¿Para qué son los hermanos? - Cuarta Parte.

por
género
incesto

Acaricié tiernamente los cabellos de mi hermana menor y le aseguré.
—Yo también quiero correrme en tu trasero … Nada ni nadie me impedirá de hacerlo …
—Se siente muy cachondo eso ...
—Todo en ti es cachondo … obviamente también tu culo … Es fantástico …
—Uhmmmm … Y siempre seré la primera …
Magaly besó mi polla. Solange con una voz burlona dijo.
—Uhm, Dios ... Y donde sacan esas cositas tan cachondas …
—Sofía un poco sarcástica, añadió.
—Supongo que será un secreto entre hermanos …
Solange sonrió ante el comento de su esposa Sofia y luego agregó.
—Sea como sea, deberías hacerlo despacio … Tienes que ser amable con nuestra hermanita menor …
—Está bien … Seré gentil con ella …
—Oh, tampoco vayas a exagerar … Sé gentil, pero no tanto …
Expresó Solange guiñándole un ojo. Magaly no decía nada en contrario, incluso continuaba a mover su trasero mientras yo me arrodillaba detrás de ella. Tanto Solange como Sofía observaban con gran interés desde cada lado. Ambas me embadurnaron la polla con lubricante justo cuando la apuntaba al centro caliente del agujerito de Magaly. Nunca en mi vida había visto un ojetillo tan delicioso e invitante, se veía resbaladizo y acogedor. Apoyé mi glande sobre la pequeña fisurita redonda y Magaly empujó hacia atrás, haciendo que mi gruesa cabezota se deslizara con sorpresiva facilidad en su cuevita caliente. Gimió fascinada cuando me adentré en ella y no dejó de empujar hasta cuando sus glúteos chocaron con mis bolas, mi polla enterita estaba dentro de mi hermanita menor. Solange y Sofía ayudaban abriendo sus nalgas hacia los costados. Realmente era un trabajo en equipo, las tres chicas colaboraban para que yo pudiese afondar mi verga en el estrecho orificio de Magaly.


Magaly gimió suavemente ante el estiramiento inicial de su pequeñito y apretado trasero. Sin embargo, nunca dejo de empujar hasta empalarse por completo en mi entiesada polla. Magaly se detuvo solo un instante, haciendo que mi polla entrara por completo en su ano y luego comenzó a mecerse hacia atrás y hacia adelante.


Traté de despreocuparme de Solange y Sofia que estaban entusiasmadas mirando el prieto orificio de Magaly que andaba hacia atrás y hacia adelante deslizándose a lo largo de mi polla. La estaba follando profundamente. Era absolutamente maravilloso, no me esperaba nada menos glorioso. Quizás un poquitín depravado, pero enormemente satisfactorio y caliente, al mismo tiempo en un ambiente de dulzura y cariño. Todo impulsado por una tenue racha de competitividad por parte de Magaly y loca cachondez por parte de Solange y Sofia. Y también hay que mencionar el puro placer físico de tomar la virginidad anal de mi hermanita menor.
—Hmmmmmm … Eso se ve muy cachondo … —Hizo notar Solange.
—Ooohhh, ssiii … ¿Y cómo se siente? … —Quiso saber Sofia.
—Gabriel se va a correr en mi trasero … Ummmm … —Respondió Magaly sonriendo.
—Lo sabemos … Pero ¿cómo se siente ahora? … —Volvió a preguntar Sofia.
—¿Ugh? … Como si mi hermano estuviera con su polla en mi trasero … —Dijo Magaly gimiendo.
—Grrr … Eso lo sabemos … Antipática … —Espetó Sofia, levantando sus brazos hacia el cielo.
Solange sin poder contenerse se lanzó a besar a Magaly.
—Pero sí eres un amor … Te amo tal como eres, hermanita ….
Mientras las hermanas se besaban tiernamente, yo sondeaba lo más profundo posible el estrecho orificio de Magaly. En el intertanto, Sofía saltó de la cama y regresó luego con un consolador con correas. La miré inquisitivamente.
—Es para Solange … Ella lo va a necesitar …
Me dijo a modo de explicación, a lo que respondí encogiéndome de hombros.
—Bueno … pero eso es entre ustedes dos …
—Sí, pero lo vas a poder ver de cerca … Te va a gustar …
Miré el magnífico culo de Solange, así agachada a besar a Magaly estaba muy bien presentado. Un culo de verdad hermoso. En tanto Sofía se había colocado las correas y rápidamente había penetrado el culo de Solange, mucho más rápido que yo el culo de Magaly. Seguramente tenía mucha práctica y habilidad en follar el culo de Solange, esta gimió y se frotó el coño mientras Sofia le daba fuertes nalgadas.


Mientras follaba el culito de mi hermanita, Solange y Magaly se besaban furtivamente cuando podían.
—Gabriel se va a correr en mí …
Gimió Magaly. Solange le sonrió cariñosamente y le respondió.
—Sí ... Lo sé ... Te llenará todo tu trasero ...
—Mmmmmmm … Qué buen hermano que es …
—Sí … De verdad lo es …
No pude evitar de intervenir, diciendo.
—Ah … Ustedes dos son las malas …
—Mira quien habla … El niño travieso que folla el trasero de su hermanita más pequeña …
Dijo Solange burlonamente.
—No me critiquen … Ni siquiera la he golpeado … —Dije en mi defensa.
—Sí … Está siendo encantador y gentil … Lo siento muy rico … —Opinó Magaly ensoñadoramente.
—Tal vez porque es tu primera vez … De a poco irán mejorando …
Dijo Solange. Sofia le dio una fuerte bofetada en su nalga derecha y le dijo.
—Solo porque tú eres una puta, eso no significa que Magaly sea como tú …
Solange enterró su rostro en el edredón gimiendo, mientras Sofia la penetraba con fuerza por el trasero. Ciertamente estaba aprendiendo muchas cosas sobre la relación entre mi hermana y Sofia. Quizás demasiado. Pero era innegable que lo estaba disfrutando mucho.


Magaly tomó la mano de su hermana con dulzura mientras Sofia golpeaba con rudeza sus posaderas y la follaba enérgicamente, entonces ella me miró y en voz baja dijo.
—No sé … Pero ¿podrías dármelo un poco más duro? …
—Entonces quieres que sea un poco malo, ¿eh? …
Magaly se movió más enérgicamente y eso se sintió increíble.
—No es malo si me coges un poco más duro …
Le di una nalgada mucho más suave que lo que Solange había recibido de Sofia, pero lo suficientemente fuerte como para que todos pudieran escucharlo. Magaly gritó, se agitó y volvió a mover su trasero.
—Ouch … Ay … Eso me dolió …
Magaly gimió cuando comencé a follarla mucho más fuerte y le di otras nalgadas a su hermoso trasero. Claro que nada comparado con lo que Solange estaba prendiendo por parte de Sofia. Al parecer Magaly era mucho más delicada que su hermana mayor.
—Me voy a correr en tu trasero … —Le dije a Magaly.
—Ummm, qué rico … Hazlo, por favor … —Respondió prontamente.
Magaly apretó la mano de Solange, también su trasero apretó mi polla. Gemí y sentí los acostumbrados temblorcillos de placer, mi cuerpo se tensó y fue invadido por un delirante hormigueo. Mis bolas parecían querer reventarse, pulsaban enloquecidas cuando comencé a verter mi líquida masculinidad en el prieto trasero de mi hermanita, bañando con mi semen todas sus estrecheces, tal como ella quería, haciendo que sus nalgas temblaran vigorosamente y comenzara a correrse junto a mí.
—Oh Santo Dios … Ummmmmm … Aaahhh … Umpf … Umpf … Oh, Gabriel … Hmmmmmm … Me estás llenando toda … Huumummm … Oh Jesús, es tantísimo …
Solange dio un animalesco y feliz gruñido, Sofía la estaba follando deveras fuerte, estaba imposibilitada a expresar nada inteligible, pero hizo el esfuerzo de acercarse a su hermana para besarla y acompañarla en su orgasmo. Momentos después se dejó caer sobre el edredón mientras Sofia la follaba a termine de otro feroz orgasmo. Mientras chillaba de placer, frotaba salvajemente su clítoris, haciendo casi caer a Sofia enterrada en su trasero. Magaly no dejó pasar la oportunidad de acercarse a ella para besarla apasionadamente.


Juntas, Magaly y Solange se arrastraron a besar mi polla goteante. Me lamieron acuciosa y muy cachondamente, con miradas de adoración hacia mí, como prometiéndome de tener mucho más sexo conmigo. Solange fue la primera en hablar.
—Creo que ahora es mi turno … Tienes que follarme duro el culo …
Magaly asentía a todo lo que decía su hermana mayor, pero Sofia tenía algunas otras ideas.
—Eso no va a suceder … Definitivamente es a mí a quien le toca ahora … Ustedes dos ya lo hicieron con él … Me corresponde y es mi turno …
Dijo sacándose el arnés con correas, Solange se quejó inmediatamente.
—Pero sí todavía no lo ha hecho en mi trasero … Ni siquiera una sola vez …
A lo que Sofía respondió seria y decididamente.
—Ese no es mi problema …
Solange tuvo que aceptar la lógica de Sofia y junto a Magaly continuaron a lamber mi polla, asegurándose de dejarla lista para Sofia, luego se apartaron mientras Sofía se recostaba y abría sus piernas diciendo.
—Yo no lo quiero en mi trasero … Gracias …
—¿No eres fanática de lo anal? …
—Bueno, sí … Pero todo a su debido tiempo y lugar …
—Pero lo hiciste con mi hermana …
—Porque era el momento apropiado …
—Bueno, si es así … Creo que sería oportuno en centrarnos en dejarte embarazada …
Sofia me sonrió capciosamente tirándome hacia ella, ambos sabíamos que no estaba en su ciclo. Eso lo íbamos a volver a intentar la próxima semana, ahora ella solo quería volver a sentir mi verga en su dulce coño y no iba a ser yo a negárselo. Lo tomé como una práctica necesaria y ella muy feliz tomó mi polla y la llevó a su coño mojado y pronto. Restregó hábilmente mi cabezota en sus jugos antes de permitirme hundirme en ella profundamente.


Magaly y Solange se arrodillaron y observaron atentas como Sofia y yo follábamos frente a ellas. Sus deditos se abrieron paso entre la labia de sus coños calientes y comenzaron a frotarse cada vez más cachondas. Magaly dio una lujuriosa mirada a su hermana mayor y le propuso.
—¿Quieres que folle tu trasero? …
Solange se rio ante la oferta de Magaly, la abrazó y la besó.
—Oh, mi pequeña … Al parecer te he corrompido totalmente, ¿eh? …
—No es tan así … Nunca fui totalmente inocente …
—¿No? … ¿Y a cuantas otras se lo has hecho en el trasero? …
—Oh … Técnicamente a ninguna …
—¿Entonces? …
—Quiero que seas mi primera …
Magaly se volteó su cabello y tomó el arnés con correas usado por Sofia y agregó.
—Te follaré bien con esto … Y lo vas a sentir bien …
—Es lo que más le gusta a ella … Prenderlo por el culo … —Dijo Sofia mirándolas a ambas.
—Oh, sí … Hazlo … Me gustaría ver … —Dije yo animando a Magaly.
—Por supuesto que lo hará … —Concluyó Sofia.
A Magaly le tomó un poco de tiempo descubrir como colocarse el arnés. De hecho, nunca había utilizado una cosa similar, ni tampoco había follado a nadie por el culo. Mucho menos a su hermana mayor. Sin embargo, resolvió la situación alegremente y muy pronto escuchamos a Solange comenzar a gemir y chillar.
—Creo que mis hermanas están locas … —Le dije a Sofia a baja voz.
—Je-je-je … ¿Y recién ahora te estás dando cuenta? … —Me preguntó Sofia muy suelta de cuerpo.
—Ehm … Bueno … Yo …
—¿Y las discusiones por tus corridas? … ¿Las bofetadas de Magaly al trasero de Solange? … ¿Y ahora le está follando su trasero? … ¿No han sido suficientes pistas para ti? …
—Bueno … Tal vez, sí …
—Uhm … Ya lo creo …
Dijo Sofía mirando a Solange y Magaly. Yo también las miré, luego salí de Sofia y la hice voltear; ella levantó su trasero y penetré su coño desde atrás comenzando a follarla e imitando a como Magaly estaba follando el trasero de su hermana mayor.


Magaly también nos observó con una sonrisa un poco tímida, un poco jactanciosa, sintiéndose satisfecha consigo misma. Como estábamos bastante cerca, puse una mano en su nuca y la besé ardorosamente. Magaly gruño en mi boca y empujó su lengua para buscar la mía, sin dejar de follar a su hermana y yo a Sofia. Finalmente me corrí a torrentes en el apretado coño de Sofia. Solange se percató de ello y la arrastró juguetonamente para colocar su coño rebalsado de semen al alcance de su boca, entonces comenzó a lamer a su esposa para dejarla limpia de mi densa corrida. Con un sonoro “floosch”, el arnés salió del culo de Solange.


Me acerqué a Magaly y la abracé, pero no con un deseo sexual, solo quería apañarla y sentirla en mis brazos en forma afectuosa y así totalmente desnuda. Ella se acurrucó en mis brazos, todavía llevaba el arnés con correas. Nos reímos un poco viendo la forma en que ella pinchaba mi vientre con su pene plástico, pero nos quedamos así tranquilos tomándonos un merecido descanso. No pensé que iba a durar mucho. Ya estaba acostumbrándome a las energías y expectativas sexuales de mis hermanas. Solange nunca iba a dejarme tranquilo sino se lo metía por el culo. Pero nada estaba sucediendo en estos momentos. Me arrimé al oído de Magaly y le dije.
—¿Sabes? … Si ustedes dos tienen que competir por mí … Creo que esta es una manera bastante buena de hacerlo …
—Yo y Solange nunca competimos …
—Uhm … ¿Estás diciendo que todo este asunto anal surgió de la nada? … ¿Qué esta es la primera vez que discuten? …
—Ehm … Sí …
—Pero ¿cómo? … ¿Estas segura? …
—Sí … No puedes amarla más ella que a mí … Ella ya tiene a Sofia, ¿sabes? … No sería justo …
La bese con toda la ternura de hermano y le dije.
—Sabes que las amo a las dos … Y no deben competir por ello …
Magaly se encogió de hombros antes de decir.
—Está bien … De todos modos, fui la primera en tenerte en mi trasero y te corriste en él …
—Ugh … ¿Qué acabo de decir sobre competir? …
Magaly se hizo hacia adelante, me beso en la nariz y dijo.
—Que tonto eres … Esto no tiene nada que ver contigo, ¿sabes? …
—Bueno … Eso tienen que probármelo …
—Hmmm …
Solange y Sofia vinieron detrás de mí justo en ese momento. Las dos me alejaron de Magaly y se lanzaron a por mí polla. Magaly reaccionó prontamente y se unió a ellas, de pronto tenía tres chicas buscando de alcanzar mi polla con sus lenguas y caricias. Mi polla se puso más dura teniendo tres lindas chicas sexys trabajando en equipo sobre mi erección.


Las Chicas buscaban cada una de tener un momento mi polla lo más cerca de ellas. A ratos todas pudieron compartir bastante ecuánimemente el espacio alrededor de mi polla. Se rieron y divirtieron, a veces peleando juguetonamente por mi falo erecto. Luego Solange surgió como la dominante y se hizo cargo ella sola de mi herramienta pulsante. Diestramente y con gracia, ella se sentó sobre mi polla. Magaly y Sofia observaban de cerca como Solange se empalaba en mi dureza masculina y penetraba su orificio como si fuese su juguete anal personal.
—Oh … Creo que debo aprender eso … —Dijo Magaly acercándose a mirar más de cerca.
—Je-je-je … Igual que tu hermana … convirtiéndote en puta antes de lo que pensabas …
Dijo Sofía murmurando entre dientes.
—No … Nada de eso … Pero lo que hizo me pareció genial … —Se apresuró a decir Magaly.
—Ummm … Es verdad … Puedo ayudarte a practicar, si lo deseas …
—Oh … Sería lo ideal …
Solange las miró con un poco de desdén mientras Magaly y Sofia conversaban y se preparaban para un momento de “práctica” . Yo solo sonreí y encontré que fue bastante lindo ver como mi hermana presentaba su trasero y dejaba que Sofia la penetrara.
—Pensé que te gustaría que Magaly aprendiera de ti … —Le dije a Solange.
—Ehm … Sí … Me gusta …
Dijo ella, luego se mordió el labio mientras observaba cómo el trasero de Magaly se estiraba permitiendo la entrada del consolador de Sofia y agregó.
—Me gusta … Pero estoy sorprendida en cómo Sofia la folla con el pretexto de ser útil …
—Solo estoy siendo útil … —Replicó Sofia prontamente.
—Je-je-je … Y no te excita para nada el hecho de follar el culo de mi hermanita, ¿eh? …
—Bueno … Yo … Ehm …
Solange se rio entre dientes y se acercó a Magaly para darle unas fuertes palmadas en sus nalgas, esta lanzó varias chillidos meneando su culo sobre el falo de Sofia y Sofia la aferró por las caderas manteniéndola empalada en su arnés con correas. Luego Solange se concentró en montar mi reciedumbre masculina enterrada profundamente en su ano. Su trasero tenía mucha más habilidad que el de Magaly y comenzó a rebotar sobre mi con un demencial ritmo y velocidad, me impresionó su destreza para follar su estrecho agujerito sobre mi polla. Solange se estremeció sintiendo mi pene profundamente en ella, me apretaba y succionada con su ojetillo anal con un ritmo acompasado. Me miró directamente a los ojos mientras me regalaba una esplendida sonrisa un poco salvaje y un poco cachonda, follando mi polla en forma autoritaria, haciendo valer su ascendencia de hermana mayor, capaz de usarme para todos sus juegos y necesidades anales. Le devolví la mirada asombrado.
—Todo esta personalidad tuya … Nunca supe ni sospeché nada de ella … —Dije.
—Nunca preguntaste nada … —Respondió Solange sin dejar de sonreír.
—Sí … Es verdad … Me hubiera parecido grosero preguntarle a mi hermana mayor que se siente tomar una polla por el culo, ¿no crees? …
—Pues tú te lo has perdido …
Le sonreí y metí mis dedos entre su labia mojada buscando su clítoris, ella gimió cuando acaricié su botoncito del amor y flexionó los músculos de su esfínter sobre mi polla, entonces le dije.
—Tal vez te hubiera gustado que te preguntara, ¿eh? … Tú y Sofia, siempre tan pervertidas y calientes todo este tiempo, ¿eh? …
—Bueno … Nos gusta divertirnos en la justa medida …
—La medida necesaria para llevarte a follar con tus hermanos, ¿eh? …
—Uhm … Tal vez, sí …
—La medida necesaria … Y a mi me gusta … —Intervino Sofia.
Magaly murmuró algo incomprensible e hizo contacto visual conmigo. Tomé su mano y entrelazamos nuestros dedos sintiendo esa poderosa conexión entre hermanos mientras el matrimonio nos follaba a ambos.


Seguí frotando el coño caliente y bañado de Solange con mi mano libre hasta que finalmente ella se estremeció y comenzó a correrse empalada en mi verga. Luego de recomponerse en unos segundos, ella cabalgó mi polla y me hizo correrme en su trasero, levantado sus brazos en son de triunfo cuando sintió mis chorros llenando sus entrañas.
—Lo siento … Pero no es mucho lo que quedaba … —Dije a modo de disculpa.
—Está bien … Lo sé … Pero la próxima vez seré yo la primera en atraparte y me lo darás todo en mi trasero …
—No, eh … La primera seré yo … —Reclamó Magaly.
—Ni siquiera lo pienses … No siempre serás la primera … Quítate eso de la cabeza …
Replicó vehementemente Solange deslizándose sobre el vientre de Sofia para comenzar a lamer el coño de Magaly. Esta abandono inmediatamente la discusión sintiendo la lengua de su hermana mayor bailando enérgicamente sobre su coño, mientras todavía estaba empalada en el arnés de Sofia. Eventualmente Magaly se desesperó y se corrió, cayendo de bruces al costado de Sofia. Agotados, todos nos acomodamos entre brazos y piernas desnudas a reposar y recomponernos.
*****


Sucesivamente en las semanas siguientes, tuvimos más encuentros de este tipo. Pequeñas y saludables orgías. Nada más que compartir la locas sensaciones de desenfreno que se provocaban entre nosotros. Follando y gozando a nuestro propio antojo, sirviéndonos de la excusa de embarazar a Sofia nos convertíamos en bestias sexuales de nuestra propia depravación.


Por eso fue por lo que me sorprendió bastante un fin de semana en que nos juntamos todos en un ambiente totalmente diferente. Solange, Sofia y Magaly me estaban esperando, ¡Todavía todas vestidas! Sentadas en la sala de estar. Al parecer no habían iniciado nada de nada, ni siquiera una caricia ni un beso. Quizás me esperaban a mí para tener la excusa necesaria. Las miré impávido, pero inquisitivamente.
—¿Pasó algo? … —Pregunté, mirando furtivamente a mi alrededor.
—Uhm … Algo así … —Respondió Solange con una enigmática sonrisa en su rostro de ángel.
—Ehm … Así es … Pero complicado … —Agregó Sofia.
—Bueno … ¿Qué tan complicado? … —Pregunté expectante.
—Bueno … Verás …
Dijo Solange levantándose y acercándose a su esposa Sofia, entonces puso una mano en la barriga de ella.
—¡Estoy embarazada! … —Chilló fuertemente Sofia.
—Oh … Felicidades … —Dije un tanto desconcertado, aún cuándo sabía que eso era predecible.
—Gracias … —Respondió Sofia emocionada.
—Bueno … Pero … Entonces eso significa que debemos parar de follar … No haremos más todas esas cosas cachondas, ¿eh? … Y …
Dije bastante desconsolado, pero Solange me interrumpió.
—No querido hermano … No significa eso …
—¿Ugh? … ¿No? … ¿Entonces qué? … —Pregunté interesado.
Esta vez fue la mano de Sofía que viajó sobre la panza de Solange y casi al unísono exclamaron.
—Estamos embarazadas las dos …
—Oh … Guau ... Maldición ... —Dije conmovido.
—Sí … ¿Verdad? …
Dijo Solange. Sofia me miró intensa y fijamente y dijo en voz firme.
—Sé que no era esa la intención … Pero, por otro lado, no es nada malo, ¿no? …
—¿Cómo? … ¿Qué haya dejado también a mi hermana embarazada? … ¿Te parece nada? …
Dije mirando fijamente la barriga de Solange, donde solo mi fértil imaginación veía una ligera curvatura que comenzaba a anunciarse incipientemente. Entonces habló Solange con la voz quebrada por la emoción.
—Hemos hablado de ello … Es cierto, no estaba en los planes … Pero lo queremos … Quiero tenerlo … Así el bebé de Sofia tendrá un hermanito o hermanita desde el principio … No serán gemelos, pero parece algo similar, ¿no? …
Solange tomó la mano de Sofia y se miraron tiernamente por un momento para luego besarse con amor y pasión.
—Bueno … Quiero decir … Ehm … Te corresponde a ti la decisión …
Dije buscando apoyo en alguna parte, ya que me estaba comenzando a sentir algo mareado.
—Pero nos gustaría que estuvieras de acuerdo con esto … Sé que nosotras somos las que tenemos que decidir … Solo que no quiero que te sientas mal … No quiero que odies lo que estamos haciendo … Sé que estás impactado … También Magaly lo está …
Magaly estaba sentada en silencio, parecía estar más impactada que yo por la noticia. Su rostro era toda una mezcla de emociones. Pensé en consolarla, pero mis pensamientos me tenían en una especie de estado de confusión.
—¿Estás embarazada? … —Chilló Magaly casi a punto de llorar.
—Sí … —Respondió escuetamente Solange y luego agregó.
—Bueno … Eso sucede por haber dejado que Gabriel se corriera dentro de mí, ¿sabes? … Pero como dije, pensamos que esto sea una bendición … Será algo bueno … Y … Y creo que ….
—Yo también … —Gritó Magaly con los ojos brillosos interrumpiendo a su hermana mayor.
—¿Estás impactada? … —Preguntó Solange con cierta inquietud.
—No … Yo también estoy embarazada …
Vociferó Magaly corriendo a los brazos de Solange. Me apresuré en unirme a ellas, todas mis preocupaciones se habían volatilizado al instante. No sabía como procesar tanta noticia y euforia, realmente no cabía en mí, esto era demasiado para ser asumido de una sola vez.


Solange y Sofia abrazaban a Magaly y yo abrazaba a las tres casi ahogando a mi hermana menor, le prodigábamos amor y afecto, casi amontonados sobre ella que reía y luchaba por respirar.
—Hey … Hey, chicos … Me están aplastando … —Protestó Magaly.
Magaly echó sus brazos a mi cuello, Solange y Sofia se apartaron para estar entre ellas. Me quedé abrazado a Magaly. Sus protestas cesaron y comenzó a sollozar suavemente en mí hombro con locas risitas de nerviosismo.
—Lo siento …
Dijo Magaly recuperando su compostura. Se secó las lágrimas con el dorso de su mano y añadió.
—Al principio me sentí destrozada … No sabía que hacer … Nunca pensé … Pero …
—Explícate … ¿Qué quieres decir? …
Preguntó Solange arrodillándose frente a su hermana y tomándola de la mano, adoptando su ascendencia de hermana mayor, su rostro seriamente preocupado.
—¿Ustedes se quedarán con ambos? … —Preguntó Magaly.
—Ese es el plan … —Asintió Sofia.
—Entonces … Entonces, ¿yo también puedo? …
Preguntó Magaly mirando alternativamente a todo su alrededor, tratando de buscar un permiso de parte de todos nosotros. Pero no lo necesitaba. En otras circunstancias seguramente lo habría sabido. Pero esto era algo excepcional. Después de todo era el bebé que yo le había puesto dentro, su hermano y esto rendía el todo muy complicado de asumir de buenas a primeras.
—No es necesario que nos preguntes … —Le dije acariciando sus cabellos.
—Así es … —Dijo Solange besando la mano de Magaly.
—¿Depende solo de mí? … Pero … Quiero decir … Van a nacer tres bebés … Todos a la vez … Será como si tuvieras trillizos … ¿Está bien eso? …
Dijo Magaly preguntándome con los ojos.
—Será siempre tu decisión … ¿Por qué sigues preguntándome a mí? … —Le dije sonriendo.
—Porque tu los has engendrados … Sé que no querías hacerlo … Pero te convertirás en una especie de papá multiplicado por tres …
Dijo Magaly frotando su vientre plano.
—Lo sé … Nunca fue mi intención … Pero me corrí un montón de veces en ti …
—Y en todas nosotras … Chico malo … —Dijo Solange bromeando.
—Ehm … Sí … Y circunstancialmente puse un bebe en cada una de mis hermanas … Soy consciente de ello … Pero honestamente … No me siento de estar preparado para ello …
—Tienes razón … Es verdad … —Dijo Sofia.
—Es más … No tengo buenas respuestas para nada … Pero deben tenerlo por seguro de que apoyaré cada una de vuestras decisiones …
Dije suspirando.
—Quiero tenerlo … —Dijo Magaly en voz baja y esperanzada, para añadir.
—No estaba preparada para tener un bebé … No sé si alguna lo estaría … Pero … Si voy a tener uno, estoy feliz de que sea tuyo …
—¿De tu hermano? … —Pregunté.
—Sí … Sí … —Respondió Magaly con firmeza.
—Sí … Lo mismo digo … Esa es la jodida verdad … —Agregó Solange con vehemencia.
Miré a Sofia y esta se encogió de hombros. La entendí. Me habían elegido para ayudarla a tener un bebé a ella y ahora venían tres bebés en camino. Nadie estaba preparado para eso, aunque sabíamos muy bien que habíamos sido imprudentes y ahora nos tocaba lidiar con la realidad. Solo que ninguno de nosotros tenía respuestas justas para todo eso.
—Ustedes dos son tan raras … —Le dije a mis hermanas.
Magaly arrugó su ceño a punto de llorar, Solange levantó su puño amenazando con golpearme. Inmediatamente las apacigüé repartiendo amorosos besos entre ellas y luego les dije.
—No intentaba ofenderlas … Me siento muy bien sabiendo que ambas quieren tener a mis bebés …
—¿Y no es eso una cosa rara? … —Preguntó Magaly.
—Soy tu hermano, ¿recuerdas? …
—Entonces … ¿Me amas? …
—Eso será siempre cierto … Te amo y te amaré … Siempre …
Solange se metió entre nosotros y me robó los besos de Magaly, diciendo.
—Esto va a ser genial … Tú, yo y Sofia tendremos los bebés de Gabriel … Ya verás …
—Así lo espero … —Dijo Magaly menos aterrorizada y preocupada que antes.
Sofía también se integró a nosotros y compartió amor y afecto con Magaly que comenzó a reírse y a defenderse de tantas cucamonas y fiesta.
—Pero tendremos que asegurarnos de que nuestro hermano a futuro ya no nos deje embarazadas … Eso es todo …
Dijo Solange sintiéndose complacida como hermana mayor.
—Hey … No es todo culpa mía … —Protesté resentido.
—¿Pero te corriste o no en todos nuestros coños? … —Insistió Solange.
—Bueno … Esa respuesta ya es obvia, ¿no? …
—¿Y entonces? …
—¿Eso significa que no podré volver a correrme en vuestros coños? …
—No dije eso … Es solo que deberemos tener cuidado … Ahora mismo es algo irrelevante … Ya estamos todas embarazadas … Pero en futuro tomaremos medidas precautorias …
—¿Por qué? … ¿Acaso no fuimos lo suficientemente prudentes? …
—No … No lo fuimos …
—Ah … ¿No es eso lo que estabas buscando? …
—¿Qué? …
—Ya lo escuchaste … Responde …
Solange me miró con cierto desdén.
—Me parece que es obvio que no estaba intentando ser embarazada por mi hermano … Eso sería realmente raro, ¿no crees? …
—¿Estás segura? …
—Por supuesto que estoy segura de lo que digo …
Sofía se la quedó mirando en forma extraña antes de decir.
—Pero tuviste fantasías con eso … ¿Recuerdas? …
Solange se volteó hacia ella furibunda.
—Oye, tú … ¿Cómo te atreves a decirle eso? …
—¿Solange? …
—Ok … Sofía y yo teníamos muchas fantasías y juegos mientras follábamos … Pero eso no significa que quisiera que ninguno de ellos se hiciese realidad …
—Bueno … Pero bastante de esos ya se hicieron realidad … Te follaste a Gabriel … Te follaste a Magaly … Te quedaste embarazada … Después él te echó todas sus cositas en tu trasero … Y él …
—Cállate, traidora … ¿Por qué estás diciendo todas esas cosas? …
—Porque … Bueno, sobre todo, esto me pareció muy divertido … Pero, sí … Debo admitir que no teníamos intención en que Solange quedara embarazada … Solo que no nos cuidamos y fuimos imprudentes … Tampoco pensé en que ella follaría con Gabriel …
—Yo tampoco nunca imaginé que haríamos todas esas cosas que hemos hecho … Debo confesar que estoy muy feliz de que haya sucedido lo que sucedió …
Me acerqué a Magaly y la besé, ella se sorprendió en principio, pero luego participó activamente en la unión de nuestros labios. Muy pronto nos encontramos en un enredado montón que se retorcía dando manifestaciones de amor y la ya conocida cachondez. Expresábamos nuestro amor libre y juguetonamente, besándonos y acariciándonos. Magaly era el centro de nuestras atenciones, era obvio que ella necesitaba ser acompañada y reforzar su amor propio.


Solange, sirviéndose de la prerrogativa de ser la hermana mayor, fue directa al coño de Magaly. Sofia y yo dejamos dócilmente que ella lamiera a Magaly mientras nosotros jugábamos a besarnos. Magaly muy pronto estuvo totalmente desnuda y siendo atacada por todos nosotros que también nos fuimos desnudando. Ella gimió y aceptó feliz todas nuestras carantoñas.
—Muy pronto mi panza comenzará a crecer …
Dijo ella. Yo tenía mi mano en su barriga y le dije.
—Sí … Es natural … Así será …
—Todas pasaremos por lo mismo … Será una nueva experiencia para el pobrecito Gabriel, el vernos a todas con nuestras barrigas en aumento …
—¿Pobrecito? … Ni modo … No será él que tendrá un bebé creciendo dentro …
—Más temprano que tarde, todas nosotras tendremos mucho más de que quejarnos … Espera un par de meses más …
—Fue el comentario conclusivo de Sofia.
*****


A medida que avanzaban los embarazos, las cosas se iban dando con altos y bajos. No todo era negativo, pero cuando surgían problemas, estos había que multiplicarlos por tres. Lo mejor de todo es que ahora tenía a todas mis chicas a tiempo completo y eso me encantaba. Magaly y yo nos habíamos mudado permanentemente a casa de Solange y Sofia, cosa que era de toda lógica en estos momentos. Magaly y yo compartíamos la misma cama, pero había noches en que pasaba con Solange y otras con Sofia, dependiendo de la cachondez de cada una de ellas.


Así como la circunferencia de sus barrigas variaba en forma contemporánea, también variaban sus estados de ánimos. A veces querían solo ser abrazadas y acompañadas, otras se desataban sexualmente y querían ser folladas en todos sus agujeros. Me tuve que ir adaptando a sus necesidades, pero no fue difícil. Magaly era siempre la más sensible.
—Me parece que este embarazo está durando demasiado … Este bebé no quiere salir …
Se quejó Magaly sintiéndose miserable. Froté cariñosamente su vientre hinchado y la acurruqué a mí haciéndole cariño.
—Debes tener paciencia … El bebé vendrá … —Le dije para tranquilizarla.
—Pero mi guatita no para de crecer …
—Es como deber ser … Es lo natural …
—Lo dices solo porque no es a ti a quien le crece la panza …
—Sí, es verdad … Pero eso no cambia nada …
—Me veré tan rara en un par de meses …
—Te verás hermosa … Y sexy como siempre …
—Eres un mentiroso …
La envolví entre mis brazos con fuerza y le dije.
—Pero te amo … Y eso nunca será una mentira …
—Uhm … Lo sé … ¿Sabes?, hay días en que no quiero sexo … Pero ¿Qué pasará si no quiero hacerlo cuando todo vuelva a la normalidad? …
—¿Deveras piensas eso seriamente? …
—No lo sé … Tal vez … Tener hijos hace cambiar las cosas y afecta a las relaciones …
—Sí … Puede ser … Pero nunca te preocupaste por eso …
—Es una cosa que me preocupa de frecuente … Todavía no sé si he cometido un error …
—Hey, Magaly … ¿Qué dices? …
—No sé … Pero me sentiría peor si fuera la única a no tener a tu bebé …
—Magaly … No necesitas hacer de esto una competencia con Solange …
—No lo hago … Creo … Pienso que lo querría incluso si ni Solange ni Sofia estuvieran embarazadas … Solo que … A veces me da susto …
—Bueno … No tienes nada que temer … Estaré junto a ti, ¿vale? … Toda la noche si quieres …
—No … No lo harás … Apenas sientas demasiado calor te alejarás de mí … Lo haces siempre …
—Bueno … Intentaré hacer lo mejor que pueda …
—Ehm … Está bien … ¿Podrías correrte en mi mañana por la mañana? …
—¿En algún lugar preferido? …
—Bueno … Realmente no sé si querré sexo … Uhm … Una corrida en mis tetas o algo así … Eso me gusta y me hace sentir sexy y deseada …
—Siempre serás sexy, Magaly … ¿Puedes sentir como me tienes de duro? …
—Sí … Siento tu presión en mis glúteos … Me empujas … Siempre lo haces …
—Es porque eres muy sexy …
—¿Deveras? … ¿O es porque estás siempre cachondo? …
—Ambas …
*****


(Continuará …)

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El regalo más preciado de quien escribe es saber que alguien está leyendo sus historias. Un correo electrónico, a favor o en contra, ¡Tiene la magia de alegrar el día de quien construye con palabras, una sensación y un placer!


luisa_luisa4634@yahoo.com

escrito el
2024-09-28
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