mi faena...

- vamos... Exclamo suplicante.

Al principio me contuve, luego cedí, deje que su propia mano me dirigiera hacia la raja de su trasero. Al verla así tan sumisa, dominada por mis caricias, disfrutando de aquello que hasta entonces le había negado a otros, incluso que se había negado a si misma por temor... Pensé: que diablos... No debe faltar mucho para que me pida lo que yo quiero.

Agudice la picazón en su ano, moviendo lentamente mis dedos dentro suyo, ella con desesperación comenzó a moverse hacia atrás, entonces respondí empujando hacia delante, mi mano rebotaba contra sus nalgas... Ella se estremecía...

- ay... Uhmmm.... Que ricoo.... No aguanto mass... Uhmmm... Gimoteaba.

- yo tampoco... Replique angustiado, incluso comencé a acariciar mi verga. Si no me permite penetrarla, al menos tendré una fenomenal paja con el espectáculo que me da.

Escucho mi exclamación y, sin dejar de moverse, volteo a verme, se sorprendió al ver desenvainada mi tiesa verga. Nuevamente volteo, quizás imaginaba que lo que le proporcionaba placer no eran mis dedos, sino mi pené... Esta idea habrá podido mas que su conciencia o que su voluntad... Fue entonces que finalmente el placer que sentía no le dejo mas remedio...

- uhmmm... Ya no puedo mass... Uhmmm... No puedo mass... Gemía desesperada... Métemela.... Vamos... Métemela...

- ¿qué?... ¿pero tu...?... Exclame incrédulo.

- olvida lo que te dije... Me recrimino cielo riveros e insistió en su pedido... Solo métemela... Por favor... Hazlo... Vamos... Métemela... Casi grito, loca de placer.

Me despoje como pude del pantalón, subí a la cama y arrodillado me ubique detrás de ella. Casi me da un infarto al verme ante semejante panorama: sus enormes caderas y sus redondas nalgas iban estrechándose a medida que llegaban a su cintura... Como para tomarle una foto.

- que esperas... Yaaa.... Hazloo... Por favooor... Memetelaaa... Me suplico cielo riveros.

Tome todo el gel que pude y se lo embadurne, me eche el restante, introducí mis dedos para hacerme espacio... Ella disfruto al tener nuevamente mis dedos expandiendo su ano.

- uf... Que bien... Que ricoo... Metemelo... Vamos...

Saque mis dedos y fui introduciendo la cabeza de mi pené, que ingreso sin mayor dificultad hasta la mitad, de ahí en adelante forcejee un poco... Con mi excitación no me di cuenta que no tenia que proceder tan bruscamente...

- auuu... Uhmmm... Espera... Uhmmm... Se quejo cielo riveros.

Entendiendo que sus traumas respecto al sexo anal podían volver, acaricie sus nalgas y su espalda para apaciguarla, luego procedí con mayor suavidad. Repetí el mismo ejercicio que realice con mis dedos... Y su ano fue cediendo... Más lentamente que antes, pero con mayores gestos de aprobación de su parte...

- ay... Ayyy... Si... Así... Despacito... Uhmmm...

Cuando mi pené iba por la mitad, cielo riveros volteo a verme; su rostro lucia excitado pero incrédulo, seguro no podía creer que se la estaban clavando por el ano y que lo estaba disfrutando... Su expresión me excito y tomándola de la cintura le empuje un cuarto más de verga.

- ahhhh.... Exclamo con la boca abierta, tragando aire y haciendo que su pecho creciera, en su rostro una expresión de sorpresa y reproche.

- lo siento... Lo haré mas despacio... Me excuse.

La vi apoyar un codo, cerrar el puño y morderse un dedo para evitar gritar, yo no me moví... Mas bien empecé a retroceder lentamente...

- auuu... No, no, esta bien... Continua... Ouuu... Repuso cielo riveros cuando recobro el aliento.

A pesar de que le dolía, quería seguir teniéndola adentro, perforándola por primera vez... Le hice caso y rehice mi camino... Ahora sus dedos arañaban las sabanas...

- ayyyy... Me estas rompiendo. .. Auchh... Se quejo.

Temí que se arrepintiera, le dije que no le iba a doler, pero su ano era muy estrecho, con semejantes nalgas no quedaba mucho espacio para su pequeño agujero. Comencé a acariciarla, se relajo, al menos su ano no estrechaba tanto mi pene, que ya me comenzaba a doler...

- sigueee... Aunque me partas... Termina... Me dijo con voz entrecortada.

- esta bien...

Inicie mis movimientos con cierta oposición de su esfínter. Unte más gel como pude. Su anito lucia rojo, pero poco a poco fue cediendo, con cada ida y vuelta de mis caderas, le iba introduciendo un poco más...

- no, no... Espera... Las escuchaba quejarse.

Sin embargo al poco rato, ella misma se contradecía pidiendo que continuara:

- esta bien... Dame más... Ufff... Vamos... Uhmmm... Ouuuu...

- ya casi... Ya casi entra toda... La animaba.

Cuando al fin pude empujarle mi verga hasta la raíz, ella se desmorono; sus codos y su cabeza presionando la cama, sus manos haciendo puños... Así ella soporto la ultima arremetida...

- ay... Caraj... Suaveee…

quiso huir, pero mantuve mis manos aferradas a su cintura, quería que sintiera toda mi verga dentro suyo, perforándole las entrañas... Que se acostumbrara a ser clavada...

- ayayaay... Sueltameee...

- esperaa... Que ya va a pasar...

- salvaje... No te diferencias mucho de javier... Me increpo.

- a diferencia de el... Yo te tengo clavada por el ano... Respondí con sorna.

- no por mucho... Exclamo con cierto enfado.

Intento salirse pero nuevamente le empuje mi verga hasta la raíz, sus abultadas nalgas chocaron contra mi ingle, el temblor que origino este choque en su carnoso trasero se propago por sus caderas, su columna se contrajo:

- ohhhh... Suspiro hinchando sus pulmones.

Intento huir y nuevamente me la clave. Durante unos segundos repetimos esa operación que paso de ser un forcejeo a un incipiente acto sexual. Cada shock eléctrico que le producía mi pené perforándola la hacían desistir de escapar. Su ano más elástico me permitía ingresar y salir con menor dificultad. Ahora ella no huía, sino empujaba su trasero hacia mi, cada vez con mas fuerza, y yo también arremetía contra cielo riveros... El dulce sonido del golpeteo de sus abultadas nalgas contra mi ingle fue uniéndose a sus gemidos que iban en aumento.

- uhmmmm.... Ahhhh.... La escuchaba gemir.

- ¿te gusta?... Me atreví a preguntar.

- siii... Me encanta... ¿cómo no hice esto antes?... Uhhh... Respondió súper excitada.

Mis manos en su estrecha cintura guiaban su voluminoso trasero contra mi ingle, veía desaparecer mi largo pene entre sus redondas nalgas. Los movimientos eran cada vez más rápidos y fuertes, el sudor nos invadía. Sus gemidos, mi respiración, sus nalgas chocando contra mi, la cama chirriando, todos estos sonidos inundaban armoniosamente mi cuarto...

- asiii, asii... Ay que reviento... Acábame....

- ya casi... Respondía, sintiendo que mi torrente de leche próximo a salir.

En un ultimo empujón, en que le enterré hasta el fono mi musculosa verga, ella se contrajo toda, su espalda arqueada a mas no poder, con sus dedos desgarrando mis sabanas, fue entonces que mi pene inundo por primera vez su pequeño agujero con semen hirviendo.

- ohhhh.... Fue su última exclamación antes de dejarse caer a un lado.

Su cuerpo disfruto por primera vez de un salvaje orgasmo proporcionado por el sexo anal. Cielo riveros, recostada de lado, respiraba forzosamente, entre la maraña de sudor y cabellos, su rostro encendido aun saboreaba todo el placer que le había proporcionado aquella experiencia.

Contemple maravillado sus entreabiertos muslos, por sus nalgas aun escurría mi blanquecino semen. Era para estar satisfecho, aquel monumento de mujer había sucumbido ante mí...

Cuando ella al fin abrió los ojos, me miro incrédula, no dando fe a lo sucedido... No creía que aquello que se negó a hacer durante tanto tiempo pudiera depararle semejante placer...

Me observo: con mi expresión satisfecha y mi pecho aun jadeante, con mi semi erecto pene que aun tenia algunos líquidos. En un ultimo arranque pasional, se arrastro entre mis sabanas hasta llegar a mi pene y mamarlo en agradecimiento por todo el placer que le había proporcionado.

Esa chica que más de uno ansió poseer, se convirtió en una especie de ninfomana debido al adiestramiento anal que le di. La chupaba con gran pasión, se desvivía por acariciarlo, lamerlo hasta limpiarlo completamente. Solo me atreví a acariciarle el cabello y observar su semidesnudo cuerpo. Finalmente se hizo a un lado...

- vaya... No puedo creer lo que hicimos... Dijo suspirando.

- yo tampoco...

Como volviendo en si, luego de un ataque de locura, se aparto un poco, cubriendo parte de su desnudez con mis sabanas... Volvió a su estado racional, ese en el que las culpas y arrepentimientos tienen lugar, donde mora la conciencia...

- júrame que no se lo vas a decir a nadie... Me dijo preocupada.

- esta bien... Respondí intentando calmarla.

- ¡júramelo!...

- lo juro... Le dije, y solo así vi que se tranquilizaba.

Hubo un incomodo silencio, no sabíamos que hacer o decir. Decidí dejarla unos momentos sola, hice un ademán de que iba a salir, no me dijo nada. Fui al baño, me limpie mis partes intimas, esperando que cielo riveros se calmase y que, al menos, al regresar, parte del bochorno se le hubiera pasado.
Regrese a mi habitación y encontré a cielo riveros quitándose la ropa, se inclino completamente de espaldas a mi, todo su enorme trasero lucia aun meloso por mi semen. Sus carnosas nalgas me daban un magnifico paisaje, tuve ganas de clavármela de nuevo, parecía una invitación... Pero note que quería recoger la sabana que estaba en el piso. Se cubrió con la sabana y se asusto al verme en la puerta, observándola... Quizás quiso reprocharme algo, pero solo llego a decir...

Creo que necesito una ducha... Dijo con timidez.

Era obvio, no iba a ir a la facultad con el perfume de mi esperma sobre su redondo trasero y sus bien formados muslos.

Claro... Dije y le di paso para que fuera a la ducha.

Intente alejar cualquier recuerdo de lo sucedido, porque me daban ganas de entrar a la ducha, aunque dudo que cielo riveros, ahora menos excitada, me dejara poner en practica esa idea. Poco después ella ingreso a mi habitación cubierta por mi bata...

No había otra cosa que ponerme, espero que no te importe... Me dijo avergonzada.

No te preocupes, te queda mejor a ti que a mi... Repuse.

Una tibia sonrisa suya me animo a pensar que las cosas podían volver a su cauce normal. Un incomodo silencio nuevamente reino entre nosotros. Entendí que quería un poco de espacio para cambiarse. La había visto desnuda y en una pose por demás sugerente, pero sin alcohol en la sangre y sin la picazón en sus partes intimas que antes tenia, seguramente se sentiría mas pudorosa. Así que salí so pretexto de prepararle el desayuno.

Después de desayunar llegamos a la universidad y presentamos nuestro informe, no sabíamos que teníamos que sustentarlo, así que no preparamos nada porque nos la pasamos envueltos en la iniciación anal de cielo riveros. Expusimos el trabajo como pudimos, imagínense que tan mal nos fue; después de beber mucho vino y poseer el trasero de cielo riveros, yo no podía concentrarme mucho y ella estaba igual de distraída que yo. El profesor nos puso una mala nota...

Al terminar la clase se desato la pelea; me echo la culpa de nuestro traspié académico, aunque nos iba bien en los otros informes, me hizo responsable si es que reprobaba... Yo sabia que su enojo no era tanto por el curso sino por la perforación que le hice a su enorme trasero... Intente calmarla, pero no logre mucho... Terminamos peleados, por suerte esa semana no había informe que presentar, aun así nos veríamos en clase. No tenia ganas de ofrecerle paz y ella tampoco parecía querer dármela...

Evito verme o saludarme, al igual que yo evite ver o hablar con javier. Algo de remordimiento tuve, me era incomodo saludarlo después de que me deleite con las nalgas de su enamorada...

¿como estas?... Escuche que me decían, al voltear note que era javier.

Ahí...Mas o menos... Repuse sin animo.

Cielo riveros me contó todo... Replico serio.

¡mierd...!, lo sabia, cielo riveros se lo confeso... Bueno hace tiempo que no me agarro a golpes con nadie, parece que hoy vuelvo al club de la pelea... Pensé, esperando el primer golpe del recientemente cornudo...

¿a si?... Respondí incrédulo.

Si... Dijo pensativo y agrego: no te preocupes, se lo fastidiosa que puede ser cielo riveros...

¿qué?... Pregunte sin entender.

Ya sabes, cuando la reprueban se pone insoportable... Pero ya se le pasara...

Ahhh... Exclame con cierto alivio.

Al parecer cielo riveros no le había contado la historia completa, porque sino se armaba la pelea del siglo en el patio de la facultad.

Por tu culpa tendré que volver a llamar a mi amiga... Te conté de esa que succiona vergas como toda una profesional, además tiene unas senos enormes... Me dijo burlonamente.

¿qué?¿con cielo riveros no te basta?... Le pregunte.

Bueno, a cielo riveros no le gusta practicarme sexo oral... Tu sabes algunas mujeres piensan que es denigrante... Tonterías suyas...

Lo mire extrañado, porque recordé la espectacular mamada que días antes me dio cielo riveros, no tuve que decirle nada, ella misma engullo mi verga con vehemencia... Al parecer también recibí las caricias de los labios de cielo riveros en mi verga antes que javier... Hasta ese punto llego la excitación de cielo riveros, se olvido de sus convicciones sobre el sexo oral, sucumbiendo ante el placer y la gratitud hacia el pene que le desfloro su ano...

Además, cuando cielo riveros se pone fastidiosa, prefiero buscarme a otra... Replicó javier, notando mi silencio e intentando justificar su infidelidad.

No le podía reprochar mucho porque yo mismo le fui infiel a mi enamorada, seducido por las curvas de cielo riveros. Javier se alejo, diciéndome que si quería podía darme el numero de su amiga.

Esa semana, al salir con mi enamorada, tuve que disimular la cara de culpabilidad. Ella me noto distraído, me excuse diciendo que tenia mucho trabajo en la universidad... Y me creyó. Caraj... ¿por que tanto remordimiento?, en toda mi vida es la primera vez que he sido infiel, y dudo que vuelva a repetirlo... Me dije, intentando acallar mi conciencia, pero no tardaría mucho en tropezar de nuevo con la misma piedra.

Termino la semana y nuevamente vi a cielo riveros en clase, otra vez teníamos que hacer un informe, seria el ultimo del ciclo... Ya no podíamos evitarnos. Quedamos de acuerdo en hacer el trabajo el sábado por la tarde, en la facultad. No mencione nada de ir a mi casa o la suya, no creo que hubiera aceptado... Además su trato conmigo era frío... Ella tampoco sospechaba que caería de nuevo en una infidelidad...

Nos encontramos en la sala de computo de la facultad. Cielo riveros vino con un pantalón blanco apretado, note el revuelo que causo en el pasillo, todos los hombres babearon al verla pasar. Después me daría cuenta que su pantalón no tenia bolsillos en la parte trasera, aunado al claro color, casi translucido del pantalón, uno prácticamente podía verle todo su jugoso trasero. Llegue a pensar que no traía ropa interior, luego descubriría que su diminuta tanga blanca se había perdido entre sus generosas nalgas.

Intente concentrarme en el trabajo, su trato indiferente no me daba lugar a otra cosa, sin embargo, por momentos soñaba despierto, recordaba lo sucedido dos semanas atrás o como la vi de espaldas minutos antes, con su sugerente pantalón blanco, que no dejaba mucho a la imaginación.

Llego la hora de cerrar la sala de computo y no habíamos terminado el informe. El tipo que administraba la sala nos conocía, así que nos dejo quedarnos unos minutos más. A pesar de eso no pudimos finalizar el trabajo. Al abandonar el centro de computo, nos dimos cuenta que la facultad estaba prácticamente desierta...

Debemos presentar el informe el lunes, solo nos queda el domingo... Le dije.

¿qué hacemos?... Pregunto secamente.

No se, vamos a tu casa... Sugerí.

No, un virus mato mi computadora y no la he arreglado... Me contesto de mala gana.

Entonces vamos a mi casa... Dije.

Eso te convendría... Me dijo con desconfianza.

¿quieres terminar el informe o no?... Pregunte con seriedad.

Pero tu quieres ir a tu casa a trabajar o a que... Me respondió con cierto enojo.

¿a que te refieres?... Conteste enfadado.

Ni creas que te vas a aprovechar de nuevo de...

No te hagas la inocente, que yo no soy el único culpable... Respondí fríamente.

No dijo nada, simplemente recibí una estruendosa bofetada que me dejo helado, no supe que hacer, estaba molesto pero no la iba a golpear. Pensé en otra cosa para desquitarme, la abrace con fuerza y la bese. Cielo riveros no reacciono, por unos instantes llegue a sentir que me correspondía, pero luego vino el forcejeo, me aparto bruscamente, lucia iracunda pero parecía haber disfrutado del beso que le robe, al menos eso creí hasta que me dio otra bofetada.

Idiota... Me grito con lo que me parecía una fingida furia o pudor.

Después, sin dar pie a una replica mía, ingreso presurosa al baño de damas que estaba a escasos metros de nosotros. Vacile unos segundos, pero con la rabia que tenia no iba a dejar las cosas así. Ingrese también al baño de damas.

La encontré frente al lavamanos, mirándose en el gran espejo del baño.

¿qué haces aquí?... Pregunto sorprendida.

Esto... Dije, y nuevamente la abrace y bese.

Hubo menos forcejeo que la primera vez, llegue a sentir su lengua, sus brazos parecían querer abrazar mi cuello, pero nuevamente me alejo y otra vez mi mejilla enrojeció por una bofetada.

Cuando voltee el rostro para verla, me miro de manera extraña, pensé que me daría otro golpe, pero me tomo del cuello y fue ella misma quien me beso, en un lujurioso pero extraño beso. Esta vez yo la aleje, ahora había pasión en el brillo de sus negros ojos. Su pecho henchido subía y bajaba por la adrenalina que esa situación generaba... Viendo su rostro ansioso y sus medianos melones ir y venir, me dije ¿por qué no?... Tome su blusa, y en un rápido movimiento la jale, rompiendo todos sus botones y dejando a mi vista sus senos... Me abalance sobre ellos jaloneando su brasier y engullendo sus pezones...

Ahhh... Gimió sorprendida.

Cielo riveros respiraba agitada, me acaricio el cabello, pero sus manos prefirieron buscar en mi pantalón, hice lo propio con el suyo. Ella tomo mi endurecida verga entre sus dedos y yo le bajaba como podía su apretado pantalón y la pequeña prenda que parecía ser su ropa interior. Mi pantalón cayo al suelo por su propio peso mientras cielo riveros no dejaba de pajear mi pene.

Deje de acariciar sus senos y la bese nuevamente, cuando me aparte, en sus ojos veía deseo... No dije nada, bruscamente hice que se volteara, que me diera la espalda. Cuando cielo riveros entendió lo que yo quería, no ofreció resistencia, solo se agarro de los bordes del lavamanos esperando que la sometiera.

De espaldas a mi, con su pantalón y su ropa interior apenas por debajo de su pubis, me hice espacio entre sus redondas formas, mi tiesa verga como dirigida se ubico a la entrada de su ano. Alce la vista y la vi por el espejo, una expresión de ansiedad se leía en su rostro.

Vamos... Susurro súper excitada.

Simplemente le fui hundiendo mi verga, que al principio no entro, pero fui empujando y ella a su vez inclinaba su espalda, haciendo que su trasero presionara contra mi pene, hasta que al fin logro entrar...

Ohhhhh.... Se quejo ella, mientras parecía temblar de placer.

En su boca abierta un gesto dulce de dolor. Repuesta del impacto inicial, cielo riveros siguió empujando hacia atrás, mientras yo apresaba su estrecha cintura y arremetía hacia delante. En este raro forcejeo le fui clavando centímetro a centímetro mi verga. Parecía que iba a desfallecer, pero seguía empujando su enorme trasero hacia mi, solo así acallaría ese cosquilleo anal que ahora tenia, que la dominaba, sabia todo el placer que aquello le podía deparar.

Los ojos de cielo riveros lagrimeaban, no sabia si de alegría por ser nuevamente atorada por el ano o de dolor porque esta vez no había crema que nos ayudase... Hasta que por fin la tuvo toda adentro, bajo la cabeza, parecía disfrutar teniendo todo mi pene dentro de su estrecho agujero, llenándola...

Uhmmm.... Ufff... Escuchaba su respiración entrecortada.

Sus manos se asían con fuerza al lavamanos, y las mías no soltaban su pequeña cintura... Cualquiera que entrara al baño en ese momento podía pensar que se trataba de una violación: yo presionándola contra el lavamanos y ella con su blusa desgarrada, su brasier roto, sus senos al aire, su pantalón bajado a medias, mis manos aferradas a su cintura y claro... Mi pene abriendo sus gordas nalgas...

Hasta que cielo riveros levanto el rostro y me vio por el espejo... Parecía poseída, tenia la misma expresión de locura pasional que le vi días atrás en mi cuarto...

¿qué esperas?... Fue lo que me reclamo a media voz.

No tuvo que decir mas, comencé a cabalgarla, dificultosamente y escuchando sus quejidos, yo reprimía los míos... A mi también me causaba un poco de dolor perforar su estrecho ano. Su esfínter apresaba mi pene, parecía no querer soltarlo. Paulatinamente las penetraciones fueron mas agradables, disfrutaba de la fricción de mi miembro contra su pequeño agujero... Ella también...

Uhhhh... Uhmmm... Ohhhh... La escuchaba gemir complacida

una de sus manos soltó el lavamanos y se dirigió a sus henchidos senos, ella misma se dedico a estrujarlos mientras soportaba mis embestidas contra su inflado trasero. Mi ingle rebotaba contra sus redondas nalgas produciendo armónico ruido que resonaba en todo el baño...

Cielo riveros se inclinaba, procurando que mi verga le entrara mejor, que sus nalgas dieran paso a penetraciones mas profundas. Su cabeza prácticamente apoyada de lado en el espejo, un codo contra la unión entre el lavamanos y la pared, mientras su mano libre no dejaba de acariciar sus senos que retumbaban con cada incursión de mi pene en su ahora ágil esfínter.

Ayyy... Debo estar loca... Uhmmm... Vocifero ella.

¿por qué?... Pregunte jadeante, sin dejar de moverme.

Uhmmm... Porque me gusta demasiado... Ohhh... Respondió, volteando parcialmente y mirándome directamente a los ojos.

Esto me excito mas, ahora mis arremetidas eran mas fuertes y rápidas. Ella volvió contra el espejo, soportando y disfrutando de mi vigor. El espejo se empaño con su sudor, con el aliento de sus gemidos que cada vez eran mas continuos..

Uhhh... Me vas a mataaar... Ahhhh.... Exclamaba ella, a punto de reventar de placer.

Tomaaa... Grite castigándole el ano con mayor vehemencia.

Poco después llene su ano con mi ardiente semen, el goce que esto origino se propago por todo sus ser, transformándolo en un prolongado orgasmo... Cielo riveros apoyo los codos en el lavamanos respirando dificultosamente. Yo no dejaba de presionar mi verga contra sus enormes nalgas, esperando que mi pene dejara de escupir lo que parecían litros y litros de esperma...

Me dedique tanto a observar sus reacciones, a través del espejo, que no me di mayor tiempo de contemplar su imponente trasero: con mi verga partiéndola en dos, sus carnosas nalgas arremangadas contra mi ingle, sus redondas formas terminaban armoniosamente en su estrecha cintura... Mi pene se fue deshinchando mientras yo admiraba sus curvilíneas formas...

Luego me aleje, cielo riveros seguía apoyada contra el lavamanos, reponiéndose de toda la agitación que le provoco su satisfactorio orgasmo... Yo retrocedí unos pasos y aprecie su gran culo bronceado, su pequeño y enrojecido ano destilando mi leche, manchando su pantalón... Ella volteo, me miro satisfecha y con su pantalón tal y como estaba se me acerco. No le importo que el piso estuviera sucio o que su pantalón fuera blanco... Simplemente se arrodillo y se trago mi semi erecta verga... Limpiando, lamiendo y relamiendo cada gota de semen...

Menos agitado, suspiraba complacido por las caricias que sus labios y su lengua le brindaban a mi también enrojecida verga...

Finalmente cielo riveros apoyo su cabeza en mi ingle, sus brazos rodeaban mis piernas, parecía cansada, después de la furiosa cogida que le di, supongo que debía comprenderla. Ella se lo busco con esas repetidas bofetadas... Me justifique, luego me dije: además ambos lo disfrutamos... Espero que no me eche la culpa por lo sucedido otra vez... Parece que leyó mis pensamientos:

ahora ¿que vamos a hacer?... Me pregunto a media voz desde su posición

no conteste, porque tampoco sabia la respuesta... Cielo riveros con cara de angustia me miro desde abajo, con sus rojizos labios aun melosos por mi leche.

No se.... Fue mi sincera respuesta.
Tras un silencio incomodo intente agregar algo, pero el sonido de unos pasos acercándose nos hizo darnos cuenta del lugar y la situación en que estábamos, mas aun de la forma en que nos veíamos…

¿qué hacemos?... Me pregunto asustada.

Por mi mente cruzo cerrar la puerta del baño, pero… ¡estábamos en el baño para profesoras!, generalmente ellas tenían una llave. El baño también era usado por el personal administrativo, cuyas oficinas estaban cerca. Diablos, ¿nos habrán escuchado?..

Pues hay que escondernos… dije presuroso indicándole una de las cabinas de los baños.

En cualquier otro baño hubiera sido una situación bochornosa, una travesura tal vez sin mayor consecuencia, pero en los claustros de la universidad y dependiendo de quien ingresase a ese baño de damas, podría significarnos una expulsión segura.

Los pasos se oían cada vez mas cerca. Con el pantalón apenas sobre las rodillas, me apresure a ingresar a una de esas cabinas, cielo riveros en cambio, presa del miedo, intentaba arreglarse… regrese donde ella y la jale… con sus senos al aire y su apretado pantalón por debajo del pubis.

Ya dentro de la cabina me senté en uno de los sanitarios y cielo riveros se sentó en mis rodillas, de espaldas a mí. Con lo estrecho del lugar, las desnudas nalgas de cielo riveros estaban prácticamente sobre mi ingle, también desnuda. Una tentación a la que no preste mucha atención en ese momento, por lo peligroso de la situación.

Para nuestra mala suerte el cerrojo de la puerta estaba roto. No había tiempo para ir a otra cabina, la puerta exterior del baño hacia un chirrido que nos indicaba que alguien iba a entrar. Cielo riveros se inclino y con las 2 manos empujo la puerta de nuestra cabina para mantenerla cerrada. En esta acción sus nalgas se abrieron y la posición que adoptaba era por demás excitante, provocadora.

Mi verga parecía tener vida propia, sin pensar en la delicada de nuestra situación, simplemente empezó a endurecer… cielo riveros lo noto, mejor dicho lo sintió, un temblorcillo la recorrió su espalda, soltó un poco la puerta, luego se recompuso y la presiono nuevamente.

Ni si quiera se te ocurra… me reprocho en voz baja, volteando a medias, quiso decir mas pero...

El sonido de unos tacones dentro del baño nos indico que la intrusa ya estaba dentro. Primero el sonido del lavadero… ojala que solo quiera lavarse las manos, pensé, mientras instintivamente mi verga se había situado en sus labios vaginales, rozándolos. Cielo riveros bajo la cabeza, tal vez maldiciendo mi inoportuna excitación o tan solo controlando la suya.

Luego de unos segundos su conchita comenzó a mojarse, humedeciendo también mi pene. En esos momentos nuestra inoportuna visita ingresaba al sanitario de a lado.

No podía evitarlo, lo prohibido de la situación, las carnosas nalgas de cielo riveros, su estrecha cintura, su pubis empapado… no aguante más y sin pensarlo la tome de la cintura y l jale suavemente más hacia mí. Quería sentir mejor su conchita.

Cielo riveros volteo su cabeza a medias, pude ver su expresión sorpresa. Otro temblorcillo la recorrió al sentir que ahora mi verga se hundía parcialmente a lo largo de su humedecida vagina. Quizás hicimos algo de ruido, pero creo que el ruido que generaba la huésped de al lado logro solapar el nuestro.

No había penetrado la vagina de cielo riveros, este lugar se me había hecho improbable, debido a su reciente interés anal. Además su conchita parecía solamente destinada a su enamorado javier. Al recordarlo me moleste... ¿por que he de limitarme solo a su ano?…

escuche que la intrusa bajaba la cadena y aproveche para levantar las nalgas de cielo riveros y acomodar mi pene a la entrada de su vagina. Al inicio ella forcejeo un poco, pero con mi verga ya en posición, con la cabecita de mi pene parcialmente dentro suyo, propiciándole un rico cosquilleo, ella se detuvo, luego simplemente fue descendiendo, insertándose centímetro a centímetro mi tiesa verga. Sentía el cuerpo de cielo riveros estremecerse.

Al lado, nuestra compañera ocasional había terminado sus necesidades y se disponía a salir. Escuche el ruido de su puerta abriéndose, mientras sentía los labios vaginales de cielo riveros completamente abiertos, estrechando mi pene con toda su humedad y calidez.

Ella ahogo un gemido en su garganta, pero presa de su excitación procedió a menear su esplendoroso rabo por toda mi ingle, sentía como mi pene revolvía su intimidad y la llenaba de placer…

uhmmm… esta vez si se le escapo un dulce y profundo gemido.

Yo también quise soltar un uff… estaba en las nubes, se sentía tan bien tenerla así. Solo que reaccione, recordé nuestra situación e instintivamente me puse rígido. Cielo riveros se dio cuenta de lo inoportuno de su gemido. Solo quedaba rogar que nuestra visitante no lo hubiese notado… pero…

¿hay alguien ahí?.. Pregunto una voz, parecía la secretaria del decano.

Por la gran put… ya nos jodimos, pensé. Cielo riveros se puso helada, su cuerpo se contrajo, mi pene sufrió las consecuencia des este espasmo. Ella casi suelta la puerta. La empuje para que no sucediera y nuevamente hicimos ruido.

¿hay alguien ahí? Contesten... Dijo mas seria, escuche sus tacones acercarse.

Ninguna respuesta solo silencio, sentía a cielo riveros lloriquear desde su posición, sabia que no respondería nada…así que…

si, si... Disculpe es que tengo un malestar… dije con la voz mas femenina que mis cuerdas bucales me permitieron.

Su voz no me es cielo riverosr… ¿es usted profesora de esta facultad?...

No, no… repuse nervioso, que caraj… invento.

¿entonces?

Soy estudiante, hace poco ingrese a esta facultad.

Pues debe saber que este baño es solo para profesoras y personal administrativo…

si, si, disculpe… es solo que tuve una emergencia… a este punto mi voz ya no salía tan fina como hubiera querido.

Esta bien muchacha, por esta vez lo voy a dejar pasar… dijo con voz desconfiada.

Como había inclinado un poco a cielo riveros hacia un lado, para que mi voz se escuchase, no se por que pero, el tono de voz de la señora me puso en guardia, mire por debajo de la puerta y note como su sombra se iba ensanchando… maldición, la vieja se esta agachando, seguro quiere ver por debajo de la puerta…

en acto reflejo, levante las piernas lo más que pude, me fui hundiendo en el retrete, gracias al peso de las enormes nalgas de mi compañera. Mis manos soltaron la cintura de cielo riveros y me apoye en las paredes de la cabina. Logre detener mi descenso. Cielo riveros se percato de mi accionar, y dejo de presionar sus jugosas nalgas contra mi, se levanto un poco.

Observe como la sombra de nuestra inoportuna visita volvía a su forma original, uff, al parecer quedo satisfecha con ver los zapatos de cielo riveros, sus pies femeninos con sus uñas pintadas. Escuche sus pasos alejarse, el sonido del lavabo.

No se demore mucho jovencita, el portero no debe tardar en venir a hacer la limpieza y cerrar el baño.

No, no, en un rato salgo… respondí con voz cada vez mas masculina.

Mi incomoda posición hacia que me costara seguir con mi imitación. Por fortuna, escuche sus pasos alejándose. Se detuvo en la puerta… maldición…

cuídese también de los resfriados, parece que su voz esta un poquito ronca… dijo antes de salir.

Si, ujum, gracias… respondí.

Suspire aliviado al escuchar la puerta cerrarse, cielo riveros también se relajo, nuevamente su abultado trasero hizo presión contra mi, me iba a hundir, puse mis pies contra el suelo y la empuje para afuera. En ese trance le hundí mi verga con fuerza, ella se estremeció.

Ohhh… exclamo, no me sonó a queja sino a sorpresa, grata sorpresa.

No dijo nada, entendí que aceptaba mi proceder, que no ponía objeciones a que termináramos lo que habíamos empezado. Me acomode en el sanitario, revolviendo mi pene en su conchita que volvía a empaparse.

Uhmmm… no creo que… protesto a media voz, denotando su excitación.

No la deje continuar mis manos buscaron sus senos, los encontré henchidos, subiendo y bajando por la agitada respiración de cielo riveros, sus erizados pezones aceptaron mis caricias…

ayyy… no… por favor no… no hagas eso…me rogaba, sin embargo el tono de su voz me invitaba a hacerlo.

Esta bien… le dije, y retándola agregue: puedes levantarte, no te voy a retener…

ella se fue levantando poco a poco, pero nuevamente se dejo caer… ahora se le erizo toda la piel…

¿por que me haces esto?... Uhmmm… sabes que no puedo…

no puedes ser infiel por ese agujero o no puedes o soportar el placer que te estoy propiciando, no puedes alejarte… quise preguntarle. Como respondiéndome ella meneo su delicioso trasero en toda mi ingle, saboreando la rigidez y anchura de mi pene. Nuevamente subió y se dejo caer… una y otra vez…

ay chris … que placer… me haces hacer locuras…

y tu me vuelves loco… le respondí.

Dejo de sujetar la puerta y sus manos hacían que las mías estrujaran sus senos, mientras sus trasero no dejaba de rebotar contra mi ingle…

ahhh… ahhh…va a venir el portero… ahhh ahhh…

no importa… le decía.

Uyy

pocos segundos depuse, quizás por lo vertiginoso de sus movimientos de ascenso y descenso, por esa dulce fricción entre nuestros genitales y por la adrenalina de la situación, la posibilidad de ser descubiertos, todo ello se aunó para provocarnos un placentero orgasmo.

Ahhhh… uhmmm…

uff….

Mi leche intento contradecir la ley de gravedad, chorros y chorros de viscoso liquido llenaban su tambien lubricada y empapada conchita, sin embargo terminaban escurriendo nuevamente desde sus intimidades.

Toda esta grata agitación provoco que nuestros cuerpos se relajen, sobre todo el de ella, que nuevamente se dejo caer sobre mí, saboreando esa nueva experiencia, esa prohibida situación… así poco a poco me fui hundiendo.

Solo reaccione cuando sentí el agua del retrete en mis nalgas.

Oyeee... Espera…

ay si… lo siento… me dijo y se paro.

Yo también me pare nos miramos… ¿culpa? ¿vergüenza?, intentaba descifrar que era lo que sus negros ojos brillantes intentaban decirme… sin embargo no era eso…

me tomo del cuello y me acerco a sus carnosos y rojizos labios, parecía una efusiva muestra de agradecimiento, de cariño tal vez… permanecimos unidos así unos segundos, quizás minutos… hasta que…

el vibrar y el tenue sonido en mi pantalón, me indicaban que tenia una llamada… continuamos besándonos unos instantes mas, sin embargo el persistente sonido hizo que nos alejáramos.

El celular dejo de sonar, ahora si se notaba que había incomodidad en su expresión. Nuevamente el celular y su persistente sonido, lo reconocí, era el timbrado que había configurado para ella, mi enamorada… ¡diablos!, tengo enamorada…

anda contesta, puede ser algo importante… me dijo cielo riveros.

Permiteme un segundo… le dije.

Con la cabeza semi inclinada, quizás para no verme, cielo riveros se hizo a un lado, cejándome salir de la cabina del sanitario. Ella permaneció allí.

Busque presuroso mi celular, como esperaba era viviana, mi enamorada.

Hola amor, dime… conteste mecánicamente.

No se como le habrá caído a cielo riveros escuchar ese saludo telefónico, al que yo estaba acostumbrado, instintivamente voltee a la cabina donde ella estaba, hasta ese momento no hubo mayor señal de movimiento, parecía que quería escuchar atenta mi conversación. Sin embargo después de mi respuesta escuche un pequeño ajetreo. Se estará arreglando pensé.

¿por que me contestas tan agitado?... Inquirió viviana.

Me has atrapado en el baño… le dije intentando guardar la compostura.

Ah… lo siento… me dijo con voz risueña.

No, no importa, dime ¿ha ocurrido algo?... Pregunte preocupado.

No, es solo que como me habías dicho que tus padres iban a salir a una reunión cielo riverosr… pensé que podría visitarte a tu casa… y no se, ver unos videos y… me dijo con su dulce voz.

Viviana nunca me diría que quería ir a mi casa para hacer el amor como conejos, esa parte escabrosa y los comentarios subidos de tono siempre me los dejaba a mí. Este pudor, su inocente invitación, era una de las pocas veces en que se me ofrecía tácitamente. Su forma de decirlo, su vocecita, todo ello me robaba una sonrisa…

sonrisa que capto cielo riveros al salir del baño, y sonrisa que disimule volteando el rostro.

Uy am... Tartamudee, me cohibí de decirle amor porque cielo riveros estaba cerca y después de lo sucedido, era un poco incomodo, solo agregue: viviana, lo siento, te dije que tenía que terminar un trabajo, debo presentarlo el lunes…

pero lo haces mañana, vamos es solo un ratito… insistió.

¿un ratito?... Le dije sonriendo nuevamente.

Bueno, tú eres el que siempre se demora en eso… me dijo un poco avergonzada y me sonó también a queja.

Era cierto, ella no tardaba mucho en tener un orgasmo, generalmente yo me demoraba más y a veces lograba arrancarle un segundo orgasmo. Pero con cielo riveros siempre se dio la coincidencia que terminábamos los dos al mismo tiempo. La observe estaba frente al espejo donde hace un rato la había poseído, nuevamente estaba enfundada en su pantalón blanco, la observe desde sus bien formadas pantorrillas, sus carnosos muslos y ese abultado pero firme trasero… nuevamente se me armaba una erección… pero…

amor… ¿qué dices? ¿aceptas?... Insistió viviana por el celular.

¿qué?.. Respondí volviendo a mis cabales.

¿aceptas?...

No, no puedo… le dije y vi una tibia sonrisa de cielo riveros por el espejo.

Esta bien, ya se como eres con tus trabajos… me dijo resignada.

La próxima te lo compenso…

mira, me debes una, te tomo la palabra… me dijo sonriendo.

Esta bien…

solo mándame un beso y dime que me amas y dormiré tranquila… me dijo traviesamente.

Viviana hay gente acá… respondí bajando la voz.

Claro, cielo riveros esta acá, con un oído parado y sus deliciosos melones también, ella intentaba arreglarse la blusa de alguna forma, yo le había roto los botones y no podía abrochárselos. Que decir de su brassiere, era historia, intentaba acomodárselo pero a menos que tuviera cinta adhesiva no se iban a quedar en su posición.

Vamos amor… insistía viviana con su voz de niña.

Es que… intentaba refutar mientras veía a cielo riveros quitarse el brassiere completamente, no tenía arreglo.

¿acaso no me amas?… preguntó juguetonamente viviana.

Una pregunta caprichosa que siempre me hacia cuando quería algo, era un jueguito inocente cuya respuesta era evidente… pero después lo sucedido… ¿la amo?... ¿por qué hago esto?... Si la amara no lo haría…ella no se lo merece…

¿amor?… insistió viviana, en busca de respuesta.

Esta bien… te amo… duerme bien… luego hice el sonido de un beso, quería terminar esa conversación antes de que los sentimientos de culpabilidad terminaran de asaltarme.

Yo también te amo… trabaja y pórtate bien… ella también hizo un sonoro beso por el celular, creo que hasta cielo riveros lo oyó, y luego colgó.

Ese te amo, me partió el corazón, me sentí una gran basura, un mentiroso de la peor calaña.

Cielo riveros ya había solucionado el problema de su blusa: hacia la mitad de su abdomen había formado un simple moño con los bordes de su blusa. Se veía deliciosamente escotado este arreglo, pero funcionaba de maravillas. Por suerte su blusa no era tan clara y no se veían directamente sus senos, pero diablos la silueta que formaba la tela y el puntillazo de sus pezones…

cariñosa la niña… me dijo cielo riveros sacándome de mi abstracción.

Si bueno, ella es así… dije pensativo.

Bueno si quiera a ti te llaman, el mío ni se acuerda…

me acorde de la frase de javier: "cuando cielo riveros se pone así prefiero buscarme a otra"… idiota no sabe el mujeron que tiene, no la aprecia… y yo con que moral me atrevo a pensar así… me recrimine.

Bueno, salgamos de aquí… le dije, mire mi celular: ya son casi las 9, el portero no debe demorar en venir.

Esta bien, solo una cosa… súbete el pantalón… me dijo sonriendo.

Diablos.

Me arregle lo mejor que pude. Cielo riveros salio primera, para ver si es que había moros en la costa… como el pasillo estaba despejado me paso la voz para que saliera.

Caminamos silenciosos, pensativos, solo antes de llegar a la puerta de la universidad me dijo…

no sabia que imitabas tan bien la voz de una mujer… cuidado se te puede hacer costumbre… me dijo burlonamente.

Ya cállate… le dije entre risas.
Al salir por una de las puertas laterales de la universidad note como los vigilantes comían con la mirada a cielo riveros. Le lance una mirada agresiva al primero que atrape saboreando las curvas con las que yo había deleitado, el tipo bajo la vista y se hizo el desentendido.

Su reacción me dio a entender que a mi casa no podríamos ir en transporte público. Seriamos la comidilla de todos los ojos masculinos y la envidia de los femeninos. Subimos a un taxi, en silencio. Ni bien me senté recibí un mensaje de viviana: "no te desveles mucho, te amo".

Diablos a pesar de que le malogre sus planes para esta noche, ella lejos de estar enfadada se preocupa por mi… es linda… pensé.

Te presento a viviana, estudia conmigo… le oí decir a mi prima, hace casi 1 año.

Era una chica de piel clara, ojos color caramelo, labios carnoso y rosados, cabello castaño. De sus curvas no podía decir mucho, vestía muy conservadoramente. Solo la manera en que su blusa se abultaba me dio una idea de la forma y dimensiones de sus senos: medianos. Deben ser lindos, como ella, pensé.

¿como estas?… le dije y le di un beso en la mejilla, se ruborizo, esto me robo una sonrisa.

Bailamos un par de veces, era cohibida pero se fue soltando. Al final de la noche me encontré conversando con ella en el sillón mientras los demás bailaban. La acompañe a su casa a pesar de que me pidió que no lo hiciera, sus padre era un ogro. Luego le pedí su número a mi prima, ella me advirtió:

viviana es una chica muy linda, muy tranquila… no es para divertirse…

oyeee… ¿por qué me dices eso?… proteste.

Porque te conozco, eres un verga loca… aunque bueno, quizás te haría bien salir con una chica como viviana, tal vez es hora de que tengas una relación seria primito…

con la venia de mi prima, y una amenaza, llame a viviana. Salimos unas cuantas veces. Al final la química que había entre nosotros termino manifestándose en un beso. Un pequeño resbalón fue pretexto para ello.

Una noche, después de ver una película, caminábamos por un parque, cerca de la rivera del río. Al bajar de una acera, por el agua de una reciente lluvia, ella trastabillo, yo voltee para retenerla, sino se iba de bruces.

Tarde unos segundos en que recobrara el equilibrio. Al final ella termino de pie en la acera con su 1.60m y yo en la pista con mi 1.80m, digamos que en esa posición estábamos al mismo nivel. Abrazados, riéndonos por lo sucedido, tenia una esplendida sonrisa de niña, luego la risa desvaneció, nos miramos fijamente, me incline hacia ella, en su brillosos ojos no encontré negativa.

Mis labios se pasearon por los suyos durante segundos, minutos, me abrazaba con fuerza, sentía su respiración agitada, era un beso tierno, apasionado… pudimos estar horas así, aferrados el uno al otro… pero… un auto paso cerca de nosotros y nos salpico agua. Reímos nuevamente, la ayude a bajar de la acera, esta vez nos tomábamos de la mano, sin decir nada éramos enamorados, lo sabíamos.

Vaya… así que… así se siente un beso… me dijo suspirando.

¿no me digas que nunca has besado a nadie?… pregunte incrédulo.

Pues no… respondió avergonzada.

Entonces hay que solucionar eso... Le dije jalándola a una banca.

Entre risas ella me siguió. Permanecimos buen rato entre besos y caricias, esta vez si note su inexperiencia, cosa que no me importo y que con los minutos fue haciéndose menos evidente. Aprendía rápido.

A medida que íbamos saliendo nuestros besos eran más continuos, prolongados, mas apasionados, se alejaba de mí a veces…

no puedo respirar… me decía, sin embargo segundos después ella buscaba mis labios nuevamente.

Llevábamos poco mas de un mes juntos. Sabia que ella era inexperta, por esa razón no le había insinuado nada hasta entonces. Pero se iba haciendo evidente que debíamos avanzar. Se lo explique.

Si lo se, pero debes tenerme paciencia… recién hace un mes que se lo que es un beso… se excuso tímidamente.

Y lo haces muy bien… le dije robándole un beso.

Además me da un poco de miedo… el acto en si… ir a uno de esos sitios, que vergüenza… me decía.

No te preocupes… le dije abrazándola, y agregue: esperare hasta que te sientas lista…

¿y como sabré si estoy lista o no?... Pregunto inocentemente.

Lo sabrás, créeme… le dije haciendo alarde de mi experiencia.

¿y si tienes que esperar un año?... Me dijo mirándome.

¿un año?... Tampoco te pases… le dije sonriendo.

No esperarías por mi… entonces solo buscas eso… eres igual que los demás… me dijo un poco decepcionada, alejándose de mi.

Oye, espera. Si solo buscara placer iría a cualquier discoteca y seguramente encontraría chicas dispuestas a satisfacerse y satisfacerme. Contigo me divierto, la paso bien.

¿en serio?

Si, esperare el tiempo que sea necesario, valdrá la pena… le dije.

Me beso apasionadamente, por primera vez sentía su lengua sin inhibiciones y vaya que la usaba bien. No solo aprendía rápido, sino también parecía tener iniciativa.

Sabía que el plazo de un año era muy irreal, tal vez una idea romántica, yo me encargaría de apurar las cosas. En un año mi próstata reventaría.

Hay diferentes formas de lograr que una mujer inexperta este contigo. De la que generalmente se oye es el chantaje. ¿es que no me amas? Dice el supuesto macho pidiéndole una prueba de amor, lo que a mi entender es una manera mediocre de lograr los favores de una dama.

Aunque hay otras que son peores: obligándolas a la fuerza o dándoles algún somnífero en sus bebidas. Eso ya es una aberración.

Yo me inclino más por la paciente incitación hasta llegar a la excitación. Al final es como dicen: el hombre propone y la mujer dispone.

Así fue, durante las siguientes citas era evidente que nuestros besos eran más subidos de tono, las películas casi no las veíamos. La pasión que le imprimía a cada beso me calentaba la sangre.

En los parques, cuando ella se recostaba de espaldas a mi, yo le abrazaba por la cintura, poco a poco me fui haciendo maña par tocar su piel desnuda… al principio sentí un poco de excitación en el temblorcillo que la recorrió, volteo y me dio un beso. Luego se incomodo un poco y yo empecé a acariciarle la cintura, antes que protestara algo le dije:

me gusta acariciar tu cintura, tu piel es tan suave…

dicho esto se tranquilizo un poco y me dejo tocarla. El contacto de mis manos con su piel amplificaba sus emociones, sus besos.

Una vez conquistada la cintura, ya que le gustaba y ella misma me hacia poner mis manos allí, mis manos fueron subiendo, acariciando su abdomen. No oponía resistencia a ello... El siguiente paso lógico era llegar a sus senos…

durante una película romántica, en la cual no había muchos espectadores, entre calurosos y agitados besos mis manos fueron subiendo por su cintura, su abdomen. Cuando la sentí excitada, en un rápido movimiento mis manos pasaron por debajo de su brassiere y apresaron sus medianos senos… su tersa piel, ella se sorprendió, su primera reacción fue tomar mis manos, intentar alejarlas…

no, no esta bien… me decía entre jadeos, sin dejar de besarme.

Solo déjame acariciarte… ¿no te gusta?... Le decía.

Si… pero… no continuo con sus protestas, solo me dejo actuar.

El candor que le imprimió a sus otros besos me dio a entender que mis caricias surtían efecto. Sus manos dejaron de rechazar las mías.

¿por que avenida?.. Pregunto el taxista.

Continué por esta nomás, es más rápido… le dije sin mayor interés.

Cielo riveros seguía pensativa mirando por la ventana, solo volteo al notar que el taxista acomodaba su espejo retrovisor, tal vez para enfocar el escote de su blusa. Aunque lo primero que enfoco fue mi mirada seria y directa… creo que entendió el mensaje. Salvando la situación, acomodó para el lado correcto su espejo, mejor dicho lo regreso a su posición original, no le resulto la treta.

Cielo riveros tomo mi mano, renació su temor hacia los viajes en taxis. Quería darle a entender a nuestro chofer que no estaba sola. Sonreí tibiamente, ella también, luego se tomo el cabello y siguió buscando en las ventanas una respuesta para nuestra situación.

Lo que hicimos no me pareció correcto… protesto viviana, tras caminar en silencio por mas de 15 minutos.

Su expresión y su silencio ya me lo habían dado a entender desde que salimos del cine. Remordimiento, culpa, vergüenza… todas juntas.

Esta bien, si te incomoda no lo vuelvo a hacer… le dije.

Tras unos tensos minutos en nuestra banca del parque, al fin accedió a darme mas respuestas que los monosílabos con los que me trato a manera de castigo. Después empezaron nuevamente los besos, las caricias… la reconciliación.

Amparado por lo oscura de nuestra ubicación, la escasa gente que pasaba, mis manos rompieron la promesa hecha minutos antes.

No por favor… no puedo… me decía en un lastimero pero excitado quejido.

Esta bien… no te preocupes… le dije, entendiendo que iba a demorar mas de la cuenta superar esa etapa.

Aunque no demoro tanto, después de unos minutos, presa de la excitación, ella misma dirigió mis manos a su abdomen. A buen entendedor pocas palabras, el tramo restante lo salve yo, y no hubo protestas… solo las de un vigilante que a lo lejos nos apunto con una linterna.

Maldición… dije y salimos huyendo.

No podremos volver a este parque… me dijo entre risas traviesas.

Luego se hizo costumbre en el cine que mis manos se pasearan por todo su pecho, jaloneando sus pezones, que hasta ese momento no había visto, solo sentido. Situación que cambie, abriéndole la blusa…

¿que haces?... Me van a ver... Protestaba.

Esta oscuro y hay poca gente… me excusaba.

Sus protestas terminaron cuando mis manos acariciaron sus blancos senos, sus pezones rosados… no aguante me abalancé sobre ellos y los engullí…

uhmmmmmm… se le escapo un sonoro gemido que afortunadamente no se escucho por lo ruidosa de la película de acción que veíamos.

Sus manos intentaron retener mi cuerpo, pero terminaron acariciando mis cabellos mientras mis labios y mis manos acariciaban sus senos.

La siguiente ocasión, tras unos placenteros besos, ella misma se desabotono la blusa, invitándome a succionar sus deliciosos senos.

A este punto era evidente que debíamos seguir avanzando, ya no ponía objeción a mis maniobras, mas bien me invitaba a realizarlas con una incipiente lujuria que yo le había incitado.

Como mis manos habían subido por su abdomen hasta su pecho, ahora era el momento de que bajaran hasta su pubis y explorara ese rincón prohibido.

La misma estrategia, solo que esta vez si tuve mayor resistencia, mas de una vez fui rechazado… quizás por apuro mió, al saber que estaba tan cerca de tenerla. Solo cuando estuvo súper excitada dejo de oponer resistencia, mas bien fue sorprendida, gratamente sorprendida por mis dedos… que como imaginaba terminaron mojados… mis caricias a sus senos habían despertado tal lubricación.

Mientras mi mano hurgaba por aquella intimidad prohibida, ella presa del nerviosismo de esta nueva sensación, no dejaba de prodigarme besos, de ahogar gemidos entre su lengua y la mía. Su inexperto cuerpo se retorcía debido al cosquilleo que mis dedos le prodigaban.

A decir verdad fueron mis dedos los que primero se atrevieron a ingresar a ese virgen agujero, claro que no hasta romper su sello virginal, pero si hasta hacerle entender la función de un acto sexual. Al cabo de unos segundos se estremeció entre mis brazos, sus manos apretaron con fuerza mi ropa, con mi mano libre intente callar lo sonoro del gemido de satisfacción que emitió.

Ahhhh… uhmmmm… resonó entre mis dedos.

Luego su respiración agitada, aparto mi mano y su lengua me devolvió en unos besos lujuriosos todo el placer que le propine. Si, mis dedos le hicieron conocer lo que era un orgasmo, lo disfruto y sus taras acerca de lo malo que era tener relaciones sexuales se fueron cayendo. Empezó a dudar.

La siguiente ocasión, mientras se retorcía de placer en su butaca de cine, noto el tieso bulto en mi entrepierna. Quizás ya lo había sentido antes, mientras estábamos sentados, ella se recostaba en mi espalda y yo atraía su cintura a la mía. Solo que esta vez se atrevió a buscar en mi pantalón… si yo podía buscar en su pantalón porque ella no en el mió… seguramente quería prodigarme con su mano el mismo placer que yo le brindaba a ella.

Su inexperta y temblorosa mano fue rozando mi duro miembro… mi leche estaba por brotar de solo sentirla, sabiendo lo que para una chica como ella significaba dar ese paso…

mi dedo entraba y salía de su vagina en un corto trayecto, para no violar su himen. Viviana dedujo que el mismo movimiento haría mi pene en su interior e intento imitar lo que su estrecha conchita le haría a mi pene: cerro sus dedos alrededor de mi verga y empezó a subirla y bajarla imitando la misma frecuencia con que mis dedos ingresaban y salían de su conchita… me estaba pajeando… aunque ella aun no lo sabia, creo que tampoco sabia que yo la estaba masturbando a ella, nunca me pregunto, solo me dejo hacérselo.

Viviana primero sucumbió ante un orgasmo, pero al notarme solo un poco agitado quiso retribuirme el placer que le di. Nuevamente tomo mi pene entre sus dedos y continuo con su tarea trunca. Puede sonar a burla, pero no tarde mucho en salpicarla… sus caricias fueron por demás efectivas…

vaya... ¿qué fue eso?… exclamo sorprendida.

Un poco avergonzado tuve que explicarle que al igual que ella se empapaba producto de su excitación, esta era la forma en que los hombres desfogábamos la nuestra. Le dejé mi pañuelo para que se limpie los restos de semen en sus manos y en sus brazos, hasta el poco en su mejilla. Luego ella fue al baño a terminar de asearse y me trajo algo de papel.

Me limpie como pude, pero mi pantalón tenía secuelas notorias. Tuve que sacar del pantalón mi camisa para cubrir dicha mancha.

Al salir nuevamente el silencio, una cara de preocupación. Otra vez las culpas se ciñeron sobre ella.

Esto no puede seguir así… me dijo.

Entiendo tu preocupación pero… respondí excusándome.

No, no lo entiendes… dijo cortante, molesta.

Entonces explícame para que lo entienda… le pedí.

Su rostro cambio, creo que ella misma no sabia como explicarme. Estaba confundida, casi al borde de las lágrimas. Me sentí mal, pensé que había apresurado mucho las cosas… finalmente…

no se si lo que me haces sentir esta bien o esta mal…

pensé que terminaría conmigo, no la hubiera culpado de hacerlo… viviana tomo aire y casi al borde de las lágrimas me dijo:

solo se que quiero…

¿si?... Pregunte temiendo lo peor.

Quiero que me hagas el amor… dijo finalmente y una lagrima resbalo por su mejilla.

La abrace, entendí que no era fácil para ella llegar a ese punto, admitirlo de esa manera. Tuvo que superar todos los miedos que le habían infundido sus padres desde pequeña, sus propios miedos. Esa noche era muy tarde para intentar algo, solo la acompañe a su casa…

la próxima vez que salgamos no me digas nada… solo llévame… me dijo y me dio un tierno beso.

Esta bien…

camino a mi casa comencé a planificar la siguiente cita, la llevaría a un hotel, uno bonito, discreto y alejado. Separaría la habitación, llevaría algunas provisiones… si, le va a gustar, pensé.

Luego la recordé con su sumisa aceptación de que eso era lo único que le faltaba a nuestra relación. Habíamos pasado todas las etapas, el siguiente paso lógico era ese, pero ¿era correcto?, comencé a dudar de mis intenciones.

¿la quería? O simplemente era el morbo de este jueguito del gato y el ratón que finalmente yo había ganado. No se trata de que gane o pierda, se trata de una chica, de una buena chica. Una cosa es jugar con una mujer experimentada, otra con ella, la puedo lastimar… pensé.

Nunca había durado más de 2 o 3 meses con una chica, quizás por ello mi prima me decía que era un "verga loca". Sin embargo con viviana llevaba casi 5 meses, y sin tener relaciones, solo salíamos y la pasábamos bien. Con ella no me aburría, no necesitaba fingir, era yo. No, esto es diferente, esta yendo por buen camino, siento que la quiero, tal vez la ame, me dije. Así acalle a mi conciencia.

La siguiente cita deje todo listo en el hotel y fui a buscarla, estaba nerviosa, sabia a lo que íbamos. Intente distraerla conversando, pero no logre mucho. Ingresamos lo mas discretamente al hotel y subimos a la habitación.

Lejos de notar las comodidades del lugar, o el arreglo con pétalos de rosas y esas cosas que prepare, viviana fue directamente a la cama. Vaya, querrá salir de esto rápido, me dije.

Me eche a su lado y ella rápidamente tomo el control remoto y encendió la tele. A pesar de su arrebato inicial, ahora evadía la situación. Entendí su nerviosismo, así que no la apure, deje que se acostumbrara al lugar.

Tras unos minutos ya conversábamos de lo más normal, reíamos, al rato nos empezamos a besar, intente desabrochar su blusa… pero…

no se, es un poco extraño… lo siento… me dijo, excusándose.

Me pare, apague las luces, la pantalla de 33 pulgadas seria nuestro pequeño cine y el respaldar de la cama nuestras butacas, eso seria menos extraño…

¿y así?... Le pregunte.

Mucho mejor… respondió sonriendo mas relajada.

Noto mi intención y el recuerdo de lo que hacíamos en el cine. No debe ser tan malo hacerlo acá, habrá pensado. Solo faltaba la película, cambie de canal y encontré una romántica que ya estaba por terminar…

déjala ahí… me dijo, su voz sonaba calmada, hasta risueña.

Incluso me llamo a su lado, recostó su cabeza en mi pecho. En la escena final, donde los protagonistas al fin se besan, ella intento imitar esa acción y busco mis labios.

Los tiernos besos fueron calentándose, convirtiéndose en lujuriosos. Mis manos desabrocharon su blusa y no hubo objeciones. Al rato ella se despojaba completamente de la blusa y el brassiere, era la primera vez que veía su torso completamente desnudo. No pude detenerme mucho en su contemplación, aun quedaba cubierta la otra mitad.

Mientras me dedicaba a acariciar y besar sus senos, me iba despojando de mi camisa. Mi labor me distraía de las caricias que le prodigaba, así que ella me ayudo a desabrocharme.

Despojado de mi camisa, inmediatamente mis dedos hurgaron bajo su pantalón, como lo imaginaba su vagina estaba mojada. Viviana se retorció al sentir mis dedos ingresando por sus labios vaginales. Casi por instinto ella busco mi verga en mi pantalón, tomo con mayor seguridad mi pene entre sus dedos y empezó a pajearme.

No quería que este encuentro terminara como en el cine, es decir, una mutua masturbación. Así que notándola súper excitada, procedí a bajarle el pantalón, en su mirada había de angustia, ansiedad.

A la altura de sus rodillas su pantalón se trabo. Viviana se encargo de zafarse del resto, actuó sin pensarlo, por el morbo y el cosquilleo creciendo en sus aun vírgenes intimidades. Aproveche para quitarme mi pantalón.

Nuevamente mis manos buscaron por debajo de su calzón, que aun llevaba, su conchita. No quería que su excitación disminuyese, que se dejara atrapar por sentimientos de culpabilidad. Viviana imito mi accionar y busco en mi bóxer mi verga. Su mano logro liberarla de su prisión.

Por fin pudo verla, se sorprendió, una cosa era sentirla pero otro cantar fue apreciarla. No dio fe a sus ojos y su mano recorrió de arriba abajo mi pene, para cerciorarse de que todo eso era mió.

Pero eso que es ¿un hueso?... Exclamo ingenuamente.

No mi amor, eso es tuyo… le dije besándola risueñamente.

Danny, en serio… ¿tu crees que eso me entre?… dijo preocupada.

Ya veras que si… respondí sonriendo.

Continué besándola, luego sus senos, mis dedos nuevamente incitaban su conchita, quería que se olvidase de las dimensiones de mi verga. Lo estaba logrando, viviana gemía y empezaba a pajearme. Es momento me dije.

Tome su calzón por ambos lados y empecé a deslizarlo por entre sus piernas, a medida que descubría su pubis y que la tela rozaba sus muslos, su cuerpo se erizaba. En acto reflejo, su mano busco cubrir aquel hermoso triangulo que sus vellos formaban. Su mano se detuvo en su abdomen. Era tarde ya la había visto.

A través de la tibia iluminación de la tele y de la luz que ingresaba por la ventana la pude apreciar. Era la primera vez que un hombre la veía así, era bella, sus formas armónicas, sus gráciles curvas, su tersa y blanca piel. Siempre enfundada en jeans, nunca pude reconocer que tenía unas bien formadas piernas.

¡que hermosa eres!... Exclame gratamente sorprendido, hasta enamorado diría yo. Quizás ella era mucho premio para mí.

Sonrió por aquel sincero halago, noto en mi voz y tal vez en la forma en que la veía, que no mentía. El resplandor en su rostro, el brillo en sus bellos ojos me hizo entender que estaba lista.

Se levanto un poco, sus labios tocaron los míos, con su mano en mi cuello me atrajo hacia ella. Sin dejar de besarla, me deshice como pude del bóxer, viviana instintivamente abría las piernas para permitirme ubicarme entre ellas. Ya estaba sobre su cuerpo, acariciando sus cabellos, quizás esperando un gesto de aprobación que me permitiera iniciar aquel ritual que la transformaría en mujer.

Te amo… me dijo con voz apasionada.

Una enorme alegría me invadió, ninguna mujer me lo había dicho de una forma tan segura, apasionada, sincera.

Yo también te amo… respondí y en ese momento era cierto.

Fue el gesto de aprobación que esperaba. Ubique mi verga entre sus húmedos labios vaginales, esto causo un pequeño remezon en su ser. Fui empujando mi pene y sintiendo como su virgen agujero se iba ensanchando a mi paso. Ella con mueca de sorpresa aceptaba esta incursión.

Sus brazos ladearon mi torso, quizás para acompañar el ritmo de ingreso o para retenerlo llegado el momento. Había terminado el corto recorrido hasta su himen y viviana lo había soportado.

Con un pequeño forcejeo y empuje logre romper su sello virginal, estaba hecho. Viviana lo sintió y mordiéndose los labios callo un quejido de dolor. Me iba a permitir continuar. Fui hundiendo mi musculosa verga en su estrecha y tibia intimidad,

ahhh… ohhh… la escuchaba suspirar quejosamente mientras sus dedos apretaban mis brazos.

Ya, ya casi… le decía, observando su acalorado rostro.

Una forzada sonrisa en medio de su dulce dolor, me hizo saber que lo entendía y lo aprobaba.

Cuando mi verga llego al final de su recorrido, pude sentir como se relajaba su cuerpo.

Ahhh… uhmmm……gimió ella, me sonó a liberación, después del dolor inicial había algo de satisfacción en esta etapa final.

Sentí como sus paredes se dilataban para hacerme espacio, todo parecía encajar bien. Sus manos fueron dejando de presionar mis bíceps. Su gesto de angustia, de dolor fue amainando. Sus mejillas acaloradas, sus carnosos labios lucían rojizos, húmedos, el brillo en sus ojos eran una invitación.

La bese, en un tierno beso le agradecí permitirme ser parte de esta experiencia, ser el primero en disfrutar de ella, de su cuerpo, de su entrega.

Las manos de viviana dejaron mis brazos, se pasearon por mi espalda hasta mi cuello, mis cabellos. Los tiernos besos dejaron lugar a los más apasionados, su lengua y los jadeos que los acompañaban me dieron a entender que debía proseguir.

Lentamente fue sacando e insertando mi verga nuevamente en su inexperta conchita. En cada beso iba ahogando un quejido, un gemido. Sentía sus pechos llenarse de aire y tocar mi tórax producto de su agitación.

Deje de besarla para permitirle respirar mejor y para apreciar como su cuerpo reaccionaba ante esta nueva experiencia.

Uhmmm… fue el primer tibio suspiro, mezcla de gemido y quejido que le escuche al alejarme de sus labios.

La observe: su bello rostro sumergido en una mezcla de emociones, el pausado ir y venir de sus senos. Intente imitar ese armonioso vaivén, imprimiéndole el mismo ritmo a mis penetraciones.

Ayyy… oummm….

En su rostro un candido reproche por mi accionar. Pero sus iniciales quejidos se iban transformando en dulces gemidos, suspiros de placer que me agradecía de cuando en cuando con besos profundos. Veía su cuerpo estremecerse con mi vigor, segundos, minutos, no sabría decirles, solo se que lo disfrute, no era solo sexo… estábamos haciendo el amor…

ahhh… exclamo cuando su ser no pudo aguantar mas esa mezcla de emociones, sentimientos.

Esa energía se irradio en todo su cuerpo, haciendo que lo contrajera, que sus manos, sus dedos estrujaran mi espalda. Segundos después derrame mis líquidos en su hasta hace poco virgen cavidad. Un temblorcillo la recorrió nuevamente.

En sus ojos satisfacción, quizás algo de incredulidad por lo sucedido y la forma en que lo había disfrutado.

Uhmmm… suspiro suavemente, saboreando el último resquicio de orgasmo en su cuerpo.

La bese apasionadamente. Ella me devolvía cariñosamente mis besos, sentía su respiración aun agitada. Me aparte y sonreía tiernamente. Ya no era una niña, quizás si en su alma, pero su cuerpo había experimentado la madurez.

Tras unos minutos observándonos, sonriendo, besándonos, quise alejarme… debíamos asearnos se hacia tarde, ella me retuvo a su lado.

No, no me dejes… me suplicó.

Tonta, si lo que más quiero es estar a tu lado… le dije.

Después de un rato me permitió desenfundar mi flácido miembro, me recosté a un lado. Ella me siguió, apoyo su cabeza sobre mi pecho. Una lagrima se deslizo por su mejilla hasta mi tórax.

Hey ¿qué paso?... Le dije, descubriendo su rostro.

Nada volverá a ser lo mismo… me dijo preocupada.

Comprendía que ya no era una niña, quizás temía que ante mis ojos ella cambiase, que se perdiera lo bueno de nuestra relación, que solo la viera como un objeto para satisfacer mis necesidades sexuales.

No… todo será mejor… le dije.

La oscura nube que se había ceñido sobre sus ojos se disipo. Me regalo una hermosa sonrisa, nuevamente nuestros labios se encontraron.

Así termino nuestro encuentro.

En los días siguientes nadie pudo borrarnos nuestra tonta expresión de dicha. Pero ya habían pasado casi seis meses después de eso. En ese tiempo puedo decir que había sido feliz...

Sin embargo todo ello se estaba yendo al tacho por mi infidelidad… pero era casi imposible no sucumbir ante las monumentales curvas de cielo riveros… intente excusarme.

No debí matricularme en ese maldito curso… al menos no en este ciclo… comencé a recriminarme.

Danny… ya llegamos… me aviso cielo riveros.

¿qué?... Oh… si, bajemos… respondí aturdido.

Cielo riveros avanzo hacia mi casa vacía mientras yo le pagaba al taxista.

Oye hermano, ¿cómo haces para tener una mujer así?... Me pregunto el taxista con una morbosa sonrisa.

No se, pregúntale su enamorado… respondí.

Jajaja… que buena… eres un pendej… jajaja… dijo y se fue riendo.

Saque mi llave y camine hacia cielo riveros que esperaba en la puerta…

¿qué te dijo ese idiota?... Pregunto, por el taxista y su sonora risa.

Olvídalo, no importa… le dije.

Lo que realmente importaba era lo que fuera a pasar dentro de mi casa…
tras esos recuerdos y los sentimientos de culpa que me aquejaron, no solo a mí, también a cielo riveros por lo que veía. Era evidente que debíamos hablar. Nos sentamos en la sala e inicie la conversación que nos habíamos evitado.

Parece que esta situación se nos esta yendo de las manos… le dije, pero no podía apartar mi vista del escote de su blusa.

Si, creo que si… respondió.

Más allá de los encuentros que hemos tenido y de una reciente amistad, nunca hemos tenido un acercamiento mas romántico, por decirlo así, como una pareja normal… agregue, intentando no mirar sus senos, parecían imanes.

Parece que lo nuestro se basa en "eso"… me dijo haciendo referencia al sexo y confirmando mi teoría.

¿quieres a javier?... Le pregunte para rematar la idea.

Si, bueno, si no fuera así no seria su enamorada… repuso y me devolvió la pregunta: ¿quieres a tu enamorada?

Si, la quiero, es la primera relación que realmente me dolería perder… le dije y la mire fijamente.

¿estas seguro?... La forma en que me tomas… no, se me hace dudar de lo que dices… repuso mirándome intensamente.

Hace unos minutos en el taxi estaba seguro de que era lo correcto, ahora con ella frente a mí, no estaba seguro de nada, intentaba estarlo. El cuerpo de cielo riveros, su forma angustiada de preguntar, ese brillo en sus ojos… pero viviana no se merece esto, me repetía ingenuamente olvidando mi condición mortal, de ser imperfecto.

Si, estoy seguro... Conteste fríamente, luego agregue: tal vez encuentres que permitiéndole a javier hacértelo (por el ano)… disfrutes tanto, como conmigo… sentencie, me sentí como un idiota enviándola a ese mujeriego, pero era su enamorado, ella lo eligió, así como yo elegí a viviana.

Tal vez sea cierto… quizás si tu se lo haces de la misma forma a tu enamorada encuentres eso que le falta a tu relación… dijo con cierta resignación, devolviéndome el golpe.

Bueno, aclarado esto, creo que podremos trabajar tranquilos… le dije, mintiéndome mas de la cuenta. Prefería llamarle a un taxi, dudaba de mi fortaleza frente a sus atributos físicos.

Si, esta bien, pero… ¿podrías prestarme tu baño?, creo que necesito una ducha… me dijo un poco avergonzada.

La lleve al baño del segundo piso, estaba cerca de mi cuarto y del cuarto de lavado. No quería arriesgarme a que mis padres, si regresaban temprano de su reunión, nos encontraran con esas fachas.

Bueno, era obvio que nuestros encuentros en el baño de la facultad habían dejado más de una huella en sus intimidades, así como en su ropa. Ofrecí meter su ropa y la mía a la lavadora.

Por la puerta del baño me alcanzo su ropa. Camino al cuarto de lavado imaginé que cielo riveros estaría desnuda, con su fenomenal cuerpo siendo acariciado por el agua de la ducha.

Me quite mi ropa, me puse algo mas ligero, un short y un t-shirt, luego metí la ropa de cielo riveros con la mía en la lavadora. En segundos pude ver como nuestras prendas se revolvían en el agua… quizás era un presagio de lo que sucedería con sus dueños.

Danny… me alcanzas una toalla… le escuché gritar a cielo riveros.

Vaya, tan rápido se baño, generalmente las mujeres demoran mas en estas tareas… pensaba mientras le llevaba la toalla. Quise dejar la toalla sobre la puerta, para evitarme la visión y la tentación de sus firmes curvas… pero…

esta abierto… pasa…

habrá intuido mi dubitación en la puerta del baño. Aun escuchaba el ruido de la ducha, así que ingrese pensando que ella aun se bañaba. Así era, a través del vidrio opaco pude ver parcialmente distorsionadas sus formas. Hasta su reflejo es digno de armarme una erección… pensaba mientras la sentía mi miembro crecer.

Te la dejo sobre el sanitario… le dije y me dispuse a huir.

En mi camino de regreso observe una toalla limpia en el colgador, me detuve un rato. Seguramente cielo riveros no habrá visto esta toalla ¿o si?, si es así ¿por qué me haría traer esta otra?. Muy pronto obtendría algunas respuestas.

Escuche el sonido de la puerta de la ducha deslizándose, voltee instintivamente. Cielo riveros con su bronceado cuerpo bañado por el agua, sin cubrirse en lo absoluto, sus deliciosos melones al aire, dándome la bienvenida, su aun enjabonado y velludo pubis.

Gracias… dijo sonriéndome coquetamente. Seguro noto la reacción que su imagen causo en mi.

No hay por que… dije, me di vuelta y retome mi fuga.

Solo una cosa mas…

¿si?

Ayúdame con mi espalda… no llego… me dijo mostrándome al jabón.

Como no reaccione, se volteo un poco para enfatizar su pedido, su espalda no estaba enjabonada, tampoco sus firmes muslos, esa deliciosa raja…

vamos… que no te voy a morder... Me dijo animándome.

Le devolví la sonrisa que me brindaba, el problema era que yo si podría morderla… sentí que había vuelto la cielo riveros coqueta, la chica provocativa que conocía, aquella menos desinhibida, la que inspiro nuestro primer encuentro. Había enterrado a la cielo riveros dubitativa de las últimas horas que me dejaba las decisiones a mí, ahora ella quería equiparar las acciones.

Me estiro la mano ofreciéndome el jabón, lo tome y ella se puso de espaldas. Intente no bajar mí vista para no caer en tentación, sabia como lucían las nalgas de cielo riveros… solo que…

un poco mas abajo… me dijo juguetonamente.

¡maldición!, me esta tentando, seguro quiere ponerme a prueba. Averiguar si aquella negativa mía a continuar con nuestra "relación" era realmente cierta, quizás su ego femenino no podía entender como yo podía resistirme a sus llamativos encantos. Tal vez se estaba tomando una revancha por lo que le hice en el baño de la universidad, o quizás simplemente quería usarme para vengarse de javier por su descuido hacia ella.

Intente no distraerme más en estos pensamientos que harían que permaneciera más tiempo cerca a ella y a su juego de seducción. Así que finalmente accedí a su pedido, deslizando el jabón por su espalda, enjabonando más de la cuenta y tratando de mantener mí vista sobre sus hombros.

Hasta que el jabón no pudo bajar mas, ¿tan grandes son sus deliciosas nalgas?... Pensé, no resistí, quise comprobarlo. Vaya si que lo son… las contemple, redondas, carnosas y firmes… se me fue el aliento… y también el jabón... Termino en el piso de la ducha.

Cielo riveros se dio cuenta, tal vez sonrió al notar lo sucedido. Su jueguito estaba surtiendo el efecto esperado en mí.

No te preocupes, yo lo recojo… me dijo.

Luego se inclino completamente, dándome la espalda, en 4, sus jugosas nalgas se abrieron permitiéndome ver su pequeño ano. Estuvo en esa posición el tiempo que creyó necesario para hacerme sucumbir. Después lentamente volvió a su posición original… giro lentamente y me dio el jabón.

Ay… mírate… el agua te esta salpicando… estas todo mojado…

bueno... Si… dije dándome cuenta, pero por sobre todo tenía una vigorosa y llamativa erección.

Ven… báñate conmigo… me dijo sonriendo y haciéndome un espacio para entrar.

Atónito por aquella audaz propuesta no atine a reaccionar… claro que mientras la enjabonaba había fantaseado con esa idea ¿quién no lo haría?… pero no que ella me lo propusiese.

Vamos… ya dije que no te voy a morder… insistió juguetonamente jalándome de un brazo.

Esta bien…

no digan ni piensen nada, lo se…

me quite el short, el t-shirt, mi endurecida verga apuntaba mi camino… tenia la estupida esperanza de que el agua fría de la ducha terminara por someter esa rigidez…

ya vez… esta mejor así… me dijo coquetamente.

Nuevamente me ofreció el jabón. Lo tome y seguí enjabonando su espalda, mis manos guiadas por mi morbo, pasaron por debajo de sus brazos, hasta sus senos… se endurecieron… me acerque casi abrazándola por detrás, mí endurecida verga se desvió en su espalda… sentí su respiración agitada, luego visiblemente excitada me dijo:

no, ahí no… continúa en la espalda… mas abajo… me pidió.

Seguí su sugerencia, a estas alturas ni saliendo agua helada de la ducha se iba a poder amainar mi erección. No me cohibí de mirar sus voluminosas nalgas, ahora las tocaba con más libertad, tanto que ella se estremeció, me hizo soltar nuevamente el jabón.

Otra vez me acerque a cielo riveros, pensando que ya no tenía sentido enjabonarla, quería lubricar sus intimidades. La abrace por detrás, no me rechazo. Aun de espaldas, volvió un poco el rostro para verme, me beso con ansiedad desde su incomoda posición, yo le acaricie sus hinchados senos. Sintió nuevamente mi verga en su espalda, era evidente que quería sentirla en otro lado… mas abajo.

No te preocupes, yo lo recojo… me dijo en clara alusión al jabón.

Intuía lo que se venia, aquella sugerente maniobra que tiro al suelo mi moral, que mando de vacaciones a mi conciencia. Me aleje para darle espacio a su provocativo accionar.

Aquella seductora inclinación ponía fuera de combate a cualquier atisbo de remordimiento. La aprecie desde sus bien formadas pantorrillas, sus carnosos muslos, sus abultadas pero firmes nalgas… no había marcha atrás, solo hacia delante.

Sin pensarlo, la tome de la cintura. Ella sabia lo que se venia así que dejo de lado la absurda búsqueda del jabón. Así, inclinada abrió mas las piernas y sus manos se apoyaron en los bordes de la ducha. Estaba lista para soportar mi incursión.

Apunte mi verga hacia su ano, que impacientemente latía. Empuje, su esfínter se abría placidamente mientras ella temblaba de placer…

ohhhh…siiii…

seguí empujando, notando como ella tercamente resistía desde su posición, no retrocedía. Continué empujando sin avanzar mucho… hasta aquí me lo permite su estrechez, pensé… a partir de aquí necesitamos ayuda… pensé.

Al lado mío había un pequeño altillo con shampoos y esos aceites especiales para jacuzzies, tome el que me pareció más jabonoso y lo unte en nuestros genitales…

no me digas que ya… gimió a manera de protesta, pensando que había eyaculado precozmente.

No, es solo un poco de ayuda… le dije.

Sentí que emitía un suspiro de alivio, quería acallar ese cosquilleo en su interior. Al percatarse de mi nueva arremetida, un temblorcillo recorrió su columna, sintiendo dicho líquido escurrirse, lubricar su estrecho agujero. Sabia que ahora si mi verga le iba entrar hasta la raíz…

si, ahora si… pidió ansiosa.

Así fue, sin mayor oposición de su arrugado anillo le fui insertando toda mi tiesa verga. Una vez que la tuvo toda dentro arqueo la espalda, su cuerpo se contrajo saboreando ese empalamiento.

Su goloso ano latía en mi pene, degustando su dureza, comiéndose cada centímetro de su rígida musculatura.

Ay que placer… exclamo agradecida.

No tuvo que decir mas, inicie mi cabalgata, alejando y atrayendo su abultado trasero. Imponía mí ritmo con mis manos sujetando su estrecha cintura. Al parecer ella sintió que no era suficiente para sus apetitos, que la gentileza de mis suaves y armónicos movimientos no estaba acallando su picazón.

Más… más… mételo más… mas duro… pidió lujuriosa.

Incremente mis arremetidas, con el agua bañándonos el sonido de sus nalgas rebotando en mi ingle era cada vez fuerte.

Plosh… ploshhh...

Al parecer le encantaba el eco que esto producía en mi ducha, el morbo la invadía, sus gemidos se mezclaban con estos sonidos.

Ahhh… ahhhh… ahhh…

ya no tenia que sujetarla de la cintura, con una mano sobre su espalda la guiaba, ella misma iba y venia con mayor rapidez, encontrándose siempre con mi recia respuesta que la alejaba, obligándola a empujar su nuevamente su prominente trasero contra mi ingle. Me deleitaba viendo su cuerpo estremecerse, sus nalgas temblar con cada penetración, escuchando sus gemidos y pedidos, casi ruegos:

así… así… más fuerte… pedía enloquecida de placer.

Hasta que sintió que su posición era incomoda: agachada, con sus manos aferradas a los bordes de la ducha. Mi ímpetu la había hecho avanzar, su cabeza casi chocaba con la pared. Entonces, conocedora de que no faltaba mucho para su orgasmo, decidió disfrutarlo en una mejor posición, que le permitiera profundizar estas emociones.

Se levanto un poco, arqueando la espalda, sus brazos ahora se apoyaban en las manecillas de la ducha (aquellas que controlan el agua). Abrió más las piernas, para que también sus redondas nalgas se abrieran y me permitieran castigar su ano con mayor vehemencia.

Mi verga ahora entraba hasta la raíz, solo faltaba que le insertara mis testículos…

si… si… asi… danny asiii… ohhh… ahhh… ahhh…

no sabia si yo la estaba usando para satisfacer el apetito sexual que su cuerpo me despertaba, para colmar mis instintos carnales, o si ella me estaba usando para acallar los suyos, para vengarse de javier y su desinterés por ella, o para vengarse de mi, para probarme que no podía resistirme a sus atributos… invadido por estos sentimientos comencé a cabalgarla con furia… la estaba partiendo y ella lo estaba sintiendo…

no tan fuerte… no… ahhh... Uhmmm… ahhhh...

Me aferre a su cintura, atrayéndola hacia mi lo mas que pude, sus deliciosas nalgas también se abrieron lo mas que pudieron. Toda mi rabia se fue disipando a medida que mi verga expulsaba su blanquecino líquido. Este torrente la lleno completamente, alucine que mi leche saldría por el otro lado, por su boca… boca que mantenía abierta, su cuerpo en extremo rigor saboreaba este nuevo orgasmo.

Uhmmmmm….

Sus manos en violento espasmo se aferraban a las manijas del agua, con cada borbotón de esperma, su columna se contraía. Hasta que un temblorcillo final indicaba que ya había pasado, su cuerpo lo había disfrutado, y ahora exhausto no podía mantenerse en pie.

Intento apoyarse en las manillas, pero estas cedieron, su mano resbalo, haciendo girar la llave del agua caliente…

auuu... Exclamo adolorida al sentir el agua quemándola.

Quizás era una señal, un aviso de que merecíamos arder en el infierno por nuestras continuas infidelidades… por nuestra deslealtad hacia nuestras parejas formales…

la jale hacia mí, con mi verga semidura aun dentro suyo fue algo doloroso a lo que no preste mayor atención, puesto que el agua caliente también me estaba salpicando.

Nos refugiamos en el otro extremo de la ducha. Solo entonces pude desencajarle mi maltrecha y adolorida verga.

Lo siento… me dijo cariñosamente.

Yo no… le dije.

Entendiendo que no me arrepentía de aquel placentero encuentro, cielo riveros me dio un jugoso beso. Luego me abrazo, apoyando su cuerpo desnudo y mojado contra el mió.

El agua seguía corriendo y yo no podía luchar contra la corriente… estaba perdido, lo había intentando pero había fracasado clamorosamente… era obvio que no podía resistirme a ella…
luego de unos minutos de estar aferrados el uno al otro, en silencio, decidimos salir de la ducha, el vapor que generaba el agua caliente estaba por convertir en un sauna aquel espacio. Deslice la puerta por el lado posterior y así finalmente escapamos de aquella vaporosa prisión.

Cerré la llave del agua caliente y le alcance una toalla para que limpiara sus carnosas formas y yo tome otra.

Vaya… que chiquito… me dijo sonriendo, mirando mi entrepierna.

Oye, tu ya lo has visto y lo has sentido (hasta sufrido) cuando esta inspirado… proteste, al darme cuenta que mi verga se había reducido a su mínima expresión luego del baño y de las 3 exprimidas que cielo riveros le había dado a mi pene esa noche.

Lo se tonto… repuso cariñosamente abrazándome, pensando que así acallaría me ego supuestamente herido.

No te has secado bien… le dije al sentirla nuevamente.

Entonces ayúdame… contesto coquetamente.

No me rehusé a su invitación, mientras ella se secaba el cabello, yo secaba sus armoniosas curvas. Protegido por la toalla, mis manos tocaron todos los rincones de su cuerpo, provocando más de una sonrisa traviesa.

Oye… ahí no…. Exclamo risueña, cuando mis manos se insertaron en el espacio entre sus nalgas.

Aun esta mojado… le dije excusándome.

No puso objeción, me dejo actuar, aunque note cierto gesto de dolor cuando rose su ano. Bueno han sido 2 veces esta noche, en su aun poco experimentado ano, que esperabas… me dije.

Sin lamentarme por ello mis manos subieron, buscando deleitarse con sus otros atributos, llegando a sus melones. Se le erizo la piel al sentir el jaloneo que le daba, sus pezones se pusieron rígidos como piedra… la misma rigidez se iba manifestando en mi verga.

Cielo riveros, de espaldas a mi, continuaba secándose nerviosamente el cabello, con la toalla sobre su cabeza, su cuello desprotegido. Me acerque a ella, y juguetonamente la bese en el límite entre su cuello y su hombro. Por el espejo frente a nosotros note como esta simple caricia la desarmo completamente, soltó un suspiro excitado y cerrando los ojos volteo hacia mi, en busca de un beso.

Hacia poco que había descubierto su debilidad, o su fascinación por el placer que le provocaba el sexo anal, ahora, al parecer había encontrado un punto débil de su anatomía, tal vez un punto g, un punto que al ser tocado despertaba toda su pasión.

Me incline para corresponderle ese beso, su respiración agitada me decía que su excitación iba en aumento. Nuestras toallas se deslizaban por nuestros cuerpos hasta caer al piso.

Mi nueva erección era evidente, por nuestra diferencia de estaturas, cielo riveros estaba sintiendo lo duro de mi pene en su ombligo, quizás por instinto mi verga buscaba insertarse en esa cavidad, aunque era muy pequeña para satisfacer mis necesidades y las de ella.

Así lo entendió cielo riveros, que empezó a abrazarme del cuello, buscando trepar sobre mí, quería encontrar una manera de que mi verga no le presione el ombligo sino otro de sus agujeros.

Motivado por sus lujuriosos besos, sus senos apretándome por el ir y venir de su respiración, su desesperación y ansiedad porque la penetrara otra vez, y con mi verga hirviendo de deseo de probar su carne nuevamente… no lo pensé dos veces… mis manos dejaron de acariciar su espalda, se deslizaron hasta su cintura, tocando sus nalgas hasta sus muslos, mis manos se fijaron en ellos y la levante…

ohhh… siiii… exclamo sorprendida y agradecida.

La mantuve izada en lo mas alto unos instantes, con sus henchidos senos a la altura de mi boca, succione sus jugosas tetas, jalonee sus pezones y la sentía estremecerse de placer….

Yaaa… por favor yaaa… hazlooo… me suplicaba.

Entendía que quería ser penetrada, la fui descendiendo poco a poco, hasta que mi verga rozaba su pubis… en este incomodo accionar, la cabeza de mi verga se paseo por los labios de su empapada vagina, un temblorcillo la recorrió mientras mi verga se deslizaba hasta su ano…

la mire, aun excitada pero con un gesto de desconfianza me dio su aprobación, aun sentía adolorido su esfínter… la fui dejando caer, mi verga se fue insertando en su maltratado ano, resistió sin embargo segundos después sus dedos arañaban mi cuello y mi espalda, el dolor se le estaba haciendo insoportable…

no auuu… espera nooo… ayyy… mejor nooo… por ahí no… me rogó cielo riveros visiblemente adolorida.

Esta bien… respondí y atendiendo a su pedido la fui levantando, sacándole la cabeza de mi pene de su maltrecho ano.

En ese momento ni ella ni yo sabíamos que instantes después presa de la excitación ella misma se hundiría mi verga en su ano… pero en ese momento solo me quedo satisfacer a su reclamo, deslice nuevamente mi verga hasta su pubis, hasta su mojada vagina…

si por ahí siii… exclamo mas aliviada.

Sus dedos dejaron de estrujar mi espalda, la mueca de dolor se desdibujo en su rostro y nuevamente lucia su candorosa excitación. Mi verga se fue insertando en su vagina como en mantequilla, su evidente lubricación hizo que no tardara mucho en tenerla completamente clavada.

Ahhhh.. Siiii… uhmmm…

sus brazos me sujetaron con fuerza, sus piernas temblaron al sentir su conchita completamente invadida por mi tieso miembro. Sus labios y su lengua no tardaron en buscar los míos, mientras su cuerpo saboreaba esta nueva penetración…

vamooos… danny… dame… me pidió tras unos instantes.

Ubique mejor mis brazos debajo de sus muslos , con mis manos sujetando sus voluminosas nalgas, inicie al ascenso y descenso que el cuerpo de cielo riveros estaba deseando, insertando y sacando mi verga de sus humedecidos labios vaginales… gustosa agradeció esta fricción…

siiii… asiiii… que biennn… hummmm….

Sus inflados senos rebotaban en mi cuerpo, sus dulces gemidos llenaban mis oídos. Con la sangre hirviendo, fui aumentando el ritmo de su ascenso y descenso, ella disfrutaba de ese vigor, de la fuerza que le imprimía a estas penetraciones, cada vez mas continúas…

ahhh… uhmmm… ahhh…

el agitado vaivén de su cuerpo, le impedía continuar con sus pedidos. El aire en sus pulmones apenas le daba para emitir esos gozosos suspiros. La fuerza en mis brazos también apenas me daba para continuar con este esforzado movimiento. Mi ritmo fue decayendo, mas no la rigidez de mi verga.

Vamos danny… mas fuertee… vamoss… me reclamaba recuperando el aliento y notando mi decaimiento físico.

Al no haber mayor reacción de mi parte ella misma en movimientos torpes, pero placenteros, fue subiendo y bajando… sin embargo no serian suficientes para llevarla a otro orgasmo… me hubiera gustado terminar en esa posición, pero tras tres actos sexuales esa noche y mi poco ejercitación física en los últimos tiempos iba a ser una tarea difícil.

Sabía que no podría mantenerla en alto mucho tiempo, así que mis ojos buscaron un lugar de apoyo que nos permitiese terminar aquel encuentro… pensé ubicarla sobre el lavamanos, pero dudaba que aguantase el peso de cielo riveros y la fuerza de nuestro accionar… luego observe el sanitario, con su tapa abajo me permitiría sentarme en el.

Con el cuerpo de cielo riveros a cuestas me fui a sentar sobre el excusado. Sonrió agradecida al notar mi práctica solución, o tal vez fue por recordar que horas antes estuvimos en un posición similar en el baño de la facultad, solo que esta vez ella esta frente a mí y no de espaldas.

Así esta mejor… dijo y se dispuso a proseguir la faena.

Meneo su jugoso rabo por toda mi entrepierna y encontró que mi verga aun endurecida la llenaba plenamente. Al igual que en el baño de la facultad, con sus pies apoyados en el suelo, cielo riveros se encargo de subir y bajar, incrustándose a placer mi verga en su ardiente conchita…

que... Bien… ahhh... Uhhh… clamaba sintiendo que volvía la misma agitación de instantes previos.

Me dedique a descansar mis brazos, rodeando su cintura. Mis labios succionaban sus melones que iban y venían por sus movimientos y su agitación. Sus manos acariciaban mis cabellos… hasta que…

ayyy… no puede ser… no puedo masss… decía cielo riveros confundida.

La mire extrañado, pensé que ya había llegado al orgasmo, me pareció muy repentino dado que hacia poco que habíamos reiniciado nuestro accionar. En su rostro de fascinación y aun excitación pude ver nuevamente aquella locura pasional que había visto cuando le desvirgue el ano o cuando la poseí por el mismo agujero de manera salvaje en el baño de la facultad.

Esa locura, ese apetito anal había vuelto, en el punto más álgido de su excitación creyó que sentiría mayor placer siendo penetrada por el más estrecho y adolorido de sus agujeros. Así me lo dio a entender cuando ella se levanto un poco, sacándose mi verga y tomándola con su mano, como su dueña, la ubico en la entrada de su ano, que aun herido palpitaba esperando una nueva incursión.

¿estas segura?... Pregunte incrédulo.

Si… fue su tajante y lujuriosa respuesta.

Para dar por sentada su posición al respecto, ella misma se fue sentando en mi verga. Mordiéndose los labios, para no dejar escapar quejidos de dolor, fue hundiéndose de a pocos mi maciza verga. Mis manos se limitaron a guiar su accionar, tomándola por la cintura. Su piel se estremecía mientras descendía.

Ufff… ouuu… se quejo.

Ya casi… la animaba.

Sus piernas empezaban a temblar, producto del dolor, del cansancio o tal vez de su excitación. No aguanto más y se dejo caer….

Ayyyy… clamo adolorida.

Me abrazo con fuerza mientras su cuerpo se reponía de aquella dolorosa incursión, de aquella forzada penetración que parecía haberla partido. Con su rostro escondido entre mi hombro y mi cuello, en voz baja me reclamo:

mira en que me has convertido…

¿en una infiel? ¿en una ninfomana? ¿en una adicta anal?... Quizás esta última se acercaba más a la respuesta, ya que estaba dispuesta a sufrir este dolor inicial en pos de un clímax mayor. Pude quedarme en silencio, pero preso de la curiosidad me atreví a preguntar:

¿en qué (te he convertido)?

Apartándose de mi hombro, y mirándome fijamente, con un brillo inusual en sus ojos, y con un gesto cariñoso, tal vez excitado, me respondió:

en una adicta a tu verga.

Mi respuesta estuvo cerca pensé. Gratamente sorprendido y halagado quise responder algo, retribuirle, pero cielo riveros no me dio pie a ninguna replica inmediata. Quizás esperaba una respuesta física y no con palabras, ya que procedió a menear su delicioso trasero por mi entrepierna

era la primera vez que hacia esta maniobra cuando mi pene la estaba empalando por el culo… tras el gesto de sufrimiento inicial, un gesto de gozo fue cambiando su expresión, transformando el dolor inicial en incipiente placer, su piel se erizo nuevamente al sentir recobrada esa sensación.

Uhmmmm… suspiro aliviada al notar que el dolor cedía y la excitación ganaba paso nuevamente.

Más segura, comenzó a ir y venir suavemente sobre mi verga. Mis manos continuaron guiando su cintura, mis labios buscaron los suyos que en generosos besos me retribuían el placer que mi verga le generaban a su pequeño agujero. Luego mis labios se dirigieron a sus henchidos pezones que parecían que iban a explotar.

Si… tómame así… disfruta de mi cuerpo como yo disfruto de tu verga… murmuraba jadeante.

El sudor empezaba a bañarnos, el subir y bajar de su cuerpo era cada vez más rápida, sus gemidos, el golpeteo de sus nalgas en mi ingle, la dulce fricción y el placer que provocaban iban en aumento… solo que ahora sus fuerzas iban en descenso…

ahhh… vamosss… ayúdame… ahhh… me rogaba con sus mejillas encendidas, su rostro cansado.

Mis manos rodearon voluminosas nalgas, y mis descansados brazos la ayudaron en su tarea de ascenso y descenso, primero imitando su ritmo, luego incrementándolo.

Siiii… asiii… ahhhh… ya casi… uhmmm… exclamaba satisfecha.

Su castigo auto infringido, esta auto penetración, estaba llegando a su clímax, los movimientos, las incrustaciones eran cada vez mas frecuentes, mas vertiginosas. Sus senos vibraban cerca de mi pecho, sus voluptuosas nalgas retumbaban contra mi entrepierna.

Ahhh… ahhhh… ahhh… gemía cielo riveros profundamente.

En un último movimiento, se dejo caer con fuerza, clavándose mi verga lo más que pudo, luego meneo nuevamente su apetecible cola, mientras su cuerpo se retorcía producto de un nuevo orgasmo. Me abrazo con fuerza, mi casi enroscada verga se dio maña para inundarla, para refrescar sus intimidades con su lechoso líquido.

Ufff… uhmmm… suspiro agradecida.

Nuevos espasmos la recorrieron producto de estas ráfagas de semen invadiéndola. Nuevamente su rostro descanso en mi hombro. Su cuerpo deliciosamente relajado, agotado, descansa contra el mío. Sus senos dejaban de golpear mi tórax en clara evidencia de que su respiración recobraba su ritmo habitual.

Vaya… creo que necesitamos un baño… dije finalmente notando nuestros cuerpos sudorosos.

Alejo un poco su rostro de mi hombro y lucia un poco perpleja, tenia una graciosa expresión, solo me dijo, casi suplico:

si, pero que esta vez solo sea una ducha…

me reí percatándome que su cuerpo estaba exhausto, después de todas esas experiencias sexuales era evidente. Cielo riveros temía que mi propuesta de bañarnos juntos nuevamente encerrara otro castigo a su arrugado anillo.

Esta bien, que solo sea un baño… respondí sonriendo.

Solo así vi que su expresión de sorpresa, casi temor, se tornaba en una más risueña. Después de esos agitados encuentros, yo también dudaba que pudiera someterla una vez mas, al menos por esa noche, o dentro de los siguientes minutos… además teníamos otras tareas pendientes, es decir, aun no terminábamos el informe de la universidad que debíamos presentar el lunes… después de eso, tal vez mas repuestos, ¿quien sabe?… a estas alturas entre nosotros cualquier cosa podía pasar…
cielo riveros se levanto, mi verga aun endurecida fue abandonando sus intimidades. Continué sentado sobre el retrete, recomponiéndome. Cielo riveros me miro cariñosamente, tal vez un poco orgullosa del estado en que me había dejado.

Su vista fue bajando por mi pecho hasta mi ingle, vio a mi guerrero enrojecido, aun erecto, quizás esperando otra muestra de agradecimiento de sus labios.

No es tan chiquito… le dije, recordando sus burlonas palabras.

No… no lo es… repuso complacida.

Sin decirle nada, se fue arrodillando, iba a atender aquel pedido mental que no me atreví a manifestar con palabras. Tomo mi verga y la engullo, limpiando los pocos restos de nuestro encuentro, el resto yacía en su interior. Estuvo algunos minutos así, con su lengua paseándose por la cabeza de mi pene, sus dedos sujetando mi verga. Mis dedos acariciaban sus cabellos.

Cuando creyó culminada su tarea, tal vez temiendo una nueva erección mía, me miro desde abajo y al notar mi expresión agradecida, me regalo una sonrisa. Luego se paro y se dirigió nuevamente a la ducha.

Tras unos instantes la acompañe… esta vez solo fueron besos y caricias… después de la ducha y de secarnos, cielo riveros con la toalla sobre su pecho y yo con la toalla sobre mi cintura, salimos del baño.

Suficiente de baños por hoy… dijo de buen humor.

Fuimos en busca de nuestra ropa. Llegamos al cuarto de lavado, nuestras prendas ya estaban limpias, solo quedaba ponerlas en la secadora y esperar.

En la espera nos invadió el hambre, después de todos los encuentros sexuales, nuestros cuerpos pedían que los alimentemos, no solo de sexo vive el hombre.

Bajamos a mi cocina, sobre la mesa una nota de mi madre.

"juan daniel: tu comida esta en el refrigerador, ponla 2 minutos en el microondas y estará caliente… volvemos mañana… nada de fiestas… pórtate bien"

que linda tu mami juancito… dijo cielo riveros burlonamente.

Ah si… juan es mi primer nombre… repuse.

Pero todos en la universidad te dicen danny…

claro por lo de daniel… le dije.

¿por qué pone juan daniel en su nota?, suena muy solemne…

no se, siempre en sus mensajes pone mis dos nombres, quizás quiere sonar mas enfática o enérgica en lo que me pide… respondí.

Puede ser, pero creo que danny suena más amical… dijo sonriendo.

Si yo también, pero mis padres prefieren llamarme juan, en general en mi cielo riveros me conocen por ese nombre: mis tíos, tías, primos… y mis primas me llaman así… le explique.

Si creo que escuche a guillermo llamarte así alguna vez...

Eso fue en los primeros ciclos, ahora todos me dicen danny…

aclarado lo del nombre, buscamos en la refrigeradora. Mi madre preparo un guiso que se veía bien, pero a decir verdad creo que ambos teníamos mas ganas de comer comida chatarra. Nuestros cuerpos pedían calorías a gritos para reponernos del desgaste que habíamos hecho.

Pedí por teléfono una pizza grande y sodas. Después de unos minutos nos encontrábamos devorando la pizza, como si no hubiéramos comido en días.

Pensaras que soy una cerda… me dijo avergonzada mientras tomaba otro trozo de pizza y bebía su soda.

Eres una cerdita muy linda… respondí besándole la mejilla.

Cielo riveros sonrió. Minutos después la pizza era historia. Una vez saciada nuestra hambre, descansamos sobre las sillas, conversamos sobre trivialidades. Nos habíamos olvidado de nuestra ropa, solo las toallas seguían cubriéndonos.

Al cabo de un rato, con menos pesadez en el cuerpo, decidimos que era momento de terminar el dichoso informe, que había sido el pretexto para que ella viniese a mi casa. Solo restaba limpiar los indicios de nuestra comilona.

Cogí los envases vacíos de soda y los eche a la basura. Cielo riveros diligentemente tomo un trapo y se dispuso a limpiar la mesa. Tome la caja grande de la pizza y lo lleve al tacho grande de basura de mi jardín.

Camine por el pasillo hacia el jardín, en este trayecto observe lo que fue mi dormitorio y ahora era el cuarto de estudio de mi padre. Al frente estaba el cuarto de visita que ahora era el dormitorio de mis padres. Algunos viejos recuerdos y algo de nostalgia me invadió unos instantes al notar que una maltrecha maceta aun cumplía su función decorativa. No quise distraerme mas en estos pensamientos, bote la caja y retorne a la cocina.

Al regresar vi a cielo riveros aseando la mesa. Estaba de espaldas a mí, meneando su hermoso trasero, la toalla se levantaba dejando ver su redondo trasero, aquella magnifica raja que ocultaba su pequeño agujero.

Me parecía increíble, pero mi toalla también empezaba a levantarse producto de una nueva erección. No puede ser, me decía no dando fe a la rigidez que sentía. Me toque el miembro, estaba duro de nuevo. Con mi mano hice presión hacia abajo intentando bajarlo… segundos después, desafiante mi pene volvía a izarse.

No podía ocultarlo, el provocativo movimiento de las caderas de cielo riveros mientras hacia la limpieza me estaba excitando de nuevo. Pensé en resistirme, abandonar la habitación hasta que ella terminase su labor y se me bajase mi floreciente erección. Dudaba que cielo riveros accediese a un nuevo encuentro, sobre todo por donde yo quería.

Iba a salir de la cocina pero vi a cielo riveros inclinarse por completo, en su esforzado accionar buscaba llegar al otro borde de la mesa. Con su atrayente meneo de nalgas y la toalla que ya no la cubría, no aguante más.

Ansioso me quite mi toalla y me acerque por detrás. Mi verga se encontró con su raja pero en su rigidez se desvió hacia arriba, recorriendo toda esta línea divisoria de sus nalgas. Ella se sorprendió al sentir su dureza entre sus abultados cachetes. Volteo nerviosa y con rostro incrédulo me dijo:

no danny, ya nooo…

es la última, te lo prometo… le dije, casi rogando.

Si es por la comida yo la pago… pero no me hagas esto… reclamo aturdida, pensando que era mi forma de cobrarme por la cena que acabábamos de degustar.

Es por tu cuerpo, no puedo evitarlo… le dije.

¿acaso eres insaciable?... ¡ya lo hemos hecho 4 veces esta noche!… protesto, pero vi como movía su cabeza nerviosamente.

No hay quinto malo… repuse acariciando sus nalgas.

No, debemos terminar nuestro trabajo… replico, ahora si note que cedía, su piel comenzaba a saborear mi erección.

Lo hacemos después, tenemos toda la noche…

no hubo respuesta, cielo riveros se levanto un poco, aun con el trapo en la mano intento zafarse de mi prisión, en este forcejeo mi verga se paseo por todo su pubis. Note que se mojaba nuevamente, dubito un poco. Aproveché para besarla en el cuello y vi como esta acción terminaba por encenderla.

Esta bien… me dijo y se relajo, dejaría que la poseyera nuevamente.

No la dejaría arrepentirse, no debía darle tiempo a pensarlo, aparte un poco su toalla y ubique mi verga en su ano.

¿qué?... Nooo… por ahí nooo… exclamo asustada.

Pero fue muy tarde, envuelto en el morbo de la situación le inserte mi verga sin miramientos, ya tenia casi la mitad incrustada en su ano, y con la adrenalina a flor de piel dudaba que la sacaría.

Ayyyy… eres un bruto… auuu… exclamo adolorida.

Ya va a pasar… le decía sin dejar de empujar mi verga para hundirle lo que faltaba.

Nooo... Duele… sácala… por favor sácala… me pedía.

Faltaba poco para tenerla enganchada completamente, con toda la lujuria que me despertaba poseerla así, hice caso omiso a sus suplicas. Sabía que no tardaría en rogarme que la cabalgara, pero debía hacer que su cuerpo lo pidiera. Debía amainar su dolor, así que le bese el cuello otra vez.

Ayyy… uhmmmm… gimió ante su propia sorpresa.

¿ves?... Ves que te gusta… le dije con voz pausada y nuevamente bese su cuello con pasión.

No hubo respuesta, desde su incomoda posición, con mi verga atorándole el ano, ella intento acomodarse, su cabeza giro un poco. La observe con sus ojos aun cerrados, sus mejillas encendidas, con sus labios húmedos, su boca semiabierta en expresión de dolor y placer.

Buscaba que mis labios terminaran de someterla; la bese con pasión, su lengua y su respiración revelaban su creciente lujuria. Ya no pugnaba por huir… finalmente abrió los ojos:

hazme tuya… fue el pedido que hizo sumisamente.

Volteo su vista nuevamente hacia la mesa, esperando que la sometiera con mí accionar. La sostuve por la cintura para evitar que huyera nuevamente, luego retrocedí y le enfunde mi tiesa verga.

Ouuu… mas suave… por favor…

me sentía excitado viendo sus esplendorosas nalgas aprisionadas contra mi cadera, abriéndose con mi verga… así que no preste mayor atención a su pedido y continué martillándole su inflado trasero…

ayyy nooo… no uhmmmm…ahhhh…

se quejaba por momentos y por momentos se le escapaban gemidos. Sabía que sufría, lo veía en sus manos: una arañaba la mesa y la otra apretaba con fuerza el trapo de limpieza. Yo, sencillamente no podía parar, quería seguir cabalgándola salvajemente…

las fuertes penetraciones que le practicaba hacían que sus senos rebotaran, que la toalla fuera deslizándose de sus melones que la sostenían, dejando sus tetas al aire, vibrando al ritmo de mis incursiones en su ano.

Ohhh… uhmmm… ohhh…

el sonido de sus gemidos, sus lamentos, hacia eco en toda la cocina, quizás en toda la casa, a ello se le unía mi respiración agitada, el vibrante sonido de sus nalgas chocando en mi ingle, el retumbar de la mesa que iba cediendo de su posición inicial…

cielo riveros ya no buscaba huir, ansiosa soportaba mis violentas arremetidas. Mis manos buscaron sus senos, los sentía temblar al igual que veía sus nalgas prácticamente saltando al compás de mis incursiones en su ano.

Ya noo... Ya noo... Que no puedo… ahhh … ahh…

no pudo mantenerse más sobre sus brazos, apoyo los codos contra la mesa y continúo resistiendo mis embestidas. Le di un par de palmazos a sus abultadas nalgas, esperando animarla.

Ya casi… ya casi… le decía sintiéndome próximo a eyacular.

Apúrate que no aguanto…ahhh…

ahora si que cielo riveros estaba por desfallecer, recostó todo su torso sobre la mesa, sus manos ahora se aferraban a los bordes de la mesa. Su cabeza de lado sobre el mueble que acababa de limpiar, entre su maraña de cabellos veía su rostro gozosamente exhausto. Sus quejidos y gemidos eran más continuos así como ingreso y salida de mi musculoso miembro en su cuerpo…

ahhhh… uhmmm… exclamo al sentir mi leche invadiéndola.

Arqueo su espalda mientras sus carnosas nalgas eran aprisionadas con fuerza entre la mesa y mi entrepierna. Apoyo nuevamente las manos sobre la mesa, haciendo puños, resistiendo aquella avalancha de semen, aquella oleada de placer que nuevamente la invadía. Girando el rostro me pidió con febril pasión...

Bésame…

en un arranque también de locura, propia del salvaje encuentro que tuvimos, la tome de los cabellos y la jale hacia a mi, cuando su rostro estuvo a un nivel pertinente, la bese. Lejos de morderme o quejarse por lo brusco de mi accionar, cielo riveros me devolvió mis besos con agitada vehemencia.

Luego se dejo caer nuevamente sobre la mesa. Veía su espalda subir y bajar por el agitado ritmo de su respiración. La toalla lucia remangada en su cintura, sus nalgas enrojecidas por unos palmazos que le di y por el continuo golpeteo contra mi entrepierna. La raja de su culo aun abierta de par en par porque mi verga continuaba presionándola, clavándola contra la mesa…

fui retrocediendo, note un espasmo de dolor en el cuerpo de cielo riveros mientras mi verga abandonaba su estrecho y maltrecho ano. Ella continúo descansando con su abdomen sobre la mesa.

Yo me senté en una silla hasta que mi respiración volvió a su ritmo normal, y mientras tanto veía como su ano comenzaba a expulsar el esperma que a presión había copado su interior, ahora se escurría por sus carnosos muslos.

Repuesto de mi agitación después de un rato, me levante y le di un palmazo en sus gordas nalgas.

Auuu… oye… me reclamo, dando señales de vida.

Creo que ya hicimos la digestión… ahora debemos trabajar… le dije frescamente.

Hubiera sido mas cortes avisarme que esta era tu forma de hacer la digestión… me reprocho dulcemente.

¿y que hubieras hecho?… pregunte sarcásticamente.

No se, hubiera estado mas preparada, tal vez hubiera huido… respondió graciosamente.

¿a donde hubieras huido?... Estas en mi casa…

tienes razón… dijo riendo.

Se paro y tomo la toalla para limpiar el resquicio de mis líquidos en su cuerpo. Luego tomo el trapo y comenzó a borrar la huella de su cuerpo sobre la mesa. Claro que esta vez no me dio la espalda, sabia que era peligroso hacerlo, así que prefirió irse al otro lado de la mesa.

Sonreí al ver como hacia ese movimiento evasivo hacia el otro lado del mueble, note su dificultad al caminar… me parece que maltrate mucho su ano, con esto creo que será suficiente por hoy, me dije sintiendo un poco de ardor a lo largo de mí rojizo y deshinchado pene. Yo también sufría las consecuencias por esas continuas fricciones de nuestros genitales.

Cielo riveros sin quejarse continuo con su labor de limpieza, sonriendo traviesamente me miraba de cuando en cuando, como vigilando que no me moviera de mi asiento.

Yo miraba complacido sus melones ir y venir al compás de su aseo sobre la mesa. Ella lo noto, temiendo otro ataque mío, tomo la toalla y se la puso nuevamente sobre sus senos. Me reí.

No te preocupes, creo que fue suficiente por hoy… le dije.

Contigo nunca se sabe... Contesto con un gesto desconfiado.

En muestra de buena fe yo también me cubrí con mi toalla. Al poco rato hacíamos un lento y cansado ascenso por la escalera hacia el segundo piso, hacia mi cuarto, para hacer el tan odioso informe…

en el trayecto cielo riveros me pregunto curiosamente:

dime… ¿las pizzas son un afrodisíaco para ti?...

No tonta… solo que el movimiento de tus caderas me inspiro…

ahhh… y pensaste que mis caderas no mienten…

jajaja… si algo así…

la próxima me cuido la retaguardia… suspiro risueña.
Llegamos al segundo piso y cielo riveros aun sentía melosas y adoloridas sus intimidades, así que decidió volver a la ducha para limpiarse y refrescarse.

Te acompaño… me ofrecí diligentemente.

No, no, gracias… primero voy yo, después vas tu… me dijo desconfiada, poniéndome un alto con su mano en mi pecho.

La vi en su tortuoso camino a la ducha, parecía un poco escaldada luego de todas las penetraciones anales que le hice esa noche.

Solo tráeme una toalla limpia, pero la dejas en el colgador… me pidió.

Sonreí al escucharla… la entendía, cielo riveros ya no quería correr riesgos. Teníamos que dejarnos de esos jueguitos sexuales, al menos por el momento, debíamos completar nuestro informe. Tampoco quería que cielo riveros terminase hastiada del sexo anal y de la persona que se lo practicaba.

Fui al cuarto de lavado saque nuestra ropa de la secadora, tome la suya y una toalla y me dirigí al baño. Al escucharme cerró la llave del agua y deslizo la puerta de la ducha. Esta vez no me dejo ver todo su provocativo cuerpo, solo saco la cabeza y me estiro el brazo pidiéndome la toalla. Pensar que la misma chica que me tentó hace unas horas lucia ahora muy precavida, temerosa de otro encuentro sexual.

Espere a que terminara de secarse dentro de la ducha, para luego ingresar a bañarme, como habíamos acordado. Al fin salio, nuevamente con la toalla sobre sus senos, cubriéndola hasta debajo del pubis. Me ofrecí cortésmente a ayudarle a secarse.

No gracias… aléjate… me dijo con una expresión graciosa.

Esta bien… dije sonriendo y deje mi toalla.

Haz que se quede así… me dijo señalando mi pene que lucia tímidamente encogido.

Lo intentare, pero no lo provoques… respondí e ingrese a la ducha.

Cuando salí de la ducha cielo riveros se peinaba frente al espejo del lavamanos, aun llevaba la toalla puesta a pesar de que su ropa seca y limpia estaba sobre la tapa del excusado.

Todavía esta caliente… me explico en alusión a la ropa.

¿qué todavía estas caliente?... Bueno haré un esfuerzo para bajarte la calentura… dije en broma quitándome la toalla de la cintura.

No, tonto, mi ropa aun esta caliente… no te me acerques… respondió riendo nerviosamente al ver que me aproximaba a ella.

Esta bien… voy a prender la computadora… le dije saliendo del baño.

Llegue a mi cuarto y mientras la computadora encendía, yo me vestía con un t-shirt (polo) y un short.

Al poco rato, ya enfrascado en el informe, no note que cielo riveros, ya vestida, había ingresado a mi habitación. Cuando me percate de su presencia pude ver que había algo de nostalgia en su mirada. Se dio cuenta que la observaba…

vaya… pareciera que ha pasado mucho tiempo desde la ultima vez que vine… dijo y no pudo evitar mirar la cama donde hacia dos semanas le había desflorado el ano.

Si, parece que si… pero ya… vamos a trabajar… le dije.

Era casi medianoche y desde que salimos de la sala de cómputo de la facultad no habíamos avanzado nada. Cielo riveros lo entendió y se vino a sentar a mi lado… solo que no soporto mucho sentada, tuvo que ponerse de lado, apoyada en una nalga, parecía que su arrugado anillo le fastidiaba.

No te rías que aun me arde… dijo fingiendo seriedad.

Trabajamos una hora y parecía que el sueño nos quería envolver, después de todo el ajetreo físico era de esperarse.

Por momentos cuando cielo riveros me preguntaba algo o me hacia alguna sugerencia, yo volteaba a mirarla, para prestarle atención, solo que mis ojos se desviaban a menudo y terminaban en el escote de su blusa, aquella prenda que tuvo que unir en sus bordes, a la altura de su abdomen, porque yo en un ataque pasional había roto todos sus botones. Así mi vista siempre se perdía en sus apetecibles senos, cual niño lactante los contemplaba con cierta ansiedad.

Mírame a los ojos… me pedía un poco risueña.

Si, si te escucho… respondía sin dejar de admirar sus melones.

Danny… ¡esos no son mis ojos!… me decía levantando mi quijada y fijando mi vista en sus intensos ojos negros.

Bueno… ¿sabes que? Creo que mejor preparo café… le propuse, quería despejar la vista y la mente.

Si, que sea café cargado, bien cargado… dijo bostezando un poco.

Se te antoja algo de comer… ¿pizza?… le dije bromeando.

No… todo menos eso, ya se como te pone la pizza… dijo enfática pero con algo de gracia.

Solo preguntaba, haré unos sándwiches… respondí riendo.

El ir a la cocina y preparar esa merienda me despejo. Cuando regrese a mi habitación, cielo riveros dormitaba frente a la computadora. La desperté y con el café reanimándonos pudimos terminar nuestro trabajo.

Eran casi las 3 y los dos estábamos medio sonámbulos, presos del cansancio físico (por nuestros encuentros sexuales) y mental (por el informe de la universidad). Decidimos irnos a la cama, al parecer solo dormiríamos, el cuerpo y las ganas no nos daban para mas.

Solo que cielo riveros no quería dormir con la misma ropa puesta. Buscamos en mi guardarropa algo que pudiera ponerse. Le llamo la atención un polo naranja con el cuello verde… sonriendo leyó la inscripción que con plumón tenía:

así que "juancho"… me dijo.

Si, bueno, fue un apodo que me pusieron en un trabajo hace un tiempo… le dije mintiendo, no quería ahondar en explicaciones.

Parece que has tenido muchos nombres… repuso intrigada.

Soltó el polo y sus ojos se fijaron en otro polo, mas pequeño, más femenino, me miro con gracia y suspicacia…

¡aja!… no sabia que tenias estos gustos…

oye… eso es de una prima que paso un tiempo con nosotros… le dije, quizás con aire melancólico.

¿y que hace en tu closet?... Pregunto curiosa.

No se, tal vez cuando me mude a este cuarto mi mama por error lo coloco entre mi ropa… le explique, aunque ya me había percatado de ese error, conservaba esa prenda como recuerdo.

Ah… y ¿cómo se llama tu primita?… pregunto sin comerse el cuento.

Su nombre es ana… respondí sin darle mayor importancia.

¿y quisiste mucho a anita?... Pregunto con picardía.

¿qué?... Oyeee… no seas mal pensada… que ella acaba de tener un hijo hace poco… replique un poco malhumorado.

Ah si, que linda… y ¿quién es el papá?... Pregunto burlonamente, notando que sus preguntas me hacían sonrojar, quizás delatarme, se estaba divirtiendo a costa mía.

Ya, ya… basta de preguntas insidiosas… ¿te vas a poner eso si o no?, si quieres te traigo algún camisón de mi madre… repuse irónico.

Ay no, no lo tomes a mal, pero seguro tu mami usara ropa de dormir al estilo antiguo, cubriéndole hasta los tobillos, como la de las mujeres árabes… dijo con cierto sarcasmo.

No me ofendí porque sonaba gracioso y tenia algo de cierto.

Solo dame un ratito, ¿me quedara?… tal vez sea muy apretado para dormir… repuso pensativa mirando el polo de mi prima.

Se me vinieron a la mente pasajes de una historia antigua, quizás no muy lejana… por lo que recordaba aquella prenda podía encajarle a cielo riveros, las dimensiones de mi prima eran similares a las suyas…

bueno, quizás cielo riveros era un poco más voluptuosa, pero este juicio era algo injusto dado que anita era más joven, casi una niña, cuando uso ese polo, sin embargo la última vez que la vi en su hacienda… si, creo que podía decirse que las contexturas de anita y de cielo riveros eran parecidas… sentencie, procurando no ahondar en mi memoria y en mis sentimientos. Era un buen recuerdo pero era historia pasada... Pensé con nostalgia.

Creo que aquello de enfundarse en la ropa, y tal vez en la historia, de otra chica no le llamaba mucho la atención a cielo riveros. Su ego femenino no quería compartir o competir con esos recuerdos. Ella tenia su propia personalidad, sus propias formas, y vaya ¡que buenas formas!

Al final cielo riveros reparo en una camisa mía. Era un poco vieja y no la usaba mucho porque se había decolorado, aunque su tela aun se mantenía suave y fresca.

Esta creo que me puede quedar bien… dijo aliviada, bostezando por el cansancio.

Pues bien póntela y a dormir… dije imitando su bostezo.

Pero… ¿podrías hacerme un favor?... Pregunto vergonzosa.

¿cuál?... Respondí con curiosidad.

Podrías voltearte mientras me cambio… dijo con tímida expresión.

Oye pero si ya… después de todo… intente protestar buscando las palabras adecuadas, no quería sonar muy rudo o herir su susceptibilidad ante su repentino ataque de pudor.

Hazlo por mí ¿si?... Me pidió juguetonamente.

Esta bien… esta bien… respondí, era mi huésped y después de todo lo que le hice esa noche, creo que debía ceder a su pedido.

Me voltee sonriendo… ¡mujeres!, pensé. Al cabo de unos minutos, me dijo finalmente:

ya puedes voltear…

le hice caso y… wow… divina tentación… lucia hermosa vestida solo con esa camisa. Dejarme esa impresión fue su intención al pedirme que me volteara mientras se cambiaba.

Mi vista se paseo por sus bien formadas piernas bronceadas, que terminaban donde la camisa empezaba (apenas por debajo de sus intimidades seguro que también desnudas). Cielo riveros con sus manos en su cintura, me daba a entender lo grande que le quedaba mi camisa así como el pequeño tamaño de su cintura. Más arriba, sus pechos desafiantes levantaban mi camisa, sus pezones indicaban su justa posición. En su rostro una sonrisa coqueta, sabia que la había comido con la vista y eso inflaba su vanidoso ego femenino.

¿qué tal me queda?... Pregunto luciéndose, dando una vueltita.

De maravilla… exclame mientras veía como su trasero levantaba la camisa, casi permitiéndome ver sus redondas nalgas.

Bueno… creo que es hora de… dijo provocativamente.

¿si?... Inquirí sintiendo que en mi adormecido cuerpo aun se podía despertar otra erección.

Que es hora de dormir… puntualizo risueña, soltando otro bostezo.

Si tienes razón… respondí desganado, realmente cansado.

Mientras ella se dirigía a mi cama, yo buscaba un sleeping (bolsa de dormir) en mi closet. Cielo riveros se acomodaba entre mis sabanas, cuando me vio desplegar el sleeping, me miro curiosa:

oye, no seas tonto… no vas a dormir en el piso, debe estar frió y duro… te puedes enfermar… me dijo con pena.

Pensé que no querrías…

aquel ataque de pudor que tuvo al vestirse para dormir y la forma tragicómica en que había huido a mis bromas e insinuaciones mientras terminábamos el informe de la universidad me habían hecho dudar que cielo riveros quisiese compartir la cama.

Nada de eso… ven aquí, que hay espacio para los dos… dijo haciéndose a un lado, como no reaccione, ella agrego con picardía y dándole un palmazo al colchón: vamos… que no te voy a morder…

esta bien… solo espero que no ronques… o hables dormida…

jaja… graciosito… apúrate que quiero dormir… dijo desganada.

Sentí un poco de calor y, ante su atenta mirada, me quite el polo y el short, solo me quede en bóxer. Note su expresión desconfiada.

¿algún problema con que duerma así?... Pregunte.

No… con tal que no dejes que nada se te escape… me dijo de buen humor mirando mí entrepierna. Al parecer estaba muerta de sueño.

Ok… me limite a decir, luego me aproxime a la cama.

Cuando me vio acercarme, levanto las sabanas para dejarme acomodarme entre ellas. Inicialmente se recostó de lado, dándome la espalda, mientras yo me acostaba boca arriba, mirando el techo, pensando en lo sucedido.

Habíamos tenido mas de un encuentro sexual (en mas de una posición) esa noche y por tanto no debía haber tanta tensión entre nosotros, debía haber más confianza, muestras de cariño y esas cosas propias de toda pareja. Y ese era el problema… nuestra situación no estaba definida…

¿qué éramos?... No éramos enamorados, porque aun seguíamos con nuestras parejas formales… tampoco éramos amigos cariñosos, apenas si éramos amigos y habíamos sido mas cariñosos de la cuenta, después de todas las situaciones sexuales de esa noche, habíamos superado esa etapa… ¿amantes?, creo que esta era la palabra que mas se acercaba a nuestra situación… aunque dudo que a cielo riveros le gustase como sonaba eso…

al cabo de unos minutos, cielo riveros se volvió hacia mi lado. Sin decir nada se acurruco en mi pecho, abrazándome… quizás las mismas preguntas cruzaron por su mente y quería encontrar las respuestas en mi regazo, o tal vez solo tenia miedo de darme la espalda, es decir, quería cuidar su bien proporcionada pero aun adolorida retaguardia…

¿te molesta que me quede así?… pregunto tímidamente, notando la tensión que la cercanía de su cuerpo me había generado.

No, para nada… respondí recobrando un poco la cordura.

Mientras la luz de la calle iluminaba en algo mi oscuro cuarto, acaricie sus cabellos en una muestra de cariño y para acostumbrarme a su presencia. No recuerdo más de esa semi oscuridad, estaba agotado… me quede dormido...

Me desperté por un pequeño ruido, el cantar de aun ave cerca de mi ventana, aun no estaba del todo claro afuera. El sol saldría por entre las montañas en unos minutos y esta ave anunciaba su llegada.

Tras unos segundos me percate que nuestra ubicación había cambiado: cielo riveros ya no estaba recostada sobre mi pecho. Nuevamente me daba la espalda, solo que esta vez mi cuerpo estaba también de costado, detrás suyo.

Mi brazo rodeaba su cintura y la mano de cielo riveros, sujetando la mía, parecía querer mantenerla allí, era un gesto tierno. Mas abajo mi cadera tenuemente presionaba sus abultadas nalgas… no era un gesto obsceno, pero lo seria instantes después… a medida que mi cuerpo y mi sensibilidad despertaban… sin embargo cielo riveros y su bien dotado cuerpo seguían dormidos.

Quise alejarme, sintiendo venir una erección matutina, pero la mano de ella me lo impedía y no iba a sacarla bruscamente, no quería perturbar el tranquilo sueño de cielo riveros… lo que si me estaba perturbando era el contacto de mi verga cada vez mas dura con sus carnosas nalgas…

¡diablos!... Intente pensar en cosas terribles para hacer retroceder mi excitación, pero no logre mucho… ahora mi pene semi erecto empujaba la camisa que protegía la raja de su precioso culo, buscando insertarse.

Intentaba luchar contra estas sensaciones, no quería aprovecharme de cielo riveros mientras dormía… no era correcto… sin embargo mi pene no parecía entenderlo, tenia reflejos propios que yo no podía controlar… con decirles que había logrado salir, sin ayuda, de mi bóxer a través de su abertura…

viendo que nada parecía menguar mi deseo por la carne de cielo riveros… probé una salomónica solución: rozaría mi verga suavemente a lo largo de la raja de sus redondas nalgas, a fin de darme placer, de pajearme, procurando no despertarla y evitando violar su estrecho agujero…

al inicio estos movimientos comenzaron a surtir efecto, en algo estaban aplacando mi morbo. Cielo riveros apenas se movió, producto de mi tacto o de su propio sueño… solo que al poco rato, estas tibias fricciones lejos de acallar mi lujuria, empezaron a incrementarla de manera febril, nublando mi conciencia… no podía mas… quería poseerla…

mis movimientos eran cada vez mas torpes y notorios, algunos quejidos se le escaparon entre sueños a cielo riveros… no me quedaba otra… si quería acabar con todo el deseo matinal que su cuerpo me había despertado… tenia que penetrarla a como de lugar…

aproveche que cielo riveros dejo de sujetar mi mano contra su cintura, quizás debido al continuo escarbar de mi pene contra sus nalgas… sigilosamente libere mi mano, me ayudaría con ella a levantar un poco su camisa y a hacerme espacio entre sus nalgas.

Así lo hice, levantar la camisa no fue tarea difícil, su voluminoso trasero alejaba la mayor parte… lo difícil era hacer diana en su pequeño agujero con delicadeza y suavidad, evitando despertarla sino podría reaccionar mal… obnubilado por mi morbo llegue a creer que la penetraría a gusto y ella no despertaría… después de todo estaba sumamente exhausta…

lentamente fui acomodando mi verga entre sus nalgas, algunos leves movimientos me dieron a entender que cielo riveros estaba cerca de despertarse. No pude esperar mas… ni bien encontré que su carne cedía (había ubicado su esfínter con la cabeza de mi pene) comencé a empujar… instintivamente sus nalgas se contrajeron, mi mano dejo de guiar mi verga, que ya había encontrado su camino, y se ubico en su cintura, para impedirle escapar…

¿que?... Pregunto cielo riveros entre sueños.

No respondí, empuje más y le inserte la cabeza de mi pene en su soñoliento cuerpo. Ella se estremeció, no sabia aun si era un sueño o una pesadilla, pronto lo sabría…

ayyy… auuu… se quejaba mientras le insertaba mi pene.

Estaba enloquecido por su cuerpo, sus voluptuosas formas, su estrecho agujero… lejos de retroceder, seguí empujando mi verga hasta que forzosamente le entro casi la mitad…

auuu… ¿qué haces?… ayyy… pregunto nerviosa, aun adormilada.

Nada... Nada… duérmete… me atreví a decirle desvergonzadamente.

¿estas loco?... Ayyy… se quejo dándose cuenta de la situación.

Si… loco por ti… susurre a su oído y acto seguido le bese el cuello.

Ayyy… nooo… ahhhh… se quejo tibiamente.

Su mano busco la mía, que contenía su cintura, quiso apartarla para liberarse, pero sus reflejos eran torpes. Solo logro sujetar mi mano y trasmitirme el dolor que mi presurosa penetración le estaba causando. Ya tenía más de la mitad adentro y yo seguía forcejeando por meter lo demás.

Ohhhh... Auuuu… ayyyy… chillaba adolorida.

Su cuerpo se había levantado un poco de la cama, sus piernas pataleaban lenta y torpemente, buscaba un impulso que la alejara, sin embargo no lo lograba… en un ultimo arranque de locura le clave con furia el resto de mi verga... Ahora si la tenia completamente atorada… empalada…

ayayayyyy… soltó un lastimero gritito.

Ufff… suspire aliviado al tenerla enganchada.

Primero un espasmo de dolor la recorrió, luego se dejo caer sobre la cama, dejo de patalear, su mano ya no alejaba la mía… se estaba reponiendo de aquella violenta incursión… cielo riveros intuía que no podría escapar…

a pesar de escuchar sus dolientes lamentos, tercamente me negué a retirarle mi verga de su adolorido ano… quizás envuelto por una locura pasional o por un presentimiento de que aquel podría ser nuestro ultimo encuentro… habíamos terminado el ultimo informe… y después de eso que…

eres de lo peor… ni mas vuelvo a trabajar contigo… me reprocho con sufrimiento, como leyendo mis pensamientos.

Lo siento… dije volviendo un poco a mis cabales.

El primer rayo de sol se filtraba por las montañas y me traía algo de cordura, retrocedí un poco. Sin embargo la lucidez mental no me duro mucho… le enfunde nuevamente mi verga…

ahhhh…ya, ya basta… ayyy… se quejo.

Esta bien… dije y le bese el cuello a manera de perdón.

Vi como este dulce beso en el lugar adecuado la desarmaba… suspiro profundamente, y su cuerpo contraído en muestra de dolor se fue relajando…

ayyy… nooo… no me hagas eso…sabes que no puedo…

¿no puedes?

Ahhh… no puedo resistirlo… clamo acalorada.

¿no puedes resistir qué? ¿esto?... Pregunte y volví a besarle el cuello.

Nuevamente se estremeció, no de dolor, sino de placer, incipiente placer. Su pierna intentaba apartarse un poco, quizás para acomodarse mejor, para que su cuerpo saboreara mejor mi verga llenándole el ano.

Eres un maldito… te odio… dijo con voz pausada, develando su excitación.

No di lugar a otro reclamo o insulto: lentamente saque mi verga, ella presiono mi mano, quizás no quería que la saque, no duro mucho tiempo mi pene fuera ya que violentamente se volvió a refugiar en sus intimidades.

Ouuuu… aahhh… exclamo mientras apretaba mi mano.

Repetí el movimiento una y otra vez… estaba dispuesto a llegar al clímax con ella o a costa de ella… cielo riveros lo presentía y pronto se uniría a mi labor…

ahhhh… siii… siii… ohhh….

Su pierna dejo de apartarse tímidamente y procedió a levantarse, hacerse a un lado, para permitirme perforarla a fondo. Su mano ya no sujetaba la mía, sino que nerviosa desabotonaba la parte superior de la camisa, buscando liberar sus senos que no podían rebotar mas allá de lo que la tela le permitía.

Ohhh… siii… mas fuerte… siiii asiii… uhmmmm…

ahora no se quejaba, solo pedía, clamaba por más de ese dulce sufrimiento, no me negué a su ruego… preso de mi propia excitación incremente el ritmo… sus nalgas bailaban con cada salvaje embestida de mi cadera contra su abultado trasero. Su mano guiaba la mía a sus senos, para que pudiera sentir como temblaban de placer por mi vigor…

¿ves?... Como lo que me haces sentir… ahhh… ahhhh…

dejo mi mano estrujando sus vibrantes senos y su mano busco mis cabellos, devolviendo mi salvaje acción de nuestros encuentro anterior, me jaloneo bruscamente la cabeza, hasta que nuestros labios se encontraron… ahora ella también tenia una expresión febril…

ay… que placer… nunca nadie… nadie me hizo sentir así… uhmmm...

Tal vez nuestros sentidos no estaban del todo despiertos aun. Llevábamos minutos así y mi cuerpo no quería soltar su leche, el cuerpo de cielo riveros se negaba a desfallecer… lo estábamos disfrutando demasiado… empapados de sudor… agitados…

ya… acaba por favor… que me matas… ayyy….

Resiste.. Un poco más…

siii… siii.. Ahhhh… ahhh…

mis manos aun en sus melones sentían sus aceleradas palpitaciones. En su cansancio sus labios buscaron los míos, entre jadeos su lengua trataba de incitar la mía, de apurar mi excitación con lujuriosos y calidos besos… lo estaba logrando… mi verga apuraba los movimientos en su interior, mi cadera seguía castigando sin piedad sus firmes nalgas.

Ayyy… no maaas… no masss… que reviento… ahhh…

espera… aguanta… ya casi… ufff…

parecía que cielo riveros iba a reventar del placer, casi al borde de la taquicardia, le hundí con fiereza mi verga, ella la resistió y empujo sus carnosas nalgas contra mi cadera… sabia que me venia y quería sentirme abriéndola al máximo…

yaa… ahhh… uhmmm…

mi mano apretó sus senos mientras llenaba su estrecha cavidad con litros de semen hirviendo… mi entrepierna temblaba con cada ráfaga de esperma que mi verga escupía. Cielo riveros se estremecía con cada ráfaga que su cuerpo recibía…

ayyy… ahhh... Uhhhmmm… exclamo mientras explotaba en un violento orgasmo.

Parecía que no había espacio para más en su conducto anal. Apenas si podíamos respirar. Quise alejarme para buscar aire, pero me mantuvo con mi mano en sus senos. Yo había provocado ese agitado amanecer, debía permanecer junto a ella y disfrutarlo, reponerme a su lado.

Ay… después de lo de anoche… no puedo creer que me hayas hecho acabar así… dijo cielo riveros sorprendida, recuperando el aliento.

Yo tampoco creí amanecer así… respondí aun agitado.

Te dije que mantuvieras a tu pene dentro de tu bóxer… me reclamo.

Si, y yo te dije que no lo provocaras…

pero si yo estaba dormida… exclamo sorprendida.

Si, pero descuidaste tu retaguardia… le dije burlonamente.

Eres un… eres un… me dijo con fingido enojo.

¿un maldito?...

Aun con verga en su ano, volteo a medias… recordó aquel febril reproche… entendí que quería buscar mis labios para congraciarse…

no… eres un insaciable… me dijo con tierna sonrisa.

No, no lo creo… le dije

¿por qué?... Pregunto curiosa.

Porque tu si logras saciarme…

no dijo mas… solo me beso…
tras unos minutos de besos y caricias, nos apartamos, aun cansados pero sin sueño. Los dos recostados de lado, frente a frente, solo nos mirábamos y sonreíamos. Nos negábamos a dar fin a ese mágico momento. Solo ella se atrevió a preguntar:

¿tú crees que esto es normal?, ya sabes, hacerlo tantas veces en una noche…

bueno, creo que al principio es así… uno lo hace como conejo… en todos los lugares que puede y en todas las posiciones que puede… ¿no te ha pasado antes?…

eso de estar así… tal vez 2 o 3 veces, quizás 4 sea mi record… ¡pero no 6 veces en una noche!... Lo tuyo ya es un abuso… me dijo medio en broma medio en queja.

Pero recuerda quien me provoco en la ducha…

esta bien, pero tu ya pareces el conejito de esas pilas duracell...

Tal vez se me paso la mano con ella, pero aunque suene torpe, machista y desatinada la analogía: yo estaba como un niño con un juguete nuevo… no me cansaba de ella… no la quería soltar… estaba embaucado, encantando, extasiado con cielo riveros, con su deliciosa silueta, su candente entrega, su graciosa personalidad. No supe como expresarlo en ese momento, solo le dije:

es que tu me pones así… le explique y nuevamente le bese el cuello, a estas alturas veía que esta caricia no surtía tanto efecto como antes, solo me sonreía cariñosamente.

No, no te va a funcionar… después de esta noche soy inmune a tus tretas… me dijo graciosamente.

Bajo esas circunstancias no funcionaba mi maniobra, creo que primero debía incentivarla un poco y luego si aun estaba algo reacia, besándole el cuello podría darle el puntillazo final... Solo en casos de emergencia, en circunstancias extremas usaría esa táctica, no quería que cielo riveros terminase inmune a esa caricia. En ese momento estaba cansado y con la ingle algo adolorida por el uso continuo. Solo quería bromear con la idea:

¿sabes que?, el numero 6 no me gusta… vamos por el 7… le propuse.

No… llegaras solo al 7… conmigo no cuentes… respondió con mueca de sorpresa y cansancio.

Después de esa breve platica, decidimos abandonar la cama, testigo de la iniciación anal de cielo riveros así como de nuestro último encuentro. Aun era temprano, pero el sol ya esparcía su luminosidad y calor con mayor fuerza.

Cielo riveros pidió ducharse sola, no quería tentar suerte, se conformaba con las 6 veces que lo hicimos ese fin de semana. Además su ano término enrojecido, algo irritado, era comprensible que quisiera alejarme de la tentación de llegar al séptimo encuentro sexual de ese fin de semana.

Me duche y al regresar a mi habitación vi a cielo riveros vestida con su pantalón blanco pero con mi camisa, intentaba arreglar su blusa… una cosa era ir a mi casa mostrando un sugerente escote y otra era regresar a la suya, a la vista de sus padres, ellos notarían el maltrato en su blusa.

¿tienes aguja, hilo y botones?... No creo que a mis padres… ay… ¡mis padres!… les dije que haría un trabajo pero no les avise que me quedaría fuera… estarán preocupados… dijo con aire de culpabilidad.

Si quieres te presto mi teléfono para que los llames…

no, es muy temprano, voy a enviarle un mensaje al celular de mi papa… si me dice algo, pondré de pretexto que fu culpa de la red telefónica que tardo en enviar el mensaje…

saco de su cartera su celular y al revisarlo, su expresión cambio: primero fue de sorpresa por la cantidad de llamadas perdidas y mensajes… luego fue preocupación al notar que todos eran de sus padres… al final algo de decepción al no encontrar ninguno de javier… al parecer su amiguita cariñosa lo había tenido tan ocupado como yo mantuve a cielo riveros.

Al principio note su gesto incomodo por esa desatención de javier, pero después pareció no darle importancia, total con lo sucedido en mi casa creo que ella se había desquitado suficiente.

Http://www.Todorelatos.Com/todorelatos_gfx/5/todorelatos_51235_01.Jpgnos dedicamos a coserle los botones a su blusa, aunque quedo bien, era obvio que no eran los originales, además había algunos rasguños propios de la forma brusca en que le había abierto la blusa en el baño de la facultad.

No podía regresar así a su casa. Cielo riveros se acordó del polo de mi prima que vio en mi closet y decidió usarlo, era mejor que su blusa. Como me lo imagine le quedo un poco pequeño y apretado, como un top. Como su brassiere roto yacía en el baño de la facultad, ella estaba protegida solo por el polo. Sus pezones eran apenas contenidos. Al final ella quedo algo así como en la foto.



Luego fuimos a tomar desayuno. Esta vez no se ofreció a limpiar la mesa, temía por su retaguardia. Mientras yo limpiaba la mesa ella lavaba las tazas.

De espaldas a mi, ella terminaba su labor, sus movimientos no eran tan sugerentes como cuando limpio mi mesa, pero sus formas, sus nalgas… era para comérsela… simplemente me acerque por detrás y la abrace…

¿qué haces?... Protesto juguetonamente.

Nada… me gusta verte así… hacendosa… le dije cariñosamente, sintiendo sus abultadas nalgas cerca de mi entrepierna.

No vamos a llegar a la séptima… me advirtió risueña.

Parece que cielo riveros ya había sentido el bulto de mi ingle en sus carnosas nalgas, sin embargo no me alejaba de ella. Seguramente le gustaba que le abrazara de esa forma, le gustaba sentirme. Cuando finalizo su labor:

gracias… le dije.

No, gracias a ti… por todo… respondió, luego volteo el rostro, entendí que quería darme un beso y le correspondí.

Estuvimos unos segundos así, hasta que sintió que mi verga iba endureciendo, entonces se aparto…

no… mantenlo quieto… que se me va hacer tarde… mis padres deben estar preocupados… dijo excusándose.

Esta bien… dije con voz de niño resentido.

Otra vez será… me dijo cariñosamente y me dio otro beso.

Vaya, pensé que nuestra historia sexual terminaría ese día, sabia que no debía ilusionarme mucho, pero su comentario me estaba dejando una puerta semi abierta, que yo debía tocar o empujar para ingresar… no me estaba negando esa posibilidad…

se alejo de mi, busco su cartera y como me vio un poco desilusionado porque no llegamos al séptimo encuentro sexual, me pidió que la acompañe. Pobre cielo riveros, no sabia que el numero siete estaba mas cerca de lo que ella pensaba.

Caminamos por mi sala, yo detrás de ella observaba maravillado el vaivén de sus caderas, de ese coqueto andar que lucia para mi, sabia que la estaba observando. Estaba dispuesta a salir y así terminar su martirio en mi casa… solo que su vanidad le jugo una mala pasada…

cerca a mi puerta hay un espejo de buen tamaño, esta por encima de un sofá. Mi madre lo puso allí porque quería darse una última revisada a su ropa o su cabello antes de salir, cosas de mujeres… cielo riveros no fue la excepción a ese vistazo final, hizo una última parada frente a ese espejo... Mi verga también le tenia reservada una ultima parada de despedida.

Se miro en el espejo, mientras le daba unos últimos retoques a su maquillaje, yo me ubicaba detrás de ella y la abrazaba. Solo que esta vez mi pene estaba mas notoriamente duro y se ubicaba entre sus redondas nalgas.

Te dije que no vamos a llegar al siete… me dijo sin soltar su cartera en busca de sus implementos de maquillaje, sin embargo sentí que empino un poco las nalgas, no se si por alerta o por la fascinación que le causaba mi dura verga intentando separar sus gordas nalgas.

Yo solo te abrazo… me excuse sin dejar de presionar mí bulto en su raja.

Ahora mis manos jalaban su cintura hacia mí, empujando sus nalgas contra mi ingle. Ella no se quejaba, seguía mas preocupada en su apariencia. Le bese el cuello, por el espejo pude ver como ahora si surtía efecto, entrecerró los ojos, por un momento se olvido del maquillaje, luego volvió en si:

no chris ya no… mira que me he tenido que echar crema humectante para aliviar el ardor que tenia… protesto tiernamente.

Lo siento… es que no puedo dejarte… si quieres te regalo un frasco entero de crema humectante… yo mismo te la pongo… le dije en graciosa suplica.

Ay… eres terrible… dijo cediendo un poco, sin embargo se hizo la difícil nuevamente: ya es tarde… tus padres van a llegar.

En otros tiempos eso hubiera hecho menguar mi erección, pero en estas circunstancias; sintiendo el cuerpo de cielo riveros esa excusa no funcionaba. Además eran casi las ocho, era muy temprano.

Mis padres seguramente llegaran mas tarde… le dije subiendo mis manos por su abdomen en busca de sus senos.

¿seguro?... Pregunto cielo riveros retrocediendo en su negativa, pero avanzando en la presión que sus nalgas ejercían contra mí.

Mis manos ya no sujetaban, ni presionaban su cintura hacia mi entrepierna, sin embargo su trasero seguía empujando contra mi verga. Cielo riveros lo estaba haciendo a voluntad, estaba sintiendo mi duro pene entre sus jugosas nalgas y lo estaba disfrutando, quería sentirlo mas cerca, abriéndola más y por ello no dejaba de ejercer presión. Mis dedos masajeaban sus senos a través de la tela, sintiendo su creciente agitación.

Estoy seguro de que van a llegar en un par de horas…

no… nos pueden atrapar… respondió, pero esta idea aumentaba la adrenalina de la situación, por el tono de su voz lo sentí.

No importa… le dije cerca al oído, besándola detrás de la oreja.

Se estremeció, su cabeza se fue hacia atrás, mientras dejaba que mis manos y mi verga la sobaran a través de su ropa. Quizás la idea del séptimo encuentro no le disgustaba tanto después de todo… o era su última venganza por no recibir llamada ni recado alguno del cornudo de su enamorado.

No debemos hacerlo… nos pueden ver… decía visiblemente excitada, pasaba su mano por detrás, tocando mi cintura, sosteniéndola y empujándola por momentos contra su cuerpo.

Las cortinas están cerradas, en calle no hay gente… le dije.

No respondía nada, pero sentía la calidez de su cuerpo, la forma como buscaba rozar mi ingle con sus caderas… no se apartaba, me buscaba… tome esto como un signo de aprobación.

Baje una de mis manos a su cintura y como pude empecé a bajar su apretado pantalón por un lado… tomo mi mano para impedirlo… sin embargo no ofrecía mayor resistencia… le bese el cuello, movió su cabeza nerviosamente, con sus ojos cerrados… ahora su mano me ayudaba a bajar su pantalón…

ayyy… ¿por qué hago esto?... Se preguntaba cielo riveros, sorprendida por su actitud, por esa ansiedad de ser penetrada nuevamente.

Su pantalón ajustado y su pequeña tanga habían dejado escapar sus nalgas que lucían mas abultadas. Su mano por encima de mi pantalón masajeaba mi verga, sonreía al sentirla dura… sabia que ella, su cuerpo, sus gestos provocaban esas continuas erecciones… para ese momento no sabia quien era el esclavo y quien el amo… quien abusaba de quien… quizás ambos éramos victimas de las circunstancias…

quítate eso ya… me pedía, en alusión a mi pantalón.

No me hice de rogar, me lo baje lo más rápido que pude, mi verga salia disparada y prácticamente reboto en su nalga. Se sorprendió al sentir su rigidez, y yo me sorprendí al sentir la firmeza de sus nalgas con mi adolorida verga.

Al sentirla, cielo riveros se inclino un poco, pensé que quería que la penetrara pero note que su pantalón aun estaba por encima de su pubis. Sin embargo al inclinarse, verga rozo su ano… un gestillo de dolor afloro en sus labios… su mano me aparto, quería que la dejara bajar su pantalón…

no seas desesperado… me reprocho.

Cuando su pantalón estuvo a la altura de sus rodillas, no aguante con mi verga mi fui hacia adelante. Cielo riveros quiso reaccionar, subir al sofá, pero fue muy tarde, son sus piernas aun atrapadas por el pantalón, su intento de saltar al mueble no prospero, mas bien fue repelida al chocar sus rodillas... Se fue para atrás… donde mi verga ansiosa y estoicamente parada la aguardaba…

ayyy... Uhmmm…. Exclamo sorprendida por lo brusco de la acción y la certeza de mi instinto para hacer diana en su agujero.

Quise creer que mi pene se inserto en su ano, pero por la forma rápida en que mi verga prácticamente se deslizo por su interior, la lubricación que tenia era propia de su conchita, además por su gesto note que el dolor no era producido por una penetración anal.

Cielo riveros tenia media verga introducida en su húmeda vagina, su espalda se contrajo un poco por el impacto, sus dedos arañaban el respaldar del sofá.

Contigo nunca se… ahhh… ahhh…

no la deje quejarse, solo tome entre mis manos su estreche cintura y comencé a atraer y alejar sus enormes caderas. Sus labios vaginales, poco usados esa noche, apretaban gustosamente mi verga... Agradecidos de que al fin me acordara de ellos…

que bien se siente esto… uhmmm… decía cielo riveros.

Ahora mis caderas empujaban hacia delante y sus nalgas rebotaban contra mi ingle. Con su torso inclinado hacia delante y sus manos apoyándose en el mueble, ella resistía mis embates. Por el espejo frente a mi veía como cielo riveros con los ojos cerrados y mordiéndose el labio (quizás para no ser escuchada en la calle) gozaba de mi labor, su polo apretado se iba levantando producto del ir y venir de su cuerpo… sus gordas nalgas vibraba a mi ritmo…

ahhh sii… asiiii…. Ahhhh…. Masss….… pedía cielo riveros.

Ahora la atraía y alejaba con mas fuerza, su recorrido era mayor… mis ojos se fijaron en su raja, la forma en que se abría y cerraba cuando mi pene entraba y salía… vi su ano… rosado igual que la crema que le habían untado… sabia que no debía… pero…

bájate bien el pantalón… le dije, prácticamente le ordene sacando mi verga, apartándome un poco para dejarla obrar.

Con rostro fogoso me miro por el espejo, no dudo en hacerme caso, bajo su pantalón blanco y su tanguita lo más rápido que pudo, no le importo que se manchara en el suelo. Estaba tan excitada, pensaba que aquel pedido encerraba un cambio de posición, que le permitiría unirse a esa faena…

se inclino para liberar una de sus piernas del pantalón, aproveche este descuido, esta inclinación que ponía su ano a mi nivel, para enfundarle mi verga por ese pequeño agujero.

Ayyyyy… caraj… auuu… bramo adolorida.

En acto reflejo busco huir, subió al mueble, pero yo la seguí, no pudo huir mas… arrodillada sobre el sillón, con su cuerpo rígido por el dolor, sus brazos apoyados en la cabecera del sillón, sus manos haciendo puños, su rostro enrojecido y adolorido… y claro un cuarto de verga en su maltrecho ano…

ayayay… eres una mierd… auuuu… ahora si que me rompiste el culooo… ayyy… dijo sollozando, apoyando su frente en el respaldar del sillón, no dejaría que la viese sufrir a través del espejo.

Mi verga sufrió también las consecuencias, casi la sentí doblarse en este brusco movimiento… pero tenía mi recompensa… cielo riveros estaba encerrada entre mi cuerpo, el sillón, el espejo, la pared… no podría huir… estaba atrapada… yo tenia su calido agujero y su enorme trasero a mi disposición…

ayyy… mi culitooo… auuu…. Se quejaba.

Se que lo mío ya rayaba en la demencia, era una obsesión por poseerla de esa forma… estaba jugando con fuego, tal vez después de aquel brutal acto anal cielo riveros se alejaría definitivamente de mi, quizás seria lo mejor, total después de que ella saliera por mi puerta no era seguro que lo nuestro continuase… o tal vez era un reflejo de mi subconsciente, quería romperle el culo para que nadie mas le provocase ese oscuro placer que yo le hice descubrir… menos aun el idiota de javier… pensarlo me hizo enfurecer…

no… no… no lo hagas… ayyy…

la primera y forzosa penetración había terminado, acaba de iniciar la ultima faena anal en mi casa… era casi una violación… escuchaba sus lamentos y ruegos pero no me detenía, sin mayor resistencia de su parte y posesionado de su cintura, seguía clavándole mi verga con mas fuerza… mientras su espalda se contraía con cada arremetida, ella levanto el rostro, sufrimiento, furia, se veían en su expresión…

uyyy… ouchhh… ¿te gusta no?... Auuu… seguro la frígida de tu enamorada no te complace tanto… ayyy… dijo en voz entrecortada, poseída por la ira, quizás ya no le importaba si la oían afuera.

¡cállate!… le ordene y le di un palmazo en sus temblorosas nalgas.

Presa de la rabia por esa forzada cabalgata anal, buscaba desquitarse con sus palabras, herirme de esa forma. Ella no sabía que eso también me llenaría de ira y que su ano pagaría las consecuencias… me olvide de lo áspero y doloroso de las penetraciones, solo incremente mi ritmo de manera despiadada…

ayyy… ahhh… ahhh… se quejaba, gemía enloquecida.

Por la furia que me había desatado no me di cuenta que su espalda que antes rígida soportaba mis embestidas, ahora se arqueaba, había abierto mas sus piernas y empinado el trasero procurando recibir mi verga hasta el fondo. Ella también comenzaba disfrutar de este demencial acto anal…

ves… ¿te gusta no? ¿acaso él te hace gozar así?... Le espete enardecido.

Cual enamorados celosos nos reclamábamos por nuestros otros amoríos, tal vez en aquel salvaje encuentro estábamos desfogando toda la tensión de aquella relación indefinida aun.

No… no… uhhmmmm… ahhhh… gemía cielo riveros casi sin aliento.

¿no que?... ¿no te gusta? ¿javier no te hace gozar así?... Replique enloquecido.

Su rostro que antes se ocultaba, procurando no verme por el espejo, finalmente dio la cara… su rostro enrojecido de por lo agitado de nuestro encuentro, su expresión no era de dolor, era de placer, de un turbio placer…

ahhh… si me gusta… uhmmm… dijo con tinte de locura.

¿qué mas?... Le exigí mientras le daba otro palmazo a sus gordas nalgas.

Ahora cabalgaba con mayor fuerza y a pesar de sentirla al borde de desfallecer, cielo riveros empujaba su voluminoso trasero contra mí, rebotando en mi ingle con furia… el sonido producido por este golpeteo, las nalgadas que le di, mis jadeos, sus gemidos, nuestros exaltados reclamos… íbamos a ser afortunados si nadie nos escuchaba, y por lo salvaje del ruido cualquier parroquiano pudo llamar hasta a la policía avisando por una presunta violación… pero no nos importaba, cielo riveros apenas con aire gemía, no podía articular palabras… o no quería darme la razón en mis preguntas… hasta que al fin…

uhhhmmmm… no… nadie… ahhh… nadie me lo hace como tú… ahhh… me dijo volteando el rostro mientras su cuerpo temblaba por mis salvajes embistes, quería confesármelo mirándome a los ojos.

Me lleno de satisfacción oírla, sin embargo no quise menguar en el suplicio que le daba, le acaricie la espalda, ella se reconforto… pero quise ver temblar sus senos, su estrecho polo termino remangado por encima de sus senos…

ahhh… ohhh… uhhmmmm..

Me miro sorprendida por el espejo, no podía creer que mi vigor hacia saltar de esa forma a sus senos, por momentos una expresión de dulce sufrimiento, luego desfalleciente, pero volvía a ser pasional… excitación total, al borde del clímax…

acaba… acábame… ohhh… ahhh

sintiéndome a punto de terminar aquel brutal encuentro, mis manos abandonaron su cintura, que iba y venia castigándose sola, y las puse sobre sus hombros, para empujar con mayor fuerza su cuerpo contra el mío, mientras mi verga con ritmo demencial entraba y salía de su ano…

ahhhh… yaaa… uhmmmm… ufff… exclamo siendo invadida por un brutal orgasmo.

Su columna se contraía mientras mi verga escupía semen por séptima vez en sus ardientes intimidades. La raja de su culo termino abierta de par en par, sus carnosas nalgas arremangadas contra mi ingle.

Exhausto me incline hacia ella, mis manos soltaron sus hombros y fueron hacia sus senos que aun temblaban de placer, sentía su agitada respiración... Cielo riveros con se apoyaba los codos sobre el mueble… con expresión extasiada agradecía mis caricias a sus melones, aun respiraba aceleradamente por la boca….

Cuando su respiración volvió a la normalidad, giro, aun con mi verga en su ano, sus senos desnudos y con expresión pasional, me tomo por el borde de mi camisa, me jalo… la bese….

No quiero ser solo la que coges cada vez que tienes ganas ¿entiendes?... Me dijo angustiada mirándome con deseo, ternura.

No quería que la viera como mi prostituta personal, aquella que solo usaba para calmar mis deseos carnales. Era evidente que no solo quería ser tratada como objeto, como un cuerpo que sabia que despertaba muchas morbosas pasiones en los hombres, quería algo mas… una relación amorosa tal vez..

¿vas a terminar con ella?... Me pregunto, casi me pidió.

No supe que responderle… una cosa era el cariño de una relación como la que tenia con viviana… otra el sexo alocado, el placer llevado a su máxima expresión que sentía con cielo riveros… tal vez con cielo riveros también podría llegar a esos momentos placenteros de una relación de enamorados, a aquella convivencia armoniosa… en ese momento no supe que decir… y fui momentáneamente salvado…

el sonido de la puerta de mi cochera abriéndose… alguien la había accionado por control remoto… el auto de mis viejos… estaban cerca…

tenemos que arreglarnos... Le dije mientras escuchaba el motor de un auto acercándose.

Respóndeme… me exigió, casi sollozando, jaloneando mi camisa.

Esta bien… lo haré… dije mirándola fijamente. En ese momento el auto se ingresaba en mi cochera…

sonrió con cierto alivio, alegría… me dio otro beso… luego la aleje rápidamente… escuche el motor del auto apagándose… estaban por bajar…



escuche el ruido de mis padres descendiendo del vehiculo, en poco segundos entrarían a la sala. Mas allá de ser sumamente vergonzoso que te atrapen semidesnudo practicándole sexo anal a una chica, también esta el tema de que esa chica no era mi enamorada… y mis padres adoraban a viviana.



Saque mi verga y note que mis líquidos empezaban a escurrir desde su interior… iba a manchar el mueble y tal vez su ropa.



No… cuidado, mi ropa… me dijo preocupada, mientras se apuraba en cubrir sus esplendorosos senos.



Saque un pañuelo y limpie como pude sus melosas intimidades, una expresión de sufrimiento surco el rostro de cielo riveros, por lo apurado y tosco de mi accionar y por el evidente continuo uso que le di a su ano.



Una vez limpia, cielo riveros bajo del sillón y nuevamente se enfundaba su pantalón y su diminuta ropa interior. Por mi parte yo limpiaba mi adolorida verga y la guardaba en mi boxer, me subía el pantalón cuando escuche la llave en la puerta.



Cielo riveros ya cambiada, se sentaba sobre el sillón para disimular la situación, lo que no pudo disimular fue su expresión de dolor, su ano estaba muy maltratado.



Hola… salude un poco nervioso a mis padres que aparecían.



Hijo… ¡que madrugador!…me respondía sorprendida mi madre.



Buenos días… saludo formalmente mi padre al notar la presencia de cielo riveros en la sala.



Buenos días… respondió cielo riveros un poco avergonzada.



Te dije que nada de fiestas… repuso mi madre un poco seria.



No… estuvimos estudiando… respondí.



¿estudiando?... Repuso mi padre con cierta sorna, no se comía ese cuento tan fácilmente.



Haciendo un informe para la universidad… repuso cielo riveros algo sonrojada por el cuestionamiento de de mi padre.



Si, parece que si… la sala esta como la deje… dijo mi madre.



Hubo un incomodo silencio, cielo riveros no se movía del sillón, presa de la vergüenza evitaba mirar a mis padres.



Ustedes deben estar cansados… y nosotros vamos de salida… dije intentando terminar la bochornosa situación.



Bueno… toma… lleva a cielo riveros a su casa… me dijo mi padre ofreciéndome las llaves del auto. Creo que se percato que su actitud incomodaba a cielo riveros.



Tras darme sus llaves desaparecieron por el pasillo hacia su dormitorio. Solo entonces cielo riveros se levanto… adolorida a más no poder… me abrazo aliviada porque lo peor había pasado…



disculpa si algún comentario o gesto de mi padre te incomodo…



no te preocupes… mejor vámonos… me dijo.



Salimos, cielo riveros caminaba dificultosamente… yo la abrazaba para disimular su andar… subimos al auto y enrumbamos hacia su casa.



En el trayecto ninguno hizo mayor comentario. Cielo riveros se sentaba de lado, por momentos soltaba suspiros adoloridos, gestos de sufrimiento. Yo temía que sus padres lo notaran. La preocupación de cielo riveros no iba por ese aspecto:



creo que lo que te pedí no fue muy justo… me dijo.



¿a que te refieres?.... Pregunte curioso sin dejar de manejar.



Ya sabes, eso de que termines con ella… se que tienen una bonita historia juntos… y no se… tal vez no sea el momento indicado… me explico con cierto malestar.



Bueno… creo que tienes razón… mira, estamos por finalizar este ciclo y si nos dejamos distraer por estas cosas podemos echar a perder el trabajo hecho en este curso y en todos los demás… le dije.



Si… tal vez si esperamos un poco hasta después de los exámenes finales o si lo llevamos con cuidado, no se…



si, puede funcionar… agregue optimista, finalizando el comentario que ella no se atrevió a completar.



Al escucharme su expresión nostálgica, de pena, fue cambiando, contagiándose de mi optimismo. Apoyo su cabeza en mi hombro y me dejo conducir tranquilo. Al llegar a su casa me estacione en la acera del frente.



Si quieres te acompaño para explicarles a tus padres el por que de tu demora… le ofrecí.



No, mejor no, sabes, ellos pueden estar molestos y si nos ven juntos, tal vez puedan sacar las mismas conclusiones que tu papá… no quiero que mis padres piensen mal de mi… me dijo.



La deje ir, vi como a medida que se acercaba a su puerta iba disimulando su caminar, intentando ocultar las dolencias que aquejaban a su ano, para que sus padres no lo notaran.



Luego regrese a mi casa. Seguramente no vería a cielo riveros hasta el día siguiente a la hora de entregar el informe. A quien si vería esa noche seria a viviana.



Después de todo el sexo con cielo riveros, estaba con las bolas hinchadas, adoloridas… viviana se alegro de que la visitara en su casa y se sorprendió de que no le propusiera llevarla a nuestro nidito de amor. Le dije que estaba muy cansado y ella me comprendió. Nos quedamos sentados en la sala de su casa viendo una película.



¿como podía estar a su lado y en su casa?, me había convertido en un sinvergüenza, en un caradura. Lo mas digno hubiera sido terminar con viviana, a pesar del dolor que pudiese causarle… pero no estaba seguro de que lo mío con cielo riveros llegase a funcionar, ¿y si era algo pasajero? Además no le escuche decir que terminaría con javier… también estaba lo de los estudios, envolverme en esas decisiones a puertas de terminar el ciclo, me podía desconcentrar y necesitaba enfocarme en mis cursos…



al final pensé en mi conveniencia; dejaría pasar las cosas y haber que sucedía: si lo mío con cielo riveros no llegaba a prosperar tal vez le estaba ahorrando un dolor innecesario a viviana... Si, era egoísta, pero creo era la mejor solución para todos (sobre todo para mí) por el momento...



Al poco rato de llegar a esa conclusión, los padres de viviana bajaron.



Tu mamá y yo vamos a cenar afuera, ¿nos acompañan?...



No me sonó mal la idea, después de todo el desgaste que hice ese fin de semana, sentía que debía reponer fuerzas…



¡que abusador!, encima que le pongo cuernos a su hija, quieres cenar gratis, me recrimino mi conciencia… pero tal vez ese ambiente cielo riverosr me iba a hacer recapacitar, iba a aceptar… solo que viviana me dio un leve codazo…



gracias papi, pero chris ha estudiado de amanecida y debe estar cansado… yo tampoco tengo muchas ganas de salir…



bueno, esta bien, les traeremos algo de todas formas… dijo mi hasta entonces suegro.



Pórtense bien… dijo la madre de viviana con una sonrisa bonachona antes de salir.



Cuando escuchamos su auto alejarse viviana se acerco a la ventana para cerciorarse de que no regresaban, ya saben, a algunos padres les es difícil dejar a la hija con el enamorado, sobre todo en una casa vacía.



Ya se fueron… ven… me dijo tímidamente.



¿a dónde?... Pregunte curioso, sin entender.



A mi cuarto… dijo sonrojándose levemente.



Ah… ok… respondí un poco aturdido.



Ella subió la escalera hacia su habitación, yo iba detrás de ella aun sin entender… ¿querrá mostrarme uno de sus peluches nuevos?, pensé… no creo que quiera… ¿o si?... Bueno ayer casi me propuso ir a mi casa para tener relaciones, y hoy parece querer lo mismo… ¿a que se debe este cambio? Viviana no es así…



recordé que hubo un par de ocasiones en que nos quedamos solos en mi casa y en su casa, pero nunca paso nada, se moría de vergüenza. Sentía cierto respeto por su casa y la mía. No chris, no es correcto hacerlo aquí… me decía generalmente. Claro que horas después terminábamos en un hotel lo que habíamos empezado en nuestras casas.



Entramos a su habitación, me senté en su cama…



se que has estado muy tenso últimamente… me dijo.



¡diablos!, creo que ya se dio cuenta que la estoy engañando… pero ¿por qué me trajo a su habitación? ¿para regañarme?… quizás eligió este lugar por si es que sus padres regresan, para que no escuchen nuestra discusión…



si bueno… intente argumentar.



Se que esto de tus estudios te tiene así…



claro, claro… la universidad y esas cosas… dije aliviado.



Entonces pensé que te podía ayudar a que te relajes… dijo sonriendo tiernamente y empezó a quitarse el discreto top que llevaba.



Oye, eso no es necesario… dije sintiéndome un poco mal al verla así, esforzándose por hacerme sentir bien, sobre todo cuando la causa de mi estrés eran los cuernos que yo le ponía.



Quiero hacerlo… dijo acercándose.



Su top yacía en piso, luego me dio un apasionado beso y guió mis manos hacia los broches de su brassiere. Parecía nuevo, muy bonito, de color negro, vaya le quedaba muy bien…



sin embargo me era un poco rara la situación ya que yo era el que generalmente iniciaba las acciones… pero me estaba gustando su cambio de actitud, que tomara la iniciativa, además ya teníamos casi un año juntos, era tiempo de que se soltara más en ese aspecto…



además quiero darte tu regalo de aniversario… me susurro dulcemente al oído.



Error… no teníamos casi un año juntos… ese día cumplíamos exactamente un año juntos… ¡que estupido! ¿cómo lo pude olvidar?... Por eso quiso ir a mi casa ayer. Quería que recibamos juntos ese día, que hiciéramos el amor toda la noche tal vez… solo que yo tuve sexo toda la noche con cielo riveros…



lo siento viviana… no me acorde… dije, dejando su brassiere, que ya estaba desabrochado y que simplemente cayo, dejándome ver sus medianos senos blancos, sus rosados pezones



no te preocupes… relájate… te tengo una sorpresa… me dijo sonriendo, ahora procedía a bajarse la falda.



¿es eso una tanga?... Dije sorprendido y maravillado.



¡wow! ¿de donde salio esta mujer? ¿qué paso con mi enamorada?... Parecía que si, su ropa interior era nueva, seguro salida de un catalogo de victoria secret´s… su tanguita era negra también, con algunas partes translucidas… era deliciosamente pequeña… no veía ningún vello fuera… ¡vaya! ¿no me digas que se rasuro su conchita?... Si quería sorprenderme, lo logro… me dejo con la boca abierta…



viviana sonrió traviesamente al notar el efecto que su apariencia causo en mi… la veía mas desinhibida, no tan mojigata como hace unos minutos cuando a media voz me invito a su habitación… no, ahora se sentía como una mujer capaz de excitar a su hombre…



pero esta no es tu sorpresa… me dijo con una incipiente coquetería.



¿y que es?... Pregunte curioso… ¿un perfume?, ¿un cd de música?...



Sonrió bellamente y me miro a los ojos, estaba lejos muy lejos de acertar…



es algo que me has pedido varias veces y siempre me negué…



en ese momento, y por lo sucedido ese fin de semana, mi mente era un desorden de ideas, de sentimientos, así que no estaba para adivinar acertijos… viviana lo entendió por mi confundida expresión… no me dijo nada, simplemente se subió a la cama, gateo hasta estar a la altura de las almohadas y se quedo así… en cuatro patas… para rematar la idea empino su trasero…



no me digas que… dije atónito.



Si mi amor… este es tu regalo… repuso viviana con un intenso brillo en sus ojos.



¡me estaba obsequiando su culo por nuestro aniversario!… me ofrecía su virginidad anal como regalo… me debe amar mucho… pensar que en otras ocasiones se negaba a ponerse en esa posición o si lo hacia terminaba lloriqueando, lo cual me hacia arrepentirme de continuar…



incluso poseerla en 4 por la vagina era difícil, porque no le gustaba… decía que sentía como si la estuvieran violando… y ahora prácticamente me estaba pidiendo que la viole…



¿estas segura?... Dije con ansiedad.



Mi verga estaba por estallar viéndola así. No tenia el cuerpo de cielo riveros, sus enormes y firmes nalgas, pero que una mujer llegue a amarte de esa forma, que a pesar de sus miedos y convicciones te ofrezca su trasero virgen para que se lo inaugures… eso es algo igual de excitante, sobre todo en esta niña que con ingenua ansiedad aguardaba descubrir este nuevo placer…



si chris … ¿no quieres disfrutar de tu regalo?... Me dijo incitando aun mas mi lujuria.



Si, si claro… dije saltando sobre la cama con mi verga en ristre.



Me ubique detrás de ella y aparte su pequeña ropa interior. El panorama no eran tan carnoso como el de las nalgas de cielo riveros, pero si apetecible: su blanca piel, sus bien formadas pantorrillas, muslos… no era voluptuosa, pero su cuerpo no podía envidiar la de una modelo, viviana era de proporciones estéticamente adecuadas…



me la iba a clavar en una, quizás así mataría el recuerdo de cielo riveros… pero…



¡maldición!... Exclame.



¿qué sucede?... Pregunto curiosa, volteando desde su posición.



No traje nada para ayudarte a lubricar… si lo hacemos así te puede doler mucho… le explique con decepción por mi mala suerte.



Yo tengo… me dijo con alegría y señalo su mesita de noche.



¿perdón? ¿cómo? ¿cuándo?... Pregunte atónito.



Después te explico… me dijo con cierta impaciencia, casi nerviosismo.



Era cierto, no era momento de dar explicaciones, si dejaba pasar mas el tiempo tal vez su aplomo iba a decaer, se pondría nerviosa y no me dejaría inaugurar su pequeño agujero.



Sobre su mesa de noche había un pequeño paquete envuelto con papel de regalo, lazos y esas cosas, solo faltaba una tarjeta… bueno, ya saben lo que había adentro…



sin perder tiempo me unte el gel en mi verga y le unte otro tanto en su rosado ano, se estremeció al sentir este masaje. Quería clavársela ya, pero me contuve. Decidí tener la misma consideración que tuve en la iniciación anal de cielo riveros: usaría primero mis dedos y cuando la penetración fuera propicia le insertaría mi verga.



Así lo hice, pacientemente me tome unos minutos para seguir el mismo procedimiento que seguí con cielo riveros dos semanas antes. A diferencia de ella, viviana presa de la vergüenza, no soltaba ni un quejido, menos aun un gemido. Por momentos parecía una estatua, pero los temblorcillos y el estremecimiento que mis dedos ingresando a su ano le producían se manifestaban por momentos.



Cuando sentí que era el momento, saque los dedos y ubique mi verga en su pequeño agujero… parecía un momento histórico, quizás burdo y tonto, pero de cierta forma aquello podía definir nuestra relación…



acá vamos... Dije y no escuche respuesta, ella sabia lo que venia.



Empuje suavemente contra su arrugado esfínter, ella iba huyendo al sentir la presión, pero la detuve sujetando su cintura… empuje y empuje hasta que la cabeza de mi verga entro…



ayyy mamita… auuuu… se quejo con voz apagada, sollozante, al sentir violado su ano.



Tranquila… lo haré suavemente… le dije acariciando su espalda.



Seguí empujando hasta que un cuarto de verga estuvo dentro de su núbil agujero… ella ahogaba exclamaciones de dolor en la almohada donde tenia enterrada su cabeza, aun así parecía dispuesta a continuar a cumplir con regalarme su angosto agujero…



vamos relájate… le decía.



Su cavidad anal estrechaba mi endurecida verga, su nerviosismo hacia que lo contrajera por momentos. Sentía que no podía avanzar más, así que fui simulando el acto sexual, atrayendo y alejando su cintura lentamente…



su ano a tropezones iba cediendo, insertándose de a pocos mas y mas mi verga, hasta un poco mas de la mitad…



ay no… ya nooo… auuuu… me pedía llorosa.



Ya va a pasar…



mi verga nuevamente se detenía, necesitaba mayor fuerza. Deje de lado mi delicadeza, estaba ansioso por poseer finalmente a viviana de esta manera, y tal vez exorcizar el recuerdo de cielo riveros. Si antes estaba arrodillado detrás de ella, ahora ponía mis dos pies sobre la cama, con las rodillas flexionadas a ambos lados de las caderas de viviana…



nooo… ¿qué haces?... Auuuu… chillo viviana.



Con mi propio peso ahora empujaba mi pene hacia el interior de viviana, intentando mantener el equilibrio con mis manos en su cintura. Sus carnes se abrían dificultosamente, las paredes de su ano hacían presión para no dejarme entrar… pero un breve descuido, quizás un leve suspiro hizo que su cuerpo cediera y terminara insertándose toda mi verga…



ayayayay.… sácalo… por favor… sácalo… auuu… se quejo con su cabeza de lado.



Tranquila… espera un rato… si no te acostumbras lo saco… le dije, aunque esta promesa por lo general es una mentira piadosa.



Ayyyy… esta bien… confío en ti… me dijo adolorida.



Me acomode mejor entre sus quejidos, por momentos su ano palpitaba fuertemente en mi verga, en otros instantes se relajaba… aproveche uno de esos instantes de relajación para empezar a meter y sacar mi verga suavemente…



no todavía no… espera… ayyay…



vamos relájate… lo estas haciendo bien… la animaba.



Vi su rostro apoyado de lado en la cama, con una expresión de dolor, enrojecido, sudoroso, con algunas lagrimas pugnando por salir… me deje llevar por mi propia excitación, la fricción de su recién inaugurado agujero… fui incrementando mi ritmo…



no… por favor ya nooo… auuu… me suplicaba.



Es mi regalo ¿lo recuerdas?... Me atreví a decirle.



Su expresión cambio de dolor a sorpresa por mi desconsiderado comentario, sin embargo se callo unos instantes y decidió soportar… la cama comenzaba a retumbar producto de mi creciente vigor…



ayyy auuu…. La escuchaba quejarse, algunas lágrimas bañaban sus mejillas, pero embebido en mí lujuria no le preste mayor atención.



En un momento escuche el chirrido de una puerta. Me detuve pensando que sus padres me iban a atrapar sodomizando a su hija. Cuando voltee me di cuenta que una de las puertas de su ropero se había abierto, quizás los retumbos de la cama hicieron que la puerta cediera, y ahora mostraba su espejo… y su reflejo le permitió ver a viviana como la sometía…



ay nooo... ¿qué me haces?... Auuu... Exclamo horrorizada.



Aquel espectáculo no le estaba siendo tan grato como lo era para mi: ella con su trasero empinado, su negra y pequeña ropa interior hecha a un lado, su espalda inclinada hacia la cama, sus manos arañando la gran almohada sobre la cual su rostro descansaba de lado… y claro quien les escribe empujando frenéticamente su verga en su estrecho ano…



¡me estas violando!... Ayyy… detente… auuu…



espera ya casi… le decía apurando mis movimientos.



Ahora veía el rostro de viviana sorprendido, adolorido, con la boca abierta, a pesar de sus reclamos no hacia ningún movimiento para liberarse… mas bien soportaba mis embestidas con menos quejas que antes… estaba embobada por lo que observaba a través del espejo… no podía creer lo que le hacia… quizás esta imagen la llenaba de morbo también…



suéltame… ahhh… no sigas… uhhhh… ayayay… exclamaba con cierto pudor, sin embargo parecía empezar a disfrutarlo.



Amor resiste… ya casi…



déjame ya… chris detente… exclamo llorosa, la culpa de esa aberrante situación nuevamente la invadió.



A mi en cambio me invadieron los recuerdos de las cogidas con cielo riveros, el sonido del golpeteo de sus nalgas con mi ingle eran mas sonoros que los que ahora escuchaba con viviana… ¿por qué pienso en eso ahora?, me recrimine, aumente de manera despiadada mis embestidas. Quería dejar de pensar en eso, no escuchaba las quejas, los llantos de viviana… estaba embebido en mi mundo y no me di cuenta que la estaba violando de una manera brutal…



basta… por favor… ya nooo… ahhhh… fue su última queja.



En un ultimo empuje llene por primera, y quizás ultima vez, los intestinos de viviana… mi espeso semen la lleno provocándole unos violentos espasmos…



cansado, casi acalambrado pero satisfecho, me aleje de ella… mi verga salía con dificultad de su estrecho agujero. Viviana se dejo caer de lado, se encogió, intentando cubrir su desnudez. Se tapaba el rostro sollozando… solo entonces me di cuenta de lo torpe y necio de mi accionar.



Oye… lo siento… le dije culposamente, abrazándola.



Te dije que te detuvieras... ¿por qué no lo hiciste?.... Me reclamo.



Perdona… es que no… no se… te vi tan segura de querer hacer esto…



pero te pedí, te suplique que no siguieras, ni siquiera te diste cuenta que estaba llorando… me recriminó entre sollozos.



Discúlpame amor… le dije sintiendo que lagrimas de culpabilidad se agolpaban en mis ojos.



Me estaba matando verla así. Había pensado más en mi disfrute personal que en ella. Había actuado de la forma que siempre reproche en otros ¿en qué me estaba convirtiendo?... Encima de serle infiel ahora prácticamente la había violado aprovechándome de su generoso ofrecimiento, de ese regalo de amor que había preparado darme esa noche.



Amor ¿qué puedo hacer para que te sientas mejor?… pregunte, quería hallar la forma de que se calmase, de arreglar las osas



solo vete… déjame sola… me dijo.



Pero… quise refutar.



¡lárgate!... Me grito mostrándome por primera vez su rostro furibundo, lleno de lagrimas, enrojecido de ira, decepción.



Esta bien…



ese día no podría solucionar las cosas, quizás nunca lo haría… mi presencia empeoraba todo. Quería estar sola. Tome mis cosas y me marche…



en el camino a mi casa me sentí la peor basura del mundo, me reproche por mi accionar, no encontré respuestas para lo que hice… quise culpar a cielo riveros a javier a todos… pero era mi culpa… yo lo hice… todo lo demás eran circunstancias, lo cierto es que yo tuve la posibilidad de detenerme, de no continuar, pero no lo hice, me deje llevar…



pensé en viviana, en todo lo que habíamos pasado juntos y como lo había echado perder. Luego pensé en sus padres, si la encontraban así… si me acusaba, bueno, como es normal sentí temor pero no pensé en huir… si aquello pasaba a mayores me merecía el castigo que pudieran imponerme ellos, la policía, el juez, la ley, quien fuese…



toda la noche intente comunicarme con ella. Envié mil y un mensajes al celular de viviana. No quería salvarme del posible castigo, solo quería que me perdonase… pero no recibí respuesta… seria difícil que me perdone después de lo que le hice…



al final me tire en un rincón oscuro de mi cuarto y llore amargamente por las estupideces que cometí esa noche, ese fin de semana…



*****



chris despierta… ¡hey!…



¿qué pasa?... ¡viviana! ¿qué haces aquí?... Exclame sorprendido.



Ella más sorprendida aun me miraba desde arriba…



¿qué hago aquí? ¡esta es mi casa!… me respondió sonriendo.



¿tú casa? ¿qué paso?... Replique aturdido mirando alrededor.



Amor te quedaste dormido… tenias una pesadilla y te desperté.



¿en serio?



Parecía cierto: estaba en su sala, con la luz a medias, la televisión aun encendida, mi cuerpo echado en el sofá con mi cabeza sobre sus rodillas y ella me miraba bonachonamente, acariciándome el cabello.



Nada de eso paso…ufff... Que alivio… musite sentándome.



Nunca tuve una pesadilla tan horrible, tan real. Incluso en mis mejillas aun se escurrían unas cuantas lágrimas, las cuales limpie lo más rápido que pude. Me incorpore, sentándome a su lado.



¿te sientes bien?… pregunto preocupada.



Si, es solo que… ¿y tus padres?...



Salieron a cenar hace 20 minutos… ¿no te acuerdas?...



Al menos esa parte era cierta, tal vez eso fue lo último real que vi y escuche antes de quedarme dormido…



¿estas bien?... Replico preocupada.



Si… bueno no… no se… respondí aun aturdido.



No sabia que era lo que le podía explicar, todo lo sucedido ese fin de semana, el sueño, todo era confuso. Viviana no era tonta, yo llevaba semanas en esa distracción, abstraído por mis culpas… no tardaría mucho en darse cuenta cual era el motivo de mis distracciones.



Si, hace tiempo que no estas bien… me reprocho.



Tienes razón... Mira… le dije y me detuve.



Tal vez era el momento oportuno para dejar de huir, la situación se me iba de las manos. Mi sueño podía ser una advertencia, un presagio de que las cosas si seguían así iban a terminar mal…



¿y bien?... Me apuro viviana.



Esta bien… he estado un poco ido últimamente, la universidad, los cursos me están poniendo de cabeza y… dije intentando justificarme.



¿estas seguro de que solo es eso?... Me pregunto angustiada.



Dude en confesarle la verdad, sabia que le haría daño… podía mentirle o esconderle la verdad, después de todo "ojos que no ven, corazón que no siente"… solo que mi corazón y mi conciencia sabían la verdad… y me estaban atormentando…



no es que…



¿qué es?... ¿es acaso otra mujer?... Pregunto desafiante.



No respondí… la expresión en mi rostro y mi silencio le dieron la respuesta que no me atreví a gesticular… su semblante cambio.



¿ella te gusta?... Pregunto dolida.



No se… respondí abrumado por sus preguntas, sobre todo porque no tenia la respuesta exacta.



Claro que cielo riveros me gustaba físicamente ¿a quien no le gustaría una chica así?… nos llevábamos bien en la cama, en el sillón, en la mesa, en la ducha, etc. Saben a que me refiero… pero más allá de eso, en las cosas normales y cotidianas que hacen llevables cualquier relación… no, no lo sabia, eso era un misterio aun… tampoco quise responder porque era clavarle una estaca mas en el corazón a viviana, sin embargo ella tenia la respuesta…



te debe gustar, sino no estarías así…



vamos viviana no sigas con esto…



era una tortura lo que se estaba haciendo. No se si es una virtud o un defecto en las mujeres que, llegada esta situación, siempre quieren desentrañar toda la situación, a pesar de todo el dolor que les puede causar… será valentía, la búsqueda de una razón, un por que… o simple masoquismo… sea lo que fuera, yo era el culpable, yo había generado eso…



recuerdo que me prometiste que si alguien te llegaba a interesar me lo ibas a decir… que era mejor terminar nuestra relación antes de que pasara algo… que preferías ser honesto conmigo antes que serme infiel… ¿es por eso que me estas diciendo esto?...



Si, bueno… dije intentando salvar la situación, pero me ella me conocía, sabia que mentía.



¿ustedes ya han tenido algo?... Pregunto visiblemente mortificada.



En mi aturdida mente ensaye una respuesta… solo que la respuesta nunca salió por mis labios…



¡responde!... Me exigió molesta.



Si, pero solo fue sexo… replique sin pensar.



Me dio una sonora bofetada que me volteo el rostro. Me la tenía bien ganada, no solo por el hecho de la infidelidad sino porque ella era victima de esta situación y yo me atreví a contestarle de esa forma brutal.



Al principio me dejo helado, luego un poco de rabia, pero entendí que no tenia derecho a sentirme molesto. Voltee a verla, estaba roja de ira, luego se fue calmando.



A decir verdad, nunca una bofetada me había dolido tanto, no por la fuerza que le imprimió, sino por lo que significaba… la había defraudado.



Eres una basura… compartí contigo lo que era mas sagrado para mi y no lo supiste apreciar…



la expresión de decepción que tenía me partía el alma. Nadie me había hecho sentir tan culpable… ni siquiera mi padre cuando le dije que no quería estudiar medicina, después de que durante muchos años me compro libros y juguetes de doctor… solo que la cara de mi viejo se recompuso en algo cuando le dije que iba a estudiar economía… pero el rostro de mi enamorada, mejor dicho ex enamorada, no lo podría componer, el daño estaba hecho.



A pesar de que no le vi derramar una lágrima, quizás pensó que no me daría ese gusto, sabia que estaba muy afectada. Fui el primer hombre en su vida y también su primera gran decepción.



Lo siento… espero que algún día me perdones... Le dije compungido.



Quizás algún día te perdone… pero jamás lo voy a olvidar… ahora vete… me dijo al borde las lagrimas.



Viviana…



déjame sola… ¡lárgate!…



esta bien…



me levante y me marche.



Al salir tenía el corazón hecho trizas. Había pasado un año de mi vida con ella, un tiempo corto tal vez, pero significativo. Hasta mis padres habían notado y apreciado el beneficioso cambio que viviana había logrado en mí.



Era la primera relación formal que tuve: había experimentado el día a día de una relación, el fortalecimiento de la misma, aprendí a dejar de lado mi orgullo y llamarla después de una pelea, comencé a apreciar los pequeños detalles, sentí como el cariño sincero se iba transformando en algo más… en amor tal vez… si ella me amo… pero yo no la ame como era debido, sino no habría hecho esto.



Mi naturaleza inmadura había echado a perder algo que iba por buen camino… tal vez no estaba preparado para esto aun… me dije. Además viviana no se merecía continuar soportando mis indecisiones y mis traiciones.



Solo esperaba haber tomado la decisión correcta… haber elegido a la chica correcta…
deambule algunos minutos, sumido en recuerdos, tal vez en remordimientos por haber dejado a una estupenda chica. Había terminado con viviana y no tenia nada definido con cielo riveros, prácticamente había saltado al vacío… en fin… me di cuenta que no llegaría a mi casa caminando, además en mi errático andar prácticamente me había perdido.



Tome un taxi a casa, me sumía en mil y un pensamientos, esperanzadores por momentos, y funestos después… hasta que:



¿te conosco?… si… me pregunto el taxista.



¿a mi?... No creo… repuse sin darle mucha atención.



Si… ya me acorde… tu eres el muchacho que estaba con ese mujeron el otro día…



mundo pequeño. Al parecer este era taxista el que ayer nos llevo a cielo riveros y a mí desde la universidad a mi casa. Intente hacerme el desentendido pero:



por la cara que traes, seguro que ya te corto… ah verdad me dijiste que otro era su novio… dijo riendo sonoramente.



Si, si, algo así… dije intentando cortar la platica.



¿qué paso?... Seguro regreso con su enamorado…



no exactamente… repuse, pero para que entrar en explicaciones con un tipo que ni siquiera conocía.



Uhmmm… exclamo el pensativamente y luego dio su veredicto: no te preocupes, hay mujeres así, esas que nacen para no tener dueño, alégrate mas bien de haber disfrutado de una hembra como esa…



si, bueno… dije para no contrariarlo y no extender la platica.



Aunque si yo tuviera una mujer así, tampoco dormiría tranquilo, hay muchos lobos sueltos… jajaja… yo he sido uno de esos… jajaja…



sin preguntarle me contó algunas de sus pillerías, por suerte, llegamos rápido a mi casa. A pesar de no prestarle mucha atención al taxista, a esa tonta y burda conversación, al bajar del taxi me dejo con una sensación de desolación peor… sensación que se agudizaría al conversar con mi padre, al que encontré bebiendo en la sala:



¿te apetece una cerveza?.



Bueno… dije, después de lo pasado un trago no me caería mal pensé.



¿ya lo hiciste?



¿hacer que…?... Pregunte extrañado luego de un largo sorbo.



Terminar con viviana…



¿qué? ¿como lo sabes? ¿acaso llamo ella?...



Sonrió burlonamente, al parecer se reía de mi ingenuidad.



No soy tonto… dijo simplemente.



No creí ser tan evidente… dije de mala gana.



Suspiro largo, y destapo otra cerveza… al parecer se venia el sermón:



hijo… tienes que aprender a diferenciar las chicas que son para divertirse y las que son para formar una relación seria, un hogar.



Créeme… se la diferencia… pero ¿por qué me dices esto ahora?...



Soy tu padre y me fastidia ver que sigas cometiendo errores en tus relaciones…



ese reproche iba mas allá de mi situación actual con cielo riveros, abarcaba también una fallida relación que tuve hace un tiempo con una prima… eso dolió…



viejo, solo para ti han sido errores mis decisiones… dije y sin esperar respuesta deje la cerveza y me fui a mi cuarto.



Me eche en mi cama y busque respuestas en el techo. Tal vez mi viejo podía tener razón: viviana era una chica amorosa, seria y responsable en nuestra relación, a pesar de que yo era su primer enamorado, demostraba cierta madurez. En cambio cielo riveros a pesar de su experiencia aun parecía estar en la etapa de los enamoramientos, un poco voluble, quizás susceptible a quien la enamore de la manera adecuada… y había una larga lista de pretendientes… sin mayor ánimo de ahondar mas en esos pensamientos pesimistas, me quede dormido



al día siguiente en el aula había un cartel en la puerta que nos avisaba que se suspendía la clase, al parecer el profesor estaba enfermo. Espere un rato, busque en los alrededores y no vi a cielo riveros.



¡diablos!, seguro se habrá reconciliado con javier… ¡que estupido he sido!… no debí apresurarme a terminar con viviana… me reprochaba. Así, con el ánimo por los suelos me fui a la biblioteca, intentaría estudiar algo, quizás lograría distraer mi mente.



Me senté solitario en una mesa, al poco rato se fue llenando el lugar, los murmullos iban creciendo y no me podía concentrar, repasaba la misma hoja una y otra vez. De cuando en cuando levantaba la vista y buscaba a cielo riveros o al menos a javier, para saber como iban las cosas entre ellos. El barullo se me hacia insoportable. Quería estar solo.



En la biblioteca de mi facultad existen unos cubículos, son pequeños cuartos (de unos 2m por 2m y 2.5m de alto), con un par de sillas y una mesa pegada a la pared. Generalmente están ocupados, pero por suerte vi a un par de estudiantes abandonando uno y me abalance sobre ese cubículo. Cerré la puerta.



Lance mi mochila sobre la mesa y me senté, la situación al interior no cambio, seguía ojeando mi libro sin entender lo que leía. En el exterior el murmullo fue disminuyendo, se acercaba la hora de almuerzo. Simplemente me recosté sobre la mesa y continué maldiciendo mi suerte... Hasta que escuche el ruido de la puerta abriéndose…



el cubículo esta ocupado… dije de mal humor sin levantar la cabeza.



¿hay espacio para alguien mas?... Me pregunto una voz femenina.



¿cielo riveros?... Dije levantado el rostro y volteando.



Si era ella… ¿estaría soñando?... ¡maldición! Esta para comérsela… pensé: traía un top blanco que apenas contenían sus senos y una minifalda suelta de color naranja… vaya, por ella deje a viviana, me dije y mi expresión se nublo nuevamente.



¿estas bien?... Tienes una carita de desolación… me dijo apenada.



Si, es solo que… ayer fui a ver a viviana… dije, y note como se incomodaba ¿celos?.



¿si? ¿y que paso?... Pregunto curiosa, sentándose a mi lado.



Pues… terminamos… suspire, creí ver algún halo de alegría en su rostro, que disimulo rápido y adopto una diplomática expresión.



Oye… si es por lo que te pedí… pensé que habíamos quedado en no hacer nada hasta terminar el ciclo…



no es por eso… es solo que… ella hizo las preguntas correctas… y yo no pude darle las respuestas erradas.



Ay… pobrecito, debe haber sido difícil… me dijo acariciando mis cabellos.



No sabia si llorar o alegrarme, no sabia si cielo riveros actuaba como amiga sincera o si lo hacia para disimular, es decir, si es que en realmente le dolía ver a un amigo así (amigo por el cual no sentía mas que amistad y una calentura de vez en cuando) o si es que intentaba aparentar y en el fondo sentía que esta era una oportunidad para al fin estar juntos…



no dijo nada, solo me abrazo, luego apego mi cabeza en su regazo, mi tristeza se fue perdiendo entre sus senos. Me apoye mas sobre su pecho, mis manos abrazaron su cintura, después de horas de angustia y soledad, necesitaba sentirme querido…



los terribles recuerdos de la noche anterior, los fatídicos comentarios del taxista y de mi padre se diluían en su escote, en la generosa silueta de sus senos, en el delineado de sus pezones…



quise volver a mi infancia, la época donde todo era seguro y no había mayores problemas sentimentales… sin embargo retrocedí mas y cual recién nacido mis manos se prendieron de sus senos… mis labios besaron sus senos…



uhmm... ¿qué haces?.... Pregunto sorprendida.



Quiso reclamar más, pero mis deseosas manos ya habían liberado un seno y mi boca engullía un pezón como un niño lactante. Necesitaba sentirme amado, sentir el calor de su cuerpo, el morbo que me incitaba…



no danny… no hagas esto… ¿estas loco?... Me recrimino sin rechazarme, sus manos no me alejaban, solo acariciaban mi cabello.



Si… estoy loco… loco por ti…



uhmmm… gimió al sentir un beso mió en su cuello.



Mis palabras, el efusivo beso en su punto débil y mis caricias en sus senos terminaron por redimirla, sabia que no tenia escapatoria, me dejaría hacerla mía, como todo el fin semana anterior… no importaba que estuviéramos en una biblioteca…



seguí besando su cuello, ella no podía esgrimir ninguna palabra, su pecho subía y bajaba agitado, su garganta contenía sonoros gemidos. En una rápida maniobra mi mano izquierda que acariciaba sus senos y mi manos derecha que apresaba su cintura, ladearon sus caderas, yo prácticamente me puse frente a ella y de un solo envión la levante.



Oh… dios no… danny no… uhmmm… musitaba.



Sus desnudos senos a la altura de mis labios fueron presa de una terrible succión que la dejo sin argumentos. Con su cuerpo a cuestas, la lleve sobre la mesa. Mis labios por fin encontraron los suyos, entre jadeos y con su lengua me devolvía con vehemencia toda la excitación producida por este alocado acto.



Mis manos tomaron su diminuta falda y la levantaron hasta su abdomen, mis dedos tantearon su pequeña ropa interior, solo tuve que hacerla a un lado… cielo riveros por su parte ya me había bajado el cierre y su dedos encontraron el tieso miembro que siempre la satisfacía… una tibia sonrisa se perdió entre sus besos al sentir mi duro instrumento listo para la acción.



No tuvo que pedirlo, solo pensarlo y mi verga ya se perdía entre sus húmedos labios vaginales, era el primer orificio disponible en aquella accidentada posición…



solo tuvo que sentirlo ingresar unos centímetros y ella se aferro a mi, jalando mi cuerpo contra ella, sus piernas abrazaron mi cintura y terminaron por clavar completamente mi pene en su extasiado ser…



ahhh… exclamo abrazándome, mordiéndose un puño para no ser escuchada afuera.



Podría jurar que aquello le provoco un orgasmo, la sentí relajarse, suspirar profundamente, sus senos rebotaban en mi pecho.



¿por qué solo contigo siento esto?... Me pregunto besándome cariñosamente.



La memoria puede ser un gran aliado en los estudios, pero puede ser un enemigo cuando invade los dominios corazón… se me vino a la mente una frase similar que un momento de ternura me prodigo viviana:



solo contigo he sentido esto… me dijo viviana.



¿qué?... Pregunte curioso



lo que es el amor… replico ella.



Luego rememore la frase de mi padre: debes aprender a diferenciar las chicas que son para divertirse de las que son para una relación seria…. ¡diablos! ¿por qué ahora me atormentan estos recuerdos?



No quería recordar eso… maquinalmente empecé a penetrar a cielo riveros, con rabia, con vehemencia, quería borrar con lujuria lo que mi mente recordaba.



Ayyy… danny un poco más suave… auu… uhmmm… se quejaba a media voz cielo riveros.



No mi viejo no tenia razón, no podía tenerla… menos aun la tendría ese estupido taxista… mi pene como poseído entraba y salía rápidamente de su vagina que empezaba a secarse… era de esperarse, lo que inicialmente la excito, ahora parecía asustarla…



aleje mi rostro que había permanecido sobre su hombro y la vi, una expresión un poco temerosa se cernía en su rostro, sin embargo me sonrió… coquetamente… luego mi vista se poso en sus generosos melones, su pezones que rebotaban con mi furia, su cintura era una maraña entre su top y su minifalda, su pequeña tanga removida a un lado, casi rota, su lampiño pubis y mi verga saliendo y entrando rápidamente.



Ouch… uhmm… au…



su cuerpo era un manjar, sus voluptuosas carnes abultadas en los lugares precisos… si tal vez era una chica solo para coger… solo para divertirse… para satisfacer los mas morbosos instintos de un hombre… si tal vez ella nunca tendría dueño, pero podría tenerla al menos por esta vez…



jalonee su cintura, su espalda resbalo en la pared, se encorvo mas, sus nalgas se deslizaron en la mesa… deje su pequeño agujero en una posición mas asequible para mi verga.



No danny… por favor… basta…



tu eres una perra y lo sabes… le recrimine, en ese momento ella era la culpable de todos mis errores, ella tenia que pagar.



Me miro sorprendida, aproveche su desconcierto y le empuje mi verga por su ano… se mordió los labios para no soltar un grito, una maldición… sus ojos inicialmente desorbitados se fueron llenando de lagrimas.



Era tarde para cualquier reproche, mi verga ya estaba instalada en su ano, una mano mía sujetaba su cintura manteniéndola en su posición para que me dejara penetrarla y la otra mano jaloneaba bruscamente sus senos…



danny… detente… que me estas asustando… ayyy.…



hice caso omiso a su pedido continué penetrando con furia su áspero ano, la fricción, el ardor no me importaba… estaba enloquecido con la idea que me infundieron, ella era solo una chica para eso… para una buena cogida, su voluptuoso cuerpo, sus deliciosas curvas solo servían para provocar placer, nunca tendría dueño… solo amos ocasionales…



si, la estupida y romántica idea que tuve de una relación con ella se iba desvaneciendo… solo podía aprovecharme de su monumental cuerpo mientras lo tuviera a la mano… luego ella regresaría con javier… ese imbecil…



ouch… ayyy… ouuu… no ya nooo… auuu…



resiste puta… ¿no es esto lo que te gusta?… ¿no era esto lo que querías?… le increpe exaltado, sin importarme el lugar en que estábamos.



No… yo solo… yo solo te quería a ti… me dijo cariñosamente, con su rostro enrojecido por haber soportado mis bestiales embates, con sus mejillas húmedas por algunas lagrimas de dolor.



Solo entonces vi una luz al final del túnel… mis forzados y torpes movimientos cesaron… quizás no era solo eso lo que buscaba en mi… en esa nube confusa que era mi cabeza sentí que alguien me extendía la mano… mejor dicho sus manos jalaron la solapa de mi camisa y me atrajeron hacia ella…



un efusivo beso termino por apaciguar el demonio de la soledad, de los remordimientos, de la frustración… todo aquello que se había apoderado de mi alma en las últimas horas…



oye… lo siento… me disculpe.



No esta bien… no importa… además la que lo siente soy yo… ay mi pobre anito... Me dijo algo risueña.



Sonreímos, a pesar de todo era benigna conmigo, comprendía el tormento que había pasado, el desorden en mi cabeza y no me reprochaba la brutal cogida que le estaba dando, ni siquiera los groseros comentarios que le hice.



Espera que lo saco… dije alejándome, al verle una mueca de dolor.



No dejalo ahí un ratito… que me pase un poco el dolor…



esta bien… respondí y le inserté los centímetros perdidos.



Se contrajo un poco, pero se acomodo mejor, nos miramos y nos reímos…



eres un tonto… me dijo riendo.



Tu eres mas tonta por estar con un tonto… replique.



No dijo nada, solo me beso tiernamente, tras unos segundo sentía su lengua, nuevamente el candor de su respiración, tras unos minutos la lujuria de su boca, solo tuve que pasar disimuladamente mis dedos por sus labios vaginales para saber que la humedad nuevamente la había invadido. Un temblorcillo recorrió su cuerpo al sentir mi tacto en su vagina.



Uhmmm… suspiro en mi oído.



Mi verga latía nuevamente ansiosa dentro de su ano, las paredes de su pequeño agujero no se contraían como antes, más bien se relajaban…



continua por favor… hazme tuya… me susurro excitada al oído.



Así lo hice, había menos oposición de su cuerpo a mis pausadas penetraciones, fui aumentando el ritmo y no escuche quejas, más bien placenteros gemidos…



así… así… mas fuerte… métemelo mas… me suplicaba extasiada.



Sus piernas nuevamente apresaban mi cintura… sin embargo a los pocos minutos, presa del cansancio y del esfuerzo comenzaron a temblar…



no… por favor no pares… falta poco… ahhh…



nunca la había visto desfallecer de esa forma, el placer de aquella forzada posición le propiciaba era inaudito o tal vez era por lo poco usual del lugar… la adrenalina de poder ser atrapados in fraganti.



Esta bien… esta bien… pero no hables tan alto… le pedí.



Lo que quieras… pero no me dejes así… me suplico.



Me compadecí de sus piernas, así que mis manos se apoyaron en el borde de la mesita, ahora mis brazos contenían sus piernas que prácticamente estaban sobre mis hombros… el cubículo comenzaba a retumbar y no nos importaba.



Asi esta mejor…ohhh.. Uhmmm… se morida los labios para no gritar.



Nos besamos unos instantes, luego aleje mi rostro para apreciarla, era hermosa, así la vi. A pesar de la difícil posición en la que estaba, sus senos al aire, subiendo y bajando por su agitada respiración y por el ritmo de mis penetraciones



ella me miraba extasiada, con ojos de ternura por momentos, de lujuria en otros... Hasta que sin quererlo, al sentir como retumbaba la mesita en la que sus generosas nalgas se apoyaban, decidió bajar la vista… solo entonces pudo apreciar como mi verga se perdía en su interior con un ritmo endemoniado…



ohh diosss… uhmmm … ohhh…



callate…



me miro con la boca abierta, no podía creer que mi verga entrara con tal facilidad en su hasta hace poco virgen ano, la morbosidad que esto le genero era evidente, así como la prolongada fricción de nuestros cuerpos… nuevamente bajo la vista… sus gemidos eran mas sonoros…



ahhhh… uhmmmm… uhmmmm….



Cielo riveros por favor que nos van a escuchar… le rogué.



Nuevamente absorta casi poseída, me miro, ella misma se tapo la boca con una mano y con la otras se dedico a estrujar sus henchido senos… parecía que se iba ahogar… luego vi a sus ojos prácticamente salirse de sus orbitas… en ese momento le descargaba un torrente de semen en sus cavidades anales…



ohhh… ufff… resople satisfecho, cansado.



Ella apenas respiraba, mi verga escupía su leche y su maltrecho cuerpo se contraía extasiado con cada borbotón que la invadía.



¿lo vas a dejar?... Era mi momento de devolverle la pregunta.



Si… lo… haré… me dijo sin pensarlo, con el poco aliento que le quedaba.



Esta vez yo busque sus labios, a pesar de su fatigada respiración, no me rechazo… en cambio, su cuerpo empezaba a rechazar mi esperma, su ano escurría mi leche, mi verga ya flácida no podía retenerla…



heyyy… uyyy cuidado… dije y me aleje.



Mi leche ya caía sobre la mesita, casi me mancha el pantalón.



Límpiame, por favor… me pidió con carita de niña.



Era lo menos que podía hacer luego de aquella sufrida y gratificante muestra de afecto que me dio en aquel inusual lugar. Saque un pañuelo y la limpie lo mejor que pude, así como mi verga… solo después pudo salir de su incomoda posición, de esa prisión, de esa pared y esa mesita donde la había arrinconado



se bajo de la mesa comprensiblemente adolorida, y antes que arreglarse se me acerco y me abrazo. El calor de su cuerpo, lo amoroso de su abrazo disiparon las dudas del afecto que tenía hacia mí.



No me dijo nada, pero el latir de su corazón se aunaba al mió… así yo mismo le fui acomodando su ropa. Sentí su sonrisa ante mi torpe esfuerzo por acomodarle el brassiere.



Así no… me dijo riendo.



No alejo mis manos para hacerlo ella, mas bien guió las mías, como dando a entender que tenían derecho a escudriñar en su cuerpo, que ya eran también mis dominios, aunque la idea suene machista. Al mismo tiempo cielo riveros tenia cabida en la zona baja de mi cintura, ella abrocho mi pantalón.



¿oye por que no hay ruido afuera?… pregunto curiosa.



En serio… con el ruido que hicimos estarán esperando que salgamos seguramente… dije medio en broma medio en serio.



Ay… no… dijo preocupada.



Asome la cabeza por la puerta, la biblioteca estaba vacía… ¿qué habrá pasado?... Bueno la bibliotecaria tenia como sagrada su hora de almuerzo, desaparecía y nadie la molestaba, pero los demás, los estudiantes ¿dónde estaban?...



Al parecer mi mente trajo a uno… un estudiante… el menos indicado… javier… pensé que se iría de largo, pero entro a la biblioteca, lo vi aproximarse…



maldición…



¿qué pasa?



Es javier… esta afuera…



cielo riveros palideció, una cosa era cortar con el en una conversación y otra muy diferente era enterándose que era un carnudo. Personalmente me daba igual liarme a golpes con javier, eso era lo de menos… el problema era armar un escándalo en la facultad, la reputación de cielo riveros iba a terminar en solo en una gran putación, es decir quedaría como una puta, y yo como el apestado, el quita novias, etc,…



pero tal vez, solo tal vez, podria tener buena suerte… quizas no me vio…



hey danny… escuche llamarme jovialmente, era el.



Se iba a armar una buena en esa silenciosa y hasta ahora pacifica biblioteca.
Cielo riveros parecía un foquito de navidad, por momentos pálida, por momentos roja, al borde de las lagrimas... Javier estaba a escasos metros de nosotros, no sabíamos como, pero el sabia que yo estaba allí… en ese cubículo…



he pasado por situaciones similares anteriormente, más que nada por tenia la experiencia adquirida en una relación filial hacia unos años, me había dado cierto aplomo y rapidez mental para salir de estas situaciones… si pude en su momento salvarme de mis padres y mis cielo riverosres, creo que no seria difícil deshacerme de javier…



- mira… el me esta buscando a mi… yo salgo, le doy el encuentro y después de cinco minutos tu sales… le susurre a cielo riveros.



Ella no atino a decir nada, con las justas movió su cabeza afirmativamente, tome mis cosas iba a salir… cuando la perilla de la puerta giro… ¡mierd…!...



Cielo riveros estaba cerca de la puerta, en acto reflejo la empuje a un lado, para que quedara detrás de la puerta. Ella entendió y siguió esa dirección, ubicándose tiesa, cual estatua, detrás de la puerta.

Hola javier… dije un poco agitado, conteniendo la puerta, para que no le diera en las narices a cielo riveros.



- que tal danny… ¿has visto a cielo riveros?, me dijeron que la vieron por aquí.

- bueno, si… paso por acá… estaba preocupada por el trabajo del curso que llevamos juntos, le dije que el profe no había venido… así que se fue tranquila… respondí, intentando no ser dubitativo, aunque sentía la nerviosa respiración de cielo riveros sobre la mano que contenía la puerta.



- ¿hace cuanto?... Pregunto extrañado, parecía que quería entrar al cubículo a continuar la platica. Solo mi cuerpo y mi actitud se lo impedían.



- no se, unos quince o veinte minutos... Oye mira… me muero de hambre… vamos por ahí a comer algo… dije para salir del apremio.

- solo si tú invitas… respondió sonriendo.



- esta bien… respondí aliviado, muy pocos se resisten a un almuerzo gratis.



Cerré la puerta, me imaginaba al interior cielo riveros recuperando su color y la respiración…

- oye ese cubículo huele raro… ¿no te habrás estado pajeando?... Me dijo javier en son de broma y casi me atoro con mi saliva.



- como crees, solo tu harías una cosa así… respondí devolviéndole la broma.

- jajajaj… tienes razón… se ufano el.



- ¿cómo sabias que estaba acá?... Le pregunte para cambiar de tema y no ahondar en los olores y en lo sucedido en ese cubículo.



- fácil… solo un tonto como tu se queda en la biblioteca cuando hay final de fútbol femenino en el coliseo… me dijo riendo.



Ah, claro por eso la biblioteca estaba vacía, el equipo de fut-sal femenino de la facultad iba a jugar la final del campeonato universitario… y eso nadie quería perdérselo, casi todos estaban en el coliseo

- ya… en serio…

- guille vino a devolver un libro y me dijo que te vio entrando al cubículo…



- ¿y como sabias que cielo riveros paso por acá?...



- no lo sabia, solo pregunte… repuso.



Diablos, mejor no sigo indagando al respecto porque yo mismo me puedo poner al descubierto... Me dije. Así que me apure en sacar a javier de la biblioteca, pero en el camino a la puerta el saco su celular….

- a quien vas a llamar?.... Pregunte algo preocupado.



- a cielo riveros… creo que esta molesta conmigo…



caraj… si el celular de cielo riveros suena dentro del cubículo, nos jodimos, se va a dar cuenta de que ella esta adentro.

- mierd… me quede sin crédito… dijo molesto al escuchar el mensaje de la operadora.



- estas con suerte… dije socarronamente, aunque aliviado porque el de la suerte era yo.



Salimos a comer. No tuve que preguntarle, me contó de su amiga la tetona succiona vergas, de cómo lo habían pasado el fin de semana. Yo me reía, a veces de la forma en que contaba las cosas y otras recordando o haciendo una semejanza con las que hice yo con cielo riveros…



idiota, teniendo a cielo riveros se mete con una tipa que por lo que dice es la mas experimentada de la ciudad, casi una mujerzuela… quizás eso acalla su morbo… cada quien con satisface sus apetitos como gusta.



Quizás por esa costumbre de andar o de estar con mujeres de ese tipo, de gran trayectoria amatoria, por eso no había podido descubrir el fuego interior de cielo riveros, no había descubierto su punto débil, no había sabido incitarla de manera sutil a esos oscuros placeres…



javier no tenia paciencia ni ganas de enseñarle esas mañas a cielo riveros, esperaba que por su escultural cuerpo ella tuviera toda la experiencia necesaria, que cielo riveros supiera de esas cosas, así que él simplemente iba al grano, como lo hacia con las otras chicas… y quizás en parte javier se frustraba al ver que en la cama cielo riveros no tenia toda la experiencia que aparentaba tener.



En parte aquella fascinación que javier tenia por esa chica (la succiona vergas, no le conocía otro nombre) me había resultado beneficiosa, ya que pude disfrutar de cielo riveros. Si javier hubiera llamado ese sábado en la noche, no hubiera pasado aquel magnifico fin de semana con cielo riveros, explorando cada rincón de su anatomía en cada rincón de mi casa.



Inclusive, al terminar el almuerzo, javier me llego a pedir que intercediera por él con cielo riveros, había notado que ella lo estaba evitando, no contestaba sus llamadas… para que no me insistiera le dije que vería que podía hacer… así mi cornudo compañero se quedo tranquilo…



aunque me dijo que no me apurara en hacerlo, porque el miércoles iba a salir con otra tipa que al parecer solo le gustaba que le den por atrás… a esas alturas ya ni me remordía la conciencia por ponerle los cuernos a javier…



ese miércoles mientras javier satisfacía todos sus apetitos anales con su amiga, yo iba al cine con cielo riveros… había un poco de nerviosismo entre ambos, era la primera vez que salíamos juntos como una pareja…



las cosas se dieron de una manera extraña, me llamo en la noche y me dijo que estaba aburrida. Fui a verla, conversamos un rato, en realidad aparte de conocer su cuerpo no conocía mucho de ella y de sus gustos, solo de sus recientes apetittos sexuales.



Así, conversamos sobre películas, casi teníamos los mismos gustos al respecto. Hacia unas semanas que habían estrenado una película que a ambos nos hubiera gustado ver, pero por esos trabajos de la universidad y nuestros encuentros y desencuentros amatorios, no habíamos tenido oportunidad de ir a verla…

danny vamos a verla ahora… mira que no debe faltar mucho para que la saquen de cartelera… me dijo cielo riveros.



Oye pero es un poco tarde, tu crees haya alguna función a esta hora… repuse.



Eran casi las 10 y calculaba que hasta que lleguemos al cine serian cerca de las 11 de la noche, ya saben por el tiempo de viaje y lo que demoran algunas chicas en arreglarse.

Mira hay una función a las 10:30pm… me dijo mostrándome la sección de cine de un periódico.



- ese cine esta un poco lejos… ¿tu crees que lleguemos?...



Si salimos ahora, si… ¿qué dices?.... Me dijo animada.



- vamos… respondi, no me podia negar.



Su padre estaba fuera de la ciudad y su madre no puso mayor objeción a que saliera conmigo, me conocía por los trabajos de la universidad que hacíamos.



Ella no necesito cambiarse, llevaba una falda negra que le quedaba por encima de la rodillas, con unas panties del mismo color cubriendo sus piernas, seguro por el frió, una blusa y una chompa cubriéndola, tenia una apariencia un poco casera, un poco formal, casi de oficinista, pero no se veía mal. Por suerte era de las que no necesita arreglarse mucho para verse bien.



Llegamos cuando pasaban los avances de otras películas, algunos asientos de atrás estaban ocupados, había muchos espacios, pero era la primera vez que salíamos juntos, casi formalmente como enamorados… así queríamos estar solos… la zona media de la sala estaba casi desierta y las primeras filas vacías… hacia allá nos dirigimos…



la abrace, ella se recostó sobre mi hombro, nos dimos algunos besos cariñosos. Al poco rato inicio la película, un poco lenta… como mi mano subiendo sobre su cintura hacia sus senos, desabotonando su blusa… ella no protesto… solo me beso con mayor efusividad…



mi mano estrujaba sus senos, sus pezones y su lengua me retribuía el favor… me sobaba el pecho, el abdomen, tome su mano y la dirigí a mi pantalón… si yo masajeaba sus senos ella podía prodigarme el mismo placer en mi verga.



Ella lo entendió, mejor de lo que pensé, no se limito a acariciar mi verga sobre el pantalón, sino que se dio maña para meter directamente su mano por debajo de mi pantalón y su calida mano atrapo mi erecto pene…



yo hice lo propio y mis dedos se deslizaron por su suave abdomen, pasando por su falda, acaricie sus piernas a través de sus delgadas panties, subiendo mis manos hasta llegar a su tibia y húmeda conchita, un shock eléctrico la recorrió… ahogo un gemido entre su garganta y nuestras lenguas.



Su siguiente reacción, casi maniática, fue sacar su mano, desbrocharme el pantalón, bajarme el cierre completamente rebuscar en mi bóxer hasta sacar por completo mi verga, dura… quería sentirla libremente con sus dedos… palpar toda su rigidez… sabia que aquel instrumento se ponía así por ella, y que aquella masa de carne podía complacerla…



no importaban los demás en el cine, tal vez hacían lo mismo desde sus ubicaciones, o quizás solo veían la película, que mas da… nosotros agazapados en las butacas dábamos rienda suelta nuestros instintos… escondidos de la vista de los pocos asistentes a esa sala, sin nada que temer.



Mis dedos no dejaban de proporcionarle ese agradable cosquilleo en sus labios vaginales y ella respondía con candorosos besos, con sus dedos pajeando mi verga… parecía que iba a explotar de placer… hasta que no pudo mas… quiso sentir en sus labios lo que mis dedos hacían en su vagina…



sus jugosos y carnosos labios se apartaron de mi boca y fueron descendiendo a mi verga…

- ¿qué haces?... Me atreví a preguntar ingenuo, a media voz.



No me respondió, absorbida por su propio morbo no dudo en meterse mi verga a la boca y succionarla, me sobresalte un poco en el asiento al sentir su lengua en mi verga. Unas gotitas de leche salieron instantáneamente al sentir sus carnosos y suaves labios recorriendo mi verga, ella no protesto, sumida en su excitación prosiguió con su labor.



A pesar de la incomoda posición, cielo riveros siguió mamando mi verga. Yo complacido, acariciaba sus cabellos y por momentos me daba maña para acariciar sus senos. Estaba en la gloria.



Llego un momento en que ella ceso su labores, quizás volvió a la realidad. Habrá menguado su excitación y se habrá dado cuenta de donde estamos… pensé un poco mortificado, ya que había dejado su trabajo a medias. Por fortuna me equivoque.



Al parecer no podía seguir en aquella incomoda posición, se deslizo por el asiento hasta quedar de rodillas frente a mi, en ningún momento soltó mi verga… yo solo me limite a abrir mis piernas para darle un espacio…



con rostro poseído por el placer y la lujuria, me miro desde su posición, reconoció mi mirada excitada entre los chispazos de la pantalla que iluminaban la semidesierta sala de cine. Sonrió y nuevamente se engullo mi verga de a pocos, mirando de cuando en cuando hacia arriba, complacida de mis reacciones, de mi pecho jadeante…



sus labios soltaron mi verga, solo sus dedos siguieron pajeándome. Se incorporo un poco, me agazape para darle el encuentro, pensé que me quería besar, sin embargo tomo mi cuello y me susurro al oído:

te necesito ahora…



- vamos a otro lado… le dije.



- no aquí… me dijo, casi suplico con su apagada voz.



Era una locura… nunca había llegado a esos extremos en el cine… no había pasado de las caricias y pajeos en los asientos. En ese momento no me llegue a imaginar como hacerlo, solo supuse que cielo riveros podría sentarse sobre mi verga dándome la espalda, pero seria muy obvio para los pocos espectadores detrás nuestro lo que estábamos haciendo allí…



por suerte la mente de cielo riveros fue más creativa. Ella que ya estaba de rodillas en el piso, solo giro el cuerpo hacia el pasillo que formaban los asientos levantados, puso sus manos en el piso y espero que entendiera su insinuación…



era evidente, ella estaba en cuatro patas como perrita ansiosa esperando que la cogieran, dude un poco en aunarme a su posición… pero ella no estaba para dejarla así… fue subiendo su falda, mostrándome su esplendorosas nalgas, y las ligas que unían las panties de sus piernas con su pequeña tanga… parecía una conejita de playboy… y contra esa seductora imagen no se puede luchar.



Solo me quedo deslizarme a través de mi asiento, tratando de no hacer mayor ruido, levante mi asiento para darme espacio detrás de aquellas jugosas nalgas que me habían vuelto loco…



podía jurar que cielo riveros sonreía coqueta, complacida de que no pudiera resistirme a sus encantos. Empino su trasero para recordarme el porque de su posición, quería que la penetrara así, en cuatro patas… como a una perra en celo…



con el pantalón apenas por debajo de mis nalgas, me acerque y me puse detrás de ella, apunte mi verga a su vagina, sin embargo ella avanzo… supuse que se habría arrepentido… pero cielo riveros empino mas el trasero… entendí la sugerencia… quería mi verga en su ano…



me deslice a través del pegajoso piso hasta estar nuevamente detrás de ella, esta vez mi verga apunto a su ano, y esta vez cielo riveros no huyo. Lentamente fui introduciendo mi verga en su pequeño orificio… quizás muy lentamente para su lujuria, ya que ella empezó a retroceder insertándose mi verga.



Mis manos tomaron su cintura por encima de los bordes de las ligas de su panties, y la jale hacia mi, taladrándola violentamente, metiéndole la mitad de mi verga. Su columna se arqueo hacia arriba, su garganta ahogo un aullido de dolor… quería que supiera que aun yo mandaba en su adiestramiento anal…



cuando su columna recupero su posición normal, comencé a atraer y alejar su cintura, rebotando mi ingle contra sus carnosas nalgas. Era una maravillosa sensación sentir sus abultadas nalgas temblando contra mi… esta vez si la deje aunarse a mis movimientos, ella iba y venia a gusto.



Aunque no escuchaba sus gemidos por el ruido de la película y porque ella misma seguramente los acallaba para no ser descubiertos, y aunque no podía ver su rostro extasiado, podía sentirla y eso era suficiente…



creo que presintió lo que pensaba, por que volteo el rostro, con sonrisa traviesa, con expresión de gozo, me observo mientras mi verga seguía perforando sus entrañas…



por momentos se mordía los labios, en otros ratos abría su boquita en espasmo de dolor, de dulce dolor… todo ello me encendía mas… aunado al hecho de ver su pequeña y negra ropa interior hecha a un lado, sus panties con liga, sus carnosas pero firmes nalgas… empecé a penetrarla con mayor fuerza y rapidez… solo esperaba que el ruido de la película prosiguiera porque ya me parecían escuchar los ahogados gemidos de cielo riveros…

- uhmmm… uhmmm… uhmmm…



no soporto tanta presión de mi verga hacia su cuerpo, lo frenético de mis penetraciones, su rostro volvió al pasillo… solo veía sus cabellos flotando en la semi oscuridad… su cabeza tenia su propio ritmo, se movia al compas de su excitación, de los gemidos que acallaba por momentos.



Masajeaba su cintura, sus piernas, diablos que monumento de mujer… su cuerpo empujaba con vehemencia hacia el mió, ella iba decayendo en su candor, se acercaba al clímax como yo…

- ahhh... Oooh… escuche su tibio gemido.



Mi verga nuevamente disperso su blanquecino líquido en las candentes intimidades de cielo riveros. Su escultural cuerpo tembló con cada nuevo chorro que la invadía… cuando esa placentera sensación fue menguando… ella se incorporo un poco, aun con mi elástica verga en su ano… se apoyo en un asiento para mantener el equilibrio… entendí lo que quería…



giro un poco el rostro, y en esa incomoda posición nuestros labios se encontraron, mis manos se posicionaron de sus henchidos y desnudos senos a través de su semi abierta blusa… los acaricie, había extrañado verlos, los había imaginada rebotando al son de mis penetraciones…



su lengua me devolvió con gratitud las caricias a sus senos y pezones… luego, producto del cansancio, nuevamente se agazapo y volvió a su posición en cuatro, quizás esperando reponerse para luego arreglarnos y volver a nuestras posiciones en los asientos…



yo también recuperaba el aliento, complacido observaba sus nalgas, su provocativa ropa interior, a su vez cielo riveros solo atinaba a mirar el suelo mientras recuperaba su ritmo normal de respiración.



La locura de nuestra pasión, del placer que sentíamos hacia el sexo anal nos estaba llevando a cometer aquellas pillerías en lugares públicos, en los baños de la facultad, en la biblioteca y ahora en un cine a altas horas de la noche… habíamos tenido suerte de no ser descubiertos hasta entonces… pero…

- ¿están jugando al caballito?...



- ¿qué?... Pregunto cielo riveros levantando la vista



salí de mi abstracción y horrorizado levante la vista… por el tono de voz y lo inocente de la pregunta ya lo había supuesto… era una niña… habíamos sido pillados por una infante de no mas de 5 años… ¿quién mierd… deja a su hijos sueltos en el cine a esa hora?... La niña al inicio de la fila nos miraba ingenua esperando una respuesta.

- si, si, pequeñita… estábamos jugando al caballito… pero ya terminamos… respondió a media voz cielo riveros nerviosa.



Mi semi erecta verga sufrió el espasmo inicial del cuerpo de cielo riveros, luego el temblar de su cuerpo. Mi primera reacción hubiera sido alejar a la niña con algunas palabras subidas de tono, pero tal vez eso hubiera llamado mas la atención… creo la actitud de cielo riveros era la mas adecuada… opte por dejarla actuar, yo me quede mudo casi como una estatua esperando que cielo riveros lograse alejarla.

- ¿oye niñita porque no buscas a tus padres?

- no los encuentro…

- dónde están?... Pregunto cielo riveros. Creo que le salio su aire maternal.



¡caraj… cielo riveros no me digas que quieres ir a buscar a sus padres con las tetas al aire y la falda sobre tu cintura… cielo riveros entendió mi reacción porque apreté un poco mis manos sobre su cintura.

- no se… estábamos viendo shreck… salí al baño volví a entrar y no los encontré… dijo la niña un poco asustada.



- ay mira… esa película la están dando en la siguiente sala… solo tienes que salir al pasillo y entrar a la puerta siguiente…



- ahhh… pero ¿ustedes van a seguir jugando?… ¿puedo jugar con ustedes?...



¡mocosa del diablo!… estaba muy chiquita para esas cosas… ¿por qué no se va?...

- no… no… repuso cielo riveros nuevamente nerviosa…



- nosotros ya terminamos de jugar… ahora vamos a ver la película… ve con tus papis… respondí, al notar que cielo riveros no atinaba o decir nada mas.



- esta bien… dijo y dio media vuelta y se fue.



Ufff…



desde su ubicación cielo riveros volteo y me dio una mirada de reproche.

- creo que fuiste un poco dura con la niña…



- ¿no me digas que querías que se quedara?…



- no, pero hay otras formas…



- oye, esas otras formas iban a tomar tiempo, tenemos suerte de que nadie se haya acercado…



- bueno... Si…



- más bien hay que arreglarnos, no se le vaya ocurrir volver a esa niña con sus hermanitos o con sus padres…



así, agazapados, pusimos nuestra ropa en orden y nos sentamos sin mayores aspavientos, procurando no llamar mucho la atención…

danny… ¿tu crees que la niña le cuente a sus padres que nos vio jugando al caballito?… pregunto medio en serio, medio en broma.



- no se, tal vez… dije un poco preocupado.



- mejor vámonos… me dijo preocupada.



Nos escabullimos por la puerta de emergencia, al salir a la calle nuestros rostros pasaron de la preocupación a las sonrisas… y luego nuevamente al susto…



vimos carlos, a un compañero de la facultad saliendo de pizzería con su enamorada diana, otra chica que también estudiaba en la facultad. Para nuestra mala fortuna estos chicos tenían la fama de ser poco discretos, siempre estaban al día con los últimos chismes de la facultad. Así que si nos veían, al día siguiente íbamos a ser la comidilla de la facultad…



antes de que le dijera nada, cielo riveros ya me había estampado contra una pared, llenándome de besos… yo solo la jale solo unos centímetros, hacia un rincón que no estaba muy iluminado.



Algo de suerte tuvimos, ellos permanecieron en la acera del frente…

- vayan a un hotel… nos gritaron al unísono ambos, en tono de broma.



Creo que a cielo riveros no le gusto mucho el comentario, quiso voltear para contestarles algo, pero yo se lo impedí apretándola más contra mí.

Escuchamos algunos otros comentarios y sus risas se desvanecían a medida que se alejaban…

- ¿ya se fueron?... Pregunto cielo riveros entre besos.



- no, mejor esperamos un poco mas… respondí sin dejar de besarla.



Las cosas nuevamente se calentaban entre nosotros. Mis manos ya comenzaban a trepar por su cintura, tal vez ahí mismo, arrinconados en ese umbral de puerta, en esa extraña posición, podíamos tener otro encuentro fugaz pero ardiente.



Mis dedos ya tocaban sus senos, su respiración era mas agitada. Si se resistía a hacerlo allí, solo tendría que besarle el cuello y cedería a todas mis pretensiones… todo iba bien, hasta que…

- circulen por favor… nos decía por el altavoz un patrullero.



Maldta sea… cuando no la policía, siempre están cuando no los necesitas y cuando los requieres están comiendo donas… pensé.



Con algo de pudor y vergüenza, continuamos nuestro camino, buscando un lugar donde tomar un taxi. En el trayecto me asaltaron algunas dudas:

¿por qué tuvimos que ocultarnos de carlos y su enamorada?... Era una pregunta valida, dado que fue cielo riveros la que arrincono y me lleno de besos para que ellos no nos vieran.



- ya sabes que son unos chismosos de primera…



- ¿acaso aun no has terminado con javier?... Repregunte algo enfadado.



Por mi actitud ella dudo en contestarme, quizás preparaba alguna excusa…

- respondeme… le exigí, al igual que ella me exigió alguna vez acerca de si es yo iba a terminar con viviana.



- esta bien… no he podido hacerlo… no lo he visto si quiera… respondió abrumada.



- pero el te ha estado llamando… replique.



- si, pero no quiero he querido contestarle, tampoco quiero verlo…



- ¿por qué? ¿es que aun sientes algo por el?... Pregunte sintiéndome nuevamente un idiota por haber dejado a viviana.



- no seas tonto… dijo luego me abrazo y me beso… yo te quiero a ti… es solo que…



- ¿qué?...



- me da vergüenza, no se, nunca había sido infiel, y no se si al verlo termine por confesarle todo, tal vez el se de cuenta que le estoy ocultando algo… y eso puede terminar peor… me dijo confundida.



Quise enojarme con ella, pero al fin y al cabo yo la comprendía, lo mismo acababa de experimentar con viviana. Te sientes bien con la otra persona, pero tienes remordimientos y no sabes como confesarle a tu pareja formal, o al menos terminar la relación, es un poco difícil… y creo que más para una mujer…

mira, este fin buscare la forma de hablar con el…



- esta bien…



- pero danny cambia esa cara…



- solo si me das un beso…



nos besamos apasionadamente, hasta que nuevamente sentimos la luz de las sirenas, policías de mierd…

compitiendo por una promesa

todo parecía ir arreglándose, ese fin de semana cielo riveros conversaría con javier, mejor dicho cortaría su relación con él, nosotros seguiríamos viéndonos a escondidas mientras los rumores de la ruptura se acallaban, con los exámenes y luego al salir de vacaciones, el chisme iría diluyéndose… como dije, todo parecía ir viento en popa… pero…

generalmente una semana antes de los exámenes de fin de año, la facultad organizaba un campeonato de futsal masculino, quizás para que los alumnos liberen tensiones físicamente antes de las pruebas académicas... Pero ese fin de semana no solo habría tensiones deportivas sino también emocionales…

hubo un tiempo en que no me perdía estos campeonatos, después de un viaje a las tierras de un tío, y por una lesión, digamos que me retire del fútbol. Deje de lado las amistades deportivas, quizás por ello no me hice muy amigo de javier, ya que él era infaltable en los encuentros de fútsal todos los fines de semana en cualquiera de las losas deportivas de la universidad.

Así pues, me dispuse a ir a la facultad a entretenerme un poco viendo como mis amigos luchaban por el trofeo del campeonato. También, en parte, quería constatar si cielo riveros cumplía la promesa que me hizo de terminar con javier… solo que ella había hecho otra promesa mucho antes…

llegue a la facultad cerca de mediodía, la primera ronda ya había terminado, el equipo de javier había clasificado a los octavos de final. Lo felicite por ello, a él y unos amigos que teníamos en común. Lejos de verlo con el ánimo decaído, lo note con un vigor poco usual, con unas ganas de llevarse de una vez por todas ese trofeo… y no era el único trofeo que esperaba recibir…

pensé que tal vez cielo riveros no había querido terminar con él durante plena lid deportiva, quizás al final del campeonato le clavaría la estocada.

Bueno quizás no sea hoy, si javier no gana el campeonato se va a deprimir, más aun si cielo riveros lo deja. No me importaría que cielo riveros deje las cosa para mañana… si, que deje que el ánimo de javier se reponga, porque al fin y al cabo su equipo no es tan bueno como para ganar el torneo… me dije.

Estaba de ánimo optimista, lo que contrasto con el rostro pesimista que tenia cielo riveros cuando la encontré deambulando por los pasillos de la facultad.

- hola… dije y quise darle un beso pero me contuve, podría haber algún curioso por allí.

- hola… respondió con una sonrisa algo forzada.

- ¿por qué estas así?... Pregunte extrañado, y repregunte algo victorioso… ¿terminaste con él?

- si… lo hice… dijo aun con rostro de pesar.

- no me digas que te arrepientes de haberlo hecho… dije malhumorado.

- no es eso… es que… si te cuento te vas a molestar…

- no, si no me lo cuentas me voy a molestar… respondí serio.

- está bien…

nos sentamos en las escaleras, entonces me comento lo sucedido:

cielo riveros había terminado con javier el día anterior por la noche. El dolido ego de javier no la dejaría ir tan fácil. Después de pasar buen tiempo detrás de cielo riveros, cortejándola, y que al cabo de unos pocos meses ella lo termine… es algo difícil de asimilar… quizás no tanto para él mismo, porque como les dije satisfacía sus instintos sexuales con otras, y pienso que quizás gran cariño por cielo riveros no tenía. Ella era más bien su trofeo, la gran conquista que lucía frente a sus amigos, y por la cual era envidiado por muchos.

Así que creo que a javier no le dolió el corazón sino más bien la cabeza… pensó más en los comentarios, generalmente malintencionados, que estas situaciones generan, sobre todo entre los amigos… palabras subidas de tono como que tal vez lo dejaron por impotente, por eyaculador precoz, por no saber cómo satisfacer a una mujer así… como ven, la situación se presta para estos comentarios y otros más ingeniosos e insidiosos.

Todo ello era de esperarse, imagine que javier intentaría con mil y una tretas para seguir con cielo riveros, al menos hasta el final del ciclo, las vacaciones… así lo hizo… pero ella no acepto… solo al final de su plática, que termino pareciéndose más a una negociación, acordaron los términos de su separación…

no divulgarían lo de su separación sino hasta después de los finales. Ya en las vacaciones el chisme se esfumaría y el siguiente ciclo lo suyo seria historia vieja, así javier cuidaba su orgullo. Además él prometería no hacer ningún comentario revanchista o malintencionado sobre ella y sus intimidades. Hasta ahí todo bien… el problema fue una vieja promesa que ella tenía que cumplir…

hacia mitad de ciclo hubo un campeonato de futsal, cielo riveros como enamorada de javier fue a alentarlo, pero gran decepción se llevó al ver como su equipo era vapuleado y goleado. Lo que provoco las burlas de varios compañeros y a las que ella también se unió.

Ya en la intimidad, después de aquel trágico día para él, javier intento al menos salir ganador entre las sabanas, quizás para olvidar el mal trago de su vergonzosa derrota deportiva busco en el sexo acallar esos malos momentos… pero no solo buscaba el sexo común, quería sexo anal.

Inaugurar el gran trasero de cielo riveros seguramente haría pasar todo lo demás a un segundo plano, además básicamente por esa fantasía seguramente inicio su relación con ella. Cielo riveros siempre le había negado esa posibilidad por temor y otras cosas… y esa noche ella siguió con esa negativa… más aun previendo que javier desquitaría toda su furia con su entonces virgen ano… solo que ella lo expreso en otros términos…

- ¿crees que te mereces ese regalo luego de haber perdido de esa forma?... Le increpo cielo riveros en aquella oportunidad.

- ósea que de haber ganado el campeonato me hubieras dejado metértelo por el culo… respondió javier algo enfadado.

- si, en ese caso creo que sería una justa recompensa… respondió cielo riveros algo aliviada por mantener el pene de javier alejado de su estrecho agujero.

- vas a ver… el próximo campeonato lo voy a ganar… y tu culito va ser mió… respondió confiado javier.

- ya veremos… respondió cielo riveros en son de burla.

- ¿apostamos?...

- está bien… asintió cielo riveros, confiada de que aquello nunca sucedería.

- pero vamos… no te vas a arrepentir… insistió javier.

- no…

- promételo…

- está bien… lo prometo… sentencio cielo riveros en aquel entonces.

La noche anterior, javier le hizo recordar su promesa. Era evidente que algún recuerdo suyo quería llevarse, finiquitar aquella fantasía que con esa ruptura se haría imposible… y el caso es que cielo riveros acepto, para no prolongar más aquella discusión que ponía fin a su relación, además porque estaba segura que el equipo de javier era malísimo.

Pero javier no era tonto, movió mar y tierra para reforzar su equipo… y lo consiguió, prometió desde cervezas hasta conseguirles citas con sus experimentadas amigas. El equipo de javier había clasificado ganando por goleada. Mientras hablábamos en las escaleras, su equipo aplastaba a otro rival y clasificaba a cuartos de final.

- oye, pero no seas tonta… aun cuando gane, tu no vas a cumplir con esa promesa… a menos que quieras hacerlo… dije molesto.

- no, claro que no quiero cumplir esa promesa… ¿qué me crees?, ¿una cualquiera?... De solo pensarlo me da… no término la frase, pero hizo una expresión graciosa de asco.

- entonces… ¿cuál es el problema?... No cumples lo prometido, invéntale cualquier excusa y listo… que se enoje ¿qué más da?…

- es que tengo miedo de que reaccione mal y…

- si te toca lo mato… dije instintivamente imaginando que javier podría golpear o intentar obligar a cielo riveros a cumplir su promesa.

Ella me miro sorprendida, algo asustada al inicio pero luego con ternura al notar que estaba dispuesto a protegerla como era debido. Acaricio mi mejilla, me robo un beso que apaciguo en algo mi enardecido animo… nos separamos al escuchar algunos pasos…

- danny… es que no es solo eso… me dijo aun confundida.

- ¿qué? ¿le has prometido algo mas?...

- no tonto, es que como yo no voy a cumplir lo que le prometí, él me puede decir que tampoco cumplirá lo que prometió… no se… puede divulgar rumores acerca de mi… de la intimidad que tuvimos alguna vez… o inventar cualquier tontera y hacerme quedar como una prostitut… ¿entiendes?...

- si, pero quien le va creer, todos saben como es el de hablador, además se darían cuenta de que esta hablando por la herida…

- aun así los rumores dejan algo…

- pero esas cosas al fin y al cabo la gente las olvida…

- para ti es fácil porque eres hombre, si tu terminas con tu enamorada y al poco tiempo te ven con otra chica, tus amigos te felicitan, te celebran como un donjuán… en cambio si una mujer termina con su pareja y al poco tiempo aparece con otro chico, todos la tildan de mujerzuela, de chica fácil, tus propias compañeras te miran con recelo, hasta piensan que les puedes quitar el enamorado…

no podía objetarle eso, era una realidad, algo machista las reacciones no solo de los hombres sino de las propias mujeres cuando ven que una amiga dejo a su enamorado por otro…

si por esos días alguien me veía con cielo riveros, seguro que me felicitarían, algunos me invitarían cervezas, que les platique como fue la cosa, los comentarios hacia mi serian benignos en gran parte… pero a ella… dirían que es una put…, entre otras perlas… y mas aun si javier por despecho soltaba algo, y con lo boca floja que él era. Si me contaba sin tapujos sus aventuras con sus amigas, ya me imaginaba lo que podría decir de cielo riveros…

- tienes razón… bueno, creo que mejor vas a tu casa, yo veo como soluciono esto, cualquier cosa yo te llamo…

- no te vas a pelear con el… me dijo asustada.

A decir verdad, me gustaría amenazarlo, y si eso no funciona darle algunos golpes… pero tranquila… se que eso empeoraría las cosas.

- entonces ¿qué vas a hacer?...

- ya se me ocurrirá algo… o tal vez no tenga que hacer nada, quizás su equipo pierda… ¿te acompaño o te vas sola?...

- no, me voy a quedarme un rato más, debo encontrarme con una amiga en la biblioteca para estudiar, luego me voy…

- está bien… entonces nos vemos… me despedí y le di un beso de amigo en la mejilla para no levantar sospechas, solo que mis labios rozaron los suyos, note como se ruborizaba.

Enfile hacia las losas deportivas para averiguar cómo iba el campeonato y si el equipo de javier ya había sido eliminado. Pero las noticias no eran buenas, como comente su equipo paso a cuartos de final y su rival sería un equipo que a duras penas logro clasificar… así que fácilmente podría avanzar a semifinales…

mientras tanto yo maquinaba como evitar la oleada de acciones y reacciones que podían suceder si javier ganaba el campeonato… pensé en unirme a alguno de los equipos clasificados, total había ido a la universidad en ropa deportiva… solo que todos los equipos estaban completos, y de haber algún cupo muchos dudarían en dármelo, debido a que yo llevaba buen tiempo alejado de los campos deportivos.

En menor medida, también sería un poco sospechoso que yo insistiera a como dé lugar en ingresar a un equipo. Hasta el poco sesudo de javier podría empezar a sospechar de mis motivaciones, podría empezar a asociar cosas, mi reciente amistad con cielo riveros, nuestras amanecidas estudiando, su reciente ruptura, mi reciente interés por jugar fútbol…

solo me quedaba esperar una oportunidad, o tal vez fingiendo un accidente, un tropiezo o algo, caerle encima, lesionarlo… ¿qué se yo?... Pero ¿cómo hacer que parezca algo casual? ¿cómo lesionarlo de tal forma que no juegue?... Meditaba esto mientras veía clasificar a semifinales al equipo de javier. Las semifinales y la final se jugarían en el coliseo.

¡diablos!... ¿y si les invito una bebida con un purgante fuerte?, todos terminarían en el baño y no jugarían… sería muy llamativo y ¿dónde consigo un purgante así?, que haga efecto rápido y que me lo den sin receta médica...

Creo que mejor lo lesiono… no sé si funcione, total su equipo sin él también puede ganar y él podría pedir su recompensa… pero cielo riveros podría argumentarle que el no estuvo en el equipo jugando la final… si puede ser… me dije viendo que no tenía más opciones.

Los equipos calentaban en las zonas auxiliares al campo principal del coliseo, por el momento había poca gente en las tribunas. Vi a javier separándose de sus amigos y dirigiéndose a los baños, decidí seguirlo… es solo cuestión de pisarle el tobillo de manera casual, no provocarle un esguince, pero si dejarlo adolorido como para que no juegue… estaba por alcanzarlo, no me enorgullecía de lo que iba a hacer, era algo sucio… pero algo tenía que hacer…

estaba cerca, iba a pisarle el tobillo, iba a lesionarlo… solo que el lesionado fue otro…

- ay caraj…

javier volteo instintivamente y yo también, se sorprendió al verme detrás suyo casi acechándolo… pero más le llamo la atención la persona que profirió el quejido… el lesionado…

era el arquero del equipo de guillermo, durante el calentamiento había recibido un balonazo en la cara, mejor dicho en la nariz, y por la fuerza que tenía el disparo lo estaba haciendo sangrar a borbotones.

Nos acercamos a ayudarlo, parecía que tenía el tabique desviado, se le empezaba a hinchar la nariz… un compañero que no era del equipo había sido el culpable del potente remate que casi deja sin olfato al arquero de guille. Era evidente que no podría continuar. El causante del problema compungido y entre reproches acompaño al arquero al servicio médico de la universidad.

- uy guille… jajaja… que mala suerte… se reía javier viendo que el único equipo que podría quitarle el trofeo tenía una baja en sus filas.

- maldita sea… inscribe a sergio como refuerzo… que juegue para nosotros de arquero… bramo guillermo.

- no, el ya jugo para otro equipo, y los refuerzos solo pueden ser jugadores que no hayan participado en ningún equipo… le explico un compañero.

- entonces llama a david… él no ha participado…

- sí, pero está en su casa, hasta que venga va a pasar más de media hora y el partido es en menos de 10 minutos… repuso otros preocupado.

Yo escuchaba la plática haciéndome el desentendido, mientras javier, celebraba para sus adentros su suerte…

- si quieres yo juego para tu equipo… propuse, como quien no quiere la cosa, como quien le hace un favor a un amigo desesperado.

- ¿tu?... Repuso aún más burlón javier.

- oye danny aprecio tu ofrecimiento, pero hace tiempo que no te vemos jugar fútbol, y que yo recuerde tu eres medio campista no arquero… dijo guille incrédulo.

- si… pero bueno… en mis tiempos en el colegio jugaba en el arco y no lo hacía mal… repuse mintiéndole, era la única forma de que me aceptara en su equipo y de intentar evitar que javier ganara el trofeo.

- está bien… dijo y volteando a uno de sus compañeros agrego… denle la camiseta del arquero.

Tenía unos 5 minutos para calentar mis oxidados músculos deportivos y recordar lo básico sobre como cuadrarse en un arco de fútbol. Javier de regreso del baño, risueño observaba mi torpe calentamiento, mis adormecidos reflejos… la siguiente vez lo vería en el campo de futsal, en el equipo rival…

- suerte… me dijo y agrego socarronamente: la vas a necesitar.

¡caraj…! En que líos me meto, puedo quedar en ridículo frente a la facultad, primero si es que me como una goleada espantosa y segundo si perdemos, cielo riveros no va a cumplir su promesa, van a saltar los chismes, la habré defraudado… pero ya veré que hago pensé mientras entraba al campo deportivo, atendiendo al llamado del árbitro…

durante el primer tiempo no tuve mayores problemas, algunas torpes intervenciones, pero que nos salvaron, además la defensa del equipo de guille sabia que yo no era buen arquero así que redoblaban esfuerzos en ayudarme… el problema era que el equipo de javier también se dio cuenta que yo era un improvisado en el arco, y en el segundo tiempo atacarían con mayor fuerza.

En el entretiempo, guille se me acerco:

- eres un buen amigo, gracias por la ayuda, resiste un tiempo más, no te preocupes si pasamos a la final no tendrás que jugar, antes que empiece el partido mandamos llamar a david… por si las dudas…

lejos de ofenderme, me sentí aliviado, un partido era suficiente. En lo que a mí respecta esta era mi final y no podía perderla…

empezó el segundo tiempo y el equipo de javier se volcó con todo a mi arco. Casi todo mi equipo estaba en nuestro campo defendiendo, solo quedaba guille para el contragolpe…

ya durante los primero minutos mis reflejos habían despertado, producto de la adrenalina de las situaciones que tenía que evitar (los goles y los chismes)… solo hubo un pequeño incidente que termino en gol…

de pronto en el coliseo empezaron a silbar, como lo hacen cuando hay chicas guapas… ¡diablos! ¿en que momento se llenó el coliseo? Pensé primero y luego, hombre al fin, fije mi vista hacia la zona en que todos divisaban a una agraciada muchacha, en mallas deportivas, ¡caraj…! ¡esa apretada ropa no dejaba nada a la imaginación!…

mayor fue mi sorpresa al descubrir que aquellas curvas las conocía, pertenecían a cielo riveros… ¿de donde demonios saco esa ropa?... Me preguntaba esto cuando un remate desde fuera del área paso por sobre mi cabeza, sacándome de mi abstracción… ¡mierd…!... Se me fue…

el disparo hizo retumbar el travesaño del arco, en tardía reacción logre saltar y tomar a duras penas el rebote… pero prácticamente todo el coliseo estaba más pendiente de las monumentales curvas de cielo riveros, que ahora se agachaba criminalmente, dejando ver todo su voluminoso trasero…

tanta fue la conmoción y el barullo que esto genero entre el público, que los propios jugadores, con natural curiosidad voltearon a ver… el equipo de javier estaba tan embelesado con las carnosidades de cielo riveros, que ni siquiera protestaron que el balón había sobrepasado la línea de gol… aleje el balón del arco para no levantar sospechas, me quedé atónito un momento por la sugerente posición adoptada por cielo riveros… hasta que…

- psss... Psss… danny… el balón… era guille que quería aprovechar la distracción del rival.

No lo pensé dos veces, le lance el balón, él lo recibió cerca del medio campo, avanzo sin mayor problema, otro compañero se unió al ataque. Cuando el equipo rival se dio cuenta, ya estaban en desventaja, todo su equipo estaba en mi campo, un defensa suyo quiso regresar, pero al final entre guille y su compañero terminaron por someter al arquero… fue sencillo… ¡gol!

Cielo riveros ya estaba sentada en sus abultadas nalgas y creí ver que me sonreía… hasta creo que casi salta de su asiento para celebrar el gol que la salvaba de su promesa… solo que disimulo… bandida, creo que ya había logrado su cometido, había captado la atención necesaria que nos permitió anotar… quizás por ello se vistió así… vino a darme una mano para salvar su ano... Nuestro rival perdía cuando faltaban menos de 5 minutos para que termine el encuentro.

El equipo de javier se fue contra el árbitro, para que invalidara el gol, pero él no cedió, la pelota estaba en juego, el nunca paro las acciones… el gol era legítimo. A mí me convenía que protestaran más, porque así quemaban más tiempo.

Maldición, debo aguantar unos minutos más… con más confianza y con una bella dama que con su mirada me alentaba, me di tiempo de lucirme un poco, con algunas atajadas felinas. El rival perdía los papeles, quedaba un minuto, una pelota al córner… javier estaba desesperado.

Vino el lanzamiento desde la esquina y javier se abalanzo con todo a cabecear. Yo iba a coger el balón pero fui empujado por los codos de javier y nuevamente la pelota se fue al córner… así que te gusta jugar rudo, me dije furioso por lo poco leal de la acción, ahora veremos…

nuevamente vino el balón desde la esquina, otra vez javier se lanzó como si su vida dependiera de ello… solo que esta vez yo salté con la rodilla en alto y los codos desplegados en legítima defensa.

Fue tal el impulso que llevaba javier que, al chocarme, su cara se estrelló contra mi codo, al igual que sus costillas contra mi rodilla levantada. Yo caí de pie, pero mal, me torcí el tobillo… aun así no solté el balón… en cambio javier cayó estrepitosamente, tomándose la cara y haciendo un show que logro convencer al árbitro… penal…

- ¡mierd…!.Mi tobillo!... Son ironías del destino, por desear torcerle el tobillo a javier para que no jugara, al final yo termine torciéndome el mío.

Mis compañeros se fueron contra el árbitro, yo cojeaba… pero él no iba cambiar de opinión, era penal. Yo había traspasado el área chica (zona segura para los arqueros) en mi afán de tomar el balón y supuestamente había lesionado al jugador del otro equipo.

Guille preocupado me miraba… se ofreció a atajar el penal, pidiendo un cambio para mi… no acepte, tampoco lo aceptaría el árbitro…

obviamente adolorido pero con una sonrisa de oreja a oreja, javier tomaba el balón… creo que ya se imaginaba el desenlace del partido: el anotaba el penal, nos íbamos a tiempo extra, teniéndome convaleciente, el equipo de guille no aguantaría y él pasaría a la final, donde tendría a un rival menos resistente que nuestro equipo…

en su rostro se veía que ya saboreaba todo eso… yo me paseaba adolorido esperando que colocara el balón… intentaba caminar derecho, pero no podía… algunas muecas de dolor surcaron mi rostro.

A lo lejos una expresión de preocupación de cielo riveros, sentí que era más por mi estado que por el desenlace de ese partido. A mis lados veía rostros de preocupación, mis compañeros bajaban la cabeza, daban por perdido todo… solo guille me tenía algo de fe… o al menos fingía bien… y frente a mí la sonrisa casi triunfal de javier… ya se imaginaba detrás de cielo riveros… partiéndole ese culito que solo yo había saboreado… y yo quería que así se quedara…

puso el balón en su sitio, yo me cuadre a duras penas, intuía que lanzaría el remate hacia mi lado derecho, porque ahí era que mi tobillo estaba lesionado, prácticamente apoyado en un pie estaba decidido a lanzarme hacia el balón… el silbato sonó…

javier enfilo al balón… hizo la "paradinha", es decir se detuvo antes de disparar, con ello logro que por los reflejos y la inercia yo me lanzara a un lado… y con el arco desguarnecido… él hizo un potente disparo… ¡por la put… madre! ¿cómo me deje engañar de esa manera?... Me lamentaba adolorido en el suelo, cuando escuche retumbar el arco.

- ohhh… escuche el murmullo en el coliseo.

Lance mi vista al otro lado del arco, que aun vibraba, el balón dio un fuerte rebote que llego casi al medio del campo, nuevamente guille corrió enloquecido en su búsqueda, mientras javier se arrodillaba frente a mi tomándose la cabeza… había hecho casi todo bien, solo al final, producto de su propia ansiedad había estrellado el balón contra el arco…

al otro lado del campo guille sellaba, con su segundo gol, la suerte del partido… no había tiempo para más… ganamos 2-0.

Todos sus compañeros se acercaron a abrazarme como si hubiéramos ganado la final. Entre la amontonadera de gente busque a cielo riveros… había desaparecido… al igual que javier… ¡mierd…! Creo que se quiere cobrar su apuesta si o si…

si la toca, lo masacro, no importa le daré una golpiza con un solo pie, le haré la grulla a lo karate kid, pensaba enardecido…

caminando a duras penas me disponía a salir del coliseo y buscarlo para ajustar cuentas… pero observe que el equipo de javier se había agolpado a un lado, y él en medio. Todos le reprochaban por la manera tonta en que desperdicio el penal… le decían que de todas maneras le cobrarían lo prometido, ya que por su culpa habían perdido…

me sentí un poco mal por javier, pero aliviado de que mi relación con cielo riveros continuase sin problemas, ahora que ya estaba totalmente desvinculada de él.

No pude dar un paso más, me dolía el tobillo, me senté en las gradas, los compañeros de javier me alcanzaron una bolsa con hielo y por ahí alguna pastilla para el dolor, vendas y esas cosas que siempre cargan por si acaso…

busque por todos lados no veía a cielo riveros, había desaparecido, quizás presagiando alguna mala reacción de javier, quizás aliviada, se fue a quitar esa llamativa ropa y luego regresaría…

como no tenía nada mejor que hacer, espere…

ya iba a empezar el partido de la final y ni señales de ella… bueno, veré el partido y la llamare mas tarde, me dije cuando sentí que algo me hincaba… mierd… debe ser el hijo del conserje, ese niño del demonio tiene la costumbre de fastidiar.

Por entre los tablones que conforman las gradas del viejo coliseo, existen pequeñas rendijas, por donde ese niño solía pinchar a los espectadores con palillos… más de una vez se había ganado un coscorrón, pero aun así insistía en su travesura… yo no estaba dispuesto a aguantar pulgas.

Menos adolorido, pero aun cojeando flanquee las tribunas, por debajo de ellas, el espacio era utilizado como almacén: colchonetas, mallas, balones, etc. Eran apilados allí. Encontré la puerta de ese almacén semi abierta… mocoso del diablo, ahora vas a ver… pensaba sorprender al niño in fraganti mientras fastidiaba a otros… pero el sorprendido fui yo.

Ni bien mi mano toco el marco de la puerta, fue tomada y jalada hacia adentro… de repente me vi en el interior de aquel recinto semi oscuro. Estaba desorientado, casi sin equilibrio por lo rápido de la acción, mi vista aún no se acostumbraba a la poca luminosidad que se filtraba por entre las bancas.

Mi primer pensamiento fue que un niño no pudo haberme jalado de esa forma, quizás era alguien que quería una revancha… si, tal vez era javier que quería arreglar cuentas con el que le quito la posibilidad de poseer el culito de cielo riveros, o quizás por la treta que hizo cielo riveros el logro darse cuenta que yo era la razón por la que cielo riveros termino con el…

todos estos pensamientos cruzaron rápidamente por mi cabeza mientras recuperaba mi equilibrio e instintivamente me ponía en guardia con los puños... Dado que él era el cornudo podía darle la ventaja del primer golpe… y así fue… me dieron el primer golpe… solo que no fue como yo lo esperaba…

aun como murciélago intentaba descifrar en la oscuridad la ubicación de mi agresor, cuando me tomaron de la solapa y me jalaron nuevamente, sus brazos rodearon mi cuello en una extraña llave… su pecho golpeo el mío… y sus labios tocaron los míos con fiereza… ¿qué? ¿javier se volvió gay?...

No nada de eso, no era él… por la lujuria impresa, por esa pasión que irradiaban sus besos, era ella… si, era cielo riveros…

mis torpes reflejos buscaron autentificar que fuera ella, mis manos ladearon su estrecha cintura y como no, se deslizaron por sus esplendorosas caderas… si, era ella, esa voluptusiodad solo podían ser de ella… recorrí a gusto todas sus redondeadas formas, ella no protestaba solo me besaba con mayor candor…

era una delicia recorrerla con mi tacto, la ropa que llevaba, aquella infartante malla deportiva (de aeróbicos), era prácticamente su segunda piel, se amoldaba correctamente a sus formas, podía sentirla…

- no puedo creer que hayas hecho esto por mi… me susurro al oído con cariño, casi extasiada por los besos.

- por ti haría eso y mucho más…

mi vista, ahora si acostumbrada a la penumbra, al fin veía el agradecido rostro de cielo riveros… tan solo su sonrisa podría iluminar aquel ambiente.

- no puedo creer que te hayas vestido así para distraerlos…

- jajaja…

- ¿cómo sabias lo que pasaba?…

entre al coliseo para ver cómo iban las cosas, durante el primer tiempo te vi haciendo enormes esfuerzos por no perder, pensé en darte una mano, por suerte encontré a erica, le pedí prestada su ropa de gimnasio y en el descanso me cambie.

- ¿pero cómo entraste aquí?

Cuando termino el partido y todos estaban distraídos, me fui al baño a cambiarme y en el camino vi la puerta semiabierta, entre por curiosidad… y luego se me ocurrió buscarte… me demore, pero por suerte te encontré.

Pero no has dicho nada acerca de cómo me queda esta ropa ¿te gusta?... Pregunto como niña engreída, aunque me la comía con la mirada ella quería escucharlo de mi boca.

- te queda fenomenal… le dije y la bese con mayor lujuria.

Mis manos instintivamente se pasearon por sus gordas nalgas hasta terminar prácticamente dentro de aquella quebrada que separaba sus abultados cachetes… ella excitada, correspondía con su lengua mis manoseos…

pero, cómo fue que te inclinaste, me gustaría verlo de nuevo… dije incentivando mi morbo, que no necesitaba mucho, porque mi verga estaba súper dura.

Ella se apartó de mí, entendiendo mi intención, sus ojos le brillaron de ansiedad, casi de regocijo al intuir en lo que iba a terminar ese juego… no importaba que sobre nosotros hubiera un mar de gente, resguardados por los tablones de las gradas, podríamos dar rienda suelta a nuestros instintos.

Fue más o menos así… dijo cielo riveros sensualmente, al mismo tiempo el barullo se incrementaba afuera, la final iba a empezar.

Cielo riveros se fue inclinando lentamente, dejándome saborear en todo su esplendor las apetecibles curvas de su cuerpo. Con las piernas semi abiertas y la espalda encorvada, empinando su jugoso trasero me dejo sin aliento…

¡diablos!!Todo eso era mío!... Pensé no dando fe a la magnitud de los atributos físicos que cielo riveros me mostraba. Ella me miraba desde su posición, sonreía coquetamente, por momentos se mordía los labios, quizás por ansiedad.

Me dio una especie de ataque de ansiedad, como un niño que por primera vez va tener sexo, el morbo que la posición adoptaba por cielo riveros, me generaba era insoportable… y no lo soporte...

Me abalance sobre ella, no fue difícil bajarme el pantalón deportivo y con mi verga en ristre apuntaba mi camino, ella se sorprendió por la vehemencia con que me adelante, no atino a moverse. Cuando quiso reaccionar, mis manos ya habían desnudado sus enormes nalgas. Solo un pequeño hilo de lo que aparentemente era su diminuta ropa interior, se interponía entre mi verga y sus intimidades.

Hice a un lado su pequeña tanga, entonces ella interpuso su mano entre mi verga y sus labios vaginales… quizás temerosa por lo sorpresivo y alocado de mí accionar… pero no fue eso…

- tu ganaste el partido… te mereces el premio mayor… dijo con malicia, apuntando con uno de sus dedos a su estrecho ano.

Al ver mi reacción sorprendida, ella sonreía con lujuria. Acto seguido sus manos apartaron sus abultadas nalgas para que yo pudiera divisar mejor su arrugado anillo. A estas alturas yo no sabia para quien era el premio, para mí o para ella, ya que era evidente que el sexo anal era una recompensa también para su apetito sexual…

a pesar de mi arrebato inicial, ahora un tanto atónito por las iniciativas de cielo riveros, yo no atinaba a reaccionar, entonces ella fue retrocediendo. Así torpemente por su excitación y sin quererlo, mi verga fue resbalando por su agujero… no quise moverme ni ayudarla, me gustaba verla desesperarse, angustiada por ser penetrada por detrás… pensar que semanas antes no daba mucho crédito a lo que el sexo anal podía provocarle, y ahora se había vuelto adicta a este placer…

tanta fue su insistencia que por fin mi verga fue haciendo diana en su esfínter… aliviada de ese cosquilleo fue relajándose, saboreando la fricción que la cabeza de mi pene ejercía en su arrugado ano… sin embargo no era suficiente, empujaba y empujaba para insertarse más mi verga, pero sus movimientos eran dificultosos y no lograba ser penetrada con la rapidez que su excitación le exigía…

yo disfrutaba observándola, viendo su estrecha malla apenas por debajo de su húmedo pubis, con sus colosales nalgas abiertas de par en par, su rostro deseoso y encendido por el esfuerzo que hacia…

notando que no la ayudaría a insertarse mi verga y no queriendo suplicarme que lo haga, seguro por temor a ser escuchada por alguien sobre nosotros (en la tribunas), cielo riveros no pudo mas, simplemente se incorporó un poco y paso una de sus manos hasta agarrar mi verga con firmeza y ella fue jaloneándome y empujando su trasero… ella misma fue insertándose mi verga…

- uhmmm… fue soltando cálidos suspiros de alivio al sentir que mi verga iba llenando su cavidad anal.

Con cada tramo que ingresaba a su goloso trasero, ella cerraba los ojos y abría su boquita en mueca de dolor por momentos y placentera en otros, como disfrutando cada pedazo de carne que se le iba incrustando…

- vamos… ¡por favor!... ¡ayúdame!... Me dijo suplicante, casi llorosa.

Sonreí al verla en tan sumisa posición… yo siempre era el que iniciaba las acciones, solo en el cine ella me propuso hacerlo, pero esta vez ella prácticamente se había metido mi verga endurecida en su pequeño agujero, que una chica haga algo así es por demás excitante.

No la hice sufrir más… le incruste salvajemente toda mi verga.

- ahhhh… exclamo cual alarido mientras se retorcía de placer, luego agrego volteando, con rostro febril, casi si poseído por la lujuria: graciasss…

ahora si quise retribuirle sexualmente la ayuda que me presto durante el partido… la toma de la cintura como a mi potranca, masajee sus abultadas nalgas y empecé a cabalgarla duramente…

- ohhh… uhmmm… ohhh… escuchaba sus sonoros gemidos que afortunadamente no se oían afuera por los vítores deportivos de las tribunas.

Lo mejor que podía hacer en agradecimiento a ella, era castigarla analmente para satisfacer toda su morbosidad, todo su apetito sexual recientemente descubierto, y también para desfogar la tensión sufrida en las últimas horas por aquella apuesta que tenia con javier.

- si así, así… más… mas… mas… suplicaba cielo riveros tambaleante con la apretada malla deportiva sobre las rodillas.

Ella estaba con los codos sobre las rodillas, resistiendo mis embates, intentaba mantener el equilibrio y a la vez dejar todo su voluminoso trasero en una adecuada posición para que la penetraran con fuerza, solo que no resistió mucho y tuvo que apoyar las palmas de las manos en el sucio piso, sin dejar de vociferar y gemir como loca.

- sigue por favor sigue… rómpeme el culo asii... Asi… ahhh…

sus nalgas vibraban con mi empuje, así como los tablones de las tribunas con cada jugada en el campo deportivo. Empapados por el sudor nos resistíamos a decaer por el cansancio, mas bien incrementábamos le ritmo.

Cielo riveros quiso liberar sus senos, que saltaban torpemente, parcialmente aprisionados por el pequeño top deportivo. Con una mano logro zafar sus melones, que ahora temblaban desnudos a placer.

Pero en esta acción, dejo de apoyarse en el piso con sus manos, y por la vehemencia con que sometía a su trasero, ella perdió el equilibrio. Casi se fue de bruces y en su caída me jalaba a mi. Así trastabillo unos pasos, con mi verga en su ano y la apretada malla apenas sobre las rodillas.

Hasta que en su desequilibrado camino se encontró con un tubo metálico que servía como columna para las graderías del coliseo. Fue allí donde pudo apoyar sus manos y levantar parcialmente su espalda. Sin embargo, por el impulso que yo traía no pude equilibrarme y con toda mi inercia me fui a estrellar con ella…

- ayayay… me partiste el ano… auuuu… vociferaba cielo riveros adolorida.

Parecía cierto, mi trastabillar fue amortiguado por las nalgas de cielo riveros, mi propio peso había hecho que mi verga se le incrustara criminalmente en el ano, abriendo sus jugosas nalgas de par en par, empujando su tórax contra el frió metal que ahora separaban sus henchidos senos.

- ay mi culito… se lamentaba cielo riveros, casi sollozante.

Así, estampado su pecho contra el tubo de acero, y su espalda semi inclinada, cielo riveros se reponía de aquel choque… pero a mí me causo shock su imponente posición: con sus redondas nalgas arremangadas contra mi ingle, con su ropa ajustada apenas sobre su vagina, su estrecha cintura, su espalda sudorosa, su brillante cabellera y sus manos aferradas a la columna... Parecía una esclava esperando su suplicio… y eso le iba a dar…

- ayy… auu… espera que aun duele… no seas tosco… auu… se quejaba.

A mi no me importaba, nuevamente estaba con el morbo a mil, con aquella ansiedad de aquel que por primera vez experimenta el sexo. Mis manos aferradas a su cintura y mi verga clavando a placer su pequeño ano, sus gordas nalgas rebotando contra mí y ella sin escapatoria… solo le quedaba resistir…

- ya no danny… ouuuu… más despacio… ayyy… uhmmmm…

- ¿ves? Sabía que te iba a gustar…

- ayyyy… si… pero más suave… uhmmmm… gimoteaba a un adolorida.

Nada que más despacio, pensé y continué castigándole el ano sin piedad… sus abultadas nalgas vibraban como las graderías con la gente saltando.

- que rico culo tienes… exclame embelezado observando su fenomenal trasero.

- ohhh… si, si, es tuyo… haz lo que quieras con el… destrózalo… uhmmm… pero no pares… sigue por favor…. Acábame…. Ahhhh…

incremente el ritmo de manera infernal, y así ardían nuestras intimidades, un calor propio del averno, que nos proporcionaba un placer demencial… llega el punto en que ella también, a pesar de su estrecha posición empezó a empujar su escultural cuerpo contra el mió, chuleándome a rabiar… loca de lujuria y gozo.

- ahhhh… ooohhh… ahhhh… era tan fuerte el placer que cielo riveros sentía que ya no alcanzaba a gesticular palabras.

- ufff…. Mientras mi verga disparaba violentamente semen en su estrecho esfínter.

Cielo riveros transmitía al tubo metálico, con su cuerpo tembloroso y rígido por momentos, todo el placer y los espasmos que le provocaban cada chorro de esperma.

Poco a poco, nos fuimos dejando caer de lado hacia una colchoneta de gimnasia, exhaustos pero satisfechos, sudorosos, adoloridos por el esfuerzo… pero con ganas de prodigarnos caricias aun…

yo aún seguía detrás de ella, pegado con mi verga aun deshinchándose dentro suyo… abrazándola por detrás, acariciando sus palpitantes senos, dándole uno que otro beso cariñoso que no podíamos prolongar porque aún no recuperábamos el aliento.

- ohhh… se escuchó rugir en las tribunas sobre nosotros, luego las protestas y otros improperios.

- no lo hiciste tan mal… me dijo cielo riveros sonriendo.

- jajaja… creo que silban y se quejan porque terminamos nuestra función… dije bromeando.

Pero no era por eso… entre el barullo sobre nosotros logre escuchar que al parecer en el campo de deportivo se había desinflado el balón de fútbol con el que jugaban, y al parecer los coordinadores del campeonato no tenían otro de repuesto a la mano.

Hasta que a un infeliz, en las tribunas, justo encima de nosotros se le ocurrió la gran idea, o ideota, para mí era un tremendo idiota... En fin, el tipo este propuso que sacaran una del almacén…

cielo riveros y yo nos miramos helados… caraj… ahora el problema no era que javier nos descubriera, sino que todo el coliseo lo hiciera…

caraj… que se calle este imbecil… pensaba en voz alta.

- ojala no lo escuchen… decía cielo riveros temblorosa.

Pero este tipo parecía empecinado en darnos la contra y cada vez gritaba más fuerte y se ofrecía a buscar una pelota en el almacén, lo que no se imaginaba era que nos iba a encontrar en pelotas a cielo riveros y a mi.

Pero ese tonillo de voz me era cielo riverosr… mierd… era su voz… era él…

- es la voz de javier… me dijo cielo riveros asustada.2

no se que será, instinto, sexto sentido, habrá presentido que le estábamos poniendo los cuernos justo debajo de el... Que estábamos celebrando sexualmente su derrota… o que se yo… el asunto es que en pocos minutos o segundos, javier entraría al almacén… esta vez no podría retenerlo porque seguramente no entraría solo…

ahora si parecía que no había escapatoria, el secreto de nuestra relación se haría publico… y ante un numeroso público en las tribunas… ¡que cagad…!...
-¡mierd…! ¿qué hacemos?



- si tú no sabes… yo menos… repitió sollozante cielo riveros.



Los tablones de las gradas crujían, javier estaba bajando, entre las rendijas divisamos su silueta. Mi verga aun incrustada en el ano de cielo riveros se iba deshinchando apresuradamente, reduciéndose a su mínima expresión.



Miraba hacia los lados, buscando un lugar donde escondernos pero nada, habían algunos estantes, pero semi vacíos, nada que pudiera cubrirnos completamente. Hasta que divise un closet, pero para nuestro infortunio tenía un enorme candado puesto.



¡ahora si nos jodimos!... Prensaba, mientras sentía el cuerpo de cielo riveros gélido, petrificado, temblando por momentos.



- danny tengo frío…. Musitaba temblorosa cielo riveros.



Le frotaba los hombros y brazos, la abrazaba por la espalda procurando darle calor, parecía que nuestra suerte estaba echada. Solo me quedaba consolarla, abrigarla. En ese momento solo me preocupaba por ella, ya había dejado de lado cualquier intento de escape.



Si nos vestíamos y fingíamos que estábamos allí de casualidad, nadie se lo creería. Lo otra opción es que solo yo me vistiera e intentara alejar a javier, al igual que el otro día en la biblioteca, lo cual seria por demás sospechosos, además cielo riveros no tendría donde esconderse, ¡diablos, si podía funcionar!, simplemente le diría que yo fui primero a buscar el balón... Pero era muy tarde…



escuchaba el barullo cerca de la puerta. Apoye mi cabeza contra una áspera lona… caraj… nos van a pillar in fraganti, javier y todos los que lo acompañen. Diablos… yo puedo liarme con él, eso no es problema, tampoco me importa que los de su equipo me quieran linchar… cielo riveros, como va a quedar… mientras javier forcejeaba la puerta para entrar… yo me daba cabezazos contra la rugosa lona… un momento… la lona… ¡eso es!…



se trataba de una sucia y enorme lona revestida de material impermeable, que usaban para cubrir el campo del coliseo. Era de buen tamaño y mi cabeza estaba apoyada en una ruma.



Con toda la fuerza que me quedaba, después toda la tensión del encuentro deportivo y la lujuria del sexual. Cielo riveros ni se movía, creo que apenas si respiraba, solo sabia que seguía viva por los temblorcillos que deba de cuando en cuando.



Parecía que no encontraban la llave del almacén, eso me daba algunos segundos mas… solo que escuche la voz del mocoso ese, el hijo del portero que anunciaba que traía la llave, debía apurarme.



Cielo riveros, ayúdame…



¿qué?... Oh… si… si… repitió maquinalmente al darse cuenta de mis intensiones.



A duras penas, jaloneamos una ruma de la lona y nos cubrimos como pudimos… yo seguía detrás de ella cubriendo su cuerpo, así adoptamos una posición fetal, para simular ser otra ruma de la lona e intentar pasar desapercibidos. Cuando le daba el ultimo jalón a la lona escuche la perilla de la puerta girar bruscamente y el chirrido de las bisagras. Ya estaban adentro.



Cielo riveros volvía a temblar como auto viejo, yo la apretaba más hacia mí para evitar que sus movimientos nos delaten. Escuchaba sus pasos… su conversación… pero por sobre todo sentía las temblorosas nalgas de cielo riveros sobre mi ingle… masajeándome, provocándome una nueva e inoportuna erección.



Oye… ¿dónde guardan los balones de fútbol?... Preguntaba javier.



No se… por allá creo, por los estantes…



esos estantes estaban detrás de nosotros, y a pesar de la situación comprometedora en que estábamos yo no podía menguar mi erección, mas bien los movimientos de cielo riveros la incrementaban. En esa situación la cabeza racional no manda, la cabeza del pene parece tener vida propia en esos casos.



Mi verga crecía nuevamente dentro del ano de cielo riveros, con mis manos apretaba los melones de cielo riveros que se henchían por la sorpresa de sentirme. Intente sacarla parcialmente, lentamente, logre sacar una parte… hasta que...



Escuche los pasos de javier cerca de mi cabeza… aun así mi verga seguía tiesa… cese mis movimientos… sus pasos se alejaron, no mucho… no lo escuche por segundos, parecieron minutos, horas… luego…



aca hay uno… dijo triunfal.



Al fin se iría y nos dejaría terminar lo que mi verga estaba empezando… pensé aliviado… pero…



pero esta medio desinflado este balón.



Mierd… lárgate caraj… quise gritarle.



Joven… por acá hay otro… replico el niño.



¿qué tal esta?



Si, creo que esta bien…



nuevamente los pasos de javier cerca de mi nuca…estaría camino al niño de espaldas a mi… casi triunfal y alegre por que se iría no lo pensé y le clave la parte a cielo riveros de mi verga que había sacado lentamente, ahora se la incrustaba violentamente.



Sentí sus uñas clavándose en mi pierna, auuu caraj… quise proferir. Su pecho se hinchaba más de lo normal, cambie mi mano de posición. Ahora tapaba la boca de cielo riveros para evitar que gritara o se quejara. Pero creo que hicimos más ruido de lo normal.



Escuchaste algo… inquirió javier.



No… pero… dicen que por acá hay un alma en pena… decía el muchacho asustado.



Yo también había escuchado esa historia: un joven murió a causa de un paro cardiaco en un encuentro de básquet, aquí en el coliseo, y que ahora su alma rondaba el almacén. Nunca le di mucha fe a ese cuento, me sonaba mas a leyenda urbana, mas bien creo que los ruidos eran producidos por otros jóvenes que como nosotros buscaban un encuentro fugaz. Pero si javier se creía esa historia y salía más rápido, mejor para nosotros.



No seas tonto… los fantasmas no existen… decía javier de mal humor.



Sentía las lagrimas de cielo riveros en mi mano, no se si era por el dolor de la verga que le incruste criminalmente o por el miedo a que, a pesar de todo, nos descubran.



¿hay alguien ahí?... Grito javier.



Si, yo, mal nacido y le estoy rompiendo el culo a tu ex… ¿era eso lo que esperaba que le respondan?... Porque simplemente no se iba y punto… pensaba mientras intentaba no moverme, pero una gotita de leche iba saliendo, producto de la excitación que las carnosas y ahora sudorosas nalgas de cielo riveros me propiciaban. Ella dio otro temblorcillo al sentirla.



Ves, algo se movió… dijo javier.



Vámonos joven… ya tenemos el balón…. Salgamos… repetía lloroso el niño.



Nuevamente sus pasos se acercaron a nosotros… bueno, si a si tiene que ser, así será… me dije… aprovechare sus sorpresa para darle algunos golpes… aunque preferiría dejarle el primer golpe, total él era el cornudo.



Sentí un peso sobre, seguro eran las manos de javier que iban a jalar la colcha y descubrir nuestro cuerpos… solo pensaba decirle ¡sorpresa! Y noquearlo para que no se arme el alboroto.



Pero ¿que es esto?... Me dije al sentir que algo se movía sobre mi hombro, parecían sus dedos, creo que estaba tanteando sobre la lona, para saber que era lo que se movía debajo… pero creo que no se había cortado las uñas…



miau…



gato de porquería… me pegaste un susto… exclamo javier.



Ve, solo era mi gato… déjelo ahí y vámonos… replico el niño.



Javier apúrate que mi equipo se enfría… le gritaba de afuera guille.



No se pero aquí hay algo raro… sentencio javier antes de salir.



Al fin escuche la puerta cerrarse. Mis músculos se relajaron, todos, menos uno que seguía en ristre.



Ayyyy… eres un idiota… auuu mi culito…… sollozo cielo riveros en voz baja, al fin pudo proferir las palabras que tenia aguantadas.



¿culito?... Tienes un rabo espectacular… dije mas cariñoso.



Tonto… auuu… dijo entre risas, a pesar del dolor que manifestaba no se alejaba de mí.



¿qué puedo hacer para compensarte?... Pregunte, pensaba en llevarla a comer, ir al cine o algo, pero ella tenia otra idea.



Bueno… termina lo que empezaste…. Me dijo con voz sugerente, meneando su enorme trasero en mi ingle.



Con gusto… respondí.



Aleje la lona que nos cubría los mas que pude, nos hacia sudar como puercos y luego comencé a castigar su glotón ano. Nuevamente mis manos estrujaban sus inflados senos.



Siii… auu… sii asi…. Gemia ella, le gustaba ese suplicio.



Yo besaba su cuello, ella se enardecía mas, con su brazo jalo mi cabeza hacia ella, nos besamos, mientras yo seguía bombeándole el culo por detrás, sentía sus gemidos entre sus labios, su lengua.



Mas… mas fuerte… siii… sii…ahhhh… pedia sumisa.



La había convertido en mi esclava anal. La podía someter como me diera la gana y seguramente lo hubiera aceptado gustosa, con una sonrisa de oreja a oreja… como ahora aceptaba que le taladrara el culo vehementemente y se atrevía a pedir mas… sin impórtale que hace pocos segundos hubiéramos estado al borde del colapso emocional… solo importaba satisfacer nuestros apetitos carnales, dejarnos llevar por la lujuria, casi locura, que el sexo anal nos provocaba.



Oh auuu…. Ahhh… se quejaba, gruñía, gustosa.



Levantaba una pierna para permitirle a mi verga incrustarse en su goloso ano sin dificultad, mis dedos estrujaban sus melones, de cuando en cuando en volteaba la cabeza y su lengua buscaba la mía, para darnos unos excitados besos, entre la agitación de sus melones.



Ohh… siii que placerr…. Ahhh…



cada vez la penetraba con más fuerza, alejaba mas mi verga y se la empujaba con mayor vehemencia, el trayecto que hacia era cada vez mas largo y sin embargo no perdía potencia en mis incursiones. Tan fuertes eran las perforaciones en su ano y tan alejadas, que mi verga perdio el paso y salio de su comelon ano.



No… no… por favor no… bramo enloquecida, creyendo que la estaba castigando por algo al no permitirle gozar de mi verga en su ano.



No me dio tiempo de reaccionar, tan solo paso rapi8damente una de sus manos por mi entrepierna, tanteo hasta encontrar mi tieso pene, lo agarro con firmeza como para que no se le escape y fue probando, usando mi verga como elastico, en su desesperación no sabia como hacer que mi verga entre a su ano nuevamente. Hasta que hizo diana…



no, no, por ahí no… se quejo tristemente al notar que había ingresado en su vagina.



Saco mi verga de su conchita y continuo tanteando hasta que lograra meterse mi pene en su pequeño agujero. Yo la dejaba maniobrar como si mi verga fuera un juguete, parecía una loca poseída, se desesperaba, temia que si yo intentaba ayudarla ella me golpeara, a ese punto estab llegandosu demencia anal.



Si, aqui esta, ahora si… chillo triunfal cuando mi verga se acerco a su maltratado pero hambriento ano.



Cuando tuvo la certeza que era su ano donde la cabeza de mi pene le cosquilleaba, ella misma procedió a incrustarse violentamente mi verga en su arrugado anillo… ella misma se lo clavo y se estremeció…



- oh… siii… que delicia… gimió temblando de placer…



comenzó a culearme al ver que yo no reaccionaba, incluso me palmoteo en mi cadera para despertarme, para que le siguiera castigando sus gordas nalgas, para que siguiera martillando su vicioso ano.



Vamos… por favor… así… pedía estrujándose ella misma los melones.



No fui ajeno a sus suplicas y nuevamente le taladre el ano, empecé lentamente solo para ver como su cuello se tensaba, como se desesperaba, y poco a poco fui incrementando mi ritmo hasta tener una frecuencia infernal…



- ahhh… ahhh…. Ohhhh…



su pierna, ya no podía permanecer levantada, estaba casi acalambrada, la bajo, casi entrecruzo sus piernas y abrió la mas que pudo su trasero con una mano, en esa posición sus nalgas eran como dos balones de fútbol. Así, y con la columna medio retraída, el tórax hacia delante, casi sobre el piso, así se dispuso a soportar mis embestidas…



ayyy nooo… uhmmmm…. … auhmmmmm….



La veía temblar, contraerse por momentos, no sabia si era de dolor o placer… se volvió hacia atrás, busco mis labios….Nuevamente libero sus piernas, con una pierna en el aire, queria que la penetraran mas a fondo….



- ohhh… no aguanto mas… ohhh… me dijo con expresión febril.



Y era cierto, estaba tan sumida en el placer, a tanto llego su excitación, que vi salpicar chorros desde su entrepierna, la vi estremecerse violentamente, por suerte sus estridentes exclamaciones y gemidos se perdieron entre los vítores de la tribuna… allí mismo habíamos llegado a un placentero y brutal orgasmo.



- uhmmmm …. Ouuuu…



- ufff…



ambos yacíamos desnudos sobre el piso, casi sin aliento, mi verga seguí escupiendo esperma en su goloso trasero, y a pocos centímetros un charco, producto de los líquidos de cielo riveros.



No puedo creer que me hayas hecho orinarme de placer, que vergüenza…



jajaja, no se si es orina o que cosa será… pero vaya que te mojaste…



ay te adoro… solo tu me haces acabar así… me dijo cariñosamente y me beso.



Escuchamos el tropel de gente bajando por las tribunas… el partido había terminado… y ahora la pregunta era: ¿se ira javier con toda la multitud o volverá a entrar al almacén para guardar el balón?



Sea como fuere, instinto, sexto sentido o tan solo un presentimiento… lo cierto es que yo sabia que estábamos cerca de ser descubiertos..

Acurrucados en el toldo, esperamos que la gente abandone las giradas, que el ruido se disipe y nos diera a entender que no había moros en la costa. Adormecidos, casi acalambrados pero felices, nos prodigábamos besos y caricias sin imaginar lo que pasara después.

- dany ya salieron todos creo, ya no escucho ruido…

- si hay que salir mejor antes que cierren el coliseo y nos dejen encerrados…

nos acicalamos como pudimos y salimos discretamente por la puerta debajo de la grada, entre juegos cariñosos, abrazos y besos… felices nos creíamos las únicas personas en el coliseo hasta que…

escuchamos risas estruendosas a pocos metros nuestro, vi las luces prendidas de los camerinos… ¡diablos… había olvidado que después de los partidos, los jugadores iban a cambiarse, a recordar las incidencias del partido, gastarse bromas y exagerar las hazañas conseguidas… hasta que entre las risas y gritos escuchamos…

- hey… y dany donde esta?... Nuestro arquero estrella que nos salvó… era la voz de guillermo

- ese desgraciado me las debe… era la voz, la voz, de javier, maldita sea, nos jodimos.

Mire a cielo riveros su rostro de placer y alegría pura se tornó pálido y asustado… congelada como estatua… reaccione lo más rápido que pude y le dije:

- vete que me van a salir a buscar… no deben verte…

no reacciono, solo escuche a guille decir:

- creo q vi a dany en las tribunas, espera q lo busco…

al no ver reacción en cielo riveros la tome de los hombros y la samaqueé…

- vamos reacciona vete... Vete caraj…

solo así reacciono y empezó su huida, lenta con el ano adolorido, como escaldada… a la mierd… o la deje convaleciente después de romperle el culo o esta así por el susto, pero debe moverse más rápido… debí decirle q se meta debajo de las gradas, pero ya era muy tarde…

- hey dany… vente a celebrar con los chicos, vamos a reírnos a expensas de javier…

- ah…. Si… si… vamos… dije poniéndome frente a guille para evitar que vea el penoso andar de cielo riveros, pero no funciono…

- oye… esa no es cielo riveros?... Pero q le paso q nada medio raro… y esa malla esta manchada…

lo primero q haría cualquiera al ver a una chica como cielo riveros en malla, seria verle el trasero, guille no fue ajeno a eso... Después de estar mucho rato bajo las gradas mi vista no era muy buena y no me había percatado que la malla de cielo riveros estaba manchada con mi leche…

- eso es… y el rostro de guille cambio… tú estabas, luego no… guille estaba deduciendo todo.

- ah bueno, el chico este q molesta debajo de las gradas, lo fui a buscar y… le intentaba explicar

- sí, pero ella desapareció… y ahora…

el rostro de guille cambio entre serio y broma, por más amigos que éramos, obviamente hay ciertos códigos de grupo, mas sobre meterse con las enamoradas de los amigos… no sabía que tan cucufato pudiera ser guille… yo me preparaba para lo peor, porque a pocos metros en el camerino estaba todo el equipo de guille y el de javier… se me venía un linchamiento terrible…

- a la mierd… no seas pendejo… te la tiraste?… jajaja… sentencio guille

- caraj… cállate… q te van oír… le dije

cielo riveros detuvo momentáneamente su andar, lo escucho… si él lo escucho, tal vez el resto en los camerinos también… diablos…

- te dejo de molestar, pero me vas a contar todo… y vente rápido sino la gente sale…

- ya está bien, pero regresa rápido antes q salgan… ahora te alcanzo… le dije,

me di un rato para ir a fui a alcanzar a cielo riveros, le preste una chompa para que se tape la vergonzosa mancha de mi leche en su malla, si guille se dio cuenta a la distancia, cualquiera fuera del coliseo lo notaria…

- que te dijo? Escuche que se reía y sentí que me miraba... Pregunto asustada cielo riveros.

- no nada, después te comento, solo cúbrete… no podemos salir juntos… voy a distraer a los chicos en el camerino, luego te llamo… le dije y volví presuroso para evitar q alguien más salga del camerino y nos vea juntos.

Ya en el camerino fui víctima de bromas pesadas, sobre todo de javier, quería desquitarse a la mala conmigo por haber impedido su triunfo. Note q sus bromas intentaban provocarme para algo más, quizás que pierda la paciencia y agarrarnos a golpes, imagínense si así se ponía por un partido de futbol, que sería si se entera que le andaba rompiendo el orto a su enamorada, bueno ex… en realidad lo descubriría poco después…

el asunto es que no le prestaba mucha atención a lo que decía javier o los demás, mi mente estaba más en cielo riveros y sus curvas. Para mi suerte guille calmaba las cosas cuando las bromas se ponían muy toscas, calmaba la situación, creo que quería hacer méritos para que le cuente todo…

terminado el cotorreo en los camarines el buen guille nos invitó a una de sus acostumbradas fiestas en su casa luego de los campeonatos las hacía para celebrar o simplemente para confraternizar. Guille tenía una casa enorme, llegue a creer que su viejo era narco... Luego me arrepentiría de asistir.

Ya en mi casa agotado, me disponía a dormir cuando cielo riveros me llama, le explique la situación… primer error, decirle la verdad a una mujer…

- que le vas a contar?... Dijo medio sorprendida y enfadada

- guille ha sido mi amigo hace un tiempo y nunca conto mis cosas personales que le conferí, solo le contare lo mínimo para que no moleste, además conviene tenerlo de aliado ademas javier tampoco es santo de su devoción… le dije calmandola.

- pero no le diras que me la metes por ahí… verdad?... Dijo medio pudorosa y avergonzada

- jajaja… no pues, jamás le diría eso a nadie… eso es nuestro secreto… lo recuerdas?...

- ok… mira que confío en ti... Dijo risueña… y…. Que harás mas tarde?…

esta golosa ya quería otra salida pensé, y ahí fue que cometí el segundo error de sinceridad, le dije que iría a la fiesta de guille, al no escuchar su voz, argumente que debía ir para guardar las apariencias, pero esa respuesta no fue de su agrado…

- las fiestas de guille son conocidas porque van las chicas más fáciles de la facultad y de los institutos cercanos… tú vas para guardar apariencias o vas de cacería?... Sentencio molesta nuevamente.

- wow… de donde salió todo eso?... Contigo me basta y me sobra, después de lo de la mañana me exprimiste tanto que tengo suficiente para el fin de semana… le dije a manera de halago algo brusco pero sincero.

Sonrió y se disculpó por celarme, luego continúo la plática y en teoría todo estaba bien, nos veríamos al día siguiente. Pero mujer es mujer… a pesar de tener un cuerpo de infarto, vestirse coqueta, es decir, que podría tener el hombre que quisiera sin necesidad de sentir celos, más bien yo debería ser el que este en guardia… aun así no le gustaba la idea de verme con otras chicas…

nunca hablamos de ser pareja… se estaría enamorando… de ser así… que sentía yo?... Me gustaba y demás, sobre todo romperle el ojete… pero nunca pensé bien que seguiría… bueno esas cosas no se piensan, se sienten… y al parecer con todo el trajín no estaba seguro… dejaría las cosas fluir y ver qué pasa… mientras nadie entere (iluso yo, ya lo sabía guille y luego …)…

dormí unas horas, desperté repuesto aunque con molestias en las piernas por el partido, me aliste para la fiesta, no tenía muchos ánimos de ir, desperté con unos deseos de ver a cielo riveros y poseerla de nuevo, cabalgarla de nuevo, ya era mi vicio… quizás este en la fiesta un rato y luego la busco, pensé y se me cumpliría como no me imagine.

Llegue poco más de las once a la fiesta y estaba armándose la rumba, como cielo riveros sospechaba había chicos y chicas de cacería, mujeres con ropa muy sugerente… minifaldas, shorts ajustados, mallas, era para volverse loco… vi a javier en una esquina con una tetona de gran escote (la succiona vergas pensé), mientras este entretenido sin molestarme, que le aproveche…

hasta que me tomaron del hombro… era guille, me ofreció una cerveza…

- ahora si pendejo… cuéntamelo todo y exagera…. Me dijo guille con sonrisa morbosa cómplice.

Le solté el rollo… le dije que a raíz de ese trabajo de grupo nos conocimos más y nos gustamos, una cosa llevo a la otra…. Que ella dejo a javier por eso estaba empinchado en el partido, que ella vino a apoyarme con la malla como distracción, etc, etc.

- pero te pasaste de pendejo, te la tiraste bajo las gradas con toda la gente arriba…. Jajaja…. Mis respetos… sin joderte mucho, ese culito esta para otras cosas… eres un suertudo.

- algún día, pero ya me dio a entender que no le gusta eso… le dije mintiéndole, como cambiando de tema… pero el tema volvería al tapete en ese instante.

Apareció una rubia en un micro-short infartante, que para ser de piel clara tenía un trasero que nada tenía que envidiar a cielo riveros… era vanesa, una chica que tildaban de creída por tener padres acomodados (a diferencia de guille q creían que su padre era narco), estaba en mi curso con cielo riveros, pero rara vez socializaba con nosotros y era la primera vez que la veía vestida así… pero no fue la única que apareció…

detrás de ella, con un vestido rojo corto (minifalda) pegado al cuerpo, dejando poco a la imaginación… era ella, si ella…. Que mierd… hacia cielo riveros aquí en esas fachas, a todos los hombres de la fiesta se les fue los ojos con ambas: una rubia y una morocha… de cuando acá eran amigas?.... Para que le dije que venía, le entraron los celos, por esa tontera nos íbamos a poner en vitrina…

- uy te jodieron la cacería… vino tu señora… me dijo sonriendo en voz baja guille.

Ambos monumentos de mujer se acercaron a nosotros, sorprendidos, sobre todo porque note que vane se me pego, cosa que no le hizo mucha gracia a cielo riveros, mientras de reojo veía a javier al fondo que no sabía cómo deshacerse de su tetona para venir con nosotros y caerle a cielo riveros seguramente.

Conversamos tonteras de los cursos y demás, hasta que guille se ofreció a traer unos tragos y brillantemente se llevó a vane para dejarme con cielo riveros a conversar.

- que haces acá?... Nos vas a poner en evidencia… le increpe disimuladamente.

- no fue mi culpa, vane me insistió… ella, esa regalona… dijo rabiando..

- por qué dices eso…

- hace un tiempo me estuvo preguntando… bueno… dijo algo avergonzada.

- preguntando qué?...

- me estuvo preguntando por ti pues... Los hombres no se dan cuenta… eres un tonto…

al ser las chicas más codiciadas de la facultad, no eran tan amigas pero conversaban y llevaron varias materias juntas así que algo de confianza había. Vane le había manifestado algún interés por mí, más aun luego de que forme grupo con cielo riveros, más aun después del partido en que me vio participar.

Después que cielo riveros me llamo, vane llamo a su vez a cielo riveros, y a la muy tonta se le escapo que yo venía a la fiesta de guille, entonces vane le dijo que era su oportunidad para insinuárseme. Eso despertó los celos furibundos de cielo riveros que no le iba a dejar que vane las cosas fáciles. Así que cielo riveros decidió ponerse su ropa más provocativa para que no se me olvide que su trasero me tenía loco.

- tonta… yo iba estar un rato aca para cumplir, luego te iba a buscar… le dije.

- en serio?… dijo cielo riveros sonriendo con brillo en sus ojos

- pero ahora todo se malogro, no podemos irnos juntos…

- es que no te iba a dejar con esa…

- cuidado ahí vienen… dije viendo a guille y vane cerca.

- bailamos?… dijo vane decidida tomándome de la mano.

No me pude negar y obvio que los ojos de cielo riveros cambiaron, con esa mirada casi calcina a vane, a la que creo q no le gusto la cercanía con que hablaba con cielo riveros, las mujeres no son de compartir.

No soy gran bailarín pero me muevo, y con lo adolorido después del partido estaba casi tan duro como van damme, así que no se hagan ilusiones… vane me conversaba, yo respondía cortes y bromeaba para salvar la situación, mientras veía que cielo riveros tomo a guille para bailar cerca de nosotros y ver qué pasaba…

cuando pusieron una canción para bailar más pegados y acaramelados, ya le habia hecho señas a guille para que se acerque y aprovechar en cambiar de parejas, obvio que un baile asi solo con cielo riveros sino me negaría sus curvas buen tiempo….

Pero vamos, somos hombres y entre gitanos no nos vamos a engañar, dude…unos segundos pensé, y que tan malo sería que cielo riveros me deje, no teníamos nada serio, termine con viví por el trasero de cielo riveros, pero no sabía que pasaría después, como dijo el taxista esas hembras no tienen dueño son coquetas… por otro lado vanesa, una chica de buena cielo riveros, simpática sin mucha coquetería que me vuelva celoso, pero vane dejaría que se la meta por el culo con la misma pasión que me deleitaba de cielo riveros?...

Esos breves segundos de indecisión fueron aprovechados por otro… en hábil maniobra javier dejo a la tetona con guille y se le acerco a cielo riveros, que no supo cómo escapar… mientras vane me pegaba todas sus curvas y me abrazaba, guille me miraba excusándose, cielo riveros me quería matar y yo quería destrozar a javier que borracho pugnaba por bajar sus manos por las curvas de cielo riveros que lo mantenía a raya…

- si quieres puedes bajar tus manos más… me decía al oído vane, dándome permiso de explorar sus formas en la semioscuridad de la pista de baile, mientras yo hervía en celos de ver a cielo riveros en brazos de javier.

- ah, no disculpa… no quiero que vean los demás y te tomen a mal... Dije pretendiendo cuidar su imagen o reputación.

- sabía que eras un caballero, por eso me gustas… te lo dije porque veo que cielo riveros no tiene problemas en que javier la toque…

- qué?... Dije disimulando mi furia y volteando a ver como javier posaba sus manos en ese trasero que consideraba mis dominios.

Pensé que cielo riveros más celosa de la cuenta por ver mi cercanía con vane le permitió a javier tocarla para desquitarse…pero en realidad fueron pocos segundos los que javier tuvo su mano en las nalgas de cielo riveros a la que vi forcejear por librarse… en mi rabia iba a intervenir y golpear a javier, justo cuando cielo riveros logra zafarse y le propina una estruendosa cachetada a javier…

la fiesta se detuvo unos segundos, esa acción llamo la atención de todos, se detuvo el tiempo hasta que cielo riveros al notar que todos la veían, salió huyendo y javier enrojecido no sabía dónde esconderse… por momentos en su borrachera me pareció que hizo un ademan de devolverle el golpe, pero se contuvo…eso aproveche para acercarme con guille y evitar que haga algo…

- que paso?... Le dijo guille.

- la cague… me apresure… caraj… dany tu eres su amigo, puedes hablar con cielo riveros, dile que no se invéntale algo…. Decía nervioso javier, mientras guille lo llevaba con la tetona y vane por un trago, y la fiesta retomaba su ritmo entre risas y cuchicheos.

Aproveche eso para salir raudo tras cielo riveros, sentí una mirada, voltee y era vane, se veía en sus ojos el reproche por dejado cuando se me ofrecía, ego de mujer herido y quizás sospechando de lo que pasaba con cielo riveros… luego lo comprobaría.

La casa de guille era grande, un sala amplia que daba a un jardín trasero donde hacía poco habían instalado una piscina, razón por la cual las fiestas se habían mudado del jardín delantero al jardín posterior con la piscina. Pero el jardín delantero amplio aún conservaba dos baños habilitados por las acostumbradas fiestas de guille, sus padres no querían que hicieran un desastre en los baños de la casa, pero al hacerse las fiestas en la piscina, estos baños delanteros estaban casi siempre vacíos.

Tras buscar por toda la casa, sin encontrar a cielo riveros, decidí pasar por estos baños, había una tenue luz en el baño de mujeres, dentro un sollozo. Sin pensarlo dos veces entre y era cielo riveros… con el maquillaje corrido, estaba frente al espejo del lavabo, en vez de alegrarse por verme, enfureció…

- eres un maldit… ya vi cómo se te pego esa loca… dijo dándome una bofetada, al parecer más que llorar por el manoseo de javier y la vergüenza, lloraba de celos de verme con vane.

- que te pasa?... Le dije tomando sus manos contra mi pecho para evitar otro golpe, mientras sentía su pecho henchido de rabia subir y bajar, esos melones que ya había visto desnudos antes saltando mientras la poseía.

- nunca más me vas a tener… me dijo desafiante, quizás adivinando mis pensamientos.

- ah sí?... Tu eres mi mujer… le dije, mientras la tenía apretada contra el lavabo, bruscamente le di vuelta, recordando aquella vez que la penetre en el baño de la facultad…

- que haces?... Replico ella forcejeando por librarse.

- sientes esto… le dije pasando todo mi bulto por entre sus nalgas, la corta y delgada minifalda no eran obstáculo.

- uhmmm… la sentí resoplar cediendo pero no sería fácil…

- ves?... Tú me pones así… solo tu… le susurre al oído.

- mentiroso… suéltame…

- ahora veras lo que es bueno…. Le dije, mientras con una mano apresaba sus dos manos contra el vidrio frente a nosotros, y con la otra mano le subía la corta minifalda roja y bajaba su ropa pequeña ropa interior del mismo color.

- ni te atrevas que grito… vocifero, mientras yo liberaba mi verga endurecida, que quería venganza tras haber visto a cielo riveros apachurrada por javier.

- grita entonces… la rete mientras mi verga escarbaba entre sus nalgas, y ella se movía como lombriz intentando evitar que la penetre, cualquiera que entrase al baño pensaría que era una violación.

- déjate de estupideces dany… no te vas a…. Ahhh…

no termino su frase, vocifero al sentir que mi verga hacia diana en su vagina, que sorprendentemente estaba húmeda, no le di tiempo a reaccionar, ya tenía media de verga metida y mi ingle hacia presión contra el lavabo y sus carnosas nalgas… sus manos hicieron puños y cedieron, se agarró de los bordes del lavabo, su rostro mueca de dolor, arqueándose… no lo disfrutaba, lo sufría, luego bajo el rostro, solo veía una maraña de pelos…

- eres una mierd…

- ahora no vas a gritar… vas a gemir… le dije provocándola, e insertando a presión toda mi verga.

- eso crees?... Dijo desafiante, mientras yo empezaba a bombearla toscamente… ufff… uff carajo… auuu mierd…

- deja de hablar que tu conchita hace agua… le decía con ironía, mientras veía sus nalgas vibrar con mis embestidas, entre la maraña de pelos veía saltar sus senos…

mis manos que habían apresado su cintura para que no huyera, rápidamente tomaron los bordes superiores del vestido rojo y lo tiraron para abajo mostrando su brasiere donde sus melones rebotaban…

- ahhhh…. Exclamo sorprendida por el movimiento que hice, sin darle espacio a mayor reacción, desabroche su brasier y sus senos libres empezaron a retumbar a mi ritmo…

ella embobada con una mueca de sorpresa, veía saltar sus senos, mientras que su espalda espontáneamente se había arqueado para recibir mejor mi verga que taladraba sin piedad su conchita… yo forcé más ese quiebre de espalda echando mi torso para atrás y tomando parte de su brasiere y de su traje como brida mientras la cabalgaba.

Hasta que cielo riveros poco a poco fue levantando su rostro… sorprendida de como su cuerpo se había acomodado a esta bestial cogida que le estaba dando, viendo como sus senos se estremecían…

- dannyyy… me estas violando!... Uhmmm… gimió sorprendida, lo estaba disfrutando y su garganta no lo podía contener más, la habían sometido y la idea le alimentaba el morbo.

- te lo mereces por dejar que ese insecto te toque… le recrimine aludiendo a javier, mientras la tomaba ahora del cabello y la jalaba para atrás arqueándola más.

En ese momento en que la poseía salvajemente aproveche para terminar de someterla… un beso en el cuello, que la hizo estremecer de pies a cabeza….

- eres un maldito… exclamo excitada,

luego volteando más y busco mis labios, mientras me besaba y nuestras lenguas se unían en cálidos besos, sus manos apartaban mi cuerpo y tomaban mi verga, dirigiéndola a su ano…

- hazlo… por favor… metemelaaa… prácticamente me imploro.

- vas a gritar?... Me atrevi a burlarme viendo su ansiedad.

- no solo voy a gemir lo prometo… pero clavame ya…. Ahhhh…

no la deje terminar, y le inserte bruscamente mi verga en el ano, tambaleo y me miro con los ojos y la boca bien abierta…

- ayyyy…. Graciasss… decía con los ojos llorosos mientras empezaba a taladrarla…. Ohhh…. Uhmmm…

empezaba a gemir como loca poseída, dirigía mis manos a sus senos para que los apretuje… de cuando en cuando la tomaba del pelo hacia atrás como si fuera montura y la cabalgaba sin piedad, parecía desfallecer, que el aire le faltaba… de aquella minifalda solo quedaban una banda arrugada en su cintura, con sus nalgas al aire y sus saltando…

- ay… me partes…. Ahhhh…. Uhmmm… decía al tiempo que inclinaba el rostro contra el espejo, sus resoplidos empañaban el vidrio, con una mueca entre dolor y gozo…

yo agarraba sus nalgas como asas, y le martillaba el culo con todas mis fuerzas, era fenomenal ver su estrecha cintura, sus carnosas nalgas, su piel bronceada, esa boquita carnosa y sus mejillas rosadas, sometida, disfrutando como una perra que la cojan por el ano….

- ouuu… uhmm…. Gimió desfalleciente por última vez llegando a un descomunal orgasmo que hicieron temblar sus piernas mientras mi verga escupía ardiente semen en su palpitante ano.

Casi se desparrama frente al lavabo, se echó sobre el mueble, mi verga aun tiesa eran parte de su soporte, sus piernas arqueadas a duras penas la sostenían, así que puse mis manos sobre su cintura haciendo presión para abajo para que no se deslice. Con su cabeza contra el vidrio seguía disfrutando ese orgasmo contrayéndose con cada chorro nuevo de leche que mi pene descargaba…

yo miraba mi rostro satisfecho y feliz, teniendo el culo más apetitoso de la facultad atorado y desfalleciente por mi causa, había vuelto a esta morena espectacular casi mi esclava anal. Ni el más experimentado de javier había conseguido eso con todas sus mañas… pero el solo hecho de recordarlo fue casi una invocación…

mientras cielo riveros y yo disfrutábamos esos gratificantes momentos tras el orgasmo... Escuchamos pasos sigilosos… unas risas… y su voz…

- es por aca… decía, decía javier a pocos metros del baño.

Cielo riveros giro el rostro desde abajo a verme asustada… se venía la noche.
Destrozada por lo incomoda de la posición y desfalleciente por el esfuerzo, la tortura anal a la que la sometí, cielo riveros yacía tirada contra el lavabo. Con su vestido reducido a su mínima expresión, la mini sobre las nalgas, el escote debajo de sus senos, el brasier ladeado y su tanga a medio camino entre su pubis y sus rodillas…

ah y obviamente cielo riveros con su ano atorado por mi verga y algunos hilos de leche discurriendo por sus intimidades, y bueno… el que les escribe detrás de ella empalándola por el culo y tomándola por la cintura para que no se desparrame.

Esa era la imagen que iba encontrar javier si entraba al baño de mujeres… al que consideraba su amigo, con su verga incrustada a mas no poder en el hasta hace poco virgen ano de su ex enamorada, de su mayor conquista…

- ¿en el baño de hombres o mujeres?... Pregunto una voz femenina, intuía que era la tetona.

Mierd… ¿nos habrán visto entrar?... Serán solo ellos o guille y vane también… que importa?... Si entran, nos jodimos…

- creo que en el baño de hombres, parece que el de mujeres está ocupado… era la voz de javier, que me dio cierta alivio de que no entrarían a descubrirnos.

Por precaución, saque sigilosamente mi verga del ano de cielo riveros, que nuevamente se había puesto pálida, solo se relajó, casi como desinflándose cuando le saque mi pene. Me dirigí a la puerta, que para variar con el apuro no le había puesto seguro.

Para evitar hacer ruido, me limite a hacer presión con mi cuerpo y evitar que alguien entre. Aliviado escuche el ruido de la puerta de al lado, el baño de hombres, a través de la pared escuchaba sus risas…. Pensé que la tetona quería hacer sus necesidades pero…

- ¿qué esperas?... Chúpame la verga… le ordeno javier bruscamente en su borrachera.

Al escuchar esto, puse un expresión como diciendo: vamos cielo riveros, cómo pudiste estar con un tipo así?, que romántico este patán… la expresión de cielo riveros, que ya estaba repuesta, también cambio como de sorpresa diciéndome, a mí nunca me trato así… como quien dice, cada quien actúa de acuerdo al que el otro le permite…

- hey… está bien que tu puta (cielo riveros) no te haya hecho caso y me hayas vuelto a buscar, como siempre… pero te me calmas… que si no te la muerdo… replico la tetona, como escuchando lo que pensamos.

Quise soltar una carcajada, en cambio note que a cielo riveros no le hizo mucha gracia que se refieran a ella como una puta… cambio su expresión un rato, divago, bueno tampoco le gustó mucho comprobar que su ex javier le haya estado poniendo los cuernos con la tetona, supongo que en el fondo lo imaginaba.

- ok, ok… que sensible… pero nadie la mama como tú y lo sabes… hazme el favor… replico javier más calmado, viendo que la tetona molesta lo podía dejar con las ganas.

Con cada frase, javier revelaba más sus infidelidades, cielo riveros obviamente estaba distraída en pensamientos al respecto, continuaba apoyada contra el mueble… yo no sabía si ponerme celoso al respecto o darle su espacio… opte por hacerle señas, para abandonar el baño.

Ella al notarlo me hizo una negativa con la cabeza… pensé que quizás, como muchas mujeres que les gusta torturarse, quería escuchar en que terminaba toda esa conversación entre javier y la tetona… y ver si se enteraba más cosas de ellos.

Afortunadamente creo que tenía en mente otra, cosa… note que su vista perdida termino posándose sobre mi verga semi erecta y aun empapada en líquidos. Cielo riveros sonrió, se recompuso lentamente, dejo su tanguita caer de entre sus piernas al suelo y la lanzo a un lado, se deshizo también de su jaloneado de su brasier.

Así, con el vestido sin arreglar, con el pubis desnudo, los senos al aire, el cabello desordenado, el maquillaje corrido, las mejillas coloradas, los labios rojos y los ojos con un brillo particular… con todo eso lucia hermosa…

se acercó con ojos risueños, hasta enamorados, como dándome a entender que no le importaba lo que pasaba al lado… me tomo del cuello y me beso con una mezcla de pasión y ternura. La abrace, le devolví su afecto con caricias a su espalda, cintura, obviamente mis manos no se detuvieron ahí… acaricie sus carnosas nalgas…

no sé por qué, pero mentalmente mi mente voló al recuerdo de vane y su short apretado que dejaba poco a la imaginación, era la primera vez que la veía tan conquistadora, obviamente me di maña para verle el trasero, que era bien formado, pero ahora tocando a cielo riveros me percate de las diferencias entre ambas…

el trasero de vane muy llamativo se notaba que era producto de horas de gimnasio, un trasero firme y duro producto de la musculatura desarrollada por el ejercicio… yo había practicado atletismo en mi juventud y vi muchas chicas en malla o calzoneta cuya llamativa musculatura en los muslos era similar a la que apreciaba en vane…

por otro lado las nalgas de cielo riveros eran naturales, heredadas, digamos de su propio biotipo y esos rasgos de sangre morena que tenía… su trasero era suave y con la consistencia de esas pelotitas anti-estrés, me podría pasar horas amasando sus muslos…

mientras hacía estas comparaciones mentales, las caricias en que le prodigaba a las posaderas de cielo riveros, provocaron que sus besos sean más profundos e iba ahogando suspiros entre nuestras lenguas que se entrelazaban en besos cada vez más jadeantes…

al mismo tiempo, al lado no se escuchaba mayor ruido, apenas algunos respiración y jadeos fuertes, por momentos me sonaba a javier, por ratos a la tetona, que seguramente le estaría succionando la verga como el tanto quería y como cielo riveros nunca se lo hizo.

Este pensamiento al parecer también fue compartido por cielo riveros, que abandono mis labios y poco a poco fue agachándose, pasando sus manos por mi cuello, bajando por mi torso, hasta que finalmente termino arrodillada frente a mi verga, la cual empezó a limpiar lenta y cariñosamente…

sus movimientos comenzaron a incitarme nuevamente, mientras mi verga iba creciendo lentamente en su boca, lo que parecía gustarle y cada vez me la mamaba con mayor pasión… casi como poseída, agarraba mi pene como su juguete, su paleta de dulce y se desvivía en caricias, lamidos, succiones… llegue a pensar que cielo riveros mentalmente estaba compitiendo contra la tetona succiona vergas… ego de mujer al fin y al cabo…

cielo riveros por más que se vistiera coqueta, con ropa apretada, y que todos en la facultad fantasearan con ella… a decir verdad, nunca la vi coquetear, regalarse, o insinuarse a chicos, siempre mantuvo a raya a la gente con su actitud, no a todos saludaba con beso en la mejilla solo a los que consideraba amigos, al resto de lejitos nomas…

una cosa era que cielo riveros se sentía cómoda con la ropa ceñida al cuerpo, hasta quizás que le gustara mostrar sus atributos o sentirse orgullosa de los mismos… pero otra cosa era que cielo riveros le diera a cualquiera sus encantos… javier lo consiguió tras mucho tiempo siguiéndola y disimulando su esencia de pendejo para engatusarla….

Pero eso de ser coqueta y regalona iba más con las costumbres de la tetona, que a todas luces era una regalona y poco sutil, con decirles que estando con javier ella me llego a dar miradas más que insinuantes y provocadoras… para que juzgarla, cada quien vive su vida como le place y está visto que no soy un santo…

- deja eso ya… ufff… ufff… ponte en 4 como siempre, ya sabes que me gusta… pedía ansioso javier al lado.

- pero no me la metas al ano rápido, que mi conchita esta mojada… eh… le advirtió la tetona que quería también ser saciada.

Yo seguía en la gloria con la succión que cielo riveros me practicaba, pero volví a mis cabales tras escuchar a los de al lado. Debíamos aprovechar la distracción de ellos y salir de ahí para no ser descubiertos… mis manos acariciaba los cabellos de cielo riveros arrodillada, pero opte por apartarla, prácticamente tirándola de los pelos porque cielo riveros se había asido de mi verga como sanguijuela…

mediante señas le di a entender que era suficiente… que debíamos irnos… pero cielo riveros se negó, con una cara de pasión desbordada, estaba recontra caliente y no dejaría ese baño sin que la satisfaga nuevamente… sorprendido por esa actitud, intente hacerla reaccionar con gestos más severos… pero poco caso me hizo…

solo opto por… de rodillas alejarse un poco y lentamente inclinarse, poniéndose de 4 patas, mientras lentamente iba abriendo las piernas y arqueando su espalda… para dejarme a la vista un magnifico paisaje: esas gordas y suaves nalgas morenas abiertas de par en par, con su vagina húmeda y su ano palpitante… sumisa como una perra, entregada totalmente, esperando que la sometan…

a la mierd… no soy de acero tampoco, me había hinchado las pelotas a más no poder… al sentir que no reaccionaba cielo riveros giro el rostro de manera provocativa para verme, pasando la lengua por sus carnosos y melosos labios aun con mi leche impregnada…

se jodio todo pensé, y poco después tendría razón… la poca cordura que tenia se fue al diablo, el temor de ser atrapados era lo último que paso por mi mente… esta mujer era el diablo, yo la había convertido en eso, en una adicta anal y ahora no podía alejarme tampoco de ella…

solo me quedo, tomar aire, deshacerme de mi pantalón y dirigirme lentamente detrás de ella… deslice mi verga lentamente a través de sus labios vaginales, pasando de largo, para provocarle más cosquilleo en sus intimidades… eso la estremeció desde los talones a la coronilla, tembló de placer…

pero ella sabía que no quería solo eso… paso su brazo debajo de su vientre y con su mano tapo la entrada de su mojada conchita… con su cabeza me hizo un gesto negativo de niña engreída… por ahí no me dio a entender… yo sabía lo que quería la bandida…

cuando pose mi verga en la entrada de su arrugado anillo, un brillo apareció en sus ojos, ansiedad en sus labios semiabiertos esperando la penetración… la cual fue haciendo lentamente para no hacer ruido, a medida que mi verga iba abriendo su carne, ella entrecerraba los ojos, como disfrutando cada centímetro que se abría paso en su estrecho esfínter…

al mismo tiempo, en el baño de al lado parecía que a la tetona la estaban empalando contra la puerta del baño ya que se escuchaba sus toscos gemidos casi doloridos y el ruido retumbante de la puerta… al parecer javier se estaba desquitando con ese aguachento trasero todo lo que no le pudo hacer al magnifico culo de cielo riveros…

yo empezaba a sacar y hundir lentamente mi verga a cielo riveros, que con el adiestramiento anal de las últimas semanas ofrecía menos resistencia que antes. El complacido rostro de cielo riveros que en la anterior cogida había encontrado apoyo en el espejo, ahora cielo riveros apoyaba el rostro contra el suelo sin importarle que estuviera sucio, sus desordenados cabellos eran su almohada…

lejos de estar arrodillado detrás de ella, como costumbre en la pose del perrito, por la posición que adopto ella, no me quedo más que agazapado como haciendo sentadillas, castigarle el ano con mi verga empujándola hacia abajo, mientras ella resistía con sus rodillas al piso y pantorrillas levantadas, el culo empinado, el torso y las tetas al suelo igual que su sufrido pero gozoso rostro…

la veía retorcerse de placer, resoplar, mordiéndose los labios para no gemir en voz alta, solo murmuraba lastimeros gorgojeos de placer… a veces no aguanta y ella misma se mordía un dedo o se tapaba la boca casi hasta ahogarse…

al mismo tiempo, su otra mano buscaba mi tobillo para sujetarlo, por momentos lo acariciaba, por momentos lo sujetaba con fuerza, en momentos de mayor éxtasis me lo apretaba casi hundiéndome las uñas como transmitiéndome todo su placer y dolor…

estaba en la gloria viendo sus nalgas abrirse de par en par… era la mejor cogida que había tenido con ella, la sumisa posición, el prácticamente ruego para que la sodomice, la excitante situación casi competencia con los de al lado…

pero caraj… con todo esto, honestamente me estaba acalambrando por la posición y tras el partido que me molió las piernas… pero está dispuesto a aguantar para llevar a cielo riveros a ese orgasmo que tanto deseaba, que era su desquite, su revancha por enterarse de los cuernos que aguanto…

por momentos la sentía tambaleante, como próxima a reventar en un orgasmo, pero conteniéndose, procurando alargar su agonía para disfrutarlo lo más que pudiera… la veía enrojecida con gotas de sudor que parecían fundirse con lagrimeos de gozo… hasta que mi cuerpo y sus cuerpo no pudieron más…

mi verga exploto nuevamente dentro de su estrecho ano, parecía una manguera de bombero desbocada, ella se contrajo bruscamente, luego un par de veces más… el sonoro ruido al lado disimulo nuestras leves exclamaciones de placer, ya que al parecer ellos también estaban terminando su faena…

a pesar de mis piernas casi adormecidas, tuve que darme maña para sostener las caderas de cielo riveros, que nuevamente habían perdido las fuerzas y querían dejarse caer a un lado con sus piernas temblorosas, pero lo evito mi verga que la tenía enganchada hasta las entrañas…

solo note una gratificante sonrisa en los labios de cielo riveros, como cuando tienes un buen sueño del que no quieres despertar sino seguir disfrutándolo un buen rato… igual que en esos casos, cielo riveros parecía haber babeado en la almohada, en este caso el piso…

- ahhh… que buen culo tienes perra… gritaba javier satisfecho.

- uhmmm…. Ufff… exclamo a su vez la tetona.

Obviamente el brusco halago de javier tenía que ver mucho con el placer del momento que experimentaba, porque buen culo era el de cielo riveros, lo otro más parecía un tamal mal envuelto… lo de la tetona eran sus grandes tetas y el rostro de coqueta provocadora…

al parecer cielo riveros estaba tan embobada, en otro mundo que ni atención le presto a la exclamación de javier… seguía disfrutando de cada remanente del orgasmo, esa sensación y respiración placentera que te deja durante los instantes después de llegar al clímax.

Mientras mis pulmones buscaban aire, estaba medio mareado, al borde de un paro cardiaco, por el esfuerzo, la satisfacción, el procurar no hacer ruido, callar los jadeos… ufff… ufff… intentaba recuperar el ritmo normal de mi respiración… unos instantes después ya lo había logrado… pero no sería por mucho…

cielo riveros ya parecía haber reaccionado, despertado de un sueño que se convertiría en pesadilla… me miraba desde abajo amorosamente con una sonrisa de oreja a oreja, yo le devolvía el mismo gesto mientras acariciaba sus apetitosas y bronceadas nalgas…

luego escuche el chirrido de la puerta… si de esa puerta a la que nunca le pusimos seguro… a la mierd… la puerta se fue abriendo como en cámara lenta mientras yo volteaba el rostro con expresión y sorpresa, ya que estábamos medio de lado, con la puerta al costado, quien entrara nos vería casi de perfil…

el rostro de cielo riveros fue cambiando de expresión de satisfacción a horror… sus ojos y cabeza que miraban, giraron a ver la puerta, mientras sus brazos intentaban reponer su cuerpo sin éxito, no tenía fuerzas y sus brazos cayeron nuevamente al piso… mis piernas adoloridas y acalambradas no atinaban a reaccionar…

mi verga aun tiesa seguía anclada en el generoso culo de cielo riveros, que yacía devastada debajo de mí con su apetitoso culo al aire, empinado, abierto de par en par con mi leche pugnando por salir… el vestido rojo remangado a la cintura, los senos henchidos contra el piso igual que su rostro ahora frio como el piso…

y claro… grotescamente mi flaco y algo peludo trasero al aire, con mis bolas reduciéndose a su mínima expresión eso mata cualquier pasión… así mismo, mi verga encogiéndose después de haber vaciado toda su carga de leche en goloso ano de cielo riveros…

la luz exterior empezó a entrar tenuemente por la puerta mientras dé a pocos se iba divisando el jardín… afortunadamente vacío hasta el momento, en el interior del baño se iba dibujando y creciendo una sombra que no pude distinguir bien…

lo cierto era que no había tiempo de reaccionar, de vestirse, no había donde esconderse, no había donde huir… fue el principio del fin…

- ¿pero qué es esto…?... Fue la exclamacion que oimos venir de la puerta...

Y así fue como se jodio todo…
una silueta emergió entre las sombras, mis ojos intentaban adaptarse y percibir quien nos descubrió, quien profirió esa exclamación de sorpresa… conocía esa voz, luego reconocí su rostro, que con expresión entre horrorizada, decepcionada y hasta asqueada nos miraba…

era una mujer… era vane, aquella hembra que minutos antes quiso que mis manos toquen sus bien formadas curvas, ahora descubría que todo lo que imagino o deseo que yo le haga, se lo hice salvajemente a cielo riveros… y empezaba una especie de sollozo decepcionado con su ego herido…

detrás de ella emergió otra imagen, esta vez eran rasgos masculinos, lo conocía bien… era guille que tomaba del brazo a vane para sacarla de ahí, pero ella igual que cielo riveros estaban como estatuas… guille no perdió oportunidad de ver toda la escena, primero una expresión de morbo y luego un rostro en risueño e irónico, fácilmente me quería decir: felicitaciones… pero la cagast…

guille me explico después, que con vane fueron en busca de unos tragos para javier y la tetona, al volver ellos habían desaparecido… tras la bofetada de cielo riveros, javier tomo a la tetona para desquitar su hombría herida viniendo al baño de al lado a someterla por el culo, cosa que no pudo hacer con cielo riveros…

como vane tampoco me ubicaba, y se sentía muy expuesta por la ropa provocadora que uso, le pidió a guille que la acompañe a tomar un taxi. Imagino las miradas que le habrán dado a vane los lobos en la fiesta, que incomodo habrá sido para ella que no acostumbraba vestir así, menos a sentirse acosada…

en el camino a la puerta, pasando por el jardín, vane le pregunto que era esa construcción, guille le dijo que era el baño, y vane sugestionada por el viaje largo a su casa, decidió ir justo al baño donde estábamos nosotros…

cielo riveros y yo embebidos en nuestra gratificante experiencia, no escuchamos sus pasos en el jardín… pero el problema no eran ellos, eran los de al lado, en esencia javier… seguramente escucho la exclamación, pero no sabía que éramos nosotros y seguro también temía ser descubierto en pleno acto sexual…

pero nuestra identidad incógnita, no quedaría mucho tiempo sin descubrir, ya que vane exaltada, sintiéndose traicionada por cielo riveros, quien se encontraba con el culo criminalmente saciado por el chico que vane le confeso que le gustaba…

- ¿cómo me pudiste hacer eso?... ¡pensé que eras mi amiga!… vocifero vane intentando abalanzarse encima de cielo riveros, pero fue contenida por guille.

- ven... Déjalos… vamos… intentaba calmarla guille, mientras forcejeaba con vane.

- eres una perra cielo riveros… me oíste… una perra… sentencio vane, terminando de hundirnos, mientras cielo riveros se tapaba el rostro sollozante por la vergüenza.

Hasta ese momento javier y la tetona, que se habían mantenido en silencio para no ser descubiertos tampoco, no sabían que a quienes encontraron in fraganti éramos cielo riveros y yo… pero tras la última exclamación de vane, todo termino por descubrirse… al menos javier ya sabía que al lado se habían cogido a cielo riveros, y como a mí me mando a buscarla, seguro intuía que era conmigo…

- pero que mierd… escuche al lado, era la voz de javier, no tardaría en venir.

- quédate acá… escuchaba a la tetona que tampoco quería ser descubierta.

Vane y guille se sorprendieron al escuchar el grito al lado y los ruidos, segur la tetona y javier pugnaban por vestirse y salir. Al oírlos, la adrenalina invadió mi cuerpo, mis músculos tiesos y adoloridos, que hacían que mi cuerpo se apoye en cielo riveros, atorándola más profundamente… recién ahora reaccionaban…

saque rápidamente mi verga del ano de cielo riveros, tanto así que sentí que algunos líquidos saltaron, mientras veía que vane se cubría el rostro para no ser salpicada o quizás para no ver las nalgas de cielo riveros abiertas de par en par, con el hueco en su ano palpitante… luego cielo riveros caería de lado…

- ¿quién es?... Me dijo en voz baja guille.

- es javier… le dije haciendo muecas con la boca, para que no escuchen mi voz al lado.

- la put… madr… dijo guille, y salió de nuestro baño y fue al lado, quizás para evitar que javier saliera o para contenerlo unos momentos mientras yo me vestía.

Busque mi ropa en el suelo, me puse la ropa interior y el pantalón… cielo riveros reaccionando muda y presa de la vergüenza también hizo lo propio, claro que primero ubico papel y se lo pasó por su ano y sus muslos para limpiar todos mis líquidos que escurrían de su esfínter.

Luego cielo riveros siendo recontra práctica, ya que en su nerviosismo no sabía cómo ponerse el brasier y su tanga (y no le podía pedir ayuda a vane), solamente opto por tomar su vestido que hasta hace poco era una faja, lo extendió hacia arriba y abajo, cubriéndose los senos y el pubis.

Vane parecía niña castigada, de espaldas en un rincón cubriéndose la vista para no ver nuestros cuerpos semi desnudos y sollozando de cólera. Quizás por su posición social y ser hija única, estaba acostumbrada a conseguir todo lo que quería y no podía entender como una morocha le había arrebatado al chico que le gustaba y por el cual vane se había atrevido a vestirse casi como mujerzuela…

al lado, la puerta retumbaba, javier furioso cual toro encerrado, buscaba salir a como dé lugar, mientras guille contenía la puerta como podía. Una vez con la ropa encima, voltee y mire a cielo riveros que tiraba su ropa interior en un tacho, ya que no se la pudo poner al menos no quería que alguien la viera en el piso.

- déjenme salir caraj… gritaba furibundo javier.

Salí y vi a guille pasar apuros con la puerta, le hice una seña para que la deje y así lo hizo… javier salió como toro, metiéndole un puñete a guille, con la inercia del golpe javier se fue de largo al suelo, mientras guille se tomaba el rostro. Javier dio media vuelta en el grass, giro y me vio de lleno…

- tuuu… maldit… hijo de perr… aulló mientras se abalanzaba sobre mí. Ya sospechaba que sería yo porque busque a cielo riveros, porque le impedí ganar el campeonato que le hubiera dado el culo de cielo riveros que nunca pudo tener, eso era lo que le dolía más en el alma.

Una cosa es que me insulte a mí y otra que dé a entender que mi madre es una perr… así que aproveche su inercia y lo deje irse de largo… oleee… javier nuevamente trastabillando fue a golpearse contra la puerta del baño, a un lado de la tetona. Mientras cielo riveros ya recompuesta se fue asomando por la puerta.

Nuevamente como toro de lidia, javier se recompuso y se abalanzo contra mí… como les comente, había pensado esta situación antes, me dije que le dejaría el primer golpe, ya que le había puesto los cuernos… luego del primer golpe lo que pasara ya dependería de nuestra hombría…

simplemente me plante esperando el golpe… recibí un puñete en la mejilla, que a decir verdad me volteo el rostro y me removió las ideas… por la fuerza esta vez solo el tronco de javier se fue de largo, casi hasta quedarse agazapado, y tomándose su mano adolorida porque su golpe dio en mi pómulo…

javier levanto el rostro, ve a cielo riveros en la puerta del baño con las manos sobre la boca, sufriendo por el golpe que me propinaron…

- yo apenas pude tocarte, pero con el hasta en el baño, ahora veras… dijo enrumbando hacia ella.

- ¿a dónde vas?... Dijo guille recompuesto, lo detuvo en su camino, abrazándolo por detrás.

- suéltame que la reviento… bramaba javier enfurecido, con su ego de macho herido.

Con el ruido que causamos, a pesar de la música, comenzaron a asomar cabezas curiosas en las ventanas de la sala. Debía terminar esto antes que salieran y empezaran las preguntas.

- suéltalo, a ver qué tan macho es conmigo… dije furioso al ver que javier planeaba golpear a cielo riveros.

Guille lo soltó casi empujándolo en mi dirección, yo sabía que javier era más boca que otra cosa, poseído por la borrachera y la ira estaba desbocado, le permití el primer golpe por algún sentido de caballerosidad y desquite de su agravio… pero ahora me tocaba a mí.

Se lanzó nuevamente contra mí, lo recibí con un puño en la boca. Soltó un manazo buscando darme donde sea, lo esquive y su pómulo derecho recibió mi puño de ida y el izquierdo recibió mi codo de retorno. Cayó de rodillas con la espalda inclinada para atrás. Lo tome de las solapas de la camisa…

- intenta tocarla y te mato… lo amenace poseído por la ira.

Luego lo golpee una y otra vez con mi puño hasta que guille esta vez me contuvo a mí, mientras javier caía al piso. Luego intentó infructuosamente pararse, tenía el labio roto, la nariz sangrando. Se levantó a duras penas, pero esta vez lo tomaron dos personas, eran amigos de guille de su equipo de futbol.

- esto no termina acá dany… lo sabes… me amenazo, mientras los que lo sujetaban lo empujaban hacia afuera. La tetona buscaba que calmarlo y javier la alejaba, mientras salían de la casa.

Al pie de la puerta todo era visto por cielo riveros llorosa y preocupada, hasta que… la tomaron de los pelos por detrás y la metieron al baño… caraj… yo pensé que termino todo y se diluía el escándalo, ya que había gente al pie del jardín observándonos… pero nos olvidamos de vane… y se venía la pelea de mujeres…

- hey acá no pasó nada… grito guille a la gente que comenzaba a acercarse… hoy, hay bar libre… replico soltándole la llave a uno de sus amigos, para que abra la vitrina con todos los tragos.

- yee… grande guille… se armó el barullo regresando a la sala, mientras guille y yo entrabamos al baño a separar a esas dos hembras que se tenían tomadas de las greñas y se empujaban.

Logramos separarlas, claro que recibiendo varios arañazos… guille tenía por la cintura a vane que pataleaba, yo tenía abrazada por atrás a cielo riveros, que se mostraba más calmada.

- vane vamos… le decía guille tranquilizándola.

Vane entro en razón, nos miró con rabia y fue saliendo escoltada por guille… claro que al pasar por mi lado, me soltó un bofetada en la misma mejilla que recibí el puñete, me hizo ver a judas calato… cielo riveros reacciono soltando un zarpazo que no le dio a vane porque yo la tenía bien contenida.

- pudiste tener esto… y te conformas con eso… dijo despechada vane, mostrándome sus atributos y hablando despectivamente de cielo riveros.

- déjame que reviento a esta regalona… exclamo cielo riveros, forcejeando para que la suelte.

Guille se llevó a vane, mientras yo calmaba a cielo riveros. Una vez que se alejaron y cielo riveros se tranquilizó, volteo a verme, me beso y comenzó acariciarme el rostro…

- ¿estás bien?... Dijo preocupada cielo riveros

- si no es nada… más bien hay que aprovechar y buscar tu ropa… le dije, ya que en los últimos instante de violencia, los pezones de cielo riveros empezaron a traslucir de su vestido.

Esta vez pusimos seguro a la puerta, mientras cielo riveros se colocaba su ropa interior, yo pensaba en lo que vendría. Javier era un patán y picón, pudo desenmascararnos frente a todos, pero no lo hizo, más por el que por nosotros… si decía que me cogí a cielo riveros, su ex, él iba quedar como un soberano cornudo… y eso es algo que su ego no lo hubiera permitido, por eso prefirió callar… pero me la tenia jurada.

Igualmente suponía que vane callaría que cielo riveros le robo el chico que le gustaba. Vane se había expuesto al mostrarse frente a todos con poca ropa y regalona conmigo. A decir verdad, lo que vane fuera hacer era más impredecible… podía destrozar a cielo riveros con rumores, podía decir lo que vio, etc… no lo sabíamos… solo quedaba esperar… mientras que la gente en la casa seguía bailando, chismeando, etc.

Ya cambiados, abrimos la puerta y encontramos a guille, nos dijo que vane iba furiosa, no dejo que la acompañe, solo tomo un taxi y se fue. Agradecí como me ayudo a controlar la situación, claro que le debía un favor… dijo que no me preocupe que me iba a decir luego que rumores corrían en la fiesta.

Guille nos dejó y regreso rápido a su casa, quería salvar lo que quedase del bar de sus padres. Cielo riveros y yo optamos por irnos, estábamos expuestos, no queríamos dar pie a más rumores y que especularan los motivos de mi pelea con javier. Tomamos un taxi a su casa y en el interior, empezó la discusión:

- ahora vane que va a decir de mi… todo porque no le pusiste seguro a la puerta… dijo cielo riveros.

- ¿qué?… te pedí irnos varias veces… pero no quisiste… aparte que te dije que no vengas a la fiesta para no exponernos… replique.

- como te iba a dejar con esa facilona de vane… se excusó la celosa cielo riveros.

- acaso no confías en mi… replique.

- como confiar si terminaste con tu novia por mí… dijo, viendo mi cambio de expresión, cambio su voz y agrego: que pasaba si vane se te ofrecía, seguro lo dudabas como yo te hice dudar…

- sabes que… mejor no hablemos… dije molesto.

Yo recibo golpes por defenderla, ella duda de mí y echándome la culpa de todo. No hablamos más hasta llegar a su casa. Noto mi enojo, me tomo del brazo, se puso delante de mí con sus senos en mi pecho:

- vamos, lo siento… no quise decirlo… es solo que… tengo miedo de perderte… me dijo apenada.

- bueno, ya… es tarde, fue una noche larga… entra y mañana hablamos… dije cortante.

- uy pero que mal se ve eso… dijo tomando mi mejilla, que sentí inflamada, por el golpe de javier y el remate que le dio vane con una potente bofetada... Ven que te echo una crema para los moretones, no puedes ir así a tu casa… agrego cielo riveros queriendo congraciarse conmigo.

Accedí, porque no quería llegar el lunes con un moretón a la facultad. Era tarde y cielo riveros no quiso entrar por la puerta principal porque despertaría a sus padres. Ingresaríamos por la cochera, que estaba en un semi-sotano, habían 2 puertas de cochera, la de la izquierda tenia tenía una puerta pequeña al lado.

Bajamos por la rampa de acceso a la cochera, cielo riveros me dirigía muy cariñosa, quería aplacar mi enojo. Yo la seguía por detrás viendo su trasero moverse armónicamente en esa minifalda roja, a cada paso se le subía la mini descubriendo parte de sus jugosas nalgas y ella no hacía nada por cubrirse con su vestido…

antes de entrar, ella volteo, sabía que la miraba embobado, sonrió pícaramente y complacida de que sus curvas me causaran tal efecto, ya imaginaba y disfrutaba la erección que se me estaba formando.

Una vez dentro, estaba semi oscuro, en un extremo solo había un auto cubierto por una funda hasta el suelo. Frente a nosotros una escalera que dirigía a su casa, entre la escalera y el auto había un viejo sofá y frente a él, casi al lado de la puerta por donde entramos había una vetusta tele… cielo riveros y me explico:

- acá duerme mi papa cuando se porta mal… dijo sonriendo, la mama de cielo riveros tenía carácter…. Así que piénsalo bien antes de hacerme enojar… me amenazo juguetonamente.

Me dijo que espere, se quitó los zapatos, se escabullo por unas escaleras que ingresaban a su casa en busca de la dichosa crema. Me senté en el sofá y la veía mientras subía las gradas, la mini se levantaba más y más, casi hasta la mitad de sus nalgas… que diría su padre si viera a su niña en esas fachas…

bajo con la crema, sin subirse la mini, mostrando parte de su ropa interior, o estaba en confianza o me estaba provocando de nuevo. Se sentó en mis piernas, sentí esas deliciosas nalgas abrirse en mi pierna, al notar el gusto que me causo, sonrió y cariñosamente me untaba la crema y se sinceraba, me dijo:

- tú me gustaste siempre pero no me hacías caso, por más que me paseaba frente a ti con ropas llamativas… no soy una chica fácil, si deje que me hicieras todas esas cosas es porque sabía y sentía que eres especial… y esta noche lo demostraste al defenderme de ese loco… dijo cielo riveros con cierta alegría y orgullo de al fin encontrar alguien que la valore y proteja.

Luego bajo el rostro lagrimeando, la tome del mentón, dirigí su rostro hacia mí y la bese tiernamente. Yo en cielo riveros encontré una chica linda, inteligente, graciosa, jodida como cualquier mujer, pero que también compartía mi morbo, mi deseo sexual, que me permitía hacerle cosas que otras chicas pudorosas no dejarían… estábamos enganchados sentimentalmente, poco después lo estaríamos carnalmente.

Lo tierno de los besos se iba tornando nuevamente el pasional… a estas alturas yo sospechaba que cielo riveros me había emboscado en su cochera, bajo el pretexto de la crema… pensar que al principio yo la incitaba para disfrutar de sus curvas… y ahora era ella la que me buscaba y pedía prácticamente que la posea…

la humedad de su intimidad la comenzaba a sentir en mi pierna, yo le había subido la mini para acariciarle sus redondas nalgas que parecía ser su otra debilidad… nuevamente su respiración se agitaba y su lengua buscaba la mía, mientras su mano incitaba mi verga a través de mi pantalón.

No aguanto mucho, bajo mi cierre y descubrió mi verga, comenzándola a pajear. Una vez que la sintió dura, no quiso perder más tiempo y tenerla adentro… se paró dándome la espalda, la mini ya estaba subida, solo hizo a un lado su tanga y se fue ubicando sobre mi verga, dirigiéndola a su goloso ano…

- ohhhh… ufff…. Gimió en voz baja, sabía que estaba en casa de sus padres, si bien quería ser empalada de nuevo, no quería llamar la atención, suficiente ser descubierta una vez.

Tenía prisa por sentirse clavada nuevamente por el que la defendió, aquel que por primera vez le desfloro su estrecho agujero… que le permitió descubrir ese placer al que ahora se había vuelto adicta…

- ay danyyy… solo contigo soy una puta… uhmmm… murmuraba cielo riveros entre jadeos.

- si… eres mi puta… le decía al oído, mientras mis manos subían de su cintura a sus senos.

Mi verga ya se había hundido en todo su esfínter… ella disfrutaba centímetro a centímetro aquella estaca que invadía sus entrañas. Se había sentado sobre mí, sus nalgas se abrían de par en par y mi verga la tenía hasta la raíz, solo faltaba meterle mis testículos…

- ummm siii… exclamaba extasiada, ensartada a mas no poder.

Mis manos bajaron su vestido, liberando sus senos que subían y bajaban con su excitada respiración. Cielo riveros se cansó de sentir solo mi pene tieso en sus intimidades, quería saborearlo más, comenzó a menear su enorme rabo en mi ingle, quizás para menguar el cosquilleo que sentía en su esfínter.

La posición no permitía mucho tampoco, yo sentado sobre el mueble, ella sobre mi verga… sus piernas no tenían mucho espacio para subir y bajar, solo le quedaba menear su tremendo culo sobre mí, moverlo así para provocarle esas sensaciones que hace poco había aprendido a disfrutar… pero ya comenzaba a sentir mi pene como plastilina, como chicle, estirándose al gusto del trasero de ella…

yo también quería disfrutar esto, quitarme el estrés de la pelea, de ser descubiertos, olvidar todo… así que me fui discurriendo por el mueble, para bajar mi ingle y darle espacio a que cielo riveros pueda maniobrar, que pueda satisfacerse ella misma incrustándose mi verga a placer… después de todo siempre era yo el que la clavaba, ahora le tocaba a ella hacer el esfuerzo…

cielo riveros entendió mi maniobra, y ella misma fue subiendo y bajando lentamente, con unos leves pero placenteros temblorcillos recorriéndola. Yo deje de acariciar sus senos y fui tomando su estrecha cintura para evitar que su enorme trasero se salga de su camino y termine aplastando mi verga.

- uy… como me encanta esto… como no te conocí antes… uhmmm…. Musitaba.

Cada vez cielo riveros más extasiada y desbocada, subía y bajaba con más rapidez, por momentos sentía que no podía sostenerla, mi espalda se deslizaba hasta el borde del asiento. Hasta que cielo riveros dejándose llevar por la locura del momento se dejó caer con más fuerza… no la pude contener y terminamos en el suelo…

- ay… caraj… ahora si me rompiste el culo… auuu… sollozo adolorida cielo riveros.

En el último culazo que me dio, mi espalda se deslizo en el mueble, termine con mi trasero en el piso. Mientras el culo de cielo riveros cayo con fuerza en mi ingle, abriendo sus gordas nalgas a mas no poder, con su ano partido por mi verga que sentí que le llego a los pulmones, por las ahogadas respiraciones que daba.

- ya me fracturaste la verga… murmure, sintiendo mi verga doblada.

Cielo riveros intento pararse, pero sus talones desnudos fueron presa del piso resbaloso y nuevamente fue a clavarse con mi verga, esta vez sentí que le metí hasta los huevos…

- ouuu… mi culito… dijo la muy sinvergüenza, con tremendo culo casi parte mi verga.

- a la mierd… quédate ahí nomás un rato… exclame yo adolorido, presionado a mas no poder por su redondo trasero hundido en mi entrepierna.

Sentía su esfínter palpitar en mi pene, por lo tosco de los últimos movimientos pensé que mi verga se deshincharía, pero curiosamente, esos temblorcillos de su esfínter me excitaban nuevamente, llegue a soltar unas gotitas de leche en su interior… ella lo sintió y movió nerviosa su cabeza, parecía disfrutarlo, pero, parece que esta vez era ella la que entro en razón…

- no dany, ya no… el ruido que hacemos va a despertar mis padres… y ahí si te matan y me envían a un convento…

- pobres sacerdotes… los vas a hacer pecar… le dije imaginándola con traje de monja que no podría disimular sus curvas, y los curas volteando para verle el trasero.

- jajaja… eres un tonto…

cielo riveros intento pararse de nuevo, y algo raro paso… no podíamos despegarnos, forcejeo un poco y nada, estábamos pegados como perros, la tenía enganchada por el culo… quizás en verdad me doblo la verga y la tenía como garfio reteniéndola o quizás era solo los nervios del momento, lo adoloridos que estábamos por todo lo sucedido, los músculos atrofiados, y que no nos hacía actuar coordinadamente…

- ay… no… ahora en verdad soy una perra… dijo cielo riveros asustada.

- ya va, solo hazlo lentamente, de a pocos y saldrá… le dije calmándola aunque me quería reír.

Cielo riveros subió hasta donde sentía que no podía salir, donde su ano apresaba con fuerza mi verga, luego bajo. Repitió la misma operación varias veces, cada vez subiendo más… se había acomodado mejor, con las piernas a los lados con las rodillas dobladas arriba, las manos en el piso, su espalda contra mi pecho.

Mi cuerpo a su vez estaba apresado por ella, mis piernas entre las suyas, sus brazos a los lados de mi cintura apoyándose en el suelo y en el mueble por ratos, mi espalda contra el sillón. Y claro, mi verga aparecía y desaparecía entre sus carnosas nalgas y su ano insaciable… esto dejo de ser un ejercicio para desatorar su ano, hacía rato que mi verga podía salir de su culo, pero ella no lo quería… lo disfrutaba…

- uy… dany… me encanta ser tu perra… uhmmm… volvía a gemir como loca.

El dolor en mi pene fue cambiando por la excitación del momento, ahora era ella la que me violaba… en su casa, a pocos metros de donde dormían sus padres… yo estaba excitado de verla clavarse ella misma, y tampoco le permitiría escapar, con una mano tomaba su cintura y con la otra estrujaba sus senos…

- nunca lo olvides… eres mi perra… le dije en un momento de pasión, jalándole el pelo hacia atrás para que su oído este cerca de mi boca.

- si, si, si… solo tuya…. Ohhh… uhmmm… gimió librándose un poco, buscando mis labios.

Nuestras lenguas se fundían en un beso, lo que nos causaba mayor excitación… ella apuraba sus movimientos, ahora ya la tomaba por la cintura para ayudarla a que se castigue con mayor rapidez y fuerza su elástico y goloso ano.

- ay no… ay no… no puedo más…. Ohhh…. Exclamo, mientras se retorcía de placer.

Esa nueva oleada de orgasmo de cielo riveros, me envolvió a mí también… mi pene doblado expulso galones de semen en sus entrañas. Ella satisfecha, se dejó caer en mi pecho, sus redondas nalgas descansaban en mi ingle… mientras sentía sus melones subir y bajar con fuerza por lo agitado de su respiración.

Estábamos felices, nos habíamos librado de toda la tensión del día, del coliseo, de la fiesta… podía decirse que esta vez, lo habíamos disfrutado más tranquilamente, a pesar de estar en su casa… sin el temor de ser descubiertos como estando debajo de las gradas en el coliseo, o de ser descubiertos en el baño de la casa de guille por cualquier persona de la fiesta o javier y la tetona al lado… la paz que se sentía en esos minutos era formidable, saboreando cada segundo del orgasmo…

esa paz se rompería nuevamente… otro chirrido de puerta, esta vez ella no le puso seguro… otra vez la luz ingresando, ahora era del interior de su casa, y esta vez la luz venía a nosotros por las escaleras al lado del sofá… nuevamente una sombra formándose, esta vez podrían ser sus padres…

mier… no otra vez… pensé.
No era posible que tuviéramos tanta mala suerte… guille me diría después que era el karma que teníamos por la manera en que empezamos la relación cielo riveros y yo… ella poniéndole cuernos a javier y yo a viví… el destino nos estaba haciendo pagar las libertades que nos dimos y el dolor que causamos.

En este punto, me importaba más el dolor que podía causarme el padre de cielo riveros, tenía entendido que era un moreno de casi 2 metros, ex cielo riverostar… razón por la cual los pocos enamorados que tuvo cielo riveros temían acercarse a su casa… ya entendía porque javier huía de conocer al padre de cielo riveros.

Ahora imagínense la reacción de un gigante así al encontrar a su niña atorada contra natura, con su vestido replegado en su cintura, casi como violada… sus senos al aire, su pubis desnudo, lo lógico sería con mi verga en su vagina, pero lo chocante que sería a cualquier padre ver a su bebita con una verga incrustada en el ano y una morbosa expresión de placer en ese mujeron que siempre seria su niñita.

No soy racista, pero obvio que ese negro se iba a engorilar mismo king kong… y una cosa es que le ceda un golpe al cornudo de javier, pero ¿qué haría con el viejo de cielo riveros?… dejar que me golpee sin responder o intentar defenderme… en ambos casos iba terminar en el hospital o en los anuncios de defunciones.

A todo esto, las nalgas de cielo riveros se habían contraído por el miedo, apretando a más no poder mi verga que se deshinchaba, reduciéndose a su mínima expresión, mis huevos eran dos bolitas peludas y arrugadas… ríanse si quieren pero seguro ya les ha pasado en alguna oportunidad…

cielo riveros giro su rostro de pánico hacia la escalera, seguro ensayando una excusa para su papi. Yo no podía hacer mucho mientras cielo riveros no se parase y me dejase salir o huir. Estaba agotado, por el partido, la fiesta, la pelea y todo lo que me exprimió cielo riveros, apenas si tenía fuerzas… quise levantar su enorme trasero para librarme, pero no pude… lo único que pude hacer fue, al menos, subirle el vestido, cubrirle los senos y agazaparme detrás de ella… quizás su viejo no notaria mi presencia, pensé absurdamente.

Mientras la sombra sin hacer ruido iba creciendo en la escalera. El viejo de cielo riveros era sigiloso como buen cielo riverostar… caraj… ¿y si tenía un arma y esperaba matar un ladrón?... El único ladrón que mataría en esa cochera seria al que le robo salvajemente la virginidad anal a su nenita… hasta que escuchamos su voz…

- miauuu….

¿qué? ¿no era gorila era tigre?, pensé… luego vi la silueta del felino… gata de mierd… casi me da un infarto por su culpa, era la mascota de cielo riveros, una gata angora. Ambos nos reímos y respiramos aliviados…

cielo riveros ahuyento con señas a su gata para que no se acerque, machistamente pensé: las perras y las gatas no se llevan bien… pero estaba bien que la ahuyentara, tampoco era para que la gata venga a hacer más ruido y despierte al viejo de cielo riveros… shu, shu, vete michi... Le decía.

Una vez que la gata huyo, cielo riveros se paró, dejando caer mi reducida verga llena de mi leche que caía de su ano abierto. Ella lo miro con gracia y ternura, adivino que el estrés del momento lo dejaron así…

- uy pobrecito como quedaste… dijo risueña arrodillándose frente a mi verga, para darle su respectiva limpieza, un ritual que parecía haber adoptado.

Una vez que termino su labor, abandono mi verga semi erecta. Cielo riveros no quería exponerse más de la cuenta a ser descubierta en su casa… tomo un trapo y limpio como pudo las huellas de mi semen en sus nalgas y muslos, luego en mi pantalón… mientras yo la miraba complacido y ella me sonreía satisfecha.

Yo estaba desparramado entre el piso y el mueble, dejando que cielo riveros hiciera todo, yo estaba molido… ella en cambio parecía repuesta, se empezó a acicalar, se cubrió todo y se atrevió a modelar provocativa y juguetonamente para mi… pero tanta payasada nos pondría nuevamente en evidencia...

Cielo riveros se paseaba al lado del auto, sus pies aun desnudos por momentos parecían resbalarse, robándome sonrisas… pero en una de esas resbalo por lo que parecía parte de mi leche que se le escapó de sus intimidades cuando se paró. El asunto es que el resbalón la hizo caer de lado, obligándola a apoyarse en el auto, lo que a su vez… activo la alarma del coche… si, con sirenas, luces y todo…

- por la put… madr… dije, ahora sí que me jodi completamente, pensé.

Con todo ese ruido no tardaría en venir el viejo de cielo riveros y darme la tunda de mi vida. No podía esconderme en ningún lado, no podía salir por la puerta sin hacer ruido y exponerme a un tiro en mi huida, tampoco podía presentarme con mi pantalón manchado con mi propio semen.

Solo me quedaba ofrecerle al viejo de cielo riveros mi mejilla izquierda, ya que la derecha estaba maltrecha… me encontraba resignado, mientras escuchaba el ruido que venía de encima de nosotros, de la casa…. Eran pasos ruidosos, de gigante, apresurados por llegar a la cochera…

cielo riveros nuevamente horrorizada me miraba, por más que ella retuviera a su viejo en las escaleras, el cielo riverostar bajaría a ver si es que su hijita vino con algún novio aprovechado… pero esta vez cielo riveros me sorprendió, me hizo rápidas señas para que me meta debajo del auto… era mi última opción, me metí arrastrándome debajo del auto, mientras cielo riveros presurosa subía la funda para dejarme entrar…

- ¿quién anda ahí?... Era la voz grave del viejo de cielo riveros, venia de la escalera…

a la mierd… hasta acá llegue, pensé, terminando de meterme bajo el auto, mientras cielo riveros dejaba caer la funda para cubrir el auto y a su amante que la satisfacía analmente…

- papi, soy yo… dijo cielo riveros asustada mientras escuchaba en las gradas a su viejo bajando.

- ¿estas son horas de llegar?, ¿entrando a escondidas por acá en esas fachas?... Se le venía la reprimenda a cielo riveros, mientras yo apenas respiraba bajo el auto.

- ay papi, lo siento, es que se me paso a hora, no quise despertarte, pero tropecé y active sin querer la alarma del auto… con esa vocecita de niña engreída que ponía, me daban ganas de empalarla con su vestido de escolar.

- ok, mi niña, está bien, pero sabes que no me gusta que te vistas así, te expones a mañosos…

- papi se defenderme, aprendí del mejor, aparte quien se va querer meter con la hija de un gran cielo riverostar… dijo alimentando el ego de su padre, mientras yo esperaba que se lo lleve de ahí.

- jajaja… si… pero… dijo el viejo zorro dudando y empezó a olfatear… acá huele raro...

Ay caraj… sentía que me orinaba… claro que olía raro, su hija olía a mi semen, me la tire 3 veces esa noche, tenía impregnado mi olor a esperma... Su nenita tenía su enorme culo meloso por mi leche…

- buenooo papi… tu sabes que estuve en una fiesta… se me debe haber pegado el olor del trago y los cigarros… tu sabes ese humor se impregna… se justificó cielo riveros medio nerviosa.

- puede ser… pero huele como a cloro… sentencio el viejo, me jodi pensé se va dar cuenta que es olor de leche que aun tenia cielo riveros en su esfínter ajustándolo seguro para que no salga.

- debe ser el cloro que mama usa para limpiar el piso… explico cielo riveros miedosa.

- si, puede ser… ¿que se mueve ahí?… dijo nuevamente serio.

A la mierd… yo estaba tieso, pero la funda del auto parecía moverse… a mis pies veía la gata de cielo riveros paseándose cerca al neumático… que carajos tengo que se me pegan las perras y las gatas!… pensaba mientras veía la luz entrar debajo del auto, el viejo estaba subiendo la funda y cielo riveros estaba helada seguro.

En mi nerviosismo me di maña para empujar con mi pie a la gata hacia afuera… la que salió maullando y pegándose a la pierna de ese gigante que parecía pie grande…

- esta gata tuya… decía el viejo mientras aliviado veía la funda nuevamente caer y cubrirme… ven hija, vamos a dormir…

- papi no tengo sueño… quiero quedarme un rato viendo tele… dijo caprichosamente cielo riveros.

- ok… pero no te desveles y ponle seguro a la puerta de la cochera…

yo respiraba aliviado bajo el auto, escuchando en las gradas los pasos del viejo de cielo riveros, me quede un rato… escuche unos pasos más suaves en la escalera, pensé que era la vieja de cielo riveros…

- dany… ya puedes salir, ya le puse seguro a la puerta de arriba.

- que cerca estuvo eso… creo q perdí un par de kilos…

algo precavidos y cansados por todo lo hecho, solo estuvimos un rato en su sofá dándonos besos, esperando que el cielo riverostar se duerma de nuevo. Varias veces cielo riveros me jalo de la puerta de su casa para volver a llenarme de besos, hasta que me permitió irme, tome un taxi a mi casa. Caí rendido en mi cama.

Al día siguiente guille me conto que en la fiesta solo hubieron rumores de que javier me atrapo besando a cielo riveros y por eso se armó el lio… bueno si solo piensan que la bese, estamos bien, me dije… es que también tengo perfil bajo sin fama de pendejo, cielo riveros se viste apretada pero no da pie a que se le acerquen mucho… más bien lo que comentaron más fueron las fachas de vane, que normalmente vestía bien pero no tan provocativa, era como si pasara de monja a puta… más de uno le quería caer…

al día siguiente, lunes, empezaban los exámenes en la facultad, así que la gente estaría más distraída en eso. Cielo riveros y yo solo teníamos examen el martes de la materia que llevamos juntos y del que estábamos en la cuerda floja. El buen guille que era delegado del curso, me informo que el lunes en la noche había opción de sustentar nuevamente nuestro trabajo para recuperar los puntos que perdimos aquella vez que sustentamos mal por la tensión que había entre cielo riveros y yo tras desvirgar su ano.

Ese domingo cielo riveros y yo optamos por darnos libre ese día y estudiar por separado, era mucha tentación estar juntos… le avise del trabajo, me dijo que pase a recogerla una hora antes de la clase.

El lunes después de almorzar tarde me di una siesta, y me levante casi a la hora de la clase… diablos… mi viejo al verme apurado, se compadeció de mí y me dio las llaves de su auto… caraj... O me aprecia mi viejo o piensa que más caro le sale pagarme de nuevo el curso… en fin, salí volando a buscar a cielo riveros…

cielo riveros también tomo una siesta y me recibió soñolienta sin noción de la hora… en una malla negra y una chompa suelta que le cubría buena parte de su deliciosa anatomía…

- espérame que me cambio… me dijo

- no hay tiempo que nos agarra el tráfico… replique.

- al menos déjame lavarme… me dijo.

Salió unos minutos después, subimos al auto, mientras ella se peinaba y terminaba de maquillarse, yo buscaba la ruta más corta, pero nada, tráfico en todos lados… el curso era de 6 a 8, y ya eran las 7pm…

- ay dany… como me haces venir así… que vergüenza, esta malla está rota… me dijo.

Baje la vista, cielo riveros había abierto sus piernas y me mostraba el agujero que tenía su malla a la altura del pubis, lugar propicio pensé, mientras me imaginaba como aprovechar ese agujero… hasta que un claxon me devolvió a la realidad… semáforo en verde, avancemos…

- no es tan grande el hueco, aparte está ahí abajo y no se verá (a menos que necesites levantar la pierna para evitar que nos reprueben)… le dije calmándola.

Llegamos a las 7.30… como ya no había gente, el profesor preparaba sus cosas para irse… aquí ayudo el ruego de cielo riveros, si este profe como cualquiera se deleitaba viéndola con sus ropas apretadas, al menos un favor le debía permitir a una alumna cumplida como cielo riveros…

expusimos soberbiamente, el domingo estudiamos bien, e igual que en el sexo nos complementamos muy bien… incluso el profesor nos felicitó. Nos faltaba poco para aprobar el curso, el examen al día siguiente seria puro trámite… cielo riveros parecía una niña feliz… saliendo del salón, me planto un beso…

- nos van a ver… le dije, pero el pasillo estaba vacío solo había gente en los salones en exámenes.

- no me importa… eres mío y tarde o temprano lo sabrán… dijo orgullosa y quizás marcando territorio, ya que vane se me regalaba quería evitar que otra tentara suerte conmigo.

En realidad nunca tuve una chica en la facultad, desde que ingrese siempre evite enredarme con chicas de la facu para evitarme distracciones. Viví era de otra universidad, a jeny la conocí estudiando inglés, a angie trabajando en una tienda (casi en simultaneo con la anterior, otro enredo que algún día contare), luego una relación filial camuflada con mi prima anita y otra relación dando clases de matemáticas a una escolar (cinthya)… ese era mi prontuario de mi época universitaria… todas lejos de las aulas…

no había pensado como seria eso de tener enamorada en la facu, como actuar… bueno faltaba poco para terminar la carrera… así que solo dejaría fluir las cosas, permitiría que cielo riveros se deje llevar por la alegría del momento, bajamos a buscar el auto. Por los exámenes, las cocheras cercanas a la facultad estaban llenas, tuve que estacionar en otra facultad donde había pocos autos y era algo oscuro…

entramos al auto… había dejado una luna posterior semi abierta, lo que hizo que uno de los rollos de planos de arquitectura de mi papa, que estaban sobre el asiento de atrás, se desenrede y por el viento el papel cubría la luna posterior, no me dejaría ver por el retrovisor….

- cielo riveros hazme el favor de sacar eso de ahí… le dije señalando los planos.

- si me lo pides… te hago cualquier favor… me dijo coquetamente mirando mi entrepierna.

Por un momento pensé que había liberado nuevamente a la fiera anal… pero parecía más un juego suyo, ya que no dio pie a que le conteste nada… solo vio mi cara de sorpresa, sonrió y salió y entro por la puerta de atrás, por el retrovisor la vi sentada forcejear con el plano… mientras yo veía la hora…

luego escuche un ruido del rasgar de una tela, pensé que cielo riveros había roto el asiento y ahí si mi viejo me mata… levante la vista y vi como cielo riveros se había subido al asiento de atrás, en 4 patas con las rodillas sobre el asiento y los codos en el respaldar… en esa acción el hueco que tenía en la malla se hizo más grande…

- ay no… que vergüenza… no voltees… no me veas por favor… exclamo.

Lo que vi por el retrovisor quise verlo mejor y voltee, era un espectáculo inusual y excitante: cielo riveros en cuatro con sus gordas nalgas abiertas casi en mi cara, la malla descocida entre su pubis y su ano, su pequeña tanga se metía entre sus labios vaginales, que parecían empezar a mojarse con esa fricción…

no me importo que estuviéramos en la universidad, aposte porque las lunas polarizadas del auto nos cubrirían de cualquier curioso que pasase por ese desolado estacionamiento. En ese momento no lo pensé dos veces, simplemente tome los bordes de esa descocida malla y tire a los lados abriéndola más.

- queee… dany no… ummm… gimió cielo riveros, mientras sentía que mi lengua incitaba su vagina.

Nunca me había provocado tanto hacerle sexo oral a una chica, claro que lo había hecho, pero esta vez por la posición y el espectáculo que me daba cielo riveros, me abalance sobre su conchita y la lengüeteé ferozmente, mientras con mis manos estrujaba sus enormes nalgas… y ella se estremecía…

- para ya… no… no pares… sigue… se desdecía al sentir mi lengua en su clítoris.

Me di maña para liberar mi verga que ya votaba líquidos… baje como pude el asiento de al lado, mientras cielo riveros se quitaba su polera que con la calentura la hacía sudar. Ahora tenía el pecho desnudo, solo con el brasier negro conteniendo sus grandes melones... Y claro su malla, negra rota de par en par, con su hilo dental a un lado, mientras ella arqueaba la espalda esperando recibirme…

- ¿qué esperas?... Vamos… me decía enloquecida de excitación.

Pase como pude atrás, para esto el auto ya rebotaba en sus amortiguadores, por suerte no veía a nadie y tenía la alarma apagada… la bondad de ese auto era su espacio posterior y su altura, fácilmente entramos los dos en el asiento de atrás, ella con sus gordas nalgas apuntándome…

- uhmmm… gimió al sentir mi verga hundirse en su húmeda vagina… no ahí, no, después no habrá tiempo para este… dijo apuntando su ano y agrego… y por acá es más rico…

- como gustes… le dije tomándola de la cintura y apuntando a su ansioso ano.

La fui empalando lentamente, tomándola por la cintura y atrayéndola hacia mí, mientras ella me empujaba su enorme rabo a mi entrepierna. Cielo riveros que antes apoyaba sus codos en el espaldar, ahora tenía clavada sus garras en el asiento… así como yo me la clavaba a ella…

- ay… no puede ser q me guste tanto estooo…. Como me encanta ser tu perra… vociferaba enloquecida por el placer que le causaba tener su ano invadido por mi verga hasta la raíz.

Nuevamente la imagen parecía propia de una violación, un sometimiento salvaje… cielo riveros con la malla rota mostrando su raja y sus nalgas a medias, yo martillándole el culo salvajemente mientras tomaba de riendas lo que queda de su malla, su brasier y sus cabellos… esa era también la excitación del momento, nuevamente al borde de ser descubiertos hasta expulsados.

Por cielo riveros estaba excediendo los límites de la cordura y el exhibicionismo, una cosa era someterla en mi casa vacía… pero en el cine, en la biblioteca, en el coliseo, en el baño de la casa de guille, en la cochera de sus padres… y ahora en el estacionamiento de la facultad!!!

Quien diría que cielo riveros, esa morena apetitosa pero que mantenía a raya a los que querían propasarse, que se hacía respetar con sus gestos y miradas… terminaría siendo una esclava de sus pasiones, una adicta al sexo anal… algún viejo cielo riverosr me dijo cuando yo era adolescente: toda mujer tiene una puta en su interior, depende de cada uno hacer que aflore… y parece que le había dado en el punto exacto a cielo riveros…

- no pares por favor… más fuerte… me rogaba, pasando sus brazos por atrás y tomando los bordes de su malla para abrirlos más, para que vea sus gordas nalgas.

Eso no fue todo, acto seguido, ella misma tomo sus redondas nalgas y las abrió, como para que mi verga se le hunda hasta el fondo… yo se la incrustaba tan fuerte como podía y ella resistía, mientras el auto se movía como poseído dentro del estacionamiento, ya comenzaba a chirriar pero no nos importaba.

Por momentos le besaba el cuello y la hacía temblar, o tomaba de los pelos a cielo riveros jalando su cabeza para atrás para que me bese, dándole a entender que yo mandaba en ese castigo anal a la que la sometía… ella no se quejaba, como loca buscaba mi lengua… mientras sus senos ya habían saltado de su brasier, sus duros pezones rebotaban contra el asiento…

- dany… ya no… ya no… que me matas… ohhh…. Uhmmm… decía cielo riveros desfalleciente.

- aguanta un poco… ufff ufff… le pedía sintiendo que me faltaba poco.

Apure mis movimientos, viendo a ella más cerca al orgasmo que yo… hacia retumbar sus redondas nalgas contra mí. Me invadió el morbo de ver ese enorme trasero temblar con mi verga abriéndola en dos… ella volteo y me miro con una expresión de placer, por momentos de niña violada, sometida, castigada… viendo de lado sus enormes melones vibrar con mis embestidas…

esas imágenes terminaron por excitarme más y hacerme llegar mientras le hundía mi verga a más no poder dividiendo sus abultadas nalgas y ella contraía todo su bronceado cuerpo, mis dedos se hundían en sus gordos glúteos transmitiendo mi éxtasis… luego le vinieron los temblores y las contracciones de placer, con cada inyección de semen de mi pene a sus intestinos…

- ay dany… no puedo…ufff… no puedo respirar… lo disfrutó tanto que se estaba sofocando, también era porque teníamos las lunas cerradas.

No podíamos abrir las ventanas porque nos verían, solo me dedique a calmarla, acariciar sus cabellos… ella me tomo la mano y la dirigió a sus senos, sentía su corazón palpitar a mil al borde de la taquicardia… resignada a esperar que pase, apoyo sus brazos y cabeza contra el asiento… hasta que…

escuchamos pasos afuera… a través de la luna polarizada pude ver la imagen de un hombre en traje… mierd… debe ser profesor… abrió la maletera de su auto y metió algunos documentos, ahí lo pude ver bien… era el mismo profesor que minutos antes nos aprobó y ahora estaba a unos metros de mi auto, si nos descubría no solo nos reprobaban, nos expulsaban.

Cielo riveros yacía deshecha debajo mío con mi verga aun clavada en su ano palpitante, recuperando su respiración, no sospechaba del peligro… pensé que ese profesor se subiría a su auto y se iría… pero poso su vista extrañada en mi auto, cerro su maletera y comenzó a caminar hacia nosotros…

la put… que te pario!… ¿por qué mierd… vienes?... Vete caraj… murmure intentando ahuyentarlo.

El profe habrá visto el auto moverse, rebotar sobre los neumáticos, eso despierta cualquier sospecha. Cielo riveros no reaccionaba, estaba casi desmayada. Luego recordé las palabras de guille respecto a que estábamos pagando nuestros errores…

maldito karma… pensé.
Mientras me cogía a cielo riveros en el auto, desactive la alarma para no hacer ruido, los seguros de la puerta estaban desbloqueados, cualquiera podría entrar… ese profe que no aguantaba pulgas, que por menos saco a alumnos del salón, si me encontraba con mi verga anclada en el culo de cielo riveros, fácil nos expulsaban.

Ya estaba casi frente al auto, se acercaba poniendo sus manos sobre la vista, como hacen las personas para ver dentro de un auto de lunas polarizadas… este maldito voyerista, habrá visto el auto moverse y sospecho lo que pasaba y quiere espiar seguro… malnacid… pensé, mientras yo volteaba el rostro, al menos para que no vea mi cara, ni la de cielo riveros que yacía enterrada en el asiento.

- hey… ¿qué hace ahí?...

Mierd… nos descubrieron… pero no, al girar el rostro para que no me vea el profe, note que por el otro lado venia otra persona… que cagad… ¿más gente?, ¿otro profesor?... No, era un vigilante… al oír su voz, cielo riveros reacciono, levanto su cabeza y quiso decir algo, yo le puse una mano en la boca para que se calle.

- soy el profesor rodriguez, este auto está en el estacionamiento del decano… dijo excusándose el profe que había sido atrapado queriendo fisgonear en el interior de un auto ajeno.

Caraj… por el apuro de ir a exponer, estacionamos en cualquier lugar y justo en el puto lugar del decano, estábamos hundidos a mas no poder. Cielo riveros resoplaba y sollozaba al notar la situación. No podíamos hacer nada, solo quedarnos como estatuas, si nos movíamos el auto se tambalearía poniéndonos en evidencia.

- bueno, el decano no vino hoy… pero déjeme hacer la guardia para ver a quien pertenece el auto y hacerle la amonestación respectiva… dijo diligente el vigilante.

- ok… lo dejo en tus manos… dijo el profesor y emprendió regreso a su auto.

Mientras escuchaba el auto del profe alejarse, el vigilante, se quedó rondando desde lejos el auto, esperando ver llegar al dueño para increparle su descuido.

- ¿por qué no se larga?... Murmuraba cielo riveros nerviosa, sentía que mi leche salía de su ano y se desparramaba por sus muslos.

- ya tranquila… le decía para calmarla, pero en realidad yo intuía que pronto más estudiantes y profesores saldrían y estaríamos más expuestos aun.

Dentro de nuestro karma, tuvimos la suerte que sonó la radio del vigilante, seguro solicitaron su apoyo, porque se fue lentamente de cuando en cuando volteando a mirar… al fin, me dije, respirando aliviado.

- ay dany!… ¿por qué nos pasan estas cosas a nosotros?... Se quejaba cielo riveros.

- no sé, pero no hay tiempo, hay que cambiarnos… le dije, no había tiempo para teorizar.

Ubique unas franelas que mi viejo ponía detrás del asiento para limpiar sus lunas, con eso me limpie, pero la atolondrada de cielo riveros en su apuro se limpió con el borde de su propia chompa, ensuciándola… y nuevamente se iría perfumada por la fragancia de mi semen.

Para mí era fácil, metía mi pene en el pantalón y listo… pero cielo riveros… tenia rota y jaloneada la malla, su chompa manchada con leche apenas la tapaba porque se la remango para no mostrar la mancha… con todo eso, ella no podía salir del auto así. Solo le quedo escurrirse entre los asientos para pasar adelante, mientras yo salía rápidamente y pasaba al asiento del chofer.

Cielo riveros angustiada veía su malla rota, exponiendo toda su intimidad, pero eso lo resolveríamos después, ahora había que huir de la facultad… pero… escuche unos golpes en la luna… caraj… otra vez… voltee a ver… y era el vigilante que había vuelto... No podía bajar la luna porque vería todo el espectáculo de la vagina de cielo riveros al descubierto. Ella solo se tomaba el rostro rojo de vergüenza y casi al borde del sollozo.

- alumno lo vi entrar, por favor baje la luna e identifíquese… decía el vigilante a un lado del auto.

- deme un minuto… le dije, mientras buscaba con que cubrir a cielo riveros.

Recordé que mi padre en la guantera guardaba los documentos del auto en un folder grande. Lo saque y se lo puse a cielo riveros sobre sus piernas, tapando su pubis. Ella al sentirse cubierta sonrió aliviada. Baje la luna y era el mismo vigilante que semanas antes deleito con las curvas de cielo riveros al verla salir después de que la cogí en el baño y que también le rompí la blusa.

Obviamente empezó la reprimenda, le explique el apuro de la exposición, aun así quiso retener mi carnet de estudiante. Ahí intervino cielo riveros, el vigilante la reconoció, se puso nervioso recordando las formas de ella, así que moderó su tono y solo nos advirtió que no lo volvamos hacer. Salimos raudos a su casa, me quite la camisa y ella se la puso encima, entro a su casa cubierta y yo me quede con un polo.

Al día siguiente, cielo riveros y yo nos encontraríamos a vane en el examen. Cielo riveros sabiendo eso, en esa competencia femenina, se puso una blusa blanca escotada con un brasier negro que traslucía algo, una falda escocesa rojinegra suelta, a media altura entre su pubis y sus rodillas, y unas panties negras… me hizo recordar, la imagen que fantasee en la cochera de su casa cuando la oí hablarle engreída a su padre… cuando quise verla vestida de escolar y cogerla salvajemente como a una lolita…

en cambio vane no volvió usar ropa tentadora como en la fiesta, pero tampoco volvió a su ropa recatada… digamos que para disimular las fachas expuestas en la casa de guille, opto por una vestimenta intermedia, como para que no digan que se vistió así para llamar mi atención sino que era parte de su cambio de look… esta vez usaba jeans apretados, si bien antes los cubría con blusas o chompas largas, ahora las tenía apenas debajo de la cintura, dejando ver su bien formado trasero...

Más de uno al entrar al salón se sorprendió gratamente al verla de espaldas… obvio que a mí como hombre, me jalo la vista más de una vez, pero tenía la vigilancia de cielo riveros cerca, así que trataba de verla disimuladamente. Y bueno, como supondrán, cielo riveros detestaba a vane, porque le quiso robar su chico, porque la insulto y desprecio… si estuvieran solas fácil se agarraban de las greñas nuevamente.

Por suerte el buen guille procuraba mantener a vane alejada de nosotros, le conversaba para distraerla, pero no evitaba que vane me mande miradas coquetas que enervaban a cielo riveros… eso era lo que buscaba vane, provocarla como para decirle que no todo estaba dicho... Que le podía quitar a su hombre.

Para nuestra suerte, la gente estaba más preocupada en sus exámenes, algunas miradas nos dieron a cielo riveros y a mí recordando el incidente en la fiesta, quizás algún comentario, pero no paso a más… unos conocidos me preguntaron por la hinchazón en mi mejilla y tuve que excusar un incidente en un baño (que en parte era cierto, sin llegar a detalles escabrosos y escandalosos).

Lo bueno era que javier andaba más atrasado en sus estudios y no compartíamos cursos. Solo los que lo vieron me dijeron en broma que al parecer javier había querido besar un camión y este lo atropello (el camión tenía mi nombre en la placa)… si mi cara estaba algo hinchada, me imagino como estaría la de él.

Durante el examen, vane volteaba a verme coqueta y hasta guiñarme el ojo por ratos… esta bruja provocadora… cielo riveros al notarlo le daba unas furiosas miradas… después me diría algo que parecía inculcado por su padre cielo riverostar: lo que es mío, es mío y no lo comparto!… yo le hacía señas a cielo riveros para que se calme y continúe su examen, quedaba media hora para que termine la prueba… pero…

- uds. ¿qué hacen?... Denme sus exámenes… dijo severo el profesor detrás mío.

La cagad… el profesor creyó que estábamos copiando. No pudimos protestar mucho, ya que nos tenía fichados desde hace tiempo por lo irregulares que éramos en el curso. Nos sacó del salón mientras guille miraba preocupado y la insidiosa de vane nos sonreía burlonamente… esa maldit…

dejo a un vigilante cuidando el aula, mientras nos dirigía a su oficina. Nos pidió que esperemos ahí hasta que termine la prueba, luego hablaríamos de las sanciones… nos dejó ahí sentados en su escritorio y regreso al salón, yo de mal humor maldecía mi suerte… ni bien se alejó empezaron sus disculpas:

- lo siento dany… es mi culpa… esa perr… me saca de quicio… dijo entre apenada y colérica.

- caíste en su juego y ya viste donde estamos… le dije resignado.

- me puse celosa, porque vi como la mirabas antes del examen… dijo cielo riveros parándose.

- dale con eso ¿no confías en mí?, una cosa es que me jale la vista y otra que la desee… explique.

- entonces… a mi… ¿me deseas?... Dijo provocativamente, inclinándose para que vea sus senos.

- como conejo en celo… replique perdiéndome entre sus melones y escote.

- ¿ahora?... Me dijo mientras apoyaba su estómago en el escritorio.

- ¿estás loca?... Le dije sorprendido, casi nos atrapan por descuido pero esto era suicidio.

- demuéstrame cuanto me deseas…. Me pidió como niña engreída.

Ahora no solo veía sus grandes senos, sino su falda levantada descubriendo sus generosas nalgas... Me dedique a acariciarlas y jalonearlas embobado, su pequeña ropa interior había desaparecido entre esos enormes cachetes… ella se estaba excitando y en su delirio me hizo su ultimo pedido…

- si me quieres… me lo harás aquí y ahora… dijo completamente arrecha.

Era un chantaje sentimental que yo no habría aceptado en otras circunstancias, sin embargo esta hembra me tenía embrujado, cachondo al límite… pensando más con la cabeza de abajo que con la de arriba. Por un momento dude, pero voltee a ver sus suaves y gordas nalgas mientras las acariciaba.

Para mi mala suerte detrás de cielo riveros había un espejo y podía ver por completo sus enormes glúteos entre los cuales se perdía una delgada ropa interior… un poco más abajo, donde terminaban sus rechonchas nalgas, empezaban las sexys ligas de sus panties que, a su vez, encerraban sus bien formadas piernas que lucían entrelazadas y se tensaban con cada caricia, más aun cuando le jalaba su tanga y se metía en su conchita húmeda… yo no aguantaba más ver esa escena. Mi pene quería romper mi pantalón…

- ay no… dany no, no… yo solo jugaba, solo quería saber si lo harías… decía mientras se retorcía.

Pero era muy tarde, había despertado mis instintos más básicos… ella negaba con palabras lo que a gritos pedía su cuerpo: quería ser cogida como una perra, quería sentirse segura que su hombre solo perdía la cabeza por ella… había jugado sus cartas para provocarme y que le pruebe mi afecto, pero su jueguito y capricho se le fue de las manos y terminaría en su ano…

- no dany… basta… por favor no… que nos van a… ouuuu…. Uhmmm…. Gimió al sentir mi verga ingresando fácilmente en su húmeda vagina.

Se había vuelto mi fantasía en los últimos días cogerla en uniforme escolar contra un mueble, como a colegiala malcriada en la oficina del director… esta vez la castigaría por ser una puta provocadora que no mide las consecuencias de sus celos y de sus chantajes…

- estás loco… uhmmm… para ya… no… ahhh… reclamaba mientras yo tenía su rechoncho trasero rebotando entre mi cuerpo y el mueble.

Con sus palabras se resistía, pero su cuerpo me esperaba, tenía las manos bien asidas de los bordes del mueble, casi arañándolo, soportando mis embestidas... Yo la cabalgaba teniendo un borde su falda como brida y por momentos usaba las ligas de sus panties para jalonearla a mi gusto… mi verga se deleitaba con su vagina, pero no por mucho… cielo riveros en un terrible espasmo contrajo el cuerpo satisfecha… tanto tiempo sin penetrarla por la vagina que ya estaba recontra sensible…

- ohhh… ufff… exclamo satisfecha.

Pero yo aún estaba en viada… encaprichado por hacerle todo lo que pudiera en esa vestimenta de lolita… espere unos instantes a que se recupere… saque mi verga empapada de su vagina. Ella quiso pararse para darle seguramente su limpieza habitual a mi pene… pero no la deje, con mis manos mantuve su cintura presionada contra el mueble… era mi esclava hasta que me satisficiera.

- queee… no dany ya estuvo bueno… ahí nomás… párale si… no más…. Me increpo aun agitada.

- no te vas a librar tan fácil… le dije, ella me provoco casi chantajeo, ahora que se aguante.

No di pie a que se queje más… apunte mi verga a su ano, que se contrajo para no permitirme entrar. Yo me incline a ella, la jale del cabello para que sepa quien mandaba en esa cogida y luego le bese el cuello… eso la desarmo unos momentos, que aproveche para incrustarle mi verga hasta el fondo…

- auuu… ¿por qué eres así?... Sabes que no… uhmmm… gimió nuevamente sometida.

- tu empezaste… me justifique, comenzando a cabalgarla esta vez por el ano.

Estábamos en la oficina del profesor que en cualquier momento podía entrar, nuevamente la puerta sin seguro y no nos importaba… vivíamos nuestra sexualidad al límite, que karma ni que karma… ese culo merecía ser ultrajado salvajemente, ese pseudo disfraz de colegiala había llevado mi morbo al límite.

- ohhh ufff… resoplaba cielo riveros, resistiendo mis arremetidas, evitando gemir para no ser escuchados afuera, sabía que no me iría sin saciarme y ella se preparaba a disfrutarlo también.

Menuda imagen que encontraría el profe si entraba: sus alumnos copulando como conejos sobre su escritorio… cielo riveros que seguro era parte de las fantasías del profe, yacía con su falda en la cintura, su tanga a un lado, sus panties jaloneadas, su gordo trasero martillado por mi ingle, su ano clavado por mi verga vehementemente… y ella con los cabellos revueltos y una expresión morbosa de satisfacción…

- ohmmm… soy tu mujer, ¿verdad?... Me dijo, mirándome entre extasiada y romántica.

- si… solo tú eres mi mujer… y mi puta… le replique y la vi sonreír satisfecha de mi salvaje respuesta, que alejaba los fantasmas de celos que vane le infundio desde la fiesta.

En otro momento pasional, cielo riveros volteo y me miro embobada por la fuerza con que castigaba su ano… vio una imagen detrás nuestro, se estremeció pensando que era el profesor… pero se dio cuenta que era el espejo... Su curiosidad pudo más y se estiro un poco más para ver mejor… nos vio casi de lado, su enorme culo tambaleando por mi vigor, rebotando, percibió mi verga entrando y saliendo de su ano…

- que gran culo tengo!... Ouuu… y me lo estas partiendo!… uhmmm… murmuro sorprendida, seguro al verse al espejo en otras situaciones no se daba cuenta del morbo que inspiraban sus carnosos formas, ahora ver rebotar su trasero la llenaba de dicha.

- callate!, que nos van a oir… le advertí.

- me callo, pero sigue por favor… sigue… ohhhh… decía gimiendo ahora en voz baja.

Con esa salvaje imagen del castigo anal, con el esfínter criminalmente saciado, recupero la excitación que levemente perdió al creer que el profe estaba detrás… el único detrás era yo que le bombeaba el culo con fiereza… tanto que cielo riveros no tardó mucho en llegar a su segundo orgasmo y yo al primero…

- ahhhh…. Ohhhh…. Exclamo finalmente tapándose la boca.

En un último esfuerzo, le incruste mi verga a más no poder, sus infladas nalgas terminaron remangadas contra mi ingle, mientras mi verga ametrallaba su interior con ráfagas de leche que hacían que se le contraiga el espinazo. Luego se dejó caer satisfecha en el mueble. Yo resoplaba feliz de haber cumplido mi fantasía a costa de cielo riveros y de la oficina del profe… pero como nunca tenemos suerte…

sonó la alarma de la facultad, la que indicaba el cambio de hora y, en este caso, que el examen había terminado… mierd… ya vendría el profe a darnos la reprimenda, si nos encontraba así no solo nos reprobaban, nos votaban de la facu… como dicen, luego del gusto viene el disgusto…

cielo riveros se contrajo toda, apretando sus nalgas y mi verga… auuu caraj… me estaba moliendo el pene… tuve que darle un palmazo en sus abultadas nalgas para que se relaje. Vi alrededor, no había con que limpiarse, solo exámenes, informes y actas de notas… diablos…

hasta que divise en un estante un rollo de papel toalla… pero estaba algo lejos… no le podía sacar la verga porque mancharíamos todo: sus panties, su falda, el piso, el escritorio, los documentos… le hice señas a cielo riveros para movernos juntos… parecíamos nuevamente perros enganchados tras copular, caminamos hacia el papel como un trencito… hasta que…

la puerta chirrió al abrirse… helados como estatuas solo atinamos a voltear las cabezas y ver quien nos descubrió esta vez: ¿el vigilante?, ¿el profe? O peor aún el decano o el rector… pero otra vez vimos un rostro desencajado, decepcionado y colérico… la mierd… que suerte la suya…

- otra vez uds.… ¿acaso son perros?… dijo vane furiosa, saliendo rápido y lanzando la puerta.

- envidiosa… murmuro cielo riveros en tono revanchista, triunfalista, casi feliz de que nos encontrara así para demostrarle que ella era mi única hembra.

- seguro va en busca del profesor… le dije a cielo riveros, devolviéndola a la realidad.

Nos apuramos en alcanzar el papel, nos limpiamos tan rápido como pudimos… pero la habitación olía a mi semen y los jugos de cielo riveros. La oficina parecía más celda, solo tenía ventanas superiores, las que abrí como pude para ventilar el ambiente… cielo riveros saco un perfume de su cartera y lo roció, casi fumigo la oficina, para eliminar el olor a sexo de hotel que despedía la habitación.

Poco después llego el profe, se demoró porque tras el examen tuvo preguntas de un tal guille lo retuvo un rato. Ese guille nos salvó de varias. Creo que guille ya sospechaba lo que hacíamos y lo que vane quería hacer al salir del salón antes que termine el examen, así que retuvo lo más que pudo al profe.

Obviamente el profe nos reprendió, aunque fue gracioso porque se la paso estornudando porque cielo riveros exagero con el perfume y le activo su alergia… luego amenazo con llamar a nuestros padres, lo que lo contuvo fue notar que nuestros exámenes no eran iguales, es decir no habíamos copiado… después nos sermoneo sobre las parejas y las relaciones, que no debe interferir eso en nuestra vida universitaria… a cielo riveros más bien le gusto lo último, que reconocieran que éramos pareja… en fin, cosas de mujeres…

por momentos veía que se le iban los ojos al escote de cielo riveros, algo de celos me dieron pero estábamos en las manos del profe… al final nos dejó ir sin anularnos el examen… nos disculpamos por lo sucedido y nos fuimos. Una vez fuera de la oficina, notamos que casi no había alumnos en la facultad.

Salimos aliviados, fácilmente estábamos aprobados con lo que habíamos avanzado al momento que nos quitaron el examen. Pasamos por el estacionamiento donde vimos un auto deportivo… ya lo había visto antes, de pronto salió del interior una figura conocida… era vane, parecía esperarnos para decirnos algo, insultarnos o que se yo que le pasaba por la cabeza caliente de vernos otra vez fornicando…

cielo riveros no dejo que nos diga nada, simplemente me jalo del brazo, me estampo contra una pared y me planto un beso pasional casi sexual. De reojo vi a vane, roja de cólera, no aguanto más, se subió a su auto y se fue… maliciosamente me dije: pensar que con vane pude tener ese auto… pero prefería tener una chica con buena carrocería y gran desempeño como cielo riveros.

Esta era una terrible guerra de féminas, que no terminaría bien… lo peor que yo estaba en medio y sabía que empeoraría. Cielo riveros había ganado la batalla, pero intuía que vane para ganar la guerra haría lo impensable. Creo que cielo riveros se confiaba porque vane no había contado nada de lo que vio hasta el momento... Era jugar con fuego seguir provocándola… pero no importaba, esa noche cielo riveros era feliz.

Me tomo de la mano y en cada esquina que le provocaba me besaba y salimos como pareja de la universidad. Igual en el viaje a su casa, me prodigo besos, caricias, etc., se mostraba enamorada y no me disgustaba, me sentía bien. Regrese a casa y mi padre pregunto cómo me fue, estuvo satisfecho de que apruebe. Luego pregunto por viví, no quise dar detalles, solo dije que ya no iba más esa relación.

Me fui a mi cuarto con el recuerdo de mi ex, vaya forma de mi padre de bajarme el buen ánimo y traerme recuerdos. Viví siempre fue orgullosa, alguna vez me dijo que lo único que nunca pero nunca (así lo enfatizo) nunca perdonaría era la infidelidad… y bueno yo peque de eso, dudaba que me volviera a llamar… sin embargo en ese momento sonó mi teléfono… ¿la llame con la mente? Pero ¿qué le diría?

- ¿alo?... ¿quién es?... Pregunte curioso porque no me era cielo riverosr ese número.

- ¿no reconoces mi voz?… me dijo seductora y al no responderle ella agrego: soy… vane…

se me helo el cuerpo, recordé su insinuación en la fiesta, su bofetada en el baño tras verme con cielo riveros, su indignación por mi supuesto desprecio, el temor de que chismosee todo, lo que vio en la oficina del profe, la provocación de cielo riveros en el estacionamiento… tenía toda la información y los motivos necesarios para hundirnos en chismes, pero no lo había hecho hasta ahora… ¿por qué? ¿que planeaba?...

- ah… si hola… ¿a qué debo tu llamada?… respondí tras segundos de asimilarlo, ya que antes había sido tan orgullosa, despectiva y ahora me llamaba.

- tu sabes lo que quiero… me dijo sin dudarlo como una femme fatale.

- en realidad no… ¿mis apuntes de clase?... Dije ingenuamente pero ya intuía algo.

- no seas tonto… dijo riendo socarronamente.

- ¿entonces qué?... Pregunte, se me ocurrían muchas cosas que una mujer herida podía pedir.

- tu sabes lo que vi… y esas imágenes no se me quitan de la mente… me dijo reflexiva.

- y ¿qué puedo hacer yo?... Pregunte, en realidad era problema suyo no mío, hasta que fue mío:

- tú, puedes hacer muchas cosas… me dijo pícaramente.

- ¿por ejemplo?... Replique, dándole a entender que se deje de rodeos.

- puedes hacerme lo mismo… lo mismo que a ella… sentencio vane provocativamente.

Si no estuviera sentado, me caía… mierd… esta chica estaba desbocada… a tanto llego su ego herido o tanto inflo su morbo las escenas que vio… no lo podía creer… estaba pidiéndome que le desvirgue el su rosado ano, que le empale su blanco y bien formado trasero... Me quede perplejo, no lo podía creer.

- ¿perdón?... ¿estas bromeando o qué?… dije, no se puede confiar de una mujer despechada, quizás solo me estaba probando o hasta me estaba grabando para luego decirle a cielo riveros.

- no, yo no me ando con juegos… dijo enérgica, luego agrego haciéndose la interesante: además recuerda que… yo vi muchas cosas que en la facu les encantaría saber… serian la comidilla…

- wow… espera… ¿me estas amenazando?.... Dije sorprendido, no podía creer que en su capricho, venganza u obsesión, me estaba obligando a que le rompa el culo.

- tómalo como quieras, esta semana hay exámenes y no quiero distraerme… pero quiero tu respuesta antes del sábado en la noche… dijo determinada, la muy mandona.

- aguarda… tu sabes que estoy con cielo riveros… y que no le puedo hacer eso… le dije tratando de hacerla reflexionar, esas revanchas y venganzas estaban pasando los límites de lo razonable.

- ese es tu problema… dijo enojada al escuchar el nombre de su contendiente y solo agrego: chaooo… se despidió burlonamente, sin dejar que responda.

Diablos… me dejo pasmado, cualquiera estaría agradecido de que una chica le pida desvirgarla, pero que te amenacen… por otro lado con cielo riveros estaba empezando algo que podía tener futuro, una chica que parecía reunir todo lo que quería: cariñosa, inteligente y bueno obvio… una puta en la cama…

así como javier me la tenía jurada, vane se la tenía jurada a cielo riveros… era una revancha, una competencia entre ambas féminas y en medio yo… quedaba como un puto… como un hombrezuelo que debía satisfacerlas, pero con cielo riveros exprimiéndome dudaba que me quedara fuerzas para vane…

había evitado tener parejas en la facu para no tener enredos que afecten mi desempeño en mis estudios… pero esto era el colmo, una locura… además, que me garantizaba que tras satisfacer a vane no dijera nada que afecte a cielo riveros… y romperle el culo a vane también le daría motivos para tenerme en sus manos, y quizás en su ano, las veces que le plazca… era muy enredado para resolverlo yo solo…

no podía decírselo a cielo riveros, la última vez que fui sincero con lo de la fiesta en casa de guille término asistiendo y empeorando las cosas. Y decirle mi viejo sería peor, aun no me perdonaba haber dejado a una chica que consideraba perfecta para mí (viviana) por cielo riveros, quien le recordaba mi aventura con una prima de rasgos similares (anita)… y javier, con quien tuve algo de confianza en estas cosas de mujeres, me detestaba, claro si le rompí el culo a su enamorada y luego le rompí la cara a el…

en realidad por mantener mis relaciones sentimentales alejadas de la universidad, no tenía muchos amigos dentro de la facultad… solo conocidos, grupos para el estudio o para la joda y la fiesta… pero no tenía costumbre de contar mis cosas a nadie, mis enredos… solo una vez en una borrachera alguien me escucho y me dio unos concejos razonables…

- hola, puedo ir a tu casa a conversar… le dije y acepto.
Era tarde, pero me recibió en su jardín… pensar que en esa casa empezó el declive y buscaba que ahí empezara a solucionarse todo… él era el único que aparte de cielo riveros, vane, javier y yo, sabía lo que sucedía y se había comportado como un amigo leal y discreto, ayudando a salvar situaciones… el buen guille…

quizás en aquella borrachera que tuvimos hace tiempo, confesé más de la cuenta de mis enredadas relaciones, cosa que me inhibió luego de su amistad y me aleje un poco, buscando mantener mi privacidad… lo cierto es que guille nunca fue infidente con lo que le conté ni lo uso en mi contra...

- ¿quieres entrar a conversar en la sala?... Me ofreció guille.

- no, solo caminemos por tu jardín y hablemos… respondí, no quería incomodar a sus padres, y agregue: por cierto, gracias por darnos tiempo en la oficina... Como supiste que cielo riveros y yo…

- vamos dany, a quien engañas?, eres un verga loca, si te atreviste a tirarte a cielo riveros bajo las gradas del coliseo y en mi baño… era de suponer que algo harían en la oficina… me explico.

Reímos y luego le comente la situación, como cielo riveros y vane se habían enfrascado en una pelea de egos, que había llegado al límite con la propuesta indecente, mejor dicho chantaje que me imponía vane. Guille escuchaba mi explicación, por momentos hacía preguntas… y al final me dio su gran conclusión:

- estas completamente jodido… hagas lo que hagas… vas a terminar cagándola… no hay forma que salgas bien de esto… sentencio sin tapujos guille.

- gracias por tu optimismo… me levantas la moral… le dije bromeando, aunque ya lo sabía.

- es que es cierto... Alguien va salir herido de todas maneras, ya sea vane o cielo riveros… si aceptas, vane le puede contar a cielo riveros en revancha y ella te odiara eternamente… si no aceptas vane te odiara y contara lo que vio, dejando a cielo riveros como un puta en la facultad, lo que también termine haciendo que se aleje de ti por llevarla a eso… dijo guille, resumiendo.

- sip… a grandes rasgos es eso… estoy más cagado que pañal de bebe… sentencie agobiado.

- ah… y hay que agregar que javier aun quiere desquitarse… agrego guille.

En realidad más me preocupaban los “suegros”… el viejo de cielo riveros era un ex cielo riverostar ahora dedicado a brindar seguridad de manera privada, fácil me podía desaparecer sin rastro si dañaba a su nenita… el viejo de vane era un gran empresario que hacia donaciones a la universidad, podía hacer que me voten e impedir que me den trabajo… ni el chapulín colorado me salvaría de lo que vendría.

- aunque todo depende de lo siguiente… ¿amas a cielo riveros?... Inquirió guille mirándome.

- bueno… siento que la quiero, más allá de lo pasional nos llevamos bien… me gustaría descubrir si llegamos a eso… y esta situación lo dificulta todo…

- entonces estas más jodido aun, hombre enamorado esta jodido por definición… si cielo riveros no te importara irías con vane sin problema… agrego guille.

- a veces quisiera ser como javier… follar sin remordimientos a toda mujer que camine… dije.

- pero también javier se coge cada espécimen… cielo riveros fue su máximo logro… sin ofender…

- oye, pero… casi siempre hablo de mis cosas contigo… y ¿tú?... ¿quién te gusta?… le pregunte, como para aliviarme un poco de mis problemas escuchando los suyos.

- nadie dany… mejor dejémoslo ahí… dijo un poco abrumado.

- no me digas que es un hombre… dije alejándome, lo único que faltaba era que fuera yo.

- no seas pendejo… claro que me gustan las mujeres… solo que la chica que me gusta está metida en este enredo y nunca me prestaría atención… dijo resignado.

- aguanta… te considero mi amigo… pero no soy de compartir… le advertí, cielo riveros era solo mía.

- caraj… es vane… me gusta vane… me dijo casi gritando, desahogándose.

Mierd… como no lo vi antes, siempre era diligente con vane, le hacía favores en clase, le prestaba sus apuntes, la acompañaba… creo que se pegó mucho a vane y a ella no le gustó tanto. Al formar grupos para el trabajo del curso, vane opto por un chico menos estudioso pero también de buena clase social…

si bien guille era de padres adinerados, por ser mestizo muchos creían que sus viejos eran narcos (incluido yo). Ese estigma del color de piel y clase social, no daban crédito que sus padres pudieran ser exitosos empresarios que empezaron de abajo… mientras vane, era de piel clara, padres ricos y nadie dudaba del origen de su dinero, por más que se escuchaba que explotaba a sus trabajadores.

- es curioso, ahora que lo pienso… en realidad te envidio sanamente… ¿que tienes tú?... ¿por qué cielo riveros y vane llegan a este punto por ti?... Dijo reflexivamente.

- si lo supiera… no estaría acá, pidiendo tu concejo y ayuda… le dije dándole un palmazo, luego agregue.

Una morena que se me pego una vez en una fiesta de guille, me dijo una vez que tenía un aire de enigma, de interesante, que algo ocultaba y le provocaba conocerme… bueno ocultaba relaciones enredadas, era reservado y eso le deba un tono atractivo a ciertas mujeres… luego era alto y no era feo… por lo demás soy un pobre diablo aburrido, eso lo descubrían solas después….

Guille no era un galán pero feo tampoco… éramos casi de la misma talla y contextura… solo que él era mestizo, y yo un blanquiñoso de clase media venida a menos. Y bueno también está la actitud ante las mujeres, vi a guille confiado ante otras chicas, pero fue muy sometido ante vane, quizás sintiéndose menos por su color piel y se notaba que vane era algo selectiva respecto a quien elegía.

- bueno, no tengo esperanzas con vane y luego de su desplante al hacer grupos para el trabajo del curso, se me fue quitando el interés… resurgió en la fiesta, pero al ver que era más por ti… y tras lo que ahora me cuentas que te pide, creo que estoy más decepcionado que otra cosa… que no afecte tu decisión lo que te conté… dijo guille dándome libertad de actuar con vane.

Prácticamente me dio a entender que no habría resentimientos si decidía romperle el culo a vane, que ya era cosa de su pasado, que en lo que pudiera me ayudaría... Ojala así hubiera pensado javier… incluso guille llego a ofrecerme un depa que tenían sus padres cerca de la universidad, que usaba para sus aventuras y me lo prestaría discretamente si decidía iniciar el ano de vane… por momentos llegue a pensar que guille lo hacía por despecho, ya que lo rechazo, quería que le desgarre el ano a vane.

Pero dudaba que lo de vane fuera cariño hacia mí, se había enfrascado en una competencia con cielo riveros me parece desde antes. Si me pareció notar que cielo riveros se interesó en mí desde hacía tiempo, pero no me la creí y en parte me recordaba a una relación con una prima… pero justo cuando cielo riveros se mostró más interesada en mí, en ese curso, también vane se interesa en mí.

Cuando vane sospecho que algo había entre cielo riveros y yo, justo viene a la fiesta a insinuarse. Después de ver como atoraba a cielo riveros por el ano, resulta que ahora vane quería lo mismo. Y ¿por qué no me pidió hacer grupo antes?, quizás la historia sería diferente y le hubiera desvirgado el ano a ella… quizás vane no se atrevió, pero me parecía raro… siempre actuaba tras lo que cielo riveros hacia… como cuando las hermanas por capricho buscan que arrebatarse los muñecos para no dejar jugar a la otra.

Me quede conversando con guille… analizamos varias opciones y en algo me ayudo a desenredar el problema… luego fui a mi casa, en el camino termine de definir qué hacer. Ya era tarde, pero me imagine que ella seguiría estudiando para los exámenes… así que la llame…

- que sorpresa tu llamada!… exclamo feliz.

- bueno, ya lo pensé… y… acepto tu propuesta vane… dije algo resignado.

- uyyy… que buena noticia… no puedo esperar sentirte dentro mío y que me hagas todo lo que sabes… dijo casi excitándose, luego pregunto curiosa: y ¿qué te llevo a decidirte?...

Quizás vane esperaba que le de algún tipo de halago, que alimente su ego femenino, que muestre mi elección a ella por su superioridad física, académica o social frente a cielo riveros, pero…

- para que darle más vueltas y distraerme pensando en eso durante los exámenes… le dije, solo era prolongar mi agonía, pero para no magullar su ego, agregue: tampoco es mala la idea, no sabía que tenías una figura tan espectacular…

- y no solo eso… veras que te hare disfrutar como nunca… prometió vane, dándome a entender que no solo sus curvas sino se entrega me harían olvidar a cielo riveros.

Coqueteamos unos minutos más con alusiones indirectas a lo que haríamos, pero en resumen nos veríamos ese sábado en la noche en el departamento que guille me ofreció. Ya en la semana me encargaría de darle el pretexto a cielo riveros de que tenía una reunión cielo riverosr, para tener esa noche libre.

Está bien soy hombre y débil, pero le rompería el culo a vane para salvar el honor de cielo riveros y quizás hasta para vengar el desplante de vane a mi amigo guille… ya tenía más o menos una estrategia para evitar que vane se lo cuente a cielo riveros o que chismee en la facultad lo que nos vio hacer, el asunto que el sacrificio de esa noche terminaría con todo… al menos eso quise creer justificándome por lo que haría…

ese sábado en la noche vane me espero frente al edificio, en realidad lucia hermosa, se arregló como para una fiesta (de iniciación anal), bien maquillada, con un saco largo que llegaba encima de las rodillas… me daba curiosidad saber que traía debajo… me leyó el pensamiento y mientras cruzaba la pista, se desabotono el saco y lo abrió mostrándome lo que se había puesto, como para que no me arrepienta y salga huyendo… me quede gratamente impresionado…

traía unas panties oscuras, una minifalda negra ceñida a sus apetitosas curvas y apenas por debajo del pubis… subiendo más, tenía su blanca cintura descubierta y un pequeño polo que terminaba en escote mostrando sus medianos pero bien formados senos, coronados por unas pecas encantadoras…

- muévete animal!… ¿te quieres morir?… me grito un taxista que freno para no atropellarme mientras yo observaba embobado a vane que se reía vestida como prostituta de lujo, alimentaba la fantasía de una secretaria esperando ser poseída por su jefe.

Me saludo con un beso entre el labio y la mejilla. No quise perder tiempo para evitar ser vistos e ingrese al edificio, en un séptimo piso estaba el departamento de guille. En el camino no recuerdo de que hablamos, yo estaba nervioso y ella ansiosa. Me tarde en hacer diana con la llave en la puerta, ella sonreía al pensar que ojala si hiciera diana en su ano o pensó que su figura causo ese nerviosismo en mí, pero no solo era eso, era pensar en cielo riveros y como nos afectaría lo que íbamos a hacer.

Al entrar era un depa de soltero, pequeño pero acogedor… los viejos de guille se lo compraron para que este cerca de la universidad, pero el engreído ese no se acostumbró a hacer sus cosas solo, pasaba más tiempo en casa de sus padres donde lo atendían en todo… luego de la sala había un baño para visitas… una cocina kitchenette (abierta hacia la sala) y tras un pasillo un dormitorio con baño…

- y ¿dónde va ser?... Pregunto coqueta vane quitándose el saco y mostrándome su bien trabajada silueta, como me dijo una vez, ella no se andaba con rodeos, directo al grano y a su ano.

- sera acá, las camas son aburridas… le explique, si me obligo a esto al menos que sea a mi gusto.

- ¿cómo quieres que sea?... Pregunto abrazándome, restregándome su cuerpo como gata en celo.

Yo me resistía, comenzaba a excitarme pero debía guardar la compostura, sería una noche larga. En parte me hacía sentir como si yo fuera la chica que era llevada al matadero, que yo era la virgen, que ella disponía de todo y que yo era el que me hacia el difícil por mis miedos y dudas.

- tengo algo en mente… espero que te guste… dije mostrándole un mueble peculiar.

- ¿ahí?... Y ¿para qué son las sogas?... Pregunto extrañada.

Era una banca larga y acolchada, muy cómoda, con 4 patas… y debajo de ella unas sogas… como les dije si ella me obligo a esto, al menos le sacaría provecho a mi manera, con mi fantasía… jugaría con su morbo al estilo sadomasoquista de 50 sombras de grey, obviamente sin golpes… le explique:

- tú apoyas tu vientre aquí, quedas en 4, yo amarro tus extremidades al mueble… le dije seductor.

- pero así no podre verte… me dijo entristecida, abrazándome como niña regañada.

- esa es la idea… que no veas sino que sientas… le replique, dándole vuelta y abrazándola por detrás, le hice sentir mi verga entre sus bien formadas nalgas apenas apresadas por la mini, luego agregue a su oído: …debes magnificar tus sensaciones sin ver…

- ok… uf…. Tu eres el maestro en esto… uf… dijo visiblemente acalorada entrecerrando sus piernas, seguramente la humedad comenzaba a invadir su conchita.

Sin decirle nada, presurosa como perrita amaestrada, se quitó los tacos, caminando descalza sobre la alfombrada sala, se ubicó sobre el mueble, arrodillándose sobre un cojín y poniendo el pecho sobre la banca… me dejo atarle las manos, las piernas y por si acaso la cintura… luego saque una venda oscura y se la puse en los ojos, ella no protesto… no debía ver… solo sentir…

- hazlo con paciencia por favor… dijo invadida por el morbo y el temor a que le desgarren el ano.

- no te preocupes… le dije acariciando su cabello y espalda, le subí la pegada mini dejando a la vista sus blancas y firmes nalgas, baje su pequeña tanga entre su pubis y sus rodillas, luego dije viendo su virgen esfínter rosado y arrugado: bueno, ahora es tu turno…

- ¿qué?... Pregunto nerviosa vane.

- que ahora le toca a tu ano… le dije, quizás sonando revanchista, ese ano me las pagaría todas.

A vane se le practicó la misma iniciación anal que a cielo riveros (para mayor referencia ver capítulo 1 j)… ya venía abastecido de crema lubricante, se le hizo el masaje en su esfínter, ingresando dedo a dedo hasta que estuvo bien dilatado y ansioso por recibir aquel mazo de carne que la desvirgue analmente.

Vane lucia nerviosa, conteniendo su excitación… todo su aplomo y altivez las había perdido mientras unos dedos escarbaban en su interior… ella se retorcía enrojecida, contraía las nalgas, la espalda, por momentos retumbaba la banca, donde vane esta vez no era una niña rica sino una esclava anal…

- ouuu… ufff…. Musitaba mientras movía nerviosa su cuello.

Y llegó el momento en que su culo pagaría todas sus fechorías. Bajo la cabeza, lista para recibir un pene por primera vez en su ano. Primero la punta, de nuevo apretó las nalgas, nada que un palmazo y unas caricias no destraben… luego ingreso la cabeza del pene, mientras su ano palpitante se acostumbraba a ser violado, después lentamente, se le fue hundiendo la verga untada también en lubricante.

- ay no puedo creer… que la tenga toda adentro… uf… uf… exclamaba triunfal, oficialmente tenía el culo roto y se sentía feliz, ahora estaba a la par con cielo riveros.

Luego lentamente empezó a moverse algo en su interior, una estaca que la clavaba una y otra vez… como siempre, esa cálida fricción va dando pie a una mayor velocidad, propio del placer y la excitación que se sienten, el frenesí empieza en una cogida desbocada, un castigo propicio para una chantajista.

- oh my god… oh my god… ohhh… comenzaba a gemir la gringa sumisa.

Cada vez la banca retumbaba más fuerte, sus blancas nalgas se mostraban rosadas por el continuo martilleo contra el cuerpo de su inquisidor, su musculoso trasero no rebotaba tanto como el carnoso culo de cielo riveros, pero igual era un espectáculo ver sus nalgas temblar y sonar armónicamente, por momentos la tomaban de la mini para clavarla más fuerte o de las panties que ya estaban raídas.

Con cada embestida que vane resistía contra el mueble, sus amarras se iban soltándole, dándole más movimiento a sus extremidades, llego a liberar más su cintura, arquear su espalda, liberar su cabeza y la venda que tenía en los ojos se fue cayendo… dándole libertad de girar y ver… le había advertido que no lo hiciera hasta que termine todo, pero en un momento pasional lo hizo…

- queee… tuuu… nooo… guille nooo… ouuuu… uffff… dijo contrayéndose por la sorpresa.

Era muy tarde, ya estaba siendo sometida por el buen guille que la tenía enganchada por el ano y no pensaba soltarla, la tenía bien asida de la cintura, mientras su verga empalaba el hasta hace poco virgen ano de vane… si, de aquella mujer que sintió que lo había despreciado por su color de piel…

- uhmmm… ya nooo… guille nooo… uhmmm oh my god… uhmmm… gemia vane sometida.

Creo que al final vane se resignó a ser sodomizada y en parte creo que aumento su morbo tener un mestizo clavándola hasta las tripas. Siempre su cuerpo se había entrelazado y fundido con otra piel clara de su misma clase, pero esta vez su blanquecina piel hacia contraste y era azotada carnalmente por la mestiza piel de guille. Era como el plebeyo que se había revelado para someter a la rica del barrio.

- no… no… no puede serrr… uhmmm…. Exclamo vane retorciéndose de placer, no podía creer que la persona que no quiso de compañero de curso y que alejo, la había hecho explotar en un terrible orgasmo… como ese mestizo pelele le podía arrancar tamañas sensaciones.

Guille satisfecho, aun con la respiración agitada se acercó al otro lado de la banca, dejando al descubierto el enorme culo de vane enrojecido, su ano abierto borboteando de leche. Pero guille quería el servicio completo… vane extasiada lo observo no dando fe a lo sucedido… luego su rostro se tornó en decepción por no haber sido cogida por el chico que ella esperaba…

pero el buen guille no estaba dispuesto a ser despreciado nuevamente, fue más incisivo poniéndole la verga a la altura de sus labios. Si hubiera estado ahí, le hubiera advertido que no lo hiciera, una hembra rencorosa y vengativa como vane podía morderlo y hasta castrarlo en un arrebato de furia.

Sin embargo vane lo dudo unos segundos, luego ella misma presa de la locura del momento, estiro el cuello para darle alcance a esa mestiza verga que la había llenado por primera vez del placer anal. A tanto llego la succión que le practicaba que termino atrayendo a la banca el cuerpo de guille.

- ufff… ufff… exclamaba ahora guille aliviado.

Al principio vane se la mamo con los ojos cerrados como para no verlo o imaginar que era un habitual amante blanquiñoso, luego presa de la excitación y gratitud lo miraba como una enferma golosa.

Algunos se preguntaran: ¿qué? Cómo? Cuando... Otros ya lo suponían, intuían o deducían por la forma en que fue descrita la iniciación sexual de vane… en fin, les explico…

decidí continuar con cielo riveros, pero para mantener a vane a raya tenía que buscar una forma de desquitarme… ella nos vio en pleno acto y conocía nuestro gusto por el sexo no convencional, ella podría vender a cielo riveros como una puta o perra golosa, que lo era, pero solo conmigo, esa era nuestra privacidad y debía ser respetada, nadie en la facultad tenia por que saberlo.

Yo debía encontrar otra forma de tener un secreto de vane, de tal manera de anular chisme con chisme, chantaje con chantaje… si yo tenía relaciones con ella iba a seguir en sus manos, pero si guille lo hacía, se desquitaba él y yo tenía un secreto de ella también. No me atreví ni a grabarla o tomarle fotos, me parecía un exceso, aparte vane tampoco tenía ese tipo de prueba de nosotros (eso creí), solo su palabra.

Cuando fui a pedirle la llave del depa a guille, le conté mi plan… le debía varios favores y con esto hasta el me quedaba debiendo… lo dudo un poco, porque quizás no era la manera romántica en que él pensó iniciar algo con vane, pero ella no le dio pie a eso… aparte por su comportamiento y el chantaje que nos hacía a cielo riveros a mí, por hacernos votar del examen, guille sentía que vane merecía un castigo.

Por un momento pensé en cederle los honores de desvirgar el ano de vane a javier… como para congraciarme con él y zanjar el problema de cielo riveros: ojo por ojo, un culo por otro… pero javier era un bocón listo para difundir su hazaña y la idea no era perjudicar tampoco a vane, y guille aparte de su amistad me garantizaba discreción… con eso le pagaba sus favores y tenía su revancha con vane.

El asunto es que tenía previsto que guille espere en el interior del departamento, escondido en el dormitorio… después que amarre a vane y le tape los ojos, le di paso a él, que sin hacer ruido, descalzo sobre la alfombra, tomo mi lugar e inicio la dilatación anal como le había explicado. Yo también descalzo, me escurrí al dormitorio, para no estar de fisgón e inhibir el accionar de guille.

La contraseña para que guille me reemplace detrás de vane era “es tu turno”, esa palabra que hizo dudar a vane, pero que tuve que disimular diciendo que era con su ano. Incluso el uso de la banca, las sogas y la venda, lo planifique de tal manera que ella no pudiera voltear ni ver quién la sometía.

Después de abandonar la sala, ya en el dormitorio, escuchaba los gemidos y cosas que vane profería en su excitación. No sé por qué, pero sus gemidos y las cosas que decía no me excitaban tanto como las frases que cielo riveros decía en sus momentos de placer. Sin embargo oír a vane me provoco buscar a cielo riveros.

Una vez terminada la faena… devolviéndole a vane su ropa a su lugar, viendo que no actuaria violentamente, guille la desato y ella se cubrió con su saco… entonces yo retorne del dormitorio a la sala… vane no lucia altiva, amenazante o colérica como cuando nos descubrió a cielo riveros y a mi… ahora, en la otra cara de la moneda, estando de víctima de la situación, vane lucia nerviosa y avergonzada.

- lamento que las cosas hayan llegado a esto, pero no me dejaste otra opción… no podía permitir que me chantajees o que hables mal de cielo riveros en la facu… le explique racionalmente.

- entiendo… yo… lleve las cosas a este extremo… y creo que… que me lo merecía por tratar de manipularte… respondió vane, que ahora entendía lo que era estar en una situación así, expuesta a que se difundan rumores donde la califiquen de perra o puta, temerosa al borde de las lágrimas agrego: y ahora… ¿qué piensan hacer o decir?…

veía a vane aun pasmada, no asimilaba lo sucedido, tras sus arranques caprichosos luego pasionales ahora estaba avergonzada. Era como cuando uno va a una fiesta y en la borrachera se desinhibe por completo haciendo locuras, pero al día siguiente, en medio de la resaca empiezan los recuerdos y arrepentimientos, los “ojala nadie se haya dado cuenta” o “ojala nadie lo comente”… a pesar de todo nuestro afán no era revanchista, de hundir su imagen en la facultad, como ella si pensó hacerle a cielo riveros…

- las cosas ya se salieron de control… nosotros no diremos nada si tu no dices nada… estas venganzas, revanchas, odios, etc., se terminan aquí, esta noche… ¿de acuerdo?... Agrego guille.

- entiendo… guille, me llevas a mi casa por favor… dijo vane avergonzada, ya no quería estar ahí.

Guille más bien se sintió feliz y gustoso de irse con vane, pensó que tras lo hecho ella lo detestaría y jamás le hablaría… bueno, luego me contaría que en el camino ella no dijo mucho, solo que sentaba graciosamente sobre una nalga… ¿que esperaba? Si le desvirgo el ano, aún estaba adolorida y no podía sentarse bien. Tras ese exorcismo anal, vane parecía haber cambiado de actitud.

Vane se tomó un instante para avergonzada disculparse con guille, por si sintió que lo lastimo tras todo lo amable que él había sido con ella, por elegir a otro para hacer grupo y por alejarse de el al notar que se interesaba en ella. Creo que la forma violenta en que vio que guille le partía el culo, que si bien lo disfruto por ratos, sintió toda su rabia y odio por desquitarse de esa ofensa. Guille acepto la disculpa y a su vez también se disculpó por lo sucedido (romperle el culo sin que ella supiera que era el).

Ella quizás acostumbrada a tener todo lo que deseaba, manipular a los demás a su antojo para conseguir lo que quería, esta vez el tiro le salió por la culata. Usaron sus mismas tretas para hacerle a ella lo que ella acostumbraba a hacerle a los demás. Se dio cuenta que no era nada agradable lo que sentían los agraviados por sus caprichos… como se sintió guille, cielo riveros o yo tras sus desplantes, altaneras actitudes y chantajes… y en serio parecía sentirse arrepentida, según lo que me manifestaba guille.

Para mí, en teoría todo encajaba perfecto… vane no me chantajearía, cielo riveros no temería a los chismes, guille estaba resarcido, logre anular todas las amenazas potenciales… excepto javier claro… pero termino el ciclo, estábamos de vacaciones, no me preocuparía de el por un tiempo... Al menos eso creí triunfalistamente… pero la alegría me duraría poco… el único cabo suelto termino por cagarme la vida…

- ay nooo… me olvide advertirle a dany… nooo… llámalo por favor… exclamo vane ya en su casa.

Guille me conto que vane también tuvo su plan para terminar de vengarse de cielo riveros: le aviso a javier que yo iba a romperle el culo a ella, le dio la dirección del depa de guille. Javier oculto, espero para tomarnos fotos a vane y a mi entrando a ese edificio que fácil podría confundirse con un hotel…

caraj… y recién me dicen, javier había tenido suficiente tiempo para llamar a cielo riveros o enviarle las fotos a su correo… inmediatamente le colgué a guille y marque el número de cielo riveros… vamos contesta…

- alo ¿cielo riveros?... Dije apurado, quizás tenía algo de suerte y cielo riveros no atendió la llamada de javier o borro su correo, después de todo ya no quería nada con ese patán.

- ¿cómo pudiste hacerme esto?... Y con esa perr… eres una maldita basura… me dijo colérica y agrego al borde del sollozo: no me vuelvas a hablar o buscar nunca más en tu asquerosa existencia… sentencio, luego, sin dejarme explicarle nada, me colgó violentamente el fono.

A la mierd… justo cuando todo parecía arreglado… me jodi de nuevo… y feo…recordé las palabras sabias de guille:hagas lo que hagas… la vas a terminar cagando…
tras la concisa, explosiva y brutal respuesta de cielo riveros, caí sentado en la cama, luego echado… volví a pensar en el bendito karma y en un dicho popular: lo que mal empieza, mal acaba… cielo riveros y yo empezamos con infidelidades a nuestras parejas y bueno… tampoco fue la solución más decorosa la que encontré para anular los chantajes de vane... Y todo me pasaba factura justo ahora...

Como haría para explicarle a cielo riveros si no quería ni hablarme, como haría para recuperarla si no quería ni verme… si llevaba a vane a la puerta de su casa para que le explique lo sucedido, cielo riveros terminaría por arrancarle la cabeza, y su viejo me la arrancaría a mi… que ayuda me podría ofrecer guille, si cielo riveros sabía que era mi amigo y me encubriría como lo hizo en el baño o en el salón… no, estaba solo, era mi pelea…

era difícil, porque cielo riveros tenía en la cabeza la imagen de que yo me había cogido a vane por el culo, placer que solo compartía con cielo riveros. Todo eso que ella pensó que fue especial conmigo, resultaba que era habitual para un promiscuo como yo… todos sus celos y temores de vane conmigo estaban más que justificados, para ella seguro yo no era diferente de javier… otra decepción en tan poco tiempo.

Esa noche no podía ir a buscarla, si su padre no me disparaba lo hacia ella misma… tras buen rato pensando y sin que el techo me diera respuestas, me quede dormido confiando que si había ingeniado una solución para el chantaje de vane… algo se me ocurriría para aplacar la furia de cielo riveros.

Al día siguiente, me la pase deambulando en la casa, como fantasma, no sabía cómo hacer para recuperar a cielo riveros… y también me invadió la culpabilidad… ¿por qué no hice lo mismo por vivi?, la primera mujer a la que dije que la amaba… ¿me habría enamorado de cielo riveros?, no dejaba de pensar en ella.

Solo por ratos pensaba en javier, como lo golpearía nuevamente por ponerme en esa situación. Y si el en revancha le proponía a cielo riveros vengarse dejando que él la coja por atrás, como yo supuestamente le hice a vane… nooo… ni pensarlo, el culito de cielo riveros era solo mío…

- juan daniel… te llaman... Grito mi madre, apresurado fui al fono, es ella seguro.

- ¿cielo riveros?... Pregunte instintivamente.

- no, guille… ¿cómo te fue?...

- me detesta como no te imaginas… no quiere que la busque, ni que le hable… dije resignado.

- bueno, vane esta arrepentida de lo que hizo, así que llamo a casa de cielo riveros…

- ¿la llamo?... A terminar de apuñalarme… dije molesto.

- no, vane ya cambio… llamo para contarle la verdad… pero le dijeron que cielo riveros y sus padres fueron a pasar el día en el club de los cielo riverostares… me conto guille.

- mierd… y ¿cómo hago para entrar ahí?... Dije, más fácil fue entrar al culo de cielo riveros.

- mi tío es coronel, a mí me dejan entrar con amigos… ¿te animas a ir?... Me propuso guille.

Acepte, aunque en el camino a casa de guille, pensé que me estaba metiendo en la boca del lobo, un club en pleno de cielo riverostares en actividad y retirados, donde el padre de cielo riveros podría destrozarme con sus amigotes. Bueno, que mayor demostración de cariño que ir en medio del peligro por ella, pensé.

Bajo un pretexto de un trabajo urgente, le pille las llaves del auto a mi viejo… que no se te haga costumbre nomas, me llego a decir. Luego fui rápido a buscar a guille. En su casa, esperaba un auto deportivo, lo conocía, más aun al chofer… no te pases!… era vane... Que carajos hace ahí?...

- wow… guille, está bien que te guste vane, que este arrepentida y todo… pero no creo que sea buena idea, cielo riveros me quiere matar… y si la ve la destroza… le dije de mal ánimo.

- no, no… solo quiere congraciarse, se ofreció a llevarnos... Además su auto es más rápido que el tuyo y el mío… justifico guille, no tenía tiempo para discusiones, así que acepte.

El club estaba en una zona campestre en las afueras de la ciudad, era una gran extensión de terreno, con zonas deportivas, restaurantes, zonas de camping, piscinas, incluso acceso a un rio. El viaje seria de unas 2 horas, dependiendo del tráfico y el karma… aunque vane manejaba como loca, por el apuro de llegar.

En el camino hablamos poco, era propio de las tensiones de las situaciones que habíamos pasado. Solo note que vane se mostraba más amistosa con guille, ellos iban adelante y yo solo atrás con mis pensamientos. A mí como que vane aún me tenía miedo o vergüenza, no era para menos por la situación en que me puso. Ella había vuelto a vestir menos llamativa, como antes, le iba mejor así.

Al llegar al club, vane nos iba a dejar en la puerta e irse, pero guille la convenció de entrar con nosotros… lo quise matar, pero me explico que el club era muy grande, que él y vane podían buscar juntos en algunas zonas y yo en otras para abarcar más área… era cierto, era como buscar una aguja en un pajar, siendo fin de semana y vacaciones, el lugar estaba lleno…

vane no podía buscar sola porque si cielo riveros la veía la mataba y parecía que guille quería pasar tiempo con ella, con la versión antigua de vane, que no era como la bruja de semanas anteriores. Solo temía que en vez de ayudarme, guille y vane se fueran a continuar lo que iniciaron la noche anterior. Más aun cuando decidieron buscar en las zonas construidas: restaurante, bolos, billar, juegos de niños, alojamientos, cabañas, etc., y me dejaron todo el campo para que patrulle yo solo…

bueno, en parte era mejor que ellos busquen en esas zonas con más gente, donde cielo riveros se contendría… pero en campo abierto si cielo riveros divisaba a vane, la daba una paliza… no podía, ubicarla, aunque mi vista también se perdía entre shorts, minis y demás… estas hijas de cielo riverostares, mostraban mucha piel.

Hasta que por fin divise a cielo riveros, estaba en una cancha de vóley… jugaba su cielo riveros (padre, madre y ella) contra otra cielo riveros. El padre de cielo riveros como les comente era un moreno que medía 1.98m, yo con mi 1.85m me sentía enano a su lado. Su madre como ya lo imaginaba, era de 1.60m, de tez clara, cabello castaño y figura atlética… una guapa y bien conservada suegra.

Al final en ese mestizaje cielo riveros salió un poco más alta que la mama, saco la contextura voluptuosa de las morenas de la cielo riveros del padre, el color de piel no era ni de morena ni de blanca, un magnifico tono bronceado. Esas eran las características de la mujer que intentaba recuperar.

Por lo demás, cielo riveros estaba vestida como las chicas que salen a trotar en las mañanas, es decir, shorts cortos, un polo pequeño sin mangas y algo escotado, estas fachas dejaban traslucir nítidamente todas sus formas, me daban nuevamente ganas de poseerla, pero dadas las circunstancias no sería nada fácil.

Espere pacientemente que terminaran de jugar, obviamente alejado y oculto para no llamar la atención, al terminar su partido, cruzaron algunas palabras entre las cielo riveross. Obviamente gano la cielo riveros de cielo riveros, con el gigante padre y los fuertes mates de cielo riveros… lo digo por experiencia, ya que sufrí sus bofetadas.

Luego, para mi suerte, note que cielo riveros se separó de sus padres, mientras ellos iban al restaurante, veía que cielo riveros se perdía entre la vegetación, en dirección al rio. Tal vez se quería dar un momento para dar un paseo y estar sola con sus pensamientos… pensar en mí quizás…

sabía que esta era la única oportunidad que tenía para hablarle a solas… así que me di maña para seguirla, a cierta distancia, mi único camuflaje los arbustos que encontrara en el camino. Bueno también yo traía una mochila con algunas provisiones… un gorro que saque para cubrirme en algo la cara.

Esperaba ser sigiloso y que no me descubriera, sin embargo por instinto cielo riveros se detenía de cuando en cuando a observar a los lados… su ano sentiría la presencia de mi pene como un imán?, pensé.

Me sentía como un acechador, un acosador… pero en el camino aun había gente, debía esperar a estar a solas para que ella no arme un escándalo que pueda llamar la atención de la gente y amigos de su padre dispuestos a darme una paliza… debía emboscarla, elegir un terreno favorable para mí batalla.

Una vez que vi que no había gente alrededor, ya que atardecía y la mayoría retornaba, decidí acercarme más, escuchaba el sonido del rio cerca… estaba a pocos metros de ella, quise hablarle… pero ella escucho mis pasos… se detuvo y volteo a ver quién la seguía:

- ¡tuuu!… dijo sorprendida y recordando todo agrego… ¡maldito traidor!…

- espera, espera… déjame hablar… le dije, esquivando las cosas que me lanzaba.

Sospechaba que ese carácter explosivo lo había heredado de la madre de cielo riveros, que con su 1.65m hacía que ese moreno de 1.98m durmiera en la cochera cuando se enojaba… tiempo después el cielo riverostar me diría: “las batallas contra las mujeres son las únicas que se ganan huyendo”… dicho suyo pensé, pero me corrigió: no, frase de napoleón, gran cielo riverostar (pésimo esposo seguramente).

Volviendo al relato, cielo riveros me lanzaba todo lo que encontraba en el piso, desde ramas hasta pequeñas piedras. Mientras yo me acercaba más y más, esquivando o recibiendo lo que me lanzaba.

- carambas!… déjate de cosas… au… ¿no podemos hablar como adultos?... Le pedí.

- adultero es lo que tú eres!… judas!… replico sin darme tregua.

Pensé en el dicho de napoleón, pero terco, decidí no huir… llegue hasta aquí y no iba rendirme…

- no pasó nada con vane, en el departamento estaba guille… él se la cogió… le explique rápido.

- mentiroso… dijo lanzando otra piedrita, pero ya a menos distancia porque me acerque.

- au… mierd… me queje al recibir esa piedrita en la cabeza.

Esa última piedra hizo diana en la frente, mismo david y goliat. En realidad no me dolió mucho, solo iba a ser un chinchón más, pero exagere el dolor del golpe para que me diera unos momentos de tranquilidad y despertar su lado maternal, su compasión y efectivamente…

note que ceso de lanzar cosas, su rostro cambio de rabia por incredulidad y luego preocupación. Viendo que mi estrategia surtía efecto, seguí con mi teatro, me tome la frente, cubriéndome un ojo, me senté en la tierra quejándome y maldiciendo…

- ¿qué te pasa? ¿estás loca?... Me queje.

- danny… ¿estás bien?... Dijo cediendo y acercándose.

- diablos!… casi me sacas el ojo… le dije exagerando.

- pero bien te lo mereces… por pendejo… replico, pero con menor dureza que antes.

Veía que había sido más fácil amaestrar el ano de cielo riveros, pero domar su carácter sería una prueba de fuego… ya estaba a mi lado, agazapada mirándome arrepentida casi llorosa.

- si me quedo tuerto… solo tendría un ojo para verte… dije zalamero, era de ese tipo de cosas que les gusta oír a las mujeres. Cielo riveros estaba a punto de derretirse en 5, 4, 3, 2...

- eres un… canalla… encantador de serpientes… te la sabes todas… dijo casi sonriendo, luego agrego: déjame ver como esta…

aparto cariñosamente la mano que cubría mi frente y mi ojo… obviamente no encontró mucho y eso avivo nuevamente su cólera…

- no tienes nada… lo sabía… mentiroso!… dijo empujándome.

Solo que no dejaría que se vaya, cuando sus manos se apoyaron en mi pecho, aproveche en tomarla de los hombros, igual por la inercia del empuje terminamos echados en el piso. La tenía abrazada, pero ella forcejaba. Gire rápido y me puse sobre ella aprisionándola entre mis brazos y piernas.

- suéltame... Me pedía mientras pataleaba.

La quise besar a la fuerza, lo logre… al principio busco esquivarme, luego sentí que me correspondía, sentí parte de su lengua jadeante… pero recobrando la cólera por el recuerdo de vane, nuevamente pugno por alejarse… sentí que quería morderme… y tome distancia.

- inténtalo de nuevo para que veas.... Me reto.

Mi cabeza hacia amagos de querer besarla y ella me recibía con los dientes, mordiendo al aire en advertencia para tenerme a distancia… hasta que hice un amago, su cabeza fue a un lado y yo termine en el otro lado besándole el cuello… ella cedió, sus piernas que antes luchaban se relajaron y comenzó a mover nerviosa su torso, me abrazo…

yo también relaje la fuerza con que la aprisionaba, dándole espacio, casi cantando victoria porque había logrado domar a la fiera… pero fue muy pronto, ella volviendo en sí… me dio con la rodilla en las bolas…

- au caraj… me lamente, esta vez me dolió, un frio calambre recorrió mi estómago.

- ahora si te duele ¿verdad?... Dijo irónicamente, empujándome a un lado, luego se paró y agrego molesta… eso no es ni una pizca de lo que me dolió lo que me hiciste…

después cielo riveros retomo el camino y comenzó a huir a trote, mientras yo me retorcía en el piso, intentando asimilar el golpe… pensé ¿por qué siempre las mujeres le dan su cuota de drama?... Algo confuso aun por el golpe, no sabía si el dolor que menciono cielo riveros era de cuándo le rompí el culo la primera vez o el dolor que le causo creer que inicie analmente a vane, su rival…

después, conscientemente pensé que sentiría yo si me dijeran que javier se cogió a cielo riveros… la sola idea me daban ganas de pulverizar a javier… y a cielo riveros, bueno, gritarla, insultarla, decirle su vida, al menos yo sé que no podría golpearla, como si quiso hacer javier…

nunca había estado en esa situación, es decir, de saber o sospechar que mi pareja me había sido infiel… que me puso los cuernos… no sabía que sentiría incluso si solo fuera un chisme… creo que igual que cielo riveros ahora, me costaría escuchar las explicaciones de mi pareja… me costaría confiar en ella…

entonces si era difícil ¿por qué lo seguía intentando?, cielo riveros no me quería oír, no confiaba en mí, menos tras ver las fotos de vane y mía entrando al depa… nunca había llegado a estos extremos con otras chicas… bueno tampoco había estado en esta situación de que piensen que era un pendejo… ¿qué tenía esta mujer que me hacía perseguirla? A otras por menos las mande al diablo...

Aparte de sus gordas nalgas y estrecho ano que me encantaba cabalgar… se había vuelto mi adicción, mi obsesión o mi capricho… o simplemente quería limpiar mi nombre de ese malentendido con vane… quizás esta hembra más difícil de conquistar era la que más me atraía… por ese aliciente de dificultad…

nuevamente me pare, adolorido, volviendo a la carga, persiguiendo a cielo riveros por el sendero que vi que tomo... Decidido a que me escuche por la buena o por la mala…

- ayyyy… escuche su quejido, que venía acompañado del sonido de un deslizamiento de tierra.

Mierd… parecía que cielo riveros se hubiese desbarrancado… seguí rápidamente sus huellas. Note que en una parte del camino había un desvió, seguro un atajo al rio, ese sendero era polvoriento, inestable, por el que fácilmente uno podía caer… debe ser por aquí me dije, mientras seguía oyendo sus quejidos…

era un terreno suelto, con pendiente descendente y vegetación a los lados… baje a través del estrecho camino apartando ramas… hasta que me di con un espectáculo inusual:

- ¿cómo diablos terminaste así?... Pregunte asombrado.

Cielo riveros se encontraba estampada contra un gran árbol tirado en el suelo, era como un obstáculo quizás para evitar que un caminante o ciclista avezado se fuera de largo y sufriera un accidente… ya que tras él había un desnivel de unos metros, luego unas rocas y el rio… en realidad yo casi me rio al verla…

ella me daba la espalda, estaba recostada en el árbol, con su vientre contra el tronco, mientras por alguna extraña razón una rama rota había apresado su cintura y otras ramas más pequeñas su espalda… me daba el espectáculo de sus gordas nalgas encerradas en un short que por la presión ya parecía una malla, mientras sus piernas pataleaban buscando zafarse.

- ¿qué esperas?... Ayúdame… me ordeno, reconociendo mi voz.

- no tan rápido… le dije… ahora me vas a escuchar.

Sabía que si la libraba nuevamente se iba a escapar o me lanzaría lo primero que viera, mejor era tenerla así quieta y que escuche mi versión de las cosas. Por otro lado era un lindo espectáculo verla así, enredada, cautiva, casi en 4 patas.

Pase frente a ella, había un poco de espacio entre el árbol y el fin del camino… quise evitar reírme de su situación, pero se me salió una sonrisa burlona. Ella me miraba roja de rabia, si me acercaba me daba un zarpazo seguro… era mejor tenerla como fiera enjaulada.

Ella con sus brazos libres intentaba, hacia fuerza contra el árbol, reponerse, empujando las ramas y no podía, seguía encerrada y desistió al final. Tal vez solo descansaba tomando fuerzas para intentarlo de nuevo, y podría tener éxito… así que aproveche ese tiempo para contarle lo sucedido.

Le resumí la historia de cómo vane llamo a chantajearme, como le pedí ayuda a guille y embaucamos a vane para que vaya a su depa, donde tras amarrarla y vendarla, guille la poseyó. Luego estando a mano le pedimos que ya no nos vuelva a amenazar con chismes, molestar en la facultad o chantajearnos. Pero que vane antes había confabulado con javier para que me tome fotos y las envíe.

Cielo riveros escuchaba pacientemente, no tenía otra opción, con un brazo sobre el árbol y su mano sosteniendo su quijada, con expresión aburrida e incrédula…

- ahora cuéntame una historia de vaqueros… dijo irónicamente.

- carambas… lo que te dije lo pueden corroborar guille y hasta vane… le insistí.

- no me hables de esa perr… dijo molesta intentando librarse nuevamente.

- ¿crees que vendría acá a mentirte?… arme un plan para librarnos de vane, salvar tu imagen en la facu… arriesgo mi pellejo para verte, viniendo en medio de un lugar lleno de cielo riverostares entrenados para matar… dije molesto, esa mujer era más terca que una mula.

- pero hay fotos… dime ¿cómo creerte?… decía amargamente y llorosa.

- ósea prefieres creerle a fotos que me tomo adrede javier, ese patán que quiso golpearte… si me crees o no ya es contigo… tampoco voy a suplicarte… dije perdiendo la paciencia.

Ya había dicho lo que vine a decir y me iría con la frente en alto… por esta mujer me atreví a tener relaciones en los lugares más riesgosos, a punto de ser descubiertos en el baño de la facu, en la biblioteca, en el coliseo, en el baño de guille, en la cochera de su casa, en el estacionamiento y en la oficina del profe… y aun así, ella no confiaba en mí.

Me arriesgue a ser expulsado de la facu a punto de terminar mis estudios, arriesgándome a que me mate mi padre, me arriesgue a ser golpeado por su padre… la defendí a golpes de javier frente a todos… incluso me arriesgue a dejar una buena chica (viví) que adoraban en mi cielo riveros… y ¿para qué?…

bueno en realidad, el último ejemplo no fue bueno, ya que en eso cimentaba cielo riveros sus dudas sobre mí… en que deje una buena chica por un buen culo… si deje a viví por cielo riveros, que me impedía dejar a cielo riveros por vane que también tenía formas apetitosas y el morbo que implicaba desvirgarle el ano a la niña rica.

Claro que mi conciencia no me permitiría irme sin liberar a cielo riveros… en esos instantes se invirtieron los papeles, cielo riveros reflexiono todo lo que le dije… ella estaba alicaída, casi avergonzada de haber desconfiado de mí, yo molesto comencé a romper las ramas pequeñas que aprisionaban su espalda…

- danny… quiero que me entiendas… toda mi vida los chicos me han buscado por mi cuerpo, al no conseguirlo se fueron o me engañaron con otras, como javier…

- no me compares con ese tipo… dije iracundo desapareciendo de su vista.

- lo siento danny… no quise decir eso… no te pongas así … dijo sollozante

me iba ir, total ya la había liberado de varias ramas y sería más fácil que ella salga de ahí. Tal vez me alejaría un poco, la vería, si no puede librarse retornaría a ayudarla. Solo quería alejarme un rato, que me bajen un poco las revoluciones, que me pase el enojo… sin embargo cielo riveros me insistió…

- ¿a dónde vas?... No me dejes… vamos… ¿qué puedo hacer para disculparme?… dijo arrepentida.

Al escuchar eso, voltee y me compadecí de verla aprisionada, de ver su gran trasero encerrado entre las ramas… era un desperdicio… con la rabia que tenía podía ser un patán de otra manera… total dudaba que la volviera a ver, al menos quería probar por última vez el placer de su cuerpo, de su gran culo…

- no vas a hacer nada… le dije y me baje el cierre, ella escucho ese sonido y reacciono.

- ¿qué?... No danny… ¿qué haces?... Se quejó, mientras sentía que le bajaba el short.

Deje sus rechonchas nalgas al aire, al sentir el viento se le erizo la piel, se contrajeron sus nalgas aprisionando su pequeña ropa interior, tras un palmazo se relajó y aproveche para hacer a un lado su pequeña y sexy ropa interior negra.

- suéltame danny… detente por favor… exclamaba asustada.

Había sido muy bueno y comprensivo… a cambio solo recibí respuestas irónicas y pedradas… caraj… ella prefería creerle a javier… quizás para que las mujeres nos crean y nos persigan los hombres debemos ser unas basuras… ya que las mujeres prefieren creerle a pendejos antes que a tipos que las tratamos bien y protegemos… no, ahora yo sería un patán… le daría una lección a esta perra terca…

- ni se te ocurra… me amenazo, sospechando lo que quería.

Mi verga se le incrusto en su ano sin contemplaciones… ella estiro su espalda, se retorció de dolor al sentirse clavada tan salvajemente… esta vez estábamos en medio de la nada, podía gritar, vociferar, aullar y nadie la oiría… esto era entre ella y yo… me desquitaría de su desconfianza a costa de su culo…

- no danny no… ouuu… ufff…. Se quejó pero era tarde.

Cielo riveros forcejeaba con el árbol y sus ramas que la aprisionaban, mientras yo forcejeaba con las pataletas de sus piernas, con su estrecho y evasivo ano… por momentos ella contraía las nalgas y el esfínter, apretando mi adolorida verga que antes había recibido un rodillazo… un par de nalgadas y me soltaba.

- ouuu mierd… ufff… ouuu… exclamaba ella adolorida mientras le violaba el orto.

Llego el punto en que se dio cuenta que dé más estaba intentar huir… estaba prisionera de la naturaleza (el árbol) y de mi entrepierna que le golpeaba armónicamente su inflado trasero, mientras mis manos jaloneaban sus carnosas nalgas…

- ufff… así se lo hiciste a la desabrida de vane ¿no?… ouuu… decía para molestarme.

- no bruta… ¿no entiendes?... Solo tú eres mi perra… replique sin dejar de castigarle el ano.

- ouuu… uhmmm… mentiroso… ouuu…. Ufff…. Uhmmm… se resistía mientras tibios gemidos se escapaban entre queja y queja.

Estaba domando a la fiera de la manera que le gustaba, la tenía analmente esclavizada… si no la exorcizaba del chisme de vane, al menos me daría el gusto de cogérmela por última vez… de disfrutar viendo su cuerpo retorcerse de placer… escuchar sus gemidos…

- ouuu… uhmmm… daba alaridos mezcla de dolor y de placer, en medio del bosque, algunas aves huían al oírla.

Yo estaba dispuesto a romperle el culo salvajemente para que se acuerde bien de quien la inicio en este placer, le dejaría adoloridas las nalgas para que se acuerde de mi cada vez que se siente, le desgarraría el ano para que nadie más se atreviera a cogerla como yo… para que se arrepintiera de dejar ir a la persona que la llenaba, que la atoraba y que la satisfacía…

- ay amorrr… que me revientas… uhmmm… me dijo presa del placer que le brindaba.

- ¿vas... A… dudar… de… mí?…. Le preguntaba y en cada silaba la empalaba contra el árbol.

- no mi amorrr… nunca más… uhmmm… exclamo cielo riveros completamente sometida.

- mentirosa!… le replique, ahora me tocaba a mi hacerme el difícil.

Saque mi verga y la deje así, poseída de la excitación… apenas a pocos segundos de llegar al orgasmo… este sería su castigo por ser una loca desconfiada y celosa… encima se atrevía a decirme amor tras haberme hecho buscarla en ese club lleno de cielo riverostares y hacer que la persiga en el bosque…

- nooo… ¿qué haces?... No me dejes así… por favor… regresa amor…

escuche suplicar a cielo riveros, mientras yo me alejaba...
Los papeles se habían invertido, yo la perseguí para explicarle lo que pasó y ella huyo de mi… ahora ella quería hablar y yo quería huir… en realidad no quería irme… solo darle una lección a mi manera… yo le pedí las cosas por las buenas y no acepto… ahora ella me rogaría que la atore, que la satisfaga…

no la iba dejar con el ano abierto, palpitante y las rechonchas nalgas aire en medio del bosque… se imaginan que la deje ahí y aparezca alguna culebra (poco probable) y se meta por donde yo debía… o que algún suertudo perdido en el bosque se aproveche de esa situación… ni hablar…

yo solo quería aprovecharme de su desventura y arrechura… fui al otro lado del árbol, donde yacían sus senos a punto de reventar y su cara empolvada, cabellos desordenados y rostro enloquecido de éxtasis…

- vamos danny… me imploraba que volviera atrás a someterla cruelmente.

No la deje decir nada más, la jale de los cabellos y le clave mi verga hasta la garganta, casi ahogándose, hice que me la mamara… cuando recupero el ritmo de la respiración, se asió a mi verga con las dos manos, luego con una, mientras me jalaba por las caderas para que no me aleje… pero la deje…

- no ¿a dónde vas?... Nooo… exclamo roja de pasión.

Sin hacer mayor ruido, me fui detrás suyo y volví a enterrarle mi verga hasta las tripas…

- ayayayyyy…. Ouuuu…. Me desgarraste el ano… ouuu… se quejó exagerando.

No preste atención a sus quejas, en poco tiempo volverían a ser gemidos de placer, agradecimiento, yo le jaloneaba sus las gordas nalgas, abriendo su culo para que mi verga entre sin obstáculos a su ano… mientras que por el ímpetu, caían las hojas de las ramas que la apresaban.

- asiii… ohhh siii… … uhmmm… ohhhh… exclamaba enloquecida y me gustaba.

Llegue a pensar que hacía varios minutos que cielo riveros pudo haberse liberado, pero no quiso, solo quería someterse a ese dulce martirio que tanto le gustaba. Antes su cuerpo se resignaba a que la violara, ahora ella se había acomodado mejor en el árbol para recibir mis embestidas, con la espalda arqueada y levantando el culo para recibirme mejor y hasta el fondo…

- no puedo más… no aun no… nooo… uhmmm… por más que se resistió, desfalleciente termino envuelta en un profundo orgasmo que la hizo temblar de pies a cabeza…

- ¿qué?... ¿es todo?... Le reclame aun molesto.

- ay nooo… no doy más… ufff…. Uhmm… resoplaba molida, disfrutando extasiada.

No llegue tan lejos para irme sin disfrutarla al máximo… me faltaba poco para satisfacerme, en parte seria caballero y no abusaría más de su culo criminalmente y analmente torturado, me dirigí de nuevo frente a ella, que reventada de placer me miraba embobada, colorada y jadeante… entonces cometería la última vejación de la tarde…

- ay… dany… no sé qué… tiene tu verga… que me deja… sin aliento… resoplaba cielo riveros.

- ahora lo sabrás… le repuse.

Ella abrió la boca en expresión de asombro… lo que aproveche para nuevamente jalonearle la cabeza e incrustarle mi verga hasta la garganta, casi sentí sus labios en mis bolas… viendo que se ahogaba, la solté un poco porque aún no se reponía del orgasmo y respiraba con dificultad…

cuando se repuso, otra vez cielo riveros se asió de mi verga, dándole una succión cariñosa, hasta limpieza… pero yo no quería eso… yo quería completar lo que quedo a medias… así que tome su cabeza por los lados… los cabellos por encima de su sien y empecé a pajearme con sus húmedos y carnosos labios…

- uyyy… cuidado… mierd… quise advertirle pero era muy tarde, mi leche inundo su boca.

Por lo placentero de aquella cogida, con cielo riveros aprisionada dándome su culo para que lo disfrute, con todo el sabor a revancha que me supo esa cogida, sentirme resarcido de lo que me inculpaban… termine en una brutal descarga de semen… que la pobre cielo riveros término tragando en parte…

creo que en la excitación del momento ella quiso engullir todo… pero casi se ahoga y termino abriendo la boca, dejando escapar parte de mi leche, que se escurría entre sus labios y mentón… mi verga escupió otro poco de leche en su mejilla…

- diablos!…. ¿tanto votas?... Se quejó graciosamente cuando recupero el habla tras tragarse buena parte de mi leche.

Era la primera vez que se engullía mi leche, creo que si ya me la había mamado, conocía su sabor y no se le hizo tanto problema, ni se asqueo por hacerlo… lo que me pareció excitante también…

- así me tienes… uno vota más cuando disfruta más… estoy exprimido al máximo… le respondí jadeante y satisfecho.

Ella lo sintió a halago, sin decirme nada, sin limpiarse la barba de mi leche ni las gotas de esperma en su mejilla… simplemente me jalo de las caderas, y tomo mi verga como si fuera su juguete y se dedicó a limpiármela con mucho cariño… parecía que la tormenta había pasado… sin embargo…

escuchamos unos pasos… mierd… otra vez… ni en el bosque nos dejan tirar en paz… pensé.

Cielo riveros nuevamente petrificada, no era como antes… que te encuentre vane, javier o un profe… no es lo mismo a que te encuentren tus padres... Ella ya llevaba mucho tiempo desaparecida desde que dejo a sus viejos en el restaurante… ¿habrían salido a buscarla?...

En ese caso, igual que en la cochera de sus padres, la situación seria chocante… cielo riveros estampada contra un árbol, con el culo empinado, su ano palpitante y abierto, el short y la ropa interior en las rodillas… a todas luces parecería una violación… y hay que agregar que ella tenía mi verga en su mano y mi leche discurriendo por su boca, mentón y mejillas…

que su viejo me maltrate y hasta que me entierre en el bosque estaba dentro del cálculo de lo posible, pero… ¿cómo reaccionaría su madre?… le daría un infarto tal vez… se le antojaría y terminaría en una orgia todo… pero eso era lo último que pasaría…

forcejee con cielo riveros para liberarla, pero en su nerviosismo, no colaboraba, se quedaba plantada... Entonces opte por guardar mi verga y en mi desesperación intente volver a cubrirla con las ramas, camuflándola… una torpe idea viendo sus grandes nalgas al aire, enrojecidas por el maltrato que les di… incluso si nos encontraban otros padres, amigos o no del viejo de cielo riveros, igual la situación era vergonzosa…

pero dentro del susto de la situación, afine un poco el oído… mire por el camino tras cielo riveros, por donde vinimos… ni los pasos ni el ruido venían de ahí… entonces ¿de dónde?...

Luego gire la vista al rio… tras el desnivel frente a nosotros y las piedras, unos metros más allá, estaba la ribera del rio, una orilla arenosa, por donde venían dos jóvenes tomados de la mano y riendo… bueno, al menos no eran los viejos de cielo riveros, pensé aliviado viendo que los jóvenes estaban lejos.

Agudizando más la vista los reconocí… caraj… eran guille y vane, ahora se veían más románticos y acaramelados… creo que este guille más que venir a ayudarme con cielo riveros quería un tiempo con vane a solas… conquistarla como siempre imagino y no como había sucedido en el depa…

- ¿son vane y guille?... Pregunto cielo riveros a mi lado…

mierd… casi me da un infarto, ¿cómo se liberó?... En vez de ponerse a luchar con las ramas sobre ella, esta vez opto por deslizarse de lado en sentido contrario al inicio de las ramas, y se liberó fácilmente. Luego me explicaría como llego a enredarse ahí…

tras huir de mí, dejándome tirado en el suelo tras el rodillazo que me propino, ella tomo ese camino de bajada e instable, a medida que descendía al rio tomaba velocidad, de pronto volteo a ver si yo la seguía y ahí perdió el equilibrio, se fue de largo y termino contra el árbol… quizás por el impulso hizo girar el tronco y destrabo las ramas que terminaron apresándola para mi provecho.

En fin… siguiendo con los hechos… veíamos a guille y vane perderse por momentos entre los árboles y salir nuevamente a la orilla, quizás en cada escondida se prodigaban besos…

- ¿ves?... Te dije que guille la había desflorado, no yo… le enfatice para que se convenza.

- ay danny… es que era difícil de creer… ponte en mi lugar… ¿qué pensarías?... Replico cielo riveros como niña regañada, justificándose.

- bueno ahora convéncete… dije calmado.

- esos ahora ya están enganchados como nosotros… sentencio cielo riveros.

No respondí, porque ya me daba cosa ver la leche cayendo de su cara, creo que el momento de placer había pasado. Saque de mi mochila agua y un pañuelo para que se limpie. Mientras abajo veía como la nueva pareja se sentaba al borde del rio viendo como el sol se perdía lentamente en el horizonte.

Ahora los fisgones éramos nosotros… yo me recosté contra el tronco, puse a cielo riveros delante de mí, abrazándola para sentir su gran trasero y que no me tape el espectáculo. Ellos se besaban sin sospechar que los veíamos… luego vane se recostó contra la arena, guille se recostó de lado encima…

- ¿lo van hacer?... Dijo cielo riveros sorprendida, porque vane había rechazado mucho tiempo a guille.

- sip… creo que hemos sido un mal ejemplo para ellos… le dije.

- jajaja… si, ahora nos imitan haciéndolo al aire libre sin temor de ser descubiertos… dijo cielo riveros.

Luego vimos como guille pugnaba por desabotonarle la blusa y ella por soltarle la correa, el cierre y bueno… se venía todo lo demás…

- creo que ya vimos suficiente… démosle su privacidad… le dije.

- sip… me alegro por ellos… dijo cielo riveros y pensé que al fin zanjaba su pelea con vane.

- si… yo también… agregue, pensando que ya se venía la tregua y la paz.

- aunque no tanto por guille… insistió cielo riveros.

- ¿por qué lo dices?... Pregunte curioso.

- se nota que guille la quiere, desde antes, pero ella… no se… dijo cielo riveros desconfiada

- piensas que sea una ilusión temporal para vane, y que guille salga lastimado…

- no se danny… esa chica es medio bipolar… no confió en ella…

- en realidad a mí no me da tanta buena espina… le confesé.

- es que dudo que haya cambiado tan rápido… me explico.

- bueno… es asunto de guille… le dije.

Al final también podía ser que guille usase a vane para satisfacer su ego, su capricho de estar con una chica adinerada como el, pero de mejor posición social, de piel clara y demás… al final cada quien tiene sus motivaciones… pero no conocía tanto a guille como para saber si lo suyo era amor o capricho.

- tu eres su amigo… tienes que advertirle que esa chica es engreída, caprichosa, vengativa, chantajista, berrinchosa… decía cielo riveros.

- oye, me estas describiendo a una mujer promedio… le dije burlonamente.

- ya, sabes a que me refiero, vane no es de fiar… dijo cielo riveros hablando en serio.

- intente decirle a guille, pero esta recontra enamorado, cree que al fin logro conquistar a vane y no escucha razones, ni advertencias… le dije.

Tome de la mano a cielo riveros y le dimos espalda al espectáculo que empezaba en el rio… bordeamos el árbol y del otro lado, cielo riveros no me dejo avanzar… recostó sus infladas posaderas contra el árbol y me jalo para que la viera, con el sol ocultándose tras ella… cielo riveros lucia más hermosa que nunca…

- me perdonas por haber desconfiado de ti… dijo apenada.

- está bien… pero aprende a controlar tus celos y tus berrinches… le dije.

- prometo que lo hare… dijo, debí reírme en ese instante, pero quería creerle.

- si queremos que funcione… dije enfatizando el sermón.

- ok… si ya entendí… me regañas como mi papa… me dijo sonriendo.

- si no hay comunicación… dije prosiguiendo, buscando molestarla.

- ya basta… si… dijo entendiendo la broma, y me dio un golpe juguetón en el hombro.

Luego me tomo de los bordes del polo, mi pequeña pero mandona enamorada, se puso de puntitas y me jalo hacia abajo para que la bese… ahora si podía abrazarla y besarla con libertad, estábamos en medio de la nada… sin temor a ser descubiertos… tanto que los recatados de guille y vane tenían relaciones a pocos metros de nosotros, en la orilla del rio…

luego cielo riveros me soltó un momento… tenía ese brillo en los ojos y esa mirada pasional que ya le conocía:

- ¿tú crees que tengas tiempo para mí?… ¿para qué me lo hagas otra vez?… pregunto la golosa.

- claro amor… demostrémosles a esos principiantes… dije en alusión a la pareja del rio.

- sí, pero, por ahí no… creo que me desgarraste o algo… me arde… se quejó por su ano.

- está bien preciosa… le dije y empecé a besarla.

No tuve que decir o hacer mucho, cielo riveros solita empezó a bajarse el short, pasándolo de bajo de sus piernas y pateándolo a un lado… yo solo debía aflojar un poco mi pantalón y bajar el cierre.

Ya me la había cogido en cuatro contra el árbol, ahora me provocaba otra cosa… ella había resbalado un poco en el árbol, su baja espalda se apoyaba contra el tronco, sus lindas piernas estaban abiertas y sus muslos desnudos me esperaban así como su nuevamente excitado y húmedo pubis...

- ¿pero cómo…?... Ahhh… exclamo sorprendida.

En rápido movimiento, pase mis manos debajo de sus muslos y la levante, eso iba respondiendo su pregunta de cómo sería esta vez… sus muslos fueron resbalando hasta que la parte posterior de sus rodillas quedaran apoyados en mis brazos, que le iban abriendo las piernas… y acercando su ansiosa vagina y mi erecta verga…

- ohhh… si… ¡qué fuerte eres!… replico excitada.

Le invadió el morbo el notar que la levante sin mayor esfuerzo, como a una muñeca, algunas mujeres también responden al estímulo de un hombre alto y fuerte que las someta con vigor, al menos al inicio… en parte se sienten protegidas y en parte dominadas… me miraba con rostro ansioso…

- uhmmm… soy tuya… ohhh… exclamo rendida al sentir mi verga incrustándose en su vagina.

Había entrado sin mayor dificultad en sus bien lubricados labios vaginales. Ella esta aprisionada entre el árbol y mi pecho… me tomaba del cuello, los hombros para no resbalarse… mientras yo empezaba a cabalgarla, embistiéndola contra el árbol.

En cada arremetida, su cuerpo saltaba, ella se había aunado a mi ritmo, haciendo equilibrio con sus piernas en mis brazos, con su espalda y cintura en el árbol, abrazándome… ella me veía por momentos con fascinación, cuando no soportaba me robaba besos jadeantes con su lengua…

- como me gusta que me folles… uhmmm… exclamo lujuriosa.

En plena excitación, me deba besos en el cuello también, que me provocaban cosquillas y la solté un poco… ella resbalo… al intentar acomodarse, poso su vista en nuestros genitales… extasiada veía como mi mazo de carne aparecía y desaparecía rápidamente en su vagina, esto incremento su placer y locura quería disfrutarlo más…

- métemela por el ano… uhmmm…. Me suplico

- ¿estas segura?... Pregunte, ya que me había dicho que le dolía.

- siii… por favor… hazlooo…. Reclamo la muy golosa.

Las palmas de mi mano, que se apoyaban en el tronco del árbol para hacer equilibrio con sus piernas, se cansaron y sufrí algunos raspones por la corteza del árbol… así que me di maña para pasar mis manos debajo de sus carnosas nalgas… la levante un poco más hasta que su palpitante ano estuvo a tiro de mi verga… sin mayor preámbulo, para evitar que se arrepienta… empecé a empujársela…

- ouuu… me partiste el ano… uhmmm…. Exclamo en parte satisfecha y en parte adolorida.

Para transmitirme su dolor, me clavo las uñas en mi espalda… era justo, yo me la clavaba por el esfínter a cielo riveros y ella me clavaba sus uñas… para esto, mis manos se habían acomodado mejor y jaloneaban sus pulposos glúteos… sin dar lugar a mayores reclamos, nuevamente empecé a embestirla contra el árbol…

- uyyy… siempre dejare que me violes… uhmmm… gemía.

Quería que siempre la enganche por el ano, que siempre la esclavice, que la someta por ese estrecho agujero… sus gemidos, alaridos y frases me excitaban tanto como verla y cogerla… sus labios de nuevo buscaban mi boca, más aun mi lengua… luego me miraba como una viciosa… más aun veía mi verga entrar y salir por su maltrecho ano….

- ay nooo... Nooo… uhmmm…

ella quería disfrutar más ese empalamiento, pero sumida en todo lo que veía, lo que sentía, termino desahogándose en un brutal orgasmo que hizo que se aferre a mí con fuerza, haciendo una rica fricción con mi verga y sintiendo sus grandes pechos presionándome, tampoco soporte más y le descargue mi leche en sus intestinos…

- uyyy… que ricooo… ufff…. Clamaba satisfecha.

Cielo riveros seguía agitada, contraída y aferrada a mi cuerpo, con sus brazos en mi cintura, parecía no querer soltarme… se dedicaba a besarme agradecida por la tremenda cogida que le di…

- solo tú haces que me venga tan rico… me dijo jadeante.

- y tú también me provocas lo mismo… le respondí y la bese.

Sentía que mi verga seguía escupiendo esperma dentro de ella, con cada descarga se contraía y su lengua me transmitía sus emociones. Era gratificante tenerla así… con mi verga aun anclada en su ano y sus labios, sus senos, sus brazos transmitiéndome todo su amor…

- danny… yo… yo… dijo sollozante y jadeante.

- ¿qué paso?... Pregunte, en teoría todo estaba bien, pero con las mujeres uno nunca sabe.

- no te burles… pero yo… dijo a medias, antes no me dejaba hablar y ahora tartamudeaba.

- vamos dime… le insistí, había que sacarle a cucharadas las cosas.

- siento que… dijo y yo pensé que se resbalaba.

- ¿que sientes?… pregunte, aparte de mi verga.

- te amo… dijo con sus ojos vidriosos.

- hey… yo también siento que te amo… le conteste.

- ¿en serio?... Replico cielo riveros alegre por mi respuesta.

- claro… sino no hubiera venido hasta acá… le dije.

- es que nunca sentí esto, es diferente a una ilusión… se siente acá en el corazón, es bonito pero también me da miedo… nunca se lo dije a nadie… me confeso abrazándome.

Yo no podía decir lo mismo, ya le había dicho a viviana que la amaba. Recordé vagamente las circunstancias en que se lo dije y me dio cierta melancolía. Ella era especial pero de alguna forma no terminamos de complementarnos. La relación se había vuelto monótona y predecible, creo que me animaba más el hecho que mis padres la aceptaran, que hubiera cierta seguridad con ella, sin problemas ni temores respecto al futuro.

En cambio con cielo riveros a pesar de las peleas y enredos me sentía más vivo, más cómodo con la relación. Había más adrenalina, más jovialidad, más energía de juventud, para ir a fiestas o conciertos… teníamos más cosas en común aparte del sexo… a mí también me daba miedo arriesgarme, pero eso es natural, es parte de toda relación… es parte de la vida…

estaba filosofando tan bien… pero hablando de adrenalina… nunca hay paz… ni siquiera en el bosque…

- cielo riverosss…. Hijaaaa…. Se escuchó a lo lejos una voz femenina.

- ¿quién es?... Pregunte curioso.

- mi mama… dijo asustada cielo riveros.

- ¿dónde estasss?... Cielo riverosii… era una voz masculina, la conocía.

- mi papi… dijo avergonzada.

- tu viejo… dije palideciendo.

Nos habíamos demorado mucho, ya estaba anocheciendo y como sospeche… sus viejos preocupados habían salido a buscarla por el camino que la vieron desaparecer…

ya me había escapado una vez de él… espero que después de esta también pueda contarla…
cielo riveros seguía trepada encima de mí y aferrada como koala… yo la sostenía con mis brazos debajo de sus gordas nalgas, sus piernas al aire… de la cintura para abajo cielo riveros estaba desnuda… ah y claro, estábamos enganchados porque mi verga atoraba su ano, mientras gotas de leche salían de ahí…

en esta ocasión no estaba tan temeroso de ser descubierto… estábamos en un bosque donde sería fácil esconderse… pero igual había que ser precavidos, si yo encontré el rastro de cielo riveros, un cielo riverostar entrenado como su viejo también lo hallaría fácilmente…

había escuchado mejor, y parecía que las voces de sus padres aún estaban lejos en el camino… aun no llegaban al atajo en que estábamos… nos daba algo de tiempo…

- cielo riveros… le dije.

- ¿qué?... Pregunto en voz baja.

- como que va siendo hora que te bajes… dije al sentir que mi flácido miembro salía de ella.

- oh… cierto… respondió reaccionando.

Se bajó de mí, con las piernas abiertas, procurando que los líquidos que salían de su ano no manchen sus medias ni sus zapatillas. De mi mochila, tirada a un lado en el suelo, nuevamente saque agua y algo de papel para limpiarnos. Mientras en el camino, unos metros arriba, veíamos luces entre los arboles…

- yo ya estoy listo… ¿cómo vas?... Pregunte.

- no encuentro mi ropa… dijo preocupada.

Cielo riveros ya estaba limpia y todo, solo con el pubis y las nalgas al aire, como bebita sin pañal… niña descuidada, no podía recibir así a sus padres… en su arranque pasional había pateado su short, que salió volando, quien sabe a dónde.

En mi mochila yo tenía mi ropa de baño porsiacaso… pero qué pensarían sus viejos si ven a cielo riveros con una bermuda de hombre que por mi talla le quedaría floja a ella, solo en la cintura, porque quizás en las caderas le cabria bien. A pesar que ya estaba casi oscuro, seria evidente lo que estuvimos haciendo…

mientras las luces y las voces ya habían llegado al desvío… estaban cerca…

- ya, la vi… dijo mientras la veía saltar graciosamente y sus nalgas desnudas rebotar.

- ¿cómo llego eso ahí?... Pregunte sorprendido.

Estaba en una rama algo alejada, cerca al barranco. Cielo riveros en su arrechura al sacar el short lo pateo con fuerza… hice a un lado a mi pequeña acompañante y me estire para alcanzar su short. Ya sentía pasos y a lo lejos veía la polvareda que se armaba, ya estaban descendiendo por el camino.

¡apúrate!... Le pedí, y la muy nerviosa se puso el short al revés. Se lo hice notar y nuevamente se sacó el short... Veía que por los nervios perdía el equilibrio, me agazape a su lado para que se apoye, lo hizo y termino de colocarse el short… mi corazón latía a mil escuchando la voz de su padre cerca… hasta que sentí la luz de una linterna en mi rostro…

- ¿aun te duele?... Pregunte terminando de agazaparme y tomándole el tobillo, disimulando.

- ah no… ya no… gracias… dijo cielo riveros siguiéndome la corriente.

Me fui levantando y por suerte esta vez sí vi el short de cielo riveros correctamente puesto… puse mi mano frente a mi vista, ya que la linterna me seguía apuntando… me sentía como en un interrogatorio…

- ¡aquí estas!… dijo la madre de cielo riveros asustada, yendo a abrazarla.

- no se preocupen estoy bien… respondió cielo riveros calmándola.

Bajaron la luz de la linterna y apenas veía al viejo de cielo riveros, ya estaba oscuro, más el color de su piel y mis ojos que sufrieron el destello de la linterna, su papa era solo una sombra para mí, casi un árbol más… sentía que me miraba como a un insecto… con cara de pocos amigos… seguro se preguntaba que hacia este pelele con su nenita en medio del bosque… y en realidad pregunto algo similar:

- ¿qué paso? ¿cómo terminaste acá?... Pregunto su viejo entre severo y preocupado.

Cielo riveros estaba muda, como esperando la reprimenda de su padre, no sabía que inventar para excusar su ausencia, como cubrir que se la habían cogido dos veces en medio de la naturaleza, contra natura por el ano y también contra el árbol detrás nuestro…

- nos desviamos del camino, buscando ir al rio… cielo riveros bajo trotando y con la inercia termino golpeándose con el árbol… parece que también se torció un poco el tobillo en la bajada… esperábamos a que se sintiera mejor para regresar… le explique de corrido para evitar preguntas y bueno algo nervioso también.

- y ¿cómo está tu tobillo?... Pregunto el viejo acercándose a revisar a su nena.

- esta mejor… solo fue un susto… replico nerviosa, evitando que su viejo se acerque más, quizás ella aun despedía olor a mi semen.

Obviamente vino una pequeña reprimenda: que su madre se preocupó, que debía tener más cuidado, que ya era tarde, etc., etc. Luego de esa pequeña terapia cielo riverosr su viejo volteo a verme.

- a todo esto… ¿quién eres tú?... Pregunto bajando la mirada, me llevaba casi una cabeza.

- disculpe señor por no presentarme… mi nombre es daniel, soy compañero de estudio de cielo riveros en la universidad… replique, ofreciéndole la mano y ajustando mi hombría.

Aunque también anal-izo a su hija, pensé… pero no quería ser chocante y atribuirme ser su enamorado, porque nunca se lo pedí y no lo hablamos, solo follamos… además veía que su viejo intentaba meterme miedo (y en realidad lo estaba logrando), era mismo el careo entre boxeadores antes de una pelea…

cielo riveros por su parte no quería su papi piense que ella se iba con cualquiera al bosque…

- papi, en realidad él es…. Es mi enamorado… dijo cielo riveros un poco tímida, vendiéndome.

Su viejo la miro atónito, como si no supiera el significado de aquella palabra, después me miro desconfiado y sentí que me apretaba más la mano, al darse cuenta me soltó… auuu… mierd... Mi mano… obviamente no emití ni queja ni expresión de dolor… aguante como los machos…

- ah sí… ¿por qué no sale corriendo como los otros?... Dijo medio en serio y medio en broma, quizás pensó que su hija pudo conseguir algo mejor.

- soy difícil de intimidar señor… respondí, no me ganaría el respeto de este cielo riverostar escondiéndome detrás de cielo riveros.

- eso lo veremos… me dijo casi retándome.

- ya papi, no lo espantes, que de verdad me gusta mucho… suplico como niña defendiéndome.

- en realidad es el primer chico que conocemos como su enamorado… dijo su mama sonriendo acercándose a besarme en la mejilla y abrazarme. Cariñosa la suegra.

- te voy a dar el crédito de ser el primero en presentar batalla (darle la cara)… los otros no pasaron del teléfono ni llegaron a la puerta de mi casa… gruño el viejo.

Si supiera que había llegado hasta su cochera, que abuse de su hija apenas metros debajo de donde él dormía… que así como el me apretó la mano, el ano de su hija me apretó la verga días atrás en su cochera y minutos antes acá en el bosque, dos veces…

- espero que sepas en que te metes… dijo advirtiéndome.

Creo que a estas alturas me había metido más de la cuenta, sobre todo en el ano de su golosa niña… para mí lo que dijo el cielo riverostar era una advertencia de lo que me haría si lastimaba a su hija… pero la mama de cielo riveros entendió otra cosa:

- vamos… ni que fuéramos tan malas… bromeo la madre de cielo riveros.

Luego de esa pequeña charla, retornamos por el camino, ellos adelante, nosotros detrás. Cielo riveros caminaba un poco adolorida, mas por su ano maltratado, pero sus padres podían entender que era por su supuesto tobillo lesionado… para eso ya mi corazón latía más tranquilo, había salvado el momento, encarado al viejo… me le plante sin amilanarme y parece que le gusto que no le demuestre temor.

Cielo riveros contenta me tenía tomado de la mano, por momentos me dejaba llevar y la abrazaba o ella me robaba besos. En el camino de cuando en cuando el viejo volteaba a vigilarme… le era raro ver a su niña acaramelada con un chico. Supongo que era el día que temía, ver a su niña convertida en mujer.

Llegamos a las instalaciones del club, los padres de cielo riveros habían planeado quedarse un día o dos, para relajarse, vacaciones cielo riverosres. Alquilaron una cabaña para ellos… cielo riveros me pidió que me quede, pero obviamente no iba a dormir con ellos. Dudaba que su viejo acepte.

Sus padres nos dejaron cenando, ellos ya lo habían hecho. Conversamos de varias cosas, cuando estábamos a mitad de la cena… se nos acercaron guille y vane… como comprenderán cielo riveros se erizo, por instinto, como una gata cuando ve a una perra, analogía que calzaba después de lo sucedido entre ellas.

Al fin y al cabo cielo riveros guardo la compostura… se saludaron como si nada hubiese pasado… yo me imaginaba que cielo riveros mentalmente la había destrozado, o al menos enviado saludos a la mama de vane…

cenamos juntos, algo tensos, evitando comentar cosas pasadas para no reavivar peleas… guille de buen ánimo porque la pasaba bien (después de tirarse a vane en el rio), me propuso quedarnos también en el club. Guille quería alquilar una cabaña, sospecho que quería aprovechar al máximo a vane.

Los padres de vane estaban de viaje en europa, así que ella no tenía con quien reportarse. Había escuchado por rumores en la facu, que sus viejos o se la pasaban viajando o trabajando. Ella había sido prácticamente criada por su abuela, una señora medio neo-nazi, ya entendía porque sus actitudes.

En previsión, guille ya había pedido que lleven el auto de mi viejo a mi casa. Solo quedaba yo… llame a mi casa, para mi suerte contesto mi vieja, me confirmo que el auto había sido devuelto… mi padre había salido a visitar a un hermano enfermo. Lo bueno que mi vieja era más asequible y, como toda madre, solo pidió que me cuide, así que todo arreglado.

Guille alquilo una cabaña pequeña, con 2 dormitorios, una sala, una pequeña cocina y baño. En teoría como vane era la dama, dormiría sola en un dormitorio… pero vamos, obvio que guille iba a dormir con ella y yo me iba al otro dormitorio. No me hacía problemas por eso. Solo rogaba que no hicieran ruido.

Era un poco tarde, pero ya había quedado con cielo riveros en vernos en la piscina… para evitar roces y demás, guille y vane eligieron otra actividad para entretenerse, me parece que fueron a la zona de juegos.

Cielo riveros quería disfrutar al máximo nuestra estadía ahí… era el primer fin de semana juntos como enamorados oficialmente. Ahí no teníamos que escondernos de los demás, no habrían rumores… sus viejos me aceptaban… es decir, todo había vuelto la calma y todo se había corregido…. Vane estaba neutralizada y javier no nos interesaba que haría…

- sabes que javier me propuso vengarnos de ti… me cito para verlo… me dijo cielo riveros.

- ese maldito… es un granuja, traidor, abusivo… dije molesto.

- me estas describiendo a un hombre promedio… dijo cielo riveros intentando bromear, como yo hice respecto a vane, pero no me agrado tanto y lo noto, era otro contexto.

Me vino a la mente, como golpee a javier en la fiesta de guille y quise hacerlo nuevamente… el ambiente era similar, un jardín enorme, un baño al lado, solo que ahora estábamos recostados frente a una piscina casi vacía y con una luna llena iluminándonos…

- nunca aceptaría nada de javier… amor, no te molestes… dijo acariciando mi rostro.

- ¿soy tu amor?... Pregunte, embobado por el inicio del romance.

- en realidad… no se… me dijo haciéndose la interesante.

- ¿por qué?... Pregunte contrariado.

- nunca me pediste ser tu chica… dijo algo resentida.

- ah… en serio… es cierto… respondí.

En realidad era gracioso que después de tirar como conejos en todos los rincones posibles, en todas las posiciones que pudimos… arriesgando nuestro pellejo en enredos… al final no éramos nada….

- y ¿bien?... Pregunto ansiosa.

- ¿qué?... Pregunte extrañado.

- ¡tienes que pedírmelo!… me dijo impaciente.

- ok… ahí va… cielo riveros ¿quieres ser mi enamorada?... Pregunte simplemente.

- ay… que romántico eres… así nomás… dijo graciosamente decepcionada.

- ¿qué esperabas? ¿la declaración de independencia? ¿fuegos artificiales?... Replique.

- ay, hombres… no me imagino como será si algún día pides mi mano… refuto muy engreída.

- mejor pido tu ano… dije bromeando.

- eres un tonto… sinvergüenza… dijo riendo y dándome palmazos de reprimenda.

- oye… pero no me respondiste… le dije.

- está bien… acepto… ¿qué me queda?... Peor es nada… bromeo cielo riveros.

- ah con esas estamos… dije y me abalance sobre ella.

Reímos, nos besamos y dimos caricias envueltos entre las toallas. Hasta que tanta fricción surtió efecto y comenzó a aflorar en mi short… ella se dio cuenta, sonrío pícaramente pero se contuvo.

- no dany… acá no… mis padres rondan y hay aún un par de personas… me dijo.

Vi alrededor, aun había una pareja en la piscina y un chico terminando de hacer limpieza, además la cabaña de sus viejos estaba cerca. No sabía si su viejo me vigilaba a través de la mira de un rifle.

Así que la única manera de quitarme la calentura era con el agua fría y nadando un poco. Cielo riveros lo entendió y me dejo ir mientras ella me miraba al pie de la piscina, no se animaba a entrar, no era buena nadadora y alguna vez casi se ahogó, por eso aun algún trauma al respecto tenía.

A cielo riveros no le gustaba pasearse con bikini, era algo vergonzosa y sus formas eran llamativas, las miradas la incomodaban. Por eso solía vestir trajes de baño de una pieza y cuando usaba ropa de baño dos piezas, la de abajo era tipo short o malla corta, e incluso andaba con la toalla o pareo a la cintura. Creo que para ella era diferente vestirse con ropa apretada (jeans, minis, etc.) para salir, que andar en una piscina mostrando las nalgas al aire, ella no llegaba a tanto.

Tras un rato insistiéndole… al final decidió entrar al agua, el chico de limpieza se había ido, solo éramos nosotros y otra pareja que más andaba al otro lado de la piscina, buscando su propio espacio y dejándonos nuestra privacidad. Entonces cielo riveros me dio una sonrisa coqueta y se despojó la toalla.

Al verla nuevamente se me armo la cuestión… parece que por deleitarme la vista se puso un bikini de 2 piezas… creo que era de su madre, porque sus formas apenas eran contenidas y desbordaban tanto arriba como abajo. Poso un momento para mí...

Luego al darse cuenta que el chico de la otra pareja de la piscina la observaba, decidió meterse en la piscina. Creo que no solo cielo riveros se dio cuenta que la miraba, la pareja del chico también lo noto y le armo una escena, la chica salió molesta de la piscina y el chico tras ella… bueno, al menos nos dejaron solos.

- ¿ves el lio que armas?... Le reproche en broma.

- ay danny… solo por ti me estoy vistiendo así… me dijo un poco avergonzada

nadamos y jugamos un rato… llego un momento en que ella se alejó nadando, pero no se dio cuenta que había ido a una zona más profunda, al notarlo se puso nerviosa y se hundió… mierd… fui nadando rápido hacia ella… en realidad no era tan profundo, yo de puntitas estaba con la cabeza afuera, pero ella más pequeña y miedosa… se desesperó y se hundió…

- te tengo… le dije, remolcándola a la orilla más cercana y a menor profundidad.

Cielo riveros se aferró a mí como un koala, igual que en la tarde, parecía una niña asustada, temblaba y me abrazaba con fuerza. Yo empecé a acariciarla para calmarla y calentarla… aunque el que se calentaba era yo al sentir sus infladas formas temblando encima mío, igual que en el árbol horas antes.

- ¿estás bien?... Le pregunte.

- contigo si… siempre me cuidas... Dijo un poco alegre pero aun nerviosa.

Me miro con un brillo de amor en sus ojos, empezó a besarme tiernamente, yo se lo devolví de la misma manera. Como era de esperar, mi verga endureció nuevamente, cielo riveros comenzó a sentirla debajo de sus abultadas nalgas, casi situándose en su raja, dividendo sus cachetes e incentivando sus genitales…

- uhmmm… gimoteo conteniendo la respiración.

Esta fricción en el agua provoco que los besos de cielo riveros fueran cada vez más apasionados, su lengua fue haciéndose participe, sus jadeos… conteniéndose se apartó y me miro… como intentándome hacer entrar en razón… era una locura, sus padres estaban cerca… ya me había dicho que ahí no…

- que sea rápido… dijo excitada.

Me dio a entender que la posea ahí, antes que vinieran a buscarla sus padres. No lo pensó mucho, quería hacerlo con su enamorado por primera vez, con el chico que le desvirgo el ano, con el que la defendió de javier y vane, el que la salvo de ahogarse… estaba muy arrecha, se olvidó de sus padres, por la forma en que me veía y besaba le daba igual… yo era su hombre y ella mi mujer…

- apúrate… métemela… me pedía, apartando ella misma el bikini, dejando su pubis visible.

Abrí rápido mi bermuda y saque mi verga… ella seguía abrazándome, se la hundí en el agua, por lo fácil que fue intuyo que era su vagina. Ella me apretujo más… yo la tenía prisionera entre mi cuerpo y la pared de la piscina.

- ohhh… siii… mi amorrr… exclamo satisfecha en mi oído.

Igual que en la tarde, pase mis brazos por debajo de sus piernas y mis manos debajo de sus voluminosas nalgas, esta vez ayudado por el agua parecía que sus infladas nalgas flotaban. Yo me dedicaba a alejar y atraer su cuerpo, clavándola en medio del agua…

- uhmmm… siempre seré tu puta… ouuu… bramaba a voz baja en mi oído.

Ella se contenía de gemir a voz en cuello como en el bosque, acá era diferente, sus padres podrían salir a buscarla, sabían que estaba en la piscina conmigo, estaban cerca… apenas se escuchaba el murmullo de la marea que generábamos con nuestros apurados movimientos. Si bien éramos enamorados para sus padres, hay ciertos formalismos que guardar, no podía el primer día ser descubierto clavándome en la piscina a la niña que ellos pusieron tácitamente a mi cuidado.

- ufff… eres mi perra… le replicaba yo excitado,

- uhmmm… si, si… tu perra… uhmmm… me respondió alocada.

Y esta idea parece que le corroyó la mente, trayendo imágenes y sensaciones de terribles cogidas que le propine… sin decirle nada, ella se bajó de mí, me apartó con sus manos, dándose, espacio… me dio la espalda y se puso en posición sugerente…

- cógeme como… tu perra… me pidió ansiosa.

Aquella posición esperaba que la clave como le gustaba… por el ano… que le revienten el culo de manera diferente, en el agua…

- ¿qué esperas?… hazme tu perra… me rogaba.

Se había agarrado del borde de la piscina, esperando que la someta… por la poca y lejana iluminación de los postes y la luz de la luna, me guiaba para ver a través del distorsionado reflejo del agua, a través del agua veía sus piernas abiertas y sus nalgas empinadas. La tome de los bordes de sus nalgas y con el tacto sentí su rugoso ano… y le fui taladrando su goloso esfínter…

- uyyy… siii… como me gusta estooo… uhmmm… gimió satisfecha al sentirse atorada.

Comencé a embestirla como le gustaba, ella se contraía por momentos, el agua caía de sus cabellos, ponía su rostro de lado para que viera como soportaba mi castigo con su boquita en mueca de dolor placentero y sus mejillas encendidas…

- asiii… asiii… masss amorrr masss… uhmmm…. Me pedía extasiada.

Me dedique a acariciar sus senos, sin quitarle la parte superior de la ropa de baño, si llegaba sus padre era más evidente lo que hacíamos si tenía las tetas flotando… por momentos volteaba buscando mis labios y mezclaba sus besos con su tibia y deseosa lengua…

- ayyy amorrr… tu verga me hace feliz… ohhh…

con cada empalada, sin darme cuenta, la estaba empujando más contra la pared de la piscina, ella antes agazapada casi en 4, termino casi con las piernas abiertas contra la pared, como rana, mientras yo la clavaba más fuerte cada vez, casi haciéndola saltar de emoción y placer…

- ayyy siii… nooo… uyyy…. Uhmmm… exclamo finalmente contrayéndose toda.

Mientras yo la estampaba por última vez contra la pared de la piscina, mi torrente de leche inundaba su recto. Ella resoplaba satisfecha y yo jadeaba detrás suyo, casi en su oído, con mi cabeza en su hombro.

- ufff… me… dejas… sin… aire… ufff… se quejaba ella disfrutando de haber llegado al clímax.

- que rico es cogerte… le decía agradecido.

Nuevamente volteo el rostro, buscando mis labios y mi lengua, quise apartarme para voltearla y besarla mejor… pero no me dejo, con una mano detrás de su espalda, me jalo la cintura para que permanezca ahí, aun quería sentirse unida a mí, enganchada por el culo como le gustaba.

En esa posición me hizo un pedido:

- estaba pensando… me dijo

- ¿en qué?... Pregunte curioso.

- algún día me harás eso que planeaste para vane…

- ¿qué cosa?... Pregunte.

- eso pues… de amarrar y tapar la vista… solo para sentir… me dijo deseosa.

Recién terminaba de disfrutar de llegar a un genial orgasmo, sus senos apenas se recuperaban de su agitada respiración… y la muy golosa ya estaba pensando en cómo sería la siguiente cogida. O tal vez simplemente en esa competencia que se tenían, ella quería experimentar lo mismo…

- ah ok… jajaja… le puedo pedir el depa a guille de nuevo… le dije.

Sonreí al pensar que sometería a cielo riveros, como lo idee para vane… me había quedado con las ganas de tenerla así, casi como cuando estuvo apresada contra el árbol, parece que le gusto… lo que yo no imaginaba que eso sucedería más pronto… y de una manera que no esperaba… pero antes de eso….

Nuestro amigo karma llamo a su amigo mala suerte que a su vez llamo al viejo de cielo riveros…

- cielo riverosii… ¿dónde estás?... Pregunto el cielo riverostar engorilado.

Caraj… tanto tiempo en la piscina y disfrutando que no nos dimos cuenta que una sombra crecía cerca de nosotros, estaba a pocos metros y más molesto que nunca… ya me había salvado 2 veces… quizás la tercera era la vencida…
tras la placentera experiencia, cielo riveros se contrajo por el frio del agua y el frio que recorrió su espina al ver a su viejo acercarse molesto. Como de costumbre en momentos de tensión apretaba las nalgas…

- suéltame… le susurre al oído, agazapándome detrás de ella, mientras ella se relajaba.

No sería muy bonita imagen para el cielo riverostar que me encuentre jugando al trencito con su hija, enganchados por mi verga en su ano, con mi semen flotando alrededor…

- escóndete…. Me murmuro nerviosa.

Sus nalgas habían soltado mi verga, su viejo se acercaba, yo me agache, pase frente a ella para que me cubra con su cuerpo. Por el borde de la piscina y el ángulo en que venía su viejo sería difícil que me vea. Pero cielo riveros al notar que su viejo se acercaba más, tomo mi cabeza y me la zambullo, advirtiendo esto yo ya había tomado aire. Estaba ahora bajo el agua aprisionado entre el cuerpo de cielo riveros y la pared de la piscina.

- ¿por qué demoras tanto hija?… hace media hora debiste regresar… le riño su padre.

- lo siento papi… es que acá no hay reloj… dijo la muy sabida.

Intuyendo que su padre le podía pedir que salga de la piscina inmediatamente, note que su bikini estaba ladeado, porque ella lo movió así para permitir que la penetre. Entonces, lentamente le fui acomodando la ropa de baño, lo que le provoco un temblorcillo nervioso.

- ¿dónde está ese enamorado tuyo?... Pregunto sospechando el viejo.

- ah… él fue a traerme unas toallas… ya hace frio… dijo justificando sus temblorcillos.

- no te demores… le advirtió nuevamente su padre, procediendo a retirarse.

- no exageres, deja a los muchachos en paz… dijo la mama de cielo riveros viniendo a llevarse a su esposo.

- si, ya voy papi… intentaba ahuyentar cielo riveros a su papa.

Mientras yo debajo del agua, me ponía azul aguantando la respiración. Cuando me sumergí aún estaba agitado por la cogida que le di. Resistí lo más que pude, porque conociendo al viejo de cielo riveros, se iría pero volteando de cuando en cuando para verificar si era cierto lo que le decía su hija.

Hasta que al fin salí cuando ya no pude aguantar más. Para mi suerte su viejo había desaparecido, otra vez cielo riveros me llenaba de besos disculpándose por haberme hundido en el agua… bueno yo también se la había hundido en el esfínter y no me disculpe… pero esa hundida ella lo disfruto…

al poco rato salimos de la piscina, ella se limpió y se cubrió con las toallas, mi leche parecía haberse diluido en el agua de la piscina. Ojala que cambien el agua al día siguiente, el que trague esa agua se llevara un sabor a mi… pensé.

El chico de limpieza había dejado gentilmente unas toallas, tras cambiarnos, las tome para secarnos el cabello y disimular el pretexto que cielo riveros dio a su padre… y fue buena estrategia. Al poco tiempo y de improviso apareció nuevamente su padre, casi me da un infarto de verlo al lado nuestro.

- cielo riveros… tu madre te llama… le dijo el cielo riverostar para alejarla.

Me cagu… pensé, sude frio… quizás su viejo escondido nos había visto.

- necesito hablar con este joven… cosas de hombre… le dijo insistiendo.

- pero papi… dijo ella protestando casi berrinchosa.

- entiendo señor… no te preocupes cielo riveros… le dije resignado, calmándola.

Si me molería a golpes o me gritaría, seria vergonzoso que ella este al lado. Por otro lado, vi a cielo riveros irse como mascota regañada, quizás a quejarse con su madre y esa señora seria mi salvación.

- pues bien… ¿cuáles son tus intenciones con mi hija?... Pregunto directamente.

- las más honorables señor… vine aquí por ella… replique sin intimidarme.

Ufff… al menos no me pregunto por los incidentes en el bosque y en la piscina, todo estaba bien…

- sabes que me entrenaron para infringir dolor al enemigo… casi me amenazo.

- claro señor… solo espero mantenerme como aliado… respondí tragando saliva.

Esta última respuesta le hizo gracia, se relajó un poco, al menos ya había sentado su punto, puesto las cosas claras… si lastimo a su hija, el me lastima a mi… así de simple y doloroso…

luego para mi sorpresa, había mandado traer del bar una botella de whisky, hielo y un par de vasos. Yo no era muy afecto a ese tipo de tragos… como comprenderán estudiante de pocos recursos toma cerveza, ron barato, vino en caja u aguardiente de dudosa procedencia combinado con refresco…

no soy de embriagarme rápido, pero con todo el estrés del día, la persecución y las cogidas, en realidad quería irme a dormir, pero no podía desairar al viejo de cielo riveros, al que al parecer había caído en gracia y quería creer que el cielo riverostar, al menos a su manera, me respetaba.

Al pie de la piscina donde estampe a su hija… conversamos el cielo riverostar y yo de muchas cosas, pregunto por mi cielo riveros, que quería yo a futuro de la vida… ver si mi entorno y mis aspiraciones encuadraban con lo que como padre quería para su hija… por su parte él también me conto de su cielo riveros, como conoció a su esposa, su hija, anécdotas de su carrera cielo riverostar…

el hielo era un adorno, el viejo tomaba el trago puro y por no quedarme atrás lo tome igual. Al principio sentía que el trago cauterizo mi garganta, después ya adormecido, ni sentía mi garganta. Terminamos la botella y mando a pedir otra.

Creo que el viejo de cielo riveros quería soltarme la lengua a punta de trago, yo más bien sentía que la lengua se me trababa más por el efecto del alcohol. Como dicen solo los niños y los borrachos dicen la verdad… seguro el cielo riverostar esperaba que confiese o se me escape algo de lo sucedido en el poco tiempo que tenía con su hija o descubrir mis verdaderas intenciones con ella.

El cielo riverostar quiso pedir otra botella de trago, ya era poco más de medianoche, para mi suerte el bar ya estaba cerrando y mi suegra vino a rescatarme con cielo riveros… lo dejaríamos para otro día. Ese gigante graciosamente se fue abrazado de su pequeña esposa. Mientras cielo riveros me remolcaba a mí, sonreía de verme mareado y que le caía bien a su papi.

Con todo el cansancio físico y mental de las últimas semanas de estudio y enredos amorosos, estaba noqueado. Me atreví a pedirle a cielo riveros hacerlo otra vez… pero no se podría porque olía a licor y no le gustaba, además que su padre la esperaba y no había que abusar de nuestra suerte… más tarde la mala suerte abusaría de mi…

caí en la cama deshecho pero satisfecho... Feliz porque todo se había solucionado…

horas después desperté medio sonámbulo, en mi mareo note que aún era de noche… quizás cerca de amanecer… algo de la luz artificial de los postes entraba por la ventana de mi cuarto…

sentí que no estaba solo en la habitación… además… sentía una floreciente erección, humedad en mi verga… quizás había tenido un sueño erótico sin darme cuenta… alguna vez un tío se durmió ebrio y se orino dormido… ojala no me haya pasado eso, me lamentaba porque sería vergonzoso…

sin embargo, sentía que algo se movía en mi verga…. Mierd… un insecto, me dije temiendo que fuera una cuchara o, peor aún, una araña que me pique y deje envenenada mi verga… pero no era eso…

- ¿qué?... Exclame asombrado viendo mi entrepierna.

Había una sombra succionándome la verga… caraj… se levantó levemente al oírme, era una silueta femenina… ¿era un sueño?, bueno se sentía real… solo en la alucinación del momento, esperaba que no fuera samara, la chica de la película “el aro”… ya que se inclinó de nuevo a succionarme y solo veía su cabellos… igual le rompería su aro por importunar mi sueño…

luego pensé: esta cielo riveros desesperada, al parecer le gusto mi propuesta y no pudo esperar a que amanezca… se escapó de la cabaña de sus padres y vino a exprimirme… total ella me dejo acá horas antes, conocía la cabaña y donde dormía, seguro dejo las puertas abiertas para regresar luego.

Quise acariciarle el cabello mientras me mamaba desesperada la verga… estire mi brazo, pero no llegue… mierd… que pasa, me quede acalambrado, contraído… intente otra vez y nada… mierd… ese trago me dejo parapléjico… aun mareado voltee a ver que le pasaba a mis manos que no se movían…

- pero ¡qué diablos!… exclame nuevamente sorprendido.

Tenía mi mano atada a uno de los bordes de la cama… asustado voltee a ver mi otra mano y también estaba atada… quise patalear, pero… tampoco pude… mis tobillos también estaban amarrados.

- wow… así no era, se supone que yo te amarraría y vendaría a ti… le dije confundido.

- es que te necesitaba ahora… dijo en voz baja, quizás para no despertar a guille y vane.

- prende la luz al menos para verte… le dije ansioso.

- no mejor, no… se va a dar cuenta… dijo avergonzada.

Mientras hablaba, no dejaba de pajearme, para tenerme bien duro… cuando sintió que ya no era necesario mayor estimulo. Se incorporó, caminando de rodillas sobre la cama, con sus piernas ladeándome… estaba ubicándose para que la penetrara, mientras yo solo veía su sombra y silueta…

- ohhhhh…. Uhmmmm… exclamo satisfecha al sentir que se había ubicado bien sobre mi verga.

Sentí toda su humedad, su vagina súper mojada me recibía con gusto… mi verga se le hundió con gran facilidad en su tibio interior…

- ufff…. Exclame satisfecho de tenerla empalada.

Un cambio de vez en cuando no está mal me dije… yo siempre la embestía y me la clavaba, ahora le tocaba a ella hacer el sacrificio… ella la tenía todo adentro y lo disfrutaba casi sin moverse, luego comenzó a menear su rabo en mi entrepierna, quería sentir mi verga en todos los ángulos…

- uyyy… te dije que no podía esperar a sentirte dentro mío… me dijo con voz apasionada.

- ¿perdón?… pregunte pasmado, recordaba esa frase.

No era la voz de cielo riveros… era la voz de… vane….

- espera… no… caraj… ¿qué haces?… le dije sintiéndome violado.

- hago lo que tú debiste hacerme… me dijo provocadora.

Yo la tenía ensartada hasta las tripas… mi verga siguiendo su instinto natural estaba tiesa… intente hundir mi trasero en el colchón para sacarle mi pene, pero los resortes del colchón devolvieron mi ingle a su posición natural, clavando a vane… que agradeció mi movimiento…

tras esa infructuoso intento de escape, me di cuenta que no había forma de zafarme, estaba unido a ella… quería hacer entrar en razón a la arrebatada de vane…

- vamos vane… tú quieres a guille… le dije.

- ese mestizo ya tuvo suficiente de mí, ojala le haya hecho provecho… dijo despectiva y agrego: ahora yo te voy a tener a ti, como quería y como me ofreciste... Me dijo.

Esta loca había hecho bien su rol de chica arrepentida, de villana en busca de redención, guille y yo nos las creímos: su llamada para averiguar dónde estaba cielo riveros, su ofrecimiento a traernos, sabiendo que guille estaba enamorado y que no la dejaría irse, pero llegar al extremo de fingir sentir algo más por él, engatusarlo, darle alas solo para buscar vengarse de mí y de cielo riveros… eso era muy maquiavélico.

O lo había hecho todo de manera premeditada o esta tipa estaba tronada. Sería como cielo riveros me advirtió, no había que fiarse porque vane era bipolar… cambiaba de actitud repentinamente… hacia unas horas andaba de la mano, abrazada y besando a guille, hasta haciéndolo en el rio… y ahora me ataba y usaba…

- prepárate que te voy a hacer gozar como nunca… me dijo muy confiada.

- espera… no… no lo hagas… le pedía, me sentía abusado.

Ahora ya sabía lo que sintió cielo riveros cuando en mis enojos me la clave sin reparos, apresándola contra un mueble, el baño o un árbol… se habían invertido los papeles… ahora yo era el sometido…

- ouuu…. Uhmmm… ufff… exclamaba vane con mi verga empalándola.

- uy… mierd… uggg… decía yo conteniéndome.

Vane había comenzado a brincar sobre mi verga, clavándose ella misma a voluntad… estaba como poseída, casi sentía que danzaba encima mío… por momentos con el pecho hacia mí, apoyando sus manos en mi hombro, por ratos con el tórax hacia atrás con mi verga estirada hacia abajo. Hacía de mí y mi verga lo que le daba la gana con tal de prodigarse placer.

- uhmmm… ya sé por qué a la morena le encanta esto… uhmmm… dijo enloquecida.

Yo sentía algo recorriendo mis intimidades, obviamente no lo disfrutaba pero me sentía excitado… apretaba los dedos de los pies, retorcía mi planta del pie, aguantando, procurando no soltar ni una gota de semen… se imaginan si algo se me escapaba y embarazaba a esa loca…

- oh my god… oh my god… ohhh… gemía apasionadamente cada vez más seguido.

Solo esperaba que terminase y se bajase de mi… al menos por la oscuridad tenía la certeza que esta vez no me tomaron fotos, nada que le mostrase a cielo riveros… no, parecía que lo de vane era más personal… una revancha por lo que le hice o más bien por lo que no le hice en el departamento de guille… quitarse el antojo que le dio de tenerme sabiendo que yo estaba con cielo riveros, su rival…

diablos… debí darme cuenta en la oscuridad que era ella… su vagina se sentía diferente, más estrecha tal vez… sus nalgas no eran tan suaves y carnosas como las de cielo riveros, sino más firmes y musculosas… la manera en que la mamaba… eran pequeños detalles que en mi ebriedad no note… pero aun así… no podía haber hecho mucho, después de todo… la muy perr… ¡me tenía amarrado!…

- ohhhh… uhmmm…. Gimió finalmente, contrayendo todo su atlético cuerpo.

Vane había sufrido un orgasmo propinado por ella misma, a costa de mi verga… mientras yo me sentía sucio y abusado, como un consolador andante…

- oh god… ufff… que rico estuvo… exclamo satisfecha.

- uy… sí estuvo bien… ufff… dije siguiéndole la corriente.

Tal vez, como a los locos, no hay que contradecirlos y seguirles el juego hasta que uno pueda tomar control de la situación. Al menos ya había cumplido con lo que esta caprichosa desquiciada quería…

- viste que lo disfrutaste… pero… ¿no eyaculaste?… dijo decepcionada.

- no es necesario, además la mamas de maravilla… le respondí.

Tenía la verga aun dura, me quede a medias y quería dejarlo así. Debía evitar que está loca me vuelva a cabalgar, extrayéndome mi leche, prefería que lo haga con su boca para no tener accidentes (embarazos), si se subía en mí, excitándome y yo antes de eyacular le advertía… ¿se saldría? O ¿dejaría que descargue todo en su interior para fecundarla?... No sabía hasta donde podía llegar su venganza…

- te la voy a chupar… me dijo coquetamente.

- ¡excelente!… dije aliviado.

- pero después de extraerte toda tu leche… me advirtió.

- bueno pero ya te satisfice… y yo estoy bien… puedes bajarte… le pedí.

- te voy a soltar cuando me plazca… replico vane.

- ya vane… vamos que ya fue suficiente…

- no, te dije que me harías lo mismo que a ella… ¡y me lo harás!… dijo decidida.

Mierd… vane quería servicio completo… no me soltaría hasta que le entierre mi verga por el ano, como había deseado desde que me vio empalando a cielo riveros en el baño de guille, durante la fiesta… consolido esa idea cuando vio mi verga incrustada nuevamente en el ano de cielo riveros en la oficina del profesor.

Para mi mala suerte, guille en el cuarto de al lado roncaba satisfecho de haber conquistado a vane, sin percatarse de la ausencia de ella… sin darse cuenta que la que consideraba su enamorada, estaba brincando alegremente sobre mi verga, abusando de mí a pocos metros de él.

Yo no sabía si gritar y pedir su ayuda… primero que era vergonzoso, segundo que no sabía cómo lo tomaría guille, ¿me culparía por esto?, ¿se decepcionaría de ella?… guille no era violento, pero quien sabe cómo reaccionaría con esa escena, no solo contra mí sino contra ella…

a todo esto a vane no le importaba lo que pasara, ella quería satisfacerse a como dé lugar pero a costa mía… saco mi verga de su aun mojada vagina… me dejo completamente empapado de sus líquidos. Luego se bajó de la cama… aliviado pensé que se iría y me dejaría…

se agazapo debajo de la cama… busco algo, mierd… si saca un bate de béisbol me jodi, con esta loca no se sabe… pero no, era un sobre… esta bruja vino preparada… en la oscuridad, me imaginaba que era crema lubricante lo que tenía en las manos. Lo confirme cuando vi que dirigía su mano a su trasero, embadurnándose su recientemente desvirgado ano…

quiso evitar que mi verga decayera… así que me la mamo nuevamente por unos instantes, pajeando, succionando... Una vez que la tuvo dura a su gusto… también me unto con lubricante… quería que mi verga se deslice en su interior…

hice un último intento por librarme… jale de mis amarras, pero esa bruja me había atado bien… solo me libraría con lubricante para hacer resbalar mis manos… o que ella me desate… sentía que en ese momento mis dos alucinadas opciones eran imposibles… seria abusado nuevamente…

lo bueno era que en la oscuridad no podía ver que era ella, así que no me sentí tan culpable por serle infiel a cielo riveros… en realidad no podía evitarlo, era su prisionero... Después de todo era en parte excitante que una mujer llegue a eso por tenerme… ella era una mujer muy deseable y su silueta con sus armoniosas formas me cautivaba… aparte yo tenía una incipiente resaca y andaba alucinado…

mientras tanto, vane nuevamente se iba ubicando sobre mi verga… esta vez apuntado a su ano… la ansiosa vane se fue sentando sobre mi duro pene… su estrecho esfínter no se abría tan fácilmente, apenas hizo diana la cabeza de mi pene… y ella se sentaba, desesperada por estar atorada…

- cuidado… me estas doblando la verga… auuu… me queje.

- está bien… está bien… ufff… lo hare más despacio… ouuu… dijo ella.

Nuevamente repitió la operación, con las rodillas hacia adelante, sus pies ladeando mis costillas y su enorme culo blanco bajando sobre mi entrepierna. Esta vez se controló más, relajándose y permitiendo entrar la cabeza de mi verga…

- uyyy… ya está…. Que biennn… uhmmm… dijo emocionada.

Ahora ella como experta, empezó a subir y bajar, dilatándose ella misma su ano, cada vez subía más y bajaba más… tenia media verga adentro, pero para ella no era suficiente… quería tenerla toda adentro como imagino y no me soltaría hasta que lo hiciera, no importaba si le desgarraba el ano…

- ufff… que rica verga… ouuu… uffff… dijo en un tono que me sonó revanchista contra guille

creo que a vane no le había caído del todo bien ser desvirgada analmente por guille, parecía su trauma, que un mestizo la haya cabalgado y hecho disfrutar sin su permiso. Incluso creo que al hacer todo esto también se vengaba de él. Sabía que él estaba enamorado de ella y que esto lo afectaría.

Yo no sabía si debía sentirme halagado por tener una mejor verga… porque eso dificultaría más la penetración, demoraría más que me la tire y se satisfaga…. Y ya estaba amaneciendo… guille podría despertar en cualquier momento y ganarse con ese chocante espectáculo…

- uyyy… al fin… al fin la tengo toda adentro… ufff… exclamaba satisfecha.

Su tragón ano, estaba abierto… con mi verga abriendo de par en par sus bien formadas nalgas y mi pene cual estaca atorándola como ella deseaba. Se sentó un rato, acostumbrándose a estar empalada… sentía su estrecho ano palpitar rodeando mi pene, casi ahorcándolo… y ella complacida de que así sea.

La tenue luz del alba empezaba a entrar por la ventana, ya comenzaba a distinguir bien las formas de vane… sus blancos senos con sus pezones rosados apuntándome, su pecho rociado por unas deliciosas pecas… su bien formadas pantorrillas y muslos producto del gimnasio… su mejillas coloradas por el esfuerzo, su cabello castaño cayendo sobre sus hombros, su rostro con expresión excitada…

en realidad vane era una mujer hermosa, lástima que estuviera algo chiflada… si en realidad hubiera manifestado su interés en mi antes que cielo riveros, muy probablemente esta historia tendría otro título, cambiando el nombre de cielo riveros por el de vane… rompiéndole el culo a vane…

con ese magnífico cuerpo, obviamente me hubieran dado ganas de iniciarla analmente, poseerla en más de una posición… pero ahora era solo un cuerpo con alma turbia… dudo que podría enamorarme de su forma de ser, de su manera racista de referirse a guille (mestizo) y cielo riveros (morena)… en cambio me fue fácil caer en las redes de cielo riveros, que no tenía complejos ni resentimientos…

dentro de todos los defectos de cielo riveros (celosa, impulsiva, mandona, etc.), no había mala fe en sus acciones. Cielo riveros no era capaz de conspirar contra de alguien, de por capricho obligar a los demás a hacer algo… de chantajear, de fingir querer a alguien solo para buscar vengarse de otra persona… eso si lo hacía vane y eso no la hacía deseable a mi parecer…

sin embargo a veces la cabeza de abajo se deja llevar por otros estímulos… y vane sabia como estimularlo, meneaba su bien formado rabo en mi entrepierna, incitando a mis genitales, manteniendo dura mi verga para que le diera un placer que considero incompleto con guille, porque él no era su capricho… él no era la pareja de su rival…

eso buscaba en mi tal vez, una revancha, arrebatarle el chico a una chica que no consideraba su digna rival, pero que le quito el chico en que vane se interesó… si bien le habían desvirgado el ano, no consideraba satisfecha su fantasía hasta que no fuera yo el que le rompa el culo…

- uhmmm…oh my god… que delicia… uhmmm… deliraba de placer vane.

Sus gemidos no eran tan inspiradores como los de cielo riveros, pero comenzaba a subir y bajar, esa fricción me ponía la verga a mil… por más que procurara no disfrutarlo, mi excitación iba en aumento… me deje llevar porque sabía que no me dejaría hasta que eyacule en su interior como ella tanto deseaba…

ella apuraba sus movimientos y yo tuve que unirme a los suyos, moviendo mi cadera arriba y abajo, eso la lleno más de placer, ver que yo colaboraba. Mientras yo por momentos cerraba los ojos y recordaba las excitantes cogidas que tuve con cielo riveros, en los baños, bibliotecas, coliseo, cocheras, bosque….

- ohhhh… siiiii… al finnn… exclamo vane triunfal en un tembloroso orgasmo, satisfecha de que mi leche llenara por primera vez sus tripas.

Ya había amanecido, y yo más bien, jadeante, esperaba que fuera la última vez que sucediera eso… mientras vane estaba feliz, con mi verga incrustada aun, no quería levantarse, quería seguir disfrutando de esos segundos de orgasmo…

de repente levanto la vista y miro por la ventana… sonrió sarcásticamente y moviendo su mano saludo provocadoramente… alguien nos vio… mierd… cielo riveros…
ese saludo, con sonrisa burlona, provocador solo podía ser para una persona… para cielo riveros… dudo que quisiera sacar de quicio a guille… yo de mi posición, y sin poder moverme, no podía ver mucho, solo el cielo claro del amanecer…

- ¿por qué hiciste eso?... Pregunte.

- se lo merecía… dijo fríamente.

Si era la cielo riveros ofuscada que me lanzo cosas, entraría dentro de poco a sacarla a patadas de mi habitación y de mi vida, hasta podría castrarme… pero recordé también que cielo riveros huyo cuando me quise amistar con ella el día anterior… era un enigma lo que cielo riveros pudiera hacer…

mientras yo me lamentaba mentalmente, vane se paraba, mi verga ya estaba flácida por pensar que la mujer que quería me vio con otra en pleno acto sexual, que yo apure para librarme de vane pero que cielo riveros podía entender que era porque yo también quería… y vane tranquila se limpiaba su intimidad sin mayores problemas.

Estaba con la vagina y el ano satisfecho, se había salido con su gusto y los demás no importaban… yo aún forcejeaba con las amarras y ella me miraba compadecida, sabía que si me soltaba iba tras cielo riveros o la sacaba a empellones a ella de la cabaña para que le explique a cielo riveros.

Obviamente no me desato, solo atino a taparme el rostro con un polo mío… venganza completa, para que no vea… luego solo escuche sus pasos de salida y la puerta cerrada… esta bruja perversa… maldecía yo. Esa loca había llevado las cosas muy lejos.

Yo me creía listo por haber urdido un plan para engañarla, pero ella urdió otro plan mayor… lo mío fue una treta a la que me vi obligado para anularla, protegerme a mí y a cielo riveros… pero lo de vane era un juego de venganza y revancha hacia nosotros… incluyendo a guille… pobre diablo enamorado…

le di mil vueltas en mi cabeza, pensé en explicaciones o formas de recuperar nuevamente a cielo riveros… estar así atado era una tortura que planifico bien vane… quizás lo pensó mientras regresaba a su casa con guille después que el la desvirgo y la traumo, bueno, más de lo que estaba…

no sé si estuve así minutos u horas, se me hizo eterno, mi cabeza era un desvarió por el dolor de cabeza, exhausto, por momentos dormitaba pensando que era una pesadilla… pero me volvió a la realidad el ruido de la puerta…

- ¿qué te paso?...

Era la voz atónita y casi burlona de guille, al encontrarme desnudo y amarrado… no quise responderle, inmediatamente me quito el polo de los ojos y cubrió mi entrepierna… luego empezó a desatarme…

- pensé que había visto de todo… pero uds. Son extremistas para estas cosas… bromeo guille.

Evidentemente creía que cielo riveros me había hecho eso. No le quise responder, hasta que me desatara por completo. El pobre e ingenuo guille no se atrevía a pensar que fuera vane y yo tampoco quería romperle el corazón a mi amigo, primero debía encontrar a cielo riveros.

- bueno ya sabes, se nos da por experimentar… dije disimulando mi vergüenza.

No todos los días te encuentra tu amigo en el cuarto de al lado, amarrado a la cama y desnudo, con la vista cubierta por un polo, con tus genitales empapados en líquidos propios y de una fémina.

- ¿sabes dónde está vane?... Me pregunto guille curioso.

- ahhh… no se… no deberías saber tu… respondí tragando saliva.

- qué raro… desperté y no estaba… me dijo.

- seguro salió a tomar desayuno… dije para distraerlo.

Luego me disculpe, lo deje y salí en busca de cielo riveros a su cabaña. No importaba si el cielo riverostar me rompía la cabeza con la botella que compartimos ayer. Toque la puerta y me recibió amablemente mi hasta ahora suegra… parecía que cielo riveros no conto nada… pregunte por ella y su respuesta me helo la sangre…

- salió a trotar hace un rato… con esa amiga suya… vane creo… me dijo.

- ¿sabe por dónde?... Pregunte apurado.

- creo que por la orilla del rio… por donde estuvieron ayer…

¿qué diablos se traía entre manos esta bruja?… ¿engatuso a cielo riveros también?… ¿le contaría su versión de las cosas en pleno camino?… ¿la llevaría a donde guille se la follo ayer?... ¿la metería al rio para ahogar a cielo riveros?... Todas esas dudas me asaltaban mientras salía corriendo a ubicar a ambas.

Salí presuroso en busca de vane y cielo riveros, al menos tenía la certeza que cielo riveros no confiaba en vane, que no le creería fácilmente… no después de que me presente ante sus padres como su enamorado, y que fraternice con su viejo hasta tarde... No creo que cielo riveros piense que soy tan hipócrita de ganarme a su cielo riveros para perderla por el culo de vane…

seguí el camino del día anterior… mucho antes del desvío por donde cielo riveros se estampo con el árbol (y yo la estampe por el ano), había otro desvío y este si parecía que ofrecía acceso directo al rio y sin peligro. Al parecer por ahí, el día anterior vane y guille llegaron a la rivera.

Atravesé los árboles y llegue a la orilla… a lo lejos vi la silueta de esas dos féminas en competencia, pero lucían tranquilas, ¿cuánto tiempo habría pasado desde que le conto vane? ¿ya lo habría asimilado cielo riveros?... Me acerque rápidamente… note como convenientemente vane huía… maldita zorra…

cuando estuve cerca dude… vi a cielo riveros mirando el rio pensativa… mierd… no otra vez… me dije, tanto me había costado recuperarla y ahora debía nuevamente luchar por ella… antes había sido solo un rumor de javier, ahora ella lo habría visto en vivo desde la ventana de mi cuarto, era peor…

si bien podía argumentar que estaba atado, desde la ventana y con el leve brillo del sol y quizás cielo riveros ni lo noto… aparte se notaba que apure mis movimientos para hacer llegar a vane y eyacular… pero como a pesar de todo eso… cielo riveros había aceptado salir con vane… para oír su versión o solo por masoquismo…

cielo riveros estaba nuevamente con ropa de baño, esta vez de una pieza (a lo baywatch), seguro no quería mostrar sus atributos naturales para que vane no la odie más. A un lado veía su toalla y ropa deportiva… y las huellas de la bruja de vane.

De pronto cielo riveros se dio cuenta que la observaban y volteo a verme temerosa:

- ¿cómo me encontraste?... Pregunto sorprendida.

Luego se paró, como no le respondía me observo atónita como si fuera un fantasma y después se acercó… me prepare para la bofetada y los reclamos...

- ¿qué paso amor?… estas pálido… dijo abrazándome.

Pero ¿cómo?... No estaba molesta conmigo… ¿qué había pasado?… no le creyó a vane o solo esperaba que su viejo vengara su honra… quizás vane fue por el cielo riverostar…

- ¿qué hacías con vane?… pregunte apartándola y mirándole a los ojos.

- ah… esa loca vino a mi cabaña a pedirme salir a correr, que me mostraría el rio…

- pero si se odian… ¿por qué aceptaste?... Pregunte extrañado.

- no se… parecía arrepentida… ella sale con guille… así que no quise seguir la pelea… me explico.

- ¿estás bien amor?… pregunto volviendo a abrazarme.

La perr… esa no le dijo nada, quizás esperaba estar más en confianza con cielo riveros en el rio… por otro lado, si cielo riveros estaba tranquila es porque no me vio en la mañana en la ventana de mi cuarto… ¿a quien saludaba vane con esa sonrisa de revancha?…

era seguro que no eran ni guille ni cielo riveros los que fisgonearon por mi ventana mientras atoraba el ano de vane… menos podían ser los viejos de cielo riveros sino me hubieran esperado en la cabaña para emboscarme y apalearme… tal vez ¿sería otra vez javier tomándonos fotos?...

O simplemente era que vane no vio a nadie por la ventana… que me quiso hacer creer que había alguien ahí, para dejarme con la duda de quién sería… me cubrió la vista y me dejo amarrado para que yo solo me torture pensando que era cielo riveros y todo lo que pasaría… esa fue su cruel venganza…

esa bruja estaba segura que no le contaría a guille porque era mi amigo y no quería lastimarlo, que no le contaría a cielo riveros que era mi enamorada que ya había dudado de mi… estaba cerrando el círculo alrededor mío, dejándome sin aliados… jugando al gato y al ratón… ¿qué más tramaría?...

Al inicio de todo esto, pensé que mi peor enemigo era javier… no contaba con la maquiavélica vane…

- ¿te sientes bien?... Insistió cielo riveros viéndome pasmado.

- ¿cielo riveros estas bien conmigo?... Repregunte yo.

- claro… yo te amo, tú me amas… mi mama te adora y mi papa te acepta… es lo que siempre quise… dijo sonriendo enamorada.

Mierd… en teoría todo perfecto… excepto por vane… ¿cómo se lo diría para no matar el momento?...

- y a ti ¿qué te pasa?... Me insistió.

- es solo… solo… que tuve… tuve una pesadilla… explique excusándome.

- pobrecito… también después de todo lo que tomaste con mi papa… dijo en tierno reproche.

- no quiero perderte… le dije abrazándola.

- eso no va pasar… ¿estas temblando?...

Me sentía afiebrado… no sé si por el estrés de la situación que causo vane o porque esa bruja me había dejado desnudo en la cama, en el frio amanecer…

- ven… regresemos… me dijo preocupada, alejándose a tomar sus cosas.

- no, solo abrázame un rato… le respondí tomándola del brazo y acercándola de nuevo.

Quería sentir el calor de su cuerpo… el latido de su corazón con el mío… conservar ese momento en que era mía… alejados de todo y de todos… de javier, de sus viejos, de guille y vane…

la abrace por la cintura, me incline y ella entendió, se empino un poco en busca de mis labios… tras unos cálidos y amorosos besos, la sangre me hervía nuevamente…

- te necesito ahora… le dije.

- ¿estás loco?... Es de día… alguien puede venir y vernos… mis padres… se excusó.

- vamos, ahora… le insistí.

- quizás al anochecer dany… se resistía mientras la besaba.

Para evitar mayores negativas… solo me quedaba apuntar a su punto débil… un beso en el cuello que la desarmo parcialmente… debía reforzar mi estrategia, contratacar… mis manos bajaron de su cintura y comenzaron a acariciar sus nalgas mientras continuaba besándola y por ratos iba a su cuello…

- ay diosss… eres terribleee… no se puede contigo… me decía cediendo.

Mis manos seguían estrujando sus gordas nalgas, ella que antes me abrazaba sosteniéndome, ahora parecía depender de mí para seguir en pie, completamente entregada, tenía sus piernas y su espíritu flaqueando por la excitación. La fui recostando sobre la arena,

- no danny… nos van a ver… me decía con lo poco de cordura que le quedaba.

Pero yo no iba a ceder, no la quería cabalgar salvajemente como en otras ocasiones, solo quería hacerle el amor. Sentirla mía… antes que nuevamente el karma o el destino disfrazado de javier o vane me quiten esa paz que ahora tenía con cielo riveros.

- amorrr… basta yaaa… uyyy… exclamaba satisfecha de las caricias que le daba.

La tenia recostada sobre su toalla, yo encima de ella besándola en los labios y bajando a su cuello… ella, sin pedírselo, fue abriendo instintivamente sus piernas, para que yo me ubique entre ellas. Toda su piel se erizo, sus pezones endurecieron marcando mi pecho que tenía apresado sus senos.

- danny… ¿qué me haces?... Pregunto, cielo riveros estaba en las nubes.

- te hago el amor… respondí sin dejar de besarla.

Esa respuesta fue el último estimulo que necesito para entregarse sin condiciones, la hija del cielo riverostar se rindió ante mí, el hombre que la amaba, que quería poseerla con ternura y pasión, no solo por sexo…

- uhmmm… soy tuya amorrr… respondió sometida.

Solo tuve que aflojar y bajarme un poco la bermuda, para liberar un poco mi verga… ella no iba a esperar a que le quite la ropa de baño conservadora de una pieza que tenía… solo debía hacer a un lado el borde inferior de su ropa, liberando su pubis, su húmeda vagina.

- hazlo amorrr… hazlooo… ohhh… me pedía ansiosa.

No tuve que decir más, mi tiesa verga se deslizo en su interior… ella de solo recibirla se estremeció. Era fantástico, su entrega, sus besos, sonrisas, ojos brillosos… era sin duda, diferente… hacíamos el amor…

- ohhh… uhmmm…. Ahhh… gemía excitada en mi oído.

Mientras yo la penetraba pausada y armónicamente, disfrutando su piel, su interior, su cuerpo… sus senos eran un incentivo al sentirlos subir y bajar por sus jadeantes respiraciones… si me deleitaba acariciando sus nalgas y su rostro, porque debía excluir sus redondos senos…

- uhmmm… ¿qué haces?... Ohhh…. Preguntaba excitada, seguro no quería que me distraiga.

Baje una de las tiras de su ropa de baño, a través de sus hombros hasta liberar uno de sus senos, me dedique a acariciarlo mientras ella se estremecía… lo tomaba con toda la palma de mi mano, luego mis dedos jugaban con su pezón… hasta que me di tiempos de bajar mis labios y succionarle el seno…

- ayyy… dios… nooo… dijo llegando al cielo.

Fue un refrescante orgasmo a la orilla del rio, su cuerpo tembló de placer, respirada ahogadamente y me abrazaba con fuerza, de cuando en cuando me daba besos agradecidos. Yo no había llegado aún, con todo lo que me exprimió ayer cielo riveros y hace unas horas la loca de vane, sería difícil para mí llegar…

tampoco me importaba no haber llegado al orgasmo, no haber eyaculado, total había hecho feliz a cielo riveros, ver su entrega y reacciones era un espectáculo maravilloso para mi… me sentía por ese lado satisfecho… pero ella no pensaba igual…

- uyyy… ¿qué paso?... ¿te falto mucho?... Pregunto al notar que no vote nada.

- no… no importa… le dije.

- no mi amor… no te puedo dejar así… me dijo comedida y avergonzada

cielo riveros quería satisfacer a su hombre, solo que su vagina estaba aún muy sensible tras su orgasmo… pero muy diligentemente me ofreció su ano para que lo disfrute y llegue yo también… como no amar a esa mujer que me ofrecía todo para complacerme…

- ven acá…. Sé que te gusta darme por atrás… dijo alejándome un poco.

Bueno no solo a mí me gustaba darle por el culo viendo sus gordas nalgas rebotar y tomando su estrecha cintura… a ella también le fascinaba eso… al final, ella no solo lo hacía por mí, cielo riveros también ganaba cuando la sometiera…

- ¿me quieres así?... ¿en cuatro?… me dijo ofreciéndose ansiosa.

Mientras cielo riveros se ponía de rodillas, con los codos en la toalla, empinaba el trasero, casi retrocediendo para animarme a incrustarle mi verga por el ano. Yo aun gratamente pasmado por su entrega, no reaccionaba, solo atinaba a contemplar maravillado su gran culo en medio de la naturaleza, con el rio a un lado y con los arboles al otro lado.

- vamosss… ¿qué esperas?... Me apuraba ella, meneando el rabo.

No podía hacerla esperar más, tampoco quería abusar de mi suerte y que alguien más viniera al rio. Mi verga seguía aun tiesa, mi ánimo cariñoso del primer encuentro se tornó en instinto carnal salvaje, esa mujer me despertaba ambas sensaciones… podía ser mi amor y mi puta…

- ouuu… que desesperado… ouuu… se quejó ella.

No era para menos, ante sus apuros y reclamos, no le di tiempo de acomodarse más, simplemente me la clave con fuerza, como para que sepa quien mandaba y que no me apurase… ella ya había tenido su orgasmo, ahora me tocaba a mi…

- no… no tan fuerte… ohhh… se quejaba ella.

Mientras yo embelesado con su gran culo, sus redondas nalgas temblando, quería borrar la imagen de vane saltando sobre mi verga… mierd… ¿por qué justo ahora tenía que recordar a esa zorra?… y empecé a meter y sacar mi verga a un ritmo despiadado para exorcizar el recuerdo de vane…

- no… no… me estas partiendo… ahhh… casi chillaba.

No me daba cuenta que estaba castigándole el ano cruelmente, cielo riveros no tenía la culpa de mis enredos, de mi forma de enganchar a guille con vane para evitar su venganza, y de que esta última se haya cobrado revancha conmigo…

- basta… amor… bastaaa… casi chillaba.

- lo siento… amor… dije volviendo en mi.

Lejos de estar molesta como en otras ocasiones cuando me la clave salvajemente, esta vez cielo riveros lucia mas comprensiva… quizás por el enredo mental que noto que tenia, quizás porque ahora si eramos pareja… lo cierto es que lejos de recriminarme, ella aun de rodillas se incorporó un poco… pensé que mi festín había terminado… pero aún seguía con mi verga atándola por el ano y remangándose con su acción.

Giro levemente… me jalo como para decirme algo… yo aturdido y algo avergonzado no atinaba a decir nada, solo me dejaba llevar por ella… solo que no me dijo nada, solo me dio un cálido y jugoso beso que hasta me hizo soltar una gotita de leche en su ano…luego se alejó y sonrió al sentir ese efecto, me dijo:

- déjame que yo lo haga…

luego volvió a su sumisa posición en 4 patas, empinando su delicioso trasero y ella misma fue insertándose mi verga, armónicamente haciendo rebotar sus gordas nalgas contra mi ingle, tomaba ritmo y lo hacía cada vez con mayor rapidez propia de su creciente excitación…

- ohhh siii… que rica verga tienes… exclamo lujuriosa cielo riveros.

Por segunda vez en pocas horas, me sentía como un consolador andante, como si fuera un árbol a la que una perra o gata se arrima para quitarse una picazón… solo que esta vez era una picazón anal… hasta el momento me había deleitado viendo sus rechonchas nalgas rebotar, sintiendo esa cálida frotación en mi verga… me sentía cerca al clímax… pero quería que fuera a mi modo…

- ayyyy…. Si mi amorrr… asiii… ohhh… festejo cielo riveros.

La había tomado nuevamente por la cintura, tomando el control de su enorme culo… le excitaba sentirse controlada, sometida… volteó a verme con expresión satisfecha y lujuriosa… pero yo no le había dado permiso… en mi calentura la tome del cabello y empecé cabalgarla torciéndole la espalda…

- ohhh… uhmmm… ufff… vocifero cielo riveros desahogando su segundo orgasmo.

No pude contenerme en esa posición, los gemidos de cielo riveros y la manera en que se retorció de placer me hizo perder la compostura y desahogue toda mi leche esta vez en el agujero indicado… en el ano de mi enamorada, de cielo riveros y su escultural cuerpo…

- asuu… ufff… clame casi avergonzado porque no terminaba de vaciar mi leche.

Caí deshecho sobre la espalda de cielo riveros que jadeante me soportaba, hasta que tampoco pudo y su pecho se apoyó contra el suelo… unos minutos después el ruido de unas ramas nos quitó la paz…

- diablos… exclame.

Podía ser cualquiera… su madre sabía que estaba en el rio, si la suegra sabia… sabia el suegro…si el cielo riverostar engorilado… saque mi verga como pude, y cielo riveros a su vez giro… terminamos de alguna forma tapados pero enredados por la toalla en la arena… hasta que al fin pude ver el panorama completo y descubrir quién nos importuno…

- palomas de mierd… suspire aliviado

- jajaja… sonrió cielo riveros… que no nos bombardeen nomas….

Quizás hicimos mucho ruido en nuestro ritual amatorio… tanto que asustamos o excitamos a algunas aves que salieron volando de entre las ramas… pero no había que confiarse, sus padres podrían buscarla o cualquier pareja joven como nosotros en un paseo romántico… igual el desbande de esas palomas podía indicar la presencia alguien cerca…

nos alistamos… al menos para guardar apariencias… después de tremenda agitación y lo poco que dormí por culpa de vane, me moría de sueño… pero también me moría de hambre, no había desayunado… el sonido en mi estómago alerto a cielo riveros que solo había tomado un jugo por salir a trotar…

entonces decidimos regresar al restaurante a comer algo… al menos nuestro libido estaba satisfecho… aunque no del todo…

- te confieso algo… me dijo cielo riveros intrigante tomando sus cosas.

- ¿qué cosa?... Pregunte desconfiado, pensando en vane.

- después de lo que me hiciste contra el árbol el otro día, mientras me apresaban las ramas…

- ¿sí?... Pregunte, pensando que se venían las quejas.

- sigo pensando en eso de que me amarres como a vane… me pedía ansiosa.

- ahhh… ok… jajaja… dije tragando saliva mientras recordé como vane me amarro.

Luego por un momento tuve la sensación que alguien nos observaba, intentando fallidamente quedar oculto entre los árboles y arbustos… conocía esa silueta… era femenina… pero no era una mujer cualquiera…

no era la madre de cielo riveros, pero no… era esa arpía… era vane que parecía haber estado fisgoneando como le rompía el culo a cielo riveros, ahora entendía porque las aves salieron volando de esa zona… ¿que tramaría esa loca ahora?...
En la cabaña había dejado a guille sumido en pensamientos, quizás en dudas por lo que vio. ¿estaría sospechando?¿se le habría antojado la misma situación?... O quizás la imagen de verme amarrado quizás le trajo a guille recuerdos de su depa, cuando vane era la amarrada.

- guille, me llevas a mi casa por favor… le había pedido vane avergonzada en aquella ocasión.

Guille bajo con ella al estacionamiento. Vane estaba nerviosa, contrariada, por momentos temblorosa, había sido una terapia de shock la que se le impuso. Por momentos lucia ida, guille quería direccionarla al auto o quizás confortarla con su mano en su hombro… pero vane reaccionaba huyendo.

Evidentemente guille al notar lo turbada que estaba también sintió remordimiento, lo audaz que sonó aquel engaño para neutralizar a vane, también tuvo consecuencias. Solo habíamos pensado en como bloquear sus chantajes, pero no se nos ocurrió como reaccionaria, como la afectaría. Olvidamos que a pesar de todos sus arranques, vane también tenía sentimientos.

Subió al auto, vane por instinto se sentó detrás… quizás acostumbrada a que cuando ella no manejaba, lo hacia el chofer de la cielo riveros, un mestizo como guille. Esta vez el entendió la situación, no se molestó, solo le pidió amablemente que lo acompañe adelante, total más de lo que le hizo en el departamento no le podía hacer ya en el auto.

Ella acepto, pero apoyaba su hombro contra la puerta, tomándose la cabeza con la mano y su brazo apoyado en el espejo. Estaba pensativa, tras intentar conversar con ella sin mayor respuesta, guille decidió dejarle su espacio. Hasta que al fin pareció reaccionar:

- ¿por qué siempre eras bueno conmigo?... Pregunto vane saliendo de su mutismo.

- y ¿por qué no debía serlo?... Replico guille.

- porque… no lo sé…

en el esquema mental de vane, seguro bajo lo que le inculcaron, los mestizos solo eran buenos cuando querían algo a cambio. Obviamente guille no quería ningún tipo de favor o retribución económica de la niña rica, en principio quería su amistad y quizás ganarse su cariño porque le atraía vane.

- lamento haberme distanciado de tu amistad… le dijo sinceramente.

- no te preocupes… respondió guille compungido.

Luego le explico que varios de sus amigos (blanquitos) habían notado que guille se le pegaba mucho y algún comentario se les escapo en su casa. Su abuela al enterarse puso el grito en el cielo y vane para evitarse problemas, comentarios, decidió alejarse.

Si bien vane podía lucir independiente para muchas cosas, aun la unía esa especie cordón umbilical con su cielo riveros. Guardaba gran respeto por su abuela, porque ante la ausencia de sus padres ella prácticamente la crio, esa anciana descendiente de los alemanes de la segunda guerra mundial. Así vane durante su crianza a manos de ella asimilo varios de sus complejos nazis.

Obviamente las explicaciones de vane, enterarse de todos sus traumas y complejos, tampoco le hacían mucha gracia a guille… evidentemente ella no decía las cosas de mala fe, pero eran chocantes para guille notar como era visto por su abuela y amistades, así como, en parte, por la misma vane.

- mejor no digas más… ya me di cuenta como me aprecian en tu entorno… dijo guille.

- pero yo no soy así…

- uno es lo que hace, no lo que dice… replico guille.

Vane se dio cuenta que en realidad sonaba feo discriminar a la gente, seguro era partidaria en contra, hasta daría discursos. Sin embargo su manera de actuar se contradecía con lo que decía, alejo a guille solo para estar bien con sus amigos y su abuela.

- entonces… no quiero ser así… dijo vane nuevamente llorosa.

En este punto vane estaba confundida, entre sus caprichos, lo que creía correcto, lo que le inculcaron, lo que sucedió y con quien. Guille procuro entenderla y no abrumarla más pidiendo explicaciones.

Solo después vane recordó lo que le pidió a javier, que aprovechara su encuentro conmigo para tomarnos fotos. Recordó su venganza y a lo que nos llevó y comenzó a arrepentirse, quiso cortar esa cadena de revanchas… pero era muy tarde para advertirme.

Luego sucedió lo ya sabido, vane intento congraciarse con nosotros, llamo a cielo riveros para disculparse, luego guille le pidió que nos acompañe y fue a su casa donde me esperaron. Ante mi cara de decepción por su presencia, vane en el camino al club se dedicó a retomar su amistad con guille.

Ya en el club, guille aprovecho la situación para profundizar su amistad en todo el sentido de la palabra, sobre todo en el rio. El pobre guille intento llevar a vane por algunos rincones del club sin mayor suerte, vane no era tan tonta y se daba cuenta que la situación del día anterior lo había dejado con ganas de más… pero ella no estaba segura si deseaba lo mismo.

Estuvo esquivando cada propuesta, cada insinuación… hasta que guille se dio maña, gracias a mí también, ya que me vio persiguiendo a cielo riveros por ese camino de tierra. Le hizo ver a vane mis intenciones y eso dio cabida a que nos siguieran… no con la misma rapidez, para darnos nuestro espacio.

Así que en el camino, guille la desvió del buen camino… creo que ya lo había hecho la noche anterior, y creo que vane no andaba por el buen camino desde que me vio con cielo riveros en el baño… en fin, el asunto es que guille vio su oportunidad en el primer desvío del bosque, y vane cayo redondita.

En el camino la mantuvo distraída con conversaciones que ni el mismo recuerda, solo sabía que su corazón latía fuerte, con ansiedad de volver a poseer a esa blanquiñosa engreída que lo traía loco. Por momentos también tuvo temor de como reaccionaria ella si el intentaba nuevamente sodomizarla…

en menor medida guille tenía algo de temor…. Porque no sabía dónde mierd… estaba ni a donde ir… si bien había ido al club un par de veces, pero le tenía cierta fobia a los bosques. Me conto que cuando era niño hizo un viaje cielo riverosr a la selva, y en el camino al hospedaje en el medio de la selva una pequeña culebra le cayó de una rama, eso dice su padre, si le preguntan a guille les dirá que fue una anaconda.

El asunto es que poseer nuevamente a vane, esta vez esperaba que sea por voluntad propia de ella, lo tenía con la adrenalina al máximo que se arriesgó a adentrarse al bosque, claro que evitando chocar con ramas…

- ¿te pasa algo?... Pregunto vane viéndolo un tanto paranoico con los sonidos del bosque.

- no… nada… estoy bien… replico guille, disimulando mientras sudaba.

Vane quiso distraerlo, pero quizás no eligió el tema de conversación adecuado:

- hace cuanto que dany y tu son amigos…

- desde que empezamos la universidad… respondió guille algo incómodo, no la llevo a esos parajes para hablar de mí, sin embargo era el buen guille y agrego: …es buen amigo.

- y ¿desde cuando sale con cielo riveros?...

- me parece que hace no mucho, pero creo que lo engancho… dijo guille viéndome enamorado.

- si lo vi en el baño… dijo con mueca graciosa vane recordando cómo nos vio.

- jajaja… no me refiero a eso… creo que cielo riveros hizo que se enamorara de ella… dijo guille, en parte también para quitar a vane la idea de que aun yo seguía disponible.

- si, nunca lo vi con una chica en la facultad… siempre amable, caballeroso, pero perfil bajo… como si ocultara algo… ahora se atreve a pelearse con javier frente a todos por ella… dijo vane.

- bueno, él tuvo un amorío complicado con una chica parecida a cielo riveros… dijo guille y dándose cuenta que no le correspondía hablar más de mi intimidad, prefirió no continuar.

- oh… ya veo… asintió vane, quizás dando sentido a mi predilección por cielo riveros en vez que a ella.

- si creo que las morenas son su debilidad, lo vuelven loco… afirmo guille como para sentar la idea a vane que se olvide de mí, que no era mi tipo.

No la había llevado en medio del bosque, venciendo sus miedos y en busca de en un romántico atardecer para hablar de su amigo con la chica que le gustaba. Guille quería crear su oportunidad y el destino se la dio…

- wow… que hermoso paisaje… exclamo admirada vane.

Habían llegado a la rivera del rio… la arena empezaba a lucir naranja por la puesta del sol entre las montañas, era un paisaje verde surcado por un rio tranquilo, un clima tibio con una brisa refrescante.

- sentémonos un rato… dijo guille, haciendo su jugada.

- pero… cielo riveros y dany… replico vane recordando porque habían ido allá.

- ya aparecerán… respondió guille.

Al final vane en el fondo sospechaba lo que se venía, dejo las cosas fluir o que guille las hiciera fluir a su modo… al final guille fue una de las pocas personas que la trato con cariño y respeto, sus amigos por demás eran muy confianzudos y más de uno intento embriagado caerle a la mala en alguna reunión.

- me preguntaste porque te trataba bien… dijo guille adivinando sus pensamientos.

- sí... Replico vane sabiendo que se venía una declaración.

- me gustaste desde la primera vez que te vi… en realidad si soy gentil con las chicas, pero contigo me nace ser más amable, cariñoso…

- ¿pero que tengo yo que te guste?... Pregunto vane, iba más allá de lo físico y guille lo entendió.

- eres inteligente, amable, graciosa… solo que cuando estas con tus amigos te transformas… no eres tu… te dejas llevar… y…

- lo se… lo se… lo siento… no quiero ser así, ya no… dijo vane, tapándose el rostro queriendo sollozar de nuevo.

Entonces guille busco que reconfortarla… alejo sus manos, vio su rostro enrojecido con la algunas lágrimas y los ojos entrecerrados mirando abajo, ella siendo altiva en las ultimas semana sentía vergüenza que la vuelva a ver así, como una mujer débil… guille aprovecho el momento y la beso…

vane en ese momento quería sentirse querida, valorada y las palabras de guille alabando sus cualidades le daban a entender que el veía más en ella que su rostro o su cuerpo… él la trato bien, y si estuvo equivocada eligiendo chicos que no la querían… que de malo tenía en darle la oportunidad a alguien que si buscaba su amor…

- ¿qué haces?... Pregunto vane ofreciendo algo de resistencia, mientras guille comenzaba a acariciarla por debajo de la ropa.

- tenerte de la manera correcta… con amor, como te mereces… replico guille entre jadeos.

Aquella respuesta termino por desarmar a vane, que fue dejándose caer de espaldas sobre la arena, mientras guille se posicionaba encima de ella, sin dejar de besarla… vane aun no preparada mentalmente para seguir esa situación, seguía con los ojos cerrados, igual que la vez anterior, solo quería sentir… sentirse amada…

vane llevaba una blusa suelta y una falda también holgada, después de vestirse el día anterior como prostituta de lujo y viendo lo que causo las veces que se vistió así, ese día prefirió vestirse como antes, nada llamativa… aun así guille ya sabía lo que había debajo de esas fachas…

mientras guille aun ansioso y tembloroso pugnaba por desabotonarle la blusa, mientras que vane instintivamente le jaloneaba la correa. él le subió presuroso la falda, mientras ella le bajo un poco el pantalón y su verga salió disparada, empapada en sus líquidos por su ansiedad, que a su vez hizo que le ladeara la ropa interior de ella.

- ouuu… uhmmm… gimió vane al sentir la verga mestiza del apurado guille metiéndose en su aun poco lubricada vagina.

Guille se la empujo con rapidez lo más que pudo, no quería que vane se arrepienta, que dudase y se le escape… así que le zampo media verga sin miramientos… ella se estremeció adolorida, pero no quiso oponerse, en parte porque le gustaba sentirse deseada y en parte por temor a como reaccionaria guille si lo rechazaba.

- más despacio… si... Le pidió ella mordiéndose los labios.

A tanto había llegado el frenesí de ese momento para guille, que sentía que no tardaría en venirse… una cosa era someterla analmente cuando ella no se daba cuenta que era el por estar amarrada, pero ahora era diferente… la tenía como él quiso desde que la vio… por las buenas, con cariño, con su consentimiento, con su entrega… con ese paradisiaco paisaje... Era perfecto… mejor de lo que imagino…

- si… asiii… oh my god… uhmmm…

ahora guille se movía más armónicamente, se había acomodado mejor sobre ella… intento dominar su mente para evitar venirse precozmente. Intento no pensar en aquella humedad que vane le ofrecía, producto de su excitación, procuro no prestar atención a sus gemidos satisfactorios.

Solo había una cosa que le molestaba a guille… vane seguía con los ojos cerrados, disfrutando eso o tal vez pensando que alguien más se lo estaba haciendo… en ese momento su mente le jugó una mala pasada… comenzó a recordar porque se iniciaron las cosas, era por la vane que lo desprecio y que estaba tras su amigo danny, tanto que lo chantajeo para estar con ella… eso lo enojo…

- ¿por qué no me miras?... Le pregunto ofuscado.

- ¿que?... Exclamo van, abriendo los ojos y saliendo de su trance, ver a guille molesto la asusto.

- estas pensando en el ¿verdad?... En danny… dijo guille penetrándola fuertemente.

- no… no… guille… no es asiii… cálmate… le rogaba vane.

él estaba endiablado, poseído por la ira… también estaba cansado de ser el segundón, así como vane no era prioridad para mí, sentía que ella no lo tomaba como prioridad a el… que era su premio consuelo, su peor es nada… no quería sentirse así, también quería su venganza… dejo de ser el buen guille…

- te daré algo para que pienses en mí…. Le dijo furioso.

- nooo… se quejó vane adivinando lo que venía.

Guille le levanto la cintura a vane rápidamente, ella quiso contraer sus nalgas para evitar su arremetida, pero fue muy tarde, el envión brusco que hizo guille la tomó por sorpresa… guille lo hizo para tener su ano a su merced… y lo consiguió… luego simplemente se la clavo bruscamente…

- ahhhh…. Ohhh… exclamo vane sollozante por el dolor.

Con la verga incrustada de guille en el ano nuevamente… vane reacciono instintivamente apretando sus músculos, pero era tarde, ya la tenía atorada… y más bien apretar no solo le causo dolor a guille sino a ella también… comprendió que no podía hacer nada… dejaría que la someta …

- ves… mira… es mi verga la que te hace feliz… decía guille febril.

- siii… siii guille… eres tu… decía vane siguiéndole la corriente, intentaría calmarlo.

- míralo... Replico guille casi obligándola.

Guille quería que vane levante la cabeza y pudiera ver hacia abajo, en su entrepierna, como se unían, como su mestiza verga entraba y salía infructuosamente de su hasta hace poco el virgen ano. Era la primera vez que ella veía ese espectáculo, la vez anterior guille la había sometido por detrás. La imagen de ahora fue llenando su morbo, esa oscura herramienta la estaba sodomizando otra vez.

- ohhhh… goddd… uhmmm… asiii… exclamo vane.

Ella que inicialmente había sufrido su arremetida, que había clavado sus uñas en la espalda de guille, cosa que él no sintió por la adrenalina… ahora vane relajaba sus manos, sus dedos que antes hacían puños, ahora comenzaban a acariciar su espalda… el mestizo la estaba sometiendo otra vez y le agrado.

- ¿te gusta?... Se atrevió a preguntar guille, menguando su enojo al ver que vane lo disfrutaba.

- cállate y bésame… le replico vane, que también parecía de armas tomar.

Guille empezó a besarla como enamorado, tiernamente… pero vane no quería eso, lo tomo prácticamente de la nuca y lo jalo hacia su rostro. Mezclaba sus gemidos y jadeos con la sorprendida lengua de guille, que prácticamente se estaba ahogando.

- espera… decía guille, que ahora no podía contener la fiera que había despertado.

- ohhh… más rápido… más fuerte… uhmmm… le exigía a su vez vane.

Si él podía martillarle sus blancas nalgas con su mestiza ingle, clavarle su oscuro miembro hasta sus entrañas por su pequeño agujero… ella también se creía en derecho de disfrutarlo a su manera, con besos salvajes, con sus manos jalándolo hacia ella, apurándolo en sus movimientos para que le dé más…

- ohhh yesss… ohhh yesss…. Yaaaa casiii…. Uhmmm… exclamo finalmente vane.

Guille que llevaba un rato conteniéndose, temía que si se venía antes de tiempo vane lo golpearía, así que por fin pudo relajarse y eyacular en la tibia y estrecha cavidad de vane. Guille también quiso durar para no dejar una mala impresión, quería sentar su propia huella para no ser comparado luego.

- ohhh… ufff… resoplo guille cansado.

Se dejó caer parcialmente sobre vane… que también respiraba dificultosamente. Poco a poco la verga flácida de guille comenzó a salirse del enrojecido y maltratado ano de vane.

- uyyy… apártate, me vas a manchar… dijo ella haciéndolo a un lado.

La leche caliente de guille comenzaba a salir por el esfínter de vane, ella recogió su falda y el semen comenzó a caer en la arena. Su ropa interior estaba jaloneada a un lado, estirada, la liga ya no le ajustaría… vane lo entendió y se la quitó, usándola para limpiarse…

guille a un lado, echado de espalda, aun recuperaba su respiración, quizás esperando como la vez anterior, que vane en un ataque de locura pasional le limpie la verga…

- ya estoy… vístete… está oscureciendo… le pidió vane, matando la fantasía de guille.

Había sido un encuentro raro, empezó con una vane sumisa y termino con la chica altiva y mandona que era por momentos. Guille pensó que era su manera de protegerse para evitar sentir algo, para cuidarse.

Vane sabía que guille esperaba una succión, pero para ella no era habitual hacerlo, era suficiente para un día, se dijo. Tampoco sabía que vendría después, en parte lo dejo hacer para resarcirlo de lo que le hizo, en parte para sentirse amada… lo disfruto, le gustaba que el la adorara como en el curso cuando hacia todo por complacerla… pero sentir algo más por el… más allá de los traumas en su casa o lo sucedido… vane en realidad no sabía si lo quería de verdad.

Viendo a guille un poco resentido por su mutismo y aislamiento, incluso la forma mandona en que lo volvió a tratar… vane nuevamente se sintió culpable y que debía ser más amigable con él. Por momentos ella llego a sentir que guille era la chica de esa relación, porque lo veía más sensible… así que se le pego y le converso, el paso su brazo sobre su hombro y ella lo dejo.

Sin recordar que fueron so pretexto de buscarnos terminaron ahí, comenzaron su camino de regreso entre los árboles. Guille nuevamente por momentos ansioso, no solo por el bosque sino por pensar en el futuro, que tendría que enfrentar a la cielo riveros de ella y sus amigos. Al menos sus pensamientos denotaban que era bastante optimista de lo que pasaría de ahí en adelante.

Así, tras entregarse a guille en la ribera del rio al atardecer, en una escena por demás romántica y que quedaría en el recuerdo de ambos, de manera diferente en cada caso. Era la segunda vez que vane estaba con guille íntimamente, la primera vez conscientemente.

Es por eso que vane le asaltaron algunas dudas a vane sobre lo sucedido el día anterior, cosas que no se atrevió a preguntar en el momento por lo vergonzosa de la situación, pero que ahora en más confianza se animó a preguntar… lástima que no fue para bien…

- a todo esto, ¿de quién fue la idea de amarrarme?… pregunto vane curiosa.

- fue idea de danny… replico guille.

- pensé que había sido tu idea…

- bueno, en realidad él tenía la idea en bruto y yo le ayude a pulirla con detalles… agrego guille que no quería parecer manipulado por mí.

Quizás le habría parecido todo bien hasta ese momento, había asimilado la idea de que guille en su despecho por no tenerla había ideado poseerla y que aprovechando la coyuntura mía con cielo riveros, guille propuso esa solución, más que por salvarme a mí, por su amor a ella.

De pronto no le cayó tan bien enterarse que guille había sido usado por mí, para mis motivos, en parte su ego herido de que el amor por ella no fuera la causa principal de ese engaño. Tal vez ahí volvió a nacer ese resentimiento, odio, de no ser tomada en cuenta, así como sus padres tampoco la priorizaban.

Nuevamente se activó la peor versión de ella, otra vez planearía su venganza en con la persona que le arruino sus fantasías, que le negó lo que vane creía que le correspondía. Esta vez solo se prometió que sería la última vez que se vengaría… se daría su revancha y ahí quedarían las cosas… al menos para ella.
Vane me había sometido en la cabaña, aprovechando mi cansancio y el de guille, se escapó de la habitación que compartían con sigilo. Las sogas no fueron difíciles de hallar, las obtuvo de una vieja hamaca que estaba a la entrada de la cabaña, pero que nadie usaba.

Ahora que lo recuerdo, entre mis sueños sentía que me movían, pero dado mi mareo y cansancio no le preste importancia, ya que ebrio suelo cambiar seguido de posición en la cama al dormir.

El resto es sabido, vane prácticamente abuso de mi… o según ella se cobró su revancha, venganza, como quisiera llamarlo ella para justificar su ego herido de mujer, de hija y todos los demás traumas que tuviera por no ser la primera opción de su entorno… al final se las desquito conmigo.

Tras buscar a cielo riveros y poseerla en el rio, y ver que vane aun nos fisgoneo… yo no quería cruzarme con ella en el camino. No sabía cómo actuar, aun no digería toda la situación. Así que entretuve un rato a cielo riveros en el camino y no fue difícil, con lo satisfecha que estaba tras sus dos orgasmos, se había puesto cariñosa y cada cierto tiempo me colmaba de besos y abrazos en el árbol que más le gustara.

Al retornar al club fuimos directo al restaurante a desayunar, yo iba medio paranoico viendo cada cierto tiempo a todos lados, esperando que vane aparezca y me malogre el día y quizás la vida, puede sonar dramático pero recuerden que mi suegro cielo riverostar podía dejarme invalido.

- ¿qué te pasa? Estas distraído… ¿esperas a alguien?... Pregunto cielo riveros notando mi ansiedad.

- no… es solo que… no quiero… (no quiero ver a la perra de vane, pensé)… no quiero decir algo fuera de tono y que tus padres me sorprendan… seria vergonzoso… dije inventando cualquier tontera.

- jajaja… ah sí… y ¿qué me querías decir?...

- palabras cariñosas, bromas sexuales, sucias, etc… dije y vi cómo se sonrojaba.

- déjalo para la noche… dijo sonriendo coqueta y pasando su pie por mi entrepierna

afortunadamente el mantel de la mesa cubría todo, y su desnudo pie hizo una maniobra sobre mi verga, que llego a soltar una gotita de leche ante tan audaz maniobra, robándole otra sonrisa.

- además… no te preocupes mis padres seguro ya desayunaron y no vendrán por aquí.

Me relaje un poco, si se armaba un escándalo al menos sus viejos no estarían. Vane no aparecía, guille tampoco. Creo que el escandalo no era una opción para vane, tampoco querría quedar como mujerzuela en el club, pero estoy seguro que algo tramaba. Era como un juego de ajedrez, solo me quedaba esperar que ella hiciera su siguiente movimiento y ver como contrarrestarlo.

Pero el siguiente movimiento lo hicieron los viejos de cielo riveros… al ir a su cabaña, ella me hizo pasar y encontramos a sus viejos haciendo maletas. A mi aun suegro le asignaron un trabajo de emergencia, un personaje político quería irse de vacaciones y necesitaba guardaespaldas… trabajo es trabajo…

la mama de cielo riveros tenía consulta médica al día siguiente y quería ahorrarse el estrés del viaje a la ciudad a última hora… y cielo riveros, bueno, quería quedarse en el club conmigo… solo había un pequeño detalle… tendría que convencer a sus viejos que la dejen con el enamorado que recién conocían…

era una conversación cielo riverosr, así que me hice el desentendido y salí de la cabaña a esperar el veredicto… minutos después se abrió la puerta, sonreí pensando que era cielo riveros… mi expresión cambio al ver la silueta oscura del gigante de casi 2 metros con cara de pocos amigos…

- hablemos… me dijo a secas.

- si señor… respondí siguiéndolo, mientras veía que por las cortinas se asomaba cielo riveros.

- lamentablemente en mi casa se practica la democracia… 2 votos a 1, la madre es convincente y rara vez le niego algo a mi hija… ella se queda un día más, además ya estaba pagado...

- entiendo señor… dije con una leve sonrisa que no pude evitar y que él me borro al instante.

- no, no entiendes… conozco gente aquí, me tendrán informado si te ven rondar esta cabaña… recuerda que ahora conozco tu apariencia y tu nombre… comete un error y me encantaría salir a cazarte y provocarte dolor… ahora si… ¿entendiste?... Me dijo con fuego en los ojos.

- está claro señor… dije tragando saliva y sudando por donde no sabía que podía.

- ahora dame la mano y sonríe, disimula para las espectadoras en la ventana… dijo sonriendo.

Me apretó con inusual fuerza y resistí lo más que pude, me soltó cuando escucho la voz de cielo riveros en la puerta… su padre nos dejó un rato. Mientras la sangre volvía a mi mano, cielo riveros me dijo que los ayudaría a hacer maletas, que almorzaría con ellos (en cielo riveros, no me opuse) y que en la tarde nos veríamos.

Yo también debía regresar a mi cabaña a asearme, aunque en realidad no quería… quería evitar a vane y guille, pero no tenía salida, mis cosas estaban allá. Entre con sigilo, escuche sus risas en el cuarto de al lado… había que reconocerlo, era buena actriz, no solo eso, sin remordimientos…

procure no pensar en ellos más de la cuenta, me duche y caí rendido en la cama. Bueno, antes revise si no habían sogas a lado de mi cama, le puse seguro a la puerta y ventanas, para evitar otra visita de vane. También por si acaso mire en el closet y debajo de la cama, por si esa bruja se escondía ahí.

Creo que me sugestione pensando en vane, al final soñé con ella… al inicio la imagine algo así como gollum, el atormentado personaje del señor de los anillos, con sus cambios de actitud, por momentos gentil por momentos macabro… yo era como su precioso anillo que quería pero a la vez detestaba…

luego se volvió sexual… yo la sometía analmente y me gustaba, ni ella estábamos amarrados, lo hacía libremente por mi voluntad. ¿sería a manera de castigo por lo que me hizo? O ¿sería porque inconscientemente deseaba hacerlo?... Esas dudas me asaltaban en mi sueño.

Aquello tenía algo de sicielo riverostud con el sueño que tuve con mi ex, viviana, cuando le clavaba mi verga desde arriba y ella en 4 lo resistía sufridamente, llorosa… en cambio en este sueño era vane quien disfrutaba esa posición y me pedía más… vane y vivi eran parecidas, de piel clara, estatura similar, cabello del mismo color… solo que vivi tenía cuerpo de modelo y vane era mas carnosa…

sería que ese sueño era un presagio, que en mi mente vane era una versión mejorada de vivi, es decir, bonita, inteligente, buena cielo riveros y a la vez una golosa sexual como cielo riveros… ese pensamiento me trajo de vuelta a cielo riveros a la cabeza y me sentí culpable de soñar con esas cosas… quería despertar…

- mierd… desperté sudando, aturdido y con una floreciente erección.

Ya estaba oscuro, ¿cuánto dormí?... Oí un golpeteo, vi la puerta y no era eso… gire a la ventana y vi a cielo riveros tocando el vidrio asustada… ¿ya le habría ido vane con el chisme?... Abrí la ventana y le dije que fuera por la puerta, al parecer no había nadie. Cielo riveros me conto que vio a vane y guille por la piscina.

Le conté que por cansancio caí rendido, creo que cielo riveros tenía otras intenciones… pero tras lo sucedido con vane ahí y el sueño que tuve, ese cuarto estaba maldito para mi… no me podría concentrar, y pensar en ir a su cuarto era tentar mi suerte… su viejo prácticamente me amenazo para no acercarme ahí…

al final el sonido de mi estómago vacío mato toda pasión, terminamos yendo al restaurante, no había almorzado y me moría de hambre, ya eran más de las cinco. Cielo riveros comió algo ligero, se la notaba un poco aburrida… el inicio del día fue auspicioso en el rio, pero luego paso el día con sus padres, yo me desaparecí, además andaba medio ido con los recuerdos de vane y la expectativa de lo que diga.

Pensé que toda pareja tiene momentos así, no todo siempre es diversión… tratando de ponerme en su lugar, quizás en algo envidiaba a vane y guille que parecían iniciar su romance, y disfrutar más su estadía… pero si ella supiera que todo eso era tan frágil y artificial…

- disculpa que este así… es que… es mi madre… me dijo melancólica.

- ¿qué sucede con ella?... Pregunte, no recordaba haberle faltado el respeto o algo.

- ella sufrió de cáncer… y cada que va a esos chequeos, me da miedo… … ya pasamos por la quimio… mi papa dejo el ejército para estar más con nosotras… repuso casi lagrimeando.

- amor… todo va estar bien… no te preocupes… dije abrazándola.

Me conto que en su adolescencia prácticamente la paso sola, su padre se dedicó más a su madre, y cuando le tocaban trabajos como esta vez, ella era la que se quedaba cuidando a su madre. En parte ahora entendía que cielo riveros no tuvo tiempo de ser adolescente, no tuvo fiesta de quince años, no fue a su fiesta de graduación de colegio…

no tuvo la atención de su padre cuando la necesitaba, sus problemas de adolescente no eran tan grandes como los de su madre. Tal vez por eso el cielo riverostar me decía que rara vez le negaba algo a su hija, por ese sentimiento de culpabilidad de no haber estado tanto para ella como debió.

A medida que conoces a alguien y descubres sus capas, lo que paso, su historia, le das sentido a como son ahora, me da por analizar a veces esas cosas… como con vane… en el caso de cielo riveros, viendo fotos de ella de su temprana adolescencia, no usaba ropa llamativa, al contrario era muy conservadora.

El quiebre en la manera de vestir de cielo riveros se da gradualmente tras la enfermedad de su madre, hace sentido que buscaba la atención que no tuvo en casa, en la admiración de los demás llevando ropas pegadas o cortas, quería sentirse querida, quizás deseada, suerte que en su caso no llego a más.

También me parecía raro que el padre siendo cielo riverostar no fuera más estricto con la vestimenta de su hija, pero parecía que con el consentimiento de la madre optaron por dejarla que se sintiera cómoda, ya suficientes cosas le negaron por esa maldita enfermedad.

Intente confortarla, pero no sabía cómo alegrarle el día, ¿qué podía decirle?, no había sufrido lo mismo tan de cerca, algún cielo riverosr lejano… pero para mi suerte… o desdicha… el mozo nos dejó un panfleto colorido en la mesa… no le preste mucha atención, pero luego se me ocurrió algo.

- esta será como tu fiesta de graduación… le dije y vi como de a pocos se le iluminaba el rostro.

Habría una fiesta en el restaurante unas horas después, estaban alistando un espacio para la banda y decorando con globos y demás. Era el primer fin de semana da vacaciones, la decoración iba más con los carnavales… pero era cuestión de darle el sentido que quería.

Quedamos en cambiarnos y que la recogería a las diez, la música ya sonaba desde las 9. Por suerte había empacado un pantalón drill claro y una camisa blanca. Escuche el ruido al lado, eran vane y guille que llegaban de la piscina, nuevamente risas... Ni una pizca de remordimiento de vane, pobre guille.

No sé por qué recordé lo sucedido la noche anterior… como vane se movía encima de mí como licuadora, incitándome y excitándome… como a pesar de mi rencor hacia ella me hizo llegar… luego el sueño… ¡diablos! Esta mujer se me está metiendo en la cabeza, quizás eso quería… pensé, pero si la dejo, ella gana… se estaba convirtiendo en la versión de rubí de bárbara mori, mujer sensual y fatal.

Suprimí esos pensamientos y el amago de erección que tuve, pero con el ruido al lado volvían a mi mente… entonces salí a buscar a cielo riveros, aun no terminaba de cambiarse, así que espere afuera. Ahí note que había una persona de seguridad haciendo ronda… debe ser este el tipo que el viejo de cielo riveros dejo a cargo de su castidad… estaba distraído en eso… cuando de pronto…

- wow… exclame gratamente sorprendido al ver a cielo riveros.

- uhmmm gracias… que guapo… respondí ella sonrojada y dándome un beso.

Se había puesto un vestido blanco que le entallaba perfecto al cuerpo, no era ceñido, pero con sus voluptuosas formas no era necesario porque se dibujaba bien su silueta. Era un poco escotado en el pecho y terminaba en una mini discreta por encima de las rodillas…

es hermosa… pensé, y yo pensando en tonterías con esa bruja de vane… fue suficiente, me dije. Escolte a cielo riveros a la fiesta, a pesar de ser temprano se estaba llenando, habían muchos adolescentes de últimos años escolares, otros recientemente universitarios y nosotros estudiantes de último ciclo.

La estábamos pasando genial, bailando, bebiendo, nos habíamos embriagado… era su fiesta de graduación y quince años juntas… ella lo disfrutaba como nunca, era perfecto… hasta que…

- mira… se animaron a venir… me dijo cielo riveros.

Voltee a ver… y si… eran ellos… guille y la insidiosa de vane, que me sonreía como si nada hubiera pasado… por un momento se me descompuso el rostro, pero disimule, no quería que guille o cielo riveros se dieran cuenta… procure no prestarles atención ni darles importancia… pero…

- cambiamos de pareja… me propuso guille.

Sin darme cuenta, entre baile y baile… se nos habían acercado, el buen guille con ánimo de confraternizar y zanjar rencillas se le ocurrió intercambiar parejas de baile… inocente, si supiera… no quería aceptar, pero de hacerlo, mataría el momento, empezarían las preguntas, etc.

Tome de mala gana a vane, a diferencia de guille a cielo riveros, la canción termino rápido por suerte… luego vino una música lenta, iba a volver con cielo riveros, pero guille me hizo una seña para que continúe… ingenuo enamorado, creía que estaba limando asperezas entre su enamorada y su amigo…

- ¿ahora que te propones?... Pregunte, alejándome de guille y cielo riveros, viendo que vane callaba.

- nada… todo está hecho… respondió fríamente vane, sin embargo sonreía para disimular.

- osea que todo quedo acá… estamos a mano… repuse incrédulo pero algo aliviado.

- así es… la próxima, no me amarraras, ni te amarrare, será porque ambos lo queremos… dijo sonriendo con malicia y hasta con convicción.

- no habrá próxima… replique cortantemente pero sonriendo, ¿sabrá lo de mi sueño?.

- eso lo veremos… respondió vane con una sonrisa entre coqueta y desafiante.

La música había terminado, sin embargo seguíamos juntos… esa situación y el juego de sonrisas no le estaba gustando a cielo riveros, que vino a recuperarme. Había visto que el alcohol le hizo efecto, eso en general la ponía coqueta, pero ante la presencia de vane se le activaron los celos…

pusieron otra música lenta, esta vez bailaba con cielo riveros… no sé por qué ahora se me escapaba la vista hacia vane. Las situaciones vividas, el sueño que tuve y la conversación reciente hacia que mantuviera mi fijación sobre ella… vane parecía saberlo porque me sonreía provocativamente…

no le había prestado mucha atención, recién aprecie que ella había venido con un micro short ajustado que terminaba en su entrepierna, poco más y dejaba sus bien trabajadas nalgas casi al aire. Creo que cada vez que se activaba su peor versión, de femme fatal, se vestía más provocativa…

luego vane traía una blusa blanca algo ceñida, semi escotada pero sobre todo translucida… se apreciaba su blanco brasier y las dimensiones de sus apetitosos senos y las pecas que las coronaban que me hacían recordar a viviana y que eran también una de mis debilidades…

al terminar la canción… cielo riveros prácticamente me dejo sobre la pista de baile, salió del local tranquila, la seguí pensando que iba al baño, en mi distracción seguro me dijo algo y no lo note… pero no era eso…

- hey ¿a dónde vas?... Le pregunte, mientras veía que se perdía entre los arbustos y árboles.

- quiero estar sola… me dijo de mala gana casi sollozante, deteniéndose frente a un árbol.

Se había mantenido tranquila para no darle el gusto a vane de vernos pelear en la pista de baile, pero ahora se la veía despechada, decepcionada… sin darme cuenta ella había notado mi distracción hacia vane… lo que debió ser su baile, se malogro por ella…

- ¿qué te traes con vane?... Me pregunto molesta.

- ¿qué?... Estas loca… caíste en su juego y ya viste donde estamos… intente calmarla.

- ah… crees que no me di cuenta como la mirabas… replico más molesta aun.

- ya, párala… está bien que me guste cogerte por atrás, pero tus celos tontos ya me están aburriendo… le dije de mal animo viendo que venía otra pelea para mí, absurda.

Plashh… recibí una sonora bofetada por desatinado comentario que enfureció a cielo riveros. A mí se me escapo ese hiriente comentario más por la molestia de mi situación con vane, la pobre cielo riveros termino soportando mi desquite de frustración de esas cosas… además ambos estábamos semi embriagados, lo que nos hacía exagerar la situación…

en parte también me sentía frustrado, ¿qué más tenía que demostrarle a esa mujer?... Deje a viviana por ella, me pelee con javier por defenderla, le hice el amor en todos los lugares más peligrosos por ella… bueno por mí también… invente un embrollo para que vane no la desprestigie en la facu, me arriesgue a buscarla en ese club a pesar de su viejo… ¿qué más debía hacer para demostrar amor?...

- diablos… ¿qué te pasa?... Le dije tomándome el rostro rojo de ira.

- ¡eres un imbécil!... Solo eso soy para ti… ¿una buena cogida por atrás?... Me reclamo, alzando nuevamente su mano para dirigirla a mi mejilla hinchada.

- hey… no te atrevas… le dije deteniendo su mano.

Sin embargo ella levanto la otra mano… que también la cogí… y lleve ambas manos suyas para su espalda… casi abrazándola, mientras ella tenía sus senos clavados en mi pecho, su escote subía y bajaba en su airada respiración… igual sus nalgas que sentía sometiendo sus manos detrás… ella estaba apresada entre mi cuerpo y un árbol.

Mi cabeza hacia amagos de besar y ella me recibía con los dientes, queriendo morderme… hasta que hice un amago y termine besándole el cuello… ella cedió, se le doblaron las piernas y comenzó a mover nerviosa su torso, hasta creo que froto la raja de su trasero contra el árbol para acallar la picazón que empezaba en su esfínter… pero volviendo en sí, no quiso ceder… me mordió el cuello…

- mierd… ahora vas a ver… dije, sintiendo que se pasó, esta hembra debía ser domada.

La di vuelta toscamente, aun con sus manos atrás, sus senos entre el árbol y su rostro queriendo voltear a ver… preso de la ira la imagine como una potra salvaje que tenía que ser domesticada… o como una niña malcriada que merecía ser dada de nalgadas… la aleje un poco del árbol.

- ¿qué haces? Suéltame… reclamaba casi pataleando.

- ¿qué crees?... Le dije, mientras separaba sus manos haciéndola apoyarse en el árbol.

Ella contrajo la espalda al sentir sus nalgas abriéndose por la erección contenida en mi pantalón. Tenía sus dos manos apresadas por una mía contra el árbol, me baje el cierre con mi mano libre, levante la falda… no hubo que escudriñar mucho en su delgada ropa interior, fácilmente se hizo a un lado…

a pesar de su fiereza inicial sentía que no oponía mucha resistencia… por el contrario… veía que sus piernas se retorcían, como cuando excitas a una mujer y la humedad comienza a perturbarla… quizás en su mezcla de furia y excitación, no quería que lo note… quizás me usaba para someterla…

- ouuu… vocifero cielo riveros al sentir que me la clave sin piedad por el ano.

Para nuestra suerte estábamos casi en la oscuridad, entre los árboles, unos halos de luz se filtraban entre las hojas y el ruido de la música impediría que alguien la escuche. Con sus manos aun contra el árbol, contenidas levemente por la mía, soportaba mis brutales embestidas…

- ¿esto querías?… para que no vuelvas a dudar de mi… le susurre al oído.

- auchhh… ouuu… se quejaba pausadamente.

Ella permanecía con el rostro hacia el suelo, envuelta en una maraña de pelos… quizás no quería que la vea sufrir mis arremetidas, o tal vez no quería delatar que lo estaba disfrutando… o era solo que esta vez, como vane, no quería ver, solo dedicarse a sentir…

- uhmmm… ahhh… parecía que comenzaba a disfrutar cielo riveros, pero luego agrego desafiante... Disfruta que es la última vez que me haces esto… uhmm… ahhh…

- no… serás la última a la que le haga esto… replique martillándole el culo.

Llevado por la intensidad de la situación y el amor que le tenía, di a entender que sería mi última mujer, que quería todo con ella, matrimonio, hijos, etc… en realidad en esas situaciones ofrecemos todo.

Para dar intensidad al halago, me incline y le bese el cuello… eso la desarmo por completo… llego a un orgasmo brutal, hasta les diría que se orino de placer… lo que hacen unos halagos y un beso en el momento y lugar correcto…

yo sin embargo me sentía mareado por el ímpetu y el alcohol aun en mi sangre… en un momento resbale con algo de barro y caí de espaldas en el pasto… cielo riveros permanecía inclinada y apoyada contra el árbol, en mi ímpetu, la había empujado contra el tronco del árbol, ella se recuperaba y la notaba avergonzada… con lo que resbale fue producto de lo que ella chorreo en su excitación…

yo intentaba pararme y no podía… se me nublaba todo… mezcla de agitación, embriaguez, cansancio… opte por quedarme ahí, tendido de espaldas, apoyado en mis codos… cielo riveros volteo cansada pero satisfecha, al verme, en vez de compadecerme… cambio de actitud… no sabía si me golpearía o…

- yo soy tu mujer… y me vas respetar… me dijo seria, luego agrego: y también a satisfacer…

- ¿qué?... Pregunte en mi desvarío etílico, la había hecho orinarse de placer.

No dio pie a que diga otra cosa, se levantó la falda y se sentó frente a mí, sobre mí aun tiesa verga… por la extrema humedad entendí que era su conchita la que quería que fuera satisfecha esta vez… luego ella misma comenzó a brincar armónicamente sobre mi pene…

- solo me lo harás a mi… ¿entiendes?... Uhmmm… exclamo autoritaria, como su viejo cielo riverostar.

Creo que aquella frase que dije, acerca que sería mi última mujer, le dio un sentido de pertenencia, de propiedad sobre mí, mezcla de seguridad y confianza para su ego, que dio a pie que se transforme, que ella tome las riendas aprovechando mi mareo y prácticamente abuse de mí.

- ohhh… uhmmm… exclamaba satisfecha.

En cada salto veía su vestido iba cayendo de a pocos y fueron apareciendo sus senos, saltando al ritmo de sus propios movimientos… se recostó hacia atrás, apoyando sus palmas de sus manos sobre el grass, sus piernas ladeaban mi tronco y ella proseguía saltando.

Esta imagen trajo a mi mente el recuerdo de la noche anterior con vane, en la misma posición… para colmo cielo riveros decidió sacar mi verga de su vagina y metérsela en el ano de nuevo… no quería pensar en vane, cerraba los ojos y…. Era peor… la veía más claramente… diablos…

- ahhh… si mi amor… uhmmm… profería cielo riveros, que parecía cercana a otro orgasmo.

Cielo riveros meneaba su enorme rabo en mi entrepierna, como para sentir mi verga en toda su longitud y dureza… yo me calentaba más en una mezcla de recuerdos… mientras ella volvía a saltar… cerré los ojos, buscando sentir más y venirme… nuevamente la vi… mierd… nooo…

- ohhh… ufff… ohhh… exclamo cielo riveros triunfalmente al sentir mi leche y venirse.

- wow… eso estuvo… ufff… dije aliviado de que terminara.

Me deje caer de espaldas, cielo riveros hizo prácticamente lo mismo… mi verga elástica como chicle aun nos mantendría unidos hasta que se deshinchase. Me sentía como los perros cuando después de tener relaciones pasan una pierna por detrás y quedan tontamente enganchados…

obviamente no le diría a cielo riveros que llegue con la confusa imagen de vane, esa arpía polifacética… ya suficientes problemas nos causó esa noche su presencia, para traerla a colación de nuevo... Quería que esa sea la noche de cielo riveros…

solo me quedo en la cabeza aquella advertencia, casi amenaza de vane sobre nosotros y la posibilidad de otro encuentro, la seguridad que tenía que pasaría de nuevo… ya veremos…
nos mantuvimos echados, ella sobre mí, en una extraña posición, en silencio, bueno en agitada respiración mientras nos recuperábamos… hasta que mi verga fue saliendo de su ano y la leche con ella… solo ahí ella se salió y procedió a limpiarse con su pequeña ropa interior…

en eso vimos una luz moviéndose alrededor nuestro… era una linterna… mierd… el vigilante... Cielo riveros vino rápidamente a mi lado. Nos acurrucamos silenciosamente detrás de un arbusto para ocultarnos. Esperamos un momento hasta que la luz fue desapareciendo a lo lejos.

- ufff… suspiro ella al ver disiparse el peligro.

Luego cielo riveros me diría que era un conocido de su padre, hijo de un cielo riverostar amigo suyo que se había quedado sin empleo y que él le consiguió el trabajo ahí. Seguro era con el que me amenazo respecto a que tenía gente en el club para cuidar a su hija y vigilar la cabaña.

Al ver cielo riveros que yo seguía inmóvil, sumido en mis pensamientos, recuerdos, remordimientos, etc., cielo riveros se recostó de lado para verme, tal vez pensando que seguía resentido o molesto con ella… yo parecía una de esas chicas en shock después que pierden la virginidad… era casi una estatua…

- ¿te pasa algo?... Pregunto preocupada.

- nada… me dio un mareo, el trago, la agitación, creo que fue mezcla de todo… me disculpe.

- uhmmm… yo sé que te puede reanimar… me dijo coqueta.

Seguro pensó que en esa posición yo esperaba nuestro sabido ritual… se alejó un poco y luego se arrodillo y me limpio la verga de manera muy hacendosa. Logro relajarme, sacándome unos placenteros suspiros y algunas gotitas extra de mi leche, que ella engullo sin problemas… como para congraciarse del berrinche que hizo… después, se echó a mi lado…

- en realidad crees que seré tu ultima pareja… dijo cariñosa apoyando su cabeza en mi pecho.

- sí, me gustaría… dije sinceramente, luego agregue… creo que te voy a regalar una lámpara, como la de aladino…

- ¿una lámpara?¿para qué?... Pregunto curiosa.

- para que guardes ese genio de mierd… que tienes… le dije en tono de gracia y reproche.

- jajaja… está bien… me dijo como niña regañada.

- tienes que aprender a controlarte… eres muy explosiva… le reclame más calmado.

Quizás pueda sonar racista, pero a uno le queda la imagen, que las morenas son más belicosas o al menos es el estereotipo de algunas películas… pero yendo más por el lado cielo riverosr, su madre a pesar de ser de piel clara parecía algo colérica, si dominaba a ese moreno gigante… y bueno su padre tenía un aire autoritario también… caraj… domesticar esta chica iba ser trabajoso, pensé.

- pero es que mirabas mucho a vane… dijo justificándose y luego hizo la pregunta que temía… ¿es que te hizo algo? ¿o te dijo algo?...

Quizás en ese momento debí decirle la verdad, las mentiras no duran mucho… además lo que paso con vane no fue mi culpa… pero no quise malograrle el momento, suficiente tenía cielo riveros con la preocupación por lo de su mama.

- con todo lo sucedido… no la paso… no sé cómo actuar con ella… no me da confianza… y no sé si sea buena para guille… respondí.

- bueno, eso como me dijiste, es problema de ellos… son adultos... Repuso cielo riveros.

- si… tienes razón… dije callando todo.

Optamos por volver a la fiesta, en el camino me percate que cielo riveros aún tenía la falda sobre el pubis y el escote debajo de los senos… se lo hice notar y enrojeció como tomate… luego tuvimos que escondernos otra vez… cielo riveros me jalo repentinamente, pensé que era el vigilante de nuevo… pero…

eran vane y guille, estaban saliendo de la fiesta, al parecer ellos también tenían su pequeña discusión, guille parecía reclamarle algo… sin embargo notaba como vane más que prestarle atención, observaba a todos lados… ¿nos estaría buscando?, saber si termine con cielo riveros para aprovechar la situación… ¿estaría molesto guille por la atención que aun ella me daba?...

Tras el acicalamiento de cielo riveros, decidimos salir de entre los árboles, tomados de la mano… ahora el rostro que se descompuso fue el de vane… su treta de hacernos pelear había funcionado al revés… guille más bien menguo su molestia con ella, intentando disimular que ellos también estaban bien.

- ya me imagino que habrán hecho… me dijo bromeando en voz baja, sin embargo cielo riveros escucho.

Le hice un gesto como para que se calle, había confianza entre nosotros como amigos… pero no con cielo riveros, que no le gustaban ese tipo de bromas… y se dio cuenta al ver que ella enrojecía.

Luego cielo riveros fue a consolar a vane que parecía abrumada… fuerza de genero será, en algunas situaciones las mujeres se apoyan mutuamente… y más con la arpía de vane dándosela de victima seguro por su discusión con guille. Ambas se fueron al baño, el pretexto que usan las féminas para hablar…

- ¿qué paso?... Me atreví a preguntar, viendo a guille contrariado.

- vamos… tú lo sabes… me dijo incómodo.

Pensé un instante que vane le conto todo, pero de ser así… al igual que javier ya me habría golpeado.

- ¿a qué te refieres?… insistí haciéndome el desentendido.

- ella aún tiene una fijación contigo… ¿hizo algo? O ¿te dijo algo?... Pregunto hastiado.

Era la segunda vez que me lo preguntaban, primero fue cielo riveros y ahora guille… y nuevamente me negué, esta vez con la cabeza… desperdicie la segunda oportunidad que tuve, tampoco quise malograrle la ilusión a mi amigo que tanto me apoyo… creí que no era el lugar ni el momento apropiado.

Pero sentí que por proteger a mi amigo y a mi enamorada, estaba cavando mi propia tumba… como el sabio guille dijo “hagas lo que hagas, la vas a cagar”… antes por contarles las cosas a ellos, los metí en este lio… ahora quizás caería solo en la trampa que vane me ponga y sufriría solo las consecuencias.

- lo siento, no estoy cómodo con vane cerca, no sé cómo actuar después de todo lo que paso… le confesé y agregue… es muy cambiante… no me da confianza…

- tienes razón, ella se mostró afectuosa conmigo, ahora me dice que soy muy celoso y posesivo… pero solo quiero saber que pasa por su cabeza… ¿por qué actúa así?... Me dijo afligido.

- no te ilusiones con ella… es muy complicada… te va fregar la vida… le aconseje.

- lo se… pero ya me complique… me dijo abrumado, era un ciego enamorado o encaprichado.

Por más que le aconsejara, no me haría caso hasta que el se diera cuenta… cada quien elige la pared contra la cual estrellarse, es decir, todos nos entercamos alguna vez con una relación, forzando las cosas para que funcionen… solo me quedo invitarle un trago para que se olvide un momento de eso…

tras un rato las chicas volvieron, se unieron un poco sombrías a nuestra mesa, luego fueron haciéndose participes de la conversación… nuevamente vane se puso en modo neutro, decidí no darle importancia y difícil con lo ebrio que me puse y lo seco que me dejo cielo riveros. Vane más bien enfilo su atención a guille, el chico que la riño, le daba unas miradas rencorosas… y cielo riveros, bueno volvió a ser cariñosa conmigo.

Mientras mirábamos a los pocos jóvenes que quedaban bailar, nos dimos cuenta que estábamos cansados y decidimos regresar a las cabañas… en el camino guille y yo nos enteramos que las chicas habían decidido, mientras estaban en el baño, dormir en la misma cabaña, en la de cielo riveros…

evidentemente era el castigo que vane le imponía a guille por gritarla… pero que culpa tenía yo de eso, ya había ideado escabullirme a ver a cielo riveros… después lo pensé… eso de dormir juntas, seria literal, es decir, la última venganza de vane seria… ¿dormir con mi enamorada?... ¿volverla lesbiana?…

creo que en mi estado etílico estaba desvariando… pero con esa loca nunca se sabe… me saco de mi abstracción, la sentida aceptación de guille a esa situación… caraj… vane se estaba llevando sus bolas, lo había convertido en su perrito faldero que aceptaba todo de ella, pensé.

Las dejamos ir… voltee a ver a cielo riveros, le hice un gesto… que se cuide de esa loca… ella entendió y me hizo un gesto para que no me preocupe. Me fui tambaleando con guille… en el camino y en la cabaña me conto toda su relación con vane… me estaba muriendo de sueño pero lo escuche…

cuando se dio cuenta que me dormía con los ojos abiertos, que era como hablar con un maniquí… me libero de ese castigo y me dejo irme a dormir… otra vez me deje caer sobre esa maldita cama que no me dejaría descansar tan fácilmente…

nuevamente empezaron mis sueños primero con viviana, pasando después a mis sueños pseudo húmedos con vane… había algo de lógica en mi sentimiento de culpa por lo de viví que ahora reflejaba en vane… sentía que todas esas situaciones eran producto de mis errores, que ellas pagaron las consecuencias de mis actos y de alguna manera debía congraciarme con vane para sentirme perdonado.

Una cosa es pensar racionalmente en resarcir un daño… pero la otra cabeza (del pene) a veces no piensa igual, solo se queda con las imágenes candentes de mi sueño con mi cuerpo entrelazado con el de vane en un confuso acto sexual, mezcla de pasión animal (que tenía con cielo riveros) y cariño (que tuve con vivi)…

- por la put… madr… casi grite al despertarme de golpe, luego agregue palmeando mi frente… sal de mi cabeza… puta de mierd…

aún era de noche… guille roncaba en el cuarto de al lado… intente dormir otra vez y me asaltaban imágenes similares… caraj… me había obsesionado con esa loca… pensé que solo había una forma de exorcizarme de eso… iría a buscarla y le haría el amor salvajemente… a mi enamorada, mal pensados…

como en la mañana, el cuerpo de cielo riveros me ayudaría a callar esos demonios, quizás sería bueno despertar acurrucado con ella de manera placentera y romántica… luego llamaría a viví para hacer las paces, y buscaría la manera tranquila de conversar con vane racionalmente… así mataría mis culpas y demonios, luego al fin volvería a dormir tranquilo…

esperando a cielo riveros antes del baile, fisgoneando en los alrededores de su cabaña, había encontrado un lugar por donde entrar… se trataba de una puerta de acceso secundaria, que en teoría había sido clausurada, estaba fijada por unos clavos… pero… era de esas puertas divididas en 2: una parte inferior de 1 metro de altura y la parte superior el resto…

en mi exploración note que solo la parte superior de la puerta estaba fija, la parte inferior se había descolgado un poco. Seguro los niños que se hospedaron ahí anteriormente habrán jugado con esa parte inferior de la puerta, dejándola maltrecha… ahora lucia apenas pegada o juntada al marco de la puerta, se veía que con un empujón se abriría sin problemas.

Ya que veía que mi cabaña estaba embrujada, maldita por el abuso que vane me infringió, más aun por los sueños repetitivos que tuve… entonces tentaría suerte en la cabaña de cielo riveros…

me escabullí mismo rambo, entre los arbustos alrededor de la cabaña de cielo riveros… note, que el vigilante se había tomado a pecho su misión de cuidar ese lugar, dio minuciosamente una vuelta alrededor, seguramente esperando oír algo que pudiera interpretar como mi presencia dentro… al no notar nada fuera de lo normal, decidió proseguir su camino, pero volteando de cuando en cuando…

al ver que estaba prudencialmente lejos, me acerque a la puerta descrita, le di un pequeño empujón, para no hacer ruido y, como esperaba, la puerta cedió fácilmente… a pesar de mi ansiedad de entrar, tuve que ser paciente y abrir de a pocos, para evitar que el chirrido de esa vieja puerta me delate… luego cerrar la puerta también lentamente, para no dejar huellas de mi ingreso…

una vez adentro habían 2 dormitorios, igual que en mi cabaña, uno grande: que en mi caso usaron guille y vane, supongo que acá lo usaron los viejos de cielo riveros… y otro dormitorio más pequeño, que use yo en mi cabaña y supongo cielo riveros aquí… entonces enrumbe a este cuarto…

mi corazón latía a mil por la adrenalina de la situación y poseer a cielo riveros en ese lugar prohibido, escapando de la vigilancia y tomándola por sorpresa… me recordó la vez que la desperté en mi casa con mi verga por detrás… esperaba que esta vez fuera algo diferente… debía tener cuidado también de no hacerla gritar para no llamar la atención de vane o del vigilante en alguna de sus rondas…

abrí esta puerta también con sigilo… dentro vi que sobre la cama se dibujaba una apetitosa silueta tapada por las sabanas… observando el cuarto, encontré que la ropa que cielo riveros había usado en la fiesta, estaba en el suelo… su ropa de baño colgada en un mueble… algo desordenada la niña...

En este caso la luz no entraba tan directamente al dormitorio como en mi cabaña, había más penumbra… pero igual pude distinguir que cielo riveros descansaba boca abajo… posición propicia para mis fines, pensé… seria que me estaría esperando para que la atore por detrás como le gustaba…

me restaba dar unos pasos para llegar a la gloria… sentí nuevamente el mareo, tomar dos días seguidos no me cayó bien, seguía semi embriagado … o era la ansiedad de tenerla otra vez… mi verga estaba dura de nuevo viendo el bulto que formaban las posaderas de cielo riveros que sobresalían de las sabanas.

Frente a la cama, fui jalándole suavemente las sabanas para no despertarla… fueron apareciendo sus piernas y su enorme rabo… ella ni se inmuto… vi que tenía un polo que apenas si le cubrían sus nalgas… se veía esa deliciosa raja y lo abultado que se ponían glúteos al llegar a las piernas…

yo me desnude, para que nada entorpeciera mi faena… fui subiendo lentamente a la cama, para no hacer ruido ni movimientos bruscos que la saquen de su sueño… mis piernas ladearon sus piernas, comencé a acariciar sus nalgas… maldito mareo… mis sentidos no se sentían del todo bien…

en la maraña de pelos que cubrían su rostro, podía jurar que la note sonreír o al menos emitió un sonido de complacencia entre sueños… bueno es suficiente, ya no puedo esperar más, me dije… estaba a mil, aparte con el temor que el volviera el vigilante y se le ocurriera ver por las ventanas…

le abrí un poco las nalgas y fui enfilando mi verga a su pequeño ano… aquí si tuve un poco de paciencia, no quería clavarla de golpe y despertarla bruscamente… había llevado algo de crema por si acaso, la incursión seria repentina y necesitaría algo de ayuda para que entre mi verga.

Me unte la crema y fui metiendo de a pocos mi verga, empujando paulatinamente… apenas escuche unos leves quejidos, pero sin mayor movimiento u oposición… cielo riveros también estaba ebria, seguro con los sentidos más adormilados y anestesiados que los míos…

ya había logrado insertar la cabeza de mi pene, su esfínter parecía oponer resistencia, seguro inconscientemente iba apretando las nalgas… pero no me desanime…

- ohhh… ufff… escuche su gemido entre sueños, cuando la parte más gruesa le entro.

Al oírla, casi me da un paro cardiaco… me detuve… al ver que se relajaba nuevamente y que el sonido fue más de complacencia que de queja, entonces procedí a insertarla más… ya veía media verga desaparecida entre sus golosas nalgas… más bien ella realizo un pequeño movimiento involuntario quizás, abrió un poco las piernas, como para separar las nalgas y que la atoren mejor…

a medida que le iba entrando la otra mitad, notaba como movía el cuello nerviosa, resoplando y gimoteando por momentos… cada vez más sentía que levantaba un poco sus caderas para que le entre mejor… mientras yo seguía forcejeando para metérsela toda, hasta la raíz…

una vez que mi ingle finalmente choco con sus redondos glúteos, solté un suspiro de alivio… al fin la tenía enganchada hasta el fondo… de la emoción, una gotita de leche se me escapo… cielo riveros a su vez, se retorció satisfecha… sus piernas se comenzaron a mover, como escaneando cada centímetro de mi verga en su interior… era como cuando uno se estira en la cama al levantarse…

- ¿qué?... Ouuu… uhmmm… exclamo suavemente, levantando un poco la cabeza.

Se estaba despertando, se había sentido deliciosamente atorada, esa opresión en sus nalgas, más esa tiesa barra de carne en sus entrañas… era evidente que por más borracha que estuviera, en algún momento se daría cuenta que se la estaban clavando, prácticamente violando…

me incline, casi eche encima suyo, mi brazo izquierdo se apoyaba en la cama y mi mano derecha le tapaba la boca para evitar que grite… me acerque para susurrarle, al menos donde yo creía que estaba su oído, porque su cabello era un desorden que cubría su rostro…

- no te preocupes... Soy yo… le dije.

- ¿dannyyy?... Pregunto excitada aun adormilada.

- así es… replique.

- siii… al finnn… susurro satisfecha cielo riveros entre mis dedos.

- no grites… le advertí.

- nooo… hazme tuyaaa… exclamo ahogadamente.

Ahora sabiendo quien la poseía, se retorció más, aun adormilada estaba disfrutando ser clavada… yo me separe un poco de ella para empezar la faena. Vi como sus manos arañaban las sabanas, mientras suspiraba ahogadamente…

se dio cuenta que estaba haciendo ruido y no quería despertar a vane o llamar la atención del vigilante, así que ella misma jalo una almohada hacia su rostro para ahogar sus sonidos placenteros y sus futuros gemidos ahí. Luego nuevamente sus manos buscaron que asirse del colchón… sus brazos ladeaban su cabeza cada vez más enterrada en la almohada…

para apoyarme mejor, y a su vez someterla… tome sus muñecas y me apoye sobre ellas, con mis rodillas ladeando sus piernas y apoyadas en el colchón… estaba en una posición como manejando una de esas motos de carrera. Cielo riveros con su pequeña estatura, estaba sometida debajo de mí en una posición casi como de rana, brazos hacia arriba, piernas separadas y culo oportunamente levantado…

- ohhh… siii… que ricooo… exclamaba ahogada entre la almohada.

Estaba meneando su delicioso culazo en mi entrepierna, gozando esa unión, por momentos relajándose y por momentos apretando sus nalgas como para comprobar si era cierto o un sueño… o solo para que su goloso trasero saboree mi verga en toda su magnitud…

sentí que era momento de iniciar mi faena… comencé a meter y sacar lentamente mi verga… ella desesperada no me dejaba alejarme mucho… su ansioso trasero perseguía hacia atrás a mi verga, no dejando que se aleje, como si temiera que no volviera a ingresar…

así casi sin querer, cielo riveros fue adoptando una posición peculiar… sus caderas un poco levantadas, quebrando la espalda para recibirme… no estaba completamente echada, tampoco precisamente en 4, era una figura intermedia… con las rodillas bien fijas en el colchón como para soportar mis arremetidas…

- ayyy que placerrr… uhmmm… suspiraba en voz baja.

Por un momento temí que se ahogara en la almohada, que parecía contener no solo sus gemidos sino también su entrecortada respiración… pero mientras siguiera arañando la cama, soportando con sus enormes nalgas levantadas, supongo que todo estaría bien…

el martilleo y rebote de mi ingle en su inflado trasero empezaba a hacer un armónico ruido, ese placentero golpeteo… pero no me importo… si nos oía vane o si se atrevía a entrar, no vería nada que no haya visto antes… así que… que se muera de envidia esa bruja…

cada vez nuestros movimientos eran más rápidos, producto del placer que nos causaba esa fricción, esa inesperada incursión de madrugada… cada vez mi ingle rebotaba con más fuerza en sus voluptuosas nalgas, a su vez ella empujaba con más fuerza sus caderas contra mi… esperando que la estampe mi verga con mayor dureza y profundidad… hasta que no aguantamos…

- ohhh… ufff… exclame casi sin aliento, con mi verga escupiendo leche en sus entrañas.

Ella se dejó desparramar sobre la cama, respirando forzadamente… había hecho un gran esfuerzo físico, me sorprendía que cielo riveros no haya terminado acalambrada, más aun después de brincar unas horas antes sobre mi verga tras abusar de mi entre los arboles al lado de la fiesta…

hasta que final escuche su voz más claramente, voz q no escuche bien antes entre la maraña de sus cabellos y la almohada… pero no era lo que esperaba…

- ufff… oh my god… ufff… suspiró satisfecha.
Tras la espectacular venida que tuve… escuchar aquella frase de satisfacción me dejo perplejo…

- ¿queee?... Exclame atónito.

Aquella frase solo se la había escuchado a ella en momentos de placer… si… a… vane… si aquella niña ricachona gringa mimada y alienada que en momentos de excitación y placer profería frases en inglés (oh my god)… y no solo eso, era el tono de voz… no era el de cielo riveros…

quizás estaba equivocado, tal vez seguía ebrio, quizás era un sueño… para verificar, me di otro palmazo en la frente… auuu, eso dolió… luego aparte la maraña de cabellos de su rostro…

- por la put… madr… suspire lamentándome en voz baja.

- te dije que me lo harías de nuevo… sin ataduras… dijo vane sonriendo satisfecha.

La conch... Su madr… en ese momento mis bolas se hicieron canicas, mi verga parecía un globo largo desinflándose… no di importancia a los líquidos que escurrían sobre los muslos de vane y salían de su ano extasiado… mierd… me deje caer a un lado del colchón, devastado casi parapléjico… mientras vane seguía descansando, disfrutando su momento triunfal…

carja… pero ¿cómo?, comencé a pensar… había mucha oscuridad para diferenciar colores de piel y cabello. Mi ebriedad y sentidos adormilados no notaron la diferencia entra las nalgas pulposas de cielo riveros y las musculosas de vane… también recordé que cielo riveros dormía de lado y vane estaba boca abajo.

Vane profería sus palabras y gemidos en voz baja, amortiguados por la almohada, más el ruido de grillos afuera, nuevamente mis sentidos no estaban al 100%… caraj... Aparte que ella no dijo ninguna frase en ingles hasta el final… no sé si se contuvo a propósito para que no me dé cuenta, porque si lo hacía me daba cuenta y me detenía… al menos eso creo, en momento de excitación ¿quién sabe? (soy humano)...

Después estaba la entrega… cielo riveros era más floja en el acto sexual, yo era el que proponía y hacia el mayor esfuerzo físico al poseerla. Ella me complementaba poniendo su enorme rabo y yo ponía mi nabo… vane resistió esa faena en una posición difícil y hasta participando activamente culeándome para que le entre mejor mi verga, esa resistencia era producto de su entrenamiento en gimnasio… ¡diablos!...

Bueno esa era la justificación de la parte física, y ¿el cuarto?… era el correcto… estaban las cosas de cielo riveros ahí (su ropa del baile y traje de baño)… en algún momento de la noche, vane le cedió a su anfitriona cielo riveros el cuarto más grande en forma de agradecimiento por dejarla quedarse con ella… eso no lo sabía… lo habría hecho vane a propósito sabiendo que con lo pipilectico que soy, buscaría a cielo riveros a medianoche…

después de todo, aquellos continuos sueños que tuve con vane, ahora parecían más una advertencia de lo que podía pasar que un deseo por ella… interprete mal las cosas… pero eso no fue lo peor…

- vaneee… se escuchó una voz afuera.

Mierd… ¿están penando? ¿fantasmas? ¿la llorona?, ¿vinieron del más allá a llevarme?… pero no… era la voz de… de… mi enamorada… por la put… madr… se acabó la historia, mi vida, cierren la web, apaguen su compu, tablet o smarthphone… se jodio todo… cielo riveros estaba en la puerta, yo palidecí y hasta escalofríos me dieron… vane seguía sonriendo coquetamente satisfecha… solo me hizo un gesto de silencio…

- uhmmm… ¿sí?… replico vane haciéndose la que recién se despierta.

- ¿escuchaste un ruido?... Pregunto cielo riveros.

- ahhh… si… debe ser ese vigilante que anda dando vueltas... Se justificó vane.

Sentía que esa respuesta no convenció a cielo riveros… con lo que me quedaba de resto físico, me escabullí a un lado de la cama, luego al suelo, mientras vane se reía de mí accionar. Después rodé debajo de la cama, escondiéndome como una rata… me sentía sucio… pero esa maniobra fue propicia porque justo…

- ¿puedo entrar?... Insistió cielo riveros.

- sí, claro… agrego vane.

Debajo de la cama, yo estaba sudando frio y respirando apenas, sin hacer ruido. Sentí el colchón moverse, seguro vane se daba vuelta, no recibiría a cielo riveros con las nalgas abiertas y el ano rebosando en mi leche… escuche la puerta abrirse y vi cómo se formaba la sombra de cielo riveros acercándose a la cama…

- creo que… el ruido venia de acá… dijo cielo riveros, sonaba un poco enferma.

- ¿ah sí?… bueno… repuso vane un poco nerviosa ante la insistencia de cielo riveros.

Este era el punto de quiebre… vane tenía todas las de ganar, hasta el momento me había tenido a salvo, quizás para torturarme cruelmente… ahora me tenia del cuello, podía darme el golpe de gracia en ese momento y decirle a cielo riveros que su enamorado estaba escondido bajo la cama, tras propinarle un placentero orgasmo anal... Y tenía las pruebas escurriendo por sus intimidades…

- ¿y bien?… insistió cielo riveros.

- es que… me da vergüenza… replico vane.

Yo estaba a la expectativa de lo que dijera, una palabra suya me llevaría al cielo o al infierno… en ese momento me arrepentí de todas las oportunidades que tuve de confesarle a cielo riveros y guille lo sucedido, hubiera alejado a vane del club y de nuestras vidas desde antes… pero me calle para no hacerlos sufrir ni malograrles el momento, ahora terminaría pagando las consecuencias de mi silencio…

- ¿por qué?... Pregunto curiosa cielo riveros.

- es que… tuve uno de esos sueños (húmedos)… agrego vane con voz pudorosa.

- ahhh… exclamo cielo riveros avergonzada, no creo que quisiera preguntar detalles.

Vane me había salvado… ahora yo recuperaba la respiración, sentía la sangre volver a mi rostro y el alma al cuerpo… pero ella no hacia las cosas sin planearlas, era hasta cierto punto maquiavélica creo que sabía que si me delataba, la historia terminaría ahí para ambos y una pelea en media noche no tenía sentido… vane aun quería tenerme en sus garras, a su merced para lo que dispusiera esa lady ladilla…

- pensé que… que guille había venido… agrego cielo riveros con voz rara.

- ay no… no me hables de ese… ese… tu sabes… dijo vane, creo que recordar a guille le malogro esos instantes de victoria y satisfacción.

- es que… dijo cielo riveros un poco ida.

Vi su sombra tambaleante, emitió unos sonidos guturales raros… luego salió cerrando la puerta presurosa, seguramente para que vane no oyera lo que pasaría… por mi experiencia entendí que salió raudamente al baño, se le venía el vómito por la borrachera… por eso sonaba rara, enferma… aún seguía medio mareada (igual que yo) por lo de la fiesta, ella no acostumbraba tomar mucho…

al lado se escuchó el ruido de la puerta del baño, y el sonido de lo que expulsaba su cuerpo… entendí que era mi momento para huir, aprovechar el malestar de cielo riveros que la entretuviera unos minutos... Salí de debajo de la cama, me recompuse sin hacer mayor ruido, no quería ni ver a vane… solo que…

- me debes una… me dijo vane jalándome de un brazo hacia ella.

En un acto reflejo voltee a verla… ella aprovecho ese descuido, ese momento de titubeo para estamparme un jugoso beso y hasta su lengua sentí... Luego vane me guiño un ojo y me dejo ir…

esta loca habrá pensado que todo esto fue planeado por mí para cogérmela, no se habrá dado cuenta que esto fue involuntario… bueno cada quien piensa o ve las cosas como quiere… más aun en la mente retorcida de vane… tampoco tenía tiempo para explicarle lo que sucedió… solo sabía que debía huir…

- hey… me susurro vane y luego señalo mi cuerpo.

Mujer golosa, seguro quería más… pero al ver mi ingle note que seguía desnudo… maldición ¿qué me pasa?... Tome mi short y polo a un lado de la cama y me los puse como pude. Solo con el short casi pierdo el equilibrio y me saco la mierd… lo que le hizo gracia a vane que disfrutaba la situación…

después vi como vane se dejó caer rendida sobre la cama, con una sonrisa de oreja a oreja, saboreando lo sucedido, su victoria y su orgasmo, resoplando de cuando en cuando, aun exhausta por lo ocurrido. Conociendo su falta de conciencia, seguro dormiría tranquila y sin remordimientos.

Mientras yo salí casi de puntitas de la habitación, cerré la puerta, como cielo riveros lo hizo. Con todo lo que paso, la embriaguez se evaporo de mi cuerpo. Ubique mi puerta de escape, en el camino vi que la puerta de cielo riveros estaba abierta y aun se la oía arrojando sus entrañas… ufff… al menos está ocupada…

me senté al lado de la puerta y fui abriéndola de a pocos, hasta que… caraj… mala suerte la mía… vi la luz de la linterna apuntando cerca de la cabaña… así que volví a cerrar la puerta y esperar que la luz se alejara… sabía que esos minutos de espera podían jugarme en contra… había dejado de escuchar vomitar a cielo riveros, pero tampoco había ruido, así que seguro seguía en el baño…

una vez que vi la luz alejarse, nuevamente abrí la puerta… no sé por qué en mi aturdimiento decidí sacar primero las piernas, luego empecé a sacar mi pecho… sin querer aquella maniobra me salvo…

- ¿dany?... Dijo una voz.

A la mierd… es el colmo caraj… no podía tener tanta mala suerte, como decía mi padre en momentos muy jodidos: a mí no me han parido, me han cagado… voltee el rostro y si… era ella… era cielo riveros…

- ¿qué haces aquí?... Insistió cielo riveros.

Yo estaba gélido, casi temblando… en shock, casi al borde del paro cardiaco… di algo animal…

- yo… yo… yo… comencé a tartamudear en voz baja.

- ¿tú qué?... Replico cielo riveros.

Solo atine a hacer un gesto de silencio, para ganar tiempo mientras pensaba en algo… cielo riveros entendió que debía ponerse a mi lado agacharse para oír mi explicación, para no alertar a vane… ¡que pesadilla!...

- ¿sí?… insistió cielo riveros que parecía perder la paciencia.

- yo… yo… yo vine… vine… por ti… agregue languideciendo, fue lo único que se me ocurrió al ver que mi posición en la puerta más que de salida parecía de entrada a la cabaña.

- ohhh… ¿en serio?... Replico derritiéndose.

Aquella frase sin querer funciono de maravillas… cielo riveros me abrazo y me dio un suculento beso que casi me mata… ¡tenía un olor a vomito espantoso!… dada la situación y mi sentido de culpabilidad, no me quedo otra que soportarlo todo, con decir que también a mí me dieron ganas de vomitar… hasta que…

- ohhh no… dijo cielo riveros retorciéndose de nuevo.

Se paró bruscamente y otra vez se fue corriendo al baño... Aun le faltaba vomitar más. Yo caí rendido en el piso, con medio cuerpo afuera de la cabaña… esto no puede estar pasando, me decía… ¿sera el karma por lo que le hice a vivi?... Me repuse, estaba exhausto pero no podía irme, cielo riveros me había visto…

ya no tenía más leche que votar… supuse que en el estado de cielo riveros, no querría nada sexual, solo que la reconforten… en fin… no hay de otra… volví a entrar a la cabaña y cerrar mi puerta de escape. Mientras me dirigía a su cuarto, escuche los ronquidos de vane… cayo dormida rápido, la deje muerta, pensé.

Entre al cuarto de cielo riveros y a su baño… vi a la pobre de rodillas, con la cabeza frente al sanitario…

- ¿te sientes bien?... Fue la pregunta más boba, pero a esa hora no pensaba.

- no… me quiero morir… decía casi sollozante, y agrego… nunca más vuelvo a tomar…

casi le digo que esa es la mentira más grande, pero dado su estado, solo opte por sentarme a su lado y acariciar su espalda. Cielo riveros estaba vestida con un camisón translucido que dejaba ver sus senos y que apenas llegaba a la mitad de sus nalgas desnudas. Seguro era algo que usaba de más pequeña y que ahora apenas le cabía y se veía sexy… aunque por su mal estado, en realidad no me excitaba mucho…

- ¿necesitas algo? (¿una menta para el aliento?)… pregunte intentando ayudarla.

- si… pásame un poco de papel porfa… me pidió desfalleciente, bajando la palanca del baño.

Cielo riveros seguía con la cabeza apuntando al sanitario, en 4 patas, el papel estaba del otro lado, para alcanzarlo debía pasar detrás de ella. Para que no se sienta sola, continúe acariciando su espalda y cabellos, pasando casi arrodillado en ese ambiente poco espacioso. Una vez detrás suyo, como que quede aprisionado entre la pared y ella… pero esta vez estirándome si alcanzaría el papel.

Comencé a estirarme y sin quererlo, mi ingle se fue hundiendo entre las deliciosas y morenas nalgas de cielo riveros… esto es otra cosa me dije, tiene consistencia y suavidad (comparándolas con las nalgas de vane). Sin animo sexual también comencé a acariciar sus muslos, quería hacerla sentir bien… y tras mi reciente error con vane, mi conciencia también me obligaba a hacer lo más reconfortante posible.

Le alcance el papel y ella procedió a limpiarse la boca… cielo riveros seguía en la misma posición sumisa, en 4 frente al sanitario, por si volvía a darle otro arranque de nauseas… y efectivamente tuvo otro ataque, su vientre empezó a retorcerse un poco y con eso el resto de su cuerpo…

yo que me había mantenido pegado a ella, porque me gustaba sentirla así, con su gran trasero presionando mis genitales… esta vez sentí aquellos temblorcillos, la compadecí… pero… esos movimientos involuntarios estaban surtiendo un efecto inesperado e impensado…

- wow… exclame asombrado sintiendo mi verga crecer.

- ay no dany… no… en serio que no estoy para eso… se quejó cielo riveros, previendo lo que pasaría.

- no, nada… yo solo juego… le dije, pensando que no había posibilidad de algo más.

Pero el morbo me empezó a invadir cuando no solo comencé a sentir, sino a ver también… baje mi vista, y pude apreciar tras el camisón translucido como su bronceada espalda terminaba en su pequeña cintura y la tela le daba forma a su figura… siguiendo más abajo, como se iba formando aquel carnoso trasero en forma de corazón, con esa deliciosa raja…

- lo siento… le dije suspirando abrumado.

- ¿por qué?... Pregunto cielo riveros fatalista, seguro esperaba una confesión.

En realidad, ya mi verga increíblemente estaba tiesa a mas no poder… y el pretexto que mi mente estaba usando para convencerme era que: debía hacerlo para borrar mi involuntaria equivocación con vane en el cuarto de al lado… me baje el short, cielo riveros ya estaba en 4 hace buen rato y su camisón ya había descubierto sus imponentes caderas…

- lo siento… por lo que voy hacer… agregue.

- ¿qué?... Ouuu… nooo dany… nooo… se quejó cielo riveros.

Era tarde, mi verga ya había hecho diana en su flexible ano. Tras un entrenamiento intensivo anal que le di a cielo riveros en las últimas semanas, su esfínter ya no necesitaba tanto de cremas lubricantes como vane… mi verga ya se sabía el camino y su ano sabia como estirarse para comerse gustoso mi pene.

- ¿por qué eres así?... Estoy mal… ayyy… me reclamo graciosamente cielo riveros.

- para mi estas muy…. Pero muy bien… la halague acariciando su cintura y muslos.

Ese cumplido la hizo sonreír y relajarse, lo que aproveche para perforarla más, mi verga ya había entrado completa. Vi como un temblorcillo recorría su columna y la piel se le erizaba. Su ano ansioso palpitaba sobre mi endurecida verga… no habiendo mayores síntomas de nauseas, procedí a bombearle sus jugosas y redondas nalgas…

- uhmmm… estoy ebria… ohhh… estas abusando de mi… uhmm… gimoteaba cielo riveros.

Seguía con la cabeza en el baño pero instintivamente su posición en 4 se fue amoldando más para recibir una cogida, es decir, encorvando la espalda y abriendo las piernas para que esas dos voluptuosas nalgas se abran de par en par y reciban más profundamente mi verga.

De mi posición arrodillada fui pasando cada vez más a sentarme sobre mis pantorrillas, cielo riveros se estaba agarrando del borde del sanitario y empezaba a empujarme su enorme rabo contra mi ingle… después de todo no era tan flojita como pensé…

- ayyy amorrr… ohhh… uhmmm… comenzaba a disfrutarlo a pesar de su mareada cabeza.

Tomo mis manos que apresaban su cintura y las dirigió a sus senos, que gustosamente bailaban con cada clavada a la que sometía el goloso esfínter de cielo riveros… podía sentir sus pezones a través del camisón… pero ella quería sentir mis dedos sobre sus senos desnudos…

entonces ella misma, loca de pasión, no aguanto y tomo su camisón por el borde de cuello y lo jalo, rasgando la débil tela y liberando sus henchidos melones… mis dedos ahora estrujaban sus senos desnudos y jugaban con sus pezones, llenándola de más placer…

- ouuu… ufff… uhmmm… exclamo desfalleciente en un inusual pero placentero orgasmo.

Mierd… nooo… me faltaba poquito, me dije un poco decepcionado… pero no me importo, corregí el error de la noche haciéndoselo a la chica correcta en esa cabaña… había ido por cielo riveros y la tuve… esperaba haber terminado con la maldición.

- ay amor… se me viene otra vez… salte… me advirtió.

Pensé que se le venía otro orgasmo, pero fue otra descarga de vomito… creo que la ajetree mucho… saque presuroso mi verga a punto de explotar en leche… cielo riveros arrojo más lo que parecía agua o saliva, no le quedaba nada solido en el estómago… fue entonces que ella cometió un error…

aun sentada al lado del sanitario, levanto el rostro, lejos de parecerme asquerosa esa imagen, por el morbo del momento… aquella baba que cubría sus carnosos y enrojecidos labios, parecía más restos de mi leche… eso término de incentivar mis genitales…

- nooo cielo riveros… sal de ahiii… le advertí.

- ¿queee?... Exclamo ella asombrada de ver mi verga a pocos centímetros de su boca.

Quise contener el torrente de leche que se me venía, ahorcando mi verga, pero mis dedos en vez de detener este aluvión, al frotar mi sensible pene, terminaron por incitarlo más… era muy tarde…

- ohhh… ufff… resople aliviado, mi verga comenzó a escupir leche a montones.

- ahhh… cofff… cofff… se quejaba cielo riveros casi ahogándose.

Mi intención fue descargar mi leche en el sanitario, pero el rostro y sobre todo la boca de cielo riveros se interpusieron en mi camino. Una lluvia de semen cayo en sus parpados, mejillas, labios, mentón y sobre dentro de la boca abierta de cielo riveros y su lengua…

esta excitante imagen fue un peor aliciente, mi verga no dejaba de contraerse, mi miembro era ahora el que vomitaba a más no poder, litros y litros de leche… comencé a exprimir mi pene para que no quede nada… y cielo riveros atónita continuaba sin moverse, recibiendo toda esa viscosa salpicada.

- asuuu… ufff… dije terminando, casi creí que me orine, pero me vine como nunca.

Viendo mi placentera venida, creo que cielo riveros no me quiso malograr la experiencia con reclamos, seguro que también la excito ver lo que me causo… para rematar mi fantasía, ella sin limpiarse o escupir nada, se asió de mi verga y comenzó a limpiarla, en el proceso se habrá tragado algo, pero en su estado no le importo… con ese excitante panorama logro exprimirme algunas descargas más de leche…

- wowww… eres… la mejorrr… ufff… la halague plenamente satisfecho, acariciando su cabello.

Cielo riveros sonrió agradecida, aun con mis líquidos en su rostro, sus labios melosos y mi leche escurriendo por su mentón y resbalando hacia sus senos… hasta que… otra vez le dio un arranque de náuseas y voto todo, incluyendo mi leche… eso en parte mato la pasión… pero esos momentos e imágenes excitantes quedaron bien grabados en mí.

Volví a confortarla, por suerte fue el último vomito de la noche... Después me dijo que había despertado con nauseas, por la bebida, y que había oído ruidos raros en el cuarto de vane, al entrar y acercarse a su cama, sintió un olor raro (nuestro sudor, mi leche y sus jugos) y eso le activo las náuseas… no dije nada…

luego nos aseamos entre juegos y nos fuimos a dormir en esa enorme cama donde sus viejos durmieron la noche anterior. Como lo había planeado desde el inicio me acurruque con cielo riveros… la incursión a esa cabaña, como pensé, con sus sorpresas y todo acallaron el recuerdo de vane, mi obsesión temporal.

Aunque vi la luz de la linterna reflejada en los muros, no me importo, porque antes de entrar a la cabaña note que el vigilante no se acercaba tanto, seguro temía que cielo riveros lo delate como fisgón con su viejo…

por otro lado, a través de las paredes escuchaba algunos ronquidos de vane que descansaba placenteramente… esa bruja creyéndose la gran ganadora de la noche, se durmió satisfecha sin asearse, con mi leche adentro de sus entrañas como grato recuerdo…

decidí perdonarme a mí mismo por lo sucedido, no fue enteramente culpa mía: la primera vez vane me amarro y la segunda fue una equivocación en la oscuridad y por mi embriaguez, hasta con matices de ser una trampa tendida por vane… así que al menos esa noche al lado de cielo riveros, dormí tranquilo…

pero igual aún tenía el recelo de que es lo que haría vane… aun le “debía” un favor…
desperté descansado… la luz del día entraba por la ventana, el canto de las aves, era un día cálido con una fresca brisa, todo parecía perfecto… pero estaba solo… ¿dónde estaba cielo riveros?... Otra vez se me activo en mi cabeza la alarma paranoica por lo que pudiera hacer o decir vane….

Esa loca podía cambiar de humor y planes fácilmente, si nos escuchó anoche en el baño y se puso celosa… podía contarle a cielo riveros todo… total ya era de día y podía largarse cuando quisiera en su auto... Salte de la cama y me disponía a salir en busca de cielo riveros…

- ¿a dónde vas?... Me pregunto una voz detrás mío.

- ufff… que susto… iba a buscarte… repuse viendo a cielo riveros en la puerta del baño.

Ella sonrió coqueta y volvió a entrar al baño… creo que tras todas las veces que la poseí en ese club y en todas las formas posibles… estaba por muy satisfecha y despertó de muy buen ánimo… yo más aliviado aún tenía la duda de donde estaba vane… así que le saque la información a mi manera.

Me acerque al baño, cielo riveros ahora tenía un polo translucido, que igual le llegaba hasta la mitad de la cadera, dejando ver sus gordas nalgas, el camisón de la noche anterior estaba deshecho en una esquina… cielo riveros orgullosa de lo que sus formas causaban en mí, me miraba a través del espejo del lavabo…

- ¿estamos solos?... Pregunte, abrazándola por detrás y sintiendo sus formas.

- uhmmm… si… dijo complacida de sentirme, luego agrego… guille vino a buscar a vane temprano, creo que para disculparse, salieron juntos, seguro estarán desayunando…

yo comenzaba a acariciarla por encima de su corta y delgada ropa… cielo riveros procuraba hacerse la difícil, la desentendida… pero viendo sus gestos a través del espejo, sabía que estaba cediendo… más aun cuando yo tenía la clásica y habitual erección matutina intentando abrir sus gordas nalgas…

- ay… yaaa… no te basto abusar de mi anoche… se quejó ella pícaramente, apartándome un poco.

A decir verdad me dio un culazo para hacerme retroceder y me causo gracia. Cielo riveros tenía el cabello desordenado, parecía escoba vieja... Dándose cuenta tomo una liga y levantando los brazos fue acomodándose el cabello hasta formar una cola… mientras yo me morboseaba mirando su otra cola, la de sus apetitosas nalgas.

Al levantar la vista y ver su sonrisa mientras ella miraba abajo buscando la pasta de dientes… me di cuenta que cielo riveros cometió el error de que al hacerse la cola en el cabello, dejo descubierto su cuello, su punto débil que aprovecharía para abusar nuevamente de su otra esponjada cola.

La abrace por detrás nuevamente, empujando con mis manos su vientre para que su trasero se hunda en mi ingle otra vez… y bese su cuello desnudo… aquel punto débil que le hizo erizar la piel y ponerse nerviosa… soltó el cepillo y la pasta de dientes…

- qué terrible eres… repuso con los ojos entrecerrados.

- sera la última antes de irnos… insistí, porque debíamos partir más tarde.

- nooo… esperaaa un pocooo… refuto cielo riveros.

Seguro quería que me aguante hasta que termine de acicalarse, para que se siente mejor… pero para mí ese era el momento… cielo riveros procuro no prestarme atención, aunque tenía mi verga dura dividiendo sus gordos glúteos. Siguió echando pasta de dientes al cepillo y luego se lo metió a la boca…

esa espuma blanca que se formaban en sus labios, me recordó como la noche anterior mi leche la salpico por todo el rostro y como incluso se le metió a la boca… no resistí más… me baje el short, le subí un poco el polo y mi verga rebusco entre sus infladas posaderas…

- ohhhh… exclamo sorprendida al sentirme piel con piel.

En ese instante, la mezcla de agua y dentífrico, se le escapó de la boca, yendo a parar sobre sus senos que ya traslucían a través del polo delgado… pero que ahora mojados se mostraban en todo su esplendor, más aun con su pezón endurecido…

ella miro sus enormes melones con satisfacción, tratando de oponerse a esa febril excitación… con un dedo tomo un poco de pasta que había chorreado en su seno izquierdo y se lo metió con su dedo en la boca, casi chupándoselo… en una infartante imagen provocadora… eso era todo… no podía masss…

- ayyy… ouuu… se quejó cielo riveros al sentir mi verga la perforándola otra vez por donde le gustaba.

Nuevamente soltó el dentífrico y el cepillo, esta vez no los quiso recuperar, solo se aferró a los bordes del lavabo sintiendo sus entrañas invadidas por mi erección matinal… tenía los ojos entrecerrados, una expresión de disfrute, aun se escurría algo de espuma entre su mentón y sus senos…

- nooo… yaaa nooo… insistía cielo riveros resistiéndose a lo inevitable.

Procuro volver a sostener el cepillo, como para continuar limpiándose los dientes… abrió el grifo de agua para enjuagarse, se inclinó para tomar agua y lo hizo… pero fue una mala jugada para ella y buena para mi… en esa inclinación, sus nalgas se abrieron de par en par y no desaproveche la ocasión para hundirle unos centímetros más de tiesa estaca, apretándola más contra mí con mis manos en su cintura…

- oufff… ouuu… uhmmm… gimió casi ahogándose.

Ante esa brutal clavada, su vientre se contrajo, obligándola a votar de su boca todo el agua que recién acaba de absorber para enjuagarse… nuevamente su pecho se llenaba de humedad, su polo ya parecía el de esos concursos de camisetas mojadas… donde se aprecian por completo los senos…

no me resiste a jalonear esos deliciosos globos… cielo riveros me miraba sorprendida por el espejo, respirando aun forzadamente… luego volteo aun con la boca, abierta… su cuerpo había despertado hace poco y esa avalancha de sensaciones la estaba inundando y sacándola de sus cabales…

- ayyy… ¿qué me haces?… uhmmm… gimoteo sorprendida casi sin voz.

Tenía apresada a cielo riveros por todos lados, como un pulpo: una mano apresando su vientre y jalándola hacia mí entrepierna que a su vez apresaban sus pulposas nalgas, mi otra mano estrujaba sus senos que se inflaban con su respiración agitada… y obvio, mi verga empalándola dulcemente por su arrugado anillo…

cielo riveros en vez de intentar huir, más bien frotaba su cuerpo contra el mío nerviosamente, producto de su excitación… tanto que casi me hizo perder el equilibrio porque se apoyaba mucho en mi… en rápida maniobra me recompuse parándome mejor… pero prácticamente la levante un poco... La tenía como bandera en ristre y en vez de quejarse lo disfruto…

- ohhh… uhmmm…

en mi nueva posición, dada nuestra diferencia de altura hasta ella misma se había empinado un poco como para acomodarse, para evitar que mi verga saliera de su ano… quería conservar cada centímetro llenándola hasta la raíz… en esa extraña posición sus nalgas se abrían más aún...

Mi verga atorando sus entrañas era nuestro punto de apoyo, su senos subían y bajaban con su agitada respiración… sin embargo, se dio maña para voltear el rostro y robarme un jugoso y desesperado beso, mezcla de todas las sensaciones que disfrutaba… al menos ahora su aliento era a fresca menta…

cuando no soporto más, nuevamente se apoyó contra el lavabo, yo abrí un poco las piernas para no tenerla empinada en esa forzosa posición… ella sola se rindió, ya había olvidado el cepillo y la pasta, esa labor quedo a medias dejando huellas blancas en sus labios, mentón y senos…

- ayyy… me encanta lo que me haces sentir… uhmmm… dijo en voz ahogada.

Cielo riveros solita se iba inclinando y empinando su gordo rabo, para que lo fustigue en una cabalgata feroz, esta vez con los codos y brazos apoyados en el lavabo y las manos aferradas al borde, para resistir todo.

No necesite mayor consentimiento para comenzar a taladrarle su cálido esfínter que ya palpitaba ansioso sobre mi verga… la tome de la cintura y empecé a estamparla contra el lavabo. Era temprano, había descansado bien y tenía todo el ímpetu de tener las cosas más claras respecto a cielo riveros, la adoraba.

- uyyy… que biennn… asiii… uhmmm… exclamaba satisfecha.

En esa posición semi agazapada, me dejaba su culo a mi merced, para que se lo rompa a placer… mientras veía sus senos saltar… con cada incursión veía sus nalgas remangarse en mi ingle y rebotar, yo estaba aferrado a su estrecha cintura que por momentos parecía que se iba a quebrar…

puse mis manos a los lados de lavabo para apoyarme en él y darme impulso, ahora los recorridos de mi verga en sus entrañas no eran tan largos, más bien eran más rápidos y cortos pero con mayor impacto…

- ayyy diosss… que fuerteee… me partesss… siii… uhmmm… gemía enloquecida.

Ella me miraba sorprendida, con la boca abierta en expresión entre aterrada y placentera… yo estaba completamente absorto en sus nalgas rebotando en mí, en esa dulce fricción que me generaba… pero sentí que me miraba… y fue peor para ella…

note que su otra cola, la de su cabello, también saltaba por el ímpetu que le imprimía a su enorme trasero… me dije ¿por qué no?... La tome del cabello con una mano y la jale hacia atrás, mi otra mano la apoye en su cintura para evitar que deje esa posición…

- ahhh…. Ouuu… se quejó levemente por mi accionar.

Más bien en esta maniobra le estaba arqueando la espalda… ella sumisa me seguía en todo lo que hiciera, sabía que también se beneficiaría, que le proporcionaría más placer… con sus manos aun aferradas en el lavabo, los senos saltando, ella lagrimeaba de placer…

en esa posición, la estaba cabalgando en todo el sentido de la palabra… ella nuevamente se retorcía de placer… parecía estar esperando que me viniera para dejarse llevar… pero su cuerpo no pudo más y en violentos pero reconfortantes espasmos termino su dulce agonía en un violento orgasmo…

- uhmmm… uffff… uhmmm… resoplo finalmente satisfecha.

- no amorrr esperaaa… reclame sintiéndome cerca de llegar.

- si… si…. Ven… me dijo.

Evidentemente su inflado trasero y su goloso esfínter estaban sensibles tras ese brutal orgasmo… me di cuenta de eso y solté un poco las riendas, dándole cierta libertad…

- ¿qué haces?... Exclame al verla actuar inusualmente.

Ella se desengancho de mí rápidamente, aun la veía agitada… pero inmediatamente se arrodillo frente a mi… al ver que no actuaba o le seguía la corriente… increíblemente… procedió a pajearme y succionarme la verga… terminando la tarea que su delicioso rabo dejo casi por terminar…

- ay mierd… salteee… le advertí.

Pero no hizo caso, mi verga exploto sobre su garganta, cuando empezó ahogarse la alejo un poco… pero sin dejar de pajearla como para que escupa todo… no le importaba que le manchara el rostro, esta vez se esparció más que el día anterior por todo su rostro…

- ohhh… ufff… ufff… estás loca… ufff… exclame satisfecho.

Otra vez, en agradecimiento por el fenomenal orgasmo que le di… procedió a limpiarme la verga, exprimiendo hasta la última gota de semen en mí…. Luego se alejó sonriendo, aun con leche escurriendo de su rostro… tomo un poco del mentón y se lo metió con un dedo…

eso me hizo escupir una gota más que con su lengua limpia… antes se había tragado mi leche, creo que esta vez quiso probarlo… en ese momento de placer y locura dimos rienda suelta a disfrutar sin complejos ni limites… ella me estaba enloqueciendo…

creo que el día anterior, al notar como casualmente al acabar en su boca me excito al máximo, cielo riveros quiso repetir esa situación… si yo hacia todo por satisfacerla analmente, porque ella no podía complacerme de esa forma…

había algo de reciprocidad en esto… yo hacia el esfuerzo físico sometiéndola para darle placer y ella me causaba un impacto visual con sus formas, su entrega y ahora con sus mamadas y tragadas de leche…

también creo que había algo de competencia por lo de vane… cielo riveros quería mostrarse más audaz y atrevida conmigo en el sexo, cosa que seguramente no tendría con la blanquiñosa y desabrida de vane… así que cielo riveros decidió desinhibirse por completo como para darme la más grata experiencia y que no mire a otros lados…

por otro lado, luego me dijo que se atrevió a eso porque temía que me canse de ella, que su cuerpo dejara de excitarme… ya que en algunas de las ocasiones en el club yo la hice llegar 2 veces (en el rio y en la fiesta) y ella solo me hizo llegar una vez… entonces pensó que quizás me estaba volviendo inmune a sus encantos… que debía encontrar otras formas de hacerme llegar con ella…

bueno, no podía decirle que aquellas veces que me demore más fueron porque tenía la cabeza en otro lado por culpa de vane… al final gracias a ella conseguí mayor satisfacción con cielo riveros… creo que en parte debía estar agradecido porque la presencia de vane ayudo a mejorar mis encuentros sexuales con cielo riveros…

volviendo al relato, cielo riveros y yo habíamos quedado extasiados en el baño, recuperando la respiración ambos sin dejar de mirarnos y sonreír satisfechos… yo estaba feliz, encontrar una mujer que haga de todo por complacerte es genial… estábamos tan abstraídos, perdidos en nuestras miradas y sonrisas, que para nosotros no importaba nada más… pero…

- ayyy… uds. Son… son unos cochinos… aggg… exclamo vane con expresión asqueada.

No nos percatamos que vane toco la puerta del cuarto, ni de sus pasos yendo al baño… la imagen que ella encontró fue: yo aun de pie exhausto apoyado contra la pared con mi verga aun parada y cielo riveros arrodillada frente a mí con todos mis líquidos chorreando por su rostro, sobre todo su boca y labios, y también sobre sus senos…

- no le hagas caso amor a esa reprimida… me dijo cielo riveros en voz baja, luego agregó: esta celosa porque solo puede llegar así en sus sueños húmedos…

- jajaja... ¿en serio?... Reí nervioso recordando y haciéndome el desentendido por lo de ayer.

- en realidad creo que… ella se estuvo masturbando ayer… olía terrible su cuarto… me dijo cielo riveros.

- ah sí… seguramente… agregue siguiéndole la corriente a cielo riveros y aliviado que pensara así.

No quise profundizar más en lo sucedido anoche, no me convenía… solo le di a entender a cielo riveros que poco importaba lo que pensara la loca de vane, (total cada quien disfruta su sexualidad como le plazca)… cerramos la puerta, por si acaso el fisgón de guille se asomaba… después nos reímos de la situación... Vane parecía destinada a atraparnos en las situaciones más íntimas, para incrementar su envidia…

escuchamos afuera la voz curiosa de guille preguntando qué pasó... Pero oímos que se alejaron de la cabaña para darnos nuestro espacio. Después nos enteramos que habían ido a buscarnos preocupados porque no aparecimos en el restaurante para desayunar… además debíamos abandonar las cabañas a mediodía, teníamos alistar nuestras cosas para preparar nuestro regreso a la ciudad.

Cielo riveros y yo nos acicalamos rápidamente y fuimos al restaurante a devorar el desayuno… la expresión de felicidad que teníamos nadie nos la borraba. Tampoco nadie le borraba la extraña expresión que traía vane, mezcla de molestia y asco… seguro recordaba lo que había visto… en parte fue bueno, porque por esa aversión que nos tenía, se le había pegado más a guille y la inhibió de mandarme indirectas…

el problema era que vane al principio también sintió asco de vernos follando como perros en la casa de guille y en la oficina del profesor, pero luego se le antojo que le hiciera lo mismo, hasta me chantajeo… ahora, según ella, yo le debía algo… solo esperaba que no pidiera eso… a estas alturas, esperaba que con el shock que le causamos, se le hubiera olvidado eso…

subimos nuestras cosas al auto de vane, ahora el problema es quien manejaba… vane aduciendo que estaba muy cansada no quería manejar, esa fue una indirecta que me mando sonriendo por mi inesperada visita del día anterior… por suerte cielo riveros lo tomo como que nosotros no la dejamos dormir, y bueno cielo riveros tampoco tenía licencia para conducir.

Guille, era el más descansado, quería continuar amistándose con vane, si ella no conducía era obvio que iría en los asientos de atrás, y el iría con ella… entendiendo eso, me ofrecí a manejar… solo esperaba que no le pasaran factura a mis reflejos lo poco que dormí, todo lo que bebí y lo mucho que cogí esos días…

con las cosas en el auto y decidido el conductor, almorzamos en el club a manera de despedida y confraternidad… esperaba que después de eso, no volviéramos a estar tanto tiempo juntos otra vez, más que nada por vane, que con sus locuras y enredos desestabilizaba al grupo…

enrumbe por la carretera de regreso, con una sonriente cielo riveros de copiloto. A los pocos minutos, producto del calor y de la merienda, mis compañeros cayeron somnolientos. Poco después me di cuenta que el retrovisor frente a mí no estaba ajustado a mi medida, lo iba mover.

En eso note la mirada coqueta de vane que había despertado y me miraba casi desvistiéndome… no quise distraerme viéndola… pero sentí su mirada persistente… al voltear nuevamente note que me mostraba 2 dedos, en forma de v… luego hizo una mueca a manera de beso entre ellos…

dándole sentido a sus señas, habían sido 2 veces las que estuvimos juntos en el club, mejor dicho enganchados sexualmente en las cabañas… bueno, para mi ahí quedaron las cosas… pero vane insistía en distraerme… otra vez al ver por el retrovisor, me hizo los gestos que temía…

- me debes una… dijo en voz baja, luego haciendo un puño movió su mano como cuando se come un helado, con la boca abierta y lengua hacia un gesto como de una mamada.

Parecía que después de todo vane, a pesar de lo que me dijo mientras bailábamos, no dejaría las cosas zanjadas en el club y que nuevamente a pesar de todo el asco que mostro… se le antojo lo que vio…

vane quería prolongar mi agonía en la ciudad… sospechaba que eso no terminaría bien para nadie…
en el camino guille y cielo riveros se despertaron un par de veces, más bien vane, tras dejar sentado su mensaje, mejor dicho su nuevo chantaje, se durmió nuevamente. No hubo mayores contratiempos… solo en mi mente por lo que dijo vane.

La casa de cielo riveros estaba más cerca, así que la deje ahí y mientras me despedía cariñosamente de ella, volví a sentir la mirada de vane clavada en mí, deseando ella que me la volviera a clavar seguramente… esperaba que guille no lo notara… luego fuimos a la casa de guille, pensé quedarme ahí y que el llevara a vane… pero ella dijo que había descansado y que podía manejar sola a su casa…

guille se acercó a conversar con ella, yo me aleje para darles su espacio… nuevamente algo de discusión y vane se fue sin más, altiva otra vez, dejando a guille con expresión sombría en la entrada de su casa, en ese jardín del que salimos días antes… yo no sabía que decirle… pero guille si sabía que decirme…

- ahora si… dime la verdad… ¿qué paso en el club?... Me confronto guille.

Era obvio que sospechaba y que vane le dejo también la duda… estaba enamorado pero no era tonto…

- como amigo… dime… ¿quién te amarro?... Insistió guille, seguro lo había analizado mucho.

- fue su manera de vengarse… confesé afligido por el dolor que causaría, no podía ocultarlo más.

- ¿qué?... Y uds. ¿lo hicieron?... Pregunto atónito a pesar que en el fondo lo sabía.

- no lo hicimos… ella me lo hizo a mi… me excuse.

Guille monto en cólera… maldijo y pateo los arbustos… cuando se calmó me pidió que le cuente, lo hice sin detalles morbosos para no torturarlo. Claro que obvie lo sucedido la noche anterior y el ultimo pedido de vane. Creo que con de la amarrada fue suficiente para que la odie y se aleje de ella.

- esa perr… prostitut… de mierd… bramo febril.

Guille estaba enfurecido, para él debió ser un fin de semana espectacular con la chica de sus sueños y obsesiones, pero todo se enturbio como la mente de vane… no sabía qué hacer para calmarlo, nunca lo había visto así, al borde de la locura… se tapó el enrojecido rostro de ira…

- hey brother… no lo vale… le dije para evitar que derrame alguna lagrima por vane.

- voy por vane… dijo alterado.

- guille… no hagas tonterías… con la cabeza caliente será peor… le advertí.

- no, no… ya paso… esperare… me dijo aun ofuscado.

Me quede un rato, ayudándole a sacar el veneno que tenía en su alma, cuando lo vi más calmado me fui a mi casa, pero aun así me quede preocupado y lo llame después.

- ¿cómo vas?... Pregunte ante su silencio.

- debiste decirme en el club… replico afligido, parecía haber llorado de rabia.

- hubiera sido un escándalo… además te advertí antes de ir que no la llevemos… me excuse.

- es cierto… ahora vera… replico volviendo a enojarse.

- ¿qué vas a hacer?... Pregunte preocupado.

- es mejor que no lo sepas danny… no quiero involucrarte… me dijo.

- no hagas una locura… ya viste lo que causo esto… y nunca terminara… le advertí preocupado.

Ya nos habíamos vengado de vane una vez, para anular sus intenciones… y lo único que genero fue un juego de revancha. Por eso deje de lado desquitarme, si lo hiciera, continuaría aquel circulo vicioso de venganzas, cada cual peor que la anterior… nadie ganaría, todos perderíamos… por eso quería cortar esa secuencia antes de empeorar las cosas… pero no dependía solo de mi…

guille sabía que me opondría, guille se sentía traicionado, estaba muy dolido y no me haría caso… al menos sospechaba que ese día no haría nada… me dejo en silencio….

Al día siguiente guille pondría en práctica su plan… llamo a vane y la cito en su depa, ahí donde la desfloro analmente con mi complicidad. A pesar de la reticencia inicial de ella, termino aceptando, algo de morbo le daba volver a visitar la escena de ese crimen, donde ella fue la víctima. Quizás también, ahora en su estado amigable, quería zanjar sus problemas con guille o quizás su ego femenino le jugó una mala pasada, al sentirse tan deseada por ese mestizo.

Al entrar al depa, vane clavo la mirada justamente hacia el mueble donde se la clavaron… un escalofrió recorrió su cuerpo. Esta vez no iba vestida ni tan puta ni tan santa. Llevaba una falda floja por encima de las rodillas, un polo con cuello algo ceñido y que dibujaba la figura de su estrecha cintura y sus apetitosos senos, solo contenidos por unos botones de mitad del pecho hacia el cuello.

Guille al verla se puso nervioso, tal vez por lo hermosa que se veía, quizás por la ansiedad de venganza o la conciencia que aún le quedaba y que le hacía sentir que no era correcto lo que haría…

finalmente guille la invito a sentarse… luego le ofreció algo de beber. Se sentaron a conversar de cosas triviales y fueron pasando a lo sucedido en el club. Guille esperaba que vane por su cuenta le confiese lo sucedido… le diga su versión de las cosas… pero ella no hizo ninguna referencia a lo de amarrarme.

- ¿sabes que encontré a dany amarrado al día siguiente?… pregunto guille insidioso.

- ah sí… bueno, de cielo riveros y dany se puede esperar cualquier cosa… respondió casi sin turbarse.

Guille la quedo mirando fijamente a ver si la hacía hablar, vane se enrojeció levemente y puso algo nerviosa, entonces se dio cuenta que la consigna de ella, seria negar todo… hacerse la desentendida, por más que él le dijera que lo sabía todo, que yo le confesé lo que pasó… vane diría que es mi versión, que me obsesione con ella y cualquier cosa que pudiera inventar… no lograría extraerle información.

De pronto vane comenzó a sentirse más acalorada, el veneno que guille puso en su bebida comenzaba a hacer efecto… en realidad era una pastilla usada para incitar la reproducción de animales, yo lo llamo veneno, porque envenena el juicio de las jovencitas para que se aprovechen aquellos patéticos que no pueden obtener los favores de una dama en buena lid… por eso guille no quería contarme sus planes.

- ufff… hace calor… ufff… se quejaba vane perturbada.

Devolviéndole la buena actuación… guille abrió más las ventanas, hasta prendió un ventilador. Vane no sospecho nada, a pesar que estaba atardeciendo y no había razón de sentirse tan agitada. Ella por instinto se desabotono el polo, dejando a medio ver sus deseables melones… también comenzó a subirse la falda un poco, para que sus intimidades se ventilen mejor.

El que se comenzó a calentar al verla más descubierta fue guille, mirando esas bien trabajadas piernas y esos naturales e inflados senos. En el fondo sabía que la bebida le había hecho efecto y quería cosechar los frutos. Entonces decidió sentarse a su lado mientras le hablaba más cariñosamente.

Vane no le presto mayor importancia, ya que comenzaba a inquietarse sin saber el motivo… la comenzó a invadir ese deseo que sintió al verme amarrado en la cabaña, ese querer sentarse sobre una verga dura… en lo aun racional que le quedaba, atribuyo ese sentimiento al estar en el mismo lugar donde le hicieron conocer el placer anal, al estar al lado del chico que tanto la deseaba…

recién se percató que guille estaba muy cerca, llenándola de halagos y que empezaba a acariciarle el cabello y ahora el rostro… lo siguiente que supo es que la estaba besando… con la excitación que la invadía desde hacía unos minutos, ella no se negó, le correspondió efusivamente con su lengua.

- ayyy… guille… espera… no se… me siento rara… protesto levemente vane.

Guille no presto mayor atención a su pedido. Ella más bien sintió sus manos estrujando sus senos, después bajando a sus piernas, subiendo por los muslos hasta meterse debajo de su falda y jalonear su ropa interior, descubriendo que su poca velluda vagina ya se encontraba completamente húmeda…

vane comenzaba a temblar de placer, sintiendo los dedos de guille escudriñar sus intimidades. Ya no podía soportar aquella picazón en su pubis y también el cosquilleo en su pecho… esta vez ella quería cambiar la historia… ella no sería la sometida en ese departamento…

- ahora será como yo quiero… le espeto a guille.

El sorprendido no atino a hacer nada, mientras ella se arrodillaba y le desenfundaba la verga del pantalón, que salió tiesa y algo le salpico… vane estaba medio ida por efecto de la droga pero aun así desistió de mamarle la verga, solo lo toco para comprobar su dureza.

- uhhh está bien… exclamo a gusto con lo tieso que lo palpo.

Rápidamente se quitó el calzón que usaba, en su desesperación ya no pensó en quitarse la falda, solo la aparto y fue a sentarse sobre la verga de guille, quien la recibió gratamente, empalándola por la vagina.

- uhmmm… siii… uhmmm… suspiro complacida de tenerla metida.

Ahora vane acallaría esa picazón saltando sobre la verga de guille, lo tenía apresado contra el mueble, con sus senos cubriéndole el rostro, casi asfixiándolo… el pensaría en su trauma nuevamente que vane no quería verlo, que solo lo usaba mientras se imaginaba que algún blanquiñoso la clavaba, quizás yo.

Entonces se dio maña para zafarse un poco, tomo el polo de vane y se lo fue subiendo para sacárselo, en mi caso en la desesperación yo le hubiera roto el polo para liberar sus senos… pero guille tenía sus maneras, le saco el polo torpemente, mientras ella no paraba de auto castigarse… le saco el brasier y esta vez sí hundió su rostro entre los redondos melones de vane… quien se estremeció más…

- oh my goddd… yes… uhmmm… se retorcio vane.

Guille estaba satisfecho de que su treta hiciera efecto, la tenía enloquecida, sin embargo olvido la otra parte de su venganza… pero pronto lo recordaría y quizás se arrepentiría de haberla puesto en práctica…

- ¿qué?... Nooo… ¿qué es esto?... Exclamo vane aterrada.

- sorpresa… dijo alguien socarronamente tras ella.

Mientras ella pugnaba por liberarse, guille la había tomado de la cintura. Vane sentada sobre el con las piernas apoyadas contra el mueble, con ese envión de excitación que tenía, no se percató que se acercaron por detrás de ella, viendo su rosado y abultado trasero saltar sobre la entrepierna de guille.

Aquel intruso desnudo y con la verga en ristre viendo ese espectáculo, pugnaba por clavársela por el único agujero libre que quedaba… si, su estrecho y hace poco desvirgado ano…

- no por favor nooo… gimió ella saliendo de esa febril excitación.

- ¿te gusta comportarte como un perra?... Le increpo guille.

- nooo… no lo hagasss… suplico vane.

- entonces serás tratada como una perra… le dijo guille rabioso.

Al escucharlo vane dejo de forcejear sorprendida de que lo que sucedía era en complicidad suya, como alguien que la quería le podía hacer eso, quizás pensó que sus acciones empujaron las cosas a ese absurdo desenlace… esos titubeos fueron aprovechados por su secuaz para despiadadamente atornillarle su verga hasta el fondo…

- ouuu… nooo… auuu… sollozo vane por lo brusco de la acción.

Vane ahora estaba empalada por su vagina y por su ano… entendió que guille había descubierto su desliz en el club y que en su frustración y desilusión había ideado someterla cruelmente para vengarse… pensó que guille no era así, que yo debí idear ese plan como la vez anterior… y que yo era quien estaba detrás suyo, lo que en un principio no le pareció tan mal… hasta que…

- vamos javier… daleee a esta perraaa… le pidió guille a su cómplice.

Javier que era un loco desesperado, no necesito mayor aprobación para empezar a estampar a vane contra el cuerpo de guille, mientras el a su vez también la empalaba a su modo, abrazándole la cintura para evitar que huya de ese castigo mientras javier la tomaba de sus gordas nalgas.

- paren por favor… ya nooo… se quejaba vane sintiendo ambas vergas penetrándola.

Guille sabía que yo no aceptaría ser parte de eso, que era una atrocidad, entonces opto por buscar a alguien más... ¿quién más estaría dispuesto a un trabajo así de sucio?… solo javier, tras perder a cielo riveros querría aprovecharse del otro trasero más deseado de la facultad, el de vane… en su venganza a guille no le importaba si javier era bocón, él pensaba que podría tenerlo controlado… tonto iluso…

- fue asiii… así te le regalaste a dany verdad… le reclamo guille a vane que se había apoyado en el llorando para soportar esa violación.

- ¿qué? También con danny… ese infeliz… bramo javier enfurecido.

A javier no solo le robaron el trasero de cielo riveros, ahora se enteraba que yo también había tenido el trasero de vane antes que el… y tan solo escuchar mi nombre hizo que se enoje terriblemente, atacando sin piedad el ano de vane. Ella sumida en la vergüenza no quería gritar más alto y que la encuentren así.

- no más… ya nooo… paren yaaa… suplicaba vane llorosa pero a ellos no les importaba.

Solo javier se detuvo un rato, vane pensó que todo había terminado, pero el solo quería disfrutar de su otro agujero… ella estaba como zombi, mezcla de la pastilla, el esfuerzo y la vergüenza de la vejación que sufría… javier la hizo acomodarse bruscamente de espaldas a guille, que ahora le clavaria por el ano... Mientras javier por delante le abría las piernas para clavársela por su ahora seca vagina…

- sonríe a la cámara… le dijo con sorna javier viendo ahora su sufrido rostro.

- ¿qué?... Nooo… guilleee… nooo… se quejó vane mientras javier sonreía burlón.

Vane noto que sobre la mesa de la sala había una laptop con la luz encendida, la cámara sobre ella parpadeaba, la estaban grabando. Guille por su lado, la vio pararse deshecha, con el maquillaje corrido por las lágrimas, un sentimiento de culpa comenzó a invadirlo, mientras javier obligaba matonezco a vane a saltar sobre ambas vergas y le jaloneaba toscamente sus inflados senos… vane a su vez cerraba los ojos llorosos para evitar ver el morboso rostro de javier deleitándose con su cuerpo…

guille al ver como javier se deleitaba con vane, como su odio febril por su amigo dany hacia que se desquite con ella, se dio cuenta que el hacía lo mismo con vane, le pareció grotesca la situación… ¿cómo pudo permitir que ese salvaje goce con el cuerpo de la chica que él queria? Pero dany también lo hizo, se dijo para justificarse, luego entendió que ella me eligió, que yo no se lo hice a la fuerza…

- hey guille... ¿tú crees que le entren dos vergas en el ano a esta puta?... Pregunto javier.

Javier se había hastiado de la seca vagina de vane y veía que guille casi ni se movía absorto en sus pensamientos y culpas… así que pensó en meterle su verga junto a la de su compañero… evidentemente eso desgarraría el ano poco lubricado de vane… ¿en realidad merecía llegar a ese castigo?...

- no nooo… suficiente… dejenmeee… dijo pataleando vane con la poca fuerza que le quedaba.

Sin reaccionar, guille seguía conteniéndola de la cintura… parecía que él había tomado la droga, no ella, y javier sin mayor respuesta, entendió el silencio como aceptación y comenzó a forcejear por meterle la verga… vane lloraba desfalleciente… javier le cubría la boca para evitar que grite… era una estúpida y salvaje violación, la venganza había quedado corta, eso era un crimen… guille no sabía cómo detenerlo…

javier había logrado meterle la cabeza desgarrando el esfínter de vane, un hilillo de sangre discurrió en la entrepierna de guille… mientras vane era presa fácil producto de la pastilla, su cansancio por la continua exaltación en esos forcejeos, el estrés psicológico de la situación…

ella estaba mareada, desvariando, casi desmayada… la excitación casi se había ido, no lo disfrutaba pero seguía agitada por la adrenalina… mientras no podía creer que esas dos vergas se frotaban en el interior de su hasta hace poco virgen y estrecho ano, en realidad ambos miembros eran delgados.

Evidentemente guille no se movía, el que forcejeaba era javier, que si bien le parecía extraño frotar su verga con la verga de guille, procuraba pensar más en lo que sentía al frotar contra el esfínter de vane, una de las chicas más deseadas de la facultad, que ahora era suya y tenía como probarlo con su video.

- no seas imbécil… ¿y después que?¿qué crees que pasara?¿lo publicaras en youtube?... Cada quien ira tranquilo a su casa como si nada pasara… estás loco… le grite a guille al teléfono.

Finalmente guille antes de actuar accedió a contarme a regañadientes por teléfono como planeaba su absurda y febril venganza contra vane, en el fondo sabia qe estaba mal y quizas lo que le quedaba de conciencia le animo a decirme el crimen que planeaba tal vez buscando indirectamente mi intervencion salvadora que le devolviera la cordura... Al escucharlo yo me imagine como sucedería en realidad (que fue lo que relate) y como comprenderán me quede horrorizado.

El muy tonto pensaba que javier sería un títere que trataría con dulzura a vane… locos como esos se aprovechan de la situación y no se los puede controlar… por eso en su momento yo elegí a guille, porque era más calmado… aunque ahora tras la decepción con vane ¿seguiría siendo el buen guille?...

- no se… ya veré… algo se nos ocurrirá… se justificó guille.

- ¿has escuchado lo que dices? ¿estas demente? Estas planeando una violación, uso de drogas para abusar de vane… encima con javier ¿crees que él no se desquitara con ella por lo de cielo riveros?… y luego que… ¿vane se quedara tranquila?...

- pero ella está acostumbrada a estos juegos de revancha… se limitó a argüir guille como débil justificación para lo que pensaba hacer.

- te puede enviar a la cárcel si es que su viejo no te manda a castrar antes con sus mafiosos amigos… le advertí a guille intentando que razone.

- no seas exagerado… estas paranoico, mucho le temes a sus viejos y a ella... Si fue capaz de atarte, sabiendo que la quería… no tiene alma ni perdón… se merece eso y más… exploto guille.

Luego en un arranque de ira, me colgó el teléfono…

cuando vane me chantajeo pensé las cosas calmadamente y pedí concejo a un amigo, hasta lo acepte, me arrepentí de lo que hice porque no fue correcto, no soluciono nada y degenero en peores cosas… yo inicie esto y… yo debía terminarlo…
pensé advertirle a vane de las intenciones de guille, pero no sabía cómo reaccionaría ella, me creería o no… de hacerlo podía acusarlo con su padre que no dudaría en mandar a darle una golpiza dejándolo mal, hasta invalido, si no es que lo mandaba desaparecer…

no creía exagerar, había escuchado historias de líderes de sindicato en sus empresas que terminaban en el hospital y alguna exageración de un tipo que lo tuvieron que armar como rompecabezas… no podía permitir que eso le pase a mi amigo… entonces hice lo más decente que se me ocurrió…

- alo sra… ud. Es la abuela de vane ¿verdad?...

Al otro lado de la línea telefónica, una anciana de voz dulce me respondía, uno no podría sospechar que tras esa delicada voz se escondía una persona de carácter…

- si… soy abuela de vane… ¿con quién hablo?…

- no me conoce… soy amigo de vane…

le conté que había visto a su nieta en un club, compartiendo una cabaña con un mestizo, que eso no se veía muy bien… apelando al racismo de la señora, que casi le da un infarto al saber que su nieta se juntaba con la chusma, más aun del que creían que su cielo riveros se hizo rica contrabandeando drogas.

Evidentemente exagere las cosas, le metí miedo a la señora, no era la mejor manera pero logre mi objetivo… al día siguiente llegarían los padres de vane y quizás se la llevarían de vacaciones para alejarla de sus malas juntas o que se yo… el tema era que se la llevaran hasta que las aguas se calmaran…

al menos así podría estar tranquilo… de esa manera creí haberle pagado el favor que le debía a vane… pero solo que corte la cadena entre vane y nosotros… pero formaría una nueva cadena entre guille y yo, de alguna manera intuiría que intercedí para alejar a vane de él, evitar su venganza y no me lo perdonaría fácilmente… pero aun así me arriesgaría a hacer lo correcto para evitar desatar más locuras…

había que sumar también que javier me la tenía jurada. También sabía que al enterarse guille me llamaría o buscaría para ajustar cuentas… y fue más rápido de lo que creí que recibí una llamada…

- ¿quién diablos te crees para meterte en mi vida?... Me grito una voz ofendida.

- hey… intento hacer lo correcto… le explique.

- lo correcto para mí o para ti… ¿por qué me quieres alejar? ¿acaso sientes algo por mí?... Repuso vane apelando a su ego femenino.

Tuve que desarmar su castillo donde según vane yo estaba enamorándome de ella y la quería alejar para que no interfiera con mi relación con cielo riveros. Solo quedaba la verdad, era momento de dejar de esquivar cosas que al final se complicaba más todo, le conté que guille supo lo del club y que lo tenía desquiciado, planificando cosas absurdas y peligrosas.

- yo se cuidarme sola... Me grito ella.

- esto es diferente… lo has llevado al borde la locura… no reconozco a guille.

- está bien… dijo reflexionando ya algo asustada, tal vez entendió sus acciones generaron esto.

- hasta que al fin entendiste… repuse aliviado.

- solo te pido algo… me dijo compungida,

- si claro… lo que sea… respondí, quizás quería que le dé un mensaje a guille antes de irse.

- en realidad… aún me debes un favor… lo que quedamos en el club… me dijo maliciosa.

- ¿es en serio?... Replique atónito, uno preocupado por su integridad física y ella excitada tal vez por la situación o entendiendo que sus padres la alejarían mucho tiempo.

- si quieres que me vaya para protegerme, solo te pido eso… sino me puedo escapar y evitar irme con mis padres, guille me podría encontrar y terminaría mal… me dijo inocente la chantajista.

Diablos… esta chica es el demonio… me hacía responsable de lo que sucediera, si es que no cumplía con su deseo de romperle el culo una vez más y esparcir mi leche sobre su rosto como había visto que hacía con cielo riveros… no sabía si ella estaba loca por pedírmelo o yo por negarme…

en ese momento pensé que si bien me había cogido 2 veces a vane, había sido circunstancial y confuso… la primera vez ella me amarro y pensé que era cielo riveros… la segunda vez medio ebrio entre a su habitación y la poseí nuevamente pensando que era cielo riveros… nunca fue porque ambos quisiéramos, ella lo sabía y justamente deseaba eso… un encuentro consentido, sin confusiones ni errores…

- bueno… esta… bien… replique resignado, mientras pensaba… a la mierd... No hay otra solución.

Quizás ese era el punto final que necesitaba todo esto… quizás esto debí hacer desde el inicio para evitarme todos estos líos… total sus padres se la llevarían a europa posiblemente, tal vez hasta la cambiarían de universidad para evitar malas juntas o que recaiga en su gusto por los mestizos…

así que tal vez sería la última vez que vea a vane y si era para alejarla de mi relación con cielo riveros, que me quedaba… sin más engaños, ni más revanchas podría continuar con cielo riveros en paz… bueno, con javier y con guille queriéndome matar por meterme en sus asuntos… pero prefería eso al juego de vane… me puedo liar a golpes con ellos, pero lo de vane era psicológico y desgastante, no sabías con que te iba a salir, era como una guerra de guerrillas…

puse mis condiciones: con esto quedaba saldado todo, no habría más venganzas, chantajes, tampoco amenazas de contarle las cosas a cielo riveros o guille para provocar otro encuentro intimo entre nosotros. A su vez ella me puso sus condiciones: debía ser esa noche porque al día siguiente llegaban sus padres, debía ir a recogerla a su casa porque tras lo que le conté a su abuela no la dejaría salir fácilmente.

Así lo hice, me aliste rápido y bueno, con la conciencia remordiéndome, llame a cielo riveros pero me dijeron que dormía, al menos no me llamaría tras todas las cogidas y cansancio por lo sucedido en el club. Me puse mis mejores fachas y enrumbe a la casa de vane sumido en mil pensamientos.

Su casa era una mansión, mucho más grande y mejor decorada que la de guille, pero me mostré indiferente, si quería impresionar a la abuela, no podía andar con la boca abierta como turista. Converse con la señora, algo de su veneno racista soltó, pero tuve que disimular mi incomodidad.

Hasta que bajo vane, sin dudas era una hermosa mujer, con poco maquillaje y no lo necesitaba para resaltar, un vestido negro ceñido, algo escotado y terminaba en una minifalda… aquí si me quede con la boca abierta… cosa que la abuela miro complacida de que su nieta fuera tan admirada.

Hubo una pequeña platica, para entrar en confianza, y que la señora sepa con quien dejaba a su nieta, más bien el que debía temer era yo… tras saber mis logros académicos, deportivos y laborales, la abuela le dio a entender a la nieta que chicos como yo deberían visitarla más a menudo.

Al final la abuela nos dejó ir, con toque de queda a medianoche, los padres de vane llegaban de madrugada y debían encontrarla en cama. Salimos raudos en su auto, enrumbe a un hotel bonito donde había desvirgado a mi ex viviana… pero al final no quise manchar ese recuerdo, y entre a otro cercano, más caro, supongo que vane esperaba un detalle así para este supuesto encuentro consentido…

en realidad casi ni hablamos en el camino… ella quizás presa de la ansiedad, yo en mis pensamientos hacia cielo riveros, guille, javier y hasta vivi… en como todo había ido degenerando de mal en peor… tal vez mi ansiedad iba más por el lado de que las cosas terminaran esa noche de una vez por todas…

al entrar y hacer la reserva, sude al pagar, para evitar estar acartonado y guardar apariencias en el hotel, intente ser cariñoso con vane, que también estaba algo rígida… en el ascensor también intente abrazarla pero cuando no hay esa empatía y confianza, todo se siente forzado… atracción física había y era evidente… pero tras todo lo sucedido no había enamoramiento, sabíamos que íbamos a tener sexo…

- y… ¿cómo lo quieres?... Pregunte entre frio y nervioso, no me sentía de ánimo.

- obviamente… con esa actitud… no… respondió decepcionada.

- bueno… y ¿qué esperabas?... Repuse abrumado, me sentía obligado.

Quizás javier en esta situación ya estaría con el pantalón abajo y la verga en ristre… pero yo estaba aturdido por todo, por vane y las locuras que nos llevó a esto… por cielo riveros de la cual creía haberme enamorado… también por mi soldado, no sabía si con esta situación de estrés se pararía…

- bueno… quizás solo debamos conversar… me dijo apenada.

Me puse mis mejores fachas, ella estaba muy sexy y deseable, pague el hotel más caro de mi vida… para conversar… bueno… al menos mi conciencia respecto a cielo riveros estaría tranquila, pero mi bolsillo lloraba…

comenzamos a conversar de tonteras de universidad, burlándonos de los profesores y de quienes nos caían mal. Para esto, vane ya había descubierto el minibar de la habitación… empecé a sudar porque la cuenta engrosaría… afortunadamente dado su buen ánimo, ofreció pagar al menos eso… chica liberada.

Cuando entre en esa habitación pensé que tras un rato empezarían a escucharse gemidos… pero solo se oían risas salir de ahí… más aun animadas por las cervezas y botellitas de otros tragos que ingeríamos… hasta que… la puerta sonó abruptamente…

en ese instante la incipiente embriaguez se me disipo momentáneamente ¿quién sería?... Vane ¿habría llamado otra vez a javier a tomarnos fotos?... ¿nos habría seguido guille haciéndole la guardia a vane?...

- servicio de cuarto… dijeron al otro lado de la puerta al ver que no abríamos la puerta.

Me pareció raro, no llamamos para pedir nada… al abrir efectivamente era un mozo del hotel que nos traía una botella de champagne. Nos contó que era una cortesía del hotel que venía incluida con la suite matrimonial… obviamente si te regalan algo, no pones objeciones…

con la mezcla de tragos, entre botellas de cerveza, botellitas de ron, vodka, etc… aunado ahora con el champagne todo se hacía un chiste, cualquier cosa era risible, llegue a pensar que nos votarían por el ruido que hacíamos. Nos dio ganas hasta de cantar y pusimos un canal musical.

Con los cantos desafinados, en los dúos, sin querer nos fuimos pegando, en los coros estábamos mejilla con mejilla, en los solos bailábamos casi como baladas… hasta que entre juego y juego hubo más frotación, miradas, amagues de besos… en lo poco que me quedaba de conciencia, decidí cambiar de canal, mucha música romántica no era buena idea…

más bien vane entre juegos me disputaba el control, lo que termino por hacer que apretemos varios botones y canales, hasta que el control salió volando y se detuvo en un canal pornográfico…

ambos nos miramos seriamente y luego nos reímos de las imágenes… luego nos quedamos mirando la pantalla, era sexo duro, sexo fuerte, un chico jaloneando y penetrando brutalmente una chica, por donde él quisiera y ella loca de la excitación se dejaba manipular y maltratar, hasta pedía más.

- eso… eso quiero que me hagas… me dijo vane tras un silencio algo incómodo.

De repente en su embriaguez, le excitaron esas imágenes, que debo confesar que a mi también… y no me dio tiempo de protestar tampoco… si ya estábamos cerca, solo opto por empinarse y jalar mi cuello hacia ella y brindarme un jugoso beso con lengua…

mientras yo intentaba reaccionar a esta avalancha, ella ya tenía su mano en mi verga, pajeandola y a decir verdad no necesito mucho, con las imágenes y su reacción… ya la tenía dura y algo goteante de líquidos… sentí una risita de felicidad entre sus jadeos y besos…

no le dije nada… ella sola, bruscamente se arrodillo y jaloneando mi verga del pantalón para que salga, se la termino metiendo en la boca… excitada, casi no respiraba por meterse todo en la boca…

- te vas a ahogar… uy carajo… mierd… exclame sintiendo que hacían efecto sus caricias.

Ella nuevamente sonrió mirándome de abajo… y deteniendo un poco sus maniobras para contemplarme… yo con un atisbo de culpabilidad, no quería ver su rostro en el lugar que le pertenecía a cielo riveros… así que hice lo más decente que pude…

la tome de los cabellos a ambos lados de su rostro y la obligue a mamármela con más vehemencia, ya no me importaba si se ahogaba o no… no vería su rostro manipulador… total, quería sexo fuerte… quería ser sometida, me desquitaría todas las que me hizo pasar esta pendeja…

una vez que sentí que era suficiente, nuevamente la jalonee de los cabellos y la lleve al sillón frente a la televisión… la recosté a la mala, boca abajo contra uno de los brazos del sofá… con una mano apresaba sus dos muñecas en su espalda y con la otra, a la mala le subí la mini negra e hice a un lado su diminuta tanga negra…

- ohhh… si al finnn… gemía ella previendo que se venía la clavada que tanto ansiaba, sus piernas temblaban.

Casi por instinto quería hacerla sufrir, que espere, me di maña para quitarme el pantalón, y deje mi ropa interior a la mano… mire su blanco y enorme trasero, bien formado, atlético…

- a la mierd… todo… que esto termine aquí… dije enloquecido de excitación y deseo de venganza…

- oh mi god… exclamo vane temblando, preparándose para recibirme…

no quería oír sus absurdos gemidos en inglés, suficiente tenía con tirármela y bloquear el recuerdo de cielo riveros… así que le metí mi bóxer en su boca, para no escucharla… cosa que al parecer la excito más… la sumisión era completa….

Sin miramiento y para no arrepentirme o pensarlo mucho, solo opte por clavarle mi verga por el ano, viendo que tenía momentos de contracción por la excitación, seguidos de relajamiento, aproveche uno de esos paréntesis de soltura y sin dejar de sujetar con una mano sus brazos y muñecas en su espalda, con la otra mano a la mala intente abrir su ano…

tuvo una contracción de espalda, adivinando que se la metería por el ano, quizás esperaba que fuera más gentil y empezara por su vagina súper mojada… pero no… un palmazo y dejo de forcejar y en esa relajación, en esos segundos… le clave unos centímetros de mi verga en un su poco lubricado anillo…

comenzó a patalear, vi su rostro enrojecido y lagrimeante, por momentos sus ojos salían de sus orbitas solo dejando un color blanco mientras ahogaba sus gritos y quejas en mi ropa interior en su boca…

- ¿esto querías no?... Ahora lo vas a tener… le increpe, febril…

deje que mi propio peso fuera haciendo su trabajo, y fui ingresando bruscamente mi verga en su ano… por momentos contraía los glúteos, pero cuando se dio cuenta que era en vano… solo los intento relajar y dejarme entrar… sentía mi verga adolorida por el forcejeo… pero igual, continúe, quería castigar a esa perra caprichosa, insidiosa, manipuladora… etc…

era incomodo sujetar sus brazos y penetrarla, así que en un descuido, le solté las manos y solo me apoye en su cintura para evitar que escape, mientras la estampaba contra el mueble… vane en vez de forcejar, solo opto por aferrarse al respaldar del mueble y arañarlo mientras soportaba mis embestidas…

- uggg…. Uhmmm… ouuu… oía sus gemidos ahogados entre su garganta mi ropa interior.

Estaba enrojecido su rostro, igual que sus nalgas que eran golpeadas por mi ingle, igual que su ano al rojo vivo por la fuerte fricción… esa posición me estaba cansando, el equilibrio era difícil… así que decidí aplicar lo que vi en el video.

Sin sacarle mi verga metida a fondo, procure ponerme de lado, poniendo una pierna entre las suyas y al lado del mueble, mientras mi otra pierna buscaba que apoyarse en la parte alta del mueble… en esta maniobra nuevamente sus ojos se tornaron blancos… le estaba entornillando mi verga en su hasta hace poco virgen ano…

- ouuu… uhmmm…. Se quejaba vane pero me daba igual.

- cállate perra… le espete dándole otro palmazo en sus musculosas y blancas nalgas.

Al hacer esto, mi pierna apoyada en el mueble trastabillo un poco y termine pisándole la cabeza, y a mi parecer, en esta posición, tenía mejor equilibrio, así que no me moví, más bien comencé a moverme nuevamente… clavándola sin piedad…

ante mi sorpresa, en esos minutos que ella tuvo las manos libres, nunca se quitó mi ropa interior de la boca, creo que esa sensación de ahogarse, o el olor de mi intimidad le gustaban… más bien uso sus manos de otra manera, viéndome febril y sabiendo que no cedería al castigo que le daba… vane opto por usar sus manos para abrirse las nalgas…

le estaban dando la paliza anal de su vida, solo le quedo no oponerse, más bien entendió que debía facilitarme las cosas… ahora más bien entre jadeo y jadeo se le iba saliendo mi bóxer de la boca…

- ¿qué me haces?... Uhmmmm…. Gimió mientras sentía mi verga doblada empalándola y mi pie sometiendo su cabeza.

Yo ya estaba me ido, en sus quejidos oía dolor y mezclado con algo de placer… y yo no quería que vane lo disfrutara… quería hacerla sufrir, padecer, por todo lo que nos hizo… así que le saque mi verga, la tome nuevamente del cabello, ella deshecha en lágrimas y sudor me seguía como una zombi… la empuje contra un espejo…

- uhmmm… ¿qué?... Se quejó sorprendida, casi rebotando frente al espejo.

Por suerte puso sus manos que evitaron un impacto mayor, con la violencia del jaloneo, fácil pudo romper el espejo… en ese momento no lo pensé mucho, solo la empale nuevamente contra el frio vidrio… haciendo nuevamente una mueca de dolor, esta vez contrajo la espalda…

- ouuu… ahhh… nuevamente sus ojos fuera de órbita y un lagrimeo.

Con la vehemencia de mis embistes contra sus bien formadas y ahora rojas nalgas… sus senos iban rebotando, mientras su ceñido vestido de a pocos se fue deslizando… dejando a la vista el encaje de su delicado y translucido brasier… el cual jalonee dejando sus pezones al aire y sus senos a medio salir…

con sus senos rebotando, sus manos contra el espejo y mis manos en su cintura, apresando sus gordas nalgas, su ropa interior jaloneada a un lado para permitirme someterla… por la manera en que la trataba, si alguien se quejaba por el ruido y entraban… cualquiera pensaría que era una violación…

- ayyy… ahhh… más despaciooo… ouuu… se quejaba ella entre jadeos.

Peor aún no le hice caso a sus suplicas, se la enterré violentamente hasta la raíz, casi estampándola contra el espejo… nuevamente contrajo la columna, sus senos se hincharon conteniendo el aire y soportando esa brutal incursión… contrajo el cuello y la cabeza hacia atrás… dejándome sus cabellos a disposición… la tome de un mechón hacia atrás… para poner su oído cerca de mi boca…

- ¿querías esto no? Ahora te aguantas por pendeja… le susurre sin dejar de embestirla.

Por primera vez desde que estaba frente al espejo, vane abrió tímidamente los ojos al inicio, antes había soportado todo el castigo con los ojos entrecerrados, como disfrutando… ahora más bien tenía una expresión de sorpresa… al ver su imagen como el de una ramera... Si, aquella niña rica siendo tratada como una vulgar prostituta callejera, siendo violada frente a un espejo…

con el maquillaje corrido, el rostro colorado y gotas de llanto y sudor corriendo por su delicado rostro, su fina ropa interior casi deshecha, su vestido ceñido levantado en los muslos dejando su pubis a medio ver por su tanga jaloneada, sus rosados pezones apuntando al espejo mientras sus senos apenas eran contenidos por un maltrecho brasier y el vestido escotado que ya no escondía nada…

sus bien formados senos rebotando a mi cruel ritmo, sus nalgas enrojecidas por el golpeteo contra mi ingle… mientras detrás suyo estaba yo, también colorado de la excitación, con una expresión entre morbosa y vehemente, tomándola del cabello con una mano y manteniendo su columna arqueada con la otra mano en su cintura… cabalgándola…

- ¿soy una puta?... Se preguntó entre absorta y excitada aquella niña caprichosa, viendo como sus senos vibraban hasta casi tocar el espejo…

- nooo… eres una perraaa… le brame enfurecido.

Nuevamente la jalonee… esta vez para ponerla de lado, apoyo las manos contra el armario al lado del espejo… quería mostrarle como la poseía como a una perra, no era un acto de cariño o amor, era un acto salvaje de venganza, mezclado con morbo y placer… era un castigo…

esta vez perdiendo toda timidez, en vez de quedarse mirando el mueble, nuevamente su mirada se fijó en el espejo… contemplando su silueta abultada en su pecho y trasero, delgado en su cintura… el vestido negro era casi una faja en su cintura, sus abultadas y firmes nalgas vibraban con mi golpeteo continuo, sus senos esta vez libres saltando con cada embestida….

La jalonee un poco más hasta poner de lado su trasero, que veas sus pulposos y blancos glúteos marcados y enrojecidos por tanto golpeteo con mi ingle… para que viera el reflejo de mi verga martillando su rosado ano… más bien ahora rojo y algo húmedo…

- ayyy danyyy… ¡me rompiste el culo!… ouuu… exclamo al ver un hilo de sangre salir de su arrugado anillo.

- así se trata a las perras chantajistas como tú… le increpe febril…

desde su posición volteo el rostro para verme llorosa y quejosa… creo q esa imagen en vez de inhibirme, me excito más… mientras ella volvía el rostro contra el mueble, al parecer sollozando por su culo reventado… por un segundo sentí lastima, la estaba tratando como a una cualquiera…

en un momento vane volteo al espejo, los ojos cerrados, el rostro enrojecido y con lágrimas, el maquillaje corrido… resoplando y resistiendo… y luego comenzó a sonreír gustosa… y a pesar de los jaloneos en su cabellos, los palmazos en sus nalgas… ella comenzó a culearme, se unió a mi ritmo…

- ¿ves?... Te dije que me lo harías… uhmmm…. Me dijo medio sarcástica, contrayéndose por lo que parecía un vibrante orgasmo.

Tras un breve sollozo o actuación para enardecerme más, vane más bien parecía disfrutarlo… parecía haberme incentivado para castigarla más… con ella no podía ganar… a mayor maltrato, mayor gozo de su parte… en ese instante de flaqueo de ánimo, flaqueo mi sensibilidad también... Después de todo la imagen que me ofrecía vane, que era hermosa, más aun sometida como una prostituta de lujo…

- mierd… se me viene… dije por instinto, acostumbraba advertir a cielo riveros, mierd… cielo riveros… pensé, pero ya estaba hecho todo.

- nooo… la quiero en mi boca… me reclamo.

Se liberó rápidamente y se arrodillo… yo sin querer le di tiempo, como un tonto ahorque mi verga para que no salga la leche, pensando que si no salían mis líquidos no había infidelidad… pero tonto al fin, era inevitable, iba explotar mi verga si seguía apretándola… solo me quedo liberar mi verga y mi leche salió hirviendo a borbotones…

mientras vane soporto un torrente de leche en su cara, abriendo la boca, tragando lo más que pudo… tras el salpicón inicial que derramo líquidos en sus mejillas y hasta parpados, resbalando por sus senos… luego apreso con un mano mi verga, que parecía una manguera de bomberos desbocada, una vez que la tuvo bajo su control, se dedicó a succionar las ráfagas de semen tibio que mi pene escupía…

- asuuu… tantooo… se quejó sorprendida, casi ahogándose.

En un último arrebato de ira, a pesar del cansancio, nuevamente tome del cabello a vane y la obligue a tragarse mi verga… en realidad algo de culpabilidad empezaba a invadirme y no quería ver su rostro… ella más bien obediente, no opuso resistencia y se dejó llevar por el maltrato que le había impuesto.

Más bien, cuando agarro ritmo, se dio maña para respirar entre mi verga y el poco espacio que le dejaba para maniobrar a su cabeza hacia atrás… y en realidad con su lengüeteo y succión logro exprimirme unos chorros más, creí que me estaba orinando… eso si no lo aguanto y forcejeo para liberarse, yo no la retuve más debido a mi cansancio…

- cofff…. Cofff… ayyy… exclamo medio ahogada, desparramando líquidos.

Cuando pudo respirar, nuevamente se aboco a limpiar mi verga… esta vez solo atine a acariciar su cabeza, después de todo… había soportado todas las vejaciones que le hice, el peor maltrato… en un momento me desconocí porque no recordaba haber tratado tan bruscamente ni siquiera a cielo riveros que me sacó de quicio un par de veces….

Vane me miro gustosa desde su posición arrodillada… estaba exhausto, respirando apenas… colorado y sudoroso… no quise verla… solo sentí un mareo y parecía que solo me sostenía la mano de vane agarrando mi verga y sus labios limpiando los líquidos de la cabecita de mi pene... Una vez q los soltó… yo me caí a un lado, apoyándome en el piso y un lado de la cama que nunca usamos…

ella hizo un gesto de querer ayudarme al verme desvanecerme, pero luego se tapó la boca, creo que sintió los líquidos en su cuerpo y comenzó a observar sus blanquecinos senos manchados por mis restos de semen que se le habían escapado.

Mira absorta todo lo embarrada que estaba, casi feliz… comenzó a recoger con sus dedos los líquidos que se le escaparon, y casi por instinto se los fue llevando a la boca… tragando al principio y luego saboreando… era como una especie de limpieza al estilo de los gatos…

- ¿así sabia esto?... Uhmmm… decía vane curiosa.

A mí solo me quedaba mirar embobado como esa niña caprichosa se tragaba mis líquidos, vane finalmente se había salido con la suya y a costa mía… por momentos tenia flashes de cielo riveros en mi cabeza, procuraba bloquearlos, estaba adolorido y cansado, casi agarrotado y me sentía derrotado, sin ganas de moverme… parecía que el ultrajado había sido yo…

tras ese shock, tuvimos que acicalarnos e irnos, si hubiera sido cielo riveros me hubiera exprimido un par de veces más en la ducha y donde pudiera, pensé… pero con vane, no quería más… yo estaba como zombi mientras vane feliz se portaba cariñosa conmigo… la deje en su casa, suerte q su vestido no se manchó y que su abuela no hizo preguntas confiada en que era un “buen chico”…

ese día los padres de vane llegaron y se la llevaron de viaje… creyeron que la dejaron sola mucho tiempo y que por llamar la atención se había hecho de malas juntas… la alejaron de la ciudad y de la ira furibunda de guille… al menos la aleje del peligro y corte la cadena de revanchas… pero…

- guille me conto todo… escuche la indignada voz de cielo riveros al teléfono.

- por la put… madr... Suspire.
Sabía que en algún momento seria descubierto, como y cuando eran las incógnitas… siempre creí que el “cómo” no importaba y deseaba que el “cuándo” fuera temporalmente muy pero muy lejos, de tal manera ya no signifique nada para cielo riveros o para mi… aunque era muy ingenuo, porque las mujeres rara vez olvidan fácilmente y todo cuenta para ellas, incluso las ex, peor los deslices…

dolía saber que el “cómo” había sido a través de guille, a quien consideraba mi amigo, siempre había pensado que el “cómo” sería por vane o hasta javier, pero ¿guille?... A tanto llego su sed de venganza, su ansia de revancha, que al ver que no podía desquitarse con vane decidió desquitarse con cielo riveros y conmigo… si él no era feliz (con vane o vengándose de ella), nadie debía serlo…

- amor… explícate que no te entiendo… repuse, tragando saliva.

- nada de amor… no me llames así… después de lo que hiciste… continuo molesta.

- pero ¿qué hice?... Dime… respondí, mientras pensaba que excusa poner.

En esos segundos estaba en la encrucijada, no sabía que inventar en caso que me dijera que sabe lo de vane… por un lado lo que le conté a guille fue que me amarro, no pude hacer nada… pero si le conto lo que planifique con él en su depa… ¡diablos!… o me quedaba la otra táctica históricamente usada por mi genero… “niégalo todo”… hasta que cielo riveros decidió continuar…

- como es posible que le hayas hecho eso guille… me recrimino.

- ¿qué cosa?... Dije sin entender.

- alejar a vane diciéndole a su abuela que sale con un narco, solo por ser mestizo… entonces que pensaras de mi o de mi padre… me dijo abrumada.

Suena hasta cierto punto risible, pero cuando los rumores van de una persona a otra se matizan. Guille llamo a casa de vane, contesto la abuela que había escuchado de el por los amigos de vane, entonces fue fácil asociar los rumores con el… y la señora le dio una reprimenda, casi lo amenazo con la policía si se volvía a acercar a su nieta… luego fácilmente guille asocio eso con mi intervención…

parece que después cielo riveros llamo para preguntarle cómo iba con vane… o quizás para saber si es que yo lleve a vane a su casa, recuerden que mi enamorada andaba en guardia con vane. El asunto es que guille en despecho le fue a cielo riveros con el chisme… dentro de lo bueno de esto es que… al menos guille respeto el secreto entre ambos sobre lo sucedido conmigo y vane…

- oyeee… no fue así… me excuse.

- entonces como… insistió cielo riveros, quería una explicación.

Como explicarle que tuve que alejar a vane para protegerla de guille, de su venganza, de esa revancha porque vane me amarro y me ultrajo en la cabaña… como justificar mi accionar, sin relacionarlo con vane a quien cielo riveros a pesar de tener cierta empatía también la tenía como rival… quizás tenía una oportunidad más para confesarle la verdad…

- vane… abuso de… dije en voz baja.

- ¿abuso? ¿de quién?... Agrego intrigada.

Era vergonzoso hasta cierto punto confesarle que me sometió… pero tampoco no sabía cómo reaccionaría cielo riveros al enterarse, no fue mi culpa... Pero ella diría que por provocar a vane si lo fue…

- de… de… nuestra amistad… dije prolongando mi agonía.

- ¿cómo así?... Replico cielo riveros, que no me soltaría hasta saber la verdad.

- en el baile… ella… se me insinuó… luego en el auto… invente lo primero que se me ocurrió.

- yo la matooo… esa regalona… dijo furiosa cielo riveros.

En parte era cierto, vane en el baile me insinuó que tendría otro encuentro con ella, y en el auto me insinuó que le debía un favor. Le dije a cielo riveros que guille lo había notado, que me confronto y le conté la verdad, porque no quería que siguiera engañado por ella… pero que él no lo tomo tan bien… y que por su cuenta estaba planeando vengarse de vane hasta pensando incluir a javier en eso.

Cielo riveros se horrorizo al oírlo, no daba fe que guille pudiera reaccionar así… o que una insinuación fuera tan grave como para llegar a eso… cielo riveros se quedó con la duda de que si le decía toda la verdad o le ocultaba algo más… y yo me quede con la duda, de que si guille no llegaría a decir más de lo que paso…

le explique qué vane ya estaba rumbo al extranjero, que se tranquilice, que guillermo estaba dolido y exagero las cosas, que en realidad lo hice por su bien, que vane con sus cosas no era para él, no porque fuera rica sino porque estaba medio tronada, inestable, cambiaba de opinión a cada rato y lo iba hacer sufrir y desconcentrar de los estudios.

Al fin, cielo riveros se tranquilizó, pero según ella aun no me perdonaba… ¡mujeres!, cuando se engríen buscan que uno pague por las cosas que uno no entiende que ha hecho, pero para ellas está claro que algo hicimos y debemos resarcirlas… en fin, aunque yo si estaba con la conciencia movida.

Sacando cuentas había estado con vane 3 veces, quizás las 2 primeras no contaban (para mí al menos), porque la primera vez me amarro y la segunda estaba muy ebrio… pero ¿la tercera?... Esa si fue en mi juicio no muy sano, pero a voluntad, igual podría decir que cedi ante su chantaje.

El tema es que ¿cielo riveros lo entendería así?... Lo dudaba, más bien me mataría, basta recordar que después de sospechar que me tire a vane no me quiso ver y tuve que buscarla en el club, y ahí, luego de un coqueteo de vane en la pista de baile, me armo tremendo berrinche. Si se entera de esto, sería peor.

Mientras tanto, al recordar imágenes de lo sucedido… mi ego se sintió en las nubes al recordar que había poseído a los traseros más apetecibles de la facultad, quizás de la universidad. El moreno y carnoso trasero natural de cielo riveros, así como el musculoso y bien trabajado trasero blanco de vane.

Pensaba en todo eso cuando me quede dormido satisfecho de que todo, al menos hasta el momento, se había resuelto bien. Me desperté horas después con el sonido de mi laptop, había recibido un correo electrónico… era de vane… abrí el correo y vi una foto suya a manera de postal de algún lugar de europa, españa al parecer. Decía a grandes rasgos:

- gracias por la despedida, me acorde de ti todo el viaje, no me pude sentar bienj… besos, vane.

Supongo que vane hacía referencia al maltrato anal que le di el día anterior, se fue satisfecha pero adolorida. Me percate que había otro archivo adjunto, comprimido quizás para que no se vea a primera vista, ¿será un virus?, pudo más mi curiosidad y al abrirlo…

- asu… esta mujer está loca… exclame en la privacidad de mi cuarto.

Vanesa había adjuntado una foto de su blanco y bien formado trasero, mientras se abría con ambas manos las nalgas para mostrarme su enrojecido ano. Por el entorno de la foto, que apenas se apreciaba, intuí que se lo había tomado en el baño del avión. Quizás lo hizo para que yo aprecie la magnitud de los destrozos que mi verga causo en su ano, y el motivo por el cual ella no se podía sentar bien. Luego de apreciar esa locura, me reí… aunque mi pronto se me acabaría la suerte.

- danny… te buscan… escuche la voz de mi madre tras la puerta.

- ¿quién es?... Pregunte, cerrando los archivos por instinto.

- yooo… dijo abriendo la puerta.

Mierd… era cielo riveros, me quede helado, pálido, sin voz. Solo atine a cerrar la laptop casi sobre mis propios dedos, cosa que a ella no le pareció sospechoso sino gracioso, para mi suerte.

- ¿qué?... ¿no te alegras de verme?... Pregunto entre resentida y caprichosa.

- pobrecito, se acaba de levantar… intervino en complicidad mi madre.

Yo seguía mudo y sorprendido, ¿de cuándo acá se llevaban bien cielo riveros y mi madre?... Al parecer cielo riveros se sintió culpable por las cosas que me dijo y vino a visitarme, como yo aún dormía, mi madre la invito a pasar para conocer a su posible futura nuera. Se entretuvieron conversando hasta que oyeron ruido en mi cuarto, que las alerto que estaba despierto, entonces subieron a verme.

- claro amor… feliz de verte… que sorpresa… respondí medio tartamudo.

- bueno chicos, los dejo, pórtense bien… dijo mi mama sonriendo.

Creo que era la primera vez que mi madre me escuchaba decirle “amor” a una chica, ella estaba feliz, y cielo riveros también por reconocerla así, como mi enamorada, frente a mi madre. Mi madre salió de la habitación no sin antes hacer gestos de aprobación como diciendo “bien hijo, cielo riveros está muy linda”.

Era cierto, cielo riveros había venido muy linda, quizás previendo encontrarse con la suegra, llevaba un vestido claro, un poco ceñido en el pecho y suelto en la falda apenas sobre las rodillas. Poco maquillaje, no necesitaba mucho, su sonrisa de enamorada que se siente culpable lo completaba todo.

- pensar que aquí me… me lo hiciste por primera vez… dijo sonriendo algo nostálgica, recordando cómo meses atrás se lo había metido por atrás en aquella cama mientras “estudiábamos”.

En ese momento no sabía que quizás ese mismo lugar seria donde tal vez se lo haría por última vez. Cielo riveros se sentó al borde de mi cama, observando todo el lugar y recordando como a manera de juego había empezado todo, entre copas de vino y la calentura de las historias... Y las ganas que nos teníamos.

- solo quería disculparme por lo que dije… entiendo que lo hiciste buscando el bien de vane y de guille… agrego cielo riveros al ver que no respondía.

Quizás pensaba que estaba molesto con ella, por la llamada que me hizo furibunda, cuando en realidad yo estaba aturdido por lo que hice con vane el día anterior, por el correo que recibí con esas fotos y por la sorpresiva visita de cielo riveros… que no sabía cómo reaccionar…

- ahhh… si bueno… a veces eres muy explosiva… atine a decir.

- si lo se… herede el carácter de mi madre… ¿qué puedo hacer para que me perdones?... Dijo apenada como niña regañada.

A estas alturas los papeles se habían invertido, era cielo riveros la que buscaba mi perdón, lo que me hacía sentir más culpable aun. Debía quitarme ese sentimiento, debía dejar de pensar en lo que le hice a vane, en como abuse salvajemente de ella y le gusto… y solo se me ocurría una manera de olvidarlo…

- que tal… sexo de reconciliación… me atreví a decir medio en serio medio en broma.

- ay dany, lo sabía, solo piensas en eso… me reprocho graciosamente.

Entonces deje mi escritorio y me fui a sentar a su lado, en la cama, mientras cielo riveros fungía de la chica tímida e inocente que no sabe qué hace en el cuarto de un chico, cosa que en parte me excitaba más. Le acaricie el rostro, aparte algunos cabellos y empecé a besarla, cielo riveros me correspondía.

- no… tu mama se dará cuenta… me decía entre jadeo y jadeo que denotaba que cielo riveros también se estaba excitando.

- no te preocupes… está viendo su novela… me excuse, mientras mis manos hurgaban sus senos.

- uhmmm… que terrible eres… dijo zafándose de mí.

Se levantó y paseo unos instantes por el cuarto para que se le bajen las hormonas, acababa de entablar relación con su suegra y no quería dar mala imagen. Cuando cielo riveros paso cerca de mí, la atraje, ella estaba de pie frente a mi mientras yo seguía sentado en la cama, de manera tierna la abrace por la cintura mientras mi cabeza se apoyaba en su plano abdomen. Cielo riveros me acariciaba los cabellos.

Una vez que se sintió cómoda con esa situación, mis manos instintivamente fueron bajando de su cintura, acariciando sus sobresalientes nalgas por encima del vestido. Ella movía su cabeza nerviosa, con los ojos cerrados, disfrutando de esas caricias… hasta que llegó el momento de arriesgarme, metí mis manos por debajo del vestido y empecé a estrujar sus carnosos glúteos, lo que la hacía estremecer…

- vamosss… le susurre, viendo que su cuerpo no resistiría más esos incentivos.

- uhmmm… está bien… pero que sea rápido… me respondió cediendo.

Ella estaba recontra caliente, pude tantear su pequeña ropa interior que estaba húmeda, ella tembló al sentir mis manos pasar por ahí. Acto seguido, se arrodillo y empezó a jalonear mi pantalón, hasta que descubrió mi verga erecta y sin chistar se la metió a la boca, la comenzó a mamar como poseída.

Seguramente quería asegurarse que ese encuentro fuera rápido como ella lo había pedido, para evitar que mi madre nos sorprenda, por ese motivo succionaba y pajeaba con gran pasión para tenerme al borde de la eyaculación.

- ya, ya… le dije apartándola, entonces agregue… vamos a la cama.

- nooo… mucho ruido… se excusó ella.

Esa vez que le inaugure el ano, hicimos ruido, pero era de madrugada y mis viejos roncaban así que no se dieron cuenta. Ahora que aún no anochecía, y con mi vieja en la sala, debíamos ser más discretos.

- ven… me dijo cielo riveros y me jalo hacia la silla de mi escritorio, estaba súper excitada.

Me hizo sentar en la silla mientras ella misma apartaba su vestido, hacia a un lado su pequeña ropa interior, se puso de espaldas a mí, yo la ayude a apartar la falda, mientras ella tomo con confianza mi verga y se la apunto donde más lo deseaba, en su ano.

- uyyy… siii… exclamo al sentir que mi verga hacia diana en su goloso ano.

Yo embobado la veía maniobrar, solo atine a tomarla de la cintura, mientras ella iba insertándose centímetro a centímetro mi tieso pene. Parecía disfrutarlo, por momentos un temblorcillo nervioso la recorría y la hacía perder el equilibrio y metérsela más rápido. Hasta que al fin estuvo completamente ensartada, sentía su arrugado anillo palpitar complacido sobre mi verga.

- ayyy amorrr… como me gusta tenerte dentro… suspiro satisfecha.

Tras unos segundos de disfrutar el empalamiento que ella misma se prodigo, cielo riveros dejándose llevar nuevamente por su excitación, comenzó a menear su enorme rabo en mi ingle. Mi verga cual plastilina la seguía mientras mis manos mantenía presionado su inflado trasero en mi entrepierna.

Hasta que llegó el momento en que sintió que debía satisfacerse ella misma, y comenzó a brincar sobre mi verga armónicamente, primero despacio y luego aumentando el ritmo. Mis manos en su cintura no hacían mucho, así que pase mis manos a sus henchidos senos, jaloneando el vestido para liberar sus deliciosos melones y jugar con sus pezones.

- uyyy… siii… así amor... Asiii… exclamo ella, sin dejar de brincar sobre mi verga.

Cada vez sus gemidos eran más sonoros, cielo riveros se daba cuenta y volteaba de lado a verme si no me quejaba, ella procuraba morderse los labios para no emitir sonidos, pero ni así, cada vez era más evidente lo que hacíamos, sobre todo porque la silla empezaba a tambalearse también.

Yo estaba extasiado viendo esos dos globos canelas que tenía por nalgas saltar y vibrar en mi ingle, pero debía cambiar de posición, cielo riveros hacia mucho ruido. La hice levantarse, esta vez se sentaría frente a mí, con sus senos a mi disposición, con su boca cerca de mi… intentaría acallar sus gemidos con mi lengua.

Nuevamente cielo riveros con confianza de sentirse dueña de mi verga, la apreso con su mano, pensé que cambiaría de agujero… pero otra vez la dirigió a su ano, esta vez no fue lento, sino ella se introdujo mi pene violentamente, no lo quiso tener fuera mucho tiempo y decidió clavárselo rápidamente.

- ouuu… uhmmm… se quejó ella, mientras yo le tapaba la boca.

Tras unos segundos de asimilación, ella me miro y asintió, como dándome el ok para empezar nuevamente. Cielo riveros empezó a saltar otra vez sobre mi verga, cada vez más fuerte, cada vez más poseída, mientras sus senos vibraban frente a mí, de cuando en cuando engullía un pezón y ella me abrazaba con fuerza, soportando ese castigo auto infringido.

Llego el momento en que cielo riveros comenzó a flaquear de su esfuerzo y yo tome como pude sus enormes nalgas y la ayude a empalarse ella misma. Sentía que me faltaban manos para estrujar y cubrir esos gordos glúteos, mientras cielo riveros ahogaba sus gemidos entre mi lengua y la suya, hasta que se detuvo. Creí que ya había llegado, porque estaba muy agitada… pero no…

- quiero terminar así… me pidió mientras se paraba y me invitaba a hacer lo mismo.

Luego cielo riveros fue a arrodillarse, apoyando el abdomen sobre la silla, al igual que los codos, mientras sus manos se asían de las barras del respaldar de esa silla, como preparándose para soportar otra embestida en su inflado trasero. Cielo riveros quería que la posean como le gustaba, en 4 patas, como una perra.

Al ver que no reaccionaba ante tal espectáculo, cielo riveros empino más el trasero, quebrando la espalda como para que viera sus atributos a plenitud. En esta maniobra sus nalgas se fueron abriendo dejando ver a su complaciente y torturado ano, que pedía más.

Solo le quedo voltear suplicante y ansiosa para que le atore el ano de nuevo. No me hice de rogar y la fui penetrando rápidamente, su esfínter ya se había acostumbrado a dejarme ingresar.

- siii…. Hasta la raizzz… suspiro complacida.

Era cierto, en esa posición, mi verga la atravesaba por completo, solo faltaba que le metiera las bolas, mientras cielo riveros se retorcía ansiosa. No la hice esperar más y comencé a estamparla contra la silla. Por momentos jaloneaba sus gordas nalgas, y luego la tomaba de su estrecha cintura, haciendo más presión, quebrándola más mientras su enorme trasero vibraba al chocar con mi entrepierna…

- uyyy siii… promete que me vas a coger siempre así… uhmmm… me pidió al borde del orgasmo con cara de poseída.

- ¿cómo así?... Pregunte desvariando, embobado por su jugoso rabo.

- como a una perra… como tu perra… exclamo en el éxtasis de su morbo.

A estas alturas ya no nos importaba el ruido que hacíamos, la silla saltaba, sus gemidos eran sonoros, estábamos al límite….

- ouuu uhmmm…. Se quejó finalmente cielo riveros estremeciéndose de pies a cabeza.

- ufff…. Se me viene… ufff… exclame.

- no, no… vennn… en mi cara… me suplico, apurándose en darse la vuelta.

Mientras cielo riveros abría la boca, mi verga escupía semen en su rostro, algunos chorros hicieron diana en su garganta mientras otros en sus labios, mejillas, barbilla, frente y hasta parpados, mientras ella sonreía complacida, como si de yogurt se tratara, no le importaba, estaba satisfecha y sabía que esa excitante imagen me encantaba.

Cuando mi verga dejo de descargar su leche, cielo riveros sin limpiarse el rostro empezó a mamarme la verga, a limpiarla. El agradecimiento que tuvo hizo que su lengua jugara con mi sensible verga, incentivándola, logrando extraer una segunda pequeña descarga de semen. Sentí que me orinaba, me quise alejar, pero más bien cielo riveros me tomo de las caderas para evitar que huyera… estaba dispuesta a tragárselo todo… y así lo hizo, respirando dificultosamente pero lo logro….

- uy caraj…. Cielo riveros…. Eres la mejorrr… exclame agradecido, mientras me deje caer sentado al borde de la cama.

Ella sonrió complacida, como puntillazo final procedió a tragarse las gotas de semen que quedaron esparcidas… esa imagen hizo que mi verga goteara más… y ella al darse cuenta, me siguió de rodillas y se engullo por última vez mi verga para limpiarla con su lengua.

Tras eso, exhausto me deje caer sobre la cama. El resto de lo que recuerdo fueron chispazos, vi entre sueños que cielo riveros entro a mi ducha a bañarse, se acicalo y se acurruco a mi lado. Yo estaba muerto por los últimos sucesos: lo del campamento, la trama entre vane y guille, mis suegros, etc.

Sentí que cielo riveros salió de mi lado en la cama, yo me acurruque de lado, unos minutos más y estaría renovado, listo para llevarla a su casa, le dije feliz en mi desvarió… grave error… ella me dio un beso en la frente, luego sentí que mi cuarto se ilumino, afuera ya estaba oscureciendo, pensé que estaba viendo tele, esperando que me recupere… pero no fue así…

- ¿que mierd… es esto?... Exclamo una voz furiosa con gran indignación.

Me senté rápidamente, prácticamente salte… ¿qué paso?, ¿temblor? ¿fuego? ¿mis viejos?... Intentaba dilucidar mientras mi adormecido cuerpo intentaba despertar y ponerse en alerta, buscando el peligro que acechara en mi cuarto para defender a cielo riveros de lo que sea... Excepto de mí mismo.

Hasta que mi mirada se centró en el rostro desencajado cielo riveros, que me veía desde el asiento donde minutos antes la poseí con gran pasión… a su lado mi laptop abierta… con la imagen del blanco trasero de vane y su enrojecido ano… más aun con el sugerente mensaje detrás, en el correo que me envió.

Por la put… madr… se jodio todo… me dije.
Dicen que cuando uno está al borde de la muerte, se te vienen a mente, como en un flash, las imágenes de los hechos más saltantes de tu vida… lo gracioso fue que en este caso solo me venían imágenes del mi reciente pasado con cielo riveros…

desde que la inicie meses atrás en esta misma habitación y en la cama donde aún estaba yo sentado, semi dormido y perplejo. Curiosamente la mayoría de mis recuerdos fueron hacía las veces que me cogí a cielo riveros por el culo, gratos recuerdos, que quizás estaban por terminarse ahí…

todo lo que pasamos, tuve que afrontar al simplón de javier cuando aún era su enamorado y cuando fue su ex, a la loca pero a su manera sexy vane y el hasta hace poco buen guille aunque ahora trastornado… todo para llegar a esto…

pensé que si todo se iba al diablo algún día, si cielo riveros me descubriría, seria por alguno de ellos, casi me sentía como batman contra el guasón, harley queen y harvey dos caras respectivamente. Al final termino siendo un autogol, fue mi error dejar mi laptop accesible, sin clave, más aun con ese correo sin cerrar… a la vista…

- ¿y bien?... Me increpo al ver que no reaccionaba, esperaba una respuesta.

- bueno… llegue a decir con un hilo de voz, casi sin aire.

- ni se te ocurra mentirme… dijo enfurecida.

Los segundos que estuve sin responder, recordando mi agitada relación con cielo riveros y elucubrando respuestas, también le dieron tiempo a cielo riveros de ir atando cabos sueltos a su manera, con sus recuerdos y lo vivido en nuestra reciente amistad con vane, con la que me celo un par de veces. Se paró sorprendida, y comenzó a caminar frente a mí, su mente comenzó a divagar…

- claro… por eso la alejaste de guille… la querías para ti… eres un infeliz…

- nooo… no fue así… dije reaccionando.

- la foto de ustedes en el hotel… y en el club, ella te buscaba… como no me di cuenta… mierd… me paso otra vez… pensé que eras diferente a javier… que no me engañarías…

comenzó a rememorar cada cosa hilvanándola, como saben hacer las mujeres… la vi tambalear, en un inicio estaba iracunda, pensé que me golpearía como una reacción natural pero luego comenzaron a agolparse en su cabeza los recuerdos de las infidelidades de javier…

se sintió herida en su ego seguramente, como a ella, una chica bella de escultural cuerpo, quizá la chica más deseada de la facultad termino siendo engañada por 2 chicos: uno alocado y pendejo (javier) y otro divertido y tranquilo (yo)…

- ¿estás bien?… pregunte viéndola mareada.

- hace calor… dany… no me siento bien… solo murmuro y… se dejó caer.

Se desvaneció frente a mí, apenas la pude atrapar, al menos para eso si pude reaccionar rápido. La recosté en el sillón que estaba al lado de mi cama, preocupado, pero me cerciore que respiraba. Cielo riveros había pasado de la furia a la depresión, un cambio abrupto de humor… o simplemente tuvo algún tipo ataque de ansiedad que termino por fulminarla.

- mierd… ¿ahora qué hago?... Me dije preocupado.

Si le aviso a mi vieja para que me ayude, se arma un lio… mejor solo espero que se recupere… si despierta lo más seguro es que me va querer matar…. Después del repaso que le dio a mi cercanía con vane, dudo que me creyera o quisiera escuchar al menos, se iría de mi casa y de mi vida, armando un alboroto… quien podría culparla.

Mientras pensaba que hacer, mi vista se posó sobre unos trozos de cuerda en mi habitación que alguna vez use para subir unas cosas por el balcón…

- claro, debo inmovilizarla, para evitar que se ponga agresiva o que huya, y que a su vez me dé tiempo de explicarle lo sucedido... Fue la única idea que se me ocurrió en ese momento.

Bueno, sonaba razonable mi plan, mientras ya veía reaccionar de a pocos a cielo riveros, como cuando sueñas y te mueves sin saberlo. Hasta que…

- hijo… escuche en la puerta.

- si… dije temblando, mi vieja.

- saldré un rato a ver a tu tía…

- ok… dije aliviado.

- pórtate bien…. Dijo en advertencia.

Ufff… suerte que no quiso despedirse de cielo riveros… y al menos no habría público por si había gritos cuando ella despierte… mi vieja demoraría una hora o dos… esperaba poder sobrevivir eso…

con lo nervioso que estaba y, mientras pensaba como explicarle lo sucedido, termine amarrándola mal, digamos que fue culpa de ella también, en principio cielo riveros estaba recostada en el sillón, le iba a amarrar los pies, pero como sonámbula reacciono y termino apoyada en mi espalda mientras yo arrodillado le amarraba un tobillo.

En mi prisa porque presentía que se levantaría pronto, ate su tobillo derecho a su muñeca derecha, sería más difícil que huya así… luego ate el otro tobillo a su otra muñeca… poco ortodoxo, pero en su momento creí que era una manera rápida de contrarrestar a cielo riveros, mientras su cabeza comenzaba a reaccionar.

Parecía una muñeca de trapo, sentada, con el pecho contra sus piernas… sus brazos ladeando sus piernas y amarradas de una manera peculiar. Lo que no prevei era que en esa forma tenía la cabeza casi entre las piernas, mirando al suelo, no me podía ver… quizás me convenía para no verla mientras le explicaba todo…

- danny… danny… ¿qué es esto?... Dijo forcejeando por las amarras.

- tranquila… tranquila… déjame que te explico…

- eres un maldito mentirosooo… bramo recordando todo e intentando levantar la cabeza.

- no, no… déjame que te explique…

- suéltame que te mato… grito furiosa.

Mientras comenzó a patalear, en su deseo por incorporarse, término con la espalda contra el respaldar del sillón y…. Las piernas y brazos graciosamente al aire, como un camarón volteado. Pude ver su rostro rojo de rabia, sus ojos echaban fuego y su boca… bueno, profería una serie de insultos y amenazas que comenzaba a sonar más fuerte….

Si mis vecinos llamaban a la policía y nos encontraban así, parecía un secuestro, debía callarla pero como… mire sobre mi cama aun yacía la ropa interior de cielo riveros, y por la posición que ahora tenía ella, con su falda abierta, era evidente que no la traía puesta… ya imaginaran lo que hice…

si, hice una bola de trapo con su tanga y, si ya me odiaba, me iba a odiar un poco más, se la metí en la boca… la tanga claro, si le metía otra cosa en la boca me mordía… nuevamente empezó a patalear, quiso escupir la tanga de su boca pero no pudo, respiraba airadamente por la nariz…

tras unos segundos o minutos… al fin se dio cuenta que no tenía sentido forcejear… se calmó, me hecho una última cara furiosa y luego se relajó, las piernas abiertas pegadas a los brazos se recostaban a ambos lados de los brazos del sillón.

- ok… primero discúlpame por amarrarte, no me dejaste otra opción… bueno, también por lo de la tanga en la boca… es la única manera que encontré de que me escuches… le dije.

Ahora que había silencio, solo tenía que soportar su mirada amenazante, empecé a explicarle como sucedió todo. Desde las insinuaciones de vane, pasando por su chantaje por contar lo mío con cielo riveros y las cosas que nos vio hacer, inventando chismes que harían quedar como una puta a cielo riveros en la facu… bueno, si era una puta pero mi puta… y nadie más debía saberlo…

le conté como para preservar el honor de cielo riveros y vengarme de vane, apele a engañar a vane en el hotel, siendo guille que me suplanto. Como luego se enredaron las cosas por culpa de javier y la foto que nos tomó. Que luego vane y guille se encariñaron, al menos eso pareció en el club.

A decir verdad, omití la parte en que vane me amarro en la cabaña y abuso de mí. Tampoco le conté de mi triste venganza en el club, en la que ebrio y en oscuridad poseí a vane en su cabaña. Creo que esas partes no tenía por qué saberlas y solo la enfurecerían más…

del club solo le comente que durante el baile vane se me insinuó, que seguía encaprichada conmigo y que parecía que lo tomo a competencia con cielo riveros. Le dije que la rechace… pero que igual en el camino de regreso en el auto se me volvió a insinuar.

También le dije que guille se percató de eso, y vane al regresar y le dijo a guille cruelmente que seguía interesada en mí. Que eso enloqueció a guille y planeo una horrenda venganza contra ella, usando a javier también. Por ese motivo hable con la abuela de vane para que la aleje hasta que guille vuelva a sus cabales y se olvide hacer locuras.

Pero que, bueno, vane me siguió chantajeando con tener un encuentro conmigo y que solo así se iría de la ciudad. Que yo actué temiendo por lo que le haría guille y las consecuencias que podría traer para el también.

- como ves… una cosa llevo a la otra… cuando pensé que solucione las cosas emparejando a guille y vane, las cosas empeoraron por la terquedad de vane… la única manera que encontré de ponerle fin a eso… fue accediendo a su pedido, para evitar todo termine mal con guille, con vane, incluso contigo para que no deje mal tu imagen en la universidad…

casi me pinte como un santo, queriendo salvar a todos, y también mi pellejo, siendo yo una víctima de las circunstancias. Termine mi relato y escuche a los grillos… evidentemente no hubo respuesta, cielo riveros seguía con la boca tapada… mirándome entre furiosa e incrédula de mi historia. Con tantas cosas que le oculte o mentí, historias que invente… era difícil que me creyera…

ya había sido difícil en el club que me perdone, ahora sería casi imposible por la expresión en su rostro, pero al menos ya había dicho mi verdad…

- te voy a sacar eso de tu boca… pero no grites… dije tímidamente.

Saque rápidamente la tanga de su boca, para evitar que me muerda. Cielo riveros movió la boca como recuperando la movilidad por lo incomodo de la tanga en la boca… guardo silencio como pensando que decir y aguantándose de gritar…

supongo que a estas alturas se dio cuenta de la situación, tampoco quería un escándalo y que la encuentren tirada en un sillón, amarrada patas arriba, con su falda abierta y el pubis al aire…

- ahora se supone que te debo agradecer por tirarte a esa mujerzuela… quieres que te aplauda por salvar mi honor… por mentirme…. Eres una basura… dijo aun molesta.

- si no lo hacía, vane diría estupideces de ti en la facultad… eso te hubiera gustado?... Me defendí.

- sabes que desde que entre a la facu dicen estupideces de mí… cada vez que paso un curso difícil, todos dicen que seguro me tire al profesor, si soy amable con un chico piensan que soy fácil, si salgo con alguien a la semana el imbécil dice que se acostó conmigo…si me hago amiga de un chico inteligente piensan que es por interés, para que me ayude a aprobar…

- wow… de que hablas… nunca oi esas cosas (bueno un poco, solo lo último)…

- tu apenas pasas tiempo en la facu, no todos tenemos la suerte de sacar buenas notas con poco esfuerzo, yo tengo que pasarme casi todo el dia en la facu estudiando y haciendo mis trabajos, porque quiero graduarme… pero eso no le importa a la gente, todos miran mi trasero y piensan que me regalan las notas o que alguien me ayudo… siempre escucho los rumores… dijo indignada al borde de las lágrimas.

Tenía razón, yo mismo llegue a pensar que muchos profes se morboseaban con ella y le regalaban notas… y si me estresaba pasar mucho tiempo en la facu, veía gente paseándose de acá y allá, perdiendo el tiempo, pensaba que más productivo para mí era estudiar o hacer mis trabajos en casa…

- ¿tú crees que me importa lo que digan de mí?, la gente no sabe el esfuerzo que hago para pasar mis cursos… o todos los chismes de lo que hacía o no con javier… y vienes tu como gran macho a decir que te tiraste a vane para que evitar que hablen de mi…

- bueno… pensé que… intente rebatir abrumado, tenía lógica, yo arme un mundo de situaciones para protegerla y termine succionado por mis propias intrigas, el karma como diría guille.

- ¿pensaste que la gente no iba a hablar?… golpeaste a javier en una fiesta, todos saben o sospechan que estamos juntos… javier va hablar mal de mí… y tú querías evitar que hablen mal de mí, cogiéndote a esa zorra… eres un perro traidor… como todos… sentencio sollozante.

Me sentí hecho mierda… cielo riveros me dijo mis verdades y yo la cague, lleve al extremo las cosas con vane y guille. Por la put… madr… cinco minutos de sinceridad con cielo riveros me hubieran ahorrado un mundo de rollos, de idas y vuelta con vane… y por no decirle las cosas en su momento, la estaba perdiendo…

- me mentiste, me engañaste con esa perra… de todas tuviste que elegir justo a la que detesto más… como te odio infeliz… ahora suéltame… suéltame… bramo volviendo a enardecerse.

Entendí que volvería a gritar, así que volví a meterle la tanga en la boca. Enfureció más… me disculpe por las cosas que hice, creí que actuaba de buena fe, admití que debí contarle antes de llegar a eso, etc…

- tú crees que haya la posibilidad… que me perdones… pregunte absurdamente en ese contexto.

Me miro con rabia, logro escupir la tanga de su boca y con desprecio profirió las siguientes palabras:

- después que me sueltes, me largare de aquí… y nunca más volveré a hablarte, nunca más volveras a tocarme maldito imbécil… confié en ti y fuiste mi más grande decepción…

eso dolió… mierd… había perdido a la chica con la que toda la facu sonaba, había descubierto que era más que un rico culo para coger, tenía virtudes y funcionábamos bien juntos, mejor que las otras relaciones que tuve antes… caraj… como la cague… me dejo perplejo… ahora era yo el mareado…

- danny… suéltame yaaa….

Me senté abrumado en mi cama… con la mirada perdida, luego mi vista se posó en ella, no la quería perder… observe su bello y decepcionado rostro, por ratos preocupada por mi abstracción, y luego como atraído por un imán mi mirada fue bajando, termino aterrizando a su pubis desnudo… ella atada de piernas y brazos, en el sillón…

recordé sus palabras… cuando la suelte y se vaya todo terminaría… cuando la suelte… en algún momento tendría que soltarla… no tenía que ser ahora…

- lo siento… le dije, me acerque a ella y… le tape nuevamente la boca con su tanga.

Me miro con sorpresa… le acaricie el rostro, los cabellos, sus senos por encima de su ropa, sus caderas, muslos, mientras ella temblaba no sé si de odio o nervios al imaginar lo que pensaba hacer… ella lo dijo, sería la última vez que la tocaría…

dirán que estoy loco, quizás llegue al nivel de locura de guille… pero recién me percate de la situación, cielo riveros transmitía la imagen propia de una chica sodomizada, esperando que la sometan brutalmente… tal vez, eso me fue llenando de morbo… si ya me detesta y es la última vez que tendré contacto con ella… ¿por qué no?, me dije.

En esos instantes mi verga comenzó a crecer, formando un bulto en mi ropa, libere mi pene ante la mirada atónito de cielo riveros, que hizo un intento de patalear, sabía lo que venía. No tuve que acariciar mucho me pene, ya la tenía erguida. Mientras me iba acercando los ojos de cielo riveros iban creciendo sorprendidos.

- lo siento… musite nuevamente, mientras me iba acomodando entre sus piernas.

Cielo riveros solo atinaba a mover la cabeza a manera de reproche, con las piernas y brazos amarrados en alto intento patalear, el torso y pubis libres para recibirme, poco podía hacer para evitar la última cogida que estaba dispuesto a darle.

Para evitar su inquieto movimiento de oposición, opte por la vieja táctica, un beso en el punto débil, por más que tenso el cuello, al sentir mis labios y los besos que le di con un leve mordisco, termino por aflojar un poco, por bajar la guardia…

aproveche esto, para jalar un poco su cadera y ponerla en la posición adecuada, lista para recibirme… veía su vagina empezando a lubricarse contra su voluntad… sin embargo no perdería tiempo ahí… iría directo al grano, mejor dicho al ano…

apunte a su arrugado esfínter, nuevamente la mirada entre reproche y sorpresa de cielo riveros, sus ojos abiertos a más no poder… sin esperar más, la penetre violentamente…

- ouuummm…. La oí quejarse a través de la tela que le tapaba la boca.

- lo siento… repetí mecánicamente otra vez.

Tras aquel impacto cielo riveros arqueo la espalda para soportar el dolor que le causo el abrupto ingreso de mi verga en su sorprendido ano. Su rostro colorado, ojos por momentos abiertos y por ratos entrecerrados, lagrimeando.

Pues bien, sería la última vez que me deleitaría con sus gordas nalgas y estrecho agujero… así que comencé a bombearla, con algo de dificultad, ella intentaba oponer resistencia, contrayendo el esfínter y apretando mi pene… hasta que al fin cedió…

se dio cuenta que no tenía sentido oponer resistencia, ya que estaba dispuesto a salirme con la mía, a no dejarla ir hasta satisfacerme por última vez…. Cielo riveros solo atino a rendirse y soportar mis embestidas en su reventado ano, mientras yo la atoraba hasta las tripas…

- mmmm…. Grrrr… mmm… la oía quejarse levemente con la boca tapada.

Si disfrutaría de ella, por última vez, lo haría de todas sus curvas… mientras le taladraba el ano, sujetando su cadera con una mano, con la otra atine a jalonear sus inflados senos, liberándolos parcialmente, jaloneando sus pezones ante su atónita.

Sudorosa, la veía resoplar ahogadamente por la tela, respirando forzadamente por la nariz… por momentos temí que se iba a ahogar… retire la tanga de su boca, y la reemplace por mi mano entreabierta, para que pudiera respirar mejor sin hacer mucho ruido…

- uffff… ufff…. Ouuu…. Se quejaba entre mis dedos cielo riveros.

Cuando recupero el aliento, ni bien tuvo la oportunidad, me dio un mordisco… aleje mi mano adolorida...

- ¿te gusta?... Así te hacia gozar esa perra… me increpo aludiendo a vane.

- no, no, no… no hay culo más rico que el tuyo… replique febril.

- ouuu… perro mentiroso…. Uhmmm… traidor…. Ouuu… se quejaba ella cediendo.

Al notar su ego creciendo como su excitación, por mi brusco halago, mi reconocimiento a que era el mejor culo que había probado en mi vida… no solo por lo estrecho de su ano y lo bultoso de sus glúteos, sino por esa entrega que tenía, sus ricos gemidos…

dejándome llevar… me lance a besarla… primero cerro la boca, se apartó, hasta que atine a sus labios, ella cedió, abrió su boca, por momentos me brindo su lengua… luego me mordió el labio…

- ufff… ufff… inténtalo de nuevo… malditooo… oummm…. Me reto.

Enfurecí con esa mordida, y castigue violentamente su ano, sus nalgas temblaban y ese estremecimiento se expandió por su cuerpo, vibraba nerviosamente, no sabía si de placer o por el esfuerzo de la posición incómoda con sus extremidades atadas… lo averiguaría intentando besarla otra vez.

- mierd… uhmmmm… ouuu… renegaba cielo riveros, mordiéndose los labios para evitar soltar un gemido que delatara que empezaba a gozar de ese brutal castigo.

Intente acercarme otra vez, de manera retadora me esperaba mostrándome los dientes, lanzando mordidas al aire ante cada amago de besarla… hasta…

- uhmmmm…. Uhmmmm… profirió un tibio gemido con la boca abierta y expresión de sorpresa.

Aproveche ese descuido, para besarla nuevamente, sentí que ahogaba toda su excitación en mi garganta, con su lengua desesperada por enredarse con la mía… otra vez hizo un amago de morderme, sentí sus dientes apresando mi labio inferior… la mire a los ojos, había furia, excitación…

de repente entrecerró los ojos y desistió de morderme, se aboco a besarme desesperadamente mientras irrumpía uno que otro gemido en mi paladar.

- uhmmm… te odiooo malditooo… uhmmm… vocifero excitada.

- nadie te va romper el culo como yo… la rete.

- eres una mierd… uhmmmm… pero que rico me cogesss… uhmmm…

esperaba que esa sometida anal hiciera que desistiera de dejarme, que a punta de vergazos hubiera torcido su decisión, que no fuera necesario amarrarla otra vez, que la próxima que la tuviera patas arriba con el ano a mi disposición seria por su elección…

- ¿quién te reventó el culo por primera vez?... Le obligue a responder.

- tu perrooo mentirosooo… tuuu… uhmmm… no puedo masss…uhmmm… gimió casi reventando de placer.

Hasta que sentí húmedo mis genitales, cielo riveros me estaba orinando de placer, soltaba chorro tras chorro, me aleje un poco al sentirlo. Mientras ella miraba embobada como mi verga le partía el culo en dos y su vagina parecía un volcán escupiendo líquidos…

- ohhh… mierd… me estas reventando… uhmmmm….

- si… eres mi perra… le dije.

- no no no… ya nooo… uhmmm… ya no puedo… uhmmm…

fue así que cielo riveros, no pudo más… tal como dijo, reventó en un terrible orgasmo anal, que la hizo estremecerse y temblar hasta contraerse, casi acalambrándose… mientras mi verga exploto en su ano, con litros y litros de leche…

- ohhh… ufff… qué diablos… me dije.

En plena explosión saque mi verga, y la apunte rápidamente a su boca abierta y jadeante, solo que no le atine precisamente, la salpique el rostro, mejillas, barbilla, hasta hacer diana en su boca, cielo riveros se ahogaba con el chorro de leche…

- mierd… ufff…. Ufff… resople tranquilo.

Mientras ella se tragaba mi leche para poder respirar tranquila. Cuando termine, llevado por la lujuria pensé que si cielo riveros ya había soportado eso, que más daba en una última vejación. Fui por un lado del mueble, cielo riveros respiraba dificultosamente, pero no me importo.

Jalonee su cabeza, hasta su cuerpo se deslizo en el mueble y acomodando su cabeza conveniente de lado, y la obligue a tragarse mi verga. Debía ser una faena completa, cielo riveros tenía que limpiar mi verga.

- queee… oughhh ughhh… apenas alcanzo a decir, porque mi pene ya estaba en su paladar.

Pensé que con su lengua limpiaría los rezagos de semen en mi verga. En un momento me asuste al sentir sus dientes… que idiota, había puesto mi verga en la boca de una mujer hasta hace poco furiosa… que me mordió los dedos y el labio… tenía mi pene literalmente en la boca del lobo (loba mejor dicho).

Al darme cuenta empecé a sacar mi pene, pero sus labios me retuvieron… sin decir, nada, cielo riveros comenzó a succionarme la verga como poseída… entendí que en un primer instante su intención fue morderme, luego, al igual que yo, se dejó llevar por el morbo y actuó de acuerdo a eso.

Los centímetros de pene que había sacado de su boca los fui insertando nuevamente complacido, se había vuelto una experta mamándola…

- put… madr… eres la mejorrr…. Uffff…. Exclame.

En pocos segundos, cielo riveros había logrado extraerme una segunda descarga de leche, sentía que me orinaba, pero ella seguía engullendo mi leche sin protestar. Cuando acabo mi descarga, procedió a limpiar con su lengua los restos de esperma.

Alejo su rostro suspirando profundamente, elevo su rostro al cielo, cerrando los ojos, como disfrutando un momento, hasta que instintivamente paso su lengua por sus labios melosos para terminar de limpiarse ella misma. Otra gota de leche, se me salió al ver esa escena.

Cielo riveros muerta, se dejó caer de lado, con sus extremidades amarradas, resoplo unos segundos… con la mirada perdida…

- ahora si… suéltame por favor… suplico graciosamente al borde de un calambre total.

Viéndola mas domesticada, sumisa, quizás habiéndome perdonado, decidí liberarla, parecía que ya no sería un peligro, ni parecía con fuerzas o ánimos para hacer un escándalo. Quizás había funcionado, ya antes la había sometido analmente, logrando terminar peleas y llegando a reconciliarnos.

- voy a bañarme… solo atinó a decir una vez libre, aun con semen secándose en su mejilla.

Se veía abrumada, pensativa. No la quise presionar con preguntas o definiciones de lo nuestro, de que pasaría, solo la deje ir al baño. Escuche su vestido caer, el agua, solo le deje una toalla y la espere en el sillón en el que la había ultrajado hace unos momentos.

Pensando que tal vez en unos días las cosas se normalizarían entre nosotros, en que tenía que hacer para ganarme su confianza de nuevo, quizás llevarla a un sitio bonito antes que acaben las vacaciones de la universidad y empiece nuestro último ciclo.

Salió cambiada del baño, con la mirada triste, esbozo una tibia sonrisa, mientras yo esperaba optimista su veredicto… su perdón o alguna penitencia que me impusiera, sería razonable dado lo que hice…

- se acabó dany… me mentiste muchas veces… sentencio cielo riveros.

- pero… la pasamos bien hace rato… intente refutar.

- no quiero alguien para tirar, quiero alguien en quien confiar… ya me pasó con javier, fue igual y me engaño una y otra vez…

- no me compares con ese imbécil… me enoje.

- digas lo que digas, ahora te veo así… defraudaste mi confianza… maldición, te tiraste a vane, ¿debo decir más?… no quiero seguir contigo… respeta mi decisión… me explico.

- está bien… fue lo único que me quedo decir.

Sabía que era inútil intentar convencerla, sería peor, lo de vane era muy reciente, quizás debía darle tiempo al tiempo. Cabizbajo acepte su decisión. Cielo riveros hizo un ademan de irse. Caminamos en silencio a la puerta de mi casa.

- nuevamente lo siento… le dije.

- yo también… replico llorosa.

Me dio un beso en la mejilla, y luego me dio la espalda, por un momento se detuvo, igual que mi corazón, dudo en seguir… luego volteo, me miro dulcemente… quizás me perdono…

- por cierto… dijo, mientras su mano acariciaba mi mejilla.

Tal vez era el preámbulo de un beso de reconciliación… pero no… alejo su mano, cerro el puño y me dio un certero golpe en la mejilla que acaba de acariciar como preparándola para el castigo. Vaya que fue un golpe fuerte, me volteo el rostro, recordé que su padre había sido cielo riverostar y seguro le había enseñado como dar un buen puñetazo.

- me la debías… maldito mentiroso… me recrimino.

Me lo tenía bien merecido, nada que reprocharle. Cuando pude volver el rostro, vi su expresión decepcionada casi lagrimeante, tomándose la mano adolorida por el golpe que me dio y con la muñeca aun roja por la atadura que le hice. No quiso que la viera llorar, dio media vuelta y se marchó cerrando la puerta bruscamente.

Quise perseguirla pero entendí que sería peor armar un escándalo en la calle. Como dijo guille haga lo que haga… estaba jodido… nuevamente tenía que darle tiempo al tiempo.

Para mi mala suerte mi madre regreso al rato, dijo que vio a cielo riveros subiendo a un taxi casi llorando, y me recrimino porque la deje ir así, que le había hecho… bla bla bla… en fin al rato se dio cuenta que yo estaba deshecho y que no estaba para reproches, me dejo irme a mi habitación.

Se venía el último ciclo de la universidad… ¿lograría que me perdone antes? ¿durante el ciclo? ¿después de que termine la universidad?... Quien sabe… solo el tiempo lo diría…
pasaron las últimas semanas de vacaciones, le di todo el espacio posible a cielo riveros. Cerca al último fin de semana, la llame varias veces sin respuesta. Así que me arriesgue a ir a su casa, enfrentar a mi ex suegro, si me caía una golpiza, al menos que cielo riveros viera que estaba dispuesto a recibirla por recuperarla.

Toque varias veces el timbre, sin respuesta, hasta que una vecina me indico que habían salido a su club… ¿otra misión imposible en el club?, estaba dispuesto a hacerlo… pero, la última vez ingrese gracias a que guille tenía un cielo riverosr cielo riverostar.

Ahora mi amistad con guille se había roto por culpa de las intrigas de la manipuladora de vane… aun así, intente llamarlo, seria oportunidad para congraciarme con él y, ¿por qué no?, que me ayude nuevamente con cielo riveros, pero no tuve respuesta.

Hasta que recibí la llamada de un número desconocido…

- me dicen que andas solito… dijo coqueta.

- ¿vane?, este no es tu número… replique, reconociendo su voz, pero no su número.

- buenooo… el otro número estaba viciado, solo recibía llamadas de ya sabes quién… dijo aburrida.

Al parecer yo no era el único que llamaba de cuando en cuando a la ex (cielo riveros), parece que guille seguía intentando volver a contactar a vane que, siendo práctica, cambio su número… hacia poco que vane había regresado de viaje y no sé cómo se enteró de mi situación… tenía un radar esa bruja…

- pero… no me contestaste… ¿qué paso?... Se acabó el amor… replico burlona.

- nada… diferencias irreconciliables… argumente para no dar pie a más comentarios.

- espero que no haya sido mi culpa… agrego con falsa pena.

Claro que si… puta de mierd… por tu culpa ya no puedo disfrutar del carnoso trasero de cielo riveros, ni de su fogosa entrega… y bueno de su compañía también… ustedes comprenderán, ya la abstención me estaba pasando factura, que se me venía a la mente más rápido sus habilidades amatorias que sus virtudes.

- nooo, para nada… repuse, no quería inflarle más el ego a esa arpía.

- entonces… ¿estas disponible?… agrego volviendo a la coquetería.

- ¿para qué?... Repuse haciéndome el loco.

- tú sabes… un chico solo, una chica sola… hay vacíos por llenar… dijo explícitamente.

Cielo riveros tenía razón, vane era una zorra, pero con rabo de paja… en realidad con un tremendo rabo… caraj… concéntrate, no caigas en el juego de esta loca… gracias a ella y sus intrigas terminaste alejando a quizás de lo mejor que te paso en los últimos tiempos. Por otro lado, cielo riveros me alejo… no me responde, intente congraciarme de todas las maneras posibles y nada… después de todo vane tiene un culo como para olvidarse de todo…

como ven, tenía mi angelito en un hombro y mi diablito en el otro, ambos susurrándome al oído… uno me decía: huye de esa lagartona, no vale la pena, eso te va alejar más de cielo riveros… y el otro me decía: aprovecha y reviéntala, ese blanco y musculoso trasero quiere tu verga, de paso que te vengas…

esta última idea fue envenenando mi mente… venganza o verganza (venganza de mi verga)… no era posible que esta bruja loca anduviera feliz y campante, burlándose de mi situación e invitándome a cogerla… mientras cielo riveros, guille y yo, estábamos jodidamente infelices por su culpa. Vane debía pagar.

- ¿a qué te refieres?... Repuse haciéndome el interesante.

- tu sabesss… una mujer es como un auto… necesita un buen mantenimiento de cuando en cuando, si una se descuida, se oxida… me dijo risueña, seguramente en referencia a su ano, si no le abrían el culo de nuevo se iba a cerrar, quería mantenerlo razonablemente dilatado.

- suena bien… respondí accediendo.

En realidad, no sabía qué hacer en ese momento… estaba con un deseo revanchista terrible, quizás igual de febril que guille en su momento. No quería llegar a extremos, quizás un castigo anal, reventarle el orto, como para que se acuerde de mí siempre (o al menos cada vez que se siente) y no me lo vuelva a pedir…

pero que tal, un castigo a su ego… dejarla plantada… o ir a la cita, acceder a sus caprichos hasta cierto punto, cuando este excitada y lista, irme dejándola así, haciendo referencia a que cielo riveros era mejor que vane en la cama… o algo así… que la hiera igual que ella hirió a guille, que le duela igual que a cielo riveros le dolió ver la foto del culo de vane en mi laptop… que sufra como yo cuando cielo riveros se alejó de mi…

- y bueno… ¿donde?... Agregue tras esos segundos de reflexión.

- que te parece en el mismo lugar de la vez pasada… agrego vane rápidamente.

- por mi está bien… dije tragando saliva.

Más que por ansiedad, trague saliva, recordando lo caro que me salió la última vez. Quizás vane noto mi reacción poco relajada, pero estaba muy animada porque en esta ocasión, sin haber chantaje de por medio, yo estaba accediendo a sus peticiones.

- que bien… no te preocupes… esta vez yo invito… dijo emocionada.

- oye…no… repuse saliendo mi lado caballeresco.

- ay, no tienes que quedar bien conmigo… no soy anticuada, una mujer también puede pagar estas cosas… dijo frescamente, saliendo su lado feminista.

No opuse, quedamos en vernos en el hotel a las 8 de la noche, vane ingresaría primero y me mandaría un mensaje con el número de la habitación. Me hacía ideas que está loca seguro querría preparar algo para mi llegada… quizás algún fetiche o fantasía que tuviera.

Por otro lado, tuve un leve temor de que preparase otro tipo de recibimiento… para vengarse de la vez que la amarre y dejé que guille disfrutara de ella. Bueno, se supone que ya todo estaba saldado, me dije… pero esta noche le reviento el culo como para que no vuelva a llamarme.

Había pasado las últimas noches en desvelo pensando en cielo riveros, estaba un poco cansado y a la vez ansioso por esa idea loca del castigo anal que pensaba darle a vane. Pensé que debía descansar un poco para darle a vané el esfuerzo que la ocasión merecía.

Recordé que la última vez vane opto por el sexo fuerte, en esta ocasión con que idea vendría… o más bien debería preocuparme con que propuesta ir yo… así me quede dormido sin darme cuenta.

Desperté de improviso por la alarma, me vestí de manera normal, ya no tenía que impresionar a la abuela de vane, solo tenía que ir directo al punto y hacer mi trabajo.

Tome un taxi, y en el camino por el centro de la ciudad me distrajo un cartel de neón “sex-shop”… corte el viaje, previa protesta del taxista. Creí que ahí podría encontrar algún implemento que me ayude a darle a vane su merecido.

Cual justiciero o vengador anal, que en ese momento esa idea corrompía mi mente, ingrese de la manera más discreta a esa tienda. Hice un par de preguntas al vendedor y salí llevando algo en mi bolsillo… ahora veras vane, me decía.

Retomando el camino al hotel, recibí el mensaje de vane… habitación 69… debe ser una broma, numero cabalístico, pensé. Ingrese al hotel más decidido que la primera vez, el recepcionista amable y discretamente me dijo que me esperaban.

Tome aire, recordé el plan (una brutal verganza anal) y toque la puerta y… a la mierd… vane me abrió la puerta apenas vestida por una diminuta y traslucida ropa interior de encaje color rojo, toda una diabla, dejando vislumbrar su castaño y poco poblado pubis, así como sus rosados pezones…

me esperaba sin preámbulos, lista para la acción mientras yo seguía con la boca abierta ante ese espectáculo que me ofrecían sus formas casi desnudas… obviamente vane sonrió complacida al ver el shock que causo en mí, mirando además el efecto en mi entrepierna.

- pasa… me dijo ingresando, dándome la espalda para que pudiera apreciar sus firmes nalgas.

La seguí embobado como zombi, viendo el ir y venir de sus muslos, entre los cuales se perdía un fino hilo rojo de su tanga. Para acrecentar el morbo de la situación, se detuvo ante una pequeña mesa de centro y se inclinó completamente hasta estar en 4, volteo a mirarme coquetamente:

- deseas servirte algo… dijo sugerentemente y al ver que no reaccionaba agrego… me refiero a un trago.

Accedí a tomar algo, mientras mi mente trataba de reaccionar e hilvanar ideas del porque estaba ahí, recomponer mi plan… recordar todo lo que nos hizo sufrir a guille, cielo riveros y a mi… enfócate, síguele el juego y luego a lo tuyo, me dije.

- ¿ves?... Te dije que no tenías que quedar bien conmigo… me dijo como femme fatale.

Me quería dar a entender que ella no esperaría a que yo tomara la iniciativa, seguramente intentando que yo haga la comparación con cielo riveros… mostrándome que vane cuando tuviera ganas podía ser provocativa y proactiva…

como para sentar mejor su punto, se arrodillo frente a mí, desenvaino mi semi-erecta verga y la engullo de buena gana. Mientras yo atónito apenas lograba reaccionar… vane me estaba ganando la iniciativa y la partida de todas las maneras posibles… me sentía como un vibrador andante…

vane parecía dispuesta a mostrarme que podía ser la mujer más complaciente… capaz de cualquier habilidad amatoria con tal de hacerme olvidar a cielo riveros o dejar en claro que vane era mejor en la cama.

Por lo pronto notaba que había aprendido mucho en el último tiempo, la mamaba con una experta, usando labios y lengua, pajeando de cuando en cuando, y metiéndosela hasta el paladar casi ahogándose con tal de complacerme… mirándome expectante desde abajo…

logro sacarme unas gotitas de leche, que saboreo sonriendo, mientras yo cedía, acariciándole los cabellos, por momentos reaccionando y jalándola con fuerza para que haga bien su labor…

- mi turno… le dije, queriendo retomar la iniciativa.

Recordando que la última vez le había encantado el sexo fuerte, y con la rabia contenida que le tenía, la tome del cabello y casi la arrastre hacia el sillón… en vez de verla asustada, más bien la notaba ansiosa de lo que pasaría…

- en 4 patas, perra… le ordene.

- si… si… repuso arrodillándose sobre el sofá, a lo largo.

Sin decirle más, ella misma hundió su cabeza en el mueble, mientras estiraba los brazos hacia atrás, jalando su pequeña tanga a un lado y luego abriéndose sus firmes nalgas para mostrarme su arrugado, pero lubricado ano… vane había tomado la precaución de lubricarse ella misma con algo que compro en la farmacia.

- hazlo yaaa… por favorrr… me suplicaba vane que había pasado de la acción a la sumisión.

Le di un palmazo en la nalga, para calmarla y hacerle saber quién tenía el control en ese momento, eso la estremeció, excitándola más hasta hacerla temblar… tenía que hacerla sufrir… así que la tome bruscamente por su estrecha cintura y apuntando rápidamente mi verga contra su ano, la penetre violentamente hasta la raíz…

- ayyyy… oouuu… asiii nooo… ouuu… exclamo llorosa vane.

A pesar del lubricante, sintió el impacto de mi feroz incursión en sus entrañas, se le arqueo la columna en un fuerte espasmo, mientras ella misma se arañaba las nalgas… luego volteo el rostro para ahogar otros lastimeros quejidos en los cojines del mueble.

- resiste puta… dije burlonamente.

Por el momento la verganza se estaba consumando… vane a pesar de su lubricada preparación estaba sufriendo en su esfínter las consecuencias de su febril deseo de superar a cielo riveros en cuanto a destreza anal. Sin darle mayor tiempo a reaccionar, procedí a bombearla con fuerza…

- auuu.., caraj… auch… mierd… la escuchaba quejarse entre los cojines.

Para ese entonces vane había perdido todo atisbo de sus gemidos con sus absurdas frases en inglés, se había vuelto más terrenal su agonía… yo estaba satisfecho por eso, gozando de su firme trasero que se iba volviendo colorado por el continuo golpeteo contra mi ingle.

- callate mujerzuela… le reñí golpeando su nalga nuevamente con mi palma.

- nooo… danny… ya nooo… murmuraba vane con lágrimas en los ojos.

Por momentos comencé a sentir pena por ella, quizás estaba exagerando, en esa dubitación dejé de castigarla frenéticamente, bajando a un ritmo más armónico y pausado… mientras decidía que hacer… pensé que estaba llegando a los extremos de venganza que le había reprochado a guille,

estaba pasando de un encuentro sexual consentido a una salvaje violación anal donde no me importaba lo que dijera o que me pidiera que me detenga… solo deseaba hacerle el mayor daño posible para que no volviera a buscarme… sin embargo…

- ohhh… siii… asiii… párteme el culo así… uhmmm… le oí gemir a vane.

En ese ritmo más lento, menos brutal, vane había encontrado el disfrute, paso de las lágrimas de llanto a un lagrimeo de placer, con el rostro colorado de lado, entrecerrando los ojos y mordiéndose los labios mientras disfrutaba que le abrieran el culo como perra.

Esa no era la idea… era momento del plan b… busque en el bolsillo de mi pantalón lo que compre en el sex-shop… saque mi verga de su ano…

- queee… nooo… sigue por favor… sigue… dijo saliendo de su abstracción.

- espera puta… le recrimine.

Me coloque en la verga el accesorio que había encontrado para infringirle dolor a vane… un preservativo con púas, el más agresivo que encontré, solo apto para sadomasoquistas, no para una recientemente aficionada al sexo anal…

ni bien me lo coloque, me la clave abruptamente… a pesar de la resistencia inicial que me ofreció su orto, empuje bestialmente hasta meterle todas las púas en sus intestinos…

- auuuu… nooo… auuu…. Me desgarras… ayyy… exclamo vane, enterrando las uñas en el mueble, mientras nuevamente lagrimeaba de dolor.

- esto buscaste siempre… ¿no es así perra?… ¿querías que te rompa el culo?, pues se te cumplió loca de mierd… le grite enfurecido.

La expresión de vane de dolor se tornó en temor, mientras yo forzaba las penetraciones que se estancaban en las paredes de sus entrañas… viendo que no estaba dispuesto a ceder, vane intento liberarse de su cautiverio, pataleando, mientras yo la presionaba hacia abajo con mi cuerpo.

En un momento que perdí el equilibrio, vane se logró liberar, pero también trastabillo y termino de cabeza en el piso con la espalda contra el asiento del sofá. En esos breves segundos de confusión de su parte, de no saber cómo pararse, aproveche en ubicarme sobre ella, aún tenía su blanco trasero a mi disposición… no se me escaparía… me las pagaría todas…

- ouuu… nooo… ya nooo… se quejó vane, al sentir nuevamente mi verga desgarrándola.

En todo ese trajín pude ver como su ano tenía rastros de sangre al igual que las púas que traía en el preservativo… seguía febril por mi apetito de venganza. Lo hacía por guille, por cielo riveros y por mi… para que esta perra manipuladora no se nos volviera a acercar jamás.

Para evitar que siguiera quejándose, procure poner mi pie sobre su boca, ella casi me muerde… en ese malabarismo en que estábamos, los senos de vane se habían liberado de su pequeña prisión y se mostraban desafiantes, saltando al ritmo de mi demencial castigo a sus bien formadas nalgas.

De un momento a otro vane se fue callando y soportando ese martirio… me imagino que vane pensó que sería penoso que por sus gritos la rescaten de ese lujoso hotel con el culo reventado por alguien que ella misma había dejado entrar.

- terminaaa yaaa… por favorrr… me suplicaba vane llorosa, con el rostro enrojecido.

Aquellas púas iban teniendo el efecto contrario, para suerte de vane, generando una fricción en el cuello de mi verga, masajeándola debido a lo ajustado de su cavidad anal. Cuando me sentí cerca de llegar, liberé mi verga de su ano, dejando el preservativo con las púas dentro de sus entrañas.

Mi verga escupió a diestra y siniestras sus líquidos en los muslos, en el vientre, en los senos y hasta en el rostro de vane, llegando a cegarla con un chorro en el parpado derecho, mientras otras gotas se escurrían en su mentón y mejilla y algunos caprichosamente entraban en su boca abierta.

Vane resoplaba llorosa y adolorida… había excedido mi venganza, no me sentía orgulloso de lo que hice, sin embargo, siempre hay un espacio para la crueldad… el puntillazo, tras el castigo físico, el emocional…

- ufff… estuvo bueno… pero el culo de cielo riveros, uff ese si es rico… sus nalgas naturales son suaves y producen un rico sonido… las tuyas están un poco duras… dije despectivamente.

Vane se quedó boquiabierta, ante tal despiadada declaración, seguramente con su ego herido, por un momento la vi pasar de la pena y dolor a la rabia, mientras se limpiaba los restos de semen y lágrimas de sus ojos.

Antes que reaccionara esa loca, de una manera u otra, me limpie y me vestí dejándola tirada de cabeza en el suelo, deshecha y salpicada de mis líquidos, quería huir antes que mi conciencia comenzara a torturarme por el desastre que hice.

Recordaba las advertencias que le hice a guille sobre el mafioso viejo de vane y lo que le podía hacer por dañar a su hija… pero ya era tarde… no tuve un amigo para detenerme… había jodido todo con cielo riveros, con vane, con guille… quizás así debía ser, así debía terminar todo.

Sin embargo, mientras me abría la puerta, escuché una sonora y quizás disforzada risa…

- ¿eso fue todo?... Replico vane provocativa y agrego desafiante… disfrute cada instante tenerte dentro mío...

Un frio temblor recorrió mi columna, me inundo una rabia como nunca había experimentado, quería hacerle daño a como dé lugar, cerré la puerta… ahora veras puta de mierd…

caraj… ¿qué fue eso? ¿dónde estoy?... Comencé a ver a los lados desesperado, estaba algo oscuro… ¿qué paso? ¿me desmaye?... Dije aun aturdido… ¿qué le puso vane al trago? ¿cómo llegue aquí?... ¿aún tengo mis riñones?, pensé por último tocándome… estaba sudado y frio…

lo único cierto era que aún era de noche… busque mi celular en mi ropa y lo revise buscando pistas de lo sucedido… ok aun es sábado, sigue siendo la misma fecha… y la hora es… ¿qué? No puede ser… eso significa que… ¿en serio?... ¿así paso?...

Con el transcurrir de los segundos caí en cuenta que… que nunca salí de mi habitación… me había dormido pensando en todo lo que haría, me había encaprichado con vengarme de vane y me quede con esa idea en la cabeza a tal punto que se reprodujo en un vivido sueño… tan real, tan fatal…

mientras intentaba dilucidar que era fantasía y que real, vi un mensaje en mi celular… era de vane: “habitación 69”… ¿coincidencia?... Luego recibí una llamada que me aclaro todo.

- te estoy esperando en el hotel idiota… ¿a qué hora vas a venir?... Me recrimino vane furiosa.

- no… no iré… respondí fríamente, luego colgué y apagué el teléfono.

Tras todo lo sucedido, de lo experimentado con y de la fantasía de mi sueño… entendí que con vane no había forma de ganar, entraría en su juego, en el cual ella me manipularía a su gusto, como ya había pasado antes. Era volver a lo mismo, y ya sabía cómo terminaba esa historia.

Había excedido mis limites en mi sueño, tanto que me había horrorizado de mi accionar y lo que estaba dispuesto a hacer, a tal punto que desperté violentamente… quizás era un presagio de lo que pasaría si me dejaba llevar por esa ira y sed de venganza.

Era algo similar a lo que dicen de los idiotas… que no puedes ganarle una pelea porque te llevaran a su nivel y por experiencia te ganaran… supongo que algo similar me esperaba con esta loca, por más que maquinara venganzas, no tenía tanta malicia ni era tan manipulador como vane…

cualquier cosa que hiciera, me llevaría un escalón cada vez más bajo, trasgrediendo mi personalidad solo por revanchismo, forzándome a hacer cosas absurdas... Sí caía a su nivel, vane ganaba. Quizás algunas peleas si se ganan evitándolas, pensé.

Vane seguro intuía que por la manera que actué antes, guiado febrilmente por mi ego herido, yo seguiría actuando de la misma manera revanchista y mientras fuera así, ella tendría el control. Tenía que romper con ese círculo vicioso… y de la misma manera la hería en su propio ego.

Si deseaba recuperar a cielo riveros debía dejarme de esos juegos que me alejaron de ella… después de tiempo me alegraba de pensar con la cabeza de arriba que con la cabeza de mi pene… pero cuanto duraría… cuanto tardaría en recuperar a cielo riveros… ese era el dilema…

lo malo era que cielo riveros me acostumbro a un ritmo sexual… y estar abstemio no sabía cuánto tiempo me resultaría… quizás terminaría cayendo con vane después de todo… que parecía dispuesta a seguir insistiendo… ella había perdido la batalla, pero no la guerra… como todo, era cuestión de tiempo.
Pasé mi último día libre aliviado de no haber ejecutado aquella locura de venganza, o verganza, y que no terminara en vergüenza por las idioteces que planeaba realizar. Cabe señalar que al encender el celular tenía varias llamadas perdidas de vane, algunos mensajes de voz y de texto bastantes groseros, incluso para vane. Opte por no oírlos ni leerlos todos y simplemente eliminarlos.

Sentí que, al no caer en el juego de vane, había aprendido la lección y que, a su vez, le había dado una lección a vane. Entendí que si hubiera accedido a la propuesta de vane, se hubiera activado nuevamente ese circuito de chantajes y venganzas que tan mal termino para mí.

Al día siguiente empezó el último ciclo, me había quedado sin enamorada y sin mejor amigo. Había despreciado a vane, la segunda chica más buena, y quizás la más loca, de la facu, enterrando con eso cualquier posibilidad de satisfacer mis necesidades carnales en el futuro inmediato.

Así con ese panorama sombrío, los primeros días de universidad transcurrieron conmigo vegetando por la facu como alma en pena, tratando de reestablecer contacto con los pocos amigos que me quedaban, aunque en su mayoría eran solo conocidos.

Otros se me acercaban más en pos de enterarse de algún chisme de lo sucedido con cielo riveros, javier… lo bueno es que nadie supo lo de vane y guille. No falto algún otro que, a la distancia, directa o indirectamente me felicitara por haberme cogido ese culito… claro que su expresión cambiaba al ver mi rostro molesto.

Ahí pude dar fe de lo que cielo riveros me decía, en realidad había un mundillo de chismes en la facu, del cual yo me había mantenido alejado. Ahora que pasaba más tiempo en la facu, buscando coincidir con cielo riveros, me di cuenta que ya era parte de la comidilla, de las leyendas urbanas, me enteré de cosas que supuestamente hice… pero tras perder a cielo riveros, poco me importaba.

Con javier apenas si me cruce un par de veces, pero como dicen… perro que ladra no muerde… si bien fue amenazante la última vez, la realidad era que a la distancia solo me echaba miradas de odio, o murmuraba algo, seguramente de mí, con su acompañante de turno para incomodarme, pero no me importaba.

Casi ni veía a cielo riveros, se matriculo en horarios diferentes a los míos, prácticamente en la tarde y noche, mientras yo iba en la mañana y una que otra vez en la tarde. Cuando la veía, mi corazón aceleraba, ella me percibía a la distancia y con una mirada de tristeza o congoja, luego daba media vuelta y escapaba antes de que intentara acercarme.

Respecto a vane, ni se apareció los primeros días, seguro se tomó otro descanso tras el desplante que le hice. Luego volvió renovada, contando en su círculo de amistades, sus aventuras por europa y de los días que recientemente se tomó en un exclusivo club para relajarse… o para que se le bajen los humos de su ego herido, en fin.

No llegue a enterarme de ninguna indiscreción de vane respecto a lo que vivimos, después de todo, supongo que estaba a la defensiva por todos los mensajes que me dejo en el celular. A pesar de su inicial muestra de odio y resentimiento hacia mí, al darse cuenta de mi falencia de amigos, note que intentaba acercarse a mí y, en este caso, era yo el que le huía a ella.

Y bueno, guille, coincidí con él en varias clases, pero ni bien me veía, inmediatamente se sentaba al otro extremo. Como culparlo, pensaba que le había robado al amor de su vida. Un absurdo en realidad, porque vane lo uso para acercarse a mí, para satisfacer su capricho conmigo, su revancha con cielo riveros… que se yo.

Más bien en todas las clases me encontraba con marcela, una vieja amiga de los primeros ciclos, que con el transcurrir de la carrera nos fuimos alejando. Era una chica ni bonita ni fea, que empezó a mostrar interés por mí, no quise darle importancia, en ese tiempo andaba enredado con una prima, así que me alejé para no malograr esa amistad, porque no sentí ese tipo de atracción hacia ella.

Me parece que marcela noto mi distanciamiento, ahora, pasado un tiempo, parecía que no había rencores. Al final, terminé contándole mi drama, confiaba en su discreción ya que siempre la vi dedicada a sus estudios y nunca la oí esparciendo chismes. Pues bien, al menos se ofreció a ayudarme, indirectamente, a través de una compañera suya (gaby) que estudiaba en las noches y compartía algunas clases con cielo riveros.

Igual que marcela y conmigo, gaby había sido cercana a cielo riveros al inicio de la carrera, pero empezó a elegir llevar cursos de noche ya que se vio obligada a trabajar medio tiempo debido a la difícil situación de su cielo riveros. Bueno, no era lo ideal tener esta cadena de informantes, pero por el momento, no había de otra.

A través de ella, me enteré que, el buen guille también tomo un curso de noche. Parecía haberse hecho amigo más cercano de cielo riveros, como dicen… en el dolor (se volvieron) hermanos… ambos que se sintieron traicionados por vane y por mí, terminaron juntándose.

Me hervía la sangre pensar que guille, enamoradizo e ingenuo como era, terminara enamorándose de cielo riveros… pero mis informantes me calmaron. Al parecer cielo riveros no tenía intenciones de involucrarse con nadie, estaba decepcionada de los hombres, solo quería terminar bien su carrera.

Con cielo riveros dedicada a sus estudios, pensé que yo tampoco debía descuidarme. Después de todo, al igual que me aleje de marcela en su momento y ahora volvimos a ser amigos con el tiempo, esperaba que lo mismo sucediera con cielo riveros… claro que rogaba que en menos tiempo… antes de fin de ciclo al menos.

A mitad de ciclo, un sábado antes de la semana de exámenes, estaba estudiando en casa sin mayores planes… cuando recibí una llamada, esta vez de un numero conocido…

- danny… no sé si decirte… era la voz angustiada de marcela.

Esteee… diablos, ¿otra vez esta chica se encariño conmigo?, habíamos pasado mucho tiempo juntos últimamente, se había vuelto mi confidente… no quería perder a mi última amiga por estos enredos sentimentales… pensaba con mi ego inflado.

- vamos… dime… dije, esperando que no fuera lo que pensé, pero fue peor.

- es cielo riveros… dijo en voz baja.

- ¿qué hay con ella?... Pregunte preocupado.

Nuevamente mi cabeza se alboroto, como solemos hacer fatalistamente… no me digas que termino cayendo con guille, por la put… madr… por mi culpa. Pensar que queriéndoles proteger de vane, termine alejándolos de mí y juntándolos… pensé abrumado, maldiciendo mi suerte.

- bueno… no es ella precisamente… es… su mama… volvió a recaer… por cáncer… dijo triste.

- ay mierd... Pobre… no importa que ella me odie, no me responda, o que su viejo seguro me quiera matar… iré a verla a su casa… dije apenado.

- no… no… están en emergencias, en el hospital…

averigüe el hospital, me disponía a salir de inmediato… y marcela se ofreció a acompañarme, me dijo que quizás con ella al lado, si aún había resentimientos o reproches de cielo riveros hacia mí, al menos se disimularían por salvar las apariencias frente a otros amigos…

llegamos al hospital, ya no estaba en emergencias, pasamos a la sala de espera… ahí estaba ella… ¿qué mierd… hace guille a su lado?, me salto la testosterona, el machismo territorial… pero me contuve, no era el momento ni el lugar, y cualquier cosa, era su decisión y fue mi culpa… caraj...

A unos metros de llegar, guille me quedo mirando sorprendido de mi presencia, eso hizo que cielo riveros volteara a ver que lo distraía… y me vio… también sorprendida, luego con melancolía… yo me quede helado… no sabía qué hacer, avanzar, quedarme, huir… pero ella si supo que hacer.

Cielo riveros se acercó rápidamente a mi… diablos, ahí viene otro golpe, pensé… casi le estaba ofreciendo la mejilla para recibir otro puñetazo, que seguramente merecía y dada su situación, si le ayudaba a liberar tensión, al menos mi presencia serviría para algo.

- danyyy… musito cielo riveros llorosa y me abrazo con fuerza.

- ya… tranquila… atine a decir sorprendido, mientras le acariciaba la cabeza y los cabellos.

Guille se quedó con la boca abierta mientras marcela que, poco más y celebraba como madrina de bodas, entendiendo su función en esta historia, fue a sentarse y conversar con guille, para darnos a cielo riveros y a mi nuestro espacio. Cielo riveros seguía llorando desconsoladamente en mi hombro, aferrándose a mí con fuerza.

Mierd… esa cercanía, su aroma, su calor, sentir su cuerpo nuevamente, sus senos oprimiendo mi pecho… no seas pendejo, respeta el lugar y la situación, me decía para mantenerme en calma y evitar una erección… pero nada, eran 2 meses lejos de ella…

mi cabeza pensante decía una cosa, mientras la cabeza de mi pene actuaba de otra manera… para mi desgracia, en mi apuro por ir a verla, había salido en buzo, cualquier erección sería más notoria así.

- ven… sentémonos… le dije, para evitar que sienta el bulto de mi entrepierna a través de la delgada tela y alejarme de una posible bofetada, ella con su pena y yo con mi pene.

Nos sentamos lejos de los chicos, cielo riveros comenzó a contarme que hacia un tiempo que su mama comenzó a sentirse mal… sacando cuentas justo, poco después que terminamos. Ahí me enteré que decidió estudiar de tarde y noche, no para alejarse de mi (nuevamente un punto menos para mí ego), sino para cuidar a su mama mientras su papa trabajaba.

Sin decir o hacer nada, cielo riveros se había acurrucado a mi lado nuevamente, como antes, como cuando éramos pareja. Con la mirada perdida en el piso, triste… recordando por momentos pasajes con su madre, anécdotas en cielo riveros, resaltando la importancia de ella en su vida.

No sé si fueron minutos u horas, lo cierto es que en un momento se acercaron marcela y guille para despedirse. Guille tenía un gesto de pocos amigos, casi como de hermano mayor celando a la hermanita, pero fue un caballero al despedirse, mientras marcela lo jalaba del brazo. Esa chica sí que vale como amiga.

Al rato, salió su papa, que había estado acompañando a su mama en sus exámenes y haciendo los tramites en el hospital… me miro sorprendido, y casi enojado por momentos, pero viendo a su hija reconfortada, apaciguo sus ánimos contra mi…

- jovencito… tiempo sin verte… me dijo irónicamente, mientras me destrozaba la mano con un fuerte apretón.

- señor, lamento las circunstancias… respondí, discretamente aguantando el dolor.

Luego nos informó de la situación, la mama de cielo riveros se quedaría en observación un día o dos, dependiendo como vaya su salud. Le habían asignado una habitación, el papa de cielo riveros dijo que pasaría la noche con su esposa para cuidarla, en un sillón cama del cuarto. Le pidió a cielo riveros que entre a despedirse su mama, porque entendía que su hija tenía exámenes y debía dormir bien y estudiar.

- me debes una conversación… me dijo el padre de cielo riveros, mientras ponía su pesada mano en mi hombro y me alejaba de la habitación donde estaban su esposa e hija.

- si señor… dije tragando saliva.

- no sé qué problemas tuviste con mi hija… y ahora después de tiempo, te veo aquí… espero que no aproveches esta situación… me dijo en tono de padre mal pensado y protector.

- no señor, para nada… dije cortándolo (quiero aprovecharme de su hija, pero no es el momento), si no funciono, respeto la decisión de su hija, que tiene su carácter… (dije para inflarle el ego al viejo que sonrió, pero creo que el carácter venia por el lado de su mama)… ante todo su hija es mi amiga y sé que en una situación similar ella me apoyaría también… agregue sinceramente.

- bueno… me alegra oírlo… ¿ya te había dicho que si la haces sufrir (otra vez) te puedo destruir (esta vez no te escaparías)?... Me amenazo el viejo, recordando sus épocas cielo riverostares.

- sí, señor… dije ajustando mi hombría, mientras el apretaba mi hombro con su manota.

- ¿y te quedo claro?... Repuso en tono cada vez mas de cielo riverostar hablando con su tropa.

- muy claro señor… repuse tragando saliva.

- ya papaaa… escuche detrás mío.

Era la voz de cielo riveros que había salido de ver a su madre y veía como se arrugaba la ropa en mi hombro por la presión del viejo… ufff… me rescato. El viejo disimulo una sonrisa y se despidió de nosotros… sentí su mirada en mi nuca, al voltear a verlo me hizo un gesto como de que me iba a estar vigilando.

Cielo riveros se disculpó por la actitud de su padre, que siempre fue sobre-protector y más aún ahora con lo de su madre, me pidió que no le haga caso. Ofrecí llevarla a su casa de regreso, por seguridad, luego irme a la mía. Dudo un instante, pero acepto.

En el taxi, ella se acurrucaba a mi lado pensativa, igual que en el hospital… yo le acariciaba el cabello, y de cuando en cuando besaba su cabeza… ella no decía nada… hasta que en un momento reacciono y se alejó un poco… se disculpó por acercarse tanto… es la costumbre, me dijo.

Llegamos a su casa, la deje en el umbral, me despidió con un beso en la mejilla… di media vuelta, será un pajazo más, me dije… bueno, roma no se hizo en un día, pensé… al menos era un avance. La pude ver y no fue lo ideal por la situación de su mama, pero al menos ya no nos éramos indiferentes… solo tenía que esperar a que las cosas tomen su curso natural… aunque fue más rápido de lo esperado.

- danyyy… puedes quedarte un rato… solo hasta que me duerma… dijo con voz de niña asustada, que tiene miedo de quedarse sola en una casa grande.

No me hice de rogar y regresé inmediatamente. Antes de entrar a su casa, cielo riveros me advirtió que no era lo que yo pensaba, es decir, que no pasaría nada, que no nos reconciliaríamos o que me daba licencia para violarla… era solo que necesitaba compañía… me pregunto si estaba de acuerdo con eso, y dije que no esperaba más después de lo sucedido, que aceptaba porque al menos quería recuperar su amistad.

Nos acurrucamos en el sofá de la sala viendo una película, hasta que le diera sueño a la niña. Mi corazón a mil ante su presencia, más aún ahora que caía en cuenta que la falda suelta que traía cielo riveros se había levantado un poco, dejando ver sus bien formadas piernas… resiste caraj… me decía apaciguando a mi verga que quería endurecer de nuevo.

- el trasero de j-lo es exagerado… dijo cielo riveros en alusión a la película que veíamos, mientras yo ni cuenta de lo que pasaba en la tele, estaba más pendiente del gran trasero que tenía al lado.

- cierto… el tuyo es mucho mejor… repuse instintiva y sinceramente (en mi experiencia, obvio, nunca he probado el culo de j-lo).

Ay… la cague… pensé al darme cuenta de lo inoportuno de la referencia, pero en mi defensa, cielo riveros fue la que trajo el tema, al hacer ese comentario. Ella se alejó mirándome sorprendida… ok, prepárate para ser abofeteado y expectorado de su casa, me dije… y bueno si recibí algunos golpes.

- ay… eres un tonto… ¿cómo dices eso?… dijo sonrojándose graciosamente, mientras me daban unos palmazos a manera de juego.

Levante los brazos para defenderme… pero en su avalancha de manotazos, perdí el equilibrio terminé recostado en el sofá y ella encima mío. Tomé sus muñecas para evitar más golpes, mientras nos reíamos, hasta que nos quedamos mirando… ya está cediendo pensé, al fin… pero…

- no dany… eso no va pasar (no me vas a coger), no… me dijo volviendo a sus cabales, quizás recordó porque terminamos, y que aún no me había perdonado.

Se recompuso, se alejó un poco, sin darnos cuenta así entre juego y juego, había terminado encima de mí, en realidad ahora estaba sentada sobre mi verga… que ya había endurecido al sentir su pubis apenas cubierto por una tanga, ya que su falda se había abierto… y mi buzo no podía disimular mi erección.

- ohhh… ¿qué es esto?… exclamo sorprendida al sentir mi verga cerca de su vagina.

- es tuyo… le exclame excitado en referencia a mi pene.

- ayyy... Que mentiroso… replico de manera juguetona, intentando manotearme de nuevo.

En esos juegos, su pubis se iba frotando contra mi verga, fricción que se fue haciendo más agradable cada vez, para ambos. Intente hacer mi movimiento, acercarme… pero ella me contuvo…

- ayyy… no dany… nooo… solo déjalo así… dijo conteniéndome hacia abajo.

Accedí a sus condiciones, mientras ella seguía encima de mí, como cabalgando un caballo. Cielo riveros tenía una incipiente excitación, solo debía dejarla seguir su curso… hasta que hizo una mueca de fastidio, la fricción de nuestras intimidades se había topado con la costura del buzo, generando ardor.

Pensé que ahí terminaría todo, no sé cómo… en realidad sí, la suma del morbo de ambos y quizás el hecho de que ella estaba bajoneada y quería sentirse bien, ayudo a que la convenciera de dejarme bajar mi buzo y continuar así, frotándonos, no había peligro de penetración mientras tuviéramos puesta la ropa interior.

Ella seguía al mando de la situación… la estaba dejando pajearse en una dulce fricción con mi verga. El ir y venir de su vagina contra mi verga, me tenía a mil, pero ella me seguía conteniéndome con sus manos contra mi pecho y por momentos tomando mis muñecas para evitar que le manosee sus cada vez más henchidos senos o sus gordas y abultadas nalgas.

Esa cabalgata a través de mi bóxer y su tanga, logro liberar mi verga a través del agujero de mi ropa interior… ella lo sintió y tuvo un temblorcillo que la recorrió entera, puso una expresión de sorpresa, se detuvo un instante… pero era muy tarde, ya estaba obnubilándose por la excitación…

nuevamente empezó a moverse sobre mi ahora desnuda verga… mientras su tanga iba hundiéndose en la húmeda raja de su vagina… hice un ademan de querer alejar su ropa interior, para permitir la fricción directa piel con piel… pero nuevamente me detuvo.

- quietooo… me dijo en voz baja, conteniendo mi mano, mientras ella misma con su otra mano, ponía a un lado su tanga para permitirle gozar mi pene sin barreras.

A medida que su excitación incrementaba, hacia recorridos más largos sobre mi verga, frotándose a todo lo largo con su mojada vagina. Por momentos, sentía que la cabeza de mi pene hacia diana, se trababa un poco en el ingreso de su cálido y mojado orificio vaginal.

Cielo riveros se iba inclinando hacia mí y retorciéndose más al sentir mi verga próxima a invadirla, por momentos se contenía, pero luego se movía con mayor fuerza de lado a lado… hasta que sucedió lo inevitable…

- ohhhh… uhmmm… nooo… esto está mal… nooo… uhmmm… gimió cielo riveros resistiéndose.

Lo cierto era que, en un brusco movimiento, debido a su excitación, finalmente mi verga había hecho diana en su vagina, entrando a medias, mejor dicho, deslizándose debido al alto grado de lubricación de su pubis… ese shock la hizo estremecerse, arañar con su mano mi pecho…

lo último que le quedaba de raciocinio le hizo proferir esas palabras de arrepentimiento... Quiso zafarse lentamente, pero perdió el equilibrio y termino empalándose hasta la raíz… lo que la volvió a remecer…

- uhmmmm… no dany… nooo… uhmmm… decía, como culpándome de lo que ella misma se estaba haciendo.

Quiso alejarse nuevamente, esta vez con mis manos sobre sus muslos, hice presión hacia abajo, y la retuve. Ella como poseída, me apretó el pecho con sus manos… disfrutándolo… pero viendo que otra vez se quería liberar… opte por soltarla, yo estaba en falta con ella, debía dejarla hacer a su gusto.

- está bien… hazlo tu… le dije, dejándole el control completamente a cielo riveros.

Si se quería pajear conmigo, o cabalgarme, era decisión de ella… yo no me opondría, ni la obligaría. En verdad, en el fondo me sentía violado, como cuando vane me amarro a una cama, me sentía casi como un dildo, un objeto para darle placer a cielo riveros... Pero yo también lo disfrutaba…

cielo riveros me miro angustiada, sin saber qué hacer, en parte sorprendida por mi sometimiento, ya que siempre era yo el que la poseía y la sometía analmente… esta vez las reglas habían cambiado, ella estaba encima de mí y yo le había dejado el control… y creo que eso le gusto…

tras unos segundos en silencio e inmóviles, cielo riveros comenzó a menear su rabo en mi entrepierna, mi verga parecía una palanca de videojuego dentro de su vagina. Mientras ella disfrutaba de cada centímetro de mi pene en su cálido interior.

Al poco rato, ella misma comenzó a brincar sobre mi verga, primero lentamente como primeriza experimentando el placer, luego cada vez más rápido. Dejo una mano sobre mi pecho, mientras con la otra cielo riveros empezó a estrujarse sus abultados senos. De un momento a otro cielo riveros se detuvo… ¿se habría arrepentido? ¿habría llegado al clímax ya?...

- ¿a quién engaño?… dijo como hablando con ella misma.

Acto seguido saco mi verga de su vagina y se la apunto al ano. Una vez en posición, era evidente que era difícil la penetración, había pasado mucho tiempo desde la última vez que le rompí el culo. Lo que a su vez me alivio, que nadie más hubiera entrado ahí y que ella fuera sincera respecto a sus apetitos anales.

Cielo riveros empujaba y empujaba su enorme trasero, y su estrecho esfínter contra mi pene… sin éxito, pero ella no se rendiría, quería ser atorada analmente sí o sí. Ella misma puso sus manos en sus gordas nalgas y empezó abrirlas para hacer espacio y permitir que mi verga la empale.

Esta vez sí me permitió sostenerla de su estrecha cintura, para que conservara el equilibrio. Hasta que se salió con la suya, de a pocos su estrecho ano se iba abriendo para dejar entrar mi verga en ristre… había esperado mucho este momento.

Dejándose llevar, cielo riveros presiono con fuerza contra mi verga, casi la dobla, pero logro dolorosamente su cometido… mi pene la había atravesado hasta la raíz y ella lo sintió dolorosamente…

- ouuuu… uhmmm… olvide que la tenías gruesa… ouuu… uhmmm… se quejó graciosamente.

Nuevamente, cielo riveros meneo su enorme rabo en mi ingle, disfrutando cada centímetro de mi verga violando su gran culo, invadiendo sus tripas. Se recostó hacia atrás un poco, apoyando sus manos en el mueble y empezó a brincar armónicamente, en esa posición, seguro sentía que mi pene se hincaba mejor en su ano.

- ohhhh… siiii… que biennn… necesitaba estooo… uhmmm… gemía lujuriosa.

Cielo riveros estaba como en trance, con los ojos cerrados, mordiéndose los labios, por momentos pasándose la lengua, saboreando aquella cabalgata anal, de la que se había privado hace mucho tiempo. Ahora lo disfrutaba al máximo… la ayudaba a olvidarse de todo, en esos instantes no había ni enfermedades ni engaños… solo era placer…

- nooo… ya noo… así nooo… se quejó de un momento a otro deteniéndose.

¿se arrepintió?, bueno al menos lo disfruté mientras duro, me dije… cielo riveros se levantó, se alejó un poco del sofá, me jaloneo del brazo… pensé que quería que me arregle y me vaya de su casa… pero no era eso. Se había cansado de esa forzosa posición, me obligo a pararme y adopto su posición favorita.

Se puso de rodillas en el mueble con el pecho contra el respaldar del sofá. Abriendo las piernas y empinando sus carnosas y redondas nalgas. Yo embobado me perdía en ese paisaje.

- dany ¿qué esperas?... Se quejó ansiosa.

Al fin cielo riveros me estaba dando carta libre para actuar, al igual que la primera vez que le inaugure el ano. Me esperaba ansiosa a que la someta como a una perra… como le gustaba, sentirse enganchada por el culo hasta las tripas… con mi verga taladrándola y sus nalgas tambaleando.

- ohhhh… siiii… asiii… uhmmmm…. Vocifero de placer cuando me la clave.

Nuevamente, tras muchas semanas, tomé posición de su estrecha cintura y comencé a manejar su ancha cadera, golpeando sus glúteos con mi ingle, mientras cielo riveros temblaba de placer, arqueaba su espalda para recibirme mejor… ella misma volvía a jalonearse los senos hasta liberarlos.

De cuando en cuando veía de lado su rostro enrojecido, con algunas gotas de sudor, los labios apretados, la lengua disfrutando de pasearse por su boca disfrutando esa cogida, su cabello saltando al ritmo de mis embestidas.

La jalonee del cabello con una mano mientras la cabalgaba, atrayéndola hacia mí, mientras mi otra mano comenzó a estrujar sus redondos melones, tironear sus pezones. Lo que la excito, y me permitió al fin, en esa difícil posición, besarla de lado, su lengua pugnaba por meterse en mi boca. No sabía cómo hacer para succionar mis labios entre gemidos.

- nooo… danny ya nooo… me revientas… nooo… ufff… se quejaba.

Mientras más me decía que no, o intentaba oponer resistencia, más me excitaba, más le castigaba el ano, con más fuerza hacia retumbar sus gordas nalgas… pero fue cierto… no pudo más…

- ohhhh… uhmmmm…. Ahhhh… exclamo explotando en un violento orgasmo.

Se contrajo a mas no poder, apretando mi sensible verga que tampoco aguanto e hizo erupción dentro de su enrojecido ano. Con cada borbotón su espalda se estremecía. Ambos respirábamos forzosamente, exhaustos, casi me deje caer sobre ella… que me aguanto contra ella.

- ufff… que bueno estuvo… ufff… mierd… musite aliviado tras tanto tiempo sin disfrutar a cielo riveros.

- siii… wow… lo había olvidado… ufff… exclamo cielo riveros agotada.

Tras unos instantes de recuperación… al final tuve que despegarme… vi satisfecho el maltratado ano de cielo riveros discurriendo mi semen.

- uy… se va a manchar el mueble… me dijo apurada.

Y salió corriendo al baño de visitas a pocos metros de ahí. Regreso unos minutos trayendo unas toallas de papel, mientras graciosamente revisaba su piso y trapeaba con los papeles las gotas de esperma, pruebas de nuestro reciente encuentro.

Yo la esperaba en el sofá, extasiado, con la verga aun en ristre y mojada por mis líquidos. Esperaba que cielo riveros se animara a darme una mamada, de aquellas que me succionaban todo… en cambio.

- toma… límpiate… me dijo un poco cortante, dejando algunas toallas de papel sobre mi verga, como para taparla.

Bueno, debía entender que después de semanas alejados, ya era un gran avance haber disfrutado de su húmeda vagina, su gran culo y estrecho ano. Lo demás (la mamada de verga y succionada de semen) era accesorio… quizás con el tiempo se daría nuevamente cuando se recupere la confianza… pensaba… pero cielo riveros no pensaba igual…

- danny… no quiero que te molestes… pero… me dijo poniéndose incómodamente seria.

- ¿por qué? ¿qué paso?... Pregunte preocupado.

- ¿qué paso?... Paso esto… ¿te parece poco?... Me dijo abrumada, y agrego… no debió pasar… bueno si me gusto… pero… no puedo volver contigo… no quiero eso… no confió en ti…

- pero… ¿es que hay alguien más?... Pregunté estúpidamente por celos.

Recordaba la presencia de guille en el hospital, sospechaba que estaba al acecho, creo que cielo riveros sabia a donde apuntaba mi pregunta, y vi como su rostro comenzaba a enfurecer… las cosas volverían a ponerse feas como cuando terminamos si no le ponía paños fríos.

- eres un imbécil… tu todavía me preguntas eso… tú que me engañaste con esa… con esa zorra regalona… me dijo enfadándose un poco.

- está bien… discúlpame, no me correspondía preguntarlo, tienes razón, fui yo quien malogro todo… lo siento… dije.

- y no, no hay nadie más… no soy como tu… dijo hiriente, luego agrego: ahora no estoy para esas cosas, mi madre me necesita… y por ahora tampoco quiero que lo haya.

- bueno, al menos me gustaría, si es posible claro, recuperar tu amistad… quiero que sepas que, si me necesitas, estaré ahí para apoyarte en lo que desees… repuse calmándola.

Su expresión disgustada, fue cambiando a una mezcla de alegría y tristeza, por la situación que pasaba, necesitaba saber que no estaba solo en todo esto … me abrazo con fuerza…

- mi cabeza es un desastre ahora… mi vida está al revés… solo necesito un buen amigo… me dijo con voz sollozante y agrego… gracias por entender.

Volvimos a ver la tele, mientras le acariciaba el cabello y le daba unos besos cariñosos en la cabeza de cuando en cuando. Así, cielo riveros se quedó dormida en mi pecho, al poco rato me dormí también.

Al día siguiente despertamos sorprendidos de habernos quedado en el mueble. A pesar de la incomodidad o bochorno de su parte por lo sucedido la noche anterior, desayunamos juntos procurando mantener la amistad que habíamos acordado.

Ofrecí acompañarla al hospital, pero me dijo que prefería que no. Mas que nada, porque su papa iba a sospechar que estuvimos juntos toda la noche y se iba poner más pesado.

A pesar de sus palabras y su actitud distante, me despedí de cielo riveros, con un sentimiento optimista… seguía pensando que tenía que darle tiempo al tiempo y dejar que las cosas pasen… aunque no saldrían como lo esperaba… iluso, el final me acechaba, sin saberlo
regrese a mi casa, un poco adolorido, casi agarrotado, por haber dormido en el mueble de la sala de cielo riveros, fungiendo como una almohada para que ella descansara tranquila. Sin embargo, estaba satisfecho, por el hecho de haber vuelto a tener a cielo riveros tras dos meses de lejanía.

Mi madre pregunto por cielo riveros y el estado de su madre. Mi papa, más sabe el diablo por viejo que por diablo, dudaba que me haya quedado en el hospital acompañando a cielo riveros. Pero entendiendo la situación, solo me dejaron ir a mi cuarto a descansar.

Con todo, estaba de buen ánimo y descanse tranquilo… a pesar que, pensándolo fríamente, cielo riveros prácticamente me mando a la friendzone... Reto aceptado... Pensé que, con algo de paciencia, las cosas se irían dando poco a poco… como mi padre me dijo alguna vez: lo que es para ti, es para ti… al final todo debe confluir para lograrlo.

Así, arrullado por estos sentimientos optimistas, descanse tranquilamente. Ni bien desperté y llamé a cielo riveros para ver cómo iban las cosas con su madre. Me dijo que todo bien, pero que igual su mama se quedaría una noche más en el hospital y, obviamente su papa también acompañándola.

No quise insinuarle nada a cielo riveros, obviamente me moría de ganas de que me invité de nuevo a su casa y tentar nuevamente poseerla, pero debía esperar que ella me lo proponga… si la presionaba, peor se entercaría en no hacerlo… así funcionan por lo general algunas mujeres…

entonces opte por dejarle su espacio a cielo riveros y bueno, la estrategia rindió sus frutos, unas horas después, casi al anochecer, cielo riveros me llamo:

- ¿qué haces?... Pregunto tímidamente.

- aquí, estudiando para los exámenes… repuse estirándome.

- ahhh… si, yo también… pero no me entra nada… dijo preocupada.

Bueno ayer te entro todito en tu culito, pensé maliciosamente recordando como su ano se tragó mi verga enterita la noche anterior. Pero se refería a que estaba abrumada por lo de la enfermada de su madre y no se podía concentrar para estudiar.

- ¿tú crees que me puedas ayudar?... Me dijo.

- uhmmm… yo creo que tienes miedo de quedarte sola en casa… dije bromeando.

- no, no es eso… no he tenido tiempo para estudiar, a estas alturas no estoy para estar leyendo y analizando, prefiero que alguien me lo expliqué… y recordé que tú eres bueno para eso… me dijo, luego agrego… pero si no puedes, no hay problema…

esa táctica que usan las féminas para interesarnos y dejar en el aire la sensación de que, si no aceptamos, pueden llamar a alguien más… nooo, me dije, no daré cabida a nadie. Me imaginaba a todos los chicos de último ciclo de la facultad haciendo cola para enseñarle a cielo riveros (y verle la cola) hasta lo que no sabían, y seguro primero en la fila a guille… nooo, que pesadilla, ni hablar…

- esteee… claro… no hay problema, te voy a ayudar… dije haciéndome un poco el difícil.

- ¿seguro?... Me pregunto cielo riveros, como para decir, ojo que no te interrumpo.

- claro, para que están los amigos… dije como para que no dude de mis intenciones.

Nuevamente les explique la situación a mis padres, y me dejaron ir otra vez a la casa de cielo riveros, con miras de pasar la noche nuevamente ahí. Por suerte los padres de cielo riveros y los míos no se conocían, sino hubieran cruzado información y sabrían que ella estaba sola… y ya se veía que el viejo de cielo riveros tenía ganas de desaparecerme.

Salí raudo a casa de cielo riveros, procurando no emocionarme mucho, al igual que la noche anterior, debía dejar las cosas fluir. Hacer de mejor amigo y esperar que las cosas se den… dejar que cielo riveros piense que tiene el control, que ella decida si pasan o no las cosas. Ese era al menos el plan, y claro repasar para los exámenes.

- hola… pasa… me dijo cielo riveros abriéndome la puerta.

¡esta mujer es el demonio!… me dije… cielo riveros me espero con una malla deportiva ceñida al cuerpo, casi enteriza, dejando ver todas sus curvas y abultadas zonas del cuerpo… me dejo boquiabierto… mierd… esta amistad no va durar mucho, pensé… es demasiada tentación. Mientras pensaba esto, cielo riveros sonreía al ver el efecto que había causado en mí.

- disculpa que este así, con todo el ajetreo recién pude lavar mi ropa… esto es casi lo único que tengo limpio... ¿no te incomoda no?... Dijo como niña apenada.

- no para nada, total estás en tu casa… le dije, tragando saliva.

Por dentro pensaba, esta niña me va matarrr… esto va terminar conmigo en un manicomio o con mi próstata hinchada o en una violación. No sabía cuánto tiempo soportaría verla a cielo riveros vestida así, sin hacer nada. Una cosa es ser un buen amigo, pero esto es el colmo, es una flagrante provocación, que tortura… pensé mientras recorría sus formas.

Vi el ir y venir de sus gordos glúteos, siguiéndola a través de la sala como zombi. Debía recuperar la cordura, volver al plan inicial, esperaba con el transcurrir de los minutos me fuera acostumbrando a su malla y sus formas casi desnudas, apenas tapadas por aquella tela deportiva delgada, debía intentar hacerme inmune para que eso no termine mal.

Pues bien, cielo riveros ya tenía sus libros en una mesa redonda en su amplia cocina. Bueno, era más practico estudiar ahí, cerca de las bebidas, los aperitivos y la comida. Aunque comenzaba a ver como comida a cielo riveros, en más de una oportunidad tuve que desviar mi vista, que se posaba sobre sus bien formados senos y el escote de su malla deportiva.

Además, creo que cielo riveros, después de las experiencias de estudio que teníamos en mi casa, quería mantenerme lejos de su cuarto, para evitar caer en tentaciones como el día que le inauguré el orto o la noche que la poseí en reiteradas oportunidades.

Al sentarnos, la silla de cielo riveros crujió graciosamente a manera de quejido. Ella se avergonzó un poco, mientras yo pensaba: pobre silla, tener que aguantar semejante trasero… aunque pensándolo bien, yo si lo aguantaría feliz.

Volviendo al tema de estudios… cielo riveros no era tonta, captaba las cosas rápido, sino que por momentos se distraía, seguramente su mente iba al hospital con su madre, como culparla… luego ella misma, se reseteaba, volvía en sí y me pedía que le explique de nuevo.

Hasta que nos dio hambre. Cielo riveros preparo algo rápido: algo de arroz, ensalada y un par de hamburguesas. Ella esperaba que mientras cocinaba, yo siguiera estudiando… pero lo único que estudiaba era su jugoso trasero bamboleándose de acá para allá…

seguía hipnotizado por sus caderas, mientras ella de espaldas a mi cocinaba, de cuando en cuando cielo riveros volteaba a ver cómo iba, y según yo, disimuladamente volvía a ver los libros. Se habrá percatado un par de veces que la comía con la vista y solo le escuchaba una risita coqueta.

Supongo que cielo riveros habrá pensado que, si me tenía a raya como amigo, bajos sus condiciones que yo había aceptado, no le hacía daño dejarme mirar… al menos por ahora… además que de alguna manera era su forma de retribuirme, por la ayuda que le brindaba.

Cenamos tranquilamente, bromeamos un poco de cosas triviales, aunque note que evitaba tocar el tema de nuestro pasado de pareja o si habíamos salido con alguien más en este tiempo… comprendí que era para no complicar el momento, habíamos estudiado bien hasta entonces y no faltaba mucho para terminar, tampoco cielo riveros quería generarme expectativas…

terminamos de cenar y me ofreci a lavar los platos, sin embargo, cielo riveros se opuso. Creo que le gustaba que la mire mientras hacia las labores domésticas, seguro también le inflaba su ego que le mirara su inflado trasero… y en parte se sentía algo cielo riverosr, quizás eso también le faltaba en ese momento, algo de compañía.

Lo gracioso fue que, al pararse cielo riveros, la silla nuevamente sonó, pero esta vez de una manera diferente, no solo fue el ruido de la silla, se aunó el sonido de algo rasgándose… cielo riveros hizo una expresión de susto y luego sonrió nerviosamente…

- ay dany… creo que se rompió mi malla… dijo sonrojada.

- ¿cómo?... A ver… dije instintivamente por morbo sonriendo.

- nooo… que vergüenza… dijo risueña tapándose el rostro.

- quizá no es tan serio… déjame ver… dije bromeando.

- no no no… promete que no vas a voltear… me dijo nerviosa.

- ok… prometido… dije cruzando los dedos bajo la mesa.

En mi plan de amigo, ofrecí nuevamente lavar los platos, para evitar que se pare. Sin embargo, para mi suerte, cielo riveros no me dejo. Me dijo que yo era el invitado y que además le estaba ayudando a estudiar, así que ella, al menos, debía lavar los trastes.

Ante tales argumentos, no insistí, solo me reí al verla avergonzada, levantarse lentamente y recoger los platos, pensando bien cada uno de sus movimientos, procurando no darme la espalda para no dejarme ver nada… pero me imaginaba todo.

- noooo… no mires… danyyy… lo prometiste… dijo risueña.

- ok… ok… respondí, tapándome los ojos.

Ni bien cielo riveros se dio la vuelta contra el lavabo, mis dedos, que cubrían mi vista, automáticamente se abrieron para permitirme admirar el panorama… y satisfacer mi curiosidad y morbo sobre el tamaño del agujero en su malla deportiva…

- mierd… ¡qué tal culo!… me dije, bajando la mano y mordiéndome los dedos para no decirlo en voz alta.

La pobre malla deportiva no pudo contener semejante rabo y termino por rasgarse. Se había abierto justo por el medio, por la raja de su culo, dejando a la vista parte de su pequeña ropa interior negra que se perdía por momentos en sus dos carnosos cachetes. Esa imagen me estaba volviendo loco… enfermándome de lujuria… al punto que mi verga no tardó en reaccionar y ponerse dura…

- nooo… esto es el colmo… no soy de piedra… me dije… lo siento cielo riveros, adiós amistad.

Después de todo, ella me espero con la malla deportiva puesta, dejándome todo a la vista. Luego se paseó frente a mi mientras cocinaba, con su sonrisa coqueta. Ahora que se rompió su malla, tuvo la posibilidad de irse a cambiar, pero decidió continuar así, sabiendo que la miraría (vamos, soy hombre, obvio que iba a ver). Lo que me hacía pensar que cielo riveros, consciente o inconsciente, esperaba o ansiaba que yo hiciera algo.

Con esa idea, me deslice lentamente por el asiento, procurando no hacer ruido. Creo que cielo riveros intuía mi presencia porque la notaba nerviosa, me acerque por detrás a ella. La tome por la cintura suavemente, pero presionando con fuerza el bulto que formaba mi verga en mi pantalón contra el hueco que se había formado entre sus dos generosas nalgas…

- te ayudo a lavar… le susurre al oído, tratando ocultar mis obvias intensiones.

Cielo riveros se estremeció al sentirme detrás, presionando mi pene en su abultado trasero, abriendo sus glúteos… en su nerviosismo soltó uno de los platos y con sus manos se apoyó en los bordes del lavabo, soportando me empuje.

- nooo… danyyy… ya hablamos de estooo… me dijo con voz temblorosa, su boca intentaba resistir lo que todo su cuerpo parecía desear.

- no cielo riveros, tu hablaste… yo voy a actuar… le dije al oído excitado y acto seguido le di un beso en su punto débil, en el cuello.

- ayyy…. Nooo… ¿por qué eres asiii?… dijo temblando de placer.

Inmediatamente libere mi verga mientras ella seguía embebida en sus dudas, en la lucha entre lo que creía incorrecto y lo que su cuerpo ansiaba. Seguía aferrada al lavabo, dándome la espalda, sin siquiera forcejear o pugnar por liberarse… eso me dio a entender que cielo riveros no era indiferente a mis caricias, que podía actuar, pero debía hacerlo inmediato, antes que se arrepintiera.

El agujero en su malla no daba mucho margen para penetrarla como era necesario… qué diablos, me dije… tome ambos extremos del agujero en su malla y los jalonee hasta abrirlos completamente, rasgando toda la tela, total ya estaba rota me dije… dejando al descubierto su enorme trasero que prácticamente reboto al sentirse liberado de su opresión…

- queee… ohhh… se quejó sorprendida cielo riveros al sentir descubiertas sus intimidades.

Antes de darle tiempo de reaccionar, hice a un lado su delgada tanga, y procedí a penetrarla violentamente, con toda mi furia contenida, sentía que había soportado bastante que me provocara con esa ropa por horas…

la penetré por el primer hueco que encontré, que fue su lubricada vagina, mi pene entro como en mantequilla. Cielo riveros tembló de pies a cabeza… mientras yo procedía a bombearla violentamente, para mantenerla o llevarla a otro nivel de excitación… como para que no se arrepienta…

- ohhhh… uhmmm… uhmmm… se quejaba tibiamente, mientras seguía aferrada al lavabo.

No me había percatado que, en mi frenesí, casi la había levantado, cielo riveros estaba empinada y empalada, con tal de ser penetrada, se había acomodado así para permitirme maniobrar… mientras su gran trasero retumbaba apresado entre el lavabo y mi entrepierna.

- nooo… no… ahiiii no…. Dijo al sentir que su vagina esta recontra mojada y sus apetitos iban por otro lado.

Entendiendo sus gustos, saqué mi verga y la dirigir hacia su arrugado ano… no tuve que hacer mucho, porque ella misma en su desesperación por ser clavada por el culo, comenzó a presionar hacia atrás. Así se fue insertando centímetro a centímetro de mi duro pene… y no se detuvo hasta tenerlo todo adentro.

- si… siiii… ahiii… exclamo satisfecha cielo riveros al sentirse atorada por donde le gustaba.

Sentía su ano palpitando feliz en mi verga, casi como saboreándolo… luego ella misma fue inclinándose hacia adelante y arqueando su espalda, entendió que de esa manera permitiría que mi verga le entre hasta la raíz… y fue así, un temblorcillo la recorrió hasta la coronilla.

Pensé que le había dado suficiente tiempo para disfrutar mi verga partiéndola, ahora me tocaba disfrutar a mí también… la tomé por sus dos gordas nalgas como si fueran asas o estribos. Nuevamente comencé a bombearla, jaloneándola de los glúteos… cosa que parecía disfrutar en extremo.

Sin embargo, la veía desfallecer, casi acalambrándose en esa posición, nuestras diferencias de alturas hacían difícil una penetración de esa forma, casi parados, obligándola a empinarse…

- queee… noooo… se quejó cielo riveros al sentir que sacaba mi verga de donde le gustaba.

Rápidamente le di vuelta, me miro perpleja… casi por reflejo, se estaba arrodillando, pensando que venía la descarga de semen y que ella debía recibirla en su garganta. Pero no la deje, la levante pasando mis brazos por sus piernas abiertas.

Para mantener equilibrio, la enganche rápidamente por su húmeda vagina, ella se aferró a mi abrazándome y arañándome con sus dedos. Mientras sus labios buscaban los míos desesperadamente, tras varias semanas, al fin nos besábamos de frente, con pasión y con lengua.

La lleve sobre la mesa donde estaban los libros, los tire a un lado, la recosté, abriéndole las piernas, mientras ella misma las levantaba para ponerla en mis hombros, empinando el trasero para mostrarme su goloso agujero… sabía lo que cielo riveros quería, sus ojos y expresión lo decían todo…

le volví a ensartar mi verga por el culo, se le puso la piel de gallina, y con los ojos entrecerrados como saboreando aquel empalamiento, me dio su aprobación. Sus manos se aferraron a los bordes de la mesa. De la misma manera hice yo y procedí a castigarle armónicamente su jugoso rabo.

El resonar de sus bultosas nalgas contra mi ingle, ese armónico sonido aunado a sus tibios gemidos, llenaban mis sentidos, aunque faltaba algo más… en esta posición veía ir y venir sus inflados senos. Los comencé a jalonear hasta liberarlos…

- ohhh… siiii... Uhmmm…. Agradecía cielo riveros la atención a sus melones, mordiendo los labios.

Por momentos sus gemidos eran tan fuertes, que temía que sus vecinos fueran a oírnos e irle luego con el chisme a su viejo… nooo, me dije… y de cuando el cuándo le tapaba la boca para silenciarla. Ella lo entendida y entre mis dedos gemía…

- sigueee… sigueee… uhmmm… falta poco… me partes… uhmmm… me animaba cielo riveros viéndome sudar por el esfuerzo.

Me incline hacia ella, presionando más mi verga contra su cuerpo, sus piernas temblaban, mientras ella casi vociferaba de placer. Cielo riveros se aferraba a la mesa, yo hacía lo mismo, clavándola sin piedad mientras la mesa retumbaba…

- siii… yaaaa… yaaa…. Ohhhh… uhmmmm… exclamo retorciéndose de placer.

- mierd…. Ufff… ufff… replique yo, descargando semen en sus tripas.

Instintivamente saque mi verga de su ano, buscando que ponerla en su boca para que reciba mi tibia leche, pero por la posición estaba muy lejos… mis chorros terminaron salpicándole el abdomen, el pecho… graciosamente cielo riveros levanto la cabeza pensando que algún chorro haría diana en su boca… y si… algunas gotas salpicaron su rostro y llegaron a su paladar.

Ella dejo caer su cabeza contra la mesa, mientras saboreaba ese orgasmo y las gotas de semen que pudo recibir. Tras recuperarse de la agitación, me jalo de un brazo, a su lado… esta vez sí engullo mi verga hasta dejarla limpia y sacarle unas gotas más de semen que se tragó de buena gana…

en aquella mesa donde hace poco habíamos comido, cielo riveros terminaba de comerse mi verga completita… pensándolo bien, mi tieso pene había paseado por cada uno de sus agujeros: su húmeda vagina, su estrecho ano y su golosa boca.

Tras esa inesperada faena, provocada por la rotura de su malla deportiva, ambos estábamos extasiados, ella deshecha seguía tirada sobre la mesa con la cabeza de lado, mientras yo parado a su lado solo atinaba a acariciar su cabello, como agradeciendo su fogosa entrega…

hasta que el silencio se fue tornando incomodo, por cómo iba cambiando la expresión en su rostro, entendí que nuevamente las dudas comenzaban a invadirla de nuevo… hasta que abrumada solo atino a cubrirse el rostro con sus manos casi sollozando…

- solo quiero que seamos amigos… y siempre terminamos así… dijo abrumada, quizás torturada por su conciencia.

Cielo riveros estaba acostumbrada a tener relaciones solo con su pareja, la única excepción fui yo cuando empezamos y ella aún estaba con javier… ahora se suponía que éramos amigos, sin embargo, seguíamos tirando como conejos cada que nos veíamos…

era obvio que aún no me quería perdonar, se negaba a hacerlo, porque le dolió en el alma lo que hice, engañarla con vane… por eso se castigaba así misma por permitirse intimar conmigo, un mentiroso… por no ser coherente con sus decisiones…

bueno, también hay que reconocer que cielo riveros era un manojo de sentimientos por lo de su madre… estaba vulnerable, inestable y todo…

- bueno… entonces solo seremos amigos que cogen de cuando en cuando… dije en tono fresco, en realidad se me salió, estaba pensando en voz alta.

Cielo riveros me miro perpleja… luego volvió a taparse el rostro… ay, yo y mi bocota, pensé… no sé cuándo callarme… hasta que al rato oí risas entre sus manos…

- no hay duda… eres un idiota… dijo sin parar de reír.

- ¿por qué?... Me atreví a preguntar.

- ¿cómo me vas a decir eso?... A veces parece que tu crees que estas hablando con un amigo…no con una chica… dijo risueña.

Luego, cielo riveros aun recostada sobre la mesa… me hizo señas para que me acerque… como para contarme un secreto en voz… o quizás iría por mi ultimo premio, un beso de agradecimiento por mi desempeño para satisfacer sus por, tanto tiempo, inhibidos apetitos anales…pero no fue así…

- danny… solo quiero que sepas que… me dijo intrigante.

- ¿qué?... Pregunte curioso.

Que aún me amas, que te gusto, que quieres que te lo haga otra vez, ¿qué? Dilo ya… pensaba mientras cielo riveros seguía haciendo un largo preámbulo... Al ver que me comía la curiosidad…

- que me debes una malla deportiva… me malograste esta… repuso angustiada.

- ¿cómo?... Proteste. También con semejante trasero, tampoco iba a resistir mucho.

- danny… sabes que te portaste mal… cuando te pones así (excitado), haces locuras y ya vez, me quede sin malla deportiva… me dijo en gracioso reproche.

- ok… está bien… dije resignado. Total, le rompí la malla y bueno goce rompiéndole el culo, era justo.

- ahora si… se buen chico y tráeme una toalla del baño… porfa… me dijo acariciando mi cabeza.

Parecía que cielo riveros no se quería arriesgar nuevamente a pasearse con las nalgas al aire, sabia que era una flagrante provocación y era suficiente con eso por esa noche.

Al darle la toalla, se la amarro a la cintura y a pesar de todo, se fue, procurando no darme la espalda, para que, según ella, no la ataque de nuevo.

Subió a su cuarto y a los minutos bajo, esta vez vestida con una de esos pijamas mata pasiones… esas que son sueltas y que tapan todo, que apenas dejaban ver su abultamiento en algunas zonas de su cuerpo… sonrió al ver mi cara de decepción, sabía que, vestida así, me mantendría a raya.

Terminamos de repasar lo que nos faltaba, me había hecho ilusiones de quedarme viendo una película con ella y hacerle compañía y por ahí tentar algún otro encuentro… sentía que debíamos ponernos al día después de tanto tiempo separados… le tenia un morbo reprimido a pesar de su pijama.

Sin embargo, cielo riveros me despacho a mi casa, creo que intuía mis pensamientos y para ella era tentar a la suerte que me quedara ahí, la última vez que pasamos juntos una noche de estudios (en mi casa), terminamos escaldados por todas las veces que lo hicimos.

Todo parecía ir bien, al menos de a pocos íbamos recuperando aquella afinidad y complicidad de pareja que teníamos antes… sentía que vivíamos una segunda etapa de enamoramiento, que al igual que la primera, empezó con dudas de su parte.

Sin embargo, a veces el destino nos tiene deparadas cosas muy diferentes… todo tiene su final, nada dura para siempre, como dice la canción... Y parecía que se acercaba el nuestro… sin darnos cuenta, teníamos un enemigo silencioso complotando contra nosotros…
tras ese agitado encuentro de “estudio”, según cielo riveros ya no seguíamos juntos, pero según mi intuición estábamos más cerca de volver… tras 2 meses de agonía, al menos ahora la había poseído 2 veces. Si bien no había reconciliación o perdón a la vista, al menos el estado de las cosas era mucho mejor que entre estos 2 meses de silencio y alejamiento.

Transcurrió la semana da exámenes y todo nos fue bien, un par de veces cielo riveros me pidió que me quede en la facultad y la ayude a estudiar, como mis exámenes eran en la maña y los suyos en la noche, teníamos tiempo intermedio para repasar.

Viendo que éramos comidilla de los chumes de la facu nuevamente y, que cielo riveros no me quería en su casa dado las últimas veces que estuvimos ahí terminamos cogiendo. Aparte que su mama ya estaba ahí al cuidado de su padre… nooo… ni imaginar estudiar bajo la mirada de su viejo.

Tampoco cielo riveros quería ir a mi casa, por la tentación, recordando ahí siempre su ano terminaba pagando tributo de estadía. Así que optamos por estudiar en la biblioteca de otra facultad, alejada de la nuestra, donde no nos conocieran y estudiáramos tranquilos.

Aunque igual cielo riveros atraía las miradas y yo no podía decir nada. Había notado que el tiempo que estuvimos alejados cielo riveros se comenzó a vestir un poco más recatada, como sin ganas de atraer a los hombres. Estos días que pasamos juntos nuevamente se vestía más coqueta, como para volverme loco con sus vestidos y ropa ceñida… era como decir: mira, pero no toques…

esta vez había venido con una mini falda roja y una blusa blanca. Diablos… el rojo de su falda me hacía sentir como un toro dispuesto a embestirla… pero por detrás. Solo lo blanco de su blusa, me calmaba, aunque era un poco translucida y podía notar su blanco brasier también… pero cuando se inclinaba… ufff… podía ver sus redondos melones…

como ven, me traía loco… pero cielo riveros me había mantenido a raya esa semana en la facu. Hasta que el ultimo día paso algo curioso… lo normal era que cielo riveros atraiga las miradas a nuestro alrededor, pero de pronto, una chica empezó a mirarme fijamente, distrayéndonos a cielo riveros y a mí por unos instantes…

- ¿la conoces? ¿es tu ex o algo?... Me pregunto curiosa.

- mmm… no que yo recuerde… pero quizás es lesbi y te está mirando a ti… dije disimulando y reímos. Mientras en mi mente repasaba de donde podía conocer a esa chica.

Al poco rato otra chica se acercó a la mesa de la primera chica que me miraba y ambas me miraron un rato y empezaron a murmurar entre ellas.

- esto es raro… ¿no habrás hecho un dúo el tiempo que estuvimos separados?... Bromeo cielo riveros al notar que me miraban.

- nooo… quizás se preguntarán ¿qué hace una chica tan guapa como tú con alguien como yo?… agregue inflándole el ego a cielo riveros que sonreía incrédula por ese halago. Mientras internamente intentaba recordar quienes podrían ser esas chicas.

Hasta que llego una tercera chica, que me miró fijamente, me saludo con un beso en la mejilla… me tomo de la mano cariñosamente y me miro con ternura:

- ¡hola!... ¿cómo has estado?… dijo en tono entre jovial y coqueta, mientras yo la miraba con cara de intrigado ¿y tú quién eres?

A los segundos esta chica se comenzó a avergonzar y reírse histéricamente, mientras las otras dos que estaban en la mesa del frente también lo hicieron.

- lo siento… discúlpame… me dijo soltando mi mano sonrojada.

- si se parece… bastante… dijo la primera chica.

- casi me confundo yo también… agrego la segunda.

En esa confusión cielo riveros me miraba con cara de sorprendida y diría por momentos celosa.

- creo que fue suficiente… así no podremos estudiar… dijo cielo riveros seria.

- cierto… bueno, gracias chicas… les dije despidiéndome de las tres que aun reían, aunque ahora nerviosamente viendo que me habían causado un lio con mi acompañante.

Mientras sacaba mis cosas y seguía a cielo riveros, que salió más rápido, internamente pensaba mi ego con cierta alegría, si las cosas no funcionan con cielo riveros, tengo que volver a esta facu, parece que soy famoso… al menos tenía un plan b, pero mi plan a (cielo riveros) estaba afuera mezcla de furia y celos.

- ¿quiénes son esas tipas?... Me recrimino.

- ni idea… no las conozco… dije haciéndome el desentendido.

- pues no parece… repuso irónicamente cielo riveros.

- ya las oíste… se confundieron… dije a la defensiva.

- seguro que no viniste aquí buscando chicas cuando rompimos… insistió ella.

- oye… ¿que tienes?… ¿estas celosa?... Repuse volviendo a la ofensiva.

- no… no… para nada… dijo disimulando su ira.

Luego caminamos en dirección a la facu en un incómodo silencio mientras anochecía…

- bueno, parece que tienes un clon o un gemelo en esa facultad… me dijo, luego agrego en tono revanchista: quizás lo busque, si tú eres el gemelo malvado tal vez él sea el bueno y fiel…

- jaaa… y dale con eso… sigues celosa… déjalo ya… dije mientras caminábamos por los desolados pasillos de un edificio administrativo.

- ayyy… es que me hacen recordar eso… lo que hiciste con esa loca de vane… y me da… ayyy…. Una rabia… decía apretando los puños.

En un momento, se detuvo en pleno pasillo, como acumulando su ira… al notar que no había nadie más y que me quede a su lado esperándola. Me soltó un puñete en el hombro… en realidad no dolió, fue medio en serio, medio en juego… pero sentía que se venía otra andanada de golpes… era como su catarsis de todo lo que se estaba reprimiendo…

- oye… ya… tranquila… le decía.

- ¿cómo pudiste malograrlo?... Estábamos tan bien… y te metiste con ella… con esa regalona… como te odiooo…. Replico cielo riveros furiosa, recordando todo.

Y nuevamente, a manera juego comenzaron los palmazos. Por momentos quería reírme de su rabieta, aunque sabía que la enfurecería más… pero vamos, cielo riveros parecía una ardilla peleando con un árbol. Solo me quedo hacerme a un lado, me ubique frente una puerta y la tome de los brazos.

- ok… ya paso… dije calmándola.

- si tienes razón… dijo respirando aliviada… no, aun no… repuso ella y me empujo.

La puerta detrás de mí, que parecía cerrada, apenas estaba juntada cedió con mi peso. En realidad, aunado al empujón de cielo riveros, trastabille porque el piso había un pequeño charco de agua.

Lo cierto es que termine cayendo dentro de una pequeña y apenas iluminada habitación, que parecía un almacén de limpieza, ahora entendía porque estaba mojado el piso, había un balde con agua y trapeador, un estante de productos de limpieza y una pequeña mesa.

Mis flacas posaderas detuvieron la caída con el piso, ahí si envidie a cielo riveros que con tremendo trasero seguro ni sentía la caída o rebotaba, pero yo si sufrí el golpe y termine recostándome contra el piso… mientras cielo riveros me miraba asustada, tapándose la boca.

- lo siento, lo siento… repetía una y otra vez.

- au caraj… llegue a quejarme.

- pobrecito… ¿estás bien?... Dijo mientras me ayudaba a parar.

Me hizo apoyar sobre la mesa, que no fue buena idea porque mi trasero estaba adolorido… pero me sentía mareado por lo rápido que me pare, además que la habitación estaba oscura, apenas divisaba a cielo riveros entre las estrellitas que bailaban en mi cabeza.

- se me paso la mano… sorry… me dijo apenada tomándome el rostro para que la vea.

Al menos eso funciono, mis ojos de a pocos fueron enfocando su preocupado rostro. Me miro arrepentida con ternura…

- lo siento, lo siento… volvió a repetir mientras me besaba las mejillas para calmarme.

Sus labios contra mi piel, volvió a marearme de manera diferente, con cada beso, sus labios se acercaban a los míos… casi rosándolos. Mis manos instintivamente se fueron a su cintura, para apoyarme y reconocerla más en esa tenue luz.

- cielo riveros… aun te amo… le dije en un acceso de cordura y sinceridad.

- sabes que esto no se puede… ya no funciona… me dijo con tristeza.

Me iba a dar otra lista de argumentos, y quizás lo hizo, solo que ya no la escuchaba, veía sus carnosos y rosados labios moverse, pero no la oía… solo veía su proximidad a la mía, que no me huía, que seguían mis manos en su cintura y que ella tenía sus manos en mi rostro.

Solo me quedo salvar los pocos centímetros que había entre nosotros… la bese y no se opuso, fue un tierno beso, mis labios repasando los suyos, moviendo la cabeza de lado a lado, apenas respirando, con algunos leves jadeos.

Sus manos pasaron de mis mejillas a mi cuello, mis brazos terminaron de abrazar su cintura con fuerza, atrayéndola a mí. Los besos eran cada vez más apasionados, comenzaron a entrar en escena nuestras lenguas y los jadeos se hacían cada vez más frecuentes. Nos comíamos a besos mientras nos apretujábamos con fuerza.

Recostado contra la mesa, estábamos casi a la misma altura, mis brazos largos dejaban que mis manos tuvieran a su alcance sus muslos. Instintivamente mis manos pasaron por el extremo inferior de su falda, y fueron acariciando sus piernas y subiendo de a pocos hasta apretar sus nalgas por debajo de aquella tela.

- uhmmmm… dany nooo… tengo examen… dijo reaccionando.

Era cierto, quedaba menos de una hora para su examen, aun estábamos lejos de la facultad. Si bien era un lugar público, por el horario ya casi no había gente… además estábamos en un pequeño cuarto… pero la puerta estaba abierta.

- cierto… dije, suspirando y cediendo al pedido de cielo riveros, tratando de ser un buen amigo.

Cielo riveros se alejó un poco de mí y se acercó a la puerta lentamente, la seguí, por momentos tuve el impulso de tomarla de la mano y jalarla de nuevo hacia mi… pero no fue necesario…

cuando cielo riveros estuvo frente a la puerta, se detuvo como pensando, luego, simplemente la empujo para cerrarla… volteo repentinamente y me miro con una mezclar de cariño y ansiedad, acto seguido se acercó rápido y me empujo contra la pared…

- que sea rápido… atino a murmurar mientras me llenaba de besos nuevamente.

Prácticamente me estampo contra la pared, y no me dejaba respirar, apenas yo pude reaccionar, tímidamente mis manos volvieron a su cintura… sin embargo ella quería apurar las cosas y volver a lo de antes… tomo mis manos y las puso en sus abultadas posaderas por debajo de su falda.

No tuvo que insistirme mucho… comencé a estrujar sus gordas nalgas, mientras ella resoplaba de placer. Alejo sus manos de mi cuello y hurgo en mi pantalón hasta encontrar mi dura verga, la libero como pudo, bajándome el pantalón a la mala.

A su vez, yo le subía la falda hasta la cintura, dejando desnudo su imponente trasero que yo iba masajeando. En esa posición no iba pasar nada, así que tome sus nalgas como si fueran agarraderas y la levante, colocándola sobre la estrecha mesa.

- ohhhh…. Si… que fuerte que eres… ohhh… jadeaba cielo riveros complacida.

Solo quedo hacer a un lado su pequeña ropa interior, y la penetre por su húmedo agujero, su bien lubricada vagina. Cielo riveros me hundió las uñas en la espalda embebida de placer, mientras habría más las piernas para dejarme actuar.

- uhmmm… si… si… mi amor asiii… uhmmm… me decía excitada.

Que después de tanto tiempo, me volviera a llamar amor, me excitaba más aun… considerando que ya le había declarado que aun la amaba… parece que eso la hizo soltarse más.

La empecé a bombear armónicamente y con mayor fuerza cada vez, mi verga se deslizaba en su húmeda vagina haciéndola retorcerse de placer, mientras mis brazos contenían sus piernas, con mis manos contra la mesa que comenzaba a retumbar…

- ohhh… nooo… ayyy… nooo…. Uhmmm…. Exclamo arañando nuevamente mi espalda.

Mi se contrajo abruptamente mientras parecía ahogarse con la boca abierta. Unos pocos minutos de fricción en su ansioso pubis, la hizo reventar en un violento orgasmo del cual quiso escapar o al menos retardar, pero no pudo.

Luego se relajó y me abrazo con fuerza, mientras mi verga seguía incrustada en ella. Cielo riveros respiraba rápidamente y se fue calmando, parecía disfrutar de ese orgasmo vaginal después de tiempo… hacia parecer que las otras cogidas en su casa fueron puro arranque de placer y que esto era algo más… que de una manera loca estábamos volviendo a hacer el amor.

Tras unos instantes volvió a besarme con ternura, como agradecimiento, mientras yo seguía acariciando sus piernas y mi verga seguía erguida a la espera de otra oportunidad… quizás ya no habría tiempo para satisfacerme… pero creo que cielo riveros intuyo mis pensamientos…

- ¿aún me amas?... Dijo enamorada.

- nunca deje de amarte… repuse y la bese.

- entonces… si aún me amas… ponlo aquí… dijo coquetamente.

No tuvo que hacer mucha referencia, sabía que quería decir, pero igual la deje actuar… deje que agarre mi verga y, mientras se recostaba más y empinaba el trasero, la apuntara a su aun no satisfecho ano… cielo riveros quería salir de esa habitación con sus dos agujeros satisfechos… y quien era yo para negarme…

la ayude a ubicarse mejor sobre esa mesa mientras su espalda se apoyaba en los estantes. Acto seguido hice realidad sus deseos, le incruste mi verga en las entrañas… ella no resistió el placer de esa nueva irrupción en su goloso ano y me jalo de la camisa hasta que nuestros labios se fundieron en un jugoso beso.

- uhmmm… que deliciaaa… como me rompes el culooo… gemía satisfecha.

Estaba bien que fuera un edificio casi vacío, pero no era para hacer un escándalo, pensé mientras le tapaba la boca. Me acomode mejor y le clave mi verga hasta la raíz, lo que hizo que sus pupilas salieran de sus orbitas, vi en sus ojos entrecerrados solo el color blanco… lo estaba disfrutando.

La seguía estampando contra el mueble, la mesa retumbaba, los estantes se remecían y nos llovían trapos y utensilios de limpieza, pero no nos importaba.

- no pares por favorrr… sigue… sigue… uhmmm… me pedía cielo riveros a pesar que el mundo se nos caía encima.

Veia a través de su translucida blusa el ir y venir de sus senos, logre con esfuerzo abrir la blusa, subirle el brasier y engullir sus pezones mientras cielo riveros se hinchaba de placer…

- nooo… otra vez… nooo…. Ouuu…. Uhmmm… exclamo satisfecha retorciéndose.

Se vino en un orgasmo tan rico, su cuerpo se contraía tan deliciosamente que me hizo envolverme en ese placer… mi verga comenzó a contraerse…

- ufff… se me viene también… exclame…

- no, no… en mi ropa no… dijo alejándome.

Retrocedí un poco buscando un balde o envase donde esparcir el semen que apenas podía contener, ahorcando mi verga…

- ven hazlo acá… me dijo arrodillándose y abriendo la boca.

Embobado no atine a rehusarme, solo deje que me jalara la verga su boca, que por un momento se sintió tímida y no escupió nada. Viendo mi sufrimiento por haberme aguantado de vaciar mis líquidos en su ano, cielo riveros hacendosa procedió a incentivar mis tuberías… para librarlas de su presión.

- no te preocupes… ya va salir… me animo mientras comenzaba a pajearme.

Dándose cuenta que el masaje con su mano no hacía efecto, incluyo su boca en la operación, sus húmedos labios hicieron que me relajara… no tardó mucho en hacer efecto.

- ayyy… ufff…. Siii... Al finnn… exclame satisfecho

ahora si mi verga expulso todo su arsenal, comencé casi a temblar de alivio… mientras cielo riveros se engullía todo de buena gana. Sentía su garganta contraerse, para tragarse todo y dejarla respirar… por momentos me quería alejar… pero ella no me dejaba, me mantenía unido a su boca, tomándome por la cintura.

Seguro temía que la manchara, no quería llegar a su examen con gotas de semen en su cabello o rostro, similar a la película de loco por mary… donde el semen colgaba del oído de ben stiller y termino como gel de cabello de cameron diaz.

Menos aun con rastros de semen en su inmaculada y blanca blusa o en su falda… seria para que nuevamente de que hablar en la facu… ante esos escenarios y llevada por el placer, cielo riveros opto por tragarse todo el semen y no dejar huella.

Una vez que no hubo gota de leche que extraer… cielo riveros se alejó, permitiéndose respirar pausadamente, con los ojos cerrados y el rostro hacia arriba, como para que no regrese nada… se pasó la lengua por los melosos labios y suspiro…

abrió los ojos como si nada hubiera pasado… me miro con ternura y algo de vergüenza, sonrojándose un poco… luego regreso en sí y me miro asustada…

- ¿qué hora es?... ¡mi examen!… exclamo.

- mierd… hay que apurarnos… dije arreglándome

cielo riveros se puso de pie y comenzó a acicalarse, bajarse la falda para ponerla en su sitio hasta entallar a la fuerza su abultado trasero, colocar sus redondos senos en su sostén y abotonar su blusa. Se pasó los dedos por los labios para ver si había algún rastro meloso de semen… por si acaso se chupo el dedo para que tampoco quede rastro.

Esa acción erótica, que cielo riveros lo hizo por practicidad, me hizo botar otra gota de semen en mi ropa interior, pero bueno ya no había tiempo. Lo último fue que cielo riveros me pidió revisar si no había ninguna mancha en su ropa, se dio una vuelta lentamente mientras yo la comía con la vista y ella sonreía coquetamente sabiendo el efecto que causaba en mí y que se abultaba en mi pantalón.

- ya… se hace tarde… vámonos… dijo jalando la puerta.

Salimos rápido, pero a los pocos metros… oímos una voz detrás nuestro:

- ¿ustedes que hacían adentro?... Muchachos de mierd… gritaron.

Al voltear me di cuenta que era un viejo conserje, canoso y regordete en overol, que estaba retornando sus utensilios de limpieza al almacén. Cielo riveros aterrada, solo atino a salir corriendo… mientras yo solamente llegue a hacer un gesto al señor como disculpándome.

Para mi sorpresa, el viejo conserje al ver mejor a cielo riveros y sus abultadas formas en su entallada ropa, se quedó boquiabierto… luego solo atino a hacerme un gesto de felicitación y me dejo ir con su dedo pulgar arriba a manera de like.

Me dirigí a la salida del edificio sonriendo… al parecer mi suerte estaba cambiando, más que nada debido a eventos ajenos a mí... Que, de no haber sucedido, habrían hecho que cielo riveros ni se atreviera siquiera a hablarme.

La lamentable enfermedad de la madre de cielo riveros, la cercanía de los exámenes para los cuales ella no estaba preparada por estar preocupada por su madre, incluso ahora la confusión con esas chicas que activaron sus celos… todo ello había confluido para que ahora cielo riveros haya menguado su resistencia hacia mí, cediendo a mi amistad… éramos tipo amigos con derechos y pintaba para más…

pensando esto, alcance a cielo riveros afuera del edificio y caminamos rápido a la facu… aunque en un tibio silencio, me imagino por sus remordimientos por lo sucedido, como ya había pasado las dos veces anteriores, o tal vez procurando recordar todo lo aprendido antes entrar al cuarto del almacén. Poco antes de llegar, viendo que aún tenía unos minutos, ella bajo la velocidad hasta que se detuvo…

- danny… solo déjame aquí… me dijo nerviosa.

Imagine que no quería que la vieran llegar conmigo, para no distraerse con los cuchicheos y rumores sobre nosotros. Por otro lado, salieron mis celos, pensé que quizás no quería que algún otro candidato interesado (que podría ser guille) me viera con ella.

- sobre lo que paso… no quiero que te hagas ilusiones… dijo apenada, al ver que no respondía.

Otra vez se viene el sermón de que esto no debió suceder y de que no va pasar nada más entre nosotros… bla, bla, bla… y si… fue eso, pero de una manera que no me esperaba.

- está bien… será a tu manera… seremos amigos… lo entiendo… dije algo aburrido.

- no… no lo entiendes… replico ella poniéndose seria.

- si, lo se… fue mi error, no confías en mí, no pasara nada entre nosotros, entiendo… repuse.

- no… es solo eso… dijo ella triste,

- entonces ¿qué es?... Replique, pensando que había alguien más, guille quizás.

- mañana tendré exámenes… me dijo abrumada.

- bueno, te ayudo a estudiar entonces… respondí sin entender.

- no esos exámenes… sino… exámenes médicos… para saber si tengo lo mismo… lo mismo que mi mama… dijo al borde de las lágrimas.

Me di cuenta del pavor que le causaba solo pensar posibilidad de tener cáncer, cielo riveros incluso temía de decir esa palabra. Había estado tan embebido en mis pensamientos, en mi meta de retomar mi relación con cielo riveros, que no había pensado o previsto que algo así podría pasarle a ella…

- ¿qué?... Pero como… ¿estás bien?… agregue preocupado

- si… pero si ella tiene eso, quizás sea hereditario… tengo miedo… repuso sollozante.

- tranquila, te acompaño… le ofrecí rápidamente.

- no… no quiero que nadie pase lo que mi papa está pasando… dijo alejándose.

Tenia que entender que no era la primera vez que su madre recaía en esa maldita enfermedad, cielo riveros había crecido viendo a su madre ir y venir de hospitales, y su padre haciéndose cargo de su madre y de ella en esos difíciles momentos a través de los años.

Incluso cielo riveros vio a su padre a renunciar a sus sueños personales de continuar con su carrera cielo riverostar, renunciar a llegar a general, el máximo rango, todo para dedicarse a su esposa e hija…y cielo riveros entendía lo difícil que era, y no le deseaba eso a nadie.

Ahora entendía sus palabras al terminar conmigo… no quería alguien solo para coger rico, necesitaba alguien en quien confiar, alguien que estuviera ahí no solo en momentos de pasión, sino cuando todo se pusiera de cabeza, como ahora.

- ya sea como pareja o como amigo, como gustes, estaré contigo… no me alejare, no te dejare sola en esto… respondí abrazándola.

Sentía que era lo que mi corazón deseaba en ese momento, lo que mi conciencia decía que era correcto… dicen que la primera reacción es la mas sincera y que demuestra lo que en realidad queremos… y esa fue mi reacción.

Cielo riveros lloro unos instantes, mezcla de miedo y rabia por el cáncer que carcomía la salud de su madre y que, quizás silenciosamente, ella podía tener dentro sin darse cuenta aún. Lloraba y se aferraba a mí como una niña buscando protección.

Luego reaccionando, se percató del tiempo, se secó las lágrimas con sus manos. Me dio un tierno beso en los labios, ante mi sorpresa, tras meses sin hacerlo. Me agradeció por todo, luego se alejó rauda hacia su salón de clases a dar su examen.

Me quede helado viendo como cielo riveros se alejaba… por momentos pensé que me hubiera gustado que me diga que había alguien más, sea guille o que volvió con javier o que se interesó en alguien más, eso hubiera sido más simple… ya me había ganado su cariño una vez, liberándola de las garras de javier, y sentía que podría hacerlo nuevamente de cualquier otro…

pero ¿cómo liberarla de las garras del cáncer? ¿cómo se hace eso?… siempre me preocupe que alguien me alejara de cielo riveros… ya sea javier, vane o guille… pero nunca imagine que alguna enfermedad podría poner fin a lo nuestro…

- vamos caraj… deja de pensar tonterías… no va pasar eso… ella va estar bien… me decía.

Así regrese a mi casa, mientras intentaba ser positivo… pero esa sombra de duda y negatividad rondaba mis pensamientos…
los pensamientos sobre la posible enfermedad de cielo riveros, sus consecuencias, no me dejaron tranquilo… ¿estaba listo para enfrentar algo así?, en algún momento tenía que madurar y sentía que cielo riveros valía la pena… así que, a medio camino a casa, me arrepentí y volví a la facu a esperarla.

Ella estaba en medio de un grupo de amigos, entre los cuales estaba guille, seguramente discutiendo las respuestas del examen… sin embargo al verme, el rostro se le ilumino, los dejo y fue a verme. Me conto que le fue súper bien, me agradeció por ayudarla, fuimos a cenar y luego la deje en su casa. No pude pasar porque sus viejos ya estaban ahí y no quería interrumpirlos.

A pesar que no me lo pidió, insistí y la acompañé a sus exámenes médicos y tras unos días de estrés, fuimos a recoger sus resultados… eran negativos… sonreímos aliviados, mientras nos abrazábamos de alegría y ella llamaba a sus padres para informarles.

Pero… si bien salió bien en sus exámenes médicos, la advertencia estaba dada, debía hacerse sus chequeos regularmente. No debía cantar victoria… siempre el lado negativo que tenemos, me hacía intuir que esa enfermedad se daría maña por separarnos… aunque no de la manera que pensaba…

tras esas semanas agitadas, llego el fin de semana de celebración del día de brujas… que, si bien no es una celebración latinoamericana, ya desde hacía unos años se había tornado en un pretexto para que los jóvenes salieran a divertirse, incluso para que los niños pidan dulces.

Mi situación con cielo riveros era difusa, no éramos pareja, y sentía que éramos más que amigos… más bien me parecía que ella me tenía a prueba para ver si recuperaba su confianza, cosa que no me importaba… tampoco hablamos de eso, solo nos dejábamos llevar por el momento…

como les decía, tras esas semanas de ajetreo y estrés, cielo riveros me insinuó para salir a divertirnos, a bailar y relajarnos… no me negué… le había llamado la atención una fiesta en una discoteca, pero el ingreso era solo con disfraz… ella nunca había asistido a una fiesta así y le gustaba la idea, a mí por mi lado no me hacía gracia disfrazarme… pero bueno… con tal de darle su gusto…

pues bien, termine disfrazándome de pirata, pantalón negro, camisa blanca suelta, cintillo rojo en la cintura y sombrero a lo jack sparrow, con parche en el ojo y todo. A decir verdad, me sentía ridículo, más cuando veía la expresión del taxista que me llevo a casa de cielo riveros.

Espere un rato en la puerta, hasta que cielo riveros salió vestida de… como decirlo… una sexy nativa norteamericana, con un vestido beige con grabados indios que terminaban en minifalda, con los hombros descubiertos y algo de escote… ufff… una delicia, ver como a pesar de ser suelto el vestido se le abultaba en los senos y el trasero…

para completar la imagen y la fantasía, cielo riveros tenía pintadas las mejillas con esas rayas características que se ven en las películas de vaquero, tenía un par de trenzas que ladeaban sus hombros como apuntando a sus redondos senos… y de remate una vincha en la con una pluma en la frente.

La comí unos instantes con la vista y luego nos fuimos a la disco. Había una fila grande para ingresar, pero ella me dijo para ir adelante que quizás teníamos suerte… a pesar de la cola, creo que el de seguridad le vio la cola a cielo riveros y nos dejó pasar… no sin darle una mirada marcando mi territorio.

Cielo riveros se dio cuenta y me jalo del brazo, ya estábamos adentro, no había que armar un lio. Lo cierto es que esperábamos relajarnos y pasar desapercibidos en ese local alejado de la universidad… pero…

la gran idea de cielo riveros de ir a esa disco, al parecer fue compartida por varios miembros de la facu de último ciclo, nos topamos con varios rostros conocidos… pero nos dio igual, continuamos nuestro camino… cielo riveros me decía que no tenía ánimos de unirse a ningún grupo, que solo quería quedarse conmigo, bailar y tomar algo tranquilamente, sin chismes, ni nada.

Ubicamos una mesa pequeña para 2, en un segundo piso, alejados del tumulto, pero con vista a la pista de baile. Pedimos unos tragos, mientras conversábamos alegremente, esperando alguna canción que nos animara a bailar. Comenzamos a recordar anécdotas de nuestra relación, cuando éramos pareja… los recientes eventos… nuestros planes después de la universidad…

así sin querer llevábamos varios tragos encima… hasta que cielo riveros, me dijo que iba al tocador (baño de mujeres), me hizo gracia verla pararse algo mareada y caminar tambaleándose unos metros hasta que se estabilizo… y me gusto más ver como en el camino rechazaba propuestas para bailar…

estaba tranquilo, bebiendo una cerveza, optimista de como pintaba la noche… hasta que sentí una presencia siniestra… un frio recorrió mi espalda y se me entumeció el cuello… sentí una mano delicada acariciando mi hombro…

- hola… tiempo sin verte… era la voz coqueta de la rubia vane.

- ahhh… si… bueno… estuve ocupado… dije maldiciendo mi suerte.

- ya no contestas mis llamadas… me reclamo insinuante.

- bueno no quería oír tus reproches por lo que paso la última vez (que te deje plantada en el hotel), ¿recuerdas?… repuse sarcásticamente.

- eso fue hace meses y ya te perdoné… quiero empezar de nuevo… dijo frescamente, sin poder disimular su disgusto tras ese recuerdo.

Mierd… como hago para que esta loca se vaya, pensaba. Estaba siendo hasta cierto punto agresivo con ella, demostrándole mi incomodidad por su presencia, pero ni así vane se iba. Encima me daba su perdón por haberla desairado dejándola esperando en una habitación de hotel.

A decir verdad, vane estaba haciendo honor a la imagen que tenia de ella en mi mente, de una bruja, había venido con un sombrero negro (de esos en punta de las hechiceras), un vestido ceñido negro, muy escotado dejando ver sus inflados melones, terminado en una minifalda pequeña que por lo ajustado dejaba poco a la imaginación, mostrando sus bien trabajados muslos.

- creo que vi a guille por ahí… le mentí, intentando alejarla nuevamente.

- ay… no me importa… es mi cumpleaños y nadie me lo va malograr… dijo aburrida.

Ahora todo tenía sentido, esa loca solo podía haber nacido un día de brujas… pero daba igual, cielo riveros debía estar de regreso… debía botarla, dejando mi ego de lado (pensando que vane me deseaba) quizás su insistencia en quedarse a mi lado era para provocar a cielo riveros.

- disculpa, es que no vine solo… espero a alguien… le dije apurándola.

- que grosero… yo tampoco vine sola (ahí está mi grupo de amigos), pero no me vas a negar un baile por mi cumple… y por los viejos tiempos… agrego coquetamente.

En esa última referencia paso su mano sugerentemente por mi espalda, mientras con la otra se acariciaba encima del escote, de sus blancos y jugosos melones que comenzaban a hipnotizarme… volviendo a inflar mi ego, pensé: esta pendeja quiere que me la tire otra vez, me dije…

- quizás podamos encontrar un lugar más privado… agrego seductora al ver que no respondía.

A vane no le importaba que yo tuviera compañía (o quizás ya sabía o intuía que vine con cielo riveros), tampoco le importaba su grupo de amigos. Por su voz, su mirada, su sonrisa y expresión corporal era obvio que quería que le rompa el culo otra vez…

soy hombre y esa bruja literalmente estaba buenota, pero loca, y recordé que fue por ella que cielo riveros termino conmigo. Mierd… cielo riveros, busqué la ruta al baño y no la encontré… quizás ya me vio con vane y accedió a bailar con alguien más… mire la pista de baile y nada… ¿dónde está?... ¿se fue?

- hola vane… dijo una voz poco amical a mi lado.

Caraj… cual fantasma, cielo riveros apareció a mi lado. Mientras vane me estaba comiendo con la mirada e insinuándoseme, cielo riveros se acercaba cual fiera sigilosa… ya me jodi otra vez, pensé al verla, mientras vane seguía con su mano en mi hombro.

- hola cielo riveros… respondió vane desganada, sin dejar de acariciar mi hombro.

La presencia de cielo riveros había malogrado los planes de vane respecto a lo que pensaba hacerme… o que pensaba dejarme hacerle como regalo de cumple, quizás vane me esperaba con un lazito de regalo en su bien formado trasero, listo para partirlo…

- ven amor… vamos a bailar… dijo cielo riveros imperativa.

Me dio un beso, me tomo de la mano y prácticamente me jalo hacia la pista de baile, mientras refunfuñaba una serie de groserías en voz baja. Apenas logre ver vane con rostro desencajado y furiosa porque cielo riveros me alejaba de su trofeo… se sintió desairada y parecía que volvería a la carga en cualquier momento, se reagrupo con sus amigos sin dejar de mirarnos…

cielo riveros más bien se sentía retada por ella, por su mirada desafiante, por sus intenciones hacia mí. Vane había sido la piedra de la discordia entre nosotros, por sus manipulaciones caprichosas… así que cielo riveros en respuesta me besaba con pasión mientras bailábamos abrazados, para provocar a vane…

- te dejo 2 minutos… y esa ofrecida aparece al acecho como buitre… dijo molesta.

- ya amor… no le hagas caso… le dije, besándola y siguiéndole la corriente.

- justo ella tenia que estar aquí… que rabia… renegaba cielo riveros.

- olvídate de eso… ahora estamos juntos… le dije calmándola.

- si… estamos juntos… ¿eres solo mío?... Dijo poniéndose melosa, no sabía si por mis palabras o actuando para que la espectadora de vane se enfurezca más.

- si, solo tuyo… respondí besándola tiernamente.

Poco a poco con el baile nos fuimos olvidando de vane y sus venenosas miradas. Nos fuimos acercando al ritmo de la música cada vez más provocativa. Nuestros cuerpos se fueron juntando y frotando al son de las canciones, que por la forma en que se bailan, horrorizarían a nuestros padres.

Cada vez nos íbamos poniendo más calentones, ocasionado porque moviera su redondo trasero en mi ingle, que su abultado pecho rebotara en el mío… o simplemente verlos saltar al compás de música, nuestras miradas iban cambiando por deseo, así como nuestros besos.

- ayyy… amorrr… quiero que me rompas el culo… me susurro cielo riveros al oído mientras bailábamos pegados sobándonos todas las prominencias de nuestros cuerpos.

Mierd… como negarse a ese pedido… pero ¿aquí? Y ¿ahora?... ¿dónde?... Me decía, si la llevaba a otro sitio, quizás su excitación menguaría, era mejor aprovechar ese morbo que traíamos…

- vamos… le dije jalándola de la mano entre el gentío de la pista de baile.

Recordaba haber visto un baño en el entrepiso, en dirección a donde estaba nuestra mesa… alguna vez había aprovechado un lugar así poco concurrido en una disco para recordar viejos tiempos con una amiga de colegio con la cual nos iniciamos en los placeres sexuales… pero esa es otra historia.

Volviendo al relato… el baño en cuestión dejo de ser opción al ver que entraban y salían chicas, era muy arriesgado. Hasta que intentando disimular nuestro acecho al baño, empezamos a besarnos contra una pared… entonces vi nuestra opción ganadora…

en una puerta al lado había un pequeño letrero de que decía “box reservado” y abajo un papel que decía “srta. Vanesa…” y un poco más abajo a partir de las 12… entonces estaba libre hasta la medianoche… y nos quedaba poco mas de media hora, tiempo suficiente.

Ingresamos rápidamente viendo que era propicio el lugar para nuestra travesura, con el aliciente de profanar el lugar donde vane y sus amigos celebrarían su cumpleaños.

- srta. Vanesa… ya está listo… pase… nos dijo una mesera que hacia los últimos arreglos.

Le jale la mano a cielo riveros y ella le siguió la corriente, se haría pasar por vane para que nos dejaran la habitación.

- quedo todo muy bonito… gracias señorita… dijo cielo riveros nerviosa.

- cualquier cosa que necesiten, toquen el timbre y vendré... Respondió la mesera y se retiró.

Nos dejó en aquel cuarto espacioso con unas banquetas de cuero alrededor de una mesa de centro con tragos y otra mesa mas grande con torta y bocadillos, decorado con globos y demás. Lo único que nos inhibió un poco fue el ventanal desde el que se veía la pista de baile… ¿nos verían?

Cielo riveros ni se quiso acercar a la venta, me percaté que era de esos vidrios polarizados, desde los que uno puede ver hacia afuera y no hacia adentro, recordé que desde la pista de baile no se veía nada hacia dentro… me acerqué a ver el panorama… bueno era un salón vip, digno de nuestra calentura.

Al voltear me di cuenta que otro panorama me esperaba… cielo riveros ya se había acomodado en 4 patas sobre una de las banquetas, se había levantado la falda y me esperaba con su gordo trasero empinado y las piernas abiertas, para mostrarme su goloso y arrugado ano ansioso de ser penetrado.

- y bien… ¿qué esperas?... No hay mucho tiempo… me dijo apurándome con cara excitada.

Corrí a su lado rápidamente, me hizo una seña, quería probar mi verga antes que se la incruste por el orto… la engullo, lamio y succiono unos segundos, dándole su aprobación al grado de dureza que ya manifestaba, solo entonces me dejo ir a su retaguardia.

Me arrodille detrás de ella y la penetre lentamente por su arrugado anillo, mientras notaba como su piel se le ponía de gallina y ella ansiosa retrocedía buscando insertarse toda mi verga, estirándose hacia atrás

- asiiii amorrr… asiiii… que ricooo… exclamo al tener mi verga atorándola nuevamente.

Su cuerpo disfrutaba el momento, cielo riveros comenzó a menear su rabo en mi erecta verga, saboreando su dureza centímetro a centímetro, mientras yo disfrutaba del espectáculo que me ofrecía. Ante mi inacción cielo riveros comenzó a bombear ella misma su culo… yendo y viniendo, rebotando su gordo trasero contra mi entrepierna.

- clávame ya… por favorrr… me suplicaba para que reaccionara y la sometiera.

Comencé bombearla armónicamente, hasta que agarre ritmo… sus tibios gemidos inundaban el ambiente y se mezclaban con la música. En el ir y venir de su enorme rabo, el vestido apenas agarrado en los hombros se había replegado a la cintura, liberando sus senos que se bamboleaban al compás de mi ritmo, al igual que sus trenzas.

Tome ese borde de su vestido con una mano, mientras con la otra atrapaba sus trenzas y la jale hacia atrás, cabalgándola como a una yegua salvaje que debía ser domesticada…

- uhmmm…. Siii… cabalgameee asiii… párteme el culo… suplicaba cielo riveros excitada.

En uno de los tirones exagere un poco y cielo riveros en un principio arqueo la espalda lo más que pudo, clavándose todo hasta la raíz, luego se incorporo un poco, lo que me permitió jalonear sus henchidos senos… al mismo tiempo que cielo riveros volteaba el rostro buscando mis labios.

Entre jadeo y jadeo nuestras lenguas y labios se proferían caricias, sin que mi verga no dejara de castigar sus redondos glúteos, con una mano continuaba tirando sus trenzas y con la otra apretujando sus senos y pezones… cielo riveros me miraba satisfecha con amor…

- ahora lo quiero diferente… me dijo liberándose de mi cautiverio.

Me hizo sentarme en la banqueta y ella se sentó encima mío, de frente, tomo mi verga se la dirigió a su goloso ano, no tardando en empalarse ella misma. Cielo riveros brincaba plácidamente sobre mi verga, mientras no dejaba de besarme… eso era lo que quería… mezcla de ternura, amor, excitación.

- ayyyy… si mi amorrr… uhmmm… exclamo al poco rato estremeciéndose.

Al poco rato se contrajo, arañándome la espalda sin dejar de succionarme con sus labios y lengua, agradecida de que le haya roto el culo como le gustaba. Suspiramos un rato... Me quise salir… pero cielo riveros no me dijo…

- te falta el otro… me dijo coqueteando risueña.

No le entendí al inicio, pero luego ella se levanto y apunto mi aun dura verga a su mojada vagina… cielo riveros quería faena completa, quería salir de ahí con sus dos agujeros satisfechos y también complacerme… para terminar de profanar el lugar donde seguramente vane se sentaría con sus amigos en unos minutos.

Nuevamente cielo riveros comenzó a brincar sobre mi tiesa verga de manera armónica, infringiéndose ella misma el castigo. Me apretujaba el rostro contra sus voluminosos senos, casi obligándome a engullirlos mientras ella con los ojos entrecerrados disfrutaba mordiéndose los labios.

- ayyy amor… ayyy amor… uhmmm… gemía cielo riveros complacida.

Su tibio agujero, su dulce gemir… sus jugosos labios con su juguetona lengua, me estaban excitando, llevándome al borde… resiste mierd… no termines antes que ella… me decía yo mismo, dándome ánimos para no desfallecer…

de repente cielo riveros comenzó a apretarme cada vez más fuerte, sus senos se abultaban en mi pecho, mientras su respiración se ahogaba cada vez más, brincando cada vez más rápido y fuerte… ya conocía esa expresión, ese trance, estaba cerca…

- uhmmm… mi vidaaa… uhmmm… exclamo reventando en un sonoro orgasmo.

Las contorsiones que sufrió su cuerpo terminaron de excitarme… estaba conteniendo mi descarga, procurando que cielo riveros termine de disfrutarlo, mientras me besaba… pero debía alejarla, sino terminaría dentro suyo.

- ufff amor… ya… ya… me vengo… le advertí.

Cielo riveros se alejo rápidamente, se puso de rodillas frente a mí, con una sonrisa de oreja a oreja y los ojos brillosos de mujer enamorada y satisfecha de que le hayan complacido sus dos agujeros… no veía esa sintonía expresiva de felicidad entre su cuerpo y rostro, desde que éramos pareja… sentí que habíamos recuperado esa magia.

En el suelo, con los senos descubiertos subiendo y bajando por la agitación, cielo riveros esperaba pacientemente que le vacié todos mis líquidos en su boca y quizás su rostro, para terminar de complacerme quizás con una mamada y succionada de premio… sin embargo…

- chicos… un rato espérenme… veré si todo está listo… oímos afuera de la puerta.

Mierd… parecía la voz de… no… era la voz… vane… que se disponía a verificar si su box privado estaba listo para celebrar su cumpleaños. Al poco rato ella abrió la puerta con expresión de sorpresa a ver como cielo riveros arrodillada se disponía con la boca abierta a recibir mi la avalancha de semen…

vane se tapó la boca con las dos manos, quizás para evitar proferir gritos e insultos que atrajeran más gente, mientras sus ojos crecían brutalmente no dando fe a lo que veían… soltó la puerta que se cerró rápidamente detrás de ella, para nuestra suerte, evitando que algún curioso pudiera vernos.

Mi descarga que había aguantado un poco porque la retarde para evitar venirme en la vagina de cielo riveros, no podía esperar más, la naturaleza debía seguir su curso… a pesar de la sorpresiva presencia de vane, la explosión liquidad de mi verga era inminente…

- ¿qué? ¿qué es esto?... Logro a murmura vane casi sin aliento, sin entender lo que ocurría.

Al voltear instintivamente a ver a vane, desvié la puntería de mi verga de la boca de cielo riveros… mis líquidos salieron expulsados como manguera de bombero, por diferentes lugares… las banquetas, cojines, la mesa de vidrio, los tragos… y un poco sobre el rostro y la boca de cielo riveros que los recibió de buena gana sin dejar de sonreír complacida.

- ¡ustedes otra vez!… exclamo vane recuperando la voz, recién caía en cuenta que eso no era parte de un espectáculo contratado o de la hora loca de su cumpleaños.

Se la veía indignada y a la vez asqueada del desastre que hacíamos, quizás hasta humillada porque el chico que la dejo plantada hace 2 meses y la rechazo hace unas horas, se follaba a su rival en su cumpleaños y en su habitación reservada.

Además, recordé que apenas hacia un rato, vane me había propuesto irnos a un lugar más privado… quizás se refería a este box, donde acababa de romperle el culo a cielo riveros en vez de a ella… una triste ironía a costa de vane. Encima, para su mala suerte, no era la primera vez que nos atrapaba así, igual fue en la casa de guille, en la universidad y en el club, siempre en pleno acto sexual.

Sin darle mayor importancia a la presencia de vane, o quizás adrede para que ella la vea, cielo riveros agarro mi desbocada y salpicante verga, procediendo a dirigirla y embocarla a su boca, para terminar de recibir el chorro de leche y limpiar agradecida mi verga con su lengua y labios…

vane roja de ira contemplaba la imagen, viendo que no le hacíamos caso. Tenía una mano sobre la puerta cerrada, para evitar que alguien mas entrara y viera como habían profanado su habitación vip donde ella esperaba celebrar… pero nosotros nos habíamos adelantado…

- son unos animales… ¡lárguense de aquí!… exclamo furiosa.

Nos acicalamos rápidamente en medio de risas burlonas, como niños atrapados en una travesura, luego salimos huyendo… solo que cielo riveros se detuvo en la puerta y regreso al lado de vane, que petrificada y mortificada veía como habíamos salpicado toda la habitación.

- en tu cara… ¡perra!… le grito cielo riveros en tono revanchista a vane que no atino a decir nada.

Tuve que jalar a cielo riveros del brazo, para que no siga provocando a vane, ya que en un último arrebato cielo riveros le había mostrado los dos dedos del medio mientras hacia una expresión fiera... Tenía que alejarla antes que reaccione y se arme una pelea.

Salimos rápidamente de la habitación, mientras veíamos como los amigos de vane seguían tomando y bailando alrededor de una mesa grande, sin percatarse de los gritos que nos pegó vane, ni de nuestra huida… y que vane seguía profiriendo insultos furiosa dentro de su “box-vip”.

Bajamos las escaleras y vimos a la mesera subir raudamente… pobre chica… iba tener que aguantar el humor de vane y limpiar el desastre… salimos entre risas de la disco, quizás cuando vane reaccionase nos mandaría a sacar con la seguridad de la disco.

Recién afuera, me percate que cielo riveros tenía una línea blanca melosa en la mejilla producto de un chorro de mi leche… pero que se había mimetizado con su maquillaje de india.

- que divertido… me la debía esa zorra regalona… dijo cielo riveros triunfante.

Cielo riveros sentía que se había cobrado revancha de la humillación que sintió al ver su foto en mi laptop… mejor que su foto fue la imagen en vivo que se llevo vane al vernos llegar al clímax en la habitación que ella reservo y así arruinarle su celebración… aunque luego el destino nos depararía otra anécdota a expensas de vane…

en el taxi camino a su casa, cada cierto tiempo cielo riveros se acordaba de lo sucedido y se reía de buena gana, luego me besaba feliz... Mientras me dejaba abrazarla y ella sostenía mi mano de manera cariñosa... No fue necesario decir nada… habíamos vuelto a ser pareja…

sin embargo, teníamos un futuro incierto por delante…le habíamos ganado esa batalla a vane, pero perderíamos la guerra con alguien más…
tras lo sucedido el día de brujas, pasamos las siguientes semanas, casi como luna de miel… cogiendo como conejos cada que podíamos, en mí casa, cuando mis padres estaban fuera y de cuando en cuando en algún discreto hotel.

Ya antes habíamos tentado la suerte, sofocando nuestra calentura en algún baño o lugar vacío, pero esta vez procuramos ser más cautos, sobre todo en la universidad, considerando que estábamos casi por terminar la carrera y no queríamos ser expulsados.

Ni pensar en tener sexo en casa de cielo riveros, su madre pasaba la mayor parte del tiempo ahí y su viejo rondaba de cuando en cuando por sorpresa, para ver cómo iba. A veces llegue a pensar que su viejo tuviera alguna cámara en el cuarto de ella.

Tampoco se había dado la oportunidad de estar en su cuarto, generalmente cuando la visitaba, me atendía en la puerta porque salíamos rápido. Cuando sus padres estaban pasaba a la sala, por ahí quizás a la cocina para repasar algo… pero nunca a su cuarto… hasta ese entonces…

si bien no habíamos hablado del estado de nuestra relación, en la práctica era evidente que éramos pareja de nuevo… creo ambos no queríamos tocar el tema, para evitar caer en malos recuerdos de porque terminamos… simplemente dejábamos las cosas fluir.

Solo de cuando en cuando, notaba que cielo riveros se abstraía... Varias veces le pregunte el motivo… temiendo que volvieran el fantasma de vane y los recuerdos de mi traspié con ella, pero cielo riveros se excusaba diciendo que era por su madre y no me daba pie a indagar más… sin embargo, sabía que había algo que no me quería contar aún.

Respecto a vane, nos odiaba con el alma, lanzando furiosas miradas, pero evito hacer comentarios, al menos no nos enteramos que contara nada. Parecía que cada vez que nos veía juntos, recordaba las veces que nos encontró en pleno acto… hacia una mini rabieta y se alejaba.

Había dejado de llamarme o dejarme mensajes, o de intentar acercarse a coquetearme si me veía solo en la facu. Parecía que al fin vane se había rendido a fastidiarnos la vida, pero quien sabe, quizás se tomaba un descanso hasta encontrar la manera de incomodarnos… pero no nos importaba.

Por el lado de guille más bien las cosas iban bien, desde aquella vez que se fue con marcela del hospital, poco a poco se fueron haciendo cercanos. Aunque no lo decían, parecía que tenían algo mas que una amistad. A veces molestaba un poco a marce con eso a, pero no me quería confirmar nada.

Me imagino que, estaban viviendo una etapa de salir y conocerse, quizás algo más, pero no querían que los demás sepan para no entorpecer eso que vivían. Me alegre por ellos, y porque marce lo mantuviera cerca de cielo riveros. Aparte la cercanía con marcela hizo que dé a pocos guille fuera limando asperezas conmigo.

Sobre javier… bueno, prácticamente desapareció de nuestras vidas, andaba llevando cursos de otros ciclos, no se graduaría con nosotros ese ciclo. Un par de veces lo vi, coqueteando con chicas más jóvenes de otros ciclos con las que compartía cursos…

una que otra vez, lo veía pasearse por la facu con una chica voluptuosa (similar a su famosa tetona), que traía de su barrio para presumir con sus amigos. La chica tenía unos modales un tanto toscos, incluso se atrevió a darme unas miradas provocativas al verme pasar, a pesar de tener a javier al lado.

Digamos que las aguas se habían calmado… cada historia había tomado su curso… entendí que más que mi poder de convencimiento o mi destreza amatoria, había tenido suerte con cielo riveros para que me perdone o al menos haya guardado bajo la alfombra de sus recuerdos mi infidelidad con vane.

La seguidilla de eventos, había confabulado a mi favor… la penosa enfermedad de su madre, su necesidad de apoyo anímico y en los estudios … incluso los celos, como los que le dieron aquellas chicas en la biblioteca, o cuando vio a vane que me tentaba en la disco.

Mas bien, de esta última etapa que pase con cielo riveros, quizás uno de los mejores recuerdos que tengo, fue cuando un fin de semana antes de los exámenes finales, sus padres fueron al club. Su madre aun andaba decaída y su papa pensó que un día de sol, alejados de la ciudad, podía reanimarla.

Dejaron a cielo riveros sola en casa, entendiendo que debía estudiar para sus exámenes… y claro, bajo la advertencia de nada de visitas… sin embargo, lo que cielo riveros entendió fue… que nada de visitas a su cuarto… pero era un día para romper reglas, entre otras cosas.

Antes de mediodía, me invito a su casa a estudiar, teníamos hasta el anochecer en que seguramente regresaban sus padres. Pensaba sacarle el máximo provecho… sin embargo cielo riveros, tenia otro concepto, aprovechar en estudiar… estaba asustada por los exámenes finales.

Me tuvo a raya todo el tiempo, a pesar que se puso un buzo suelto para evitar provocarme, igual le tenía ganas por la forma en que se le abultaba la ropa. Después de almuerzo, una vez que las cosas parecían controladas a nivel educativo, recién pudimos conversar más relajados.

Ahí me percate que cielo riveros traía unas cuantas manchas en la ropa, por la comida. Tras burlarme de ella por comer como cerdita, ella se avergonzó al punto de querer ir a cambiarse.

- espérame un rato que regreso… me dijo.

Por un rato pensé en dejarla ir, quizá cielo riveros volvería con alguna ropa sexy y así al fin darle algo de acción a ese día de estudios… pero luego… recordé algo y me entro la curiosidad...

- oye… a todo esto… nunca he estado en tu cuarto… le dije.

- ni lo estarás… me dijo bromeando.

- no es justo… tú conoces cada rincón de mi casa… le objete como niño.

Tras insistir unos minutos accedió a dejarme ir con ella a su habitación… pero solo por un rato, no quería trasgredir la sagrada regla de su padre, nada de chicos en su cuarto. Me había generado expectativa, aquel lugar prohibido.

En teoría aun teníamos varias horas hasta que sus viejos regresen, quizás eso también le dio confianza como para acceder a mi pedido. Seguí sus caderas, hasta su habitación… antes de entrar, cielo riveros lo pensó de nuevo, pero insistí, no me iría sin ver su cuarto… me hizo toda clase de advertencias nuevamente.

Bueno…ingrese a su cuarto y no era nada del otro mundo. Algo similar en forma y distribución al mío, pero obviamente con el decorado propio de una señorita: colores rosados y lilas o pastel por doquier, peluches por amontonados a un lado, algunas fotos cielo riverosres, etc.

Cielo riveros tomo otra muda de ropa de su closet y se fue al baño de su cuarto a cambiarse. Objete que se cambiara frente a mí, total ya la había visto desnuda, pero no quiso porque sabía cómo terminaría eso, aunque fue mejor… porque me permitió hacer un descubrimiento que me resulto bien.

Mientras ella se cambiaba, yo la esperaba recostado en su cama, hasta que vi en su closet algo que me llamo, la atención. Me pare curioso y revolví su ropa hasta dar con la prenda que me cautivo… vaya…

- danny… nooo… ¿qué haces?... Nooo… protesto cielo riveros a mis espaldas.

- tú también rebuscaste mi closet una vez… le recordé.

- pero no… que vergüenza… ponlo de nuevo en su sitio… dijo apenada.

- vamosss… póntelo… le insistí.

- estás loco… aparte ya no me queda… repuso sonrojada.

Pues bien, se preguntarán que era… creo que es parte de la fantasía de todo hombre, cogerse a su chica (acompañante de turno) enfundada en este traje particular… en su uniforme escolar… es parte del morbo que también refuerzan las paginas pornográficas…

no dejaría pasar esa oportunidad… le insistí de todas las maneras posibles. Ella se oponía con eso de que no le quedaba, me dijo que en su época escolar ella era más delgada que ahora, en realidad, tenía contextura atlética. Digamos que tuvo un desarrollo tardío… más bien una explosión de sus formas en el estado voluptuoso de ahora, empezó en los primeros ciclos de universidad.

Ante tanta insistencia, termino cediendo… pero solo un ratito, dijo. Nuevamente se fue a cambiar al baño, mientras yo ansioso esperaba su salida. La graciosa, saco medio cuerpo enfundado en su uniforme desde la puerta y se metió de nuevo… se moría de vergüenza.

Prácticamente la jale para que saliera. Una vez afuera, se tapaba el rostro enrojecido…

- bueno… ya viste… me cambio… repuso.

- nada… una vueltita… modela para mi… le ordene.

- que terrible eresss… dijo sonriendo, sabía que no la dejaría ir.

Hasta el momento solo había visto su blanca blusa, sobre la que resaltaban el color de su negro brasier y obviamente sus redondos senos. La falda escocesa azul, la traía muy encima a las rodillas, casi como mini. De lo que ella recordaba le quedaba más abajo, quizás había crecido unos centímetros, pero luego, al darse la vuelta, quedo claro que sus gordas nalgas también contribuían a levantarle la falda.

- mierd… dije al saborear esa imagen de cielo riveros, con una gota de leche saliendo de mi verga.

- ya… fue todo… dijo halagada por como la comía con la vista, pero nerviosa.

- no, no, espera… tuviste tu baila o algo de promoción… le dije.

Me dijo que no pudo ir por lo de su madre, entonces me ofrecí a bailar con ella. Quería mantenerla con esa ropa el mayor tiempo posible. Cielo riveros accedió y bailamos pegados cual vals. Mi mano bajo a su estrecha cintura que aun conservaba la delgadez de su época escolar.

Tras unos segundos, cielo riveros poso sus brazos en mis hombros mientras colocaba su cabeza en mi pecho, como recordando aquellas épocas. Yo no podía mas con la ansiedad, y fui bajando mis manos a su trasero, ni bien lo tuve, apretujé sus nalgas a través de la tela y luego por debajo de la falda.

- danny… esa no es mi cintura… dije en graciosa recriminación.

- lo se… respondí mientras mi mente volaba acariciando sus gordos glúteos.

- vamos… prometiste portarte bien… me reclamo risueña.

A pesar de lo que decía, cielo riveros no hacía nada por alejarme, me dejaba hacer… de mi experiencia con ella, sabia que su cuello era su punto débil, digamos formalmente. Sin embargo, me había percatado que tenía otro punto débil, que le daba vergüenza admitir…

le encantaba que le acariciara las nalgas, que se las apretujara cual pelotita anti estrés. Esta acción no tenía un efecto inmediato como un beso en el cuello… pero el masajeo continuo en sus glúteos la adormecían, la iban llevando gradualmente a un punto de excitación.

- ningún enamorado mío estuvo aquí… me dijo mirándome con amor.

Si bien sabía que no había sido su primer beso o su primera vez, había sido primero en otras cosas, la había desvirgado analmente, me hizo su primera mamada, me dejo entrar en su cuarto y en su vida…

la bese tiernamente sin dejar de acariciar sus nalgas desnudas y jalonear su pequeña tanga, como para que apriete e incentive su ya seguramente húmeda vagina… ella se empinaba para besarme, en este caso fue ella la que, al alejarse un poco, me beso el cuello… quizás a manera de provocación, o dándome el impulso como para que terminara debilitar su defensa.

Así lo hice, le devolví el gesto, besándola en su punto débil… haciéndola estremecer, me apretó fuertemente contra su cuerpo, sobándome todos sus inflados senos con pasión… para luego buscar desesperadamente mis labios y ahogar sus jadeos en mi boca y lengua.

- soy tuyaaa… hazme lo que quierasss… exclamo alucinada de placer.

No me hice de rogar, una de mis fantasías estaba finalmente por hacerse realidad… sin dejar de besarla, le fui dando la vuelta lentamente, y empujándola contra su escritorio, que también fungía como tocador. Cielo riveros solo me dejaba guiarla, poco a poco también se estaba volviendo parte de su fantasía, a su manera… cielo riveros deseaba ser abusada sexualmente en su cuarto, frente a sus peluches.

No tuve que levantarle mucho la falda escolar, sus gordas nalgas habían hecho el trabajo, solo tuve que hacer a un lado su pequeña ropa interior negra. Cielo riveros levanto una de sus piernas y la coloco sobre el escritorio, para abrir mas sus muslos y dejarme entrar.

Me dejo hurgar entre sus nalgas mientras se estremecía, y sus manos desabotonaban su blusa, para permitirle a sus senos liberarse. Yo la veía actuar presurosa, a través del espejo en la pared frente a su escritorio, como les dije… aquella zona funcionaba como también como tocador, para que cielo riveros se maquillaje y se dé una mirada antes de salir.

Ahora cielo riveros miraba en ese espejo como abusaban de ella en su cuarto, con ella misma desnudándose los senos. Arañe prácticamente sus gordos glúteos para hacerme espacio mientras la iba penetrando lentamente y veía como iba cambiando la expresión en su rostro… primero de sorpresa, luego de leve dolor, soportándolo, hasta pasar a disfrutarlo con los ojos cerrados mientras se retorcía de placer.

- uhmmmm… siii… al fin…. Como me gusta… exclamo satisfecha.

Comencé a bombear su gran trasero que hacía rebotar sonoramente mi ingle. Cielo riveros miraba en el espejo embobada como sus senos a medio desnudar se iban liberando solos, saltando de su brasier, mientras ella se sostenía de los bordes del escritorio para soportar mis embestidas.

Por momentos sonreía, por momentos se mordía los labios, mientras su rostro se iba poniendo colorado y su cabello bailaba en el aire, con cada incursión. Parecía que estábamos destrozando el mueble, que iba y venía contra la pared. Sus útiles de estudios se tambaleaban, así como sus accesorios de maquillaje… pero a cielo riveros ni a mi nos importaba.

Era una delicia, tenerla enganchada así, dejándome llevar, la tome del borde de la falda y la blusa y comencé a estamparla con mas fuerza. Luego tome con otra mano de su cabello y la cabalgue salvajemente sin mayor objeción de su parte, solo una mórbida sonrisa a través del espejo.

- ahhh amorrr… destrozame el culo… uhmmm… me pedía.

Me emocione por su pedido y castigue su ano con mayor vehemencia… a estas alturas no era solo mi fantasía… pero lleve al extremo las cosas… cielo riveros perdió el equilibrio y quiso apoyarse en la pared, pero termino contra el vidrio… casi rompiéndolo… lo que me asusto un poco y la hizo reaccionar…

- ven, ven, aquí… quiero que me hagas tu perra… me dijo jalándome.

A través del espejo había visto su cama… quería profanar también aquel santuario donde hasta entonces había dormido sola… quería exorcizar también aquel lugar donde solo era una niña buena… esa tarde quería ser tratada como una perra… ¿cómo negarme?...

Prácticamente me arrastro a su cama, loca de placer, no quería perder tiempo… se subió rápidamente y adopto la posición tan ansiada… en 4 patas… como perra… así como la había iniciado analmente en mi casa y cama, deseaba ser sometida en su cama…

abrió las piernas y se subió la falda, mientras me mostraba su arrugado y ansioso esfínter, que deseaba ser violentado. Así lo hice, invadí su culo abruptamente, en una rápida incursión en le que pareció que le desgarré el ano…

- ouuu… uhmmm… exclamo un poco adolorida arañando las sabanas, para soportar el dolor.

A los pocos segundos ella misma empezó a empujarme su gordo trasero, chocando contra mi ingle, el dolor se estaba transformando en placer nuevamente. La deje hacer unos instantes para que el morbo se fuera incrementando, que ella misma se fuera castigando a su ritmo.

Luego decidí tomar el control, hundiendo mejor mis rodillas en su cama, ella sabia lo que venia y se aferro al colchón, tome sus esponjosos y suaves nalgas como asas y los use para jalarla y alejarla de mí. Clavándola cada vez con mas fuerza mientras ella se estremecía.

- soy tu perra amor… soy tu perra… repetía cielo riveros orgullosa entre jadeos y gemidos.

- si eres mi perra… le respondía para excitarla más.

Por ratos al escucharme, volteaba satisfecha sonriendo agradecida… por ratos enterraba el rostro en la almohada profiriendo gritos de placer (para evitar que los vecinos la oyeran), en otros momentos la vi mirando al rincón de los peluches, como si fuera su público, mudos espectadores de aquel encuentro salvaje y contra natura… hasta que…

escuchamos frenar un vehículo y el ruido de la cochera abriéndose, mientras yo le seguía abriendo el culo a cielo riveros… ¡eran sus viejos!... Habían regresado antes de tiempo… mierd…

- sigue… sigue… por favor… ya casi… uhmm… me suplicaba cielo riveros desfalleciente.

Apurado por la adrenalina, sabiendo que cielo riveros no me soltaría hasta que le sacara un gratificante orgasmo y me exprimiera toda mi leche, procedí a bombearla con más fuerza.

- si… siii… asiii amorrr… asiii… uhmmm… gemía como loca.

Le di un palmazo en sus gordas nalgas, mientras la cabalgaba, para que tuviera más cuidado y no hiciera tanto ruido, sus viejos estarían por subir dentro de poco. Algo absurdo, porque no le prestaba atención al ruido que hacia su cama, que parecía que se iba a romper, por los chirridos que hacía, con el ir y venir de nuestros movimientos.

No había mucho tiempo… tenia que cabalgarla salvajemente, castigarla con furia para obligarle a llegar a su ansiado orgasmo. Eso hice, la tomé nuevamente del borde de la falda con una mano y de los cabellos con la otra, arqueándola al máximo, mientras ella abría mas las piernas para recibir el brutal castigo que tanto le gustaba.

Fueron apenas unos segundos, al menos eso me pareció… cuando ella comenzó a temblar, de pies a cabeza, pareció contenerse lo más que pudo, quería disfrutarlo más, hasta que no aguanto…

- ayyyy siiii… ohmmm… uhmmm… ahhhh… exclamo extasiada.

Mi verga tampoco resistió esa agradable vibración en su interior y exploto dentro de su estrecha cavidad… estaba agotado, no tenía fuerzas para sacarle la verga y ofrecérsela para que me la mame, le había soltado el cabello para dejarla disfrutar y yo apenas si me mantenía en posición, ahora con mis manos arañando su inflado trasero.

A los segundos cielo riveros se dejó caer en la cama, boca abajo, mientras mi verga deshinchada seguía goteando leche sobre sus amplios muslos. El ano de cielo riveros comenzaba a parecer una piscina, con mis melosos líquidos aflorando.

Fue entonces que oímos el ruido de la puerta de abajo, debía ser la sala o la cocina. Sus viejos ya habían entrado a la casa. Cielo riveros reacciono rápidamente, salió casi volando al baño a limpiarse, mientras yo casi acalambrado me deje caer sobre su cama, con mi verga semi erecta y aun empapada, apuntando al techo de su cuarto.

Escuchaba ruido en su baño, cielo riveros limpiándose y echándose perfume, mientras yo yacía exhausto y satisfecho en su cama, resoplando buscando aire… wow… había estado genial… todo el morbo que genera un informe escolar…

- ¿qué esperas? ¡escóndete!... Me recrimino cielo riveros, sacando la cabeza del baño.

Mierd… cierto, comenzó a buscar lugares donde esconderme: debajo del escritorio, en la ducha, en el closet, debajo de la pila de peluches, detrás de las cortinas… ay, que idiota, estaba sentado sobre mi escondite… el clásico lugar, la cama…

escuché un par de golpes en la puerta, mientras me metía rápida y sigilosamente debajo de la cama, al poco rato oí abrirse la puerta y vi los enormes pies de su viejo entrando a la habitación, mientras yo sudaba como puerco y apenas si respiraba… no pensé que así sería el día de mi muerte.

- ¿qué haces vestida así?... Le recrimino el viejo.

- ay papi… que susto… exclamo cielo riveros, que aún estaba agitada por la cogida, pero que ya debía haberse acicalado, luego agrego como niña buena: no sé, sentí nostalgia, estaba recordando viejos tiempos a ver si aún me quedaba…

- bueno… ve a ver a tu madre, no se sintió bien y tuvimos que regresar, quizás la anime ver a su niña así… dijo su papa benévolo, que tenía intenciones de quedarse.

Creo que el viejo no se había comido el cuento, esperaba que cielo riveros saliera, para empezar la revisión del cuarto… vi moverse a cielo riveros, pero no a su viejo… mierd… cielo riveros no te vayasss… rogaba para mis adentros.

- vamos papi… le dijo cariñosa.

- aquí huele raro… dijo el viejo.

- cierto… es que… estoy en esos días… voy a abrir las ventanas… dijo excusándose cielo riveros, creo que eso incomodo a su viejo, luego ella agrego: ve avanzando… ahorita te alcanzo.

Al fin, con gran alivio vi sus pesados pies salir, no sin antes pararse en la puerta y seguro dar una última mirada a aquella habitación. Escuche a cielo riveros abrir su ventana luego se agacho y me aviso para que saliera de debajo de la cama:

- mi mama está en el dormitorio de al lado… voy a entretenerlos en su cuarto… baja las escaleras hasta el sótano de la cochera y espera ahí… luego los llevare al jardín de atrás, ahí aprovechas y te vas… me dijo dándome un beso.

Había pensado saltar de su balcón, pero era absurdo, no era muy alto, pero el dormitorio de sus padres estaba al lado y me verían. Igual era escapar inmediatamente tras bajar a la cochera, del dormitorio me oirían y me verían… por eso debía esperar a que cielo riveros se los lleve atrás… era un buen plan.

Cielo riveros salió y fue al cuarto de al lado… escuche las risas y mimos de su madre, las risas del papa, estaban felices por ver a su niña de nuevo de escolar, si supieran que su nenita bajo esa ropa tenía el ano reventado por cumplir nuestras fantasías…

aproveche eso para bajar las escaleras despacio, sin hacer ruido, hasta la cochera. Al estar abajo, me puse al umbral de la escalera, para oír cuando se fueran al jardín. Escuche sus pasos bajando la escalera… luego se detuvieron en la sala…

- olvide la cámara en el auto… dijo el viejo.

Mierd… este tío algo intuye, quizás lo que olfateo en el cuarto de su hija (olía a sexo, a semen)… yo estaba buscando donde esconderme… hasta que…

- ay papi… yo lo busco después… vamos al jardín, esta bonito el día… dijo cielo riveros empujándolo casi.

Pensé que su viejo me mataría a golpes, pero a este paso parecía que me iba a matar de un infarto… más aun con lo último que llegue a oír.

- ¿ya le contaste a tu novio?… escuche decir arriba a su papa.

- papa déjame encontrar el momento… solo atinó a decir cielo riveros.

Cielo riveros llevaba tiempo un poco rara, sabía que algo me ocultaba… lo de su viejo me lo confirmaba… pero ¿qué seria?... Mi instinto de supervivencia me hizo volver a ese momento, las dudas serian para después, me di cuenta que ya no había ruido arriba, era momento de huir. Abrí la puerta lentamente y salí despacio...

Luego de a poco me alejé cada vez más rápido, mientras de a poco venían las dudas por el secreto que cielo riveros no me quería confesar… ¿qué tan grave seria si hasta su viejo lo sabía?... Venían los exámenes finales, así que no debía distraerme con esas cosas… ya me contara… pensaba…

en ese momento, no sabía que las cosas estaban por definirse pronto, antes de fin de año, en unas pocas semanas, todo se aclararía o acabaría… para bien o para mal…
tras aquella peligrosa incursión en la casa de cielo riveros, cumpliendo mis fantasías y quizás las suyas también, decidí abocarme a mis exámenes. Me olvide por un rato de las palabras del viejo de cielo riveros, ya habría momento después de los exámenes para distraerme con diversas teorías y hacer preguntas. Esa semana paso rápida, apoyando de cuando en cuando a cielo riveros a estudiar en la facu.

Así, terminaron los exámenes finales y todo parecía indicar que habíamos pasado los cursos… sentíamos un gran alivio al saber que nos graduaríamos. La ceremonia en el auditorio de la universidad seria recién la siguiente semana.

- ¿qué te provoca hacer?... Le pregunte animoso a cielo riveros, ese sábado.

- bueno… no sé... Lo que quieras… me dijo cansada, tras la semana de exámenes.

Clásica respuesta femenina, pareciera que en el fondo lo saben, pero les gusta ver como tanteamos y nos equivocamos hasta que al fin damos con la respuesta que más les gusta. Así que empecé el interrogatorio…

- ¿vamos a bailar a una disco?... Propuse.

- no en realidad, no estoy de ánimo… estoy un poco cansada… repuso cielo riveros.

- ¿qué te parece el club cielo riverostar?, podemos descansar y relajarnos en la piscina… agregue.

- uhmmm… está un poco lejos… se quejó cielo riveros.

- entonces… vemos una película en tu casa o la mía… dije perdiendo un poco la paciencia y las opciones, esta niña se ponía caprichosa.

- ayyy… nooo… quiero salir a despejarme… repuso.

- bueno… salir de casa, ver película… vamos al cine… propuse resignado, lo siguiente era mandarla lejos a saludar a su abuela.

- si… está bien… agrego más animada.

Fui a recogerla a su casa, entre un rato a saludar a sus padres. Me recibió con un vestido suelto, no tan ceñido en el busto, pero con los hombros descubiertos, del vestido salían un par de tiras que pasaban por su cuello para evitar que el vestido se le baje y muestre sus apetitosos senos.

La falda apenas por debajo de las rodillas, y sus piernas cubiertas por pantimedias. Se veía linda, menos provocativa que veces anteriores. Ante mi sorpresa me decía, que así se sentía más cómoda, tras la semana estresante, como que no estaba de ánimos para usar vestidos ceñidos ni atraer miradas.

Antes de dejarnos salir, llegue a oír que su papa le ponía un tope horario, misma cenicienta, regresar antes de las 12. Luego note un pequeño intercambio de palabras…

- no te olvides de decirle… le advirtió su viejo.

- esta bien papa… yo me encargo… dijo cielo riveros resignada.

Nos fuimos en el taxi, si bien al principio cielo riveros estuvo cariñosa, luego se puso pensativa otra vez, como en los últimos tiempos... Y ya empezaba a preocuparme eso, su viejo la presionaba para que me dijera algo, era la segunda vez que lo escuchaba, tras esa vez que escape de la cochera.

- ¿qué tenias que decirme?... Me pareció que tu padre te dijo eso… le comenté a cielo riveros.

- ah no… bueno eso de… dijo nerviosa.

- ¿de qué?... Insistí.

- ah pues… de llegar temprano… si… es un fastidio que aun me ponga horarios… agrego aliviada, pero sentía que ocultaba algo más.

Supuse que cuando tuviera mas confianza, cielo riveros me develaría el secreto que tanto me guardaba. No quería abrumarla tampoco con preguntas, íbamos bien en las últimas semanas, cumpliendo nuestras fantasías eróticas y logrando objetivos educativos… no había que malograr el momento.

Deje a cielo riveros elegir la película, una comedia romántica que estuvo divertida… sin embargo seguía -notando que por momentos divagaba. Bueno quizás tras la película, seria momento de irle sacando por cucharadas aquello que tanto la abrumaba y no se animaba a decirme…

bueno total, ya éramos pareja, debía haber comunicación y bla, bla, bla… quizás en el tiempo que estuvimos solos salió con alguien más, javier, guille o que se yo (esa seguía siendo mi gran duda)… seguro ella no quería contarme y su padre le aconsejo que lo hiciera para evitar problemas… pensaba tomar la iniciativa de manera discreta, sin embargo, ocurrió al revés…

salíamos del cine conversando de la película, pensaba que camino a casa podia conversarle con paciencia del otro tema… sin embargo, nos topamos en los pasillos con ella… hacía mucho que no nos veíamos… y también estaba acompañada… era viviana…

fue una rara coincidencia que mientras nosotros salíamos de una sala de cine, ellos salían de la sala del frente, las películas habían terminado casi al mismo tiempo… mierd… habían pasado meses desde la última vez que la vi, mejor dicho, que terminé con ella para estar con cielo riveros.

Fue un momento bastante incomodo, como se imaginarán, de esos en que no sabes que hacer y solo te quedas mirando… no sabes si saludar, si hacer un gesto o sonrisa cordial, decirle algo o solo irte huyendo haciéndote el desentendido…

mi suerte fue que en esta ocasión yo no tuve que tomar esta decisión… viviana opto por lo último, por irse como si no me hubiera visto, jalando a su pareja de manera presurosa.

No tuve que decirle nada a cielo riveros, mejor dicho, confirmarle quien era ella, porque ya lo intuía.

- ¿era viviana?... Me pregunto.

- ehhh… si… si… era ella… respondí tratando de reaccionar y no darle importancia.

- vaya… parece que no te olvido del todo… repuso con cierta intuición femenina.

- ¿por qué lo dices?... Replique intrigado.

- se busco un chico parecido a ti: alto, piel clara, cabello castaño, tu contextura… dijo cielo riveros medio en serio, medio en burla.

No me había percatado de esos detalles, yo más bien me fije en viviana, que estaba linda como siempre. Mas bien, me sorprendía que cielo riveros me comentara esos detalles, seguro intentaba mostrarse relajada respecto a lo sucedido, aunque eso iría cambiando con el transcurrir de los minutos.

- debo reconocer que es una chica muy guapa… dijo cielo riveros.

- si… lo es… dije reflexivamente, quizás no debí decirlo, cielo riveros me sacaba las cosas por cucharadas.

- tienes buen gusto… dijo cielo riveros, luego intentando bromear, agrego sonriendo: quizás por eso me elegiste a mí también…

hizo énfasis en esto último, como quien dice: estoy aquí, soy tu enamorada, si yo, ahora, aquí, mírame, hazme caso… hace minutos que viviana se fue… si tu ex… vuelve acá, a la tierra, conmigo… sal de tu mundo y recuerdos con ella.

Sabía que cielo riveros hacia todo de buena fe, intentar distraerme o darme confianza para hablar del tema y desahogarme un poco… pero a pesar de eso, yo seguía distraído. Se notaba que viviana me había movido el piso, cosa que ya no le estaba haciendo gracia a cielo riveros, pero ¿cómo evitarlo?

Viviana había sido importante en una época reciente de mi vida... Había tenido enamoramientos antes, sentido cariño por mis otras parejas… pero lo de viviana quizás había sido mi primera relación seria con la que alguna vez vislumbré un futuro… fue la primera chica a la que le dije que la amaba, de manera sincera… aparte fue la única que genero consenso positivo en mis padres… la adoraban…

- ¿nos vamos?… me dijo cielo riveros comenzando a incomodarse por mi desvarió.

- ah cierto… tu papa pidió que vuelvas temprano.

Recién me percaté que, en el tiempo que estuve solo (peleado con cielo riveros), no se me paso por la cabeza llamar o buscar a viviana. Creo que la respetaba demasiado como para jugar con ella en un momento así, para llenar el vacío que cielo riveros me dejo. Por otro lado, pensé que también debía querer a cielo riveros, para que no se me haya ocurrido buscar a viviana, vane o alguien más.

Debo reconocer que me percate que viviana actuó algo celosa, miro de pies a cabeza a cielo riveros, como hacen las mujeres cuando quieren buscarse defecto para destrozar a la chica que anda con su ex, para luego contarlo en su grupo de amigas. Me hizo gracia, nunca había visto reaccionar a viviana así.

Evidentemente eran diferentes, claro que viviana era bella (como cielo riveros reconoció) y cuerpo atlético, pero más que nada en la manera de vestir era mas recatada y bueno en personalidad también más reservada, pero amorosa. Mientras cielo riveros era un torbellino en todo sentido, su personalidad, su vestimenta, su cuerpo, la intimidad…

era tragicómico… le había dado a cielo riveros muchas opciones para hacer ese día de descanso (disco, el club, su casa, la mía) y justo ella elige el cine… justo el mismo que elige viviana… me debatía en estos pensamientos hasta que…

- ella debió significar mucho para ti… agrego cielo riveros algo celosa.

- no… es solo que… nada… repuse mordiéndome la lengua para no empeorar las cosas.

- ¿nada? ¿mira como te tiene?... Prácticamente me reclamo cielo riveros.

Luego volteo el rostro, mirando la ventana del taxi, se sentía ofendida por mi distracción, entendiendo que mi mente seguía con viviana y no con la chica que tenía al lado, mi pareja actual… así que intente calmarla, procurando medir mis palabras para no meter más la pata.

- es que si… ella fue especial… es todo… no se quizás a tuviste un novio con el que te costó terminar… le explique para que me entienda con algún caso de su experiencia.

- si… hubo alguien con el que me costó terminar… reconoció cielo riveros.

- ¿ves? ¿algún enamorado de colegio o de barrio?… repuse devolviendo las preguntas.

- fuiste tu… tonto… me costó terminar contigo… dijo melancólica.

- wow… y antes no… ¿con javier?... Pregunte sorprendido.

Me explico que terminar con javier fue relativamente fácil… que empezó con él en una etapa que quería tener alguien, que era divertido y le hacía olvidar los problemas de su madre… pero intuía que le era infiel… más bien pensó que fue cobarde por no terminar antes con el…

- me da un poco de celos ¿sabes?... Me dijo.

- ¿por qué? Eso ya paso… le dije.

- es que tu al menos amaste a alguien más… y yo… yo solo a ti… me confeso.

El que viera a viviana para cielo riveros era como una alerta… la sombra de la ex… habíamos estado tan bien, hasta lo de vane… luego volvíamos a estar bien y ahora aparecía viviana, eso la hacía sentirse insegura respecto a nosotros nuevamente.

- hey… ven aquí… sabes que también te amo… le dije, abrazándola y forzando mis sentimientos para confortarla.

Luego nos besamos tiernamente. Nos miramos con cariño… ella aun veía algo de penumbra y congoja en mis ojos, abrumados por los recuerdos de viviana… pero no dejaría que ella ganase... No esa noche…

- señor… nos bajamos acá… dijo repentinamente cielo riveros.

Ay, se me viene la noche, pensé… va comenzar con la discusión, en esa desolada calle, o en un arrebato se tomará otro taxi y se ira sola… me dije. Cielo riveros, me tomo del brazo, casi jaloneándome.

- ven… vamos… me dijo.

No sabía a donde me llevaba cielo riveros, porque estábamos en una calle vacía, en medio de la noche, quizás eran las 11… estábamos cerca del toque de queda establecido por su padre, cosa que parecía no importarle a cielo riveros… ella sabia y estaba segura de a donde quería ir.

Hasta que al final de la calle… vi el letrero de neón hacia el cual parecía apuntar cielo riveros…

- ¿es en serio? ¿a esta hora? ¿en ese lugar?... Pregunte absorto, no es que fuera snob, soy hombre y me meto a cualquier lugar, lo decía más por ella.

- si… ahí… y ahora… me dijo de manera imperativa y mandona.

Ya se imaginarán… era un hotel, mejor dicho, un hostal… de poca calaña, pero fue lo mas cercano que cielo riveros vio mientras pasábamos en el taxi. Ella estaba dispuesta a exorcizarme esa noche del recuerdo de viviana como sea y donde sea.

- oye… no es necesario… le dije un poco cansado, mejor dicho, de poco ánimo.

- ohhh… si… sí que lo es… me dijo de manera decisiva, lo había tomado como un reto.

A pesar que ambos estábamos cansados por la semana larga de exámenes, cielo riveros estaba dispuesta a sacrificar su ano en aquel simple hostal, ofrecer su trasero como tributo para que viera cuanto me amaba… incluso rebelándose a la hora límite impuesta por su padre.

Cielo riveros entro sin avergonzarse, pidió una habitación e incluso la pago, dejando su documento de identificación… yo parecía más bien el puto al que le habían pagado para acompañarla y satisfacerla... Y parecía que se las cobraría en especias, con el sudor de mi ingle.

Me tomo de la mano y me llevo a la habitación… cielo riveros parecía una policía llevando a su celda a un preso…yo la seguía aturdido y sorprendido, en todo este tiempo nunca la había visto tomando tanta iniciativa respecto a estas cosas… menos aun a mi ex viviana… quizás la única que fue así era vane, que estaba loca y me amarro…

entramos a una habitación ataviada para el acto, con algunas imágenes de mujeres desnudas, un espejo a un lado de la cama y otro en el techo… algo me decía que detrás de uno de esos espejos podía haber una cámara, de esas que luego uno ve los videos de sexo amateur por la red.

Mientras apreciaba la habitación y sentía el olor típico de esos hostales (a sexo, algunos sabrán a que me refiero), recordaba que había tenido encuentros casuales en sitios así, pero con chicas que uno conoce al vuelo en discos o fiestas… pero hasta me daba pena llevar a cielo riveros u otra pareja formal ahí.

Sin embargo, a cielo riveros poco le importaba eso, ella tenía una misión y la iba a cumplir. Sin darme cuenta, mientras me perdía en abstracciones y observaciones del lugar, ella ya se había apoderado de mi verga, baje la vista y cielo riveros ya estaba de rodillas, mamándomela… buscando ponérmela dura.

Una vez que estuvo dura como deseaba, sonrió coquetamente complacida… se levantó, me tomo de la mano, llevándome a la cama…

- ven amor… reviéntame el culo… dijo con morbosa expresión.

Cielo riveros estaba motivada, dispuesta a borrar cualquier recuerdo de viviana esa noche. Ella quería ser el único recuerdo que me llevara a mi almohada esa noche… yo la seguía embobado, apenas recordando que con viviana no vivía ese tipo de lujuria, claro que había pasión y algo de morbo, pero también ternura… se acercaba más lo que podía decirse, hacer el amor…

camino a la cama, cielo riveros se había soltado las tiras del vestido en su cuello, dejando caer la parte superior del vestido, liberando sus redondos senos. Cielo riveros se levantó la falda y se recostó en la cama, de lado, levanto una pierna y la otra sobre la cama, un brazo también apoyado sobre la cama y el otro libre.

En esa posición, me percate que sus piernas enfundadas en pantimedias negras, terminaban en unas ligas en sus muslos, unidas a su vez por unas tiras a su pequeña ropa interior que ella se encargo de hacer a un lado. Esa imagen era excitante, parecía que, a pesar del cansancio, cielo riveros había ido esa noche a darme una sorpresa, por si se daba la ocasión, con esa sexy lencería negra.

Viendo que no reaccionaba embobado mirándola, cielo riveros con la mano libre comenzó a hacerme señas para que me acercara, mientras me miraba excitada. Ya me había dejado el espacio necesario para entrar de costado a su ansioso esfínter, que me esperaba palpitante.

- no seas tímido tontito… me decía ansiosa de que la poseyera.

Me fui acomodando, con un pie en el suelo y una rodilla en la cama, un brazo frente a ella y otro detrás, pero cielo riveros no quería esperar demasiado. Cogió mi verga con confianza y la jalo apuntándola su ano, luego me tomo de la camisa como para que mi cuerpo se acercara y mi verga se le fuera incrustando entre sus gordas nalgas…

me di cuenta que aquella posición tenía su razón de ser… cielo riveros quería observarme mientras la complacía, quería observar como yo también me deleitaba con su jugoso trasero, sus redondos senos y su estrecho ano… quería que mi mirada no estuviera perdida en recuerdos como desde que sali del cine, tras ver a viviana… cielo riveros solo quería ver la lujuria que me provocaba someterla.

Fue así que empecé a taladrar su ano, mientras cielo riveros me observaba deseosa, para incentivar mi ritmo, me jalo de la camisa y me beso con pasión, mientras su lengua incentivaba la mía, dándome algunas miradas de angustia y placer... Sus jadeos iban en aumento, hasta que no pudo besarme más, porque los gemidos contenidos en su garganta la estaban ahogando.

- uhmmm… siii amorrr… asiii… pártele el culo a tu novia… uhmmm… me decía como recordándome de quien era mi dueña actual.

Por momentos, sentía que actuaba mecánicamente, si bien cumplía con mi función, mi cabeza tenía flashes de otros momentos vividos con viviana… maldita sea, concéntrate, me decía… me costo tanto volver con cielo riveros, como para perder la cabeza una noche por mi ex…

- ¿soy tu mujer amor?… ¿soy tu mujer?… insistía cielo riveros excitada y buscando aunarme a su juego.

En ese momento no tenía en claro nada, pero cielo riveros no tenia que saberlo, debía hacer mi mejor actuación para salir de ese contratiempo que me genero viviana. Si las mujeres pueden fingir orgasmos, quizás yo podría fingir más pasión de lo normal… y en el camino quizás ya no tendría que fingir…

- no… no eres mi mujer… dije en un momento de estúpida sinceridad.

- ¿qué?... ¿no soy tu mujer?... Repuso absorta, decepcionada.

- no… esta noche… esta noche eres mi puta… repuse salvando la situación.

- ¿tu puta?... Repuso perpleja cielo riveros, no era la respuesta gentil que esperaba, pero algo de morbo le genero la respuesta dentro de todo, lo pude ver en su rostro perplejo.

Para no dar pie a otras preguntas, comencé a bombearla con mayor fuerza, su pierna en alto apenas me podía contener mientras castigaba su ano y la besaba con pasión, devolviéndole mi lengua y ahogándola nuevamente entre jadeos y gemidos. Mi mano comenzó a estrujar sus henchidos senos, volviéndola loca de placer.

- siii… amorrr… soy tu puta… soy tu puta… uhmmm… repetía frenéticamente, satisfecha.

Como esperaba, poco a poco fui asumiendo mi papel y dejándome llevar por el morbo, cielo riveros contribuía con sus ricos gemidos y las expresiones en su rostro, entre placer, dolor, momentos de sonrisa, o caras como de niña castigada, haciendo pucheros o mordiéndose los labios.

- amorrr… me estas reventando mi culitooo… auuu… decía caprichosa, sabía que eso me incentivaba más y que la bombearía más fuertemente.

En esa posición, estirando el cuello podía ver como mi dura verga le dilataba el ano violentamente, mientras me miraba sorprendida. Por ratos cerraba los ojos y con la cabeza hacia arriba disfrutaba esas sensaciones… hasta que abrió los ojos y comenzó a darle buen uso al espejo en el techo... Mirando embobada como su cuerpo se retorcía de placer, sus senos bailaban y la expresión en su rostro.

- uhmmm… me convertiste en tu puta amor… uhmmm… exclamo completamente sometida.

Las imágenes no la engañaban, aquello que empezó con ella llevándome ahí y diciéndome casi que hacer… ahora se había revertido con cielo riveros soportando un salvaje castigo anal… tanto duro, que ya le estaba acalambrando su pierna en alto.

Si bien cielo riveros, soportaba porque quería más, o más bien sacarme a viviana de la cabeza, decidí cambiar de posición… adoptando mi nuevo rol machista, y habiéndole dado el papel de una puta sometida. La tomé del cabello y la hice voltear hacia la cama…

- ¿qué?... Ohhh… exclamo sorprendida y excitada por mi rudeza.

Después de todo ella quería eso, me trajo a ese sucio hostal a que le parta el culo, para sentirse segura que era la única, que no había nadie mas afuera que le hiciera sombra… ni vane, ni viviana, ni cualquier otra… solo ella… solo su gran culo…

- ¿qué haces amor?... Uhmmm… gimió algo asustada.

Con el estómago contra el borde de la cama y las piernas colgando, casi como arrodillada y apresada a la vez entre mi ingle y la cama, así en cuatro, como le gustaba, comencé a clavarla, de arriba hacia abajo, haciendo presión con mi cuerpo hacia abajo y rebotando contra sus abultados glúteos.

- ouuu… uhmmm… ayyyyy dannyyy… uhmmm… se quejaba cielo riveros de aquel empalamiento.

Cielo riveros soportaba mis embestidas contra la cama, arañando el viejo colchón, con el rostro de lado, mezcla de miedo y dolor… había despertado la bestia en mi… yo enloquecido, intentando bloquear los recuerdos de viviana que me perseguían… castigaba con dureza el ano de cielo riveros…

- ábrete el culo… le ordene con un palmazo en sus nalgas.

Ella tras recibir ese sonoro golpe que le dejo las nalgas coloradas, solo atino a pasar sus manos por detrás y separar sus gordos glúteos, para soportar mi castigo…

- asiii nooo amorrr… asiii nooo… dijo algo sollozante.

Me di cuenta que estaba siendo demasiado vehemente, la excitación de cielo riveros se iba transformando en susto… y bueno, no era justo… ella no tenia la culpa del enredo que traía en la cabeza, solo intento encausarme hacia ella… recién lo entendí y procuré salvar la situación…

- eres mi mujer y me vas a complacer… le reñí, para halagarla,

intentaba cambiar el papel de cielo riveros de chica abusada a mujer complaciente, que la idea de que era un castigo se tornase más amigable para ella, a pesar de la cruel violación que sufría su ano…

- siiiii… siii amorrr… tu mujer te va complacerrr… uhmmm… repuso nuevamente excitada.

Otra vez animada, sintiendo que había cedido al pedido de reconocer que era mi mujer… cielo riveros ahora con gusto se abría mas las abultadas nalgas, casi arañándoselas, mientras soportaba y empezaba a disfrutar de ese castigo nuevamente.

Es increíble pensar como unas palabras dichas en el tono y momento adecuado, pueden disponer a una fémina para que una salvaje cogida la asuma gustosamente, e incluso la lleve a un nivel de lujuria que la haga disfrutarlo al máximo.

- ayyy amorrr… que ricooo… uhmmm… gemía gustosa cielo riveros.

- ¿qué amor? ¿qué?... Le preguntaba para incentivar su morbo.

- tu verga atorando mi culo… uhmmm… exclamaba como poseída cielo riveros.

Esta vez en su rostro de lado no veía temor, solo sus ojos entrecerrados de placer, disfrutando de todo eso… su morbo se multiplicaría al hacer nuevamente uso de los espejos, de uno al lado de la cama… veía absorta como mi ingle rebotaba en su rechoncho trasero… como sus uñas se le clavaban en sus propias nalgas y como le faltaban manos para agarrar todo su gordo trasero.

- amorrr… mi culo es enorme… uhmmm… exclamo sorprendida de lo que veía.

Me vio a mí también prácticamente saltando encima de ella, con expresión de enfermiza morbosidad… cosa que la hizo sonreír gustosa… que su hombre la mirase con lujuria y placer, mientras se satisfacía de su enorme culo, mientras le incrustaba la verga hasta las tripas…

creo también le generaba morbo, verse como una perra sometida en un camastro de un inmundo hostal… eso termino por llevarla la climax…

- ayyy noo… noo… ouuuu… uhmmmm… exclamo temblorosa, casi acalambrada.

A pesar que intento resistirse, no pudo más y termino en un brutal orgasmo… nuevamente unos chorros de excitación inundaron su interior, mientras cielo riveros se retorcía de placer…

- ay amor… uggg… ufff… exclame, rindiéndome ante su enorme rabo.

Le descargue un galón de leche, parecía como un auto cargando gasolina… no dejaba de salir los borbotones de semen, inundándole las tripas de mis líquidos. Hubiera querido terminar en su boca, salpicarle la cara… pero ufff… con ese culo a veces no se puede… no siempre se gana…

me despegué y me hice a un lado, sentado en el suelo al lado de ella, que seguía en la misma posición contra la cama… intentando reponerse… mientras respiraba agitada y me veía con una amorosa sonrisa a pesar del maltrato que le di a su enrojecido culo y casi reventado ano.

- ¿soy tu única mujer?... Pregunto embobada.

Cielo riveros esperaba con esa demostración haber ganado la batalla a mis recuerdos de viviana, sacrificando su culo, su ano que casi había terminado destrozado.

- si mi amor… tu eres la única… le dije para terminar de calmarla.

Creo que cielo riveros quería seguir en esa absurda conversación, de sublimes halagos… como hacen las chicas cuando se ponen pegajosas tras hacer el amor… sin embargo… un ruido nos sacó de nuestra placentera recuperación… su celular comenzó a retumbar…

- uyyyy… mi papa… ayyy… son las doce… dijo cielo riveros mirando la hora.

Eran las doce en punto y su viejo la llamaba para recriminarle por su ausencia en la hora pactada…

- lo siento papi… la película empezó un poco mas tarde y duro más de la cuenta… dijo cielo riveros con vocecita de niña buena.

El oírla así, me excitaba… cielo riveros se dio cuenta, y me hizo señas para que me arregle para irnos, pero ni bien colgó, se aferro a mi verga, limpiándola con unos certeros lengüetazos. No me quiso succionar porque sabía que si seguíamos no saldríamos.

Cielo riveros se limpió lo mejor que pudo y salimos volando del hostal, tan apurados estábamos que cielo riveros casi se olvida sus documentos. Al llegar a su casa, a pesar de la explicación, igual su viejo nos espero con cara de pocos amigos, tras una severa llamada de atención, nos dio un breve sermón.

Me despedí de cielo riveros, que parecía mas enamorada que nunca, yo estaba satisfecho también… pero bueno, con el transcurrir de los minutos empezaron a asaltarme de nuevo los recuerdos de viviana, tendría tiempo ahora mas liberado para torturarme con esas imágenes del pasado.

Al llegar a mi casa, antes de dormir, recibí un mensaje en el celular… me pareció raro porque ya le había avisado a cielo riveros que llegué bien a mi casa.

- te extraño… no dejo de pensar en ti… decía.

Esta cielo riveros, se ha puesto más romántica y cariñosa de lo usual, pensé, pero no era su número…

- ha sido bonito recordar algunas cosas… no sé qué más decirte… respondí abrumado.

Quizás no debí responder, al menos no en ese momento, a esas horas que indicaban que también estaba pensando en ella, cuando no correspondía hacerlo.

- disculpa, fui una tonta, no estás solo… no debí escribirte… descansa… finalizo ella en el siguiente mensaje despidiéndose.

- está bien… descansa viviana… respondí con un nudo en la garganta y corazón.

Mierd… recordé lo difícil que fue dejar una chica así, linda, noble, inteligente, amorosa y se me ocurrían otra serie de virtudes, desde sus modales, su manera elegante de vestir sin dejar de sensual, una chica que podías presumir en cielo riveros o en reuniones amicales o de trabajo, sin temor a que todos la acosen como lobos adolescentes.

De cuerpo, por lo que vi, viviana seguía siendo atlética, tenía sus bien formadas y gráciles curvas como modelo, no como las voluptuosas o saltantes curvas de cielo riveros… sacando conclusiones eran muy diferentes en casi todo.

Mas bien, con cielo riveros en estos meses todo había estado lejos de ser calmado, todo había sido un huracán de momentos extremos de pasión, peleas, venganzas, entre otras cosas… bueno lo que algunos podrían decir que esas cosas le dan sazón a la vida…

pero en cambio, en el tiempo que estuve con viviana todo funciono en paz y armonía… no recordaba peleas serias, celos, interferencia de terceros (como si nos paso a cielo riveros y a mi con vane, javier, guille)… con viviana todo fluyo fácil… como en un sueño, así me fui quedando dormido.

Quizás ese encuentro con viviana, nos daría el puntillazo final a cielo riveros y a mí… el destino pone a las personas en tu camino por diversos motivos y esos reencuentros quizás tenían una razón de ser… ante lo que se nos venía pronto…

al fin me enteraría lo que cielo riveros me había ocultado por semanas… en el momento menos pensado y de una manera un tanto cruel… y eso terminaría de inclinar la balanza…
nos graduaríamos el siguiente sábado en la noche, ante la felicidad de nuestras cielo riveross. Había algo de nerviosismo adicional de nuestra parte porque sería el momento en que ambas cielo riveross se conocerían… y sacarían chispas seguro… quizás por eso notaba a cielo riveros más preocupada y distante que en las últimas semanas.

Sabía que a mi padre no le agradaban los cielo riverostares, y al viejo de cielo riveros yo no le hacía tanta gracia, pero al menos me respetaba por estar con su hija en los momentos tan difíciles que pasaron. Por el lado de nuestras madres me parecía que no habría problemas cuando se conocieran.

En ese momento creía que esa era mi principal preocupación, como hacer congeniar a nuestros viejos, ya que consideraba que mi relación con cielo riveros vislumbraba para algo serio a futuro, tras todo lo vivido y superado. Sin embargo, estaba muy lejos de presagiar el principal problema que teníamos encima.

Llego el día de la dichosa ceremonia… quizás la última vez que veríamos a la arpía de vane, así que estaba atento a lo que pudiera tramar aquella bruja loca… pero el golpe no vendría por ese lado.

Previa a la ceremonia, en el auditorio de la universidad, estábamos conversando entre amigos en las gradas de ingreso, enfundados elegantemente en nuestros trajes, esperando que nos llamaran para colocarnos la toga y empezar con la ceremonia. Cielo riveros también estaba con su grupo de amigas, pero en los vestidores, dándose los últimos retoques a su maquillaje y quizás tomándose fotos.

De a pocos iban llegando los padres… a la distancia divise la enorme figura de mi suegro que resaltaba más que la de su esposa. Me acerque a saludarlos, él se veía con un estilo marcial propio de su disciplina cielo riverostar, la madre de cielo riveros se veía un poco más delgada y demacrada producto de su enfermedad, pero con el halo de felicidad por ver a su hija graduarse.

- te felicito muchacho, tus padres debe estar orgullosos... Me dijo.

- gracias señor, ellos están orgullosos igual que ustedes de su hija… repuse.

- lástima que no tendremos mucho tiempo para celebrar… agrego apenado.

- ¿por qué?... Pregunte curioso.

- tú sabes… por el viaje… me dijo extrañado.

- ¿cuál viaje?... Replique sin entender.

- mi hija… ¿no te dijo nada?… insistió su viejo.

- no señor… ¿que se supone que debía saber?… agregue preocupado.

Vi el rostro de la madre de cielo riveros, un poco desencajado, viendo como su esposo había metido la pata en grande, quizás adelantando algo que a cielo riveros le correspondía resolver. Entendiendo que era una conversación de hombres, la madre de cielo riveros decidió adelantarse y dejarnos solos.

Fue entonces que el padre de cielo riveros, al fin, termino por revelarme el secreto que me había ocultado durante las últimas semanas, aquel secreto que su padre le insistió en más de una oportunidad que me contara.

El cáncer de la madre de cielo riveros no había menguado. La cielo riveros había optado porque continuara su tratamiento con especialistas en estados unidos… en new york, tenía parientes en new jersey… ella la doble nacionalidad… hasta el momento ese no era mi problema… y en unos instantes se convirtió en mío también.

El padre de cielo riveros se quedaría en el país, en su trabajo, mientras su esposa viajaba a hacer su tratamiento… pero no iría sola… necesitaba quien se haga cargo de ella mientras sus parientes trabajaban…

pues sí, adivinaron… la sacrificada seria cielo riveros… y por consiguiente también nuestra relación de pareja… el tratamiento de su madre de por si sería costoso, como para contratar a una persona que este tiempo completo con ella.

¿por cuánto tiempo se iría?... Dependía de la enfermedad, del tratamiento y como evolucionase… podían ser semanas, meses… ¿años?... ¿quién sabe?...

El padre de cielo riveros se había sincerado crudamente conmigo, al buen estilo cielo riverostar... Un solo golpe, sin dudas ni murmuraciones, que duela una vez. Vislumbraba que su hija ante la situación, y si se daba la oportunidad, aprovechase al menos para tentar conseguir una beca y estudiar una maestría allá.

¿al menos 1 o 2 años? ¿es una broma?, pensé… me cayó como baldazo de agua fría… más aun cuando el padre de cielo riveros me dijo que, dependiendo como iba les iba, el también tentaría irse, vender su casa y buscar un empleo allá también… es decir, que el futuro de la cielo riveros de cielo riveros parecía estar en el extranjero.

Aparte, en ese momento recordé que, cielo riveros me había comentado tímidamente que hace años su madre y su cielo riveros le había iniciado los trámites para una visa de residencia allá. Quizás a manera de presagio de lo que podría suceder o de una posibilidad para el futuro de su hija…

el padre de cielo riveros me dejo en shock, por primera vez (sin tragos encima) lo note más condescendiente conmigo, sabía que estaba enamorado de su hija. Bueno, en realidad… que pendej… viejo de mierd… me jodio todo… mi felicidad, mi graduación y quizás mi futuro… pero en realidad, no era su culpa… era la situación…

- chicos a ponerse las togas… llamo el coordinador del evento.

Su viejo me despidió con un palmazo en el hombro y una palabra de aliento que ni recuerdo. Fui como zombi a los vestidores, apenas oía lo que me decían los demás mientras me ponía la toga. La gente fue saliendo y formándose, a un lado las mujeres y al otro los chicos. En la fila de mujeres no veía a cielo riveros…

- ¿a dónde vas?... Me dijo el coordinador al ver que huía.

- al baño un rato... Nervios… me excuse.

- contigo o sin ti, va empezar la ceremonia… me advirtió.

A esas alturas no me importaba mucho, había visto otras ceremonias, sabía que había todo un rollo de discursos y protocolos al inicio… cosa que me podía ahorrar, esperaba que mis padres me entendieran luego, ahora tenía otras prioridades…

- ¿por qué no me lo dijiste?... Le increpe a cielo riveros al encontrarla sola en los vestidores.

Estaba con la toga puesta, con la mirada perdida en el piso… al levantar el rostro vi que estaba llorando, su madre ya le había dicho que su viejo me conto todo… quizás hasta su padre reprendió a su hija por no habérmelo confesado antes, a pesar de su insistencia de las últimas semanas.

- ¿por qué tuvo que decirte el?... Sollozo ella, culpando a su padre.

- y ¿cuándo pensabas decirme?… replique.

- no se… pero no hoy… no ahora… en nuestra graduación… se excusó.

- pero ¿por qué no me lo dijiste?... Insistí.

- ¿tú crees que es fácil?… no sabía cómo… estábamos terminando la universidad, teníamos exámenes… no quería distraerte… no sabía cómo decírtelo… exclamo tapándose el rostro para que no la viera llorar.

Al final mi rabia, se disipo al verla así, destrozada como yo… si bien me sentía traicionado porque no me lo dijo… por otro lado, la entendía. Me sentía vacío, por fin entendí los silencios de cielo riveros de las últimas semanas, su negativa a decirme, había estado sufriendo en silencio…

me senté a su lado, cielo riveros apoyo su cabeza en mi hombro, mientras le acariciaba el cabello.

- ¿cuándo?... Pregunte.

- el jueves… dijo resignada.

- mierd… tan rápido… por la put... Madr… replique sorprendido.

Pensar que yo ya había hecho planes para pasar la navidad en su casa y luego ir a la mía, para así cumplir con ambas cielo riveross… pensé llevarla a la playa para recibir el año nuevo, embriagarnos… y romperle el culo en un hotel, o en una carpa en medio de un campamento, o quizás en la orilla del mar de madrugada cuando todos durmieran… según lo que pasase… pero no eso ya no sucedería…

- si… te iba a enviar una postal… dijo ingenuamente.

- ah… encima te pones graciosa… reclame sonriendo.

En ese momento nos reímos de nuestra fatalidad… no fue javier, no fue vane, no fue guille, no fueron nuestros viejos, ni siquiera viviana o alguien más… fue el estúpido de cáncer a la sangre, leucemia, que nos hacía mala sangre a los dos… y ponía un continente entre nosotros.

- podemos hacer que funcione, te llamaría… correos… videoconferencia... Dijo triste.

- cyber-sexo… agregue dejando mi mente volar… nooo, no sería lo mismo.

- ay… solo piensas en eso… que enfermo eres… me recrimino risueña.

- y eso te encanta… le dije.

- si, me gusta… que eres loco, me haces reír… decía melancólica.

- y gemir… dije completando.

- y dale con eso… que pervertido eres… pero bueno, también eso, me encanta que me hagas gemir… dijo riendo.

En esos instantes uno se pone creativo y se te vienen varias posibilidades a la mente, ¿conservar el idilio a la distancia?, era pesimista al respecto, la mayoría de experiencias que conocía al respecto terminaban como la canción que dice… felices los 4.

Claro que eso del amor a distancia suena románticamente bonito, pero ¿en la práctica?… no había una certeza del tiempo que permanecería allá o si es que se quedaría definitivamente allá… ya me había pasado con mi prima, que el tiempo nos alejó y buenos las cosas siguieron su curso, yo acá con cielo riveros y ella allá con otra pareja… y estábamos en el mismo país…

hasta pensé en ¿casarnos?... Claro, quería mucho a cielo riveros, sentía que la amaba, pero apenas llevábamos unos cuantos meses juntos, no nos conocíamos del todo para dar ese paso. Mas aun el matrimonio no anulaba la enfermedad de la madre… aun así tendría que irse…

- pensé que tu madre se estaba recuperando… dije, resistiéndome a creer lo que sucedía.

- no… quizás hasta necesite un trasplante en algún momento… y ya sabes quién será la donante… dijo asustada, era obvio que sería ella.

- ya… tranquila… dije consolándola.

Mierd… también por eso se iba cielo riveros, quizás en los exámenes médicos que le hicieron habían visto su compatibilidad como donante de su madre. En ese momento, al saber que cielo riveros estaba sana, no me preocupe en ver los demás detalles de su evaluación médica.

Hasta que me surgió otra alternativa… ¿qué tal irme a estados unidos?... Siendo realistas no era una posibilidad en el corto plazo… no estaba en ninguno de mis planes de vida, pero quizás sería la única alternativa viable… pero no tenía visa, y de lo que se comentaba las cosas se pusieron mas duras tras el 11 de setiembre (que era algo más reciente en esa época).

Al menos cielo riveros tenía cielo riveros allá, y ellos la iban a apoyar con la salud de la madre… pero la idea no era irme allá para ser una carga más para ellos, un lugar más como polizonte entre su cielo riveros… tampoco me veía escabulléndome de la migra, yo no tenía ni pasaporte… no se puede vivir del amor…

- ¿qué va pasar con nosotros?... Pregunto cielo riveros intuyendo mis pensamientos.

- bueno... No tenemos que definirlo todo ahora… ya se nos ocurrirá algo… pero creo que nos ira bien… dije calmándola e intentando calmarme a mí mismo.

Nos paramos de la banca, dispuestos a unirnos a la celebración que se oía afuera, quizás nuestros padres seguro que ya estaban acomodados en las butacas, buscándonos entre los graduados. De repente cielo riveros se detuvo y no me dejo avanzar.

- y si esta es la última vez que estamos a solas… dijo apenada.

- ¿pero faltan unos días?... Dije extrañado.

- lo sé, pero debo alistar mis cosas, ayudar a mi madre, despedirme de la cielo riveros… no sé cuánto tiempo me quede después de hacer todo eso… dijo nuevamente llorosa.

- mierd… cierto… pero debemos salir... Le dije.

- aún hay tiempo… insistió ella.

- ¿para qué?... Pregunte incrédulo, aunque sabía a qué se refería.

- para mi… dijo besándome, luego agrego… quiero que me hagas tuya (por última vez).

Ay caraj… como negarse a eso… después de la graduación, nos perderíamos entre los amigos y la cielo riveros, de ahí en adelante, lo demás era incierto. Lo único cierto era que estábamos solos en ese vestidor y que no sabíamos si gozaríamos de esa privacidad nuevamente.

- ¿aquí?... Todos están afuera y… ¿si alguien regresa?… dije dudando.

- vamos tontito… peores locuras hemos hecho antes… repuso cielo riveros acariciándome.

Bueno si, habíamos hecho toda clase de locuras (baños, box, autos, cines, etc.) en el tiempo que llevábamos juntos, hacer una más, ¿qué más da hacer otra más?… no sería la primera vez que lo haríamos en la universidad… más seria la última vez que lo haríamos ahí, a esas alturas creo que no podrían expulsarnos… ¿o sí? … bueno todo le daba algo de morbo también a la situación…

comenzamos a besarnos como si fuera la última vez, primero tiernamente… luego salvajemente como si fuera el fin del mundo, quizás no habría mañana para nosotros… no había muchas opciones para hacerlo, solo estaba aquella banca delgada en la que estuvimos sentados en los minutos previos.

Cielo riveros lo entendió, se sacó rápidamente la toga, debajo de la cual traía un vestido semi entallado negro con gris, mezcla de elegante y provocador: por el ligero escote, por la mini en la que terminaba, las pantimedias negras y por todo lo que sabía que había debajo, que se dibujaba notoriamente.

Mientras me quitaba la toga, también me di cuenta, que aquella visión de cielo riveros semi agachada dejando su toga a un lado de la banca, ya me había armado instintivamente una erección… ¿cómo no lo haría?... Sí veía su enorme y redondo trasero abultarse, su corta falda subirse dejando entrever sus magnificas y bronceadas nalgas… mientras aparecía el final de sus pantimedias y apenas si se veía una diminuta ropa interior negra… esa mujer sabia como ponerme duro sin esfuerzo…

cielo riveros lo intuía, volteo a mirarme coqueta… y una gota de leche se me escapo cuando torno su sonrisa a una lujuriosa y provocativa…

- amor… hazme tu perra otra vez (o por última vez)… dijo cielo riveros sugerentemente.

Se acomodo en cuatro sobre la delgada banca, casi haciendo equilibrio, ya que no cabían sus dos rodillas en el mueble, entrecruzo un poco las piernas, mejor dicho, los pies y pantorrillas para prácticamente apoyarse en una pierna… con esta acción sus muslos se juntaron y su jugoso trasero se veía mas enorme que nunca…

- a la mierd… que rico culo… dije sin tapujos a lo que cielo riveros sonrió agradecida.

En esa posición, como para alimentar más mi morbo, cielo riveros arqueo un poco la espalda, sus labios vaginales se veían entrecerrados, difícilmente podría ingresar una verga en esa estrechez forzada… lo que claramente era una invitación para disfrutar de su ano, que se veía ansioso y palpitante.

- amorrr… rómpeme el culo yaaa… me rogaba cielo riveros.

Ella veía embobada mi dura verga soltando una gota de leche mientras su vagina apretujada comenzaba también a hacer agua, escurriendo algunas gotas de su floreciente excitación…

- ya que insistes… le dije volviendo en mí.

Había que apurar las cosas ahí dentro, afuera ya se oían algunas palabras de bienvenida a los padres y cielo riverosres, mientras que en ese vestidor el ano de cielo riveros le daba la bienvenida a mi tiesa verga.

- mas fuerte… más duro… por favor… me pedía cielo riveros temblando de placer.

Yo estaba manejando este ultimo encuentro con cierta delicadeza, que más bien parecía desesperar a cielo riveros que ansiaba una cogida salvaje … quería irse con el culo destrozado, sufriendo para sentarse, como para que se acuerde de mi en todo su viaje…

- ohhh…. Siii… asiii… exclamo estremeciéndose.

Lo que había empezado en una lenta penetración, ante sus reclamos se convirtió en un brutal clavado que casi le desgarra el esfínter… que se dilato de manera abrupta para recibirme… tras esa criminal incursión inicial… sentía su arrugado ano temblando ansioso, casi saboreando mi verga.

Como les dije, en esa posición el rabo de cielo riveros se veía más grande que nunca, el panorama era increíble, dos enormes nalgas abiertas por mi dura verga, sus gordos glúteos arremangados contra mi ingle, dejando ver una pequeña cintura… que parecía que se quebraría si la cabalgaba con fuerza.

Cielo riveros estaba super excitada, con la respiración entrecortada, volteo a verme, mezclar de placer y por unos instantes su vista se nublo casi a punto de lagrimear, recordando el futuro incierto que nos aguardaba… no quería menguar su excitación ni la mía…

- ouuu… uhmmm…. Ayyy… se quejaba cielo riveros sorprendida por la forma violenta en que, de la nada, empecé a bombearle su redondo culo.

Quería distraer todo pensamiento del futuro de mi cabeza y de la de cielo riveros… nuevamente el gordo trasero de cielo riveros y su ajustado ano servirían para exorcizarme de toda frustración… mierd…. ¿por qué ahora?... Si lo sabia porque me retuvo mas viendo que viviana revolvió mi mundo… ¿por qué cielo riveros pugnaba por interesarme (por ser la única en mi vida) para luego dejarme?...

- ayyy… amorrr… ayyy… uhmmm… sufría cielo riveros con mi cogida.

Ella sabia que estaba siendo brusco, intuía que yo desquitaba toda mi frustración por su partida, partiéndole a su vez el culo… frustración también magnificada por su silencio… me parecía que cielo riveros estaba dispuesta a sufrir ese castigo con tal de darme el placer que parecía que necesitaba yo en ese momento… ofrendaba su ano con tal de congraciarse conmigo y brindarme un recuerdo de su entrega.

Cielo riveros que había hecho equilibrio en aquella delgada banca, con una pierna y ambas manos agarradas a los lados del larguero de madera, ahora el mueble retumbaba con mis embestidas y apenas cielo riveros podía mantenerse en posición… ella opto por apoyar la cabeza contra el larguero, mientras sus manos buscaban apoyo en la base del banco…

- siii… amorrr… asiii… decía llorosa soportando aquella vejación.

Si antes pensaba que su trasero no se podía ver mas grande, me equivoque, con esa nueva posición su rabo lucia colosal… más aun con la ultima maniobra que realizo, sacrificando su equilibrio, soltó la base de la silla y las dirigió a sus rechonchas nalgas… abriéndoselas, casi arañándoselas para aumentar mi morbo y que termine con esa tortura anal…

- ayyy amorrr… me partesss… mi culooo… ayyy… se quejaba cielo riveros.

- lo siento mi vida… es que me poness asiii… le dije excusándome.

En un momento me detuve algo exhausto por el ritmo demencial que le apliqué… no era su culpa tampoco, que hubiera hecho yo si mi padre o madre pasaran por algo similar… quizás no hubiera ocultado tanto tiempo esto… pero tenía su lógica, era el final de la carrera… puto cáncer…

desde su posición cielo riveros abrió los ojos, que antes entrecerrados soportaban el castigo, y me vio dudar, nublarme nuevamente como cuando su padre me soltó esa bomba… al verme dubitar… ella hizo algo similar a cuando empezó esta faena… hizo lo posible por traerme de vuelta a ese momento… a esa cogida que debíamos atesorar como un gran recuerdo…

cielo riveros comenzó a mover su rabo de manera sugerente, meneándolo en mi ingle y por momentos empujándomela, penetrándose ella misma, entrando y saliendo de mi verga… cada vez con mas fuerza… hasta que me hizo sonreír morbosamente otra vez y eso también la alegro melancólicamente.

- hagámoslo bien… susurro excitándose nuevamente cielo riveros.

Esta vez no agarre su delgada cintura, sino que me posicione tomando sus gordas nalgas, había mucho de donde agarrar, no tenía pierde… nuevamente comencé a bombearla…

- uyyy siii… que bien se sienteee…. Como la primera vez… exclamo cielo riveros poseída.

Cielo riveros disfrutaba recordando la primera vez que como jugando llevados por la curiosidad, un poco de vino y atracción que mutua, terminamos por desvirgarle el culo a cielo riveros… por descubrir aquel placer inexplorado por ella y del cual era una adicta ahora…

la chica con el mejor culo de la facultad, quizás de la universidad, convertida en una perrita ansiosa que solo quería que le den por su arrugado y estrecho ano… cosa que la hacia gemir como loca, al punto de nuevamente comenzar a derramar líquidos por su palpitante vagina…

- uhmmm amorrr…. Uhmmm…. No paresss… mi culitooo uhmmm… gemía cielo riveros.

- pero no grites… le decía yo, dándole un palmazo en sus gordas nalgas.

Lo peor que podía pasar es que, con el ruido que hacía cielo riveros, terminaran regresando los graduados y atraparnos en plena faena anal… me imaginaba que mas de uno se masturbaría con aquella imagen…

- siii… mi vida… pero sigue rompiéndome el culo… decía cielo riveros mordiéndose los labios.

La banca parecía tener vida propia, saltaba con cada incursión de mi verga en sus tripas… cielo riveros se aferraba con mas fuerza a la tabla. Por momentos parecía que se iría a un lado y luego al otros… y al final, la inercia hizo lo demás… fue tras unos segundos se fue a un lado…

- ayyy… cuidado… uhmmm…. Exclamo cielo riveros sorprendida.

Cielo riveros termino sobre el piso alfombrado, y yo con ella detrás… sus brazos amortiguaron su caída, sino se hubiera ido de boca, yo casi me doble el tobillo, enredado con ella y con la banca a un lado. No la había soltado en su caída… ella cayó casi en su misma posición, en 4 patas como perrita en celo…

- auuu… ahora me reventaste el ano… se quejó cielo riveros.

Yo seguía con la verga incrustada en su estrecho ano, y al perder el equilibrio, termine empalándola más hacia abajo, abriendo sus nalgas a mas no poder… su arrugado anillo era lo que me mantenía en equilibrio y sus bultosas nalgas amortiguaron mi caída, rebote contra ellas.

Esta vez cielo riveros estaba apoyada en sus 2 rodillas y su cabeza en la alfombra, sus brazos parcialmente extendidos, como queriendo incorporarse, su culo muy empinado… mientras yo detrás ya me había posicionado y no la quería soltar…

- uy no… espera… no… uhmmm… si… sigue… exclamo cielo riveros desdiciéndose.

No había marcha atrás, mas bien solo había un martilleo hacia adelante. Ya me había asentado bien con mis pies contra el piso y mi verga taladrándola hacia abajo, mientras cielo riveros nuevamente comenzaba a estremecerse de placer y hacer agua su vagina... Sus manos comenzaban a arañar la alfombra.

Por momentos mis palmas ladeaban sus gordas nalgas, atrayendo y alejando sus glúteos, haciendo un armónico golpeteo contra mi ingle que producía un cálido sonido… que nos excitaba mas aun… un punto a mi favor era que en mi posición veía rebotar sus redondos cachetes y la onda expansiva que se producía hasta terminar en su estrecha cintura…

- uhmmm… ohhh… uhmmm… escuchaba los ahogados gemidos de cielo riveros.

La veía estremecerse, casi orinarse de placer, pero por momentos contraía los muslos, quería prolongar al máximo su gozo… quizás el ultimo… se resistía a entregarse a un orgasmo, a dejar esa locura terminar en la universidad donde empezó todo.

Pero por mas que se contrajera y estremeciera resistiendo, con los puños cerrados, mordiéndose los labios y lagrimeando… en algún momento se tenia que relajar, se tenia que rendir ante lo inevitable… un sonoro y placentero orgasmo que les juro que resonó en todo ese vestidor…

- ouuuu…. Uhmmm… eres el mejorrr amorrr… uhmmm… casi grito extasiada.

Luego entendí que el temblor que sentí en la habitación eran por los sonoros aplausos de los presentes al discurso del representante de los alumnos… aunque sentí que era una gran ovación a aquella fenomenal cogida que le di a cielo riveros…

- ohhh… ufff… ay… caraj… ufff… exclame casi acalambrado.

No basto mucho para que mi verga se contraiga y luego comience a escupir violentamente, al ritmo de las contracciones de las nalgas de cielo riveros… por momentos hasta su columna se contaría con cada borbotón de tibio semen que inundaba sus tripas. Desde aquella posición parecía que su cintura se partiría con tanto estremecimiento.

Cada descarga seminal era seguida por un alarido y contracción de cielo riveros, así como una descarga vaginal, parecía una tubería mal goteando… en un ultimo alucinamiento de lujuria podía decir que cada estremecimiento parecía un rezago o un golpeteo de un nuevo orgasmo.

- ayyy… ufff… ay mi culito… mi cintura… ayyy… resoplaba cielo riveros también semi acalambrada.

Al sentir que mi verga había descargado todos sus líquidos, y dejo de contraerse… me fui alejando, quería admirar por esa, quizás ultima, vez el desastre que había hecho en la retaguardia de cielo riveros… que parecía como disecada… toda contraída en su misma posición con la cola empinada y las nalgas abiertas… su casi al rojo vivo ano contrastaba contra el blanco liquido que comenzaba a salir, y con el traslucido liquido que su vagina excitada babeaba.

Sus pantimedias estaban raídas en la parte superior… su falda estaba algo arrugada, pero aun presentable. Parecía que cielo riveros no se movería de su posición… estaba deshecha… solo me quedo buscar lo poco de papel que quedaba y limpiarle su destrozado trasero… al pasar el papel por su ano, se estremeció adolorida.

Coloque nuevamente la banca en su sitio y entendí que cielo riveros sola no podría volver en sí, estaba casi agarrotada por tanta resistencia que le puso a su inminente orgasmo… o tal vez disfrutando cada instante de esos momentos de placer y guardándolos en su memoria.

Prácticamente tuve que ponerle su ropa en su posición y la estaba ayudando a reincorporarse, al menos a sentarse de rodillas… mi verga aun con nuestros líquidos estaba semi erecta, esperando de manera sugerente su limpieza, y con los ojos medio idos, cielo riveros se posó en mi mástil…

como era costumbre, con una mano apreso con seguridad mi verga, mientras la otra me tomaba de la cadera para tenerme cerca… con morbosa mirada vio las gotas seminales de ansiedad que iban saliendo provocadas por la inminente succión que se avizoraba… cielo riveros fue acercándose lentamente y abriendo la boca, sus enrojecidos labios hacían la mueca justa como para apresar mi verga… sin embargo…

escuchamos un ruido, el golpeteo del piso en el pasillo que daba a los vestidores… eran pasos acercándose… mierd… quizás nos oyeron… o nos habían ido a buscar…

- ¿que?... Exclamo cielo riveros volviendo en sí, al oír el sonido presuroso.

Cielo riveros abrió los ojos, la mueca lujuriosa se transformó en una asustada… como despertando de un placentero sueño que se iba transformando en pesadilla…

- a los closets… rápido… le dije a cielo riveros.

Nos metimos en esos poco espaciosos closets… mi verga, aún tenía líquidos, no me quería manchar… había algunos sacos que seguro las chicas dejaron antes de ponerse las togas… pero solo quedaba una última toga, quizás alguna de repuesto o prueba… me limpie con el borde de esa, mientras oía los pasos acercarse al closet…

abrieron la puerta justo frente a esa toga sobrante, mientras yo me deslizaba de lado, intentando cubrirme con la ropa de las chicas… hasta que me tope con cielo riveros que estaba de cuclillas en un rincón, casi temblando… no había más a donde ir… era el final del closet…

- ahí está… esa es la tuya… escuche decir, parecía la voz de la coordinadora de las chicas.

- ah… ok…. Gracias… respondieron sacando la toga.

Esa voz me era cielo riverosr… mierd… era la voz de vane… diablos… claro, estaba tan preocupado por cielo riveros, que no me percate que vane tampoco estaba en la fila de graduados… había llegado tarde y estaba por enfundarse la toga con la cual me acaba de limpiar los restos de semen de mi verga.

Por las rendijas de las puertas veíamos como vane presurosa se ponía la toga, mientras cielo riveros no pudo soltar una risita al ver la mancha de leche en un borde de la parte posterior de la toga… cosa que vane no se percató… pero de lo que si se percato fue del sonido de la risa de cielo riveros…

vane comenzó a caminar hacia los closets, con mirada curiosa… cielo riveros se tapaba la boca y me miraba asustada… si bien no le tenía miedo a vane, quizás a lo que ella podría decir en venganza, aun no estábamos graduados oficialmente, y vane nos tenía una rabia contenida que podría hacer cualquier cosa para desquitarse…

tal vez cielo riveros temía que, en su ausencia, por su próximo viaje, vane nuevamente tentaría acercárseme o chantajearme como pudiera… si bien ojos que no ven, corazón que no siente… dudo que cielo riveros quisiera dejarme a merced de vane… y ella ya estaba por abrir la puerta…

- señorita, apresureseee... Le recriminaron a vane.

Para nuestra suerte la coordinadora había retornado a apurar a vane, que retorno en sí y recordó la ceremonia, dudo unos instantes y luego la vimos salir presurosa … ufff….

- ¿por qué siempre está loca nos sigue?... Pregunto cielo riveros, un tanto aliviada.

- que importa… vamonosss… le dije, si estaban por llamar a vane, en orden de apellidos, poco después nos tocaría a nosotros…

para nuestra suerte, ingresamos al estrado con las luces semi apagadas, solo enfocando al estudiante que daba el discurso en representación de los alumnos. Al momento de prender las luces para empezar a entregar los diplomas, mágicamente la cantidad de alumnos estaba completa con nuestra presencia.

Solo guille se percató de mi presencia a su lado, en uno de los extremos de la fila de hombres… en el caso de cielo riveros, parecía que las chicas estaban más distraídas buscando a sus padres en el público, entre la penumbra, creo que mas se percataron de la presencia de vane a la que no habían visto en la practica preliminar… es decir, para nuestra suerte pasamos desapercibidos, excepto para nuestros padres.

Lo que no paso desapercibido fue la mancha que parecía de goma en el borde de la toga de vane, que parecía brillar con las luces… mas para nosotros que la veíamos de espaldas… tras la ceremonia se fue al baño a limpiarse eso, a pedido de sus amigas, me imagino que al oler eso se habrá percatado que era y habrá intuido de quienes eran esos líquidos…

sin querer, termino siendo la última venganza de cielo riveros contra vane… ¿pero habría una ultima venganza de vane contra ella o contra mí?... No se sabia aun, solo que nuevamente nos lanzaba furibundas miradas al vernos juntos y cielo riveros no disimulaba su risa traviesa y revanchista... Aunque cielo riveros tampoco podía disimular, al menos para mí, su adolorido trasero, ya que me percataba que se sentaba de lado.

Al final, después de la graduación hubo una pequeña recepción con brindis y bocadillos, fotos aquí y allá con la cielo riveros y amigos… como era de esperarse, al final nuestras cielo riveross se conocieron, pero eso ya no era lo importante o lo más estresante para mí, solo cabe resaltar hubo buen ánimo protocolar por la emoción de la graduación.

En realidad, ya no recuerdo mucho de esos momentos, salvo lo que pude ver después por las fotos que nos tomamos y nos tomaron amigos en grupo, todo fue como un sueño… cuando uno simplemente se deja llevar por el momento, los amigos y su alegría... Mas de ellos que mía…

total, en esos momentos, mi cabeza estaba más en el incierto futuro de cielo riveros y el mío… apenas quedaban unos días antes de que ella se fuera… o que se la llevaran… y luego… ¿qué pasaría?… ¿el caprichoso destino nos tendria deparado alguna otra sorpresa?...
Los últimos días trascurrieron como cielo riveros había pensado, visitando o recibiendo visitas de cielo riverosres a manera de despedida… la vi un par de veces, pero como era de esperar, no hubo tiempo de intimar y de otro tipo de despedida… la oficial seguía siendo la de la graduación…

procurábamos no hablar del futuro o lo que vendría, para no generar mas ansiedad o tristeza sobre el futuro. Compartimos besos y momentos tiernos juntos… parecía que la paz había llegado a nosotros… pero a pesar de todo, llego el fatídico momento…

los acompañe al aeropuerto. Bajo la atenta mirada del padre cielo riverostar, apenas si hubo unos momentos para unos cuantos besos y caricias… hasta que llego el momento de partir…

- dales unos minutos… le susurro la madre de cielo riveros a su esposo cielo riverostar.

- ok… dijo de mala gana el viejo, mientras se alejaban de nosotros.

Veía el rostro lloroso de cielo riveros, procurando sonreír ante la fatalidad del momento…

- vamos… me vas a hacer llorar… decía secándole sus lagrimas y llorando por dentro.

- ¿te vas a portar bien?... Me dijo abrumada.

- como siempre… bueno casi siempre… le dije.

- jajaja… si… casi siempre… aquello siempre será nuestro secreto… dijo recordando como empezó todo, cuando la desvirgue analmente y me hizo prometer no decírselo a nadie.

- si… veré la forma de visitarte… para hacerte recordar nuestro secreto… le ofrecí para alegrarla.

- ¿lo prometes?... Pregunto cómo niña pidiendo regalo de navidad.

- claro… dije quizás mintiendo o siendo optimista.

Ella sonrió tiernamente, luego nos besamos y abrazamos, intentando prolongar el momento…

- es hora… dijo el viejo cielo riverostar pegado a la puntualidad.

No había forma de escapar de eso… me despegué de su cálido cuerpo, de sus abultadas formas que habían dejado huella en mi cuerpo… la vi alejarse abrazando a su madre que también llorosa se alejaba de su esposo… nos hicieron una última señal de despedida, antes de desaparecer tras la puerta que dirigía a la zona de embarque internacional…

estuvimos en silencio unos minutos, suspirando e intentando no derramar lágrimas… vi a aquel tipo de casi 2 metros a punto de quebrarse… sin embargo se recompuso.

- ¿deseas que te lleve?, como voy de regreso… me dijo el cielo riverostar.

- no… no se preocupe… creo que me quedare un rato más… dije mirando con tristeza la puerta por donde desaparecieron.

Había visto una zona de ventanales, desde se veian a los aviones partir, recordé haber visto gente ahí viendo partir o llegar a sus seres queridos. Tal vez me detendría ahí unos momentos para asimilar la idea de su perdida, pensando que en alguno de esos aviones iría cielo riveros.

- ¿quieres un trago?... Insistió el viejo de cielo riveros, sacándome de mi abstracción.

- bueno… creo que en estos momentos no me caería mal… le dije, cediendo, a pesar que aquella vez en la piscina me emborracho mal.

Nos sentamos en un restaurante y pedimos un par de cervezas personales. El viejo estaba apenado, dejaba ir a su cielo riveros con la que compartió años, mientras yo dejaba ir a la chica que conocía hace años pero que amaba hace unos pocos meses… recién en ese momento, me puse en contexto… él debía estar sufriendo más que yo.

- y… ¿como conoció a su esposa?... Pregunte, buscando hacer conversación.

- bueno, como parte del entrenamiento cielo riverostar, fui destacado un tiempo al extranjero… allá la conocí… era profesora de español y fue la traductora designada a mi grupo… dijo con nostalgia.

- en poco tiempo que se conocieron… ella decidió venir aquí… pregunte asombrado.

- eran otros tiempos, la gente se casaba más joven, había más romanticismo… tampoco fue de inmediato, hubo cartas de por medio (diablos, ¿cartas?, que viejo), vino de visita y entonces las cosas se fueron dando… agrego con nostalgia.

- vaya… suspire incrédulo.

La madre de cielo riveros se arriesgó a venir a un país de tercer mundo, enamorada de un cielo riverostar que conoció unos pocos meses, encima de uno color, bueno, hago énfasis en esto por el racismo con el que se asocia normalmente a estados unidos, bueno en algunas ciudades.

- es que… cuando lo sabes… lo sabes… me dijo el viejo melancólico.

Aunque no fue su intención, me sonó a indirecta. En poco tiempo su esposa y el sabían que era amor, se arriesgaron a intentarlo a pesar de la distancia y las diferencias culturales. Producto de ese amor, a su vez, yo pude disfrutar del amor de cielo riveros en esos meses.

Tras un ultimo trago, el viejo decidió irse, creo que sabia que, si se quedaba más tiempo compartiendo experiencias conmigo, se quebraría como un niño. Me parece que prefería sufrir en silencio en su casa, en mi casa no había nada que esperar, preferí continuar un rato mas ahí, viendo aviones ir y venir…

tal vez paso una hora o más, no me preocupe del tiempo, me iría cuando hubiera menos gente o cuando me sintiera listo para dejarla ir, me dije… hasta que recibí un extraño mensaje de texto…

- hey guapo… decía el mensaje.

- ¿en donde estas?... Respondí sorprendido y tras unos segundos…

- detrás de ti…

pero ¿cómo puede ser esto?... Pensé sorprendido, volteé rápidamente, entre la gente la pude ver con una sonrisa entre melancólica y preocupada…

- ¿qué paso?... Pregunte atónito.

- hubo un cambio repentino… y me pasaron a otro vuelo… dijo cielo riveros abrazándome.

- ¿es broma?… dije mecánicamente, ya me despedí una vez y me hice a la idea, morí por dentro para pasar lo mismo de nuevo.

- ¿no te alegra verme?… repuso triste.

- claro, claro… sino que… me sorprendió… y bueno me preocupa… dije disculpándome.

Cielo riveros me explico que al parecer hubo un cambio, por temas técnicos, en el vuelo que venia de estados unidos, enviaron un avión con menor capacidad, y los pocos pasajeros que sobraron fueron los que hicieron check-in (reserva) tarde, y ellos tendrían que ser reacomodados en otro vuelo… en un par de horas después.

Así como cielo riveros había pospuesto contarme sobre el viaje, también había pospuesto hacer su reserva, como negándose a irse o guardando alguna esperanza de quedarse, y se le cumplió… al menos temporalmente.

A pesar de la protesta que hicieron ante la línea aérea… no pudieron viajar juntas… y dado que la cielo riveros de su mama la iba esperar en estados unidos, decidieron que era mejor que al menos su mama viaje y que luego llegue cielo riveros unas horas después.

Desde el momento a solas que tuvimos en la graduación, estos días no habíamos vuelto a estar juntos, al menos tendríamos un par de horas para estar solos.

Me emocione pensando que cielo riveros logro sacar algunos provechos de la línea aérea, como una habitación en el hotel del aeropuerto… pero no, porque solo eran un par de horas de retraso, al menos consiguió que a su madre la acomoden en primera clase, con el pretexto de su estado de salud, y bueno para ella apenas algunos vales de consumo en el aeropuerto.

Intentamos sacarle provecho, pasamos un rato visitando algunas tiendas, le compramos algunas chucherías que podría usar en su viaje, me compro unos lentes oscuros, comer algunos snacks.

Cielo riveros estaba con un jean, que en realidad parecía que era de sus favoritos de hace muchos años, que bueno, parecía que iba a reventar por semejante rabo… en realidad me dijo que se sentía un poco incomoda, pero que no quiso abandonar ese pantalón acá…

- en realidad, has engordado… dije bromeando.

- ay no seas tontoooo… dijo avergonzada… tanto que castigabas mi trasero, se ha hinchado… fue su graciosa explicación para lo abultado de sus nalgas.

Así justo nos detuvimos en una tienda deportiva, quería viajar mas cómoda y haría uso de sus vales para comprar una malla… pero no se decidía, le gustaban 2 pero solo le alcanzaba para una…

- vamos… te compro la otra… le dije, viendo que le quedaba bien y que no era tan llamativa como la primera que compro, esa si, era de infarto.

- ay amor… no es necesario… dijo con cara de niña que espera regalo de navidad.

- ahora q recuerdo te debía una malla… dije recordando la vez que le rompí la malla en su cocina para romperle el culo, parecía presagio.

Para mi tortura, cielo riveros decidió ponerle la primera malla de color llamativo, que solo llegaba a la rodilla y dejaba ver su delicioso rabo. Yo mas bien intente animarla a que se ponga la que le que compre, que era mas discreta, de color oscuro y llegaba a las pantorrillas… pero se encapricho con su gusto…

en realidad, algo de celos me dio, ver como mis compatriotas y algunos turistas miraban de reojo el trasero de cielo riveros… pero bueno… debía dejarla ir en todo sentido… ella se sentía cómoda y feliz… armarle una escena de celos, en esos momentos estaba de más.

Cielo riveros noto mis gestos territorialistas o miradas contra los que posaban su mirada en sus nalgas… por momentos sonreía, viendo que me enfadaba un poco…

- ay tontito… estas celoso… dijo risueña.

- no… para nada… dije intentando disimular

- jajaja… estas rojito… creo que es la primera vez que te veo así… respondió.

- me alegra que te haga gracia... Dije intentando bromear.

Bueno, era cierto, en este tiempo, cielo riveros había sido la celosa de la relación, mas que nada por culpa de vane, así que como que cielo riveros lo tomaba a manera de graciosa revancha…

- ay… tu eres único para mi… ven… me dijo para acallar mi mal humor.

Me arrincono en una esquina algo escondida y oscura, se empino para besarme, al principio presa del mal humor la seguí mecánicamente, pero ella siguió y siguió besándome, hasta que mis labios cedieron y respondieron sus caricias y juegos, ahí si sentí su sonrisa de satisfacción.

Me rodeaba con sus brazos, y casi apoyándose contra mi… yo más bien la jale hacia el lado más oscuro… hasta que mi espalda sintió el frio de un metal, una barra que termino cediendo… era una barra que abría una puerta de emergencia…

- mierd… cuidado… dije trastabillando hacia el interior de un ambiente semi oscuro.

Cielo riveros mas bien se reía de la situación… era como una puerta secreta a otro mundo. Era una pequeña entrada que luego terminaba en unas escaleras hacia abajo. Por curiosidad seguimos la escalera, parecía no tener salida, debía ser alguna antigua puerta de escape, que en la remodelación que tuvo el aeropuerto, recientemente, se quedó sin uso y se olvidaron de bloquear.

- pero está cerrado… dijo al ver que terminaba en una pared.

- no importa… regresemos… propuse, quería ver si la puerta por la que entramos se podía abrir, sino estaríamos atrapados ahí.

- esperaaa… me dijo calmándome, tomándome de la mano y agrego… aquí nadie nos ve.

Me estampo contra la pared nuevamente, los besos anteriores que la habían encendido un poco, quizás el morbo de sentir que la celaba… yo mas bien preocupado de quedarnos atrapados y que perdiera el vuelo… y cielo riveros mas bien me saco de mi abstracción, tomando mis manos y dirigiéndolas a sus nalgas, con eso me desarmo.

Sus abultadas nalgas se sentían fácilmente a través de la delgada malla, me dedique a estrujarlas, cosa que a cielo riveros le excito más, ahogando jadeos en mi lengua, temblando de placer… mas aun cuando le bese el cuello…

- ayyyy… no hacía falta… uhmmm… me dijo sometida, ya estaba excitada, lo del cuello fue demasiado, sentí que sus piernas se le doblaban, tuve que sostenerla.

Esta vez, fue ella quien se bajó la malla, mientras me besaba, apenas por debajo del pubis. Si antes la sostenía de la cintura, ahora la tomaba por las nalgas para que no se desvanecería… cosa que la aloco más, su lujuria estaba a mil…

- no puedo masss… hazme tuyaaa… me susurro al oído.

Sin embargo, no espero ninguna reacción mía, automáticamente se volteo contra la pared, empinándose y abriéndose las nalgas para mostrarme su ansioso ano. Con la malla apenas debajo de su humeda vagina, y sus piernas se doblaban ansiosas.

- ayyy…. Uffff… que rico mi amorrr… exclamo sorprendida cuando me la clave violentamente.

No tuvo que pedirme más, ante ese espectáculo sumiso y ansioso que cielo riveros me brindaba, quizás por ultima vez, no le pensé mas y tampoco lo quise desaprovechar… luego nos preocuparíamos por como salir de aquel lugar.

Cielo riveros andaba desatada, se bajo el top que llevaba, sus senos tocaban la fría pared, sus pezones se erizaban, era una invitación para jugar con sus melones… así lo hice mientras ella temblaba de placer, una vez que tuve sus senos entre mis dedos, se dedico nuevamente a agarrar sus gordas nalgas para abrírselas…

- asiii amorrr… hasta el fondo… me partesss… uhmmm… vociferaba excitada.

Era una nueva locura en un lugar público, con el morbo de ser descubiertos quizás por última vez… quizás no había más después de eso… eso ya no importaba, era disfrutar el momento, lo que hacia que cielo riveros luciera más desinhibida y proactiva que nunca…

- ahhh… siii… asiii… que bien me rompes el culo amor… gemía.

Por momentos arañaba sus propias nalgas gordas para abrírselas poseída de placer, volteaba a mirar como mi morboso rostro disfrutaba de su abultado trasero, de aquel retumbido que se propagaba por sus suaves glúteos hasta la cintura que parecía querer partirse.

En otros momentos, victima de mi castigo anal, cielo riveros se sostenía contra la pared, resistiendo aquel golpeteo contra su arrugado anillo, que le hacia temblar las rodillas… por ratos, cruzaba las piernas como si se fuera a orinar… bajando las caderas y sacándolas mas contra mi… lo que parecía una invitación a tomarla de la cintura y atraer y alejar su gran trasero con fuerza…

- ayyy… nooo… uyyy… nooo… asiii no… exclamo intentando contenerse.

Se sentía cerca de desfallecer… pero no quería que ese momento terminara así… no lo quería así… se libero de su auto impuesta prisión contra la pared… me tomo de la mano… y en aquel pequeño ambiente entre la pared y las escaleras, improviso la posición que lee gustaba… si… en 4 patas, como perra… como le gustaba ser sometida…

- por favorrr… asi mi vida… métemela asiii… me imploraba mientras se iba acomodando.

Subió algunos peldaños en la escalera semi alfombrada, tiro su casaca al piso para amortiguar sus rodillas. Poso sus rodillas en las gradas, se reclino hacia el frente, apoyando sus codos en el descanso de la escalera, un par de escalones arriba.

Con sus manos en sus manos sosteniendo el rostro de manera pensativa, tratando de dejar una imagen excitante, de chica ingenua que iba ser abusada contra su voluntad… cuando la realidad era que en el fondo esperaba que me la coja como se le había hecho adicción en los últimos meses.

Si algún estimulo faltaba, cielo riveros cruzo un poco más las piernas, quebró la espalda, sus caderas se veían enormes, sus nalgas colosales parecían globos a punto de reventar… divididos por aquel cañón que dejaba ver aquel enrojecido anillo que deseaba disfrutar de mas tortura anal….

- vamossss amorrrr… reviéntame el culo… me exigía.

Me había perdido en las sensaciones, en el apreciar aquel magnífico paisaje… me subí apenas una grada de donde están sus rodillas, apoyé mis pies ahí… mis piernas ladeaban sus caderas, cosa que la hacia temblar de placer y ansiedad… sabia lo que se venía… su cara suplicante me imploraba que mi verga vuelva a atorar sus tripas…

- ayyyy… uffff…. Uhmmm… ouuuu… se quejaba a pesar de su ansiedad.

Aquella posición, clavándola desde arriba, la excitaba, pero la hacía sufrir, sentía que le estaba atornillando mi verga, por la oposición que había. En su sacrificio por ser clavada como se debía, como una perra, en su despedida, cielo riveros apoyo el rostro en la alfombra de la grada, liberando sus manos, para abrirse las nalgas nuevamente de par en par…

en su desesperación se clavaba las uñas que ya iban dejando huellas en aquellos inflados cachetes que tenia de posaderas, parecía que se iban a reventar por lo afilado de sus pintadas garras…

- asiii… así si va entrar… decía ansiosa, casi dándose valor.

Me acomode mejor, tomando también su cintura como punto de apoyo y mi verga como estaca yendo y viniendo de su interior cada vez mas armónicamente y sin resistencia de su goloso ano. En mi esforzada labor, me atrevi…

- como te gusta esto…

- siii… siii… como perra amorrr… como tu perra… amor… clamaba complaciente.

De a pocos el morbo, que había bajado por lo forzado de la posición, se fue recuperando por aquella dulce fricción de nuestros cuerpos, por el nuevo brío que le imprimía a los golpeteos contra sus bronceadas nalgas…

- ayyy… nooo…. Esperaaa… noo… se resistía nuevamente cielo riveros.

Con el rostro de lado, tenia el ceño fruncido, resistiendo la llegada de un orgasmo que terminara aquel dulce castigo que tanto le fascinaba… cielo riveros había resistido mas de la cuenta, igual que yo, que estaba al borde de tener el cuerpo acalambrado, desfalleciente, pero le daría su gusto…

- ahhhh… uhmmm… ouuuu… exclamo casi soltando un alarido.

Mientras su cuerpo se retorcía como nunca vi, casi acalambrada, con algunos nerviosos retortijones… la espalda se le contrajo mientras arañaba la alfombra y el rostro colorado, sudoroso… los ojos chinos de placer, lagrimeantes disfrutando con los ojos cerrados… la boca abierta y jadeante, que hacia juego con la posición canina que tenía…

- ayyy… uffff… no acabaaa… ahhh… decía como poseída.

Cielo riveros comenzó a chorrear líquidos de su palpitante vagina, parecía orinarse de placer, mientras sus piernas temblaban y cielo riveros en el limbo de la lujuria, tenía tantas contracciones y mini orgasmos remanentes terminaron por complacerme y mi verga comenzó a escupir leche hirviendo.

Pero yo no quería que termine así, quería que mi semen salpique en su rostro y boca… en un último esfuerzo, saque mi verga rápidamente, mi verga como manguera de bombero descontrolada comenzó a salpicar por todos lados.

Cielo riveros desfalleciente, desde el suelo, en cuatro patas, solo atino a voltear parcialmente el cuerpo y rostro para recibir algunas de esas gotas que me ayudo a exprimir. Por momentos llego a sacar la lengua, como cuando las niñas quieren probar las gotas de lluvia, así logro recibir ese blanquecino rocío… mientras sus cabellos y mejillas recibían otro poco, hasta su parpado.

- ohhh uffff… que ricooo… exclamé satisfecho, viendo el desastre que hice en el culo abierto de cielo riveros y su rostro gomoso por mi leche.

Sus nalgas abiertas de par en par, con su orto destrozado, en un gran orificio colorado, que comenzaba a expulsar parte de la leche. Mientras cielo riveros pasaba la lengua por los labios melosos, casi sin poder respirar, presa de toda la agitación… con el cabello enredado y lubricado por mi semen… dejo caer el rostro… vencida…

sin embargo, a los pocos segundos… cielo riveros se recompuso nuevamente. Se volteo y reincorporo valientemente… aun ciega por la gota de leche en su ojo, sin siquiera limpiarse, tenía otro objetivo…

- esto no va terminar así… se dijo febril.

Yo que estaba recostado contra la pared de la escalera, respirando ahogadamente… ella, arrodillada, casi se arrastro hacia a mi… buscando mi verga, que seguía mas erecta que nunca, humedecida de mis líquidos. Ella lo agarro con confianza, y casi sin haber recuperado el aliento… lo engullo como poseída…

- ufff… ay amorrr… no es necesario… ohhh… mierd… decía yo, que ahora chillaba como cerdo de placer.

Le tomaba de los cabellos, acariciándolos… esperaba que limpiara las gotas de leche en mi verga, pero cielo riveros me succionaba con tal dedicación, que volvía a incitar mis sentidos… tras unos segundos ya le seguía la corriente, casi tomando su cabeza por los lados y pajeandome con sus labios.

- esperaa… ufff… ay caraj… te vas a ahogarrr… exclame advirtiéndole.

Sentía que se me venia una nueva erupción, al menos le advertí… pero ella terca se clavo en mi verga como sanguijuela. Hasta que sin saber de dónde, cielo riveros consiguió arrancarme otra generosa descarga seminal, parecía que me orinaba… pensé que, si ella se casi se orino de placer, por que yo no… la diferencia era que ella se lo estaba tragando…

- cofff… cofff… ufff… ufff… decía casi ahogándose.

Aun con la boca abierta seguía recibiendo algunos chorros en parte de la boca y el rostro, mientras su lengua intentaba recuperar lo perdido… luego se dejo apoyar de lado contra la pared, semi sentada… estaba hecha un desastre de líquidos… en mi delirio, tome un poco de papel y la ayude a limpiarse…]

- ufff… esto si es digno de recordar… dijo algo melancólica pero feliz.

- si… le contaras a tus nietas este día… dije bromeando.

- jajaja… nuestras nietas... Les diré que su abuelo era un enfermo… dijo esperanzada.

No quise contradecirla, no era momento y era bueno ser positivos y optimistas respecto al futuro… total había planes, esperanzas y cosas por hacer para hacerlo posible… éramos jóvenes, cualquier cosa podría pasar…

la malla que tanto le gusto y se puso, termino maltrecha y salpicada de mis líquidos… lo que la obligo a cambiarse la malla que le compre, que era más recatada, y que atraía menos miradas… al menos la malla anterior cumplió su cometido, al generarme celos provoco aquel, quizás ultimo e impensado encuentro… ahora el tema… ¿cómo salir?...

Quedaba poco tiempo para el vuelo de cielo riveros… una vez acicalados de mejor manera… subimos nuevamente la escalera por donde habíamos entrado y comenzamos a golpear la puerta… hasta que tras unos minutos… para nuestra suerte o mala suerte (porque si perdía el vuelo la tenía más tiempo)… una señora nos escucho del otro lado y abrió la puerta…

fuimos casi corriendo al ingreso de vuelos internacionales… nuevamente, las lagrimas brotando de su rostro… y esta vez, yo apenas podía contener los míos…

- sabes que eres lo mejor que me ha pasado… me confeso.

- y tu a mi… entre toda esta locura en la universidad… fuiste lo mejor que le pudo pasar a un tonto como yo… le dije.

- siii… lo se… dijo bromeando, luego agrego… en serio te amo…

- yo también… me amo… le dije devolviéndole la broma.

- tonto… exclamo, golpeándome.

- lo sabes… te amo… le dije.

Entre besos y abrazos temblorosos y llorosos se nos fueron quizás minutos, que parecieron segundos apenas… hasta que por los megáfonos del aeropuerto comenzaron a llamar a los pasajeros del vuelo de cielo riveros… y las lagrimas comenzaron a caer por mi rostro mientras la dejaba ir, mientras intentaba sonreírle para darle valor

en el camino cielo riveros volteaba de cuando en cuando, hecha un mar de lágrimas a su vez y también procurando sonreír… una señora en el camino se compadeció de ella y la comenzó a calmar… quizás con la experiencia de haber pasado por un trance similar.

Mierd… ¿qué hare ahora?…
tras semanas de angustia, apenas aplacadas por algunas llamadas de cielo riveros, que funcionaban a manera de placebo para mi joven y enamorada alma herida… fui a visitar mi conciencia.

- ¿la amas?... Pregunto.

- creo que si… pero… es un cambio radical... Me gusta estar acá, siempre quise hacer cosas en mi país… allá está todo hecho… siempre pensé que, si me iba afuera, seria para aprender y luego regresar a aplicar lo aprendido en mi país… no para quedarme afuera ayudando a los países ricos a ser más ricos… dije con un aire romántico patriota.

- entonces ahí está tu respuesta… replico.

- caraj… guille, quieres hablar sin rodeos… no estoy para adivinanzas… dije frustrado, estaba bien que lo buscara por concejo, pero ya se estaba poniendo en plan yoda.

- tú mismo has dicho que si un día te ibas afuera era para aprender… pues hazlo, vete a estudiar, aprende… busca una beca o algo para irte a estados unidos…

- suena fácil… pero ¿cuánto demoraría eso?, digo esos procesos de selección de becas pueden llevar meses…duraremos tanto… agregue dudando.

- tu pregunta en realidad es ¿valdrá la pena?... Y esa mi amigo, es una pregunta que nadie más puede contestar… solo tu… concluyo guille.

- ¿estoy jodido?... Pregunte recordando su célebre veredicto.

- mas que lo habitual… con esto ganaste el premio nobel de los jodidos… dijo guille.

Era cierto, era una decisión que me correspondía a mí, valorando lo vivido con cielo riveros y lo que creía que podíamos llegar a ser. Mis dudas iban por el lado que un año atrás amaba a viviana… hace unos meses me enamore de cielo riveros… acababa de terminar la universidad, era joven, que voluble puede ser el amor a esa edad…

- y ¿cómo te va con marce?... Me atreví a preguntarle, ya habíamos hablado mucho de mí.

- ah bien… es una buena chica, trajo paz a mi vida, después de lo de (vane)… bueno, tú ya sabes después de que… dijo guille tímidamente, sin querer ahondar en detalles de vane o marce.

La respuesta de guille me hizo recordar que yo también recordé que hubo una época de tranquilidad en mi vida, una chica que me trajo paz. Tras el estrago de una relación filial con una prima. Antes de despedirme de guille, quise satisfacer una antigua curiosidad…

- oye… y… ¿nunca te llegaste a interesar por cielo riveros?... Pregunte sin tapujos.

- no, en realidad no… me respondió seguro, luego ante mi incredulidad agrego: después de lo sucedido con… tu ya sabes (vane, que a este punto era la innombrable), decidí evitar involucrarme con chicas interesadas en otras personas… para evitarme problemas.

Me pareció sincera su respuesta, bueno de todo esto, guille también aprendió algo. Luego me refirió, que cielo riveros y el, llegaron a compartir sus quejas sobre sus desventuras en el amor, pero que nunca llegaron a salir… ninguno estaba de ánimo para ahondar en esos temas.

Me daba gracia que tanto cielo riveros como guille evitaban nombrar aquello que les podía causar dolor… cielo riveros evitaba decir cáncer, guille obviaba nombrar a vane.

Regrese a mi casa pensando que las morenas de cuerpo escultural tienen una maldición para mi… me atraían de una manera pasional… sin embargo llevaba 3 experiencias que terminaban termino conmigo aquí y con ellas a kilómetros de distancia. …

la primera morena con la que me inicie joven en el sexo y exploramos lo que nuestra curiosidad nos impulsaba. Fue con la que, como jugando, descubrimos el sexo anal, que marcaría mis gustos en adelante. Pues bien, ella terminó yéndose al final del colegio, su cielo riveros se mudaba.

La otra morena en mi vida, que fue mi prima, que en realidad ya vivía fuera de la ciudad, solo que vino de visita. La quise, pero ambos éramos muy jóvenes, fue sexo puro y bestial, tenía el morbo y matiz de lo prohibido por la ser parientes. Su fogosa y joven entrega, mezcla de ingenuidad y aprendizaje. Tuve que renunciar a ella presionado por mi padre y por lo complicado que era y además porque era muy joven… pero sabía que no era amor.

Y ahora la última morena en mi vida… era cielo riveros, que se iría más lejos que las otras dos. Claro que hubo otras morenas, en mi poca experiencia, pero fueron historias pasajeras, que no valían la pena comentar en este momento, porque no me involucre más allá de algún encuentro pasional.

Ya habían pasado semanas desde que cielo riveros se fue, hasta que recibí una llamada, oí su voz y la reconocí…

- ¿cómo estás?... Pregunto.

- si llamas para burlarte, no estoy de ánimo… repuse.

- ¿por qué sigues tan agresivo conmigo?... Pregunto vane.

- vamos… ya sabes porque… dije aburrido.

- llamo en son de paz… para hacerte una propuesta… me dijo insinuante.

- te dije que no estoy para juegos… replique perdiendo la paciencia.

- pensé que te interesaría saber que mi cielo riveros tiene conocidos en estados unidos… en especial en new york… agrego un poco más intrigante.

Esta loca, se enteraba de todo, llegue a creer que tenía rastreado mi celular… me dejo un poco frio. ¿ahora que querrá esta bruja?...

- pues bien, por ustedes… ¿qué hay con eso?... Pregunte.

- buenooo… le dije a mi papa que quería estudiar mi maestría y ver universidades por allá…

- me alegro por ti… conteste sin darle cabida, pero envidiando su suerte.

- le dije a mi papa, que quizás para ayudarme, me podría acompañar alguien que haya estudiado conmigo y que haya terminado en los primeros puestos… agrego más claramente.

Algún día mi padre me diría que, si no me hubiera metido en tantos líos de faldas (con mi prima, con cielo riveros y otra más por ahí, quizás si me quedaba con viviana), hubiera terminado en primer puesto… lo cierto es que termine tercero… pero quiero creer que en los años de universidad cumplí en lo académico y no me prive de disfrutar la experiencia completa: con fiestas, deporte, líos amorosos, etc.

Vane en cambio, en la tabla de calificaciones, estuvo de mitad de tabla para abajo...Muchos decían que se graduó gracias a los generosos donativos de su padre a la facu. Ella parecía que estudiaba para darle gusto a sus padres más que por necesidad o interés.

En fin, el asunto es que, cuando tienes dinero, y tiempo libre, como vane, se puedes hacer lo que quieras, hasta (por joder) irte a estudiar al país donde está la novia del chico con el que esta encaprichada… el tema era… ¿a cambio de qué?...

- bueno, necesito quien me asesore en temas educativos… aparte podrías aprovechar conocer gente y postular a alguna beca o algo por allá… me dijo para interesarme.

- solo eso… ¿qué te asesore en temas educativos?… pregunte incrédulo.

- es que no solo iríamos a nueva york, tendríamos que ver otras opciones en otros estados: boston, chicago, washington, quizás los ángeles… y al final new york… es un viaje largo y cualquier cosa puede pasar… me dijo con algo de coquetería.

Mierd… a vane por graduarse, su viejo prácticamente le regalo un paseo por estados unidos para que evaluase opciones para estudiar maestría. A mí, mi viejo apenas si me dio un tibio abrazo y me heredo su reloj, que fue de mi abuelo también... Bueno, si tuvo su valor sentimental el puto reloj del abuelo.

Volviendo al tema, la propuesta de vane era como un viaje de luna de miel, paseándonos por estados unidos y visitando universidades… ¿qué esperaba?, que le rompa el culo en cada estado, frente a cada universidad… ¿creía que me enamoraría de ella en ese periplo?... Estratégicamente vane dejo new york para el final…

acaso pensaba llegar a new york y decirle a cielo riveros… ¡en tu cara perra!... A manera de revancha por lo de la disco. Mostrarle que ella gano, que se paseó por estados unidos con el chico de su rival, teniéndolo casi de esclavo sexual… ¿lo entendería cielo riveros?, que lo haría para estar más cerca de ella.

- piénsalo… y me avisas… agrego insinuante al no oír respuesta mía.

Me dejo con la cabeza intranquila ¿qué hacer?, es una buena oportunidad, me dije, pero era de nuevo entrar en el juego de vane, que con dinero y viendo mi necesidad creía que me podía manipular… esa bruja tenía tanto tiempo libre, que parecía que esto era uno de sus hobbies, eso de planear meterse en la vida de los demás…

quizás yo estaba en su lista de regalos o trofeos que nunca pudo tener… y cuando me tuviera ¿qué pasaría?... Una vez que satisficiera su ego y tomara su revancha, me daría una patada… ya dejándome como apestado frente a cielo riveros… ¿valdría la pena arriesgarse?

Era como hacer un trato con el diablo, o la diabla, por mi alma, era muy arriesgado y peligroso… porque vane era una niña rica y caprichosa… era una hermosura, con un cuerpo escultural, pero estaba loca… y ya me comenzaba a dar miedo…

volvió a sonar el teléfono… ese piénsalo y me avisas, no duro mucho, vane parecía ansiosa…

- vane… es muy pronto… déjame pensarlo un poco más… dije abrumado.

- no soy vane… me respondió tímidamente.

- ah discúlpame…. Recién veo tu número… lo siento… dije apenado.

- ¿estás bien?… pregunto preocupada.

- ah… si, si, todo bien… respondí, atribulado.

- no seas mentiroso, te conozco… y bueno, llame a tu madre para saber como estaba ella y me conto lo que paso… me dijo, como para evitarse mi rollo de respuestas esquivas, después de todo, me conocía.

- mi madre… bueno, que se puede esperar… seguro ella te llamo a ti… dije desanimado.

- ay, no la culpes, ella se preocupa por ti… repuso a manera de reproche.

- es que, después de todo lo que paso, no me corresponde hablar eso contigo… me excuse.

- ¿por qué no?... Quiero creer que aun somos amigos… me dijo tiernamente.

- ah… no se… sería raro… dije resistiéndome.

- solo salgamos a conversar y ya… insistió.

- está bien… viviana… repuse.

En los últimos días había sido una avalancha de posibilidades: la propuesta de vane para irme con ella a estados unidos en el corto plazo… la opción que me daba guille de tentar una beca e irme a estudiar allá, que lo veía a mediano plazo… la llamada de viviana y sus deseos escondidos de retomar la relación que se truncó por la aparición cielo riveros… esto último estaba latente y frente a mí.

- hijo… y como para cuando piensas trabajar… dijo mi viejo.

Había irrumpido en mi cuarto, mientras yo buscaba respuestas en el techo, él quería respuestas de frente… estos días había vegetado en mi casa, sin ánimo de hacer mayor cosa… ya estaba graduado, lo lógico que, tras unos días de descanso, buscase empleo… pero mi viejo no veía indicios en mi de querer postular a un empleo… me veía perdido, y quería meterme presión para encausarme…

- papa lo se… pero (no estoy para sermones) déjame tramitar mis papeles primero… dije, buscando ganar tiempo para superar lo de cielo riveros o buscar cómo resolverlo.

- se que estas con el ánimo bajo por lo de tu chica… pero la vida no espera… muchos se han graduado como tú y ya están viendo opciones… insistió.

- sali en el cuadro de honor de mi promoción… sabes que cuando pude trabaje como profesor y como practicante, hasta trabaje en el campo ayudando a mi tío…no soy ningún ocioso… es solo que ahora no se… no se que hacer... Por un momento podrías… podrías solo pretender que me entiendes… y darme un concejo para esto… le reclame abrumado.

Estaba hecho mierd… como para pensar en empleos… ya había pasado por una situación similar al dejar a mi prima… al terminar con viviana… pero esta vez era diferente, era peor… me daba vergüenza que mi viejo me viera así, pero ya había tocado fondo… él se dio cuenta y bajo la guardia.

- en mi vida yo también tuve atracción por una prima, tuve una cielo riveros en mi universidad y una viviana… ¿sabes a quien elegí?... Me pregunto.

- ¿a mi madre?... Respondí tontamente, no estaba para acertijos.

- si, tu madre fue mi… mi viviana… yo la elegí y nunca me arrepentí de hacerlo… me dijo.

Mi padre, salvando distancias y épocas, me dio a entender que no he sido el único idiota con este dilema… el en su momento eligió a la chica que le dio tranquilidad, que equilibro su mundo, con la cual pensó que podría formar un buen hogar, que también lo hizo entrar en correa y lo ayudo a madurar…

ahora entendía porque mi viejo y mi madre adoraban a viviana… era la elección lógica… la nuera que cualquier madre querría… sin embargo mi padre al verme más confundido, agrego.

- pero esa fue mi decisión… nadie va tomar la decisión por ti… lo único que puedes hacer es elegir a la persona que creas correcta para ti… no por 5 minutos de pasión, ni por la belleza que dura poco… debes pensar con quien te gustaría pasar tu vida, formar una cielo riveros, afrontar momentos difíciles… y una vez que lo decidas arriesgarte por esa persona.

- si la decisión que tomo no te gusta… le dije.

- es tu vida hijo… nadie va vivirla por ti… yo tengo mi cielo riveros, mi trabajo, mis logros… debes madurar y hacer tus elecciones y aprender a vivir con ellas… haz lo que desees, pero haz algo, no puedes seguir así… finalizo su sermón, casi me retándome.

En parte tenía razón, mirando el techo no solucionaba nada. Era visto que no aceptaría la propuesta de vane, que siempre terminaban mal. Caer con viviana en esta situación, tampoco era justo para ella… me enfocaría en la solución de guille y de mi viejo… conseguir trabajo y tentar una beca.

Conseguí un trabajo en poco tiempo, me mantenía la cabeza ocupada, mas aun con la búsqueda de posibilidades de beca y estudiando inglés (para repasar), después del trabajo. Claro que, en ambos lugares, vi algunas miradas de interés de chicas, en el trabajo y el estudio… pero no quería meterme en otras complicaciones… por el momento no… igual las complicaciones me encontrarían…

estaba enfocado en cielo riveros… las llamadas de noche que nos hacíamos casi todos los días, mantenían mi esperanza en la relación. Me contaba como le iba… por momentos las cosas se ponían calentonas con los recuerdos… me enviaba algunas fotos sugestivas y me daba un pajazo con su voz, mientras ella también se incentivaba también.

Claro que no era lo mismo, pero algo me aliviaba y a ella. El único disconforme era mi viejo, por las cuentas de teléfono, a pesar que yo las pagaba, que en realidad no eran tan costosas por el horario en que las hacíamos, pero mi viejo sentía que debía aprovechar mejor mi sueldo.

Ya había pasado unos meses, era evidente que no me la pasaba encerrado, salía con algún grupo de amigos del trabajo o del instituto de inglés, a pesar que algunas me mandaban indirectas para salir solos. Por su parte cielo riveros también salía con sus primos o un grupo de amigos en el barrio donde vivía.

Amor de lejos… complicado… las cosas tampoco ayudaban… si bien al inicio con cielo riveros, las cosas parecían conspirar para que estemos juntos a pesar de javier y vane… ahora más bien, parecía todo lo contrario, la empresa donde trabajaba mi padre andaba mal, me tocaba apoyar más en la casa… por los gastos médicos de la mama de cielo riveros, su padre vendió la casa y se fue a vivir a un pequeño depa alquilado... Mas me daba la impresión que estaba mas cerca de hacer maletas e irse, que de que cielo riveros regrese.

Mas aun con el tiempo, acepte salir con una que otra chica, pero al contar mi situación, más por el interés que tenían en mí, en vez de animarme a seguir me desanimaban. Cielo riveros por su parte, resistió mas que yo, pero me iba contando de un joven doctor que recién termino la carrera y que trataba muy bien a su madre y bueno le había insinuado para salir, pero ella lo rechazo varias veces, que por ahí por amabilidad pensaba en aceptar … de alguna manera sentía que me estaba pidiendo permiso o advirtiendo para que me apure…

no podía ser hipócrita, le di libertada de decidir… total yo ya había salido un par de veces, pero nada serio, solo pasar el rato, al final casi siempre en medio de la cita, terminaba pensando que me había perdido de ver en la tele: algún partido o película mas interesante que la chica que me acompañaba…

esas situaciones se estaban dando, sin darme cuenta… ya había pasado un año de aquella fiesta de guille en la que terminé peleándome con javier… en realidad, me lo hizo recordar una invitación que recibí de guille, para otra fiesta… esta vez sería una especie de reencuentro de los graduados…

en principio no quise ir, sin embargo, cielo riveros por gratitud, ya había aceptado cenar con aquel joven médico que atendía a su madre. Entonces no estaba de ánimos para quedarme solo en casa, pensando lo peor… iría a la fiesta a emborracharme y olvidarme de todo… si lo de cielo riveros era el principio del fin, quizás yo también debería tomarme en serio aquello de empezar a ver a otras chicas.

En la fiesta, prácticamente los anfitriones eran marce y guille, que parecía que ya no temían presentarse como pareja. Los felicite, mientras me robaba a guille unos minutos para contarle mi desgracia.

- el tiempo y la lejanía… ella está pasando una situación difícil allá sin el apoyo que tu le dabas acá… sentencio guille como para justificar a cielo riveros, y luego agrego quizás para congraciarse conmigo: en realidad ese medico también es un pendejo, sabiendo como esta ella, de alguna manera está sacando provecho de la situación.

- si es un hijo de mala madre…

- solo tienes una opción…

- ¿cual?

- beber… salud…

- eso no me ayuda…

- tampoco estar pensando en cosas que no han pasado aun, quizás luego de esa cena, cielo riveros te extraña más aun… ¿qué se yo?... Te estas envenenando, satanizando las cosas… me dijo.

Al fin y al cabo, le hice caso, bebí y bebí, baile con algunas amigas, y la clásica pregunta ¿qué es de cielo riveros?... Ya me estaba aburriendo de explicarles… aunque por ahí note que algunas lo preguntaban de buena fe, mientras otras parecían tantear la situación para saber si estaba disponible o no… hasta me ofrecían salir a tomar un café o algo para conversar… ponernos al día… ¿por qué no?, me decía, ya tenía citas para las siguientes semanas.

Hasta que sentí un frio recorrer mi espalda, así como unos dedos que se paseaban con confianza por mis hombros…

- ¿me extrañaste?... Escuche decir coqueta.

La expresión de guille de felicidad a pocos metros de distancia, se tornó turbia. Automáticamente se acercó a mí, mientras yo volteaba en mi estado etílico a confirmar lo que aquella voz me insinuaba.

- ¿qué haces aquí?... Pregunte sorprendido por su audacia de aparecerse ahí.

- cierto… yo no te invite… agrego guille un poco agresivo.

- vamos chicos, es un reencuentro… ya paso el tiempo… hay que olvidar el pasado y dejar las cosas seguir… dijo vane bastante suelta de huesos.

- para ti es fácil decirlo… agrego guille, ofendido recordando todo lo que sufrió por ella.

- ok… guille, solo bajemos las revoluciones… le dije al oído.

Guille entro en cuenta que no debía armar un lio, mas aun en la reunión en la que aparecía con marce como su pareja. No debía dejar que vane le malogre la fiesta. Vane nos sonrió al ver que secreteábamos, luego se fue por un trago, pero parecía intenciones de volver con nosotros, creo que le encantaba torturarnos.

- le dijiste algo a marce de lo tuyo con vane… pregunte tratando de ser discreto.

- no… preferí obviar eso… dijo guille preocupado.

- bueno… yo hubiera hecho lo mismo… le dije.

- danny… puedo pedirte un favor… en realidad me debes varios… dijo guille como para que no me niegue.

- si claro, ¿qué cosa?... Pregunte intrigado.

- podrías mantener a vane lejos de mi… y de marce… me dijo un poco angustiado.

Guille recién empezaba formalmente con marce, y esa arpía venenosa de vane podía malograr aquello que pintaba bien. A regañadientes acepte hacerle el favor a guille, era cierto, había sido un buen amigo este tiempo… así que valía la pena comerse ese sapo o culebra por él.

Mientras vane regresaba, guille volvía a su labor de anfitrión, de acá para allá con grupos de amigos, paseándose con marce. Claro que vane se percató, y ya me había traído un trago, había saludado a algunos amigos. Aunque lo cierto era que en esa reunión conocía poca gente.

La mayoría de su grupo de amigos eran más adinerados y relajados, ellos aún seguían en la universidad llevando cursos. Vane apenas si había socializado con la gente de esa fiesta, lo que hizo que se pegara más aun a mí. Para evitar hablar o recordar mis penas con cielo riveros o que vane sacara provecho de eso, me puse a bailar con ella. A la distancia veía la sonrisa aliviada de guille por mantener a vane lejos y ocupada.

Intentaba mantener mi distancia, pero vane cada que podía me frotaba su cuerpo al mío… tentándome con sus redondeadas formas. Había venido como diabilla, con un vestido rojo pegado al cuerpo, con un sugerente escote que dejaba ver sus blancos melones y una mini corta que dejaba ver sus bien formadas piernas y envolvían su gordo trasero.

En mi embriaguez más de una vez me perdí en sus senos, mientras ella sonreía coqueta y complacida de que sus atributos causaran ese efecto en mí. Mas de un amigo que había ido en pareja me envidiaba, mientras otro tipo de envidia tenían las otras chicas que se habían ofrecido a salir conmigo, al ver como vane se llevaba mi atención tan fácilmente.

En un momento vane quiso descansar, me pidió que la espere un rato, desapareció unos instantes y regreso con una botella de vino que robo por ahí con unas copas. Me dijo que sentía calor, así que salimos al jardín a refrescarnos, beber y conversar… en mi borrachera no me daba cuenta que estaba tendiendo su trampa, o si lo intuía, pero me dejaba llevar para evitar pensar en cielo riveros.

Nos sentamos en unas bancas a manera de columpios en el jardín, apenas a unos metros del baño donde le había roto el culo a cielo riveros un año atrás. Divague en recuerdos unos segundos, al reaccionar vane se había acurrucado a mi lado, en una confianza casi como de pareja.

Disfrutaba que le viera los senos y las piernas, en esa posición sentada, la mini se le había replegado dejando ver parte de su pequeña y diminuta ropa interior negra. Me contaba en gracioso reproche que por mi culpa viajo con su mama estados unidos, aprovecho para mostrarme algunas fotos en su entonces moderno celular, mientras aprovechaba en pegar su rostro más a mí.

Vane al notar que su cercanía, a pesar de mi embriaguez, comenzaba a turbarme y ponerme nervioso, avanzo mas aun… puso su mano en mi pierna, mientras mi verga iba endureciendo al sentir también su pecho de lado en el mío… no sabia como, pero ya la estaba abrazando.

- pensar que… dijo melancólica, mirándome deseosa.

- ¿qué cosa?... Pregunte curioso.

- aquí debiste romperme el culo hace un año… dijo morbosamente para incrementar mi excitación.

- ah sí… repuse incrédulo de lo que oía.

- debí ser yo… no ella (cielo riveros)… a la que sometieras como una perra en ese baño… dijo también excitada.

Nunca la había oído hablar así, creo que en este punto ella también estaba embriagada y desinhibida, había pasado un año después de todo. Me confeso que aquella vez había venido preparada para aceptar que le hiciera cualquier cosa, que me tenia unas ganas, que no le hubiera importado hacerlo en algún cuarto de esa casa o en ese baño.

Lo siguiente que supe, ante mi indecisión por el conflicto mental que tenía (esa mujer era el diablo), fue que vane ya tenia su lengua en mi boca y me acariciaba la verga por sobre el pantalón. No le importaba si nos veían o no de adentro o si alguien venia… quería hacer aquello que hace un año pensó que cielo riveros le había quitado… ella no sabia que lo de cielo riveros venia de antes…

- espera que nos verán… dije en lo poco de conciencia que me quedaba.

- ven… me dijo presurosa, jalándome de una mano.

Me llevo a aquel baño donde según ella debí inaugurarle el ano un año atrás. En el camino me percate que su mi se había levantado y dejaba ver una parte de sus musculosas nalgas (pensar que hoy en día mostrar parte de las nalgas en los shorts se está volviendo normal), lo que me hacia tener la verga en ristre en el pantalón.

- ahora vamos a corregir las cosas… vas metérmela por el ano… asi como te vi ese dia… me dijo lujuriosa, levantando un poco mas su falda y haciendo a un lado su hilo dental.

- ¿cómo? ¿así?... Dije excitado clavándole media verga sin dejarla reaccionar.

- ouuuu… siiii…. Uhmmm…vocifero extasiada.

La había estampado contra el lavabo del baño, como un año atrás lo hacia con cielo riveros, vane también se sujeto del lavabo con las manos, mientras a través del espejo veía su expresión de dolor y morbo por sentirse clavada como merecía y deseaba.

Al reaccionar tras unos segundos disfrutando mi verga en su ano, ella misma se bajó el escote del vestido, dejando sus redondos senos al aire. Sus pezones habían endurecido al máximo, solo me quedo estrujarlos mientras ella sonreía complacida y excitada.

Comencé a bombearle su blanco trasero, mientras comenzaba a gemir y yo estrujaba sus carnosas nalgas. No eran suaves como las de cielo riveros, pero su gordas y firmes. Por momentos vane buscaba mis labios ansiosa, descargaba todo su dolor en húmedos besos con lengua.

- uhmmm… no puedo creer que esté pasando… uhmm… musitaba.

- ¿qué cosa?... Pregunte.

- que me estés atorando el culo aquí… decía lagrimeante de felicidad.

Por momentos se quebraba mas para recibirme, se abría las nalgas, apoyando el rostro al espejo, las mejillas coloradas, algo de sudor, sus nalgas enrojecidas por el martilleo de mi ingle. Yo tomaba su cintura, en mi embriaguez era una de las pocas cosas que me mantenía en equilibrio.

Hasta que en un momento de lujuria vane se despegó de mí, repitiendo frenéticamente una y otra vez como poseida:

- perrito… perrito…perrito… decía jalándome.

Quería que la posea en 4 patas como había visto aquella vez que me clavaba a cielo riveros. A estas alturas actuaba en automático, si bien no quería pensar en cielo riveros, quizás mi ego estaba herido al saber que había aceptado salir con ese médico. Quizás en mi embriaguez estaba en modo venganza. Por otro lado, mi ego estaba inflado por ese monumento de mujer que era vane, que estaba obsesionada con que le rompa el culo, que cumpliera su fantasía de hace un año.

- oh… sii… asii… asiii… debías partirme el culo… gimoteaba satisfecha.

Vane ya se había ubicado como perrita en ese sucio piso de baño, no le importo. Había quebrado la espalda y abierto las piernas, apoyando los codos en el suelo. En mi desvarió etílico al inicio hice diana en su vagina… cosa que no pareció agradarle…

- no… no… ahí nooo… se quejó, casi colocando su mano en su vagina para evitar que mi pene entre por ahí.

Fue entonces que me la clave violentamente por el ano, le hice arquear la espalda en rigor mortis, pero exclamo satisfecha su victoria, de que al fin le partía el culo como ella lo deseo desde que nos vio en ese baño… quizás sentía que estaba corrigiendo las cosas, que ahí se volvería a enrumbar lo que según ella debió ser... Que yo debí ser el que le inaugure el ano, no guille en una treta… o que yo la poseyera después por casualidades no por elección, como esa noche.

Recordé brevemente las cosas que vane nos hizo pasar, me provoca castigarla más… me pare y con mis piernas ladeando sus caderas, mi verga comenzó a clavarla hacia abajo, vane resistió de buena gana, más aún empino más las nalgas.

- uhmmm…. Auuu… uhmmm… me desgarras el ano… uhmmm… se quejaba gustosa.

Lejos de asustarse por el criminal castigo que le propinaba a su esfínter… estaba feliz de que me desperara por romperle el culo. Reventaba de placer… hasta que no pudo más… en un momento, soltó un sonoro alarido, mientras su cuerpo se retorcía de pies a cabeza, pasando luego a una tensión máxima disfrutando de un sonoro orgasmo, mientras su vagina hacia agua, botando chorros.

- ouuu… uhmmm… ufff… no lo creo… hiciste que me orinara… uhmmm… clamo satisfecha.

Mientras mi verga comenzaba a escupir litros de leche, lo que hacia que su columna se contrajera con cada borbotón, que a su vez disfrutaba con unos temblorcillos. Llevaba tiempo sin disfrutar de un estrecho agujero y de un cuerpo escultural… por lo cual demore en botar mis líquidos a lo que vane sonreía complacida de saber todo lo que me hizo botar.

Tras unos instantes de disfrutar ese orgasmo, se repuso mientras yo me paraba y me apoyaba cansado contra el lavabo. Vane se acerco deshecha de rodillas, se asió a mi verga y comenzó a limpiarla, pajeando y succionando obsesionada…

- tu me vas a dar más… le dijo a mi verga.

Mi verga a punto de hacerse flácida, se reincorporo, mientras vane comenzaba a mamar con mayor vehemencia… creo que recordó aquella vez que me atrapo vaciando mis líquidos en la boca de cielo riveros y quería lo mismo… faena completa… o habrá pensado que, si yo hice que se orine hace unos instantes, ella me haría lo mismo.

- ohhh…. Ufff… exclame sorprendido al ver que una nueva descarga de leche salía.

Vane se trago una parte, mientras que por un rato libero mi verga, para dejarla que salpique su boca y rostro, quizá aquella imagen le llamo la atención en la cabaña del club campestre, tal vez pensaba que eso me complacería más. Lo cierto que, tras eso, me lamio el semen remanente y me dejo descansar.

Esa loca me había exprimido y exorcizado mi recuerdo de cielo riveros, y sus recuerdos de lo sucedido en este tiempo. Luego de un rato, se repuso con mi ayuda y empezó a acicalarse. Se reía por momentos de aquella travesura o esa fantasía que tenia de tiempo. Luego pareció volver en si…

- mierd… hay gente en la fiesta aun… ¿se habrán dado cuenta?... Exclamo.

- no creo… dije, aun desvariando y ebrio, tampoco me importo en ese momento.

- danny mejor vámonos… dijo, volviéndose pudorosa.

Una cosa era actuar como una perra en la intimidad, o todas las locuras y enredos que conspiro contra guille o conmigo en privado… pero otra cosa era que la gente vea que era una arpía fácil capaz de meterse con un tipo cuya novia está de viaje…

nos acicalamos rápidamente y huimos de ese baño, según nosotros discretamente, salimos a la calle y tomamos un taxi. La deje en su casa, con un tibio beso en la mejilla de despedida, quizás un poco de vergüenza en ambos.

Llegue a mi casa y me deje caer en la cama, había un mensaje en un papel que mi madre dejo en mi escritorio, sobre que cielo riveros había llamado. No estaba de ánimo para saber cómo le fue en su cita con el médico, aparte la conciencia me atacaba por haber caído con vane tras meses de haber rechazado viajar con ella.

Desperté por un ruido molesto… era solo el teléfono, pero me sonaba a sirena de bombero.

- eres un idiota… me reclamo guille al fono.

- espera… espera… que estoy con resaca… le dije viendo que ya era de día.

- te dije que la distraigas… no que te la tires frente a todos… vocifero guille.

- oye… mierd… no fue frente a todos… fue en el baño… me excuse estúpidamente.

- cierto… pero todos se dieron cuenta… me dijo socarronamente.

- caraj… ay la cagu… me recrimine.

- su vas a hacer esas tonterías con esa arpía… se mas discreto…

- ¿tu crees que alguien? Ya sabes… le vaya con el chisme a cielo riveros… pregunte.

- mira… varias te echaron el ojo ayer… no faltara una que de despechada pueda decir algo… me advirtió guille.

- disculpa por lo de ayer… deja que hago unas llamadas para solucionar las cosas…

- ok… pero no se si funcione… suerte… me dijo guille.

Antes de empezar a llamar, prendí mi laptop… a veces cuando cielo riveros no podía conversar por fono conmigo, me dejaba un correo... Y si lo hizo… muy breve y conciso, por cierto.

- lo pensé y no quise salir con ese chico… pero ya me enteré… ¿cómo pudiste hacerlo? Después de todo lo que paso ¿con ella?... Adiós… (cielo riveros)

mierd… caraj… put… mad… de todas las chicas que se me insinuaron en el trabajo y el instituto, se me ocurre serle infiel con vane en una reunión de amigos de universidad que conocen a cielo riveros. Ya no era como antes, que la tenía cerca y podía intentar recuperarla… ella había rechazado salir con ese chico… ahora con mis actos quizás la empuje a hacerlo…

¿por qué siempre termino embarrándola?… ¿el karma?... Fue el principio del fin… sin embargo el destino me compensaría a su manera con una oportunidad que se haría esperar…
como imaginaran, después de mi última metida de pata (o de verga en el ano de vane) las siguientes horas y días me las pase intentando contactar a cielo riveros, que nada quería saber de mí. Dejándole mensajes, correos, hasta tratando de usar de intermediario a guille, ya que marce molesta conmigo no quiso apoyarme.

Sentí que inconscientemente me había hecho hará-kiri, que yo mismo había boicoteado mi relación para no prolongar la agonía, tras recibir toda clase de comentarios que no funcionaría un amorío a distancia y, bueno, por mis celos exacerbados ante la salida de cielo riveros con ese médico.

Sinceramente, esta vez no me hice tantos dramas como las veces anteriores, ya sentía que la causa estaba perdida, la distancia y el silencio fueron mis respuestas…

así empezó mi periodo de verga loca, no quería pensar, ni recordar o imaginar lo que estaría haciendo cielo riveros, solo me dedique a tener sexo fácil y rápido con cualquier chica que me diera cabida en el trabajo en el instituto de inglés, evidentemente, teniendo algo de esperanza que cielo riveros en algún momento me perdone. Al menos evité caer con alguna ex compañera de facultad… aprendí mí lección.

Sobre vane… bueno, esa mujer cambiaba de animo con cada brisa de aire… por momentos podía ser intrigante, seductora, desinhibida y por otros cohibida, al punto de desaparecer. Así lo hizo, ella hacia sus maldades discretamente, pero ahora ante la vista de todos, genero malos comentarios entre los de la facu y bueno… se tomó unos meses sabáticos viajando a europa a seguir buscando universidades donde estudiar su maestría.

Tampoco es que yo haya vislumbrado algún tipo de relación con vane, solo me deje llevar. Quien como ella que tenia los recursos para desaparecer… en mi caso, mas bien las cosas en los meses siguientes empeoraron en la economía cielo riverosr.

Mi padre se quedo sin empleo y encima con deudas que contrajo intentando salvar un terreno cielo riverosr que mi tío administraba de regular a mal. Ahora que tenía tiempo libre, mi padre viajo para intentar reflotar aquella hacienda… me dijo que lo hizo por conservar la herencia de la cielo riveros, sin embargo, eso me convirtió en el sostén de mi cielo riveros.

Los ahorros que había logrado pensando en viajar a ver a cielo riveros o postular a estudiar allá, se iban dilapidando, tuve que dejar de estudiar inglés. Como dirían, empezó la época de las vacas flacas.

Así sin querer había pasado tres años desde que cielo riveros se fue. Vane a su vez había regresado, estudio una maestría en cualquier cosa, con tal que fuera en europa y que sus padres no se sientan defraudados. Busco que contactarme y seguir enredándome, pero ya no quería volver a meterme con esa loca caprichosa que tanto lío me causo, estaba mejor con mis relaciones fugaces.

Había tanta mujer cercana a los 30 años en mi oficina, sintiendo que se les iba el tren, y se arriesgaban a todo con tal de atraer a algún joven profesional con algún atisbo de madurez y discreción…

lo cierto es que también parecían un tanto desesperadas por atrapar a alguien y terminaban espantando gente. A veces se presentaban con una onda en plan de amigos con derecho, uno caía y tras unas semanas se ponían intensas queriendo formalizar y tener hijos. Como verán fue mi época de cinismo también.

Cada que quería torturarme, tras terminar alguna de esas relaciones fugaces, o escaparme mas bien de la trampa que parecían tenderme ese tipo de chicas, iba a visitar a guille. A que me cuente como le iba a cielo riveros y bueno ver si al menos me había perdonado.

Tras unos meses de soledad, después de que me terminara por correo, por culpa mía… al final cielo riveros termino aceptando a salir con aquel médico. Parecía que era descendiente de padres latinos, un tipo muy correcto y medio nerd, según las referencias que le daba cielo riveros a guille. Era de esperar, no podía reclamar mas aun cuando yo la empuje a eso con mis metidas de para con vane, mas aun con todas las metidas de pata en la oficina y el instituto que tuve en esos años.

Mas bien, otra mala noticia, habían desahuciado a la madre de cielo riveros, le quedaban unas semanas, quizás meses de vida. El padre de cielo riveros termino por cerrar todos sus pendientes aquí y se fue a estar con su cielo riveros en esos últimos momentos. Aunque sabia que no me respondería, igual le envié un mensaje por correo de apoyo a cielo riveros.

Así, quebrado en la economía cielo riverosr y metido en relaciones sin sentido, poco tiempo después me llamo guille para informarme de que mi suegra estaba en cuidados intensivos, ya agonizante, dando su última batalla, era cuestión de tiempo, horas, quizás días.

- ay mierd… pobre cielo riveros… me gustaría estar ahí… aunque no se si me recibiría… dije apenado.

- en realidad, la última vez, valoro tu presencia en el hospital… me animo guille.

- si, pero mi situación es un desastre (ya sabes el lio que me dejo mi padre), quizás pueda pedir vacaciones… pero como pagaría el viaje y la estadía…

- buenooo… quizás te pueda ayudar en los pasajes… tengo algunas millas acumuladas que quizás te pueda transferir para que viajes… dijo modestamente guille, que en los últimos meses había viajado mucho al extranjero para llevar cursos y ver tecnologías que aplicar al negocio cielo riverosr.

- ¿en serio?... Te lo agradecería… le dije incrédulo.

- bueno sabes que mis padres no me dan dinero en efectivo para evitar que lo despilfarre, solo me financian algunas comodidades… así que al menos en eso te podría ayudar.

- eso es bastante guille, ya lo demás veré como lo consigo… dije agradecido.

En realidad, las noticias volaban… mientras veía los horarios de mi posible viaje, y eligiendo que riñón vender para pagarme un alojamiento. Recibí un llamado de un numero local, atendí pensando que podría ser un banco dispuesto a ofrecerme un crédito o algo que me permita solventar gastos.

- otra ves tu… dije algo indignado.

- espera… no cuelgues… dijo vane tímidamente.

- que quieres esta vez…

- mira se dé la situación de cielo riveros, me comentaron que te apoyo guille con los pasajes… déjame apoyarte con el alojamiento.

- a cambio de que… respondí desconfiado

- de nada… solo quiero congraciarme por todos los problemas que cause.

A regañadientes acepte su propuesta. Vane tenía un amigo que estudiaba en new york y que estaba pasantía en europa, así que su mini departamento de estudiante estaría vacío, las siguientes semanas, así que logro que me lo ceda.

Bueno tenía pasajes y alojamiento, lo que me quedaba aun de ahorros para casos de emergencia, los usaría para sobrevivir allá, esto calificaba como emergencia. Feliz con todo esto… pero como lograr que cielo riveros me reciba sin reproches si ni siquiera me respondía. Pensé que algo se me ocurriría en el viaje, lo más seguro era que sería la última vez que la viera.

Justo antes de salir al aeropuerto, recibí la llamada de guille… era para darme la noticia del deceso de la madre de cielo riveros, prácticamente en los brazos de ella y en compañía de su padre. Mierd… debería estar allá… me apresure en salir… aunque igual eso no ayudaría a que el avión salga más rápido.

En el viaje apenas si dormí, buscaba las palabras que decir cuando tuviera la oportunidad de ver a cielo riveros, lo repasaba de diferentes maneras, afinando palabras para no meter más la pata. No recuerdo ni donde hice escala.

Al llegar al aeropuerto cruce como zombi la zona de migraciones, masticando mi inglés, me sentía hablando como tarzán, igual que cuando los gringos intentan hablar español y no conjugan bien los tiempos o verbos. Me sentía tonto, aparte que estaba tan distraído que no prestaba atención a las indicaciones y me las repetían.

Tras varias horas de viaje… al fin creí tener el discurso perfecto en mi mente, recogí la maleta con una sonrisa de alivio, enrumbé hacia la salida a procurar no ser asaltado por algún taxista… mientras caminaba por el pasillo, se me nublo todo… se me cayó la maleta… ella estaba ahí…

pensé que, tras horas sin dormir, días en realidad por la ansiedad de verla… quizás ya estaba alucinando por el cansancio… estaba a unos 15 metros de distancia, ojerosa, demacrada, pero linda como solo ella… me miraba con pena, rabia, decepción, tristeza…

por inercia empecé a acercarme, mientras ella también lo hizo rápidamente… no salió ni un sonido de mi boca. Estábamos frente a frente… la gente no importaba… y la primera reacción que tuvo cielo riveros fue la mas lógica… me dio una sonora bofetada… me la merecía.

- tu… tu… maldito idiota… tu… maldito… maldito… tu… repetía, mientras golpeaba mi pecho con algunos débiles manotazos que perdían fuerza mientras ella sollozaba.

Termino por hundir su rostro en mi pecho, mientras lloraba desconsoladamente, no solo era por mi estupidez que la decepciona, era también por lo de su madre… la suma de todo. Tras unos momentos de un torpe forcejeo, termino por dejar que la abrace y la consuele.

- lo siento… lo siento… por todo… por mi… por lo de tu mama… por todo… lo siento… le repetía mientras una lagrima de tristeza y arrepentimiento por lo hecho, recorría mi mejilla.

Al final de cuentas mi ángel guardián (aunque suene gay), guille, le había dicho a cielo riveros que estaba en camino para allá. Según el, le movió el piso a cielo riveros saber que, a pesar de mi precaria situación económica, iba para allá por ella… aunque sabia que ella no era libre como antes.

Salimos del aeropuerto, y nos fuimos en busca de su auto… era incomodo, no sabíamos que decir…

- deseas que te lleve a algún lugar… me dijo… aunque… uhmmm…

- ¿qué cosa?}

- bueno… hay una reunión cielo riverosr en casa de mis tíos… mi papa va estar ahí, le va dar gusto verte… quizás nos quieras acompañar… dijo con esa cara de no saber si hacia bien o no al invitarme, me imaginaba que en algún momento llegaría su novio.

- ah… claro… seria agradable verlo de nuevo… dije, tendría que tragarme el ver al tipo que me la robo, pero había ido por ella para darle apoyo moral.

La incomodidad siguió en el auto, hablábamos de trivialidades y luego el silencio… hasta que se le ocurrió preguntar…

- y… ¿cómo esta vane?... ¿cómo les va?... Pregunto haciéndose la indiferente.

- no… ya vas a empezar… que vane y yo no estamos juntos…

- me alegro… es una perr… maldita… con el perdón de las perras… dijo sarcástica.

- ya… ósea… no quiero pelear por esto, ya te dije mil veces que la cague, que me arrepiento, que lo siento… no vine de tan lejos para hablar de esto… le dije intentando cerrar el tema.

- entonces ¿para qué viniste? ¿qué esperas?... Pregunto mirándome fijamente, mientras el semáforo nos daba unos segundos.

- no espero nada… solo vine porque creí que era lo correcto… no se… es decir, no vine buscando algo… solo quería acompañarte en estos momentos y ya…

- esta bien… dijo con mirada y tono melancólico.

Mied… es que esperaba una declaración de amor… o que le diga que fui a secuestrarla… estaba con otro tipo haciendo su vida allá… yo me había convertido en padre de mis padres, ahora debía mantenerlos… ¿qué le podría ofrecer?…

después de todo también ella estaba vulnerable por lo de su madre y quizás añorando el pasado conmigo, cuando su cielo riveros estaba unida, cuando su madre estaba bien… como aprovecharme de eso… pero ese fucking doctorcito se aprovecho de eso, me decía el diablillo en mi hombro…

- llegamos… me dijo, mientras yo debatía moralmente en mi cabeza.

Era la típica casa de madera de los gringos, en la que quieres entrar y pasar desapercibido pero las tablas del piso crujen avisándole a todos que llego alguien. Estaban otros cielo riverosres de cielo riveros, me presentaba como su amigo de universidad.

- vaya… que sorpresa… que gusto verte… me dijo el padre de cielo riveros, que parecía haber envejecido en los últimos meses. Maldita enfermedad que consume la vitalidad de los seres queridos.

- es lo menos que podía hacer señor… lamento su perdida… dije estrechando su mano.

- gracias muchacho… por alguna extraña razón… a mi esposa le caías bien (a mi no)… dijo intentando bromear, luego me ofreció una cerveza.

Cielo riveros me dejo con él, ella andaba ocupada saludando cielo riverosres y bueno departiendo recuerdos… hasta que llego el infeliz… lo supe porque la saludo con un beso, un beso que me correspondía a mi… ella avergonzada, sabiendo que los vería, intento esquivarlo…

- toma otra… eso debe doler… te ves peor que yo… me dijo el papa de cielo riveros dándome otra cerveza, notando mi malestar por presenciar a su hija con otro.

Aunque valgan verdades, ahora que lo miraba… mierd… era casi de mi talla, color de piel, cabello, contextura… y el rostro, bueno ahí si lo aventajaba… y quería creer que en verga también… pero no lo descubriría…

- ay…. Mi hija… tiene malos gustos… se busco uno parecido a ti… me dijo el viejo bromeando, él también se había percatado del parecido.

Tras un rato, me excuse, me despedí, ya se hacía tarde, tomaría un taxi para ir al alojamiento que me había conseguido vane. Cielo riveros se ofreció a llevarme, pero la mirada del novio no era muy satisfecha, igual yo marcaria mi territorio (¿sabría que era su ex?)… al final el viejo de cielo riveros se ofreció a llevarme.

El amigo de vane me había dejado la llave en el buzón de correo, era un lugar agradable, un ambiente grande (típico en las películas de los gringos) que fungía de sala, comedor, dormitorio, con una pequeña separación que era el kitchenet y el baño a un lado.

Serian mis dominios por unos días. Al día siguiente sería el velorio en la iglesia, el viejo se ofreció a recogerme, creo que se quería mantener entretenido y no lo culpo, para evitar pensar en su esposa. Luego tendría unos días para conocer la gran manzana, quizás serian mis últimas vacaciones en mucho tiempo, al llegar a mi ciudad, a la realidad, seria trabajar como esclavo nuevamente a pagar deudas.

Pensando en esas cosas, me quede dormido… hasta que… escuche un ruido afuera… en principio desperté con la confusión de no saber donde estaba, una vez recordándolo… me entro el natural temor que te meten las películas o series, que en nueva york roban mucho las casas… a la mierd… que suerte la mia… acabo de llegar y ya me van a bautizar… pensé…

mire por las ventanas… vi una sombra cerca a la puerta… busque algo con que defenderme… entendí porque el bate de beisbol estaba cerca a la puerta… lo tome, tuve un pensamiento poco racional… y si el novio de cielo riveros nos había seguido y quería darme una paliza… la que se va llevar el, pensé.

- déjame entrar… oí tras la puerta.

- ¿qué? ¿qué haces aquí?... Pregunte incrédulo, era una voz femenina, ¿era vane?.

- danny… solo… solo déjame entrar… dijo sollozante, esta vez si reconocí la voz y la deje entrar.

- pero ¿qué? ¿como?... Dije sorprendido.

- no digas nada… repuso llorosa, y me empezó a besar apasionadamente.

- ¿segura?... Respondí maquinalmente entre jadeos.

- si… quiero ser tuya… una vez más… dijo casi empujándome hacia adentro.

Me quito la camisa y empezó a hurgar en mi pantalón, se hacia tan lejano la última vez que sucedió así… por momentos creí que estaba soñando… hasta que su fría mano tomo mi verga que empezaba a endurecer… si era real… estaba sucediendo.

- te extrañe tanto danny… dijo mientras me pajeaba torpemente aun dentro del pantalón.

- y yo a ti… cielo riveros… repuse, sin dejar de besarla.

En ese momento dejo de sentirse raro o lejano, se volvió nuevamente cielo riverosr, metí las manos por debajo de su vestido negro, tome aquellas gordas nalgas que fueron mi delirio mucho tiempo y que nunca olvide… eso la estremeció de pies a cabeza… más aun cuando recordé su punto débil…

- ay mierd… eres un… ohhh…. Uhmmm… exclamo cielo riveros retorciéndose de placer ante el beso en cuello que le propine, casi diría que se vino.

Tras eso me beso con más pasión, prácticamente me jaloneo la verga hasta liberarla… ya me había llevado casi a la cama. No dije nada, ella dudo un momento, luego solo se arrodillo y engullo mi verga… aunque no era necesario porque estaba super tiesa… quizás solo quería recordar el sabor o la sensación que le daba… apenas fue un momento.

- hey… que… mierd… dije cuando ella me empujo contra la cama.

La deje obrar, quizás ella tanto como yo había pensado ese momento, la deje tomar la iniciativa... Se sentó encima mío, hizo a un lado su rop… un momento… no hizo al lado nada… no traía ropa interior… cielo riveros desde que salió de su casa sabia a lo que venía… o sabía que quería venirse conmigo…

- uyyy… siiii…. Ohhh… exclamo metiéndose mi verga en su super mojada vagina.

Prácticamente me araño el pecho al sentirse invadida por mi tieso miembro. Sin decir más, empezó a saltar sobre mi verga, luego menear su enorme rabo en mi ingle, mientras yo la sostenía por momentos de la cintura o jaloneaba sus gordas nalgas, lo que la hacía brincar más rápido.

- tan dura como siempre… que rico… ummm… exclamaba con los ojos cerrados, disfrutando de su auto castigo.

Luego tomo mis manos y las dirigió a sus redondos senos, entendí la invitación y comencé a estrujarlos, hasta liberarlos… cielo riveros, estaba como poseída… no paso mucho tiempo hasta que comenzó a acelerar sus movimientos…

- ay no... No… nooo… auuu… ohhhh…. Uhmmm… quiso evitar no inevitable, pero se vino en un rico orgasmo que me mojo toda la ingle.

Se estremeció casi hasta acalambrarse… arañando nuevamente mi pecho… tras unos segundos se dejo caer agotada sobre mi pecho, aun con mi verga dentro de su tibio interior… después aun jadeante, busco mis labios nuevamente.

- como extrañaba esto… me dijo melancólica.

- si, yo también… pero parece que no fue hace mucho… le dije para que no siga apenada.

Dio un suspiro… luego un temblorcillo la recorrió al sentir una gotita de leche invadiéndola…

- ups… se me escapo… dije avergonzado.

Luego ambos nos miramos y nos reímos…

- no creas que me he olvidado… me dijo juguetona.

- ¿de qué?... Pregunte.

- aun te falta a ti…

- ah… no… no es necesario… estoy bien… dije, no quería forzarla a otra cogida.

- no… no es solo por ti… yo también lo necesito… repuso volviendo a encenderse.

Sin decir más, cogió mi verga con seguridad y la dirigió a su ano… me miraba con una ansiedad y ternura al mismo tiempo, luego se fue insertando con dificultad mi pene cada vez mas duro en su estrecho agujero… ese tipo debía tener la verga flaca o pequeña, me dije, porque a cielo riveros le estaba costando meterse mi verga nuevamente.

Para ayudarse, cielo riveros comenzó a besarme con lujuria, mientras iba abriendo mas las piernas, yo la ayude abriéndole las nalgas y dejando posarse su enorme trasero en mi ingle. Mientras ella seguía forcejando por incrustarse toda mi verga hasta la raíz.

- ohhhh… que grande… no entra… ohhh… se quejaba por momentos.

Hasta se despego un poco de mí, prácticamente sentándose por completo, jalonee sus senos… lo que la hizo enloquecer otra vez, dejandose caer por completo sobre mi verga… sentí mi pene completamente absorvido por su esfínter… la tenia incrustada hasta las tripas…

- ayyyy…. Ouuuu…. Uhmmmm…. Siiiii… exclamo triunfante, estremeciéndose.

Nuevamente se contrajo, mirando al techo con la boca abierta, pensé que nuevamente había tenido otro orgasmo… ¿seria posible?... Ya iban como 3…

- wowww… es que esta sensación… uffff…. Gemía cielo riveros pensando en voz alta.

- ¿qué sensación?... Replique para incrementar su morbo.

- de tu verga llenándome toda… dijo como poseída.

Acto seguido, comenzó a brincar dificultosamente sobre mi duro miembro… era una delicia verla disfrutarlo… morderse los labios, sonreír de placer, casi llorar de dolor… pero aun así seguir… al borde de acalambrarse por lo forzado de la posición para ella, que parecía haber perdido ritmo.

- ay danny… ya nooo… asi nooo… se quejó ella.

Pensé que habría recobrado la conciencia, que se había acordado de su novio, que me dejaría con la verga en ristre y saldría corriendo… pero no fue así…

- ¿cómo?... Pregunte.

- como antes… dijo con voz ahogada, luego agrego con expresión morbosa… como perra… como tu perra…

no tuvo que decir más, la expresión en mi rostro le dio a entender que me moría por cogerla en 4 patas, como la primera vez… ella misma se llenó de energía y se levanto y busco la manera de acomodarse en la cama… para sentirse sometida como una perra nuevamente…

- esta bien así…. Exclamaba ella quebrando la espalda, para que me embobara con su estrecha cintura y sus abultadas nalgas.

- si… super bien… exclame casi ahogándome con mi saliva.

- como la primera vez… que me hiciste tu perra… me susurro.

No necesite mayor invitación, en poco tiempo ya tenia media verga metida en sus tripas, ella se retorcio por lo brusco y desesperado de mi accionar…

- ouuu… siii… asi también dolioo… uhmmm… pero sigueee… me animo.

Agarre sus gordas nalgas, las abri y empecé a empujar… sentía que la estaba partiendo, se me hacia como la primera vez que la desvirgue analmente, se hacía difícil, volvía a sentir su estrechez… mi verga también sufría las consecuencias… pero estaba dispuesto a soportarlo.

El espectáculo y el culo valían la pena… ese panorama de 2 grandes glúteos partidos a la mitad por mi verga, sus piernas que parecían haber ganado volumen, me morboseaba más, y su estrecha cintura que parecía querer doblarse con cada inserción, mientras su espalda se contraía soportando mi incursión.

- ohhh… siii… asiii… hasta el fondoooo…. Suplicaba como loca.

Temía que los vecinos nos oyeran, estos latinos locos que estarán haciendo dirían y llamarían a la policía… pero ni ellos me lograrían despegar de semejante trasero con el que había soñado y pajeado varias veces.

Una vez que mi verga estuvo clavada casi hasta los huevos, ella se dejo caer un poco aliviada de que al fin todo estuviera dentro.

- ¿qué esperas amorrr?... Me recrimino cielo riveros, recordando la cielo riverosridad de antes.

Quería que la cabalgue salvajemente como era nuestra costumbre, yo había ido sin mayores expectativas y ahora la tenia atorada hasta las tripas… que más podía pedir… encima estaba haciendo cachudo a ese gringo aprovechado…

sin más espera, comencé a bombearla armónicamente, hasta que veía que cielo riveros se desesperaba y empezaba a culearme. Bueno, basta de delicadezas me dije… era obvio que ella no pensaba en el entierro de su madre, sino en mi verga enterrada en su ano y la quería violentamente, para olvidarse de todas sus penas… solo quería que mi pene la exorcizara de todo.

- ohhhh…. Uffff… asiiii…. Siiii… como perraaa… siii… como tu perra… uhmmm… exclamaba ella.

Ya la tomaba de la cintura y la penetraba con fiereza, cosa que ella parecía agradecer, sus nalgas temblaban armónicamente. Así comenzó a reinar en el ambiento el sonido que tanto nos gustaba, el de su gordo trasero rebotando en mi ingle.

Ya con mas confianza, la tomé de los cabellos y comencé a jalonearla para cabalgarla… ya no quedaban gentilezas o cariños de enamorados que se extrañan… eso se había transformado en un encuentro pervertidamente salvaje… eran 3 años lejos de esos placeres y como si fuera la última vez, queríamos recordarlo.

En algún momento quise cambiar de posición… quizás para que ella no se aburra… porque yo estaba de maravillas martillándole el culo… pero cielo riveros no se dejó cambiar de posición…

- no, no… danny… como perra… está bien así... Como perra… como tu perra… insistía febril, entre jadeos y gemidos.

Ya me había convencido de que no solo quería complacerme, entendí que era el morbo de ella también, lo deseaba tanto o mas que yo… la había amaestrado tan bien, que solo quería sentirse sometida como una perra…

- ayyy… nooo…. Aunnn nooo… ayyy… uhmmm…. Gimio casi explotando, nuevamente comenzó a gotear su vagina, luego un chorro de liquidos.

- ouuuu…. Uffff… que ricooo culooo… uffff… exclame sorprendido.

Me vine como caballo, litros y litros de leche caliente vertidos en sus tripas, mientras cielo riveros se contraía deliciosamente, un sinfín de espasmos propios de su orgasmo y de los reflejos que causaba mi verga contrayéndose y escupiendo semen en su enrojecido y destrozado ano.

- ohhhh… uffff… que brutal… no masss… ufff… exclamo exhausta entre jadeos cielo riveros.

- aun te falta… me atreví a decir

- cierto… reconoció casi sin aliento.

Cuando sintió mi verga completamente exprimida en su ano, se despego y busco agradecerle a mi pene como era nuestra costumbre, con una succión y limpieza. Solo que estaba exagerando...

- espera… ok… diablos… exclame.

Asi, toda jadeante, cielo riveros se había asido a mi verga como sanguijuela… ya mi pene estaba limpio, sino que se había parado de nuevo… estaba volviendo a sentirme nuevamente a punto de eyacular…

- uyyy… ahí viene… le advertí, pero no se quiso despegar, siguió succionando con mayor vehemencia.

- siii… siii… damelaaa… susurro pajeando y succionando.

- ouuuu mierd… ufff… eres la mejorrr…. Exclame satisfecho.

Cielo riveros había logrado sacarme una segunda descarga que inundo su garganta y ella empezó a tragar, luego alejo un poco mi verga e hizo que le salpicara en la cara… esa imagen pornográfica hizo que me salieran unos chorros más, que ella gustosa recibía en su rostro, en sus mejillas, labios y barbilla, hasta en su parpado…

- me dejaste seco… dije cansado.

- si, tenias galones acumulados del ultimo año… dijo sonriente, con el rostro meloso.

Luego se fue limpiando como gata, absorbiendo aquellas gotas que intencionalmente dejo que adornaran su rostro para mi morboso disfrute. Sabia que ese panorama me excitaba, que estaba haciendo una de mis fantasías realidad. Entre nosotros ya no había vergüenzas o pudores… ella sabia que yo era un enfermo anal y yo sabia que conmigo ella era una perra en la cama.

Me dejo tirado en la cama, mientras se fue a limpiar al baño… tras un rato volvió y se acurruco a mi lado. Ambos semi desnudos, sin ganas de arreglarnos más… era tarde, pero aun así no teníamos sueño…

- pero… ¿cómo? ¿que?... Estaba feliz pero confundido, y no sabia como iniciar la conversación.

- el danny de siempre… tu y tu manía de querer entender las cosas… me dijo cielo riveros risueña.

- olvidé que me conoces mejor que nadie… dije.

- es solo que… ay… si fuera por mi… te violaba en el aeropuerto… me dijo bromeando y agrego… pero también te quería matar…

- del odio al amor… repuse.

- si… en esos limites hemos estado… agrego ella recordando todas nuestras idas y vueltas.

- tu culito se sintió tan rico y estrecho como la primera vez… le dije… ¿es que acaso no…?

- ayyyy… en verdad quieres saberlo danny… de mi intimidad… ¿con el?... Repuso desganada.

- aishh…. Ciertooo… olvídalo… dije intentando no meter imágenes en mi cabeza.

Nos reímos un rato, luego nos quedamos en silencio… mientras nos acariciábamos mutuamente, quizás queriendo detener el tiempo… hasta que ella rompió el silencio y retomo la conversación…

- no… en realidad él nunca me lo hace por ahí… confeso apenada.

- ¿por qué?... ¿es gay?… dije burlonamente.

- no… es médico… dice que muchos gérmenes, bacterias, etc… agrego cielo riveros aburrida.

- bahhh… no sabe de lo que se pierde… que desperdicio… dije dándole un palmazo a sus enormes nalgas.

- quizás él tenga razón… un día se te va caer el pene por tanto meterlo por ahí a tanta loca… me dijo bromeando.

- que exagerada… repuse a la defensiva.

- ay danny… no soy tonta… hasta acá se oyen los rumores… me dijo incrédula.

- son solo rumores… dije.

A pesar de todo, ya no eran reproches de cielo riveros, no eran celos, bueno, si a medias… pero ambos entendíamos la situación, no teníamos ya derecho el uno sobre el otro… cada quien había seguido su camino. éramos como amigos que sabíamos que esto era pasajero y que lo habíamos disfrutado, sin dramas, ni nada… ya no estábamos para eso… quizás habíamos madurado a la fuerza por el tiempo transcurrido y por la situación.

Nuevamente nos sumimos en cariños y silencios…

- ¿qué pasaría si vengo a estudiar aquí?… le dije animándome a retomar la relación.

- no lo hagas… me dijo tornándose seria.

- ¿por qué?... Replique.

- no sería buena idea… repuso alejándose, sentándose al lado mío para vernos frente a frente.

- se que la malogre… estaba celoso y ebrio… pero estoy dispuesto a hacer todo lo que sea necesario para empezar de nuevo… le dije, sentándome también.

Nos quedamos mirando, en silencio, esperaba una reacción de ella, una respuesta, un perdón, una explicación para su tajante negativa… por momentos ella quería decir algo y luego se desanimaba, parecía que no sabia como decirlo… hasta que finalmente lo soltó...

- tengo cáncer… musito procurando no quebrarse.

- ¿que?... Repique incredulo.

- tengo leucemia… me confeso.

- nooo… te hiciste el examen y salió negativo… le dije negándome a creerlo.

- danny… eso fue hace 3 años… 3 años… repitió, como si fuera una vida.

Me dejo pasmado… quería preguntar como y cuando, pero no tenia mucho sentido. Solo la abrace mientras una lagrima caía de su rostro y del mío… tampoco quería que me viera llorar… ya alguna amiga de trabajo me había comentado que en cada generación el cáncer se va presentando cada vez mas temprano.

- como ves… me saque la lotería… me dijo intentando bromear llorosa.

- no digas eso… repuse, estaba destrozado.

- me lo detectaron hace unas semanas… agrego tras un suspiro.

- vas a estar bien, lo bueno es que seguro lo han detectado a tiempo… te voy a cuidar y todo va salir bien… intente animarla.

- dannyyy… sabes que te quiero… te amo o te ame antes y siempre te amare por las locuras que hicimos y vivimos… pero se cómo es esto… ya lo he visto… mi padre lo vivió… no se lo deseo a nadie… me dijo.

- pero no es tu decisión… es la mía… agregue tercamente.

- se que me amas, como para venir hasta acá… y con eso me basta… pero no puedo ser egoísta y pedirte que te quedes aquí a luchar conmigo, sin saber que va pasar… cuando tienes tu cielo riveros allá que depende de ti… ¿quién se hará cargo de ellos?... Ellos te apoyaron para que tengas una profesión, es momento de que los cuides a ellos…

- pero y ¿tu?… intente refutar.

- yo tengo mi padre y acá… y a paul, que me quiere y cuida… me siento una mierd… por hacerle esto… pero eras tú, como no caer contigo... Dijo sonriendo con melancolía.

Mierd… maldit… fortuna… se me acabaron los insultos por decir… quería ser un héroe para ella, pero tenia razón… como abandonar a mis padres por cuidarla a ella… la salud de mi madre a raíz de las deudas de mi padre empeoro. Mi padre no era un mal hombre e hizo lo que creyó correcto para su cielo riveros, pero termino hipotecando mi futuro. Mientras el seguía batallando en la hacienda campestre para sacarla a flote, pero aún no rendir frutos, apenas para sobrevivir.

- no… no quiero que se acabe así…dije quebrándome.

- tienes que dejarme ir… como yo te deje ir… no voy a regresar, ya inicie mi vida acá y lo que me quede de ella aquí, voy a seguir trabajando mientras pueda y el tiempo dirá… me dijo.

Permanecimos en silencio, aferrados el uno al otro, quizás recordando cada una de las travesuras que hicimos en todos los rincones posibles de nuestra ciudad, casa, universidad, club, etc.… ahora hasta internacionalmente. Se fue a su casa, al día siguiente me recogería su padre para ir al cementerio.

De la ceremonia no hay mucho que decir… volví a ver a paul, supuestamente el doctorcito que me robo cielo riveros, sin embargo, en realidad siempre supe que yo la perdí. Ya no lo miraba con ese odio territorial, sino en parte pensaba que quizás era lo mejor para cielo riveros ahora.

Ahora que veía a paul si parecía un nerd bonachón, en fin, ¿cómo criticar a cielo riveros?… alguna vez una amiga me decía, que algunas chicas guapas tras malas experiencias con chicos, tendían a buscar lo seguro, quizás alguien no tan agraciado o sociable, pero de buenos sentimientos que les de confianza que no les será infiel… ósea paul debía agradecerme por eso.

Esos días pasaron rápido… a decir verdad aprovechamos que paul andaba de guardia, para salir a pasear… la estatua de la libertad, el empire sate, time square, central park, etc… y aprovechando algún que otro intermedio para la “despedida definitiva” como siempre, volvimos a nuestra época de universidad y locuras… siempre la última vez que lo hacíamos era la definitiva.

Hasta que llego el momento de despedirnos en el aeropuerto, esta vez no hubo tanto drama como la vez anterior… era como un hasta luego de unos amigos que alguna vez se amaron. No había el estrés de pensar en cómo seguirán las cosas… nos despedimos en buenos términos, con un halo de melancolía… fue una buena manera de cerrar aquel capítulo de mi vida.

De cuando en cuando mantenía contacto con ella, por correo y llamadas por fiestas y saber cómo íbamos cada quien, con la cielo riveros, las parejas que teníamos, los estudios, el trabajo, ponerla al día de los chismes de los compañeros de la facu… y bueno… aunque siempre lo evitábamos, al final siempre llegábamos a su enfermedad.

Sabía que, aunque ella estuviera mal, no me lo diría, para no preocuparme... Y nunca lo dijo.
escrito el
2025-01-12
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